Ley 2551 - Ley Electoral de La Provincia
Ley 2551 - Ley Electoral de La Provincia
Ley 2551 - Ley Electoral de La Provincia
de los electores
Capítulo único derechos y deberes
*Art. 1 – son electores para todas las elecciones primarias y generales a nivel
provincial, municipal y de convencionales constituyentes, quienes lo sean del
registro nacional de las personas de ambos sexos, nativos desde los dieciséis
(16) años y naturalizados desde los dieciocho (18) años, siempre que se
encuentren inscritos en el registro nacional de electores y que no se
encuentren alcanzados por las inhabilidades establecidas por la constitución
de la provincia y la presente ley. El poder ejecutivo solicitará oportunamente
del juzgado federal, copia autorizada del padrón, la que deberá remitir a la
junta electoral. El incumplimiento de este deber no implicará sanción para los
menores de dieciocho (18) años. A los efectos de la debida acreditación de los
electores, la libreta de enrolamiento, la libreta cívica y el documento nacional
de identidad (D.N.I.), en cualquiera de sus formatos son documentos
habilitantes a los fines de esta ley, de conformidad al código electoral nacional
(Art. 10 de la ley 26741). (Texto según Ley 8619, Art. 50).
*Art. 2 – el sufragio electoral es un derecho y una función política que los
ciudadanos tienen el deber de ejercer con arreglo a las disposiciones de la
presente ley. Para la emisión y el escrutinio del voto podrán incorporarse
nuevas tecnologías que procuren la seguridad y celeridad del proceso
electoral. La incorporación de las nuevas tecnologías al proceso electoral,
podrá ser progresiva y gradual. (texto según ley 8619, art. 51).
Art. 3 – ninguna autoridad podrá reducir a prisión al ciudadano elector desde
veinticuatro horas antes de la elección hasta la clausura del comicio, salvo en
caso de flagrante delito o cuando existiera orden emanada de juez competente.
Fuera de estos casos, no podrán ser estorbado en el tránsito de su domicilio al
lugar de la elección, ni molestado en el ejercicio de sus funciones o derechos.
Art. 4 – la persona que se hallare bajo la dependencia legal de otra, tendrá
derecho a ser amparada para dar su voto, recurriendo al efecto a las
autoridades a que se refiere el párrafo siguiente y a falta de estas, al presidente
del comicio en donde le corresponda votar. El elector afectado en cualquier
forma en sus inmunidades, libertad o seguridad, o privado del ejercicio del
sufragio, podrá solicitar amparo por si o por intermedio de otra persona en su
nombre, por escrito o verbalmente, denunciando el hecho ante cualquiera de
los miembros de la junta electoral, ante el magistrado mas próximo, o ante
cualquier funcionario nacional o provincial. El elector puede pedir también
amparo para que le sea entregada su libreta de enrolamiento o cívica retenida
indebidamente por un tercero. Quienes por razones de trabajo deban estar
ocupados durante las horas del acto electoral, tienen derecho a obtener una
licencia especial de sus empleadores con el objeto de concurrir a emitir su
voto, sin deducción alguna de salario ni ulterior recargo de horario.
*Art. 4 bis – los procesados que se encuentren cumpliendo prisión preventiva,
tendrán derecho a emitir su voto en todos los actos eleccionarios que se
celebren durante el lapso en que se encuentren detenidos. A tal fin la junta
electoral provincial como autoridad de aplicación confeccionará el registro de
electores privados de libertad, que contendrá los datos de los procesados que
se encuentren alojados en los distintos establecimientos penitenciarios de
acuerdo a la información que deberán remitir los jueces competentes. Se
habilitarán mesas de votación en cada uno de los establecimientos de
detención y se designarán sus autoridades de conformidad a la reglamentación
que se efectúe.
Los procesados que se encuentren en un distrito electoral diferente al que
corresponda podrán votar en el establecimiento en que se encuentran alojados
y sus votos se adjudicarán al distrito en el que estén empadronados. (texto
incorporado según ley 8619, art. 51).
Art. 5 – el sufragio es individual y ninguna autoridad, persona, corporación,
partido o agrupación política, puede obligar al elector a votar en grupos de
cualquier naturaleza o denominación que sea.
Art. 6 – el secreto del voto en el acto de la elección es obligatorio.
Art. 7 – todo elector tiene el deber de votar en cuantas elecciones provinciales
y municipales fueran convocadas en su sección o municipio.
Art. 8 – quedan exentos de la obligación dispuesta por el artículo anterior:
A) los electores mayores de setenta (70) años.
B) los jueces y sus auxiliares y todos los funcionarios públicos que por
disposición de esta ley deban asistir a sus oficinas y tenerlas abiertas durante
las horas de la elección.
C) los que el día de la elección se encuentren a más de quinientos kilómetros
de la mesa en que les corresponda votar.
D) los que estuvieren enfermos o imposibilitados físicamente, o que, razones
de fuerza mayor debidamente comprobadas, les impida concurrir al comicio.
Art. 9 – las obligaciones que esta ley atribuye a los electores, constituyen
carga pública y serán, por lo tanto, irrenunciables a no mediar causa
debidamente justificada.
Disposiciones transitorias
Art. 124 – dejase sin efecto, por esta sola vez, la disposición contenida en el
primer apartado del art. 85 de esta ley en cuanto determina que las elecciones
de diputados, senadores y concejales, tendrán lugar el primer domingo de
abril, estableciéndose que las próximas elecciones de dicho carácter, se
realizaran el último domingo del mes de abril de 1959.
Art. 125 – por esta sola vez, la junta electoral podrá ejercer las facultades que
le acuerda el art. 74o de esta ley, con veinte días de anticipación a la fecha
fijada por la convocatoria para el acto eleccionario.
Art. 126 – por esta sola vez, las municipalidades harán entrega de las libretas
cívicas a los interesados, en el plazo de diez días de publicado el padrón
definitivo, quedando a estos efectos suspendido el plazo de treinta días que
exige el art. 24 de la ley no 1079.
En caso de que alguna comuna considere imposible el cumplimiento de la
previsión de la libreta cívica municipal, podrá expedir un instrumento
supletorio, para cuyo otorgamiento el interesado deberá acreditar su identidad
con alguno de los siguientes documentos:
a) cedula de identidad expedida por la policía de cualquier provincia argentina
o por la policía federal;
b) pasaporte debidamente visado;
las municipalidades entregaran a los electores extranjeros, un certificado en el
cual constara su carácter de tales y quedara libre un espacio adecuado para
que las autoridades comiciales anoten el cumplimiento de los deberes del
sufragio.
El elector extranjero deberá exigir al presidente de la mesa receptora de votos
ambas constancias, la de identidad y la de inscripción.
Art. 127 – para las elecciones municipales del último domingo del mes de
abril de mil novecientos cincuenta y nueve, se utilizara el padrón de
extranjero, con la inclusión de los electores de ambos sexos, sean o no
contribuyentes, confeccionado de acuerdo con el decreto-ley no 5924/57.
*Art. 128 – los gastos que demande el cumplimiento de la presente ley, se
tomaran de rentas generales, con imputación a la misma. (texto según ley
2633, art. 2)
Art. 129 – derogase toda disposición que se oponga a la presente.
Art. 130 – comuníquese al poder ejecutivo.