Hipertrofia Muscular Vs Fuerza
Hipertrofia Muscular Vs Fuerza
Hipertrofia Muscular Vs Fuerza
Lo cierto es que el hombre promedio que recién empieza a entrenar con pesas,
indistintamente del tipo de entrenamiento que utilice, se va a volver mas fuerte y
va a desarrollar masa muscular.
Cuando esta misma persona llega a cierto nivel, para seguir progresando, tiene
que cambiar su método de entrenamiento dependiendo de su objetivo.
Tiene que decidir si quiere entrenar para ser muy fuerte o quiere entrenar para
desarrollar una mayor masa muscular.
Los que entrenan enfocados en desarrollar más fuerza física suelen seguir
entrenamientos del tipo “Powerlifting”, y los que entrenan para desarrollar musculo
suelen seguir entrenamientos de “Bodybuilding” o físicoculturismo.
Proceso de adaptación
El cuerpo humano esta diseñado para sobrevivir, por lo que se adapta a las
situaciones y los estímulos.
Aclaremos una cosa, existe una infinidad de ejercicios para desarrollar musculo,
pero esta vez se van a considerar dentro de este tipo de entrenamiento, además
de otros, los ejercicios básicos que también se utilizan en los entrenamientos de
fuerza: el press banca, las sentadillas y el peso muerto.
Para cada uno de los ejercicios básicos se puede realizar un volumen total
aproximado de 20 a 36.
Las repeticiones totales en cada uno de estos ejercicios adicionales pueden ir entre
30 a 50 aproximadamente y el descanso entre series no debe ser mayor a 90
segundos dependiendo del peso y del esquema series-repeticiones que se este
utilizando.
Lo mas común para cada ejercicio complementario es hacer entre 3 a 5 series con
un promedio de 10 repeticiones por serie.
Por ejemplo, si la parte superior de los pectorales es la debilidad, luego del press
banca plano, se pueden realizar series de press banca inclinado con barra o
mancuernas.
Para los ejercicios básicos, se utiliza del 80% al 90% de la repetición máxima y el
numero de repeticiones debe ser entre 10 y 20.
Los más avanzados a veces entrenan con mas del 90% de la repetición máxima, y
en ese caso las repeticiones totales no deben exceder a 10.
El peso a utilizar debe ser entre el 70% y 80% de la RM, además, se va a realizar
un menor numero de ejercicios, máximo 2 a 4.
En este apartado vamos a tratar de realizar una pequeña guerra fuerza vs volumen. Vamos
a tratar de comentar lo más claro y preciso posible las diferencias existentes entre ambas
cualidades (ejercicios, tiempo de recuperación, pesos…), vamos a ver dos tablas de
entrenamiento centradas en cada una de las cualidades y finalmente comentaremos por
qué ambas cualidades son complementarias una de la otra.
Fuerza: La definición que hemos utilizado otras veces ha sido ”Capacidad de vencer una
resistencia mediante una contracción muscular’‘. Hay que destacar que con el trabajo de
la fuerza, el crecimiento muscular será prácticamente nulo.
→ Cargas: Este número de repeticiones nos permitirá movilizar cargas de entre el 85-100%
de nuestro 1 RM.
Volumen: El volumen podría ser definido como el ”aumento del tamaño de nuestras fibras
musculares’‘.
→ Recuperaciones: Con los ejercicios de hipertrofia lo que se busca es una fatiga de las
fibras musculares, por lo que los descansos deberán ir desde un mínimo de 1 minuto hasta
un máximo de 2 minutos.
TABLAS DE ENTRENAMIENTO
FUERZA
Día 1: Pectoral
(Pecho)→(Press inclinado)→(2)→(6)→(5′)
(Pecho)→(Press declinado)→(1)→(6)→(5′)
Día 2: Dorsal
Día 3: Pierna
VOLUMEN
Día 1: Pecho/Bíceps
(Pecho)→(Press banca)→(4)→(8)→(1’30”)
(Pecho)→(Press inclinado)→(4)→(8)→(1’30”)
(Pecho)→(Press declinado)→(4)→(8)→(1’30”)
(Pecho)→(Aperturas)→(2)→(8)→ (1’30”)
Día 2: Dorsal/Tríceps
Día 3: Pierna/Hombro
Para finalizar el artículo, nos gustaría explicar por qué la fuerza y el volumen son
cualidades físicas complementarias. Muchas personas creen que los hombres que se
dedican a aumentar su masa muscular hasta proporciones impensables (culturistas),
carecen de fuerza. Esto es una leyenda urbana, ya que estos hombres son personas muy
fuertes, lo que pasa es que su entrenamiento no está enfocado a ser capaces de mover y
mover más y más carga, sino que su objetivo es construir sus músculos de forma
armónica. Es decir, sus entrenamientos buscan el trabajo de volumen o hipertrofia. Pero
al trabajar esta cualidad física, indirectamente estamos trabajando nuestra fuerza.
Sin embargo, cuando observamos entrenar a un lanzador de peso observamos que sus
entrenamientos buscan ser capaces de movilizar grandes cargas en un corto periodo de
tiempo. No se preocupan de que sus pectorales estén bien construidos, su único objetivo
es ser capaces de lanzar una bola que pesa 7,260 kg lo más lejos posible.
El que hipertrofiemos más o menos no depende tanto de lo largas que sean las series,
sino del total de repeticiones realizado Un 10×3 producirá bastante hipertrofia a pesar de
que las series sean de 3 repeticiones, y de hecho con estos sistemas lo que se busca es una
buena mezcla de fuerza e hipertrofia.
Lo ideal sería poder utilizar para hipertrofia las mismas cargas que para la fuerza. Sin
embargo para hipertrofiar los músculos es necesario CANSARLOS. Unas series de fuerza
tipo 3×3 por supuesto provocan cansancio, pero el cansancio es del sistema nervioso más
que muscular. Se necesitan más repeticiones, más duración, más tiempo bajo tensión, para
que los músculos verdaderamente se cansen y la hipertrofia se produzca. Esto se puede
conseguir como se ha dicho haciendo un entrenamiento de fuerza “alargado” (tipo 10×3),
pero estos esquemas se vuelven poco prácticos cuando la persona es avanzada y necesita
más volumen para crecer (muchas series, muchos descansos, lo cual alarga la duración del
entreno) lo cual nos lleva al compromiso de bajar un poco más el peso y buscar esquemas
más típicos de la hipertrofia (4×8, 4×10, 3×12 etc.)
* Con el 1RM sólo podríamos hacer una repetición: 100×1=100kg totales movidos
* Con el 5RM (que son 87kg) podríamos hacer 5: 87×5=435kg totales movidos
* Con el 10RM (75 kg) podríamos hacer 10: 75×10=750kg totales movidos
Con sólo bajar un 25% el peso, podemos realizar una cantidad de trabajo 7 veces y media
superior. Una disminución no muy alta en la intensidad (kg) hará que nos metamos
rápidamente en un trabajo de resistencia.
Rutinas como la variante Boring but big del sistema 5/3/1 toman en cuenta esto, poniendo
las repeticiones de fuerza delante y series más largas con más repeticiones detrás.
Lo anterior no quiere decir que no podamos ir calentando el sistema nervioso con pesos
cada vez más altos hasta llegar a una serie máxima (por ejemplo como se hace en el sistema
5×5 o en el calentamiento en rampas). En estos sistemas, las series que preceden a la serie
final no buscan el agotamiento y además se trabaja con series cortas (en torno a 5
repeticiones) lo que limita el total de Kg levantados y por tanto el agotamiento. Lo que no
es lógico son las pirámides ascendentes que tanto se ven en los gimnasio. Por ejemplo:
En este ejemplo, el levantador seguramente podría haber levantado muchísimo más y haber
producido un efecto más beneficioso en su fuerza simplemente comenzando al contrario
(por la serie con 80 Kg).
Los sistemas de energía del cuerpo
Distintas capacidades del cuerpo, necesitan distintos tipos de entrenamiento para
desarrollarse. A veces se trabaja la fuerza y la resistencia al tiempo en un entrenamiento
(sesión de fuerza terminada en cardio). Mucho más común todavía es intentar trabajar la
fuerza y la hipertrofia (como podría ser el caso de las rutinas mencionadas más arriba). Esto
no está mal, y puede resultar conveniente según los objetivos o si no se dispone de mucho
tiempo. Sin embargo es imposible entrenar la Fuerza y la resistencia de manera óptima en
un mismo régimen de entrenamiento.
Nuestros músculos necesitan energía para contraerse, y el cuerpo utiliza 3 vías para obtener
energía: El sistema de fosfágeno (fosfocreatina), la glicolísis anaeróbica y la fosforilación
oxidativa.
Estos 3 sistemas para obtener energía se utilizan siempre al mismo tiempo, sin embargo el
porcentaje de uso de cada uno varía según la intensidad del ejercicio. La fosfocreatina es la
energía más rápida, pero también es la que se agota más rápidamente. La glicolítica es la
segunda en rapidez, y dura algo más. Finalmente, la fosforilación oxidativa es casi ilimitada
y eficiciente, pero con la desventaja de que es una energía mucho más lenta que las otras
dos.
En el otro extremo están los esfuerzos de alta intensidad, tales como un sprint a toda
velocidad. Estos provocan que el cuerpo emplee la fuente de energía más rápida: la
fosfocreatina. Aunque es el combustible más potente, las reservas se agotan en tan sólo 10
segundos si el esfuerzo es a intensidad completa. Si se continúa esprintando después de
esto, la glicolísis anaeróbica (glucógeno) se convierte en la fuente primaria, lo que
permitirá unos 30 segundos más de carrera a intensidad máxima. Los corredores de 400
metros están muy familiarizados con el muro que se produce alrededor de los 300 metros,
cuando se agotan los 30-40 segundos de reservas de glucógeno.
Restauración de la energía
Estructurales: Este tipo se refiere a las mejoras provocadas sobre el propio cuerpo: mayor
densidad ósea, mayor resistencia de los tendones, incremento de la masa muscular, de los
metabolitos etc. Estas mejoras serán generales: unos huesos más densos conseguidos a base
de levantamientos pesados aún serán densos a la hora de realizar un placaje de rugby.
Neurales: Son las mejoras que se producen en el sistema nervioso y son específicas del
movimiento entrenado. El cuerpo se vuelve más eficiciente en ese movimiento determinado
(reclutando más fibras, coordinando el reclutamiento de más fibras al mismo tiempo,
aprendiendo la técnica etc).
Las mejoras en la fuerza son una suma de estas dos adaptaciones. Una mayor cantidad de
músculo (mejora estructural) nos hará más fuertes en potencia, pero para sacar todo el jugo
a esa fuerza hemos de practicar el movimiento concreto y provocar mejoras neurales.
Aquí es donde la técnica correcta cobra una importancia fundamental. El cuerpo se adapta
neurológicamente al movimiento tal cual se realiza. Si dejamos que la fatiga se acumule, la
técnica se deteriora y por tanto la adaptación del sistema nervioso se desvía hacia esa
técnica mal realizada. Es por eso que en un entrenamiento de fuerza máxima, no podemos
permitirnos el trabajar con fatiga acumulada, sino que debemos mantenernos relativamente
frescos.
Conclusiones
A la hora de entrenar debemos tener en cuenta el efecto que deseamos conseguir y actuar en
consecuencia. Si queremos fuerza máxima las series han de ser cortas debido a que la vía
de energía primaria (fosfocreatina) no durará más de 10 segundos, si continuamos más allá
la fatiga provocará un deterioro de la técnica y no reforzaremos el movimiento real. A la
vez el peso habrá de ser intenso para provocar el uso coordinado de todas las fibras
musculares posibles.
Si nuestro objetivo principal es la hipertrofia, buscaremos más bien una fatiga de las fibras
por agotamiento del glucógeno (glicolisis anaeróbica). Esto es complicado de obtener con
series pesadas repetidas, ya que se producirá un agotamiento demasiado rápido del sistema
nervioso, por tanto hemos de recurrir a pesos inferiores y series más largas.