386 2021 Sunedu 03 06
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INFORME N° 386-2021-SUNEDU-03-06
Firmado Digitalmente por:
MARTINEZ ALFARO
Alexandra Arminda Rosa FAU
A : Jessica Martha Rojas Barrueta
20600044975 soft
Motivo: Doy V°B° Jefa de la Unidad de Registro de Grados y Títulos
Fecha: 19/05/2021 16:22:56
1. Antecedentes
2. Base normativa1
1 Cuando se hace mención a las referidas normas, se incluyen sus respectivas disposiciones ampliatorias y modificatorias, de ser el
caso.
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4. Análisis
4.1. El artículo 18 de la Constitución Política del Perú, otorga a las universidades autonomía,
en el marco de la propia Constitución y de las leyes2.
Esta garantía está contemplada en el artículo 8 de la Ley N° 30220, Ley Universitaria (en
adelante, Ley Universitaria), que señala que el Estado reconoce la autonomía
universitaria, manifestada a través de cinco regímenes: a) normativo, b) de gobierno, c)
académico, d) administrativo; y, e) económico3.
4.3. En el marco de este derecho y garantía que la Constitución concede a las universidades,
independientemente de su naturaleza pública o privada, es que estas pueden ejercer sus
capacidades y potestades a fin de prestar, adecuada y óptimamente, el servicio
educativo superior universitario.
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4.5. Cabe precisar que el ejercicio de la autonomía universitaria no es irrestricto, pues tal
potestad debe respetar los límites establecidos por la Constitución y demás normativa
aplicable.
4.6. En primer lugar, se debe indicar que, en virtud a la autonomía normativa, las
universidades tienen la potestad de regular en sus normas internas ‒siempre dentro del
marco constitucional y legal‒ sus instituciones, mecanismos, procedimientos, entre
otros.
4.9. El literal G, del Título Preliminar de las Disposiciones en materia electoral de las
universidades públicas señala que los procesos electorales en las universidades se rigen
por el Principio de Imparcialidad, entre otros:
G. Imparcialidad y objetividad
Todas las decisiones electorales son tomadas de forma imparcial. De acuerdo con ello, las
6 Disposiciones para el mejor cumplimiento de la Ley N° 30220, Ley Universitaria en materia electoral de las universidades
públicas, Resolución del Consejo Directivo N° 158-2019-SUNEDU-CD
Artículo 4.- Preparación del proceso electoral de autoridades
(…)
4.2. La preparación del proceso electoral se realiza en las fechas programadas, de conformidad con el plazo mínimo de
organización de seis (6) meses previstos en la Ley Universitaria, el que se computa tomando como referencia la fecha en la que
culmina el mandato de la autoridad y/o representante a ser reemplazado. La preparación del proceso electoral inicia con la
elección del CEU. La preparación oportuna del proceso electoral, de forma independiente a si este califica como principal o
complementario, es responsabilidad del CEU.
(…)
(El subrayado es nuestro)
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decisiones se toman conforme a las reglas dispuestas para las elecciones, sin que a través
de estas se procure favorecer o perjudicar a nadie. Asimismo, todas las decisiones que así
lo requieran deberán estar motivadas con objetividad.
4.10. De la definición de este principio, se puede verificar que, a fin de que los procesos
electorales se lleven a cabo de manera eficiente y justa, todas las autoridades
electorales, en el desarrollo de sus actividades, deben reconocer y custodiar
permanentemente por el interés común y por los valores fundamentales de la
democracia, velando por el respeto de la democracia institucional y eliminando
intereses subjetivos o preferencias políticas.
4.11. Ahora bien, una vez efectuada la proclamación de resultados, la comunidad universitaria
ha tomado conocimiento de la lista ganadora y de las personas que ocuparán los cargos
de autoridades electas. En tal sentido, efectuar un proceso electoral “complementario”
en el que la población de electores estaría compuesta solo por un grupo de votantes,
que ya conocen los resultados electorales, podría vulnerar el mencionado Principio de
Imparcialidad, en tanto este previo conocimiento podría interferir en la voluntad
electoral. Es decir, que el voto a emitirse, podría no representar la expresión libre,
auténtica y espontánea de dicho grupo de electores, dado que conocer previamente los
resultados electorales pueden influir o calar en su ánimo electoral.
5. Conclusiones
5.2. Efectuar un proceso electoral en el que la población de electores estaría compuesta solo
por un grupo de votantes, que ya conocen los resultados electorales, podría vulnerar el
Principio de Imparcialidad, en tanto este previo conocimiento de la lista ganadora podría
interferir en la voluntad electoral y no representar la expresión libre, auténtica y
espontánea de dicho grupo de electores.
Atentamente,
FMMI/jagl/ama
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