El Participio
El Participio
El Participio
Es, junto con el infinitivo y el gerundio, una forma no personal de los verbos.
No obstante, a diferencia de estos, el participio admite variación
de género y número
(p. ej., comprado/comprada/comprados/compradas).
El participio en español se obtiene quitando las terminaciones del infinitivo -ar, -er,
-ir, y añadiendo -ado o -ido a la raíz a los verbos acabados en -ar y -er/-ir,
respectivamente.
Ejemplo:
hablar - hablado
aprender - aprendido
vivir - vivido
Ejemplo:
Los partidos fueron suspendidos.
● en perífrasis verbales, con flexión de género y número.
Ejemplo:
La jornada se dio por terminada.
Participios irregulares:
Algunos participios en español son irregulares.
● Cuando la raíz de un verbo acaba en vocal, la i de la terminación -ido del
participio debe acentuarse. Así se indica que la vocal de la raíz del verbo y
la de la terminación son independientes y no forman un diptongo.
Ejemplo:
leer – leído
traer - traído
● Algunos verbos en español tienen dos participios: uno regular y uno
irregular. Otros verbos pueden tener además dos participios irregulares. Se
trata en todo caso de participios aceptados por la RAE, y pueden utilizarse
indistintamente, pues son correctos. La tabla siguiente recoge los verbos
más frecuentes de este tipo.
Ejemplos:
abrir abierto
decir dicho
escribir escrito
hacer hecho
morir muerto
poner puesto
suscribir suscrito/suscripto
ver visto
volver vuelto
Participio variable
Cuando se usa como adjetivo después del verbo estar, el participio
tiene flexión de género y número, pues debe concordar en género y número con
el sustantivo al que modifica. Se trata, pues, de un participio variable.
Ejemplo:
Los jugadores estaban emocionados.
La jugadora estaba emocionada.
Singular Plural
Nadie diría «la bella dormidora», sino «la bella durmiente»; en cambio, nadie
diría que «el panda es comiente de bambú», sino «el panda es comedor de
bambú»; en otras ocasiones, resulta bastante indiferente la elección de uno u
otro, como en «gobernante» y «gobernador»; en otros casos solo hay (pequeñas)
diferencias de matices, como entre «cantante» y «cantor».
Formación
El participio presente se puede reconocer fácilmente por su terminación: -ante
(abundante, distante, picante), -ente (convincente, procedente, urgente) o -iente
(correspondiente, durmiente, dependiente). Se trata de un resto del español
antiguo cuya forma en el español actual es bastante irregular. Pero no se debe
confundir con el gerundio