Tesis Dstepanov Dimitrov
Tesis Dstepanov Dimitrov
Tesis Dstepanov Dimitrov
Aunque la presente tesis doctoral lleva solo mi nombre mucha gente ha colaborado en
el proceso de su elaboración aportando ideas, material, criticas, ánimos y un largo etcétera.
En primer lugar quiero agradecer a mi director de tesis, Dr. Carles Ribera, la confianza
que siempre ha depositado en mí al darme la oportunidad de trabajar en este proyecto y,
sobre todo, por todo lo que me ha enseñado y por su contaminante entusiasmo que ha
demostrado a lo largo de todos estos años que hemos trabajado juntos. Todos estos factores
han sido cruciales para poder afrontar con éxito el doctorado. Gracias a sus charlas y
discusiones he aprendido un sinfín de cosas sobre islas oceánicas, sistemática de arañas y
métodos filogenéticos. A él tengo que agradecer el haberme formado como científico.
Este trabajo habría sido imposible sin la ayuda y el continuo apoyo de Clara. Gracias
por haberme aguantado y estado ahí incluso en los momentos más difíciles.
Una gran parte de lo que sé sobre Canarias y muchos de los especimenes, entre ellos
algunas de las especies nuevas, se las debo al Dr. Pedro Oromí y a la gente del Departamento
de Biología en la Universidad de La Laguna. Gracias a ellos he podido conocer mucho
mejor, no solo la flora y fauna de las islas, sino también los “guachinches” canarios.
La amistad, los consejos y las discusiones de Salvi y Miquel Angel han jugado un papel
esencial en este trabajo. Les agradezco muy sinceramente toda la ayuda y espero que en el
futuro lograremos conservar la amistad fundada en estos años.
La ayuda en el campo y la amistad de Nuria Macias, Nayra, Salva, Heriberto, Eva y
Lidia han sido imprescindibles. Todos ellos han sido unos compañeros de trabajo
estupendos y estoy muy satisfecho de haber tenido la oportunidad de conocerlos y trabajar
con ellos.
Nuria Lopez no sólo ha sido una compañera de tesis, sino una muy buena amiga que
en numerosas ocasiones me ha ayudado, e incluso salvado, de quedarme literalmente en la
calle (¡muchísimas gracias!).
También querría agradecer el apoyo de mis padres y mi hermana, que aunque no han
estado cerca siempre me han ayudado con lo que han podido y me han animado a seguir.
Finalmente quiero agradecer la División de Ciencias Experimentales y Matemáticas de
la Universidad de Barcelona para haberme concedido una beca en los dos primeros años del
doctorado.
Muchísimas gracias a todos.
INDICE
1. Introducción _____________________________________________________1
1.1. Concepto de biodiversidad _________________________________________2
1.1.1. Definiciones de la biodiversidad __________________________________2
1.1.2. La sociedad moderna y las amenazas a la biodiversidad________________4
1.2. Las islas oceánicas y la biodiversidad_________________________________5
1.2.1. Puntos calientes de la biodiversidad _______________________________5
1.2.2. Las islas oceánicas como modelos para los estudios de la biodiversidad ___6
1.3. El Archipiélago Canario ___________________________________________9
1.3.1. Situación geográfica ___________________________________________9
1.3.2. Historia geológica ____________________________________________10
1.3.2.1. Fuerteventura ____________________________________________12
1.3.2.2. Lanzarote _______________________________________________13
1.3.2.3. Gran Canaria ____________________________________________14
1.3.2.4. La Gomera ______________________________________________14
1.3.2.5. Tenerife ________________________________________________15
1.3.2.6. La Palma _______________________________________________16
1.3.2.7. El Hierro________________________________________________16
1.3.3. El Clima ____________________________________________________17
1.3.4. El entorno biogeográfico _______________________________________18
1.3.5. Caracterización ecológica ______________________________________19
1.3.6. Las islas y la gente____________________________________________21
1.4. La biodiversidad en las Islas Canarias _______________________________23
1.4.1. Estado de conocimiento de la diversidad de las arañas en el archipiélago _24
1.5. El sujeto de este estudio: el género Pholcus (Pholcidae, Araneae)__________25
1.5.1. Características de la familia Pholcidae ____________________________25
1.5.2. Caracteres morfológicos del género Pholcus _______________________27
1.5.2.1. Prosoma ________________________________________________27
1.5.2.2. Apéndices_______________________________________________28
1.5.2.3. Opistosoma______________________________________________33
1.5.3. Biología ____________________________________________________35
1.5.4. Taxonomía y filogenia_________________________________________37
1.5.5. Distribución _________________________________________________42
1.5.6. Antecedentes sobre el género Pholcus en el archipiélago Canario _______42
2. Objetivos _______________________________________________________43
3. Materiales y métodos _____________________________________________45
3.1. Técnicas de recolección y conservación del material ____________________46
3.2. Material estudiado _______________________________________________46
3.3. Técnicas de microscopia y de dibujo utilizadas ________________________47
3.4. Métodos moleculares: extracción, amplificación y secuenciación __________49
3.4.1. Justificación de los genes escogidos ______________________________49
3.4.2. Extracción de ADN ___________________________________________50
3.4.3. Amplificación _______________________________________________50
3.4.4. Secuenciación _______________________________________________52
3.4.5. Alineación de las secuencias ____________________________________54
3.5. Tecnicas de reconstrucción filogenética ______________________________54
i
3.5.1. Concepto de especie adoptado___________________________________54
3.5.2. Métodos de inferencia filogenética utilizados _______________________55
3.5.2.1. Máxima parsimonia (MP) __________________________________56
3.5.2.2. Máxima verosimilitud _____________________________________57
3.5.2.3. Inferencia Bayesiana ______________________________________57
3.5.2.4. Medidas de soporte _______________________________________58
4. Resultados y discusión ____________________________________________59
4.1. Taxonomía: definición de las unidades de estudio ______________________59
4.1.1. Dimitrov, D. & C. Ribera. in revision. The genus Pholcus (Araneae,
Pholcidae) in the Canary Islands. Zoologycal Journal of the Linnean Society. ___59
4.1.2. Dimitrov, D. & C. Ribera. (in press). Three new species of Pholcus
(Araneae, Pholcidae) from the Canary Islands with notes on the genus Pholcus in
the archipelago. Journal of Arachnology. _______________________________163
4.1.3. Dimitrov, D. & C. Ribera. 2003. Pholcus intricatus (Araneae, Pholcidae)
una nueva especie endémica de Tenerife (Islas Canarias). Revista Ibérica de
Aracnología 8:7-11. _______________________________________________181
4.1.4. Dimitrov, D. & C. Ribera. (in press). Pholcus vachoni n. sp. (Araneae,
Pholcidae) una nueva especie de Agadir (Marruecos). Revista Ibérica de
Aracnología. _____________________________________________________189
4.2. Filogenia _____________________________________________________197
4.2.1. Muestreo taxonómico y selección del grupo externo ________________197
4.2.2. Análisis cladístico basado en caracteres morfológicos _______________204
4.2.3. Análisis filogenético basado en caracteres moleculares.______________207
4.2.3.1. Características moleculares ________________________________207
4.2.3.2. Selección del modelo evolutivo _____________________________213
4.2.3.3. Congruencia entre los genes secuenciados ____________________214
4.2.3.4. Análisis filogenético _____________________________________215
4.2.3.4.1. Análisis de los tres genes por separado ___________________215
4.2.3.4.2. Análisis conjunto de los dos genes proteicos _______________234
4.2.3.4.3. Análisis conjunto de los tres genes secuenciados____________237
4.2.3.5. Discusión ______________________________________________242
4.2.4. Análisis combinado __________________________________________245
4.2.4.1. Construcción de la matriz combinada ________________________246
4.2.4.2. Test de incongruencia entre los caracteres morfológicos y moleculares
______________________________________________________247
4.2.4.3. Resultados _____________________________________________248
4.2.4.4. Discusión ______________________________________________252
4.2.5. Colonización y radiación ______________________________________257
4.2.5.1. Consideraciones generales _________________________________257
4.2.5.2. Resultados _____________________________________________258
4.2.5.3. Discusión ______________________________________________265
5. Conclusiones ___________________________________________________269
6. Otros hallazgos taxonómicos derivados de este trabajo ________________273
6.1. Dimitrov, D. & C. Ribera. 2005. Description of Ossinissa, a new pholcid genus
from the Canary Islands (Araneae: Pholcidae). Zootaxa. 982:1-13. ____________273
7. Bibliografía ____________________________________________________289
ii
INTRODUCCIÓN
1. Introducción
En los últimos años el uso del término “biodiversidad” está creciendo de una
manera espectacular y esto ocurre no solo en los artículos científicos sino también
en muchos otros medios como los periódicos, la televisión e incluso en los
discursos de algunos partidos políticos. Pero ¿qué es la biodiversidad?
CAP.1-1
INTRODUCCIÓN
Otros autores como Norton (1994, 2001) incluso defienden la tesis de que nunca
llegaremos a tener una definición científica de la biodiversidad en el sentido de
crear una manera de medirla. Él atribuye esto a la existencia de varias teorías
sobre la biodiversidad y a los numerosos métodos para medirla, y propone que
cada caso se ha de tratar distintamente escogiendo el modelo apropiado.
Las ideas de Norton quizás puedan ser útiles para afrontar problemas concretos
pero, desde un punto de vista filosófico, no son aceptables. Es obvio que aunque
nosotros podemos objetar sobre distintas medidas de la diversidad en situaciones
concretas, dando más o menos peso a ciertos aspectos, al fin y al cabo hablamos
del mismo fenómeno. E. O. Wilson (1988) trata el concepto de la biodiversidad
como un cambio cualitativo en la biología y su modo de operar con unidades y
piezas hacia un método holístico. Las ideas holísticas están adoptadas por un gran
número de científicos (Ehrenfeld, 1988; Wilson, 1988; Takacs, 1996) y también
aportan un nuevo enfoque sobre el problema que tiene en cuenta la falta de
conocimiento sobre los componentes da la diversidad de la vida. Es posible que
en realidad los valores más básicos de la biodiversidad estén basados en aspectos
que todavía desconocemos.
CAP.1-2
INTRODUCCIÓN
En la situación actual hay, al menos, dos cosas muy preocupantes y diferentes con
respecto a acontecimientos previos. Primero: la tasa de extinción que se registra
es, con mucho, mayor que en las anteriores extinciones masivas y segundo: este
proceso está acompañado por una grave pérdida y fragmentación de los hábitats.
CAP.1-3
INTRODUCCIÓN
CAP.1-4
INTRODUCCIÓN
CAP.1-5
INTRODUCCIÓN
muy difícil construir un sistema modelo completamente artificial para los estudios
de la biodiversidad, pero, por suerte, la propia naturaleza nos ofrece unos
ejemplos “modelo” que cumplen con las condiciones necesarias. Estos
“laboratorios naturales” son las islas, y especialmente las islas oceánicas.
Debajo del concepto de “isla” se agrupan una gran variedad de espacios naturales
que tienen como característica común un claro límite que los define. De esta
manera como islas se pueden considerar también fragmentos de bosque que han
quedado aislados, cuevas o lagos y zonas de alta montaña. Es evidente que este
concepto es mucho más amplio que la definición tradicional de las islas como
partes de tierra rodeadas por agua, y refleja mejor las ideas adoptadas por los
biólogos y ecólogos modernos. La característica más importante que todas estas
islas comparten, y que directamente permite el desarrollo de procesos evolutivos,
es su aislamiento. Como resultado de éste, una población y su pool genético, con
el paso del tiempo, se diferencia de la población original.
Para poder estudiar los procesos evolutivos es muy importante tener una
referencia temporal. En el caso de las islas oceánicas esto es muy fácil, ya que su
edad se puede medir con gran exactitud mediante métodos modernos de datación
aplicados en geología.
CAP.1-6
INTRODUCCIÓN
Por otro lado algunas de las características que convierten las islas oceánicas en
un laboratorio natural para observar y estudiar los procesos evolutivos, son la
causa de su gran vulnerabilidad. Una gran parte de las extinciones de especies
documentadas han ocurrido en islas. Las razones de esto son muchas, pero una se
distingue por su gravedad – la introducción de especies. Todos los ecosistemas
insulares son especialmente vulnerables a las especies introducidas, debido a su
aislamiento y a la necesidad de las plantas y los animales que los habitan de
competir con un número limitado de especies.
CAP.1-7
INTRODUCCIÓN
La situación geográfica es uno de los factores que tienen mayor influencia sobre
la flora y la fauna de las islas oceánicas. La zona climática en que están situadas
las islas y la vecindad con continentes y otras islas influyen directamente sobre
los procesos de colonización y diversificación de las faunas insulares. Las Islas
Canarias con sus 7447 kilómetros cuadrados de superficie son una de las mayores
cadenas de islas volcánicas que se conocen. Éstas se sitúan en el océano
Atlántico, enfrente de la costa africana, entre 27º37´ - 29º25´ de latitud norte y
13º20´ - 29º25´ longitud oeste según el meridiano de Greenwich. Siete grandes
islas y varios islotes constituyen el archipiélago. Las islas principales son según
su edad geológica: Fuerteventura, Lanzarote, Gran Canaria, Tenerife, La Gomera,
La Palma y El Hierro. Los islotes se sitúan cerca de las islas orientales: Lobos
entre la Fuerteventura y Lanzarote y La Graciosa, Montaña Clara y Alegranza
situadas al norte de Lanzarote.
Muchos autores proponen como medida objetiva de aislamiento para las islas
oceánicas la distancia al continente más cercano. En el caso de Las Canarias la
cercanía con el continente africano se traduce en un aislamiento bastante
reducido. Este hecho afecta directamente a la fauna, facilitando los procesos de
CAP.1-8
INTRODUCCIÓN
CAP.1-9
INTRODUCCIÓN
1993; Anacochea et al., 1990; Coello et al., 1992). Otros autores (Le Bas et al.,
1986) basándose en datos paleontológicos sugieren una edad entre 80 y 70Ma.
Aunque todavía la edad exacta del “nacimiento” del archipiélago no está
perfectamente definida, ésta es, con seguridad, mayor de 25Ma. A pesar de esta
incertidumbre se ha de subrayar una característica geocronológica muy
importante, todas las estructuras comparables, tales como los complejos basales,
los volcanes etc., son más antiguos en las islas orientales que en las occidentales.
Otro modelo que ha sido propuesto es el modelo de “punto caliente” (hot spot)
(Schmincke, 1973; Vogt, 1974a, 1974b; Khan, 1974; Morgan, 1983). El típico
ejemplo de esta teoría son las Islas Hawai (Wilson, 1963). Este modelo atribuye
la actividad volcánica a una anomalía termal en el manto cerca de la placa
oceánica. De ahí el magma se expulsa hasta llegar a formar, cuando emerge sobre
la superficie, la isla. Por otro lado los movimientos tectónicos desplazan el
material acumulado (la isla) y en la zona sobre el “hot spot” el proceso empieza
de nuevo. De este modo se forman cadenas volcánicas con una distribución linear
en la cual las islas tienen edades sucesivas. A pesar de la similitud en la
distribución geográfica y temporal, las Islas Canarias presentan unas pausas entre
CAP.1-10
INTRODUCCIÓN
los ciclos de actividad magmática que llegan a siete millones de años, hecho que
no puede ser explicado por este modelo. También la longitud de la vida de sus
volcanes supera con creces la de las Islas Hawai.
Buscando una solución de todos estos problemas Anguita y Hernan (2000) crean
un modelo unificado que reúne estas tres teorías. Según ellos el origen de los
magmas es una anomalía termal situada debajo del archipiélago, Norte de África
y partes de Europa central y occidental (Hoerne et. al., 1995). Esto explicaría las
numerosas similitudes con los volcanes del Atlas central. La forma de esta
anomalía es parecida a una hoja de papel que no penetra en el manto inferior,
características que la distinguen claramente de los clásicos puntos calientes.
Probablemente en este caso se trata de restos de un punto caliente fósil que se
formó a finales del Triásico.
La fractura propagante ha sido necesaria para que los magmas de esta anomalía
térmica salgan a la superficie. Con esto también se explica el largo periodo de
actividad volcánica y su patrón temporal. Por otro lado, los movimientos
tectónicos de bloques es un proceso presente en el archipiélago que no se puede
negar.
1.3.2.1. Fuerteventura
CAP.1-11
INTRODUCCIÓN
qué punto la erosión tiene importancia cuando comparamos este dato con las
3300m de elevación que se estima que tuvo Fuerteventura en el pasado. La gran
parte de esta erosión fue producida durante un largo periodo de quiescencia entre
el mioceno y el pleistoceno. La actividad volcánica post-miocénica en
Fuerteventura es escasa y queda limitada a la zona central y norte de la isla. La
única excepción es la península de Jandia.
Fuerteventura junto con Lanzarote constituyen las dos islas más áridas del
archipiélago y no poseen una gran variedad de hábitats. A pesar de ello su valor
científico es incalculable. Hay muy pocos ejemplos de islas oceánicas con unas
edades geológicas tan elevadas. Esto nos permite observar y estudiar diferentes
estados de la sucesión ecológica ausentes en islas más jóvenes.
1.3.2.2. Lanzarote
Es la isla más oriental del archipiélago. Tiene una superficie de 862 kilómetros
cuadrados y su altura máxima es de 670m (Peñas de Chache). La edad de
Lanzarote es de alrededor de 15.5Ma (Coello et. al., 1992). Al contrario que
Fuerteventura aquí todavía hay una considerable actividad volcánica. De hecho
una de las erupciones históricas más importantes en cuanto a la cantidad de
material expulsado y tiempo de duración, es la del volcán de Timanfaya. Como
resultado de esta erupción la superficie de la isla aumento considerablemente y
ahora esta zona forma el Parque Nacional de Timanfaya.
CAP.1-12
INTRODUCCIÓN
La isla de Gran Canaria con sus 1532 kilómetros cuadrados ocupa el tercer lugar
detrás de Tenerife y Fuerteventura. La isla se formó antes de 14.1-13.9Ma
(Schminke, 1976) básicamente como resultado de una gran erupción. Los
siguientes ciclos volcánicos han sido de menor importancia. Como resultado de la
concentración del volcanismo más reciente se observa una gran diferencia entre la
zona NE y la SO de la isla. En la mitad NE se presenta el típico paisaje volcánico
reciente.
1.3.2.4. La Gomera
CAP.1-13
INTRODUCCIÓN
cuaternaria. Cantagrel et. al., (1984) data el final del volcanismo de La Gomera
hace 2.8Ma.
1.3.2.5. Tenerife
Tenerife es la isla más grande (2058km2) y más alta (3718m Teide) del
archipiélago. Esta isla es originaria de tres islas independientes, las cuales ahora
forman los macizos de Conde, Teno y Anaga. Los primeros en emerger fueron el
Roque de Conde y Teno con unas edades de 11.6Ma y 6.7Ma respectivamente
(Ancochea et. al., 1990). Un poco más tarde sobre los 6.5Ma (Ancochea et. al.,
1990) se formó Anaga. Hace 2Ma empezó un ciclo de actividad volcánica que se
caracterizó por la gran cantidad de materiales emitidos y por su larga duración
(unos 130000 años). Durante este periodo se formó la zona conocida como Las
Cañadas y las tres islas antiguas quedaron unidas. Tal magnitud tenían estas
erupciones que el edificio volcánico que se formó en el centro de la isla pudo
alcanzar una altitud de unos 5000m (Carracedo, 1984a). A finales de este periodo,
el antiguo estratovolcán que formaba la parte central de la isla se colapsó y se
formó el edificio Teide-Pico Viejo que todavía está activo.
Tenerife es la isla donde mejor se observa uno de los fenómenos que participa
activamente en la formación del relieve de las islas volcánicas – el deslizamiento
CAP.1-14
INTRODUCCIÓN
1.3.2.6. La Palma
La isla de La Palma es una de las islas en las que se han observado erupciones
volcánicas recientes y todavía está bastante activa. La última erupción que tuvo
lugar es la del volcán de Teneguia en el año 1971.
Con una edad de entre 1.5-2Ma (Carracedo, 1984a; Schmincke, 1976) es una de
las islas más jóvenes. Tiene una superficie de 706 kilómetros cuadrados y una
altura máxima de 2426m (roque de Los Muchachos).
1.3.2.7. El Hierro
CAP.1-15
INTRODUCCIÓN
1.3.3. El Clima
CAP.1-16
INTRODUCCIÓN
CAP.1-17
INTRODUCCIÓN
A partir de los 250m empieza una parte xerófila donde, junto con las Euphorbia
sp., aparecen comunidades de Tamarix-Phoenix, Juniperus sp. y Dracaena draco.
Esta zona xerófila llega hasta los 800m en las vertientes sur y es la única, aparte
de la árida, presente en las islas más bajas: Fuerteventura y Lanzarote. En estas
debido a su baja altura no llega a formarse el “mar de nubes” mencionado
anteriormente. Como resultado de esto el aporte de agua es muchísimo menor y
no se observan las diferencias entre las vertientes sur y norte, tan características
en el resto de las islas del archipiélago.
En las islas con mayor altitud y en la vertiente norte, a una altura entre 600m y
1200m, se manifiesta una zona cubierta de bosque húmedo subtropical conocido
CAP.1-18
INTRODUCCIÓN
Por encima del anillo formado por el bosque de pino se sitúa el estrato de las
comunidades subalpinas. Aquí predominan los arbustos xerófilos como la retama
(Spartocitisus sp.).
CAP.1-19
INTRODUCCIÓN
CAP.1-20
INTRODUCCIÓN
CAP.1-21
INTRODUCCIÓN
Las Islas Canarias son bien conocidas por su gran biodiversidad y por el elevado
número de especies endémicas que albergan. El número total de especies citadas
en el archipiélago sobrepasa los 12.661 de las cuales un 28% son endémicas.
Estas especies se agrupan en 4.512 géneros y 1.145 familias. El 2.5% de estos
géneros son endémicos. La tasa de endemicidad no es igual y varía bastante en los
distintos grupos. De esta forma hay grupos donde no hay especies endémicas y
otros donde prácticamente todas lo son. Entre todos los grupos de organismos
presentes, el reino animal es el que tiene mayor número de taxones de los cuales
más de la mitad pertenecen a los artrópodos. En cifras absolutas el número de
especies conocidas de artrópodos en las islas alcanza 6.000 de las cuales un 51%
CAP.1-22
INTRODUCCIÓN
Una gran parte de la excepcional riqueza faunística de las Islas Canarias se debe a
los arácnidos. Los arañas (Araneae) y los pseudoscorpiones (Pseudoscorpiones)
presentan una tasa de endemicidad superior al 50% y tienen un elevado número
de especies endémicas que supera las 300. Sólo los coleópteros (Coleoptera)
superan al orden Araneae en cantidad de especies endémicas. Las arañas están
representadas por 453 especies y aunque este número es muy elevado, éstas
pertenecen a un grupo de géneros relativamente reducido. Muchos de estos
géneros han sufrido un proceso de radiación adaptativa excepcional y manifiestan
una gran cantidad de endemismos. Buenos ejemplos son el género Dysdera con
43 especies, Oecobius con 35 y Spermophorides con 22.
Aunque los números que reflejan la diversidad de las arañas pueden parecer altos,
estos no son definitivos ya que la gran mayoría de las familias presentes en este
archipiélago están poco estudiadas. En este sentido, casi el único ejemplo de un
estudio completo anterior al presente trabajo es el género Dysdera (Ribera &
Arrendó, 1994; Arnedo & Ribera, 1996; Arnedo et al., 1996; Arnedo & Ribera,
1997; Arnedo et al., 2000).
CAP.1-23
INTRODUCCIÓN
La mayoría de las especies tiene ocho o seis ojos. En las especies cavernícolas los
ojos están reducidos y en muchos casos faltan por completo. En los phólcidos con
ocho ojos, estos están distribuidos en dos tríadas laterales compuestas por los ojos
laterales anteriores (OLA), los ojos medianos posteriores (OMP) y los laterales
posteriores (OLP). Los ojos medianos anteriores (OMA) están situados en el
centro del área ocular. Normalmente toda la zona ocular está elevada y, muy a
menudo, los ojos se sitúan sobre unas características elevaciones. Estas
elevaciones se sitúan en algunos casos en el centro de la zona ocular, aunque en la
mayoría de las ocasiones se encuentran situadas lateralmente. En los géneros que
tienen seis ojos faltan los OMA. El prosoma presenta, en algunos casos, sobre su
parte dorsal una hendidura o una depresión oval. El clípeo es muy alto y con una
CAP.1-24
INTRODUCCIÓN
En los machos los quelíceros están casi siempre modificados sexualmente. Estas
modificaciones pueden ser muy variables y comúnmente se observa más de una.
La presencia de órganos estriduladores también es bastante común tanto en
machos como en algunas hembras.
CAP.1-25
INTRODUCCIÓN
Las especies del género Pholcus son arañas de pequeñas dimensiones (entre 2 y
10 mm) con unas patas exageradamente largas en comparación con el resto del
cuerpo. El prosoma es oval, de color amarillento y con manchas de tonalidades
pardas. La identificación de las diferentes especies de Pholcus se basa
principalmente en los caracteres morfológicos situados en el órgano copulador
masculino (el pedipalpo) y en el genital femenino (epigino y vulva). En los
machos pueden ser útiles las apófisis presentes en los quelíceros, caracteres que
resultan del dimorfismo sexual que manifiestan.
1.5.2.1. Prosoma
CAP.1-26
INTRODUCCIÓN
corniger. La línea ocular anterior está recurvada, este carácter permite distinguir
los diferentes géneros dentro de la subfamilia Pholcinae. En la mayoría de las
especies las tríadas laterales se sitúan sobre dos salientes cilíndricos (Fig. 3). El
clípeo, es casi vertical con una altura casi igual a la de los quelíceros y sin
modificaciones sexuales. El esternón con una longitud similar a su anchura
presenta en algunos casos una mancha más oscura en el centro. El labium está
fusionado con el esternón.
1.5.2.2. Apéndices
Quelíceros
CAP.1-27
INTRODUCCIÓN
Pedipalpos
Los pedipalpos están formados por seis artejos: coxa, trocánter, fémur, patela,
tibia y tarso. En los machos, como en el resto de las arañas, los pedipalpos tienen
la función de órgano copulador masculino y presentan numerosas estructuras que
intervienen en la cópula y transfieren el esperma en la cavidad genital femenina.
Los pedipalpos masculinos del género Pholcus tienen una morfología muy
compleja distinguiéndose fácilmente del resto de las arañas (Fig. 6 y 7). El bulbo
genital esta formado por escleritos fusionados (Kraus, 1984) y se inserta en la
parte ventral de la zona proximal del tarso. La presencia de procursus, una
estructura tarsal muy compleja y fuertemente quitinizada, es exclusiva de la
familia Pholcidae y muy importante a nivel taxonómico.
CAP.1-28
INTRODUCCIÓN
El bulbo genital se inserta en la parte ventral del tarso y presenta varias apófisis
(Fig. 10), la más grande de ellas es el uncus. El uncus, en Pholcus, está muy bien
desarrollado y su morfología es muy útil para determinar las diferentes especies.
Entre el uncus y el bulbo genital se encuentra otra proyección del bulbo llamada
el apéndice del bulbo. Este apéndice es muy variable en su morfología y en
muchas de las especies adicionalmente se divide en dos o tres apófisis distales.
Entre el uncus y el apéndice se extiende el émbolo. El émbolo es membranoso
con la base relativamente estrecha y dilatado en su parte donde se aprecian
numerosos dentículos.
En la parte proximal del tarso se encuentra el órgano tarsal (Fig. 11) que en
Pholcus es capsulado (Huber, 2000).
CAP.1-29
INTRODUCCIÓN
Apéndices marchadores
Las patas son muy largas y finas, con el tarso pseudosegmentado (Fig. 13) y con
tres uñas tarsales. Su tamaño relativo es 1243.
CAP.1-30
INTRODUCCIÓN
CAP.1-31
INTRODUCCIÓN
1.5.2.3. Opistosoma
En la parte caudal del opistosoma se observan tres pares de hileras (Fig. 14):
anteriores, medianas y posteriores. Las posteriores no presentan fusulas y no
producen seda. Las hileras anteriores y las posteriores a menudo tienen machas de
color castaño.
Los caracteres morfológicos de los órganos genitales femeninos que nos facilitan
la identificación específica son: la forma y el tamaño de la placa genital, la
abertura genital y la forma y situación de las placas porosas del útero interno (Fig.
17).
CAP.1-32
INTRODUCCIÓN
CAP.1-33
INTRODUCCIÓN
1.5.3. Biología
Los Pholcus son gregarios y sedentarios. Casi todas las especies son arañas de
tendencias lucífugas y por esta razón prefieren sitios donde no hay mucha luz.
Construyen telas de captura irregulares donde esperan a sus víctimas. Para
construir sus telas prefieren espacios cerrados donde no haya fuertes corrientes de
aire y la humedad sea elevada. Algunas especies se encuentran en las entradas de
cuevas (Pholcus roquensis) o incluso llegan a ser troglobias (Pholcus corniger),
varias especies poseen marcadas tendencias antropófilas (Pholcus ornatus,
Pholcus fuerteventurensis, Pholcus phalangioides).
Al igual que el resto de araneidos, los phólcidos son depredadores y capturan sus
presas mediante telas de captura. Sus víctimas pueden ser atacadas incluso cuando
están en contacto sólo con un hilo y no están realmente atrapadas en la tela. En
cualquier caso los Pholcus nunca atacan sus presas si estas no están en contacto
con la tela. El contacto inicial con la victima es normalmente con el primer par de
patas. Si por alguna razón éste se ha efectuado con las patas III o IV, el Pholcus
vuelve a tocar la presa con el primer par de patas y después empieza a encubrirla
con hilos de seda. Cuando el primer contacto es con el segundo par de patas se
puede proceder directamente a enrollar la presa sin tocarla con el primer par.
Después de inmovilizar a la victima, le clava cinco o seis veces la uña de los
quelíceros y luego empieza a alimentarse.
Aunque las presas más comunes son insectos que quedan atrapados en la tela, los
Pholcus también se alimentan de otras arañas o de sus huevos invadiendo telas
ajenas (Jackson & Brassington, 1987). También utilizan las telas de otras arañas
como sistema de captura. En estos casos se observa un comportamiento
específico denominado “mimicria agresiva”. Este comportamiento consiste en
movimientos vibratorios que imitan la conducta de pequeños insectos cuando
caen atrapados en la tela de araña. Este comportamiento se evidencia cuando
CAP.1-34
INTRODUCCIÓN
atacan otras arañas en sus propias telas y muy raramente cuando la presa es un
insecto. Es difícil saber hasta qué punto es importante la depredación sobre otras
especies de arañas, pero la presencia de comportamientos como la “mimicria
agresiva” sugieren que debe de ser un fenómeno bastante normal en algunas
especies.
CAP.1-35
INTRODUCCIÓN
CAP.1-36
INTRODUCCIÓN
CAP.1-37
INTRODUCCIÓN
El género Pholcus con sus más de 114 especies (Platnik, 2005; Dimitrov &
Ribera, in press a) es uno de los géneros más numerosos dentro de la familia
Pholcidae. Las primeras especies de Pholcus fueron descritas a finales del siglo
XVIII: P. phalangioides (Fuesslin, 1775) y P. opilionoides (Schrank, 1781). En
aquel momento todavía no estaba establecido el género Pholcus y estas dos
especies se describieron como miembros de Aranea. Más tarde Walckenaer
(1805) estableció el género Pholcus basándose en P. phalangioides como especie
tipo. Los caracteres más importantes que lo distinguen del resto de los géneros en
la familia son: presencia de ocho ojos; presencia de prominencias frontales y
apófisis próximolaterales en los quelíceros; presencia de una apófisis del bulbo
bien desarrollada, fuertemente esclerotizada y con una granulación característica
(el uncus); presencia de un émbolo membranoso; presencia de una placa
triangular muy fuertemente quitinizada en el epigino; la forma cilíndrica del
opistosoma y su gran tamaño en comparación con otros géneros cercanos. Como
resultado del gran parecido somático entre las distintas especies, que incluso se
puede observar a nivel genérico, la taxonomía del género Pholcus (y en gran parte
de toda la familia Pholcidae) esta basada en los caracteres de los órganos
genitales, tanto masculinos como femeninos
CAP.1-38
INTRODUCCIÓN
2003b, 2003c). Sinonimizar estos géneros sin previamente hacer un estudio muy
detallado, tanto de la morfología de las especies que los componen como de sus
relaciones evolutivas, sería poco convincente, ya que bastante de las especies que
albergan son marcadamente diferentes desde punto de vista morfológico. Es más,
muy probablemente los tres géneros sean válidos y simplemente precisan una
redescripción taxonómica precisa y un estudio sobre sus relaciones evolutivas.
CAP.1-39
INTRODUCCIÓN
CAP.1-40
INTRODUCCIÓN
1.5.5. Distribución
Mientras las Islas Canarias albergan casi el 20% de la totalidad de las especies
conocidas del género, en el continente europeo se conocen tan solo tres especies
de Pholcus. Dentro del archipiélago Canario el género esta presente en todas las
islas y en cada una de ellas hay por lo menos una especie endémica exclusiva, con
la única excepción de la isla de La Palma.
Los conocimientos sobre el género Pholcus en las Islas Canarias son bastante
irregulares e insuficientes. La primera cita de una especie de Pholcus en el
archipiélago es de 1895. Bösenberg describió la primera especie endémica del
archipiélago: Pholcus ornatus (Bösenberg, 1895). Se trata de una especie con
hábitos antropófilos y por consiguiente la que posee la mayor distribución dentro
del archipiélago. Después de este trabajo no hay nuevas aportaciones sobre este
CAP.1-41
INTRODUCCIÓN
género en un largo periodo de tiempo (casi cien años). La gran mayoría de las
especies fueron descritas recientemente como resultado de los trabajos realizados
principalmente por J. Wunderlich. Así en el año 1980 este autor describió el
primer Pholcus endémico de La Gomera Pholcus gomerae (Wunderlich, 1980a).
Siete años más tarde, y en un sólo trabajo, describió ocho especies nuevas;
Pholcus calcar, Pholcus corcho, Pholcus multidentatus, Pholcus helenae,
Pholcus mascaensis, Pholcus tenerifensis, Pholcus gomeroides y Pholcus sveni
(Wunderlich, 1987). En 1991 y, junto con la descripción de otras cuatro nuevas
especies (Pholcus fuerteventurensis, Pholcus roquensis, Pholcus knoeseli y
Pholcus malpaisensis), el mismo autor cita el primer Pholcus canario que
presenta ciertas características troglomorfas; Pholcus baldiosensis (Wunderlich,
1991). Finalmente la última descripción de una especie de Pholcus canario se
debe a Campos y Wunderlich (1994), los cuales describes Pholcus edentatus,
especie endémica de la isla de Gran Canaria.
CAP.1-42
OBJETIVOS
2. Objetivos
CAP.2-43
OBJETIVOS
CAP.2-44
MATERIALES Y MÉTODOS
3. Materiales y métodos
Con el fin de clarificar la situación del género Pholcus en las Islas Canarias, en
cuanto al número de especies y a su distribución, se planificaron y realizaron una
serie de campañas de prospección con la finalidad de delimitar, dentro de lo
posible, las áreas de distribución de cada una de las especies conocidas y
recolectar material destinado a estudios tanto morfológicos como moleculares.
Durante estas campañas se recolectó material locotípico que nos permitió su
comparación con los ejemplares “tipo” de cada una de las especies descritas y
valorar la variabilidad morfológica de las mismas para su posterior redescripción.
Cabe señalar que se ha hecho un esfuerzo por muestrear todas las zonas
ecológicas presentes en cada una de las islas, y también se han prospectado todas
las localidades donde existían citas previas.
CAP.3-45
MATERIALES Y MÉTODOS
Dr. Bernhard Huber, Dr. Miquel A. Arnedo, Dr. Pedro Oromí, y Jörg Wunderlich.
CAP.3-46
MATERIALES Y MÉTODOS
Los quelíceros de los machos se han dibujado en posición frontal sin separarlos
del prosoma.
CAP.3-47
MATERIALES Y MÉTODOS
Primero: las partes del ejemplar (padipalpo, quelíceros, etc.) seleccionadas para la
posterior observación en SEM, fueron separadas y deshidratadas pasándolas con
una serie de alcoholes de concentración ascendente. Posteriormente se secaron,
bien a punto crítico, si tenían una estructura frágil, o bien al aire si presentaban
una fuerte quitinización. Una vez secas las muestras se montaron en la posición
correcta para su observación y se recubrieron con oro.
CAP.3-48
MATERIALES Y MÉTODOS
Cabe mencionar que estos genes se han utilizado con éxito en numerosos estudios
filogenéticos para reconstruir la historia evolutiva de diversos grupos de animales
en el archipiélago canario (Arnedo et al., 2001; Ribera et al., 2003; Sota &
Vogler, 2003; Pestano et al., 2003; Emerson et al., 2000; Salomone et al., 2000;
Fu, 1997; Pruser & Mossakowski, 1998; Gonzáles et al., 1996; Rando et al.,
1997; Juan et al., 1995, 1996a, 1996b).
Para la extracción de ADN se utilizó QIAamp DNA Mini Kit (Qiagen) siguiendo
el protocolo del fabricante.
CAP.3-49
MATERIALES Y MÉTODOS
3.4.3. Amplificación
CAP.3-50
MATERIALES Y MÉTODOS
3.4.4. Secuenciación
CAP.3-51
MATERIALES Y MÉTODOS
9. Secar el ADN.
CAP.3-52
MATERIALES Y MÉTODOS
CAP.3-53
MATERIALES Y MÉTODOS
CAP.3-54
MATERIALES Y MÉTODOS
Para las reconstrucciones de los estados ancestrales de los caracteres y los tests de
su evolución se utilizo el programa Mesquite ver. 1.05.
Uno de los argumentos más importantes a favor del uso de la máxima parsimonia,
que también en nuestro caso nos hace creer que este método podría ser el más
apropiado, es la posibilidad de incluir en el análisis diferentes tipos de caracteres
(moleculares, morfológicos, etc.).
CAP.3-55
MATERIALES Y MÉTODOS
mayor de 100. En Pe-Wee las búsquedas para cada valor de K (conc1 – conc6) se
realizaron ejecutando los comandos h10000h/2mul*1000max*.
CAP.3-56
MATERIALES Y MÉTODOS
CAP.3-57
MATERIALES Y MÉTODOS
CAP.3-58
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
4. Resultados y discusión
CAP.4-59
Texto del artículo disponible en / Text de l’article disponible a / Avalaible online at:
CAP.4-162
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
CAP.4-163
Texto del artículo disponible en / Text de l’article disponible a / Avalaible online at:
Journal of Arachnology
http://www.americanarachnology.org/JOA_online.html
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
CAP.4-181
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
CAP.4-182
Texto del artículo disponible en / Text de l’article disponible a / Avalaible online at:
Resumen:
CAP.4-189
Texto del artículo disponible en / Text de l’article disponible a / Avalaible online at:
CAP.4-206
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
En el caso de 16S, los valores observados son parecidos a los del ND1. Aquí la
divergencia máxima es del 38.9% y corresponde a una comparación de secuencias
de especies de diferentes géneros. De nuevo el valor mínimo es de 0.0% a nivel
poblacional. Dentro de las especies macaronésicas las distancias genéticas son
más reducidas y varían entre 17.5% y 0.0%.
CAP.4-207
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
T(U) C A G A+T
COI 40,6 13,2 22,3 23,9 62,9
ND1 34,1 21,6 34,8 9,5 68,9
16S 30,1 16,0 39,0 14,8 69,1
CAP.4-208
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
En las Figuras 22-24 están representadas las curvas de saturación para cada uno
de los genes estudiados. En la Figura 22 E podemos observar como las
transversiones en la tercera posición del codón en COI presentan evidencias de
saturación en los casos de taxones con una divergencia genética superior a 12.9%.
Lo mismo se observa para las terceras posiciones de ND1 (Figura 23 E) para los
taxones con divergencias genéticas superiores al 20%. En el caso de 16S no se
observan indicios de saturación.
CAP.4-209
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
30 9
8
25
7
20 6
5
Ts
Tv
15
4
10 3
2
5
1
0 0
0 0,05 0,1 0,15 0,2 0,25 0 0,05 0,1 0,15 0,2 0,25
Distancia genética no corregida Distanacia genética no corregida
A B
6 6
5 5
4 4
Ts
Tv
3 3
2 2
1 1
0 0
0 0,05 0,1 0,15 0,2 0,25 0 0,05 0,1 0,15 0,2 0,25
Distancia genética no corregida Distancia genética no corregida
C D
90 80
80 70
70 60
60
50
50
TS
TV
40
40
30
30
20 20
10 10
0 0
0,00 0,05 0,10 0,15 0,20 0,25 0 0,05 0,1 0,15 0,2 0,25
Distancia genética no corregida Distancia genética no corregida
E F
CAP.4-210
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Ts NDH 1a Tv NDH 1a
25 30
25
20
20
15
Ts
Tv
15
10
10
5
5
0 0
0 0,05 0,1 0,15 0,2 0,25 0,3 0,35 0,4 0,45 0 0,05 0,1 0,15 0,2 0,25 0,3 0,35 0,4 0,45
Distancia genética no corregida Distancia genética no corregida
A B
Ts NDH 2a Tv NDH 2a
14 14
12 12
10 10
8 8
Ts
Tv
6 6
4 4
2 2
0 0
0 0,05 0,1 0,15 0,2 0,25 0,3 0,35 0,4 0,45 0 0,05 0,1 0,15 0,2 0,25 0,3 0,35 0,4 0,45
Distancia genética no corregida Distancia genética no corregida
C D
Ts NDH 3a Tv NDH 3a
40 60
35
50
30
40
25
Ts
Tv
20 30
15
20
10
10
5
0 0
0 0,05 0,1 0,15 0,2 0,25 0,3 0,35 0,4 0,45 0 0,05 0,1 0,15 0,2 0,25 0,3 0,35 0,4 0,45
Distancia genética no corregida Distancia genética no corregida
E F
CAP.4-211
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Ts 16S Tv 16S
60 100
90
50
80
70
40
60
Ts
Tv
30 50
40
20
30
20
10
10
0 0
0 0,05 0,1 0,15 0,2 0,25 0,3 0 0,05 0,1 0,15 0,2 0,25 0,3
Distancia genética no corregida Distancia genética no corregida
A B
--
** Akaike Information Criterion (AIC) **
Base frequencies:
freqA = 0.2968
freqC = 0.1033
CAP.4-212
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
freqG = 0.1922
freqT = 0.4076
Substitution model:
Rate matrix
R(a) [A-C] = 4.2270
R(b) [A-G] = 11.3688
R(c) [A-T] = 1.1542
R(d) [C-G] = 0.9561
R(e) [C-T] = 16.4372
R(f) [G-T] = 1.0000
Among-site rate variation
Proportion of invariable sites (I) = 0.4773
Variable sites (G)
Gamma distribution shape parameter = 0.6557
--
El Akaike information criterion (Akaike, 1974) fue utilizado para comparar los
diferentes modelos. El mismo modelo evolutivo, GTR + I + G, pero con
diferentes parámetros fue seleccionado por el MODELTEST para todas las
matrices.
La incongruencia topológica entre los tres genes fue comprobada mediante el ILD
(incongruence lenght difference) test (Farris et al, 1994; Minckevich & Farris,
1981) en el programa PAUP versión 4.0b10. En el test se realizaron 1000 réplicas
y se utilizaron sólo los caracteres informativos según el criterio de parsimonia.
El resultado del ILD confirma que los tres genes no son incongruentes entre ellos
desde un punto de vista estadístico.
CAP.4-213
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Para evaluar la información que aporta cada uno de los tres genes secuenciados se
llevaron a cabo varios análisis. Cada análisis se ejecutó para cada gen por
separado. Aunque las preferencias del autor se inclinan hacia el uso de métodos
basados en parsimonia, como ya se ha comentado en el apartado de materiales y
métodos, la comparación de los resultados procedentes de diferentes análisis
puede ser útil para detectar ciertos problemas (como por ejemplo el long branch
attraction). Esta aproximación también se puede utilizar como una medida
adicional para examinar la robustez de los resultados.
16S
CAP.4-214
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
por último, el cuarto acoge los endemismos de Tenerife (se ha de tener en cuenta
que en este análisis no están incluidas las dos especies cavernícolas de Tenerife,
P. corniger y P. baldiosensis, por razones previamente discutidas). El soporte de
bootstrap para estos grupos es mayor de 50 con la única excepción del conjunto
de especies de Madera.
ND1
COI
CAP.4-215
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
En este caso las diferencias entre las distintas poblaciones están mejor soportadas
presentando valores de bootstrap más elevados. Las especies que en los dos
análisis previos aparecían como parafiléticas aquí recuperan la monofilia con la
única excepción de P. sveni. Este caso coincide con las dos secuencias parciales
obtenidas de estas especies (P. sveni H y P. bimbache CM2) y muy
probablemente sea un artefacto originado por la presencia de missing data.
CAP.4-216
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
CAP.4-217
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
CAP.4-218
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
CAP.4-219
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
16S
Dentro del otro gran clado formado por especies macaronésicas, las especies de
Madera de nuevo se reconocen como un grupo monofilético y éste recibe un
soporte alto. Lo mismo ocurre con las especies de Tenerife, donde a pesar de que
las especies P. tenerifensis y P. mascaensis aparecen como parafiléticas, las
especies de la zona de Anaga y sus cercanías (P. knoeseli y P. malpaisensis)
forman un clado con un soporte del 100%. El resto de las especies forman un
grupo que también recibe un soporte del 100% dentro del cual se encuentran las
de la zona da Teno (P. intricatus y P. mascaensis) y P. roquensis + P. tenerifensis
CAP.4-220
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Por ultimo las especies de las islas más orientales, junto con el P.
fuerteventurensis, forman un grupo monofilético con un soporte alto.
ND1
A pesar de las similitudes en los clados principales las relaciones entre ellos
difieren con respecto a los resultados del análisis de la matriz de 16S. En este
caso las especies de Madera y las islas orientales del archipiélago canario ocupan
una posición basal, mientras que el resto de los endemismos canarios forman un
grupo dentro del cual se separan, por un lado las especies de Gran Canaria, y por
el otro las de Tenerife y las islas occidentales. Los cinco clados principales
obtienen un soporte alto. El árbol obtenido del análisis del fragmento secuenciado
de ND1 está representado en la Figura 29.
COI
CAP.4-221
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Figura 28. Resultado del análisis con MrBayes de la matriz de 16S. Los números
en los nodos representan los valores de la probabilidad posterior.
CAP.4-222
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Figura 29. Resultado del análisis del fragmento de ND1 aplicando la inferencia
Bayesiana. Los números en los nodos representan los valores de la probabilidad
posterior.
CAP.4-223
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Figura 30. Resultado del análisis del fragmento de COI aplicando la inferencia
Bayesiana. Los números en los nodos representan los valores de la probabilidad
posterior.
CAP.4-224
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Máxima parsimonia
16S
Dentro del segundo grupo las especies de Tenerife se separan de las de El Hierro
y La Gomera formando dos clados que reciben un soporte alto. También entre las
especies de Tenerife se observa una clara segregación en tres grupos, que
coinciden en gran medida con la teoría de la formación de la isla.
El tercer clado se divide en dos grupos que obtienen soporte alto. Uno de ellos
está formado por las especies de Gran Canaria sin el P. fuerteventurensis y el otro
compuesto por P. fuerteventurensis + P. anachoreta.
Aunque los clados principales coinciden con los propuestos en los previos
análisis, las relaciones entre ellos están resueltas de una manera diferente. Los
resultados de los análisis de ML y IB sugieren una estrecha relación entre las
especies de Madera y las de las islas más orientales del archipiélago canario e
incluso la colonización de Madera desde un ancestro procedente de esta zona,
ninguno de los árboles más parsimoniosos obtenidos aplicando ponderación
uniforme soporta esta hipótesis.
CAP.4-225
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
ND1
Como resultado del análisis del fragmento de ND1 se obtuvieron tres árboles más
parsimoniosos con longitud de 723 pasos, Ci=51 y Ri=80. El consenso estricto de
estos tres árboles está representado en la Figura 33. Nuevamente las especies
macaronésicas forman un grupo monofiletico. Los cinco clados terminales son los
mismos que en los análisis anteriores y todos reciben un soporte alto, tanto de
bootstrap como de jackknife. Sin embargo las relaciones entre ellos están
pobremente soportadas, tan sólo en el caso de las islas más occidentales y
Tenerife la existencia de un ancestro común obtiene soporte. La aplicación de
ponderación implícita en Pee-Wee (Figura 34) con valores bajos de K de nuevo
da como resultado la perdida de la monofilia de las especies macaronésicas y los
clados principales no presentan diferencias entre los resultados obtenidos con
diferentes valores de K y los de la ponderación uniforme.
COI
CAP.4-226
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
CAP.4-227
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
CAP.4-228
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Figura 32. Árboles simplificados obtenidos como resultado del análisis con Pee-
Wee de la matriz de 16S. A – con valores de K=2-6; B – con valor de K=1.
CAP.4-229
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
CAP.4-230
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Figura 34. Árboles simplificados obtenidos como resultado del análisis con Pee-
Wee de la matriz de ND1. A – con valores de K=1-4; B – con valor de K=5-6.
Los taxones del outgroup están señalados con una línea discontinua fina.
CAP.4-231
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
CAP.4-232
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Figura 36. La parte del árbol que difiere en los resultados de Pee-Wee con K=1-2
con respecto al árbol de NONA y los de Pee-Wee con valor de K=3-6.
CAP.4-233
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Las diferencias en los resultados obtenidos de los distintos análisis son mínimas.
En todos ellos las especies macaronésicas constituyen un grupo monofilético con
alto soporte.
CAP.4-234
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
CAP.4-235
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Una vez evaluada la información filogenética de cada uno de los genes por
separado y la del análisis conjunto de los dos genes proteicos, se construyó una
única matriz con los tres fragmentos secuenciados. La legitimidad de esta
aproximación está avalada por el resultado del test de incongruencia aplicado a
las tres particiones de la matriz. Para minimizar el efecto negativo de la presencia
de missing data varios taxones incompletos fueron excluidos. La elección de los
taxones a excluir se realizó mediante una serie de análisis preliminares en los
cuales se detectaron todos los casos problemáticos.
ML e inferencia Bayesiana
CAP.4-236
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Algunos de estos grupos principales están compuestos por clados más pequeños
que en la mayoría de los casos están bien soportados. De esta forma dentro del
grupo de las especies de Tenerife se diferencian tres grupos bien diferenciados. El
primero está compuesto por las especies de la zona de Anaga y sus alrededores
(P. knoeseli y P. malpaisensis); el segundo está formado por las dos especies
endémicas de la zona de Teno (P. intricatus y P. mascaensis); el tercero agrupa
las especies del centro y el sur de la isla (P. roquensis y P. tenerifensis). Dentro
del clado formado por las especies de Gran Canaria también se distinguen dos
grupos bien definidos – uno está formado por P. edentatus y la nueva especie del
Barranco de Fataga, y el segundo por el resto de las especies.
MP
CAP.4-237
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Es interesante notar que en el análisis de los dos genes proteicos la posición de las
especies de Madera también se presentaba como un punto conflictivo en los
resultados de máxima parsimonia y los métodos basados en verosimilitud. Muy
probablemente esto es resultado de la homoplasia de algunos de los caracteres, ya
que la aplicación de ponderación implícita resuelve este conflicto a favor de la
topología obtenida con máxima verosimilitud e inferencia bayesiana. Obviamente
se ha de tener en cuenta que en estas matrices no están presentes tres de las
especies macaronésicas que no fueron secuenciadas. Su ausencia del análisis
podría afectar la precisión de los resultados y la estabilidad de algunos de los
clados. Además algunos de los caracteres que ahora resultan no informativos
podrían serlo si se añaden estas tres especies.
CAP.4-238
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Figura 38. Resultado del análisis conjunto de los tres genes secuenciados
aplicando máxima verosimilitud y el método bayesiano. Los asteriscos debajo de
las ramas señalan los bootstrap superiores a 70 y los triángulos las probabilidades
posteriores superiores al 96%.
CAP.4-239
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
CAP.4-240
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
4.2.3.5. Discusión
CAP.4-241
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
En cuanto a las relaciones entre los cinco clados principales sólo el grupo
formado por tenerifensis + bimbache obtiene un soporte alto en todos los análisis
efectuados. La agrupación de ornatus con fuerteventurensis también presenta un
soporte significativo y está presente en la mayoría de los resultados. El caso del
clado parvus es bien distinto. Su relación con el resto de las especies
macaronésicas no está resuelta. Aunque en ciertos casos una u otra agrupación
con alguno de los otros cuatro grupos recibe soporte, a menudo las relaciones
propuestas por los distintos análisis son incongruentes. Muy probablemente gran
parte de los problemas para resolver las relaciones entre los cinco grupos de
especies macaronésicas está causado por la falta de información molecular para P.
baldiosensis, P. corniger y Pholcus vachoni de Agadir. Basándose en estas
consideraciones, dentro de las especies canarias podemos definir dos grandes
grupos – el occidental formado por los clados tenerifensis y bimbache, y el
oriental compuesto por ornatus y fuerteventurensis. Las especies de Madera
probablemente provienen de un ancestro procedente del archipiélago canario,
pero con la información disponible no se puede determinar con exactitud su lugar
de origen. Esto no es un hecho aislado en el orden Araneae, ya que en caso del
CAP.4-242
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
En algunos casos las especies de los clados principales se segregan en grupos más
pequeños, cuyos miembros habitan zonas geográficas limitadas dentro de una
isla. De este modo en el clado ornatus se diferencian dos grupos – uno de P.
edentatus con los haplotipos Pholcus sp. BFGC, y el otro del resto de las
especies. En el clado tenerifensis en todos los análisis realizados se reconocen tres
grupos monofiléticos de especies: P. knoeseli y P. malpaisensis de Anaga; P.
intricatus y P. mascaensis de Teno; y P. roquensis y P. tenerifensis de la zona
central de la isla. Dos de estos grupos coinciden con las dos partes mas antiguas
de la isla, Anaga y Teno, que antes de la formación de las Cañadas y del Teide
formaban islas independientes.
CAP.4-243
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Efectos de la saturación
CAP.4-244
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Es importante tener en cuenta que estas dos formas de tratar los datos parten de
unas premisas básicas muy diferentes. El análisis por particiones supone que hay
varios tipos de información totalmente independientes entre sí, en su forma y en
su utilidad para la reconstrucción de las relaciones filogenéticas de los
organismos. El análisis simultáneo supone que lo más importante en un estudio
filogenético es la maximización de toda la información disponible y aplica unos
tests de homología muy restrictivos. Como en nuestro caso se trata de construir
CAP.4-245
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
un cladograma que nos permitirá inferir los procesos evolutivos del género
Pholcus en las Islas Canarias, creemos que el análisis simultáneo es el más
apropiado.
CAP.4-246
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
En los tres casos el ILD encontró una incongruencia significativa entre las
particiones comparadas. A pesar de estos resultados, los árboles obtenidos de los
análisis por separado de las cuatro particiones no presentaban incongruencias en
los clados principales, sino en la posición de algunos taxones dentro de ellos. Las
únicas diferencias importantes se observaban en la topología del grupo formado
por los clados tenerifensis y bimbache (clado occidental). En los resultados del
análisis morfológico las especies endémicas de Tenerife, El Hierro y La Gomera
forman un grupo monofilético dentro del cual no se reconocen los clados
tenerifensis y bimbache como grupos monofiléticos. Aunque el clado formado
por todas las especies de las islas occidentales obtenía un soporte alto, ninguno de
los nodos internos presentaba jackknife o bootstrap superior a 50. Es más,
forzando una topología igual a la obtenida con los análisis moleculares se
producía un aumento relativamente pequeño en la longitud del árbol.
CAP.4-247
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
particiones (Yoder et al., 2001; Darlu & Lecointre, 2002; Dowton & Austin,
2002).
4.2.4.3. Resultados
CAP.4-248
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Una manera más objetiva de decidir cual de estas topologías se va a preferir para
inferir los procesos de colonización y radiación del género Pholcus en las Islas
Canarias es la aplicaron de análisis adicionales cambiando algunos paraméntelos.
En este sentido una buena aproximación es el uso de análisis que tratan de dar
distinto peso a los caracteres como es el caso de implied weighting Pee-Wee. El
análisis de la matriz conjunta aplicando ponderación implícita en Pee-Wee con
K=1-6 proporciona cinco árboles idénticos en todos análisis y para cada valor de
la constante de concavidad aplicada. En todos ellos la única diferencia con
respecto a los resultados de NONA es la posición de la especie P. vachoni de
Agadir y las relaciones entre las especies de Lanzarote y Fuerteventura. Todos los
resultados de Pee-Wee evidencian la existencia del clado P. fuerteventurensis +
P. anachoreta + P. vachoni. En la Figura 42 está representada la parte del árbol
que difiere con respecto al consenso de los árboles obtenidos con ponderación
uniforme en NONA.
CAP.4-249
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Figura 40. Consenso estricto de los 18 árboles obtenidos con NONA analizando
la matriz conjunta. (L=3373; Ci=43; Ri=80).
CAP.4-250
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
CAP.4-251
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
4.2.4.4. Discusión
Aunque el mecanismo de los posibles efectos negativos del missing data todavía
no están muy bien conocidos, en numerosos estudios se ha demostrado que la
presencia de taxones con un gran número de caracteres sin codificar, produce un
aumento de los árboles más parsimoniosos y un consenso con menor resolución
(Gauthier, 1986; Novacek, 1992b; Wilkinson & Benton, 1995; Gao & Norell,
1998). Lo más probable es que esto esté causado por la incierta posición de los
taxones incompletos (Huelsenbeck, 1991; Nixon & Wheeler, 1992; Wilkinson,
1995).
CAP.4-252
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Grande & Bemis, 1998; Ebach & Ahyong, 2001) de ellas las dos más acceptadas
son:
2.- Sin embargo, varios autores (Gauthier et al., 1988; Donoghue et al., 1989;
Novacek, 1992b; Wilkinson, 1995; Anderson, 2001; Kearney, 2002) demuestran
que esto no es necesariamente cierto y que el verdadero problema reside en el
muestreo de un número de caracteres demasiado reducido, y esto puede resolverse
añadiendo más caracteres a la matriz, independientemente de la cantidad de
missing data presentes. Wiens (2003) evalúa estas dos hipótesis y confirma que el
origen del problema está en la inclusión de pocos caracteres y no en los datos que
faltan.
El conjunto de matrices definidas en todos los análisis dan como resultado una
serie de topologías que coinciden en la mayoría de los grupos resultantes. Aun
así, para poder optimizar los caracteres morfológicos y la información
biogeográfica, con el objetivo de esclarecer las pautas de colonización y radiación
del género Pholcus en el archipiélago canario, se ha de optar por un árbol
concreto o al menos un grupo muy reducido de topologías. Basándose en los
resultados obtenidos en los numerosos análisis efectuados, tanto con la matriz
conjunta como con las particiones, la elección del cladograma preferido no es una
difícil decisión, ya que en la mayoría de los casos se reconocen topologías
prácticamente idénticas.
CAP.4-253
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Para resolver las relaciones entre las especies en el clado oriental y en concreto
entre las especies de Lanzarote, Fuerteventura y P. vachoni se escogió la
topología representada en la Figura 41. Esta topología es una de los cuatro
obtenidas con parsimonia uniforme y es la única que es congruente con los
resultados del análisis de parsimonia con ponderación implícita. Además, es
completamente congruente con los resultados obtenidos con los resultados de los
análisis moleculares y morfológicos.
En la Tabla 10 están representados todos los clados que se proponen para agrupar
las especies de Pholcus endémicas de las Islas Canarias.
CAP.4-254
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Figura 43. Árbol escogido como hipótesis de las relaciones filogenéticas de las
especies endémicas de Pholcus en las Islas Canarias y en el resto de Macaronesia.
CAP.4-255
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Clado corniger 2
P. corniger T
P. baldiosensis T
Clado oriental 11
Clado guadarfia 1
P. guadarfia L
Clado fuerteventurensis 2 (3)
P. fuerteventurensis F
P. anachoreta L (Montaña Clara)
(Pholcus vachoni) Moroco
Clado edentatus 2
P. edentatus GC
Pholcus n. sp. Barranco de Fatiga GC
Clado ornatus 5
P. ornatus GC, T, G, P, H
P. multidentatus GC
P. helenae GC
P. calcar GC
P. corcho GC
Clado occidental 9
Clado tenerifensis 6
P. tenerifensis T
P. roquensis T
P. knoeseli T
P. malpaisensis T
P. intricatus T
P. mascaensis T
Clado bimbache 3
P. bimbache H
P. sveni G
P. gomerae G
Tabla 10. Clados propuestos en el presente estudio para agrupar las especies
endémicas de Pholcus de las Islas Canarias. En paréntesis se señala la posición
más probable de la nueva especie de Pholcus descubierta en Marruecos. F –
Fuerteventura; L – Lanzarote; GC – Gran Canaria; T – Tenerife; G – La Gomera;
P – La Palma; H – El Hierro.
CAP.4-256
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Hay tres modelos principales que intentan explicar las pautas de formación de la
diversidad específica en islas oceánicas en relación con su aislamiento. El primer
modelo trata acerca de las islas que se sitúan cerca del continente, normalmente
en éstas se forman meta-poblaciones de especies procedentes del continente más
cercano. En este caso los eventos de colonización son frecuentes y no se observa
un aislamiento efectivo entre las poblaciones. El segundo modelo es para las islas
que presentan un aislamiento intermedio, las colonizaciones continentales son
menos frecuentes y permiten la especiación local, pero no facilitan eventos de
radiación adaptativa, ya que la tasa de inmigración es mayor que la de especiación
local. El tercer y último escenario es el que se observa en las islas que presentan
un grado de aislamiento alto. En estos casos las colonizaciones son poco
frecuentes y en muchos casos se generan procesos de radiaciones específicas. Un
ejemplo de radiación adaptativa espectacular en las Islas Canarias es el caso del
género Dysdera (Arnedo et al., 2001; Arnedo & Ribera, 1999).
Por otro lado hay dos tipos principales de especiación dentro del mismo
archipiélago. El primero es el proceso de formación de nuevas especies
geográficamente separadas (especiación alopátrica), derivadas de eventos de
colonización interinsular, o de la colonización de una parte de la isla desde otra
zona geográficamente separada. La otra posibilidad está más relacionada con la
diversificación dentro de la misma isla, o en la misma zona geográfica, que da
lugar a especies cuyas distribuciones se solapan (especiación simpátrica).
Además, en nuestro caso nos encontramos con especies cavernícolas que pueden
haberse generado mediante un proceso de especiación parapátrica.
CAP.4-257
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
4.2.5.2. Resultados
CAP.4-258
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
CAP.4-259
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
CAP.4-260
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
CAP.4-261
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
CAP.4-262
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
CAP.4-263
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Estos resultados indican que las primeras especies de Pholcus colonizaron las
Islas Canarias hace más de 7Ma. Si consideramos la falta de información
molecular para las dos especies cavernícolas P. baldiosensis y P. corniger las
cuales ocupan una posición basal con respecto al resto de las especies
macaronésicas, esta edad muy probablemente sea todavía mayor.
Las islas orientales y Madera son las primeras en ser colonizadas desde Tenerife
hace unos 6.5-7Ma. Los resultados obtenidos sugieren que aunque todas las
especies contemporáneas de Pholcus en las islas occidentales son muy recientes,
la colonización de estas islas ha tenido lugar hace unos 5-6Ma.
4.2.5.3. Discusión
La totalidad de las evidencias presentadas en este trabajo apuntan que las especies
presentes en Macaronesia provienen de un ancestro común y muy probablemente
son el resultado de un único fenómeno de colonización desde el continente
africano. De todas formas este dato se ha de tratar con gran cautela ya que uno de
los principales problemas existentes en este trabajo es la falta de grupos externos
disponibles para ser utilizados como prueba del monofiletismo de las especies
CAP.4-264
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Por otro lado, las especies cavernícolas de la isla de Tenerife representan el clado
basal del resto de las especies macaronésicas, y son las responsables de este
resultado. Ambas especies (P. corniger y P. baldiosensis) son estrictamente
cavernícolas y no poseen grupos hermanos epigeos, pudiéndose considerar como
especies relictas. Si realmente estas especies derivan del primer (o primeros)
ancestro que colonizó la isla de Tenerife, hemos de aceptar que se han producido
fenómenos de extinción que han hecho desaparecer del archipiélago las especies
epigeas de las cuales provienen.
Por otro lado, si sacamos del análisis ambas especies las etapas de la colonización
del género Pholcus en las islas macaronésicas queda ambiguo, oscilando desde 1
a 4 procesos de colonización.
CAP.4-265
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
En conclusión podemos decir que el escenario más probable que representa los
procesos de colonización y especiación en las Islas Canarias y el resto de
Macaronesia es el siguiente:
CAP.4-266
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Las especies del clado bimbache se separan del resto de las especies de Tenerife
hace unos 5-6Ma, lo que indica que esta diversificación coincide muy
probablemente con un paso de Tenerife a La Gomera. Por otro lado los dos
grupos dentro del clado tenerifensis se dividen al menos 2.5Ma más tarde.
Muy probablemente las radiaciones específicas recientes que hemos inferido y los
supuestos procesos de extinción ocurridos, estén relacionados, entre otras causas,
por los cambios climáticos producidos durante los ciclos de glaciación acaecidos
en el Pleistoceno. Knowles (2000) demuestra que el gran número de rápidos
cambios climáticos durante este periodo pudo provocar una especiación explosiva
en un marco temporal muy reducido. En este caso los rangos de divergencia que
CAP.4-267
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
CAP.4-268
CONCLUSIONES
5. Conclusiones
CAP.5-269
CONCLUSIONES
10. – Las especies cavernícolas P. corniger y P. baldiosensis son las únicas que
conservan algunas de las características de los ancestros de las especies
canarias. En la actualidad estas dos especies se podrían considerar como
especies relictas.
CAP.5-270
CONCLUSIONES
14. – Se ha demostrado una aceleración del reloj molecular en las especies del
género Pholcus la cual, probablemente, esta causada por el proceso de
especiación explosivo que ha experimentado este grupo en Macaronesia.
CAP.5-271
CONCLUSIONES
CAP.5-272
OTROS HALLAZGOS TAXONÓMICOS
CAP.6-273
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Zootaxa
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OTROS HALLAZGOS TAXONÓMICOS
CAP.6-274
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