Gonzalez Baca, C Dieta Boas Cozumel
Gonzalez Baca, C Dieta Boas Cozumel
Gonzalez Baca, C Dieta Boas Cozumel
POSGRADO EN CIENCIAS
BIOLÓGICAS
TESIS
QUE PARA OBTENER EL GRADO ACADÉMICO DE
P R E S E N T A
GRACIAS!
Esta tesis estuvo en proceso durante tanto tiempo y en tantos lugares que si
agradezco a todos los que me apoyaron la lista sería más larga que la misma
tesis, además, considerando mi memoria RAM es muy probable que me olvide de
más de la mitad. Así que, primero que nada y por si no estas en la lista: GRACIAS!
De nuevo, gracias al Sr. Dr. Don Cuarón en “La tesis contraataca”. Una
tesis más como esta y te beatificas. Has formado parte importante de muchos
cambios trascendentales de mi vida. Gracias por estar ahí, por tu apoyo y, sobre
todo, por tu amistad.
Gracias al Dr. Aurelio Ramírez y al Dr. Gerardo Herrera por sus
comentarios y guía durante el desarrollo y final de este trabajo. Igualmente gracias
a la Dra. Ella Vázquez y al Dr. Andrés García por sus acertadas sugerencias y
rápida respuesta.
Mil gracias a la familia Cartón de Grammont Lara y Kuico, por su
amabilidad, hospitalidad y aguantarme un rato en su casa. Al Dr “Vali” por
adoptarme en su laboratorio en el IE y recibirme en su casa.
A los Cozumeleños por adopción y que alguna vez les tocó filosofar en un
trayecto nocturno, compartir garrapatas en el peech sillón, disfrutar del dulce
aroma de un contenido estomacal o detener boas mientras yo les hacía de cosas:
1ª y 2ª Generación (preparación del trabajo y trayectos nocturnos) Gabo, José
Carlos, Guilota, Nenorrinha Najera, Luís Bernardo, El Doitor Martínez, Tohui,
Flora, Wanda, Iris, Jimena. 3ª y 4ª Generaciones (trayectos, sometimiento de boas
para su medición y compañeros de huracán), Chechi, Ninia, Miriam, Elisa,
Rodrigo, Ana Laura, Chucho, “Dotora” Betancourt, Daniel, Emilio, Pablo, Pavka y
los que se me olviden (que no es por gacho, es por despistado).
A amigos, compañeros por el apoyo moral en los cursos maestría: Chinto,
Lionor, Poncharelo, Tamara, Javierín, Carmela. Gracias a la gente en el CIEco
que me apoyaron con los múltiples trámites que siempre hay que hacer y
embrollos de cómputo: Heberto Ferreira, Mauricio Quesada.
iv
CONTENIDO
RESUMEN
ABSTRACT
Foraging ecology studies the factors that influence in organisms for obtaining
resources, among these are age, size, sex, behavior (foraging strategy), habitat or
availability of resources. Few studies have focused on foraging ecology of
serpents. The aim of this study was to describe morphologic and environmental
factors and their relation with foraging ecology of Boa constrictor on Cozumel
Island. I captured boas, took different body measures and analyzed their stomach
content. In addition, I used different complementary methods in order to check the
availability of potential prey in the different vegetation types on the island. Male and
females boas were similar in most morphologic characteristics, but differ in weight
and tail length. Relative tail length is useful to identify sex in boas at any size
stage. The boas consumed a wide size of preys. Feeding frequency is related to
the size of the boas. Forty percent of the boas contained food, most of these were
adult females. Boas ate preys of very different sizes. Prey abundance was different
in every types of vegetation. Amphibians, reptiles and rodents were less abundant
in low tropical forest. Whereas in that same type of vegetation big preys (>200 g)
had a trend to be more abundant. Boas in Cozumel did not consume the prey
according to their availability. They elect big prey in spite of its little availability. It’s
necessary to constantly check populations of boas and their prey, specially
endemic ones, in order to develop control strategies.
INTRODUCCIÓN 1
1 INTRODUCCIÓN
(e.g., Sih et al. 1985, Terborgh 1988). Al contrario que con los grandes felinos,
hay poco interés por estudiar los efectos de la depredación causada por
serpientes (Bonett et al. 2002). La ausencia de estudios de depredación en
serpientes resulta paradójica considerando que en su dieta incluyen otros
animales con papeles ecológicos importantes (e.g., dispersores de semillas,
polinizadores o presas de otros depredadores) y que en muchos sitios las
serpientes son los depredadores de más alto nivel en la cadena trófica (Mushinsky
1987, Luiselli et al. 1998).
2 HIPÓTESIS
3 OBJETIVOS
4 COZUMEL
De las 451 islas que existen en aguas territoriales mexicanas solo 144
están habitadas, de éstas Cozumel es la mayor ocupando casi el 10% del total de
territorio insular mexicano (INEGI 2002). Presenta un clima cálido-húmedo con
una temperatura media anual de 26 °C, lluvias intensas en verano y una
precipitación promedio anual de 1570 mm (Figura 2; CNA 2005). Los recursos
hídricos superficiales que se presentan en la isla son lagunas costeras,
humedales, cenotes y aguadas. Además hay aguas subterráneas con una capa de
agua dulce. El suelo presente es el mismo material calizo que forma el suelo de la
península de Yucatán.
COZUMEL 8
400 Precipitación
28
Temperatura
350 27
300
26
Precipitación (mm)
Temperatura ºC
250
25
200
24
150
23
100
50 22
0 21
Ene Feb Mar Abr May Jun Jul Ago Sep Oct Nov Dic
4.1 VEGETACIÓN
Hasta el año 2000, cerca del 90% de la isla estaba cubierta por vegetación natural
(Romero-Nájera 2004). La vegetación de la isla es similar a la que existe en la
parte continental más cercana, constituida por asociaciones vegetales de clima
cálido. Los principales tipos de vegetación y que presentan mayor cobertura y
diversidad de especies son: selva mediana subcaducifolia, selva baja
subcaducifolia y manglar. Existe otro grupo de tipos de vegetación con menor
cobertura y diversidad, por lo general, se encuentran asociados a los tipos
principales: tular, tasistal, saibal y vegetación de dunas costeras. La siguiente
clasificación está basada en Tellez et al. (1989) y el área de cobertura de cada tipo
de vegetación en Romero-Nájera (2004).
4.1.3 Manglar
Es una comunidad importante en la isla, por las funciones ecológicas que cumple,
y por encontrarse representado en casi 16% del área total de la isla. La vegetación
alcanza de 5 a 10 m de altura con valores altos de humedad y temperatura. Se
inunda periódicamente con aguas saladas o salobres, por lo que los suelos son
ricos en materia orgánica. Las especies de plantas dominantes son: Rhizophora
COZUMEL 10
4.1.4 Tasistal
Es una asociación poco diversa, con palmas dominantes de 3 a 10 m de altura.
Cubre solamente el 2% del total de la isla, normalmente está asociada a otras
comunidades. La especie dominante es la palma Acoelorhaphe wrigthii y en menor
cantidad Cladium jamaicense, Acrostichum danaeifolium y Schomburgkia tibicinis.
4.2 FAUNA
Categoría de riesgo
Familia Especie UICN a NOM b
LEPTODACTYLIDAE Leptodactylus labialis NI NI
BUFONIDAE Bufo marinus NI NI
Bufo valliceps NI NI
HYLIDAE Hyla microcephala NI NI
Scinax staufferi NI NI
Smilisca baudinii NI NI
CROCODILIDAE Crocodylus acutus VU Pr
CHELONIIDAE Caretta caretta EN P
Chelonia mydas EN P
KINOSTERNIDAE Kinosternon scorpioides NI Pr
EMYDIDAE Rhinoclemmys areolata NI A
Trachemys scripta LR Pr
GEKKONIDAE Sphaerodactylus glaucus NI Pr
Sphaerodactylus millepunctatus NI NI
Aristelliger georgeensis NI Pr
Hemidactylus frenatus NI NI
CORYTOPHANIDAE Basiliscus vittatus NI NI
IGUANIDAE Ctenosaura similis NI A
Iguana iguana NI Pr
PHRYNOSOMATIDAE Sceloporus cozumelae NI Pr
POLYCHROTIDAE Anolis cristatellus NI NI
Norops rodriguezii NI NI
Norops sagrei NI NI
SCINCIDAE Eumeces schwartzei NI NI
Mabuya unimarginata NI NI
TEIIDAE Aspidoscelis cozumela c NI NI
LEPTOTYPHLOPIDAE Leptotyphlops goudotii NI NI
BOIDAE Boa constrictor NI A
COLUBRIDAE Dryadophis melanolomus d NI NI
Leptodeira frenata NI NI
Oxybelis fulgidus NI NI
Tantilla moesta d NI NI
Thamnophis proximus NI A
a. NI: No incluido; EN: en peligro; VU: vulnerable; LR: bajo riesgo
b. NI: No incluido; P: en peligro de extinción; A: amenazada; Pr: sujeta a protección
especial.
c. Especie endémica
d. Especie registrada por primera vez para Cozumel
COZUMEL 13
4.2.2 Mamíferos
En Cozumel existen 17 especies de mamíferos terrestres no voladores, de los
cuales siete son taxa endémicos, lo que la hace una de las islas con más taxa
endémicos en México (Martínez-Morales 1996, Reid 1997, Ceballos et al. 1998,
Cuarón et al. 2004; Cuadro 2). Además, en los mamíferos endémicos de la isla se
pueden observar diferencias significativas de tamaño en comparación con sus
contrapartes continentales (e.g., Cuarón et al. 2004, García Vasco 2005).
Categoría de riesgo
Familia Especie UICN a NOM b
Didelphis marsupialis
DIDELPHIDAE cozumelac NI NI
d
DASYPODIDAE Dasypus novemcinctus NI NI
c
MURIDAE Oryzomys couesi cozumelae NI A
c
Reithrodontomys spectabilis EN A
Peromyscus leucopus
cozumelae c NI A
d
Rattus rattus NI NI
d
Mus musculus NI NI
d
DASYPROCTIDAE Dasyprocta punctata NI NI
d
Cuniculus paca nelsoni NI NI
4.2.3 Aves
Howell y Webb (1995) mencionan que hay 203 especies de aves registradas para
cozumel (Anexo I). Recientemente Howell (2004) añade a la lista 21 especies,
sumando ahora un total de 224 especies de aves en la isla. De las cuales 52 se
encuentran en alguna categoría de riesgo en la normatividad mexicana y 19 son
endémicas (SEMARNAT 2001; Cuadro 3).
Categoría de riesgo
Familia Especie UICN a NOM b
TROCHILIDAE Chlorostilbon forficatus NI NI
TROGLODYTIDAE Troglodytes beani NI Pr
MIMIDAE Toxostoma guttatum CR P
Melanoptila glabrirostris cozumelana NT NI
VIREONIDAE Vireo bairdi NI Pr
ACCIPITRIDAE Buteo magnirostris gracilis NI Ni
CRACIDAE Crax rubra griscomi NT P
PICIDAE Melanerpes pygmaeus pygmaeus NI NI
Melanerpes aurifrons leei NI NI
TYRANNIDAE Attila spadiceus cozumelae NI Pr
Myiarchus yucatanensis lanyoni NI NI
Myiarchus tyrannulus cozumelae NI NI
SYLVIIDAE Polioptila caerulea cozumelae NI NI
VIREONIDAE Cyclarhis gujanensis insularis NI Pr
EMBERIZIDAE Dendroica petechia rufivertex NI NI
Spindalis zena benedicti NI NI
Piranga roseogularis cozumelae NI NI
Cardinalis cardinalis saturata NI NI
Tiaris olivacea intermedia NI NI
a. NI: No incluido; CR: en peligro crítico; NT: casi amenazado.
b. NI: No incluido; P: en peligro de extinción; A: amenazada; Pr: sujeta a protección
especial.
COZUMEL 15
especies. El caso más común es la captura de aves de ornato. Las especies más
utilizadas son las silvias amarillas (Dendroica petechia rufivertex), perlitas
(Polioptila caerulea cozumelae), tángaras (Piranga roseogularis cozumelae),
cardenales (Cardinalis cardinalis saturate) y reinitas (Coereba flaveola; Obs.
Pers.). Los cuatro primeros taxa son endémicos a Cozumel.
Las amenazas mencionadas anteriormente son ocasionadas por los
humanos. Sin embargo, la isla también tiene amenazas naturales como es el
embate de los huracanes. Históricamente, en la isla hay un huracán de fuerte
magnitud cada década (Martínez-Morales 1996). En 1988 se presentó el huracán
Gilberto y en 1995 el Roxana. Recientemente se presentaron dos; Emily, el 17 de
julio 2005 y, tres meses después, del 21 al 24 de octubre, el huracán Wilma
(ambos categoría 4 en la escala Shaffir-Simpson). Los dos huracanes causaron
daños evidentes en la estructura de la selva. Emily principalmente en el sur de la
isla y Wilma en toda la isla (Obs. Pers.).
Cuarón et al. (2004) consideran como un problema potencial la
sobreexplotación del manto acuífero. Esto debido al aumento en la demanda de
agua por crecimiento de la infraestructura turística y de la población en general.
Otro problema considerado como amenaza para la conservación de la biota
es la percepción que la sociedad tiene hacia los recursos naturales terrestres de la
isla. Poca gente conoce y valora la riqueza biológica existente en la isla y su
importancia (Navarro 2005). Esto ocasiona que no se valore y, por lo tanto, se
deprede con poca o nula protección.
METODOS 17
5 MÉTODOS
1
2
3
4
5
5
6
7
8
9
10
11
Coordenadas UTMa
Vegetación
Sitio E N Ubicación en la isla dominante Métodos utilizadosb
Manglar 508974 2272716 Noroeste Manglar TL, PBI, TLag, TS
Country Club 508361 2271599 Noroeste Manglar TS
Potabilizadora 510128 2266752 Centro-norte Selva mediana TL, PBI, TLag, TS
Santa Rita 513346 2267028 Centro-norte Selva mediana TL, PBI, TLag, TS
Carretera Rodea la porción sur Todos los tipos TC
periférica y central de la isla,
inicia y termina en la
zona urbana
CAPA 510454 2260492 Centro-Sur Selva mediana TL, PBI, TLag, TS
Mezcalitos 515343 2259185 Centro-Este Selva baja TL, PBI, TLag, TS
Coconuts 512398 2252964 Sureste Selva baja TL, PBI, TLag, TS
Playa 512611 2258871 Sureste Dunas costeras TL, PBI, TLag
y tasistal
El Cedral 500782 2248717 Sur Selva mediana TL, PBI, TLag
La Ceiba 501236 2246305 Sur Selva baja TL, PBI, TLag
a. Proyección: Unidad Transversa de Mercator; Datum horizontal: Norteamericano
de 1927
b. TL= trayecto lineal; PBI= parcelas de búsqueda intensiva; TLag= Trayectos para
lagartijas; TS= líneas de trampas Sherman; TC: trayecto en carretera.
Gallus sp
De este modo recorrí 2054 km, a partir de julio 2001 hasta diciembre 2002
(Cuadro 6). Las boas fueron capturadas con la mano y, una vez procesadas, se
liberaron en el lugar donde fueron encontradas.
5.4.3 Lagartijas.
Trayecto en línea para lagartijas. Se utilizó también el método de trayecto en línea
para observar lagartijas. Por las condiciones de los caminos, las especies que más
se observaron son las que utilizan lugares abiertos y asoleados.
METODOS 24
El método y los datos registrados son los mismos que para observar
grandes vertebrados. Sin embargo, para observar lagartijas se redujeron la
longitud del tramo (a 100 m) y la velocidad de recorrido (a 0.8 km/hr
aproximadamente). La ubicación de estos trayectos se eligió al azar a lo largo de
los senderos usados para observar presas grandes. En total se recorrieron 9600 m
de octubre de 2002 a marzo de 2003 (Cuadro 6).
5.4.5 Roedores
Líneas de trampas marca Sherman, para roedores. Se colocaron 25 trampas
Sherman, separadas entre si por 12.5 m, a lo largo de un trayecto de 300 m, en
siete de los sitios descritos. Las trampas fueron cebadas con una mezcla de
avena, vainilla y crema de cacahuate. Cada periodo de muestreo consistió de tres
noches continuas, de manera simultánea, en todos los sitios. Las trampas se
revisaron en las primeras horas de la mañana (Cuadro 6).
Al capturar un roedor se registró el número de trampa en que fue
capturado, la especie, edad, condición reproductiva, peso, longitud de cola, de
METODOS 25
disponibilidad de recursos, pero distinta al resto). Otro supuesto fue que las
serpientes habían consumido el alimento identificado en el tipo de vegetación
donde fueron encontradas.
6 RESULTADOS
que fue además, el único mes en que capturé boas pequeñas (<500 mm; Cuadro
8).
25
**
20
Número de individuos
15
10
Cantidad
0
<500 501-750 751- 1001- 1251- 1501- 1751- >2001
1000 1250 1500 1750 2000
Longitud hocico cloaca
Figura 4. Distribución de individuos de Boa constrictor por clases de tamaño (LHC)
(G = 47.2; g.l.= 7; P<0.001).
Mes
Clase de Feb Mar Abr Jul Ago Sep Oct Nov Dic Total
tamaño (mm)
<500 - - - - 5 - - - - 5
501-750 - 2 2 1 1 - - - - 6
751-1000 1 1 2 9 - - 1 2 16
1001-1250 2 2 1 5 5 - 2 3 2 22
1251-1500 2 1 1 1 2 - 1 - - 8
1551-1750 - - - 2 - - - - - 2
1751-2000 - - - - 1 1 - - - 2
>2001 - - - - - - - 1 - 1
Total 5 6 6 9 23 1 3 5 4 62
RESULTADOS 29
Peso. En ambos sexos se observó una relación positiva entre la LHC y el peso
(hembras: n = 18; r = 0.94; P= <0.001 y machos: n = 11; r = 0.97; P = <0.001). Al
comparar las pendientes encontré que las hembras fueron significativamente más
pesadas que los machos de la misma longitud (análisis de covarianza de un factor,
sexo como factor, LHC como covariante y el peso como variable dependiente, F1,25
= 4.393; P <0.001; Figura 5).
RESULTADOS 30
4500
Machos
4000 Hembras
3500
3000
Peso (g)
2500
2000
1500
1000
500
0
0 500 1000 1500 2000 2500
Longitud hocico-cloaca (mm)
250
Machos
Hembras
200
Longitud de la cola (mm)
150
100
50
0
0 500 1000 1500 2000 2500
Longitud hocico-cloaca (mm)
Figura 6. Relación entre la longitud hocico-cloaca y la longitud de la cola en
hembras y machos de B. constrictor.
20 Machos
Hembras
18
Longitud relativa de la cola (%)
16
14
12
10
6
0 500 1000 1500 2000 2500
Longitud hocico-cloaca (mm)
Figura 7. Relación entre la longitud hocico-cloaca y la longitud relativa de la cola en
hembras y machos de B. constrictor.
RESULTADOS 32
Cuadro 11. Boas a las que analicé el contenido estomacal; considerado el tipo de
vegetación del lugar de captura, el tamaño (longitud hocico-cloaca; LHC) y el sexo
del individuo.
Fecha de captura Tipo de LHC Sexo Contenido
vegetación estomacal
09-Abr-02 Selva baja 890 Hembra Ausente
29-Jul-02 Selva mediana 1020 Hembra Ave NI1
07-Ago-02 Selva baja 860 Hembra Ausente
14-Ago-02 Selva baja 1090 Hembra Reithrodontomys
spectabilis
MURIDAE 30
Orizomys couesi 46.1 ±1.9b 111.2 ±1.5b Nocturno. Principalmente terrestre, pero
cozumelae puede, a veces, trepar árboles o nadar c.
PHASIANIDAE 20
No identificado Mamífero 10
Ave 10
RESULTADOS 35
75%
50%
25%
1 5 10 1 1 3 4
0%
Abr '02 Jul '02 Ago '02 Oct '02 Nov '02 Feb '03 Mar '03
Periodo de muestreo
Figura 8. Porcentaje de boas registradas con y sin restos de alimento durante los
distintos periodos de muestreo. El número en la barra indica la cantidad de boas
analizadas.
RESULTADOS 36
8
Alto
Moderado
Nulo
6
Cantidad de boas
0
Abr '02 Jul '02 Ago '02 Oct '02 Nov '02 Feb '03 Mar '03
Periodo de muestreo
Figura 9. Contenido de cuerpos grasos de las boas evaluadas por mes de muestreo.
Efecto del tamaño y sexo. Aproximadamente el 88% de las boas con una LHC
mayor que 1 m contenían restos de alimento (Figura 10). Al contrario, en las boas
pequeñas (< 1 m), solo el 10% contenían alimento (Figura 10). Estas diferencias
fueron estadísticamente significativas. (χ²= 30.37; g.l. = 5; P <0.001).
Al considerar la frecuencia de alimentación de acuerdo con el sexo encontré
que 56% de las hembras y 23% de los machos tenían restos de alimento, siendo
esta diferencia significativa (χ²= 11.05; g.l. = 1; P = 0.001). Todas las hembras
con alimento fueron individuos mayores que 1 m, mientras que en los machos no
se observa ninguna relación entre la frecuencia de alimentación y el tamaño
(Cuadro 10).
RESULTADOS 37
6
Sin alimento
Con alimento
5
Cantidad de boas
0
<500 501-750 751- 1001- 1251- 1501- 1751- >2001
1000 1250 1500 1750 2000
Longitud hocico-cloaca (mm)
Figura 10. Cantidad de boas registradas con y sin restos de alimentos por clase de
tamaño.
Hembras Machos
Longitud Sin indicios Con indicios Sin indicios Con indicios
hocico-cloaca de alimento de alimento de alimento de alimento
<500 - - 1 -
501-750 1 - - 1
751-1000 3 - 3 -
1001-1250 - 2 4 2
1251-1500 - 2 2 -
1501-1750 - - - -
1751-2000 - - - -
>2001 - 1 - -
RESULTADOS 38
1000
100
10
1
0 500 1000 1500 2000 2500
Longitud hocico-cloaca
Figura 11. Relación entre el tamaño de las boas y la masa de las presas.
6
Individuos /10km
0
Selva mediana Selva baja Manglar y dunas
costeras
Figura 12. Abundancia de presas grandes (individuos /10 km), obtenida con el
método de trayecto en línea, en cada tipo de vegetación. No encontré diferencias
estadísticas al comparar los valores. Las líneas verticales representan el error
estándar.
4000
a
3000
Individuos /km²
2000
a
1000
b
*
0
Selva mediana Selva baja Manglar y dunas
costeras
Figura 13. Abundancia de anfibios y pequeños reptiles (individuos /km²) en cada tipo
de vegetación, estimada mediante la búsqueda intensiva en parcelas (125 m²). Las
líneas verticales representan el error estándar. Las barras que comparten letra no
son diferentes estadísticamente.
6.3.3 Lagartijas
Se recorrió un total de 9.6 km, en 96 tramos de muestreo de 100 m y registramos
23 individuos de cuatro diferentes especies (Aristelliger georgeensis, Mabuya
unimarginata, Norops rodriguezii y Norops sagrei). En la selva baja se registraron
las cuatro especies mencionadas, mientras que en selva mediana y manglar y
dunas costeras únicamente individuos del género Norops.
La abundancia de lagartijas fue de 2.4 ±0.7 individuos/ km recorrido. Al
comparar la abundancia de presas en los diferentes tipos de vegetación no
encontré diferencias significativas (H=1.79; P=0.40; Figura 14).
RESULTADOS 42
4
Individuos /km
0
Selva mediana Selva baja Manglar y dunas
costeras
Figura 14. Abundancia de lagartijas (individuos /km), calculada al recorrer trayectos
de 100 m de longitud. No hubo diferencias estadísticas al comparara los valores. Las
líneas verticales representan el error estándar.
6.3.4 Roedores
Se capturaron 82 individuos de roedores de dos especies: 18 Reithrodontomys
spectabilis y 64 Oryzomys couesi cozumelae. En selva mediana y manglar se
registraron las dos especies, mientras que en la selva baja únicamente O. couesi
cozumelae.
El éxito de captura total fue 0.05 individuos por trampas/noche. Al comparar
la abundancia entre distintos tipos de vegetación al menos dos grupos fueron
distintos estadísticamente (Kruskal-Wallis, H = 15.93 P = <0.001; Figura 15). La
abundancia de roedores en los sitios de selva baja fue menor que en el resto de
los tipos de vegetación (Prueba Kruskal-Wallis de comparación múltiple; Z = 4.1, P
= <0.05; Figura 15).
RESULTADOS 43
0.14
0.12
a
Individuos/trampa/noche
0.10
0.08
0.06 a
0.04
b
0.02
0.00
Selva Mediana Selva Baja Manglar y dunas
costeras
Figura 15. Abundancia de roedores (ratones /trampa/noche) en los diferentes tipos
de vegetación. Las líneas verticales indican el error estándar. Las barras que
comparten letra no son diferentes estadísticamente.
70
Disponible
60
Elegido
50
Porcentaje
40
30
20
10
-
Presas Roedores y Lagartijas NI
grandes M.
glabrirostris
Figura 16. Disponibilidad de presas y frecuencia de consumo por Boa constrictor. NI
significa presa no identificada.
DISCUSIÓN 45
7 DISCUSIÓN
7.1 MORFOMETRÍA DE BOAS
Al comparar la LHC promedio de las boas de Cozumel (1012.13 ±43.2 mm) con la
registrada en otros sitios (Cuadro 13), se puede observar que en Cozumel las
boas son más pequeñas que en el continente y que poblaciones insulares nativas,
pero son similares a otras boas insulares introducidas. Esto apoya la idea
propuesta por Boback y Guyer (2003) sobre el tamaño de las serpientes en las
islas, quienes mencionan que las especies de serpientes que en el continente
miden más de un metro, en islas disminuyen su tamaño.
Bertona et al. 1998 Argentina Longitud Hocico ♂ 1875.54 ±22.04 1240 – 2440
Cloaca (LHC)
♀ 2003.69 ±24.59 1240 – 3220
Quick et al. 2005 Isla Aruba Long. Total ♂♀ 1045 ±76.5 485 – 2000
Hay que tomar en cuenta que casi el 81% (61) de los individuos fueron
recolectados durante trayectos en la carretera, es decir, durante traslados de las
boas. Bonnet et al. (1999) demuestran que ciertas clases de tamaño tienen más
probabilidad de ser encontradas, o atropelladas, por presentar mayores valores de
movilidad. En B. constrictor y otros boidos se ha demostrado que la movilidad
varía de acuerdo con la edad, la época y condición reproductiva (que también
depende de la edad), el sexo y la estrategia de forrajeo (Madsen y Shine 1999a,
Chiaraviglio et al. 2003, Wunderle et al. 2004, Fearn et al. 2005). Por ejemplo, en
época reproductiva, los machos sexualmente maduros se mueven más, buscando
a las hembras, que son más sedentarias (Wunderle et al. 2004). Actualmente se
realiza un estudio sobre patrones de actividad y uso de hábitat de Boa constrictor
en Cozumel en el cual se estudia la variación en la movilidad de las boas (A. D.
Puaron y C. Hernández, com. pers.).
Únicamente durante agosto capturé individuos con una LHC menor que 50
cm. La LHC promedio de estos individuos fue de 40.4 ±1.16 cm, valor cercano al
tamaño de individuos neonatos en poblaciones cautivas (Correa-Sanchez y
Godínez-Cano 2002; obs. pers.). Esto es un indicador de que en Cozumel las
boas nacen en agosto.
están registrados tres taxa de ratones silvestres, los tres endémicos (O. couesi
cozumelae y R. spectabilis y P. leucopus). Se han realizado estudios paralelos
sobre distintos aspectos de los ratones de la isla, en los que han determinado,
entre otras cosas, que R. spectabilis es poco abundante, comparado con
poblaciones continentales de la misma especie y con O. couesi en la isla
(Gutierrez-Granados 2003, Fortes-Corona 2004, Cuarón et al. datos sin publicar,
este trabajo). En estos estudios, y después de un muestreo intensivo y continuo,
no se ha registrado la tercera especie (Peromyscus leucopus cozumelae). Esta
especie de ratón fue reportada en 1989 como la más abundante y que habitaba
todos los tipos de hábitat muestreados (Engstrom et al. 1989). El no existir
registros recientes de P. leocopus cozumelae y la considerable presencia de
roedores en la dieta de las boas y perros (Bautista 2006), sugieren que esta
especie está extinta y una posible causa son los depredadores introducidos.
La segunda especie más registrada en los contenidos del tracto digestivo
son las gallinas domésticas. Esta es una de las razones que ocasiona que los
pobladores rurales en Cozumel tengan una percepción negativa de las boas
(Navarro-Ramírez 2005), lo cual es una causa común de muerte de esta serpiente.
Chiaraviglio et al. (2003) también registraron gallinas como una presa común de
las boas. Esto, aunado a que se han realizado capturas de boas en la zona
urbana, es indicio de que las boas no evitan los sitios habitados por humanos, lo
cual fue confirmado también por Romero-Nájera (2004). Incluso, algunos
habitantes locales mencionan que las boas usan frecuentemente los gallineros
como sitios para forrajeo.
De las seis especies identificadas como presas, cuatro de ellas son taxa
endémicos a la isla. Dos de las cuatro presas endémicas son poco abundantes
(Gutierrez-Granados 2003, Fortes-Corona 2004, este estudio). Esto puede ser un
indicador de la poca capacidad para soportar la depredación que tienen las
especies nativas. En la Isla Guam, en Micronesia, otra serpiente introducida
extinguió casi totalmente a la avifauna nativa y afectó a murciélagos y otros
reptiles; la severidad de esta extinción se ha atribuido, entre otras cosas, a la
ausencia de coevolución entre presas nativas y el depredador introducido (Fritts y
DISCUSIÓN 51
Efecto del tamaño y sexo. Hubo mayor proporción de boas grandes (>1 m) con
indicios de alimento que de pequeñas (<1 m). De la misma manera, en proporción,
DISCUSIÓN 53
hubo más hembras con indicios de alimento que machos. Estos resultados se
pueden relacionar debido a que, como se mencionó arriba, es más probable que
se encuentren e identifiquen presas en boas grandes que en pequeñas (debido a
que pueden comer presas más grandes y por lo tanto tener mayor tiempo de
digestión); y las boas hembras son más grandes que los machos. Es decir que,
de acuerdo con lo esperado en mi segunda hipótesis, el tamaño de Boa constrictor
es un factor de variación en un aspecto de la ecología de forrajeo, la frecuencia de
alimentación. Se han encontrado resultados similares en pitones reticulados y en
serpientes piscívoras (Houston y Shine 1993, Shine et al. 1998a).
objetivo en este trabajo discutir las causas de su abundancia. Sin embargo, hay
que tener en cuenta que los resultados obtenidos pueden ser un indicador de los
efectos de B. constrictor como depredador.
No es común que las investigaciones sobre la alimentación de serpientes
evalúen la disponibilidad de presas para la especie de estudio. Entre los pocos
que lo han hecho, se han enfocado solamente a un grupo taxonómico (e.g.,
Houston y Shine 1993: peces; Shine y Madsen 1997 y Madsen y Shine 2000:
roedores). Un objetivo de este estudio fue conocer la disponibilidad de diversos
grupos de presas, para lo cual fue necesario utilizar diversos métodos debido a la
gran variedad de presas que consume B. constrictor. En la isla existen 36
especies de reptiles, mamíferos y aves consideradas en este estudio como presa
potencial, de las cuales registré casi el 50 % (17 especies), con representantes de
los cuatro grupos taxonómicos considerados (anfibios, reptiles, aves y mamíferos).
Aunque registré una tendencia a mayor riqueza y abundancia de presas
grandes en la selva baja, las diferencias no fueron significativas. Lo que hace que
rechace mi tercera hipótesis con relación las presas grandes, ya que presentaron
una abundancia similar en todos los tipos de vegetación.
Bufo marinus fue la presa más abundante en la selva mediana (0.2 ± 0.1
individuos /10 km), y es de hábitos nocturnos (Lee 1996), por lo que se traslapan
sus horarios de actividad con los de la boa. Sin embargo, no fue registrado en los
contenidos del tracto digestivo. Una probable razón es que este sapo es tóxico
para las serpientes cuando lo tragan por lo que es evitado como presa (Phillips et
al. 2004). Se ha reportado que en serpientes australianas este sapo ha causado
modificaciones como respuesta coevolutiva, siendo algunas especies inmunes al
veneno (Phillips et al. 2003, Phillips y Shine 2004).
Los anfibios y reptiles presentan diferente abundancia en los diferentes
tipos de vegetación, lo que comprueba mi tercera hipótesis para este grupo de
organismos. Hubo más especies de anfibios y reptiles en la selva mediana que en
el resto de los tipos de vegetación, mientras que en la selva baja la abundancia
resultó significativamente menor. Durante las búsquedas intensivas las lagartijas
más abundantes fueron los del género Norops (1194 ± 642.3 individuos/km²). Sin
DISCUSIÓN 55
embargo, no las registré en los contenidos del tracto digestivo de las boas. Esto
puede deberse a que no son consumidas o, que por su tamaño pequeño no
permanecen mucho tiempo en el sistema digestivo de las boas.
Al contrario que los anfibios y reptiles, hubo una mayor riqueza de especies
de lagartijas en la selva baja. Sin embargo, en contra de lo que esperaba en mi
tercera hipótesis, no hubo diferencias significativas en la abundancia de lagartijas
entre tipos de vegetación. Al igual que con el método de parcelas, con este
método las especies del género Norops fueron las más abundantes (1.98 ±0.60
individuos /km).
En la selva mediana subcaducifolia y en el manglar registré dos especies de
roedores (R. spectabilis y O. c. cozumelae), mientras que en la selva baja solo R.
spectabilis. Asimismo, de acuerdo con lo esperado en mi tercera hipótesis, en la
selva baja hubo menos roedores que en los otros tipos de vegetación. Hay que
considerar que el periodo de muestreo fue unicamente durante noviembre,
diciembre y febrero; es decir, durante la época de lluvias invernales (“nortes”) en
Cozumel. En esta temporada Fortes-Corona (2004) registró la mayor abundancia
de las dos especies. Este tipo de variación estacional de las poblaciones ha sido
reportada en otros sitios y para diversos grupos taxonómicos (e.g., Malcolm 1990,
Madsen y Shine 1999b, González-Baca 2002). No obstante, si las únicas causas
de variación en la abundancia de las especies son la mortalidad y la natalidad,
todos los tipos de vegetación deberían estar sujetos a la misma variación. Es decir
que durante la época lluviosa la selva baja seguiría siendo el tipo de vegetación
con menor abundancia de roedores. De modo que la disponibilidad de roedores
para las boas sería distinta en cada tipo de vegetación, independientemente de la
época del año.
8 CONCLUSIONES
9 LITERATURA CITADA
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(continuación)
Aythya collaris W
Aythya affinis W
Oxyura dominica W
Coragyps atratus S?
Cathartes aura R
Pandion haliaetus R
Chondrohierax uncinatus R?
Elanoides forticatus V(R?)
Buteogallus anthracinus T
Buteo magnirostris R?
Buteo brachyurus R
Falco sparverius R
Falco columbarius W
Falco rufigularis W
Falco peregrinus V
Crax rubra R (E?)
Laterallus ruber W
Rallus limicola
Porzana Carolina R
Porphyrula martinica
Gallinula chloropus W
Fulica americana T
Pluviales squatarola R
Charadrius alexandrinus W
Charadrius wilsonia W
Charadrius semipalmatus T (W?)
Charadrius vociferus W (R?)
Haematopus palliatus W
Himantopus mexicanus W
Jacana spinosa W(R?)
Tringa melanoleuca R
Tringa flavipes R?
ANEXOS 72
(continuación)
Tringa solitaria W
Catoptrophorus semipalmatus T
Actitis macularia W
Arenaria interpres W
Calidris canutus W
Calitris alba V
Calitris mauri T
Calitris minutilla W
Calitris fuscicollis W
Limnodromus griseus V
Gallinago gallinago W
Larus atricilla W
Larus argentatus V
Sterna caspia V
Sterna maxima T (S?)
Sterna sandvicensis V
Sterna dougallii S?
Sterna hirundo S
Sterna antillarum T
Sterna anaethetus
Sterna fuscata V
Chlidominas niger W
Columba livia R*
Columba leucocephala S (R?)
Zenaida asiatica R (S?)
Zenaida aurita X (R?)
Zenaida macroura
Columbina inca
Columbina passerina R
Columbina talpacoti R
Claravis pretiosa V(S?)
Leptotila jamaicensis R
ANEXOS 73
(continuación)
Amazona xantholora R
Coccyzus americanus T
Coccyzus minor R
Crotophaga ani R
Crotophaga sulcirostris R
Tylo alba R?
Otus guatemalae R
Asio stygius V(R?)
Chordeiles acutipennis S
Chordeiles minor T
Nyctidromus albicollis R
Nictiphrynus yucatanicus R
Caprimulgus badius
Chaetura vauxi T
Anthracothorax prevostii R
Chlorostilbon canivetti R (S?)
Ceryle alcyón R
Chloroceryle aenea W
Melanerpes pygmaeus R
Melanerpes aurifrons R
Spynrapicus varius R
Camptostoma imberbe W
Myiopagis viridicata R
Elaenia martinica R
Contopus virens R
Contopus cinereus T
Empidonax virescens W (R?)
Empidonax minimus T
Attila spadiceus W
Myiarchus yucatenensis R
Myiarchus tuberculifer R
Myiarchus crinitus S
ANEXOS 74
(continuación)
Myiarchus tyrannulus T
Tyrannus melancholicus S
Tyrannus tyrannus R
Tyrannus dominicensis T
Tyrannus forticatus
Progne subis T
Progne chalybea T
Tachycineta bicolor S?
Tachycineta albilinea W
Stelgipteryx serripennis R
Riparia riparia T
Hirundo pyrrhonota T
Hirundo rustica T
Trogodytes beani T
Polioptila caerulea R
Sialia sialis R
Catharus fuscescens X
Catharus minimus
Catharus ustulatus T
Hylocichla mustelina T
Turdus migratorius W
Dumelella carolinensis X
Melanoptila glabrirostris W
Mimus gilvus R
Toxostoma guttatum R
Vireo griseus R
Vireo bairdi W
Vireo flavifrons R
Vireo philadelphicus W
Vireo olivaceus W
Vireo magíster T
Cyclarhis gujanensis R
ANEXOS 75
(continuación)
Vermivora pinus R
Vermivora chysoptera W
Vermivora peregrina T
Vermivora celata W
Vermivora ruficapilla
Parula americana
Dendroica petechia W
Dendroica pensylvanica R
Dendroica magnolia T
Dendroica tigrina W
Dendroica caerulescens W
Dendroica coronata W
Dendroica virens W
Dendroica fusca W
Dendroica dominica T
Dendroica pinus W
Dendroica discolor
Dendroica palmarum W
Dendroica castanea W
Dendroica striata T
Mniotilta varia T
Setophaga ruticilia W
Protonotaria citrea W
Helmitheros vermivorus T (W?)
Limnothlypis swainsonii W
Seiurus aurocapillus W
Seiurus noveboracensis W
Seiurus motocilla W
Oporornis formosus H
Geothlypis trichas W
Wilsonia citrina W
Wilsonia canadensis W
ANEXOS 76
(continuación)
Icteria virens
Coereba flaveola W
Cyanerpes cyaneus R
Spindalis zena X
Habia fuscicauda R
Piranga rubra
Piranga olivacea W
Cardinalis cardinalis T
Pheucticus ludovicianus R
Guiraca caerulea W
Passerina cyanea W
Passerina ciris W
Volatinia jacarina W
Sporpphila torqueola
Tiaris olivacea R
Spizella pallida R
Ammodramus savannarum X
Quiscalus mexicanus W
Molothrus ater S?
Icterus spurius T
Icterus cucullatus R
Icterus galbula T