Teoría Albert Bandura
Teoría Albert Bandura
Teoría Albert Bandura
La teoría se basa en que hay tipos de aprendizaje donde el refuerzo directo no es el principal
mecanismo de enseñanza, sino que el elemento social puede dar lugar al desarrollo de un nuevo
aprendizaje entre los individuos. Teoría del aprendizaje social es útil para explicar cómo las
personas pueden aprender cosas nuevas y desarrollar nuevas conductas mediante la observación
de otros individuos. Así pues, esta teoría se ocupa del proceso de aprendizaje por observación
entre las personas.
En la teoría del aprendizaje social de Albert Bandura elaborada el año 1977 se basa en teorías del
aprendizaje conductista sobre el condicionamiento clásico y el condicionamiento operante. Sin
embargo, añade dos ideas importantes:
✅Conducta es aprendida desde el medio ambiente a través del proceso de aprendizaje por
observación.
Aprendizaje mediante la observación Los niños observan a las personas que los rodean para ver e
imitar cómo se comportan. Los individuos observados son llamados modelos. En la sociedad, los
niños están rodeados de muchos modelos influyentes, como los padres y otros miembros de la
familia, personajes de la televisión (o de YouTube), amigos, maestros de la escuela, etc.
Los niños prestan atención a todas estas personas o modelos y codifican su comportamiento.
Posteriormente, ellos pueden imitar (es decir, copiar) la conducta que han observado. Pero pueden
hacer esto sin importar si el comportamiento es «apropiado” o no, aunque hay una serie de
procesos que hacen que sea más probable que un niño reproduzca el comportamiento que su
sociedad considere apropiado para él o ella.
En primer lugar, el niño tiene más probabilidades de imitar a aquellas personas que percibe como
más semejantes. En consecuencia, es más probable que imite la conducta modelada por personas
del mismo sexo.
Posteriormente, las personas que rodean al niño responderán al comportamiento imita, ya sea con
el refuerzo o el castigo. Si un niño imita el comportamiento de un modelo y las consecuencias son
gratificantes, el niño es probable que continúe realizando dicho comportamiento. Por ejemplo, si
un padre ve a su hija consolando a su osito de peluche y le dice «eres una niña muy amable», esto
será gratificante para ella y hará que sea más probable que repita dicho el comportamiento. Su
comportamiento habrá sido reforzado.
El fortalecimiento de una conducta puede ser externo o interno y puede ser positivo o negativo. Si
un niño busca la aprobación de sus padres o compañeros, esta aprobación será un refuerzo
externo, sentirse feliz por haber sido aprobado es un refuerzo interno. Un niño se comportará de
manera en la que piense que va a ganar una mayor aprobación, ya que la desea de forma innata.
Por lo general, el refuerzo positivo (o negativo) tendrá poco impacto si el refuerzo ofrecido
externamente no coincide con las necesidades del individuo. El refuerzo puede ser positivo o
negativo, pero lo importante es que éste conduzca a un cambio en el comportamiento de una
persona.
Por otro lado, el niño también tendrá en cuenta de lo que le sucede a otra persona antes de decidir
si copiar o no sus acciones. Una persona aprende mediante la observación de las consecuencias
del comportamiento de otro, por ejemplo un hermano menor puede observar un tipo de
comportamiento de su hermano mayor que es premiado, por lo que será más probable que repita
ese comportamiento en particular. Esto se conoce como refuerzo vicario.
Retención: La retención de la conducta recién aprendida es necesaria para que ésta se mantenga.
Sin retención, no se establecería el aprendizaje del comportamiento, y es posible que se tenga que
volver a observar el modelo nuevo, ya que no fuimos capaces de almacenar la información sobre el
comportamiento.
Motivación: Se trata de la voluntad de realizar una conducta. Las recompensas y los castigos que
siguen un comportamiento serán valorados por el observador antes de imitarlo. Si las recompensas
percibidas superan los costos percibidos (si los hay), entonces el comportamiento tendrá más
probabilidades de ser imitado por el observador. Por el contrario, si el refuerzo vicario no es lo
suficientemente importante para el observador, entonces no va a imitar el comportamiento.
El enfoque de aprendizaje social tiene en cuenta los procesos de pensamiento y reconoce el papel
que desempeña en la decisión de imitar o no cierto comportamiento. Sin embargo, a pesar de que
esta teoría puede explicar algunos comportamientos bastante complejos, no puede explicar
adecuadamente cómo desarrollamos toda una gama de comportamientos incluyendo los
pensamientos y sentimientos. Tenemos una gran cantidad de control cognitivo sobre nuestro
comportamiento, y sólo porque hemos tenido experiencias negativas no significa que tengamos
que reproducir dicho comportamiento.
Es por esta razón que Bandura modificó su teoría en 1986 y llamó a su Teoría del Aprendizaje
Social, Teoría Social Cognitiva (TSC), como una mejor descripción sobre la forma en que
aprendemos de nuestras experiencias sociales.