Subarrendamiento
Subarrendamiento
Subarrendamiento
Requisitos
La única forma en la que esta situación puede darse en el marco de la ley es en el
caso de que el subarrendamiento se especifique y se pacte en el contrato de
arrendamiento. En ese y otros casos donde se pacte algo así, serán tres partes las
que intervengan en la operación inmobiliaria: el arrendador o propietario de la
vivienda; el arrendatario o inquilino, que se convierte en subarrendador al firmar el
contrato de subarrendamiento; y el subarrendatario, que es el nuevo inquilino del
arrendatario.
Las dos condiciones esenciales para poder subarrendar una vivienda es, en
primer lugar, contar con el consentimiento por escrito del propietario; y, en
segundo lugar, que esa operación inmobiliaria esté permitida en una cláusula del
reglamento interno y de la escritura constitutiva del condominio. Por ejemplo, debe
saber que entre el subarrendador y el subarrendatario existen los mismos
derechos y obligaciones que entre propietario y arrendatario, y que el arrendador
puede reclamar directamente al subarrendatario los pagos y cuotas de
mantenimiento pendientes del arrendatario.
Además, en el caso de que se subarriende una propiedad sin el permiso por
escrito del arrendador, el contrato podrá disolverse inmediatamente e incluso el
propietario podrá reclamar por los daños y perjuicios causados. Por último, es
importante aclarar que no se considera subarriendo al uso temporal de una
vivienda de modo gratuito, debido a que en esa operación no existe lucro.
De acuerdo con el artículo 2480 del Código Civil Federal, el inquilino no puede
subarrendar o ceder sus derechos de la cosa arrendada sin consentimiento del
arrendador; de lo contrario será solidariamente responsable de los daños y
perjuicios que sufra el bien.
Aun y cuando exista un permiso por parte del dueño pueden generarse las
siguientes obligaciones:
Subarrendamiento en México: qué dice la ley y cómo debe actuar la administración del
condominio – Revista Habitat