Libro Fundamentos Misión Sucre
Libro Fundamentos Misión Sucre
Libro Fundamentos Misión Sucre
FUNDAMENTOS CONCEPTUALES
DE LA MISIÓN SUCRE
PRESENTACIÓN ......................................................................................3
I. LA MISIÓN SUCRE ..........................................................................5
II. RAZONES QUE JUSTIFICAN LA CREACIÓN
DE LA MISIÓN SUCRE .....................................................................8
II.1. Los sistemas de selección y admisión ...............................................8
II.2. La exclusión en la educación superior ..............................................8
II.3. La nueva orientación de las políticas sociales
del Estado Venezolano .................................................................11
II.4. La función estratégica de la Educación Superior ............................12
III. DEFINICIÓN, CARACTERÍSTICAS Y OBJETIVOS
DE LA MISIÓN SUCRE ...................................................................14
III.1. ¿Qué es la Misión Sucre? ..............................................................14
III.2. Características que definen la Misión Sucre ...................................17
III.3. Objetivos de la Misión Sucre .........................................................17
IV. BASES JURÍDICAS DE LA MISIÓN SUCRE .....................................19
IV.1. La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela ..............19
IV.2. Declaración Mundial sobre la Educación Superior
para el Siglo XXI: Visión y Acción ...................................................21
IV.3. Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social .............................23
IV.4. Políticas y estrategias para el desarrollo de la Educación
Superior en Venezuela .................................................................24
IV.5. Decreto 2.601 .............................................................................25
V. VISIÓN E IMPACTO ESPERADO DE LA MISIÓN SUCRE .................26
VI. LOS PARTICIPANTES QUE SE INCORPORAN
A LA MISIÓN SUCRE .....................................................................28
VII. FUENTES BIBLIOGRÁFICAS Y DOCUMENTALES ..........................30
PRESENTACIÓN
La verdadera revolución consiste en alcanzar la justicia social y por ello ha sido én-
fasis de la gestión del Gobierno Revolucionario la lucha en contra de la exclusión
social, la cual se pone de manifiesto de muchas y variadas maneras. Algunas de
ellas muy sutiles como la diferenciación en el trato que se ofrece a las personas
provenientes de los diferentes grupos sociales en los programas de televisión;
otras veces la exclusión se manifiesta de manera más brutal como la discrimina-
ción racial, étnica o de género. Pero nunca la exclusión social tiene tanto impac-
to como cuando se refiere a la exclusión de las oportunidades de estudio. Y es
que allí, cuando a un niño o a un joven se le impide estudiar, se está consolidan-
do un círculo de exclusión y de marginalidad que afecta a dichos jóvenes, a su fa-
milia y a sus descendientes los cuales a su vez, reproducirán estos círculos de ex-
clusión afectando a la sociedad en su conjunto.
En esta Misión se conjuga una visión de justicia social, con el carácter estratégico de la
educación superior para el desarrollo humano integral sustentable, la soberanía nacional
y la construcción de una sociedad democrática y participativa, para lo cual es indispensa-
ble garantizar la participación de la sociedad toda en la generación, transformación, difu-
sión y aprovechamiento creativo de los saberes y haceres.
En las últimas décadas del siglo pasado, el Estado fue reduciendo progresivamente sus
responsabilidades en materia educativa y específicamente en lo que se refiere al nivel de
educación superior. De hecho, la inversión realizada en educación superior en Venezuela
desde 1989 hasta 1998, evidenció una tendencia descendente, afectada por la propen-
sión a realizar recortes presupuestarios en todos los sectores del ámbito social y, en espe-
cial, como una estrategia para construir la viabilidad del proyecto de privatización de la
educación superior.
Esto trajo como consecuencia una amplia deuda social acumulada, pues la matrícula uni-
versitaria sufrió un estancamiento, favoreciendo la exclusión de los estudiantes prove-
nientes de los sectores más pobres.
1
En efecto, diversos estudios concuerdan en afirmar que el ingreso a la educación supe-
rior favoreció a los sectores con mayores ingresos, a la población de las grandes ciudades
y a los estudiantes provenientes de planteles privados. A la par de este fenómeno, la edu-
cación superior de gestión oficial disminuyó sensiblemente su participación en favor de la
educación de gestión privada.
Desde 1999, el Gobierno Bolivariano ha dedicado sus mejores esfuerzos a fortalecer to-
do el sistema educativo venezolano y hacer realidad el ejercicio de la educación como de-
recho humano, para lo cual ha sido indispensable rescatar la iniciativa del Estado como
garante de oportunidades educativas de calidad para todos, tal y como lo señala el ar-
tículo 102 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, que refiere:
1 Ver Morales G., E (2003). La exclusión de los pobres de la educación superior venezolana. Ediciones OPSU; Caracas.
y Fuenmayor, L., y Vidal, Y (2000). Fuente: unidad de estadística CNU-OPSU.
Por una parte, se ha revertido la tendencia de las últimas décadas a la disminución del pre-
supuesto público dedicado a la educación, pasando del 3.2% del PIB en 1998 al 4.6% en
el año 2002, la cual es una proporción significativa en comparación con el conjunto de la
América Latina que destina en promedio el 4.4 % del PIB a la educación, aún cuando que-
da un amplio trecho por recorrer para alcanzar niveles de inversión como los de Estados
Unidos y los países de la Unión Europea.2
2 Con las transformaciones en el orden político derivadas del proceso constituyente y la conformación de una nueva
racionalidad en la toma de decisiones, en donde, una de las directrices fundamentales es priorizar el gasto público hacia la
resolución de las necesidades sociales de la población venezolana, se realiza un incremento en el gasto público real en
Educación Superior de 316.484 millones de bolívares entre el año 1999 y el año 2000, esta tendencia se mantiene para el
año 2001, sufriendo un grave revés en el año 2002 como producto del golpe de Estado y el paro petrolero.
3 Conforme al artículo 3 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.
En este marco reivindicativo y de justicia social se ubica la Misión Sucre, que junto a los es-
fuerzos antes mencionados, significa un impulso a la educación gratuita, obligatoria y de
calidad para todos aquellos que habían sido excluidos por las políticas del sistema escolar
venezolano.
Además, desde 1999 se han creado cinco nuevas universidades, a saber: la Universidad
Nacional Experimental de Yaracuy (creada por decreto en el gobierno de Rafael Caldera y
abierta en la gestión del presidente Chávez); la Universidad Marítima del Caribe; la Uni-
versidad Nacional Experimental Politécnica de la Fuerza Armada; la Universidad Nacional
Experimental del Sur del Lago y la Universidad Bolivariana de Venezuela (punta de lanza
de la Misión Sucre). Igualmente, se han creado cuatro nuevos Institutos Universitarios de
Tecnología, como son: el IUT del Estado Bolívar, el IUT del Estado Apure, el IUT del Estado
Barinas y el IUT en la Fría, Estado Táchira.4 Estas instituciones son nuevas oportunidades
de estudio para el gran número de bachilleres que egresan de la educación media, y ade-
más responden a la necesidad de transformar el sistema de educación superior, en térmi-
nos de cobertura geográfica, en función de la construcción del Equilibrio Territorial dise-
ñado en los lineamientos del Plan Económico y Social de Desarrollo 2001-2007.
Estos ejemplos son una muestra de la decisión y de la acción estratégica del Estado para
cancelar y superar la deuda social y garantizar el acceso a la educación superior de todas y
todos. Sin embargo, este esfuerzo resulta aún insuficiente, toda vez que la deuda social
acumulada es de enormes proporciones. Existe un aproximado de más de 500.000 ba-
chilleres excluidos del sistema de educación superior.
4 Simultáneamente, están en proceso de creación otros institutos, tal es el caso del I.U.T del Estado Nueva Esparta.
5 Villarroel, César (1981) Análisis de la Prueba de Aptitud Académica aplicada por la OPSU. En, Temas de Educación.
Volumen II. N° 1. Escuela de Educación. UCV. Caracas.
Ambos instrumentos (la Prueba Nacional de Aptitud Académica y las pruebas internas de las universidades) han sido
seriamente cuestionados en cuanto a su capacidad para evaluar válidamente a los aspirantes, entendiéndose que habrá
mayor grado de validez en alguno de los sistemas aludidos, en la medida en que éste discrimine menos en lo social y
6 económico. Véase a Fuenmayor Toro, L. (2000).
La exclusión en la educación superior pareciera tener una de sus causas en las fórmulas in-
ternas que han producido las propias instituciones, a las cuales ya hemos hecho referen-
7
cia. Un estudio efectuado por OPSU indica cómo ha sido la evolución del ingreso al siste-
ma entre los años 1998 y 2000. El número de aspirantes, los asignados por OPSU-CNU y
las cifras de nuevos inscritos en tales años se presentan en la tabla 1.
a Cifras estimadas
En el cuadro anterior se observa como, a pesar del incremento de los asignados por la vía
CNU-OPSU, la proporción representa en el mejor de los casos el 13% del total de estu-
diantes que ingresan a la educación superior. Aunado a ello, las cifras de personas que no
ingresan a la educación superior ronda números entre setenta mil trescientos cincuenta y
seis (70.356) y cincuenta y cuatro mil quinientos veinte (54.520). En otras palabras, se ha
excluido a más de ciento noventa y un mil aspirantes sumando los tres años. Ello, sin con-
7 OPSU (2002) La Asignación no exitosa en educación superior. Fuente: Gerencia de Estadística, Informática y
Documentación, Área de Informática OPSU-CNU.
8 OPSU (2002) La Asignación no exitosa en educación superior. Fuente: Gerencia de Estadística, Informática y
Documentación, Área de Informática OPSU-CNU.
Sin embargo, el énfasis debe ser puesto en el índice de exclusión. Es muy importante to-
mar en cuenta que diecinueve (19) de cada cien aspirantes se vieron excluidos de la educa-
ción superior en el año 2000, veintitrés (23) en 1999 y veintisiete (27) en 1998. Si bien la
tendencia es al descenso, estos datos indican dos cosas: las cifras de estudiantes sin cupo
representan casi la cuarta parte de la demanda; y cuando se analizan estos números se en-
tiende que el Proceso Nacional de Admisión administra un bajo porcentaje de los cupos to-
tales de educación superior, aun cuando es el mecanismo que resulta menos excluyente.
La tabla 2, brinda una mejor panorámica de cómo las universidades públicas a través del
tiempo han reducido su capacidad de ingreso para los sectores más pobres de la socie-
dad. Las clases obrera y muy pobre (reconocida en otros trabajos como “marginal”), han
reducido sus números de ingreso a poco más de la mitad y a menos de la tercera parte res-
pectivamente, entre los años de 1984 y 1998.
En la tabla 3, se aprecia la tendencia al descenso que se mantenía hasta 1998 en los cu-
pos para los bachilleres que egresaban del sector público de la educación. Un poco más
de una tercera parte de los cupos en términos porcentuales, perdió el sector oficial. Para-
lelamente, los egresados del sector privado ocuparon casi diez por ciento más.
10 Fuente: unidad de estadística CNU-OPSU. Cit. Por Fuenmayor, L., y Vidal, Y. (2000).
Por todas estas razones, se presenta como urgencia nacional la necesaria implementación
de un sistema equitativo de ingreso a la educación superior, donde se hable de acceso en
vez de selección, donde se universalice la oferta académica en los municipios, se creen nue-
vas modalidades de estudios y se flexibilicen los currícula y se reconozcan las competencias
de las personas, es decir, lograr una real transformación universitaria que beneficie a todos
en igualdad de condiciones.
Ello requiere que la educación superior venezolana en un tiempo perentorio asuma el rea-
comodo, reforma, cambio y/o transformación de sus estructuras y procedimientos aca-
démicos y administrativos, que hagan propicio el cabal cumplimiento de su misión social.
La revisión o cambio que debe realizarse en la educación universitaria debe conducir a
transformaciones profundas en la concepción de lo académico, de lo administrativo, de
lo financiero, a un rediseño del modelo de relaciones entre y con los estamentos profeso-
rales, estudiantiles, administrativos y de servicios, que le permitan y favorezcan un nuevo
plano de interrelaciones y vinculaciones entre ellos, con la comunidad, con el Estado, con
el aparato productivo y otras instituciones nacionales e internacionales.13
11 Se parafrasea aquí parte de la Declaración de la Conferencia Mundial sobre la Educación para el Siglo XXI (UNESCO, 1998).
12 Esto implica, entre otras cosas, garantizar el mejoramiento continuo de la calidad, y que la organización del currículum no
se convierta en una secuencia de obstáculos en el proceso de formación y profesionalización de las nuevas generaciones.
13 En los países de América Latina, a partir de la década de los noventa, se evidenció la necesidad de transformar la educa-
ción superior, se produjeron discusiones en torno a nuevas propuestas de leyes de educación superior, nuevas modalida-
des de estudio y uso de las nuevas tecnologías de la información, entre otros. Ver García Guadilla; 17-37: 2003.
El objeto primordial de la Misión Sucre es conformar y consolidar una red de todas aquellas
instancias, instituciones y factores vinculados a la educación superior, que resuelva el pro-
blema del cupo universitario, a través de la generación de nuevos espacios y creación de
nuevas modalidades de estudios convencionales y no convencionales. La idea es propiciar
la transformación de todas las prácticas obstaculizadoras, los métodos de selección y admi-
sión excluyentes, y de aquellas concepciones negadoras del derecho a la educación para to-
dos y todas. Igualmente, promover la reflexión, discusión, concepción e implantación de
nuevos modelos educativos universitarios, con base en los imperativos de la democracia
participativa y protagónica, el diálogo con los actores involucrados teniendo como referen-
cia fundamental el proceso histórico, social, político y económico que vivimos.
14 En el sentido de que uno de sus referentes principales sea la ubicación geoespacial, geohistórica, geosocial, geocultural y
geoeconómica de la práctica educativa universitaria.
Una de las directrices de gran relevancia y puntal principal de la Misión Sucre es la munici-
palización, por lo cual se hará una descripción más extensa de ésta. Por municipalización
entendemos un proceso que haga posible que los estudios superiores estén indefectible-
mente vinculados al contexto socio-cultural en el que se realiza la práctica educativa. Por
ello, la educación superior debe tener:
15 A manera de ejemplo, puede señalarse que, a partir del método de proyectos y de solución de problemas, desde la
cotidianidad del estudiante, y su vinculación a su contexto sociocultural y geográfico, proponer ejercicios,
investigaciones de diversa índole, trabajos de campo, excursiones y visitas guiadas; fomentando simultáneamente el
arraigo y el amor por lo propio. Véase a Carlos Lanz (comp.): Teoría critica y currículo: Contribución al desarrollo
curricular del PEN. Clemente Editores; 2002.
16 Este proceso requiere: a) que los distintos gobiernos locales se incorporen al objetivo de llevar los estudios superiores, a las
diferentes regiones y municipios; b) impulsar las distintas modalidades de encuentro con los participantes según sus
necesidades y disponibilidad (diurnos, nocturnos, semanales, fines de semana, quincenales, etc.); c) utilizar distintos
recursos para el aprendizaje: videos, programas de radio y tv., correo electrónico, bibliografías, materiales en formato
electrónico; d) utilización de espacios físicos, como las aulas de escuelas básicas y liceos y de otras instituciones educativas
(que no tengan jornadas nocturnas o de fines de semana), así como el acondicionamiento de espacios en diferentes
instituciones públicas como: cuarteles (que posean espacios aptos), locales de organizaciones sociales y cualquier espacio
que pudiese ser habilitado para la formación; lo que implica el reconocimiento y la legitimación de nuevos espacios para el
aprendizaje (pues de lo que se trata es de convertir a Venezuela en un gran espacio para el aprendizaje y enseñanza al
servicio de los intereses, problemáticas, necesidades y aspiraciones de superación de las grandes mayorías nacionales); y e)
la incorporación de un grupo importante de voluntarios (profesionales universitarios de diversas especialidades), quienes
con cursos intensivos de formación pedagógica, participen en la Misión como docentes.
Objetivos Específicos:
1. Cuantificar y caracterizar la población de bachilleres que no han podido acceder a la
Educación Superior.
2. Diseñar e implantar un Programa de Iniciación Universitaria (PIU), que favorezca el
tránsito de los bachilleres a la educación superior.
3. Aumentar la matrícula en las instituciones de educación superior (IES).
4. Conformar una red que integre a todas aquellas instituciones y organizaciones que
puedan cooperar de manera sustantiva en el desarrollo y consolidación de la Misión
Sucre.
5. Desarrollar currículos que contribuyan e impulsen el Proyecto de Desarrollo Nacional
endógeno y sostenible.
6. Propiciar el desarrollo de un currículum abierto, flexible, dinámico e innovador que per-
mita desarrollar e innovar planes y programas de estudio, metodologías y recursos para
el aprendizaje, y que prevea la implementación de modalidades de formación como: la
presencial, la semipresencial, la educación a distancia, la no convencional, y la acredita-
ción de experiencias, entre otras.
7. Promover estrategias de transformación del sistema de educación superior, con base
en el desarrollo endógeno y sostenible, que impacten en lo local, lo regional y lo nacio-
nal, que simultáneamente corrijan todas aquellas anomalías y desaciertos que han veni-
do caracterizando a este sector educativo (admisión, sesgo social, deserción, calidad de
la enseñanza etc.).
Tal como se establece en su artículo 3, en el cual se declara también que la educación y el tra-
bajo son los procesos fundamentales para alcanzar dichos fines, otorgando a la educación
un carácter de prioridad fundamental y un valor estratégico.
Desafíos múltiples que se combinan con las exigencias de las sociedades contemporá-
neas en el sentido de superar las desigualdades entre los países y al interior de éstos, com-
batir los mecanismos de exclusión, consolidar la democracia, los derechos humanos y la
paz, a la vez que “trascender las consideraciones meramente económicas y asumir di-
mensiones de moralidad y espiritualidad más arraigadas”. Estos elementos sientan un
marco para lo que se denomina “la transformación y la renovación más radicales que ja-
más haya tenido por delante” la educación superior.
Y con respecto al acceso a la educación superior se apunta que si bien la segunda mitad
del siglo XX se caracterizó por una “expansión espectacular” de la educación superior a
escala mundial, “también es la época en que se ha agudizado aún más la disparidad, que
ya era enorme, entre los países industrialmente desarrollados, los países en desarrollo y
en particular los países menos adelantados en lo que respecta al acceso a la educación su-
perior” y que ha sido igualmente “una época de mayor estratificación socioeconómica y
de aumento de las diferencias de oportunidades de enseñanza dentro de los propios paí-
Los principios que rigen el equilibrio social son la universalidad, la equidad, la participa-
ción y la corresponsabilidad, y esto es fundamento de la garantía de los derechos para to-
dos y todas los ciudadanos. En función de estos valores, la Misión Sucre como parte de
una política de Estado, busca dar respuesta a la gran deuda social que se tiene con los
bachilleres y bachilleras que no han podido acceder a la educación superior.
Específicamente, se menciona que la educación debe ser de calidad y para todos, a la vez,
se debe garantizar el acceso y la permanencia en el sistema educativo, también extender
la cobertura de la matrícula en todos los niveles y modalidades del sistema educativo.
Específicamente el apartado 2.1.1.5, “Equidad y educación superior”, del Plan de Desa-
rrollo Económico y Social de la Nación, dice:
La Educación Superior está orientada a consolidar las competencias como ciuda-
danos y como trabajadores, para contribuir al desarrollo del país, comprometida
con la disminución de las inequidades y de las desigualdades sociales. En el marco
de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, la política de Educa-
ción Superior está orientada al aumento de la pertinencia social de la educación
superior, al mejoramiento de la equidad en el acceso y en el desempeño estudian-
til, al mejoramiento de la calidad y la eficiencia, al fortalecimiento de la función de
extensión, a la instrumentación de una negociación estratégica con las universi-
dades oficiales y al desarrollo de un sistema de Educación Superior.
La mayor pertinencia social de la Educación Superior consiste en que las funciones de do-
cencia, investigación y extensión, los programas y actividades, satisfagan las demandas
de la sociedad y estén vinculados con los programas de desarrollo económico, social, cul-
tural y regional.
La Misión aparece pues, desde su génesis, como esfuerzo de sinergia interinstitucional y par-
ticipación comunitaria. Se trata entonces de una convocatoria a toda la sociedad a participar
en la solución de la problemática, superando las visiones sectoriales. El Decreto ubica además
a esta convocatoria en el marco del crecimiento con equidad y el combate a las exclusiones,
reconoce las limitaciones de los medios convencionales para la creación de soluciones y des-
taca que el objetivo no es solamente lograr la incorporación a la educación superior sino tam-
bién que los bachilleres alcancen un apropiado desempeño en la Educación Superior.
17 En tal sentido, y con la intención de generar una dinámica social signada por la transferencia de poder al pueblo, a través del ac-
ceso al conocimiento y la información, ha sido necesario el desarrollo de programas integradores para garantizar el ejercicio del
derecho a la educación en todos los niveles y las instituciones. Este proceso no es exclusivo del sector educativo, en el sector sa-
lud, por ejemplo, podemos observar la misma tendencia en donde para garantizar el derecho a la salud, ha sido necesario desa-
rrollar planes como Barrio Adentro, Prosa y Bolívar 2000. El plan Barrio Adentro consiste en la incorporación de médicos en
los sectores populares del país, para atender los requerimientos de salud a nivel primario. El plan Prosa es un programa de sa-
lud, coordinado por el Ministerio de Salud y Desarrollo Social y la Fuerza Armada. Y el plan Bolívar 2000 tiene que ver con la
participación de la Fuerza Armada en relación con aspectos vinculados a: operativos de salud, infraestructura social, emergen-
cias nacionales, vivienda, etc.
tres (3) tipos de nuevos estudiantes: las personas maduras que no tuvieron oportunidad
de estudiar cuando eran jóvenes; los jóvenes adultos cercanos a los 30 años y los egresa-
18
dos que regresan por más educación.
Junto a esto grupos, se han tomado en cuenta los grupos tradicionalmente discrimina-
dos, como: la población indígena y la población de personas discapacitadas.
Esta caracterización de la población hace visible la diversidad de estudiantes a los que es-
tá dirigida la Misión, así como sus19características y necesidades educativas. Se 20
trata en mu-
chos casos de personas con compromisos laborales y familiares, con experiencias diver-
sas, que han de considerarse tanto en el diseño de las trayectorias formativas, como en
las estrategias y los materiales educativos. La irrupción de estos grupos a la educación su-
perior supone rupturas con la idea preconcebida de los estudiantes como jóvenes y a de-
dicación exclusiva y abre un especial lugar a los conceptos de la andragogía. Se trata de
que los saberes y acervos de los participantes enriquezcan los procesos formativos; de ge-
nerar relaciones estrechas entre la educación superior y el mundo del trabajo y de la vida
18 García Guadilla, Carmen (1996) Conocimiento, Educación Superior y Sociedad en América Latina. Nueva
Sociedad/CENDES. Caracas. Venezuela.
19 De acuerdo al criterio étnico, está definida por el autoreconocimiento, es decir, se considera indígena a todo aquel
ciudadano que declare pertenecer a algún pueblo indígena de Venezuela. Existen 28 pueblos indígenas diferenciados
claramente por características socioculturales propias. Se estima que su población es de aproximadamente 204.874
personas.
20 Se refiere a todas aquellas personas que han sufrido pérdida o presentan alguna anomalía de uno o más órganos o
miembros, o de las funciones propias de ésos órganos o miembros, que haya dado lugar a una o varias discapacidades; a
las limitaciones producidas por enfermedades que afecten de manera permanente la actividad de la persona. Se considera
que una persona tiene discapacidad aunque la tenga superada con el uso de ayudas técnicas externas. Se cuentan entre las
discapacidades las siguientes: ceguera total, sordera total, pérdida o discapacidad de extremidades superiores, pérdida o
discapacidad de extremidades inferiores y todas aquellas otras que afecten el buen desenvolvimiento psíquico, motor o
sensitivo en la actividad normal de una persona.
Ello requiere que tanto el personal docente como todos los actores del programa tomen
conciencia de la riqueza que esta diversidad significa, pues son las relaciones que se gene-
ran en el quehacer diario las determinantes para construir un ambiente de aceptación y
respeto fundamental para garantizar el diálogo plural que ha de caracterizar la educa-
ción superior, pues queremos que esta sea uno de los escenarios para la construcción con-
creta de una sociedad pluricultural.