Heraldos Del Evangelio Nº 0007 2003 Agosto Septiembre
Heraldos Del Evangelio Nº 0007 2003 Agosto Septiembre
Heraldos Del Evangelio Nº 0007 2003 Agosto Septiembre
Agosto/Septiembre
2003
ACTO DE CONFIANZA EN LA
BONDAD DE NUESTRO SEÑOR
(San Claudio de la Colombière)
HERALDOS DEL
EVANGELIO
Asociación privada internacional de
fieles de derecho pontificio
Ano I, nº 7, Agosto - Septiembre 2003
Sumario
Bolivia: La Paz Av. H. Siles 5054
Tel. // Fax: (591-2) 278 60 62
Santa Cruz de la Sierra Asaí 125
Tel. // Fax: (591-3) 34 34 358
Chile: Santiago Casilla 13188 Correo 21
Tel. (2) 207 54 53 // Fax: 207 55 78
Colombia: Bogotá Calle 75 N° 11-87
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Costa Rica: San José Barrio La Guaria de
Moravia. De la entrada principal del Club
La Guaria 200 oeste y 75 sur.
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Ecuador: Quito Urbanización Campo
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Los Angeles: 805 Novelda Rd
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El Salvador: San Salvador Calle 2
Casa 33 Lomas de S. Francisco
Tel. (503) 257 0840
Guatemala: Ciudad de Guatemala
Eduardo Caballero
BENDIGO SUS ACTIVIDADES ta Sede, al confiarles oficialmente la La revista, por tanto, es portavoz
iglesia de San Benedetto in Pisci- de Dios y de su Iglesia.
Recibí su amable carta fechada
nulla que ayer, sin duda, estuvieron Vladimir Galvão Martins, Valencia
el 7 de julio de 2003, con el adjunto
celebrando al Santo.
ejemplar de la revista en español ¡SIEMPRE COMIENZO
Me gustó mucho la fina presenta-
“Heraldos del Evangelio”, publi- TODO DE NUEVO!
ción de la revista, con buenos artí-
cación bimensual en el número
culos y excelentes fotografías y bien Estoy leyendo las revistas Heraldos
abril-mayo. Ojeando y leyendo un
compuestas. Todo esto hace mucho del Evangelio. Que lectura maravillo-
poco sus páginas, admiro su precio-
bien y a todos nos ayuda a ser tam- sa, envolvente!
sa presentación y su rico contenido
bién heraldos del Evangelio. Aún no consigo leerlas todas: siem-
evangelizador en todos los lugares
De nuevo: gracias por todo, fe- pre que las tomo, comienzo a leer todo
en donde los Heraldos realizan su
licitaciones y, con mis saludos, mi de nuevo! Me gustaría tener los núme-
labor apostólica.
bendición para tí y todos tus com- ros para formar mi colección.
También le agradezco de cora-
pañeros Charlote Hajas, Curitiba
zón la alegre e importante noticia
Mons. Roberto Cáceres RESPUESTAS QUE BUSCABA
que me participa sobre la recepción
Obispo emérito de Melo — Uru-
oficial de la iglesia San Benedetto Quedé muy feliz con el último
guay
in Piscinula confiada a los Heral- número de la revista. Además de
dos del Evangelio por parte de la ESTOY EN CONTACTO emocionarme, encontré algunos
diócesis de Roma. Pido al Señor PARA SUSCRIBIRME
cuestionamientos y otras res-
Jesús y a Nuestra Señora de Fátima puestas que necesitaba en aquel
Por una amiga recibí el Nro. 4
que bendigan abundantemente sus momento. Felicitaciones por el
de la revista Heraldos del Evan-
actividades, aquí en Uruguay y en trabajo, que Dios los bendiga para
gelio. Permítame felicitarlo por
donde quiera que lleven a cabo el continuar cada día mejor
tan buena publicación católica,
Evangelio de la salvación. Fátima Moreira (via internet)
que por su formato y contenido
Aprovecho gustoso la oportuni-
me parece indispensable para mi ESPERO ANSIOSA LA REVISTA
dad para expresarle las muestras
familia.
de mi consideración y estima en Siempre espero ansiosa la revista
Ya me puse en contacto con
Cristo. Heraldos del Evangelio. Todo es muy
los Heraldos de Paraguay a fin de
Mons. Janusz Bolonek lindo. Cuanta información nos trae
concretar mi suscripción.
Nuncio Apostólico en Uruguay en sus artículos. Después que la leo,
Saludos a todos y que Dios y la
NOS AYUDA A SER TAMBIÉN Virgen los bendigan en esta labor. se la presto a otras personas. Como
HERALDOS DEL EVANGELIO Marisol, via internet soy misionera en mi parroquia, la
Acabo de recibir tu carta y como aprovecho mucho, la estudio, la
PORTAVOZ DE DIOS
anteriormente me enviaras un Y DE SU IGLESIA
transmito a otras personas. He di-
ejemplar del folleto sobre el Santo vulgado la revista. Como tengo una
Rosario, estupendamente impreso, Esta revista hace parte del Evan- peluquería aquí en mi ciudad, se la
no quiero dejar pasar un día más, gelio Eterno, la novedad de los muestro a mis clientes para que la
sin acusar recibo de ambos envíos: últimos tiempos, la cual viene a res- lean.
el del folleto sobre el Rosario y ayer, catar los valores de siempre, viejos y Escriban más artículos sobre
la revista de los “Heraldos del Evan- confiables pilares de la Santa Madre Uds., las ropas que usan… Creo que
gelio” en español. Iglesia. La editorial de febrero de muchas personas tienen curiosi-
Los felicito por la confianza en 2002 tiene razón:“Dios tiene siempre dad en conocerlos mejor.
Uds. depositada por parte de la San- bellas novedades para contarnos.” Teresita Noro, Pernambuco
4
Editorial
L
os árboles, como todos los seres vivos, nacen, se desa-
rrollan, alcanzan su apogeo, declinan y mueren. Mu-
chos de ellos podrían ser escogidos como símbolo de
la más bella de todas las instituciones, la Santa Iglesia,
nacida del costado de Cristo y dotada de algo que ni
siquiera existe en el reino animal: su inmortalidad en
medio de un esplendor siempre renovado.
Con el paso de los siglos y los milenios, sin dejar de amparar y
conservar sus conquistas, ella va abriendo nuevos campos, a veces
sorprendentes.
Es del corazón de nuestro actual pontífice, S.S. Juan Pablo II, que
vemos surgir, bajo el soplo del Espíritu Santo, nuevas hojas, flores y
frutos en los frondosos ramos del árbol de la Iglesia. Entre todos, des-
tacamos hoy los movimientos eclesiales. Al respecto, así se refirió el
Santo Padre, en mensaje a los participantes de su Congreso mundial
(27-5-1998):
“Desde el inicio de mi pontificado, atribuí especial importancia al
camino de los Movimientos Eclesiales y tuve ocasión de apreciar los
frutos de su difundida y creciente presencia, en los transcursos de las
visitas pastorales a las parroquias y de los viajes apostólicos. Constaté
con placer su disponibilidad para colocar las propias energías al servicio
de la Sede de Pedro y de las Iglesias locales. (...) Ellos representan uno
de los frutos más significativos de aquella primavera de la Iglesia (...) Su
presencia es alentadora.”
Y en su discurso durante el mismo Congreso, acrecentó: “Los
Por
Primer a
movimientos y las nuevas comunidades eclesiales son la respuesta sus-
citada por el Espíritu Santo a este dramático desafío del fin del milenio”
(30/5/1998).
Ya anteriormente, preparando el camino para Juan Pablo II, la
vez en la
Constitución Dogmática Lumen Gentium dejaba claro que corres-
pondía de manera especial a los laicos “iluminar y organizar todos los
asuntos temporales a los cuales están estrechamente vinculados, de tal
manera que se realicen continuamente según el espíritu de Jesucristo y se
Historia
desarrollen y sean para la Gloria del Creador. (...) A los laicos pertenece,
por vocación propia, buscar el Reino de Dios tratando y ordenando, se-
gún Dios, los asuntos temporales” (LG 31).
Sobre todo, delante de una cultura y civilización materialistas y de
una sociedad constituida por modelos de vida esencialmente ateos,
la mejor manera que tienen los laicos de cumplir esa noble tarea
evangelizadora consiste, de hecho, en organizarse en movimientos
eclesiales. Esta es la razón del gran apoyo e incentivo de nuestro Papa
a esa “nueva época asociativa de los fieles laicos” (Christifideles Laici,
29), como también la de él haber, por vez primera en la Historia, con-
cedido a una asociación privada de fieles —los Heraldos del Evange-
lio— una iglesia en su Diócesis de Roma. ²
5
COMENTARIO AL EVANGELIO
D
¹
espués de esto, se fue Jesús a la otra Jesús: “Haced que se recueste la gente.” Había
ribera del mar de Galilea, el de Ti- en el lugar mucha hierba. Se recostaron, pues,
beríades, ²y mucha gente le seguía los hombres en número de unos cinco mil.
porque veían las señales que realizaba en los Tomó entonces Jesús los panes y, después de
11
enfermos. ³Subió Jesús al monte y se sentó dar gracias, los repartió entre los que estaban
allí en compañía de sus discípulos. 4Estaba recostados y lo mismo los peces, todo lo que
próxima la Pascua, la fiesta de los judíos. 5Al quisieron. 12Cuando se saciaron, dijo a sus dis-
levantar Jesús los ojos y ver que venía hacia Él cípulos: “Recoged los trozos sobrantes para
mucha gente, dijo a Felipe: “¿Dónde vamos a que nada se pierda.” 13Los recogieron, pues,
comprar panes para que coman éstos?” 6Se lo y llenaron doce canastos con los trozos de los
decía para probarle, porque Él sabía lo que iba cinco panes de cebada que sobraron a los que
a hacer. 7Felipe le contestó: “Doscientos dena- habían comido. 14Al ver la gente el milagro que
rios de pan no bastan para que cada uno tome había realizado, decía: “Este es verdaderamente
un poco.” 8Uno de sus discípulos, Andrés, her- el profeta que iba a venir al mundo.” 15Dándose
mano de Simón Pedro, le dijo: 9“Aquí hay un cuenta Jesús de que intentaban venir a tomarle
muchacho que tiene cinco panes de cebada y por la fuerza para hacerle rey, huyó de nuevo al
dos peces; pero ¿qué es eso para tantos?” 10Dijo monte Él solo (Jn 6, 1-15).
6
Multiplicación
de los Panes”—
Iluminura de las
“Ricas Horas
del Duque de
Berry”
7
en busca de un lugar desértico en ble trabajar en Dios como también indica que, al final, esa fiesta había
Bethsaida. descansar en Dios. llegado a la plenitud de su simbolis-
Nuestra vida en sociedad —sobre mo, la Pascua Cristiana.
2
y mucha gente le seguía porque todo cuando es apostólica— debe Tal vez haya aún una tercera ra-
veían las señales que realizaba ser conducida en una mezcla de ac- zón, pues conforme comenta Beda el
en los enfermos Venerable, San Juan Bautista habría
sido degollado por ocasión de la mis-
El transcurso a pie era el doble ma festividad, en la cual Jesús sufrió
del que se realizaba en barco. A pe-
sar de esto, percibiendo hacia dónde Al buscar a Jesús, la Pasión.
8
su mayor empeño se concentró en didáctica, Él deseaba fortalecer la Fe Con esta intervención de Andrés,
atraer la atención del lector para la aún tímida de sus seguidores. Por eso estaban colocados los presupuestos
esencia del milagro preparatorio a la obliga a Felipe a comprobar la total para valorar el divino poder de Jesús
institución de la Eucaristía. imposibilidad de alimentar a toda sobre el universo.
Ante la apetencia de aquella mul- aquella gente, a fin de facilitarles el Apenas como curiosidad, convie-
titud, el Divino Maestro abandonó creer en la magnitud del milagro. ne notar que el pan de cebada era
inmediatamente el propósito de alimento de los pobres, y los peces
reposo y se puso a recibir a todos, 7
Felipe le contestó: “Doscientos deberían de ser secos y salados,
predicándoles con esplendor sobre denarios de pan no bastan para conforme las costumbres de sur del
el Reino de Dios, no sólo con la que cada uno tome un poco. lago de Tiberíades. Algunos autores
palabra, sino también por medio de antiguos atribuyen un pequeño sim-
milagros. Son las incansables ma- Jesús prueba la Fe de los Após- bolismo a los números cinco (panes)
nifestaciones del Sagrado Corazón toles en la persona de Felipe, por y dos (peces). En cuanto al primero,
de Jesús revelándonos su divina el hecho de ser éste oriundo de la dicen relacionarse con el Pentateuco
bondad, preciosísima parcela de la región en que todos se encontraban de Moisés, o sea con la antigua Ley.
herencia que Él dejó a su Iglesia. La en ese momento. Su respuesta fue
Iglesia tiene compasión, palabras de la más precisa posible. Ninguna de-
claración podría ser más segura para
vida eterna, ampara a los necesita-
dos, tal como lo hacía su Fundador. comprobar el absoluto poder tauma- Jesús obra un
6
Se lo decía para probarle, por-
túrgico del Mesías.
Nada permite creer que el dinero milagro grandioso,
que Él sabía lo que iba a hacer. de los apóstoles poseyese la cuantía
necesaria para alimentar cinco mil
para fortalecer
Los discípulos de Jesús ya habían
presenciado las innumerables ma-
personas.
la Fe aún tímida de
ravillas que Él había operado, com-
probando su entero dominio sobre la
8
Uno de sus discípulos, Andrés, sus seguidores
hermano de Simón Pedro, le di-
naturaleza. Entretanto, en su divina
jo: 9 “Aquí hay un muchacho que
tiene cinco panes de cebada y
Los peces, según ellos, eran dos para
dos peces; pero ¿qué es eso para
representar los poderes gubernativos
tantos?” de los hebreos — el real y el religio-
Antes de esta intervención de An- so— dos prerrogativas de Nuestro
drés, los sinópticos narran la aflic- Señor.
ción de los discípulos a propósito de
la dramática situación de aquellos 10
Dijo Jesús: “Haced que se
millares de personas: se hacía tarde, recueste la gente.” Había en el
el sol se ocultaba, el lugar era desér-
lugar mucha hierba. Se recosta-
tico y por eso, movidos por el sentido
común, aconsejaron a Jesús a despe-
ron, pues, los hombres en núme-
dir a la multitud. ro de unos cinco mil.
Andrés manifiesta su Fe en Jesús, Es bellísima la delicadeza de
al introducir un pequeño vendedor Jesús. Como buen anfitrión, hace
ambulante con sus cinco panes y dos a todos sentarse en la grama por
peces. Entretanto, erróneamente Él creada. Además, así lo exigía
habría juzgado ser necesario que un principio de buena disciplina.
Imaginemos cuál no habría sido el
hubiese una cierta proporción entre
bullicio producido por una multitud
los panes existentes y los multiplica- hambrienta que intenta conquistar
dos por el milagro. Según afirma San su alimento, sin que hubiese quien
Juan Crisóstomo, Andrés conocía el la armonizase. Sentándose ordena-
episodio acaecido con Eliseo, quien damente en grupos de cincuenta o
alimentó cien personas con veinte cien, la distribución de los panes y de
panes (8). los peces se tornaba fácil.
9
11
Tomó entonces Jesús los panes Nunca aquella gente había comido 15
Dándose cuenta Jesús de que
y, después de dar gracias, los tan delicioso manjar. Él debería ser intentaban venir a tomarle por
repartió entre los que estaban inmensamente superior al propio la fuerza para hacerle rey, huyó
maná del desierto, pues éste no
recostados y lo mismo los peces, de nuevo al monte Él solo.
había pasado por las divinas manos
todo lo que quisieron. de Jesús. No hubo quién no comiese En los otros Evangelios nos de-
La narración de este hecho, al ser hasta saciarse. paramos con una vigorosa actitud
completada en detalles por los otros de Nuestro Señor: hace que los
Evangelistas, adquiere un elevado 12
Cuando se saciaron, dijo a sus apóstoles se separen enseguida de
simbolismo anunciador de la insti- la multitud exaltada, en cuanto Él
discípulos: “Recoged los trozos
tución de la Eucaristía. Tomando en se despedía de todos.
sobrantes para que nada se pier- Oigamos al famoso Fillion, (10)
sus manos los cinco panes y los dos
da.” con su fino discernimiento exegé-
peces, Jesús levantó sus ojos al cielo,
Además de tratarse de una cos- tico, comentar estos dos últimos
tumbre propia a los hebreos, al orde- versículos:
Un concepto nar a los discípulos recoger todos los “Su admiración, lamentable-
mente muy humana, crecía a cada
restos, Jesús demuestra una especial
equivocado de didáctica preparatoria del futuro instante. Tan ardorosa era su exal-
trato con las especies eucarísticas. tación que ya no pensaban sino
mesianismo También Él tenía en vista tornar aún en apoderarse de Nuestro Señor y
más patente su absoluto poder tau- proclamarlo Rey de Israel, ¡incluso
horadaba un matúrgico, evitando así la tentación en contra de su voluntad! Pero este
de que todo lo ocurrido había sido concepto del mesianismo —como
profundo abismo una simple ilusión. ya tuvimos ocasión de verlo muchas
11
LA VOZ DEL PAPA
MARÍA
REINA DE LOS APÓSTOLES
En su homilía en la ciudad de Zadar (Croacia), el 9 de junio pasado, S. S. Juan
Pablo II resaltó el papel central de la Virgen, no sólo en el Cenáculo, el día de Pente-
costés, sino a lo largo de toda la vida de la Iglesia.
“La Virgen que se hizo Iglesia” del Espíritu sobre la Iglesia, que enfrenta desafíos
emergentes en las varias épocas de la Historia.
Nuestra asamblea litúrgica tiene lugar el día si-
Así, María realiza plenamente su misión maternal:
guiente a la solemnidad de Pentecostés, el día en que
no es Madre únicamente porque dio a luz y alimentó
celebráis la Fiesta de María, Madre de la Iglesia. La
al Hijo de Dios; es Madre también porque es “la Vir-
lectura, que acaba de ser proclamada, la presenta en
el Cenáculo para permitir que el anuncio evangélico gen que se hizo Iglesia”, como la exaltaba Francisco
salga a la plaza de Jerusalén y se encamine por las de Asís (cf. Fuentes Franciscanas, 259) que, según la
veredas del mundo. tradición, pasó por Zadar al inicio del S. XIII, duran-
Como en Pentecostés, la Virgen permanece espi- te su viaje rumbo a Oriente y a Tierra Santa.
ritualmente en medio de los fieles, a lo largo de los Reuniendo en torno suyo a los Apóstoles y a los
siglos, para invocar la constante efusión de los dones discípulos, tentados de dispersión, la Virgen María
Diariamente —en audiencias, homilías, cartas y discursos— el Sumo Pontífice dirige al orbe católico pala-
bras ricas de enseñanzas, de estímulo a la santidad y al apostolado, de alimento para la vida espiritual de
cada fiel. Transcribimos aquí algunos trechos escogidos, para beneficio de nuestros lectores.
12
los entrega al “fuego” del Espíritu Santo, que ha de
lanzarlos en la aventura de la misión. El “sensus fidei”
del pueblo cristiano reconocerá la presencia activa de
María, no apenas en la comunidad de los primeros
cristianos, sino también en las vicisitudes subsecuen-
tes de la Iglesia. Por eso, no dudará en tributarle el
título de “Reina de los Apóstoles”.
La Virgen Santísima, que, según el Evangelista San
Lucas, “conservaba todas estas cosas, y las meditaba
en su corazón” (2, 19), continúa proponiendo a la me-
moria de los fieles los acontecimientos históricos que
fundamentan su Fe. Testigo de los orígenes, garantía
de la fidelidad de las generaciones cristianas, María
repite en todos los tiempos las palabras pronunciadas
en las bodas de Caná: “Haced lo que Él os diga” (Jn
2, 5).
Sergio Hollmann
los prepara continuamente para la misión, con la asi-
duidad de su oración al Padre, con el apelo al Hijo y
con su disponibilidad a las sugestiones del Espíritu.
Me es grato conocer que, en los últimos años,
esta Arquidiócesis vio florecer y multiplicarse varias
formas de compromiso y de apostolado de los laicos. apostolado auténtico exige como condición previa el
Dilectos Hermanos y Hermanas, aprended de María encuentro personal con Jesús vivo, el Señor (cf. Ap
a ser testigos fidedignos y apóstoles generosos, ofre- 1, 17-18).
ciendo vuestra contribución a la grandiosa obra de María Santísima permanece como modelo de cuan-
la nueva evangelización. Y recordad siempre que el tos escuchan la Palabra de Dios y la ponen en práctica
➢➢
las preguntas fundamentales de su (A los miembros de la Pontificia es único en todo el universo, así
existencia, parece abrirse a la voz Comisión Bíblica, 29/4/2003) la predicación de la verdad brilla
que procede de la Trascendencia por doquier e ilumina a todos los
y que se expresa en el mensaje El Evangelio, faro de hombres que quieren llegar al co-
bíblico.
salvación para todos nocimiento de la verdad (...). Sea
Al mismo tiempo, cada vez
soporta menos la exigencia de los pueblos que se trate de un gran orador o
comportarse en armonía con los Cristo es la verdad que libera a de un miserable charlatán, todos
valores que la Iglesia presenta cuantos lo buscan con sinceridad enseñan la misma verdad. Nadie
desde siempre como fundados en y perseverancia. Él es la verdad disminuye el valor de la tradición.
el Evangelio. Asistimos así a tenta- que la Iglesia proclama incan- Única e idéntica es la fe. Por eso,
tivas de todo tipo para desligar la ni el elocuente puede enriquecerla,
sablemente de modos diversos,
revelación bíblica de las propues-
difundiendo el único Evangelio ni el balbuciente empobrecerla”
tas de vida más arduas.
de salvación hasta los últimos con- (Contra las herejías, I, 10, 3).
La escucha atenta de la Palabra
de Dios ofrece respuestas frente a fines de la tierra e inculturándolo (Discurso a los participantes
esta situación, que encuentran su en las diversas regiones del mundo. en un congreso organizado por la
plena expresión en las enseñanzas San Ireneo recordaba sabiamente: Pontificia Universidad Lateranen-
de Cristo. “Como el sol, criatura de Dios, se, 9/5/2003)
13
(cf. Lc 8, 21). Entonces, ¿cómo podría dejar de existir
un profundo entendimiento espiritual entre los fieles
y la Virgen del Magnificat? Los pobres y los humildes
de todos los tiempos no se engañaron, haciendo de
María en el silencio, su portavoz y, de María en el ser-
vicio, su Reina.
También nosotros nos aproximamos de ella, para
aprender su docilidad y su abertura a Dios. Inclusive
nosotros, peregrinos del tercer milenio, nos entre-
gamos a sus cuidados a fin de que, a través de su
intercesión, sustente nuestra Fe, alimente nuestra
Esperanza y torne fecunda nuestra Caridad:
Santa María, Madre de Dios y nuestra Madre, re-
cuerda a todos tus hijos, ven en nuestra ayuda.
Oriéntanos hacia Cristo, Camino, Verdad y Vida;
implora del Padre, para nosotros, los dones del Espí-
ritu, la protección contra las amenazas y la liberación
del mal.
Ayúdanos a dar testimonio en todas las circunstan-
cias, de la fecundidad de tu amor y del sentido auténti-
co de la vida; enséñanos a edificar contigo el Reino de
tu Hijo, ¡Reino de justicia, de amor y de paz!
Reza por nosotros y sé nuestra Patrona, ahora y
siempre.
Os entregamos, hoy, nuestras personas, así como
toda esta tierra y todo el pueblo de Croacia, a ti, que
sois también Nuestra Señora del Gran Voto Bautismal
Croata, Reina del Santo Rosario.
La importancia de la del Evangelio den fruto en vues- volver más difícil, y por así decir,
tras sociedades y culturas. “contra la corriente”, el compro-
evangelización de la cultura (Audiencias a los Obispos de miso de convertirnos en auténticos
Un aspecto central de la nueva Escandinavia, en visita “ad limina discípulos del Señor, en cuanto
evangelización, a que exhorté a Apostolorum”, 5/4/2003) la velocidad y profundidad de los
toda la Iglesia, es la evangeli- cambios hacen aumentar la distan-
zación de la cultura. Porque en Educación cristiana de los cia y a veces casi la incomunicación
el centro de cada cultura está el niños, la nobilísima misión entre las generaciones. Por tanto,
comportamiento que el hombre de las familias es justo, como afirmasteis en las
asume delante del mayor misterio: Orientaciones Pastorales para el
Escogisteis como tema central
el misterio de Dios. “Cuando esta presente decenio, asumir como
de esta 51ª Asamblea General la
cuestión es eliminada, se corrom- criterio de renovación “la opción
iniciación cristiana: elección opor-
pen la cultura y la vida moral de tuna como nunca, porque la forma- de configurar la pastoral según el
las naciones” (Centesimus annus, ción del cristiano y la transmisión modelo de la iniciación cristiana
24). de la Fe a las nuevas generaciones (“Comunicar el Evangelio en un
El desafío que debéis enfrentar tiene una importancia decisiva, mundo en cambio”, n° 59).
consiste en hacer con que la voz que se torna aún mayor por el ac- En una situación que exige un
del Cristianismo sea oída en el tual contexto social y cultural, en gran compromiso de nueva evan-
contexto público, y que los valores que muchos factores concurren a gelización, los propios itinerarios
14
Dios llama especialmente a los laicos
También en su reciente viaje a Croacia, el Santo padre hizo un ardoroso llamado a los fieles laicos para que
tomen conciencia de que todos son llamados a “un renovado impulso apostólico”.
de iniciación cristiana deben con- (A los Obispos de la Conferen- Se encuentra en esto, queridos,
ceder un gran espacio al anuncio cia Episcopal Italiana, 20/5/2003) el secreto de la eficiencia de cada
de la Fe y proponer sus motivos ministerio y servicio en la Iglesia.
fundamentales, de manera propor- Santidad, el secreto de la Todo esto os ayudará enorme-
cionada a la edad y a la instrucción eficiencia apostólica mente cuando realicéis vuestra
de las personas. Después, es muy Para desempeñar de manera fiel actividad entre pueblos con cos-
importante comenzar a temprana las tareas que os serán confiadas, tumbres, civilizaciones, lenguas y
edad la educación cristiana de los es indispensable que, desde los tradiciones religiosas diferentes.
niños, para que ella sea vitalmente años de formación, vuestro objeti- Vuestro servicio será tanto más
asimilada desde los primeros años: vo prioritario sea buscar la santi- provechoso cuanto más tratéis de
debemos hacer con que las familias dad. (...) promover, con espíritu auténtica-
sean conscientes de su nobilísima Sea vuestro esfuerzo cotidiano mente sacerdotal, el crecimiento
aspirar a la perfección evangé- de las Iglesias locales, uniéndolas
misión y ayuden a cumplirla, su-
lica, alimentando una relación
pliendo también sus eventuales con la Cátedra de Pedro y para el
ininterrumpida de amor con Dios
carencias. De hecho, ningún niño bien de los pueblos.
en la oración, en la escucha de su
bautizado debe ser privado del palabra y, sobretodo, en la devota (Discurso a los miembros de la
alimento que hace crecer la semilla participación del Sacrificio Euca- Pontificia Academia Eclesiástica,
colocada en el Bautismo. rístico. 15/5/2003).
15
La Diócesis de Roma
confía la Iglesia de San Benedetto in Piscinula
C
on estas palabras, el
cardenal Camillo Rui-
ni, vicario de Su San-
tidad para la diócesis
de Roma, confiaba
oficialmente a los Heraldos del Mons. Adriano Paccanelli
Evangelio, el 31 de mayo pasado, la Ceremoniaro de la Basílica de
iglesia de San Benedetto in Piscinu- Santa María Mayor
la, situada en el barrio romano de
Trastevere.
dad pastoral que allí se desarrolla a Eterna, Sede del Sucesor del Após-
La Asociación Heraldos del
una asociación privada de laicos. tol Pedro, encuentra su centro de
Evangelio, atendiendo la invitación
Con razón los Heraldos de unidad y de irradiación de la Fe.
de la diócesis de Roma, se compro-
Evangelio consideran esta etapa El carisma de los Heraldos del
metía a prestar al rector de la iglesia
un acontecimiento importante pa- Evangelio tiene su fundamento en
su servicio de apoyo en el ejercicio
ra la vida de la Asociación. Es un la Eucaristía, se distingue por una
de la actividad pastoral, particular-
precioso fruto, madurado después especial devoción a la Virgen y es-
mente en la animación litúrgica de
del 22 de febrero de 2001, cuando, tá caracterizado por un particular
las celebraciones, en la custodia y
en la fiesta de la Cátedra de Pedro, vínculo a la persona del Papa y a
decoro de la iglesia y de los orna-
obtuvieron del Pontificio Consejo su magisterio. A través del recono-
mentos sagrados, bien como en la
para los Laicos el reconocimiento cimiento pontificio anterior y de la
acogida a los peregrinos.
como Asociación Privada de Fieles entrega, ahora, de una iglesia en
El rector, a su vez, ejercerá el mi-
de Derecho Pontificio. Roma, reciben una cualificada con-
nisterio sacerdotal en armonía con
la pastoral diocesana, en colabora- Por designio de la Divina Provi- firmación de la actualidad y eficacia
ción fraterna con la parroquia, en dencia, iluminados por la presencia de su servicio apostólico a la Iglesia
la consideración atenta del espíritu materna de María Santísima, los y a la Nueva Evangelización.
y del estilo propio de la experien- Heraldos del Evangelio ahora for- Las raíces de la Asociación He-
cia asociativa de los Heraldos del man parte integrante de la vida y de raldos del Evangelio y cada uno de
Evangelio. la historia de la Iglesia de Roma, in- sus miembros se afirman ahora más
Por la primera vez, la Iglesia de sertándose en el surco fecundo del en el corazón de la Iglesia Univer-
Roma, diócesis del Santo Padre, —dos veces milenario— camino de sal, como si estuvieran idealmente
confía un lugar sagrado y la activi- la Iglesia Católica que, en la Ciudad sumergidas en el suelo bañado por
16
Fotos: Mauricio Badolato / Gold Foto, Roma
17
Heraldos reciben la llave
En una solemne ceremonia realizada el 16 de junio, Mons. Angelo di Pasquale, rector de la iglesia San
Benedetto in Piscinula, entregaba las llaves de tan histórico y simbólico edificio a Don Pedro Paulo
Figueiredo, presidente regional de los Heraldos del Evangelio. Con estas calurosas palabras Mons. di
Pasquale se dirigía a los Heraldos presentes dándoles la bienvenida:
S ed bienvenidos, Heraldos
del Evangelio, en la ale-
gría y agradecimiento al
Señor por vuestra presencia en
esta iglesia que ha tenido durante
tantos siglos de historia un prota-
gonista —en la persona y carisma
de San Benito— de la Civiliza-
ción Cristiana y de la Civilización
del Evangelio, de la paz de Cristo
en el mundo.
Este mensaje se perpetúa hoy,
a través de vuestra presencia,
vuestro carisma, vuestra activi-
dad y vuestro propio hábito, que
proclama esta finalidad y esta Venid y sed los animadores amado y adorado, y todos se sien-
misión. de esta comunidad para que, tan uno sólo, ya que el Señor está
Queridos hermanos, habéis ve- también en Roma, centro de la donde hay caridad y amor.
nido aquí, a este lugar histórico, Cristiandad, al lado del Apóstol En la confianza y consagración
para perpetuar la memoria que, Pedro y su Sucesor, se pueda a la Madre de Dios y nuestra, Es-
años atrás, recibisteis de San Be- desarrollar siempre este mensaje posa del Espíritu Santo, Madre
nito, en la ciudad de São Paulo, de amor y de gracia, tan querido del Divino Amor, Madre de la
donde empezasteis vuestro itine- y propagado por nuestro Padre Confianza y de la Perseverancia,
rario, inspirados por el Espíritu Juan Pablo II, de manera que, en Madre del Carmelo —Muchas
Santo. todas partes, Nuestro Señor sea Gracias.
“Por ocasión del comienzo de la colaboración de gando a la Reina del Santo Rosario y a San Benito
la Asociación Heraldos del Evangelio en esa igle- copiosos favores celestiales, concede de corazón a
sia, el Sumo Pontífice hace votos de un generoso y usted y a todos los miembros del sodalicio la implo-
competente servicio en el anuncio del Evangelio, rada Bendición Apostólica, extensiva a los demás
decoro de la liturgia y acogida de los fieles, y ro- fieles presentes en el sagrado rito.”
18
ACUERDO ENTRE LA DIÓCESIS DE ROMA
Y LA ASOCIACIÓN PRIVADA DE FIELES
HERALDOS DEL EVANGELIO CONCERNIENTE A
LA IGLESIA DE SAN BENEDETTO IN PISCINULA
Eduardo Caballero
31 de mayo por Su Eminencia el Cardenal Camilo Ruini y
por el representante legal de esta Asociación, Sr. Guillermo
Asurmendi.
Teniendo como premisas: en la persona física del Rector, en con- actividades que —aunque conformes con
—que el artículo 101, 4o. de la Ins- formidad con el can. 557 C.I.C.; las funciones y la dignidad del lugar— no
trucción en materia Administrativa de Considerándose lo arriba dicho sean directamente orientadas al culto,
la Conferencia Episcopal Italiana, del como parte integrante del presente debe realizarse en común acuerdo con el
1º de abril de 1992, aun previendo que acuerdo se determina de común Rector y bajo su responsabilidad directa,
la concesión de Iglesias-rectorías sea acuerdo lo que sigue: dentro del respeto al derecho particular
hecha a beneficio de un Instituto reli- 1. Al Rector, nombrado por el Ordi- de la Diócesis de Roma.
gioso clerical o a una Sociedad de vida nario de Roma, compete la cura pastoral 4. La presencia de la Asociación en
apostólica, no excluye la posibilidad de de la persona jurídica Iglesia-Rectoría SAN BENEDETTO IN PISCINULA
establecerse un acuerdo bilateral entre SAN BENEDETTO IN PISCINULA. constituye un enriquecimiento para la
la Diócesis y otros sujetos de derecho Él ejerce su ministerio en armonía con Diócesis de Roma. Por lo tanto, el Or-
que quieran ofrecer su colaboración, la pastoral diocesana, en colaboración dinario dispone que la Iglesia de San
para favorecer un adecuado ejercicio de fraterna con la parroquia territorial, en la Benedetto in Piscinula sea pastoralmente
la actividad institucional de la persona atenta consideración del espíritu y del es- ligada a las actividades de la Asociación
jurídica Iglesia; tilo propio de la experiencia asociativa de HERALDOS DEL EVANGELIO, cuyos
—que en la Iglesia SAN BENE- los HERALDOS DEL EVANGELIO. miembros expresan su propia identidad
DETTO IN PISCINULA —dotada Él tiene la responsabilidad del edificio cristiana con el testimonio de la propia
de personalidad jurídica y abierta al sagrado y de la casa-rectoría anexa, aun- vida, dando una atención privilegiada al
culto público— se da la necesidad de que no esté ocupada por él personalmen- apostolado, y viviendo la propia consa-
colaborar con el Rector para garantizar te, así como del ejercicio del culto y de la gración bautismal, por medio de María,
la eficacia de las estructuras, providen- pastoral de acogida de los fieles, según según la espiritualidad de San Luis M.
ciando urgentes obras de restauración y la normativa canónica, en el respeto del Grignion de Montfort.
de consolidación de las mismas (edificio programa pastoral diocesano y de las di- 5. Queda establecido que los actos de
sacro y casa-rectoría anexa), y asegurar rectivas del Ordinario. administración referentes a la persona
de esa manera la regular prosecución de Al Rector —considerando que el jurídica Iglesia-rectoría, según lo que
la celebración del culto. mismo ente Iglesia SAN BENEDETTO prevé el derecho común (cf. Can. 1281
—que la Asociación privada de fieles IN PISCINULA es propietaria del edifi- C.I.C.), las normativas de la C.E.I. (Con-
cio sacro, en cuanto que el Vicariato de ferencia Episcopal Italiana) y el Derecho
“HERALDOS DEL EVANGELIO”,
Roma lo es de la casa-rectoría— le cabe General del Cardenal Vicario de Roma
habiendo manifestado el deseo de
también la administración ordinaria de la de 20.09.1990 n. 863/90, deben ser au-
abrir un centro propio en el ámbito de Iglesia-rectoría, así como el cuidado de torizados previamente por la autoridad
la Diócesis de Roma, ha acogido a su los procedimientos administrativos reque- eclesiástica competente.
vez la propuesta de fijar la sede en las ridos por las leyes del Estado italiano y del 6. El Acuerdo tiene una duración de seis
dependencias de la susodicha Iglesia de Vicariato de Roma. años, a partir de la fecha de hoy, y es reno-
SAN BENEDETTO IN PISCINULA, 2. La Asociación privada de fieles vable sin ningún límite de tiempo máximo.
ofreciendo, al mismo tiempo, su propia HERALDOS DEL EVANGELIO,
Tres meses antes del vencimiento, las Partes
colaboración para las exigencias más acogiendo la invitación de la Diócesis de
entrarán en contacto para establecer las mo-
arriba enunciadas; Roma, se compromete a prestar al Rector
dalidades de renovación del mismo. La even-
el servicio propio de apoyo al ejercicio de
—que la intervención de la Asocia- tual interrupción anticipada de la relación de
la actividad pastoral en la Iglesia, a título
ción se dará según la modalidad y en los colaboración —siempre posible por causa
gratuito, donde necesario y previamente
términos concordados con los órganos acordado, por ejemplo, en la animación proporcionada, por iniciativa de cualquiera
competentes del Vicariato (cf. Anexos litúrgica de las celebraciones, en la cus- de las partes, o en ausencia de renovación de
I y II); todia y el mantenimiento del decoro de acuerdo en el vencimiento— se dará dentro
—que el Ordinario diocesano de la Iglesia y de los ornamentos sacros; así del respeto a la normativa canónica vigente
Roma conserva intacto su derecho de como en la acogida de los visitantes. y a los recíprocos derechos constituidos a
proceder libremente al nombramiento 3. Cualquier eventual utilización de la través de los acuerdos abajo firmados por
del representante legal del ente Iglesia, Iglesia por parte de la Asociación para ambas partes (cf. Anexos I y II). N
19
El cáliz de la obediencia
El sufrimiento que tanto causa horror al hombre mo-
derno es uno de los medios más eficaces de conferir
celebridad. Es lo que encontramos en estas líneas
Juliane Campos sobre Santa Rita.
L
torno de ella y depositaban suavemente miel en sus labios,
a obediencia es una de las virtudes más di- sin herirla ni despertarla. Uno de los campesinos vecinos,
fíciles de practicar, pues obedecer significa presenciando la escena por vez primera, quiso apartar los
contrariar la propia voluntad para hacer la
de otro, mortificando de modo especial la
naturaleza humana, que recibió de Dios la
libertad.
La Historia nos revela bellos ejemplos de obediencia.
El más sublime, sin duda, es el de Jesús, el cual, para redi-
mir al género humano, “se hizo obediente hasta la muerte,
y muerte de cruz”.
Abajo del Salvador, el más excelso modelo de obedien-
cia es María Santísima, la perfecta discípula de su Divino
Hijo, en ésta como en todas las virtudes.
Invito al lector a pasear conmigo, en este artículo, por
la vida de una santa que bebió desde niña el cáliz de la
obediencia, siguiendo el supremo ejemplo de Jesús y el
ejemplo excelso de María: Santa Rita de Casia.
Su fiesta se celebra el día 22 de mayo. Ella es invocada
especialmente como protectora de las causas imposibles,
por los motivos que el lector verá más adelante.
Niña privilegiada
Aunque de avanzada edad, Antonio Mancini y su esposa
Amanda, no cesaban de pedir a Dios, con confianza e in-
sistencia, la bendición de tener un hijo que les alegrase el
hogar. Vivían ellos en la pequeña aldea de Roca Porena, en
Casia, en la Umbría.
Para atender las oraciones de ese piadoso matrimonio,
realizó Dios el primer “imposible” de la vida de la santa: su
Sergio Hollmann
20
insectos con su mano atrofiada. En el mismo instante ella diante el Sacramento de la confesión, Pablo Fernando
quedó curada. fue asesinado por algunos de los malos compañeros que
Después de la muerte de Santa Rita, esas mismas abejas había tenido.
blancas comenzaron a aparecer anualmente en el monaste- Los hijos del matrimonio, dos gemelos, con entonces
rio de las agustinas, donde ella pasó los últimos años de su 14 años, juraron vengar la muerte del padre. Santa Rita
vida. Allá llegaban por Semana Santa y permanecían hasta viendo como los hijos habían heredado las malas tenden-
el 22 de mayo. Después se retiraban, para volver la Semana cias de su progenitor, y temiendo por el destino eterno de
Santa siguiente. Hasta hoy los peregrinos pueden ver los los dos, dirigió a Dios una súplica: prefería ver a sus hijos
huequillos que ellas hacían en las paredes del monasterio. muertos antes que siguiendo el camino de la perdición.
Pronto el Padre de Misericordia demostró su complacen-
Infancia marcada por la piedad y la cia con la súplica de esta madre auténticamente católica.
obediencia En menos de un año, los dos hijos cayeron enfermos y fa-
llecieron, perdonando a los asesinos de Pablo Fernando.
Desde pequeña, demostraba Rita una gran inclina-
ción a la piedad. Sus padres, a pesar de no saber leer ni
escribir, le enseñaron el catecismo y la historia de Jesús.
Entrada en la vida religiosa
Se dedicaba con gran gusto a la oración, meditaba cons- Viuda y sin hijos, libre de todo lo que podría atarla al
tantemente sobre la pasión de Nuestro Señor. No sabía mundo, Rita deseaba hacerse religiosa. Pidió ser aceptada
leer ni escribir. Entretanto, “leía” continuamente el más en el monasterio de las monjas agustinas de Casia, donde
magnífico de todos los libros: el Crucifijo. siempre quiso estar. Pero —¡oh decepción!— la superiora
Además de ser especialmente devota de la Virgen, es- le dijo que lamentablemente no podían admitir viudas en
cogió como patronos a la congregación, que era des-
San Juan Bautista, San tinada sólo a vírgenes.
Agustín y San Nicolás ¡Imagínese su desilusión y
de Tolentino. Buscaba Por obediencia, regó tristeza al volver a casa!... Pe-
abstenerse de trave- ro era ella una mujer santa. Y
suras y juegos propios durante un año la en cuanto tal, en lugar de de-
de la edad infantil, jarse abatir o desanimar, de-
como mortificación parra muerta, de la cual cidió seguir con mayor ardor
que antes su vida de oración
para consolar a Jesús
Crucificado. brotaron flores y frutos y penitencia.
El mayor deseo de Acudieron en su auxilio sus
su alma era ser religio- patronos, San Agustín, San
sa. Exactamente en este punto, la Providencia exigió de Juan Bautista y San Nicolás
ella un enorme acto de obediencia, aceptando un estado de Tolentino, obteniendo de la medianera de todas las
de vida opuesto al llamado religioso que sentía en su alma. gracias la realización de un nuevo “imposible” a favor de
Con apenas 12 años de edad, fue obligada por los padres su protegida.
a contraer matrimonio con el novio escogido por ellos, lla- Se cuenta que una noche, estando inmersa en la ora-
mado Pablo Fernando. ción, se le aparecieron estos tres santos y la invitaron a
seguirlos. En éxtasis, ella los acompañó. Cuando volvió en
Sufrimiento en la familia sí, se encontraba dentro del monasterio de las Agustinas...
Pronto el marido se reveló un hombre agresivo, de Había entrado milagrosamente, pues todas las puertas y
mal genio, borrachín y disoluto, que hacía a Rita sufrir ventanas se encontraban cerradas.
tremendamente. Ella, no obstante, no sólo le fue siempre A la mañana siguiente, la madre superiora reconoció
fiel, sino que también soportó todo eso con extrema pa- en ese prodigioso hecho una clara disposición de la Divina
ciencia, durante 18 años, siempre rezando y ofreciendo Voluntad y decidió acoger a Rita como novicia de la con-
gregación.
esta especie de martirio por la conversión de los pecado-
res, sobre todo por la de su detestable marido.
Y una vez más lo “imposible” se realizó. Al final, tuvo Obediencia recompensada por el milagro
ella la alegría de ver al esposo convertido y pidiéndole Revestida ya del hábito, la nueva religiosa fue un
perdón por todos los malos tratos y por la vida licenciosa ejemplo para todas sus hermanas de vocación.
que había llevado. ¡Cuán oportuna fue esa conversión! De los tres votos de religión, aquel en el que más se
Poco tiempo después de reconciliarse con Dios, me- esmeraba era en el de la obediencia, haciendo siempre
21
ser verdaderamente partícipe de los dolores de Jesús
coronado de espinas.
22
¡HASTA LA MUERTE, SI FUESE NECESARIO!
La Fe mueve montañas, dice el Salvador, y llega a
vencer con heroísmo, el propio instinto de conserva-
ción. Conozcamos en este artículo uno de los más be-
llos aspectos de la historia de la Iglesia. Pedro
Morazzani Arráiz
R
oma, sedienta y de- espectadores aguardaban impacientes
senfrenada, acudía el momento en que los cristianos se-
una vez más a em- rían lanzados a las fieras.
briagarse con la san- Súbitamente, la multitud enmude-
gre de los mártires. ció, y durante algunos instantes, reinó
El Coliseo, la majestuosa mole de un silencio impresionante: un hombre
piedra construida por Vespasiano, había sido introducido en la arena y
abría sus pórticos para la turba que avanzaba lenta y gravemente hacia su
subía precipitadamente por las largas punto más central. Ruinas del Coliseo romano, cuyas
escalinatas y se apretujaba en las gra- Repentinamente, entretanto, arenas se embebieron de la sangre
de incontables mártires de Cristo
derías de mármol. Casi cincuenta mil resonó en el majestuoso recinto un
Mario Shinoda
23
una efusión de entusiasmo y vene-
ración. Mártir significa, en griego,
testigo. “El martirio es el supremo tes-
timonio prestado a la verdad de la Fe;
designa un testimonio que va hasta la
muerte” (CIC, 2473).
“Vos seréis mis testigos hasta los
confines de la tierra” (Hch 1, 8), ha-
bía dicho el Maestro a sus discípulos.
Y estos proclamaron, cuando fueron
llamados a juicio por el Sanedrín, a
causa de Cristo: “¡Nosotros somos
testigos”! (Hch 5,32).
Este testimonio llevado hasta las
últimas consecuencias, encendió en
los primeros siglos de la Iglesia un
entusiasmo hasta entonces desco-
nocido, e hizo que incontable nú-
mero de católico, como San Antonio
María Claret, exclamase: “¡Ojalá yo
pudiese, con la sangre de mis venas,
Fotos: Sergio Hollmann
24
Agustín exclamar admirado: sibilidad ya anunciada en la Revelación,
“¡Oh bienaventurados márti- no puede excluir esta perspectiva del ho-
res! ¡Oh soldados fortísimos! rizonte de su propia vida. Estos dos mil
¿Con qué elogios explicaré la años transcurridos desde el nacimiento
fortaleza de vuestros cuerpos? de Cristo están marcados por el persis-
Es únicamente gracias tente testimonio de los mártires (...) A la
al Espíritu de Fortaleza admiración por su martirio asóciese, en
prometido por el Salvador el corazón de los fieles, el deseo de poder,
(cfr. Jn 15, 26-27) que una con la gracia de Dios, seguir su ejemplo
indefensa doncella como caso lo exijan las circunstancias” . (8)
Santa Inés o un niño inocen-
te como San Tarcisio fueron * * *
“fuertes en la guerra” (Hb “¡Ten confianza, Yo he vencido al
11, 34) y manifestaron una mundo!” (Jn 16, 33) proclamó el Re-
tan gran intrepidez que es- dentor a sus discípulos la víspera de su
pantó incluso a los propios Pasión. Esta divina proclama resonará
perseguidores de la Fe. siempre viva a través de los siglos como
el cántico de victoria de la Santa Iglesia
La gloria Católica, Cuerpo Místico de Cristo. La
Iglesia, pura e inmaculada, no cesa de
¡Recompensa “demasia-
extender el Reino de Dios, creciendo
damente grande” (Gn 15, 1)
Martirio de San Andrés Apóstol siempre en santidad y gloria, a pesar
la que reciben estos héroes
de todas las tormentas y persecuciones
de la Fe! Explica el P. Lum-
Delante de Pilatos, Jesús había que Satanás pueda levantar contra ella.
breras que “el martirio confiere la
respondido: “Vine al mundo para dar Y nosotros católicos del siglo XXI,
gracia santificante, apaga los pecados
testimonio de la Verdad” (Jn 18, 37); y participamos del carácter invencible
y perdona la pena —incluso la tem-
“obediente al Padre hasta la muerte” de la Iglesia en la medida en que sea-
poral— a estos debida; el mártir sube
(Fil 2, 8), el Hijo Unigénito llevó su mos miembros vivos de ella, unidos a
directamente al Cielo, sin pasar por el
testimonio hasta el derramamiento, la Roca inconmovible contra la cual el
Purgatorio (...). Recibe, finalmente,
en lo alto del Calvario, de la última infierno nunca prevalecerá. Es por la
un premio accidental (...) la aureola
gota de su sangre divina. mediación de la Virgen Santísima, la
de los mártires”. (7)
Considerando que la propia vida Reina de los mártires, que estamos se-
Por eso, canta la Iglesia en el Te
es el bien más preciado del hombre, guros de recibir la fortaleza del Espíritu
Deum: “El ejército de los mártires
Santo Tomás concluye que “el martirio Santo que “ayuda a nuestra debilidad”
canta vuestras alabanzas”. Sí, es el
es, entre los actos humanos, el más per- (Rom 8, 26) para llevar nuestro testi-
fecto en su género, como señal de mayor ejército invencible de aquellos que monio de Fe hasta la muerte si fuese
caridad, pues según San Juan (15, 13) “lavaron sus vestidos y los tornaron necesario. N
no hay mayor amor que dar la vida por blancos en la sangre del Cordero” (Ap
sus amigos”. (4) 7, 14); son los escogidos por Jesús
para luchar y vencer con Él (cfr. Ap 1) J. M. Gil, Epistolario Claretiano, I.
Acto de fortaleza 17, 14) y que después, por los siglos 2) Cfr. Suma Teológica, 2-2,q 124, a2,
de los siglos, estarán junto al trono ad2
¡Qué espanto para los incrédulos, de Dios, cobijados por su tabernácu- 3) Introd. q 124, in Suma Teológica,
contemplar a lo largo de la Historia lo (cfr. Ap 7, 15). vol. IX, BAC.
este interminable ejército de cató- 4) Suma Teológica, 2-2,q 124, a3,c
licos que caminan para el martirio 5) Suma Teológica, 2-2, q.124 a2,c
El martirio hoy y siempre 6) Ep. 8 ML: 4, 252
como quien va a un banquete, y
En reciente documento, el Santo 7) Suma Teológica, vol IX, apéndice al
“enfrentan la muerte en un acto de
Padre proclamó la perenne actualidad tratado de la fortaleza, 3. BAC
fortaleza”! (CIC, 2473). 8) Incarnationis mysterium, 13.
Esta virtud heroica de la forta- del testimonio de Fe llevado hasta las
leza que, por amor a Dios, lleva al últimas consecuencias:
cristiano a enfrentar la muerte con “El fiel que haya considerado seria-
el desdén y la altanería de quien mente su vocación cristiana, dentro de
tiene la certeza del Cielo, hizo a San la cual el martirio aparece como una po-
25
HERALDOS EN EL
Santiago de
Chile —
Celebración
presidida por
el Card. Juan
Francisco Freno
en la Iglesia de la
Sagrada Familia,
EL PAPA PRESIDE LA CON
en Lo Barnechea Por segunda vez consecutiva, un numeroso grupo
nidad de Corpus Christi en Roma. Tradicionalmen
caristía en San Juan de Letrán y culmina con una
Santo Padre celebra la Santa Misa y conduce el San
Coselheiro
Lafaiete — En
esta ciudad
brasileña, la
procesión partió
de la Parroquia
de la Virgen de
la Concepción
y terminó en la
Casa de los Heraldos del Evangelio, en donde
hubo una solemne bendición y entronización del
Santísimo Sacramento
Arriba: Pro
(São Paul
26 Mo
L MUNDO
Recife (Brasil)—
ado y bendito”
Los Heraldos
hicieron la
guardia de honor
del Santísimo
Sacramento durante
la procesión
presidida por Mons.
José Cardoso
Sobrinho
túan, los Heraldos colaboraron
moraciones de la fiesta de Corpus
seo del Santo Padre, “Cristo, Salvador (Brasil) — El
Cardenal Geraldo Majella,
orificado y bendecido” Primado de Brasil, recibió los
saludos de los Heraldos del
Evangelio después de la Misa
en la Catedral
Bajo el sol de
Andalucía — En Baeza,
España, la solemne
Misa de hábeas Christi
fue celebrada por el
Obispo Diocesano, Mons.
Santiago García Aracil.
Los Heraldos animaron
la Eucaristía e hicieron
guardia de honor al
Santísimo durante la
procesión
NMEMORACIÓN EN ROMA
o de Heraldos del Evangelio participó de la solem- República Dominicana
— Haciendo parte del
nte, el acto comienza con la celebración del a Eu-
comité organizador de la
a procesión hasta Santa María la Mayor. El propio Arquidiócesis, los Heraldos
ntísimo Sacramento entre las dos basílicas. del Evangelio de Santo
Domingo, prepararon la
celebración. La procesión
terminó en un estadio
repleto de fieles
28
MISA EN SANTA MARÍA LA MAYOR
En la mañana del día de la solemnidad del
Cuerpo y la Sangre del Señor, los Heraldos parti-
ciparon de una solemne Misa en acción de gracias
por la concesión de la Iglesia de San Benedetto in
Piscinula. Fue celebrada en la capilla de la Vir-
gen Protectora de los Romanos, en la Basílica de
Santa María la Mayor, por Mons. Adriano Pacca-
nelli, ceremoniario de este histórico templo
Honrados por
la visita de Su
Eminencia, los
Heraldos lo
acogieron con
demostraciones
de cariño y viva
alegría
29
CARTA DE LA SANTA SEDE
En respuesta a la filial misiva de felicitaciones de aniver-
sario, enviada al Papa Juan Pablo II por el Presidente Gene-
ral de los Heraldos del Evangelio, recibió éste la siguiente
carta del Secretario de Estado:
“El Santo Padre recibió con complacencia el fervoroso
mensaje que, en nombre de esa Asociación, Ud. Le envió por
ocasión de su aniversario.
“Su Santidad agradece cordialmente su delicado recuerdo,
ruega a Dios copiosos dones de paz y prosperidad para Ud. y
par todos cuantos se unen a este amable gesto, y envía de cora-
zón la implorada Bendición Apostólica, en señal de todos sus
buenos deseos.”
Facsímil de la carta Facsímil de la carta de
de los Heraldos la Santa Sede
SANTÍSIMO SACRAMENTO EN
LAS CASAS DE LOS HERALDOS
En carta fechada el 12 de mayo,
el Cardenal Nicolás de Jesús López
Rodríguez, Arzobispo Primado de las
Américas, autoriza a “celebrar la Eu-
caristía y reservar el Sacramento”, en la
capilla de los Heraldos del Evangelio
de República Dominicana. Igual be-
neficio fue concedido por el Cardenal
Norberto Ribera Carrera, Arzobispo
Primado de México, a los Heraldos de
su Diócesis.
También en Brasil, Mons. Silvestre
Scandian SVD, arzobispo de Vitória,
y Mons. Bonifacio Piccinini SDB, ar-
zobispo de Cuiabá, celebraron la Eu-
caristía en la capilla de los Heraldos
en esas ciudades y dejaron instalado
el Santísimo Sacramento. La carta del Cardenal Norberto
Carrera, Arzobispo Primado de México,
El Cardenal autorizando la reserva del Santísimo
Nicolás
Rodríguez por
ocasión de la
gira del Coro
y Orquesta de
los Heraldos
por República
Dominicana
La autorización
concedida por el Cardenal
La entronización del Santísimo
de Santo Domingo
Sacramento en las casas de los
30 Heraldos en Vitória (arriba), y en
Cuiabá, (izquierda), ambas de Brasil
GUATEMALA
Alegría y fervor fueron las
notas predominantes del 1º
Congreso del Oratorio realizado
en ese país el 18 y 19 de mayo.
En el primer día hubo varias ex-
posiciones sobre María, Madre
de la Nueva Evangelización.
En el segundo más de 400
oratorios entraron en cortejo a
la Catedral Metroplitana, para
una celebración Eucarística pre- El evento culminó con una brillan-
sidida por Mons. Guillermo Flo- te procesión hasta la Iglesia de Santo
res, capellán de los Heraldos. Domingo.
31
PEREGRINACIÓN A
CARTAGENA DE INDIAS
Durante tres días una multitud
de personas acompañó la imagen
Peregrina del Inmaculado Corazón
en esta ancestral ciudad colombia-
na. El acto principal fue una Euca-
ristía celebrada en el Santuario de
Fátima por el obispo de la ciudad,
Monseñor Hugo Puccini Banfi.
HONDURAS
PARAGUAY
Los Heraldos del Evangelio llevaron la imagen pere-
grina del Inmaculado Corazón a la ciudad de Luque.
32
1
33
La Salutación Angélica
en los mares de Sicilia
Arrebató imaginaciones con sus romances de capa y espada,
pero fue arrebatado, a su vez, por la belleza de una oración al
poner el sol...
Guy de Ridder
A
lejandro Dumas, literato francés del adquiere una santidad infinita. La misteriosa inmensi-
siglo XIX, no tuvo una vida carac- dad del aire envolvente y de las olas, ese sentimiento
terizada por la piedad. Entretanto, profundo de la debilidad humana comparada con el
ejercitando los dones de discerni- poder omnipotente de Dios, esa oscuridad que avanza,
miento que Dios le dio, consiguió y durante la cual el peligro, siempre presente, crece aún
captar y describir de modo cautivante más, todo esto predispone el corazón a una melancolía
situaciones y hechos —reales o imaginarios— con una religiosa, a una confianza santa que eleva el alma en las
vivacidad y un realismo dignos de nota. alas de la Fe. Esa tarde, sobretodo, el peligro de cual
De él conocemos sobretodo la obra que más con- habíamos acabado de escapar, y que nos era recordado
tribuyó a volverlo célebre: Los Tres Mosqueteros. Pero de tiempo en tiempo por una ola encrespada o mugidos
también compuso muchas otras obras igualmente agra- lejanos. Todo inspiraba a la tripulación y a nosotros mis-
dables y atrayentes. Entre ellas, Le Speronare, nombre mos un profundo recogimiento.
de la embarcación que lo llevó a las iluminadas costas En el momento en que nos juntábamos en la cubierta,
de Sicilia. la noche comenzaba a tornarse más espesa en el oriente;
Ofrecemos al lector un trecho seleccionado de esta las montañas de Calabria y la punta del cabo de Pelora
obra, en que, con maestría y gran sensibilidad, él consi- perdían su bello color azul para confundirse en un tinte
guió poner en palabras los imponderables maravillosos ceniza que parecía descender del cielo, como si estuviese
de la oración del Angelus, en aquellos parajes de la costa cayendo una fina lluvia de cenizas. En cuanto en Occi-
italiana. dente, un poco a la derecha del archipiélago de Lipari,
Alejandro Dumas se encontraba a bordo de la referi- cuyas islas de formas extravagantes se destacaban con
da embarcación, en las inmediaciones de Messina, cuan- vigor sobre un horizonte de fuego, el sol alargado y
do presenció la escena que describimos a seguir. listado de largas fajas violetas comenzaba a embeber la
orla de su disco en el Mar Tirreno, que, centelleante y en
* * *
movimiento, parecía rodar olas de oro derretido.
—El Ave María —dijo el capitán en alta voz. En ese momento, el piloto se levantó, tomó en sus
A estas palabras, cada cual salió de la escotilla a la brazos al hijo del capitán, que se puso de rodillas sobre
cubierta. el techo de la cabina; y, abandonando el timón como si la
De un extremo a otro de Italia, esa oración, recitada embarcación estuviese siendo suficientemente dirigida
a una hora solemne, encierra el día y abre la noche. [En por la oración, sustentó al niño para que el balanceo no
Italia, el Angelus no es rezado necesariamente en hora le hiciese perder el equilibrio.
fija, a las 18:00 horas, sino al anochecer.] Ese momento Ese grupo singular se destacó pronto sobre un fondo
del crepúsculo, en todo lugar lleno de poesía, en el mar dorado, semejante a una pintura célebre; y con una voz
34
tan débil, que apenas llegaba hasta nosotros, y que, en- que la realizan. Para un lector de viajes o un amante de
tretanto, subía hasta Dios, comenzó el niño a recitar la las cosas del mar, no será sino un niño que reza, hombres
oración virginal que los marineros escuchaban de rodi- que responden y un navío que fluctúa.
llas y nosotros inclinados. Pero, para cualquier persona que hubiese asistido a
He aquí uno de esos recuerdos para el que el pincel es una escena parecida, será uno de los más magníficos es-
fácil y la pluma insuficiente. Esta es una de esas escenas pectáculos que ella haya visto, uno de los más magníficos
que ninguna narración puede describir, porque su gran- recuerdos que él haya conservado; será la flaqueza que
deza está entera en el sentimiento íntimo de los actores reza, la inmensidad que observa, y Dios que escucha. N
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UNA VISITA
AL INFIERNO
E
l domingo, 3 de ma-
yo de 1869, fiesta
del Patrocinio de
San José, Don Bos-
co retomó la narra-
ción de sus últimos
sueños. He aquí como relató su
“visita al Infierno”: “Don Bosco es el santo que siempre sonríe, y
—Debo contarles otro, que pue-
de ser tomado como consecuencia
sonríe a todos. El santo de la comprensión” – afir-
de los narrados los Jueves y los ma el P. Rodolfo Fierro, S.D.B., en la Introducción
Viernes en la noche, los cuales
me dejaron tan cansado, que di- General de la obra “Biografía y Escritos de San
fícilmente podía mantenerme de
pie. Vos los llamaréis de sueños, Juan Bosco”. El afable Don Bosco juzgó que era
o les daréis otro nombre... como
quisiereis.
provechoso, para la formación de sus jóvenes
Ya os hablé de un sapo deforme alumnos, la narración del sueño que transcribire-
que en la noche del 17 de abril
amenazaba engullirme, y cómo, mos a seguir.
al desaparecer, oí una voz que me
dijo:
—¿Por qué no hablas? brados, apoyé la almohada en los —¿Adónde quieres llevarme?
Me volví hacia el lugar de don- hierros de la cama, de modo que —Ven y verás.
de provenía la voz y vi junto a mi permaneciera sentado. Entre-
lecho un distinguido personaje. Y tanto, estando muy cansado, se
le pregunté: apoderó de mí el sueño sin darme San Juan Bosco
—¿Y qué deberé decir a los mu- cuenta. Súbitamente vi en el cuar-
chachos? to, junto a mi cama, el hombre de
fue llevado por
—Lo que has visto y oído en los
últimos sueños. Además de esto,
la noche anterior, que me dijo:
—¡Levántate y ven conmigo!
un guía a través de
lo que deseabas saber y que te será
revelado la próxima noche.
—Te ruego por favor —respon- una inmensa planicie
dí— déjame tranquilo, pues estoy
Y desapareció.
muy cansado. Mira, ¡hace varios desierta, delante
Al día siguiente estuve pensan-
do en la mala noche que habría
días que el dolor de dientes no me
deja en paz! Déjame descansar.
de un escenario
de pasar. Y, llegada la hora, no
me decidía a acostarme. Quedé
He tenido sueños espantosos. Es- desolador
leyendo, sentado a la mesa, hasta toy extenuado.
Decía esto también porque la
media noche. Me horrorizaba la Era un hermoso camino,
idea de tener que presenciar nue- aparición de este hombre es siem-
pre señal de gran agitación, de amplio, espacioso y bien
vamente espectáculos terribles. Al
final, me hice una gran violencia y cansancio y de terror. pavimentado
me acosté. —¡Levántate! ¡No hay tiempo Me condujo a un lugar donde
Para no dormir de inmediato, que perder!— me respondió. se extendía una inmensa planicie.
por temor de que la imaginación Me levanté y lo seguí. En el ca- Miré alrededor, sin ver en parte
me llevase a los sueños acostum- mino le pregunté. alguna sus confines. ¡Era un ver-
36
cendiendo, y, aunque el descenso
no pareciese muy pronunciado,
corría con tal velocidad que pa-
recía que estaba siendo llevado
por el viento. Más aún: tan rápida
era nuestra carrera que cuando
me di cuenta estaba avanzando
sin mover los pies. Considerando
que volver atrás por un camino tan
largo me costaría un gran trabajo y
fatiga, dije a mi amigo:
—¿Y cómo haremos para volver
al Oratorio?
—No te preocupes. El Señor es
omnipotente y quiere que vayas.
Éste que te guía y que te enseña a
ir adelante, sabrá también condu-
cirte de vuelta— me respondió.
Un camino
con muchas trampas
El camino descendía siempre.
Seguíamos nuestro viaje entre flo-
Christus Rex Inc.
37
ron celadas” (Ps 139). Aproxímate —Tomé uno de aquellos hilos, “Soberbia, desobediencia, pereza,
un poco más— me respondió. lo tiré hacia mí, y descubrí que sexto mandamiento, robo, gula,
Me aproximé y vi que los niños su punta extrema no aparecía. envidia, ira”, etc.
pasaban en medio de muchas tram- Tiré un poco más, pero no pude Hecho esto, me aparté un poco
pas, algunas colocadas en el suelo, ver donde terminaba, y percibí para observar cuál de aquellas
otras a la altura de la cabeza. Es- que también a mí me arrastraba. trampas cogía mayor número de
tas últimas no eran percibidas. Por Seguí entonces la dirección del jóvenes. Eran las de la deshones-
consiguiente, muchos jóvenes, en hilo y llegué a la boca de una tidad, desobediencia, robo y so-
cuanto caminaban sin darse cuen- espantosa caverna. Me detuve, berbia. Las tres primeras estaban
ta del peligro, eran cogidos por las porque no quería entrar. Tiré de amarradas a ésta última. Vi mu-
trampas. En el momento en que nuevo el hilo y me di cuenta que chas otras trampas que causaban
algo en él cedía. Sin embargo, era gran estrago, pero no tanto como
eran atrapados, daban un salto,
necesario hacer más fuerza. Y he éstas. Continué a observar, y vi
después caían con las piernas
aquí que, después de mucho tirar, muchos muchachos que corrían
para arriba, y, levantándose, em-
poco a poco, vino a salir afuera un más inconteniblemente que otros
prendían irrefrenable carrera en
monstruo feo, grande y asqueroso, y pregunté:
dirección al abismo. Eran tomados
el cual mantenía con fuerza las —¿Por qué esta velocidad?
por la cabeza, por las manos, por puntas de todas aquellas trampas. —Porque ellos son arrastrados
la cintura, por un brazo, por una Era este que tiraba inmediatamen- por los lazos del respeto humano.
pierna, por el cuello y arrastrados Mirando con mayor atención,
inmediatamente. vi que entre esas trampas había,
Las trampas extendidas por tie-
rra, casi imperceptibles, parecían
Las trampas que esparcidos de uno y otro lado,
muchos cuchillos que servían para
ser de estopa. Eran semejantes a cogían a más cortarlas, puestos allí por una ma-
hilos de araña y parecía que no no providencial. El mayor de ellos
podían hacer mucho mal. Sin em- jóvenes eran las de representaba la meditación, y era
bargo, vi también que los jóvenes
cogidos por esas trampas caían
la deshonestidad, el arma contra la trampa de la so-
berbia. Otro muy grande también,
todos por tierra. desobediencia, robo pero un poco menor que el prime-
ro, simbolizaba la lectura espiritual
Respeto humano y soberbia; otros eran bien hecha.
detrás del cual está un feo y arrastrados por el Además de esto, había dos espa-
asqueroso monstruo das. Una de ellas era la devoción
Yo estaba espantado. Y el guía respeto humano al Santísimo Sacramento; la otra la
devoción a la Virgen María. Había
me dijo:
también un martillo: la confesión.
—¿Sabes qué es esto?
te hacia sí a todo aquel que caía en Había otros cuchillos, símbolo de
—Es solamente un poco de es-
aquella red. varias devociones: a San José, a
topa —respondí.
—Es inútil —dije para mí mis- San Luis Gonzaga, etc.
—Menos aún: esto no es nada.
No es más que el respeto humano. mo— enfrentar la fuerza de este Con esas armas, muchos mucha-
Viendo entretanto, que muchos monstruo feo, porque no lo ven- chos destruían las trampas cuando
continuaban enredándose en esos ceré; mejor es combatirlo con la eran agarrados, o se defendían pa-
hilos, pregunté: señal de la cruz y jaculatorias. ra no caer en ellas.
—¿Pero por qué tantos se dejan Me di vuelta hacia atrás, hacia En efecto, vi diversos jóvenes
amarrar por esos hilos? ¿Quién los mi guía, y él me dijo: que caminaban entre ellas pero
arrastra de ese modo? —¿Sabes ahora quién es? que nunca eran atrapados. O pasa-
—Aproxímate más, mira y ve- —¡Oh, sí! Ya sé, es el demonio ban antes de que cayese la trampa,
rás. que extiende esas trampas para o sabían desviarse de ella cuando
—Nada veo —le dije después hacer que mis jóvenes caigan en el caía, de modo que no fueran apri-
de haber observado durante un Infierno. sionados.
minuto. Observé con atención muchas Cuando el guía se dio cuenta
—Mira un poco mejor —res- de esas trampas y vi que cada una de que ya había observado todo,
pondió. llevaba escrito su propio título: me hizo continuar por el camino
38
bordeado de rosas, las cuales iban carpado y lleno de espinas y afila- ma y cerrada. Llegamos al fondo
siendo menos numerosas a medida das piedras... del precipicio
que avanzábamos, y comenzaban a Miraba después el camino que
aparecer largas espinas. aún tenía que recorrer, y cerraba El lugar “donde no hay
Llegamos a una altura en que, los ojos, espantado. Por fin, excla- redención”
por más que yo mirase, no encon- mé:
Alrededor de aquellas murallas
traba ninguna rosa más. El rosal se —¡Por favor, volvamos atrás!
surcadas por llamas sanguinolen-
había transformado en espinal sin Si seguimos adelante, ¿cómo ha-
tas se sentía un calor sofocante y
hojas quemado por el sol. Además remos para regresar al Oratorio?
se elevaba un espeso humo ver-
del ramaje retorcido y seco, salían Para mí será imposible subir esa
doso.
bejucos que serpenteaban en el rampa.
Levanté los ojos para ver la
suelo, llenándolo tanto de espinas El guía me respondió resoluta-
altura de aquellas paredes. Eran
que sólo con gran dificultad se po- mente:
más altas que una montaña. Pre-
día andar. —¿Ahora que llegamos a este
gunté al guía:
Habíamos llegado a una de- punto quieres quedar sólo?
—¿Dónde estamos? ¿Qué es
presión del terreno, de donde no —¿Sin ti cómo podré volver
esto?
podíamos ver las regiones vecinas. atrás o seguir adelante? —excla-
—Lee lo que está escrito en
El camino continuaba siempre en
aquella puerta. Por la inscripción,
declive, cada vez más horrible,
sabrás dónde estamos.
sin pavimento, lleno de huecos y
Miré y vi escrito en la puerta:
piedras. Perdí de vista a todos mis Lee lo que está escrito “Aquí no hay redención”. Me di
muchachos, muchos de los cuales
habían salido de aquel camino in- en aquella puerta. Por cuenta, entonces de que estába-
mos en la puerta del Infierno.
sidioso y tomado otro rumbo.
la inscripción, sabrás El guía me llevó a dar una
vuelta por las murallas de aquella
Un camino cada vez dónde estamos. horrible ciudad. A intervalos regu-
más espantoso lares, se veía una puerta de bronce
Continué caminando.
Miré y vi escrito en la como la primera, a los pies de una
Cuanto más avanzaba, más ás- puerta: “Aquí no hay lúgubre rampa, cada cual con una
inscripción diferente de las ante-
pero y acentuado era el descenso,
de tal manera que a veces rodaba redención”. Me di riores.
y caía por tierra, donde permane- Apartaos de Mí, malditos, para el
cía hasta recobrar las fuerzas... De cuenta, entonces de fuego eterno, que está preparado pa-
vez en cuando, el guía me ampa-
raba y ayudaba a levantarme. Me
que estábamos en la ra el demonio y sus ángeles caídos...
Todo árbol que no da buen fruto
parecía que a cada nuevo paso se puerta del Infierno. será cortado y lanzado al fuego.
iban a descoyuntar mis huesos. Cogí el lápiz para copiar aque-
Con voz entrecortada de cansan- llas inscripciones. El guía me dijo:
cio, dije a mi guía: —¿Qué haces?
—Vea amigo mío, mis piernas mé en tono dolorido, ante esa —Tomo nota de esas inscrip-
no pueden sustentarme más. Es- amenaza. ciones.
toy tan maltratado que me es im- —Pues bien, sígueme —acre- —No es necesario. Todas están
posible continuar el viaje. centó él. en las Sagradas Escrituras. Más
El guía no me respondió. Me Me levanté y continuamos ba- aún, tú mandaste colocar algunas
jando. El camino se volvía cada de ellas en los portales de tu Ora-
dio por señales un poco de ánimo
vez más espantoso e intransitable, torio.
y prosiguió su camino. Viéndome
de modo que mal conseguía man- (Continúa en el próximo número)
lleno de sudor y muerto de can-
tenerme en pie.
sancio, me condujo a un mirador
Entonces, en el fondo de ese
que había al lado del camino. Me
precipicio, que terminaba en un
senté, respiré profundamente y valle oscuro, surgió un inmenso
parece que descansé un poco. edificio que ostentaba delante de
Mientras tanto, miraba hacia atrás nuestro camino una puerta altísi-
y veía el camino ya recorrido: Es-
39
La Virgen de la Confianza
C
nasterio de la ciudad de Todi, Sor Clara fue privilegiada
“¨¡
onfianza! ¡Confianza! ¡Yo vencí al por Dios con gracias místicas, entre las cuales la de reci-
mundo!” (Jn 16, 33) bir en sus miembros los estigmas de la Pasión.
Cuando la palabra confianza era Nutriendo una devoción muy particular a la Madre
pronunciada por Nuestro Señor Je- de Dios, llevaba siempre consigo un milagroso cuadro
sucristo, “se operaba en los corazones que la representa con el Niño Jesús en los brazos. A esa
una profunda y maravillosa transfor- pintura se atribuían gracias y curas numerosas, y ya en el
mación”, dice un sabio escritor. “La aridez de sus almas S. XVIII comenzaron a circular por Italia copias, dando
era humedecida por un rocío celestial, las tinieblas de sus origen a la devoción de la Santísima Virgen bajo el título
espíritus se transformaban en luz, la angustia era sustituida de Madre de la Confianza.
por una calma serenidad.” Una de las copias acabó por tornarse más célebre que
El mismo convite hecho otrora por Nuestro Señor, es el propio original. Fue ella llevada al Seminario Mayor
repetido hoy a nosotros. ¡Confianza! de Roma —el principal del mundo, por ser el seminario
¡Cómo esa virtud es necesaria en los días de hoy! del Papa—, donde se convirtió en la Patrona. Todos los
¡Cómo se equivocan las almas que, sintiendo sus defi- años es venerada por el propio Pontífice, quien va a visi-
ciencias y miserias, no osan aproximarse del Divino Sal- tarla en la fiesta de la “Virgen de la Confianza”, el 24 de
vador, con recelo de que un Dios tan puro y excelso no se febrero.
inclinaría hacia ellas, no perdonaría sus faltas! Desde el inicio, la Virgen mostró a los seminaristas
Dios es Misericordia, y desde que deseemos sinceramen- que, si recurriesen a Ella bajo la invocación de Nuestra
te convertirnos, Él tendrá pena de nuestra miseria y se dig- Señora de la Confianza, podían contar con su auxilio en
nará salvarnos y colocarnos junto a su Sagrado Corazón. toda circunstancia por más difícil que fuese.
Más aún: para que experimentásemos de un modo más En ese sentido, entre los hechos prodigiosos más in-
elocuente la bondad en términos humanos, creó el cariño signes se cuentan las dos veces (1837 y 1867) en que una
materno. De lo alto de la Cruz, cuando entregaba su alma epidemia de cólera alcanzó la Ciudad Eterna, y en las
al Padre, nos dio a su propia Madre para que fuese también que el Seminario Romano se vio milagrosamente libre
la nuestra: “Mujer, he aquí a tu hijo. (...) Hijo, he aquí a tu por la poderosa intercesión de su Patrona. También, du-
Madre” (Jn 19, 26-27). Como explica la Iglesia desde sus rante la Primera Guerra Mundial, cerca de cien semina-
primeros siglos, en San Juan estaba representada toda la ristas fueron enviados al frente de batalla, y se colocaron
humanidad. bajo la especial protección de la “Madonna”. Todos re-
Ese don inenarrable de ser, también, hijos de la Ma- gresaron vivos, lo que atribuyeron a la Santísima Virgen.
dre del Cielo, nos facilita igualmente la práctica de la En agradecimiento, entronizaron el venerable cuadro en
virtud de la confianza. una nueva capilla de mármol y plata.
40
Imagen de la Viregn de la Confianza,
venerada en la capilla del Pontificio Seminario Romano
Cuando allí fue colocado, venía acompañado de un La devoción a la “Madonna della Fiducia” se muestra
antiguo pergamino, que aún se conserva, y que trae estas particularmente benéfica cuando se reza la jaculatoria
consoladoras palabras de Sor Clara Isabel: “La divina “¡Madre mía, confianza mía!”
Señora se dignó concederme que toda alma que con con- Muchos son aquellos que se fortalecen en la con-
fianza se presente delante de este cuadro, experimentará fianza, o la recuperan, apenas por contemplar esa bella
una verdadera contrición de sus pecados, con verdadero pintura, sintiéndose inundados por la mirada materna,
dolor y arrepentimiento, y obtendrá de su Divinísimo Hijo serena, cariñosa y alentadora de la Reina del Cielo.
el perdón general de todos sus pecados. Además esa mi di- Y el Divino Niño, también observando al fiel, apunta
vina Señora, con amor de verdadera Madre, condescendió su índice a la Santísima Virgen, como diciendo: “Coló-
en asegurarme que a toda alma que contemple esta imagen, quese bajo su protección, recurra a Ella, sea enteramen-
concederá una particular ternura y devoción hacia Ella.” te de Ella, y Ud. conseguirá llegar hasta Mí”. ²
41
HISTORIA PARA NIÑOS... O PARA ADULTOS LLENOS DE FE
El Amigo Fiel
¿Los cuentos, cuentos son? No siempre. A veces, Michelle Viccola
A
sí como lo dul- afinidades profundas por don- “mil y una noches” nos relata la
ce del compri- de las personas se entienden y historia de una verdadera amis-
mido ayuda al se aprecian. tad. Tesoro que todos buscan, y
niño a tomar Algo en nuestro interior pide que raros encuentran.
el remedio, la esa relación de armonía y bien- Amir y Farid eran dos ricos
belleza de una querencia. Apetencia que pro- mercaderes, grandes amigos,
historia —real o ficticia— pue- viene, en último análisis, de una que siempre viajaban juntos pa-
de facilitar la aceptación de añoranza y una esperanza. Año- ra vender sus mercancías.
verdades difíciles de ser asimi- En uno de esos viajes, al
ladas. pasar cerca de un río caudalo-
En nuestra época, más que la Los actos de bondad, de so, Farid resolvió bañarse. En
inseguridad o las privaciones de dado momento, distrayéndose,
orden material, otro mal asola amor y abnegación fue arrastrado por la corriente.
a las multitudes: el aislamiento. Amir, viendo que su gran amigo
Es una paradoja que nunca deben ser grabados en la corría riesgo de vida se lanzó al
los hombres vivieron tan cerca-
dos por sus semejantes, y nunca roca, para que otros agua y, con mucho esfuerzo
consiguió salvarlo. Farid, lla-
cada cual se sintió tan solo.
¿Por qué? quieran imitarlos mando a uno de sus esclavos,
mandó que grabase en una ro-
Todo mundo busca alguien ca que allí existía, la siguiente
que lo comprenda. Tener ami- frase: “Aquí, dando una gran
gos es una necesidad del ser ranza de un paraíso perdido, prueba de amistad, con riesgo
humano. El instinto de socia- que no llegamos a conocer, y es- de su propia vida, Amir salvó a
bilidad, más entrañado en el peranza de una bienaventuranza su amigo Farid”.
hombre que el propio instinto eterna que tanto anhelamos. Al regresar, pasaron por el
de conservación, busca ese Uno de aquellos famosos mismo lugar, donde se detu-
apoyo que surge en función de cuentos de las tierras de las vieron para tomar un corto re-
42
poso. En cuanto conversaban,
comenzaron a discutir y Amir,
alterándose, abofeteó a Farid.
Éste se aproximó a la margen
del río y, con una vara, escribió
en la arena: “Aquí por motivos
fútiles, Amir abofeteó a su ami-
go Farid.”
El esclavo que había sido en-
cargado de escribir en la piedra
el agradecimiento de Farid, le
preguntó:
—Mi señor, cuando fuisteis
salvado de las aguas, mandas-
teis grabar aquel hecho en la
piedra. Y ahora escribís en la
arena el agravio recibido. ¿Por
qué lo hacéis así?
Y Farid le respondió:
—Los actos de bondad, de
amor y abnegación deben ser
grabados en la roca, para que
todos aquellos que los conocie-
ron, busquen imitarlos. Al con-
trario, cuando recibimos una
ofensa, debemos escribirla en
* * *
¡Bella lección!
Si una amistad natural, sin Jesucristo. O el amor al próji- grada Escritura alaba en estos
fundamento religioso, es tan mo tiene esa raíz y llega a esas términos:
conmovedora, cuán más subli- consecuencias, o, para decirlo “Un amigo fiel es una podero-
me se torna ella cuando bañada bien, no existe. sa protección: quien lo encontró,
por las santas aguas del bautis- La verdadera amistad supo- descubrió un tesoro. Nada es
mo. Ahí sí, ella encuentra su ne, por tanto, el amor a Dios y comparable a un amigo fiel; el
justificación y toda su dimen- la renuncia al egoísmo. Cuando oro y la plata no merecen ser
sión sobrenatural. se tiene ese estado de espíritu, puestos en paralelo con la sin-
¿Qué es entonces, la verda- se siente no sólo facilidad en ceridad de su Fe” (Eclo 6, 14-
dera amistad, entendida de una auxiliar a otro, sino incluso 15).N
manera cristiana? alegría en sacrificarse por el
Es el amor al prójimo, vivido prójimo. Busquemos así la re-
en todas sus modalidades y en lación con personas virtuosas,
todas sus consecuencias lógi- y encontraremos la perfecta
cas, por amor a Nuestro Señor amistad: aquella que la Sa-
43
L’Osservatore Romano
SUCEDIÓ EN LA IGLESIA Y EN EL MUNDO
44
papel de la Arquitectura en la historia helenística y romana como com- como, por ejemplo, sus asociaciones,
y en la cultura de la humanidad”. ponentes de la cultura europea, lo movimientos y grupos, muchos de los
(Eclesiales) que es cierto. Pero lo que es sor- cuales nacieron con el objetivo de de-
prendente para cualquier europeo dicarse a la evangelización. De hecho,
Práctica de la religión mejora de mediana cultura es que se salte, además del trabajo evangelizador
la relación Madre-Hijos sin más ni menos, de estos dos ele- que estas organizaciones realizan, los
mentos, al S. XVIII, a los filósofos laicos como individuos están en todos
La religión tiene gran influencia
iluministas.” los ambientes de la ciudad y pueden
en la relación Madre-Hijos. Las
“Es triste ver —continúa el Car- hacer una evangelización que incluya
madres que hacen de la religión una
denal— a qué vacíos históricos puede el contacto inter-personal, tan impor-
parte importante de su vida tienen
llevar una mentalidad sectaria. Lo tante en el proceso evangelizador”.
una relación mejor con sus hijos
que el Plenario de la Convención Eu-
adultos. Este resultado sorprendió a
los investigadores de la Universidad
ropea quiere aprobar es una falsedad Cardenal Sodano pide a
de Michigan, EE.UU., que entrevis-
histórica, una ofensa a millones de la OEA que los Estados
europeos que se sienten hijos también promuevan legislaciones a
taron a cada hijo dos veces: a los 18
de una cultura cristiana —y no sola- favor de la familia
y a los 23 años de edad.
mente de la greco-romana—, y una
La investigación valoró una serie “Preocuparse por la estabilidad de
demostración de que ideología, vacía
de factores sobre la calidad de la la institución familiar es un deber del
de trascendencia, quieren construir
relación emocional. Entre ellos, si la Estado”, afirmó el Cardenal Angelo
una Europa que sería irreconocible
opinión de la madre era importante, Sodano, Secretario de Estado de la
si los políticos de los estados miem-
si la madre lo aceptaba y lo com- Santa Sede, en carta a la Asamblea
bros de la Convención aceptaran
prendía, si había libertad para criti- General de la Organización de Es-
tal disparate histórico y cultural.”
car, si hacían alguna cosa juntos. tados Americanos (OEA), reunida
(Eclesiales)
Para confirmar la influencia de del 8 al 10 de junio en Santiago de
la religión, los investigadores con- Chile.
trolaron una variedad de factores
Una nueva prueba de la
Refiriéndose a la familia, el
sociales y demográficos, como autenticidad del Santo
Purpurado acentuó que “cuanto
edad, tamaño de la familia, educa- Sudario más sana sea ella, más sana será la
ción y renta de los padres, relación Uniendo su voz a la de otros sociedad”. Recordó que la OEA
matrimonial. Independiente de autorizados especialistas, Mark defendió siempre la familia “como
esos factores, la religión influye en Guscin, miembro del Equipo de In- célula base de la sociedad y conti-
la calidad de la relación. Y cuanto vestigación del Centro Español de núa creyendo en la importancia de
mayor la participación religiosa, Sindonología, declaró que el Santo la institución familiar, no obstante
mejor la relación. ¡Y cuanto an- Sudario corresponde a la llamada las dificultades que experimenta”. Y
tes comience, mejor! ¡Que en la “imagen de Edesa”, ya conocida acrecentó: “Preocuparse por la esta-
adolescencia, haya oración! (La antes del S. X, siendo imposible, por bilidad de la institución familiar es,
Gaceta) tanto, tratarse de una falsificación por tanto, un deber del Estado, a ser
medieval del S. XIV. (AICA) cumplido también por medio de una
Arzobispo de Barcelona legislación que favorezca la familia y
denuncia “falsedad histórica” El Cardenal Claudio no la penalice”.
En artículo intitulado Qué se pre- Hummes destaca el papel de “La Santa Sede —concluyó el
tende al negar las auténticas raíces de los laicos en la Evangelización Cardenal Sodano— jamás se can-
sará de repetir que no se pueden equi-
Europa, el Cardenal Ricard María En entrevista al semanario “O
parar a la familia, concediéndoles
Carles, Arzobispo de Barcelona, la- São Paulo”, por ocasión de su 5º los mismo derechos, otras formas de
menta que en el Preámbulo del pro- aniversario al frente de la Arquidió- unión que no tienen la sagrada finali-
yecto de Constitución aprobado por cesis de esa ciudad brasileña, el Car- dad y el altísimo encargo de perpetuar
el Plenario de la Convención Euro- denal Claudio Hummes declaró que la especie humana y de educar a los
pea, no se haga ninguna mención al “para la evangelización, además de la hijos, ofreciendo a estos el calor, la
Cristianismo “que impregnó Europa convocatoria a los padres y agentes de protección y las oportunidades mate-
desde hace casi veinte siglos”. pastoral, procuro dar apoyo, fuerzas y riales y espirituales que necesitan para
“El Preámbulo —explica— se crédito a los laicos, en especial a las crecer, a los cuales tiene derecho.”
refiere explícitamente a la cultura organizaciones del laicado católico (Eclesiales)²
45
Nunca se oyó decir
P
ara María no existen palabras como
“difícil”, “imposible”, “irrealizable”,
“irremediable”. Ella es llamada la
Celso Pedrosa
Omnipotencia Suplicante, pues su
Divino Hijo nunca deja de atender
ninguno de sus pedidos.
El propio Judas Iscariote, el infame traidor, si hubiese vuestra protección, implorado vuestra asistencia y recla-
recurrido a Ella, seguramente habría alcanzado el per- mado vuestro socorro, haya sido abandonado por Vos.
dón y se habría regenerado. Animado por esta confianza, a Vos acudo, ¡oh Virgen de
La siguiente oración del gran San Bernardo, debería la Vírgenes!, y gimiendo bajo el peso de mis pecados me
estar siempre en nuestros labios y en nuestros corazo- atrevo a comparecer ante vuestra presencia soberana.
nes: No despreciéis mis súplicas, antes bien, eschadlas y aten-
“Acordaos, ¡oh piadosísima Virgen María!, que ja- dedlas benignamente. Así sea.”
más se oyó decir, que ninguno de los que han acudido a ¡Jamás, es realmente jamás, y no admite excepciones!
Si la Virgen nunca dejó de atender, no seré yo el pri-
mero en no ser atendido...
Un expresivo ejemplo al respecto es relatado por Fray
Wenceslao Schepper, OFM, en su libro “Salve Reina,
Madre de Misericordia”. Un joven francés, condenado
a muerte por sus numerosos crímenes, aguardaba con el
corazón lleno de odio a Dios, el día de su ejecución.
Un sacerdote quiso visitarlo, pero el criminal lo
rechazó gritando: ¡Fuera! ¡Fuera! ¡No quiero saber de
padres!
Él, no obstante, permaneció pacientemente en el
lugar hasta conseguir establecer una conversación con
el infeliz condenado. Después de algún tiempo, el mi-
serable le contó su triste historia. Pero al oír hablar de
confesión, se tomó de tal furor que casi agredió al celo-
so ministro de Dios.
Éste lo invitó entonces, a rezar el “Acordaos”.
Sorprendentemente él accedió. La oración pareció
agradarle y prometió rezarla nuevamente. Finalmente,
después de repetidas visitas, el padre consiguió conven-
cerlo de que se confesase.
Con el alma limpia, completamente cambiado, el de-
lincuente lloraba de emoción, dando pruebas de sincero
Carlos Tonelli
arrepentimiento.
Algunos días después, fue ejecutado. Sus últimas
palabras fueron “Acordaos, ¡oh piadosísima Virgen
Imagen Peregrina del Inmaculado Corazón de María, María!...”
teniendo como fondo el litoral de Olinda, Estado de Que este hecho nos ayude a tener una confianza ple-
Pernambuco, norte de Brasil nísima, sin límites, en la Madre de Dios y nuestra. N
46
Carne a la
Mariela Lavarello
Jioletto
E
s la armonía una
de las leyes de la
estética que Dios Ingredientes: la carne se ve como cocida, se le
puso en el Universo. hecha la sal a gusto y se revuelve
800 gramos de posta negra cor-
bien. Luego se agrega la harina,
Ella se establece por tada en trozos / 4 dientes de ajo /
se junta todo bien y enseguida la
afinidades entre seres semejan- 2 cucharadas de harina / 1 taza de
leche, revolviendo constantemen-
leche.
tes, pero a veces también por te, como queda como engrudo se
contrastes de elementos que se Preparación sigue aclarando con agua hervida
hasta formar una salsa bechamel,
complementan. Un cuello largo Se cortan los dientes de ajo en la cual será más líquida o espesa
y delgado como una serpiente pequeños pedacitos, y se sofríen de acuerdo al gusto del comensal.
junto al cuerpo abultado de un en aceite. Luego se agrega la car- se deja a fuego bajo alrededor de
ne cortada en trozos largos y se 5 – 7 minutos, lo suficiente para
pato, resultan en esa maravilla sofríe todo junto, revolviendo pa- que se cocine bien la harina.
llamada cisne. ra que la cocción y el ajo se distri- Servir de inmediato. Se acom-
¿Quién negará que la personali- buyan en forma pareja. Esto suel- paña sobre puré o bien con arroz
dad incisiva de la fresa encuentra ta bastante jugo de carne. Cuando blanco. ²
un sereno complemento en la
crema chantilly?
Quiere Dios que el hombre, res-
Gerardo Álvarez
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GRANADA
religiosa y mística
“ D
ele una limosna mujer, porque no hay
nada peor en esta vida que ser ciego en
Granada.” No se engañó el Rey árabe
al decir estas palabras a su esposa,
cuando un mendigo ciego le pidió lo
socorriese...
Situada en Andalucía, a los pies de la majestuosa Juan Carlos Casté
Sierra Nevada, bañada por los ríos Darro y Genil, que
fertilizan su famosa vega, a unos 700 metros de altitud,
se yergue, altanera, bella y desafiando los siglos, la mítica
ciudad de Granada. Ha sido cantada por poetas y escrito-
res, visitantes y peregrinos, especialmente por los román- sus plazas y plazoletas y, sobretodo, entramos en sus be-
ticos del siglo XIX, los cuales, por así decir, sucumbieron llísimas iglesias, nos deparamos con una realidad mucho
al charme incomparable de esta hermosa ciudad. más amplia y elevada, pues toca en Dios.
Si nos adentramos un poco por las calles de trazados Es la Granada religiosa, casi diríamos mística y mara-
caprichosos, subimos por los caminos pedregosos del villosa, que nos atrae, más que las centenarias murallas o
Albaicín, visitamos sus célebres “cármenes”, recorremos la grandeza humana de la Alhambra.
Sergio Hollmann
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Evangelizada por San Cecilio aún no había sido comprendida en algunos ambientes
eclesiásticos), compuso uno de sus más bellos poemas y
Esa Granada cuyo origen se pierde en la noche de los
fundó varias casas, entre las cuales el Colegio de Baeza.
tiempos es la Granada de la Fe, visitada por innumera-
Esta privilegiada ciudad sirvió de púlpito a San Juan
bles santos, fundada sobre la memoria milenaria del
de Ávila. Y fue en ella igualmente que, oyendo las
apóstol Santiago, quien por allí anduvo. Según narra una
palabras llenas de unción de este insigne predicador,
piadosa tradición, ciudad marcada por las apariciones de
un aventurero portugués, también llamado Juan, fue
la Santísima Madre de Dios, la cual, cuando aún vivía en
conmovido profundamente por la gracia divina, decidió
esta tierra, se apareció al apóstol de España en el Sacro-
abrazar la Cruz y encaminarse por la vía de la Santidad.
monte; y por la presencia siempre actual de San Cecilio,
Sí, fue esta misma ciudad que vio nacer la monumental
“Varón Apostólico”, que fue consagrado obispo por San
obra de San Juan de Dios, la Orden de los Hospitalarios.
Pedro, junto con otros compañeros de Santiago, y con El perfume espiritual de este gran santo aún perdura en
ellos vino en el año 44 de la era Cristiana, para Iliberis los lugares que frecuentó. Después de huir de su casa a
—así se llamaba Granada en la época— donde recibió la los 8 años, pastorear en los campos de Oropesa, cerca
gracia del martirio. de Toledo, haber sido soldado del Emperador Carlos V y
Como premio sobrenatural por la sangre derramada combatir en Alemania para impedir la invasión turca, fue
en este lugar, la región se tornó fervorosamente cristia- a Granada donde, convirtiéndose, pasó de ser un héroe
na. en el campo de batalla a serlo en el campo mucho más
amplio de la caridad.
Campo apostólico de grandes Santos A lo largo de los siglos, otras almas santas, vivieron o
Ya en el siglo XVI encontraremos recorriendo las pasaron por esta ciudad, irradiando sus gracias y bene-
plazas, calles y callejuelas de la ciudad y rezando en sus ficios. Entre éstas se destaca el célebre capuchino Fray
iglesias, a un hombre menudo, vistiendo un pobre hábito Leopoldo, que hasta hace pocas décadas recorría las
marrón de tosca lana, ¡pero con una mirada de fuego! calles pidiendo limosna para los pobres. Su fama de san-
“Mitad de monje”, lo llamaba afectuosamente Santa tidad, así como los innumerables milagros que, según se
Teresa de Jesús, en razón de su baja estatura. Era él San cree, fueron realizados por su intercesión, transformaron
Juan de la Cruz, el mayor místico de Occidente. Fue en su tumba en un santuario, su celda en un oratorio y su
este antiguo reino de Granada que él, huyendo de la pobre túnica en un objeto de veneración ante el cual no
cárcel de la Inquisición de Toledo (la Reforma Carmelita pocos ricos de este mundo van a inclinarse...
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Sería largo enumerar todos los lindísimos conven- Esplendores de la Semana Santa
tos de monjas de clausura —algunos de ellos verdade-
El español tal vez sea el pueblo de Europa que más
ros palacios, donados a las diversas Ordenes religiosas
comprendió la grandeza del sufrimiento de nuestro Divi-
contemplativas— dispersos en este bello entramado
no Redentor. La historia del país ayudó a crear condicio-
de calles que constituye Granada.
nes para aceptar resignada y alegremente el dolor.
En muchos de ellos el Santísimo Sacramento per-
Desde los más remotos tiempos, España trabó innume-
manece expuesto a la adoración durante la mayor par-
rables luchas, derramó mucha sangre, pasó por grandes
te del día; en algunos, día y noche, como en el de la
tragedias. Seguramente, ese secular parentesco con el do-
Capuchinas Recoletas de San Antón, en pleno centro,
lor hizo con que ese pueblo se sintiese más unido a Nues-
y en el de las Esclavas del Santísimo Sacramento y de
tro Señor en su Pasión y Muerte que los demás pueblos de
María Inmaculada
Europa.
¿Será ésta una de las razones por las cuáles España
reviste la Semana Santa de un colorido especial? No hay
región de esta noble nación que no se engalane de un
esplendor austero para acompañar al Señor y a su Madre
Dolorosa en el camino de la Cruz. Son multitudes las
que se toman las calles para seguir a Jesús con la Cruz a
cuestas.
Pero es verdaderamente en Andalucía donde la Sema-
na Santa tiene un lugar especial en el corazón de cada
habitante. En Granada, situada en el centro de la An-
dalucía Oriental, no podía ser diferente. Hay más de 60
cofradías, que salen con sus “Pasos”. Son grandes andas
portando en procesión una imagen de Cristo, o de Nues-
tra Señora, o incluso un grupo de imágenes representan-
do alguna escena de la Pasión. Por ejemplo, el Señor del
Mayor Dolor, Santa María de la Soledad y tantos otros
Cristos y Dolorosas.
Exhuberantes de flores, sedas, terciopelos, oro, plata,
cirios e incienso, los pasos recorren calles y callejuelas,
atrayendo la ternura y compasión de los millares de fieles
que, durante varias horas, acompañan su lento caminar
el Jueves y Viernes Santo. Espectáculo de oración y de
pasión del cual no se puede participar sin dejarse conta-
Sergio Hollmann
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José Carlos Jiménez Reyes
giar por la emoción religiosa de la grandeza de la Sema- comunidades, individuos, no existe granadino que no traiga
na Santa. su ofrenda, su pequeño don a la Patrona, desde preciosas
rosas hasta humildes margaritas o violetas; todo mundo es
La Patrona generoso con la Virgen.
Sin embargo, es para conmemorar la fiesta de su Patrona, No obstante, la gran fiesta tiene lugar el último domingo
la Virgen de las Angustias, que Granada se reviste de sus de septiembre, cuando la imagen de la Santísima Virgen
mejores galas. Se trata de una imagen del S. XVIII, esculpida sale a las calles y se dirige la Catedral. Por así decir, no hay
por ángeles, según consta, y cuya devoción penetró a fondo quien no acompañe esa procesión. Descalzos y con velas en
en el corazón del pueblo granadino. la mano, hombres y mujeres acompañan piadosamente su
Los Evangelios nos enseñan que, antes de operar algún mi- recorrido. El Arzobispo de Granada, con todo el capítulo, las
lagro, Nuestro Señor exigía la Fe: “Tu Fe te ha curado” — “Tu autoridades civiles y militares, y las diversas corporaciones,
Fe te ha salvado”. Lo que nos muestra que, cuando tenemos inclusive las más humildes, tienen como cuestión de honor ir
Fe, el Cielo queda más cerca de la tierra, y la relación entre lo detrás de la imagen, cuyas andas son cargadas por hombres
natural y lo sobrenatural se torna más fluida y continua. de todas las edades y condiciones.
En el tiempo en que ocurrió el milagro de la aparición
de Nuestra Señora de las Angustias, había, sin sombra de Un foco de amor y belleza
duda, una Fe ardiente. Conforme cuentan las crónicas de la Es por estas razones que, a pesar de apariencias contra-
época, la imagen fue traída por ángeles con formas humanas. rias, Granada es uno de los centros más religiosos y fervoro-
Granada le abrió el alma y se dio con amor a su Patrona. No sos de Andalucía.
hay casa, por pobre que sea, donde no haya un cuadro, una La tradición religiosa, la acción de presencia e irradiación
escultura, una foto de la Virgen de las Angustias. Todos los sobrenatural de tantos santos y personas virtuosas, aliadas a
villorrios de ese antiguo Reino de Granada ostentan una ve- una historia de luchas, tragedias y sobretodo, del divino rocío
neración amorosa a su Patrona. de la gracia santificante, forjaron este amor a Nuestro Señor,
El 15 de septiembre, no sólo la población de Granada, a su Madre Santísima y a la Santa Iglesia. Y como fruto se-
sino también las de las ciudades y poblaciones cercanas, vie- cundario, produjo esta maravilla de belleza, que atrae innu-
nen a su Basílica a hacer una ofrenda floral a María. Grupos, merables peregrinos y visitantes. N
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Virgen del Carmen,
Sevilla (España)
Sergio Hollmann