INFOGRAFIA
INFOGRAFIA
INFOGRAFIA
APRENDIZAJE
5
Nuevas perspectivas de la Evaluación.
Las concepciones sobre evaluación han ido evolucionando con el paso de los
años, pero la que va a merecer especial atención en esta ocasión es la que tiene
referencia a la evaluación de los aprendizajes. La evaluación de los aprendizajes
de los alumnos tiene como objetivos la valoración de los cambios o resultados
producidos como consecuencia del proceso educativo (Fernández, A.sf).
constituye una reflexión crítica sobre todos los momentos y factores que
intervienen en el proceso didáctico a fin de determinar cuáles pueden ser, están
siendo o han sido, los r
Video 1.
La Evaluación educativa
6
Características de la evaluación
7
El Proceso de la evaluación
Existen varias preguntas que retroalimentan el proceso de evaluación que
ponen en orden aspectos importantes tales como ¿Cómo se pueden definir estos
conceptos? Algunos autores tienen puntos en común y otros difieren en algunos
aspectos según Stuffebeam "es el proceso de delinear, obtener y proveer información
para juzgar alternativas de decisión" pero Lafourcade dice que s una etapa del
proceso educativo donde se ponderan los resultados previstos en los objetivos
habiéndolos especificado con antelación . En iguales parámetros cabe situar la
definición de Ketele, para quien "evaluar significa examinar el grado de
adecuación entre un conjunto de informaciones y un conjunto de criterios
adecuados al objetivo fijado, con el fin de tomar una decisión".
Sin embargo, la UNESCO (2005) define la evaluación como "el proceso de
recogida y tratamiento de informaciones pertinentes, válidas y fiables para permitir, a
los actores interesados, tomar las decisiones que se impongan para mejorar las
acciones y los resultados." Referido a lo que opinan estos autores se concluye:
La evaluación es una actividad mediante la cual, en función de
determinados criterios, se obtiene información pertinente acerca de un
fenómeno, situación, objeto o persona, se emite un juicio sobre el objeto de
que se trate y se adoptan una serie de decisiones referentes al mismo. De tal
manera que, en este contexto, la evaluación educativa, si se dirige al sistema
en su conjunto, o a algunos de sus componentes, responde siempre a una
finalidad, que la mayoría de las veces significa tomar una serie de decisiones
respecto del objeto evaluado (Rosales, 2014, p.2)
En la evaluación no se admiten ambigüedades de criterios como refiere el autor
porque funciona como sistema, conjunto y desemboca en decisiones que interfieren
en la continuidad y progreso del objeto evaluado.
Funciones de la evaluación.
A través de este cuadro de doble entrada Ramos (1989) compara las funciones
de la Evaluación teniendo en cuenta tres aspectos importantes, el estudiante, el
maestro y la evaluación como recurso del proceso evaluativo.
8
Tabla 1.
Funciones de la Evaluación
Para el estudiante Informativa
Orientadora
Motivadora
Para el maestro Conocer el ritmo de aprendizaje
Diagnosticar su nivel de aprendizaje
Pronosticar
Calificar
Mantener informados a todas las partes
interesadas
Como recurso en el proceso educativo Finalidad de orientación escolar del estudiante
Revisión de forma continua de la validez en la
actuación de cada uno de los elementos que
intervienen en la evaluación (metaevaluación)
Nota. Tomado de Proceso evaluativo: evaluación sumativa, evaluación formativa y
Assesment su impacto en la educación actual Tomado de Congreso Iberoamericano de
Ciencia, Tecnología, Innovación y Educación, (s.f.). Buenos Aires (Argentina)
9
convendría modificar en una repetición futura de la misma secuencia de enseñanza-
aprendizaje. (p.9)
Concluyendo con respecto a la finalidad de ambas Rosales tiene una
apreciación más amplia de la finalidad de la evaluación porque no se centra en el
espacio y el tiempo, sino que muestra el proceso de lo general a lo particular y no se
queda en la determinación de los criterios sino evalúa los resultados a través de sus
objetivos.
10
cooperativa. Además, la evaluación tiene la función de explorar, motivar y orientar
los aprendizajes, al momento que somos objetivos y aceptamos los procesos de
manera sistemática.
12
TALLER 2: EVALUACIÓN DE Y PARA EL APRENDIZAJE
13
Tipos de evaluación
Según su función
Evaluación Diagnóstica.
Según (Diaz & Barriga, 2002) la evaluación diagnóstica es aquella que se realiza
previamente al desarrollo de un proceso educativo, cualquiera que éste sea. También se le ha
denominado evaluación predictiva.
Cuando se trata de hacer una evaluación de inicio a un grupo o a un colectivo se le suele
denominar prognosis, y cuando es específica y diferenciada para cada alumno lo más correcto
es llamarla diagnosis (Jorba y Casellas, 1997) citado por (Diaz y Barriga, 2002); este divide la
evaluación diagnóstica en dos tipos: inicial y puntual
Evaluación diagnóstica inicial
Es la que se realiza de manera única y exclusiva antes de algún proceso o ciclo educativo
amplio. Para la evaluación diagnóstica de tipo macro, lo que interesa es reconocer especialmente
si los alumnos antes de iniciar un ciclo o un proceso educativo largo poseen o no una serie de
conocimientos prerrequisitos para poder asimilar y comprender en forma significativa los que
se les presentarán en el mismo. Otras cuestiones complementarias que también se evalúan,
por su importancia para el aprendizaje, son el nivel de desarrollo cognitivo y la disposición
para aprender (afectivo- motivacional) los materiales o temas de aprendizaje (Luchetti y
Verlanda, 1998) citado por (Diaz & Barriga, 2002).
Evaluación Formativa.
14
reguladora y consustancial del proceso. La finalidad de la evaluación formativa es estrictamente
pedagógica; regular el proceso de enseñanza- aprendizaje para adaptar o ajustar las condiciones
pedagógicas (estrategias, actividades) en servicio de aprendizaje de los alumnos (Diaz &
Barriga, 2002).
Como lo dice (Diaz & Barriga, 2002) este tipo de evaluación, como ya lo
preconizara desde los sesenta M. Scriven, parte de la idea de que se debe supervisar el
proceso del aprendizaje, considerando que éste es una actividad continua de
reestructuraciones producto de las acciones del alumno y de la propuesta pedagógica.
Por tanto, no importa tanto valorar los resultados, sino comprender el proceso,
supervisarlo e identificar los posibles obstáculos o fallas que pudiera haber en el mismo,
y en qué medida es posible remediarlos con nuevas adaptaciones didácticas in situ.
En la evaluación formativa interesa cómo está ocurriendo el progreso de la
construcción de las representaciones logradas por los alumnos. Además, importa conocer la
naturaleza y características de las representaciones y, en el sentido de la significatividad de los
aprendizajes, la profundidad y complejidad de estas; es decir, la riqueza cualitativa de las
relaciones logradas entre la información nueva a aprender y los conocimientos previos, en este
tipo de evaluación se intenta conocer el progreso cognitivo de los estudiantes.
Según Jorba y Casellas (1997), la evaluación formadora para que consolide y regule el
aprendizaje se divide en tres modalidades:
Regulación interactiva, es inmediata por el intercambio comunicativo que ocurre en el instante
entre profesor y estudiante, interpretando la forma en que el estudiante está interiorizando la
información, lo que permite tomar actitudes de rechazo, afirmación, recapitulación o cambio de
estrategia con nuevos ejemplos. Para este tipo de regulación se realiza una evaluación informal
a través de la observación y diálogo.
Regulación Proactiva, se realiza hacia el futuro considerando nuevas actividades que
complementen y refuercen los contenidos ya abordados lo que permite a los estudiantes que
tenían dificultad reforzar el conocimiento y a los que adquirieron el aprendizaje comprobar el
conocimiento sin implicaciones de complejizar el contenido.
Regulación Retroactiva, ocurre cuando luego de una evaluación final el estudiante no alcanza
el aprendizaje lo que hace necesario la programación de refuerzos académicos extra-clase.
15
La retroalimentación valora los conocimientos, las habilidades, valores y actitudes, pero
igualmente valora el desempeño de los estudiantes de forma en que estos se sientan motivados
a superar las dificultades encontradas. Dentro de la evaluación formativa las preguntas guía,
adaptadas al momento, son una valiosa estrategia para saber cómo están procesando la
información los estudiantes y aprovechar al máximo para reforzar el aprendizaje (secretaria de
Educación Pública, 2018)
Evaluación sumativa.
La evaluación sumativa ha sido considerada como la evaluación por antonomasia, al
punto que cuando se habla de evaluación en las comunidades escolares, inmediatamente se le
asocia con ella. (Diaz & Barriga, 2002)
La evaluación sumativa, también denominada evaluación final, es aquella que se realiza
al término de un proceso instruccional o ciclo educativo cualquiera. Como ya lo han expresado
varios autores, su fin principal consiste en verificar el grado en que las intenciones educativas
han sido alcanzadas. Por medio de la evaluación sumativa el docente conoce si los aprendizajes
estipulados en las intenciones fueron cumplimentados según los criterios y las condiciones
expresadas en ellas. Pero, especialmente, esta evaluación provee información que permite
derivar conclusiones importantes sobre el grado de éxito y eficacia de la experiencia educativa
global emprendida. (Diaz & Barriga, 2002)
En la evaluación sumativa la función social generalmente ha prevalecido sobre la
función pedagógica. Las decisiones que se toman a partir de esta evaluación son aquellas
asociadas con la calificación, la acreditación y la certificación; es por ello que muchas veces
se le ha confundido con estos temas, especialmente con la acreditación. (Diaz & Barriga,
2002)
Según su extensión
16
Evaluación global.
Se pretende abarcar todos los componentes o dimensiones del alumno, del centro
educativo, del programa, etc. Se considera el objeto de la evaluación de un modo holístico, como
una totalidad interactuante, en la que cualquier modificación en uno de sus componentes
o dimensiones tiene consecuencias en el resto. Con este tipo de evaluación, la comprensión de
la realidad evaluada aumenta, pero no siempre es necesaria o posible. El modelo más conocido
es el CIPP de Stufflebeam.
Evaluación parcial.
Pretende el estudio o valoración de determinados componentes o dimensiones de un
centro, de un programa educativo, de rendimiento de un alumno, etc
Evaluación interna.
Es aquella que es llevada a cabo y promovida por los propios integrantes de un centro,
un programa educativo, etc. A su vez, la evaluación interna ofrece diversas alternativas de
realización: autoevaluación, heteroevaluación y coevaluación.
Autoevaluación: los evaluadores evalúan s u ropio trabajo (un alumno su
rendimiento, un centro o programa su propio funcionamiento, etc). Los roles de
evaluador y evaluado coinciden en las mismas personas.
Heteroevaluación: evalúan una actividad, objeto o producto, evaluadores distintos a las
personas evaluadas (el Consejo Escolar al Claustro de profesores, un profesor a sus
alumnos, etc.)
Coevaluación: es aquella en la que unos sujetos o grupos se evalúan mútuamente
(alumnos y profesores mutuamente, unos y otros equipos docentes, el equipo
directivo al Consejo Escolar y viceversa). Evaluadores y evaluados intercambian
su papel alternativamente.
Evaluación externa.
Se da cuando agentes no integrantes de un centro escolar o de un programa evalúan su
funcionamiento. Suele ser el caso de la "evaluación de expertos". Estos evaluadores pueden
ser inspectores de evaluación, miembros de la Administración, investigadores, equipos de apoyo
a la escuela, etc.
Estos dos tipos de evaluación son muy necesarios y se complementan mutuamente. En
el caso de la evaluación de centro, sobre todo, se están extendiendo la figura del "asesor
17
externo", que permite que el propio centro programa se evalúe a sí mismo, pero le ofrece su
asesoría técnica y cierta objetividad por su no implicación en la vida del centro.
Evaluación externa.
Se realiza al comienzo del curso académico, de la implantación de un programa
educativo, del funcionamiento de una institución escolar, etc. Consiste en la recogida de datos
en la situación de partida. Es imprescindible para iniciar cualquier cambio educativo, para
decidir los objetivos que se pueden y deben conseguir y también para valorar si al final de un
proceso, los resultados son satisfactorios o insatisfactorios.
Evaluación procesual.
Consiste en la valoración a través de la recogida continua y sistemática de datos, del
funcionamiento de un centro, de un programa educativo, del proceso de aprendizaje de un
alumno, de la eficacia de un profesor, etc. a lo largo del periodo de tiempo fijado para la
consecución de unas metas u objetivos. La evaluación procesual es de gran importancia
dentro de una concepción formativa de la evaluación, porque permite tomar decisiones de
mejora sobre la marcha.
Evaluación final.
Consiste en la recogida y valoración de unos datos al finalizar un periodo de tiempo
previsto para la realización de un aprendizaje, un programa, un trabajo, un curso escolar, etc.
o para la consecución de unos objetivos.