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ORTHOTOMOUNTA Usando Bien La Palabra de Verdad

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ORTHOTOMOUNTA

Usando bien la Palabra de Verdad


Introducción
1. La Clase Fundamental

E
n agosto de 1975 finalizaba la primera Clase Fundamental de
Poder para la Vida Abundante rodada en Argentina. Las sucesivas
presentaciones de ésta, “la Clase Fundamental”, impactarían
decisivamente en sus estudiantes, produciendo cambios sustanciales en
sus vidas.

Era maravilloso recibir ese caudal de muchos, nuevos e insospechados


conocimientos, para aquellos tiempos, surgidos directamente desde la
misma Biblia, y sin “intermediarios”.

Uno de los primeros fundamentos o “principios” en ser conocidos y


comprobados, fue que “La Biblia es la Palabra y la Voluntad reveladas de
Dios” 1.

De inmediato se enunciaba otro elemento basal y estrechamente ligado


al anterior, tan simple y contundente como el de saber que “la Palabra de
Dios, es la Voluntad de Dios” 2.

Unos pasos más adelante, estando los estudiantes ya “entraditos en


tema” y con entusiasta fervor, un versículo fundamental salía a la luz 3:

2 Timoteo 2:15:
Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no
tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad.

En ese momento, el intenso ritmo de la Clase se tomó un tiempo para


analizar estas palabras “usa bien”, traducción proveniente de la palabra
compuesta orthotomounta (ὀρθοτομοῦντα), tal como aparece en los
textos griegos.

2. Orthotomounta

E ste término, usado solamente en este pasaje de La Biblia, resulta de la


unión de dos palabras:

1 Victor Paul Wierwille, Poder para la Vida Abundante, Capítulo 1, página 7. American Christian Press.
2 Ib. Victor Paul Wierwille, Poder para la Vida Abundante.
3 Puede consultar la Enseñanza No. 161, Usando Bien la Palabra de Dios.
ORTHOTOMOUNTA – Usando bien la Palabra de Verdad

- El adjetivo orthos (ὀρθός), que significa y se traduce, entre otras


maneras, como: recto, correcto, derecho, vertical o alineado.

- El verbo tomóteros (τομώτερος), relacionado a temno, que indica:


cortar, dividir, repartir y trazar, más otras usanzas y que, en su forma
conjugada, deriva en tomounta.

Orthotomeō, entonces, alude a un “corte recto”, a una manera de “cortar


derecho”, trazar rectamente o dirigir algo con rectitud, sin desviaciones ni
distorsión alguna; y así lo refería el Dr. Victor Paul Wierwille, autor de la
Clase:

2 Timoteo 2:15 es el único lugar en la Biblia donde se encuentran las palabras “usa bien”.
De nuevo, un uso singular en la Palabra de Dios indica que la expresión es particular y
dinámicamente significativa. Las palabras españolas “usa bien” son la palabra griega
orthotomounta. Orthos quiere decir “perfectamente correcto” o “perfectamente recto”.
Temno quiere decir “cortar” o “dividir”. Juntando estas dos palabras en la palabra
orthotomounta, traducida “usa bien” en la versión Reina-Valera, literalmente quiere decir
“un corte perfectamente correcto”. 4

William Edwy Vine, por su parte, señala que el concepto de “usar bien”
se asocia con “trazar bien”, “manejar acertadamente” o “trazar
rectamente”. La noción de cortar o dividir, cobra ahora un significado más
amplio al introducir la idea de “tratar rectamente con alguna cosa” 5.

Al ser este el único registro Bíblico del Nuevo Testamento que contiene
esta palabra griega, su análisis y entendimiento también dependen, en
alguna medida, de indagar las usanzas y los contextos en los que
orthotomounta era empleada antiguamente en el griego de la literatura
profana o secular.

3. Orthotomounta en el Antiguo Testamento en Griego

Como herramienta auxiliar, se cuenta con dos usos, orthotome y


orthotomei en el Antiguo Testamento , vertidos en la Versión de los
6

Setenta 7, en el Libro de Proverbios. En ambos casos, su sentido se


asocia a “enderezar”.

Dado el carácter singular de la aparición de esta palabra en la


Septuaginta, resulta interesante una consulta, a través de distintas
versiones en español.

4 Ib. Victor Paul Wierwille, Poder para la Vida Abundante. Capítulo 10, página 125.
5 Para más información puede consultar la Enseñanza No. 648, Procura con Diligencia.
6 Proverbios 3:6; 11:5. Puede consultar la Enseñanza No. 648, Procura con diligencia.
7 También llamada Septuaginta o LXX, es una traducción al griego cercana al Siglo III a.C. (antes de

Cristo), que reviste cierta autoridad. Probablemente sea la primera traducción de Escrituras a otro idioma.

Roberto Alejandro Tufró 2


ORTHOTOMOUNTA – Usando bien la Palabra de Verdad

El primero se encuentra en Proverbios Capítulo 3.

Proverbios 3:6 (Traducción del Nuevo Mundo de las Santas


Escrituras): En todos tus caminos tómalo en cuenta, y él mismo
hará derechas tus sendas.

Proverbios 3:6 (Nueva Versión Internacional):


Reconócelo en todos tus caminos, y él allanará tus sendas.

Esta última traduce “allanar”, lo cual es “hacer llano” o “derecho respecto


de la altura”: algo que no se “dobla hacia arriba ni se desvía hacia abajo”.
También puede entenderse como “aplanar”, “alisar” o “nivelar”.

Proverbios 3:6 (Dios Habla Hoy):


Ten presente al Señor en todo lo que hagas, y él te llevará por el
camino recto.

Proverbios 3:6 (Amplified Bible):


En todos tus caminos conoce, admite y reconócelo, y Él hará tus
sendas derechas y llanas (removiendo obstáculos que bloquean tu
camino).

Todos estos traductores optaron por palabras tales como: “hará


derechas”, “allanará”, “rectas” y “lisas”; muy asociadas todas, sin duda.

El otro registro de orthotomounta en el Antiguo Testamento está en


Proverbios 11, por lo que también veremos algunas versiones al español.

Proverbios 11:5 (Traducción del Nuevo Mundo de las Santas


Escrituras):
La justicia del exento de culpa es lo que hará derecho su camino,
pero en su propia iniquidad el inicuo caerá.

Proverbios 11:5 (Nueva Versión Internacional):


La justicia endereza el camino de los íntegros, pero la maldad hace
caer a los impíos.

Proverbios 11:5 (Dios Habla Hoy):


La justicia endereza el camino del justo, pero el malvado cae por su
propia maldad.

Proverbios 11:5 (Amplified Bible):


La justiciar del irreprochable allanará su camino y lo mantendrá
derecho. Pero el malo caerá en su propia maldad.

En estos casos, se apeló a las palabras: “hará derecho”, “endereza”,


“allanará”, (hará llano, plano, liso) y “mantendrá derecho o recto”.

Roberto Alejandro Tufró 3


ORTHOTOMOUNTA – Usando bien la Palabra de Verdad

Como puede verse, no interviene aquí el concepto sustantivo de “corte” o


“división”, sino más bien el de un verbo, una “acción” que se toma:

- hacer derechos los caminos o sendas.


- allanar, que es hacer llanas las sendas.
- llevar por el camino recto.
- hacer sendas rectas, lisas o planas, en la Versión de habla inglesa.
- enderezar, que es hacer que algo torcido se ponga derecho.
- mantener el camino recto y derecho.

La palabra hebrea que se tradujo como orthotomounta en estos dos


versículos, es YASHÁR, que representa: estar derecho o parejo;
enderezar, hacer, conducir y encaminar, entre otras acepciones. En
estos registros, no necesariamente se tradujo orthotomounta como
“dividir correctamente” o “cortar algo de manera derecha”, lo que lleva a
considerar que esta palabra tiene un terreno de aplicaciones más amplio.

4. Las palabras y sus traducciones

L os traductores vuelcan los conceptos de las palabras que han de


traducir. No existe una “Tabla Matemática de Traducciones” en la que
cada palabra se corresponda con otra única palabra de otro idioma.
Siempre es bueno tener presente que una palabra transmite ideas,
conceptos, realidades o pensamientos, que pueden ser concretos como
“mesa” o “silla”, pero también puede tener un sentido figurado.

La Real Academia Española define a la palabra “palabra”, como una


“unidad lingüística, dotada generalmente de significado”. Por su parte,
“significar” es expresar o representar un concepto a través de un signo.
Toda palabra que constituya un signo (sonoro, escrito, o por señales)
para expresar algo, tendrá al menos un significado.

Teniendo esto en cuenta, entendemos que no siempre es recomendable


mantener la costumbre de sujetarse a un solo, único y rígido significado
para cada palabra. Tal es el caso de orthotomounta que, además de
“dividir correctamente”, connota también el significado de tomar otras
acciones tal como hemos visto que es utilizada en otras versiones de los
dos versículos de Proverbios.

En este de la Segunda Carta a Timoteo, estamos ante un caso en el que


la expresión “que usa bien” sugiere que nuestro manejo de la Palabra de
Dios debe ser hecho (acción tomada) de buena manera: lisa; llana y
rectamente; de la manera correcta; un trabajo “hecho y derecho”.

Roberto Alejandro Tufró 4


ORTHOTOMOUNTA – Usando bien la Palabra de Verdad

5. Las palabras en 2 Timoteo 2:15

D e manera buena y acertada pero hipotética, este versículo podría


haber sido escrito, por ejemplo, así: “Preséntate a Dios como obrero
que usa la palabra de verdad.” No obstante nuestra versión dice:

Procura con diligencia


-•-
Aprobado
-•-
Que no tiene de qué avergonzarse
-•-
Que usa bien
-•-

Veamos un poco sobre cada cláusula que aparece en el versículo

Procura con diligencia

Quejamása una persona se la invite a “procurar”, puede deberse a que


podría habérsele ocurrido a esa persona procurar cosa alguna.
Qué interesante: Dios nos da una brillante idea, que es la de procurar
algo que no estábamos procurando, quizá porque simplemente no se nos
había ocurrido. Y a esa procuración debe agregársele “diligencia”, que
implica un empeño con rapidez y eficacia. Es posible que a muchos
tampoco se les hubiese ocurrido aplicar diligencia a sus procuras,
dejando así que las cosas se realicen sin prisa alguna, como si no
hubiese apuro o necesidad de que acontezcan, esperando que se
produzcan por sí solas. Bienvenida, entonces, esta instrucción.

Aprobado

¿Podría acaso un creyente salvo y justificado, hijo de Dios renacido de


espíritu santo, presentarse “no - aprobado” ante Dios? Sin duda: en
el plano de las obras terrenales, es muy probable que eso ocurra. Por lo
tanto, aplaudimos que el Padre nos recuerde que queremos estar
aprobados ante Él en todo lo que hacemos y, de ser posible, acceder
también a algunas de Sus benditas recompensas.

Que no tiene de qué avergonzarse

D e idéntica manera, esto nos indica la clarísima posibilidad de que


ocurra lo contrario: que un obrero resulte desaprobado y tuviera de
qué avergonzarse. Gracias a Dios por advertirnos, y veremos todo lo que
tengamos que hacer para evitar ese momento bochornoso.

Roberto Alejandro Tufró 5


ORTHOTOMOUNTA – Usando bien la Palabra de Verdad

Que usa bien

¿Pordicequéy tuvo Dios que revelar todas estas cosas a Pablo? ¿Qué nos
qué “no nos dice” este versículo? El Apóstol escribió “usa
bien”. ¿Qué otra manera podría haber de usar la Palabra de Dios, si no
fuera “usándola bien”? Sin duda, todo el mundo acertará la respuesta:
Usarla mal. Lo dicho aquí, nos enseña dos cosas:

- No sólo que hay que usar la Palabra de Verdad (pues de no usarla, no


se llegaría a ser siquiera un obrero) sino que, además:

- Hay que usarla bien, de manera correcta.

6. Usando mal la Palabra de Verdad

V eamos algunos casos de “mal uso de la Palabra de Verdad”, por así


decirlo, pues desde el momento en que esa Palabra es usada mal,
deja de ser “Palabra de Verdad”.

Nos remontaremos a la primera oportunidad de la Historia en la que Su


Palabra fue usada incorrectamente por nuestros “primeros padres”.

Génesis 2:16 y 17:


16 Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del
huerto podrás comer; 17 mas del árbol de la ciencia del bien y del
mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente
morirás.

Esa fue la Palabra de Dios original, la Palabra de Verdad dada a Adán, y


que resultó sometida a distorsión.

Génesis 3:1-6:
1 Pero la serpiente era astuta, más que todos los animales del
campo que Jehová Dios había hecho; la cual dijo a la mujer:

Llama la atención lo antagónico de los discursos:

“Mandó Jehová Dios… diciendo”




“Pero la serpiente… dijo”

Distintas procedencias para la misma acción: la acción de dar


instrucciones.

…¿Conque Dios os ha dicho: No comáis de todo árbol del huerto?

Roberto Alejandro Tufró 6


ORTHOTOMOUNTA – Usando bien la Palabra de Verdad

Dios no había dicho eso; a diferencia de lo planteado por la serpiente


antigua, las palabras de Dios fueron: “De todo árbol del huerto podrás
comer”.

2 Y la mujer respondió a la serpiente: Del fruto de los árboles del


huerto podemos comer; 3 pero del fruto del árbol que está en medio
del huerto dijo Dios: No comeréis de él, ni le tocaréis, para que no
muráis.

Notables cambios introducidos por la mujer que, entre otros tropiezos,


añade de idea de “no tocar al árbol” (no encomendada por Jehová),
cambiando además la consecuencia de comer de ese árbol: Dios había
dicho: “porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.” Pero
Eva dice: “para que no muráis”, lo que hace que la aseveración de
Jehová pierda fuerza, pasando de ser una sentencia firme, a ser sólo
una “posibilidad”: la de morir.

Esto es como decir: “No subas a la escalera, para que no caigas”. Si una
persona no sube a una escalera, no caerá de una escalera. Pero si sube,
podría caer… o no caer. Eso es diferente a decir, por ejemplo: “Si subes
a esa escalera, ciertamente caerás”. Quien así dijera, seguramente sepa
que la escalera, aunque se vea bien, está muy deteriorada.

Eva hizo un uso incorrecto de la Palabra que Dios había hablado a su


hombre, Adán, y que demostrado está, él había transmitido a la mujer.

Ella no usó bien la Palabra de Verdad. No “salió al cruce” de las palabras


de la serpiente con la Palabra de Dios correctamente presentada, sino
que expuso sus propias palabras, “enganchándose” a una profana y vana
palabrería con el menos indicado de todos los interlocutores.

4 Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis; 5 sino que sabe


Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y
seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal.

Mentiroso y homicida desde el principio 8, el diablo, Satanás, la serpiente


antigua 9, torció la Palabra de Verdad contradiciéndola frontalmente en
todas sus proposiciones, coronando su engaño con la falsa afirmación
de: “ciertamente morirás”.

Lamentablemente, nuestra predecesora aceptó las palabras del diablo,


con las ya sabidas consecuencias, catastróficas 10, sin duda:

6 Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era
agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; y
8 Juan 8:44.
9 Apocalipsis 12:9.
10 Katastrophe es la palabra traducida como “perdición” en 2 Timoteo 2:14.

Roberto Alejandro Tufró 7


ORTHOTOMOUNTA – Usando bien la Palabra de Verdad

tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual comió


así como ella.

Al comer del fruto de ese árbol, ellos incurrieron en rebeldía.

1 Samuel 12:14:
Si temiereis a Jehová y le sirviereis, y oyereis su voz, y no fuereis
rebeldes a la palabra de Jehová, y si tanto vosotros como el rey que
reina sobre vosotros servís a Jehová vuestro Dios, haréis bien.

No hay que ser rebeldes a la Palabra de Dios.

Números 15:31:
Por cuanto tuvo en poco la palabra de Jehová, y menospreció su
mandamiento, enteramente será cortada esa persona; su iniquidad
caerá sobre ella.

La Palabra de Jehová tampoco debe ser menospreciada, sino muy


apreciada, amada, y bien utilizada, especialmente en ocasiones en las
que se hace necesario interponerla, saliendo al cruce para “cortar por lo
sano”.

La prédica del Evangelio de Cristo y el anuncio del Reino de Dios, sólo


han de dar gloria al Padre Creador y al Señor Jesucristo, de quien ya
bastante hemos recibido, y no exaltar ni enaltecer a los hombres. Las
personas a las que se les anuncie la Palabra de Verdad, deben ser
llevadas al arrepentimiento que convierta sus corazones a la fe en
Jesucristo, y no a seguir la voluntad o “la figura” de los maestros de
turno.

2 Pedro 2:18:
Pues hablando palabras infladas y vanas, seducen con
concupiscencias de la carne y disoluciones a los que
verdaderamente habían huido de los que viven en error.

Es útil pensar qué clase de palabras serán esas que “seducen” a los
creyentes con concupiscencias de la carne, y determinar con qué
finalidad se emplean. Quizás se trate de promesas y expectativas de
enormes beneficios terrenales, prosperidad “mágica”, salud “a prueba de
balas”, éxito desmedido en los negocios, y “milagros portentosos en tu
vida de la mañana a la noche”, a cambio de que tu nombre figure en la
lista de tal o cual denominación. Nunca faltarán aquellos que, con tal de
atraer gente a su congregación, se erijan como vendedores de ilusiones
a “costo cero”. Alguna execrable razón tiene que haber en el corazón de
quienes lo hacen, que los mueve a cuestionar la Palabra de nuestro
Padre bueno, intentando destrozarla.

Roberto Alejandro Tufró 8


ORTHOTOMOUNTA – Usando bien la Palabra de Verdad

Veamos otro caso de distorsión de la Palabra del Evangelio:

2 Pedro 3: 3 y 4:
3 sabiendo primero esto, que en los postreros días vendrán
burladores, andando según sus propias concupiscencias, 4 y
diciendo: ¿Dónde está la promesa de su advenimiento? Porque
desde el día en que los padres durmieron, todas las cosas
permanecen así como desde el principio de la creación.

Esta gente sembraba incertidumbre poniendo en duda, burlonamente, el


regreso de nuestro Señor Jesucristo por nosotros.

Veamos otro caso en el que el Apóstol Pablo, ante desvíos o torceduras


de la Palabra de Dios, sale al cruce impartiendo doctrina correcta, recta y
derecha, exponiendo la Verdad:

1 Corintios 15:12-21:
12 Pero si se predica de Cristo que resucitó de los muertos, ¿cómo
dicen algunos entre vosotros que no hay resurrección de muertos?
13 Porque si no hay resurrección de muertos, tampoco Cristo
resucitó. 14 Y si Cristo no resucitó, vana es entonces nuestra
predicación, vana es también vuestra fe. 15 Y somos hallados falsos
testigos de Dios; porque hemos testificado de Dios que él resucitó a
Cristo, al cual no resucitó, si en verdad los muertos no resucitan. 16
Porque si los muertos no resucitan, tampoco Cristo resucitó; 17 y si
Cristo no resucitó, vuestra fe es vana; aún estáis en vuestros
pecados. 18 Entonces también los que durmieron en Cristo
perecieron. 19 Si en esta vida solamente esperamos en Cristo,
somos los más dignos de conmiseración de todos los hombres.

Aquí se trata el caso de algunos creyentes (sí, creyentes) que negaban


la resurrección de los muertos. Veamos cómo a partir del próximo
versículo, el Apóstol comienza a enderezar el curso de la discusión,
“dividiendo” correctamente, ordenando y poniendo cada cosa en su lugar;
en fin, usando bien la Palabra de verdad:

20 Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los


que durmieron es hecho. 21 Porque por cuanto la muerte entró por
un hombre, también por un hombre la resurrección de los muertos.

Y así continúa este Capítulo, pleno de doctrina correctamente dividida,


presentada, distribuida, repartida, entregada y muy completa.

8. Conceptos anteriores, sumando conocimientos actuales

B ueno es saber que para servir la Palabra de Verdad presentándola

Roberto Alejandro Tufró 9


ORTHOTOMOUNTA – Usando bien la Palabra de Verdad

correctamente, es necesario estudiarla, y estudiarla bien.

Muy en claro está lo imprescindible que es saber “a quién está dirigida”


cada porción de la Escritura, como indispensable también será conocer
las eras o Administraciones en las que se ubican los distintos
acontecimientos y mandatos.

Útil y necesario será tener en cuenta que La Biblia es un Libro antiguo y


oriental, en el que intervienen variantes literarias propias de las épocas y
lugares en los que fuera revelada a quienes, de su puño y letra,
inspirados por el Espíritu Santo, la escribieron. La Escritura contiene
también Figuras Literarias, Modismos y Orientalismos propios de sus
idiomas, todos aspectos dignos de ser conocidos y tenidos en cuenta
para enriquecer nuestro entendimiento.

Pero todo esto debe tener una finalidad muy marcada y bien entendida;
un “para qué”. Y la respuesta a este “para qué” es que estudiamos,
aprendemos, sabemos y entendemos la Palabra de Dios para,
primeramente, conocer a nuestro Padre y poder amarlo, y para
anunciarla y enseñarla también a otros, impartiéndola de la manera
más eficaz posible. Y es también aquí por donde “viene la cosa” en todo
este asunto de ser obreros aprobados, que usamos bien la Palabra de
Verdad: para llevarla, repartirla, distribuirla, para “dividirla de manera
correcta”; para usarla bien, para aplicarla lo más rectamente que
podamos nosotros y llevarla a aquellos que la desean.

9. La Insistencia del Apóstol Pablo

A l estudiar las dos Epístolas a Timoteo, entre otras cosas notaremos


que Pablo instaba reiteradamente al joven a mantener vigente la
sana doctrina mediante la exposición de las palabras que recibiera a lo
largo de su instrucción. El mismo caso se daba también con Tito.

Hay que tener muy en cuenta que para los creyentes del primer siglo, la
Palabra de Dios consistía de los Escritos del Antiguo Testamento, más
las palabras predicadas y enseñadas “en vivo” por los Apóstoles; también
las Epístolas y Evangelios escritos, que estaban comenzando a circular
entre las iglesias. Todo eso fue lo que mucho más tarde se convertiría en
“La Biblia”, constando de Antiguo y Nuevo Testamento, tal como la
tenemos hoy. Pero en aquel tiempo no había una Biblia completa con los
cuatro Evangelios, un Libro de Hechos y un Nuevo Testamento completo.
Es decir, no había una “Palabra de Verdad escrita en forma de libro” que
pudiera ser estudiada dividiendo correctamente según Administraciones,
o a quién estaba dirigida, o sobre la cual se pudieran hacer estudios de
acumulación de Escrituras. La Palabra de Dios escrita no estaba
disponible como lo está ahora. Simplemente, no estaba.

Roberto Alejandro Tufró 10


ORTHOTOMOUNTA – Usando bien la Palabra de Verdad

Temas recurrentes en las cartas de Pablo para quienes estaban en


posición de responsabilidad, eran: confrontar a los que estaban
predicando un Evangelio incorrecto, y la importancia de mantenerse
fieles a la Palabra de Dios que iba siendo revelada y enseñada. Pablo
aconsejó continuamente a Timoteo y a Tito para pararse firmes en esa
Palabra, enseñarla y transmitirla.

1 Timoteo 1:3-7; 18 y 19:


3 Como te rogué que te quedases en Efeso, cuando fui a
Macedonia, para que mandases a algunos que no enseñen
diferente doctrina, 4 ni presten atención a fábulas [mitos] y
genealogías interminables, que acarrean disputas más bien que
edificación de Dios que es por fe, así te encargo ahora. 5 Pues el
propósito de este mandamiento es el amor nacido de corazón
limpio, y de buena conciencia, y de fe no fingida, 6 de las cuales
cosas desviándose algunos, se apartaron a vana palabrería, 7
queriendo ser doctores de la ley, sin entender ni lo que hablan ni
lo que afirman.

18 Este mandamiento, hijo Timoteo, te encargo, para que conforme


a las profecías que se hicieron antes en cuanto a ti, milites por ellas
la buena milicia, 19 manteniendo la fe y buena conciencia,
desechando la cual naufragaron en cuanto a la fe algunos.

1 Timoteo 4:1; 6 y 7; 11 y 12; 16:


1 Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos
algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus
engañadores y a doctrinas de demonios.

6 Si esto enseñas a los hermanos, serás buen ministro de


Jesucristo, nutrido con las palabras de la fe y de la buena doctrina
que has seguido. 7 Desecha las fábulas [mitos] profanas y de viejas
[tontas, necias]. Ejercítate para la piedad.

11 Esto manda y enseña. 12 Ninguno tenga en poco tu juventud,


sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor,
[espíritu] 11, fe y pureza.

16 Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina; persiste en ello, pues


haciendo esto, te salvarás [te librarás, te protegerás, te pondrás a
salvo] a ti mismo y a los que te oyeren.

1 Timoteo 6:3-5; 20 y 21:


3 Si alguno enseña otra cosa, y no se conforma a las sanas
palabras de nuestro Señor Jesucristo, y a la doctrina que es

11 No figura en los textos griegos: Griesbach, Lachmann, Tischendorf, Tregelles, Alsford, Wordsworth.

Roberto Alejandro Tufró 11


ORTHOTOMOUNTA – Usando bien la Palabra de Verdad

conforme a la piedad, 4 está envanecido, nada sabe, y delira acerca


de cuestiones y contiendas de palabras, de las cuales nacen
envidias, pleitos, blasfemias, malas sospechas, 5 disputas necias de
hombres corruptos de entendimiento y privados de la verdad, que
toman la piedad como fuente de ganancia; apártate de los tales.

20 Oh Timoteo, guarda lo que se te ha encomendado, evitando las


profanas pláticas sobre cosas vanas, y los argumentos de la
falsamente llamada ciencia, 21 la cual profesando algunos, se
desviaron de la fe. La gracia sea contigo. Amén.

2 Timoteo1:8, 13:
8 Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor,
ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el
evangelio según el poder de Dios,

13 Retén la forma de las sanas palabras que de mí oíste, en la fe y


amor que es en Cristo Jesús.

2 Timoteo 2:2:
2 Lo que has oído de mí ante muchos testigos, esto encarga a
hombres fieles que sean idóneos para enseñar también a otros.

2 Timoteo 2:14-18:
14 Recuérdales esto, exhortándoles delante del Señor a que no
contiendan sobre palabras, lo cual para nada aprovecha, sino que
es para perdición de los oyentes. 15 Procura con diligencia
presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué
avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad. 16 Mas evita
profanas y vanas palabrerías, porque conducirán más y más a la
impiedad. 17 Y su palabra carcomerá como gangrena; de los cuales
son Himeneo y Fileto, 18 que se desviaron de la verdad, diciendo
que la resurrección ya se efectuó, y trastornan la fe de algunos.

2 Timoteo 2:23:
Pero desecha las cuestiones necias e insensatas, sabiendo que
engendran contiendas.

2 Timoteo 3:14-17:
14 Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste,
sabiendo de quién has aprendido; 15 y que desde la niñez has
sabido las Sagradas Escrituras [Antiguo Testamento], las cuales te
pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo
Jesús. 16 Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para
enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, 17
a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado
para toda buena obra.

Roberto Alejandro Tufró 12


ORTHOTOMOUNTA – Usando bien la Palabra de Verdad

2 Timoteo 4:1-5:
1 Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que juzgará
a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su reino, 2 que
prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo;
redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina. 3
Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que
teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a
sus propias concupiscencias, 4 y apartarán de la verdad el oído y
se volverán a las fábulas [mitos]. 5 Pero tú sé sobrio en todo,
soporta las aflicciones, haz obra de evangelista, cumple tu
ministerio.

Tito1:9-11; 13 y 14:
9 Retenedor de la palabra fiel tal como ha sido enseñada, para
que también pueda exhortar con sana enseñanza y convencer a los
que contradicen. 10 Porque hay aún muchos contumaces,
habladores de vanidades y engañadores, mayormente los de la
circuncisión, 11 a los cuales es preciso tapar la boca; que trastornan
casas enteras, enseñando por ganancia deshonesta lo que no
conviene.

13 Este testimonio es verdadero; por tanto, repréndelos duramente,


para que sean sanos en la fe, 14 no atendiendo a fábulas [mitos]
judaicas, ni a mandamientos de hombres que se apartan de la
verdad.

Tito 2:1:
Pero tú habla lo que está de acuerdo con la sana doctrina.

El énfasis puesto por Pablo en el uso correcto de la Palabra, en contraste


con el mal uso y las distorsiones de los que estaban predicando y
enseñando otro Evangelio o doctrina adulterada, es insoslayable; a tal
punto, que estos consejos, mandatos y advertencias cobran, aun en
nuestro tiempo, una vigencia estremecedora.

10. Conclusión

T odo este contexto ayuda a ampliar nuestro conocimiento de las


condiciones reinantes en aquellos tiempos, lo que nos permite ahora
comprender un poco más la instrucción de Pablo a Timoteo en el párrafo
que nos ocupa.

2 Timoteo 2:14-16:
14 Recuérdales esto, exhortándoles delante del Señor a que no
contiendan sobre palabras, lo cual para nada aprovecha, sino que
es para perdición de los oyentes.

Roberto Alejandro Tufró 13


ORTHOTOMOUNTA – Usando bien la Palabra de Verdad

Esa era la situación: gente contendiendo, discutiendo y “peleando” sobre


palabras con “vanas palabrerías”, lo cual no tenía provecho, fruto ni
beneficio alguno, sino que sólo resultaba en perdición para los que se
sumaban a escuchar y participar de esos debates infructuosos, que no
contenían ni una jota ni una tilde de la Palabra de Dios.

Y ahora sí:

15 Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero


que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de
verdad.

He aquí la instrucción: En medio de todas esas revueltas, se hacía


necesaria e imprescindible la presencia de un obrero que cumpliera con
su trabajo de presentar Su Palabra de manera correcta, saliendo al
cruce, trazando, repartiendo, distribuyendo, manejando, administrando
sanas palabras, rectas, derechas, oportunas y adecuadas para poner las
cosas en orden ante las falsas doctrinas que pululaban en aquellas
reyertas sin provecho.

16 Mas evita profanas y vanas palabrerías, porque conducirán más


y más a la impiedad.

Evitando toda esta parafernalia de doctrinas diabólicas, también nosotros


hoy debemos valorar y procurar la correcta exposición de la Palabra de
Dios, haciendo previamente todo lo posible para aprenderla e
interpretarla con la mayor precisión.

Cuanto menos estudiemos La Biblia, más expuestos estaremos a recibir


el embate de doctrinas erróneas; y cuanto menos la estudiemos,
seremos nosotros los que, al hablar, expondremos a Su gente a recibir el
embate de nuestros propios errores.

Podemos visualizar, por medio de la incuestionable claridad que nos


ofrece el contexto de este tema, cómo “encaja” y armoniza de una
manera asombrosa, por no decir “perfecta”, esta fundamental instrucción
dada por el Apóstol Pablo a Timoteo, en medio de todas aquellas
palabrerías insanas, infructuosas y malignas: “Tú, Timoteo, usa bien,
expone correctamente la Palabra de Verdad”.

Todos los que anhelamos ser dignos y veraces servidores de nuestro


Dios y Padre del Señor Jesucristo,

procuremos con diligencia presentarnos a Dios aprobados, como obreros


que no tengamos de qué avergonzarnos,
usando bien Su Palabra de Verdad.

Roberto Alejandro Tufró 14


ORTHOTOMOUNTA – Usando bien la Palabra de Verdad

Marcos 16:15

Nota del Editor


Revisión: Maro Mazzola | Alejandro Isla | Eduardo Di Noto

Esta Enseñanza fue compartida el 22 de agosto de 2021 por Roberto Alejandro Tufró quien tuvo el
privilegio de ser estudiante de la Primera Clase Fundamental sobre Poder Para la Vida Abundante en la
Argentina. Dicha Clase finalizó el 17 de agosto de 1975.

Toda cita de la Escritura utilizada en esta obra, es tomada de La Biblia Reina - Valera 1960 12 a menos
que se señale otra versión.

Las palabras resaltadas dentro del Texto Bíblico indican un énfasis especial añadido por el autor, siendo
que el texto de la Biblia aquí utilizado no tiene letras resaltadas.

Cada vez que se haga mención de una palabra en idioma griego, ésta será escrita en minúscula cursiva
(Ej.: atomos). Si se tratara de una palabra hebrea o aramea, será escrita en mayúscula cursiva (Ej.:
YARE). En ambos casos podría utilizarse la palabra raíz, así como cualquier otra forma gramatical de esa
palabra en representación de la familia de palabras.

Debido a que los paréntesis se utilizan en el Texto Bíblico, cuando dentro de un versículo se inserte
alguna nota del autor, ésta estará colocada [entre corchetes] para distinguirla.

Todas las citas de fuentes externas se anotarán en esta otra tipografía para diferenciarlas del resto.
Asimismo, cuando la cita de la fuente sea de mayor longitud que la representada en este trabajo, se
resumirá así: “...” indicando que hay más información disponible para consulta en dicha fuente.

Cuando se haga referencia a los antiguos Textos griegos o hebreos, la misma se hará según los textos
correspondientes presentados en e-Sword de Rick Meyer, o theWord de Costas Stergiou.

Las notas al pie de página son una parte integral y necesaria de este Estudio. Tienen el propósito de
documentar, respaldar, ampliar, aclarar o reforzar el tema que esté bajo análisis.

Esta obra somete a consideración del lector el tema que trata. Es, en alguna manera, un punto de partida
que propone, orienta y, desde ya, concluye con lo que el autor ha estudiado de las Escrituras, de lo cual
ofrece aquí los resultados. No obstante, la Palabra de Dios, es simplemente inagotable. El único que no
necesita revisión es Dios mismo y, por ende, Su Palabra según fuera originalmente inspirada. Pero
nuestro conocimiento y entendimiento de las distintas maravillas presentadas en esta magnífica
Revelación de Su Voluntad, siempre han de ser sometidos al escrutinio13 del estudiante Bíblico.

Es entonces, el presente trabajo, una ayuda; un aporte; una fuente de consulta, referencia y estudio de la
Palabra de Dios. La obra está lejos de pretender ser la única, o la más sobresaliente que exista en su tipo;
no posee eminencia sobre ninguna otra ni es autoridad última sobre el tema. La Palabra de Dios es de
exclusiva autoría del Padre Celestial, por lo cual se constituye en la única fuente de conocimiento
verdadero, y de autoridad inapelable.

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¡Dios lo bendijo, lo bendice y lo bendiga en el nombre de nuestro Señor Jesucristo!

12 La Santa Biblia Antiguo y Nuevo Testamentos, Antigua Versión de Casiodoro de Reina (1569) Revisada

por Cipriano de Valera (1602) Revisión de 1960. Sociedades Bíblicas Unidas, 1993
13 Hechos 17:11

Roberto Alejandro Tufró 15

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