Santo Tomás distingue entre esencia y existencia, afirmando que solo Dios existe por sí mismo, mientras que las sustancias angélicas y los seres humanos son creados por Él. Su gnoseología sostiene que el conocimiento humano es un proceso que parte de los sentidos y culmina en la abstracción de lo universal, mientras que la existencia de Dios se demuestra a través de cinco vías. En ética y política, propone una jerarquía jurídica basada en el iusnaturalismo, donde la ley eterna de Dios guía la moral y la felicidad se alcanza mediante la contemplación de Dios.
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Santo Tomás distingue entre esencia y existencia, afirmando que solo Dios existe por sí mismo, mientras que las sustancias angélicas y los seres humanos son creados por Él. Su gnoseología sostiene que el conocimiento humano es un proceso que parte de los sentidos y culmina en la abstracción de lo universal, mientras que la existencia de Dios se demuestra a través de cinco vías. En ética y política, propone una jerarquía jurídica basada en el iusnaturalismo, donde la ley eterna de Dios guía la moral y la felicidad se alcanza mediante la contemplación de Dios.
Santo Tomás distingue entre esencia y existencia, afirmando que solo Dios existe por sí mismo, mientras que las sustancias angélicas y los seres humanos son creados por Él. Su gnoseología sostiene que el conocimiento humano es un proceso que parte de los sentidos y culmina en la abstracción de lo universal, mientras que la existencia de Dios se demuestra a través de cinco vías. En ética y política, propone una jerarquía jurídica basada en el iusnaturalismo, donde la ley eterna de Dios guía la moral y la felicidad se alcanza mediante la contemplación de Dios.
Santo Tomás distingue entre esencia y existencia, afirmando que solo Dios existe por sí mismo, mientras que las sustancias angélicas y los seres humanos son creados por Él. Su gnoseología sostiene que el conocimiento humano es un proceso que parte de los sentidos y culmina en la abstracción de lo universal, mientras que la existencia de Dios se demuestra a través de cinco vías. En ética y política, propone una jerarquía jurídica basada en el iusnaturalismo, donde la ley eterna de Dios guía la moral y la felicidad se alcanza mediante la contemplación de Dios.
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SANTO TOMÁS
ONTOLOGÍA/ANTROPOLOGÍA Parte de la distinción entre esencia y existencia a la manera de Aristóteles: la esencia como potencia y la existencia como acto. De esta distinción se deriva una jerarquía ontológica:
1. Dios es el único que existe por sí: en Él coinciden necesariamente esencia y existencia; es acto puro y motor inmóvil 2. Sustancias angélicas carecen de materia y son creadas por Dios 3. Resto de los seres, compuestos de materia y forma, creados por Dios de manera análoga, ni distinta ni idéntica. En cuanto al origen del alma, es una creación directa de Dios en cada ser humano. No procede de los padres como el cuerpo, como había defendido el traducianismo. El cuerpo es el principio de individuación, como ya dijo Aristóteles, ya que la esencia de los seres humanos es la misma: todos somos hijos de Dios y estamos hechos a su imagen y semejanza, dotados de inteligencia racional y voluntad libre.
En cuanto a la naturaleza de Dios, podemos optar por la vía negativa, es decir, apuntar lo que Dios no puede compartir con sus criaturas, o por la vía positiva, por predicación analógica, asignándole atributos proporcionalmente semejantes a los de sus criaturas, pero en grado máximo (vía de eminencia: atribuimos a Dios esos rasgos que lo definen en grado sumo: Dios es bondad suprema, suprema perfección, es omnipotente, omnisciente…) Cada una de las 5 vías le asignará un atributo de este tipo. GNOSEOLOGÍA Como para Aristóteles, conocer es abstraer: pasar de lo particular a lo universal. Dios tiene un entendimiento superior, de modo que en un solo acto aprehende la esencia de cada cosa. El entendimiento humano, sin embargo, tiene que seguir un proceso a través del cual va aprehendiendo cada categoría del objeto, y corre el riesgo de equivocarse. Parte de los sentidos y sigue 4 fases:
1. Los sentidos aprehenden los objetos individuales
2. La percepción sensible deja impresa en la memoria una imagen del objeto 3. El entendimiento agente despoja a la imagen de sus elementos particulares y abstrae la esencia universal
4. El entendimiento paciente contempla el concepto universal…que siempre será
imperfecto, análogo (por eso serán indicios más que pruebas, lo que obtengamos sobre Dios) Conocimiento a posteriori: LAS 5 VÍAS
La existencia de Dios no es evidente por eso es necesario demostrarla. La esencia no hay
que demostrarla porque depende de la fe, pero la existencia depende de la razón humana. Existen pruebas internas como las de San Agustín o San Anselmo, que Santo Tomás rechaza. El argumento ontológico de San Anselmo viene a decir que no se puede comprender que Dios existe y al mismo tiempo decir que no existe. Pero se puede muy bien pensar que no existe un ser tal que no se puede concebir en él algo mayor. Es decir, la idea de una existencia no es, en modo alguno, el equivalente de una existencia; una existencia se constata o se infiere, no se deduce. Santo Tomás lo rechaza por no considerar la existencia como una perfección más de la esencia; es decir, la esencia de un ser es la misma tanto si existe como si es sólo imaginario. Un euro imaginario no tiene más céntimos que uno real. Santo Tomás, por el contrario, propone pruebas externas. Considera que para conocer incluso a Dios se ha de partir de los sentidos, a posteriori, ya que sólo Dios conoce a priori y en un solo acto.
Pasos generales: 1. Hecho de la experiencia: EFECTOS 2. Aplicación del principio de causalidad 3. Imposibilidad: lo racional es pensar que todo efecto tiene una causa 4. Afirmación de la CAUSA…” que nosotros llamamos Dios”
Vías:
• Dinámicas:
-Cosmológica: primer motor inmóvil (aristotélica)
-Causal: primera causa eficiente incausada (aristotélica) -Del gobierno: primera inteligencia ordenadora del “caos ordenado”
• Estáticas:
-Contingente/necesario: el único ente necesario
-Grados: el ente perfectísimo (platónica-aristotélica)
Su maestro, Alberto Magno, le propuso una objeción: una demostración no puede recaer en la negación sin pruebas de la relación ad infinitum. La respuesta fue que no se trata de pruebas sino de INDICIOS racionales puesto que nuestra limitada razón humana no puede aportar pruebas, para eso está la fe. Según la teología racional humana, la razón puede ayudar a la fe. Otra objeción que se puede interponer es que las 5 vías se sostienen sobre la base de que la causa debe ser ontológicamente superior al efecto, lo cual ni se induce ni queda probado. TEOLOGÍA:
La teología de Santo Tomás viene marcada por los dogmas (verdades de fe) oficializados en el concilio de Constantinopla; “esta es la fe de la Iglesia”, a lo que el doctor angélico añade que la razón puede ayudar a la fe en este punto: -Trinidad: se puede aclarar racionalmente a través de la idea de RELACIÓN, cuyo denominador común es Dios: padre (paternidad), hijo (filiación) y espíritu santo (amor)
-Encarnación: Jesucristo tiene naturaleza humana (existencia) pero no es persona humana
sino divina (esencia); por eso se puede aclarar racionalmente que Jesucristo tenga dos naturalezas -Creación: la creación ex nihilo se puede aclarar racionalmente porque no se trata de una creación en el tiempo; no se inicia en el tiempo porque siempre ha sido posible en la cabeza de Dios, por tanto, desde este punto de vista es eterna (el tiempo sin tiempo) ÉTICA Y POLÍTICA Al igual que en Aristóteles, la ética y la política del escolástico son inseparables. Plantea una ética teleológica, material, cuya finalidad es la felicidad, descrita como la contemplación de Dios. Según Santo Tomás existe una jerarquía jurídica, cuya base es el iusnaturalismo. Los tres órdenes son los siguientes: -Orden divino: hay una LEY ETERNA, que representa el gobierno de Dios en el mundo, sobre el universo (“la razón de la Sabiduría divina en tanto que rectora de todos los actos y movimientos”). En este sentido, Dios es causa eficiente y final. El primer precepto moral de esta ley prescribe que “hay que hacer el bien y evitar el mal. A partir de esta ley, podemos distinguir entre:
-Lo real no humano que será sometido también a las leyes físicas -Los seres humanos con libertad racional, que deberá cumplir igualmente la ley moral -Orden moral: hay una LEY NATURAL (presencia en la naturaleza humana de la ley eterna): dentro de ella debemos distinguir entre:
-Los primeros principios: inmutables y universales, distintos de los hábitos, en sentido
esencial; son actos de la razón, que se puede educar, por tanto, es lo deseable (que no siempre coincide con lo deseado); es decir, la inclinación natural que posee el hombre hacia el bien, hacia la felicidad. Todo ello se concreta en:
• El instinto de conservación (según el cual todo ser viviente siente como un bien su existencia y tiende a preservarla) • La tendencia a la procreación (según la cual todo animal siente como un bien reproducirse y velar por su descendencia) • La tendencia a conocer la Verdad y a vivir en sociedad (según el cual todo hombre entiende como un bien el mantenimiento del orden social dentro de los parámetros de fidelidad a la Iglesia y la obediencia a las leyes justas -Los principios secundarios, contingentes y particulares: éstos dependen del contexto y, en ocasiones, están mal guiados por apetitos corporales; se materializan en… -Orden político: por último, hay una LEY POSITIVA, aplicación concreta de la libertad formal que nos proporciona la razón, la voluntad (“animales políticos”); es un don divino para alcanzar el fin ético, a saber, la felicidad definida como la contemplación de Dios (Beatitud) y la felicidad común, como objetivo último. Al mismo tiempo, existen otros objetivos parciales dentro de la comunidad como: lograr la paz, obrar de acuerdo con la ley natural y proporcionar los medios para vivir. Por ello, Santo Tomás entiende que si se alza una tiranía, que no procure dichos objetivos, deberá ser derrocada; frente a ello, en política se inclina por una “forma mixta de gobierno”, una monarquía limitada, en la que el príncipe esté controlado por un consejo de notables. En definitiva, serán justas las leyes positivas que no contradigan la ley natural, o sea, eterna: la justicia es el nexo entre la moral (ley natural) y el derecho (ley positiva).
