Escuela Dominical Libre Albedrio

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Escuela Dominical

Continuación:
Omnisciencia y
presciencia de Dios
(Prov. 19:21)
“Muchos pensamientos hay en el corazón del hombre;
mas el consejo de Jehová permanecerá”.

Tema: Distintas hipótesis


sobre la predestinación y lo
que nos dice la Biblia.
Primera hipótesis o interpretación: La predestinación
es incondicional solo para algunos individuos en
particular ya no existe posibilidad alguna para
ejercer el Libre Albedrío.
Consecuencias: Si ya todo lo que sucede en el futuro
está predeterminado por Dios incondicionalmente,
entonces la libertad de escoger por parte del hombre
queda anulada, e irremediablemente unos ya están
elegidos para salvación (cielo) y otros para perdición
(infierno)independientemente de la elección humana.
Esta posición está diametralmente opuesta al libre
albedrío.

¿Es válida esta interpretación según la enseñanza


general que nos da la Biblia?
Segunda hipótesis o interpretación: La
predestinación es condicional para todas las
personas , existe el Libre Albedrío.
Consecuencias: Todo en el futuro está
predeterminado por Dios antes de la fundación del
mundo, pero en ningún momento es anulada la
libertad de escoger. La salvación es condicional.
La Soberanía y presciencia de Dios es autónoma del
hombre, esto es un misterio de Dios. No está en
nuestras mentes la comprensión de cómo Dios sabe
de antemano las decisiones libres y futuras del
hombre, pero de todas las
formas posibles ya todo está decretado desde el
principio sin dejar a un lado la libertad humana.

¿Es válida esta interpretación según lo que nos


enseña la Biblia?
El hombre debe vivir bajo la palabra o la orden de Dios
como un asunto de elección personal (Gn. 2:16-17).
Obedecer a Dios es honrarle como Dios.
¿Qué clase de personas están predestinadas
por Dios a la condenación antes de la
fundación del mundo?

El Señor afirma: «¡Ay de los hijos rebeldes,


que hacen planes sin contar conmigo
y preparan proyectos que yo no les inspiro,
de manera que amontonan pecado sobre
pecado!» (Is.30.1)
«Tu maldad te castigará, y tus rebeldías
te condenarán; sabe, pues, y ve cuán malo y
amargo es el haber dejado tú a Jehová tu
Dios, y faltar mi temor en ti, dice el Señor,
Jehová de los ejércitos» (Jer.2.19)
REBELDÍA
Apóstatas: (del griego «ἀνυπότακτος”), significa
insubordinado, bajo (moralmente), desordenado.
Se traduce «de rebeldía» en Tit.1.6 (RV:
«contumaces»). CONTUMAZ, DESOBEDIENTE,
que resiste la autoridad de Dios

«Antes ustedes estaban muertos a causa


de las maldades y pecados en que vivían,
pues seguían los criterios de este
mundo…siguiendo nuestros malos
deseos y cumpliendo los caprichos de
nuestra naturaleza pecadora y de
nuestros pensamientos» Ef.2.1-3
«Que nadie los engañe con palabras
huecas, porque precisamente por estas
cosas viene el terrible castigo de Dios
sobre aquellos que no lo obedecen. No
tengan ustedes, pues, ninguna parte con
ellos. Ustedes antes vivían en la
oscuridad, pero ahora, por estar unidos
al Señor, viven en la luz. Pórtense como
quienes pertenecen a la luz, pues la luz
produce toda una cosecha de bondad,
rectitud y verdad. Examinen siempre qué
es lo que agrada al Señor. No compartan
la conducta estéril de los que son de la
oscuridad» Ef.5.6-11
Si la predestinación de Dios no incluyera
el ejercicio del Libre Albedrío, entonces
¿para qué Jesús manda a su iglesia a ir
y predicar el evangelio de salvación a
todas las criaturas y exige el
cumplimiento de su voluntad en el plan
de salvación?

«Pero Dios es tan misericordioso y nos


amó con un amor tan grande, que nos
dio vida juntamente con Cristo cuando
todavía estábamos muertos a causa
de nuestros pecados» (Ef.2.4-5)
«No es esto algo que ustedes mismos hayan
conseguido, sino que es un don de Dios. No es
el resultado de las propias acciones, de modo
que nadie puede gloriarse de nada; pues es
Dios quien nos ha hecho; él nos ha creado en
Cristo Jesús para que hagamos buenas obras,
siguiendo el camino que él nos había
preparado de antemano» Ef.2.8

“Fue él quien nos salvó y nos llamó con santo


llamamiento,
no conforme a nuestras obras, sino conforme a
su propio propósito y gracia, la
cual nos fue dada en Cristo Jesús antes del
comienzo del tiempo”. (2Tim. 1:9).
Dios tiene el derecho soberano de DISPONER de la vida de sus
criaturas. DISPONER, significa: deliberar, determinar, mandar lo
que ha de hacerse, poner las cosas en orden. Debemos rendir
nuestra voluntad y nuestras vidas al control de nuestro
Soberano. Este es el atributo de Dios que más resisten los
cristianos, pues se trata del control absoluto de sus vidas bajo
la voluntad de Dios.

¿Diremos por eso que Dios es injusto? ¡Claro


que no! Porque Dios dijo a Moisés: “Tendré
misericordia de quien yo quiera, y tendré
compasión también de quien yo quiera.” Así
pues, no depende de que el hombre quiera o
se esfuerce, sino de que Dios tenga
compasión.
Ro 9.14-16
«¡Qué profundas son las riquezas de Dios, y su sabiduría y
entendimiento! Nadie puede explicar sus decisiones, ni llegar
a comprender sus caminos. Pues “¿quién conoce la mente del
Señor? ¿Quién podrá darle consejos? ¿Quién le ha dado algo
antes, para que él tenga que devolvérselo?” Porque todas las
cosas vienen de Dios, y existen por él y para él. ¡Gloria para
siempre a Dios! Amén» (Ro.11.33-36)

Esto nos lleva a otro atributo de Dios: su SOBERANIA. Su


voluntad, por ser soberana, es por lo tanto inmutable,
irresistible e inevitable.

“Porque a los que antes conoció, también


predestinó para que fuesen hechos
conformes a la imagen de su Hijo, para que él
sea el primogénito entre muchos hermanos; y
a los que predestinó, a estos también llamó”
Ro.8:29-30
¿Quiénes son los elegidos entonces? Es decir, Pablo habla de
los que voluntariamente obedecen al evangelio y guardan sus
mandamientos ("Pues este es el amor a Dios, que guardemos
sus mandamientos" (1 Juan 5:3).

Es obvio que Pablo habla de una CLASE DE GENTE, gente que


ama a Dios en respuesta a su llamado (los que obedecen al
evangelio, los cristianos). Los que no aman a Dios no se
incluyen en su "propósito" de tener consigo en gloria un pueblo
especial y están predestinados a la condenación.

«Por estas cosas viene el terrible castigo de Dios


sobre aquellos que no lo obedecen; y en su vida
pasada ustedes las hacían. Pero ahora dejen todo
eso: el enojo, la pasión, la maldad, los insultos y las
palabras indecentes. No se mientan los unos a los
otros, puesto que ya se han despojado de lo que
antes eran y de las cosas que antes hacían, y se han
revestido de la nueva naturaleza: la del nuevo
hombre, que se va renovando a imagen de Dios, su
Creador» Col 3.6-10
«Pero me dirás: “Siendo así, ¿de qué puede Dios
culpar al hombre, si nadie puede oponerse a su
voluntad?” Y tú, hombre, ¿quién eres para pedirle
cuentas a Dios? ¿Acaso la olla de barro le dirá al que
la hizo: “Por qué me hiciste así?” El alfarero tiene el
derecho de hacer lo que quiera con el barro, y del
mismo barro puede hacer una olla para uso especial
y otra para uso común» (Ro 9.19-21)
No podemos entonces ocupar el lugar de Dios
y pretender conocer a los elegidos, solo es
derecho de Dios como Creador y Soberano.
Dios nos da el libre albedrío no para hacer
nuestros planes sin contar con su voluntad,
pues solo Él conoce todas las cosas, desde la
eternidad ya están ordenadas.
Obedecer, o no obedecer, esa es la cuestión.

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