Mapa Renal 1

Descargar como pptx, pdf o txt
Descargar como pptx, pdf o txt
Está en la página 1de 81

Mapa renal 1

El riñón se encarga de mantener siempre en un


volumen constante el agua corporal total.
Al haber más agua, filtra más y al haber menos
agua, filtra menos y reabsorbe más en los
túbulos renales.
El mecanismo de balance del agua, está
íntimamente ligado al balance de los solutos que
en ella están disueltos como el sodio y el
potasio, por lo cual reacciona ante la secreción
de:
• por lo cual reacciona ante la secreción de:
• · Hormona antidiurética
· Péptido atrial natriurético
· Sistema renina-angiotensina-aldosterona
• BALANCE DEL AGUA
El riñón tiene la propiedad de regular al balance
hídrico del organismo y sobre todo de separar la
eliminación del agua de los solutos.
• La reabsorción del agua se realiza a lo largo del
túbulo renal, pero la mayor parte se efectúa en
el túbulo proximal ,reabsorción obligada
• . La disociación de agua y solutos se efectúa en el
túbulo distal, que se halla condicionada a los
niveles plasmáticos de la hormona antidiurética.
• La cantidad de HAD se halla regulada por los cambios
de osmolaridad plasmática o una disminución de la
volemia que pueden ser debidos a una pérdida de
líquidos, por ejemplo diarreas, vómitos, hemorragia
etc., originando aumento de la osmolaridad con
mayor liberación de HAD, reabsorbiendo mayor
cantidad de agua y eliminando una orina
concentrada.
• Regulan el balance del agua dentro y fuera de las
células (electrolitos). También conocido como
proceso de osmosis
• El sistema excretor, por intermedio de su principal órgano,
el riñón, está encargado de regular la cantidad de agua y la
concentración de electrólitos y ciertos productos terminales
del metabolismo en el líquido extracelular.

• En el individuo sano, los riñones intercambian sustancias


con el plasma para que el medio interno se mantenga
constante.
• El sistema excretor o urinario realiza una continua filtración
de la sangre, extrayendo del plasma una gran cantidad de
sustancias que son eliminadas al exterior como orina.
La eliminación de sustancias desde el medio interno hacia
el medio externo recibe el nombre de excreción.
• La excreción urinaria permite eliminar, fundamentalmente:
• El exceso de agua
• El exceso de electrólitos
• Desechos nitrogenados del metabolismo

• Entre las sustancias depuradas por orina también se encuentran


los productos finales del metabolismo de la hemoglobina,
metabolitos de hormonas y sustancias extrañas ,agentes tóxicos,
fármacos, plaguicidas, aditivos alimentarios.
La composición y volumen de la orina pueden variar
ampliamente.
• Por ejemplo, si una persona bebe gran cantidad de agua, ésta
tiende a diluir los líquidos corporales y aumentar su volumen, y el
riñón responde con un aumento de la diuresis
• . En cambio, si una persona se ve privada de agua, los
riñones producen una orina muy concentrada para
disminuir al mínimo la pérdida de líquido.
• Del mismo modo, cuando hay déficit o exceso de
potasio, ácido u otras sustancias, el riñón modifica su
excreción para mantener en equilibrio el medio
interno.
De esta forma, la composición y el volumen del medio
interno sólo varían dentro de límites muy estrechos.
La insuficiencia renal altera la homeostasis del medio
interno, conduciendo a una función anómala en todos
los sistemas del cuerpo y en última instancia, a la
muerte.
• Desechos nitrogenados
• Los desechos nitrogenados se originan del metabolismo
celular y se vuelcan a la sangre, desde donde son
incorporados a la orina cuando la sangre circula por el
riñón. Si sus valores en sangre aumentan, ocasionan
toxicidad.
Los desechos nitrogenados son:
• • Urea: se genera a partir del grupo amino removido de los
aminoácidos en el proceso de desaminación
• . La desaminación y la transformación del amino en urea
(ciclo de la urea) tienen lugar principalmente en el hígado.

Desechos nitrogenados
• La urea tiene la ventaja de ser un compuesto de
bajo peso molecular, soluble en las membranas y
por lo tanto fácilmente difusible.
• En la insuficiencia renal los valores de urea en
sangre están anormalmente elevados, generando
un síndrome conocido como uremia.
• Los síntomas de la uremia incluyen letargo,
anorexia, náuseas, vómitos, deterioro mental y
confusión, espasmos musculares, convulsiones y
coma.
Desechos nitrogenados
• Amoníaco: el amoníaco (NH3) o su catión amonio
(NH4+) son los derivados inmediatos del grupo amino.
Dada su alta toxicidad, el amoníaco es rápidamente
convertido a urea.
• Cuando esta transformación no se produce, por
ejemplo cuando hay una insuficiencia hepática, el
amoníaco se acumula en sangre, provocando
hiperamonionemia.
• Este síndrome incluye temblor, habla ininteligible,
visión borrosa y, a concentraciones muy elevadas,
daño cerebral irreversible, coma o muerte.
• La toxicidad del amoníaco afecta directamente al SNC.
Mapa conceptual tubulos renales
Órganos del sistema excretor
• Anatomía del riñón
• El riñón es un órgano par, situado en la pared posterior
de la cavidad abdominal, en la zona lumbar.
• Es un órgano retroperitoneal.
• Está cubierto por la cápsula renal, mide unos 12 cm de
largo y pesa alrededor de 150 gramos.
El riñón presenta un borde externo convexo y un
borde interno cóncavo En este último se encuentra
el hilio renal, a través del cual ingresan al riñón los
vasos sanguíneos (la arteria renal y la vena renal), los
nervios, y por donde emerge la pelvis renal.
• .
• La pelvis renal
• es un ensanchamiento en forma de embudo, donde
convergen los cálices renales, conductos que recogen la
orina producida en el riñón. De la pelvis renal se origina el
uréter.
Internamente, en el riñón se distinguen dos zonas: la
externa, o corteza, y la interna, o médula.
La médula está recorrida por unas estructuras de
disposición radial llamadas pirámides de Malpighi, de base
externa y vértice interno, separadas por columnas.
• A la altura de los vértices, las pirámides de Malpighi
presentan una zona cribosa (papila), por donde la orina
drena hacia un cáliz, y de allí a la pelvis renal.
• Microscópicamente se puede reconocer a las
unidades anatómicas y funcionales del riñón,
los túbulos renales, también
• llamados nefronas o nefrones, las cuales se
extienden tanto por la corteza como por la
médula del órgano.
• Las nefronas son túbulos que se inician con un extremo cerrado,
mientras que su extremo opuesto se abre en un tubo colector.
• El extremo cerrado de la nefrona está hundido, formando una
especie de copa, la cápsula de Bowman, en cuya concavidad se
aloja un ovillo de vasos capilares que recibe el nombre
de glomérulo.
• La asociación entre el glomérulo y la cápsula de Bowman se
conoce como corpúsculo de Malpighi o corpúsculo renal.
A la cápsula de Bowman le sigue una porción flexuosa de la
nefrona, el túbulo contorneado proximal(TCP).
• Tanto el corpúsculo de Malpighi como el túbulo contorneado
proximal se ubican en la corteza renal.
• El túbulo contorneado proximal se continúa con el asa de
Henle (AH), un segmento que realiza un recorrido en forma
de U, penetrando en la médula del riñón.
• El asa de Henle consta de una rama descendente, delgada, y
una rama ascendente, gruesa.

• Algunos nefrones, llamados corticales, poseen asas de


Henle cortas; otros, los yuxtamedulares, cuyos corpúsculos
de Malpighi se ubican muy cerca de la médula renal,
presentan asas de Henle más largas.
• Estos últimos tienen importancia fisiológica, pues son los
principales responsables de la concentración de la orina.
• La última porción del nefrón se encuentra en la zona
cortical; es un túbulo flexuoso, el túbulo contorneado distal
(TCD), que desemboca en el conducto colector.
Varios túbulos contorneados distales provenientes de
nefronas adyacentes desembocan en un tubo
colector común.
• Éstos descienden desde la corteza hacia la médula y
convergen en los cálices (en los vértices de las pirámides de
Malpighi), los cuales se reúnen en la pelvis renal; de la
pelvis renal nace el uréter.

• La formación de la orina comienza en la cápsula de


Bowman; la orina inicial es modificada mientras recorre el
túbulo renal, hasta que es recogida en los cálices.
• Circulación renal
• Los riñones filtran el plasma en forma continua. En un adulto, el
21% del gasto cardíaco pasa por el riñón, lo que implica que los
riñones reciben alrededor de 1,2 litros de sangre por minuto.
La sangre llega al riñón por una rama de la aorta, la arteria renal,
que ingresa al órgano a través del hilio y se ramifica en su interior.
Cada nefrón recibe una rama arterial, llamada arteriola aferente,
a partir de la cual se forma un ovillo capilar, el glomérulo, en
íntimo contacto con la cápsula de Bowman. Allí tiene lugar la
filtración. Luego, los capilares glomerulares confluyen formando
una arteriola eferente, que se aleja de la cápsula.
La arteriola eferente se comporta de manera distinta, según el tipo
de nefrón del cual provenga. Las arteriolas eferentes de los
nefrones corticales se ramifican dando origen a una red
de capilares peritubulares, que reciben esta denominación por su
disposición alrededor de los túbulos que forman el nefrón.
• Cada nefrón recibe una rama arterial, llamada arteriola
aferente, a partir de la cual se forma un ovillo capilar,
el glomérulo, en íntimo contacto con la cápsula de
Bowman. Allí tiene lugar la filtración.
• Luego, los capilares glomerulares confluyen formando
una arteriola eferente, que se aleja de la cápsula.
La arteriola eferente se comporta de manera distinta, según
el tipo de nefrón del cual provenga.
• Las arteriolas eferentes de los nefrones corticales se
ramifican dando origen a una red de capilares
peritubulares, que reciben esta denominación por su
disposición alrededor de los túbulos que forman el nefrón
• Las arteriolas eferentes de los nefrones yuxtamedulares drenan no
sólo en la red peritubular, sino que también se prolongan en
los “vasa recta”
• . Los “vasa recta” forman asas que penetran en las pirámides
medulares siguiendo a las asas de Henle.
Entre los capilares peritubulares, los “vasa recta” y la nefrona
ocurre gran cantidad de intercambios.

• Finalmente, los capilares peritubulares y los “vasa recta”


forman vénulas que desembocan en la vena renal, la cual sale del
órgano a nivel del hilio y drena en la vena cava inferior.

• En el trayecto que realiza dentro del riñón, el plasma sufre


modificaciones muy importantes relacionadas con la formación de
la orina
• Formación de orina
• La orina se origina primariamente como
un ultrafiltrado del plasma a nivel glomerular.
• Ya en el interior de los túbulos renales, este
ultrafiltrado es modificado mediante dos
procesos: reabsorción tubular y secreción tubular.
La reabsorción consiste en el transporte de
sustancias, tanto agua como solutos, desde la luz
tubular hacia los capilares sanguíneos
peritubulares.
• La secreción tubular es el transporte de
sustancias desde los capilares peritubulares hacia
los túbulos renales.
Significa que la orina definitiva ya no contiene
gran parte de las sustancias filtradas, que son
reabsorbidas, pero puede contener otras que no
fueron filtradas, sino que se incorporaron a la luz
tubular por un proceso de secreción posterior.
La excreción es entonces el resultado de la
filtración glomerular, menos las sustancias
reabsorbidas, más las sustancias secretadas.
• FILTRACIÓN - REABSORCIÓN + SECRECIÓN = EXCRECIÓN
• FILTRACIÓN - REABSORCIÓN + SECRECIÓN = E
XCRECIÓN
• Cada día unos 180 litros de sangre son
filtrados en los riñones, de los cuales una
pequeña parte es eliminada como orina.
Se denomina diuresis a la cantidad de orina
excretada diariamente.
• La diuresis normal es de aproximadamente
1, 5 litros
• Filtración glomerular
• La filtración glomerular consiste en el ultrafiltrado del plasma (plasma
libre de proteínas) desde los capilares glomerulares hacia la luz tubular,
más particularmente, hacia el espacio de la cápsula de Bowman.
El volumen y la composición del ultrafiltrado dependen de varios factores:

1. El flujo sanguíneo renal.
2. La barrera de filtración.
3. La diferencia de presión entre el glomérulo y la cápsula de Bowman.

1. El flujo sanguíneo renal es el volumen de sangre que circula por los
riñones en la unidad de tiempo. La filtración glomerular es directamente
proporcional al flujo sanguíneo renal. Por eso, el alto porcentaje del gasto
cardíaco que llega al riñón se explica mejor como una forma de garantizar
un flujo suficiente, que posibilite la filtración, que como una necesidad
para abastecer a este órgano (aunque, de hecho, se trata de un órgano
metabólicamente muy activo).
• La barrera de filtración está constituida por el endotelio del
capilar glomerular, la membrana basal y la hoja interna de la
cápsula de Bowman.
Los capilares glomerulares son muy permeables, de tipo
fenestrado, con un endotelio que presenta grandes poros.
La membrana basal está formada por una red de colágeno y
proteoglicanos.
• Esta membrana deja pasar libremente al agua y los solutos
pequeños, pero retiene a las proteínas.
• Los proteoglicanos de la membrana basal están cargados
negativamente.
• Esto hace que, a igual diámetro de las partículas, las que están
cargadas positivamente pasen con más facilidad que las negativas,
que son repelidas por las cargas de la membrana basal.
• La hoja interna de la cápsula de Bowman es una capa discontinua
de células epiteliales, llamadas podocitos.
• Los podocitos tienen grandes expansiones parecidas a un pie, que
rodean a los capilares glomerulares. Entre los pies hay espacios
(los poros de rendija) por donde se desliza el filtrado glomerular.
La membrana glomerular es más gruesa que la de otros capilares,
pero también es muy porosa, lo que la hace permeable.
• Los poros tienen un tamaño de 8 nm, aunque partículas más
pequeñas, como la albúmina, no los atraviesan, debido a sus
cargas negativas.
En conclusión, los únicos impedimentos para la filtración son el
tamaño de las partículas y sus cargas.
La barrera de filtración retiene a las células sanguíneas y a las
proteínas plasmáticas.
• El resto de los componentes del plasma pasa libremente hacia el
espacio de la cápsula de Bowman.
• La filtración depende de la suma de presiones
hidrostáticas y coloidosmóticas (oncóticas)
que actúan sobre la barrera de filtración,
favoreciendo la filtración u oponiéndose a ella.
Favorecen la filtración Se oponen a la filtración

Presión hidrostática Presión hidrostática en la


glomerular (presión cápsula de Bowman = 15
sanguínea) = 55 mm Hg mm Hg

Presión coloidosmótica en
la cápsula de Bowman.
Esta fuerza es Presión coloidosmótica
despreciable, ya que el glomerular = 30 mm Hg
filtrado prácticamente no
contiene proteínas.
• La presión efectiva de filtración resultante es:
Presión efectiva de filtración = 55 mm Hg – (15 mm Hg + 30 mm Hg) = 10 mm Hg
• Reabsorción y Secreción en el nefrón: Túbulo Contorneado
Proximal
• La orina definitiva que llega a la pelvis renal se consigue tras
la modificación del filtrado mediante los procesos de
reabsorción y secreción tubular.
Casi el 99% del filtrado es reabsorbido en los túbulos
renales.
• La reabsorción es un proceso selectivo. Mediante la
reabsorción se recuperan para el organismo sustancias
necesarias, como glucosa y aminoácidos, mientras que
desechos, excesos de iones y otras sustancias, permanecen
en el filtrado y son excretados con la orina.
• El transporte de sustancias entre el filtrado, en
la luz de los túbulos renales, y el espacio
intersticial, para acceder a los capilares
sanguíneos, necesariamente debe realizarse a
través del epitelio del túbulo renal.
Las sustancias transportadas pueden seguir la
vía paracelular, a través de las uniones
estrechas entre las células epiteliales, o la vía
transcelular.
• Las células del epitelio simple que forman el
nefrón están adaptadas para la absorción.
Poseen ribete en cepillo en su superficie
apical e invaginaciones en la superficie basal;
ambas diferenciaciones contribuyen a
aumentar el área superficial de la membrana.
Además contienen abundantes mitocondrias,
necesarias para proveer la energía consumida
en los transporte activos.
• En el túbulo contorneado proximal se reabsorben el 70 %
del agua, el sodio y el cloruro, la casi totalidad de la
glucosa y los aminoácidos, vitaminas hidrosolubles y otros
solutos filtrados.
La reabsorción de sodio en el TCP está determinada por la
presencia de la bomba de Na+/K+ en la superficie
basolateral del epitelio.
• La bomba extrae el sodio en la superficie basolateral,
generando un gradiente que promueve el ingreso de este
catión por la superficie apical.
• Como resultado, el sodio se mueve desde la luz tubular
hacia la sangre.
• El gradiente de sodio también es utilizado para la reabsorción de
otras sustancias mediante un mecanismo de transporte activo
secundario.
• En este tipo de transporte participa un cotransportador que
moviliza simultáneamente dos solutos a través de la membrana.
Uno de ellos es transportado a favor de gradiente, mientras que el
otro se mueve contra gradiente.
• El cotransporte puede ser un simporte, si los dos solutos se
trasladan en el mismo sentido, o un antiporte, cuando lo hacen en
sentidos opuestos.
El simporte con sodio es el mecanismo que permite el ingreso de
glucosa, aminoácidos y vitaminas por la superficie apical. Luego,
estos solutos salen a favor de gradiente por la superficie
basolateral, a través de sus carriers específicos.
• Los carriers para glucosa ubicados en la superficie basolateral
pertenecen a una familia de transportadores denominados GLUT.
Cuando la concentración de glucosa plasmática (y por
consiguiente en el filtrado) es alta, estos transportadores se
saturan y no alcanzan a reabsorber toda la glucosa filtrada.
• A partir de entonces, la glucosa aparece en orina (glucosuria).
• Esto ocurre cuando la glucemia es mayor de 170 mg%, valor
conocido como “umbral renal” para la glucosa.
De la misma forma, otras sustancias aparecen en orina cuando el
filtrado contiene mayores concentraciones de las que pueden ser
reabsorbidas, es decir cuando superan el umbral renal.
• El antiporte con sodio también es responsable
de la secreción de protones hacia la luz del
TCP.
El gradiente de sodio favorable a su
reabsorción acarrea cloruro, que es atraído
por el gradiente eléctrico. El cloruro es
transportado mediante canales iónicos, o bien
por la vía paracelular.
• El agua se reabsorbe por un gradiente
osmótico, siguiendo a los solutos. Puede
atravesar las células, por intermedio de
canales específicos para el agua
(aquaporinas), o el espacio paracelular.
Cuando se mueve por la vía paracelular,
ocasiona un “arrastre por solvente” llevando
consigo solutos como calcio, cloruro, sodio,
potasio y magnesio.
• Las células del TCP también secretan aniones
y cationes orgánicos, tanto endógenos ,ácido
úrico, oxalatos, adrenalina, como exógenos
penicilina, atropina, morfina.
Como el TCP es permeable tanto a los solutos
como al agua, cuando el filtrado sale del TCP,
es isotónico con el plasma.
• Asa de Henle
• La rama descendente delgada del asa es impermeable
a los solutos; sin embargo, es muy permeable al agua.
Alrededor de un 15% del agua filtrada de reabsorbe en
esta porción del nefrón.

• La rama ascendente gruesa del asa de Henle es


impermeable al agua, pero cuenta con mecanismos
para el transporte activo de iones.
• En la rama ascendente gruesa, la bomba de
Na+/K+ en la superficie basolateral genera un
gradiente de sodio, el cual permite la reabsorción
del ión.
• Ésta se realiza acoplada con el transporte de
cloruro y potasio, por intermedio de un
cotransportador electroneutro.
• Dicho transportador introduce, simultáneamente,
1 sodio + 2 cloruros + 1 potasio.
• El cloruro es reabsorbido, pues abandona la
superficie basolateral por difusión a través de
un canal.
El potasio regresa a la luz a favor de gradiente.
La acumulación de iones positivos en la luz
genera una diferencia de potencial
transepitelial. Esto impulsa la reabsorción de
sodio, calcio y magnesio (cationes) por la vía
paracelular.
• Túbulo Contorneado Distal y Túbulo Colector
• El TCD es impermeable al agua.
• La primera parte del TCD tiene propiedades
semejantes al asa gruesa de Henle.
• Allí se realiza un transporte activo secundario de
sodio con cloruro.
• Ambos son reabsorbidos.
• El primero, por la bomba Na+/K+, que genera el
gradiente de sodio, y el segundo, mediante
canales.
• La segunda parte del TCD tiene propiedades comunes con el
túbulo colector.
• En estas porciones del nefrón distal hay dos clases de células:
principales e intercalares.
Las células intercalares regulan el equilibrio ácido-base.
• Estas células pueden secretar protones (H+), cuando el medio
interno se torna ácido, o bien bicarbonato (HCO3-), cuando el
medio interno se torna alcalino.
Las células principales reabsorben sodio y secretan potasio.
• El sodio ingresa por la superficie apical a través de unos canales
especiales denominados “canales epiteliales de Na” (ENaC).
• La bomba de Na+/K+ en la superficie basolateral genera el
gradiente de sodio y lo expulsa hacia el intersticio.
• La reabsorción de sodio en el TC no se acompaña de reabsorción
de cloruro, como ocurre en otros tramos del nefrón, debido que
aquí el espacio paracelular es menos permeable.
• Esto hace que la luz se torne más negativa.
El potasio sale por los canales hacia la luz, siguiendo su gradiente
de concentración y atraído por las cargas negativas de la luz
tubular.
Los ENaC son sensibles a la hormona aldosterona.
• Un aumento de la aldosterona (un mineralocorticoide) incrementa
la reabsorción de sodio y la secreción de potasio en el TC.
La absorción de agua en el túbulo colector es dependiente de la
hormona antidiurética o vasopresina (HAD).
• En ausencia de HAD, el TC es impermeable al agua. La secreción
de HAD estimula la reabsorción de agua en el TC.
reabsorción y secreción en el nefrón
Parte del nefrón Reabsorción de solutos Reabsorción de agua Secreción

• 99% glucosa, aminoácidos,


vitaminas hidrosolubles.
• 70% Na • H+
TCP • 80% K SÍ • Aniones orgánicos
• HCO3- • Cationes orgánicos
• Ca
• Mg

Asa de Henle (Delgada) Impermeable Sí ----------

• Na
Asa de Henle (Gruesa) Impermeable ----------
• Cl

• Na (aldosterona) • H+
TCD Impermeable
• Cl (aldosterona) • K (aldosterona)

No (s/HAD)
• H+
TC • Na (aldosterona) Sí (c/HAD)
• K (aldosterona)
• Mecanismo de concentración y dilución de la orina
• El filtrado que se produce en el glomérulo es isotónico
con el plasma, ya que la filtración es un proceso no
selectivo. La osmolaridad del plasma es de 300
mOsm/l.
En el TCP hay una importante reabsorción de solutos.
Dado que el TCP es permeable al agua, ésta es
reabsorbida por ósmosis, acompañando a los solutos.
• Por lo tanto, la osmolaridad del filtrado se mantiene.
Pero el líquido tubular se hace hipertónico cuando
llega al asa de Henle descendente, ya que esta parte
del nefrón es permeable al agua, pero no a los solutos.
• Así, el agua escapa hacia el espacio intersticial, en la médula renal,
mientras que los solutos se concentran dentro del túbulo.
• En el extremo del asa, la osmolaridad del filtrado alcanza su
máximo valor, de 1200 mOsm/l.
Este filtrado hipertónico asciende luego por el asa gruesa de Henle
y el TCD.
• Ambos realizan reabsorción activa de iones, pero son
impermeables al agua. La remoción de iones desde el líquido
tubular hacia el intersticio, sin el acompañamiento de agua, vuelve
a diluir el filtrado tubular.
• La osmolaridad del líquido tubular desciende paulatinamente, a
medida que el filtrado asciende por el nefrón hacia la
corteza. Cuando llega al TCD, el líquido es hipotónico.
• El Na+ bombeado fuera de la rama ascendente
vuelve hipertónico el intersticio medular y, como
la rama descendente del asa de Henle no permite
la salida de Na+ pero sí su entrada desde el
intersticio, la osmolaridad de éste aumenta de
manera progresiva.
• El agua, por el contrario, fluye pasivamente desde
la rama descendente del asa hacia el intersticio
medular y, desde éste, hacia la rama ascendente
• La proximidad anatómica entre ambas ramas permite
por consiguiente un flujo de solutos a contracorriente
desde la rama ascendente al intersticio y desde éste a
la rama descendente, efecto que se multiplica a
medida que se profundiza en la región
medular (mecanismo multiplicador de
contracorriente).
• Como resultado, la osmolaridad aumenta tanto en el
interior del túbulo renal como en el intersticio
medular, creándose un fuerte gradiente osmótico
entre la región cortical y la medular.
• El intercambio a contracorriente es el proceso
que permite conservar la hipertonicidad
intersticial creada por el asa de Henle y se basa en
la particular disposición anatómica de los vasos
rectos medulares.
• Si éstos se limitaran a atravesar linealmente la
región medular, perderían agua y ganarían solutos
a partir del intersticio renal hipertónico por simple
difusión, lo cual ocasionaría una disminución
continuada de la hipertonicidad intersticial
• . Por el contrario, los vasos rectos
descendentes (arteriolas) se continúan con los
vasos rectos ascendentes (vénulas), de
trayecto paralelo y sentido contrario.
• En su recorrido descendente, los vasos
pierden agua y ganan solutos, mientras que en
su trayecto ascendente, el agua fluye hacia su
interior y los solutos hacia fuera.
• La sangre que circula por el interior de los
vasos rectos medulares se equilibra en todo
momento con la osmolaridad intersticial.
• Esta disposición en paralelo de los vasos
rectos medulares, y el consiguiente
intercambio de solutos a contracorriente,
evita que la circulación renal disipe el esfuerzo
del asa de Henle en crear una fuerte
hipertonicidad medular
• Además del cloruro de sodio, la urea contribuye
en importante medida a generar la
hipertonicidad del intersticio medular.
• Parte de la urea filtrada que llega al túbulo
colector es reabsorbida desde este último hacia el
asa de Henle y los vasos rectos.
• De esta forma la urea recircula continuamente
por la médula renal, aumentando la
concentración de solutos del intersticio.
• Cuál es la importancia fisiológica de crear un intersticio cada vez más
hipertónico, a medida que se desciende desde la corteza hacia la
médula?
• Obsérvese que la última porción del nefrón, el túbulo colector, realiza este
recorrido. El TC recibe una orina hipoosmótica.
• En ausencia de HAD, el TC es impermeable al agua. Por lo tanto, excretará
una orina hipoosmótica, es decir diluida, con baja concentración de
solutos y gran volumen de agua.
Sin embargo, si el organismo necesita retener agua, deberá excretar la
menor cantidad posible de ésta, concentrando la orina.
Cuando falta agua en el organismo, se estimula la secreción de HAD.
• La HAD hace al TC permeable al agua. Así, a medida que la orina
desciende por el TC, desde la corteza hacia la médula, se encuentra con un
medio cada vez más hipertónico, que ejerce atracción sobre el agua.
• El agua abandona el TC, mediante un proceso osmótico,
hasta lograr una orina concentrada. La máxima
concentración que puede lograrse en el riñón humano es la
que se consigue en el intersticio medular, de 1200 mOsm/l.
La osmolaridad del plasma es captada por osmorreceptores
ubicados en el hipotálamo. Cuando la osmolaridad
plasmática aumenta, los osmorreceptores detectan el
cambio y el hipotálamo pone en marcha los mecanismos
homeostáticos:
- La sed, que alerta sobre la necesidad de incorporar agua.
- La secreción de HAD, que es liberada desde la
neurohipófisis. De esta forma, se reabsorbe agua en TC,
disminuyendo la osmolaridad plasmática.
• El mecanismo de acción de la HAD en el TC
consiste en aumentar el número
de aquaporinas de la membrana apical.
• Este efecto se consigue estimulando la
migración y la fusión con la membrana
plasmática de vesículas citoplasmáticas que
reservan aquaporinas en estado no funcional.
• Composición final de la orina
• La orina excretada es un líquido límpido, de color amarillo ámbar, con
escasos sedimentos.
• Su volumen, osmolaridad, densidad y pH son sumamente variables, ya que
dependen de los mecanismos compensatorios del riñón para mantener la
homeostasis.

• La orina contiene agua; cloruro de sodio; sulfatos; fosfatos de sodio, de


calcio y magnesio y pequeñas cantidades de amoníaco.

• Entre las sustancias orgánicas, las principales son la urea, el ácido úrico, la
creatina, la creatinina, los pigmentos biliares, enzimas y metabolitos de
hormonas.
El análisis de orina tiene un importante valor diagnóstico. Son índice de
alteraciones la glucosuria, la albuminuria y la presencia de células
sanguíneas, entre otros.
• La función de la renina consiste en activar el angiotensinógeno
plasmático, al convertirlo en angiotensina I.
• La angiotensina I, a su vez, es convertida a angiotensina II por la
enzima convertasa, presente en el endotelio de los vasos del
pulmón y otros órganos.
La angiotensina II es uno de los vasoconstrictores más potentes.
• Produce constricción arteriolar y aumenta la presión arterial
sistólica y diastólica.
Además, estimula la secreción de aldosterona en la corteza
suprarrenal, con el consecuente aumento de la reabsorción de
sodio en el túbulo renal.
• Como el sodio arrastra agua por ósmosis, se produce un aumento
de la volemia, contribuyendo aún más al incremento de la presión
arterial.

También podría gustarte