Tema 5
Tema 5
Tema 5
constitucionales
Profa. Dra. Laura Baamonde Gómez
Despacho 5.0.42 Telf. 916248654
lbaamond@der-pu.uc3m.es
Tema 5 Derechos de la esfera personal
Objeto y contenido
“Uno. La libertad religiosa y de culto garantizada por la Constitución comprende, con la consiguiente inmunidad de coacción, el
derecho de toda persona a:
a) Profesar las creencias religiosas que libremente elija o no profesar ninguna; cambiar de confesión o abandonar la que tenía;
manifestar libremente sus propias creencias religiosas o la ausencia de las mismas, o abstenerse de declarar sobre ellas.
b) Practicar los actos de culto y recibir asistencia religiosa de su propia confesión; conmemorar sus festividades, celebrar sus ritos
matrimoniales; recibir sepultura digna, sin discriminación por motivos religiosos, y no ser obligado a practicar actos de culto o a recibir
asistencia religiosa contraria a sus convicciones personales.
c) Recibir e impartir enseñanza e información religiosa de toda índole, ya sea oralmente, por escrito o por cualquier otro
procedimiento; elegir para sí, y para los menores no emancipados e incapacitados, bajo su dependencia, dentro y fuera del ámbito
escolar, la educación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones.
d) Reunirse o manifestarse públicamente con fines religiosos y asociarse para desarrollar comunitariamente sus actividades religiosas
de conformidad con el ordenamiento jurídico general y lo establecido en la presente Ley Orgánica.
Dos. Asimismo comprende el derecho de las Iglesias, Confesiones y Comunidades religiosas a establecer lugares de culto o de reunión
con fines religiosos, a designar y formar a sus ministros, a divulgar y propagar su propio credo, y a mantener relaciones
con sus propias organizaciones o con otras confesiones religiosas, sea en territorio nacional o en el extranjero.
Tres. Para la aplicación real y efectiva de estos derechos, los poderes públicos adoptarán las medidas necesarias para facilitar la
asistencia religiosa en los establecimientos públicos, militares, hospitalarios, asistenciales, penitenciarios y otros bajo su dependencia ,
así como la formación religiosa en centros docentes públicos.”
Libertad ideológica y libertad religiosa
• No obstante, algunas de sus previsiones serían reconducibles a otros derechos, por ejemplo, la
libertad de expresión para la proclamación de las creencias, sin embargo, si el contenido de las
manifestaciones tiene carácter religioso quedará amparado por la libertad religiosa.
• ¿Dónde cabría incluir las respuestas negativas a la fe, es decir, las manifestaciones de ateos y
agnósticos?, ¿en la libertad religiosa o en la libertad ideológica? Pues bien, es parte del contenido
de la libertad religiosa el no profesar ninguna religión pero, a partir de aquí, las actuaciones que se
hagan en este sentido serán manifestaciones de la libertad ideológica y no de la libertad religiosa.
Estas libertades presentan dos tipos de contenidos o facetas:
-Contenido positivo: consiste en tener, o dejar de tener, las ideas o creencias que uno estime más
adecuadas, sin sufrir presión o represalia alguna. Es una garantía de indemnidad. Esto sería la
dimensión interna del derecho, pero hay además una dimensión externa (dentro del contenido
positivo), que consiste en manifestar las propias ideas o creencias, hacer proselitismo, etc. (a esto se
llama libertad de culto en el caso de la libertad religiosa)…
-Contenido negativo: art. 16. 2 CE: prohibición de establecer una obligación de declarar sobre las
propias creencias.
El contenido del derecho debe respetarse a todos, es decir, con independencia de la confesión que se
practique, incluso aunque sea minoritaria.
Libertad ideológica y libertad religiosa
Límites
El límite al ejercicio de este derecho se establece en el art. 16. 1 CE: “el orden público
protegido por la ley”.
TC ha señalado:
-este límite debe aplicarse con especial rigor y con carácter excepcional. Sólo con
carácter excepcional se aplicará de modo preventivo.
-para aplicarse debe estar previsto en una ley: art. 3. 1 LOLR: los elementos constitutivos
del orden público son: la moral, la seguridad y la salud públicas.
Principio de igualdad
• Recogido en el art. 14 CE con carácter general. La religión es una de las “categorías
sospechosas”, por lo que sólo se puede establecer diferencias por motivos religiosos
cuando: los supuestos no sean sustancialmente iguales, cuando la diferencia sea objetiva y
razonable, y las consecuencias de la medida sean proporcionadas a los fines que se
persiguen.
Libertad ideológica y libertad religiosa
Principio de cooperación
• Se establece en el segundo inciso del art. 16. 3 CE. El contenido de esta cooperación no se explicita en la
CE, ni la forma en la que deba llevarse a cabo, por lo que el alcance y naturaleza son decisión del legislador.
• La cooperación está subordinada a los otros dos principios. El TC ha señalado que ésta no implica derechos
subjetivos, sino que es un deber del Estado.
• No puede implicar un comportamiento “parcial” del Estado, sino que debe primar la neutralidad.
• Para que sea conforme a la no discriminación, los criterios para poder optar a ella deben ser objetivos.
• Actualmente hay acuerdo con la Iglesia Católica, islámicos, judíos y evangélicos.
• Podemos distinguir 4 tipos de confesiones en atención a las relaciones de cooperación:
1) Iglesia Católica: mencionada explícitamente por la CE
2) Confesiones con acuerdo: art. 7 LOLR (confesiones inscritas con notorio arraigo en España) Acuerdos entre
la Santa Sede y España, 1979 (Tratado internacional); Acuerdos por Ley desde 1992 con la Federación de
Entidades Religiosas Evangélicas de España, la Federación de Comunidades Israelitas de España y la
Comisión Islámica de España
3) Confesiones registradas: art. 5 LOLR (Registro de Entidades Religiosas del Ministerio de Justicia, la
inscripción supone la adquisición de personalidad jurídica)
4) Confesiones no registradas: sectas destructivas, fuera del ámbito de protección de la LOLR
Jurisprudencia relevante sobre relaciones Iglesia-Estado
• STC 340/1993: cuestión de inconstitucionalidad sobre el art. 76. 1 LAU (de 1964), en el que se plantea la
inconstitucionalidad de la inclusión de la Iglesia Católica junto a entes de Derecho Público, en relación
con la “exención de prueba”. Se establece una desigualdad de trato entre los particulares y la Iglesia
Católica. Se resuelve que la desigualdad de trato a favor de la Iglesia no está justificada, no hay semejanza
sustancial entre situaciones. Además, rompe con el carácter aconfesional del Estado, hay confusión entre
funciones religiosas y estatales. Tampoco sería amparable dentro del principio de cooperación.
• STC 177/2006: militar que abandona la formación al rendir honor a la Virgen. El recurrente pretendía
hacer valer la vertiente negativa de la libertad religiosa. El art. 16. 1 CE garantiza la existencia de un
“claustro íntimo de creencias”, y también faculta a los ciudadanos para actuar conforme a sus propias
convicciones, y mantenerlas frente a terceros. No se trataba de actos de naturaleza religiosa con
participación militar, sino de actos militares destinados a la celebración, por personal militar, de una
festividad religiosa. Hay un conflicto entre el deber de disciplina y el derecho a la libertad ideológica y de
conciencia. El art. 16. 3 CE no impide a las FFAA la celebración de festividades religiosas o la
participación en ceremonias de tal naturaleza!!! Pero el derecho de libertad religiosa, en su vertiente
negativa garantiza la libertad de decidir en conciencia si se desea o no tomar parte en actos de tal
naturaleza. Se trata de una decisión personal a la que no pueden oponerse las FFAA, que en estos casos sí
están vinculados por el mandato de neutralidad del art. 16. 3 CE. Debió respetarse de voluntariedad en la
asistencia. No se reconoció el amparo al no cumplirse con la subsidiariedad.
Jurisprudencia relevante sobre relaciones Iglesia-Estado
• STC 46/2001: Iglesia de la Unificación. La cooperación no se extiende a todas las confesiones religiosas, sólo a las
que tienen arraigo. El Registro no es un instrumento circunscrito a la cooperación, sino que produce efectos
diversos: reconocimiento de personalidad jurídica, confiere determinado status (capacidad de autoorganización,
ejercicio de DF facilitado en su dimensión colectiva…). La inscripción registral no habilita al Estado para realizar
una actividad de control de la legitimidad de las creencias religiosas de las confesiones, sino sólo a comprobar
que la entidad no es ninguna de las excluidas por el art. 3. 2 LOLR y que sus conductas no atenten contra los DDFF
o contra el orden público protegido por la ley. Actuación reglada. Interpretación rigurosa del concepto de orden
público. Cabría su aplicación preventiva ante sectas destructivas (medida justificada, razonable y proporcionada).
Reconocimiento por sentencia firme. Inconsistencia de los fundamentos de peligrosidad de la confesión
analizada, se entiende que se ha vulnerado el derecho.
• STC 154/2002: caso del niño testigo de Jehová que se niega a una transfusión. La existencia de límites a la libertad
religiosa es una manifestación de que los DDFF no son absolutos. Requisitos de los límites: necesidad,
proporcionalidad, respeto del contenido esencial del derecho. Los menores son titulares del derecho a la libertad
religiosa; ejercicio: madurez suficiente, apoyo de quienes ostenten la guardia y custodia o la patria potestad:
siempre en interés del menor. En el caso concreto la decisión del menor no vinculaba a los padres (porque la
decisión implicaba la muerte). Pero la reacción del menor a los intentos de intervención médica ponían de
manifiesto que tenía unas convicciones y una consciencia que no podía ser desconocida ni por sus padres ni por
la autoridad judicial. Los padres acataban en todo momento la decisión judicial de hacer la transfusión. No en el
caso ningún elemento que justifique el límite a la libertad religiosa. El deber de garante de los padres no exigía de
ellos una conducta suasoria o permisiva de la actuación en contra de sus convicciones. Se valora que posibilitaron
sin reservas la actuación de los poderes públicos. Se ha vulnerado el derecho a la libertad religiosa.
DERECHO A LA OBJECIÓN DE CONCIENCIA AL SERVICIO
MILITAR
Art. 30. 2 CE, desarrollado por la Ley de 6 de julio de 1998
• Derecho a ser dispensado de un deber de origen constitucional (art. 30.1 CE: “los españoles tienen el
derecho y deber de defender a España”), en atención a los graves escrúpulos morales que el uso de las
armas provoca a determinadas personas
• DF cuyos únicos titulares son las personas físicas de nacionalidad española (sólo ellas pueden estar sujetas
al servicio militar obligatorio), y cuyo único destinatario es por definición el Estado
• La inactividad inicial del legislador para articular el procedimiento dio lugar al reconocimiento de la eficacia
directa del derecho por el TC, fallando que quedaba suspendida la incorporación a filas de los que se
declarasen objetores (STC 15/1982)
• Actualmente este derecho no tiene vigencia práctica, en la medida en que el legislador ha decidido la no
obligatoriedad del servicio militar. (Gobierno Aznar, 2001)
OBJECIÓN DE CONCIENCIA Y DESOBEDIENCIA CIVIL
• Los derechos al honor, la intimidad personal y familiar y a la propia imagen, son de los
llamados “derechos de a la vida privada”, recogidos en el art. 18 CE, concretamente estos
3 derechos se reconocen en el primer apartado del art. 18 CE.
• Estos tres derechos se protegían incluso antes de la aprobación de la CE por vía civil, ya
que pertenecen a la categoría de los “derechos de la personalidad” del Derecho Civil
(junto con otros, como el derecho al nombre). De hecho, para las relaciones civiles se
aprobó la LO 1/1982 de Protección Civil del derecho al honor, a la intimidad personal y
familiar y a la propia imagen, aunque no existe regulación para los casos en los que el
conflicto o la posible vulneración provenga de los poderes públicos.
• Es decir, estamos ante derechos con clara eficacia horizontal: el sujeto pasivo no sólo es
el Estado, sino también los particulares (realmente en la mayoría de los casos), como
prevé la LO
DERECHO AL HONOR
Valor o bien jurídico protegido
El aprecio social, la buena fama o reputación, es decir, el merecimiento ante los ojos de los demás. Qué sea la
buena reputación, obviamente, depende de las creencias imperantes en cada momento, por lo que puede
variar por razón de espacio y tiempo
Titulares
Está vinculado con la dignidad humana, son titulares todos los seres humanos. Incluso puede ser ejercido por
los herederos del sujeto al que se ha vulnerado el derecho, siempre que la lesión tenga alguna proyección sobre
el ámbito familiar. El TC también ha reconocido que también son titulares del derecho las personas jurídico-
privadas
Contenido
• Es problemático porque determinar, en un caso concreto, cuándo se ha lesionado la buena fama o la
reputación de una persona debe hacerse según las pautas sociales generalmente aceptadas, lo que supone
un amplio margen de apreciación subjetiva.
• Art. 7 LO 1/1982, apartado 7: describe las agresiones al derecho al honor. Son reconducibles a 2 grandes
modalidades:
– La difamación, que es atribuir a la persona hechos falsos
– La vejación, que es denostar o agraviar innecesariamente a la persona
• Protección penal: delitos contra el honor arts. 205 y ss. CP: injurias (expresión que lesiona la dignidad de
otra persona menoscabando su honor) y calumnias (imputación de un delito con conocimiento de su
falsedad o temerario desprecio hacia la verdad).
• Principales problemas: colisión con art. 20 CE (libertades de expresión e información). Ej. no hay atentado al
honor en las actuaciones judiciales, tampoco en la información oficial veraz sobre operaciones policiales.
DERECHO A LA INTIMIDAD
Valor o bien jurídicamente protegido
Es el ámbito “propio y reservado” de las personas, cuya efectiva existencia es necesaria para alcanzar una calidad
mínima de vida humana. Es el ámbito constituido por las cuestiones de índole personal y familiar.
Titulares
Como está vinculado a la dignidad humana, son sujetos titulares del derecho todos los seres humanos, tanto
nacionales como extranjeros.
Respecto a las personas jurídicas, no son titulares del derecho, ya que no tienen vida personal y familiar, que es el
objeto de protección del derecho.
Contenido
• El derecho a la intimidad consiste en la facultad de excluir del conocimiento ajeno cualquier hecho comprendido
dentro del ámbito propio y reservado.
• El problema principal es determinar el alcance exacto de la vida privada y qué son intromisiones ilegítimas en la
intimidad. Para dilucidar esto puede utilizarse:
– un criterio formal, según el cual privado es lo que cada persona decida excluir del conocimiento de los demás;
– o un criterio material, con el que “intimidad” será lo que, según las pautas sociales imperantes se considere reservado o
ajeno al legítimo interés de los demás.
• El TC ha seguido un criterio predominantemente material, aunque en los últimos años ha hecho un giro hacia una
visión más formal, aunque no está aún consolidada. En general, parece que lo preferible es seguir un criterio
predominantemente material, aunque pueda darse relevancia a la actitud previa del interesado.
Abarca: intimidad corporal (informaciones sobre salud y vicisitudes médico-sanitarias), en general no comprende la
faceta patrimonial, al menos frente a los poderes públicos, preferencias y conductas sexuales…
DERECHO A LA INTIMIDAD
Principales límites:
• Libertades de información y expresión del art. 20 CE*: los criterios para determinar el resultado de la ponderación serán de un
lado, la relevancia pública de la información, y del otro, su veracidad -diligencia informativa-
*Problema del uso de la cámara oculta, especialmente relevante en el periodismo de investigación: SSTC 12/2012, 24/1012 y 74/2012.
Se declara la intromisión ilegítima en los derechos a la intimidad y la propia imagen, al considerar el uso de este método de acceso a la
información desproporcionado por su capacidad de intromisión en la vida ajena, sin entrar a valorar que las informaciones fuesen
veraces y tuviesen interés público.
• Seguridad pública: la Ley Orgánica 4/1997, de Videovigilancia*, permite la instalación de videocámaras en las vías públicas para
prevenir la comisión de delitos, previa autorización del Delegado del Gobierno e informe positivo de una comisión presidida por
un magistrado. Además, el art. 22 de la LO 4/2015, de Protección de la Seguridad Ciudadana habilita a la autoridad gubernativa y
a las FCSE para la grabación de personas, lugares u objetos mediante cámaras de videovigilancia fijas o móviles legalmente
autorizadas.
*También en relación con la videovigilancia: en las relaciones laborales, giro en la jurisprudencia del TC (protección de los derechos a
la intimidad y a la protección de datos): no se requiere consentimiento, pero sí información de acuerdo con lo previsto en la normativa
de protección de datos.
-STC 29/2013: concesión de amparo frente a la utilización de imágenes captadas por este método, para un fin, como es el control del
absentismo laboral, del que no se había informado previamente al trabajador.
-STC 39/2016: giro radical, basta la presencia de un cartel (“Zona Videovigilada”). Sentencia polémica, hay votos particulares.
Protección penal: “Del descubrimiento y revelación de secretos”, arts. 197 y ss. CP.
DERECHO A LA PROPIA IMAGEN
Valor o bien jurídicamente protegido
Está identificado con el ámbito reservado de las personas (aunque constituye un derecho fundamental autónomo
a los anteriores), en este caso, en su vertiente corporal: imagen es el aspecto físico de la persona, incluso cuando
no tenga nada de íntimo o no afecte a su reputación.
La visión tradicional del derecho a la propia imagen lo configura como una manifestación del derecho a la
intimidad, de modo que el bien jurídicamente protegido sería el aspecto físico de la persona, en tanto pueda
calificarse de íntimo o reservado. Sin embargo, en los últimos años, ha pasado a considerarse que el derecho a la
propia imagen es un derecho autónomo, de manera que, el aspecto físico de la persona está protegido incluso
cuando no tenga nada de íntimo o no afecte a su reputación.
(Ojo ¡!!!, El TEDH no considera que el art. 8 CEDH contenga un derecho autónomo a la propia imagen, sino que
ésta sólo está protegida cuando esté conectada a la intimidad.)
También la voz se considera aspecto físico, y por tanto está protegida por el derecho a la propia imagen.
El TC ha entendido que a la hora de valorar la reproducción o utilización de la imagen de una persona lo decisivo
es su consentimiento, aunque puede haber excepciones por razones de interés público.
Titulares
Todas las personas, incluidos los extranjeros, pero no las personas jurídicas.
CONFLICTOS COMUNES A LOS TRES DERECHOS: colisión con las libertades de expresión e
información del art. 20 CE:
• personas con relevancia pública (por su trabajo): preferencia de las libertades informativas
si la información tiene que ver con su trabajo o con la actividad por la que la persona tiene
notoriedad. *Famosos: en general, cabe primar la información, pero con límites: insulto y
veracidad de la información
• Con este artículo (que contiene varios derechos) se reconoce la existencia de una esfera privada, en la
que los demás no pueden entrar sin el consentimiento de la persona.
• El principal rasgo compartido de estos derechos es que están configurados como “garantías formales
de intangibilidad”. Lo que se considera digno de protección es la limitación de acceso en sí mismo
(frente a intromisiones), con independencia de cualquier consideración material. Lo decisivo no es el
contenido sino el continente. Por eso, cuando el titular del domicilio o la comunicación permite el
acceso a otro queda excluida cualquier vulneración de los apartados 2 y 3 (aunque no del 1,
intimidad).
Derechos de la vida privada
Inviolabilidad del domicilio, secreto de las comunicaciones y protección de datos personales
Otras tres características compartidas:
• Reserva de jurisdicción: “salvo resolución judicial”: la finalidad es excluir cualquier intromisión gubernativa o
administrativa. La intromisión debe ser siempre acordada por un juez que valore las circunstancias de cada
caso. Así, en estos casos no estamos sólo ante el ordinario control judicial de las actuaciones administrativas,
sino que añade un control judicial preventivo. La resolución judicial (auto) debe ser motivada con respecto a
las circunstancias del caso y proporcional. (En relación con el art. 55. 1 CE: estados de excepción y sitio y el
art. 55. 2 CE: LECrim, en caso de bandas armadas o elementos terroristas puede realizarse la intervención con
comunicación posterior al juez).
• Estos derechos están garantizados por la “regla de la exclusión”, es decir, las pruebas que se hayan obtenido
con la vulneración de estos derechos no podrán ser utilizadas (Teoría del fruto del árbol envenenado, origen
USA)
INVIOLABILIDAD DEL DOMICILIO
Valor o bien jurídico protegido
Es un espacio en el cual el individuo vive, sin estar sujeto necesariamente a los usos y convenciones sociales y ejerce su libertad
más íntima (STC 22/1984).
Esto quiere decir que el concepto constitucional de domicilio no coincide con el tradicional de Derecho Privado* (art. 40 CC:
“Para el ejercicio de los derechos y el cumplimiento de las obligaciones civiles, el domicilio de las personas naturales es el lugar
de su residencia habitual, y en su caso, el que determina la Ley de Enjuiciamiento Civil”).
Concepto autónomo y más amplio porque pretende proteger el espacio donde se desarrolla la vida privada. Así, el TC ha
entendido aplicable el art. 18. 2 CE a las habitaciones de hotel (STC 10/2002), las habitaciones en las residencias militares (STC
189/2004), tiendas de campaña. En principio cualquier espacio cerrado en el que la persona desarrolla su vida privada, incluso
de manera provisional, es domicilio a efectos constitucionales. Excepción: las celdas de prisiones, donde puede haber un
intenso control de la Admón.
*Sin embargo no puede considerarse domicilio cualquier propiedad privada.
Además, el TC ha interpretado de manera amplia qué debe entenderse por penetración en el domicilio, incluyendo la captación
visual o auditiva de los acontecimientos que tienen lugar en el domicilio mediante aparatos electrónicos, mecánicos u análogos.
Titulares
Todas las personas, nacionales o extranjeras, físicas y jurídicas.
Sujetos pasivos
Fundamentalmente los poderes públicos.
Respecto de los particulares se articula a través de la protección penal con la tipificación del delito de “allanamiento de
morada”, dentro de los “Del allanamiento de morada, domicilio de personas jurídicas y establecimientos abiertos al público”,
arts. 202 y ss.
INVIOLABILIDAD DEL DOMICILIO
Objeto y contenido
Tal y como establece el art. 18. 2 CE, la entrada en un domicilio sólo es lícita si concurre una de estas
circunstancias:
• consentimiento del titular: no plantea grandes problemas cuando el consentimiento lo presta el titular o una
persona inequívocamente habilitada por él o con quien mantenga una convivencia normal (cónyuge, hijos
mayores…), pero si quien da la autorización no tiene una habilitación clara, no se cumple el requisito. El
consentimiento del titular prima sobre la voluntad de cualquier otra persona que habite en la casa, es decir,
puede revocar el consentimiento dado previamente
• autorización judicial: como ya hemos visto, tendrá que ser siempre motivada, el juez tendrá que ponderar las
circunstancias e intereses en juego en el caso concreto
• flagrante delito: el TC ha dicho que es “evidencia del delito y urgencia de la intervención policial”, donde la
“evidencia” percepción directa y “urgencia” es el carácter inaplazable de la intervención.
Además de estos casos, la LO 4/2015, de Protección de la Seguridad Ciudadana, en su art. 15. 2, prevé como
causa para entrar “la necesidad de evitar daños inminentes y graves a las personas y a las cosas, en supuestos de
catástrofe, calamidad, ruina inminente u otros semejantes de extrema y urgente necesidad”, en cuyo caso debe
darse inmediata cuenta a la autoridad judicial. Debe tenerse en cuenta que esto sólo puede justificarse en
términos de efectivo estado de necesidad (por otro lado ya previsto como eximente en materia penal, y
reconocido por el TC en la STC 341/1993).
SECRETO DE LAS COMUNICACIONES
• Modificación de la LECrim por la LO 13/2015: arts. 579 a 588 octies: mucho más detallada en cuanto a los
medios que puedan utilizarse, e incorpora la jurisprudencia constitucional en la materia, STC 49/1999 entre
otras).
• sólo la comunicación indirecta que ha de valerse de un medio técnico está protegida por el art. 18. 3 CE. No
lo está la comunicación directa (la conversación recogida por un micrófono, que ahora está prevista en la
LECrim -aunque en un capítulo separado al de la interceptación de comunicaciones- no lo estaría, aunque el
TC ha dicho que sí en el caso de una celda. Se lesionarían otros derechos como la inviolabilidad del domicilio o
la intimidad)
• protegido por el secreto no están sólo el soporte y el mensaje, sino también las circunstancias de la
comunicación, como el momento, la duración, o la identidad de los comunicantes.
• el secreto no rige entre los comunicantes (sin perjuicio de vulnerar el derecho a la intimidad, situaciones de
intimidad compartida)
• el secreto admite grados según las características del medio empleado: quién envía una postal no puede
esperar el mismo nivel de secreto que quien envía una carta en un sobre cerrado
Titulares
Nacionales y extranjeros, personas físicas y jurídicas.
SECRETO DE LAS COMUNICACIONES
Sujetos pasivos
Los poderes públicos.
En relación con los particulares, se articula a través de la protección penal: “Del
descubrimiento y revelación de secretos”, arts. 197 y ss. CP.
Objeto y contenido
Consiste en la libertad de comunicarse con otros a través de los medios técnicos a
disposición del público y en excluir a los demás de la comunicación.
El secreto sólo puede ser dispensado por uno de los comunicantes o una autorización
judicial.
• El objetivo del constituyente es poner coto a los eventuales abusos en el empleo de las nuevas
tecnologías. Una preocupación no sólo de los Estados nación, sino también de las organizaciones
supranacionales. Si bien por su fecha de redacción el CEDH no lo prevé expresamente, la limitación
al tratamiento de datos se considerada incluida dentro de la noción de vida privada del art. 8
CEDH, además, en el seno del Consejo de Europa se elaboró el Convenio sobre Protección de Datos
Personales de 1981
• Artículo 8 CDFUE: “Protección de datos de carácter personal 1. Toda persona tiene derecho a la
protección de los datos de carácter personal que la conciernan. 2. Estos datos se tratarán de modo
leal, para fines concretos y sobre la base del consentimiento de la persona afectada o en virtud de
otro fundamento legítimo previsto por la ley. Toda persona tiene derecho a acceder a los datos
recogidos que la conciernan y a su rectificación. 3. El respeto de estas normas quedará sujeto al
control de una autoridad independiente.”
PROTECCIÓN DE DATOS PERSONALES
Nuevo marco jurídico: Reglamento General de Protección de Datos
(Reglamento UE 2016/679):
*STC 172/2020:
– Declara la inconstitucionalidad y nulidad del inciso “no
autorizado” (constituye censura previa)
– En lo demás es conforme a la CE siempre que el término
“uso” se interprete en el sentido de que para apreciarse
infracción grave es necesaria la publicación o difusión ilícita,
no bastando la mera captación no seguida de publicación o
difusión.
Novedades normativas en relación con los derechos de la
vida privada: