Su amor por la naturaleza influye en su nombre artístico: ama las flores rojas y carnosas del banano, del que extrajo el pseudónimo con que se le conoce en el mundo: Banana.
El jugo extraído de las raíces carnosas, como así también los tallos jóvenes hervidos, se suministraban para tratar a los pacientes con cirrosis.
La columna ligeramente arqueada, cilíndrica de unos 10 mm de longitud Las raíces no muy flexibles son gruesas, carnosas y glabras.
Esta capacidad para almacenar nutrientes constituye un método de supervivencia en caso de condiciones adversas, como una prolongada sequía o una temporada estival demasiado calurosa. Bulbo: la función reservante es ejercida principalmente por hojas engrosadas y carnosas.
Muestra un hábito de desarrollo monopodial. El rizoma se desarrolla erecto y en su extremo produce dos gruesas y carnosas hojas alternas y elípticas cada año.
Las ventajas de este comportamiento pueden haber influido en la evolución de las plantas hacia unas frutas más carnosas, utilizando más energía rodeando la semilla con una pulpa rica en azúcares en pos de conseguir una mayor diáspora vegetal.
Tanto el macho como la hembra tienen la cabeza desnuda y un plumaje de color cobrizo, negro, castaño o blancuzco, pero el macho posee unas excrecencias carnosas, llamadas carúnculas, que cuelgan de la cabeza y el cuello, y un destacado mechón de plumas colgando del pecho.
A partir de entonces, los botánicos han registrado calentamiento endotérmico e incluso termorregulación en las flores, inflorescencias o estróbilos de varias familias de plantas espermatófitas primitivas. Estas plantas poseen flores grandes y carnosas que, a menudo, son polinizadas por escarabajos, abejas o moscas.
as comelináceas (nombre científico Commelinaceae) forman una familia de plantas monocotiledóneas representadas por hierbas carnosas, a veces suculentas, con hojas planas o con forma de V en el corte transversal, en la base de las hojas con una vaina cerrada.
Se trata de una flor que crece en pequeños grupos en las praderas alpinas y roquedos de altura de las cordilleras europeas, de no más de 10 cm de altura, con brácteas gruesas, carnosas y cubiertas de una fina pelusa, con un color blanco y tonalidades verdosa o amarillenta.
La variedad de mesa es de raíces gruesas, rojas y carnosas, que se consumen principalmente cocidas; el color se debe a dos pigmentos, la betacianina y la betaxantina, que resultan indigeribles, tiñen el bolo alimenticio, los excrementos y la orina de ese color.
Hojas opuestas u ocasionalmente alternas, usualmente paripinnadas, a veces simples o 2-folioladas, raramente 3–7-folioladas, persistentes, frecuentemente carnosas a coriáceas, pecioladas a subsésiles; folíolos enteros u ocasionalmente lobados, inequiláteros, peciolulados a subsésiles; estípulas apareadas, libres, persistentes o raramente caducas, foliáceas o carnosas o espinescentes.