Los desesperados testimonios de quienes, como Provo, sólo veían el derrumbe y no únicamente del imperio, lo constatan con sus apéndices y sus glosas.
Después, un escriba español añadió glosas en escritura alfabética y en español interpretando lo plasmado con ayuda de intérpretes indígenas.
El Corán ha sido traducido a muchos idiomas, pero las traducciones no son consideradas por los musulmanes como copias auténticas del Corán, sino simplemente como «glosas interpretativas» del libro; por lo tanto no se les da mucho peso en los debates relativos al significado del Corán.
Respecto del nacimiento, en el Monasterio de Santo Domingo de Silos se conserva un beato muy antiguo, el Beato de Silos. En dicho Monasterio se encuentran las Glosas Silenses.
Diego Ortiz: Tratado de glosas sobre cláusulas y otros géneros de puntos en la música de violones nuevamente puestos en luz, Roma, 1553.
En general, las traducciones a otras lenguas son tenidas como simples glosas, en tanto interpretaciones, de las palabras directas de Dios.
Evidencias de estos y otros cambios pueden verse a finales del siglo III en Appendix Probi (enlace externo), una colección de glosas prescriptivas que proponían un latín clásico de uso correcto, criticando ciertas formas del latín vulgar.
En noviembre de 2010, la Real Academia Española avaló los cartularios, escritos en «una lengua latina asaltada por una lengua viva», como los primeros documentos en los que aparecen palabras escritas en castellano, anteriores a las Glosas Emilianenses.
Estas glosas describen: un proceso de síncopa, la pérdida de vocales átonas (MASCVLVS NON MASCLVS); la reducción de las previas formas silábicas /e/ e /i/ en /j/ (VINEA NON VINIA); la nivelación de la distinción entre /o/ y /u/ (COLVBER NON COLOBER) y /e/ e /i/ (DIMIDIVS NON DEMEDIVS); la regularización de formas irregulares (GLIS NON GLIRIS); la regularización y el énfasis de formas de género (PAVPER MVLIER NON PAVPERA MVLIER); la nivelación de la distinción entre /b/ y /v/ entre vocales (BRAVIVM NON BRABIVM); la substitución de diminutivos por palabras no marcadas (AVRIS NON ORICLA, NEPTIS NON NEPTICLA) la pérdida de sílaba cuando termina nasalizada (MENSA NON MESA) o su inserción inapropiada como forma de hipercorrección (FORMOSVS NON FORMVNSVS).
En España, los primeros textos escritos en lengua romance fueron las glosas del monasterio de San Millán de la Cogolla, a las que siguieron las jarchas mozárabes; posteriormente surgieron los «cantares de gesta», como el Cantar de Mío Cid (1140).
El 27 de diciembre de 2009, la agencia EFE informó de un estudio del Instituto Castellano y Leonés de la Lengua (ILCYL), que afirma que los Cartularios son textos clave para entender «la disolución del latín y la formación de las estructuras prerromances». Glosas Emilianenses Glosas Silenses Cartulario Cuna del Castellano Sustrato vasco en lenguas romances Emiliana Ramos Remedios, Los Cartularios de Santa María de Valpuesta.
Como se puede ver, en los rasgos gramaticales del latín vulgar están presentes ya las principales señas de identidad de las lenguas románicas; en el siglo VI, un latín fuertemente vulgarizado morirá como lengua (quedando sólo como herramienta culta para la ciencia) y de él empezarán a surgir variantes que, con el tiempo, se convertirán en las diferentes lenguas románicas Otra perspectiva de los cambios de vocabulario en el latín vulgar en Francia puede verse en las glosas de Reichenau, escritas en los márgenes de una copia de la Biblia Vulgata, que explica las palabras vulgatas del siglo IV cuya lectura era ininteligible en el siglo VIII, cuando parecen haberse escrito dichas glosas.