Basically a voyeur.
Siempre en busca de historias.
No pude conectar porque todo lo que decían parecía que lo estaban leyendo.
Las mujeres sabemos desde muy chicas los mandatos sociales que existen al rededor de nuestros cuerpos. La película no hace juicio de valor, solo se avienta al cuento de hadas demente de poder ser otra, o aquella que fuiste.
Una rueda que comienza a girar frenéticamente hasta regalarnos un final grosero, divertido y catártico.
¡Que llueva sangre!
Tensión comédica a tope en un dramón.
Amo.
Con Ruben Östlund puedo contar para que, con sutilidad, me provoque las risas más estruendosas en momentos incómodos.