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En este artículo se examinan de manera sistemática las formas de gobierno, según lo enseña Platón en sus tres diálogos de ciencia política. Cinco formas en la República, siete en el político, y dos en las Leyes, que es la síntesis de todo el estudio del pensador griego: La monarquía y la democracia. "Es necesario e imprescindibledice Platón-que los sistemas políticos participen de estos dos ". He ahí, el origen del gobierno mixto que rige hoy en todos los países del mundo.

VIGENCIA DEL PENSAMIENTO POLÍTICO DE PLATÓN EN LAS FORMAS DE GOBIERNO. RESUMEN En este artículo se examinan de manera sistemática las formas de gobierno, según lo enseña Platón en sus tres diálogos de ciencia política. Cinco formas en la República, siete en el político, y dos en las Leyes, que es la síntesis de todo el estudio del pensador griego: La monarquía y la democracia. “Es necesario e imprescindible – dice Platón- que los sistemas políticos participen de estos dos “. He ahí, el origen del gobierno mixto que rige hoy en todos los países del mundo. PALABRAS CLAVE Platón, formas de gobierno, aristocracia, tiranía, oligarquía, monarquía y democracia. INTRODUCCIÓN Pocos filósofos, como Platón, nos han legado una obra tan extensa en temas y tan profunda en su contenido. Pero algo más tiene la obra de pensador ateniense. Fue escrita a prueba de todas las inclemencias del tiempo, pues transcurridos veinticinco siglos ha llegado intacta hasta nuestros días. De muchos temas se ocupó Platón: de la belleza, la astronomía, la naturaleza del hombre, la ecología, del deber de la sabiduría moral, del valor, de la amistad, del amor, de la piedad, de la retórica, de la lingüística, de la ciencia, del ser, etc. Sin embargo, el verdadero sueño de Platón fue la política. En las demás materias hay un cumulo de debates, controversias y discusiones, pero también mucho de figuras poéticas y fantasías. En cambio, fue por la política por la que Platón vivió, estudio, viajo, fue hecho esclavo y prisionero. Basta leer su propio testimonio: “cuando yo era joven, sentí lo mismo que le pasa a otros muchos. Tenía la idea de dedicarme a la política tan pronto como fuera dueño de mis actos”. Y aunque en la praxis política no tuvo éxito, en el estudio, la investigación y la producción teórica alcanzo la gloria. Esta inmortalidad no es gratuita, pues a la política le dedico, por una parte, todo su esfuerzo personal y sus recursos económicos para crear y sostener la Academia; y por la otra, casi toda su obra escrita, de manera especifícala Republica, el Político, Las leyes, Critias o Atlántida y sus doce cartas, aunque también contienen una lata dosis de política Apología y sus diálogos Menéxeno y Sofista. El pensamiento político del Platón, a su vez comprende muchos temas: la fundación del Estado, la justicia, la educación, la formación del gobernante, la guerra, el papel de la mujer en la organización política de la sociedad, la corrupción, la libertad y la esclavitud, para no mencionar más. Pero este artículo solamente se ocupa de las formas de gobierno, por ser un tema en el que se ve de una manera muy clara y objetiva la vigencia del pensamiento político del filósofo ateniense. PROBLEMA DE LA INVESTIGACION ¿El marco del pensamiento político de Platón, tienen alguna vigencia las formas de gobierno que propuso el filósofo griego? METODOLOGIA En la investigación adelantada para escribir este artículo, se utilizaron los métodos históricos y analítico-deductivo fue determinante para examinar el material bibliográfico consulado. Los documentos que sirvieron de apoyo medular fueron los diálogos, la Republica, el Político, las Leyes y Menéxeno de Platón, con las que hoy existen. CONTENIDO Para apreciar el aporte que Platón hizo a la ciencia política, y concretamente sobre la síntesis de las formas de gobierno –monarquía y democracia- y su permanencia en los actuales sistemas, es necesario ir al estudio que sobre este tema hizo Platón en los tres diálogos dedicados al Estado: Republica, Político y las Leyes. En consecuencia, es la tarea que asumen las páginas que vienen a continuación siguiendo el mismo orden en que Platón escribió estas tres obras. REPUBLICA En el dialogo Republica Platón describe cinco formas de gobierno, que corresponde a cinco tipos de personalidad. Entre estas cinco formas de gobierno, se halla en primer lugar, el gobierno, se halla en primer lugar, el gobierno que nace del Estado fundado por Platón, calificado de excelente. Y además de este régimen, hay muchas formas malogradas de gobierno, aunque solo cuatro de ellas son dignas de mención, según las propias palabras del pensador griego. Esas cuatro formas malogradas de gobierno, pero que por su importancia, según Platón, merecen tenerlas en cuenta son: timocracia, oligarquía, democracia y tiranía. Siguiendo la caracterización que Platón hace de cada uno de estos regímenes de gobierno, así como de sus respectivos gobernantes, de manera muy breve se analizan a continuación. En relación con el régimen del gobierno de Platón, en la parte final del libro IV de la Republica, el filósofo ateniéndose por intermedio de Sócrates, dice que el gobierno que corresponde al Estado que han fundado y descrito, es uno pero que podría llamarse de dos maneras: monarquía o aristocracia. “A si –dice Platón-, si entre los gobernantes surge uno que se destaca de los demás, lo llamaremos monarquía, mientras que, en caso de que sean varios, aristocracia”. Según Platón esta especie de gobierno es única, y aunque sean varios los gobernantes, no cambiaran las leyes del Estado de manera abrupta, por que han recibido una buena educación. Las primeras palabras del libro V son para decir que a semeje forma de gobierno, se llama “buena receta”, así como el hombre que se ocupa de ese régimen, mientras que las otras cuatro son malas y erróneas, tanto en lo relativo a la administración del Estado, como en el carácter del alma individual de quien lo gobierna. En términos generales este régimen de gobierno tiene unas características muy especiales en la manera de ejercer la administración. La mujer tiene participación en el ejercicio del poder, con igualdad de derechos y obligaciones que el hombre. Que los hombres y mujeres lo hagan todo en común, con la excepción de tratarlas a ellas como más débiles u a ellos como más fuertes. Pero para que las mujeres puedan competir con los hombres, es preciso darles la misma educación que se imparten a los varones, como la formación que tiene que ver con las artes y la guerra. La igualdad entre los hombres y mujeres para ejercer el cargo de guardianes y guardianas, conlleva la obligación de ejercer en común todas sus ocupaciones. Esto a su vez determina que todas estas mujeres deben ser comunes a todos estos hombres, ninguna cohabitara en privado con ningún hombre, y los hijos también serán comunes: ni el padre conocerá al hijo ni el hijo al padre. Esta es la parte más utópica del sueño político de Platón, que es el único sueño del pensador ateniense. Todos los demás temas en Platón, son muy importantes, pero hay en ellos, como ya se dijo, mucho de especulación, fantasía, metáfora y cantares poéticos. En cambio el verdadero proyecto de vida de Platón fue la política. Sin embargo, esta parte de sus proyectos de vida –la comunidad de hombres, mujeres y niños-, es definitivamente irrealizable, en el omento en que vivió Platón, y ahora La timocracia nace a partir de la aristocracia, es decir del régimen de gobierno que corresponde al Estado fundado por Platón, y es un sistema intermedio entre la aristocracia y la oligarquía. Se pasa de la aristocracia a la timocracia por el hecho elemental de que todo régimen político se transforma a partir de los que detentan el poder, cuando entre ellos mismos se produce una división, pues mientras sus relaciones se desarrollan en armonía no hay cambio alguno. Siguiendo el método dialectico, Platón se hace estas preguntas: ¿Cómo será perturbado el Estado que hemos fundado, la aristocracia?, ¿Cómo entraran en discordia los gobernantes y los auxiliares unos con otros y consigo mismos? Recurriendo a un pasaje de la Ilíada de Homero, se pregunta ¿cómo se produjeron las primeas crisis dentro del Estado? Luego de esos agudos interrogantes Platón contesta de manera magistral, como es la naturaleza de la crisis del Estado. Según el pensador político, es difícil que un Estado como el que junto con los contertulios del dialogo ha fundado, no sea perturbado y entre en crisis. La esencia de esa crisis, se halla en la corrupción, la movilidad y el cambio, que Platón explica así: “Dado que todo los generado es corruptible, esta constitución no durara todo el tiempo, sino que se disolverá, porque no solo en el caso de las plantas que viven en la tierra, sino también en el de los seres vivos que se mueven sobre la tierra, hay fecundidad de almas y de cuerpos” La oligarquía, según Platón, el régimen basado en la tasación de la fortuna, en el cual mandan los ricos, y los pobres no participan del gobierno. ¿Cómo se produce el tránsito de la timocracia o timarquia a la oligarquía? Platón explica que la causa de esta transición es la riqueza, porque los gobernantes descubren otras maneras de gastar el dinero y para ello corrompen las leyes, desacatándolas, tanto ellos como sus mujeres. Cada corruptor mira al otro, y logran que la mayoría actúen del mismo modo. Cuando más crezca el apetito pot la riqueza, más menosprecia la excelencia por el gobierno. “por ende –dice Platón- , cuando más se veneran en un Estado las riquezas y los hombre ricos, en menos se tiene la excelencia y los hombre buenos”. Se trata de un régimen donde los hombres que asían imponerse y recibir honores y terminan por convertirse en amigos de la riqueza y del acrecentamiento de esta, administran a rico y lo llevan al gobierno, despreciado al pobre. La única condición para gobernar es la riqueza, pues así lo señala la propia constitución, de tal manera que el gobernante no tiene ninguna formación para cumplir acertadamente con sus funciones. En el régimen oligárquico de la sociedad se halla radicalmente dividida en dos, que según Plantón constituye dos Estados. En suma, en el régimen oligárquico casi todos son mendigos a excepción de lo que gobiernan. Enseña Platón que la democracia nace de la oligarquía, porque la codicia insaciable del hombre oligárquico lo lleva a considerar que el único bien, es la acumulación de riqueza. Entonces el pobre al observar el atesoramiento de bienes, piensa que la oligarquía ha logrado ese propósito por la pereza de los pobres, y cuando estos reúnen en privado se transmiten unos a otros la siguiente consigna: “estos hombres son nuestros, pues no son de valía alguna”. Explica Platón ese tránsito, diciendo que así como un cuerpo enfermizo necesitan solo un pequeño estimulo externo para volcarse hacia la enfermedad, y a veces incluso sin lo externo estalla una revuelta en su interior, así el Estado oligárquico se halla propenso a una revolución sin necesidad de agentes externos “entonces la democracia surge –dice Platón-, cuando los pobres, tras lograr la victoria, matan a unos y desentierran a otros, y hacen participes a los demás del gobierno y las magistraturas, las cuales la mayor parte de las veces se establecen en este tipo de régimen por sorteo.” El régimen democrático se caracteriza por que en el abunda la libertad para todos los ciudadanos, particularmente la libertad de palabra y la libertad de hacer en el Estado lo que cada uno quiera. La Libertad es considerada como el valor más bello, y para quien se sienta libre por naturaleza, el régimen democrático es el escenario propicio para llevar una vida feliz. Y el as hermoso concepto de la democracia, lo deja Platón en palabras de Sócrates, quien señala: “puede ser que este sea el más bello de todos los regímenes. Tal como un manto multicolor con todas las flores bordadas, también este régimen con todos los caracteres bordados podrá parecer el más bello. Y probablemente, tal como los niños y las mujeres que contemplan objetos policromos, muchos lo juzgarían el más bello” A pesar de que el Estado que funda Platón en su dialogo Republica, es la monarquía, si el gobierno es ejercido por una sola persona, o aristocracia si es ejercido por varios, considera que la democracia es un régimen propicio para dar nacimiento al sistema político que él se propone construir. ¿Por qué? Porque la democracia cuenta con todo género de constituciones, debido a la libertad; “y es posible que quien quiera organizar un Estado, como nosotros acabamos de hacer deba dirigirse a un Estado democrático, y allí, cómo si hubiese llegado a un bazar de constituciones, escoger el tipo que más le agrade y, una vez escogido, proceder a su fundación”. Pero algo más: este régimen proporciona una exquisita tranquilidad a los hombres que han sido juzgados y condenados, aun a la pena de muerte o al exilio. El régimen democrático se divide en tres partes: la burocracia, los ricos y el pueblo. La burocracia es la que marcha a la cabeza del Estado, es el sector más feroz, el que habla y actúa y no tolera que se haga crítica alguna al Estado, y todo es administrado por este tipo de gente. En el sector de los ricos todos tienen afán de lucro, y en todo momento se separan de la muchedumbre. El tercer sector es el del pueblo, o sea, todos aquellos que trabajan para sí mismo y no ocupan cargos públicos y poseen pocos bienes. Es el género más numeroso y en consecuencia, cuando se congrega, es la mayor autoridad de la democracia, pero con frecuencia no está dispuesto a hacerlo, a menos que tenga alguna contraprestación. Así como la democracia nace de la oligarquía, la tiranía nace a parir de la democracia, por la degradación o relajamiento de la libertad. Es la anarquía total, no sola en el manejo del Estado, sino en la propia familia y en la escuela. El hijo quiere ser semejante al padre y no tiene temor ni respeto por sus progenitores. El maestro teme y adula a sus alumnos y estos hacen caso omiso a las orientaciones y enseñanzas del educador. Cuando así ocurre, los gobernantes del Estado democrático se embriagan más de la cuenta con el vino de la libertad entonces el pueblo castiga y los acusa de criminales y oligárquicos. “Es razonable, entonces –dice Platón-, que la tiranía no se establezca a partir de otro régimen político que la democracia, y que sea a partir de la libertad extrema que surja la mayor y más salvaje esclavitud”. El pueblo tiene cierto grado de responsabilidad, pues preferentemente pone a la cabeza de la inconformidad a un individuo, lo alimenta y lo hace creer en grandeza. Es evidente que aquí nace el tirano, de un liderazgo que le genero el pueblo. A continuación de este razonamiento, Platón, con su acostumbrado método de recurrir a las figuras, hace una comparación entre el tirano y el lobo. Los analistas de la teoría política a través dela historia, que no han leído la Republica atribuyen la originalidad de esta figura a Hobbes, en parte porque el autor del Leviatán no tuvo la generosidad y la ética de darle el crédito a Platón. En un solo pasaje dos veces utiliza Platón la figura del lobo. “cuando alguien gusta de entrañas humanas descuartizada entre otras de otras víctimas, necesariamente se ha de convertir en lobo”. Y remata la descripción con esta conclusión “es forzosamente fatal que semejante individuo perezca a manos de su adversarios o que se haga tirano y de hombre se convierta en lobo” Al finalizar el libro VIII de la república, Platón hace una profunda reflexión e sociología, política, más honda aun, de lo escrito hasta ahora. En una de estas parábolas magistrales, el pueblo es como el padre de esta desfiguración de la criatura humana que es el tirano. Entonces el pueblo engendra al tirano y lo alimenta a él, y a su sequito. Cuando el patrimonio crece en despotismo y represión contra el pueblo, este se enfurece y quiere expulsar al tirano del poder, pero para entonces ya es demasiado tarde, porque en la medida en que el pueblo se hace más débil, el tirano ha ganado en fortaleza. Al final de la descripción figurada, el tirano termina siendo parricida y represor de la vejez. EL POLÍTICO El debate de Patón hace en el político sobre las formas de gobierno no es tan extenso e intenso como el que adelanto en la Republica, pero no por eso deja de tener importancia. En el dialogo político Platón enseña que hay tres formas de gobierno: el gobierno de uno, el gobierno de pocos, el gobierno de muchos. El gobierno de uno es la monarquía, el gobierno de unos pocos es la aristocracia y el gobierno de la muchedumbres la democracia. Y veinte páginas más adelante, llega a la conclusión de que no son 3 si no 7, incluyendo el régimen excelente, que corresponde a la propuesta de Platón. “si ahora seccionamos en dos cada uno de estos gobiernos, tendremos 6, tras haber diseminado al régimen recto y haberlo puesto aparte de estos como el séptimo”. Y enseguida explica, como es que de cada régimen resultan dos sistemas de gobierno. De la monarquía resultan, el gobierno real y la tiranía; del gobierno ejercido por quienes son muchos, proceden la aristocracia, cuyo nombre es de buenos auspicios, y la oligarquía. Y finalmente, -dice Platón- al gobierno ejercido por mucho lo considerábamos antes simple, llamándolo “democracia”, pero ahora, “en cambio, también a él debemos considerarlo doble”. Así pues, las siete formas de gobierno, en el político son: monarquía, tiranía, aristocracia, oligarquía, democracia legal, democracia al margen de la ley y el gobierno excelente o perfecto que es el que propone Platón. El elemento que determina si un gobierno es bueno o malo, más bien sea de uno, de pocos, de muchos, es la ley. La monarquía, cuando está unida al yugo de esos buenos escritos, denominados leyes, es, de los seis regímenes, el mejor de todo; sin la ley, en cambio, es la tiranía, la más difícil y la más dura de sobrellevar. El gobierno de pocos, se ejerce conforme a la ley, es la aristocracia se hace el margen de la ley, es la oligarquía. En cuanto al gobierno de la muchedumbre, es decir, la democracia, no es ni “ni bueno ni malo, en comparación con los demás, porque en él la autoridad está distribuida en pequeñas parcelas entre numerosos individuos. Por lo tanto, de todos los regímenes políticos que son legales, este es el peor, pero de rodos los que no observan las leyes, es el mejor” Concluye Platón en este tema de los regímenes de gobierno, señalando que de todos los sistemas, de lejos sería mejor vivir en el primero, si se exceptúan el séptimo. “a este, en efecto, no cabe duda que hay que ponerlos aparte –como a un dios frente a los hombres- de todos los demás regímenes políticos”. LAS LEYES Quizás habían transcurrido treinta o cuarenta años desde el momento en que Platón había escrito la Republica cuando aterroriza en las Leyes. Por eso es una antología el avance que el filósofo logra en este tipo de dialogo sobre las formas de gobierno. Y es florilegio por dos razones: porque se encuentra en síntesis de la forma de gobierno estudiadas en la Republica y en el Político, y por qué en las leyes esta la fuente prístina del gobierno mixto, que rige hoy en todo el mundo, aun en los regímenes tiránicos. En efecto en el introito de la investigación de las formas de gobierno en las leyes, Platón dice:” No hay que legislar gobiernos con poderes, ni formas puras de gobierno, pies hay que pensar que una ciudad debe ser libre, prudente y amiga de sí misma y que el que legisla debe hacerlo apuntando a esa finalidad”. ¿De dónde saco Platón tanta sabiduría para llegar a esa afortunada síntesis?; del estudio de muchos sistemas políticos que habían tenido desarrollo durante varios siglos antes de la época de Platón y de los regímenes contemporáneos al propio pensador griego. Entre los múltiples sistemas políticos, es preciso tener en cuenta el estudio que Platón hizo de los regímenes de Esparta, Persia y Atenas. En lo que respecta a Esparta en varias paganías de las leyes Platón nos deja su testimonio de la manera como asumo el estudio y el análisis de las instituciones que caracterizan ese sistema político. En el transcurso del dialogo Leyes, en el preciso momentos en que Platón pretende enfrentar el tema, dice por boca de Ateniense: “volvamos al mismo tema, de modo que nos investigaremos en abstracto, si no acerca de lo que paso realmente” y de ahí en adelante viene un debate muy amplio y profundo, de unas veinte paginas aproximadamente, de la manera como surgieron se desarrollan y decayeron tres ciudades, donde solo una se debatió por Grecia según las palabras de Platón. Las tres ciudades fueron, Argos, Mesene y Esparta y solamente esa última apoyo en Atenea hasta cuando las dos ciudades empezaron a rivalizar, y finalmente se engarzaron en la guerra de Peloponeso. Ese estudio amplio y diverso comprende varias instituciones políticas, económicas y administrativas que le sirvieron a Platón de insumo, no solo para hacer la síntesis de las formas de gobierno, sino de toda la propuesta de Estad, realista y posible, que diseño en las Leyes. La igualdad en la distribución de la sociedad espartana, la corrupción que invadió a las ciudades de Argos y Mesene, los primeros acuerdos de ayuda mutua de esas ciudades en caso de invasión de pueblos barbaros, que constituyen el origen del derecho internacional público, las causas que destruyen esas confederaciones de Estados, la asamblea popular, el consejo de ancianos, el poder de éforos, como sistema de frenos y contrapesos a los poderes de los reyes, y que es el origen del gobierno mixto. Todo esta en el estudio que Platón hizo sobre Esparta. La investigación sobre el régimen político persa, también comprende muchos temas: la asunción de Ciro al poder y la liberación de los esclavos, pero a la vez la esclavización de otros pueblos, la muerte de Cambises y la llegada al trono de Darío. Como lo saben los estudiosos de estos temas, a la muerte de Cambises, se produjo entre quienes aspiraban a sucederlo en el trono, Otanes, Megabyzo y Darío, un debate con relación al régimen político que debía adoptar Persia. Cada uno de los tres defendía un sistema de gobierno distinto: Otanes se inclinaba por la democracia, Megabyzo por la aristocracia y Darío por la Monarquía. La controversia la gano Darío, quien asumió el poder en el 521 antes de nuestra era. Esta es la más antigua discusión sobre las formas de gobierno y el punto de partida para el estudio del gobierno mixto. Sobre el sistema político persa y sobre sus tres primeros reyes (Ciro, Cambises y Darío), también se refiere Platón en su diálogo, Menéxeno o de la oración fúnebre lo cual confirmé la tesis de que al fundador de la Academia, solo le interesaba la organización política de la sociedad, es decir la formación del estado. En sistesis de esos tres monarcas, y el valor de los griegos dice Platón en Menéxeno: “ a los persas que eran dueños de Asia y se disponían a somter a Europa, lo detuvieron los hijos de esta tierra, nuestros padres, a quienes es justo y necesario que recordemos para enaltecer su valor”. Luego dice que el primer monarca, Ciro, tras conceder la libertad a los persas, sometido con la misma soberbia a sus propios ciudadanos; que su hijo Cambises, puso bajo el yugo a Egipto y Libia. Y sobre el tercer monarca, Darío, dice: “Fijo por tierra los límites de su imperio hasta los escitas. Dominaba con sus naves el mar y las islas, de modo que nadie se atrevería a enfrentarse con él, y las opiniones de todos los hombres se hallaban sometidas a esclavitud. Con base en los anteriores sistemas políticos y en el de Atenas, por supuestos, Platón llego a la síntesis del estudio realizado en la Republica y en el Político. En efecto, en la Republica que fue el primero de los tres diálogos sobre ciencia política, como ya se dijo, Platón nos enseña que hay cinco formas de gobierno. En primer lugar, el régimen recto o excelente que corresponde al Estado fundado por el principio de Platón, y cuatro más: timocracia, oligarquía, democracia y tiranía. En el político, eleva el número a siete, y en las leyes, sintetiza todas las formas en dos: monarquía y democracia. Del estudio que Platón hizo en estos dos últimos diálogos, han partido todos aquellos que en el mundo se ha ocupado de las formas de gobierno, desde Aristóteles hasta nuestros días. El más reciente pronunciamiento sobre régimen democrático, lo hizo José Saramago, en su novela Ensayo sobre la lucidez. En las leyes, Platón reduce las formas de gobierno a dos grandes sistemas de los cuales se derivan de los demás. “hay como dos madres-dice- de los sistemas políticos, de cuyo entrelazamiento como razón podría decirse que surge el resto. Es correcto llama a una monarquía y la otra democracia. De una es la expresión más alta la raza de los persas, de la otra, la de los atenienses. Casi todas las formas restantes, como dije, son vacaciones de estas. Por tanto, es necesario e imprescindible que los sistemas políticos participen de estas dos, si realmente ha de haber libertad y amistad con inteligencia. He ahí el origen no solo de la democracia sino igualmente del gobierno mixto que rige hoy en todos los países del mundo aun en los regímenes dictatoriales. Quien lea cuidadosamente la clasificación que sobre las formas de gobierno hace Platón en las leyes y luego las primeras palabras del príncipe de Maquiavelo, podrá comprobar sin ninguna dificultad que el florentino copio casi textualmente el ateniense, si mencionar las fuentes de su inspiración. Lograda esta síntesis, Platón continúa el debate en las páginas siguientes hasta terminar el libro III de las leyes, haciendo un parangón entre la monarquía persa y la democracia ateniense, y señalando que debe existir un equilibrio entre los dos regímenes. En el primer párrafo después de la síntesis, Platón hace un elogio al sistema político espartano, por cuanto este régimen se aproxima a la justa medida, es decir al gobierno mixto, “pues bien –dice Platón-, dado que una ama el principio monárquico y otra, el de la libertad con exclusividad y más de lo necesario, ninguna de las dos posee la justa medida de estos dos elementos, pero el lacedemonio y el cretense, aproximan mas a ellos. Antiguamente, también eran así, en cierta medida, los atenienses y los persas, aunque ahora los son menos.” Antes de concluir el libro III de las leyes, Platón de manera implícita se refiere al justo medio, para concluir que mediante este, se logra el bienestar. “por eso elegimos dos órdenes políticos –concluye Platón-, el más despótico y el más libertario y observamos ahora cuál de los dos funciona correctamente. Cuando percibimos una cierta mesura en vara uno de ellos, de los unos en el ejercito del mando y de otros en la búsqueda de libertad, vimos que entonces se daba en ellos de manera significativa una situación de bienestar. Agrega el pensador ateniense, que si se recurre a los extremos, no hay beneficio para ninguno. “cuando se desplazaron hacia los extremos, unos en el sentido de la esclavitud. Otros en el contrario, la situación no fue beneficiosa pata los unos ni para los otros.” El debate sobre las formas de gobierno, sin embargo, no concluye aquí, pues lo volveremos a encontrar en el libro IV de las leyes, cuando Platón examina de nuevo el régimen político de Esparta, en el que parece encontrar un gobierno mixto.” Cuando pienso-dice Platón-, en el orden político lacedemonio no puedo decir a boca de jarro, cual debo decir que es pues incluso creo que se asemeja a la tiranía- ya que cuando los éforos se convirtieron en ella de manera sorprendente en una especie de poder tiránico- y sin embargo, a veces, me parece que tiene la apariencia de ser la que actúa de una manera más democrática de todas las ciudades”. A pesar de tener algo de la tiranía y ser más democrática a Platón también le parece que tiene algo de aristocracia y de monarquía. “Además, el no decir que es una aristocracia está totalmente fuera de lugar. También en ella una monarquía de por vida de la que afirman todos los hombres y nosotros mismos que es la más antigua de todas.” Sin embargo, el más convincente testimonio sobre las bondades del gobierno mixto, nos lo dejo Platón en el libro VI de las leyes, al tratar la estructura administrativa del Estado. La prueba de confianza en el gobierno mixto, se encuentra en la propuesta de elección del Congreso de 360 miembros. Este organismo, más que un consejo, es una corporación de origen popular, más parecido a lo que hoy son los parlamentos u órganos legislativos del poder público. No hay que buscar el origen del gobierno no mixto ni en otra parte, ni en otro autor. La verdadera esencia del régimen democrático está en Atenas y Platón la sintetizó en estas palabras: “una elección echa de esta maneta mantiene un punto equidistante del orden político monárquico y el democrático, en medio de los que deben estar siempre el sistema político. A pesar de ser tan claro el principio contenido en palabras tan breves, resulta demoledor por lo convincente, si se le acompaña con las explicaciones que Platón hay a continuación, y por la relación y coherencia con otros conceptos expresados en el mismo dialogo leyes, inmediatamente después de la síntesis del gobierno mixto, se refiere Platón a la dialéctica igualdad-desigualdad, en la que exige con rigor un punto de equilibrio. “en efectos, esclavos y amos nunca podrían llegar a ser amigos, ni tampoco si se establecieran en las mismas dignidades a los malos y a los probos –pues para desiguales las cosas iguales se convertirían en desiguales si no alcanzaran la medida justa- por estas dos causas, los órdenes políticos están llenos de discordia. Un antiguo dicho verdadero, que la igualdad produce la amistad, tiene mucha razón y es atinado” El principio según el cual, solo la igualdad produce amistad real y verdadera, seguramente lo tomó Platón dela obra fenicias de Eurípides, quien trae una idea similar, y necesariamente hay que leerlos de manera sistemática y armónica con otros fragmentos de las leyes, me refiero a los que tienen que ver con los conceptos dialectos riqueza-pobreza, bondad-maldad, felicidad-desgracia. Conforme al siguiente párrafo de Platón, la ecuación ricos-buenos en imposible: “Me atrevería a decir que es necesario que lleguen a ser al mismo tiempo felices y buenos –esto, por cierto lo querría- pero que lleguen a ser muy ricos y buenos es imposible, al menos lo que la mayoría reconoce como ricos, ya que se refiere a los pocos hombres que tienen posesiones que valen mucho dinero y que, eventualmente un hombre malo también posee” La relación entre riqueza-pobreza y riqueza-justicia la analiza el filósofo griego así: “El que se apropia de manera justa e injusta y no gasta ni justa ni injustamente es rico cuando es ahorrativo, pero el muy malo, dado que es manirroto la mayoría de las veces, es muy pobre, mientras que el que gasta en cosas buenas y adquiere solo lo que es producto de lo justo, ni llegara a sobresalir nunca por su riqueza fácilmente, ni tampoco será muy pobre.” Y este razonamiento lo remata Platón con un golpe demoledor, del que seguramente tomaron los redactores de la biblia, para matizar las leyendas filantrópicas y moralistas. “Por tanto, nuestra afirmación es correcta: no existen los muy ricos buenos, pero si no son buenos, tampoco son felices”. El reto de la legislación, según Platón, apunta a como ha de alcanzarse el máximo grado de felicidad y amistad entre los miembros de la sociedad. “nunca –dice- podrá haber ciudadanos amigos donde hay muchos procesos entre ellos y muchas injusticia, sino donde estos fenómenos son tan pequeños y reducidos como fuera posible”. Y agrega: “Decimos que en la ciudad no debe haber ni oro ni plata ni tampoco ser posible hacer mucho dinero por el artesanado y los intereses ni por l oprobiosos ganado”, sino todo lo que da y produce la agricultura y, las cosas por las que naturalmente existen las posesiones, esto es, el alma y el cuerpo, los que sin gimnasia y el resto de la educación nunca llegarían a ser dignos de mención”. En relación con la igualdad de oportunidades en la sociedad, Platón señala: “será necesario por muchas causas y por la igualdad de oportunidades en la ciudad, que las propiedades en la ciudad, que la propiedades sujetas a censo sean desiguales para que las magistraturas, los impuestos y las distribuciones determinen el valor de la dignidad de cada uno, no solo según de cada uno, no solo según la excelencia de los antepasados y la propia ni tampoco por la fuerza y la buena forma de los cuerpos, sino también por el uso de la riqueza o la pobreza”. Asimismo aconseja que haya cuatro clases de impuestos: “por ello, hay que establecer cuatro clases impositivas según la magnitud de la riqueza, primeros, segundos, terceros y cuartos o con otras denominaciones, tanto cuando permanezcan en la misma clase como cunado se hagan más ricos de más pobres o se vuelvan más podres de ricos y también a la clase correspondiente a cada uno. CONCLUSIONES En lo que respecta a las formas de gobierno, Platón tuvo su propia mutación: cinco formas en la republica (el gobierno perfecto o excelente, timocracia, oligarquía, democracia y tiranía), siete en el político (el gobierno perfecto o excelente, monarquía, tiranía, aristocracia, oligarquía, democracia legal y democracia al margen de la ley) y dos en las leyes (monarquía y democracia) +, como se vio al desarrollar el punto tres de este artículo. El primero de estos tres diálogos se presume que es fruto de su primera madurez; aproximadamente a los cincuenta años, mientras que las leyes fueron escritas en la última etapa de su vida, quizás a los 79 u 80 años. Sin embargo la metamorfosis intelectual de Platón en las formas de gobierno, no es tan solo cuestión de tiempo; se debe al profundo estudio de los regímenes políticos que hasta el momento se había desarrollado. Cualquiera, de manera simplista, podría decir que no existe coherencia intelectual en el pensamiento político de Platón en este tema. Si se leen por separado las tres obras seguramente se llegan a esta conclusión, pero si se estudian de manera sistemática se entenderá que la mutación es aparente. En efecto, Platón, en la república, parte del hecho cierto de que existe muchas formas de gobierno. De entre esas muchas formas, según el fundador de la Academia, hay cuatro que son dignas de mencionar y estudiar: timocracia, oligarquía, democracia y tiranía. Pero además de estas, hay una quinta forma de gobierno, que corresponde al Estado que el propio Platón funda. En el político, logran un avance significativo de síntesis. Hay un Estado excelente que e que crea Platón y, además de este, tres formas de gobierno: el de uno, el de pocos y el de muchos. Por cada uno de estos tres hay que multiplicarlos por dos, según sea ejercido conforme a las leyes o al margen de estas. En consecuencia, en el político, son siete las formas de gobierno. En las leyes, en cambio, Platón alcanza una síntesis magistral. Solamente hay dos formas de gobierno: la monarquía y la democracia. Como lo podrá comprobar, sin ninguna dificultad cualquier observador, la síntesis que dejo Platón sobre las formas de gobierno .democracia y monarquía- está vigente, con una gran deformación de la democracia y con el decaimiento de la monarquía en despotismo tiránico. En efecto, después de las experiencias democráticas del mundo antiguo, en las cuales se inspiró Platón para escribir sus obras, en principio se podría decir que en ninguna parte del mundo y en ninguna época de la historia ha existido democracia, porque jamás han gobernado los pobres, que son mayoría, ni los buenos, que por carecer de ambición jamás se preocupan por alcanzar el poder. Siempre ha manejado las palancas del Estado una exigua minoría, en representación de los dueños de la riqueza mundial, que cambie de nombre a través de las diferentes etapas de la historia: esclavistas, mientras existió esta forma de discriminación; señores feudales, aliados de la iglesia católica, en el medievo; industriales y comerciales, en las modernidades; banqueros y transnacionales, en el mundo de la globalización neoliberal. Las ideas de Platón atravesaron el mundo, siendo Roma su primer destino. Aquí, debido a que la republica romana contempla algunas libertades al régimen republicano se le identifica con la democracia, y así continua por el resto de la historia: mundo medieval, Renacimiento, Ilustración. Finalmente, esas ideas filosóficas fueron recogidas por las tres grandes constituciones del mundo occidental: la de Inglaterra de 1688, la de los Estados Unidos de América en 1787 y la de Francia en 1791, de las cuales se derivaron todos los estatutos políticos de Europa y América Latina. En el marco de la Constitución de los Estados Unidos, el más conspicuo de sus voceros, Abraham Lincoln, dio la siguiente definición de la democracia al apagarse el fuego de la lucha intestina de esa externa nación: “la democracia es el gobierno del pueblo por el pueblo y para el pueblo”. Podría considerarse este momento, como el cernir de la democracia y la definición más poética del sistema de gobierno que Platón llamo de la muchedumbre. ¿En qué momento esta hermosa definición de democracia que había transitado desde Platón hasta Lincoln desapareció del papel? Si hasta entonces la democracia había estado más en los tratados de la teoría política y en las constituciones, es decir, más en el papel que en realidad al finalizar el siglo XIX vendría a ser una farsa, y en el mejor de los casos una caricatura: la democracia pasaba, en la propia teoría, del gobierno de las muchedumbres al gobierno de las elites. No solo dejaba de ser realidad sino que además desaparecida del papel, porque ahora resultaba nuevos teóricos que cambiaban el valor simbólico de las palabras, su etimología y su esencia para legitimidad a la exigua minoría gobernante y excluir a la inmensa mayoría ene, reparto del poder. En efecto, para los pensadores Ludwing, Gumplowicz, Caetano Mosca y Wilfredo Pareto, la democracia y la soberanía popular son conceptos ideales que jamás pueden corresponder a una realidad fáctica porque, cualquier que sea la forma de gobierno, quien lo ejerce es solo una minoría. He ahí la nueva moral de las elites convertida en filosofía y textos constitucionales. Ahora, con una tranquilidad de conciencia, los duelos del poder convocan periódicamente a los pobres para que voten por los ricos, verdaderos voceros del poder económico, financiero y mediático. Pero en el instante de abandonar la urna, nada decidirán. El poder real lo tiene la riqueza, expresada en el mercado de las transnacionales, cuya sede está en cualquier lugar del mundo, y se ejerce de manera dictatorial, con lo cual la otra forma de gobierno, la monarquía, ha degenerado en el despotismo tiránico. Mientras los pobres estén muriéndose de hambre, sin educación y sin medios de comunicación, tales son menos ofensivos los discursos sobre la democracia que el ultraje a la razón. REFERENCIAS BALLEN RAFAEL . (2005). ¿QUÉ HACER CON LA SEGURIDAD DEMOCRÁTICA?. BOGOTÁ : LE MONDE DIPLOMATIQUE . PATRICIO DE AZCÁRATE . (1871). OBRAS COMPLETAS DE PLATÓN. 2019, de ACADEMIA DE CIENCIAS MORALES Y POLÍTICAS Sitio web: http://www.filosofia.org/cla/pla/azcarate.htm ALBERTO MANGUEL . (2012). LA REPÚBLICA DE PLATÓN . 2019, de LETRAS LIBRES ALIANZA Sitio web: https://www.letraslibres.com/mexico-espana/leer-la-republica-platon-hoy SHEYLA OCUPA. (2017). FORMAS DE GOBIERNO . 2019, de SLINDESHHARE UAEM Sitio web: https://es.slideshare.net/jhosizita/formas-de-gobierno-75836813 BRAIHLLAN VELANDIA . (S/A). TEORÍA POLÍTICA DE PLATÓN Y ARISTÓTELES . 2019, de POLITICAV5 AVANZADA Sitio web: https://sites.google.com/site/politacav5avanzada/politica