lonja

(redireccionado de lonjas)
También se encuentra en: Diccionario.
Graphic Thesaurus  🔍
Display ON
Animation ON
Legend
Synonym
Antonym
Related
  • all
  • nombre

Sinónimos para lonja

loncha

Sinónimos

Diccionario Manual de Sinónimos y Antónimos Vox © 2022 Larousse Editorial, S.L.

Sinónimos para lonja

Ejemplos ?
U.E "Andres eloy blanco" E.B "R5 Cabimas es conocida por sus arepas, son arepas fritas que se colocan cortadas en cuadros al fondo del plato donde se sirven, y se le agregan arriba de ellas ingredientes como lonjas de queso y jamón como base, luego pollo, carne, cerdo o camarones según el gusto, verduras como lechuga, aguacate y tomate, un huevo duro hervido cortado en cuatro, mayonesa, ketchup, mostaza, y por último, queso blanco duro rallado encima y trozos de hocico de cerdo, conocido popularmente como "cabeza"; según el gusto del cliente.
Lo dispuesto en las ordenanzas para aquella casa de contratación sirvieron como de modelo para la organización de las demás lonjas y casas de contratación que se fueron estableciendo sucesivamente en la Península Ibérica.
as casas de contratación o lonjas eran establecimientos destinados al control de la actividad comercial y el tránsito de personas y expediciones entre España y América.
Norte con el Departamento Jiménez y la provincia de Tucumán Sur con los departamento Guasayán y Departamento Capital Este con los Departamentos Capital, Departamento Banda y Jiménez Oeste con la provincia de Tucumán Llanura ondulada con pendiente suave hacia el Sudeste y hacia el Noroeste, dejando en su interior lonjas convexas.
Esa curiosidad del peonaje llegó al patrón, que quiso saber. Entró de sorpresa, encontrando a Núñez tan absorbido en un entrevero de lonjas, que pudo retirarse sin ser sentido.
Jusilen al que es cuatrero dende el más grande al más chico, que sea pobre o que sea rico, que sea gaucho o sea pueblero, saquenlén lonjas del cuero y servirá de escarmiento...
–El día va a ser bárbaro e'calor -dijo "Leche con fideos". –Sí, nos a sacar lonjas -respondió Rodríguez. Con dificultad, pues estaban muy pesados de caña, los que aguardaban en el café subieron al camión.
Acercábase a los vendedores de cerdo a pedirles precio de embutidos, examinaba codicioso las sonrosadas cabezas de cerdo, hacíalas girar despacio bajo la impasible mirada de los ventrudos comerciantes de delantal blanco, rascábase tras de la oreja, miraba con voluptuosidad los costillares enganchados a los hierros, las pilastras de tocino en lonjas, y como si resolviera un problema que le daba vueltas en el meollo, dirigíase a otro puesto, a pellizcar una luna de queso, o a contar cuántos espárragos tiene un mazo, a ensuciarse las manos entre alcachofas y nabos, y a comer pepitas de zapallo o a observar al trasluz los huevos y a deleitarse en los pilones de manteca húmeda, sólida, amarilla, y aún oliendo a suero.
Y cuando se fue el mocito, llevándose su cabestro tan pueblero y su cabo de manila, el gaucho viejo, acabando de un trago su copa de ginebra, rezongó: «Los criollos de hoy, amigo, son lonjas de otro cuero que los de ayer».
El aceite sale de tu bodega, no por panillas, sino por arrobas; las lonjas de tocino vuelan de la despensa; las morcillas transponen; la manteca se evapora; los jamones se disipan.
Mucho antes que los criollos, hubo quien supo de un cuero sacar lonjas bien cortadas, pues cuentan que la reina de Tiro, Dido, al llegar, fugitiva, en las costas africanas, después de conseguir de los habitantes la concesión -según su pedido- de la tierra que podría encerrar en un cuero de vaca, cortó el cuero en lonjitas largas y delgadas, abarcando así una extensión de terreno tal que pudo, en ella, fundar la ciudad de Cartago, y tarde vieron los incautos africanos que se habían pisado la huasca.
En los países desarrollados, aunque los controles no son todo lo estrictos que sería de desear, puede considerarse que los animales que se venden en las lonjas han pasado los controles de talla necesarios.