burro


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Sinónimos para burro

corto

no apearse del burro

Sinónimos

Diccionario Manual de Sinónimos y Antónimos Vox © 2022 Larousse Editorial, S.L.

Sinónimos para burro

Ejemplos ?
Y caminos sobre su lomo, porque Madroño era un burro muy flaco, muy huesudo, con el vientre pegado al espinazo, el espinazo pegado a la piel, las orejas largas, el rabo corto, el cuerpo repujado de mataduras y las patas llenas de esparavanes.
¿A quién no cansa un barbón con un tiple muy sutil, lastimero y recalzado, diciendo: «ili portuguí»? ¿Quién sufre un burro aguador, que me sabe distinguir a mí de un poste, y se aparta del poste, y me embiste a mí?
Un burro viejo robado por una familia de zíngaros y hecho a vivir con ella y a ser el amigo inseparable de Curro, de aquel gitanillo de ocho años, que tenía el pelo negro, los labios rojos, los dientes blancos y la cara cobriza.
Van todas de continuado, de angosturas sin medidas; y aun pisas sobre adoquines, para ir a la otra esquina. Sin duda esta arquitectura, fue hace siglos concebida; para que pasara el Burro, con la carga que traía.
Aparecían en él los escolares azotando al dómine; la res desollando al carnicero; el burro arreando al aguador; el reo ahorcando al juez; el escribano huyendo del gatuperio: el usurero haciendo obras de caridad; el moribundo bendiciendo al médico y la medicina, et sic de cœteris.
No se trata de eso todavía. Os llamo para preguntaros qué le habéis tomado a este hombre. - Un burro en pelo. - ¿Y dinero? - Tres duros y siete reales.
Y tanto se alborotaron los coronguinos celebrando la jus- tificación y talento de su paisano Remusgo, que la cosa llegó á oídos del Juez letrado de la provincia, el cual pidió los autos, y en ellos estampó un decreto declarando la nulidad de todo lo actuado, por existir inmediato parentesco entre el Juez de paz y el burro.
Yo creo a ratos que las dos grandes fuerzas de España, la que tira para atrás y la que corre hacia adelante, van dislocadas por no querer entenderse, y de esta discordia se aprovecha el ejército neutral de los ramplones para hacer su agosto; y a ratos pienso también que nuestro país no es lo que aparece, y sé me ocurre compararlo con un hombre de genio que hubiera tenido la ocurrencia de disfrazarse con careta de burro para dar a sus amigos una broma pesada.
Por eso volvía su cabeza hacia el burro, gritándole: «¡Anda, que falta poco!» Daba unos pasos en esta actitud y luego tornaba a inclinar la cabeza, mientras el asno le seguía con triste y achacoso renqueo.
La existencia agitada y bulliciosa de Madrid, comenzaba a manifestarse en los grupos de obreros que por la carretera se extendían; en los carruajes cubiertos de polvo que cruzaban por ella, en el vocerío de las mujeres que, mantón al brazo y pañuelo a hombros, regresaban de sus tareas, y en el rumor confuso que venía de la ciudad como un alentar poderoso. La marcha del burro se había hecho de minuto en minuto, más difícil.
El profeta Ezequiel, dis que Doliba :se entregaba a cualquiera rodaballo :con tal de que le arrimasen panza arriba :Verga de burro, y chorro de caballo.
Creo que fue el Domingo de Ramos y en momentos de pasar por la catedral la procesión del borriquito, aquella en la que refieren que dijo un prójimo: ::«Asno que a mi Dios lleváis, ::¿quién tan feliz como vos? ::Quiero ¡oh mi Dios! que me hagáis ::como este burro en que vais..... ::(y cuentan que lo oyó Dios)».