San Juan Crisóstomo - PATROLOGÍA

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SEMINARIO MAYOR SAN PEDRO DE PORTOVIEJO

San Juan Crisstomo

PATROLOGA

Nombre: Profesor: Curso:

Ricardo Amat Snchez P. Vicente Saeteros Sierra II de Teologa

San Juan Crisstomo, afamado rtor y fino exegeta, primero asceta y monje; luego, dicono y presbtero en Antioqua; despus obispo de Constantinopla. Su don extraordinario de elocuencia le vali el glorioso ttulo de Crisstomo, Boca de Oro, que casi ha suplantado a su verdadero nombre desde que le fue otorgado por primera vez en el siglo VI .

SAN JUAN CRISSTOMO


CONTENIDO Introduccin ........................................................................................................................... 1 1. Vida ................................................................................................................................... 1 Como Obispo de Constantinopla ........................................................................................ 2 Exilio y Muerte .................................................................................................................. 3 2. Obra ................................................................................................................................... 3 3. Doctrina - Teologa ............................................................................................................ 4 1. Cristologa ...................................................................................................................... 5 2. Mariologa ...................................................................................................................... 5 3. Pecado original ............................................................................................................... 6 4. Penitencia ....................................................................................................................... 6 5. Eucarista........................................................................................................................ 7 6. Sobre el sacerdocio ......................................................................................................... 7 Conclusin ............................................................................................................................. 8 Bibliografa ............................................................................................................................ 8

INTRODUCCIN Abordaremos sobre la vida y enseanza de uno de los cuatro grandes Padres del Oriente y de los tres grandes doctores ecumnicos de la Iglesia griega San Juan Crisstomo, personaje con muchas virtudes cristianas que nos deja en legado muy valioso para nuestra fe. Sin duda alguna es uno de los Padres de la Iglesia con mucha actividad en la que ms que defender la doctrina cristiana, la ensea. 1. VIDA San Juan Crisstomo, afamado rtor y fino exegeta, primero asceta y monje; luego, dicono y presbtero en Antioqua; despus obispo de Constantinopla. Aqu su seriedad de reformador y tambin su falta de tacto le llevaron a serios conflictos con obispos y con la corte imperial. Depuesto y desterrado, sus tribulaciones y muerte en el exilio fueron una dolorosa prueba martirial para l y el sector de la comunidad que se le mantuvo fiel1. Naci en Antioqua (Siria), en el ao 347 2. En aquel entonces, dicha ciudad era la segunda ms importante del Imperio Romano de Oriente. El padre de Juan, Secundo, era un
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TREVIJANO ETCHEVERRIA Ramn, Patrologa, Biblioteca de Autores Cristianos, Madrid, 1994, p. 215. Los siguientes apartados sobre la vida de este Padre de la Iglesia lo he tomado de: http://ec.aciprensa.com/j/juancrisostomo.htm y de http://es.wikipedia.org/wiki/Juan_Cris%C3%B3stomo

alto oficial del ejrcito sirio y muri poco tiempo despus del nacimiento de Juan por lo que su hermana mayor y l quedaron totalmente a cargo de Antusa, la madre cristiana de ambos. Juan fue bautizado en 370, a la edad de 23 aos y fue ordenado lector (una de las rdenes menores de la Iglesia). Comenz estudios con el filsofo Andragatio y continu con Libanio, que entonces era un famoso orador y el ms ferviente partidario del feneciente paganismo romano. Libanio qued maravillado con la elocuencia de su discpulo y previ para el mismo una brillante carrera como estadista o legislador. Sin embargo, un encuentro con el obispo Meletio result decisivo en la vida de Juan, quien comenz a estudiar teologa con Diodoro de Tarso (uno de los lderes de la antigua escuela de Antioqua) mientras mantena un ascetismo extremo. No obstante, las ansias de una vida ms perfecta lo llevaron a convertirse en un eremita (alrededor de 375) condicin en la que permaneci hasta que su quebrantada salud por excesivas vigilias y ayunos durante el invierno lo obligaron a volver a Antioqua donde retom su actividad como lector. Crisstomo fue siempre un admirador de un monasticismo activo y utilitario y se pronunci contra los peligros de una contemplacin ociosa. En 381 fue ordenado dicono por Meletio de Antioqua y en 386 fue ordenado sacerdote por el obispo Flaviano I de Antioqua. Al parecer fue ste el momento ms feliz de su vida. Su principal tarea durante doce aos consisti en predicar. Adquiri gran popularidad por su elocuencia. Dignos de mencionar son los comentarios que hizo a pasajes bblicos y la exposicin de enseanzas morales muchas de ellas recopiladas en sus Homilas. Con el transcurso del tiempo Crisstomo lleg a ser el sucesor de Flaviano I. Durante su misin como obispo mostr gran preocupacin por las necesidades espirituales y materiales de los pobres. Tambin se pronunci en contra de los abusos de los poderosos y de la propiedad personal. Su interpretacin directa de las Escrituras (en contraste con la tendencia de Alejandra donde se recurra a una interpretacin alegrica) lo condujo a seleccionar para sus charlas temas eminentemente sociales que explicaban el concepto de la vida cristiana. A la muerte de Nectario el 27 de septiembre de 397 fue instituido de cierta forma en contra de su voluntad como metropolitano de Constantinopla (por su calidad de villa imperial, el metropolitano de Constantinopla recibi posteriormente el ttulo de Patriarca). Para poder abandonar la ciudad de Antioqua, en donde era tan querido, una escolta militar tuvo que acompaarlo para as evitar la conmocin del pueblo. Qued instituido como metropolitano el 26 de febrero de 398 por Tefilo, patriarca de Alejandra, quien con gran desgano llev a cabo el pedido del emperador Arcadio. Como Obispo de Constantinopla El primer acto del nuevo obispo fue provocar la reconciliacin entre Flaviano y Roma. La misma Constantinopla comenz pronto a sentir el impulso de una nueva vida eclesistica.

La necesidad de reforma era innegable. Crisstomo comenz barriendo las escaleras desde arriba (Palladius, op- cit., v). El llam a su oeconomus, y le orden reducir los gastos del mantenimiento de la sede episcopal; puso fin a los frecuentes banquetes, y vivi poco menos estrictamente de lo que antes haba vivido como sacerdote y monje. Sin embargo, el partido de los descontentos no era realmente peligroso, a menos que pudieran encontrar algn lder prominente e inescrupuloso. Tal persona se present ms pronto de lo que podran haberlo esperado. Fue el bien conocido Tefilo, Patriarca de Alejandra. Apareci bajo circunstancias bastante curiosas, lo que de ningn modo anunciaba el resultado final. Tefilo, hacia el fin del ao 402, fue convocado por el emperador a Constantinopla para disculparse ante el snodo, que debera presidir Crisstomo, por varios cargos, que haban sido presentados en su contra por ciertos monjes Egipcios, especialmente por los llamados cuatro hermanos altos. El patriarca, su antiguo amigo, se haba puesto repentinamente en su contra, y los haba perseguido como Origenistas (Palladius, "Dialogus", xvi; Socrates, op. cit., VI, 7; Sozomenus, op. cit., VIII, 12). Un doble atentado contra la vida de Crisstomo fracas. En Vsperas de Pascua de 404, cuando todos los catecmenos estaban por recibir el bautismo, los adversarios del obispo, con soldados imperiales, invadieron el baptisterio y dispersaron a toda la congregacin. Al final Arcadio firm el decreto, y el 24 de Junio de 404, los soldados condujeron a Crisstomo una segunda vez al exilio. Exilio y Muerte Los seguidores del obispo exiliado fueron acusado del crimen y perseguidos. Apresuradamente Arsacio, un hombre viejo, fue designado sucesor de Crisstomo, pero fue pronto sucedido por el astuto Atico. Crisstomo, fue conducido Cucusus, un aislado y escabroso lugar en la frontera este de Armenia, continuamente expuesto a las invasiones de los Isuricos. Cuando las circunstancias de esta deposicin fueron conocidas en el Occidente, el papa y los obispos italianos se declararon en su favor. El emperador Honorio y el Papa Inocencio I intentaron convocar un nuevo snodo, pero sus delegados fueron apresados y enviados a casa. El papa rompi toda comunin con los Patriarcas de Alejandra, Antioquia (donde un enemigo de Crisstomo haba sucedido a Flaviano), y Constantinopla, hasta que (despus de la muerte de Crisstomo) consintieron admitir su nombre en los dpticos de la Iglesia. Muri cerca de Comana, en el Ponto, el 14 de septiembre del ao 407. 2. OBRA Entre los Padres griegos no hay nadie que haya dejado una herencia literaria tan copiosa como Crisstomo. Adems, l es el nico, entre los antiguos antioquenos, cuyos escritos se han conservado casi ntegramente. Ningn escritor oriental ha conseguido la admiracin y el amor de la posteridad en el campo que lo consigui l . Su don extraordinario de elocuencia le

vali el glorioso ttulo de Crisstomo, Boca de Oro, que casi ha suplantado a su verdadero nombre desde que le fue otorgado por primera vez en el siglo VI 3. Tratados (Son anteriores a su ordenacin sacerdotal): Sobre el sacerdocio (373): es la obra ms leda y traducida (es una obra prctica). Exhortacin a Teodoro de Mopsuestia; Contra los enemigos de la vida monstica; Sobre la virginidad; Sobre la compuncin; Sobre la vanagloria y la educacin de los hijos. Homilas (Es considerado el mejor orador cristiano. Duraban un par de horas. La gente tomaba nota de ellas; l las preparaba mucho; haba muchos aplausos...): Homilas exegticas (exgesis literal de carcter moral; son varios centenares) o Antiguo Testamento: dos serie sobre el Gnesis (son 9 y 67); 60 sobre los Salmos; o Nuevo Testamento: 90 sobre San Mateo; 88 sobre San Juan (390-91); sobre los Hechos; 250 sobre las Epstolas de San Pablo. Homilas dogmticas o 12 contra Eunomio sobre la naturaleza incomprensible de Dios; Homilas bautismales. Homilas morales o contra los juegos circenses; o sobre la limosna. Homilas de circunstancias o a propsito de las fiestas; o 21 homilas por las estatuas, motivadas por un motn del pueblo de Antioqua contra el Emperador. Cartas: Escribi 236 cartas con celo apostlico, en las que se reflejan su gran humanidad y santidad de vida, entereza y nimo frente a lo adverso. Dos de esas cartas estn dirigidas al Papa Inocencio y son una buena fuente para defender el Primado romano. 3. DOCTRINA - TEOLOGA Entre los numerosos escritos de Crisstomo no hay uno slo que se pueda llamar propiamente una investigacin o estudio de un problema teolgico como tal. No estuvo envuelto en ninguna de las grandes controversias dogmticas de su poca. Si refuta herejas, lo hace para proporcionar a sus lectores la informacin e instruccin necesarias 4.

QUASTEN Johannes, Patrologa II. La edad de oro de la literatura patrstica griega, BAC, Madrid, 1991 , pp 477ss. 4 QUASTEN Johannes, Patrologa II.., pp 528ss

1. Cristologa No cabe duda de que Crisstomo era partidario de la doctrina antioquena tanto en exgesis como en cristologa. Distingue claramente entre ousia o physis para significar naturaleza, e hypostasis o prosopon para significar persona. Ensea que el hijo es de la misma esencia que el Padre y emplea por lo menos cinco veces la frmula nicena homoousios para caracterizar la relacin del Hijo con el Padre. Al igual que los dems antioquenos, recalca la divinidad completa y perfecta de Cristo contra los arrianos, y la humanidad perfecta y completa contra los apolinaristas. Insiste en la realidad e integridad de estas dos naturalezas en Cristo. Cristo es de la misma naturaleza que el Padre, . Tena tambin un cuerpo humano, no pecador como el nuestro, pero idntico al nuestro en cuanto a la naturaleza. A pesar de la dualidad de naturalezas, no hay ms que un solo Cristo: Permaneciendo lo que era, asumi lo que no era, y aunque se hizo carne, sigui siendo Dios Verbo... Se hizo esto [hombre], asumi esto [al hombre], era lo otro [Dios]. No confundamos, pues, ni separemos. Un solo Dios, un solo Cristo, el Hijo de Dios. Pero cuando digo un solo [Cristo], quiero decir unin, no mezcla ( , ;); no quiero decir que esta naturaleza se ha convertido en aqulla, sino que se ha unido 2. Mariologa Crea en la virginidad de Mara antes y durante el parto 5. No hay duda de que el haberse educado en aquella escuela (de Antioqua) influy en su mariologa. Nunca aplica en sus escritos a la Santsima Virgen el ttulo de Theotokos, al que se oponan los antioquenos; pero tampoco emplea la expresin Christotokos, que utilizaban ellos, ni la de Diodoro de Tarso, Anthropotokos; una prueba sta de que deliberadamente usaba de reserva y se negaba a tomar partido en la discusin que haba empezado ya para el ao 380. Ensea con toda claridad la virginidad perpetua de Mara: Aun sabiendo esto, muchas cosas ignoramos todava. Por ejemplo: Cmo el que todo lo contiene es llevado en su vientre por una mujer? Cmo da a luz una virgen y permanece virgen? ( ). En cambio, en otras ocasiones habla de ella de modo tan extrao que observa Santo Toms: In verbis illis Chrysostomus excessit (S. Th. 3 q.27 a.4 ad 3). As, por ejemplo, se plantea la cuestin de por qu anunci el ngel la Buena Nueva a la Virgen antes de la concepcin y, en cambio, a San Jos despus de ella: Entonces me diris por qu no lo hizo as tambin la Virgen y no la llev la buena noticia despus de la concepcin? La razn fue por que la Virgen no se turbara y desconcertara enteramente. Realmente, de no saber con claridad lo que en ella haba pasado, verosmil es que hubiera tomado una resolucin desesperada y se hubiera ahorcado o pasado a espada, al no poder soportar su deshonor

VIDAL MANZANARES Csar, Diccionario de Patrstica. (s. I-VI), Libro digital. p 66.

3. Pecado original En el sermn Ad neophytos, Crisstomo enumera detalladamente los efectos del bautismo: Por eso bautizamos tambin a los nios pequeos, aun cuando no tengan pecados (). De este pasaje, el pelagiano Julin de Eclana concluy que Crisstomo negaba el pecado original. San Agustn le replica con razn (Contra Iulianum 1,22) que el plural pecados y el contexto prueban que Crisstomo se refera a los pecados personales (propria peccata), y en apoyo de su argumento cita ocho pasajes de otras obras de Crisstomo para probar que ense abiertamente la existencia del pecado original. Pero, con todo, la concepcin de Crisstomo en estos pasajes no coincide exactamente con las ideas y con la terminologa mejorada de San Agustn. Aunque Crisstomo asegura repetidamente que las consecuencias o penalidades del pecado de Adn no afectan solamente a nuestros primeros padres, sino tambin a sus descendientes, nunca dice explcitamente que el pecado mismo haya sido heredado por su descendencia y que sea inherente a su naturaleza. 4. Penitencia Crisstomo habla con frecuencia de la confesin de los pecados, pero se refiere o a la confesin pblica en presencia de otros o a la efusin del corazn en presencia de slo Dios. Sobre esto segundo insiste l una y otra vez, sealando su necesidad y sus ventajas. Nunca da a entender que en la confesin hecha delante de Dios incluya tambin la confesin hecha a un sacerdote que acta como representante de Dios; es ms, en algunos pasajes excluye positivamente esta interpretacin: Por eso os exhorto, ruego y pido que confesis a Dios constantemente. No te llevo al crculo de tus consiervos ni te obligo a revelar tus pecados a los hombres. Desdobla tu conciencia delante de Dios, mustrale a El tus heridas y pdele a El las medicinas. Mustrate a El, que no te reprochar, sino que te curar. Aunque guardes silencio, El lo sabe todo. No hay en sus escritos ningn pasaje que le haga testigo inequvoco de la existencia de la confesin privada. Es sintomtico que en los seis libros De sacerdotio, donde diserta sobre la dignidad y los deberes del sacerdocio, mencione diecisiete obligaciones del sacerdote, pero ni una sola vez la de escuchar confesiones. Sin embargo, hay un pasaje muy significativo donde Crisstomo declara que el sacerdote puede perdonar pecados dos veces, una vez en el bautismo y la segunda en la extremauncin: Los sacerdotes no slo tienen poder de perdonar lo pecados cuando nos regeneran por el bautismo, sin tambin los que cometernos despus de nuestra regeneracin. Porque: Est alguno enfermo dice la Escritura entre vosotros? Llame a los presbteros de la Iglesia y ore sobre l, despus de ungirle con aceite en el nombre del Seor. Y la oracin de la fe salvar al enfermo y el Seor lo levantar, y si hubiere cometido pecados, se le perdonarn

5. Eucarista En los tiempos modernos se le ha llamado a San Juan Crisstomo Doctor Eucharistiae. Aunque este ttulo no ha recibido una aprobacin oficial de la Iglesia, no hay duda de que es un testigo eminente de la presencia real de Cristo en la Eucarista y del carcter sacrificial de la misma. Sus afirmaciones en este sentido son numerosas, claras, positivas y detalladas. Querra que se acercaran a este sacramento con respeto y devocin. Llama a la Eucarista una mesa tremenda, una mesa tremenda y divina, los misterios terribles, los misterios divinos, los misterios inefables, los misterios que exigen reverencia y temblor. El vino consagrado es el cliz de santo temor, la sangre tremenda y la sangre preciosa. Sealando el altar, dice: All yace Cristo inmolado, Su cuerpo ahora delante de nosotros. Lo que est en el cliz es aquello que man del costado... Qu es el pan? El cuerpo de Cristo. Reflexiona, oh hombre!, qu sacrificio vas a tocar, a qu mesa te vas a acercar. Piensa que, aunque seas tierra y ceniza, recibes la sangre y el cuerpo de Cristo. Algunas expresiones suyas son todava ms fuertes. No duda en decir: No nos concedi solamente el verle, sino tocarle tambin, y comerle, e hincar los dientes en su carne y unirnos a El de la manera ms ntima. Aplica aqu a la substancia del cuerpo y de la sangre de Cristo lo que, estrictamente hablando, es verdad slo de los accidentes de pan y vino, para poner lo ms claro posible la verdad de la presencia real y la identidad del sacrificio eucarstico con el sacrificio de la cruz. Lo que se ofrece todos los das es un sacrificio real; pero no es que un da sea una vctima y otro da otra, sino que siempre es la misma. Por eso el sacrificio es nico. En todas partes es uno el Cristo, que est entero aqu, y entero all, un solo cuerpo. El sacerdote que sacrifica es el mismo Cristo, y la consagracin tiene lugar en el momento en que se pronuncian las palabras de la institucin. 6. Sobre el sacerdocio Respecto del sacerdocio San Juan Crisstomo en su tratado De sacerdotio, nos dice textualmente: El sacerdocio, s es cierto que se ejerce sobre la tierra, pero pertenece al orden de las instituciones celestes, y con mucha razn. Porque no fue un hombre, no un ngel o arcngel, no otra potestad alguna creada, sino el Parclito mismo quien orden este ministerio e hizo que hombres vestidos an de carne pudieran ejercer oficio de ngeles. Por lo cual, el sacerdote ha de ser tan puro como si se hallara en los cielos en medio de aquellas anglicas potestades... En efecto, a moradores de la tierra, a quienes en la tierra tienen an su conversacin, se les ha encomendado administrar los tesoros del cielo, y han recibido un poder que ni a ngeles ni a arcngeles concedi Dios jams. Porque no se les dijo a stos: Lo que atareis sobre la tierra ser tambin atado en el cielo, y lo que desatareis sobre la tierra ser desatado en el cielo (Mt 18,18). Cierto que los que ejercen autoridad en el mundo tienen tambin poder de atar; pero es slo los cuerpos. La atadura del sacerdote toca al alma

misma y penetra los cielos. Lo que los sacerdotes hacen aqu abajo, Dios lo ratifica all arriba, y la sentencia de los siervos es confirmada por el Seor... CONCLUSIN Despus de haber estudiado a este Padre de la Iglesia, muy importante en la vida de la misma, vemos que es posible defender nuestra fe y aportar para su correcta divulgacin, haciendo un recorrido con mucha preparacin, dndole valor a las Sagradas Escrituras, a la Tradicin y a las enseanzas del Magisterio. Convencernos de quien anunciamos es a Jesucristo no a nosotros mismos. Ese es le motivo que nos debe mover en todo lo que hacemos. BIBLIOGRAFA QUASTEN Johannes, Patrologa II. La edad de oro de la literatura patrstica griega, BAC, Madrid, 19914. TREVIJANO ETCHEVERRIA Ramn, Patrologa, Biblioteca de Autores Cristianos, Madrid, 1994. VIDAL MANZANARES Csar, Diccionario de Patrstica. (s. I-VI), Libro digital. http://ec.aciprensa.com/j/juancrisostomo.htm 5-jun-2012; 16h35 http://es.wikipedia.org/wiki/Juan_Cris%C3%B3stomo 5-jun-2012; 16h40

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