Bienestar Psicológico 4 Décadas de Progreso PDF
Bienestar Psicológico 4 Décadas de Progreso PDF
Bienestar Psicológico 4 Décadas de Progreso PDF
RESUMEN
Correspondencia
Alejandro Castro Solano
Jean Jaures 437 8 19 (1215)
Buenos Aires, Argentina
E-mail: a.castro@fibertel.com.ar
Recibido: 01/06/2009
Aceptado: 15/07/2009
43
44
45
H[SHULPHQWD HPRFLRQHV SRFR SODFHQWHUDV FRPR WULVWH]D R UDELD /D OLWHUDWXUD GH
investigacin seala que la satisfaccin es un constructo trirquico. Por un lado
tenemos los estados emocionales (afecto positivo y afecto negativo), y por el otro,
el componente cognitivo. Los estados emocionales son ms lbiles y momentneos,
al mismo tiempo son independientes. El tener una alta dosis de afectividad positiva
no implica tener una alta dosis de afectividad negativa. El componente cognitivo
de la satisfaccin se denomina bienestar, y es resultado de la integracin cognitiva
que las personas realizan acerca de cmo les fue (o les est yendo) en el transcurso
de su vida.
47
49
VDWLVIDFFLyQ HQ HO WUDEDMR GHEH H[SHULPHQWDU DOWD VDWLVIDFFLyQ HQ VX WLHPSR OLEUH
tambin. Las contribuciones de las teoras del bienestar a la personalidad, ms lo
comentado acerca del poco peso de las variables ambientales, daran evidencia
suficiente de que el bienestar es un rasgo psicolgico difcil de modificar (&267$,
0F&RAE y ZONDERMAN, 1987).
Teoras de la adaptacin
Estas teoras consideran que la adaptacin es la clave para entender la felicidad
(M<(56, 1992). Ante el impacto de eventos altamente estresantes las personas
simplemente se adaptan y vuelven a su nivel de bienestar previo set point.
%ULFNPDQ &RDWHV \ -DQRII%XOPDQ HYDOXDURQ XQ JUXSR GH SHUVRQDV
que haban ganado importantes sumas de dinero en la lotera; al poco tiempo
GHO VXFHVR HVWH JUXSR H[SHULPHQWy XQ DXPHQWR HQ VX QLYHO GH ELHQHVWDU SHUR
algo ms tarde, el nivel de bienestar volvi a su lnea de base. En otro estudio,
Allman (1990) verific que personas confinadas a vivir en sillas de ruedas,
contrariamente a lo que podra suponerse, no registraban un menor nivel de
satisfaccin comparadas con su grupo control. En la misma lnea se encontraban
los niveles de satisfaccin de personas que tenan severas discapacidades motoras
como consecuencia de lesiones medulares (SILVER, 1982). El autor verific que
estas personas, al tiempo de tener el accidente que haba ocasionado la lesin,
volvan a estar tan satisfechas con sus vidas como en el perodo anterior al
suceso. Esta teora se basa en un modelo automtico de la habituacin en el cual
los sistemas reaccionan a las desviaciones del nivel de adaptacin actual. Estos
procesos automticos de habituacin son adaptativos porque permiten que el
impacto del evento simplemente se diluya. Por lo tanto, las fuentes de recursos
personales permanecen libres para poder hacer frente a los nuevos estmulos
que requieren atencin inmediata (F5(',&. y /2(:(167(,1, 1999). La idea
de que las personas son relativamente estables en su bienestar y que ste no es
demasiado sensible a las circunstancias cambiantes del entorno especialmente las
GHVIDYRUDEOHVUHVXOWDDOWDPHQWHDWUDFWLYD$VLPLVPRHVWDUtDH[SOLFDQGRODVSRFDV
GLIHUHQFLDVH[LVWHQWHVHQHOELHQHVWDUSHUFLELGRGHSHUVRQDVFRQPXFKRVUHFXUVRV
personales y de otras con problemas severos. La evidencia emprica de que las
FRQGLFLRQHVH[WHUQDVQRH[SOLFDQHOELHQHVWDUGDFRQVLGHUDEOHVRSRUWHDHVWDWHRUtD
Tanto el ganar ms dinero, el atractivo fsico o las condiciones objetivas de salud
H[SOLFDQDOUHGHGRUGHXQHQODYDULDFLyQGHOELHQHVWDUDIENER, L8&$6 y
S&2//21, 2006).
Algunas correcciones originales al modelo de la adaptacin consideran que
ODV SHUVRQDV QR UHWRUQDQ H[DFWDPHQWH D XQ QLYHO QHXWUDO VLQR TXH HVWH QLYHO GH
50
51
a- Aquello que las personas tienen y el objetivo que quieren lograr (teora del
objetivo-logro).
b- Aquello que las personas tienen y su ideal a lograr (teora del ideal-realidad).
c- Aquello que se tiene en el momento y lo mejor que se obtuvo del pasado
(teora de la mejor comparacin previa).
d- Aquello que uno obtiene y lo que otro grupo social significativo tiene (teora
de la comparacin social).
e- Adaptacin entre medio y sujeto (teora de la congruencia).
Dentro de la teora de las Mltiples Discrepancias el autor toma varias hiptesis
HQ FRPELQDFLyQ EDViQGRVH HQ ORV WUDEDMRV GH &DPSEHOO &RQYHUVH \ 5RGJHUV
(OELHQHVWDUVHH[SOLFDSRUODFRPSDUDFLyQTXHKDFHQODVSHUVRQDVHQWUH
sus estndares personales y el nivel de condiciones actuales. Si el nivel de los
estndares es inferior al nivel de logros, el resultado es la satisfaccin. Si el estndar
es alto y el logro es menor, el resultado es la insatisfaccin.
En la revisin de la literatura que el autor realiza, es posible apreciar que el
GH ODV LQYHVWLJDFLRQHV TXH H[SOLFDQ OD VDWLVIDFFLyQ PHGLDQWH KLSyWHVLV GH
comparacin obtienen resultados positivos. El autor concluye que es prometedora
la utilizacin de este marco terico, relacionando asimismo estas teoras con la
concepcin social del bienestar (welfare) los enfoques naturalsticos y las teoras
pragmticas de los valores.
Unas de las teoras ms clsicas est relacin con la comparacin social. En
estos modelos se utiliza a las otras personas como estndares (DIENER y FUJITA,
6L XQ LQGLYLGXR VH VLHQWH PHMRU TXH ORV GHPiV HQWRQFHV HO UHVXOWDGR HV
la satisfaccin, caso contrario, la infelicidad. Las comparaciones sociales en s
mismas no producen directamente la satisfaccin, sino que las personas eligen
selectivamente con quin compararse (T$</25 :OOD y L,&+70(1, 1983).
En algunos casos se puede incluso crear imaginariamente alguien con quien
compararse. Lyubomirsky y Ross (1997) encontraron que las personas ms
IHOLFHV WLHQGHQ D XVDU FRPSDUDFLRQHV KDFLD DEDMR FRPSDUDUVH FRQ DOJXLHQ
que se encuentra en peor situacin), mientras que las personas infelices utilizan
comparaciones en las dos direcciones.
3RU RWUD SDUWH :LOOV IRUPXOD OD WHRUtD GH ODV FRPSDUDFLRQHV VRFLDOHV
KDFLDDEDMR(VWRHVODVSHUVRQDVSXHGHQPHMRUDUVXVDWLVIDFFLyQFRPSDUiQGRVH
con otras personas menos afortunadas. Segn el autor, esta teora puede ser
puesta en prctica activa o pasivamente. En este ltimo caso, las personas se
52
FRPSDUDQ FRQ DTXHOORV GHVDIRUWXQDGRV TXH VRQ DFFHVLEOHV D VX H[SHULHQFLD (Q
HOVHQWLGRDFWLYRODVSHUVRQDVLQWHQWDQGHQLJUDUDORVGHPiVSDUDDFUHFHQWDUOD
GLVWDQFLDSVLFROyJLFDHQWUHHOORV\ORVRWURV(QHOFDVRH[WUHPRHVWDGLVWDQFLDSXHGH
ser acentuada mediante la induccin del dao fsico de modo activo.
Otros autores trabajaron con el nivel de aspiraciones. Las teoras ms modernas
sealan que el proceso de dirigirse hacia el logro de alguna aspiracin afecta de
DOJXQDPDQHUDHOELHQHVWDUPiVTXHHOORJURHQVtPLVPR&ARVER, L$:5(1&(
y S&+(,(5&6,.6=(170,+$/<,, 1998). En este caso, personas con altas
aspiraciones y bajos logros pueden mantener alto su nivel de bienestar si sienten
que estn haciendo algn progreso hacia el objetivo gua. El logro de objetivos
resulta central como regulador del sistema afectivo. El tener objetivos hacia los
que dirigirse provee un sentido agntico y otorga estructura y significado a la
vida diaria. Las personas obtienen mayor bienestar si tienen como estndar un
objetivo que sea coherente con sus necesidades y motivaciones (BRUNSTEIN,
S&+8/7+(,66 y GRASSMAN, 1998).
Indudablemente la comparacin con algn estndar afecta el nivel de bienestar
(EMMONS y DIENER(OSUREOHPDUHVLGHHQHVWDEOHFHUSRUTXpODVSHUVRQDV
eligen ese estndar y no otro en diversas situaciones (DIENER y FUJITA
53
control sobre este flujo psquico es lo que nos da serenidad y permite alcanzar la
IHOLFLGDG/DVWUDGLFLRQHVDQFHVWUDOHVGHO<RJD\GHO=HQKDQGLVHxDGRWpFQLFDVTXH
permiten reemplazar estos contenidos mentales mediante el control y la disciplina
mentales. La psicologa contempornea, por su parte, ha diseado tcnicas que
permiten cambiar los contenidos mentales, apaciguar el flujo mental o desmantelar
los pensamientos negativos, interviniendo en las actitudes, los estilos preceptuales
y las atribuciones, entre otras.
&VLNV]HQWPLKDO\LKDUHDOL]DGRLQYHVWLJDFLRQHVDORODUJRGHPiVGH
aos con personas que vivan estados plenos de felicidad, aquello que el autor
llama flow. El flow o flujo, es el estado en el cual las personas se hallan tan
involucradas en alguna actividad que ninguna otra cosa parece tener importancia;
ODH[SHULHQFLDHVWDQSODFHQWHUDTXHLQFOXVRVHSDJDUtDXQDOWRFRVWHSDUDSRGHU
desarrollarla. Las actividades artsticas, la msica, los deportes, los juegos y los
rituales religiosos son actividades en las cuales las personas entran frecuentemente
en estado de flow. El autor llega a la conclusin de que la felicidad no es algo
que sucede, no es producto del azar, sino que es una condicin vital que hay que
cultivar para alcanzarla. Aquellos ms felices son los que supieron cmo controlar
VXVH[SHULHQFLDVLQWHUQDVSDUDGHWHUPLQDUODFDOLGDGGHVXVYLGDV(OHVWDGRySWLPR
GHODH[SHULHQFLDVHDOFDQ]DFXDQGRKD\RUGHQHQODFRQFLHQFLDHVGHFLUFXDQGR
las personas pudieron focalizar su energa psquica en una meta. Esta meta tiene
que cumplir con el requisito de retroalimentacin constante para que se alcance
OD FRQGLFLyQ GH IOXMR &XDQGR OD FRQFLHQFLD HVWi RUJDQL]DGD GH HVWD PDQHUD D
WUDYpV GH H[SHULHQFLDV GH IOXMR OD FDOLGDG GH YLGD PHMRUD \ OD SHUVRQDOLGDG VH
diferencia y complejiza. Esto es lo ms cerca que estamos, segn el autor, de la
IHOLFLGDG&VLNV]HQWPLKDO\LHVWXGLyODVH[SHULHQFLDVGHIOXMRHQXQDJUDQFDQWLGDG
de situaciones, condiciones y personas.
El estado de flow tiene que ver con la clsica distincin entre el placer hednico
y eudaemnico de los griegos. Mientras que el placer hednico consiste en el
aumento de emociones positivas la mayor parte del tiempo para ser feliz, el placer
eudaemnico consiste en que el logro de la felicidad no se alcanza de primera
PDQR VLQR TXH H[LJH HVIXHU]R \ WUDEDMR QR VROR SDUD FRQVHJXLUOR VLQR SDUD
PDQWHQHUOR /D SVLFRORJtD SRVLWLYD FRQVLGHUD TXH OD FDSDFLGDG GH H[SHULPHQWDU
flow es una va regia de acceso a la felicidad (PETERSON et al
55
Estas tcnicas se administran una sola vez y se pregunta a las personas acerca de
cun favorable evalan sus vidas de modo general y en reas especficas (DIENER,
SUH, /8&$6y SMITH, 1999). Este tipo de escalas en trminos generales tienen
una buena consistencia interna, estabilidad moderada y son sensibles al cambio en
las condiciones de vida (EID y DIENER, 2004; H($'(<\:EARING, 1989). Esta
clase de instrumentos tienen un nivel moderado de convergencia con los informes
diarios de estados del nimo, el reporte de otros informantes y el recuerdo de
eventos positivos y negativos (6$1'9,&., DIENER y SEIDILTZ, 1993; SEIDILTZ,
:<(5 y DIENER, 1997).
Entre los instrumentos del tipo de autoinforme ms utilizados se encuentran el
PANAS (Positive and Negative Affect ScheduleGH:DWVRQ&ODUN\7HOOHJHQ
TXHFXHQWDFRQtWHPVSDUDHYDOXDUORVDIHFWRVSRVLWLYRV(QVXYHUVLyQH[SDQGLGD
FRQVWDGHtWHPV:ATSON y &/$5., 1994). Algunos autores han criticado a
este instrumento diciendo que los descriptores de emociones positivas y negativas
son limitados y que se omiten emociones positivas que se consideran centrales (por
ejemplo, orgullo, celos, envidia, alegra), dando lugar a la construccin de nuevos
instrumentos (DIENER et al., 2009). El grupo de investigacin de Diener construy
dos nuevos instrumentos, el SPANE P y N (positive and negative experience) para
evaluar tanto emociones positivas y negativas. Las escalas derivadas presentan una
buena confiabilidad y validez. Otros instrumentos son del tipo checklist, en el cual
para evaluar una dimensin se consideran varios tems y el evaluado tiene que
consignar si esa emocin en cuestin est presente o no. Uno de los ms conocidos
en este terreno es el Multiple Affect Adjetive Checklist-R (Z8&.(50$1 y LUBIN,
&RQVWDGHtWHPV\WLHQHFRPRYHQWDMDVDOLJXDOTXHRWURVLQVWUXPHQWRV
del tipo inventario una mayor confiabilidad y una mejor cobertura del contenido
del constructo evaluado. Otros cuestionarios que evalan la afectividad positiva
son en realidad cuestionarios de personalidad, dado que la alta emocionalidad
SRVLWLYDHVWiHQUHODFLyQFRQEDMRQHXURWLFLVPR\DOWDH[WURYHUVLyQ(QHVWHFDVR
tenemos el Multidimensional Personality Questionnaire de Tellegen (1982).
Otras metodologas para evaluar emociones positivas no utilizan el autoinforme.
Entre estas encontramos los mtodos on-line en los que la persona lleva un
beeper o alarma y debe completar un cuestionario de emociones predominantes
cuando le es indicado ()5('5,&.621 y KAHNEMAN, 1993). Esto llevara
a evitar el sesgo en el recuerdo retrospectivo y permite capturar la variacin
en un perodo de tiempo, debido a la labilidad que presentan las emociones.
Algunos autores consideran que este es el mejor mtodo para evaluar emociones
(KAHNEMAN, 1999). Un problema muy frecuente es la gran cantidad de datos
TXHSURGXFHHVWHPXHVWUHRGHODH[SHULHQFLDVXEMHWLYDGHODVSHUVRQDVUHVXOWDQGR
en una metodologa muy complicada para su anlisis (S&2//21, KIM-PRIETO y
56
DIENER, 2003). En otro caso, algunos investigadores consideran til evaluar los
rasgos faciales como marcadores de las emociones. EKMAN y FRIESEN (1978)
idearon un mtodo para codificar imgenes de caras basadas en los movimientos
musculares faciales. Este mtodo, si bien lleva mucho tiempo y entrenamiento,
fue utilizado para evaluar las imgenes de caras en los lbumes de estudiantes
(HARKER y KELTNER, 2001). Finalmente, otro mtodo bastante utilizado para
evaluar las emociones positivas consiste en el recuerdo de eventos placenteros en
un perodo de tiempo dado. La mayor frecuencia de eventos recordados es un
indicador de afecto positivo (SEIDLITZ y DIENER, 1993).
En cuanto a la lnea del bienestar psicolgico, los autores consideran que
adems de las variables individuales relacionadas con el afecto positivo/negativo
y la satisfaccin con la vida es necesario tomar en cuenta la relacin entre la
persona y el entorno (K(<(6 y M$*<$502(, 2003). Los autores dentro de esta
corriente comentan que la mayora de las investigaciones sobre el bienestar no han
WHQLGRXQPDUFRWHyULFRFODURFRPRUHVSDOGR(QHVWHFDPSRH[LVWHXQDFDQWLGDG
de datos empricos, pero muy pocos modelos tericos que guen la construccin
de los instrumentos y la interpretacin de los resultados de las investigaciones. Los
LQYHVWLJDGRUHV GHO ELHQHVWDU SVLFROyJLFR FULWLFDQ OD RSHUDFLRQDOL]DFLyQ H[FOXVLYD
del bienestar a travs de los ndices de afecto positivo o negativo o las escalas
unidimensionales de satisfaccin, ignorando la adjudicacin de significado de los
DFWRVKXPDQRVHQWHQGLGRFRPRHOVHQWLGRGHRUGHQRFRKHUHQFLDHQODH[LVWHQFLD
personal. Algunos autores proponen que el oficio de vivir, en un determinado
momento, supone desarrollar un sentido de integridad, una apreciacin de por
qu y cmo uno ha vivido (REKER, P($&2&. y :21*, 1987). En esta lnea
se ubican los trabajos de Pychyl y Little (1998), quienes estudian los constructos
relacionados con las metas personales y proponen que los proyectos tienen dos
funciones: una instrumental relacionada con la eficacia y el alcance de la felicidad
y otra ms simblica, relacionada con la consistencia y que da por resultado el
significado asignado al proyecto de vida.
En la misma lnea, Ryff (1989) critica los estudios clsicos sobre satisfaccin
diciendo que en general se ha considerado el bienestar psicolgico como la
ausencia de malestar o de trastornos psicolgicos, ignorando las teoras sobre la
autorrelizacin, el ciclo vital, el funcionamiento mental ptimo y el significado
vital. La autora plantea serias dudas sobre la unidimensionalidad del constructo
bienestar psicolgico, sealando su multidimensionalidad (R<)) y K(<(6
&OiVLFDPHQWH HO ELHQHVWDU SVLFROyJLFR IXH LGHQWLILFDGR FRQ OD HPRFLRQDOLGDG
positiva y la ausencia de emociones negativas. Una persona se siente feliz o
VDWLVIHFKDFRQODYLGDVLH[SHULPHQWDGXUDQWHPiVWLHPSR\HQPD\RUIUHFXHQFLD
mayor cantidad de afecto positivo. Implcitamente el bienestar est identificado
,6615HYLVWD,QWHUXQLYHUVLWDULDGH)RUPDFLyQGHO3URIHVRUDGR
57
59
(ORUJXOORSUHGLFHODIHOLFLGDGPiVSDUDODVVRFLHGDGHVLQGLYLGXDOLVWDV\OD
disposicin hacia la amistad ms entre las sociedades orientales como la japonesa
(.,7$<$0$, MARKUS y .8526$:$, 2000).
61
JUXSRVH[SHULPHQWDOHVDORVTXHVHOHVLQVWUX\HURQODVWDUHDVREWHQtDQJDQDQFLDV
significativas en los niveles de bienestar psicolgico.
%RQR\0F&XOORXJKGHPRVWUDURQTXHHOLQFUHPHQWRGHODVH[SHULHQFLDV
de gratitud estn asociadas con el bienestar psicolgico. Las investigaciones de
LQWHUYHQFLRQHV WUDWDURQ GH LQGXFLU H[SHULPHQWDOPHQWH DFWLYLGDGHV GH JUDWLWXG
mediante tcnicas escritas (e.g., escriba una carta para alguien con el que se
siente agradecido) o instruccin de actividades especficas (e.g., acciones de
gratitud reales) demostraron en todos los casos un mayor aumento de bienestar
de las personas (/<8%20,56.<, SHELDON y 6&+.$'( EMMONS y
0F&ULLOUGH :ATKINS et al., 2003). Al respecto, Seligman (2003)
comenta que el motivo por el cual la gratitud mejora el bienestar es porque ampla
los buenos recuerdos sobre el pasado en cuanto a su intensidad y frecuencia, as
como al etiquetado de los pensamientos, amplificando los recuerdos positivos.
Otras intervenciones basadas en la hope theory (61<'(5, 2002) estuvieron
dirigidas hacia la activacin del componente esperanza. Este modelo plantea
como elemento fundamental el logro de metas, teniendo en cuenta adems de las
H[SHFWDWLYDVGHOIXWXURODPRWLYDFLyQ\ODSODQLILFDFLyQQHFHVDULDVSDUDFRQVHJXLU
dichos objetivos. Los trabajos de Irving et al. (2004) demostraron en un formato
de tratamiento breve focalizado en la esperanza antes del tratamiento clnico
propiamente dicho, la eficacia de intervenciones dirigidas a la esperanza en un
grupo de pacientes clnicos. Otra investigacin que tena como objetivo verificar
ODHILFDFLDGHLQWHUYHQFLRQHVEDVDGDVH[FOXVLYDPHQWHHQODHVSHUDQ]DGHPRVWUDURQ
que las actividades relacionadas con la formulacin de metas, el uso de vas
mltiples para alcanzar los objetivos, la utilizacin de recursos motivacionales y la
monitorizacin de progresos era muy til para mejorar la esperanza (&+($9(16
et al., 2006).
Fava (1999) dise un programa de intervenciones positivas para promover
el bienestar de modo complementario a otros tratamientos farmacolgicos o
psicolgicos. El programa se basaba en el reconocimiento de recuerdos de eventos
positivos y en la identificacin de obstculos que dificultan dichos recuerdos. Tiene
como base terica la teora del bienestar de Ryff (1989). Se ha demostrado la
eficacia de esta intervencin en pacientes depresivos y con trastornos de ansiedad
generalizada (FAVA y RUINI, 2003). En todos los casos, el mdulo de terapia
del bienestar combinada con otro tratamiento clnico potencia la eficacia de los
resultados de las terapias convencionales.
Frisch (1998, 2006) plantea un tipo de intervencin clnica llamada terapia
de calidad de vida, que integra una teora del bienestar, instrumentos de medida
62
Comentarios finales
La ciencia del bienestar, como algunos autores contemporneos la llaman, es
XQDGLVFLSOLQDMRYHQTXHFXHQWDFRQVRORFXDWURGpFDGDVGHH[LVWHQFLD9=48(=,
61&+(= y +(596, 2008). En estos aos obtuvimos una firme evidencia de
aquello que hace feliz a las personas, ya que una gran parte de las investigaciones
sobre el bienestar estuvo centrada en el estudio de las diferencias individuales.
Sin embargo, en las investigaciones ms recientes, se plante que el bienestar no
es un mero resultado de otras variables psicolgicas, sino que es un importante
predictor de la salud fsica, de la longevidad, de las relaciones interpersonales y del
funcionamiento psicolgico ptimo de las personas (DIENER y B,6:$6',(1(5,
2008). Si bien mucho se ha hecho, especialmente en la medicin del bienestar,
VHQRWDODDXVHQFLDGHWHRUtDVSVLFROyJLFDVFRPSUHQVLYDVTXHSXHGDQH[SOLFDUSRU
qu las personas estn felices. Las intervenciones psicolgicas, muchas de ellas
HQVXIDVHH[SORUDWRULDGDQFXHQWDGHTXHHOELHQHVWDUVHSXHGHPRGLILFDU\TXH
,6615HYLVWD,QWHUXQLYHUVLWDULDGH)RUPDFLyQGHO3URIHVRUDGR
63
Referencias bibliogrficas
ALLMAN, A. (1990). Subjective well-being of people with disabilities: Measurement issues.
Unpublished Master thesis. University of Illinois (citado por Avia y Vazquez, 1998).
ANDREWS, F. y ROBINSON, J. (1991). Measures of subjective well-being. En: J. Robinson.
y P. Shaver (Eds.), Measures of personality and social psychological attitudes.
California: Academic Press.
ANDREWS, F. y WITHEY, S. (1976). Social indicators of well being: Americans perceptions
of life quality. New York: Plenum.
ARGYLE, M. (1987). The psychology of happiness. London: Methuen.
ARGYLE, M., MARTIN, M. y LU, L. (1995). Testing for stress and happiness: The role of
social and cognitive factors. En C.D. Spielberger y I.G.Sarason (Eds.), Stress and
emotion (pp. 173-187). Washington, DC: Taylor & Francis.
AVIA, M. y VZQUEZ, C. (1998). Optimismo inteligente. Madrid: Alianza Editorial.
BONO, G. y McCULLOUGH, M. E. (2006). Positive responses to benefit and harm:
Bringing forgiveness and gratitude into cognitive psychotherapy. Journal of Cognitive
Psychotherapy, 20, 147-158.
BRADBURN, N. (1969). The structure of psychological well-being. Chicago: Aldine.
BRICKMAN, P., COATES, D. y JANOFF-BULMAN, R. (1978). Lottery winners and accident
victims: Is happiness relative? Journal of Personality and Social Psychology, 36, 917927.
64
65
66
DIENER, E., SUH, E. N., LUCAS, R. E. y SMITH, H. L. (1999). Subjective well-being: Three
decades of progress. Psychological Bulletin, 125, 276-302.
DIENER, E., WIRTZ, D., BISWAS-DIENER, R., TOV, W., KIM-PRIETO, C., CHOI, D. y OISHI,
S. (2009). New measures of well-being. In The Collected Works of Ed Diener, Volume
3. The Netherlands: Springer.
EASTERLIN, R.A. (2005). Feeding the illusion of growth and happiness: A reply to Hagerty
and Veenhoven. Social Indicators Research, 74, 429-443.
EID, M. y DIENER, E. (2004). Global judgments of subjective well-being: Situational
variability and long-term stability. Social Indicators Research, 65, 245-277.
EKMAN, P. y FRIESEN, W. V. (1978). Facial action coding system: A technique for the
measurement of facial movement. Palo Alto, Calif.: Consulting Psychologists Press.
EMMONS, R.A. (1998). A systems framework or systems frameworks? Psychological
Inquiry, 9, 148-150.
EMMONS, R., CHEUNG, C. y TEHRANI, K. (1998). Assessing espirituality through personal
goals: Implications for research in religion and subjective well-being. Social Indicators
Research, 45, 391-422.
EMMONS, R. y DIENER, E. (1985). Personality Correlates of Subjective well being.
Personality and Social Psychology Bulletin, 11 (1), 89-97.
EMMONS, R.A. y McCULLOUGH, M.E. (2003). Counting blessings versus burdens:
Experimental studies of gratitude and subjective well-being. Journal of Personality
and Social Psychology, 84, 377-389.
ERICKSON, E. H. (1959). Identity and the life cycle: Selected papers. Psychological Issues,
1, 1-171.
FAVA, G. (1999). Well-being therapy: Conceptual and technical issues. Psychotherapy and
Psychosomatics, 68, 171-179.
FAVA, G. y RUINI, C. (2003). Development and characteristics of a well-being enhancing
psychotherapeutic strategy: Well-being therapy. Journal of Behavior Therapy and
Experimental Psyquiatry, 34, 45-63.
FORDYCE, M. W. (1977). Development of a program to increase happiness. Journal of
Counseling Psychology, 24, 511-521.
FORDYCE, M. W. (1983). A program to increase happiness: Further studies. Journal of
Counseling Psychology, 30, 483-498.
67
68
KEYES, C.L.M. y MAGYAR-MOE, J.L. (2003). The measurement and utility of adult
subjective well-being. En Shane J. Lpez y C.R. Snyder (Ed.), Positive psychological
assessment: a handbook of models and measures (pp. 411-425). Washington:
American Psychological Association.
KITAYAMA, S., MARKUS, H. R. y KUROSAWA, M. (2000). Culture, emotion, and well-being:
Good feelings in Japan and the United States. Cognition & Emotion, 14, 93-124.
KLINGER, E. (1977). Meaning and void: Inner experience and the incentive in peoples lives.
Minneapolis: University of Minnesota Press.
LARSEN, R., DIENER, E. y EMMONS, R. (1985). An evaluation of subjective well-being
measures. Social Indicators Research, 17, 1-17.
LARSEN, R. y KETELAAR, T. (1991). Personality and susceptibility to positive and negative
emotional states. Journal of Personality and Social Psychology, 61, 132-140.
LUCAS, R. E. (2005). Time does not heal all wounds. A longitudinal study of reaction and
adaptation to divorce. Psychological Science, 16, 945-950.
LUCAS, R. E., CLARK, A. E., GEORGELLIS, Y. y DIENER, E. (2003). Re-examining adaptation
and the set-point model of happiness: Reactions to changes in marital status. Journal
of Personality and Social Psychology, 84, 527-539.
LUCAS, R. E., CLARK, A. E., GEORGELLIS, Y. y DIENER, E. (2004). Unemployment alters
the set-point for life satisfaction. Psychological Science, 15, 8-13.
LUCAS, R., DIENER, E. y LARSEN, R. (2003). Measuring positive emotions. En C. R. Snyder
y M. Lopez (Eds.), Positive Psychological Assessment: A handbook of models and
measures (pp. 201-218). Washington, DC: American Psychological Association.
LUCAS, R. E., DIENER, E. y SUH, E. (1996). Discriminant validity of well-being measures.
Journal of Personality and Social Psychology, 71, 616-628.
LYKKEN, D. y TELLEGEN, A. (1996). Happiness is a stochastic phenomenon. Psychological
Science, 7, 186-189.
LYUBOMIRSKY, S. (2007). The how of happiness. New Cork. The Penguin Press.
LYUBOMIRSKY, S., KING, L. y DIENER, E. (2005). The benefits of frequent positive affect:
Does happiness lead to success? Psychological Bulletin, 131, 803-855.
LYUBOMIRSKY, S. y ROSS, L. (1997). Hedonic consequences of social comparison: A
contrast of happy and unhappy people. Journal of Personality and Social Psychology,
73, 1141-1157.
69
70
71
72