Cultura Obrera en El Interior Del Uruguay (Pascual Muñoz)

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CULTURA OBRERA

EN EL INTERIOR DEL URUGUAY


(Salto, Paysand y Rocha 1918-1925)

PASCUAL MUOZ

L
Muoz, Pascual
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay
(Salto, Paysand y Rocha 1918-1925)
1. Movimiento Obrero Uruguay.
2. Salto, Paysadn, Rocha.
3. Anarquismo, Comunismo, Socialismo.

Lupita Ediciones
ISBN: 978-9974-99-849-0

Diseo y maquetacin
Lupita Ediciones
Foto de Tapa: Salto 1 de Mayo de 1921.
(Tribuna Saltea, 2 de Mayo de 1921)

1era Edicin, 1000 ejemplares.


Montevideo, Mayo 2015.
ISBN: 978-9974-99-849-0

Proyecto Seleccionado por Fondo Concursable para la Cultura - MEC


Agradecimientos

Este proyecto premiado por los Fondos Concursables para la Cultura nunca
hubiera logrado su aprobacin sin la inmensa ayuda de Leticia Rodrguez
Taborda para redactar el mismo.
Victor Muoz, Gastn Amen y Paula Cua leyeron y corrigieron los primeros
borradores de este trabajo.
Daniel Vidal y Gerardo Garay leyeron y aportaron comentarios al captulo
de Cultura Obrera.
Analaura Cardozo, Bettina Rodriguez, Ianara Francia, Federico Sobrino, Ro-
drigo Alterna, Polen y Marianella Irace, transcribieron los textos incluidos
en el Anexo.
Para esta investigacin han colaborado tambin; Francisco Fernandez de
Paula, Martn Manuli, Ricardo Silva, Ignacio Pardo, Jimena Silva y Rodolfo
Porrini.
A su vez han sido parte fundamental del trabajo de investigacin en todo
este tiempo, recabando informacin y apoyando el proyecto, desde el viejo
continente; Kike (estas pginas son para t, hasta que caigan todos los mu-
ros, que las almas libres no se pueden encerrar), Anna, Bea, Alba (vaya un
apretado abrazo tras los golpes de Pandora!). Estefa, Josich, Mikel, Lies-Lot,
Mara Miguelaez, Miquel Amors, Miguel Iiguez, Marcos (La Malatesta),
Beta, Marja, Mariana y Furio (Biblioteca Franco Serantini).
Desde Argentina; Nacho (F.O.R.A.), Maxi y Juan (de la ex Biblioteca de los
libros de la Esquina), Nahuel y Kuka (eternos anfitriones), Agustina Prieto
(Rosario) y Jorge O. Gilbert.
Desde aqu; Hctor Feliciano, Jarry Poster, Pichinchas, Juan Pilo, Puchil,
Martn Ayala, Rosario, Roberto y Anah, Cacho y Julio (Aragones). Gustavo
Fripp, Esteban Corrales, Natalia Carb, Julio Varela, Marcelo Salom (librera
El Ojo -Galera Central-, gran proveedor de imgenes).
Es imposible no mencionar a su vez a Yamand Gonzalez Sierra, Rafael Es-
posito (Daniel Barret) y Luis Alberto Gallegos (el viejo Beto) aunque ya no
estn entre nosotros.
Por ltimo tambin a las funcionarias de la Biblioteca Nacional. Los colegas
del Cedinci (Laura Fernandez Cordero, Horacio Tarcus y Lucas especialmente),
la Biblioteca Anarquista del Cerro, la extinta Biblioteca y Archivo Luce Fabbri
en Montevideo, el Archivo de la F.L.A. y el Ateneo Constitucin, la extinta Bi-
blioteca de los libros de la Esquina y la F.O.R.A. Capital y Rosario.

3
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

PRESENTACIN

Zambullirnos en el mundo de la cultura obrera en el


interior de los aos veinte nos ofrece un primer obstculo que es
la falta de conocimiento sobre la historia y desenvolvimiento de
ese complejo mundo obrero.
La historia del movimiento obrero en el interior del
Uruguay est indudablemente, poco estudiada.1
Para poder tener un acercamiento hacia la cultura obrera
del interior, cre entonces importante profundizar en el contexto
histrico y recorrido que el movimiento obrero curs por esas
fechas, ya que sus prcticas culturales son expresin de un
1 Se destaca, entre los pocos libros publicados sobre el tema, el de Yamand
Gonzalez Sierra, Los olvidados de la tierra (Nordan, Montevideo, 1994), ya que
abarca casos puntuales de la lucha de los trabajadores rurales en los depar-
tamentos de Treinta y Tres, Florida, Salto, Paysand y Rocha entre la dcada
de 1930 y 1970. Tambin es de destacar el importante trabajo de Raul Zibechi,
De multitud a clase. Formacin y crisis de una comunidad obrera, Juan Lacaze.
(1905-2005). (Ed. Ideas, Montevideo, 2006.) A su vez, podemos mencionar el de
Gabriela Szapriza, Los caminos de una ilusin. 1913: huelga de mujeres en Juan
Lacaze (Montevideo, Fin de Siglo, 1993 )y un reciente trabajo de Ral D. Chega
Espiga, Los picapedreros de La Paz (1872-1928) (Talleres Vanguardia, La Paz 2010).
Luego de eso, hay escasas menciones sobre el movimiento en el inte-
rior del pas en los trabajos que recorren la historia del movimiento obre-
ro del Uruguay, destacndose en ese aspecto quizs los de Pintos, F. His-
toria del movimiento obrero del Uruguay, Montevideo, Gaceta de Cultura,
1960. Y D'Ela, Germn - Miraldi, Armando, Historia del movimiento obre-
ro en el Uruguay. Desde sus orgenes hasta 1930, Montevideo, EBO, 1985.
En relacin a la cultura obrera, se han publicado recientemente importantes tra-
bajos sobre el tema, como ser el de Daniel Vidal, Florencio Snchez y el anarquis-
mo (Banda Oriental. Montevideo, 2010), el de Carlos Zubillaga, Cultura popular en
el Uruguay de entresiglos (Leonardi y Risso, Montevideo, 2011), y los artculos de
Rodolfo Porrini; Anarquistas en Montevideo: Ideas y prcticas en torno al tiempo
libre de los trabajadores. (1920-1950) (Historia: Debates e Tendencias. V.13 N2,
Jul/dez, 2013 p-357-371.), Izquierda uruguaya y culturas obreras. Propuestas al
aire libre: el caso del ftbol. (Montevideo, 1920-1950) (Dilogos, v. 16, n.1, p.
69-95, jan.-abr./2012.), Izquierda uruguaya y culturas obreras. Propuestas al aire
libre:pic-nics y paseos campestres en Montevideo,1920-1950 (Revista Mundos
do Trabalho, vol. 3, n. 6, julho-dezembro de 2011, p. 105-129.) pero todos se enfo-
can principalmente en Montevideo

4
Presentacin

accionar que busca transformar su entorno y la sociedad en


general, y sera casi imposible comprender sus prcticas culturales
sin comprender los acontecimientos del periodo.
El trabajo que se presenta a continuacin est lejos
de subsanar la carencia existente sobre la bibliografa del
movimiento obrero en el interior, aportando un fragmento ms
de tan vasta historia en tres departamentos y en un periodo de
tiempo acotado.
Sin embargo dicho periodo, por mas acotado que
sea (unos 7 aos para Salto y 5 para Paysand y Rocha) es un
momento ms que especial en la historia del movimiento obrero
local e internacional, ya que a un mundo conmocionado por la
Gran Guerra de 1914 y la crisis econmica, se le sumaba una
onda expansiva irradiada desde la Rusia revolucionaria que haba
destronado a los zares y proclamado la aplicacin prctica del
socialismo.
En esos aos el movimiento obrero internacional se
precipitar hacia la bsqueda de una salida revolucionaria para
concretar sus aspiraciones. El movimiento obrero de la regin
y del interior uruguayo no ser nada ajeno a esa situacin.
Recorreremos entonces, como se manifest esa onda expansiva
irradiada desde Rusia y como se materializaron en el interior
uruguayo, las profundas divisiones que atravesaron a todo el
proletariado universal ante momentos de dramticas definiciones.
A su vez se profundiz en algunas corrientes ideolgicas
del movimiento obrero, en particular el federalismo obrero,
originado por los internacionalistas del siglo XIX y de la cual tanto
la Federacin Obrera Regional Uruguaya, como la Federacin
Obrera Local Saltea fueron fieles continuadoras.
Sera importante complementar este trabajo con el estudio
del resto de los departamentos, lo que ayudara a completar el
mapa de lo acontecido en esos agitados aos.

5
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

La fuente de informacin de esta investigacin era


originalmente, el revelamiento del peridico La Tierra que edit,
en su primer poca, unos 221 ejemplares entre 1920 y 1925 (y de
donde se haya abundante informacin del movimiento en Salto y
Paysand) y Trabajo, editado en Rocha entre 1920 y 1921.
La presencia que el movimiento obrero pareca tener en
Salto en el momento de editarse La Tierra en 1920 llev a esta
investigacin a indagar un poco antes de la fecha propuesta
para comprender como el movimiento haba logrado tal nivel
de desarrollo, por lo cual, el primer captulo corresponde casi
enteramente a la ciudad de Salto entre los aos 1917 y 1920.
Por otro lado, el departamento de Paysand quizs est
sub estudiado, sobre todo en comparacin con Salto, que es el
departamento del que se hall ms informacin.
De las dos fuentes principales utilizadas, se complement el
trabajo con la consulta de una cantidad importante de peridicos
obreros, anarquistas, comunistas y comerciales de Montevideo,
Salto, Paysand, Rocha y Buenos Aires.
El lector o la lectora podr encontrar entonces una des-
cripcin del movimiento en los agitados aos rojos que vieron
comenzar la dcada del 20. Luego se desarrolla, en la segunda
parte de este trabajo, las expresiones culturales que el movi-
miento obrero en el interior llev a la prctica, en sintona con las
prcticas culturales de los principales centros de difusin obrera,
interiorizndonos en sus expresiones locales.
Y finalmente se incluye un anexo documental que da
cuenta de la cultura obrera en la regin estudiada.
Esperamos con este trabajo poder contribuir a la memoria
histrica del movimiento obrero en el interior uruguayo, su capa-
cidad de organizacin y sus experiencias de autogestin.

6
Presentacin

Mapa de la Repblica Oriental del Uruguay

7
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Mapa del departamento de Salto

Mapa del departamento de Paysand

8
Presentacin

Mapa de la provincia de Entre Rios (Argentina)

9
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Mapa del departamento de Rocha

10
PRIMERA PARTE
EL MOVIMIENTO OBRERO
Aproximacin al momento y el lugar

1. Aproximacin al momento y el lugar.


1.1. Un acercamiento demogrfico y econmico
a la regin.

Antes de introducirnos en la historia del movimiento


obrero de estos tres departamentos del Uruguay debemos ha
cer una pequea introduccin sobre los mismos.
Lo primero que hay que sealar es que Salto y Paysand
conforman una suerte de unidad geogrfica, por ser departa
mentos limtrofes y por compartir sus lmites con el ro Uruguay
y la Repblica Argentina, por lo cual su economa y su realidad
es muy similar, al igual que sus comunicaciones y el flujo de
obreros y militantes gremiales.
Rocha en cambio se encuentra al otro margen del pas
compartiendo sus lmites con el ocano Atlntico y la Repblica
Federativa del Brasil.
Es sabido que Montevideo, con apenas el 0,30% del te
rritorio uruguayo concentra la mayor cantidad de poblacin y
actividad econmica del pas. Eso es as en la actualidad y lo ha
sido desde que existe el Uruguay.
A nivel territorial Salto y Paysand son de los departa
mentos ms extensos del Uruguay, despus de Tacuaremb que
ocupa un 8,82% del territorio nacional se encuentra Salto ocu
pando el 8.09% (14.163 km2) y luego Paysand con el 7,95%
(13.922 km2), Rocha por su parte ocupa el 6,03% (10.551 km2).
A nivel de poblacin los principales datos que tenemos
provienen de los censos nacionales. Lamentablemente en
tre el censo de 1908 y el de 1963 no se realiz ninguno, pero
igualmente nos acercaremos a la realidad del periodo estudia
do complementndolos con otros datos. Claro que el censo de
1908 est muy cerca de la fecha de nuestro trabajo (1918 a
1925), pero hay que tener en cuenta que los aos que van de

13
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

1908 en adelante son aos de profundos cambios econmicos,


productivos y de crecimiento demogrfico debido fundamental
mente a la inmigracin europea que an es importante.
Si nos atenemos al Censo de 19081, de una poblacin na
cional total de 1.042.686, Montevideo concentra el 29,6% de la
poblacin (309.231). En sptimo lugar se encuentra Salto (des
pus de Canelones, Colonia, Lavalleja, Tacuarembo y San Jos,
en ese orden) con el 4,44% de la poblacin (46.259). Paysand
se ubica en el doceavo lugar (luego de Cerro Largo, Durazno,
Florida y Soriano respectivamente) con el 3,68% de la poblacin
nacional (38.421), y por ltimo Rocha (despus de Rivera) con
el 3,27% de la poblacin (34.119). Es decir que de los 19 depar
tamentos ocupaban los lugares 7, 12 y 14. Para 1963 Salto haba
ascendido al tercer lugar pero descendido al 3,55% (92.183) de
la poblacin total. Paysand se ubicaba en el cuarto lugar, justo
despus de Salto con el 3,39% (88.029) y Rocha en el lugar 13
con el 2,12% (55.097) de la poblacin nacional.
Para acercarnos a la realidad de los aos 20 debemos mi
rar hacia el censo de 1908 ms que al de 1963. Pero la prensa
comercial de Salto nos aporta algunos datos complementarios
que son fundamentales.
Tribuna Saltea del 6 de Febrero de 1919 publica los da
tos del Anuario Estadstico del Uruguay el cual seala que en
Diciembre de 1915 Salto tena 68.922 habitantes y en Diciembre
de 1916, 74.415. Para Paysand seala 63.343 habitantes en Di
ciembre de 1915 y 65.915 un ao despus.
Lo cual demuestra un fuerte crecimiento de ambas ciu
dades, casi duplicndose su poblacin en menos de diez aos.
Por otro lado queremos tener una aproximacin al aspec
to econmico de dichos departamentos.
1 Agradezco a Ignacio Pardo del departamento de Demografa de la Facultad de
Ciencias Sociales (UdelaR) por haberme facilitado los datos censales de 1908 y
1963.

14
Aproximacin al momento y el lugar

Segn el estudio de Mariana Garca, Julio MartnezGala


rraga y Henry Willebald titulado Crecimiento y estructura pro-
ductiva regional en Uruguay en la primera mitad del siglo XX:
primeras aproximaciones y algunas hiptesis2 donde se reali
zan importantes estimaciones econmicas para periodos en los
que no existen datos hasta el momento siguiendo la metodo
loga de recientes estudios europeos. Segn dicho trabajo, la
Poblacin Econmicamente Activa de Salto en 1908 en el sec
tor primario3 era 4% del total nacional, el sector secundario4 el
4,65% y el terciario5 4,78.
Para Paysand las cifras son de 3,08%, 3,77% y 3,3% res
pectivamente. Y Para Rocha; 4,16%, 1,91% y 2,03%. 6
Como vemos tanto a nivel de poblacin como de P.E.A.,
Salto predomina sobre Paysand y ste sobre Rocha, aunque
Rocha tena una mayor actividad en el sector primario. Pero de
bemos considerar que el movimiento obrero se conform bsi
camente de trabajadores del sector secundario en el que Salto

2 Mariana Garca, Julio MartnezGalarraga y Henry Willebald Crecimiento y estruc-


tura productiva regional en Uruguay en la primera mitad del siglo XX: primeras
aproximaciones y algunas hiptesis Seminario Programa de Historia Econmica
y Social. Facultad de Ciencias Sociales, Universidad de la Repblica, Uruguay. Sep
tiembre de 2014. (Agradezco a Mara Magdalena Camou del Programa de Historia
Econmica de la Facultad de Ciencias Sociales (UdelaR) por haberme facilitado
dicho documento y a Henry Willebald por haber autorizado su utilizacin en este
trabajo).
3 Actividades econmicas relacionadas con la transformacin de los recursos natu
rales en productos no elaborados. Usualmente, los productos primarios son utili
zados como materia prima en otros procesos de produccin en las producciones
industriales. Las principales actividades del sector primario son la agricultura, la
minera, la ganadera, la apicultura, la caza, la pesca entre otras.
4 Actividad artesanal e industrial manufacturera, mediante las cuales los bienes
provenientes del sector primario son transformados en nuevos productos. Abarca
tambin la industria de bienes de produccin, tales como materias primas artifi
ciales, herramientas, maquinarias, etc.
5 Servicios varios (comercio, distribucin, etc)
6 Datos de Garca, Martnez, Willebald, 2014:29

15
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

tiene una importante cantidad en comparacin a los otros dos


departamentos y eso se ver reflejado tambin en la activad
sindical de dichos departamentos.
Otro dato importante que nos ofrece el estudio de Gar
ca, Martnez y Willebald es el del Valor Agregado Bruto, que es
el conjunto de ingresos generados por los tres sectores de pro
duccin (algo similar al P.B.I. pero sin los impuestos agregados).
Veamos el V.A.B.

Es importante aclarar que Montevideo, salvo en el sector


agropecuario que representaba el 3,1%, tena un peso ms que
importante en el sector industrial y de servicios representando
el 69,8% y 61,0% respectivamente, por lo cual los porcentajes de
Salto y Paysand son importantes para el periodo.

Para el segundo perodo hay que destacar el crecimien


to de Montevideo al 85,5% en el sector industrial y 65,3% en el
terciario. Si consideramos que del sector industrial, de donde se
nutre bsicamente la poblacin del movimiento obrero, nos que
da un 30,2% en 1908 y un 14,5% en 1937 para repartir entre 18
departamentos, los ndices de Salto y Paysand son importantes
y se corresponden con su intensa actividad gremial.
Tambin puede resultar interesante el V.A.B. per cpita en
cada departamento, para 1908 el mayor era Montevideo con un
ndice de 162,6. En cuarto lugar Paysand con 96,8. En sptimo
lugar Salto con 85,7 y Rocha en el lugar diecisis con 61,1.

16
Aproximacin al momento y el lugar

Para 1937, tambin lidera Montevideo (146,3), encontra


mos a Paysand en el lugar sexto con 83,7. Rocha en el lugar do
ceavo con 69,2 y Salto en el diecisiete con 51,4.7
Sobre el tipo de poblacin, en Paysand predominaba
apenas en un 53% la poblacin urbana sobre la rural, en Salto se
mantena en partes iguales y en Rocha la poblacin urbana era
apenas del 32%.8
Las estadsticas de la Oficina Nacional del Trabajo de 1926
nos ofrecen algunos datos complementarios, existan para esa
fecha 132 establecimientos industriales en Salto y 298 estableci
mientos comerciales, ambos sumaban 1589 obreros, (2,3% de los
establecimientos nacionales y 7,18% de los establecimientos del
interior. 1,71% de los obreros a nivel nacional y 8,18% del total
del interior.)
Paysand contaba con 40 industrias, 84 comercios en total.
Siendo el 0,65% del total nacional y el 2,02% del interior. Los obre
ros eran unos 1458, 1,56% del total nacional 7,5% del interior.
Rocha, por su parte contaba con 57 industrias, 98 comer
cios en total, siendo el 0,76% del total nacional y el 2,36% del in
terior. La cantidad de obreros era 592, el 0,63% del total nacional
y 3,04% del interior.9
Estos datos son importantes por la fecha de 1926 muy cer
cana a nuestro periodo. De all se desprende que solo Salto tiene
una actividad industrial y comercial importante de los tres departa
mentos; por encima de Salto se ubicaban Montevideo, Soriano, Ca
nelones, Colonia, Lavalleja y San Jos, en ese orden de importancia.
Del total de obreros y empleados a nivel nacional el 23,56%
eran extranjeros.

7 Garca, Martnez, Willebald, 2014:1


8 Garca, Martnez, Willebald, 2014:28
9 Acevedo, Eduardo, Anales Histricos del Uruguay, Tomo VI, Barreiro y Ramos,
Montevideo, 1936, pg 347.

17
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Sin embargo, segn un dato anterior de la Oficina Nacio


nal del Trabajo, para 1920 ya haban 1551 obreros en Salto y 139
establecimientos industriales, siendo el tercero en importancia
despus de Montevideo y Colonia, lo que nos hace pensar que
la gravitacin econmica de Salto en el periodo era an mayor.
Paysand, en quinto lugar tena para ese ao 851 obreros.10
En resumen, Salto y Paysand parecen haber sido dos po
los industriales importantes dentro del interior del Uruguay don
de el sector industrial era realmente muy menor (el 67,49% de los
establecimientos industriales y comerciales se concentraban en
Montevideo en 1926). Sin duda, el fuerte econmico del interior
fue el agropecuario (96,9% del V.A.P. en 1908 para el interior y
97,8% para 1937). Pero es claro que el movimiento obrero, si bien
siempre manifest su intencin de suscitar la adhesin de los tra
bajadores rurales, se nutri bsicamente de la poblacin urbana.
Segn el estudio de Garca, Martnez y Willebald, Paysand
integra el grupo de los departamentos lderes11 del interior, es
decir que representan en su conjunto ms del 50% del P.B.I. del
interior, Salto lo integraba para 1908, descendiendo a la categora
de seguidores para 1936, mientras que Rocha que se colocaba
entre los seguidores en 1908 queda dentro de los rezagados
para 1936.
No es nuestra intencin analizar el por qu del decaimiento
del departamento de Salto en la economa nacional, pero como
vimos hasta al menos 1926 segua teniendo un lugar importante
dentro de sta.

10 Diario Nuevo (Salto) 20 de Agosto de 1920.


11 De los 18 departamentos del interior, los autores proponen tres categoras de seis
departamentos; lderes, seguidores y rezagados.

18
Aproximacin al momento y el lugar

Algunos datos econmicos para entender el perodo.

No podemos entender el convulsionado periodo que va


mos a estudiar sin compenetrarnos mnimamente en la difcil si
tuacin econmica que se viva.
El perodo comprendido durante la Gran Guerra (prime
ra guerra mundial) fue de una desoladora crisis econmica en
toda la regin europea lo que precipit aun ms la oleada revolu
cionaria luego de la revolucin rusa.
En Uruguay se vivir una crisis econmica que golpear du
ramente a las clases trabajadoras y tambin acta como detonan
te de los potenciales revolucionarios de los trabajadores.
Veamos algunos datos econmicos. Por ejemplo si toma
mos como valor de costo de vida de una familia obrera en 1914 el
valor 100. Para 1918 era de valor 116.6. Para 1919 128, para 1920
148 y para 1921 hay una recuperacin colocndose en 139.12
Es decir que el periodo estudiado es de grave crisis y pre
cipitacin econmica. Los aos 1919 y 1920 son los de mayor
retraccin econmica y donde el empobrecimiento de la clase
trabajadora llega a su punto mximo. Desde 1914 a 1920 el cos
to vital aument un 49% y el poder de compra se redujo en un
20%.13
Los ndices de desocupacin tambin son llamativos. En
1920 haba un 67% ms de desocupados que en 1914 y en 1921
un 50% ms que en e 1914, ms all de la recuperacin del ao
21, los ndices destacan un panorama conflictivo.14

12 El Salario Real. Ministerio de Industrias. Imprenta Nacional. Montevideo, 1927.


(En Lopez DAlessandro, F. La fundacin del partido comunista y la divisin del
anarquismo Vintn, Montevideo, 1992. Pg. 15).
13 Lopez DAlessandro, 1992:17
14 Idem.

19
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Esto sin duda se vio reflejado en la actividad obrera, segn


el Anuario Estadstico del Uruguay entre 1911 y 1916 hubieron
103 huelgas en el pas, mientras que entre 1917 y 1921 hubieron
441, ms de cuatro veces ms.
Segn el trabajo de Bertino, Bertoni, Tajam y Yaffe,15 en el
perido de 1913 a 1922 el producto [bruto interno] muestra una
brusca cada primero y luego una lenta recuperacin, fruto de la
crisi financiera de 1913, los efectos de la Primera Guerra Munidal
y la posterior crisis de posguerra16
Finalmente incluimos el siguiente cuadro que nos ilus
tra la difcil situacin fiscal del Estado uruguayo en el periodo
estudiado.17

15 B
 ertino, M., Bertoni, B., Tajam H., y Yaff, J., La larga marcha hacia un frgil resul-
tado 1900-1957, Ed Banda Orienta, Montevideo, 2001.
16 Idem, pg 16.
17 T omado de: Bertino, M. Y Bertoni B. Balance fiscal, economa y poltica, 1906-
1930 Revista de Economa;2da. poca v. XI:73-110, Montevideo, mayo 2004.
(http://www.bvrie.gub.uy/local/File/REVECO/2004/Bertino-Bertoni.pdf)

20
Aproximacin al momento y el lugar

1.2. Origen del movimiento obrero local y el federalismo


obrero en el Rio de la Plata.

Antes de sumergirnos en la realidad del movimiento obre


ro de Salto, Paysand y Rocha, debemos comprender el contexto
y la historia que el movimiento obrero tena en la regin y en
dichas localidades.
Se considera como origen del movimiento obrero local la
fecha de 1870, en la que se logra materializar la creacin del pri
mer gremio, o sindicato en el Uruguay, en particular la Sociedad
Tipogrfica Montevideana fundada el 25 de Agosto de 187018,
quienes venan intentando organizarse desde al menos 185819.
En 1872, se constituye en Montevideo, formada por obre
ros europeos ya vinculados a la lucha obrera, una seccin de la
Asociacin Internacional de Trabajadores (A.I.T.).
La A.I.T. haba sido fundada entre otros por Carlos Marx y
Federico Engels en 186420. Desde sus comienzos la Internacional

18 Estatutos

de la Sociedad Tipogrfica Montevideana Montevideo, Imprenta El Si
glo, 1870. Tambin por estas fechas es fundada la Societ Culinarie de Secours
Mutuels.
19 
La Nacin, del 10 de Abril de 1858 en su pgina dos seala Sociedad Tipogrfica.
Se invita a todos los tipgrafos, litgrafos, repartidos a una reunin general que
tendr lugar el Domingo 11 del corriente, a las 2 de la tarde en la imprenta del Sr.
Mega, calle de Misiones N120 con el fin de tomar las medidas necesarias para
la instalacin de dicha sociedad que tendr lugar el 17 de Mayo prximo. (infor
macin brindada por Yamand Gonzlez Sierra al autor de este trabajo)
20 
La misma fue originada por una reunin entre trabajadores ingleses y franceses en
Londres en agosto de 1862, como lo seala Anselmo Lorenzo, referente de la sec
cin espaola; La exposicin internacional verificada en Londres en 1862, reuni
a muchos obreros de distintos pases, favoreciendo esta coyuntura los proyectos de
Marx. Este promovi con algunos obreros la clebre fiesta de la fraternizacin in-
ternacional, realizada el 5 de agosto de 1862, reuniendo de esta suerte a todos los
delegados obreros en un local de la francmasonera de Londres, y all fue lanzada
la idea de la fundacin de La Internacional. Lorenzo, Anselmo. El Proletariado
Militante. Tomo I Ed. del movimiento libertario espaol CNT en Francia, Toulouse,
1946. Pg. 50.

21
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

tuvo distintos matices ideolgicos, como todo movimiento que


en tanto tiene vida, debe tener diversidad.
La Asociacin Internacional indica la aplicacin prcti
ca de las teoras socialistas revolucionarias. Desde un punto de
vista ideolgico la AIT fue una suerte de escuela del socialismo,
en donde contendan las distintas corrientes tericas que po
lemizaban acerca de cmo emanciparse del Capital. En el seno
de la misma se producen dos grandes duelos a decir de Carlos
Rama- la derrota del proudhonianismo y la batalla entre Marx y
Bakunin.21 Los partidarios de las ideas de Bakunin revitalizaron
la Internacional debido a su influencia en Espaa, Suiza, Francia,
Blgica e Italia. Pero las diferencias entre Marx y Bakunin tuvieron
consecuencias determinantes.22
En los sucesivos congresos Marx refuerza la tesis de la ac
cin parlamentaria; centraliza la organizacin contra la opinin
de las secciones; intenta disolver la organizacin jurasiana23 baku
ninista; hace expulsar a Bakunin por mantener la Alianza por la
Democracia Socialista en el seno de la A.I.T.; y traslada la sede

21 Rama, Carlos M. "Historia de las Ideas Socialistas en el Siglo XIX". Iguaz. Buenos
Aires, 1966.
22 Adems de las diferencias personales, que fueron significativas, estn en desacu
erdo sobre la necesidad del Estado que Bakunin rechaza mientras Marx acepta en
forma transitoria durante el proceso revolucionario. Estn en desacuerdo sobre
las formas de la economa socialista, ya que Bakunin es colectivista y Marx comu
nista (posteriormente, con posturas sostenidas por Kropotkin y Malatesta entre
otros, el anarquismo ser partidario de la organizacin econmica comunista en
casi todos los pases). Sobre los medios de lucha Marx acepta el parlamentarismo,
mientras que Bakunin es partidario nicamente de la huelga general y la insurrec
cin de las comunas. Y finalmente sobre la organizacin interna de la A.I.T., ya que
Marx es centralista pretendiendo dirigir el movimiento desde Londres y Bakunin
es partidario de la completa autonoma de las secciones locales.
23 La Federacin del Jura fue la federacin de tendencia anarquista de la Asociacin
Internacional de Trabajadores, basada principalmente en los relojeros de las
montaas del Jura en Suiza, integrndola entre otros, James Guillaume y Mijail
Bakunin.

22
Aproximacin al momento y el lugar

de Londres a Nueva York. Los grupos orientados por blanquistas,


proudhonianos y bakuninistas se retiran en masa, los sindicatos
ingleses se desvinculan, quedando junto a Marx solo los alema
nes y algunos discpulos aislados. En 1876 Marx declara en Nueva
York oficialmente disuelta la Internacional.
Sin embargo, a partir de 1872, luego de la expulsin de
Bakunin en el Congreso de La Haya, las secciones expulsadas o
retiradas siguen sesionando, autodenominndose como la In-
ternacional antiautoritaria. sta entidad fue acompaada por la
mayora de las secciones pertenecientes a la vieja Internacional;
celebr sus congresos en Saint Imier 1872, Ginebra 1873, Bruse
las 1874, Berna 1876 y Verviers en 1877.
En su primer congreso, en Saint Imier, se redacta la si
guiente declaracin:
Que la destruccin de todo poder poltico es el primer de-
ber del proletariado: que toda organizacin de un poder poltico lla-
mado provisorio y revolucionario para llevar a esa destruccin no
puede ser sino un engao ms, y sera tan peligroso para el prole-
tariado como todos los gobiernos que existen hoy; que rechazando
todo compromiso para llegar al cumplimiento de la revolucin so-
cial, los proletarios de todos los pases deben establecer, fuera de
toda poltica burguesa, la solidaridad de la accin revolucionaria.24
Estas ideas sern defendidas por las secciones de la regin
jurasiana de Suiza, de Espaa, Italia, Blgica, Francia, Estados Uni
dos, Cuba, Mjico y Montevideo.
Algunos comuneros vinieron a nuestras tierras huyendo
de la represin tras la derrota de la Comuna de Pars en 1871,

24 N
 ettlau, Max La Anarqua a travs de los tiempos. Guilda, Barcelona, 1935 (pg.
155), en Rama, C. M. Las ideas socialistas en el siglo XIX, Ed Iguaz Bs. As., 1966,
pg 150. El libro de Nettlau se encuentra disponible en la web en varias ediciones y
es fundamental para comprender los procesos de la Internacional en su vertiente
federalista.

23
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

entre ellos el tipgrafo Renaud-Reynaud, o los hermanos Jorge


y Pedro Bernard y Mara Bernard esposa de ste ltimo-. Estos
comuneros tuvieron una relacin directa con el surgimiento del
federalismo obrero en el Uruguay. Otros, como el cataln Carlos
Sanz vendrn huyendo de la represin tras la revolucin cantona
lista en Espaa (1873).25
El mximo historiador del movimiento anarquista Max Nett
lau seala Carlos Sanz de Barcelona, haba ido a Mxico y estuvo
activo all a partir de los primeros meses de 1873 () y l era compa-
ero de Rafael Farga Pellicer: l era muy activo y en ese momento ya
haba estado en Uruguay y Argentina. As, en 1872 podra haber sido
una de las primeras personas en difundir las ideas en esos pases.26
Podemos afirmar con certeza que en 1872 ya estaba for
mada la seccin Montevideana de la Internacional27. La seccin
montevideana, se identificar totalmente con la Internacional An-
tiautoritaria desde su nacimiento.28
25 R
 ama, Carlos M., Historia social del pueblo uruguayo, Montevideo, Comunidad
del Sur, 1972, pg. 79
26 N
 ettlau, Max. A contrubution to an anararchist bibliography of Latin America, Ed.
La Protesta, Bs.As. 1926. pg. 5. Traduccin propia del original: From Comrade
Valads in Mexico, I learned on 26 April 1924 that, so far as he had been-able to
establish, Carlos Sanz of Barcelona, had gone to Mexico and been active there be-
gining in the early months of 1873 -further details will follow- and he was comrade
of Rafael Farga Pellicer: he was extremely active and by that time had already
been to Uruguay and Argentina. Thus, in 1872 he could have been one of the first
people to disseminate the ideas in those countries, but perhaps his stay was too
short although he did live for a long time in Mexico and was very active. Existe una
edicin en espaol del texto publicada en Certamen Internacional de La Protesta
Buenos Aires, 1927. Nettlau incluso menciona que Carlos Sanz reciba correspon
dencia del mismo Bakunin. Farga Pellicer por su parte, haba tenido trato personal
con Bakunin en Suiza.
El Ferrocarril del 4 de Julio de 1872, seala; Ya ha empezado la Internacional
27 
sus trabajos entre nosotros. Se asegura que en la prensa peridica tendr en breve
un rgano cuya redaccin estar confiada por ahora al Sr. Palma Gil. (informacin
brindada por Yamand Gonzlez Sierra)
En carta desde Montevideo, del 25 de Mayo de 1872, el internacionalista C. Ca
28 
cleran comenta la idea de sacar la publicacin denominada El Obrero Federado

24
Aproximacin al momento y el lugar

El 25 de Junio de 1875 La Seccin Montevideana convoca a


su primer acto pblico, promocionado como fundacin de la mis
ma, donde se afiliaron la importante cantidad de 2000 socios.29
En 1877 la Internacional Montevideana, es aceptada for
malmente como miembro de la Internacional Antiautoritaria (las
secciones expulsadas por Marx en 1872 o retiradas voluntaria
mente posteriormente) en el Congreso celebrado en Verviers
(Blgica)30, ser la seccin montevideana la nica en toda Am
rica Latina en pertenecer formalmente a la organizacin antiau
toritaria.
Pero as como a nivel internacional la Internacional Anti-
autoritaria no logra sobrevivir mucho ms del congreso de 1877
y en Espaa por ejemplo la otrora potente Federacin Regional
Espaola tambin se desintegra, en Montevideo, la actividad de
la Internacional tambin decae.
Pero algunos aos despus en 1884 la A.I.T. local contar
con secciones en Las Pierdas, Paysand y Montevideo editando el
peridico La Lucha Obrera.31
En la A.I.T. local convivan las tendencias mutualistas con
las revolucionarias, ya en 1875 en un manifiesto difundido el 7
de Julio se sealaba la necesidad de organizar Comits de defen
con intencin de contrarrestar la prdica marxista proveniente de Buenos Aires. Y
por si quedan dudas, en carta del 1 de Enero de 1873 declara que los animadores
de la A.I.T. local son fieles juramenteros de los principios de la Alianza democrti-
ca Socialista aquella que inspirara Bakunin-.(Valades, 1927:85)
 onzles, Yamand. Los primeros internacionalistas en el Uruguay, Semanario
29 G
Compaero N124. Enero, 1987.
30 G
 uillaume, James. L Internationale. Documents et Souvenirs (1864-1878) P.V.
Stock. Tomo IV, Paris 1910. pg 258.
31 La Lucha Obrera, editar 26 ejemplares entre el 2 de Marzo de 1884 y el 31 de
agosto de ese ao. Anteriormente se haba editado El Internacional en 1878, y
se sabe de la edicin de La Revolucin Social en 1882, la cual Nettlau constat
su publicacin y direccin postal, pero no se conocen ejemplares. Es importante
sobre este tema consultar el mencionado trabajo de Max Nettlau Contribucin
para una bibliografa en Amrica Latina.

25
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

sa (para defenderse de calumnias u opresiones por parte de los


patrones) y Cajas de Resistencia, para prepararse ante futuras
huelgas.32
El 21 de Junio de 1885 los tipgrafos fundan su caja de
resistencia33, y en 1888 se consolidan definitivamente como So
ciedad de Resistencia.
La caja de resistencia consiste en la creacin de un fondo
econmico cuya finalidad es poder resistir una futura huelga. As,
las Sociedades de Resistencia son sociedades obreras que a di
ferencia de las de Socorros Mutuos predominantes en la poca
buscan pasar a la ofensiva a travs de la lucha gremial y no sim
plemente paliar las inclemencias de la explotacin capitalista. Las
sociedades de resistencia se caracterizaran por estar compuestas
exclusivamente por obreros, no permitindose la integracin de
ninguna persona ajena al gremio, ni encargados, gerentes, o que
su rol laboral implicara algn tipo de complicidad con los patro
nes, se proponen el mejoramiento moral y material de los traba
jadores, fomentando la solidaridad y la sistemtica aplicacin de
medidas de lucha para obtener sus objetivos, principalmente las
huelgas.34
En 1881 en Espaa se conforma la Federacin de Traba
jadores de la Regin Espaola (FTRE), heredera de la disuelta
Federacin Regional Espaola, la misma se proclama anarco-
colectivista y plantea sus objetivos; la Libre Federacin de libres
asociaciones de productores libres.35

32 El Ferrocarril, 8 de Julio de 1875


33 Ver Gonzlez, Yamand Del mutualismo a la lucha de clases. Los grficos se orga-
nizan (1865-1887). Semanario Compaero N122, 26 de Noviembre de 1986.
34 Para una completa descripcin de las formas de organizacin gremial ver Zubillaga,
Carlos Pan y Trabajo, Librera de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la
Educacin, Montevideo, 1996.
35 Gmez Casas, Juan. Historia del anarcosindicalismo espaol La Malatesta, Ma
drid, 2006. pg 86

26
Aproximacin al momento y el lugar

En Montevideo, cuatro aos despus36, se refunda la AIT


Montevideana con el nombre de Federacin de Trabajadores de
la Regin Uruguaya (FTRU), la cual no solo emula de nombre a la
espaola sino tambin en su espritu ideolgico.
Es ms que probable que integrantes de la misma se ins
talaran en Uruguay, en particular Antonio Taivo37, a quien desde
la redaccin de la prestigiosa revista Acracia de Barcelona, que
editan los principales referentes y fundadores del movimiento
obrero y anarquista hispano (Farga Pellicer, Anselmo Lorenzo y
Tarrida del Mrmol), se le solicita enve regular correspondencia.
Ante el reclamo Taivo comenta;
En el ao 1875 se fund la Asociacin Internacional de los
Trabajadores, llegando tener los dos aos de existencia 300 afi
liados. Pero ms tarde fu degenerando tanto en sus trabajos, por la
falta de conviccin de los que entonces dirigan la sociedad y del res
to de los socios, que poco poco sucumbi entre farras, banquetes y
orgas, quedando todas las cuentas pendientes hasta hoy.
Como varios compaeros que formaban parte de esa asocia
cin tenamos la seguridad de que no todas las conciencias estaban

36 E l 5 de Diciembre de 1885 se realiza su asamblea constitutiva. Estatutos de la


Federacin Local de los Trabajadores de la Regin Uruguaya Montevideo, Tip.
Pro-Patria, 1887.
37 La importancia de Antonio Taivo, como Pierre Bernard en la consolidacin del mo
vimiento en el Uruguay, tambin nos la indica una correspondencia mantenida
entre el reconocido historiador del anarquismo Max Nettlau, y el prestigioso anar
quista italiano Errico Malatesta, por 1892. Nettlau pide algunos contactos a ste
para establecer comunicacin con compaeros de Buenos Aires y Montevideo, y
Malatesta, que haba residido en Argentina entre 1885 y 1889, y realiz varias con
ferencias en Montevideo, remitir la direccin de Pierre Bernard y Antonio Taivo.
(Letter from Erico Malatesta to Max Nettlau, from Londres May, 1892. IISG) (En
realidad parece haber un error en la catalogacin de dicha carta en el Archivo de
Historia Social de Amsterdam, ya que Nettlau mantuvo correspondencia con Taivo
en 1891, as que la carta en la que enva las direcciones no podra ser de 1892,
seguramente las direcciones que estn remitidas en un papel aparte pertenecen a
otra carta)

27
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

corrompidas, emprendimos de nuevo el trabajo y formamos la Fe-


deracin de Trabajadores de la Regin Uruguaya, al frente de la cual
luchamos con el ahinco posible (...)
los estatutos, que en breve pensamos imprimir, son tomados
de El Congreso Obrero Regional de 1881 celebrado en Barcelona (...)
creemos que nos llevar mucho tiempo nuestra empresa, causa de
lo acostumbrados que estn estos trabajadores las sociedades de
carcter individualista, como se nota por las primeras preguntas que
nos dirigen: quien es el presidente? con qu capital cuenta la Fe
deracin? as que todos los trabajadores afluyen a esas sociedades
de socorros mutuos que poseen edificios propios y miles de pesos en
el Banco, con presidentes al frente, que son los ms fuertes capitalis
tas de esta localidad.38
Otro destacado militante fue Zacaras Rabassa quien haba
participado de la fundacin de la Federacin Regional Espaola
adherida a la A.I.T. en 1870. En 1885 Rabassa edita en Montevi
deo Federacin de Trabajadores, peridico vinculado a los inter
nacionalistas locales, luego tuvo activa participacin en Buenos
Aires tambin junto al anarquista Rafael Roca.
La F.T.R.U. logr publicar sus estatutos en 1887 y es la lti
ma noticia que tenemos de ella. Luego se produce un parntesis
por la preponderancia del anarquismo opuesto a las organizacio
nes formales, que si bien no reniegan de las organizaciones obre
ras39, cuestionarn duramente el burocratismo imperante en las
sociedades de socorros mutuos y su reformismo conciliador. Pero
tras la ola de huelgas de 1896 y 1897 y la influencia de importan
tes propagandistas anrquicos, en especial Pietro Gori, pero tam
bin otros como Pascual Guaglianone, Felix Basterra se consolida
el vuelco del anarquismo hacia el movimiento obrero.
38 Acracia Revista Sociolgica. Noviembre de 1886, N11, Barcelona.
39 Ver por ejemplo El Derecho a la Vida N11 pg. 4 Diversas

28
Aproximacin al momento y el lugar

Lo mismo pas en Buenos Aires, aunque los grupos anti


organizadores eran ms agresivos con los gremialistas y anar
quistas pro organizacin locales, en el cambio de siglo se pro
dujo el mismo vuelco. Adems de la mencionada presencia de
Pietro Gori en la regin (1898-1902) y la activa propaganda de
los agitadores, la aparicin de La Protesta Humana (Buenos
Aires, desde el 13 de Junio de 1897) con una constante prdica
en pro de la organizacin obrera es determinante.
A partir de Noviembre de 1900, La Protesta Humana
comienza a publicar una serie de artculos titulados la orga
nizacin obrera redactados por Pellico (Farga Pellicer), a
quien ya vimos vinculado a la revista Acracia de Barcelona y a
la F.T.R.E. Dichos artculos sern la base terica de la fundacin
de la Federacin Obrera Argentina el 25 de Mayo 1901.
Tambin all Pellicer expresa su propuesta de la Federa
cin Local, la cual ser practicada en el interior del Uruguay
algunos lustros ms tarde.
Segn palabras de Diego Abad de Santilln40, en la idea
de Pellicer la Federacin Obrera Local es ya en germen la co-
muna del futuro revolucionario; es, si se permite la expresin,
el organismo poltico de los trabajadores, como la organizacin
de oficio es hoy [1933] el rgano de la resistencia econmica al
capital.
Pellicer propone que se organice la federacin local
en el sentido de la comuna revolucionaria, de la accin per-
manente y activa del pueblo trabajador en todos los asuntos
que comprometen su libertad y su existencia. (...) La federacin
local, partiendo del concepto del trabajo y funcionando como

40 Diego Abad Santilln (1897-1983) fue un referente de la Federacin Obrera Re


gional Argentina y el peridico La Protesta en los aos 20. A su vez public nume
rosos trabajos historiando el movimiento anarquista de dicho pas. Tuvo tambin
una destacada y polmica actuacin en el movimiento anarquista ibrico durante
la revolucin y guerra civil espaola desatada en 1936.

29
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

organismo social, sienta las bases de la sociedad del porvenir.41


Las federaciones obreras locales -siguiendo ahora a Santi
lln- se federan a su vez para formar la federacin regional de fe-
deraciones locales, sobre cuya estructura y funciones se extiende
tambin Pellicer Paraire. (...) Las aspiraciones de la organizacin
anarquista en el movimiento obrero deben ser el Acratismo - Li-
bre Pacto Solidaridad., las cuales ya haban sido formuladas en
la revista Acracia barcelonesa.
En la Argentina se articulan las distintas Federaciones Lo
cales desde temprana fecha- La Federacin Obrera Local Rosari
na se funda en Agosto de 1902.42 Para 1908 existan las siguien
tes federaciones locales: Federacin Obrera Local Bonaerense
(25 sociedades adheridas), Federacin Obrera local de Rosario
(15 sociedades adheridas), Federacin Obrera Local de Santa Fe
(4 sociedades adheridas), Federacin Obrera Local de La Plata
(12 sociedades adheridas), Federacin Obrera Local de Tucumn
(6 sociedades adheridas), Federacin Obrera Local Entrerriana
(4 sociedades adheridas), Federacin Obrera Local Mendocina
(5 sociedades adheridas).43

1.3. La FORU y la radicalizacin de las luchas obreras.

La agitacin social y obrera parece conocer periodos ccli


cos, as las huelgas de 1896 y 1897 acercaron a los grupos anar
quistas a los gremios obreros nuevamente, las de 1901 y 1902
demostraron la necesidad de una lucha coordinada y eficaz con
tra el capitalismo y las de 1905 materializaron esas aspiraciones.
En 1905 en Montevideo se produce una nueva oleada de

41 A
 bad de Santilln, Diego. La FORA ideologa y trayectoria Anarrs, Buenos Aires,
2005. pg. 69.
42 La Protesta Humana N186, 9 de Agosto de 1902.
43 Abad de Santilln, 2005:175

30
Aproximacin al momento y el lugar

conflictos, encontrando a las Sociedades de Resistencia ya fuer


tes y maduras para la tan anhelada creacin de su Federacin
Obrera. Solo entre Enero y Junio de 1905 unos 15.000 obreros
estuvieron en conflicto y se organizaron en los primeros cuatro
meses del ao 21 centros obreros.44
Del 25 al 27 de Agosto en el local del Centro Internacional
de Estudios Sociales se celebra el Primer Congreso Obrero que
constituir la Federacin Obrera Regional Uruguaya (F.O.R.U.).
Treinta y dos sociedades gremiales participaron del con
greso obrero.45 Dos delegados de la Federacin Obrera Regional
Argentina (F.O.R.A.) participaron tambin, en momentos que en
la vecina orilla se realizaba el Quinto Congreso de sta donde se
resolver la recomendacin a los obreros de la propaganda del
comunismo anrquico en las sociedades obreras. Ante la negativa
de los socialistas de participar del congreso la influencia anarquis
ta ser decisiva.
La F.O.R.U. se crea bajo el ejemplo de la F.O.R.A. argentina,
y sta, junto al resto de las federaciones latinoamericanas a ima
gen de la vieja Federacin Espaola. Sin duda hay una continui
dad ideolgica entre la vieja federacin de la AIT montevideana
y la nueva FORU, una lnea directa, dir Rama, Es la misma
forma de organizacin, el mismo estilo tctico de lucha obrera, y
hasta la misma orientacin ideolgica, tomada del anarquismo,

44 
Entre ellos; peones de curtiembres, ferroviarios, carpinteros, panaderos, albailes,
herreros, carboneros y varaleros del Cerro, mecnicos y fundidores, hojalateros,
tranviarios, vidrieros, zapateros, peones de saladeros y varaleros, pintores, bau
leros, etc. Ver por ejemplo; Barran y Nahum Batlle, los estancieros y el imperio
britnico Tomo I, Banda Oriental. pag. 67
45 
Picapedreros y graniteros (Montevideo), albailes, caldereros y anexos, panade
ros, sastres, cigarreros, foguistas y marineros, zapateros, picapedreros y granite
ros (La Paz), conductores de carruajes, obreros del Puerto, aserraderos y anexos,
oficios varios (Villa del Cerro), ferrocarrileros, picapedreros y graniteros (Paso del
Molino), pintores, varaleros (Cerro), peones de barracas y anexos, calafates y car
pinteros de ribera, artes grficas. (En Zubillaga, 1996:54)

31
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

en sus formas prouhdonianas y bakuninistas.46 Incluso, los obre


ros sastres la llamarn de 2 Federacin Regional Uruguaya en
su revista gremial.47
En 1937, en ocasin del Congreso de la A.I.T. en el informe
de la F.O.R.U. Se podr leer; Si alguien quisiera un da decir en
verdad al mundo lo que es la Federacin Obrera Regional Urugua-
ya, sin tener en cuenta los perodos de mayor o menor potenciali-
dad numrica, tendra que remontarse a las postrimeras del ao
1871, y de entonces en adelante, con los primeros prfugos de la
Commune que pusieron sus plantas en estas tierras.48
Esta lnea directa la podemos ver tambin personificada en
los artculos de Pellicer Paraire quien particip tempranamente
de la seccin Barcelonesa de la Internacional y la Federacin Es
paola y quien inspir decisivamente la fundacin de la FOA-FO-
RA argentina e impulso directamente su congreso fundacional49
Esa lnea directa tambin puede verse en sus militantes. As
como vimos miembros activos de la Federacin Espaola (Sanz y
Pellicer) actuar en la A.I.T. local, podemos ver al mismo Pellicer en
los origenes de la F.O.R.A. y a Antonio Taivo en los de la F.O.R.U.
Antonio Taivo, a quien ya vimos vinculado a la F.T.R.E. y la
F.T.R.U. y quien semanas antes de la celebracin del congreso fun
dacional de la F.O.R.U. sealar en las pginas de El Obrero El
Congreso, acordar y pondr de manifiesto que todos los traba-
jadores sin distincin de nacionalidad se organicen en cada loca-
lidad de tantas asociaciones de resistencia como sea posible, con
objeto de luchar sin descanso en pr de mejorar las condiciones

46 Rama, Carlos M. Obreros y Anarquistas. Enciclopedia Uruguaya No32. Montevi


deo, 1969. pg.26
47 Despertar, rgano de la Sociedad de Resistencia de Obreros Sastres N4, Octubre
de 1905.
48 Solidaridad N125 1 de Mayo de 1937, Informe del Consejo Federal a la AIT.
49 Iiguez, Miguel. Enciclopedia histrica del anarquismo espaol., Asociacin Isaac
Puente, Vitoria, 2008. pg. 1305.

32
Aproximacin al momento y el lugar

del trabajo. Estas organizaciones puramente econmicas sern


distintas y opuestas a la de todos los polticos burgueses y polti-
cos obreros puesto que como ellas se organizan para la conquis-
ta del poder poltico, nosotros nos organizamos para funciones
puramente econmicas, estableciendo una sociedad de PRODUC-
TORES LIBRES. Por lo expuesto se desprende que el Congreso se
declarar en gobierno, Libertario; en propiedad, Comunista; y en
religin Atesta.50
Esas palabras, son casi textualmente las que aprobar la
F.O.R.U. en su congreso y son las aprobadas por el 4 Congreso
de la Federacin Obrera Argentina, el cual se basa, a su vez, en el
manifiesto del congreso de la Federacin de Trabajadores de la
Regin Espaola celebrado en Barcelona en 1881.51
Este ser el famoso artculo 6 que tendr polmicas deri
vaciones en los aos veinte. La declaracin original seala:
Nuestra organizacin puramente econmica, es distinta
y opuesta a la de todos los partidos polticos burgueses y polticos
obreros, puesto que as como ellos se organizan para las conquistas
del poder poltico, nosotros nos organizamos porque los Estados po
lticos y jurdicos, actualmente existentes, queden reducidos fun
ciones puramente econmicas, establecindose en su lugar una libre
Federacin de libres asociaciones de PRODUCTORES LIBRES.52
Siendo modificada en el Tercer Congreso de 1911;
Nuestra organizacin puramente econmica, es distinta
y opuesta a la de todos los partidos polticos, puesto que as como
ellos se organizan para la conquista del poder estatal, nosotros
nos organizamos para destruir todas las instituciones burguesas y

50 A. Taivo El Proximo Congreso Obrero El Obrero N24 15 de Abril 1905


51 Abad de Santilln, 2005:128 y 132. Sobre la declaracin del Congreso de Barcelo
na de 1881 vase Lorenzo, 1946:235
52 La Emancipacin. N1, 1 de Enero de 1907.

33
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

polticas hasta llegar a establecer en su lugar una Federacin Libre de


productores libres.53
La Federacin se estructurar por oficios en una base te
rritorial de lo simple a lo complejo, desde la Federacin local de
Oficios hacia la Federacin comarcal de varios oficios y hacia la
Federacin Regional. Esta organizacin de base territorial se da
en funcin de un proyecto a largo plazo; la configuracin de co
munas autnomas que se relacionarn a travs de esta estructu
ra. Cada sociedad ser autnoma del resto de la organizacin. No
existirn organismos fijos en las cpulas, acorde al anti autorita
rismo anarquista.54
El historiador comunista Francisco Pintos seala que desde
1901 y por varios aos, (...) no es posible hablar del movimiento anar-
quista en el Uruguay como un movimiento aparte de la organizacin
de los trabajadores, y no es posible hablar del movimiento sindical
como una cuestin separada por completo de la actuacin de los
anarquistas. En un reducido espacio de tiempo, los cratas consiguie-
ron grandes xitos en el terreno de la organizacin sindical.55
El tercer congreso obrero de 1911 se haba producido
en medio de crecidas agitaciones contra la caresta de la vida
las cuales continuarn luego del mismo en solidaridad con la
huelga tranviaria que se produjo y que desemboc en la decla
racin de la primer huelga general en la historia del Uruguay56,
y las importantes agitaciones en la ciudad de Pando en pro de
53 Federacin Obrera Regional Uruguaya. Acuerdos del 3er Congreso Obrero en el
Uruguay. Montevideo 1919. Tip Morales Hnos.
54 Zubillaga, 1996: 55
55 Pintos, Francisco Historia del movimiento obrero del Uruguay. Montevideo, Ga
ceta de Cultura, 1960. pg. 57.
56 Sobre la primer huelga general puede consultarse entre otros; Muoz, P. La
Primera Huelga General en el Uruguay (La Turba, Montevideo, 2011). Vidal, D.
Ensayo y aborto de la primer revolucin obrera en el Uruguay (Aportes, Monte
video, 2012) y Rodrguez, U. Los sectores populares en el Uruguay del 900 Tomo
II. (TAE, Montevideo, 1992)

34
Aproximacin al momento y el lugar

la jornada de ocho horas. Entre Mayo y diciembre de ese ao se


produjeron unas 28 huelgas en Montevideo y 10 en el interior.57
La cercana de algunos referentes obreros hacia el gobier
no de Batlle y Ordez puede haber sido una de las causas del
declive agitativo que se produjo en 1912. Al ao siguiente, en
1913, hubo una importante huelga en Juan Lacaze protagoni
zada por las obreras tejedoras, que cont con el total apoyo de
la F.O.R.U. y sus delegados, los cuales se instalaron varios das
en dicha localidad. Pero la resolucin del conflicto por parte del
secretario de la Federacin, aceptando solo una parte de las de
mandas produjo una crisis en el seno de la Federacin Obrera,
renunciando su Consejo Federal y no nombrndose otro, por
lo cual la F.O.R.U. qued de hecho, desarticulada entre 1913 y
1916. A partir de 1914 comienza a funcionar un Comit Obrero
que tomar la iniciativa de hacer las veces de Consejo Fede
ral y comenzando en 1915 con el apoyo decisivo del peridico
anarquista La Batalla a reorganizar la Federacin. La victoria de
la huelga frigorfica protagonizada por la Sociedad de Resisten
cia de Oficios Varios de la Villa del Cerro en Marzo de 1916 le
proporciona el impuso necesario para dejar completamente re
constituida la F.O.R.U. Ante una creciente crisis econmica el
apoyo al gobierno batllista se empieza a desmembrar y las so
ciedades obreras comienzan a retomar protagonismo. En Mayo
de 1917 se produce otra importante y violenta huelga frigorfica
en el Cerro de Montevideo que desemboc en la segunda huel
ga general de la historia uruguaya.58
57 Las Piedras, La Paz, San Jos, Rivera, Trinidad, Durazno, Canelones y Colonia. (Ro
drguez, 1992: 136 y 157).
58 Sobre las huelgas frigorficas ver Cosse, Isabela. Obreros y vecinos. Huelgas en los
frigorficos del Cerro. (1915-1917). Monografa, Historia del Uruguay II. Facultad de
Humanidades y Ciencias de la Educacin, Licenciatura en Ciencias Histricas. Plan
1988. Muoz, P. Huelga en los frigorficos del Cerro 1916-1917, primera parte,
Tierra y Tempestad N12, Montevideo, Verano 2012. y Muoz, P. Huelga en los
frigorficos del Cerro. Segunda Parte. Tierra y Tempestad N13 Otoo 2012.

35
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

En este clima de creciente agitacin la Revolucin Rusa


ser la chispa que encienda la mecha.

1.4. El movimiento obrero en Salto, Paysand y Rocha


hasta 1918.

El hecho de que no exista casi bibliografa sobre el movi


miento obrero en el interior nos hace contar solo con algunas
pistas dispersas de sus antecedentes. Pero sabemos que tempra
namente, y con diferencia de algunos aos con relacin a Monte
video ya hay actividad gremial en Salto y Paysand.
Ya muy tempranamente, en Agosto de 1875, la prensa de
Salto comenta esta muy llamativa noticia;
Sociedad Internacional de Artesanos. El domingo se
reunieron un nmero considerable de artesanos en el almacn
AllIsola di Caprera con el objeto de formar una seccin de mutuos
socorros entre ellos.
Puestas las bases a consideracin de los concurrentes,
se ha resuelto pedir copia de los estatutos a la Sociedad Inter-
nacional de Montevideo y fundar la sociedad obrera sobre las
mismas bases.
Dentro de poco tiempo la Sociedad Independiente de arte-
sanos de Socorros Mutuos ser un hecho.59
Sabemos, tambin, segn los trabajos de A. Fernndez
Cabrelli que el 3 de Marzo de 1877 se funda una Sociedad de
Artesanos y Obreros la cual se defini como pura y exclusiva-
mente de trabajadores y en el propsito de protegernos de todas
las industrias. Y que en Febrero de 1873 hubo un intento de
huelga de tipgrafos, y una huelga de hojalateros de una fbrica
de conservas, que en Noviembre de 1878 hubo una huelga en

59 El Ferrocarril, Montevideo, 14 de Agosto de 1875 (Informacin brindada por Yaman


d Gonzlez Sierra)

36
Aproximacin al momento y el lugar

el ferrocarril que va al puerto de Salto. En 1877 y hasta al menos


1882 los empleados de comercio realizan algunas medidas de
fuerza para obtener y luego recuperar el descanso semanal.60
En Paysand sabemos que en enero de 1877 se parali
za el trabajo en algunas secciones del puerto.61 Para Mayo de
1882 sabemos de la existencia de una Liga Obrera fundada ese
mes, pero su direccin estaba integrada por burgueses progre
sistas ajenos a la clase trabajadora, como ser Setembrino Pe
reda redactor de El Paysand y Alfredo Arlas director de El
Progreso62.
Para 1884 el peridico editado por la A.I.T. local La Lucha
Obrera cuenta ya, desde su segundo nmero con un correspon
sal en Salto, Don Antonio Martnez y Segovia, domiciliado en
Cuareim 144,63 y quince das despus ya publican correspon
dencias tanto de Salto como de Paysand.64 Siendo semanas
despus, M. Garcia corresponsal desde Paysand.65
En Mayo de 1884 se constituye en Paysand la Sociedad
Humanitaria, Agrcola, Pastoril, Obrera; la cual dice contar con
unos ciento cincuenta afiliados y la cual forma parte de la A.I.T. del
Uruguay como una seccin propia. En sus objetivos se propone
vivir entre asociados como una sola y unida familia, estable-
ciendo un mbito de intercambio de los productos y obras reali-
zadas, proporcionarse trabajo mutuamente, y crear una caja de

60 Fernndez Cabrelli, Alfonso Salto 1877-1884: Las primeras huelgas de nuestra


historia Hoy es Historia, N24 Noviembre, Diciembre 1987.
61 Pintos, 1960:44
62 Fernndez Cabrelli, Alfonso Las primeras organizaciones obreras del interior Hoy
es Historia N1 Montevideo, Diciembre Enero 1983, 1984 y Fernndez Cabrelli,
Alfonso Noticias para una historia del anarquismo en Uruguay Hoy es Historia
N20, Montevideo, Marzo Abril 1987.
63 La Lucha Obrera N2, 9 de Marzo de 1884. Montevideo.
64 La Lucha Obrera N4, 23 de Marzo de 1884, Montevideo.
65 La Lucha Obrera N14, 1 de Junio de 1884, Montevideo.

37
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

ahorro con fines mutuales, crear escuelas de enseanza e instruc-


cin, adoptar a los nios hurfanos de los asociados. Entre los
deberes se exige abandonar todo nacionalismo, vivir del fruto de
su propio trabajo. Llaman a respetar, amar y tratar con distincin
a a mujer, y a Respetar y proporcionar los animales tliles para
el hombre todos los elementos necesarios para su subsitencia y
tratarlos con moderacin y aprecio.66
Del departamento de Rocha, si bien no tenemos noticias
de actividad gremial por etas fechas, La Lucha Obrera recibe los
peridicos La Libertad y El Imparcial, por lo que es de supo
nerse que al menos haba algn tipo de correspondencia.67
Comenzado el siglo XX sabemos que a fines de abril de
1903, los Obreros Estibadores de la Ribera del Salto Oriental
participan de un congreso de estibadores realizado en Buenos
Aires junto a 31 organizaciones ms, entre ellas dos de Monte
video.68
En 1904 sabemos de la existencia del Centro Internacional
Obrero de Salto, cuyo rgano de prensa ser La Lucha. 69
Solo en el ao 1905 se organizan 38 gremios en Montevi
deo y varios en Salto, Paysand, Colonia y Mercedes. Se editaron
ocho peridicos sindicales en Montevideo, dos en Salto y uno en
Mercedes. Y se produjeron 21 huelgas generales y parciales en
Montevideo y seis en el interior.
En Salto La Voz del Pueblo que diriga la libre pensadora
Sarah Bergara y que contaba entre sus colaboradores a la anar

66 La Lucha Obrera N13, 25 de Mayo de 1884, Montevideo. Tambin puede consul
tarse en Gonzlez, Yamand Internacionalistas comunitarios en Paysand Comu
nidad, Estocolmo Mayo-Junio 1987
67 La Lucha Obrera N10 (4 de Mayo de 1884) y La Lucha Obrera N14, 8 de Junio de
1884, Montevideo.
68 Abad de Santilln, 2005:112
69 Zubillaga, C. y Balblis, J., Historia del movimiento sindical uruguayo Tomo II, Ban
da Oriental, Montevideo, 1986. pg. 109

38
Aproximacin al momento y el lugar

quista Virginia Bolten, el anarquista Alfonso Grijalbo, el liberal


Adolfo Vzquez Gmez, Antonio Martez Segovia (a quien vimos
como corresponsal de La Lucha Obrera veinte aos antes), entre
varios otros, pasar a ser el nuevo rgano del Centro Internacio
nal de Obreros. Por otra parte, en Julio de 1905 van a la huelga
los albailes de Salto y en Setiembre de ese mismo ao lo hacen
varios gremios de Paysand.
En 1906 una serie de huelgas paraliz la construccin, la
circulacin de vehculos y el aprovisionamiento entre el 27 de
Marzo y el 15 de abril en Paysand, mientras hubo tambin paros
de los trabajadores del ferocarril Midland en el Noroeste urugua
yo y una huelga de los obreros en madera y los sastres en Salto.70
En 1908 sabemos que la importante huelga ferrocarrilera
tambin tuvo repercusiones en Paysand, la Sociedad de Resis
tencia de obreros del Ferrocarril tena presencia en el Litoral al
menos desde 1905, y haba contado con una gira de propaganda
del delegado montevideano Luis Rodriguez, en Agosto de 1905.71
Quebrada la huelga por la represin la sociedad se desintegrar.72
Para 1909 sabemos que en Salto se editan los peridicos
Alba Roja y Adelante.
A partir de estas fechas, parece haber una actividad obrera
constante en el Litoral. Tras las manifestaciones en repudio del
fusilamiento de Francisco Ferrer73 se realizaron dos manifestacio
nes en Paysand. Y a partir, al menos de 1911 hay noticias de la
conmemoracin del 1 de Mayo tanto en Salto como en Paysan
d ao a ao.

70 Pintos, 1960:72
71 La Voz del Pueblo, N24, 13 de Agosto de 1905, Salto.
 Elia, German. Miraldi, Armando. Historia del movimiento obrero en el Uru-
72 D
guay. Banda Oriental. Montevideo, 1984.82
73 
Francisco Ferrer fue fusilado en Barcelona el 13 de Octubre de 1909 acusado de
instigar la denominada semana trgica de 1909.

39
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Sabemos que por estas fechas los socialistas comienzan


a asentar su presencia en las organizaciones obreras tanto en
Paysand como en Salto, donde conformarn una Unin General
de Trabajadores, de la que no tenemos mayores datos.

1.5. El movimiento obrero en la Argentina.

Para interiorizarnos en el movimiento obrero de Salto y


Paysand hay que tener presente el desarrollo del movimiento
en la Argentina, que como veremos en el transcurso de ste tra
bajo su influencia fue mayor, en el caso de Salto que la ejercida
por Montevideo.
En Argentina el movimiento obrero sigui una trayectoria
similar a la local en el siglo XIX, donde tambin hubo una seccin
de la Asociacin Internacional de Trabajadores, pero a diferen
cia de Montevideo pareci primar la tendencia marxista sobre la
anarquista en esos primeros aos.
Pasada la dcada de predominio de los grupos anarquistas
anti organizadores en la dcada de 1890, el anarquismo se impone
como doctrina en el movimiento obrero al cambiar el siglo.
Segn Gonzalo Zaragoza entre 1898 y 1900 se consolida
el anarquismo argentino como una de las principales alternati
vas revolucionarias y sindicales, una visin alternativa del mundo
y un esquema tico y de relaciones sociales. Zaragoza sostiene
que se trata de un doble fenmeno; la actuacin creciente en las
sociedades obreras como objetivo fundamental de la lucha anar
quista. Y por otro lado, la ampliacin de la base y aceptacin de
la ideologa revolucionaria anarquista por sectores de clases me
dias, especialmente jvenes intelectuales, labor en la que Pedro
Gori, al igual que en Montevideo, tuvo un importante mrito.74

74 Zaragoza, Gonzalo. Anarquismo argentino. 1876-1902 Ed. De la Torre, Madrid,


1996. pg. 233.

40
Aproximacin al momento y el lugar

El 25 de Mayo de 1901 se celebra un congreso obrero con


la participacin de 27 sociedades obreras, participando tanto
anarquistas como socialistas y conformando la Federacin Obrera
Argentina. En su segundo congreso, al ao siguiente, los socialis
tas se separan y conforman la Unin General de Trabajadores.
En su cuarto congreso de 1904 la F.O.A. cambia su nombre por
Federacin Obrera Regional Argentina y redacta su Pacto de
Solidaridad muy influenciado por las resoluciones del Congre
so de Barcelona de 1881, y se rechaza un intento de unificacin
con la U.G.T. En 1905 el quinto congreso de la F.O.R.A. formula
una declaracin en la que se recomienda la propaganda por el
comunismo anrquico en el seno de las sociedades obreras. El
VI congreso de la F.O.R.A. resuelve hacer un llamado a la unidad
de los gremios obreros en un solo organismo para poder poten
ciar la lucha gremial, lo cual es aceptado por el IV congreso de
la U.G.T. En Marzo de 1907 se realiza el congreso de unificacin
con una amplia participacin de los gremios de la F.O.R.A., U.G.T.
y gremios autnomos. De 109 delegados al momento de la vota
cin sobre el carcter ideolgico de la organizacin, 62 votaron
por mantener la recomendacin de propaganda anarquista, 9 se
opusieron y 38 se abstuvieron, ante lo cual los gremios socialistas
se retiraron. En 1909 la U.G.T. convoca a un nuevo congreso de
unificacin al que concurren 42 gremios (los de la U.G.T., algunos
autnomos y 10 de los 85 pertenecientes a la F.O.R.A.), fundan
do la Confederacin Obrera Regional Argentina, con miembros
socialistas y anarquistas en su Consejo Federal e incorporndose
el pacto federal de la F.O.R.A. de 1904, declaraciones de repudio
a los partidos polticos y se proclamaba la accin directa como
nico mtodo legtimo de lucha.
De all en ms hubieron algunos intentos de unificacin
hasta que en 1914, los gremios de la C.O.R.A. deciden disolver su
entidad gremial y entrar a la F.O.R.A. Integrados dichos gremios,

41
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

sumados a algunos autnomos, se realiza el IX Congreso de la


F.O.R.A. en abril de 1915. En este congreso se resolvi eliminar
la recomendacin del comunismo anrquico a los gremios. 21
sociedades gremiales rechazaron tal resolucin, se retiraron del
congreso y negaron la validez del mismo y del nuevo Consejo Fe
deral, reconstituyeron la F.O.R.A. que se conocer como F.O.R.A.
del V Congreso, y la otra entidad ser conocida como F.O.R.A.
del IX Congreso.75
Segn Julio Godio, tras la fuerte represin a la huelga gene
ral de 1910 (represin del Centenario)76, comienza el predominio
sindicalista sobre el anarquista que se consolida con la F.O.R.A.
del IX Congreso.77
Sin embargo a partir de 1919 la F.O.R.A. del V crecer
fuertemente igualando y tal vez superando a la F.O.R.A. del IX.

1.6. La Chispa que encendi la mecha: la onda expansiva


de la Revolucin Rusa.

La Revolucin Rusa marca fuertemente el periodo que vamos a


recorrer en el interior uruguayo, el impacto que gener alrededor
del mundo es imponente, su onda expansiva recorrer Europa
apenas finalizada la primer guerra mundial, llegar con fuerza al
Rio de la Plata, y se vern sus consecuencias tanto en Montevideo
como en el Interior.

75 Solomonoff, Jorge. Ideologas del movimiento obrero y conflicto social, Tupac


Bs.As., 1988.Pgs 259-264.
76 E n Mayo de 1910 el Estado argentino pretende celebrar el centenario de su inde
pendencia. La F.O.R.A. declara la huelga general reclamando la derogacin de la ley
de residencia (que permita la expulsin de anarquistas extranjeros) y la libertad de
los presos. Pero el Estado se adelant y declar el estado de sitio. Bibliotecas, casas
de obreros fueron asaltadas, mujeres violadas, hombres y nios apaleados siempre
bajo el amparo policial. La huelga se levant el 21 de Mayo vencida por la represin.
77 Godio, Julio. Historia del movimiento obrero argentino 1870-2000. Corregidor,
2000, Bs.As. Pg. 240.

42
Aproximacin al momento y el lugar

Seala el reconocido historiador ingls Eric Hobsbawm:


Las repercusiones de la revolucin de octubre fueron mu
cho ms profundas y generales que las de la revolucin francesa,
pues si bien es cierto que las ideas de sta siguen vivas cuando ya
ha desaparecido el bolchevismo, las consecuencias prcticas de los
sucesos de 1917 fueron mucho mayores y perdurables que las de
1789. La revolucin de octubre origin el movimiento revolucionario
de mayor alcance que ha conocido la historia moderna.78
Una oleada revolucionaria barri el planeta en los dos aos si
guientes a la revolucin de octubre y las esperanzas de los bolcheviques,
prestos para la batalla, no parecan irreales. Vlker hort die Sgnale
(Pueblos, escuchad las seales) era el primer verso de la Internacional
en alemn. Las seales llegaron, (...) se escucharon en todos los lugares
donde existan movimientos obreros y socialistas, con independencia de
su ideologa, e incluso ms all. Hasta los trabajadores de las plantacio
nes de tabaco de Cuba, muy pocos de los cuales saban dnde estaba
Rusia, formaron soviets. En Espaa, al perodo 1917-1919 se le dio el
nombre de bienio bolchevique, aunque la izquierda espaola era pro
fundamente anarquista, que es como decir que se hallaba en las antpo
das polticas de Lenin. Sendos movimientos estudiantiles revolucionarios
estallaron en Pekn (Beijing) en 1919 y en Crdoba (Argentina) en 1918,
y desde este ltimo lugar se difundieron por Amrica Latina generando
lderes y partidos marxistas revolucionarios locales. (...)
En enero de 1918, pocas semanas despus de la conquista del
Palacio de Invierno, y mientras los bolcheviques intentaban desespera
damente negociar la paz con el ejrcito alemn que avanzaba hacia sus
fronteras, Europa central fue barrida por una oleada de huelgas polticas
y manifestaciones antibelicistas que se iniciaron en Viena para propagar

78 Hobsbawm, Eric. Historia del siglo XX Crtica, Bs.As. 1998. Pg. 63.

43
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

se a travs de Budapest y de los territorios checos hasta Alemania, cul


minando en la revuelta de la marinera austrohngara en el Adritico. 79
Luce Fabbri, hija del prestigioso anarquista italiano Luiggi
Fabbri, que era una nia por esos aos, recordara tiempo des
pus: Eran aos de fuego. Todos miraban hacia el Este: la clase
media aterrorizada, el mundo obrero lleno de esperanzas. Se pen-
saba que inevitablemente lo que haba pasado en Rusia se iba a
repetir en todos los pases afectados por la guerra.80
Y el Rio de la Plata no ser ajeno al impacto de la Revolu
cin Rusa. Diego Abad de Santilln militante de la FORA e historia
dor de dicho movimiento sealar:
Vino primero la revolucin rusa, con la gran conmocin sus
citada en todo el mundo por el gran acontecimiento, luego el fin de la
guerra y la repercusin de los movimientos europeos, la cada de los
imperios alemn y austraco, la revolucin en Hungra, la Repblica de
los Consejos de Baviera, la agjtacin en Italia y en Espaa. Todo eso
repercuti vivamente en la Argentina y todo eso hizo de la F.O.R.A. del
quinto congreso el centro de convergencia de las grandes masas.
La revolucin rusa y el fin de la guerra despertaron aqu la fie
bre de la organizacin; en pocos meses se levantaban sindicatos con
millares y millares de asociados; el crecimiento era demasiado rpido
y se estaba muy poco preparado para tanta y tan repentina afluencia.
No haba gremio que no considerase como su deber primor
dial ir a la huelga en demanda de mejoras materiales y morales; se
abusaba quizs de las huelgas, fruto de la conciencia que se tena de
la propia fuerza.81

79 Hobsbawm, 1998:73
80 L uce Fabbri Archive, IISG. Carpeta 210: Typescript and manuscript of 'Autodidac
tismo Obrero'.
81 Abad de Santilln, 2005:249-250

44
Aproximacin al momento y el lugar

Victor Muoz, sealar en relacin a la regin chilena: En-


tre 1917 y 1921 numerosos conflictos polticos y sociales sacudie-
ron al pas. La crisis salitrera, el encarecimiento acelerado de la
vida y la consolidacin del sindicalismo, as como el ejemplo de la
Revolucin Rusa, repercutieron en el surgimiento de un inusitado
ciclo de enfrentamientos que tensaron las relaciones de grandes
porciones populares con el empresariado y el Estado nacional.82
Hacia el otro lado del Uruguay, en Rio Grande del Sur los
aos de 1917-1920 son de intensa movilizacin entre los obre-
ros, huelgas, represin violenta, peridicos que surgan para
luego desaparecer, surgimiento de nuevas asociaciones. Es en
este ambiente que las noticias de la revolucin rusa llegaron83
Fernando Lopez de DAlessandro en su trabajo sobre la iz
quierda uruguaya seala Si bien el Uruguay siempre fue sensible a
todo acontecimiento internacional que implicara a las luchas de la
clase obrera, nunca se haba dado un suceso que marcara tan pro-
fundamente el devenir histrico del mundo progresista criollo como
la Revolucin de Octubre y sus derivaciones posteriores.84
La revolucin rusa no solo alborot el ambiente obrero
local sino que puso en escena a jugadores que antes no existan,
ya que hasta esa fecha la existencia de organismos obreros re
volucionarios era patrimonio exclusivo de los anarquistas.
Como acertadamente seala Carlos Rama;
Hasta la poca de la Revolucin Rusa el extremismo prole
tario en el Uruguay coincide casi enteramente con el anarquismo, ya
que las manifestaciones marxistas revolucionarias practicamente no
se conocen. (...)

82 Muoz Cortes, Vctor. Sin Dios Ni Patrones, Mar y Tierra, Valparaso, 2013. Pg. 30.
83 Duarte, Federico. O Horizonte Vermelho: O impacto da revoluo russa no mo-
vimento operrio do Rio Grande do Sul, 1917-1920. Porto Alegre, 2008. Univer
sidade Federal Do Rio Grande Do Sul Instituto De Filosofia E Cincias Humanas
Programa De Ps-Graduao Em Histria. Pg. 12
84 Lpez DAlessandro, 1992:6

45
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

La base humana del extremismo nacional, y explicacin de


su prolongada supervivencia, es sin embargo el movimiento obrero,
donde estas ideas arraigan por 1870 y dominan -casi sin competen
cia- hasta 1920. Durante el primer cuarto del siglo XX los intentos del
reformismo socialista de crear una Unin General de Trabajadores
-como se anuncia en 1906- fracasan repetidas veces, y ser necesa
ria la divisin y crisis del movimiento obrero anarcosindicalista85 para
permitir, ya a fines de la dcada de los aos 20, el surgimiento de una
central obrera de orientacin marxista.86
El mismo Rama que conoci personalmente a varios mili
tantes de aquella poca afirma: Basta leer la prensa obrera de
esos aos, o escuchar a sus sobrevivientes para comprender que
para los contemporneos de le Revolucin Rusa que eran afines
al movimiento extremista, pareca llegado el momento de la pa-
lingenesia social.87

85 Es opinin del autor de stas pginas que anarcosindicalista no es el concepto


ms adecuado para definir a los anarquistas involucrados en el movimiento obre
ro, ya que anarcosindicalista refiere a una corriente del anarquismo actuante
en el movimiento obrero, existiendo tambin otra, predominante en el Uruguay
hasta los aos veinte que podra denominarse finalista (en relacin a su finali
dad emancipadora y anarquista) o federalista (como se denominaba la corriente
bakuninista en la Asociacin Internacional de Trabajadores) y que a partir de los
aos veinte se denominar forista en alusin a las siglas de la F.O.R.A.
86 Rama, Carlos M. Ensayo de sociologa uruguaya. Medina. Montevideo, 1957. Pg. 212
87 Rama, 1957:224

46
Aproximacin al momento y el lugar

2. El Trienio Rojo Uruguayo (1918-1920).


Si en el mundo, la regin y Montevideo, un fantasma rojo
recorra todos los rincones del universo obrero, ese fantasma,
esa tormenta social llegar rpidamente a la regin del litoral.
Es difcil poner un comienzo temporal a este relato. La idea
original giraba en torno al comienzo de la edicin del peridico
La Tierra en Salto en 1920, pero es inevitable remontarse unos
aos antes para entender la realidad del movimiento y principal
mente sus aos de mayor efervescencia.
Un fenmeno poco conocido hasta el momento en la his
toriografa sobre el movimiento obrero uruguayo parece ser la
existencia de las Federaciones Locales, las cuales eran parte de los
objetivos asumidos en los estatutos de las Federaciones Obreras de
la corriente internacionalista que venimos viendo. As constatamos
la Federacin Obrera Local Saltea, la Federacin Obrera Local de
Paysand y la Federacin Obrera Rochense.

2.1. Origen de la Federacin Obrera Local Saltea.

Existen dos reseas histricas publicadas en el peridico La


Tierra de Salto por los mismos integrantes de la Federacin Obrera
Local acerca de su origen, una publicada en 192188 y la otra en 1922.89
Segn la crnica de La Tierra del 1 de Mayo de 1921, el co
mienzo de este nuevo ciclo de organizacin obrera en el Salto se
origina a fines de 1916 con la organizacin de los obreros panade
ros: Cabele la gloria a los obreros panaderos del Salto haber sido el
primer gremio que, como heraldo de la organizacin proletaria y de
los ideales comunistas anrquicos, rompiera el achatamiento y cris-

88 La Tierra N37, 1 de Mayo de 1921


89 La Tierra N89, 30 de Mayo de 1922

47
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

talizacin imperantes, all por los ltimos meses de 1916. Su obra fue
talvez breve, pero fue suficiente para dar calor y vida a los anhelos
de los trabajadores salteos y formar un buen ncleo de camaradas
jvenes y entusiastas que impertrritos luchan hasta ahora.
La crnica contina con interesantes detalles Y as pron-
to se reorganiz la vieja sociedad de Obreros Sastres, se form la
Agrupacin de Oficios Varios, intentaron organizarse el gremio de
Chauffeurs y apareci con el concurso de algunos camaradas de
Concordia, como un paladn de la gran causa, aquel pequeo r-
gano proletario q [sic] se llam La voz del Obrero cuya obra de
propaganda y doctrina complement la tarea empezada por los pa-
naderos. El mencionado peridico edit siete ejemplares a lo largo
de 1917, pero lamentablemente no hemos podido consultarlo.90

90 Se encuentra una coleccin de La Voz del Obrero en la Biblioteca Nacional de Monte
video. La misma est catalogada dentro de la categora de Publicaciones Varias, stas
no se pueden consultar actualmente por encontrarse en espera de ser micro-filmadas.
Esta situacin pesa sobre decenas de publicaciones obreras, anarquistas, socialistas y
comunistas, como tambin cientos de publicaciones en general. Intentando subsanar
dicha carencia hemos iniciado un proyecto junto al investigador Daniel Vidal compran
do los escaneados de dichas publicaciones para ponerlas accesibles al pblico en la
web de Publicaciones Peridicas Uruguay (http://biblioteca.periodicas.edu.uy/).
Publicaciones Peridicas es un proyecto surgido en el Seminario de Anlisis de la Co-
municacinde la ex-Licenciatura en Ciencias de la Comunicacin de la Universidad de la
Repblica (hoy radicado en la recientemente creada Facultad de Informacin y Comuni
cacin de la Universidad) sostenido por Arturo Rodrguez Peixoto y Lisa Block de Behar.
El proyecto de comprar los escaneados fue apoyado por una larga lista de investigado
res de varios pases y aprobada por la Biblioteca Nacional de Montevideo. Si bien ya
hemos recibido varias entregas de escaneos y se estn subiendo a la web, an no se
han conseguido los ejemplares de La Voz del Obrero. Los investigadores que apoya
ron dicha iniciativa son los siguientes; Luciana Anapios, Joaqun Calvagno, Fernanda
de la Rosa, Laura Fernndez Cordero, Luisa Gaspar de la Teja, Yanina Leonardi, Mer
cedes Lpez Cantera, Martn Ariel Manuli, Sandra Michelon, Alejandro Agustn Nie
to, Vernica Norando, Agustina Prieto, Nadia Prieto Ledesma, Ana La Rey, Fernando
Diego Rodrguez y Lorena Verzero (Argentina); Luciana Eliza Dos Santos, Caroline
Poletto, Carlo Romani y Rodrigo Rosa da Silva (Brasil); Luigi Balsamini, Giampietro
Berti, Franco Bertolucci, Alessia Bruni, Pasquale Iuso, Adriano Prosperi y Claudio
Venza (Italia); Miguel Amors, Miguel iguez, Maria Miguelaez y Rodrigo Vescovi
(Espaa); Nstor Bauman, Nicolas Duffay, Gerardo Garay Montaner, Salvador Neves,
Rodolfo Porrini y Ral Zibechi (Uruguay).

48
Aproximacin al momento y el lugar

Sabemos que el grupo iniciador de La Voz del Obrero e


integrante de la sociedad de Oficios Varios estuvo integrado por
Colman, M. Amaro, A. Rodriguez, D. Pacheco y Tettamani.91
En una crnica posterior, publicada en La Tierra del 30
de Mayo de 1922, se menciona una versin similar; se men
ciona la existencia previa de la Unin General de Trabajadores,
orientada por los socialistas, de la cual no tenemos ms
informacin.92
Y luego nos cuenta:
Un grupo de camaradas inspirados en las tendencias anar
quistas y revolucionarias que ya haban tomado intensa propulsin
en las grandes ciudades de la Argentina y Montevideo, echaron
entre fines de los aos 1916 y el curso de 1917 18, los cimientos
de las primeras organizaciones y publicaron el primer peridico
obrero anarquista de este litoral que se llam La Voz del Obrero.
La Sociedad de Obreros Panaderos y luego la Agrupacin
de Oficios Varios fueron (...) las primeras celulas de nuestra actual
organizacin.
Fueron organizndose nuevamente otros gremios a impul
sos de la prdica anarquista, hasta que en Setiembre de 1918 se
realiza el Primer Congreso Obrero Local y se resuelve dejar funda
da la Federacin Obrera Local Saltea integrada por los gremios
siguientes: Sastres, Oficios Varios, Panaderos, Vendedores Ambu
lantes, Martimos y Estivadores y Trabajadores del Saladero.
Desde el primer momento, nuestra F.O.L.S. Se adhiri a la
F.O.R.U.93

91 La Tierra N76, 28 de Enero de 1922.


92 Es muy probable que exista nutrida informacin sobre la misma, pero hemos li
mitado el comienzo cronolgico de este trabajo a los orgenes de la Federacin
Obrera Local Saltea.
93 La Tierra N89 30 de Mayo de 1922

49
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Ms all de las crnicas auto-referenciales de 1921 y


1922, que poseen algunas contradicciones (en la de 1921 se
menciona la fundacin de la Federacin Obrera Local en Se
tiembre de 1917 y en la crnica de 1922 en Setiembre de 1918),
es recin en Setiembre de 1918, que encontramos la primer
referencia a la Federacin Obrera Local en la prensa, donde la
Sociedad de Resistencia de Obreros Sastres de Montevideo en
comunicacin con sus pares de Salto comunican que se han
venido realizando activos trabajos con el objeto de formar la Fe-
deracin O. Local.94
Afirmando que tal aspiracin est prxima a concretarse.
Lo cual indicara, que para esa fecha an no se haba formado, y
menos an para fines de 1917, como seala la crnica de 1921.
En la crnica de 1922 incluso, se menciona la realiza
cin de un Congreso Obrero, que da origen a la fundacin de la
F.O.L., en Setiembre de 1918.
Sin embargo, debemos hacer una salvedad a la historia
relatada por la misma Federacin Obrera, ya que en Octubre de
1920 se enva una circular a los distintos gremios con la finalidad
de realizar el Primer Congreso Obrero Regional Salteo para
el mes de Diciembre, postergndose para Enero por la huelga
general desarrollada en Buenos Aires, postergndose nueva
mente y no realizndose finalmente.
A pesar de eso, el congreso que se realiz del 1 al 4 de
Mayo de 1922, fue convocado como Segundo Congreso Obrero
Local, ubicando el primer congreso, como vimos en la crnica, en
Setiembre de 1918.
Pero en definitiva creemos que el presunto primer congre
so de 1918, no es ms que una reunin de gremios que deciden
formar una Federacin Local e instrumentan su funcionamiento,
otorgndose la cartula de Congreso cuatro aos despus, en

94 La Batalla N67 (Montevideo) 30 de Mayo de 1918

50
Aproximacin al momento y el lugar

momentos de profundas divisiones y donde se tratan de magnifi


car los logros propios. Sino, no se explica la convocatoria en 1920
para un Primer Congreso.
Por ltimo, sobre la presencia de algunos camaradas
que haban tenido activa participacin en Buenos Aires y Mon
tevideo, puede tratarse de los anarquistas Mario O. Herrera,
Franco Hernndez, Jos Etcheverry y Jos Fernndez, activos
militantes en Salto y a quien puede comprobarse tambin des
tacada presencia en Argentina principalmente.95

2.2. La Semana Roja de Montevideo.

Para 1918 el viento revolucionario soplaba fuerte y helado


procedente de la glida Rusia. Ese fro viento que se ir calentan
do al sol de las grandes extensiones (y tensiones) argentinas ya
sacuda Montevideo y se empezaba a sentir en el Salto.
En Salto se registran algunos movimientos reivindicativos
como una huelga de sastres en oposicin a la expulsin de un
obrero.96
Son los sastres justamente, quienes se muestran activos en
estas fechas y en comunicacin con sus pares en Montevideo en el
peridico anarquista La Batalla de Montevideo comentan: Los com-
paeros del Salto se ocupan de ir preparando el ambiente para el me-
jor xito de los actos de propaganda que se realicen en esa localidad
con motivo de la gira que se proyecta.97 Como veremos los aconte
cimientos se precipitarn en poco tiempo y dicha gira no se realizar.

95 E l flujo de militantes de un pas a otro es constante. Franco Hernndez, por ejem


plo, estar detenido ms de un mes tras la represin en Villaguay, Entre Ros en
Mayo de 1921. Mario O. Herrera, estar preso en Buenos Aires, tras ser detenido
por el complot obrero de Marzo de 1920. (sobre ste ltimo suceso ver: Doeswijk,
2013:153 y La Tierra N3 (04-09-1920)
96 Tribuna Saltea (Salto) 4 de Abril de 1918
97 La Batalla N67 (Montevideo) 30 de Mayo de 1918

51
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

A fines de Julio de 1918, por carta enviada desde Salto


La Batalla nos informa la reciente organizacin de la Unin de
Obreros del Saladero La Caballada y de los Trabajadores de Rive
ra, as como informa del xito obtenido en la huelga de obreros
sastres.
Para el 30 de Julio el mismo peridico nos informa acerca
del triunfo de una huelga en el Puerto, como as tambin los
trabajos tendientes a organizar una sociedad de Oficios Varios.98
Al mes siguiente los acontecimientos se precipitarn y la
ola roja sacudir Montevideo.
En el mes de Agosto de 1918 se produce una de las ms
violentas huelgas generales de la historia del Uruguay, la mis
ma se extendi desde el Lunes 12 de Agosto hasta el Jueves
15, pero si consideramos el conjunto de lo que la sociedad de
obreros sastres de Montevideo dio a llamar la semana roja de
Montevideo99 y contamos el movimiento desde el comienzo de
la huelga tranviaria (el 3 de Agosto), nos encontramos con casi
15 das de combates entre huelguistas, rompe-huelgas policas
y soldados.
Constantes piquetes armados de huelguistas, tiroteos
desde las calles, casas y locales sindicales. Tranvas incendiados,
locales allanados, infinidad de huelguistas detenidos, explosin
de petardos de dinamita y diversidad de sabotajes en distintos
puntos de la ciudad. Se levantaron barricadas sobre la principal
avenida de ciudad y dej un saldo de al menos cuatro huelguis
tas muertos por balas policiales y dos policas muertos bajo el
fuego de los huelguistas.100

98 La Batalla N71 (10-07-1918) y N73 (30-07-1918)


99 Despertar N75 (Montevideo) Agosto [Setiembre] 1918.
100 Puede consultarse sobre el tema: Muoz, Pascual. La Semana Roja de Montevi-
deo. Primera Parte (Tierra y Tempestad N18 Primavera/Verano 2013-2014 Mon
tevideo). Muoz, Pascual La Semana Roja de Montevideo. Segunda Parte (Tierra
y Tempestad N19, Montevideo Otoo 2014). Y Muoz, P. La Dinamita redentora.

52
Aproximacin al momento y el lugar

Ante la violenta huelga general de Montevideo, los obreros


del Salto se organizan rpidamente para solidarizarse y hacer va
ler sus reivindicaciones, convocndose a un paro general para el
lunes 19 de Agosto.101
El paro fue adherido por los gremios de panaderos, albai
les, sastres y portuarios.
Un ejemplo del momento revolucionarios que se viva en
Salto es la sociedad de obreros panaderos, que como haban
mencionado las mismas crnicas histricas de La Tierra, fue uno
de los pilares del origen del movimiento revolucionario de Salto.
El sbado 17 de Agosto los panaderos realizan una asam
blea en el local obrero ubicado en la calle Dayman 319, para tra-
tar de estudiar el ultimtum que debe enviarse a los patrones
segn un manifiesto repartido por los mismo obreros.
El mismo manifiesto nos da un panorama del posiciona
miento social de dicho gremio;
Compaero: Todos los obreros estamos siendo vctimas
de una explotacin sin igual; en nuestros ranchitos no existe ms
abundancia que la miseria, queremos trabajar para producir y para
aliviar en parte nuestra existencia, no encontramos trabajo, y cuan
do trabajamos, es decir, cuando nos alquilamos, los patrones no
reparan en que todos somos hijos de la naturaleza, y que pertene
cemos a la misma especie humana, y sin consideracin de ninguna
clase nos dan un trato como a simples bestias de carga, nos rebajan
el salario que no nos alcanza para cubrir nuestras ms perentorias
necesidades.
Los patrones tienen infinidad de grupos para obtener mayo
res ganancias, como ser: la guerra y otras cosas por el estilo. Nosotros

La Semana Roja de Montevideo tercera parte. (Tierra y Tempestad N20, Monte


video Primavera 2014)
101 Tribuna Saltea (Salto), 17 de Agosto de 1918

53
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

los obreros, nada tenemos que ver, a nadie mandamos a pelear.


La miseria reinante no debe, bajo ningn principio, recaer
sobre nosotros los trabajadores.
Nosotros, en lugar de ser muecos de cartn, debemos ser
hombres de dignidad y si apreciamos la vida, es necesario que lu
chemos por ella.
El miedo debe desaparecer, y demostrar nuestra justa re
belda, por medio de la unin de nuestra Sociedad de Resistencia.
Compaeros Panaderos: hay la necesidad de abolir estas
palabras: a mi la Sociedad no me d nada si es que me declaro en
huelga, pero bien: hay que tener en cuenta, que muchas veces, hemos
quedado sin trabajo, sin ganar nada y, no es ms simptico quedar
sin trabajo para conquistar ms salario y ms respeto de los patrones?
Compaero: no tenemos que perder la oportunidad; el momen
to es propicio para exigir algo a los patrones, teniendo en cuenta que
nada debemos temer a gente que pueda venir de otras partes; con todos
estamos de comn acuerdo y no hay que perder tiempo para nada.
Seamos un gremio ms en huelga si fuera necesario, de los
ciento cuarenta que ya estn agitando sus banderas de reivindicacio
nes obreras.102
Como se ve, las justificaciones que llevan a los panaderos a
levantarse en huelga, son las mismas que los obreros rusos o que
el proletariado mundial; la miseria y la guerra.
El pliego presentado por la sociedad de obreros panaderos
a los patrones de los nueve establecimientos que existan en la
ciudad de Salto nos muestra una sociedad obrera revolucionaria
en pie de guerra.
Art.1 Los seores patrones no deben admitir en las panaderas
a ningn obrero, que no est afiliado a nuestra sociedad, como

102 Idem.

54
Aproximacin al momento y el lugar

tampoco podrn despedir a los asociados sin causa justificada.


Art. 2 Tambin se admitir la entrada del cobrador de sta Sociedad
en las panaderas.
Art. 3 Se pide tambin, la libertad por 24 horas, o sea un paro, por
acto de solidaridad, con los obreros en huelga de Montevideo.
Art. 4 Se concede como plazo, para la contestacin del presente
pliego de condiciones, 2 horas, comprendidas de 7 a 9 a.m.
Art. 5 En caso de firmar el presente pliego de condiciones, y con el
propsito de no perjudicar a los seores patrones, el paro se har
despus de concluir el trabajo, que empezar a regir desde el do
mingo a las 9 p.m. Hasta el Martes a las 5 a.m.
Art. 6 Reunido el gremio y considerando que es un pedido insignifi
cante, no se modificar en ninguna de sus partes, el presente pliego
de condiciones.
Por la Comisin:
Alfredo Carrera (Strio Gral)
Eliseo Rodrguez (Strio de Actas)

Como se podr ver, el pliego tiene varias particularidades,


en primer lugar no hay ninguna reivindicacin econmica. Es una
huelga solidaria, y eso nos habla tambin de la finalidad que tiene
la sociedad obrera para quienes la componen y orientan, su fina
lidad no es nicamente las mejoras puntuales de carcter econ
mico que puedan hacer al obrero ms soportable su explotacin,
sino que su finalidad es lograr la emancipacin de dicho traba
jador, y es por eso que afirmamos que es una sociedad obrera
revolucionaria, o al menos de intencin revolucionaria.
El artculo 1 y 2 son puntos bsicos de las sociedades
obreras anarquistas del periodo, el reconocimiento de la socie
dad de resistencia por los patrones. Recordemos por ejemplo,
que la segunda huelga general declarada en el Uruguay, el 27 de
Mayo de 1917, fue realizada en solidaridad con los obreros de

55
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

los frigorficos del Cerro de Montevideo, quienes reclamaban au


mento de sueldos y reconocimiento de la Sociedad de Resisten
cia, habiendo los patrones aceptado los aumentos econmicos y
no as el reconocimiento de la sociedad obrera, la guerra social103
se desat en el cerro en procura del reconocimiento gremial.
El reconocimiento de la Sociedad de Resistencia por parte
de la empresa est ntimamente ligado a la concepcin anarquis
ta de Accin Directa, y nada tiene que ver con el reconocimiento
legal del Estado104. El reconocimiento de la Sociedad de Resisten
cia por parte de la empresa consista bsicamente -segn el grado
de concesiones arrancadas a la empresa-, en que todos los traba
jadores de la planta, taller o lo que fuese, deberan estar afiliados
a la sociedad obrera y pagar su cuota, el cobrador podra entrar al
lugar de trabajo a cobrar y la sociedad de resistencia poda decidir
quien trabajaba o no en los establecimientos.
A su vez, legitimaba a la Sociedad de Resistencia como el ni
co interlocutor vlido para la comunicacin entre el trabajo y el capi
tal, rechazando categricamente toda intervencin estatal, smbolo
de la representacin es decir de la autoridad y por ende incompa
tibles con los principios emancipatorios de los obreros.
En ese sentido el reconocimiento de la sociedad obrera es
clave en el afianzamiento de la accin directa como herramienta
de lucha contra el capital y quien es considerado su gran aliado, el

103 En el artculo Huelga en los frigorficos del Cerro. Segunda Parte. Guerra social en
el Cerro, desarrollo el porqu considerar dicho conflicto como una guerra social. Las
exigencias de la Sociedad de Resistencia de Oficios Varios de la Villa del Cerro, para
dar por terminado el conflicto son tres; cese de la represin, retiro de las tropas de
la villa del Cerro y libertad de los huelguistas presos. Como se ve, el conflicto dej de
ser econmico y tras intensos das de combates armados en la villa cerrense, las rei
vindicaciones para su fin son de ndole militar. Adems de esto, la expresin guerra
social es propia del movimiento obrero de la poca. (Ver Muoz, P. Huelga en los
frigorficos del Cerro. Segunda Parte. Tierra y Tempestad N13 Otoo 2012.)
104  Sobre stos conceptos puede consultarse el artculo Muoz, P. Accin Directa,
Boicott y Sabotage. Tcticas anarquistas en el movimiento obrero Barrikada N 48
Mdeo. Ago-Set 2012

56
Aproximacin al momento y el lugar

Estado, como as tambin una herramienta de construccin hori


zontal de los trabajadores.
La misma Federacin Obrera Regional Uruguaya, haba su
frido una crisis interna importante, cuando en ocasin de la huel
ga de tejedoras de Juan Lacaze a fines de 1913, los gremios ad
heridos declararon la huelga general, y el secretario de la F.O.R.U.
acord el levantamiento de la huelga tras obtener las demandas
econmicas exigidas, pero no as el reconocimiento de la socie
dad de resistencia. Este hecho provoc la renuncia de todo el
Consejo Federal por las fuertes crticas a su actuacin.
No es de extraarse entonces, que el gremio de panaderos
coloque como sus dos primeras reivindicaciones las facultades de
la sociedad de resistencia dentro del territorio de trabajo. El ar
tculo 3 es quizs el ms interesante, ya que se pide la libertad
por 24 horas es decir el paro. Estn manifestando que no existe
la libertad bajo la forma de trabajo capitalista? El corto plazo con
que cuenta el pliego demuestra una voluntad de ir a la huelga
ms que de llegar a un rpido acuerdo, y la intencin de hacer
una demostracin de fuerzas perjudicando los intereses patrona
les. El hecho de que igualmente se realizara la huelga ms all de
que se acepte el pliego-pero en un horario menos perjudicial- y la
negativa negociar algn punto, reafirman el temple intransigente
intrnseca a toda pretensin revolucionaria.
De los nueve establecimientos que hay en la ciudad siete
aceptaron el pliego inmediatamente. Pero los dos establecimientos
ms importantes, la panadera Modelo y La Comercial, propiedades
de A. y R. Ambrosoni, y Carlos Ambrosoni, pusieron reparos a la
conveniencia de que la sociedad obrera controlara quienes podan
trabajar o no, y creyeron inconveniente la realizacin del paro, ya
que consideraban que la empresa haba sido generosa con sus
trabajadores y no se oponan a que el cobrador ingresara -siempre
que estuviesen los obreros de acuerdo-.

57
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

De los cuarenta y tantos obreros que trabajaban en am


bos establecimientos, veinti tantos se plegaron a la huelga se
gn Tribuna Saltea. En el establecimiento de A.R. Ambrosini
incluso, se comenz la huelga tiempo antes del convenido dejan
do 16 bolsas de harinas sin producir.

2.3. El Paro General en el Salto.

Segn Tribuna Saltea las sociedades obreras existentes


en ese momento, son Obreros Panaderos, Sastres Unidos y
Obreros del Puerto. Y son bsicamente las que van a la huelga.
Los obreros del puerto que comenzaron la huelga el da lunes no
presentaron ninguna reivindicacin.
El lunes 19 efectuado el paro se realiz una manifestacin ca
llejera, segn la crnica periodstica, se juntaron en la plaza 18 de
Julio despus de las 14:20 hs, los obreros panaderos, sastres, por
tuarios, albailes y del saladero. A las 15 partieron en manifestacin
unos 300 a 400 obreros, encabezada por la bandera de la Sociedad
de Resistencia Albailes, y pancartas que decan Viva la huelga de
panaderos Abajo la explotacin, mientras se vivaba la huelga y se
entonaban cnticos revolucionarios, la columna baj por la calle Uru
guay tomando luego Gaboto y Brasil hasta llegar a la explanada del
puerto donde hablaron seis obreros quienes expresaron su repudio a
la represin del gobierno para con los obreros en Montevideo. Luego
se retiraron en columna hacia el local obrero de la calle Daymn.105
En las dos panaderas en conflicto la huelga continuaba inte
rrumpiendo el reparto de pan a domicilio, y solo obtenindose ste
en el mostrador del local. Terminado el paro general la huelga de
panaderos parece se extendi algunos das ms y aparentemente

105 Tribuna Saltea (Salto), 20 de Agosto de 1918 y La Batalla (Montevideo) N74 30


de Agosto de 1918.

58
Aproximacin al momento y el lugar

habran sido derrotados los obreros logrando la empresa contratar


rompe huelgas ahogando as el conflicto.
La mencin de que las panaderas Modelo y La Comercial,
debieron ser vigiladas por la polica por temor a algn atentado
nos muestra el clima de intranquilidad que se viva en relacin a la
organizacin obrera.106
En correspondencia enviada desde Salto al peridico
La Batalla de Montevideo, podemos conocer las evaluaciones de
los mismos protagonistas tras la huelga general;
El acto, si bien no revisti toda la trascendencia que fuera de
desear, super en mucho a lo calculado, mxime si se tiene en cuen
ta, que no hubo tiempo de preparar a la masa, pues, la propaganda
se inici dos das antes, tan solo.
Por otra parte, se careca casi de noticias; stas eran contra
dictorias (antigua tctica burguesa) y al mismo tiempo comentadas
en la ms repugnante forma, por la celestina prensa.
Los brbaros atropellos, llevados a cabo por los bandoleros
legalizados, al servicio de la burguesa han tenido la virtud de conmo
ver y despertar al proletariado de sta, que hallbase sumido en una
extrema modorra y esta es la hora en que estn en vas de organizar
se los carpinteros, los albailes, los tranvieros, los cocineros, mozos y
hasta es probable que las lavanderas.107
Otro gremio que particip de la huelga fue el de los obreros
sastres quienes comunicaron a sus pares montevideanos su
actitud la cual parece ser vista con muchas expectativas desde la
capital; Ahora, es cuando creemos ms que los obreros salteos
se encuentran en un grado de conciencia proletaria capaz de iniciar
ciertos problemas, que hasta la fecha nos eran difciles desde ac

106 Tribuna Saltea (Salto) 21 y 22 de Agosto de 1918.


107 La Batalla (Montevideo) N74 30 de Agosto de 1918.

59
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

poderlos realizar, y que era: el tratar de constituir las Federaciones


Locales, en cada departamento, para as poder constituir en
realidad la Confederacin de todo el pas y ser los trabajadores
del Uruguay una fuerza potente que se interponga a la absorbente
fuerza de la burguesa que nos deprime y aplasta y ms adelante
agrega Por carta que pronto les enviar la Federacin Obrera,
podrn enterarse de ciertos proyectos que tiene esta institucin,
con objeto de realizar las ideas arriba expresadas.108
Y es en estas fechas entonces, de Setiembre de 1918 cuan
do efectivamente se consolida la creacin de la Federacin Obrera
Local, aunque no hayamos podido encontrar la fecha exacta de su
fundacin, desde Montevideo se sigue y alienta su creacin La
Federacin local del Salto ser la primera entidad obrera que de
una de las ciudades ms importantes del interior de esta repblica,
o quiz la mas importante vendr a integrar nuestra Federacin
Obrera (...) establecindose hoy para derribar los privilegios y a es-
tablecerse maana como base de la gran organizacin social del
futuro. Dir el quincenario anarquista La Batalla.109
Pero la primera mencin real de su existencia la encon
tramos recin en Diciembre de 1918, cuando el diario salteo
La Tarde mencione;
Conferencia Obrera: (...), maana a la tarde a las 16hs ser
efectuada una conferencia a los trabajadores, organizada por la Fe-
deracin Obrera Saltea. El acto tendr lugar en la explanada del
puerto, habiendo sido convocados a l los obreros de todos los gre-
mios, asociados o no asociados. Los oradores se ocuparn principal-
mente de organizacin proletaria y otros asuntos de actualidad.110
Das despus se informa que hablaron varios oradores
de la localidad, y otros, delegados de distintas agremiaciones de

108 Despertar N75, Agosto [setiembre] de 1918.


109 La Batalla N75, 10 de Setiembre de 1918.
110 La Tarde (Salto) 7 de Diciembre de 1918.

60
Aproximacin al momento y el lugar

Concordia, Carmelo y Buenos Aires, stos dos ltimos seguramente


Rosales y Choca. Sealando la crnica que hubo regular
auditorio.111
Para el 22 de diciembre la Federacin Obrera Local
convoca a un mitin de protesta internacional por Thomas
Mooney, un anarquista estadounidense condenado a la horca
acusado de arrojar una bomba en el desfile militar del 22 de Julio
de 1916 en ocasin de la entrada de Estados Unidos a la Gran
Guerra mundial que se produca con centro en Europa. El mitin
se vio bastante concurrido, por obreros principalmente, de los
cuales algunos dirigieron la palabra a los manifestantes. Tambin
usaron la palabra algunos obreros concordinenses que vinieron
expresamente a sta. relatar Tribuna Saltea.112
El mismo da se realiza una importante velada y conferencia
a beneficio de la Federacin Obrera Local en el teatro Novedades
la cual estuvo regularmente concurrida, sealando las crnicas
que el excesivo calor seguramente quit un poco de pblico.
Se cant el himno Hijos del Pueblo, La Marsellesa, y hubo
conferencias y discursos varios.

2.4. La Federacin Obrera en Constructores Navales,


Seccin Salto.

Los conflictos en el puerto sern el centro de las preocupa


ciones de la burguesa saltea que ven directamente perjudicados
sus intereses. Ya en Setiembre se registra un boycott al puerto de
Salto por la Federacin Martima de Concordia en solidaridad con la
huelga martima de Montevideo. Segn el peridico salteo Diario
Nuevo en los barcos de carga hacia Salto el boycott era absoluto.113
111 La Tarde (Salto) 9 de Diciembre de 1918.
112 Tribuna Saltea (Salto) 24 de Diciembre de 1918.
113 Diario Nuevo (Salto), 6 de Setiembre de 1918.

61
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

En el mes de diciembre se cuenta en el Salto con la presencia


del delegado de la Federacin Obrera en Constructores Navales de
Buenos Aires J.P. Rosales y el de Carmelo Carlos Choca.
La presencia de Rosales y Choca ser la palanca propulsora
de cuanta propaganda y agitacin se hiciera en la localidad sea
lar La Tierra tiempo despus.114
La Federacin Obrera en Construcciones Navales era una
fuerte organizacin con sede tanto en Buenos Aires como en
Montevideo, Carmelo, Ro Santiago, San Fernando y Chile y de
pendan bsicamente de la empresa Milhanovich que tena su
directorio central en Buenos Aires. Garantizando la solidaridad
en los distintos puertos la presin ejercida por la misma era muy
importante.115
La presencia Rosales y Choca fue determinante para lograr
la fundacin de la Sociedad de Resistencia de Constructores Na
vales de Salto, y que la misma entrara en conflicto con la empre
sa, garantizndose la solidaridad desde Carmelo y Buenos Aires.
La huelga comenz el 17 de diciembre por mejoras econmicas
para matizar el efecto de la caresta.
Rosales ya vuelto a Buenos Aires junto a otros delegados se
entrevistaron con los directivos de Milhanovich116 y ante la ame
naza de que los barcos no serian reparados en ningn astillero
se logra llegar a un acuerdo firmndose un pliego de condiciones
con aumentos. El 2 de enero por la tarde los obreros festejaron
alegremente el triunfo, en la costa del ro Uruguay, en el paraje
El Cable, se hizo un asado donde pasaron algunas horas y re
gresaron al local social al comps de una marcha musical en claro
signo de confraternidad obrera.117

114 La Tierra N89, 30 de Mayo de 1922


115 La Batalla N85 20-12-1918 y Tribuna Saltea (8-12-1918, 10-12-1918 y 17-12-1918).
116 Tribuna Saltea, 31 de Diciembre de 1918
117 Tribuna Saltea, 3 de Enero de 1919

62
Aproximacin al momento y el lugar

2.5. Araando la revolucin social.

El clima que se vivir entre diciembre de 1918 y los pri


meros meses de 1919 -antes de solucionado el conflicto en el
puerto-, y ante la amenaza de extenderse desde la Argentina el
conflicto en el Ferrocarril Central es de pnico. Un editorial del
diario batllista Tribuna Saltea del 26 de diciembre expresa las
preocupaciones de la burguesa local;

El problema obrero del Litoral


Nos hallamos indudablemente en momentos difciles en lo
que respecta al problema obrero planteado en algunos grandes es
tablecimientos del litoral y a cuya dificultad se una la perspectiva del
movimiento general que se viene anunciando para el 1 de ao.
Si por una parte las empresas se hallan decididas a no conce
der las prerrogativas que exigen sus obreros, por la otra, estos, firmes
en sus primeros propsitos mantendrn sus exigencias, que conside
ran justas, hasta que sean satisfechos, por lo menos en su mayor parte.
Esto puede observarse desde ahora, segn las informaciones
que ha venido publicando Tribuna Saltea en los movimientos actuales
de Liebig, en Coln, y del astillero, Milhanovich, en Pueblo Nuevo, don
de an no han podido realizarse las soluciones propuestas por parte de
intermediarios, en algunos casos, y de los gerentes o directores en otros.
Pero lo mas grave que tiene el problema obrero del litoral,
no son precisamente los acontecimientos actuales, localizados hasta
ahora en el radio de cada industria, Lo grave es el movimiento que se
prepara y que tendr carcter general, paralizando todos los servicios
de transportes en una poca de actividades de todo orden y especial
mente en lo que se refiere a las industrias.

63
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Si las cosas continan adelante, en la forma programada por


la masa obrera, el movimiento se extender a todos los estableci
mientos de Montevideo y Buenos Aires y es posible que tambin a los
ferroviarios en general del Uruguay y la Argentina, haciendo de ese
modo completa la paralizacin comercial.
Las consecuencias inmediatas de un movimiento de tales
proposiciones, sern realmente desastrosas para los pueblos de
ambos pases, no solo en sus problemas econmicos, que sufrieran
hondamente, sino tambin en la tranquilidad de los centros de ma
yor industria y comercio donde es posible que se produzcan actos de
violencias de resultados dolorosos.118
En esos das, se produce en la Rosario argentina una at
pica huelga de policas. Los policas rosarinos que no cobraban
sus sueldos haca ya entre seis y nueve meses fueron a buscar
solidaridad a las puertas de la Federacin Obrera Local Rosari-
na, sta sin poder ocultar su sorpresa, habr visto en el conflicto
la posibilidad de ganarse para la causa a un sector del brazo
armado del rgimen. En base a ciertos acuerdos la solidaridad
fue brindada y alguno de los pasajes del pliego de condiciones
de policas no tiene desperdicio;
Considerando que los agentes de polica pertenecen a la
clase desposeda, cuyos intereses les son comunes, en adelante
se abstendrn a intervenir en los conflictos entre el capital y el
trabajo, y todo movimiento que tienda al bienestar y libertad del
pueblo.
El cuerpo de bomberos no ejercer funciones de polica.
Eliminacin del mismo en las funciones de guarda crceles.119

118 Tribuna Saltea 26 de diciembre de 1918


119 El manifiesto fue publicado en La Vanguardia (Buenos Aires) del 11 de Diciembre
de 1918 y es reproducido por Horacio Silva en Das Rojos, Verano Negro Ana
rrs, Buenos Aires, 2011, pgina 101.

64
Aproximacin al momento y el lugar

La ciudad de rosario fue ocupada militarmente y la huelga


fue ahogada en sangre con varios muertos y heridos, pero la sangre
no trajo la tranquilidad. La prensa ms conservadora de la argenti
na como The Review of the River Plate vea en estos sucesos el co-
mienzo de un soviet, como los creados en la Rusia revolucionaria.
Los consejos (soviets) de obreros, campesinos y soldados en Rusia
fueron los micro centros de poder paralelos al Estado zarista que
lograron articular la ruptura violenta con el rgimen y la reorgani
zacin social de la economa rusa. La adhesin del gremio policial
a las filas de los radicalizados gremios argentinos haca recordar
demasiado a la experiencia rusa.
La mencin a la huelga rosarina de policas, en referencia al
problema obrero del Uruguay no es antojadiza. En comunicacin
confidencial enviada el 28 de diciembre desde la Legacin de la
Repblica Argentina en Montevideo dirigida al ministro de Relacio
nes Exteriores y al Ministro del Interior argentinos, el cnsul Carlos
Estrada afirma:
Sr Ministro; Desde que ocurri la huelga del personal de
Polica de la ciudad de Rosario se ha notado (...) intensa agitacin
entre el elemento obrera [sic] de esta, suscitada por cabecillas cra-
tas, entre los cuales predominan rusos y espaoles.
Comenta en la correspondencia la represin al mitn anar
quista del 21 de diciembre en la plaza Independencia de Monte
video y el encarcelamiento a los principales promotores revo
lucionarios, como medidas preventivas tomadas por el gobierno
uruguayo y la presencia de todas las tropas del interior en el campo
de Cerrillos con la excusa de maniobras militares. Seala tambin
que se destituy al personal espaol de la polica y se lo reemplaza
por uruguayos, a la vez que se vigila de cerca a los rusos.120 Como se

120 Circular N817 (confidencial) Archivo General de la Nacin (Argentina), legajo


Huelgas Varias - 1919 (Series Histricas II - leg. 31), la circular es citada ntegra
mente por Silva,2011:102). Agradezco a su vez enormemente a Horacio Silva el
envo de una copia escaneada del original de la circular en cuestin.

65
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

ve, la paranoia en las esferas de los gobiernos y de las clases altas


estaba instalada. Ya no solo los anarquistas estaban convencidos
de que la revolucin era inminente. Los socialistas se estaban ra
dicalizando aceleradamente al igual que el conjunto de los obre
ros, y ahora, hasta la misma burguesa tema por su inminente
cada.
Por si esto fuera poco, la huelga de metalrgicos de los
talleres Vasena en el barrio Pompeya de Buenos Aires desemboca
en la mayor huelga general insurreccional que se hubiese produ
cido hasta esa fecha en la Argentina. La huelga metalrgica que
se haba originado a fines de diciembre derivo en un acelerado
espiral de violencia entre los huelguistas y los rompe huelgas que
involucr a todo el barrio y la feroz represin desemboc en una
huelga general salvaje durante la segunda semana de enero don
de se contaron entre 400 y 700 muertos ante un poder policial
desbordado e incapaz de contener la arremetida obrera.
La chispa revolucionaria se haba disparado, y no haba
sido por obra de la organizacin obrera que no estaba en su me
jor momento, sino que la chispa haba explotado en la parte ms
difcil de obtener, la espontaneidad revolucionaria de las masas.
La F.O.R.A. del IX Congreso de orientacin sindicalista in
tent encausar el conflicto y a pesar de acordar el levantamiento
del mismo la huelga sigui en pie varios das ms. La F.O.R.A. del
V Congreso, de tendencia anarquista, dio amplio apoyo al movi
miento y vio revitalizadas sus fuerzas y adherentes luego del mis
mo, pero no supo ni pudo encauzar la chispa insurreccional en un
movimiento generalizado.
Por las calles de Buenos Aires y Montevideo circulaban
de mano en mano boletines como el incautado por la polica de
Montevideo denominado Apresurate!;
Nuestro objeto es cargosear a los compaeros repetirle una
y cien veces al odo de que es necesario cambiar de vida, de mtodos

66
Aproximacin al momento y el lugar

de lucha, de forma de propaganda y adaptarlas a la poca a las nue


vas necesidades creadas por la gran revolucin rusa.
La ACCION de los revolucionarios, mientras no se haga la
revolucin es perseguir y eliminar sistemticamente a los policas,
jueces, a los periodistas mercenarios y a esos burgueses y poltica que
mas se ensaan contra las ideas y los hombres revolucionarios.121
Un ao antes ya, en carta al jefe de polica de Montevideo
fechada el 18 de Enero y dirigida por el traidor obrero Francisco
Corney122 ste le advierte; La revolucin rusa es el plato del da
de todos los militantes del campo crata, los que confan en que
no tardar la argentina en oficiar la misa roja (...) Los anarquis-
tas de ac esperan caldear el ambiente para solidarizarse con la
[revolucin] internacional. (...) si el calor que produjera la hogue-
ra revolucionaria argentina fuera mayor, el fuego llegara a ple-
garse aqu.123
La ciudad de Salto no escapa a la paranoia roja y en la edi
cin de Tribuna Saltea del 24 de enero se publica un artculo
titulado El maximalismo en el Salto? bajo los sub ttulos; Una
caravana de rusos sospechosos. La polica debe tomar medidas.
En la cual se narra que:
Desde hace tres das nos ha llamado la atencin la presencia
en nuestra ciudad de varios sujetos rusos, que vagan desorientados

121 Apresurate!, Archivo Virgilio Sampognaro (A.V.S.). Archivo General de la Nacin.


(A.G.N.) Caja 219, carpeta 7, hoja 13. Subrayado en el original.
122 Francisco Corney fue un destacado militante de la F.O.R.A. expulsado de la Argen
tina por la Ley de Residencia en 1905 recal en Montevideo donde tuvo una im
portante actuacin en la fundacin de la F.O.R.U. y sus primero aos. Se acerc
al batllismo al extremo de convertirse en un confidente del jefe de polica Virigi
lio Sampognaro a cambio de algunos pesos y bajo la supuesta fidelidad al partido
Colorado. Pero ms que un cambio en el posicionamiento poltico, como tuvieron
infinidad de militantes, Corney se convirti en un espa policial traicionando y com
prometiendo la integridad fsica y los proyectos colectivos de sus ex compaeros.
123 A.V.S., A.G.N. caja 216 carpeta 22. Carta del 8-1-18

67
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

por las calles en busca de los diversos centros obreros locales.


Al parecer, esta clase de gente procede del Brasil, de donde
seguramente han sido deportados por tratarse de agitadores peligro
sos y han encontrado libre entrada aqu.
Antenoche, precisamente, un hombre de aspecto sospechoso,
vistiendo un traje obrero, se dirigi a uno de los redactores de este dia
rio preguntando donde se hallaba el local de la Federacin de Obreros
en constructores navales. El desconocido husped dijo ser de nacio
nalidad rusa y haber llegado al Salto recientemente. (...) Ayer de tar
de otro individuo, ruso tambin, pero luciendo mejor vestimenta, nos
interrog sobre la ubicacin del local de la Federacin Obrera saltea.
Satisfecho su deseo, el desconocido sigui rumbo al lugar donde se
halla instalada aquella, pero en vano, pues dicho local, como lo anun
ciamos, ha sido clausurado recientemente por la polica
El artculo termina reclamando ms control policial sobre
los rusos en la ciudad.124

2.6. La agitacin local en Salto.


En este clima mas que agitado se inicia la huelga en la Usi
na Elctrica por el reconocimiento de la sociedad obrera (impli
cando que solo puedan trabajar los afiliados), la imposibilidad de
despidos por causas injustificadas, la inexistencia de represalias y
un aumento de sueldos.
La prensa seala que los huelguistas son unos 40 obreros.
Al igual que las Lavanderas Unidas la Federacin
Obrera Local125 se solidariza con el conflicto y emite el siguiente
comunicado;
124 Tribuna Saltea, 24 de Enero de 1919.
125 Para estas fechas el secretario de la Federacin Obrera Local era Alejandro Col
man. Y el secretario de la federacin de electricistas y anexos Enrique R. Y su local
se ubicaba en la calle 19 Abril N693 (Tribuna Saltea, 19 y 23 de Enero de 1919)

68
Aproximacin al momento y el lugar

1.-Tomar nota del pedido formulado por los electricistas y


pasar la comunicacin correspondiente a todos los gremios adheri
dos a la Federacin con el objeto de que estn prontos para aportar
la solidaridad en el caso que les sea requerido su concurso.
2.- Nombrar a los compaeros Alejandro Colman, Ramn
Saucedo y Eliseo Rodrguez, para que intervengan en carcter de
delegados de la Federacin Obrera Local Saltea con mandato
deliberativo.126
Para el 22 de enero se han registrado varios sabotajes
obreros cortando los cables de la Usina Elctrica de las lneas te
lefnicas. La prensa se escandaliza y denuncia alarmada la edi
cin de un boletn sedicioso incitando a los policas a unirse al
movimiento.
Fue la gota que derram el vaso, la represin desatada en
Buenos Aires y Montevideo tambin lleg al litoral salteo.
Se orden la detencin de Alejandro Colman, Enrique Re,
Ramn Saucedo, ngel Rodrguez, Jos Riccardi, Jacinto Acua,
Juan Gastesi y Ernesto Deilio miembros del Consejo Federal de la
Federacin Obrera Local.127
La Batalla de Montevideo publica una comunicacin con
la F.O.L. Saltea en donde denuncian haber pasado estos das
bajo un terror inquisitorial por la polica de esa localidad. (...) La
polica detuvo a la comisin administrativa, porque les acusaban
de haber roto un cable por los huelguistas. Fueron maltratados y
apaleados (...) y sometidos a un riguroso martirio. Tambin fueron
detenidos los miembros del Consejo Federal de la Federacin O.
Local e igualmente fueron tratados como los primeros (...) Hay
una efervescencia bastante agitada en esa localidad128

126 Tribuna Saltea 21 de Enero de 1919.


127 Tribuna Saltea 23 de Enero de 1919
128 La Batalla N93 21 de Enero de 1919.

69
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

La huelga termina con un resonado triunfo de los obreros,


se toman a todos los huelguistas, se conceden aumentos de jor
nales, no hay represalias por el movimiento, y se paga el 50% del
sueldo de los das de huelga.129
Otras huelgas que se registran en el verano salteo son
las de los obreros del puente del Daymn, el 22 de enero que se
soluciona a los dos das.130 Y la de los obreros en la construccin
muralln del puerto por aumentos de jornal.131
Por el mes de marzo se muestra muy activo un centro so
cial denominado Regeneracin y que logra editar un peridico
del mismo nombre.132 El 23 de Marzo en el recreo 18 de julio
realiza una conferencia pblica, en la que despus de hablar los
oradores todos menos uno fueron detenidos.133 Entre los dete
nidos contamos a Jos Tahuenca, Mario O. Herrera, Eliseo Rodr
guez, Nicols Mayolino, Domingo Pacheco y Arnaldo Morelli, es
tando tres das detenidos.134 La agitacin estaba en el aire, por la
ciudad corren rumores de que se declarar la huelga general por
48 exigiendo la libertad de los detenidos.135
El detenido Mario Herrera, en carta al mismsimo presi
dente de la Repblica Baltasar Brum, narrar los hechos;
El domingo 23 de Marzo fui invitado para concurrir y hacer
uso de la palabra a una conferencia pblica en el local designado por

129 Tribuna Saltea 26 de Enero de 1919.


130 Tribuna Saltea 23 de Enero de 1919.
131 Tribuna Saltea 13 de Marzo de 1919.
132 La Batalla N100, Montevideo, 17 de Abril, informa la aparicin de su segundo
nmero. Lamentablemente no hemos encontrado ejemplares de dicho peridico.
Para el 1 de mayo se anuncia el tercer ejemplar, el cual Trae buen material y
lucha por encausar debidamente la organizacin obrera de esa localidad dir La
Batalla N102 1 de Mayo de 1919
133 Tribuna Saltea 25 de Marzo de 1919
134 La Batalla N101 24 de Abril de 1919
135 Tribuna Saltea 17 de Marzo de 1919.

70
Aproximacin al momento y el lugar

Paseo 18 de Julio. Este acto fu organizado, previa comunicacin legal


a la polica, por una agrupacin de ciudadanos llamada Regeneracin
y con el objeto de ilustrar al pueblo y a la clase trabajadora. Al llegar
al paraje indicado, pude serciorarme [sic], por el gran despliegue de
tropas policial, de que sin duda se trataba de llevar a cabo alguna
pueblada. Efectivamente fu [sic] as. En actos pblicos realizados en
Salto y de los cuales particip, la jefatura se limit a enviar vigilancia
como para garantir el orden y hacer simple acto de presencia. Estando
preso, tuve oportunidad de conocer que en la orden del da lanzada
esa maana, el jefe de polica haba ordenado al personal subalterno
que, fiscalizara lo que manifestaban los conferencistas. Y porque no
decirlo? Tambin nuestra prisin.136
En correspondencia remitida a el peridico El Hombre de
Montevideo, se informa que se declararon en huelga solidaria con
los trabajadores del muralln los estibadores y conductores de la
casa Preve y Frioni, y comentan que se ha procesado al peridico
Regeneracin por hacer manifestaciones y propaganda anar-
quista, habiendo el juez, hecho comparecer a su presencia a todos
los compaeros que lo redactan, por lo cual la Federacin realiz
un mitin en el recreo 18 de julio dando por resultado la prisin de
nuevos compaeros de la forma mas absurda y brutal.137
Desde Montevideo La Batalla alerta; Las noticias que lle-
gan del Salto informan de la agitacin obrera reinante en aquella
localidad debido a la huelga de los martimos y a las arbitrarie-
dades policiales. La Huelga general que se anunciaba como inmi-
nente ser decretada siempre que el conflicto no se solucione en
breve.138

136 Carta de un anarquista al Presidente de la Repblica. La Batalla N101, 24 de


Abril de 1919. Se reproduce ntegra en el anexo.
137 El Hombre (Montevideo) N127 19 de Marzo de 1919.
138 La Batalla N98 5 de Abril de 1919.

71
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

La conflictividad est en el ambiente, a la huelga de cons


tructores del muralln del puerto se le suma la solidaridad brin
dada por los estibadores y carreros del puerto139,la misma se ex
tiende por varias semanas y preocupa a todos los comerciantes.
En abril se solidarizan la Federacin Obrera de Concordia y no
se embarca nada para el puerto de Salto debido a que se estaba
reponiendo el personal con rompe huelgas.140

2.7. El Centro Ciencia y Vida.

El 3 de Abril de 1919 se constituye el Centro Ciencia y Vida


el cual ser el otro puntal de la organizacin obrera junto a la Fe
deracin Obrera Local y el peridico La Tierra.
Muy posiblemente el Centro Ciencia y Vida sea la conti
nuacin del Centro Regeneracin golpeado recientemente por la
represin policial.
En su declaracin de principios declaraba en el primero
punto sus objetivos:
Este Centro secundar por todos los medios posibles la or
ganizacin obrera, propendiendo a la elevacin moral del proleta
riado, haciendo llegar hasta los conocimientos necesarios, a fin de
que se compenetre y avalore la importancia que tienen los grandes
ideales revolucionarios, particularmente el comunismo anrquico,
para la completa emancipacin; y encausar en este sentido toda su
propaganda ideolgica, desligando y combatiendo toda poltica go
bernativa y religiosa, por ser stas contrarias a nuestros sanos ideales
de proletariado.141

139 Tribuna Saltea 29 de Marzo de 1919.


140 Tribuna Saltea 12 de Abril de 1919.
141 La Tierra (Salto) [Segunda poca] N s/n[53?], 14 de Enero de 1933

72
Aproximacin al momento y el lugar

2.8. El 1 Mayo 1919.

En este clima se llega al primero de Mayo, fecha simblica,


representativa de la clase obrera y revolucionaria, smbolo y
termmetro de la capacidad de lucha revolucionaria de los
obreros organizados.
Con el impulso creciente de la agitacin obrera y la
estimulante presencia del delegado de la Federacin Obrera
Regional Uruguaya, Francisco Carreo.142
El diario local Tribuna Saltea nos da una idea de las
dimensiones de la jornada; Jams en el Salto el 1 de Mayo
tuvo tan digna conmemoracin como este ao. La mayora de la
clase obrera respondi como nunca al llamado que se le hiciera
Agrega que pesar de que a las 17 se volvieron porque se desat
una tormenta; No obstante al mal tiempo, el acto obrero de
ayer alcanz proporciones inesperadas, lo cual prueba que el
proletariado local se organiza progresivamente.143
Pero nuevamente debemos destacar el relato de La Batalla,
quien nos brinda detalles de la jornada obrera;
La conmemoracin de la fecha del proletariado universal ha
obtenido en esta localidad un xito y una resonancia jams vista. Los
diferentes gremios organizados en una reunin habida en el local de
142 Francisco Carreo (1890-1947), por estas fechas recin llegaba al Ro de la
Plata siendo un entusiasta militante. Ser secretario de la F.O.R.U. en 1919 y se
destacar en Buenos Aires como secretario de la F.O.R.A. y en las luchas gremiales
realizando una resonada huelga de hambre junto a otros militantes en Febrero
de 1924. Luego volver a Uruguay donde se destacar nuevamente en la F.O.R.U.
encabezando las aguerridas luchas del Sindicato nico del Automvil. Deportado
por la dictadura de Terra luchar junto a Durruti en la Guerra Civil Espaola e
integrar Los Amigos de Durruti grupo opositor a la colaboracin de la C.N.T. y los
anarquistas con las instituciones estatales. Muri en la resistencia anti franquista
editando el peridico CNT desde Francia. Ver Amoros, M. Francisco Carreo
Ediciones Solidarias con la biblioteca anarquista del Cerro, La Turba Ediciones,
Montevideo 2014.
143 Tribuna Saltea 2 de Mayo de 1919.

73
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

la Federacin Obrera Local Saltea, organizaron un comit de agi


tacin y preparacin para dar mayor esplendor al acto. Al efecto, la
propaganda fue intensa y eso puede decir que todas las paredes de la
ciudad estaban repletas de carteles y manifiestos alusivos a la fecha.
La vspera del 1 de Mayo el delegado de la F.O.R.U.-compaero Fran
cisco Carreo. Llegado de Montevideo en gira de propaganda por el
interior de la Repblica, desarroll una importante conferencia en
el local de la Federacin O., sobre el tema: organizacin y accin del
proletariado. Los obreros que llenaba de bote a bote dicho saln y la
parte exterior del mismo, demostraban con su entusiasmo la afirma
cin de que estos luchadores estn dispuestos para la lucha total por
sus reivindicaciones.
El paro fue total en la fecha de los trabajadores, cerrando
todo comercio sus puertas y hasta los valientes camaradas de la Fe
deracin O. De Mecnicos, Electricistas y Anexos, hicieron paralizar
los trabajos de la Usina Elctrica para demostrar su espritu de soli
daridad proletaria.
La manifestacin fue grandiosa, pues jams ms de dos mil
trabajadores concurrieron a ella. A las dos p.m. Sali la columna par
cial de la barriada genuinamente obrera del Pueblo Nuevo, encami
nndose al local de la F.O.L.S., calle Daymn, desde donde se organiz
la columna central. Al frente de la manifestacin figuraba un gran
cartel con el siguiente lema El que quiera comer que trabaje. Des
pus seguan las rojas banderas de la F.O.L.S., Federacin O. en Cons
trucciones Navales, Federacin O. Mecnicos Electricistas y Anexos,
Federacin de Carpinteros, Herreros y Anexos, Sociedad Albailes y
Anexos, Sociedad Carreros Unidos, Sociedad Lavanderas Unidas, So
ciedad Panaderos Unidos, Unin Trabajadores de Saladeros, Agrupa
cin O. Varios, Centro E. Sociales Ciencia y Vida, Agrupacin y peri
dico Regeneracin y la sociedad Martimos, Estibadores y Anexos;

74
Aproximacin al momento y el lugar

recorriendo las principales calles de la poblacin ante los sonidos de


Los Hijos del Pueblo ejecutado por una banda de msica que era
acompaada por multitud de voces proletarias hasta la explanada del
puerto que hay frente al muelle donde se verific la conferencia, en
la que tomaron parte los compaeros Plaza, Adrian Bazzacchi, Mario
Herrera, Tabuenca y Francisco Carreo.
En fin, un buen da para las ideas y para la organizacin de
los trabajadores, y un mal da para la burguesa saltea que desde
sus domicilios contemplaba cautelosamente y con pavor la grandiosa
manifestacin de los obreros que desfilaba ante su visita entre gritos
de abajo la burguesa! viva la Revolucin Rusa!.144

2.9. De Mayo a Mayo. 1919-1920.

a) Salto

Son sin duda estos meses de 1918 y 1919 los de mayor


efervescencia obrera, la misma se canalizar positivamente para
la causa de los trabajadores en la consolidacin de sus estructuras
organizativas, instituciones de ndole poltico-cultural y prcti
cas culturales propias que le brindaran identidad y confianza en
miras de los objetivos planteados de emancipacin colectiva.
Mas all de eso, comienza a verse tambin un leve declive
en el plano de la agitacin obrera, smbolo quizs de la reactiva
cin econmica que tmidamente comienza a vislumbrarse.
En un folleto impreso por la F.O.R.U. en 1919 conteniendo
sus estatutos y resoluciones del tercer Congreso de 1911 se men
ciona a la F.O.L. adherida a la F.O.R.U. conteniendo los siguien
tes gremios; Sociedad O. Sastres Unidos, Sociedad O. Panaderos
Unidos, Sociedad O. de los Saladeros, Sociedad Oficios Varios,

144 La Batalla N104 15 de Mayo de 1919.

75
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Sociedad O. Carpinteros Herreros y Anexos, Sociedad O. Carre


ros Unidos y Sociedad O. Picapedreros.145 Es sin duda uno de los
mejores momentos de la F.O.L. saltea.
Entre mayo de 1919 y mayo de 1920 los conflictos obreros
parecen no haber sido tantos como anteriormente ni haber teni
do tanta magnitud, an as podemos contar al menos 4 huelgas
en el periodo, una conferencia pblica y un importante pic-nic
obrero, aunque es muy probable que haya existido ms actividad
que no hayamos encontrado en la prensa o no haya obtenido
eco en ningn peridico.
El Domingo 1 de Junio se realiz un mitin de propagan
da en donde se habl de la organizacin especialmente de los
obreros rurales dada la gran explotacin de la que eran vctimas,
sobre el ideal anarquista, el maximalismo146 y la necesidad in
mediata de hacer la revolucin y prepararse para ello. Al acto se
realiz en un clima de exaltacin por parte de los oradores y el
pblico.147
Para fines de Agosto se registra un nuevo conflicto en el
puerto.148
En Octubre se crea sociedad de Chauffers la cual enva
por intermedio de La Batalla de Montevideo un saludo a todas
las sociedades obreras que luchan tenaz y valientemente con-
tra la burguesa y el Estado, expropiadores y tiranos de la clase
trabajadora.149

145 Federacin Obrera Regional Uruguaya. Acuerdos del 3er Congreso Obrero en el
Uruguay. Montevideo 1919. Tip Morales Hnos. De los 16 gremios adheridos a la
F.O.R.U. en el interior, 7 eran de Salto, el resto en Rocha, Minas, Carmelo, Florida,
Nueva Palmira, Maldonado, San Carlos, Piripolis y La Paz.
146 Maximalistas era la expresin comn de la poca para denominar a los revolucio
narios influenciados por la revolucin rusa fuesen anarquistas o socialistas.
147 La Batalla N108 12 de Junio de 1919.
148 Tribuna Saltea 20 de Agosto de 1919.
149 La Batalla N127 23 de Octubre de 1919.

76
Aproximacin al momento y el lugar

En noviembre se declaran en huelga los trabajadores del


astillero de San Fernando y se solidarizan los de Buenos Aires,
Salto y Carmelo, hay unos diez mil obreros en huelga. El conflic
to se origin porque despidieron algunos obreros federados de
Buenos Aires, Salto y San Fernando y sustituyndolos por otros
no federados. Los huelguistas en Pueblo Nuevo (ciudad de Salto)
son 130, e intentan ser suplantados por rompe huelgas.150
Comenzado el ao de 1920 se realiza una importante
huelga de carteros, aunque esta parece escapar a la influencia
revolucionaria de la Federacin Obrera Local, los mismos piden
aumento de jornales y 8 horas de trabajo. La huelga se extender
a Paysand y otros departamentos.151
A fines de enero los obreros de la Usina Elctrica piden
aumento y obtienen una nueva y contundente victoria.152
En las pginas de La Batalla del mes de Febrero encontra
mos las primeras referencias de lo que luego ser el peridico La
Tierra, de su origen y el carcter obrero del mismo.
Los trabajadores organizados de esta localidad, con el laudable
propsito de adquirir una imprenta propia para sacar un peridico se
manal, vienen realizando actos pblicos con mucho xito. ltimamente
se realiz en el Prado Espaol el primer pic nic familiar obrero que em
pez el 8 de febrero a las 7 am culminandose a las 8 pm del mismo da.
Mas de mil personas concurrieron al festival que se desa
rroll dentro de la mayor cultura. Se obtuvo un beneficio liquido de
ciento quince pesos en nmeros redondos, cosa que revela la activi
dad del Comit pro-imprenta, organizador principal del acto, y la
conciencia revolucionaria, que se empieza a encarnar en el pueblo
productor que permaneca inanimado, estancado, sin aliento, sin vida.

150 Tribuna Saltea 7 y 17 de Diciembre de 1919


151 Tribuna Saltea 31 de Enero y 5 de Febrero de 1920.
152 Tribuna Saltea 31 de Enero de 1920.

77
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Felizmente hoy rompe con la monotona tradicional, para


incorporarse, como un titn que surge a luchar por la causa de la
justicia, que es la emancipacin material y moral de los oprimidos
por el contubernio clero, capital y Estado.
Este viril resurgimiento de los pueblos de campaa nos hace
concebir la cercana esperanza de imponer en la prctica lo que te
ricamente pregonaba el apstol cristiano cuando deca comers el
pan con el sudor de tu frente (...) Franco Hernndez, Salto, Febrero
11 de 1920.153
Llama significativamente la atencin el alto nmero de
concurrentes sealado en el pic nic el cual iguala a la concurren
cia de los pic nics montevideanos de la poca, a sabiendas de
que la poblacin montevideana era mucho mayor.
La actividad anarquista contina preocupando a la prensa
burguesa local como lo demuestra las palabras publicadas por
Diario Nuevo en el mes de Marzo "la comandita crata que por
ah vaga, (...) ha alucinado a alguna pobre gente, entre ellas,
varias lavanderas que con toda ingenuidad creen o suponen en
el cuento del reparto de la cosas".154

b) Paysand

Las primeras noticias que tenemos del movimiento obre


ro sanducero en este perodo es la existencia de un sindicato
de Oficios Varios, (ubicado en 8 de octubre entre Misiones y
Junta), local que cuenta con una biblioteca obrera y desde el
cual se van articulando otros gremios que se van formando en
los meses siguientes.

153 La Batalla N144 20 de Febrero de 1920.


154 La Batalla N146 12 de Marzo de 1920.

78
Aproximacin al momento y el lugar

Segn una crnica de La Tierra de 1921155, los socialistas


venan actuando en Paysand desde haca unos ocho aos (1913
aproximadamente), y los anarquistas lo hacan desde 1920. Lo cual
llama la atencin dada la fuerte presencia en Salto desde 1917.
Los socialistas actuaban en el Centro de Oficios Varios,
desde el cual se van organizando otros sindicatos. As en las
nuevas sociedades obreras los anarquistas comienzan a tener
presencia, impulsada y sostenida por los agitadores venidos
desde Montevideo o Salto.
Uno de los primeros gremios de este periodo que parece
organizarse desde la sociedad de Oficios Varios es la Unin
de Pintores de Paysand, quienes presentaron un pliego por
mejores condiciones de trabajo, suba de salarios, jornada de
8 horas y reconocimiento de la sociedad obrera, entrando en
huelga, formando una comisin permanente en el local de
Oficios Varios.156
El 5 de Noviembre un numeroso grupo de carpinteros se
conform, tambin en el local de Oficios Varios, como Socie
dad de Resistencia.157 A su vez tanto los zapateros y talabarteros
piensan organizarse.158
Paysand fue sin duda el bastin socialista del interior del
pas. En las elecciones nacionales de 1916, por ejemplo de los
366 votos obtenidos en el interior por los socialistas 205 prove
nan de Paysand.159 En las elecciones de 1919, se obtuvieron

155 La Tierra N45 25 de Junio de 1921.


156 Justicia, 7 y 9 de Setiembre de 1919.
157  La comisin administrativa estaba compuesta por Secretario General; Pedro De
negro, Secretario de Actas; Benito L. Scotto, Tesorero Diego Lezcano, Vocales; Jos
Chigliano, Jos Onetto, Antonio Piadolfi y Alfredo Desirello. (Justicia 13 de Noviem
bre de 1919)
158 Justicia 13 de Noviembre de 1919 y La Repblica (Paysand) 7 de Noviembre de 1919.
159 Barrn, J.P. y Nahm, B. Batlle, los estancieros y el imperio britnico Tomo 8.
Banda Oriental, Montevideo, 1987, pg 129

79
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

en Paysand 211 votos, siendo tambin la mayor cantidad de


votos del interior.160
Para fines de 1919 y en medio de la campaa electoral
se cont con la presencia de Eugenio Gmez161 en Paysand
quien junto al obrero grfico Adolfo Piriz realiz una confe
rencia en el local de Oficios Varios el 11 de Noviembre, donde
exhort a los trabajadores de Paysand a la organizacin que
era urgente y precisa si es que buscaban su emancipacin del
yugo capitalista.162
Al da siguiente, en el mismo local repleto dio otra con
ferencia donde disert por espacio de una hora y media, so-
bre salarios, jornadas de trabajo, caresta de la vida y solida-
ridad obrera.163
El da 13 realiz una nueva conferencia, esta vez al aire
libre, donde habl del programa electoral socialista, segn la
crnica del diario sanducero La Repblica fue ella todo un
xito, puesto que en su larga y brillante disertacin que dur
ms de una hora, el pblico le aplaudi a cada instante asu-
miendo a veces carcter de ovaciones delirantes.164

160 Le sigui, en cantidad de votos; Ro Negro con 94, Soriano con 84, Flores
con 72, San Jos con 45 y Minas con 27, en el resto de los departamentos,
a excepcin de Montevideo que obtuvo 3861 (3936 segn Gmez:1990) no
obtuvieron votos.
161 Eugenio Gmez (1892-1973) ingres al Partido Socialista en 1913, en 1917
queda al frente de la recin constituida Federacin Obrera Martima, el pri
mer gremio de importancia controlado por los socialistas, quienes practican y
defienden desde la prensa -por primera vez en un gremio socialista- la accin
directa. Cuando en 1921 el Partido Socialista se convierta en Partido Comu
nista Eugenio Gmez ser de los principales protagonistas del novel Partido
Comunista Uruguayo.
162 La Repblica (Paysand) 12 de Noviembre de 1919.
163 La Repblica (Paysand) 13 de Noviembre de1919.
164 Repblica (Paysand) 14 de Noviembre de 1919.

80
Aproximacin al momento y el lugar

Una semana despus Emilio Frugoni165 y Francisco Pintos166


darn otras conferencias obreras en el Centro Socialista y el teatro
Progreso, en ste ltimo habl por espacio de dos horas, atacando
duramente a todas las fracciones de los partidos tradicionales, termi
nada la misma lo acompao una manifestacin hasta el Hotel Concor
dia, desde donde dirigi la palabra nuevamente desde los balcones.167
Son varios los gremios que estn organizados al finalizar
el ao 1919; los zapateros y carpinteros sostienen algunos con
flictos, pero tambin estn organizados los Mozos, Confiteros y
Anexos, Chauffers, Albailes, Pintores, Herreros y Anexos, el men
cionado Oficios Varios, se constituyen tambin los Peluqueros y
se reorganizan los Panaderos.168
En febrero contamos con huelgas de los tipgrafos de la libre
ra Mariono, Comas y del diario La Repblica.169
El hecho de que en algunos meses ms adelante dicho
centro pida el envo de publicaciones y folletos al peridico anar
quista La Batalla de Montevideo, nos hace pensar de la conviven
cia de anarquistas y socialistas en dicho centro.170

165 Emilio Frugoni (1880-1969) procedente de familia anarquista se hace socialista en


1904 y funda el Partido Socialista del Uruguay en 1910, del cual fue diputado en
varias ocasiones (1911-1914, 1920-1921 las dos primeras de ellas). Convertido el
Partido Socialista en Partido Comunista en 1921 Frugoni renuncia a su banca y re
funda el Partido Socialista uruguayo.
166 Francisco Pintos naci en 1889, ingres al Partido Socialista en 1914, adhiri a
las 21 condiciones de Mosc integrando el Partido Comunista del Uruguay. Como
seala Lpez DAlesandro En 1922 Francisco R. Pintos fue el primer uruguayo que
particip en un congreso de la COMINTERN y el nico oriental que conoci a Lenin
personalmente. (Lpez DAlesandro, Fernando. Los orgenes de la cultura estali
nista en el comunismo uruguayo en Yaff, Jaime. Dossier Cinco estudios recien
tes sobre el comunismo uruguayo, historiapolitica.com, [en lnea], URL: http://
historiapolitica.com/dossiers/comunismouruguayo/.)
167 La Repblica (Paysand) 20 y 21 de Noviembre de 1919.
168 La Repblica (Paysand) 23 y 31 de Diciembre de 1919.
169 Justicia 19 de Marzo de 1920 y Tribuna Saltea 13 de Febrero de 1920.
170 La Batalla N173, 17 de Setiembre de 1920

81
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

En Febrero de 1920 un maximalista de pas por Paysand


y nos cuenta sobre la conferencia de un socialista llamado Russo
quien fustig a los anarquistas.171

c) Rocha

No tenemos muchas referencias sobre la organizacin


obrera en Rocha, pero en referencia al periodo que aborda
mos sabemos que hacia fines de 1919 los Picapedreros de Ro
cha se encontraban afiliados a la Federacin Obrera Regional
Uruguaya.172
As como en Salto encontramos una Federacin Obrera Lo
cal y en Paysand el movimiento se articula, en un comienzo, en
torno al centro de Oficios Varios. En Rocha nos encontramos con
la Federacin Obrera Rochense.
El origen de la Federacin Obrera Rochense parece haber
sido la fundacin el 28 de Junio de 1919 de la Sociedad Obrera
de Oficios Varios. A diferencia de los orgenes de este periodo de
organizacin gremial en el litoral, en la zona este del pas, el in
flujo de las ideas sociales, parece ser mucho menor, quizs desde
Brasil pudieran llegar algunos militantes fogueados en las luchas
econmicas de aquellas tierras, pero al parecer, Rocha recibi
poca influencia -al menos en un primer momento- de las tenden
cias revolucionarias.
Si bien se afirma que la organizacin de la Sociedad de
Oficios Varios se realiz convencidos de lo que vale la solidaridad
de los elementos productores, frente a las imposiciones
patronales tambin aclaraban que No es la guerra, el lema que
se inscriba en las divisas proletarias, no era odio al capital, lo que
mova a los obreros a agruparse, sino que era buscando el afecto,

171 La Batalla N144, 20 de Febrero de 1920


172 Solidaridad N1, 21 de Noviembre de 1919

82
Aproximacin al momento y el lugar

la hermandad de los eternos esclavos del capital; era un derecho


legtimo que buscaban en la unin de todos los gremios dispersos, y
esa, unin se ha conseguido no para la guerra, pero si por la comn
defensa de los que producen cuantiosas riquezas y no disfrutan de
ellas nada.173
Quizs no todos los afiliados estuviesen de acuerdo con esas
manifestaciones ya que debieron aclararlas al nmero siguiente, se
alando que los proletarios nunca estn a favor de la guerra, pero
dado que los poderosos nos declaran la guerra y ya no seremos
nosotros los que humildemente pidamos paz (...) guay! De sus sol-
dados y de su oro cuando ese pueblo tienda sus lineas y se cruce de
brazos. Entonces sern ellos, los que cobardes capitulen.174
La F.O.R. parece ser en sus comienzos una organizacin de
tipo reformista y burocrtica, ms parecida a las viejas sociedades
de socorros mutuos que a las sociedades de resistencia que pre
dominaban en Montevideo y el litoral.
Contamos con informacin de esta Federacin desde la
edicin del primer nmero del rgano de prensa de la misma lla
mado Trabajo, que se edit entre el 1 de Mayo de 1920 y el 16
de Junio de 1921.
Son varias las pistas que nos hacen ver a la F.O.R. como
reformista y burocrtica. La gran cantidad de cargos que contiene
(veinte entre secretarios, secretarios de actas, tesorero, vocales,
comisin de prensa, comisin fiscal, y otros tantos para el peri
dico.) A su vez se inserta propaganda comercial en el peridico
obrero. Se convoca a participar del 1 de Mayo como un da de
fiesta, aunque se realiza un paro para ello. Resultaron todo un
xito los festejos realizados con motivo de la conmemoracin de
la fiesta de los trabajadores175 sealarn categricamente.

173 Trabajo (Rocha) N1 1 de Mayo de 1920.


174 Trabajo (Rocha) N2 15 de Mayo de 1920.
175 Trabajo (Rocha) N2 15 de Mayo de 1920.

83
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Otro indicio es la indudable participacin de militantes de


partidos polticos, y de integrantes, o de allegados a los miembros
de la Junta Departamental, ya que la banda municipal toc en el
acto obrero y sus gastos fueron sufragados por el Municipio. Tam
bin su contemplacin hacia los poderes pblicos puede verse en
una carta enviada al jefe de polica exhortando se tome medidas
contra el juego que envileca a los obreros, a la vez que se reciben
denuncias de incumplimiento de la ley de ocho horas, para que el
director de la F.O.R. lo comunique al Inspector de Trabajo.
Pero principalmente, llama la atencin la actitud tomada
ante el Primero de Mayo, mientras en los gremios del litoral se
convoca como un da de protesta y de paro, buscando la solidari
dad de clase de los obreros, en Rocha, el Centro Socialista, apela a
la solidaridad de los patrones, pidiendo que no abran sus puertas
para que los obreros vayan al acto obrero, peticin que los pa
trones no aceptaron, llamando el Centro Socialista de carneros
no a los obreros que fueran a trabajar, sino a los patrones que no
accedieron al pedido.
La F.O.R. entonces parece estar compuesta mayoritaria
mente por obreros socialistas, y algunos otros de los partidos tra
dicionales (blanco y colorado), aunque tambin los debiera haber
anti-polticos e independientes.

2.10. 1 de mayo 1920.


a) Salto

El primero de mayo, siempre es sintomtico del carcter del


movimiento. En esta ocasin la ciudad saltea fue visitada no solo
por un delegado de Montevideo, sino tambin otro de Buenos Aires.
La Batalla de Montevideo nos brinda un relato privilegiado
contado por sus protagonistas;

84
Aproximacin al momento y el lugar

Con motivo de la conmemoracin del 1 de Mayo nos visita


ron dos delegados de Montevideo y Buenos aires, respectivamente,
circunstancia que aprovechamos para realizar, tanto intensa como ex
tensamente una activa propaganda revolucionaria, la que viene dando
eficaces resultados.Nuestros visitantes, compaeros Juan Llorca176 y
Joaqun Corts177 (el primero en representacin del Comit de Relacio
nes de Agrupaciones Anarquistas), dieron una serie de valiosas con
ferencias, que nos han permitido avanzar algunos pasos en el camino
emprendido, cuya meta es la emancipacin del pueblo.
La bandera roja flameaba como un smbolo de abnegacin
y de herosmo mientras se vivaba la fraternidad mundial, sin fronte
ras, sin idiomas, sin razas, sin privilegios, sin ttulos, sin autoridad,
sin latrocinios, sin crmenes y sin farsas.
Muchos trabajadores se han adherido a sus respectivos gre
mios con motivo de la buena propaganda realizada.
Tambin se constituyeron dos agrupaciones anarquistas.
Claridad y Tierra Libre, que cuentan con muchos adherentes. El
cuadro filodramtico del centro Ciencia y Vida llev a cabo una
velada en el teatro Larraaga que estaba de bote a bote, represen
tndose Fin de fiesta, el muerto resucitado y 1 de Mayo, que fueron

176 Juan Llorca de origen espaol integro la Federacin Obrera Argentina y presidi
su IV Congreso en 1904. Fue expulsado de la Argentina en 1905 e integr las ac
tividades locales desde un comienzo participando activamente en la Federacin
Obrera Regional Uruguaya en el gremio de la pesca. Orador, escritor y referente
de su gremio fue unos de los forjadores de la etapa ms activa del gremialismo
anarquista. Tras la Revolucin Rusa simpatiz con las posturas en favor de la
dictadura proletaria acercndose cada vez ms al Partido Comunista, pero al
parecer, sin llegar a ingresar en el. Fue expulsado por la dictadura de Terra en
1933 y muri combatiendo en la Guerra Civil Espaola en 1936.
177 De origen espaol perteneca por estas fechas a la FORA del V Congreso. Aos
ms tarde en 1927 estuvo junto a Durruti y Ascaso en su estancia sudamericana.
Vuelto a Espaa estuvo muy activo en los aos treinta dentro de la C.N.T. espaola
junto a Durruti. Muri en Mxico en 1979.

85
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

muy bien interpretados y dejaron excelente impresin en el pblico


a juzgar por los aplausos conquistados.
Dicho acto dio un resultado econmico liquido de ciento
cuarenta pesos, que pasaron a engrosar los fondos del centro Cien
cia y Vida Organizamos un pic nic en una quinta que nos haban
cedido, pero a ltima hora el propietario, burgus y ladrn, nos co
munic que no ceda la quinta por que se haba arrepentido, y nos
frustr el programa. Dicha quinta Los eucaliptos, de Arriague, es
un lugar donde todas las sociedades recreativas, partidos polticos,
etc. realizan paseos a menudo, sin obstculo por parte de los due
os; pero a los obreros, sin causa justificada, nos lo impidieron.
Con tal que no vuelvan a arrepentirse todo ir bien! Pero...
quien sabe?...
Despus solicitamos el Ateneo Popular para una conferen
cia sobre los problemas sociales de nuestro tiempo y, no obstante
ser popular y haber sido concedido a cuanto diablo lo ha solicitado,
le fue negado a los trabajadores que lo construyeron.
A pesar de todo, adelante, amigos!, y con Joaqun Corts, que
permaneci una quincena entre nosotros hemos seguido levantando
tribunas en los locales obreros y en las plazas con mucho xito.
En las agrupaciones constituidas ltimamente se acord so
licitar ejemplares de La Batalla.
Tambin constituiremos en estos das un centro cultural femenino.
Para terminar exhortamos a las compaeras y compaeros
de dolor y de esperanza que por debilidad o cobarda an permanez
can alejados de los centros obreros, se apresuren a engrosar las filas
de la clase productora que lucha por la felicidad humana.
Hasta la prxima
Salto, Mayo 1920, Franco Hernndez178

178 La Batalla N157, 28 de Mayo de 1920.

86
Aproximacin al momento y el lugar

Una edicin anterior de La Batalla seala como en el acto


tanto Corts como Llorca historiaron el significado de la gran
fecha y que por la noche en el local de los Constructores Nava
les ambos hablaron sobre las luchas obreras y la accin directa.
Sobre la manifestacin seala que asistieron no menos de 4000
personas.179
Si bien Franco Hernndez no menciona el nmero de con
currentes, Tribuna Saltea seal que adquiri la misma mag-
nitud del realizado en el mismo da el ao pasado (alrededor de
dos mil) y enumer las sociedades que desfilaron en manifesta
cin; Constructores Navales, Lavanderas Unidas, Picapedre
ros de cantera Albailes y Anexos, Electricistas, mecnicos y
anexos Federacin Local Saltea Centro de Estudio Sociales
Ciencia y Vida, Chauffeurs Unidos y obreros en mimbre, lle
vando cada una de estas sociedades sus respectivas banderas.
La manifestacin fue encabezada por una banda de msica a la
cabeza, sonando La Marsellesa y La Internacional.180
Pero no fue el nico acto que se realiz el 1 de Mayo. El
sindicalista argentino Luis Lotito, delegado de la F.O.R.A. del IX
Congreso, realiz una conferencia a la tarde en el local de Cons
tructores Navales, esta conferencia ser un primer antecedente
de una prctica que se desarrollar ampliamente meses despus
y que refiere a la lucha de tendencias ideolgicas. Luego de brin
dada la conferencia algunos participantes, entre ellos Franco Her
nndez, le increparon varios asuntos relacionados a la actitud de
los delegados de la F.O.R.A. del IX Congreso Marotta y compa-
a por sus negociaciones con polticos y policas. Llam la aten
cin Franco Hernndez del por qu la represin en la Argentina
caa sobre los militantes de la F.O.R.A. del V Congreso y ninguno
del IX Congreso se encontraba encarcelado, ni se clausuraban sus

179 La Batalla N155 14 de Mayo de 1920.


180 Tribuna Saltea 2 de Mayo de 1920.

87
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

locales. Que el mismo Consejo Federal ocupaba sus cargos desde


su fundacin en 1915 y cuestionaron la enorme centralizacin de
la misma, en donde todo debe ser decidido por el Consejo Fede
ral y no por los gremios, entre otras cuestiones. Lotito, que tom
la palabra nuevamente parece no haber contestado directamen
te a ninguna de las apreciaciones realizadas segn sus detracto
res. Se le ofreci el local de Ciencia y Vida para una controver
sia pblica que no acept y realiz una segunda conferencia en
la taberna del Turco ubicada en 19 de abril y Joaqun Surez,
en la que haba poca concurrencia, sealando el mismo Franco
Hernndez que acudieron un centenar de compaeros desde el
Centro Ciencia y Vida y que al preguntarle si dara tribuna libre y
contestar que no, se retiraron en bloque a los gritos de farsante
embaucador agente de la burguesa vendido temes a la
verdad los obreros conscientes a la calle! Al centro ciencia y
vida! Viva la anarqua! abajo los camaleones!181
Lamentamos no poder contrarrestar esta versin sin duda
muy subjetiva, con la de los sindicalistas, pero al menos nos acer
ca al clima de confrontacin ideolgica el cual ir aumentando in
tensamente y modificar todo el mapa ideolgico del movimien
to obrero y revolucionario local al igual que se produjo en gran
parte del planeta.
Llorca que al da siguiente del 1 se traslad a Paysand,
sigui recorriendo otras localidades y retorna a fines de Mayo, ya
que el 30 realiza una conferencia organizada por el Centro Cien
cia y Vida, la cual fue un xito segn La Batalla por el numero
de concurrentes y por la forma entusiasta que estos acogieron la
exposicin que del ideal hiciera el orador compaero Juan Llorca.

181 La Batalla N164 16 de Julio de 1920.

88
Aproximacin al momento y el lugar

b) Paysand

Ms all de las pugnas ideolgicas los obreros sanduceros


conmemoraron la fecha, sea como fiesta del trabajo para los
socialistas o como un da de protesta para los anarquistas. Ambos
contaron con la presencia de importantes oradores de Montevi
deo. Celestino Mibelli182 del Partido Socialista y Csar Forni de la
Federacin Obrera Regional Uruguaya haban venido de Montevi
deo para la ocasin. Durante el da se realiz un pic nic (o fiesta
campestre) en la que participaron ambos delegados
A las 21 horas se realiz un mitn organizado por las socie
dades obreras y el Centro Socialista, donde Pacheco present a
Forni y Mibelli, sealando el diario Justicia que; los socialistas
y obreros de Paysand conmemoraron digna y brillantemente la
Fiesta del Trabajo183
Al da siguiente Juan Llorca, tambin delegado de la
F.O.R.U. lleg desde Salto, a las 16 horas se realiz un mitin en
el puerto donde habl junto a Forni frente a una gran presen
cia de pblico, stos expusieron la inutilidad de las reformas
cuyo verdadero alcance explicaron claramente e invitaron a que
se les refutara pero... ni en broma! segn las expresiones de
La Batalla, el mismo da se realiz una conferencia de propaganda
anarquista y fueron escuchados y aplaudidos con entusiasmo.184
Al tercer da en el Centro de Oficios Varios, realiz una nue
va conferencia organizada por la sociedad de mozos y los grficos.
Hablaron de que la organizacin debe ser obra directa de los tra
bajadores sin intervencin de polticos ni religiosos, el publico
qued sumamente satisfecho, diciendo y repitiendo la mayora de
182 Celestino Mibelli (1882-1969) perteneciente al Partido Socialista fue el primer di
putado comunista consumada la divisin del socialismo uruguayo y principal refe
rente junto a Eugenio Gmez de dicho partido.
183 Justicia, 4 de Mayo de 1920.
184 La Batalla N155 14 de Mayo de 1920

89
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

sus componentes, que nunca haban odo conferencias de aquella


naturaleza A partir de ese da qued constituido el Centro de Estu
dios Sociales El Internacional, el cual ser el centro anarquista de
referencia de todo el perodo. La correspondencia del mismo era
dirigida a Adolfo Carbonne en Sarandi esquina Independencia.185

c) Rocha

En la capital rochense desde muy temprano se agruparon


gran cantidad de obreros que concurrieron de las distintas par
tes de la ciudad al local social ubicado en la calle Piedras 151. Se
iz la bandera Federal por primera vez y a las 9 de la maana
sonaba la Marsellesa ejecutada por la banda Municipal.
A las diez de la maana con banderas desplegadas acom
paados por la banda municipal se dirigieron al Parque Macha
do donde se realiz un Pic Nic. All se realizaron varios ejercicios
fsicos, y se escucharon varios discursos por parte de Juan C Ba
gattini (secretario general de la F.O.R. y director de Trabajo), Pe
dro DAlessandro quien en forma galana exhort a la unin de
todos los obreros para hacer frente con ventaja a las imposicio-
nes patronales y Flix Centani (Secretario de Actas de la F.O.R.)
quien ley un viejo artculo del otrora anarquista Pascual Gua
glianone, donde se narraban los sucesos de Chicago de 1886.
A las 15.30 se sali en manifestacin hacia la plaza de
deportes de la ciudad unos ms de 300 personas en medio
del mayor entusiasmo y entonando cantos alusivos, en la plaza
esperaba el centro de Estudiantes Jos Enrique Rodo que se
haban adherido al acto.
All hablaron Bagattini, Larrosa (estudiantes), Gonzalez,
Marchand y Joanic. Luego se retorn al local donde cerr el
acto Bagattini desde el balcn.

185 La Batalla N155 14 de Mayo de 1920

90
Aproximacin al momento y el lugar

El peridico Trabajo que edit 700 ejemplares en su primer


nmero, se reparti totalmente en pocas horas, lo que muestra
la gran cantidad de obreros que andaban por las calles ese da.
El peridico se distribuye tambin en la localidad de Lascano y
Castillos.186

2.11. La conflictividad como presencia permanente.

a) Salto.

A comienzos de junio se produce una huelga de carpin


teros del establecimiento El Progreso por mejoras de sueldo y
condiciones de trabajo que desemboca el despido de siete car
pinteros por elevar el pliego de condiciones.187 Al da siguiente 14
barrenderos se declaran en huelga.188
Pero lo que ms preocupa a la burguesa local es la para
lizacin del puerto en los astilleros desde la creacin de la Fede
racin Obrera en Constructores Navales en diciembre, como el
boicott a los barcos de dicha compaa ejercida por los obreros
martimos.
Las notas de Tribuna Saltea son claras al respecto;
Los conflictos obreros
Pasado maana har ocho meses que se declar la huelga en
los talleres que la poderosa empresa Milhanovich posee en Pueblo
Nuevo y va para cinco meses que se mantiene paralizada la navega
cin fluvial de los barcos pertenecientes a la misma compaa.
Es indudable que la larga duracin de ambos conflictos

186 Trabajo (Rocha) N2, 15 de Mayo de 1920


187 Los despedidos fueron Pedro Fioritti, Juan Rippa, Pablo Gomez, Nicols V. Mayoli
no, E. Alvarado, Eduardo Massini, Teodoro Gregori. (Tribuna Saltea 4 Y 5 de Junio
de 1920).
188 Tribuna Saltea 5 de Junio de 1920.

91
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

ocasiona sensibles perjuicios al comercio y a las industrias de


todo el litoral, cuyo movimiento de intercambio queda reducido
exclusivamente a los ferrocarriles, con los consiguientes trastornos y
mayores gastos en la traslacin de los productos en general189

Atentado a la panadera La Modelo.

Los panaderos vuelven a tomar protagonismo y tras una


huelga producida en julio en la panadera La Modelo de Carlos
Ambrosini, es por la resonancia de la bomba colocada en la venta
na de dicho establecimiento en la madrugada del 16 de Julio, que
la prensa informa muy preocupada acerca del atentado, sin haber
antes mencionado una palabra del inicio del conflicto.
A las 2:30 am de dicho da, explot una bomba en una de
las ventanas de la casa contigua a la Panadera La Modelo, con
de viva Carlos Ambrosini y su familia, en la pieza destinada a la
sala. Sufrieron desperfectos la reja, la pared, el piso, los espejos
de la sala y una ventana y un cerco de la casa de enfrente. La
bomba contena pedazos de hierro agujas puntadas, siendo muy
intenso su poder explosivo. La explosin caus alarma en las au
toridades y vinieron dos detectives desde Montevideo para apo
yar la labor policial.
El conflicto se origin porque despidieron al secretario de
la sociedad de panaderos Zenn Romero. Los obreros pidieron su
reposicin, y que todo el personal que se tome en adelante per
tenezca a la sociedad. Como la comida era mala y escasa solicitan
se cambie por 0,70 pesos ms y un pan.
Segn los huelguistas Carlos Ambrosini rompi el pliego en
la cara de los obreros y stos fueron a la huelga.190

189 Tribuna Saltea 17 de Julio de 1920.


190 Tribuna Saltea 16 de Julio de 1920. Diario Nuevo 16 de Julio e 1920. La Tarde 16
de Julio de 1920 y La Tierra N1 21 de Agosto de 1920.

92
Aproximacin al momento y el lugar

Tras el atentado fueron detenidos, siendo liberados poste


riormente los obreros Lorenzo Bentez, Anselmo Orcasitas y Zenn
Romero. La plvora e ignita utilizada en el atentado fue sustrada
del polvorn El Palomar taladrando la puerta alrededor de la ce
rradura y sustrayendo 12 kilos de plvora y 500 gramos de ignita.191

La Tierra.

La aparicin de el peridico La Tierra marca un antes y un


despus en el periodismo obrero del Salto e incluso de todo el
interior del pas, siendo sin duda la publicacin obrera ms im
portante del interior hasta el momento, y por muchos aos. Segu
ramente existan otras que hayan durado ms en el tiempo, pero
tampoco es algo que podamos afirmar por no tener conocimien
to de ello.

La Tierra N1, 21 de Agosto de 1920

La primer salvedad que hay que hacer de La Tierra como


peridico obrero es su claro perfil ideolgico, ya que se anuncia
desde su primer nmero como un peridico anarquista. Pero as
como vimos que desde febrero los gremios se venan organizando
con la finalidad de editar un semanario propio, con imprenta
propia, tambin sabemos que cuando se discuti que perfil
deba tener ese semanario, los delegados de todos los gremios
191 Tribuna Saltea 18 de Julio de 1920.

93
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

estuvieron de acuerdo de que fuese un peridico anarquista,


curiosamente, el nico en desacuerdo, fue el delegado, no
de un gremio, sino del centro anarquista Ciencia y Vida, que
consideraba que el mismo no debera tener rtulo ideolgico.192
A su vez su redaccin ser encomendada a un comit edi
tor (Comit pro-imprenta).
La Tierra, en su primer edicin se presenta entonces como
un semanario anarquista. Ofrece un logo bien logrado, con un
dibujo de una mujer, de brazos abiertos, y de fondo un crculo que
representara el planeta seguramente, con la inscripcin para
bien de todos la queremos libre.
Su administrador ser Adolfo Tettamanti y su redaccin y
administracin ser en la calle Joaqun Surez al 407. Su precio,
que se mantendr invariable en todos sus aos de existencia ser
de 20 centsimos la suscripcin mensual y 5 centsimos el nu
mero suelto.
Cuando comienza a editarse un peridico obrero gremial
como bien seala Mirta Zaida Lobato193, en su primer hoja se pu
blica una declaracin de principios o una manifestacin de los
ideales, en este caso La Tierra har los suyo;
Venimos a luchar por la abolicin de la explotacin del
hombre por el hombre, para que todos se conviertan en trabaja
dores libres que produzcan segn sus actitudes y consuman segn
sus necesidades. (...)
No buscamos reformas que constituyen una engaa pi
changa; queremos la total transformacin del rgimen capitalista,
cosa que desearamos realizar pacficamente sin que corriera una
sola gota de sangre, pero como resulta imposible hacerlo debido
a la tradicional terquedad de los conservadores de ese mal, que no

192 La Tierra N100 15 de Julio de 1922


193 Zaida Lobato, Mirta La prensa obrera, Bs. As. Edhasa, 2009.

94
Aproximacin al momento y el lugar

razonan por que no les conviene, propagamos la revolucin armada de


pobres contra ricos egostas para implantar por ese nico medio eficaz
nuestro programa de felicidad social (...)
propagamos la existencia de valores nuevos de acuerdo con
los tiempos y los hombres nuevos tambin que conservan joven el
espritu. (...)
somos -con la ciencia- anti-religiosos porque todas las religio
nes son falsas.
La poltica es el arte de engaar a los pueblos y nosotros no
queremos engaar a nadie, siendo a la postre anti polticos en el senti
do corriente de la palabra.
Adems, ningn progreso econmico social, se ha producido
dentro de la accin poltica, segn la historia, sino al margen de ella,
cosa que nos induce a declararnos enemigos de esa meretriz que se
acuesta con el que mejor paga.
Queremos la destruccin del Estado parlamentario para susti
tuirlo por la Federacin descentralizada de trabajadores libres que admi
nistren y distribuyan justiciera y equitativamente la produccin mundial.
Con Proudhon entendemos que la propiedad es un robo y la
expropiacin una necesidad. (...)
Ni polticos, ni religiosos, ni acaparadores de la tierra venimos
a entablar batalla contra todas esas instituciones malditas y a romper
lanzas contra todas las injusticias que se comenten con los hombres,
las mujeres o los nios.
Ayer eramos pocos, hoy somos muchos y maana seremos
muchsimos que no habr fuerza que detenga nuestra barca revolucio
naria que ha de seguir contra viento y marea propagando la felicidad
de los pueblos con la implantacin del comunismo anarquista.194

194 La Tierra N1, 21 de Agosto de 1920.

95
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

En su segundo nmero publican el programa revolucionario a


implantar,195 el cual consiste bsicamente en la destruccin de la pro
piedad de la tierra y los inmuebles y su colectivizacin en manos de
los trabajadores. La administracin econmica de la sociedad por los
trabajadores. La abolicin del dinero, obligatoriedad del trabajo (ma
nual o intelectual) de toda persona que quiera disfrutar de las venta
jas de la sociedad. Abolicin de todo tipo de autoridad. Enseanza de
los nios a cargo de los gremios de maestros con libertad de ctedra.
Y sentenciaban; toda organizacin social y de la produccin es libre
mientras no se explote a otro ser humano. A su vez declaraban la
libertad de amor y unin.196 Abolicin del ejrcito, pero sostenimien
to de fuerzas armadas revolucionarias, en carcter provisorio para
impedir que los reaccionarios obstaculicen el nuevo rgimen.197
La primer edicin de La Tierra fue de 1.200 ejemplares y se
agot en menos de una semana.
El comienzo de la edicin de La Tierra tambin nos mar
ca una nueva etapa para comprender la realidad del movimiento
obrero salteo y sanducero, ya que a partir de la fecha del 21 de
Agosto de 1920 -fecha de la primer edicin- contamos con noticias
semanales del movimiento.
Veamos cuales eran los gremios y grupos existentes en Salto
a la fecha de la salida del primer ejemplar;
El grupo Ciencia y Vida quizs el ms importante de los
colectivos anarquistas fundado en 1918 como vimos.
En Marcha con local en 19 de Abril y Repblica, del cual
menciona que actan una veintena de jvenes sin reglamento ni
otras declaraciones legalistas.
El grupo Tierra Libre y el colectivo La Batalla.
195 Se publica ntegramente en el anexo de este libro.
196 La libertad de amor y unin de stos anarquistas no estaba exenta del prejuicio
moral y sexista de la poca, ya que dicha libertad era proclamada para seres de
diferente sexo.
197 La Tierra N2, 29 de Agosto de 1920.

96
Aproximacin al momento y el lugar

Los gremios de que se informa noticias en este primer n


mero son; Pintores Unidos, Lavanderas Unidas, Sastres Unidos, Pi
capedreros y Anexos (del cual dice que no es muy numeroso pero
hay muchos anarquistas en el), Sociedad de Carpinteros, Federa
cin de Mecnicos y Electricistas, Albailes y Anexos, Peones de Ba
rracas y Estibadores, Sociedad de Panaderos, Obreros Municipales,
Chauffers Unidos y la Federacin de Constructores Navales. sta
ltima contina con su huelga, al igual que lo estn los panaderos.
La situacin de la Federacin Obrera Local al momento de
salir a la calle La Tierra, parece ser de un leve estancamiento, el
comit editor de La Tierra propone en su N2 que la Federacin
enve a los gremios una circular proponiendo la renuncia del Con
sejo Federal, el nombramiento de uno nuevo y la necesidad de ver
como hacer ms efectivo el boycott a la panadera Ambrossi y la
casa Rossi, la F.O.L. lo aprueba y a la semana siguiente es enviado a
todos los gremios.
Para estas fechas se constituye una sociedad de obreros
metalrgicos en el local de La Tierra, y afirmando sta la orienta
cin revolucionaria de la misma, tambin y en el mismo local se
constituye la Sociedad de Oficios Varios. Y se hace un intento de
organizar a los obreros peluqueros sin xito ya que parecen stos
estar embanderados dentro de las filas de los partidos Blanco y
Colorado.198
En Setiembre la seccin saltea de la Federacin Obrera
Martima orientada en Montevideo por el socialista y futuro co
munista Eugenio Gmez, entrega un pliego de reivindicaciones con
demandas econmicas (ocho horas de trabajo y aumento de suel
dos) siendo Andrs Costa su secretario.199
Para el mes de octubre encontramos un muy interesante re
lato de como se intenta expandir las ideas revolucionarias de la

198 La Tierra N4 (11-09-1920) y N5 (26-09-1920).


199 La Tierra N8 9 de Octubre de 1920.

97
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

ciudad hacia la campaa y los pequeos resultados que comien


zan a manifestarse;
La actividad desplegada por nuestros compaeros en estos
ltimos tiempos est surtiendo sus efectos saludables. Los indios
se sienten revivir al calor de nuestras ideas emancipadoras. Cuan
do llega del pueblo un compaero, los pobres paisanos los reciben
con aquella fraternal simpata que tan propia es de nuestra gente
de campo, generosa y hospitalaria. Todos piden folletos, peridicos
obreros y LA TIERRA. El fogn que ayer fuera el lugar obligado para
hacer gemir las bordonas en algn triste o vidalita hoy es recinto
de educacin y despertar donde la revolucin hace su obra entre
el paisanaje.
Recientemente en la estancia del burgus Santa Ana dos peo
nes ya cansados y asqueados de la explotacin y mala alimentacin
se resolvieron a protestar. Como Santa Ana que es un burgus tradi
cionalmente srdido y avariento hiciera odos de mercader a la ms
que justas peticiones de los peones, stos se declararon en huelga y
resolvieron carnearle gordo y abundante.
Los albailes que trabajaban en una obra que se esta hacien
do en la misma estancia hicieron causa comn con los peones y ade
ms se resolvieron a no trabajar ms y se volvieron al pueblo.
En la estancia del terrateniente Salaberry se produjo otro
caso. Un compaero estaba explicando a la peonada las causas de
la explotacin capitalista y la manera de resolver sus males, pero en
esto se cruz un capataz que es un sujeto servil e ignorante preten
diendo impedir la obra de nuestro compaero.
Entonces los peones haciendo un hermoso gesto procedie
ron a la criolla con el hombre. Muy bien compaeros, nada hay mejor
que la accin directa prctica y enrgica. Meta palos con los carneros.

98
Aproximacin al momento y el lugar

El burgus White que sin duda ha de ser batllista -hace el


cuento a los pobres peones de una simulada bondad, pero pretenda
que le trabajen en la esquila por $1.20 secos, es decir que, los paisa
nos tienen que comprarse la comida. Los peones que se dieron cuen
ta de las cucaas de White le presentaron un pliego de condiciones
donde peda $5.00 y una comida. Naturalmente el hombre de marras
se neg y los trabajadores le plantaron el trabajo. As que en la estan
cia de White no se ha empezado a esquilar por falta de brazos.
Por informaciones que nos llegan tenemos conocimientos de
otros pequeos movimientos de protesta y rebelda que nos da la
idea del gradual resurgimientos que como augurio promisor se nota
en la campaa saltea.
LA TIERRA invita a que los compaeros continen llevando
folletos y material de propaganda cada vez que salgan al campo y
al mismo tiempo pone sus columnas para todas las informaciones
que quieran publicar los camaradas del campo. Firmes, compaeros
y adelante en la obra hasta doblar a los burgueses200
Por su parte la Sociedad de Obreros Sastres inicia un boicott
a las sastreras XX de Setiembre de Milano Sofo y La Siriana de
Azuri Hnos201, casas que se niegan a reconocer la organizacin de
los trabajadores, ste boicott ser mantenido por la sociedad, al
menos hasta que salga el ltimo ejemplar de la primer poca de
La Tierra en 1925.
La Federacin de Constructores Navales continan en
huelga afirmando despus de once meses de frrea lucha aun
nos consideramos ms fuertes que el primer da, porque ni el tal
gobierno o Estado burgus o podr quebrantar nuestra solidari-
dad de clase. Es intil que los representantes de la empresa de la

200 La Tierra N11, 30 de Octubre de 1920.


201 La Tierra N11, 30 de Octubre de 1920.

99
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Milhanovich se disfracen con tres o cuatro caretas, tendrn que


caer rendidos ante la fuerza de nuestra organizacin. Aparente
mente comienza a solucionarse el conflicto en Buenos Aires pero
no as en Salto y Carmelo.202
Aunque lo mas destacado del periodo quizs sea la reac
tivacin e impulso tomado por la Federacin Obrera Local, la
cual en la reunin de delegados tras el pedido de renovacin del
Consejo Federal impulsado por La Tierra se form un Consejo
provisorio compuesto por 9 delegados para hacer gira de pro
paganda y realizar el Primer Congreso Obrero del Litoral. La idea
es realizar conferencias para los gremios de Concordia, Paysan
d, Monte Caseros, Basavilvaso, y otras localidades cercanas. Se
piensa solicitar a los delegados de la F.O.R.U. y F.O.R.A. su par
ticipacin en el Congreso, el objetivo del mismo es claro, unir y
coordinar esfuerzos para la inminente realizacin de la revolu
cin; es tiempo, camaradas de ambas mrgenes del Uruguay,
que lleguemos a algo prctico a fin de que en breve sea un hecho
la revolucin obrera.203
En el mes de octubre la F.O.R.U. pide solidaridad con huel
ga en de las canteras Martn Chico, Carmelo. La F.O.L. discute el
tema en los gremios y aconseja el sabotaje considerando que
toda lucha sostenida a fuerza de moneda es un fracaso para los
trabajadores porque el centsimo nunca podr dominar al peso
(...) si quieren y tienen voluntad para triunfar deben esforzarse
por emplear el sabotaje en todas sus amplitudes aconsejndolo,
si es que ellos no lo pueden realizar. La lucha entre el capital y el
trabajo debe ser encaminada en el sentido de destruir el beneficio
capitalista elevando el nivel moral de los que bregamos por una
prxima revolucin sentenciaban los obreros salteos.204

202 La Tierra N11 (30-10-1920) y N12 (06-11-1920)


203 La Tierra N8, 9 de Octubre de 1920.
204 La Tierra N9, 16 de Octubre de 1920.

100
Aproximacin al momento y el lugar

La importante actividad cultural del movimiento.

En los meses que van de Agosto a Noviembre, se realiz en


Salto una velada filodramtica en el teatro Larraaga, donde se re
present Los Mrtires, Amurando y Lo Inevitable.205
Se realizaron al menos dos mitines callejeros, uno cuyo tema
era la libertad de ngel Gonzlez, en el que iba hablar Mario Herrera
y fue detenido por la polica antes de poder hacerlo suspendindose
el mitin, lo que dej una autocrtica a los editores del peridico obre
ro; el deber de todos los trabajadores all presentes era no haber de-
jado detener a nuestro compaero por quince o veinte policas ante
doscientos trabajadores, pero ese gesto vergonzoso de todos los que
concurrimos al acto debe ensearnos algo para el porvenir, en que
no debemos concurrir con las manos limpias a las conferencias pbli-
cas donde deben hablar nuestros compaeros.206
El 9 de Octubre se realiza una conferencia en el Centro
Ciencia y Vida y el 23 de Octubre se realiza otro mitin en Plaza
Flores (Pueblo Nuevo) sobre la conveniencia para los trabajado
res de no concurrir a las elecciones.207
Por otra parte se realizan dos pic nics casi consecutivamen
te, mostrando la gran receptividad que los mismos tenan en los
trabajadores y lo efectivo que resultaban para recaudar fondos. El
primero de ellos se realiz a beneficio de La Tierra en 9 de Octubre,
en la quinta de la viuda de Mir, Avenida Blandengues la entrada
fue gratuita, pero se vendieron 68 tiquets de almuerzos, hubo una
conferencia de Mario Herrera, orquesta, baile, y diversiones va-
rias. Se obtuvo un total de 53 pesos y sumados a la rifa existente
de la F.O.L. y el centro Ciencia y Vida sumaron ms de 80 pesos.208

205 La Tierra N1, 21 de Agosto 1920.


206 La Tierra N6, 26 de Setiembre de 1920.
207 La Tierra N10, 23 de Octubre de 1920.
208 La Tierra N9, 16 de Octubre de 1920.

101
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

El segundo pic nic se realiz el 23 de Octubre en el paraje


Alamos de Pieyro, a beneficio del Congreso de la F.O.L., y cont
con conferencias, orquesta, diversiones varias, audicin de guita
rras y dueto revolucionario, cantos y recitacin por varias nias y
una regata por el Ceibal.
Se vendieron entradas para hombres a 0,20 (mujeres y ni
os gratis) y no se vendi comida pero si lea y otros anexos.209

Los Comits Anti Polticos.

En vsperas de las elecciones los mismos militantes que


estn al frente de los gremios obreros, los centros de estudios
sociales y la prensa obrera, conforman comits de agitacin anti
poltica con el propsito de contrarrestar la propaganda poltica.
Estos farsantes que todo el ao pasean annimos e indife-
rentes por los cafs y los prostbulos sin acordarse para nada del
pueblo los das de elecciones corren presurosos para mendigar
al harapo y a la miseria de algunos inconscientes el voto que los
llevar a los escaos legislativos sentenciaran en su propaganda.
En el Centro Ciencia y Vida se conforma el Cuartel General de la
Campaa Anti-poltica que ser el frente de contacto y relacin
entre los comits de barrio. (...) En Pueblo Nuevo, Plaza Libertad,
el Lazareta, la Caballada, la Cachimba, el Palomar y Centro han
quedado establecidos comits de propaganda.210
En Salto, que predomina ampliamente la tendencia anar
quista (a diferencia de Paysand y Rocha) comienzan a sentirse
las diferencias internas dentro del movimiento obrero. Desde La
Tierra se critica duramente a la F.O.R.A. del IX Congreso y comien
zan los primeros cuestionamientos al obrero Adolfo Plaza de la
Sociedad de Picapedreros de Salto, quien encabeza un ncleo de

209 La Tierra N10, 23 de Octubre de 1920.


210 La Tierra N13, 13 de Noviembre de 1920.

102
Aproximacin al momento y el lugar

obreros afines al sindicalismo de la F.O.R.A. del IX. stos obreros


editan el peridico El Sindicalista para contrarrestar la propa
ganda anarquista de La Tierra, pero no logrando subsistir ms de
algunos meses. Lamentablemente no hemos localizado ningn
ejemplar de dicha publicacin.211

b) Rocha.

El Federalismo Obrero.

Es llamativo que una organizacin con fuerte presencia de


los socialistas haya tomado la forma de una Federacin, lo cual
puede explicarse por el prestigio que la F.O.R.U. tena en el mundo
obrero, ya que los socialistas siempre fueron mas partidarios de
las Uniones Generales o nombres similares.
Las federaciones obreras, antes que polticas, son entidades
llamadas a agrupar en un solo haz todos los trabajadores sin dis-
tingos de ninguna clase, con el solo objeto de defenderse contra los
zarpasos del capitalista usurpador y nada ms Sealaba Trabajo,
desterrando la posibilidad de una finalidad revolucionaria. Contina;
La Federacin de los hombres del trabajo, no debe significar
el ataque a ninguna tendencia poltica, puesto que all donde haya
un conglomerado de hombres libres, habrn distintas ideas, habr
diversidad de ideales. (...) nada nos amilana para que nosotros con
un criterio libertario hagamos un llamado amplio a todos los obre
ros para cobijarse bajo la roja bandera federal, donde caben todas
las tendencias por encontradas que estas fueran; pues la agrupacin
del elemento obrero bajo su bandera no busca nada con programas
estatuidos a no ser la defensa comn de los intereses de la clase(...).

211 La Tierra N9 (16-10-1920) y N13 (13-11-1920).

103
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Queremos conquistar el sagrado derecho de un vivir mas c


modo, vivir como las gentes y no como bestias, tener pan en abun
dancia y techo higinico, ilustrarnos, descansar y producir; a esto se
reduce la misin del obrero federado y no debe invadirse otros cam
pos cualesquiera que ellos fueran.
En ese sentido hacen una distincin entre la accin gremial
y la poltica la lucha contra el capital no debe invadir el campo
electoral. Eso es privativo del pensar de cada uno; republicano o
monrquico, socialistas o anarquistas y ms en nuestro medio am-
biente, blanco o colorado, catlico o libre pensador.212
En esta primera etapa de la F.O.R., parece haber funciona
do entre otras cosas, como una receptora de denuncias, donde
se hace hincapi en el incumplimiento de la ley de 8 horas en
varios establecimientos y la nula actuacin de los inspectores de
trabajo que deberan asegurar que dicha ley se cumpla. Los obre
ros denuncian los comercios donde dicho horario no se cumple,
pero el inspector al ir a corroborar, afirma que el horario s se
cumple y luego, los obreros sospechosos de haber denunciado el
incumplimiento son despedidos.
El obrero Jos A. Isaurral se indigna ante esta situacin
y afirma; lstima que los pocos que habemos capaces de pre-
sentar un pliego, declarar un boycott, u organizar una huelga no
tratemos con esa clase de patroncitos!213
Por otra parte la F.O.R. imprime sus carnets de asociados
los cuales tienen un costo de 10 centsimos y con los mismos se
obtienen descuentos en varias casas comerciales, los cual nos da
otro indicio de su orientacin mutualista.214

212 Trabajo (Rocha) N3, 30 de Mayo de 1920.


213 Trabajo (Rocha) N2 (15-05-1920) y N3 (30-05-1920)
214 Casas que ofrecan descuentos con el carnet de la FOL: Casa Diaz (todas sus ven
tas) 5%, Casa Florencio Sanchez dem 10%, Casa Lorenzo Gonella 3%, Mueblera
El nuevo Mundo 5%, Libreria Belloni 10%, Platera A. Manzoni 10%, La Victoria

104
Aproximacin al momento y el lugar

La F.O.R. parece estar en manos de unos pocos militan


tes los cuales se quejan de que hay mucha desidia entre los
afiliados.215 Las editoriales del rgano oficial de la F.O.R. son
siempre en un tono muy correcto y respetuoso con el sistema im
perante. Sin embargo, poco a poco, se van colando al interior del
peridico artculos con una tonalidad ms revolucionaria. Un tal
bolsewiski (bolchevique) denuncia que en la Usina Elctrica se tra
baja 11 horas y los inspectores de trabajo no dicen nada. En otro
artculo se menciona la causa del obrero Jos Prieto, quien se en
contraba preso en Montevideo tras la muerte de un polica en los
disturbios del 1 de Mayo de 1919 en la capital. Se comienza a seguir,
desde las pginas de Trabajo, la situacin del movimiento obrero ca
pitalino y las actuaciones de la F.O.R.U., que como sabemos tena una
orientacin revolucionaria y sectaria distinta a la de la F.O.R.
As en el seno de la F.O.R. conviven dos tendencias, la mutua
lista, reformista y otra ms agitativa se va abriendo camino; Los sin-
dicatos obreros de todo el mundo recogen en la actualidad los frutos
fecundos de las maravillosas semillas revolucionarias sembradas en
el campo obrero por hombres que desinteresadamente pusieron su
inteligencia y su vida al servicio de un ideal. Que muchos llamaban
utpico, pero que hoy se perfila con caractersticas firmes y seguros
como la mas bella realidad sealar el ejemplar de Julio de 1920.216
Por un lado se celebra el 14 de Julio, en alusin a la toma
de la bastilla. Es decir como parte de la simbologa revoluciona
ria y republicana, realizndose una actividad conmemorativa y se
coopera a su vez con una cooperativa de consumo tras una inicia
tiva de un Concejal. Pero por otra parte se publican artculos en

almacn 2% tienda 3%, Platera Manuel Fernndez 10%, Casa Centanni 10%, Casa
Amndola 10%, Zapatarea Decuadra 5%, Casa Borsani 5%, Botica de S. Pradere
(desc considerables), Dentista Ignacio D. Garaza (grandes descuentos). (Trabajo
(Rocha) N6, 15 de Julio de 1920.)
215 Trabajo N5, 30 de Junio de 1920.
216 Trabajo (Rocha) N6, 15 de Julio de 1920.

105
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

pro de la libertad de ngel Gonzlez, el obrero que se encuentra


preso en Montevideo por matar un rompe huelgas en la pasada
huelga martima de 1919.217
Se pueden leer artculos donde se menciona que los burgue
ses sienten miedo al huracn libertador, y tiemblan cobardemen-
te ante el grito de los libres; sienten miedo a las ideas renovadoras
que salen de all de las brumosas lejanas del desgraciado pas mos-
covita; ellos los que jams sintieron remordimientos en sus negras
conciencias, ellos que fueron criminales a todas horas, se acobardan
ante el eco de una fuerte voz que proclama la bondad de las nuevas
ideas; ideas de redencin y de justicia humana.218
El carcter diverso de la Federacin Rochense es explicitado
una y otra vez en sus pginas, Nuestro peridico es rgano oficial de
la F.O.R. y sta a su vez es una agrupacin en la cual militan hombres
de todas las tendencias polticas y de todas las ideas filosficas.
Hay blancos, colorados, socialistas y hasta anarquistas, li-
berales y catlicos; pero todos estamos hermanados por un mis-
mo ideal de emancipacin; todos luchamos por romper las cade-
nas con que a diario nos oprimen.
Y as en sus pginas conviven los artculos cuestionando lo
que pasa dentro del Consejo Administrativo local, donde ms que
una crtica a su existencia en tanto un organismo de clase burgus
se realizan crticas a su gestin, como artculos del socialista radical
Eugenio Gmez219 o incluso del anarquista pro sovitico Misha.220

217 Trabajo (Rocha) N6, 15 de Julio de 1920.


218 Trabajo (Rocha) N7, 30 de Julio de 1920.
219 Trabajo (Rocha) N9, 30 de Agosto de 1920.
220 Trabajo (Rocha) N10, 15 de Setiembre de 1920. Misha es el seudnimo de Juan
Romanoff, obrero ruso que estuvo preso en el glido penal de Usuahia (Argentina)
entre 1910 y 1914 acusado de colocar la bomba en el teatro Coln de Buenos Aires
en Mayo de 1910 en repudio a la represin gubernamental al movimiento obre
ro y anarquista porteo tras la denominada huelga del centenario. Consagrado
con cierto prestigio dentro del movimiento obrero y anarquista, en Montevideo
protagoniz un resonado atraco en 1914. Entusiasmado desde un comienzo con

106
Aproximacin al momento y el lugar

La actividad gremial.

La F.O.R. se integra activamente a las luchas obreras


del pas. Por iniciativa de sta se constituye el 28 de Agosto el
gremio de albailes221 y el 11 de Agosto los obreros en Made
ra hacen los suyo y publican un manifiesto contra la caresta
de la vida. El mismo da y tambin respondiendo al llamado de
la F.O.R. se organizan los tipgrafos, quienes llamarn a su or
ganizacin gremial Gutemberg, siendo su secretario Eusebio
Otero y contando con la totalidad de los grficos de la localidad
entre sus afiliados.222
Desde la F.O.R. se inicia una iniciativa a travs de la com
pra de acciones reembolsables por sorteo para comprar una
imprenta propia. A la vez que se forma un cuadro filodram
tico compuesto por obreros federados. Segn seala Trabajo
La FOR atravieza [sic] por un momento de verdadera reorga-
nizacin, dentro de breve quedarn definitivamente organiza-
dos varios gremios que designarn delegados ante la Consejo
Federal.223
El 2 de Noviembre se realiz una asamblea general ex
traordinaria en la que se nombr un nuevo Secretario General,
se discuti la conformacin del Consejo Federal, la adquisicin
de la imprenta propia, la conmemoracin del 11 de Noviembre

la Revolucin Rusa ocup una columna semanal en las pginas de La Batalla defen
diendo la misma. Desde all sostuvo duras y agresivas polmicas con La Protesta de
Buenos Aires. (Ver Muoz, P. La dinamita redentora. La Semana Roja de Montevi-
deo tercera parte. Tierra y Tempestad N20 Primavera 2014)
221 Su Comisin Administrativa estuvo integrada por Salvador Fola, Carlos de los
Santos, ngel Malzoni, Flix Severino Prez, Hiplito Casella, Juan Simonelli, Juan
Ramos. Al consejo Federal; Hiplito Casella, suplente Mazoni, Secretario Gene
ral Hi[polito Casella?] (El original se encuentra cortado en dicho rengln). Trabajo
N10 15 de Setiembre de 1920.
222 Trabajo (Rocha) N10 15 de Setiembre de 1920.
223 Idem.

107
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

entre otras cuestiones.224 De all se resuelve realizar una confe


rencia especial en dicha fecha donde hablarn varios oradores.225

La Unin Obrera Castillense.

El primero de Agosto se constituy en Castillos la Sociedad


Obrera de Oficios Varios contando ms de 100 afiliados, desde
all un Corresponsal informa al peridico obrero rochense;
Como estaba anunciado efectuse el primero la
Asamblea Obrera con el fin de fundar una Sociedad Gremial;
un xito inesperado coron tan justa iniciativa, cuenta el
mismo que llegaron trabajadores de esa villa y de la campaa,
colmando el local y ubicndose la gente en puertas y ventanas
local. A las 8 en punto son La Marsellesa. Primero habl
Domingo Presa, quien ley un extenso discurso que fue
muy aplaudido; hizo elogio de la bandera Social, present el
iniciador y tuvo palabras de aplauso para TRABAJO, peridico
que brega, dijo por el mejoramiento del obrero, encaminndolo
hacia justas aspiraciones
Luego habl Lucas Valds, que histori el desarrollo pro-
letario desde los tiempos Feudales hasta hoy. A continuacin
subi a la tribuna Aquilino Fernndez, que habl sobre el Capi
tal y el Trabajo y demostr la explotacin que sufra el obrero,
y termin explicando los fines que persegua la Sociedad. Lue
go el estudiante Santana Cardozo quien ley un poema de Fru
goni. Por ultimo el corresponsal de TRABAJO, recit el Himno
a la Aurora226 y para finalizar Baldomero Alvarez quien con su
discurso lleno de stira origin hilaridad en la concurrencia, que
coron con aplausos sus expresiones.

224 Trabajo (Rocha) N13, 30 de Octubre de 1920.


225 Trabajo (Rocha) N14, 11 de Noviembre de 1920.
226 El mismo es reproducido en el Anexo de este libro.

108
Aproximacin al momento y el lugar

Luego de los discursos y oratorias se aprob el reglamento


de la sociedad que era el mismo que el de la F.O.R.227
Semanas despus Trabajo entrevist a un obrero de la
Unin Obrera Castillense quin coment acerca de la organiza
cin de la misma;
Contemplando la violacin del horario obrero legal y la ex
plotacin de que eran vctimas los obreros de Castillos; como lo de
nunci pblicamente en TRABAJO, y comprendiendo que la manera
ms eficaz de contrarrestar el abuso de la burguesa era constituir
una sociedad obrera, me aperson a varios trabajadores de los que
crea ms rebeldes y en los que encontr una buena acogida, deter
minando efectuar una asamblea preparatoria que tuvo lugar a me
diados de Julio. (...)
A pesar del corto espacio desde su fundacin (...) la U.O.C. ha
efectuado varias asambleas y disertaciones de propaganda e ilustra
cin, en las que ha visto aumentar el nmero de sus afiliados, y el entu
siasmo habido predice los futuros triunfos de esta entidad gremial (...)
Hay ciertos jvenes vanidosos que por temor al amo no se
afilian a la sociedad o por que no quieren rozarse con los haraposos
y humildes, pero que en cambio no tienen escrpulos de rozarse con
los parroquianos de las timbas, a las cuales son asiduos concurrentes,
estos son los trabajadores enemigos de la organizacin obrera. (...)
La UOC ha iniciado trabajos contra el juego y el alcoholismo
Finalmente el obrero seala que TRABAJO es el peridico
ms ledo en Castillos donde cuenta con muchas simpatas.228

227 Trabajo (Rocha) N9, 30 de Agosto de 1920. La comisin qued compuesta de


la siguiente manera; Secretario General; Aquilino Fernndez, Secretario de Actas,
Domingo S. Presa; Tesorero, Juan Vega; Vocales, Vicente Marn, Pedro Iriarte, Jos
Izaguirre y Sebastin Gaullot, Comisin Fiscal; Lucas Valdez, Miguel Guerrero y
Jose Debat. (Trabajo (Rocha) N13, 30-10-1920.)
228 Trabajo (Rocha) N11, 30 de Setiembre de 1920.

109
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

El 14 de Noviembre la Unin Obrera Castillense realiza una


conferencia en la que particip el inspector de trabajo junto con el
secretario de actas, y ambos coincidieron en la necesidad de ha
cer cumplir con la ley de 8 horas y los fines de la sociedad. Esto
nos muestra como coincide con la orientacin predominante de la
F.O.R., buscando la concrecin de los beneficios obreros a travs de
la participacin de medios institucionales y no mediante la accin
directa como el movimiento hegemnico en Montevideo y Salto.229

2.12. La onda expansiva de la Revolucin Rusa


se hace sentir.

a) Buenos Aires

Del otro lado del ro Uruguay, en Santa Fe, la fuerte huelga


de La Forestal recordaba a los obreros el potencial revolucionario
que posean.
La revolucin an palpitaba de cerca, a comienzos de no
viembre se publican noticias sobre los consejos de fbricas que
se estn desarrollando en Bolonia Italia bajo el impulso de los
anarquistas italianos, sealando como en Buenos Aires se aplic
dicho mtodo en una fbrica.230
En Argentina dentro de la F.O.R.A. del V Congreso desde
Enero de 1919 predominaban los anarquistas que simpatizaban
con la dictadura proletaria como metodologa revolucionaria
para instaurar el comunismo. En Setiembre de 1920 la FORA
realiza un Congreso Extraordinario, que es seguido con especial
expectativa desde Salto. En dicho congreso la F.O.R.A. cambia
su denominacin por F.O.R.A. Comunista, e incluso incluye
en su logo una hoz y un martillo. Los principales referentes de
229 Trabajo (Rocha) N15, 30 de Noviembre de 1920.
230 La Tierra N12 15 de Setiembre [Octubre] de 1920.

110
Aproximacin al momento y el lugar

la F.O.R.A. Comunista son Garca Thomas231, Vidal Mata, Gon


calvez, Ferrer, entre otros quienes sern denominados anarco-
bolcheviques por sus posturas en pro de la dictadura comunis
ta. En dicho congreso la FORA adhiere a la Internacional Roja
fundada el en Mosc en Marzo de 1919.232
Entre otras resoluciones la F.O.R.A.-C. seala lo siguiente:
El proletariado de la Regin Argentina, reunido en el pri
mer congreso extraordinario de la F.O.R.A. comunista con asisten
cia de los delegados de 220 sociedades adheridas y 56 autnomas,
expresa su solidaridad hacia la revolucin rusa y hacia todas las
fuerzas revolucionarias que con tesn y energa tienden en su re
novacin incesante a la elevacin moral y material de todos los
trabajadores del mundo, y en especial modo hacia los anarquis
tas que en Rusia, como en todas partes, luchan por el triunfo de
sus ideales, fuerza dinmica creadora y transformadora de todos
los valores morales y sociales que impulsar a la humanidad en su
marcha ascensional hacia el porvenir.233

b) Rocha

La onda expansiva de la Revolucin Rusa estaba llegando


a Rocha, la ola roja dir Trabajo; Cuando decamos que la ola

231 Enrique Garca Thomas. (1883-1950) fue uno de los principales referentes de la
tendencia anarquista pro dictadura proletaria desde los peridicos La Rebelin
(1913-1918), Bandera Roja (1919) y El Soldado Rojo (1919). Siendo de los principa
les referentes anarquistas pro dictadura obrera de la vecina orilla junto a Sebastin
Ferrer, Antonio Gonalvez, Alejandro Alba, Jess Mara Surez, Julio R. Barcos, Eva
Viv, Elas Castelnuovo, Pierre Quiroule, Jos Torralvo, Juan Lazarte, Luis Di Filippo,
Mariano Barrajn y Jos Vidal Mata entre otros. Combatidos por La Protesta y La
Antorcha fueron expulsados de la FORA en Agosto de 1921. (Tarcus,2007:242 y
Doeswijk, 2013:27)
232 La Tierra N11 (30-09-1920) y N13 (30-10-1920)
233 Abad de Santilln, 2005:246.

111
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

roja de las reivindicaciones obreras amenazaba inundarlo todo,


no nos equivocbamos; no era un falso optimismos hijo de nues-
tra fantasa; era la realidad de los acontecimientos lo que nos
haca pensar as.
Europa arde, por todas partes se siente el hlito de las reivin-
dicaciones populares, el pueblo trabajador reclama sus derechos y
la burguesa tiembla. (...) La corona de Italia se tambalea, la bur-
guesa Italiana, tiembla; los obreros consolidan posiciones y la ban-
dera roja de la libertad flamea altiva234
A partir de fines de Setiembre de 1920, la presencia de ar
tculos agitativos en el rgano de la Federacin Obrera Rochense
ser constante. Se publica un manifiesto del Comit Pro Presos de
la F.O.R.U. llamando a la huelga general el da del juicio a ngel
Gonzlez, al siguiente se reproduce un artculo de Justicia de Mon
tevideo, llamando al frente nico del proletariado tanto para obte
ner la libertad de A. Gonzlez como para preparar la revolucin y
la dictadura del proletariado para llegar al comunismo.235

La influencia de la revolucin rusa


en la FORA anarquista incorporando
una oz y un martillo en su sello

234 Trabajo (Rocha), N10, 15 de Setiembre de 1920.


235 Trabajo (Rocha), N11 (30-09-1920) y N12 (15-09[10]-1920).

112
Aproximacin al momento y el lugar

A fines de Octubre, en primera plana se publica un artculo


donde se reivindica el delito cometido por ngel Gonzlez y se
reivindica su libertad;
Mat si: pero mat defendiendo su vida de hombre honra
do, amenazado por un vil traidor de sus hermanos y por este delito
inmenso, pide la justicia burguesa, el mxium de la pena que se aplica
en estos casos, como si fuese su vulgar asesino.
Y es que la justicia burguesa tiembla asustada, ante el fan
tasma de la Revolucin social que se cierne sobre sus tambaleantes
cabezas.
Es que la justicia burguesa, teme el estallido de las iras popu
lares, que barriendo el carcomido andamiaje de esta sociedad prosti
tuida, ponga en el trono del derecho a la verdadera Justicia.
Compaeros de Rocha, ni un brazo perteneciente a un obre
ro sano de conciencia, ni un vehculo, ni una maquina, ni una he
rramienta, debe producir nada el da que se vea en juicio publico la
causa de nuestro compaero ngel Gonzlez. (...)
Hagamos conocer a los corrompidos y venales instrumentos
del capital, que tenemos, la fuerza de la razn, y que si es necesario,
tenemos tambin la razn de la fuerza.
Obreros, solidaridad: La unin nos dar fuerza para terminar
con todas las injusticias que cometen los que nos oprimen.
Viva la Revolucin Social!236

Sin duda los artculos convocando a la revolucin social,


contrastaban y desentonaban cada vez ms con aquellos que pe
dan se cumplieran las leyes obreras y manifestaban una armona
de intereses con los inspectores de trabajo del gobierno.

236 Trabajo (Rocha), N13 30 de Octubre de 1920.

113
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

c) Salto

En Salto los anarquistas estn an en el primer perodo


por el que pasaron los anarquistas del mundo, que fue no solo
el apoyo y ejemplo de la revolucin rusa, sino su idealizacin,
sealando que el sovietismo federalista, rgano de recoordi-
nacin y regulacin en el periodo transitorio de la revolucin,
que asesta el ms duro y definitivo golpe a los engaifas insti-
tucionales de la democracia burguesa. Finalmente recogen la
onda expansiva irradiada por el ejemplo ruso que es la nece
sidad de hacer la revolucin Que la revolucin no se hace con
palabras, ni discursos sino con la accin prctica, inteligente y
sistemtica. Es hora esta que todos pensemos en ella y ponga-
mos nuestro brazo para su realizacin rpida y definitiva.237
En la edicin del 4 de Setiembre La Tierra238 habla de
seguir el ejemplo de la revolucin rusa y en la del 30 de Oc
tubre afirman la Revolucin Proletaria Rusa qu en este mes
de Octubre cumple tres aos de vida, es el fenmenos social de
mayor trascendencia que como un radiante sol sigue tonifican-
do con sus rayos de vida y calor las esperanzas de la Humanidad
entera.239
A su vez, el congreso extraordinario de la F.O.R.A. Comuni
sta fue un impulso a los militantes de Salto, ya que se proyectan
para casi la misma fecha la realizacin de un Congreso Obrero
Regional, convocando a los gremios de Salto, Paysand y Entre
Ros principalmente.
El orden del da del congreso es significativo para com
prender las cuestiones que se pretendieron discutir y resolver,
es decir cuales eran los ejes centrales del pensamiento ideolgi

237 La Tierra N13 30 de Octubre de 1920.


238 La Tierra N3 4 de Setiembre de 1920.
239 La Tierra N13 30 de Octubre de 1920.

114
Aproximacin al momento y el lugar

co de los militantes de la F.O.L. y la orientacin del movimiento


obrero local.
Se convoca al 1er Congreso de la Federacin Obrera del Litoral.
1 Apertura del Congreso
2 Informe del Consejo Federal
3 Nombramiento de la mesa y comisin de poderes
4 Federacin Internacional. Sud-americana de asiduas relaciones
con los gremios y agrupaciones afines.
5 Que concepto le merece a los congresales las doctrinas anar
quistas, sindicalistas o socialistas? Y cual debe propagarse dentro y
fuera de las organizaciones?
6 Discusin y aprobacin de la carta orgnica de la Federacin
7 Debe tener o no, intervencin directa del Consejo Federal, de la
Federacin, en las asambleas de las organizaciones?
8 Los centros y agrupaciones pueden tener intervencin en la
Federacin?
9 Es o no conveniente que los compaeros ms capacitados cons
tituyan agrupaciones secretas al margen de la organizacin, para
arbitrar recursos (fondos) y otros perterechos necesarios para la
prxima revolucin obrera?
10 Como deben ser considerados los gremios que no quieren ple
garse a la Federacin?
11 Qu carcter de organizacin debe fomentarse entre los tra
bajadores campesinos de la comarca?
12 Que concepto le merece a los congresales la Revolucin Rusa?
13 Asuntos varios
14 Clausura del Congreso.240

240 La Tierra N9, 16 de Octubre de 1920-

115
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Trabajo (Rocha) N13, 30 de Octubre de 1920


Veamos brevemente los contenidos del temario. Los prim
eros tres puntos son de orden interno presentes en todos los con
gresos de la poca.
El cuarto punto ofrece una forma orgnica federal para el
vinculamiento regional, incluyendo a gremios y agrupaciones es
decir grupos especficos anarquistas y afines.
En el punto quinto, se pone en el tapete un viejo tema de
discusin. El neutralismo ideolgico de las organizaciones obreras
defendidos por sindicalistas. Consagrada en La Carta de Amiens
aprobada en el congreso de la Confederacin General del Trabajo
de Francia (Amiens, 1906) donde se afirm la independencia de
accin de los sindicatos respecto de los partidos polticos. Es uno
de los documentos ms importantes del sindicalismo revolucio

116
Aproximacin al momento y el lugar

nario internacional y antecedente del anarcosindicalismo. Dicha


independencia, de los partidos polticos y tambin de embander
ar los sindicatos segn una ideologa determinada fue defendida
por los principales referentes del anarquismo internacional como
Erico Malatesta y Luigi Fabbri y ser adoptada por las organizacio
nes gremiales europeas como la C.N.T. espaola fundada en 1910
o la mencionada CGT francesa entre otras.
En este sentido el Ro de la Plata una excepcin mundial,
donde las organizaciones obreras mayoritarias, en el periodo de
predominio anarquista en el movimiento obrero (1875-1925), tu
vieron una definicin explcitamente anarquista.
Estas dos posturas estn presentes en el movimiento ob
rero local en todo el periodo de predominio anarquista. En refer
encia al Tercer Congreso de la F.O.R.U. de 1911, Francisco Corney
comentar a la prensa; En el Congreso Obrero hubo choque. All
federalistas y sindicalistas, con todo respeto, discutieron con ar-
dor sus respectivas tendencias. El triunfo de los partidarios del
comunismo-anrquico no implica ninguna derrota para los ad-
versarios del mismo. Muy por el contrario, pone de manifiesto la
cultura y la inteligencia como respeto a las ideas ajenas que en
esa emergencia tuvieron los sindicalistas, respetando la voluntad
soberana de la mayora.241
El punto siete es un claro ejemplo del impacto de la Rev
olucin Rusa en los planteos ideolgicos de los militantes de la
regin, y fundamentalmente en los anarquistas. Ya que en el plan
241 Rodrguez, Universindo. Los sectores populares en el Uruguay del 900 Tae, Mon
tevideo, 1992. Pg 55. Por federalistas denomina Corney a los anarquistas que
consideran que la federacin obrera debe plantearse el comunismo anrquico
como su finalidad. Por su parte los sindicalistas son aquellos que, aunque anar
quistas revolucionarios tambin, consideran que las sociedades obreras deben ser
lugares ms amplios ideolgicamente para as estando en contacto con todos los
obreros demostrarles la superioridad de las propuestas anarquistas, como pre
gonaban Malatesta, Fabbri y los sindicalistas franceses. El mismo Bakunin y sus
amigos se llamaban federalistas en los tiempos de la A.I.T.

117
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

teo federalista anarquista clsico los gremios coordinan horizon


talmente a travs del Consejo Federal, ms all de la influencia
que los delegados ms activos generen en el resto de los gremios.
Pero el planteo de formalizar la incidencia del Consejo Federal, es
decir del ncleo de militantes ms preparados y experimentados
en la lucha social, puede vincularse al rol de vanguardia revolucio
naria que el leninismo difunda con xito como forma de realizar
la revolucin.
El punto ocho es tambin particular, la articulacin entre
los grupos anarquistas y los gremios obreros es un tema que ha
estado presente a lo largo de la historia del movimiento en el Ro
de la Plata. Sera difcil, por ejemplo estudiar la trayectoria de la
F.O.R.A. en Argentina, sin tener en cuenta la enorme influencia
ejercida por el grupo editor del diario anarquista La Protesta.
Los Centros de Estudios Sociales y las agrupaciones anarquistas
apoyaron y constituyeron una entidad estrechamente ligada en
el periodo de hegemona anarquista en la regin. En ocasin de
discutirse la necesidad de ir a la huelga general, como efectiva
mente se hizo en Mayo de 1917 en Montevideo, declarada por la
F.O.R.U. en solidaridad con los obreros frigorficos, se menciona
junto a los distintos gremios obreros que proclamaron la huelga
general la presencia de dos Centros de Estudios Sociales (Villa
Muoz y Germinal) que apoyaron la misma y participaron de la
asamblea que la declar.242
En el punto nueve encontramos el claro legado de los in
ternacionalistas del siglo XIX de la cual la F.O.R.A., la F.O.R.U. y
como veremos la misma F.O.L. son herederos directos. Baste solo
mencionar, que el principal argumento por el cual Bakunin fue
expulsado por Marx y Engels de la A.I.T., era la existencia de orga
nizaciones secretas a las cuales Bakunin perteneca y lideraba que

242 La Razn (Montevideo), 20 de Mayo de 1917. Ver Muoz, P. Huelga en los frigor-
ficos del Cerro, segunda parte Tierra y Tempestad N13 Otoo 2012

118
Aproximacin al momento y el lugar

conspiraban por fuera del consejo general de la A.I.T. Lo llamativo


es la pretensin de formalizar dicha posibilidad, legitimando as el
accionar revolucionario de los grupos anarquistas y maximalistas
para concretar la revolucin.
Es importante tambin la preocupacin en el punto once
acerca de los trabajadores campesinos siendo un potencial que
los gremios del interior se ven en la necesidad de influir y organi
zar. As como la clara inclusin de la discusin sobre que opinin
merece la Revolucin Rusa en el punto siguiente. Quizs el gran
ausente es la discusin sobre la adhesin o no a la Internacional
Roja, o quizs estuviera incluido en ese ltimo punto.
Lo cierto es que el congreso parece generar entusiasmo
y expectativas en los gremios obreros ya que rpidamente la Fe
deracin de Electricistas M. y Anexos, Federacin O Metalrgica,
Sociedad de Carpinteros, Aserradores y Anexos, Sociedad de Ofi
cio Varios, aprobaron el orden del da del congreso. Oficios Varios
adhiere formalmente a la F.O.L. y nombra delegados y recursos
para el Congreso, en Paysand se realizan conferencias pro Con
greso y varios gremios deciden participar y los Chauffeurs Unidos
donan 10 pesos para gastos del Congreso,
Desde Buenos Aires, tanto la F.O.R.A. Comunista como el
activo gremio de Chauffeurs Unidos nombran delegados para el
Congreso. En Basavilbaso, Entre Ros, se realizan varias conferen
cias, y varios gremios deciden participar, aplaudiendo la idea de
unir ambos mrgenes del ro.243
En este sentido las organizaciones obreras internacio
nalistas siempre han defendido la organizacin regional por
encima de fronteras nacionales. Negar el regionalismo sera
aceptar las fronteras departamentales o nacionales que nos
impone la burguesa para que no podamos vincularnos con los
dems trabajadores que necesariamente deben cooperar con

243 Ver La Tierra Ns10 (15-09-1920) al 14 (11-11-1920).

119
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

nosotros a la revolucin obrera. De manera que si le hubira-


mos dado carcter departamental a nuestro Congreso, se le
restara importancia y se cometera un egosmo absurdo con
los trabajadores que luchan fuera del departamento. Quedara-
mos aislados sin mancomunar esfuerzos y obstruccionaramos
la emancipacin integral obrera, cosa que pretende la burgue-
sa y quienes la defienden por un plato de lentejas sentenciaba
La Tierra.244
Sin embargo el Congreso que estaba previsto para el 1 al
7 de Diciembre se vio suspendido por la realizacin de la huelga
general por la libertad de ngel Gonzlez, aplazndose para el 5
de Febrero, y luego aplazndose nuevamente sin una explicacin
concreta, pero posiblemente debido a una baja de la actividad y
la profundizacin de las diferencias ideolgicas que cada vez ms
se harn presentes en el movimiento mundial y regional. Segn
Francisco Pintos la realizacin del Congreso fue postergada por
desavenencias con las organizaciones obreras de Paysand.245

d) Paysand.

Si bien, como vimos el Congreso Regional no lleg a realizar


se, el mismo sirvi de impulso a la agitacin obrera en Paysand.
En Noviembre de 1920 un grupo de militantes se dirige
desde Salto a dar varias conferencias a Paysand. Uno de ellos
es Franco Hernndez, el otro posiblemente sea Jos Etcheverry.
Los delegados se hospedaron en la Fonda Americana, (ubi
cada en 8 de octubre y Queguay, pagando un peso con cuarenta
por da cada uno). En correspondencia a La Tierra cuentan; se
yerbea de lo lindo entre el paisanaje sanducero (...) sin que falte
algn criollo que eche al viento sus penas al comps del instru-

244 La Tierra N17, 15 de Enero de 1921.


245 Pintos, 1960:148

120
Aproximacin al momento y el lugar

mento para completar la tradicin campera. (...) Canejo! Si en


canto habamos entrao ya comprendimos que venan como anillo
al dedo los Entre Campesinos de Malatesta y excusamos decir lo
que hicimos en ambiente tan propicio
Los delegados se reunieron con los delegados de los Al
bailes, Pintores, Martimos, Zapateros, Chauffeurs, Carpinteros,
Herreros y Anexos, Panaderos y Grficos. Todos en el amplio local
de Oficios Varios donde los atendi el Consejo de Relaciones que
se reuni especialmente y prometi cooperar, a pesar de que la
sociedad de Oficios Varios estuviese orientada por los socialistas.
Al sbado siguiente hablarn en la asamblea de gremios y
para tales efectos redactaron un manifiesto que terminaba as;
Compaeros, trabajadores: Quedis invitados para la
asamblea de todos los gremios que se realizar el sbado 6 a
las 20 horas. Ven, no faltis, te esperamos, hay para t un puesto
entre nosotros los rebeldes los que gestamos un mundo de ms
verdad y de ms amor. Sindicato de Oficios Varios.- Calle 8 de
Octubre entre Misiones y J.E. Administrativa.
Visitaron el Centro de Estudios Sociales Internacional
fundado recientemente por una veintena de revolucionarios y
uno de ellos, Bartolemeo Bosch es el paquetero de La Tierra,
quien pide unos 20 ejemplares por edicin.
Los delegados acordaron dedicar un pgina a Paysand en
La Tierra, porque consideran que la propaganda revolucionaria
(...) es deficiente en esta ciudad, donde se hace gremialismo
econmico puramente y campaas electoralistas de los distintos
partidos, aadiendo que las mujeres son totalmente apticas a
la organizacin pero que intentaran organizarlas.246
En dichas asambleas y conferencias el debate entre
anarquistas y socialistas fue inevitable. Una de ellas fue sobre La
Revolucin Rusa, donde el delegado Franco Hernndez debati

246 La Tierra N12 15 de Setiembre[Octubre] de 1920.

121
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

con el socialista sanducero Manuel Benavente y se polemiz


ampliamente sobre las ideas marxistas y anarquistas.247
Los grficos parecen ser el nico gremio que escap de la
influencia socialista, ya que en una conferencia realizada en el
local de Oficios Varios el secretario del Comit Federal y el socia
lista N. Delmonte incitaron a no participar del Congreso Regional,
pero stos decidieron por mayora de votos en la asamblea enviar
delegados al mismo. El Centro de Estudios Sociales Internacional
tambin nombra sus delegados al Congreso.248
Pero aunque el Congreso Regional no se realiz la marea
revolucionaria ya inundaba la ciudad de Paysand, mientras al
gunos socialistas se radicalizan para convertirse en poco tiempo
en comunistas revolucionarios, los anarquistas se proponen con
tagiar sus ideas, sino hegemnicas, muy fuertes e influyentes en
Salto, Montevideo y Buenos Aires. Las giras de propaganda de
dos destacados oradores de la F.O.R.U en Mayo y la huelga por la
libertad de ngel Gonzlez que se realizar en Noviembre ingre
san a Paysand en el campo del gremialismo revolucionario. En
diciembre de 1920 dir La Batalla de Montevideo;
desde que los grupos anarquistas iniciaron la propaganda en
el interior de la repblica una intensa conmocin se ha producido
(...) A la ciudad sanducera vinieron el viejo Llorca y Forni, que dieron
una sacudida saludable a ese ambiente retrgrado al extremo. Los
hombres ms libertarios de esta ciudad eran los socialistas parlamen
tarios. Y hoy, si bien no se ha progresado con la intensidad con que
es necesario progresar en estos tiempos, la anarqua no es ya una
palabra terrorista, ni mucho menos una cosa desconocida. (...) es que
en Paysand no se conocen doctrinas, ni mucho menos tcticas de
lucha. El sistema de luchar en esta localidad es completamente cris

247 La Tierra N16, 1 de Enero de 1921.


248 La Tierra N14 (11-11-1920) y N15 (30-11-1920).

122
Aproximacin al momento y el lugar

tiano. Mas an: es un sistema burgus. Pero ya se han dividido las


opiniones, obra sta de los anarquistas llegados a esta localidad.249
La propaganda revolucionaria, tanto para anarquistas
como futuros comunistas consiste en demarcar bien las posturas
para abrir camino a la revolucin social. Finalizando el ao La
Tierra sealar En estos das estamos de plena orientacin
en Paysand. Deslindar campos, saber a donde vamos, como
tenemos que llegar, determinar formas y medios, tal es el objeto
principal que los hombres sinceros nos proponemos establecer
en Paysand cueste lo que cueste Cuenta el corresponsal en el
mismo artculo que el concejal Caramello visit a la sociedad
obrera; se creer este buen seor que todava estamos
dispuestos a luchar por medio de cajas de ahorros, cruzndonos
de brazos (...) No! (...) ya sabemos demasiado que mientras no
hagamos luchas a base de accin directa, es decir, mientras no
nos orientemos hacia la toma de posesin del capital y los medios
productivos, no obtendremos ningn triunfo. Lenin lo ha dicho
bien. No podemos tratar ninguna cuestin poltica, mientras
no derrumbemos de raz los parlamentos y los polticos. Lenin
entiende como poltica la administracin por medio de los
soviets, de la produccin.250
Pero el predominio en Paysand, a diferencia de Salto es
claramente de los socialistas. La puja ideolgica se dar dentro
de los gremios, por ejemplo, dentro del gremio de albailes se
resolvi no adherirse a la F.O.R.U. porque se acord entre los
cuatro o cinco compaeros ms viejos el no adherirse, y como
estos compaeros que podrn ser muy sinceros, por son muy
apasionados por el partido socialista y tienen una influencia y
amistad en todo el gremio, les dijeron a todos que no votasen por
la adhesin a la F.O.R.U. luego el mismo albail nos cuenta otro

249 La Batalla N178, 17 de diciembre 1920


250 La Tierra N19 15 de Diciembre de 1920.

123
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

suceso ilustrativo un obrero que no es socialista y s anarquista,


pidi para dar una conferencia para desvirtuar las macanas
que la prensa burguesa haba dicho sobre el movimiento de
solidaridad gestado por todos los obreros conscientes del pas,
por la libertad de Gonzlez. Como no es socialista, se le tuvo
tres semanas, hasta que vino el concejal Carmella y di una
conferencia en el local versando sta sobre cooperativas y otras
macanas burguesas-socialistas.
El obrero este, viendo la pasin del hecho en s, protest
porque no se conceba el porqu, dentro de un sindicato tienen
que tener privilegio un concejal sobre un obrero, mxime cuna-
do los obreros de la usina de Salto siguen la lucha en solidaridad
a Gonzlez y hay otros presos a raz de esa cuestin.251
En Noviembre de 1920 el gremio grfico, donde haba una
importante presencia anarquista, propone al Consejo de Oficios
Varios se pase a estudio de los gremios la necesidad de crear una
Federacin Local, sin embargo, los socialistas afianzados en el
Consejo Federal rechazaron la propuesta sealando que las fede
raciones son cosas antiguas y que deban guiarse por las doc
trinas mas modernas de los sindicatos rojos. Pero posteriormente
propusieron crear un Sindicato Federal con un consejo de 5 o
3 miembros, pero se debera llamar Sindicato y no Federacin.
(Quizs para distinguirse de la F.O.L. Saltea?).252

251 La Tierra N21 15 de Marzo de 1921.


252 La Batalla N191, 14 de Enero de 1921

124
Aproximacin al momento y el lugar

3. La Solidaridad Revolucionaria (1920-1921).


3.1. La Huelga General por la Libertad
de ngel Gonzlez.

Ya vimos como en 1918 se realiz en Montevideo una vio


lenta huelga general y como el ambiente estaba ms que agitado
en la regin al comenzar el ao 1919. En el transcurso de ese
ao se realiz una importante huelga martima. La Federacin
Obrera Martima, que haba salido fortalecida por su triunfo de
la huelga de 1918, orientada por un socialista, un poltico al decir
de los anarquistas (no porque ejerciera como poltico, sino por
pertenecer a un partido), haca constantes llamados a defender la
huelga a travs de la accin directa en la calles, tctica que hasta
esas fechas solo haba sido defendida por los anarquistas. Pero
los tiempos haban cambiado y un sector del Partido Socialista
estaba radicalizado tras el ejemplo de la Revolucin Rusa.
Durante el mes de Agosto de 1919 murieron dos rompe
huelgas y un huelguistas en las trifulcas callejeras del puerto en el
marco de la huelga martima. En la madrugada del 11 de Setiem
bre morir otro rompe huelgas lo que provoc una fuerte repre
sin, con locales obreros asaltados y varios detenidos. El obrero
carrero ngel Gonzlez fue procesado con prisin por la muerte
del rompe huelgas.
As para fines de Noviembre de 1920, por unanimidad de
los gremios adheridos a la F.O.R.U. se decide declarar la huelga
general por tiempo indeterminado por la libertad de ngel Gon
zlez. Pero la huelga se declarar en un da muy atpico, el 27 de
Noviembre, da de elecciones nacionales al Consejo Nacional de
Administracin. Consejo que acompaaba al presidente en el Po
der Ejecutivo y renovaba sus miembros anualmente.
El Partido Socialista, acompa la medida y no se present
a elecciones, pero protestando principalmente por la regresin

125
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

que significa realizar esas elecciones con voto pblico253 cuando


ya en las anteriores de 1919 se haba realizado el voto secreto. La
medida provoc el pnico dentro del parlamento. Los polticos
ms moderados, los batllistas, proponen postergar las elecciones
para el 5 de Diciembre. Los polticos ms reaccionarios ponen el
grito en el cielo y exigen una dura represin con quienes preten
den subvertir el orden. Por su parte el ministro del Interior y fu
turo golpista, Gabriel Terra, declara que se encuentra preparado
para combatir la huelga subversiva. Un huelga declarada clara
mente contra el poder poltico y con un contundente significado
de solidaridad de clase.
Mientras la huelga se prepara en las distintas asambleas y
mitines, desde el poder se discute si declarar el estado de sitio, si
promulgar leyes de excepcin para prohibir el derecho de huelga
por interferir con el libre sufragio, y el parlamento se declara
aterrado en sesin permanente.
La noche del sbado 26 en Montevideo son detenidos va
rios huelguistas, entre ellos el secretario general de la F.O.R.U.;
Celestino Gonzlez. Otros huelguistas sern detenidos por inten
tar sabotear las vas de tren.
Los regimientos de caballera 3,4,5,6 y 7 son trados a la
capital, junto a los camiones policiales y de bomberos que se en
cuentran a la expectativa de entrar en accin. A su vez, las ame
tralladoras de la fortaleza del Cerro son movilizadas y colocadas
en puntos estratgicos de la ciudad.
La huelga general, que comenz a las 0 hs del 27 de No
viembre (noche del sbado), se extendi hasta el medio da del
martes y fue considerada como un xito absoluto de la solida
ridad obrera para la Federacin. sta editar un boletn diario,
La Voz de la F.O.R.U. con un tiraje de ms de 7.500 ejemplares
habiendo salido 3 nmeros mientras dur la huelga.

253 Justicia, 7 de Octubre de 1920. en Lpez DAlessandro, 1992:52.

126
Aproximacin al momento y el lugar

El rgano de los Picapedreros, cont durante la huelga


la explosin de 7 petardos de dinamita en distintos puntos de
la ciudad.
En total adhirieron 61 sociedades obreras de Montevideo,
ocho de Salto, tres de Mercedes, Carmelo y Paysand, dos de
Canelones, y una en San Jos, San Carlos, Florida, Dolores,
Tacuaremb, Minas, y Rocha.254
La jornada de huelga tambin puede medirse en relacin
al boicott electoral. Si se compara con la eleccin al Consejo
Nacional de administracin de Noviembre de 1919, votaron
11.903 personas menos (56.750 en 1919 y 44.847 en 1920).
Pero si se compara la cantidad de votos con la cantidad de
inscriptos, las diferencias son muy fuertes, mientras en 1919
vot el 85,97% de los inscriptos, en 1920 tan solo lo hizo el
51,73%.255
El Lunes 29 a la hora 12, Federacin Obrera levanta la
huelga exhortando a los trabajadores sigan velando con el arma
al brazo para salir de nuevo a la defensa de sus derechos cuando
la burguesa pretenda condenar a su altivez en la persona del
compaero ngel Gonzlez, o trate de tomar venganza en la
de cualquiera de los nuestros que militan sin cobardeas en las
gloriosas filas de la organizacin obrera. viva la solidaridad
proletaria! segn deca el comunicado emitido por el Consejo
Federal.256
Fue sta la cuarta huelga general realizada en el
Uruguay257, todas convocadas por la F.O.R.U. (las anteriores en
1911, 1917 y 1918).
254 Solidaridad N10, Diciembre 1920.
255 Justicia 30-11-1920, N367.
256 La Voz de la F.O.R.U. N9 29-11-1920.
257 Sobre esta huelga ver por ejemplo Muoz, P. Obreros y carneros. De la huelga
martima a la huelga general por la libertad de ngel Gonzlez, Tierra y Tempes
tad, N 14, 2012.

127
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

a) La Huelga General en Salto.

La Federacin Obrera Local y la Federacin en Constructo


res Navales emitieron ante la proclamacin de la huelga en Mon
tevideo el siguiente comunicado;
Trabajadores del Salto: Salud! La Federacin Obrera Regio
nal Uruguaya como acto de protesta y desagravio por la injusta con
dena impuesta al compaero martimo ngel Gonzlez ha resuelto
declarar el paro general en todo el pas a partir desde hoy sbado 27
a las 12 de la noche hasta nueva resolucin.
El Consejo Deliberativo de Delegados de los gremios adheridos
reunido juntamente con el Consejo Federal teniendo en cuenta la justi
cia del movimiento y lo establecido en el pacto solidario resuelve;
Solidarizarse con la huelga decretada por la F.O.R.U. y hacerla
efectiva desde el da y hora sealada por la misma.
Compaeros: Ha llegado el momento de demostrar nuestros
sentimientos solidarios de clase. Cada uno de nosotros cumpla con
su deber.
Que el proletariado salteo no trabaje y que no haya traido
res! VIVA LA HUELGA GENERAL!258
A las 12 de la noche del sbado se decret el paro por
tiempo indeterminado difundiendo al efecto un vibrante mani-
fiesto que fue profusamente repartido en la localidad, en Concor-
dia, Paysand, San Antonio, Lavalleja y otras localidades de am-
bas mrgenes del Uruguay.
A esa hora pararon el trabajo todos los trabajadores de la
Usina Elctrica, as como otros obreros que trabajan de noche a
pesar de estar abolido por las leyes burguesas el trabajo nocturno,
seala La Tierra que al otro da por ser domingo no se poda

258 La Tierra N15, 27 de Noviembre de 1920.

128
Aproximacin al momento y el lugar

La Tierra N16 4 de Diciembre de 1920

La Tierra N15 27, de Octubre de 1920

129
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

apreciar la intensidad y conciencia proletaria que acataba el paro,


que se desarrollaba en calma, pero el lunes se pudo apreciar en
todas sus manifestaciones solidarias259, y que fueron a la huelga
incluso gremios que no estaban organizados y la mitad de los
krumiros260 que trabajan en el taller Milhanovich, lo que llam
la atencin de los redactores del semanario.
Los que no adhirieron, aunque se les pidi solidaridad,
fueron los lancheros que pertenecan a la F.O.M. argentina
-seccin Concordia-.
A las 2 de la tarde del lunes reciben telegrama de la F.O.R.U.
Informando que se dio por terminado el paro en Montevideo.
La crnica de La Tierra seala que en una poblacin de
70.000 habitantes en el departamento tan solo votaron siete mil,
sealando que fueron ms las abstenciones que los votos a cada
partido.261
En la asamblea general reunida en el Centro Ciencia y Vida
a las 4 de la tarde se dio a conocer la noticia ante ms de mil
obreros y obreras presentes.
Los mismos obreros que participaron de dicha asamblea
nos cuentan lo que sucedi despus;
El lunes 29 a las 2 p.m. y estando en el local del Centro
Ciencia y Vida una veintena de compaeros, se present enviado
vaya uno a saber por quin, un sujeto que hace de carnero en el
taller de carpintera de Jos Rossi262, pretendiendo sacar apuntes
y en actitud provocativa, cosa que disgust a los compaeros
presentes y sin ms trmite un camarada esgrimiendo una silla se
la despedaz en la cabeza al krumiro, que medio tambaleando con

259 La Tierra N16, 4 de Diciembre de 1920.


260 Krumiro, proveniente de la jerga italiana, es sinnimo de rompe-huelgas.
261 La Tierra N16, 4 de Diciembre de 1920.
262 Recordemos que la carpintera de Rossi se encontraba bajo boicott obrero.

130
Aproximacin al momento y el lugar

semejante porrazo, emprendi la fuga para delatar el caso ante la


polica, que poco despus conduca al heridor a la crcel y al herido
a al hospital.
El Agresor, Moreni ser detenido en la comisara. La
asamblea de obreros resuelve entonces seguir con la huelga
hasta que Moreni sea liberado.
Los obreros comunicaron al jefe de polica la decisin,
pero ste seal que no era responsabilidad suya sino del juez
y el certificado mdico necesario. Los trabajadores tomaron
esto como una excusa y ratificaron la resolucin de continuar la
huelga con carcter violento.
Luego de esto, los huelguistas parecen haber logrado
hacerse con el control de la ciudad, o al menos generar la idea
de que tenan la capacidad de hacerlo.
La Tierra nos cuenta que tan lejos estaban dispuestos a
llegar los huelguistas;
Salieron de la asamblea varias comisiones de hombres
decididos y comenzaron a parar en la calle a cuanto vehculo pasaba,
manejados la mayora por los propietarios y los hacan dar vuelta
despus de aplicarles a los conductores que pretendan levantar
el gallo, unos buenos palos para recuerdo y para ensearles que
cuando se decreta huelga general nadie debe trabajar (...) Varios
casos fueron vistos por algunos policianos [sic], que declarndose
tachuela hacan la vista gorda y no procedan.
Ellos tambin empiezan a comprender que les conviene
solidarizarse con los trabajadores en lucha, que buscan el bienestar
de todos los hogares necesitados.
Puede decirse que haba empezado a sembrarse el terror en
la ciudad, cuando el jefe de polica dispuso la libertad del compaero
detenido, a las 6 p.m.

131
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

La Tierra se jacta del triunfo de la presin obrera; Ese


quebramiento del principio de autoridad por la fuerza y la accin
directa obrera que obra al margen de las leyes y arranca a sus
presos, produjo un delirante entusiasmo en la masa que pronto se
conglomer en la calle frente al local vivando la unin proletaria
que acaba de triunfar.
Luego hablaron algunos militantes para comentar a gran-
des rasgos el desarrollo y la importancia del movimiento y se
resolvi terminar la huelga y volver al trabajo.263
Cuando los obreros de la Usina Elctrica fueron a volver al
trabajo, les informaron que gerentes y jefes de maquina haban
renunciado y tenan que entenderse al otro da con los patrones
que venan de Montevideo. Pero al otro da no vinieron, y reanu
daron el trabajo con otros obreros.
Los trabajadores de la Usina, que ya haban ganado dos
conflictos a la patronal el ao anterior presentaron un pliego de
condiciones donde se exige, el reintegro de los obreros y pago de
los das en los que no trabajaron, el pago forzoso de una indem-
nizacin de 100 pesos oro por cada da que dure el Lou Kau[sic],
expulsin de los rompe huelgas, a la vez que facultan a la F.O.L.
para representar el gremio y amenazan con un cerrado bloqueo
a nivel local, nacional y regional. Firman el mismo el secretario
de la F.O.L. E. Rodrguez y de la Federacin Obrera de Mecnicos
Electricistas y Afines Benito Martnez.264

b) la huelga en Paysand.

Ante la resolucin del paro general por la F.O.R.U., el gre


mio de albailes convoc a una asamblea general de obreros
a la cual concurrieron unos 500 obreros, y fue presidida por el

263 La Tierra N15, 27 de Noviembre de 1920.


264 La Tierra N16, 4 de Diciembre de 1921

132
Aproximacin al momento y el lugar

obrero pintor Gaspar Admoli. All se debati ampliamente si adhe


rir al paro o no, resolvindose finalmente la adhesin al mismo.265
Se realiz un paro general de 48 horas, que comenz al
igual que en Montevideo a las doce de la noche del sbado, se
adhirieron los gremios afiliados al Sindicato de Oficios Varios; al
bailes, pintores, tipogrficos, herreros y zapateros, no adhirie
ron los panaderos, martimos y la Unin de Chauffeurs por no
encontrarse en situacin de hacerlo pero acompaaron indivi
dualmente la medida algunos miembros de dichos gremios.
El nico incidente que parece haberse registrado fue entre
dos albailes cuando el huelguista Juan Bogado inst a un albail
que no respet la medida a no trabajar y la polica los detuvo a
los dos. Una comisin de huelguistas se present en la comisara
y lograron su liberacin.266
El domingo de elecciones y huelga fue sacudido por una
fuerte tormenta e intensas lluvias en todo el litoral. La absten
cin electoral en Paysand fue de un 40% aproximadamente. Si
en Salto, los redactores de La Tierra se jactaban de la abstencin
electoral, en Paysand la prensa comercial lo confirmaba. El dia
rio nacionalista La Repblica, adjudic las causas a cinco razones;
las fuertes tormentas, la poca incidencia local de las elecciones
nacionales, la falta de propaganda, el voto pblico (no secreto) y
la abstencin sistemtica de los elementos avanzados y la inten-
sa propaganda, que en la ciudad, hicieron socialistas y anarquis-
tas, fijando en las paredes y distribuyendo en profusin, carteles y
manifiestos incitadores del boycot a las urnas.267
Los socialistas, que convocaron a no participar de las elec
ciones, en un manifiesto publicado por el Comit Administrativo
del Partido Socialista en Paysand, no mencionan en absoluto el

265 La Repblica (Paysand), 27 de Noviembre de 1920.


266 Justicia, 2 de Diciembre de 1920.
267 La Repblica (Paysand), 30 de Noviembre de 1920.

133
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

asunto de la huelga por ngel Gonzlez, sino que se limitan a ads


cribir su abstencin en base a que en esas elecciones (a diferencia
de las anteriores y las prximas) el voto no era secreto.268
Un corresponsal envo una nota a Solidaridad, rgano de
la F.O.R.U. la cual comentaba; Aunque con poca intensidad la
huelga ha sido declarada por los trabajadores sanduceros, lo que
a buen seguro ha de contribuir a turbar la tranquila digestin de
los parsitos y los clculos de los politiqueros de todos los colores,
que pensaban jugar como siempre con la ingenuidad de los hijos
del trabajo.269
Los anarquistas de Paysand vieron en el desarrollo de la
huelga un claro triunfo de sus ideas. Hay que ver el fracaso pol-
tico hasta donde ha llegado. El 47% son los votantes. Causas? La
propaganda anti poltica que hemos hecho los anarquistas.
Los socialistas tambin largaron un manifiesto diciendo
que se abstenan, pero la opinin general, an la de nuestros ene-
migos, es que hemos triunfado los anarquistas.
El cronista augura buenos momentos y finaliza sealando
que Ahora hay en marcha ya la iniciativa de organizar a los cam-
pesinos y va a ser un hecho porque se ha consultado con unos
cuantos y estn dispuestos a meter fierro, noms.270

c) La Huelga General en Rocha.

La Federacin Obrera Rochense por estas fechas parece


contar con unos 140 afiliados. Segn palabras de uno de ellos
desde haca ms de un mes, se haba adherido a la FORU para
todos los actos de protesta a realizarse en pro de la libertad del

268 La Repblica (Paysand), 27 de Noviembre de 1920.


269 La Voz de la F.O.R.U. (suplemento diario de Solidaridad durante la huelga) N8,
28 de Noviembre de 1920.
270 La Tierra N17, 11 de Diciembre de 1920.

134
Aproximacin al momento y el lugar

obrero Gonzlez. Entre otras cosas, se imprimi un manifiesto


que se reprodujo tambin en Trabajo (es el que se cita algunos
fragmentos anteriormente), como tambin 120 tarjetas con el re
trato de ngel Gonzlez para sufragar los gastos del mencionado
manifiesto.271
Ante el llamado de la F.O.R.U., la Comisin Administrativa
de la F.O.R. declara el paro solidario. Sealan sus integrantes que
la F.O.R. no convoc a una asamblea general ya que cuando se
recibi la informacin desde la F.O.R.U. con la fecha y hora del
mismo, se pidi reserva sobre dicha informacin. Sealan los
miembros del Consejo de la F.O.R. que decretaron la huelga, que
como se seala en el artculo 14 de la Federacin, si algn socio
estaba en desacuerdo con la propaganda que se vena llevando
a cabo en pro del paro general por ngel Gonzlez podra haber
convocado a una asamblea para protestar y nadie lo hizo.
La comisin integrada por Juan C Bagattini, F. Centani, Ba
ranzano, Cuartin, Pagola, DAlesandro y Balbino Pereira acordaron
la huelga y lanzaron 2000 manifiestos a la calle.
Un delegado de la F.O.R.U., Luis Scuarcia, fue especialmente
a Rocha para garantizar el paro. La huelga tuvo una fuerte acep
tacin en los tipgrafos no publicndose ningn diario. Y tambin
cont con adhesiones de algunos albailes, herreros y carpinteros,
especialmente los que trabajan a jornal diario. No as en los pa
naderos y empleados de comercios. Para Trabajo la huelga tuvo
bastante xito, para el diario La Democracia, fue un fracaso.
Ya el mismo diario, un da antes de declarada la huelga ha
ba sealado que el movimiento por ngel Gonzlez no buscaba
exigir aumento de salario, de horas de descanzo [sic], o mejo-
ramiento alguno de su suerte, con legitimo derecho, sino el de
ejercer presin sobre la justicia para que decrete la libertad de
uno de los tantos que mat a otro trabajador (...) no se trata del

271 La Democracia (Rocha), 7 de Diciembre de 1920.

135
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

ejercicio de un derecho legtimo para mejorar la suerte del obrero,


sino del ejercicio de un abuso y de la comisin de un delito, que no
debe ni puede consentirse, sin alentar la ms perturbadora de las
subversiones institucionales: la que tiende nada menos, que a la
impunidad del crimen.272
El delegado de la F.O.R.U., que segn La Democracia pre-
tendi erigirse en Kaiser, y segn Justicia de Montevideo era
uno de los ms activos militantes de la organizacin obrera, fue
detenido arbitrariamente por el espacio de varias horas segn
inform la F.O.R.U., el motivo segn Justicia fue haber prestado
solidaridad al paro declarado por algunos gremios.273, debiendo
sealar el delegado que l no ejerca presin, sino que invitaba
a los trabajadores a adherir al paro.274
Pero la declaracin de una huelga de estas caractersticas,
seguramente el primer paro general de la historia rochense, trajo
graves repercusiones a la interna de una Federacin tan ambigua,
y tan contemplativa con los poderes estatuidos como lo era la
Federacin Obrera Rochense.
As, un grupo de afiliados, desacreditaron lo resuelto por
la F.O.R. y repartieron un manifiesto en ese sentido, firmado
por varios miembros, algunos que incluso haban estado en
la toma de decisin del paro sin oponerse al mismo, como por
ejemplo Balbino Pereyra, uno de los principales promotores del
cuestionamiento al paro. Dicho manifiesto sealaba que existe un
ncleo de asociados al Partido Socialista, y que desde hace tiempo
tratan de imponer esas ideas... (...) que el 28 de Noviembre
pasado se proclam la huelga invocando abusivamente el
nombre de esta Sociedad, puesto que se hizo sin conocimiento de
la mayora de los miembros de al comisin administrativa... En el

272 La Democracia (Rocha), 26 de Noviembre de 1920.


273 Justicia, 2 y 3 de Diciembre de 1920.
274 La Democracia, 30 de Noviembre de 1920.

136
Aproximacin al momento y el lugar

mismo manifiesto se convoc a una asamblea para expulsar a los


promotores del paro, en la que aparentemente habran llevado
a varias personas a votar que no estaban afiliadas para poder
ser mayora, denunciada esta situacin se retiraron tras un gran
tumulto desafilindose de la Federacin.
As, tras saltearse una semana, Trabajo volvi a salir a la
calle, anunciando los Nuevos Horizontes de la F.O.R.;
Nuestra organizacin, que hasta el momento slo ha tenido
una orientacin tmida y mal definida, aprestase a renovar sus aspira
ciones y hacer de sus principios el reflejo de la hora actual.
Como entidad obrera har, por as marcrselo sus nuevos ho
rizontes, obra netamente revolucionaria, luchando en el orden eco
nmico por suprimir la propiedad privada de los medios de produc
cin y de cambio, para que pasando a propiedad de la colectividad,
sto es; ponindose en manos de los productores, pueda haber ms
justicia en el reparto de la riqueza.
Y bien, lo declaramos sin vacilaciones, somos enemigo del
desastroso rgimen capitalista actual, queremos hacer honda divi
sin entre nuestra clase y la burguesa, queremos levantar muy alto
la conciencia proletaria enseando al obrero lo que vale por su labor
productiva para que con toda conciencia, con todo conocimiento exi
ja lo que merece por su fecundidad creadora.
Y para disipar alguna duda, manifestamos que dentro del te
rreno gremial, ser firme nuestra abstencin a militar en poltica ya
sea doctrinaria o tradicional.
Es de creer que los trabajadores verdaderamente revolucio
narios, han de unirse a nuestras filas para formar as la gran concien
cia proletaria. Trabajadores nuestro enemigo, la burguesa; nuestra
arma la solidaridad; Unidos triunfaremos275

275 Trabajo (Rocha) N16 1 de Enero de 1921.

137
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

En el mismo ejemplar de la renovada F.O.R. se incluye, un


artculo del conocido anarquista italiano Erico Malatesta.
El 18 de Diciembre se realiza una asamblea donde se
forma un nuevo comit de prensa integrado por; Luis Scuarcia,
Fliz Centani, Eugenio Pagola, Jose Cuartin, Mercenil Prieto,
Joaquin D. Valcarcel y Eusebio Otero. Director de Trabajo; Jose
Cuartn. Secretario de redaccin Eugenio Pagola, Administrador
Mecenil Prieto.
Y se conforma tambin una nueva Comisin Administra
tiva integrada por; Secretario general; Humberto Baranzano,
Secretario de actas; Feliz Centani, Tesorero, Aristides Gonzlez,
Biblioteca; Eugenio Pagola. Primer vocal Luis Scuarcla, segundo
Jose Cuartin, tercero J. Mercenil Prieto cuarto Pedro dAlesandro,
quinto Jose F. Ferreiro.
El paro general haba fracturado a la F.O.R., y sta cambia
de nombre en su siguiente asamblea por el de Sindicato General
de Trabajadores de Rocha, mientras que la fraccin ms refor-
mista sigui sesionando como F.O.R. siendo ese seguramente el
motivo el cambio de nombre.
A su vez aprueba una nueva declaracin de principios, en
la que menciona que hay dos clases antagnicas, la que acapara
y la que produce, sealando que para conquistar sus destinos lu
chara por elevar los niveles morales, econmico e intelectual, de
los trabajadores, y finaliza puntualizando El Sindicato General de
Trabajadores de Rocha ser neutral en las luchas polticas y estar
fuera y por encima de las luchas de tendencias, permaneciendo eso
s, siempre fiel a los altos principios del Comunismo integral.276
La onda expansiva de la revolucin rusa se haba exten
dido definitivamente en Rocha, sealando el rgano del novel
Sindicato General de Trabajadores que El proletariado de todos
los pases ha fijado su mirada hacia un nuevo horizonte hacia el

276 Trabajo (Rocha) N17 15 de Enero de 1921

138
Aproximacin al momento y el lugar

nuevo sol naciente, que en la plenitud de su esplendor asoma all


en el Oriente, en el Oriente de la hermana Rusia revolucionaria,
que con sus rayos de luz ilumina de allende aquende los mares, el
camino a seguir, el camino de nuestra emancipacin y de nuestra
completa libertad, el S.G.T. con una clara tendencia comunista
(aunque con participacin de anarquistas) manifiesta su inclina
cin hacia la III Internacional.

3.2. Diciembre 1920- Mayo 1921.

De la huelga general el movimiento haba salido sin duda


fortalecido, sin embargo el camino ascendente de la agitacin re
volucionaria comenzar a detenerse paulatinamente por la des
encadenacin de varios sucesos internacionales, regionales y lo
cales. El movimiento estaba viviendo quizs su mayor esplendor,
sin tener posibilidad de poder saberlo, en la mentalidad obrera
del momento, se avanzaba firmemente hacia la revolucin inter
nacional.

3.3. Salto, por la revolucin al comunismo.

Sin duda el conflicto ms importante del momento es la


victoria de los obreros en Constructores Navales luego de una
huelga de ms de un ao.
La organizacin del gremio de Lavanderas Unidas, por su
parte, parece verse decada, pero se logra un nuevo impulso de
la organizacin femenina con la formacin del Centro Cultural
Femenino, al que seala La Tierra se adhirieron ms de 50 mujeres.277
Para los editores de La Tierra, es decir de los militantes
de la F.O.L. y el centro Ciencia y Vida, la situacin es ms que
positiva y alentadora. La revolucin est prxima y el movimiento
277 La Tierra N15 (27-11-1920) y N18 (18-12-1920)

139
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

est en su mximo potencial. Si bien hay discrepancias sobre las


aplicaciones prcticas para llegar al comunismo y las enseanzas
que ofreca para algunos la revolucin rusa, el movimiento obrero
acta conjuntamente, tanto en Montevideo como el interior,
habindose partido ya en Rocha. En Buenos Aires incluso, un
ncleo fuerte de anarquistas promueve la fusin de las dos
F.O.R.A.s en una sola entidad. Esta situacin que est a punto de
desplomarse como una torre de naipes ofreca un potencial al
movimiento que no se conoca hasta el momento.
En ese clima La Tierra afirma;
LA RESURRECCION
Con la constitucin de las nuevas organizaciones obreras y la
reorganizacin de otras, el proletariado de Salto se incorpora de cuer
po entero a las batallas del trabajo contra el capitalismo explotador (...)
Las mujeres salteas acaban de constituir un centro femenino (...) los
albailes acaban de realizar una numerosa asamblea, dejando reorga
nizado el gremio de la construccin, otros gremios preparan la misma
obra y hasta los trabajadores del campo nos escriben y nos visitan pug
nando por encarrilarse en la misma senda de emancipacin.
(...) parece que se acercara la poca en que nadie querr ser
carnero ni patrn, dado el cariz sugerente que empiezan a tomar los
detalles de los problemas sociales que se desarrollan desde un corto
tiempo a esta fecha.
Un ao en conflicto llevan los constructores navales y nada
ms que tres obreros abandonaron las filas de la organizaron. Siete
meses hace que los carpinteros luchan contra la casa Rossi y solo un
federado abandono el campo de lucha. (...) La resurreccin de los pue
blos es un hecho, la hora del ltimo incorporado a la batalla ha de so
nar y el azar de las armas determinar el triunfo.278

278 La Tierra N18, 18 de Diciembre de1920

140
Aproximacin al momento y el lugar

Se producen huelgas de panaderos en la panadera La


Catalana, en Febrero y de los tipgrafos en Marzo, quienes de
claran el boicot a los diarios Tribuna Saltea y Diario Nuevo
por no aceptar el pliego de condiciones. A su vez los vendedores
de diarios se organizan como Sociedad de Resistencia y adhieren
al boicot a los mencionados diarios.279
Contina el conflicto de los Electricistas (adheridos a la
F.O.L.) por las represalias de la huelga general y tambin est en
huelga la seccin saltea de la Federacin Obrera Martima.280
Se registran algunos movimientos en el interior del depar
tamento, como la huelga en cuadrilla de campaa que reparan
las carreteras en las cuchillas de Salto al comenzar el ao 1921.281
O una correspondencia enviada desde Valentn Chico que
nos ilustran ciertas intenciones o potenciales de conflictividad rural.
DE VALENTIN CHICO
En este establecimiento el burgus pretende llevar una opre
sin que ya es imposible de soportar. Para que los compaeros se de
cuenta de la forma como explota Mrquez a los trabajadores, voy a
explicar algunos detalles.
Actualmente tiene en la estancia seis peones puesteros. Esta
gente gana un sueldo mensual que vara entre 8,9,10,11,14 y 15 pe
sos con la condicin de efectuar todo trabajo y trabajar todas las ho
ras que mande el patrn. Una verdadera irrisin!
ltimamente comprendiendo Mrquez, que era imposible
seguir as porque los peones y puesteros se iban apercibiendo de
la explotacin de que eran vctimas y no daban cumplimiento a sus
deseos, resolvi valerse de una estratagema que lo pinta de cuerpo

279 La Tierra N26 (12-02-1921) y N30 (12-03-1921)


280 La Tierra N19 (25-12-1920) y N21 (08-01-1921)
281 La Tierra N21 8 de Enero de 1921.

141
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

entero. Prometi que si le hacan 60 cargas de lea les pagara como


peones por da. Fu aceptado por el personal, pero ocurri que una
vez que estuvieron hechas las cargas, el seor no pag nada de lo
convenido.
Es una vulgar estafa que este parsito ha cometido con los
pobres e ignorantes criollos. Y pasa por un gran seor!
Algunos das despus y como tena que hacer una lnea de
alambrado les prometi a los peones pagarles aparte. Ellos conocien
do las intenciones del burgus les pidieron que les pagara el trabajo del
monte. Como se negara a cumplir en este compromiso, abandonaron
el trabajo siguindoles en los trabajos, el negro Anibal de Olivira.
Sera bueno que los trabajadores del campo tuvieran en
cuenta los abusos de este burgus y lo boycotearan.
Las ideas de rebelin entre los paisanos cada da se abren
paso. Es bueno que as sea.
Arriba compaeros del campo! A unirnos y a meterle
duro y parejo a los burgueses que nos esplotan [sic] y engaan!-
Corresponsal.282
Mientras por un lado, algunos vern un decaimiento en el
movimiento local en pleno verano, los conflictos ms largos que
se sostenan fueron coronados con una contundente victoria.
Por un lado el gremio de Chauffers se queja de la poca
participacin gremial instando a los trabajadores a abandonar el
caf y los prostbulos y activar gremialmente.283 Por si parte JLM
desde la pginas de La Tierra se queja de que En el Salto la orga-
nizacin obrera no existe puede decirse, por cuanto solo son dos o
tres los gremios, que por medio de una organizacin inteligente y
un levantado palmo a palmo, doblegando la soberbia capitalista,

282 La Tierra N28, 26 de Febrero de 1921.


283 La Tierra N23, 22 de Enero de 1921.

142
Aproximacin al momento y el lugar

un mejor bienestar econmico y merecido el respeto a que son


acreedores, pues la mayora de las entidades obreras estn des-
organizadas, por apata o indiferencia. Seala que quienes estn
al frente de las sociedades obreras hacen prevalecer su razona
miento y prctica que est reida con las buenas orientaciones
que debe imprimirse a los gremios es decir su carcter revolu
cionario. Tambin seala el autor de la nota, como otra causa de
decaimiento gremial, que aquellos que cobran mejores sueldos
obstaculizan la agitacin, no concurriendo a las asambleas.284
Por otro lado, los dos conflictos ms largos que se sostenan,
el de la carpintera Rossi y el de los Constructores Navales se solucio
naron a favor de los obreros despus de largos meses de lucha.
Los Carpinteros de Rossi lograron la aceptacin del siguien
te pliego;
1.-Despedir a todo el personal adventicio que trabaj durante la
huelga y trabajar con personal asociado a esta sociedad.
2 No aceptar control por no estar de acuerdo con nuestro trabajo
3 Jornal mnimo para oficial $2.40 y para medio oficial $1.80, re
servndose el derecho el oficial que se concepte de ms jornal por
apercibirlo en otros talleres.
4 Abonar una indemnizacin pro levantamiento de boicot y gastos de
manifiestos la cantidad de sesenta pesos oro
5 El pago se efectuar los sbados de cada quincena.285
El pliego es un total triunfo del temple revolucionario con que
los gremios estaban logrando imponerse a los patrones, hacindoles
cobrar una indemnizacin por los gastos ocurridos en la realizacin
del conflicto. Luego de dicha victoria, los panaderos logran reorgani
zarse y presentan pliegos en varias panaderas que son aceptados.286

284 La Tierra N24, 29 de Enero de 1921.


285 La Tierra N19, 25 de Diciembre de 1920.
286 La Tierra N33, 3 de Abril de 1921.

143
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Mayor logro an que el de la carpintera Rossi, era sin duda


el arreglo del largo conflicto de los Constructores Navales. Para los
efectos de intentar dar solucin al conflicto se traslado a Salto el
delegado de Buenos Aires, Fresia, quien propuso un pliego de con
diciones que consista en volver al trabajo en 15 das, por orden
de antigedad sin echar a los carneros que trabajaron durante la
huelga, y que solo se repararan barcos uruguayos. Pero la asam
blea de trabajadores de Salto lo rechaz por unanimidad por no
querer trabajar junto a los traidores a la huelga, ni con barcos boi
coteados por la Federacin O.M. Argentina.287
Un mes despus se logra el triunfo del movimiento, luego
de 16 meses de huelga la huelga ms larga que registra la histo-
ria proletaria dir La Tierra288 obtenindose el siguiente pliego;
1- reconocimiento de la federacin 2.- jornada de 44 hs, aumento de
10% 3.- se trabajaran todas las horas necesarias. 4.- reincorporacin
de todos los huelguistas reconocindosele su antigedad y sumn
dosele el tiempo de la huelga 5.- si se toma personal nuevo solo se
aceptara el federado 6.- la empresa puede castigar al que genere
desorden en el trabajo 7.-se readmite el personal suspendido.289
Como se ve, ms all de las concesiones hechas por los
obreros, hay un gran triunfo de la lucha obrera sobre la fuerza
ofrecida por los patrones. Sin embargo a pesar de ste buen mo
mento en materia de lucha social, la F.O.L. no logra realizar el
Congreso pospuesto para el mes de Febrero, sin dar explicaciones
al respecto.
La capacidad organizativa de la F.O.L. es fluctuante, algu
nos gremios se desorganizan y organizan constantemente. En
una reunin de la misma efectuada el 27 de enero sabemos que
concurrieron los Sastres Unidos, Oficios Varios, Unin de Picape

287 La Tierra N29, 6 de Marzo de 1921.


288 La Tierra N34, 11 de Abril de 1921.
289 La Tierra N35, 16 de Abril de 1921,

144
Aproximacin al momento y el lugar

dreros, Carpinteros, Chauffeurs y electricistas. Faltando solo el


gremio de metalrgicos siendo entonces stos los gremios que la
componan a esa fecha.
Como nuevo secretario general quedar Nicols Mayolino,
activo militante desde hace aos ya en Salto. Los tipgrafos, por
su parte, pedirn el apoyo efectivo de la F.O.L. para el boycot a
Diario Nuevo y Tribuna Saltea, sumndose a los boicots ya de
clarados a las sastreras y la usina elctrica.290
Uno de los principales problemas de la Federacin Obrera
Local que Juan Payr seala desde las pginas de La Tierra, es
la falta de infraestructura; La primera cosa que debe dotarse a
un Consejo Federal o centro de coordinacin es de una oficina con
todos sus tiles y materiales necesarios para que pueda atender si-
quiera los elementales servicios de correspondencia y control. (...)
y este es a mi juicio el mal principal de nuestra Federacin Obrera
Local. Hasta ahora se ha seguido un sistema rutinario y mezquino.
Para escribir una nota a los diez o doce gremios es necesario que
echen las espaldas sobre el papel, tales o cuales compaeros que
tienen que robar este tiempo a su descanso del trabajo. Natural-
mente que la correspondencia llevada as, mal escrita, sucia, lac-
nicamente redactada, hasta falta de sentido porque es necesario
hacerla rpidamente y a mano. Si es el archivo no puede llevarse
por esa razn y si se lleva es psimo y propenso a fraudes.291

Por la revolucin al comunismo.

ste sigue siendo el tema central y la hora de la revolucin


se siente cada vez ms prxima, varios sucesos violentos de tintes
revolucionarios se han producido en la Argentina que hacen pen
sar que la revolucin es cosa de cualquier momento, muy cerca

290 La Tierra N30 (12-03-1921) y N31 (19-03-1921)


291 La Tierra N30 12 de Marzo de 1921.

145
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

de Salto, en Villaguay, se produce una importante agitacin obre


ra y una fuerte represin. Uno de los militantes ms activos del
movimiento en Salto, es detenido en Villaguay durante esos das.
Desde las pginas de La Tierra el tema ser constante en
estas fechas y solo reproducimos algunos prrafos ilustrativos de
Febrero de 1921;
POR LA REVOLUCION AL COMUNISMO.
Tal es la voz unnime que se oye desde un mbito a otro del
mundo capitalista (...)
Y as lo vemos en nuestra regin poner con la guirnalda roja de
su sangre derramada, el broche de oro de los sacrificios ms audaces.
La Semana Roja de Enero, las explosiones insurreccionales de
Bartolom Mitre y dems pueblos en la zona agraria argentina, el
complot revolucionario de Marzo de 1920292, los gestos subversivos
de los gauchos chaqueos, el alzamiento de las poeanadas de Santa
Cruz, las batallas campales que sostienen nuestros hermanos de An
tofagasta son signos reveladores y elocuentes.
No hay da en que el telgrafo no se estremezca anunciando
al mundo un nuevo gesto del pueblo alzado en armas.293
Tenemos que ver en este contexto de agitacin en la Ar
gentina, a la F.O.R.A. Comunista cuyo Consejo Federal estaba in
tegrado por aquellos anarquistas afines a la dictadura del proleta
riado y que estaban prestos a realizar un congreso de unificacin
con la F.O.R.A. sindicalista, lo que poda verse como la aceleracin
de un potencial revolucionario.

292 Se refiere a la denominada por Doeswijk huelga de las bombas, donde supuesta
mente se descubre por parte de la polica un complot organizado en la Argentina
para hacer una explosiva huelga revolucionaria, quedan dudas an si el complot
fue descubierto por la polica o fomentado por la misma para desencadenar la
represin. (Doeswijk, 2013:143)
293 La Tierra N26 12 de Febrero de 1921.

146
Aproximacin al momento y el lugar

Pocas semanas despus se insista en el tema;


El viejo torren capitalista que la burguesa argentina pre
tende imbecilmente refaccionar se viene abajo. De todos los pechos
obreros surge un solo anhelo; Revolucin! Ya no es solamente en
las heladas regionales de Santa Cruz donde se alzan en armas los
trabajadores, es ahora tambin en el Neuqun y el Chubut, all dando
los bosques y los valles cordilleranos son ms dulces y apacibles. En
el Chaco el gobierno declara manifiestamente su impotencia porque
le resulta imposible contener la ventisca insurreccional de nuestros
bravos criollos. Ms de seis mil paisanos argentinos permanecen en
los bosques chaqueos a la espera de los acontecimientos. (...) En On
cativo y Los Leones -en la provincia de Crdoba- se producen choques
sangrientos. En Rosario, Santa F, provincia Buenos Aires, ocurre igual
cosa. (...) Como grano de arena que el huracn revolucionario y co
munista arrastra, uno a uno los trabajadores se alistan y preparan.294
Desde la celda de reclusin en Villaguay, Franco Hernndez
confirma a sus compaeros en Salto, la revolucin es inminente
no ya en Europa sino en Amrica!
No es que vamos a hablar al pueblo que nos escucha de
la ruina de los estados capitalistas y del alzamiento del proletariado
europeo. No, es de la revolucin social que ya se ha iniciado en Am
rica; de la insurreccin de los gauchos de la Argentina, de los rotos
de Chile, de los guasos de Per, Bolivia y Colombia, de los criollos
paraguayos y brasileos.(...) Por esto es que decimos a los trabaja
dores de la ciudad, a los criollos del campo, a los revolucionarios que
permanecen en una deprimente laxitud o absorbidos en polmicas
teolgicas, mientras el pueblo se lanza a la accin, que la revolucin
es un hecho y que es obra de hombres leales y responsables prepa

294 La Tierra N29, 6 de Marzo de 1921.

147
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

rarse. La sangre del pueblo no es vino ni agua para que se derrame


impunemente, y por lo tanto los que han proclamado en los tiempos
de calma la necesidad de la revolucin social hoy no deben desertar
de sus puestos. As lo exigen las actuales vsperas revolucionarias.295
La Tierra se hace eco de ese sentir sealando; Debemos
aqu en el Uruguay, tratar de despertar en los criollos ese espritu
revolucionario junto con los dems trabajadores a un fin La Revo-
lucin Social296Queremos la revolucin, pero ella no vendr sola.
Ser el producto del esfuerzo y de las ansias que por realizarla
pongan los trabajadores. Un medio eficaz para aproximarla est
en que los trabajadores se armen.297
El entusiasmo de los anarquistas por la revolucin rusa es
taba en su punto culmine, si bien ya desde un primer comienzo
existieron crticas a la misma por parte de stos, sea de el peri
dico El Hombre en Montevideo o desde La Obra en Buenos Aires,
a pesar de eso, todos los anarquistas ms all de las diferencias
participaban juntos tanto de la F.O.R.A. Comunista como de la
F.O.R.U., escriban tanto en La Protesta en Buenos Aires o Solida-
ridad en Montevideo.
As en Marzo de 1921 podemos leer en La Tierra frases
como con Lenin decimos que, en la presente revolucin el traba-
jador no tiene otra que perder q[sic] sus cadenas298, estas pala
bras son impensables pocos meses despus.
En relacin a las actividades pblicas realizadas desde el
movimiento obrero, no son muchas las conferencias que se regis
tran, pero debe sealarse la realizacin de tres pic nics obreros el
26 de diciembre, 27 de Febrero y el 3 de Abril los cuales describi
mos en el captulo de Cultura Obrera.
295 La Tierra N31, 19 de Marzo de 1921.
296 La Tierra N32, 26 de Marzo de 1921.
297 La Tierra N36, 23 de Abril de 1921.
298 La Tierra N32, 26 de Marzo de 1921.

148
Aproximacin al momento y el lugar

3.4. 1 de Mayo de 1921.

Si los primeros de mayo son un termmetro que nos per


miten ver el potencial del movimiento en cada ao, este primero
de mayo es especial, un montn de fuerzas que en escasos meses
se repelern a s mismas an actan conjuntamente y hacen un
importante despliegue de vida, agitacin y cultura obrera.
A partir de aqu un efecto domin dividir el movimiento
obrero definitivamente. Uno de las primeras fichas de domin de
rribadas ser la represin en Kronstdat en la Rusia revolucionaria .
En Montevideo, un mes despus se prohibir en una reu
nin de la F.O.R.U., en alusin al punto 6 del pacto Federal, la pro
paganda a favor de la dictadura, primer captulo del traumtico
proceso de divisin del movimiento obrero que transcurre desde
esa fecha hasta la fundacin de la Unin Sindical Uruguaya en
Setiembre de 1923. En Buenos Aires, ser el ejemplar de La Pro-
testa de este primero de mayo de 1921 el ltimo que contenga
artculos tanto a favor como en contra de la dictadura del proleta
riado. De hecho, en dicho ejemplar la relacin es de 12 artculos a
favor y 4 en contra. Luego de esa fecha jams se leer un artculo
a favor de la misma. El 20 de Agosto, sern expulsados del comit
federal de la F.O.R.A.-C los principales referentes anarquistas que
apoyan a dictadura del proletariado.
Pero este alud de divisiones, acusaciones e intrigas an no
ha sucedido.

a) Salto

Los das previos a la fecha se realizaron varias conferencias


pblicas; una se realiz el Domingo 17 convocada por la sociedad
de Oficios Varios, fue brindada por Etcheverry frente al corraln
municipal, sealando La Tierra que acudieron ms de 400

149
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

personas.299 El Jueves 21 a las 20:30 en la plaza 33 se realiz otra.300


El sbado 23 a las 20 horas en local de Constructores Navales se
dio otra donde habl la conocida militante de Concordia M.B.
Amestoy Carrera por centro femenino, y el domingo 24 otra en la
Plaza Libertad.301
Nuevamente la conmemoracin obrera parece haber con
gregado a unas dos mil personas ms o menos. En la manifestacin
relucan unas diez banderas de color rojo, algunos estandartes con
dibujos revolucionarios y algunas frases como; los acaparadores
deben estar en la crcel, por ser los principales culpables de la mi-
seria del pueblo. La cada de la burguesa es la vida del proletaria-
do La tierra para bien de todos la queremos libre El que quiera
comer debe producir, la misma iba encabezada por algunos nios,
luego las obreras del Centro Femenino, luego la Federacin y el
Comit pro 1 mayo y los dems gremios.
Al igual que los aos anteriores se cont con la presencia de
un delegado de la F.O.R.U. venido desde Montevideo, Daniel Do
mnguez (delegado del Sindicato de Artes Grficas), quien dio va
rias conferencias tanto en Salto como en la ciudad de San Antonio
y trajo muchos Solidaridad el peridico de la F.O.R.U. editado en
Montevideo y muchos folletos de propaganda que se repartieron
profusamente.
Varios fueron los oradores de la jornada y es bueno mencio
narlos; Herrera, Selser, Lpez, Santos, Hernndez, Corrales y Maria
del Carmen Margaroti.302 El delegado Domnguez de la F.O.R.U. que
iba realizar varias conferencias ms en la ciudad se volvi antes de
lo planificado a Montevideo arguyendo problemas de salud decep
cionando un tanto las expectativas de los trabajadores salteos.

299 La Tierra N36, 23 de Abril de 1921.


300 La Tierra N35, 16 de Abril de 1921.
301 La Tierra N36, 23 de Abril de 1921.
302 La Tierra N38, 7 de Mayo de 1921.

150
Aproximacin al momento y el lugar

El peridico La Tierra (que ya llegaba a su nmero 37) ofre


ci una edicin especial.
Es llamativo que adems de las referencias con amplias fo
tografas a Bakunin y Kropotkin, se insertan artculos de opinin
de Juan Llorca, Jos Torralvo y especialmente enviados para La
Tierra, Garca Thomas y Joaqun Hucha. Torralvo y Thomas son
dos de los mayores referentes de la corriente anarquista pro
dictadura del proletariado en la F.O.R.A.-C, quienes luego sern
denominados anarco-bolcheviques. Hucha y Llorca son dos
militantes histricos ya tanto de la F.O.R.A. como de la F.O.R.U.,
y que apoyan, ambos dos, la dictadura sindical ejercida por los
anarquistas luego de la revolucin, aqu se los llamar despecti
vamente anarco dictadores.
En dicho ejemplar se introduce una ya mencionada nota
histrica sobre el recorrido realizado por la F.O.L., y se mencio
na que hasta el momento componen la misma las siguientes
sociedades obreras; Sastres Unidos, Mecnicos Electricistas y
Anexos, Picapedreros y Obreros de Canteras, Chauffeurs Uni
dos, Carpinteros, Aserraderos y Anexos, Oficios Varios y Meta
lrgicos y Afines.
Entre los gremios autnomos de la F.O.L. saltea menciona
a los Constructores Navales, con sede en Buenos Aires por ser
una organizacin internacional. La seccin saltea de la Federa
cin Obrera Martima (seguramente de influencia socialista), Ti
pgrafos y anexos, Canillitas Unidos, Centro Femenino de Oficios
Varios, Obreros Albailes y Anexos, Conductores de Carros y Mo
zos de Cordel.
Pero el ser autnomos no los hace estar lejos de la F.O.L.,
de hecho los albailes pusieron todos sus fondos para la organi
zacin del 1 de Mayo y colaboran con 0,10 pesos por cotizante
para el peridico La Tierra.303

303 La Tierra N37, 1 de Mayo de 1921.

151
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

El balance del peridico obrero es ms que positivo y sin


duda, el movimiento se encuentra en su mejor momento, y no
recuperar este nivel de organizacin al menos en las siguientes
dos dcadas;
Despus de 4 aos de tenaz propaganda, de entusiasta es
fuerzo, la obra del proletariado salteo adquiere caracteres propios
y definidos, extendiendo su accin libertaria por encima de las fron
teras al punto que Salto se ha tornado la Meca de los luchadores del
litoral argentino uruguayo.
Contamos con: 1 Federacin Local, con 7 sindicatos adheridos,
7 gremios autnomos, 1 Centro de Estudios Sociales, 1 biblioteca pu
blica 1 cuadro filodramtico, 1 imprenta y 1 peridico de propaganda
obrera y anarquista que desparrama semanalmente sus mil generosas
hojas por toda la regin llevando hasta los lejanos fogones de nuestros
campesinos, el verbo de revolucin y comunismo. Obras son amores,
camaradas, a trabajar para que lo que hemos hecho sea multiplicado
prodigiosamente en bien de los ideales de justicios [sic] y reparacin
social que sembramos cariosamente a manos llenos.304

b) Paysand

El primero de Mayo se conmemor en Paysand con la


presencia principal de tres delegados, dos anarquistas; Salva
dor Cholbi, del gremio de albailes de Paysand, Etcheverry que
vino desde Salto y Martigliaro, quien vino desde Buenos aires a
pedido del Centro de Oficios Varios.
La amplia crnica publicada en La Tierra sealaba la pro-
funda corriente renovadora que en estos momentos, conmueve
al mundo, est fructificando tambin en este pueblo.305
304 La Tierra N37, 1 de Mayo de 1921.
305 La Tierra N38, 7 de Mayo de 1921.

152
Aproximacin al momento y el lugar

La noche anterior al 1 de Mayo, en la interseccin de las


calles Florida y Comercio, convocada por las organizaciones obre
ras se realiz una conferencia a la que no acudi demasiado pbli
co debido a la poca propaganda que se realiz.
A las 21 horas, el camarada Cholbi, declara abierto el acto,
despus de un breve, sencillo y elocuente discurso, en el que histo-
ri la forma en que se produjeron los trgicos hechos de Chicago,
incitando a los presentes, a mantener vvida la llama de fuego de
las rebeldas populares, a fin de tumbar el rgimen econmico y
poltico de la burguesa, que a todos nos oprime.
Enseguida ocupa la tribuna el ciudadano Martingliaro, ora-
dor comunista poltico, trado expresamente de Buenos Aires por el
Sindicato Oficios Varios de la localidad.
Los comentarios del cronista hacia Martigliaro son alta
mente despectivos sealando que defina la lucha de clases,
como una simple ambicin mezquina, hacindola radicar exclu-
sivamente en una lucha por la conquista del poder del Estado.
Habla de jefes y de fiestas obreras como el primero de Mayo en
una forma que repugna a todos.
Luego habl Etcheverry, recin llegado de Salto, quien dijo
que el 1 de Mayo es da de protesta, afirmacin y esperanza para
los trabajadores y no fiesta. Combati la dictadura de un partido, de
cualquier color que fuere. Hizo notar que si la dictadura es necesario
esgrimirla despus de la revolucin, ella debe ejercerla la clase traba-
jadora, por intermedio de sus organismos sindicales, pero nunca por
un partido, por ms comunista que sean sus declaraciones: pues este
ltimo nunca ser la expresin unnime ni real de la voluntad del pro-
letariado. Luego de hablar del potencial revolucionario de las masas
y de la necesidad de volcar todas las energas en las instituciones
obreras revolucionarias finaliz entre los ms frenticos aplausos y
vibrantes clamoreos de viva el comunismo anrquico.306

306 Idem.

153
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

El 1 de Mayo, a las 17hs se realiz una nueva conferencia en


la explanada del puerto, donde fueron unas 600 personas segn La
Tierra, abri el acto Cholbi, quien habl del alcance y significado de
la protesta obrera y los crmenes de la clase capitalista. Luego ha
bl Martigliano y Etcheverry quienes defendieron apasionadamen
te sus posiciones. No sabemos que orientacin respaldaba Cholbi
dentro del anarquismo pero lo que s vemos es que los socialistas
parecen haber perdido protagonismo convertidos en comunistas o
aislados por los revolucionarios.
A la noche se realiz el acto ms importante de todos, don
de se fueron agrupando, pasadas las ocho de la noche las columnas
obreras en el local de Oficios Varios;
A las 20 y 30 ms o menos, llegaron en columna cerrada los
obreros organizados en la F.O.M. quienes traan una amplia ban-
dera roja. A las 21 se organiz la columna definitiva. Dos enormes
pabellones rojos desplegados por un ligero viento, precedan como
dos lenguas de fuego a la manifestacin. Carteles alusivos al acto
y estandartes con leyendas apropiadas distribuidas entre lo macizo
de la columna, daban un matiz soberbio, a ese mar humano.
La crnica cuenta no menos de 1500 personas y cuenta que
hablaron los mismos oradores que en las jornadas anteriores. Lue
go se regres en manifestacin hacia el local sindical.
Este primero de Mayo no ha sido mas que un paso hacia la
emancipacin obrera, que no nos debe detener un solo momento
sin continuar las actividades de la marcha.307

c) Rocha.

Desde las pginas de Trabajo de Rocha se haba solicitado


la presencia del delegado anarquista Celestino Gonzlez, secreta
rio de la FORU. Finalmente fue por la F.O.R.U., el tambin anar

307 Idem.

154
Aproximacin al momento y el lugar

quista Leopoldo Sala, ms acorde a la lnea poltica que parece


predominar en el Sindicato General de Trabajadores. L. Sala es un
anarquista pro dictadura obrera y que un ao ms tarde estar
ingresando a las filas del Partido Comunista.308
Sala realiz una conferencia en el teatro Artesana a las
20:30 horas, comentar Trabajo;
Dicha conferencia fue un verdadero xito.- Ante un pbli
co de ms de doscientas personas hablaron los compaeros Prieto,
Scuarsia y Sala -este ltimo delegado de la F.O.R.U.- quien disert por
espacio de una hora, con la aprobacin unnime de todos los pre
sentes. -Tambin habl el compaero Gonzlez Acosta delegado de
los estudiantes.
Clausur el acto el compaero Cuartn, quien invit al pblico
a ir en manifestacin hasta el local del Sindicato, y as se hizo dentro
del mayor entusiasmo, cantndose en el trayecto Hijos del Pueblo
y vivndose a la Revolucin Rusa y a la solidaridad proletaria. En re
sumen, una expendida jornada, si se tiene en cuenta la pobreza del
ambiente.309

308 Al adherirse al Partido Comunista Leopoldo Sala manifest Relatos sobre supues-
tos fusilamientos de anarquistas, hacen algunas publicaciones de este sector, lo que
trae como resultado la aparicin del purismo. Mi repudio hacia estos anarquistas
contrarrevolucionarios, es terminante. Partidario de la dictadura del proletariado,
y de la disciplina, contino adherido a la fraccin que sostiene estos principios. Y al
producirse el ao pasado la fundacin del Partido Comunista, luego de limpiarlo de
los elementos aburguesados y politiqueros de alma, todas mis simpatas estn con
el nuevo partido. L. Sala Por qu me adhiero al Partido Comunista. Justicia, 21
de Abril de 1922.
309 Trabajo (Rocha) N25, 15 de Mayo de 1921.

155
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

4. La divisin obrera.
4.1. Las 21 Condiciones.

Entre el 19 de Julio y el 20 de Agosto de 1920 se realiz


en Mosc el II Congreso de la Internacional Comunista. En l se
especificaron algunas cuestiones que haban quedado imprecisas
en el Primer Congreso del ao anterior. Entre ellas se formularon
las 21 condiciones para ingresar en la Internacional.
El tema de la adhesin a la Internacional Comunista vena
debatindose en el seno del Partido Socialista uruguayo. En el 8
Congreso del P.S., ambas tendencias -una lnea socialista clsica
defendida por Emilio Frugoni y Liber Troitio principalmente, y
otra internacionalista por Celestino Mibelli y Eugenio Gmez- se
haban enfrentado. All se resolvi por amplia mayora la adhe
sin a la III Internacional.
Las 21 condiciones fueron publicadas por Justicia el 8 de
Octubre de 1920. Y como las mismas sealaban se realiz un con
greso extraordinario para discutirlas y aprobarlas.310
La 7ma condicin sealaba Los partidos deseosos de
pertenecer a la Internacional Comunista deben reconocer la ne-
cesidad de una ruptura total y definitiva con el reformismo y la
poltica centrista y preconizar esta ruptura entre los miembros de
las organizaciones. (...) La Internacional Comunista exige impera-
tivamente y sin discusin esta ruptura que debe ser consumada
en el menor plazo posible.311
El resultado del Congreso extraordinario fue la aceptacin
de las condiciones, el cambio de nombre a Partido Comunista
(condicin N17), y se expulsaron del mismo a todos los que dis
crepaban con las tendencias revolucionarias.

310 Sobre este tema ver Lpez DAlessandro, 1992:177-245


311 Los Cuatro Primeros Congresos de la Internacional Comunista, Ediciones digitales
Izquierda Revolucionaria. Mayo 2008, pg 131.

156
Aproximacin al momento y el lugar

La conformacin del Partido Comunista tuvo una impor


tante influencia en el devenir del movimiento obrero. Afianzados
en la prestigiosa Federacin Obrera Martima, los comunistas
desde su rgano Justicia incentivarn constantemente la divisin
en el campo anarquista atrayendo a los anarquistas pro dictadura
obrera y atacando a los anarquistas ortodoxos.
El mismo II Congreso de la Internacional comunista haba
sealado el Congreso considera un deber de todos los camara-
das el sostener por todos los medios la transicin de todos los ele-
mentos proletarios de masas del anarquismo a la III Internacional.
El Congreso considera que el xito de la accin de los par-
tidos verdaderamente comunistas debe ser apreciado entre otras
cosas en la medida en que hayan logrado atraer a todos los ele-
mentos verdaderamente proletarios del anarquismo.312
Ya vimos como en Rocha, esa depuracin se haba dado
espontneamente, antes incluso de que se conocieran dichas re
soluciones.
Lo cierto es que los comunistas realizaron un denotado es
fuerzo por atraer a la fraccin anarquista que simpatizaba con la
revolucin rusa precipitando as los acontecimientos.
En un artculo publicado en Justicia titulado los anarquis-
tas y nosotros se poda leer la verdad escondida hasta hoy por
apariencias y espejismos es que no podemos ser jams enemigos,
quienes juntos luchamos -sea como sea- contra la clase que de-
tenta todos los privilegios.313 Meses ms adelante afirmaran que
las diferencias con los anarquistas eran producto de las luchas del
pasado, pues el Partido Comunista operaba en el terreno de la
tctica anarquista.314

312 Los Cuatro..., 2008:148


313 Justicia, 7 de Octubre de 1920.
314 Justicia, 28 de agosto de 1921 en Lpez DAlessandro, s/f:2.

157
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

4.2 La rebelin de Kronstdat.


Otro hecho internacional que influy enormemente, en
este caso en el campo anarquista, mayoritario en el movimiento
obrero local, fue la rebelin de los marinos de kronstdat en la
Rusia post revolucionaria.
Como ya hemos visto, en un primer momento los anar
quistas vieron con enorme simpata la Revolucin Rusa. Es in
teresante para comprender la postura de los anarquistas a nivel
internacional las memorias de Emma Goldman, quien junto a su
compaero Alexander Berkmann de nacionalidad rusa, fueron de
portados desde los Estados Unidos hacia Rusia por anarquistas pe
ligrosos a final del ao 1920. Llegaron a Rusia llenos de expectativa
y admiracin; Rusia Sovitica! Tierra sagrada, pueblo mgico!.
Has llegado a simbolizar la esperanza del hombre, t sola ests
destinada a redimir a la humanidad. He venido a servirte, amada
matushka. Acgeme en tu seno, djame entregarme a ti, mezclar
mi sangre con la tuya, encontrar un lugar en la heroica lucha y dar
hasta el infinito para saciar tus necesidades! exclamaba en sus
memorias Emma Goldman al pisar suelo ruso.315
En Rusia fueron recibidos por el gobierno comunista como
hroes revolucionarios y se le ofrecieron, en un principio, condicio
nes de vida muy superiores al resto de la poblacin local.
A poco tiempo de estar en Rusia los compaeros anarquistas
les alertaron que las cosas no eran lo que parecan, que los
anarquistas estaban siendo duramente reprimidos y que los
comunistas estaban matando la revolucin. Emma no daba crdito
a lo que escuchaba; Pens que los hombres de aquella sala lgubre
tenan que estar locos para poder contar tales historias absurdas
e imposibles, tenan que ser malvados para poder condenar a
los comunistas por crmenes que deban saber eran provocados
315 Goldman, Emma. Viviendo mi vida. Tomo II. Fundacin Anselmo Lorenzo, Ma
drid. 1995. Pg 241.

158
Aproximacin al momento y el lugar

Trabajo N14 11, de Noviembre de 1920

159
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

por la cuadrilla contrarrevolucionaria, el bloqueo y los generales


blancos que atacaban la Revolucin. Proclam mi conviccin ante la
asamblea, pero mi voz se ahog en medio de las risas y las burlas.
Me acusaron categricamente de estar deliberadamente ciega. Esa
es la clase de mordaza que han usado contigo, me gritaron. T y
Berkman habis cado en la trampa, os lo habis tragado enterito!316
La rebelin de Krondsat de Marzo de 1921 fue la gota que
derram el vaso, y el ltimo indicio que necesitaban los anarquis
tas a nivel internacional para convencerse de que la revolucin y
la dictadura comunista eran cosas opuestas, al menos dentro del
marco interpretativo del anarquismo.
Los rebeldes, que haban sido clave en el triunfo de la re
volucin por sus enrgicos combates, y entre los que se conta
ban numerosos comunistas desencantados con la evolucin del
gobierno, exigieron la aplicacin de un programa de reformas
que recordaba las reivindicaciones de corte anarcosindicalista de
1917; eleccin libre de los soviets, inclusin de los partidos so
cialistas y anarquistas en el poder, libertad econmica para cam
pesinos y obreros, fin del poder de los partidos y del monopolio
bolchevique del poder, disolucin de los nuevos organismos bu
rocrticos surgidos durante la guerra y restauracin de los dere
chos civiles para la clase trabajadora.
El 5 de marzo de 1921 el gobierno comunista se propo
ne atacar Kronstdat, Alexander Berkman escriba en su diario de
anotaciones La ciudad estaba al borde del pnico. (...) Muchos
bolcheviques se negaban a creer que se haba aprobado esa re-
solucin. Era una cosa muy monstruosa atacar con las armas al
orgullo y la gloria de la Revolucin rusa, como Trotski bautiz a los
marineros de Kronstdat.317

316 Goldman, 1995:249


317 Berkman, Alexander. El mito bolchevique. La Malatesta/Tierra de Fuego. Madrid.
2013. Pgs. 260-261.

160
Aproximacin al momento y el lugar

Berkman, Goldmann y dos anarquistas deportados ms


enviaron una carta ese mismo da a Zinoviev, Presidente del So
viet de Trabajo y Defensa de Petrogrado. En ella sealan que El
fro y el hambre han producido el descontento, y la ausencia de la
ms mnima oportunidad para discutir y criticar han forzado a los
obreros marineros a airear sus quejas en pblico. Los anarquistas
firmantes318, conscientes de su prestigio internacional en el movi
miento revolucionario advertirn El uso de la fuerza por parte del
gobierno de los obreros y campesinos en contra de los trabajadores
y marineros tendr un efecto desmoralizador sobre el movimiento
revolucionario internacional y conllevar un incalculable perjuicio
para la revolucin social Los firmantes proponen una comisin de
cinco miembros, entre ellos dos anarquistas para que se dirijan a
Kronstadt a buscar una solucin por medios pacficos.
Kronsdat fue ahogada en sangre. En el dcimo congreso
del Partido Comunista, celebrado entre el 8 y el 16 de Marzo de
1921, Lenin seal que haba que librar una guerra ms implaca
ble an contra la pequea burguesa incluidos los elementos
anarquistas, y que haba que combatir las inclinaciones anarco
sindicalistas que se haban desarrollado adentro del mismo Parti
do Comunista. La represin al anarquismo en Petrogrado conoci
uno de sus peores momentos.
Luego de estos sucesos, sumados a la feroz epopeya de Nstor
Makho y el pueblo ucraniano, la opinin del movimiento anarquista
internacional era unnime, no se poda defender la anarqua y la
dictadura comunista, eran sendas opuestas. En 1921 se publica en
Italia Dittadura e rivoluzione de Luigi Fabbri, el primer estudio
crtico a la Revolucin Rusa publicado desde el bando revolucionario.
Para 1923 el libro ya est al espaol traducido por Diego Abad de
Santilln e impreso y distribuido en el Ro de la Plata.319

318 Emma Goldman, Alexander Berkman, Perrkus y Petrovski


319 Los primeros textos anarquistas cuestionando los sucesos rusos son anteriores, el

161
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Manuel Azaretto, obrero grfico afiliado a la F.O.R.U., relatar


como se vivi este momento en Montevideo;
Los llamados urgentes de Solidaridad a nuestros presos!
traspasaron clandestinamente las fronteras de Rusia, y volvieron a
la realidad a los anarquistas del mundo entero. Ya no era posible
ser meros espectadores de esa farsa grotesca y criminal, so pena de
aparecer como cmplice del crimen de lesa libertad de pensamiento
y de accin que cometan los gobernantes comunistas.
Y las voces se alzaron, potentes y anatemizadoras. Sebastin
Faure, Wilken, en Francia; Malatesta, Borghi en Italia; Shapiro, Berk
man y Goldman (deportados de Rusia), y Rocker, en Alemania; Pes
taa, Mella, Urales, en Espaa; Pacheco, Biagiotti, en la Argentina;
Tato Lorenzo, Noriega, Dominguez, Staffa, aqu y otros elementos de
prestigio de todos los pases denunciaron los crmenes.320

4.3. El Hombre y La Batalla.

Hay dos trabajos claves para entender el proceso de


divisin del anarquismo y el movimiento obrero uruguayo
en torno al impacto de la revolucin rusa, uno es el de Lpez

libro de Luis Fabbri, Dictadura y revolucin, aunque se escribi entre 1919 y 1920,
no apareci en italiano hasta 1921 y su edicin en espaol se public en Argentina
en 1923. Anteriormente a ste uno de los primeros folletos antibolcheviques fue
Soviet o dictadura?, escrito por Rudolf Rocker, que no apareci en castellano
hasta 1920, publicado por Argonauta en Argentina. Bolchevismo y anarquismo, del
mismo autor, escrito en 1921, vio la luz en Argentina al ao siguiente. Hasta 1923
no se public en alemn la obra de Pedro Archinof: Historia del movimiento mac-
knovista. El mismo ao, se publica en Estados Unidos Mi desilusin en Rusia, de
Emma Goldman. En tanto que El mito bolchevique, de Alejandro Berkman, no se
ofreci al pblico hasta 1925. (Ver Mara Magdalena Garrido Las relaciones entre
Espaa y la Unin Sovitica a travs de las Asociaciones de Amistad en el siglo XX
Tesis, Universidad de Murcia, 2006. http://www.tdx.cat/handle/10803/10891)
320 Azartto, Manuel El cenculo de Judas, Montevideo, 1923.

162
Aproximacin al momento y el lugar

de Alessandro321, bastante conocido por la historiografa local.


Y otro es la tesis de maestra de George Fellipe Zeidan Vilela
Araujo titulada O impacto da Revolucao Russa no movimiento
anarquista uruguaio. (1917-1921) de la Universidad Federal
de Minas Gerais. En ella hace un recorrido intensivo sobre las
pginas de dos publicaciones emblemticas del anarquismo
uruguayo. El Hombre, dirigida por el anarquista individualista
Jos Tato Lorenzo, editada entre 1916 y 1924. Y La Batalla,
dirigida por la aguerrida propagandista crata Mara Collazo, que
se edit entre 1915 y 1928. En un comienzo ambas publicaciones
eran hermanas y se realizaban actividades conjuntas para
el financiamiento de ambas. A su vez, la Federacin Obrera
Regional Uruguaya, que no tena rgano propio de difusin
contaba con sus pginas para los continuos informes y debates,
siendo particularmente importante la labor de La Batalla para la
reorganizacin de la Federacin Obrera en 1916 y su acelerada
radicalizacin.
Si bien juntas en la lucha social, ambas publicaciones
diferan en los puntos de vista donde poner el nfasis de la
lucha, El Hombre consideraba sustancial la educacin para la
transformacin social y el cambio de valores en las relaciones
humanas, La Batalla, en cambio consideraba, que era
imprescindible que los anarquistas trabajasen por la revolucin,
destruyendo el actual estado de cosas para llegar a la anarqua.
En un comienzo ambas propuestas, no tenan porque
ser antagnicas sino que deban complementarse. Para los
anarquistas de La Batalla la revolucin llevaba inevitablemente
a la anarqua, para los de El Hombre, eso no era necesariamente
as, la anarqua ms que el resultado de determinaciones
externas, sera progresivo, una evolucin constante que no se

321 Lpez DAlessandro, F. La fundacin del partido comunista y la divisin del anar-
quismo Vintn, Montevideo, 1992.

163
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

lograra solo con hacer desaparecer las penurias materiales.322


Araujo seala como ya desde la revolucin rusa de
febrero de 1917 la discusin en torno a la revolucin constitua
el verdadero ncleo de la praxis libertaria. El advenimiento de
la revolucin de Febrero hizo que las polmicas se intensificaran
cada vez ms y cambiasen de perspectiva, ya que la realidad haba
pasado a intervenir agudamente en las discusiones tericas, la
tan discutida Revolucin pareca finalmente haberse iniciado.323
Si los vientos de Febrero alborotaron la prensa crata, los
vendavales de octubre desataron la tormenta. Para La Batalla
la hora de la anarqua haba triunfado en Rusia. Pero para El
Hombre, los anarquistas no podan estar del lado de ningn
gobierno por ms avanzado que fuese. Estas opiniones le valieron
el cuestionamiento a Jos Tato Lorenzo por parte de los Centros
de Estudios Sociales Villa Muoz y Arroyo Seco de los cuales
El Hombre era vocero, y el cual dej de serlo al poco tiempo.
La Batalla, por su parte lanz una campaa para extender
el tiraje y llevar el peridico a todas las ciudades del interior del
pas para que todos sepan lo que ocurra en Rusia.324
Para fines de 1918 la postura de La Batalla de considerar
el maximalismo ruso y el anarquismo como sinnimos era
inaceptable para los anarquistas de El Hombre que publicaban
extensos artculos sealando sus diferencias. Con el correr de
los meses sealar Araujo Ambos peridicos venan subiendo
el tono de las crticas mutuas, acusndose, recprocamente, de
revolucionarios de papel, oportunistas o inconsecuentes con
el ideal anarquista.325

322 Araujo, 2012:58.


323 Araujo, 2012:73 traduccin propia.
324 Araujo, 2012:105, El Hombre N61 (22-12-1917), El Hombre N62 (29-12-1917) y
La Batalla N53 (30-12-1917)
325 Araujo, 2012:133

164
Aproximacin al momento y el lugar

A comienzos de 1921 el enfrentamiento era total, para


El Hombre Los anarquistas transformados en dictadores, son
trnsfugas de las ideas, enemigos reales de la anarqua y como
tales hay que tratarlos. No lo decimos nosotros, as lo afirman y
hacen los anarquistas, italianos, espaoles, belgas, suizos, portu-
gueses, etc., y como ellos vamos a proceder. Abajo los dictado-
res! Guerra a los confusionistas!.326
La Batalla por su parte peda a los trabajadores que aban
donasen a los anarquistas acobardados que en pleno momen-
to revolucionario mundial pretendan eternizarse en una acti-
tud terica.327

4.4. El artculo 6 del Pacto Federal.

En el ao 1964 se conforma en Montevideo la Convencin


Nacional de Trabajadores, bajo las banderas de la unidad obrera.
El tema de la unidad obrera, ser una temtica que estar en el
orden del da del movimiento sindical uruguayo durante dcadas y
debemos buscar su origen en las divisiones que aqu se producen.
La F.O.R.U., hegemnica hasta stos aos, si bien breg
siempre por la unin de los trabajadores, no fue partidario nun
ca de la unidad total de los mismos sin exclusiones ms all de
ideologas, sino muy por el contrario, y muy influenciada por la
F.O.R.A., se breg por la unidad de una Federacin Obrera revolu
cionaria que se encamine hacia la anarqua. Fue ste debate en
tre federalistas y sindicalistas el que dio hegemona anarquis
ta a la F.O.R.U. en su tercer congreso de 1911, en que se modific
el art 6, quedando as a partir de 1911;
Nuestra organizacin puramente econmica, es distinta y
opuesta a la de todos los partidos polticos, puesto que as como

326 El Hombre N221, 19-02-1921


327 La Batalla N190 (07-01-1921) en Araujo:2012:146

165
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

ellos se organizan para la conquista del poder estatal, nosotros


nos organizamos para destruir todas las instituciones burguesas
y polticas hasta llegar a establecer en su lugar una Federacin
Libre de productores libres.328
Las simpatas de los anarquistas por la revolucin rusa
hace tiempo que vena matizndose, pero estas fechas marcan
un punto de inflexin, los rumores sobre la represin a los anar
quistas ucranianos, la represin de los marinos de Kronstdat, los
anarquistas presos, los fusilamientos estaban definiendo las po
siciones de un bando u otro.
Varios de los anarquistas ms destacados de la propagan
da obrera montevideana, como ser Mara Collazo, Juan Llorca,
Joaqun Hucha, Antonio Marzovillo, Roberto Cotelo, Ricardo
Carril, Adrian Troitio, entre varios otros, predican en las tribu
nas obreras en nombre de la F.O.R.U. y las distintas sociedades
obreras la necesidad de ir hacia una dictadura proletaria como
momento transitorio luego de realizada la revolucin para enca
minarse definitivamente a la anarqua.
La divisin se consum en las asambleas de delegados de
la F.O.R.U. del mes de Junio. El Consejo Federal, haba realizado
una reunin junto a varios de los oradores de la Federacin, y
haban resuelto que la propaganda a favor de la dictadura del
proletariado iba en contra del art. 6 del pacto Federal.
El gremio de Picapedreros de Montevideo, envi una
nota al Consejo Federal solicitando su renuncia, por haberse
tomado resoluciones que no le correspondan, habiendo cita
do para ello a una reunin con personas ajenas a la Federa
cin (entre ellas Jos Tato Lorenzo), por haber permanecido ya
bastante tiempo en el Consejo y cobrar dinero por el trabajo
realizado.

328 Federacin Obrera Regional Uruguaya. Acuerdos del 3er Congreso Obrero en el
Uruguay. Montevideo 1919. Tip. Morales Hnos.

166
Aproximacin al momento y el lugar

El tema se discuti en la asamblea de del 8 de junio, con


42 delegados presentes, entre ellos Juan Negri, en representa
cin de la F.O.L. Saltea, quien preside las sesiones. Son los de
legados del Calzado (Robaina), Sastres (Molina), y Picapedreros
(Tronconi), quienes reprochan la actitud del Consejo Federal de
prohibir la propaganda por la dictadura proletaria, y exigen se
discuta este tema en la asamblea. Segn el informe publicado en
Solidaridad rgano de la F.O.R.U. se encuentra la F.O.R.U. frente
a un momento tal vez el ms lgido de la lucha, cuando una agru-
pacin hasta hace poco bastante allegada a este Consejo, se pone
frente a la organizacin con el fin preconcebido de hacer desviar
los principios del Pacto Federal, dicha agrupacin es claramente
la editora del peridico La Batalla.
El debate se redime votando, ganando la mocin de de
fender la postura del consejo Federal, con 21 votos (entre ellos la
Fed. Ob. Saltea), 2 votos en contra (Picapedreros de Montevideo
y Oficios Varios de Florida), y 6 abstenciones. Sin embargo, 19 gre
mios ya se haban retirado debido a que se vot pasadas las 4 de
maana, entre ellos varios de los que defendan la dictadura (sas
tres, electricistas, panaderos), esto hace que el conflicto est lejos
de haberse resuelto. La Sociedad de Picapedreros y Graniteros de
Montevideo, se separ de la Federacin, inicindose as el proceso
de ruptura. El Sindicato nico de la Aguja y el Sindicato de Artes
Grficas, los secundaron momentos despus. La Revolucin Rusa
se atravesaba como una lanza por medio del movimiento obrero
local, el Sindicato de Artes Grficas mencion que los sindicatos
[quieren] entrar de lleno en el terreno de las realizaciones, de los
hechos prcticos y eficientes. Y por eso dirigen su visual hacia esa
gigantesca ola Revolucionaria que en Rusia (...) impone, por la ra-
zn o por la fuerza, la supremaca de la clase proletaria. (...) El di-
lema es sencillo y es de acero: o con Rusia libre o con la Liga de las
Naciones; con la dictadura proletaria o continuar con la dictadura

167
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

burguesa329 Esto provoc un efecto domin y en pocos meses va


rios gremios se separaron de la Federacin; Sociedad de Picape
dreros de La Paz, y todas las secciones adheridas a la Federacin
Sudamericana de Picapedreros, Obreros electricistas, Marmoleros
y Anexos, Pedregulleros Unidos de La Paz, Federacin de los Frigo
rficos, Conductores de Vehculos de Carga y Yeseros.330
En una carta enviada a la Federacin Sudamericana de Pica
pedreros y que fuese aprobada por la Unin Picapedreros de Salto se
afirmaba que ...la asamblea entiende que al frente de la F.O.R.U. no
pueden ni deben estar quienes no son partidarios de la dictadura que
ejerce el proletariado ruso contra los ex capitalistas y sus lacayos.331
Rotas las relaciones con La Batalla, y no publicndose ms
Solidaridad, los anarquistas ortodoxos (o puritas segn el mote
despectivo de sus adversarios) editan en Montevideo desde el 5
de Agosto del 1921 el peridico Trabajo, en l sealan;
Las asambleas gremiales se han convertido en avisperos. Las
frases hirientes vuelan de boca en boca y, no pocas veces, los puos
se levantan airados y amenazadores con contra de nuestros mismos
hermanos.
Si del terreno gremial pasamos al terreno de las ideas, el
espectculo no resulta menos edificante. (...) las discusiones se re
suelven, en muchos casos a base de insultos, cuando n a base de
trompadas, y los camaradas se hayan distanciados, divididos (...) los
compaeros viejos en la propaganda recuerdan muchas divergencias
habido en nuestro seno (...) entre organizadores y anti-organizado
res, entre individualistas y comunistas; pero de seguro nunca se ha
llegado a los extremos a que hemos llegado hoy.332

329 El Obrero Grfico, Agosto de 1921, citado por Lpez, 1992:250-


330 Lpez, 1992:287
331 Justicia, 14 de Setiembre de 1921.
332 Trabajo (Montevideo) N8, 23 de Setiembre de 1921.

168
Aproximacin al momento y el lugar

La F.O.R.U. haba programado un importante Congreso


para octubre con un interesante temario333 donde se discu
tiran todos los asuntos en polmica y se llegara un acuer
do. Los gremios disidentes resuelven no acudir al congreso
constituyendo el Comit Pro Unidad Proletaria, y ante esto,
la F.O.R.U. posterga el Congreso. La F.O.R.U. pretende dar una
seal de acercamiento y el Consejo Federal renuncia aprobn
dose otro por los sindicatos adheridos que tampoco conforma
a los disidentes por ser todos los miembros del nuevo Con
sejo contrarios a la propaganda a favor de la dictadura pro
letaria. La F.O.R.U. propuso en Diciembre el reintegro de los
disidentes, disolvindose el C.P.U.P. y nombrando un Comit
Pro-Congreso.
Dicha reunin se realiz el 13 de Diciembre, nuevamen
te las discusiones se alargaron hasta las cuatro de la maana y
cuando se realiz la denominacin del nuevo Consejo Federal
muchos gremios se haban retirado y ste qued constituido
solo por miembros a favor de la dictadura proletaria. Este Fe
deral no fue reconocido por los gremios federalistas, quienes
retiraron los tiles y sellos del local del Centro Internacional e
instalaron la secretaria en el local del sindicato del automvil.
Segn Azaretto perteneciente a la F.O.R.U. ortodoxa
queran apoderarse de la F.O.R.U. para imprimirle una orien-
tacin dictatorial y poltica.334
Entre las graves acusaciones que se realizaban, los anar
quistas ortodoxos vean las manos del Partido Comunista de
trs de muchas de las intrigas, como tambin acusaban a los
dictadores de inventar gremios, para poder inclinar la balan
za a su favor, y tambin de que muchos delegados ejercan su
opinin personal y no la de la asamblea de su gremio.

333 Publicado en Trabajo N8, 23 de Setiembre de 1921.


334 Azaretto, Manuel. El cenculo de Judas 1923 Pg.8

169
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Los anarquistas pro dictadura obrera, con su nuevo Con


sejo realizaron una reunin el 7 de enero donde se nombr como
secretario general el anarquista pro-dictadura y luego comunis
ta Leopoldo Sala.
Los entendimientos no se producen tras reiteradas instan
cias, el sindicato de la Madera presenta una mocin para que se
realice un acuerdo, convocndose a un nuevo Consejo Federal
elegido por cotizante (donde los puritas u ortodoxos eran mayo
ra), la propuesta aceptada en una primera instancia por el Con
sejo Federal que sesionaba en el Centro Internacional (los pro
dictadura obrera) fue considerada como una cobarda por los
anarquistas pro dictadura ms intransigentes como Ricardo Carril.
Entonces los anarquistas pro dictadura nombraron un nuevo Con
sejo Federal afn y la F.O.R.U. purita no lo reconoce y expulsa al
gremio del Calzado por pedir se entreguen los tiles al otro Con
sejo Federal. A partir de entonces, se centraliza la organizacin no
autorizndose la comunicacin entre los gremios ni la solidaridad
con los no adheridos sin autorizacin del Consejo Federal. Y se re
suelve que no se aceptar ninguna propuesta de unin, sino que
los sindicatos que lo deseen deben aceptar el Pacto Federal de la
F.O.R.U. con su artculo 6 hasta un nuevo congreso.
Esta resolucin fue tomada de muy mala manera por el
Consejo Federal del Centro Internacional; los elementos divi-
sionistas estn desenmascarados. Ellos son saboteadores de la
unin y de la revolucin obrera. Guerra implacable a esa mala
familia!335 se lea en el rgano de los obreros sastres. As el 22
de Marzo se constituir el Comit Pro Unidad Obrera (C.P.U.O.),
al que ingresar la Federacin Obrera Martima poco tiempo des
pus, ingresando as el Partido Comunista en las filas del movi
miento obrero mayoritario.

335 Despertar, Marzo de 1922, citado por Lpez, 1992:261

170
Aproximacin al momento y el lugar

4.5. Buenos Aires y los anarco bolcheviques.

Como vimos la divisin obrera en Montevideo fue un es


piral acelerado que precipitndose en junio de 1921 se consolida
en Marzo de 1922 definitivamente. Meses antes, como tambin
vimos, los socialistas se desmembraron siendo ampliamente ma
yoritaria la fraccin comunista revolucionaria.
En Buenos Aires, hasta 1919 los anarquistas parecan apo
yar sustancialmente la revolucin rusa, recin en La Obra de Abril
de 1919 se leen las primeras crticas a la dictadura comunista pu
blicndose una conferencia de Rodolfo Gonzlez Pacheco. Desde
diciembre de ese mismo ao, Gonalvez y Ferrer, importantes
anarquistas pro bolcheviques, estarn al frente de la F.O.R.A. Vi
mos, tambin, como tras el Congreso Extraordinario se cambi el
adjetivo V Congreso por Comunista, a la vez que se adjunt
un dibujo de una oz y un martillo en su sello.
El peridico La Antorcha, dirigido por el mencionado Pa
checo y Antill, comenz a polemizar con la dictadura comunista
desde sus primeras ediciones en 1921. El diario La Protesta lo
hizo algn tiempo despus, conformndose un importante blo
que de anarquistas opuestos a dicha prdica. Vimos tambin,
como en mayo de 1921 aparecen los ltimos artculos a favor de
la dictadura proletaria en las pginas de La Protesta.
Andreas Doeswijk en su trabajo sobre los anarco-bolche-
viques rioplatenses explica la situacin;
Los anarco sindicalistas y la F.O.R.A. quintista comenzaran a
llevar adelante un programa de unidad sindical. A la cabeza de esa lu
cha se encontraba el militante agrarista Jos Vidal Mata y los portua
rios, Sebastin Ferrer y Antonio Gonalvez, y no hay duda de que se
estaba luchando por una central muy semejante a la Confederacin
Nacional del Trabajo (CNT) de Espaa, con la intencin de abando

171
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

nar el modelo sindical forista (exclusivamente anarquista) practicado


desde comienzos del siglo y tan criticado por Luigi Fabbri, Neno Vas
co, Malatesta y otros.
En cuanto a la ltima etapa del debate, desde mayo y agosto
de 1921, comenz a abrirse una nueva perspectiva cuando La Protes
ta y la F.O.R.A.-C (se le haba agregado la sigla Comunista a la F.O.R.A.
del V Congreso), los anarquistas realizan una verdadera purga de
anarco-dictadores, no tanto para defender la libertad contra la dic
tadura, sino para impedir la fusin de ambas centrales sindicales
y preservar el modelo sindical anarco-comunista. Fue a partir de
una reunin del 20 de Agosto de 1921 del Consejo Federal de la
F.O.R.A.-C que La Protesta cambi de rumbo y comenz su debate
contra la Revolucin Rusa, los bolcheviques del anarquismo y los
comunistas. Desde esa fecha, los anarco-bolcheviques se dirigieron
a la F.O.R.A. Sindicalista y, en marzo de 1922, seran los principales
protagonistas de la creacin de la Unin Sindical Argentina (USA),
la que reuni gremios sindicalistas, anarquistas y autnomos. Las
caractersticas principales de la USA fueron la prctica del mode
lo gremial anarco-sindical el estilo de la COB Brasilera y la CNT
espaola.336
As el 20 de Agosto de 1921 en una reunin de delegados
de la F.O.R.A.-C se descalific a Jess Mara Suarez, Sebastan
Ferrer, Antonio A. Gonalvez, Julio R. Barcos, Alejandro Alba, En
rique Garca Thomas y Nemesio Canale. Todos importantes re
ferentes gremiales y alineados en la tendencia pro dictadura. Se
los acusa de haber conspirado a espaldas de la Federacin con
delegados rusos, junto a otras cuestiones, como ser la delegacin
de Tom Barker para participar como delegado de la F.O.R.A. en la
fundacin de la sindical roja en Mosc.

336 Doeswijk, 2013:61-62

172
Aproximacin al momento y el lugar

4.6. El polvorn argentino.

Ms all de la profunda divisin que se produca en el cam


po gremial, el interior argentino seguir siendo un campo seco a
punto de arder. Los acontecimientos se seguirn precipitando y
la cercana con el litoral uruguayo de algunos conflictos se hace
sentir.
En 1921 la ola roja sacudir literalmente la Argentina, ya
habamos visto la imponente huelga de enero de 1919 (conocida
como semana trgica) ahogada en sangre.
En 1921 la regin de Entre Ros a escasos quilmetros de
Salto, se ver sacudida por graves sucesos.
El 9 de Marzo de 1920 se constitua la Federacin Obrera De
partamental de Gualeguaych adherida a la FORA del IX Congreso,
producindose varios conflictos obreros de resultados favorables
para stos, elevando los niveles de confrontacin entre obreros y
patrones. Sealan Jorge Gilbert y Elisa Balsechi en Voces del sin
dicalismo entrerriano; Una muestra de la capacidad de presin
de las organizaciones, qued evidenciada cuando el intendente de
Gualguaych solicitara entrevistarse con un delegado de la FORA
[IX], para consultar si los carros federados podan trasladar harina
oficial hasta las panaderas en conflicto.337
En las huelgas que se produjeron se destac el uso de boi
cots como en el caso de los marinos de ferry-boats, lo que desenca
den la detencin y procesamiento de huelguistas y su reemplazo
por personal de la armada y subprefectura. Cuando los trabajado
res presos eran conducidos a Concepcin del Uruguay, los ferrovia
rios de Basavilbao detuvieron el tren y obligaron a un juez de aque
lla ciudad a trasladarse a dicha localidad para iniciar el sumario. El

337 Gilbert, O. y Balsechi, E. Voces del Sindicalismo Entrerriano del Zorrito, Buenos
Aires, 2008. Pg. 48. Agradezco enormemente a Jorge O. Gilberte el envo de un
ejemplar de dicho libro y a Horacio Silva por contactarme con dicho autor.

173
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

gobierno debi revisar las medidas, y liberarlos tras comunicar que


debido a una informacin errnea, se haba confundido su afilia
cin, e ignorando su carcter de martimos.338 Para Gibert y Basle
chi 1920 fue el ao durante el cual ms crecieron en nmero los
gremios, en un proceso liderado por la Federacin de Gualguaych,
como uno de los ncleos principales de accin gremial.339
El 9 de Febrero de 1921 se producen violentos incidentes
con heridos de ambos bandos entre trabajadores y policas. Dos
das ms tarde la violencia se desatar en Villaguay, Entre Ros.
La organizacin en Villaguay tambin vena en aumento y
la burguesa armada a travs de la Liga Patritica junto a la polica
estaba alarmada. Las reuniones obreras son prohibidas, Axentzoff
secretario de la sociedad obrera fue apresado y torturado.
El 11 de Febrero se realizara un mitin en Villaguay para
protestar por los sucesos.
Mientras haca uso de la palabra el secretario de la Fe-
deracin Obrera Comarcal, un trabajador tipgrafo de Villaguay,
de apellido Cisneros, el senador Ligista Alberto Montiel trep a la
tribuna para interrumpirlo. A partir de ese momento, se escucha-
ron numerosos disparos de armas de fuego, los que provocaron
la dispersin de los manifestantes, y dejaron como saldo mas de
treinta heridos y cinco muertos, entre ellos el hijo del senador340
Franco Hernndez el activo militante de Salto, se encontra
ba rumbo a Buenos Aires y particip directamente de los hechos,
publicando un amplio testimonio en sucesivos ejemplares de
La Tierra.341
Cuenta Hernndez que Cisneros inici el acto pronuncia-
do las primera palabras que fueron ahogadas con tres descargas

338 Gilbert, O. y Balsechi, E., 2008:49


339 Idem.
340 Gilbert, O. y Balsechi, E., 2008:59
341 Ver La Tierra N33, N34, N35, N36 y N39 de 1921. Lo que v en Villaguay

174
Aproximacin al momento y el lugar

cerradas de revolvers, carabinas y otras armas. Las descargas


surgieron de un centenar de personas, militares y particulares
que estaban detrs de la tribuna. Como es de imaginarse, aque-
llo produjo gran sorpresa entre la muchedumbre que empez a
desgranarse a todo viento, bajo un tiroteo graneado que sigui
a las descargas durando media hora mas o menos, empezando
despus las capturas de obreros.342
Uno de los detenidos tras los sucesos fue el mismo Franco
Hernndez, quien permanecer detenido unos 40 das.
En Gualeguaych, tambin provincia de Entre Ros, el 1
de Mayo tambin evoca, adems de la fecha obrera, el pronun
ciamiento que en 1851 realizara el gobernador Justo Jos de Ur
quiza contra Juan Manuel Rosas. Con dicha excusa la Liga Patriota
solicit permiso para conmemorar dicho pronunciamiento ese 1
de Mayo.
Se realiz un importante asado y se escucharon discursos
de Manuel Carls y otros brigadistas que exaltaron el patriotismo
de los presentes en contra de aquellos que pretendan cambiar
la bandera por un sucio trapo rojo343y a favor del trabajo libre
(obreros rompe huelgas armados por la patronal).
Finalizado el acto, algunos liguistas armados se dirigieron
hacia la Plaza Independencia donde la Federacin Obrera realiza
ba su manifestacin.
Cuando la manifestacin obrera parti, la polica intent
contener a los liguistas vindose ampliamente desbordada mu
riendo incluso un sargento, entre otros seis muertos y una trein
tena de heridos.
Ayer Villaguay, hoy Gualguaych, maana cualquier otro
pueblo ser el teatro de las fechoras liguistas y cabe preguntar
a los obreros:

342 La Tierra N35, 16 de Abril de 1921.


343 Gilbert, O. y Balsechi, E., 2008:63

175
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Hasta cuando soportaremos tantas sangras? Se pregun


taba La Tierra.344
Pero los movimientos ms grandes fueron sin duda los de
La Forestal y La Patagonia.
Abad de Santilln contaba en sus memorias; La Forestal
era un poderoso feudo ingls, dedicado a la explotacin de los
bosques milenarios de quebracho La empresa domin y explot
los territorios indgenas y su mano de obra bajo un rgimen de
explotacin opresiva bajo ley suprema de la polica de los propios
establecimientos pagando mseros salarios muchas veces con
vales en vez de dinero. Los anarquistas organizaron a los traba
jadores imprimiendo incluso un peridico agitativo Aa Membuy
(hijos de puta) en idioma guaran. La huelga se extendi como
reguedero de plvora. El ejrcito procedi violentamente en
marzo-abril de 1921, contra huelguistas, como si se tratase de
someter un pas enemigo. El saldo fue un conjunto de muertos y
heridos y una buena cantidad de presos.345
En la Patagonia la Sociedad de Resistencia de Ro Galle
gos realiz una formidable huelga de peones que paraliz toda la
zona imponindose con un contundente triunfo. La liga patronal
agrupada en la Sociedad Rural inici una violenta campaa de es
carmiento a los ex huelguistas lo que desemboc en una nueva
huelga, la cual tom ribetes insurreccionales con toma de estan
cias y rehenes. La Patagonia se convirti en un autntico campo
de batalla, el ejrcito a cargo del teniente coronel Varela fusil a
todos los huelguistas que pudieron capturar aunque se entrega
ran pacficamente, se habl de unos 1500 fusilados.346
Abad de Santilln, en su historia de la F.O.R.A sealaba;

344 La Tierra N38, 7 de Mayo de 1921.


345 Abad de Santilln, Memorias 1897-1936 Planeta, Barcelona, 1977. Pg. 64.
346 La compleja batalla que se dio en la Patagonia argentina fue prolijamente estudia
da por Osvaldo Bayer en La Patagonia Rebelde, Cuatro tomos.

176
Aproximacin al momento y el lugar

Fueron grandes movimientos en 1920 y 1921 los de los Fe


rrocarriles del Estado, los de la Patagonia, los de La Forestal.
En todos se ha luchado bravamente. En los Ferrocarriles del
Estado el abuso de la fuerza de la organizacin llev fatalmente en las
huelgas repetidas, y no siempre bien cimentadas, a un descalabro. En
la Patagonia y en La Forestal se luch con las armas en la mano contra
la polica y contra el ejrcito. Tanto en el lejano Sur como en el Chaco
santafecino, esos movimientos dejaron una huella imborrable. Sobr
herosmo, disposicin combativa, falt quizs una mejor organizacin
tcnica de la defensa y de la ofensiva de los trabajadores. Comentan
do ese perodo, decamos el primero de mayo de 1921:
Si es cierto que ninguna entidad poltica ni revolucionaria
puede compararse en potencia con los anarquistas, tambin es cier
to que no estamos ms cerca de la revolucin que ayer, porque las
fuerzas no estn dispuestas en orden de batalla, como para accionar
solidaria y mancomunadamente contra nuestros enemigos, lo que
asegurara el triunfo al proletariado.347

4.7. Junio a Diciembre, la calma que precede la tormenta.

a) Salto

Mientras en ambas mrgenes del plata se resquebrajaba


la mancomunin de esfuerzos entre los militantes y las distintas
interpretaciones sobre las formas prcticas de aplicar la revolu
cin. En la ciudad de Salto, hasta el mes de diciembre, se vivir
con cierta calma.
Despus del 1 de Mayo se realizan algunas conferencias
junto al delegado de la F.O.R.U. Domnguez. Mario O. Herrera, por

347 Abad de Santilln, 2005:268

177
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

su parte se traslad a Paysand a realizar varias conferencias y


Hernndez lo har en Concordia, siendo Salto un centro de agi
tacin para los anarquistas que apoya las localidades cercanas.
Se intensific el vnculo con Concordia, y se invita a Hernndez a
participar en un acto conjunto contra la represin en Guelguayc
h. En ocasin de un pic nic en Concordia se contrataron lanchas
para trasladarse a bajos costos.348
Pero las aguas se haban dividido y eran tiempos de defini
ciones ideolgicas. Desde la sociedad de Oficios Varios se plantea
la necesidad de realizar un Congreso Obrero Local, sealando por
ejemplo que la F.O.L. no tiene estatutos, desde luego debe ci-
mentarse la organizacin en una buena carta orgnica o pacto fe-
derativo que contemple adems, de las necesidades de los nuevos
tiempos, el rgimen interno de la misma q[sic] es donde precisa-
mente ha de descansar su buena gestin funcional Combocando
[sic] un Consejo Obrero Local, seria, factible hacer una poderosa
organizacin y dotarla de la agilidad y robustez que necesita.349
En Junio se realiza una huelga de albailes y carpinteros
juntos, que si bien se sostiene hasta Setiembre, ser derrotada350.
Se mantienen los boicots obreros a la sastrera XX de Setiem-
bre de Squillace Soffo y La Siriana de Azuri Hermanos y los diarios
Tribuna Saltea y Diario Nuevo.351 En Setiembre en ocasin de un
boicot de los picapedreros a las canteras de Pascual Nessi se llama
a emplear todos los medios que esten a nuestro alcance, a fin de
hacerle sentir el peso de nuestras fuerzas organzidas.352
Los ecos de la divisin obrera comenzaban a sentirse, a
fines de Julio y principios de Agosto la F.O.L. parece desorgani

348 La Tierra N38, 7 de Mayo de 1921.


349 La Tierra N40, 21 de Mayo de 1921.
350 La Tierra N44 (18-06-1921) y N58 (24-09-1921)
351 La Tierra N51, 6 de Agosto de 1921.
352 La Tierra N56, 10 de Setiembre de 1921.

178
Aproximacin al momento y el lugar

zarse, quizs por el decaimiento del movimiento gremial en ge


neral, por ejemplo, en la asamblea a realizarse el 25 de Julio para
designar secretario (ya que haca un mes que no haba), y otras
funciones solo acudieron los gremios de choferes y oficios varios.
El 8 de Agosto por fin se pudo sesionar, pudindose vislumbrar la
irreversible divisin del movimiento gremial que se produce en
la regin. El delegado de los picapedreros Adolfo Plaza pide se in
vestigue a La Tierra por algunas declaraciones publicadas contra
l. El secretario de La Tierra se encontraba presente (lo que nos
muestra tambin la natural integracin de las distintas agrupa
ciones sociales dentro de la Federacin Obrera) y seal que el
artculo estaba firmado as que no corresponda responsabilizar
a la redaccin. Se cito a Mario Herrera, autor del mismo para la
reunin siguiente del da 15.
El problema se haba iniciado cuando Plaza, al frente del
gremio de Picapedreros, envi una nota al resto de los gremios
solicitando que La Tierra deje de ser administrado por una agru
pacin y pase a ser el rgano de la F.O.L. Al igual que en Montevi
deo donde fueron los Picapedreros los primeros en desmarcarse
de la F.O.R.U., ser Plaza en Salto el puntal de de la lucha contra
el modelo gremial forista o finalista en nombre de la unidad
proletaria. A la siguiente asamblea, hubo una asistencia comple
ta de delegados, junto a una barra de obreros, y donde se vio
signos de resurgimiento gremial. La mocin de Plaza no fue acep
tada por ningn gremio, ya que se consider el peridico cumpla
su funcin perfectamente, y se le reproch a Plaza, que en oca
sin de salir a la luz La Tierra, el edit El Sindicalista con una
prdica contraria a la de La Tierra e incluso no pudo sostenerlo
ms all de algunos ejemplares, mientras que La Tierra haca un
ao que se edita semanalmente.353

353 La Tierra N50 (30-07-1921), N52 (13-08-1921), N53 (20-08-1921) y N54 (27-
08-1921)

179
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

La desocupacin parece estar pegando fuerte en las filas


de la organizacin obrera y como manera de contrarrestarla se
convoca a una reunin para organizar a los desocupados en octu
bre en el local de la F.O.L.354 Los Metalrgicos y Afines hace ya un
ao que no se renen y se propone incluso donar sus fondos al
peridico La Tierra.355
De la F.O.L. no tendremos noticias hasta diciembre.
Sin embargo s hubo una importante cantidad de conferen
cias y pic nics.
Se realiz un bazar rifa el 4 de Junio con discursos y reci
taciones.356 Hubo una serie de funciones teatrales a beneficio de
los artistas compaeros que se encontraban en huelga. Con la
representacin de obras anarquistas como Los Mrtires de Dante
Silva y Vboras de Rodolfo Gonzlez Pacheco.357
El 10 de Julio se realiza una conferencia en el barrio Laza
retto con la participacin de los principales oradores locales; An
selmo Gamarra disert sobre Las asociaciones libres y lo que
persigue la burguesa, Cantalicio Santos sobre la misin de la
prensa obrera, Franco Hernndez sobre los indios, su pasado,
su presente y su porvenir y Mario O. Herrera lo hizo acerca de La
revolucin obrera en la actualidad.358
En Agosto se realizaron conferencias en la Plaza Flores
(Pueblo Nuevo) y el local de Constructores Navales, organizada
por la sociedad de Oficios Varios, donde hablan desde Argenti
na; Maria B. Amestoy Carraras, Robello y Nieves Cisneros junto a
otros obreros de Salto.359

354 La Tierra N62 ,22 de Octubre de 1921.


355 La Tierra N68, 3 de Diciembre de 1921.
356 La Tierra N42, 4 de Junio de 1921.
357 Idem.
358 La Tierra N45 (25-06-1921) y N46 (02-07-1921)
359 La Tierra N52, 13 de Agosto de 1921.

180
Aproximacin al momento y el lugar

Pero ya en octubre se notar el decaimiento obrero, por


ejemplo, en el mitin convocado por el Centro Popular Florencio
Snchez en la plaza 33 el 2 de Octubre, donde habl Jose M. Et
cheverry, a pesar del lindo da la concurrencia parece haber sido
muy poca.360
Un poco antes, en Setiembre comenzaba la temporada de
pic-nics, el primero fue organizado por el Centro Popular Floren
cio Snchez a beneficio de este Centro y del Comit pro impren
ta La Tierra, en el paraje llamado Los Algarrobos el Domingo 11
de Setiembre, para el que se vendieron unas 138 entradas y el 23
de Octubre se realiz a beneficio del comit pro-imprenta en el
cual se vendieron 98 entradas.361
En estos meses entonces, adems de producirse un decai
miento de la actividad se comienzan a dar dos discusiones funda
mentales. La primera y ms importante, es la postura ante el maxi
malismo ruso, y la aprobacin o no de la dictadura proletaria como
paso necesario luego de la revolucin. Y la segunda tendr que ver
con el sistema de organizacin gremial. El punto es, si sigue siendo
vlido el sistema federal por oficio, o debe pasarse al sistema por
industria, organizados por sindicato nico que agrupe todos los
oficios de una determinada actividad industrial. El cambio se argu
mentaba, en la necesidad de adaptarse al cambio en los sistemas
productivos del capital e implicaba una cierta centralizacin. Era el
modelo de la central anarco sindicalista norteamericana IWW (Indus
trial Workers of the World-Trabajadores Industriales del Mundo-).
En ambos temas, en este primer momento se adopt una
postura intermedia, publicndose artculos sobre ambas posicio
nes, como lo hacan el resto de los peridicos hasta hace algunos
meses atrs.

360 La Tierra N59 (01-10-1921) y N60 (08-10-1921)


361 La Tierra N56 (10-09-1921), N59 (01-10-1921), N61 (15-10-1921) y N63 (29-
10-1921)

181
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Sindicalismo Industrial o por Oficio.

La polmica consista en la conveniencia o no de cambiar


el viejo sistema de sindicatos por oficios, tal como estuvo orga
nizada siempre tanto la F.O.R.U. y la F.O.R.A., o adoptar el Sindi
cato por Industria. El sindicato por industria se presentaba como
una respuesta a los cambios planteados por el sistema industrial
capitalista donde los pequeos talleres se suplantaban por gran
des industrias en donde coexistan obreros de distintos oficios.
Se agrupaban en un Sindicato nico, varios oficios y el funcio
namiento se centralizaba en una junta central que actuaba por
encima de cada uno de esos oficios. El referente de ese sistema
eran los I.W.W. de Estados Unidos, pero el sistema comenzaba a
discutirse en todos los mbitos obreros y anarquistas del mundo.
En Montevideo, el peridico anarquista El Hombre, firme oposi
tor a la dictadura proletaria recomendaba ampliamente su imple
mentacin. En la F.O.R.U. se resuelve que ambos sistemas pueden
ser vlidos, conformndose en 1922 el Sindicato nico del Auto
mvil, que agrupando siete oficios, ser el puntal de la F.O.R.U.
durante todo el resto de su existencia. En el bando pro-dictadura,
ser el Sindicato nico de la Aguja el principal referente.
En Buenos Aires, la F.O.R.A., desprecia el sistema industrial,
y la influencia se hace sentir en Salto. Antonio Vidal, delegado
de la misma en Salto para el Congreso Comarcal que se realizar
en 1922, publicar algunos textos contra el sistema industrial. El
tema ser recurrente en las pginas de La Tierra;
Los anarquistas tenemos para la lucha actual, en todos sus
aspectos, y para el porvenir o sea para la post revolucin mtodos y
conceptos esencialmente propios y que son, entindase bien, abso
lutamente contrarios a todo plan que no se base en ellos (...)
En efecto el sindicato industrial considerado sociolgicamen
te, se basa en un concepto de Marx sobre la lucha de clases orgni

182
Aproximacin al momento y el lugar

camente, tiene un rgimen federo-unitario o centralizado; adminis


trativamente es burocrtico; como tctica o mtodo de lucha actual,
es pesado e impotente para imprimirle a los movimientos obreros
carcter revolucionario o insurreccional que anhelamos los anarquis
tas, y en cuanto se refiere a su accin futura despus de la descom
posicin [sic] definitiva de la actual sociedad, es totalmente contraria
a los principios comunistas anrquicos, por que crea un mecanismo
de estado y se adapta al sistema tcnico que caracteriza a la produc
cin capitalista.(...)
Orgnicamente, el sindicalismo industrial es un rgimen
federal unitario o sea centralizado, complejo en su mecanismo, en
pugna con nuestro concepto del federalismo libertario o descentrali
zado. (...) anula por completo la libre iniciativa supeditando la accin
al contralor de los concejos centrales.362

La Dictadura Proletaria.

En Agosto de 1921 mientras en Montevideo se discuta, la


circular del gremio de Picapedreros exigiendo la renuncia del Con
sejo Federal por prohibir la propaganda de la dictadura proletaria,
desde el Centro Femenino de Salto se enva una nota a la F.O.R.U.
que dice Sobre la circular N62 acord -la asamblea- aconsejar
a los compaeros de Montevideo que dejen a un lado esos los
de dictadura o antidictadura, que en fondo tienden a malquistar
o dividir a los trabajadores y que slo traten de unir a todos los
que quieran preparar la revolucin emancipadora. Lo dems es
cuestin secundaria, que la resolveremos despus de triunfar.363
En este sentido parece haber cierta expectativa hacia el
Congreso Extraordinario proyectado por la F.O.R.U. en Montevi
362 La Tierra N93, 27 de Mayo de 1922.
363 Trabajo (Montevideo), N2, 12 de Agosto de 1921.

183
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

deo, informando La Tierra sobre los compaeros de Montevi-


deo, que con marcado empeo quieren acelerar el advenimien-
to del congreso depurador que ha de dar por tierra con todo lo
corrompido.364
Incluso se inicia una encuesta en las pginas de La Tierra
acerca de que orientacin debe tomar la Federacin en dicho
congreso. Habindose publicado ocho respuestas. Siete de ellas
sern de obreros del Interior, en su mayora de Salto. En todas
ellas la respuesta es muy similar y describe las aspiraciones de
los principales referentes que animan al movimiento obrero local.
Franco Hernndez, conocido agitador del Salto seala
que la F.O.R.U. debe pronunciarse a favor del comunismo anr
quico. A. Suarez propone que los fondos de la F.O.R.U. deben
destinarse a la compra de armas para realizar la revolucin.
A. Gamarra, conocido militante de La Tierra, propone que
la F.O.R.U. se defina por el comunismo anrquico y se conformen
grupos secretos para comprar armas y financiar el pertrecha
miento. Catalicio Santos, tambin conocido militante del Salto,
tambin propone armarse, pero agrega la necesidad de discutir
el sistema de organizacin industrial y el sindicato nico. Jos
Bessio, otro conocido militante salteo se pronuncia por el co
munismo anrquico, al igual que M.A. quien adems propone
que haya un comit de relaciones de sindicatos del interior con
delegados en gira.
Juan J. Colo desde Riachuelo (Colonia?) seala que la
F.O.R.U. debe armarse y declararse por el comunismo anarquista.
Y por ltimo, el viejo militante de los obreros panaderos de
Montevideo, Joaqun Hucha propone que la F.O.R.U. se posicione
por el comunismo anrquico, pero que reconozca tambin la
necesidad de la dictadura proletaria, ya que esta dictadura
transitoria es indispensable sino queremos eternizarnos en

364 La Tierra N44, 18 de Junio de 1921.

184
Aproximacin al momento y el lugar

teorizar y al mismo tiempo continuar cargando las cadenas de


la esclavitud.365
La ambigedad de la posicin de los referentes obreros del
Salto en relacin a la dictadura proletaria, en este periodo es tal
que llegan afirmar cuestiones como que quizs debera imple
mentarse la dictadura en lugares donde la organizacin obrera no
es fuerte y en otros no, as lo afirmaban en su edicin del 2 de Ju
lio; Si una vez triunfante la revolucin hay necesidad de implan-
tar una especie de dictadura en Paysand, por ejemplo, para que
los reaccionarios no puedan atentar contra el orden establecido,
se hace hasta consolidar el nuevo orden de cosas; y, sin perjuicio
de que en Salto, de acuerdo con la mayor capacidad del pueblo,
reine el comunismo anrquico en todas sus manifestaciones.366
Pero ms all de la ambigedad existente, hay quizs una
intencionalidad de promover que cada zona pudiese ser autogo
bernada segn sus fuerzas, por los comunistas bajo una dictadura
proletaria en Paysand y bajo el comunismo anrquico orientado
por los anarquistas en Salto.
Mientras la divisin se consolida en Montevideo, a nivel
internacional el asunto se precipita, desde Buenos Aires llega
una circular firmada por unas 20 organizaciones anarquistas ar
gentinas, (entre ellas La Protesta y La Antorcha) y apoyada por
la misma F.O.R.A.-C donde se condena abiertamente la dictadu
ra rusa por la comprobada represin a los anarquistas presos
constatada pblicamente por reconocidos anarquistas como
A. Berkman y como a Schapiro y Emma Goldman.367
La discusin gira enrgicamente en la temtica sobre la
dictadura proletaria donde el peridico mantiene su posicin

365 La Tierra N45 (25-06-1921), N46 (02-07-1921), N48 (16-07-1921), N49 (23-07-
1921) y N50 (30-07-1921)
366 La Tierra N46, 9 de Julio de 1921. Dictadura o Anarqua
367 La Tierra N56, 10 de Setiembre de 1921.

185
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

intermedia y sobre el estancamiento gremial que parece vivirse,


proponindose el sistema industrial como una alternativa para
salir del mismo.
Mientras, las situacin internacional sigue siendo explosi
va, si ante la huelga general de Buenos Aires en Mayo se hizo
un llamado desde La Tierra a armarse para estar preparados, los
sucesos de Jacinto Arauz (Argentina) no dejarn dudas, donde los
obreros detenidos en la comisara realizaron un espectacular tiro
teo dentro de la misma. La Tierra, en su edicin nmero 60 acon
sejaba; CADA COMPAERO, cada grupo debe saber con anticipa-
cin en los lugares que debe atacar en la prxima revolucin.No
hay que dormirse compaeros!.368
El suceso ms trascendente de stos meses en la ciudad de
Salto, es la gira de propaganda del secretario general de la F.O.M.
de Montevideo con la intencin de reorganizar la seccin saltea.
El conocido referente del Partido Comunista Eugenio Gmez, lle
gado el jueves 15 de diciembre. La crnica del diario comunista
Justicia es elocuente;
La gira del compaero Gmez
El jueves lleg al Salto el compaero Gmez, delegado de nues
tra Federacin. Esa misma noche se realiz asamblea general de traba
jadores martimos y portuarios, a la cual concurri un buen nmero de
compaeros. Adems, llenaban el local trabajadores de otros gremios,
especialmente de la construccin naval. Ante este pblico, el compa
ero Gmez di una conferencia extensa sobre la lucha sindical y sus
finalidades, conferencia que mereci el apoyo caluroso de la asamblea.
No falt, sin embargo un anarquista purita. Que pidiera permiso para
hacer una aclaracin, la que le fue permitida. El hombre no hizo ms
que despacharse contra Rusia y la dictadura proletaria, y lo hizo con
toda mala fe. El compaero Gmez le replic, y luego ofreci la tribuna

368 La Tierra N60, 8 de Octubre de 1921.

186
Aproximacin al momento y el lugar

de seccin para cuando quisiera venir a dar una conferencia sobre el


tema, manifestndole que la F.O.M. proceda siempre as, pues le gus
taba dilucidar bien los temas, al contrario de lo que hacan ellos que
cerraban sus tribunas a los oradores que no pensaban como ellos.369
Despus de este entre dicho, que el pblico desaprob un
nimemente, por el proceder de los que lo provocaron segn es su
costumbre en sta, los martimos y portuarios entraron a deliberar
acerca de la mejor manera de hacer prosperar la organizacin, acor
dndose para ello recrudecer la propaganda, lanzar un extenso ma
nifiesto y realizar nueva asamblea.370

b) Paysand.

El arraigo de los comunistas en Paysand segua preocu


pando a los anarquistas, quienes relatan; en una crnica anterior
decamos que el proletariados de sta, estaba despertando del
marasmo negativo, en que hasta hace poco vivi; sometido cie-
gamente al tutelaje de los mas diversos y pintorescos caudillismos
polticos, que medraban protegidos por la psima orientacin sin-
dical existente.
Empeados -por la imposicin de los 21 puntos en man-
tenerse encaramados sobre los gremios, para desde all, imponer
su voluntad, mediante sus habilsimos trabajos de zapa; estn
perdiendo su sarcistanesca chaveta, ante las voces ardientes y
la luz de idealidad, que llevamos los anarquistas, a los sindica-
tos y que con tanto cario y prestigio estn prodigindoles los
trabajadores.371

369 En clara alusin a la prohibicin del Consejo Federal de la F.O.R.U. de prohibir la pro
paganda por la dictadura proletaria por contradecir el artculo 6 del Pacto Federal.
370 Justicia, 20 de Diciembre de 1921.
371 La Tierra N45, 25 de Junio de 1921.

187
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

A iniciativa del gremio de Albailes y Anexos se inici una


agitacin pblica, a base de conferencias contra la desocupacin.
La iniciativa fue prestigiada por el Consejo Federal del gremio
de Oficio Varios. Otra vez, el activo militante anarquista J.M Et
cheverry fue el encargado de arengar a los obreros desde las tri
bunas llevado por los compaeros de Paysand, para realizar en
todas las disertaciones, una activa propaganda pro organizacin
obrera, encuadrando las conferencias dentro de los verdaderos
principios, motivos y finalidades del sindicalismo revolucionario.
La primera conferencia se realiz en el sindicato de Oficios
Varios y la segunda fue al aire libre, en Florida esquina Comercio
en ambas se fustig duramente a la burguesa, al Estado, al a
poltica y en fin, a todas las armas que esgrime la clase capitalista,
a fin de oprimir a la clase trabajadora. Se defendi y propag fer-
vorosamente, la organizacin obrera, como arma especfica de la
lucha de clases, cuyos principios son esencialmente antipolticos,
antiestatales y anticapitalistas; lo que facilita la capacitacin de
los trabajadores, de su propio podero.
En la explanada del puerto se realiz una tercer conferen
cia, obteniendo un buen resultado los trabajadores a pesar de
que el gobierno local envi la banda de msica municipal a tocar
para perturbar la audicin, en esta conferencia Etcheverry habl
sobre los orgenes del movimiento sindical moderno, sus caracte-
rsticas y su finalidad eminentemente comunista anrquica. His-
tori las luchas intestinas, desarrolladas en el seno de la primera
Internacional; y en las que jug un papel tan indigno como clave,
Carlos Marx, padre espiritual de nuestros formidables comu-
nistas probados Ante esto el consejo del sindicato de Oficios
Varios, desde donde se articula la propaganda local, compuesto
por delegados comunistas, decidi suspender las conferencias y
llamar la atencin de Etcheverry porque viol los reglamentos de
la organizacin obrera local. Etcheverry desconoci la llamada de

188
Aproximacin al momento y el lugar

atencin pues son los gremios y no ese concejo federal sin fede-
racin, el encargado de proseguir la campaa.

Entre la tranquilidad del pueblo y la necesidad de la


revolucin.

No hemos encontrado mucho registro de huelgas en este


periodo, ms all de una huelga de panaderos y consecuente boi
cott a las panaderas El Sol y La Sanducera.372
Tambin sabemos que para el 31 de Abril se tena pensado
realizar un Congreso Obrero en Paysand, pero no tenemos no
ticias de que se haya realizado. Y por ltimo, la organizacin de
los obreros ferroviarios en Paysand parece ir por buen camino
segn manifestaciones de Geronimo Villalobos secretario de la
Sociedad de Resistencia Unin Ferrocarrilera en entrevista con
el diario Justicia de Montevideo.373
Un conflicto en el mes de Mayo en la Barraca Americana
levantar el nimo revolucionario, tres obreros fueron despedi
dos, acusados de ser los promotores del movimiento sindical. Tras
eso, se form una sociedad de resistencia, se exigi la reincorpo
racin de los 3, aumentos de salario, bonificacin del 100%, dan
do cuatro horas de plazo y la casa acept. Se organiz al personal
y con un manifiesto se convoc a una asamblea general, Este
es el primer eslabn, de la nueva organizacin obrera, que est
surgiendo en Paysand, siguiendo las ltimas y modernas formas
del sindicalismo revolucionarios374 sentenciarn los anarquistas.
Meses ms tarde, en Agosto, desde las pginas de El
Trabajo de Montevideo un cronista sanducero se quejar de que
all reina la apata y que el nico gremio organizado parece ser el

372 Justicia, 11 de Enero de 1921.


373 Justicia, 26 de abril de 1921 y 9 de Mayo de 1921.
374 La Tierra N38, 7 de Mayo de 1921.

189
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

ferroviario, organizado por los comunistas tras la ida de Eugenio


Gmez. Aqu somos muy pocos compaeros, -agrega- que nos
vemos abrumados por la apata general que reina en el pueblo
y campaa sealar al rgano de los anarquistas puros que
sostiene la F.O.R.U. en la capital.375
En Setiembre se produjo un incidente cuando los catli
cos pretendieron fundar un sindicato religioso. Segn la visin de
anarquistas y comunistas, la misin de ese tipo de sindicatos es
la de reclutar obreros dispuestos a trabajar mientras lo dems
hacen huelga para as quebrarlas.
Mientras uno de los catlicos hablaba a los obreros, algu
nos comunistas, entre ellos Calatayud pidieron la palabra, y los
catlicos comenzaron a gritar que los echen, once comunistas y
el anarquista Etcheverry resultaron detenidos por 48 horas. Cac
cia y Jos Fernndez fueron a la comisara a preguntar por sus
compaeros y resultaron tambin detenidos. Los anarquistas qui
sieron hacer intervenir a los gremios en el asunto pero el Consejo
Federal no lo crey oportuno, realizando s, una conferencia de
protesta en Florida y Comercio, pero quejndose los anarquistas
que poco y nada dijeron del suceso.376

c) Rocha

Trabajo, el rgano del Sindicato General de Trabajadores


de Rocha, dejar de publicarse en Junio de 1921, anuncindose
su conversin mensual y en forma gratuita, pero dicha aspiracin
parece no haberse materializado finalmente. En sus ltimos n
meros hay gran cantidad de artculos agitativos, muchos de ellos
de Montevideo. Se publica un extenso artculo sobre sindicalismo

375 Trabajo (Montevideo) N4, 26 de Agosto de 1921.


376 Trabajo (Montevideo) N6, 9 de Setiembre de 1921 y Justicia 25 de Agosto de
1921.

190
Aproximacin al momento y el lugar

revolucionario de Jos Negre, quien fuese el primer secretario ge


neral de la anarco sindicalista C.N.T. espaola. Se insiste en otras
notas en la necesidad de pertenecer a los sindicatos;
El sindicato es la herramienta con que los trabajadores van
forjando su porvenir en una accin conjunta, donde todos unidos
por iguales aspiraciones; la de su liberacin y perfeccionamiento,
educan su espritu y cultivan su cerebro hacia concepciones su-
periores e idealidades verdaderamente bellas377 Se publican los
estatutos del S.G.T., manifestando la pretensin de federarse con
otros sindicatos formando una Federacin Obrera Local, lo que
nos da la pauta de que el S.G.T. cumple la funcin de un Sindicato
de Oficios Varios, los cuales se sienten ligados a la F.O.R.U., ya que
se menciona que en caso de disolucin sus archivos deben ir a las
manos de sta.378
El nico conflicto que se menciona en la poca es una
huelga en Castillos contra la casa comercial Llera Martinez que no
quera cerrar los domingos.379
Como hemos visto la presencia socialista primero, y comu
nista luego, parece ser casi hegemnica en la F.O.R. y luego S.G.T.,
sin embargo algunos artculos, de Malatesta, de Misha, Negre, o
poemas e himnos alusivos a la anarqua, o el mismo pedido del
delgado Celestino Gonzlez para que participase del 1 de Mayo
pasado, nos da la pauta que en su seno se debi contar con la
participacin de anarquistas, pero no podemos saber cual fue su
grado de participacin, ni si los haban solo de la tendencia a fa
vor de la dictadura proletaria.
Una de las nicas pistas en este sentido nos ofrece una co
rrespondencia aparecida en Trabajo de Montevideo, rgano de
los obreros anarquistas contrarios a la dictadura proletaria.

377 Trabajo (Rocha), N25, 15 de Mayo de 1921.


378 Idem.
379 Trabajo (Rocha), N26, 30 de Mayo de 1921.

191
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

All se seala; Camaradas: Con gran agrado recib la vues-


tra y les prometo enviarles correspondencia de vez en cuando. En
esta, la organizacin obrera casi podramos decir, que no existe.
Existe una Unin General de Trabajadores, que viciada desde sus
principios, lleva una vida anmica, casi nula.
Hace mucha falta, que vengan compaeros de esa, pero
entendmonos bien, compaeros, que nos informen de los verda-
deros principios del sindicalismo, arrojando a un lado toda autori-
dad aunque esta provenga de nuestro campo.
Saludos y Anarqua. Corresponsal.380

4.8. La divisin obrera en el Salto.

Mientras la divisin obrera se haba consolidado tanto en


Buenos Aires como en Montevideo, no era de esperar que tardara
mucho la situacin en extenderse al resto del pas, el asunto qui
zs, sera ver de qu lado de la divisin quedaban plantados cada
uno de los centros obreros de las distintas localidades. Luego de las
asambleas de diciembre donde no se llega a ningn acuerdo entre
los dos consejos federales de la F.O.R.U. y se consolida el Comit Pro
Unidad Obrera, Celestino Gonzles, quien fuese secretario general
de la F.O.R.U. cuando la divisin estall y blanco de duras crticas por
parte de los anarco-dictadores fue a Salto en gira de propaganda.
Gonzlez debi informar a sus pares salteos los porme
nores de la divisin, las mil tramas y dolorosas peleas entre ex
compaeros, y exigir, seguramente, por parte de los anarquistas
de Salto, una definicin ms precisa y contundente frente a tan
importante cuestin.
El 28 de Diciembre, llegado C. Gonzlez se realiz una reu
nin en El Palomar (Osimani y Llerena), si bien ya se utilizaba un local
en esa direccin, luego de la divisin saltea, parece ser el principal

380 Trabajo, (Montevideo) N4 26 de Agosto de 1921.

192
Aproximacin al momento y el lugar

local utilizado por los anarquistas de La Tierra y la F.O.L. y los sindi


catos afines. En la reunin estaban presentes once delegaciones y
Gonzlez present un informe sinttico de la situacin general del
proletariado uruguayo, remarcando la necesidad imperiosa de que
la organizacin obrera debe ser elevada al rango de potencia com-
bativa, para que la clase trabajadora pueda resguardar sus intereses
constituyndose en tutora de si misma y procurando eliminar la in-
tromisin de polticos en sus filas.381
A su vez se realiz un programa de conferencias a realizar
se; 1.-en la F.O. en Construcciones Navales para el Domingo a las
9pm. 2.- en el Palomar (Osimani y Llerena) martes 3 a las 9 pm.
3.- En la explanada del puerto, el jueves 5 de enero a las 9 pm.
4.- Viernes y Sbado conferencias en Concordia. 5- 9 de enero,
en el festival que se organiza en Los Algarrobos y 6 el Lunes 9,
asamblea plenaria en F.O.C.N. y conferencia.
Tambin se forma comit de propaganda para reconstituir
la F.O.L. que no sesionaba desde Agosto. Los das que no se rea
licen conferencias se realizaran asambleas de los gremios con la
presencia del delgado de la F.O.R.U. Es decir, la actividad del se
cretario de la F.O.R.U. es intensa y se propone rearticular los gre
mios obreros del interior siendo Salto el puntal del gremialismo
anarquista del interior uruguayo.
Sabemos que la primer conferencia estuvo poco concurrida
a causa de la lluvia, y que en la segunda, que se trat el mismo
tema hubo una polmica con un militante entorno al tema de la
dictadura proletaria. En la conferencia del puerto acompaaron en
la tribuna a Celestino Gonzlez, C. Santo y F. Hernndez.
El viernes se realiz otro mitin en la plaza 33, el cual a pesar
de que se envi a la orquesta municipal para entorpecer la labor se
realiz igual.382

381 La Tierra N72, 30 de Diciembre de 1921.


382 La Tierra N73, 7 de Enero de 1922.

193
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

La crnica de La Tierra es elocuente acerca de la importan


cia para los anarquistas de su presencia en el litoral Los locales y
obreros y las plazas publicas fueron tribunas propicias a los fines
de la propaganda. Cada da se aprovechaba en algo. Y la labor
segua su curso normal, surtiendo paulatinamente los efectos que
de ella se esperaba.
Celestino Gonzlez areng a las multitudes combati la in-
diferencia; esplic [sic] el valor de la organizacin obrera; exhort
a los oyentes a sostenerla con entusiasmo y dedicacin tenaz.383
Segn el informe del mismo Celestino Gonzlez, el valor
sindical y los prestigios de la vieja F.O.R.U. no haban mermado
ante la propaganda insidiosa de los elementos divisionistas (...)
el espritu de nuestra campaa es hermoso y est abierto a las
corrientes que informan el sindicalismo libertario384

Los sindicalistas salteos.

Del lado opuesto al de la F.O.R.U., la F.O.L. y La Tierra, el prin


cipal referente era Adolfo Plaza, quien es tachado continuamente
de sindicalista por La Tierra, Plaza parece ubicarse entre los anar
quistas pro dictadura obrera ms que junto al Partido Comunista, lo
que evidencia una casi nula presencia comunista en Salto.
Desde que Plaza integr la secretara de picapedreros en
Marzo de 1921 stos rompieron relaciones con los dems gre
mios agrupados al comit de reorganizacin que reconstituir la
Federacin Obrera Local.
Sus palabras publicadas en Justicia nos dan un panorama
de lo que sucede en el Salto al comenzar el ao 1922;
En la localidad no ha circulado nada ms que un manifiesto
del Comit constituido por los disidentes, que me fue remitido a m y
383 La Tierra N74, 14 de Enero de 1922.
384 Justicia, 4 de Enero de 1922.

194
Aproximacin al momento y el lugar

que yo puse en manos de los secretarios de los sindicatos de sta, y


que algunos de ellos no han distribuido como tenan el deber de ha
cerlo; en cambio aqu circula profusamente Trabajo y otros rganos
defensores de los puros que se dan gratis. Adems, los no menos
puros de sta publican el resumidero "La Tierra", que es el expo
nente fiel de la sinceridad, de la capacidad y del prestigio de la lite
de la comunidad anarquista que en sta se encuentra agrupada en
el Ciencia y Vida, La Tierra, comit Pro Imprenta, Florencio Sn
chez y otros de menor cuanta que salen de sus tumbas cuando los
llaman y que son los que a sorbo callado han sacado de la circulacin
La Batalla y otros voceros del anarquismo que antes se vendan y
repartan en sta.
Yo hago constar tambin que en esta localidad nadie, en nin
guna forma, ha combatido a la vieja F.O.R.U., y que son los picapedre
ros los nicos que han hecho declaraciones en favor de la dictadura
proletaria y que han manifestado su desacuerdo con la conducta ob
servada por el Consejo Federal de la F.O.R.U., en cuyo seno se man
tienen a pesar de todo.
El estado de la organizacin sindical en sta es verdadera
mente precario; la mayora de nombre y los dems andan a los tiro
nes con la vida que quieren retener a toda costa. La Federacin Obre
ra Local no existe. Los sindicatos de labanderas [sic], metalurgicos,
albailes, carreros, gastronmicos, panaderos, peones de barraca,
pintores, mozos de cordel y electricistas estn disueltos. La reorgani
zacin de los pintores, de los peones de barraca y la constitucin del
Sindicato nico de la Alimentacin es un cuento y una maniobra, que
seguramente va a tener cola.
Los martimos y estibadores estn en vas de reorganizacin;
los carpinteros y chauffeurs se mantienen en pie gracias a los esfuer
zos meritorios que realizan una docena, nada ms que una docena

195
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

de compaeros voluntarios y activos. Los que mejor se conservan y de


fienden son los constructores navales, los sastres, los grficos, oficios
varios y los picapedreros, que son, puede decirse, los nicos que estn
debidamente relacionados con la F.O.R.U. Justo es consignar tambin
que los navales, los grficos y los martimos son autnomos.
Adolfo Plaza Salto, Enero 11 de 1922385
Por stas fechas nos encontramos con algunas conferen
cias sindicalistas, tras la llegada del delgado de la F.O.M.A. Pe
dro Alegra y de la F.O.M. Ramn Surez, patrocinada por los
martimos y los picapedreros.
En estas conferencias los anarquistas utilizaron un clsico
recurso que consista en reclamar la tribuna libre, es decir el
poder replicar los argumentos y discutir pblicamente. All los
anarquistas podan dirigirse a un pblico que tal vez nunca hu
biese entrado a una conferencia en un local o no se interesase
en la lectura revolucionaria. Son frecuentes las crticas de socia
listas386 o liberales denunciando que los anarquistas se adue
aban de los mitines ya que surgan oradores espontneos de
la nada y tomaban la palabra durante horas. La capacidad ora
toria, se mezclaba con las virtudes personales de cada orador
u oradora que se suban a un banco, una columna o cualquier
elemento para desde una altura levemente superior iniciar su
arenga a gritos contra el viento.
La mencionada conferencia fue el fiel reflejo de que la di
visin obrera se haba impuesto en el Salto, nos cuenta La Tierra;
a la hora indicada se presentaron al local los dos seores
acompaados de los cinco sindicalistas salteos.

385 Justicia, 14 de Enero de 1922.


386 Dir por ejemplo El Socialista rgano del Partido Socialista en 1913 Siempre
que he asistido a una conferencia celebrada por el Partido Socialista al aire libre he
tenido el disgusto de presenciar un cohato de desorden ocasionado por algn que
otro titulado anarquista (N141, 7-12-1913)

196
Aproximacin al momento y el lugar

Poco ms tarde llegaron diez picapedreros, tres compaeros


nuestros y dos curiosos, total veinte.
Entonces tom la palabra el tal Alegra, y empez a decir los
anarquistas son fanticos. Divisionistas, pagos por la burguesa para
hacer propaganda (pero no tenemos plata ni la libertad de viajar
como ellos que tienen carta blanca para todo) hay que matarlos a
todos (lo mismo dice la burguesa).
A esta altura un obrero que simpatiza con nuestra causa pidi
tribuna libre para aclarar un concepto y los delegados que hablaban
de libertades y emancipaciones obreras dijeron: aqu no se d tribu
na libre a nadie.
Entonces el as sindicalista local Plaza, agreg: al que pida
eso lo vamos a sacar a trompadas en nombre de la libertad, que se
haba convertido en libertinaje.
Frente a tanta belleza, nuestro compaero opt por escuchar
quietito la conferencia; pues ms que zonzo sera estando casi solo,
seguir pidiendo libertad de palabra a aquellos brutos que le hubieran
roto las costillas si expona un solo razonamiento anrquico.387
A continuacin el autor del relato, saca a colacin una
ancdota, que aunque se va un poco del tema, no deja de ser
pintoresca por contar la ocasin de que el propagandista anrqui
co de la F.O.R.A. Joaqun Corts (que haba pasado tambin por
Salto en 1919) le pidi la tribuna libre al mismo Batlle y Ordez.
Pasado este momento, continuaron despotricando sindi
calmente contra la F.O.R.A. Comunista Anrquica y contra todos los
anarquistas (...) aunque (...) se digan muy revolucionarios y muy liber
tarios; tanto que ni siquiera dan libertad de palabra o tribuna libre,
para discutir y razonar como deca nuestro querido compaero Joa
qun Corts, la noche que le pidi tribuna a Batlle y Ordez.

387 La Tierra N77, 4 de Abril de 1922.

197
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Recuerdan muchachos?...
Batlle, con ser todo un burgus y un ex presidente de la
repblica, fu ms libertario que estos cuenteros amigos de Plaza,
puesto que lo hizo pasar a nuestro compaero al escenario donde
alcanz a pronunciar cuatro palabras, cuando lo sacaron los adulones
batllistas; pero los sabios sindicalistas inteligentes (...) ni ese gesto
tuvieron (...)388
El resto de la conferencia hizo crispar los nervios de los anarquistas;
Agreg ms adelante que los anarquistas deban unirse con
los obreros socialistas, sindicalistas, blancos, colorados y catlicos, para
que las cosas marchen bien a fin de hacer la revolucin.
Cualquier da vamos a meternos nosotros en semejante pro
miscuidad con camaleones, curas, polticos y cuanto bicho malo anda
por ah.
No faltaba ms, para que nos lleven a rezar, a votar, o vaya uno
a saber que porqueras querrn hacer con los trabajadores compae
ros nuestros. (...)
Despus le toc el turno a Surez, dijo ante todo que era pol
tico comunista y defenda la dictadura de su partido (...)
Tuvieron hasta el tup de aplaudir a los gobiernos que arreglan
las huelgas, con motivo de la huelga de tranviarios de Montevideo.
Milagro no dijeron que la emancipacin obrera ser obra de
los gobiernos. (...)
En el manifiesto haban dicho que hablaran sobre Organiza
cin sindical-obrera, pero ni trataron semejante cosa.
Se limitaron a insultos, calumnias, rastrerias e infamias que
produjeron muy mal efecto entre la veintena de concurrentes.389

388 Idem.
389 dem.

198
Aproximacin al momento y el lugar

El 5 de Febrero, en otra conferencia en el puerto, se repiti


la escena cuando se intent reclamar la tribuna libre.
Y al da siguiente, el escenario se volvi a presentar.
Segn los anarquistas de La Tierra, cuando se pidi la tri
buna, como nica respuesta se desenfundaron los revlveres.
Nos guiaremos ahora, por la crnica del diario comunista
Justicia;
Al da siguiente de esta conferencia [6 de Febrero] se rea
lizaba una asamblea de obreros martimos y portuarios de Salto. A
este acto efectuado en el local de la Construccin Naval que a la vez
es de los martimos, haban concurrido numerosos trabajadores. La
asamblea era tan importante que se puede decir que pocas como
ella han realizado los martimos y portuarios en esta localidad, pero
la accin de los puritas, vino a entorpecer la obra y a poner una
nota sombra en el ambiente. Primero los puritas interrumpieron a
Alegra y pidieron la tribuna. Este no la cedi entendiendo que en una
asamblea en que se trata de reorganizar una sociedad la polmica,
como necesariamente se deba sostener, era perjudicial. Los puri
tas entonces se estacionaron en la puerta del local y empezaron a
arrojar piedras, lo que dio lugar a que los asamblestas llamaran al
orden a los provocadores, pero sin xito alguno, pues se produjo de
inmediato un tumulto en que los puritas tuvieron el heroico ges
to de herir de un balazo en una pierna, un tajo en una mano y una
pedrada en la frente al secretario de la Sociedad de Picapedreros,
Adolfo Plaza. Felizmente, los puritas no pudieron consumar todo
su plan gracias a la intervencin enrgica de los asamblestas que les
propinaron una buena paliza a pesar de que tenan casi un arsenal de
guerra y los obreros reunidos no contaban ms que con sus puos.
La polica intervino en el hecho y detuvo a seis puritas. Ade
ms, el secretario de los Picapedreros estuvo en la Jefatura en calidad

199
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

de detenido durante 16 horas. El secretario de la F.O.M. (seccin Sal


to), Andres P. Costa, junto con otros compaeros tambin estuvieron
detenidos varias horas, pero fueron puestos en libertad despus de
tomrseles declaracin.390
En carta enviada por Adolfo Plaza a Justicia del 9 de Febre
ro, narra con detalles lo ocurrido en aquella asamblea.
Alegra puso en conocimiento de la asamblea la publicacin
que fue hecha en el nmero 77 de La Tierra, publicacin que es
igualmente ofensiva para nosotros como para los componentes de
las organizaciones que l representaba en aquel momento, y ense
guida hizo ver la necesidad de repudiar a los autores de esas publica
ciones y a los que con ellos se declaran solidarios. Tambin recalc la
necesidad de oponerse a la intromisin de personas no obreras en las
organizaciones y a que stas sean embanderadas con una ideologa
partidista o filosfica determinada. (...) Los trabajadores sindicalmen
te organizados no necesitan directores ni de un ideal que los orien
te, lo que necesitan es ser lo suficientemente unidos para constituir
y organizar la fuerza que han de poner en accin para materializar su
propio ideal (...)
Alegra se estaba ocupando en demostrar que las ideas parti
distas, religiosas o filosficas solo sirven para confundir y dividir a los
trabajadores; en ese momento, Cal y la patota que lo acompaaba,
que haca rato que haban llegado al local y que se haban estacio
nado en la puerta y un poco para adentro, pidieron tribuna libre y
empezaron a gritar y proferir insultos porque no se quiso hacer lugar
a su pedido, y no se hizo porque sabamos a ciencia cierta que eran
capaces de repetir lo que ya haban dicho en La Tierra y que su
objeto era armar un escndalo. (...)

390 Justicia, 14 de Febrero de 1922.

200
Aproximacin al momento y el lugar

La asamblea qued totalmente interrumpida y todos salimos


en direccin a la puerta para ver de obtener por las buenas que se
nos dejase tranquilos. Sin duda que me estaban esperando, pues no
acab de llegar al grupo cuando recib en a frente una pedrada de
Franco Hernndez, un balazo de Cal en la pierna izquierda y una carga
de Casiano Gonzlez, que me atac con una daga, con la que me hiri
en el dedo pulgar de la mano izquierda y cuatro dedos de la mano
derecha,. (...) En la calle se arm una verdadera tormenta de piedras
y golpes.391
Como se vio varios fueron los detenidos. Luego la polica
realiz una razzia y detuvo a varios ms. Juan Pedro Tort es acu
sado por Plaza como autor del disparo siendo el detenido ms
comprometido.
Los anarquistas sealaran que con otros anti anarquistas
que vinieron antes a Salto no hubo lo, como Cisneros, Eugenio
Gmez, e incluso que cuando Alegra habl a los martimos de
organizacin no hubo problemas, pero cuando atac a La Tierra
y la anarqua si.
Entonces pidieron tribuna libre para aclarar un concepto
y la neg como perfecto kaiser, insultando como un energmeno.
Eso fue lo que dio origen al suceso que nos ocupa, pues
los trabajadores ya estaban cansados de soportar las infamias de
Alegra y Plaza, negndose tribuna o el derecho de razonar, des-
pus de insultarlos, en el Palomar y en el Puerto; pero como la ter-
cera es la vencida, en la conferencia del local de los Martimos, se
arm una de balazos, pedradas y trompis, que result un slvese
quien pueda.392 Seal La Tierra.
Tras el suceso que sacudi la ciudad saltea, los anarquis
tas salieron al cruce con un manifiesto en que descargaban todas

391 Justicia, 22 de Febrero de 1922.


392 La Tierra N78, 11 de Febrero de 1922.

201
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

sus acusaciones contra los sindicalistas el cual fue publicado en


nombre de la F.O.L. y reproducimos casi completamente;
FEDERACIN LOCAL SALTEA
A LOS TRABAJADORES
Nuestra voz de conciencia
Cules son los verdaderos polticos? Cules son los aliados
y fieles instrumentos de las policas y gobiernos? Quienes son los re-
volucionarios que en nombre de la liberacin humana quieren hacer
la unificacin del proletariado?
Todo obrero que ama a su causa, a su famlica madre, a sus
harapientos hermanitos, escualidas compaeras y si sagrada libertad
es su deber como hombre, como explotado, como revolucionario,
despojarse de odios personales y detenerse por un instante frente
a frente a la verdad, y preguntar a sta, cual es su verdadera misin
en la hora presente en que la burguesa borracha por los aconteci
mientos de reivindicacin social, ya impotente para detener el grito
de todas las madres de la tierra que claman justicia de los brbaros
modernos, cuyo angustioso clamor de venganza se oye desde los cin
co continentes de esta triste Tierra poblada por hienas y corderos.
Trabajador! Eterno esclavo y siempre engaado por los te
rrenos polticos de todos los colores y partidos; oye un instante, me
dita y luego juzga con tu propia conciencia.
Pedro Alegra, Surez y Plaza son agentes directos del brba
ro gobierno argentino Hiplito Irigoyen y fieles comisarios del ms
brbaro y sangriento gobierno de Mosc.
Pruebas y no palabras antojadizas.
El domingo 29 de Enero, los agentes del gobierno argentino,
seores Alegra, Surez y Plaza, dieron una conferencia en el local
Osimani y Llerena. Anunciaron que hablaran de sindicalismo pero lo

202
Aproximacin al momento y el lugar

que dijeron fueron solo insultos a los trabajadores que no estaban de


acuerdo con ellos. Cuando se le pidi tribuna libre, amenazaron con
trompadas y tiros.
El da 5 de Febrero dieron otra conferencia en el Puerto, en
la que volvieron a insultar y acusar a los anarquistas ser perros de
policas y venidos a la burguesa. Se le volvi a pedir tribuna libre y
entonces volvieron las anteriores amenazas.
El cobarde crimen, perpetrado y llevado a efecto.
El lunes 6 de Febrero, prepararon una asamblea, en la que
di su fruto al premeditado crimen.
En el Cerro, local de los Navales se le pidi tribuna libre, como
nica contestacin desenfundaron los revlveres que el gobierno les
costea y dispararon contra los esclavos que ya no quieren ms far
zantes [sic] que los venda miserablemente a las odiosas cadenas de
la esclavitud, en nombre de la organizacin obrera del santo ideal de
redencin humana.
Pruebas
La Nacin martes 7 de Febrero de 1922.
Entre Rios- Asuntos gremiales- Nota del Ejecutivo al ministro
del Interior.
PARAN, 6-El P.E. Dirigi al ministro del Interior la siguiente nota:
Cumplo con el deber de acusar recibo a la nota de V.E. fecha 26
de enero ppdo, por la que se sirve comunicarme la presentacin a ese
Ministerio de la Federacin Obrera Regional Argentina, manifestando
qu ha destacado como delegados a los seores Enrique Villacampa y
Pedro Alegra, para visiten el primero, los puertos de esta Capital, Pueblo
Riuge, Santa Elena y La Paz, y el segundo los de Concordia y Concepcin
del Uruguay, con el objeto de tranquilizar a la gente trabajadora y soli
citando que se haga saber esto a las autoridades policiales con el fin de
evitar que pueden interpretarse errneamente el objeto de su misin

203
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Pues bien camaradas: Si quieren enterarse con ms informa


cin pueden leer La Nacin de la fecha indicada.
Cules son los verdaderos disolventes de la organizacin
obrera, ellos o nosotros?
Cuales son los empleados del gobierno, policas y aliados
del burgus que nos explota, ellos o nosotros? Cuales son los presos
y condenados a la crcel, destierros en la Siberia Argentina, ellos o
nosotros?
Plaza y dems pillos estn en libertad, Alegra se le facilit
la salida de sta para la casa de su (patrn). Nuestros hermanos de
dolor y miserias estn entre las mazamorras esperando la sentencia
del juez que los juzgue a pesar de su inocencia.
Ahora que te has enterado de la verdead debes cumplir
como hombre y alistarte en las filas del ejrcito de tus hermanos los
esclavos y exigir inmediata libertad de nuestros compaeros deteni
dos.- Por el Consejo Federal. El Secretario.393
El domingo 19 se realiz una nueva conferencia en el puerto
donde habl A. Plaza y a pesar de habrsele prohibido hablar de los
incidentes por la polica habl del tema. Luego habl D. Amestoy
de Concordia quien tambin se refiri a los hechos y luego lo hizo
sobre la necesidad de la organizacin sindical, y recalc la necesi
dad de trabajar para materializar los anhelos de unidad orgnica
en el orden nacional e internacional Segn cuenta el mismo Plaza
La compaera Amestoy, se ocup tambin de la mujer obrera, po-
niendo de relieve su triste condicin de esclava del capitalismo y de
todos los que la rodean en el hogar. Conden los prejuicios de que
es vctima y la exhort a organizarse sindicalmente, para luchar,
para educarse y para hacerse digna de su total liberacin.394

393 La Tierra N78, 11 de Febrero de 1922.


394 El Picapedrero (Montevideo), n39, Febrero de 1922.

204
Aproximacin al momento y el lugar

La actividad gremial en el verano de 1922 fue bastante


escasa. Se organizaron los pintores y obreros en mimbre,395 se
form la Agrupacin Grfica Libertaria disidente de la Sociedad
Tipogrfica de Salto de orientacin sindicalista. Y tan solo se regis
tr una huelga en el saladero del hervidero, y el boicot del gremio
de Sastres a la casa Paris-Londres.396

La fractura del Centro Ciencia y Vida.

El Centro Ciencia y Vida, fundado en 1918 haba sido par


te imprescindible de la propaganda anarquista en Salto, llegan
do a tener hasta cien adherentes. Al igual que el resto de la
actividad en Salto, la del centro de estudios se haba visto tam
bin resentida, siendo que haca unos tres meses que no tena
actividad ninguna.
Algunos de sus integrantes anuncian que el centro sera
clausurado el da 15 de Marzo.
Ante esta situacin se convoca a una conferencia el Lunes
13 en la que hablar J. Hernndez, para intentar continuar con
el centro.
Pero quienes pretenden cerrarlo lanzan un manifiesto en
el que hablan de la clausura temporal del Centro en vista de los
insistentes llamados a la colectividad que no quera cooperar, a
su vez el 12 por la noche retiran los muebles y tiles, cortan la
luz y entregan la llave del local.
Al da siguiente, quienes pretendan reabrirlo, logran
contratar nuevamente la luz y realquilar el local y la conferencia
logra realizarse, quedando el centro reabierto con 35 socios.
Luego de reabierto el mismo, quienes lo cerraron,

395 La Tierra N54 (27-08-1921) y La Tierra N55 (03-09-1921)


396 La Tierra N80 (23-02-1922), N84 (18-03-1922), N85 (01-04-1922), N88 (22-04-
1922)

205
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

anarquistas alineados con la dictadura obrera, se negarn a su


vez a devolver los tiles quienes quedaron en posesin de los
mismos; de Aquiles Tettamani y ngel Rodrguez.
En las pginas de La Tierra se publica un cartel perma
nente que se repetir por varios nmeros;
Este centro [Ciencia y Vida] continuar considerando de-
fraudadores de las aspiraciones y los intereses colectivos, a los
que mantienen secuestrado sus muebles y tiles.
Dejarn de ser tales el da que restituyan al servicio de la
colectividad lo que actualmente ocultan.397
Desde Montevideo Domingo Pacheco, antiguo miembro
del Ciencia y Vida firma un manifiesto en el que se acusa a
Mario O. Herrera y a LA TIERRA de caudillo, chantagistas, mis-
tificadores y de colaborador con la burguesa Desde la F.O.L.S.
se invita a el o los autores del mismo a debatir y a considerarlos
calumniadores y enemigos de la causa sino lo hacen.398
Incluso un mes despus se edit un folleto donde se deca
que el Centro estaba temporalmente cerrado, mientras quienes
lo mantenan abierto, salieron a desmentirlo pblicamente.399La
divisin obrera estaba a flor de piel.
Esta divisin interna, seguramente se vivi en cada una
de las agrupaciones y cada uno de los gremios, quedando
posicionados de un lado o del otro. Por ejemplo, Marcelino
Sosa, del comit pro imprenta, quien tena fondos de dicho
comit se neg a entregarlos a La Tierra, argumentando que
dichos fondos eran de los gremios autnomos.400
De a poco las piezas se iban acomodando, y los
anarquistas puritas del Salto, desde La Tierra, consideraban

397 La Tierra N84, 23 de Marzo de 1922.


398 La Tierra N94, 3 de Junio de 1922.
399 La Tierra N100, 15 de Julio de 1922.
400 La Tierra N96, 17 de Junio de 1922.

206
Aproximacin al momento y el lugar

su reorganizacin como un triunfo Con la actividad del Centro


Ciencia y Vida, que trabaja da y noche para la causa; la
reorganizacin de la Federacin Obrera Local, la de los gremios
de Albailes, Oficios Varios, Centro Femenino, la huelga de
los trabajadores del Hervidero, el movimiento estudiantil, etc,
todas las modorras han sufrido un fuerte sacudn.401
Se forma tambin una seccin de la Alianza Anarquista
Internacional con el fin de afianzar la corriente ortodoxa o purita
del anarquismo. , considerando que dado el confusionismo
que reina en las filas anrquicas como en el campo gremial es
necesario disiparlo; declara: que frente a todo gobierno, llmese
este burgus o proletario, es decir, frente a todo principio de
autoridad, hemos de propagar y afirmar a todo viento nuestros
principios anarquistas de negacin de autoridad, como as
combatiremos todo partido poltico inclusive el de ltima hora
denominado comunista, por considerarlos como los mayores
enemigos de la libertad y de la emancipacin humana.402
Pero por ms que desde La Tierra se pretenda demostrar
que los anarquistas estn saliendo bien parados de la fractura
obrera, hay algunos indicios de que no es tan as, como este
pedido de solidaridad a los compaeros de Buenos Aires;
Compaeros de Buenos Aires.
A todos y a ustedes principalmente recurrimos en homenaje
a la vida de la anarqua.
Aqu el ambiente nos quiere romper al no poder doblarnos.
Es ms fro y ms duro que la mole de hielo que hundi al Titanic.
Por todas partes nos tiran del saco para que no avancemos.
Nuestros impulsos titnicos se harn aicos. La carga es
muy pesada y pedimos ayuda material y moral. Bianchi, Corts,

401 La Tierra N85, 1 de Abril de 1922.


402 La Tierra N76 28 de Enero de 1922.

207
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Etcheverry, Gonzlez Pacheco, Barrera, Carreo, Forni, Juana, etc,


etc.
Cual puede venir?
A pesar y por encima de todo viva la Anarqua y adelante
siempre!...403

a) Paysand

Hemos visto como los comunistas tomaron en Paysand el


protagonismo que antes perteneca a los socialistas.
La presencia de Etcheverry y de Jos Fernndez o Franco
Hernndez en Paysand parece ser intermitente pero constante.
El eje principal de las conferencias parece haber sido el
debate de ideas entre comunistas y anarquistas. Etcheverry llev
adelante una controversia con un comunista en el local de Oficios
Varios. A los pocos das, el jueves 8 de Setiembre de 1921 se llev
a cabo una conferencia organizada por el sindicato de obreros
panaderos. En Florida y Comercio se lo invito a Etcheverry para
que hablara de la finalidad de la organizacin obrera, tambin
hablara por los panaderos Barcia y el comunista Jos Calatayud. La
controversia era inevitable, habl Catalayud, luego Etcheverry quien
habl de la finalidad de la organizacin obrera, (anticapitalista y
antiestatal) y combati a los partidos polticos, incit a dejar de lado
las organizaciones parlamentarias y formar parte de la organizacin
obrera, que es el arma especfica e incontrastable de la verdadera
emancipacin del proletariado. Catalyud pidi la palabra y volvi
a subir; sealando que el no atac a la persona de Etcheverry sino
a sus argumentos, pero le cuestion que no era un trabajador,
Calatauyd y una veintena-segn La Tierra- de comunistas se fueron
al grito de los comunistas nos vamos, luego Etcheverry explic

403 La Tierra N83, 18 de Marzo de 1922.

208
Aproximacin al momento y el lugar

que no trabajaba porque la burguesa lo tena en las listas negras


por agitador y no consegua trabajo en ningn sitio.404
En correspondencia con La Tierra de Noviembre, el cro
nista cuenta que existen en ese momento unos cuatro o cinco
gremios. Que los anarquistas pretenden formar una Federacin
Local Sanducera, pero los comunistas quieren crear un Sindica
to Departamental, supeditado al Partido Comunista y a la III In
ternacional y que en la carta orgnica propuesta sealan; Es el
objeto interior emancipar el trabajo de la explotacin capitalista
y realizar junto con el Partido Comunista la implantacin de la
Sociedad Comunista. (...) Que tienen que mantener una estrecha
y permanente vinculacin con la Internacional de los Sindicatos
Rojos, secundando su obra y relacionarse por su intermedio con
los trabajadores de todo el mundo.405
Las conferencias continan con mpetu, los anarquistas
realizaron varias a impulso del Centro de Estudios Sociales Inter
nacional, en cooperacin con el delegado de Salto. Se repartieron
varios manifiestos gremiales.
Los comunistas contaron nuevamente con la presencia del
delegado de la F.O.M. Eugenio Gmez para reorganizar la seccin
sanducera sin que parezca poder lograrlo. Es llamativo el respeto
que Gmez causaba en los anarquistas, juzgado por el cronista de
La Tierra podemos leer; El delegado de la Martima y futuro can-
didato a diputado estuvo correcto y elocuente en su disertacin.
Habl como un anarquista sobre el valor del sindicato en los mo-
mentos actuales. Es una lstima que sea poltico y que despus
de hablar como un anarquista, venga dentro de dos o tres meses
a decirle a los obreros que voten por tal lista.
El 4 de diciembre se realiz un pic nic organizado por los
anarquistas en la quinta prxima al Campo del Vapor; por la

404 La Tierra N58, 24 de Setiembre de 1921.


405 La Tierra N66, 19 de Noviembre de 1921.

209
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

noche continu la fiesta de confraternidad societaria en el domi-


cilio de un quintero del lugar, que expres, como otros vecinos,
las simpatas a que se haban hecho acreedores por su cultura,
liberidad y franqueza.
Al domingo siguiente los comunistas hicieron el suyo y los
anarquistas no pudieron dejar de reconocer que estuvo bastan
te concurrido y que lograron el xito econmico que buscaban.
El tema del momento era la realizacin del Congreso
Obrero. Se haba previsto para abril, luego para el 20 de diciem
bre y ahora se postergaba nuevamente un mes.
Los anarquistas logran por su parte organizar dos gremios
nuevos, cumpliendo con sus intenciones manifestadas meses
atrs organizando el Centro Cultural Femenino, cuya secretaria
ser Luca Bucco una de las jvenes ms inteligentes y estu-
diosas de Paysand segn La Tierra406 teniendo su secretara
en Daymn y Sarand, y por otro lado la Unin de Trabajadores
Agrcolas, ubicando su secretara en la calle Independencia es
quina Uruguay. No tenemos muchas referencias de la labor que
dicha Unin haya logrado realizar, pero podemos deducir que
se trata de imitar la exitosa experiencia de la Unin de Trabaja
dores Agrcolas de Argentina cuyo referente era Antonio Vidal
Mata (destacado anarco-bolchevique argentino). La U.T.A. Ar
gentina creada en 1919, consideraba que el chacarero no era un
explotador de mano de obra, sino principalmente, un explotado
por el capital (contratistas, casas cerealistas, latifundistas, em
presas ferroviarias, martimas y exportadoras). La U.T.A. tuvo a
la burguesa terrateniente argentina en pnico cuando en el ve
rano de 1920 un fuerte conflicto agrario amenazaba con pren
der fuego amplios latifundios argentinos. El mismo Vidal Mata
era el autor del folleto La Doctrina del Campesino Argentino,
una suerte de catecismo rural donde se contraponen los ricos

406 La Tierra N71, 19 de Noviembre de 1921.

210
La divisin obrera

holgazanes con los pobres trabajadores explotados. El texto


fue publicado en varias entregas en La Tierra de Salto y su lec
tura recomendada por los editores.407

Celestino Gonzlez en Paysand.

Luego de su paso por Salto, donde Celestino Gonzlez lo


gr el completo posicionamiento el ncleo anarquista de Salto
del lado de la F.O.R.U., de all se dirigi a Paysand donde el pre
dominio comunista y anarco-dictador era incuestionable para
realizar algunas conferencias.
La primera de ellas, fue el Martes 17 de enero auspiciada por
el sindicato de grficos y anexos en el local de Oficios Varios, donde
trat de la organizacin obrera y la dictadura, Gonzlez seal mi-
nuciosamente los diversos conceptos que estn ms difundidos, pro-
curando demostrar a los oyentes la conveniencia innegable de ajus-
tar las tcticas y las tendencias del proletariado federado a la nica
orientacin que lo encamina a su verdadera escuela de auto-gobier-
no; la lucha por la libertad plena de nuestra clase, sin ambiciones do-
minadoras. Con objeto de difundir las nociones ms fundamentales
de la lucha sindical, describi las mltiples formas de aplicar con efi-
ciencia el sabotage a la clase patronal, perjudicando sus intereses di-
recta y sensiblemente a fin de obligarlos a ceder a las reclamaciones
proletarias, sin que aquellos se atrevan a plantear conflictos con la
altivez, continuidad y soberbia que hoy lo hacen, validos de la actitud
inofensiva de los trabajadores sealar un corresponsal a Trabajo de
Montevideo.
El 19 realiz otra conferencia pblica organizada por el mis
mo gremio en la plaza Constitucin, sobre los anarquistas y los
polticos. En esta conferencia, se dedic a analizar la actuacin

407  Doeswijk, 2013:124 y 264. en La Tierra se public en los N42 y N43, y del N52
al N60 inclusive.

211
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

de los libertarios y de los polticos en las filas obreras. Con el fin de


hacerles posible a los pollitos la desvirtuacin de sus afirmaciones,
si las crean antojadizas, Gonzlez los invit a controvertirle. Claro
est que esos seores no aparecieron por ningn lado para reivindi-
car sus buenas intenciones ante el pueblo reunido.
La ltima conferencia fue el domingo 22 en la explanada
del puerto sobre El capital y el trabajo, la cual cont con una
concurrencia numerosa, a pesar de que la banda de msica en
viada por el gobierno nuevamente intent boicotear el acto.
El corresponsal termina su crnica sealando que Nos
place afirmar, una vez ms, que esta prctica (la de enviar delega-
dos al interior) es de suma utilidad y de gran trascendencia para
el movimientos social y emancipador.408
Pero ms all del informe alentador enviado a Montevideo,
para los anarquistas sanduceros el balance no fue tan positivo, el
delegado, por ser antipoltico, fue saboteado por todos los gremios,
excepcin hecha de los grficos. ya que las conferencias no fueron
muy reverentes con los saboteadores de la organizacin. 409

b) Rocha

La desaparicin de Trabajo, el rgano del Sindicato Gene


ral de Trabajadores de Rocha, parece haber invisibilizado la ac
tuacin de los anarquistas pro dictadura que actuaban junto a los
comunistas. Lo cierto es que los militantes comunistas, comenza
ron la edicin de un rgano de prensa partidario titulado Accin
Comunista que vio la luz su primer ejemplar el 17 de Octubre de
1921. El mismo estar integrado por D. Garaza (director), Mario
Bordabehere (director tambin), Oscar Bonami, Joaqun Valcare,
(Administradores) Marcenil Prieto (secretario de redaccin).

408 Trabajo N27 11 de Febrero de 1922


409 La Tierra N77, 4 de Febrero de 1922.

212
La divisin obrera

Las pginas de Accin Comunista nos informan que el Sin


dicato General de Trabajadores de Rocha tuvo problemas para
sesionar con regularidad.410
En la reunin del 30 de Octubre de 1921 se form una Comi
sin Administrativa provisora, convocndose a una nueva asamblea
para as formar delegados permanentes y discutir dos notas de la
F.O.R.U. La asamblea se pospondr por dos veces consecutivas a
falta de qurum, hasta que lograron reunirse finalmente resolvien
do instalar el local sindical en la calle 19 de abril 167.411
Ante un movimiento obrero decado, los militantes comu
nistas parecen haber puesto el nfasis de su militancia en la po
ltica y no tanto en lo sindical. As el jueves 29 de diciembre de
1921 se realiza el primer acto del Centro Comunista de Rocha, en
el teatro La Artesana ante unas 250 personas. El acto fue con
vocado para protestar contra las prepotencias burguesas habla
ron Bordabehere, Amelio Gonzlez, Romeo Di Candia (quien ley
un poema) e Ignacio Garaza.
El mvil del acto parece haber sido el suceso del obrero ru
ral Gregorio Fernndez, que indign a los trabajadores rochenses
casi un ao atrs. Fernndez era padre de siete hijos casi todos
menores de edad, comenz a trabajar el 17 de Febrero de 1920
para Antonio Otamendi, en donde tena que labrar 25 hectreas
por 4 aos en un rgimen de semi esclavitud. Un ao despus,
Conrado Otamendi, hijo de su patrn, lo asesina de un tiro sobre
su caballo mientras el araba con una bolsa de semillas al hombro.
A los pocos meses el matador es liberado por la justicia mientras
la familia de Fernndez se hunda en la miseria.412
En el acto de La Artesana se escucharon afirmaciones
como estas; Mientras el obrero ngel Gonzlez sufre cinco aos

410 Accin Comunista (Rocha), N1, 17 de Octubre de 1921.


411 Accin Comunista N3 (31-10-1921) y N4 (07-11-1921)
412 Accin Comunista N55, 6 de Noviembre de 1922.

213
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

de prisin por haber muerto a otro en defensa propia, los jueces


le dan la libertad a un seor latifundista, Conrado Otamendi, que
mata de dos balazos a mansalva a un trabajador, padre de 7 hijos
(...) La violencia con los de abajo es la norma jurdica del Estado.
As pues, debemos desesperanzarnos de conseguir algo bueno de
un organismo que esta podrido.413

Marzo de 1922; Huelga de los obreros constructores de


vas frreas de Rocha.

Ya en enero de 1922 Accin Comunista informaba que los


trabajadores que construan el tramo de vas frreas de San Car
los a Rocha, trabajaban ms de doce horas diarias (de 4 a 11 y de
14 a 19:30). A su vez, siendo contratados por intermediarios se
les pagaba la cuarta parte de lo que la empresa contratista gana
ba por el trabajo realizado. Se les vende una comida que se cobra
a unos siete pesos en total (para una cuadrilla de 14 obreros),
cuando en el mercado comn los mismos alimentos costaran
unos dos pesos. As varios obreros no llegan a cobrar nada en la
mano ya que todo se les va en los caros precios de almacn.414
En Marzo una asamblea de unos 60 obreros de las distintas
cuadrillas deciden declararse en huelga reclamando las 8 horas
de trabajo, el fin del trabajo a destajo, jornal de 18 reales. El
pliego es firmado por unos cien obreros y se da 48 horas de plazo
para pronunciarse.415
Las crnicas sealan que hay entusiasmo entre los ms
de cien huelguistas y son pocos los carneros. Hay cuatro con
tratistas, bajo su direccin trabajan varias cuadrillas. El pliego se
les present primero a la empresa, pero sta ni lo ley, sealando

413 Accin Comunista N12 2 de Enero de 1922


414 Accin Comunista N14, 16 de Enero de 1922.
415 Accin Comunista N23 (20-03-1922) y N24 (27-03-1922)

214
La divisin obrera

que tenan que hablar con los contratistas. A su vez, sin per
der tiempo, la empresa lanza un decreto segn el cual se poda
expulsar inmediatamente a cualquier trabajador. Antes de que
esto empezara a aplicarse se declar la huelga el jueves 16 de
Marzo.
Se les present el pliego por separado a los contratistas,
pero a condicin de que todos deban aceptarlo.
El pliego era el siguiente;
1 Cumplimiento estricto de la jornada de 8 hs.
2 Abolicin del trabajo llamado a destajo
3 Jornal mnimo de $1,80
4 Venta de los artculos de provedura al precio que tienen en el
comercio de Rocha.
5 Pago de los jornales los 2s y 4s sbados de cada mes
6 Readmisin de todos los compaeros expulsados por causas aje
nas al trabajo.
7 intervencin del capataz de cada cuadrilla, o de cualquiera que
lo represente, en el control del peso y la calidad de la carne que se
nos suministra para la alimentacin
8 Libertad absoluta de los trabajadores para adquirir los artculos
de consumo fuera de las proveeduras si lo creen conveniente416
Se realizan asambleas a diario, en el local del S.G.T. y en
el Sauce cerca del campamento. All hablan Garaza, Valcrcel y
Bordabehere. El S.G.T. dono su fondo de 20 pesos a los huelguis
tas y form una comisin para juntar fondos.
El domingo 19 los obreros se entrevistaron con la empre
sa, y esta les ofreci sacar los intermediarias para tener mayores
salarios, pero no aceptando el resto de las condiciones del plie
go, por lo cual continuaron con la huelga.

416 Justicia, 20 de Marzo de 1922.

215
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Se suceden numerosas asambleas y el 20 de Marzo se reali


z una importante manifestacin. Los trabajadores fueron en gru
pos desde los distintos campamentos y se organizaron en el Paso
Real para entrar a Rocha en vibrante manifestacin de protesta,
recorriendo las calles en ruidosa columna hasta el local del S.G.T..
Desde all, siendo poco ms de las 8 horas se dirigieron a La Artesa
na, donde se celebr el acto de protesta contra la empresa, con una
importante concurrencia obrera.
A las 9 de la noche era materialmente imposible entrar al
teatro, que se hallaba desbordante de trabajadores. Hicieron uso de
la palabra en medio de delirantes manifestaciones de la entusiasta
concurrencia Los comunistas Garaza, Gonzlez Acosta, Bordabehe
re, Techera, Valcrcel y Cerchi, este ltimo para expresar a la asam
blea el saludo fraterno del Cerro Aspero.
Terminado el acto ms de 500 trabajadores recorrieron las
calles en manifestacin, a cuyo frente iba la bandera roja del Sindi
cato General de Trabajadores.
Al llegar al Sindicato, volvieron a hacer uso de la palabra
varios oradores, exhortndose a la lucha sin desmayos, frente a la
prepotencia capitalista. Poco despus la manifestacin se disolvi
en el mayor orden.
El inspector de trabajo Evaristo Costa, fue al sindicato y se
ofreci para mediar pero en el conflicto sin obtener xito alguno.
Segn la empresa local hay unos 50 o 60 obreros que an trabajan
en las cuadrillas, pero los huelguistas afirman que tan solo son 4 o
5 los que traicionan la huelga.417
El lunes 27, se produjo el mayor incidente del conflicto. Mni
ca, uno de los ms prepotentes contratistas, quien al parecer gustaba
de ostentar el arma que llevaba a la cintura, se diriga desde el cam
pamento hacia el lugar de trabajo la maana de ese da, acompaa
do de sus escoltas personales y unos 5 trabajadores rompe huelgas.

417 Justicia, 1 de Abril de 1922.

216
La divisin obrera

Los huelguistas, con la intencin de interceptar a los car-


neros para que no fueran a trabajar, dado la fuerte custodia mili
tar que haba en el campamento los esperaron atrs de un maizal
en el camino al trabajo. Cuando Mnica y los dems pasaron por
all se inici un tiroteo entre los sub contratistas y los huelguistas.
Si bien en estos casos se cuestiona la legtima defensa o no del
suceso, los huelguistas no titubearon al reconocer que el primer
tiro que son provino de sus armas y dio muerte al explotador
Mnica.
Veinticuatro huelguistas fueron detenidos por este suceso.
Das despus la polica por orden del juez levant violentamente
el campamento de los huelguistas.418
Justicia public un telegrama recibido sobre el suceso;
Hoy de maana, a la hora de iniciar el trabajo, se produjo una
refriega entre los huelguistas de la va y los carneros, quedando
muerto de un balazo el contratista Virginio Mnica, conocido ex-
plotador. No hay ms heridos. La polica detuvo a varios compa-
eros, y un piquete de soldados de guardia hizo fuego contra los
huelguistas.419
Ante el hecho Accin Comunista ser determinante La
mano armada que ejecut la muerte, cumpli un designo ineludi-
ble, ajeno a la propia voluntad de su dueo. El impulso que la movi
no provena de un alma perversa y criminal sino de la propia socie-
dad en que vivimos. Ella es la que, castigando con la crcel a los
impacientes ladrones de los ricos y protegiendo con los cdigos, las
policas y los soldados a los ladrones de los pobres, enciende en las
almas proletarias el fuego de la venganza personal, nico recurso
que les queda a los desamparados para reparar las injusticias que
padecen, con el consentimiento de la sociedad. (...) consideramos la
muerte de Mnica como un simple accidente del robo, as como

418 Justicia, 5 de Abril de 1922.


419 Justicia, 28 de Marzo de 1922.

217
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

ellos consideran la muerte de un trabajador entre los engranajes de


una mquina, como un simple "accidente del trabajo".420
A comienzos de Abril, el diario Justicia entrevist a uno
de los obreros en huelga quien cont como los explotaban con
las exiguas pagas, siendo estafados cobrando mucho menos de
lo prometido. Un grupo de obreros mas avezados en las luchas
entre el capital y el trabajo, resolvieron hacer propaganda para
un movimiento reivindicativo y obtuvieron el mas completo xito
en sus gestiones, pues sus compaeros, unnimemente respon-
dieron a un llamado de estos reunindose en asamblea general
y confeccionando el pliego de condiciones. Seala que son unos
120 o 125 los huelguistas en un total de 130 obreros. Jamas se
haba presenciado en Rocha un movimiento de esta naturaleza.
Ha habido, es cierto, algunos movimientos, pero aisladamente y
de poca importancia.
Este es el primer movimiento serio que se inicia en Rocha y
que tiene todos los caracteres de las grandes luchas entre el ca-
pital y el trabajo. Es admirable una cosa en este movimiento: la
solidaridad y el entusiasmo que reina entre los trabajadores.421
Pero luego de ms de veinte das de huelga el movimien
to comienza a decaer La vuelta al trabajo, iniciada por unos
cuantos obreros flojos de voluntad, de escasa comprensin de
sus propios intereses y dbil preparacin revolucionara, no cons-
tituye sin embargo una liquidacin el movimiento.422
Si bien la huelga se perder por el desmembramiento de
los trabajadores que agotados en sus esfuerzos volvieron poco a
poco a desempear sus funciones, la lucha por la libertad de los
presos mantuvo unidos a buena parte de los obreros rochenes.
El asedio policial tambin continu siendo, por ejemplo, una

420 Accin Comunista N25, 3 de Abril de 1922.


421 Justicia, 8 de Abril de 1922.
422 Justicia, 13 de Abril de 1922.

218
La divisin obrera

asamblea en el S.G.T. de comienzos de abril rodeada por las fuerzas


policiales.423 En el mes de junio recin sern liberados cuatro pre
sos, continuando an en esa fecha veinte en prisin.424

4.9. Los Congresos Obreros en el Litoral.

a) El Congreso Obrero de Paysand

Luego de las mencionadas postergaciones, el sbado 11 de


Febrero de 1922 a las 21:30 en el local de Oficios Varios se inicia el
primer Congreso Obrero de Paysand.
Como secretario del Consejo Federal existente Julin Pes
ce abri el acto. Participaron del congreso, Pascual Caccia y Juan
Buceo por albailes. Julin Pesce y Agustn Roveta por obreros en
calzado, Oscar Manin, por Oficios Varios, Juan D. Belatti y Salvador
Giarso por Pintores, Andrs P. Medina y Erasto Barcia por los Pana
deros, Ernesto Juan y N. Gmez por los Grficos y N. Gersi por la
Unin de Trabajadores Agrcolas. A su vez participaron con voz pero
sin voto, Domingo Delmonte por los Herreros, Rodolfo Gall, por los
Sastres; Alfredo Pacheco por los Martimos.
El Congreso fue presidio por Erasto Barsia. A diferencia de la
propuesta original de denominar a la nueva entidad como Sindica
to Obrero Departamental, se le denomin Federacin Obrera Local,
(recomendacin que se encuentra en los estatutos de la F.O.R.U.).
Luego se discuti los propsitos de la Federacin, y seala
Justicia que los delegados anrquicos atacaron con muchas pala-
bras que queran ser argumentos al Partido Comunista, a la Inter-
nacional de los Sindicatos Rojos, a la dictadura del proletariado, a
la revolucin rusa, a todo.425
423 Accin Comunista N26, 10 de Abril de 1922.
424 Accin Comunista N34, 12 de Junio de 1922.
425 Justicia, 21 de Febrero de 1922.

219
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

La discusin parece haberse prolongado por dos horas


sufriendo los anarquistas una derrota aplastadora segn el
relato comunista. Gersi, que fue sealado como leader de los
anarquistas por el cronista comunista, mocion para que se su
primiera el apoyo a la Sindical Roja y solicit la adhesin a la
F.O.R.U. El Congreso no aprob la mocin, pero si aprob en
cambio, una del delegado Magnin aceptando la dictadura del
proletariado y los soviets. Cumplida la hora reglamentaria se
dej el segundo punto para el lunes a las 21:30. La primer se
sin haba sido un triunfo claro de los comunistas.
El lunes comenz la segunda sesin a las 21:30. Segn
la crnica de Justicia, predominaron los insultos y la falta de
entendimiento. Del lado anarquista parecen haberse destaca
do los delegados de la U.T.A., Gersi y su compaero Eselsi, y
tambin Juan Buceo, quin increp a su compaero de oficio
Pascual Cecio. Tambin en esta sesin solo se pudo aprobar un
artculo sin mencionar la crnica de que trataba el mismo.
Segn El Telgrafo Las discusiones han sido demasiado
largas habindose perdido, por esta causa, mucho tiempo. Algu-
nos congresales hacen cuestin de sectarismo.426
En la sesin del martes se trat la renuncia del delegado
de los panaderos Andrs P. Medina, entonces, y siempre segn
el relato comunista Por medio de malvados manejos los anar-
quistas se encontraron en igual nmero que los comunistas, con
el agregado de tener la presidencia en sus manos. De esa ma-
nera reformaron el reglamento a su gusto, del 3 al 7 artculo.
La sesin del mircoles a la noche no se realiz ya que
se realizaron algunas asambleas gremiales que tendrn graves
repercusiones. Los panaderos, tras la renuncia de su delegado
designaron a Julio Sujurato. Pero el asunto ms complejo estuvo
en la asamblea de albailes especialmente convocada, donde

426 El Telgrafo (Paysand), 14 de Febrero de 1922.

220
La divisin obrera

destituyeron al delegado anarquista Buceo ya que segn Justi-


cia haba violado las resoluciones del gremio y lo reemplaza
ron por Toms Desidero.427
Para los anarquistas lo sucedido fue que no habiendo
podido rechazar las aludidas credenciales [de los delegados
anarquistas], por resultancias demasiado legales, acordaron
otro golpe politiquero y sin ms ni menos, hicieron convocar
una asamblea de albailes para nombrar un nuevo delegado
quitndole el poder al nombrado por ser anarquista.428
La siguiente sesin fue el Jueves 16 a la noche. El asunto
fue tomado como una provocacin por los anarquistas quie
nes no reconocieron a los nuevos delegados. De los insultos la
asamblea deriv en una violenta batahola, entre una quincena
de anarquistas y una cuarentena de comunistas. Revlveres,
garrotes, pias americanas y cuchillos salieron a relucir, resul
tando el comunista Pablo Gonzlez herido en la cabeza.
Fueron detenidos por algunas horas los comunistas Ju
lin S. Pesce, Luis Giano, Manuel Migone, Enrique Belotti, Pas
cual Laccia, Patricio Pelatti, Domingo Sangona, Rodolfo Galli,
Juan D. Belotti, Pablo Gonzlez, Salvador Giano y Agustn Ro
veta y los anarquistas Rafael Gmez, Erasto Barcia y Matas
Surez.429
La prensa comentar Anoche mientras sesionaba el
congreso obrero local (...) se produjo un descomunal escndalo.
Hubieron varios disparos de armas de fuego -seis omos noso-
tros- no habindose podido hasta el momento individualizar a
los autores. (...) Pablo Gonzlez result herido en la cabeza, al
parecer de un garrotazo (...) En el local del Centro, se encontra-
ron abandonados sombreros, gorros, una cachiporra de plomo

427 Justicia, 21 de Febrero de 1922.


428 La Tierra N81, 4 de Marzo de 1922.
429 Justicia, 21 de Febrero de 1922.

221
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

de 550 gramos, varias pias americanas, garrotes, etc.430


Los anarquistas desde las pginas de La Tierra reivindica
ron su accionar; si los socialistas ayer y comunistas hoy no hubie-
ran pretendido embanderar a la nueva F.O.L. en un partido polti-
co para pescar votos, no hubiera ocurrido el lo. Ven por egostas
y engaadores lo que les pasa! (...) Bien por los anarquistas que
han salvado la situacin proletaria en Paysand!431
No sabemos que sucedi despus de tan intenso combate,
no parece haber habido consecuencias penales para nadie, pero
no sabemos cual fue la actitud de la polica hacia los militantes
anarquistas y comunistas, pero sin dudo el nivel de tensin entre
ambas tendencias estaba en un punto clmine.
El Consejo Federal del Sindicato de Oficios Varios parece
haber llamado en varias oportunidades a reanudar el Congreso
pero los anarquistas no se presentaron. Ni el presidente del Con
greso ni los delegados de la U.T.A. ni los obreros Panaderos acu
dieron al llamado del 1 de Marzo y el Congreso no sesion.432
El Congreso recin reanud sus sesiones el Martes 7 de
Marzo, la U.T.A. se retir del Congreso sealando en una nota en
viada y por palabras del mismo delegado, debido a que no estn
de acuerdo con las resoluciones del mismo, argumentando, a su
vez, que en los informes publicados por Justicia se calumnia a la
U.T.A. y sus delegados. El gremio grfico tambin se retir, al igual
que el resto de los anarquistas presentes y el congreso sesion
solo con los delegados comunistas, aprobndose en un da del
artculo 7 al 26. Al da siguiente se reuni la ltima sesin y se
nombr el Consejo Federal de 7 miembros para 1922-1923 com
puesto por Julin Pesce (secretario general), Amrico Fernndez
(secretario de actas), Juan D. Belotti (tesorero) y Oscar Magnin,

430 La Repblica (Paysand), 17 de Febrero de 1922.


431 La Tierra N81, 4 de Marzo de 1922.
432 La Repblica (Paysand) 1 y 2 de Marzo de 1922

222
La divisin obrera

Adolfo Rojas y Luis Fleitas (vocales). Quedando la Federacin


Obrera Local integrada por los siguientes gremios; Albailes, Pa
naderos, Zapateros, Pintores, Sastres, Herreros, Martimos y Ofi
cios Varios.433
Tras el triunfo comunista en el Congreso Obrero, los anar
quistas envan un amplio informe de su accionar en Paysand al
peridico La Tierra, el cronista es optimista ms all del Congre
so, ya que seala que los anarquistas tan solo hace un ao que
hacen propaganda en localidad pero son ms o menos la misma
cantidad que los dems que ya llevan varios lustros de propagan
da. Seala que en realidad las organizaciones gremiales existen
solo de nombre, puesto que no tienen la pujanza necesaria para
presentar la batalla al capitalismo y derrotarlo; pero en cuanto a
la cuestin moral existen de verdad y constituyen entidades pen-
santes, que pujan unas por establecer el gobierno o la dictadura
del partido socialista colectivista ayer y comunista hoy; y otras
por la organizacin, del libre acuerdo o anarquista, sin explota-
dores sin dictadores. Entre los gremios anarquistas menciona
principalmente a los grficos, pero tambin a los panaderos, a
la Unin de Trabajadores Agrcolas. A los conductores de carros
(prontos a organizarse) y parte de los albailes, de los herreros y
oficios varios.
Entre los centros sociales cuenta a El Internacional y el
Femenino el primero agrupa a una cincuentena434de compa-
eros activos que a menudo realizan conferencias, otras propa-
gandas y llevan a los gremios la difusin del pensamiento revolu-
cionario. Y el segundo realiz un importante pic nic que dej 60
pesos lquidos de ganancia.
Los anarquistas proyectan crear una Federacin Obrera
Anarquista Sanducera, considerando que donde existen divi-

433 Justicia, 15 de Marzo de 1922.


434 En una crnica posterior (La Tierra N83, 18-03-1822) dicen ser una treintena.

223
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

siones fundamentales las unificaciones solo pueden hacerse en


forma muy transitoria para casos especiales; de los contrario se-
ra constituir un organismo indefinido, incoloro, estorbo para las
fracciones en pugna.435
Por otra parte los comunistas parecen haber constituido
otro centro femenino que resolvi en una asamblea que las afilia
das al Centro Cultural Femenino tambin debera afiliarse al nue
vo centro. Como respuesta, el ya existente rechaz la imposicin
y cambi su nombre por el de Centro Femenino Anarquista436La
divisn obrera se haba impuesto en Paysand.
Por su parte los gremios disidentes de la Federacin Local,
Artes Grficas y Trabajadores Agrcolas se afiliaran a la F.O.R.U.437

b) Gira de Ricardo Carril en Salto.

En abril de 1922 se realizar una nueva gira de propaganda


por el litoral. As como al comenzar el ao dio unas seis conferencias
el delegado de la F.O.R.U. Celestino Gonzlez, los sindicalistas de la
FOM y la FOMA, contando con la presencia de Pedro Alegra realiza
ron otras tres. Ricardo Carril, delegado del Comit Pro Unidad Obrera
(C.P.U.O.) de Montevideo, dar una conferencia el 7 de Abril en Salto.
Desde La Tierra se informar sintticamente lo ocurrido;
Anoche habl en el local del Pueblo Nuevo, el delgado Ca-
rril, propiciando la unificacin proletaria.
Cuando termin tom la palabra el obrero albail, compa-
ero Jos Fernndez, y acus a Carril, con datos concretos que el
acusado no pudo destruir, de ser uno de los principales autores de
la divisin obrera en Montevideo.
Hemos recibido cartas particulares de Montevideo, donde

435 La Tierra N82, 11 de Marzo de 1922.


436 La Tierra N84, 23 de Marzo de 1922.
437 Trabajo (Montevideo), N34 15 de Abril de 1922)

224
La divisin obrera

confirman las acusaciones hechas por Fernndez, contra el aludi-


do Carril.438
Y en efecto, Carril no era un delegado ms, con solo 22
aos, era un de los principales agitadores del grupo de La Batalla
de Montevideo, uno de los principales referentes, tanto en la
tribuna como en el papel de la defensa de la dictadura proleta
ria, y quien tuvo activa participacin en los conflictos ocurridos
en Montevideo en la divisin obrera.
El propio Carril enviar al C.P.U.O. el informe de la gira;
Desde temprano un numeroso pblico de obreros se con
greg, aumentando en forma que al iniciarse el acto el local rebo
saba de pblico, el que tuvo que extenderse hasta la calle. Inici la
conferencia la compaera Amestoy, la que dentro del tema, disert
extensamente invitando a la unidad proletaria. Tuvo palabras opor
tunas para las numerosas mujeres presentes, a las que seal la
conducta que deban seguir colaborando con el hombre en la lucha
social y termin con una salva entusiasta de aplausos. (...)
Luego como delegado del Comit Pro Unidad Obrera ocup
la tribuna y, como tal me esforc en la forma ms clara y sencilla
en exponer los fines que me traan al Salto. Una breve resea de la
lucha interna que soport la fuerza sindical en la renovacin y revi
sacin de valores y mtodos de lucha; la exaltacin de las pasiones;
la intolerancia practicada hasta entonces y como resultado el decai
miento del sindicato, el hasto y la apata de la masa (...)
Un compaero pidi la tribuna libre y concedida le fu, ex
pres de manera culta ciertas observaciones a nuestras palabras,
demostrndose no obstante, dispuesto a colaborar a la obra de uni
dad. La intervencin de este camarada y la forma de expresarse, la
actitud del pblico hasta el final de la conferencia, en una palabra la

438 La Tierra N86, 8 de Abril de 1922.

225
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

serenidad y entusiasmo puesto de manifiesto durante el acto, nos


permite ser optimistas y creer en el futuro de la unidad.439

Por otra parte el delegado seal que fue este un primer


contacto, se di paso hacia la conjuncin de fuerzas y se traz un
plan de acercamiento definitivo. Lo que nos da la pauta de que
los anarco-dictadores de Montevideo, no tenan mucha influen
cia en Salto, y los sindicalistas parecen recibir su influencia desde
Argentina y la F.O.M.

c) Picnics en un verano caliente.

El pic nic obrero, ms all de su valor cultural fue el princi


pal motor econmico, que permiti el financiamiento de los de
legados y la propaganda. En ese convulsionado verano obrero,
se realizaron tres. El 8 de enero en Los Algarrobos a beneficio
del comit pro reorganizacin y La Tierra, con variados atracti
vos y conferencia de C. Gonzlez, pero como el beneficio de ste
pic nic se utiliz para sufragar los gastos del delegado en gira, se
realiz un original corso de flores el 5 de Febrero tambin en
Los Algarrobos, vendindose 152 entradas (mujeres y nios iban
gratis)440El 2 de Abril se realiz un nuevo pic-nic a beneficio del
Ciencia y Vida y los delegados que vendran de Buenos Aires.441

d) Congreso Obrero Comarcal en Salto. (Mayo 1922).

Realizado el Congreso en Paysand embanderada la F.O.L.


sanducera con los postulados comunistas, los anarquistas de Salto

439 Justicia, 19 de Abril de 1922.


440 La Tierra N75 (21-01-1922) y N85 (01-04-1922)
441 La Tierra N84 (23-03-1922) y N86 (08-04-1922)

226
La divisin obrera

se proponen disputar los logros obtenidos y salen al cruce con la


realizacin de un Congreso Obrero Comarcal que agrupe varios
departamentos y provincias alineadas en el anarquismo ortodoxo.
A menos de dos semanas de que se realice el Congreso
Obrero en Salto, Mario Herrera se dirigi a Paysand a realizar pro
paganda en pro del mismo, a raz de esto se ha iniciado una activa
campaa en pro de nuestras ideas y del Congreso obrero comarcal
que se realizar en breve en esta localidad deca La Tierra. La pri
mer conferencia fue el sbado de noche, en el Centro Internacio
nal y el domingo de tarde se realiz una conversacin informa
tiva en la asamblea del Centro Femenino Anarquista, este ltimo
acord poner 5 pesos para el Congreso, y enviar dos delegadas
Clemencia Lectler y Luca Bucco. El Centro Internacional enviar a
Lectler. El martes realiz otra conferencia en plaza Constitucin y
mircoles en la explanada del puerto.442
La Federacin Obrera Local Saltea, que haba nombrado
delegados en Febrero a travs del auto disuelto comit de reor
ganizacin, sesionar en el local de Osimani y Llerena y culmina
su reorganizacin al finalizar Marzo; La Federacin Obrera Lo-
cal Saltea ha quedado constituida el 30 de Marzo ltimo, con
los nicos gremios que existen organizados actualmente en salto
y que son: Obreros Albailes y Anexos, Sastres Unidos Obreros
Mimbreros, Centro Femenino de Oficios Varios, S.R Oficios Va-
rios, Pintores Unidos, adems asisti en carcter informativo un
miembro de la comisin de Obreros Panaderos.443
La F.O.L. reorganizada, resuelve realizar un Congreso
Comarcal con delegados de Salto, Buenos Aires, Montevideo,
Paysand, Concordia, Concepcin del Uruguay, Monte Caseros y
otras localidades aledaas.444

442 La Tierra N88, 22 de Abril de 1922.


443 La Tierra N85, 1 de Abril de 1922.
444 La Tierra N86, 8 de Abril de 1922.

227
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

El Congreso que se realizar los das 1,2,3 y 4 de Mayo


ser sin duda el acontecimiento ms importante desde el triunfo
de las huelgas del ao anterior. En el contexto de la profunda
divisin existente el Congreso busca definir posiciones en el mo
vimiento obrero local, y el objetivo de los anarquistas de la F.O.L.
quedar alcanzado ampliamente.
En el Congreso se propone discutir valores, acerca del so
cialismo, el sindicalismo, y anarquismo. Sobre el sistema federati
vo y el sistema industrial, medios de lucha y finalidad.
Se redactar un pacto federativo. Se tratar sobre las rela
ciones regionales e internacionales, si se debe mantener relaciones
con otros organismos que no acepten la finalidad y medios de lucha
afines. Sobre el proletariado rural, la prensa revolucionaria. Sobre el
concepto que la organizacin tiene de la revolucin rusa, su significa
do histrico, filosfico y socialista. Sobre cuales son los medios de la
organizacin para la reconstruccin socialista luego de consumada la
revolucin. Sobre que medidas tomar para ayudar al sexo femenino
en talleres, fabricas, etc. y se nombrar un nuevo Consejo Federal.
A su vez, La Tierra publica un proyecto de pacto federal
para una Federacin Obrera Anarquista.445
El Congreso fue considerado todo un xito por los anarquis
tas. Por el numero de instituciones representadas, por la naturale-
za de los asuntos tratados en l, por la amplia libertad de hablar y
votar que se concediera a las organizaciones que concurrieran con
carcter informativo, por la libertad de exposicin que se otorgara
a la barra, este Congreso Comarcal ha sido un triunfo moral.446
Participaron unas 20 instituciones, entre ellas, delegados
de Paysand y Concordia, un delegado de la Federacin Obrera
Regional Uruguaya y otro de la Federacin Obrera Regional Ar
gentina y el peridico La Protesta.

445 La Tierra N89, 30 de Abril de 1922.


446 La Tierra N90, 8 de Mayo de 1922.

228
La divisin obrera

Antonio Vidal, quien vino como delegado de la F.O.R.A. Co


munista seal Hay que hablar con franqueza. El Congreso obrero
salteo reunido los das 1,2,3 y 4 de Mayo, fu una de las asambleas
obreras que revisten mayor importancia no solo en el Uruguay sino
en casi toda la Amrica del Sud, Centro y Norte Amrica, excepto la
Repblica argentina, en cuyo pas ha tomado el proletariado acuer-
dos de tal magnitud, como la recomendacin de la propaganda del
comunismo anrquico como finalidad social de la F.O.R.A.447
En la vereda opuesta el grupo de Plaza y los sindicalistas
sealaron que el Congreso se realiz en familia y que fue una
parodia de congreso.
No sabemos que gremios concurrieron exactamente. Segn
los sindicalistas, no fueron ni los picapedreros, ni los navales, ni
los sastres ni los martimos ni los constructores navales. Segn La
Tierra, los sastres s participaron, y los nicos que se opusieron
fueron los picapedreros (argumenta que los Constructores Navales
no tuvieron asamblea para nombrar delegados).
A partir del congreso La Tierra es el rgano de publicidad
de la F.O.L.S.
Se acord crear una seccin del comit de reorganizacin
que atienda las necesidades de los trabajadores del campo y su
organizacin.
El Comit de reorganizacin qued compuesto por; A. Ma
zarino, A. Lancieri, A. Rivero, A. Gamarra, Q. Amarillo, E. Amarillo,
Piroto S, E. Gonzalez, R. Martinez, M.O.Herrera, A. Casi, C. Mazza,
J.P. Tort, J. Bilonchi, V. Nuez, L. Sabinta y J. Fernndez.
El congreso fue presentado como II Congreso Obrero Lo
cal y 1er Congreso Obrero Comarcal. Como vimos al comienzo
de este trabajo, la adjudicacin de ste como II Congreso Local,
presupone la adjudicacin de 1er Congreso, a la fundacin de la
F.O.L. saltea en 1918, cosa que pusimos en duda.

447 Idem.

229
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

En el Anexo publicamos los acuerdos completos del Congreso


pero dada su importancia apuntaremos algunos puntos centrales;
Como primer acuerdo se declara: de acuerdo con las prac-
ticas anarquistas, esencialmente libertarias, todos los delegados
tuvieron voz y voto y la barra amplia libertad de expresin es
decir que la barra tena voz y podran enviar mociones a la mesa,
pero solo podan votar los delegados de los gremios.
Segundo y Tercer acuerdo; solidaridad con los presos por
cuestiones sociales; Simn Radowitzky y los anarquistas presos
por el gobierno Sovietista Ruso y Sacco y Vanzetti.
4to acuerdo; revisacin de valores; socialismo, sindicalis
mo y anarquismo.
En este punto se explayan claramente, declarndose
abiertamente partidarios del Comunismo Anrquico, basado en
el Sistema Federalista descentralizado y libertario que bosquejara
Miguel Bakounine y por lo tanto, declarndose contrarios a todo
poder de estado ya sea poltico o proletario u obrero y a todo in-
tento de perpetuar la lucha de clases reemplazando en el poder o
gobierno a los que actualmente lo detentan.
Quinto acuerdo; sobre el label de las organizaciones y de la
F.O. Local Saltea, seala que para diferenciarse de los sindicatos
como la Unin Sindical Argentina (no menciona al C.P.U.O.) to
das las sociedades que adhieran al comunismo anrquico deben
explicitarlo en sus sellos. En lo que se refiere en particular a la
F.O.L. acuerda que en adelante se llame Federacin Obrera Local
Saltea y como subtitulo en vez de Emancipacin -como dice
el sello de la F.O.R.U.-, diga Comunista Anrquica.
Sexto acuerdo; sobre el sindicato nico por industria la
F.O.L. rechaza el sindicato industrial centralizado, sin haber con
senso en este punto contando 18 votos a favor, una abstencin y
el Centro Ciencia y Vida seala que se pronuncia por el federalis
mo sin prejuicio de que se estudie el Sindicato nico Industrial.

230
La divisin obrera

Sptimo acuerdo; Pacto de Solidaridad se aprueba el pro


yecto de Federacin Obrera Anarquista, pero se le cambia el nom
bre por Federacin Obrera Local Saltea, Comunista Anrquica.
Octavo; en relacin con otros organismos, que no se man
tengan relaciones con los que no aspiran al comunismo anrquico,
pero deben solidarizarse con los trabajadores que perteneciendo
a estas organizaciones, le impriman movimientos revolucionarios.
Noveno; se acuerda fomentar la propaganda del comunis
mo anrquico al proletariado rural y fomentar su organizacin.
Por ltimo se design a La Tierra como rgano de la
F.O.L.S., se rechaz todo poder poltico obrero como el ejercido
en Rusia, se apoyar la organizacin femenina y se atendi una
mocin del delegado de Paysand solicitando se los apoye peri
dicamente.448

4.10. El forismo como ideologa obrera.

A medida que las disputas en torno a la revolucin rusa se


van agudizando, se va delineando lo que luego se denominar
forismo, o que tambin puede denominarse como movimiento
obrero finalista (porque pone nfasis en la finalidad
revolucionaria), o que quizs la manera ms correcta de llamarlo
sera federalismo, no solo porque promuevan la organizacin
federal sino por ser claros continuadores ideolgicos de los
federalistas (bakuninistas) de la Primera Internacional.449 Es sta
la particular posicin de los militantes de la F.O.R.A., la F.O.R.U.,

448 La Tierra N91 (13-05-1922), N92 (13-05-1922) y N93 (27-05-1922).


449 Nos reconocemos continuadores de la primera Internacional, tal como fu en-
tendida en Espaa e Italia y en los pases suramericanos; creemos que ella ha
marcado el buen camino al proletariado revolucionario y que el sindicalismo pos-
terior no ha sido ms que una desviacin mezquina del espritu y la prctica de la
gran Asociacin obrera. (Lpez Arango y Abad de Santilln, El anarquismo en el
movimiento obrero, Libertad! Buenos Aires, (Edicin digital), 2014. Pg.93.

231
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

y que adscribe plenamente la F.O.L. saltea sobre la militancia


anarquista en los gremios.
El forismo es fruto de la experiencia prctica de la F.O.R. Ar
gentina, y defendido y practicado por la F.O.R. Uruguaya. Expulsa
dos los elementos anarco bolcheviques de la F.O.R.A. Comunista
en 1921, se dio un primer paso que se materializ en el congreso
de 1923, donde se elimin la palabra comunista (ya la F.O.R.A. del
IX Congreso se haba transformado en U.S.A. a su vez y no exista
necesidad de diferenciar ambas F.O.R.A.), y se fij por escrito el
relacionamiento entre la entidad obrera y los grupos anarquistas,
aconsejando que los compaeros anarquistas que se encuentran
al margen de la FORA tengan derecho a integrar los cuerpos de
responsabilidad de la misma.450
En ocasin del II Congreso de la AIT celebrado en Amster
dam en 1925, Abad de Santilln sealaba sobre la F.O.R.A.; Tn-
gase en cuenta que nuestra institucin ocupa un lugar nico en el
mundo, por su definicin ampliamente anrquica, y tiene inters
en que ese principio se adopte como finalidad de todo movimien-
to reivindicador del proletariado universal.451
En 1925 con la publicacin del libro El anarquismo en el
movimiento obrero Diego Abad de Santilln y Emilio Lpez Aran
go terminaban de dar forma a la postura forista que tena sus
claros orgenes en los federalistas bakuninistas y Federacin de
Trabajadores de la Regin Espaola del siglo XIX.
En dicho libro se diferencian del anarco sindicalismo clsico
defendido por los principales referentes internacionales como
Malatesta, Fabbri o Faure, que consideran al sindicato como el
embrin de la sociedad futura, sealando que No debemos

450 Abad de Santilln,2005:271


451 Federacin Obrera Regional Argentina. Concurrencia al II Congreso de la AIT. La
Protesta, Buenos Aires, 24/06/1924. en Miguelaez Mara Virilidad y juventud:
las luchas de representacin y el anarquismo latinoamericano, Fazendo Gnero
N9 , Disporas, Diversidades, Deslocamentos 23 a 26 de agosto de 2010

232
La divisin obrera

olvidar que el sindicato es, como consecuencia econmica


de la organizacin capitalista, un fenmeno social hijo de las
necesidades de esta poca. Conservar su estructura despus de
la revolucin implicara tanto como conservar la causa que lo
determin: el capitalismo.452
Los autores se oponen al sistema de organizacin indus
trial fomentado por los I.W.W. sealando que Los I. W. W. lleva-
ron el marxismo a la organizacin obrera; son materialistas his-
tricos, ya que a la fatalidad del desarrollo industrial confan el
triunfo de la revolucin y en la potencia del capitalismo se basan
para nutrir de energa sus organizaciones de lucha. (...) Pues lo
mismo que no debemos aspirar a la conquista del Estado, sino a
su destruccin, tampoco debemos querer la conquista del sistema
econmico del capitalismo, sino su abolicin en la vida social.(...)
Y si esos anarquistas, pretendiendo haber hecho un colosal descu-
brimiento, nos presentan el industrialismo I. W. W. o sus derivados
sindicales: consejos de fbrica, organizacin por talleres, divisin
del trabajo en ramas de industria y dems innovaciones de corte
marxista, creyendo haber encontrado la solucin del problema
social, es menester que les recordemos que nada tan opuesto a
las ideas anarquistas y a la concepcin del comunismo como esa
teora sacada de la mdula del capitalismo.453
Mientras en nombre de la unidad proletaria se cometan
las ms feroces luchas intestinas que el movimiento obrero inter
nacional conoci, los foristas no escondan sus intenciones;
Nosotros hemos hecho escuela del divisionismo (...) Acep
temos como lgica la existencia de fracciones doctrinarias orgnica
mente independientes en el movimiento obrero. Y consecuentes con
la intransigencia hacia todo lo que conspire contra nuestro derecho a

452 Lpez Arango y Abad de Santilln, 2014:22


453 Lpez Arango y Abad de Santilln, 2014:34-36

233
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

propagar el anarquismo a los trabajadores, nos esforzamos por crear


un movimiento sindical autnomo frente a las corporaciones adver
sas a toda ideologa y a las que sostienen una ideologa que no es la
nuestra. Y no negamos el derecho a hacer lo mismo a todas las dems
fracciones polticas y revolucionarias. Es la experiencia de los diversos
matices ideolgicos y tcticos la que dir la ltima palabra sobre la
prevalencia o la desaparicin de las varias corrientes que se disputan
la orientacin del movimiento obrero.454
Los foristas ponen en tela de juicio un valor tan caro a los
organismos sindicales, el clasismo, sealando
Nos hemos acostumbrado a considerar el mundo a travs
del prisma unilateral que pone a una clase frente a otra, y en lugar de
confirmar con el examen de la historia y de la realidad el contenido
de esa idea, la supuesta homogeneidad de las clases en pugna, ha
cemos la operacin contraria, abstrayndonos de todo lo que puede
poner en tela de juicio la exactitud del materialismo histrico. (...)
si queremos la revolucin, no lo hacemos en vista slo de aliviar la
situacin de los que tienen hambre de pan, sino para organizar la vida
social de manera que todos los hombres tengan en el banquete de la
vida un puesto y disfruten de las ventajas de la libertad.
Los reformistas se esfuerzan por que pensemos como zapa
teros o como sastres y no como hombres. Predican la fraternidad de
los obreros y no la fraternidad humana. Pero nosotros dudamos que
la unidad de intereses del obrero y del gendarme o del huelguista
y del rompehuelgas, todos pertenecientes a una capa social econ
micamente inferior, sea efectiva y justifique una alianza cualquiera
entre ellos.455

454 Lpez Arango y Abad de Santilln, 2014:47


455 Lpez Arango y Abad de Santilln, 2014:48

234
La divisin obrera

Por la misma razn que protestamos cuando los bolchevis


tas o los socialdemcratas nos dicen que la revolucin es una cosa de
partido, del partido propio, protestamos tambin contra los sindicalis
tas que dicen que es una cuestin de clase. Hemos visto a qu qued
reducido el gobierno del pueblo por el pueblo; vimos despus que la
dictadura del proletariado de Lenin fu una dictadura de una minora
influyente sobre el proletariado a beneficio del capitalismo. Si la expe
riencia sindicalista se hiciera algn da veramos que la idea de clase se
limitara a los obreros asociados, ms an: a las Comisiones ejecutivas.
An ms: a los ms hbiles y a los ms astutos de esas Comisiones eje
cutivas. Y as como Lenin hubiera podido decir: la dictadura del prole
tariado soy yo, veramos a algn sindicalista afirmar: la clase soy yo.456
En definitiva, para los autores, las organizaciones valen por
sus ideas, por sus finalidades; La organizacin no debe ser con-
siderada como algo sustantivo; lo sustantivo en una organizacin
son los ideales que la inspiran y que la fundamentan. Si la organi-
zacin en si tuviera algn valor intrnseco, entonces todas las or-
ganizaciones proletarias se equivaldran. No podramos distinguir
una fascista de una anarquista.457
Luigi Fabbri, amplio conocedor y discpulo de las ideas de
Malatesta deca sobre las posturas de ste sobre el movimiento
obrero;
A propsito de ciertas tendencias de algunos anarquistas a
constituir organizaciones sindicales con programa o etiqueta anar
quista (anarco sindicalistas rusos y alemanes, y sindicales anarquis
tas sudamericanos), Malatesta se declar siempre contrario a ellas.
Como hemos visto, hablaba siempre de sindicatos abierto a todos.
Para que el sindicato pueda servir a su propio objetivo de defender

456 Lpez Arango y Abad de Santilln, 2014:49


457 Lpez Arango y Abad de Santilln, 2014:52

235
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

los intereses actuales de los trabajadores y mejorar sus condiciones,


y al mismo tiempo ser medio de educacin y campo de propaganda
para una futura transformacin social radical, es preciso que recoja a
todos los trabajadores, o al menos a todos aquellos trabajadores que
aspiran a mejorar sus condiciones y a quienes se consigue hacer ca
paces de una resistencia cualquiera contra los patronos... Toda fusin
o confusin entre el movimiento anarquista y revolucionario y el mo
vimiento sindicalista acaba por hacer impotente al sindicato para su
finalidad especfica, o por atenuar, falsear, extinguir en l el espritu
anarquista.458
sta ltima es claramente la postura de los anarco sindica
listas de la U.S.U., del C.P.U.O., los anarco dictadores u anarco
bolcheviques, claro que Malatesta, Fabbri, y los referentes del
anarco sindicalismo europeo rechazaban la frmula de la dictadu
ra sindical y de la dictadura del proletariado en general.
El mismo Lpez Arango y Abad de Santilln contestaban a
Malatesta;
Podr alegar Malatesta, y con l todos los defensores del
anarquismo poltico -de las organizaciones especficas, al margen del
movimiento obrero y en oposicin a los partidos electorales. Que la
aceptacin del rtulo anarquista en los sindicatos supone el emban
deramiento en una tendencia exclusivista y que por ser tal rechaza
a los que previamente no acaten su programa. Pero esa imposicin,
que por otra parte se manifiesta en todos los rdenes de la activi
dad humana, a pesar de nuestras prdicas libertarias, no ejerce en el
movimiento obrero funciones violentas. Nosotros no forzamos a los
obreros de un oficio o de una industria, por el hecho de tener idnti
cos intereses como asalariados, a plegarse a nuestras organizaciones.

458 Sindicalismo e anarchismo, en Pensiero e Volont, de Roma, N6, 16 de Abril y 16


de Mayo de 1925. en Fabbri, L. Malatesta, Americalee 1945. Pg. 310.

236
La divisin obrera

Preferimos prescindir del vnculo de clase para unir a los trabajado


res de acuerdo con sus ideas. De ah que propiciemos la divisin de
las corporaciones improvisadas sobre bases econmicas y sometidas
a una rgida disciplina, organizando en su lugar tantos movimientos
obreros como tendencias dividen al proletariado.
No hay nada ms absurdo que la unidad de clase, propiciada
por los partidos polticos para consolidar su propio poder sobre los
trabajadores. Sin participar de esos propsitos, por una falsa inter
pretacin del movimiento obrero -segn nuestro modo de ver- Mala
testa y Fabbri propician tambin esa unidad, y, para dar el ejemplo,
comienzan por renunciar a toda propaganda que responda a fines
escicionistas.459

4.11. 1 de Mayo de 1922.

a) Salto

Este primero de Mayo se conmemora en Salto en momen


tos en que se realizaba el Congreso Obrero y se instalaba el foris-
mo en Salto.
En un primer momento se realiz una convocatoria para el
1 por fuera de la F.O.L. pero luego se unific la convocatoria in
tegrando el comit; Sastres Unidos Chauffers Unidos Oficios
Varios Obreros Albailes Obreros Panaderos Obreros Grfi
cos F. en Constructores Navales Centro Femenino de Oficios
Varios Centro Ciencia y Vida Obreros en Mimbre F.O.L. Sal
tea; F. O. Martima Salto; Obreros Panaderos; Obreros Pintores,
Agrupacin Tierra Libre y el semanario La Tierra.460
Pero tal unificacin no fue total ni armoniosa, dejemos que
459 Lpez Arango y Abad de Santilln, 2014:91
460 La Tierra N88, 22 de Abril de 1922.

237
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Plaza nos cuente lo sucedido:


A iniciativa nuestra, a fines de Marzo ppdo. se constituy
un Comit pro 1 de Mayo, que lo integraron los Navales, los Marti
mos, los Grficos, los Chauffeurs y nosotros [picapedreros]. Herrera,
Hernndez y sus satlites, con los Sastres y otros sindicatos... que no
existen, dieron por constituida la F.O.L. y un Comit pro 1 de Mayo.
(...) En esos das lleg a sta el compaero Carril, y, a iniciativa suya,
nuestro Comit propuso a las organizaciones de la pretendida F.O.L.S.
la celebracin de una reunin. A esa reunin nuestro Comit mand
tres delegados (...) [quienes] opinaron que slo se deba tener en
cuanta a los Sastres, que era la nica entidad, de las que realmente
existan que no estaban en nuestro Comit.461
En dicha reunin que se encontraba Herrera y Hernn
dez por la F.O.L.S., se llegaron a acuerdos que segn Plaza los
delegados del comit sindicalista se extralimitaron y propu-
sieron y aceptaron condiciones para la unificacin El Comit
sindicalista reenvi su posturas y exiga que no participe ningn
centro anarquista del comit (solo gremios obreros) y que no
participen ni Herrera, ni Hernndez ni otros que como ellos
estn en tela de juicio. A la siguiente reunin concurri todo
el comit sindicalista. Como las condiciones exigidas no fue
ron aceptadas e incluso fue designado Mario Herrera al frente
del comit unificador pro 1 de Mayo, se retiraron los Chau
ffeurs y los grficos (recordemos que haba una agrupacin
grfica anarquista y otra sindicalista). Picapedreros, Grficos
y Chauffers resolvieron no participar de la manifestacin del
1 de Mayo.
Pero no se explica como, si la nica organizacin real
que tenan los anarquistas eran los Sastres, por que se impu

461 El Picapedrero (Montevideo) Mayo de 1922.

238
La divisin obrera

so el Comit anarquista sobre el sindicalista, demostrando los


hechos que los anarquistas continuaban teniendo una notoria
hegemona en el Salto.
Ante la realizacin del Congreso el mitin se hizo, por pri
mera vez a la noche. La Tierra seala que se hizo bajo el boicot
de dos o tres sindicalistas.462
La crnica de La Tierra ser emotiva;
En algunos momentos de la marcha, como cuando baja
ba del Cerro, la columna alcanz a ms de una cuadra, entonan
do himnos revolucionarios anarquistas, vivando continuamente a
la F.O.R.U., a la F.O A. Comunista, a La Protesta y al Comunismo
Anrquico.
Era francamente imponente y grato al espritu, la marcha de
aquella columna de hombres, mujeres y nias cantando en himnos
picos sus dolores y protesta; el flamear diez o dice banderas rojas que
en la noche se tornaban negras, como las penas y las miserias que so
portamos los esclavos de la sociedad actual.
En pocas palabras, el mitin del 1 de Mayo fue un triunfo de
las ideas anarquistas que ya se han hecho carne en el alma de nuestras
mujeres y nios y de la masa general del proletariado salteo.463

b) Paysand

Antes del primero se realizaron dos conferencias


preliminares de las que no tenemos mayor informacin. El
primero de mayo Paysand cont con la presencia del delegado
de la F.O.R.U. R. Freire, y dejaremos que l mismo nos cuente de
primera mano sus impresiones tras su llegada a la ciudad;

462 La Tierra N90, 8 de Mayo de 1922.


463 Idem.

239
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

En viaje para Salto llegu a Paysand donde algunos


compaeros, al verme me dijeron que deba permanecer ah a
dar una conferencia, pues haban recibido un telegrama para que
me detuvieran, as lo hice. Despus de los preparativos para esta
conferencia, llegamos al lugar prontos a hacerlo, pero la polica con
el pretexto de que haba pasado media hora de lo que estipulaba el
permiso, se opuso a que se realizara. Despus de dejar constancia
del abuso que se cometa, impidiendo el acto por cuestin de
minutos, nos retiramos a recoger algunos detalles, entre otros el
que parecera, en lugar de un 1 de Mayo un da de fiesta; pues
todo el mundo trabajaba, nos retiramos al Centro Internacional
donde los compaeros me informaron que por la noche debera
realizar una conferencia en la Federacin O. Local. Despus de
hablar del estado de la organizacin la cual se halla bastante cada
por cierto, me dijeron que en la conferencia de la noche hablara un
delegado del Partido Comunista, como es natural me extra, cre
que se tratara de una broma, pero luego oh desilusin! Comprob
que en realidad era cierto lo que los compaeros me haban dicho.
En la tribuna se hallaba Caceres [delegado del Partido Co
munista de Montevideo] a quien haba odo ya en Montevideo,
en nombre del Partido en que milita ahora, me pregunto yo qu
concepto pueden tener los obreros de Paysand con respecto a la
solidaridad? Cmo permiten estos compaeros que en lugar de
hablar delegados de la Federacin, se pidan oradores al Partido Co
munista?
Yo, como se trataba de un da como este y no queriendo res
tar nmero a la conferencia, aconsej a algunos que vean en todo
un proceder de hombres apocados no pedir la tribuna ni intervenir
al orador, pues entiendo, que aunque esta vez ha sucedido, no debe
permitirse que la organizacin sirva de bandera a quien organiza

240
La divisin obrera

un partido al margen, sembrando as el confusionismo, queriendo


mezclar la obra de los sindicatos en la de los partidos polticos.
En otra dar ms informes.
R. Freire, Salto, 3 de Mayo de 1922464
Por la noche se realiz un mitin partiendo una columna
desde el local de la F.O.L., llevando banderas rojas y carteles has
ta la Plaza Constitucin donde hablaron ante un pblico pocas
veces antes visto en Paysand Magnin, Schiappapietra y Cce
res, luego se volvi al local donde nuevamente habl Cceres. La
crnica del peridico comunista Justica, ignora la presencia del
delegado de la F.O.R.U.465

c) Rocha.

En la asamblea del S.G.T. del 15 de Abril se lee una nota del


C.P.U.O. pidiendo la adhesin del sindicato rochense y se nombra
un delegado para el prximo congreso, designando a Amelio Gon
zlez. Se decide a su vez, conmemorar 1 de Mayo en el teatro
La Artesana; con los oradores Garaza, Bordabehere y Ramon
Olivera. Se avisa al Centro Comunista, a la cuadrilla de excavacin
de Rocha y a la Sociedad de Resistencia de Picapedreros.466
Se menciona en la crnica de Accin Comunista que esta
vez se hizo un solo acto, seguramente por las divisiones ocurridas, el
ao anterior se vio reflejado en aquel primero de mayo. Sin embargo
el decaimiento del movimiento es notorio ya que no se pudo realizar
la marcha prevista por no acudir suficiente nmero de trabajadores.
S se realiz la conferencia proyectada y se realiz a su vez un pic nic
para juntar fondos para los presos de la pasada huelga.467
464 La Tierra N90, 8 de Mayo de 1922.
465 Justicia, 4 de Mayo de 1922.
466 Accin Comunista (Rocha), N27, 4 de Abril de 1922.
467 Accin Comunista (Rocha), N29, 8 de Mayo de 1922.

241
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

4.12 De Mayo a Mayo...

Para el mes de Mayo el peridico Trabajo de Montevideo


nos informa acerca de los gremios adheridos tanto a la F.O.R.U.
como al C.P.U.O., en relacin a los departamentos estudiados po
demos saber que el C.P.U.O., contaba con la adhesin solo de los
Picapedreros de Salto contando 20 cotizantes. Mientras que se en
contraban autnomos de ambas en Paysand los albailes con 250
cotizantes, Pintores con 25, Panaderos 25 y los peluqueros con 10.
Tambin estaba autnoma el S.G.T. de Rocha con 80 cotizantes.468
Mientras que adheridos a la FORU se encontraba la F.O.L.,
compuesta por Albailes, Sastres, Pintores, Panaderos, Obreros
en Mimbre, Oficios Varios, Centro Femenino y Oficios Varios,
sumando todos 250 cotizantes. Y en Paysand contaban con los
panaderos (30 cotizantes) y la Unin Grfica (30 cotizantes) y se
menciona el M.T.A. con 20 cotizantes que seguramente se trata
de la U.T.A. (Unin de Trabajadores Agrcolas).469

a) Salto

Si bien desde las pginas de La Tierra se insiste en que


hay un resurgimiento de la actividad obrera y gremial despus
del Congreso470, ya en un par de meses ms adelante se volver
a sealar el espritu decado de la organizacin y del nimo de los
trabajadores, sealando por ejemplo, que en ocasin de la huelga
de municipales que se efecta en Montevideo, los trabajadores de
Salto no estn los suficientemente organizados como para secundar
una huelga general.471

468 Trabajo N39, 20 de Mayo de 1922.


469 Trabajo N38 13 de Mayo de 1922.
470 La Tierra N92, 13 de Mayo de 1922.
471 La Tierra N104, 13 de Agosto de 1922.

242
La divisin obrera

Se nota un impulso militante tras el congreso, los anarquistas


plantaron la bandera forista en el Salto, e impulsaron una serie de
iniciativas locales, pero la activad gremial jams recuperar el nivel
de actividad de 1918-1921.
Vimos como tanto en el gremio grfico como en el de choferes
se haban producido divisiones internas. Ahora ocurre lo mismo con
las lavanderas, que mientras el gremio de stas parece posicionarse
por el sindicalismo, con la ayuda de Adolfo Plaza y Blanca Amestoy
desde Concordia, se forma otra sociedad de lavanderas en el local
de Agraciada y Constituyente (donde tambin lo haca la agrupacin
libertaria grfica) al amparo de las propuestas anarquistas de la F.O.L.,
mientras las sindicalistas lo hacen en el local de los Constructores
Navales, contando con unas 60 socias.472 Lo mismo ocurre con los
conductores de carros, donde tambin se seala la influencia de
varios conductores sindicalistas desde Concordia.473
Por otra parte comienzan a registrarse problemas en
algunos gremios por la falta de participacin como es el caso de
Oficios Varios.474
Los albailes que para Mayo cuentan unos 30 socios
tambin comienzan a tener problemas para sesionar por falta de
participacin.475 Como tambin los tiene el Centro Femenino.476
El conflicto ms activo del periodo ser quizs, (y que se
mantendr por varios aos), el boicott de los obreros sastres a
la casa Paris-London, el cual se ve amenazado por mujeres que
van a trabajar por menos dinero incluso que los huelguistas.
Este hecho llam la atencin de los obreros agremiados, el
ejemplo no puede ser ms digno de tenerse en cuenta por todos

472 La Tierra N92 (13-05-1922), 94 (03-06-1922) y 95 (10-06-1922)


473 La Tierra N95, 10 de Junio de 1922-
474 La Tierra N101, 20 de Julio de 1922.
475 La Tierra N103 (05-08-1922), 113 (21-10-1922) y N114 (29-10-1922).
476 La Tierra N112, 14 de Octubre de 1922.

243
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

los trabajadores y revolucionarios en general que descuidan


lamentablemente la emancipacin de la mujer (...) No es
solamente el hombre quien ha de sufrir las consecuencias del
descuido de la educacin revolucionaria de sus compaeras
sean estas hermanas, madres, hijas, esposas, etc. Sino que ellas
tambin, por lgica consecuencia de su ignorancia se producirn
perjuicios para el bienestar y emancipacin de sus respectivos
hogares.477
Pasado el Congreso se realizaron varias conferencias, (en
Constructores Navales, en Plaza nueva, en el mes de Mayo y
otras varias en Junio), a su vez el Cuadro filodramtico del Centro
Ciencia y Vida comenz sus ensayos.
ste centro a su vez realizar un ciclo de cursos libres
Centro Ciencia y Vida
Cursos Libres de Enseansas [sic]
De acuerdo con lo acordado en el ltimo Congreso Local
(...) este centro acord crear un Curso Libre de Enseanza
invitando al efecto a la Asociacin Osimani y Llerena y a algunos
profesores que comprendiendo los altos fines que el Centro
persigue con estos cursos, presten su cooperacin intelectual.478
Los cursos comenzaran el10 de julio en el local del centro
con el siguiente programa;
Lunes; 8 a 9 pm, clase de lectura y escritura a cargo de
M.O. Herrera. 9 a 10pm clase de geografa elemental a cargo de
D.A. Massarino.
Mircoles; 7:30pm a 8 y30, clase de Historia General a
cargo de N. Etchevera. De 8:30 a 9 clase de Aritmtica a cargo
de D.A. Massarino.
Jueves 8 a 9pm lectura y escritura M Herrera.
Sbado 8;30 a 10 Temas Libres a cargo de J. Fernndez.

477 La Tierra N102, 29 de Julio de 1927.


478 La Tierra N98, 01-07-1922.

244
La divisin obrera

Tambin se piensa dar Gramtica Castellana y Geometra.


Pero el hecho de que no se hagan ms menciones de los
mismos en La Tierra nos hace pensar que no prosperaron ms all
del primer impulso.
En el centro Tierra Libre, por su parte, se realizan charlas
familiares todos los mircoles, la primera de ellas, el mircoles 23
de Agosto ser sobre La Anarqua.479
A su vez, acercndose la fecha de los comicios electorales, se
reorganiza el Comit Anti Poltico, realizando varios carteles y mani
fiestos, contando con la cooperacin del centro Tierra Libre quienes
se proponen sacar 500 carteles semanales y cuatro mil volantes.480
En julio se realiza un baile organizado por el Centro Femeni
no de Oficios Varios, que contar adems con la conferencia de la
compaera E. Bueno entre otras funciones, y otro organizado por
el gremio de albailes, en donde habl J. Fernndez. La finalidad de
ambos bailes es conseguir fondos para abrir una biblioteca obrera.481
El jueves 27 de Julio se realiza una conferencia pblica en Pla
za Nueva patrocinada por los albailes en la que hablaron Fernn
dez por el gremio y Herrera por la F.O.L.S., la misma se vio bastante
concurrida a pesar del fro invierno. Esto parece haber dado cierto
impulso ya que se realizaron varias ms en las semanas siguientes.482
El sbado 5 de agosto en la explanada del puerto organiza
da por la F.O.L.S.483 El domingo 13 de Agosto otra organizada por el
centro Tierra Libre donde A. Gamarra habl sobre La Poltica y los
Trabajadores, J Fernndez sobre la Prensa Anarquista, hablando
tambin M.O. Herrera y Tort.484

479 La Tierra N105, 20-08-1922.


480 La Tierra N106 (27-08-1922), N112 (14-10-1922), N113 (21-10-1922)
481 La Tierra N100 (15-07-1922) y 104 (13-08-1922)
482 La Tierra N102, 29 de Julio de 1922.
483 Idem.
484 La Tierra N105, 20 de Agosto de 1922.

245
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

En la asamblea del convulsionado gremio de lavanderas reali


zaron una conferencia Tort y Fernndez.485 El domingo 20 de Agosto
se realiz una conferencia anti poltica en el puerto, el Domingo 10
de Setiembre otra en Plaza Flores, y el 24 en los cruces de la calle
blandengues y av. Alberdi frente al almacn del "avestruz".486
Otro incidente que se produjo en la fecha, directamente
vinculado a la divisin obrera, fue la presencia del obrero Juan
Negri quien se desempeaba como albail en Salto. Negri haba
pertenecido al gremio de los yeseros en Montevideo y tena los
fondos de stos para la realizacin de un diario de la F.O.R.U..
Cuando la escisin obrera, Negri entreg los fondos a la F.O.R.U.,
lo cual le vali la condena de sus compaeros de gremio (ya que
el mismo se haba posicionado contra el consejo federal de la
F.O.R.U.) quienes solicitaron a la F.O.L.S. se le boicoteara en el
Salto, cuestin que la F.O.L.S. no acept por estar en completa
empata con la F.O.R.U. y la actitud de Negri.487
Por otra parte la actividad de los sindicalistas, y en
particular de Adolfo Plaza en Salto parece haber mermado
ampliamente luego de Marzo de 1923 en que la seccin de
Picapedreros de Salto qued disuelta, por solo quedar tres
miembros en la misma adems de Plaza y Giraldoni; su hijo,
un obrero que pas a trabajar en un saladero y otro que es
analfabeto y como tal no puede llevar actas. El desbande fue en
torno al conflicto sostenido con el patrn Pedro Pedrini, para
el cual, el casi total de los afiliados, ms de una veintena de
obreros, traicionaron la huelga y se pusieron a trabajar como
Krumiros.488

485 La Tierra N104, 13 de Agosto de 1922.


486 La Tierra N105, 20 de Agosto de 1922.
487 La Tierra N103 (05-08-1922), N106 (27-08-1922), N107 (02-08-1922), N108
(10-09-1922).
488 El Picapedrero, Marzo de 1923.

246
La divisin obrera

Aos despus, en la segunda etapa de La Tierra en


1932, encontramos a Plaza nuevamente junto a los anarquistas
ortodoxos, disipadas ya las viejas disputas en torno a la
dictadura proletaria, Adolfo Plaza publica una serie de artculos
en La Tierra sobre la jubilacin.489

La Tierra N117, 18 de Noviembre de 1922

489 Ver por ejemplo La Tierra N25 (25-06-1932), La Tierra N26 (03-07-1932) y La
Tierra N28 (16-07-1932)

247
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

b) Paysand

Terminado el congreso comarcal en Salto, Antonio Vidal y


R. Freire (delegados de la F.O.R.A. y F.O.R.U.) se dirigen a intensifi
car la propaganda en Paysand. El 9 de mayo, se realiz un mitin
callejero donde se esperaba debatir pblicamente con los comu
nistas, pero finalmente stos no fueron. Fue una noche muy fra
y con poca afluencia de pblico, unas 150 personas. El delegado
argentino Vidal critic duramente a la Unin Sindical Argentina,
por su obra renegadora y anti revolucionaria. Freire, por su par
te hizo una bien razonada y documentada crtica a los comunis-
tas y a todos los partidos polticos obreros y burgueses diciendo
que los trabajadores no deben esperar nada de nadie, ms que de
sus propias fuerzas. Luego Vidal habl de la reaccin internacio
nal contra el gobierno de Estados Unidos y por Sacco y Vanzetti.490
Pasado el Congreso y el Primero de Mayo, el movimiento
parece estar bastante retrado. Segn los anarquistas el
ambiente est decado por obra y gracia de los eternos
adormideras del camaleonismo comunista, que desde que
hicieron el congreso en marzo no se logrado nada y que los
gremios como los zapateros o sastres se han desbandado y los
otros existen nominalmente.491
Justicia, en Montevideo entrevist a Magnn, miembro del
consejo federal de la F.O.L. sanducera quien seal que:
si bien es cierto que la clase obrera de Paysand es poco
activa en la lucha sindical (...) se debe sobre todo a la gran desocu
pacin que reina desde hace ms de un ao y medio en Paisand,
produciendo un efecto desastroso sobre el estado de nimo de la
clase obrera; (...) Hace pocos meses se ha constituido la Federacin

490 La Tierra N91, 13 de Mayo de 1922.


491 La Tierra N96 (17-06-1922) y N99 (09-07-1922)

248
La divisin obrera

O. Local integrada por los sindicatos de albailes, zapateros, pintores,


panaderos y oficios varios. Esta federacin trata por todos los medios
de llevar a cabo la reorganizacin de sus cuadros sindicales, asi como
la agitacin por medio de conferencias para la que cuenta con el con
curso de compaeros oradores de esta capital.
Qu actitud adopt la Federacin O. Local frente a la actual
divisin que roe el campo sindical? (...) -Tambin la F.O.L. -nos dijo- co
nociendo los perjuicios que reporta a la clase trabajadora la divisin
existente en el campo sindical est dispuesta a prestar todo su con
curso a fin de dejar sellada la unidad. Es as que espera la realizacin
de un congreso obrero por-unidad para concurrir con el sano prop
sito de efectuarlo cueste lo que cueste.
En cuanto a las relaciones internacionales que desea tener,
ya las dej entrever en el pasado Congreso, donde dej sentado en
sus estatutos una fuerte simpata por la Sindical Roja.492

El affaire Perdomo.
Para mediados de 1922 el C.P.U.O. realiza una importante
campaa de propaganda en el interior. En Julio salen en gira hacia
San Jos Cabrera y Maria Collazo, en Agosto Juan Llorca se dirige a
Mercedes y en Setiembre Jos Perdomo y Julio Bardallo se dirigen
a Paysand y Salto.
Esta gira de delegados del C.P.U.O. a Paysand particular
mente, traer profundas repercusiones, que hablan por un lado del
problema de la unidad y la difcil convivencia entre comunistas y
anarco sindicalistas, como tambin traer al tapete serias discusio
nes acerca de la moral obrera y sindical.
El peridico La Batalla de Montevideo del 11 de Agosto de
1922 informaba que existan en Paysand los siguientes gremios;

492 Justicia, 17 de Julio de 1922.

249
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

panaderos, albailes, sastres, grficos, pintores y zapateros, que


todos eran autnomos y por ende, ninguno se encontraba afiliado
al C.P.U.O.493
A comienzos de Setiembre la F.O.L. Sanducera solicita al
C.P.U.O. el envo de un delegado para realizar propaganda, soli
citando que se enve a Jos Perdomo (hijo). El C.P.U.O., contesta
que no tienen dinero para enviarlo pero enviarn a Julio Barda
llo. Desde Paysand se contesta que no, que entonces enven a
Leopoldo Sala, con quien tienen mayor afinidad. Finalmente el
C.P.U.O. envi a Perdomo y Bardallo. Tanto Perdomo como Sala
eran comunistas, Bardallo era anarquista.
Ya La Batalla al momento de ser enviados los delegados
mir con desconfianza la resolucin sealando; Desearamos
que el C.P.U.O. cambie de conducta, y que cuando se le soliciten
delegados, mande a compaeros que por su condicin de antipo-
lticos, sean una garanta de respeto por las normas sindicales.494
Los delegados llegaron el 12 de Setiembre, encontrando
segn Perdomo un ncleo aun cuando poco numeroso, entusiasta
y capaz, que a pesar de la chatura de nimo de los trabajadores de
Paysand, motivada por la gran desocupacin, reinante, mantenan
en alto la insignia de las reivindicaciones del trabajo esclavo.495
Perdomo hizo un informe de su visin de la situacin de
Paysand a su llegada;
La organizacin sindical en Paysand, por su naturaleza
de organizacin revolucionaria y su programa en el sentido tcti-
co, constituye una fuerza apreciable en nuestro ambiente sindical.
Nacida respondiendo a una necesidad histrica, la lucha contra
el capital y el Estado, ha afrontado por repetidas veces situacio-
nes difciles que ste le ha planteado; ha sostenido infinidad de

493 La Batalla N273, 11 de Agosto de 1922.


494 La Batalla N278, 15 de Setiembre de 1922.
495 Justicia, 1 de Noviembre de 1922.

250
La divisin obrera

huelgas tendientes al levantar la miserable condicin de vida y de


trabajo de sus integrantes a un nivel superior. Ha cruzado en el
breve curso de su historia por periodos de hermoso florecimiento
en el que era dado ver sesionar gremios con la totalidad de sus in-
tegrantes y an cuando hoy se encuentran un tanto decados por
la obra deletrea de elementos pretendidamente anarquistas, y en
especial manera, por la paralizacin que se opera en las industrial
locales en este periodo del ao.496
Y finalmente describe el tamao de las fuerzas; Las orga-
nizaciones sindicales hoy existentes son Ferroviarios, con 40 adhe-
rentes, Albailes, con 400; Panaderos, 50; Pintores con 40, Oficios
Varios, con 40, O. En Calzado con 80, Total 650 adherentes. Estn
en vas de organizacin los sindicatos de Grficos, Herreros, Car-
pinteros, Peones de Barraca y Martimos.
Luego de reunirse con los delgados de los gremios y la
F.O.L. acordaron el plan de conferencias a realizar. La polica les
prohibi las primeras conferencias por lo cual tuvieron que reali
zarlas en parajes aislados.
La primer conferencia se realiz el Viernes 15 de Setiem
bre en Sarand y Plata sobre el Origen del movimiento de los
obreros municipales497 segn Justicia, Perdomo habl dentro del
tema sealado pero no as Bardallo quien seala que en una to-
tal falta de disciplina no habl nada del tema y que se dedic a
combatir, aunque en forma vedada, al Partido Comunista. En la
segunda conferencia, el Martes 18, realizada en Sarand y Treinta
y Tres sobre El valor de la organizacin los comunistas reiteran
que Bardallo atac al Partido Comunista.
La tercera se realiz el jueves 21, en el local de la F.O.L.,
y versaba sobre los Propsitos del C.P.U.O.. All la crnica

496 Idem.
497 Por esas fechas se haba producido una importante huelga de los empleados mu
nicipales en Montevideo.

251
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

menciona que se continuo atacando al partido y a los fundamentos


bsicos de su organizacin, atac duramente a la dictadura del
proletariado encarnada en el Estado proletario transitorio, que
la organizacin local de acuerdo con histricos acontecimientos
considera imprescindibles como factor de triunfo definitivo del
proletariado sobre el capitalismo. Aunque la crnica no lo diga,
lo que en realidad se dio fue un duro debate de ideas entre
ambos delegados, as lo deja ver por ejemplo algunas expresiones
de la misma Defendi luego a la F.C.A. del V, [se refiere a la
F.O.R.A. Comunista, antes llamada del V Congreso] diciendo
que era cuestin de hombres, es decir, malos elementos que se
encontraban a su frente y jams fruto de una ideologa contra
revolucionaria, como lo haba afirmado Perdomo.498
Luego de la tercer conferencia el Consejo de la F.O.L.
resolvi que Bardallo quedaba desacreditado para hablar en los
mitines ya que su postura iba contra los principios de la F.O.L.
Bardallo denunci la situacin al secretariado del C.P.U.O. y ste
envi su respuesta el 26 de Setiembre, reunido especialmente
para tratar este tema, resuelve que la F.O.L. debe restituir a
Bardallo, ya que cuando sta pidi los delegados nunca aclar
que tenan que alinearse en los postulados de la F.O.L., y que
si bien cada organismo gremial tiene libertad en su orientacin
interna, los delegados en nombre del C.P.U.O. no pueden
exponer ideas polmicas ya que ste para corroborar su deseo
manifestado de respetar todas las tendencias ideolgicas que
presionan en el ambiente gremial, no autoriza a sus delegados
ni a atacar ni a defender los especiales puntos de vista que cada
entidad estime como mejores El C.P.U.O. no puede particulares
con determinadas tendencias, debiendo sus delegados observar
en todo momento la ms rigurosa imparcialidad, desenvolviendo
su accin en sentido unificador y tomando como base la obra

498 Justicia, 10 de Octubre de 1922.

252
La divisin obrera

realizada, la orientacin de presindencia ideolgica seguida y la


finalidad hacia la cual se encamina el C.P.U.O. El C.P.U.O. no
autoriza que en su nombre, ninguno de sus delegados en jira,
sostenga ninguna clase de polmicas499 As en dicha asamblea
el C.P.U.O. decide desacreditar a Perdomo y observar a Bardallo
por 19 votos a favor, 3 en contra y 1 abstencin.500
La F.O.L. no volvi a autorizar a Bardallo y las conferencias
de Perdomo continuaron; La mujeres en la lucha de clases ante
un gran nmero de mujeres y El valor de la organizacin entre
otras.
Lunes 2 se realiza una asamblea de los ferroviarios donde
se discute el tema de la adhesin al C.P.U.O. quedando la resolu
cin a discutirse en una prxima asamblea general.
En la asamblea de pintores del da 4 de Octubre donde
Perdomo histori la divisin del movimiento obrero del Uruguay,
stos deciden adherir al C.P.U.O. y nombran como delegada a di
cho comit a Isabel Fernndez. El mismo da los panaderos luego
de escuchar la palabra de Perdomo en la tribuna votan la adhe
sin al C.P.U.O. nombrando a Julio Baccino como su representan
te. Lo mismo ocurri dos das despus en el sindicato de Oficios
Varios, designando como delegado al C.P.U.O. a Leopoldo Sala.
Y ese mismo da ocurre lo mismo en la asamblea de Albailes
nombrando como delegado al mismo Perdomo.501
Pero ms all del xito obtenido adhiriendo gremios
sanduceros al C.P.U.O., la actitud de Perdomo desat la ira de los
anarco sindicalistas. Ya La Batalla del 22 de Setiembre sealaba
el C.P.U.O. debe alejar definitivamente al delegado Perdomo
de su cuerpo de propagandistas, ya que no es tolerable que el
terreno gremial se convierta en campo de exploracin de los

499 Justicia, 29 de Setiembre de 1922.


500 Justicia, 3 de Noviembre de 1922.
501 Justicia, 11 de Octubre de 1922.

253
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

militantes de un partido que pretende imponer a sangre y fuego


sus principios, aunque el Sindicalismo quede maltrecho.502
A mediados de Octubre el C.P.U.O. realizada una asam
blea de delegados para tratar el tema se resuelve desacreditar
a Perdomo como delegado del C.P.U.O., ya que hizo propaganda
partidista y no en la lnea del C.P.U.O. El argumento central de la
F.O.L. fue que Bardallo no se ajustaba a la lnea ideolgica de la
F.O.L. y Perdomo s, pero el C.P.U.O. argument que ambos dele
gados deban ajustarse a las pociones del C.P.U.O. y en los puntos
polmicos los delegados no tenan autorizacin para debatir. En
la mencionada asamblea, los comunistas, con Eugenio Gmez en
primera lnea defendern el accionar de Perdomo.503
El anarquista Cuataglia es terminante Perdomo ha hecho
propaganda en Paisand por la Sindical Roja y eso es salirse de la
cuestin. Merece por tanto, no solo ser descalificado sino que no
se le debe admitir como delegado.504
El delegado de los picapedreros de La Paz sostiene que
Perdomo, incluso fund una Juventud Comunista en Paysand,
que fue a hacer lo que le mand el ejecutivo del Partido Comu
nista y no el C.P.U.O.. Sostienen los delegados anarco sindicalis
tas que Perdomo nunca mand sus informes desde Paysand. A
su vez, descalifican a E. Gmez, ya que sealan que no trabaja
en la F.O.M. para poder ser delegado de la misma, expulsndolo
del C.P.U.O., al igual que a Perdomo que no podr desempear
ninguna funcin en el mismo, ni siquiera la representacin del
gremio de albailes que as lo design.505
Mientras Perdomo era desacreditado por el C.P.U.O. Justicia
le realiza una entrevista; los anarquistas puros y los otros,

502 La Batalla N279, 22 de Setiembre de 1922


503 Justicia, 20 de Octubre de 1922.
504 Justicia, 25 de Octubre de 1922.
505 Justicia, 24 de Octubre de 1922.

254
La divisin obrera

no han tenido jams aceptacin en el seno de la clase obrera de


Paysand, y da a da se aleja ms la posibilidad de que puedan
tenerla, desde el momento que las organizaciones sindicales se
empean en crear en el proletariado una verdadera educacin
revolucionaria que les permita dejar de ser proclamadores
olmpicos de la libertad, para convertirse en verdaderos soldados
de la causa de la revolucin y de la dictadura proletaria.506

c) Bardallo en Salto.

El 9 de Octubre el delgado del C.P.U.O. Julio Bardallo,


imposibilitado de actuar en Paysand por la censura de la
F.O.L. sanducera, lleg a Salto y se realiz una reunin con los
gremios autnomos que eran los Chauffeurs, F.O. Martima, F
en C. Navales, Picapedreros y Grficos. Se acord constituir un
comit de Propaganda y agitacin e invitar al gremio de Sastres
y Albailes adheridos a la F.O.L. (los cuales parecen ser los
gremios ms activos del campo forista).
A una de stas reuniones concurri Jos Fernndez que a
nombre de los albailes rechaz la invitacin de unirse porque
el C.P.U.O. contradeca el pacto federal de la F.O.R.U. y la F.O.L.S.
Se acord a iniciativa de Chauffeurs, Grficos y
Picapedreros, realizar una conferencia el sbado por la noche en
el local de Constructores Navales, la cual no fue muy concurrida
dndose una controversia con un grupo de puros que
concurrieron y se debati en torno a la divisin obrera, siendo
Fernndez y Negri los encargados de defender las posiciones de
la F.O.R.U. y la F.O.L.S.507
Bardallo luego de realizar una conferencia en Concordia
a pedido de la F.O.M. de esa localidad regres a Salto y en la

506 Justicia, 16 de Octubre de 1922.


507 La Batalla N284, 27 de Octubre de 1922.

255
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

asamblea del 28 de Octubre de la F. en Constructores Navales se


resolvi la adhesin de dicho gremio al C.P.U.O.508
Ms all del el xito obtenido por la adhesin de los Cons
tructores Navales al C.P.U.O., es de notar que en quince das de
estada Bardallo tan solo realiz una conferencia pblica en el Sal
to, lo cual habla de la preponderancia de los anarquistas puros
u ortodoxos en la ciudad. La Batalla se quej de esto, sealando
que los puros le impiden dar sus conferencias, concurriendo de-
bidamente empatotados a dificultar su obra, alejando a los tra-
bajadores del lugar destinado a las reuniones y conferencias.509

d) Gira de Fermn Sarmiento a Salto.

Poco tiempo despus de la gira de Bardallo, una nueva gira


de propaganda traer la presencia del delegado de la F.O.R.U. Fermn
Sarmiento al Salto, quien desde el 2 de Noviembre se encontrar all.
Los foristas salteos ven con expectativa la presencia del
delegado para poder superar la situacin de estancamiento; Su
llegada en estos momentos de apata por parte de los trabajadores
hacia la organizacin y la gran campaa que los partidos polticos
estn realizando para pescar incautos que los elijan amos suyos.
(...) El estado de decaimiento por el que atraviesa la organizacin
obrera en esta localidad, exige por parte de todos los camaradas
el mayor esfuerzo para llegar a levantar de nuevo la organizacin,
arma eficaz con que cuenta la clase trabajadora para la lucha
contra el capitalismo y el Estado.510
Al igual que cuando fue C. Gonzlez un ao atrs se forma un
comit de reorganizacin realizando varias asambleas y conferencias.

508 La Batalla N286, 10 de Noviembre de 1922.


509 La Batalla N284, 27 de Octubre de 1922.
510 La Tierra N115, 5 de Noviembre de 1922.

256
La divisin obrera

La primer conferencia se realiz el 5 de Noviembre en la


plaza Flores, donde la polica detuvo a un obrero por repartir
manifiestos anti electorales, siendo posteriormente liberado tras
la protesta de los manifestantes.511
El jueves 9, convocada por el gremio de albailes se reali
z la segunda en la que hablaron J. Fernndez y Sarmiento.
La misma fue considerada un xito por La Tierra quien
seal tiempo haca ya no se efectuaba una conferencia en tal
lugar que adquiriera el xito por sta obtenido. Esto indica indis-
cutiblemente un resurgimiento de parte de muchos camaradas
que permanecan alejados de la propaganda y que segn parece
estn dispuestos a reintegrarse a esta, por lo cual puede asegu-
rarse que no tardarn en volver los buenos tiempos en que el pro-
letariado salteo representaba un baluarte en las luchas contra
el Capitalismo y el Estado.512
Una tercer conferencia se realiz el domingo 12 en la ex
planada del puerto, y ms tarde el delegado hablar tambin en
una conferencia del Centro Femenino.
El sbado 12 se realiza otra conferencia en el local de
La Tierra donde Sarmiento habl sobre La F.O.R.U. frente a la
divisin proletaria explicando las fuentes de la divisin en el
campo obrero, la actitud de la F.O.R.U. y sus nuevos mtodos
industrialistas. Y el martes 21 realizar la ltima en el local de
Lavanderas Unidas.
Luego el delegado se dirige a Paysand a realizar algunas
conferencias pero como all las autoridades se lo prohben, vuel
ve a Salto para continuar la propaganda realizando varias confe
rencias ms, en el local de lavanderas y otras en la explanada del
puerto sobre la temtica anti electoral.513

511 Idem.
512 La Tierra N116, 11 de Noviembre de 1922.
513 La Tierra N120 (09-12-1922) y N123 (30-12-1922).

257
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

La mejor forma de financiamiento, comenzando la


temporada clida seguirn siendo los picnics obreros.
El primero de la temporada se realiz el 22 de Octubre
a beneficio de La Tierra con un variado programa cultural, y al
fin de semana siguiente se realiz otro tambin a beneficio del
semanario anarquista, siendo este segundo poco concurrido y
con poco beneficio dado su poca preparacin.514
El 19 de Noviembre se realiz otro para sufragar los costos
de la gira del delegado Sarmiento y el siguiente recin se realiz
el 14 de enero, organizado por los Albailes para el beneficio
de stos y el comit pro presos de la F.O.R.U., en donde si bien
se vendieron 106 entradas de hombres, el beneficio econmico
fue apenas de 3,74 pesos.515 La espaciada distancia entre uno
y otro y la poca ganancia econmica del ltimo evidencian el
declive del movimiento en estas fechas.
El sbado 25 de noviembre, da previo a las elecciones,
J. Fernndez y C. Mazza que se domiciliaban ambos en
la misma casa, fueron citados por la polica, detenidos y
golpeados severamente sin causa aparente ms que realizar
una represalia por la intensa labor anti poltica de los militante
gremiales.516
Pero ms all de ese hecho puntual, que muestra la
preocupacin de las autoridades por la actividad gremial, el
movimiento sigue mostrando ndices de decaimiento, se intenta
reorganizar a los panaderos, antiguo baluarte del gremialismo
crata en Salto pero sin poder obtener el xito deseado, las
lavanderas tampoco logran reunirse con periodicidad,517 incluso
parece haber un intento de fusin entre el gremio de lavanderas

514 La Tierra N111 (7-10-1922), N114 (29-10-1922), N116 (11-11-1922).


515 La Tierra N116 (11-11-1922), N123 (30-12-1922) y N134 (17-03-1923).
516 La Tierra N119, 2 de Diciembre de 1922.
517 Idem.

258
La divisin obrera

y el Centro Femenino de Oficios Varios para amortiguar la poca


participacin.518
Por otro lado se denuncia por parte de La Tierra que el
viejo boicott sostenido por los grficos a los diarios Tribuna
Saltea y Diario Nuevo se rompi porque la sociedad de grficos
(sindicalista) llam a trabajar a dichos establecimientos.519

e) Gira de Fermn Sarmiento


y Celestino Mibelli en Paysand.

El jueves 23 de Noviembre, el delegado de la F.O.R.U. Fermn


Sarmiento llega a Paysand. Su primer conferencia fue la Anarqua
frene a los partidos polticos en la interseccin de Florida con Mon
tevideo. A pesar de la propaganda en contra de la misma hecha por
los partidos tradicionales, ya que eran tiempos de elecciones parece
haber ido bastante pblico, cuenta La Tierra que Sarmiento con la
preparacin y serenidad que lo caracterizan hizo una amplia y defini-
da exposicin (...) Luego de demostrar el origen de los partidos blan-
cos colorados y todas las artimaas de que se valen los caudillos, a
fin de pescar incautos que los eleven a las bancas parlamentarias,
fustig enrgicamente la ruin actitud de los que bajo el disfraz de
obrerismo, quieren tambin recostarse en las poltronas del estado,
cuestion tambin los que se dejan arrastrar por los partidos y a
los comunistas que critican a los partidos polticos, para terminar
exhortando al pueblo que voten por ellos. Habl durante unas dos
horas y a pesar de haber comunistas en la tribuna y haber exhortado
Sarmiento al debate pblico no hablaron.
El informe de Sarmiento sobre el movimiento en Paysan
d, contrarrestar con las palabras dichas por Perdomo semanas
antes, segn Sarmiento Paysand es una madriguera comunis-

518 La Tierra N137, 14 de Abril de 1922.


519 La Tierra N135, 24 de Marzo de 1923.

259
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

ta, pero segn l poco a poco va queriendo deshacerse de esta


plaga, que desde 12 aos atrs, ha sentado sus reales plantas.
Seala que no es real que la F.O.L. comunista tenga 8 gremios,
sino que stos se estn desintegrando. Seala la existencia de un
sindicato gastronmico de influencia anarquista que sesiona en
el Centro Internacional y que se encuentra en conflicto con el
explotador Petrini, uno de los chupacirios de ms renombre en
Paysand.520 Seala la intencin de publicar un quincenario de
propaganda del Centro Internacional que se denominar Alba
Roja, el cual ver su primer ejemplar en la calle en el mes de
enero.521
Su segunda conferencia fue el jueves 30, patrocinada por
el Centro Internacional y con la edicin previa de un manifiesto
sobre el tema El partido Comunista frente al tribunal del pueblo.
Como se ve, Sarmiento fue al choque de ideas con los comunistas
que parecen consolidados en Paysand, a diferencia del predomi
nio anarquista en el Salto. Frente a un numeroso pblico, empez
historiando la actuacin de los partidos socialistas y su accin
negativa en el seno de la clase obrera, como factor de emancipa-
cin enumero sus traiciones, hasta llegar a la revolucin rusa,
su divisin, al llegar aqu el orador puso de manifiesto la obra
desquiciada llevada a cabo por el partido comunista en el seno de
las organizaciones obreras internacionalmente El lder de los co
munistas locales hizo algunas preguntas y objeciones en el acto.
La siguiente conferencia, el domingo 3 fue prohibida por la polica
y se cambi para el lunes 4 en la plaza Constitucin, siendo nue
vamente prohibida, ya que la polica no permiti ningn acto
pblico hasta que finalizase el escrutinio electoral, ante esto,
como vimos, Sarmiento regres a Salto.522

520 La Tierra N120, 9 de Setiembre de 1922.


521 La Tierra N126, 20 de Enero de 1923.
522 La Tierra N121, 16 de Diciembre de 1922.

260
La divisin obrera

Ya vuelto a Paysand el domingo 17 de diciembre se rea


liz la tercer conferencia, donde fustig con energa a la clase
burguesa y tambin a los trabajadores que se manifiestan indi-
ferentes hacia la causa de liberacin, remachando as la cade-
na de la esclavitud burguesa. Al terminar el acto exhort a los
trabajadores a concurrir a una asamblea, formando un comit
pro Sindicato General de Trabajadores de Paysand llam para
dejar constituida una entidad proletaria que respondiera a los
principios de la F.O.R.U., pues las organizaciones sindicales que
existan despus de la adhesin a Mosc, han dejado de ser ta-
les para transformarse en un sector poltico, lo que significa la
negacin del sindicalismo.523
Los anarquistas parecen haber materializado la creacin
del Sindicato General de Trabajadores de Paysand, ya que el
sbado 23 diciembre, la cuarta conferencia de Sarmiento fue
patrocinada por dicha institucin la cual sealan es el produc-
to de la labor de los trabajadores libertarios de esta localidad
y que a pesar de ser nueva cuenta ya con un buen numero de
afiliados. Y sealan luego; Este Sindicato est llamado a fina-
lizar con la Federacin O Local Comunista, pus despus de la
adhesin a la Sindical Roja, sta perdi toda efectividad y poder
para la lucha, transformndose en una agencia comunista, a la
cual los obreros repudian, pues mucho tiempo fueron engaa-
dos ya por blancos y colorados y no estn dispuestos a continuar
siendolo por los moscuteros, aunque se llamen a s mismos re-
volucionarios.
El Sindicato Gastronmico, por su parte resolvi adherir a
la F.O.R.U., tambin se insiste en la inminente reorganizacin de
los grficos. Segn el delegado para rehacer la F.O.L. y adherirla
a la F.O.R.U. cuentan con el Sindicato Gastronmico, el Sindicato
General de Trabajadores (el cual parece ser una especie de

523 La Tierra N122, 23 de Diciembre de 1922.

261
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

sindicato de oficios varios) y el de Artes Grficas que sern la


base ya que la llamada Federacin Local existe (...) compuesta
y dirigida por los polticos comunistas, nada se puede esperar
ya, conservan los sellos de los que fueron Sindicatos, para as
impresionar al elemento obrero, pero en realidad no hay nada,
(...) lo que fue una respetable organizacin, no es hoy ms que un
triste recuerdo.524
Comenzado el ao 1923 se cuenta con la presencia del
principal dirigente comunista Celestino Mibelli en Paysand,
quien dio varias conferencias, en una de ellas, el viernes 17 de
enero fue cultamente interrumpida por el delegado Sarmiento,
quien le solicit la tribuna para manifestar la inexactitud de los
argumentos de Mibelli, referente a las ideas y tcticas de lucha
de los anarquistas. Mibelli le dijo que haban 15 minutos para
cada uno y se dio una dura polmica, sobre la conveniencia o no
de estar en el parlamento, sobre lo hecho en el mismo, sobre la
manera en que tanto el y como el delegado de la F.O.R.U. costea
ban las giras.525
A la edicin de Alba Roja por parte de los anarquistas, los
comunistas responden editando El Proletario, lamentablemente
no hemos podido localizar ninguna de las dos publicaciones.526
En Febrero se registran algunos conflictos obreros, los gas
tronmicos se solidarizan con sus pares de Mercedes, y ms ade
lante se registran huelgas de panaderos y pintores.527
Para diciembre de 1922 La Batalla informa de las socie
dades obreras adheridas al C.P.U.O. y entre ellas cuenta; en Pas
yand a los panaderos, Oficios Varios, pintores, albailes y fe
rrocarrileros. A los Constructores Navales de Salto y el S.G.T. de

524 La Tierra N124, 6 de Enero de 1922.


525 La Tierra N127, 28 de Enero de 1923.
526 La Tierra N129, 10 de Febrero de 1923.
527 La Tierra N131 (24-02-1923), La Batalla N311(18-05-1923)

262
La divisin obrera

Rocha y la Unin Obrera Castillense. Como gremios autnomos


seala a los sastres, grficos y zapateros todos de Paysand.528

f) Rocha

El movimiento obrero rochense por estas fechas parece


estar bsicamente inactivo. En octubre se discute el ingreso del
S.G.T. al C.P.U.O., quedando finalmente adherido al mismo.529
En el mes de noviembre se registra una curiosa polmica
entre Mario Rodrguez, quien fuese miembro del Centro
Comunista y era uno de los huelguistas pertenecientes a la
cuadrilla de difunto Mnica. Rodrguez recurre a las pginas del
anarco sindicalista La Batalla de Montevideo para denunciar el
caso de un chico de quince aos que trabajaba en forma de semi
esclavitud y se escap, Rodrguez lo aloj en su casa un da y lo
llev a la casa de Garaza, miembro del Comit Central. ste lo
remiti al centro de menores y semanas despus se encontraba
preso. Los comunistas por su parte, sealan que el chico no era
ms que un ladronzuelo y que Mario Rodrguez tan solo pretenda
hacer intrigas por sus problemas personales con los miembros del
Centro Comunista. En todo caso pretendemos con este suceso
intentar encontrar la existencia de otras tendencias obreras ante
la hegemona comunista rochense.530
Accin Comunista dej de publicarse en Diciembre de
1922 y reaparece como N1 en Agosto de 1923.

528 La Batalla N293, 2 de Diciembre de 1922.


529 Accin Comunista N53, 23 de Octubre de 1922 y La Batalla N293 (02-12-1922).
La Batalla menciona al Sindicato General de Trabajadores de Rocha como Unin
General de Trabajadores de Rocha.
530 La Batalla N285 (03-11-1922) y La Batalla N288 (24-11-22)

263
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

La sociedad de obreros picapedreros de Rocha.

Los obreros picapedreros constituyen una forma de


organizacin que desborda no solo los lmites de los estados
nacionales sino las propias federaciones obreras regionales.
Adheridos a la F.O.R.U. en Uruguay y la F.O.R.A. en Argentina en un
comienzo, se agrupaban a su vez en la Federacin Sudamericana de
Obreros Picapedreros, la cual contaba con sus propios congresos
y resoluciones.531 Su rgano de prensa era El Picapedrero, que
se editaba en Montevideo y se distribua en todas sus secciones,
siendo varias en el Uruguay, Argentina y Brasil.532 Las secciones
de Uruguay, tuvieron una amplia participacin en el Congreso
de la U.S.U., con siete secciones que le contabilizaron 7 votos.533
Los picapedreros fueron el primer gremio en escindirse de la
F.O.R.U. cuando comenzaron las disputas en torno a la dictadura
proletaria, y vimos como en Salto fueron los picapedreros los
que ms resistencia opusieron a la lnea anarquista ortodoxa.
Los picapedreros fueron sin duda, por su potencial numrico,534

531 Dentro del estudio de los picapedreros existe una tesis indita de Nestor Bau
mann La minera a comienzos del siglo XX en Uruguay conteniendo un cap
tulos sobre el movimiento obrero de picapedreros. Borrador indito de Tesis de
maestra. Universidad de la Repblica. Montevideo. (Accedido ao 2014)
532 El Picapedrero N 51 de Febrero de 1923 por ejemplo publica noticias de las si
guientes secciones: Burgeo, Paso Molino, La Paz, Isla Mala, Rocha, Maldonado,
Cufr; Minuano (cueva del Tigre colonia), Cerro Carmelo, Salto, Montevideo y La
Chacarita en Uruguay. Buenos Aires, Tandil, Rosario (Santa F), Sierra chica, Las
Peas (Cordoba), Naschel y San Jos de Tinta en Argentina. Y San Pablo, Ro de
Janeiro, Porto Alegre y Reiberao Pires en Brasil.
533 Los comunistas se quejaban de que porqu no se organizaban todos juntos al me
nos los de Montevideo, a lo que contestaban que, por ejemplo, los de La Chacarita
(Camino Maldonado Km13) y el Paso Molino, tenan horas de distancia para poder
comunicarse.
534 De las secciones participantes en el congreso fundacional de la Unin Sindical
Uruguaya en Setiembre de 1923 tenemos la siguiente informacin; Picapedreros
de La Chacarita: 59 cotizantes. Del Paso Molino, 120, de Montevideo 80, de La Paz
104, de Burgueo 20, de Isla Mala 25, de Cueva del Tigre 35, de Minas 12. En total

264
La divisin obrera

su combatividad y fcil acceso a la dinamita,535un gremio


destacado dentro del movimiento obrero local.
En el departamento de Rocha exista una seccin de pica
pedreros, la cual no fue muy numerosa ni muy activa debido a la
poca demanda de trabajo, pero que fue parte de la organizacin
obrera. Y a su vez nos hecha luz sobre las organizaciones de ten
dencia anarco sindicalista en Rocha. Los picapedreros rochenses
en continua correspondencia con sus pares montevideanos no
parecen tener demasiados vnculos con el Sindicato General de
Trabajadores de Rocha.
Para Octubre de 1921 la seccin rochense se encontraba
activa y donaba 5 pesos para los picapedreros de Cerro Carmelo
en conflicto.536
Y si bien parece no haber participado del III Congreso de
la Federacin Sudamericana de Picapedreros y Anexos celebra
do en Montevideo en Noviembre de 1922537, en enero de dicho
ao discuten y envan sus resoluciones acerca de los temas a
tratarse en dicho Congreso.538

sumaban 455 afiliados. Tomados en su conjunto solo son superados dentro de la


U.S.U. por los obreros en calzado (610 afiliados) y el Sindicato nico de la Aguja (517).
535 En ocasin de la huelga por la libertad de ngel Gonzlez el rgano El Picapedrero
(N25 Diciembre 1920) cont con llamativa precisin la explosin de 7 petardos
de dinamita solo en la capital. Laureano Riera Daz, quien fuese secretario general
de la F.O.R.U. entre 1926 y 1929, narraba en sus memorias, los picapedreros y
marmolistas ganaban salarios que duplicaban al de los oficiales especializados de
cualquier gremio. El sindicato sera declarado ilcito por los jueces y perseguido por
la polica, pero ningn patrn quera tener problemas con los obreros. Panteones
de granito pulido de costo muy elevado eran volados en los cementerios, en las
narices de los serenos y policas, si haban sido trabajados por carneros. (Riera
Daz, 1981:84)
536 El Picapedrero N35 (Montevideo) Octubre, 1921.
537 Federacin Sudamericana de Picapedreros y Anexos, Bases Aprobadas en el III
Congreso celebrado en Montevideo los das 1, 2 y 3 de Noviembre de 1922, Folle
to sin datos de edicin. Agradezco a Juan Pilo haber compartido un ejemplar del
mismo.
538 El Picapedrero N38 Enero 1922

265
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

En Correspondencia fechada el 22 de Marzo de 1922 se


informaba que por resolucin de asamblea el secretario de la
entidad obrera A. Bizzari dejaba su cargo a Jos Dalmacio (hijo)
y mencionaba el primero Aqu el trabajo marcha siempre lo
mismo. Como en todo comienzo, los espritus son muy dbiles,
pero que se va a hacer! Esperemos... No hay ms remedio.539
En Setiembre de 1922 se informa que el trabajo haba
dado a trmino y se hizo entrega de los tiles del sindicato a la
cede en Montevideo.540 En Enero se retoma el trabajo, pero se
quejan desde Montevideo de que los obreros que all fueron, a
pesar de estar en la organizacin hace muchos aos no lleva
ron los tiles de la entidad gremial.541 Pero para Mayo la socie
dad parece verse reorganizada, se adhiere al C.P.U.O. y nombra
delegado a Jos di Jacobo para el mismo.542 En la segunda mitad
del ao el trabajo escasea y se reorganiza la sociedad a comien
zos de 1924 nombrndose los siguientes delegados; Pedro Dal
mar (hijo), Bautista Pachioti, Enrique Dinelo y Domingo Grego
rini543 y en Abril resuelven adherir a la U.S.U. contando con 18
cotizantes.544 De los pocos logros gremiales que se conocen de
la seccin rochense puede mencionarse la imposicin del pago
del seguro de accidentes de trabajo en Mayo de 1924.545
En Noviembre de 1925 la seccin Rocha se disuelve nue
vamente por falta de trabajo.546

539 El Picapedrero N40 Marzo 1922


540 El Picapedrero N46 Setiembre 1922
541 El Picapedrero N50 Enero 1923
542 El Picapedrero; N54 Mayo 1923 y N55 Junio 1923
543 El Picapedrero N63 Febrero de 1924.
544 El Picapedrero N65 Abril 1924 y Unin Sindical N1, Diciembre de 1923.
545 El Picapedrero, N66 Mayo 1924
546 El Picapedrero, N72 Noviembre 1925

266
La divisin obrera

4.13. 1 de Mayo de 1923.


En este clima de decaimiento gremial y profunda divisin
llegamos al primero de mayo, fecha elocuente, donde en Salto se
cuenta con la participacin de delegados en gira y nos muestra un
poco la realidad del movimiento.
En esta ocasin se cuenta con la presencia de Celestino
Gonzlez nuevamente como delgado de la F.O.R.U. y el viejo mili
tante Juan Llorca por parte del C.P.U.O.
Lo llamativo del caso es que se realiz un acto conjunto.
Llorca lleg el 28 de Abril a Salto, y el 29 realiz una conferencia
en el local de C. Navales que parece no haber estado muy concu
rrida por la poca propaganda que se pudo realizar.
La manifestacin del 1 de Mayo, segn la crnica de La
Batalla de Montevideo, no fue muy concurrida, las columnas de
la F.O.L. y C. Navales confluyeron en la Plaza 33 donde Gonzlez
y Llorca dieron sus discursos y de all continuaron hasta la expla
nada del puerto.
All volvi a subir a la tribuna Gonzlez quien puso al des-
cubierto en toda su repugnante desnudez, la maldad del rgimen
capitalista, demostrando con argumentos irrebatibles la nece-
sidad de matar para siempre en los espritus las ideas de auto-
ridad y de explotacin, causas originales de todas las injusticias
sociales.547 Para el cronista de La Batalla sin embargo, Aburri
soberanamente, pero se vea claro la indigna intencin; no dar
tiempo a Llorca para hablar. Se despach a su gusto contra los
unionistas.548
Luego habl Llorca, quien salud a los presentes en nom
bre del C.P.U.O. de Motevideo. Sus palabras son recibidas con
aplausos, y termina aceptando la polmica de todo el que no est

547 La Tierra, N140, 12 de Mayo de 1923.


548 La Batalla, N310, 11 de Mayo de 1923.

267
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

conforme con sus conceptos Luego subi Gonzlez nuevamente


y habl sobre la situacin del obrero Ramn Silveyra.549
Terminado el mitin llegaron noticias de la feroz represin
ocurrida en el mitin realizado en Montevideo donde haba muer
to un obrero bajo las balas policiales, Jess Salandr quien haba
perdido una pierna en una de las revoluciones criollas y cuando
sonaron los primeros tiros no pudo refugiarse a tiempo.
Ante esto, en Salto, se resolvi realizar una conferencia de
protesta al da siguiente en el local de los Constructores Navales.
La misma deriv en un debate en torno a la dictadura proletaria
en la que tambin tom parte Adolfo Plaza.
Al da siguiente, aprovechando la presencia del delegado
de la F.O.R.U. se realiz una nueva conferencia en el local de la
F.O.L.S. ante un regular numero de trabajadores donde qued
reorganizada la sociedad de Oficios Varios.
Fueron das de intensa propaganda a la que presentaron
un concurso valioso los camaradas de la F.O. Local Saltea y espe-
cialmente el grupo de trabajadores que editan LA TIERRA los que
se multiplicaron dando un alto ejemplo de abnegacin y entusias-
mo y una prueba elocuente de los que puede la voluntad, puesta
al servicio de una causa justa.550
549 Si bien haba cierto acuerdo de no entrar en mayores polmicas entre las dos
tendencias en pugna del movimiento obrero la mencin a Ramn Silveyra no era
casual. El obrero panadero Silveyra estaba preso en Buenos Aires por la colocacin
de una bomba en una panadera en conflicto que no caus vctimas mortales. Tras
conseguir un traje en una visita sali del penal vestido atravesando unas ocho
puertas enrejadas. Silveyra se traslad a Uruguay y fue capturado iniciando las
autoridades los trmites de extradicin. Para impedir la misma, la F.O.R.U. y el
C.P.U.O. conformaron un comit pro huelga para impedir su extradicin. La efme
ra unin no estuvo exenta de conflictos y la F.O.R.U. se apart de la misma. La men
cin al suceso implicaba una clara alusin a las polmicas internas del movimiento.
(Sobre sta y la posterior fuga de Silveyra ver; Etchenique, Jorge Vidas en fuga
Sudestada N106 (Buenos Aires) Marzo 2012. Sobre la actuacin de la F.O.R.U. en
la huelga por Sivleyra ver La Protesta (Buenos Aires) Federacin Obrera Regional
Uruguaya. Al proletariado en general 25, 26, 27, 28 y 29 de Julio de 1923.
550 La Tierra N140, 12 de Mayo de 1923.

268
La divisin obrera

Es de sealar que La Tierra sac una edicin de 6 pginas


-dos ms que lo habitual- impresas en tinta roja. El esfuerzo parece
haber sido grande, ya que a la semana siguiente el semanario se
salte una salida para retomar en la siguiente. Del balance del mis
mo se desprende la impresin de 700 suplementos para La Tierra
(suponemos se trate del peridico mismo, pero puede tratarse de
un texto aparte), 600 murales, 500 manifiestos y 6000 volantes.551
En la ciudad de Paysand el 1 de Mayo se cont con la
presencia del comunista y ex anarquista Leopoldo Sala, quien
la noche previa dio una conferencia en el local de la Federacin
Obrera. Los anarquistas por su parte, convocados por el centro
de Estudios Sociales realizaron una conferencia en el cruce de Sa
rand y Monte Caseros. El 1 se realiz una manifestacin por las
calles Florida y Montevideo, donde L. Sala y otros propagandistas
hablaron. Finalmente, por la noche se realiz un mitin convocado
por el Centro Internacional el cual tambin fue muy concurrido.552
En Rocha ni La Democracia, La Voz, ni Diario de Rocha,
mencionaron alguna conmemoracin obrera por la fecha aludida.

4.14. El declive gremial.

Para Mayo de 1923 sabemos que estn adheridos al C.P.U.O.


los siguientes gremios; de Paysand; panaderos, Oficios Varios,
ferrocarrileros y albailes. De Salto Picapedreros y Constructores
Navales. De Rocha el S.G.T. Por otra parte permanecen autnomos
los choferes, sastres, grficos, los albailes y la F.O.M. de Salto.553
Para el resto del ao no tenemos noticias de actividades ni
en Rocha ni en Paysand. En Salto en cambio, con la presencia de
La Tierra, el movimiento por pequeo que fuese dej un registro.

551 La Tierra N144, 9 de Junio de 1923.


552 El Telgrafo (Paysand) 2 de Mayo de 1923.
553 La Batalla N310, 11 de Mayo de 1923

269
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Durante el invierno de 1923 se realizaron varias conferencias,


como de costumbre, pero se puede afirmar que la actividad gremial
estaba en un declive irreversible.
El 29 de Julio, por ejemplo, la F.O.L.S. convoc a una
conferencia en la explanada del puerto sobre la organizacin
obrera dentro de la clase capitalista, el 16 de Agosto de Catalicio
Santos realiza otra en la asamblea de Albailes.
En octubre en la explanada del puerto C. Santos expuso sobre
Como resolver la situacin de la miseria en la clase laboriosa.554
Apenas el gremio de Albailes y Sastres parecen sobrevivir
hasta fin de ao. En Oficios Varios y el Centro Femenino gremios
tambin adheridos a la F.O.L.S., se registra escasa actividad. Por
otra parte ni Justicia ni La Batalla nos informan de ningn mo
vimiento de importancia por parte de los gremios autnomos o
sindicalistas.
En Mayo se haba registrado un triunfo de los trabajadores
navales solidarios con el gremio de Buenos Aires habiendo triunfa
do y pudiendo controlar quienes trabajaban en la planta.555
A su vez se produce la solidaridad de los estudiantes salte
os con la huelga de estudiantes producida en Montevideo.556
Y la ltima noticia que tenemos de una huelga en el ao
1923 es en el saladero La Caballada en el mes de agosto.557
Las quejas de que los obreros no concurren a las asam
bleas son constantes, donde estn esos camaradas que ni los
hocicos se ve los das de reunin? pregunta A. Caccia en Junio.
En las tabernas y los prostbulos parece responderse el mismo
semanario en otra edicin.558

554 La Tierra N151 (28-07-1923), N153 (11-08-1923), N158 (22-08-1923).


555 La Tierra N142, 26 de Mayo de 1923.
556 La Tierra N145, 9 de Junio de 1923.
557 La Tierra N153, 11 de Agosto de 1923.
558 La Tierra N141 (19-05-1923) y N145 (09-06-1923).

270
La divisin obrera

La merma en la actividad gremial comienza a sentirse


tambin en el grupo editor de La Tierra que comienza a tener
dificultades para sostener el semanario.

4.15 La muerte de Ricardo Carril.

En Setiembre de 1923 se produce en Montevideo un captulo


ms de la divisin obrera. Captulo por dems doloroso y terrible y
que ser el sello definitivo de la misma, el que causar una mancha
ya imborrable que no solo consolidar la divisin irreversible sino
que su recuerdo imposibilitar futuros entendimientos pasados los
aos.559
El asunto ocurri en ocasin de una asamblea del gremio de
los obreros en Madera realizada en la Casa del Pueblo de la calle
Arenal Grande.
En la asamblea de los obreros de la madera se discuta aca
loradamente si adherir a la F.O.R.U. o al nuevo congreso de unifica
cin convocado por los sindicalistas (anarco dictadores y comunis
tas). Uno de los referentes de ste gremio era Ricardo Carril, quien
ya vimos en Salto dando conferencias por el C.P.U.O., Carril era uno
de los militantes ms destacados de la poca y estaba ampliamente
comprometido en los trabajos de preparacin del Congreso y quera
defender con uas y dientes la participacin del gremio en el mismo.

559 Desencantadas por completo ambas corrientes del anarquismo acerca del devenir
de la Revolucin Rusa, y retirado los gremios comunistas de la Unin Sindical Uru
guaya, sta entidad y la Federacin Obrera Regional Uruguaya compartan por el
ao 1929 una prdica y un accionar bastante similar que no justificaba su divisin.
Tras una asamblea realizada en 28 de Setiembre de 1929 por delegados del Sin
dicato de Escultores y Yeseros, Sociedad O. Panaderos, S. de Picapedreros de Isla
Mala, Sindicato de Mozos y el Sindicato del Automvil, se redactaron e imprimie
ron los acuerdos para una Federacin Sindical Obrera Uruguaya que uniera ambas
entidades la cual nunca lleg a consolidarse. (Carta Orgnica de la F.S.O.U. Ugo
Fedeli Papers, Carpeta 499. IISG)

271
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Cuando en la asamblea Carril estaba hablando fue in


crepado duramente por un obrero que estaba entre el pblico,
ante lo cual Carril descendi en actitud desafiante hacia su re
plicarte, lo cual gener un tumulto y sonaron algunos disparos
resultando Carril gravemente herido, muriendo un mes y poco
despus. Desde Justicia y La Batalla se acusar a los anarco
puritas como los asesinos, desde Solidaridad se acusar a los
sindicalistas de haber provocado esa ola de violencia y odios
entre hermanos que tuvieron tan lamentable desenlace.
Desde La Tierra, se brindar una versin distinta a todas
las anteriores, quizs buscando justificar lo sucedido o quizs
aportando nuevos datos al difcil suceso;
La asamblea se realizaba en el saln de La Casa del
Pueblo. El secretario haba terminado de leer el acta de la
asamblea anterior. Un anarquista, en vista de que poco se oa,
porque en el paraso estaban gritando un grupo de comunistas all
reunidos, observaba a la Comicin [sic] de ser culpable culpable
[sic] de esa molestia, por haber preferido reunirse en el local de
los polticos.
Esto motiv la intervencin del anarco-dictador, Ricardo
Carril. Se cambiaron una serie frases, alguna no agrad al dictador,
entonces se abalanz a puetazos, el barullo se contagio entre los
asamblestas y mientras Carril pareca ser vencido por el anarquista,
un partidario de la dictadura, con mano trmula apuntaba con su
pistola haciendo fuego en el preciso momento en que durante
la lucha el anarquista cambi de posicin, y la bala que haba de
eliminar a nuestro compaero, fue a herir al dictador Carril.
En ese instante cae al suelo el herido; y muchos de los
asistentes gritaron el nombre del heridor. Muchos fueron los que
gritaron, que hiciste fulano!

272
La divisin obrera

Muchos fueron los que vieron la pistola en el suelo. Algunos


saben a quien perteneca y comprendieron que no pude haber sido
un purita como esos desgraciados nos llaman.560
Trabajo de Montevideo sealar;
es el resultado lgico de esa prdica malsana impregnada
de un torpe autoritarismo, que solo sirve para reavivar viejos odios
y que de un tiempo a esta parte han venido desarrollando entre los
trabajadores los comunistas autoritarios, consecuentes con su vieja
concepcin marxista y a la que han hecho coro los que titulndose
libertarios cantan losas al torpe ideal de la dictadura.
La mano del amigo o adversario de la vctima, que no
supo contenerse y empu el arma homicida para hacer valer sus
particulares razones, no puede ser otra que la de un obsesionado
por esa prdica malsana y embrutecedora, que no confiando en
el valor ni en la fuerza de su razonamiento pretenda vencer al
adversario circunstancial hacindole enmudecer para siempre.561
Hay que destacar a la luz de lo publicado por La Tierra
la frase la mano del amigo o adversario de la vctima que
empu el arma homicida adquiere mayor significado. Y ms
claras quedan tambin las palabras de Solidaridad rgano de la
F.O.R.U.;
14. Este es el nmero de compaeros, que fueron
aprehendidos a raz del incidente que tuvo por escenario el local
comunista de la calle Arenal Grande.
Catorce camaradas estuvieron entre rejas, porque as lo
quisieron quienes se dirigieron al Jefe de la Polica de Investigaciones
acusndolos de un hecho que slo podra adjudicrsele a la mala

560 La Tierra N157, 15 de Setiembre de 1923.


561 Trabajo (Montevideo) N20, 14 de Setiembre de 1923.

273
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

puntera de quien quiso ultimar al camarada Cisneros, valindose


del tumulto provocado a consecuencia de las objeciones hechas
por ste a la labor de la fraccin unificacionista.562
Por el otro lado, las versiones del anarco sindicalista La Batalla y
el comunista Justicia sern bien distintas:
el criminal atentado llevado a cabo por los miserables que
han enlodado al anarquismo que acaban de enrojecer su negra
historia con el brutal atentado que llev al borde de la tumba a
ese camarada, que por sus dotes morales e intelectuales por su
carcter y su firme abnegacin y sinceridad, haba despertado en
su favor el mas entusiasta sentimiento de simpata en el campo
revolucionario.
Empez la asamblea; en la atmsfera pesaba algo trgico
que no se poda precisar. Una objecin violenta de un sujeto el acta
leda; una rplica culta pero enrgica de nuestro camarada, y un
desafo que provoca el tumulto esperando para herir traidora y
framente al generoso y noble compaero Carril.563
uno de los divisionistas que estaban cerca del lugar donde
se hallaba Ricardo Carril (...) tuvo con este un fuerte altercado que
culmino en un pequeo tumulto. Varios obreros acudieron para
impedir que se fueran a las manos, cuando un elemento divisionista
que se hallaba cerca de Carril, se puso a sus espaldas y sacando una
pistola le descerraj un tiro a quema ropa, de atrs.564

562 Solidaridad N1 17 de Setiembre de 1923.


563 La Batalla N237, 7 de Setiembre de 1923.
564 Justicia, 6 de Setiembre de 1923.

274
La divisin obrera

5. La Unidad fragmentada (1923-1925).


5.1. La Unin Sindical Uruguaya.

El proceso de divisin obrera iniciado en 1921 con la pro


hibicin de la propaganda a favor de la dictadura proletaria, el
retiro de los muebles de la F.O.R.U. y la posterior creacin del
C.P.U.O., culmin entre el 19 y el 23 de Setiembre de 1923 con el
congreso obrero que fund de la Unin Sindical Uruguaya.
La F.O.R.U. se encuentra por estas fechas bastante debilita
da, en particular su presencia en el interior. La F.O.L. saltea sigue
adherida a la misma contando solo con cuatro gremios. Junto a
ella del interior se suma el sindicato gastronmico de Paysand y
dos sindicatos ms de Minas.565
El Congreso de la U.S.U. fue sin duda muy significativo para
los gremios del interior debido a la importante participacin que
tuvieron en el, pero no es la intencin de este trabajo analizar la
historia ni la significancia de esta nueva Unin Sindical.
Luego de los cuatro congresos de la F.O.R.U. (1905, 1906,
1911 y 1912), y despus de once aos sin que se realice otro, se
celebra un nuevo Congreso Obrero. La U.S.U. es una clara escisin
de la F.O.R.U. de los elementos anarco bolcheviques en alianza
circunstancial y siempre conflictiva con los gremios influenciados
por el Partido Comunista que toma el ejemplo de la Unin Sindi
cal Argentina, (continuacin de la FORA del IX Congreso).
La fundacin de la U.S.U. es el mejor momento en la histo
ria de dicha Unin Sindical, a lo largo de su trayectoria hasta 1944,
no parece lograr superar su participacin a la de este periodo.
La nueva Unin Sindical qued formada por una clara ma
yora anarco-sindicalista y una minora comunista partidaria. Ya
meses antes del congreso dos comisiones armaron dos propues
tas de bases, una de la mayora y otra de la minora.
565 Solidaridad N1 17 de Setiembre de 1923.

275
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

La mayoritaria ser bsicamente los estatutos de la U.S.U.


y consista en la destruccin del capitalismo -que se sealaba se
encontraba en decadencia- como su objetivo, tomando en sus
manos los trabajadores la administracin y direccin de la pro
duccin. Se rechazaba todo contacto con partidos polticos, la
participacin en elecciones, postulando la accin directa y la dic
tadura proletaria implantada desde los sindicatos.
Organizativamente se mantendra el esquema de la
F.O.R.U., creando federaciones locales en el interior donde exis
tieran al menos tres gremios y de existir al menos tres federacio
nes locales se agruparan en federaciones departamentales.
Se formara un Comit Central compuesto por 13 miem
bros (finalmente fueron 9) renovado por mitades cada seis meses.
Cada gremio poda organizarse libremente, no recomendndose
ni el sistema por oficios ni el industrial. Se rechazaba totalmente
los puestos directivos rentados. A nivel internacional se postulaba
la neutralidad, ante las asociaciones internacionales existentes.
Por otra parte la propuesta de la minora difera en algunos
aspectos. Por ejemplo no vea inconveniente en que se participara
en agitaciones junto a partidos polticos u otras organizaciones.
Se rechazaba el federalismo y se precisaba la forma organizativa
que deban tener los sindicatos imponindose el sistema industrial
y se convocaba a la adhesin de la Internacional Sindical Roja.566
La participacin de los gremios del interior en este congre
so es importante, contndose 21 gremios.
Por un lado los cinco gremios de Paysand; Albailes (69
cotizantes), Pintores (25), Panaderos (22), Oficios Varios (25) y
Ferrocarrileros (25), fueron junto al sindicato de Oficios Varios de
Mercedes (12 cotizantes) los gremios del interior que votaron las
posiciones comunistas ya sea de los estatutos, como de la adhe
sin a la Internacional Roja.

566 Lpez DAlessandro, 1992:269-270.

276
La divisin obrera

En el otro bloque contamos con los Picapedreros de Isla


Mala, Florida (25 cotizantes), de Burgeo, Maldonado (20), de La
Paz, Canelones (104), Oficios Varios de Durazno (20), Oficios Va
rios de Colonia (15), Constructores Navales de Salto (10), Sastres
de San Jos (22) y el Sindicato nico de la Aguja de Mercedes (15)
que votaron por las bases anarco sindicalistas de la mayora. A su
vez todos estos a excepcin de los picapedreros de Cufr vota
ron por la autonoma de la U.S.U. a las centrales internacionales
junto a estos gremios del interior; Picapedreros Minas (12) y Cue
va del Tigre, Colonia (35), Chauffers de Salto (10), Oficios Varios
de Carmelo (15), Municipales de Mercedes (10) y Panaderos de
Mercedes (16).567
Se contaron unas 63 organizaciones gremiales, de las cua
les 9 no fueron admitidas por la comisin que controlaba las acre
ditaciones.
En primera instancia se form una comisin de poderes
que autoriz las credenciales de los delegados, la comisin no
logr llegar a un consenso y por mayora de 30 votos contra 11
(y 11 abstenciones) se aprobaron 29 credenciales de Montevi
deo y 23 del Interior. De las 11 observadas, a 6 se les permiti
participar con carcter informativo (tres del interior, incluyendo
Rocha y 3 de Montevideo) y 5 fueron rechazadas (3 de Mercedes
y 2 de Montevideo.) Bsicamente se acusaba de resucitar sindi
catos que no existan ya, para obtener ms votos en el Congreso.
Por otra parte la minora haba observado algunos gremios entre
ellos, los Chauffers de Salto.568
Los picapedreros de Rocha, con una existencia muy poco
significativa no tuvieron representacin en el Congreso.

567 Justicia 25 de Setiembre de 1923, el hecho de que unos hayan votado por la auto
noma internacional y no por las bases no parece indicar que no votaran en bloque
junto a los anarquistas sino posiblemente a la ausencia de los delegados en el
momento de la votacin.
568 La Batalla N 239, 28 de Setiembre de 1923.

277
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Paysand, por su parte, fue uno de los bastiones comu


nistas en el Congreso, de los 21 votos que tenan los comunistas,
Paysand les otorgaba 5. El comunista Leopoldo Sala era el repre
sentante del sindicato de Oficios Varios de esa localidad y tuvo
una activa participacin en las discusiones del Congreso. Isabel
Fernndez represent a los pintores de Paysand. Juan Massoni
a los Albailes y Julio Baccino a los panaderos. Estos dos ltimos
integraron la comisin que control los poderes de los delegados.
Baccino plante una mocin condenando el atentado a Carril y la
F.O.L. de Paysand tambin se solidariz con el herido.
A. Vzquez ser el delegado de los Constructores Navales
de Salto y vice presidente del Congreso.
El Sindicato General de Trabajadores de Rocha, no fue
aceptado por la comisin de poderes.
Larroca el delegado de dicha entidad sindical protest:
El Sindicato de Trabajadores de Rocha existe y ha realizado
grandes luchas, siendo uno de los mejores del interior. Hizo el paro
cuando el caso de ngel Gonzlez. Se han realizado movimientos,
suspendindose la salida de los diarios. Se ganaron huelgas de alba
iles. Todos los aos los trabajadores de Rocha han realizado grandes
mitines, y esto debieran conocerlo todos. Se dice que no se hacen
publicaciones en la prensa. Sin embargo, aqu tengo el peridico
Accin Comunista de fecha 21 de Agosto de este ao donde se
publican resoluciones de la asamblea. Y en un peridico ms reciente
hay una publicacin que demuestra que el Sindicato existe regular
mente. Las puedo mostrar a quien quiera.569
Roberto Cotelo del grupo La Batalla, quien haba tenido un
protagonismo central en la existencia del C.P.U.O. y que presida
las sesiones del Congreso le seala;

569 Justicia, 22 de Setiembre de 1923.

278
La divisin obrera

Solo tengo un informe y es una nota de Diciembre de


1922, acreditando como delegado ante al C.P.U.O. a Antonio Du-
bra. El C.P.U.O. no acept a Dubra porque no era afiliado. Desde
entonces no tenemos ningn otro informe. Esto es concluyente.
En La Batalla se podr leer; en Rocha parece haber un
sindicato. Cuando de veras lo hubo se adhiri al C.P.U.O. Design
su delegado, que no pudo aceptar el Comit por no ser obre-
ro agremiado. Pas el tiempo. Por meses y meses el sindicato
no di nuevas seales de vida. Y a 24 horas del Congreso, des-
pampanante resurreccin. Hasta la Telegrafa entr en juego.
Diablos con estos rochenses! El delegado ante el Congreso, que
vena con rdenes de servir a Mosc, tuvo que conformarse con
que se le aceptara con carcter informativo. Y todava le pareci
mal...570
Los comunistas que haban observado las credenciales
de algunos gremios como los chaufferes de Salto se quejaron;
el sector anarco-dictador del Congreso resolvi -oh la moral
anarquista!- que los gremios observados que vengan al Congre-
so a votar el proyecto de la mayora y que por lo tanto sean
aliados de los anarquistas, podrn votar. En cambio, los sindi-
catos observados que traen mandato de votar el proyecto de la
minora, esos no tienen voto hasta despus que se discutan las
credenciales.571
Entre las credenciales observadas tambin estaba la del
delegado de los chauffers de Salto;
Dice este sindicato en el informe presentado, que tienen
de 9 a 11 cotizantes y que ha realizado asamblea el 3 de Setiembre;
no especifica el numero de asamblestas.
Segn planilla en poder del C.P.U.O. aparecen figurando 10
cotizaciones correspondientes al mes de Setiembre 1923.

570 La Batalla, N329 28 de Setiembre de 1923


571 Justicia, 22 de Setiembre de 1923.

279
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Esto es una evidente inmoralidad, dado que ningn gremio


paga sus cotizaciones adelantadas, ni puede saber por adelantado
cuantos cotizantes tiene. Se ve que los chauffeurs de Salto tenan
mucho inters en concurrir al Congreso. Como que pagan las
cotizaciones adelantadas...
Este sindicato no estaba de ninguna manera en condiciones
para estar representado en el Congreso.
No obstante la mayora lo admiti.572
A la distancia, la existencia del sindicato de chauffers de
Salto, parece ser tan precaria como la del S.G.T. de Rocha por
esas fechas.
En el Congreso hubo dos temas que generaron mayor po
lmica entre ambos sectores durante las sesiones. El primero fue
una mocin presentada por los Picapedreros de La Paz y de Bur
geo, la cual sealaba;
El primer Congreso de Unidad del proletariado del Uruguay
cree cumplir con un alto deber solidario enviando un fraternal y en
tusiasta saludo a la Rusia revolucionaria, en cuyo pas supo el prole
tariado limar las cadenas de la esclavitud; y si bien no lleg a las ms
amplia liberacin econmica y poltica, debido a la falta de apoyo del
proletariado internacional y a la vez por haber descuidado el mismo
proletariado de Rusia su verdadera independencia, permitiendo la
intromisin en la direccin de sus intereses a un partido poltico, este
Congreso hace votos para que cuanto antes el proletariado mosco
vita -como el de todos los pases en que triunfe la revolucin social.
Reaccione virilmente, tomando la total direccin de sus destinos y
ejerciendo el contralor por medio de los sindicatos de produccin,
nicos organismos llamados a regir los destinos de toda la sociedad
libre de productores.

572 Justicia, 28 de Setiembre de 1923.

280
La divisin obrera

Pero, al mismo tiempo que saluda al proletariado


revolucionario, lanza su ms formidable protesta contra los actuales
mandatarios de Rusia, por la persecucin sistemtica de todos los
hombres adversos al rgimen llamado, por irona, comunista, y
que significa la prdida de los valores morales que dieron prestigio
a la revolucin entre las masas populares de todos los pases,
persecuciones denunciadas ante el mundo revolucionario por los
propios comunistas de la oposicin obrera, que es la verdadera
fraccin revolucionaria dentro del Partido Comunista Ruso.573
La mocin como se ve, era difcil de digerir para los
delegados comunistas, la misma fue aprobada con 31 votos,
contando con el apoyo de los Constructores Navales de Salto y
los choferes.574
El otro asunto polmico fue la adhesin o no a la
Internacional Roja, ganando la autonoma a las internacionales
por 32 votos contra 20.
La neutralidad hacia las entidades obreras internacionales
puede verse de distinta manera. Para Lpez de Alessandro575 se
esperaba aun la posibilidad de un entendimiento entre la Tercera
Internacional de Mosc y la Asociacin Internacional de Trabaja
dores refundada por los anarquistas en Berln en 1922. Si bien es
cierto que dicha posibilidad an se manejaba, las probabilidades
eran mnimas, dado que la A.I.T. surgi ante la disconformidad
de los sindicatos anarquistas con la Tercera Internacional dirigida
por el Partido Comunista Ruso, y por la disconformidad del movi
miento anarquista internacional por la direccin de la dictadura
comunista conocidos los sucesos de Kronstdat y la Macknovchina.
Pero cabe preguntarse porque los anarco sindicalistas no

573 El Picapedrero N58, Setiembre de 1923.


574 Justicia, 21 y 23 de Setiembre de 1923.
575 Lpez DAlessandro, 1992:269

281
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

utilizaron su mayora en el Congreso para adherir la U.S.U. a la


A.I.T. de Berln, y puede haber varias respuestas para ello. Quizs
llevar a tal extremo la paciencia de los comunistas comprometera
la tan anhelada unidad sindical, aunque no parece haber sido ste
un motivo para aprobar en sus estatutos el rechazo a los partidos
polticos y enviar una condena pblica a la dictadura comunista.576
Por otro lado, y posiblemente sea el motivo de fondo, la
F.O.R.U., con la cual el quiebre de relaciones era total en sta
poca se haba adherido a la A.I.T. Desde Berln, Diego Abad de
Santilln, como delegado de la F.O.R.A. y la F.O.R.U. polemizar
con el sindicalismo neutro de la mayora de las organizaciones
sindicales europeas afiliadas a la A.I.T. que tenan una similitud
ideolgica con la U.S.U. y la U.S.A. (salvo por la simpata hacia
la dictadura proletaria), logrando finalmente en el segundo
congreso de la A.I.T. de Marzo de 1925 aprobar una resolucin
por la cual solo poda integrar la misma una sola organizacin por
pas, desterrando definitivamente la posibilidad de adhesin de
la U.S.A. y la U.S.U.577
En este sentido La Batalla en su informe del Congreso
seal que adems de ser contraproducente para la unificacin
proletaria imponer la adhesin a la Internacional de Berlin,

576 En un artculo de Ricardo Carril publicado despus de su muerte en relacin a la


adhesin a una de las tres internacionales (la reformista con sede en Amsterdam,
la anarquista en Berln o la comunista en Mosc) deca; Forzados por una de las
tres, nos inclinaramos por Berln; los anarquistas estaramos con los de ms afini-
dad y con los que conceden ms independencia. Del mismo modo que de no existir
Berln optaramos por Mosc antes de pensar en Amsterdam (...) Pero (...) Quien
justifica una adhesin internacional mientras los cuadros sindicales estn destro-
zados? (...) Que pas no tiene su proletariado sangrando por la herida estpida
de su propia divisin interna? Que inters hay en que esa divisin sea llevada al
terreno internacional? (La Batalla N343, 4 de Enero de 1924)
577 En este sentido son muy interesante los trabajos de la investigadora madrilea
Mara Miguelaez, en especial; En la esfera del anarquismo y el sindicalismo in-
ternacional: las luchas de representacin Historia, Trabajo y Sociedad, N 4, Ma
drid, 2013.

282
Aproximacin al momento y el lugar

argumentaban el propsito divisionista que dio origen a la


entidad berlinesca.578
Finalizado el Congreso las bases de la mayora fueron
aprobadas por 38 votos contra 21.
Entre las resoluciones del congreso destacamos algunas
de inters;
1 Aceptar en su seno a los asalariados de todas las razas,
nacionalidades y tendencias polticas, filosficas y religiosas. Re-
chazar, en cambio, en forma absoluta todo contacto inteligencia
o direccin de cualquier partido poltico y proclamar en todo mo-
mento la conveniencia de que todo el poder econmico y poltico
corresponda a los sindicatos.
2 Rechazar por completo la accin electoral como medio
de lucha, y aceptar y propagar, en cambio, la accin directa y re-
volucionaria como nica arma de capacitacin y emancipacin
Se menciona el propsito de mantener una constante re
lacin entre federaciones locales y sindicales del Interior, realizar
asiduo intercambio de delegaciones; canje de peridicos y ma
nifiestos; creacin de bibliotecas, y edicin de folletos y todo
medio de publicidad oral y escrita que se considere eficaz para
los fines que se persigue.
Se nombrar un secretario para la capital, otro para el in
terior y otro para las relaciones internacionales. El del interior
tendr a su cargo la organizacin de giras al interior, comunica
cin, correspondencia e informar sobre las resoluciones de la
U.S.U.
La problemtica rural fue abordada en el artculo 39 resol
viendo que se de especial preferencia a la tarea de despertar el
espritu de clase del obrero del Interior, y procurar de fraternizar
y acercarlo al proletariado fabril de las ciudades, para unidos en
un solo haz dar por tierra con la explotacin existente

578 La Batalla N329, 28 de Setiembre de 1923.

283
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

En el art 42 seala que los gremios del interior tienen que


ser representados por delegados que formen parte de sindicatos
similares de la capital.579
El Congreso fue sin duda un triunfo del anarco sindicalis
mo, as lo manifest La Batalla; Apresurmonos a decir que este
Congreso de unidad obrera ha sellado un magnfico y elocuen-
te triunfo para las normas revolucionarias que se informan en la
tendencia denominada anarco-sindicalista para diferenciarla del
sindicalismo amarillo y del comunismo poltico electoral.580
En definitiva, los gremios sanduceros votaron con la mi
nora comunista tanto en la aprobacin de las bases como en
la adhesin de la Internacional Roja, el gremio de Rocha que
sustentaba las mismas opiniones no fue acreditado, mientras
que los sindicalistas salteos votaron con la mayora anarco sin
dicalista.
Al poco tiempo de fundada la U.S.U. esta edita un peri
dico que se publicar muy espordicamente a lo largo de su his
toria. En su primer nmero haca un interesante balance de los
gremios del interior.
De Paysand mencionaba;
Despus de Mercedes, es Paysand la ciudad que ms or
ganizacin posee. Es una de las ms importantes ciudades despus
de Montevideo, por su forma edilicia, su desarrollo comercial, la vas
tedad de sus mltiples medios econmicos y polticos. El puerto de
Paysand es el de ms movimiento de todos los del litoral y su desa
rrollo rivaliza con el del Salto, que se asegura es la segunda ciudad de
la Repblica.
Quizs a esto se deba que Paysand tenga varios gremios y
que stos, formando la Federacin O, Local, sean los que en el actual

579 Unin Sindical Uruguaya. Carta Orgnica. Montevideo, 1924


580 La Batalla N329, 28 de Setiembre de 1923.

284
La unidad fragmentada

momento presentan valores indiscutibles. No obstante, no puede


afirmarse que aquello sea la perfeccin ni mucho menos.
La F.O.L. la forman Albailes, Panaderos, Pintores y O. Varios.
Existe, adems, el Sindicato de Ferroviarios, compuesto en su mayo
ra de personal de los talleres del Ferrocarril Midland. Este sindicato
es autnomo de la Local, pero adherido a la U.S.U., como todos los
dems. Existi hasta no hace muchos meses el gremio de Obreros en
Calzado; pero, la comn negligencia de sus componentes, generali
zndose, lo ha hecho decaer completamente.
Los gremios de Albailes y Pintores han obtenido triunfos
hace poco, aumentando as las seguridades de mantenerse en la lu
cha contra el enemigo comn.581
Para Salto informa que fue en otros momentos el segundo
baluarte de la organizacin regional., y que los delegados obre
ros trataron de reorganizar los gremios en varias oportunidades
pero fueron estorbadas y atropelladas por una banda de fora-
gidos que en nombre de ideales respetables hacen una obra de
bandidaje y derrotismo.
Llorca, Carril, Bardallo, llegaron en misin reorganizadora,
y todos tropezaron con el muro de fanatismo puritano.582

5.2. Gira de Roberto Cotelo en Paysand.

El 24 de Diciembre lleg Roberto Cotelo a Paysand. ste


era de los principales referentes de la tendencia anarco sindicalis
ta, haba sido el secretario general del C.P.U.O. y ahora se diriga
personalmente a llevar la voz de la U.S.U. al litoral. Cotelo vena en
gira de propaganda como delegado de la recientemente formada
U.S.U., haba enviado una correspondencia desde Fray Bentos
581 Unin Sindical, N1 Diciembre de 1923.
582 Idem.

285
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

anunciado su llegada, pero al parecer hubo una confusin y los


comunistas sanduceros no prepararon ninguna conferencia para
el delegado anarco sindicalista. As, con poca propaganda previa
y siendo el feriado de Navidad Cotelo dio una conferencia no muy
concurrida el da 25 a la noche en el local de la Federacin. Fue
presentado por el obrero O. Mann (o Magnin) y habl extensa
mente de los mtodos de organizacin interna de los sindicatos
y del mandato que traa de la Unin Sindical.583 Al da siguiente
se reuni con los ferroviarios, gremio que aunque adherido a la
U.S.U. se mantenan autnomos de la F.O.L.584
A la noche siguiente se realiz una conferencia en la plaza
Constitucin sobre Organizacin obrera y anti militarismo, al
parecer no haba mucha gente pero se fue acercando a medida que
Cotelo iba hablando. En el informe enviado por el mismo Cotelo
a la U.S.U. en Montevideo cuenta expuse primero los valores de
esa Central [la U.S.U.], haciendo una exhortacin para que todos
los trabajadores se unieran a ella desde sus respectivos sindicatos.
Inici por derivacin un comentario general bosquejando varios
aspectos de orden poltico y social que me llevaran a comentar el
funesto plan militarista del gobierno nacional. Hara casi 45 minutos
que hablaba, y como dijera las cosas como eran, sin eufemismos,
llamando por su verdadero nombre a los que roban el pueblo y
asignndoles el justo titulo que se merecen, los que en mil probadas
ocasiones han matado obreros y han ensangrentado el suelo como
en el ltimo 1 de Mayo, por ejemplo, todo esto, en fin exasper
a la polica local, la que impidi que continuara mi conferencia,
desplazando al pblico que ya alcanzaba a 300 o ms, personas.
Cotelo no accedi a bajar de la tribuna en un comienzo,
y convoc a seguirla en el local de la Federacin hacia donde
583 La Batalla N343, 4 de Enero de 1924.
584 Esto podra dar la idea de que estuvieran inclinados hacia el anarco sindicalismo,
sin embargo, en el congreso fundacional de la U.S.U. votaron junto a los delegados
comunistas.

286
La unidad fragmentada

fueron cantando himnos revolucionarios. Ya en el local continu


hablando contra la polica y el militarismo. Cotelo propuso la
creacin de un comit de Agitacin para reactivar el movimiento
y realiz reuniones con los delegados de los gremios de Albailes,
Pintores, Oficios Varios y Panaderos, y al otro da lo hizo con los
ferroviarios. 585
El corresponsal se queja de que fue recibido con semi
indiferencia por parte de muchos de sus adversarios de ideas, es
decir los comunistas.

5.3. Gira de Roberto Cotelo en Salto.

Es curioso que la F.O.R.U. no haya enviado ningn delega


do este ao, sin duda es un sntoma de su decaimiento gremial.
Cotelo lleg desde Paysand el 27 de Diciembre a Salto.
El sbado 28 se realiz la primer conferencia en el local de Cons
trucciones Navales, que se haba planificado para el da anterior
pero se suspendi por no poder hacerse propaganda y no ir la
cantidad de gente necesaria.
All, segn La Batalla Dijo que no eran las etiquetas o
rtulos lo que vala, sino la accin. Afirm que l, como obrero
y anarquista, no tena a menos luchar con trabajadores de las
ms variadas tendencias, y que esos obreros no valan por su
rtulo ideolgico, sino por sus actividades en pro de la organiza-
cin sindical y las luchas por cuestiones sociales. En ese instante
un puro le interrumpe, dicindole que pareca mentira que Co-
telo haga confusiones entre los obreros sobre lo que es anarqua
y dems tendencias.
Al da siguiente se suspendi una nueva conferencia
otra vez por falta de pblico ya que se inauguraba una plaza
de deportes, las conclusiones del cronista son obvias Revela

585 Justicia, 5 de enero de 1924.

287
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

hasta dnde llega la indiferencia reinante el detalle expuesto: los


trabajadores prefirieron asistir a la inauguracin de una plaza
de deportes, antes que a nuestro acto...
El mircoles 2 de enero, se realiz una reunin de obre
ros de distintos gremios, con el fin de formar un sindicato de ofi
cios varios. La crnica revela las dificultades que Cotelo estaba
encontrando para organizar el movimiento en Salto El delega-
do de la Unin Sindical Uruguaya explic en forma clara por qu
es necesario constituir un sindicato de oficios varios, despus
de haberse hecho todo lo posible por reorganizar los sindicatos
otrora existentes y no haber podido materializarse ese anhelo.
Seala la crnica que ya se haban anotado unos 18 o 20 compa
eros con ese fin, hasta que los eternos divisionistas crnicos,
atorrantes, haraganes y vagabundos de profesin, enemigos
acrrimos del trabajo honrado y dignificador, metieron un des-
comunal bochinche, como los seis metidos anteriormente en ese
mismo local, debido a la tolerancia de los Navales.
El individuo Moreli (alias, El Gringo que es una fiera con
figura humana (...) engredo con fama de malo, insult a Cotelo,
tratndolo de embustero y sinvergenza; y de estar haciendo
confusionismo.
El tumulto fue aparentemente porque los anarquistas de
la F.O.L., reclamaban que ya exista un sindicato de Oficios Varios,
aunque otros sealaban que dicho sindicato ya no exista.586
Finalmente parece haberse constituido un Sindicato de
Oficios Varios el 7 de enero, aunque el nico gremio de Salto
que cotizar en la U.S.U. durante todo el ao 1924 ser el de
Constructores Navales, con unos 40 afiliados.587

586 Si bien se registra una asamblea de Oficios Varios en La Tierra del 12 de enero -y
luego no se registran mas-, desde la edicin del 4 de Agosto que no se registraba
actividad del mismo.
587 Unin Sindical N4 (01-05-1925) y N6 (12-11-26)

288
La unidad fragmentada

Tambin se intent re organizar a los choferes de Salto, lo


que parece confirmar las crticas comunistas,588realizadas en el
Congreso de su precaria existencia.
Segn la crnica de La Tierra, el purita replicante
aclar que existan la sociedad de Albailes y Oficios Varios,
que contaban con una treintena de adherentes, mientras los
choferes tan solo tenan son dos o tres.
Ambas crnicas coinciden en que casi se le van a las
manos al purita cosa que al final no ocurri por la mediacin
de un individuo.589
El declive del movimiento a estas alturas es casi total,
en todo el verano se registr un solo pic-nic, realizado el 24 de
Febrero y la actividad gremial es casi nula, los nicos gremios
que parecen estar activos son los albailes y los constructores
navales.
En enero se hace un llamado para organizar a los
vendedores ambulantes de verdura y se realizan un par de
asambleas pero el asunto no parece prosperar.590
En Paysand en Febrero Justicia entrevista al delegado
de los panaderos Fleitas, quien cuenta que hace unos tres
aos el sindicato funcionaba muy bien pero sufri un duro
golpe por un conflicto con un patrn y que apenas lo haban
podido mantener, pero que hace unos pocos meses han logrado
reorganizarse y en un reciente conflicto con la panadera
Guidali salieron victoriosos obligando al patrn a tener a todo el
personal adherido al sindicato.591

588 La Batalla N341, 11 de Enero de 1924.


589 La Tierra N169, 12 de Enero de 1924.
590 La Tierra N169 (12-01-1924) y N170 (19-01-1924)
591 Justicia, 16 de Febrero de 1924.

289
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

5.4. 1 de Mayo de 1924.

Acorde con el decaimiento gremial en Salto, el primero de


mayo no parece haber revestido mayor importancia, se realiz
una conferencia en el puerto y se repartieron unos mil volantes,
donde no sabemos cuales han sido los oradores, y por primera
vez en los ltimos cinco aos, no se cont con un propagandista
de Montevideo o Buenos Aires para la ocasin.592
En Paysand se realiz una primer conferencia el mircoles
31 de noche en la sede de la Federacin Obrera Local, en la cual el
delegado Comunista ngel Gonzlez habl sobre la mujer.
El 1 de tarde se realiz un mitin en el que participaron el
comunista Gonzlez y el delegado de la F.O.R.U. Zabala. Los con
vocantes fueron el Centro Comunista, la Federacin Obrera Local
y el Centro de Estudios Sociales Internacional.593
En Rocha se realiz una conferencia en la plaza de depor
tes convocada por el Sindicato General de Trabajadores a la que
concurrieron unos 400 trabajadores, donde hablaron Pieiro, Te
chera y Garaza quien seal que haba que reorganizar el sindica
to cuya vida es bastante precaria.594

5.5. La decadencia gremial.

En el informe enviado por la F.O.R.U. al II Congreso de la


A.I.T. sealan en relacin al periodo que va de Diciembre de 1923
a Febrero de 1925; El periodo (...) nos fue, sin duda, uno de los
ms crticos por que atraves nuestra organizacin. Esto se debe
ms que nada a la lucha tenaz y ardorosa que por la salvacin de
nuestras ideas y nuestro movimiento revolucionario y emancipador

592 La Tierra N183 (03-05-1924) y N189 (14-06-1924).


593 El Telgrafo (Paysand), 2 de Mayo de 1924.
594 Accin Comunista N40, 6 de Mayo de 1924.

290
La unidad fragmentada

hemos tenido que librar contra todos los elementos de dictadura


-anarco-dictadores, comunistas y socialistas. (...) Sera una
torpeza afirmar que ellos no han logrado nada de sus propsitos.
Algo han logrado Pero no lograron destruir la F.O.R.U. seala,
esta lucha fue tan ardua que los compaeros anarquistas han
quedado cansados, por lo que muchos de ellos han permanecido
hasta hoy inactivos. Solamente un grupo reducido de luchadores
jvenes y nuevos -en su mayora- en la propaganda de nuestras
ideas, permanecieron firmes en sus puestos.595
En Agosto de 1924 la F.O.R.U. Se quejaba de la escasa
participacin de los gremios del interior; Hace mucho tiempo,
(...) que los sindicatos y compaeros del interior no mandan ni
una nota a la F.O.R.U. con la debida regularidad, y esto, claro est,
perjudica grandemente la labor que el C.F. Consejo Federal debe
realizar por la propaganda de la organizacin.596
En Salto la actividad gremial en 1924 y hasta julio de 1925 que
se deja de editar La Tierra es prcticamente inexistente, se realizan dos
pic nics a fin de ao, el primero a fines de noviembre, mostr un nivel
de participacin importante, vendindose 95 entradas y obteniendo
un beneficio de 25 pesos, para el segundo, hacia fin de ao, solo se
vendieron 48 entradas obtenindose 13 pesos de ganancia.
Si bien se registra una conferencia el 6 de diciembre de
1924 en el Ciencia y Vida sobre la represin internacional, unos
meses despus La Tierra sealar; En los momentos presentes
la carencia de Centros Culturales es casi absoluta; solo existen
algunas agrupaciones de carcter cultural, pero ajenos a toda
corriente ideolgica, y por ende, hurfanos de una orientacin
precisa en sus practicas culturales.597

595 Solidaridad N7, 15 de Febrero de 1925


596 La Protesta (Buenos Aires), 12 de Agosto de 1924 F.O.R.U. Informe de la conferen-
cia de Insburk.
597 La Tierra N220, 15 de junio de 1925.

291
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

El semanario La Tierra, comenz a editarse cada vez con


menos frecuencia, y con sus ausencias nuestras crnicas se fue
ron vaciando, despus de la edicin N219 del 1 de Mayo de
1925, tan solo sali un ejemplar ms, seis semanas despus, que
nada nos cuenta de lo acontecido en ese 1 de Mayo.
En Paysand en Diciembre de 1924 comienza un conflicto
de albailes. stos piden solidaridad a los obreros de Salto a tra
vs de La Tierra, para que ningn albail de Salto vaya a trabajar
como rompe huelgas engaado por algn patrn. Firma el comu
nicado por el comit de huelga Jos Selser.598
El conflicto fue por aumento de salarios y se coron con un
triunfo obrero. Al frente del gremio se encuentra Pascual Caccia.
Y Magnin contina como secretario de la F.O.L.599
En Rocha la situacin tambin es de estancamiento Los
obreros de Rocha tienen actualmente constituido un Sindicato Ge-
neral. A l adhieren varias decenas de proletarios de la localidad.
Pero el Sindicato, en realidad lleva una vida demasiado precaria,
la inmensa mayora de los trabajadores de las distintas categoras
se hallan fuera de su organizacin y permanece impasible a las ex-
hortaciones que se le hacen. A las asambleas del Sindicato no acu-
de sino muy reducido nmero de camaradas. Algunas asambleas
deben ser suspendidas por falta de nmero reglamentario.600

5.6. Huelga de obreros del saneamiento en Rocha.

En enero de 1925 se produce una importante huelga de los


obreros del saneamiento de Rocha. Sin duda es la huelga ms im
portante desde la protagonizada en Marzo de 1922 por los obre
ros de la va frrea. Los reclamos son por mejores condiciones de

598 La Tierra N206, 4 de Diciembre de 1924.


599 Justicia, 6 de Diciembre de 1924, 7 y 13 de Enero de 1925.
600 Accin Comunista N46, 17 de Junio de 1924.

292
La unidad fragmentada

trabajo ya que trabajan en psimas condiciones, trabajando de


noche sin cobrar doble y obteniendo salarios muy bajos.601
El Sindicato General de Trabajadores convoca a un mitin en
la plaza de deportes al que acuden unas 800 personas, habiendo
muchos huelguistas con banderas del S.G.T. Habl el huelguista
Stuart disertando acerca de porqu comenz la huelga. Luego el
comunista Garaza habl del conflicto y de la estructura social, y
finaliz Pagola en nombre de la Juventud Comunista de Rocha,
de all se manifest en una columna hasta el local sindical donde
habl Garaza nuevamente.
El 19 de enero, los huelguistas interceptan los camiones
que llevaban a los trabajadores que no adhirieron a la huelga, lo
que deriv en una apaleada policial con varios detenidos que fue
ron liberados poco despus y se comienza a discutir la posibilidad
de realizar un paro general.602
Tras un mes de huelga y la intermediacin del Concejo de
Administracin los huelguistas obtienen un muy magro aumento
de salarios como nica conquista. Los comunistas, al frente del
conflicto quisieron ver esto, igualmente como una gran victoria
no solo para los huelguistas sino para todo el proletariado ro-
chense que hasta ahora puede decirse que han vivido al margen
de toda organizacin sindical, han empezado ya a reaccionar con-
tra esa indiferencia y pesimismo con que hasta el presente mira-
ban las organizaciones sindicales y ya suman varias decenas los
obreros que, adems de los huelguistas, han solicitado su ingreso
al Sindicato General de Trabajadores.603
El domingo 1 de Febrero se hizo una conferencia en la
plaza de deportes, que si bien se convoc a las 10 ya desde las
8:30 haba una buena cantidad de obreros. Pagola narr en que

601 Justicia, 29 de Enero de 1925.


602 Accin Comunista N75, 9 de Enero de 1925.
603 Justicia, 9 de Febrero de 1925.

293
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

condiciones se realiz el arreglo y luego Garaza, explico porque se


acept el arreglo no obstante entender que las mejoras concedi-
das era pocas. A pesar de ello, ste fue el conflicto ms impor
tante de la regin estudiada entre 1924 y 1925.

5.7. 1 de Mayo de 1925.

Este primero de mayo, en Rocha al igual que casi todos los


anteriores se realiz un gran picnic, en el que ms all de su
completo programa hicieron uso de la palabra el lder del Partido
Comunista Celestino Mibelli, y los comunistas locales Gonzlez
Acosta e Ignacio D. Garaza.604
El Pic Nic que se iba a realizar en el terreno de la rural de
bi cambiarse de sitio a ltimo momento ya que su dueo neg
el espacio, realizndose en la chacra Cecilio Costa. Si bien el cli
ma no acompa parece haber satisfecho las expectativas de sus
promotores; desde temprano, grupos de numerosos trabajado-
res fueron llegando al campo y disponindose en fogones en los
cuales los cantos revolucionarios resonaban en una anunciacin
augural. Llegada la hora de la comida, un criollazo asado con cue-
ro reconfort el apetito de todos.
Mas de cien personas comieron, haciendo como siempre,
el honor a la clsica olla podrida. Luego passe a la realizacin del
amplio programa de juegos atlticos y populares.
Ms de 200 trabajadores vieron los juegos, todo un xito
tanto desde el punto de vista de la confraternidad como financiero
De noche abri la conferencia Gonzlez Acosta, y luego ha
bl el diputado Mibelli quien seal; No somos esos terroristas
barbudos, como nos pintan los burgueses, somos obreros que trae-
mos la verdad social para los obreros ignorantes y atrofiados por el
brutal sistema burgus, ensendole el nico y verdadero camino

604 Accin Comunista N87, 28 de Abril de 1925.

294
La unidad fragmentada

de su liberacin: luchar para transformar el rgimen social culpable


de toda la miseria y del dolor del proletariado. Luego habl Garaza.
Al da siguiente se realiz otro mitin en la plaza de depor
tes donde se repitieron los oradores.605
En Paysand se realiz un mitn en la plaza Constitucin
el cual no fue muy numeroso. Se cont con la presencia de un
delegado de la F.O.R.U. quien critic el principio de autoridad e
histori de forma clara y sencilla la fecha histrica. Fustig du-
ramente a los reformistas de todos los colores que han convertido
el 1 de Mayo en un desfile de ociosos, calificndolo de fiesta del
trabajo informar Solidaridad desde Montevideo.606

605 Accin Comunista N88, 4 de Mayo de 1925


606 Solidaridad, N17 19 de Junio de 1925.

295
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

6. Salto, un tardo resurgimiento en los aos 30.

El decaimiento del movimiento gremial al mediar la dca


da del veinte fue general, en la regin y el mundo, la onda expan
siva generada por la revolucin rusa de 1917 se extingui para
1923, Montevideo y Buenos Aires conocieron algunas agitaciones
intensas, pero seguramente ya sin la certeza de que el capitalismo
estaba pronto a caer.
Nuestra investigacin se cerrara bsicamente en el ao
1925, sin embargo las ediciones posteriores de La Tierra en la
dcada del 30 nos dejan entrever cierto resurgimiento de la co
rriente gremial de tendencia anarquista, la cual incluiremos, pero
sin contrastar como en la dcada anterior con la presencia de las
otras corrientes.
El primer dato que se desprende de la segunda poca de
La Tierra, iniciada en enero de 1932, es que la vieja minerva don
de se publicaba el semanario, no estuvo sin utilizarse en esos 7
aos, sino que se menciona que estuvo activa hasta Setiembre de
1929, pero no especifica que tipo de uso se le dio.607
Sabemos que en Octubre de 1931, Francisco Carreo, que
haba visitado Salto en gira de propaganda el 1 de Mayo de 1919,
volva como secretario del Sindicato nico del Automvil y como
delegado de la F.O.R.U.
La agrupacin anarquista La Tierra se muestra activa ya
que fue quien organiz las conferencias que realiz, donde habl
del caso Sacco y Vanzetti, las dictaduras -como la argentina y la
italiana-, la situacin econmica internacional y el caso de Kerbis
y Cisneros (que veremos ms adelante). Se organiz un comit
de propaganda de la F.O.R.U., intentando organizar un sindicato
de Oficios Varios. Pero donde parece haber tenido xito fue en

607 La Tierra N1, 11 de Enero de 1932.

296
La unidad fragmentada

la organizacin de los choferes, crendose una seccin saltea


del Sindicato nico del Automvil integrados por choferes de al
quiler, particulares, camiones, mecnicos, nafteros, entre otros,
contando con ms de cien afiliados.608
Si bien el peridico sigue manteniendo una lnea obreris
ta, y sigue siendo redactado por trabajadores609 en los primeros
nmeros nada se menciona de la actividad gremial en Salto, pero
es claro que el resurgimiento del peridico molest a las autori
dades, en la represiva dcada del 30. As, el 4 de Febrero de 1932,
la polica se apersona al local de La Tierra, y tras un pretexto que
no se explicita son detenidos quienes se encontraban all; Anto
nio Silva, Macario y Colman, ste ltimo vive con su familia como
inquilino en el local. Los dos ltimos fueron liberados a las pocas
horas. Jos di Fernando, administrador del peridico, fue dete
nido momentos despus violentamente y golpeado en la calle,
quedando detenidos por tres das.
En comunicacin con Montevideo, los editores de La Tierra,
informan que ya no existen gremios anarquistas en el Salto, pero
que si hubiese ms comunicacin con la capital podran iniciar una
corriente gremial afn a la F.O.R.U. y los gremios anarquistas aut
nomos, sealando incluso, que en Salto se enteraron de una huelga
general realizada en Montevideo, por la prensa comercial.610
En el mes de Marzo se registra la presencia de Liber Troi
tio, del Partido Socialista en Salto, quien realiz al menos una
conferencia, en la plaza 33, en sta el anarquista Di Fernando qui
so rebatirle sus argumentos pidiendo la palabra la cual no fue
cedida, y ante esto lo invit a una nueva conferencia con debate
pblico lo cual tambin fue rechazado por Troitio, ante lo cual
608 Solidaridad N34, Octubre de 1931
609 Nosotros que conocemos perfectamente el movimiento econmico e industrial de
esta localidad, y que sabemos directamente de la oferta y la demanda del trabajo,
por la simple razn de ser trabajadores La Tierra N3, 26 de Enero de 1932.
610 La Tierra N6, 25 de Febrero de 1932.

297
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Di Fernando se tom la libertad de disertar a los gritos siendo


callado por la prepotencia policial.611
El 20 de Marzo se realiz una segunda conferencia, donde
se ve que la intervencin de Di Fernando en la anterior tuvo al
gn efecto, ya que segn la crnica de La Tierra el orador elogi
a el anarquismo por largo rato, sin embargo, antes de comenzar
el comisario presente se acerc a Di Fernando dicindole que si
perturbaba el acto sera detenido.612
Los anarquistas tambin realizaron sus conferencias por
estas fechas, el 26 y 27 de Marzo, en Plaza Flores (Socialismo y
Anarquismo) y otra en Plaza Treinta y Tres (organizacin social
bajo el punto de vista anrquico).613
A esta segunda conferencia segn La Tierra compareci
bastante publico aunque no todo aquel que desearamos
A las 21 y 30 abri el acto el compaero Cantero, disertan-
do sobre la condicin moral de la familia en la sociedad presente y
futura, precedindole Nuez, quien hizo diversas consideraciones
sobre la situacin de proletariado ante la poltica actual, cerran-
do el acto Di Fernando que analiz el tema socialismo marxista y
anarquista.
La conferencia del da siguiente no se pudo realizar porque
cuando Di Fernando fue a pedir los permisos a la comisara se lo
detuvo por media hora, y la misma fue prohibida, quedando el
pblico en la plaza.614
A mediados de Abril y ante la idea de conmemorar el 1 de
Mayo se empieza a manejar la propuesta de organizar un sindica
to de Oficios Varios.615

611 La Tierra N11, 20 de Marzo de 1932.


612 La Tierra N12, 26 de Marzo de 1932.
613 Idem.
614 La Tierra N13, 2 de Abril de 1932.
615 La Tierra N15, 14 de Abril de 1932.

298
La unidad fragmentada

La idea va tomando fuerza nmero a nmero, incluso men


cionndose la voluntad de reconstruir la Federacin Obrera Local.
El 1 de Mayo se realiz finalmente una conferencia y mitn
en la plaza 18 de Julio a las 16 hs.616
Por la maana se haba realizado una conferencia del di
putado socialista argentino Solari en la Plaza 33, la cual, aunque
la crnica de El Sol de Montevideo seal que concurri una
crecida legin de trabajadores, segn La Tierra asistieron tan
pocos trabajadores, que todava la mayora de los obreros de esta
ciudad ignoran donde se realiz el acto.
Luego dice El Sol Durante varios minutos debi soportar
impertinentes interrupciones de un anarco-comunista que pre-
tenda ser escuchado por el orador. Aparentemente se tratara
de Di Fernando y segn La Tierra fue respondido por el diputado
con bravuconadas no dndole la palabra.617
Sobre el acto de la tarde menciona que el pblico no fue
numeroso, pero fue pblico obrero. Seala que a las 15 horas
ya se encontraba pblico en la zona, habl Esteban C. Nuez, An
tonio Cantero, quien refut algunos conceptos sobre socialismo
y anarquismo contestando a Solari. Y finalmente habl Di Fernan
do, quien al igual que Nuez convoc a los trabajadores al local
de La Tierra para fundar el Sindicato de Oficios Varios. Se fue en
manifestacin hasta el local cantando Hijos del Pueblo y otros
cantos.
En el local se forma el Sindicato de Oficios Varios,
conformndose una comisin provisoria de 7 miembros (cuatro
hombres y tres mujeres) lo que le dar ms valor a la lucha,
desde el momento en que en ella se le designa un papel importante
a la mujer, descuidada casi siempre en nuestras luchas y que es
en cambio el aporte ms valioso con que podramos contar, si

616 La Tierra N17, 30 de Abril de 1932.


617 La Tierra N23, 11 de Junio de 1932.

299
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

realmente la interesarmos en la lucha por la justicia y la libertad


integral de la humanidad.618
La lnea ideolgica del grupo La Tierra, contina siendo la
del sindicalismo finalista, ideolgico, el forismo, as afirman en su
editorial nmero 20 Antes que una organizacin hbrida, preferi-
mos que no haya organizacin. Las ideas primero.619
Un tema que estar presente en las pginas de La Tierra
una y otra vez, es la campaa por la libertad de los obreros Kerbis
y Cisneros del Sindicato nico del Automvil de Montevideo (ni
co gremio de importancia que an sostena la F.O.R.U.).
El conflicto se inici alrededor de un mnibus que su pro
pietario vendi a su pareja y estuvo tres meses parado en un ta
ller. Los obreros reclamaban se les pagaran esos tres meses lo
que el patrn no acept, con el pretexto del cambio de propie
tario. El sindicato de choferes comunista dio apoyo al propieta
rio, mientras que los obreros pertenecan al Sindicato nico del
Automvil, por lo cual adems del conflicto de clase existente, se
convirti en un conflicto de puja ideolgica.
El 5 de julio tres obreros pretenden realizar un sabotaje
al mnibus boicoteado, intentando prenderlo fuego, pero del
incidente result muerto el guarda que trabajaba en la unidad
boicoteada y uno de los obreros que intent el sabotaje, ambos
de un disparo.
Varios fueron los obreros del Sindicato nico del Autom
vil detenidos, quedando Kerbis y Cisneros por mayor tiempo, a
pesar de haber demostrado en varias ocasiones que se encontra
ban en otro lugar en el momento del hecho. Siendo reconocidos
y activos militantes del S.U.A. Se realiz una de las campaas ms
importantes del movimiento obrero local por la libertad de los
presos sociales.

618 La Tierra N18, 8 de Mayo de 1932.


619 La Tierra N20, 21 de Mayo de 1932.

300
La unidad fragmentada

Como bien seala La Tierra la militancia anarquista


del momento en el Uruguay, gira en torno a la campaa
emprendida por la libertad de Kerbis y Cisneros.620
En ocasin del juicio pblico a realizarse en Montevideo,
se realizaron unos 10 mitines en la capital tan solo en un mes
con ese motivo. En el Salto se har lo suyo el 26 de Junio
en la plaza 18 de Julio, donde a las 16hs habl Alberto Nan
Juarez, Esteban C. Nuez y C. Santos. La crnica de La Tierra
se muestra sincera ante la concurrencia Aunque el pblico
no fu numeroso, sabemos que este acto ha despertado
mucho inters entre los trabajadores, especialmente, que ya
empiezan a interesarse por la causa de los compaeros Kerbis
y Cisneros.621
El 12 de Agosto se realiza un paro general de la F.O.R.U.
en solidaridad con Kerbis y Cisneros, y en Salto se realiza una
conferencia en la Plaza 33 a las 10 de la maana.
Segn La Tierra, a pesar del fro reinante que complic
tanto el acto como la propaganda previa, se seala que
participaron muchos obreros y estudiantes. Se seala que los
estudiantes, municipales y portuarios pararon totalmente
sus actividades, y que obreros y empleados de otros oficios
tambin pararon. Si se tiene en cuenta que en esta ciudad no
hay ningn gremio organizado se ver claramente el arraigo que
ha tomado ya en el seno del pueblo la causa de los compaeros
Kerbis y Cisneros sealar el vocero crata de Salto.622
Seala la crnica que a las 10 de la maana lloviznaba
y haca mucho fro pero igual haba bastante pblico, unas
quinientas personas, que se fueron desgranando de a poco,
hablaron en el mitin Nan, Nuez y Cantero.

620 La Tierra N26, 03 de Julio de 1932.


621 dem.
622 La Tierra N32, 15 de Agosto de 1932.

301
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Segn La Tierra el paro de los portuarios y municipales


fue total, y es de llamar la atencin que gremios que no estn
organizados paren totalmente. El militante Cesar Mazza en una
carta hacia los obreros portuarios, se atribuye el xito del paro a
la propaganda de La Tierra; No es para admirarlos lo que escribo
estos renglones dirigidos a vosotros sino para alentarlos teniendo
en cuenta el digno gesto que han tenido al solidarizarse con el
paro decretado por la agrupacin LA TIERRA.623
La presencia socialista parece haber aumentado en sta
dcada ya que las menciones de su existencia han sido varias.
El gremialismo anarquista parece no haber logrado afianzarse,
ya que ni la seccin del Sindicato nico del Automvil ni el de Oficios
Varios parecen haber sobrevivido mucho tiempo, sin duda el mayor
logro del periodo parece ser el paro por Kerbis y Cisneros de Agosto.
El mes de Diciembre de ese 1932 estuvo ms agitado en
Salto. Con motivo de las elecciones arrib el comunista Lazarraga
quien realiz varias conferencias. El domingo 3 realiz una en
la plaza 33, llamando a controversia a los socialistas que no
lo hicieron, pero s lo hizo el anarquista Cantero, a quien se le
permiti hablar diez minutos.
La disparidad de puntos de vista sobre asuntos como
la guerra, el caso Kerbis y Cisneros, entre otros, era tal que se
acord realizar una controversia, que finalmente no se concret
por argumentar los comunistas que tenan muchas actividades.
Esto parece haber reactivado al grupo de La Tierra, que ni
siquiera se encontraba editando el semanario. Al no realizarse la con
troversia los anarquistas realizaron un acto el Sbado 10 por la noche
en la plaza 33, donde hablaron Nan, Cantero y Santos. En este caso
fue un comunista el que pidi tribuna y se le concedi, y nuevamente
qued acordada una controversia que tampoco fue realizada.

623 La Tierra N33, 21 de Agosto de 1932.

302
La unidad fragmentada

En esos das lleg a Salto nuevamente el anarquista


Francisco Carreo esta vez junto a Simn Radowitzky624, lo cual
parece haber dado mayor impulso a las actividades de los anar
quistas, como lo demostr el numeroso pblico que a la noche
siguiente concurri a la conferencia pblica en que hablaron
Cantero, Santos, Simn y Carreo.625 En esta ocasin tambin
pidi tribuna un comunista quien entre otras cosas seal que
se encontraba en Salto Julia Arvalo626. Nuevamente se acord
una controversia que tampoco se realiz.
Los anarquistas realizaron varias conferencias, el mirco
les 21 en la Plaza Flores sobre Organizacin Obrera, el viernes
23 en la plaza 1 de Mayo Obrerismo poltico, el sbado 24
en el Puerto Contra la Guerra y el Domingo 25 en la plaza 33
Que quieren los anarquistas.627
En enero se habla de un resurgir de actividades, reabre
sus puertas el viejo centro Ciencia y Vida, ofreciendo una confe
rencia para el sbado 14 de Enero con un militante de Concor
dia, como tambin la Agrupacin Anarquista La Tierra vuelve a
editar el viejo semanario que se haba suspendido en el mes de
diciembre. Se menciona la participacin de jvenes militantes
en ambos mbitos, y nuevamente se habla de refundar el sindi
cato de Oficios Varios.
624 Simn Radowitzky era un hombre rodeado de un prestigio sin igual en el movi
miento obrero de la regin. En 1909 haba asesinado al jefe de polica de Buenos
Aires Ramn Falcn, responsable de la matanza de obreros el anterior primero de
mayo en Buenos Aires. Radowitzky al verse perseguido intent suicidarse de un
disparo sin xito, se salv de la pena de muerte por ser menor de 21 aos y pasar
20 aos en el glido penal de Ushuaia, sometido a duros tratos y castigado a un
mes de calabozo sin ver la luz del sol a pan y agua ao a ao al conmemorarse la
fecha de la muerte de Falcn. Indultado por el gobierno de Irigoyen residi en Uru
guay hasta la dictadura de Terra en la cual fue apresado y parti rumbo a Espaa a
combatir en la guerra civil.
625 Tierra! N11 Montevideo, 3 de Febrero de 1933
626 Julia, Arvalo (1898-1985), destacada militante comunista.
627 Tierra! N11 Montevideo, 3 de Febrero de 1933

303
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Tambin se seala la presencia de comunistas intentan


do organizar el movimiento obrero salteo desde el ao 1932
y la edicin de una publicacin comunista denominada La Voz
Comunista.628
En Febrero se anuncia tambin la reorganizacin del gre
mio de los Sastres.
No sabemos hasta cuando se edit el peridico, el ltimo
ejemplar conservado en la Biblioteca Nacional es del 2 de Octu
bre de 1932, pero es posible que salieran varios ejemplares ms,
pero debemos considerar que en Marzo de 1933 se realiz el gol
pe de Estado de Gabriel Terra, y la represin al movimiento obre
ro y revolucionario fue importante, si bien no revisti los niveles
de genocidio y tortura de las dictaduras de los aos 70.
Sabemos s que en 1937 sali a la luz una nueva edicin
de La Tierra, pero sus pginas se llenan bsicamente de informar
acerca de la guerra revolucionaria que se desarrollaba en Espa
a, aunque es de sealar la existencia (y persistencia) del Centro
Ciencia y Vida.629

628 La Tierra Ns/n [53?], 14 de Enero de 1933.


629 La Tierra N313 (21-08-1937) y N326 (27-11-1937)

304
SEGUNDA PARTE
CULTURA OBRERA
En la primer parte de este trabajo, hemos abordado una
reconstruccin cronolgica del devenir del movimiento obrero
en Salto, Paysand y Rocha, en un perodo de tiempo acotado.
Hemos tratado de juntar todas las piezas sueltas encontradas
que se publicaron sobre sus antecedentes, e intentado recons-
truir lo mejor posible los acontecimientos que se produjeron
en ese periodo de tiempo en que el impacto de la revolucin
rusa sacudi al mundo.
Ahora, intentaremos ver cuales eran las prcticas cultu-
rales, los valores ticos y la simbologa a travs de la cual los
obreros se identificaban y unan.
Los mismos obreros consideraban sus prcticas y prdi-
cas revolucionarias como una labor cultural imprescindible, as
lo seala La Tierra;
Educativa es la organizacin obrera porque solo ella
puede sacar de ese estercolero de miseria, dolor y harapos a
la enorme masa proletaria para poner en su pupila una visin
de bienestar y liberacin que de otra manera no recibira. Una
asamblea obrera donde el trabajador cambia ideas, escucha,
escribe y discute sus asuntos y problemas, efecta una obra
educativa de incalculables alcances.
Bien se ha dicho que el sindicato obrero es la escuela
del trabajador. En l concibe el medio de capacitarse y de ser
hombre libre.1
Desde Rocha, Trabajo expresa nociones similares, La
eficacia de las practicas sindicales exige cultura colectiva. En-
tendemos por cultura no el adimiento libresco mal digerido y un
ligero barniz literario, sino el adquirir nociones para poder pro-
yectar una labor eficaz en el ambiente social. La constitucin
de una biblioteca social y, con ello, la realizacin de lecturas
comentadas y apertura de un ciclo de conferencias culturales,

1 La Tierra N41 28 de Mayo de 1921

307
Cultura Obrera

est dentro de las prcticas y fines del moderno sindicalismo


revolucionario.2
En los tres departamentos que hemos centrado nuestra
atencin puede verse prcticas similares, que estn a tono con
las prcticas del movimiento en Montevideo, Buenos Aires y las
principales ciudades donde el movimiento obrero ejerci su in-
fluencia. Pudimos ver, como en cada uno de ellos, las formas de
organizacin, y la ideologa que las gua son distintas, pero algu-
nas prcticas tienen puntos en comn.
Todos han utilizado los mitines, las veladas y los pic-nics
como su forma de expresarse, auto financiarse, comunicarse e
integrarse en el movimiento obrero, de unirse y sentirse parte de
un mismo colectivo social.
La conmemoracin del 1 de Mayo sobresale por sobre
todos los rituales obreros junto a las canciones, sea La Marselle-
sa, Hijos del Pueblo o los distintos himnos, las manifestaciones
callejeras, el debate de ideas en la tribuna, etc.
Pretenderemos ver ahora, algunas de sus expresiones en
los departamentos estudiados, aunque por razones de tener
muchas ms informacin, nos explayaremos principalmente en
el caso salteo.

2 Trabajo N18, 18-12-1920 (Rocha)

308
La Conmemoracin del 1 de Mayo

1. La Conmemoracin del 1 de Mayo.

Mayo no es fiesta ni es luto, Mayo es ms grande, es el


desbordamiento del odio que encierran desde hace siglos los pe-
chos de los oprimidos, Mayo no es fiesta porque todos los cados
son muy grandes, fueron muy valientes, cayeron por la causa de
la humanidad y llorarlos sera querer demostrar que se a perdido
esa causa. El 1 de Mayo es la imagen del porvenir sonriente que
se avecina, es la esperanza en el pronto fin de una noche negra y
larga, es el primer albor de la aurora del gran da de las redencio-
nes humanas.3
Sin duda, por sobre todas las conmemoraciones obreras
sobresale la del 1 de Mayo, arraigada ya en la tradicin obrera
en los aos estudiados. Recordemos que tras la violenta huelga
de Chicago de 1886 cinco anarquistas fueron ahorcados al ao
siguiente, siendo utilizada la fecha del comienzo de las huelgas
de 1886 como referencia. Desde 1890 se conmemor, por ini-
ciativa de los obreros socialistas europeos, el 1 de Mayo como
da de los trabajadores, producindose violentos disturbios en los
primeros aos de su conmemoracin en Pars, Italia, Espaa y va-
rias ciudades ms. En Montevideo, se conmemor la fecha, con
algunas excepciones desde 1890, aunque en los primeros aos
parece haber sido ms importante la fecha del 11 de Noviembre4
3 La Tierra N37, 1 de Mayo de 1921
4 Durante toda la dcada de 1890 y los primeros aos del siglo XX, la fecha del 11
de Noviembre era una cita ineludible con importantes veladas en Montevideo y
Buenos Aires, recin a partir de 1900 aproximadamente el 1 de Mayo parece
cobrar ms protagonismo, para sobrepasarlo ampliamente debido a las grandes
manifestaciones callejeras que suscit con el correr de los aos. (Sobre los primero
de Mayo ver; Gonzlez Sierra, Yamand, 100 Primeros de Mayo en Uruguay,
Montevideo, CIEDUR, 1990. Muoz, Pascual 1 de Mayo. El da en que no habr
ningn hombre al servicio de otro hombre. (1890-1925) Tierra y Tempestad N9,
Montevideo, Otoo, 2010. y Pintos, Francisco R. Historia del 1o de Mayo en Uru-
guay. Justicia) N4365 29-04-1940.

309
Cultura Obrera

(fecha en que los mrtires de Chicago fueron ahorcados) que la


del 1 de Mayo. En el interior su conmemoracin fue constante
desde al menos 1910.
En Salto vimos que la conmemoracin del primero de
mayo fue acompaada, al menos en los aos donde el movimien-
to tena una importante presencia, por delegados de la capital
o incluso Buenos Aires. Francisco Carreo, Juan Llorca, Joaqun
Corts, Celestino Gonzlez, Celestino Mibelli, Luis Lotito, todos
de los ms destacados militantes de la regin, alzaron su voz por
plazas y locales del litoral salteo.
En esta fecha los smbolos de la clase obrera salen a
relucirse con todo su esplendor, La bandera roja flameaba como
un smbolo de abnegacin y de herosmo mientras se vivaba la
fraternidad mundial, sin fronteras, sin idiomas, sin razas, sin privi-
legios, sin ttulos, sin autoridad, sin latrocinios, sin crmenes y sin
farsas.5 relataba Franco Hernndez desde Salto en relacin al 1
de Mayo de 1920, a La Batalla.
Al ao siguiente la crnica de La Tierra para Paysand tam-
bin era elocuente; A las 20 y 30 ms o menos, llegaron en colum-
na cerrada los obreros organizados en la F.O.M. quienes traan una
amplia bandera roja. A las 21 se organiz la columna definitiva. Dos
enormes pabellones rojos desplegados por un ligero viento, prece-
dan como dos lenguas de fuego a la manifestacin. Carteles alusivos
al acto y estandartes con leyendas apropiadas distribuidas entre lo
macizo de la columna, daban un matiz soberbio, a ese mar humano.6
La aglomeracin de obreros y el despliegue de las bande-
ras le otorgaban un carcter pico a la jornada que evocaba a los
mrtires del trabajo y la lucha obrera. En Rocha el 1 de Mayo de
1920 se alza por primera vez la bandera Federal al son de La
Marsellesa.

5 La Batalla N157 28 de Mayo de 1920


6 La Tierra N38 7 de Mayo de 1921

310
La Conmemoracin del 1 de Mayo

En esta fecha se registran las manifestaciones ms nume-


rosas y es un claro indicador de como se encontraba la organiza-
cin obrera en ese momento.
Las manifestaciones con banderas rojas y carteles eran
acompaadas con la edicin especial de folletos, peridicos y
manifiestos. El 1 de Mayo de 1921 en Salto por ejemplo se re-
partieron las ediciones especiales de La Tierra, Solidaridad de
Montevideo y La Protesta de Buenos Aires, todas con mayor can-
tidad de pginas y tiraje que sus ediciones comunes. El Trabajo
de Rocha, por su parte, se edit por primera vez un 1 de Mayo.
La forma en como se organizaban las manifestaciones tam-
bin tena un componente emotivo, la de Salto de 1921, (segu-
ramente es la mayor de todas las que sucedieron en la regin y
periodo estudiados), fue encabezada por algunos nios, luego,
las mujeres del Centro Femenino, siguiendo la Federacin y el Co-
mit pro 1 Mayo y por ltimo el conjunto de los gremios.7
Los himnos obreros junto a las banderas conformaban la
simbologa bsica, La Marsellesa fue entonada tanto en Salto como
Rocha el 1 de Mayo de 1920. Hijos del Pueblo y La Internacional
fueron otras de las ms sonadas. En Rocha se dio la particularidad
que se crearon algunos himnos con letras locales, como Bandera
Libertaria,8en la cual se adapta claramente la meloda del himno al
pabelln Mi Bandera, sustituyendo la letra patritica por otra de
contenido revolucionario9, o el Himno Socialista Rochense.10 Es
importante destacar en este sentido, en ocasin del pic nic realiza-
do el 8 de enero de 1922 en Los Algarrobos (Salto), la impresin de

7 La Tierra N38, 7 de -mayo de 1921


8 Trabajo N13, 30 de Octubre de 1920.
9 Claro que no es patrimonio exclusivo de Rocha. En Salto en la velada realizada el
9 de Julio de 1922 se anuncia que a las nueve de la maana La orquesta har
la apertura del acto con La Marsellesa A., es decir La Marsellesa Anarquista. (La
Tierra N101 27 de Julio de 1922)
10 Trabajo N15, 30 de Noviembre de 1920.

311
Cultura Obrera

200 cancioneros, demostrando la importancia dada por los obreros


al incentivo de este tipo de prcticas.11
En muchas ocasiones como en Rocha en 1920, 1922 y
1925, o Paysand en 1920, la fecha obrera fue acompaada por
la realizacin de un pic nic.
Pero sin duda el momento central de la jornada eran las ma-
nifestaciones callejeras y las conferencias al finalizar la manifestacin.
No vamos a desarrollar las manifestaciones realizadas los
1 de Mayo, ya que las hemos descrito una a una en el recorri-
do cronolgico de este trabajo, pero si resaltar el 1 de Mayo
de 1921 en Salto la cual consideramos como la manifestacin
ms importante de todas las abarcadas en el perodo y la regin
estudiadas;
Paso obrero hacia la victoria
A las 2 p.m. Inici la manifestacin con la presencia de los
camaradas mas activos de la F.O.L., F. en C. Navales, O. Martimos,
Centro Femenino, Sastres, Carpinteros, Chauffeurs, Electricistas,
Metalrgicos, Albailes, Oficios Varios, Centro Ciencia y Vida y otros
compaeros que luchan fuera de las organizaciones que ascenda en
total a dos mil manifestantes mas o menos.
Flameaban no menos de diez banderas rojas con gallarda
que caracteriza a todos los smbolos de humanidad y amor. Rojas
como la sangre vertida en mil combates de emancipacin, como roja
es la maana, rojo el amor y rojo el arte de la vida entonan el hosana
Pudimos anotar las inscripciones de los siguientes estandar-
tes con dibujos revolucionarios:
Los acaparadores deben estar en la crcel, por ser los prin-
cipales culpables de la miseria del pueblo, La cada de la burguesa
es la vida del proletariado, La tierra para bien de todos la queremos
libre, El que quiera comer debe producir.
11 La Tierra N76, 28 enero 1922

312
La Conmemoracin del 1 de Mayo

Encabezaban la manifestacin los nios seguidos por las


compaeras del Centro Femenino, despus las federaciones, el
comit pro 1 mayo y los dems gremios, constituan el grueso de
la columna.
Dado el nmero de los manifestantes que fueron engrosan-
do la fila, mientras se recorran las calles de la ciudad, se dio un
paso hacia la victoria, puesto que esa fuerza pacfica desengaada
una vez ms de la ineficacia del cruce de brazos se tornar en vio-
lenta maana para hacerse duea de toda la produccin y el trans-
porte, desalojando la burguesa en pocas horas.12
Adems de La Tierra se reparti esa jornada varios ejem-
plares de Solidaridad rgano de la F.O.R.U. que fueron trados
por el delegado Domnguez, al igual que gran cantidad de folle-
tos, seguramente Entre Campesinos de Enrique Malatesta del
cual la Federacin Obrera haba comprado dos mil ejemplares
en diciembre para los delegados en gira al interior.13
Entre los oradores de aquel primero de mayo estuvieron
Mario Herrera, Selser, Lpez, Catalicio Santos, Franco Hernn-
dez, Corrales y Maria del Carmen Margaroti.14

12 La Tierra N38 7 de Mayo de 1921


13 Justicia 7 de 4 Abril de 1921 (F.O.R.U. Balance, diciembre 1920)
14 La Tierra N38 7 de Mayo de 1921

313
Cultura Obrera

2. Las Conferencias, controversias y giras de propaganda.

Las conferencias y mitines pblicos fueron sin duda, y qui-


zs por encima de la prensa obrera uno de los ms importantes
canales de comunicacin y de expresin de la cultura obrera, all,
el orador se alzaba un poco por encima del publico nucleado para
explicar las causas de los males sociales y sus soluciones. El hecho
de que no se precisaba saber leer ni entrar a un local obrero para
escuchar a algn orador en los diversos mtines callejeros, lo ha-
ca realmente accesible al obrero curioso.
La cantidad de mtines callejeros realizados es abundan-
te, como tambin la prctica de enviar la banda municipal tan-
to en Salto como Paysand para intentar obstruir el mensaje de
los propagandistas por parte de los gobiernos locales. Tambin
pudimos ver como en Salto, algunos mtines desencadenaron la
represin policial con algunos detenidos, como en el del 23 de
Marzo de 1919.
Las controversias pblicas, por su parte fueron, como vi-
mos, causantes de graves conflictos y trifulcas, pero sin duda fue
parte identitaria del modo de debate de ideas.
Especialmente para los anarquistas, quienes hicieron de la
tribuna libre un frente de batalla desde el cual utilizar los mti-
nes ajenos para propagar sus ideas, motivo por el cual muchas
veces se les negaba rotundamente la palabra y eso derivaba en
distintos tipos de escndalos de mayor o menor trascendencia.
Las conferencias callejeras podan surgir por la urgencia de
una huelga o un conflicto cualquiera, o tambin ser elaboradas
disertaciones, como la realizada el 3 de Julio de 1921 en el barrio
Lazaretto de Salto, donde Anselmo Gamarra expuso sobre Las
asociaciones libres y lo que persigue la burguesa, Cantalicio
Santos sobre la misin de la prensa obrera, Franco Hernndez
hizo lo suyo acerca de los indios, su pasado, su presente y su

314
Las Conferencias, controversias y giras de propaganda

porvenir y cerrando el mitin Mario Herrera disert sobre La re-


volucin obrera en la actualidad.15
Por otra parte, las giras de propaganda causaban un im-
pacto realmente significativo en el proletariado local, estable-
ciendo un contacto directo entre los referentes locales y los de
las grandes ciudades y llevando la palabra experimentada sobre
la necesidad de organizarse. Estas giras daban un impulso signifi-
cativo a la organizacin local.
En ocasin de la gira de Celestino Gonzlez a Paysand, se
sealaba en una carta enviada a Trabajo de Montevideo que es-
tas giras de delegados al interior son de suma utilidad y de gran
trascendencia para el movimiento social y emancipador16
Desde la misma ciudad se haba informado anteriormente
que la gira de el viejo Llorca y Forni dieron una sacudida salu-
dable a ese ambiente retrgado al extremo.17
De hecho, se puede notar que luego del paso de los de-
legados en gira se produce un impulso al menos temporal de la
actividad local gremial.
En ocasin de la mencionada gira de Gonzlez, luego de
consolidarse la divisin obrera, las palabras de La Tierra son elo-
cuentes;
Los locales obreros y las plazas publicas fueron tribunas pro-
picias a los fines de la propaganda. Cada da se aprovechaba en algo.
Y la labor segua su curso normal, surtiendo paulatinamente los efec-
tos que de ella se esperaba.
Celestino Gonzlez areng a las multitudes combati la indi-
ferencia; esplic [sic] el valor de la organizacin obrera; exhort a los
oyentes a sostenerla con entusiasmo y dedicacin tenaz. (...)
En la generalidad de los actos en que particip, su palabra
15 La Tierra N45 (25-6-1921) y La Tierra N46 (2-7-1921)
16 Trabajo N27 11-2-22
17 La Batalla N178, 17 de Diciembre de 1920

315
Cultura Obrera

tocaba a diana, invitando al despertar de todos los explotados. Cree-


mos que su efecto ser positivo. Que desde ahora los obreros salte-
os agitarn sus msculos de productores y sus mentes de gente que
aspira a emanciparse de las tutelas funestas.18

Afiche pegado en las calles. La Tierra N115 5 noviembre 1922

18 La Tierra N74 14 de enero de 1922

316
Los centros sociales

3. Los centros sociales.

La existencia de centros sociales es parte inherente del


movimiento obrero del periodo, principalmente para la tenden-
cia anarquista, pero compartiendo prcticas similares en los so-
cialistas y comunistas.
Como bien seala Juan Suriano para el caso argentino;
El crculo [como los Centros de Estudios Sociales] era un
mbito de educacin y adoctrinamiento integral que alcanzaba no
slo al trabajador sino tambin a su familia, llegando adonde no lo
poda hacer la sociedad de resistencia, cuya actividad esencialmen-
te reivindicativa estaba destinada a los obreros y se circunscriba al
mbito laboral. La orientacin de los gremios se hallaba, en cier-
ta medida y de manera informal, subordinada a las orientaciones
emanadas del crculo o la prensa. Se trataba adems de un espacio
especfico de formacin de activistas y, a la vez, concientizador y
adoctrinador de los sectores populares vinculado directamente a la
esfera publica asociativa de los trabajadores.19
La cantidad de Centros de Estudios Sociales en Salto es
importante, sin duda, el principal referente a lo largo de todo el
periodo fue el Ciencia y Vida, fundado en 1918 y activo duran-
te todo el periodo, incluso resurgiendo en los aos treinta. El
mismo desarroll gran cantidad de veladas y sirvi de local para
innumerables conferencias. En marzo de 1921 La Tierra seala-
r en relacin al Ciencia y Vida como siempre el Centro ha sido
la vanguardia del movimiento cultural y anarquista de Salto20
El 1 de Mayo de 1921 La Tierra sealaba;
"El baluarte de la propaganda anarquista fue desde un
19 Suriano, Juan Anarquistas. Cultura y poltica en Buenos Aires, 1890-1910Manan-
tial, Buenos Aires, 2008. Pg 39.
20 La Tierra N29 6 de Marzo de 1921

317
Cultura Obrera

primer momento el Centro Ciencia y Vida. Fundado en Abril de


1918 ha realizado una obra de cultura y conciencia verdaderamente
grandiosa.
Ha organizado movimientos de opinin q [sic] han tenido
la mas basta repercusin en la localidad. Acogi siempre con cario
y entusiasmo todos los grandes causas estimulando energas en el
seno del proletariado local.
Cuenta en la actualidad con una buena biblioteca, y con
un cuadro filodramatico que por quinta vez ir a las tablas. Su obra
cultural est probada con el numeroso ncleo de que ha formado
y viene formando que harn imperecedera su obra de educacin
revolucionaria.
A su calor han surgido las nuevas agrupaciones en Mar-
cha, Tierra Libre y La Batalla que por diversos sectores de la
ciudad vienen realizando obra de propaganda obrera y doctrinaria.
Bajo su direccin y patrocinio se han organizado campaas antipo-
lticas de verdadera transcendencia [sic] social que han preocupado
seriamente a los tradicionales partidos polticos que se disputan la
hegemona popular.
El comite pro imprenta es una de las iniciativas hijas exclusi-
vamente de los anarquistas que como hemos dicho nos agrupamos
en el Centro Ciencia y Vida.21
Para Agosto de 1920, adems del Ciencia y Vida ya existan
el centro En Marcha, Tierra Libre y La Batalla22
Para agosto de 1921 se funda tambin el Centro Popular
Florencio Snchez, La Tierra, tras la fundacin del mismo comen-
tar Este centro tratar por todos los medios posibles de capa-
citar a los trabajadores, para pasar a un Estado Social basado

21 La Tierra N37, 1 de Mayo de 1921.


22 La Tierra N1 21 de Octubre de 1920

318
Los centros sociales

en el libre acuerdo, y en el que los hombres trabajen segn sus


aptitudes, y consuman segn sus necesidades fundamento bsico
de la sociedad del porvenir.23
Otro aspecto al que los anarquistas parecen haber dado es-
pecial importancia es a la organizacin de las mujeres. Vimos como
se organiz tanto en Salto como en Paysand un Centro Femenino.
Reproducimos a continuacin una carta de una mujer de dicho cen-
tro que nos ilustra la difcil tarea a la que se abocan;
Al Centro Femenino
Una opinin,
Va a hacer aproximadamente un ao que nuestro Centro ha
quedado constituido con unas bases buenas: libertario, pero a pesar de
ello, -es lamentable el decirlo- no hemos progresado gran cosa, y que
conste que no me refiero al mendrugo, aunque lo necesitamos bastan-
te, me refiero a la ilustracin y conocimientos [dice conocientos] socie-
tarios, indispensables, como para podernos administrar nosotras solas
sin necesidad de que un compaero tenga que estar al frente de nuestro
centro toda la vida; haciendo notas y ensendonos a levantar y bajar
la mano, muchas veces propuestas por stos mismos compaeros que
tienen que hacer como de directores, acostumbrndonos por lo tanto
a que nunca puedamos [sic] salir de la tutela espiritual de los directo-
res. Opino que los compaeros desinteresados y conscientes tienen la
obligacin moral de orientarnos, y exponer libremente lo que piensen
al respecto de la mejor marcha y progreso del Centro, pero no deben
ser egostas; deben ensearnos algo que no sea la revolucin escrita
en el diccionario que ya no nos asustamos de ella sino que, deben en-
searnos los deberes internos del Centro: presidir una sesin, discutir,
hacer una nota y todo lo que se pueda, en ste sentido. Vern despus
las compaeras, como a medida que nosotras vamos progresando en

23 La Tierra N54 27 de Agosto de 1921.

319
Cultura Obrera

conocimiento, tambin progresar el Centro, en nmero y en calidad.


Para la semana entrante creo que el Centro P. Florencio Sn-
chez va dar una serie de lectura comentadas y nuestro deber sera
concurrir el mayor nmero posible a fin de salvar las dificultades enu-
meradas brevemente.
Hasta otra. Ceferina Galaza. Pueblo Nuevo, Salto 192124
Tanto el Centro Femenino como el Florencio Snchez,
realizaron varias veladas y conferencias. Podemos destacar por
ejemplo la del 2 de octubre de 1921, donde el Centro Florencio
Snchez convoca a un mitin por Sacco y Vanzetti en la plaza 33,
donde habl Jos M. Etcheverry, o la realizacin del pic nic del 11
de Setiembre de ese mismo ao en Los Algarrobos.25
Tambin fue inherente a la creacin de un centro de estu-
dios, el de de una biblioteca obrera, como lo hizo por ejemplo el
Centro Tierra Libre en diciembre de 1922.26
Tanto el Ciencia y Vida Como el Florencio Snchez
conformaron cuadros filodramaticos para la realizacin de obras
teatrales. El cuadro filodramtico del Ciencia y Vida llev a cabo
una velada en el teatro Larraaga el 1 de Mayo de 1920 donde
se representaban dos obras clsicas del teatro anarquista; Fin de
fiesta, de Palmiro de Lidia, 1 de Mayo de Pietro Gori y la antigua
obra del siglo XVII El muerto resucitado, las cuales fueron muy
bien interpretados y dejaron excelente impresin en el pblico
a juzgar por los aplausos conquistados. segn el relato de un
participante.27
Tiempo despus, cuando el declive del movimiento hacia
1925 La Tierra lamentar la carencia de stos centros En los mo-
mentos presentes la carencia de Centros Culturales es casi abso-
24 La Tierra N68 3 de diciembre de 1921
25 La Tierra N56 (10-9-1921) y N58 24 de Setiembre de 1921
26 La Tierra N122 23 de Diciembre de 1925
27 La Batalla N157, 28 de Mayo de 1920.

320
Los centros sociales

luta; solo existen algunas agrupaciones de carcter cultural, pero


agenos a toda corriente ideolgica, y por ende, hurfanos de
una orientacin precisa en sus practicas culturales.28
En Paysand vimos, como a la vez de la existencia de un
centro socialista, en agosto de 1920 se fund el Centro de Estu-
dios Sociales Internacional,29 siendo el primero el referente de
las actividades socialistas y el segundo de las anarquistas. Tam-
bin mencionamos la creacin del Centro Cultural Femenino,
cuya secretaria fue Luca Bucco.30
Sabemos que para agosto de 1922 exista el cuadro filo-
dramatico Ernesto Herrera el cual se encontraba ensayando
El Len Ciego, obra de Ernesto Herrera y que se levant un
escenario en el local de la Federacin Obrera Local.31
Para enero de 1925 el cuadro parece continuar activo,
y en ocasin de la huelga de albailes de diciembre y enero de
1925 el relato de Justicia es elocuente;
El prestigioso centro artstico Ernesto Herrera en solida-
ridad con los camaradas albailes en huelga, realiz el sbado 3
del cte. una funcin a beneficio de los mismos, en su amplio sa-
ln de espectculos [sic], sede de la F.O.L. Psose en ecena [sic] la
comedia dramtica Aurora criolla, de Marambio Ballesteros, y la
chistosa petit-pieza El esquinazo, las que fueron interpretadas con
feliz xito por los compaeros del cuadro. Para el sbado prximo
el mismo dar otra funcin, tambin a beneficio de los huelguistas.
Dado el xito obtenido en la parte artstica como financiera, des-
contado est el xito de la del sbado prximo32

28 La Tierra N220 15 de Junio de 1925


29 La Batalla N155 14 de Mayo de 1920.
30 La Tierra N71 24 de diciembre de 1921
31 Justicia, Montevideo, 30 de agosto de 1922
32 Justicia, Montevideo 7 de enero de 1925

321
Cultura Obrera

Las prcticas inherentes a stos centros fueron desarrolladas


tambin por las sociedades obreras, como lo atestigua Trabajo de
Rocha Se van a iniciar nuevamente las disertaciones semanales que
tanto buen resultado dieron en los comienzos de la organizacin.33
Para Setiembre de 1920 la Federacin Obrera Rochense
anunciaba la creacin de un cuadro filodramtico compuesto por
integrantes de la misma.34
En el caso rochense podemos ver como el Centro Comunista
de la localidad funciono como apoyo y complemento del Sindicato
General de Trabajadores controlado por los comunistas, y si bien el
mismo no es un Centro de Estudio Sociales, cumpli en ocasiones,
funciones similares.

33 Trabajo, Rocha N2 15 de Mayo de 1920


34 Trabajo, Rocha N10 15 de Setiembre de 1920

322
Las veladas culturales

4. Las veladas culturales

Las veladas culturales, a diferencia del mitin callejero impli-


caban una elaborada propuesta artstica que se desempeaba en
un local cerrado, sea sindical, social o un teatro alquilado para la
ocasin, siendo su entrada en ocasiones gratuita y en otras paga.
Ya en Salto, desde temprano se nota el cuidado inters por
este tipo de veladas como la celebrada en Diciembre de 1918 en el
teatro Novedades con el siguiente programa:
1 parte
1 Himno hijos del pueblo ejecutado por una orquesta
2 Conferencia de apertura
3 Bigrafo
4 Conferencia
2 parte:
1 La Marsellesa, ejecutado por la orquesta.
2 Bigrafo.
3 Conferencia
4 Himno Hijos del pueblo
En el programa se hace constar que habr algn nmero fuera de los
anunciados.
Palco 1 peso, entrada general para hombres y mujeres 0,20 nios
gratis.35
El centro Ciencia y Vida, por su parte y tambin en Salto, en
Setiembre de 1920 en el teatro Larraaga realiza una velada donde
se representa Los Mrtires, Amurando y Lo Inevitable.36
En Mayo y Junio de 1921 se realizaron varias veladas en
solidaridad con varios artistas allegados al movimiento que se

35 Tribuna Saltea (Salto) 22 de Diciembre de 1918


36 La Tierra N1 21 de Agosto de 1920

323
Cultura Obrera

quedaron sin trabajo debido a un conflicto habido con la compaa


de actores. Las obras escogidas fueron la de los anarquistas Dante
Silva (Los Mrtires) y de Rodolfo Gonzlez Pacheco (Las Vboras).
La crnica de la velada nos permite interiorizarnos en el
ambiente cultural obrero de la poca:
A pesar de la premura de los ensayos la velada que organiza
el cuadro y centro Ciencia y Vida con motivo de la compaa Art
Nouveau que haban quedado en sta, fue todo un xito artstico.
Se pusieron en escena Los Mrtires de Dante Silva y lue-
go Las Vboras de Gonzlez Pacheco, tomando parte en ellos
elementos de nuestro cuadro y de los artistas beneficiados. Con
algunas muy leves deficiencias, nuestros compaeros demostraron
una vez ms su vocacin artstica y su ya slida preparacin, desde
que el pblico lo ha podido apreciar de cerca en esta velada en que
tenan que trabajar juntamente con profesionales.
Tanto en Las Vboras como en el dilogo cmico con que
se termino la noche, desde el primer momento despert la aten-
cin de los concurrentes el artista A. Rey que trabaj con verdadera
maestra arrancando sinceros aplausos.
A pesar del intenso fro, el esfuerzo de los compaeros
del cuadro se vi coronado por un buen xito de boletera, sa-
cndose de resultado liquido $135 que fueron entregados a los
beneficiados.
Hemos de hacer notar que, este beneficio fue hecho como
un acto de solidaridad con la Federacin de Gentes de Teatro que
como se sabe se encuentra en conflicto y esos compaeros eran
huelguistas que haban quedado aislados en Salto con motivo de la
disolucin de la compaa a que pertenecan37

37 La Tierra N43 11 de Junio de 1921

324
Las veladas culturales

Por estas fechas se constituye otro cuadro filodramtico


Amor cual se propone realizar obras para beneficio del peri-
dico La Tierra y el Centro Femenino.38
Para junio de 1922 el cuadro filodramatico del Centro
Ciencia y Vida prepara la representacin de la comedia de Julio
F. Escobar la fea de la casa.39
El Centro Femenino, por su parte, realiz una importante
velada familiar el 9 de Julio de 1922 en el saln de la antigua
agencia Milhanovich.
El programa es amplio y lo detallamos a continuacin:
1 A las 9 p.m. La orquesta har la apertura del acto con La Mar-
sellesa A.
2 La Mujer conferencia por la compaera E. Bueno
3 Trozo selecto ejecutado por la orquesta
4 Tierra Argentina, monlogo original de S.A. Leiva recitado por el
compaero Carlos Moreno.
5 1 Pieza de Baile
6 Los Caballeros del Ideal poesa de A. Ghiraldo, recitado por el com-
paero Alejandro Neira
7 El compaero Nieto har un recital de poesas de Evaristo Carriego
8 Bazar rifa
9 un numero de cantos ejecutados por un compaero.
10 Baile familiar.
Para que el acto revista la mayor importancia y sea un eficaz elemento
de la cultura y sociabilidad nuestra, los compaeros y compaeras deben
hacer la mayor propaganda posible y llevar sus respectivas familias.40
La crnica posterior seala que a pesar de la copiosa lluvia
38 Idem.
39 Drama en tres actos, estrenada en Valparaso y Buenos Aires en 1919 (Ed. Civismo
y Cultura, Buenos Aires 1919). La Tierra N96 17 de Junio de 1922
40 La Tierra N100 15 de julio de 1922

325
Cultura Obrera

adquiri contornos alentadores (...) los nmeros de declamacin y


recitado a cargo de los compaeros Nieto, Neira compaerita Bue-
no, fueron escuchados con singular simpata por los concurrentes,
quienes, por el fondo y belleza potica de las composiciones reci-
tadas, comprenden el valor educativo de estos festivales. La fi-
nalidad econmica del festival era abrir una biblioteca obrera.41
El 12 de Agosto el gremio de Albailes realiza un nuevo
festival para concretar la biblioteca obrera. El programa tam-
bin fue completo, y se destacan las reiteradas piezas de baile
familiar entre actos;
1- Hijos del pueblo, por la Orquesta
2 recitados de poesias, por el camarada Nieto
3 Baile Familiar
4 Dialogo Callejero, por la compaera Esperanza Bueno y el ca-
marada C. Moreno
5 Baile Familiar
Conferencia por el compaero Fernndez
6 Bazar rifa
7 Baile Familiar
8 donde esta Dios? de M Ray, monlogo por el compaero Fer-
nndez
9 Baile Familiar
10 Canto por el camarada Gmez
11 Baile familiar
La entrada fue para hombres 30 cts. y para mujeres gra-
tis, vendindose 61 entradas.42
En el caso de Rocha, vimos como en ocasin de fundar-
se la Unin de Obreros de Castillos, se realiz una importante

41 La Tierra N101 27 de Julio de 1922


42 La Tierra N104 13 de agosto de 1922

326
Las veladas culturales

velada donde a las 8 en punto son La Marsellesa, se dieron


discursos, se recit el Himno a la Aurora y para finalizar ha-
bl Baldomero lvarez quien con su discurso lleno de stira
origin hilaridad en la concurrencia, que coron con aplausos
sus expresiones.43
Fueron comunes en Rocha las conferencias en el teatro La
Artesana, como la conferencia de Frugoni en enero de 1921.44
El 1 de Mayo de 1921, tambin se realiz una velada en
dicho teatro, dejemos que los protagonistas rochenses nos cuen-
ten como fue:
Dicha conferencia fue un verdadero xito. -Ante un pbli-
co de ms de doscientas personas hablaron los compaeros Prieto,
Scuarsia y Sala -este ltimo delegado de la F.O.R.U.- quien disert por
espacio de una hora, con la aprobacin unnime de todos los pre-
sentes.- Tambin habl el compaero Gonzlez Acosta delegado de
los estudiantes.
Clausur el acto el compaero Cuartn, quien invit al pblico
a ir en manifestacin hasta el local del Sindicato, y as se hizo dentro
del mayor entusiasmo, cantndose en el trayecto Hijos del Pueblo y
vivndose a la Revolucin Rusa y a la solidaridad proletaria.45
La utilizacin del teatro fue comn para lograr albergar
una gran cantidad de pblico, como en ocasin de la huelga de los
obreros de la va del ferrocarril el 20 de Marzo del 1922, donde
cuenta la crnica periodstica: A las 9 de la noche era material-
mente imposible entrar al teatro, que se hallaba desbordante de
trabajadores.
Hicieron uso de la palabra en medio de delirantes ma-
nifestaciones de la entusiasta concurrencia Garaza, Gonzlez
43 Trabajo (Rocha) N9 30 de agosto de 1920
44 Justicia, Montevideo 1 de Febrero de 1921
45 Trabajo (Rocha) N25 15 de Mayo de 1921

327
Cultura Obrera

Acosta, Bordabehere, Techera, Valcrcel y Cerchi (...) Terminado


el acto, ms de 500 trabajadores recorrieron las calles en mani-
festacin, a cuyo frente iba la bandera roja del Sindicato G. de
Trabajadores.46
O tambin podemos mencionar el 1 de Mayo de 1922,
donde despus de fracasada la manifestacin programada para la
tarde Por la noche, la clase trabajadora respondi sin embargo al
llamado que se le hiciera para conmemorar el 1 de Mayo, llenan-
do completamente la sala del teatro La Artesana, donde se rea-
lizaba una conferencia organizada por la misma sociedad obrera
aludida [Sindicato General de Trabajadores]. El vivo entusiasmo
con que aplaudi a los oradores demostr que la conciencia de
la clase va formndose paulatinamente entre las vctimas de la
explotacin capitalista y que si accin del futuro se desarrollar
en el terreno de la lucha de clases con finalidad revolucionaria.47

46 Justicia, Montevideo, 1 de Abril de 1922


47 Accin Comunista, Rocha, N29 8 de Mayo de 1922

328
Los pic nics obreros

5. Los pic nics obreros.

La realizacin de los pic nics es sin duda una de las expresio-


nes ms creativas y caractersticas del movimiento obrero, de estas
regiones como en general.
En Salto, de donde tenemos ms fuentes de informacin,
en el periodo que va de 1920 a 1925 contamos la realizacin de 17
pic nics obreros.
Sin duda el pic nic encarna aspectos de la cultura popular y
le carga de contenido ideolgico, as vemos, como en ocasin del
triunfo de los obreros en Construcciones Navales el 2 de enero de
1919, la forma que escogieron de celebrar si triunfo fue un asado
en el paraje El Cable junto a la costa del ro Uruguay, donde
pasaron algunas horas y regresaron al local social al comps de
una marcha musical en claro signo de confraternidad obrera.48
Una forma de celebrar que se asemeja mucho a la de una fiesta
campestre.
El picnic tena una finalidad econmica por un lado y de ex-
pansin cultural por el otro.
Los paseos campestres como tambin se les denominaba,
se realizan al aire libre, un da domingo, comenzando temprano
por la maana, entre las 6am en algunos casos o las 9am en otros.
Bsicamente su planificacin se compone de distintos jue-
gos o demostraciones, un almuerzo, predominando el almuerzo
a la criolla (carne asada), conferencias y orquestas musicales.
Siempre se realizaban en un ambiente amplio y rodeado de natu-
raleza. Como bien seala Rodolfo Porrini en relacin a los picnics
montevideanos;
Los pic-nics, paseos campestres y excursiones de las izquier-
das buscaban tanto disfrutar de la naturaleza y reforzar la camaradera,
como fomentar la expectativa y el sueo en una sociedad igualitaria
48 Tribuna Saltea, 3 de Enero de 1919

329
Cultura Obrera

o socialista. (...) la bsqueda tanto moralista como iluminista- de lo


espiritual, lo cultural y la luz que bien poda rodear esta peripecia
dominguera. Ese momento del paseo campestre era ciertamente una
experiencia vital significativa para sus protagonistas, en el camino de la
utopa o de la armona de un mundo que buscaban y era opuesto al
que vivan. 49
Yamand Gonzlez Sierra seala a su vez como La po-
pularidad de los picnics o paseos campestres familiares, insti-
tucionales, sindicales o polticos (anarquistas, socialistas o co-
munistas) respondi tal vez a la valorizacin de la naturaleza
en una sociedad crecientemente urbanizada y a la necesidad de
espacios de sociabilidad mas amplios (campos, parques, riberas
de arroyos e islas) para incrementar casi indefinidamente el nu-
mero de los concurrentes.50
La convocatoria para el pic nic en Salto del 27 de Febrero
es elocuente en ese sentido:
Trabajadores, compaeros: No faltis al gran Pic Nic, que
a total beneficio de LA TIERA se realizar el prximo Domingo;
concurriendo e invitando a vuestras familias os haris obra, pues
aparte de que vuestras hermanas o novias, en grato consorcio
disfruten de las delicias de un da al aire libre, se robustecern
e intensificarn ms y ms los lazos solidarios de la gran familia
proletaria, y nuestro semanario LA TIERRA, con el producido de
dicha fiesta, se solventar el dficit que pesa sobre l, y podr
entonces seguir su marcha, difundiendo la noble idealidad que
sustenta desde su aparicin.51
49 Porrini, Rodolfo Izquierda uruguaya y culturas obreras. Propuestas al aire libre
pic-nics y paseos campestres en Montevideo 1920-1950. Revista Mundo do Tra-
balho vol.3 N6, Julho-dezembro 2011, pag 111.
50 Gonzlez Sierra, Yamand, Domingos obreros en los albores del siglo XX en
Barrn, Caetano, Porzecanski, Historias de la vida privada en Uruguay, tomo 2: El
nacimiento de la intimidad 1870-1920, Montevideo, Taurus,1996 pg 214.
51 La Tierra N24 19 de Enero de 1921.

330
Los pic nics obreros

Poco despus en relacin al mismo pc nic La Tierra insistir


en el tema; nuestra fiesta (...) debe dar a propios y extraos la sen-
sacin de nuestra cultura y sociabilidad. Es precisamente all, frente
a la Naturaleza que hace gala de sus pompas, donde haciendo un
breve parntesis a la lucha, al trabajo y a las amarguras de nuestra
vida de esclavos, nuestras mujeres y nuestros nios van plasmando
la sociedad del porvenir.52
A su vez, ese contacto con la naturaleza en palabras de Porri-
ni, implicaba para los anarquistas un mayor goce (y espiritualidad)
de ese da particular, una bsqueda y una aproximacin de la Arcadia
y la Utopa.53 Al igual que lo sealaba La Tierra terminada la tempo-
rada de picnics del ao 1921; Ahora hasta la primavera prxima!...
Aos, tras aos, ir plasmndose en la conciencia popular el alma
de nuestras cosas, hasta que adquieran el cariz propio de los actos
anarquistas de nuestra soada Arcadia Comunista Libre.54
Sintetizando los conceptos de la camaradera al aire libre y la
lucha social en ocasin del pic nic del 10 de abril de ese mismo ao
se lea el siguiente mensaje;
La libre iniciativa, el espritu gil y juvenil de los compaeros y
compaeras que en todo momento en Salto ha sido el nervio de nues-
tra obra cultural y de progreso, se impone que sea amplia y decidida-
mente ejercitada por todos.
El prximo pic nic debe ser toda una demostracin de fuer-
zas obreras y anarquistas al mismo tiempo que, una exteriorizacin
de nuestra sentimentalidad amable, ya que contribuir a la fraternal
camaradera de los oprimidos y luchadores, la alegre y vocingiera alga-
zara de nuestros nios y mujeres.55

52 La Tierra N26 12 de Febrero de 1921.


53 Porrini, 2011:120
54 La Tierra N34 11 de Abril de 1921.
55 La Tierra N32 26 de Marzo de 1921

331
Cultura Obrera

La Tierra N114 29 de Octubre de 1922

332
Los pic nics obreros

La Tierra N77
4 febrero de 1922

La Tierra N104
13 agosto de 1922

333
Cultura Obrera

La Tierra N174 18 febrero 1924

334
Los pic nics obreros

Al esfuerzo realizado en la organizacin de los pic nics se


debe el sostenimiento de la prensa obrera, el alquiler de meses
de locales obreros, el apoyo a las huelgas y el sostenimiento de los
compaeros presos.
En relacin al aspecto econmico, y siempre en el caso sal-
teo, el pic nic que parece haber dado ms rdito econmico de
todos fue el del 9 de Octubre de 1920, obtenindose 53 pesos en
la quinta de la viuda de Mir, Avenida Blandengues la entrada fue
gratuita, pero se vendieron 68 tiquets de almuerzos, hubo una con-
ferencia de Mario Herrera, orquesta baile, y diversiones varias.56
Otro de los mas beneficiosos fue el del 10 de Abril de 1921
donde se obtuvieron 30 pesos de ganancia y se vendieron 248 en-
tradas, siendo tambin el que ms entradas vendi de todos los
pic nics realizados de los que los que hay datos.57
En el general de los pic nics, la ganancia oscilaba alrededor
de los 15 pesos.58
Las peores recaudaciones fueron de $2 el del 29 de Octu-
bre de 1922 y el del 19 de Noviembre de 1922 que gener $3,74,
y solo uno dio prdida que fue el del 26 de Diciembre de 1920
organizado por el Centro Femenino.
Dicho pic nic se realiz en el paraje Los Sauces. Hubo dis-
cursos de compaeras y duetos de guitarras. En este picnic se ven-
dieron apenas 6759 entradas de hombre a 0,10, (las mujeres iban
gratis).60 La poca anticipacin y quizs poca elaboracin del progra-
ma es una posible explicacin del poco xito econmico obtenido.

56 La Tierra N9 16 de Octubre de 1920


57 La Tierra N36 23 de Abril de 1921
58 El del 2 de Abril de 1922 gener $17. El corso de las Flores del 5 de Febrero de
1922 $16. El del 8 de Febrero de 1920 $15 pesos. El de 27 de Febrero de 1921 14$.
El de el 11 de Setiembre de 1921 $12 y el del 14 de Enero de 1923 $11.
59 Si bien la venta de entradas oscil entre las 100 y las 250 entre 1921 y 1922, en el pic nic
del 28 de Diciembre de 1924 se vendieron solo 48 entradas pero se recaudaron 13 pesos.
60 La Tierra N20 1 de Enero de 1921

335
Cultura Obrera

El fracaso de este pic nic provoc la crtica de los militantes


de La Tierra;
Las fiestas campestres (pic-nic) realizadas en el Salto a bene-
ficio de tal o cual institucin, si bien es cierto que al principio dieron
sus buenos resultados materiales, dejaron mucho que desear en la
parte moral que, creemos, es una de las cosas que no debemos des-
cuidar en todos nuestros actos. Este punto y la ligereza en realizar-
los, sin tener tiempo para organizarlos bien, para que hubiera mayor
cooperacin por parte de todos, ha sido la causa fundamental de que
cada vez ms, tengan menos xito.61
Igualmente no deja de ser llamativo que el nico picnic
que dio prdida sea el organizado por el Centro Femenino. Est
este fracaso ligado a los valores machistas de la poca? Existi
quizs una falta de apoyo de los obreros hombres? Esa posible
falta de apoyo, fue por parte de los concurrentes que no acu-
dieron a una actividad convocada por mujeres, o concurrieron sin
participar activamente? o fue una falta de apoyo de los varones
militantes ya experientes en la realizacin de los picnics?
Los picnics se realizaban entre Setiembre y Abril aproxima-
damente, contando entonces unas 6 temporadas de pic nics en el
periodo estudiado.
En la primer temporada de Setiembre de 1919 a Abril de
1920, tan solo se realiz un pic nic, el 8 de Febrero de 1920 en el
Prado Espaol, segn el informe de Franco Hernndez a La Ba-
talla fueron ms de mil personas, una gran cantidad de publico,
igualando la concurrencia de los pic nics montevideanos, a pesar
de la abultada concurrencia se obtuvieron tan solo 15 pesos de
ganancia, siendo esos los pocos datos que tenemos sobre este
primer pic nic obrero en Salto.62Luego se anunci la intencin

61 La Tierra N23 22 de Enero de 1921


62 La Batalla N144 20 de Febrero de 1920

336
Los pic nics obreros

de realizar otro el 1 de Mayo de 1920, pero el hecho de que


el propietario del terreno se negara a cumplir con su palabra de
brindar el lugar, parece haberse frustrado su realizacin.63
En la segunda temporada de Setiembre de 1920 a Abril de
1921 contamos con la realizacin de cinco pic nics.
El 9 de Octubre a beneficio de La Tierra, el cual como
mencionamos fue el que dio ms rdito econmico de todos. Su
programa fue sencillo, siendo quizs el xito econmico obtenido
debido a la efervescencia obrera ms que al esmerado programa,
se realiz en la ex jabonera quinta de la viuda de Mir, avenida
Blandengues El programa empezaba al medioda con el clsico
almuerzo criollo. A las 2 de la tarde Mario Herrera ofreci una
conferencia, a las 14:30 hubo recitaciones y nmeros culturales a
las 15:30 toc la orquesta y se bail. Para las 4 pm se prometieron
diversiones varias, en este pic nic no se vendi entrada pero se
vendieron tikets para el almuerzo a 0,60 vendindose 68 tikets
por anticipado y otros tantos en el lugar.64
Pocos das despus se realiz otro, el 23 de Octubre en el
paraje lamos de Pieyro, a beneficio del Congreso de la F.O.L.
que no lleg a realizarse y cont con conferencias, orquesta, di-
versiones varias, audicin de guitarras y dueto revolucionario,
cantos y recitacin por varias nias y una regata por el ceibal. Se
vendieron entradas para hombres a 0,20 (mujeres y nios gratis)
y no se vendi comida pero si lea y otros anexos.65
Luego el 26 de Diciembre se realiz el mencionado pic
nic del Centro Femenino que dio una prdida de un peso, y el
siguiente fue programado para el 30 de Enero, a beneficio de
La Tierra, ste cont con una detallada propaganda y un contun-
dente repertorio;

63 La Batalla N157 28 de Mayo de 1920


64 La Tierra N8 (9-10-1920) y La Tierra N10 (23-10-20).
65 La Tierra N10 23 de Octubre de 1920

337
Cultura Obrera

Una buena orquesta ejecutar variadas y selectas piezas de su


vasto repertorio. Recitacin de un monlogo (muy cmico), desempe-
ado por dos conocidos jvenes.
Carreras de embolsados (para nios) con preciosos premios.
Salto del perro gran prueba cmica, de hilarante efecto, ejecutada
por un compaero, nico en Sud Amrica.
Conferencia por el compaero MARIO O. HERRERA
Varias nias recitarn preciosas poesas.
Un grupo de nias y seoritas, tendrn a su cargo la realizacin
del Bazar Rifa.
Hay otros muchos y variados nmeros a desarrollarse, que
omitimos detallar por falta de espacio.
Habr un esmerado servicio de refrescos, chopp y helados.
Masas y dulces y frutas de todas clases.66
Por lluvias se suspendi, pasndose para el da 27 de febre-
ro, un mes despus, lo que demuestra lo complejo de su organi-
zacin. En el pic nic se vendieron 203 entradas (uno de los que
ms entradas logr vender de todos) logrndose un beneficio de
14,53.67
El ltimo pic nic de la temporada tambin fue a beneficio de
La Tierra organizado junto a la Unin Anrquica del Litoral y se rea-
liz el 10 de abril, imprimindose carteles y 10.000 volantes para su
difusin, contando con un contundente repertorio;
7:30 apertura de la fiesta por la orquesta
Variados juegos atlticos por nios y adultos, amenizados por
la orquesta.
Recitacin de un monologo por dos compaeros. Conferencia
por el camarada Etcheverry.

66 La Tierra N24 29 de enero de 1921


67 La Tierra N30 12 de Marzo de 1921.

338
Los pic nics obreros

Baile hasta el medioda


Por la tarde:
Salto del perro gran prueba acrobtica ejecutada por un
compaero. Recitacin de poesas por algunos nios y seoritas. Ba-
zar Rifa a cargo de tambin seoritas. Conferencia por el camarada
Hernndez. Iniciacin del baile y del correo del amor hasta la hora de
clausura en que el compaero Herrera dar por terminada la fiesta.
(nota importante: El buffet estar abierto durante todo el da
con un excelente servicio de bebidas, dulces, frutas, masas, etc. No
se servir almuerzo. Habr bote gratis para pasar el riacho).68
Segn cuenta la crnica,
En medio de la mayor alegra y animacin realizse ayer en
Los Algarrobos nuestra anunciada fiesta campestre. No obstante la
frialdad del da y los entorpecimientos habidos en la propaganda por
el mal tiempo y crecida del ro, los numerosos simpatizantes de nues-
tra hoja concurrieron con sus familias, llenos de franco entusiasmo a
pasar un da alegre y feliz.
A la hora de la partida en medio del bullicio y apresuramiento
de estos momentos, hemos podido constatar el espritu que campea
en nuestros actos, rebosantes de santa cultura y de la fresca lozana
que emana cuando la satisfaccin es general.69
Como ya mencionamos fue ste el que lo logr vender
ms entradas (248), y el segundo ms redituable econmica-
mente. Adems del elaborado programa que el pic nic tena, y
el buen antecedente del pic nic anterior, su xito creo debe
explicarse principalmente al buen momento que el movimiento
viva, su auge podramos decir. La divisin en el campo obrero
e ideolgico an no haba estallado, ni en Buenos Aires, ni en
68 La Tierra N33 3 de Abril de 1921.
69 La Tierra N34 11 de Abril de 1921.

339
Cultura Obrera

Montevideo, ni en Salto, aunque era cuestin de das para que


estallara.
En la siguiente temporada de pic nics de Setiembre de
1921 a Mayo de 1922 tambin se realizaron 5 pic nics, lo que
indica el movimiento aun mantiene el mismo vigor en sus capaci-
dades organizativas.
El primero se realiz en Domingo 11 de Setiembre en el
paraje llamado Los Algarrobos, fue organizado por el Centro
Popular Florencio Snchez a beneficio de este Centro y del Co-
mit pro imprenta LA TIERRA y para el mismo se anunci; Habr
en esta fiesta diversos y variados juegos, en los que podrn tomar
parte todos los nios y nias que deseen disputar los premios que
gratuitamente sern puestos por la comisin de fiesta.70
Se vendieron unas 69 entradas, obtenindose unos 26 pe-
sos de ganancia.
Coment La Tierra; una numerosa y considerable concu-
rrencia asisti a este acto obrero, con el entusiasmo que lo caracte-
riza cuando se realizan estas fiestas, que se hacen con el inters de
aprovechar ese da que todos o la mayora se hallan reunidos para
significarles el valor que encierra en si esta clase de festivales.
Hubo una tribuna por la cual defilaron [sic] varios com-
paeros, que con palabras sencillas hicieron notar la necesidad
imperiosa que existe de que se unan los trabajadores, en estos
instantes de lucha y decisin.
La alegra y animacin dur hasta el atardecer cuando em-
pezaron ha retirarse, se notaba en cada uno la grata e imborrable
impresin experimentada en el da.71
El 23 de Octubre se realiz el siguiente a beneficio del Co-
mit pro-Imprenta del cual no se detall programa y se ven-

70 La Tierra N56 10 de Setiembre de 1921.


71 La Tierra N57 17 de Setiembre de 1921.

340
Los pic nics obreros

dieron 98 entradas obtenindose un beneficio de 12 pesos.72


El siguiente, ya convulsionado el movimiento por las di-
visiones obreras, fue el 8 de Enero en Los Algarrobos a benefi-
cio del Comit pro Reorganizacin y La Tierra.
El programa fue atractivo;
Anuncio del acto con bombas a las 7 de la maana. A
las 9 organizacin de sortijas, tmbolas y otros actos con la
cooperacin de la orquesta. Al medio da almuerzo a la criolla
y salvas (fuegos artificiales). A la una de la tarde conferencia
de Celestino Gonzlez (delegado de la F.O.R.U.), quien habl
a las familias congregadas con el afn de disfrutar de las deli-
cias de una jornada feliz73 A las 2 de la tarde habra orquesta,
baile, e intervalos con coros por dos guitarristas y un ncleo de
nias. La jornada se clausuraba a las 7 de la tarde con algunas
palabras finales.74
Pero como el beneficio de ste pic nic se utiliz para
sufragar los gastos del delegado en gira, se realiz un original
corso de flores el 5 de Febrero tambin en Los Algarrobos, el
cual fue presentado por La Tierra como una Obra de cultura
artstica y difusin de nuestra causa75
El programa era bsicamente el de un pic nic con el
agregado del corso de flores
A las 6 de la maana se realiz la apertura con ejercicios
fsicos y nmeros atrayentes. Al medioda el clsico almuer-
zo a la criolla. A la una se program una explicacin de acto
desde el punto de vista social por un compaero. Y a las dos
de la tarde el anunciado corso de flores con el acompaamien-
to de una orquesta. En los intervalos msica y baile y cantos,

72 La Tierra N59 (1-10-1921), N61(15-10-1921) N63 (29-10-1921).


73 La Tierra N74 14-1-1922
74 La Tierra N73 7 de Enero de 1922.
75 La Tierra N75 21 de Enero de 1922.

341
Cultura Obrera

y se anunci como nmero especial un payador uruguayo76,


cerrndose la jornada a las 7 pm.77
Se vendieron 152 entradas (mujeres y nios iban gratis).78
El 2 de Abril se realiz el ltimo pic nic de la temporada a
beneficio del centro Ciencia y Vida y los delegados que vendran
de Buenos Aires, el cual dio iguales beneficios que el anterior
(17,81 pesos de ganancia en este caso 16 el anterior).79
La siguiente temporada de pic nics de Setiembre de 1922
a Mayo de 1923 se realizaron solo tres, demostrando que el mo-
vimiento haba comenzado su declive.
El primero se realiz el 29 de Octubre a beneficio de
La Tierra con un variado programa cultural y fue postergado en
dos oportunidades, su programa era el siguiente: 9 de la maa-
na inauguracin con Bazar rifa. Almuerzo a la criolla, cantos por
el coro Tierra Libre, juegos para menores, nmero de cantos
acompaados con guitarra. Varias conferencias. A las 5 de la tar-
de cantos con guitarra por un payador criollo, finalizando una
hora despus.

76 Es de destacar la presencia de los payadores en los pic nics. Como bien seala
Vidal, la presencia de los mismos es habitual en los pic nics anarquistas de Mon-
tevideo, aunque no tuvieron mucha presencia en la prensa anarquista de la po-
ca (1900-1920), Vidal seala La poesa de los payadores libertarios redirige la
mirada hacia una de las dos grandes vetas de la cultura anarquista del entorno
de 1900: la cultura oral de origen rural. A su vez dialoga, no est ajena, a la nue-
va o ms contempornea poesa modernista esteticista, urbana, practicada por
elementos cultos y heredera del parnasianismo y el simbolismo europeos. (Vidal,
Daniel, Coplas de realidad y voces proletarias. Los payadores libertarios, en Rojo
y Negro N9, Montevideo, octubre 2010: 18-19.) Es de destacar tambin que en la
edicin N191 de La Tierra se menciona que se retras la salida de la misma debi-
do a un extenso trabajo de un compaero payador vindose en la necesidad de
retrasar este nmero para su publicacin; en la seguridad, que el suplemento que
adjunta publicamos, nos inhibe de ms aclaracin. (La Tierra N191 5 de Julio de
1924). Lamentablemente no hemos ubicado dicho suplemento.
77 La Tierra N77 4 de Febrero de 1922.
78 La Tierra N85 1 de Abril de 1922.
79 La Tierra N85 (1-4-1922) y La Tierra N86 (8-4-1922)

342
Los pic nics obreros

El mismo parece haber sido poco concurrido, y solo se


obtuvieron dos pesos de ganancia.80
El siguiente se realiz el 19 de Noviembre para sufragar los
costos de la gira del delegado de la F.O.R.U. Fermn Sarmiento.
Este ofreci un variado programa de juegos; con buffet y
bazar rifa a las 8 de la maana, a las 9 correo tortuga, a las 10
carreras despacio para seoritas a las 11 una imperdible cin-
chada entre vegetarianos y carnvoros y al medio da el clsico
almuerzo a la criolla.
Para la tarde a las 13 horas, se cantara hijos del pueblo por
la orquesta, a las 14 lo hara el coro Tierra Libre, a las 14:30 carrera
de menores embolsados con premios. A las 15 baile familiar y a las
15:30 carrera de cintas para seoritas. Para las 16 horas se pla-
nificaron recitaciones de poesas. A las 17 duo de guitarra y cantos
criollos, 17.30 baile familiar, 18hs conferencia del delegado de la
F.O.R.U. y para las 18.30 clausura pic nic y tmbola.81
Y el siguiente fue recin para el 14 de enero, organizado
por los Albailes para el beneficio de stos y el comit pro presos
de la F.O.R.U., en donde si bien se vendieron 106 entradas de
hombres, el beneficio econmico fue apenas de 3,74 pesos82.
En la siguiente temporada de Setiembre de 1923 a Mayo de
1924 se realiz uno solo el 24 de Febrero, vendindose 77 entradas.83
Y en la ltima temporada entre Setiembre de 1924 y Mayo
de 1925 se realizaron dos pic nics que mostraron cierta recupera-
cin en la participacin obrera en los mismos. El primero de ellos
el 16 de Noviembre, si bien no se detallo el programa, y la entra-
da se rebajo a la mitad del valor de los aos fuertes del movi-
miento, se vendieron 95 entradas y obteniendo un beneficio de

80 La Tierra N111(7-10-1922) N114(29-10-1922) y N116 (11-11-1922)


81 La Tierra N116 11 de Noviembre de 1922.
82 La Tierra N116 (11-11-1922), N123 (30-12-1922) y 134(17-3-1922)
83 La Tierra N175 (23-2-1924) 176(1-3-1924) y 178(15-3-1924)

343
Cultura Obrera

25 pesos.84 El segundo fue el 28 de Diciembre en Los Algarrobos


a beneficio de La Tierra y el centro Ciencia y Vida y solo se ven-
dieron 48 entradas obtenindose 13 pesos de ganancia.85
Lamentablemente no contamos con tanta informacin detalla-
da para el departamento de Paysand, conociendo solo la existencia
de cinco pic nics en el periodo, pero seguramente hubo varios ms.
El primero de ellos fue el 1 de Mayo 1920, que cont
con la participacin de socialistas y anarquistas, y la oratoria de
Celestino Mibelli del Partido Socialista como Csar Forni de la
F.O.R.U. quienes haban ido desde Montevideo para la ocasin.86
El segundo pic nic que conocemos fue el 4 de diciembre
de 1921 organizado por los anarquistas en la quinta prxima
al Campo del Vapor; difundiendo folletos, libros y proclamas
anrquicas que hicieron un inmejorable ambiente de emanci-
pacin proletaria. (...) por la noche continu la fiesta de con-
fraternidad societaria en el domicilio de un quintero del lugar,
que expres, como otros vecinos, las simpatas a que se haban
hecho acreedores por su cultura, liberidad y franqueza
Al domingo siguiente los comunistas hicieron el suyo, los
anarquistas no pudieron dejar de reconocer que estuvo bastan-
te concurrido y que lograron el xito econmico que buscaban.87
El cuarto que tenemos conocimiento fue organizado por
el centro Femenino en Marzo de 1922 y dej 60 pesos lqui-
dos de ganancia,88 lo que supera a la mayor suma obtenida por
los picnics salteos.
Poco tiempo despus el 31 de Abril se realz un nuevo
picnic el cual fue organizado por el Centro Comunista, segn la

84 La Tierra N205 (24-11-1924)


85 La Tierra N207 (13-12-1924) y N208 (20-12-1924)
86 La Tierra N38 7 de Mayo de 1921.
87 La Tierra N71 24 de diciembre de 1921.
88 La Tierra N82 11 de Marzo de 1922.

344
Los pic nics obreros

prensa la concurrencia fue numerosa, especialmente de fami-


lias. Se bail con entusiasmo durante toda la tarde, obteniendo
la fiesta el ms franco xito.89
En el departamento de Rocha, contamos la realizacin de
cuatro pic nics y tenemos un poco ms de informacin acerca
de los mismos, los cuales parecen haber sido un ritual inherente
a la fecha del 1 de Mayo.
En ocasin del 1 de Mayo de 1920 cuenta Trabajo;
A la hora diez, ms o menos, un compacto grupo de
compaeros con banderas desplegadas y acompaados por la
banda municipal se dirigieron hasta el pintoresco Parque Ma-
chado donde se realizara el pic nic.
All en plena naturaleza, pasronse horas de gratas ex-
pansiones camaderiles, formndose, numerosos grupos entre-
gados a alegres ejercicios fsicos, como se ve, al igual que en
Salto se insiste en el momento fraterno compartido entre traba-
jadores, luego hubo un discurso del secretario general de la Fe-
deracin Obrera Rochense y luego habl Pedro D Alessandro.90
Sabemos tambin que para el 1 de Mayo de 1922 se realiz
a su vez un pic nic para juntar fondos para los presos de la pasada
huelga de los obreros de las vas del ferrocarril, sealando Accin
Comunista que se realiz en un ambiente de camaradera frater-
nal, concurriendo a el mas de cuarenta compaeros.91
En 1924, el pic nic se adelant unos 15 das, siendo con-
vocado por el Centro Comunista y no por el Sindicato General, el
cual se encontraba un tanto inactivo por estas fechas, realizn-
dose el 16 de Abril en La Rural, comenzando a las 11 am con
el clsico almuerzo a la criolla. La entrada con almuerzo fue de
un peso y sin l 0,25 para mayores y 0,15 para menores.

89 El Telgrafo (Paysand), 2 de Mayo de 1922


90 Trabajo N2 15 de Mayo de 1920.
91 Accin Comunista N29, 8 de Mayo de 1922.

345
Cultura Obrera

Entre el programa se destacan los deportes, un partido


de football entre Unibersal y Wanderes,92 carreras de ve-
locidad, de resistencia, de banderas, de bicicletas, lanzamiento
de jabalina, y saltos con y sin impulso. Pero el principal atractivo
parece ser tres matchs de boxeo entre conocidos amateurs
de la localidad (Prieto Pezuto-Paciello, y Anza-Martnez).93
El almuerzo a la criolla cont con unos 70 comensales,
pero el pic nic en general parece haber contado con unos 500
participantes segn Accin Comunista. La crnica destaca
como los momentos ms destacados de la jornada el match de
box entre Prieto Pezuto y Paciello, en el cual trinuf Paciello
por haber abandonado el ring su contrincante. Aunque justo
es declararlo, cuando Pezuto abandon, llevaba una desventaja
de 3 puntos. El otro evento destacado fue el partido de ftbol
el cual fue uno de los nmeros ms interesantes de la fiesta.
Fue un partido movido y entusiasta, durante el cual todos los ju-
gadores hicieron derroche de energa y entusiasmo. Ganando
Universal por 2 a 1. Dado que se hizo la noche no se pudieron
completar todos los nmeros previstos, en especial las carre-
ras, pero fue considerado un xito por sus organizadores.94
Por ltimo, tenemos informacin del pic nic realizado
el 1 de Mayo de 1925, para el cual contamos con el detalle
de su extenso y muy deportivo programa, lo cual demuestra
el incentivo dado por los comunistas en el aspecto deportivo
que se diferencia del acento en el aspecto cultural dado por los
anarquistas del Salto, al igual que suceda en Montevideo, como lo

92 Sobre la presencia del equipo de Wanderes en el pic nic es de sealar que en


el catlogo de la Biblioteca Nacional de Montevideo se encuentra la publicacin
Wanderes Obrero que se edit en Rocha entre Octubre de 1924 y Enero de 1925
editando 17 nmeros. No hemos podido consultar dicha coleccin por no encon-
trarse disponible al pblico actualmente.
93 Accin Comunista N37, Rocha 15 de Abril de 1924.
94 Accin Comunista N38, Rocha 22 de Abril de 1924

346
Los pic nics obreros

seala Porrini; Los libertarios tendan a plantear un mayor goce (y


espiritualidad) de ese da particular, una bsqueda y una aproxima-
cin de la Arcadia y la Utopa. Los comunistas, en cambio, preten-
dan unir poltica e ideolgicamente, ms poder para la batalla, sin
descuidar una nutrida y exigente actividad ldica, fsica y deportiva,
tanto que incluan deportes como el box que eran rechazados como
brbaros por libertarios y socialistas.95
El programa del pic nic convocado por el Sindicato General de
Trabajadores y al que se invit a participar tanto a la sociedad de pi-
capdreros como al Centro Comunista ofreci el siguiente programa:
Por la maana: Carrera de 100 mts (series), salto alto corrien-
do, salto a la garrocha, carrera de vallas (series) y partido de Volley-ball.
A medio dia: Comida a la criolla
Por la Tarde: Final de 100 mts. Partido de Volley-ball. Par-
tido de Foot-ball. Salto largo corriendo. Final de vallas. Exhibi-
cin de box. Carrera de bicicletas y palo enjabonado.
Las palabras de Accin Comunista nos terminan de ilus-
trar la convocatoria; Como se ve, pues, es todo un colosal pro-
grama del cual podrn disfrutar por poco dinero todos los que
deseen pasarse un da de sanas diversiones al aire libre, y del
cual no deben dejar de participar los trabajadores conscientes,
dado el significado y finalidad de dicho festival.96
El precio tambin se diferenciaba de los pic nics anarquis-
tas siendo este ms estricto; Hombres 0,25, mujeres 0,15, y nios
0,10. Y la entrada con almuerzo 1.00 para todos.
Adems del completo programa deportivo hicieron uso de
la palabra el lder del Partido Comunista Celestino Mibelli, y los
comunistas locales Gonzlez, Acosta e Ignacio D. Garaza.97

95 Porrini, 2011:120.
96 Accin Comunista N87 (Segunda poca). Rocha, 28 de Abril de 1925.
97 Idem.

347
Cultura Obrera

6. La relacin con la poltica.


La relacin con el sistema poltico es otro aspecto desde
donde se puede observar la cultura, o ms especficamente la
cultura poltica de los obreros organizados. Vimos a travs de
Trabajo de Rocha, como constantemente se haca un llamado
al Consejo local a cumplir correctamente sus funciones, es decir
se desarrolla una crtica al funcionamiento del sistema poltico
pero no se cuestiona la existencia del sistema poltico en s. En
todo caso parece haber una mala gestin, o una gestin que
contradice los intereses obreros y beneficia a la burguesa. Lue-
go de fracturada la Federacin Obrera Rochense y constituido
el Sindicato General de Trabajadores, parecen convivir una co-
rriente que contina denunciando el mal desempeo del go-
bierno local y de las instituciones policiales y jurdicas y otra que
cuestiona ms a fondo el sistema en s.
En Salto en cambio, el cuestionamiento al sistema poltico
en su totalidad parece evidente. Constituyndose incluso, Co-
mits Anti Polticos en tiempos de elecciones para contrarrestar
la propaganda partidaria e incitar a los obreros a no votar.
As en Noviembre de 1920 se forman secciones barriales
anti polticas en siete barrios distintos de Salto98, la situacin se
reedita hacia Setiembre de 1922.99
Segn el balance publicado por el Comit, se imprimieron
en Octubre de 1920 unos 1000 manifiestos y se realiz al menos
una conferencia pblica. En Noviembre se imprimieron 2000
manifiestos y se realiz propaganda tambin en Concordia.
Econmicamente sostuvieron el comit el gremio de Sastres y
Picapedreros y los mecnicos electricistas con 3 pesos cada uno,

98 Pueblo Nuevo, Plaza Libertad, Lazareta, La Caballada, la Cachimba, el Palomar y


Centro. La Tierra N13 12 de Noviembre de 1920
99 Ver por ejemplo, La Tierra N109 (16-09-1922), N110 (23-09-1922), N111 (07-
10-1922) y N112 (14-10-1922)

348
La relacin con la poltica

La Tierra N108 10 Setiembre de 1922

349
Cultura Obrera

y la F.O.L.S. con un peso, sumado a otras colectas y donaciones


varias.100
En Noviembre de 1922 se reedita la experiencia y se vuel-
ven a conformar comits barriales anti polticos publicando varios
manifiestos.101
En uno de ellos se poda leer;
Votar para llevar a un individuo al parlamento, no es mas
que elegir un nuevo mandn y opresor, y por lo tanto es remachar
las cadenas de la miseria y al mismo tiempo formar escaleras para
que los polticos trepen y tomen las riendas del carro del pueblo
para as rerse de los proletarios que viven creyendo en sus falsas
promesas102
El Centro Ciencia y Vida y La Tierra, reforzarn la propagan-
da anti poltica Nosotros afirmamos de que Batlle, Viera, Manini y
Rios, Frugoni y todos los aspirantes, pequeos o grandes, a vivir del
queso presupuestvoro, que se lanzan los unos contra los otros, son
todos iguales y harn la misma obra: afianzamiento de las institu-
ciones capitalistas y gubernamentales, por lo cual la situacin de
la masa obrera ser la misma: la eterna bestia de carga y de labor,
la hija predilecta de la miseria y la opresin.103
La actividad de los comit anti polticos parece no haber
pasado desapercibida por las autoridades locales ya que el sbado
25 de noviembre de 1922, da previo a las elecciones, J. Fernndez
y C. Mazza que se domiciliaban ambos en la misma casa, fueron ci-
tados por la polica, detenidos y golpeados severamente sin causa
aparente ms que realizar una represalia por la intensa labor anti
poltica de los militantes gremiales.104

100 La Tierra N28 26 de Febrero de 1921.


101 La Tierra N107 2 de Setiembre de 1922.
102 La Tierra N111 7 de Octubre de 1922.
103 La Tierra N118 25 de Noviembre de 1922.
104 La Tierra N119 2 de Diciembre de 1922.

350
La relacin con la poltica

La Tierra N104
13 agosto de 1922

351
Cultura Obrera

7. L a moral obrera
(alcohol, juego, carnaval, baile y amor)

Las pginas de La Tierra y Trabajo estn llenas de informa-


cin. All se pueden buscar las actividades realizadas por el movi-
miento obrero local, las sociedades obreras, las huelgas, sus acti-
vidades culturales, sus discusiones ideolgicas, como tambin la
construccin y difusin de una moral especfica del proletariado,
una moral inherente al obrero revolucionario. Una moral ideal
que oriente el comportamiento de los obreros para poderse en-
cauzar en una vida de lucha y de progreso a nivel colectivo. Unos
de esos valores fue siempre la solidaridad y el asociacionismo, la
creencia en lo beneficioso de las sociedades de trabajadores. Esos
valores rean con los valores burgueses del progreso individual
egosta. A su vez, haba otros valores importantes en la sociedad ca-
pitalista que era necesario combatir ya que destruan la capacidad
de los seres humanos de redimirse a s mismos. stas eran, entre
otras, el alcoholismo, el juego clandestino (la timba), la prostitu-
cin, el carnaval, el amor institucional sea a travs de la Iglesia o del
Estado, e incluso para algunos, tambin el baile.
La condena del consumo de alcohol y el juego, es unnime
en los tres departamentos estudiados y las distintas tendencias
ideolgicas que animan al movimiento obrero. La Unin Obrera
Castillense, al momento de fundarse ya inicia sus trabajos contra
el juego y el alcoholismo105
A los pocos das de salir el primer nmero de Trabajo en Ro-
cha, se alarman sus editores de que se haya duplicado o triplicado
las casas de juego.106
Tiempo despus insistir: Bregadores para construir una
Sociedad ms en armona con lo bueno y con lo justo, tenemos el
105 Trabajo, Rocha N11 30 de Setiembre de 1920.
106 Trabajo, rocha N2 15 de Mayo de 1920.

352
La moral obrera (alcohol, juego, carnaval, baile y amor)

deber, ms an, tenemos la obligacin de cambiar los errores, las


lacras sociales, sealando los que contribuyen a hacerlas ms es-
tables en una u otra forma, y comprendiendo que el juego es la
causa que origina mayores perjuicios a la clase trabajadora, la que
explotada por la burguesa en su labor, es explotada en su dinero
por individuos sin vitos [sic] de trabajo, verdaderos obstculos a
todo progreso y civilizacin. 107
A su vez se inici una campaa en contra del juego a travs
del peridico Trabajo de Rocha, y aunque en un comienzo se pro-
meti denunciar a los dueos de los mismos, a los que van y a los
policas sobornados que lo permiten, para que la polica cumpla
con su deber, el peridico se limit a hacer una breve lista de algu-
nos locales existentes, lo cual no debi ser un impacto menor en un
pueblo chico como Rocha.108
La Tierra compartir ampliamente los conceptos sobre el
alcohol y el juego afirmando; Hemos combatido siempre el vicio
del alcohol, por creer que un hombre borracho es irresponsable
de sus acciones.
Sostenemos que los juegos son igualmente malos para la
sociedad humana porque siempre conserva latente el espritu
egosta de los hombres, el que es igualmente irresponsable por-
que no se fija que lo que uno gana lo pierde el otro y estos siempre
estn en proporcin mayor.
Luego se propone una alternativa para transformar el vicio
en virtud;
Si llamamos vicio a todo aquello que usa por instinto de
satisfacer los egosmos personales llegamos a establecer la for-
mula siguiente:
Que el hombre por naturaleza es vicioso (...) As pues debe-
mos de encauzar el vicio hacia la va de los hechos positivamente

107 Trabajo, Rocha N32 15 de Marzo de 1921.


108 Trabajo (Rocha) N19 (15-2-1921) y N20 (28-2-1921).

353
Cultura Obrera

materiales. Porqu no se ha de convertir en vicio lo que hoy llama-


mos solidaridad?109
Otro asunto en el que parece haber bastante homogenei-
dad dentro del campo de la moral obrera es la condena al carnaval.
Si bien han existido a lo largo de la historia algunos intentos de
grupos obreros participando en los desfiles de carnaval, el rechazo
al mismo por parte de los militantes ms activos era casi hegem-
nico en la poca, considerando que la clase ms explotada durante
todos los das del ao, sala un da bajo el permiso de sus amos a
emborracharse y dejarse llevar por todo lo que estaba prohibido el
resto del ao para as entretener a los burgueses.
Trabajo de Rocha sealar en enero de 1921;
Estamos prximo a los das que la burguesa destina para em-
brutecer al pueblo y hacerle olvidar, aunque momentneamente, las mi-
serias y dolores que por su culpa sufre.
El carnaval, triste espectculo de imbciles y guarangos est
prximo a llegar; la corrompida burguesa gobernante derrocha los dine-
ros que han costado hambre al pueblo trabajador para despistarlo de la
senda de sus legitimas liberaciones; pero el pueblo trabajador consciente
de su clase no debe hacer caso a mamarrachos, no debe permitir que los
explotadores de su vida se diviertan a su costa.110
La crtica de los militantes obreros, y en este caso anarquis-
tas al carnaval iba desde un positivismo europesta como el siguien-
te; La incultura y la idiotez de un pueblo, se demuestra por la im-
portancia que se le presta a esta clase de actos, propios tan solo de
los pueblos brbaros y esclavos de la antigedad.
Los pueblos adelantados en cultura y civilizacin, reniegan de
tan grotesca farsa, que simbolizan tiempos de barbarie y esclavitud.111
109 La Tierra N11 23 de Octubre de 1920.
110 Trabajo N18 31 de Enero de 1921
111 La Tierra N131 24 de Febrero de 1923.

354
La moral obrera (alcohol, juego, carnaval, baile y amor)

O en otro extremo, a no condenar la fiesta en s, sino el


negocio que la misma implicaba Sera hasta cierto punto una
fiesta linda, sino se metieran los mal intencionados a organizar
los actos. (...) El ao pasado la Comisin de seores o bandidos
pro-Carnaval, engaaron al pueblo recolectando fondos pro-
fiestas y se robaron o hurtaron ms de dos mil pesos que fueron
malgastados en orgas, borracheras y paseos de la Comisin de
Fiestas y algunos invitados.112
Otro tema presente en la prensa obrera y obrerista, es la
prdica del amor libre, que bsicamente consista, para la gran
mayora de los militantes obreros, en el derecho a elegir la pa-
reja con la cual compartir la vida, ms all de intereses econ-
micos y presidiendo de la bendicin de la Iglesia y del Estado,
lo que hoy podramos llamar el concubinato, lo cual tena un
significado mucho mayor en la poca dada la fuerte presencia
de la Iglesia y de la moral en torno a la mujer y el matrimonio.
Como bien sealan Vctor Muoz y Eduardo A. Godoy en
el caso chileno;
Para los anarquistas el matrimonio tradicional (civil y
religioso) se constituy en uno de los pilares fundamentales del
sistema autoritario de dominacin, ya que en su seno no solo
se privatizaba el amor y el sexo, sino que tambin se permita
-en su particular modo de ver- la reproduccin de las formas de
subyugacin, especialmente sobre la mujer y los hijos, vigentes
en la sociedad burguesa a travs de una estructura monogmica
fundada en la autoridad del padre (pater familias) y funcional al
resguardo y perpetuacin de la propiedad privada, sobre la cual se
cimentaba el sistema capitalista. (...) Para los libertarios el matri-
monio burgus subyugaba al amor, y lo deserotiza, sometindolo
a la lgica productivista y finalista del capitalismo -al privilegiar so-

112 La Tierra N77 4 de Febrero de 1922

355
Cultura Obrera

lamente la procreacin- siguiendo, adems sus lgicas mercantiles


y egostas.113
Si bien para la poca podra ser un avance importante en
cuestin de libertades individuales, a la luz de hoy rechina cier-
to esquema heterosexual de las relaciones humanas cuando
sealan, en un artculo publicado en la segunda edicin de La
Tierra titulado Nuestro programa; El amor, como la unin
de seres de diferentes sexos ser completamente libre y sin in-
tervencin de terceros.114
Dentro las reivindicaciones del amor libre se destaca el re-
lato de una Unin Libre producida entre dos anarquistas, y quizs
no sea menor el dato de que el padre de la novia, era tambin
anarquista.
As el viernes 29 de Julio de 1921, Antonio Baraglia y Maria
Bridarolli (hija de Luis Bridarolli y de Sandalia Gonzlez) se unie-
ron libremente: Es este el primer caso que se efecta en Salto
de amor libre en el que la mujer rompiendo todos los prejuicios
y convencionalismos sociales se une al hombre que quiere para
demostrar a todo el mundo que hay seres que impulsados por el
amor grande y verdaderos, sin intereses mezquinos, sino guiados
por un libre acuerdo de ambas partes, forman el hogar en el que
ha de reinar como nica soberana la felicidad.
El padre de la muchacha dio un discurso diciendo lo im-
portante que era para salvar la humanidad que los matrimonios
deban ser por amor y no por inters como se efecta en nuestros
das El novio Buragliua habl aunque algo excitado, demos-
trando que el como anarquista no aceptaba las leyes falsas del
Estado y la Religin Luego cerr la oratoria el militante Domingo
113 Godoy Seplveda, Eduardo A., Muoz Vctor M. Por la vida nueva: la familia en
la batalla cultural entre el anarquismo, la Iglesia Catlica y el Estado. (Regin Chi-
lena, 1893-1940). En Estudios (Revista de Pensamiento Libertario) N3 Diciem-
bre 2013. CNT-AIT, Valladolid.
114 La Tierra N2 28 de Agosto de 1920

356
La moral obrera (alcohol, juego, carnaval, baile y amor)

Pacheco que con su palabra sencilla pero elocuente explic lo


que era el amor libre demostrando ser un conocedor a fondo de
esta materia la fiesta dur hasta altas horas de la madrugada.115
Finalmente cabe mencionar tambin el tema del baile en
el que sin duda no exista un consenso desde el movimiento, vea-
mos el caso salteo del que disponemos abundante informacin.
El baile fue utilizado en varias ocasiones como medio de
recaudar finanzas para el movimiento obrero.
En casi todos los pic nics incluan el baile familiar como
uno de sus atractivos. El 9 de Julio de 1922 se organiz un baile
convocado por el Centro Femenino para juntar fondos para crear
una biblioteca obrera, el 12 de Agosto se realiz otro convocado
por la sociedad de albailes.
A su vez, das antes de realizarse el Congreso Obrero en
Salto, en Mayo de 1922, se realizaron dos bailes para su finan-
ciamiento, uno el 22 de Abril y otro al sbado siguiente el 30 de
Abril.116
Sin embargo haba claramente dos visiones acerca del
tema, una que consideraba que el baile es la parodia del coito,
la antesala de la prostitucin117
Y que era determinante:
Hay varios compaeros que son partidarios del baile, que se
ponen de acuerdo con el, que son fieles defensores de este medio
corruptivo, que lejos de combatirlo, ellos mismos los fomentan, pro-
porcionndole a los que desconocen la verdad, placeres de esa clase;
pero los que han interpretado lo que quiere decir la anarqua, jams
propagan el tal baile, porque sabemos muy bien que la corrupcin y
la anarqua son antagnicas. (...) El baile (...) corrompe (...) deja a los

115 La Tierra N51 6 de Agosto de 1921.


116 La Tierra N88 (22-4-1922) y N90 (30-4-1922)
117 La Tierra N24 29 de Enero de 1921.

357
Cultura Obrera

que se entregan en brazos de este vicio, en un estado de decaden-


cia moral, intelectual y fsica (...) los anarquistas no deben organizar
festivales corruptivos; si as no lo hicieran darn a conocer la mala
interpretacin de la anarqua. No ms bailes! Ser o no ser!118
Pero desde la otra postura, por las fechas que se realizan
los bailes para financiar el Congreso Obrero, el mismo es reivindi-
cado desde las pginas de La Tierra;
Entendemos que no solo es necesario abolir la explotacin
del hombre, sino tambin reivindicar a los pueblos entristecidos, pro-
porcionndoles diversiones amplias para que vivan la vida en todas
sus manifestaciones de belleza y dicha.
El baile es un factor de alegra y de sociabilidad, como la m-
sica, el canto, etc.
Eso de que sea la antesala de la corrupcin, es un concepto
cristianista, que ha sido destruido por los socilogos modernos (...)
Nosotros no queremos explotacin, ni prostitucin, ni miseria, ni cr-
cel, ni tristeza, sino por el contrario libertad de trabajo, libre acuerdo
en el amor, abundancia, libertad y alegra.
Por lo expuesto luchemos, amemos, cantemos, bailemos, go-
cemos y vivamos amplia y dichosamente, que es el fundamento del
ideal anarquista119

118 La Tierra N126 20 de Enero de 1923.


119 La Tierra N88 22 de Abril de 1922

358
Literatura Obrera

8. Literatura Obrera

Dentro de la prensa obrera se le dio una amplia difusin


a la literatura.
En el peridico La Tierra en particular, en su primera po-
ca que edit unos doscientos veinte ejemplares, al menos en
los ltimos cien ejemplares no falt nunca la pgina de poesa y
literatura, que vino a suplir, sin pretenderlo, las pginas de ac-
tividad gremial en clara decadencia en la ltima etapa de dicha
publicacin.
El poeta preferido de La Tierra fue sin duda Fernando
Gualtieri de quien se publicaron al menos diecisiete120 textos
suyos, contrastando con los dems (le sigue por ejemplo Pere-
grino Job Chabs con nueve textos, casi la mitad).
Gualtieri era un conocido poeta anarquista de la poca.
De origen italiano121 resida en Buenos Aires desde los 12 aos.
Perteneci al grupo literario de Boeado y junto a Elias Castel-
nuovo editaron la revista La Palestra, y tambin llev adelante
una editorial del mismo nombre donde intercalaba folletos de
autores anarquistas y literarios de prestigio. Gualtieri, aunque
poco conocido en nuestros das parece haber tenido un lugar
destacado entre los poetas del ambiente bohemio, literario y
especialmente anarquista de la poca.122 Segn Katia Massara
120 La Tierra N129 (10-2-1923), La Tierra N135(24-3-1923), La Tierra N136 (31-3-
1923), La Tierra N137 (14-4-1923), La Tierra N141 (19-5-1923), La Tierra N142
(26-5-1923), La Tierra N151 (28-7-1923), La Tierra N155 (15-8-1923), La Tierra
N157 (15-9-1923), La Tierra N158 (22-9-1923), La Tierra N159 (6-10-9-1923), La
Tierra N162 (15-11-1923), La Tierra N168 (5-1-9-1923), La Tierra N169 (12-1-9-
1923), La Tierra N171 (26-1-9-1923) y La Tierra N175 (23-2-9-1923).
121 Naci en Savelli, Calabria (Italia) el 8 de Noviembre de 1896, emigr hacia Argentina
a los 12 aos. Luego a Montevideo en 1929 y a Italia en 1930, muriendo el 13 de
Junio de 1967 en Buenos Aires (http://digilander.libero.it/vincenzogreco/fernando_
gualtieri.htm). Datos brindados por Horacio Silva, a quien agradezco enormemente.
122 Elas Castelnuovo: la espada, la pluma y la palabra. Revista Sete Das Ilustrados,
1975. http://www.magicasruinas.com.ar/revistero/esto/revdesto297.htm

359
Cultura Obrera

y Oscar Greco123fue detenido y arrestado varias veces por ac-


tividad subversiva y fue colaborador del peridico La Protesta
y editor y propietario de La Palestra. En 1925 fue arrestado y
procesado por la publicacin de un opsculo reivindicando la
muerte del coronel Falcn. Seguramente se trate del poema
Maldicin de un maldito.
Sin duda el peridico La Tierra parece haber preferido
la publicacin de textos de autores comprometidos y cercanos
a las ideas, el mencionado poema Maldicin de un maldito,
por ejemplo, fue editado por Ediciones FORA del V Congre-
so en 1920.
Como bien seala Horacio Silva el joven poeta calabrs
Fernando Gualtieri compuso varios versos de carcter criollo
sobre temas ideolgicos, que fueron cantados y recitados a lo
largo y ancho del pas por los cantores locales: Semana Tr-
gica, Maldicin de un maldito, Este y aquel una interesante
milonga de contraste entre las figuras de Simn Radowitzky
y Ramn L. Falcn o El hroe, sobre la accin de Kurt Gustav
Wilckens124
El siguiente autor ms publicado en las pginas litera-
rias de La Tierra, tambin parece ser un anarquista activo en
Argentina de la poca, Peregrino Job Chabs,125 de quien solo
sabemos que enviaba artculos desde Basabilbao, siendo en un
comienzo favorable a la dictadura del proletariado.126
123 Massara, J y Greco, O. Rivoluzionari e migranti. Dizionario biogrfico degli anarch-
ci calabresi, BFS, Pisa, 2010, pg.130.
124 Silva, 2011:45. Silva cita como fuente; el disco Los anarquistas 1904-1936: mar-
chas y canciones de lucha de los obreros anarquistas argentinos, sobre guin de
Osvaldo Bayer, con recitados del actor Hctor Alterio. Bs. As., 1969
125  La Tierra N138 (21-4-1923), La Tierra N145 (9-6-1923), La Tierra N146 (24-6-
1923), La Tierra N147(1-7-1923), La Tierra N152(4-8-1923), La Tierra N162(15-
11-1923), La Tierra N174 (16-2-1924), La Tierra N202 (25-10-1924), La Tierra
N203 (1-11-1924),
126 La Tierra N24 (29-01-1921)

360
Literatura Obrera

El siguiente autor ms publicado fue el conocido anarquista


Alberto Ghiraldo127, quien haba estado al frente del diario anar-
quista La Protesta de Buenos Aires entre 1904 y 1906, y publican-
do y dirigiendo varias revistas de tendencia anarquista como El Sol
(1898-1903), Martn Fierro (1904-1905), Ideas y Figuras (1909-
1916), y publicando varias obras dramticas y literarias.128
El anarquista Miguel Silvetti129 cont con cuatro publicacio-
nes, al igual que Rafael Barret130 y Ricardo Flores Magn.131 Barret
fue un importante escritor anarquista que cautiv con su pluma a
libertarios, liberales y hombres y mujeres en general, espaol resi-
dente en Paraguay, hizo lucir sus escritos tanto en sus estadas en
Montevideo como Buenos Aires hasta su muerte por tuberculosis
en 1910. Flores Magn por su parte es uno de los referentes indis-
cutidos de la revolucin Mexicana de 1910 junto a su hermano y a
Pancho Villa.
Luego el militante anarquista salteo Catalicio Santos132
tiene tres publicaciones. Luego hay una gran lista de autores,
Dostoievski,133 Ricardo Mella,134 Julio Herrera y Reissig,135 Antn
127 La Tierra N126 (20-1-1923), La Tierra N132 (3-3-1923), La Tierra N148 (7-7-
1923), La Tierra N150 (21-7-1923), La Tierra N176 (1-3-1924), La Tierra N181
(21-4-1924), 187 (31-5-1924),
128 Ver Tracus, Horacio (director), Diccionario biogrfico de la izquierda argentina
Emec, Bs. As. 2007. Pgs 256-259.
129 Silvetti es un activo militante del movimiento en Montevideo. La Tierra N151
(28-7-1923), La Tierra N158(6-10-1923), La Tierra N166 (22-12-1923), La Tierra
N175 (23-2-1924).
130 La Tierra N155 (25-8-1923), La Tierra N180 (29-3-1924), La Tierra N187 (31-5-
1923), La Tierra N190(21-6-1924)
131 La Tierra N129 (10-2-1923), La Tierra N137 (14-4-1923), La Tierra N139 (28-4-
1923), La Tierra N142 (26-5-1923).
132 La Tierra N150 (21-7-1923), La Tierra N153 (11-8-1923) y La Tierra N172 (2-2-
1924)
133 La Tierra N124 (6-1-1923)
134 La Tierra N126 (20-01-1923), La Tierra N188 (7-06-1924)
135 La Tierra N127 (28-01-1923)

361
Cultura Obrera

Thekhov y Leoncio Lasso de la Vega,136 Almafuerte,137 Pio Baroja,138


Victor Hugo,139 Del Valle Incln,140 Ernesto Herrera,141 Rodolfo Gon-
zlez Pacheco,142 Tolstoi,143 Domingo Gomez Rojas,144 Teresa Clara-
munt y Pedro Kropotkin,145 Juana de Ibarobouru,146 Elias Castelnuo-
vo y Eduardo Gilimon147, Armando Vasseur148 Gabriela Mistral,149
Jose de Maturana,150 Enrique Nido,151 Teodorio Antilli y Anatole
France,152 Salvadora Medina Onrubia,153 Manuel Gonzalez Prada154
y Angel Faclo,155 entre los ms conocidos.
El peridico rochense Trabajo tambin dedico parte de sus
pginas al arte y la literatura bajo el ttulo de Rincn Azul en un
comienzo y seccin literaria despus.
Si dividimos al peridico en dos etapas tras la ruptura por la
huelga general por ngel Gonzlez. En la primer etapa encontra-
136 La Tierra N128 (3-02-1923)
137 La Tierra N132 (3-03-1932) y La Tierra N203 (1-11-1924)
138 La Tierra N134 (17-03-1923) y La Tierra N140 (12-05-1923)
139 La Tierra N135 (24-03-1923)
140 La Tierra N136 (31-03-1923)
141 La Tierra N137 (14-04-1923)
142 La Tierra N140 (12-05-1923)
143 La Tierra N141 (19-05-1923) y 174 (16-02-1924)
144 La Tierra N145 (9-06-1923)
145 La Tierra N164 (08-12-1923)
146 La Tierra N165 (15-12-1923)
147 La Tierra N170 (19-01-1924)
148 La Tierra N172 (02-02-1924)
149 La Tierra N174 (16-02-1924)
150 La Tierra N189 (14-06-1924)
151 La Tierra N188 (07-06-1924)
152 La Tierra N191 (05-05-1924)
153 La Tierra N193 (26-07-1924)
154 La Tierra N197 (31-08-1924)
155 La Tierra N131 (24-02-1923)

362
Literatura Obrera

mos textos del liberal Ovidio Ferandez Rios,156 del socialista Emilio
Frugoni,157 pero se priorizan las colaboraciones locales, siendo el
caso de Alfredo C. Franchi,158(a quien se le public tambin du-
rante la segunda etapa), Carlos N.,159 y Sebastan S. Angeleri.160El
otrora poeta anarquista ngel Falco161 fue publicado dos veces,
antes y despus de la fractura.
Producida la fractura se publican textos de los bohemios
de orgenes anarquistas porteos Evaristo Carriego162 y Jos de
Maturana.163
Y al igual que en La Tierra la mayor de los textos literarios
publicados son de Fernando Gualtieri,164 lo que nos confirma el
prestigio de dicho autor en el mundo obrero, ya que en dos pun-
tos distantes geogrficamente e ideolgicamente se lo prefiri
como expresin de la cultura obrera.
Una interesante particularidad del peridico Trabajo fue la
publicacin de canciones como el mencionado Himno Socialista
Rochense165 y Bandera Libertaria166

156 Trabajo N6 (15-07-1920)


157 Trabajo N9 (30-08-1920) y Trabajo N13 (30-10-1920)
158 Trabajo N7 (30-07-1920), Trabajo N10 (15-09-1920) y Trabajo N22 (30-03-1921)
159 Trabajo N8 (15-08-1920)
160 Trabajo N12 (15-10-1920)
161 Trabajo N14 (11-11-1920) y Trabajo N19 (15-02-1921)
162 Trabajo N21 (15-03-1921)
163 Trabajo N20 (28-02-1921)
164Trabajo N18 (31-01-1921), Trabajo N24 (01-05-1921), Trabajo N25 (15-05-1921)
y Trabajo N28 (30-06-1921)
165 Trabajo N15 (30-11-1920)
166 Trabajo N14 (11-11-1920)

363
Cultura Obrera

9. La prensa obrera.

Luce Fabbri, que al estallar la revolucin rusa viva en Italia


y tena unos nueve aos, sealaba; Se pensaba que inevitable-
mente lo que haba pasado en Rusia se iba a repetir en todos los
pases afectados por la guerra. Como preparacin, la clase obrera,
en sus minoras ms conscientes, trataba de conquistar el mundo
de la cultura167La prensa obrera fue un canal de expresin pri-
vilegiado en la poca para transmitir los valores revolucionarios.
Mirta Zaida Lobato, en su trabajo sobre la prensa obrera
sealar que la prensa obrera fue una herramienta considerada
fundamental para construir a los trabajadores como una clase so-
cial con derechos en el Ro de la Plata.168

a) La Tierra

Otra manera que tenemos de interiorizarnos en las prcti-


cas culturales obreras del interior es seguir, en la medida de lo po-
sible, el recorrido de los grupos editores de la prensa obrera. En el
caso salteo La Tierra, nos ofrece una importante y detallada in-
formacin de los vaivenes econmicos de su funcionamiento que
nos acerca hacia la realidad del movimiento obrero de entonces.
La edicin de un peridico obrero u obrerista, hace sin
duda a la cultura obrera. Como bien sealaba Luce Fabbri Cuan-
tos albailes, panaderos, carpinteros, encargados por su gremio
de enviar al peridico avisos de reunin, pedidos de solidaridad,
informes sobre un conflicto, han aprendido a pulmn a expre-
sarse con la pluma!169

167 Fabbri, Luce Archive, Typescript and manuscript of Autodidactismo Obrero.


Luce Fabbri Archive, Carpeta 210. (IISG)
168 Lobato, 2009:201.
169 Fabbri, Luce La cultura: exploracin de las races en La Lupa, Brecha 23-01-87

364
La prensa obrera

Propaganda en Trabajo (Rocha) n12 (15-09-1920)

365
Cultura Obrera

As mismo lo expresan los editores de La Tierra; como los


que escribimos LA TIERRA somos trabajadores y no disponemos
de tiempo suficiente desearamos que los gremios enviasen por
intermedio de algn miembro de la comisin administrativa, los
informes que tuvieran antes de los viernes para su publicacin.
Hay que trabajar todos compaeros.170
Los compaeros que escribimos La Tierra no somos perio-
distas; los que nos conocen de cerca lo saben. Y sin haber tenido
colegio de ninguna clase, que no fuera el campo de la lucha, tene-
mos que escribir y tal vez no lo hagamos al gusto de los maestros,
por que claro, no somos ni la sombra de algunos intelectuales,
que no hacen mas que archivar hermosas iniciativas. Queremos s
ver algo prctico y como viejos militantes de movimiento obrero
y anarquista del Salto, (...) hoy queremos encarar la lucha a su
verdadero terreno.171
Ya hicimos la salvedad de que La Tierra, a pesar de pre-
sentarse como un peridico obrero tiene un claro perfil ideolgi-
co, ya que se anuncia desde su primer nmero como un peridico
anarquista, pero vimos tambin, como el mismo es el resultado
del esfuerzo de los gremios obreros. Tambin sabemos que cuan-
do se discuti que perfil deba tener ese semanario, los delega-
dos de todos los gremios estuvieron de acuerdo de que fuese un
peridico anarquista, curiosamente, el nico en desacuerdo, fue
el delegado, no de un gremio, sino del centro anarquista Ciencia
y Vida, que consideraba que el mismo no debera tener rtulo
ideolgico.172 Su redaccin fue encomendada, no a los gremios
obreros sino a un comit editor (Comit pro-imprenta).
Carlos Zubillaga, que define a este tipo de peridicos como
prensa alternativa distingue entre prensa obrera y obrerista. La

170 La Tierra N57 17 de Setiembre de 1921


171 La Tierra N53 20 de Agosto de 1921
172 La Tierra N100 15 de Julio de 1922

366
La prensa obrera

prensa obrera remite a los rganos propiamente obreros, publi-


cados por organizaciones gremiales especficas. Y la prensa obre-
rista, a las que respondan con su prdica a una corriente de pen-
samiento que persegua la instauracin de un proyecto social de
cambio sin que en todos los casos sus propulsores pertenecieran
claramente a los sectores asalariados y a sus organizaciones de
clase173 Esta distincin, nos es til para el caso de Montevideo
por ejemplo, donde podemos ubicar a los peridicos La Batalla,
El Hombre, Justicia como obreristas, a Despertar (obreros sas-
tres), El Obrero Grfico, El Picapedrero, etc, como obreros. Pero
La Tierra nos ofrece una complejidad extra, ya que comprada la
imprenta a iniciativa y esfuerzo de las sociedades obreras stas
editan un peridico obrero, pero deciden que tenga un carcter
anarquista (obrerista).174
Zubillaga nos ofrece cinco caractersticas para distinguir
ambos tipos de prensa. Pero tampoco nos soluciona el problema.
Entre las cinco caractersticas mencionadas distingue la prioridad
en su temtica de la accin sindical vs lo inevitable del cambio
social, conteniendo La Tierra claramente ambas preocupacio-
nes. En las dos siguientes, a saber, la indefinicin ideolgica y la
pluralidad de ideas, La Tierra entrara dentro la prensa obrerista
dado su claro carcter anarquista, mientras que en las otras dos
(clasismo vs policlasismo, y prioridad del medio de lucha sobre
las consideraciones tcnico periodsticas) lo ubicaramos en la
prensa obrera.175 As que consideraremos a La Tierra como un
peridico obrero.
La Tierra, en su primer edicin se presenta entonces como
un semanario anarquista. Ofrece un logo bien logrado, con un
dibujo de una mujer, de brazos abiertos, y de fondo un crculo que

173 Zubillaga, 1986:16


174 Zubillaga, 1986:16
175 Zubillaga, 1986:16-17

367
Cultura Obrera

representara el planeta seguramente, con la inscripcin para


bien de todos la queremos libre.
Su administrador ser Adolfo Tettamanti y su redaccin y
administracin ser en la calle Joaqun Surez al 407. Su precio,
que se mantendr invariable en todos sus aos de existencia ser
de 20 centsimos la suscripcin mensual y 5 centsimos el nu-
mero suelto.
El grupo editor del peridico, conoci varios periodos, en
el primero de ellos, el mismo fue gestionado por el Comit pro
Imprenta compuesto por delegados de los gremios obreros. Los
delegados se ven diariamente en la imprenta, lo cual nos habla de
la cotidianidad del movimiento, si bien E. Rodrguez se queja de
que el Comit no se rene regularmente, desde el mismo peri-
dico le contestan que no se ha reunido el comit porque no tena
nada importante para tratar, pero la mayora de los miembros
concurren casi todas las noches al local de la imprenta, como lo
hacen muchos trabajadores ms, y como pueden hacerlo todos
los que quieran, puesto que la casa es de todos. E incluso comen-
tan que varios paisanos de la campaa han solicitado ejempla-
res del peridico pagando seis y diez meses de suscripcin ade-
lantada.176
En el local social se pueden encontrar varios peridicos
anarquistas, La Batalla de Montevideo, La Protesta de Buenos
Aires y hasta Umianit Nova editado por Malatesta en Italia.177
Si bien el sostenimiento econmico del peridico se rea-
liza a travs de las ventas y la suscripcin, los gremios tambin
colaboran con aportes monetarios, destacndose los Sastres
Unidos que entre Julio y Setiembre de 1920 aportaron 39 pesos,
luego los Albailes aportaron 12 pesos, los Chauffers aportaron
6 pesos, los carpinteros 5 al igual que los Picapedreros, los Cons-

176 La Tierra N3 4 de Setiembre de 1920


177 La Tierra N9 16 de Octubre de 1920

368
La prensa obrera

tructores Navales lo hicieron con 2 y un peso los Barraqueros.178


A su vez el peridico cuenta en sus comienzos con unas
375 suscripciones mensuales, sin duda el nmero mayor de sus-
cripciones de toda su trayectoria.
Entre los gastos se destaca el alquiler del local con 10 pe-
sos por mes y el pago al tipgrafo con 20 pesos por mes.179
Ayudan con su distribucin los paqueteros de Mon-
tevideo, Florida y Concordia. A ste ltimo, la polica le allan
su casa, le incaut 50 ejemplares de La Tierra y le prohibi su
distribucin bajo amenaza de aplicarle la ley de defensa social y
condenarlo a 2 o 3 aos de prisin.180
A fines de 1920 el comit editor tiene algunos problemas
internos, el tipgrafo los dej con el trabajo a medio hacer en
el nmero 14 y lo cambian por otro, a su vez la direccin de gi-
ros y valores cambia para Alfredo Deilio en ese nmero, y tres
ejemplares ms adelante queda a cargo de Catalicio Santos, de-
bido al suicidio del anterior administrador Adolfo Tettamani.181
El suicidio de Tettamani ser un duro golpe para el equipo
administrador y as lo expresar;
La fatalidad sin entraas, acaba de arrancarnos trgicamen-
te a uno de los padres de LA TIERRA.
Al que fuera su primer administrador, compaero activo, in-
teligente, joven, generoso, desinteresado y ferviente defensor de las
ideas, aun en casos de peligro, como lo demostr ms de una vez.
Cuando haba que arriesgarse en defensa de nuestra causa,
Adolfo Tettamani no escatimaba esfuerzos, ni daba un paso atrs,
pero frente al amor era un nio desolado (...) Eso precisamente le

178 La Tierra N11 30 de Octubre de 1920


179 La Tierra N12 6 de Noviembre de 1920
180 La Tierra N11 30 de Octubre de 1920
181 La Tierra N14 (20-11-1920) y La Tierra N17 (11-12-1920)

369
Cultura Obrera

ocurri a nuestro amigo, que era demasiado bueno con su gran co-
razn que protestaba frente a todas las injusticias, al extremo de do-
minar su reflexin y le toc la mala suerte de amar demasiado a una
joven de esta ciudad, de carcter completamente distinto al suyo,
cosa que a pesar de sus luchas, l no pudo modificarla y tuvieron que
chocar rompiendo relaciones.
Tal ruptura influenci tanto en el espritu de Adolfo, que el
mircoles ltimo a las cuatro de la maana pona fin a su vida, desce-
rrajndose un tiro de revolver Smit en la sien derecha.
Antes de tomar esa extrema resolucin nos dirigi una breve
carta que fu encontrada en sus ropas y dice textualmente as: Fran-
co Hernandez: Mi debilidad es ms poderosa que la lgica anrquica.
Pido que me perdonen esta nica claudicacin. Adolfo.182
Los diarios El Da de Montevideo y La Nacin de Buenos
Aires, informarn que el suicidio se debi a cuestiones obre-
ras como el fracaso de la huelga general por ngel Gonzlez.
La Batalla de Montevideo lamenta que Tettamani llegue a co-
meter la debilidad de quitarse la vida en estos momentos, preci-
samente, en que se necesitan muchas vidas para esponerlas [sic]
en la lucha decisiva contra este barbaro rgimen burgus y estatal
que nos asfixia.183
Sus compaeros anuncian la prxima edicin de un folleto
con artculos de Tettamani, pero no se lleg a anunciar su efectiva
publicacin.184
Con el cambio de ao se recambia el equipo de redaccin
y se hace el primer llamado de atencin de que el semanario tuvo
ms salidas que entradas en sus balances, habiendo un dficit
de 151 pesos. Los gastos ms grandes siguen siendo el pago al
182 La Tierra N17 11 de Diciembre de 1920
183 La Batalla N187 17 de Diciembre de 1920
184 La Tierra N56 10 de Setiembre de 1921

370
La prensa obrera

tipgrafo (50 pesos), 19 pesos de papel y 16 de repartos. En el


mes de enero las suscripciones, ventas y paqueteros solo produ-
jeron 8 pesos, siendo la mayora de las entradas de donaciones y
prstamos. A su vez, el Comit debe enfrentar tambin el pago de
una cuota mensual de 20 pesos por la compra de la imprenta.185
El grave momento econmico de La Tierra es apoyado
desde Montevideo y Buenos Aires.
La agrupacin comunista anrquica Anselmo Lorenzo de
Picapedreros de Montevideo puso a la venta 1000 bonos de 0,10
pesos para el peridico salteo.
Tambin se destaca la colaboracin del aguerrido gremio
de Chauffers Unidos de Buenos Aires que colabor con 100 pesos
argentinos (40 pesos oro).186
Entre los medios para contrarrestar el dficit se realiza una
rifa de un traje, y una velada realizada en Montevideo a beneficio
del peridico salteo.
La misma se realiz el 19 de Marzo de 1921 en la Casa del
Pueblo, local socialista que era utilizado tambin por los gremios
obreros. Son la infaltable Hijos del Pueblo, se represent una
chistosa comedia titulada La Comedia de hoy de R. Cayol. Se
recitaron poesas y el militante obrero Ricardo Carril dio una con-
ferencia sobre el valor de la prensa Anarquista en el interior y
pint lo enorme y gigantesco que es sostener un peridico en
las campaas, y la necesidad que hay de ayudarlos en todo lo
posible, por ser hoy el foco de la ignorancia, y el resumidero de
los polticos. Luego se represent la comedia de C.I. Paz titulada
La Propia Obra. La velada organizada por el centro Brazo y Ce-
rebro finaliz a las 12 y 30 de la noche y gener un beneficio de
36 pesos.187

185 La Tierra N28 26 de Febrero de 1921


186 La Tierra N21 8 de Enero de 1921
187 La Tierra N34 11 de Abril de 1921

371
Cultura Obrera

El crtico momento econmico es sobrellevado por la ayu-


da externa y el esfuerzo de los militantes que obtienen 42 suscrip-
ciones nuevas, la mayora de ellas en la localidad y la campaa.
Mientras el centro Ciencia y Vida y el gremio de choferes propo-
nen que La Tierra no vuelva a salir hasta que se salde el dficit,
los tipgrafos se proponen para hacerse cargo de la impresin del
mismo y no tener que pagar a un obrero por el trabajo, el comit
convoca a una asamblea de gremios para que se resuelva que
hacer188, a la vez que se pone a la venta una rifa de 500 nmeros
a 0,10 pesos por un reloj nickel con esfera luminosa y una pistola
Lafusset de dos tiros.189
Para febrero se cuentan 262 suscripciones mensuales, el
tipgrafo cobra 34 pesos y el cobrador se lleva el 15% de las sus-
cripciones.190
Ms all de los vaivenes econmicos el peridico logr so-
breponerse y editar una edicin especial para el primero de Mayo
de 1921 con ms pginas y varios colaboradores especiales.
Pero el problema sigue latente y los Carpinteros propo-
nen pagar el dficit de una sola vez dividiendo el gasto en partes
iguales entre todos los gremios a excepcin de los recientemen-
te afiliados. La propuesta es aceptada por todos los gremios a
excepcin del de Picapedreros, que seala que solo aceptara si
La Tierra pasa a ser administrada por la Federacin Obrera Lo-
cal. El pedido de los picapedreros no es casual, a su frente se en-
contraba Adolfo Plaza, que haca poco haba editado el peridico
El Sindicalista y anteriormente Vida Obrera, para contrarrestar
la prdica anarquista de La Tierra, llevando el peridico a la rbita
de la F.O.L. podra intentar combatir su tendencia ideolgica,191
188 La Tierra N29 (6 de Marzo de 1921), La Tierra N32 (26-03-1921) La Tierra N35
(16-04-1921)
189 La Tierra N43 11 de Junio de 1921
190 La Tierra N40 21 de Mayo de 1921
191 La Tierra N39 (15-05-1921) y La Tierra N41 (28-05-1921)

372
La prensa obrera

sin duda el periodo de las intrigas obreras ya haba comenzado.


Ante la propuesta de Adolfo Plaza desde La Tierra se sacan
a relucir las actas del Comit Pro Imprenta, que en la N1 seala
que tendrn derecho a usar de ellas las instituciones obreras o
anarquistas siempre que sea para propaganda en defensa de la
clase proletaria y oprimida. Tambin las actas 7, 20 y 22 las que
sealan que por unanimidad de votos la orientacin del peridico
sea comunista anrquica. Y a su vez, argumentan que desde mar-
zo el peridico vive con medios propios sin ayuda de instituciones
obreras o anarquistas, por lo cual si la F.O.L. quiere podra sacar
un peridico propio pero que La Tierra es de los obreros que
aman el comunismo anrquico sealan los editores.
Los gremios sastres y albailes se pronuncian a favor de la
orientacin del peridico y desestiman a Plaza.192
El tema contina por algunas semanas ms, pero se argu-
menta que pasando La Tierra a la rbita de la F.O.L. se deja afuera
del mismo al centro Ciencia y Vida, Tierra Libre, y al gremio de
Constructores Navales y Albailes que no estn adheridos, y que
la F.O.L. no es anarquista y no puede por tanto sacar peridico
con dicha orientacin.193
Mantenido el peridico en la rbita del Comit pro Im-
prenta, los problemas econmicos continan.
Las entradas de dinero son en base a las suscripciones
(300 en Mayo, 350 en Junio, 300 en Julio, 200 en Agosto y 250
en Setiembre),194 en base al apoyo de Montevideo (34 pesos
de la rifa de picapedreros de Montevideo195), en Julio se inicia
una rifa para La Tierra desde Montevideo196 y hay un agente de
192 La Tierra N43 11 de Junio de 1921
193 La Tierra N48 16 de Julio de 1921
194 La Tierra N49 (23-07-1921), La Tierra N53 (20-08-1921), La Tierra N58 (25-09-
1921), La Tierra N62 (22-10-1921) y La Tierra N65 (11-11-1921) respectivamente.
195 La Tierra N58 24 de Setiembre de 1921
196 La Tierra N50 30 de Julio de 1921

373
Cultura Obrera

distribucin en la capital vendindose en varios kioskos (Papacito,


Plaza Independencia, Reducto) y en la secretara de los obreros
albailes.197 Tambin se mantiene la agencia en Concordia.198
Otra forma de financiacin es la impresin de manifiestos
para los gremios que aport 11 pesos solo en Junio (Centro Fe-
menino, albailes, carpinteros, Tierra Libre, entre otros).199
El aporte de los gremios y centros tambin es importante,
en Mayo se reciben 20 pesos del centro Ciencia y Vida y en Junio
15 de los Sastres200 y en Setiembre se reciben 10 pesos de La Voz
del Chauffer de Buenos Aires.201
Pero a pesar de las colaboraciones el dficit vuelve a au-
mentar. En Junio de 1921 era de 65 pesos, en Julio 70, en Agosto
a pesar de obtener 40 pesos de una rifa y recibir 9 pesos de Bue-
nos Aires y 5 de Montevideo, el dficit sube a 86 pesos202 y en
Setiembre a 91.
El asunto se hace insostenible y el 26 de Octubre el re-
dactor y administrador del peridico presentan su renuncia in-
declinable ya que se sienten cansados y enfermos del esfuerzo
realizado, Anselmo Gamarra es designado para la tarea, pero
renuncia por ser insostenible el dficit existente, el tipgrafo
a cargo denuncia que se le debe 44 pesos y que publicar un
manifiesto denunciando al administrador que prometi pagarle
de su bolsillo. El 31 de Octubre se realiza una importante reu-
nin donde se reestructurar la organizacin del peridico para
siempre y finalmente Anselmo Gamarra quedar al frente del
mismo. El Comit pro imprenta entrega la gestin del peridico

197 La Tierra N46 2 de Julio de 1921


198 La Tierra N50 30 de Julio de 1921
199 La Tierra N53 20 de Agosto de 1921
200 Idem.
201 La Tierra N65 11 de Noviembre de 1921
202 La Tierra N62 22 de Octubre de 1921

374
La prensa obrera

a el colectivo La Tierra formado para tal finalidad, se dividi


la ciudad en secciones para hacer ms fcil la cobranza que
ahora la harn los militantes desinteresadamente, al igual que
el trabajo de impresin que se har como labor de militancia y
ya no se pagar un sueldo por ello.203
As comienza una nueva etapa de La Tierra, con el mo-
vimiento gremial ya un tanto decado. La nueva administracin
con trabajo militante logra reducir los gastos del peridico a 20
pesos mensuales, pero an se adeuda el sueldo del tipgrafo,
el antiguo administrador pone a rifar su reloj de plata para po-
der abonarle pero dicha rifa no obtiene el resultado esperado,
por lo cual el tipgrafo demanda a La Tierra y plantea el con-
flicto al gremio de tipgrafos, pero stos no lo respaldan y la
actual administracin del peridico tampoco se hace cargo de
la deuda ya que la considera un problema de la administracin
anterior.204
No sabemos como se resolvi el conflicto con el tipgra-
fo, pero La Tierra sobrevivi al asunto y para diciembre contaba
con 150 suscripciones y los mayores costos son en la alimenta-
cin de los obreros que trabajan en la imprenta ascendiendo a
14 pesos en Diciembre.205
Consolidada la divisin obrera tanto en Montevideo,
Buenos Aires como tambin en Salto, el 29 de Marzo de
1922 el colectivo editor La Tierra se disuelve y el peridico
ser simplemente una publicacin anarquista, sostenida,
auspiciada y propagada por la colectividad anarquista del
Salto, sin distincin de agrupaciones, centros, etc. etc.206
Quiz a partir de esta fecha entonces, La Tierra deje de ser un

203 La Tierra N62(22-10-1921) y La Tierra N64 (7-11-1921)


204 La Tierra N66 (19-11-1921) y La Tierra N67 (26-11-1921)
205 La Tierra N76 28 de Enero de 1922
206 La Tierra N85 1 de Abril de 1922

375
Cultura Obrera

peridico obrero y pase a ser un peridico obrerista, siguiendo


al frente del mismo Anselmo Gamarra.
Pero a partir de Mayo hay nuevos cambios, la adminis-
tracin pasa a estar a nombre de Arturo Lleme y el peridico es
confeccionado por Elvia Gonzlez, A. Gamarra, A. Sosa y Mario
O. Herrera, quienes son principiantes en el arte tipogrfico. Los
giros van a nombre de Arnaldo Sosa y luego a Valeriano Nuez,
a su vez el peridico se adhiere a la Alianza Anarquista Interna-
cional.207
El peridico parece tener un repunte en este periodo,
para Mayo se cuentan 190 suscripciones y se logran disminuir
los costos, siendo los mayores la compra del papel (20 pesos de
un total de 85), 14 pesos de alquiler y 27 pesos de comida del
personal. Las entradas son bsicamente las suscripciones (170
en Julio) y ventas.208
Para mediados de 1922 el peridico tiene un importan-
te reconocimiento internacional realizando intercambios con
los peridicos de Montevideo como El Hombre y Trabajo, de
Buenos Aires La Protesta, La Antorcha y Revista Obrera, y re-
cibiendo publicaciones de Francia, Espaa, Inglaterra, Mexico,
Alemania, Italia, Estados Unidos, Cuba, Blgica, Portugal, Brasil,
Chile, Ecuador, Paraguay, Per y hasta de Egipto.209
En Octubre de 1922, luego de ms de dos aos de edi-
cin, por primera vez La Tierra deja de salir por una semana, la
causa es el traslado de la maquina al nuevo local social ubicado
en la calle Osomani y Llerena N356.
Para estas fechas tambin se ve un claro descenso de
la actividad del peridico, existiendo cierta inestabilidad, para
julio se cuentan solo 26 suscripciones y para agosto salta a
207 La Tierra N90 (8-05-1922) La Tierra N94 (3-06-1922), La Tierra N95 (10-06-
1922), La Tierra N96 (17-06-1922), La Tierra N101 (27-07-1922)
208 La Tierra N91 (13-05-1922) y La Tierra N101 (27-07-1922)
209 La Tierra N94 (3 -06-1922) La Tierra N112 (14-10-1922)

376
La prensa obrera

103, existiendo un dficit de 9 pesos que va creciendo hasta


llegar rpidamente a 30 pesos en pocas semanas y a 44 en
Setiembre,210 siendo los principales gastos el papel, el alquiler
del local y la comida de los obreros que imprimen el peridico.
La solidaridad sigue siendo un sostn importante y la
agrupacin anarquista Aurora Libertaria de Buenos Aires
organiza una velada el 14 de Octubre a beneficio de la revista
La Social y La Tierra de Salto, donde se interpret la obra La
Madre eterna de I. Iglesias, y Jorge Rey dio una conferencia.211
Comenzado el ao 1923 el peridico encuentra cierta es-
tabilidad econmica logrando no generar dficit, aunque man-
tiene unos 14 pesos debido bsicamente al pago del alquiler
del local.212
Comienza por estas fechas a instalarse definitivamente
en las pginas de La Tierra la seccin literaria que acompaar
al peridico hasta sus ltimas ediciones, y que viene a suplan-
tar, sin quererlo, el espacio vaco dejado por las actividades
gremiales que empiezan a escasear.
La direccin de los giros y valores ir cambiando cons-
tantemente, Evaristo Amarillo en Enero,213 Atilio Masarino en
Febrero,214 Arminio Caccia en Marzo215, Arnaldo Morelli en Julio.216
El peridico no est en su mejor momento, pero a pesar
de eso el esfuerzo por mantenerlo es constante, en Febrero se
puede leer en sus pginas Suena por ahi (...) que La Tierra
se muere. (...) no se dan cuenta que nosotros los obreros

210 La Tierra N111 7 de Octubre de 1922


211 La Protesta (Buenos Aires) 14 de Octubre de 1922
212 La Tierra N133 10 de Marzo de 1923
213 La Tierra N125 13 de Enero de 1923
214 La Tierra N129 10 de Febrero de 1923
215 La Tierra N136 31 de Marzo de 1923
216 La Tierra N151 28 de Julio de 1923

377
Cultura Obrera

conscientes, los que no estamos como estn ellos, conformes


con este maldito rgimen, no permitiremos que La Tierra
muera mientras tengamos un tomo de vida.217
A pesar no estar en un gran momento el peridico se
permite hacer una edicin especial para el primero de Mayo
con fotos de Bakunin, Kropotkin y Zola, con 6 pginas (dos ms
que las habituales) y con algunas paginas en impresas en tinta
roja.218
Pero la edicin especial cost caro y la siguiente edicin
se salte una semana, esta vez sin explicacin. El dficit del
peridico por estas fechas ronda los 26 pesos.219 Y nuevamente
encuentra problemas para salir a la calle saltendose dos se-
manas en Junio.
El momento es difcil y se exige ms compromiso a los
paqueteros; Nuestra prensa pasa por un momento crtico
debido a los paqueteros morosos que la ponen en grave peligro
de suspensin.220
A mediados de 1923 el dficit ronda los 30 pesos, la can-
tidad de suscriptos oscila entre 40 y 65 segn el mes221, se ven-
den bonos solidarios se hacen colaboraciones personales, pero
la situacin parece ser crtica, segn las palabras publicadas por
La Tierra al comenzar Setiembre; A los cuadros filodramticos de
Montevideo y Buenos Aires. Compaeros muere nuestro periodi-
quito, se apaga la lucesita que la hemos cuidado y defendido mu-
cho, tres aos compaeros que le hemos dado nuestro esfuerzo
y energa, pero hoy ya es imposible, nuestro campo es rido, nos
encontramos solos en esta inmensa pampa de granito, y no hay
217 La Tierra N129 10 de Febrero de 1923
218 La Tierra N139 28 de Abril de 1923
219 La Tierra N144 9 de Junio de 1923
220 La Tierra N148 7 de Julio de 1923
221 La Tierra N148 (7-07-1923), La Tierra N152 (4-08-1923), La Tierra N157 (15-
09-1923), La Tierra N159 (6-10-1923)

378
La prensa obrera

salida solamente la muerte nos espera para robarnos lo que mas


queremos, nuestro hijo espiritual, nuestra hojita compaeros.222
En Setiembre nuevamente el peridico encuentra dificul-
tades para salir y se saltea una semana, y luego en Octubre se
saltea dos semanas. La situacin se prolonga hasta fin de ao,
entre octubre y diciembre el peridico no lograr publicarse se-
manalmente, sino quincenalmente.223
Al finalizar el ao la situacin es similar, unos sesenta sus-
criptores, un dficit de 30 pesos224, pero las pginas se empiezan
a llenar de crnicas internacionales a falta de informacin local en
un movimiento que muestra claros signos de decaimiento.
Igualmente el peridico logra sostenerse, el financia-
miento es apoyado con actividades, como el nico pic nic de
la temporada 1924 realizado el 24 de Febrero en el que se ob-
tuvieron 25 pesos, o la velada realizada en el Teatro Edn de
la Villa del Cerro (Montevideo) el 22 de Marzo, organizada por
las agrupaciones Sembrando Ideas, Armona y Acracia, para la
cual se vendieron 150 entradas de hombre, 45 para mujeres, y
10 palcos (unas 205 personas), dividindose las ganancias entre
la revista anarquista El Hombre de Montevideo y La Tierra de
Salto (10,40 para cada uno).225
Los balances de Marzo de 1924 en adelante son similares,
50 suscripciones en marzo, 42 en abril, 32 en mayo, 21 en junio,
41 en julio, 29 en agosto y 72 en Setiembre. En Abril el peridi-
co demor tres semanas en poder salir y en julio se salte una
semana. El llamado realizado en Setiembre por el paquetero
de Montevideo, parece haber dado efecto, en el mismo sealaba
que Teniendo por descontada la aceptacin y simpata entre los

222 La Tierra N156 1 de Setiembre de 1923


223 Ver Nms. 158 a 164
224 La Tierra N169 (12-01-1924) y La Tierra N179 (22-03-1924)
225 La Tierra N181 21 de Abril de 1921

379
Cultura Obrera

camaradas lectores y suscriptores de La Tierra en Montevideo,


y pasando el peridico por uno de los momentos mas difciles de
su existencia, es que exhorto a los camaradas morosos, quieran
si pueden ponerse al da con el semanario. 226 Al poco tiempo
se recibieron 17 pesos de Montevideo y para el mes de octubre
parece que se logr matar el dficit y estabilizar la economa del
peridico. 227
Pero la estabilizacin econmica parece haberse dado sal-
teando dos ediciones semanales lo cual redujo los costos de este
mes a la mitad. Los pic nics de Noviembre y Diciembre tambin
ayudaron a la subsistencia del semanario crata.
Al comenzar el ao 1925, un nuevo problema se suma a
la vida del semanario, la mquina que se utiliza para imprimirla
muestra claros signos de desgaste y se necesita la compra de ti-
pos nuevos y no hay dinero para ello.228
El apoyo desde Montevideo fue constante para el sosteni-
miento de La Tierra, as el 15 de Febrero se realiza un pic nic en el
Prado de Montevideo cuyo beneficio va en partes iguales para el
Comit Pro Presos, el peridico Solidaridad de la F.O.R.U. y para
La Tierra de Salto.229 El programa es variado como de costumbre;
Buffet, bazar rifa, asado a la criolla, hamacas, trapecios, carreras
para hombres, seoritas y rengos, correo tortuga, piatas y ca-
ricaturas. Orquesta y cantos. El pic nic fue considerado todo un
xito moral y material por Solidaridad de Montevideo230 y dio
un beneficio de 83,34, correspondiendo 27,78 para La Tierra.231
226 La Tierra N199 20 de Setiembre de 1924
227 La Tierra N182 (27-04-1924), La Tierra N189 (14-06-1924), La Tierra N194 (9-
08-1924), La Tierra N197 (31-08-1924), La Tierra N202 (25-10-1924)
228 La Tierra N212 31 de Mayo de 1925
229 La Tierra N213 7 de Julio de 1925. Ver tambin Solidaridad (Montevideo) N6 1
Febrero de 1925.
230 Solidaridad N7 15 de Febrero de 1925
231 Solidaridad N8 3 de Marzo de 1925

380
La prensa obrera

Y es que desde Montevideo se consideraba a La Tierra


como uno de los bastiones de propaganda forista en el Uruguay,
en ocasin del informe presentado por la F.O.R.U. al segundo con-
greso de la A.I.T. en Insbruk (Austria) se sealaba Actualmente
la FORU edita su rgano oficial SOLIDARIDAD y adems cuenta
con otras publicaciones anarquistas que sostienen sus principios
y finalidad; entre ellos Tierra, peridico anarquista que aparece
semanalmente en la ciudad del Salto, El Sembrador que apare-
ce mensual en Montevideo y la revista Ahora!. Adems, se pu-
blican mensualmente Hacia la Libertad, rgano del S. nico del
Automvil y El Obrero Gastronmico rgano de la Federacin
Gastronmica.232
Los esfuerzos son grandes y el peridico logra subsistir a pe-
sar de todo el decaimiento generalizado del movimiento. La primer
poca de este singular semanario de propaganda obrera del inte-
rior no logr sobrevivir al ao 1925 no llegando a cumplir su quinto
aniversario, luego de la edicin 215, se demor tres semanas en sa-
lir la siguiente, y dos semanas ms la otra, y nuevamente a las dos
semanas sali el nmero 218. En el se pueden leer las siguientes
palabras; Un peridico anarquista, es una luz radiante de fulgores
en la obscura noche de la Ignorancia. En sus hojas se vuelcan las
ideas de cerebros sanos, de corazones nobles. Es el ltigo que fus-
tiga implacable la prepotencia de los tiranos. Es la tribuna donde
se le expone al pueblo las ideas de amor y de justicia, diseando
una sociedad de hombres libres; una sociedad donde el hombre sea
hermano del hombre (...) Y esta luz est prxima a apagarse por la
inconsecuencia de los paqueteros del exterior y de muchos subs-
criptores de todas partes que pudiendo abonar su cuota mensual,
no lo hacen, creando con su actitud una situacin por dems crtica
para la salida normal del semanario.233

232 Solidaridad N7 15 de Febrero de 1925


233 La Tierra N218 20 de Abril de 1925

381
Cultura Obrera

Si bien el siguiente nmero logr salir casi a una semana


del anterior, el siguiente, se demorar seis semanas en salir, y ser
el ltimo de esta etapa. El motivo principal por el que deja de
publicarse parece ser el mal estado de la maquinaria;
A ningn camarada que lea sta hojita, se le ha de pasar
desapercibido la necesidad que hay de renovar el material tipo-
grfico con que se viene confeccionando La Tierra. Para recabar
fondos se han puesto varias listas de suscripcin voluntaria. Urge,
pues, que los que estn dotados de buena voluntad, se apresuren
a contribuir en la medida de sus fuerzas; siendo para un fin tan
elevado, es que llamamos la atencin de los simpatizantes de la
Anarqua. Un empujn ms, compaeros y tendremos tipos nue-
vos para seguir tirando piedras a las instituciones burguesas, y
sembrar ideas en el surco del pueblo.234
Sin embargo esa no fue la muerte de La Tierra. Fue el fin
de un ciclo, el impulso del movimiento en los agitados aos de
1917 a 1920 la haba gestado como una necesidad y desde la ciu-
dad de Salto se desarroll uno de los focos ms importantes de
agitacin obrera del interior del Uruguay del perodo. El impulso
se acab y las aguas ese impulso llegaron hasta Julio de 1925.
Pero la ola que se seca en la orilla y retrotrae, cobra impul-
so y retorna con mayor o menor fuerza.
El impulso de esa ola que vena desde Rusia fortalecida e
impulsada por Europa y la vecina Argentina no parece poder igua-
larse fcilmente.
Pero igualmente La Tierra resurge en los aos treinta, con me-
nor vigor, como resurge el movimiento anarquista y ciertas prcticas
de accin directa como el sindicato de artes grficas en Montevideo.
La crisis econmica, los militantes que huyeron del fusi-
lamiento en la dictadura argentina de Uriburu, la experiencia
adquirida y la creciente simpata del gobierno hacia el fascismo

234 La Tierra N220 5 de Julio de 1925

382
La prensa obrera

como prctica poltica, manifiestan un movimiento que intenta


revitalizarse sobreponindose a las situaciones adversas.
En Salto, la vieja minerva que imprima La Tierra estuvo
activa hasta 1929, pero la agrupacin La Tierra sigui existiendo
(auspiciando por ejemplo la gira de Francisco Carreo en Octu-
bre de 1931).
En Enero de 1932 La Tierra vuelve a salir a la calle mante-
niendo el logo y diseo original. Dentro de los militantes que lo
animan podemos reconocer a Colman y Catalicio Santos que ya
participaba en la poca anterior.
El hecho de que el peridico presente como segunda
poca nos hace pensar que no salieron ms ediciones luego de
aquella de Julio de 1925 en que se anunci el fin de una poca. El
precio del peridico tambin se mantiene igual, 0,05 el ejemplar
y 0,20 la suscripcin mensual.
"Trabajadores! Aqu estoy nuevamente entre vosotros. Un
grupo de abnegados compaeros, juzg indispensable mi presen-
cia entre vosotros; para orientar con la luz de la verdad el camino
de la libertad, el de nuestra emancipacin en general. Sin duda
todava no me olvidasteis del todo debis tener algn recuerdo
mio... Pues bien yo soy LA TIERRA rgano semanario comunista
anrquico235
Dos aos y cuatro meses sin que t, minerva amiga, ha-
blases con tu voz de plomo y antimonio de los tipos, a esas pgi-
nas blancas, tersas, del papel de imprenta prontas para ser fecun-
dadas con la palabra pujante, del verbo de amor: La anarqua.236
La mencin del uso de la minerva deja abierta la posibili-
dad de que se hayan publicado algunos ejemplares ms despus
de 1925. Pero tambin pudo haber sido utilizada en la impresin
de manifiestos y afiches, cuestin que no queda aclarada.

235 La Tierra N1 (Segunda poca) 2 de Noviembre de 1932 (Ayudate a t mismo)


236 La Tierra N1 (Segunda Epoca) 2 de Noviembre de 1932 (Segunda poca)

383
Cultura Obrera

En la Biblioteca Nacional de Montevideo se conserva


hasta el ejemplar N39 de esta segunda poca, que se extiende
entonces de enero a octubre de 1932. Sin embargo en el Insti-
tuto Internacional de Historia Social de Amsterdam se conser-
van 27 ejemplares ms. Solo cuatro parecen pertenecer a esta
segunda poca.
La numeracin de esos cuatro ejemplares es particular.
El primer ejemplar es el nmero 45 del 13 de Noviembre
de 1932, que dista a seis semanas y seis ediciones, de la ltima
ubicada en la Biblioteca Nacional del 2 de Octubre de 1932, por
lo cual podemos ver que el peridico se sigui editando regu-
larmente. El siguiente ejemplar disponible en Amsterdam es el
N47, fechado el 2 de Noviembre de 1932, el cual si considera-
mos que hubo un error y en vez de Noviembre dijera Diciembre,
la regularidad sigue siendo efectiva.237
Pero el tercer ejemplar aparece sin numerar, estando fe-
chado el 14 de Enero de 1933. Si suponemos que se sigui edi-
tando semanalmente ese debera ser el N53, pero el siguiente
ejemplar es el N289 del 1 de Febrero de 1933.
Como es evidente que no se editaron 235 ejemplares en
quince das, y dado que no se trata de un error ya que esa nu-
meracin se mantuvo en las ediciones siguientes, vemos que
claramente se pretendi enunciar una continuidad con la poca
anterior y envolver a la publicacin del mrito de haber sobre-
vivido tantas ediciones.
Suponiendo que La Tierra se edit semanalmente sin inte-
rrupciones en esta segunda poca, este ejemplar sera el nmero
56. Si sumamos los 221 ejemplares de la primer poca a estos 56
ejemplares la suma nos da 276 y no 289, como aparece numerada
esa edicin, lo cual nos indica que, o hay un error de conteo de los
237 Era un error muy comn, ya que muchas veces se mantena el formato anterior y
se cambiaban las palabras, olvidar corregir el nombre del mes o el ao al cambiar
el mismo.

384
La prensa obrera

editores, o ms probablemente, existieron otros 12 nmeros que


no conocemos entre Julio de 1925 y Enero de 1932.
De la edicin N289, la coleccin existente en Amsterdam
salta al N307, pero con la salvedad de que este se edita el 3 de Ju-
lio de 1937. Es decir que se trata de una nueva poca de La Tierra.
Sabemos que el ejemplar 307 es el primero de esa tercer
poca, as que habran salido unos 17 ejemplares ms desde el
ltimo conservado en Amsterdam del 1 Febrero de 1933. La
periodicidad semanal parece haberse interrumpido, ya que un
catalogo de las publicaciones existentes en la extinta Biblioteca
y Archivo Internacional Anarquista238 de Montevideo se mencio-
na la existencia de ejemplares de la segunda poca de La Tierra
desde 1932 hasta 1934.239
En esta tercer poca se presentan as; Para la mayora de
nuestros compaeros el recibo de este nmero de LA TIERRA, ser
quizs una sorpresa. En primer lugar por su reaparicin despus
de largo y forzado eclipse. Luego por su presentacin tipogrfi-
ca que reputarn enteramente distinta. (...) Sucede lo siguiente:
recordarn los compaeros la campaa purificadora que, hace
unos aos atrs, llevamos contra los Cuncn y Cia. Campaa que
nos vali la simpata de todos. A pesar de que nosotros nos opu-
simos terminantemente a ello, varias personas, bajo su propia
238 International Institute of Social History, Uruguay (1905-1997) Documentation.
La B.A.I.A. fue fundada el 28 de Octubre de 1950 en Montevideo, a raz de la reco-
mendacin del Congreso Internacional Anarquista celebrado en Paris en Noviem-
bre de 1948 de crear un archivo de dichas caractersticas, siendo su secretario en
un comienzo el humanista rumano Eugen Relgis residente en Montevideo. (Bo-
letn N5, S/d. En Archivo Ugo Fedelli, IISG). Relgis era un anarquista cercano a la
F.O.R.U., y se consider el Uruguay un lugar propicio para establecer el Archivo que
cont con importantes colaboraciones de material. En los aos 60 pas a la rbita
de la F.A.U. (Federacin Anarquista Uruguaya), pero lamentablemente el mismo se
perdi en manos de la represin en la dictadura cvico militar de 1973-1985.
239 En el Boletn de la Biblioteca y Archivo Internacional Anarquista se menciona la
donacin de 81 peridicos por parte de Tettamani, el militante anarquista salteo
hermano del difunto administrador del peridico. (Boletn N5, S/d. En Archivo
Ugo Fedelli, IISG)

385
Cultura Obrera

responsabilidad, iniciaron una suscripcin para, con el importe


renovar los tipos de nuestra imprenta. Y con tal fin se nos entreg
en total $50.
Desconocemos la mencionada campaa, pero parece indi-
car que ms all de la edicin o no del peridico el ncleo anarquis-
ta de La Tierra sigui activo esos aos. Esta nueva edicin encuen-
tra un movimiento ya muy mermado, pero plantea claramente sus
objetivos por unanimidad en dos asambleas consecutivas.
Estos son, adems de la propaganda de las ideas anarquis-
tas, los siguientes:
1 Aclarar la situacin espaola en lo que se refiere a la
participacin descollante y decisiva del Anarquismo y del Anarco-
Sindicalismo en su lucha contra el fascismo y por la realizacin de la
Revolucin Social. (...)
2 Aclarar y denunciar la falsa, juestica y criminal actuacin
del Comunismo presentndolo tal cual es, (...) una corriente libertici-
da, antirrevolucionaria y en el fondo netamente fascista ya que todos
sus esfuerzos-no declarados- tienden a sujetar el hombre al estado.240
Lo cierto es que la informacin sobre la situacin en Es-
paa parece ocupar la gran mayora de las pginas del peridico,
nmero a nmero, intercaladas por algunas notas locales en un
contexto regional muy adverso por las dictaduras.
Esta tercer poca de La Tierra edit 23 ejemplares sema-
nalmente, saltndose solo una semana en su ltimo ejemplar,
desde Julio de 1937 hasta Febrero de 1938.
En la edicin nmero 336 sealaban;
LA TIERRA hace un pausa.
Como no nos ha sido posible hallar una solucin a las dificul-
tades que traban la normal aparicin de esta hoja, nos vemos obliga-
dos a suspender la salida de La Tierra.
240 La Tierra N311 5 de Agosto de 1937. Las negritas son del original

386
La prensa obrera

Es preciso decir que quienes-sobran dedos de una mano para


contarlos- la han estado hacindola en todos sus aspectos, no son del
oficio; y lo que uno de ste hara en un da, a nosotros nos costaba
por lo menos cuatro o cinco. Y eso, abandonando toda otra ocupa-
cin personal, y dedicando todas las horas exclusivamente a esa ta-
rea. Tan absorbente sta ha sido, que hasta la propia resistencia fsica
ha sido toda en quebranto de la salud (...) De ah, pues, que abramos
un parntesis. (...)
Veremos si durante la obligada pausa, es posible basamentar
la obra en fundamentos tan slidos que aseguren una vida larga y
normal y eviten interrupciones forzosas como la actual.
Hasta entonces, a todos: Salud.241
Ese es el ltimo ejemplar del que tenemos conocimiento
de La Tierra, que sin duda recorri una de las trayectorias ms
largas de los peridicos obreros de interior y quizs la ms impor-
tante de los peridicos anarquistas del interior del Uruguay.

b) Trabajo

De la experiencia del peridico Trabajo de Rocha tenemos


mucha menos informacin. La primer salvedad es que notoria-
mente su existencia fue mucho ms breve que La Tierra impri-
miendo solo 28 ejemplares en un lapso de poco ms de un ao.
Trabajo es claramente un peridico obrero, es el rgano de
la Federacin Obrera Rochense y su primer ejemplar se edita en la
fecha emblemtica del 1 de Mayo de 1920, publicando la foto con
los rostros de los Mrtires de Chicago en su primer pgina.
En su presentacin de la primer edicin sealan;
Venimos a la palestra a luchar por los intereses proletarios;
he ah nuestro programa periodstico; amplio, demasiado amplio. -No

241 La Tierra N336 2 de Febrero de 1938

387
Cultura Obrera

perderemos el tiempo en ocuparnos de los polticos burgueses, de-


masiados tenemos que hacer en bien de los humildes hijos del pueblo
para que malgastemos energas defendiendo polticos que sobrepo-
nen a toda conciencia colectiva, los intereses creados por sus bastardas
ambiciones; mientras nosotros luchamos tesoneros por nuestras rei-
vindicaciones legtimas, ellos pasan su vida parasitaria en ricos festines,
ahogando sus pestilentes abruptos con el ruido de la orga.
Defendernos de la rapia patronal, defendernos de la guerra
injusta que nos declara el capital, defender nuestros derechos, los de
nuestras madres y nuestros hijos, he ah nuestra misin periodstica.
No declaramos guerra a nadie; pero nos defendemos de los
zarpasos que desde la sombra nos arrojan los poderosos.
Por el obrero y para el obrero, he ah nuestra divisa.
El porvenir es claro; el triunfo ser de los humildes que siem-
pre fueron los esclavos de las imposiciones patronales.
Auroras rojas se vislumbran en el horizonte y los aires de la
marsellesa, recorren triunfales por todos los mbitos del mundo.- Ade-
lante!!
TRABAJO, aunque pequeo por los recursos materiales con
que cuenta, ser fiel portavoz de los intereses generales del proleta-
riado rochense. Nada ms prometemos242
La periodicidad de Trabajo es quincenal, apareciendo los 1
y 15 de cada mes, su costo es de $0,10, que luego se ajustar a 0,05
(igual que La Tierra, por ejemplo), 0,10 el nmero atrasado, 0,10 la
suscripcin mensual en la ciudad de Rocha y 0,15 en la campaa.243
La redaccin y administracin es en la calle Piedras 151, su adminis-
trador Manuel San Martn y se imprime en los talleres Juventud.244

242 Trabajo N1 Mayo 1920


243 Trabajo N4 15 de Mayo [Junio] de 1920
244 Idem.

388
La prensa obrera

Como forma de financiamiento Trabajo ofrece la particula-


ridad de que, de sus cuatro pginas, una es dedicada enteramen-
te a la propaganda comercial, en general pequeos talleres.245
A partir de Setiembre, a su vez, desde la Federacin Obrera
Rochense comienza una iniciativa a travs de la compra de accio-
nes reembolsables por sorteo para comprar una imprenta propia,
la cual no parece haber prosperado.246
El primer ejemplar de Trabajo tuvo una tirada de 700
ejemplares y el segundo aument a 800 contando con agentes
en Lascano y Castillos.247
En Trabajo confluyen, como ya se ha sealado, varias ten-
dencias ideolgicas y eso se ve en el interior de sus pginas don-
de conviven artculos que cuestionan la gestin del consejo admi-
nistrativo y aquellos que cuestionan toda la organizacin social.
La Federacin Rochense muestra una buena actividad
en el comienzo de la edicin de Trabajo y en su mesa de lectura
pueden encontrarse las siguientes publicaciones; La Democracia,
Revista Rochense, Diario de Rocha, El Departamento, El Derecho,
andubay, El Negro Simn, La Palabra, Juventud, El Lascanen-
se, La Idea, Emancipacin, El Obrero en Calzado, Solidaridad (de
Montevideo) y El Obrero (de Melo).248
A partir de la edicin N5 de final de Junio hay una mejora
en la calidad grfica de Trabajo debido a que cambiaron de taller
245 En su primer ejemplar publican; el almacn, ferretera y molino del Pueblo, la
zapatera de Horacio Revelz, Casa Centanni (sombrera y tintorera), Casa Diez
(calzados, sombreros, camisas, etc), Taller de confecciones, tienda almacn y fe-
rretera La sin Rival, Casa Palma (tienda), almacn de comestibles y ferretera
Lorenzo Ganella, Case G. Caruso Schiavo (nafta y aceites para motor), Carlos N.
Rocha distribuye el Diccionario Enciclopdico Hispano Americano, Jos Balaguez
(hijo) ofrece blanqueos y pinturas a buen precio, Jos Isaurralde ofrece prolijas
encuadernaciones y Ramn N. Schiavo ofrece trabajos de tapicera y talabartera a
precios reducidos. (Trabajo N4 15 de Mayo [Junio] de 1920)
246 Trabajo N10 15 de Setiembre de 1920
247 Trabajo N2 15 de Mayo de 1920
248 Trabajo N3 30 de Mayo de 1920

389
Cultura Obrera

impresor, pasndose a imprimir en los talleres La Palabra.249


Esto les vali una demanda de Javeri J. Ramela, director
del peridico Juventud y propietario de los talleres tipogrficos
donde se imprima originalmente Trabajo, por supuesta violacin
del compromiso contrado.
Los obreros de Trabajo denuncian que Ramela nunca cum-
pla con los plazos y el tiraje prometido, agregando que El pe-
ridico que impriman los talleres de Ramela eran una verdadera
inmundicia, sucio, mal correjido, cosa que podemos poner de ma-
nifiesto con ejemplares a la vista; por esa causa fu que la comi-
sin de prensa resolvi contratar con otros talleres la impresin,
dndole aviso con 15 DIAS de anticipacin.250
En Setiembre Trabajo se jactaba de las simpatas que con-
taba entre el elemento obrero sealando han llegado hasta no-
sotros muchas palabras de aliento y la circulacin de TRABAJO po-
demos decirle sin jactancia es superior a la de cualquier peridico
local, cualquiera puede controlarlo.251
A partir de fines de Octubre los cambios se precipitarn,
por un lado el tipgrafo Marchand, el 16 de Octubre presenta
su renuncia en una carta abierta a los compaeros de la F.O.R.;
Camaradas: razones muy poderosas, me alejan del puesto
de combate que los obreros federados me confiaron cuando resol-
vieron editar TRABAJO; puesto de combate que bien pudo ser su-
perior a sus fuerzas, pero que confiado en la santidad de la causa
que defendamos, trat de desempear de la mejor manera, su-
pliendo la falta de slida preparacin, con los muchos entusiasmos
y la mucha sinceridad que en todo momento han sido mi norma de
combate.

249 Trabajo N5 30 de Junio de 1920


250 Trabajo N9 30 Agosto de 1920
251 Trabajo N10 15 de Setiembre de 1920

390
La prensa obrera

Razones de salud, me apartan por completo de la mayor


parte de la Vida activa; no puedo seguir afrontando responsabili-
dades y por eso abandono el puesto que me habis confiado en la
redaccin de TRABAJO.
Camaradas de la F.O.R. y de Comisin de Prensa salud y has-
ta pronto.252
Poco despus, el 15 de Diciembre, Marchand falleca,
desde Trabajo se lo recordar Compaero noble y decidido, di
sus mejores energas a la justa causa de la Emancipacin Prole-
taria luchando tesonero desde las columnas de Trabajo y dentro
de la Federacin Obrera Rochense, donde supo grangearse el
aprecio de todos los compaeros. Trabajo ms que nadie lamen-
ta su desaparicin, se inclina reverente ante su tumba.253
Desde el retiro de Marchand el administrador San Martn
dejo de figurar como tal. A su vez se comienza a realizar la cobranza
de la suscripcin de forma trimestral para favorecer la misma.254
Pero el cambio ms importante se debi a la fractura de
la Federacin Obrera Rochense y posterior fundacin del Sindi-
cato General de Trabajadores de Rocha debido a los sucesos de
la huelga por la libertad de ngel Gonzlez.
Consumada la divisin a partir del ejemplar nmero 16
del 1 de Enero de 1921 se conforma un nuevo comit de pren-
sa integrado por; Luis Scuarcia, Fliz Centani, Eugenio Pagola,
Jose Cuartin, Mercenil Prieto, Joaquin D. Valcarcel y Eusebio
Otero. Director de Trabajo; Jose Cuartn. Secretario de redac-
cin Eugenio Pagola, Administrador Mecenil Prieto.255
A partir de este entonces, como vimos el peridico cam-
bia su tonalidad predominando los artculos revolucionarios y
252 Trabajo N13 30 de Octubre de 1920
253 Trabajo N16 1 de Enero de 1921
254 Trabajo N14 11 de Noviembre de 1920
255 Trabajo N16 1 de Enero de 1921

391
Cultura Obrera

disminuyendo casi por completo los de un cariz ms concilia-


dor y contemplativo con los poderes pblicos, recibiendo mu-
cha colaboracin de artculos doctrinarios y de opinin desde
Montevideo.
El tiraje continu siendo de unos 700 ejemplares y la
propaganda comercial continu teniendo un lugar destacado
para la sobrevivencia econmica del mismo, manteniendo los
mismos anunciantes, bsicamente que en su primer periodo.
Publicando incluso un anuncio del Banco de la Repblica en casi
todos sus ejemplares.
Si bien los balances publicados no detallan en nada el mo-
tivo de las entradas y salidas, desde su primer ejemplar hasta el
nmero 15 inclusive entraron 268,56 pesos y salieron 245,86,
quedando un saldo favorable de 23,30, segn el balance pre-
sentado por Manuel San Martn.256
El peridico nos aporta poca informacin de su vida in-
terna, dado que es el rgano del Sindicato General su vida est
estrechamente ligada a la vida de dicha organizacin. Lo poco
que podemos saber es que, por ejemplo, el peridico logr tras-
pasar las fronteras, y adems de ser ledo en Montevideo, desde
la cercana Santa Vitoria do Palmar (Rio Grande do Sul, Brasil) en
la publicacin Sud de Estado se puede leer que Trabajo re-
fleja en sus pginas bien cuidadas, la energa de carcter de ese
pueblo, nuestro amigo, trabajador y noble.257
Para el 1 de Mayo de 1921 Trabajo ofrece una edicin
especial de 6 pginas con una portada especial.
Era ese da, tambin, el primer aniversario de Trabajo y as
lo sealaban sus editores;
Trabajo cumple hoy un ao de vida.
Hace hoy un ao que TRABAJO vi la luz pblica para luchar

256 Trabajo N17 15 de Enero de 1921


257 Trabajo N22 20 de Marzo de 1921

392
La prensa obrera

por la emancipacin de los oprimidos y desenmascarar desde este


rincn del Este uruguayo a toda la canalla burguesa y reaccionaria.
Un ao en el que hemos sufrido un sinnmero de vicisitudes
y de las que hemos podido salir triunfantes gracias a los esfuerzos de
un grupo de denodados compaeros.
Hoy como ayer, con las mismas esperanzas y con las mismas
fuerzas estamos dispuestos a seguir adelante;-con la nica diferencia
que hoy cruzamos nuestro primer ao de existencia con una horien-
tacin [sic] amplia y definida, que entendemos es, la nica que eman-
cipar, en un da no lejano, a todos los esclavos del rgimen estatal
capitalista: La comunista.
Al cumplir nuestro primer ao de lucha enviamos, nuestros
saludos comunistas a todos los colegas, que como nosotros, luchan
por la liberacin del proletariado.258
Poco despus, a partir del nmero 27 el peridico aparece
con un formato ms pequeo que el anterior, posiblemente debi-
do a un cambio de imprenta.
Al nmero siguiente se publica el siguiente comunicado;
Nuestro peridico.
La Comisin Administrativa de nuestro sindicato, cumplien-
do con las resoluciones de la ltima Asamblea, suspender desde
ste nmero la salida quincenal de TRABAJO.
En lo sucesivo ste peridico aparecer mensualmen-
te y se repartir GRATIS, para hacer as ms extensiva nuestras
propaganda.259
Sin embargo no tenemos noticias de que realmente
Trabajo haya seguido publicndose. Muy posiblemente, ste fue
el ltimo ejemplar que lleg a editarse.

258 Trabajo N24 1 de Mayo de 1921


259 Trabajo N28 30 de Junio de 1921

393
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

CONCLUSIONES

Hemos recorrido en estas pginas momentos de los ms


lgidos de la lucha social en el Uruguay, intentando descubrir
y comprender como esa onda expansiva producida por la
revolucin rusa se manifest en tres departamentos del interior
uruguayo y que implicancias tuvo.
Una de las principales constataciones que esta investigacin
nos brinda, es la existencia y descripcin de las distintas
Federaciones Obreras Locales, que con distintas expresiones, se
manifestaron en los tres departamentos estudiados.
Otro aspecto importante fue la fractura obrera producida
en Montevideo, Buenos Aires, como en gran parte del mundo
donde la aplicacin prctica de algunos planteos socialistas en
Rusia implic la reformulacin de los planteos ideolgicos de los
crculos militantes ms activos.
De las dos tendencias que actuaban en el movimiento
obrero1, la socialista y la anarquista, (sta ltima notoriamente
mayoritaria al comenzar la revolucin rusa), se bifurcaran en
cuatro tendencias. Los socialistas se convertirn en comunistas,
expulsndose a los elementos reformistas que refundaron
el Partido Socialista, y los anarquistas se dividirn en torno a la
aceptacin o no de la dictadura del proletariado como medio
vlido para llegar a la anarqua.
La presencia del Partido Socialista luego de las divisiones
en los departamentos estudiados parece haber sido casi nula,
capitalizndose toda la militancia socialista para el Partido
Comunista.
En Salto, la ciudad ms importante de las tres y con mayor
actividad obrera, hay un claro predominio de los anarquistas or-
todoxos, llamados despectivamente puritas quienes articularon

1 Tambin exista una corriente cristiana de muy escasa influencia.

394
Conclusiones

desde 1917 una corriente gremial desafiante que logr arrancar


importantes concesiones a los capitalistas en favor de los obre-
ros. Pero tambin hubo presencia de los sindicalistas como se
les denominaba en Argentina, quienes actan en la Sociedad de
Picapedreros en un comienzo, en la Federacin Obrera en Cons-
tructores Navales, y en menor medida el sindicato de choferes,
alinendose con los anarquistas pro dictadura obrera. La influen-
cia comunista y socialista en Salto parece ser mnima.
En Paysand por el contrario, hay un claro predominio de
los socialistas en un comienzo, convertidos en comunistas luego,
quienes actan desde la sociedad de Oficios Varios y desde la Fe-
deracin Local luego. Los anarquistas tambin tienen presencia
en Paysand a travs del centro Internacional y de algunos gre-
mios menores. Dentro de los anarquistas, aunque en un momen-
to coexistieron ambas tendencias, parece haber predominado
luego la anarquista ortodoxa.
Finalmente en Rocha, la Federacin Obrera Rochense se
compona de un diverso abanico de tendencias ideolgicas que
explotaron antes que las divisiones se produjeran en Montevideo
o Buenos Aires. La fraccin ms reformista de la Federacin
Obrera Rochense parece haber desaparecido o tenido una acti-
vidad muy magra luego de la fractura, y la que continu editan-
do Trabajo parece integrarse por socialistas (luego comunistas)
y anarquistas pro dictadura obrera. Ante un claro decaimiento
gremial y la suspensin de Trabajo, los anarquistas no parecen
haber dejado mucho rastro de actuacin, pero s lo hicieron los
comunistas que contaron con un peridico y un local.
En definitiva, de las tendencias en pugna pasado el ao
1921, los unionistas compuestos por los anarquistas pro dicta-
dura y los comunistas que buscaban una unidad sindical por en-
cima de las tendencias ideolgicas tuvieron importante presencia
en Paysand y menor en Salto y Rocha. Mientras que los puritas

395
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

partidarios de una federacin obrera de clara tendencia ideolgi-


ca anti poltica, tuvieron su bastin en Salto, con escasa presencia
en Paysand y casi nula en Rocha.
Posicionadas las fichas de un lado u otro del tablero, la si-
guiente conclusin que el lector habr podido percibir, es que,
ms all de otros factores externos, como el mejoramiento eco-
nmico y la recuperacin del poder adquisitivo de la poblacin,
es claro que el impulso revolucionario de los aos 1917, 1918
y 1919, se transform en una fuerza que se consumi comba-
tindose as misma, alejando a los obreros de la vida gremial y
debilitando la capacidad de accin de las sociedades obreras. No
es intencin realizar un juicio de valor sobre lo sucedido. La ma-
rea revolucionaria, la urgencia de delimitar los campos de accin
ante la inminente redencin humana no pueden explicarse desde
las pginas de un libro, sino desde la pasin y entusiasmo del mo-
mento, autnticos motores del movimiento obrero revoluciona-
rio de la poca.
El declive gremial que se produjo despus de este perio-
do fue muy difcil de recuperar, incluso dcadas despus. Para el
anarquismo implic el comienzo del declive de su influencia en el
movimiento obrero. La capitalizacin que hizo para s el Partido
Comunista de la divisin obrera merece un estudio en profundi-
dad aparte. Consideremos solo que para 1923, solo una fraccin
anarquista (pro dictadura) es mucho mayor que los comunistas
en el Uruguay, y tan solo sies aos despus, los gremios influen-
ciados por los comunistas superaran ampliamente en cantidad a
ambas tendencias del anarquismo.
Adems de la existencia de las Federaciones Locales, es
importante destacar la importancia de la prensa obrera. La exis-
tencia de Trabajo en Rocha, Alba Roja y El Proletario en Paysan-
d. O La Voz del Obrero, Regeneracin, El Sindicalista y La Tierra
en Salto solo entre 1917 y 1923, nos habla de una capacidad de

396
Conclusiones

produccin, y expresin importante. La prensa obrera, junto a los


mitines callejeros, veladas culturales y pic nics obreros ofrecan
un cuerpo cultural y humano desde donde el obrero se poda
apoyar para sostener la vida y la lucha social. Ofrecan un claro
mecanismo de transmitir y crear una cultura propia, con sus va-
lores inherentes, fundamentales tanto para combatir el sistema
burgus como para poder vivir libremente a travs de la socializa-
cin del trabajo y la riqueza.
La cantidad de centros de estudios sociales y la edicin de
ms de doscientos ejemplares de La Tierra en su primera poca
nos hablan de una actividad obrera muy destacada para el inte-
rior del pas.
Otro asunto que se pudo observar en la investigacin, fue
la influencia ejercida por los delegados en gira venidos desde
Montevideo o Argentina, estos eran una inyeccin de energa
militante, que permita reorganizar gremios, realizar campaas
agitativas e impulsar el movimiento.
Fue clara la influencia recibida en Salto por la llegada de
militantes desde Argentina, siendo quizs mayor que la ejercida
desde Montevideo. Pudimos ver como la F.O.L. Saltea se em-
bander en el comunismo anrquico en sus estatutos y rechaz
el sistema industrial, al igual que lo haba hecho la F.O.R.A. en
Argentina y a diferencia de la F.O.R.U., que nunca logr imprimir
dicha tendencias en sus estatutos1 y dejo en libertad a sus gre-
mios de usar el sistema industrial o por oficios. Por su parte, el
sector sindicalista opuesto a La Tierra y la F.O.L. en Salto parece
recibir su influencia desde Argentina ya sea desde la F.O.R.A. el IX
Congreso primero y de la Unin Sindical Argentina luego, sin te-
ner casi contactos con el C.P.U.O. en Montevideo en un comienzo.

1 En el cuarto congreso de la F.O.R.U. En 1912 se discuti el inlcuir dicha recomen-


dacin siendo rechaza la mayora de los gremios. Ver La Tribuna Popular 04-11-
1912

397
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Pero afianzando sus vnculos con la capital uruguaya al momento


de la creacin de la Unin Sindical Uruguaya.
Si observamos los conflictos del momento, sin duda se des-
taca, por un lado Salto entre 1918 y 1919 y Rocha en 1922 y 1925.
Los conflictos obreros de Salto, con victorias rotundas para
los obreros y niveles de conflictividad elevados colocan a Salto
dentro del gremialismo revolucionario en el terreno prctico.
Por su parte Rocha, que conoci una muy escasa organiza-
cin gremial, estall en duros conflictos con violentos combates
-en el caso de los constructores de la va- y masivas manifesta-
ciones como tambin el de los obreros del saneamiento, quienes
contaron con el apoyo de los comunistas locales sin obtener mu-
cho xito en sus reivindicaciones.
En el aspecto cultural los tres departamentos cuentan con
una actividad importante, de veladas, centros sociales, cuadros
filodramticos, propuestas culturales para pic nics, manifestacio-
nes cargadas de banderas, estandartes y canciones obreras.
La similitud de prcticas en los tres departamentos nos
permiten afirmar que hay una cultura obrera comn, que mas
all de sus corrientes ideolgicas comparte ciertos valores y prc-
ticas, en relacin a las formas de establecer la comunicacin e
integrar al colectivo obrero.
La cultura obrera promueve la idea de que lo que le da
estatus a un ser humano en la sociedad no es su calidad de
ciudadano es decir de pertenecer legalmente a tal o cual Esta-
do Nacin, sino su calidad de productor, y en ese sentido lucha
porque los trabajadores puedan hacerse cargo de la sociedad ad-
ministrando la produccin y distribucin de bienes a travs de los
organismos sindicales.
Por otra parte, los congresos obreros realizados, le aportan
una peculiaridad al periodo y nos muestran cierta fotografa del
movimiento, sus fuerzas y aspiraciones. El congreso salteo que

398
Conclusiones

no llego a realizarse en 1920, ofreca un potencial interesante,


en un momento donde el auge ascendente an se senta, propo-
niendo el relacionamiento federal entre las principales ciudades
de Salto, Paysand y Entre Ros y contando con el apoyo de Mon-
tevideo y Buenos Aires.
Pero los dos congresos obreros realizados en el litoral en
1922 se realizaron cuando las divisiones ya estaban acentuadas, y
bsicamente como forma de consolidar dichas divisiones en tan-
to posicionamientos inevitables.
El congreso fundacional de la Unin Sindical Uruguaya ce-
lebrado en Montevideo, tambin es importante ya que la presen-
cia de los gremios del interior fue significativa.
En definitiva no hemos ms que constatado que la cultu-
ra obrera, como tambin el derrotero del movimiento obrero de
estos tres departamentos recorre caminos similares a la de los
principales centros de influencia como Montevideo, Buenos Aires
y Europa, con la particularidad que cada departamento manifest
y que hemos detallado a lo largo de todo este trabajo.

399
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

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Federacin Sudamericana de Picapedreros y Anexos, Bases Aprobadas en
el III Congreso celebrado en Montevideo los das 1, 2 y 3 de Noviembre de
1922. (copia del ejemplar cedida)
Letter from Erico Malatesta to Max Nettlau, from Londres May, 1892. IISG
Luce Fabbri Archive, IISG. Carpeta 210: Typescript and manuscript of Au-
todidactismo Obrero. Unin Sindical Uruguaya. Carta Orgnnica. Monte-
video, 1924 (IISG)

405
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

ANEXO

Presentacin.
Se adjuntan a continuacin algunos textos significativos
del movimiento obrero en la regin y poca abordada. Todos son
textos publicados en la prensa obrera de Salto o Rocha, es decir
en La Tierra y Trabajo, a excepcin de la carta de Mario O. Herre-
ra al presidente de la repblica que fue publicado en La Batalla
de Montevideo, peridico que se lea y distribua en Salto, hasta
al menos diciembre de 1921 en que se consuma la divisin obrera
en el Litoral.
Como se ver se separan los mismos en distintas secciones.
En la primera se publican cartas de trabajadores rurales enviadas
a la redaccin del peridico La Tierra en donde se evidencia y
manifiesta los pequeos intentos de los peones rurales de formar
parte del movimiento obrero regional. Luego se adjuntan dos car-
tas que muestran la represin que la lucha social tiene como con-
secuencia. A continuacin se reproducen algunos textos sobre la
temtica femenina como tambin algunos poemas e himnos de
los trabajadores que se han mencionado a lo largo del trabajo. En
los textos de discusin terica (del 18 al 22 inclusive) se incluyen
algunos artculos que pueden ampliar el conocimiento sobre el
periodo en relacin a la utilizacin que los militantes de la poca
le adjudicaban a algunos trminos, como anarco sindicalismo y
comunismo por ejemplo. Luego se adjuntan todos los documen-
tos orgnicos que se encontraron de las organizaciones obreras
de los departamentos estudiados y finalmente una lista parcial e
incompleta de algunos de los principales militantes que identifi-
camos en el periodo lo cual puede servir de contribucin para un
diccionario biogrfico del movimiento obrero del Uruguay.

406
Anexo

01. DE LA CAMPAA
01. LA CAMPAA1
Huelga de esquiladores en la estancia de Equerre-Una carta de un
compaero campesino -El despertar de nuestros criollos.
Publicamos a continuacin una carta que hemos recibido
de uno de nuestros criollos esquiladores sin quitarle ni ponerle
nada a esa carta que revela la reaccin saludable que experimen-
tan los paisanos ante las ideas nuevas, dejamos para todos el co-
mentario que merece la misma.
Para LA TIERRA
Daymn, Noviembre 11 de 1920.
Los trabajadores del campo proceden sin miramientos.
La huelga llevada a cabo en la estancia de el burgus Adolfo
Esquerre en el Daymn por sus campecinos, nos demuestra una
vez ms que los trabajadores del campo proceden como hombres
dignos de imitarlos. Sin miramiento, no admitiendo transiciones
bochornosas, se deciden hacer justas reclamaciones, y van al
grano, se presentan ante el patrn sin necesidad de pliegos de
condiciones, a reclamar un poco de lo que se les roba, y al no
seder el torpe burgues, todos como un solo hombre al callejn,
buscando nuevos rumbos donde el trabajo denigrante sea mejor
remunerado.
El da diez del corriente mes, los compaeros esquilado-
res que trabajaban en la estancia del burgues Esquerre determi-
naron por una unanimidad designar a un compaero para que
se presentara al burgues reclamandole un cts. por cada sien,
dicho compaero as lo hizo. Presentose al burgues y sus capa-
tazes, y en nombre de la colectividad que representaba, hizo la
reclamacin sin ms plazo que el tiempo necesario para contes-
tar que si o que no, y al ser contestado por el burgues, no puedo
1 La Tierra N 13, 13 de Noviembre de 1920. Las faltas ortogrficas son del original.

407
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

pagar ms, el que quiera trabajar que trabaje. Fu una sola vez,
nosotros tampoco podemos trabajar por el precio que nos paga,
y determinando inmediatamente abandonar el establecimiento
diez y siete compaeros unos a caballo y otros a pie, dando vivas
a la revolucin social, con ganitas de calentarle el lomo al burgues
que no tan zonzo y desapareci como encanto.
Y as con una gran cantidad de folletos Entre campesinos
del compaero revolucionario Enrrique Malatesta, y canciones
revolucionarias, que lean y hacan sentir en los momentos de
descanso cantndolas acompaada por milongas, abandonamos
el establecimiento, quedando cuatro Ramboullet que son gau-
chos criados del patrn, y no se animan pastar en otro campo.
Sin ms por esta saludamos a los trabajadores de la ciudad
y a los valientes compaeros que estn al frente de el semanario
LA TIERRA.
JUAN DEL CAMPO

02. DE CAMPAA1
Camaradas de LA TIERRA.
Salud.
Hoy he resuelto escribiros unas cuantas lineas a objeto de
haceros saber algo de las calamidades que pasamos los campe-
sinos de sta.
Como sabrn, aqu estamos trabajando en el feudo del
gran ricachn Paulino Marquez y a pesar de producir y de guar-
dar los intereses creados del patrn, ste hace todo lo que puede
para pagarnos una mensualidad que no nos alcanza para comprar
unas bombachas de las mas ordinarias.
Hace cosa de unos 4 o 5 meses que en esta estancia se
nos pagaban de 10 a 15 pesos mensuales, para trabajar con las
estrellas de la maana y terminar al empezar las estrellas de la

1 La Tierra N 49, 23 de Julio de 1921.

408
Anexo

noche, y esto con la ley y todo lo de 8 horas. Hoy en cambio he-


mos prosperado como el cangrejo, los sueldos son irrisorios; se
nos pagan de 7 a 9 pesos mensuales debido al propagandista y
rebuscador de gente ignorante, por un aspirante a capataz, se
llama Daniel Acosta.
Que falta nos hace la organizacin de los trabajadores de
campo, hasta que no se produzca la inevitable revolucin obrera.
Creo que la estancia va a pasar a nuevos explotadores y los
nuevos dueos tienen la intencin de echar la vieja peonada;
esta es la jubilacin que recibiremos algunos de los obreros que
hace 20 aos que estamos al yugo, dejando girones de nuestra
propia carne y sufriendo eternamente en este valle de las libras
esterlinas.
El burgus tiene mucho campo y nosotros nada, pero nos
quiere hacer creer que la patria es de los orientales pobres. Que
sabandija!
En otra os ser ms extenso.
Mtanle duro y parejo sin sentarse en la retranca, como los
burros maaneros.
LA TIERRA del nmero pasado no nos lleg. Quin ser el
culpable?
Corresponsal.
Valentin Chico, Julio de 1921

03. CARTA DEL PAISANO JUAN DEL CAMPO1


Nuestras ideas se expanden y se revolucionan en el am-
biente. A continuacin publicamos la carta del paisano que indi-
camos tal cual la hemos recibido
Desde que leiba LA TIERRA, carta gaucha y otros diarios
que me mandaba un amigo, me haba puesto contentsimos al ver
que venan tiempos nuevos, lindos y puros, que no iba a haber

1 La Tierra N54, 27 de Agosto de 1921. Se respet la ortografa original.

409
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

patrn que se quedara con lo que nosotros habamos ganau traba-


jando, ni gobierno con polica y batallones pa cuidar lo que los ricos
nos quitan, ni tampoco curas que nos asusten con el diablo pa que
nosotros andemos de orejas caidas y no nos atrevamos a protestar
contra las picardias e los ricos y los gobiernos aunque nos maten
de hambre y a palo.
Tanto era mi entusiasmo que despus de trabajar todo el da
en el campo, en los alambraos, curando y cueriando pa el patrn,
les leiba hasta tarde de la noche, a mis compaeros que tambin les
gustaba, y nos apurabamos pa que viniera eso pa ser libres y felices.
Pero aura que vine al pueblo mandau por el patrn y fi a una
reunin de trabajadores que me convido el amigo que manda algo
pa ler, me dau cuenta esata que la cosa no se espera que venga,
hay que traerla, y pa eso se presisa tener ms agayas que un dorao
y no hecharce a muerto ni a un que las llamas queme la barba.
Y entonces me gustan ms que nunca por que la obra es
de los fuertes de espritu, y ande estan los fuertes no se anda con
rodeo pa decir la verdad, y no las van con los embromaos que
mienten y engaan para embromar a los otros, o por que son ruin
mismos que no sirven ni pa ello ni pa los otros.
Y desde aura voy a sostener la verdad y pa defenderla voy a te-
ner mi facon bien afilau y la pstola cargada y con confites de repues-
to, pa el prmero que quiera venirme con mentiras y con cosas an-
rredadas, por que entiendo que es pa perjuicio de nosotros mismos.

04. RECIBIMOS Y CON GUSTO PUBLICAMOS1


Arapey, Setiembre 21 de 1921
Camaradas redactores de LA TIERRA.

Deseara si Vds. podrian publicar en el semanario, que


dicen que es de los pobres, un abuso repudiable e inhumano co-

1 La Tierra N 59, 1 de Octubre de 1921.

410
Anexo

metido por el seor Juan Fonseca que tiene la estancia San Jos,
situada en Arapey Dto. Salto.
En el citado establecimiento trabajamos varios obreros y
como no tenamos el descanso semanal, y el salario no nos alcanza-
ba para nada hemos resuelto reclamarlo, haber la bondad, de estos
satisfechos.
Nos contest que no nos dara nada y no conforme con la
contestacin negativa, sin que nos hech a todos. Yo que trabajaba
de cocinera y que de un principio me solidariz con los peones to-
dos, tal vez porque soy mujer me hech [sic] a empujones, en com-
paa de una chica; por ms humanidad en un dia frio y lluvioso, me
mand a la estacin en un da que no hay tren para ninguna parte.
Pero en todas partes se encuentran algunas semillas huma-
nas; el mismo cambista de la estacin Ararey, al ver mi afligente situa-
cin; sin recursos y abandonada, con una criatura, en el medio,casi,
de un desierto, se condoli de de [sic] m, y me prest su proteccin,
que mucho se lo agradezco por intermedio de estas lneas.
Intil fueron mis palabras para que no me echara de una for-
ma tan brutal.
Todo fue intil.
Qued la mucama; sta hace tres meses que est y an no ha
tenido un da de descanso.
Este burgues quiere ms las obejas [sic] que los cristianos, al
decir de la gente.
Ahora solamente pedimos a los trabajadores todos, no se de-
jen angaar.
No vayan a trabajar a esa Estancia, porque el trabajo es de sol
a sol, poco sueldo y muertos de hambre.
Aprovecho para saludarlos a todos:
Margarita O. Lopez

411
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

5. CARTA DE UN CRIOLLO1
Camaradas de LA TIERRA, Estancia el Desengao. Como
he tenido conocimiento por un amigo, que LA TIERRA es de no-
sotros los trabajadores y que nos defiende de las injusticias que
comenten con nosotros, los ricos, me he largao pa escribir algo
dende estos pagos solitarios, donde tenemos por nicos compa-
eros a los animales. Mateando con otros criollos, mestao acor-
dando e las ferias, en donde los autos me tenan loco e la vida con
ese barullo que meten, pues astaura suenan en mis oidos los cor-
netazos que dan sus manejantes pa avisar que salgan del camino.
Me he puesto a pensar muchas veces las cosas que vi en
las ferias y me he puesto con tanta rabia, que mestao saliendo e
la vaina; me creran ustedes, que he tenido que estar noches ente-
ras sin dormir cuidando los toros, que los vendan en miles y miles
de peso, - y he sacao en limpio que un animal vale ms que un
hombre trabajador, porque nosotros pa los ricos valemos lo que
vale un pucho e cigarro e chala, que lo tiran y lo pisan pa no gastar
tanto fosforo, claro, ya lo han fumao y lo han saboreao bien.
Al otro da iba el patrn con las hijas todas emperifolla-
das, y jediendo a agua florida, y todo esto sacao de las costillas e
nosotros los trabajadores. Se arrimaban alao e los animales y los
acariciaban diciendo que lindos y bien cuidaditos - Claro, noso-
tros los habamos cuidao, todos los das los teniamos que baar y
con jabon rauter, teniamos que refregarles bien hasta las p... ero,
casi se ha escapao una mala palabra. Yo al ver todo esto, y que
nos miraban como a perros sarnosos, siendo que somos quien los
ha cuidao, y que nos deben los miles de caras de Artigas que han
ganao, se me venan como ganitas de pelar el facn y gritarles:
Sepan ustdes, seores caranchos, que a nosotros los criollos nos
deben todo lo que tienen puesto arriba e las osamentas, que val-
go ms que esos toros y que soy tan cristiano como uds. Pero me

1 La Tierra N60, 8 de Octubre de 1920.

412
Anexo

sujetaba, pensando q una sola golondrina no hace verano, que


tendramos que juntarnos todos los criollos pa imponernos por la
ley de facn, pedir lo que es nuestro, y en caso que nos negarn
menearles facn de punta y acha y dejarles blanqueando el sebo,
paque no tengan tanto trabajo los cuervos y los caranchos.
Los saludo a todos y disculpen la lata
JUAN FLORES.

06. CARTA DE UN CRIOLLO SANDUCERO1


Se Trata de un joven discpulo de los anarquistas, que
con pocas lecciones se ha hecho ms revolucionario que mu-
chos que mueren de viejos pidiendo aumentos de jornal en los
gremios.
CAMARADAS LUCHADORES: Yo estoy dispuesto a cumplir
con el deber de todo valiente para derrotar a nuestros opresores.
Vivo muy deseoso de ver al ncleo de luchadores auda-
ces que lancen a la revolucin para plegarme a fin de terminar
para siempre con cuanto mandn explotador existe.
Noche y da pienso como hacer para que los compaeros
me acompaen a darles confites a esos burgueses que absor-
ben todas nuestras libertades.
Tengo veinte aos, he conocido mi derecho obrero y es-
toy dispuesto a luchar hasta morir o conquistar mi felicidad y
bienestar, aboliendo la opresin.
Yo no puedo vivir a gusto, todo el mundo me produce mal
efecto, si pienso en el problema social.
Por eso espero que los dems compaeros me ayuden a
batallar sin cobardas por nuestra libertad y la de nuestras ma-
dres y hermanas.
Bien camaradas; solo espero con el pie en el estribo el
llamado para avalancharnos a la obra prctica.

1 La Tierra N71, 24 de Diciembre de 1921.

413
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Sepan que tengo el revolver cargado y el facn salindose


de la vaina para la defensa de mi noble causa.
Hiplito L. Martinez.
Paysand, Diciembre de 1921.

02. DE LA LUCHA SOCIAL.


07. (SALTO) CARTA DE UN ANARQUISTA
AL PRESIDENTE DE LA REPBLICA1
Salto, Marzo 31 de 1919.
Al seor Dr. Baltasar Brum,
Presidente de la Repblica Oriental del Uruguay.
Montevideo.
Seor y pariente:

El telegrama que con fecha 24 de Marzo ltimo dirig a Ud.


protestando por el atropello de la polica de Salto, me coloca en par-
ticular en la necesidad de dirigirle esta carta. Y me decido a hacerlo
porque como hombre que ama la verdad y lucha por la justicia, debo
sealar al pueblo lo que representa para sus intereses y libertades las
declaraciones ms o menos sonoras de los programas polticos de
sus gobernantes y tambin el uso que los allegados al poder pblico
hacen de las leyes y reglamentos que ellos mismos confeccionan.
Esos son los dos nicos motivos, as que en manera alguna
debe tomarse esta carta como pedido de justicia por el atentado
liberticida que he consignado.
Antes de pasar adelante, debo explicar a Ud. mi parentes-
co, ya que lo he invocado en mi telegrama aludido y que parece
inverodmil [sic] a la mente de los paniaguados polticos que los
jefes de estado tengan familia en el planeta y de que entre esa
familia puede existir algn miembro que, desvinculado de las pre-

1 La Batalla N101, Montevideo, 24 de Abril de 1919.

414
Anexo

bendas palaciegas, pueda inclinarse a sostener el ideal anarquis-


ta. El vnculo de sangre que me liga a Ud. proviene por dos ramas:
por los Rodrguez de Almeida y por los Saldaa; su seora madre
podr explicrselo.
Ahora ir al asunto. El domingo 23 de Marzo fui invitado
para concurrir y hacer uso de la palabra a una conferencia pblica
en el local designado por Paseo 18 de Julio. Este acto fu organi-
zado, previa comunicacin legal a la polica, por una agrupacin
de ciudadanos llamada Regeneracin y con el objeto de ilus-
trar al pueblo y a la clase trabajadora. Al llegar al paraje indicado,
pude serciorarme [sic], por el gran despliegue de tropas policial,
de que sin duda se trataba de llevar a cabo alguna pueblada. Efec-
tivamente fu [sic] as. En actos pblicos realizados en Salto y de
los cuales particip, la jefatura se limit a enviar vigilancia como
para garantir el orden y hacer simple acto de presencia. Estando
preso, tuve oportunidad de conocer que en la orden del da lanza-
da esa maana, el jefe de polica haba ordenado al personal sub-
alterno que, fiscalizara lo que manifestaban los conferencistas. Y
porque no decirlo? Tambin nuestra prisin, por cuanto le era
muy fcil justificar despus el atentado por medio de la forma-
cin de un proceso que aunque no tuviera pie ni cabeza y fuera
absolutamente falso, lo pondra a cubierto de las responsabilida-
des. El parte policial pasado al juez Dr. Pereira Nuez lo prueba
con toda claridad. Puede Ud. y el pueblo ver que esa recomen-
dacin al personal subalterno de la polica es la ms innegable
prueba de que nuestra prisin estaba, concertada de antemano y
que obedeca al deseo de quebrantar la unidad moral de la clase
trabajadora de Salto. Es muy antigua esa maniobra policial y por
haberla hecho revivir el jefe de polica de Salto merece que le
dispense alguna condecoracin! La alta Banca y el alto Comercio
han de haberse sentido hondamente halagados ante el gesto de
ese moderno cancerbero de sus intereses!

415
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

De ms esta decir la forma brutal y primitiva con que la


tropa cumpli la orden. A pesar de que el jefe de polica de Salto
tuvo el poco tino de escribir una carta en un diario, con el objeto
de reivindicarme ante la opinin pblica, el caso es que, el voca-
bulario grueso, chabacano, as como la dispersin de la multitud a
base de empellones con los caballos, fu la nica forma con que
se di cumplimiento a las rdenes impartidas. Esto sin contar
que en la comisaria segunda uno de los oficiales de la misma tuvo
la audacia de castigar con golpes de puo a uno de los presos, por
el hecho de haberle exigido el recibo de ley por el dinero efectivo
que se le extrajo en la revista.
Puede el proletarado [sic] estar seguro de que si en la Re-
pblica Oriental del Uruguay, no existen leyes de excepcin como
en la Argentina, es porque no las necesita porque la Santa Polica
de la democracia de Artigas, sabe hacer a carta cabal sus autos
de fe y tene [sic] tambin su index [sic]. En ningn pas civilizado
y menos en una democracia que se dice libertad y progresista se
puede reducir a prisin a ningn habitante sin hacerle conocer
despus de las primeras 24 horas la causa de su detencin. No-
sotros, por no hablar como deseaban el jefe de Polica de Salto,
hemos estado 3 das sin conocer la causa de nuestra prisin! Po-
dis trabajadores recordar para los das de elecciones las garan-
tas constitucionales y las promesas de los que os incitan a darles
el voto. Y piense Ud., seor Brum que quien nos hizo arrestar, lo
hizo invocando el nombre de las patrias instituciones.
Apenas va a cumplir un mes de que est Ud. al frente de la
Presidencia de la Repblica y ya sus policas con el desparpajo y
el desenfado natural de los que abusan de la fuerza, se permiten
llevar a cabo atentados a la libertad de palabra como el que de-
nunci [sic]. Quiere tener la gentileza de decirme a donde han
quedado las promesas que Ud. hiciera de que bajo su gobierno
las ideas podran expresarse con entera libertad?

416
Anexo

Pompas de jabn, exteriorizaciones huecas y falaces, sim-


ples alucinaciones producidas por los sueos de gloria y los vahos
del champagne que paga el pueblo en su do bregar, sern, seor
y pariente Brum, las declaraciones suyas, mientras caudillejos in-
cultos y ensorbecidos [sic] haciendo como hacen de jefes de Poli-
ca, sirvan sus intereses de clase en vez de los intereses pblicos.
No quiero inclinarme del todo a creer que Ud. haga lo que
hacen todos los gobernantes cada vez que por azares de la for-
tuna o enjuagues polticos consiguen escalar el capitolio pero no
obstante, debo consignar que a pesar de su tacto especial, que en
la designacin de jefe de Polica de Salto ha sufrido una lamenta-
ble equivocacin.
Hay una especie de aforismo criollo que dice, que, al indio
no se le debe dar sable ni hacerlo ms de sargento porque es he-
charlo [sic] a perder. No quiere decir esto que el seor Piacenza
sea indio; pero con la investidura y la confianza que Ud. le otorg
lo ha hechado [sic] a perder, es cierto. Este hombre ha sentido
vrtigo de las alturas; se ha sentido con una fuerza extraa y su-
perior a su modalidad psiclogica [sic] y naturalmente ha procedi-
do en este caso como un Sancho en su nsula. Como gobernante
es Ud. el responsable. Y tenga presente, estimado pariente, que
Ud. debe sincerarse en sus promesas, bajo pena de que andando
los pueblos al paso que marchan en el orden de sus conquistas le
demanden el cumplimiento de ellas.
He de poner fin a esta, puesto que sera largo relatar y por-
que no deseo hablar de mi propio martirologio, por lo que me
decido a suprimir el resto de lo pasado en los das en que he es-
tado preso junto con mis compaeros por el delito de hablar con
altivez y volver por los fueros de las clases oprimidas.
Saluda a Ud. con toda consideracin.
Mario O. Herrera.

417
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

8. DE LA LIBRETA DE UN PRESO (ROCHA)1


Interesantes apuntes
Uno de los obreros de la va, que est actualmente en al
crcel, nos ha dado estas inteligentes anotaciones que en las ho-
ras de recogimiento ha vertido en su cuaderno.
Quince das llevo de cautiverio en esta triste celda. Me miro
al espejo y me encuentro fsicamente concluido; pero moralmen-
te me siento grande y fuerte. Paso algunas horas muy amargas,
porque, quin es el que al verse recluido en una celda miserable
no sufre amarguras? Pero por esto no soy un arrepentido ni me
siento atacado por impulsos de cobarda. Por el contrario, siento
cada da ms coraje para la lucha.
Pienso mucho y todo lo que pienso me lo reservo. Qu
le puede importar de mis sufrimientos y de mis angustias a los
hombres, no siendo aquellos que en verdad se han interesado
por m en todo y por todo?
La crcel no es simptica, no puede ser simptica a los pro-
letarios, porque slo dolores y tormentos nos proporciona; pero
s lo es a la clase parasitaria a esa clase de sanguijuelas, para quie-
nes la crcel constituye el arma vengadora de que se sirven para
castigar las rebeldas obreras contra las ofensas vejatorias de los
explotadores.
Sin embargo, yo que estoy sufriendo la injusta opresin de
las cuatro paredes de mi celda, la considero en ciertos momentos
como un Liceo adonde ingresara para ampliar con el estudio mis
conocimientos. No tengo catedrticos pero yo me los hago. Ade-
ms, de todos los puntos del pais (sic) me llegan compaeros que
me instruyen, me educan y me preparan cada vez ms y mejor
para las luchas del futuro. A ellos les llamo asi (sic): Compaeros
educacionistas en las celdas. Si bien es cierto que estos compa-
eros no me visitan todos personalmente, lo hacen por medio

1 Accin Comunista N27, Rocha. 24 de Abril de 1922.

418
Anexo

de mensajes que yo ansiosamente los leo. As por ejemplo tengo


aqu, junto a m, ACCION COMUNISTA, Justicia, Nuevos Hori-
zontes, La Batalla, El Picapedrero, El Chauffeur, Nuestra
Palabra, etc. Cuando estos compaeros llegan hasta m, todo lo
olvido. Las horas amargas son reemplazadas por horas de alegra,
hasta que consiga absorber toda la sustancia desde el primero
hasta el ltimo artculo.
Desgraciadamente estoy separado de mis compaeros,
que sufren como yo, y con quienes tantas horas de expansin po-
dra tener yo leyndoles estos peridicos y explicndoles de cada
cosa su contenido.
De lo mucho que leo todo lo aprovecho y anoto los buenos
ejemplos de compaeros que tienen sus nombres bien acredita-
dos en las filas proletarias. Aunque pocos conocimientos tengo,
me siento con fuerza y voluntad para bregar por la misma causa
que ellos defienden, como obrero y comunista que me precio de
ser, en beneficio propio y de los compaeros que como yo viven
explotados y oprimidos.
Tomo ejemplo de compaeros como Brossard, Perdomo,
Salaberry y otros, a quienes sigo en sus escritos y discursos.
Todos stos, como nosotros son un obstculo para la ca-
marillas de burgueses y salteadores. Por eso es que se les saca
de las filas obreras y se les mete en las crceles alegando causas
y motivos llenos de calumnias y de infamias. Pero en fin, tenemos
que soportar esto, y adelante!
Por mis compaeros,con quienes solo puedo hablar los
das de visita, me he enterado de que a algunos de ellos se les
haba sometido a interrogatorios por el Sr. Jefe de Polica, a altas
horas de la noche; lo que me di (sic) la explicacin de los ruidos
frecuentes que yo oa, de abrirse y cerrarse puestas (sic), que
intranquilizaban mi sueo. Es que el sumario judicial, pregunto
yo, es instrudo (sic) ahora por la polica? Y el seor Jefe, solo

419
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

(sic) puede disponer de las altas horas de la noche para hacer


interrogatorios?
Me he enterado tambin, que el Sr. Berln exige certifica-
dos de buena conducta a los obreros que quieren trabajar en la
va. Y a m se ocurre que dicho seor debera presentar el suyo
antes, porque no se puede tener la seguridad de cobrar el tra-
bajo realizado durante un mes si no se tiene la certeza de que el
empresario es un hombre que cumple lo que promete. No sabe
el seor Berln que cada da se hace menos acreedora (sic) la
simpata de los obreros? No comprende el Sr. Ingeniero que an
cuando Ud. considera perdida la huelga, todava no lo est? Mire,
Sr. Empresario, esos pobres obreros que han vuelto a empuar la
pala y el pico, encorvando la espalda y aceptando sumisamente
las condiciones que Ud. les impuso, sern los que maana se le-
vantarn rebeldes ante la explotacin que se comente con ellos,
y la huelga volver a empezar, con ms fuerza y ms energa que
la que pas Ud. no ha triunfado todava.

03. DE LA MUJER.
09. LA MUJER QUE SUFRE1
Considerando que todas las mujeres pobres sufrimos el
azote de la indiferencia y el egosmo de las clases parasitarias,
debemos mancomunarnos las trabajadoras y colaberar [sic] con
amor a la obra de emancipacin de la mujer.
Es tiempo que se levanten los espritus caidos en la escla-
vitud y en la miseria dese tantos siglos a esta fecha de las reivin-
dicaciones justicieras, y tomen parte en la lucha que se plantea
para conquistar la felicidad.
Ha sido larga la jornada para convencer a las muchedum-
bres que poco piensa ; pero empieza a dar sus frutos y hoy la ma-
yora de los desconformes con la vida que llevan por necesidad,
1 La Tierra N50, 30 de Julio de 1921.

420
Anexo

saben que deben pujar para que se implante otro rgimen social
de libertad y amor que se propaga para bien de todos.
Continuar mucho tiempo como estamos, significa retroceso
y el verdadero agotamiento de todas las energas creadoras.
La mujer que sufre debe ir a ocupar un puesto en la lu-
cha obrera, para conquistar la gloria pura e inmensa, ayudando a
hundir al rgimen enfermo en que vivimos para sustituirlo por el
reinado de la vida sana y buena.
CAMILA.

10. LA LIBERTARIA1
Yo la llamo libertaria. Los dems la llaman loca. No se
dej tiranizar por los padres, por los hermanos ni por el marido.
Quizo (ser libre como los pjaros, y volar como ellos, lejos, muy
lejos; quizo que en su brazo y su cerebro trabajasen libremente,
sin correas tirnicas que los subordinasen.
Y todo lo consigui por medio de su voluntad de hierro;
quera redimirse y redimir a las que son sus hermanas en el cal-
vario de la esclavitud.
Porque al profundizar en su modo de vivir y en el de las
dems mujeres; al juzgar sin apasionamiento sus acciones y las
de las dems; al observar la naturaleza toda, que pareca decirle
tantas cosas, tantas verdades, trat de mirar hacia adentro, tra-
t de observar su propio corazn.
Y se revel al considerarse pequea, insignificante al lado
de los dems seres de la creacin. Comprendi al fin! Que la
mujer esclava tiene que desaparecer; no tembl al observar las
luchas, las eternas luchas, entre el capital y el trabajo, entre el
rico y el pobre, entre el fuerte y el dbil; pero si sinti que su co-
razn lata con violencia y que su cerebro pareca querer estallar
preado de idealismos batalladores y libertarios.

1 La Tierra N79, 17 de Febrero de 1922.

421
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Ama a sus hermanos, los obreros, y en medio de la huelga


les animaba, con su voz que jams tiembla; ella no huir jams en
las barricadas, ni las lgrimas quemarn sus mejillas, aun cuan do
su corazn rebose de dolor y de amargura.

11. A LAS INDIFERENTES1


A vosotras me dirijo, a vosotras las indiferentes, las mu-
jeres llenas de prejuicios y de temores, a las de cerebros sin luz,
como un abismo; a las de conciencias dormidas y atemorizadas
por las conveniencias sociales y el que dirn, les dirijo mi llamado,
mi llamado de mujer que sufre y siente el azote de la injusticias
de esta sociedad envilecida.
A vosotras! Las que horrorizais ante el paso de una colum-
na de proletarios consientes; hombres que han despertado del
letargo en que estaban sumidos, para lanzarse a luchar por una
mejora que no solo ser beneficiosa para ellos, sino para vosotras
tambin, las que nada haceis por la obra de justicia.
Nuestra bandera sin egosmos quiere cobijar a todos en
sus pliegues rojos como la sangre vertida en los campos de bata-
lla por defender intereses ajenos. Rojos como la sangre vertida en
las fbricas y talleres, en las oscuras minas y rojos tambin como
la aurora que anuncia un nuevo da de paz y libertad.
Os posternais reverentes ante un hombre vestido con po-
lleras que predica una doctrina falsa y nos conduce al inmundo
confesionario.
A vosotras, me dirijo para que dejeis de pensar por un mo-
mento! en vuestros vestidos y dragones, en esos maniques vivien-
tes, mentirosos del amor y la verdad, de esos que despus de bur-
larse de vosotras os abandonan para ir a un caf a comentar con
los amigos vuestra conducta, que nunca es buena, y vosotras las
eternas vctimas, callais!

1 La Tierra N72, 30 de Diciembre de 1921.

422
Anexo

Por qu callais? por qu teneis miedo? Por no saber rebe-


laros ante aquellos que os han impuesto su autoridad desptica.
No teneis derecho a nada, porque as lo han dispuesto ellos
a su antojo. Por eso debis dejar vuestra indiferencia y demostrar-
les que no sois inferiores a ellos. Por que nosotras somos esclavas
desde que nacemos; primero del padre, luego del hermano y por
ltimo del marido que creyndonos inferiores a ellos, se unen a no-
sotras para tener quien les sirva de cocinera, lavandera y mucama.
Por eso les dirijo este llarmado, a vosotras hermanas de
dolor y especialmente a las Sanduceras para que levanten, bien
alta, la frente, y sepan mostrar al mundo que la esclavitud termi-
nar, y en lugar de esta sociedad corrupta se levantar una socie-
dad de paz, de amor y de justicia y que en lugar de vuestro cere-
bro sin luz, como un abismo, estalle un volcn, pero no destructor
sin un volcn de ideas nobles y elevadas que enseen al hombre
y al nio la senda del bien.
Para eso es necesario que la mujer se una en sociedades y
luche por su bienestar.
Por eso espero que todas las mujeres, las hermanas de mise-
ria se unan y cooperen para el sostn del Centro cultural femenino
y se dejen de varios miramientos y prejuicios; y, formemos un solo
block donde se estrellarn las injusticias y termir nuestra esclavitud.
Luca Bucce
Paysand, diciembre de 1921.

12. A LA MUJER1
Los hombres han progresado tanto en intelecto, como de
generado en sentimiento. Las relaciones amorosas de hoy,
son un miserable y vergonzoso maridaje de hipocresa y li-
viandad. Es el mayor embrutecimiento en la ms grande de
las fuerzas humanas.
1 La Tierra N22, 15 de Enero de 1921.

423
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Pobre mujer; apostrofada por una sociedad injusta, de


tantos hombres malos! Ellos crearon y reglamentaron en su fa-
vor, el derecho a gozar de la vida, ms o menos con libertad, y
de ti se olvidaron, por vanos egosmos, como se olvida un pa-
sado sin objeto. Para t, que sos la fuente vivificante del amor,
y un manantial inagotable de tiernas caricias, est la negacin!
No tenis derecho de amar y de decirle a un hombre: Yo te amo!
Con toda la grandeza de la libertad; porque la crtica, las miradas
maliciosas y el desprecio caern sobre t, con todo el rigor de su
injusticia que basndote en tus legtimos derechos naturales no
cabra tal crtica, pero, despreciablemente la aceptas y te detie-
nes. Lo demuestra tu resignacin.
Cuando amas a un hombre, y en un mpetu violento se
estremece todo tu cuerpo, palpitantes tus senos, tiemblan tus
labios, lloran tus ojos, tus mejillas humedecidas por misteriosas
lgrimas de dolor; que delata vuestro inmenso y encadenado
amor. No habis pensado entonces, lo injusto e inhumana que
es esta sociedad, que te prohbe todo lo ms grande, lo ms be-
llo, lo inefable del amor?
T que sos la reina del amor, la que vive y muere por l,
la que haces enloquecer a un hombre, para jugar con l como
con un nio. T, que por tu hermosura encantadora, tu pudor
y disimulo que te sublimas, podras transformar la sociedad y
purificar los sentimientos del hombre, para que l se engrande-
ciera y te igualase en tus mritos, sos la vctima!... S, la vctima,
esclavizada en el claustro de una sociedad religiosa y abstracta,
donde vas a implorar de rodillas, ante un fetiche de dios que no
existe, un lugar feliz en el cielo para cuando mueras, sin pensar
que tu bienestar est en tu propio querer!
Pero ya que los hombres, no han querido darte la libertad,
y el derecho de amar y elegir por tus propios sentimientos al
hombre que tu quisieras, hazlo t; reblate contra todo lo que

424
Anexo

no sea amor, lo que no sea bello, lo que no sea vida. Despre-


cia al que te finge amor, implorandotelo u ofrecindote dinero,
porque ese, como el mendigo se encuentra impotente para con-
quistarte, y el impotente no es digno de tu aprecio, de tu amor...
Eso no es amar, tu bien lo sabes. El amor es un sentimiento
ms grande, ms noble y humano: Es la gestacin de una nueva
vida; es el xtasis que embriaga y no entorpece las convulsiones
que agitan los cuerpos y los labios, que se buscan ansiosos de
beber en ellos, el nctar de los besos. Y estos sentimientos tan
puros y naturales, no se compran, tu bien lo sabes...
Se conquistan con otros sentimientos que se hermanen,
que se unifiquen.
Cuando llegue el da que la mujer proceda como sienta, y
sienta todo lo contrario de este rgimen burgus, sin importarle
los obstculos; dejando todas las bajezas a un lado, por ser con-
trarias a los sentimiento puros de amor, se habr dado un gran
paso hacia la liberacin humana. Una enseanza ejemplar en-
tonces empezar. Se vivir el comunismo, tan caro conquistado,
donde si al menos no seremos todo iguales (intelectualmente)
estar sepultada para siempre esta sociedad, causante de esta
miseria y prostitucin.
Mara Anglica.
Salto, Enero de 1921

425
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

04. DEL ARTE OBRERO


13. SO1
Que me encontraba, en un pueblo que haba tenido que
pasar por una revolucin violenta, para conseguir la libertad, la
igualdad y la fraternidad.
En ese pueblo vi a unos que haban sido antes empleados
de banco, abogados, diputados, y ahora tenan que plantar pa-
pas, vender diarios, no saban hacer otra cosa.
Pero eran felices, ninguno era ms que otro, todos esta-
ban conformes con ese nuevo rgimen.
All me decan, el que no trabaja no come, trabajamos
tres horas por da y es suficiente, la produccin es doble, este
pueblo no sufre hambre, ya no se vive en pocilgas inmundas
como antes, nadie tiene el derecho de tener sirvientes, todos
somos iguales, los nios ya no tienen que encerrarse en las f-
bricas, van a la escuela, son libre como pjaros que vuelan por
el espacio.
Al otro da de la revolucin si usted viera, me decan,
cuantos fueron juzgados por el tribunal revolucionario, al gober-
nador, lo encontraron ensangrentado ajusticiado por el pueblo.
El amor es libre, si se aman, no necesitan terceros para
efectuarse la unin, los amantes se van como pjaros y hacen el
nido acompaados por la felicidad.
No hay ms ladrones, la propiedad privada fue abolida,
al desaparecer la propiedad, tambin desapareci la autoridad.
El dinero fue abolido, vivimos en el comunismo, todos
trabajan segn sus fuerzas y consumen segn sus necesidades.
Las crceles fueron derribadas, no queremos ver estos
instrumentos de torturas, decan los revolucionarios, los asilos
fueron tambin hechos aicos, queremos arrancar el mal de raz
nos decan.

1 La Tierra N8, 9 de Octubre de 1920.

426
Anexo

La tierra aqu es del que la trabaja.


Los prostbulos desaparecieron no se v ni una prostituta,
las mujeres han sido redimidas gracias a la revolucin.
Los viejos y los enfermos son cuidados con piedad y con
amor.
Los soldados se plegaron al movimiento revolucionario,
donde flameaba la bandera infame de guerreros est hoy la
bandera roja de nuestras reivindicaciones sociales.
Aqu no tenemos nacionalidad, que era causa de odios y
guerras, somos por encima de todo hombres y consideramos
hermanos nuestros a todos nuestros semejantes que hayan na-
cido en cualquier parte del mundo.
Entonces viven en el (y no termin la frase cuando me
dijeron) en el comunismo anrquico.
Y so lo que tendr que ser realidad para felicidad de
los pueblos.
LIRIO ROJO.

427
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

14. PRELUDIOS ROJOS1


PARA LA TIERRA
Escuchad proletarios del Salto,
los ardientes preludios de fuego
con que tae los nuevos principios
mi anrquica lira de cuerdas de acero.
Escuchad las estrofas aladas
de mi rojo lumnico verbo,
donde brillan con luces divinas
las grandes verdades del nuevo Evangelio.
Detengamos el paso cansado,
arrojemos los fardo al suelo,
y rompamos los grillos infames
que unce a los yugos los hombres del siervo.
Levantemos la frente oprimida,
dilatemos los bronquios y el pecho,
y arrojando las vendas malditas
los ojos cegados se llenen de cielo!
Basta ya de tiranos histriones
de mndigos, esclavos y enfermos;
dmos fin a la negra jornada
y un cielo de horrores se cierre en los tiempos!
Ni coronas ni biblias, ni vedas;
nada y de idoltricos textos!
con sus siglos nefandos cuestas
ha tiempo que tristes los dioses se fueron
Que los ros no formen fronteras,
ni naciones extraas los pueblos;
que a la mesa comn nos sentamos
del sol y la tierra, las aguas y vientos!
Que el trabajo no impida a los nios

1 La Tierra N150, 21 de Julio de 1923.

428
Anexo

empaparse de luz el cerebro;


que el trabajo no obligue a las madres
gastar la energa vital de sus pechos!
Y que miles de brazos robustos
permanezcan sin til empleo,
mientra ronda el espectro del Hambre
los negros rincones del hogar pauprrimo!
Y se encuentran los barcos anclados,
y en las fraguas no arden los fuegos;
y se estancan los centros fabricas,
y duermen silentes los campos desiertos!
J. Mario Caim
Salto julio de 1923.

15. A UN BORRACHO1
- Porqu, infeliz, te embriagas de ese modo?
- Para olvidar las penas de la vida.
- Cres, t que as podrs sanar tu herida?
- Yo s que soy feliz si estoy beodo.
- El que olvida el deber se hunde en el lodo
- Tambin de mi la sociedad se olvida.
- Qu ganas t con darte a la bebida?
- La inmensa dicha de olvidarlo todo.
- Tu pobre esposa abandonada gime;
Tus hijos piden pan de puerta en puerta;
El mundo te desprecia y te deprime.
Qu esperas insensato? Ea! Despierta!
Sacude ese vil yugo que te oprime!
Alma que no protesta, es alma muerta.
La sociedad que quiere escarnecerte,
Conozca al fin tu fibra poderosa!

1 Trabajo N12, 15 de Setiembre [Octubre] de 1920.

429
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

A luchar por tus hijos y tu esposa


A mejorar tu miserable suerte.
Solo el cobarde permanece inerte
Ante la desventura que le acosa.
Para destruir la explotacin odiosa
Hay que ser libre independiente y fuerte.
Hay que mostrarle a la nclita canalla
Que el pueblo humilde es un volcn rugiente
Cuando en su pecho la venganza estalla!
Hay que arrojarle el guante al prepotente,
Hay que arrastrarlo a la ntima batalla
Hay que aplicar la ley Diente por diente.
SEBASTIAN S. ANGELERI

16. HIMNO DE LA AURORA1


I
Los que penis ungidos al yugo del potente
Y la tierra benigna fecundis de simiente
Y lo que d su seno de sangre y sudor
Y alimentis al mundo esclavos del salario
Alzd los corazones, mrad el nuevo albor!
II
Mirad como rosadas se levantan las cumbres,
Y unnimes convergen las vasta muchedumbres,
Despiertas ya por siempre del secular sopor!
Y al aire se dilatan los pechos fraternales,
Al ritmo jubiloso de cantos augurales
Que esparcen por los mbitos un divino temblor,
III
Qu importa si los bhos multiplican su vuelo
Tendiendo alas de sombra contra el profano cielo!
1 Trabajo (Rocha) N4, 15 de Mayo [Junio] de 1920.

430
Anexo

Bien pronto ya sus ojos cegar el resplandor!


Y si en rabia nictlope graznan contra la aurora,
Su rabia nos confirma la hora nuestra hora
Visionarios obreros de otro mundo mejor!
IV
Con brazo inexorable derribaremos todo
Lo que es hoy antro de tinieblas y lodo!
donde germina el hongo plantamos la flor!
Cimentada en la roca ser nuestra colmena,
Y de polen y miel estar siempre llena,
Pues no habr quien la rob , [sic] ni holgar su labor!
Para todos los ojos la luz del firmamento!
Para todos los pechos hlito de viento!
Para todas las almas un efluvio de amor!
Y la estirpe que viene se llevar con ella
La antorcha que encendimos descolgando una estrella
A plantarla en la cumbre del eterno dolor!
AUGUSTO RUNGE.
17. LA BANDERA LIBERTARIA1
Son las flores de la vida, de la vida
Que jams besara el Sol, besara el Sol,
Son los hijos del trabajo
Los esclavos del dolor.
No han sentido la caricia, la caricia
Del albor primaveral, primaveral,
Y es su pabelln de guerra
La bandera universal.
Cual la dulce meloda, meloda
Del trinar del ruiseor, del ruiseor,
Es la armnica anarqua

1 Trabajo (Rocha) N13, 30 de Octubre de 1920.

431
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

La bandera del amor.


Es la ensea libertaria, libertaria
Que da fuego a mi ilusin, a mi ilusin
Mi librrima bandera
De Social Revolucin.

05. DE LAS DISCUSIONES TEORICAS.


18. PIENSA CAMARADA.1
T camarada, tienes un ideal poltico, ya por convenien-
cia, ya por simpata.
Tu sos posiblemente, blanco o colorados, catlico, so-
cialista o comunista; y como tal, les unos diarios en los que te
se dice [sic] que hagas esto o aquellos, y que sino lo haces
sos un traidor, y por lo tanto te descalifican, etc.
Pero, dime, camarada te consultan primero si ests de
acuerdo? Indudablemente, no te consultan para nada, sino que
te dicen: sto se haceo, y so hars.
Ves: en el sindicato no habr eso, y sabes por qu? Pues
porque en el Sindicato no hay dirigentes.
Por ejemplo: Los poltco [sic] con los que t ests de
acuerdo confeccionan una lista de candidatos al Parlamento:
al Consejo, a... cualquier lado, sin consultarse, y luego te dice;
Vote!
En el Sindicato, en cambio, hay que boycotear a una casa
o hacer una huelga, y no hacen como los poltico [sic], sino que
te llaman, te consultan y t como cualquier otro discutes si con-
viene o no hacer sto o hacer aquello otro.
Comprendes como en el Sindicato hay ms libertad?
Piensa, camarada: Si sos aun blanco o colorado, o catlico,
no importa, los mismo puedes ir al Sindicato, discutir, analizar y
luego...

1 La Tierra N145, 9 de Junio de 1923.

432
Anexo

Luego hacs lo que t conciencia te dicte. Si has de irte de


nuevo, te vas. Si has de quedarte, te quedas.
Nadie te manda. En el sindicato sos libre!

M.R.
19. FINALIDAD SINDICAL1
Compaeros, trabajadores:
Hoy me quiero ocupar de un problema sindicalista liber-
tario, del cual haca tiempo que quera plantearlo para el bien
de la colectividad revolucionaria y para la buena marcha de la
organizacin del proletariado, pero quelas circunstancias me lo
haban impedido.
Se trata de un mal entendido, debido a carencias de co-
nocimientos tericos-prcticos en la lucha social y, que algunos
logreros de la poltica aprovechan y propagan sembrando as la
divisin del proletariado, llevando a todas partes la escisin y el
confusionalismo.
Mi estudio es desinteresado y tiene como fin demostrar en
forma clara y sencilla el factor principal de la organizacin obrera,
que muchos por ignorancia y otros por convencionalismos parti-
distas, quieren desconocer.
No es la primera vez que encontrndome en asambleas de
distintos gremiost, cuando un compaero se extiende en consi-
deraciones y habla de finalidad de la organizacin que es el co-
munismo anrquico se le interrumpe en forma grotesca y ridcu-
la con este epteto: Las ideas al entrar en el sindicato se dejan
atrs de la puerta
Yo no se que concepto tendrn de organizacin los que as
la hablan, pero si se que estn equivocados o son polticos, los
mistificadores de siempre que se inmiscuyen en los sindicatos, no
para luchar por la destruccin del estado y el capital, sino, para

1 La Tierra N 75, 21 de Enero de 1922.

433
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

hacer obra del proselitismo autoritario obstaculizando as la orga-


nizacin, del proletariado siendo revolucionaria no es evolucio-
nista ni mejorativista y por lo tanto lucha por la emancipacin
integral de los trabajadores, es decir, por la abolicin del capital y
el estado para en cambio levantar sobre sus ruinas la federacin
de productores libres Otro sindicalismo que no sea este es falso
y por lo tanto poltico, no de accin directa; lleva el nombre de
tal, pero lo desmienten en la prctica. Por lo tanto si la organiza-
cin es uno de los medios ms potentes para la revolucin y tiene
como finalidad despus de ella reorganizar la produccin y el con-
sumo, precindiendo de toda autoridad basada en los principios:
Producir segn sus fuerzas y consumir segn las necesi-
dades.
Creo que es ni ms ni menos lo que propongamos noso-
tros: el comunismo en el orden econmico, quedando el hombre
reintegrado en su derecho, practicando con sus congneres el
apoyo mutuo.
Pero no debemos olvidar para que no se produzca la trans-
formacin econmica de esta sociedad decrpita y sea fecunda:
la obra moral e intelectual dentro y fuera del sindicato, y tengo
entendido que toda transformacin ha de ser la resultancia de
la superacin de los individuos y que por lo tanto del organismo
que integra que determinaran los acontecimientos, salvo ciertas
excepciones que estn sujetas al determinismo biolgico y que
nosotros tenemos que orientar porque no hay preparacin en la
masa popular.
No podemos esperar de un movimiento o revolucin de
este carcter, que puede llamarse (parto social) se opere la trans-
formacin por que son movimientos sin inteligencia, sin una fi-
nalidad que los caracterice, sin organismos y que son costosos
formarlos, en su revuelta, para la reorganizacin de la nueva so-
ciedad, y por lo tanto, como dije ms arriba orientamos tratan-

434
Anexo

do de encaminarlos hacia el comunismo libertario. Es necesario


entonces que en la organizacin obrera se discuta ampliamente
sobre la revolucin y el comunismo preparando as el espritu de
los trabajadores para que cuando se produzca todos y cada uno
sepan cumplir con su deber.
Es necesario que el sindicalismo deje de ser un dogma
para muchos y en l se discuta libremente y sin temor Anarqua
puesto que es hacia ella que nos dirigimos y que el sindicalismo
es una de las tantas ramificaciones empleada como medio para la
materializacin de nuestros anhelos.
Y es necesario que la organizacin haga una guerra sin
cuartel contra todos los trnsfugas polticos, autoritarios, que
quieren hacer de ella un medio para satisfacer sus ambiciones
parasitarias y, a los ingenuos se les ensee que para entrar al sin-
dicato no hay que dejar las ideas detrs de la puerta; es decir,
dejar de ser hombres, a no ser que ideas rufianescas, polticas...
sino todo lo contrario, hay que ir a l con espritu libertario para
combatir los pillos expulsndolos porque constituyen un obst-
culo por que son polticos y por lo tanto enemigos de la organi-
zacin revolucionaria del proletariado que lleva como finalidad el
Comunismo Anrquico.
Manuel Rodriguez.

20. EL ANARCO-SINDICALISMO1
En estos momentos tan prsperos y fecundos en des-
viaciones, en medio de tanta confusin, que reina en el campo
proletario y anarquista, han surgido muchas frmulas que pre-
tenden- cada uno por su parte- ser las salvadoras del prximo
movimiento revolucionario. Pero ninguna-a nuestro entender- ha
podido superara a la descrita por Kropotkine en sus libros la Con-
quista del Pan y Palabras de un Rebelde. Todo lo contrario cada
1 La Tierra N 195, 16 de Agosto de 1924

435
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

una de estas nuevas frmulas no tratan mas que empequeecer


y reducir a la mnima expresin el espritu de libertad latente en
el corazn de cada paria.
As es que hoy sentimos decir en las reuniones obreras y
leemos en los peridicos, todo el poder a los sindicatos y la
organizacin obrera es apta para suplantar a la clase capitalista
en la direccin y el consumo y otros que dicen, organizndonos
industrialmente estamos creando la sociedad nueva dentro del
cascarn de la vieja y as por el estilo. Y estas afirmaciones son
hechas por compaeros que hasta ayer decan: todo poder es
tirnico; abajo el poder.
Ahora en cambio ya no piensan as; piensan que el poder es
malo porque lo detenta la burguesa y los farsantes de la poltica
pero que sera bueno si lo detentaran los obreros desde sus sindi-
catos y federaciones; error. Si los sindicatos que hoy representan
un papel de resistencia combativa contra la avaricia capitalista y la
tirana del estado se convirtieran a su vez en rganos de poder, - y
entindase que damos a esta palabra su verdadero significado- nos
encontraramos de nuevo bajo la misma tirana, envueltas en las
mismas redes, sin haber cambiado en lo mas mnimo nuestra si-
tuacin. Este sera un cambio de papeles, pero nunca un cambio
fundamental como queremos los anarquistas.
Qu habramos ganado con un cambio semejante? Otro
tanto los pueblos que se insurreccionaban contra las corrompidas
monarquas; que hoy expulsaban al Rey y maana pasaba a ocupar
su lugar un presidente republicano; y nosotros tendramos que en
lugar delos burgueses y profesionales de la poltica, en vez de los
seores de levita?, seramos gobernados por los seores de blusa y
alpargatas; pero no dejaramos de ser gobernados.
Algunos anarcos sindicalistas, como Schapiro, hasta han in-
sinuado la necesidad de gobierno sindical provisorio en el perido
de la revolucin cuanado haya sido abatida la burguesa porque

436
Anexo

segn ellos de no hacerse as pueden malograrse los esfuerzos


revolucionarios. Nosotros en cambio creemos todo lo contrario,
creemos que la constitucin de un gobierno aunque fuera sindical
y transitorio no vendra a favorecer en nada a la revolucin, si no
que por el contrario la perjudicara y la matara. Recuerden los lec-
tores que cuando la revolucin rusa se nos dijo tambien en toda la
prensa comunista y hasta burguesa que el gobierno de Lenin era
transitorio (y de esto ya van siete aos!)
Nuestra misin no es, no, que se constituya un gobierno,
sino infundir valor a las masas del pueblo para que continue en
la lucha, y sobretodo para expropiar a la burguesa, y despues ya
surgiran en el pueblo los grupos de hombres capaces de organizar
la nueva vida social y econmica sin necesidad de la tutora de un
gobierno providencial. No queremos con esto negar que las orga-
nizaciones sindicales pueden ser de utilidad a la revolucin. Pero
como muy bien dijo Malatesta, el sindicalismo puede ser muy til
a la revolucin, a condicin de ser lo menos sindicalismo posible
(...)
III
Hechas las consideraciones precedentes creo necesario y de
utilidad para los lectores que tienen inters en estudiar estos pro-
blemas de gran importancia para la marcha de los acontecimientos
futuros, decir que es el anarcosindicalismo y la finalidad que per-
sigue. Esta nueva frmula, hace pocos aos que se hable de ella
en nuestro campo obrero y anarquista en los paises hispano ame-
ricanos, aunque ya sea un poco vieja en europa, y es por lo tanto
bastante desconocida y mal interpretada, por todos los militantes,
hasta por aquellos que se dieron a propagarla. Nosotros al princi-
pio hemos creido que se daban ese denominativo a los anarquistas
partidario de tomar intervencin en el movimiento sindical.
Pero de los estudios hechos a ese respecto hemos sacado en
concecuencia que este era un criterio erroneo por nuestra parte.

437
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

El anarco-sindicalismo trata de hacer del sindicalismo que para no-


sotros anarquistas por arriba de todas las formulas no es ms que
un medio de lucha por las reivindicaciones sociales todos los que
sufren una finalidad. De ahi que nos hablen de un periodo transi-
torio de dictadura sindical y creida por los organos gremiales sin-
dicatos, federaciones etc, segun ellos para contrarrestar el avance
de la burguesia amenazante.
A este mismo respecto dice Pierre Ramus (en el suplemen-
to de la Protesta 2 de julio). De las consideraciones expuesta se
deduce el rechazo completo de la defensa del territorio revolu-
cionario con los mtodos usuales tcnicos militares por nosotros
anarquistas y sindicalistas. Si aceptamos esos metodos, entonces
podemos renunciar a la realizacion de nuestro objetivo. Pues dado
que es seguro o al menos posible que se produzcan invaciones mi-
litares del mundo militar capitalista, chocariamos en una etapa
transitoria de una larga serie de encuentros guerreros a los que
muy probablemente ninguno de nosotros sobrevivira y cuyo resul-
tado definitivo es muy dudoso.
En todo caso me parece intermedio de un periodo transi-
torio en este caso inapreciable para la realizacion del anarquismo.
Se dice ordinariamente que una etapa transitoria, exige que
la organizacin obrera econmica de la revolucin, cargue con todo
el peso de la administracin de la produccin y de la organizacin
y por consiguiente que se someta forzosamente grandes partes del
resto de la sociedad a sus deseos.
Esto sera una dictadura de las Federaciones anarcosindica-
listas contra una gran parte de la sociedad. Pero debo repetir que
no puedo representarme en general una revolucin social de ese
modo sin una dictadura estatal efectiva. Si nuestras federaciones
anarquistas sindicalistas procediesen de esa manera, llegaramos
muy pronto, no a la superacin del periodo transitorio, sino al olvi-
do del anarquismo.

438
Anexo

Llevados por el interes de demostrar, lo erroneo que es para


la consecucin de nuestras finalidad idealista altamente social y
humana tratar encerrara en los estrechos lmites una formula
un sistema, hemos llenado estas cuartillas sin darnos cuenta que
ocupariamos un espacio muy grande en las columnas de este pe-
ridico. Ahora para terminar diremos diremos que como el tema
lo requiere por ser de gran importancia, nos ocuparemos de l en
otros artculos. Esto siempre de acuerdo con nuestras supremas
aspiraciones: La libertad para nosotros sin olvidar la cuestin eco-
nmica el principal problema es echar por tierra las instituciones
coercitivas opresoras del presente rgimen para conquistar la so-
ada y anhelada libertad y la equidad social el comunismo anarqui-
co. He ahi nuestra formula!
A. Vidal
Montevideo julio 6 de 1924

21. SINDICATO UNICO POR INDUSTRIA Y POR OFICIO1


Nos encontramos abocados nuevo problema; el cual
consiste en demostrar ampliamente y en una forma concreta, las
ventajas que aportan para el proletariado las formas de organi-
zacin que median entre el Sindicato Unico por industrias y el
Sindicato por Oficios.
Sabido s que, de estas formas de organizacines, si sus
componentes no estn doctados de una conciencia clara y precisa
que les permita cada trabajador obrar por libre iniciativa que en
cada hombre debe haber para que sea factible la emancipacin
humana, cualquiera de ellas serin deficiente por que ninguna de
estas dos formas de organizacines llenarin las aspiraciones del
proletariado revolucionario.
Pero es el caso que, el Sindicato Unico por Industrias es el
que menos ventaja nos ofrece por su forma y mtodos centralista,

1 La Tierra N100, 15 de Julio de 1922. Se respetaron los tildes originales.

439
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

y digo asi, no por que tenga capricho lo haga con un descono-


cimiento absoluto de lo que es el Sindicato Unico sino por que la
misma practica adquirida en la lucha diaria me ha doctado estos
conosimientos [sic]
El Sindicato Unico se diferencia del por oficios y ofrece me-
nos ventajas para el desarrollo sus componentes en la lucha, por
que todos ellos giran sobre un solo eje, que en este caso sera el
Consejo junta Central del Sindicato, el cual impide las dems
secciones del mismo que puedan declararse en huelga sin su
consentimiento, por cuyo motivo han fracasado la mayora de las
veces las organizaciones que adoctan este sistema.
Y sin vemos lo que sucedio con la F O. seccion Salto y
seccion Concordia de las cuales fui militante.
Mientras los camaradas de aqu se declararon en huelga,
los de la seccion Concordia no podian hacerlo por que no tenian
el consentimiento del C. F. de la F. O. M. o sea la Central de Buenos
Aires por cuya causa fue el fracaso de la 1.o de las nombradas, y
eso que la casi totalidad estaban afiliados a la seccin Concordia.
Pues si tenemos como base todo estos ejemplos que
seguir creyendo en lo que conocemos ya como malo? o ser que
quisiramos cerrar los ojos a la realidad?.
Para tener una organizacin poderosa y bien revoluciona-
ria no se necesita agrupar todos los trabajadores en un solo
sindicato como quien rene una majada de ovejas en un corral.
Sino que es necesario pujar para que cada trabajador
aprenda a tener f en si mismo, que nadie ms que ellos han de
ser los que resolvern sus propios asuntos, y que la solidaridad no
se mide ni tiene limites, que ella se debe prestar al trabajador que
la solicite pertenezca o no a su sindicato, sin detenerse a mirar
que nacionalidad es.
Tanto el Carpintero como el Albail, el Portuario como el
Maritimo sea del oficio que sea, su causa es la nuestra y por lo

440
Anexo

tanto cada trabajador debe hacerla suya.


Esto es lo que debemos hacer desde ya, si es que en ver-
dad queremos tener una organizacin revolucinaria.
Las organizaciones son revolucinarias, no por el nmero
de individuos que agrupe en su seno, sino por el grado de capaci-
dad que estos hayan adquirido en sus Sindicatos de oficios.
Por lo expuesto creo haber demostrado en partes, an que
no tan sintticamente co mo deviera [sic] de ser, pero con esto
queda demostrado lo que s y las ventajas que tienen para el
proletariado revolucinario los Sindicatos Unicos por Industrias y
los Sindicatos por Oficios.
A. G
22. COMUNISMO Y ANARQUA1
Los socialistas, esto es la fraccin maximalista que hoy orien-
ta la direccin oficial del Partido Socialista Italiano, hace ya bastan-
te tiempo que suele tomar los dos trminos Comunismo y Anarqua
como si fuesen antagnicos, como si la idea que ambas significan se
contradijeran la una lo opuesto de la otra.
En Italia, donde hace ms de cuarenta aos estas dos pala-
bras se adoptaron como un binomio inseparable, y que unidos son
la expresin ms exacta del programa anrquico, tal tentativa es
ridcula, no sirviendo ms que para armar confusin en la idea y
malos entendidos en la propaganda.
No estar dems recordar que fue precisamente un con-
greso de la Seccin Italiana de la Primera Internacional de Traba-
jadores, en 1876, el primero que afirm que el comunismo era el
sistema econmico que mejor podra hacer posible una sociedad
sin gobierno y que la anarqua (esto es la ausencia de gobierno),
como organizacin libre y voluntaria de la produccin social, era
el medio de mejor actuacin del comunismo. Lo uno vena a ser

1 La Tierra N81, 4 de Marzo de 1922.

441
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

la garanta de la realizacin eficaz de lo otro. Ms adelante, Pe-


dro Gori, remarca bien que en una sociedad transformada por la
revolucin, segn nuestra idea, el socialismo (comunismo) cons-
truira la base econmica y la anarqua sera la finalidad poltica.
Estos principios e ideas como definicin del programa
anrquico, conquistaron derecho de ciudadana, como suele
decirse en el lenguaje poltico, hasta el final de la Primera Inter-
nacional en Italia (por el ao 1880), en la cual los socialistas no
anarquistas jams se llamaron comunistas. Tal definicin o fr-
mula del anarquismo, el comunismo anarquico era aceptado en
el lenguaje hasta por los escritores socialistas; cuando queran
especificar su programa de reorganizacin social desde el punto
de vista econmico, hablaban, no de comunismo, sino de colecti-
vismo y se llamaban en efecto colectivistas.
Todo esto hasta 1918, es decir, hasta que los bolshevikis
rusos, para diferenciarse de los social demcratas patriotas y re-
formistas, decidieron cambiar de nombre y llamarse comunistas,
volviendo a la tradicin histrica del clebre manifiesto de Marx y
Engels de 1848 y de los socialistas alemanes anteriores al 1880. Y
poco a poco casi todos los socialistas adheridos a la Tercera Inter-
nacional de Mosc han terminado por llamarse comunistas, sin
reparar en el cambio de la significacin de la palabra y el cambio
de situacin del partido en esos ltimos cincuenta aos, come-
tiendo as un verdadero anacronismo.
Pero esto es asunto de ellos y nada nos inquietara, si se hu-
biesen apresurado a explicar claramente cual es el cambio de ideas
que corresponde al cambio de la palabra. Es cierto que los socia-
listas maximalistas han modificado algo en su programa del fijado
en Gnova, para Italia, en 1892, y en Londres para la Internacional
Socialista, en 1896. Pero la modificacin es exclusivamente sobre
mtodos de lucha (adopcin de la violencia, atenuacin del parla-
mentarismo, dictadura en lugar de democracia, etc.) y no se refiere

442
Anexo

al ideal de reconstruccin social que implican las palabras comunis-


mo y colectivismo. Porque lo referente al programa de reorganiza-
cin social, los socialistas, incluso los maximalistas, en nada lo han
modificado: en realidad, bajo el nombre de comunismo, siempre
subsiste el antiguo programa colectivista autoritario.
La razn del equivoco consiste en esto: mientras nosotros,
anarquistas, damos a la palabra Comunismo su verdadero signifi-
cado, indicando un sistema de produccin y de distribucin de la
riqueza (de dada uno segn su esfuerzo, a cada uno segn sus nece-
sidades), esto es el significado de un sistema prctico de actuacin
socialista al da siguiente de la revolucin, que corresponde as mis-
mo, al significado etimolgico y a la tradicin histrica, los socialistas
quieren, con la misma palabra, indicar nicamente el mtodo de
lucha y el criterio terico adoptado por ellos en el movimiento y en
la propaganda.
Algunos socialistas entienden por comunismo sencillamente
el mtodo de violencia autoritaria, con la cual quisieran imponer el
socialismo por medio de leyes y decretos gubernativos; otros, con la
misma palabra, quieren significar el complejo de teoras que corren
bajo el nombre de marxismo, aunque no siempre son marxistas (lu-
cha de clases, materialismo histrico, conquista del poder, dictadura
del proletariado, etc.); estos ltimos lo denominan a su vez comu-
nismo critico, acoplando dos palabras que no tienen nada entre si,
nexo lgico alguno.
Segn nuestra manera de ver unos y otros estn en error, ya
que las ideas y los mtodos arriba expresados pueden ser tambin
compartidos por los comunistas y conciliarse con el comunismo (en
cuyo caso tendramos el comunismo autoritario y marxista), pero
por si solos tambin constituyen el comunismo verdadero, no bas-
tan para caracterizarle y pueden muy bien en cambio conciliarse
con otros sistemas socialistas y revolucionarios.
De cualquier manera cada uno se llama como quiere y, en

443
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

defecto, nosotros no negamos del todo a los socialistas maximalis-


tas en derecho de adoptar este nombre que ha sido absolutamente
nuestro durante ms de cuarenta aos y que ninguna intencin te-
nemos de renunciarlo. Pero cuando discutan de anarqua y con los
anarquistas, nuestros neocomunistas tienen la obligacin moral de
no simular ignorancia del pasado, de no apropiarse de este nombre
hasta el extremo de pretender su monopolio y crear entre los dos
trminos Comunismo y Anarqua una incompatibilidad artificial y
mentirosa.
Sabido de todos es nuestro ideal, sintetizado en la palabra
Anarqua, tomando en su contenido programtico de organizacin
libertaria del socialismo, se ha llamado siempre comunismo anr-
quico. As toda la literatura anarquista y socialista en el sentido co-
munista, hasta el fin de la Primera Internacional. El colectivismo es-
tatal y legalitario por un lado y por el otro el comunismo anrquico
y revolucionario eran las dos escuelas en las que se divida el socia-
lismo hasta el estallido de la revolucin rusa. Y cuntas polmicas
hemos tenido desde 1880 hasta 1918 con los socialistas marxistas y
con los modernos neocomunistas en contra de un colectivismo de
corte militarista germnico!
Ahora bien, el ideal de ellos sobre la reorganizacin futura ha
permanecido el mismo, acentundose su carcter autoritario. Entre
el colectivismo que era entonces objeto de nuestra critica y el co-
munismo actual de los neocomunistas, la diferencia est nicamen-
te en el mtodo y en los motivos tericos, no en el fin. En verdad
retorna al comunismo de Estado de los socialistas alemanes de prin-
cipios de 1880, (el Volk-Stgeat, Estado popular) del cual Bakunin
hizo una crtica muy corrosiva, y an el socialismo gubernamental
de Luis Blane, demolido definitivamente por Prudhon; pero solo del
punto de vista secundario poltico, del mtodo revolucionario esta-
tal, no del punto de vista econmico propio de la organizacin de la
produccin y de la distribucin de la riqueza, sobre el que Blane y

444
Anexo

an Marx mismo vieron ms claro y ms amplio que los neocomu-


nistas modernos.
El contraste, la contradiccin, no est pues, entre el comu-
nismo y la anarqua; sino entre el comunismo autoritario o estatal
y el comunismo libertario o anarquista. Si hay que buscar una con-
tradiccin entre los trminos, no se hallar sta entre Comunismo
y Anarqua, que se integran tanto que uno no es posible sin el otro,
sino ms bien entre Comunismo y Estado. Por lo menos su concilia-
cin es muy difcil y queda subordinada al sacrificio de toda libertad
y dignidad humana hasta hacerla casi imposible, hoy que el espritu
de revuelta, de autonoma y de iniciativa est extendido entre la
masa anhelosa no solo de pan, sino tambin de libertad.
Luis FABBRI.

06. DOCUMENTOS ORGNICOS.

23. NUESTRO PROGRAMA1


He aqu el programa mnimo e inmediato que pretendemos
imponer por medio de la revolucin armada de los pobres contra
los ricos, para que sea posible la felicidad en los pueblos.
Lo presentamos a consideracin de todas las personas sin-
ceras para que lo estudien y le introduzcan las mejoras del caso.
Presentarnos sin saber a donde vamos sera prueba de igno-
rancia o de bellaquera, cosas que no pertenecen a los anarquistas.
1 Que la propiedad privada: campos, casas, ferrocarriles,
minas, ros y todo lo existente, pase a ser de propiedad comn de
todos aquellos que contribuyen a su produccin y perfecciona-
miento, tanto en el orden manual como intelectual.
2 Los productores en general sern administradores y di-
rectores de sus propios esfuerzos, sin ingerencia de elementos ex-
traos, como ser: polticos, burgueses, etc, etc.

1 La Tierra N2, 28 de Agosto de 1920.

445
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

3 Implantada la comunidad de la propiedad y del cada


uno, quedar de hecho abolido el dinero y todo lo que ahora
sirve ficticiamente para el intercambio de individuo a individuo
y de pueblo a otro.
4 Toda persona ser libre de pensar y propagar las ideas
religiosas y filosficas que ms le agraden, siempre que al propa-
garlas no exija ni acepte recompensa material alguna y que, para
vivir, contribuya con el conjunto social a producir algo til.
5 Toda persona, para consumir y hacer uso de las ventajas
todas de la sociedad comunista, estar obligada a contribuir con su
esfuerzo intelectual o manual al engrandecimiento de la comuni-
dad y siempre que su edad y condicin fsica se lo permita.
6 Abolicin de toda clase de jerarquas y privilegios, causa ac-
tual de todas las rencillas, envidias, servilismos, crmenes, guerras, etc.
7 La instruccin a la niez estar bajo la direccin y admi-
nistracin del gremio de maestros y profesores, teniendo cada cual,
en su escuela o clase, toda la libertad de practicar el sistema peda-
ggico que creyera ms conveniente. Esto, sin perjuicio de que cada
padre pueda dar a sus hijos la forma de instruccin y educacin que
su conciencia le dicte.
8 En la misma forma y con el mismo derecho con que un
padre puede dar a sus hijos la instruccin que ms le agrade, cada
habitante de la nueva comuna tendr derecho a organizar la forma
de vida y de produccin como, y con quien quiera, siempre que
parta de un principio nico: abolicin de toda explotacin del hom-
bre por el hombre, tanto en el orden econmico como poltico.
9 El amor, como la unin de seres de diferentes sexos, ser
completamente libre y sin intervencin de terceros.
10 Basndose la produccin de artculos en general en
las necesidades de los mismos productores, sern stos los que
fijarn la cantidad de horas de trabajo diario, formas y calidad de
la produccin.

446
Anexo

11 Abolicin absoluta de todo ejercito permanente, que-


dando en pi solamente fuerzas armadas revolucionarias, en ca-
rcter provisorio, para impedir que los reaccionarios obstaculicen
el nuevo rgimen de igualdad y de justicia.
12 No siendo la diferencia de razas, de nacionalidades, de
sexo, de inteligencia, razn de privilegio, todos tendrn igualdad
de derechos y de deberes.
13 Si bien el apoyo mutuo, el intercambio entre pueblos,
regiones y continentes ser la base de la nueva organizacin so-
cial, esto no ser obstculo, para que una absoluta autonoma
y descentralizacin exista, para as no dar lugar a autoritarismos
nefastos, como existen en el actual rgimen social.
14 Correspondiendo a cada habitante disfrutar, como m-
nimo: de casa, alimentacin, vestimenta, instruccin, etc, etc.,
equivalente, todo esto, a mucho ms de lo que en el actual rgi-
men disfrutan los pequeos capitalistas o clase media, stos, por
lo tanto, no deben temer el advenimiento de la nueva sociedad,
por cuanto saldrn beneficiados.

24. FEDERACIN OBRERA LOCAL SALTEA


PACTO DE SOLIDARIDAD1
Considerando:
Que la sociedad actual descansa sobre dos milenarios prin-
cipios, hijos de la ignorancia humana: la propiedad privada indi-
vidual y la autoridad gobierno, los cuales al travez de los tiempo
se han transformado en instituciones que tienden conservarse,
dando origen a un desequilibrio social entre los que nada poseen
y que para subsistir se ven preciados alquilar sus msculos su
inteligencia otros, que amparados en la autoridad gobierno
se [crean? ilegible] propietarios de todo los que han conquista-
do para su bien a la humanidad Este desequilibrio parcial factor

1 La tierra N93, 27 de Mayo de 1922.

447
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

de intereses y pasiones encontradas entre hombres y pueblos ha


sido el causante de guerras, crmenes, miserias y de ms males
que han impedido la emancipacin humana.
Que el progreso cientfico y la permanente evolucin de
los conocimientos humanos, al producir la tcnica moderna, vin-
cula los hombres mujeres y nios en el trabajo la producin
imposbilitando la subsistencia del viejo principio de la apropia-
cin individual o propiedad privada y desarrollando cada vez ms
la necesidad de un rgimen comunista de consumo y produccin.
Que por otra parte este mismo progreso realizado sobre el
campo de la filosofa y las artes que ha revelado, que la evolucin
historica se efecta en el sentido de la libertad individual, liber-
tad que se robustece y consolida precisamente por las practicas
de solidaridad, haciendo innecesario el establecimiento de todo
principio de autoridad o gobierno, dando paso a la anarqua de-
clarada enemiga.
Convencidos de que los factores de tantos males son la
propiedad privada y la autoridad ya se sta teocratica, monarqua
absoluta o constitucional, republicana democrtica federal o uni-
taria, proletaria dictatorial o federativa sindicalista y de que las
ideas que hoy agitan a todos los trabajadores, parias y oprimidos
de la presente sociedad, se basan y fundamentan en los adelan-
tos cada vez ms crecientes que se han realizado y se realizan en
el campo de la actividad humana, el segundo Congreso Obrero de
Salto, se declara partidario del Comunismo Anarquico y denomi-
nar en adelante F O L Saltea Comunista Anrquica, por que al
aplicar sus sabios principios de que cada cual producir segn
sus fuerzas y consumir segn sus necesidades y al imposibilitar
la accin coercitiva de todo gobierno o autoridad de clase, abre
a los humanos los infinitos horizontes de amor, libertad, igualdad
y fraternidad, donde todos los hombres se confundan en un solo
anhelo y abrazo fraternal.

448
Anexo

Por lo tanto la F. O. Comunista Anarquica de Salto, declara.


1o. Que repudia la frmula autoritaria de todos los parti-
darios del marxismo dictatorial, llamese socialista, comunista o
sindicalistas y cuyos propsitos estn sintetizados en la frmu-
la todo el poder a los sindicatos o clase obrera por cuanto los
trabajadores que anhelamos emanciparnos no perseguimos rem-
plazar en el poder, ni en la direccin de la actividad social a la
burguesa capitalista, sino por el contrario, concluir para siempre
con la divisin de la sociedad en clases, imposibi itando la cons-
titucin de todo poder o autoridad, ejerctense en nombre del
proletariado, del sindicato o del pueblo,por lo cual denuncia esa
frmula al proletariado consciente como nuevo rgimen de go-
bierno que pretenden constituirse, tan hueco de valor socilogico
como peligroso para los anhelos de libertad y de fraternidad que
debemos perseguir los trabajadores,
2o Que sostiene los principios federativos descentralistas
bosquejados por Miguel Bikunine y por lo tanto, la F.O.L.S no aus-
piciar la constitucin de Sindicatos Unicos de ninguna especie,
constituyendo federaciones obreras ya sean por oficios o indus-
trias bajo la ms completa armona para que sean los elementos
constitutivos de las comunas libres del porvenir, de modo que los
trabajadores sean libres en la federacin de su ramo u oficio, sta
en la local y as sucesivamente en la comarcal, regional o mundial.
3o Adoptar como medios de lucha, todos los medios prc-
ticos que por la accin directa resulten eficaces para la realizacin
de nuestra finalidad, propiciando los federados todas las mejo-
ras econmicas y morales que sean posibles.
4o La solidaridad ser practicada por todos los federados
entendind se, que debe interpretarse en el concepto amplio, al-
truista, y generoso de la palabra.
5o Adems del peridico, propaganda personal, la F.O.L.S.
Comunista Anarquica propiciar campaas ilustrativas dando

449
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

conferencias, fundando bibliotecas, escuelas racionalistas y dis-


tribuyendo folletos y libros educativos.
6o En presencia de que para lograr nuestra finalidad ser
nesaria una insurreccin general de todos los trabajadores, parias
oprimidos de la actual sociedad, la F.O.L.S luchar por todos los
medios su alcance en el sentido de precipitarlos acontecimien-
tos hacia la Revolucin Social.

25. FEDERACIN OBRERA LOCAL SALTEA.


Acuerdo tomados por el II Congreso Obrero Local y I Congreso
Obrero y Anarquista Comarcal, realizado los das 1, 2, 3 y 4 del
corriente.1
De acuerdo con una resolucin del Congreso y de la Federa-
cin Obrera Local-Comunista Anrquica, transcribimos los acuer-
dos que ha tomado el mismo a fin de que los trabajadores los
conozcan, los estudien y traten de darles una pronta aplicacin.
Editorialmente, los iremos comentando, contribuyendo con ello a
la obra que se propusieron los congresales. Por su naturaleza, los
acuerdos no pueden ser ms importantes por eso confiamos en
que los compaeros se han de empear en que se materialicen en
hechos prcticos cuanto antes.
1 Acuerdo
Para que de acuerdo con las prcticas anarquistas, esencialmen-
te libertarias, todos los delegados tuvieran voz y voto la barra
amplia libertad de expresin.
(Acuerdo tomado por los delegados con mandato imperativo)
En vista de que la rden del da trata asuntos de importan-
cia moral y doctrinaria para el proletariado revolucionario y de que
en asuntos de esta ndole debe imperar el criterio anarquista de
amplia libertad de expresin y decisin; adems que en asuntos

1 Publicado en La Tierra N90 (08-05-1922), N91 (13-05-1922) y N92 (13 [22]-05-


1922)

450
Anexo

de esta naturaleza no es posible someter los conceptos doctrina-


rios al azar de las votaciones o elecciones, los delegados con man-
dato imperativo resuelven: -que todos los delegados presentes sin
distincin de mandato tengan derecho a voz y a voto en todos los
asuntos de materia doctrinaria, moral o general a los intereses del
proletariado revolucionario y que para los asuntos de trmite o
particular a la F.O.L.S. Solo tengan mandato imperativo las institu-
ciones adheridas a la misma.
-Que las instituciones que mandaron representantes en ca-
rcter deliberativo o informativo quedan en libertad de acatar o
no los acuerdos del Congreso.
-Que de acuerdo a lo anteriormente expresado la barra
tenga amplia libertad de exposicin y sea cualquiera que sean sus
convicciones o doctrinas puedan tambin hacer mociones a la
mesa teniendo por lo tanto solamente derecho a voz. Que sobre
estos asuntos no se haga votacin sino que se pase a otro punto
cuando se haya agotado el debate.
2 Acuerdo:
Por los presos por cuestiones sociales; Simn Radowinski y
anarquistas presos en Rusia Sovietista.
El II Congreso Obrero Local y I Congreso Obrero Anarquista
Comarcal da un voto de protesta contra el gobierno de Estados
Unidos de Norte Amrica por la condena a silla elctrica impuesta
a los compaeros anarquistas Nicols Sacco y Bartolom Vanzetti y
al mismo tiempo hacer extensivo este voto, por los dems presos
anarquistas que gimen en las crceles y presidios y tambin en las
prisiones del gobierno sovietista (sic) de Rusia.
Enviar un saludo caluroso por medio del glorioso paladn
anarquista La Protesta al compaero Simn Radowinski preso
en Husuhaia y a todos los obreros y anarquistas que luchan por la
emancipacin humana.

451
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

3 Acuerdo:
Comit pro Sacco y Vanzetti y dems presos por cuestiones so-
ciales y de protesta por la reaccin capitalista y estatal contra el
proletariado revolucionario.
Se acuerda recomendar a la Federacin Obrera Local Salte-
a que constituya un Comit encargado de propiciar una agitacin
en ese sentido entre el proletariado local.
4 Acuerdo
Sobre el 4 punto de la orden del da: Revisacin de valores:
socialismo, sindicalismo y anarquismo.
El II Congreso Obrero Local y I Congreso Obrero y Anarquis-
ta Comarcal en presencia de que el movimiento obrero que busca
la emancipacin integral de la clase obrera, emancipacin que no
se puede realizar bajo otras bases que las del Comunismo en el
rden econmico y de la Libertad o anarqua en el rden poltico y
social, acuerda recomendar que las Sociedades o Sindicatos Obre-
ros como las Federaciones sean explcitas en sus conclusiones y
finalidad revolucionaria, declarndose abiertamente partidarios
del Comunismo Anrquico, basado en el Sistema Federalista des-
centralizado y libertario que bosquejara Miguel Bakounine y por lo
tanto, declarndose contrarios a todo poder de estado ya sea po-
ltico o proletario u obrero y a todo intento de perpetuar la lucha
de clases reemplazando en el poder o gobierno a los que actual-
mente lo detentan.
5 Acuerdo:
Sobre el label de las organizaciones: y de la F.O. Local Saltea.
El II Congreso Obrero Local y I Congreso Obrero y Anarquis-
ta Comarcal considerando de que las organizaciones obreras para
hacer efectiva y real la emancipacin social que buscan tienen que
inspirarse en las declaraciones del Comunismo Anrquico y afn
de destruir el confusionismo creado por la constitucin de orga-
nismos sindicales que responden a frmulas autoritarias marxistas

452
Anexo

como la Unin Sindical Argentina, acuerda:


1 Recomendar que en adelante las Sociedades Obreras o
Sindicatos de Resistencia que prestigian las declaraciones del Co-
munismo Anrquico en sus pactos de solidaridad o carta orgnica,
lleven en su sello y label dicha declaracin.
2 En lo que se refiere en particular a la F.O.L.S. acuerda de
que en adelante se llame Federacin Obrera Local Saltea y como
subtitulo en vez de Emancipacin, diga Comunista Anrquica.
6 Acuerdo
Sobre Sindicato Unico Industrial o sea sobre la tendencia cen-
tralista y federalista de la organizacin obrera.
El II Congreso Obrero Local y Primer Congreso Obrero y
Anarquista Comarcal en presencia de que ha aparecido como
una innovacin en el campo de la organizacin obrera la crea-
cin de Sindicatos Unicos Industriales considera:
1 Que el Sindicato Unico Industrial es producido como
una consecuencia de la industrializacin intensiva de los pases
europeos y de Estados Unidos de Norte Amrica y tiene como
propsito movilizar grandes efectivos proletarios bajo una sola
direccin de acuerdo con el mecanismo centralista que caracte-
riza a la organizacin tctina de la produccin capitalista y a la
organizacin de su poder poltico de estado.
2 Que el desarrollo de estos Sindicatos Unicos como
mecanismos para la lucha diaria no responde a ningn fin prc-
tico, puesto que solo es posible la lucha y la propia organizacin
de los trabajadores cuando es ms intensa la educacin revo-
lucionaria del proletariado y que por otra parte, lleva dicho,
sistema los elementos de un rgimen institucional sujeto a los
mtodos centralizados en que caracteriza a las instituciones del
capitalismo.
3 Que el sistema centralista en la administracin y coor-
dinacin de la lucha se encuentra en pugna con los amplios m-

453
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

todos federalista, auspiciados por el pacto de solidaridad de la


F.O.R.U. y F.O.R.A. Comunista y que por otra parte desarrolla a
su margen una exuberante burocracia gremial que viene a para-
lizar el movimiento revolucionario del proletariado porque pre-
senta un armatoste pesado que le hace perder agilidad en los
movimientos huelgusticos o insurreccionales.
4 Que lo que caracteriza la potencialidad de los I.W.W.
no es debido al mecanismo interno de su organizacin sino a la
educacin de sus componentes, producida por la difusin de las
doctrinas comunistas anrquicas que han preparado en dicha
organizacin obrera, una minora proletaria eminentemente re-
volucionaria. Que por lo que respecta al Sindicalismo Espaol se
produce algo anlogo.
5 Que por lo que se refiere al actual mecanismo federativo
vigente sus aparentes deficiencias se produce porque no se ha lle-
gado a aplicarlo en toda su intensidad por la razn sencilla de que
la organizacin obrera no ha llegado a su mayor desarrollo por la
incipiente eduecacin de la clase trabajadora.
Por lo tanto acuerda:
Recomendar que las sociedades obreras o sindicatos de re-
sistencia rechazen toda tentativa de organizacin centralista por-
que ella no solo entraa un peligro para el porvenir revolucionario
de la clase obrera. Sin que en estos momentos que las falsas or-
ganizaciones sindicales revolucionarias se manifiestan partidarias
de este sistema centralista que caracteriza al Sindicato Unico, es
conveniente que el proletariado comunista anrquico que tiene
tendencias y conceptos revolucionarios y constructivos propios se
pronuncien abiertamente por el sistema federalista descentraliza-
do y libertario que bosquejara Bakounine.
Nota: Este acuerdo fue aprobado por 18 instituciones. 1 abs-
tenido y 1 voto del Centro Ciencia y Vida que se pronunci por el
federalismo sin prejuicio que se estudie el Sindicato Unico Industrial.

454
Anexo

7 Acuerdo:
Sobre Pacto de Solidaridad de F.O.L.S.
Se acuerda aprobar el Proyecto de Pacto presentado por
el Consejo Federal cuyo texto publicaremos en la modificacin
referente al nombre de la Federacin.
8 Acuerdo:
Sobre Relaciones regionales e internacionales: si debemos
mantener relaciones con otros organismos que no acepten
nuestra finalidad y medios de lucha.
El II Congreso Obrero Local y I Congreso Obrero Anarquis-
ta Comarcal con respecto a las relaciones regionales internacio-
nes acuerda:
1 Que las Sociedades Obreras o Sindicales de Resistencia
que auspician el Comunismo no mantengan relaciones con or-
ganizaciones obreras que no practiquen sus medios de lucha de
accin directa y mantengan finalidades opuestas a los mismos,
aun cuando debern solidarizarse con los trabajadores que per-
teneciendo a ellas le impriman a sus movimientos caracteres
revolucionarios.
2 Que en lo que se refiere a las relaciones internacio-
nales, se faculte a la F.O.L.S. y a la F.O.R.U. para que de acuerdo
con la Circula Internacional N1 de La F.O.R.A. Comunista traten
de organizar la verdadera Internacional Obrera Revolucionaria
continuacin de la Internacional Revolucionaria Federalista que
inspirara Bakounine.
9 Acuerdo:
Sobre organizacin del Proletariado Rural.
El II Congreso Obrero Local y I Congreso Obrero y Anarquis-
ta Comarcal contemplando la imperiosa necesidad que hay de fo-
mentar la propaganda del comunismo-anrquico y de organizar
al Proletariado Rural, acuerda: recomendar que las Federaciones
Obreras como los Centros y Agrupaciones constituyan Comits

455
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

especiales que se encarguen de organizar a los trabajadores del


campo y de capacitarlos por todos los medios a nuestro alcance
como ser el folleto, prensa y tribuna.
10 Acuerdo:
Sobre la Prensa Revolucionaria.
El II Congreso Obrero Local y I Congreso Obrero y Anar-
quista Comarcal recomienda que la F.O.L.S. Haga del semanario
anarquista La Tierra su rgana [sic] de publicidad y que apoye
moral y materialmente la prensa anarquista.
11 Acuerdo:
Concepto que la organizacin tiene de la revolucin rusa y
sobre su significado histrico, filosfico y social.
El II Congreso Obrero Local y O Congreso Obrero Anar-
quista Comarcal declara que el concepto que le merece la Re-
volucin Rusa en su significado histrico, filosfico y social, es
el del fracaso de los principios autoritarios del marxismo pues-
tos en prctica por aquellos que sorprendiendo la buena f del
pueblo ruso, le han impuesto el gobierno de un partido poltico
defraudndolo en sus aspiraciones de integral emancipacin
econmica y social, que fuera el mvil que le guiar a la Revo-
lucin Social. Que si bien reconoce que el pueblo ruso ha no
ha conquistado su liberacin total por obra de los gobernantes
proletarios, en cambio ha puesto en evidencia la capacidad re-
volucionaria del proletariado para conseguir lo que siempre se
consider una utopa: el Comunismo Anrquico, demostrando
al mismo tiempo el fracaso de la ltima evolucin del princi-
pio de gobierno o autoridad sintetizado en el Estado Obrero o
Proletario que ideara Marx contrariando los ms elementales
principios de la naturaleza y los ms vehementes anhelos de
todos los que soportan los errores del actual orden de cosas.

456
Anexo

12 Acuerdo.
Al descomponerse la sociedad actual por la revolucin social
que medidas concepta la organizacin para la reconstruccin
social.
El II Congreso Obrero Local y I Congreso Anarquista Comar-
cal, declara;
1 Que ante una posible descomposicin de la sociedad ac-
tual las sociedades obreras comunistas anrquicas debern ten-
der a quebrantar toda tentativa para constituir un estado, gobier-
no o autoridad, llmese obrera, proletaria, o sindical o cubrase
con cualquier apariencia que sea, procediendose a hacer prctico
las ideas comunistas anrquicas de organizacin de la produccin,
consumo y relacin social bajo la base del ms estricto acuerdo y
del funcionamiento de las comunas libres y autnomas.
2 Que queda comprendido que esta prctica de las ideas
comunistas anrquicas tomar en cada lugar, ciudad o pueblo
las caractersticas que le sean propias, sin establecer programas,
legislaciones de reconstruccin social, puesto que cada colec-
tividad deber de obrar de acuerde [sic] a sus necesidades, su
educacin y su posicin histrica sin establecer ningn principio
de autoridad.
13 Acuerdo
Sobre: qu medidas debemos tomar para ayudar al sexo feme-
nino en talleres, fbricas, etc?
El II Congreso Obrero Local y I Congreso Obrero Anarquista,
acuerda:
1 Recomendar que las organizaciones obreras traten de
equiparar los salarios y condiciones de trabajo del hombre con los
de la mujer, en vista de que no hacindolo as equivale a sancionar
el concepto burgus de la inferioridad de la mujer.
2 Que siendo indispensable destruir los actuales prejui-
cios que existen sobre la mujer y de que ella tambin sostiene

457
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

con su desidia por el estudio de los problemas que le afectan;


las organizaciones obreras e instituciones anarquistas deben de
tratar de organizar las mujeres y constituir centros, escuelas o
bibliotecas en donde se difundan los principios del comunismo
anrquico que las preparar para conquistar a la par del hombre
la emancipacin social.
14 Acuerdo
a) Sobre la siguiente mocin del compaero A. Deilio.
Que concepto le merece al Congreso la creacin de una escue-
la racionalista por la Federacin Obrera Local?
El II Congreso Obrero Local y Congreso Obrero Anarquista
Comarcal acuerda: recomendar que la Federacin O. Local Salte-
a, como as tambin las organizaciones obreras se preocupen de
establecer escuelas racionalistas a fin de intensificar la educacin
o instruccin del proletariado.
b)Sobre la mocin siguiente de la Agrupacin Grfica
Anarquista.
Para que puedan adherirse las agrupaciones y centros
anarquistas a las Federaciones Obreras:
El II Congreso Obrero Local y I Congreso Obrero y Anarquis-
ta Comarcal en vista de que las agrupaciones, centros y dems
instituciones de carcter anarquistas constituyen una fuerza mo-
ral revolucionaria de indiscutible valor en el seno del movimiento
obrero imposibilitando la tendencia corporativa y conservadora
de las organizaciones obreras sin definicin concreta de su lucha
social, acuerda: que es conveniente que estos centros o agrupa-
ciones puedan integrar en carcter de adherentes deliberativos
los cuerpos federativos de las organizaciones obreras, al solo efec-
to de la obra de propaganda que stas se proponen; hacer cte-
dra doctrinaria o prestar solidaridad, toda vez que la tendencia
de las organizaciones verdaderamente revolucionarias debe ser
comunista-anrquica.

458
Anexo

c) Sobre la mocin siguiente de los delegados de Paysand:


Para ayudar la propaganda de organizacin e ideolgica
en Paysand
El II Congreso Obrero Local y I Congreso Obrero y Anarquis-
ta Comarcal a pedido de los delegados de Paysand, conriderando
[sic] que sus organizaciones persiguen la difusin de la propagan-
da del Comunismo Anrquico y la reorganizacin de los gremios
de Paysand bajo el sistema federalista [sic] de Bakounine y que
dichas instituciones no cuentan con recursos o preparacin para
desarrollar una accin eficaz, acuerda: recomendar la Federa-
cin Obrera Local Saltea Comunista Anrquica que permanezca
con contacto con las organizaciones afines de dicha localidad, en-
viando delegados y patrocinando actos pblicos tendientes al re-
ferido fin cada vez que se lo permitan las circunstancias.
Sobre campaa de Reorganizacin Obrera
El II Congreso Obrero Local y I Congreso Obrero y Anarquis-
ta Comarcal, contemplando la necesidad de constituir una fuerza
proletaria que sea eficaz para apresurar la evolucin de la clase
productora, acueda: [sic] recomendar la Federacin Obrera Lo-
cal Saltea Comunista Anrquica organice un Comit Especial de
Reorganizacin Obrera inicie una campaa de agitacin tendien-
te a ese fin.
Agotada la orden del da y no habiendo ms proposiciones
presentadas la mesa se declaran clausuradas las sesiones del
Congreso, con vitores la F.O.R.A. Comunista, la F.O.R.U, La Protes-
ta, las delegaciones de la Comarca y al Comunismo Anrquico.
Conrado Alemn.
Delegado de Albailes
Presidente de Mesa.
Secretarios: J.P. Tort por la F.O.L.S. y
M.O.Herrera, por Oficios Varios y La Protesta.

459
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

26. DECLARACIN DE PRINCIPIOS DEL SINDICATO


GENERAL DE TRABAJADORES DE ROCHA.1
La apropiacin privada de los medios de produccin y cam-
bio divide a la Sociedad en dos clases, una compuesta por un n-
mero reducido de individuos que poseen todo el capital, y la otra,
frmanla una mayora aplastadora, que trabaja penosamente para
que nada falte a la Sociedad, y que, a pesar de llevar sobre sus
espaldas todo el peso de la produccin, no tienen ni siquiera el
derecho de participar en la direccin de ella, sufriendo todava las
consecuencias de todas las crisis, provocadas unas veces por la
incapacidad de esa clase dirigente, pero casi siempre por su inhu-
mano afn de dominacin y lucro.
La clase trabajadora tiene el deber y la necesidad imperiosa
de luchar contra la miseria que le oprime cada vez ms, y con-
tra todos los males que de esta opresin se derivan; males, que,
irn en aumento o disminuirn, hasta desaparecern, segn que
la clase trabajadora permanezca desunida inactiva, que sea
capaz de comprender su misin histrica, disponindose unida y
resueltamente, a realizarla creando una sociedad sobre la base de
la propiedad comn de los medios de produccin y cambio, reali-
zando as, la libertad y la justicia social integral cimentando sobre
estas eternas inmutables verdades, la paz y la fraternidad entre
los hombres de todos los pueblos y razas.
El Sindicato general, a fin de preparar a los trabajadores
para la conquista ms inmediata de sus altos destinos, luchar
para elevar el nivel moral, econmico intelectual de los mismos,
difundiendo la cultura, empleando para ello, la tribuna, libros, dia-
rios, folletos y revistas, en fin, empleando todos los medios con-
ducentes a su alcance, creando as la conciencia de sus intereses
de clases oprimidos, que al comprender su verdadera situacin y
la fuerza invencible que les dar la unin, no vacilarn en arrazar

1 Trabajo (Rocha) N17, 15 de enero de 1921.

460
Anexo

[sic] cuanto obstculo se interponga en su camino con pretencin


[sic] de impedir la creacin del edificio social que ser de todos y
para todos.
El Sindicato General de Trabajadores de Rocha ser neu-
tral en las luchas polticas y estar fuera y por encima de las lu-
chas de tendencias, permaneciendo, eso s, siempre fiel a los altos
principios del Comunismo integral.

27. REGLAMENTO DEL SINDICATO G. DE


TRABAJADORES DE ROCHA.1
De Asambleas
1-Las Asambleas se realizarn ordinariamente una vez
por mes; y extraordinariamente cada vez que la Comisin Admi-
nistrativa lo crea conveniente o cuando cinco afiliados lo soliciten
por escrito.
2- Las Asambleas podrn constituirse a la primera citacin
con el 15% de los asociados y a la segunda con cualquier nmero
que hubiera presente.
3- Constituida que est la asamblea, se elegir un com-
paero que la presida, y sus funciones como presidente habrn
terminado, cuando concluya el acto.
Comisin Administrativa
4- Esta sociedad tendr una Comisin Administrativa
compuesta de nueve miembros, cuyos cargos se distribuirn as:
Secretario General, Secretario de Actas, Tesorero, Pro-Tesorero,
Bibliotecario y cuatro Vocales.
5- Los miembros de la Comisin Administrativa sern ele-
gidos en Asamblea General convocada al efecto.
6- Semestralmente se renovar la mitad de los miembros
de la Comisin Administrativa; al primer semestre de elegida la
primera Comisin de acuerdo con este reglamento, se renovar

1 Trabajo (Rocha) N25, 15 de Mayo de 1921.

461
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

el Secretario de Actas, el Bibliotecario, y el segundo y cuarto vo-


cal, y luego se seguirn las renovaciones semestrales, siguiendo
el orden establecido.
7- La Comisin Administrativa est obligada a presentar
los balances de caja mensualmente.
8- Todo miembro de la Comisin que faltase a ms de tres
reuniones consecutivas, sin causas que lo justifiquen, ser dado
de baja y en la primera asamblea que se realice luego, se nombra-
r un compaero para que lo reemplace en el puesto.
9- La Comisin debe citar para las asambleas con tres dias
de anticipacin a la fecha en que stas deben realizarse, por me-
dio de hojas sueltas y de la prensa; las Asambleas Extraordinarias
se podrn convocar dentro de 24 horas como mnimun.
10- La Comisin Administrativa sesionar cada diez das.
Del Secretario
11.- Ser obligacin del que desempee este cargo:
a) Llevar un libro-registro, en el que estarn inscriptos los
nombres y domicilios de todos los asociados.
b) Ser el encargado de la correspondencia y archivos.
c) Cuando se depositaran fondos sociales en algn banco
el guardar la libreta que acredite esos fondos.
d) Firmar las libretas-carnets que acrediten al asociado.
Del Tesorero
12- Los deberes del compaero que desempee este car-
do [sic] son:
a) Llevar un libro en que consten las entradas y las salidas
de las cantidades de dinero que se hayan recaudado o invertido,
en forma tal que se puede saber en cualquier momento el esta-
do de la caja de la Sociedad.
b) Archivar todos los recibos comprobantes de las sumas
gastadas, para exhibirlos a la Comisin Revisora de Cuentas,
cuando sta lo exija.

462
Anexo

c) Preparar los balances mensuales para presentarlos a las


asambleas, y colocarlos adems en lugar visible en el local social,
para que puedan ser examinados por los socios.
Del Secretario de Actas.
13.- Deber llevar dos libros de actas, uno en el que cons-
ten las deliberaciones de las Asambleas Generales, y en el otro
las de la Comisin Administrativa. Los libros de actas podrn ser
siempre consultados por los socios que lo soliciten.
De los Vocales
14.- Les Vocales deben concurrir a las reuniones que cele-
bre la comisin de la cual forman parte, y colaborar en los traba-
jos que sobre ella recaigan.
Comisin revisora de cuentas
15.- Semestralmente se nombrar una Comisin Revisora
de Cuentas encargada de inspeccionar los libros de caja de la
Sociedad dando su dictamen en Asamblea General.
16.- La Comisin Revisora de Cuentas se compondr de
tres miembros, y stos sern elegidos en Asamblea General.
17.- En ningn caso puede ser elegido como miembro de
la comisin Revisora de Cuentas, un compaero que forme parte
de la Comisin Administrativa.
Los fondos sociales
18.- La Comisin Administrativa slo tendr en su poder
hasta la suma de $25.00, para los gastos urgentes, y los dems
fondos sern colocados en un establecimiento que ofrezca ga-
ranta de seguridad y bajo la firma de tres miembros elegidos en
una Asamblea General, no pudiendo ser electo para ocupar en
esta Comisin el Secretario General de la Sociedad.
19.- La libreta que acredite los fondos depositados queda-
r en poder del Secretario General, el que no podr entregarla a
nadie sin autorizacin de una Asamblea.
20.- Bajo ningn concepto se podr retirar fondo alguno

463
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

del Banco, o casa de comercio donde estuvieran depositados, sin


previa autorizacin de la Asamblea General.
La Bandera
21.- La Bandera Social podr llevar las iniciales de la Socie-
dad o un Smbolo de Trabajo.
Disposiciones generales
22.- Cada afiliado a esta Sociedad contribuir al sosteni-
miento de ella con la suma de $0,30 mensualmente.
23.- Todo socio expulsado o dado de baja por la Sociedad,
perder sus derechos a la misma y no podr reclamar nada de lo
que sta posea.
24.- Una vez constituida una Federacin Obrera Local se-
rn nombrados por una Asamblea General, los delegados que
sean necesarios ante la misma.
25.- En caso de disolucin social, los bienes del Sindicato
pasarn a la Federacin Obrera Local o a la Federacin Obrera
Regional Uruguaya.
26.- La sociedad no podr ser disuelta mientras haya 10
socios dispuestos a sostenerla, y si sta se disolviera por falta de
nmero, todo lo que posea pasar a poder del Sindicato General
de Trabajadores.
27.- Este reglamento podr ser modificado por acuerdo en
mayora de una Asamblea General extraordinaria convocada con
ese fin.
28.-Todo asociado que sin la debida justificacin se atrase
tres meses en la cotizacin sindical, pierde todo derecho y ello
implica el uso de la palabra y el voto en las asamblea general por
voto secreto.

464
Anexo

28. MILITANTES OBREROS


DE SALTO, PAYSAND Y ROCHA1.
Acua, Jacinto. Miembro del Consejo Federal de la F.O.L.
saltea en 1919 (TS23-01-1919)
Alemn, Conrado. Miembro de la sociedad de albailes, presi-
de la mesa del Congreso Comarcal de 1922. (LTn92), Integra
el Centro Ciencia y Vida. (LTn142)
Almeida, Crispn. Integra el gremio de albailes (LTn124)
Amarillo, Evaristo. Integra el gremio de albailes (LTn124),
Administrador de La Tierra (LTn125)
Amaro, M. Fundador de la Sociedad de Oficios Varios que ori-
gin la F.O.L. e impulsor de La Voz del Obrero en 1917. (LTn76)
Andino, Luisa. Secretaria del Centro Femenino. (LTn43)
Arrestia, E. Integra la Unin Anrquica del Litoral (LTn54), Se-
cretario del comit pro imprenta. (LTn92)
Baez, Braulio. Revisa cuentas del Centro Popular Florencio
Snchez y La Tierra (LTn59, 71 y 76)
Barbieri, Anibal. Miembro de la Sociedad de oficios varios
(LTn18 y N39), es secretario de actas de la F.O.L. (LTn43)
Barboza, Carlos. Integra el gremio de albailes (LTn124)
Battnimi, Luis A. Tesorero de La Tierra (LTn74)
Benella, G. Integra la sociedad de picapedreros de Salto.
(LTn69)
Berasa, J. Bibliotecario del Centro Ciencia y Vida. (LTn142)
Bessio, Jos. Del gremio de Choferes (LTn53)integra el Cen-
tro Popular Florencio Snchez y escribe artculos de opinin.
(LTn54). Expulsado del gremio de choferes por adherir a los
sindicalistas.
Bosch, Bartolom. Paquetero de La Tierra en Paysand.
(LTn12)
1 Se indica entre parentesis la fuente de donde se obtuvo la informacin. A saber;
LT (La Tierra), LB (La Batalla), J (Justicia), TS (Tribuna Saltea), LR (La Repblica),
T (Trabajo), AC (Accin Comunista).

465
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Bouch, Santiago. Integra el gremio de albailes (LTn124)


Bridaroli, M. Actor (o actriz) en Los Mrtires en la velada
solidaria de Junio de 1921. (LTn43).
Bridarolli, Antonia. Integra el cuadro filodramatico Tierra Libre
(LTn103)
Bridarolli, Luis. Revisa cuentas de la F.O.L.S. (LTn97) y el gre-
mio de Albailes (LTn103)
Buraglia. Actor (o actriz) en Los Mrtires en la velada solida-
ria de Junio de 1921. (LTn43).
Caccio, Arminio. Tesorero del gremio de albailes. (LTn103),
Tesorero del Centro Ciencia y Vida. (LTn142)
Cando, Elvira. Integra el cuadro filodramatico Tierra Libre
(LTn103)
Crdamo, R. Integra el cuadro filodramatico Tierra Libre
(LTn103)
Carrera, Alfredo. Secretario general de la sociedad de obreros
panaderos de Saltoen 1918. (TS 17-08-1918)
Castro A. Integra el grupo Cultura Libertaria. (LTn121)
Collazo, L. Secretario de la sociedad de oficios varios (LTn29)
Colman, Alejandro. Fundador de la Sociedad de Oficios Varios
que origin la F.O.L. e impulsor de La Voz del Obrero en 1917.
(LTn76) Delegado de la F.O.L en 1918 (TS26-01-1918)
Conde, Celia. Integra el elenco de actores en conflicto para el
cual se realiza una obra teatral a su beneficio. (LTn42)
Costa, Andrs. Secretario de la seccin saltea de la Federa-
cin Obrera Martima. (LTN4)
de Neira, Juana G. Integra el Centro Femenino. (LTn59)
de Venimi, Juana A. Tesorera del Cetro Femenino. (LTn43)
Deilio, Ernesto. Miembro del Consejo Federal de la F.O.L. sal-
tea en 1919 (TS23-01-1919) Tesorero de la F.O.L. (LTn11)
Dellio, A. Fomenta la creacin de una Escuela Moderna bajo el
auspicio de la F.O.L. Comunista Anrquica. (LTn91)

466
Anexo

Di Santi, Antonio. Secretario de Obreros en Mimbre ante la


F.O.L. y la F.O.R.U. (LTn75)
Enriquez, C. Integra el elenco de actores en conflicto para el
cual se realiza una obra teatral a su beneficio. (LTn42)
Etchecerry, . Escribe desde Rosario Argenitna. (LTn15)
Fagundez Horacio. Integra el Comit de propaganda gremial.
(LTn43)
Fernadez, Mara Odulia. Secretaria del Centro Femenino de
Oficios Varios. (LTn21)
Fernandez, Jos. Secretario de la Alianza Anrquica Interna-
cional. (LTn77). Secretario de la F.O.L.S. (LTn94) Referente
del gremio de albailes (LTn102), Integra el cuadro filodra-
matico Tierra Libre (LTn103)
Gallarrete, N. P. Actor (o actriz) en Las Vboras en la velada
solidaria de Junio de 1921. (LTn43).
Gamarra, Anselmo. Integra la Unin Anrquica del Litoral.
(LTn54), secretario de la sociedad de Oficios Varios (LTn55),
revisa cuentas de La Tierra (LTn62), integr la F.O.M. saltea
y de Concordia. (LTn106) Administrador de La Tierra entre oc-
tubre de 1921 y Mayo de 1922, pasando luego a participar de
su confeccin. (LTn90 y 64)
Gastesi, Juan. Miembro del Consejo Federal de la F.O.L. salte-
a en 1919 (TS23-01-1919)
Gayte, Zenn. Miembro de la Sociedad de oficios varios
(LTn18 y N39)
Giraldoni, Flix. Secretario de la sociedad de picapedreros e
integrante de la F.O.L. hasta la llegada de Adolfo Plaza, adhiere
a la lnea sindicalista de Plaza opuesta a La Tierra. (LTn69)
Godoy, Menelao. Integra la Sociedad de Tipgrafos y Anexos.
(LTn46)
Gonzlez, Elvia. Confecciona La Tierra desde Mayo de 1922.
(LTn96)

467
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Gonzlez, Pilar. Integra la sociedad de lavanderas. (LTn137)


Gonzlez, Prspero. Secretario de los canillitas. (LTn30)
Guarch, Arturo. Integra la Sociedad de Tipgrafos y Anexos.
(LTn46)
Hernandez, Franco. Tesorero de La Tierra en su primeros
tiempos. Miembro del la sociedad de oficios varios. (LTn35).
Inegra la Unin Anrquica del Litoral (LTn54)
Herrera, Mario O., A cargo de los valores de la Unin Anr-
quica del Litoral (LTn52). Integra la soc. de Oficios Varios y la
F.O.L. (LTn92). Confecciona La Tierra desde Mayo de 1922.
(LTn96)
Lagrotta, Genaro. Revisa cuentas de la F.O.L.S. (LTn97), Secre-
tario del gremio de albailes (LTn124)
Larroca, Carmelo. Integra el gremio de albailes (LTn124)
Lechini, Julio, Secretario del gremio de albailes (LTn124)
Llema, Arturo. Integra la Agrupacin Sindical Libertaria.
(LTn80), Administrador de La Tierra desde Mayo de 1922.
(LTn96), Integra el Centro Ciencia y Vida. (LTn142)
Lopez, Celedonio. Integra la Sociedad de Tipgrafos y Anexos.
(LTn46)
Martinez, Benito. Secretario de la Federacin Obrero de Me-
cnicos, Electricistas y Afines en 1920. (LTn16)
Martnez, E. Tipgrafo de La Tierra a fines de Agosto de 1921.
(LTn65)
Martnez, P. Integra la sociedad de picapedreros. (LTn91)
Massarino, Atlilio. Secretario del gremio de albailes (LTn124),
Tesorero del comit pro imprenta. (LTn92) Integra el cuadro
filodramatico Tierra Libre (LTn103)
Mayolino, Nicols. Secretario de la sociedad de carpinteros.
Secretario de la F.O.L. entre el Enero y Julio de 1921. Lue-
go se va a Argentino y oficia de paquetero desde Concordia
(LTn111)

468
Anexo

Mazza. Secretario del Centro Tierra Libre (LTn124)


Moreira, Juan L. Integra la Sociedad de Tipgrafos y Anexos.
(LTn46), Integra el Centro Popular Florencio Snchez. (LTn80)
Moreno, Arnaldo Carlos Integra el Centro Ciencia y Vida,
su cuadro filodramtico. (LTn96), el Centro Tierra Libre
(LTn103). Secretario del Centro Ciencia y Vida. (LTn142), In-
tegra el gremio de albailes (LTn124).
Moreyra, Homero. Revisa cuentas de La Tierra (LTn58 y 65)
Nuez, Valeriano. Tesorero de la F.O.L.S. (LTn97), y La Tierra
(n100). Integra el gremio de albailes (LTn140). Administra-
dor de La Tierra a partir de Julio de 1922. (LTn101)
Olivero, P. Actor (o actriz) en Las Vboras en la velada solida-
ria de Junio de 1921. (LTn43).
Olivert, Julio. Integra el elenco de actores en conflicto para el
cual se realiza una obra teatral a su beneficio. (LTn42). Ac-
tor en Las Vboras en dicha velada solidaria (Junio de 1921).
(LTn43).
Olivet, Carmen. Integra el elenco de actores en conflicto para
el cual se realiza una obra teatral a su beneficio. (LTn42). Ac-
triz en Los Mrtires y Las Vboras en dicha velada solidaria
de Junio de 1921. (LTn43).
Ortiz, Elias. Se desempea como tipgrafo de La Tierra y escri-
be algunos artculos. (LTns53, 54 y 60)
Pacheco, Domingo. Fundador de la Sociedad de Oficios Varios
que origin la F.O.L. e impulsor de La Voz del Obrero en 1917.
(LTn76) .Amdinistrador del comit pro imprenta (LTn40). Ac-
tor en Los Mrtires en la velada solidaria de Junio de 1921.
(LTn43).
Pieyro, Fermn. Integra la Sociedad de Tipgrafos y Anexos.
(LTn46)
Plaza, Adolfo. Secretario de la sociedad de picapedreros. En
Junio de 1921 es vocal de la F.O.L. e integra el comit de

469
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

propaganda gremial. (LTn43). Sera el principal referente de la


posicin anarco sindicalista opositora a La Tierra.
Racciope, Nicols. Integra la Sociedad de Tipgrafos y Anexos.
(LTn46)
Ramirez. Integra el cuadro filodramtico del Ciencia y Vida
(LTn96)
Re, Enrique. Delegado del gremio de electricistas y miembro
del Consejo Federal de la F.O.L. saltea en 1919 (TS23-01-
1919)
Rey, A. Actor en Las Vboras en la velada solidaria de Junio
de 1921. (LTn43).
Riccardi, Jos. Miembro del Consejo Federal de la F.O.L. salte-
a en 1919 (TS23-01-1919)
Ricciardi, Guido. Del gremio de choferes. (LTn40)
Rivas, Jos. Delegado del gremio de albailes ante el Comit
Pro Imprenta. (LTn26)
Rivero, Agustn. Integra el Centro Tierra Libre. (LTn41)
Rizzo, Enrique. Integra la Sociedad de Tipgrafos y Anexos.
(LTn46)
Rocha, Toms. Integra el Centro Luz (LTn122)
Rodriguez, Angel. Fundador de la Sociedad de Oficios Varios
que origin la F.O.L. e impulsor de La Voz del Obrero en 1917.
(LTn76) Miembro del Consejo Federal de la F.O.L. saltea en
1919 (TS23-01-1919)
Rodriguez, Eliseo. Secretario de actas de la Sociedad de Obre-
ros Panaderos en 1918 (TS 17-08-1918). Secretario de la F.O.L.
en 1920. (LTn16) Integra el grupo de La Tierra y la Unin
Anrquica del Litoral (LTn54). En Octubre de 1922 escribe
desde Argentina. (LTn139)
Rognini, A. Actor (o actriz) en Los Mrtires y La Vboras en
la velada solidaria de Junio de 1921. (LTn43).

470
Anexo

Rosendo, M. Actor (o actriz) en Los Mrtires en la velada


solidaria de Junio de 1921. (LTn43).
Salto:
Snchez, Saturnino. Revisa cuentas del gremio de albailes.
(LTn103)
Sanguinetti, C. Integra el Centro Ciencia y Vida. (LTn142)
Sanguinetti, Marcelino. Tesorero del comit pro imprenta
(LTn40).
Santos, Catalicio. Secretario de la F.O.L. (LTn3), Secretario
Comit Pro Imprenta (LTN35). Integra la Unin Anrquica
del Litoral (LTn54). Enva colaboracin desde Buenos Aires
(LTn108).
Saucedo, Ramn. Integra la Federacin Obrera Local saltea
en 1918. (TS 26-01-1918). Revisa cuentas del Centro Popular
Florencio Snchez y La Tierra (LTn59, 62)
Scaniovino, Orlando. Integra la Sociedad de Tipgrafos y Ane-
xos. (LTn46)
Schiappacassa, L. Integra el cuadro filodramatico Tierra Libre
(LTn103)
Silva, Luis D. Integra la Sociedad de Tipgrafos y Anexos.
(LTn47)
Sosa, Arnaldo. Confecciona La Tierra desde Mayo de 1922.
(LTn96)
Stochetti (o Stoketti). Integra el gremio de albailes (LTn30),
tesorero de la sociedad de oficios varios (LTn51), revisa cuen-
tas de La Tierra y el comit pro imprenta. (LTn53)
Tettamani ? Fundador de la Sociedad de Oficios Varios que ori-
gin la F.O.L. e impulsor de La Voz del Obrero en 1917. (LTn76)
Tettamanti, Adolfo. Primer Adminstrador de La Tiera
Tettamanti, T. . Actor en Las Vboras en la velada solidaria de
Junio de 1921. (LTn43).

471
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

Tort, Jos P. Revisa cuentas de La Tierra. (LTn71) Es detenido


acusado de agredir a A. Plaza en la tumultosa asamblea de Fe-
brero de 1922. Secretario de la FOLS por esas fechas. Integra
el gremio de albailes (LTn124)
Uberti, Ermurio. Integra el comit pro imprenta (LTn40). Re-
visa cuentas de La Tierra y el comit pro imprenta. (LTn53)
Vonella, J. Actor (o actriz) en Los Mrtires en la velada soli-
daria de Junio de 1921. (LTn43).
Zenon, Romero. Secretario de la Sociedad de Panaderos,
1920. (TS 16-07-1920)
Paysand:
Adamoli, Gaspar. Integra el gremio de pintores en 1920. (LR
27-11-1920)
Belotti, Juan D. Tesorero de la F.O.L. (J 15-03-1922).
Benavente, Manuel. Militante obrero del Partido Socialista en
1920. (LT16)
Bessio, J. Corresponsal de La Tierra en Paysand. (Trabajo
Mdeo N5)
Bosch, Bartolomeo. Paquetero de La Tierra. (LTN12)
Bucco, Luca. Miembro del Centro Femenino Anarquista.
(LTn88)
Caccia, Pascual, Secretario del Gremio de Albailes (LTn206)
y miembro del Consejo Federal de la F.O.L. (J27-11-1922)
Candia, Mximo. Delegado del sindicato gastronmico.
(LTn131)
Carbonne, Adolfo. Miembro del Centro de Estudios Sociales
Internacional (LBn155)
Carbonne, Adolfo. Miembro del Centro de Estudios Sociales
Internacional. (LB 14-05-1920)
Cholbi, Salvador. Anarquista integrante del gremio de albai-
les en 1921. (LTn38)
Delmonte, N. Miembro del Partido Socialista. (LTN14)

472
Anexo

Denegro, Pedro, Secretario General de la Sociedad de Resis-


tencia de carpinteros de Paysand en 1919. (J 13-11-1919)
Fernandez, Isabel. Delegada del gremio de pintores. (J11-10-
1922)
Fleitas, Luis. Vocal de la F.O.L. (J 15-03-1922).
Lectler, Clemencia. Miembro del Centro Femenino Anarquis-
ta. (LTn88)
Lezcano, Diego. Tesorero de la Sociedad de Resistencia de car-
pinteros de Paysand en 1919. (J 13-11-1919)
Magnin, Oscar. Vocal de la F.O.L. (J 15-03-1922).
Pesce, Julin. Secretario General de la F.O.L. (J 15-03-1922)
Rojas, Adolfo. Vocal de la F.O.L. (J 15-03-1922).
Scotto, Benito L. Secretario de Actas de la Sociedad de Reis-
tencia de carpinteros de Paysand en 1919. (J 13-11-1919)
Selser, Jos. Integra el gremio de Albailes en 1924. (LTn206)
Rocha:
Bagattini, J.C. Secretario general de la F.O.R. y director de Tra-
bajo en 1920 (TN1)
Baranzano, H. Vocal de la F.O.R. en 1920 (TN1) y secretario
general del Sindicato General de Trabajadores en 1920 (Tn16)
Bizzari, A. Secretario de la Sociedad de Obreros Picapedreros
de Rocha. (EPn40)
Bordabehere, Mario. Director del peridico Accin Comunis-
ta. (ACn1)
Cardoso, J. Bibliotecario de la F.O.R. en 1920 (TN1)
Casella, Hiplito. Secretario general del gremio de albailes.
(TN10)
Centani, Flix, secretario de actas de la F.O.R. en 1920 y del
S.G.T. luego de la fractura.(TN1y16)
Cuartn, J. Vocal de la F.O.R. y Redactor de Trabajo en 1920
(TN1) y director del mismo luego de la fractura y vocal del
S.G.T.(Tn16)

473
Cultura Obrera en el Interior del Uruguay

D'Alessandro, Pedro. Vocal de la F.O.R. En 1920 y del S.G.T. lue-


go (TN1y16)
Dalmacio, Jose. Secretario de la Sociedad de Obreros Picape-
dreros de Rocha. (EPn40)
Ferreiro, Jos. Vocal del S.G.T. (Tn16)
Garaza, F. Director del peridico Accin Comunista. (ACn1)
Gonzlez, Arstidos. Tesorero del S.G.T. en 1920 (Tn16)
Gonzlez, F.C. Vocal de la F.O.R. en 1920 (TN1)
Lorenzo, W. Secretario de redaccin de Trabajo (TN1)
Marchand. Secretario de redaccin y tipgrafo de Trabajo
(TN1)
Otero, Eusebio. Redactor de Trabajo en 1920 (TN1). Secreta-
rio de la sociedad de obreros tipgrafos Guttemberg (T10)
Pagola, Eugenio. Secretario de redaccin de Trabajo luego de
su fractura y bibliotecario del S.G.T. (Tn16)
Pereyra, Balbino, Tesorero de la F.O.R. en 1920 (TN1)
Prieto, Mercenil. Administrador de Trabajo luego de su fractu-
ra y vocal del S.G.T.(Tn16) Admisitridor de Accin Comunista.
(ACn1)
Ramela, Javier J. Redactor de Trabajo en 1920 (TN1)
Rtulo, J. Vocal de la F.O.R. en 1920 (TN1)
San Martn, Manuel. Administrador de Trabajo. En 1920 (TN1)
Scuarcia, Luis. Delegado de la F.O.R.U. y vocal del S.G.T. En
1920. (Tn16)

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