Revista Sugia 3 Baja
Revista Sugia 3 Baja
Revista Sugia 3 Baja
2. a temporada Vol. 7 N. o 3
violencia
y abuso sexual
en la niñez
y la adolescencia
Violencia familiar
maltrato y abuso infantil
Protocolo para la atención
del abuso sexual y violación
Explotación sexual
de niños, niñas y adolescentes
No más
niñas madres
La educación
como factor protector
Imperioso y urgente:
terminar con la violencia sexual
en niños/as y adolescentes
La protección
de la infancia y adolescencia
frente a las violencias REVISTA DE LA SOCIEDAD URUGUAYA
DE GINECOLOGíA DE LA INFANCIA
1
Y ADOLESCENCIA
2.ª temporada Vol. 7 N.o 3 · 2018
SOCIEDAD URUGUAYA DE GINECOLOGíA
DE LA INFANCIA Y ADOLESCENCIa
( sugia ) 2018-2020
Presidenta
Dra. Marianela Lourido
Vicepresidenta
Dra. Stella Sollier
Secretaria
Dra. Patricia Di Landro
Tesorera
Dra. Leticia Rieppi
Protesorera
Dra. Gabriela Fernández
Coordinación de actividades científicas
Dra. Gabriela Ferreyra - Dra. Estela Conselo
Dra. Selva Lima - Dra. Deborah Laufer
Dra. Adriana Zuviría
Coordinación de publicaciones
Dra. María Inés Martínez - Dra. Soledad Estefan
Dra. Gabriela Fernández
Coordinación de actividades en el interior
Dra. Mónica Lijtenstein - Dr. Eric Quevedo
Dra. Natalia Sica - Dra. Carolina Ríos
Coordinación de intervención en la comunidad
Dra. Gricel Valerio - Dra. Alba Morgade
Dr. Germán Doce - Profa. Patricia Pivel
Vocales
Dra. Alma Martínez - Dra. Gabriela Chifflet
Dra. Graciela Gadola - Dra. Graciela Garín
Dra. Paula Oholeguy
Comité científico
Dra. Estela Conselo - Dr. José Enrique Pons
Dra. María Inés Martínez - Dra. Selva Lima
Dra. María Luisa Banfi - Dr. Roberto Sergio
Dra. Sandra Keuchkerian - Dra. Leticia Rieppi
Dra. Gricel Valerio - Dra. Deborah Laufer
Dra. Soledad Estefan
violencia
Dra. Inés De La Parra
Coordinadoras Dra. Silvia Oizerovich
Dra. Soledad Estefan
Dra. Gabriela Fernández Chile y abuso sexual
Dr. Ramiro Molina en la niñez y la adolescencia
Dra. Estela Conselo Dra. Adela Montero
Dra. Gricel Valerio (Uruguay)
Dr. José Enrique Pons
Costa Rica
Dra. Selva Lima
Dr. José Vidal Sáenz
Dra. María Luisa Banfi
Dra. Sandra Keuchkerian Cuba
Dra. Leticia Rieppi Dr. Jorge Peláez
12 Violencia familiar, maltrato y abuso
Dra. Gricel Valerio infantil: ¿cómo nos enfrentamos
Dra. Deborah Laufer Panamá a estas realidades?
Dra. Mónica Lijtenstein Dra. Margarita Castro
Dr. Julio O. Cukier (Argentina)
Perú
16 Protocolo para la atención del abuso
Dra. Milagros Sánchez
sexual y la violación. Bases para la
Venezuela atención correcta de la víctima
Dra. María Mercedes Pérez Dra. Alejandra Giurgiovich (Argentina)
38 Explotación sexual de niños,
niñas y adolescentes
Dra. Mónica Lijtenstein (Uruguay)
Copetín
Uruguay (sgu). Miembro de la 62 Imperioso y urgente: develar y actuar
Asociación Latinoamericana de
<www.copetin.com.uy> Obstetricia y Ginecología de la
para terminar con la violencia sexual
Infancia y la Adolescencia (Alogia). que sufren niñas, niños y adolescentes
Sede actual del Comité Ejecutivo en Uruguay
- Período 2017-2019. Miembro
de la Federación Internacional de A. S. Mariela Solari Morales (Uruguay)
Ginecología Infanto Juvenil (figij).
72 La protecciónREVISTA
de laDEinfancia
LA SOCIEDAD URUGUAYA 3
y adolescencia DEfrente a las
GINECOLOGíA DEviolencias
LA INFANCIA
Y ADOLESCENCIA
Lic. T. S. Andrea Tuana (Uruguay)
2.ª temporada Vol. 7 N. 3 · 2018
o
freeimages.com
Estimados lectores:
«El altísimo costo social, psicológico y en vidas hu- Este número ofrece al lector herramientas que
manas que conlleva la violencia ha sido determi- ayudan a detectar situaciones de violencia y abuso
nante para que en esta oportunidad la unidad te- sexual, y que lo orienten en las posibles interven-
mática seleccionada sea la Violencia Doméstica, con ciones.
especial énfasis en una de sus variantes: el abuso Los autores, representantes expertos en distintas
sexual.» disciplinas, presentan los modelos explicativos de la
Así comenzaba el editorial de nuestra Revista en el violencia, cómo llegar al diagnóstico, sus consecuen-
número 2, volumen 4, del año 2002. Ese año en Uruguay cias y los recursos legales vigentes. El Comité Edito-
también se aprobó y publicó en el mes de julio la ley rial agradece efusivamente este valioso aporte.
N. 17.514 de Violencia Doméstica que declara de interés
o
Compartimos con ustedes la satisfacción de haber
general las actividades orientadas a su prevención, cumplido con la tarea prometida: hemos completa-
detección temprana, atención y erradicación. do los tres números de la Revista correspondientes
Han transcurrido 16 años y hoy volvemos a reto- al año 2018. Este desafío que parecía muy difícil de
mar el tema. Lamentablemente no podemos comu- llevar a cabo, solo se ha podido concretar por la ge-
nicar que lo realizado en este período haya logrado nerosidad y solidaridad de todos los autores que han
erradicar la violencia y el abuso sexual en la infancia participado. Reciban nuestro agradecimiento.
y la adolescencia. Existe una mayor conciencia social Se recuerda que siempre hay un espacio disponi-
de la importancia de terminar con este flagelo, que ble para aquellos que quieran publicar casos, inves-
va de la mano de una mayor difusión y denuncia de tigaciones o puestas al día. Los esperamos.
los casos. La violencia no solo afecta a Uruguay y a Es el deseo de sugia que el próximo año nos vol-
la región, sino que es un problema generalizado en vamos a encontrar a través de estas páginas y que
todos los países del mundo. Su origen multifactorial 2019 los colme de dicha, amor y trabajo.
requiere acciones desde las distintas áreas involu-
cradas, que actúen en conjunto de forma transdis- Dra. María Inés Martínez
ciplinaria e intersectorial.
vio
len
cia
y abuso sexual en la niñez
y la adolescencia
freeimages.com
niñas y adolescentes es justificable, y toda En el 22 % de los casos se trató de abuso sexual; 3 de cada
violencia es prevenible.
4 son niñas y 1 de cada 5 son menores de 5 años.
Paulo Sergio Pinheiro
La mayoría de estas situaciones de violencia sexual se
mantiene en el tiempo, debido a condiciones facilitado-
Introducción ras que las legitiman y naturalizan desde los más diversos
En nuestro país las cifras de casos de violencia sobre niñas, ámbitos: intrafamiliares, culturales, sociales, económicos y
niños y adolescentes (nna) son alarmantes. políticos.
En la Primera Encuesta Nacional de Prevalencia de Vio- Asistimos a lo que se denomina violencia basada en gé-
lencia Basada en Género y Generaciones (2013), surge que nero y generaciones (vbgg).
1 de cada 3 mujeres declara haber padecido violencia en su Implica una relación asimétrica de poder del victimario
infancia, en sus distintas formas, donde aparece la violencia sobre la víctima, por su edad o posición, ejercida mayormente
sexual. sobre niñas, lo cual se agrava por el pacto de silencio familiar
Según datos proporcionados en abril de 2018 por el Sis- y/o social.
tema Integral de Protección a la Infancia y a la Adolescencia Este tipo de violencia, sufrida desde edades tempranas
contra la Violencia (Sipiav), en el año 2017 se registraron 3155 del desarrollo psicofísico, va a dejar secuelas, de leves a se-
situaciones de violencia contra niñas, niños y adolescentes; veras, consecuencias del trastorno de estrés postraumático
508 casos más de los que se registraron en el año 2016, lo (tept) y expresadas como:
Dra. Cristina Lustemberg, pediatra, analiza y propone accio- niñas y adolescentes como directora de la ong Asociación
nes para enfrentar el embarazo en niñas menores de 15 años, Civil El Paso, desarrollando proyectos a nivel regional y como
que implica una grave vulneración de derechos, y riesgos consultora en organismos regionales e internacionales.
para su salud. Nos actualiza sobre el lanzamiento en Uruguay
Nos describe la terrible indefensión que experimentan nna,
de la campaña Niñas, no madres (Amnistía Internacional).
debido a las prácticas intolerables que se siguen ejerciendo
Prof. de Enseñanza Media Patricia Pivel, con su enfoque en el abordaje de estas situaciones.
de la educación como factor protector de nna, así como el Nos aporta conocimientos y herramientas para ayudar en la
rol fundamental que cumplen las instituciones educativas protección de las víctimas.
en acciones de prevención y de intervención en situaciones
de violencia detectadas en el ámbito educativo, aplicando Reflexiones
protocolos y mapas de ruta. Desde nuestro lugar en el Equipo de Salud, cualquiera sea
nuestra área, tenemos la necesidad y la responsabilidad de
Mag. Mariela Solari, desde su actual función como directora
capacitarnos para dar respuestas oportunas y soluciones
de la Unidad de Víctimas y Testigos de la Fiscalía General de
viables. En especial quienes ejercemos la Ginecología de la
la Nación, realiza aportes fundamentales sobre los procesos
Infancia y la Adolescencia, tenemos un lugar propio e in-
de acceso a la justicia para nna que son víctimas de violencia
transferible en la atención de las víctimas.
sexual. Es prioritario que los profesionales o técnicos que
En ese sentido, auguramos que las exposiciones de los
detectan o realizan el abordaje de estas situaciones conozcan
prestigiosos invitados serán de suma utilidad en la actua-
el marco legal vigente, para apoyar a la víctima y su familia.
lización de conocimientos, para nuestros colegas y todos
Mag. Andrea Tuana, de larga trayectoria orientada al abor- quienes intervienen en la atención de niñas, niños y ado-
daje de la violencia doméstica y sexual hacia mujeres, niños, lescentes víctimas de violencia o abuso. n
En este capítulo se realizará un enfoque biológico de la tiempos, los hipogonadotrofismos funcionales, como ser
pubertad femenina y sus variaciones solo con fines académi- los secundarios a trastornos de la conducta alimentaria,
cos sin desconocer que la adolescencia solo puede analizarse a estrés crónico, o bien al ejercicio de competición.
La conducta de los padres, de los docentes y de la socie- sufren cualquiera de estas situaciones revelen lo que está
dad toda es la que va a influir enormemente en la conducta sucediendo sin tener temor de las amenazas que el agresor
adolescente y que se prolongará posiblemente en la edad suele utilizar.
adulta.
5. Signos físicos y emocionales
Si las conductas intrafamiliares se rigen por la violencia,
el castigo, la falta de afecto y de respeto, el autoritarismo y Además debemos estar atentos a la aparición de signos fí-
la falta de escucha de las necesidades del niño van a gene- sicos como:
rar conductas habitualmente violentas, incluso contra ellos
n dolores abdominales recurrentes;
mismos y con los demás.
n cefaleas frecuentes;
El primer lugar a considerar para evitar conductas futuras
n aparición de enuresis y/o encopresis;
agresivas es el hogar.
n infecciones urinarias repetidas;
Es una función social fundamental informar, explicar,
comprender, comunicarse con los adultos de la familia, para n inflamaciones de la zona genital o anal;
poder evitar actitudes que generen niños, adolescentes y n la aparición de alguna enfermedad de transmi-
futuros adultos violentos. sión sexual.
Entre los cambios emocionales que suelen aparecer, tanto
El primer lugar a considerar para evitar conductas en el abuso como en el maltrato, están:
futuras agresivas es el hogar.
n cambios de humor inexplicables;
n conductas hipersexualizadas;
Es función de los gobiernos, de los docentes y de toda
n mentiras frecuentes;
la sociedad generar escalas de valores que prevengan la
aparición de situaciones de violencia. n sobreadaptación;
n retraimiento social con aislamiento y no parti-
4. Características de las personas que ejercen violencia,
maltrato y abuso dentro del ámbito familiar cipación en actividades familiares; escolares o
sociales que eran habituales;
Casi todos tienen un patrón común que los lleva a ejercer
estas actitudes que incluyen agresión física, psicológica, n conductas regresivas o agresivas;
sexual, económica y patrimonial. n temores inexplicables ante ciertas personas o
Están incluidos el maltrato infantil en todas sus formas situaciones;
y el abuso infantil.
n desórdenes alimentarios;
En general son individuos que no pueden controlar sus
impulsos, y que tienen carencias afectivas e incapacidad para n trastornos de la conducta alimentaria;
resolver problemas. Muchas veces aparentan ser sumisos. n intentos de suicidio o infringirse lesiones;
Suelen tener baja autoestima y tienen serias dificultades en
n disminución severa de la autoestima;
demostrar afecto.
Uno de los factores que influyen en la repetición de estas n cuadros de depresión o ansiedad;
conductas es que el agresor trata de mantener fuera del n llantos reiterados sin causa aparente;
conocimiento de los demás lo que está sucediendo.
n fobias;
Por eso es fundamental generar en la infancia una co-
rriente de comunicación que permita que aquellos que n hiperactividad;
6. ¿Qué hay que hacer? relato del perjudicado no es creído por los demás.
Resumen
Se presenta la propuesta de un protocolo para la atención del abuso sexual y la violación, aplicable a niñas,
niños y adolescentes. La protocolización evita errores en el procedimiento, en un momento donde todo es an-
gustiante para pacientes y profesionales actuantes Evita el olvido de los pasos médicos, psicológicos y legales
que constituyen el eje del comienzo de un proceso judicial para ayudar a la paciente-víctima.
Palabras clave: Protocolo abuso sexual infanto juvenil, violación, registro, toma de muestras, evidencias.
Abstract
The proposal of a protocol for the care of sexual abuse and rape is presented, applicable to children and ado-
lescents. The protocolization avoids errors in the procedure, in a moment where everything is distressing for
patients and acting professionals. It avoids forgetting the medical, psychological and legal steps that constitute
the axis of the beginning of a judicial process to help the patient-victim
Key words: Protocol child and adolescent sexual abuse, rape, registration, sampling, evidence.
Figura 2. Beneficios del uso de protocolo para asij, Figura 3. Objeto de la protocolización en la atención de
maltrato y violación pacientes con abuso, violencia o violación
La protocolización evita errores en el procedimiento, en Las situaciones de asij, maltrato y violación son —como
un momento donde todo es angustiante para pacientes y dijimos— inesperadas y si no quedan claros la descripción de
profesionales actuantes. El protocolo beneficia al médico lesiones, acciones a tomar y los aspectos legales podemos
actuante y a la víctima (figura 2). realizar un diagnóstico equivocado, o simplemente no hacer
Las bases de la protocolización que proponemos se ba- nada y volver a enviar a la víctima a su insufrible situación.
san en distintos autores: Unicef, Organización Panamericana
Pero si reconocemos una situación de violación o asij
de la Salud (ops), distintas universidades, primer protocolo
no podemos olvidar ninguno de los pasos médicos, psi-
realizado en Argentina a nivel hospitalario, etc.10-12
cológicos y legales. Este es un momento único: el primer
Para lograr su cometido el protocolo idealmente per-
interrogatorio, la primera toma de muestras, las lesiones
fecto debe tener, indefectiblemente: compromiso médico;
que luego desaparecerán, guardar evidencia. Todo esto es
se debería realizar en un lugar especial, sin interrupciones,
donde el/la paciente se sienta protegido/a, no expuesto/a el eje del comienzo de un proceso judicial para ayudar a la
y se debería realizar juntamente con el hospital (médico, paciente-víctima, lo cual es entorpecido por una mala his-
psicóloga, trabajadora social), la justicia, forenses, comisaría toria clínica; falta de tomas de muestras o pérdida de ellas;
de la mujer o lugares preparados desde la justicia para recibir preguntas médicas o psicológicas impropias, que podrían
estos casos, utilizando historias clínicas especiales y únicas implantar palabras o declaraciones que luego perjudican
para todas las áreas involucradas. el proceso judicial.
El momento de la consulta es clave, ya que las acciones El protocolizar el asij, maltrato y violación tiene por ob-
que ocurren no pueden volver a repetirse, ni tomar material jetivo cubrir todas las áreas posibles y evitar errores (figu-
de estudio luego de algún tiempo, ya que se pierde. ra 3).
Figura 4. Objeto de la
protocolización en la
atención de pacientes
con abuso, violencia o
violación
Estos especialistas y sectores pueden actuar juntos física Los sectores involucrados en el procedimiento y articu-
o virtualmente, al igual que el equipo interdisciplinario. lación con la justicia: médico, trabajo social, policial y justicia
Si estamos en un consultorio privado, lo que hacemos constituyen el nivel II.
es tratar de tener especialistas para interconsulta telefóni- La denuncia a la justicia la realiza trabajo social, el propio
camente: psicólogos, psiquiatras, juzgado, etc. médico o el colegio.
Esto también puede ocurrir en salas de atención de pri- A veces la víctima es traída al hospital por policías; en-
mer nivel que no tienen especialistas en el momento, pero tonces, por lo general, solo realizamos el examen, trata-
pueden hacer la interconsulta, la derivación de urgencia o miento médico o psicológico acorde a lo que solicitan. En
no, acorde al caso, si tienen una red virtual armada. estos casos, al revisar a un/a paciente con probable abuso,
En el nivel II (figura 5) están los distintos sectores que se debe describir con minuciosidad las lesiones. No somos
actúan en el caso: colegio (por esto también el lugar educa- peritos; por lo tanto, no sábenos si hubo en forma cierta
tivo debe tener protocolos de acción), hogares públicos, ins- una violación o abuso: no estuvimos en el lugar. Nuestro
titución desde donde llega la paciente, el hospital donde se diagnóstico será «compatible con abuso sexual». Si la víc-
realiza el diagnóstico psicofísico de asij, maltrato o violación tima fue traída por policías se entiende que la judicialización
(la violación es una lesión muy grave de la cual por lo general está en marcha.
no quedan dudas). En estos casos se aplica el protocolo. Si Si la paciente es hallada en vía pública y es traída por la
la víctima es traída del colegio se debe esperar la llegada de policía, y debemos proceder a una cirugía, sutura o exáme-
los padres, a excepción de que sean lesiones gravísimas que nes, primero se debe comunicar al juzgado. Siempre acorde
puedan afectar su vida. a la gravedad del caso.
Se puede sospechar u observar lesiones que nos hacen Siempre se estará acompañado de un/a colega, admi-
pensar en un maltrato, lo que es descubierto a veces luego nistrativa, enfermera, etc.
de meses o años, acorde a la gravedad de las lesiones.17 Si es posible, se escuchará por separado a la víctima y a
¿Ante qué consultas pensamos en asij o situaciones que su acompañante.
nos explicitan los nna? Las preguntas serán abiertas, y se harán con la paciente
n Ante los manoseos, frotamientos, contactos y vestida:
besos sexuales. ¿Qué ocurrió?, ¿cuándo?, ¿dónde?, ¿cuántas veces?, ¿cómo?,
n El coito interfemoral (entre los muslos). ¿qué hiciste luego?, ¿conocías a la persona?, ¿la/lo volviste a
n La penetración sexual o su intento, por vía vaginal, ver?, etc.
anal y bucal, aun cuando se introduzcan objetos.
Uso de la Cámara Gesell
Exhibicionismo y voyerismo Muchas veces, por tratarse de niños pequeños o que no
Actitudes intrusivas sexualizadas, como efectuar comenta- desean hablar, se utiliza en el interrogatorio la Cámara Ge-
rios lascivos e indagaciones inapropiadas acerca de la inti- sell.
midad sexual de los nna. Se puede utilizar en casos en que, una vez judicializada
n La exhibición de pornografía, en ocasiones, disfra- la denuncia de abuso sexual infantil, es dificultoso que el
zada como «educación sexual». niño/a exprese lo ocurrido, o si no habla por su edad, o si es
n Instar a nna a que tengan sexo entre sí o fotogra- traumático volver a decirlo. También se puede utilizar si hay
fiarlos en poses sexuales. inconsistencia en el relato.
n Contactar a un nna vía internet con propósitos La Cámara Gesell es una habitación acondicionada para
sexuales. permitir la observación con personas.
Son dos ambientes separados por una pared que es un
Hay signos altamente sugestivos de ser adquiridos por con-
vidrio espejado. Hay un micrófono en un lado de la habitación
tacto sexual en los nna: gonorrea, sífilis, hiv adquirida posna-
y parlantes en el otro, y un equipo de video.
talmente. También se debe descartar como forma de contagio
otras infecciones de transmisión sexual (its) menos específicas
para el abuso sexual, entre las que se encuentran: virus del
herpes simple (produce vesículas genitales); virus de papiloma Preguntas que nunca
humano o hpv (produce verrugas genitales). La infección por se deben hacer*
clamidia produce inflamación pelviana crónica, esterilidad; Tri-
chomonas vaginalis produce vulvovaginitis, dolor, disuria.
n ¿Te tocaron la cola, el pene?
Actualmente ya no se considera dentro de este grupo al
gamm —Gardnerella, anaerobios, Mobiluncus y Mycoplasma.
n ¿Te metieron un dedo en la cola?
n ¿Te dolió?
Consultorio donde atender estos casos y cómo realizar
la entrevista18 n ¿Es cierto que fue tu tío?
De esta manera se pueden escuchar las preguntas del Pautas básicas del interrogatorio
examinador y las respuestas o silencios de la víctima, así La consulta se realiza en forma privada, sin interrupciones.
como observar sus juegos, dibujos gestos, etc. Todo queda Se pregunta en forma minuciosa y se escriben las pa-
grabado. labras que utilizó la paciente o acompañante para relatar
Puede utilizarse para escuchar a niñas/os en juicios sin lo ocurrido.
ser revictimizados. No todos los países la aceptan; muchas Interrogatorio en lugar cerrado, sin interrupciones, en
veces no se acepta como prueba definitoria. forma separada paciente y acompañante, en el escritorio y
Hay que explicar al niño y a sus responsables que va a con el/la paciente vestido/a y fuera de la camilla.
ser grabado y filmado: «Antes de empezar la prueba, el chi- Las preguntas sobre lo ocurrido —como se dijo— son
co es llevado por el profesional del otro lado y ve quiénes abiertas, con pregunta en espejo, sin implantar informa-
están, los instrumentos que hay. El niño sabe que lo están ción.
grabando y filmando.» Este tipo de test lo realizan personas
muy entrenadas. Consignas para protocolo sobre asij, abuso y maltrato
El especialista «nota cuando un chico está preparado», Hay pautas que no deben faltar en ningún protocolo (figu-
es decir, que fue instruido a decir determinadas cosas.19 Del ra 7):
otro lado pueden estar presentes «el juez o el secretario ge- 1. Fecha y hora de la consulta. Por si la lesión no
neral, el abogado defensor y el acusador, puede estar el fiscal es clara, o no hay lesión y la víctima es agredida
o asesor de menores y los peritos de ambas partes».20, 21 posteriormente al examen.
Accionar médico
Si tuvo relaciones sexuales anteriores o en su defecto menos el 50 % del grosor del himen. Describir dilatación hi-
bajo anestesia: cuello, vagina. Si es necesario, realizar tacto meneal medida con centímetro inextensible.
rectal. Ejemplos:
Figura 12.
Recolección
de muestras
Puede haber fluidos. Se realizará toma en fresco y cul- Para este paso, cada institución puede preparar mate-
tivo. riales en una caja, donde se indique qué medio de trans-
Si, en cambio, no hay secreción, se tomará una cánula fina, porte utilizar o toma realizar acorde al lugar agredido. De
con agua destilada (aproximadamente 5 cm3), se lavará la ca- esta manera se abreviará el tiempo, ya que no se perderá
vidad y se aspirará. Este material se usa para estudio. en preocuparse por procurar el material necesario para las
tomas de muestras y cultivos.
Toma de cultivos y muestras
Luego de finalizado el examen se clasifica lo hallado:
Actualmente se indica estudio de infección de hiv; vdrl; he- examen normal, sugestivo de abuso, probable o posible de
patitis B, C, D; hpv (en tiempo posterior), toma de cultivos abuso y confirmatorio de abuso sexual.
para clamidia, ureoplasma, mycoplasma, gonococo, tricho- Varios autores trabajaron en la clasificación de las lesio-
monas24 (figuras 11 y 12). nes, signo-sintomatología hallada.
Presentamos las dos clasificaciones que nos parecen 3c. Presencia de infecciones que confirman its. Sífilis,
más adecuadas a la utilización diaria. gonorrea, hiv, excluir transmisión vertical.
Probable abuso: clamidia, trichomonas, hsv II.
Clasificación de J. A. Adams
Posible abuso: hsv I, hpv.
En su última clasificación Adams deja tres categorías: nor-
mal, no específica y la tercera que da datos más específicos
o certeros. En la figura 13 vemos que cada categoría presenta Vaginosis bacteriana no significa abuso sexual.
varias opciones que pasamos a explicar.
Figura 14.
Clasificación
de Gil Arrones, 2007
n 3TC 4 mg/kg cada 12 horas por 30 días. nidazol 2 g ud + doxiciclina 100 mg c/12 horas
o 200 mg c/24 horas por 14 días, o alternativo:
n Más uno de los siguientes:28
azitromicina 500 mg ud + ceftriaxona 250 mg im/ud.
* EFV solo en mayores de 3 años. Una dosis 4. Si se sospecha sífilis: penicilina o eritromicina.
diaria nocturna según peso.
5. HIV: AZT 400 mg c/8 horas + 3TC 150 mg c/12 ho-
* Lopinavir/ritonavir cada 12 horas según peso. ras + IDV 400 mg c/8 horas (30 días).
3. Tratamiento hepatitis B. 6. Anticoncepción de emergencia
4. Antibioticoterapia acorde al estado de la lesión. im: intramuscular
Figura 17
Resumen
En setiembre de 1990, luego de la Convención sobre los Derechos del Niño, las Naciones Unidas concretan su
voluntad de evitar la explotación sexual infantil. A partir de ese momento varios países comienzan acciones
para lograr este objetivo. Este artículo presenta cronológicamente los hechos más relevantes ocurridos en el
mundo y en Uruguay hasta el presente.
Palabras clave: explotación sexual comercial, prostitución infanto juvenil, trata de niños y adolescentes.
Abstract
In September 1990, after the Convention on the Rights of the Child, the United Nations specifies its will to
prevent the sexual exploitation of children. As of that moment several countries begin actions to achieve this
objective. This article chronologically presents the most relevant events that have occurred in the world and in
Uruguay up to the present.
Key words: commercial sexual exploitation, child and adolescent prostitution, deals with children and adolescents.
al niño o niña y a una tercera persona o varias. El niño es tratado 2001-2007. Uruguay
como un objeto sexual y una mercancía. La explotación sexual
comercial de los niños constituye una forma de coerción y vio-
Siguiendo esta línea se realiza en Montevideo en el año 2001
lencia contra los niños, que puede implicar el trabajo forzoso y el Congreso Gubernamental Regional sobre Explotación
formas contemporáneas de esclavitud. Sexual Infantil. Distintas instituciones nacionales e interna-
cionales se comprometen a elaborar un Plan de acción.
La explotación sexual comercial de niños, niñas y ado-
En el año 2004 el Código de la Niñez y la Adolescencia
lescentes (escnna) comprende la prostitución, la pornogra-
sufre una modificación trascendental: el niño se concibe
fía, la trata, el turismo sexual y los espectáculos sexuales
como sujeto de derechos.
o eróticos.
Ser sujeto de derechos implica la posibilidad de ejercer-
n La prostitución infantojuvenil es la práctica eróti-
los y exigirlos; se convierten en sujetos con plena ciudadanía.
co-sexual remunerada; no implica necesariamente
relaciones coitales, sino que incluye cualquier tipo «Es por eso que se necesitan normas que protejan a todos
de contacto sexual. Cabe destacar que la remu- los niños, niñas y adolescentes del mundo y que, de igual
neración o retribución puede no llegar al niño o modo, salvando sus múltiples diferencias, todos y todas
joven, sino a quienes ofician de intermediarios. puedan disfrutar de los derechos que les pertenecen como
n La pornografía o imágenes de explotación sexual seres humanos y los especiales de protección derivados de
de niños implica todo tipo de representación real su edad» (Código de la Niñez y la Adolescencia. 2007).
o simulada de situaciones erótico-sexuales y/o
Uruguay ratifica todos los tratados internacionales en
exhibición de genitales; comprende la producción,
distribución, divulgación, comercialización y tenen- la materia.
BIBLIOGRAFIA
cia.
(1) OMS | Desarrollo en la adolescencia
Definición
La trata de niños y adolescentes se define como
n
www.who.int/maternal_child_adolescent/topics/
el traslado de estos dentro de un mismo país o En general vemos que la explotación sexual infantojuve-
al extranjero, con fines de explotación sexual
adolescence/dev/es/
nil se define por la presencia de tres elementos: el tipo de
comercial. (2) ACOG Number 651, December 2015 (Replaces Com-
prácticas presentes, la edad de los participantes y el carácter
El turismo sexual consiste en la oferta de servicios mittee Opinion 349, November 2006, Reaffirmed 2017)
n
económico de la retribución, pero se pone de manifiesto la
sexuales que involucran a niños o adolescentes, PDF Format Menstruation in Girls and Adolescents:
dificultad existente para abordar un fenómeno altamente
dirigido principalmente a extranjeros o turistas. Using the Menstrual Cycle as a Vital Sign
complejo y lleno de matices que se manifiestan incluso entre
n Los espectáculos sexuales pueden ser públicos o
privados e implican la exhibición de niños o ado- zonas de un mismo país.
lescentes en forma sexual o erótica. Se ve que existe un aspecto vincular (la existencia de un
explotador para que se concrete la explotación); un pro-
2001. Yokohama, Japón blema socioeconómico (pobreza, falta de oportunidades,
En el año 2001 se lleva a cabo en Yokohama el Segundo delincuencia, drogadicción) y problemas socioculturales
Congreso Mundial contra la Explotación Sexual Comercial de (sociedades patriarcales, adultocentrismo, experiencias de
los Niños, donde se ratifican estos acuerdos y se promueve victimización sexual infantil, violencia familiar).
la creación de nuevas leyes que penalicen este tipo de Consistentemente con la perspectiva de derechos desde la
explotación, incluyendo medidas extraterritoriales. cual se parte, en todas las definiciones se vincula la explotación
sexual comercial con la vulneración de derechos individuales y no Además, debemos considerar la participación, ingreso
con la patología individual o de conductas socialmente desviadas, o involucramiento de los niños y adolescentes en las situa-
y se destaca la importancia de incorporar una perspectiva de ciones en las cuales son víctimas de explotación, a partir de
género que permita comprender las consecuencias, para mujeres la discusión del tema del consentimiento.
o varones, o niñas y niños, de cualquier acción planificada, El sociólogo Gustavo Leal, director de Convivencia y Se-
incluyendo políticas, legislación o programas de acción, así como guridad Ciudadana, del Ministerio del Interior, plantea que
el reconocimiento de que la enorme mayoría de víctimas de la podría utilizarse la noción de consentimiento inducido, en el
explotación son niñas y adolescentes mujeres. cual, bajo la apariencia de promesas de cambio de la situa-
Numerosos estudios muestran que en la sociedad exis- ción cotidiana en la que viven las víctimas, se les presenta
te un conjunto de creencias que no permiten cuestionar la una posibilidad de mejora que, una vez tomada, actúa como
práctica y la demanda de relaciones sexuales pagas con si hubiese sido efectivamente una opción, como si hubiesen
menores de edad; ni siquiera se cuestiona la distribución de elegido. La decisión se toma bajo la aprobación e incitación
pornografía donde aparecen menores. del grupo o personas que tienen interés en que la víctima
Aunque este fenómeno se encuentra frecuentemente adopte la opción que se le ofrece. La víctima incorpora el
vinculado a situaciones de pobreza, puede manifestarse también punto de vista del grupo o persona que ejerce la cooptación
en otras clases sociales, donde explotadores y explotados y se opaca la real forma en la que la decisión fue tomada.
posean un mayor capital económico y cultural. Rostagnol dice que se entra y sale de la prostitución con-
Sin embargo, existe la condición de vulnerabilidad como siderándola como una opción, cuando, en realidad, no hay
factor común, ya sea por pobreza extrema, desamparo, baja mucho para elegir a cambio.
autoestima, ausencia de redes de contención, situación de La realidad es que la explotación sexual infantojuvenil
calle, entre otras. Sumado a esto, los valores impulsados por produce dinero, mucho dinero. Este dinero, constituido en un
una sociedad de consumo generan que todo se vuelva mer- valor social universal, a veces ofrece al niño la posibilidad de
cancía habilitante, incluidos los cuerpos, para poder subsistir salir de una realidad agobiante, ya sea de hambre como de
y pertenecer al sistema. carencias materiales que le impiden pertenecer a un mundo
de otros, y eso puede dirigir sus pasos hacia una ilusión de
Agentes involucrados
un futuro mejor. Otras veces son las organizaciones las que
Rostagnol y Grabino realizan en el año 2008 una descripción llenan sus bolsillos y no llega al niño nada de este dinero
de los agentes que están directa o indirectamente involu- que produjo con su explotación.
crados en este hecho social, en la cual se vislumbra que la Pero no hay diferencia entre un caso y otro, porque no
explotación sexual infantil no es un fenómeno que compete hay posibilidad de elegir. A veces incluso usan a otros ado-
a sectores marginados de la población, sino que forma parte lescentes para reclutarlos, a sabiendas de que los jóvenes
de toda la sociedad. Dentro de esto, se encuentran desde los van adonde van los demás.
propios niños/as y adolescentes explotados, los clientes, los
proxenetas, los familiares, los miembros de instituciones es- ¿Qué acciones se debería tomar para evitar
este flagelo social?
tatales e internacionales, el personal de las ong que trabajan
con víctimas, hasta el resto de la sociedad, que, por algún Un especial destaque merecen las acciones que se están
medio, está enterada de la existencia del fenómeno. llevando a cabo a nivel de Mercosur con la iniciativa Niñ@
Aun así, se podría decir que existe cierta naturalización Sur, a través de la cual se han realizado distintos estudios
con respecto a esta realidad social. La compra de sexo con sobre la situación de explotación sexual infantojuvenil en
menores no es percibida como delito. Esto genera una in- las fronteras compartidas de los países miembros, las «Re-
visibilización del fenómeno, al mismo tiempo que dificulta comendaciones sobre derechos y asistencia a las niñas, niños
su erradicación. y adolescentes víctimas de trata, tráfico, explotación, abuso
y/o venta» y se prevé la ejecución de un proyecto denomina- Por lo tanto, las acciones deberán ser contundentes e
do «Estrategia regional de lucha contra la trata y tráfico de involucrar a toda la sociedad, y fundamentalmente a los pro-
niños, niñas y adolescentes para fines de explotación sexual pios adolescentes desde una perspectiva de derechos. No
en el Mercosur». hay ninguna institución que pueda lograr por sí sola el obje-
En Uruguay, el otro destaque fundamental es la con- tivo de la protección de las víctimas, por lo cual el desarrollo
creción del Plan Nacional de erradicación de la explotación de políticas y dispositivos de intervención deberá superar
sexual comercial de niños, niñas y adolescentes, realizado la tradicional inercia de la responsabilidad y competencia
por el Comité Nacional para la Erradicación de la Explotación segmentada, y actuar en conjunto.
Sexual Comercial y No Comercial de la Niñez y la Adoles- El Centro Operativo Anti Trata, de Colombia, que articula
cencia. instituciones y acciones de protección, prevención, asistencia y
Este Plan tiene como objetivo general «el garantizar represión con capacidad operativa, es un ejemplo en la región.
a todos los niños, niñas y adolescentes del país el pleno Generar una estrategia pública para crear una nueva for-
ejercicio de los derechos fundamentales reconocidos en la ma de visibilizar las situaciones de explotación sexual infantil
Constitución de la República, la Convención de los Derechos y adolescente puede ser el camino a recorrer para garantizar
del Niño y el Código de la Niñez y la Adolescencia relativos efectivamente la protección y restitución de los derechos
a la violencia sexual» y como objetivo específico el dise- vulnerados de estos niños, niñas y adolescentes que sufren,
ñar, implementar y monitorear acciones específicas para la día a día, en carne propia este drama. Mientras haya un niño
erradicación de la explotación sexual comercial mediante o niña explotado sexualmente, o somos parte de la solución
un conjunto de programas articulados de prevención, pro- o somos cómplices del problema. n
tección, atención y restitución de los derechos de los niños,
niñas y adolescentes.
no más
niñas madres
Resumen
Se conceptualiza el enfoque de derechos humanos para abordar particularmente la violencia y el abuso sexual
que sufren niñas y adolescentes menores de 15 años en Uruguay. Se informa en forma sucinta las políticas públi-
cas actuales y desafíos que viene enfrentando el país, que procuran garantizar el acceso universal e igualitario a la
salud sexual y reproductiva, en especial a los grupos más vulnerables. Se informa sobre el compromiso asumido
por el país a través de la «Estrategia intersectorial y nacional de prevención del embarazo no intencional en
adolescentes», cuyo diseño e implementación se basan en el reconocimiento de que el embarazo no intencional
es una expresión y consecuencia de desigualdad y segmentación social. También se presentan los objetivos y
recomendaciones de la campaña Niñas, no madres impulsada por organizaciones de la sociedad civil.
Palabras clave: violencia y abuso sexual, embarazo menores de 15, estrategias de prevención.
Abstract
The human rights approach is conceptualized to specifically address the violence and sexual abuse suffered
by girls and adolescents under 15 in Uruguay. The current public policies and challenges facing the country are
briefly reported, which seek to guarantee universal and equal access to sexual and reproductive health, espe-
cially to the most vulnerable groups. It informs about the commitment assumed by the country through the
“Intersectoral and national strategy of prevention of unintentional pregnancy in adolescents”, whose design and
implementation are based on the recognition that unintended pregnancy is an expression and consequence of
inequality and social segmentation. The objectives and recommendations of the Girls, not mothers campaign
promoted by civil society organizations are also presented.
Key words: violence and sexual abuse, pregnancy under 15, prevention strategies.
Introducción
A lo largo de la historia de la humanidad la violencia como mente para aquellas poblaciones con mayor vulnerabilidad,
fenómeno social es una constante. A partir del siglo xx se co- entre ellas: mujeres, niños, niñas y adolescentes.1
mienza a analizar con mayor profundidad el significado de los En América Latina el embarazo y la maternidad temprana
derechos individuales. Luego de la Segunda Guerra Mundial, son temas de preocupación de larga data y recientemente se
la comunidad internacional asume un compromiso a través vienen abordando con una perspectiva de derechos humanos.
de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que El embarazo infantil es ante todo una vulneración extrema de
garantiza la igualdad, los derechos y el respeto a la dignidad los derechos de las niñas: «una niña que queda embarazada,
humana. La Declaración fue el punto de partida de una serie independientemente de las circunstancias o razones, es una
de acuerdos internacionales entre los Estados, particular- niña cuyos derechos quedan menoscabados».2
Cuadro 1
interrupciones voluntarias del embarazo, lo que corresponde metas sanitarias, centrados en las personas, en la perspectiva
a un 0,8 % del total de abortos para dicho año (cuadro 2). de derechos y en los determinantes sociales».4 Cuenta con 15
De las 123 niñas, el 34 % residía en Montevideo, mien- problemas críticos priorizados y el embarazo no intencional
tras que el 66 % restante, en el interior del país. En 2017 se en adolescentes ocupa el primer lugar.
registró un descenso de los nacimientos: 98 niñas menores Este trabajo conceptualiza el enfoque de derechos hu-
de 14 años fueron madres2 (cuadros 3 y 4). manos para abordar particularmente la violencia y abuso
Nuestro país ha reconocido que el embarazo adolescen- sexual que sufren niñas y adolescentes menores de 15 años
te no intencional es una consecuencia de desigualdad, y es en Uruguay. Se incluye un resumen de las políticas públicas
parte de la exclusión, vulnerabilidad social y de género que actuales y desafíos que viene enfrentando nuestro país que
sufren niños, niñas y adolescentes. En este sentido, asume
procuran garantizar el acceso universal e igualitario a la salud
como un compromiso esta problemática e implementa la
sexual y reproductiva, en especial para los grupos más vul-
«Estrategia intersectorial y nacional de prevención del em-
nerables. Se presentan los objetivos y recomendaciones de
barazo no intencional en adolescentes».*
la campaña Niñas, no madres impulsada por organizaciones
Esta Estrategia forma parte del Plan Nacional de Primera
de la sociedad civil, las cuales denunciaron ante la Comisión
Infancia, Infancia y Adolescencia 2016-2020 y de los Obje-
Interamericana de Derechos Humanos (cidh) la grave situa-
tivos Sanitarios Nacionales 2020, una serie de: «objetivos y
ción de violencia sexual que viven niñas en América Latina
y el Caribe.5
portante entre la edad de esas niñas y de los progenitores, Es imprescindible realizar un análisis
mucho más grandes en edad.
específico en los casos de embarazos
La realidad de las niñas que viven el embarazo y la mater-
nidad forzados es uno de los principales indicadores de des-
de niñas menores de 15 años, no solo
igualdad social que subyace sobre todo en la construcción de
por la extrema vulneración y limitación
sus proyectos de vida y nos señala tres inequidades severas: de sus derechos, sino también por
la inequidad intergeneracional, la inequidad de género y la los riesgos médicos que implica un
inequidad territorial. Viven en un contexto de vulnerabilidad embarazo a tan temprana edad.
donde el embarazo también es el resultado de la pobreza, la
exclusión y la falta de oportunidades educativas. El tempra-
no inicio de la actividad sexual, la ausencia de un proyecto
de vida distinto a la maternidad, el consumo de drogas y
antecedentes familiares de embarazos a temprana edad son
también factores relacionados.6 Según datos del Censo 2011,
el 22,4 % de las adolescentes que tienen dos o más de sus
necesidades básicas insatisfechas son madres, mientras que involucra e implica también al varón, así como a las familias,
el porcentaje de madres con necesidades básicas satisfechas a las comunidades y a la organización simbólica y social».9
es de 3,6 %.4 En setiembre de 2016 Uruguay asume un compromiso
Es imprescindible realizar un análisis específico en los a través de la «Estrategia intersectorial y nacional de pre-
casos de embarazos de niñas menores de 15 años, no solo vención del embarazo no intencional en adolescentes»,
por la extrema vulneración y limitación de sus derechos, sino cuyo diseño e implementación se basa en el reconocimien-
también por los riesgos médicos que implica un embarazo to de que el embarazo no intencional es una expresión y
a tan temprana edad.7 consecuencia de desigualdad y segmentación social. Esta
Existen historias donde las niñas cursan su embarazo en estrategia se concentró en revertir un problema social que
silencio; muchas veces ignorado por la familia, no solo no compromete el bienestar, el desarrollo y viabilidad futura
reciben atención médica, sino que tampoco tienen apoyo del país. El objetivo general es disminuir la incidencia del
afectivo.8 Otro aspecto vinculado a los embarazos en edad embarazo no intencional en la adolescencia, garantizando
temprana son las trayectorias de las niñas y las adolescen- la promoción y el ejercicio pleno de sus derechos. La ma-
tes que implican vulneraciones extremas de sus derechos, ternidad se impone como una situación de atención desde
situadas en un contexto de poder y en escenarios de escasas la política pública, cuando el ejercicio de sus derechos se ve
posibilidades de llevar a cabo sus proyectos de vida. tan restringido que es el único proyecto personal posible.
En Uruguay, incidir en este contexto que explica los Cada caso requiere un abordaje integral y específico, para
porcentajes altos de fecundidad en adolescentes requie- que cuando se decida seguir adelante con un proyecto de
re necesariamente trabajar intersectorialmente desde una maternidad temprana no derive nuevamente en situaciones
perspectiva de igualdad de género, derechos y diversidad. de expulsión que restringen aún más las posibilidades de
La perspectiva de género utilizada como una herramienta desarrollo de las adolescentes.
clave para comprender los procesos humanos, subjetivos «La Estrategia se estructura en cuatro componentes con
y sociales. «La dimensión relacional de la perspectiva de un respectivo objetivo específico, líneas de acción y activi-
género recuerda que el embarazo se trata de un hecho que dades»9 (cuadro 5).
objetivo general: Disminuir la incidencia del embarazo no intencional en adolescentes y sus determinantes, garantizando la
promoción y el ejercicio de sus derechos.
componente 1: adolescentes 1. Fortalecer las condiciones para el ejercicio de los ddss y ddrr y
la toma de decisiones reproductivas con autonomía de las y
los adolescentes, promoviendo proyectos de vida diversos que
cuestionen los modelos tradicionales de género.
componente 2: adolescentes que transitan 2. Fortalecer la detección y captación oportuna para la atención
un embarazo de la adolescente en la interrupción o continuidad del embrazo,
buscando el involucramiento de su entorno social cercano.
componente 4: implementación de políticas públicas 4. Implementar en forma articulada en el territorio las políticas
públicas vinculadas a la Estrategia.
Uruguay tiene grandes desafíos por delante. Vale la pena la sociedad civil para fortalecer una política pública que ga-
continuar hacia distintas líneas de acción para abordar esta rantice las máximas oportunidades de una vida plena a niñas
problemática que nos interpela. Actualmente dentro de la y adolescentes, y trabajar en las condiciones estructurales
estrategia intersectorial se está trabajando en la elabora- que perpetúan esta desigualdad.
ción de un mapa de ruta para la atención de situaciones de
Campaña Niñas, no madres
embarazo y maternidad en niñas y adolescentes menores de
15 años. Es necesario construir más información desde los Amnistía Internacional lanzó la campaña regional denomi-
actores institucionales y de la sociedad civil intervinientes nada Niñas, no madres cuyo objetivo principal es mostrar las
para la obtención de datos que permitan comprender cómo graves consecuencias de la violencia sexual y las maternida-
se llegó a la maternidad temprana; si la niña o adolescente des forzadas en la vida de las niñas latinoamericanas.5
recibieron el cuidado y la protección adecuada y conocer so- Movilizamos esfuerzos de la sociedad civil para que los Estados
bre las características principales de cada embarazo. cumplan con su obligación de garantizar la protección de los
Es nuestra responsabilidad política, académica, profe- derechos de las niñas y atiendan de manera integral este grave
sional y ciudadana definir este tema como de alta prioridad, problema de derechos humanos y salud pública en América
construir más investigaciones desde lo académico y desde Latina.
Actualmente, en el marco de esta campaña, Amnistía lencia sexual a servicios integrales de salud sexual
Internacional está iniciando un proceso de investigación y reproductiva, incluyendo a la interrupción legal
en Uruguay que permita comprender las distintas líneas de del embarazo, reconociendo que un embarazo
siempre implica un riesgo inminente a la vida y
embarazo adolescente. Los Estados tienen la obligación de
salud de las niñas.
prevenir la violencia sexual contra las niñas y garantizar su
n Contar con procesos legales expeditos para las
desarrollo integral. Ante las alarmantes cifras de violencia niñas y adolescentes víctimas de violencia sexual,
sexual, Amnistía Internacional elaboró una serie de reco- que sean congruentes con la legislación nacional y
mendaciones para que los Estados visibilicen esta proble- los estándares internacionales de derechos huma-
mática y asuman un compromiso para la construcción de nos.
políticas públicas que garanticen los derechos de las niñas n Capacitar de manera continua al personal, tanto
y adolescentes:5 del sector judicial como médico, sobre la atención
integral que deben recibir las niñas y adolescentes
n Garantizar que las niñas víctimas de violencia víctimas de violencia sexual, con perspectiva de
sexual reciban una atención integral, teniendo en género y derechos humanos. n
cuenta la afectación que un embarazo genera en
su salud física, mental y social.
n Garantizar el acceso de las niñas víctimas de vio-
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desigualdad social y de género. Cotidiano Mujer. Uruguay.
Resumen
Se hace referencia al rol que cumplen las instituciones educativas como espacios de construcción de ciu-
dadanía y ejercicio de derechos, y como espacio privilegiado para crear vínculos de confianza y buen trato
que promuevan la autonomía y la protección de niñas, niños y adolescentes. Se hace una breve descripción
de los mapas de ruta de la Administración Nacional de Educación Pública como herramientas para actuar
ante situaciones de violencia doméstica que se detectan en las aulas.
Palabras clave: rol, instituciones educativas, protección, mapas de ruta.
Abstract
Reference is made to the role of educational institutions as spaces for the construction of citizenship and the
exercise of rights, and as a privileged space to create bonds of trust and good treatment that promote the
autonomy and protection of children and adolescents. A brief description of the route maps of the National
Administration of Public Education is made as tools to act in situations of domestic violence that are detected
in the classrooms.
Key words: role, educational institutions, protection, route maps.
19 %
19 %
39 %
44 % 56 %
20 %
22 %
Gráfica 1. Distribución por formas de violencia Gráfica 2. Distribución por género nna
Fuente: Sipiav 2018
El informe plantea que se producen cuatro formas de El 57 % de los agresores son hombres. En el 69 % de las
violencia hacia nna: maltrato emocional (39 %), abuso sexual agresiones quien lo hace es la madre o el padre, en tanto que
(22 %), violencia física (20 %) y negligencia (19 %) (gráfi- en el 13 % de los casos el agresor es la pareja de la madre.
ca 1). La violencia constituye un problema crónico, ya que en el
En relación con la distribución por género de la violencia 81 % de los casos las situaciones son recurrentes, mientras
hacia nna, el 56 % de los casos refiere a niñas y el 44 %, a que solo en el 19 % constituyen un episodio único.
varones (gráfica 2). El 60 % de las víctimas no visualiza la situación de violen-
Según estos registros, la mayoría de las situaciones se cia, porque la naturaliza, la niega, no la ve como una situación
presentan en niñas y niños en etapa escolar de entre 6 y 12 de violencia.
años (42 %) y en adolescentes de entre 13 y 17 años (34 %).
Algunas conceptualizaciones
El 94 % de las personas que agreden a nna son familiares
directos o personas que pertenecen al núcleo de conviven- Las situaciones de maltrato y abuso sexual en nna se dan en
cia. En el 51 % de los casos el agresor convive con el niño todos los sectores socioeconómicos y culturales; no son,
o la niña. más allá de las creencias, patrimonio de las clases sociales
más deprivadas. En los niveles socioeconómicos y culturales
más desfavorecidos se dan con mayor frecuencia el maltrato aprendido y se transmite como modelo de socialización de
físico, el maltrato emocional y las conductas negligentes, en una generación a otra.
tanto que las situaciones de maltrato emocional, el aban- La violencia familiar puede ser ejercida bajo distintas formas.
dono afectivo y la sobreexigencia se dan en los estratos más La violencia física es toda acción, omisión o patrón de conducta
favorecidos cultural y económicamente. que dañe la integridad corporal de un niño, niña o adolescente.
Según la Organización Mundial de la Salud (oms), el abuso La violencia psicológica o emocional es toda acción u omisión
o maltrato de menores abarca toda forma de maltrato físico dirigida a perturbar, degradar o controlar la conducta, el com-
y/o emocional, abuso sexual, abandono o trato negligente, portamiento o las decisiones de un niño, niña o adolescente
explotación comercial o de otro tipo de la que resulte un por medio de la humillación, la intimidación o el aislamiento, de
daño real o potencial para la salud, la supervivencia, el de- forma tal que la vida emocional sea desestabilizada. La violencia
sarrollo o la dignidad del niño en el contexto de una relación sexual es toda acción que imponga o introduzca comporta-
de responsabilidad, confianza o poder. mientos sexuales a una persona mediante el uso de la fuerza,
La violencia familiar o doméstica es un fenómeno mul- intimidación, manipulación, amenaza o cualquier otro medio.
ticausal y multidimensional complejo que constituye un A los nna les resulta difícil revelar cuando viven situacio-
factor de riesgo psicosocial que impacta en forma directa nes de violencia o abuso sexual, en especial porque quien los
en la salud y el bienestar de niñas, niños y adolescentes. El agrede es un integrante del núcleo familiar por el que sienten
hecho de que la violencia doméstica sea de dominio de la afecto.
esfera privada de las personas la convierte en una realidad En los centros educativos se generan vínculos de conviven-
invisible y naturalizada, que legitima relaciones abusivas cia y de confianza con los adultos referentes que habilitan que
dentro y fuera del hogar. La violencia es un comportamiento nna puedan develar las situaciones de violencia que viven.
indicadores conductuales
vínculo de confianza construido a partir de la frecuencia de en- rá ser proporcionado por él/ella, y que bajo ningún
cuentros que tiene con el o la adolescente a lo largo del año.4 concepto podrá ser quien agrede. Hay que relevar
información desde el relato del/la adolescente
y de referentes familiares, así como también de
Pasos a seguir en la atención a situaciones de violencia
doméstica vecinas/os, y de otros integrantes de la institución
educativa.
Cuando en una institución educativa se detecta que un/a
* Evaluar el riesgo de la situación teniendo en
adolescente vive una situación de violencia doméstica, esta cuenta el tiempo que lleva la situación de vio-
debe ser tenida en cuenta y atendida. lencia, cuál es el vínculo con agresor/a, cuál es el
Es importante: tipo de maltrato, si hay daño, cuál es el núcleo de
convivencia, recursos para generar un cambio en la
n creer en el relato que el/la adolescente hace;
situación.
n considerar que lo que el/la adolescente relata es
3. Establecer las medidas de protección que se to-
confidencial;
marán una vez conocida la situación, dependiendo
n no abordar la situación en solitario y conformar un de la gravedad y el riesgo que el/la adolescente
equipo de trabajo multidisciplinario y/o con perso- sufre por esta causa.
nas de la institución que puedan hacerse cargo de
4. Realizar un seguimiento de la situación detectada
la situación;
con apoyo pedagógico. n
n buscar estrategias y coordinar la forma de llevarlas
a cabo;
n incluir al/la adolescente en el diseño de la inter-
vención a llevar a cabo;
n identificar a un adulto referente (que no sea el referencias bibliográficas
agresor), que puede ser un integrante de la familia
1 Sistema Integral de Protección a la infancia y a la Adolescen-
u otros adultos cercanos; cia contra la Violencia: Informe de gestión 2017. Disponible en:
n tener en cuenta que el diagnóstico de violencia <www.inau.gub.uy/documentacion/item/1494-informes-de-
será realizado por el equipo técnico de salud o del gestion-sipiav>.
poder judicial que se haga cargo de la situación; 2 Ley General de Educación 18.437. Disponible en: <parlamento.
gub.uy/documentosyleyes/leyes/ley/18437>.
n considerar que derivar no significa desvincularse
de la situación. 3 Bentancor, Gabriela, Fernanda Lozano, Mariela Solari Morales:
Mapa de ruta para las situaciones de maltrato y abuso sexual
Ante la denuncia de una situación de violencia, los pasos a en niños, niñas y adolescentes detectadas en el ámbito escolar,
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* Identificación de la situación de violencia, que caweb/mapa_de_ruta_maltrato_infantil_2013.pdf>.
puede darse por el relato, diversos comportamien- 4 Durán Costa, Mariana (comp. y coord.): Situaciones de violencia
tos, cambio de actitudes, cambios en los procesos doméstica en adolescentes. Protocolo para Enseñanza Media,
Montevideo: Administración Nacional de Educación Pública,
de aprendizaje.
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rentes parámetros de gravedad, urgencia e intensi- ción y Perfeccionamiento Docente, Sistema Integral de Protec-
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* La identificación de un adulto referente que pue- utu.edu.uy/utu/reglamentos/protocolo-de-intervencion-pa-
da cuidar y proteger al/la adolescente y que debe- ra-ensenanza-media_anep-codicen.pdf>.
1. Introducción
La violencia sexual es una violación a los derechos humanos y yor dificultad para ser abordada. Este tipo de violencia genera
un problema grave de salud y seguridad públicas, que sucede sentimientos de rechazo, angustia, impotencia en las vícti-
en los diversos ámbitos donde transitan especialmente las mas y en las personas que toman contacto con los hechos.
mujeres. Esto también es una de las formas de violencia más En especial genera culpa en las víctimas y en el entorno.
graves que viven las niñas y los niños en el ámbito familiar, Sentimiento este que paraliza, favorece el ocultamiento, y
institucional, comunitario. Con mayor prevalencia ocurre en perpetúa y legitima las situaciones de este tipo. Su abordaje
el ámbito doméstico y el agresor es en la mayoría de los ca- requiere de seguir profundizando en el armado de respuestas
sos del entorno de confianza de ellos. La violencia sexual es complementarias entre diversas disciplinas e instituciones.
una de las formas más terribles de la violencia ejercida hacia La complejidad de su origen, dinámica y secuelas reclama
niñas, niños y adolescentes, y también es la que genera ma- un abordaje colectivo, y exige la coherencia y racionalidad
psicomotriz, del lenguaje, en su capacidad de simbolización y con las situaciones de violencia sexual se ven afectados por
elaboración, en las habilidades para manejar sus emociones, el relato que genera sentimientos y emociones contradicto-
en su capacidad de integración social, como en otras áreas. rias y ambivalentes. Como el propio problema que requiere
Los efectos e impactos de la violencia sexual están abordaje. En general los equipos pueden pasar por expe-
relacionados con: a) el tipo de vínculo con el agresor, b) el riencias en las que el miedo y la impotencia frente al relato
tiempo en que transcurre la situación de abuso, c) la edad hacen que «no vean, que no ven»5 lo que los indicadores o
de las víctimas, d) la respuesta del entorno inmediato frente síntomas de salud (psíquica, física) en el desarrollo del niño
a la situación. En el caso de niñas, niños y adolescentes las están advirtiendo sobre una posible situación de violencia
situaciones crónicas generan efectos severos en el desa- sexual. También puede pasar lo opuesto. Esto es que el im-
rrollo físico, emocional, cognitivo y psicológico. Los daños pacto del relato y la identificación de un solo indicador lleve
no se limitan a la víctima que lo padece, sino que pueden a actuar rápidamente sin considerar otros indicadores o el
extenderse al grupo familiar, grupos de pares y la comunidad. contexto de la situación que permita evaluar las acciones
(Fiscalía General de la Nación, Colombia, 2016) más protectoras y garantistas para niñas, niños y adolescen-
Tal como plantea Intebi en el año 20168 el potencial de tes. Por esta razón es necesario que frente a las situaciones
daño emocional que tienen los abusos sexuales sobre los de violencia sexual los equipos de trabajo que tienen un rol
niños se basa en que: asistencial con niñas, niños y adolescentes conozcan las ca-
racterísticas de la problemática y las estrategias de abordaje
n no son comportamientos consensuados, aun
cuando el niño no se resista; pertinentes.
En ese sentido el primer planteo remite a conocer la
n resultan, con frecuencia, evolutivamente inade-
cuados; normativa, los instrumentos creados desde cada sector
n invariablemente alteran la relación vincular en la para el abordaje de estas situaciones y en especial la insti-
que ocurren; tucionalidad que cuenta con servicios y recursos para ello.
n pueden resultar dolorosos, producir temor y con- Los instrumentos creados en los últimos años, en especial
fusión; en el sector salud, remiten a guías, manuales y protocolos
n producen respuestas en los niños que pueden que plantean las acciones a seguir por el personal de salud.
interferir en los procesos evolutivos normales. Cuentan además con equipos de referencia en violencia do-
Los efectos en las vidas de las mujeres, niñas, niños y méstica que tienen como cometido brindar apoyo en estas
adolescentes son devastadores, tanto en la salud física, de- situaciones tan complejas.
sarrollo y secuelas psicológicas y sociales. En segundo término, como aspecto general, se hace
Algunos de los principales efectos que genera la vio- necesario diferenciar los roles y competencias y el ámbito
lencia sexual son: de abordaje. Las situaciones de violencia requieren para su
n Mayor vulnerabilidad a adquirir enfermedades de abordaje de acciones al menos en los siguientes ámbitos:
transmisión sexual. prevención, asistencia, acceso a la justicia y reparación/tra-
n Embarazos no deseados en adolescentes. tamiento.9
n Problemas emocionales y de salud mental severos. La atención integral, por lo tanto, va a implicar el diseño
n Mayor prevalencia de homicidios e intento y/o de un abordaje con acciones en cada una de esas áreas de
suicidio. intervención explicitadas y requiere de diversas disciplinas
e instituciones con competencias diferenciales. Tanto el
3. Apuntes para el debate sobre el sistema de diagnóstico como las estrategias de cambio en estas situa-
respuesta a la violencia sexual que viven niñas, niños y
adolescentes ciones tan complejas no pueden ser realizados por una sola
disciplina ni por una sola institución, y requieren al menos de
Los equipos técnicos de salud y otros sectores (educación,
experticia psicológica, social y médica. A problemas comple-
programas sociales y de infancia, otros) que toman contacto
jos, respuestas complejas.9
los delitos sexuales, los procesos de revictimización por los edad, teniendo en cuenta su madurez y grado
cuales se ubica a las víctimas como sospechosas, se las culpa de autonomía.
por su indefensión frente a estas situaciones, y se les pide B) Que su relato sobre los hechos denunciados
que relaten una y otra vez los hechos generan en las niñas, sea recabado por personal técnico especiali-
niños y adolescentes procesos de retracción y retractación zado, en lugares adecuados a tal fin y evitando
su reiteración.
como forma de preservarse. Esto es un daño que se agrega
y aumenta el ya sufrido por el propio abuso. C) A la restricción máxima posible de concurren-
cia a la sede judicial o policial, así como a ser
Es así que los profesionales y técnicos que detectan estas
interrogados directamente por el tribunal o
situaciones deben conocer el marco legal y los mecanismos por personal policial.
más protectores para acceder a la justicia y acompañar a niñas,
D) Ser protegidos en su integridad física y emo-
niños y adolescentes y sus familias. cional, así como su familia y testigos, frente
Una precisión importante es que en la actualidad en Uru- a posibles represalias, asegurando que los
guay los delitos sexuales no requieren de instancia de parte mismos no coincidan en lugares comunes
para investigarse en el ámbito penal. Esto es que no se re- con las personas denunciadas en los espacios
quiere de la denuncia de la propia víctima para dar inicio a una judiciales y policiales.
investigación criminal. Tal como lo establece la Instrucción E) En las audiencias no podrá estar presente la
General N.o 8 de Delitos Sexuales de la Fiscalía General de la persona denunciada como agresora y la de-
fensa no podrá formular preguntas a la niña,
Nación,12 en los Lineamientos para la persecución de los de-
niño o adolescente salvo previa autorización
litos de violencia sexual, literal «B. Investigación de oficio. La del Tribunal y solamente a través del personal
acción penal respecto a los delitos previstos en los artículos técnico especializado.
272, 272 bis, 272 ter, 273, 273 bis y 274 del C. P. es pública, no F) El respeto de la privacidad de la víctima y
requiriéndose instancia del ofendido (art. 78 Ley Nº 19.580)». familiares denunciantes respecto de terce-
Esto implica que las víctimas, que en algunos delitos sexuales ros, manteniendo en reserva su identidad e
no se identifican como tales (como las víctimas de explo- imagen y la adopción de medidas necesarias
tación sexual y trata) pueden asistirse y recibir apoyo en los para impedir su utilización por los medios de
comunicación.
servicios asistenciales, y la investigación penal de los hechos
G) Recibir información previa accesible a su edad
delictivos podrá seguir su curso de oficio.
y madurez. Para la realización de los exáme-
Asimismo, en este último período se han generado cam-
nes u otras acciones que afecten su intimidad,
bios legislativos que han permitido contar con nuevas herra- podrán ser acompañados por la persona
mientas para proteger a las víctimas y perseguir el delito. adulta de confianza que ellos mismos elijan.
En especial, la Ley N.o 19.580 (Violencia hacia las mujeres,
También se cambia el delito de atentado violento al
basada en género)13 plantea en su capítulo 1 de disposiciones
pudor para pasar a tipificar el delito como abuso sexual
generales:
en el Código Penal, se plantea nuevas medidas y también
Artículo 9 (Derechos de las niñas, niños y adoles- introduce delitos como el grooming y aquellos referidos a
centes en los procesos administrativos y judiciales). divulgación de mensajes con contenido íntimo.
Se reconoce a las niñas, niños y adolescentes, sean
víctimas o testigos de actos de violencia, sin per- Artículo 272 bis. (Abuso sexual). El que por medio
juicio de los derechos que establecen las normas de la intimidación, presión psicológica, abuso de
aplicables, el derecho a: poder, amenaza, fuerza o cualquier otra circuns-
tancia coercitiva realice un acto de naturaleza
A) Ser informados por su defensa sobre sus
sexual contra una persona, del mismo o distinto
derechos, el estado y alcance de las actuacio-
sexo, será castigado con pena de ocho meses de
nes administrativas, los plazos y resoluciones
prisión a seis, años de penitenciaría. La misma pena
judiciales en la causa, en forma accesible a su
se aplicará cuando en iguales circunstancias se
reiteración de pericias psicológicas o físicas sobre la persona La mayor evidencia con la que se cuenta en los casos de
de la víctima. abuso sexual infantil sin penetración es el relato del niño. En
otros casos existen informes médicos que dan cuenta de las
En el nuevo Código del Proceso Penal y tal como lo es- lesiones, y en los casos que pasan a la justicia en general se
tablece la mencionada Instrucción General N.o 8 de la Fisca- solicitan pericias psicológicas, médicas y/o sociales.
lía General de la Nación, para la investigación de los delitos En la lista de aquellas cosas que debemos mejorar como
sexuales está prevista la posibilidad de efectuar: sistema de detección precoz y en especial de respuesta a estas
F. Prueba anticipada. situaciones, es prioritario y urgente el debate al menos sobre
los siguientes aspectos: los modelos de atención que se des-
Las Guías de Santiago sobre la Protección de Vícti-
pliegan para la asistencia de niñas, niños y adolescentes vícti-
mas y Testigos recomiendan que: Debe valorarse la
posible práctica de actuaciones de prueba anticipa- mas de violencia sexual; los protocolos metodológicos que se
da para que, con garantía para todas las partes, se despliegan en este tipo de situaciones que permiten garantizar
evite que el proceso, en su desarrollo, se convierta una atención evaluable; los parámetros, la metodología y los
en causa de victimización secundaria o suponga un indicadores estandarizados con los que se toma el testimonio
factor de presión sobre la víctima que le pueda lle-
del niño y se releva información diagnóstica. Estos aspectos
var a abandonar el libre ejercicio de sus derechos. El
Ministerio Público debe asumir la presencia de estas que aún no cuentan con la explicitación, rigurosidad y profun-
víctimas en el proceso valorando tanto su escasa didad que ameritan las situaciones son los que muchas veces
predisposición a la colaboración como la fugacidad terminan jugando un papel preponderante en la victimización
de su disponibilidad, por lo que debe articular opor- de niñas, niños y adolescentes. El debate sobre estos aspectos
tunos mecanismos de prueba pre constituida con exige a la academia y las instituciones que lleven adelante la
plenas garantías para todas las partes; a fin de que
tarea de asistencia, protección y acceso a la justicia.
la persecución penal de la conducta sea eficaz, la
víctima no sea sometida a procesos de revictimiza- 4. Desafíos
ción y la propia dilación y reiteración de actuaciones
no suponga tanto un riesgo para su seguridad como Uruguay ha avanzado en los últimos 10 años en la legislación,
un riesgo de ineficacia para el propio proceso. en el diseño de servicios y la capacidad de captar y atender
A solicitud de la víctima o del Ministerio Pú- situaciones de violencia sexual a los niños. Se ha visibilizado el
blico, el Tribunal dispondrá el diligenciamiento de tema, pero es imperioso y urgente que cambiemos las prácticas
prueba anticipada (art. 213 y siguientes del C.P.P.).
y el ejercicio profesional desde los distintos servicios que tra-
En los casos del art. 76 de la Ley N.o 19.580, sin
necesidad de otra fundamentación. bajan con niños y adolescentes. Tener una mirada atenta que
logre despistar la existencia de situaciones de violencia sexual,
profundizar en la rigurosidad de los modelos de atención y
En los casos de violencia sexual hacia niñas, niños y ado-
los instrumentos de diagnóstico. Este debate debe además
lescentes uno de los asuntos que amerita debate y profundizar
incorporar la especificidad que se requiere de cada disciplina
en los criterios es el referido a las pruebas que se requieren
para diagnosticar y atender la violencia sexual que viven ni-
en el ámbito judicial. Esto es relevante tanto en los procesos
ñas, niños y adolescentes. Diseñar modelos rigurosos con el
judiciales en la órbita de familia especializada cuando se solici-
detalle del método, instrumentos y sistemas de evaluación
tan medidas de protección, como en la órbita penal cuando se
de aquellas intervenciones que se realizan en el marco del
investiga un delito y se generan mecanismos para la atención
abordaje a niñas, niños y adolescentes requiere de la descrip-
y protección de las víctimas.
ción de las competencias disciplinares e institucionales. Para
Y en este punto es relevante diferenciar el diagnóstico que
brindar atención y protección a las víctimas que sea de calidad
se requiere para la asistencia de las víctimas en espacios psi-
y efectiva en un proceso de cambio es imperioso y urgente
cosociales, educativos y/o médicos de la prueba pericial que
revisar los modelos de respuesta a la violencia sexual hacia
se requiere en los procesos judiciales.
niñas, niños y adolescentes. n
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226.
de largo alcance. Requiere para su abordaje del desarrollo Para Unicef, en 2013, las modalidades de violencia hacia
de políticas integrales de atención, prevención y combate los niños, niñas y adolescentes dentro del ámbito familiar
a la impunidad. o entorno cercano pueden clasificarse de diversas formas.
Naciones Unidas en 2006 alerta de que la familia puede Existen clasificaciones más exhaustivas, pero en términos
ser un lugar peligroso para los niños y niñas, y en particular generales podemos identificar las siguientes modalidades:
para los bebés y los niños pequeños. Asimismo, plantea que
la prevalencia de violencia contra los niños por parte de sus n Maltrato físico: toda agresión que puede o no tener
progenitores u otros miembros cercanos de la familia —vio- como resultado una lesión física, producto de un
lencia física, sexual y psicológica y trato negligente— apenas castigo único o repetido, con magnitudes y carac-
ahora ha comenzado a ser reconocida y documentada. terísticas variables.
En 2016 la Organización Mundial de la Salud define el n Maltrato emocional: el hostigamiento verbal
habitual por medio de insultos, críticas, descrédi-
maltrato infantil como:
tos, ridiculizaciones, así como la indiferencia y el
… los abusos y la desatención de que son objeto los menores de rechazo explícito o implícito hacia el niño, niña o
18 años, e incluye todos los tipos de maltrato físico o psicológico, adolescente. También se incluye el rechazo, el ais-
abuso sexual, desatención, negligencia y explotación comercial lamiento, aterrorizar a los niños o niñas, ignorarlos
o de otro tipo que causen o puedan causar un daño a la salud, y corromperlos.
desarrollo o dignidad del niño, o poner en peligro su superviven- n Abandono y negligencia: se refiere a la falta de
cia, en el contexto de una relación de responsabilidad, confianza protección y cuidado mínimo por parte de quienes
o poder. La exposición a la violencia de pareja también se incluye tienen el deber de hacerlo y las condiciones para
a veces entre las formas de maltrato infantil. ello. Existe negligencia cuando los responsables
de cubrir las necesidades básicas de los niños no lo
En cuanto a la magnitud del problema, plantea que una
hacen.
cuarta parte de todos los adultos manifiestan haber sufrido
n Abuso sexual: es toda forma de actividad sexual
maltratos físicos de niños y 1 de cada 5 mujeres y 1 de cada
entre un adulto y un niño, niña o adolescente.
13 hombres declaran haber sufrido abusos sexuales en la Incluye la explotación sexual.
infancia.
freeimages.com
ni de ser protegido. En esta etapa los mecanismos adaptati-
vos comienzan a funcionar y se acomoda a la situación como
forma de supervivencia. La revelación tardía, conflictiva y
poco convincente ocurre en el momento de la denuncia o
la formulación del pedido de ayuda.
La palabra de los niños, niñas y adolescentes es puesta
en cuestión; no se cree en sus relatos; se duda por lo tardío
de la revelación; muchas veces se acusa de que los jóvenes
usan esta acusación para vengarse de padres que imponen
límites fuertes. Finalmente, ocurre la retractación, una etapa
muy común en estas situaciones. Una vez develada la situa-
ción, los efectos de levantar el secreto son tan dolorosos y
nefastos que las niñas y niños se retractan de lo relatado.
4. No querer ver lo que rompe los ojos nales son funcionales al poder, porque cuando se es imparcial
Algunos profesionales, rechazan la idea de que exista el abu- en un sistema desigual, en un sistema donde existen asime-
so sexual; no toleran pensar que alguien que debe cuidar y trías de poder entre varones y mujeres, entre adultos y niños,
proteger pueda hacer cosas tan terribles. Prefieren creer que ser imparcial es ser parcial y sesgado al modelo imperante. Es
son pocos los casos, y que son productos de mentes muy innegable afirmar que vivimos en un sistema social que anula
enfermas. No pueden lidiar con tanto horror. a los niños, niñas y adolescentes, y no los reconoce ni los trata
Otros profesionales están atravesados por concepciones como sujetos de derechos; que aplasta y oprime a colectivos
machistas, misóginas y creen que las mujeres están tan empo- por no compartir su mirada respecto del mundo (por ejemplo,
deradas que inventan falsos abusos sexuales para desprestigiar colectivos lgtbi); que aplasta a quien piensa distinto. Sin lugar
y dañar a los hombres. Creen que las madres son manipuladoras a dudas, la imparcialidad es funcional y abona al sistema he-
e inventan los abusos sexuales y que la mayoría de las denuncias gemónico, machista y adultocéntrico.
son falsas, generando sospechas sobre los testimonios de los En este concierto de voces e instituciones están los pro-
niños, niñas y adolescentes y sobre las intenciones de las fami- fesionales que no ven, no se dan cuenta, no ven más allá de lo
lias que les protegen y les acompañan en el doloroso periplo evidente y superficial, y en una actitud de desidia, burocrática
de buscar justicia y protección. Algunos profesionales también y formal, atienden niños y niñas sin ver lo que rompe los ojos.
se encargan de injuriar y desprestigiar a los profesionales que Esos también hacen muchísimo daño.
trabajan en el campo del abuso sexual infantil, de forma com- Puede haber además experiencias personales. Porque es
prometida, solvente, con una clara perspectiva de derechos hu- innegable que existen las denuncias falsas de abuso sexual, que
manos. Quieren hacer creer a la ciudadanía que las personas que existen los falsos testimonios y que existen madres y padres
trabajan en este campo tienen intenciones maliciosas, intereses malintencionados que inventan esto para dañar a sus exparejas.
económicos o que tienen algún problema de salud mental que Y si a algún profesional le tocó vivirlo, va a pensar que quizás
les hace ver abusos sexuales donde no los hay. todos los casos son así.
Otros profesionales quieren enarbolar la bandera de la Esos profesionales se creen que son el centro del mundo
ecuanimidad, la imparcialidad y la objetividad. Esos profesio- y que su experiencia es la experiencia general.
El serpentón
El capitán del vapor Elmer acaba de ver un monstruo ma- El serpentón nada alrededor del barco en círculos cada
rino. No dice nada porque no quiere que lo tomen por vez más estrechos. Levanta olas como edificios y azota
loco. Le puede costar su puesto. rabiosamente las crestas de espuma con su cola trífida.
El primer oficial también lo ve. No dice nada porque El primer oficial se seca los vidrios de los anteojos.
no quiere que lo tomen por loco. Le puede costar su —¿Garúa o es idea mía?
puesto. —Es idea suya.
El grumete también lo ve. No dice nada porque, como El serpentón quiere que su presencia se note. ¡Cómo
todavía es un chico, pensarán que está inventando. El no va a querer! Sabe que un monstruo sólo existe si al-
cocinero también lo ve. No dice nada porque pensarán guien lo ve y grita. Si nadie lo ve y nadie grita, no existe.
que, para variar, bebió demasiado. A los dos les puede ¡Qué puede hacer si todos están mirando para otro lado!
costar el puesto. Una y otra vez se sumerge y vuelve a aparecer que-
Todos lo ven, en realidad, y nadie dice nada. brando la superficie del mar con estampidos violentos.
El monstruo está ahí, a medio tiro de fusil. Es un ser- Trata de amedrentar a los marineros de cubierta rocián-
pentón como de seis cuadras de largo, escamas de color dolos con sus babas.
verde pantano, cara de caballo, cuernos en cantidad, ojos En la noche emprende pasadas vertiginosas por debajo
llameantes, lengua larga. Echa vapor por las narices. Bra- de la quilla, iza el barco entre sus anillos de hierro y lo deja
ma. Las fauces son tan grandes que podrían engullir cua- caer desde las alturas. El Elmer no zozobra por milagro.
tro vapores del tamaño del Elmer en un mismo bocado. Y así.
Imposible no verlo, imposible confundirlo con otra cosa. Está cada vez más insistente.
¿Qué van a decir que es eso? ¿Un delfín? ¿Una boya? Ahora cena en el comedor con el capitán y los oficiales.
—Parece que va a refrescar —comenta el primer ofi- ¡Ni hablar de lo que es capaz de hacer en la mesa! El ca-
cial al capitán. marero, que tampoco quiere que lo tomen por loco, finge
—Sí, parece —contesta el capitán. que no lo ve y todas las noches barre la vajilla rota. n
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¿cómo nos enfrentamos a estas realidades? May. 2018; 7(1):18-27
Dic. 2018; 7(3):12-15
reglamento de publicaciones
La Revista de la Sociedad Uruguaya de Ginecología de la In- Se realiza a través de correo electrónico a la dirección
fancia y Adolescencia (Revista de SUGIA) se caracteriza por inesmartinez52@gmail.com, en archivo adjunto de Word no
desarrollar una unidad temática por número. Cuenta con las anterior a 2010, en Times New Roman tamaño 12, a doble
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haber sido publicados en otras revistas nacionales o interna- sión no mayor de 250 palabras, que constará de los
propósitos del estudio o investigación, procedi-
cionales y tienen que contar con la cita de las fuentes.
mientos básicos, hallazgos más importantes con su
2. Actualización. significancia estadística (siempre que sea posible)
3. Revisión. y las conclusiones principales. Deberá destacarse
las observaciones, los aspectos más novedosos y
4. Casos clínicos comentados.
relevantes del estudio.
5. Novedades bibliográficas n Palabras clave. A continuación del resumen, en es-
pañol y en inglés, se especificará de 3 a 10 palabras