Expo Distocias
Expo Distocias
Expo Distocias
TIPOS
• Distocias fetales
• Distocias dinámicas
- Situación transversa: Ocurre una situación transversa cuando el eje longitudinal del
feto es perpendicular al eje longitudinal de la madre:
FACTORES DE RIESGO PARA DISTOCIA DE PRESENTACIÓN
• Fetales
o Embarazo de pretérmino
o Embarazo gemelar
o Malformaciones fetales congénitas
• Maternas
o Gran multiparidad (≥ 5 partos)
o Tumor previo (mioma uterino ístmico)
o Malformación uterina (tabiques)
o Deformación pélvica severa
• Ovulares
o Polihidroamnios
o Oligohidroamnios
o Placenta previa
El diagnóstico se hace por palpación abdominal con las maniobras de Leopold y el tacto vaginal,
siendo fácil la confirmación por ecografía obstétrica, que además aporta otros datos sobre el feto
y la placen ta. Se considera una distocia absoluta ante la imposibilidad del parto normal aun con
fetos pequeños y es necesario practicar operación cesárea siempre. La situación transversa con
dorso superior y ruptura de membranas debe considerarse una urgencia ante la posibilidad del
prolapso del cordón al iniciarse la dilatación del cuello.
2. Modalidades de bregma, frente y cara Son aquellas en las cuales se pierde la actitud fetal
normal de flexión de la cabeza. La deflexión altera los diámetros cefálicos que se van a
presentar en el estrecho superior de la pelvis . En la presentación de bregma hay una ligera
deflexión de la cabeza de manera que el diámetro que se presenta es el fronto-occipital, que
mide 12 cm; el punto de reparo es el bregma (B) y el tacto vaginal permite reconocer la
fontanela mayor en el centro de la pelvis. En la presentación de frente la deflexión es más
acentuada, el diámetro de la presentación es el mento-occipital, que mide 13,5 cm; y el punto
de reparo es la nariz. En la presentación de cara la deflexión es total. Puede ocurrir en la
variedad mento-anterior, cuyo diámetro de presentación es el submento-bregmático, el cual
mide 9,5 cm, permitiendo el parto vaginal, y en una variedad mento-posterior, cuyo diámetro
sería el preesternosincipital, que mide de 13,5 a 15 cm, el cual impide el parto vaginal normal.
Los signos clínicos que deben hacer sospechar el diagnóstico de la presentación de cara son:
que la fontanela posterior no pueda identificarse y en cambio sí se identifica la fontanela
anterior o una de las órbitas, la base de la nariz o el mentón.
Presentación de pelvis En estos casos el feto presenta el polo pélvico en vez del polo cefálico para
el mecanismo del parto. se asocia con prematurez, malformaciones fetales, miomatosis uterina y
placenta previa. El diagnóstico se hace mediante la palpación abdominal al identificar el polo
cefálico localizado en la parte superior del abdomen, la auscultación de ruidos cardíacos por
encima del ombligo, y por el tacto vaginal al precisar el polo pélvico. El estudio ecográfico o, en su
ausencia, el radiológico, confirman el diagnóstico. TRES MODALIDADES
Mala posición fetal La forma más frecuente de mala posición fetal es la variedad
occípitoposterior persistente, Como causa se invoca estrechez pélvica relativa del
estrecho medio y desproporción cefalopélvica. Debe sospecharse en casos de
progreso lento de la fase activa del parto, dolor exagerado irradiado hacia la región
dorsal, persistencia del reborde anterior del cuello y prolongación del descen so. Se
confirma al tacto vaginal por la persistencia del punto de reparo en posición posterior.
El diagnóstico de variedad posterior persistente obliga a una evaluación cuidadosa de
la pelvis materna y del estrecho medio, y vigilancia del estado fetal
Ampliar la episiotomía.
• Realizar una maniobra de Kristeller suave, que consiste en la presión sobre el fondo
uterino, conjuntamente con maniobra de McRoberts: soltar las piernas de la madre,
de la mesa ginecológica; flexionarlas fuertemente y desplazarlas hacia afuera con el fin
de que se desencaje el hombro anterior.
• Maniobra de Woods: introducir la mano por la espalda fetal y rotar el hombro
posterior 180°, con el objetivo de que se desencaje el hombro anterior.
• Maniobra de Rubin: introducir la mano con el fin de desplazar uno de los hombros
hacia el tórax.
• Maniobra de Zavanelli: desplazar la cabeza hacia arriba, para luego realizar una
cesárea.
2. DISTOCIAS PÉLVICAS
TIPOS DE PELVIS
- Pelvis ginecoide. Se caracteriza por tener un estrecho superior redondeado, el diámetro
transverso máximo está aproximadamente a la mitad del conjugado verdadero
- Pelvis platipeloide o plana. El estrecho superior es ovalado pero, al contrario de la pelvis
antropoide, en la pelvis plana el diámetro transverso es mayor que el anteroposterior. Una
pelvis platipeloide dificulta la rotación interna y presenta dificultades en el período
expulsivo.
- Pelvis androide. En el estrecho superior la parte anterior es angosta y puntiaguda. El
diámetro transverso máximo intercepta al conjugado verdadero más cerca del sacro, de
modo que la superficie del segmento posterior es mayor que la del segmento anterior.
Una pelvis androide presenta dificultades en el encajamiento y en la rotación en las
variedades posteriores.
- Pelvis antropoide. El estrecho superior tiene una forma ovoide cuyo diámetro
anteroposterior es mayor que el transverso. Una pelvis antropoide presenta dificultades
en el encajamiento y descenso en el estrecho inferior y en la rotación de las variedades
transversa y posterior
Estrechez del plano de salida o inferior. Casi siempre se asocia a estenosis del estrecho
medio y debe sospecharse cuando hay espinas ciáticas prominentes (disminución del
diámetro transverso), sacro inclinado hacia adelante, diámetro anteroposterior del
estrecho inferior corto (este diámetro va desde el borde inferior de la sínfisis hasta la
punta del sacro), o disminución de la distancia entre las tuberosidades isquiáticas
(diámetro intertuberoso menor de 8 cm)
Distocias de tejidos blandos Este grupo está constituido por todas aquellas distocias que
tienen su origen en los tejidos músculo aponeuróticos que entran en contacto con el polo
fetal durante el trabajo de parto y en orden descendente según su localización anatómica
pueden ser de anexos del cuerpo uterino, del cuello uterino, la vagina, la vulva o el periné.
Distocias ocasionadas por patologías del útero y anexos Los miomas uterinos localizados
en el segmento inferior del útero, y en especial los de la cara posterior, pueden quedar
atrapados en la pel vis menor y ocasionar obstrucción mecánica en el segmento uterino.
Lo mismo puede ocurrir con los quistes ováricos pediculados grandes, mayores de 10 cm,
que ocupen la parte inferior de la pelvis ocasionando la obstrucción mecánica y además el
riesgo de ruptura del quiste durante el trabajo de parto. El uso de la ecografía permite
identificarlos y la conducta es practicar operación cesárea.
Distocias cervicales El normal reblandecimiento del cuello por las acciones hormonales
durante el embarazo y el trabajo de parto, y por ende la facilidad para acortarse y
dilatarse, se alteran con las cicatrices cervicales posteriores a desgarros cervicales en
partos anteriores. Igualmente, el edema del cuello provocado por maniobras traumáticas
durante el control del trabajo de parto o por la presión persistente de la presentación fetal
en caso de una desproporción céfalo-pélvica, alteran este proceso de borramiento y
dilatación. Dicha dificultad puede ser resuelta espontáneamente por una buena dinámica
uterina, maniobras suaves de ayudar a pasar el cuello por detrás de la presentación, o por
analgesia peridural.
Distocias vaginales y vulvares Las cirugías vaginales previas pueden causar distorsión de
los tejidos y riesgos de que la patología anteriormente corregida con el procedimiento
quirúrgico vuelva a aparecer. Los quistes de Gardner grandes pueden extenderse hasta
sitios altos de la vagina y causar obstrucción del trabajo de parto. Las grandes
condilomatosis vulvovaginales o perineales pueden sufrir laceraciones y desgarros durante
el nacimiento, ocasionando hemorragias severas . Por último, las lesiones como las fístulas
recto o vesicovaginales contraindican el parto vaginal por el riesgo de aumentar el daño
preexistente, al igual que infecciones locales de transmisión que pongan en peligro al
recién nacido
Alteraciones de la placenta
Placenta previa: Cuando la placenta está implantada total o parcialmente en el segmento
uterino inferior, en la zona de borramiento y dilatación del cérvix, constituye una
obstrucción para el descenso de la presentación. Durante el embarazo el principal signo
clínico es el sangrado indoloro; actualmente el diagnóstico se comprueba mediante
ultrasonografía. La conducta es la intervención cesárea electiva.
5. DISTOCIAS DINAMICAS
LAS hiperdinamias pueden ocurrir desde el inicio del trabajo de parto; en tal caso se
atribuyen a mayor excitabilidad uterina, al aumento de la secreción de oxitocina y a la
contextura vigorosa del miometrio. También pueden ocurrir hiperdinamias cuando ya se
ha iniciado del trabajo de parto, y su origen puede ser iatrogénico (administración
exagerada de oxitócicos) o provocadas por obstrucción del parto. El síntoma principal es el
aumento exagerado del dolor durante la contracción, el signo clínico es aumento de la
consistencia del útero (leñosa) y se evidencia mediante monitoría electrónica por
aumentos de la duración de la contracción (mayor de 70 segundos), de la intensidad
(mayor de 50 mmHg) y, secundariamente, del tono uterino. Las hiperdinamias pueden
provocar hipoxia y sufrimiento fetal, parto precipitado, ruptura uterina, desprendimiento
prematuro de placenta, desgarros del canal del parto y atonía posparto. Si no se establece
ninguna medida terapéutica también puede ocurrir hipodinamia hipertónica (tétanos
uterino) o hipodinamia hipotónica secundaria por cansancio de la fibra muscular. El
tratamiento de las hiperdinamias debe ser etiológico; se debe identificar si existe un
obstáculo que ocasione obstrucción y en tal caso se resolverá el nacimiento por cesárea;
en el caso de la ad ministración inadecuada de oxitócicos se deben suprimir
inmediatamente y colocar a la paciente en decúbito lateral.
Inversión parcial o total del triple gradiente: Los componentes del triple gradiente
descendente de la contracción uterina son: la duración, la intensidad y el sentido. Cuando
la inversión afecta un solo componente del triple gradiente se denomina inversión parcial;
si la inversión del gradiente afecta los tres componentes, inversión total. Se le llama
inversión del gradiente de intensidad (segmento inferior hipertónico) cuando las
contracciones del segmento inferior son más intensas que las del cuerpo.
Si las contracciones uterinas se inician en el segmento inferior del útero y se propagan
hacia arriba (ondas ascendentes) con duración de la onda contráctil mayor en el segmento
inferior que en el cuerpo, se denomina inversión del gradiente de propagación y duración
Y se define inversión total de gradientes cuando las ondas al comenzar son más intensas,
tienen mayor duración en el segmento inferior del útero y se propagan en forma
ascendente. Los cuadros de inversiones de gradiente pueden ocasionar falta de dilatación
y borramiento del cuello