Ebooks - 978 84 1377 593 7
Ebooks - 978 84 1377 593 7
Ebooks - 978 84 1377 593 7
EXPERIENCIAS PRÁCTICAS
INNOVACIÓN E INVESTIGACIÓN DOCENTE
EN EDUCACIÓN: EXPERIENCIAS PRÁCTICAS
Coordinadoras
CARMEN ROMERO GARCÍA
OLGA BUZÓN GARCÍA
2021
INNOVACIÓN E INVESTIGACIÓN DOCENTE EN EDUCACIÓN:
EXPERIENCIAS PRÁCTICAS
ISBN 978-84-1377-593-7
SECCIÓN I.
EXPERIENCIAS INNOVADORAS EN CIENCIAS EXPERIMENTALES Y
ENSEÑANZAS TÉCNICAS
SECCIÓN II
EXPERIENCIAS INNOVADORAS EN LA ENSEÑANZA DE LENGUAS
EXTRANJERAS
SECCIÓN III
EXPERIENCIAS INNOVADORAS EN CIENCIAS SOCIALES, JURÍDICAS
Y EMPRESARIALES
SECCIÓN IV
EXPERIENCIAS INNOVADORAS EN COMUNICACIÓN Y ENSEÑANZAS
ARTÍSTICAS
L
as necesidades del aprendizaje del alumno actual, que debe
aprender a vivir en una sociedad globalizada, digitalizada, inter-
cultural, cambiante y que produce cantidades ingentes de infor-
mación, requieren formas de enseñar diferentes a las que se utilizaban
hace 20 años. Vivimos, desde hace algunos años, una transición desde
un modelo educativo centrado en la enseñanza y la transmisión de con-
tenidos hacia un modelo metodológico centrado en el aprendizaje y la
adquisición de competencias.
Las tres últimas leyes educativas que hemos tenido en España, LOE,
LOMCE y LOMLOE tienen como pilar fundamental del sistema edu-
cativo una formación en competencias, que prepare a nuestros estudian-
tes durante la Educación Primaria y Secundaria para progresar a estu-
dios superiores y sobre todo para aprender a aprender. Así mismo, el
Espacio Europeo de Educación Superior (EEES) propone una forma-
ción en competencias profesionales que permita la incorporación de los
estudiantes al actual mercado laboral.
En este contexto, la formación en competencias solo es posible si los
sistemas educativos adoptan modelos de enseñanza centrado en el
alumnado, teniendo en cuenta que el objetivo no es enseñar, si no apren-
der. Modelos que incorporen metodologías activas que permitan que el
estudiante se responsabilice del proceso de aprendizaje, siendo el papel
del docente el de un diseñador de actividades, en las que el alumnado,
frecuentemente de forma colaborativa, pone en práctica lo aprendido y
‒ ‒
el profesorado adopta un papel de guía, que da feedback en todo mo-
mento al alumnado, orientándole en su aprendizaje y atendiendo a las
particularidades del alumnado y a la diversidad del aula. La evolución
hacia un modelo de enseñanza y aprendizaje de este tipo permite la for-
mación en competencias, atiende a la diversidad del alumnado y en de-
finitiva permite un aprendizaje autodirigido, autónomo y significativo.
Este cambio de paradigma en la forma de enseñar requiere la integra-
ción de la tecnología y el uso eficiente de diferentes herramientas digi-
tales para el acceso a la información, la creación de contenidos, cola-
boración y evaluación de los aprendizajes.
Las herramientas tecnológicas impulsan nuevas formas de enseñanza,
rompiendo las barreras espaciales y temporales y permitiendo la cola-
boración entre los estudiantes desde cualquier lugar. La crisis sanitaria
en la que se ha visto inmersa la sociedad a nivel mundial ha puesto de
manifiesto la necesidad de que los procesos de formación online no se
limiten a la utilización de las TIC para facilitar el acceso a la informa-
ción o para su transmisión y recepción. Se deben integrar para que per-
mitan la interactividad como apoyo a las metodologías activas, puesto
que la tecnología, por sí sola, no garantiza una mejora del proceso edu-
cativo, siendo el docente el responsable de adaptar la tecnología al con-
texto del aula, aprendiendo a utilizarla para enriquecer sus clases y pro-
mover el aprendizaje de los estudiantes.
Los docentes de diferentes niveles educativos, conscientes de esta ne-
cesidad, diseñan e implementan en sus aulas diferentes experiencias
educativas apoyadas en diferentes líneas de investigación docente,
como Aula Invertida, Gamificación, Aprendizaje basado en Retos,
Aprendizaje basado en Investigacion y Colaboración virtual, muchas
de ellas basadas en herramientas digitales. Dar visibilidad a estas expe-
riencias, la mayoría con resultados positivos en el aprendizaje es la base
de la innovación educativa y contribuye a la transformación de la prác-
tica pedagógica según las necesidades actuales.
En este libro se presentan experiencias innovadoras implementadas en
diferentes áreas de conocimiento que ofrecen una visión de las nuevas
tendencias de Educacion. Así, en la sección I se presentan innovaciones
realizadas dentro del ámbito de las Ciencias Experimentales y
‒ ‒
Enseñanzas Técnicas, en la II en el campo de la Enseñanza de Lenguas
Extranjeras, la sección III está dedicada a las Ciencias Sociales, Jurídi-
cas y Empresariales, en la sección IV experiencias dentro del ámbito de
las Comunicación y Enseñanzas artísticas y la sección V se dedica a las
experiencias innovadoras para la Formación Docente.
‒ ‒
SECCIÓN I
EXPERIENCIAS INNOVADORAS
EN CIENCIAS EXPERIMENTALES
Y ENSEÑANZAS TÉCNICAS
CAPÍTULO 1
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
estos conocimientos con la idea previa que se habían formado del grado
cuando efectuaron su elección, porque siempre piensan en las asignatu-
ras más aplicativas, como serían en este caso todas las implicadas en la
fabricación de alimentos o en su análisis. Por ello, los conocimientos
impartidos durante el primer curso son entendidos en realidad como una
continuación de los conceptos estudiados durante su Educación Secun-
daria Obligatoria y su Bachiller, lo que determina que pronto se suman
mayoritariamente en una apatía y desinterés generalizados.
La segunda causa surge de la propia génesis de una asignatura tan he-
terogénea como la ByM, que hubo que reunir conocimientos de “Bio-
logía” y “Microbiología”, por no poder ofertarse asignaturas básicas de
menos de 6 créditos en ninguno de los grados universitarios, de forma
que mientras que la materia de “Microbiología” hubiera podido consti-
tuir por sí sola una asignatura, no sucedió los mismo con los conoci-
mientos de “Botánica” y “Zoología”, que sumaban ambos solo 4,5 cré-
ditos (2,5+2,0 créditos). De esta fusión un tanto artificial, basada más
en el nombre de las materias que en cualquier otra justificación, surgió
la asignatura más densa de las cuarenta y una que reúnen los ocho se-
mestres de CTA.
Puesto que los profesores de cada uno de los bloques, integrados en
áreas de conocimiento sustancialmente diferentes (“Botánica”, “Zoolo-
gía” y “Sanidad Animal”), decidieron desde el primer instante tratar
cada una de estas tres partes como entidades independientes, se permi-
tió la posibilidad a los alumnos de compensar cada parte, en principio
con un 4,0 (siempre que de la reunión de las tres materias se llegara al
5,0), y a partir del curso académico 2015/2016, con un 5,0; por lo tanto,
ya se exigía aprobar cada una de las tres partes para liberar la materia.
A pesar de aplicar un prorrateo del 50% para la nota obtenida en “Mi-
crobiología” frente al 25% de las alcanzadas en “Botánica” y “Zoolo-
gía”, con el fin de equiparar su tamaño en créditos a la proporción de
las calificaciones, los alumnos se percataron enseguida de que les su-
ponía menos esfuerzo concentrarse en la preparación de 2,5 + 2,0 cré-
ditos (de obtener un 5,0 en esas dos partes), que dedicarse a una materia
cuyo volumen de trabajo representaba casi el triple, como sucede con
la “Microbiología”. Con este método de calificación, podían superar
‒ ‒
perfectamente el conjunto de la asignatura, limitándose a conseguir, por
ende, la nota mínima de 5,0 en la parte más densa y complicada, sin
ningún tipo de esfuerzo adicional.
Ambos hechos dieron origen a la paradoja de que en ByM se obtienen
porcentajes aceptables de aprobados (superiores al 65%, próximos a los
valores manifestados en la Memoria de Verificación), pero con unos
porcentajes de buenas calificaciones, del "notable" en adelante, meno-
res de los que se hubieran deseado, y siempre con los resultados más
pobres en la parte de “Microbiología”.
Con el fin de motivar a los alumnos en un intento por mejorar sus cali-
ficaciones por encima del “aprobado” en el conjunto de la ByM, y par-
ticularmente de elevar las calificaciones en los 6 créditos ECTS de “Mi-
crobiología”, se ensayaron una serie de actividades de ejecución senci-
lla y realización relativamente breve (15-30 minutos como máximo
cada una). Para su realización no se necesitó recurrir a grandes apoyos
informáticos, que suelen retraer a los estudiantes y también a los profe-
sores. Con ello, se pretendía pues volver más atractiva la “Microbiolo-
gía”, conseguir una mayor motivación de nuestros estudiantes, fomen-
tar su autoaprendizaje y ejercitar diversas competencias transversales
de las enumeradas en la Memoria de Verificación de CTA, ya desde el
primer contacto de los alumnos de 18-19 años con la universidad, en
una edad en la que la sociedad del siglo XXI les posibilita infinidad de
ofertas disuasorias, más atrayentes, lo que resta dedicación a aquellas
materias que no consideran prioritarias en el desenvolvimiento de su
futuro profesional, como es nuestro caso.
De ellas, la primera propuesta fue ensayada ya durante el curso acadé-
mico 2014/2015 en esta misma materia y grado, junto con otras que
ahora no fueron consideradas, como la realización de tres exámenes a
través de la plataforma Moodle (uno cada siete temas teóricos, de los
21 que integran la teoría de “Microbiología”) y como la exposición por
grupos de un tema relacionado con esta misma materia, por medio de
un póster, simulando la participación en un congreso de investigación
(Gutiérrez-Martín et al., 2017). Como otras investigaciones previas por
parte de otros autores, solo hemos encontrado de nuevo información
relativa a la búsqueda de noticias de actualidad, publicadas en medios
‒ ‒
de comunicación españoles, vinculadas con aspectos científicos y/o
profesionales de una asignatura de los cursos superiores del Grado en
“Veterinaria” de la Universidad de Murcia: la “Nutrición Animal”
(Orengo Femenía, 2014).
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
informaciones quedaría anulada si había sido enviada previamente
por otro compañero. Cuando sucedía esto, se informaba al alumno,
al que se concedían hasta tres oportunidades más de remitir un no-
ticia distinta, no repetida. Esta actividad fue valorada según la rapi-
dez de envío de la noticia, una vez comprobado que era correcta y
que no se había entregado previamente. Se les dio un plazo de tres
días.
2ª actividad.- El envío de un vídeo sobre una ruta catabólica micro-
biana (de bacterias o de hongos microscópicos) junto con su corres-
pondiente resumen, con el objeto de facilitar el entendimiento de un
aspecto del temario que siempre resulta de difícil comprensión por
parte del alumnado. Se calificó en función de la calidad y rapidez
de envío de la tarea a nuestro correo electrónico, una vez verificado
que era correcta. También contaron con tres días de tiempo para su
realización.
‒ 3ª actividad.- Como novedad respecto a las dos actividades
anteriores, se les daba a los universitarios la oportunidad de
que ellos mismos plantearan una tarea ideada por ellos mis-
mos, semejante pero no idéntica a las propuestas por el profe-
sor, con el fin de que trabajaran sus propias habilidades. Se
valoró en función de la originalidad y la velocidad de entrega,
dentro de un tiempo establecido de dos días.
‒ ‒
originalidad/calidad y de la velocidad de envío (que fue posi-
ble hasta en los tres días posteriores).
‒ ‒
‒ La noticia de prensa sobre la Microbiología y los alimentos
‒ Tu propuesta de actividad
‒ Tu propuesta de actividad
‒ ¿Crees que es una buena idea repartir tres premios entre quie-
nes obtengan las mejores puntuaciones tras el desarrollo de las
actividades propuestas?
4. RESULTADOS
‒ ‒
totalidad de los alumnos. Entre las noticias enviadas, se hacía referencia
a diferentes aspectos, que hemos dividido en tres bloques: a) riesgos
microbiológicos derivados del consumo de algunos alimentos, como el
queso de rulo de cabra, la leche cruda, el fuet, el foie gras de pato, los
melocotones, la carne mechada y los brotes de listeriosis, diferentes
pescados, el vino, los helados, la harina utilizada para la elaboración de
fideos congelados o el pollo poco cocinado. Se trató del grupo más fre-
cuente de informaciones entregadas al profesor.
FIGURA 1. Porcentaje de estudiantes que participaron en cada una de las cinco actividades
propuestas, así como en la encuesta de satisfacción
100
91,9
78,4 81,1
% alumnos
56,7
35,1
1ª 2ª 3ª 4ª 5ª Encuesta
Actividad
FIGURA 2. Porcentaje de estudiantes que realizó cada una de las cinco actividades pro-
puestas por el profesorado
% alumnos
26,3 26,3
18,4 18,4 10,6
5 4 3 2 1
Nº de actividades realizadas
‒ ‒
En menos ocasiones, las noticias se centraron en b) los efectos benefi-
ciosos de los microorganismos, como en la elaboración de bebidas fer-
mentadas, en la protección frente a otros agentes patógenos y en la re-
ducción del consumo de agua en las plantaciones de fresas, en la fabri-
cación de los yogures y del kéfir o en la utilización de probióticos para
la prevención de algunas enfermedades víricas. Otro tercer grupo de
inofrmaciones se relacionó con c) aspectos curiosos, como la moda del
consumo de alimentos orgánicos con la presencia de hongos filamento-
sos en ellos (Figura 3), la carga bacteriana de los chicles tirados al suelo,
el consumo del té de kombuche utilizado en algunas dietas, el riesgo de
la manipulación de alimentos con guantes o la regla de los cinco segun-
dos aplicada a los alimentos que caen al suelo.
Las puntuaciones se distribuyeron a lo largo de los tres días permitidos,
diferenciando entre mañana y tarde, de forma que a partir de la califi-
cación máximo de 0,3 puntos se fueron restando 0,05 puntos, hasta lle-
gar a los 0,05 puntos, la puntuación menor, otorgada a las informacio-
nes recibidas durante la tarde de la tercera y últimajornada.
‒ ‒
La tarea 2ª fue entregada por el 78,4% de los estudiantes (29 de 37) y
fue solicitada a la finalización del noveno día de teoría. También se dio
un periodo de tres días para su realización. El 51,7% de la matrícula
entregó el vídeo y su resumen primer día; el 17,2%, el segundo, y el
31,1% restante, el último día. Las puntuaciones fueron respectivamente
de 0,3, 0,2 y 0,1 puntos, según el momento de entrega al profesor.
Solo fueron dos las rutas catabólicas seleccionadas: la glucólisis, pre-
ferida por 21 de los 29 alumnos (72,4%), a mucha distancia de los úni-
camente ocho jóvenes que optaron por el ciclo de Krebs (27,6%). Como
curiosidad, podemos señalar que entre los vídeos se remitieron algunos
con canciones, entre las que queremos destacar un rap humorístico, alu-
sivo al ciclo de Krebs.
Con diferencia, la actividad 3ª fue la menos completada, únicamente
por el 35,1% (tan solo 13 alumnos). En esta ocasión, solo se les facili-
taron dos días de margen. La propuesta se les comunicó durante el de-
cimotercer día de clase teórica. La puntuación fue la máxima, de 0,30,
para quienes entregaron su propuesta durante las primeras 24 horas y
disminuyó a la mitad si se remitió en las 24 horas siguientes. De los que
no llevaron a cabo esta tarea, cinco confesaron que no se les había ocu-
rrido ninguna actividad alternativa a las del profesor. Otros estudiantes
alegaron que tenían exámenes parciales que tenían que estudiar durante
los dos días de plazo.
Como ejemplos de algunas de las 13 ideas expuestas, citamos la pro-
puesta de realización de un crucigrama con términos microbiológicos,
la elaboración de mapas conceptuales o diagramas con ayuda de la apli-
cación informática gratuita lucidchart (como ilustra la Figura 4), la re-
misión de la biografía de una microbióloga destacada (con sus princi-
pales contribuciones y los galardones obtenidos, si los hubiera), la
dsitribución en dos columnas de diez conceptos microbiológicos desta-
cados (en la de la izquierda) y de sus correspondiente definiciones (en
la columna de la derecha), para su posterior emparejamiento, o de un
listado con diez especies de bacterias y/u hongos microscópicos junto
con sus efectos beneficiosos o perjudiciales sobre los alimentos.
‒ ‒
El profesor seleccionó una actividad original que no le pareció excesi-
vamente complicada de ejecutar (para que los alumnos no alegaran que
les restaba demasiado tiempo para el estudio de otras asignaturas). Con-
sistió en la búsqueda y entrega de dos fotografías de otras tantas bacte-
rias, con su nombre de especie correcto, su descubridor, los alimentos
con que se relacionaban y, finalmente, las enfermedades que podían
ocasionar.
‒ ‒
formar parte del examen teórico de la materia, mediante su elección
aleatoria a través de un sorteo público, siempre y cuando se recibieran
como mínimo de 12 preguntas en el correo electrónico del profesor. Se
sugirió que la pregunta debía contener un cierto grado de originalidad.
Contaron con un plazo de tres días y la actividad fue comunicada en el
día vigésimo segundo de las clases teóricas.
Esta tarea interesó al 56,7% (n=21) de la matrícula. Algunas de las
cuestiones remitidas fueron del tipo de las siguientes:
‒ ¿Cuáles son las principales diferencias que existen entre la fer-
mentación y la respiración aerobia?
La última, la tarea 5ª, fue seguida por el 81,1% (n=30) de los matricu-
lados, es decir, gozó de una buena aceptación e interesó a un alumno
más que la propuesta 2ª. Se establece esta comparación entre las tareas
2 y 5 porque ambas actividades se parecieron en cuanto a que se solici-
taba un resumen por escrito de un vídeo de prácticas proporcionado en
inglés, en el caso de la tarea 5ª, y del vídeo que debían buscar ellos
mismos, en el caso de la 2ª. La última actividad se permitió resolver
durante dos días y fue explicada en detalle en la clase teórica trigésima.
Una vez efectuada la encuesta voluntaria de satisfacción, después de
su propuesta el último día de docencia teórica, con posibilidad de ser
cumplimentada durante un plazo de 48 horas y calificada con 0,2 puntos
a quienes la entregaron a tiempo, expresamos los principales resultados.
El sondeo fue respondido por 34 personas (el 91,9%), de las que el
88,2% (n=30) consideró útil repetir estas actividades durante el curso
‒ ‒
2021/2022, mientras que el 91,2% (n=31) opinó que estos ejercicios les
habían facilitado el estudio de la “Microbiología”. Además, los tres pre-
mios otorgados a las mejores puntuaciones fueron valorados positiva-
mente por el 85,3% (n=29) del alumnado. Hubo casos en los que no fue
contestada algunas de las siete preguntas: la pregunta 5 no fue respon-
dida por un estudiante y la 6 fue dejada en blanco por dos.
Quienes no resolvieron las cinco tareas, plantearon como motivos que
se olvidaron, que se enteraron tarde, que se organizaron mal, que se
confundieron con el plazo dado, que no se les ocurría qué plantear (en
cuatro casos para su propuesta de actividad y en una ocasión para la
proposición de su pregunta para el examen) o, lo más preocupante, que
el vídeo de la 5ª actividad se explicaba en inglés.
La actividad más popular fue la noticia sobre los alimentos y la Micro-
biología. Así lo entendió el 44,1% (n=15), situándose en segundo lugar,
con un 20,6% (n=7) el resumen del vídeo en inglés. Por el contrario, se
produjo un empate entre las que menos gustaron: el resumen del vídeo
de la ruta catabólica y la propia propuesta de los estudiantes, ambas
votadas por el 29,4% (n=10). Por otra parte, el 88,2% (n=30) opinó que
estos retos habían facilitado el estudio de la “Microbiología General” y
un porcentaje ligeramente inferior (85,3%, n=29), que esta quíntuple
metodología había aumentado su interés y/o motivación por esta mate-
ria.
De los 34 que cumplimentaron la encuesta, 26 (el 76,5%) emitieron
otros comentarios, que en su gran mayoría fueron positivos. Por reseñar
alguno negativo, hubo quien expresó que algunas tareas resultaban de-
masiado largas y otra persona aludió una vez más a los problemas con
la actividad en inglés. Un tercer estudiante preconizaba tareas más di-
námicas, del tipo de las de los vídeos. Otro reprochaba que no se hu-
biera comentado la existencia de las tres recompensas antes de la tercera
actividad de innovación docente.
Por último, citamos los resultados obtenidos después de las convocato-
rias de enero y febrero del curso 2019/2020: el porcentaje de aprobados
del conjunto de la asignatura, la ByM, alcanzó el 61,6%, de los que 3
estudiantes (el 7,7% de todos matriculados y el 12,5% de los que
‒ ‒
superaron la asignatura) obtuvieron “notable”. Exclusivamente la parte
de Microbiología fue aprobada por el 69,2% de los alumnos.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
disposición a través de la página web de la asignatura, el grado de sa-
tisfacción mostrado por los estudiantes en las correspondientes encues-
tas puso de manifiesto que la experiencia les había resultado interesante
(concretamente, fue valorada con una puntuación de 2,8 sobre 4,0)
(Orengo Femenía, 2014).
En cuanto a la 2ª propuesta, de resumen de un vídeo en el que se abor-
dara una ruta catabólica, fue presentada a los estudiantes para intentar
facilitar la comprensión del metabolismo de los microorganismos. Se
trata ésta de una de las partes más arduas del programa teórico, sin duda.
Sin embargo, en ningún momento se les indicó que tuvieran que apren-
der las rutas bioquímicas; antes bien, se les reiteró en suficientes oca-
siones que bastaba con comprender el mecanismo general del metabo-
lismo. A este respecto, el profesorado cree que se trató de una tarea que
les ayudó a familiarizarse con la ruta elegida y a mejorar su compren-
sión, especialmente en aquellos casos en los que los estudiantes se de-
cantaron por un vídeo divertido, como sucedió con varios de ellos.
Referente a la 3ª propuesta, la que debían discurrir ellos mismos, nues-
tra opinión es que la verdadera razón para obtener un seguimiento tan
escaso por parte de los universitarios radicó en que, por primera vez, se
encontraron ante un reto al que no podían hacer frente buscando en su
ordenador ni en su teléfono móvil. Para resolver satisfactoriamente esta
tarea se requerían claramente dosis de ingenio, de imaginación; por
tanto, debían recurrir a utilizar su inteligencia en mayor medida, lo que
parece que disuadió a muchos de los posibles participantes. Es más,
algunos ni siquiera llegaron a plantearse cumplimentar este tercer ejer-
cicio, como reconocieron en la encuesta de satisfacción, al interrogarles
sobre las causas por las que no habían llevado a cabo alguna de las cinco
actividades de innovación docente.
Con la tarea 4ª hubo que modificar alguna de las premisas planteadas a
los estudiantes, comprobado cómo se iba desarrollando. Cuando se ad-
virtió que las respuestas remitidas no se ajustaban al nivel de originali-
dad que se les había insinuado, no quedó más remedio que optar por la
aceptación de cualquier tipo de pregunta enviada. Nuevamente, todo
parece indicar que a los universitarios les resultó difícil discurrir cues-
tiones más imaginativas. Seguramente por ello, se dio la circunstancia
‒ ‒
de que esta propuesta fue la segunda menos refrendada por nuestro au-
ditorio.
Como ocurriera en el caso de la actividad anterior, pensamos que se
encontraron de nuevo ante un ejercicio que no podían trasladar directa-
mente de alguna página de internet, sino que tenían que reflexionar so-
bre él para elaborar la pregunta, fuera más o menos original. Este hecho
también retrajo la participación de casi la mitad de nuestros universita-
rios, a pesar de haber contado con un día de plazo más que para la eje-
cución de nuestra tercera propuesta.
La buena participación obtenida con la tarea 5ª, tan avanzado el semes-
tre (solo restaban cuatro clases teóricas), podría relacionarse con que,
una vez sobrepasado el puente de diciembre, los estudiantes se encon-
traban más liberados de cargas docentes, al haber finalizado todos los
exámenes parciales de las cuatro asignaturas que componen el primer
semestre del Grado en CTA. No obstante, queremos destacar el hecho
de que algunos alumnos nos trasladaron las dificultades que habían su-
frido al tener que resumir en español un vídeo proporcionado en inglés
(que, como es de sobra sabido, es el idioma científico principal).
De hecho, una persona afirmó que no había realizado esta actividad de
innovación docente por encontrarse el vídeo en inglés, mientras que
otra indicó en la encuesta de satisfacción que varios compañeros (aun-
que no él) habían tenido dificultades por culpa de este idioma extran-
jero. Esta circunstancia nos sorprendió casi tanto como nos apenó, por-
que los profesores pensábamos que en los tiempos actuales los estu-
diantes se manejaban con mucha mayor soltura el inglés que nuestra
propia generación. Ciertamente, comprobamos que esta premisa no se
cumplía, al menos en varios casos determinados, como los propios uni-
versitarios reconocieron.
Aunque no fuera el objetivo principal de esta actividad de innovación
docente (ni siquiera figura mencionado en el apartado de este nombre
de este artículo), no se consiguió mejorar el porcentaje de calificaciones
altas en el conjunto general de los estudiantes que superaron la ByM,
en comparación con los años precedentes (datos no mostrados). Así, el
porcentaje de “notables” no fue uno de los mejores en esta promoción
‒ ‒
2020/2021, en relación con las diez promociones previas desde la im-
plantación del Grado en CTA y nadie obtuvo un “sobresaliente”. No
obstante, en caso de que los resultados hubieran sido los contrarios,
tampoco se hubiera podido deducir que nuestras cinco propuestas ha-
bían contribuido decisivamente a esta mejora, puesto que deberían ha-
ber sido tenidos en cuenta varios sesgos. En primer lugar, la propia con-
figuración de cada promoción de universitarios, que determina clara-
mente que haya cursos mejores y otros peores, por lo que los resultados
difícilmente podrían ser comparados promoción a promoción. Por otro
lado, el hecho de que la “Microbiología” represente seis créditos de los
10,5 totales de la asignatura de ByM introduce una nueva variación, si
consideramos además que los 4,5 créditos restantes, correspondientes a
la “Botánica” y la “Zoología”, no fueron impartidos por los mismos
profesores a lo largo de estos once cursos, a diferencia de la “Microbio-
logía”, siempre explicada por el mismo docente. Otro factor que debe
tenerse en cuenta es que, durante los primeros cursos académicos, cada
una de las partes de esta asignatura de ByM compensaba con un 4,0 (si
en el conjunto de las tres materias se obtenía un 5,0, como mínimo),
mientras que la nota para llevar a cabo el promedio se elevó hasta el
5,0, a partir del curso 2015/2016.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
7. AGRADECIMIENTOS
8. REFERENCIAS
‒ ‒
CAPÍTULO 2
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
de pruebas ahora hay que extrapolarlas a las clases teóricas, con las
posibles dificultades que esto representa (Salinas, 2015).
Los profesores universitarios deben desarrollarse profesionalmente en
tres tipos de tareas: la investigadora, la docente y la de gestión. Para
enseñar hay que tener conocimientos científico-técnicos, pero es am-
pliamente reconocido que saber mucho no significa saber enseñar. In-
cluso puede suceder lo contrario: cuanto más experto es el profesor en
una materia, mayor dificultad tiene para seleccionar los contenidos im-
prescindibles, sintetizarlos, transmitirlos y entender las dificultades del
estudiante en su aprendizaje (Gosálvez, 2014).
En el caso de las Facultades de Veterinaria, estas también han tenido
que buscar herramientas para sus asignaturas, proponiendo cursos de
formación del profesorado, modernizando los recursos formativos
etc… (Paricio-Royo et al., 2020).
Los docentes que firman esta publicación han recibido diversos cursos
de formación por parte de la Escuela de Formación de la Universidad
de León, cursos donde, además del conocimiento de nuevas herramien-
tas, se aprendieron nuevas utilidades de aplicaciones educativas que ya
se usaban. Estos docentes han mostrado siempre ganas de innovar y
mejorar, habiendo realizado en años anteriores técnicas de innovación
docente para acercar el aprendizaje a los alumnos (Gutiérrez Martín et
al., 2017; Martínez Martínez et al., 2019a; Martínez Martínez et al.,
2019b).
La innovación docente aplicada a la formación del Grado en Veterinaria
ha estado siempre más relacionada con la aplicación de casos clínicos
o en asignaturas como Toxicología, Farmacología o Patología Clínica
(Moyano, 2009). En asignaturas más teóricas de esta formación univer-
sitaria, como puede ser la asignatura de Microbiología, con gran canti-
dad de materia, con muchos conceptos de estudio más que de compren-
sión, es más difícil encontrar herramientas educativas.
‒ ‒
conocimiento compleja, con gran cantidad de nombres científicos y ter-
minología concreta. Las asignaturas de Microbiología llevan siempre
una importante carga de prácticas en el laboratorio, imprescindibles
para la fijación de los conceptos mostrados en las clases teóricos, así
como para la profundización en los principales sistemas de diagnóstico
de enfermedades producidas por microorganismos y su forma de carac-
terizarlos en la actualidad. En la parte práctica de esta asignatura sí se
conocen algunas metodologías que ayudan a profundizar a los alumnos,
como las llevadas a cabo por la Universidad CEU Cardenal Herrera de
Valencia, que se basan en compartir prácticas on-line con interacción
directa alumno-profesor (Marín Orenga et al., 2014).
El conocimiento de la Microbiología es básico para establecer unas ba-
ses que permitan el diagnóstico y el tratamiento de las enfermedades
infecciosas desde una perspectiva teórica y práctica, así como el segui-
miento del aprendizaje de los alumnos. Actualmente, nos encontramos
en una situación de sobrecarga informativa, debido a la cantidad de da-
tos que se distribuye a través de la red y su fácil acceso a ellos. Este
problema es especialmente importante en los estudiantes de los prime-
ros años de Grado, que no son capaces de filtrar, seleccionar ni estruc-
turar toda la información que les llega. Además, la Microbiología
avanza rápidamente y deben aprender a buscar contenidos actualizados.
Todas aquellas herramientas de estudio o de aprendizaje de la asigna-
tura que favorezcan la comprensión de información actualizada sobre
la materia deben ser aplicadas para asentar bien las bases de los estu-
diantes en los primeros cursos del Grado.
‒ ‒
El cine es una herramienta docente que rebosa cultura general y espe-
cífica, habiendo sido estudiada ampliamente la intersección entre cine
y pedagogía (García Amilburu, 2010; Svensson, 2013). El cine, como
elemento cultural y artístico tiene, además, la gran capacidad de atraer
al espectador a la par que aúna en un mismo soporte la transmisión de
valores, a niveles conscientes e inconscientes, y la capacidad de entre-
tener.
El desarrollo de las nuevas tecnologías audiovisuales ha propiciado que
en los últimos años el cine se haya ido incorporando a la docencia como
“un instrumento pedagógico eficaz para la formación integral de los
alumnos, o como complemento para el desarrollo del programa de una
asignatura” (García Amilburu, 2010), y ha ido desbancando las clásicas
clases magistrales, tradicionalmente poco interactivas, escasamente
atractivas para transmitir conceptos complejos a los alumnos y, en oca-
siones, fundamentadas en la pura memorización de textos más o menos
didácticos.
En este contexto, algunos trabajos ya han demostrado, en otras materias
o especializaciones, que el uso del cine es una herramienta pedagógica
eficaz para la docencia universitaria, sobre todo en aquellas asignaturas
con mucho contenido y muchas terminologías taxonómicas y caracte-
rísticas que memorizar (Jiménez, 2012).
La asignatura “Microbiología e Inmunología”, de 12 créditos ECTS y
diferentes partes, una de ellas la Virología, se imparte en el tercer se-
mestre del Grado en “Veterinaria” y reviste una dificultad especial, por
concentrarse una gran cantidad de materia en tan solo un semestre. Por
este motivo, se ha recurrido al cine en esta actividad como herramienta
pedagógica.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
en la materia, mediante una herramienta educativa que les gusta y que
disfrutan, como es el cine.
Demostrar que el uso del cine es una herramienta pedagógica eficaz
para la docencia universitaria, realizando al final de la actividad un
cuestionario a los alumnos donde puedan valorar su interés y utilidad.
3. METODOLOGÍA
2. ¿Cómo se contagia?
‒ ‒
extensión requerida por el profesorado. Por otro lado, se valoraba que
los alumnos dieran respuesta a esas 8 preguntas planteadas anterior-
mente, explicadas de manera concisa; en esta valoración era importante
comprobar que los alumnos habían detectado errores microbiológicos
y comprendido, por tanto, el objetivo de esta actividad docente. Se va-
loraría más aquellos trabajos más originales o con una discusión más
completa sobre las curiosidades encontradas en las películas o series.
El profesorado, a lo largo de las clases teóricas, podría ir comentando
los resultados más interesantes, conclusiones o ejemplos para conoci-
miento general.
Los alumnos debían, de esta manera, aplicar los conocimientos apren-
didos en la asignatura para poder valorar la calidad de la película desde
el punto de vista microbiológico. La intención era que, con esta activi-
dad, los alumnos sintieran de cerca y en su vida habitual las problemá-
ticas estudiadas y planteadas en las clases teóricas.
‒ ‒
‒ ¿Esta actividad te ha servido para hablar con tus compañeros
sobre Virología?
4. RESULTADOS
TABLA 1. Títulos de películas y series que fueron seleccionados por los alumnos para la
realización del trabajo
‒ ‒
FIGURA 1. Algunos de los carteles de las películas seleccionadas
‒ ‒
FIGURA 2. Títulos de películas y series seleccionadas por el profesorado y por los alumnos
FIGURA 3. Títulos de películas o series junto con el número de alumnos que lo realizaron
‒ ‒
4.2. RESÚMENES
‒ ‒
Contagio (2011): Es una película mucho más real que el resto de las
seleccionadas. Aunque el virus es inventado, es cierto que lo clasifican
dentro de una familia existente y las características que describen re-
producen fielmente a esa familia. Como película también tiene su parte
fantasiosa, como que se desarrolla la vacuna rápidamente, solo la prue-
ban en monos e inmediatamente la administran a toda la población.
Guerra mundial Z (2013): El virus de esta película no existe y la sin-
tomatología que presentan los infectados es muy variopinta y surrea-
lista, como el instinto de comer todo tipo de carne (animal e incluso
humana) y conductas extremadamente agresivas. Además, los síntomas
aparecen a los diez segundos de la mordedura, que es el método de in-
fección en la película.
Estallido (1995): En este caso el virus descrito tiene características si-
milares al virus del Ébola en cuanto a la sintomatología y la forma de
transmisión. En la película se explican bien los diferentes niveles de
bioseguridad en los laboratorios que existen, dependiendo del microor-
ganismo con el que se trabaja. Lo único que es más irreal es el hecho
de que este virus tenga una tasa de mortalidad del 100% y que explican
de forma muy confusa el tema de los sueros y la inmunidad que los
mismos pueden generar en pacientes.
La lluvia (2018): El virus mata en pocos segundos, el modo de conta-
giarse entre los individuos va cambiando a lo largo de la película, al
principio solo con una gota de agua ocurría la infección, siendo algo
completamente surrealista, se describe mal el papel del sistema inmune
en el organismo y los tipos que existen. Además, como a lo largo de la
película no consiguen una vacuna óptima, deciden infectar a toda la
población.
La valla (2020): El virus de la serie lo quieren clasificar dentro de la
familia Noravirus pero no cumple las características de esta. Las perso-
nas que se infectan presentan una sintomatología inmediata, se contagia
por fluidos y en una parte de la serie dan a entender que se podría dise-
minar rápidamente y, en cambio, no se utiliza ninguna medida de pre-
caución y no se evitan los hacinamientos, sobre todo en las zonas pobres
con baja salubridad, en la que se desarrolla la serie. Además, cuando
están tras la búsqueda de una inmunización a partir de sueros de
‒ ‒
personas que ya han padecido la enfermedad, se refieren a sueros con
gran cantidad de antígenos en vez de anticuerpos.
Virus (2013): Una vez que se infectan las personas, los síntomas apa-
recen en horas, solo se utiliza la mascarilla en la calle y no en los espa-
cios cerrados, confunden sueroterapia con vacuna, se hacen cuarentenas
colectivas de mucha gente junta en pabellones y demás y los cadáveres
se entierran en fosas comunes dentro de la cuidad.
‒ ‒
proponer actividades alternativas, porque es necesario que sea justo
para todos poder participar.
Que los profesores propusieran algunos títulos para dar ideas tuvo una
aceptación buena: el 84% valoró esta pregunta con un 4 sobre 5, al igual
que cuando se les preguntaba si el profesorado había dejado claro, al
principio de la actividad, lo que se debía entregar y cómo hacerlo,
donde el 79% contestó de nuevo un 4 sobre 5.
Un 15% de los participantes vio muy útil este trabajo para poder dialo-
gar con sus compañeros sobre Virología y el 59%, bastante útil. El 99%
de los alumnos vieron más cercana la Virología gracias a esta tarea, sin
duda, un porcentaje muy alto. Para el profesorado de esta asignatura
esto resultó muy reconfortante, porque el objetivo final de cualquier
docencia universitaria es que los alumnos observen las aplicaciones di-
rectas de lo aprendido, más aún en Ciencias Experimentales.
“Cinevirus” resultó, para los alumnos, una actividad viable, donde
aprendían y aplicaban conocimientos con un poco de “juego” y, por
ello, el 79% de ellos valoraban con un 4 sobre 5 la pregunta que propo-
nía que este tipo de actividad se desarrollara en otras partes de la asig-
natura o incluso en otras asignaturas del Grado.
En general, la actividad docente desarrollada fue valorada con un 5 so-
bre 5 en un 83% de los alumnos. Unos resultados tan positivos para el
profesorado animan a realizar más actividades de este tipo.
‒ ‒
FIGURA 5. Gráficos con porcentajes de las respuestas de los alumnos en la encuesta de
satisfacción realizada tras la actividad (valoración de 1 a 5, siendo 1 nada y 5 muy satisfac-
torio)
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
seguridad. Esta actividad les inquietó, les gustó y, además de disfrutar,
aprendieron.
Tras la lectura de los resúmenes realizados por los alumnos, el profeso-
rado pudo observar cómo se fijaban en aquellos detalles importantes,
que a lo largo de las clases teóricas habíamos estudiado sobre los dife-
rentes tipos de agentes microbiológicos y sobre los que habíamos hecho
hincapié. De esta manera, hubo detalles muy claros que los alumnos
detectaron con rapidez y como consecuencia de la aplicación de los co-
nocimientos básicos e importantes de las enfermedades producidas por
los virus como, por ejemplo, que los virus no se pueden multiplicar
fuera de un organismo vivo, como las diferentes vías de contagio (aque-
llas que son posibles y aquellas que no lo son), como las formas de
transmisión de los virus, como la prevención o las diferentes pautas de
vacunación (de existir).
Los alumnos, no solo aprendieron estos conocimientos básicos, sino
que fueron capaces de relacionar, además, diferentes familias de virus
con sus características estructurales. Fueron, de esta forma, capaces de
detectar, en las series o películas visualizadas, errores como que “tal”
virus no se podía transmitir de esa manera, no podía infectar así, era
imposible que permaneciera tanto en tiempo en el ambiente, etc…
A lo largo de las clases teóricas, el profesorado comentaba algunas cu-
riosidades con los alumnos sobre los resúmenes. De esta manera, algu-
nas de las enfermedades víricas más abordadas en el mundo cinemato-
gráfico fueron analizadas desde el punto de microbiológico, desvelando
de esta manera “errores” en las series o películas entre todos en el aula.
Esta actividad docente permitió, al menos, repasar las características
generales de los virus habitualmente reflejadas en el mundo cinemato-
gráfico, ampliamente conocidas en la sociedad.
Tras la realización de la encuesta de valoración de la actividad de inno-
vación docente, el profesorado descubrió que este trabajo había gustado
a los alumnos, les había hecho aplicar sus conocimientos y les había
estimulado a hablar entre ellos de contenidos virológicos. Se trató de
un éxito, sin duda, para afianzar los conocimientos virológicos de la
única asignatura semestral de 12 créditos ECTS de todo el Grado en
‒ ‒
Veterinaria imprescindible para asentar conocimientos de asignaturas
futuras y, en última instancia, para su desarrollo como futuros profesio-
nales. Nadie puede imaginar a un veterinario que conozca todos los gru-
pos de antibióticos, todos sus nombres o incluso sus nombres comer-
ciales si el especialista en cuestión no sabe que una enfermedad vírica
no se puede tratar con antibióticos ni por qué. O de poco sirve ser gran
cirujano veterinario experto si no sabe lo que es una sepsis ni un shock
séptico, ni cómo evitarlos.
Después de la puesta en marcha de esta iniciativa, el profesorado de
esta asignatura tiene claro los beneficios de utilizar este tipo de herra-
mientas pedagógicas para acercar a los alumnos a la materia impartida,
por lo que continuará aplicando este tipo de actividades en los cursos
sucesivos.
6. CONCLUSIONES
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
‒ ‒
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Salinas J. (2015). Innovación docente y uso de las TIC en la enseñanza
universitaria. Revista de Universidad y Sociedad del Conocimiento
(RUSC).
Svensson, V. (2013). Relaciones entre cine, literatura y educación. Revista.
Pilquen. Vol. 1. (16): 1-13.
Paricio Royo, J.; Fernández March, A.; Trillo Alonso, F. (2020). Veinte años de
cambio en la educación superior: logros, fracasos y retos pendientes.
Homenaje a Miguel Ángel Zabalza. Revista de Docencia Universitaria,
18 (1), 9-15.
‒ ‒
CAPÍTULO 3
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
de ese doble eje calidad-actualización de la docencia del nivel superior
(Gilabert et al., 2014).
Es en esta línea en la que nos encontramos desde hace tiempo los tres
docentes que firmamos esta publicación, puesto que llevamos aprove-
chando desde hace años los cursos de formación que pone a nuestra
disposición periódicamente la Universidad de León, a través de su Es-
cuela de Formación. Este ha sido, insistimos, nuestro interés a pesar de
ser conscientes, como ha quedado expresado más arriba, de que el
tiempo que nos supone esta faceta de nuestro ejercicio profesional (que
restamos evidentemente a las tareas de investigación y/o gestión) con-
tinúa siendo menos considerada y, por ende, peor valorada, no solo por
el público en general sino a menudo por algunos de nuestros compañe-
ros y por el propio Ministerio de Universidades. Confíemos en que esta
situación se invierta o, al menos, se equipare en un futuro próximo.
‒ ‒
1.4. ACTIVIDAD DE LOS GRUPOS DE INNOVACIÓN DOCENTE 19 Y 32 DE LA
UNIVERSIDAD DE LEÓN
‒ ‒
tercer semestre. Como prácticas en común, se llevan a cabo la tinción
diferencial de Gram, las identificaciones bacterianas, los antibiogra-
mas, o se presta atención a los hongos filamentosos dermatofitos. Tam-
bién se hace énfasis en la remisión correcta de las muestras clínicas al
laboratorio de Microbiología, lo que con demasiada frecuencia se rea-
liza de un modo completamente inadecuado (Flores et al., 2014). En
cualquier caso, en esta mención a las prácticas microbiológicas solo se
alude a su puesta en marcha en el país americano (Flores et al., 2014),
no al desarrollo de ningún tipo de innovación docente.
La segunda referencia, como la tercera, se centran en la aplicación de
metodologías de innovación, como la integración de las prácticas en
una plataforma interactiva y en mapas conceptuales-mentales o como
la compensación de la disminución del número de créditos que se operó
con el cambio de la Licenciatura al Grado en Veterinaria, en la Univer-
sidad de Murcia (Cuello et al., 2014). La última, también publicada en
la “Revista Complutense de Ciencias Veterinarias” versa sobre la
puesta a disposición de los estudiantes de prácticas on-line, al tiempo
que les permite una autoevaluación sencilla y dinámica, en palabras de
sus promotores, pertenecientes a la Universidad CEU Cardenal Herrera,
de Valencia (Marín Orenga et al., 2014).
‒ ‒
Con el objeto de intentar mitigar esa abulia estudiantil y de potenciar
algunas de las competencias que figuran en la Memoria de Verificación
del Grado en “Veterinaria”, como una participación más activa, el in-
tercambio de opiniones entre ellos o la búsqueda de información por su
parte, se planificó durante las prácticas del curso 2019/2020 una doble
metodología activa para sedimentar los conceptos microbiológicos bá-
sicos y mejorar el rendimiento académico en el examen práctico, que
tenían obligación de aprobar para presentarse al examen teórico. Estas
dos actividades se basaron en el “aprendizaje basado en problemas”,
pero con una metodología sumamente sencilla.
‒ ‒
semestre. Para esta actividad, se eligieron únicamente las prácticas de
“Microbiología”, que suman, como ya ha sido indicado, 25 horas repar-
tidas a lo largo de 10 días consecutivos, debido a que, en la mayoría de
ellas, las lecturas deben efectuarse al día siguiente del inicio de un en-
sayo concreto.
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
3.2. PROPUESTAS DE INNOVACIÓN DOCENTE FUNDAMENTADAS EN EL
“APRENDIZAJE BASADO EN PROBLEMAS”
‒ ‒
El último día, el décimo, se dedicó a la realización de un examen escrito
sobre el contenido de las prácticas efectuadas durante los nueve días
anteriores, tanto en el grupo experimental A como en el grupo control
B. Estos exámenes constaron de 10 preguntas de respuesta corta, que
cabían todas en un folio por las dos caras. Se llevó a cabo la calificación
entre 0 y 10 en ambos grupos.
4. RESULTADOS
Repasaremos una a una las actividades llevadas a cabo entre los días de
prácticas 2º y 9º, ambos inclusive, de forma individual para cada uno
de los tres módulos reunidos por nosotros en el denominado grupo A,
de acuerdo con la alternancia pregunta-error que se ilustra en la Tabla
1.
‒ ‒
día siguiente, con la resolución de las preguntas o los errores planteados
el día anterior.
‒ ‒
encontrado por el 68,4% de quienes contestaron (n=13). Para la séptima
sesión se formularon cuatro preguntas de respuesta muy breve, sobre
bacterias, hongos y normas del laboratorio, que fueron resueltas por el
78,9% (n=15), en tanto que los demás acertaron tres. En la octava prác-
tica, se habló al revés de la composición en peptidoglucano de las pa-
redes de las bacterias Gram + y Gram -. Este error fue descubierto por
la totalidad de los estudiantes. Por último, el día previo al examen prác-
tico se les pidió que buscaran el nombre de algún bacteriófago, con
éxito también por parte de todos los alumnos.
‒ ‒
cuenta del error, mientras que nadie contestó de forma completa la pre-
gunta. En el penúltimo día se les propuso una pregunta, basada en que
explicaran las diferencias entre los antibióticos y los desinfectantes en
cuanto a su administración. Sólo un tercio de los estudiantes acertaron
una cuestión de suma importancia desde el punto de vista microbioló-
gico y farmacológico. Para finalizar, el noveno día se introdujo un error
relacionado con las características estructurales de los virus, que no
fue resuelto por ninguno de los veinte estudiantes.
‒ ‒
ninguno de los 16 universitarios fue capaz de contestar correctamente,
aunque tres (18,75) se aproximaron. El último día de prácticas se repitió
el mismo error relacionado con los virus que en los dos módulos ante-
riores, con la esperanza de obtener mejores resultados. No fue así y de
nuevo nadie supo resolverlo.
‒ ‒
FIGURA 1. Media ± desviación estándar de las calificaciones obtenidas en las activi-
dades realizadas en el grupo a y en el examen práctico del grupo a.
‒ ‒
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
profesora escribe en la pizarra lo siguiente que se va a dar, y eso ayuda
a ganar tiempo.
Reflexionemos sobre ambos comentarios. Si el profesorado se atrevió
con este tipo de aprendizaje basado en problemas fue en la seguridad
de que éste sería un procedimiento cartesiano que les ayudaría en la
formación de su pensamiento crítico para que, desde el establecimiento
de un juicio racional sobre lo escuchado al profesor y su contrastación
con los apuntes o con la información que pudieran obtener de sus telé-
fonos móviles o de sus tabletas (donde figuraba “la verdad”), fueran
capaces de detectar la discrepancia y eso reforzara su aprendizaje ac-
tivo. Al fin y al cabo, se trataba de un pequeño procedimiento de
“aprendizaje basado en problemas”, muy básico, muy sencillo, pero no
solo la parte de los errores, sino también la de formulación de pregun-
tas. Y la posibilidad de que intercambiaran opiniones, les permitiría
proponer una “tormenta de ideas” que les sirviera para pensar, inter-
cambiar opiniones y diseñar soluciones que pudieran plasmar final-
mente por escrito, de forma individual.
A la vista del comentario, que entendemos que en buena medida refleja
el parecer de buena parte de sus compañeros, debemos concluir que
nuestra apuesta resultó completamente desacertada. Parece que esta ge-
neración no se siente cómoda ante este tipo de experiencias, por lo que
decididamente dejaremos de ensayarlas en promociones futuras. Así lo
hemos hecho ya durante el curso académico 2020/2021, no solo impul-
sados por esta opinión desfavorable, sino también por la COVID-19,
que nos obligó a trastocar mucha de la organización habitual de las
prácticas de “Microbiología”, como para atrevernos además a “hacer
filigranas”.
Más rotunda y desalentadora resulta, sin duda, la segunda opinión. Re-
cordemos en este momento que cada sesión práctica de “Microbiolo-
gía” debe durar 150 minutos. No se trata aquí de enjuiciar si es dema-
siado tiempo, que seguramente lo es, sino de completarlo, pues de otro
modo no se estaría impartiendo a los estudiantes la totalidad de los cré-
ditos que figuran en los planes docentes y por los que pagan en su ma-
trícula. E indiquemos que el profesor que se ocupó del grupo A, del
grupo de ensayo, no excedió esas dos horas y media en ninguna de las
‒ ‒
prácticas. Pero el hecho de que en el laboratorio de al lado, la otra do-
cente fuera más breve y además no invirtiera tiempo extra con la reali-
zación de una pregunta (para buscar información o para detectar algún
error), parece que causó desazón, al menos en uno/a de los/as universi-
tarios/as que tuvo la “mala fortuna” de encontrarse con el profesor más
pesado, que además ponía en marcha actividades que excedían lo con-
vencional, lo que para este/a alumno/a claramente constituía un agravio
comparativo.
Por otra parte, como resultado del estudio estadístico, se comprobó con
satisfacción por un lado que, al ser las calificaciones el examen práctico
del grupo A significativamente más altas que las conseguidas después
de efectuar el promedio de las ocho tareas no convencionales, podría
deducirse que estas actividades les habrían animado a estudiar para la
evaluación práctica. Sin embargo, cuando por el contrario se verificó
que el valor medio de las notas del grupo A, fue prácticamente igual
que el de las del grupo B, se infería que no influían esas ocho tareas en
la mejora de los resultados alcanzados. Por tanto, otro dato más para no
continuar con este tipo de procedimiento docente, que no aumentaba el
rendimiento académico de las prácticas de “Microbiología” y no era del
gusto de algunos de los que recibían la propuesta.
Diferentes grupos españoles cuentan con una dilatada experiencia en
actividades cimentadas en la metodología activa del “aprendizaje ba-
sado en problemas”. Nuestros compañeros del área de Inmunología de
la Universidad de Alcalá pusieron en marcha hace más de una década
un procedimiento de este tipo, adaptado al estudio de artículos científi-
cos, no de conceptos básicos de las prácticas de “Microbiología”. Ellos
(Prieto Martín et al., 2006) comprobaron que la mayoría de los 128 uni-
versitarios con los que trabajaron, del último curso de “Biología”, no
eran capaces de asimilar un artículo científico de su disciplina. En nues-
tro caso, nos dimos cuenta, a juzgar por el escaso porcentaje de aciertos
obtenidos en bastantes ocasiones, que tampoco con los conceptos bási-
cos de la “Microbiología”. Quizá después del segundo comentario, de-
bamos pensar que no querían ejercitar la actividad propuesta porque, al
menos para algunos, era más importante acabar las prácticas lo antes
posible.
‒ ‒
Para finalizar con la discusión de nuestros resultados, queremos men-
cionar las limitaciones que ha presentado este estudio. Eso sí, como no
se han encontrado diferencias entre los dos grupos, se puede afirmar
que los sesgos no han contribuido a unas diferencias que no se han pro-
ducido. Una primera limitación fue la propia asignación no aleatoria
inicial de los participantes a los grupos, lo que no aseguró su homoge-
neidad. En segundo lugar, aunque el contenido docente de las prácticas
fuera el mismo, su realización simultánea obligó a la participación de
dos profesores, lo que aportó un nuevo sesgo.
6. CONCLUSIONES
7. AGRADECIMIENTOS
‒ ‒
8. REFERENCIAS
Cuello Gijón, F.; Caro Vergara, M.R.; Perales Blanco, V.; André Adam, F.;
Ortega Hernández, N.; Salinas Lorente, L.J.; Gallego Ruiz, M.C. (2014).
Integración y secuenciación de contenidos teórico-prácticos de
Microbiología utilizando nuevas tecnologías como apoyo en el proceso
de aprendizaje de los alumnos de Grado en Veterinaria. I Congreso
INNOVET. Revista Complutense de Ciencias Veterinarias, 8 (1), 76.
Encinas Cerezo, M.T.; Gilabert Santos, J.A.; Ros Rodríguez, J.M. (2015). La
formación docente de los profesores de Veterinaria en España. Revista
de Docencia Universitaria, 13 (3), 53-72.
Flores, B.M.; Múzquiz, J.L.; Halaihel, N.; Fuertes, H.; Muniesa, A.; de Blas, I.
(2014). Prácticas de Microbiología en la Escuela de Medicina
Veterinaria de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua-León. I
Congreso VetDoc en Veterinaria Docente. Asociación Española de
Veterinarios Docentes, Lugo, 26-27.
García Iglesias, M.J.; Pérez Martínez, C.; Sahagún Prieto, A.M.; Díez Liébana,
M.J., Díez Láiz, R.; López Cadenas, C.; Rodríguez Lago, J.M.;
Fernández Martínez, M.N.; Sierra Vega, M.; García Viétez, J.J.;
Gutiérrez Martín, C.B. (2014) Mejora del rendimiento académico de
asignaturas básicas del Grado en Veterinaria en la Universidad de León
mediante el empleo de tutorías on line. I Congreso VetDoc de Docencia
Veterinaria, Septiembre, Lugo, 22-23.
García Iglesias, M.J.; Pérez Martínez, C.; Gutiérrez Martín, C.B.; Díez Láiz, R.;
Sahagún Prieto, A. (2018). Mixed-method tutoring support improves
learning outcomes of veterinary students in basic subjects. BMC
Veterinary Research, 14: 35.
García Iglesias, M.J.; de Paz Cabello, P.; Villena, A.J.; Pérez Pérez, V.; Ferreras
Estrada, M.C.; García Marín, J.F.; Pérez Martínez, C. (2019).
Metodología docente virtual para la enseñanza práctica de las
asignaturas universitarias basadas en la morfología microscópica. V
Congreso VetDoc de Docencia Veterinaria, Julio, Madrid.
García Iglesias, M.J.; Balseiro Morales, A.M.; Pérez Pérez, V.; Ferreras Estrada,
M.C.; García Marín, J.F.; Pérez Martínez, C. (2020). Implementación de
la microscopía virtual en la docencia práctica tradicional de Histología
para estudiantes de Veterinaria. 3er Congreso Mundial de Educación,
EDUCA, La Coruña, España.
Gilabert, J.A.; Ros-Rodríguez, J.M.; Encinas, T. (2014). La formación del
docente en Veterinaria: Un camino autodidacta. I Congreso VetDoc en
Veterinaria Docente. Asociación Española de Veterinarios Docentes,
Lugo, 49.
‒ ‒
Gutiérrez Martín, C.B.; Martínez Martínez, S.; Rodríguez Ferri, E.F. (2017).
Autoevaluación en línea y otras metodologías sencillas en el fomento del
rendimiento académico de “Microbiología”. IV Congreso VetDoc de
Docencia Veterinaria, Julio, León.
Gutiérrez Martín, C.B.; García Iglesias, M.J.; Martínez Martínez, S. (2021). ¿Son
bien recibidas por los estudiantes de “Microbiología” del Grado en
“Ciencia y Tecnología de los Alimentos” las metodologías activas
propuestas en el aula? II Congreso Internacional de Innovación y
Técnicas Educativas INNTED, Julio, Sevilla. Aceptada.
Henríquez Hernández, L.A.; Pérez Luzardo, O.; Domínguez Boada, L.; Almeida
González, M.; Zumbado Peña, M. (2015). Aplicación de la metodología
del aprendizaje basado en problemas a la docencia de Veterinaria Legal.
Revista de Docencia Universitaria REDU, 13, 171-188.
Lane, E.A. (2008). Problem-based learning in Veterinary Education. Journal of
Veterinary Medical Education, 35, 631-636.
Marín Orenga, C.; Vega García, S.; González, S. (2014). Prácticas on-line de
Microbiología Veterinaria. I Congreso INNOVET. Revista Complutense
de Ciencias Veterinarias, 8 (1), 52-53.
Martínez Martínez, S.; García Iglesias, M.J.; Pérez Martínez, C.; Gutiérrez
Martín, C.B. (2019a). Los dispositivos inalámbricos en el apoyo a la
docencia y evaluación de la “Microbiología”. V Congreso VetDoc de
Docencia Veterinaria, Julio, Madrid.
Martínez Martínez, S.; García Iglesias, M.J.; Pérez Martínez, C.; Gutiérrez
Martín, C.B. (2019b). Kahhot! aplicado a la docencia y evaluación en
“Microbiología” del Grado en “Ciencia y Tecnología de los Alimentos”.
Technological Ecosystems for Enhancing Multiculturality, Octubre,
León, España.
Martínez Martínez, S.; Gutiérrez Martín, C.B. (2021). “Cinevirus”: una forma
activa de acercar la Virología a los alumnos de 2º de Veterinaria. II
Congreso Internacional de Innovación y Técnicas Educativas INNTED,
Julio, Sevilla. Aceptada.
Pérez Martínez, C.; García Iglesias, M.J.; Gutiérrez Martín, C.B.; López Cadenas,
C.; Rodríguez Lago, J.M.; Sahagún Prieto, A.M. (2014). Tutoring as tool
to improve learning outcomes in Pharmacology. 35º Congreso Nacional
de la Sociedad Española de Farmacología. Madrid. Septiembre.
Publicado en: Basic & Clinical Pharmacology & Toxicology, 115
(Suppl. 2), 57.
Paricio Royo, J.; Fernández March, A.; Trillo Alonso, F. (2020). Veinte años de
cambio en la educación superior: logros, fracasos y retos pendientes.
Homenaje a Miguel Ángel Zabalza. Revista de Docencia Universitaria,
18 (1), 9-15.
‒ ‒
Prieto Martín, A.; Barbarroja Escudero, J.; Reyes Martín, E.; Monserrat Sanz, J.;
Díaz Martín, D.; Villarroel Mareño, M.; Álvarez-Mon Soto, M. (2006).
Un nuevo modelo de aprendizaje basado en problemas, el ABP 4x4, es
eficaz para desarrollar competencias profesionales valiosas en
asignaturas con más de 100 alumnos. Aula Abierta, 87, 171-194.
Sahagún Prieto, A.M.; Pérez Martínez, C.; Gutiérrez Martín, C.; Sierra Vega, M.;
García Viéitez, J.J.; Díez Liébana, M.J.; Fernández Martínez, N.;
Rodríguez Lago, J.M.; Díez Láiz, R.; López Cadenas, C.; García
Iglesias, M.J. (2014). Mejora en el rendimiento académico mediante
tutorías en asignaturas básicas del Grado en Veterinaria de la ULE. I
Jornadas de Innovación Docente en Veterinaria (INNOVET), Madrid.
‒ ‒
CAPÍTULO 4
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
la innovación y el desarrollo asociativo de procesos cognitivos, con ca-
pacidad de estimular la interacción y el trabajo colaborativo (Aguiar,
Velázquez, & Aguiar, 2019; Calzadilla, 2002).
Desde que la Organización Mundial de la Salud catalogase la enferme-
dad COVID-19, causada por la propagación del coronavirus SARS-
CoV-2, como pandemia global en marzo del 2020, todo el mundo la
educación, y en particular la comunidad universitaria, se enfrentaban a
un nuevo reto para continuar con los objetivos de docencia normal-
mente establecidos (Ding, Lu, Fan, Xia, & Liu, 2020; García-Peñalvo,
2020; Gorbalenya et al., 2020; Lai, Shih, Ko, Tang, & Hsueh, 2020;
Ordorika, 2020; Velavan & Meyer, 2020; Zhu et al., 2020).
En condiciones normales, el modelo educativo apuesta por aportar es-
tímulos al estudiante durante toda su etapa académico-formativa, desde
el inicio de su desarrollo y crecimiento hasta la conclusión de sus estu-
dios superiores, capacitando al alumno hacia la autorrealización
(Calzadilla, 2002), todo ello en busca de alcanzar un objetivo final pro-
pio del sistema educativo, que busca la formación de profesionales que
cuenten con la superación de competencias propias del aprendizaje au-
tónomo (Dueñas, Salazar, Ojeda, de Sola, & Failde, 2016).
Estas características propias habituales del sistema educativo y sus ob-
jetivos de desarrollo sobre el discente fueron modificadas debido a la
nueva situación, en particular, el entorno educativo en España se vio
especialmente condicionado por la citada pandemia de COVID-19 y
por las restricciones derivadas de la imposición del estado de alarma
(Fernández Torres, Chamizo Sánchez, & Sánchez Villarrubia, 2021;
Ordorika, 2020).
De la noche a la mañana el mundo cambiaba, la humanidad a nivel co-
lectivo se enfrentaba a un reto hasta entonces desconocido y el sistema
educativo, como pilar básico del desarrollo de la sociedad debía de
adaptarse a la nueva realidad, marcada por el confinamiento, el distan-
ciamiento social y la detección del funcionamiento de múltiples activi-
dades corrientes en nuestro día a día (Ordorika, 2020).
La educación superior, en ese momento, hubo de adoptar un proceso de
transformación, especialmente reseñado por la inmediatez de las
‒ ‒
circunstancias (Ordorika, 2020; Tauber, 2020b, 2020a; Tejedor Calvo,
Cervi, Tusa, & Parola, 2020).
Es ahí donde las Tecnologías de la Información y la Comunicación
obran el milagro, y se alzan con el papel protagonista, como elemento
fundamental e indispensable para hacer frente al distanciamiento, al pa-
rón lectivo. Así, por medio de este modo, el mundo digital se sitúa en
el centro neurálgico de la esfera educativa, especialmente a nivel uni-
versitario y hace posible la progresión de la docencia (Fernández Torres
et al., 2021).
Si bien, el protagonismo de las herramientas virtuales y los entornos
digitales de educación nos traslada a un nuevo marco de debate donde
analizar otras realidades, como la capacidad de acceso a la red por parte
del estudiante, lo cual obliga a la administraciones educativas a adquirir
el compromiso para el desarrollo y la puesta en marcha de igualdad de
oportunidades y recursos para continuar la formación (Ordorika, 2020;
Tauber, 2020a, 2021; Torrecillas Bautista, 2020).
Centrados en la adaptación al medio digital es preciso destacar que por
lo general, el contenido de las materias se encuentra diseñado para su
exposición de manera presencial en el aula, y a pesar de que la mayoría
de universidades contaba con un espacio de campus virtual las asigna-
turas no se encontraban preparadas para un modelo de educación ex-
clusivamente a distancia, mediado por la utilización de diferentes apli-
caciones a través de terminales móviles e informáticos (Fernández
Torres et al., 2021; Finkelstein, 2020).
En el ámbito universitario que nos ocupa, como es la formación en Fi-
sioterapia, es especialmente complejo el proceso de diseño y adaptación
de los contenidos curriculares, al tratarse de un programa eminente-
mente práctico en su concepción y desarrollo, lo cual dificulta y obliga
al docente a redefinir el concepto de enseñanza clásico establecido en
su entorno.
Los nuevos tiempos obligan a adoptar nuevos medios, recurriendo a
métodos de innovación aplicados de forma directa sobre el aprendizaje,
en este punto cabe destacar la posibilidad de trabajar por medio de la
simulación de casos dentro de las variantes de actuación de las
‒ ‒
herramientas digitales en los programas de formación universitaria en
Fisioterapia (Alfonso-Mora et al., 2020).
De este modo, los recursos digitales que ofrecen entornos de simulación
clínica gracias a las tecnologías de la información y la comunicación
pueden resultar especialmente útiles y novedosos en el aprendizaje en
Fisioterapia, al igual que se han ido estableciendo y se encuentran am-
pliamente extendidos en la formación de otras disciplinas biomédicas
(Alfonso-Mora et al., 2020), adaptando todo el contenido a las necesi-
dades derivadas de la pandemia (Fardoun, González, Collazos, &
Yousef, 2020; Finkelstein, 2020).
Es por eso que el proceso de docencia y aprendizaje logra ser factible a
través de recursos digitales y aplicaciones móviles, pudiendo realizarse
para mostrar técnicas específicas de Fisioterapia, enseñar conceptos
anatómicos y funcionales, y remitir el contenido específico de la inter-
vención terapéutica (Gómez Ardila & Chacón González, 2017).
Por lo tanto, los sistemas de educación han encontrado un eficaz apoyo
en estado de pandemia con la incorporación de las nuevas Tecnologías
de la Información y la Comunicación a los entornos de formación uni-
versitarios.
Es en ese punto donde el docente juega un papel fundamental tratando
de llevar a cabo el cambio y adaptación de contenidos (Fernández
Torres et al., 2021; Finkelstein, 2020; García-Peñalvo, 2020; Ordorika,
2020; Tauber, 2021) y al mismo tiempo debe de tratar de mantener su
apuesta por metodologías orientadas al desarrollo del alumno por me-
dio de contextos compartidos de interrelación, basados la interacción y
capacidad de cooperación como herramienta de aprendizaje colabora-
tivo (Calzadilla, 2002; Muñoz, Cárdenas-Rodríguez, & Terrón-Caro,
2017).
La pandemia fue y es por tanto un hándicap o reto al que se enfrenta el
modelo educativo tradicionalmente arraigado, pero también una opor-
tunidad de crecimiento para continuar la implantación de medios digi-
tales, pudiendo valorar su idoneidad y aunando el uso de herramientas
tecnológicas con los modelos de aprendizaje y evaluación continua,
siendo el modelo de evaluación y calificación una de los problemas o
‒ ‒
situaciones más controvertidas para la adaptación a la no presencialidad
(Fardoun et al., 2020).
Así pues, el aprendizaje a distancia, sobre todo mediado por la vertiente
online es también la oportunidad de cumplir con las medidas estableci-
das en el Espacio Europeo de Educación Superior, popularmente cono-
cido como Plan Bolonia, que procura cambios dentro del entorno edu-
cativo universitario, apostando por nuevas propuestas de innovación en
la metodología docente (Esteban & Sánchez, 2005; Mauri, Coll, &
Onrubia, 2007).
Del mismo modo abre la vía al desarrollo de métodos propios del apren-
dizaje colaborativo dentro de la posible acción de estas tecnologías di-
gitales, como podría ser el manejo de foros mediante plataformas
Moodle, que generan un entorno o campus virtual que propicia la inter-
acción de docentes y discentes, y la puesta en común de materiales di-
versos, lo cual fomenta la cooperación entre estudiantes (Lavigne,
Vasoncelos, Javier, & McAnally, 2012). Esta condición se puede cata-
logar como especialmente reseñable, puesto que el aprendizaje colabo-
rativo se impone como una de los métodos de aprendizaje más respal-
dados en función de los objetivos formativos alcanzados (Dueñas et al.,
2016).
Las herramientas tecnológicas tienen la capacidad de incorporar carac-
terísticas funcionales que repercuten sobre el aprendizaje (Lavigne et
al., 2012), esto da lugar a nuevos modelos de intervención en el plano
educativo, como pueden ser los planes de innovación docente que res-
ponden a nuevos criterios y solicitudes y permiten la formación de los
alumnos mediante aplicaciones atractivas y adaptables a las tendencias
más adecuadas (Muñoz et al., 2017).
La popularización de los recursos digitales y el uso de las Tecnologías
de la Información y la Comunicación, junto con el mismo desarrollo de
estos recursos hace posible su inclusión en el entorno educativo (Aguiar
et al., 2019), permitiendo su uso en situaciones de pandemia (Fernández
Torres et al., 2021; Ordorika, 2020; Tauber, 2020b).
Dentro de la educación superior de ámbito universitario, los modelos
docentes basados en la ejecución de actividades y proyectos de
‒ ‒
colaboración en común pueden derivar en incrementos en la calidad del
aprendizaje y suponen un entorno o marco multifactorial para atender
a las necesidades del alumnado de la sociedad actual, favoreciendo la
adquisición de conocimientos, y reduciendo las tasas de fracaso y de
saturación percibida, y abriendo el espacio a las intervenciones educa-
tivas que parten de la realización de proyectos que toman las tecnolo-
gías de la información y la comunicación como referencia de actuación
(Aguiar et al., 2019; Dueñas et al., 2016).
Todo lo expuesto da lugar a la necesidad de ahondar en el diseño de
metodologías que favorezcan el aprendizaje y permitan la evaluación
en tiempos excepcionales de pandemia caracterizados por la docencia
a distancia a través de recursos, tecnologías y dispositivos digitales
(Fardoun et al., 2020; García-Peñalvo, 2020; Ordorika, 2020; Tauber,
2020b, 2021).
2. OBJETIVOS
‒ ‒
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
medios digitales fue 37 individuos, quedando la muestra agrupada en
un total de 20 mujeres y 17 hombres participantes.
El conjunto de la carga lectiva fue trasladada por completo al entorno
virtual. Por medio de los recursos digitales disponibles se realizó tanto
la docencia teórica y tutorías, como el desarrollo de los contenidos de
carácter práctico, todo ello a través de plataformas virtuales para evitar
el contacto físico entre personas y de ese modo evitar posibles contagios
de COVID-19 por la posible propagación del coronavirus SARS-CoV-
2.
En primera instancia, el cuerpo docente a cargo de la asignatura se en-
cargó de crear y difundir contenido de la materia de Métodos Específi-
cos de Intervención en Fisioterapia I, para que estuviese a disposición
del acceso de los alumnos en modo digital en el campus virtual de la
Universidad de Cádiz.
El contenido fue dividido en los bloques o unidades temáticas en los
que normalmente se repartía y fue trasladado a los alumnos por medio
de documentos de texto, archivos de presentación en formato Power-
Point, vídeos explicativos y sesiones de videoconferencia online en di-
recto.
Los alumnos podían estar en contacto directo con el profesor a través
de correo electrónico y por las herramientas de foro del campus virtual,
ofreciendo la posibilidad de concertar tutorías no presenciales vía on-
line, además de poder resolver sus dudas durante la propia clase por
videoconferencia en directo.
A continuación de cada bloque temático y al final de todo el temario
teórico se realizó un examen a través de la plataforma gratuita Socrative
para evaluar el índice de aprendizaje del alumnado y, de igual modo,
tener la posibilidad de compararlo con los resultados académicos de
cursos académicos anteriores.
A modo de examen práctico cada uno de los alumnos tuvo que realizar
un vídeo sobre un supuesto práctico que propuso el profesor y de esta
manera familiarizarse con las técnicas y las nuevas tecnologías.
‒ ‒
A cada uno de alumnos le fue asignada una técnica específica de la
asignatura en cuestión, de Métodos Específicos de Intervención en Fi-
sioterapia I, y partiendo de la misma debía de elaborar una presentación
en formato PowerPoint y un vídeo explicativo de la aplicación de la
técnica sobre un paciente ficticio.
Las técnicas seleccionadas en la asignatura de Métodos Específicos de
Intervención en Fisioterapia I fueron aquellas maniobras de tratamiento
vinculadas con disfunciones de la movilidad de la articulación sacroi-
líaca, con restricción de movilidad en sentido anterior o posterior, y las
técnicas manipulativas de la columna lumbar ante disfunciones de mo-
vimiento en flexión, extensión, inclinación o rotación.
Los estudiantes debían llevar a cabo un estudio razonado de la técnica
en cuestión respaldado por el conocimiento científico a través de la bús-
queda bibliográfica de artículos en las bases de datos de referencia en
Ciencias de la Salud.
Tomando como referencia dichos contenidos sobre la técnica de inter-
vención fisioterapéutica encomendada, cada alumno elaboró su presen-
tación en PowerPoint para explicar las pautas de actuación en el desa-
rrollo de cada técnica, con sus características generales y específicas,
detallando las indicaciones y contraindicaciones, haciendo hincapié en
explicar sobre qué tipo de pacientes sería adecuado la aplicación de la
técnica.
Del mismo modo, los estudiantes realizaron un vídeo detallando la eje-
cución propia de cada técnica, mostrando el desarrollo de la maniobra
en un paciente ficticio, recurriendo a la colaboración de algún convi-
viente que ejerciera de paciente. Los vídeos debían de ser publicados
en una cuenta de YouTube con cuenta y contraseña privadas, de modo
que el acceso quedase limitado a usuarios externos y fuese solamente
accesible para alumnado y profesorado de la asignatura de Métodos Es-
pecíficos de Intervención en Fisioterapia I, del tercer curso de Grado en
Fisioterapia por la Universidad de Cádiz.
Tanto las presentaciones en formato PowerPoint como el enlace de ac-
ceso a los vídeos fueron remitidos a un apartado del Campus Virtual de
la Universidad de Cádiz, en la pestaña correspondiente a cada una de
‒ ‒
las unidades didáctica de la propia asignatura. Desde ahí, el contenido
podría ser correctamente visualizado por todos los participantes del
Proyecto, tanto docentes como estudiantes. Así el contenido sería valo-
rable por el profesor, y también derivaría en un proceso de enseñanza y
aprendizaje colaborativo.
Con el fin de tener acceso a la posibilidad de edición posterior de los
recursos educativos aportados (tanto presentaciones como vídeo) se
contactó y se solicitó la colaboración de los servicios del Centro de Re-
cursos Digitales de la Universidad de Cádiz, mediante el Vicerrecto-
rado de Recursos Docentes, todo ello con intención de ofrecer al alum-
nado la posibilidad de hacer uso del recurso digital creado.
Al término de la programación docente establecida en la asignatura, en
el momento en el que se hubiese completado totalmente la implemen-
tación del Proyecto de Innovación Docente “Evaluación Continua del
Alumnado Mediante Plataformas Virtuales en un Estado de Pandemia”,
el alumnado fue responsable de contestar a una encuesta final de valo-
ración, con carácter anónimo y se habilitó un buzón de sugerencias para
conocer el grado de satisfacción de esta nueva forma de docencia adap-
tada al estado actual de pandemia. Esta encuesta final se planteó con el
fin de analizar el grado de satisfacción alcanzado con la metodología
propuesta y realizada.
Todos los cuestionarios fueron elaborados y administrados por medio
de la plataforma del Campus Virtual de la Universidad de Cádiz, y la
aplicación Socrative, de carácter gratuito, obteniendo los resultados de
análisis de las encuestas por medio de los propios recursos electrónicos.
4. RESULTADOS
‒ ‒
La nota media obtenida por el conjunto del alumnado en las sesiones de
cuestionario llevadas a cabo después de cada bloque teórico que se im-
partía fue de 8,7 puntos y en los vídeos prácticos la puntuación final fue
de 7,2. En la comparativa con respecto a años anteriores, cabe destacar
que las medias anteriores fueron 7,4 en la docencia teórica para cada
uno de los bloques temáticos.
Por su parte, la media de calificaciones obtenidas en el examen final de
la docencia reglada teórica y práctica de la asignatura de Métodos Es-
pecíficos de Intervención en Fisioterapia I fue 7,7 puntos, sin embargo,
el curso académico anterior no llegó a alcanzar una puntuación global
de 7.
Con respecto al análisis del grado de satisfacción del alumnado, las en-
cuestas mostraron resultados muy positivos, puesto que por encima de
las calificaciones finales obtenidas por los alumnos en los trabajos pre-
sentados y los cuestionarios relacionados con cada unidad didáctica de
contenido, destacaron los resultados alcanzados en la encuesta de valo-
ración, pues resulta en gran medida como un indicador de la calidad y
el éxito del Proyecto de Innovación Docente centrado en la modalidad
de aprendizaje a distancia, todo ello dentro del nuevo ámbito de educa-
ción universitaria propiciado por la situación de pandemia.
Estos resultados tratan de valorar la consecución del Proyecto, con in-
tención de dar respuesta a los objetivos planteados inicialmente, sobre
todo, a la necesidad de recurrir a los métodos de aprendizaje basados
en el uso de aplicaciones informáticas y recursos digitales propios de
las tecnologías de la información y la comunicación.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
Estos resultados obtenidos van en consonancia con lo analizado en in-
vestigaciones previas llevadas a cabo con otros proyectos de innovación
docente en alumnos del Grado en Fisioterapia de la Universidad de Cá-
diz. Los resultados de las calificaciones y de las encuestas demuestran
la idoneidad del Proyecto.
Además, la puesta en marcha y desarrollo del proyecto de innovación
docente se ha realizado bajo la senda de intervención en el ámbito do-
cente universitario establecidas dentro del Espacio Europeo de Educa-
ción Superior (Esteban & Sánchez, 2005; Lerís López & Sein-Echaluce
Lacleta, 2009; Mauri et al., 2007; Muñoz et al., 2017).
De este modo, los métodos de trabajo implantados en la asignatura de
Métodos Específicos de Intervención en Fisioterapia I cumplen con los
objetivos perseguidos en los nuevos marcos de actuación en el ámbito
europeo de educación universitaria.
La participación del alumnado, tanto en los contenidos teóricos como
prácticos, permite y favorece la creación de recursos audiovisuales den-
tro de un entorno de interacción digital como el que se exige en situa-
ción de pandemia (Fardoun et al., 2020; Fernández Torres et al., 2021;
Finkelstein, 2020; Ordorika, 2020; Tauber, 2021; Torrecillas Bautista,
2020).
Se realizó una evaluación y repaso de todos los contenidos continua-
mente. Una satisfacción para el alumnado fue que todo el trabajo pro-
puesto, se realizó en horario docente de manera que disminuyó el
tiempo de estudio individual en sus domicilios, dando lugar a un apren-
dizaje más autónomo, flexible y con mejor gestión del tiempo (Tejedor
Calvo et al., 2020).
La puesta en marcha de una adaptación de contenidos diseñados para
su impartición bajo presencialidad, especialmente en fisioterapia, a una
modalidad de docencia a distancia y mediada por recursos virtuales
puede acarrear dificultades como la propia carencia de recursos tecno-
lógicos, falta de plataformas, falta de conocimiento y manejo del do-
cente y dificultades para la evaluación (Fardoun et al., 2020).
‒ ‒
Estas dificultades fueron bien asumidas en el contexto de trabajo que
nos ocupa, sin embargo, por desgracia, no siempre es así y cobran ma-
yor relevancia en otros escenarios socioeconómicos (Fardoun et al.,
2020; Tauber, 2020b; Tejedor Calvo et al., 2020).
A pesar de la retroalimentación positiva alcanzada, también es preciso
señalar que en una disciplina sanitaria y de carácter práctico dentro de
las Ciencias de la Salud como es la Fisioterapia el aprendizaje encuen-
tra limitaciones para el desarrollo de las habilidades prácticas, hecho
que se viene repitiendo en otros entornos educativos (Finkelstein, 2020;
Tejedor Calvo et al., 2020).
Es preciso que las adaptaciones llevadas a cabo mantengan un proceso
de control y readaptación progresiva, y que todo el sistema educativo
salvaguarde sus bases de actuación, tratando de fortalecer el sistema de
enseñanza a todos los niveles (Fernández Torres et al., 2021; Ordorika,
2020; Tauber, 2020b, 2021; Tejedor Calvo et al., 2020).
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
El cuerpo docente de la asignatura de Métodos Específicos de Interven-
ción en Fisioterapia I del Grado en Fisioterapia por la Universidad de
Cádiz, y el conjunto de alumnos de la Facultad de Enfermería y Fisio-
terapia de la Universidad de Cádiz se encuentran preparados para la
adaptación de contenidos y métodos de evaluación a través de recursos
electrónicos y digitales propios de las tecnologías de la información y
la comunicación cuando los condicionantes de no presencialidad así lo
requieran.
La adaptación de contenidos e inicio de la docencia a distancia por me-
dio de recursos virtuales va asociada al nivel socioeconómico del en-
torno en el que se encuentra el estudiante y su ámbito universitario.
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
‒ ‒
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Gómez Ardila, S. E., & Chacón González, A. C. (2017). Aprendizaje móvil
basado en el modelo Frame y aplicado al aprendizaje de la técnica de
Core en Fisioterapia. Revista Virtual Universidad Católica Del Norte,
50, 411–436. Retrieved from
http://revistavirtual.ucn.edu.co/index.php/RevistaUCN/article/view/831/
1349
Gorbalenya, A. E., Baker, S. C., Baric, R. S., de Groot, R. J., Drosten, C.,
Gukyaeva, A. A., … Ziebuhr, J. (2020). Severe acute respiratory
syndrome-related coronavirus – The species and its viruses, a statement
of the Coronavirus Study Group. bioRxiv.
https://doi.org/10.1101/2020.02.07.937862
Lai, C. C., Shih, T. P., Ko, W. C., Tang, H. J., & Hsueh, P. R. (2020). Severe
acute respiratory syndrome coronavirus 2 (SARS-CoV-2) and
coronavirus disease-2019 (COVID-19): The epidemic and the
challenges. International Journal of Antimicrobial Agents, 2, 105924.
https://doi.org/10.1016/j.ijantimicag.2020.105924
Lavigne, G., Vasoncelos, M., Javier, O., & McAnally, L. (2012). Exploración
preliminar del aprendizaje colaborativo dentro de un entorno virtual.
Actualidades Investigativas En Educación, 12(3), 1–20. Retrieved from
https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=44723985007
Lerís López, M. . D., & Sein-Echaluce Lacleta, M. . L. (2009). Una experiencia
de innovación docente en el ámbito universitario. Uso de las nuevas
tecnologías. Arbor Ciencia, Pensamiento y Cultura, CLXXXV(Extra),
93–110. https://doi.org/10.3989/arbor.2009.extran1208
Mauri, T., Coll, C., & Onrubia, J. (2007). La evaluación de la calidad de los
procesos de innovación docente universitaria. Una perspectiva
constructivista. REDU. Revista de Docencia Universitaria, 5(1), 1.
https://doi.org/10.4995/redu.2007.6290
Muñoz, L. V. A., Cárdenas-Rodríguez, R., & Terrón-Caro, T. (2017).
Introducción: Innovación docente en el ámbito de la universidad. Revista
de Humanidades (SPAIN), 31, 13–16.
Ordorika, I. (2020). Pandemia y educación superior. Revista de La Educación
Superior, 49(194), 1–8. https://doi.org/10.36857/RESU.2020.194.1120
Tauber, F. (2020a). Derecho a la educación en tiempos de pandemia. In Material
audiovisual aportado por el Centro de Producción Multimedial
(CEPROM).
Tauber, F. (2020b). Respuesta institucional ante la pandemia. Retrieved from
http://sedici.unlp.edu.ar/handle/10915/100956
‒ ‒
Tauber, F. (2021). Avances y desafíos de un modelo de Universidad pública en
tiempos de pandemia. In Redes de organización y solidaridad en
pandemia (pp. 7–29).
Tejedor Calvo, S., Cervi, L., Tusa, F., & Parola, A. (2020). Educación en tiempos
de pandemia: reflexiones de alumnos y profesores sobre la enseñanza
virtual universitaria en España, Italia y Ecuador. Revista Latina de
Comunicación Social, ISSN-e 1138-5820, No. 78, 2020, Págs. 1-21, (78),
1–21. Retrieved from
https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=7625686&info=resume
n&idioma=SPA
Torrecillas Bautista, C. (2020). El reto de la docencia online para las
universidades públicas españolas ante la pandemia del Covid-19.
Velavan, T. P., & Meyer, C. G. (2020). The COVID-19 epidemic. Tropical
Medicine and International Health, 25(3), 278–280.
https://doi.org/10.1111/tmi.13383
Zhu, N., Zhang, D., Wang, W., Li, X., Yang, B., Song, J., … Tan, W. (2020). A
novel coronavirus from patients with pneumonia in China, 2019. The
New England Journal of Medicine (Vol. 382).
https://doi.org/10.1056/NEJMoa2001017
‒ ‒
CAPÍTULO 5
VANESSA ORTEGA-QUEVEDO
Universidad de Valladolid
CRISTINA GIL PUENTE
Universidad de Valladolid
VICTORIA VEGA AGAPITO
Universidad de Valladolid
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
para el siglo XXI. “Desde el ámbito educativo, estas competencias se
constituyen como el conjunto de los conocimientos y las habilidades
que el alumnado es capaz de aplicar o usar para realizar las tareas aca-
démicas y que son transferibles al mundo laboral” (Almerich et al.,
2020, p. 48). Asimismo, se dividen entre competencias de alta habilidad
y las competencias TIC. En concreto, el primer conjunto comprende
“pensamiento crítico, pensamiento creativo, aprendizaje autogestio-
nado, resolución de problemas, la adaptabilidad, habilidades de comu-
nicación, y las habilidades interpersonales y de trabajo en grupo” (Al-
merich et al., 2020, p. 48-49).
Autores como Ritchhart y Perkins, entre otros, establecieron una lista
de movimientos del pensamiento, los cuales son esenciales para poder
desarrollar la comprensión del alumnado. Estos son los movimientos
del pensamiento en los que se va a basar este estudio (Ritchhart, et al.
2014, p. 32-34):
‒ Observar de cerca y describir qué hay ahí: Observar promueve
la atención detallada de la información presentada. La descrip-
ción favorece la identificación de detalles y ayuda a identificar
las características del objeto de conocimiento, los conceptos
básicos o la generalización de la situación observada.
‒ ‒
complementar sus propias ideas con las de sus compañeros y
fomenta la atención y el respeto ante la diversidad de pensa-
mientos que surgen en el aula.
‒ ‒
alumnado en su propio proceso de enseñanza-aprendizaje. Cuando ha-
blamos de juegos la participación de los jugadores es incuestionable,
puesto que “las mecánicas de los juegos involucran a los diferentes ju-
gadores que deberán realizar unas determinadas acciones para lograr el
objetivo de este” (García-Martín et al., 2020, p. 820).
2. OBJETO DE ESTUDIO
3. CONTEXTO DE IMPLEMENTACIÓN
‒ ‒
nociones teóricas y ahora puedan centrar sus esfuerzos en adquirir los
conocimientos didácticos propios de la enseñanza de las ciencias.
‒ ‒
continuada se aplican procesos formativos de heteroevaluación, coeva-
luación y autoevaluación. Dichas evaluaciones se llevan a cabo me-
diante criterios prefijados y desglosados por niveles de logro en una
rúbrica detallada que se presenta a los estudiantes al inicio de cada ac-
tividad. Con cada una de las entregas los estudiantes presentan una au-
toevaluación. Tras la presentación de las actividades se realiza una
coevaluación y tras la heteroevaluación del docente se comentan las
observaciones generales y los errores más comunes en el aula.
4. ACTIVIDAD PLANTEADA
‒ ‒
‒ Hacer un documento/juego interactivo (físico o digital) en el
que se refleje tanto el inventor o descubridor, como la evolu-
ción del objeto hasta nuestros días, así como el tratamiento
que se le daría en el aula en la etapa de Primaria. Si es sobre
la biografía de un científico, se investigaría sobre su vida, sus
éxitos o fracasos y sobre la relevancia de sus investigaciones.
Los estudiantes tienen libertad para emplear el formato que
decidan siempre que el documento sea interactivo, es decir,
que el resto de sus compañeros puedan “jugar” con él (como
si fuera un trivial o un timeline, por ejemplo).
‒ ‒
TABLA1. Rúbrica de autoevaluación, coevaluación y heteroevaluación
Nivel de logro 4 3 2 1
Los contenidos expuestos se han Los contenidos expuestos se han Los contenidos expuestos se han com- Los contenidos expuestos no se
Contenidos expuestos
comprendido bien. comprendido a medias. prendido poco. han comprendido bien.
Jugabilidad en relación Jugabilidad en relación Jugabilidad en relación Jugabilidad en relación Jugabilidad en relación
‒
claramente cuál es el objetivo a explicado más o menos el objetivo. dejado muy claro cuál es el objetivo.
objetivo al que debe responder.
alcanzar.
‒
Se trabaja algún movimiento del Se trabaja algún movimiento del pen- Se trabaja algún movimiento del pensa-
Movimientos del pensa- No se trabaja ningún movimiento
pensamiento y se justifica de samiento y no se justifica de forma miento, pero no de forma adecuada y
miento incluidos del pensamiento ni se justifica.
forma adecuada. adecuada. además no se justifica
El juego está muy trabajado y El juego está trabajado y elaborado. El juego está poco trabajado y elabo- El juego no está apenas traba-
Elaboración y originalidad elaborado. Es muy original, me Es original, me ha sorprendido un rado. Es poco original, no me ha sor- jado y elaborado. Es muy poco
ha sorprendido poco. prendido original, me ha defraudado
Observaciones
5. METODOLOGÍA
Establecer conexiones
Tener en cuenta diferentes
puntos de vista y perspectivas
Captar lo esencial y llegar a
conclusiones
Preguntarse y hacer preguntas
Descubrir la complejidad e ir
más allá de la superficie.
6. RESULTADOS
‒ ‒
En el caso del grupo del Grado de Educación Primaria, formado por 15
subgrupos de trabajo se han diseñado cuatro juegos estilo “Party & co”
con carácter semicooperativo (competición por equipos). Todos ellos
dirigidos a los últimos cursos de Educación Primaria e ideados como
actividad de repaso tras el trabajo de un contenido. A pesar de tener el
mismo diseño base, el distinto carácter aportado a los retos propuestos
en cada una de las categorías causa que no todos los juegos trabajen los
mismos movimientos del pensamiento. En concreto, se pasa a presentar
qué movimientos del pensamiento se trabajan en los distintos retos de
los diseños.
Grupo 1. Retos: mímica, tabú, dibujo, preguntas de reflexión y descrip-
ciones. Movimientos del pensamiento que trabaja: establecer conexio-
nes y captar lo esencial y llegar a conclusiones.
Grupo 5. Retos: Verdadero y Falso, mímica, dibujo, preguntas tipo test.
Movimiento del pensamiento que trabaja: establecer conexiones.
Grupo 9. Retos: adivina, dibuja, contesta a diferentes tipos de pregun-
tas. Movimientos del pensamiento que trabaja: construir explicaciones,
establecer conexiones, tener en cuenta diferentes puntos de vista, pre-
guntarse y hacerse preguntas.
Grupo 15. Retos: mímica, dibujo, tabú, preguntas tipo test. Movimiento
del pensamiento que trabaja: establecer conexiones.
Continuando con los diseños de este grupo clase, dos subgrupos han
optado por realizar ruletas con retos donde los estudiantes compitiesen
por grupos (semicooperativo), para conseguir más retos resueltos co-
rrectamente. Los diseños se dirigen a sexto curso de Educación Prima-
ria y trabajan contenidos relacionados con las redes sociales y la televi-
sión como inventos.
Grupo 10. Retos: contestar a diferentes tipos de pregunta, dibujo, seme-
janzas y diferencias, mímica, ventajas y desventajas, tabú. Movimien-
tos del pensamiento que trabaja: construir explicaciones e interpreta-
ciones; razonar con evidencias; establecer conexiones; preguntarse y
hacer preguntas; descubrir la complejidad e ir más allá de la superficie.
‒ ‒
Grupo 12. Retos: contestar a diferentes tipos de pregunta, tabú, mímica
y dibujo. Establecer conexiones y captar lo esencial y llegar más allá de
la superficie.
Otros dos subgrupos de este mismo grado han optado por un diseño de
tipo narrativo, donde relacionan los retos y los contenidos con uno o
varios relatos. El diseño del Grupo 8 se dirige a sexto curso de Educa-
ción Primaria y centra su narrativa en la emergencia climática. A través
de la resolución de retos cooperativos que tratan contenidos relaciona-
dos con inventoras e inventores de distintos siglos, los jugadores van
adquiriendo pistas para resolver un reto final. Mientras, el Grupo 11 ha
creado tres relatos que hablan sobre distintas mujeres científicas y sus
aportaciones al mundo. El juego se dirige a cuarto o quinto curso y con-
siste en la lectura de los textos y la resolución de una serie de retos para
demostrar cuánto se ha aprendido tras dichas lecturas.
Grupo 8. Retos: adivina, tabú, dibujo y contestar a diferentes tipos de
preguntas. Movimientos del pensamiento que trabaja: establecer cone-
xiones, captar lo esencial y llegar a conclusiones, preguntarse y hacer
preguntas, descubrir la complejidad e ir más allá de la superficie.
Grupo 11. Retos: tabú, dibujo y diferentes tipos de preguntas. Movi-
mientos del pensamiento que trabaja: establecer conexiones y captar lo
esencial y llegar a conclusiones.
Dos subgrupos escogieron un estilo de batalla por el conocimiento, ins-
pirado en el juego “Risk”. En este caso los jugadores de forma indivi-
dual tenían que defender su territorio o ampliarlo realizando retos. Am-
bos diseños eran competitivos y estaban dirigidos a sexto curso de Edu-
cación Primaria. Los contenidos que trabajaron fueron: inventores y
descubrimientos de los últimos siglos en distintos campos científicos
en el caso del Grupo 2, e inventos e hitos relacionados con la aviación
en el Grupo 14. Los retos y movimientos del pensamiento que plantean
son:
Grupo 2. Retos: contestar a diferentes tipos de preguntas. Movimientos
del pensamiento que trabaja: establecer conexiones y captar lo esencial
y llegar a conclusiones.
‒ ‒
Grupo 14. Retos: construir un avión de papel, contestar a diferentes ti-
pos de preguntas. Movimientos del pensamiento que trabaja: establecer
conexiones y captar lo esencial y llegar a conclusiones.
Otros dos grupos se inspiraron en juegos de tableros más tradicionales
como son “El Parchís” y “Serpientes y Escaleras”. Ambos juegos plan-
tean una estructura de competición por equipos (semicooperativo),
donde para avanzar por las diferentes casillas del tablero hay que resol-
ver una serie de retos. En el caso del Grupo 3 trabajaron contenidos
relacionados con la evolución del teléfono móvil, mientras que los es-
tudiantes del Grupo 6 trabajaron los distintos inventos realizados por
Leonardo Da Vinci. En cuanto a los retos planteados y los movimientos
del pensamiento fomentados:
Grupo 3. Retos: argumenta, debate y contesta a diferentes tipos de pre-
gunta. Movimientos del pensamiento que trabaja: razonar con eviden-
cia, tener en cuenta diferentes puntos de vista y preguntarse y hacer
preguntas.
Grupo 6. Retos: preguntas de tipo test. Movimiento del pensamiento
que trabaja: establecer conexiones.
Para finalizar con el grupo del Grado en Educación Primaria se descri-
ben los juegos de los tres últimos grupos, quienes no coinciden en sus
diseños con ninguno de los otros subgrupos.
El Grupo 7 ha optado por un diseño basado en juegos estilo “Memory”,
donde de forma competitiva los estudiantes tendrán que relacionar dos
parejas de tarjetas y resolver un reto para poder quedárselas, ganando
quien tenga más tarjetas. El nivel al que está dirigido este juego es sexto
curso de Educación Primaria y el juego trabaja contenidos relacionados
con grandes científicos y científicas de la historia. En concreto, los retos
planteados son: relacionar científicos con su invento o descubrimiento
y contestar diferentes tipos de preguntas. En cuanto a los movimientos
de pensamiento se trabajan: construir explicaciones e interpretaciones,
establecer conexiones y captar lo esencial para llegar a conclusiones.
El Grupo 13 se centró en una actividad menos dinámica dirigida a sexto
curso que consistía en comparar dos tipos de motores (electico y de
‒ ‒
combustión), denominando cada una de sus partes principales mediante
tarjetas con el nombre de los componentes. También había tarjetas con
el inventor y el año del invento para cada uno de los casos. El juego se
ejecutaba por parejas y la pareja ganadora era quién relacionaba cada
tarjeta con su motor o componente adecuado en menos tiempo. Cada
vez que situabas una tarjeta en un componente erróneo el juego se reini-
ciaba. En concreto, el reto consiste en relacionar cada nombre o inven-
tor con su componente y el movimiento de pensamiento trabajado es
establecer conexiones.
El Grupo 4 dirigió su diseño a segundo curso de Educación Primaria.
Su juego se centró en la elaboración de una serie de puzles (un puzle
por objeto) con distintos dibujos de diferentes inventos (compresas, pa-
pel higiénico, teléfono cepillo de dientes…), una vez realizado el puzle,
los jugadores deben descifrar unos códigos que vienen insertados en el
mismo puzle y que nos dirán la fecha del invento y el inventor de esos
objetos. En concreto, los restos que se plantean son: conexión entre pie-
zas con distintas formas y colores, decodificar un código. En cuanto al
movimiento del pensamiento que se trabaja es establecer conexiones.
Por otra parte, se analizan los trabajos del Programa de Estudios Con-
juntos PEC, conformado por 6 subgrupos de trabajo. En este grupo se
han diseñado dos “Escape room”, uno de ellos enteramente digital. El
Grupo 4 ha diseñado un juego de escape para quinto curso centrado en
retos de cifrado, adivinanzas, acertijos o descripciones que llevaban a
distintas pistas distribuidas por el aula y que permitían conocer distintos
aspectos de la bombilla, como sus características o identificar su inven-
tor. Los movimientos del pensamiento que se trabajan con este juego
son: construir explicaciones, establecer conexiones, tener en cuenta di-
ferentes puntos de vista, captar lo esencial y llegar a conclusiones, pre-
guntarse y hacer preguntas.
El escape digital lo diseñó el Grupo 5 para sexto curso de Educación
Primaria y se basa en retos de preguntas, cifrado, observación o rela-
ción. Los estudiantes desde sus dispositivos realizan la actividad de es-
cape resolviendo todos los retos, los cuales están relacionados con el
lenguaje binario y la evolución de los ordenadores. Los movimientos
del pensamiento que se trabajan con este juego son: observa de cerca,
‒ ‒
razonar con evidencia, establecer conexiones y tener en cuenta diferen-
tes puntos de vista.
El resto de los subgrupos del PEC establecieron diseños diferentes para
sus juegos.
El Grupo 1 diseñó un juego basado en el tradicional formato de tablero
de “Serpientes y Escaleras”, donde el reto planteado en las diferentes
casillas es responder a distintos tipos de preguntas para trabajar inven-
tos relacionados con la comunicación. El formato del juego es compe-
titivo por grupos y los movimientos del pensamiento trabajados en este
diseño son: establecer conexiones y preguntarse y hacer preguntas.
El Grupo 2 realizó un diseño con tres retos consecutivos que permitie-
ran trabajar la investigación y descubrimientos de Marie Curie. Los re-
tos fueron un “Memory”, la ordenación de distintos hitos en una línea
del tiempo y contestar distintos tipos de pregunta. Los retos se realizan
en este orden de forma cooperativa y permiten crear argumentaciones
para decidir sobres distintas acciones. Los movimientos del pensa-
miento trabajados son: construir explicaciones e interpretaciones, razo-
nar con evidencia y establecer conexiones.
El Grupo 3 realiza un diseño tipo “Trivial”, creando un tablero con dis-
tintas casillas que se corresponden con categorías que determinarán la
temática de la pregunta que los jugadores tienen que responder. El
juego es competitivo por grupos. Las preguntas planteadas son de dis-
tinto tipo. Los movimientos del pensamiento que se trabajan en este
diseño son: razonar con evidencia, establecer conexiones, preguntarse
y hacer preguntas.
Finalmente, el Grupo 6 elabora un diseño estilo “Monopoly”, donde los
estudiantes deben comprar inventos, mejorarlos y conseguir más puntos
para invertir en ciencia en el ministerio. Con estas acciones se consi-
guen diferentes inventos, junto con información de estos; así como co-
nocer su evolución con las distintas mejoras. Asimismo, cada una de
las acciones va acompañada de una pregunta sobre los inventos que ha
de resolverse. Los movimientos del pensamiento que se trabajan con
este diseño son: construir explicaciones y razonar con evidencia.
‒ ‒
Una vez presentados los juegos diseñados se pasa a analizar el conjunto
de movimientos del pensamiento que más se promueven con dichos di-
seños. Los resultados muestran que el movimiento del pensamiento más
empleado por los estudiantes del Grado de Educación Primaria es el de
establecer conexiones. Solamente el Grupo 3 no lo ha incluido en su
diseño, frente a 14 que sí. Este movimiento generalmente va unido a
retos que demandan conectar conocimientos previos con evidencias o
para asociar dos elementos con características comunes. El siguiente
movimiento del pensamiento más tenido en cuenta en los diseños ha
sido captar lo esencial y llegar a conclusiones. Este movimiento se aso-
cia generalmente a preguntas de reflexión, donde el alumnado tiene que
partir de datos dados para generar conclusiones.
En cuanto al movimiento del pensamiento que menos se ha empleado
en el grupo de Educación Primaria para diseñar los juegos ha sido, ob-
servar de cerca y describir que hay ahí. Este movimiento no se ha con-
templado en ningún diseño, pues ninguno de los retos que los estudian-
tes han diseñado se ha centrado en la observación o la descripción. Sin
embargo, en otras de las prácticas estos estudiantes sí han tenido en
cuenta este movimiento del pensamiento, por ejemplo, en prácticas que
requerían experimentación.
Por otra parte, los resultados de los diseños del Programa de Estudios
Conjuntos nos han permitido apreciar que el movimiento que más se ha
empleado en los diferentes diseños es el de establecer conexiones. To-
dos los grupos de este programa lo han tenido en cuenta en sus progra-
maciones, bien sea para relacionar cuestiones sobre la teoría de inven-
tos o descubrimientos aplicada o bien para relacionar pistas que lleva-
sen a los alumnos a resolver diferentes enigmas. Los siguientes movi-
mientos del pensamiento más empleados son tres, pues hay un triple
empate en su uso por tres de los seis grupos. Estos movimientos son:
razonar con evidencia, construir explicaciones y preguntarse y hacer
preguntas. Movimientos relacionados con la argumentación, la cons-
trucción de explicaciones sobre la teoría o para descifrar pistas y fo-
mentar la curiosidad.
En cuanto a los movimientos del pensamiento menos empleados hay
que destacar que, en esta ocasión, todos los movimientos del
‒ ‒
pensamiento se han tenido en cuenta en al menos uno de los diseños.
No obstante, el movimiento del pensamiento observar de cerca y des-
cribir que hay ahí ha sido el menos empleado, aunque sucede lo mismo
que en el caso del grupo de Educación Primaria, y sí es tenido en cuenta
en otro tipo de diseños didácticos. Otro movimiento del pensamiento
que se ha empleado solo en un caso es captar lo esencial y llegar a con-
clusiones, ya que no se han diseñado muchos retos donde el foco estu-
viese en la elaboración de conclusiones por parte de los jugadores.
En resumen, los resultados del estudio muestran que el movimiento del
pensamiento que más juegos fomentan es el de “establecer conexio-
nes”. Como contrapunto el movimiento que menos se ha tenido en
cuenta en los diseños ha sido “observar de cerca y decir que hay ahí”,
pues solo uno de los grupos, correspondiente al PEC, lo ha tenido en
cuenta en su diseño.
En relación con cuantos movimientos del pensamiento han querido fo-
mentar los estudiantes del Grado en Educación Primaria y el PEC en la
elaboración de sus juegos, cabe señalar que hay grupos que incluyen en
su diseño entre cuatro y cinco movimientos al poner en juego diferentes
tipos de pruebas; mientras que otros incluyen uno o dos centrando más
los retos en el trabajo de estos dos movimientos.
7. CONCLUSIONES
Los juegos tipo “Party & co” trabajan de forma sistemática movimien-
tos como establecer conexiones, sin embargo, alterando un poco la pro-
fundidad de los retos planteados pueden trabajar otros movimientos
como: captar lo esencial y llegar a conclusiones construir explicaciones,
tener en cuenta diferentes puntos de vista, preguntarse y hacerse pre-
guntas.
Las modificaciones de juegos tradicionales como “El Parchís”, “Ser-
pientes y Escaleras” o “Trivial” tienen mucho potencial para trabajar
diferentes movimientos del pensamiento, sin embargo, todo dependerá
de los retos diseñados para las diferentes casillas o de los tipos de pre-
guntas que se realicen. En los juegos tipo “Memory”, “Risk” o “Mono-
poly” se mantiene la tendencia que acabamos de contemplar. Si se
‒ ‒
complementa el diseño con otros retos y mecánicas el número de mo-
vimientos del pensamiento que se puede fomentar con estos juegos au-
menta.
Por su parte, los juegos de estilo narrativo y de escape ofrecen una in-
mersión en el juego que puede resultar más atractiva, si este compo-
nente narrativo está bien trabajado y conectado. En cuanto a los movi-
mientos del pensamiento que pueden caber en estos diseños son muy
variados, ya que se abren dos vías para su inclusión: implementar su
trabajo en las dinámicas del juego o en retos relacionados con la teoría.
En conclusión, el juego es un excelente elemento para trabajar distintos
movimientos del pensamiento. Los estudiantes de los grados en Educa-
ción generalmente parten de un modelo de juego que conocen para en-
riquecerlo con diferentes pruebas que les permitan trabajar la teoría y
fomentar diferentes movimientos del pensamiento. El enriquecer los
juegos añadiendo distintas dinámicas, además de incrementar el nú-
mero de movimientos del pensamiento que se puede desarrollar al ju-
gar, también atiende a distintos perfiles de aprendizaje y de jugadores.
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Erstad, O., & Voogt, J. (2018). The twenty-first century curriculum: issues and
challenges. En J. Voogt, G. Knezek, R. Christensen, & K.W. Lai (Eds.),
Second Handbook of Information Technology in Primary and Secondary
Education, (pp. 19-36). Cham, Germany: Springer.
García, M., y Orozco, L. (2008). Orientando un cambio de actitud hacia las
Ciencia Naturales y su enseñanza en Profesores de Educación Primaria.
Revista Electrónica de Enseñanza de las Ciencias, 7(3), 539-568.
Recuperado
https://reec.uvigo.es/volumenes/volumen7/ART3_Vol7_N3.pdf
García-Martín, N., Pinedo, R. Caballero, C., y Cañas, M. (2020). Inclusión
educativa a través del aprendizaje basado en juegos de mesa. Educación
para el bien común: Hacia una práctica crítica, inclusiva y
comprometida socialmente (Coord.) Enrique Javier Díez Gutiérrez, Juan
Ramón Rodríguez Fernández (pp. 819-827).
González-Galli, L. (2016). El problema de la teleología y la metáfora del diseño
en biología: cuestiones epistemológicas e implicancias didácticas. Tecné
Episteme y Didaxis: Ted, 40, 149-173.
https://doi.org/10.17227/01203916.6151
Manassero-Mas, M.A. y Vázquez-Alonso, A. (2020). Evaluación de destrezas de
pensamiento crítico: Validación de instrumentos libres de cultura. Tecné,
Episteme y Didaxis: ted, (47), 15-32.
https://doi.org/10.17227/ted.num47-9801
Nieto, S. (ed.) (2010). Principios, métodos y técnicas esenciales para la
investigación educativa. Madrid: Dykinson.
Ritchhart, R., Church, M., y Morrison, K. (2011). Making Thinking Visible. How
to Promote Engagement Understanding, and Independence for All
Learners. United States of America: Wiley.
Schleicher, A. (2016). Desafíos para PISA. RELIEVE, 22(1).
https://bit.ly/31dkXOp
UNESCO (2015). Replantear la educación. ¿Hacia un bien común mundial?
Paris, France: UNESCO.
‒ ‒
CAPÍTULO 6
1. INTRODUCCIÓN
Los libros de texto siguen siendo todavía el material docente más usado
(Braga y Belver, 2016, Martínez y Rodríguez, 2010 y Area, 2009), pese
a la existencia de otros recursos procedentes del desarrollo de las Tec-
nologías de la información y la comunicación (TIC) (Martínez y Rodrí-
guez, 2010).
Como indican Perales y Cañal (2000), Braga y Belver (2016) y Pérez-
Martín et al. (2019) aunque los libros de texto están cuestionados y son
un punto de desencuentro de familias, profesores o políticos, “quizás la
solución no está en satanizarlos, sino en formar al profesorado en su
análisis, así como en el diseño de materiales alternativos o complemen-
tarios al libro de texto” (Braga y Belver, 2016, p.202).
Enfocándonos en este aspecto es dónde ubicamos el estudio que se
muestra en esta investigación, en el que se analizan las estrategias de
pensamiento de maestros en formación. Los alumnos de los Grados de
Educación deberían aprender a buscar en primer lugar dentro de los
elementos que conforman un libro de texto, aquellas fortalezas y debi-
lidades que los integran, luego a seleccionar aquellas cuestiones priori-
tarias que deben o no estar, tras ello deberían saber analizar crítica-
mente la información obtenida e integrar esta en sus estructuras
‒ ‒
cognitivas para de ese modo, poder discernir de modo fundamentado
que criterios deben de ser los centrales para permitirles elegir el mejor
libro de texto de Ciencias de la Naturaleza.
‒ ‒
metodológico ya que en la mayoría de los casos los libros digitales re-
producen los contenidos y metodologías de los libros en papel, permi-
tiendo únicamente el acceso a estos libros a través del ordenador o ta-
blet y aportando únicamente algunos contenidos interactivos (Braga y
Belver, 2016).
‒ ‒
actividades que se basen en imágenes y que fomenten la reflexión. Otro
aspecto importante sería el de evitar la copia de imágenes que se suele
mandar en niveles inferiores ya que esta copia acaba siendo un proceso
mecánico en el que no se aprende.
También, por último, entorno a las imágenes, López y Postigo (2016),
afirman que el uso de imágenes más realistas no es sinónimo de una
mejor comprensión, sino que los alumnos pueden tener problemas para
su entendimiento. En consecuencia, la prioridad de las ilustraciones
debe ser la comprensión por parte de los alumnos y no tanto una abso-
luta fidelidad a la realidad, sin perder nunca el rigor científico.
Para finalizar esta caracterización de los criterios que es fundamental
que aparezcan en los libros de texto de ciencias, Pérez-Martín et al.
(2019) se centran en concreto en uno de los aspectos más importantes
de los libros de texto de ciencias que son las preguntas. En los libros de
texto más recientes pertenecientes a la LOMCE han encontrado la pre-
sencia tanto de preguntas de facto como de proceso, lo cual hace que
exista un equilibrio entre aprendizaje memorístico y aplicación de co-
nocimientos, cuestión que plantean como objetivo prioritario de los li-
bros.
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
suelen pararse a cuestionarlos. Dicho guion se dividió en dos partes di-
ferenciadas: un organizador y unas preguntas abiertas.
El organizador gráfico contenía las cinco dimensiones más relevantes
sobre las cuales se quería que se centrasen los discentes.
En estas cinco dimensiones se integraron las diferentes categorías o
items concretos que se pretendía que estudiaran los alumnos: estructura,
contenidos, ilustraciones, actividades y lenguaje.
En la dimensión estructura, se les propuso que analizaran:
‒ La existencia de relación entre contenidos, temas y bloques de
temas
‒ La adecuación de la estructura de los temas y si se podía iden-
tificar las secuencias de desarrollo permitiendo identificar la
metodología.
En la dimensión contenidos se les pidió analizar:
‒ La presencia de contenidos conceptuales, procedimentales y
actitudinales.
‒ La existencia de una adecuación a los objetivos y contenidos
de la legislación.
‒ El porcentaje estimado de los contenidos trabajados que se co-
rresponde con los marcados por la legislación.
‒ La conexión clara con el entorno del alumnado.
‒ Las relaciones interdisciplinares: áreas transversales y CTS
(Ciencia, Tecnología y Sociedad).
‒ El planteamiento de una visión sobre la Ciencia y la Historia
de la ciencia.
‒ La actualización científica.
‒ La existencia de errores conceptuales.
‒ La presentación de contenidos adaptados a distintos niveles de
desarrollo cognitivo.
‒ ‒
Respecto a la dimensión de actividades, las cuestiones sobre las cuales
se les pidió que se centraran fueron:
‒ Adecuación a los objetivos marcados por la legislación de las
competencias.
‒ Tipología de las actividades: dirigidas (en función de las ins-
trucciones para su resolución), diferentes tipos de actividades
(síntesis, ampliación, etc.), con diferentes grados de compleji-
dad, presentación de actividades experimentales, plantea-
miento de actividades grupales.
‒ Oferta de recursos didácticos.
‒ Adecuación al contexto del alumno.
La cuarta dimensión analizada fueron las ilustraciones, para ello se les
planteó estudiar:
‒ Si poseían una función didáctica.
‒ Si la iconicidad era adecuada.
‒ La relación con el texto principal.
‒ La presencia de etiquetas verbales.
‒ El porcentaje aproximado de la superficie del tema que es ocu-
pada por las ilustraciones y el porcentaje que se ocupa por el
texto escrito.
‒ La existencia de errores conceptuales.
‒ ‒
Con el objeto de realizar un análisis de los libros de texto más completo
basado en el contenido consignado en el organizador, se decidió utilizar
la destreza de pensamiento compara y contrasta, debido a lo cual tuvie-
ron que analizar dos libros y además comparararlos.
De este modo el organizador gráfico respondía a la estructura que se
presenta en la tabla 1
Compara contrasta
Libro 1 Criterios Libro 2
Estructura
Categoría/Item 1,2, 3…
Contenidos
Categoría/Item 1,2, 3…
Actividades
Categoría/Item 1,2, 3…
Ilustraciones
Categoría/Item 1,2, 3…
Lenguaje
Categoría/Item 1,2, 3…
Como segunda parte del guion de análisis, se les plantearon una serie
de preguntas abiertas, como: ¿cuál era el mejor libro?, ¿por qué?, ¿qué
cuestiones eran prioritarias? ¿qué carencias encontraban? Y qué pro-
puestas de mejora planteaban en función de las carencias.
Estas preguntas abiertas buscaban la reflexión del alumno y el uso de
estrategias de pensamiento.
‒ ‒
Los libros de texto analizados por los alumnos abarcaban el periodo
completo de educación Primaria de 1ºa 6º, presentándose agrupados por
curso, de modo que cada grupo libremente debía escoger dos libros del
mismo curso.
3.4. Instrumentos
‒ ‒
TABLA 2. Lista de cotejo de las dimensiones integradas en el organizador
Respuestas estudiantes
Respuestas estudiantes Grado
Programa estudios simul-
Categoría Educación Primaria
táneos
Grupos 1-16
Grupos 1-8
Criterios prioritarios
para elegir libro
Carencias más im-
portantes
Propuestas de me-
jora
Reflexiones finales
4. RESULTADOS
‒ ‒
4.1. RESULTADOS OBTENIDOS A PARTIR DEL ORGANIZADOR
‒ ‒
Con respecto a la categoría, presencia de contenidos conceptuales, pro-
cedimentales y actitudinales, los alumnos no han presentado una opi-
nión homogénea analizando los mismos libros, un tercio afirmaban que
si estaban presentes los tres tipos de contenidos y los dos tercios restan-
tes consideraron que se centraban los libros en los conceptuales y que
los actitudinales no se presentaban o lo hacían en escasa medida.
En cambio, la gran mayoría (21 de los 24 grupos) han afirmado que el
contenido de los libros de texto, sí, estaba adecuado a los objetivos y
contenidos de la legislación.
En cuanto al porcentaje de contenidos que aparecen en los libros sobre
los indicados en la legislación, respecto a los libros de las editoriales
Anaya, Santillana y Edelvives los alumnos consideran que están pre-
sentes la gran mayoría de los contenidos, proponiendo porcentajes entre
el 90 y el 100% y en cambio en las editoriales Edebé y Vincens Vives
consideraron que solo están presentes entre el 60 y el 75% de los con-
tenidos marcados por la legislación.
Otra de las cuestiones que se les pidió analizar fue si existía una cone-
xión clara de los contenidos con el entorno, de nuevo en esta cuestión
hubo unanimidad y exceptuando 1 grupo todos afirmaron que sí existía
esa conexión, ya que por ejemplo presentaban imágenes reales que se
correspondían al entorno del alumno, o contenidos, situaciones y obje-
tos de su vida cotidiana.
También se observa una unanimidad en la ausencia, según los alumnos
de planteamientos CTS o aspectos relativos a la historia de la ciencia,
los primeros no aparecen y los segundos solo lo hacen de manera anec-
dótica.
Con respecto a la existencia de relaciones interdisciplinares que conec-
ten áreas transversales a través del tratamiento de los contenidos en los
libros 20 de los 24 grupos manifestaron esa existencia a través del tra-
bajo de la comprensión lectora fundamental para entender contenidos,
en algún caso la expresión oral y/o escrita, el planteamiento del uso de
las Tecnologías de la Información y la Comunicación y la Educación
cívica trabajada según los alumnos por ejemplo en la concienciación
ambiental o en el uso responsable de las máquinas y sus actividades.
‒ ‒
La visión de la Ciencia, otra de las categorías analizadas, sí se considera
presente en los contenidos al explicar y plantear el uso del método cien-
tífico y con el uso de vocabulario técnico a lo largo de los libros de
texto.
La actualización científica de los contenidos es otra de las categorías en
la cual ha existido un acuerdo casi total, considerando los alumnos que
los libros de texto sí están científicamente actualizados, exceptuando
cuestiones como la presencia de herramientas tecnológicas ya obsoletas
o la ausencia de ciertas energías renovables que si están presentes ac-
tualmente en nuestro entorno.
Todos los grupos, también han estado de acuerdo en la ausencia de erro-
res conceptuales en los contenidos y la gran mayoría (20 grupos) han
opinado que existía una falta de contenidos adaptados a diferentes ni-
veles cognitivos.
‒ ‒
Además, según el análisis de los alumnos todos los libros de texto pre-
sentan actividades con distintos grados de complejidad, afirmando los
alumnos cuestiones como: “a lo largo del tema podemos observar como
las actividades aumentan en dificultad adecuándose al aprendizaje”, o
“las actividades de relacionar son más simples, que las de completar y
estas a su vez son más simples que las investigar”.
Asimismo, casi todos los grupos han encontrado la presencia de recur-
sos didácticos en las actividades, estando estos en forma de links, imá-
genes, audios o pegatinas adhesivas. Únicamente se ha visto una escasa
presencia de recursos didácticos en los libros del primer curso.
En relación con, la adecuación de las actividades al contexto del
alumno, también afirman en su mayoría, que sí están adecuadas al “apa-
recer numerosas actividades que están relacionadas con el entorno del
alumno: familiares, colegio, naturaleza, …” o “las ejemplificaciones
aportadas están referidas al contexto real del alumno”.
Por último, también coinciden en afirmar la carencia generalizada de
actividades experimentales, que o bien, no aparecen o son escasas y la
ausencia también de actividades grupales, que de existir no son nunca
mayoritarias, priorizándose la propuesta de actividades individuales
para realizar por parte del alumnado de Educación Primaria.
‒ ‒
En cuanto a la categoría que les pedía averiguar si tenían relación con
el texto principal, aunque en su mayoría consideran que esto es así ya
que “en todo momento las imágenes y el contenido teórico están inter-
relacionados y presentan un vínculo”, sin embargo, un pequeño número
(2 grupos), consideran que las imágenes en sus libros “están relaciona-
das con las actividades y sirven de ejemplo”.
La totalidad de los alumnos, han considerado igualmente, que dichas
ilustraciones, presentan siempre etiquetas verbales, bien de tipo sencillo
indicando debajo de la imagen a que corresponden estas o más comple-
jas indicando los diferentes elementos de la imagen.
En ningún caso han encontrado errores conceptuales en las imágenes.
Para terminar este apartado, resaltar que los futuros maestros han en-
contrado mayoritariamente que las ilustraciones ocupan más espacio
que el texto en los libros de texto, siendo los porcentajes mayoritarios
un 60% de imágenes y un 40 % de texto, aunque los libros de los niveles
más bajos como primero y segundo de Primaria presentan un mayor
porcentaje de ilustraciones, llegando estas a ocupar hasta un 80% del
espacio.
‒ ‒
encontrado su presencia en los libros de texto, exceptuando en un caso
correspondiente a la editorial Edebé.
‒ ‒
Presentar diferentes técnicas de es- Presencia de adaptaciones significati-
tudio vas para adecuar a los distintos nive-
Adecuación en cuanto a las activida- les de desarrollo cognitivo
des y lenguaje a la etapa educativa Índice y libro estructurado
propuesta
Ausencia de diferentes contenidos,
Falta de contenidos, focalizada
que no poseen distintos niveles de
normalmente en los bloques 4 y 5
dificultas que permitan adaptarse a
del currículo
los distintos ritmos de trabajo
Falta de implementación del mé-
Uso escaso de las TIC
todo científico y de actividades de
Falta de promoción del pensa-
tipo experimental que fomenten el
miento crítico y de las rutinas de
espíritu crítico
pensamiento
Carencias más Falta de glosarios explicativos del Carencia de aspectos de historia de la
vocabulario
importantes Planteamiento de excesivas acti- ciencia
Planteamiento de pocas activida-
vidades de tipo individual
des grupales
Ausencia de una visión sobre la
Proponer actividades del mismo tipo
ciencia y su historia
de manera constante
Carencia del desarrollo del respeto a
Deficiencia en actividades manipu-
los animales
lativas o de experimentación
Deficiencia de contenidos interdisci-
Deficiencia de contenidos interdiscipli-
plinares
nares
Inclusión de un glosario
Incremento de actividades coope- Combinar el libro con salidas didácti-
rativas cas, rutinas de pensamiento material
Incluir más actividades que no es- manipulativo
tén dirigidas y permitan la indaga- Actualización de metodologías
ción y exploración Separación de temas para darlos con
Propuestas de Incluir experimentación en cada mayor profundidad
tema Ilustraciones más llamativas
mejora Cuadros de resumen en cada apar- Ampliar los índices para dejar claro de
tado trata cada tema
Introducir cada tema con una contex- Promover el desarrollo emocional del
tualización histórica del tema a tratar alumnado
Mayor número de ejemplos de cada Establecer conexiones con el entorno
contenido concreto del centro
Usar el modelo por descubrimiento
Todos los libros tienen puntos No es adecuado ceñirse solo al libro
fuertes, pero ninguno se consi- de texto
dera perfecto Son un recurso escaso para traba-
Deberían ser solo una mera guía y jar el entorno del alumno
Reflexiones fi- no ser el principal recurso El docente tiene un papel fundamental
nales A veces existe un exceso de imáge- para adaptar el libro y trabajarlo de
nes modo más práctico para hacer la asig-
Introducir la reflexión a partir de natura experimental
los libros por parte del docente es Son herramientas muy útiles para los
algo imprescindible maestros
‒ ‒
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
‒ El poseer más contenidos y que además estos sean impartidos
con mayor profundidad, los alumnos piensan que esta cuestión
podría estar ayudada si se divide en un mayor número de te-
mas y estos son más extensos. Solo algunos grupos no priori-
zan la cantidad de contenidos, sino que dan mayor importancia
a dar menos y de una manera más consciente.
‒ La presencia de contenidos actitudinales y procedimentales,
además de los conceptuales que suelen ser los mayoritarios.
‒ La propuesta de experimentos y el trabajo del método cientí-
fico, para así dotar de una correcta visión de la ciencia.
‒ La presencia de actividades que generen pensamiento crítico
y el uso de rutinas de pensamiento para hacer el pensamiento
visible y que se pueda poner de manifiesto los movimientos
de pensamiento usados.
‒ El mantenimiento de una relación con el entorno de los niños,
tanto de los contenidos, actividades, las ilustraciones o los
ejemplos.
‒ Ilustraciones llamativas, coloridas y expresivas, facilitando,
por tanto, el entendimiento de conceptos.
‒ La presencia de diferentes tipos de actividades, que no estén
excesivamente dirigidas, con complejidades distintas, que
sean además dinámicas generando la participación autónoma
y activa del alumnado.
‒ La presencia de otros recursos didácticos en forma de TIC.
‒ La propuesta de realización de trabajos en grupo, afirmando
que existe un excesivo planteamiento del trabajo individual,
de modo que la realización de proyectos cooperativos se hace
imprescindible.
‒ La presencia de la interdisciplinariedad para trabajar cuestio-
nes importantes como el respeto a las diferencias o el respeto
al entorno natural.
‒ El tratamiento de la historia de la ciencia.
‒ La presentación de diferentes técnicas de estudio, glosarios
explicativos del vocabulario, cuadros de resumen en cada
apartado, mayor número de ejemplos de cada contenido, todas
‒ ‒
ellas cuestiones que se consideran facilitarían el proceso de
enseñanza aprendizaje.
‒ ‒
7. REFERENCIAS
Abela, J.A. (2002). Las técnicas de análisis de contenidos: una revisión
actualizada. Fundación Centro de Estudios Andaluces.
ANELE. (2019). El libro educativo en España. CEDRO. https://anele.org/wp-
content/uploads/2019/09/190905INF-ANELE-Informe-Libro-Educativo-
19-20.pdf.
Area, M. (2009). Introducción a la Tecnología Educativa. Universidad de la
Laguna. https://campusvirtual.ull.es/ocw/file.php/4/ebookte.pdf.
Braga, G. y Belver, J.L. (2016). El análisis de libros de texto: una estrategia
metodológica en la formación de los profesionales de la educación.
Revista Complutense de Educación, 27(1), 199-218.
https://revistas.ucm.es/index.php/RCED/article/download/45688/47915/
Del Carmen, L. (2001). Los materiales de desarrollo curricular: un cambio
imprescindible. Revista Investigación en la Escuela, 43, pp.51-61.
López, P.L. (2004). Población muestra y muestreo. Punto Cero, 09(08), 69-74.
http://www.scielo.org.bo/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1815-
02762004000100012&lng=es&tlng=es.
López-Manjón, A. y Postigo, Y. (2016). ¿Qué libro de texto elegir? La
competencia visual en las actividades con imágenes. Revista Eureka
sobre Enseñanza y Divulgación de las Ciencias, 13 (1), 84-101.
http://hdl.handle.net/10498/18016.
Martínez, J. y Rodríguez, J. (2010). El curriculum y el libro de texto escolar. Una
dialéctica siempre abierta. En Gimeno, J. (COMP), Saberes e
incertidumbres sobre el currículum. (pp. 246-268). Morata.
Ocelli, M. y Valeiras, N. (2013). Los libros de texto de ciencias como objeto de
investigación: Una revisión bibliográfica. Enseñanza de las Ciencias,
31(2), pp. 133-152.
https://raco.cat/index.php/Ensenanza/article/view/285774/373774.
Perales, F.J. y Cañal, P. (2000). Didáctica de las ciencias experimentales. Marfil.
Pérez-Martín, JM., Calurano-Tena, MT., Martín-Aguilar, C., Esquivel-Martín, T.
y Bravo-Torija, B. (2019). Preguntas en los libros de texto de Ciencias
Naturales de Educación Primaria: ¿Procesando o reproduciendo
contenidos? ReiDoCrea, 8, 186- 201. https://www.ugr.es/~reidocrea/8-
16.pdf.
Ruiz-Bolivar, C. (2013). Instrumentos y técnicas de investigación educativa: Un
Enfoque Cuantitativo y Cualitativo para la Recolección y Análisis de
Datos. Danaga [Kindle].
‒ ‒
CAPÍTULO 7
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
la sociedad en la que nos encontramos. Estas competencias desde el
punto de vista educativo se clasifican en competencias TIC y compe-
tencias de alta habilidad. Con respecto a las primeras, están conforma-
das por competencias pedagógicas, tecnológicas y éticas (Díaz-García
et al., 2016) y con relación al segundo tipo de competencias compren-
den “pensamiento crítico, pensamiento creativo, aprendizaje autoges-
tionado, resolución de problemas, la adaptabilidad, habilidades de co-
municación, y las habilidades interpersonales y de trabajo en grupo”
(Almerich et al., 2020, p. 48-49).
Este trabajo presenta los resultados de una actividad llevada a cabo por
estudiantes del grado de Maestro en Educación Primaria y del Programa
de Estudios Conjuntos (PEC) en la que se aborda el análisis de movi-
mientos de pensamiento presentes en la creación de podcast desarrolla-
dos por futuros docentes para responder a preguntas “curiosas” sobre
ciencias experimentales realizadas por alumnos de Educación Primaria.
Tal y como indican Ritchhart et al., (2014), se debe tener en cuenta que
el aprendizaje es producto del pensamiento. Por lo tanto, el proceso
educativo debe centrarse en el alumno y su pensamiento, teniendo en
cuenta que a pensar se debe aprender y se debe enseñar. Los docentes
piden constantemente a sus alumnos que piensen. Sin embargo, la pa-
labra pensar abarca una serie de procesos mentales muy amplios que no
siguen un orden concreto. Además, la investigación esclarece que la
mayoría de las personas no son conscientes de cómo se produce su pen-
samiento.
‒ ‒
Para dar respuesta a estas necesidades surge de la mano de autores como
Perkins, Ritchhart o Thisman el Proyecto Zero de la Universidad de
Harvard que desarrolla el pensamiento visible. El enfoque del pensa-
miento visible es un marco conceptual cuyo objetivo es integrar el desa-
rrollo del pensamiento de los estudiantes con el aprendizaje de los di-
ferentes contenidos curriculares en cualquier etapa educativa (García-
Martín y Gil, 2020).
Estos autores afirman que el pensamiento visible permite introducir en
el aula estrategias para la adquisición de competencias, en especial el
aprender a aprender (y a pensar) para asegurar un aprendizaje profundo
y permanente.
La visibilización del pensamiento promueve que los alumnos adquieran
un mayor dominio de los procesos mentales al externalizarlos y facilita
la comprensión al trabajar desde enfoques observables. Para implemen-
tar esta metodología es necesario que los docentes comprendan el pen-
samiento, y las habilidades y fuerzas culturales para crear una cultura
de pensamiento en el aula en la que se visibilice, fomente, detecte, re-
salte, valore y enseñe el pensamiento.
Los docentes deben desarrollar su habilidad y comprender que los mo-
vimientos del pensamiento deben enseñarse progresiva, consciente y
sistemáticamente (García-Martín y Gil, 2020). Partiendo de estas pre-
misas, Ritchhart et al, (2014) establecen movimientos del pensamiento
(tabla 1) válidos para cualquier disciplina y con niveles de pensamiento
cada vez más profundo.
‒ ‒
MOVIMIENTOS DEL PENSAMIENTO
Observar de cerca y describir qué hay ahí́
Construir explicaciones e interpretaciones
Razonar con evidencia
Establecer conexiones
Tener en cuenta diferentes puntos de vista y perspectivas.
Captar lo esencial y llegar a conclusiones
Preguntarse y hacer preguntas
Descubrir la complejidad e ir más allá de la superficie
Fuente: elaboración propia siguiendo la obra de Ritchhart et al. (2014)
2. OBJETIVOS
‒ ‒
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
El procedimiento de evaluación es acorde con el modelo didáctico y
principios educativos, pues pretende ser integral, formativo, formador,
participativo y continuo. Ello implica que la evaluación se integra con
el resto del proceso didáctico y el contexto educativo promoviendo me-
jora continuada del proceso de enseñanza-aprendizaje.
Los trabajos efectuados por el alumnado son evaluados por las profe-
soras (heteroevaluación) y de forma paralela por los alumnos (autoeva-
luación) en base a una rúbrica que contiene los criterios de evaluación
que ser muestran en la tabla 2. Dichos criterios son previamente fijados
y el estudiante los conoce con anterioridad al inicio de la actividad.
Calidad de los movimientos del pensamiento que se han incluido. Si se han in-
cluido de forma adecuada o no (por ejemplo, se hacen preguntas, pero las pre-
guntas son de localización y superficiales. En este caso el movimiento del pen-
samiento está presente pero no es adecuado o correcto)
Creatividad e innovación
Adaptación al nivel psicoevolutivo.
Validez o adecuación del contenido del podcast.
Interés divulgativo y social
Formato (tiempo/calidad de sonido, locución, fluidez y claridad verbal, lenguaje
adecuado al contexto, etc.)
‒ ‒
principales retos a los que se enfrenta esta disciplina es hacer frente a
las dificultades que plantea la creación y difusión de propuestas alter-
nativas a la forma tradicional de enseñar las ciencias y al fracaso escolar
que ello genera.
En el caso concreto del estudio que se presenta, los podcasts son elabo-
rados por los alumnos de Didáctica de las Ciencias Experimentales de
tercer curso de los grados de Educación Primaria y el Programa de Es-
tudios Conjuntos (PEC) de la Facultad de Educación de Segovia y par-
ticipan un total de 97 estudiantes divididos en 23 grupos de trabajo.
‒ ‒
TABLA 3. Selección de preguntas
‒ ‒
Finalmente, las docentes seleccionan los podcasts que cumplen en ma-
yor grado los criterios de evaluación (tabla 2) para ser compartidos por
las RRSS del Proyecto de Innovación Docente Pensamiento Visible y
Nuevas Tecnologías en Educación.
4. RESULTADOS
‒ ‒
menos frecuencia aparece es el de observar de cerca y describir qué hay
ahí, quizás condicionado por el formato final (audio mp3).
‒ ‒
G1 “Cuando lo tengáis atado haced girar la bola sujetando el otro ex-
tremo de la cuerda”
G4 “El azul del cielo varía según la hora del día ¿qué pensáis?”
‒ ‒
Algunos ejemplos estas ideas son:
G1 “ [….] sólo hace 100 años, por lo tanto, los datos que se obtuvieron
antes son cálculos aproximados.
G5 “Fue tan fuerte, que lo llegaron a percibir en diferentes partes del
planeta, provocando un hundimiento, la erupción de un volcán y un
tsunami en el Océano Pacífico”
‒ ‒
4.5 CATEGORÍA 5. TENER EN CUENTA DIFERENTES PUNTOS DE VISTA Y
PERSPECTIVAS.
‒ ‒
G6 “Tras haber escuchado estas alegaciones doña Ojín, ¿qué puede
decirnos…?”
4.7 CATEGORÍA 7. PREGUNTARSE Y HACER PREGUNTAS
‒ ‒
G1 “En realidad existe una fuerza que mantiene a la luna a una distan-
cia de la Tierra. Puede ser algo parecido a un hilo invisible que no
podemos ver”
G3 “¿Y eso lo has comprobado?
En lugar de aceptar respuestas fáciles, se observa un esfuerzo por iden-
tificar la complejidad de las ideas, en esta complejidad se encuentra la
riqueza y el suspense que define como aprendices.
5. CONCLUSIONES
‒ ‒
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Ritchhart, R., Church, M., & Morrison, K. (2014). Hacer visible el pensamiento:
cómo promover el compromiso, la comprensión y la autonomía de los
estudiantes. Paidós.
Ritchhart, R., Church, M., y Morrison, K. (2011). Making Thinking Visible. How
to Promote Engagement Understanding, and Independence for All
Learners. Wiley.
Ruíz, J. (2012). Metodología de la investigación cualitativa. Universidad de
Deusto
Schleicher, A. (2016). Desafíos para PISA. RELIEVE, 22(1).
https://bit.ly/31dkXOp
UNESCO (2015). Replantear la educación. ¿Hacia un bien común mundial?
UNESCO.
‒ ‒
CAPÍTULO 8
NATALIA SERRANO
Universidad Internacional de la Rioja (UNIR)
ANA ISABEL MANZANAL
Universidad Internacional de la Rioja (UNIR)
ADÁN YANES
Colegio Salesianos-La Orotava
MARÍA JOSÉ CUETOS
Universidad Internacional de la Rioja (UNIR)
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
1.1. APLICACIONES EDUCATIVAS DE LAS REDES SOCIALES EN EL AULA
Las redes sociales (RRSS) son consideradas como una estructura rela-
cional entre usuarios a través de Internet, cuya finalidad es permitir a
las personas comunicarse, compartir contenidos y opiniones y, cons-
truir comunidades. En una sociedad digitalizada como la nuestra, las
RRSS también están presentes en el aula, y en la actualidad, hay des-
critas bastantes experiencias sobre su incorporación en los contextos
formativos de todos los niveles educativos.
Las RRSS son reconocidas como una herramienta con gran potencial
educativo, ya que generalizan el acceso a la información, facilitan la
comunicación y estimulan el aprendizaje colaborativo entre los estu-
diantes. De hecho, la configuración de redes de trabajo y de intercambio
de información, como ficheros y links, resultan de gran utilidad para el
docente a la hora atender las necesidades del ámbito educativo, sin que
afecten las barreras espacio-temporales (Calderón-Garrido et al., 2019),
además de conseguir los objetivos académicos y mejorar la comunica-
ción horizontal entre profesores y alumnos.
Desde la implantación de Espacio Europeo en Educación Superior se
han primado el uso de las TIC, el aprendizaje cooperativo y autónomo
en las aulas universitarias (Muñoz et al., 2013), lo que ha supuesto una
transformación de la universidad, donde el modelo de enseñanza ba-
sado exclusivamente en las clases magistrales, antes mayoritario, se
combina ahora con modelos, metodologías y estrategias basadas en la
participación del alumno y el trabajo cooperativo para alcanzar el cre-
cimiento personal y académico del alumno. En este sentido, los profe-
sores universitarios deben aprovecharse del atractivo y del impacto de
las RRSS en los jóvenes como herramientas de comunicación e inter-
acción para innovar y enriquecer sus diseños de procesos de enseñanza-
aprendizaje en los entornos virtuales, y así finalmente lograr una edu-
cación de mayor calidad (Calderón-Garrido et al., 2019). De hecho, los
estudiantes universitarios, aunque declaran que mayoritariamente el
uso de las RRSS está dirigido a su vida personal y ocio, manifiestan
claramente una actitud positiva y favorable hacia su uso como metodo-
logía didáctica en el ámbito universitario (Rodríguez et al., 2017).
‒ ‒
Por otro lado, las RRSS contribuyen a la construcción del conocimiento
compartido a través de comunidades o grupos de la red. Esta forma de
trabajo provoca que el aprendizaje se acelere. Estos procesos activos,
enfocados hacia la adquisición de competencias y estrategias cognitivas
de alto nivel, conllevan que el estudiante emplee habilidades de bús-
queda de información, análisis, síntesis, metaevaluación y construcción
del mensaje sobre las informaciones y feedback que publicará en el
grupo (Martínez et al., 2013).
Y, por último, las RRSS posibilitan a las instituciones educativas el
crear un entorno tecnológico de comunicación multimedia, donde, a
modo de repositorio, localizar distintos recursos y objetos de aprendi-
zaje como vídeos, podcast, tutoriales, direcciones web, etc., de modo
que los participantes almacenan e intercambian información de forma
sencilla, rápida e interactiva, en variedad de soportes en función de sus
preferencias y habilidades cognitivas (Vázquez-Martínez y Cabero-Al-
menara, 2015).
‒ ‒
En cuanto a su tipología, Vázquez-Martínez y Cabero-Almenara (2015)
recogen que “hay una gran variedad de RRSS en función de su temática,
estructura y grado de libertad a la hora de participar: generalistas, espe-
cializadas, tematizadas; horizontales y verticales; abiertas y cerradas;
centralizadas y descentralizadas; rígidas y flexibles” (p. 256). Cada tipo
generará distintos comportamientos, e irán desde el máximo control por
parte del profesor de quién, cuándo y en qué condiciones se puede par-
ticipar, con un número limitado de miembros, hasta otras donde el
alumno se convierte en un actor clave en el desarrollo y mantenimiento
del grupo (García-Valcárcel, 2013).
En la práctica docente las RRSS facilitan el visualizar y compartir in-
tereses, favoreciendo la comunicación entre los estudiantes y entre el
profesor con sus estudiantes sin limitación geográfica. Además, son
adaptables a cualquier asignatura o curso, sin limitaciones en cuanto al
número de usuarios conectados, lo que permite un elevado grado de
interactividad, un feedback o intercambio de datos simultáneo, ahorro
de tiempo y fácil acceso (Rodríguez et al., 2017).
‒ ‒
tiene una influencia positiva tanto para la interacción de los estudiantes
en las tareas grupales como de apoyo emocional intragrupal, lo que a
su vez se traduce en un apoyo significativo para el fomento del apren-
dizaje colaborativo (Hernández et al., 2019; Kwon et al., 2014).
La penetración, en particular de Facebook (FB), en la comunidad estu-
diantil es una realidad. FB forma parte de la vida de los discentes y de
su gestión cotidiana y se convierte, por tanto, en una forma de acerca-
miento del docente a los intereses personales y académicos de los alum-
nos (Fondevila et al., 2015). De aquí radica la elección de FB como red
social para el estudio, ya que el objetivo es seleccionar herramientas
colaborativas para sostener la resolución de problemas, integrando los
recursos sociales que faciliten el aprendizaje (Pachler et al., 2010).
‒ ‒
como el saber elegir las estrategias adecuadas para llegar a sus alumnos
y aplicar modelos de enseñanza activos (Steinmann et al., 2013). Ade-
más, no podemos olvidar el componente emocional, ya que “la ciencia
debe emocionar para estimular el aprendizaje significativo en el alum-
nado” (Talavera et al., 2018, p.472). Es por ello vital que los propios
docentes sepan transmitir una actitud positiva hacia las ciencias a sus
alumnos.
García (2015) afirma que “una parte importante de los aprendizajes se
adquieren a través de la memoria visual” (p. 53) y ahí es donde entran
en juego las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC).
En concreto, el uso de las redes sociales se ha configurado como un
recurso didáctico que implica al alumnado en el abordaje del estudio
del contenido de una forma significativa (Hortigüela y Pérez, 2015). En
la misma línea, Peinado y Navarro (2014) encontraron que alumnos de
secundaria al usar redes sociales tenían mayor motivación, lo que re-
dundaba en una mejora en su rendimiento académico.
‒ ‒
amigos, lo que conlleva a un filtrado y sesgo de información (Thurman
y Schifferes, 2012). Por otro lado, es más fácil la distorsión y mutación
de la información, requiriendo que el usuario tenga la capacidad de de-
tectar la información errónea y la desinformación (Shao et al, 2017;
Kong et al., 2021). Por ello, el docente debe de asegurarse de tener y de
dotar a su alumnado de competencias tecnológicas y digitales.
Según de Valverde-Crespo et al. (2020) “Internet es la primera fuente
de información sobre ciencia y tecnología y la adquisición de las com-
petencias parar utilizar una herramienta tan asentada socialmente se
considera deseable para la alfabetización científica de los ciudadanos”
(p.81). En concreto, las RRSS facilitan al alumno el desarrollo de la
competencia investigadora, pues su participación conlleva realizar una
búsqueda sistemática de información sobre un tema, la evaluación y la
selección de fuentes de información, interpretar los resultados de inves-
tigación, procesar la información de forma adecuada, y, finalmente, la
comunicación con otros alumnos y profesores (Haro, 2010).
Además, mediante la cooperación, los alumnos y profesores generan
conocimiento de forma conjunta, pues las RRSS ofrece espacio diná-
mico para interaccionar y discutir controversias, para generar reflexión
sobre las ideas, propias y la de los compañeros (Gómez, et al., 2012),
lo que conlleva un desarrollo de la competencia comunicativa, fortale-
cimiento del pensamiento crítico y un aprendizaje más significativo. Es
frecuente que no se tenga en cuenta en la búsqueda de información la
valoración de la fiabilidad de los sitios web visitados. De hecho, Val-
verde-Crespo et al. (2020) afirman que los adolescentes tienen proble-
mas para justificar si un sitio web es o no fiable, y que esto se relaciona
con su nivel de comprensión sobre cómo se genera conocimiento cien-
tífico. Por otro lado, el hecho de que el alumno indague y dé respuestas
a sus interrogantes, no sólo motiva, sino que desarrolla la competencia
científica, en concreto en relación a su capacidad para obtener informa-
ción relevante para su investigación (Pedrinaci et al., 2012).
‒ ‒
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
3.1. PARTICIPANTES
‒ ‒
participaron en el proyecto 46 alumnos (el 93,48% eran mujeres y el
6,52% hombres) y 3 profesoras. En la tabla 1 se pueden distinguir las
características de los estudiantes en la distinción realizada entre “miem-
bros” y “no miembros” del grupo de Facebook.
‒ ‒
FIGURA 1. Captura de pantalla del grupo de FB “Cienceando”.
‒ ‒
FIGURA 2. Captura de pantalla de dos páginas del portfolio generado.
13 años 33.9%
14 años 3.4%
Mujer 35.6%
‒ ‒
El primer cuestionario estaba diseñado con 24 preguntas y se realizó
para valorar esta iniciativa (se quiso que también fuera contestado por
alumnos que no habían participado en la experiencia, con el objetivo de
conocer los motivos por los cuales había estudiantes que no habían par-
ticipado en el grupo de FB). El segundo cuestionario, constituido por
12 preguntas, se llevó a cabo para evaluar el portfolio y los resultados
de las opiniones de los alumnos de secundaria. En ambos casos se re-
cogía información sobre si los participantes eran o no miembros del
grupo “Cienceando”.
Todos los datos fueron analizados y los gráficos creados con Excel
v19.0.
4. RESULTADOS
‒ ‒
TABLA 3. Comparativa entre alumnos M y NM del grupo de FB.
70% Instagram
No Miembro 80% Adecuado 50% Facebook
30% Twetter
54% Facebook
46% Instagram
Miembro 84% Adecuado
8% Twetter
8% Tik Tok
‒ ‒
en caso de poder publicar ellos mismos la información, y más de la
mitad respondió categóricamente que no (Tabla 4).
Miembros
Utilidad del con- Formato noticias Aspectos que se han echado en falta ¿Habrías parti-
tenido en el cipado más en
contexto diario. caso de poder
Escala Likert publicar?
Útil (3) 23% Vídeos 31% Debates, test, juegos. 23% Tal vez 31%
alumnos
NS/NC 15%
‒ ‒
4.2. EVALUACIÓN DEL PORFOLIO POR LOS ALUMNOS DE SECUNDARIA
Por otro lado, con respecto al formato preferido para ser presentada (o
recibida) la información, el 61% de los alumnos escogió el formato ví-
deo (ver Gráfico 3). Siendo el tema, lo que más les ha animado a selec-
cionar la noticia que más les interesaba (64.4%), seguido del titular
‒ ‒
(50,8%), el formato en el que se presenta (vídeo, lectura, etc.) (42.4%)
y, finalmente, el desconocimiento sobre la información recibida
(37.3%).
GRÁFICO 3. Formato escogido por los alumnos de 1º ESO para recibir las noticias cientí-
ficas.
Formato noticia
70%
60%
50%
40%
30%
20%
10%
0%
Vídeo Escrito Recurso para otras
practicar
‒ ‒
GRÁFICO 4. Porcentajes de los alumnos de 1º ESO a la pregunta “¿Te gustaría recibir este
tipo de información por parte de tus profesores de ciencias?”.
18,60%
5,10%
76,30%
Sí No Tal vez
‒ ‒
TABLA 5. Descripción de los futuros docentes que contestaron el cuestionario.
Los futuros profesores ante las respuestas dadas por los alumnos de Se-
cundaria, explicaron que les había parecido una información útil, sin-
cera y que había conseguido una gran participación. Por otro lado, el
38% de los M y el 50% de los NM se mostraron sorprendidos por las
respuestas que ofrecieron los adolescentes. Entre los aspectos más des-
tacables están la sinceridad expresada por los alumnos de Secundaria,
su nivel de curiosidad, el que les hubiese gustado la misma sección (“La
Tierra en el Universo”, Gráfico 5), que les atrajera más el tema y el
titular, frente a la imagen mostrada en el portfolio, así como que am-
pliasen y entendiesen correctamente la información.
Sección preferida
90%
80%
70%
60%
50%
40%
30%
20%
10%
0%
La Tierra en el Energía Electricidad Química Biología
Universo
‒ ‒
La totalidad de los alumnos que contestaron el cuestionario volvería a
participar (M) o participaría si volviesen atrás en el tiempo (NM). Y
esto concuerda con las reflexiones realizadas sobre la experiencia com-
pleta (grupo de FB más cuestionario a alumnos de Secundaria), ya que
pensaban que era una fuente de motivación para el alumnado, que les
había permitido conocer más sobre los intereses mostrados por los
alumnos de Secundaria, lo que les llevaba a concluir que un docente
necesita investigar no sólo sobre aspectos recogidos en el currículum,
sino también enseñar los conceptos en relación con el contexto coti-
diano del alumnado. Por otro lado, también aluden a la utilidad de las
redes sociales como recurso didáctico, lo que llevó al 100% a contestar
que usaría las redes sociales en su futura labor como docentes.
Con respecto al porfolio, la mayoría adujo que había sido útil para pre-
parar la asignatura, muy interesante y que les daba ideas para poder
llevar a cabo actividades con sus futuros alumnos.
Finalmente, se les preguntó si su actitud hacia las ciencias había cam-
biado tras participar en la experiencia, y el 100% contestó que su actitud
había mejorado sustancialmente, siendo ésta muy positiva (tabla 6).
TABLA 6. Testimonios de los futuros docentes ante su actitud hacia las ciencias tras haber
implementado “Cienceando” y la elaboración del portfolio.
Grupo Miembros
Alumno Comentario
Mi actitud ya era buena, y no ha hecho sino mejorar el concepto que tenia de esta
1
materia y la propia comprensión hacia la misma
Siempre me gustó, pero sin duda cuanto más conocimiento tienes más apasiona. Mi
2 actitud ha mejorado aún más. He dado respuesta a muchas preguntas que antes
eran, un esto ocurre así, sin más, porque sí.
En el instituto fue una de las asignaturas a las que más miedo cogí, pero eso nunca
ha hecho que dejara de impresionarme e interesarme. Gracias a la profesora, y sus
explicaciones, con la que he cursado esta nueva asignatura, mi actitud ha mejorado,
3
puedo decir que incluso ha aumentado mi interés. He conocido cosas que han lle-
gado a fascinarme. Y sí, he podido entender mejor todo lo que sucede a nuestro al-
rededor, gracias a ejemplos y vídeos.
Ha mejorado, he aprendido muchísimas curiosidades y me siento más preparado
4
para enseñar Ciencias Naturales en Primaria.
Ha mejorado claramente, como con la mayoría de las asignaturas que he podido
cursar hasta el momento, he entendido mucho mejor los conceptos que de niña no
5
había llegado a comprender. Además, ahora me doy cuenta de la importancia de
ciertos aspectos.
‒ ‒
Siempre me ha gustado mucho la materia en sí como alumna, pero ahora veo infini-
6
dad de nuevas formas de presentarlo y motivar a los alumnos y alumnas.
Realicé bachillerato de la rama científica (biología, química, física, matemáticas...)
hace muchos años y me dejó con mal sabor de boca porque fue un esfuerzo muy
7 duro en esa época para conseguir aprobarlo todo, pero con esta asignatura, he re-
vivo aquellos estudios, he recordado por qué escogí estudiarlo y la verdad, he vuelto
amar la rama de las ciencias de la naturaleza.
Grupo No Miembros
Alumno Comentario
Antes de comenzar esta asignatura, no me gustaba nada de nada, pensaba que iba
a ser algo aburrido como en el colegio, pero me ha sorprendido para bien, he tenido
ganas de ver las sesiones de participar en las actividades, en preocuparme y buscar
1 información.
Sin motivo alguno buscar para conocer más. Empecé el curso sin saber nada y bási-
camente sin interesarme nada de las ciencias, pero ahora me encanta, y me ha en-
cantado ampliar conocimientos y conocer cosas que no sabía.
No había estudiado nada sobre ciencias desde la EGB. No me gustaban las mate-
máticas ni las ciencias, de hecho, en bachillerato opté por latín y griego. He apren-
2
dido cosas que no sabía. He mejorado gracias a las clases de la profesora y su pa-
ciencia en explicar los temas.
Como en el cuestionario que conteste al principio de curso, decir que las ciencias
también me apasionan y me cuestan a la vez, pero si pudiera elegir qué impartir en
una escuela, sería sin duda ciencias. Por otra parte, dar las Gracias a Natalia la pro-
fesora de Ciencias, por su dedicación y su paciencia, por enseñarnos tu metodolo-
gía de enseñanza, motivación para mí para intentar hacerlo igual que ella. No sólo
nos ha enseñado a lo largo de la asignatura, sino que ha innovado, ha sido practica
3
y dinámica a pesar del inmenso temario siempre ha querido ofrecer un poco más
para estar al día, con el objetivo de hacernos pensar, de ser críticos y tener opinión
sobre la materia. Así que puedo decir que he aprendido en un 200% y que me llevo
más experiencia en mi mochila para poder trasmitirla en un futuro, con la seguridad
que la información recibida es de la calidad.
¡Muchas gracias! Un placer.
Ha mejorado mi actitud hacia las ciencias ya que he tenido curiosidades por ciertos
temas, es cierto que este temario lo hemos dado cado en su momento como alumno
4
de colegio, pero muchas cosas se olvidan, y recordarlo y verlo desde otra perspec-
tiva con una edad diferente ayuda mucho a entender mejor los conceptos.
Debo decir que ha mejorado, puesto que me ha permitido entender muchas cosas
5
de manera más detallada.
Ha mejorado mi actitud hacia las ciencias ya que he tenido curiosidades por ciertos
temas, es cierto que este temario le hemos dado cado en su momento como alumno
6
de colegio, pero muchas cosas se olvidan, y recordarlo y verlo desde otra perspec-
tiva con una edad diferente ayuda mucho a entender mejor los conceptos.
Mi actitud ha mejorado en relación a algunas secciones como la química o la física
que en mí nunca han sido de mucho interés, pero a partir de las explicaciones y los
vídeos que me han proporcionado mis compañeros ha mejorado porque he visto su
7 parte "divertida" e interesante. La verdad es que ahora cuando me da un chispazo
un familiar o veo situaciones naturales que se dan en nuestro día a día digo: ¡ahh!
¡Mira, es por tal razón! Y la verdad es que es gratificante entender el porqué de las
cosas.
Fuente: Elaboración propia.
‒ ‒
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
que aportan las RRSS (Rodríguez et al., 2017). En este sentido, en estu-
dios realizado exclusivamente en estudiantes de magisterio en universi-
dad online (Calderón-Garrido et al., 2019) se recogieron, en la gran ma-
yoría de los encuestados, opiniones favorables al potencial educativo de
Facebook para el aprendizaje académico, pero a la vez, los estudiantes
enfatizan su impresión de que no se les saca el máximo rendimiento en
el entorno estudiado. Desde el punto de vista del profesorado (Rodríguez
et al., 2017) se reconocen las numerosas oportunidades que ofrecen las
RRSS para el aprendizaje, desarrollando capacidades cognitivas de alto
nivel, como razonamiento y síntesis.
En nuestro caso, se seleccionó FB como red social, puesto que es una
de las más populares entre los universitarios (Castañeda, 2010). Los
resultados obtenidos muestran que el uso de FB en los futuros docentes
en la asignatura de Conocimiento de las Ciencias Naturales en Educa-
ción Primaria los llevó a leer no sólo los apuntes de la asignatura antes
de la impartición de la clase teórica, sino que también ampliaron infor-
mación de forma voluntaria. El hecho de que los alumnos cursen el
grado en una universidad online permite que tengan los apuntes desde
el comienzo del curso, pero esto no asegura que los alumnos lean los
apuntes antes de la impartición teórica en la clase. Como se ha visto con
el modelo de clase invertida, donde el alumno trabaja en su casa la teo-
ría (aspectos cognitivos de bajo nivel, como recordar y memorizar) y
en el aula aplica esta teoría (tareas cognitivas de alto nivel como anali-
zar y evaluar) tiene múltiples ventajas entre las que destaca una mejora
en el rendimiento académico, una mayor motivación y mejor autorre-
gulación (Bergmann y Sams, 2012), pero se necesita contar con la co-
laboración del alumnado. La utilización de FB obliga por lo tanto a los
alumnos a leer estos apuntes (el 77% de los alumnos M lo hizo) y, por
lo tanto, permite que trabajemos aspectos relacionados tanto con la mo-
tivación como la autorregulación. De hecho, el que los alumnos lean
los apuntes para buscar información relacionada con el tema a tratar,
les ayuda a ir a clase más preparados y poder resolver las dudas en el
momento, de una forma sincrónica. Por otro lado, el alumno muestra
también autonomía y trabaja su capacidad para seleccionar la informa-
ción, recordando que ésta es una estrategia cognitiva, que permiten in-
tegrar el nuevo conocimiento con el ya presente (Ruiz-Dodobara y
‒ ‒
Escurra-Mayaute, 2013). La sección que más les llamó la atención fue
“la Tierra en el Universo”, a pesar de que en el temario sólo se dedica-
ban 2 clases a la misma, mientras que “Biología”, a la que se dedicaron
4 clases teóricas fue la siguiente y se impartieron al final, muy cerca de
la fecha de exámenes. Esto concuerda con el hecho de que el 71.3% de
las noticias buscadas por los alumnos pertenecen a estas dos secciones.
Este dato denota que los alumnos se sienten motivados a buscar infor-
mación y ampliarla en función de sus intereses (el 92% amplió infor-
mación).
Las RRSS, además, sirven para motivar, debido a la gran interacción
que presentan los usuarios de la misma entre sí. En un estudio previo
realizado a alumnos de la ESO se les preguntaba por las palabras que
definían red social y las 3 palabras más repetidas fueron: persona, gente
y comunicarse (Heredia et al., 2018). En esta misma línea, Del Moral y
Villalustre (2012) entrevistaron a estudiantes de Magisterio con perfil
en RRSS como FB, y se les preguntó sobre su actividad en las mismas,
viéndose que las utilizaban para comunicarse, relacionarse y reali-
zar/programar actividades académicas, asegurando en su mayoría que
FB es un buen recurso didáctico y declarando su intención de usarlas
en el futuro en sus clases. En nuestro caso, los alumnos tienen una edad
media elevada (32 años) y cuando se les preguntó a los futuros profe-
sores cómo mejorarían la experiencia, aunque la mayoría afirmó que,
en nada, un pequeño porcentaje propuso debates, juegos, encuestas que
promovieran más la interacción entre los compañeros, seleccionando
FB e Instagram como dos de las RRSS favoritas para llevar a cabo este
tipo de experiencia. Además, afirmaron en un alto porcentaje de los ca-
sos que FB constituía un recurso didáctico muy útil y el 100% afirmó
que estaría dispuesto a implementarlo en sus clases, a pesar de que el
perfil del alumnado a quien iría dirigido es un alumno de Primaria.
Por otro lado, la búsqueda de información forma parte del método cien-
tífico al intentar dar respuesta a un interrogante, que parte de la curio-
sidad innata del alumno y, además, implica desarrollar tanto la compe-
tencia digital como el pensamiento crítico, siendo prueba de su vital
importancia en la educación universitaria su mención en el comunicado
de la Conferencia Mundial sobre la Educación Superior (UNESCO,
‒ ‒
2009). El alumnado debe buscar en Internet, seleccionar, contrastar, de-
batir y compartir la información (Martínez-Costa et al., 2019), con la
dificultad añadida de que existe una cantidad ingente de información
con sus riesgos intrínsecos, priorizando la información por popularidad
o preferencias de conocidos (Thurman y Schifferes, 2012), así como
evaluar su veracidad, corroborando la utilización de las RRSS como
herramienta para favorecer la búsqueda crítica y eficaz de información
(Lu y Churchill, 2014).
Todas estas capacidades forman parte de las competencias científicas
que deben de desarrollar los futuros docentes. En nuestro caso, el
alumno busca dar respuesta a interrogantes que surgen de la curiosidad
ante el tema a tratar y cuenta con la ayuda del profesor, que recibe la
noticia y comunica al alumno si ésta es fiable, de calidad y por lo tanto
se puede publicar. En nuestro estudio, el 100% de las noticias aportadas
por los alumnos fue válida, fiable y de calidad, respaldando el proceso
de adquisición de estas competencias fundamental para su futura prác-
tica docente imprescindible para garantizar la plena inserción de su fu-
turo alumnado “en la sociedad digital y el aprendizaje de un consumo
responsable y un uso crítico y seguro de los medios digitales y respe-
tuoso con la dignidad humana, la justicia social y la sostenibilidad me-
dioambiental, los valores constitucionales, los derechos fundamentales
y, particularmente con el respeto y la garantía de la intimidad personal
y familiar y la protección de datos personales” (LOMLOE, 2020)
(p.85). Se destaca su predisposición a utilizar YouTube como medio
donde buscar. Este hecho coincidió con que el formato preferido en que
les gusta que se les presente la información sigue siendo el vídeo. Así
mismo, el recopilar noticias de su propio interés en un porfolio, les
ayuda no sólo a trabajar la metacognición, sino a incrementar su moti-
vación por aprender, ya que pueden ver la utilidad de lo estudiado y su
aplicabilidad en su día a día (Pedrinaci et al., 2012). Y todos estos as-
pectos influyeron en el nivel de satisfacción mostrado por el alumnado,
ya que indicaban que la experiencia había sido positiva, permitiéndoles
abordar mejor el contenido de la asignatura.
‒ ‒
6. CONCLUSIONES
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
‒ ‒
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Gómez M., Roses S. y Farias P. (2012). El uso académico de las redes sociales en
universitarios. Comunicar Revista Científica Iberoamericana de
Comunicación y Educación, 38, 131-138. https://doi.org/10.3916/C38-
2012-03-04
Gómez J, Carrion D.M., Tortolero L., Veneziano D., Esperto F., Greco F.,
Cacciamani G., Dourado Meneses A., Okhunov Z. y Rodriguez Socarrás
M. (2019). Scientific social media, a new way to expand knowledge.
What do urologists need to know? Actas Urológicas Españolas (English
Edition), 43 (5), 269-276.
Haro, J.J. (2009). Las redes sociales aplicadas a la práctica docente. Didáctica,
innovación y multimedia, 13.
Haro J.J. (2010). Redes sociales para la educación. Anaya Multimedia.
Heredia, H., Romero, M. y Amar, V. (2018). Facebook, un espacio para
compartir la lectura. Una experiencia en un aula de educación secundaria
en España. Educ. foco, Juiz de Fora, 23 (1), 201-224.
Hernández, N., Muñoz, P.C. y González, M. (2019). Computer-supported
collaborative learning: An analysis of the relationship between
interaction, emotional support and online collaborative tools. Computers
& Education, 138, 1-12. https://doi.org/1016/j.com-pedu.2019.04.012
Hortigüela Alcalá, D. y Pérez Pueyo, A. (2015). Uso de las redes sociales como
elemento formativo en el aula: Análisis de la motivación de alumnado
universitario, Icono 14 (13), 95-115.
https://doi.org/10.7195/ri14.v13i2.788
Kong, Q., Lai-Ku, K., Deng, L. y Yan-Au, A. (2021). Motivación y percepción de
los universitarios de Hong-Kong sobre noticias en redes sociales.
Comunicar, 67, 35-45. https://doi.org/10.3916/C67-2021-03
Kwon, K., Liu, Y. y Johnson, L. (2014). Group regulation and social-emotional
interac-tions observed in computer supported collaborative Learning:
Comparison between good vs. poor collaborators. Computers &
Education, 78, 185-200. https://doi.org/10.1016/j.compedu.2014.06.004
Lu, J. y Churchill, D. (2014). The Effect of Social Interaction on Learning
Engagement in a Social Networking Environment. Interactive Learning
Environments, 22 (4), 401-417.
Martínez, R., Corzana, F. y Millán, J. (2013). Experimentando con las redes
sociales en la enseñanza universitaria en ciencias. Revista Eureka sobre
Enseñanza y Divulgación de las Ciencias, 10 (3), 394-405.
https://doi.org/10498/15445
‒ ‒
Martínez-Costa, M., Serrano-Puche, J., Portilla, I., y Sánchez-Blanco, C. (2019).
Young adults’ interaction with online news and advertising. [La
interacción de los jóvenes adultos con las noticias y la publicidad
online]. Comunicar, 59, 19-28. https://doi.org/10.3916/c59-2019-02
Muñoz, M. M., Fragueiro, S. y Ayuso, M. J. (2013). La importancia de las redes
sociales en el ámbito educativo. Escuela abierta, 16, 91-104.
Pachler, N., Daly, C., Mor, Y. y Mellar, H. (2010). Formative e-assessment:
practitioner cases. Computers & Education, 54 (3), 715-21.
https://doi.org/10.1016/j.compedu.2009.09.032
Pascual, S., Martínez, P., López, A.B., Navarro, F.J. y Semperre, J. M. (2017). La
inmunología en el entorno de las redes sociales (Facebook, Twitter,
Paper.li) como forma de divulgación, aprendizaje y refuerzo de los
conceptos estudiados en clase. Memorias del Programa de Redes-I3CE.
Convocatoria 2017-2018.
Pazo, A. J. (2015). García Andés, J. (2015). La motivación, el punto clave de la
educación. Curso de cocina rápida. Burgos: Servicio de Publicaciones e
Imagen Institucional de la Universidad de Burgos, 128 págs. Revista de
Investigación en Educación, 13 (2), 304-307.
Peinado, P. y Navarro, D. (2014). Aumento de la motivación mediante el uso de
redes sociales. Revista DIM: Didáctica, Innovación y Multimedia, 29.
Pedrinaci, E., Caamaño, A., Cañal, P. y Pro, A. (2012). La evaluación de la
competencia científica requiere nuevas formas de evaluar los
aprendizajes. En Pedrinaci, E. (Eds.). 11 ideas clave: El desarrollo de la
competencia científica. Graó, cap. 11 (pp. 241-267).
Pintrich, P. R. (1994). Student motivation in the college classroom, en Pritchard,
K. W. y McLaren Sawyer, R. (Eds.) Handbook of college teaching:
Theory and application, Greenwood Press.
Ruiz-Dodobara, F. G. y Escurra-Mayaute, L. M. (2013). Hábitos de consumo de
Facebook y YouTube: conciencia y estrategias metacognitivas en la
lectura y estrategias de aprendizaje y estudio en universitarios. Persona,
(016), 29-71. https://doi.org/10.26439/persona2013.n016.2
Rodríguez, M.R., López, A. y Martín, I. (2017). Percepciones de los estudiantes
de ciencias de la educación sobre las redes sociales como metodología
didáctica. Píxel-Bit. Revista de Medios y Educación, 50, 77- 93.
http://dx.doi.org/10.12795/pixelbit.2016.i50.05
Shao, C., Ciampaglia, G.L., Varol, O., Yang, K.C., Flammini, A. y Menczer, F.
(2018). The spread of low-credibility content by social bots. Nature
Communications, 9 (1), 1-9. https://doi.org/10.1038/s41467-018-06930-
7
‒ ‒
Steinmann A., Bosch, B. y Aiassa, D. (2013). Motivación y expectativas de los
estudiantes por aprender ciencias en la universidad. Un estudio
exploratorio. RMIE, 18 (57), 585-598.
Talavera, M., Mayoral, O., Hurtado, A., y Martín-Baena, D. (2018). Motivación
docente y actitud hacia las ciencias: influencia de las emociones y
factores de género. Revista Electrónica de las Ciencias, 17 (2), 461-475.
Thurman, N. y Schifferes, S. (2012). e future of personalization at news websites:
Lessons from a longitudinal study. Journalism Studies, 13 (5-6), 775-
790. https://doi.org/10.1080/1461670x.2012.664341
UNESCO (2009). La nueva dinámica de la educación superior y la investigación
para el cambio social y el desarrollo. Conferencia Mundial sobre la
Educación Superior. Recuperado de
http://www.unesco.org/education/WCHE2009/comunicado_es.pdf
Vázquez-Martínez, A.I. y Cabero-Almenara, J. (2015) Las redes sociales
aplicadas a la formación. Revista Complutense de Educación, 26 Núm.
Especial, 253-272. http://dx.doi.org/10.5209/rev_RCED.2015.v26.47078
Valverde-Crespo, D., de Pro-Bueno, A. y González-Sánchez, J. (2020).
Competencia digital de estudiantes de Secundaria al buscar y seleccionar
información sobre ciencia. Enseñanza de las Ciencias, 38 (3), 81-103.
https://doi.org/10.5565/rev/ensciencias.2833
‒ ‒
CAPÍTULO 9
ROBERTO SÁEZ-HERNÁNDEZ
Dpto. de Química Analítica, Facultat de Química, Universitat de València
KEVIN U. ANTELA
Dpto. de Química Analítica, Facultat de Química, Universitat de València
INÉS ADAM-CERVERA
Institut de Ciència dels Materials, (ICMUV), Universitat de València
1. INTRODUCCIÓN
1.1. ANTECEDENTES
‒ ‒
El trabajo que se presenta se enfoca en la primera de ellas, el Laborato-
rio de Química Analítica I (LQAI). Ésta es una asignatura impartida en
el segundo cuatrimestre del segundo año de grado, y se divide en dos
partes: una primera de análisis cualitativo y una segunda de análisis
cuantitativo. En la primera, el objetivo consiste en identificar las espe-
cies químicas presentes en una muestra, mientras que la segunda se en-
foca en la determinación cuantitativa de sus concentraciones. Este pro-
yecto se centra en la parte de análisis cualitativo de la asignatura.
‒ ‒
imposibilidad de asistir a clases presenciales. Mientras que las asigna-
turas de carácter teórico pudieron ser, en la medida de lo posible, supli-
das por su versión on-line, las que requerían de asistencia obligatoria a
los laboratorios de prácticas de la Facultat se vieron imposibilitadas por
completo.
‒ ‒
1.3. GAMIFICACIÓN Y GAME-BASED LEARNING
‒ ‒
ESQUEMA 2. Proceso de aplicación de la gamificación a la educación según Huang y So-
man (Huang & Soman, 2013).
‒ ‒
1.3.3. Elementos utilizados en gamificación y GBL
‒ ‒
al completo debe resolver un examen global dentro del propio juego
(Daubenfeld & Zenker, 2015).
La enseñanza de formulación química mediante una app interactiva en
base a un banco de preguntas mostró buenos resultados a nivel tanto
preuniversitario como universitario (Lima et al., 2019). Asimismo,
otros planteamientos basados en juegos de mesa han permitido mejorar
las calificaciones de los estudiantes de ingeniería en aspectos básicos
de Química (geometría molecular, polaridad, fuerzas intermolecula-
res…) y han favorecido el debate entre los miembros de los diferentes
grupos de trabajo, tanto entre ellos como con el profesor (Antunes et
al., 2012). Adoptando la forma de concurso televisivo, Stringfield y
Kramer realizaron unas sesiones de repaso previas al examen entre es-
tudiantes de ingeniería en la materia de Química. Los resultados acadé-
micos entre aquellos que tomaron la sesión gamificada mejoró con res-
pecto al grupo control, pese a que de manera apenas significativa. Sin
embargo, los aspectos referentes a la motivación y la participación en
la asignatura mostraron una evolución mucho más positiva entre aque-
llos que sí participaban en el grupo con técnicas gamificadas (String-
field & Kramer, 2013).
‒ ‒
realidad queda supeditada a que las actividades gamificadas y las reales
hagan uso de estos procesos cognitivos (Tobias et al., 2014).
Adicionalmente, una de las características de los videojuegos ya men-
cionada es la capacidad de ir dosificando la información a medida que
se van desbloqueando diferentes etapas o niveles (Mayo, 2009). De
modo que permiten distribuir los contenidos de la asignatura de manera
lógica y gradual, manteniendo un gradiente de dificultad que facilite el
avance del alumno por la asignatura.
En el caso de las actividades gamificadas o GBL que hagan uso de gru-
pos o equipos de trabajo permiten desarrollar también capacidades de
resolución de problemas de manera colectiva y cooperativa (Li & Tsai,
2013), y sirven de catalizador para realizar actividades donde los estu-
diantes son partícipes y activos en el proceso de aprendizaje, compar-
tiendo ideas y estrategias de solución a los problemas (Hartt et al.,
2020).
Por otra parte, aún quedan aspectos a resolver en lo que a la implemen-
tación de estas técnicas respecta. Por ejemplo, la participación en dichas
actividades ha de regularse de manera que sean obligatorias u optativas,
con o sin efecto sobre la nota final de la asignatura. La evaluación en la
participación de la actividad es un aspecto también a considerar, de ma-
nera que tenga en cuenta la participación (individual o grupal). Además,
pueden existir una serie de factores que también pueden dificultar la
adaptación de los contenidos, como podrían ser la falta de entrena-
miento del personal a cargo, la inversión de tiempo necesaria para el
desarrollo del juego, la falta de familiaridad tanto de profesores como
de alumnos en estas metodologías, o la falta de recursos de la institu-
ción (Sandrone & Carlson, 2021).
‒ ‒
aplica la técnica a testear) con el grupo de control en el que se aplican
técnicas de enseñanza habituales.
Es importante remarcar en este momento, que el hecho de aplicar una
metodología gamificada o GBL no implica, por sí misma, la mejora
directa de las calificaciones de los estudiantes. Esta mejora dependerá
de un correcto planteamiento, enfoque e implantación (Mayo, 2009).
Además, son varias las referencias que indican un mejor rendimiento
cuando se combinan de manera cohesionada y coherente las técnicas de
enseñanza clásicas con aquellas basadas en GBL o gamificación
(Bonde et al., 2014; Daubenfeld & Zenker, 2015).
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
el contenido teórico de la simulación. Éstos constan de 7 partes, distri-
buidas entre los diferentes grupos en los que se divide la práctica de
análisis cualitativo (Esquema 1). De esta manera se presenta un primer
vídeo introductorio y 6 diferentes a continuación, 1 por cada uno de los
grupos, en los que se explican los procedimientos a seguir.
Para que este contenido teórico sea de utilidad, se muestran las reaccio-
nes que tienen lugar en cada uno de los procesos que se llevan a cabo,
así como información de interés a tener en cuenta. Por otro lado, tam-
bién se ha incorporado información que el profesor suele dar durante la
realización de la práctica, y que no se encuentra en el guión, tales como
advertencias o fenómenos que podrían ocurrir. En las Figuras 1 y 2 se
muestra un ejemplo de la información proporcionada en los vídeos.
‒ ‒
FIGURA 2. Captura de uno de los fotogramas de los vídeos desarrollados con reacciones.
Estos videos han sido evaluados por los estudiantes mediante la distri-
bución de una serie de encuestas. En ellas se preguntaba por datos rela-
tivos a la cantidad de información o la utilidad que presentaban los ví-
deos. Específicamente, se consultó a los alumnos sobre:
‒ ¿Te han ayudado los vídeos a entender los procesos y reacciones de
la marcha del carbonato?
‒ ¿Qué te ha parecido la información que contienen los vídeos?
‒ ¿Cómo de fácil o difícil te ha resultado seguir las explicaciones de
los vídeos?
‒ ¿Qué te ha parecido la duración de los vídeos?
‒ ¿Te gustaría que hubiese más vídeos de este tipo en otras prácticas
de laboratorio?
‒ ‒
3.2. PARTE PRÁCTICA DEL LABORATORIO
‒ ‒
interaccionar con otros tilesets de su mismo tipo modificándose para
dar una sensación de interconexión entre casillas, creando así un en-
torno más dinámico (Figura 4). Los tilesets de la pestaña A se depositan
en la cuadrícula eliminando los elementos de otras pestañas y solapán-
dose sobre los de su misma pestaña. Las pestañas B, C, D y E contienen
tilesets de objetos para crear escenarios más realistas. Se puede tener
un máximo de dos capas de objetos, una tercera capa eliminaría la pri-
mera capa de objetos (Figura 5).
‒ ‒
FIGURA 4. Creación de tilesets dinámicos del terreno.
Cabe destacar que cada diseño del tilesets se puede programar para que
tenga ciertas características. En primer lugar, se puede programar para
permitir el paso del avatar o no por el recuadro, o en su defecto, si se
trata de un elemento que debe dejar oculto al personaje, es decir, un
objeto por debajo del cual puede pasar el personaje. El segundo apar-
tado de programación del tilesets es, en caso de poder circular por el
‒ ‒
recuadro, las direcciones permitidas, por ejemplo, por unas escaleras
sólo se permitiría subir y bajar, las direcciones de izquierda y derecha
se deberían bloquear.
3.2.1.2. El avatar
3.2.1.3. Objetos
‒ ‒
Se han codificado dos tipos de objetos: objetos normales y objetos
clave. Los primeros son los elementos utilizados en la realización de la
práctica, y se han programado para que al seleccionarlos tengan lugar
eventos comunes (explicado en el siguiente apartado) y se puedan uti-
lizar (Figura 7). Los objetos clave son los que se obtienen cuando se
termina la práctica y muestran el resultado del ensayo. Son estos los
que hay que “entregar al profesor del laboratorio” para que éste dé por
finalizada la práctica y permita realizar el siguiente ensayo dentro del
videojuego.
‒ ‒
cromato, y cómo interfieren los eventos comunes en el desarrollo de la
simulación.
‒ ‒
3.2.1.5. Simulación de la práctica
Una vez desarrollado todo el contenido del videojuego se procede a
crear la práctica. En este caso, para la marcha del carbonato, la simula-
ción se ha establecido de la siguiente manera.
En primer lugar, el estudiante habla con el profesor del laboratorio y
selecciona la práctica a desarrollar, en este caso la marcha del carbo-
nato. A continuación, selecciona cuál de los grupos quiere desarrollar.
La simulación establece que para poder hacer un grupo debe realizar
los grupos anteriores, no se puede realizar el ensayo del grupo 3 si no
han realizado los grupos 1 y 2. Ya seleccionada la práctica, el estudiante
realiza los procedimientos para llevar a cabo los ensayos del correspon-
diente grupo.
Para facilitar al alumnado la realización de las prácticas, se han progra-
mado dos tipos de guiones. En su inventario pueden seleccionar el pri-
mero de ellos, el guión del grupo a desarrollar. Éste proporciona la “re-
ceta” a seguir para realizar los ensayos (Figura 9). El otro guion se en-
cuentra en su bancada de trabajo y proporciona los fundamentos de las
reacciones que se llevan a cabo en la simulación (Figura 10).
Como se ha explicado anteriormente, el estudiante tiene que interaccio-
nar con los objetos para llevar a cabo la resolución de la práctica. Una
vez realizados los ensayos, recibirán los objetos clave como indicadores
de que la práctica ha sido completada. Estos objetos muestran, mediante
elementos multimedia, los resultados que obtendrían en el laboratorio
(Figura 11).
‒ ‒
FIGURA 9. Imagen del sistema de guión de procedimientos.
‒ ‒
Cuando se han llevado a cabo todos los ensayos, el profesor del labora-
torio establece que se han realizado correctamente los ensayos de ese
grupo y permite al estudiante realizar los siguientes grupos. Cuando el
estudiante ha realizado todos los ensayos de los 6 grupos, se desbloquea
el modo muestra problema. El profesor real de la asignatura puede so-
licitar los códigos de acceso a este modo para distribuirlos entre los
alumnos.
FIGURA 11. Imagen de la pantalla mostrada al estudiante cuando quiere ver los resultados
del ensayo.
‒ ‒
el procedimiento de identificación, puede elaborar un informe y man-
dárselo al tutor para su evaluación.
‒ ‒
3.3. DIFUSIÓN DEL PROYECTO
a) b) c)
4. RESULTADOS
4.2. VÍDEOS
‒ ‒
proporcionadas se transmiten de manera fácil o muy fácil. En lo refe-
rente a la duración, un 96 % de los estudiantes los ha considerado ade-
cuados.
FIGURA 13: Resultados obtenidos en las encuestas sobre la simulación basada en el vi-
deojuego.
‒ ‒
FIGURA 14: Resultados obtenidos en las encuestas sobre la incorporación de vídeos a la
simulación.
4.2. VIDEOJUEGO
‒ ‒
sobre la transversalidad de los videojuegos: no sólo aquellos que se
consideran expertos hacen uso de ellos.
FIGURA 15: Resultados obtenidos en las encuestas sobre la simulación basada en el vi-
deojuego.
Los resultados referentes a la idea del videojuego han sido muy positi-
vos. Los encuestados evalúan todos los parámetros por encima de 7 so-
bre 9. De los datos se desprende que la idea presenta un grado de origi-
nalidad muy elevado, y que la experiencia docente y el entretenimiento
han sido muy bien evaluados. Todo ello se refleja en la intención de
repetir en la simulación, donde gran parte de los encuestados se muestra
dispuesto a volver a utilizar el videojuego, como se puede ver en el
Gráfico 1
‒ ‒
GRÁFICO 1: Grado de satisfacción con aspectos relacionados con el videojuego (1- menor
valoración, 9- máxima valoración).
‒ ‒
GRÁFICO 2: Grado de satisfacción con respecto a parámetros relativos al videojuego (1-
menor valoración, 9- máxima valoración).
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
simulación. De igual manera, se podía comprobar en la Figura 14 cómo
la incorporación de vídeos también les suscita curiosidad e iniciativa de
compartirlos. Se puede extraer de estos datos que la actividad ha des-
pertado su interés, hecho acorde a la bibliografía disponible (Kirya-
kova, G., Angelova, N., & Yordanova, 2013). Todo esto nos informa
de que el videojuego, en combinación con material audiovisual en for-
mato vídeo, sirve como técnica de aprendizaje activo, ya que el estu-
diante tiene que trabajar los contenidos del programa de manera autó-
noma, pero además involucrándose en él para poder realizar la simula-
ción correctamente (Hartt et al., 2020; Sandrone - Carlson, 2021)
Adicionalmente, algunos de los comentarios recibidos durante la reco-
gida de información, dejan ver cuáles son los aspectos que más han in-
teresado a los alumnos.
Algunos de ellos remarcan el carácter interactivo de la aplicación:
Me parece una manera de poder acercarte al trabajo en un laboratorio
sin necesidad de estar en él. Así mismo, gracias a ello, puedes repasar
conceptos sobre determinadas experiencias ya que el juego te propor-
ciona el guión y la explicación. Es una forma interactiva de aprender y
razonar.
‒ ‒
el aprendizaje autónomo, la realización de la simulación en equipo im-
pediría alcanzar dichos objetivos de manera correcta.
Se puede comparar el presente videojuego con otras herramientas de
gamificación y GBL. En la bibliografía se pueden encontrar diferentes
formas de planteamiento de las herramientas de gamificación y GBL,
ya sea mediante exámenes (Daubenfeld & Zenker, 2015), mediante
apps interactivas (Antunes et al., 2012) o mediante preguntas en for-
mato concurso (Stringfield & Kramer, 2013). Sin embargo, el laborato-
rio virtual planteado recurre al concepto de juego de rol, en el cual el
alumno emplea un avatar para poder llevar a cabo diferentes misiones,
las cuales proporcionan recompensas (Subhash & Cudney, 2018), y le
permiten poder seguir avanzando en el videojuego.
Mediante el videojuego desarrollado, no se pretende suplir la realiza-
ción de las prácticas correspondientes a la asignatura en cuestión, sino
que se plantea como una herramienta complementaria a éstas (Bonde et
al., 2014). La tarea de preparación previa de las prácticas de laboratorio,
así como su posterior estudio, resultan complejas para los estudiantes
ya que no disponen de los medios necesarios fuera del entorno del la-
boratorio. Por ello, la disponibilidad de una simulación que recree los
diferentes pasos llevados a cabo durante la práctica, así como la presen-
cia de material multimedia en forma de vídeos e imágenes, supone una
fuente de información muy útil para los alumnos.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
La práctica simulada ha sido la marcha del carbonato de la asignatura
‘Laboratorio de Química Analítica I’. Los resultados obtenidos se
muestran acordes a la bibliografía, demostrando que esta aproximación
ha despertado el interés de los alumnos entrevistados. Su recibimiento
entre los estudiantes ha sido muy favorable, destacando el grado de ori-
ginalidad y la predisposición a repetir la simulación. En contraposición,
el aspecto peor valorado ha sido la inversión de tiempo necesaria para
completar la simulación.
Es importante recordar que las simulaciones encuentran su limitación
principal en la imposibilidad de sustituir la experiencia recibida reali-
zando una práctica presencial con la experiencia recibida realizando
una simulación. Teniendo esto en cuenta, el proyecto se continuará
desarrollando, haciendo uso del feedback recibido, de manera que
pueda contener una mayor cantidad de prácticas, con el objetivo de ob-
tener un material docente que pueda servir de complemento a los ya
disponibles de manera habitual, y que incentive la participación de los
alumnos en el proceso de aprendizaje.
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8. REFERENCIAS
Antunes, M., Pacheco, M. A. R., & Giovanela, M. (2012). Design and
Implementation of an Educational Game for Teaching Chemistry in
Higher Education. Journal of Chemical Education, 89(4), 517–521.
https://doi.org/10.1021/ed2003077
Armellini, A., Cecilia, B., & Rodriguez, P. (2021). Active Blended Learning:
Definition, Literature Review, and a Framework for Implementation. In
Cases on Active Blended Learning in Higher Education (pp. 1–22). IGI
Global. https://doi.org/10.4018/978-1-7998-7856-8.ch001
Bonde, M. T., Makransky, G., Wandall, J., Larsen, M. V., Morsing, M., Jarmer,
H., & Sommer, M. O. A. (2014). Improving biotech education through
gamified laboratory simulations. Nature Biotechnology, 32(7), 694–697.
https://doi.org/10.1038/nbt.2955
‒ ‒
Burriel-Martí, F., Lucena-Conde, F., Arribas-Jimeno, S., & Hernández-Méndez,
J. (1985). Química Analítica Cualitativa (12th ed.). Paraninfo.
Daubenfeld, T., & Zenker, D. (2015). A game-based approach to an entire
physical chemistry course. Journal of Chemical Education (Vol. 92,
Issue 2).
Hartt, M., Hosseini, H., & Mostafapour, M. (2020). Game On: Exploring the
Effectiveness of Game-based Learning. Planning Practice and
Research, 35(5), 589–604.
https://doi.org/10.1080/02697459.2020.1778859
Huang, W. H.-Y., & Soman, D. (2013). A practitioner’s guide to Gamification of
Education. Rotman School of Management University of Toronto.
https://doi.org/10.1080/03004430.2017.1324434
Kapp, K. M. (2012). The gamification of learning and instruction: game-based
methods and strategies for training and education (R. Taff (ed. 1)).
Pfeiffer. https://bit.ly/3kZzx5i
Kiryakova, G., Angelova, N., & Yordanova, L. (2014). Gamification in
education. Proceedings of 9th International Balkan Education and
Science Conference.
Li, M.-C., & Tsai, C.-C. (2013). Game-Based Learning in Science Education: A
Review of Relevant Research. Journal of Science Education and
Technology 2013 22:6, 22(6), 877–898. https://doi.org/10.1007/S10956-
013-9436-X
Lima, M. A. S., Monteiro, Á. C., Junior, A. J. M. L., Matos, I. S. de A.,
Alexandre, F. S. O., Nobre, D. J., Monteiro, A. J., & SilvaJúnior, J. N.
da. (2019). Game-Based Application for Helping Students Review
Chemical Nomenclature in a Fun Way. Journal of Chemical Education,
96(4), 801–805. https://doi.org/10.1021/ACS.JCHEMED.8B00540
Mayo, M. J. (2009). Video Games: A Route to Large-Scale STEM Education?
Science, 323(5910), 79–82. https://doi.org/10.1126/SCIENCE.1166900
Sandrone, S., & Carlson, C. (2021). Gamification and game-based education in
neurology and neuroscience: Applications, challenges, and opportunities.
Brain Disorders, 1(November 2020), 100008.
https://doi.org/10.1016/j.dscb.2021.100008
Stringfield, T. W., & Kramer, E. F. (2013). Benefits of a Game-Based Review
Module in Chemistry Courses for Nonmajors. Journal of Chemical
Education, 91(1), 56–58. https://doi.org/10.1021/ED300678F
Subhash, S., & Cudney, E. A. (2018). Gamified learning in higher education: A
systematic review of the literature. Computers in Human Behavior,
87(February), 192–206. https://doi.org/10.1016/j.chb.2018.05.028
Tobias, S., Fletcher, J. D., & Wind, A. P. (2014). Game-Based Learning.
Handbook of Research on Educational Communications and
Technology: Fourth Edition, 485–503. https://doi.org/10.1007/978-1-
4614-3185-5_38
‒ ‒
CAPÍTULO 10
JUAN-FRANCISCO ÁLVAREZ-HERRERO
Universidad de Alicante
1. INTRODUCCIÓN
Las personas, solemos hacer más caso a aquellas ideas, mitos, creencias
o incluso pseudociencias, cuando estas vienen de gente cercana o de la
que creemos tiene la suficiente entidad para ser creíble aquello que nos
dicen. En ese sentido, a lo largo de la historia, hemos creído en ideas
que generación tras generación han ido transmitiendo. Estas ideas pre-
concebidas y espontáneas se asumen y asimilan con mucha facilidad,
pues en ningún momento se pone en duda su credibilidad, ya que como
comentábamos, consideramos muy fiables las fuentes desde las que nos
llegan. Vivimos unos tiempos, donde las personas damos mayor credi-
bilidad y fiabilidad a las emociones y creencias personales que a los
hechos objetivos. Vivimos en tiempos de la posverdad (González-
Méijome, 2017), es decir, es más probable que las personas demos ve-
racidad a un argumento basado en nuestras emociones y creencias, que
en lugar de estar basado en hechos y demostraciones objetivas. Tam-
bién es el tiempo de las llamadas fake news, de la pseudociencia y de
los negacionismos (por muy demostrados y con hechos argumentados
que podamos aportar) (Ojeda-Landirez et al., 2021).
En el mundo educativo, desde bien antiguo se ha utilizado las ideas
previas que el alumnado dispone sobre la materia a tratar, para a partir
de ahí y tomando en consideración lo que se sabe y lo que no se sabe,
afrontar con una mayor garantía de conseguir un aprendizaje eficaz y
significativo los contenidos a trabajar. Y también desde hace mucho
tiempo se ha detectado que muchas veces las ideas iniciales o de partida
‒ ‒
que disponen los estudiantes sobre la mayoría de los conceptos a tratar,
están plagadas de errores, de creencias falsas y de mitos, que obvia-
mente el docente se debe encargar de desterrar y erradicar. Sin em-
bargo, esto no es tarea fácil pues estas ideas y creencias están muy con-
solidadas y así el docente debe luchar contra las emociones y las creen-
cias asimiladas a través de la tradición, de familiares y personas cerca-
nas que le confieren mayor credibilidad que la que le pueda aportar el
propio docente. Corresponde pues al docente refutar, a partir de la con-
solidación de sólidos conocimientos científicos, y de la experimenta-
ción y comprobación, y así conseguir el cambio conceptual, desapren-
diendo esas falsas creencias para construir y cimentar ideas sólidas que
el estudiante sea capaz de comprobar por si mismo e incluso de ir más
allá y explicar, y de esa manera también refutar, a otras personas. Solo
de esta manera se conseguirá apartar estas falsas creencias y hará que
no vuelvan a aparecer. Y tampoco debemos perder de vista que, en
aquellos futuros docentes y docentes en formación, se hace incluso más
necesario el tratar de erradicar estas falsas creencias, y así no seguir
transmitiéndolas en un futuro a su alumnado.
Así, las ideas iniciales o previas, preconcepciones, ideas espontaneas,
son un recurso ampliamente utilizado en el proceso de enseñanza-
aprendizaje. Si bien no todas estas ideas previas son erróneas, sí son la
mayoría y las que van a centrar nuestra atención en esta investigación.
Pues como ya adelantábamos, se hace necesario erradicar estas ideas de
todos los estudiantes para que así no vayan perdurando y mantenién-
dose como un dogma por todos aceptado, y que muchísimo menos, se
continúe transmitiendo no solo en el ámbito informal y familiar sino
también, y es ahí donde es más peligroso, en el ámbito formal o acadé-
mico. No hay nada más perjudicial que un estudiante justifique o acepte
por válido una creencia errónea por el simple razonamiento de que es
lo que le enseñó un docente en su etapa educativa.
Todas las disciplinas académicas pueden y deben hacer uso de estas
ideas previas o preconcepciones, y si además estas son erróneas, mucho
mejor para poder refutarlas y producir un cambio conceptual. Pero va-
mos a centrar nuestra atención en las áreas de ciencias, pues es en estas
donde la experimentación, la demostración, la refutación con una sólida
‒ ‒
argumentación basada en unos conocimientos científicos adquiridos,
pueden ayudar más a conseguirlo. En los últimos años y en las diversas
materias científicas, se han dado excelentes casos con resultados muy
satisfactorios, con el uso de estas preconcepciones (Boda y Weiser,
2018; Helmi et al., 2019; Sommeillier et al., 2021)
La ciencia es una de las disciplinas o materias que más se ven afectadas
por este tipo de ideas, mitos y creencias. Y eso que estamos hablando
de una disciplina que basa su argumentación en la experimentación y la
comprobación que demuestre vivencialmente lo que estamos asimi-
lando. Precisamente echar mano de la demostración y argumentación
de la falsedad de estos mitos, creencias, ideas y pseudociencias, es algo
que se ha hecho desde bien antiguo y con excelentes resultados, pues
como dicen Martínez-Torregrosa et al. (1994), del derribo de estas ideas
se puede llegar a levantar puentes. Si bien estos autores hablan de apro-
vechar esto como criterio organizador de la enseñanza de las ciencias,
también otros autores coinciden en que se desarrollan con estas prácti-
cas multitud de competencias y habilidades propias de las materias
científicas (Delord, 2020) y así encontramos casos de éxito de cambio
conceptual con el abandono de las ideas espontáneas en diferentes con-
tenidos de las materias de ciencias, así por ejemplo sobre los conceptos
de calor y temperatura (Mahmud y Gutiérrez, 2010); la luz (Delval,
1985); la mecánica newtoniana (Martínez-Torregrosa et al., 1994); los
problemas ambientales (Yépez et al., 2017); las aguas subterráneas y
los acuíferos (Arthurs y Elwonger, 2018); fuerzas y movimiento
(Anggoro et al., 2017; Anggoro et al., 2019); mecánica (Zhou y Xiao,
2018); genética (Etobro y Banjoko, 2017); terremotos y tsunamis
(Lownsbery y Flick, 2020); o en cualquiera de los capítulos del libro de
los editores Karpudewan, Zain, y Chandrasegaran (2017).Y es impor-
tante recalcar que para que este cambio conceptual se produzca, no se
debe perder de vista que se debe cambiar la forma de enseñar-aprender
y que esta, a ser posible fundamentada en el constructivismo y donde
es el alumno quien mediante el descubrimiento y la consolidación de
los conceptos adquiridos va produciendo el cambio conceptual, debe
estar conectada con la realidad y el entorno del alumnado, para que le
‒ ‒
sea cercana, como ya lo era la idea espontánea original que tenía (Pozo
y Carretero, 1985).
Por otro lado, el error del alumnado, bien en una explicación, en una
actividad o en una prueba de evaluación, siempre se le ha considerado
como algo a castigar o penalizar con una calificación negativa. Y así,
se buscan del alumnado los errores en las pruebas de evaluación para
finalmente emitir una calificación. No se busca aquello que el alumno
sabe o conoce, sino aquello que no sabe o en lo que se equivoca, a la
hora de reportar una calificación. Ello nos conduce a querer ir más allá
y aprovechar el error como una excelente oportunidad de mejorar el
aprendizaje del alumnado (Álvarez-Herrero, 2019; Ginat, 2003). Preci-
samente el error en una prueba de evaluación debe considerarse como
un proceso formativo, pues en si misma la evaluación así debe ser, no
un suceso sino un proceso, y puede aprovechar estas circunstancias para
seguir adelante en el proceso formativo de enseñanza-aprendizaje del
alumnado. Se trata de fijarse más en lo que realmente conoce y sabe el
alumnado, y a la vez incidir en aquello que no conoce, no sabe o erra,
para de esta manera conseguir que finalmente el alumnado lo aprenda.
Conjugando una cosa y otra, podemos ver como el trabajar las ideas
espontáneas y erróneas del alumnado (sean mitos, creencias o incluso
pseudociencias), permite que destierren definitivamente estas falsas
ideas (Delord, 2020) y con ello aprendan y desarrollen ese espíritu crí-
tico tan importante en las áreas de ciencias. Pero para ello, cuenta mu-
cho el enfoque que otorguemos a este proceso. Y un factor muy impor-
tante que permita vencer estas fuertes creencias y convicciones, pasa
por una investigación y una profundización en los conocimientos cien-
tíficos. Un buena y adecuada fundamentación teórica (Campanario y
Otero, 2000) es necesaria y previa a la investigación, experimentación
y comprobación de unos hechos que al hacerlos visibles y patentes el
propio alumnado, van a permitir calar en sus propios conocimientos,
que, tras haberlos desaprendido, son vueltos a aprender con mayor
fuerza y con una mejor argumentación y fundamentación a la anterior.
Debemos considerar diferentes variables en este proceso de querer uti-
lizar las ideas espontáneas, creencias, mitos o falsas creencias que sobre
ciencias tiene el alumnado. Por un lado, debemos considerar la forma
‒ ‒
en la que son recogidas estas ideas espontáneas, errores o falsas creen-
cias. Existen muchas técnicas e instrumentos para recoger estas ideas y
falsas creencias, pero también muchas veces el utilizar uno u otro va a
facilitar o dificultar que dichas ideas salgan a relucir o no. General-
mente para su detección y recopilación se utiliza la observación, cues-
tionarios, debates, entrevistas, dibujos y cómics, dramatizaciones, dile-
mas, o también frases y situaciones sin terminar (Cubero, 2000; Díaz et
al., 2004; Özdemir, 2017). Y también debemos considerar que cada
alumno tiene sus particularidades, y existen grandes diferencias indivi-
duales entre todos ellos en lo que tiene que ver con la metacognición o
las concepciones epistemológicas (Campanario y Otero, 2000). Y de
ahí que no sea nada descabellado que debamos recurrir a la psicología
educativa para ayudarnos en este proceso de utilización del error y de
las ideas y creencias erróneas del alumnado para mejorar el aprendizaje
de las ciencias de este.
Con todo ello, también encontramos que algunos investigadores hablan
de la dificultad de vencer a estas ideas erróneas tan arraigadas entre el
alumnado aun utilizando prácticas de refutación y de conflicto cogni-
tivo (Vosniadou, 2020), pues en ocasiones es la misma ciencia la que
basa sus conocimientos en supuestos falsos para llegar a los razona-
mientos válidos y certeros (Siponen y Klaavuniemi, 2021). Volvemos
nuevamente a incidir en que es necesaria una buena base sólida de con-
tenidos científicos que permita su argumentación y la construcción del
conocimiento. O incluso es interesante comprobar como muchas veces
partiendo de tratar de vender a nuestro alumnado un concepto utili-
zando las propias armas de la pseudociencia y de las creencias, pode-
mos apelando a sus sentimientos y emociones, montarles o desmontar-
les una creencia. Así ocurre en la experiencia documentada por Casti-
llejo (2018), donde es capaz de convencer a su alumnado de una teoría
sin fundamento científico, por el simple hecho de haber sabido venderla
apelando a las emociones e impresiones de este.
Entre el alumnado de los grados de magisterio, así como en los de los
másteres de formación del profesorado de educación secundaria, es de-
cir, de los futuros docentes del mañana, se hace más que necesario in-
tervenir en estas cuestiones (ideas espontaneas, falsas creencias, mitos
‒ ‒
y pseudociencias) para que no trasciendan más allá de ellos en un fu-
turo, esto es, que no lleguen a su futuro alumnado y por tanto a los
ciudadanos del mañana. De ahí que encontramos muy necesario inter-
venir en aquellos mitos y creencias que tradicionalmente son aceptados
por todos, incluso por docentes en activo, desmontarlos y a partir de la
propia experimentación, o incluso con el uso de modelos (Burks y Huff-
man, 2019), pero siempre sustentada con la adquisición de los conteni-
dos científicos necesarios para saber argumentar y refutar estas ideas
espontáneas. Se debe trabajar desde la refutación de los conceptos erró-
neos, pues solo así se conseguirá el cambio conceptual entre estos fu-
turos docentes de ciencias (Grospietsch y Mayer, 2018). Incluso es algo
muy preocupante y que se debe trabajar, cuando más allá de estar ha-
blando de las disciplinas científicas, lo hacemos en general sobre el
concepto de aprender. Es decir, también encontramos entre los futuros
docentes ideas preconcebidas, espontaneas, mitos y creencias sobre lo
que es el propio aprendizaje (Cohen et al., 2017).
2. OBJETIVOS
‒ ‒
3. METODOLOGÍA
3.1. MUESTRA
3.2. INSTRUMENTO
‒ ‒
muy frecuentes y conocidas entre la población en general. En dicho
cuestionario solo debían indicar si las afirmaciones que se les presenta-
ban eran ciertas o falsas. Estas afirmaciones estaban numeradas del 1 al
8 y las presentamos a continuación:
1. El Sol es amarillo.
‒ ‒
ser expuesta al resto de compañeras y compañeros de la clase o grupo. La
ficha fue elaborada ad hoc y se puede ver en la Figura I.
3.3. PROCEDIMIENTO
‒ ‒
‒ Tras el consenso en pequeños grupos, se comunicó al docente
los resultados y tras ello el docente los hizo públicos a todo el
grupo clase.
‒ ‒
‒ Se establecieron un par de clases/sesiones para realizar una
breve presentación de cada uno de los mitos/creencias locali-
zadas por los 40 alumnos. Y llegadas tales sesiones se proce-
dió a su exposición pública al resto de compañeros/as de clase.
‒ Se facilitó un archivo/documento con el repositorio de las 40
fichas de los diferentes mitos/creencias localizadas por el
alumnado tras haber sido revisados por el docente.
4. RESULTADOS
TABLA 1. Resultados del cuestionario con las respuestas consensuadas por los 8 grupos
de estudiantes
‒ ‒
Como podemos apreciar en los resultados de la Tabla 1, son muy pocos
los aciertos consensuados por los ocho grupos de estudiantes. Solo un
mito/creencia, la de que todos los chinos que saltan a la vez son capaces
de alterar el eje de rotación de la Tierra, es el único que obtiene dos
respuestas acertadas. Y luego hay otros 3 mitos o creencias que obtie-
nen una única respuesta acertada, que concretamente son: el saber que
el color del Sol no es amarillo, que no existe diferencia entre ser más
sano o menos sano en un huevo blanco o uno pardo, y en saber que no
existe ningún producto que vertido en las piscinas detecte con una co-
loración la presencia de orina en el agua.
Sorprende que en los otros cuatro restantes casos de mitos/creencias,
no haya ningún grupo que acierte con sus respuestas. Así, por ejemplo,
el dormir en una habitación cerrada sería en todo caso más peligroso
hacerlo con una persona antes que con una mascota o una planta. El Sol
no sale siempre por el este, sino que esta posición va variando y des-
plazándose al igual que ocurre con su puesta, que no siempre es por el
oeste. También erróneamente solemos creer que tomar alcohol calienta
el cuerpo y permite pasar menos frío, pero lo cierto es todo lo contario,
pues el alcohol vasodilata las venas y eso devuelve sangre a la piel, lo
que provoca un descenso de la temperatura corporal. Y, por último,
siempre se ha creído que es mejor dejar encendidos los tubos fluores-
centes en vez de apagarlos y volverlos a encender argumentando que se
consume mucha electricidad encendiéndolos de nuevo, pero la verdad
es que, si el tiempo que tardamos en volverlos a encender es un tiempo
prudencial, el apagarlos y volverlos a encender consume menos energía
eléctrica que mantenerlos encendidos todo el rato.
En el debate o puesta en común pública que se hizo posteriormente, el
docente argumento con sólidos conocimientos científicos, con explica-
ciones y demostraciones oportunas, todos y cada uno de los mitos o
creencias del cuestionario. Ante la evidencia y constatación de las ar-
gumentaciones y pruebas aportadas por el docente, el alumnado aceptó
y asimiló el error. El docente también incidió en los factores y variables
que habían llevado a una aceptación como válidos y ciertos estos mitos
o falsas creencias, para permitir al alumnado el que a partir de ese mo-
mento se cuestionase y pudiese poner en duda cualquier conocimiento
‒ ‒
o idea, por muy consolidada que la tuviese, y buscase siempre una só-
lida argumentación que le permitiese aceptarla o darla por válida.
Algunos estudiantes manifestaron públicamente que esta experiencia,
si bien les había supuesto un pequeño trauma, al no acertar ninguno de
los mitos planteados, los animaba a llevárselos consigo y planteárselos
a otras personas cercanas: familiares y amigos; para utilizando los co-
nocimientos y los argumentos adquiridos en esta experiencia, refutar a
estas otras personas sus también falsas creencias al respecto.
Los resultados obtenidos cuatro meses después de esta primera expe-
riencia y basados en el mismo cuestionario, confirman que ningún es-
tudiante falló en ninguna de las ocho falsas creencias y esta vez las
identificó de forma inmediata y a la primera.
En la segunda parte de la investigación, el alumnado fue durante tres
meses recabando información y conocimiento sobre algún otro mito o
falsa creencia que sobre ciencia se da en nuestra sociedad. Contaron
durante este tiempo con el asesoramiento y guía del docente, lo cual
también permitió que no se repitiesen mitos o creencias y que estos fue-
sen realmente falsas creencias.
En las sesiones de exposición pública por parte del alumnado, este se
encontró cómodo en sus exposiciones y resultaron ser dos sesiones muy
provechosas, pues no solo se estaba compartiendo y asimilando cono-
cimiento y de una forma razonada y argumentada, sino que además se
estaba haciendo entre iguales, de estudiante a estudiante, lo que hizo
que la información y el conocimiento les llegase con su propio lenguaje
y bajo las mismas premisas y realidades que sus semejantes. Todo ello
nos garantiza, y así se constata de las observaciones y anotaciones rea-
lizadas por el docente en estas dos sesiones de exposiciones, que en esta
práctica se desarrolla el espíritu crítico, al permitir que el alumnado,
tanto el que en un momento dado expone su mito como el que lo está
escuchando, ponga en duda y se cuestione de forma crítica todo lo es-
tablecido.
El documento con el repositorio de mitos o falsas creencias que se ela-
boró con las participaciones de todo el alumnado fue muy bien
‒ ‒
valorado, y a buen seguro es y será un documento que les acompañará
en estos años de formación y de profesión docente.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
(1996) que los estudiantes han de ser invitados a preguntarse sobre
cuestiones importantes de la vida y tratar de encontrar respuestas en las
que la ciencia contribuye a hacer la vida mejor.
Aunque no muchos, pero si hemos encontrado algunos casos y expe-
riencias prácticas en las que se ha buscado la misma idea que lo que
aquí hemos comentado, refutar o rebatir aquellos mitos o falsas creen-
cias que tiene el alumnado sobre cuestiones de ciencias en general (Cas-
tillejo, 2018; Domènech, 2003; Fuertes et al., 2019; Núñez, 2018). Pues
como también hemos comentado en la introducción, el uso de las pre-
concepciones (donde muchas de ellas son falsas o erróneas) es una prác-
tica clásica en la didáctica de las ciencias.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
que permita la refutación de lo previamente conocido. Como hemos di-
cho en más de una ocasión, se trata de que el alumnado sea capaz de
desaprender algo conocido para volverlo a aprender.
Una futura línea de investigación estriba en si tras un tiempo más largo
se continúan dando los mismos resultados de éxito en el cambio con-
ceptual conseguido en este alumnado. O también que nivel de éxito o
de logro de dicho cambio conceptual se consigue por parte de este alum-
nado con las personas sobre las que ha incidido: familiares, amigos y
futuro alumnado. Por no decir de ampliar la muestra y llevar esta misma
investigación a otros niveles educativos y a otros grados universitarios.
También puede resultar interesante ampliar el cuestionario o variar los
mitos o falsas creencias que en él se pregunta, por otros menos conoci-
dos y también planteados algunos de forma correcta y otros de forma
errónea o falsa (alternando y no todos falsos como hemos hecho en esta
investigación).
La ciencia no es algo inamovible o algo siempre cierto. Debe estar en
continuo cuestionamiento. Debemos buscar el hacernos preguntas y tra-
tar de responderlas, el no aceptar todo tal y como nos lo presentan por
muy establecido o consensuado que esté. Solo de esta manera, gene-
rando la curiosidad, el interés y el desarrollo del pensamiento crítico
entre nuestro alumnado, conseguiremos desterrar y erradicar aquellas
falsas creencias, mitos e ideas preconcebidas erróneas que sobre la cien-
cia circulan y acechan de continuo en nuestra sociedad.
Es obligación de los docentes que se dedican a la enseñanza de las cien-
cias, procurar generar esta curiosidad y este pensamiento crítico entre
su alumnado, para de esta forma, al cuestionarse todas las cosas y po-
nerlas en duda hasta tener la certeza, tras una argumentación y un razo-
namiento sólido, de que realmente son así.
Es una tarea encomiable y un reto bastante ambicioso, que no por ello
debe abocarnos al desánimo y el fracaso, sino todo lo contrario, debe
inspirar en los docentes la necesidad de aportar, por poco que sea, cam-
bios y aportes hacía una nueva ciencia, más presente entre toda la so-
ciedad, y que sea conocida como algo cambiante, pero que a su vez, con
la comprobación y argumentación de sus ideas, se puede establecer
‒ ‒
como algo válido y certero que nos permite progresar como personas y
ciudadanos en este mundo global.
7. REFERENCIAS
‒ ‒
Cobern, W. W. (1996). Worldview theory and conceptual change in science
education. Science education, 80(5), 579-610.
https://doi.org/10.1002/(SICI)1098-237X(199609)80:5%3C579::AID-
SCE5%3E3.0.CO;2-8
Cohen, J. D., Jones, W. M., y Smith, S. (2018). Preservice and early career
teachers' preconceptions and misconceptions about making in education.
Journal of Digital Learning in Teacher Education, 34(1), 31-42.
https://doi.org/10.1080/21532974.2017.1387832
Cubero, R. (2000). Cómo trabajar con las ideas de los alumnos. Díada.
Delord, G. (2020). Investigar en la clase de ciencias. Ediciones Morata.
Delval, J. (1985). Las ideas espontáneas de los alumnos en el aprendizaje de las
ciencias: el caso de la luz. Revista de Educación, 278, 119-131.
http://hdl.handle.net/11162/70069
Díaz, F. J., Mora, L., Moreno, P., Rodríguez, F. D. P., y Sánchez, J. (2004).
Investigando sobre las ideas del alumnado. Una experiencia colaborativa
en el marco del proyecto “Escuelas que investigan”. Cooperación
Educativa. Kikirikí, 74, 72-76.
Domènech, A. (2003). La ciencia enredada. Educar en el 2000: revista de
formación del profesorado, 7, 63-65. http://hdl.handle.net/11162/85316
Etobro, A. B., y Banjoko, S. O. (2017). Misconceptions of genetics concepts
among pre-service teachers. Global Journal of Educational Research,
16(2), 121-128. https://doi.org/10.4314/gjedr.v16i2.6
Fuertes, M. Á., Sánchez, S. A., Corrochano, D., Jambrina, C. U., Méndez, C. R.,
Martín, M. L. D., y Teijón, P. H. (2019). Falsas creencias y
pseudociencias en los futuros maestros. Boletín ENCIC: Revista del
Grupo de Investigación HUM-974, 3(2), 72-74.
Ginat, D. (2003, enero). The greedy trap and learning from mistakes. En
Proceedings of the 34th SIGCSE technical symposium on Computer
science education (pp. 11-15). https://doi.org/10.1145/611892.611920
González-Méijome, J. M. (2017). Science, pseudoscience, evidence-based
practice and post truth. Journal of optometry, 10(4), 203.
https://dx.doi.org/10.1016%2Fj.optom.2017.08.001
Grospietsch, F., y Mayer, J. (2018). Professionalizing Pre-Service Biology
Teachers’ Misconceptions about Learning and the Brain through
Conceptual Change. Education Sciences, 8(3), 120.
http://doi.org/10.3390/educsci8030120
‒ ‒
Helmi, H., Rustaman, N. Y., Tapilow, F. S., y Hidayat, T. (2019). Preconception
analysis of evolution on pre-service biology teachers using certainty of
response index. Journal of Physics: Conference Series, 1157(2), 022033.
https://doi.org/10.1088/1742-6596/1157/2/022033
Karpudewan, M., Zain, A. N. M., & Chandrasegaran, A. L. (2017). Overcoming
Students' Misconceptions in Science. Springer.
Lownsbery, D. S., y Flick, L. B. (2020). Examining middle school students’
knowledge and beliefs about earthquake and tsunami. Journal of
Geoscience Education, 68(4), 311-323.
https://doi.org/10.1080/10899995.2019.1707587
Mahmud, M. C., y Gutiérrez, O. A. (2010). Estrategia de Enseñanza Basada en el
Cambio Conceptual para la Transformación de Ideas Previas en el
Aprendizaje de las Ciencias. Formación universitaria, 3(1), 11-20.
https://dx.doi.org/10.4067/S0718-50062010000100003
Martínez-Torregrosa, J., Domenech, J. L., y Verdu, R. (1994). Del derribo de
ideas al levantamiento de puentes: la Epistemología de las ciencias como
criterio organizador de la enseñanza en las ciencias/ Física y Química.
Revista De Enseñanza De La Física, 7(2), 22–34.
https://revistas.unc.edu.ar/index.php/revistaEF/article/view/16214
Núñez, M. A. (2018). Proyecto educativo para aclarar “mitos” y falsas creencias
nutricionales que influyen en la obesidad infantil. [Trabajo Fin de
Grado]. Universidad Pontificia de Comillas.
Ojeda-Landirez, E., Secaira-Flores, O., y Castro-Chávez, N. (2021). La ciencia y
la pseudociencia: Dilema. Polo del Conocimiento, 6(5), 644-661.
https://dx.doi.org/10.23857/pc.v6i5.2689
Özdemir, E. (2017). Comics in modern physics: Learning blackbody radiation
through quasi-history of physics. Studies in Educational Research and
Development, 1(1), 41-59.
Pozo, J. I., y Carretero, M. (1987). Del pensamiento formal a las concepciones
espontáneas: ¿Qué cambia en la enseñanza de la ciencia? Infancia y
Aprendizaje, 10(38), 35–52.
http://doi.org/10.1080/02103702.1987.10822161
Siponen, M., y Klaavuniemi, T. (2021). Demystifying beliefs about the natural
sciences in information system. Journal of Information Technology,
36(1), 56–68. https://doi.org/10.1177/0268396220901535
‒ ‒
Sommeillier, R., Quinlan, K. M., y Robert, F. (2021). Domain of validity
framework: a new instructional theory for addressing students’
preconceptions in science and engineering. Studies in Science Education,
57(2), 205-239. https://doi.org/10.1080/03057267.2020.1824472
Vosniadou, S. (2020). Students’ Misconceptions and Science Education. En
Oxford Research Encyclopedia of Education. Oxford University Press.
https://doi.org/10.1093/acrefore/9780190264093.013.965
Yépez A., M., Yépez L., M. y Salazar, A. (2017). Las ideas previas que poseen
los estudiantes de la FaCE-UC en torno al aprendizaje de los problemas
ambientales. Revista Ciencias de la Educación, 27(50), 170-188.
Zhou, S. N., y Xiao, H. (2018). Pre-service science teachers’ predictions on
student learning difficulties in the domain of mechanics. Journal of
Baltic Science Education, 17(4), 649.
‒ ‒
CAPÍTULO 11
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
educación secundaria. Gestión del aula. Finalidades y objetivos.
Competencias.
‒ ‒
multimedia), transformarla en conocimiento y aplicarla en los procesos
de enseñanza y aprendizaje en las materias propias de la especialización
cursada; CG5 - Diseñar y desarrollar espacios de aprendizaje con espe-
cial atención a la equidad, la educación emocional y en valores, la igual-
dad de derechos y oportunidades entre hombres y mujeres, la formación
ciudadana y el respeto de los derechos humanos que faciliten la vida en
sociedad, la toma de decisiones y la construcción de un futuro sosteni-
ble; CG6 - Adquirir estrategias para estimular el esfuerzo del estudiante
y promover su capacidad para aprender por sí mismo y con otros, y
desarrollar habilidades de pensamiento y de decisión que faciliten la
autonomía, la confianza e iniciativa personales.
‒ ‒
1.2. CARACTERÍSTICAS DEL ALUMNADO DEL MUPES DE LA ESPECIALIDAD
DE BIOLOGÍA Y GEOLOGÍA.
‒ ‒
aprenda. Si en su entendimiento sustituís una sola vez la autoridad a la
razón, no discurrirá más y jugará con él la opinión ajena”.
La filosofía constructivista considera que el aprendizaje es una cons-
trucción que se produce a partir de los desequilibrios o conflictos cog-
noscitivos que modifican los esquemas de conocimiento del sujeto (Ca-
lero, 2008) y fomenta un cambio de roles del profesorado y del alum-
nado en el proceso de enseñanza-aprendizaje. Por un lado, el profesor
pasa a ser guía y orientador, y no un mero transmisor de conocimientos
en la escuela tradicional. Por otro lado, el alumnado no es una tábula
rasa y se convierte en protagonista de su propio conocimiento, siendo
aprendices independientes cuyo su objetivo es llegar al dominio de co-
nocimiento (Meichenbaum y Biemiller, 1998). El aprendizaje se con-
cibe como una reconstrucción de los esquemas de conocimiento del su-
jeto a partir de las experiencias que éste tiene con los objetos, interac-
tividad y con las personas, intersubjetividad, en situaciones de interac-
ción que sean significativas de acuerdo con su nivel de desarrollo y con
los contextos sociales que le dan sentido (Calero, 2008).Esta filosofía
acompaña a un cambio conceptual ya contemplado y revisado por
Strike y Posner (1992) y posteriormente por Moreira y Greca (2003) ya
que éste, en el sentido de sustituir significados no existe. El aprendizaje
significativo no es borrable (Novak, 2002); los significados internaliza-
dos significativamente (incorporados a la estructura cognitiva de modo
no arbitrario y no literal) quedan para siempre en la estructura cognitiva
del aprendiz, como posibles significados de un subsumidor más elabo-
rado, rico y diferenciado. En el fondo, es como si cada individuo tuviera
su propia historia cognitiva personal y no borrable (Moreira y Greca,
2003, p. 306). Esto va en consonancia con la idea establecida por Au-
subel (1963, 1968), de que el conocimiento previo es el factor aislado
que más influye en el aprendizaje. El modelo de cambio conceptual ini-
cial (Posner, 1982) fue criticado por otros autores que abogaban por la
necesidad de pensar en el caso del aprendizaje de conceptos científicos
en un cambio que incluyera no sólo lo conceptual, sino también lo pro-
cedimental y lo actitudinal (Gil et al., 1999) y que el cambio conceptual
exigía, el cambio de principios epistemológicos y ontológicos (Pozo y
Gómez Crespo, 1989). Es por esta razón por la que se ha diseñado una
‒ ‒
experiencia educativa que contempla la sinergia metodológica me-
diante el desarrollo de una actividad cooperativa de aprendizaje grupal
de diseño de mapas conceptuales y su integración en un modelo de co-
nocimiento sobre el tema de la clonación y una discusión guiada tras la
búsqueda de argumentos científicos a favor y en contra,
ya que se trata de una temática que puede resultar polémica y que se
adentra en aspectos éticos y axiológicos. Esta innovación pretende pro-
ducir no sólo cambios en el conocimiento conceptual del alumnado,
sino también en lo procedimental y actitudinal, con el fin de lograr un
cambio conceptual y un aprendizaje significativo.
Los mapas conceptuales son herramientas gráficas que sirven para or-
ganizar y representar el conocimiento y que fueron ideados por Novak
(1990; 1991). Incluyen conceptos, que son sustantivos o infinitivos de
verbos y que generalmente se encierran en círculos o cajitas y las rela-
ciones entre conceptos se indican por una línea conectiva entre ellos,
que contiene una o varias palabras de enlace. Estas palabras de enlace
especifican la relación entre dos conceptos y dan dinamismo y signifi-
cado puesto que incorporan verbos y adverbios, generando de este
modo proposiciones. Las proposiciones son afirmaciones sobre un ob-
jeto o evento en el universo, ya sea que ocurra naturalmente o sea cons-
truido. Contienen dos o más conceptos conectados mediante palabras o
frases de enlace para formar una afirmación con significado, constitu-
yendo unidades semánticas. Los conceptos se representan de forma je-
rárquica con los conceptos más inclusivos y más generales en la parte
superior del mapa y los más específicos y menos generales, debajo. La
estructura jerárquica para un dominio de conocimiento en particular
también depende del contexto en el cual ese conocimiento está siendo
aplicado o considerado. Por ello, es mejor construir mapas conceptuales
con referencia a una pregunta que buscamos responder, que se deno-
mina pregunta de enfoque.
Los modelos de conocimiento (González et al.,2013; Pérez de Villa-
rreal, 2018) son herramientas metacognitivas muy potentes ideados ini-
cialmente por Novak y Cañas (2006), a partir de mapas conceptuales
‒ ‒
interconectados que pueden diseñarse empleando el software libre
Cmap Tools (IHMC, Florida). Estas herramientas didácticas favorecen
la captación de atención por parte del alumnado y consiguen su moti-
vación para la construcción idiosincrática de su propio conocimiento.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
2.2 SEGUNDA PARTE DE LA EXPERIENCIA EDUCATIVA:
VIDEOCONFERENCIA (ZOOM)
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
TABLA 1. Tabla que muestra las sesiones de la experiencia de innovación educativa me-
diante la sinergia de dos metodologías: modelado de conocimiento y discusión guiada.
NIVEL DE
SESIONES TAXONOMÍA DE ACTIVIDAD
BLOOM
Explicación de mapas conceptuales y del em-
Recordar
pleo de Cmap Tools
Comprender
Lectura de un texto sobre clonación
Aplicar Elaboración de un MC respecto a un texto so-
PRESENCIAL Analizar bre la clonación.
Evaluar Diseño de un modelo de conocimiento coope-
Crear rativo integrado por los MC elaborados
Explicación de la actividad de discusión guiada
Recordar
Presentación sobre la búsqueda de información
Comprender
científica
Realización de la búsqueda de información
científica utilizando bases de datos científicas y
Aplicar
recursos de la biblioteca
VIRTUAL Analizar
Elaboración de una tabla de argumentos a favor
y en contra de la clonación
Tomar parte activa en la discusión guiada me-
Evaluar
diante la herramienta de videoconferencia
Crear
Zoom
Fuente: elaboración propia
‒ ‒
través de una presentación de powerpoint, cómo realizar una búsqueda
de información científica fiable empleando los recursos de la biblioteca
de la universidad y las bases de datos que se emplean tanto en ciencias
como en ciencias sociales. En la segunda sesión, una vez que los grupos
de la discusión guiada (a favor y en contra) ya se habían establecido,
comenzaron a realizar la búsqueda de información científica para con-
formar su tabla de argumentos científicos a favor y en contra. En la
última sesión, se realizó la discusión guida por Zoom que tuvo una du-
ración superior a la inicialmente esperada de 1 hora debido a la motiva-
ción del alumnado.
Todas las sesiones se configuraron basándose en la clasificación jerár-
quica de pensamiento (de lo más concreto a lo más abstracto) de la ta-
xonomía de Bloom (1956; Adams, 2015), es decir, las primeras activi-
dades a realizar consistían en recordar y comprender conceptos y pro-
cedimientos (explicaciones sobre MC y sobre la actividad de discusión
guiada); las siguientes actividades se correspondían con los niveles de
aplicar y analizar de la taxonomía (lectura de texto y elaboración de
MC por un lado, y búsqueda de información científica y elaboración de
tabla de argumentos, por otro). Las últimas actividades, se basaron en
evaluar y crear, pensamientos de orden superior que consistieron en di-
señar un modelo de conocimiento completo de manera cooperativa y en
tomar parte activa en la discusión guiada y emitir juicios críticos apli-
cando los conocimientos en situaciones concretas, con la intención de
conseguir desarrollar los procesos psicológicos superiores (Vygotsky y
Cole, 1978).
4. RESULTADOS
‒ ‒
Tools. Todos los MC se unieron a un mapa esqueleto sobre la clona-
ción, del que pendían el resto de los MC, constituyendo un modelo de
conocimiento con tantas dimensiones como MC habían sido elaborados
por los grupos (Figuras 1-6). Para acceder al mapa original guardado en
el servidor de Cmap Tools, se debe utilizar el siguiente nombre de usua-
rio (AEBG2020) y la siguiente contraseña (AEBG2020).
En total, se confeccionaron un total de 6 MC, que conformaron el mo-
delo de conocimiento de un texto completo sobre la clonación. Cada
MC se obtiene haciendo click en el icono que se muestra debajo del
concepto que lo incluye y con el que está relacionado.
FIGURA 1. Mapa conceptual esqueleto del que penden el resto de mc elaborados por los
alumnos/as referente al texto 1 y elaborado por el grupo 1. si se hace click en el icono bajo
el concepto “clonación” aparece el siguiente mc.
‒ ‒
FIGURA 2. Mapa conceptual referente al texto 2 sobre clonación y realizado por el grupo
2.
FIGURA 3. Mapa conceptual referente al texto 3 sobre clonación y realizado por el grupo
4.
‒ ‒
FIGURA 4. Mapa conceptual referente al texto 4 sobre clonación y realizado por el grupo
3.
‒ ‒
FIGURA 6. Mapa conceptual referente al texto 6 sobre clonación y realizado conjunta-
mente.
‒ ‒
FIGURA 7. Ejemplo de la tabla de argumentos del grupo 1, a favor de la clonación, que
incluye los apartados siguientes: fuentes, artículos seleccionados, palabras clave, argu-
mentos/evidencias y conclusiones.
‒ ‒
Fuente: Elaboración del grupo 1
‒ ‒
elevado de intentos para conseguir un solo clon. La eficiencia ronda el
6%. En el caso del bucardo, para producir un solo embrión viable, se
necesitaron 57 embriones. Además, atenta contra la varibailidad gené-
tica y produce una pérdida de diversidad, clave para la supervivencia
de las especies. También pondría en peligro los ecosistemas al reintro-
ducir especies en peligro de extinción.
F: Los caballos de carrera son una fuente de ingresos para algunas fa-
milias. Se entiende que haya familias que quieran clonar un caballo si
es bueno. Yo no lo haría, pero lo entiendo. Hay gente sin familia y su
única compañía es su perro y entiendo que lo quisieran clonar por la
carga emocional que supone. Otro aspecto a tener en cuenta sería plan-
tearnos si es válida la copia de mascotas para niños con discapacidad,
ya que por ejemplo un niño autista que desarrolla una percepción amo-
rosa hacia su animal podría querer el mismo animal si falleciera, ya que
el vínculo puede ser muy fuerte.
C: Sin embargo, hay que tener en cuenta la epigenética. La influencia
ambiental es muy importante y el clon no va a ser exactamente igual.
F: Genéticamente sería igual. La diferencia sería mínima.
C: Se necesita legislación y hace falta establecer el estatus o trato ético
hacia estos animales que son clones o que van a ser clonados. La clo-
nación, además, no asegura que el comportamiento del animal o el fe-
notipo sea igual. Por ejemplo, los gemelos univitelinos que son criados
en el mismo ambiente no tienen el mismo comportamiento ni apariencia
exacta, por lo que el argumento de tener mascotas idénticas no es del
todo cierto en la realidad o en la práctica.
F: Nosotros creemos que la clonación puede ser interesante para la ob-
tención de medicamentos, no para el uso lúdico u ocioso de animales.
Hay artículos que son partidarios de producir biomoléculas a partir de
la leche de vacas. Si se seleccionan las vacas que producen esas proteí-
nas y se clonan, todas las vacas producirían la proteína que interesa y
el fin de la clonación sería mejorar el bienestar humano. A nivel epige-
nético podrían no ser iguales, pero sí a nivel productivo y estas vacas
no sufrirían puesto que su vida se desarrollaría en la misma explotación
‒ ‒
ganadera de sus madres. Depende del objetivo, considero que no es tan
relevante la epigenética, por ejemplo, para obtener medicamentos.
Profesora: ¿Y qué pasaría en el caso de la recuperación de las especies
extintas?
C: Si se clonaran las especies extintas, no encontrarían su nicho ecoló-
gico. Se intentó con el bucardo, pero se reduciría la diversidad genética
y a fin de cuentas, sería un híbrido porque la madre sería de una especie
afín, pero no de la misma especie.
F: Yo creo que se evitaría el desequilibro de especies en el ecosistema.
La recuperación de especies extintas podría tener sentido, cuando no-
sotros, los seres humanos, hemos sido los responsables de su extinción.
Por ejemplo, si se clonara el caballo de Prezwalsky, aunque fuera un
híbrido con la especie más cercana, ya sería un avance para la conser-
vación el hacerlo de manera artificial. La clonación podría ser una he-
rramienta para el lince ibérico o el panda rojo.
C: Las especies en peligro de extinción, podrían suponer un reservorio
de enfermedades y provocar desequilibrios en el medio natural.
Para evaluar la discusión guiada, se tuvieron en cuenta el número de
intervenciones totales de cada alumno/a y de los grupos a favor y en
contra, la argumentación y capacidad de contra-argumentar, la comuni-
cación y la actitud. Definitivamente, todos los grupos defendieron sus
posturas y aportaron conocimientos adquiridos a través de la lectura de
artículos científicos o de su propia formación previa y la discusión re-
sultó muy enriquecedora y significativa.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
eficientemente. Crearon buenos mapas conceptuales manualmente que
luego adaptaron en el Cmap Tools conformando un modelo de conoci-
miento de 6 dimensiones (1 dimensión por cada MC) y elaboraron ta-
blas con los argumentos a favor y en contra de la clonación, basándose
en fuentes de información científicas y de divulgación fiables, que en-
contraron tras una búsqueda en bases de datos científicos propios de las
ciencias y de las ciencias sociales. Cada dimensión denota un nivel de
profundización del conocimiento.
La discusión guiada (Casal y Granda, 2003) se realizó a través de vi-
deoconferencia Zoom y a pesar de que fue una sesión muy didáctica y
enriquecedora, la gestión de los tiempos, las pausas de comunicación
entre las intervenciones y la cesión de los turnos fueron más complica-
das de manera virtual. La elección de docencia online se debió a la pan-
demia y a la organización del MUPES en torno a ella. No obstante, para
ponerlo en práctica en el futuro, consideramos que es más fácil gestio-
nar la discusión guiada de manera presencial.
La discusión guiada duró más tiempo del inicialmente establecido, de-
bido a la implicación del alumnado, que de manera vehemente defendió
la postura que le había tocado, empleando argumentos extraídos de sus
fuentes de información y que redactaron en la tabla de argumentos.
Ambas actividades utilizadas de forma sinérgica pueden utilizarse para
la profundización del conocimiento en cualquier tema del curriculum
de Biología y Geología (de primero a tercero de la ESO) y para alcanzar
los niveles más elevados de pensamiento abstracto, asegurándose el
aprendizaje significativo y promoviendo el cambio conceptual en el
alumnado. Este cambio conceptual puede ser ayudado en la discusión
guiada por el hecho de que el alumnado no defiende su propia postura,
sino la que le toca por azar, con lo cual, debe incorporar un juego de
roles para defender los argumentos, que contribuye a aumentar la com-
prensión, a través de la intersubjetividad, la coherencia, la parsimonia
y la transparencia y el cambio conceptual (González, 2008) conseguido
a través del diseño cooperativo del modelo de conocimiento al asimilar
nuevos conceptos, reestructurar conexiones entre los conceptos exis-
tentes y experimentar una alteración en la complejidad estructural y en
‒ ‒
la validez proposicional de su estructura de conocimiento. De este
modo, se cumplen los tres axiomas del cambio conceptual:
‒ Los seres humanos son constructores de significados
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
‒ El alumnado tomó parte activa en la discusión guiada defen-
diendo los argumentos que habían elaborado de manera muy
apasionada lo cual indicó que el alumnado estaba motivado
por la actividad.
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8. REFERENCIAS
‒ ‒
González, F. (2008). El mapa conceptual y el diagrama UVE. Recursos para la
enseñanza superior en el siglo XXI. Narcea.
González, F., Veloz, J., Rodríguez, I.A., Veloz, L.E.., Guardían, B. and Ballester,
A. (2013). Los modelos de conocimiento como agentes de aprendizaje
significativo y de creación de conocimiento. Teoría de la Educación.
Educación y Cultura en la Sociedad de la Información, 14 (2), 107-132.
Meichenbaum, D., and Biemiller, A. (1998). Nurturing independent learners:
Helping students take charge of their learning [Fomentar aprendices
independientes: Ayudar al alumnado a tomar las riendas de su
aprendizaje]. Brookline Books Inc.
Moreira, M.A. and Greca, I. M. (2003). Cambio conceptual: análisis crítico y
propuestas a la luz de la teoría del aprendizaje significativo. Ciencia
&Educaçao, 9 (2), 301-3015.
Novak, J.D. (1990). Concept maps and Vee diagrams: Two metacognitive tolos
for science and mathematics education [Mapas conceptuales y diagrams
UVE: Dos herramientas metacognitivas para la enseñanza de las ciencias
y las matemáticas]. Instructional Science, 19, 29-52.
Novak, J.D. (1991). Clarify with concept maps: A tool for students and teachers
alike [Aclarar con mapas conceptuales: una herramienta tanto para
alumnos como para profesores]. The Science Teacher, 58, 45-49.
Novak, J.D. (2002). Meaningful learning: The essential factor for conceptual
change in limited or appropriate propositional hierarchies (liphs) leading
to empowerment of learners [El aprendizaje significativo: el factor
esencial para el cambio conceptual en las jerarquías proposicionales
limitadas o apropiadas que conducen al empoderamiento del alumnado].
Science Education, 86 (4), 548-571.
Novak, J.D. and Cañas, A. J. (2006). The theory underlying concept maps and
how to construct them [La teoría en que se basan los mapas conceptuales
y cómo construirlos] Technical report IHMC Cmap Tools, Institute for
Human and Machine Cognition.
Pérez de Villarreal, M. (2018). Design of Knowledge Models for Teaching
Experimental Sciences at University [Diseño de modelos de
conocimiento para la enseñanza de las ciencias experimentales en la
universidad]. Universal Journal of Educational Research, 6(3), 519 -
540. DOI: 10.13189/ujer.2018.060316.
‒ ‒
Posner, G. (1982). Accomodation of a scientific conception: toward a theory of
concpetual change [Acomodación de la concepción científica: hacia una
teoría del cambio conceptual]. Science Education, 66, 211-227.
Pozo, J.I. and Gómez Crespo, M.A. (1998). Aprender y enseñar ciencia. Morata.
Strike, K.A. and Posner, G.J. (1992). A revisionist theory of conceptual change
[Una teoría revisionista del cambio conceptual]. In: Duschl, R. and
Hamilton, R. (Eds.). Philosophy of science, cognitive psychology and
educational theory and practice [Filosofía de la ciencia, psicología
cognitiva y teoría y práctica educativa]. Suny Press.
Vygotsky, L., & Cole, M. (1978). Mind in society: The development of higher
psychological processes [La mente en la sociedad: El desarrollo de los
procesos psicológicos superiores]. Cambridge: Harvard University Press.
‒ ‒
CAPÍTULO 12
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
El TBL utiliza una metodología bien definida, sistemática y estructu-
rada que se aplica de forma secuenciada, en la que uno o varios profe-
sores pueden dirigir en una clase grande, el trabajo de varios grupos
funcionando simultáneamente. El resultado es que los estudiantes par-
ticipan en su aprendizaje de manera activa, que aprenden a pensar de
manera individual y en grupo y lo que es más importante, aprenden a
aplicar el conocimiento adquirido para comprender e interpretar pro-
blemas reales. Como consecuencia de todo ello se genera un aprendi-
zaje útil. Según los expertos en la utilización del TBL, para que este sea
eficaz, es necesario que se mantengan siempre los pilares metodológi-
cos, por ello, la clave del éxito está en mantener los elementos esencia-
les de su metodología (Michaelsen y Sweet, 2008). Estos elementos
esenciales son cuatro: 1. Formación y manejo adecuado de los grupos;
2. Motivación de los alumnos para venir preparados a clase. 3. Utiliza-
ción por los estudiantes de los conceptos aprendidos para resolver pro-
blemas; y 4. Evaluación de los estudiantes, tanto individualmente como
en grupo.
En la primera parte de este trabajo se presenta en detalle la implemen-
tación de la metodología de TBL en las sesiones prácticas de la asigna-
tura de Anatomía y Embriología de primer año de Grado en Veterinaria,
incluyendo un estudio comparado del rendimiento del TBL vs. prácticas
tradicionales. En la segunda parte del trabajo se analizan en detalle los
cuatro elementos esenciales del TBL y la adaptación de profesores y
alumnos a esta experiencia TBL.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
interpretación del TBL y lo adaptó en la impartición de sus
sesiones prácticas.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
de valoración del conocimiento adquirido; Fase IV o fase de resolución
de dudas y aclaración de conceptos; y Fase V o fase de pruebas de apli-
cación de razonamiento anatómico, en al menos una actividad aplica-
tiva.
‒ ‒
FIGURA 1. Material anatómico preparado para las sesiones de estudio individual presencial
del módulo de osteología de la cabeza.
.
‒ ‒
FIGURA 2. Realización del test de aprendizaje individual (tai), con papel y lápiz y corrección
manual.
‒ ‒
Tras finalizar el TAI, los estudiantes se reunían en su grupo correspon-
diente y realizaban el mismo test de aprendizaje, pero esta vez en
equipo (TAE). Previamente el grupo discutía las posibles respuestas y
consensuaban la respuesta o respuestas que consideraban correctas.
Cuando las preguntas eran de respuesta de elección múltiple y para po-
der presentar las respuestas de los grupos de forma simultánea, cada
grupo disponía de un set de tarjetas con las letras de las respuestas. Los
portavoces levantaban a la vez una tarjeta con su respuesta (Figura 4).
Cada grupo defendía su respuesta a través de su portavoz. Posterior-
mente se razonaban las respuestas en conjunto con la participación si
era necesaria del profesor, que a veces, intervenía para activar la discu-
sión entre los distintos grupos.
FIGURA 4. Debate entre grupos tras el test de aprendizaje en equipo (tae). Después de
debatir y consensar una respuesta, todos los portavoces señalan la respuesta o respuestas
que han seleccionado como correctas y si hay desacuerdo entre grupos se debate y argu-
menta la respuesta.
‒ ‒
fórmulas de trabajo dependiendo en gran medida del contenido de la
sesión y de cómo el profesor responsable de la misma quería enfocarlo.
Con el fin de exponer los conceptos fundamentales que consideraba im-
portantes para reforzar los objetivos de aprendizaje del módulo corres-
pondiente y presentar nueva información, el profesor podía utilizar pre-
sentaciones en ppt, o cualquier otro medio audiovisual que considerase.
Este tiempo también se dedicaba a la resolución de dudas y a plantear
actividades aplicativas sobre material anatómico real y especialmente
preparado, previamente por el profesor. En estas preparaciones los es-
tudiantes debían resolver los problemas que el profesor les formulaba.
Problemas que los alumnos debían discutir en grupo y desarrollar los
correspondientes razonamientos anatómicos. También utilizábamos el
tiempo asignado a la mini clase para recibir el feed-back correspon-
diente de los alumnos.
‒ ‒
sesiones), módulo de cavidad torácica y corazón (2 sesiones) y módulo
de tegumento común (1 sesión). Todos los módulos TBL debían man-
tener los elementos esenciales del TBL. En la Figura 5, se presenta el
esquema que contiene todos los elementos educativos que se deben de
utilizar para el diseño de los diferentes módulos. El diseño de los mó-
dulos de TBL se empezó formulando la siguiente pregunta, qué es lo
que queremos que los estudiantes sean capaces de hacer al final de cada
módulo. Y una vez definido ese objetivo, se estableció el contenido que
los alumnos tenían que preparar. Para ello se organizó la mini clase, con
el contenido, y el formato que cada profesor consideró, así como las
posibles actividades aplicativas. La distribución del tiempo dependió
en gran medida del contenido y del número de actividades aplicativas
que se plantearon en cada módulo. En la Tabla 1, presentamos una pro-
gramación del tiempo de las actividades en un módulo TBL completo.
‒ ‒
TABLA 1. Actividades y distribución aproximada del tiempo en una sesion típica de TBL.
TRAI: Razona-
Los estudiantes de forma individual razonan tratan de resolver un
miento Indivi-
problema real utilizando lo aprendido en los pasos anteriores.
20 min dual de una
Posteriormente realizan un de razonamiento anatómico individual
actividad apli-
(TRAI).
cativa
Al finalizar cada uno de los módulos, se les pedía a los alumnos que
completasen una pequeña encuesta. En la Figura 5 se ha incluido la
encuesta tipo para hacer un seguimiento y control del desarrollo de los
módulos. En este caso se trata de la encuesta realizada para el módulo
de Embriología. En la encuesta se les pedía que incluyeran los comen-
tarios que consideraran sobre el módulo TBL que habían realizado,
tanto positivos como negativos. Se les pedía que valoraran en
‒ ‒
concreto el estudio individual de esa parte, el desarrollo de las discu-
siones en grupo y los controles realizados (TAI, TAE, TRAI y/o
TRAE), así como cualquier otro comentario que considerasen opor-
tuno incluir.
‒ ‒
Nº de sesiones
SUSPENSO (0-4 pun- NOTABLE (8-9 pun- SOBRESALIENTE (10
prácticas y % del APROBADO (5-6 puntos) BIEN (7 puntos)
tos) tos) puntos)
global
Demuestra un conoci-
miento insuficiente, al Identifica los huesos que
(2/21: 9,5%) Identifica además los
fallar en la identifica- conforman el esqueleto de Identifica además las
Conocimiento anató- Conoce además nervios y estructuras
ción de los huesos que la cabeza, así como los re- estructuras glandula-
mico las estructuras vasculares de la ca-
conforman el esqueleto lieves óseos correspon- res presentes en los
TAI 50% musculares en un beza en un corte ana-
‒
de la cabeza y de los dientes en un corte anató- diferentes cortes de
TAE 20% corte anatómico. tómico.
relieves óseos en un mico la cabeza.
corte anatómico.
‒
Plantea un razona-
No consigue identificar Identifica las es- miento anatómico
Actividad aplicativa Identifica las estructuras Integra los conocimien-
las estructuras anató- tructuras anatómi- adecuado para inter-
TRAI 10% anatómicas necesarias tos anatómicos en la
TABLA 2. Rúbrica elaborada para el módulo de osteología de cabeza.
4. RESULTADOS
Las sesiones informativas las llevo a cabo la coordinadora del TBL, que
ya había realizado experiencias de TBL y otras formas de aprendizaje
activo con anterioridad. Una vez realizada la fase informativa, cada uno
de los profesores participantes diseñó y organizó su propia propuesta
de TBL en las prácticas que tenía asignadas. De los ocho profesores que
aceptaron su participación en la experiencia, solo siete intentaron la im-
plantación del TBL, uno de los ocho abandonó voluntariamente la ex-
periencia. La coordinadora realizó un seguimiento de todas las sesiones
impartidas, comprobando que se mantenían los principios esenciales de
TBL y orientando a los profesores que se lo solicitaron. Solo se consi-
deraron sesiones de TBL a aquellas en cuyo diseño se mantuvieron to-
dos los principios esenciales. Las diferentes formas de interpretación e
implantación del TBL por los distintos profesores se describen y anali-
zan en la segunda parte de este trabajo.
En casi todas las sesiones se realizó un TAI al inicio de las mismas. El
TAI consistió en la proyección de una imagen de una preparación ana-
tómica sobre la que se realizaban preguntas. Se utilizaron dos tipos de
preguntas, preguntas en las que se les pedía a los estudiantes que iden-
tificaran una serie de estructuras anatómicas en la imagen proyectada y
preguntas con respuestas de elección múltiple. En las sesiones en las
‒ ‒
que las preguntas eran de identificación de estructuras anatómicas, era
difícil conseguir que los alumnos discutieran sobre las posibles respues-
tas. Por lo que el TAE servía fundamentalmente para corregir el TAI y
ver los que habían hecho bien y mal. Por el contrario, en las preguntas
con respuestas de elección múltiple, la formulación de las posibles res-
puestas se diseñó para provocar discusión y por lo general esto fue así.
En casi todas las sesiones los distintos profesores, en el caso de no pro-
ducirse discusión, participaban preguntando a los alumnos sobre algún
aspecto de la pregunta, con el fin de motivarles e incitarle a la discusión
entre los diferentes grupos.
La organización de la mini clase, en las sesiones que se impartió, varió
mucho en función del contenido de la práctica y del profesor. En algu-
nas ocasiones la mini clase se convirtió en una repetición de las sesiones
tradicionales que se impartían en esas prácticas. En la mini clase de las
sesiones TBL, el profesor aclaraba conceptos, añadía contenido nece-
sario para reforzar el conocimiento necesario para resolver los proble-
mas de las actividades aplicativas. El contenido nuevo se introdujo con
diversos medios audiovisuales, o incluso en preparaciones y/o modelos
anatómicos, en los que el profesor formulaba problemas y resolvía las
posibles dudas que podían surgir a los alumnos.
Se realizó un test individual de razonamiento anatómico de una activi-
dad aplicativa TRAI, posteriormente se realizó el mismo test una vez
reunidos los grupos, en este caso lo denominamos TRAE. Muchas ve-
ces en función del tiempo solamente realizamos TRAE. Las diferentes
pruebas realizadas en un mismo módulo, se coordinaron para que desa-
rrollaran aprendizaje continuo y continuado.
‒ ‒
de alumnos y profesores a la experiencia TBL en general se describe y
discute en detalle en la segunda parte de este trabajo.
‒ ‒
TABLA 3. Estudio comparativo del rendimiento en las sesiones prácticas del estudio de la
cabeza mediante secciones: sesiones prácticas impartidas con TBL vs. sesiones prácticas
impartidas con formato tradicional.
Notas
59/152 75/152 12/152 4/152 2/152
TBL Fi-
38.81% 49.34% 7.89% 2,63% 1.31%
nal
‒ ‒
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
resolución de los problemas planteados en las actividades aplicativas.
También era el tiempo que se utilizó para recibir el feed-back de los
alumnos. Esta comunicación con los estudiantes fue importante ya que
nos permitió detectar posibles problemas y corregirlos sobre la marcha.
La fase de valoración de la aplicación del conocimiento adquirido (Fase
V) se realizó presentando diferentes problemas reales sobre los que los
alumnos pensaron y razonaron, de forma individual y en equipo. Al tra-
tarse en muchos casos de aplicaciones clínicas reales, los alumnos de-
mostraron estar muy motivados y trataron siempre de resolver los pro-
blemas planteados. Aunque en todo momento se les aclaró que el diag-
nóstico no era el objetivo de las actividades planteadas, en varias oca-
siones los estudiantes se frustraron porque no se veían capacitados para
realizar un diagnóstico adecuado. Por ello, les recordábamos que no
buscábamos ningún diagnóstico, sino más bien el razonamiento anató-
mico que pudieran realizar sobre el problema planteado. Y que todos
los razonamientos anatómicos realizados con fundamento eran válidos,
y así se valoraban, independientemente de que conllevaran o no un
diagnóstico. En todas las sesiones de TBL, se produjo una alta partici-
pación en las discusiones en equipo, con o sin la participación del pro-
fesor, tanto en la discusión previo al TAE, como en la discusión previa
al TRAE, lo que hizo posible un aprendizaje en grupo fuera eficaz. El
aprendizaje fue continuo y continuado, lo que permitió a los estudiantes
mejorar sus conocimientos y demostrarlo en pruebas posteriores. El di-
seño de los módulos TBL tiene mucha importancia a la hora de conse-
guir los objetivos planteados y siempre deben organizarse respetando
los elementos esenciales del TBL. Aunque debe orientarse siempre a
las actividades aplicativas, esto no ha sido en todos los casos en esta
experiencia. El hecho de que la evaluación haya sido continúa a lo largo
de las sesiones, ha ayudado a que los estudiantes no perdieran la moti-
vación en el caso de haber fallado en la prueba inicial. Los estudiantes,
aprendieron a pensar, y han podido comprobar como el conocimiento
crecía según avanzaba el desarrollo del módulo. Y sobre todo, como
eran capaces de aplicar el conocimiento adquirido para entender los
problemas clínicos reales que se les planteaban. La utilización de la rú-
brica en todos los módulos permitió que los alumnos conocieran en todo
momento lo que se esperaba de ellos, y cómo se iba a valorar el dominio
‒ ‒
que demostraban de las distintas partes del contenido. En las diferentes
rúbricas también se detallaba cómo se iba a aplicar el contenido en las
actividades aplicativas y cómo se iba a valorar.
Las fases completas del TBL solo se pudieron implementar con éxito
en el 40% de las sesiones prácticas. En las demás sesiones, se desarro-
llaron diferentes modificaciones que no se ajustaron a la metodología
descrita para el TBL. Las formas de interpretación del TBL por los dis-
tintos profesores participantes, se detalla en la segunda parte de este
trabajo.
La plataforma Moodle y el Campus Virtual, han sido el punto de en-
cuentro y de comunicación profesor-alumno y nos facilitó el desarrollo
de las fases I, II y III. La fase informativa la hemos realizado a través
del Collaborate, creando un espacio de comunicación con los estudian-
tes y con los profesores participantes. En la fase II la plataforma ha
servido para facilitar el acceso de los alumnos a la información, tanto
de los detalles de organización, formación de grupos, acceso al conte-
nido a preparar y a las herramientas disponibles para el acceso a la in-
formación, y para la realizar las encuestas de los alumnos. La imple-
mentación del TBL, supuso un gran trabajo de preparación y programa-
ción por parte de los profesores responsables. En este sentido, ha sido
muy importante el poder disponer de diferentes TIC para su incorpora-
ción y adaptación en el desarrollo de todo el proceso TBL. Estas TIC
las hemos ido incorporando paulatinamente y sin duda alguna, han su-
puesto un beneficio para profesores y alumnos. La utilización del espa-
cio de cuestionarios de Moodle y del “Smart-phone”, ha supuesto varios
beneficios. Primero ha simplificado el proceso de la corrección del TAI
ahorrando tiempo y recursos materiales. Otra ventaja que hemos encon-
trado es que al hacer más fácil la realización de las pruebas individua-
les, el uso de esta herramienta nos permite la realización de otras prue-
bas individuales siempre que el profesor así lo considere, sin que ello
suponga un esfuerzo de corrección añadido. Por ejemplo, si la primera
prueba individual no le sale bien a un gran número de estudiantes, es
posible formular una prueba de razonamiento anatómico individual,
que pueda valorar el conocimiento generado y pueda modificar la cali-
ficación inicial. Esta posibilidad ha demostrado ser muy útil para
‒ ‒
mantener la motivación de los estudiantes que han fallado inicialmente.
La respuesta de los alumnos a la utilización del Smart-phone para res-
ponder al TAI, fue muy dispar. Algunos alumnos se siguen sintiendo
más cómodos escribiendo en papel, otros, sin embargo, estaban encan-
tados. La incorporación de las TIC apropiadas en el desarrollo del TBL,
ha facilitado la metodología empleada en las sesiones prácticas presen-
ciales. Además, hemos comprobado, que las TIC empleadas, pueden
hacer posible la impartición de todo el proceso de forma virtual, pu-
diendo suponer su utilización, una alternativa a la presencialidad en las
sesiones prácticas de Anatomía y Embriología, en el caso de que fuese
necesario.
El rendimiento final fue muy satisfactorio, lo que se reflejó en las cali-
ficaciones y en el conocimiento aplicado generado, al final de cada se-
sión y/o módulo. Para comprobar la efectividad del TBL, se realizó un
estudio comparativo del rendimiento obtenido por los alumnos, compa-
rando el rendimiento obtenido con el TBL y el obtenido tras los exáme-
nes prácticos en las prácticas impartidas con formato tradicional. Di-
versos autores han comprobado la eficacia del TBL frente a otras me-
todologías, demostrando que el TBL era igual o mejor. Compararon los
resultados obtenidos con el test de aprendizaje individual y con el test
de aprendizaje en equipo (Chung et al., 2009; Grady, 2011; Nicoll-
Senft, 2009; Nieder et al., 2005). Lo mismo sucedió el rendimiento total
del TBL y el rendimiento obtenido en los exámenes de prácticas tradi-
cionales, confirmando lo descrito por otros autores (Grady, 2011; Koles
et al., 2005, 2010; Letassy et al., 2008; Levine et al., 2004; Persky,
2012; Thomas y Bowen, 2011; Vasan et al., 2011; Zingone et al., 2010).
Al analizar cada una de las pruebas del TBL, en nuestro estudio confir-
mamos lo que era de esperar, un mejor rendimiento en equipo en el
TAE, que en el individual o TAI, lo que confirma la efectividad educa-
tiva del trabajo en grupo. Coincidiendo con otros autores (Chung et al.,
2009) al detectar diferencias significativas en este caso, los alumnos
suspensos en el TAI 51,31%, disminuyeron a 18,42% en el TAE. Nie-
der et al., (2005), también detectaron diferencias significativas entre su
equivalente al TAI y TAE en un curso de Anatomía y Embriología Hu-
mana.
‒ ‒
La experiencia ha demostrado que la eficacia del TBL reside en que la
labor del profesor es mucho más efectiva cuando puede interactuar con
grupos pequeños. Eso era también así en los grupos de las prácticas de
Anatomía y Embriología tradicionales. Lo que, a nuestro juicio, y el de
otros autores, marca la diferencia del TBL es que la metodología del
TBL hace que los estudiantes interactúen y pasen a ser elementos acti-
vos, no solo escuchen y vean lo que les muestra el profesor, que en
muchas ocasiones ni lo ven. Chickering y Gamson (1987), establecie-
ron siete principios de buena práctica en educación y uno de ellos era
la importancia del contacto entre profesor y alumno, así como del
aprendizaje activo. Otros principios establecidos por Chickering y
Gamson que también son aplicables al TBL son el desarrollo recíproco,
la cooperación entre estudiantes, las tareas a realizar en un tiempo limi-
tado, la alta expectación y el respeto al talento diverso. El éxito del TBL
también se explica con la teoría de Vygotsky que señala la interacción
social y el uso del lenguaje como elementos esenciales para el aprendi-
zaje (Bigge y Shermis, 1999). Su teoría establece que los estudiantes
necesitan expresar sus pensamientos con palabras y compartir sus pen-
samientos con otros. En nuestra experiencia TBL hemos conseguido
repetidamente que los estudiantes pensasen y que pusiesen esos pensa-
mientos en palabras en las discusiones de grupo tanto en el TAE como
en el TRAE. La efectividad del TBL también encaja con la teoría de
Bruner (Bigge y Shermis, 1999). Para Bruner el mejor aprendizaje se
consigue cuando se hace que los estudiantes pongan en palabras sus
pensamientos, los compartan con otros y resuelvan problemas. Y eso es
exactamente lo que hemos vivido en las clases impartidas con TBL. La
teoría de Zull (2004) es muy interesante también para analizar el TBL.
Zull plantea cinco ideas sobre enseñar y aprender. La primera idea es
que el cerebro es maleable y que el aprendizaje crea conexiones neuro-
nales desarrollando una red. La segunda es que los estudiantes al apren-
der desarrollan áreas del cerebro involucradas en su aprendizaje. La ter-
cera es que los estudiantes mejoran su aprendizaje cuando existe una
implicación emocional en el mismo. Nosotros hemos comprobado
como los estudiantes se implicaban emocionalmente en algunos debates
“acalorados” entre los grupos. El cuarto es que el profesor debe utilizar
los errores de los alumnos para aprender. Y eso ha sido así
‒ ‒
principalmente en las discusiones entre grupos posterior al TAE y a
TRAE. En el caso de la discusión posterior al TAE, permitió detectar
errores conceptuales que se aclaraban en el momento o durante la mini
clase. Además, pensar sobre los errores cometidos e intercambiar los
pensamientos y argumentos de los diferentes grupos supuso la adquisi-
ción o refuerzo del conocimiento. La quinta idea es que el profesor debe
fomentar la enseñanza en grupo y entre grupos. En muchas ocasiones
la forma de transmitir el conocimiento entre los propios alumnos es más
eficaz que cuando lo hace el profesor. En esta experiencia a lo largo de
las discusiones del TAE y de las actividades aplicativas, los profesores
han motivado a los estudiantes para explicarse entre ellos desarrollando
sus propias reflexiones y razonamientos. En definitiva, y aplicando la
teoría de Zull, el TBL funciona porque su metodología consigue que
los alumnos se impliquen emocionalmente y que desarrollen sus redes
neuronales. Y para que este sea así, es muy importante el diseño y for-
mulación de las preguntas del TAI y de las actividades aplicativas. Es
necesario en el TAI formular algunas preguntas cuyas respuestas pue-
dan sacar a la luz posibles errores conceptuales, y las actividades apli-
cativas deben ser significativas y tratar de que impliquen a los estudian-
tes emocionalmente.
6. CONCLUSIONES
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
‒ ‒
8. REFERENCIAS
Bigge, M.L., Shermis, S.S. (1999). Learning theories for teachers. New York,
NY. Longman.
Chung E.K., Rhee J.A., Baik Y.H., Oh-Sun A. (2009). The effect of team-based
learning in medical ethics education. Medical Teacher, 31(11), 1013-
1017.
Clark M.C., Nguyen H.T., Bray C., Levine R.E. (2008). Team-based learning in
an undergraduate nursing course. Journal of Nursing Education, 47(3),
111-117.
Chickering, A.W., Gamson, Z.F. (1987). Seven principles for good practice in
undergraduate education. AAHE Bulletin, 3-7.
Dana S.W. (2007). Implementing Team-Based Learning in an introduction to law
course. Journal of Legal Studies Education, 24(1), 59-108.
Grady S.E. (2011). Team-based learning in pharmacotherapeutics. American
Journal of Pharmaceutical Education, 75(7), 136.
Jacobson T.E. (2011). Team-based learning in an information literacy course.
Communications in Information Literacy, 5(2), 82-101.
Koles, P., Nelson, S., Stolfi, A, Parmelee, D., DeStephen D. (2005). Active
learning in a Year 2 pathology curriculum. Medical Education,
39(10),1045-1055.
Koles, P., Stolfi, A, Borges, N.J., Nelson, S., Parmelee, D. (2010). The impact of
Team-Based Learning on medical students´ academic performance.
Academic Medicine: Journal of the Association of American Medical
Colleges, 85(11),1739-1745.
Letassy N.A., Fugate S.E., Medina M.S., Stroup J.S., Britton M.L.et al., (2008).
Using Team-Based Learning in an endocrine module taught across two
campuses. American Journal of Pharmaceutical Education, 72(5), 1-6.
Levine R.E., O´Boyle M., Haider P., Lynn D.J., Stone M.M., Wolf D.V.,
Paniagua F.A. (2004). Transforming a clinical clerkship with team
learning. Teaching and Learning in Medicine, 16(3), 270-275.
Michaelsen L.K., Parmelee, D.X., McMahon K., Levine R.E. (2007). Team-based
Learning for health profesión education: A guide to using small groups
for improving learning. Sterling, VA: Stylus.
Michaelsen L.K., Sweet M. (2008). The essential elements of Team Based
Learning. New Directions for Teaching and Learning, 116, 7-27.
Minna N., Newpher T.M. (2020). Comparing Active Learning to Team-Based
Learning in Undergraduate Neuroscience. Journal of Undergraduate
Neuroscience Education, 18(2), A102–A111.
‒ ‒
Nicoll-Senft, J. (2009). Assessing the impact of Team-Based Learning. Journal
on Excellence in College Teaching, 20(2), 27-42.
Nieder, J.L. Parmelee D.X. Stolfi A., Hudes P.D. (2005). Team-based learning in
a medical gross anatomy and embryology course. Clinical Anatomy,
18(1), 56-63.
Persky A.M. (2012). The impact of Team-based learning on foundational
pharmacokinetics course. American Journal of Pharmaceutical
Education, 76(2), 1-10.
Sibley, J., Ostafichuk, P. (2014). Getting started with Team-based Learning.
Stylus Publising. Sterling, VA.
Sweet M., Michaelsen L.K. (2012). Team-based learning in the social sciences
and humanities: Group work that Works to generate critical thinking and
engagement. Sterling, VA: Stylus.
Thomas, P.A., Bowen, C.W. (2011). A controlled trial of Team-Based Learning
in an ambulatory medicine clerkship for medical students. Teaching and
Learning in Medicine, 23(1),31-36.
Vasan N.S., DeFouw D.O., Compton S. (2011). Team-based learning in anatomy:
An efficient, effective, and economical strategy. Anatomical Sciences
Education, 4(6), 333-339.
Walters D. (2012). Team-based learning applied to a medical chemistry course.
Medical Principles and Practice, 22(1), 2-3.
Zingone, M.M., Franks, A.S., Guirguis, A.B., George, C.M., Howard-Thompson,
A., Heidel, R.E. (2010). Comparing team-based and mixed active-
learning methods in an ambulatory care elective course. American
Journal of Pharmaceutical Education, 74(9),160.
Zull, J.E. (2004). The art of changing the brain. Educational Leadership, 62(1),
68-72.
‒ ‒
CAPÍTULO 13
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
dos principios en el TBL que permanecen: asegurar la preparación pre-
via de los estudiantes, y la resolución de problemas guiada, dos princi-
pios que constituyen el alma del TBL.
‒ ‒
adquirido por los alumnos, y formulados de manera adecuada, no solo
motivan al alumno para ir preparado a clase, sino también facilitan que
exista discusión en y entre los grupos. Es imprescindible que los alum-
nos vengan preparados para participar en las discusiones y para propo-
ner hipótesis para resolver los problemas que se plantean en las activi-
dades aplicativas.
Los profesores deben conocer muy bien, y siempre mantener, los prin-
cipios esenciales del TBL. Algunos de estos principios pueden chocar
inicialmente con la visión personal sobre “cómo enseñar” que tiene
cada profesor. Según se va comprendiendo mejor la filosofía del TBL,
se va entendiendo la necesidad de mantener los pilares esenciales de
esta metodología docente. El profesor tiene que estar convencido del
valor del TBL como herramienta de aprendizaje. De tal forma, que llega
un momento donde se da cuenta que para diseñar una experiencia TBL
con éxito, necesita cambiar su forma de pensar sobre cómo enseñar.
Debe pasar de preguntarse qué es lo que quiero que mis estudiantes
‒ ‒
sepan, a qué es lo que quiero que mis estudiantes sean capaces de hacer,
diseñando un curso con TBL donde se focalice en hacer más, en vez de
saber más, y esto supone la consecuente reorganización y reducción de
los contenidos. La piedra angular del TBL es utilizar los conceptos fun-
damentales del curso para resolver problemas significativos reales. Es
un método en el que el profesor no puede limitarse a “tunear” su clase
de siempre. Debe más bien, pensar en profundidad los nuevos objetivos,
preparar material de estudio específico y mentalizarse sobre su nuevo
papel en el proceso de enseñanza. Un programa basado en el TBL no
se puede preparar en el último minuto; al contrario, necesita una plani-
ficación que lleve a que el estudiante a integrar de manera concienzuda
lo que lee en profundidad, y que le permita estar preparado para la eva-
luación (TAI y TAE), interactuar en clase, la generación de hipótesis,
así como para participar en las actividades aplicativas. Todo eso no se
puede planificar de un día para otro.
Durante toda su vida a los estudiantes se les ha dicho lo que tienen que
saber, cuándo lo deben saber y cuándo y cómo deben demostrar lo que
han aprendido. En el TBL tienen un nuevo papel, e inicialmente, a veces
no aceptan, el paso de ser elementos pasivos en el proceso de aprendi-
zaje, a desempeñar un papel activo en el entorno de enseñanza centrado
en el alumno. Por eso es importante que conozcan no solo la metodolo-
gía, sino también la filosofía del TBL, lo que se espera de ellos y los
beneficios que supone esta forma de enseñanza.
‒ ‒
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
informativas para profesores y alumnos se estableció el nuevo papel
que tanto profesores como alumnos debían desempeñar en la metodo-
logía TBL (Figura 1).
4. RESULTADOS
‒ ‒
tenían asignadas. En la figura 2 se presenta un esquema de las seis in-
terpretaciones que los diferentes profesores hicieron para la implemen-
tación del TBL en las diferentes sesiones prácticas. Solo las dos prime-
ras representadas en el esquema cumplían totalmente con los criterios
formulados en la metodología TBL y el número tres, lo hacía parcial-
mente.
‒ ‒
actividades aplicativas, comenzando con actividades más sencillas y
terminando con actividades más complejas, esto permitió en algunos
casos la recuperación de fallos iniciales en el tai. en todos los casos
siempre se trató de formular las mismas actividades aplicativas en todos
los grupos. en la figura 3 se presentan dos formas de presentar el mate-
rial anatómico a los estudiantes.
‒ ‒
TABLA 1. Resultados de la encuesta realizada a los estudiantes al final del proceso TBL.
Valoración
El aprendizaje en grupo ha sido una experiencia positiva. 4,42
El aprendizaje en grupo ha sido una experiencia negativa. 1,14
Cuánto te ha servido el estudio individual para el desarrollo del TBL. 3,85
Te ha parecido útil la utilización del Smart-phone para contestar el
3,14
TAI.
Te ha servido la mini-clase para entender el contenido y aplicarlo a
4,42
las actividades aplicativas.
La discusión en grupo te ha servido para aprender. 4,42
El material anatómico, ha sido suficiente y de calidad. 4,57
Te han sido de utilidad las actividades aplicativas. 3,57
Crees que el profesor debe contarte y mostrarte todo lo referente a
4,00
una preparación.
Crees que el profesor debe ayudarte a pensar sobre la preparación
4,42
y resolverlas posibles dudas.
Has tenido suficiente apoyo. 3,35
Crees que las clases de TBL te ha supuesto un reto intelectual. 3,95
Sientes que has empezado a dominar las ideas del curso. 3,80
Crees que has progresado gracias a tu esfuerzo y tus decisiones. 4,30
Crees que has progresado gracias al esfuerzo del grupo. 3,65
Te has sentido parte de una comunidad que quería aprender. 4,05
Volverías a repetir esta experiencia u otra parecida, basada en el
4,42
trabajo y discusión en grupos reducidos.
Valoración de grado de satisfacción de 1-5 (siendo 1 muy poco positivo y 5 muy positivo).
n=20
‒ ‒
TABLA 2. Resultados de la encuesta realizada a los profesores participantes en la expe-
riencia TBL al final del proceso.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
evidenciado aspectos que deben revisarse y solucionarse de cara a es-
tablecer el TBL como método docente en la asignatura de Anatomía y
Embriología I. La implantación e interpretación del TBL, así como la
aplicación de sus cuatro elementos esenciales, por los 7 profesores par-
ticipantes en esta experiencia ha sido diferente. Sobre el primer ele-
mento esencial, la formación adecuada de los grupos, la situación sani-
taria generada por la pandemia limitó la creación de los grupos tal como
lo recomiendan ciertos autores (Brickell et al., 1994; Sibley y Ostafi-
chuk 2014), que señalan la importancia de crear y estructurar los grupos
con cuidado para conseguir que el trabajo de grupo sea eficaz (Sibley y
Ostafichuk 2014). Teniendo en cuenta estas indicaciones no se descarta
en un futuro, dado el tamaño de las clases con las que se trabaja y con
el fin de mejorar la composición de los grupos, realizar una pequeña
encuesta para conocer la formación inicial con la que parten los estu-
diantes y así poder establecer grupos lo más compensados posible. En
este estudio, los grupos no se cambiaron durante todo el curso, y para
evitar que siempre interactuaran los mismos estudiantes, en cada sesión
se cambió el portavoz. Esto permitió que todos los estudiantes actuaran
como portavoces en al menos cuatro sesiones y que todos los alumnos
participaran activamente en la discusión en varias sesiones prácticas.
El TAI se debe utilizar como herramienta motivadora, para que los es-
tudiantes vengan con cierta preparación a clase, preparación que les
permita poder discutir sobre las preguntas y posibles respuestas cuando
se establece la discusión de grupo (Sibley y Ostafichuk 2014). La rea-
lización del TAI nada más llegar a clase se realizó en la mayoría de las
sesiones y funcionó como elemento motivador para que los alumnos
vinieran con el contenido de la práctica preparado. Esto facilitó que tu-
vieran conocimiento sobre la materia, permitiéndoles debatir dentro del
grupo y así discutir entre los distintos grupos, para defender sus ideas,
generar hipótesis argumentadas y razonar anatómicamente los proble-
mas que se plantearon en las actividades aplicativas. Algunos estudian-
tes en las encuestas se quejaron de la falta de tiempo para preparar el
TAI de algunas sesiones prácticas, por ello, algunos profesores proba-
ron a realizar un pequeño estudio/repaso del material de estudio previa-
mente a la realización del TAI. Esta circunstancia eliminó claramente
‒ ‒
la motivación para que los estudiantes preparen el material previa-
mente, al saber que otros compañeros se lo explicarían en clase antes
de realizar el TAI. En este caso la mayoría de los estudiantes no se pre-
paraban el contenido, solo trataban de memorizar lo que otro compa-
ñero les contaba en el repaso y poder pasar así el TAI. Los estudiantes
carecían de conocimiento suficiente sobre la materia para poder discutir
en los grupos y no podían por tanto generar ningún debate entre los
grupos. La preparación previa por parte de los estudiantes del contenido
es muy importante para la eficacia del proceso. Pero también es muy
importante que el contenido que deben preparar los estudiantes previa-
mente a la sesión práctica esté muy medido. No se puede pretender que
se preparen todo el contenido que se les pedía en prácticas similares de
impartición tradicional. Tampoco se le debe asignar un valor promi-
nente al TAI, debe considerarse una prueba más de las varias que se
realizan en cada módulo, con una asignación de valor porcentual ade-
cuado. El porcentaje del TAI se redujo a lo largo del curso llegando a
pasar de asignársele un valor de 60% a un 40%. Para evitar el estrés que
puede producir el TAI en los estudiantes es recomendable, por tanto, la
mesura en el contenido que deben preparar previo a la clase y asignar
un valor razonable al TAI, que sea suficientemente motivante a la hora
de prepararlo pero que no sea determinante para la calificación final.
Para la discusión entre grupos, se comprobó la importancia que tiene el
formato de las preguntas, y que la forma de formular las preguntas po-
día determinar el grado de la discusión e incluso que hubiera o no dis-
cusión posterior. Diferentes autores consideran que las respuestas de
elección múltiple facilitan e inducen la discusión, gracias en parte a
formular preguntas con varias respuestas positivas, que, aunque inicial-
mente pueden generar confusión también generan discusión (Andersen
et al., 2011; Thomas y Bowen 2011). Los estudiantes inicialmente no
comprenden que la ambigüedad que se les plantea al formular algunas
preguntas o actividades aplicativas se establece así para generar discu-
sión. Las preguntas de elección de respuesta múltiple ayudaban a gene-
rar discusión, y permitieron al profesor incluir en las posibles respues-
tas, elementos conceptuales con objeto de establecer debate, ayudando
a generar discusión entre el alumnado para su resolución. Esto no fue
así cuando las preguntas eran meramente identificativas; dónde la
‒ ‒
discusión pasaba a sustituirse por una corrección en grupo de la prueba
realizada. En el caso de producirse un ‘feed-back’ negativo sobre las
preguntas por haberles generado dudas, se debe explicar a los estudian-
tes la razón de formular este tipo de preguntas, pero nunca se debe so-
lucionar bajando el nivel, es decir, bajando la dificultad de las preguntas
formuladas en el TAI.
En los módulos de TBL se consiguió que la gran mayoría de los alum-
nos se implicaran en el proceso. El funcionamiento de los grupos se
controló durante las sesiones prácticas por medio de las encuestas que
se iban realizando al finalizar cada módulo TBL y en general el funcio-
namiento se valoró como bastante bueno, reconociendo y valorando de
manera muy positiva el aprendizaje en grupo. Se detectó, sin embargo,
que algunos alumnos al principio dudaban de la eficacia del aprendizaje
en grupo. Para ellos era mejor -y sobre todo más cómodo-, que el pro-
fesor les fuera contando todo lo que había que saber en cada sesión
práctica y que actuara como autoridad en todo momento, e incluso al-
gunos pensaban que las discusiones entre estudiantes era una pérdida
de tiempo y que no iban a aprender. Pero en general todos los estudian-
tes han comprobado la eficacia del trabajo en grupo cuando preparaban
previamente la clase y al reforzar sus conocimientos con las aclaracio-
nes del profesor en las discusiones y/o en la mini clase.
El hecho de escuchar a los alumnos siempre es importante, y al princi-
pio aún más. Para ellos es una situación nueva, que no conocen y les
genera inseguridad. Por ello tiene gran importancia, las sesiones infor-
mativas previas, en las que no sólo se explicó la mecánica de las sesio-
nes TBL, sino lo que es más importante, el valor educativo de cada una
de las partes. En general en las encuestas realizadas, la respuesta de los
estudiantes ha sido diferente. Hay que tener en cuenta que para todos
los estudiantes ha sido su primera experiencia TBL. Del mismo modo,
los estudiantes de este estudio valoran positivamente la experiencia que
supone aprender en grupo y el aprendizaje comunitario al igual que se
describe en la literatura (Levine et al., 2004; Clark et al., 2008). Casi
todos los estudiantes al ser preguntados, sobre si repetirían en el futuro
una experiencia TBL o similar, señalaron que sí que la repetirían.
‒ ‒
Al leer sobre las reacciones de las estudiantes descritas en la literatura
existente sobre TBL, se constata que al igual que nuestros estudiantes,
los alumnos experimentan sensaciones positivas y negativas. En las en-
cuestas realizadas sobre si prefieren TBL o una clase tradicional, los
estudiantes preferían el formato de enseñanza TBL (Levine et al., 2004;
Kelly et al., 2005; Clark et al., 2008; Chung et al., 2009). En este estu-
dio, aunque les parecía bien los dos formatos de aprendizaje, los estu-
diantes se decantaron más por la filosofía TBL. Son alumnos que siem-
pre se les ha dicho lo qué debían aprender, cómo y cuándo demostrar lo
aprendido, y pocas veces se les ha pedido que piensen y/o razonen. Es-
tán acostumbrados a aprender el contenido que les dice el profesor y
repetir ese contenido en los exámenes. Al igual que otros autores, en
este estudio se detectó en algunos estudiantes, un cierto grado de frus-
tración al considerar que el profesor en ciertas partes de trabajo indivi-
dual o de grupo debería de haber intervenido más (Thomas y Bowen
2011; Persky, 2012). Esto es especialmente cierto para algunas activi-
dades aplicativas, donde el profesor debía explicar a los alumnos, que
es más importante y tiene más valor ofrecer un razonamiento anatómico
lógico explicando lo que veían, frente a dar un diagnóstico correcto.
Siendo más importante su razonamiento que la explicación de la solu-
ción por parte del profesor del problema. Al principio el TBL, genera
incertidumbre, pero luego van comprendiendo el sistema y se sienten
más cómodos con su utilización. En definitiva, en el TBL han experi-
mentado el paso de que el profesor sea el responsable de su aprendizaje
a ser ellos responsables de su aprendizaje. Esta circunstancia hace que
sea normal que haya algunos estudiantes que no les convenza y duden
de la eficacia del aprendizaje en grupo y del proceso TBL en sí. A esto
hay que añadir que siempre hay estudiantes, afortunadamente suelen
ser pocos, que nunca van a estar contentos, se utilice la metodología
que sea. En las encuestas realizadas a lo largo del año, se ha compro-
bado como la mayoría de los estudiantes han comprendido el valor del
TBL y algunos nos han demostrado que estaban verdaderamente entu-
siasmados con algunas de las experiencias realizadas. Las encuestas
realizadas a lo largo del curso sirvieron para detectar y corregir posibles
errores, en algunos casos se pudieron detectar y corregir actitudes ne-
gativas y prevenir futuros problemas. Durante el TBL se potencian
‒ ‒
habilidades existentes en el alumno, como la capacidad de comunica-
ción y se desarrollan otras nuevas como puede ser la capacidad de re-
solver problemas. A veces es complicado valorar y cuantificar de ma-
nera individual la adquisición de estas nuevas capacidades. Este es uno
de los aspectos que consideramos que hay que mejorar, valorando la
incorporación de nuevas herramientas TIC que nos ayuden a mejorar la
cuantificación de estas habilidades que se desarrollan durante el TBL.
Tanto estudiante como profesores destacaron la ayuda que supuso la
elaboración de rúbricas para cada uno de los módulos TBL. El análisis
comparativo del rendimiento del TBL versus. clase práctica tradicional
se ha presentado en la primera parte de este trabajo, dedicado a la me-
todología e implantación del TBL.
A lo largo del proceso los estudiantes pudieron comprobar cómo reali-
zaban aprendizaje continuo y continuado; por un lado, obtenían su ca-
lificación individual del TAI, la cual podían mejorar, no solo con el test
realizado en grupo TAE, sino también al resolver correctamente las ac-
tividades aplicativas puntuales, cuyo contenido era equivalente al valo-
rado en el TAI inicial. Esto fue así en las sesiones de TBL donde se
plantearon varias actividades aplicativas y supuso la oportunidad, para
aquellos alumnos que habían quedado descontentos con su actuación
en el TAI, de poder recuperarlo gracias al conocimiento adquirido a lo
largo de la sesión, bien por los grupos de discusión, por la mini clase, o
ambos dos. En todo momento, a lo largo de las sesiones, se transmitía
al alumno la sensación de realizar aprendizaje continuo, al darles la po-
sibilidad de ir mejorando su conocimiento y calificaciones. Al final del
proceso las encuestas han puesto de manifiesto que los alumnos han
comprobado la eficacia del trabajo en grupo, que las discusiones y prue-
bas en grupo no solo mejoraban sus calificaciones, sino lo más impor-
tante, les permitían aprender. Con el TBL se ha conseguido que la gran
mayoría de los estudiantes hayan comprendido el valor educacional de
esta metodología, apreciando el valor que les ha aportado el trabajo y
discusión en grupo.
Las encuestas son muy importantes para ir controlando el funciona-
miento correcto del proceso, es importante escuchar a los alumnos y
tratar de ayudarles en lo que esté en nuestra mano, pero no se debe
‒ ‒
olvidar nunca que el principal objetivo del profesor debe ser siempre
ayudar a los estudiantes a que aprendan.
Del mismo modo, los profesores deben tener muy claro el papel que
deben desempeñar, así como conocer perfectamente la mecánica del
TBL en la clase. Si esto no es así es muy fácil que el profesor tienda a
volver a la metodología docente tradicional, y con la que se sienten muy
cómodos y seguros durante años. Uno de los papeles que debe ejercer
el profesor durante el TBL es el de transmitir seguridad a aquellos
alumnos que dudan y se encuentran inseguros con esta nueva forma de
aprender.
El principal objetivo del TBL es ayudar a que los alumnos aprendan a
usar los conceptos fundamentales de la disciplina, lo que debe de te-
nerse en cuenta a la hora de diseñar y organizar un módulo TBL. Se
trata de capacitar a los alumnos para resolver los problemas que se les
plantean en las actividades aplicativas. Es por esto, que en el diseño del
módulo TBL, debe empezar primordialmente, seleccionando la activi-
dad aplicativa y qué es lo que se quiere que el alumno haga con el con-
tenido que deberá haberse preparado; y posteriormente, se selecciona
el contenido de la disciplina necesario para resolver la actividad aplica-
tiva diseñada. Esto no fue así en todas las sesiones prácticas y en algu-
nas sesiones fueron de diseño tradicional, en otras, la actividad aplica-
tiva fue solo un ejemplo de la posible aplicación de parte del contenido
estudiado en la sesión práctica, sin que se generara ningún tipo de dis-
cusión en los grupos. Solo en los módulos de diseño estricto TBL, el
contenido y la mini clase se organizó alrededor de cómo resolver la
actividad aplicativa correspondiente. Conviene aclarar que lo que se ha
denominado proceso TBL y el aprendizaje activo que desarrolla, no im-
plica que el profesor no explique durante el TBL. Todo lo contrario, el
profesor tiene que explicar siempre que sea necesario. Muchas veces es
parte de la planificación de los propios módulos, otras veces los propios
alumnos lo necesitan, solicitándolo para poder seguir aprendiendo y
evolucionando con el aprendizaje continuado. En muchas ocasiones la
mini clase sirve para este fin, otras veces es necesario la intervención
del profesor para ayudarles a comprender y progresar en una actividad
determinada. Las explicaciones siempre deben ir encaminadas a que el
‒ ‒
alumno avance, ayudarles a pensar y a elaborar pensamientos de carác-
ter superior.
Todos los profesores participantes, reconocieron los beneficios que
aportaba la preparación previa del contenido de la clase. Percibiendo
cómo los estudiantes fueron evolucionando paulatinamente de sujetos
pasivos a estudiantes activos, demostrando mucho interés y ganas de
aprender, aprovechando todo el tiempo de la clase, y a veces teniéndo-
les incluso que invitar a que abandonaran la sala, fundamentalmente
porque venía el grupo siguiente. También han destacado el ambiente
distendido creado y como veían que los alumnos disfrutaban a la vez
que aprendían. Entre los aspectos negativos, los profesores destacaron
como el trabajo en grupo puede enmascarar u ocultar a aquellos alum-
nos que ni trabajan ni tienen interés, o hasta anular opiniones interesan-
tes de alumnos con menor capacidad comunicativa. Han puesto de ma-
nifiesto la necesidad de realizar una evaluación individual más exhaus-
tiva dentro del grupo. Otro aspecto negativo señalado por los profesores
en la encuesta realizada fue la cantidad de esfuerzo y de trabajo que
implica la organización de un módulo TBL. Circunstancia que les re-
sultó muy estresante sobre todo al principio; no obstante, han recono-
cido que la experiencia TBL ha hecho que los alumnos piensen y que
adquieran un conocimiento integrado. Entre las habilidades adquiridas
por los alumnos a lo largo de las sesiones TBL, los profesores destacan:
que los estudiantes en su gran mayoría han aprendido a razonar y a pen-
sar; han enriquecido su vocabulario anatómico, y mejorando su comu-
nicación, permitiendo a muchos alumnos a desarrollar su capacidad de
liderazgo; y en muchos casos, han desarrollado habilidades de carácter
superior, como son generar y formular hipótesis, razonamiento, análisis
y síntesis. También han valorado positivamente que el TBL les ha ge-
nerado espíritu crítico a la mayoría de los estudiantes. Destacaron el
hecho que el conocimiento generado a lo largo de las sesiones de TBL
les fuera de utilidad a los alumnos para su futuro profesional, y sobre
todo los cambios de actitud y de aptitud que se produjeron tras la expe-
riencia TBL.
Se han realizado numerosos estudios sobre cómo funciona la experien-
cia TBL y cómo suele ser la respuesta de los profesores a dicha
‒ ‒
experiencia (Sibley y Ostafichuk 2014). Los profesores normalmente
experimentan una emoción que va aumentando según van enseñando y
perciben cómo cambia su papel. Después le sigue un sentimiento de
estrés generado por la necesidad de hacer el cambio que requiere el
TBL. Hay varios estudios que describen la emoción progresiva sobre
todo al ver lo que sucede en la clase (Andersen et al., 2011; Jacobson,
2011; Letassy et al., 2006; Nicoll-Senft, 2009). Esta sensación la han
descrito varios profesores a lo largo de la experiencia realizada. Y en
verdad como describía Jacobson (2011), no hay nada más gratificante
que moverte por la clase, mientras los estudiantes discuten sobre algún
punto interesante del contenido. En este estudio, una compañera descri-
bía emocionada, “nunca habría imaginado a los alumnos discutiendo
sobre el blastocisto”. Todos los profesores que han hecho TBL han ex-
perimentado en mayor o menor medida, lo gratificante que ha sido es-
cuchar a los alumnos, debatiendo y discutiendo alrededor de un pro-
blema planteado, utilizando para ello razonamientos anatómicos, y uti-
lizando la terminología anatómica adecuada. En cuanto a la percepción
por parte del profesor del cambio de papel que experimenta, ha habido
diferentes respuestas. Todos estamos de acuerdo en la necesidad de pre-
parar un buen material, diseñado para comprender desde el punto de
vista anatómico una actividad aplicativa determinada. En este sentido,
sobre su adaptación al TBL, Dana (2007) describía la importancia de
proporcionar a los estudiantes las herramientas necesarias que les faci-
liten poder pensar y razonar de manera lógica sobre un problema deter-
minado. También hay coincidencia con Andersen et al. (2011), en la
necesidad de seleccionar y reducir el contenido que tienen que preparar
los alumnos, antes de la clase; pero también se coincide con la mayoría
de los autores que describen su experiencia TBL, a pesar de las nume-
rosas sensaciones positivas, ha habido sensaciones negativas. La imple-
mentación del TBL genera mucho estrés, debido en gran medida a la
falta de tiempo (Andersen et al., 2011; Dana, 2007; Fujikura et al.,
2013; Walters, 2012). Sobre todo, al principio, el profesor debe dedicar
mucho tiempo a preparar la experiencia TBL y así ha sido en este caso
para los profesores que han implementado el TBL en sus sesiones prác-
ticas. Desde aquí queremos hacer una recomendación, si no se va a dis-
poner de tiempo suficiente para la preparación adecuada del TBL, es
‒ ‒
mejor no intentarlo. En cuanto a la actitud de los diferentes profesores
ante el TBL, hay que empezar diciendo que esta filosofía no es para
todos (Sibley y Ostafichuk 2014). Los profesores que quieran implantar
TBL en su materia, deben en primer lugar estar convencidos y tener
claro por qué quieren usar TBL, y deben conocer perfectamente la me-
todología. Deben comprender el porqué de mantener todos los pasos
esenciales; ya que les dará una seguridad sobre la utilización del sistema
a la hora de diseñar los módulos TBL, y de mantener e implantar todo
el proceso que requiere el TBL. Seguridad que se transmite a los estu-
diantes. Un profesor inseguro nunca va a poder realizar el TBL de ma-
nera eficaz, ni mucho menos transmitir la confianza a aquellos alumnos
que dudan sobre la utilización del sistema y de lo que necesitan. La
recomendación es: antes de empezar con una experiencia TBL, el pro-
fesor debe documentarse y estudiar la extensa literatura existente sobre
el tema; debe tener claro lo que se pretende con cada uno de los com-
ponentes del TBL y del valor educacional de estos; debe transmitir el
por qué hace TBL, debe de estar convencido de que es bueno para ellos
y que este sistema de enseñanza les hará ser mejores profesionales, y
por último, pero no menos importante, debe de estar mentalizado del
gran trabajo que le va a suponer inicialmente el diseño y la puesta en
marcha del TBL, disponiendo de tiempo para la correcta planificación
de los módulos e intentar así minimizar el estrés. En definitiva, el pro-
fesor tiene que querer y tiene que poder. Debe saber el esfuerzo y tra-
bajo adicional que supone la implantación del TBL y nunca olvidar que
no todo vale.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
comprobado la eficacia del aprendizaje activo. Como el aprendizaje ge-
nerado es útil, permanece a largo plazo y lo van a poder aplicar a lo
largo del desarrollo de su vida profesional. Hay dos aspectos impres-
cindibles y que afectan a la correcta implantación del TBL, uno el me-
todológico y otro el humano. Respecto al metodológico, no se puede
suprimir ninguna de las fases esenciales establecidas, en el aspecto hu-
mano, para la correcta implantación del TBL es necesario un cambio en
la mentalidad y en la actitud de profesores y alumnos. Es necesario un
cambio de papeles, el aprendizaje debe girar alrededor del alumno y no
del profesor. Este cambio de mentalidad es imprescindible para pasar
del aprendizaje pasivo tradicional, al aprendizaje activo generado con
el TBL. La gran mayoría de alumnos consideraron muy positiva la ex-
periencia y muy pocos la valoraron como algo negativo. En este sen-
tido, la respuesta de profesores y alumnos ha sido la esperable y como
ha sido descrita en la literatura, siendo más complicada la adaptación
de los profesores al TBL, que la de los alumnos. En este estudio hay
que tener en cuenta que ha sido la primera vez que la mayoría de los
profesores y alumnos han participado no sólo en una experiencia de
TBL, sino de aprendizaje activo en general.
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Clark, M.C., Nguyen, H.T., Bray, C., Levine, R.E. (2008). Team-Based Learning
in an undergraduate nursing course. Journal of Nursing Education,
47(3),111-117.
Dana, S.W. (2007). Implementing Team-Based Learning in an introduction to law
course. Journal of Legal Studies Education, 24(1), 59-108.
Fujikura, T., Takeshita, T., Homma, H., Adachi, K., Miyake, K., Kudo, M.,
Hirakawa, K. (2013). Team-Based Learning using an audience response
system: A posible new strategy for interactive medical education.
Journal of Nippon Medical School, 80(1), 63-69.
Jacobson, T.E. (2011). Team-Based Learning in an information literacy course.
Communications in Information Literacy, 5(2), 82-101.
Kelly, P.A., Haider, P., Schneider, V., Searle, N., Seidel, C.L., Richards, B.F.
(2005). A comparison of in-class learner engagement across lecture,
problema-based learning, and team learning using the STROBE
classroom observation tool. Teaching and Learning in Medicine, 17(2),
112-118.
Letassy, N.A., Fugate, S.E., Medina, M.S., Stroup, J.S., Britton, M.L. (2008).
Using Team-Based Learning in an endocrine module taught across two
campuses. American Journal of Pharmaceutical Education, 72(5), 1-6.
Levine, R.E., O´Boyle, M., Haider, P., Lynn, D.J., Stone, M.M., Wolf, D.V.,
Paniagua, F.A. (2004). Transforming a clinical clerkship with team
learning. Teaching and Learning in Medicine, 16(3), 270-275.
Michaelsen, L.K., Knight, A.B., Fink L.D. (2004). Team-based Learning: A
transformative use of small group in college teaching. Sterling, VA:
Stylus.
Michaelsen L.K., Parmelee, D.X., McMahon K., Levine R.E. (2007). Team-based
Learning for health profesión education: A guide to using small groups
for improving learning. Sterling, VA: Stylus.
Michaelsen L.K., Sweet M. (2008). The essential elements of Team Based
Learning. New Directions for Teaching and Learning, 116, 7-27.
Minna N., Newpher T.M. (2020). Comparing Active Learning to Team-Based
Learning in Undergraduate Neuroscience. Journal of Undergraduate
Neuroscience Education, 18(2), A102–A111.
Nicoll-Senft, J. (2009). Assessing the impact of Team-Based Learning. Journal
on Excellence in College Teaching, 20(2), 27-42.
Nieder, J.L. Parmelee D.X. Stolfi A., Hudes P.D. (2005). Team-based learning in
a medical gross anatomy and embryology course. Clinical Anatomy,
18(1), 56-63.
‒ ‒
Persky, A.M. (2012). The impact of Team-Based Learning on a foundational
pharmacokinetics course. American Journal of Pharmaceutical
Education, 76(2),1-10.
Sibley, J., Ostafichuk, P. (2014). Getting started with Team-based Learning.
Stylus Publising. Sterling, VA.
Sweet, M., Michaelsen, L.K. (2012). Team-based Learning in the social sciences
and humanities: Group work that Works to generate critical thinking and
engagement. Sterling, VA: Stylus.
Thomas, P.A., Bowen, C.W. (2011). A controlled trial of Team-Based Learning
in an ambulatory medicine clerkship for medical students. Teaching and
Learning in Medicine, 23(1),31-36.
Vasan N.S., DeFouw D.O., Compton S. (2011). Team-based learning in anatomy:
An efficient, effective, and economical strategy. Anatomical Sciences
Education, 4(6), 333-339.
Walters, D. (2012). Team-Based Learning applied to a medical chemistry course.
Medical Principles and Practice, 22(1), 2-3.
‒ ‒
CAPÍTULO 14
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
centrados en la didáctica de la anatomía humana y especialidades clíni-
cas afines como la radiología o medicina nuclear. En la tabla 1 se re-
cogen algunos de estos proyectos de interés.
‒ ‒
diversos estudios que ilustran la variada casuística anatómica que puede
recrearse de manera fidedigna y personalizada gracias a la impresión
3D abarcando, entre otros, patologías infrecuentes como el síndrome de
Eagle (Czako et al., 2020), patologías cardíacas congénitas (Moore et
al., 2018), diversas patologías renales (Sun & Liu, 2018) o cirugías de
elevada complejidad como la separación de siameses (Villarreal et al.,
2020). Ello da cuenta del gran potencial de esta tecnología en el ámbito
de la enseñanza médica. Más allá de ilustrar de manera teórica las po-
sibilidades de la impresión 3D en el ámbito médico, diversos estudios
han demostrado su utilidad siguiendo metodologías regladas como en-
sayos de campo. En el ámbito particular de la docencia, se han publi-
cado revisiones sistemáticas y metaanálisis que concluyen que la im-
presión 3D ofrece ventajas significativas en la docencia médica (Chytas
et al., 2020; Fleming et al., 2020). No obstante, los resultados publica-
dos hasta la fecha deben ser interpretados con precaución dado que el
número de estudios publicados es aún escaso y heterogéneo, especial-
mente aquellos que generan un mayor nivel de evidencia científica.
Dado que el principal factor limitante es la reciente expansión de las
tecnologías de impresión 3D (ligado a una dificultad moderada en lo
que al desarrollo de habilidades que permitan su utilización se refiere),
cabe esperar que en los próximos años se genere suficiente evidencia
científica para generalizar el uso de estas tecnologías en la educación
médica.
‒ ‒
en el ámbito académico, pues posibilita el acceso a modelos coste-efi-
cientes y personalizados que los estudiantes pueden utilizar fuera de las
aulas.
Sin embargo, aprovechar al máximo las posibilidades de la impresión
3D requiere disponer de espacios y equipos suficientemente adaptados
para tiempos de pandemia, lo que no siempre es posible. Enseñar al
alumnado cómo obtener sus propios modelos a partir de impresión 3D
podría suponer una solución de compromiso, ya que permitiría habilitar
y coordinar tiempos de máquina para que los propios estudiantes impri-
man sus modelos, rentabilizando los tiempos disponibles para el uso de
salas. No obstante, aprender cómo funciona una impresora 3D requiere
un conocimiento, al menos parcial, del hardware de impresión, aspecto
difícilmente enseñable a través de docencia online. No obstante, la am-
plitud y variada naturaleza de los aspectos que es necesario dominar
para hacer un uso adecuado de esta técnica, fundamentalmente aquellos
relativos al software, pueden resultar suficientes si se dispone de per-
sonal que gestione los espacios y equipos de impresión 3D disponibles
en espacios institucionales habilitados a tal efecto. Ello justifica holga-
damente la realización de un curso centrado en contenidos específicos,
como es la anatomía radiológica normal y patológica, los fundamentos
de las técnicas de imagen médica avanzada, el uso de visualizadores
DICOM, las herramientas de segmentación manual y semiautomática
disponibles, el modelado 3D o el software de rebanado (slicing). Me-
diante la adquisición de competencias de nivel básico-intermedio por
parte del alumnado, se les capacita para preparar modelos de impresión
3D. Así, es posible sobrevenir las dificultades impuestas por la pande-
mia a través de un curso centrado en el aprendizaje y dominio de estas
habilidades y recursos, aunque ello no implique un dominio completo
de la impresión 3D basada en imagen médica.
‒ ‒
abordado específicamente este problema. Para ello, hemos implemen-
tado un innovador sistema de enseñanza utilizando imagen médica y
modelos impresos en 3D. La hipótesis de partida principal del proyecto
radica en que la imagen médica avanzada y, especialmente, las tecno-
logías de impresión 3D, ofrecen una mejora significativa en la docencia
de grado en términos de rendimiento académico y satisfacción estudian-
til.
En resumen, la docencia en anatomía humana está reinventándose gra-
cias a disciplinas y tecnologías emergentes como la imagen médica
avanzada, los modelos interactivos digitales y la impresión 3D. En el
difícil contexto de la enseñanza universitaria derivado de la pandemia
por COVID-19, estas herramientas han desplegado su enorme poten-
cial. Sin embargo, algunas limitaciones, como el manejo avanzado de
software y hardware específico o el conocimiento de áreas específicas
(p.ej., anatomía radiológica), deben ser consideradas para el éxito de su
aplicación. Precisamente estas limitaciones justifican los aún escasos
(aunque crecientes) proyectos de innovación docente que incorporan la
impresión 3D en la docencia de anatomía humana en España.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
‒ Evaluar el nivel de competencias adquiridas en las habilidades
básicas de impresión 3D por parte del alumnado del curso.
3. METODOLOGÍA
1 https://cemed.ugr.es/
2 Twitter (@arquim3dx) e Instagram (arquim3d)
‒ ‒
posteriormente serían convalidables en las facultades de Odontología,
Ciencias del Deporte y Medicina).
‒ ‒
En la figura 1 se muestra uno de los carteles publicitarios del curso. El
precio del curso para los estudiantes se estableció para cubrir los gastos
derivados de la gestión de convalidación de créditos, pues los docentes
renunciaron a sus honorarios. Todos los estudiantes participaron de ma-
nera voluntaria.
FIGURA 1. Cartel publicitario del curso (fuente: Centro Mediterráneo, Universidad de Gra-
nada, España).
Fuente: https://cemed.ugr.es/
‒ ‒
El perfil de los docentes incluyó cinco especialistas clínicos hospitala-
rios (tres especialistas en Radiodiagnóstico, un especialista en Neuro-
logía y un especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública), una
especialista en Medicina Familiar y Comunitaria, un graduado en Inge-
niería Electrónica, una terminóloga y un docente universitario del de-
partamento de Anatomía Humana y Embriología.
Los criterios de evaluación del curso fueron claramente establecidos
desde el inicio del curso, computándose las calificaciones de cada estu-
diante mediante la asistencia y participación (70% de la nota final) y
tres pruebas de evaluación consistentes en la preparación de un modelo
sencillo de impresión 3D (10% de la nota final), la segmentación y pos-
procesado simple de un modelo anatómico vertebral a partir de tomo-
grafía computarizada (10% de la nota final), y el posprocesado avan-
zado de un modelo 3D de hígado (10% de la nota final). Las califica-
ciones correspondientes a la asistencia y participación fueron otorgadas
tras el análisis de la asistencia a los participantes (registro de asistencia
al inicio y final de cada clase); se permitió un máximo de 1 ausencia no
justificada y se restó un 10% sobre la calificación correspondiente por
cada sesión a la que no se acudió, hasta un máximo de 3 (no se permitió
faltar a más de 3 sesiones en el curso), y el número de intervenciones
(mínimo de 4 intervenciones por estudiante para obtener la máxima
puntuación). Así, si un estudiante faltó a 3 sesiones de forma no justi-
ficada y participó activamente, su calificación fue de 5 puntos sobre 7,
mientras que quienes faltaron a 1 o ninguna sesión y participaron acti-
vamente obtuvieron los 7 puntos. Para la evaluación de las tareas, los
docentes encargados de explicar los requisitos de esta analizaron me-
diante una lista de comprobación predefinida si la tarea del estudiante
cumplía con las especificaciones, deduciéndose 1 punto por cada fallo
menor y 3 puntos por cada error mayor. El retraso injustificado en la
entrega del modelo respecto a la fecha límite establecida se penalizó
con 2 puntos.
Tras la finalización del curso, los estudiantes fueron invitados a rellenar
una encuesta voluntaria en formato semiestructurado que los docentes
del curso prepararon conjuntamente con el Centro Mediterráneo a partir
de la retroalimentación recibida durante el curso y experiencias previas
‒ ‒
recientes en otros cursos realizados con un perfil similar de alumnado
(grados y posgrados biosanitarios)3. Los cuestionarios incluyeron pre-
guntas dirigidas sobre la evaluación de los contenidos del curso y cali-
dad docente, puntuadas de 1 (menor) a 10 (mayor), así como preguntas
abiertas con respuesta de extensión breve.
4. RESULTADOS
Al inicio del curso todas las plazas fueron ocupadas, por lo que el total
de estudiantes matriculados fue de 30 (edad media: 22,15; ratio de mu-
jeres: 69,23%). De estos, 4 abandonaron el curso antes de la segunda
semana, por lo que la ratio de participación fue del 86,6%. Los motivos
de abandono fueron: laboral (1 alumno), carga académica (2 alumnos)
y no precisado (1 alumno). Los 26 alumnos que finalizaron el curso
obtuvieron una calificación media de 9,4/10. Todos rellenaron la en-
cuesta voluntaria. El 88,46% era alumnado de pregrado (Grados en
Odontología, Medicina y Bioquímica) y el 11,54% de Posgrado.
3 Por ejemplo, el director del curso y varios docentes participaron un mes antes en el curso “Produc-
ción y traducción de artículos científicos (III ed.)”, también realizado a través del Centro Mediterráneo
de la UGR (https://cemed.ugr.es/curso/21on03/)
‒ ‒
conocía de estos cursos dos años antes (3,85%) o con mayor antelación
(7,69%).
Respecto a la evaluación de la calidad del curso, los alumnos otorgaron
puntuaciones muy elevadas (media: 9,56; desviación estándar: 0,31).
En la tabla 3 se muestran los aspectos evaluados y la puntuación obte-
nida.
TABLA 3. Aspectos relacionados con la calidad del curso que fueron evaluados por el
alumnado y puntuación correspondiente (0-10).
TABLA 4. Aspectos relacionados con el profesorado que fueron evaluados por el alumnado
y puntuación correspondiente (0-10).
‒ ‒
La encuesta también incluyó dos ítems sobre aspectos genéricos, en los
que también se observaron puntuaciones muy altas: Material técnico y
audiovisual (9,92); administración Centro Mediterráneo (9,73).
Las preguntas abiertas mostraron un alto grado de satisfacción y algu-
nas limitaciones o áreas de mejora. A continuación, se recogen diversas
respuestas del estudiantado, seleccionadas al azar.
Más horas de curso, para poder hacer alguna práctica más, y la posibi-
lidad de hacer prácticas al mismo tiempo que el profesor para así poder
adquirir las destrezas en la sesión
Muy bien impartido, sin embargo la distribución del horario podría dis-
ponerse de otra manera para facilitar una correcta atención por parte de
los alumnos y no resulte muy pesado
‒ ‒
Enhorabuena por el curso. Ha sido muy interesante y muy bien organi-
zado. Para futuras ediciones, si no se pueden ampliar el número de ho-
ras, creo que sería maravilloso quizá resumir un poco los aspectos rela-
cionados con las aplicaciones, para poder incorporar más talleres prác-
ticos para aprender a segmentar situaciones patológicas, como por
ejemplo tumor. Imagino que con las técnicas vistas, ya se proporcionan
las herramientas para poder meternos de lleno en cualquier situación
por nuestra cuenta, pero creo que el programa del curso se podría ver
muy enriquecido incorporando un taller de este estilo. En cualquier
caso, ha sido un curso estupendo y unas horas muy bien aprovechadas.
Gracias por vuestro tiempo, y gracias también por vuestra iniciativa y
paciencia :)
‒ ‒
Como he dicho hubiera estado también bien más largo el curso
Sin duda cuando el formato sea presencial el feed back del curso será
mucho mayor.
Me ha parecido muy bien tal y como es. No obstante, seguro que evo-
luciona durante los años y, sin duda, creo que muchos alumnos repeti-
rán en otras ediciones.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
como Radiant), cada uno de los cuales presenta numerosas herramien-
tas. Como es lógico, los contenidos desarrollados y las prácticas eva-
luadas se adaptaron al nivel de los estudiantes, asumiendo que no par-
tían de conocimientos previos. Además de estos conocimientos de soft-
ware, se dedicaron varias clases específicas a explicar los fundamentos
de imagen médica por tomografía computarizada (TC) y resonancia
magnética (RM), ya que estas técnicas seccionales fueron empleadas en
los ejercicios de demostración y en las tareas de los estudiantes pues
son la base de la mayor parte de aplicaciones de la impresión 3D basada
en imagen médica (Bartikian et al., 2019). Las elevadas calificaciones
del estudiantado en las prácticas entregadas demuestran que adquirie-
ron los conocimientos necesarios para segmentar las imágenes de TC
aplicando diferentes filtros como el umbral, similar al concepto de ven-
tana frecuentemente utilizada en TC (Wolpert, 1979), y reconocieron
estructuras cuya anatomía puede considerarse moderadamente com-
pleja (especialmente para estudiantes de Grado), como son las vértebras
de la columna cervical alta (Louie et al., n.d.). En resumen, la adecuada
consecución de los objetivos previstos por parte del alumnado del curso
demuestra el éxito del curso en términos de adquisición de competen-
cias.
Por otra parte, el grado de satisfacción observado en el cuestionario se-
miestructurado administrado de forma voluntaria al estudiantado fue
muy elevado. Todos los ítems incluidos en dicho cuestionario obtuvie-
ron calificaciones superiores a 9 puntos, siendo 10 el máximo. No obs-
tante, debe tenerse en cuenta que dicho cuestionario no está validado
formalmente, aunque concuerda con los criterios que el profesorado del
curso consideró relevantes y viene utilizándose de manera rutinaria en
distintos cursos realizados en el Centro Mediterráneo desde hace años,
utilizándose como criterio de referencia para comparar los distintos cur-
sos que se organizan en dicha institución vinculada a la Universidad de
Granada en aras de permitir una comparación relativamente homogénea
entre los diferentes cursos. Los resultados son públicos y están a dispo-
sición a cualquier usuario en la web de dicha institución4. En relación a
‒ ‒
las preguntas abiertas, la retroalimentación del alumnado sobre los as-
pectos mejorables y limitaciones del curso destacan la conveniencia de
prolongar la duración del curso, la distribución de las horas lectivas
(clases muy concentradas, considerando que se realizaron durante el
curso académico), el interés por la aplicación de la impresión 3D al
ámbito de la Odontología y la necesidad de realizar algunos seminarios
de forma presencial para adquirir un conocimiento más práctico del
hardware de impresión 3D. Es necesario hacer algunas consideraciones
sobre estas áreas de potencial mejora.
En primer lugar, el interés por prolongar la duración del curso proba-
blemente obedece a varios motivos como la complejidad del contenido
y variedad de software empleado, pues como se ha comentado previa-
mente, se trataron diversos aspectos que pueden resultar difíciles de
aprender, especialmente para alumnos sin formación reglada en radio-
logía e imagen médica. Debe tenerse en cuenta que los docentes ofre-
cieron tutorías online para practicar aquellas tareas en las que los alum-
nos encontraran problemas. También se convocó una tutoría presencial
en aulas equipadas con ordenadores por si existían limitaciones de soft-
ware (nótese que, para algunas tareas, los requisitos de rendimiento grá-
fico son relativamente altas). En este sentido, consideramos que, ade-
más de estructurar los contenidos de forma más espaciada y prolongada
en el tiempo, y promover la realización de un mayor número de talleres
para practicar, sería conveniente establecer un sistema de cribado para
evaluar y, posiblemente, clasificar al alumnado en función de los cono-
cimientos previos sobre los aspectos fundamentales del curso (anatomía
humana, imagen médica e impresión 3D). Otra opción sería establecer
itinerarios específicos en función del Grado de procedencia y/o curso
académico. Esto permitiría, indudablemente, una mayor adaptación de
los contenidos teórico-prácticos relevantes al perfil del alumnado, y po-
dría ser especialmente importante para grados como Odontología, que
en este caso constituyó el mayor porcentaje relativo de participantes del
curso (superior al 50%).
‒ ‒
En segundo lugar, la distribución de las horas lectivas fue otro aspecto
reseñado por el alumnado. No parece descabellado si se considera que
las clases fueron de 4 horas seguidas durante dos días a la semana en
horario de tarde (de 16:00 a 20:00 horas). Téngase en cuenta que la
mayor parte del alumnado llegaba al curso tras una intensa jornada de
clases por la mañana, por lo que no debe extrañar que se prefiera tener
clases de menor duración. No obstante, también debe considerarse que
las clases fueron grabadas (con el consentimiento explícito de los estu-
diantes) ya que, debido al carácter no presencial del curso, el equipo
docente optó por poner el material impartido a disposición del alum-
nado que por cualquier razón no pudiera atender síncronamente al curso
de forma puntual; y, por otra parte, se decidió concentrar el curso para
finalizarlo durante un mes para evitar el solapamiento del mismo con
los exámenes finales del curso académico. En cualquier caso, la retro-
alimentación obtenida en este sentido fue bastante homogénea por parte
de los alumnos, y por parte de los docentes también fue evidente el des-
gaste producido por jornadas tan intensas. Por lo tanto, de cara a futuras
ediciones del curso, se hará un esfuerzo importante por evitar concen-
trar los horarios del curso en clases de 4 horas de duración. Como vías
alternativas podría considerarse el formato semipresencial con clases
síncronas y asíncronas o un mayor número de clases de menor duración
(2 horas) entre semana.
En relación a la conveniencia de introducir prácticas y contenidos es-
pecíficos para Odontología y otras áreas específicas dentro de las Cien-
cias Biosanitarias, deben tenerse en cuenta varias cuestiones. En primer
lugar, esta limitación es lógica, no solo por el carácter piloto del curso,
sino porque la mayor parte de docentes son médicos de formación. El
curso se ofertó a las áreas biosanitarias afines considerando las nocio-
nes comunes en cuanto a Anatomía Humana, ya que se trata de una
asignatura compartida, aunque evidentemente los contenidos específi-
cos difieren sustancialmente en función del grado (por ejemplo, en Me-
dicina se imparten tres asignaturas de Anatomía Humana que abarcan
la totalidad del cuerpo, mientras que en Odontología se da un mayor
protagonismo a las áreas anatómicas relevantes para el ejercicio prác-
tico). Paradójicamente, el número de créditos ECTS convalidables fue
‒ ‒
sustancialmente mayor en Odontología (3 ECTS) que en Medicina (1
ECTS), lo que puede explicarse teniendo en cuenta la escasa proporción
de créditos de optatividad que se ofertan en esta última en relación a la
primera (menos de un 5% del total de créditos de la carrera), lo que se
traduce en una menor facilidad por parte de las comisiones académicas
para otorgar créditos a cursos no incluidos en la oferta curricular del
Grado. Sea como fuere, parece claro que existe un gran interés por parte
del alumnado y la comisión académica del Grado en Odontología por
introducir las tecnologías de impresión 3D como componente forma-
tivo del alumnado, por lo que en futuras ediciones del curso prevemos
la introducción de contenidos específicos de interés particular para esta
área, en particular la introducción de impresión 3D basada en resina
(tecnologías SLA y similares) y anatomía radiológica del macizo facial.
Nuevamente, el establecimiento de criterios de cribado o clasificación
del perfil de alumnos durante la preinscripción del curso podría resultar
de gran utilidad para determinar las necesidades de los estudiantes.
Por último, a juicio de los docentes del curso, la mayor limitación del
curso concierne a la falta de formación en hardware de impresión 3D.
Este aspecto fue determinado antes de iniciar el curso debido a las res-
tricciones en la presencialidad impuestas por la pandemia COVID, no
pudiéndose optar por formatos semipresenciales dado que las medidas
de distanciamiento social eran muy restrictivas en las fechas en que se
desarrolló la mayor parte del curso. No obstante, dado el elevado interés
docente de mostrar al alumnado las características físicas de los equipos
de impresión 3D, ya desde el inicio del curso se planteó que la última
sesión del curso sería presencial siempre que la situación sociosanitaria
lo permitiese (como en efecto ocurrió). Aunque evidentemente no se
pudieron impartir talleres específicos sobre el hardware de impresión
3D, en la sesión de clausura del curso se contó con una de las impreso-
ras del equipo docente en el aula para que los alumnos pudieran verla
de primera mano en funcionamiento. Cabe reseñar que el certificado de
participación en el curso permite a los estudiantes acceder y utilizar las
impresoras 3D disponibles en nuestro laboratorio, por lo que en futuras
ediciones resultará de especial importancia asegurar que los alumnos
disponen de conocimientos suficientes del hardware, si bien siempre
‒ ‒
existe una monitorización de los equipos de impresión 3D por parte de
nuestro personal docente e investigador.
Al margen de las potenciales áreas de mejora, propias de un curso pi-
loto, la experiencia global del curso ha sido muy gratificante para estu-
diantes y alumnos. El esfuerzo por parte de ambos colectivos para op-
timizar el aprendizaje de un campo tan emergente e innovador también
queda fuera de toda duda. Los resultados de la experiencia nos animan
a continuar en la tarea de introducir la impresión 3D basada en imagen
médica como un componente formativo de elevado interés para la for-
mación de nuestros estudiantes. Considerando la efervescencia de estas
tecnologías en el ámbito biosanitario, ya implantadas en numerosos
hospitales en el contexto de Unidades de Impresión 3D clínica (Wake,
2021) así como en la práctica de numerosas clínicas de Odontología
(Kessler et al., 2020), estamos convencidos de que el alumnado contará
con conocimientos de gran importancia en su futuro laboral. Confiamos
en que la retroalimentación recibida y el escenario de vuelta a la pre-
sencialidad nos permita optimizar las características y contenidos de
este curso en futuras ediciones.
6. CONCLUSIONES
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
‒ ‒
Mediterráneo de la Universidad de Granada por facilitar el desarrollo
del curso.
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Louie, P. K., An, H. S., & Samartzis, D. (n.d.). Atlas of spinal imaging :
phenotypes, measurements and classification systems.
Moore, R., Riggs, K., Kourtidou, S., Schneider, K., Szugye, N., Troja, W.,
D’Souza, G., Rattan, M., Bryant, R., Taylor, M., & Morales, D. (2018).
Three-dimensional printing and virtual surgery for congenital heart
procedural planning. Birth Defects Research, 110(13), 1082–1090.
https://doi.org/10.1002/BDR2.1370
Proyecto ArquiM3D-X. Último acceso: Septiembre 5, 2021, disponible en
https://arquim3dx.com/
Pugliese, L., Marconi, S., Negrello, E., Mauri, V., Peri, A., Gallo, V., Auricchio,
F., & Pietrabissa, A. (2018). The clinical use of 3D printing in surgery.
Updates in Surgery, 70(3), 381–388. https://doi.org/10.1007/S13304-
018-0586-5
Sun, Z., & Liu, D. (2018). A systematic review of clinical value of three-
dimensional printing in renal disease. Quantitative Imaging in Medicine
and Surgery, 8(3), 311–325. https://doi.org/10.21037/QIMS.2018.03.09
Tack, P., Victor, J., Gemmel, P., & Annemans, L. (2016). 3D-printing techniques
in a medical setting: a systematic literature review. Biomedical
Engineering Online, 15(1), 115. https://doi.org/10.1186/s12938-016-
0236-4
Villarreal, J. A., Yoeli, D., Masand, P. M., Galvan, N. T. N., Olutoye, O. O., &
Goss, J. A. (2020). Hepatic separation of conjoined twins: Operative
technique and review of three-dimensional model utilization. Journal of
Pediatric Surgery. https://doi.org/10.1016/j.jpedsurg.2020.06.047
Wake, N. (2021). 3D Printing for the Radiologist. Elsevier.
Wang, Y.-T., Yang, X.-J., Yan, B., Zeng, T.-H., Qiu, Y.-Y., & Chen, S.-J. (2016).
Clinical application of three-dimensional printing in the personalized
treatment of complex spinal disorders. Chinese Journal of Traumatology
= Zhonghua Chuang Shang Za Zhi, 19(1), 31–34.
https://doi.org/10.1016/j.cjtee.2015.09.009
Wolpert, S. (1979). Appropriate window settings for CT anatomic measurements.
Radiology, 132(3), 775. https://doi.org/10.1148/132.3.775A
‒ ‒
CAPÍTULO 15
LA CONTAMINACIÓN ATMOSFÉRICA EN
SECUNDARIA. ANÁLISIS DE LIBROS DE TEXTO
1. INTRODUCCIÓN
De entre todos los recursos curriculares de los que disponen los profe-
sores, los libros de texto son el más utilizado (Martínez, 2007). Perales
(2006), indica que hasta un 90% de los profesores que imparten disci-
plinas de ciencias usan el libro de texto el 95% del tiempo que dura la
clase, y, muchas veces, es el mismo libro de texto el que dicta el pro-
grama a seguir (Caldeira, 2005).
Por esta razón, para muchos profesores, la elección del libro de texto se
convierte en la decisión curricular más crucial (Campanario, 2003) y,
por tanto, se adaptan exclusivamente a lo pautado por el currículo ofi-
cial. Este material, muestra una apariencia homogénea, aunque presenta
ciertas variaciones dependiendo de la editorial, siendo estos editores,
en última instancia, los que seleccionan y publican los contenidos cu-
rriculares. Además, los materiales alternativos innovadores y con una
visión investigadora son cada vez más escasos y, a menudo, no cuentan
con la confianza o el apoyo de los profesores para su utilización en clase
(Caamaño et al., 2001).
Basándonos en esta afirmación, es necesario poder conocer cómo es el
libro de texto que mejor se ajusta al proceso educativo de enseñanza-
aprendizaje. La mayoría de estos manuales se sigue centrando en as-
pectos conceptuales y propedéuticos, consiguiendo una percepción
poco motivadora de los alumnos según investigaciones en didáctica de
las ciencias (Solbes, Montserrat, y Furió, 2007). Además, el profeso-
rado debería tener en cuenta las nuevas demandas educativas en cien-
cias y el desarrollo científico y tecnológico de los últimos tiempos,
‒ ‒
haciendo un mayor énfasis en la enseñanza desde un estudio más mul-
tidisciplinar, centrado en las relaciones entre Ciencia, Tecnología, So-
ciedad y Medio Ambiente (CTSA) (Prieto, España y Martín, 2012).
Este enfoque multidisciplinar es necesario en educación ya que, los
avances científicos y tecnológicos están a la orden del día de todos los
ciudadanos (Jiménez, 2002) a través de medios informales como me-
dios de comunicación, redes sociales, museos, ... Sin embargo, estas
relaciones CTSA son muy escasas en los libros de texto de ciencias, lo
que contribuye a que los alumnos no se interesen por las ciencias, ya
que queda como contenido totalmente descontextualizado de su vida
cotidiana (Matthews, 2012). La realidad es que la ciencia rodea nuestra
sociedad y causan cierta polémica cuando hablamos de problemas de
actualidad como transgénicos, SIDA, cambio de sexo, deforestación,
agujero de la capa de ozono, fibra óptica, telefonía móvil 5G, agota-
miento de recursos, …
Autores como Domènech-Casal (2017), alertan de que los alumnos no
consiguen alcanzar un aprendizaje significativo en asignaturas sobre
ciencias mediante las metodologías tradicionales. Así, vuelven a coin-
cidir en la necesidad de implantar nuevas metodologías, no solo el
aprendizaje integrado de CTSA, como ya comentábamos, sino también,
la Enseñanza de las Ciencias Basada en la Indagación (ECBI) o el
Aprendizaje Basado en Proyectos (ABP). Se va visto que el cambio de
rol del alumno, a uno más activo, donde es el protagonista de su propio
aprendizaje, participa, experimenta y tiene total libertad en el desarrollo
de los proyectos, supone una mejora en los resultados, además de una
mayor comprensión de los contenidos y una retención más duradera en
el tiempo (Penuel y Means, 2000). De esta manera, adquieren compe-
tencias útiles tanto en el campo académico como para la vida cotidiana
(Finkelstein et al., 2010), ya que se ha visto que el aprendizaje basado
en estas metodologías convierte los aprendizajes en significativos y el
uso de habilidades cognitivas complejas (Chadwell, 2003).
La ley educativa contempla la Alfabetización Científica como el obje-
tivo primordial en la enseñanza en las ciencias en secundaria. Para ello
los estudiantes deben emplear el conocimiento científico para identifi-
car cuestiones y problemas reales (Prieto y España, 2010), para
‒ ‒
finalmente obtener conclusiones a partir de evidencias que ayuden a
comprender el mundo que los rodea y puedan tomar decisiones de una
manera crítica para un adecuado desarrollo sostenible (Banet, 2010).
En los últimos años, nuestra sociedad ha mostrado una notable preocu-
pación por la conservación del Medio Ambiente. Dentro de este ámbito,
se le da especial relevancia a la Contaminación Atmosférica, que se ha
convertido en objetivo de estudio preferente para la comunidad cientí-
fica, y a escala local, en una de las inquietudes de los ciudadanos de los
países más desarrollados. El reconocimiento mundial de que estas emi-
siones de contaminantes a la atmósfera están afectando a la salud, la
economía y el ambiente han obligado a las entidades políticas del estado
a tomar medidas legales contra el problema (Gallego, 2012).
En España, tras la derogación de la ley 38/1972 de Protección del Me-
dio Ambiente Atmosférico, entra en vigor la nueva Ley 34/2007, de 15
de noviembre, de Calidad del Aire y Protección de la Atmósfera. En la
que, en su última modificación del 23 de diciembre de 2017, define
contaminación atmosférica como “La presencia en la atmósfera de ma-
terias, sustancias o formas de energía que impliquen molestia grave,
riesgo o daño para la seguridad o la salud de las personas, el medio
ambiente y demás bienes de cualquier naturaleza”. Las sustancias con-
taminantes siempre son producidas como consecuencia de la actividad
humana, entre las que destacan la utilización de combustibles fósiles,
carbón o petróleo como fuente de energía, y, pueden presentarse sóli-
das, líquidas o gaseosas (Ministerio para la transición ecológica y el
Reto demográfico, 2020).
Así pues, a través de la Educación Secundaria se pretende concienciar
a la sociedad sobre, en este caso, la crisis ambiental en la que nos en-
contramos, y la necesidad de cambiar ciertos estilos de vida insosteni-
bles a largo plazo para garantizar la supervivencia de las próximas ge-
neraciones, de otros seres vivos, a la vez que la conservación del medio
ambiente (Acevedo, Vázquez y Manassero, 2003). Por tanto, la labor
de los profesores mediante la enseñanza es alcanzar una mejora de la
calidad de vida de las personas, obteniendo una sociedad más justa, crí-
tica y democrática (Sadler y Zeidler 2009). Persiguiendo este objetivo
de alfabetización científica, se considera a la contaminación
‒ ‒
atmosférica como uno de los problemas ambientales que deberían con-
templarse en el currículo oficial de secundaria de manera reglada, así
como, de un adecuado enfoque que permita al alumnado actuar y deci-
dir con los criterios mencionados anteriormente (Gallego, 2012).
Actualmente, la ley educativa, Ley Orgánica 8/2013, de 9 de diciembre,
para la mejora de la calidad educativa (LOMCE), y concretamente, en
el Real Decreto 1105/2014, de 26 de diciembre, en su Artículo 6, por el
que se establece los contenidos transversales a tratar en Educación Se-
cundaria Obligatoria y del Bachillerato, concluye que deben incorpo-
rarse elementos relacionados con el desarrollo sostenible y el medio
ambiente en los currículos educativos (MECD, 2015). Además, persi-
guiendo ese objetivo de alfabetización científica, parte de los conteni-
dos que se proponen trabajar sobre contaminación atmosférica respon-
den a uno de los problemas ambientales de actualidad, por lo que se
considera un tema fundamental a tratar en ESO y Bachillerato.
En un principio, esos contenidos deberían ser suficientes y adecuados
para dotar de la alfabetización científica necesaria, pero sin embargo
estudios como el de Hernández et al., (2018) sobre la educación am-
biental y la demanda educativa indican que este tipo de contenidos no
suele superar el 20% ni siquiera en libros de Biología y Geología. Botey
(2013), menciona que los libros de texto no transmiten la realidad de
los problemas ambientales y sus causas correctamente, así como tam-
bién, se habla de la necesidad de contar con libros más ecológicos, que
interrelacionen contenidos de tipo conceptual, procedimental y actitu-
dinales y fundamentada en estrategias didácticas basadas en la reflexión
y el debate, aquellas que parten del análisis de hechos concretos y cer-
canos (De Paula et al., 2014).
2. OBJETIVOS
‒ ‒
los objetivos generales de la educación obligatoria, así como de la alfa-
betización científica. Para el análisis se opta por estudiar contenidos
sobre contaminación atmosférica por tratarse de un problema socio-am-
biental de relevancia y actualidad. La metodología utilizada para el aná-
lisis puede servir como herramienta orientativa a los profesores a la
hora de elegir un libro de texto u otro. Sabiendo que el libro de texto
ocupa un lugar en las aulas fundamental.
Por tanto, este trabajo aborda el análisis de libros de texto para conocer
la forma en la que se transmiten los conocimientos científicos sobre la
contaminación atmosférica en Educación Secundaria Obligatoria. Para
alcanzar esta meta, se plantea el objetivo de analizar como se aborda la
contaminación atmosférica en una selección de libros de texto de se-
cundaria, centrando este análisis en las imágenes, en los contenidos y
en las actividades propuestas.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
manifiesto la actividad humana como precursora de la contaminación
atmosférica y, por tanto, del calentamiento global. Estos contenidos se
plantean para cuarto curso, donde los alumnos son más críticos con sus
ideas y su modo de vida.
Para la realización de esta investigación se han utilizado los libros de
texto de 1º y 4º de ESO de cuatro editoriales utilizadas frecuentemente
en los centros educativos (Oxford, Anaya, Vicens Vives y SM). En la
tabla 1, se relacionan los libros de texto seleccionados por curso y los
temas que abordan la temática de la contaminación atmosférica, además
se le asigna un código de identificación a cada manual (ID).
‒ ‒
3.1.1. Análisis de Contenidos
‒ ‒
TABLA 2. Plantilla de análisis de contenidos.
Ítems Analizados
Valoración de ideas iniciales Si/No
Causas de la contaminación atmosférica Si/No
Gases de efecto invernadero Si/No
Cambio climático Si/No
Destrucción de la capa de ozono y efecto invernadero por contamina-
Si/No
ción atmosférica
Lluvia ácida como consecuencia de la contaminación atmosférica Si/No
Calentamiento global como consecuencia de la contaminación atmosfé-
Si/No
rica
Consecuencias del calentamiento global Si/No
Consecuencias para la Salud y Medio Ambiente Si/No
Propone hábitos y soluciones, medidas preventivas y correctoras. Si/No
Importancia de la atmósfera para la existencia de vida en la Tierra Si/No
Identifica el modo de vida del ser humano como insostenible Si/No
La explotación de recursos naturales contribuye a la contaminación at-
Si/No
mosférica
Fomenta actitud crítica ante acciones humanas Si/No
Fomenta participación y acción ciudadana Si/No
Contextualización de los contenidos (problemas actuales cotidianos) Si/No
Análisis de la contaminación atmosférica desde una perspectiva de
desarrollo científico-tecnológico, económico, político y social (relaciones Si/No
CTSA)
Contenidos accesibles para el alumno Si/No
Errores conceptuales Si/No
Enfoque de los contenidos A/M/B
‒ ‒
(2002) que fueron también utilizados en Montañés y Jaén (2015) y, se
muestran en la tabla 3. El primer criterio estudiado fue el tipo de ilus-
traciones que ofrecía la unidad, pudiendo ser decorativas, ilustrativas
del texto, explicativas si intentan aclarar relaciones de varios elemen-
tos, o complementarias si dan información adicional al texto. Otro cri-
terio fue el grado de iconicidad, es decir, la similitud en que una imagen
se parece a lo que se quiere representar. Se distinguieron los siguientes:
fotografías, dibujos figurativos, dibujos esquemáticos (representa rela-
ciones sin detalles), dibujos figurativos + signos (representación de ac-
ciones, fórmulas, …) y dibujos esquemáticos + signos. Posteriormente,
se estudió la funcionalidad que encuentran los alumnos de esas imáge-
nes dentro del texto para su aprendizaje. Estas imágenes se clasificaron
en 3 criterios: inoperantes, es decir, que no aportan información; las
operativas elementales que representan información como gráficos, ta-
blas estadísticas o mapas de conceptos; e ilustraciones sintácticas que
representan elementos que requieren de conocimientos externos como
fórmulas químicas.
‒ ‒
Se incluyó otro criterio que estudiaba la relación con el cuerpo del texto,
pudiendo ser connotativa, si el texto no menciona su correspondencia
con la ilustración; denotativa, si el texto hace referencia a la imagen y
los elementos que incluye; o, sinóptica, si la imagen y el texto son com-
plementarios de manera que para alcanzar a su comprensión se deben
estudiar como una misma unidad. Finalmente, se estudió las etiquetas
que incluyen las imágenes para su correcta interpretación. Para este cri-
terio se valoraron 3 categorías: no aparecen, etiquetas nominativas y,
etiquetas relacionales si describen lo observado.
‒ ‒
TABLA 4. Plantilla de análisis de Actividades.
4. RESULTADOS
‒ ‒
en a penas unas décadas e indica ese sobredesarrollo como efecto ne-
gativo para el medio ambiente. En la tabla 5, se recogen los resultados
obtenidos al analizar los contenidos presentes en los libros de texto.
Libros de texto
L1 L2 L3 L4 L5 L6
1 X
2 X X X X X X
3 X X X
4 X X X
5 X X X X X
6 X X X X X
7 X X X X X
8 X X X X
Ítems analizados
9 X X X X X
10 X X X X X X
11 X X X
12 X X X
13 X X X
14 X X X
15 X X X
16 X
17 X X
18 X X X
19 X X X X
20 A M A M M M
‒ ‒
sobreexplotación de los recursos o la destrucción de los ecosistemas
naturales. Además, cabe destacar como todos los libros presentan con-
tenidos, en mayor o menor proporción, sobre propuestas de hábitos más
sostenibles, así como de medidas preventivas y correctoras para reducir
la contaminación. Por otra parte, tan solo en primer curso encontramos
contenidos concretos que identifiquen a la atmósfera como elemento
imprescindible para la vida en el planeta.
Referente a si, los contenidos están contextualizados mostrando proble-
mas de la vida cotidiana del alumnado, encontramos que tan solo en 1º
de la ESO de Vicens Vives (L5) contenidos sobre la gota fría. Este fe-
nómeno lo describe y sitúa asociado a la costa mediterránea, concreta-
mente en la Región de Murcia, Comunidad Valenciana y Cataluña.
Aunque las imágenes de la nubosidad captadas por un satélite presentan
fecha de 2012, podría ser utilizado como conector para comentar las
lluvias con carácter tormentoso que tuvieron lugar en 2019, e incluso
propiciar una actividad basada en comparación de climogramas o com-
paración de daños ocasionados, proponer medidas correctoras, …
El estudio de la contaminación atmosférica desde una perspectiva de
desarrollo científico, económico, político y social que fomente las rela-
ciones CTSA queda bastante escaso a pesar de los muchos autores que
insisten en su importancia. Tan solo se encuentran en 1º de secundaria
de Vicens Vives (L5) en la que relaciona la atmósfera con otros conte-
nidos como el estudio de la meteorología, el uso de satélites meteoro-
lógicos para la predicción del tiempo, cómo y qué parámetros nos indi-
can los mapas del tiempo, además de, recursos energéticos renovables
como la energía eólica y la solar, cómo funciona un aerogenerador, e
incluso la construcción de viviendas con arquitectura bioclimática con
consumos energéticos contaminantes mínimos.
En el análisis del lenguaje utilizado por los libros para expresar los con-
tenidos, encontramos que la mayoría del texto está redactado utilizando
abundante terminología científica, e incluso la utilización de palabras
demasiado complejas, lo que dificulta la accesibilidad del alumnado al
temario. Este hecho ocurre mayormente en libros de primero de la ESO,
donde el desarrollo de habilidades cognitivas complejas está aún desa-
rrollándose, frente a los libros de cuarto que presentan unos contenidos
‒ ‒
más accesibles y uso de terminología en su justa medida. Además, en
todos los libros de primero, se presentan errores conceptuales relacio-
nados con los contaminantes presentes en la atmósfera. Estos manuales
indican la existencia de dos tipos de contaminantes, los producidos por
la actividad humana, y, la existencia de “contaminantes naturales” pro-
cedentes de fenómenos naturales como polvo del desierto, gas y partí-
culas de erupciones volcánicas… Sin embargo, en lo referente a conta-
minación atmosférica, sólo se incluyen las sustancias producidas por
los seres humanos, siendo, las otras sustancias parte de reacciones in-
trínsecas de los ecosistemas naturales.
Muchos autores coinciden en la importancia de que los alumnos sean
conocedores de sus ideas iniciales y concepciones alternativas para pro-
mover un adecuado aprendizaje de los contenidos científicos. Sin em-
bargo, solo un libro de texto (L5) propone una actividad introductora
del tema donde se plantean determinadas preguntas para la reflexión
del alumno (Figura 1).
‒ ‒
cambios de actitudes ni acciones más responsables con el medioam-
biente, por lo tanto, no cumpliría con el objetivo de alfabetización cien-
tífica fijado por el currículo establecido por la Ley Educativa vigente.
4.2. Imágenes analizadas
En cuanto a las imágenes analizadas en las diferentes editoriales de 1º
y 4º de ESO, se detectó gran variación en el número de imágenes incor-
poradas (tabla 6). A pesar de que se observa un menor número de imá-
genes en la editorial Anaya, esto se debe a que el número de páginas
por tema es inferior con respecto a las otras editoriales. De esta manera,
si que se encuentra una proporcionalidad de imágenes por hoja entre
todos los manuales.
ID Editorial Nº Imágenes
L1 31
L2 30
L3 14
L4 17
L5 29
L6 27
La siguiente tabla 7, se representa la proporción en la que se encuentra
cada categoría estudiada sobre imágenes. Se presentan los valores nu-
méricos de las imágenes analizadas por cada ítem y cada editorial, por
un lado, se muestran las frecuencias, y por otro lado, los valores en
porcentajes obtenidos de cada categoría con respecto al total de imáge-
nes analizadas en cada editorial.
‒ ‒
TABLA 7. Resultados de las imágenes analizadas en cada editorial seleccionada.
Catego- L1 L2 L3 L4 L5 L6 L1 L2 L3 L4 L5 L6
Ítems
ría Frecuencias Porcentajes
1 8 7 3 5 6 5 26 23 21 29 21 19
2 11 19 9 10 14 17 35 63 64 59 48 63
A
3 1 2 1 2 5 4 3 7 7 12 17 15
4 11 2 1 0 4 1 35 7 7 0 14 4
1 21 18 8 11 20 23 68 60 57 65 69 85
2 2 4 3 4 1 1 6 13 21 24 3 4
B 3 1 3 1 1 1 2 3 10 7 6 3 7
4 5 4 2 0 7 1 16 13 14 0 24 4
5 2 1 0 1 0 0 6 3 0 6 0 0
1 21 21 11 11 18 14 68 70 79 65 62 52
C 2 1 3 1 5 4 3 3 10 7 29 14 11
3 9 6 2 1 7 10 29 20 14 6 24 37
1 10 17 3 5 5 10 32 57 21 29 17 37
D 2 8 11 9 12 17 13 26 37 64 71 59 48
3 13 2 2 0 7 4 42 7 14 0 24 15
1 0 16 4 12 1 4 0 53 29 71 3 15
E 2 21 13 10 5 10 15 68 43 71 29 34 56
3 10 1 0 0 18 8 32 3 0 0 62 30
Total 31 30 14 17 29 27
‒ ‒
hecho ya fue observado por Perales y Jiménez (2002), que indicaban la
necesidad de etiquetas relacionales para facilitar dicha interpretación
mediante palabras.
Encontramos interesante destacar la ausencia total de escalas en todo
tipo de ilustraciones, lo que puede acabar causando dificultades en el
aprendizaje. Como afirmó Simonneaux (2000), la falta de conocimien-
tos y escalas contribuye a que el alumno adquiera conocimientos erró-
neos, por ejemplo, pensar que un átomo u un virus son del mismo ta-
maño.
Tras el análisis de las actividades que proponen los libros de texto, he-
mos encontrado que no existe una proporcionalidad de actividades para
cada etapa de la secuencia educativa (tabla 8). De esta manera, el por-
centaje de actividades de iniciación y ampliación que presentan los li-
bros supone más de un 50% frente a las actividades de desarrollo que
son menos frecuentes, y las de aplicación que son muy escasas.
Ítems Valores L1 L2 L3 L4 L5 L6
Cerradas 5 4 0 0 0 0
Cuestiones Definición/Descripción 34 53 55 53 58 36
memorísti- Interpretación 19 13 10 12 4 33
Tipo cas Argumentación 31 17 23 28 35 26
Análisis 7 7 3 0 0 2
Ejercicios/Problemas 0 0 3 2 0 2
Experimentos de investigación 3 3 6 5 2 0
Actividades de iniciación 28 38 42 42 52 24
Secuen- Actividades de desarrollo 29 28 16 28 33 24
cia Actividades de aplicación 3 3 10 7 2 2
Actividades de ampliación o refuerzo 36 32 32 23 13 50
Planteamiento de problemas actuales NO NO SI NO NO SI
Fomento de desarrollo de valores y actitudes res-
NO SI SI SI NO SI
ponsables
Trabajo cooperativo NO SI SI SI NO NO
‒ ‒
Al analizar el tipo de actividades que aparecen, se observa un predomi-
nio casi completo de las cuestiones. Los otros tipos de actividades como
problemas o experimentos son muy escasos o incluso inexistentes en
algunas editoriales. La mayoría de las cuestiones son abiertas y poco
contextualizadas, de manera que, el nivel cognitivo que se requiere para
resolverlas se basa en recopilar información procedente del texto, como
definir o describir conceptos. Esto puede estar relacionado directa-
mente con el modo en el que los libros de texto presentan los conteni-
dos, ya que se tratan, en su mayoría, de hechos (describen qué es o cómo
es).
En referencia a, si las actividades propuestas plantean problemas am-
bientales actuales o no, solo se encontraron ejemplos en dos de las edi-
toriales. Estas actividades se encuentran al final del tema como conte-
nido adicional. Un ejemplo sería el recogido en el libro de 1º de ESO
de la editorial Anaya, (L3). Esta actividad aparece con el título de Em-
prender: ¿cuánto cuesta recuperar un espacio natural?, mediante la
que se plantea realizar un Plan de Acción para recuperar un ecosistema
mediterráneo tras el impacto ambiental de un incendio.
En el manual de 4º de la ESO de la editorial SM (L6), también encon-
tramos un claro ejemplo bajo el título Proyecto de investigación: ¿cómo
influirá el cambio climático en las especies y los ecosistemas de mon-
taña?. En esta actividad se plantean los acuerdos que se pactaron en la
Cumbre del Clima de 2015 en Paris, para la reducción de la emisión de
gases de efecto invernadero (Figura 2) y, se propone una investigación
sobre cómo esta subida de la temperatura puede afectar a especies de
alta montaña más vulnerables como, por ejemplo, la mariposa Apolo
(Parnassius apollo). Finalmente, la actividad indica la importancia de
estas investigaciones y experiencias para que los alumnos propongan
medidas de conservación para la supervivencia y adaptación al cambio
climático de especies y ecosistemas concretos.
‒ ‒
FIGURA 2. Ejemplo de actividad que aborda problemas ambientales actuales 4º ESO de
SM
‒ ‒
Además, se analizó si, las actividades posibilitan o proponían un trabajo
en equipo. Al tratarse, en su mayoría, de cuestiones, no propicia este
tipo de metodologías educativas. De nuevo, al igual que los criterios
anteriores, solo se propone el trabajo en grupos en actividades de inves-
tigación o experimentos que se localizan al final de la unidad. En este
caso, hay una proporción del 50% de manuales que dan esta posibilidad,
frente a otro 50% que obvia el trabajo de tipo cooperativo.
5. CONCLUSIONES
‒ ‒
y recursos educativos adicionales que se ajusten más a las necesidades
de aprendizaje del alumnado.
6. REFERENCIAS
‒ ‒
Domènech-Casal, J. (2017). Propuesta de un marco para la secuenciación
didáctica de Controversias Socio-Científicas. Estudio con dos
actividades alrededor de la genética. Revista Eureka sobre Enseñanza y
Divulgación de las Ciencias, 14(3), 601-620.
Esteve, P. y Jaén, M. (2013). El papel de los ciclos biogeoquímicos en el estudio
de los problemas ambientales en Educación Secundaria. Investigación en
la escuela, 80, 77-88.
Finkelstein, N., Hanson, T., Huang, C. W., Hirschman, B., y Huang, M. (2010).
Effects of problem based economics on high school economics
instruction. (NCEE 2010-4002). Washington, DC: National Center for
Education Evaluation and Regional Assistance, Institute of Education
Sciences, U.S. Department of Education
Gallego, P.A. et al. (2012). Contaminación atmosférica Volumen 6101305 de
Grado, Universidad Nacional de Educación a Distancia (España).
Editorial UNED.
García, J. y Martínez, F.J. (2010). Cómo y qué enseñar de la biodiversidad en la
alfabetización científica. Enseñanza de las Ciencias, 28(2), 175–184.
Doi: 10.5565/rev/ec/v28n2.212
Hernández, A.M., Velázquez, F., Corrales, J.M. y Burgui, M. (2015). Valores y
enfoques ambientales en la Enseñanza Secundaria Obligatoria a través
de los libros de texto. Ensayos de Ética Ambiental Vol.2. (Cátedra de
Ética Ambiental). Universidad de Alcalá. Fundación Tatiana Pérez de
Guzmán el Bueno.
Hernández, A.M., Burgui, M., Velázquez, F., y Corrales, J.M. (2018).
¿Responden los libros de texto a las demandas de la educación
ambiental? Un análisis para la educación secundaria. Boletín de la
Asociación de Geógrafos Españoles, 77, 80–110. doi:
http://dx.doi.org/10.21138/bage.2535
Jaén, M y Palop, E. (2011). ¿Qué piensan y cómo dicen que actúan los alumnos y
profesores de un centro de Educación Secundaria sobre la gestión del
agua, la energía y los residuos? Enseñanza de las Ciencias, 29(1), 61-74.
Jiménez, M.P. (2002). Presentación de monografías: ciencia y cultura, cultura y
evolución. Alambique, 32, 5-8.
Lupión, T. y Prieto, T. (2014). La contaminación atmosférica: un contexto para el
desarrollo de competencias en el aula de secundaria. Enseñanza de las
Ciencias, 32(1), 159-177.
Matthews, M.R. (2012). Changing the focus: From nature of science (NOS) to
features of science (FOS). In M.S. Khine (Ed.), Advances in Nature of
Science Research. Concepts and Methodologies, 3–26. Heidelberg:
Springer Dordrecht.
‒ ‒
Martínez, J. (2007). El libro de texto, ¿un recurso de innovación educativa? Aula
de Innovación Educativa, 165, 12-14.
MECD [Ministerio de Educación, Cultura y Deporte]. (2015). Real Decreto
1105/2014, de 26 de diciembre, por el que se establece el currículo
básico de la Educación Secundaria Obligatoria y del Bachillerato. BOE
nº 3, de 3 de enero de 2015, 169-546.
Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. (2020). Proyecto
de ley de Cambio Climático y Transición Energética Para la Transición
Ecológica y el Reto Demográfico. https://www.miteco.gob.es/es/prensa/
proyectodeleydecambioclimaticoytransicionenergetica_tcm30-
509256.pdf
Montañés, S. y Jaén, M. (2015). ¿Qué características presentan los contenidos
relacionados con las problemáticas ambientales propuestos en los libros
de texto de 3° de la ESO? Revista Eureka sobre Enseñanza y
Divulgación de las Ciencias, 12(1). 130-148.
Muñoz, L., y Rubio, L. (2013). Análisis de libros de textos escolares.
Conocimiento del Medio Natural Social y Cultural. Toledo: Facultad de
Educación de Toledo.
Penuel, W. R. y Means, B. (2000). Designing a performance assessment to
measure students’ communication skills in multi-media-supported,
project-based learning. Comunicación presentada al Annual Meeting of
the American Educational Research Association, New Orleans.
Peláez, C., Rodríguez, J.M. y Occelli, M. (2010). Análisis del concepto de
reproducción en libros de texto para el primer ciclo de la escuela
secundaria (EGB 3). Revista de Educación en Biología, 13(2), 7-15.
Perales, F.J. (2006). Uso (y abuso) de la imagen en la enseñanza de las ciencias.
Enseñanza de las Ciencias, 24(1), 13-30.
Perales, F.J. y Jiménez, J.D. (2002). Las ilustraciones en la enseñanza –
aprendizaje de las ciencias. Análisis de libros de texto. Enseñanza de las
Ciencias, 20(3), 369-386.
Prieto, T. y España, E. (2010). Educar para la sostenibilidad. Un problema del
que podemos hacernos cargo. Revista Eureka sobre Enseñanza y
Divulgación de las Ciencias, 7 (número extraordinario), 216-229.
Prieto, T., España, E. y Martín, C. (2012). Algunas cuestiones relevantes en la
enseñanza de las ciencias desde una perspectiva Ciencia-Tecnología-
Sociedad. Revista Eureka sobre Enseñanza y Divulgación de las
Ciencias, 9(1), 71-77.
‒ ‒
Sadler, T.D. y Zeidler, D.L. (2009). Scientific Literacy, PISA, and Socio-
scientific Discourse: Assessment for Progressive Aims of Science
Education. Journal of Research on Science Teaching, 46(8). 909-921.
http://dx.doi.org/10.1002/tea.20327
Sauvé, L. (2010). Educación científica y educación ambiental: un cruce fecundo.
Enseñanza de las Ciencias, 28(1), 5-18.
Simonneaux, L. (2000). A study of pupils’ conceptions and reasoning in
connection with ‘microbes’, as a contribution to research in
biotechnology education. International Journal of Science, 22(6), 619-
644.
Solbes, J., Montserrat, R. y Furió, C. (2007). Desinterés del alumnado hacia el
aprendizaje de la ciencia: implicaciones en su enseñanza. Didáctica de
las ciencias experimentales y sociales, 21, 91-117.
‒ ‒
CAPÍTULO 16
ANTONIO MONLEON-GETINO
Facultad De Biología
Sección De Estadística. Departamento De Genética, Microbiología Y Estadítica
Universidad De Barcelona
JAUME CANELA-SOLER
Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud.
Departament de Fonaments Clínics
Universidad de Barcelona
1. INTRODUCCIÓN
Desde hace pocos años, pero cada vez más frecuentemente, nuestros
científicos, ingenieros y matemáticos están desarrollando y utilizando
de manera colaborativa métodos y técnicas computacionales como la
inteligencia artificial (IA), aprendizaje automático (“Machine Lear-
ning” o ML), métodos bayesianos y simulaciones para analizar grandes
conjuntos de datos complejos y aplicar la información y el conoci-
miento generado a los desafíos del mundo real, ello sin dejar de lado
las matemáticas, la estadística y el análisis de datos en general, pero
con un matiz propio del siglo XXI (Monleón et al., 2017).
Según el informe “Estrategia Española de I+D+I en Inteligencia Artifi-
cial” de la FECYT (Fundación Española para la Ciencia y Tecnología)
(FECYT, 2019) indica que “Cada vez parece más claro que la IA nos
llevará a una nueva realidad social y económica. Ya lo está haciendo.
China y Estados Unidos están avanzando mucho en este campo, mien-
tras la Unión Europea trabaja para que los Estados Miembros dedique-
mos esfuerzos a la IA, por lo que ha puesto 2019 como plazo para que
‒ ‒
cada país desarrolle su Estrategia Nacional.” En este informe se indica
la importancia económica de la IA y su valor estratégico en la salud y
a educación, “El potencial económico y social de la IA es un tema cen-
tral en la discusión de sus posibles impactos. Algunos estudios pronos-
tican que la IA podría añadir alrededor de 14 billones € a la economía
global en el año 2030 y duplicar las tasas de crecimiento económico
para 2035. Esta nueva situación cambiaría el concepto de trabajo en
este proceso transformador de la economía y la sociedad. Además, la
IA puede proporcionar una amplia gama de oportunidades para las em-
presas permitiendo una mejor comprensión de sus procesos, las necesi-
dades de sus clientes y socios, y el entorno empresarial en general. La
IA también puede permitir el disponer de servicios públicos más bara-
tos y personalizados en áreas fundamentales, como son, por ejemplo, la
salud y la educación.”.
Tanto la IA, como el ML están tomando presencia permanente en nues-
tras vidas. Esto se traslada y aplica desde empresas que pueden respon-
der de mejor forma a situaciones problemáticas tomando en cuenta la
experiencia, hasta la ruta que tomamos con nuestro coche para llegar
más temprano al trabajo y la producción industrial de medicamentos,
biotecnologías, sistemas de información geográfica o el diagnóstico
médico. Cómo podemos ver, el futuro ha llegado a nosotros y las ma-
quinas son capaces de generar conocimiento sin nuestra ayuda ¿Este
hecho afecta al ámbito de las Ciencias de la Vida (Biología, Ciencias
Ambientales, Biotecnología, Bioquímica, etc.) o de la Salud (Medi-
cina? Farmacia, Enfermería, etc.) o relacionados (Bioinformática, Bio-
ingenierías, etc.)?
Las nuevas tecnologías han facilitado la creación y recopilación de
grandes y complejos conjuntos de datos relacionados con la investiga-
ción en Ciencias de la Vida y de la Salud, ambas íntimamente relacio-
nadas. Por ejemplo, los derivados de datos moleculares y celulares
como genómica, proteómica y metabolómica; Las imágenes biológicas
y médicas y los datos a nivel de población están transformando nuestra
comprensión de los complejos desafíos ambientales, sociales y mole-
culares. Sin embargo, los conjuntos de datos en sí mismos son solo una
parte de la historia, es un desafío cada vez mayor extraer la información
‒ ‒
correcta y hacerla aplicable a los principales desafíos sociales y globa-
les que deben resolverse. ¿Podrá, ser sustituidos los especialistas por
algoritmos que decidan sobre los especialistas?
Desde desafíos como la migración hasta la resistencia a los antibióticos
y la terapia con células madre, científicos en áreas como Medicina, Es-
tadística, Matemáticas, Biología, Ciencias de la Computación, Química
y otros, se están uniendo y utilizan nuevos enfoques y técnicas interdis-
ciplinarios como la IA y el ML, así como otros campos más clásicos
como son la Estadística o las Matemáticas, para extraer información
importante y derivar conocimientos de estos conjuntos de datos, que
conducirán a una mejor comprensión de los problemas y problemas y
permitirán nuevos enfoques para la prevención y proporcionarán posi-
bles soluciones.
Estos cambios, no son ajenos a las Ciencias de la Vida y de la Salud
(CVICSA), ya que son dos ámbitos del conocimiento más activos ac-
tualmente y donde todo cambio innovador es rápidamente fagocitado.
Esta tendencia ya se apunta en los últimos artículos y libros publicados
(Ver Monleon 2016 y Monleon et al, 2017), así como en las tendencias
para las Ciencias de la Vida para la próxima década que puede verse en
el trabajo “Artificial Intelligence In Life Sciences Market - Growth,
Trends, Forecasts (2020 - 2025). The Artificial Intelligence in Life Sci-
ences Market is segmented by Application (Drug Discovery, Medical
Diagnosis, Biotechnology, Patient Monitoring), and Geography.”
(Mordor Intelligence, 2020). Los grados universitarios, por su inercia y
burocratización, frecuentemente, van retrasados respecto a los rápidos
avances científicos y técnicos y es por ello necesaria su rápida moder-
nización para adaptarlos a las necesidades de la sociedad. Una revisión
del rápido cambio de paradigma social hacia el cambio de la sociedad
basada en los datos y en la información puede encontrarse en el trabajo
“El tratamiento numérico de la realidad. Reflexiones sobre la importan-
cia actual de la estadística en la Sociedad de la Información” (Monleón,
2010) o más actualmente en “Ciencia, tecnología y startups” (Condom-
Vila, 2020).
Según todos los indicadores y noticias las tendencias para los próximos
años tal y como se recoge en “White papers, Life Sciences Trends for
‒ ‒
2020” (Univ of Southampton, 2020) y en “Broatch JE, Dietrich “Intro-
ducing Data Science Techniques by Connecting Database Concepts and
dplyr”(Broatch JE, Dietrich, 2019) los caminos convergen en lo que se
denomina “Data Science”, un compendio de teorías y métodos para uni-
ficar conceptos matemáticos, estadísticas, análisis de datos, IA, ML, y
sus métodos relacionados, a efectos de comprender y analizar los fenó-
menos reales y que ha venido para quedarse y hacernos avanzar (Liu,
1995; Hayashi, 1998).
“La Ciencia de Datos es un campo interdisciplinario que involucra mé-
todos científicos, procesos y sistemas para extraer conocimiento o un
mejor entendimiento de datos en sus diferentes formas, ya sea estructu-
rados o no estructurados, lo cual es una continuación de algunos cam-
pos de análisis de datos como la estadística, la minería de datos, el
aprendizaje automático, y la analítica predictiva” (Wikipedia, 2020).
Así denominaremos Ciencia de los Datos (“Data Science”) a este
campo interdisciplinario que va desde las matemáticas hasta los con-
ceptos más avanzados del análisis de datos (“Machine Learning”,
computación, estadística, modelización, métodos bayesianos y sus
combinaciones).
La exposición temprana a las habilidades de la Ciencia de Datos, como
las bases de datos relacionales o la programación, son esenciales para
los estudiantes de grados CVICSA y de muchas otras disciplinas en una
sociedad cada vez más impulsada por los datos. Sería también muy
deseable que los estudiantes los grados CVICSA tuvieran el conoci-
miento teórico y aplicado suficiente para poder entender los conceptos
teóricos que subyacen bajo el “Data Science”. En “Introducing Data
Science Techniques by Connecting Database Concepts and dplyr” se
describe una experiencia piloto de introducción de esta pedagogía en
un curso introductorio de estadística basado en cálculo para estudiantes
de matemáticas y estadística, y proporciona una breve evaluación de la
perspectiva de la experiencia del estudiante, esto podría adaptarse a los
estudiantes de grados CVICSA. Los materiales complementarios de
este artículo están disponibles en línea (Broatch JE, et al, 2019).
‒ ‒
I.I. PERSPECTIVA HISTÓRICA
‒ ‒
La estadística inferencial (Ver Monleón & Rodríguez, 2017) trata de
establecer conclusiones relacionadas con la población a través de extra-
polar los resultados obtenidos de la muestra a la población de proce-
dencia. Las características que definen a la población se denominan pa-
rámetros poblacionales y las que definen a la muestra, estadísticos
muestrales o estimadores (Ejemplo: la medida de la probabilidad (P) de
incidencia de una enfermedad y su estimador la frecuencia relativa (fr)
de la enfermedad).
La rama descriptiva e inferencial componen la estadística aplicada. Hay
también una disciplina llamada estadística matemática, la cual repre-
senta sus bases teóricas.
La necesidad de relacionar hechos, fenómenos y variables aparece de
forma natural en todos los campos científicos y estudios. En matemáti-
cas es bien conocida la relación funcional entre y = f ( x) , que expresa
una variable dependiente y en función de una variable independiente.
Esta aplicación exacta tiene múltiples aplicaciones en Estadística, pero
en muchos casos (Bioquímica, Biología, Medicina, Economía, etc.) las
variables no son controlables, sino que toman valores de acuerdo con
una cierta distribución de probabilidad, con variables estadísticas en
donde la relación no se puede plantear en términos tan estrictos, ya que,
si se hiciera así, sólo se tendría una burda aproximación de la realidad.
Desde un punto de vista histórico la medida de la relación entre varia-
bles cabe destacar un gran avance en su estudio a partir de los estudios
de Legendre (1752-1833), que introdujo en el siglo XVIII el método de
los mínimos cuadrados utilizándolos para definir la longitud de 1 metro
como una 10 millonésima parte del arco meridional. Es a comienzos
del XIX cuando se ponen las bases teóricas de la teoría de probabilida-
des con los trabajos de Lagrange (1736-1813), Laplace (1749-1827),
Gauss (1777-1855) y Poisson (1781-1840), pero el nacimiento de la es-
tadística moderna y su uso en el análisis de experimentos se debe a los
trabajos de Francis Galton (1822-1911) y Karl Pearson (1857-1936).
Con posterioridad a Galton, las propiedades de las técnicas de regresión
fueron estudiadas por Edgeworth (1845-1926), Pearson (1857-1936) y
Yule (1871-1951).
‒ ‒
Para medir la correlación entre dos variables estadísticas, se utiliza el
coeficiente de correlación poblacional o referida a una muestra. Este
coeficiente fue inicialmente propuesto por Francis Galton en 1885, y
perfeccionado por Karl Pearson en 1895. Hoy en día se lo conoce como
coeficiente de correlación lineal de Pearson. De hecho, bastante antes
Gauss, al extender la distribución que lleva su nombre (Campana de
Gauss) al caso p> 2 dimensiones, se lo encontró como uno de los pará-
metros. Su existencia ya había sido advertida incluso antes por el astró-
nomo francés Auguste Bravais (1811-1863) en el caso bivariante (p =
2), quien se refirió a él como "ucorrelation".
Galton tuvo la genialidad de darse cuenta de que el método estadístico,
a través de la teoría de la correlación y de la regresión, proporcionaba
el instrumento indispensable para probar las teorías de Darwin (Stigler,
1989; Cuadras, 2002). Supo usar en definitiva la biología para interpre-
tar adecuadamente los resultados que se obtienen de aplicar un método
estadístico (Bulmer, 2003).
Algunos trabajos han revisado las aportaciones de Galton a la estadís-
tica, especialmente en cuanto a la regresión como en el trabajo de Stan-
ton (2001), "Galton, Pearson, and the Peas: A Brief History of Linear
Regression for Statistics Instructors", utilizados en la enseñanza habi-
tual de estudiantes en USA.
Galton introdujo en 1889 el término regresión en Estadística. Empleó
este concepto para indicar la relación que existía entre la altura de pa-
dres y de hijos. Observó, que, si los padres son altos, los hijos general-
mente también lo son, y si los padres son bajos los hijos son también de
menor altura. Pero pasaba un hecho curioso: cuando el padre es muy
alto o bajo, aparece una apreciable regresión hacia la estatura media de
la población, por lo que sus hijos "retroceden" hacia la media de sus
padres. Galton pudo describir el fenómeno de la regresión hacia la me-
dia en sus experimentos sobre el tamaño de las semillas de generaciones
sucesivas de guisantes y los publicó en el artículo "Regression Towards
Mediocrity in Hereditary Stature" (Galton, 1886). Galton en su artículo
"Kinship and Correlation" (1890), describe cómo este llego a descubrir
el concepto de correlación.
‒ ‒
En la década de 1870 y 1880, Galton fue el pionero en el uso de la
distribución normal para adaptarse a los histogramas de los datos tabu-
lados. Inventó el Quincunx o "máquina frijol", un dispositivo concebido
como una herramienta para demostrar la ley de error y la distribución
normal que hoy en día se llama "Caja de Galton". También descubrió
las propiedades de la distribución normal bivariada y su relación con el
análisis de regresión. Según cuentan los libros de historia William Sealy
Gosset ( "Student") (1976/37) trabajó durante un tiempo en el laborato-
rio Galton, tras contactar con Pearson, y así pudo investigar sobre la
correlación estadística en 1906 para posteriormente desarrollar su fa-
moso 't-test' dos años después en 1908.
Los experimentos se realizan en todos los campos del conocimiento con
la intención de descubrir algo sobre un proceso o sistema en particular.
El diseño de experimentos se define como un conjunto de técnicas ac-
tivas que manipulan el proceso experimental para inducirlo a propor-
cionar la información que se requiere para mejorarlo. El diseño de ex-
perimentos es la forma más eficaz de hacer pruebas en procesos y con-
siste en determinar las pruebas pertinentes y el método para realizarlas,
para obtener datos que al analizar estadísticamente produzcan conclu-
siones. Así el diseño de experimentos es la aplicación del método cien-
tífico para generar conocimiento sobre un sistema o un proceso, por
ejemplo de una determinada reacción bioquímica o de la acción de un
nuevo fármaco frente a un placebo.
Este año, 2020 se celebra el 200 aniversario del nacimiento de Florence
Nigthingale (Selanders, 2020), fundadora de la enfermería moderna y
pionera de la estadística, creadora del diagrama del área polar. Fue una
innovadora en la recolección, tabulación, interpretación y presentación
gráfica de las estadísticas descriptivas. Junto a Galton impulsó el pro-
yecto de creación de una nueva cátedra de Estadística en Oxford.
Ronald Fisher fue la persona que creó los métodos estadísticos en el
diseño de experimentos. Durante algunos años estuvo a cargo de la es-
tadística y del análisis de datos en la estación agrícola experimental
Rothamsted en Londres (Figura 1). Allí Fisher desarrolló y usó por pri-
mera vez el análisis de la varianza (ANOVA) como herramienta prima-
ria para el análisis estadístico en el diseño experimental. Muchas de las
‒ ‒
primeras aplicaciones de los métodos del diseño experimental se dieron
en la agricultura y las ciencias biológicas. Sin embargo, las primeras
aplicaciones industriales del diseño experimental se hicieron en la dé-
cada de 1930. En el diseño experimental se plantea un conjunto de prue-
bas experimentales de modo que los datos generados puedan ser anali-
zados estadísticamente para obtener conclusiones válidas y objetivas.
FIGURA 1: Experimentos en campos de cultivo como los realizados por Ronald Fisher a
principios del S.XX en la estación agrícola experimental Rothamsted en Londres
Fuente: Internet
‒ ‒
general "Studies in Crop Variation". En 1930 publicó "The Genetical
Theory of Natural Selection" donde aplicó estadísticas a la evolución,
una teoría muy innovadora en aquel tiempo. Durante los siguientes siete
años, fue pionero en los principios del diseño de experimentos y desa-
rrolló estudios del análisis de varianza (ANOVA) como método general
para el análisis de los experimentos. Prosiguió sus estudios de las esta-
dísticas de pequeñas muestras. Quizás aún más importante, comenzó su
enfoque sistemático del análisis de datos reales como trampolín para el
desarrollo de nuevos métodos estadísticos. Desarrolló también algunos
algoritmos computacionales para analizar los datos de sus diseños ex-
perimentales balanceados.
El libro "Statistical Methods for Research Workers", publicado en
1925, se convirtió en el trabajo de referencia estándar para los científi-
cos en muchas disciplinas. En 1935, este libro fue seguido por "The
Design of Experiments", que también fue ampliamente utilizado.
Además del ANOVA, Fisher nombró y promovió el método de estima-
ción de la máxima verosimilitud. Fisher también creó los conceptos de
suficiencia, el discriminador lineal de Fisher y la información de Fisher,
tan importantes en la estadística moderna. Su artículo "On a distribution
yielding the error functions of several well known statistics" (1924), se
presentó la prueba de chi cuadrado de Pearson y la t de William Gosset
en el mismo marco que la distribución gaussiana, y su propio parámetro
al análisis de varianza, más comúnmente utilizado décadas más tarde
en la forma de la distribución F. El nivel de significación del 5% parece
haber sido introducido por Fisher en 1925. Fisher indicó que las des-
viaciones que exceden el doble de la desviación estándar se consideran
significativas, antes de que las desviaciones superiores a tres veces el
error probable se considerasen significativas. Para una distribución si-
métrica, el error probable es la mitad del intervalo intercuartílico. Para
una distribución normal, el error probable es aproximadamente 2/3 de
la desviación estándar.
Después de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) los métodos del
diseño de experimentos se introdujeron en las industrias químicas y de
transformación en Europa y Estados Unidos, con considerable éxito.
‒ ‒
Tabla 1: División general de las diversas áreas de la Estadística
Descriptive statistics
Statistical visualization
Probability distributions
Hypothesis tests
Linear models
Non linear models
Multivariate statistics
Statistical process control
Design of experiments
Fuente: www.analyticsvidhya.com
‒ ‒
permitan a las maquinas reproducir o emular las funciones cognitivas
del ser humano con la finalidad de que estas ejecuten tareas e interac-
túen con las personas. Una de sus ramas se considera el aprendizaje
automático.
Así, el ML es un desarrollo muy reciente y se considera una rama de la
IA (AI n inglés), éste surgió en la década de 1990 gracias a los avances
como la digitalización y la computación de datos científicos y la habi-
lidad de los computadores en construir modelos que pueden aprender
por sí mismos, algunos de los métodos que utiliza son:
‒ Árboles de decisiones
‒ Reglas de asociación
‒ Algoritmos genéticos
‒ Algoritmos de agrupamiento
‒ Redes bayesianas
‒ ‒
El desarrollo de todas estas especialidades que se solapan está llevando
al uso del término "Data Science" que reúne a todas o a gran parte de
estas especialidades, no sólo para su uso con grandes volúmenes de da-
tos sino para problemas con pocos datos, como sería el caso de los mé-
todos bayesianos.
Como síntesis a este apartado podemos afirmar que eran los estadísticos
quienes hacen sólo unos pocos años desarrollaban su tarea principal-
mente para ayudar a las personas a tratar matemáticamente los proble-
mas de los datos pre-ordenador, como probar el impacto de los fertili-
zantes en la agricultura, o averiguar la precisión de una estimación a
partir de una pequeña muestra. Actualmente no son sólo ellos los que
hacen estas tareas, sino que trabajan en grupos multidisciplinares con
informáticos, matemáticos, físicos, científicos de datos formando un
“Data Science team”. Los problemas no han cambiado, si su volumen
y complejidad, ha cambiado la manera de abordar las soluciones a los
mismos con un nuevo aliado: la IA. El "Data Science" remarca los pro-
blemas de los datos del siglo XXI, como el acceso a la información de
grandes bases de datos, el "Big Data", la escritura de código para ma-
nipular los datos y la visualización de datos.
‒ ‒
obtener conocimiento y llegar más rápidamente al mercado, así la IA
en el mercado de las ciencias de la vida se valoró en 902,1 millones de
USD y se espera que crezca a una tasa compuesta anual de más del
21,1% durante el período de pronóstico (2019-2024).
Las tecnologías digitales como la computación en la nube, la plataforma
como servicio, las aplicaciones diseñadas específicamente, la plata-
forma móvil y la inteligencia artificial están ayudando a modernizar las
empresas de ciencias de la vida para impulsar resultados comerciales
de alto impacto a un costo menor.
Un tipo más sofisticado de IA es el aprendizaje automático (ML), que
utiliza algoritmos para aprender y hacer predicciones sobre los datos.
ML se superpone con estadísticas computacionales, análisis del len-
guaje humano y minería de datos. Otro aspecto del aprendizaje automá-
tico y el aprendizaje profundo es el reconocimiento de patrones, que se
centra en el reconocimiento de patrones de datos; Facebook usa esta
capacidad. En la actualidad, las empresas de ciencias biológicas utilizan
todos estos tipos de análisis avanzados. Estos métodos tan avanzados
presentan una valiosa oportunidad para que las empresas de ciencias de
la vida transformen profundamente sus negocios en todos los niveles de
la organización: personas, procesos y tecnología. Para hacer uso de es-
tos métodos analíticos avanzados, es fundamental que su proceso de
generación de datos y la calidad de los datos sea confiable y compatible.
Desde la molécula hasta el mercado, el ecosistema CVICSA tiene un
flujo de valor de servicios de I + D, médico, fabricación, cadena de
suministro, ventas y marketing que depende, no solo de las funciones
de soporte global y las tecnologías de la información compatibles, sino
también de los métodos analíticos avanzados. Vemos la rápida adop-
ción de análisis avanzados en cada uno de los servicios de la cadena de
valor. AI / ML se utiliza para permitir el cumplimiento de las leyes, la
seguridad y los riesgos, la salud y la seguridad ambientales; las funcio-
nes globales incluyen comunicaciones, recursos humanos, finanzas, ad-
quisiciones. Una de las industrias ligadas a las Ciencias de la vida y la
medicina más dinámicas y fuertes es la industria farmacéutica, tan ne-
cesaria y vital en una moderna sociedad.
‒ ‒
La industria farmacéutica continúa experimentando desafíos para man-
tener los programas de desarrollo de medicamentos debido al aumento
de los gastos de I + D y la reducción de la eficiencia. La inteligencia
artificial, el aprendizaje automático y el procesamiento del lenguaje na-
tural están ahorrando a los científicos una enorme cantidad de tiempo
en sus esfuerzos de investigación al alimentar datos de fuentes como
artículos de investigación, patentes, ensayos clínicos y registros de pa-
cientes en un sistema basado en la nube para servir conocimientos de
datos relevantes a través de la visualización.
La inteligencia artificial y el aprendizaje profundo se han vuelto más
precisos para identificar enfermedades a partir de imágenes médicas en
comparación con las de los profesionales de la salud y se han convertido
en una fuente más viable de información de diagnóstico. A medida que
crece este uso del aprendizaje profundo, es posible que se convierta en
una forma más eficiente de diagnosticar enfermedades.
Otro ejemplo reciente de un diagnóstico de IA es “IDx-DR, un disposi-
tivo que es capaz de diagnosticar la retinopatía diabética sin interven-
ción humana. El sistema es la primera inteligencia artificial (IA) autó-
noma aprobada por la FDA, que utiliza su software para analizar imá-
genes de una cámara retiniana en busca de evidencia de lesiones”. Los
diagnósticos impulsados por IA están pasando rápidamente de identifi-
car el glaucoma y la degeneración macular a explorar cómo detectar
infecciones de oído, enfermedad de Alzheimer, etc.
El ingrediente clave para el éxito de las aplicaciones respaldadas por IA
es el consenso entre expertos y científicos sobre la definición de la en-
fermedad y la información precisa para construir y validar el algoritmo
de IA.
‒ ‒
(universitarios y otros) confinados y con una rápida adaptación a la edu-
cación “on-line” o semipresencial. El estudio pone de manifiesto las
debilidades del sistema educativo español en cuanto al aprendizaje de
las matemáticas frente al de otros países de la OCDE y también indica,
al respecto del “Data Science”: “En la era de los algoritmos de apren-
dizaje automático, el futuro de la inteligencia es humano. Deberíamos
aprender a usar los últimos dispositivos, pero las escuelas y los sistemas
educativos están formados por personas. Necesitamos reclutar a los me-
jores maestros, entrenarlos bien y darles la libertad de mejorar”.
Respecto a la docencia universitaria en el ámbito CVICSA, el futuro va
encaminado hacia los siguientes aspectos:
‒ Se prioriza y acelera la transformación digital es este y en
otros ámbitos de la ciencia y la medicina
‒ ‒
‒ Una propuesta de modernización sería cambiar la perspectiva
de las asignaturas actuales por un esquema adaptado de asig-
naturas obligatorias/optativas (Tabla-2)
‒ Formar al personal docente en las técnicas necesarias para
abordar el cambio de paradigma, contratar a personal especia-
lizado para prácticas específicas Es fundamental incentivar la
formación continuada del profesorado, con programas que se
incorporen de manera obligatoria a sus tareas, y que sustituyan
al modelo actual (Urbano et al, 2020).
‒ Consensuar los cambios con los estudiantes, a través de cues-
tionarios y reuniones abiertas
‒ Estudiar y adaptar los programas de otras universidades a fin
de obtener experiencias parecidas en cuanto a la adaptación.
‒ Creación de materiales docentes adaptados a cada uno de los
grados impartidos.
‒ Utilizar la filosofía de “Public money: public code” para im-
partir las sesiones prácticas, uso de software de tipo “Open
source” como el uso de los lenguajes de programación R y
Python, otros como Winbugs, así como fomentar el uso de sis-
temas operativos “Open source” como Linux. Esto repercutirá
el aumentar los recursos disponibles en la universidad al no
pagar licencias por el uso de software propietario tal como
Statgraphics, SPSS, SAS o sistemas operativos como Win-
dows.
‒ Crear Massive Online Open Courses (MOOC) semipresencia-
les, exámenes automatizados, exámenes prácticos y material
docente publicado on-line
‒ Colaborar a nivel inter-Facultad para unificar asignaturas y re-
cursos en el ámbito CVICSA, asignaturas inter-grado.
‒ ‒
Tabla 1: Propuesta de mejora y ampliación de las asignaturas en los grados universitarios
de Ciencias de la Vida y de la Salud para adaptarlo al paradigma del “Data Science”
Se propone cambio/am-
Asignatura actual Comentarios sobre la asignatura
pliación a:
Contenido de la asignatura: Algebra, cálculo
y probabilidad/combinatoria. Énfasis en co-
nocimientos teóricos y prácticos que permi-
Matemáticas Métodos Matemáticos I tan fundamentar los métodos que se pre-
(1r curso de grado), (1r curso de grado), 1r senten futuramente.
1r semestre semestre Prácticas: Métodos numéricos en cálculo y
al álgebra, cálculo de probabilidad (ejemplo
de cadena de Markov, cálculo combinatorio,
cálculos de probabilidad).
Contenido de la asignatura: Algebra lineal
numérica, espacios vectoriales, cálculo con
Métodos Matemáticos I I múltiples variables e investigación opera-
(1r curso de grado), 2º tiva, métodos numéricos, métodos compu-
semestre tacionales, combinatoria, probabilidad II,
ecuaciones diferenciales. Prácticas: relacio-
nadas con el temario de la asignatura
Contenido de la asignatura: modelos de pro-
Métodos estadísticos I
Estadística (1r curso babilidad, manejo de datos, estadística des-
(2º curso de grado), 1r
de grado) criptiva y exploratoria, muestreo, inferencia
semestre
estadística.
Contenido de la asignatura: modelos de pro-
babilidad avanzados, lenguaje de programa-
Métodos estadísticos II
Estadística (1r curso ción R y Python, inferencia estadística II,
(2º/3r curso de grado),
de grado) métodos computacionales, métodos baye-
1r/2º semestre
sianos (MCMC), modelos lineares (ANOVA,
regresión).
Contenido de la asignatura: lenguaje de pro-
Modelización y métodos
gramación R y Python, ecuaciones diferen-
computacionales
Antigua asignatura de ciales, simulación estadística, modelización
(2º/3r curso de grado),
modelos biológicos de sistemas biológicos complejos, grafos y
1r/2º semestre - opcio-
redes bayesianas, simulación de eventos
nal
discretos, bases de datos y geoestadística.
Contenido de la asignatura: Diseño y planifi-
cación de estudios y experimentos, modelos
lineares avanzados (ANOVA, Regresión,
Análisis de datos / Di-
ANCOVA), manejo de datos y bases de da-
seño de experimen- Análisis y Ciencia de los
tos, métodos basados en aprendizaje auto-
tos (4º curso de Datos (Data Science)
mático (“Machine learning”): métodos super-
grado)
visados y no supervisados; métodos baye-
sianos, análisis de grafos/redes, programa-
ción avanzada con R y Python.
‒ ‒
3. MATERIAL Y MÉTODOS
‒ ‒
FIGURA 3: Gráfico circular con el porcentaje de participantes en la encuesta destinada a
conocer la mejora de las asignaturas como matemáticas y estadística, así como a la posi-
bilidad de la implantación de planes docentes de “Data Science” entre los grados relacio-
nados con el CVICSA.
‒ ‒
TABLA 3: Respuestas donde se indica la posibilidad de la implantación de planes docentes
de “Data Science” entre los grados relacionados con el CVICSA. Se indica la cantidad y
porcentaje de Sí, No, otras y ND (no hay disponibles datos). Bajo la respuesta positiva se
indican algunos comentarios extraídos de las respuestas como texto libre.
PREGUNTA NO SI OTRAS ND
¿Cree que para modernizar las asignatu-
ras indicadas deberían enseñarse temas
relacionados con la Inteligencia Artificial 23% (10) 69.8% (30) 7% (3) 0%
(machine learning, deep learning, statisti-
cal leaning)?
¿Cree que para modernizar las asignatu-
ras indicadas deberían enseñarse temas
23% (10) 67.4% (29) 5%
relacionados con la programación (por 5% (2)
(2)
ejemplo enseñar a programar en un len-
guaje como Python, R o C)?
¿Cree que para modernizar las asignatu-
21% (9) 60.5% (26) 12% 7%
ras indicadas deberían enseñarse temas
(5) (3)
relacionados con los métodos bayesianos?
¿Cree que para modernizar las asignatu-
ras indicadas debería enseñarse más mé- 26% (11) 58.1% (25) 7%
9% (4)
todos numéricos y menos explicaciones (3)
teóricas?
¿Cree que para mejorar el nivel de los gra-
67% (29)
dos indicados debería haber más asigna- 30.2% (13) 2% (1) 0%
turas/horas de matemáticas?
¿Cree que para mejorar el nivel de los gra-
42% (18)
dos indicados debería haber más asigna- 55.5% (24) 2% (1) 0%
turas/horas de estadística?
¿Cree que para mejorar el nivel de los gra-
dos indicados debería haber más asigna-
28% (12) 62.8 (27) 2%
turas/horas de programación/compu- 2% (3)
(1)
tación?
‒ ‒
En la tabla 3 se recogen los principales resultados de la encuesta. La
mayoría de los participantes son favorables al cambio de paradigma ha-
cia la docencia orientada al “Data Science” que se propone con casi un
70% de respuestas afirmativas para la cuestión “¿Cree que para moder-
nizar las asignaturas indicadas deberían enseñarse temas relacionados
con la Inteligencia Artificial (machine learning, deep learning, statisti-
cal leaning)?”. Son especialmente elevados los porcentajes en las pre-
guntas relacionadas con las Asignaturas de análisis de Datos y Diseño
de Experimentos con más de un 74% y 77% indicando que es necesario
más asignaturas/horas, lo que también justificaría dirigir los esfuerzos
a reforzar estas asignaturas con temas relativos a “Machine Learning”,
métodos bayesianos, programación, modelización etc.
Por el contrario, y respecto a la asignatura de Matemáticas de primer
curso, los encuestados solo indicaron en un 30% afirmativamente a
“¿Cree que para mejorar el nivel de los grados indicados debería haber
más asignaturas/horas de matemáticas?” Al contrario que cuando fue-
ron preguntados por otra asignatura habitual como es la Estadística/Bio-
estadística que contestó afirmativamente un 56%.
Un 63% de los encuestados contestaron afirmativamente a la pregunta
“¿Cree que para mejorar el nivel de los grados indicados deberían haber
más asignaturas/horas de programación/computación?”, lo que señala
también su importancia para la formación de estos profesionales y fi-
nalmente a la pregunta “¿Cree que para mejorar el nivel de los grados
indicados debería haber más asignaturas/horas de modelos/modeliza-
ción?”, un 56% contestaron afirmativamente.
‒ ‒
5.CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
5.1. CONCLUSIONES
5.2. RECOMENDACIONES
‒ ‒
las mismas para poder a tener éxito en este cometido e ir en
paralelo al actual flujo en este ámbito del conocimiento.
6. REFERENCIAS
‒ ‒
Monleon-Getino, A; Canela-Soler, J. (2017). Causality in Medicine and Its
Relationship with the Role of Statistics. Biomedical Statistics and
Informatics 2 (2), 61-68
Monleón-Getino, T; Casado, CR. (2017). Probabilitat i estadística per a ciències
II. Edicions Universitat Barcelona
Monleón-Getino, T. (2005). Optimización de los ensayos clínicos de fármacos
mediante simulación de eventos discretos, su modelización, validación,
verificación y la mejora de la calidad de sus datos. Universitat de
Barcelona
Monleón-Getino, T; Vegas, E., Reverter, F. (2017). Big Data. Hacia la cuarta
revolución industrial. Edicions Universitat Barcelona
Mordor intelligence. (2020). Artificial Intelligence In Life Sciences Market -
Growth, Trends, Forecasts (2020 - 2025). The Artificial Intelligence in
Life Sciences Market is segmented by Application (Drug Discovery,
Medical Diagnosis, Biotechnology, Patient Monitoring), and Geography.
[Ver en: https://www.mordorintelligence.com/industry-reports/artificial-
intelligence-in-life-sciences-market ]
Selanders, L. (2020). Florence Nightingale. Encyclopedia Britannica Online:
Academic Edition. [Ver en
http://www.britannica.com/EBchecked/topic/415020/Florence-
Nightingale ]
Stanton, JM. (2001). Galton, Pearson, and the Peas: A Brief History of Linear
Regression for Statistics Instructors. Journal of Statistics Education 9(3).
(Ver en http://www.amstat.org/publications/JSE/v9n3/stanton.html )
Stigler, SM. (1989). Francis Galton's Account of the Invention of Correlation.
Statistical Science 4 (2), 73-79.
University of Southampton. 2020. White papers: Machine learning and the Life
Sciences. (Ver en https://www.southampton.ac.uk/life-
sciences/data/machine-learning/index.page ]
USDM Life Sciences Accelerated. (2020). Transformation and Innovation in
Compliance and Technology. (Ver en
https://www.usdm.com/Insights/White-Papers/Life-Sciences-Trends-for-
2020 ]
Wikipedia. (2020). Ciencia de los Datos. [Ver en:
https://es.wikipedia.org/wiki/Ciencia_de_datos ]
Urbanos, R; Ortún, V; González López-Valcárcel, B. (2020). La larga marcha
hacia ninguna parte: los efectos de las hambrunas y de los déficits
educativos tardan en notarse, pero la educación en España necesita
atención urgente. Economía y Salud AES. [Ver:
http://www.aes.es/blog/2020/09/21/la-larga-marcha-hacia-ninguna-parte-
‒ ‒
los-efectos-de-las-hambrunas-y-de-los-deficits-educativos-tardan-en-
notarse-pero-la-educacion-en-espana-necesita-atencion-urgente/ ]
7. LISTA DE ACRÓNIMOS
‒ IA = Inteligencia Artificial
‒ ML = Machine Learning
‒ ‒
CAPÍTULO 17
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
interpretación. Se puede hablar desde una concepción más positivista,
entendiéndose, por tanto, como un proceso de medida cuantitativo que,
autores como Riecken y Boruch (1974), Hoyos (citado en Mejía, 2012)
o García Ramos (1989), defienden. O desde una interpretación más na-
turalista, donde se entiende esta como un proceso de estimación y no
de medida, en el que se tiende a obtener una valoración claramente cua-
litativa. Este es un enfoque sobre el que autores como Filstead (1986),
Beltrán (1991) o Casanova (1995) se postulan como grandes defenso-
res. Sin discriminar ninguna de las dos perspectivas, para que una eva-
luación sea meramente competencial, deben concurrir características de
ambas interpretaciones y no solo las derivadas de una de ellas, donde el
término tradicional encaja quizá en su uso, sobre todo en percepciones
más positivistas.
En esta misma línea, y si tomamos como referencia la normativa vi-
gente, la evaluación, al menos en etapas educativas como secundaria o
bachillerato, se define como continua y formativa. El primer término
no debe confundirse con “continua evaluación”. Como afirman Castillo
y Cabrerizo (2010), no se trata tanto de evaluar mucho, sino constante-
mente. No implica un uso indiscriminado de exámenes y controles, sino
ampliar la variabilidad en métodos e instrumentos. A su vez, la parte
formativa de la misma supone evaluar no solo al alumnado sino al do-
cente, al contexto y el proceso por igual (Santos, 2000), lo que necesa-
riamente conlleva una justificación y programación.
‒ ‒
TABLA 1. Comparativa de la evaluación competencial vs tradicional
‒ ‒
uno de los métodos más idóneos en cuanto a conseguir las finalidades
que la metodología persigue. No obstante, el uso de esta implica llevar
a cabo un cambio de paradigma que, en palabras de Trigueros-Cervan-
tes et al. (2012), significa:
‒ Las decisiones pasan de manos del docente a las del estu-
diante, no se habla de conocer pequeños matices de qué opina
el estudiante sin ningún valor calificativo sino otorgar direc-
tamente el testigo
‒ ‒
I.4. JUSTIFICACIÓN DE LA INTERVENCIÓN
2. OBJETIVOS
‒ ‒
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
por los docentes, que hagan diferenciar de lo que no es un ABP. Entre
estas últimas, se destaca que, un ABP no es:
‒ Tratar temas extracurriculares sino centrales del currículo
(Thomas, 2000)
Por otro lado, tal y como defienden Mioduser y Betser (2007), los alum-
nos que aprenden a trabajar con ABP, desarrollan mayores habilidades
de aprendizaje autónomo, así como recordar lo aprendido, en un pe-
riodo más largo, lo cual implica de manera directa a la Autorregulación
del aprendizaje. Apoyándonos en lo que afirma Álvarez-Valdivia
(2009), se puede decir, entonces, que trabajar con el desarrollo de la
autonomía desde una perspectiva autorregulada, puede favorecerse ha-
ciendo uso de procesos de evaluación, que fomenten la capacidad de
autocrítica además de trabajar de manera disciplinar los contenidos es-
pecíficos.
Dentro de las mejoras que el ABP supone, Martínez et al. (2007) o To-
ledo y Sánchez (2018) entre otros, defienden que los alumnos que tra-
bajan por proyectos, mejoran su capacidad para trabajar en equipo, su
motivación y esfuerzo, así como, mejoran la relación entre compañeros.
El ABP enfocado a un trabajo necesariamente grupal, implica por otro
lado el uso de una metodología cooperativa con los beneficios que de
ella se derivan por sí misma y que se registran en los estudios de John-
son et al. (1999). Entre estos se pueden destacar:
‒ ‒
‒ Mejora del rendimiento y la productividad, lo que mejora la
retención a largo plazo de lo aprendido
3.3. PROCEDIMIENTO
‒ ‒
FIGURA 1. Estructura de los departamentos y funciones jerarquizadas.
Fase de eva-
Departamento Funciones Carácter
luación
Elaboración del texto de cada unidad
Elaboración de los elementos curriculares de cada una Individua y
Producción
Elaboración de documentos, textos, ejercicios adicio- grupal
nales Autoevaluación
Elaboración de esquemas, mapas conceptuales, imá-
Imagen y gráfi- Individual
genes, etc.
cos y grupal
Corrección ortográfica y gramatical del texto
Ensamblaje e integración de todos los contenidos en
cada unidad
Resolución de dudas de Producción e Imagen y gráfi-
Edición cos Grupal Coevaluación
Revisión de la bibliografía, formato y fuentes consulta-
das
Contacto directo con Dirección
Aprobar o no la unidad de didáctica recibida
Atender las quejas y sugerencias recibidas por el con-
Dirección Grupal Coevaluaión
sumidor
Contacto directo con Dirección y atender sus dudas
Disconformidades con el proyecto, quejas y sugeren- Heteroevalua-
Consumidor -
cias a Dirección ción
‒ ‒
Tal y como se muestran tanto en la tabla 2 como en la figura 1, se apre-
cian cuatro momentos claves de evaluación, contemplándose que el ci-
clo se repite dos veces. Es decir, la elaboración de la unidad que ascen-
derá a través de la cadena hasta el consumidor, el cual dictará mejoras
y retroalimentación que se irán contemplando desde los departamentos
superiores hasta los inferiores completando un segundo ciclo donde se
dará lugar a la unidad definitiva. En este proceso, se evaluará utilizando
como instrumentos la lista de cotejo y el informe:
‒ Autoevaluación: lo realizarán los grupos del departamento de
Producción e Imagen y gráficos. Consistirá en una lista de co-
tejo donde valorarán diferentes aspectos relacionados con los
criterios de evaluación previamente establecidos acordes con
los objetivos a conseguir con la práctica docente. Se hará de
manera individual
Con el fin de que todos los grupos estén representando al menos una
vez cada departamento, se determinó la confección de 4 unidades di-
dácticas en grupos de 3-4 alumnos rotatorios en base a cada unidad. Los
contenidos de las unidades establecidas fueron acordes a la Guía Do-
cente de la asignatura y se establecieron en base a conocimientos de
‒ ‒
ciencias a nivel de ESO y Bachillerato, estructurados en: Medio Am-
biente, Seres Vivos, Salud e Higiene y Energía y Sostenibilidad. La dis-
tribución de los departamentos y los grupos en cada una de las unidades
se hizo de manera aleatoria, creándose éstos bajo criterios de afinidad
entre los participantes. Cada departamento en cada unidad estuvo com-
puesto por más de un grupo con el fin de albergar a todo el alumnado
que entre ellos pudieran coordinarse y trabajar de manera cooperativa.
En la rotación, se tuvo en cuenta que ningún grupo repitiese alguno de
los roles para cada una de las cuatro unidades a desarrollar.
3.4.2. Temporalización
‒ ‒
del departamento de Producción e Imagen y Gráficos (autoevaluación),
contará un 20% de la calificación de la unidad. Esta calificación es
única y personal y se justificó mediante una observación final en cada
lista según los criterios establecidos. En cualquiera de los casos, la nota
final otorgada por el docente en base a la elaboración final del producto
(unidades didácticas) se estableció en un 20% de la calificación final
del alumno siempre y cuando el docente (cliente) dé el Apto al libro
editado como resultado final.
Todos estos niveles evaluativos se hicieron, como se dice, en base a los
criterios de evaluación siguientes que se establecieron por consenso (ta-
bla 3):
‒ ‒
Asimismo, la lista de cotejo de autoevaluación presentó la siguiente es-
tructura (tabla 4):
SÍ
NO
Nivel Criterio 1
0,25 PUNTOS
PUNTO
Creo que he colaborado en todo lo que he po-
dido
He sido meticuloso en el trabajo que se me ha
otorgado
ACTITUDINAL
4. RESULTADOS
‒ ‒
(unidades que conforman el libro de texto), se llevó a cabo también a
través del mismo recurso, analizándose la bondad de este mediante una
rúbrica de evaluación (heteroevaluativa) por parte del docente. En
cuanto al registro y el informe final elaborado por el docente, se lleva-
ron a cabo durante la intervención y al final de esta respectivamente,
una vez conocidos los resultados de los test, el registro y el producto
final presentado. Para este último, los datos siguen aún contrastándose
con los informes de coevaluación.
‒ ‒
proveniente de especialidades de letras y una cierta hostilidad
inicial hacia la asignatura, el alumnado manifestó de manera
expresa tratarse de: una actividad compleja con alta dedica-
ción y tiempo, teniendo en cuenta la alta carga académica en
base a otras asignaturas del grado que aseveraban tener, ade-
más de ser una actividad que favorecía la rivalidad y el em-
peoramiento de las relaciones entre los integrantes del grupo-
clase, en especial, en el acto de coevaluar
5 DISCUSIÓN
‒ ‒
Asimismo, se llevó a cabo un ejercicio de contraste entre las
calificaciones obtenidas con su propia valoración personal,
para ese caso, mediante la autoevaluación. Además, se les dio
más importancia a los procesos de auto y coevaluación que al
de heteroevaluación, aunque este fuera clave para la aproba-
ción de proyecto. Ello se consigue en base a los porcentajes
otorgados a cada uno de los procesos en la calificación de la
actividad
6 CONCLUSIONES
‒ ‒
calificación heteroevaluativa, incentiva la idea de evaluación compe-
tencial frente al término tradicional.
Por otro lado, las limitaciones observadas y propuestas de mejora nos
hacen trabajar en relación a las siguientes líneas:
‒ La eficacia y/o bondad de la intervención debe ser considerada
desde un paradigma contextual específico. Así sería conve-
niente considerar un grado de cohesión grupal adecuado.
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8.REFERENCIAS
‒ ‒
Filstead, W.J. (1986). Métodos cualitativos: Una experiencia necesaria en la in-
vestigación evaluativa. En T.D. Cook y Ch. D. Reichardt (Ed.), Méto-
dos cualitativos y cuantitativos en investigación evaluativa(Capítulo II).
Morata
García-Ramos, J.M. (1989). Bases pedagógicas de la evaluación. Síntesis
Gimeno, M. y Gallego, S. (2007). La autoevaluación de las competencias básicas
del estudiante de Psicología. Revista de Psicodidáctica, 12(1), 7-27
Harrison, K. O’Hara y McNamara, G. (2015). Re-thinking assessment: self- and
peerassessment as drivers of self-direction in learning. Eurasian Journal
of Educational Research, 60, pp. 75-88.
http://dergipark.ulakbim.gov.tr/ejer/article/viewFile/5000149156/500013
5609
Hidalgo-Apunte, E. (2021). Reflexiones acerca de la evaluación formativa en el
aspecto universitario. Revista internacional de pedagogía e innovación
educativa, 1(1), ISSN: 2745-0341
Johnson, D.W., Johnson, R.T., Holubec, E.J. (1999). El aprendizaje cooperativo
en el aula. Paidós
Larmer, J., Ross, D., y Mergendoller, J. R. (2009). PBL Starter Kit. Buck Institute
for Education
Martínez, f., Herrero, L. C., González, J. M., Domínguez, J.A. (2007). Project
based learning experience in industrial electronics and industrial appli-
cations design. Universidad de Valladolid
Mejía, O. (2012). De la evaluación tradicional a una nueva evaluación basado en
competencias. Educare, 16(1), 27-46
Mioduser, D. y Betzer, N. (2007). The contribution of project-based learning to
high achievers' acquisition of technological knowledge. International
Journal of Techonology and Design Education, 18, 59-77
Riecken, H. y Boruch, R.F. (1974). Social Experimentation: A method for
planning and evaluating social intervention. Academic Press
Sánchez, J. (2013). Qué dicen los estudios sobre Aprendizaje Basado en
Proyectos. Actualidad Pedagógica. http://www.estuaria.es/wp-
content/uploads/2016/04/estudios_aprendizaje_basado_en_proyectos1.p
df
Santos, M. A. (2000). Evaluación educativa 1. Un proceso de diálogo, compren-
sión y mejora. Magisterio del Río de la Plata
‒ ‒
Schunk, D.H. y Zimmerman, B.J. (1998). Self-regulated learning: From teach-ing
to selfreflxive practice. Guilford
Thomas, J. W. (2000). A review of research on project-based learning. Autodesk
Foundation.
Toledo, P. ySánchez, J.M. (2018). Aprendizaje Basado en Proyectos: una
experiencia universitaria. Revista de currículum y formación del
profesorado, 22(2), 471-491.
https://idus.us.es/bitstream/handle/11441/86870/aprendizaje%20basado
%20en%20proyectos.%20Una%20experiencia%20universitaria.pdf?seq
uence=1&isAllowed=y
Trigueros-Cervantes, C., Rivera-García, E. y De la Torre-Navarro, E. (2012). La
evaluación en el aula universitaria: del examen tradicional a la
autoevaluación. Revista Internacional de Medicina y Ciencias de la
Actividad Física y el Deporte, 12(47), 473-491
‒ ‒
CAPÍTULO 18
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
hombres y mujeres como pilar de la democracia” (LOMLOE, 2020,
p.8). Sin embargo, a nivel educativo, entendemos que no queda clarifi-
cada su relación dentro del currículo, pero sí se marca la importancia
de educar en emociones y que, para los maestros en formación, debería
ser un punto a tener en cuenta en su instrucción de cara a un futuro
profesional. Tomando como premisas las concepciones de Salovey y
Mayer (1990), rescatando la terminología de Bisquerra (2007), así
como las consideraciones de Goleman (1998) en la que la inteligencia
emocional es considerada desde una perspectiva no rígida (por tanto,
educable), identificaremos el término competencia emocional como al
“conjunto de conocimientos, capacidades, habilidades y actitudes nece-
sarias para tomar conciencia, comprender, expresar y regular de forma
apropiada los fenómenos emocionales” (Bisquerra, 2007, p.63). De esta
manera, dentro de su modelo pentagonal, Bisquerra (2007) aboga por
el desarrollo de cinco competencias esenciales: conciencia, regulación
y autonomía emocional, así como la competencia social y para la vida
y el bienestar. Estas competencias, en tal caso, podrían asociarse en su
constructo, con aquellas sí marcadas por la norma como son la compe-
tencia social y cívica y la competencia de aprender a aprender. Aunque,
el desarrollo emocional, no solo se restringe al buen hacer de estas úl-
timas, sino que repercute de manera directa en todas y cada una de las
siete competencias clave adicionales debido a los beneficios que aca-
rrea un considerable desarrollo competencial.
‒ ‒
1.2.2. Beneficios a nivel docente
‒ ‒
no dispone de una serie de recursos e instrumentos que le permitan en-
señar o poner en práctica en el proceso de enseñanza-aprendizaje. En
esta línea y desde una visión general, puede considerarse como afirman
Mellado, Ruiz y Blanco (1997), que existe cierta inseguridad a la hora
de enseñar ciencias entre el profesorado, muchos docentes se conside-
ran poco preparados o con insuficientes conocimientos científicos para
dirigir el proceso de enseñanza-aprendizaje. Esto, según Dávila et al.
(2015), puede acarrear un conjunto de actitudes negativas ante la ense-
ñanza de este tipo de materias y, por ende, fomentar un conjunto de
creencias y expectativas acerca de las ciencias que, en definitiva, aleja
al alumno presentándose como poco atractivas. Por tanto, enseñar cien-
cias, así como aprenderlas, se encuentra fuertemente condicionada
desde una imagen preconcebida. Resulta interesante considerar el con-
texto educativo en el que se encuentra la docencia de esta rama en las
diferentes etapas educativas, lo que condicionará en cierta medida, el
perfil emocional característico del docente.
Mateos-Núñez et al. (2019), entre otros, matiza una serie de caracterís-
ticas contextuales que pueden resumirse en las siguientes:
− Normalmente, en especial los maestros de secundaria conside-
ran la docencia una salida de segunda elección, lo que implica
una baja motivación y, en ciertos casos aptitud, en cuanto a la
misma
− Los programas de formación de profesorado no están enfocados
a una formación que aporte al docente conocimientos útiles que
le hagan cambiar su práctica docente, lo que se traduce en una
ineficacia ya que el docente no cambiará su percepción personal
a no ser que se le aporten verdaderas estrategias útiles
− Las expectativas sobre los alumnos, así como la confianza de
estos en su propia eficacia, son un factor esencial en la acción
docente: motivación del alumnado, buen clima en el aula, efecto
Pigmalión, etc... Para el docente de ciencias, la supuesta com-
plejidad de los contenidos hace que estas consideraciones sean
claves
‒ ‒
− La inseguridad del docente en su formación disciplinar, espe-
cialmente relevante en Educación Primaria, conlleva, como ya
se ha dicho, una imagen, actitudes y sentimientos negativos en
el aula.
− Normalmente, no se potencia por una docencia más centrada en
el trabajo cooperativo sino más individualista, esta tendencia
aumenta conforme aumenta la etapa educativa, con las repercu-
siones que esto acarrea desde un punto de vista de la inteligen-
cia interpersonal
− Estudios demuestran que los docentes en formación presentan
una serie de emociones positivas de su formación en Primaria,
y mayormente negativas en secundaria en cuanto a las especia-
lidades de ciencias. Sin embargo, parece no ser significativa la
etapa de Infantil a nivel emocional en cuanto a la rama de cien-
cias en cuestión
La didáctica de las ciencias experimentales, por tanto, a nivel emocio-
nal, ha descuidado, durante años, el aspecto afectivo y emocional (Me-
llado, 2014), dominando una orientación positivista, es decir, aquello
que puede verse, tocarse, etc., como fuente de conocimiento. Esta ten-
dencia hace que el manejo emocional y el aspecto social queden rele-
vados a un segundo plano, catalogándose como poco científicos debido
a su carácter menos objetivo (Vázquez, 2007). Sin embargo, en palabras
de Shulman en su conferencia en 2012, creador del concepto de “cono-
cimiento didáctico del contenido” (CDC), advierte que el dejar a un
lado la parte afectiva en el CDC ha sido uno de los grandes errores a la
hora de formular el mismo en los contenidos de programas y planes
educativos, algo que se ha venido haciendo desde el principio; por lo
que deberían incorporarse a este (Mellado, 2014).
En definitiva, teniendo en cuenta este marco contextual general, los do-
centes de ciencias, tanto en formación como profesional, se enfrentan
con frecuencia a emociones negativas durante la práctica docente del
tipo miedo (preocupación, nerviosismo), aversión (displicencia, des-
dén) o vergüenza (culpabilidad), remarcando en este sentido como prin-
cipales causas, la inseguridad ante los contenidos, la pérdida de
‒ ‒
motivación a lo largo de la profesión o la idea preconcebida de la rama
en sí, en parte, heredada de su etapa como educando. En este sentido,
la efectividad y continuidad de los programas de intervención y/o for-
mación docente en inteligencia emocional resultan cruciales, así como,
la flexibilidad de los planes educativos que permitan un desarrollo óp-
timo también dentro del CDC.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
en el aprendizaje de la parte más disciplinar de la asignatura de Didác-
tica de las Ciencias Experimentales.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
destinadas para tal efecto, en base a lo vivido en la asignatura. Esas
emociones se ofertaron en el autorregistro en un conjunto de 8 emocio-
nes básicas, según las denominadas por Plutchick (1980), en concreto:
alegría/tristeza, miedo/ira, sorpresa/anticipación y confianza/des-
agrado; a la vez que un conjunto de emociones secundarias, que nor-
malmente derivan de las anteriores y/o pueden relacionarse. De estas
últimas se contemplaron: culpa, bochorno, desprecio, complacencia,
entusiasmo, orgullo, placer, satisfacción y vergüenza. Este autorregis-
tro, por tanto, se puso a disposición del alumnado desde el comienzo de
la intervención y facilitando la recolección de datos de manera personal
y la identificación de las emociones. El formato de este se muestra en
la figura 1.
En esta línea, es conveniente matizar la terminología específica. Así, la
mayoría de los autores coinciden en otorgar una serie de características
fundamentales que distinguen al término de emoción con el de senti-
miento, entre las que destacan: responder de manera directa a un estí-
mulo, hacerlo de forma inmediata o casi instantánea y, normalmente,
suele estar poco condicionada esta respuesta a dicho estímulo. Por otro
lado, sin embargo, esas emociones con el paso del tiempo se traducen
en sentimientos, los cuáles se caracterizan por tener una mayor durabi-
lidad y, generalmente, estar más condicionados al contexto, personali-
dad, nivel cultural, etc., en definitiva, factores personales del individuo.
Por ende, se pretende también que el alumno sea capaz de identificar
esos sentimientos que se han generado en base a las emociones experi-
mentadas al final de cada semana, a elegir entre: serenidad, desinterés,
enfado, angustia y motivación (“me siento sereno”, “desinteresado”,
etc.), sentimientos que se entienden, globalizados, en base al contexto
de la asignatura. Del mismo modo, al alumnado, se le facilitó dentro del
autorregistro, un listado de sentimientos relacionados con los primeros,
con el fin de facilitar e instruir también en su interpretación. Así, y
como se observa en la figura 1, el enfado puede ser debido o ligado, por
ejemplo, a sentimientos de agresividad, irritabilidad o sarcasmo, por lo
que el alumno podrá identificar y relacionar esos sentimientos con el
conjunto de emociones que se han experimentado previamente durante
las sesiones en las que se hizo una recogida de datos.
‒ ‒
Se aprecia, por tanto, que existen un conjunto de emociones menos pla-
centeras que desembocan en sentimientos también poco placenteros y
viceversa. Con ello, como hemos dicho, se pretende que el alumnado
aprenda a reconocer e identificar ambos, pudiendo relacionarlos con su
vida cotidiana, lo que favorece de manera autónoma, la atención y la
claridad emocional.
‒ ‒
3.2. RECURSOS ESPECÍFICOS: AUTORREGISTRO E INFOGRAFÍA
‒ ‒
FIGURA 2. Infografía para orientación del alumnado
‒ ‒
3.3. PROCEDIMIENTO.
‒ ‒
muestran en los gráficos 1 y 2. Para estimar las emociones más frecuen-
tes, se hicieron las medias de los datos recogidos a través de la aplica-
ción Google Forms en cada periodo estimado.
1. Al inicio: 2º semana
4. En el examen final
4. RESULTADOS
‒ ‒
GRÁFICO 1. Evolución de los sentimientos del grupo-clase a lo largo de los puntos de
diagnóstico en la asignatura. Los resultados se muestran de delante a atrás en orden res-
pecto a los cuatro momentos de evaluación y diagnóstico: al comienzo (1º), mediados (2º),
final (3º) y en el examen
50
40
30 1º
20
10 2º
0 3º
Examen
‒ ‒
GRÁFICO 2. Calificaciones medias a lo largo de la asignatura
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
como es el caso de la motivación, a medida que se progresa en la prác-
tica docente. Asimismo, la disminución de sentimientos menos placen-
teros, como es el caso de la angustia y sentimientos relacionados, como
pueden ser preocupación o incertidumbre. Esto puede correlacionar con
un aumento positivo de la instrucción en habilidades como la atención
y claridad emocional según el modelo de Salovey y Mayer (1990).
En cuanto a la regulación y reparación emocional, a través de la info-
grafía, se ha pretendido que el alumnado anticipe y regule las emocio-
nes de cara a las distintas pruebas de diagnóstico, planteando recomen-
daciones específicas en cuanto a situaciones concretas. Sin embargo, no
se ha observado evidencia de que sea eficiente en la última prueba co-
rrespondiente con el examen final, como demuestra el aumento de sen-
timientos poco placenteros. Se entiende, en este caso, que hablamos de
una prueba ligada a una percepción más negativa, ya que el examen
final suele relacionarse con situaciones de mayor estrés y de carácter
definitorio a nivel contextual; percepción, que sigue presente en el
grupo-clase de estudio y no parece haberse podido desarraigar.
El registro a través de la plataforma Google Forms®, ha permitido lle-
var a cabo modificaciones y mejoras en cuanto a la temporalización y
flexibilidad de las tareas. En base a los datos recogidos durante el curso,
se pretende que dichos cambios realizados en la planificación docente
favorezcan en el futuro el aumento de sentimientos placenteros entre
los integrantes del grupo-clase, tales como la motivación.
6.CONCLUSIONES
‒ ‒
debido a un mayor manejo de las emociones, sopesando los diferentes
factores externos de los que también pueda depender, como la práctica
docente en sí misma, el planteamiento de actividades, método de eva-
luación, etc. Sí parece revelador, cómo el aumento de sentimientos me-
nos placenteros en la prueba de diagnóstico final, se establecen como
factores de riesgo en los resultados académicos, como cabría esperar.
En este sentido, se plantean como mejoras, el realizar el estudio en base
al uso de instrumentos específicos que determinen el grado de inteli-
gencia emocional del grupo antes y después de la práctica, así como la
obtención de datos que nos ayuden a entender en qué medida el posible
aumento de la mejora de las competencias correlaciona con un aumento
del grado de alfabetización científica de manera evidente. Por lo que
este estudio preliminar se centra, específicamente, en verificar la utili-
dad/idoneidad de los recursos aportados, así como la metodología pro-
puesta.
7.AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8.REFERENCIAS
‒ ‒
Bisquerra Alzina, R. y Pérez Escoda, N. (2007). Las competencias emocionales.
Educación XXI, 10, 61-82. Recuperado de: http://www.redalyc.org/ar
ticulo.oa?id=70601005
Borrachero, A., Dávila, M., Costillo, E., y Mellado, V. (2017). Las emociones del
futuro profesorado de secundaria de ciencias y matemáticas, tras un
programa de intervención. Ápice: Revista de Educación
Científica, 1(1). https://doi.org/10.17979/arec.2017.1.1.2008
Cabello, R., Ruiz-Aranda, D., Fernández-Berrocal, P. (2010). Docentes emocio-
nalmente inteligentes. REIFOP, 13(1), 41-49.
https://emotional.intelligence.uma.es/documentos/Docentes_emocionalm
ente_inteligen tes_2010.pdf
Colichón, M. E. (2020). Inteligencia emocional y habilidades sociales en la
conducta disruptiva de estudiantes del nivel secundario. Espiral.
Cuadernos del Profesorado, 13(26), 29-40.
http://ojs.ual.es/ojs/index.php/ESPIRAL/article/view/2679/3390
Dávila, M.A., Borrachero, A.B., Mellado, V., Bermejo, M.L. (2015). Las emo-
ciones en alumnos de ESO en el aprendizaje de contenidos de Físi-
ca y Química, según el género. Internacional Journal of Developmental
and Educational Psychology: INFAD. Revista de Psicología, 1(1), 173-
180.
https://www.researchgate.net/publication/283206320_Las_Emociones_e
n_Alumnos_de_ESO_en_el_Aprendizaje_de_Contenidos_de_Fisica_y_
Quimica_segun_el_Genero
Del Rosal, I., Dávila-Acedo, M. A., Sánchez-Herrera, S., Bermejo, M.L. (2016).
La inteligencia emocional en estudiantes universitarios: diferencias en-
tre el grado de maestro de Educación Primaria y los grados en ciencias.
International Journal of Developmental and Educational Psychology,
2(1), 51-61. https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=349851777006
Goleman, D. (1998). La práctica de la inteligencia emocional. Editorial Kairos
Gordillo, M., Ruiz, M., Sánchez, S., y Calzado, Z. (2016). Clima afectivo en el
aula: vínculo emocional maestro-alumno. International Journal of De-
velopmental and Educational Psychology, 1(1), 195-201.
http://dx.doi.org/10.17060/ijodaep.2016.n1.v1.273
Gutiérrez-Ángel, N. (2019). Repercusiones Emocionales de la Violencia Escolar:
Influencia en la Inteligencia Emocional [Emotional Repercussions of
School Violence: Influence on Emotional intelligence]. Acción
Psicológica, 16(1), 143–156. https://doi.org/10.5944/ap.16.1.22555
Kabat-Zinn, J. (2009). Mindfulness en la vida cotidiana: Donde quiera que va-
yas, ahí estás. Barcelona: Paidós
‒ ‒
Marcos-Sánchez, R., Díez-González, M. C. (2019). Las habilidades socio-
emocionales y su influencia en la percepción y el rendimiento académico
en ciencias de la naturaleza. Innovación Educativa en Edificación, 3(1),
56-71. doi: 10.20868/abe.2019.1.3884
Mateos-Núñez, M., Martínez-Borreguero, G., Naranjo-Correa, F., L. (2019).
Comparación de las emociones, actitudes y niveles de autoeficacia ante
áreas STEM entre diferentes etapas educativas. European Journal of
Education and Psychology, 13(1), 251-267. doi:
10.30552/ejep.v13i1.292
Mellado, V., Ruiz, C. y Blanco, L. J. (1997). Aprender a ensenar ciencias
experimentales en la formación inicial de maestros. Bordón, 49(3), 275-
288
Mellado, V., Borrachero, A.B., Brígido, M., Melo, L.V., Dávila, M.A., Cañada,
F., Conde, M.C., Costillo, E., Cubero, J., Esteban, R., Martínez, G.,
Ruiz, C., Sánchez, J., Garritz, A., Mellado, L., Vázquez, B., Jiménez, R.,
Bermejo, M.L. (2014). Las emociones en la enseñanza de las ciencias.
Enseñanza de las Ciencias, 32.3, pp. 11-36.
http://dx.doi.org/10.5565/rev/ensciencias.1478
Plutchik, R. (1980). Emotion: A Psychoevolutionary Synthesis. Harper & Row
Puertas-Molero, P., Zurita-Ortega, F., Chacón-Cuberos, R., Castro-Sánchez, M.,
Ramírez-Granizo, I., González-Valero, G. (2020). La inteligencia
emocional en el ámbito educativo: un meta-análisis. Anales de
psicología, 36(1), 84-91
Rosales, J. G. (2016). Estrés académico y hábitos de estudio en universitarios de
la Carrera de Psicología de un Centro de Formación Superior Privada
de Lima-Sur. [TFG]. Universidad Autónoma del Perú, Lima.
http://repositorio.autonoma.edu.pe/bitstream/AUTONOMA/124/1/ROS
ALES%20FERNANDEZ.pdf
Salovey P, Mayer JD. (1990). Inteligencia emocional. Imaginación, cognición y
personalidad, 9(3): 185-211. doi: 10.2190 / DUGG-P24E-52WK-6CDG
Salovey, P., Mayer, J. D., Goldman, S., Turvey, C., Palafai, T. (1995). Emotion-al
attention, clarity and repair: exploring emotional intelligence using the
trait meta-mood scale, en Pennebacker, J.D. (ed.), Emotion, Disclo-sure
and Health. Whasington, DC, American Psychological Association
Usán-Supervía, P., Salavera-Bordás, C., Mejías-Abad, J.J. (2020). Relaciones
entre la inteligencia emocional, el burnout académico y el rendimiento
en adolescentes escolares. Rev. CES. Psico,13(1), 125-139. doi:
http://dx.doi.org/10.21615/ cesp.13.1.8
‒ ‒
Vázquez, A. y Manassero, M.A. (2007). En defensa de las actitudes y emociones
en la educación científica (I): evidencias y argumentos generales.
Revista Eureka sobre Enseñanza y Divulgación de las Ciencias, 4(2),
pp. 247-271
Vergara, A.I., Alonso-Alberca, N., San-Juan, C., Aldas, J., y Vozmediano, L.
(2015). Be water: Direct and indirect relations between perceived
emotional intelligence and subjective well-being. Australian Journal of
Psychology, 67(1), 47-54. doi: https://doi.org/10.1111/ajpy.12065
Zampetakis, L.A., Kafetsios, K., Bouranta, N., Dewett, T. y Moustakis, V.S.
(2009). Ontherelationship betweenemotionalintelligence and
entrepreneurialattitudes and intentions. Int. J. Entrepr. Behav. Res., 15,
595-618
‒ ‒
CAPÍTULO 19
1. INTRODUCCION
‒ ‒
La RE permite lograr y consolidar los conceptos relacionados con la
ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas y con ello pro-
mueve que desarrollen las competencias científicas, así como la forma-
ción integral del ser humano, Marcos (2016). La Robótica y su impacto
en el ámbito educativo y muy especialmente en la secundaria ha sido
objeto de estudios previos (Arís y Orcos, 2019). En especial destaca la
aplicación de la robótica educativa en relación con fomentar las com-
petencias STEAM y las vocaciones científicas.
Considerando la importancia y significación de todo ello, pretendemos
dar un paso más para investigar sobre la situación ante las competencias
STEAM y las ciencias, de manera diferenciada por género, conside-
rando tanto alumnos y profesores de educación secundaria. Se ha op-
tado por este nivel considerando que es el momento en que se toman
las decisiones para acceder a los estudios universitarios de grado.
A continuación, revisaremos el estado actual de las diferencias por gé-
nero, primero de los alumnos y después del profesorado. A tal efecto,
consideramos los datos aportados por importantes estudios. También
realizaremos una revisión de la literatura científica sobre la potenciali-
dad de la Robótica educativa. Por último, procederemos a analizar los
datos de nuestro estudio de participación en el campeonato de Robótica
Educativa. Todo ello nos permitirá alcanzar las conclusiones de nuestro
este estudio.
2. FUNDAMENTACIÓN TEÓRICA
‒ ‒
Atendiendo a los alumnos matriculados en un grado, según las estadís-
ticas del Ministerio de Educación, con datos del curso 2016-17, encon-
tramos 582.992 hombres y 708.196 son mujeres. También los porcen-
tajes de promoción y de titulación de las mujeres son mejores en ESO
(82,8 % frente al 72,7 % de los hombres.
El interés de estudiantes por escoger asignaturas o carreras científicas
se ha visto menguado en los últimos años. El número de alumnas en las
universidades supera al de alumnos, pero se constata una cierta limita-
ción de las mujeres para acceder a las carreras científicas relacionadas
con las competencias STEAM.
Cabe considerar que competencia científica, es una de las seis compe-
tencias clave a desarrollar recogida en legislación del sistema educativo
español (LOMCE). Junto con la denominada alfabetización científica,
el trabajo en dicha competencia resulta fundamental para el logro de
una cultura científica que ayude a los alumnos a consolidar unos crite-
rios científicos, con el conocimiento y las habilidades para trabajar con
método científico, sino que además les de la capacidad para analizar y
comprender, la realidad desde un punto de vista científico y tecnológico
(Loaiza-Zuluaga y Osorio, 2018). Sabemos que todo ello, es susceptible
de tener diferencias por razón de género y es lo que pretendemos inves-
tigar en este artículo.
En referencia a los profesores, su papel ante el trabajo de las competen-
cias STEAM es determinante a la hora de propiciar la necesaria riguro-
sidad científica. Un estudio reciente muestra que profesores de ciencias
aportan percepciones diferentes de un mismo concepto. Posiblemente
esto se deba a que, en su formación inicial, asimilaron algunos concep-
tos, de forma errática (Flores y García, 2011). En este sentido es intere-
sante conocer las percepciones de esos profesores también de manera
diferenciada por género.
Para profundizar en el estado de la cuestión, hemos considerado los da-
tos del informe TALIS, un estudio que analiza las características de los
docentes de Educación Primaria y Secundaria en 48 países (Desa,
2014). Según el mismo y considerando las estadísticas del Ministerio
de Educación, con datos del curso 2016-17, el personal docente e
‒ ‒
investigador universitario (PDI) en todas las universidades ascendía a
120.383 personas, de ellas 70.723 eran hombres y 49.660 mujeres. Esto
supone un porcentaje del 41,3 % del personal docente e investigador
son mujeres (OCDE, 2016b).
Asimismo, podemos observar que, a pesar de una mayor presencia de
las mujeres en las titulaciones científicas, la representatividad de inves-
tigadores invierte tales valores, tal y como muestra la Distribución de
investigadores del CSIC diferenciado por razón de sexo.
El Centro de Capacitación para Mujeres (2015) ha hecho hincapié en la
importancia de la formación en igualdad de género. La sensibilización,
el fomento del aprendizaje, el desarrollo de conocimientos y el desarro-
llo de habilidades científicas se describen como un elemento poderoso
en el proceso de preparación para la igualdad de género.
‒ ‒
programación del robot, el objetivo profundo de la Robótica Educativa
es motivar el interés y la curiosidad científica, a la vez que elementos
de la autonomía personal incrementando la responsabilidad, la interac-
ción grupal y la creatividad. A tal efecto, podemos aludir que los estu-
dios constatan que hay un mayor logro en habilidades sociales y la au-
toestima de los alumnos (Kandlhofer y Steinbauber, 2016). Asimismo,
en la actualidad, es ineludible el dominio de las tecnologías junto con
la acción autónoma y de búsqueda de soluciones creativas, así como
cualquier acción que facilite la capacidad de pensar críticamente (Ma-
loney et al., 2010).
Desde prestigiosas instituciones como el MIT (Massachusetts Institute
of Technology) o la Universidad de Stanford, se mantienen diferentes
líneas de investigación sobre su aplicación en las aulas.
El origen de la Robótica educativa se sitúa en los años 60, cuando Sey-
mour Papert, en el MIT, creó el Laboratorio de Inteligencia Artificial
y, en colaboración con Bolt, Beranek, Bobrow, Solomon y Newman,
bajo el liderazgo de Wallace Feurzeig, desarrollaron un lenguaje de pro-
gramación llamado Logo (Logo History, 2015). Logo fue diseñado
como una herramienta para enseñar las bases de la programación a ni-
ños y jóvenes de una manera accesible, flexible e interactiva que faci-
litaba el acceso al lenguaje de programación en entornos de educativos.
Logo además del objetivo de aprender a programar, también tiene la
finalidad de promover aprendizaje en otras áreas de conocimiento como
por ejemplo a través de la programación de actividades de matemáticas,
lenguaje, música o ciencia (Logo History, 2015).
Una de las aportaciones más destacables es su interfaz que facilita a los
alumnos entender secuencias convirtiendo un lenguaje abstracto en
algo más accesible. (Sanz, 2017). En esta propuesta originaria, encon-
tramos las bases del desarrollo del lenguaje de programación y pensa-
miento computacional de que encontramos en Lego Mindstorms®.
La acción en la robótica educativa implica construir un prototipo, un
robot, y programarlo para que ejecute diferentes acciones, que los alum-
nos haya decidido previamente. Encontramos actividades diferenciadas
para todas las edades, desde hacer robots simples robot con cuatro
‒ ‒
teclas hasta robots con programaciones muy complejos. En este sentido,
el material de robótica del Lego Mindstorms®, aporta un conjunto es-
pecial de elemento y piezas de Lego con su propio software de progra-
mación. Los alumnos, además de la programación de un robot, también
deben ir asumiendo una serie de retos pues también deben desarrollar
sus competencias para el trabajo en grupo, el consenso en la búsqueda
de soluciones, la creatividad, etc. La robótica aporta una alta motiva-
ción para los alumnos a la vez que permite el logro competencial de una
manera integrada (Jiménez y Cerdas, 2014). Por todo ello, la potencia-
lidad del proyecto va más allá de construir y programar en el propio
proyecto compartido, y hay que destacar que también es en sí mismo
un elemento de motivación del aprendizaje, de compresión científica
(Resnick et al., 2009). Por todo ello podemos establecer que el propó-
sito de la robótica educativa no es necesariamente enseñar a los estu-
diantes programación, sino más bien, se motiva el desarrollo de com-
petencias tales como la autonomía, la creatividad, el trabajo en equipo,
la responsabilidad y el interés por la investigación, entre otras.
La presencia de proyectos de RE tiene una mayor importancia en los
centros educativos y son cada vez más los docentes motivados por que
sus alumnos participen en este tipo de actividades. En esta ocasión
nuestro interés se centra en investigar su impacto de manera separada
en función del género. Nos planteamos conocer las diferencias por ra-
zón de genero tanto en los alumnos como en el profesorado ante la im-
plicación en los proyectos de Robótica y su significación en ante el lo-
gro de competencias científicas.
En base a toda esta información vista en los diferentes apartados, se
constata la necesidad de conocer las percepciones y motivaciones de
cada grupo. Ello nos permitirá aportar más información sobre la posible
relación con el bajo índice de mujeres para acceder a los escalafones
más altos en la carrera profesional en las dimensiones científicas
STEAM (Barbera et al., 2006).
‒ ‒
3 HIPÓTESIS
4 METODOLOGÍA
4.1 MUESTRA
Para llevar a cabo este estudio se cuenta con una muestra de 197 estu-
diantes y 132 docentes que han participado en los últimos años en los
campeonatos de First Lego League®. La distribución de la muestra se-
gún su sexo puede verse en la Tabla 1.
‒ ‒
TABLA 1. Distribución de los participantes en la experiencia según su sexo.
‒ El compañerismo
‒ La tolerancia
‒ La creatividad
Por otro lado, las variables que vamos a considerar son los ítems del
cuestionario que se facilitó a los docentes, en el que se medían la in-
fluencia de la robótica educativa en:
‒ La motivación por el aprendizaje de sus estudiantes
‒ ‒
‒ El grado en el que ha ayudado a trabajar competencias STEM
a los estudiantes
Con respecto a los análisis que se van a llevar a cabo con estos datos,
vamos a comenzar realizando un análisis descriptivo de las variables
presentadas anteriormente para estudiantes diferenciando por sexo,
para comprobar que la percepción es diferente según el sexo, y además
aplicaremos técnicas no paramétricas de comparación de medias para
comprobar que las diferencias encontradas son significativas entre los
sexos. Por otro lado, haremos un estudio similar para los docentes, pero
en este caso veremos cómo la percepción no varía según el sexo.
‒ ‒
6. ¿Hasta qué punto te ha ayudado el proyecto a mejorar su com-
pañerismo?
7. ¿Hasta qué punto te ha ayudado el proyecto a mejorar su tole-
rancia hacia las opiniones de los demás?
8. ¿Hasta qué punto te ha ayudado el proyecto a mejorar tu creati-
vidad?
9. ¿Hasta qué punto te ha ayudado el proyecto a encontrar solu-
ciones a un problema?
10. ¿En qué medida te ha ayudado el proyecto a mejorar su moti-
vación para aprender?
11. ¿Crees que la robótica es adecuada para interrelacionar diferen-
tes contenidos curriculares?
En primer lugar, en relación con las respuestas del alumno, se han cal-
culado los estadísticos descriptivos de las respuestas de cada ítem con
el fin de ver la distribución de las respuestas, distinguiendo por género.
Además, se ha estudiado la comparación de medias con la prueba U de
Mann Whitney para muestras independientes, con el fin de comparar si
las diferencias de los rangos obtenidos por género son o no
‒ ‒
significativas. Luego, se ha realizado el mismo análisis para estudiar
las respuestas de los profesores.
5. RESULTADOS Y DISCUSIÓN
‒ ‒
GRÁFICO 1. Porcentaje de respuestas a los ítems sobre motivación para el Proyecto de
Robótica Educativa (GM) y la motivación general para el aprendizaje (ML).
100,0%
90,0% 25,8%
35,8%
80,0% 48,5%
58,0%
70,0%
60,0% 39,2%
50,0% 40,7%
40,0% 37,1%
30,0% 28,4% 19,6%
18,5%
20,0% 8,2%
11,1% 3,7% 10,3%
10,0% 5,2%
2,5% 1,0% 1,2% 5,2%
0,0%
GM_Chicas GM_Chicos ML_Chicas ML_Chicos
‒ ‒
GRÁFICO 2. Porcentaje de respuestas a los ítems de compañerismo (F) y tolerancia (TOL).
100,0%
90,0% 23,7%
32,… 43,2%
80,0% 43,2%
70,0%
35,1%
60,0%
50,0% 38,1%
33,3%
40,0% 39,5%
25,8%
30,0%
18,6% 18,5%
20,0% 10,3%
12,3% 7,2%
3,7% 3,7%
10,0%
1,2% 5,2%
4,1% 1,2%
0,0%
F_Chicas F_Chicos TOL_Chicas TOL_Chicos
‒ ‒
GRÁFICO 3. Porcentaje de respuestas a los ítems creatividad (CREA), aumento de la ca-
pacidad de resolución de problemas (SOL) y la percepción de que si la Robótica Educativa
puede servir para interrelacionar diferentes contenidos curriculares (INT).
100,0%
90,0% 27,8% 23,7%
38,3% 43,2% 67,9%
80,0% 49,5%
70,0%
60,0% 35,1%
36,1%
50,0% 11,3%
34,6%
40,0% 33,3%
30,0% 13,4% 25,8% 26,8%
11,1%
23,5%
20,0%
16,5% 18,5% 6,2%
10,3% 18,5%
10,0% 3,7%
3,7% 1,2% 5,2% 1,2% 3,1%
0,0% 6,2%
‒ ‒
TABLA 2. Resultados de la prueba U de Mann-Whitney para todos los ítems considerados.
‒ ‒
100,0%
27,4% 35,7% 29,0% 35,7%
80,0%
100,0%
90,0% 27,8% 23,7%
38,3% 43,2% 67,9%
80,0% 49,5%
70,0%
60,0% 35,1%
36,1%
50,0% 11,3%
34,6%
40,0% 33,3%
30,0% 13,4% 25,8% 26,8%
11,1%
23,5%
20,0%
16,5% 18,5% 6,2%
10,3% 18,5%
10,0% 3,7%
3,7% 1,2% 5,2% 1,2% 3,1%
0,0% 6,2%
‒ ‒
prueba U de Mann-Whitney. Los datos observados en la Tabla 3 con-
ducen a la conclusión de que la distribución de respuestas es la misma
para ambos sexos. Por tanto, se puede decir que, si bien en el caso de
los estudiantes hubo diferencias en la percepción de la robótica educa-
tiva, en el caso de los docentes esta tendencia no se mantuvo.
‒ ‒
Por un lado, en la muestra de estudiantes se observaron diferencias sig-
nificativas por género, pero, por otro lado, en el caso de los docentes,
no se mantuvo la tendencia observada. Se cree que la motivación e in-
terés por la Robótica Educativa por parte de los docentes fue alta y bien
valorada sin diferencias significativas en sus respuestas, lo que fue con-
sistente con la investigación anterior de Jiménez y Cerdas (2014). Se
puede entender que los docentes, desde su rol de profesionales de la
educación, valoran el potencial de la Robótica Educativa para la pro-
yección en el aprendizaje sin diferencias significativas por género coin-
cidiendo con los resultados en Kim et al. (2015) y OCDE (2016a).
A la luz de los resultados, se puede establecer que la motivación por el
aprendizaje, la capacidad de encontrar soluciones a los problemas y la
mejora de la creatividad a través de la robótica educativa es mayor en
el caso de las alumnas. Por tanto, este tipo de proyectos, además de
potenciar la motivación, permiten la implicación de los estudiantes para
superar la diferencia de género de cara a las competencias científicas.
Teniendo en cuenta los datos de Eurostat, el porcentaje de estudiantes
varones que inician grados científicos en España es superior al de mu-
jeres, y que las estudiantes no alcanzan el 50% en las disciplinas STEM,
en relación con los resultados obtenidos en este estudio, la importancia
de trabajar con estrategias encaminadas a superar la limitación por gé-
nero. En la revisión sobre los fundamentos de la Robótica Educativa se
confirma su potencial para favorecer los logros científicos y de compe-
tencia STEAM como se puede ver en Jiménez y Cerdas (2014); Kim
(2015) y UNESCO (2015). En primer lugar, se muestran las conclusio-
nes sobre las respuestas de los alumnos y alumnas.
‒ En relación con la motivación inicial para participar en el pro-
yecto de RE, se observa que las respuestas positivas son mu-
cho mayores en el grupo de alumnas.
‒ ‒
del grupo de mujeres de manera más intensa que en el grupo
de hombres, lo que coincide con las contribuciones de los au-
tores en Arís y Orcos (2019), Kim et al. (2015); Loaiza-Zu-
luaga y Osorio (2018).
Por todo ello, se puede concluir que tanto la motivación como la pro-
yección en el aprendizaje por el uso de RE es mayor en el caso de las
alumnas que en el alumnado y también que se confirmaron las dos hi-
pótesis de investigación.
Este estudio muestra que existe una alta motivación e implicación por
parte de los estudiantes de Educación Secundaria con respecto a la Ro-
bótica Educativa, pero el número de alumnas en las carreras STEM si-
gue siendo demasiado bajo. Por tanto, este estudio tiene un valor ini-
ciático y servirá como punto de partida para profundizar en futuros es-
tudios para seguir investigando en un conocimiento más profundo sobre
el comportamiento diferenciado por género frente a las habilidades
STEAM (Centro de Capacitación para Mujeres, 2015). Por ello, se pre-
tende seguir investigando con una muestra mucho más numerosa y re-
presentativa y también evaluar la aplicación de la RE a otros proyectos,
como los relacionados con las competencias digitales, para establecer
si existen o no diferencias por género como aparece en Marcos (2016);
Reyes-Cárdenas y Padilla (2012).
‒ ‒
En este sentido, la Robótica Educativa adquiere un gran protagonismo
como uno de los recursos para incrementar la eficiencia del proceso de
enseñanza y aprendizaje, ya que permite la búsqueda de soluciones
creativas a los problemas. Esto coincide con los aportes de diferentes
estudios como los que aparecen en Kandlhofer y Steinbauber (2016);
Kim et al. (2015); Loaiza-Zuluaga, y Osorio (2018) que mostraron que
es necesario encontrar las estrategias que los docentes deben considerar
para facilitar la superación de las diferencias por género.
Finalmente, una de las líneas de mejora podría ser el proceso pedagó-
gico para lograr una planificación creativa de los currículos o conteni-
dos. También es necesario investigar nuevos modelos y alternativas
para enseñar a los estudiantes habilidades STEAM que permitan au-
mentar el interés y la participación de las estudiantes en la formación
científica (Jiménez y Cerdas, 2014). Esto requiere la mejora en la forma
de abordar los contenidos más que en su naturaleza (Sanz, 2017) y se-
guir profundizando en ambos sentidos, es decir, tanto en las diferencias
por género en los estudiantes como en los procesos de enseñanza y
aprendizaje de las competencias STEAM.
7 REFERENCIAS
Centro de Capacitación para Mujeres (2015). Una guía sobre la agenda mundial de la
igualdad de género en la 73ª Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU
73), recuperado de:
https://www.unwomen.org/es/news/stories/2018/9/feature-gender-
equality-at-unga-73
Desa, D. (2014). Evaluating Measurement Invariance of TALIS 2013 Complex
Scales: Comparison between Continuous and Categorical Multiple-
Group Confirmatory Factor Analyses. Documentos de trabajo sobre
educación de la OCDE, n.o 103, Publicaciones de la OCDE.
‒ ‒
Flores, R. C. y García Ruiz, M. (2011). Concepciones alternativas de los
profesores de biología. Una aproximación desde la investigación
educativa. Revista Educación Y Desarrollo Social, 5 (1), 13-
23.https://doi.org/10.18359/reds.889
Jiménez, M. y Cerdas, R. (2014). La Robótica educativa como agente promotor
del estudio por la ciencia y la tecnología en la región atlántica de Costa
Rica. En Congreso Iberoamericano de Ciencia, Tecnología, Innovación
y Educación (pp. 1-18). ISBN: 978-84-7666-210-6.
Kandlhofer, M. y Steinbauber, G. (2016). Evaluating the impact of educational
robotics on pupils’ technical- and social-skills and science related
attitudes. Robotics and Autonomous Systems. 75 (B), 679–685.
Kim, C., Kim, D., Yuan, J., Hill, R. B., Doshi, P. y Thai. C. N. (2015) Robotics to
promote elementary education pre-service teacher´s STEM engagement,
learning and teaching. Computers and Education, 91, 14-31.
Loaiza-Zuluaga, Y. E, y Osorio, L. D. (2018). El desarrollo de pensamiento
crítico en ciencias naturales con estudiantes de básica secundaria en una
Institución Educativa de Pereira - Risaralda. Diálogos sobre educación.
Temas actuales en investigación educativa, 9(16), ISSN 2007-2171.
Logo History., 2015. Logo History. 28/06/2018, de Logo Fundation Sitio web:
http://el.media.mit.edu/Logo -foundation/what_is_Logo /history.html
LOMCE Ley orgánica para la mejora de la calidad educativa (LOMCE), Ley
Orgánica 8/2013, de 9 de diciembre, para la mejora de la calidad
educativa. Recuperado de : https://www.boe.es/buscar/pdf/2013/BOE-A-
2013-12886-consolidado.pdf
Maloney, J., Resnick, M., Rusk, N. (2010). The scratch programming language and
environment. ACM Transactions on Computing Education (TOCE), 10(4), 1-15.
https://doi.org/10.1145/1868358.1868363
Marcos, A. (16 de marzo de 2016). Los ciudadanos del futuro y la educación
STEAM. Eduacción 3.0. Recuperado de
http://www.educaciontrespuntocero.com/opinion/los-ciudadanos-del-
futuro-la-educacion-steam/33941.html
OCDE. (2016a). Informe PISA 2015 Resultados clave. Recuperado de
https://www.oecd.org/pisa/pisa-2015-results-in-focus-ESP.pdf
OCDE (2016b), Supporting Teacher Professionalism: Insights from TALIS 2013,
TALIS, Publicaciones de la OCDE, París,
http://dx.doi.org/10.1787/9789264248601-en
PISA (2018). Results. The OECD Programme for International Student
Assessment (PISA) https://www.oecd.org/publications/
‒ ‒
Resnick, M., Maloney, J., Monroy, A., Rusk, N., Eastmond, E., Brennan, K.,
Millner, A., Rosenbaum, E., Silver, J., Silverman, B., y Yasmin Kafai
(2009). Digital fluency should mean designing, creating, and remixing,
not just browsing, chatting, and interacting. Communications of the ACM
52(1), 60- 67.
Reyes-Cárdenas, F. y Padilla, K. (2012). La indagación y la enseñanza de las
ciencias. Educ. quím., 23(4), 415-421
Sanz, D. 2017. Gracias Papert, gracias, Resnick. 28/06/2018, de Juegos
Robótica Sitio web: https://juegosrobotica.es/gracias-papert-resnick/
UNESCO. (2015). A guide for gender equality in teacher education: Policy and
practices. http://unesdoc.unesco.org/images/0023/002316/231646e.pdf
‒ ‒
CAPÍTULO 20
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
obra, donde se organizan simultáneamente múltiples actividades de di-
ferente naturaleza (Rubio Romero & Rubio Gámez, 2005). Tales facto-
res afectan la coordinación y gestión de los proyectos de edificación,
además de tener una gran influencia en la alta siniestralidad que pre-
senta el sector.
En este contexto, la metodología empleada en el proceso de diseño, eje-
cución y gestión de los proyectos en el sector de la AIC se ha basado
tradicionalmente en la metodología Computer-Aided Desing (diseño
asistido por ordenador, en adelante CAD). La metodología CAD utiliza
representaciones digitales 2D para generar, modificar y documentar re-
presentaciones gráficas del proyecto. La generación de estos planos y
documentos se basa en el uso de procesos similares al de dibujo manual
(las representaciones se elaboran a partir de líneas y tramas). Si bien
esta metodología proporciona mayor precisión que el dibujo manual,
estos procesos generan ineficiencias y problemas de interoperabilidad
entre los profesionales implicados en el desarrollo del proyecto. Por
ejemplo, al crearse las representaciones del proyecto independientes
entre sí, las modificaciones generadas en una vista no se propagan au-
tomáticamente al resto, requiriendo un mayor consumo de tiempo y re-
cursos en su edición. Además, este proceso puede generar errores hu-
manos que se arrastren a lo largo del proyecto. Se estima que estas de-
ficiencias pueden generar hasta un 30% de aumento en los errores ex-
tras en los procesos y plazos de entrega, así como la disminución de
hasta un 20% de la productividad en comparación con otras industrias
(Lu et al., 2013; O'Connor et al., 2004).
La fuerte competencia presente en el mercado actual del sector de la
AIC aumenta el nivel de exigencia en términos de funcionalidad y ca-
lidad de los procesos. Al mismo tiempo se produce un aumento en la
complejidad del diseño y se reducen los tiempos destinados al desarro-
llo del proyecto. Estas exigencias en el desarrollo de los proyectos de
edificación requieren de sistemas eficientes y metodologías avanzadas
que permitan adaptar los recursos disponibles a las necesidades del sec-
tor. La metodología tradicional CAD cuenta con múltiples limitaciones
que lastran la eficacia en el desarrollo de procesos.
‒ ‒
No obstante, el sector de la AIC está avanzando hacia metodologías
más eficientes con el objetivo de eliminar los inconvenientes que pre-
senta la metodología CAD. La metodología Building Information Mo-
deling (o modelado de la información del edificio, en adelante BIM)
está siendo adoptada por cada vez más empresas del sector del AIC en
las últimas décadas. El término que identifica esta metodología se atri-
buye a Eastman (1975), que se refería a la misma en su artículo ‘The
use of computers instead of drawings in building design’ described a
working prototype ‘Building Description System (BDS).’ BIM se define
como el proceso de generar, almacenar, gestionar, intercambiar y com-
partir información sobre los edificios de forma interoperable y reutili-
zable (Azhar, 2011). Además, engloba el proceso de generación de un
modelo digital que puede ser utilizado para realizar simulaciones de
diseño, planificación, procesos de construcción y funcionamiento de las
instalaciones del edificio (Eadie et al., 2013). Todo lo anterior, hace que
el uso de BIM suponga cambios metodológicos mucho más amplios
que el simple hecho de cambiar el programa informático utilizado para
desarrollar el proyecto. La Figura 1 muestra la evolución de la metodo-
logía tradicional a BIM.
El uso de BIM implica la utilización de procesos muy diferentes a los
utilizados tradicionalmente en el sector de la AIC y no depende del uso
de un único software. Un proyecto de edificación se compone de sub-
proyectos (proyecto arquitectónico, proyecto estructural, proyectos de
instalaciones, etc.) elaborados por cada uno de los especialistas involu-
crados en el mismo. Cada sub-modelo requerirá el uso de un software
especializado para su creación y gestión. BIM permite la interconexión
entre los diferentes modelos generados en cada uno de los sub-proyec-
tos, facilitando la interoperabilidad y gestión de estos (Kassem et al.,
2015). Por lo tanto, el modelo BIM generado constituye una represen-
tación digital del edificio que contiene toda la información, tanto geo-
métrica como no geométrica, del mismo.
‒ ‒
FIGURA 1. Evolución de metodología CAD a metodología BIM.
‒ ‒
FIGURA 2. Dimensiones de la metodología BIM.
‒ ‒
Europea (Directiva 2014/24/UE) establece que los 28 Estados miem-
bros europeos pueden alentar, especificar o exigir el uso de BIM para
proyectos de construcción y edificación financiados con fondos públi-
cos en la Unión Europea para 2016 (Charef et al., 2018). Además, pro-
mueve la inclusión de una nueva estructura en los criterios de adjudica-
ción en los procesos de contratación con la administración pública en
la que se tenga en cuenta no solo el presupuesto económico, sino que
se incluya el impacto medioambiental de la edificación. Así mismo
apuesta por la implementación de esta metodología con el objetivo de
modernizar y mejorar los procesos de contratación pública.
A nivel nacional, esta directiva ha sido traspuesta al ordenamiento jurí-
dico nacional a través de la Ley 9/2017, de 8 de noviembre, de Contra-
tos del Sector Público. Este texto jurídico ha sido clave para potenciar
la adopción BIM en España. En esta Ley se establece, en su Disposición
adicional decimoquinta. Normas relativas a los medios de comunica-
ción utilizables en los procedimientos regulados en esta Ley:
“6. Para contratos públicos de obras, de concesión de obras, de servicios
y concursos de proyectos, y en contratos mixtos que combinen elemen-
tos de estos, los órganos de contratación podrán exigir el uso de herra-
mientas electrónicas específicas, tales como herramientas de modelado
digital de la información de la construcción (BIM) o herramientas si-
milares. En esos casos, ofrecerán medios de acceso alternativos según
lo dispuesto en el apartado 7 de la presente Disposición adicional hasta
el momento en que dichas herramientas estén generalmente disponibles
para los operadores económicos.
‒ ‒
confianza en los datos contenidos en modelos proporcionados por otros
profesionales; y el uso o aplicación de BIM de forma superficial o li-
mitada (Cao et al., 2015; Holzer, 2011; Koutamanis, 2020; Matthews
et al., 2018).
En consecuencia, estas circunstancias ponen de manifiesto la evolución
y modernización del sector del AIC requiere de profesionales formados
y dispuestos a implementar nuevas metodologías y tecnologías en los
procesos desarrollados en esta industria. Estas circunstancias han gene-
rado debate en las instituciones de educación superior de todo el
mundo. Si bien existe consenso entre los docentes en la necesidad de
que los futuros egresados tengan competencias en metodología BIM,
este proceso es enfocado de forma diferente por los docentes.
Por un lado, la creencia de que el desarrollo de habilidades y compe-
tencias en la utilización de BIM es igual al proceso de aprendizaje con
un programa CAD ha estado presente en muchos docentes. Incluso en
publicaciones previas se ha expuesto la idea de que su implementación
puede suponer una amenaza para la creatividad (Becerik-Gerber et al.,
2011). Sin embargo, como se ha expuesto previamente, BIM se dife-
rencia en múltiples aspectos respecto a la metodología CAD. Conside-
rar BIM únicamente como una herramienta que proporciona informa-
ción gráfica del edificio, al mismo nivel que un software CAD, implica
que se carece de una comprensión profunda de BIM. Este hecho supone
un error que suelen cometer aquellos profesionales que consideran que
utilizan BIM únicamente porque han adquirido un software que utiliza
dicha metodología. Dado que el proceso de uso de una herramienta
CAD (basado en el dibujo y técnicas 2D principalmente) se diferencia
radicalmente del proceso de uso de herramientas BIM, en las que se
elabora el modelo siguiendo el mismo proceso constructivo, aportando
información de todas las dimensiones presentadas en la Figura 2, desde
un punto pedagógico no puede simplemente sustituirse un software por
otro. La necesidad de nuevos métodos de enseñanza es un reto para los
docentes. Seletsky reflexionó sobre este reto en estudio:
‒ ‒
La transformación del proceso tradicional de enseñanza lineal de la ar-
quitectura en uno más elíptico, incorporando el BIM como proceso y
no como herramienta, es el reto más difícil (o la oportunidad más emo-
cionante, según se mire) para los para los educadores de hoy (2006).
‒ ‒
En este contexto, en el presente estudio se plantea el posible uso de
estas herramientas BIM como apoyo a la docencia de programación y
organización de obras, así como obtener la percepción del alumnado
sobre su uso.
2. OBJETIVO
Los recursos que aporta BIM están siendo aplicados en el ámbito labo-
ral del sector de la AIC. No obstante, y dado el potencial que propor-
cionan las herramientas BIM 4D, el presente estudio establece como
objetivo valorar la opinión del alumnado sobre la implementación estos
recursos y herramientas como recursos de apoyo a la docencia de ges-
tión y programación de proyectos de edificación.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
asignatura para analizar su programación utilizando metodología tradi-
cional. Por consiguiente, el alumnado ya conocía el proyecto y estaba
familiarizado con sus características. Al analizar el proyecto desde el
punto de vista de BIM, se proporcionaba al alumnado el análisis del
mismo caso de estudio desde un punto de vista diferente a la metodolo-
gía tradicional, favoreciendo la comparación entre ambas metodologías
y valoración de las mismas.
Tras finalizar la sesión se proporcionó al alumnado un cuestionario para
conocer las percepciones de los estudiantes hacia BIM y su aplicación
a la planificación y gestión de obras. Para crear el cuestionario se utilizó
la plataforma Google Forms. El cuestionario fue diseñado para enfo-
carse en los estudiantes que participarían y en los objetivos de investi-
gación establecidos. El cuestionario se dividió en dos secciones, la pri-
mera sección contenía preguntas cuyo objetivo era recopilar informa-
ción sobre los antecedentes de los estudiantes con BIM y su percepción
sobre BIM en general. La segunda sección contenía preguntas elabora-
das con el objetivo de obtener información sobre la percepción del
alumnado sobre la aplicación de BIM a aspectos clave de la docencia
de organización y planificación de obras.
Las preguntas contenidas en la primera sección fueron diseñadas con
formato de opción múltiple, pudiendo los estudiantes responder utili-
zando el formato de escala Likert de 10 puntos. Las preguntas aborda-
ron factores individuales relacionados con los conocimientos previos
de los estudiantes sobre BIM y sobre su valoración sobre la importancia
de BIM en relación a su futuro desempeño profesional y a su inclusión
en la docencia de grados universitarios reglados. A continuación, se
muestran las preguntas contenidas en esta sección:
Bloque 1: preguntas relativas a BIM en general.
‒ Antes del curso, ¿cuál era su nivel de conocimiento acerca de
la metodología BIM? Indique su respuesta en la siguiente es-
cala, considerando que 1 indica que no tenía conocimientos de
BIM y 10 que su nivel de competencias en BIM es experto.
‒ ‒
‒ ¿Tenía conocimientos sobre el uso de programas BIM aplica-
dos a la planificación y organización de obras? Indique en la
siguiente escala.
‒ ‒
El cuestionario se proporcionó a los estudiantes en la sesión planificada
las últimas sesiones del primer cuatrimestre del curso académico
2020/2021.
4. RESULTADOS
‒ ‒
FIGURA 4. Nivel de conocimiento previo del alumnado acerca de metodología BIM apli-
cado en la dimensión 4D BIM.
‒ ‒
FIGURA 6. Percepción del alumnado sobre la importancia de incluir la metodología BIM
para formar a los futuros profesionales desde el propio grado universitario.
FIGURA 7. Percepción del alumnado sobre el potencial uso de la metodología BIM para
facilitar la compresión de las relaciones de tareas y su planificación en obra.
‒ ‒
FIGURA 8. Percepción del alumnado sobre el potencial uso de la metodología BIM para
comprender los procesos constructivos sin apoyo de planimetría.
FIGURA 9. Percepción del alumnado sobre el potencial uso de la metodología BIM para
facilitar la comprensión de las relaciones y colisiones entre diferentes sub-proyectos de un
proyecto de edificación.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
medio (ver Figura 3). No obstante, su conocimiento previo sobre la apli-
cación de BIM a la planificación y organización de obras es más limi-
tado, como se aprecia en la Figura 4 con los resultados de la pregunta
1.2.
Sin embargo, cabe destacar que el alumnado en su totalidad es muy
consciente de la importancia de tener conocimientos sobre metodología
BIM para desarrollar su futura actividad laboral en el sector de la AIC
(ver Figura 5). Más del 80% ha valorado por encima de 8 sobre 10 la
importancia de esta metodología. Este dato es clave para analizar la
percepción del alumnado respecto a BIM. Estudios previos, como el
desarrollado por Lu et al. (2015) dirigido a profesionales del sector del
AIC, afirman que la adopción de nuevas metodologías y tecnologías de
información y comunicación por parte de las empresas depende en gran
medida de la percepción individual hacia su práctica e implementación.
Conocer la percepción del alumnado de disciplinas relacionadas con
este sector, y su predisposición a adquirir habilidades y competencias
en las mismas, permite conocer la valoración de los futuros profesiona-
les de la industria.
En este sentido, dar a conocer las posibles aplicaciones de BIM apli-
cado al desarrollo de conceptos desarrollados en la asignatura “Organi-
zación y planificación en Edificación” permite hacerlos conscientes de
las herramientas disponibles, así como despertar sus inquietudes e im-
pulsar su aprendizaje. La necesidad actual de profesionales formados
en metodología BIM que contribuyan a la modernización y evolución
del sector precisa de profesionales formados con predisposición a su
implementación.
Por último, respecto a la última pregunta del bloque 1 en relación con
la formación sobre metodología BIM, el 90% del alumnado encuestado
considera que es importante incluirla desde el propio grado universita-
rio para formar a los futuros profesionales (ver Figura 6).
En relación a los resultados obtenidos sobre las cuestiones planteadas a
los estudiantes en el bloque 2 del cuestionario, en la Figura 7 se aprecia
que en su totalidad consideran (en mayor y menor grado) que las herra-
mientas presentadas facilitan la comprensión de las tareas y su
‒ ‒
planificación. Cerca del 80% de los estudiantes han valorado por en-
cima del 9 esta cuestión. Este hecho es destacable ya que, dado que
entre las competencias que el alumnado debe adquirir para superar la
asignatura se encuentra (1) Resolución de problemas de programación
y (II) Capacidad para programar y organizar los procesos constructi-
vos, la coordinación de los recursos humanos, equipos de obra, y los
medios técnicos para su ejecución y el futuro mantenimiento. Por lo
tanto, proporcionar recursos al alumnado que faciliten la comprensión
de las relaciones temporales entre las tareas y su interacción es clave
para que puedan adquirir estas competencias. En consecuencia, obtener
datos que proporcionan una valoración positiva por parte de los estu-
diantes apoya la idea de integrar estas herramientas como apoyo al pro-
ceso de enseñanza-aprendizaje en el contexto de la asignatura.
Por otro lado, en relación con la percepción del alumnado sobre el po-
tencial uso de herramientas BIM y de la simulación de la programación
de obra para facilitar la comprensión de los procesos sin necesidad de
interpretar los planos, los resultados obtenidos se encuentran más dis-
tribuidos, siendo en su mayoría superiores a 5 en la escala Likert (ver
Figura 8). La propuesta del profesorado del uso de simulaciones tiene
como objetivo facilitar la visualización de las interacciones de los dis-
tintos procesos ejecutados en obra. En ocasiones, se ha detectado en el
aula limitaciones en el proceso reflexivo de análisis de actividades a
partir únicamente del pensamiento abstracto. Por ello, se ha realizado
la propuesta de proporcionar la visualización de simulaciones para así,
tras analizar las diferentes actividades de forma apropiada, se apoye la
toma de decisiones a partir de datos cuantitativos obtenidos a partir de
simulaciones.
Por último, los resultados obtenidos sobre la valoración del alumnado
sobre el potencial uso de las herramientas que proporciona BIM para
comprender las relaciones y colisiones entre los diferentes sub-proyec-
tos que conforman un proyecto de edificación, la totalidad del alum-
nado proporciona una respuesta positiva (ver Figura 9). El 85% de los
estudiantes han valorado por encima de 8 esta pregunta. Este punto es
importante ya que, al igual que se planteó en el apartado previo de in-
troducción, que el alumnado adquiera competencias de trabajo en
‒ ‒
equipo y sea capaz de analizar información de diferentes sub-proyectos,
así como analizar las relaciones e interferencias entre los mismos, es
vital para su futuro desempeño profesional. Proporcionar herramientas
que les faciliten este proceso, a la vez que adquieren habilidades de
trabajo colaborativo, contribuye a una formación integral del estudiante
que tendrá que hacer uso de estas competencias en un futuro.
En consecuencia, y a vista de los resultados obtenidos, es posible afir-
mar que la valoración general por parte del alumnado respecto al uso
de BIM y las herramientas que proporciona como apoyo a la docencia
es positiva. No obstante, además de constituir nuevos instrumentos de
apoyo a la docencia, los autores consideran que utilizar estos recursos
puede cumplir además una doble función: su implementación en el aula
también familiariza a los estudiantes con el uso de BIM. La asignatura
“Organización y planificación de obras” pertenece al cuarto curso aca-
démico de Grado en Edificación en la Universidad de Granada, por lo
que cuando el alumnado cursa la asignatura ya conoce generalmente
qué es BIM, pero sus conocimientos son limitados más allá de la di-
mensión 3D. Incluir estos recursos contribuye a que se familiaricen con
las funcionalidades de BIM en dimensiones más avanzadas.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
facilitar la adquisición de conocimientos en relación a la planificación
de proyectos de edificación. Los resultados obtenidos muestran una res-
puesta positiva por parte del alumnado, los cuales afirman en su totali-
dad que su implementación facilita la comprensión de las relaciones
entre los procesos constructivos y su planificación, así como la interre-
lación entre los diferentes sub-proyectos que conforman el proyecto y
las interferencias entre los mismos.
Además de las ventajas planteadas, incluir estos recursos contribuye a
que el alumnado se familiarice con BIM, contribuyendo al desarrollo
de habilidades y competencias que tendrán que aplicar en su futuro
desempeño profesional. Contar con profesionales formados en esta me-
todología contribuirá a la aceleración de su adopción por parte de las
empresas, proporcionando recursos que harán del sector de la construc-
ción una industria más eficiente, segura y sostenible.
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Azhar, S. (2011). Building information modeling (BIM): Trends, benefits, risks,
and challenges for the AEC industry. Leadership and management in
engineering, 11(3), 241-252.
https://doi.org/https://doi.org/10.1061/(ASCE)LM.1943-5630.0000127
Becerik-Gerber, B., Gerber, D. J., & Ku, K. (2011). The pace of technological
innovation in architecture, engineering, and construction education:
integrating recent trends into the curricula.
https://doi.org/https://www.itcon.org/2011/24
Cao, D., Wang, G., Li, H., Skitmore, M., Huang, T., & Zhang, W. (2015).
Practices and effectiveness of building information modelling in
construction projects in China. Automation in construction, 49, 113-122.
https://doi.org/https://doi.org/10.1016/j.autcon.2014.10.014
Carvalho, J. P., Bragança, L., & Mateus, R. (2019). Optimising building
sustainability assessment using BIM. Automation in construction, 102,
170-182. https://doi.org/https://doi.org/10.1016/j.autcon.2019.02.021
Charef, R., Alaka, H., & Emmitt, S. (2018). Beyond the third dimension of BIM:
A systematic review of literature and assessment of professional views.
Journal of Building Engineering, 19, 242-257.
https://doi.org/https://doi.org/10.1016/j.jobe.2018.04.028
Directiva 2014/24/UE del Parlamento Europeo y del Consejo de 26 de febrero de
2014 sobre contratación pública y por la que se deroga la Directiva
2004/18/CE.: Official Journal of the European Union. https://eur-
lex.europa.eu/legal-content/ES/TXT/?uri=celex%3A32014L0024
Eadie, R., Browne, M., Odeyinka, H., McKeown, C., & McNiff, S. (2013). BIM
implementation throughout the UK construction project lifecycle: An
analysis. Automation in construction, 36, 145-151.
https://doi.org/https://doi.org/10.1016/j.autcon.2013.09.001
Eastman, C. (1975). The use of computers instead of drawings in building design.
AIA Journal, 63(3), 46-50.
Holzer, D. (2011). BIM's seven deadly sins. International journal of architectural
computing, 9(4), 463-480. https://doi.org/10.1260/1478-0771.9.4.463
Jin, R., Yang, T., Piroozfar, P., Kang, B.-G., Wanatowski, D., Hancock, C. M., &
Tang, L. (2018). Project-based pedagogy in interdisciplinary building
design adopting BIM. Engineering, Construction and Architectural
Management. https://doi.org/https://doi.org/10.1108/ECAM-07-2017-
0119
‒ ‒
Koutamanis, A. (2020). Dimensionality in BIM: Why BIM cannot have more
than four dimensions? Automation in construction, 114, 103153.
https://doi.org/https://doi.org/10.1016/j.autcon.2020.103153
Ley 9/2017, de 8 de noviembre, de Contratos del Sector Público, por la que se
transponen al ordenamiento jurídico español las Directivas del
Parlamento Europeo y del Consejo 2014/23/UE y 2014/24/UE, de 26 de
febrero de 2014.: Bolentín Oficial del Estado.
https://www.boe.es/eli/es/l/2017/11/08/9/con
Lu, W., Peng, Y., Shen, Q., & Li, H. (2013). Generic model for measuring
benefits of BIM as a learning tool in construction tasks. Journal of
Construction Engineering and Management, 139(2), 195-203.
https://doi.org/https://doi.org/10.1061/(ASCE)CO.1943-7862.0000585
Lu, Y., Li, Y., Skibniewski, M., Wu, Z., Wang, R., & Le, Y. (2015). Information
and communication technology applications in architecture, engineering,
and construction organizations: A 15-year review. Journal of
Management in Engineering, 31(1), A4014010.
https://doi.org/https://doi.org/10.1061/(ASCE)ME.1943-5479.0000319
Matthews, J., Love, P. E., Mewburn, J., Stobaus, C., & Ramanayaka, C. (2018).
Building information modelling in construction: insights from
collaboration and change management perspectives. Production
planning & control, 29(3), 202-216.
https://doi.org/https://doi.org/10.1080/09537287.2017.1407005
Mokhtar, A. H. (2019). BIM as a Pedagogical Tool for Teaching HVAC Systems
to Architecture Students. In AEI 2019: Integrated Building Solutions—
The National Agenda (pp. 123-133). American Society of Civil
Engineers Reston, VA.
https://doi.org/https://doi.org/10.1061/9780784482261.015
O'Connor, A. C., Dettbarn, J. L., & Gilday, L. T. (2004). Cost Analysis of
Inadequate Interoperability in the US Capital Facilities Industry.
https://doi.org/https://nvlpubs.nist.gov/nistpubs/gcr/2004/NIST.GCR.04-
867.pdf
Pressman, A. (2007). Integrated practice in perspective: A new model for the
architectural profession. Architectural Record, 195(5), 116-+.
https://doi.org/https://www.architecturalrecord.com/articles/6954-
integrated-practice-in-perspective-a-new-model-for-the-architectural-
profession
‒ ‒
Puolitaival, T., & Forsythe, P. (2016). Practical challenges of BIM education.
Structural Survey. https://doi.org/https://doi.org/10.1108/SS-12-2015-
0053
Rubio Romero, J. C., & Rubio Gámez, M. (2005). Manual para la formación de
nivel superior en prevención de riesgos laborales. Ediciones Díaz de
Santos.
Seletsky, P. (2006). Questioning the role of BIM in architectural education: A
counter-viewpoint. AECbytes Viewpoint, 27, 1-3.
Vijayeta, M. (2019). Relevance & Applicability of Agile Driven Bim at
Conceptual & Design Phases of a Project-A Case Study. PROJECT
MANAGEMENT IN THE EMERGING WORLD OF DISRUPTION, 613.
Zhao, D., McCoy, A. P., Bulbul, T., Fiori, C., & Nikkhoo, P. (2015). Building
collaborative construction skills through BIM-integrated learning
environment. International Journal of Construction Education and
Research, 11(2), 97-120.
https://doi.org/https://doi.org/10.1080/15578771.2014.986251
‒ ‒
CAPÍTULO 21
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
aprovechado de manera uniforme en los espacios dedicados a la ense-
ñanza en los distintos niveles educativos. Por ejemplo, en los niveles de
enseñanza primaria y secundaria españoles, existen escasas iniciativas
orientadas a optimizar el rendimiento de la impresión 3D. Sin embargo,
empiezan a aparecer proyectos financiados públicamente en este sen-
tido. Por ejemplo, la comunidad autónoma de Canarias ha brindado, a
través de la Consejería de Educación, Universidades, Cultura y Depor-
tes, algunos recursos para el uso educativo de la impresión 3D en edu-
cación primaria y secundaria (Gobierno de Canarias, 2021). En el ám-
bito universitario encontramos un mayor número de iniciativas, proba-
blemente debido al carácter innovador y potencialmente ligado a la in-
vestigación de la impresión 3D. Un ejemplo es la Bibliomaker de la
Universidad de Granada, un espacio habilitado dentro de la Biblioteca
institucional para implementar la impresión 3D y facilitar su uso entre
el público universitario (Universidad de Granada, 2021).
‒ ‒
en el desarrollo de todo plan formativo. Aunque es evidente que cada
Grado y salida profesional requerirá de una serie de competencias es-
pecíficas concretas, pueden asumirse una serie de nociones comunes
transversales a todas ellas (atención a las personas, cuidado y promo-
ción de la salud, investigación como medio para mejorar la vida de las
personas, etc.). Un ejemplo paradigmático es la enfermería, rama bio-
sanitaria esencial para el mantenimiento de la atención de calidad que
permite realizar una cobertura total de las necesidades poblacionales.
Salvando las distancias, las necesidades de los estudiantes de esta ca-
rrera pueden aplicarse a otros perfiles como médicos, odontólogos, far-
maceúticos y, en general, a cualquier área biosanitaria.
‒ ‒
En algunos escenarios existen una serie de limitaciones que impiden el
potencial desarrollo de los estudiantes, como es el caso de las interven-
ciones dentales en lo concerniente al uso de nuevos instrumentales, téc-
nicas y puesta en práctica de protocolos actualizados de tratamiento que
necesitan de la creación de escenarios de simulación (Chuenjitwongsa
et al., 2018). Actualmente, se utilizan tipodontos que son modelos pre-
fabricados utilizados en actividades de restauración y creación de pró-
tesis. Sin embargo, el limitado grado de realismo crea barreras con la
práctica clínica cotidiana. Para paliarlo, se ha propuesto utilizar dientes
extraídos en clínicas dentales y donados para el desarrollo formativo de
los estudiantes de esta disciplina. Desafortunadamente, su obtención re-
quiere mucho tiempo en comparación a la demanda existente e, incluso,
la posibilidad de trasmitir potenciales infecciones entre los alumnos
(Reymus et al., 2021). Por tanto, existe una necesidad de materiales y
modelos con los que mejorar la educación y el realismo clínica para
estos estudiantes. Por otro lado, se han notificado altos niveles de estrés
cuando los estudiantes universitarios se tienen que enfrentar al trata-
miento de endodoncias o al abordaje de las caries y son evaluados. Esto
se debe a los modelos de evaluación preclínica, como el de “mirada y
calificación”, que presentan altos grados de variabilidad entre los exa-
minadores. Esta es la razón para crear modelos evaluativos con menor
variabilidad, como por ejemplo el sistema Dental Teacher (KaVo Den-
tal, Biberach, Alemania) o el PrepCheck (Dentsply Sirona, Wals, Aus-
tria) que permiten realizar un estudio analítico de las preparaciones de
los estudiantes mediante el uso de escáner en tres dimensiones y soft-
ware de análisis (Cardoso et al., 2006; Shah et al., 2018).
‒ ‒
1.2. ENSEÑANZA UNIVERSITARIA EN PREGRADO: LIMITACIONES DE LOS
MODELOS DE ENSEÑANZA TRADICIONAL Y NUEVAS PERSPECTIVAS
‒ ‒
distintas habilidades psicomotrices que estimulen la concentración y la
correlación de diversas fuentes de información por parte del discente
(Etchepareborda Simonini & Abad Mas, 2005).
Por otro lado, la pandemia por COVID-19 ha roto los esquemas de la
docencia presencial de lecciones magistrales en el aula. La adaptación
repentina se vio limitada por el establecimiento de modelos pedagógi-
cos inamovibles durante años que se precipitaron a un escenario desco-
nocido hasta el momento para ellos. Sin embargo, hasta ese momento
ya se habían propuesto metodologías que pretendían combinar esta do-
cencia con un modelo hibrido a través del uso de nuevas tecnologías.
Se han postulado nuevas metodologías docentes compatibles con la si-
tuación de pandemia por COVID-19, como la modalidad de blended
learning. Este modelo combina la enseñanza teórica en modalidad on-
line de manera sincrónica o asincrónica con docencia presencial prác-
tica en los modelos de ciencias de la salud. Se han desarrollado estudios
que han pretendido valorar la efectividad y la influencia de esta nueva
modalidad en la retención de información disminuyendo la pendiente
de la curva de olvido (Cárdenas-Cruz et al., 2021; Liu et al., 2016) Sin
embargo, es necesario aclarar la importancia de desarrollar las habili-
dades practicas de manera presencial, sobre todo en disciplinas como la
enfermería o la fisioterapia (Ravat et al., 2021). Así se ha demostrado
como el modelo educativo blended learning puede mejorar la retención
de habilidades psicomotrices. Esta mejora ha desembocado en la con-
cepción del término “aula invertida” donde se busca hacer de la presen-
cialidad un entorno eminentemente interactivo aportando formación
académica de manera electrónica y telemática. El desarrollo y adapta-
ción de este tipo de aulas se está plasmando en modelos prometedores
de diseño de sistemas de instrucción (Youhasan et al., 2021).
‒ ‒
permite el diseño y la creación de maquetas a escala macrométrica en
tres dimensiones y con características materiales cada vez más versáti-
les. A pesar de la limitación a priori del elevado coste en la adquisición
de esta maquinaria, la rentabilidad en la producción y la cantidad de la
misma en modelos a largo plazo la hace asequible a las necesidades
expuestas anteriormente de la formación en materia biosanitaria.
La creación de modelos de órganos para la enseñanza de asignaturas
básicas como la anatomía, la segmentación de imágenes médicas en
áreas de radiología y los modelos impresos de planificación prequirúr-
gica para la práctica de abordajes en estudiantes universitarios o en es-
pecialistas internos residentes son algunas de las posibles utilidades que
pueden estimular el aprendizaje en la modalidad del blended learning,
involucrando al alumno en la creación del modelo y en el posterior es-
tudio o práctica sobre los mismos (Wilk et al., 2020). Además, la satis-
facción percibida por estudiantes de Ciencias de la Salud en la ense-
ñanza clínica con el uso de modelos impresos basados en aprendizaje
basado en problemas se ha visto incrementada al resolver las limitacio-
nes detectadas en estudios anteriores (Tan et al., 2021).
Ello ha permitido establecer grupos de trabajo entre estudiantes y pro-
fesorado de diferentes ramas del conocimiento, propiciando el desarro-
llo de equipos multidisciplinares entre disciplinas como ingeniería con
las Ciencias de la Salud. Este enfoque estimula a los estudiantes sani-
tarios a identificar necesidades de los pacientes atendidos en la práctica
clínica y a plasmar posibles soluciones en forma de modelos impresos
que pudieran cubrirlas. Ejemplos de ello son las ortesis personalizadas,
porta-esponjas o estabilizador de libros que permitiese a los pacientes
poder desarrollar las actividades cotidianas. Si bien se han reportado
los beneficios mencionados anteriormente, también es de especial inte-
rés resaltar las habilidades psicosociales que pueden derivar de entablar
esta estructura multidisciplinar entre los discentes de materias tan dis-
pares de conocimiento (Wagner et al., 2018).
Una disciplina en la que se está observando un crecimiento exponencial
de la impresión 3D como recurso didáctico es el ámbito de la Odonto-
logía. La tomografía computarizada de haz cónico ha posibilitado la
creación de modelos quirúrgicos para el abordaje del seno y la
‒ ‒
extracción del tercer molar para estudiantes y especialistas en forma-
ción (Lambrecht et al., 2010). Recientemente, se han reportado expe-
riencias donde se diseñaron modelos mandibulares a los que les falta-
ban algunas piezas dentales para que los estudiantes pudieran simular
un tratamiento endodóntico. Para ello, se utilizó una impresora 3D DLP
de resina que generó modelos realistas y permitió a los estudiantes sen-
tirse mejor cualificados para desarrollar estas habilidades (Reymus et
al., 2021). Además, la impresión 3D ha permitido responder a algunas
necesidades detectadas relativas a la evaluación práctica de estudiantes
en esta rama sanitaria. Así, mediante el uso de modelos con esquemas
de colores se ha buscado una mayor objetividad en la evaluación por
parte de los examinadores. En un reciente estudio se crearon modelos
utilizando impresoras de alta gama como OBJET J750 (Stratasys Ltd.,
Eden Prairie, MN, EE. UU.) con material de fotopolímero Vero. Con
ello se consiguió que la fiabilidad entre las evaluaciones fuera mayor y
mejoró el rendimiento de los estudiantes (Lugassy et al., 2021).
Con todo, la impresión 3D aplicada a las Ciencias de la Salud tiene el
potencial de beneficiar enormemente tanto a docentes como discentes
a través del uso compartido de modelos personalizados y coste-eficien-
tes. Esta realidad justifica la necesidad de establecer programas multi-
disciplinares que permitan al alumnado universitario adquirir las com-
petencias fundamentales en imagen médica e impresión 3D.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
-Establecer la combinación de modalidades (online y presencial) a cada
contenido que permitan una mayor adaptabilidad del estudiantado y do-
centes del curso.
-Determinar las competencias atendiendo a su dificultad, y establecer
un sistema apropiado para su evaluación.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
TABLA 1. Bloques, contenidos y duración del programa formativo propuesto.
‒ ‒
que se definen para el bloque I, clasificadas en función del grado de
dificultad (competencias básicas, intermedias y avanzadas).
Tipo de
Objetivos y destrezas
competencia
-Conocer las técnicas de imagen médica basadas en radiación ionizante y no ionizante
-Conocer los principios de la formación digital de imagen médica en radiología simple y
TC.
-Distinguir las principales tecnologías de impresión 3D disponibles
Básica
-Conocer los 5 pasos esenciales de la impresión 3D basada en imagen médica
-Conocer al menos 1 repositorio de modelos genéricos para impresión 3D, modelos ana-
tómicos y pruebas de imagen médica
- Conocer los principios físicos de TC, RM y PET-TC, incluyendo nociones intermedias
como los efectos de interacción de la radiación con la materia (efecto fotoeléctrico, Com-
pton, radiación de Bremsstrahlung, reacción de aniquilación), aspectos generales de ra-
diotrazadores usados en medicina nuclear y tipos de secuencias básicas en RM (poten-
ciación T1, T2, T2*)
- Conocer los fundamentos de imagen médica en radiografía simple, TC, PET-TC y RM,
incluyendo aspectos intermedios como las piezas implicadas en la obtención de imagen,
Intermedia* digitalización y transferencia a los sistemas de información vía PACS
-Conocer las tecnologías de impresión 3D avanzadas y diferentes tipos de materiales
utilizados así como sus aplicaciones en diferentes sectores
-Conocer los flujos de trabajo de impresión 3D en ámbitos de producción industrial.
-Ser capaz de acceder, descargar y alojar modelos elaborados a los recursos online
abiertos como Thingiverse.
-Conocer los principios físicos de TC, RM y PET-TC, incluyendo nociones avanzadas
como las ecuaciones generales que definen efectos de la radiación sobre la materia
(efecto fotoeléctrico, Compton, radiación de Bremstrahlung, reacción de aniquilación) y
efectos del campo magnético y aplicación de gradientes para las secuencias RM (spin-
echo, gradientes de difusión,
-Conocer los fundamentos de imagen médica en TC y RM, incluyendo aspectos avan-
zados como los tipos de algoritmos de reconstrucción en TC (filtered-back projection,
reconstrucción iterativa, reconstrucción basada en técnicas de IA), modelos de rellenado
Avanzada* del espacio k y secuencias básicas y avanzadas de RM (difusión, perfusión, tractografía,
etc.).
-Conocer las tecnologías de impresión 3D avanzadas y emergentes así como sus apli-
caciones en ámbitos de investigación, innovación y desarrollo.
-Conocer los flujos de trabajo de impresión 3D en ámbitos de producción industrial.
-Conocer la regulación legal de los diferentes tipos de licencia y patentado de los mode-
los disponibles en repositorios web, así como sus implicaciones a la hora de utilizarlos.
‒ ‒
modelado 3D de un objeto segmentado; preparación de la impresión del
modelo) y preguntas sobre contenidos teórico-prácticos. La contribu-
ción de cada prueba de evaluación a la calificación final será de un 10%
por cada prueba. Cada prueba de evaluación se realizará de manera in-
dividual, estableciéndose un tiempo determinado atendiendo al grado
de dificultad de la parte práctica (3 horas para la actividad 1 y 4 horas
para las actividades 2 y 3). La evaluación de los contenidos teórico-
prácticos asociados a cada prueba de evaluación se realizará mediante
cuestionarios tipo test con opción de respuesta múltiple, con un total de
10 preguntas y 4 respuestas posibles, de las cuales solo 1 es cierta. Para
cada prueba de evaluación, el 30% corresponderá a esta última y el 70%
restante se evaluará en función de si se han alcanzado los objetivos pre-
definidos antes de la tarea (por ejemplo, ausencia de defectos en la ma-
lla del objeto 3D).
4. RESULTADOS ESPERADOS
‒ ‒
capaces de desarrollar los pasos esenciales implicados en la impresión
3D basada en imagen médica, tal y como se ilustra en la figura 1.
FIGURA 1. Diagrama de flujo del diseño e impresión de los modelos anatómicos. tc: tomo-
grafía computarizada. rm: resonancia magnética.
‒ ‒
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
que es difícil acceder desde una perspectiva disciplinar única. Ello se
traduce en la necesidad de incorporar expertos en distintas áreas (ana-
tomía humana, radiología, ciencias de la computación, ingeniería me-
cánica), con las consecuentes dificultades asociadas. Ciertamente, el
objetivo inicial del proyecto se circunscribía a la anatomía humana, en
particular en el grado en Medicina. Sin embargo, a la vista de los resul-
tados iniciales y del claro atractivo que ha suscitado en otros grados
(particularmente Odontología), se hace evidente el indudable potencial
de la impresión 3D en el ámbito biomédico. Por ello consideramos que
este tipo de experiencias y cursos piloto merecen ser exploradas de
forma más amplia en otras áreas afines en el futuro.
Desde nuestra enriquecedora experiencia, invitamos a otros docentes e
investigadores a implantar programas formativos similares y compro-
bar sus beneficios como herramienta de enseñanza práctica. Confiamos
en que el itinerario formativo propuesto pueda servir de orientación
para mejorar la enseñanza universitaria en nuestro entorno.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8. REFERENCIAS
Batista, R., Santos, M., Melo, E., Moreira, R., Martins, J., & Galdino, M. (2021).
Burnout and academic satisfaction of nursing students in traditional and
integrated curricula. Revista Da Escola de Enfermagem Da U S P, 55, 1–
8. https://doi.org/10.1590/S1980-220X2020002003713
Biglino, G., Capelli, C., Leaver, L., Schievano, S., Taylor, A., & Wray, J. (2015).
Involving patients, families and medical staff in the evaluation of 3D
printing models of congenital heart disease. Communication &
Medicine, 12(2–3), 157–169. https://doi.org/10.1558/CAM.28455
Cabero-Almenara, J., Barroso-Osuna, J., & Palacios-Rodríguez, A. (2021).
Estudio de la competencia digital docente en Ciencias de la Salud. Su
relación con algunas variables. Educación Médica, 22(2), 94–98.
https://doi.org/10.1016/J.EDUMED.2020.11.014
Cárdenas-Cruz, A., Pérez-Bailón, A., Venegas-Robles, A., Redruello-Guerrero,
P., Carrasco-Cáliz, A., & Parrilla-Ruiz, F. M. (2021). Descriptive
analysis of the forgetting curve in basic life support in medical students.
Educacion Medica. https://doi.org/10.1016/J.EDUMED.2021.06.004
Cardoso, J., Barbosa, C., Fernandes, S., Silva, C., & Pinho, A. (2006). Reducing
subjectivity in the evaluation of pre-clinical dental preparations for fixed
prosthodontics using the Kavo PrepAssistant. European Journal of
Dental Education : Official Journal of the Association for Dental
Education in Europe, 10(3), 149–156. https://doi.org/10.1111/J.1600-
0579.2006.00409.X
Chuenjitwongsa, S., Oliver, R. G., & Bullock, A. D. (2018). Developing
educators of European undergraduate dental students: Towards an agreed
curriculum. European Journal of Dental Education, 22(3), 179–191.
https://doi.org/10.1111/EJE.12306
‒ ‒
Chytas, D., Johnson, E. O., Piagkou, M., Tsakotos, G., Babis, G. C., Nikolaou, V.
S., Markatos, K., & Natsis, K. (2020). Three-dimensional printing in
anatomy teaching: current evidence. In Surgical and Radiologic
Anatomy (Vol. 42, Issue 7, pp. 835–841). Springer.
https://doi.org/10.1007/s00276-020-02470-2
Etchepareborda Simonini, M. C., & Abad Mas, L. (2005). Memoria de trabajo en
los procesos básicos del aprendizaje. Revista de Neurología, 40(S01),
S079. https://doi.org/10.33588/RN.40S01.2005078
Fyrenius, A., Bergdahl, B., & Silén, C. (2005). Lectures in problem-based
learning - Why, when and how? An example of interactive lecturing that
stimulates meaningful learning. Medical Teacher, 27(1), 61–65.
https://doi.org/10.1080/01421590400016365
Ganguli, A., Pagan-Diaz, G., Grant, L., Cvetkovic, C., Bramlet, M., Vozenilek, J.,
Kesavadas, T., & Bashir, R. (2018). 3D printing for preoperative
planning and surgical training: a review. Biomedical Microdevices,
20(3). https://doi.org/10.1007/S10544-018-0301-9
Gobierno de Canarias, Ceuc. (2021). Propuestas de uso educativo de la impresión
3D – Impresión 3D y cultura maker.
https://www3.gobiernodecanarias.org/medusa/ecoescuela/3d/impresion-
3d/como-funciona/propuestas-de-uso-educativo-de-la-impresion-3d/
Láinez Ramos-Bossini, A., Rivera-Izquierdo, M., Redruello Guerrero, P., &
Prados Salazar, J. (2021). Modelado e impresión 3D basada en imagen
médica como herramienta docente en el grado en medicina. In G. Gómez
García, M. Ramos Navas-Parejo, C. Rodríguez Jiménez, & J. de la Cruz
Campos (Eds.), Teorìa y práctica en investigación educativa: una
perspectiva internacional. Dykinson.
Láinez Ramos-Bossini, A., Rivera Izquierdo, M., López Cornejo, D., & Ruiz del
Amo, J. (2021). Proyecto ArquiM3D-X. https://arquim3dx.com/
Lambrecht, J., Berndt, D., Christensen, A., & Zehnder, M. (2010). Haptic model
fabrication for undergraduate and postgraduate teaching. International
Journal of Oral and Maxillofacial Surgery, 39(12), 1226–1229.
https://doi.org/10.1016/J.IJOM.2010.07.014
Liu, Q., Peng, W., Zhang, F., Hu, R., Li, Y., & Yan, W. (2016). The
Effectiveness of Blended Learning in Health Professions: Systematic
Review and Meta-Analysis. J Med Internet Res 2016;18(1):E2
Https://Www.Jmir.Org/2016/1/E2, 18(1), e4807.
https://doi.org/10.2196/JMIR.4807
Lugassy, D., Awad, M., Shely, A., Davidovitch, M., Pilo, R., & Brosh, T. (2021).
3D-Printed Teeth with Multicolored Layers as a Tool for Evaluating
Cavity Preparation by Dental Students. Applied Sciences 2021, Vol. 11,
Page 6406, 11(14), 6406. https://doi.org/10.3390/APP11146406
‒ ‒
Murre, J. M. J., & Dros, J. (2015). Replication and Analysis of Ebbinghaus’
Forgetting Curve. PLOS ONE, 10(7), e0120644.
https://doi.org/10.1371/JOURNAL.PONE.0120644
Pedregosa, S., Fabrellas, N., Risco, E., Pereira, M., Stefaniak, M., Şenuzun, F.,
Martin, S., & Zabalegui, A. (2021). Implementing dedicated education
units in 6 European undergraduate nursing and midwifery students
clinical placements. BMC Nursing 2021 20:1, 20(1), 1–11.
https://doi.org/10.1186/S12912-021-00576-5
Pugliese, L., Marconi, S., Negrello, E., Mauri, V., Peri, A., Gallo, V., Auricchio,
F., & Pietrabissa, A. (2018). The clinical use of 3D printing in surgery.
Updates in Surgery, 70(3), 381–388. https://doi.org/10.1007/S13304-
018-0586-5
Ravat, S., Barnard-Ashton, P., & Keller, M. M. (2021). Blended teaching versus
traditional teaching for undergraduate physiotherapy students at the
University of the Witwatersrand. South African Journal of
Physiotherapy, 77(1), 8. https://doi.org/10.4102/SAJP.V77I1.1544
Reymus, M., Liebermann, A., Diegritz, C., & Keßler, A. (2021). Development
and evaluation of an interdisciplinary teaching model via 3D printing.
Clinical and Experimental Dental Research, 7(1), 3–10.
https://doi.org/10.1002/CRE2.334
Shah, N., Kunkel, T., Engelmeier, R., Shah, N., & Kunkel, T. (2018). A
comparison of crown preparation grading via PrepCheck versus grading
by dental school instructors. International Journal of Computerized
Dentistry, 21(4), 305–311.
Tack, P., Victor, J., Gemmel, P., & Annemans, L. (2016). 3D-printing techniques
in a medical setting: a systematic literature review. Biomedical
Engineering Online, 15(1), 115. https://doi.org/10.1186/s12938-016-
0236-4
Tan, H., Huang, E., Deng, X., & Ouyang, S. (2021). Application of 3D printing
technology combined with PBL teaching model in teaching clinical
nursing in congenital heart surgery: A case-control study. Medicine,
100(20), e25918. https://doi.org/10.1097/MD.0000000000025918
Torbjørnsen, A., Hessevaagbakke, E., Grov, E. K., & Bjørnnes, A. K. (2021).
Enhancing students learning experiences in nursing programmes: An
integrated review. Nurse Education in Practice, 52, 103038.
https://doi.org/10.1016/J.NEPR.2021.103038
Universidad de Granada, E. (2021). Biblioteca > Bibliomaker | Universidad de
Granada. https://biblioteca.ugr.es/pages/makerspace
‒ ‒
Wagner, J. B., Scheinfeld, L., Leeman, B., Pardini, K., Saragossi, J., & Flood, K.
(2018). Three professions come together for an interdisciplinary
approach to 3d printing: Occupational therapy, biomedical engineering,
and medical librarianship. Journal of the Medical Library Association,
106(3), 370–376. https://doi.org/10.5195/JMLA.2018.321
Wake, N. (2021). 3D Printing for the Radiologist. Elsevier.
Wallace, N., Schaffer, N. E., Aleem, I. S., & Patel, R. (2020). 3D-printed Patient-
specific Spine Implants: A Systematic Review. Clinical Spine Surgery,
33(10), 400–407. https://doi.org/10.1097/BSD.0000000000001026
Wang, Y.-T., Yang, X.-J., Yan, B., Zeng, T.-H., Qiu, Y.-Y., & Chen, S.-J. (2016).
Clinical application of three-dimensional printing in the personalized
treatment of complex spinal disorders. Chinese Journal of Traumatology
= Zhonghua Chuang Shang Za Zhi, 19(1), 31–34.
https://doi.org/10.1016/j.cjtee.2015.09.009
Wilk, R., Likus, W., Hudecki, A., Syguła, M., Różycka-Nechoritis, A., &
Nechoritis, K. (2020). What would you like to print? Students’ opinions
on the use of 3D printing technology in medicine. PLoS ONE, 15(4).
https://doi.org/10.1371/journal.pone.0230851
Youhasan, P., Chen, Y., Lyndon, M., & Henning, M. A. (2021). Exploring the
pedagogical design features of the flipped classroom in undergraduate
nursing education: a systematic review. BMC Nursing 2021 20:1, 20(1),
1–13. https://doi.org/10.1186/S12912-021-00555-W
Yuen, J. (2020). What Is the Role of 3D Printing in Undergraduate Anatomy
Education? A Scoping Review of Current Literature and
Recommendations. Medical Science Educator, 30(3), 1321.
https://doi.org/10.1007/S40670-020-00990-5
‒ ‒
CAPÍTULO 22
SEBASTIÁN GARCÍA
Universidad de Sevilla, España
ANTONIO PAREJO
Universidad de Sevilla, España
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
Además, a veces a los alumnos les cuesta asimilar los conceptos teóri-
cos de estas asignaturas. En estas situaciones, las sesiones de laborato-
rio en las que los alumnos aplican esos conceptos que se enseñan en las
lecciones teóricas han probado ser una forma muy útil para que los
alumnos terminen de adquirir y afianzar esos conceptos más fácilmente
(Feisel & Rosa, 2005). Además, las sesiones prácticas les ayudan a ad-
quirir capacidades como el trabajo en equipo o la habilidad para seguir
instrucciones complejas (Edward, 2012).
En este sentido, en el ámbito de las citadas asignaturas, existe una im-
portante carencia de equipamiento docente para el ajuste de bucles de
control usando PLCs. Los entrenadores disponibles en el mercado son
caros y voluminosos, por lo que se hace muy complicado el disponer
de un equipo por puesto y alumno en los laboratorios docentes. Ade-
más, la gran mayoría de dispositivos suelen estar pensados para su uso
con PCs (computadores personales, del inglés personal computers), no
siendo posible su uso con PLCs.
Si bien es cierto que se dispone de varios equipos actualmente en el
laboratorio, estos son únicamente usados a modo de demostradores,
siendo imposible la realización de prácticas individuales (dada su volu-
minosidad y alto coste). Debido a esto, actualmente no se dispone de
plataformas que permitan la realización de prácticas de bucles de con-
trol usando PLCs.
Para suplir la falta de estos equipos, actualmente se están usando simu-
ladores software. Aunque los simuladores son de gran utilidad, estos
son demasiado simples y no emulan correctamente las situaciones
reales a las que se pueden encontrar los alumnos en la industria como
el ruido, límites de operación, alinealidades, etc. Normalmente estos
simuladores no suelen incorporar estos parámetros porque son difícil-
mente explicables si no se dispone de un equipo real con los que obser-
varlos.
Dada esta situación, muchos docentes optan por el desarrollo de sus
propios equipos para las sesiones de laboratorio (Riveros et al., 2016),
los cuales suelen resultar más baratos y prácticos que los disponibles en
el mercado (Pearce, 2013). Por ello, este trabajo presenta el desarrollo
‒ ‒
de un dispositivo en forma de entrenador docente que solvente las ca-
rencias expuestas anteriormente.
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
FIGURA 1. Esquema conceptual del equipo docente propuesto.
‒ ‒
‒ Una placa de control, que dispone de un microcontrolador, así
como la electrónica necesaria para el funcionamiento del
equipo.
Las señales tanto de entrada como de salida están disponibles tanto fí-
sicamente en un bornero como digitalmente a través de una interfaz
USB. Esto permite que el equipo pueda ser controlado directamente
desde un PC o a través de un dispositivo de control externo como un
PLC permitiendo su uso con ambos sistemas como era requisito.
‒ ‒
FIGURA 3. Panel de usuario del equipo docente propuesto.
FIGURA 4. Parte trasera con el conexionado y la placa de control del equipo docente pro-
puesto.
‒ ‒
3.2.1. Descripción del panel de usuario
‒ ‒
‒ Señales de final de carrera. Los finales de carrera del disposi-
tivo se encuentran disponibles como salidas en el bornero del
dispositivo.
‒ ‒
Con esta configuración, es fácil implementar distintas dinámicas en el
microcontrolador, lo que permite disponer de distintos comportamien-
tos con el mismo equipo de prácticas, evitando copias entre estudiantes
en pruebas de evaluación.
‒ ‒
‒ Enviar datos hacia el entrenador. Las señales disponibles en el
bornero de entrada se pueden modificar a través de esta fun-
ción. De esta forma, el equipo puede ser totalmente controlado
a través de la interfaz USB.
3.2.5. Costes
Un factor esencial del diseño del equipo docente era el coste, para in-
tentar obtener un dispositivo asequible que permitiese dotar los labora-
torios.
Por ello, se han usado elementos comerciales en su amplia mayoría, lo
que facilita la reducción de costes y la reparación del equipo. Incluso la
placa de control se ha realizado usando componentes comerciales
cuando ha sido posible.
En la Tabla 1 se muestra el coste del prototipo, así como una descrip-
ción detallada y el precio de todos los elementos que lo conforman. Es
importante remarcar que los precios indicados son para una tirada corta
de dispositivos. Fabricando un volumen mayor, los precios serían más
económicos.
TABLA 1. Coste de cada uno de los elementos que conforman el equipo docente y del total
del mismo.
‒ ‒
Part Notes Price
Others Buttons, LEDs, terminals, cables, etc. 15€
Total 172.7€
‒ ‒
En primer lugar, las ecuaciones eléctricas se pueden obtener a partir del
esquema de la Figura 5:
𝑢 =𝑖𝑅+𝐿 +𝑒 (1)
𝑇 =𝐾 𝑖 (2)
𝑒=𝐾 𝜔 (3)
𝐽 +𝐵 =𝑇 −𝑇 (4)
𝑈 = 𝐼𝑅 + 𝐿𝐼𝑠 + 𝐸 (5)
𝑇 =𝐾 𝐼 (6)
𝐸=𝐾 𝜃𝑠 (7)
‒ ‒
Operando en (5), para despejar la corriente y sustituyendo en (6), se
puede obtener la siguiente ecuación:
𝑇 =𝐾 (9)
𝜃𝑠 𝐽𝑠 + 𝐵 𝑅 + 𝐿𝑠 + 𝐾 𝐾 = 𝐾 𝑈 − 𝑇 𝑅 + 𝐿𝑠 (11)
𝜃= (12)
𝜃 = 𝑓 𝑈, 𝑇 (13)
= (14)
= (15)
Por tanto, el modelo del motor DC se puede expresar como los bloques
funcionales representados en la Figura 6.
‒ ‒
Además, la velocidad se puede derivar de la posición. En el dominio de
Laplace, la derivar implica multiplicar por el operador de Laplace. Por
tanto, el modelo en velocidad también se puede obtener (Figura 7).
‒ ‒
= (16)
= (17)
= (18)
Donde D es el retraso del sistema. Por tanto, el sistema bajo control será
el mostrado en la Figura 10. Para el usuario todo esto será transparente
y el sistema se comportará de igual forma que un motor DC de imanes
permanentes.
‒ ‒
igual. Cambiando los parámetros de la función de transferencia (𝐾 y 𝜏)
el sistema se comportará de forma distinta. Por tanto, cada estudiante
puede tener una función de trasferencia distinta, evitando copias en se-
siones de evaluación.
Las configuraciones de los parámetros del modelo se pueden cargar a
través de la interfaz USB. Para este propósito, se ha diseñado una apli-
cación de PC especifica que permite a los profesores modificar la con-
figuración del equipo (Figura 11). Además, esta interfaz permite testear
el correcto funcionamiento de los equipos.
5. ESCENARIOS DOCENTES
FIGURA 11. Interfaz del profesor para configurar los parámetros del equipo.
‒ ‒
El equipo puede ser controlado de dos formas distintas: usando señales
binarias tipo todo/nada o señales analógicas. Estos dos enfoques son
descritos en las siguientes subsecciones 5.1 y 5.2.
Además de para las sesiones más puramente centradas en implementa-
ción de bucles de control, se puede usar el equipo para otro tipo de
prácticas como por ejemplo para el modelado de sistemas dinámicos
(sección 5.3) o para la docencia de programación de PLCs básica (sec-
ción 5.4).
‒ ‒
5.3. MODELADO DE SISTEMAS DINÁMICOS
5.4. OTROS
6. CONCLUSIONES
Este trabajo presenta un entrenador docente para ser usado en las asig-
naturas de Automatización Industrial y de Regulación Automática. Am-
bas asignaturas se encuentran en el marco de los grados en Ingeniería
Industrial de la “Escuela Politécnica Superior” de la Universidad de Se-
villa.
Se consiguió fabricar y validar un prototipo. Doce equipos más se han
fabricado para ser usado en los laboratorios docentes. Por razones aso-
ciadas a la pandemia de COVID-19, estos equipos aún no han sido usa-
dos por los alumnos en sesiones prácticas. Se han desarrollados distin-
tos modelos de prácticas que van desde el modelado de sistemas
‒ ‒
dinámicos, pasando por la implementación de distintas estrategias de
control en bucle abierto y cerrado hasta la docencia de programación
de PLCs y microcontroladores.
Aunque se esperaba haber usado el equipo en las sesiones prácticas del
curso 2020/2021 esto no pudo ser posible por las restricciones asocia-
das a la pandemia de COVID-19. Aunque no se han podido recoger
resultados de su uso en entornos reales de docencia, el equipo se les dio
a varios alumnos internos para que testearan y probaran el dispositivo.
Los alumnos reportaron que el equipo era sencillo de usar y que les
ayudaba a asimilar mejor los conceptos teóricos.
Hasta ahora, todos estos conceptos son cubiertos de forma teórica o,
dado el coste, con un número reducido de entrenadores. Pero, el equipo
propuesto y su reducido coste, lo hacen asequible y compacto como
para tener un equipo por puesto de laboratorio. Esto es posible gracias
a que la mayoría de los elementos están basados en componentes co-
merciales fácilmente asequibles y sustituibles.
Con el uso de este equipo se espera ayudar a los estudiantes a entender
y asimilar mejor los conceptos teóricos de las citadas asignaturas: Au-
tomatización Industrial y Regulación Automática. Además, la relación
entre estas asignaturas será más fácilmente percibida por los alumnos.
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
‒ ‒
8. REFERENCIAS
‒ ‒
CAPÍTULO 23
ANTONIO PAREJO
Universidad de Sevilla, España
SEBASTIÁN GARCÍA
Universidad de Sevilla, España
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
Una de las vertientes de la SG es la mejora de los sistemas de medición
del consumo eléctrico de los clientes. En esta sección se verá breve-
mente en qué consisten estos sistemas, su evolución reciente, y por qué
se ha considerado conveniente incluirlos dentro de los contenidos do-
centes que se imparten en el Máster en Sistemas Inteligentes en Energía
y Transporte (MSIET) de la Universidad de Sevilla.
‒ ‒
por parte de las compañías eléctricas. Además, la AMM permite a las
compañías operaciones de gestión más complejas, como aplicar tarifas
de discriminación horaria a aquellos clientes que la soliciten. Este cam-
bio ha implicado la sustitución de los antiguos contadores eléctricos
(que eran a menudo mecánicos) por los llamados contadores inteligen-
tes, medidores inteligentes o, en inglés, smart meters.
‒ ‒
cubriendo distintos aspectos como la SG, movilidad, control de energía
en edificios, diseño de software y aplicaciones de minería de datos.
Numerosos autores han señalado la importancia de adecuar la educa-
ción superior de forma que se mejore la conexión entre el mercado la-
boral y la educación terciaria para reducir la precariedad del empleo y
un mejor aprovechamiento del capital humano (Baquero y Ruesga,
2020). Esta idea es la que ha guiado el desarrollo de la propuesta do-
cente que se expondrá en este capítulo.
Dada la complejidad de los sistemas de medición inteligente, llevar a
cabo su enseñanza en las aulas aplicando únicamente una perspectiva
teórica resultaría en un enfoque muy pobre para el perfil de especiali-
zación esperado en el máster. Ello motivó a incluir también una serie
de contenidos prácticos donde los estudiantes pudieran usar y gestionar
dispositivos e infraestructuras reales, facilitándoles así el acceso a tra-
bajos especializados en compañías de distribución eléctrica en el futuro.
Estos objetivos docentes se han logrado gracias a un sistema real de
medición inteligente que se ha instalado en el aula del máster, de forma
que los estudiantes puedan tener completo acceso a él para su uso y
estudio en profundidad. Ejemplos de este tipo de infraestructura pueden
encontrarse habitualmente en artículos científicos (Uribe-Pérez et al.,
2017) y en laboratorios de las DSO, pero no son tan comunes en el
ámbito de la enseñanza universitaria.
‒ ‒
Los sistemas de medición cuentan habitualmente con dos niveles co-
existentes.
El primero se encuentra en los centros de transformación. El consumo,
tensión, corriente, etc. de cada transformador (o incluso de cada una de
las líneas de distribución en baja tensión derivada del transformador) se
miden y registran mediante aparatos específicos para ello. La conexión
con el sistema de gestión de telemetría (que es el centro de control y de
almacenamiento de datos medidos) de la DSO se realiza habitualmente
mediante una unidad terminal remota (en inglés, remote terminal unit,
RTU) o mediante un concentrador de datos.
El segundo nivel lo constituyen los contadores eléctricos inteligentes
de los clientes, que han sido instalados en la mayoría de los países eu-
ropeos (o en algunos países se está finalizando su instalación) como
consecuencia de la directiva europea previamente citada. En España es-
tos contadores eléctricos se comunican gracias a comunicaciones de
tipo PLC (en inglés, power line communication), lo que significa que
los mensajes con la información de mediciones se transmiten usando
los propios cables eléctricos como canal de comunicación. Esto tiene la
enorme ventaja de no requerir de la instalación de cables de comunica-
ción adicionales hasta los contadores, ni tampoco de ningún tipo de co-
municación inalámbrica. Mediante el canal PLC los concentradores de
datos que se encuentran en los centros de transformación captan las me-
didas de los contadores bajo su dominio, y ellos se encargan posterior-
mente de transmitirlas al sistema de gestión de telemetría de la DSO.
Para esto último habitualmente se utilizan frecuentemente comunica-
ciones a través de la red móvil. Debido a las ventajas descritas, las co-
municaciones PLC son las más habituales en el ámbito de los contado-
res eléctricos en Europa.
En la Figura 1 pueden verse ambos tipos de sistemas de medida y su
conexión con el centro de datos de la DSO, llamado sistema de gestión
de telemetría.
‒ ‒
FIGURA 1. Infraestructura de telemedida de consumo eléctrico de clientes.
‒ ‒
variedad actividades laborales pasaran a realizarse de forma no presen-
cial en aquellos casos en que fuera posible.
Naturalmente, el sector educativo fue uno de los grandes afectados por
dichas medidas. En el caso de España, el período de confinamiento co-
menzó el 14 de marzo de 2020 (García et al., 2021), lo que afectó al
curso académico en todos los niveles, desde infantiles hasta universita-
rios.
En el contexto de la educación presencial, la tecnología, tal y como se
señala en (García-Peñalvo y Ramírez-Montoya, 2017), se veía anterior-
mente como un complemento más que como una verdadera herramienta
de cambio metodológico. Esto cambió radicalmente con la crisis sani-
taria, pues forzó a que debiera producirse una adaptación muy rápida
del formato clásico de docencia, impartida sobre todo presencialmente
en aulas, a un formato online. Este proceso supuso una gran dificultad
no sólo por el poco tiempo disponible para ello, sino también por las
complicaciones para acceder a medios técnicos apropiados en el con-
texto de la crisis sanitaria, lo que no puso nada fácil realizar la adquisi-
ción de equipamiento adecuado, y siendo comunes los problemas de
suministro y reparto.
Posteriormente, con el comienzo del curso 2020-2021 en España se pro-
cedió planificar y dirigir la adaptación de los modelos existentes a for-
mas más digitalizadas, de forma que pudiera cumplirse con las medidas
sanitarias pertinentes.
En el sector de las STEM, y más concretamente en las enseñanzas de
ingenierías del ámbito industrial (en la cual se centra la propuesta que
se verá en este capítulo) podemos distinguir dos tipos de contenidos
docentes que han debido adaptarse.
El primero de ellos incluye la docencia impartida en aulas, sea en for-
mato de clase magistral, resolución de problemas por parte del profesor,
etc. La adaptación de estas al formato digital ha podido resolverse de
formas variopintas, desde del uso de cámaras en el aula para la emisión
de las clases en directo al uso de tabletas digitalizadoras que el profesor
podía utilizar como sustituto de la pizarra. Todos estos métodos, acom-
pañados de medios auxiliares como chat de la clase en directo han
‒ ‒
podido suplir en general apropiadamente las necesidades docentes en la
mayoría de los casos.
El segundo lo constituyen las prácticas de laboratorio, que habitual-
mente en el ámbito de las ingenierías incluyen dispositivos o máquinas
muy especializadas. Estos son por ejemplo los equipos de automatiza-
ción industrial, las máquinas para ensayos de materiales, u otro tipo de
equipo informático o tecnológico instalado en los laboratorios.
Precisamente es en este segundo grupo donde ha podido apreciarse los
mayores problemas para su impartición en formato no presencial. En
aquellos equipos que no podían incluir conexión a Internet debido a su
naturaleza (como las máquinas de ensayos de materiales) ha sido nece-
sario realizar las prácticas con grupos de alumnos reducidos, o bien li-
mitarse a la grabación o emisión de la práctica realizada por el profesor.
Por otro lado, aquellos dispositivos que sí podían contar con conexión
a Internet han posibilitado en algunos casos habilitar conexión remota
a ellos, de forma que los alumnos experimentaran la menor diferencia
posible en este formato.
La propuesta docente que presenta este capítulo pretende instalar una
red de dispositivos de telemedida de consumo eléctrico en un laborato-
rio para la realización de prácticas con los mismos. Estas redes de dis-
positivos por su propia naturaleza permiten habilitar una conexión ex-
terna hacia Internet de forma relativamente sencilla, precisamente gra-
cias a que el concentrador de datos (dispositivo que recoge las medidas
de los contadores eléctricos inteligentes conectados a él) admite esta
posibilidad.
Sentadas estas bases, el siguiente apartado repasará los objetivos que se
pretenden conseguir con esta propuesta, y qué características deben
cumplirse para su implementación.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
sistema eléctrico en la docencia universitaria de máster. Con esto se
pretende:
‒ Completar los contenidos teóricos impartidos con contenido
adicional de tipo práctico.
‒ ‒
Considerando estos objetivos, la siguiente sección expondrá la metodo-
logía seguida para el diseño del laboratorio de telemedida y cómo se
han llevado a cabo las decisiones pertinentes.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
‒ PRIME: del inglés Powerline Intelligent Metering Evolution
(PRIME), protocolo definido por la “Prime Alliance”. Utiliza
modulación de señal de tipo OFDM (multiplexación por divi-
sión de frecuencias ortogonales, en inglés orthogonal fre-
quency division multiplexing). Una de las compañías que uti-
lizan este protocolo en España es por ejemplo Iberdrola.
‒ ‒
TABLA 1. Tipos de reporte y registros.
Código Descripción
S01 Valores instantáneos
S21 Valores instantáneos avanzados
S02 Incremento diario
S03 Absolutos diarios
S04 Facturación mensual
S05 Facturación diaria
S27 Facturación bajo demanda
S06 Parámetros
S07 Fallo de tensión
S08 Calidad de suministro
S09 Eventos
S23 Contratos
Fuente: elaboración propia
‒ ‒
señales podrían interferir con las de aquellos contadores propios de la
compañía eléctrica que se encuentran en la red externa al aula. Por
tanto, es importante mantener las comunicaciones aisladas dentro del
aula mediante dicho filtro.
El coste total aproximado de los dispositivos PRIME instalados fue de
unos mil quinientos euros (1500€) aproximadamente, aunque por su-
puesto esto dependerá del modelo de dispositivos y el número total de
medidores que se escojan. La Figura 2 muestra un esquema general de
la estructura de los dispositivos, conexiones con la red eléctrica y co-
municaciones.
‒ ‒
uno de los contadores inteligentes registra el consumo de un pequeño
grupo de enchufes en los cuales se pueden conectar diversas cargas,
permitiendo así analizar distintas situaciones según cuáles se conecten
y cuáles sean sus perfiles de consumo.
A continuación, en la siguiente sección se analizarán algunos ejemplos
de uso de esta instalación una vez finalizada.
4. RESULTADOS
‒ ‒
La información de cada medidor es obtenida a través del concentrador
de datos. Dicho concentrador dispone de una conexión a Internet, per-
mitiendo así que profesores y alumnos accedan a la información me-
diante una interfaz web, o utilizando el protocolo FTP (protocolo de
transferencia de archivos, en inglés file transfer protocol) para extraer
los reportes de datos deseados.
La interfaz web que viene preinstalada por defecto en el concentrador
de datos es un método sencillo para hacer esta tarea y obtener la infor-
mación requerida de cada contador. En la Figura 4 puede verse un ejem-
plo de reporte, concretamente algunos de los campos contenidos en el
reporte S01 (valores instantáneos) de uno de los medidores. Este reporte
contiene datos sobre el factor de potencia, potencia activa y reactiva,
etc.
FIGURA 4. Fragmento del reporte s01. campos, valores y nombres de elemento de acuerdo
con el protocolo.
‒ ‒
datos entre sí en una red de distribución de cierto tamaño. Por ello, se
estudian en las prácticas otros dos métodos que está más extendido en
instalaciones reales, llamados respectivamente servicios web (en in-
glés, web services) y el protocolo FTP.
En estos métodos, la información viene encapsulada siguiendo ciertas
estructuras estándares, lo que hace más sencillo conectar el concentra-
dor de datos con sistemas de almacenamiento y análisis de información
de forma eficiente.
Otro reporte de gran interés es el S05, que contiene la facturación de
consumo energético para cada periodo tarifario del cliente (recordamos
que una de las ventajas de los medidores inteligentes es precisamente
poder aplicar tarifas de discriminación horaria a aquellos clientes que
deseen contratarlas, cosa compleja de hacer con los medidores mecáni-
cos antiguos). Dependiendo de la tarifa del cliente, es posible tener va-
rios tramos horarios distintos dentro del mismo día (aplicando por tanto
un precio independiente a la energía consumida en cada uno de los tra-
mos).
En la Figura 5 se muestran los datos de energía activa importada de uno
de los medidores. Dicho medidor ha sido configurado para operar bajo
una tarifa con dos tramos de discriminación horaria, lo que significa
que en su tarificación se aplicarían dos precios distintos para la energía
que haya sido consumida dentro de cada uno de los periodos a lo largo
del día.
‒ ‒
FIGURA 5. energía activa diaria importada durante una semana. se han aplicado una tarifa
con discriminación horaria de dos periodos.
‒ ‒
para probar aquellas características del sistema de telemedida que
deseen analizar con mayor detalle. Esto es de especial interés para los
alumnos que tengan intención de especializarse en el campo de la dis-
tribución eléctrica.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
funcionalidades adicionales como por ejemplo el análisis posterior de
los datos obtenidos.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
permite a los alumnos trabajar tanto en modo local (en el aula) como en
modo remoto (desde fuera de la universidad).
Esta metodología, que se ha aplicado ya durante dos cursos, ha recibido
críticas positivas por parte de los alumnos, mostrando que el enfoque
práctico para el estudio de AMI ha tenido una buena recepción.
7. AGRADECIMIENTOS
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Kezunovic, M., McCalley, J. y Overbye, T. (2012). Smart Grids and Beyond:
Achieving the Full Potential of Electricity Systems. Proceedings Of The
IEEE, 100(Special Centennial Issue), 1329-1341.
https://doi.org/10.1109/jproc.2012.2187131
Mak, S. y So, E. (2014). Integration of PMU, SCADA, AMI to accomplish
expanded functional capabilities of Smart Grid. 29th Conference On
Precision Electromagnetic Measurements (CPEM 2014).
https://doi.org/10.1109/cpem.2014.6898262
Panwar, N., Kaushik, S. y Kothari, S. (2011). Role of renewable energy sources
in environmental protection: A review. Renewable And Sustainable
Energy Reviews, 15(3), 1513-1524.
https://doi.org/10.1016/j.rser.2010.11.037
Parejo, A., Bracco, S., Personal, E., Larios, D., Delfino, F. y León, C. (2021).
Short-Term Power Forecasting Framework for Microgrids Using
Combined Baseline and Regression Models. Applied Sciences, 11(14),
6420. https://doi.org/10.3390/app11146420
Uribe-Perez, N., Angulo, I., de la Vega, D., Arrinda, A., Arzuaga, T. y Marron, L.
et al. (2017). TCP/IP capabilities over NB-PLC for Smart Grid
applications: Field validation. 2017 IEEE International Symposium On
Power Line Communications And Its Applications (ISPLC).
https://doi.org/10.1109/isplc.2017.7897118
World Health Organization (2020). WHO Director-General's opening remarks at
the media briefing on COVID-19 - 11 March 2020. Who.int website.
Fecha de última visita: 3 de septiembre de 2021.
https://www.who.int/dg/speeches/detail/who-director-general-s-opening-
remarks-at-the-media-briefing-on-covid-19---11-march-2020
‒ ‒
CAPÍTULO 24
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
proceso (OCDE, 2012). El informe elaborado por la Secretaria General
de la OCDE sobre perspectivas del medio ambiente alertan sobre las
consecuencias medioambientales de este proceso de urbanización:
La urbanización tiene consecuencias medioambientales tanto positivas
como negativas. En el lado positivo, hasta cierto nivel, la concentración
de actividades en las zonas urbanas puede permitir economías de escala
y facilitar las interacciones, lo que significa que la urbanización puede
conducir a un mayor crecimiento económico. Una mayor concentración
de personas suele facilitar el acceso a infraestructuras modernas y efi-
cientes para la prestación de servicios de energía y agua. En el lado
negativo, una mayor concentración de actividades económicas también
puede provocar mayores niveles de contaminación del aire exterior. La
urbanización también requiere políticas de transporte adaptadas para
evitar grandes complicaciones en el sistema de transporte, y la conges-
tión del tráfico puede tener consecuencias negativas para el medio am-
biente. Además, uno de cada tres habitantes de las ciudades de todo el
mundo -unos mil millones de personas- vive en un barrio marginal. Los
barrios marginales urbanos -con viviendas deficientes y servicios
inadecuados de agua, saneamiento y gestión de residuos- tienen conse-
cuencias negativas para la salud humana y el medio ambiente. Esto po-
dría agravarse con una mayor urbanización, a menos que se pongan en
marcha políticas más ambiciosas de desarrollo urbano y gestión me-
dioambiental. Sobre todo porque el número de personas que viven en
barrios marginales podría aumentar, a pesar del aumento previsto de los
niveles medios del PIB (OCDE, 2012).
Por otro lado, las ciudades son responsables aproximadamente del 70%
de los recursos consumidos a nivel global. Los edificios consumen más
del doble de energía que en 1970, representando el 40% de la energía
consumida en la actualidad (Agencia Internacional de la Energía, 2012;
Agencia Internacional de la Energía, 2016). Este hecho constituye a las
ciudades como importantes consumidoras de recursos energéticos, así
como importantes contribuyentes a la generación de gases de efecto in-
vernadero. La alta densidad poblacional, las actividades sociales y eco-
nómicas desarrolladas en las urbes, unido a la ineficiencia de los in-
muebles construidos, centran los debates sobre la sostenibilidad de las
ciudades contemporáneas (Bibri & Krogstie, 2017).
El aumento de la demanda energética mundial junto con la crisis climá-
tica se ha convertido en una gran preocupación pública. Esta situación
‒ ‒
ha llevado a centrar los esfuerzos en investigar y desarrollar políticas
para garantizar la eficiencia medioambiental y energética (Sebi et al.,
2019). Sin embargo, estos no son los únicos datos que han alertado so-
bre el problema de la sostenibilidad de las ciudades. Cabe destacar que
desde 2016 el 90% de los habitantes de las ciudades respiraba aire que
no cumplía las normas de seguridad establecidas por la Organización
Mundial de la Salud. La mala calidad del aire derivada de la contami-
nación atmosférica se estima que ha causado un total de 4,2 millones
de muertes en todo el mundo. Los niveles de contaminación del aire en
las ciudades tienen un alto impacto sobre la salud. Se estima que más
de la mitad de la población mundial ha estado expuesta a niveles de
contaminación del aire que superaban el estándar de seguridad al menos
2,5 veces (Naciones Unidas, 2020).
Además, la dinámica y desarrollo de las ciudades ha sufrido las conse-
cuencias derivadas de la crisis sanitaria generada por el COVID-19. Las
ciudades y comunidades se han visto amenazadas por la pandemia, ge-
nerando un impacto sin precedentes y afectando tanto a la salud pública
como al tejido económico y social (World bank Group, 2020). La ges-
tión de las ciudades ha sido un elemento clave en el proceso de lucha
contra el COVID-19 y la protección de la salud pública. Desde que se
detectó el primer caso en diciembre de 2019, se superó el millón de
contagios confirmados en tres meses como consecuencia de su alta tasa
de transmisión. Esta situación se ve agravada en las zonas densamente
pobladas, en las que, si además los sistemas de prestación de servicios
e infraestructuras son deficientes, puede suponer un desafío para la so-
ciedad. Estas circunstancias determinan que sea más necesario poten-
ciar los esfuerzos en contribuir a un desarrollo sostenible de las ciuda-
des, proporcionando espacios seguros e infraestructuras resilientes que
permitan establecer una red de seguridad frente a futuras crisis y pan-
demias.
‒ ‒
futura. Ya en 1988, Lave (1988) alertaba de que la sostenibilidad se
volvería más difícil de alcanzar si no se producía un cambio drástico en
la mentalidad y el comportamiento de las personas. Bowers (1997) en
su libro La Cultura de la negación afirmó:
[…] a medida que aprendemos más sobre los cambios que se producen
en los sistemas naturales degradados, así como sobre cómo las activi-
dades humanas están cambiando los sistemas meteorológicos que, a su
vez, alterarán la distribución de las especies (y, por tanto, nuestros pa-
trones de dependencia), enmarcar la solución de la crisis de una manera
que no implique un cambio radical en los fundamentos conceptuales y
morales del proceso educativo sólo añadirá de los fundamentos concep-
tuales y morales del proceso educativo no hará más que agravar nues-
tros problemas (Bowers, 1997, p. 2-3).
‒ ‒
Además, alcanzar las metas establecidas en el marco los ODS propor-
cionará notables beneficios a la sociedad, tal y como indican en el in-
forme de la Red Española de Desarrollo Sostenible (2018): “Los ODS
ofrecen un conjunto de objetivos integrados para ciudades más prós-
peras, justas y ambientalmente sostenibles. En particular, el ODS 11
exige que nuestras ciudades sean inclusivas, seguras, resilientes y sos-
tenibles. La Agenda de los ODS nos brinda un marco imparcial y a
largo plazo para lograr estos ambiciosos y nobles objetivos.”
En España, los ODS fueron considerados en el ordenamiento jurídico
español el 18 de junio de 2018, cuando el Gobierno de España creó y
definió en el artículo 11 del Real Decreto 419/2018 las funciones del
Alto Comisionado para la Agenda 2030. Entre las que destacan:
‒ Realizar el seguimiento de las actuaciones de los órganos
competentes de la Administración General del Estado para el
cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible y la
Agenda 2030.
‒ ‒
contribuya a alcanzar las metas establecidas en la Agenda 2030 y res-
ponda a los compromisos adquiridos en el marco de los ODS:
Es de capital importancia aumentar los esfuerzos encaminados a refor-
zar la función que desempeña la educación en la plena realización de
los derechos humanos, la paz, el ejercicio responsable de la ciudadanía
local y global, la igualdad de género, el desarrollo sostenible y la salud.
Los contenidos de dicha educación han de ser adecuados y contemplar
aspectos tanto cognitivos como no cognitivos del aprendizaje. Los co-
nocimientos, capacidades, valores y actitudes que necesitan todas las
personas para vivir una vida fructífera, adoptar decisiones fundamenta-
das y asumir un papel activo, tanto en el ámbito local como a nivel
global a la hora de afrontar y resolver los problemas planetarios, pueden
adquirirse mediante la educación para el desarrollo sostenible y la edu-
cación para la ciudadanía global -que a su vez incluye la educación para
la paz y los derechos humanos-, la educación intercultural y la educa-
ción para la comprensión internacional. Es imprescindible que el mo-
delo educativo planteado responda a los compromisos adquiridos en el
marco de los ODS, preparando a niños, niñas y jóvenes para vivir en
este mundo complejo e interconectado, incluyendo en el currículo edu-
cativo mecanismos que permitan dotar al alumnado de herramientas
para comprender el mundo, de competencias socio-afectivas para ma-
nejarse en él y de capacidad crítica, de manera que se fomenten valores
de dignidad humana, igualdad, justicia, solidaridad y participación, que
están en la base de una convivencia democrática pacífica (Ministerio
de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, 2018, p. 29)
‒ ‒
proporcionar herramientas y recursos que contribuyan a que tomen un
papel activo frente a estos retos es de vital importancia.
‒ ‒
producir los entornos virtuales a través de software, lo cual es un pro-
ceso costoso y consume un alto número de recursos. El video 360º es
un tipo de soporte que se encuentra muy extendido en la actualidad ya
que se ha integrado en plataformas y redes sociales, por lo que el alum-
nado está familiarizado con su utilización.
Los videos 360º se crean a partir de imágenes esféricas que permiten al
espectador tener un punto de vista libre. En este sentido, se asemejan a
los mundos virtuales en los que el usuario puede desplazarse en un en-
torno gráfico 3D y decidir qué punto de vista de la escena prefiere tener.
Esta característica es clave para diferenciar los videos 360º de los vi-
deos tradicionales (en estos segundos su grabación requiere que se fije
un punto de vista que el espectador no podrá modificar).
Para crear un video 360º es necesario utilizar equipos especializados.
En el mercado existen instrumentos específicos para la adquisición de
este tipo de videos: cámara 360º o cámara omnidireccional. Esta cámara
cuenta con un objetivo que cubre aproximadamente toda la esfera, in-
cluyendo el círculo completo del plano horizontal (vista panorámica).
Si bien en el eje vertical (donde se encuentra anclada al soporte del
trípode) no se obtienen imágenes, existen programas informáticos que
permiten eliminar dicho punto ciego. Para conseguir cubrir el amplio
campo de visión, la configuración de este tipo de instrumentos puede
utilizar diferentes técnicas:
‒ Cámaras con una lente: Este instrumento cuenta únicamente
con una lente del tipo ojo de pez. Esta técnica amplia el ángulo
para tomar el radio más grande, sin embargo, deja un ángulo
muerto justo en la parte posterior de la lente.
‒ Cámaras con dos lentes: este tipo de cámaras son las más co-
munes y también son denominadas ojo de pez dual. Cada una
de las lentes se encuentran enfrentadas, captando cada de ellas
una escena de al menos 180º. Las imágenes, grabadas de
forma simultánea, posteriormente son unidas a través de los
puntos de convergencia laterales. Este proceso, denominado
“cosido”, suele proporcionar un borde poco nítido e imposible
de eliminar en la zona de unión de ambas imágenes.
‒ ‒
‒ Cámaras con más de dos lentes: este tipo de cámaras son pro-
fesionales y de un precio mucho más elevado que las anterior.
Cuantas más lentes tenga la cámara, más pesado será el video
obtenido y requerirá de un software más potente. Sin embargo,
la calidad del video final es más nítida y se producen menos
errores de costura entre imágenes. Un ejemplo de este tipo de
instrumentos es la cámara Ponono, la cual que cuenta con 36
lentes.
‒ ‒
Por ello, es preferible que los videos generados con una finalidad do-
cente no tengan una duración excesiva. Si la duración de los videos se
limita a 10 – 15 minutos se facilita realizar más de una visualización de
estos, valorando diferentes puntos de vista y analizando diferentes as-
pectos de los escenarios captados.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
implementación de los recursos didácticos propuestos y las limitaciones
que presentan.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
complejidad el fenómeno objeto de análisis. En caso de que la duración
supere los 10 minutos, es recomendable realizar dos videos y mostrar
los procesos analizados en detalle para evitar así que la duración del
video sea excesiva.
En la Fase 2 se procede a la grabación del video. En este proceso se
recomienda el uso de un trípode y mantener estática la imagen para ga-
rantizar la calidad de la misma. Dado que no es necesario apuntar a un
determinado punto utilizando este equipo, se facilita la adquisición de
datos durante el proceso de grabación.
En la Fase 3 se procede a la descarga de los ficheros obtenidos de la
grabación. Estos serán utilizados en la Fase 4 como base para generar
el video que se mostrará al alumnado. La edición del video debe reali-
zarse con un programa informático especializado que permita el trata-
miento de imagen y video 360º. En el presente trabajo, se utilizó el soft-
ware Adobe Premier para incluir transiciones, etiquetas y créditos a los
videos generados.
Posteriormente, una vez finalizada la edición del video, en la Fase 5 se
procede a subirlo a una plataforma o repositorio que permita albergar
videos 360º. Este proceso requiere atribuir metadatos al fichero para
que la plataforma reconozca que el video es 360º y lo muestre como tal
en su visor. Configurar el video como público y proporcionar subtítulos
(en caso de que se haya incluido locución) facilitará la accesibilidad del
alumnado a estos recursos.
Por último, en la Fase 6, se procede a integrar estos materiales didácti-
cos en la plataforma Moodle de la asignatura. Este proceso se simpli-
fica, dado que insertar un visor y enlazar el video que hemos alojado en
el repositorio web es un proceso sencillo y solo requiere contar con el
enlace del video. De esta forma el alumnado tiene acceso al recurso en
el propio contexto de la asignatura, pudiendo acceder al video 360º sin
limitación espacial ni temporal. Además, puede visualizarlo tantas ve-
ces como considere necesario.
‒ ‒
4. RESULTADOS
‒ ‒
La Figura 4 muestra los diferentes elementos de interacción del video
360º integrados en la plataforma Youtube. Como podemos observar, en
la parte superior izquierda de la pantalla aparece un panel de navega-
ción que proporciona opciones de desplazamiento dentro del propio vi-
deo. Además, si se accede a través de un dispositivo móvil o tableta al
video 360º es posible utilizar este dispositivo para movernos dentro del
video (actualmente estos dispositivos cuentan con giroscopios que per-
miten esta funcionalidad). Los videos cuentan con etiquetas de navega-
ción, lo que permite identificar y acceder a los puntos más destacados
de estos de manera directa, sin necesidad de visualizar el video com-
pleto.
‒ ‒
Tras el desarrollo de los recursos y su posterior análisis, se han identi-
ficado que el uso de este tipo de tecnología proporciona notables ven-
tajas respecto a los materiales didácticos utilizados en la metodología
tradicional. Cabe destacar:
‒ Los videos 360º tienen un impacto potencial en la percepción
y la reflexión sobre el contenido. Brindar la oportunidad de
que el alumnado tome un papel activo en la visualización del
material didáctico, haciéndolo partícipe del contenido del vi-
deo como si se encontrara en el escenario, contribuye a au-
mentar su motivación y participación en el proceso de ense-
ñanza aprendizaje.
‒ ‒
‒ Los ficheros generados con cámaras 360º son de mayor ta-
maño que los videos tradicionales. El almacenamiento de es-
tos ficheros puede suponer un problema para su descarga y
edición. Además, algunos repositorios virtuales limitan el ta-
maño de los archivos para su almacenamiento.
5. CONCLUSIONES
‒ ‒
proporciona la sensación de encontrarse en otro tiempo y lugar. Al de-
dicar los videos 360º generados al análisis de casos reales relacionados
con la sostenibilidad ambiental en las edificaciones y su entorno, mos-
trando los instrumentos y metodología a emplear para su valoración y
discusión, se generan recursos clave para la adquisición de conocimien-
tos procedimentales y operativos. Además, la selección de escenarios
reales permite acercar a las aulas problemas existentes en la sociedad
actual, fomentando la reflexión y el aprendizaje significativo. Por otro
lado, la reflexión sobre estos problemas relacionados con la realidad
inmediata del alumnado fomenta la reflexión sobre problemas locales,
pudiendo ampliar su escala de análisis a un nivel global, así como atraer
la atención del alumnado a problemas que previamente han podido pa-
sar desapercibidos.
Por otro lado, aunque los vídeos 360º fueron diseñados para su visuali-
zación utilizando dispositivos de simulación de realidad virtual, los re-
cursos generados cuentan con diseño responsivo o adaptativo para que
puedan ser visualizados en diferentes tipos de pantallas, no limitándose
a un tipo exclusivo de dispositivo. Eliminar las barreras respecto a los
dispositivos a utilizar para su visualización, así como las limitaciones
espacio temporales para el acceso al conocimiento, facilita que el alum-
nado tenga acceso al mismo de forma ubicua y en cualquier momento.
En consecuencia, estas características hacen de los recursos generados
a partir de este soporte digital una herramienta clave para la docencia
universitaria. Los estudiantes de grados universitarios relacionados con
las disciplinas STEM pueden tener acceso a estos recursos, aportando
un análisis cuantitativo y cualitativo de problemas reales sobre sosteni-
bilidad que afectan a la sociedad actual.
6. REFERENCIAS
‒ ‒
Bernold, L. E., Spurlin, J. E., & Anson, C. M. (2007). Understanding our
students: A longitudinal‐study of success and failure in engineering with
implications for increased retention. Journal of engineering education,
96(3), 263-274.
Bibri, S. E., & Krogstie, J. (2017). Smart sustainable cities of the future: An
extensive interdisciplinary literature review. Sustainable cities and
society, 31, 183-212.
Bowers, C. A. (1997). The culture of denial: Why the environmental movement
needs a strategy for reforming universities and public schools. SUNY
Press.
Clark Blickenstaff, J. (2005). Women and science careers: leaky pipeline or
gender filter? Gender and education, 17(4), 369-386.
Lave, J. (1988). Cognition in practice: Mind, mathematics and culture in
everyday life. Cambridge University Press.
Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación. (2018). Plan de
Acción para la Implementación de la Agenda 2030. Hacia una Estrategia
Española de Desarrollo Sostenible.
http://www.exteriores.gob.es/Portal/es/SalaDePrensa/Multimedia/Public
aciones/Documents/PLAN%20DE%20ACCION%20PARA%20LA%20
IMPLEMENTACION%20DE%20LA%20AGENDA%202030.pdf
Naciones Unidas. (2015). Perspectivas de la urbanización mundial, revisión de
2014. Departamento de Asuntos Económicos y Sociales, Nueva York.
https://population.un.org/wup/Publications/Files/WUP2014-Report.pdf
Naciones Unidas. (2021, 5 de septiembre). Objetivo 11: Lograr que las ciudades
sean más inclusivas, seguras, resilientes y sostenibles.
https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/cities/
Naciones Unidas. (2021, 5 de septiembre). Objetivos de Desarrollo Sostenible. .
https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/objetivos-de-desarrollo-
sostenible/
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). (2012).
Perspectivas medioambientales de la OCDE hasta 2050. Las
consecuencias de la inacción.
http://www.naturvardsverket.se/upload/miljoarbete-i-
samhallet/internationellt-miljoarbete/multilateralt/oecd/outolook-2050-
oecd.pdf
Prensky, M. (2001). Digital natives, digital immigrants part 2: Do they really
think differently? On the horizon.
Real Decreto 419/2018, de 18 de junio, por el que se reestructura la Presidencia
del Gobierno. https://www.boe.es/diario_boe/txt.php?id=BOE-A-2018-
8154
‒ ‒
Red Española de Desarrollo Sostenible. (2018). Mirando al futuro: ciudades
sostenibles. . https://proyectos.irispressmz.com/thinkeurope/wp-
content/uploads/2018/12/Informe-urbano-REDS-ODS-2018-parte-I.pdf
Sebi, C., Nadel, S., Schlomann, B., & Steinbach, J. (2019). Policy strategies for
achieving large long-term savings from retrofitting existing buildings.
Energy Efficiency, 12(1), 89-105.
Seymour, E., & Hewitt, N. M. (1997). Talking about leaving. Westview Press,
Boulder, CO.
World Bank Group. (2020). Gestión de riesgos urbanos y de catástrofes.
Respuestas a COVID-19.
https://thedocs.worldbank.org/en/doc/575581589235414090-
0120022020/original/WorldBankUrbanDRMCOVID19Responses.pdf
‒ ‒
CAPÍTULO 25
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
Por lo tanto, el diseño de propuestas didácticas que integren este tipo
de recursos a través de metodologías innovadoras es de vital importan-
cia para la consolidación de esta área de estudio.
Por otra parte, el aprendizaje basado en la resolución de problemas es
una metodología ampliamente contrastada en la enseñanza de las mate-
máticas (Paredes et al., 2015; Castaño y Montante, 2015). A través de
una serie de pasos esquemáticos, el estudiante puede afrontar la resolu-
ción de cualquier problema matemático (Pólya, 1945). No obstante, una
de las principales ventajas de este enfoque es el desarrollo de los cono-
cimientos tanto técnicos como estratégicos por parte de los estudiantes
(Batanero y Díaz, 2005).
El presente trabajo incluye el diseño de una propuesta didáctica para
trabajar diferentes contenidos matemáticos a través del aprendizaje ba-
sado en problemas y un robot de bajo coste en 6º curso de Educación
Primaria. Con el fin de abaratar costes y de universalizar la potencial
implementación de la propuesta, los autores diseñan un material robó-
tico de coste económico muy reducido que podrá ser construido por los
propios estudiantes con materiales reciclados.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
‒ Detallar el diseño completo de la propuesta didáctica men-
cionada en el objetivo principal.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
La segunda fase de la investigación utiliza los resultados de la primera
para realizar una implementación en aula y análisis de resultados obte-
nidos. Esta segunda fase incluye los siguientes hitos:
‒ Implementación de la propuesta didáctica en un aula de 6º curso
de Educación Primaria (estudiantes de 11-12 años).
‒ ‒
3.2.1. Introducción y marco legislativo
3.2.2. Objetivos
‒ Estimar resultados.
‒ ‒
‒ Utilizar estrategias y diferentes procedimientos en algoritmos,
cálculos mentales, tanteos y estimaciones.
3.2.3. Contenidos
‒ ‒
3.2.4. Competencias
‒ ‒
decisiones de las actividades de forma consensuada con el resto de los
compañeros.
Sentido de la iniciativa y espíritu emprendedor (SIE): esta competencia
se trabajará a través de la capacidad de análisis, planificación y organi-
zación del equipo de trabajo, así como el establecimiento de roles de
cada uno de los integrantes, también al realizar las autoevaluaciones se
estaría trabajando esta competencia.
3.2.5. Temporalización
3.2.6. Recursos
‒ ‒
Los materiales que se necesitan son de bajo coste, y en la mayoría de
los casos están ya presentes en un aula, por lo que no supondrían un
gasto mayor.
En relación con los recursos materiales que la propuesta necesita para
poder ser llevada a cabo, encontramos el recurso robótico de bajo coste
(formado por un tren y un tablero con el recorrido), para su construcción
los materiales que se deben tener son: planchas de cartón, tapones, hilo,
palillos de brochetas, cilindro de cartón (puede ser reciclado de un rollo
de papel higiénico, por ejemplo), goma EVA y cinta adhesiva.
Dentro de las piezas de cartón que se necesitan y que se deben construir
en colaboración con los estudiantes tenemos las que aparecen en la Fi-
gura 1.
Los recursos humanos que se necesitan sería el docente que actúa como
guía-orientador del proceso de enseñanza aprendizaje y los propios es-
tudiantes que son los protagonistas de su proceso de aprendizaje.
‒ ‒
3.2.7. Metodología
‒ ‒
información, presentación de la solución (resumen de toda la informa-
ción adquirida a través de las fases previas), evaluación (durante todo
el proceso y desde distintas perspectivas, docente y alumno) e informe
y balance final (última fase de reflexión). (Torp y Sage, 1999)
Otra metodología que cobra especial importancia en la implementación
de esta propuesta didáctica es el aprendizaje cooperativo, el cual se basa
en el trabajo en grupo de un equipo que tiene un objetivo común (John-
son et al., 1999), en este caso, resolver el problema que se plantea en
cada una de las situaciones. Una de las principales ventajas del apren-
dizaje cooperativo es que favorece el desarrollo de un aprendizaje sig-
nificativo. Además, todos los estudiantes deben esforzarse en alcanzar
el objetivo propuesto (interdependencia positiva), puesto que no son
meros receptores de información si no que deben involucrarse en el
proceso de aprendizaje, construyendo conocimiento. Los estudiantes
ayudarán a sus compañeros, respetarán los distintos puntos de vista y
se adaptarán al ritmo de aprendizaje de los compañeros para alcanzar
juntos el objetivo que corresponda.
Las actividades de la propuesta serán llevadas a cabo a través de los
distintos grupos de trabajo. Los grupos de trabajo están formados por
4-5 estudiantes por equipo y la formación de los grupos se realiza de
forma heterogénea, en cuanto a niveles y ritmos de aprendizaje, facili-
tando así favorecer la atención a la diversidad del alumnado.
3.2.8. Actividades
‒ ‒
Las actividades se diseñan teniendo en cuenta el objetivo que debe tra-
bajar cada una de ellas, así como los contenidos, las competencias y los
criterios de evaluación y estándares de aprendizaje.
3.2.9. Evaluación
‒ ‒
3.2.9.2. Autoevaluación del alumnado
4. RESULTADOS
‒ ‒
basado en problemas y un robot de bajo coste para 6º curso de Educa-
ción Primaria, presentado en el apartado anterior. Dicho diseño ofrece
la posibilidad a cualquier docente de implementar la propuesta presen-
tada en un aula. Además, será el punto de partida de la segunda fase de
la investigación en la que se enmarca este trabajo y que incluye la im-
plementación en el aula de la propuesta y el posterior análisis de los
resultados obtenidos.
‒ ‒
FIGURA 2. Esquema del material de bajo diseñado para su uso en la propuesta didáctica.
‒ ‒
El resto de la información relativa a las actividades ya ha sido presen-
tada en el apartado 3.2 donde se incluye el diseño de la propuesta di-
dáctica.
‒ ‒
necesarios, realizar estimaciones (por ejemplo, para saber cuántas cajas
de cartón necesitan), realizar mediciones y construir los prototipos.
‒ ‒
construidos de la siguiente manera: al lado de cada posible trayecto para
el tren, se dispondrá una figura geométrica diferente (círculo, recta,
triángulo, cuadrado, rectángulo, pentágono, etc.). Al pasar por un tra-
yecto, el tren “recoge” esa figura geométrica y el grupo podrá contar
con ella para el diseño de su logotipo. Cada grupo debe elegir un reco-
rrido concreto a seguir por el tren (en función de las figuras geométricas
con las que quieran contar) y después debe programar el tablero para
que el tren realice dicho recorrido.
De esta manera, los estudiantes se familiarizan con las mecánicas que
se utilizarán en el resto de las actividades (diseño y programación de
trayectorias) y también trabajan contenidos geométricos.
‒ Estimar resultados.
‒ ‒
Los contenidos matemáticos que se desarrollan a través de esta activi-
dad son: noción de algoritmo, números enteros, cálculo mental, resolu-
ción de problemas, planteamiento de pequeñas investigaciones en con-
textos numéricos.
La actividad se desarrolla durante dos sesiones en las que los estudian-
tes trabajarán para encontrar la solución a algunas situaciones proble-
máticas con datos numéricos concretos (sobre el número de pasajeros).
Se mantendrán los grupos de trabajo creados durante la actividad de la
construcción del recurso.
Para desarrollar esta actividad será necesario añadir unos elementos al
tablero construido. Dichos elementos son una serie de números enteros
que se colocan al lado de cada una de las diferentes vías del tablero. De
manera que, cuando el tren pasa por una vía, se considera que el número
de viajeros aumenta o disminuye en función de si el número es positivo
o negativo. El docente informará de los números que deben colocar en
cada vía, así como el número de pasajeros inicial con los que cuenta el
tren. Cada grupo de estudiantes debe diseñar el trayecto a seguir por el
tren para terminar con el máximo número de pasajeros posible, pero sin
que se sobrepase en ningún momento el aforo máximo permitido. Por
lo tanto, los estudiantes han de considerar las distintas opciones, pues
en cada uno de los posibles recorridos, se verán involucradas operacio-
nes de suma y resta de pasajeros. Dependiendo del nivel académico de
cada grupo, será posible introducir otras operaciones aritméticas; por
ejemplo, “el número de pasajeros se multiplica por 3 en esta estación”
(representado en el tablero mediante “x3”) o “en esta estación se bajan
la mitad de los pasajeros” (representado en el tablero mediante “:2”).
Cuando sea posible, los estudiantes deberán realizar las estimaciones
mediante estrategias de cálculo mental. El grupo ha de aportar una so-
lución conjunta al problema, por lo que los estudiantes deberán trabajar
de manera cooperativa, argumentando sus ideas y empleando herra-
mientas de razonamiento lógico para llegar a un consenso. Cada grupo
debe elegir una solución concreta y programar el tablero para que el
tren realice el trayecto escogido.
‒ ‒
4.3.4. Actividad: presupuesto del viaje
‒ Estimar resultados.
‒ ‒
la situación de que dos caminos que finalizan en el mismo destino ten-
gan costes diferentes. El objetivo de cada grupo de trabajo es determi-
nar un camino concreto y calcular el coste de los peajes pagados. En la
justificación de las decisiones tomadas se puede tener en cuenta infor-
mación sobre trayectos con más afluencia de pasajeros considerando
datos de la anterior actividad (si se espera tener más pasajeros que pa-
guen sus billetes eligiendo un trayecto concreto, quizás se justifique un
peaje un poco mayor). Cada grupo debe elegir una solución concreta y
programar el tablero para que el tren realice el trayecto escogido.
Por otro lado, es posible plantear esta actividad para trabajar la suma de
números decimales (si se ha de calcular el coste de todos los peajes) o
para trabajar la resta de números decimales (si se establece un presu-
puesto inicial y se ha de ir descontando el importe de cada peaje a pa-
gar).
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
el estudiante, convirtiendo a este en el centro de su propia experiencia
de aprendizaje (Pinto, Barrera y Pérez, 2015).
Uno de los retos a los que deben enfrentarse los docentes en la actuali-
dad es el desarrollo por parte de los estudiantes de las diferentes habi-
lidades dentro del enfoque STEM (Ferrada et al., 2019). El enfoque
STEM, en el cual se suele contextualizar la robótica educativa, tiene
una base fundamentada en los principios del constructivismo (Ocaña,
Romero, Gil, y Codina, 2015). De hecho, es a través de la teoría cons-
tructivista, en la que se enmarcan las propuestas didácticas que incluyen
robótica educativa, donde mejor se entiende el estímulo de la creativi-
dad y el fomento de la adquisición de nuevos conocimientos que dichas
propuestas aportan (Papert, 1993).
Por otro lado, no sólo se tiene en cuenta el uso de robótica educativa en
las aulas sino el propio proceso de desarrollo de los materiales a em-
plear. Así, la construcción y utilización de robots en los diferentes es-
pacios educativos ofrecen una oportunidad atractiva e innovadora de
aprendizaje a los estudiantes. De manera que estos puedan poner en
práctica distintos conocimientos transversales de ciencias, tecnología,
ingeniería y matemáticas (Ocaña, 2012).
Uno de los materiales más empleados en las diferentes propuestas di-
dácticas, especialmente en Educación Infantil y en Educación Primaria,
es “BeeBot”, un robot comercial. Este material tiene el potencial de
mejorar el desarrollo de conceptos matemáticos en estudiantes en las
primeras etapas educativas (entre 5 y 8 años). En particular, facilita el
desarrollo de estrategias para la resolución de problemas y el pensa-
miento relacional (Highfield, Mulligan, y Hedberg, 2008).
‒ ‒
menos recursos. Por ello, se incorpora un diseño propio del material
empleado en la propuesta didáctica y cuya construcción pueda ser asu-
mida directamente por el docente y los estudiantes en el aula.
Los robots y materiales de bajo coste que pueden construirse de manera
sencilla y con materiales asequibles suelen englobarse en una corriente
conocida por sus siglas en inglés DIY (“Do It Yourself” o “Hazlo Tú
Mismo”). En la literatura existen algunas investigaciones que presentan
propuestas para construcción de robots de bajo coste DIY (Vandevelde
et al., 2016). Sin embargo, la mayoría de dichas propuestas están diri-
gidas a estudiantes de Educación Secundaria (entre 12 y 18 años). Por
otro lado, a menudos estas propuestas precisan de materiales electróni-
cos y de conocimientos específicos para su construcción y manejo.
Algunas propuestas como la de Ferrada et al. (2019) apuestan por una
solución intermedia, empleando un robot comercial llamado “BeeBot”
pero animando a los docentes a desarrollar sus propias actividades y
combinar dicho robot con otros materiales de bajo coste. Sin embargo,
es necesario afrontar el gasto inicial del robot comercial.
‒ ‒
matemáticos. Sin duda, la capacidad de aplicar conocimientos matemá-
ticos es más difícil de desarrollar por parte de los estudiantes que los
propios conocimientos, dado que para la primera se requiere de una
combinación de conocimientos tanto técnicos como estratégicos.
Pólya (1945) establece los pasos a seguir para resolver un problema
matemático. En primer lugar, es imprescindible comprender el pro-
blema planteado; el estudiante ha de localizar en el enunciado la infor-
mación de la que dispone y distinguir los datos de las soluciones bus-
cadas. A menudo, resulta interesante que el estudiante reformule las
preguntas o plantee preguntas intermedias que le acerquen a la com-
prensión del problema planteado. En segundo lugar, se ha de concebir
un plan; en función de las herramientas de las que dispone cada estu-
diante y de los conocimientos estratégicos, cada alumno podrá diseñar
un plan de resolución diferente y afín a sus propias características. En
tercer lugar, el estudiante ha de ejecutar el plan que ha diseñado, ha-
ciendo uso de sus conocimientos técnicos. Por último, se ha de revisar
la solución obtenida y el procedimiento seguido, de manera que se
pueda comparar la solución con otras más eficaces y detectar posibles
errores cometidos (Pólya, 1945).
En esta propuesta didáctica se trabaja la resolución de problemas mate-
máticos en la etapa de educación primaria. Las actividades planteadas,
lejos de restringirse a ejercicios sistemáticos, incluyen problemas abier-
tos donde existen diferentes posibilidades para llegar a la solución bus-
cada. Los estudiantes pueden desarrollar sus conocimientos tanto téc-
nicos como estratégicos. Además, se favorece la puesta en práctica por
parte de los estudiantes de los pasos establecidos por Pólya para la re-
solución de los problemas planteados en las diferentes actividades.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
Cabe destacar que una de las principales aportaciones de esta investi-
gación es el diseño de un material de bajo coste económico (práctica-
mente nulo) que puede ser construido por los propios estudiantes, sin
necesidad de conocimientos técnicos complejos. Esta cualidad permite
acercar dicha propuesta a cualquier aula de Educación Primaria, inde-
pendientemente de los recursos disponibles ni del perfil del profeso-
rado. De manea que se evitan dos de los principales inconvenientes a la
hora de emplear la robótica educativa en las aulas, manteniendo las ven-
tajas que esta ofrece para los estudiantes.
La metodología empleada de aprendizaje basado en problemas permite
desarrollar los conocimientos tanto técnicos como estratégicos del
alumnado, así como fomentar la construcción y el uso de materiales
manipulativos. De hecho, se utilizan la robótica como herramienta ma-
nipulativa y los contenidos matemáticos como herramienta estratégica,
para la resolución de problemas.
Tanto el diseño de la propuesta como el del recurso robótico presenta-
dos, permiten intercambiar las actividades diseñadas en este trabajo por
otras diferentes. De manera que cada docente puede adecuar dichas ac-
tividades a las necesidades específicas de sus estudiantes, así como a
los contenidos matemáticos a trabajar. Por ejemplo, podrían trabajarse
contenidos como la magnitud temporal (horarios del tren), aumentar la
dificultad de las operaciones con números decimales (precios de bille-
tes de los pasajeros), cálculo de porcentajes (descuentos en los precios
de los billetes), etc.
Como prospectiva, los autores se plantean diferentes objetivos enmar-
cados dentro de una misma investigación. En primer lugar, se espera
implementar la propuesta didáctica diseñada en un aula de Educación
Primaria y analizar los resultados obtenidos, tanto por los estudiantes
como por los docentes. Por otro lado, se va a diseñar un taller educativo
para docentes, de manera que se forme a estos en la construcción del
material desarrollado y la implementación en el aula de propuestas si-
milares a la presentada en este trabajo.
‒ ‒
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8. REFERENCIAS
‒ ‒
National Council of Teachers of Mathematics (2000). Principles and standards for
school mathematics. Reston, VA: National Council of Teachers of
Mathematics.
Ocaña, G. (2012). Robótica como asignatura en enseñanza secundaria. Resultados
de una experiencia educativa. Espiral. Cuadernos del Profesorado, 5
(10), 56-64.
Ocaña, G., Romero, I., Gil, F. y Codina, A. (2015). Implantación de la nueva
asignatura “Robótica” en Enseñanza Secundaria y Bachillerato.
Investigación en la Escuela, 87, 65-79.
Orden ECD/65/2015, de 21 de enero, relaciones entre las competencias, los
contenidos y evaluación de Primaria, ESO y Bachillerato. Boletín Oficial
del Estado, 25, de 29 de enero de 2015, 6986-7003.
https://www.boe.es/eli/es/o/2015/01/21/ecd65
Papert, S. (1993). The children's machine: rethinking school in the age of the
computer. New York, NY: Basic Books.
Paredes, H. D. H., Gutiérrez, E. A. M., López, J., & Giraldo, L. E. P. (2015).
Aprendizaje basado en problemas como potencializador del pensamiento
matemático. Plumilla Educativa, 15(1), 299-312.
Pinto, M., Barrera, N. & Pérez, W. (2010). Uso de la robótica educativa como
herramienta en los procesos de enseñanza. Ingeniería, Investigación y
Desarrollo, 10 (1), 15-23.
Pólya, G. (1945). How to Solve It. Princeton, NJ: Princeton University Press.
Torp, L. & Sage, S. (1999). El Aprendizaje Basado en Problemas: desde el Jardín
de Infancia hasta el Final de la Escuela Secundaria. Amorrortu Editores.
Vandevelde, C., Wyffels, F., Ciocci, M. C., Vanderborght, B., & Saldien, J.
(2016). Design and evaluation of a DIY construction system for
educational robot kits. International Journal of Technology and Design
Education, 26 (4), 521-540.
‒ ‒
CAPÍTULO 26
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
dando lugar a una pobre implicación en el desarrollo de estos por parte
del profesorado.
A pesar de esto, teniendo en cuenta la importancia que ha ido adqui-
riendo con el paso de los últimos años el desarrollo de la competencia
digital y el pensamiento computacional, así como el uso de las Tecno-
logías de la Información y Comunicación (TIC), es necesario garantizar
la formación del alumnado en el empleo de nuevas tecnologías para
favorecer su adaptación a las necesidades del mercado laboral actual.
Por otra parte, la incorporación de la robótica educativa en los proyec-
tos de los centros educativos se presume como un recurso didáctico
ideal para el desarrollo de las competencias clave y la motivación del
alumnado, al lograr con el empleo de dicho recurso que se sienta mayor
protagonista de su proceso de enseñanza-aprendizaje, gracias a la ma-
nipulación de los diferentes elementos que componen el robot y su pro-
gramación. A su vez, Márquez y Ruiz (2014) añaden que el uso de la
robótica educativa en el contexto académico supone una herramienta
de aprendizaje de gran utilidad, gracias a que enriquece el ambiente de
trabajo hasta alcanzar un clima ideal para la colaboración y la interac-
ción para desarrollar proyectos en equipo.
En esta línea, la propuesta didáctica Reinventando mBots nace con el
fin de emplear los robots educativos mBot y un kit de piezas realizadas
con impresora 3D, adaptadas al robot, para impartir algunos de los con-
tenidos curriculares de la Comunidad Autónoma de Canarias, concre-
tamente en la materia de Tecnología. De esta forma, se persigue que el
alumnado se introduzca en el mundo de la programación y la robótica
en edades tempranas y crear una propuesta didáctica que pueda ser
adaptada a otros centros educativos que dispongan de los recursos ne-
cesarios para su ejecución, favoreciendo el uso de las nuevas tecnolo-
gías y el desarrollo de la competencia digital.
Dicha intervención consiste en el desarrollo de una serie de actividades
que, utilizando la robótica como medio para la impartición de conteni-
dos, persigue que el alumnado se implique en el proceso de enseñanza-
aprendizaje y trabaje en equipo y de forma colaborativa.
‒ ‒
2. OBJETIVOS
Esta propuesta didáctica surge con el objetivo de dar uso a parte de los
recursos didácticos de carácter tecnológico con los que cuentan algunos
centros educativos y que actualmente no se emplean con asiduidad, para
la impartición de ciertos contenidos curriculares, en el área de Tecno-
logía, con el fin de mejorar el proceso de enseñanza-aprendizaje.
A continuación, se procede a exponer, de manera más desglosada, los
objetivos que se buscan alcanzar con la puesta en práctica de esta expe-
riencia:
‒ Emplear la robótica educativa como principal recurso para la
impartición de algunos de los contenidos recogidos en el cu-
rrículo de Educación Secundaria Obligatoria de la Comunidad
Autónoma de Canarias.
Además, este documento tiene como objeto analizar los resultados ob-
tenidos, tras la puesta en práctica de la experiencia, en las encuestas
‒ ‒
realizadas en un grupo-clase formado por 15 estudiantes de 3º de Edu-
cación Secundaria Obligatoria en un centro educativo situado en la isla
de Fuerteventura.
3. METODOLOGÍA
3.1. MATERIALES
‒ ‒
En concreto, el centro seleccionado para desarrollar la experiencia
cuenta con ocho robots mBot y una impresora 3D, por lo que el diseño
de la propuesta tuvo en cuenta el aprovechamiento de dichos recursos.
‒ ‒
un servomotor conectado al mBot, así como un conjunto de engranajes
intercambiables que giran cuando el robot avanza o retrocede.
Además, como parte de las actividades, se solicita al alumnado que
plantee un diseño propio mediante el empleo del modelado 3D para
realizar una pieza que pueda a ser levantada por la grúa que posee el
robot tras las modificaciones previas, utilizando el software libre online
Tinkercad. Dicho diseño también fue realizado con la impresora 3D y
añadido a los diferentes kits de piezas.
‒ ‒
3.1.4. Realidad Aumentada
3.2. MÉTODO
‒ ‒
un análisis cualitativo, analizando la acogida que ha tenido el alumnado
a las actividades realizadas en esta propuesta.
4. RESULTADOS
‒ ‒
superiores relacionados con la rama de ciencias de la salud, tal y como
se refleja en el Gráfico 1.
No contesta
27%
‒ ‒
TABLA 1. Preferencias de las materias del alumnado.
Por otra parte, se preguntó a los individuos sobre su interés con respecto
a la materia de Tecnología, de manera que se les solicitó que lo puntua-
sen mediante una escala numérica entre 0 y 10 puntos, tal y como se
muestra en el Gráfico 2, siendo los resultados bastante positivos en
cuanto a que la asignatura obtuvo una puntuación media notable de 8,3
puntos. Además, la puntuación mínima obtenida en dicha pregunta fue
de 6 puntos, lo que refleja que el alumnado manifiesta cierto grado de
atracción e interés por la tecnología.
7% 10 puntos
20%
13%
9 puntos
8 puntos
20%
7 puntos
40%
6 puntos
‒ ‒
En esta misma línea, a la pregunta de si creían que lo que aprendían en
la clase de la materia de Tecnología le servía de utilidad para desenvol-
verse en su vida diaria, la gran mayoría del alumnado afirmó que sí le
resultaba útil (86,7%). Sin embargo, se halló cierta disparidad y discre-
pancias a la hora de justificar la respuesta. En este sentido, llama la
atención que entre sus observaciones se encontraba el hecho de que ser-
vía para conocer más sobre las máquinas, los aparatos electrónicos y las
nuevas tecnologías. Cabe señalar que dos de los individuos del grupo
encuestado se abstuvieron de responder a dicha pregunta formulada en
la encuesta.
Cuando se preguntó al alumnado si había empleado alguna vez el robot
mBot con anterioridad a la experiencia, únicamente el 40% indicó que
había empleado el robot, por lo que la mayoría del grupo no habría uti-
lizado jamás la robótica educativa (53,3%). Asimismo, uno de los indi-
viduos afirmó haber trabajado con otro robot, aunque no especificó de
cuál se trataba. Esto queda reflejado en el Gráfico 3.
40%
Ha trabajado con otro
53% robot
No ha trabajado con
7% robots
Por otro lado, la encuesta solicitó a los estudiantes indicar si alguna vez
habían utilizado impresoras 3D, lo que reflejó que el 73,3% de los en-
cuestados afirmó haber realizado trabajos en alguna ocasión usándola
como recurso, tal y como muestra el Gráfico 4. El interés en esta res-
puesta se centró en el hecho de que la pieza que iba a ser elevada por la
grúa acoplada al robot iba a diseñarse empleando una impresora 3D.
‒ ‒
GRÁFICO 4. Utilización de impresoras 3D con anterioridad.
‒ ‒
4.3. ENCUESTA FINAL
‒ ‒
Asimismo, la encuesta planteaba cuestiones para valorar si el programa
de actividades realizado les había resultado útil. Como resultado, el
73,3% de los encuestados contestó afirmativamente (Gráfico 5) y entre
sus respuestas señalaban que habían aprendido a programar, a saber
más sobre la robótica, y a manejar mejor las tecnologías.
7%
13% Sí le encuentra utilidad
No le encuentra utilidad
7%
73% No sabe
No contesta
Por otro lado, el 73,3% del alumnado que conforma el grupo-clase se-
ñaló que el empleo de la robótica educativa le había ayudado a entender
algunos de los contenidos curriculares impartidos en la materia de Tec-
nología (Gráfico 6). Entre las respuestas indicaban que les había ayu-
dado a comprender los contenidos relacionados con estructuras y me-
canismos. Uno de los sujetos manifestó que había comprendido mejor
las estructuras debido a que al trabajar de manera visual pudo entender
los conceptos mejor.
13%
Sí ayuda
14%
No ayuda
73% No contesta
‒ ‒
Además, el 93,3% de los estudiantes encuestados, lo que supone casi la
totalidad del grupo salvo un individuo que se abstuvo, manifestaron que
les gustaría realizar más actividades relacionadas con la robótica y la
programación haciendo hincapié en que sería positivo utilizar otros pro-
gramas o robots con otras características o posibilidades.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
robótica educativa, entendida como herramienta pedagógica construc-
tivista, pasa a ser un recurso didáctico con gran capacidad para fomen-
tar y ser un apoyo al proceso de enseñanza-aprendizaje, resultando ser
gran utilidad para entender contenidos y conceptos complejos y abs-
tractos de diferentes materias curriculares (Bozikovich, y Romero,
2019). Además, la robótica educativa como una herramienta de apoyo
a los procesos de aprendizaje, permite al alumnado generar nuevos co-
nocimientos a través de su manipulación y experimentación (Márquez,
y Ruiz, 2014).
Sin embargo, esta no pretende ser solamente un recurso didáctico más
a emplear en las aulas para aprender y entender ciertos conceptos, sino
que según afirma Rebollo (2012) “la construcción de robots educativos
resulta muy motivadora para el alumnado de Enseñanza Secundaria y
es una manera atractiva e innovadora de aprender poniendo en práctica
todos los conocimientos teóricos de Ciencias y Tecnología”.
En la experiencia llevada a cabo en el centro se pudo poner de mani-
fiesto cómo el hecho de que el alumnado pudiera implicarse en la cons-
trucción de las modificaciones del robot, su manipulación y programa-
ción para trabajar con algunos contenidos curriculares tuvo una gran
acogida y los propios estudiantes evidenciaron en las encuestas lo po-
sitivo que había sido poder visualizar algunos conceptos mediante el
uso de la robótica como recurso.
Por otro lado, según Vega, y Cañas (2014), la tendencia a la automati-
zación de las tareas diarias hace que actualmente sea imprescindible
formarse en el uso de nuevas tecnologías, por lo que su introducción en
los centros educativos facilita al alumnado habilidades y conocimientos
que le serán de utilidad, tanto en su vida diaria como en su futuro
desempeño laboral. También añaden que es por ello que muchos cen-
tros de investigación y empresas trabajan en la línea de desarrollo de
ciertos materiales o kits con los que fabricar y construir robots en el
aula, con el fin de fomentar el aprendizaje de conceptos y contenidos
de carácter más teórico, especialmente en materias como Matemáticas,
Física o Tecnología.
‒ ‒
Además, Balcells-Camps (2012) hace la distinción, dentro de la robó-
tica educativa, entre robótica de autoconstrucción y robótica comercial
indicando que ambas se basan en una didáctica constructivista funda-
mentada en la fabricación y el diseño de robots por parte del alumnado
para solucionar diferentes problemas que se le planteen en el aula. No
obstante, la robótica comercial emplea kits estándar diseñados con fines
académicos, mientras que la de autoconstrucción emplea recursos de
bajo coste e incluso reciclables. Asimismo, afirma que la robótica co-
mercial implica unos costes iniciales superiores que en el caso de la de
autoconstrucción, pero la capacidad de reutilización durante periodos
prolongados de tiempo y la facilidad con la que tanto los estudiantes
como los docentes aprenden sobre su programación y construcción, ha-
cen que cada vez esta categoría tenga cada vez más seguidores dentro
de los centros educativos.
Sin embargo, según Román-Graván et ál. (2017), ambas modalidades
de robótica se centran en el campo pedagógico, es decir, requieren de
la construcción de un prototipo tecnológico con una utilidad concreta
que favorezca el desarrollo de habilidades, destrezas y competencias
clave para el estudiantado.
En la propuesta didáctica Reinventando mBots se ha perseguido encon-
trar un punto intermedio entre ambas modalidades, de manera que apro-
vechando la impresora 3D y los robots comerciales de los que disponía
el centro en el que se llevó a la práctica, se han diseñado modificaciones
para los mBots que permiten dar mayor número de aplicaciones al
mismo. La creación y uso de estos kits en el aula surge de la idea de
que el alumnado participe de forma activa en el proceso de aprendizaje,
convirtiéndose en el protagonista de este, mediante la construcción y
manipulación de los diferentes elementos que componen el robot.
Por otra parte, conforme a lo publicado por el Ministerio de Educación
y Formación Profesional (2017) en el documento resultado de la ponen-
cia “Programación, robótica y pensamiento computacional en el aula”,
el currículo nacional actual apenas incluye contenidos curriculares re-
lacionados con la robótica educativa, la programación y el pensamiento
computacional, aunque algunas Comunidades Autónomas han empe-
zado a incluir dichos contenidos y conocimientos en diferentes
‒ ‒
materias, especialmente en Educación Secundaria Obligatoria. Sin em-
bargo, estas asignaturas tienen un carácter meramente optativo, por lo
que un alumno o alumna puede cursar toda la educación obligatoria sin
haber recibido formación en relación a estas destrezas y habilidades.
Por ello, uno de los objetivos marcados al inicio de esta propuesta di-
dáctica fue conseguir integrar contenidos curriculares mediante la ela-
boración de actividades que necesariamente requieran del uso de la ro-
bótica y la programación para poder concluir las mismas con éxito. Tal
y como se reflejó en las encuestas, el alumnado manifestó que las acti-
vidades le habían ayudado a asimilar algunos de los conceptos que se
habían impartido con anterioridad gracias a la utilización del robot.
Según Pears et ál. (2007), otro de los aspectos clave a la hora de intro-
ducir a los estudiantes en el mundo de la programación es el lenguaje
que utilizar, además de tener en cuenta la pedagogía, los recursos di-
dácticos y herramientas que serán necesarias durante el proceso de en-
señanza aprendizaje. Como muchos de los estudiantes participantes en
la experiencia no habían trabajado nunca con robótica ni programación
se optó por utilizar el programa mBlock, que permitía emplear un len-
guaje de programación muy intuitivo mediante bloques, lo que tuvo
muy buena acogida.
La experiencia realizada se diseña de manera que la propuesta pueda
ser replicada en otros centros educativos que posean de las nuevas tec-
nologías y recursos didácticos necesarios para su realización, adap-
tando la metodología y recursos a los diferentes contextos y caracterís-
ticas del alumnado. Además, dicha intervención se expone como punto
de partida para líneas de desarrollo futuras orientadas al diseño y fabri-
cación de las piezas modulares para un robot de bajo coste, cuyos re-
cursos didácticos sean accesibles a los centros educativos y que dis-
ponga de varias modalidades que faciliten la impartición y desarrollo
de algunos de los contenidos curriculares de diferentes niveles educati-
vos y materias, con el fin de fomentar que el alumnado adquiera de
habilidades, destrezas y conocimientos relacionados con las nuevas tec-
nologías que les serán de utilidad en el futuro.
‒ ‒
Por consiguiente, otra de las posibles líneas futuras pasaría por la am-
pliación de los kits de piezas 3D realizadas para llevar a cabo la presente
experiencia en las aulas, mediante el diseño y fabricación de elementos,
basados en actuadores y sensores, que tengan una función didáctica, y
que sean adaptables o puedan ser modificados, no sólo para su uso con
los robots mBot, sino que puedan ser reutilizados en otros robots co-
merciales para impartir contenidos curriculares de diferentes asignatu-
ras. Además, se deberían elaborar recursos, herramientas y manuales
que ayuden y faciliten el aprendizaje de determinados lenguajes de pro-
gramación, así como que favorezcan la transición de la programación
por bloques a un lenguaje de programación mediante texto.
De esta forma, se podría optar por la creación de un banco de recursos
que fueran accesibles a todos los docentes y centros educativos con el
fin de facilitar la formación del profesorado en este ámbito, tener acceso
a herramientas innovadoras que puedan utilizar en el aula, así como
fomentar el trabajo de manera colaborativa para la creación de materia-
les didácticos, relacionados con la robótica educativa y la programa-
ción, adaptados a contenidos curriculares de diferentes cursos y mate-
rias.
Con la experiencia llevada a cabo en un aula de un centro de Educación
Secundaria Obligatoria para la materia de Tecnología, se evidencia
cómo la utilización de la robótica educativa y la programación se logra
un elemento de participación y motivación de los estudiantes, como ya
señalaba Rebollo (2012). Además, al plantear que el alumnado pudiera
diseñar y construir la pieza que iba a ser levantada por la grúa acoplada
al robot y la realización de actividades relacionadas con el currículo, se
facilita el aprendizaje de algunos de los conceptos básicos relacionados
con la materia de Tecnología.
El uso del aprendizaje basado en proyectos (ABP) se postula como una
metodología que favorece la implementación de experiencias y activi-
dades relacionadas con la robótica educativa y la programación, de ma-
nera que los estudiantes pueden relacionar los conocimientos adquiri-
dos, de manera teórica, con casos reales mediante la realización de un
proyecto en el aula. De esta manera, esta propuesta didáctica relacio-
nada con la robótica permitió al alumnado comprender conceptos y
‒ ‒
conocimientos relacionados con circuitos eléctricos y electrónicos, me-
canismos, estructuras, entre otros, teniendo en cuenta las fases de ela-
boración de un proyecto técnico, gracias a la realización de experien-
cias en vivo.
De la misma forma, la utilización del aprendizaje basado en proyectos
al igual que la metodología didáctica empleada y el uso de la robótica
como principal recurso de adquisición de conocimientos, dan como re-
sultado una mayor implicación y motivación de los estudiantes en el
proceso de enseñanza-aprendizaje, que se sienten protagonistas del
mismo y tienen mayor grado de implicación y satisfacción al poder
comprobar los resultados de las diferentes actividades y experiencias
planteadas de manera práctica y visual.
Lo expuesto con anterioridad no ha hecho más que constatar las ideas
de Bozikovich, y Romero (2019), dado que en esta intervención didác-
tica la robótica educativa manifiesta ser un recurso que favorece la ad-
quisición de conocimientos en el proceso de enseñanza-aprendizaje de
los contenidos curriculares de manera práctica y significativa, tal y
como se demuestra en las encuestas realizadas al alumnado durante el
desarrollo de la misma. También concuerda con las ideas de Márquez,
y Ruiz (2014), que exponen la utilidad de este tipo de herramientas para
el alumnado al aplicar la experimentación como parte del proceso de
enseñanza-aprendizaje.
Por otra parte, cabe resaltar que para la realización con éxito de este
tipo de intervenciones se requiere que los docentes se formen debida-
mente y, además, tenga un alto grado de implicación en la elaboración
y puesta en práctica de los recursos didácticos innovadores a emplear,
ya que es necesaria una gran dedicación en cuanto al tiempo de diseño
de estos. Además, los centros educativos deben contar con algunos de
los recursos tecnológicos necesarios para que puedan llevarse a cabo
las diferentes actividades, lo que conlleva unos costes económicos que
en ocasiones no pueden asumirse.
Por último, la propuesta didáctica resulta bastante motivadora para el
alumnado al tratarse de actividades y experiencias de carácter práctico
muy variadas que desarrollan diferentes contenidos curriculares, y se
‒ ‒
valoró este factor a la hora de realizar las encuestas para que el alum-
nado pudiera puntuar todas las actividades llevadas a cabo con el fin de
poder establecer mejoras futuras en cuanto al diseño e implementación
de la misma. Dichos resultados ponen de manifiesto, de manera general,
la buena acogida que han tenido todas las actividades y experiencias
desarrolladas utilizando la robótica educativa por parte del alumnado.
La manipulación, fabricación, construcción y programación del robot
mBot transformó algunos contenidos curriculares en actividades diná-
micas, de carácter práctico, que fomentaban el trabajo colaborativo, la
motivación de los estudiantes y la utilización del ordenador en el aula,
evitando encasillarse en la metodología clásica y tradicional.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Rebollo, G. O. (2012). Robótica como asignatura en enseñanza secundaria.
Resultados de una experiencia educativa. Espiral. Cuadernos del
Profesorado, 5(10), 56-64
http://repositorio.ual.es/bitstream/handle/10835/5589/940-3306-1-
PB.pdf?sequence=1
Rimmer, J. (2018). Meccano Pocket: Crane. Thingiverse.
https://www.thingiverse.com/thing:2968047
Román-Graván, P., Hervás-Gómez, C., y Guisado-Lízar, J. L. (2017).
Experiencia de innovación educativa con robótica en la Facultad de
Ciencias de la Educación de la Universidad de Sevilla (España). In
Innovación docente y uso de las TIC en educación: CD-ROM, 2017,
ISBN 9788497479707, pág. 16 (p. 16).
https://idus.us.es/bitstream/handle/11441/65614/2017%20Capitulo%20L
ibro%20-%20Buenas%20Practicas%20con%20TIC%20-
%20Malaga%20Roman-Hervas-Guisado.pdf?sequence=1&isAllowed=y
Santana-Coll, A. (2020). Propuesta Didáctica de Matemáticas de 6º de Primaria
con Scratch. (Trabajo Fin Grado) Universidad de Las Palmas de Gran
Canaria, España.
https://drive.google.com/file/d/1sQPVS7eohyfog5tQMANXD6L77O1tF
GnU/view
Solo, B. (2013). Math Gear(s). Thingiverse.
https://www.thingiverse.com/thing:185912
Vega-Moreno, D., Noda Vizcaíno, F. J., y Llinás-Rueda, D. (2016). Aprendizaje
por proyectos usando robots de bajo coste. In Instructional strategies in
teacher training, ISBN 978-1-943697-08-3, págs. 148-157 (pp. 148–
157). https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=6157787
Vega-Moreno, D., Cufí Solé, X., Rueda, M. J., y Llinás, D. (2016). Integración de
robótica educativa de bajo coste en el ámbito de la educación secundaria
para fomentar el aprendizaje por proyectos. IJERI: International Journal
of Educational Research and Innovation, (6), 162–175.
https://www.upo.es/revistas/index.php/IJERI/article/view/1653
Vega, J., y Cañas, J. M. (2014). Curso de robótica en educación secundaria
usando constructivismo pedagógico. Jornadas de Innovación y TIC
Educativas-JITICE’14.
https://gsyc.urjc.es/jmvega/research/pubs/2014.12.12-jitice-
secondaryTeachingRobotics.pdf
Werner, L., Campe, S., y Denner, J. (2012). Children learning computer science
concepts via Alice game-programming. In Proceedings of the 43rd ACM
technical symposium on Computer Science Education (pp. 427-432).
https://users.soe.ucsc.edu/~linda/pubs/SIGCSE2012Constructs.pdf
‒ ‒
CAPÍTULO 27
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
referencias a los robots, tanto en avances tecnológicos como en el arte
y la literatura. El mismísimo Leonardo Da Vinci, en 1495, diseñó su
Caballero Mecánico, sin ser consciente de que estaba creando el primer
diseño de un robot humanoide funcional (Bejerano, ‘Automa
cavaliere’: el robot que diseñó Leonardo da Vinci, 2019).
La evolución de la robótica, tanto de forma conceptual como práctica,
ha sido imparable. Hoy en día los robots están presentes en nuestra vida
cotidiana de múltiples formas y en todos los ámbitos. Podemos encon-
trarlos tanto en la limpieza del hogar como en la compleja industrial
armamentística. Es, por lo tanto, necesario integrarla de igual modo en
la educación de forma natural y no limitándola únicamente como un
objetivo en sí misma, sino que ha de ser considerada un recurso didác-
tico para otras áreas de conocimiento y para el desarrollo de competen-
cias diversas.
La robótica educativa hace su aparición en las aulas sobre el año 2000
a raíz de una colaboración entre la compañía Lego y el Instituto Tecno-
lógico de Massachussets. Se trataba de unos pequeños robots progra-
mables que estaban fabricados con Lego. La programación se realizaba
con el lenguaje Logo, que era un lenguaje diseñado específicamente
para la educación y que se planteaba asequible para los más pequeños
(Martí-Gil, 2020)
Los lenguajes de programación sencillos, gráficos y visuales, han ido
evolucionando con el paso de los años, apareciendo múltiples posibili-
dades, al igual que ha ocurrido con el hardware. Ya Lego no es la única
opción y hay en el mercado múltiples modelos de robot de diversas
compañías. Todas ellas compiten por hacerse un hueco en el mercado
educativo (Martí et al. 2020). Lo que se propone en el presente estudio,
realizado como innovación en un centro educativo, es una simplifica-
ción del mismo concepto, pero recurriendo para hacerlo a componentes
básicos y materiales fácilmente accesibles que, además, abaratan su
coste de adquisición.
La robótica utilizada en educación puede ser beneficiosa en muchos as-
pectos, especialmente si se plantea como un recurso didáctico con el
objetivo de favorecer la adquisición de competencias y el desarrollo de
‒ ‒
inteligencias múltiples utilizando las posibilidades que ofrece gracias a
la aplicación de metodologías activas centradas en el conocimiento
práctico y las necesidades del mundo real en lugar de limitar su utiliza-
ción como medio de aprendizaje del conocimiento más teórico centrado
en la programación y la robótica. Teniendo en cuenta la versatilidad de
estos proyectos se puede conseguir, además, implicar a todo el alum-
nado teniendo en cuenta su diversidad, incluso a aquellos estudiantes
que presentan necesidades educativas especiales.
Cuando hablamos de robótica educativa no podemos dejar de lado la
metodología STEM (Science, Technology, Engineering and Mathema-
tics) y su evolución a STEAM al incorporar el diseño (Arts) como uno
de los pilares de la misma. Esta metodología tiene como objetivo crear
proyectos integrados en los que se trabajen distintas áreas y materias
con la finalidad de que el alumnado construya algo, frecuentemente tec-
nológico, que relacione los contenidos aprendidos con el mundo real.
(De Luca, 2018).
‒ ‒
realizado por el Instituto Nacional de Evaluación Educativa. Ministerio
de Educación y Formación Profesional (2019).
‒ ‒
GRÁFICO 2: Matriculaciones en carreras universitarias de Ingeniería y Arquitectura
Nota: Adaptado de “El desafío de las vocaciones STEM”, por DigitalES. Asociación Espa-
ñola para la Digitalización, 2019.
Según este estudio, las causas de esta disminución tan notable son fun-
damentalmente dos: por un lado, la complejidad del estudio de este tipo
de materias, que implican un mayor esfuerzo y, por otra parte, la falta
de presencia de la materia de Tecnología en el currículo de nuestro sis-
tema educativo. La asignatura de Tecnología es opcional en la mayor
parte de los casos y, tal y como se indica en el informe, el 30% de los
encuestados de secundaria, bachillerato y formación profesional ha re-
conocido no haber cursado ninguna asignatura de tipo tecnológico. El
61% ha cursado únicamente una asignatura y sólo el 9% ha estudiado
dos o más asignaturas de índole tecnológica.
El estudio que presentamos surge de la creciente necesidad de adapta-
ción a esta nueva realidad tecnológica, cada vez más demandada por el
mercado y ello pasa, ineludiblemente, por adaptar la educación y los
centros educativos. Lo que proponemos es un proyecto que pretende
acercar esta realidad al alumnado de forma asequible para los centros,
adaptable a los mismos y requiriendo pocos recursos económicos, pero
permitiendo incorporar la robótica en varios cursos y trabajar diversas
materias bajo un mismo proyecto globalizador centrado en el diseño, la
construcción y la programación de robots.
‒ ‒
De igual modo se propone como un gancho capaz de motivar al alum-
nado y despertar su interés hacia las ramas más técnicas del conoci-
miento, utilizando para ello proyectos entretenidos e interesantes con
un alto contenido tecnológico y una vinculación real con el mundo que
nos rodea.
‒ ‒
La relación entre la robótica educativa, especialmente debido a la utili-
zación de la programación, y el desarrollo de habilidades transversales
como pueden ser el pensamiento lógico y analítico, el trabajo en equipo,
o la creatividad, ha sido investigada por Cabrera (2015) en su estudio
Programación informática y robótica en la enseñanza básica. De igual
modo, el estudio realizado por Fagin y Merke (2003) presenta el im-
pacto que la robótica educativa tiene en el aprendizaje perdurable. Am-
bos estudios ponen de manifiesto el interés que despierta la robótica en
el alumnado, logrando aumentar, no sólo la participación del mismo en
el aula, sino también su disposición de cara a plantearse carreras tecno-
lógicas.
Por último, en el informe “Developing Computational Thinking in
Compulsory Education” (Bocconi et al., 2016), puede analizarse el
apoyo institucional de cara a la implantación de la robótica en el ámbito
educativo con el objetivo de favorecer el desarrollo computacional. En
dicho informe se indica que la mayoría de los países europeos disponen
ya de planes específicos para la formación en pensamiento computacio-
nal o, al menos, ya están trabajando en esa línea.
2. OBJETIVOS
Los objetivos por conseguir con el presente estudio son diversos, pero
pueden centrarse en un objetivo principal que es comprobar si la utili-
zación de la robótica educativa aumenta el interés del alumnado por la
tecnología, mejorando también sus resultados, utilizando para ello me-
todologías activas que aumenten la motivación y lograrlo a través de
proyectos sencillos y económicamente viables que puedan ser adapta-
dos a casi la totalidad de los centros.
Cada proyecto o estudio tiene diversos objetivos secundarios que no
dejan de ser importantes y en este caso, estos objetivos podríamos re-
sumirlos en los siguientes:
‒ Adaptar un proyecto a un centro sin trabajo previo en robótica
educativa, con la intención de demostrar que dichos proyectos
pueden ser utilizados en cualquier centro.
‒ ‒
‒ Convertir la robótica educativa en un proyecto de centro con
poca inversión económica.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
3.1. FASE I: MONTAJE.
‒ ‒
Se trabajó con metodologías activas en todo momento, investigación
grupal, aprendizaje por proyectos, técnicas manipulativas y trabajo
cooperativo. El proyecto se realizó dando roles a cada uno de los miem-
bros del equipo, de modo que todos los integrantes fueron responsables
de alguna de sus partes, con el objetivo de organizar el trabajo y fomen-
tar el liderazgo y la toma de decisiones. Los integrantes de los equipos
de trabajo fueron los responsables de asignar los distintos roles a cada
uno de los miembros.
Al comenzar la implementación de la experiencia, se seleccionaron las
piezas de Lego que se iban a utilizar y se les explicó el proyecto. A cada
grupo se le entregó una bolsa con todo el material necesario, incluidos
los componentes electrónicos, para que pudieran tener en cuenta sus
dimensiones y su colocación.
‒ ‒
Durante el desarrollo de esta fase de construcción surgieron algunos
problemas de organización interna en los grupos, generados por la inex-
periencia a la hora de organizar el trabajo y cooperar con un grupo tan
grande de compañeros, pero gracias a ellos los estudiantes también
aprendieron a trabajar de forma cooperativa y se dieron cuenta de la
complejidad que supone participar en un proyecto de estas dimensio-
nes. Hemos de recordar que fueron ellos mismos los que se encargaron
de organizar al equipo, dando responsabilidades y gestionando recur-
sos.
Los diseños iniciales de los robots fueron muy creativos y, en algunos
casos, poco realistas, pero a medida que los estudiantes iban trabajando
en la construcción de sus robots fueron modificándolos para mejorar la
funcionalidad y poder encajar todas las piezas y los componentes elec-
trónicos necesarios. Alguno de los robots tuvo que ser modificado va-
rias veces hasta conseguir un modelo válido, pero finalmente se consi-
guió montar los 4 robots con todos sus componentes. En la Figura 2
vemos diversas imágenes del montaje de los robots.
‒ ‒
Para realizar el conexionado de los diferentes componentes electrónicos
los equipos tuvieron que realizar un esfuerzo notable, ya que, debido a
la situación vivida el curso pasado con el confinamiento provocado por
la pandemia de Covid 19, no habían estudiado previamente la parte del
temario relativa a circuitos eléctricos y no habían trabajado nunca con
esquemas de conexiones. Pese a ello, hicieron un gran trabajo y reali-
zaron correctamente todas las conexiones utilizando un complejo es-
quema que se les entregó como parte del enunciado y unas breves ex-
plicaciones cuando lo necesitaban. En la Figura 3 puede verse cómo los
distintos grupos realizaban las conexiones necesarias.
‒ ‒
3.2. FASE II: PROGRAMACIÓN Y DIVULGACIÓN.
‒ ‒
se les había presentado, especialmente en la parte relacionada con la
programación, sintiéndose incluso incapaces de realizarlo. También
manifestaron haber estado emocionados por el reto ya que iban a poder
trabajar con la robótica antes de acabar el ciclo. No podemos olvidarnos
de que entre los/as alumnos/as de 4º de la ESO hay muchos/as estudian-
tes que no volverán a tener la oportunidad de aprender programación o
robótica en sus estudios formales ya que sus elecciones de estudios pos-
teriores están alejadas de las ramas tecnológicas.
3.2.1. Programación
‒ ‒
La elección de esta aplicación responde a varias razones. La primera y
la más importante es que se trata de una aplicación sencilla y visual que
utiliza un entorno gráfico de programación por lo que se trabaja a base
de bloques y es tan intuitiva que no necesita formación previa en la
herramienta para poder ser utilizada. La segunda razón es que es un
software muy versátil que permite trabajar con diversas placas progra-
mables, entre ellas las Arduino Uno, que es la placa que utilizamos en
el proyecto. Por último, admite la adición de código, lo que nos permite
modificar algunos parámetros o añadir líneas en caso de necesitar fun-
cionalidades que no estén integradas en los bloques predefinidos.
A la hora de programar, el miedo inicial fue desapareciendo al compro-
bar ellos/as mismos/as que eran capaces de programar y lograr que los
muñecos se moviesen por la pantalla (práctica 1) y encender y apagar
las luces led (práctica 2 y 3) habiendo realizado ellos/as mismos/as los
pequeños montajes electrónicos necesarios utilizando protoboards, re-
sistencias y cables. A medida que avanzaba el proyecto estaban más
implicados y mostraban mayor interés en el mismo.
3.2.2. Divulgación
‒ ‒
El desarrollo de la página web se realizó utilizando un Google Site
creado específicamente para este proyecto. Cada robot, y por tanto cada
grupo, disponía de una sección propia en la web que inicialmente se
encontraba vacía. Ellos/as debían organizar el espacio, añadir el conte-
nido, subir imágenes, videos, entrevistas u otros elementos que les pa-
recieran oportunos para vestir la web de una forma atractiva y lograr
convertir ese espacio vacío en un escaparate del proyecto.
Por falta de tiempo no pudo subirse el contenido a las redes sociales del
colegio, pero la web sí fue posible acabarla y es perfectamente viable.
En la Figura 6 se muestran algunas imágenes del Site, organizadas por
robots.
‒ ‒
3.3. FASE III: APLICACIÓN
4. RESULTADOS
‒ ‒
mismos/as en las memorias entregadas al finalizar las distintas fases
como las encuestas anónimas entregadas al finalizar el proyecto.
Como resultado de la primera fase se obtuvieron 4 robots en gran me-
dida funcionales, con algunos defectos. Fijar los motores a la carcasa
supuso bastantes problemas, por lo que tuvieron que ser reajustados a
posteriori. Hubo que recolocar también alguna de las conexiones ya que
se habían soltado al introducirlos en las carcasas. En la figura 7 pueden
observarse los robots construidos en esta fase.
Al finalizar esta primera fase se evaluó la memoria que los cuatro gru-
pos entregaron, y, además de la exposición y el robot terminado, se
realizó un test con el que se evaluó la asimilación de los contenidos
trabajados en la creación de los robots, especialmente en lo relativo a
sus circuitos. Los resultados se pueden apreciar en el Gráfico 3, que se
‒ ‒
muestra a continuación, y en el que se puede comprobar que los resul-
tados fueron bastante positivos.
GRÁFICO 3: Calificaciones obtenidas en el test de 3º de la ESO
‒ ‒
GRÁFICO 4: Calificaciones obtenidas en la evaluación
‒ ‒
4.1. ANÁLISIS DE LOS RESULTADOS DE LAS ENCUESTAS REALIZADAS
‒ ‒
indicó que no tenía ningún interés por el tema, pero a la finalización del
proyecto, el 100% de los/as alumnos/as manifestó que les había gustado
aprender a programar un poquito y el 72% de ellos/as tienen el interés
y la intención de seguir aprendiendo.
Si analizamos las valoraciones del trabajo en equipo, el 95% del alum-
nado ha disfrutado trabajando de forma cooperativa pero casi el 66%
habría preferido trabajar en grupos más pequeños o pudiendo elegir los
compañeros de grupo.
La elección de estudios posteriores no parece haberse visto afectada por
el proyecto, pero sí que ha servido para afianzar las decisiones tomadas.
Casi el 20% del alumnado ha manifestado que la realización del pro-
yecto les ha ayudado a reafirmarse en su intención de escoger una rama
de ciencias y tecnología). Un 19% se ha replanteado sus opciones tras
el proyecto y, de estos, 2 alumnos que aún no habían decidido la rama
por la que continuar sus estudios, han optado por una rama más tecno-
lógica.
Otro dato a tener en cuenta es que hay un notable porcentaje de estu-
diantes que indican que el proyecto les ha servido para cambiar su vi-
sión de la tecnología (50% en 3º y 61% en 4º) y descubrir la robótica y
la programación, algo que nunca les había interesado.
Por último, nos gustaría indicar que una gran mayoría del alumnado de
4º de la ESO coincide en que les habría gustado haber podido participar
en el proyecto el curso anterior para montar los robots (94.5%) e incluso
en cursos anteriores, para tener un acercamiento a la robótica (72,2%).
En el grupo de 3º de la ESO, este porcentaje disminuye hasta el 41% de
los encuestados.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
Este acercamiento ha conseguido eliminar, en parte, el miedo que el
alumnado siente hacia la tecnología al verlo como algo cercano y ha
ayudado a despertar un poquito el interés por las ramas de estudios más
tecnológicas.
En este sentido y tras analizar los resultados obtenidos, es posible que
la robótica educativa sea una forma eficaz de acercar la tecnología a
nuestros estudiantes y mejorar con ello sus resultados en ciencias, que
es una necesidad actual que tiene el sistema educativo español, tal y
como se muestra en los resultados del informe PISA anteriormente
mencionado.
De igual manera parece que este acercamiento, además de mejorar los
resultados, puede favorecer el interés del alumnado por estudios supe-
riores relacionados con la tecnología, que es, tal y como se indica en el
estudio “El desafío de las vocaciones STEM”, otra de las preocupacio-
nes más inminentes debido a la alta demanda de profesionales formados
en estas áreas.
Como cualquier trabajo y estudio, es susceptible de mejora y tiene sus
limitaciones. En este caso, el número de estudiantes con el que se ha
realizado el estudio no puede considerarse suficiente como para tener
datos estadísticos concluyentes, del mismo modo que ha estado limi-
tado también en el tiempo y el número de cursos y de asignaturas afec-
tados por el proyecto de centro.
Se trata de un proyecto que podría ampliarse al número de cursos que
se crean convenientes e implicado a varias asignaturas si se plantea del
modo adecuado, pero ello requiere una alta implicación de los centros
educativos para estructurarlo mejor y a lo largo todo el curso con el
objetivo de explotar al máximo los múltiples beneficios que este tipo
de proyectos aporta a la formación integral del alumnado y del propio
centro.
Al plantearnos la interdisciplinaridad de la robótica educativa con otras
materias y áreas de conocimiento podemos referirnos a las palabras de
Rogers y Portsmore “Este carácter interdisciplinar de los robots signi-
fica que cuando los estudiantes aprenden a diseñar robots, inevitable-
mente, aprenden sobre las muchas otras disciplinas que utilizan la
‒ ‒
robótica” (Rogers y Portsmore, 2004, citado en García y Reyes, 2012,
p.48). En nuestro caso no hemos podido trabajar el proyecto de modo
interdisciplinar debido a la complejidad que supone implicar a más pro-
fesorado y cuadrar programaciones una vez el curso está avanzado, que
fue cuando surgió la posibilidad del presente estudio.
Queda propuesto para el futuro la realización de un proyecto similar
planificado con tiempo y que incluya criterios de varias asignaturas,
como física y química, matemáticas, educación plástica, inglés, lengua
castellana y literatura…
Las limitaciones del estudio actual nos abren un gran abanico de posi-
bilidades para estudios futuros en los que se tenga en cuenta cualquiera
de los parámetros anteriormente mencionados y, cualquiera de ellos,
aportará datos muy valiosos para la mejora de la aplicación de la robó-
tica educativa en las aulas.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
Otra de las ventajas que se obtienen al trabajar este tipo de proyectos es
que ayudan de forma inestimable a aprender a trabajar en equipo resol-
viendo de forma conjunta problemas complejos y favoreciendo la inte-
gración de todos los implicados, respetando su diversidad. Este ha sido
precisamente uno de los mayores retos a los que se ha enfrentado el
alumnado a la hora de realizar el proyecto, ya que se han visto obligados
a trabajar en equipos de tamaño considerable con personas con las que
normalmente no lo hacen y han tenido que gestionar las incidencias y
los imprevistos por su cuenta para lograr llegar a un objetivo común
Otro de los objetivos que nos planteábamos al inicio del proyecto era
comprobar si este tipo de iniciativas puede ayudar a acercar la tecnolo-
gía el alumnado y la respuesta ha sido un rotundo sí. Hemos podido
verificar cómo los/las estudiantes han ido perdiendo el miedo inicial
que se tiene de forma natural ante que no se conoce gracias a ir tomando
contacto con la tecnología de forma práctica y hemos podido ver cómo
algunos/as estudiantes se han animado incluso a intentar hacer otros
proyectos de similar índole.
Si nos centramos en la motivación, hemos podido comprobar cómo el
alumnado se encuentra más motivado a realizar proyectos cuando se le
propone participar en algo que implica a otros cursos y en el que pueden
sentirse parte de un engranaje mucho más amplio, en el que cada una
de las piezas, ellos incluidos, tiene su función. En este sentido nos he-
mos dado cuenta de una cuestión que no buscábamos al inicio ni plan-
teamos estudiar y es el aumento del sentimiento de pertenencia al centro
grupo que aparece durante la realización del proyecto. Se trata de un
tema que podría investigarse de forma más específica en proyectos pos-
teriores pero los indicios que tenemos actualmente gracias a los resul-
tados obtenidos son que el alumnado adquiere un mayor sentimiento de
pertenencia al grupo colegio mayor al sentirse parte de un todo, que es
el colegio entero trabajando por los mismos objetivos.
Teniendo en cuenta los recursos económicos utilizados para la realiza-
ción del presente estudio y sus posibilidades de disminución de costes
en función de la adquisición de los componentes necesarios y los mate-
riales utilizados para la fabricación de las carcasas, es evidente que la
utilización de la robótica educativa es asequible para la gran mayoría
‒ ‒
de centros y que es factible aplicarlo con independencia del nivel del
alumnado, ya que es altamente adaptable, traduciendo resultados muy
positivos .
Tal y como se ha visto en el informe, este proyecto se ha trabajado con
alumnado de 3º y 4º de la ESO, pero creemos que el proyecto podría
tener mayor impacto si se comienza en cursos anteriores, implicando
en el mismo a los/as estudiantes desde 1º de la ESO.
Es una realidad que para poder convertir los resultados obtenidos en
conclusiones definitivas es necesario realizar muchos proyectos simila-
res al actual para validarlos pero a partir de los datos que tenemos, po-
demos afirmar que, a priori, la robótica educativa se muestra como una
opción interesante para lograr que los centros puedan utilizar metodo-
logías activas e incluir proyectos STEAM en su oferta formativa con
un coste relativamente bajo y logren generar en su alumnado un interés
real por su propia educación e incluso, favorecer el interés de nuestros
estudiantes por el estudio de la tecnología.
En este sentido cada vez se están realizando más aportaciones en cuanto
a proyectos de robótica educativa, incluyendo la aplicación de esta a
diferentes materias o incluso criterios dentro de la propia asignatura de
Tecnología. Un ejemplo de ello es el Trabajo “Reinventando mBots:
Robótica Educativa aplicada a la Didáctica de Tecnología de 3º de Edu-
cación Secundaria Obligatoria” (Quesada-González, 2021) en el que se
adaptan robots mBots utilizando impresión 3D con el objetivo de ser
un recurso didáctico para trabajar diferentes criterios de la asignatura
de Tecnología de 3º de la ESO.
Como se ha comprobado a través de los resultados obtenidos en el pre-
sente estudio y por el creciente interés de la comunidad educativa en la
utilización de la robótica como recurso, este tipo de proyectos produce
un impacto positivo en los/as estudiantes, aumentando su motivación,
haciendo más cercana su relación con las tecnologías e incluso pu-
diendo incentivarlo a iniciarse en estudios de ramas más tecnológicas.
Gracias a la utilización de metodologías activas que centran el aprendi-
zaje en el descubrimiento y la experimentación y a realizar los trabajos
de forma cooperativa, las clases se vuelven más dinámicas y aumenta
‒ ‒
la participación del alumnado en su propio aprendizaje. Aunque aún
hay mucho que investigar con relación a este tema, con muestras más
grandes y grupos de control en caso de ser posible, parece que la robó-
tica educativa puede ser un camino en el que merezca la pena invertir
esfuerzos.
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Bocconi, Stefania. y Chioccariello, Augusto y Dettori, Giuliana y Ferrari, Anusca
y Engelhasrdt, Katja (2016). Developing Computational Thinking in
Compulsory Education - Implications for policy and practice.
Publications Office of the European Luxembourg Union.
10.2791/792158.
https://publications.jrc.ec.europa.eu/repository/handle/JRC104188
Cabrera Delgado, J. M. (2015). Programación informática y robótica en la
enseñanza básica. Avances En Supervisión Educativa, (24).
https://doi.org/10.23824/ase.v0i24.17
De Luca, Alejandro. (30 de diciembre de 2018). Educación STEAM: la metodología
educativa que combina ciencia, tecnología y creatividad.
Mentesliberadas.com.
https://www.mentesliberadas.com/2018/12/30/educacion-steam-
metodologia-educativa/
DigitalES (2019) El desafío de las vocaciones STEM. Asociación Española para
la Digitalización. https://www.digitales.es/wp-
content/uploads/2019/09/Informe-EL-DESAFIO-DE-LAS-
VOCACIONES-STEM-DIGITAL-AF-1.pdf
García, Y., y Reyes, D. (2012). Robótica educativa y su potencial mediador en el
desarrollo de las competencias asociadas a la alfabetización científica.
Revista Educación y Tecnología, (2), 42–55. En Sánchez-Sánchez, T.
(2019). La influencia de la motivación y la cooperación del alumnado de
primaria con robótica educativa: un estudio de caso. Revista Panorama,
13(25), https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/4502555.pdf
González-Gallego, S. (2021). Creando Robots: Un viaje de los juegos infantiles a
la robótica avanzada. Proyecto educativo de centro en Educación
Secundaria Obligatoria.[Trabajo Fin de Máster] Universidad de Las
Palmas de Gran Canaria.
Fagin, B. y Merkle, L. (2003). Measuring the effectiveness of robotics in teaching
computer science. Proceedings of the 34rd SIGCSE technical
symposium on computer science education, 19(23). 307-311. En
Sánchez-Sánchez, T. (2019). La influencia de la motivación y la
cooperación del alumnado de primaria con robótica educativa: un
estudio de caso. Revista Panorama, 13(25).
Fernández, A. (2006). Metodologías activas para la formación de competencias.
Educatio siglo XXI, 24, 35-56. En Sánchez-Sánchez, T. (2019). La
influencia de la motivación y la cooperación del alumnado de primaria
con robótica educativa: un estudio de caso. Revista Panorama, 13(25).
Recuperado de
https://revistas.um.es/educatio/article/download/152/135/0
‒ ‒
Hernández, V. (2016). Robótica educativa, roboti ¿qué? [Trabajo de Fin de
Grado]. Universidad de La Laguna, Tenerife, España. En Sánchez-
Sánchez, T. (2019). La influencia de la motivación y la cooperación del
alumnado de primaria con robótica educativa: un estudio de caso.
Revista Panorama, 13(25). Recuperado de:
https://riull.ull.es/xmlui/bitstream/handle/915/3255/ROBOTICA%20ED
UCATIVA.%20ROBOTI%20
%C2%BFQUE.pdf?sequence=1&isAllowed=y
Instituto Nacional de Evaluación Educativa. Ministerio de Educación y
Formación Profesional. (2019). PISA 2018. Programa para la
Evaluación Internacional de los Estudiantes. Informe español. Madrid:
Secretaría General Técnica, Subdirección General de Atención al
Ciudadano, Documentación y Publicaciones.
Martí-Gil, A. (2020). Diseño de una plataforma de robótica educativa
multidisciplinar.[Trabajo Fin de Grado] Universidad de Las Palmas de
Gran Canaria.
Martí Gil, A. y Quevedo Gutiérrez, E. y Hernández Castellano, P. y Zapatera
Llinares, A. y Fabelo Gómez, H. y Ortega Sarmiento, S. y Marrero
Callicó, G. (julio de 2020). Proceso de aprendizaje en la fabricación
integrada de una plataforma robótica educativa multidisciplinar. In In-
Red, Valencia, Universitat Politècnica de València.
http://dx.doi.org/10.4995/INRED2020.2020.11960
Merino-Armero, J., Villena-Taranilla, R., González- Calero Somoza, J., & Cózar-
Gutiérrez, R. (2018). Análisis del efecto de la robótica en la motivación
de estudiantes de tercero de Educación Primaria durante la resolución de
tareas de interpretación de planos. Revista De Estudios Y Experiencias
En Educación, 2(3), 163-173. En Sánchez-Sánchez, T. (2019). La
influencia de la motivación y la cooperación del alumnado de primaria
con robótica educativa: un estudio de caso. Revista Panorama, 13(25),
https://doi.org/10.21703/rexe.especial3_201816317314
Morales, P (2017). La robótica educativa: una oportunidad para la cooperación en
las aulas. En Ruiz, J., Sánchez, J. y Sánchez, E. (Edit.). Innovación
docente y uso de las TIC en educación. Málaga: UMA Editorial. En
Sánchez-Sánchez, T. (2019). La influencia de la motivación y la
cooperación del alumnado de primaria con robótica educativa: un
estudio de caso. Revista Panorama, 13(25).
http://www.enriquesanchezrivas.es/congresotic/archivos/Ens_no_univ/M
oralesAlmeida.pdf
‒ ‒
Moreno, I y Muñoz, L. y Serracín, J. R y Quintero, J y Patiño, K. P. y Quiel, J.
(2012). La Robótica Educativa, Una Herramienta Para La Enseñanza-
Aprendizaje De Las Ciencias Y Las Tecnologías. Teoría de la
Educación. Educación y. Cultura en la Sociedad de la Información. vol.
13, nº 2, pp. 74-90.
http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=201024390005
National Geographic. (2017). Inventos griegos, los autómatas de Herón. National
Geographic Historia. Obtenido de
https://historia.nationalgeographic.com.es/a/inventos-griegos-automatas-
heron_9395/2
REAL ACADEMIA ESPAÑOLA. (2021). Diccionario de la lengua española,
23.ª ed., [versión 23.4 en línea]. Recuperado el 13 de junio de 2021, de
https://dle.rae.es
Robot. (5 de junio de 2021) En wikipedia.
https://es.wikipedia.org/w/index.php?title=Robot&oldid=136097936
Robótica. (5 de junio de 2021). En Wikipedia.
https://es.wikipedia.org/w/index.php?title=Rob%C3%B3tica&oldid=136
103845
Robótica Educativa. (17 de mayo de 2021). En Wikipedia.
https://es.wikipedia.org/w/index.php?title=Rob%C3%B3tica_educativa
&oldid=135608936
Rogers, C., & Portsmore, M. (2004). Bringing engineering to elementary school.
Journal of STEM Education, 5(3, 4), 17–28. En Sánchez-Sánchez, T.
(2019). La influencia de la motivación y la cooperación del alumnado de
primaria con robótica educativa: un estudio de caso. Revista Panorama,
13(25).
Sánchez-Sánchez, T. (2019). La influencia de la motivación y la cooperación del
alumnado de primaria con robótica educativa: un estudio de caso.
Revista Panorama, 13(25). http://dx.doi.org/10.15765/pnrm.v13i25
‒ ‒
CAPÍTULO 28
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
tecnológicas en los estudiantes. Tras un estudio en el que se consultaron
a unas 300 entidades científicas, así como a ministros y responsables
educativos de los países miembros, se definieron los principales pro-
blemas encontrados, relacionados con la falta de inversión y también
con la falta de coordinación entre instituciones e industria. Destacan la
necesidad de evitar políticas elitistas en la ciencia. También se plantea-
ron líneas de trabajo adecuadas para mejorar la situación, como, por
ejemplo:
Una nueva asociación entre las universidades y la industria para pro-
mover carreras y un mejor entendimiento mutuo. Es necesaria más ex-
periencia práctica, especialmente en cursos de nivel primario y secun-
dario, que deben diseñarse para satisfacer las necesidades e intereses de
los jóvenes (Gago et al., 2004).
Con este punto de partida se han ido definiendo de una manera muy
rápida, las habilidades que deben adquirir los estudiantes de una nueva
era (Rahmawati et al., 2019; Siekmann, & Korbel, 2016).
Dentro de las definidas como STEM skills se encuentran:
‒ Resolución de problemas: los problemas STEM requieren que
el estudiante trabaje rápidamente para dar sentido a los pro-
blemas a medida que se presentan y que trabaje de manera
productiva para proponer soluciones reales y adecuadas.
‒ ‒
‒ Habilidades de matemáticas y ciencias: Las habilidades en
matemáticas y ciencias que el alumnado está aprendiendo en
la escuela son la base de STEM y deben aplicarse en la bús-
queda de soluciones. Las matemáticas y las ciencias utilizadas
para resolver problemas se conectarán, y ampliarán su trabajo
de curso, así como también resaltarán las conexiones entre
ideas y áreas temáticas.
‒ ‒
impulsados por empresas en colaboración con organizaciones educati-
vas.
STEM Talent Girl, este proyecto nace como colaboración entre el Mu-
seo de la Evolución Humana, la empresa ASTI, la red Telefónica Open
Future, la Fundación Atapuerca, la agencia Talk2Us Comunicación y
la Obra Social La Caixa. Pretende fomentar la motivación y el interés
de las niñas en materias STEM. Está desplegado en tres programas di-
ferentes: Science for Her (dirigido a identificar y fomentar este tipo de
carreras entre las alumnas de 3º y 4º de ESO mediante una lección ma-
gistral impartida por una experta); Mentor Women (dirigido a chicas de
Bachillerato, universitarias y licenciadas) y Real Work (un programa
que ofrece becas en empresas tecnológicas a mujeres jóvenes con los
estudios universitarios recién acabados).
El proyecto Hypatia, se trata de un proyecto desarrollado entre 2015 y
2018 y financiado por la Comisión Europea en el contexto del Programa
Horizonte 2020. Consiste en fomentar el interés de las chicas de entre
13 y 18 años por las materias STEM, tanto en centros educativos como
a lo largo de su trayectoria académica. Para conseguirlo, propone varios
métodos: por un lado, ofrecer la posibilidad de que las niñas descubran
las diferentes carreras relacionadas con la ciencia y, por otro, incentivar
que los centros educativos, museos o instituciones realicen una comu-
nicación acertada de dichas carreras, con una perspectiva de igualdad
de género. El proyecto otorga a los profesores que decidan participar en
el proyecto un paquete de herramientas que contiene todo lo necesario
para llevar a cabo talleres de contenido científico, así como coloquios,
debates informales y encuentros.
El proyecto STEM Alliance reúne a empresas y Ministerios de Educa-
ción para promover la educación y las carreras STEM entre los jóvenes
europeos y abordar las brechas de habilidades. Con el apoyo de las prin-
cipales industrias y socios privados, promueve las iniciativas existentes
en educación STEM (a nivel nacional, europeo y mundial) y contribuye
a la innovación en la enseñanza de STEM en todos los niveles de la
educación.
‒ ‒
Saber trabajar y evaluar todas y cada una de las habilidades que deben
adquirir los alumnos, se convierte en un reto para el docente, por todo
ello es fundamental considerar en la formación del profesor un enfoque
que incluya un tratamiento STEM integrando los contenidos curricula-
res de todos los ámbitos implicados.
Es por ello que, resultados de proyectos como el proyecto Scientix, que
promueve y respalda la colaboración entre docentes, investigadores del
ámbito de la enseñanza, legisladores y otros profesionales de la docen-
cia de materias STEM han de ser tenidos muy en cuenta. El portal Web
de Scientix (http://www.scientix.eu/) ofrece un repositorio de recursos
de gran valor y utilidad para los usuarios. Pero pueden ser insuficientes
si los usuarios de estos recursos no tienen una formación adecuada so-
bre cómo y por qué hacer uso de ellos.
La selección de los recursos y la capacidad de ponerlos en práctica son
fundamentales para la labor docente. Es fundamental conocer cómo
aplicar las diferentes propuestas y también conocer los resultados de los
usuarios en su aplicación (Prolongo & Pinto, 2019). Como destacan
Hernández-Serrano & Muñoz-Rodríguez (2020) en su estudio, los pro-
fesores en formación están interesados en aplicar las aproximaciones
STEM, pero necesitan formación específica para poder abandonar el
libro de texto y la clase magistral. Debe mejorarse su percepción en
cuanto a las actividades innovadoras. Evitar que la aplicación de las
aproximaciones STEM no se convierta en una dificultad añadida sino
en una ayuda apoyada en recursos y metodologías se convierte en uno
de los retos fundamentales de su aplicación (Doménech et al., 2019).
Llegados a este punto se hace necesario definir qué tipo de estrategias
y recursos podemos utilizar a la hora de formar al profesorado. Te-
niendo en cuenta la evaluación de los planteamientos STEM y las ha-
bilidades definidas en ellos, se debe considerar al cine como uno de
esos recursos válidos para poder desarrollar las STEM Skills en los
alumnos y también en el profesorado en activo y profesorado en forma-
ción, buscando que el trabajo a través de la práctica favorezca la inte-
gración de esas habilidades.
‒ ‒
El cine reúne una serie de características que lo convierten en ese re-
curso perfecto para introducir en el aula STEM:
‒ Reflejo de la sociedad:
El cine es el reflejo de una sociedad, a través de él podemos identificar
aspectos que se suscitan y que muchos nos son ajenos. El cine es un
medio de comunicación, expresa el sentir y situación de una sociedad.
Es un buen instrumento y complemento para comprender y reflexionar
sobre los aspectos sociales y de salud importantes y nos puede ayudar
en la práctica profesional diaria (Murillo, 2017).
‒ ‒
Considerando todas estas características se aprecia que son comunes a
las necesidades y habilidades descritas en relación con la enseñanza
STEM.
2. OBJETIVOS
Este trabajo tiene como objetivo que los estudiantes del Máster de For-
mación de Profesorado adquieran una formación práctica en el ámbito
STEM, que les capacite para establecer relaciones entre la ciencia, la
tecnología, la ingeniería y las matemáticas, y para integrar los conteni-
dos curriculares de los diferentes ámbitos en proyectos de enseñanza
activa y contextualizada que favorezcan el aprendizaje, el desarrollo de
competencias STEM, la motivación y la reflexión de su futuro alum-
nado.
Para tal fin se plantea la utilidad del cine como recurso educativo que
fomenta la visión de la enseñanza desde un enfoque multidisciplinar
STEM, y favorece la reflexión crítica a través de escenas que sirven
como contexto real de aprendizaje. En concreto, este trabajo presenta
una propuesta didáctica completa que toma como base la película The
Martian para trabajar el enfoque STEM en la formación de profesorado
a través de un aula virtual.
3. PROPUESTA DIDÁCTICA
3.1 CONTEXTO
‒ ‒
magistrales, la interacción entre todos los participantes en las sesiones,
de tal modo que los recursos con los que cuenta la sala (pizarras, pre-
sentaciones, cuestionarios, chat interactivo) pueden ser utilizados por
todos los asistentes según criterio del docente. Esto permite una gran
versatilidad en la organización de las sesiones, pudiéndose plantear se-
cuencias de trabajo individual o grupal, activo o pasivo según el guion
didáctico que más interese, lo que facilita la organización metodológica
de la labor docente. La funcionalidad más interesante para este proyecto
es la relacionada con la posibilidad que ofrece este programa de esta-
blecer grupos de trabajo entre los alumnos, creando salas independien-
tes asociadas a la principal que simulan la distribución de grupos que
se haría en una sesión presencial. En estas salas asociadas e indepen-
dientes, los alumnos pueden conectar su audio y vídeo, pueden escribir
en grupo en una pizarra virtual, compartir documentos o incluso su pro-
pia pantalla. Además, todo lo que los alumnos trabajen en esas salas
asociadas puede recogerse en la sesión principal y el profesor puede ir
moviéndose de una sala a otra para guiar y ayudar a los alumnos en el
desarrollo de actividades en grupo. Las características descritas para
este aula virtual facilitan el desarrollo de trabajos colaborativos (Pas-
cual et al., 2016), tal y como requiere la propuesta didáctica que se pre-
senta.
‒ ‒
La elección de esta película se debe a diferentes cuestiones. La razón
principal es que en su argumento se muestran múltiples situaciones que
permiten un análisis integrado desde las diferentes áreas STEM, que
además permite desarrollar conceptos trabajados en Educación Secun-
daria. Además, el planteamiento de supervivencia que se observa en la
película nos permite trabajar competencias STEM como la resolución
de problemas, la habilidad científica y matemática, la creatividad, la
indagación, el pensamiento crítico o la colaboración. Por otro lado, el
interés general por el planeta Marte ha crecido mucho en el último año,
incorporándose al lenguaje popular palabras como Rover, Perseverance
o amartizaje. El responsable de este hecho ha sido la expedición a
Marte que en febrero la NASA consiguió desarrollar con éxito: la mi-
sión Mars 2020 Perseverance Rover. Con ella se pretende explorar
Marte y conocer la respuesta a preguntas clave sobre el potencial de
vida en Marte tanto en el pasado como en la actualidad. Para ello, la
misión contiene un robot explorador que permite analizar la composi-
ción física y química de distintas zonas del planeta. Finalmente, es im-
portante destacar que el papel de la mujer ha sido muy destacado en
esta misión, ya que la directora de vuelo de la misión era la colombiana
Diana Trujillo. Y este papel principal de la mujer se observa de forma
paralela en la película The Martian, con la comandante Melissa Lewis,
por lo que el uso de esta película en la enseñanza es también de interés
para promover las vocaciones STEM.
Para el desarrollo de la propuesta didáctica se han seleccionado y ana-
lizado tres escenas concretas de la película, que serán las que después
se utilicen como centro de la actividad práctica. A continuación, se
muestra un análisis detallado de cada escena que sirve de base al profe-
sor del máster de formación para guiar la actividad en los grupos de
trabajo:
Escena 1: El fragmento “Atmósfera de Marte” se desarrolla en los pri-
meros 10 minutos de película. Esta comienza con la imagen de Marte,
su tierra y cielo rojizos. Los tripulantes de la misión trabajan en Marte
recogiendo muestras, cuando se observa la aparición de nubes y la lle-
gada de una fuerte tormenta de arena que amenaza con estropear la mi-
sión. Los tripulantes de la nave discuten sobre la llegada inminente de
‒ ‒
la tormenta y las posibles dificultades que esto puede acarrear y deciden
evacuar. En este proceso, debido a los fuertes vientos una antena se
desprende y alcanza al protagonista provocando una brecha en su traje,
con la que se estima que no podrá vivir más de un minuto.
A partir de esta escena se plantea realizar un análisis que nos lleve a
responder a la pregunta: ¿Por qué la Tierra es habitable y Marte no?
Para ello, podemos comenzar analizando lo que se observa en la escena
de la película. En primer lugar, se observa un paisaje rocoso, desértico,
cubierto de un fino polvo rojizo, y con una atmósfera de tonos ocres.
Este color de su cielo se debe a un ciclo global y permanente de polvo
en Marte, en el que, por la acción de los vientos de superficie y las
corrientes de convección, las partículas de polvo se elevan a la atmós-
fera provocando un aumento de la turbidez atmosférica. Este fenómeno
atmosférico es muy habitual en Marte, de hecho, tiene las tormentas de
arena más fuertes del sistema solar, lo que se debe a sus condiciones
atmosféricas y al estado árido de su superficie. En la escena de la pelí-
cula una de estas tormentas es la protagonista, y provoca el accidente
de Mark W. Pero ¿cómo es posible que sobreviva? ¿falla el sistema de
detección de la rotura del traje? El sistema de detección no ha fallado,
la realidad es que el traje está roto, que es lo que detectan sus compa-
ñeros. Lo que desconocen es que el fragmento de la antena clavado en
el cuerpo del astronauta, junto a su sangre coagulada, hacen que el traje
siga funcionando y Mark pueda sobrevivir más tiempo del estimado.
Para responder a la pregunta inicial y entender por qué es así el paisaje
de Marte debemos comenzar entendiendo las características de Marte y
su atmósfera, y en qué se diferencia de la Tierra. Al analizar la masa de
Marte y compararla con la de la Tierra podemos observar que es 10
veces menor, y como la gravedad depende en gran medida de la masa
del objeto, la superficie marciana tiene una atracción gravitatoria un
62% menor que la terrestre. Esto no solo afecta a cómo podríamos vivir
en Marte, sino que también afecta a la atracción de su propia atmósfera,
cada segundo Marte pierde 100 kg de atmósfera. Esto hace que la at-
mósfera de Marte tenga una densidad 100 veces menor a la de la Tierra,
lo que a su vez provoca una presión atmosférica muy inferior (de 7 mi-
libares, comparados con los 1024 milibares de la Tierra). Su
‒ ‒
composición es mayoritariamente dióxido de carbono (95%), nitrógeno
(2,7%) y argón (1,6%), representando el oxígeno menos del 0,15%, el
monóxido de carbono un 0,07% y el vapor de agua un 0,03%. Por otro
lado, se ha descrito en la atmósfera de Marte una capa de ozono seme-
jante a la terrestre, pero 1000 veces más delgada, a apenas 40 km de
altura, que no sería suficiente para evitar la radiación solar dañina. Esta
tenue atmósfera no es capaz de absorber la radiación ultravioleta del
sol, y ésta destruye con gran facilidad las moléculas orgánicas, por lo
que la probabilidad de encontrar vida en Marte en la actualidad es muy
pequeña. Las temperaturas son bastante extremas, lo que no ayuda a la
existencia de vida. Sus temperaturas oscilan entre los 186 K (-87 °C)
durante la noche y los 293 K (20 °C) durante el día, es decir se observa
una variación de temperatura entre el día y la noche de más de 60 °C.
Esta gran diferencia de temperaturas se debe en parte a la mayor dis-
tancia respecto al Sol que tiene Marte, así como a la debilidad atmosfé-
rica, que es incapaz de retener el calor.
Todas estas características hacen que podamos entender la difícil exis-
tencia de vida en el planeta rojo, así como que podamos comprender las
adversas condiciones a las que tienen que enfrentarse los miembros de
la tripulación. Los tripulantes necesitan de estaciones y trajes especiales
que mantengan las funciones vitales. Los trajes espaciales son escafan-
dras presurizadas que incluyen dispositivos que mantienen una presión
interna estable, permiten su movilidad, suministran oxígeno, regulan la
temperatura y representan un escudo frente a la radiación ultravioleta.
Además de estas características básicas, los avances en tecnología e in-
geniería los están dotando de cada vez más funciones que hacen la vida
del astronauta más fácil y segura. Es interesante nombrar aquí al inge-
niero español Emilio Herrera que en 1935 diseño el primer prototipo de
traje espacial.
A través de esta escena podemos integrar diferentes contenidos curri-
culares de ESO y Bachillerato: trabajar la comprensión de las caracte-
rísticas del sistema solar y la composición geológica de la Tierra y
Marte nos aporta una valiosa información para comprender la impor-
tancia de la atmósfera para los seres vivos, la importancia del agua y,
en general, las características que hacen habitable un planeta. Con esto
‒ ‒
estamos trabajando conceptos biológicos y geológicos de la enseñanza
secundaria. Con esta escena también se trabajan conceptos fisicoquími-
cos relacionados con el movimiento y las fuerzas (Ley de gravitación
universal, presión, física de la atmósfera), conceptos de energía tér-
mica: calor y temperatura, contenidos relacionados con las propiedades
de la materia (masa, densidad, etc.) o las propiedades de las moléculas
orgánicas. Además, estaríamos trabajan cuestiones transversales a las
ciencias, como son las magnitudes, las medidas o el análisis de datos
experimentales. Para esto es necesario hacer uso de cálculos matemáti-
cos que nos permiten entender las diferencias entre las propiedades de
Marte y la Tierra, o nos podrían permitir entender la fuerza de las tor-
mentas. Así mismo, podemos trabajar conceptos de ingeniería y tecno-
logía si analizamos en detalle cómo son los trajes espaciales, qué dis-
positivos tienen y cómo han evolucionado desde el primer diseño de
1935.
Escena 2: Uno de los grandes retos a los que se debe enfrentar el prota-
gonista (Mark Watney) es el de producir alimento para poder subsistir
hasta que puedan rescatarlo. Tras una hora de visualización de la pelí-
cula, existe un momento clave, en el cual Watney recapacita sobre
cuándo podrían volver a rescatarlo, dándose cuenta de que, en el mejor
de los casos, podrían tardar cuatro años. En ese momento hace un re-
cuento de los víveres que tiene y calcula hasta cuándo podría sobrevivir
con ellos, además de estimar en qué día de la misión se encuentra. Tras
los cálculos, concluye que es necesario buscar otra fuente de alimento.
Y lo que en principio iba a ser un experimento, dado que la misión que
tenía él como botánico de la expedición era probar cultivos en Marte,
es su única esperanza de quedar con vida. Tras ello se dispone a cons-
truir un invernadero, con todo lo que ello conlleva. Pero ¿es posible
cultivar en Marte? ¿por qué se plantea la construcción de un inverna-
dero? ¿es viable este con los recursos que posee? ¿le proporcionará su-
ficientes víveres? Todas estas preguntas se pueden abordar tras realizar
un análisis pormenorizado de la secuencia.
Los cálculos que realiza al principio de la secuencia, tanto para saber
en qué día de la misión se encuentra como para averiguar los nutrientes
de que dispone son los siguientes: Según se indica en el film, la misión
‒ ‒
debía durar 31 soles, y lo normal es enviar comida para más, previendo
imprevistos, en concreto para 68 soles y teniendo en cuenta que eran 6
tripulantes. Entonces en un primer momento tendría 408 raciones, pero
al hacer el recuento, solo le quedan 300, por tanto, se han consumido
108. Al dividir esos 108 entre los seis tripulantes, sí que se podría con-
firmar que tras el incidente que hizo que sus compañeros abortaran la
misión, habían pasado 18 soles. Por ello, la primera grabación indica
que está solo en el sol 19. Como tiene 300, ya sabe que al menos le va
a durar 300 soles, aunque si hace un buen racionamiento, ingiriendo
menos de las calorías diarias requeridas, podría extenderse a 400 soles.
Tiempo insuficiente para que puedan volver a rescatarle.
Al hacer el recuento de víveres, se da cuenta que también dispone de
unas pequeñas patatas envasadas al vacío, que estaban destinadas a uti-
lizarse junto a un pavo el día de acción de gracias. Este hecho hace que
se decante por planificar un invernadero para cultivar patatas. Puesto
que como botánico sabe que el cultivo de patata es relativamente fácil,
de hecho, es el tercer cultivo alimentario más importante a nivel mun-
dial, pueden crecer en suelos de ambientes extremos y, además, el tu-
bérculo que proporciona es muy nutritivo para el ser humano. Pero ¿por
qué no se plantea cultivarlo directamente en la tierra de Marte cercana
a la base? Son varios los factores fisicoquímicos que hacen que el pro-
tagonista ni se plantee el cultivo en el exterior de la base.
A nivel atmosférico, además de la baja concentración existente de oxí-
geno, que impediría la respiración por parte de las plantas, así como las
continuas tormentas de polvo, también hay que considerar las bajas pre-
siones, que por procesos osmóticos harían que las plantas terminasen
expulsando el agua. Además, si estas superasen la pérdida de agua, tam-
bién se tendrían que enfrentar a la pérdida de hormonas tales como el
etileno, que causaría problemas a nivel de maduración.
La temperatura en el cultivo de la patata es determinante para su optimo
desarrollo. Son típicas de climas templados-fríos, aunque también pue-
den darse en tropicales y subtropicales. La oscilación de la temperatura
que se debe dar como máximo entre el día y la noche para el cultivo de
la patata, no debe ser superior a 20 grados. Esto último hace que sea
inviable su cultivo en el exterior de Marte sin ningún tipo de protección,
‒ ‒
ya que la oscilación que se suele dar entre el día y la noche en este
planeta puede alcanzar los 63ºC.
El sometimiento de un cultivo a la radiación ultravioleta de manera pro-
longada que se da en la atmósfera de Marte, puede hacer pensar que los
productos vegetales que se obtengan pueden ser ricos en metales pesa-
dos, elementos totalmente nocivos para el ser humano. Pero los últimos
experimentos que se han hecho, simulando este tipo de cultivos, han
hecho ver que, tras el análisis de los frutos, no se han encontrado niveles
nocivos para el consumo de plomo, arsénico, etc.
A pesar de que no podemos hablar de hipogravedad en Marte, ya que
es 1/3 menor que en la Tierra (0,37g), se sabe que una exposición defi-
ciente a dicha fuerza puede provocar una división celular vegetal pre-
matura -puesto que el transporte de nutrientes es más rápido-, haciendo
que su tamaño se reduzca. Además, se ha demostrado que se producen
cambios epigenéticos durante el crecimiento, y que suelen presentar
problemas en las respuestas al estrés oxidativo. Otra problemática a la
que se enfrenta el crecimiento vegetal en Marte es el encontrar una
fuente de energía potente, que les permita realizar la fotosíntesis y la
respiración. En la Tierra, es el calor y la luz solar, lo que utilizan como
fuente de energía, pero en Marte esa energía es un 43% menor, debido
a una mayor distancia con respecto a la estrella.
Aunque la composición del suelo terrestre y el marciano son similares,
el marciano carece de compuestos orgánicos complejos y actividad mi-
crobiana, indispensables para pensar en establecer un cultivo. Además,
poseen sales de perclorato y otros metales pesados, que harían inviable
el cultivo, aunque siempre podrían ser lavados con agua, y se reducirían
bastante.
Por todos estos motivos, el protagonista directamente se dispone a cal-
cular cuánta superficie cultivable puede tener dentro de la estación (92
m2) en la que se pueden dar unas condiciones óptimas, pues tiene con-
trolada la atmósfera (presiones- equivalente a la que se tiene a nivel del
mar-, niveles de oxígeno, humedad), la oscilación de temperatura, la
gravedad, y la fuente de energía (que la suple con luz led continua) para
asegurar la fotosíntesis. Como sustrato, utiliza una mezcla de suelo
‒ ‒
terrestre que llevaban en la misión con suelo marciano, y lo abona con
los excretos humanos de la tripulación y los suyos propios. Además,
sabe que debe tener un suelo con un grosor determinado (al menos 10
cm para que puedan germinar las semillas) y que los tubérculos de pa-
tata deben ser pequeños como para que puedan germinar (a falta de se-
millas). Y por supuesto, debe contemplar la obtención de otra fuente de
agua para poder hacer frente tanto a la humedad requerida por parte del
sustrato como a los requerimientos hídricos de las especies vegetales.
(escena que se analizará posteriormente).
Con ello, sabe que, en el espacio de siete soles, el equivalente a una
semana terrestre, podrá obtener sus primeros germinados.
De este modo, a través de esta escena se pueden tratar numerosos con-
tenidos curriculares de ESO y Bachillerato, relacionados con el área
STEM. Por ejemplo, se tratarán problemas simples de álgebra (Mate-
máticas), para establecer los cálculos de los víveres y el tiempo que le
queda en la base, o para saber la cantidad de agua y de abono que ne-
cesita para desarrollar el cultivo en el invernadero. También se trabajan
contenidos de edafología (Geología) al establecer una comparativa en-
tre el suelo terrestre y el marciano y ver la necesidad del tipo de sustrato
para cultivar. Además, es indispensable tener conocimientos de Física
y de Química para continuar con el análisis de la atmósfera, la tempe-
ratura, la gravedad y las fuentes de energía que se dan en Marte, así
como cómo afectarían estas al cultivo de vegetales, por lo que también
se están tratando contenidos de fisiología y botánica (Biología). Así
mismo, también podríamos relacionar dichos contenidos, con el pro-
blema del cambio climático y la pérdida de biodiversidad, que repercute
en que cada vez existan en la tierra más ambientes extremos.
Escena 3: ¿Cómo podemos fabricar agua a partir de Hidrazina? Uno de
los retos a los que se enfrenta el protagonista Mark Watney (Matt Da-
mon) en su propósito de supervivencia en un entorno tan hostil es el de
la fabricación de agua. Mark necesita el agua para poder regar las plan-
tas de su invernadero y poder sobrevivir con los productos de ese cul-
tivo. En sus cálculos considera que debe generar unos 250 litros de agua
para poder conseguir su propósito.
‒ ‒
El problema planteado en la película abre la puerta a un análisis desde
el punto de vista químico muy interesante y completo. En la escena se
puede observar cómo el protagonista sigue un razonamiento científico
para poder alcanzar su objetivo. Este problema se puede trasladar al
aula para trabajar con él desde un contexto STEM.
Ciencia (S): El problema incluye la reactividad química como eje prin-
cipal. Conocer cómo se comportan los reactivos y los productos, las
velocidades y entalpías de reacción son algunos de los contenidos más
interesantes que se trabajan.
‒ En primer lugar, debe diseñar una ruta sintética que le permita
obtener H2O.
‒ Obtener H2 a partir de Hidrazina (N2H4), para ello utiliza un
catalizador de Iridio (Ir) que desencadena con facilidad la des-
composición en H2 y N2
‒ Obtener O2 a partir de CO2, se realiza a través de una licuación
y posterior paso por un oxigenador.
‒ Obtener H2O a partir de O2 y H2 implica una reacción exotér-
mica: 2 H2 (g) + O2 (g) → 2 H2O (L)
‒ ‒
‒ Identificar las propiedades de los materiales le permite obtener
un material comburente para originar la llama que desencade-
nará la reacción de obtención del H2O.
Ingeniería (E): para poder llevar a cabo las reacciones químicas que
generan el agua, debe construir unos reactores que permitan recoger los
reactivos intermedios y finales, para ello toma una serie de decisiones
clave en el éxito de su reto.
‒ Ser capaz de comprender cómo y dónde se deben colocar los
reactores, qué dimensiones deben tener y cómo ha de organi-
zarse el material del que dispone y para qué utilizarlo.
‒ ‒
argumento completo de la película para así poder contextualizar cada
fragmento. En la primera sesión de trabajo se explica a través de ejem-
plos prácticos el significado de la enseñanza STEM, la importancia de
la integración de contenidos y el desarrollo de las competencias STEM.
Esta sesión tiene como objetivo que el profesorado en formación ob-
tenga las nociones básicas para comprender la enseñanza STEM y ser
capaz de enfrentarse al análisis de las secuencias y al desarrollo de la
actividad práctica que se plantea en las siguientes sesiones. En las se-
siones II y III se desarrolla el trabajo práctico de manera virtual y sín-
crona a través de Adobe Connect. Al inicio de la sesión II el profesor
distribuye la clase en grupos de trabajo, y por tanto en salas indepen-
dientes, y asigna a cada grupo una de las tres escenas seleccionadas de
la película The Martian, para que en grupos puedan desarrollar la acti-
vidad práctica explicada en la ficha de trabajo (figura 1). En primer lu-
gar, se les pide que visualicen la escena, realicen un análisis de la misma
tratando de plantear qué áreas STEM se podrían trabajar de manera in-
tegrada, qué contenidos de Educación Secundaria se podrían desarrollar
y qué competencias STEM aparecen reflejadas en la escena. Además,
teniendo en cuenta la película completa también se les pide que se pon-
gan en el lugar del alumno y piensen sobre cómo esta película puede
mejorar la motivación hacia las ciencias y promover vocaciones STEM.
Una vez hecho este primer análisis se pide al alumnado que diseñe una
actividad o proyecto para desarrollar en el aula de secundaria a partir
de la pregunta central planteada en cada escena. Con este proyecto los
profesores en formación deben pensar qué preguntas o desafíos plan-
tearían a los alumnos, qué recursos usarían además de la película y
cómo lo desarrollarían a grandes rasgos.
‒ ‒
FIGURA 1. Ejemplo de ficha de trabajo para el estudiante, centrada en la actividad asociada
a la escena 1.
Atmósfera de Marte
¿Qué características hacen que la Tierra sea habitable y Marte no?
‒ ‒
puedan exponer sus proyectos, plantear las dificultades que se han en-
contrado y realizar así un debate final a modo de reflexión sobre la via-
bilidad y utilidad de la enseñanza STEM. Finalmente, se desarrollará
una evaluación desde tres puntos de vista: autoevaluación, coevalua-
ción entre grupos y heteroevaluación por parte del profesorado. En di-
chas evaluaciones se valorará el análisis desarrollado a partir de las res-
puestas a las preguntas planteadas en la ficha de trabajo. De esta manera
se valora la capacidad de detectar contenidos STEM a trabajar a partir
de la escena asignada, y su capacidad de integrarlos a través de las pro-
puestas de proyecto. A su vez, se plantea evaluar en qué medida, a partir
del proyecto diseñado se trabajarían las diferentes competencias STEM.
4. DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES
‒ ‒
se engloban bajo el término STEM (Prolongo & Pinto, 2019), puesto
que no han sido formados en ello, pretendemos que el profesorado en
formación practique a partir de las secuencias propuestas, posibles ac-
tividades a desarrollar en un aula de secundaria, destacando la impor-
tancia que tiene el aprendizaje colaborativo y reflexivo.
En definitiva, se presenta una propuesta válida para la formación del
profesorado de secundaria, porque se articula como una intervención
para reflexionar sobre la práctica diaria en el aula, aumentando así la
limitada literatura existente sobre el diseño de propuestas prácticas que
incrementen la formación y la capacidad de reflexión del profesor en
formación (Jiménez-Tenorio & Oliva, 2016) bajo el enfoque STEM.
5. REFERENCIAS
‒ ‒
Jiménez-Tenorio, N. y Oliva, J. M. (2016). Análisis reflexivo de profesores de
ciencias de secundaria en formación inicial en torno a diferentes
secuencias didácticas. Revista Eureka sobre Enseñanza y Divulgación de
las Ciencias 13 (2), 423-439.
Kim, A. Y., Sinatra, G. M., Seyranian, V. (2018). Developing a STEM Identity
Among Young Women: A Social Identity Perspective. Review of
Educational Research, 88(4), 589–625.
Morales Inga, S. & Morales, O. (2020). ¿Por qué hay pocas mujeres científicas?
Una revisión de literatura sobre la brecha de género en carreras STEM.
aDResearch ESIC International Journal of Communication Research.
22. 118-133
Murillo, A. (2017, 19-20-octubre) El cine como reflejo de la realidad: diseño de
un taller para mejorar la atención a la problemática social y sanitaria. 3er
Congreso Internacional de Comunicación en Salud, 3ICHC. Universidad
Carlos III de Madrid. Madrid, España
Pac Salas, D. & García-Casarejos, N. (2013). El cine como herramienta de
aprendizaje en el aula. Claves de una experiencia docente
multidisciplinar en el ámbito económico. Revista Internacional de
Organizaciones, 10, 181-197.
Pascual, V, Moreno, D, Palacios, A. (2016). Implementación de metodologías
activas en un aula virtual para la formación de docentes de secundaria.
En Roig-Vila (coord.), Tecnología, innovación e investigación en los
procesos de enseñanza-aprendizaje (1044-1053). Barcelona: Octaedro.
Perales Palacios, F. J., & Aguilera, D. (2020). Ciencia-Tecnología-Sociedad vs.
STEM: ¿evolución, revolución o disyunción? Ápice. Revista de
Educación Científica, 4(1), 1-15.
Prolongo, M. & Pinto, G. (2019). La Educación STEM: Ejemplos Prácticos e
Introducción al proyecto Europeo Scientix. En M. Gonzalez y L. Baratas
(Eds.). Jornadas sobre investigación y didáctica en ciencia, tecnología,
ingeniería y matemáticas (pp. 451-460). Santillana
Rahmawati, Y., Sastrapraja, A., Hadinugrahaningsih, T., Soeprijanto. (2019).
Developing critical and creative thinking skills through STEAM
integration in chemistry learning. Journal of Physics: Conference Series.
1156.
Scott, R. (director). 2015. The Martian.Scott Free Productions, TSG
Entertainment, 20th Century Studios.
Siekmann, G., & Korbel, P. (2016). Defining "STEM" Skills: Review and Syn-
thesis of the Literature. Support Document 1. National Centre for
Vocational Education Research.
‒ ‒
SECCIÓN II
1. INTRODUCCIÓN
Hoy en día los idiomas están presentes en todas las etapas escolares;
desde infantil incluso hasta en la universidad y se debería sacar un me-
jor provecho. En Palma de Mallorca, la enseñanza de idiomas todavía
es más importante que en otras zonas debido al sector turístico y a la
gran cantidad de extranjeros en la isla. Para lograr una adquisición efi-
ciente, resulta imprescindible el empleo de una metodología adecuada,
siguiendo los principios que posteriormente se hará constancia. En ese
sentido, se estudiarán las nuevas metodologías dentro del mundo edu-
cativo, que respondan a las diversas dificultades y frustraciones del
alumnado.
En primer lugar, se determina el objeto de estudio, así como los objeti-
vos de investigación. Se aborda el estudio haciendo referencia a los as-
pectos históricos, es decir, en la educación tradicional obsoleta en una
sociedad TIC y se analizan los métodos que se proponen aplicar: enfo-
que natural y comunicativo, el intercultural, el Task-based Language
Teaching y Design Thinking.
En la metodología, se distingue entre metodología cuantitativa y cuali-
tativa, que parte de un análisis PESTEL, análisis de las cinco fuerzas
de Porter y el análisis de los competidores más directos, para final-
mente, poder aportar unas conclusiones y líneas de futuro.
El objeto de estudio se asienta en la posibilidad de implantar una es-
cuela de idiomas con una organización novedosa. La idea de negocio
viene determinada por el interés continuo en los idiomas ya que es de
‒ ‒
clara relevancia presentar un amplio conocimiento en lenguas. Es por
ello que se ha puesto énfasis en la creación de metodologías fuera de lo
tradicional, nuevas y revolucionarias dedicadas en gran medida a la
práctica oral y contextualizada.
Para la impartición de las lenguas extranjeras y sobre todo de la comu-
nicación oral es muy importante presentar las aulas o salas donde, tanto
los más jóvenes como personas más adultas, tendrán a su disposición
todo tipo de talleres temáticos donde según sus propios intereses po-
drían aprender el idioma en concreto, por ejemplo, relacionado con el
ámbito del turismo, relacionado con negocios, deporte, etc. Así pues,
una propuesta de organización con el fin de permitir el desarrollo de
estrategias adecuadas en cada área de la empresa.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
‒ Realizar un estudio referente a la demanda posible de los dis-
tintos idiomas ofertados y más social agrupado por edades
3. METODOLOGÍA
4. RESULTADOS
‒ ‒
GRÁFICO 1. Pregunta: Cómo valoraría la importancia de un método influenciado en el
aprendizaje favorable de idiomas.
‒ ‒
Instituto Nacional Español (INE, 2020) comprendía un total de 422.587
personas. Centrando el dato en el nicho más interesante que son los es-
tudiantes adolescentes y jóvenes de a partir 20 años, los rangos de eda-
des entre 15-19 años presentan un total de 19.185 y las edades com-
prendidas entre 20-24 un total de 22.438. Por último, los enmarcados
entre 25-29 representan una suma de 26.954 individuos.
‒ ‒
4.2.4. Factores tecnológicos
El mundo es cada día más tecnológico y es que los avances son abun-
dantes, en este sector concretamente es realmente amplio con la apari-
ción de una gran cantidad de aplicaciones para profundizar el conoci-
miento de alguna lengua meta o cursos online mediante una plataforma
digital y el contacto telemático con el docente para practicar la habili-
dad comunicativa. En lo que se refiere a la ludificación y tecnología,
una de las tendencias son los juegos didácticos online, que ayudan a
desarrollar habilidades como la creatividad, perseverancia, etc. Según
lo descrito en el periódico el País, 2020, el desarrollo de la Inteligencia
Artificial (IA) permite identificar todo progreso de los alumnos para así
tener en cuenta las áreas en las que necesitaría más refuerzo. Es de gran
utilidad, ya que se podrá adaptar toda actividad futura, haciendo por
ejemplo que los alumnos más destacados puedan hacer uso de activida-
des más sofisticadas para mantener su motivación.
En general, los recursos multimedia son muy beneficiosos para el
aprendizaje, por ejemplo, todas aplicaciones digitales, podcast e incluso
videos instructivos que se plantean en un contexto real pueden servir
para mantener la motivación de los alumnos y aumentar sus conoci-
mientos de la lengua de destino. Además, son muchas las academias
que a día de hoy presentan cursos tanto presenciales como telemáticos.
No obstante, hay algunos cursos online que prescinden de docente, ha-
ciendo uso exclusivamente de una plataforma.
‒ ‒
España es uno de los países con una de las mayores tasas de abandono
escolar temprano. Según los datos expuestos, el 17,9% de los jóvenes
de 19 a 24 años tenían en 2018 como máximo estudio de secundaria.
Dichos Presupuestos invierten 78 millones de los fondos europeos en
el Programa de Orientación, Avance y Enriquecimiento Educativo. Re-
saltar que los colegios comienzan a impartir otras asignaturas en inglés
con el fin de fomentar el bilingüismo.
‒ ‒
En cuanto a la amenaza de nuevos competidores. Cabe recalcar que hay
una gran cantidad de academias de idiomas, así como la existencia de
precios competitivos sobre todo en cuanto a bonos y clases online. De-
bido a todo ello, se pueden presentar ciertas dificultades para abrir otra
academia en un sector tan amplio. A causa de ello, habrá que tener en
consideración esa ventaja diferencial del resto, ya no en factores como
precios asequibles, sino proporcionar servicios y material que el resto
no ofrezcan como pueden ser los recursos digitales, metodologías inno-
vadoras basadas en proyectos mediante un enfoque natural y comuni-
cativo teniendo en cuenta siempre los intereses de los alumnos.
La amenaza que representan los productos sustitutivos en el caso propio
sería el relacionado con servicios semejantes. Resulta muy importante
estar en todo momento informado de cómo trabajan otras empresas y/o
profesionales para buscar aspectos diferenciales con los servicios de las
aplicaciones o de profesores particulares.
5. DISCUSIÓN
Tanto los métodos como las metodologías sirven para estructurar, or-
ganizar, definir y guiar los diferentes comportamientos y formas de tra-
bajo que el docente tendrá dentro del aula. El término método es parte
fundamental en cualquier actividad educativa, con una buena aplica-
ción, se podrá llegar a grandes resultados. A lo largo de los últimos
años, se ha efectuado una gran evolución en el uso de determinadas
metodologías, dando un especial énfasis en la competencia comunica-
tiva por parte del aprendiz. Su acertada elección es una cuestión que
todo profesor debe plantearse, ya que determinará el resultado final del
alumno.
El propósito principal de todo método es la facilitación a la hora de
aprender la lengua como también la resolución de problemas educativos
(Martín, 2009: 61). Ya en el siglo XIX surge el primer método de en-
señanza profesional de lengua extranjera denominada como “método
tradicional o prusiano”, desarrollado por el estadounidense Sears.
‒ ‒
Fundamentalmente, se basaba en el aprendizaje del latín como lengua
culta, esta era un conjunto de reglas y se centraban en el análisis de la
gramática, memorización léxica, etc. (Martín, 2009: 62). Más adelante
dio lugar, el método directo, el método audio-oral, método situacional
también conocido como Enfoque Oral. Asimismo, se añade el concepto
de “sugestopedia”, las técnicas de relajación y concentración son fun-
damentales para retener grandes cantidades de vocabulario y estructu-
ras gramaticales.
‒ ‒
texto, el cual será utilizado, pero no en gran medida, únicamente servirá
como guía para el profesor y una herramienta de apoyo para el alum-
nado. En estos se podrá encontrar pistas de audio, videos y todo tipo de
recursos como juegos interactivos, etc.
‒ ‒
teórica online se realizará a través de la plataforma digital de la acade-
mia y en ella tendrán a su disposición todo tipo de recursos digitales,
diapositivas o fotocopias con todo tipo de explicaciones que se realicen,
así como videos del docente explicando los contenidos tratados en la
clase. Además, se realizarán talleres interactivos prácticos cada se-
mana, ya que la mejor manera de aprender un idioma es a base de prac-
ticar, es decir, de mantenerse en todo momento activo, no únicamente
hablando sino también a partir de la gamificación, proyectos que se
realicen, etc. Todo ello, adaptado según la edad, intereses y nivel del
alumnado.
‒ ‒
también es fruto del modo en que se gestionan los problemas con ante-
rioridad, ya que se pautaba como primordial reaccionar en vez de actuar
proactivamente o estar a la defensiva en vez de la ofensiva.
La innovación existe porque existen personas que quieren cambiarlo.
Los mercados cambian aceleradamente y no se pueden lanzar productos
y servicios y esperar a que los compren. La demanda es la que deter-
mina el éxito, de ahí lo de lanzar valor diferencial a las propuestas, y es
que hay que ser diferentes. Es por eso que posteriormente se centrará
en gran medida en el análisis del entorno, sector competitivo, demanda,
etc. Y es que, son aspectos que hay que tener en cuenta para determinar
un pensamiento estratégico en toda regla. Es conveniente ser mejores
que la competencia, añadiendo algo distintivo al resto para que los fu-
turos clientes quieran antes dichos servicios.
‒ ‒
el alumnado presente en el aula provenga de países distintos y/o diver-
sas ciudades, se podría mantener conversaciones profundas sobre el
tema de la interculturalidad. Es un tema que se tratará en profundidad
en niveles elevados.
‒ ‒
forma para que aprendan por su cuenta. Los tipos de actividades que
comportan son creativas y auténticas, relacionadas con la realidad.
‒ ‒
La investigación se enmarca y toma como muestra a todas las escuelas
de idiomas del centro de Palma de Mallorca. Esta se centra en la elabo-
ración de un total de siete preguntas dirigidas concretamente a una
muestra representativa de grupos sociales con el propósito final de in-
dagar en los distintos estados de opinión o comprender otras cuestiones
que se han visto afectadas. Se especifican un total de catorce escuelas
y todos los resultados se han recogido en el apartado de resultados. Los
temas a tratar se centran en el presente uso de la metodología, técnicas
que llevan a cabo y existencia de recursos digitales.
‒ ‒
TABLA 1. Aspectos influyentes en el aprendizaje favorable de idiomas
Academias
BCN Language
DIE Akademie
The Academy
Palma
Academia Raúl
Martín
Ofidiomes
Dialog
Progreso Idio-
mas
SYM UPtoU En-
glish
Palmaleman
Speakeasy
International En-
glish
English Connec-
tion
Berlitz
Class room
‒ ‒
TABLA 2. Equilibrio entre las cuatro destrezas
Academias
BCN Language
DIE Akademie
The Academy
Palma
Academia Raúl
Martín
Ofidiomes
Dialog
Progreso Idiomas
Palmaleman
Speakeasy
International English
English Connection
Berlitz
Class room
‒ ‒
TABLA 3. Importancia del enfoque natural
Academias
BCN Language
DIE Akademie
The Academy
Palma
Academia Raúl
Martín
Ofidiomes
Dialog
Progreso Idiomas
Palmaleman
Speakeasy
International English
English Connection
Berlitz
Class room
‒ ‒
TABLA 4. Metodología más adecuada
Aprendizaje
Metodología más ade- Enfoque natural y Enfoque gra- Design
cooperativo (pro-
cuada comunicativo matical Thinking
yectos)
Academias
BCN Language
DIE Akademie
Ofidiomes
Dialog
Progreso Idiomas
Palmaleman
Speakeasy
International English
English Connection
Berlitz
Class room
‒ ‒
TABLA 5. Imprescindibilidad de recursos digitales en el aula
Imprescindibilidad de recur-
SI NO NS/NC
sos digitales
Academias
BCN Language
DIE Akademie
Ofidiomes
Dialog
Progreso Idiomas
Palmaleman
Speakeasy
International English
English Connection
Berlitz
Class room
‒ ‒
TABLA 6. Aplicación de Chromebooks
Aplicación de Chrome-
SI NO NS/NC Ya se aplican
books
Academias
BCN Language
DIE Akademie
Ofidiomes
Dialog
Progreso Idiomas
Palmaleman
Speakeasy
International English
English Connection
Berlitz
Class room
‒ ‒
TABLA 7. Grado de satisfacción con el método actual
Satisfacción con el
Muy Bueno Bueno Malo Muy Malo
método actual
Academias
BCN Language
DIE Akademie
Ofidiomes
Dialog
Progreso Idiomas
Palmaleman
Speakeasy
International English
English Connection
Berlitz
Class room
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
comunicativo. Asimismo, son muchos los métodos que han caído en
desuso, estableciéndose otros creyendo ser más prósperos. Se puede
constatar que el método con un enfoque comunicativo y natural es el
más importante, debido a su gran influencia y uso en todas las acade-
mias de idiomas de la localidad de Palma de Mallorca. La formación
basada en medios digitales está centrada en el estudiante, por lo que hay
un cambio de roles, ya que en el método tradicional estaba centrado en
mayor medida en el docente. En la actualidad son muchas las academias
que ya empiezan a introducir el Chromebook en el aula.
En base a los resultados obtenidos del estudio de campo, ha resultado
sugerente el hecho de que todos concluyan que la dinamicidad en el
aula (profundizando en la habilidad y comunicativa) y otros aspectos
como la motivación sean los más seleccionados a la hora de verse in-
fluenciados en el aprendizaje de idiomas. Bien es cierto, que muchos
creen que es lo más beneficioso, pero no lo pongan en práctica. La ma-
yoría de las academias consideraron que el enfoque natural y comuni-
cativo es el de mayor importancia seguida del cooperativo.
Es interesante el hecho de que todos consideran un grado muy relevante
el hecho de aplicar una metodología propia en el aula, ya que muchos
son los que siguen en general un método tradicional. Los recursos digi-
tales son considerados primordiales en clase, algunas academias ya
aplican Chromebooks y otras no, pero sí que lo aplicarían. Hoy en día,
los niños que asisten a institutos mayoritariamente utilizan estos dispo-
sitivos en vez del libro de texto.
Los problemas que se pueden dar cara a un futuro es que se siga im-
plantando el método tradicional en las aulas y siga siendo el profesor el
centro de atención. Se debe incentivar la innovación en el aula, motivar
a los alumnos guiándoles en todo momento en el proceso de adquisi-
ción. No se basa en implantar el método que se crea más oportuno sino
en la adaptación a las características del alumnado valorando sus puntos
fuertes y débiles para la elección de un método revolucionario que les
permita aprender la lengua en cuestión.
El papel del docente es un factor clave para que los alumnos puedan
adquirir favorablemente los conocimientos del idioma en cuestión, debe
‒ ‒
ser un guía en el proceso de aprendizaje, basado en errores, de una ma-
nera dinámica basado en ejercicios donde se tengan que ver involucra-
dos y envueltos a hacer uso del idioma.
En la actualidad, el aprendizaje de idiomas online se ha visto incremen-
tado, muchos son los que consideran que no se adquieren las mismas
competencias que si fuera totalmente presencial debido a la carencia de
interacción. No obstante, si se dispone de las herramientas y metodolo-
gías adecuadas no debería resultar un problema y podría equipararse a
la modalidad presencial.
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8. REFERENCIAS
¿Por qué hablamos los españoles tan mal el inglés? (2014, abril 4). abc.
https://www.abc.es/familia-educacion/20140405/abci-hablar-varios-
idiomas-201404041054.html
Así es como la tecnología y el juego te pueden ayudar a aprender inglés |
Economía | EL PAÍS. (s. f.). Recuperado 14 de marzo de 2021, de
https://elpais.com/economia/2020/03/25/actualidad/1585126604_629047
. html
Barriopedro, E. N., & Ripoll, R. R. (2017). Medida de la utilidad de los recursos
digitales para el aprendizaje de idiomas. Revista Científica Teorías,
Enfoques y Aplicaciones en las Ciencias Sociales, 10(21), 39-48.
Cervantes, C. C. V. (s. f.). CVC. Diccionario de términos clave de ELE.
Metodología cuantitativa. Instituto Cervantes. Recuperado 14 de marzo
‒ ‒
de 2021, de
https://cvc.cervantes.es/ensenanza/biblioteca_ele/diccio_ele/diccionario/
metodologiacuantitativa.htm
El gasto en educación crece un 70% gracias a los 1.800 millones de ayudas
europeas | Economía | EL PAÍS. (s. f.). Recuperado 14 de marzo de
2021, de https://elpais.com/economia/2020-10-28/el-gasto-en-educacion-
crece-un-70-gracias-a-los-1800-millones-de-ayudas-europeas.html
Inicio. (s. f.). Real Academia Española. Recuperado 14 de marzo de 2021, de
http://www.rae.es/inicio
Paricio Tato, M.S. (2014). Competencia intercultural en la enseñanza de lenguas
extranjeras. Porta Linguarum, 21, 215-226. Recuperado el 15 de abril de
2014 de
http://www.ugr.es/~portalin/articulosPL_numero21/14%20%20Silvina.p
df
PIB España: Caída histórica del 18,5%. (s. f.). Recuperado 14 de marzo de 2021,
de https://www.elperiodico.com/es/economia/20200731/pib-espana-
producto-interior-bruto-segundo-trimestre-2020-covid19-8060109
Pierri, F. (2017). El aspecto lúdico en el proceso de enseñanza-aprendizaje de las
lenguas extranjeras y su cultura y literatura a través de las TIC del siglo
XXI [Http://purl.org/dc/dcmitype/Text, Universidad Rey Juan Carlos].
https://dialnet.unirioja.es/servlet/tesis?codigo=142260
Sala, A. (2020, julio 31). España entra en recesión con una caída histórica del
PIB del 18,5%.elperiodico.
https://www.elperiodico.com/es/economia/20200731/pib-espana-
producto-interior-bruto-segundo-trimestre-2020-covid19-8060109
Sierra, F. C. (1989). Reflexiones sobre un curso de investigación educativa para
profesores de idiomas. Revista interuniversitaria de formación del
profesorado, 6, 139-143.
Tipos de fracaso escolar: Causas y cómo prevenirlas. (s. f.). Recuperado 14 de
marzo de 2021, de https://www.unir.net/educacion/revista/tipos-fracaso-
escolar/
Ventaja competitiva—Qué es, definición y concepto | 2021 | Economipedia. (s. f.).
Recuperado 14 de marzo de 2021, de
https://economipedia.com/definiciones/ventaja-competitiva.html
‒ ‒
CAPÍTULO 30
LA PSICOLINGÜÍSTICA EN EL PROCESO DE
APRENDIZAJE DE METAFORAS INGLESAS POR
ESTUDIANTES ESPAÑOLES
BORJAN GROZDANOSKI
UNIR
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
(2020) se alude que los recientes desarrollos cognitivos y psicolingüís-
ticos revelan que las metáforas no son solo dispositivos específicos del
lenguaje, sino que también presentan una relación con los conceptos del
mundo creados por los humanos.
De allí, a la pregunta por qué las metáforas son importantes, Knowles
y Moon (2006) indican que hay dos razones principales. En primer lu-
gar, enriquecen el lenguaje y son partes importantes en el proceso de
formación de palabras y su significado. En segundo lugar, las metáforas
son unos componentes básicos y vitales en el discurso, no solamente
porque entretienen el oyente, sino también porque tienen la capacidad
de explicar, aclarar, describir, expresar y evaluar.
Partiendo de esa premisa, comparando las diferentes teorías sobre las
metáforas, nos han motivado a explorarlas y comprobar cómo los estu-
diantes de habla hispana procesan las metáforas inglesas. Con este fin,
el artículo que presentamos intentará dar más detalles sobre las teorías
de las metáforas y su procesamiento lingüístico, cognitivo y psicolin-
güístico aplicado en el aula de inglés como lengua extranjera.
‒ ‒
discurso de las experiencias de las personas que las emplean. Por tanto,
Yaseen (2013) denomina esta categoría como metáfora conceptual.
‒ ‒
Cabe destacar que la noción de metáfora conceptual fue introducida por
Lakoff y Johnson (1980). En su teoría, contradicen la visión tradicional
de las metáforas que les consideran como una cuestión de palabras más
que de pensamientos o acción. Consecuentemente enfatizan que las me-
táforas son frecuentes y comunes en la vida cotidiana de las personas,
y no representan solamente uso del lenguaje, sino también acciones y
pensamientos. Finalmente, afirmaron que el sistema conceptual del ser
humano es metafórico por naturaleza.
A raíz de lo anteriormente mencionado, Al-Hajaj (2013) aclara que la
CMT (Conceptual Metaphor Theory) va más allá del nivel lingüístico
de las metáforas para investigar los pensamientos y la cognición. Ade-
más, añade, que trata de discutir cómo se establecen y formulan las me-
táforas. A esto le sigue la estructuración lingüística de las metáforas
hasta su punto de lanzamiento que se ubica en los pensamientos y la
cognición. Por tanto, Nacey (2010) afirma que las metáforas operan si-
multáneamente tanto en nivel lingüístico como en conceptual.
Hablando de la metáfora conceptual, cabe señalar que Yaseen (2013)
indica la existencia de tres tipos de metáfora conceptual. Primero, las
metáforas estructurales que aportan una experiencia en términos de otra
experiencia mediante el uso de conceptos particulares. Consecuente-
mente, el segundo lugar les corresponde a las metáforas orientacionales
que organizan un complejo sistema de conceptos entre sí. Y finalmente,
en tercer lugar, vienen las metáforas ontológicas que se utilizan para
considerar las cosas abstractas como concretas para que sean más tan-
gibles para la mente humana.
Como todas las teorías, la teoría de la metáfora conceptual tiene sus
principios. Deignan (2005) informa que algunos de los principios bási-
cos sobre cómo se relaciona la metáfora conceptual con el lenguaje se
encuentra en la creencia que la gente es consciente de muchos temas
abstractos como el amor y la muerte a través de las metáforas. En este
sentido, volvemos a la afirmación de Al-Hajaj (2013) que las metáforas
estructuran el pensamiento, y no se pueden aislar de la experiencia.
Aunque, Lakoff y Johnson (1980) enfatizaron que en realidad podemos
sentir que ninguna metáfora puede jamás ser comprendida o incluso
adecuadamente representada independientemente de su base
‒ ‒
experiencial. Adicionalmente, Deignan (2005) señala que las metáforas
no solo son beneficiosas para el sistema conceptual de los humanos,
sino también son importantes para el desarrollo de su conocimiento.
A partir de lo expuesto, se puede observar que las metáforas se utilizan
con frecuencia en el lenguaje, y se refieren en una de sus dominios o
dimensiones para abstraer las cosas. Por eso, Deignan (2005) justifica
esta frecuencia como una falta de palabras que pueden revelar lo que
puede hacer una metáfora. Por tanto, Al-Hajaj (2013) indica que las
metáforas son fundamentales para el lenguaje abstracto.
‒ ‒
desconocidas, y el hemisferio izquierdo procesaba las oraciones fami-
liares independientemente si las se trataba de habla literal o figurativa.
Posteriormente, en Amanzio et al. (2008) encontramos información que
el procesamiento de las metáforas es diferente en cada persona, y en su
estudio sobre la comprensión del lenguaje no literal en pacientes que
padecen enfermedades como Alzheimer los procesos de comprensión
de las metáforas convencionales estaban intactos. Por otro lado, sugie-
ren que en la comprensión de las metáforas rientemente compuestas
puede que haya ciertos problemas. Por lo cual, se concluyó que el de-
terioro del razonamiento verbal en los pacientes está relacionado con la
comprensión de metáforas novedosas.
Existe una discrepancia ente lo que opinan los psicólogos y los gramá-
ticos de tal manera que los gramáticos están más interesados en lo que
la gente realmente dice. Miller (2019) afirma que justo eso es lo que
irrita a los psicólogos, ya que ellos insisten en complementar la intui-
ción con evidencia objetiva.
Eso nos lleva a la pregunta, cómo funcionan las metáforas desde una
perspectiva psicolingüística. Bergen (2012) sugirió que los conceptos
abstractos pueden entenderse a través de la simulación incorporada, o
que la gente usa metáforas para describir algo abstracto en términos
concretos. Él comenzó a observar el lenguaje metafórico para identifi-
car qué palabras de cosas concretas usa la gente para describir algo abs-
tracto (Bergen, 2012).
Las teorías del procesamiento de las metáforas están basadas en cate-
gorías, y ciertos investigadores creían que las metáforas se procesan en
base de comparaciones, pero también en inclusión de clases (Glucks-
berg y Keysar, 1990). Según Glucksberg y Keysar (1990) este modelo
de inclusión de clases supone la existencia de una categoría superior
que consta de atributos compartidos.
Por otra parte, Bowdle y Gentner (2005) integraron los dos puntos de
vista del procesamiento de las metáforas en una única teoría. Su teoría
sostiene que el procesamiento de las metáforas puede estar relacionado
con la comparación o la categorización de tal manera que las metáforas
novedosas se procesan por comparación, mientras que las metáforas
‒ ‒
convencionales se procesan por caracterización (Bowdle y Gentner,
2005). A esto, añadimos la confirmación de Nacey (2010) que el nivel
de convencionalidad se considera como base para la comparación o ca-
tegorización.
En los años ochenta del siglo pasado, Lakoff y Johnson (1980) investi-
garon las metáforas conceptuales. Posteriormente, con el desarrollo de
las ciencias neuronales del celebro se ha construido la Teoría Neural
del Lenguaje, que incluye la teoría neural de la metáfora de Lakoff
(Kövecses, 2010). A continuación, Kövecses (2010) proporciona una
descripción detallada de la Teoría Neural de la Metáfora comenzando
con teorías más generales del lenguaje. Además, Kövecses (2010)
afirma que hay diferentes tipos de circuitos neuronales, como por ejem-
plo los circuitos de enlace. Este tipo de circuitos son responsables de la
metonimia, pero existen otros circuitos que se hagan responsables de la
construcción gramatical y vocabulario (Valerio García, 2017). Sin em-
bargo, de mayor importancia en nuestro caso son los circuitos neurona-
les que procesa las metáforas. Según Kövecses (2010), este tipo deno-
minado circuito de mapeo, contiene grupos de nodos relacionados con
el origen y el destino, y, además, contiene varios nodos que enlazan los
elementos de domino de origen y el objetivo. Por lo tanto, los circuitos
neuronales de mapeo que relacionan los nodos son los responsables del
establecimiento de la metáfora.
Nos hemos encontrado con diferentes opiniones sobre cómo se procesa
la metáfora. Gerrig (1989) sugiere el enfoque directo del procesamiento
de la metáfora que lo iguala con el procesamiento del lenguaje literal,
añadiendo que ambos funcionan simultáneamente. Sin embargo, estu-
dios recientes sugieren que es el grado de prominencia lo que determina
si la interpretación de una frase tiene éxito, ya sea figurativa o literal
(Giora, 2002). Por otra parte, Amanzio et al. (2008) indican que el en-
foque indirecto supone acceso a las metáforas, y solo está disponible
cuando los hablantes o/y los oyentes no logran encontrar un significado
lógico (o más bien liberal) a un enunciado lingüístico.
Presentando esta sección del estudio previo a la práctica, se intenta pro-
porcionar una idea de que los estudios psicolingüísticos han mostrado,
y cuáles eran sus resultados sobre el procesamiento de las metáforas.
‒ ‒
De todas formas, consideramos que se necesitan más estudios para ayu-
dar a los lingüistas a llegar a conclusiones más precisas, sobretodo en
el ámbito de la educación universitaria donde las metáforas forman
parte del currículo de estudios de filología inglesa.
2. OBJETIVOS
En primer lugar, cabe destacar que los objetivos de este estudio son de
naturaleza doble. El primer objetivo es demonstrar las diferentes inter-
pretaciones y perspectivas que una metáfora puede tener si está perci-
bida en nuestra lengua materna (castellano), o si la metáfora nos llega
en una lengua extranjera (inglés). Y el segundo objetivo es dar a enten-
der los procesos cognitivos, lingüísticos y psicolingüísticos en la com-
prensión de las metáforas.
3. METODOLOGÍA
4. RESULTADOS
‒ ‒
comprensión lingüística. Gibbs (2001) indica que una forma de hacerlo
sería darse cuenta de que el continuo temporal de la comprensión lin-
güística puede ser dividido en momentos correspondientes a la com-
prensión, seguida del reconocimiento y finalmente la interpretación lin-
güística, dependiendo del nivel que tenga el receptor.
En cuanto a la comprensión, hemos detectado que esa se debe al pro-
ceso inmediato, el momento y la creación de significados por parte del
alumnado. Estos procesos en la mayoría de las veces se demostraron
como inconscientes por lo que incluyen un análisis automático de in-
formación lingüística opuesto al contexto y el conocimiento del mundo
real. Esto ha demostrado que las personas generalmente tienen tenden-
cia a averiguar qué significa una metáfora, o en otras palabras qué pre-
tende decir una persona usando una expresión metafórica. Hemos de-
tectado que estos procesos operan de una manera muy rápida, y en cues-
tión de unos pocos instantes, a veces unos segundos como máximo el
estudiante ha reaccionado e intentado descifrar la metáfora.
Por otra parte, el reconocimiento se refiere a la identificación de los
productos de la comprensión. Esto nos ha permitido verificar que el
significado entendido por un estudiante puede ser reconocido conscien-
temente como metafórico, aunque en realidad no lo es. Aunque según
la asunción de Lakoff (1980) el reconocimiento es un requisito para
comprender lo que significa una frase que recibimos, no hay un índice
claro que el reconocimiento sea una etapa obligatoria en la comprensión
del significado. Consecuentemente, nuestros estudiantes probable-
mente no tenían ningún reconocimiento consciente de que las diferentes
expresiones en ingles que les proporcionábamos eran de origen idiomá-
tico o literal. Por eso, hemos detectado que se concentran principal-
mente en comprender que es lo que quiere comunicar el mensaje lite-
ralmente.
De aquí, deducimos que la interpretación se refiere al análisis de la
comprensión inicial de la frase. Con lo cual, se ha demostrado que una
persona puede crear conscientemente un entendimiento, o interpretar
un significado particular. Por norma general, los procesos de interpre-
tación operaban en un momento posterior al proceso de comprensión.
‒ ‒
Aunque la apreciación se refiere a algún juicio otorgado a un producto,
ya sea tipológico o simbólico, esto no es necesariamente cierto para la
comprensión de las metáforas. En la psicología, la comprensión y la
apreciación de metáforas se refiere a distintos tipos de procesos menta-
les (Bergen, 2012). Esta no es una parte necesaria de la comprensión de
la metáfora. Según la evidencia psicológica, la comprensión y la apre-
ciación de metáforas se refieren a distintos tipos de procesos mentales.
Para detectar la percepción indirecta, se ha visto que entre los estudian-
tes existe una opinión predominante, que según Carroll (2000) es pura-
mente psicolingüística y se refiere al procesamiento de los actos prove-
nientes de habla indirecta, la metáfora. Esa implica un proceso de tres
etapas que eran detectadas entre los estudiantes. La primera es la eva-
luación del significado, le sigue la comparación del significado literal
con un contexto de comunicación, y al final se presenta la decisión con-
flictiva entre el significado literal y el contexto.
Si tenemos en cuenta esa visión, podemos explicar la comprensión de
metáforas como un proceso lingüístico secundario dentro del lenguaje
literal. Por lo tanto, todos los enunciados que eran presentados a los
alumnos primero eran procesados de forma literal. Esto quiere decir que
cuando la mente se haya hecho capaz de encontrar un significado literal
para una expresión, el mismo empezó a transformarse, y los estudiantes
intentaban procesar su significado literal y darle otro atreves de deco-
dificación del mismo. Este proceso demostró que la comprensión de
una metáfora se traduce en descomposición y termina en una paráfrasis
literal. Por lo tanto, los estudiantes intentaban encontrar una interpreta-
ción metafórica solo después de que la búsqueda de un significado lite-
ral ha fracasado.
En cuanto a la percepción directa, hemos decidido aplicar la investiga-
ción de Glucksberg (2001), y hemos detectado que determinados estu-
diantes estaban procesando las metáforas figurativa y literalmente a la
vez. Esto nos demostró que hay una fuerte evidencia que no todas las
personas principalmente intentan descifrar el significado litera y luego
buscar lo figurativo o metafórico. Aparte, otra vez más, coincidimos
con el descubrimiento de Glucksberg (2001) que la interpretación lite-
ral se presenta como anómala. Consecuentemente, estamos en sintonía
‒ ‒
con Carroll (2000) y hemos comprobado que los estudiantes compren-
den las metáforas en el mismo modo que el discurso literal, pero sola-
mente en castellano. En cuanto al inglés, hemos confirmado que casi
todos los estudiantes principalmente recuren a la traducción literal y
solamente después intentan buscar el significado figurativo, y exclusi-
vamente en caso cuando les hemos confirmado que su declaración es
equivoca. Con esto, confirmamos que los estudiantes que tienen un ni-
vel medio-alto de inglés intentan identificar la relación léxica antes de
empezar descifrando el mensaje de la metáfora.
Aparte de las percepciones directas e indirectas, el contexto juega un
papel muy importante en la comprensión de las metáforas. Por norma
general, hemos deducido que el contexto circundante puede influir no
solamente el tiempo de la comprensión sino también la manera de des-
cifrar el mensaje de la metáfora. Proveyendo una metáfora incluida en
un contexto más amplio, demostró que la interpretación de la metáfora
era aproximadamente el mismo que para una sección de texto con habla
literal. Esto nos habilitó deducir que cuanto más contexto se incluye,
mayores son las posibilidades de descifrar la metáfora. En contrario,
cuando hemos presentado metáforas aisladas, la insuficiencia de con-
texto forzaba el oyente a buscar otros recursos, semánticamente más
remotos, para poder entender la metáfora. Analógicamente, eso reque-
ría más tiempo, con lo cual la interpretación se retrasaba de tres a cuatro
veces.
Siguiendo las pautas de Janus y Bever (1985), hemos reproducido su
ensayo, y hemos observado que a diferencia de los sujetos de los años
ochenta, nuestros estudiantes reaccionaban con más rapidez mostrán-
doles un entorno de hablantes nativos. Con lo cual, hemos visto que la
globalización juega un papel muy importante en comprender el con-
texto de mejor manera, y con eso descifrar el mensaje de la metáfora.
Consecuentemente, el ensayo nos mostró que la comprensión de la me-
táfora no solamente es vinculada con la inteligencia, pero también con
los conocimientos globales.
En otro experimento, hemos pedido los estudiantes que realizaran una
acción o gesto cuando escuchen una metáfora, y que aplicaran la misma
acción o gesto cuando escuchen una forma de expresión literal que
‒ ‒
podía igualmente ser un concepto o idea. Se demostró que realizar una
acción que corresponde a la metáfora puede acelerar el proceso de com-
prensión de la metáfora. Con eso, hemos llegado al concepto de Bergen
(2012) que la comprensión de las metáforas activa el aparato encargado
de realizar la misma acción en ambos casos.
Se observó que la psicolingüística contribuye a una mejor comprensión
de las metáforas, tanto como la misma lingüística. Primero, los estudios
lingüísticos nos dieron base, ya que supuestos teóricos son necesarios
para poder dar un paso más. Así, la lingüística define las metáforas, las
caracteriza y aclara su funcionamiento gramatical. Pero, por otra parte,
las ciencias cognitivas amplían la comprensión de las metáforas como
dispositivos para decir que son una cuestión de cognición y pensamien-
tos.
Basándose en Kövecses (2010), hemos notado que las metáforas con-
ceptuales se basan en la experiencia general de los estudiantes. Como
tales, son más faciales de comprender que las metáforas relacionadas
con las experiencias personales. Por lo tanto, cuando se presentaba una
metáfora relacionada con algo general y bien conocido, los estudiantes
no tardaban más que procesando un pensamiento de lenguaje literal.
Hemos deducido que los estudiantes no tenían ideas muy claras porque
en el lenguaje se usan las metáforas. Sobre todo, hemos conseguido que
entendieran que las metáforas no se usan solamente para comunicar o
decir algo, pero para transmitir algo mucho más profundo. De tal modo,
hemos recibido respuestas de que mediante las metáforas los humanos
somos capaces de expresar, transmitir y comprender la vida, el amor, la
muerte, la felicidad, el dolor y todo esto lo que categorizamos como un
concepto abstracto.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
mayor importancia, ya que se usan a menudo no solamente en español
como lengua materna de nuestros alumnos, sino también en inglés, la
lengua extranjera que estudian.
Si estudiamos en lenguaje de cerca, según Knowles y Moon (2006) la
metáfora se puede definir como una forma de uso del lenguaje para re-
ferirse a algo bien distinto de lo que significaría literalmente. Esto im-
plica que se sugiere alguna semejanza o tal vez se hace conexión entre
ambas. Por eso, Al-Hajaj (2013) sugiere que las metáforas de un idioma
no siempre pueden aislarse del mismo, ya que en otra lengua no tendrán
el mismo significado. Con este sentido, si extraemos las metáforas del
lenguaje, ese no tendría la capacidad de transmitir las mismas nociones.
Según Ricoeur (1977), el lenguaje es vitalmente metafórico, y las me-
táforas no se pueden enseñar, uno tiene que tener el don de crearlas.
La psicolingüística puede enriquecer los estudios lingüísticos y profun-
dizar en la comprensión de diferentes fenómenos. Por lo tanto, la psi-
colingüística, especialmente los desarrollos recientes en cuanto los mé-
todos de investigación y el estudio del celebro pueden brindarnos una
excelente forma de entender como producimos y comprendemos nues-
tro propio idioma y como eso afecta la comprensión de las metáforas
producidas en una lengua extranjera. Si nos apoyamos a la psicolingüís-
tica, podemos tener idea como se forman y se procesan las palabras en
nuestro celebro, ya sean componentes de lenguaje especifico o figura-
tivo.
Después de haber analizado el procesamiento de las metáforas presen-
tadas a nuestros alumnos, podemos entender que las cosas abstractas
presentadas en términos de cosas concretas, aclara las primeras. Desde
un punto de vista psicolingüístico, creemos que se abren muchas ven-
tanas para que los investigadores empiecen a pensar en metáforas en
muchas formas diferentes.
Los estudios psicolingüísticos sobre metáforas aportan mucho al len-
guaje en general. Como se ha visto en las sesiones previas, pro-estudios
psicolingüísticos se puede observar el procesamiento de las metáforas.
Por lo tanto, podemos encontrar hallazgos muy interesantes y promete-
dores sobre el procesamiento tanto en personas sanas, como en personas
‒ ‒
con algún trastorno mental. Consecutivamente, creemos que los estu-
dios psicolingüísticos sobre la adquisición, la comprensión y la produc-
ción del lenguaje pueden proporcionar una gran cantidad de conoci-
mientos sobre las metáforas que circulan en inglés entre los hablantes
nativos, y que posteriormente se transmiten a los estudiantes del idioma
mencionado.
Estos hallazgos, pueden brindar más oportunidades, establecer nuevas
estrategias y desarrollar una nueva y diferente comprensión de la ad-
quisición del inglés a través de aprendizaje de metáforas, sobre todo
para los estudiantes de inglés como lengua extranjera.
6. CONCLUSIONES
Las metáforas son una parte integral de cualquier cultura y con eso su
lengua. Estudiarlas e identificarlas es muy importante para que poste-
riormente pueden ser empleadas y entendidas por los estudiantes de
idiomas, en nuestro caso de inglés. Aunque las metáforas han sido es-
tudiadas y discutidas desde perspectivas lingüísticas, cognitivas y psi-
colingüísticas, se demostró que una metáfora no es solo un elemento
especifico de la lengua, pero también es directamente vinculada con los
pensamientos. Desde punto de vista psicolingüístico, se pueden esta-
blecer bases científicas, pero sin embargo tenemos un largo camino por
descubrir de como realmente funcionan las metáforas y porque les he
tan difícil a los estudiantes de lenguas extranjeras a comprenderlas.
Por lo tanto, enfatizando la importancia de las metáforas, y como lo
confirman los estudios psicolingüísticos de que son parte de nuestra ex-
periencia corporal, cognitiva y lingüística, se piensa que tenemos que
darnos cuenta de su existencia. De allí, la adquisición de la competencia
lingüística, estratégica o pragmática es un signo de éxito en una lengua
extranjera. Por otro lado, parece que la competencia metafórica también
es importante para adquirir. De esta manera, no solo ayudará a los es-
tudiantes de habla hispana a aprender inglés, sino también para ser parte
de la cultura anglosajona. Al ser competentes en el uno se metáforas,
los estudiantes tienen la posibilidad de compartir experiencia, y al
mismo tiempo comprender conceptos abstractos relativos a los países
‒ ‒
de habla inglesa. Con eso tienen la posibilidad de saber más sobre cómo
piensan los anglohablantes.
Finalmente, una contribución muy importante de la investigación psi-
colingüística es la de cómo son procesadas las metáforas en diferentes
materias. Esto significa que los psicolingüistas han estudiado el proce-
samiento de metáforas en individuos sanos provenientes de diferentes
culturas y hablantes de diferentes idiomas. Si hacemos comparaciones,
llegamos a conclusiones que las metáforas son diferentes de una cultura
a otra. Con eso, podemos saber cómo las personas de diferentes culturas
abstraen conceptos y los comprenden, que se muestra vital para el
aprendizaje del inglés como lengua extranjera.
Por ende, podemos concluir que la investigación psicolingüística hecha
en esta investigación aporta mucho al estudio lingüístico de la metáfora,
y ayuda a los lingüistas a ver sus supuestos teóricos desde un ángulo
diferente.
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Citron, F. M., Lee, M., y Michaelis, N. (2020). Affective and psycholinguistic
norms for German conceptual metaphors (COMETA). Behav Res 52,
1056–1072. https://doi.org/10.3758/s13428-019-01300-7
Deignan, A. (2005). Metaphor and corpus linguistics. John Benjamins Publishing
Company.
Diaz, M. T., & Hogstrom, L. J. (2011). The influence of context on hemispheric
recruitment during metaphor processing. Journal of Cognitive
Neuroscience, 23 (11): 3586–3597.
https://doi.org/10.1162/jocn_a_00053
Domínguez Caparros, J. (2009). Introducción a la teoría literaria. Editorial
Universitaria Ramón Areces.
Field, J. (2004). Psycholinguistics: The key concepts. Routledge.
Gerrig, R. J. (1989). Empirical constraints on computational theories of
metaphor: Comments on Indurkhya. Cognitive Science, 13(2), 235–241.
https://doi.org/10.1016/0364-0213(89)90005-0
Gibbs, R. W. (2001). Researching metaphor. En L. Cameron & G. Low (Eds.),
Researching and applying metaphor. Shanghai Foreign Language
Education Press.
Giora, R. (2002). Literal vs. figurative language: Different or equal?. Journal of
Pragmatics, 34(4), 487-506. doi:10.1016/S0378-2166(01)00045-5
Glucksberg, S., & Keysar, B. (1990). Understanding metaphorical comparisons:
Beyond similarity. Psychological Review, 97(1), 3-18.
https://psycnet.apa.org/doi/10.1037/0033-295X.97.1.3
Glucksberg, S. (2001). Understanding Figurative Language: from Metaphors to
Idioms. Oxford University Press.
Janus, R., & Bever, T. (1985). Processing metaphoric language: An investigation
of the three stage model of metaphor comprehension. Journal of
Psycholinguistic Research, 14, 473-487.
Kacinik, N. A., & Chiarello, C. (2005). Understanding metaphors: Is the right
hemisphere uniquely involved?. Brain and Language, 100, 188–207.
Knowles, M., y Moon, R. (2006). Introducing Metaphor. Routledge.
Kreuz, R. J., & Roberts, R. M. (1993). The empirical study of figurative language
in literature. Poetics, 22(1-2), 151-169. https://doi.org/10.1016/0304-
422X(93)90026-D.
Kövecses, Z. (2010). Metaphor: A practical introduction (2nd ed.). Oxford
University Press.
‒ ‒
Lakoff, G. (2008). The neural theory of metaphor. In R. W. Gibbs, Jr. (Ed.), The
Cambridge handbook of metaphor and thought (p. 17–38). Cambridge
University Press.
Lakoff, G., y Johnson, M. (1980). Metaphors we live by. The University of
Chicago Press.
Löbner, S. (2002). Understanding semantics. Routledge.
Miller, G. A. (1990). Linguists, psychologists, and the cognitive sciences.
Language, 66(2), 317-322. https://www.jstor.org/stable/414889.
Nacey, S. (2010). Comparing linguistic metaphors in L1 and L2 English
[Unpublished doctoral dissertation]. University of Oslo.
https://www.researchgate.net/publication/289673115_Comparing_lingui
stic_metaphors_in_L1_and_L2_English.
Newmark, P. (2001). Approaches to translation. Pergamon Press.
Ricoeur, P. (1977). The rule of metaphor: The creation of meaning in language.
Routledge.
Schmidt, G. L., DeBuse, C. J., & Seger, C. A. (2005). Right hemisphere metaphor
processing? Characterizing the lateralization of semantic processes.
Brain and Language, 100, 127–141. doi: 10.1016/j.bandl.2005.03.002.
Valero García, M. (2017). Estudio de los circuitos neuronales responsables de
ritmopatías y déficit cognitivo en modelos experimentales de epilepsia
del lóbulo temporal [Tesis de doctorado no publicada, Universidad
Complutense de Madrid].
https://eprints.ucm.es/id/eprint/45698/1/T39442.pdf.
Yaseen, A. H. (2013). The commonest types of metaphor in English. Journal of
Al-Frahedis Arts, 3(15), 52-69.
https://www.iasj.net/iasj?func=fulltext&aId=84981.
‒ ‒
CAPÍTULO 31
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
enseñanza en el que se combinan las clases presenciales tradicionales
en el centro con la enseñanza online desde casa. Este nuevo modelo se
ha implementado, sobre todo, en los últimos cursos de Secundaria y
Bachillerato en función de la madurez y autonomía de los alumnos.
Y es en este nuevo escenario educativo de semipresencialidad donde
las diferentes herramientas digitales puestas a disposición de los centros
entran en juego y cobran una especial relevancia. A lo largo del presente
artículo, discutiremos la utilidad de plataformas y herramientas tales
como Google Classroom, Google Calendar o Google Meet, para paliar
los efectos de la educación semipresencial.
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
Nos centraremos especialmente en este último apartado donde refleja-
remos cómo estas herramientas digitales no solo fomentan la interac-
ción asíncrona (Google Classrooom) con el intercambio de tareas y ac-
tividades sino también la síncrona (Google Meet) con la impartición de
clases online.
Implantada en mayor o menor medida según la Comunidad Autónoma,
la educación semipresencial se encuentra en el epicentro del debate
educativo. El modelo semipresencial ha sido la solución dada a las ne-
cesidades que han venido pautadas por la COVID-19 puesto que se han
tenido que disminuir las ratios y, lógicamente, los espacios disponibles
han impedido mantener las medidas de seguridad básicas y la distancia
social.
Según el nivel de incidencia en cada comunidad, se han ido adoptando
distintos planes de semipresencialidad. En el caso de la Región de Mur-
cia, comunidad objeto del estudio, esta se ha implementado en los dos
últimos cursos de la ESO y en Bachillerato con un sistema mixto quin-
cenal mediante el cual los alumnos asisten a clase tres días a la semana
y dos en la siguiente alternándose de forma consecutiva al estar los gru-
pos divididos en dos mitades con el fin de bajar la ratio en clase. Así,
en cada ciclo quincenal los alumnos asisten cinco días a clase de forma
presencial y luego otros cinco de forma online.
Los modelos en los que se desarrolla esta semipresencialidad también
varían según la comunidad. En algunos casos, por días alternos como
en Murcia, en otros casos por semana, turnos de tres horas, envío de
tareas o vídeos tutoriales, recursos en aulas virtuales, etc.
‒ ‒
Martínez y Sonia González para “Plan International España” el año pa-
sado, se hacía un análisis de la situación, poniendo especial énfasis en
la respuesta que los jóvenes dieron ante el confinamiento. Según dicho
estudio, la pandemia no sólo afectó la salud de niños y adolescentes,
sino que también tuvo un grave impacto en su entorno su desarrollo
debido a la interrupción de la educación, la alteración de las estructuras
de protección y a las cargas económicas para las familias.
Tras el cierre de los centros educativos, millones de estudiantes vulne-
rables de todo el país no sólo no tuvieron igual acceso a la formación
online a distancia, sino tampoco a servicios básicos que recibían en el
ámbito escolar. El impacto económico de la emergencia puede aumen-
tar el riesgo de vulnerabilidad y la violencia contra la infancia y la ado-
lescencia. Con el fin de mitigar dicho riesgo, las medidas de cuarentena
tenían que ir acompañadas de una ampliación de los actuales sistemas
de protección social para aumentar la cobertura y los beneficios para
las familias que se han visto afectadas por la pandemia.
En el contexto de cierre de centros educativos y de confinamiento, se
hicieron especialmente evidentes las brechas y la desigualdad, aumen-
tando en un 18.2% las llamadas al teléfono 016. En ese contexto social
de riesgo, la emergencia sanitaria ha agravado la situación de la infancia
y de la adolescencia porque la separó de los ámbitos en los que gene-
ralmente recibían apoyo.
Otro estudio se centró de forma más específica en el uso de las nuevas
tecnologías en la lucha contra la pandemia, estudio llevado a cabo por
la agencia española de protección de datos en el año 2020. Dicho estu-
dio analizó la implementación de soluciones tecnológicas pero integra-
das dentro de una estrategia de medidas jurídicas y organizativas efica-
ces y basadas en criterios científicos.
La agencia se centraba en prevenir abusos por parte de terceras partes
que pudieran conducir a la pérdida de libertades o de discriminación
con la excusa de la incertidumbre provocada por la situación sanitaria
de emergencia.
A lo largo del estudio se realizó un breve repaso de las principales tec-
nologías planteadas en la lucha contra la pandemia con el propósito de
‒ ‒
compilar diversas opciones que se habían estado manejando con el fin
de controlar su expansión y, especialmente, regular su uso.
Desde el punto de vista meramente sanitario, el Centro Nacional de
Epidemiología del Instituto de Salud Carlos III publicó una guía para
evaluar la gravedad de la pandemia en España. En el mismo se recono-
cía que la pandemia puso de manifiesto que los países no estaban ple-
namente preparados para evaluar con rapidez la gravedad de la pande-
mia.
Esta guía definió los tres indicadores que marcaban la gravedad de la
pandemia: la transmisibilidad del virus, la gravedad de la enfermedad
que produce y su impacto en la población. En definitiva, se permitía la
estimación de una serie de indicadores y parámetros con el fin de eva-
luar la gravedad de la pandemia.
Afirmaba, asimismo, la guía que la gravedad de una epidemia o pande-
mia debía valorarse según el resultado de varios indicadores. Según los
autores de la guía, la estimación de los distintos indicadores por grupos
de edad era muy importante para caracterizar el patrón de gravedad de
la pandemia, una información que podía ser crítica para el control de la
situación epidémica.
Un punto de vista diametralmente diferente fue el aportado por el Con-
sejo General de Economistas, que se centró en el impacto del Covid-19
en la economía española. Partiendo del Informe Anual 2019 del Banco
de España que se centraba de forma monográfica en la evolución de la
crisis sanitaria del Covid-19, su impacto económico inicial y las medi-
das de política económica, proporcionaba una visión sobre los princi-
pales desafíos que la economía española debería abordar a medio plazo.
A partir del desarrollo global de la crisis sanitaria se analizó el papel de
las políticas económicas ante la pandemia, especialmente en el caso de
España, y se proyectaron los retos para la economía española ante el
escenario post Covid-19. Los autores del estudio consideraban que la
profundidad de la crisis probablemente provocaría daños persistentes
en el crecimiento potencial de la economía española, siendo el bajo cre-
cimiento de la productividad el principal factor determinante del mo-
desto crecimiento potencial de la economía española.
‒ ‒
Reconocen que las tecnologías de la comunicación han constituido una
herramienta clave para reducir el impacto de las medidas de contención.
El teletrabajo es una opción real, sobre todo en determinadas profesio-
nes más allá del confinamiento, lo cual aumenta la flexibilidad en la
provisión de servicios.
También desde el campo de la psiquiatría se reflejó el impacto del Co-
vid-19 en la salud mental de niños y adolescentes. En un artículo de
Paricio del Castillo se asoció la pandemia con un incremento de factores
de riesgo psicosociales como el aislamiento, la violencia intrafamiliar
y el abuso de las nuevas tecnologías.
La autora propuso medidas de prevención en el ámbito familiar como
la comunicación positiva, la promoción de hábitos saludables y el pa-
renting, haciéndose imprescindible reforzar la accesibilidad a la red de
salud mental. Sugería también que se diseñaran estrategias de protec-
ción de la población infanto-juvenil en el contexto de la actual crisis
sanitaria.
Entre los efectos detectados en los estudios que se llevaron a cabo en la
población infantil destacaron el trastorno por estrés postraumático, la
ansiedad o la depresión. La población infanto-juvenil afectada por la
pandemia del virus ha seguido teniendo estímulos sociales, aunque ha
visto radicalmente mermada su variedad debido al confinamiento y al
decreto de distancia social, que han conllevado un cambio radical de
sus hábitos de vida con el cierre de las escuelas y la limitación de las
relaciones con pares y de la actividad psicomotriz en el exterior.
La pandemia ha alterado de forma drástica los modos de vida de la so-
ciedad española. Y una población especialmente vulnerable a estos
cambios son los niños y adolescentes que experimentaron los efectos
de las medidas de salud pública para frenar la pandemia.
Finalmente, podemos hacer mención a un estudio realizado por la Con-
federación de Salud Mental de España, que reflejó los efectos que la
pandemia tuvo sobre la salud mental no solo de las personas contagia-
das sino también de familiares y allegados. Los problemas de salud fí-
sica, el aislamiento, la falta de contacto social, la dificultad en la
‒ ‒
conciliación con la vida personal, los cambios de hábitos, o los proble-
mas laborales pasaron factura a la salud mental de la población.
Según el estudio, los problemas de salud mental han aumentado expo-
nencialmente durante la pandemia. A nivel de la población en general,
se observó un claro aumento en los niveles de ansiedad y estrés. Los
grupos específicos que se vieron especialmente expuestos incluían a la
población de personas migrantes y refugiados, las personas sin hogar,
los niños y adolescentes, personas desempleadas y personas mayores
confinadas en su lugar de residencia.
Algunos de los colectivos profesionales más afectados por la pandemia
y el confinamiento pertenecen al ámbito de la salud (enfermeros, médi-
cos), ámbito de la educación, y en el ámbito del cuidado de personas
mayores tanto en centros residenciales como a domicilio.
También se propusieron algunas medidas prioritarias dentro del pro-
ceso de reconstrucción. Entre ellas se incluyeron las siguiente: evalua-
ción del impacto del confinamiento, apoyo psicológico y acompaña-
miento personalizado, coordinación entre servicios y recursos, materia-
les de protección, medidas y ayudas para la adecuación de actuaciones
y conciliación, acciones formativas e informativas, y la implantación,
evaluación y adaptación de protocolos.
‒ ‒
Asimismo, se ofrecen sugerencia sobre cómo abordar esta problemática
a través de diversas soluciones de hibridación, de la enseñanza y apren-
dizaje mixtos, integrados y flexibles. Según García Aretio, el equilibro
de todos estos elementos, si se combinan con la flexibilidad adecuada,
puede dar respuesta a las diferentes necesidades de formación, especial-
mente en tiempos de posCovid.
Otro artículo reflejaba los efectos que la pandemia tuvo sobre la pérdida
de clases y su correlación con el rendimiento educativo. En dicho ar-
tículo, publicado por el Centro de Estudios de Economía de Madrid, sus
autores Sainz González y Sanz Labrador afirmaron que el retroceso en
el aprendizaje de los alumnos de entornos desfavorecidos podía resultar
en un incremento de sus tasas de repetición en los próximos años.
Reconocían los autores que el principal problema es que el impacto de
la pandemia iba a ser heterogéneo, con un efecto limitado entre los
alumnos de entornos favorecidos pero elevado entre los alumnos reza-
gados y desfavorecidos. Los estudiantes de familias desfavorecidas po-
dían tener menos apoyo académico por parte de sus padres, y los recur-
sos tecnológicos, las habilidades no cognitivas y los conocimientos de
los padres son igualmente diferentes.
El cierre de los centros educativos el pasado curso era una magnífica
oportunidad para volver a situar como prioridad política un problema
educativo que, sin ser nuevo, la actual situación ha expuesto con mayor
intensidad: el amplio porcentaje de jóvenes españoles que abandonan
los estudios sin finalizar una FP media o Bachillerato.
Un estudio parecido fue el publicado por Cabrera en la Revista de So-
ciología de la Educación en la que reflexionaba sobre los efectos del
coronavirus en la enseñanza ante el aumento de la desigualdad de opor-
tunidades. Según recoge dicho autor, el modelo educativo telemático
incrementa la desigualdad de oportunidades educativas poniendo de
manifiesto las carencias materiales de dispositivos electrónicos en los
hogares más desfavorecidos.
Lo que pretendía reflejar el autor es que la enseñanza telemática online,
al menos en el sistema actual, incrementa las desigualdades educativas
del alumnado. Según los datos recogidos, casi un millón de alumnos se
‒ ‒
vieron afectados por el cierre de los centros educativos por sus condi-
ciones personales y familiares.
Las aulas virtuales han sustituido a las aulas físicas en los centros, lo
que supone una novedad manifiesta que altera sustancialmente la vida
escolar cotidiana. La educación ha pasado de ser poco transcendente
como problema social a ser una preocupación esencial de la sociedad
española con la aparición del coronavirus.
Un informe publicado por Education at a glance reflejaba el impacto
del Covid-19 en la educación en el territorio nacional. Quienes prove-
nían de entornos privilegiados pudieron tener acceso a oportunidades
alternativas de aprendizaje con el explícito apoyo de sus padres. Pero
quienes pertenecían a entornos desfavorecidos, con frecuencia se que-
daron fuera del sistema al cerrar las aulas.
Otro informe reflejaba la situación de la educación durante la Covid-19
y después de ella. La pandemia ha provocado la mayor interrupción de
la historia en los sistemas educativos afectando gravemente a los estu-
diantes por los cierres de los centros educativos.
La crisis sanitaria agravó las disparidades educativas preexistentes al
reducir las oportunidades que tenían los jóvenes para continuar con su
aprendizaje. A medida que crecía la presión fiscal, la financiación de la
educación podría enfrentarse también a importantes problemas, lo que
aumentaría los déficits de financiación en materia de educación exis-
tentes antes de la pandemia.
Pero, por otra parte, la crisis ha estimulado la innovación en el sector
educativo, aplicando enfoques innovadores en apoyo de la continuidad
de la educación y la formación. Pero esos cambios han puesto, asi-
mismo, de manifiesto que el prometedor futuro del aprendizaje y los
cambios acelerados en las formas de impartir una educación de calidad
deben ser indisociables del imperativo de no dejar a nadie atrás.
Estas decisiones tienen unas enormes implicaciones sociales y econó-
micas y tendrán efectos duraderos en los docentes, los niños y los jóve-
nes, sus padres y, de hecho, en la sociedad en su conjunto. Debemos ser
conscientes de que sigue existiendo el riesgo de una caída en espiral en
‒ ‒
un bucle de retroalimentación negativa de exclusión y pérdidas en ma-
teria de aprendizaje.
El penúltimo estudio que aquí recogeremos fue el publicado por la or-
ganización Plena Inclusión en el que se recogía el derecho a la educa-
ción durante el Covid-19 a aquellos alumnos con discapacidad intelec-
tual o del desarrollo durante el confinamiento.
La Plataforma de la Infancia lanzó un informe con cien propuestas de
protección para la infancia en España, que incluían garantizar el acceso
a herramientas tecnológicas y conexión a internet para las familias du-
rante el confinamiento. También se alertó de la situación de mayor de-
sigualdad de los niños con discapacidad y sus familias.
Varios factores convierten al alumnado con necesidades educativas es-
peciales en un grupo más vulnerable ante la situación de continuar las
clases desde casa, así como ante la recuperación de rutinas educativas
e itinerarios formativos. La suspensión de tratamientos específicos
comporta un importante riesgo de involución o desequilibrio en el pro-
ceso educativo puesto que sufren en mayor grado la brecha económica,
social y tecnológica y carecen de los suficientes apoyos de accesibilidad
cognitiva y personales.
Las principales necesidades y dificultades detectadas son el acceso a
recursos tecnológicos para estar conectados con el centro educativo, el
acceso a internet, la falta de accesibilidad cognitiva de entornos digita-
les, el apoyo específico para las tareas, o la falta de acceso a prestacio-
nes vinculadas a la asistencia presencial a los centros educativos.
Por lo tanto, entre las sugerencias aportadas en el estudio podemos in-
cluir las siguientes: que se incluya el aprendizaje y el manejo de las
tecnologías de la comunicación como herramientas de uso habitual en
las aulas con todo el alumnado, que se contemple la colaboración fami-
liar como un valor en sí mismo que permita el avance de cada alumno
con discapacidad intelectual, que se planteen nuevos modelos y prácti-
cas más inclusivas, que se invierta en el sistema educativo para su ac-
tualización en políticas inclusivas, y que se instale un plan de preven-
ción de salud laboral.
‒ ‒
Finalmente, reflejaremos también un estudio de la Asociación Española
de Pediatría de Atención Primaria que reflexionaba sobre la nueva nor-
malidad educativa y de ocio en la vuelta a los centros educativos. La
pérdida del contacto personal con el profesorado y con sus pares ha
supuesto para todos los niños una merma en su aprendizaje, en su desa-
rrollo y en su bienestar socio-emocional. Ha supuesto también un riesgo
en términos de protección a la infancia y el derecho a la educación, lo
que tendrá un mayor impacto en aquellos más vulnerables, ahondando
la brecha social y las desigualdades ya existentes antes de la crisis sa-
nitaria.
La pérdida del apoyo directo del profesorado sobre el alumnado más
vulnerable, la desaparición en muchos casos de los refuerzos educati-
vos, la brecha digital, así como la inestabilidad económica son factores
que afectan de manera específica en su desarrollo y bienestar.
La infancia y adolescencia, y por ello el sector educativo y del ocio y
tiempo libre, requieren de un esfuerzo económico y planes de financia-
ción y refuerzo excepcionales. Es un necesario un plan Marshall para
la educación que tenga en cuenta las actividades socio-educativas.
Según los autores del artículo, son necesarias una serie de medidas a
adoptar como el impulso de medidas de conciliación de la vida familiar,
el incrementar las plantillas de personal docente y profesionales del
ocio y tiempo libre, incrementar las plantillas de equipos de orientación
y reforzar las medidas de protección frente al acoso escolar.
‒ ‒
4. RESULTADOS
Grupo A Grupo B
Miércoles
Miércoles
Viernes
Viernes
Jueves
Jueves
Martes
Martes
Lunes
Lunes
Semana 1
PRE ONL PRE ONL PRE ONL PRE ONL PRE ONL
Semana 2
ONL PRE ONL PRE ONL PRE ONL PRE ONL PRE
‒ ‒
ESO en adelante con el objetivo de disminuir la ratio de las aulas y
garantizar así la distancia mínima de seguridad. De este modo, como
hemos visto, las clases se han dividido en dos grupos: mientras que unos
asistían presencialmente al centro escolar, otros lo hacían online desde
casa a través de dispositivos electrónicos.
Además del lógico beneficio en materia de seguridad sanitaria, este mo-
delo de enseñanza posibilita una atención más personalizada de los
alumnos que asisten físicamente al centro por parte de los docentes. El
resto de la clase sigue las explicaciones desde casa de forma telemática,
lo que tiene algunos beneficios adicionales como la mejora de la capa-
cidad de organización del alumnado.
Desde el punto de vista del docente, este modelo semipresencial ha ter-
minado siendo un reto para ellos, al verse obligado a plantear tareas
para los que están ese día en el aula y para los que están en casa bien
sea mediante el envío de tareas en el aula virtual o las clases en strea-
ming. Por su parte, el alumno puede acabar recibiendo una lluvia de
actividades distintas a lo largo de la semana.
En el centro escolar, los docentes cuentan con suficientes equipos in-
formáticos con cámara y micrófono y tienen asimismo acceso a la pla-
taforma SED (Sistema Educativo Digital) desde la que poder establecer
comunicación con el alumnado, subir trabajos o tareas y compartir un
calendario de organización semanal y mensual. A medida que el curso
ha ido avanzando, los docentes se han ido amoldando a los nuevos
quehaceres y adaptando su forma de intervenir con el alumnado.
Una de las herramientas digitales educativas más utilizadas por los do-
centes a lo largo del curso ha sido Google Classroom para optimizar la
gestión de tareas y para mejorar la colaboración y la comunicación. De-
pendiendo del tipo de usuario su funcionalidad varía, pudiendo destacar
cuatro roles diferentes: profesores, alumnos, padres o tutores legales, y
administradores, como se puede ver en la siguiente tabla.
‒ ‒
TABLA 2. Distribución de funcionalidades según usuario
‒ ‒
que caduca el treinta de junio, con lo que evitamos tener que ir creando
el evento semanalmente.
A dicho evento debemos invitar a nuestros alumnos para que cuando se
conecten no tengamos que estar admitiendo su presencia. Para ello, mo-
dificamos nuestro evento e introducimos los correos corporativos de
nuestros alumnos, desmarcando los permisos para los invitados.
El último paso es el de añadir el enlace de Meet creado en nuestro Ca-
lendar y añadirlo en el Classroom para que esté accesible a nuestros
alumnos. Pinchando en el evento nos facilita la información del mismo
y podemos copiar el enlace de Meet.
Otra funcionalidad práctica que tiene Google Classroom es la de poder
silenciar a algún alumno una vez que ya tenemos los alumnos matricu-
lados. También podemos enviarle un correo electrónico e invitar a tu-
tores del alumno a unirse a la clase.
Desde trabajo de clase es donde podemos organizar nuestra clase y
donde ponemos a disposición de nuestros alumnos materiales, tareas o
cuestionarios. En este sentido, es importante tener una cuidadosa pre-
sentación de la clase para que los alumnos puedan acceder fácilmente.
Para ello, se pueden asignar nombres a los temas de nuestra asignatura
facilita que los estudiantes puedan acceder a la información correcta.
De igual manera, cada clase que tenemos creada en Google Classroom
tiene asociadas una carpeta de Drive y un Calendar. Así, podemos aña-
dir contenido que ya tengamos previamente creado o crear ese conte-
nido a la misma vez que el material. Si lo creamos, tenemos que indicar
dentro del Drive en qué carpeta se tiene que guardar nuestro archivo.
Pero si decidimos añadir el material, se puede hacer bien desde Google
Drive bien desde nuestro ordenador. También se puede hacer que el
material esté visible para todos los alumnos del grupo o solo para algu-
nos de ellos.
El material que creamos y subimos a la clase se puede publicar al ins-
tante, se puede programar para que se publique en una fecha y hora, o
se puede incluso guardar como borrador, pudiendo ser editado o elimi-
nado en todo momento.
‒ ‒
También nos permite crear en la clase una tarea. En una tarea. Cuando
añadimos o creamos un material se nos presentan diferentes opciones.
Una de ellas es que los alumnos puedan ver el archivo, pero no modifi-
carlo. Una segunda es que los alumnos puedan editar el archivo ya que
todos ellos lo comparten y lo editan. Y una tercera es hacer una copia
individual para cada alumno en la que cada alumno recibe una copia
del documento con su nombre y lo edita individualmente.
En dicha tarea podremos elegir a qué clase o clases les asignamos dicha
tarea, a qué alumnos asignarles una puntuación, una fecha límite de en-
trega, elegir el tema al que corresponde la tarea, o incluso añadir una
guía para su evaluación (rúbrica).
Ahora bien, un aspecto sobre el que debemos ser extremadamente cui-
dadosos es a la hora de eliminar una tarea. Si eliminamos una tarea,
también se eliminarán las calificaciones y los comentarios que los
alumnos hayan realizado en la misma. Sin embargo, los archivos adjun-
tos a las tareas se mantienen en la carpeta de Google Drive de la clase.
Otra funcionalidad que nos permite Google Classroom es la de usarlo
como tablón. En el tablón pueden publicar tanto los profesores como
los alumnos, dependiendo de la configuración que le demos a nuestra
clase. Cuando realizamos una publicación en el tablón, podemos indi-
car que se haga en un curso en concreto o en varios, que esté visible
para todos los alumnos o alguno en concreto, añadir contenido, y pode-
mos programarla para que se publique en un momento determinado o
incluso guardarla como borrador para publicarla posteriormente. Es im-
portante señalar que tanto los alumnos como los profesores pueden aña-
dir comentarios a publicaciones que aparezcan en el tablón.
En este tablón, el profesor puede eliminar cualquier publicación o co-
mentario propia o de los alumnos, por el contrario, los alumnos solo
pueden eliminar sus publicaciones o comentarios. Otra posibilidad que
nos brinda el tablón es que si deseamos que una publicación aparezca
siempre al principio del mismo y que no se pierda entre todas las publi-
caciones, se puede utilizar la opción de mover al principio.
4.2. GOOGLE MEET
‒ ‒
La otra aplicación a la que estamos haciendo referencia, y que se ha
convertido en nuestra herramienta de uso diario, es Google Meet, que
nos ha permitido dar clases online para aquellos alumnos que se encon-
traban en casa.
Lógicamente, el primer paso era crear una reunión, lo cual se puede
hacer desde el propio meet o desde Google Calendar. En el primer caso,
podemos crear la reunión dentro de meet pinchando en iniciar o unirse
a una reunión. En el segundo, podemos programar una reunión utili-
zando un evento desde Google Calendar.
Nada más iniciar la reunión podemos invitar a otros participantes. Y en
cualquier momento el administrador de la reunión puede eliminar a un
participante o silenciar el micrófono de algún participante.
Una de las ventajas de Google Meet es que nos permite compartir pan-
talla en una reunión o clase que tengamos con los alumnos. Para ello
pinchamos en “presentar ahora” y disponemos de tres opciones: toda la
ventana (en la que se comparte todo lo que se vea en la pantalla de
nuestro ordenador), una ventana (en la que se comparte solamente una
ventana de nuestro ordenador) y una pestaña de Google Chrome (en la
que se comparte una pestaña que seleccionemos de nuestro navegador).
Desde el punto de vista de los alumnos, tienen además la opción de
“levantar la mano”, Con esta opción pueden indicar que tienen una pre-
gunta o que quieren intervenir en la reunión. Nosotros, como profeso-
res, tenemos además la opción de bajar la mano a todos los participan-
tes.
Asimismo, la aplicación nos permite configurar algunos aspectos de
nuestra videollamada pinchando en los tres puntitos que aparecen abajo
a la derecha. Uno de estos aspectos es la configuración de la pizarra.
Nos permite abrir una jamboard, es decir, simular una pizarra en la
nube. Podemos crear una pizarra nueva o seleccionar una ya creada de
nuestro drive.
Así se nos pide que confirmemos si le damos acceso a los alumnos que
están invitados en esta videollamada, qué tipo de permiso le damos, si
‒ ‒
queremos darle acceso a las personas que tengan el enlace o si no que-
remos darle acceso a nadie a nuestra pizarra.
Otro aspecto que podemos configurar es la grabación de la reunión o
clase. Podemos grabar la reunión teniendo en cuenta que dicha graba-
ción incluye al participante que está hablando y las pantallas que se
comparten. Pero para grabar una reunión o clase debemos contar con el
permiso de todos los participantes. Una vez realizada la grabación, ésta
se guardará de forma automática en la unidad de Google Drive en una
carpeta llamada “meet recordings”.
También nos permite cambiar el diseño, pudiendo elegir entre automá-
tico, mosaico (en el que se muestran a todos los participantes hasta un
máximo de 16), foco (se muestra a la persona que habla), y barra lateral
(se muestra a la persona que habla y al resto en el lateral). Cuando que-
remos ver a todos nuestros alumnos tenemos que marcar la opción mo-
saico y movemos la barra al número de personas que queremos visua-
lizar. Así podemos tener a todos los alumnos controlados.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
Asimismo, hemos comprobado cómo diferentes herramientas digitales,
Google Classroom y Google Meet principalmente, nos han ayudado a
lo largo del curso a poder atender al alumnado tanto de forma presencial
como telemática. No obstante, este modelo de enseñanza semipresen-
cial, a pesar de la ayuda que supone estas herramientas, ha constituido
también un desafío para el alumnado.
Este desafío se ha visto reflejado en el cuestionario que, de forma anó-
nima, se distribuyó entre el alumnado de 2º de Bachillerato a finales de
curso. En dicho cuestionario se les planteaban preguntas como las si-
guientes: ¿has cumplido los propósitos que te planteaste al inicio del
curso?; ¿has aprovechado las clases online?; ¿estudias regularmente e
intentas llevar las materias al día?; en general, ¿cómo es el resultado
que esperas de tus calificaciones?; en tu opinión, ¿las dificultades de
este curso son comunes o individuales?; ¿te resultan útiles las platafor-
mas digitales puestas a tu disposición?; ¿consideras que la enseñanza
online está condicionando tu aprendizaje?; ¿te conectas a las clases on-
line? ; ¿qué dificultades tienes para seguir las clases online?
De las respuestas obtenidas, podemos extraer los siguientes resultados:
las clases online afectan su estudio y organización, lo que se refleja en
los resultados académicos; las dificultades de la enseñanza online son
mayormente comunes; las plataformas digitales son útiles, pero condi-
cionan su proceso de aprendizaje; y los alumnos se conectan a las clases
online pero refieren ciertas dificultades técnicas y prefieren la ense-
ñanza tradicional.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
La educación semipresencial o “blended learning” se define como una
modalidad que combina el método de enseñanza tradicional caracteri-
zado por una presencialidad total, con un aprendizaje mediado por las
nuevas tecnologías de la información y la comunicación. Este tipo de
educación incluye entornos de aprendizaje en el que existe una interac-
ción física entre el alumnado y el docente. Por otro lado, ofrece espacios
de tiempo en los que el alumnado trabaja de forma autónoma, con una
enseñanza virtual guiada por el propio docente de una forma más indi-
recta.
Aunque hay varias formas de llevar a cabo la educación semipresencial,
en la Región de Murcia se optó por la docencia sincrónica presencial y
telemática en la que una parte del alumnado asiste a clase y otra parte
del mismo está en casa y asiste de forma virtual al mismo tiempo.
Esta situación ha puesto en evidencia la relevante labor del docente en
el desarrollo educativo y personal del alumnado. El docente no es un
mero transmisor de contenidos, sino que actúa como guía, apoyo y pro-
motor de cultura y valores. La educación semipresencial puede aportar
al alumnado una mayor flexibilidad en el aprendizaje, adaptándose al
ritmo y a la forma de aprender de cada uno, de manera individual. Por
otro lado, ofrece espacios de interacción y de cercanía entre el docente
y el discente y entre los propios compañeros.
Bien es cierto que estas adversidades iniciales se agravaron por la falta
de experiencia previa del profesorado en general, así como por la falta
del tiempo necesario para poder diseñar el nuevo escenario educativo
con plenas garantías.
Los exámenes finales también se vieron afectados, lo cual generó inte-
rrupciones en la trayectoria de aprendizaje y en el avance de los estu-
dios de los alumnos. Con el fin de conservar cierto equilibrio, los cen-
tros educativos tuvieron que reinventar los entornos de aprendizaje de
tal manera que la digitalización ampliara y complementara, pero sin
sustituirla, la relación estudiante-profesor.
Al entrar en la etapa de recuperación del Covid-19, será esencial refle-
xionar sobre la función de los sistemas educativos. A menudo, el cam-
bio real tiene lugar durante una crisis profunda y este momento nos
‒ ‒
plantea la posibilidad de que cuando las cosas vuelvan a la normalidad,
no regresemos al estatus quo. Será la naturaleza de nuestras respuestas
colecticas y sistémicas a estas perturbaciones lo que determinará cómo
terminará afectando al sistema educativo.
El impacto de esta pandemia y la crisis económica han generado un
cambio en cómo, cuándo y dónde ocurre el aprendizaje del estudiante.
La renovación e innovación pedagógica, siempre recomendada y gene-
ralmente aplazada, puede contar ahora con la gran oportunidad para ha-
cerse realidad y ganar en calidad y equidad educativas.
Nos encontramos ante una situación excepcional, nunca antes vivida,
que ha puesto de relieve las enormes dificultades de todos nuestros sis-
temas, especialmente el educativo. Nos enfrentamos a un escenario de
incertidumbre en el que toda la comunidad educativa está tratando de
dar las respuestas más adecuadas a su alumnado.
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Martínez, L., Morell, J.J., & Nuñez, C. (2020). La nueva normalidad educativa y
de ocio. Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria.
Oliva, J., Delgado, C., & Larrauri, A. (2019). Guía para la evaluación de la
gravedad de la pandemia en España. Centro Nacional de Epidemiología
del Instituto de Salud Carlos III, Madrid.
Paricio del Castillo, R. (2020). Salud mental infanto-juvenil y pandemia de
Covid-19 en España: cuestiones y retos. Revista de Psiquiatría Infanto-
Juvenil, 37 (2).
Plena Inclusión. (2020). El derecho a la educación durante el Covid-19. Madrid.
Sainz González, J. & Sanz Labrador, I. (2021). Los efectos del coronavirus en la
educación: Las pérdidas de clases y rendimientos educativos desiguales.
Centro de Estudios de Economía de Madrid.
Save the Children, (2020). La educación durante la Covid-19 y después de ella.
Madrid.
Unidad de evaluación y estudios Tecnológicos (2020). El uso de las tecnologías
en la lucha contra el Covid-19: Un análisis de costes y beneficios.
Agencia Española de Protección de Datos, Madrid.
‒ ‒
CAPÍTULO 32
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
interacción, el LMS empleado sea adecuado, se trabaje la motivación
intrínseca y la construcción del conocimiento, y existan unas sesiones
presenciales bien planeadas e integradas.
Como centros de enseñanza de adultos, las Escuelas Oficiales de Idio-
mas de Galicia comenzaron a integrar la modalidad semipresencial en
su oferta educativa en el curso 2020-21 y continuarán haciéndolo de
manera progresiva en los próximos años en las distintas lenguas impar-
tidas en sus centros. La implantación de este nuevo itinerario formativo
a nivel autonómico ha motivado la creación de una comunidad de
aprendizaje promovida por el CAFI (Centro autonómico de formación
e innovación de Galicia) denominada SBLENDID y amparada por el
Programa Erasmus+, que ha abierto un contexto de cooperación y diá-
logo sobre un tema de interés común con otras EEOOII e instituciones
de Educación de personas adultas.
En este artículo haremos primeramente unas precisiones conceptuales
para proceder a presentar los resultados de las actividades desarrolladas
en el seno del proyecto cuyo fin es el diseño de estrategias pedagógicas
que permitan atender a las necesidades del alumnado mediante una
oferta de cursos semipresenciales de calidad en las EEOOII gallegas.
‒ ‒
pretende buscar igualmente sinergias colaborativas y establecer contac-
tos con otros centros europeos en el contexto del aprendizaje mixto. El
proyecto cuenta con el respaldo e implicación de los equipos directivos
de las EOIs participantes y el apoyo institucional del Servicio de Ense-
ñanzas de Régimen Especial y del Director Xeral de Educación gallego.
El éxito de este proyecto pasa por la mejora de las competencias profe-
sionales docentes en lo relativo a los entornos virtuales de aprendizaje
y se centra en el desarrollo de estrategias para la creación de contenidos,
tutorización, acompañamiento, seguimiento y evaluación, e integración
del trabajo a través de la plataforma con las sesiones presenciales.
‒ ‒
1.2. LA MODALIDAD SEMIPRESENCIAL EN LAS E.E.O.O.I.I.
‒ ‒
Por lo tanto, como principal premisa, debemos evitar que el aula virtual
sea un mero repositorio de contenidos, sino un espacio con un alto ca-
rácter colaborativo en el que hemos de generar nuevas estrategias de
construcción del conocimiento, diferentes formas de trabajar y nuevos
procesos de interacción.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
2.5. CREACIÓN DE CURSOS
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
El primer curso estructurado “Technologies & Approaches to Blendid,
Hybrid and Online Teaching” para el grupo de nivel avanzado tuvo lu-
gar en el mes de diciembre de 2020 y fue impartido íntegramente en
línea por Rusell Stannard (NILE Institute- Norwich), debido a las res-
tricciones de movilidad derivadas del COVID-19. En él participaron un
total de 15 docentes (9 de Galicia, 3 de Navarra y 3 de Madrid).
Durante esta formación se abordaron aspectos relativos a la creación de
contenidos, estrategias de tutorización, acompañamiento, seguimiento
y evaluación e integración con las sesiones presenciales. Entre los as-
pectos más enriquecedores del curso, podemos destacar la incorpora-
ción del portafolio digital como herramienta para el fomento de la eva-
luación y autoevaluación, la autorregulación del alumnado y su autono-
mía. Cada participante elaboró su propio portafolio recogiendo eviden-
cias de aprendizaje y reflexiones compartidas con el resto de los asis-
tentes, constituyendo así una comunidad virtual de colaboración.
‒ ‒
El segundo curso estructurado, “Pedagogos digitales en el área de se-
gundas lenguas”, estaba dirigido a los/las docentes de nivel básico y fue
impartido por Carolina Castro (Europass Teacher Academy- Florencia)
durante el mes de abril de 2021. Al igual que el primer curso, esta for-
mación se convirtió en una movilidad virtual, aunque los contenidos
fueron escogidos ad hoc con el fin de adecuarlos lo máximo posible a
las necesidades de los/las asistentes. El programa incluía aspectos como
las estrategias de aprendizaje social y emocional, esenciales para cohe-
sionar el grupo y promover el bienestar, y cuestiones relativas a la eva-
luación en entornos virtuales y a las técnicas de trabajo colaborativo.
En total asistieron 13 docentes (10 de Galicia, 2 de Navarra y 1 de Ma-
drid) y con posterioridad, se organizó una sesión de difusión en línea
en la que se diseminaron los productos del curso a través de talleres
temáticos organizados en Breakout Rooms.
Curso teacher academy. en esta imagen se pueden apreciar varios tableros digitales ela-
borados con la herramienta padlet que incluyen resúmenes de los aspectos tratados en el
curso y compendios de los materiales elaborados. también se muestran capturas de los
blogs específicos creados a raíz de esta formación.
‒ ‒
oficial de Youtube del centro de innovación y formación, abiertos a
toda la comunidad educativa.
3.4. OBSERVACIÓN
‒ ‒
4. RESULTADOS
Logo del #itinerario_semi. diseño creado por el cafi para este itinerio formativo.
‒ ‒
A continuación, describimos brevemente los contenidos de cada curso
dirigidos a explorar los cuatro ejes vertebradores del proceso de ense-
ñanza-aprendizaje semipresencial:
‒ PLATAFORMA: Este curso pretende dar a conocer los dife-
rentes aspectos que conforman un entorno virtual eficaz, así
como las estrategias que acompañan el proceso de enseñanza-
aprendizaje presencial. La información presentada en sus mó-
dulos versa sobre los elementos más relevantes a la hora de
organizar un entorno virtual dinámico, con un alto carácter co-
laborativo, así como las cuestiones didácticas y pedagógicas a
tener en cuenta para estructurar un curso semipresencial, faci-
litando la navegabilidad a través de la plataforma virtual y sin-
tonizando los dos tipos de aprendizaje: síncrono y asíncrono.
‒ ‒
Aunque los cuatro cursos diseñados forman parte de un itinerario, pue-
den realizarse de manera individual a petición de las personas partici-
pantes.
‒ ‒
Moodle, se analiza el impacto de la co-evaluación y la retro-
alimentación en el desarrollo del pensamiento crítico del
alumnado. Vídeo en línea.
‒ ‒
‒ AUTONOMÍA: Se exploran herramientas tales como Screen
Cast y Loom para la creación de vídeos, Google Sites, Strikin-
gly, Portfolio Box y Blogger para el diseño de Blogs y páginas
web, Genially para la creación de presentaciones y Quizlet,
Kahoot, Educa Play, Flippity o Classcraft para la gamifica-
ción.
Fuente: https://bit.ly/3zKtrMg
‒ ‒
integrantes del equipo SBLENDID de manera colaborativa a través de
tableros digitales y chats habilitados para la comunicación de la comu-
nidad de aprendizaje.
5. CONCLUSIONES
‒ ‒
demuestran que el intercambio de buenas prácticas y las acciones for-
mativas que van asociadas a un proyecto de estas características mejo-
ran la calidad de la educación, la transformación digital y la inclusión
social.
De manera genérica, el objetivo central del proyecto es aportar un con-
junto de elementos de reflexión y de orientaciones que permitan abor-
dar con éxito la implantación de la docencia semipresencial en las
EEOOII a partir del análisis en profundidad de todos los aspectos de-
terminantes de su metodología: CREACIÓN de contenidos; estrategias
de TUTORIZACIÓN, acompañamiento, seguimiento y evaluación, e
INTEGRACIÓN con las sesiones presenciales.
En lo referente a la creación y el diseño, es de suma importancia prepa-
rar al profesorado para elaborar materiales útiles, accesibles, efectivos,
aprovechables y atractivos para el alumnado, insertados dentro de un
curso con un diseño técnico-pedagógico basado en el modelo ADDIE.
En cuanto a la tutorización, hablamos de una gestión efectiva e inclu-
siva que haga uso de las herramientas a su disposición para liderar, ges-
tionar y moderar debates, mantener la motivación y la disciplina, faci-
litar la comunicación y dar feedback de forma efectiva, crear una pre-
sencia online y gestionar su tiempo, localizando y curando recursos
para la enseñanza online.
La formación en "social learning" es esencial en este sentido, asegu-
rándo que los cursos transcienden las barreras del entorno virtual de
aprendizaje, incorporando el uso responsable y efectivo de redes socia-
les y fomentando la creación de "carteras digitales" o portafolios.
Además de estas líneas prioritarias, durante el curso 2021-22 incorpo-
raremos al proyecto aspectos de la competencia digital docente utili-
zando la herramienta de evaluación SELFIE tanto para el profesorado
como para el alumnado, con el fin de detectar necesidades específicas
para la modalidad semipresencial.
Por último, cabe destacar que en la actualidad, desde distintos contextos
profesionales se viene planteando la necesidad de configurar una cul-
tura profesional caracterizada por la colaboración. Esto es, una cultura
‒ ‒
donde tenga cabida la apertura, la comunicación, el trabajo compartido,
el intercambio de prácticas profesionales, la reflexión colectiva, la bús-
queda conjunta de soluciones a problemáticas surgidas de la actividad
docente, las preocupaciones e intereses profesionales compartidos, etc.
Desde esta óptica, el trabajo colaborativo desarrollado en el marco de
nuestro proyecto se plantea como una forma de mejorar la calidad de la
enseñanza y, por ende, el desarrollo profesional del profesorado. Res-
pecto al segundo, Hargreaves (1996: 210) así lo apunta:
Se ha dicho que la colaboración y la colegialidad encierran muchas vir-
tudes. Por ejemplo, se presentan como estrategias especialmente pro-
vechosas para promover el desarrollo del profesorado Se afirma que la
colaboración y la colegialidad hacen que el desarrollo del profesorado
trascienda la reflexión personal e idiosincrásica y la dependencia de al-
gunos expertos juntos.
6. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
‒ ‒
7. REFERENCIAS
‒ ‒
Salmon, Gilly. (2013). E-tivities: The key to Active Online Learning. London:
Taylor & Francis Ltd.
Sangrá, Albert et al. (2020). Decálogo Para la Mejora De la Docencia Online.
Barcelona: Editorial UOC.
Sangrá, Albert et al. Decálogo Para la Mejora De la Docencia Online. Barcelona:
Editorial UOC. 2020.Tomlinson, Brian, y Whittaker, Claire. Blended
Learning in English Language Teaching: Course Design and
Implementation. London: British Council. 2013.
Tomlinson, Brian, y Whittaker, Claire. (2013). Blended Learning in English
Language Teaching: Course Design and Implementation. London:
British Council.
Tucker, C. (2018). Power Up Blended Learning: A Professional Learning
Infrastructure to Support Sustainable Change. Thousand Oaks,
California: Corwin Teaching Essentials.
Vaughan, N. D. et al. (2013). Teaching in Blended Learning Environments.
Edmonton, Canada: Au Press.
Williams, S., Burgess, K., Bray, M., Bransford, J., Goldman, S. & el Grupo de
Cognición y Tecnología de Vanderbilt -CTGV-. La tecnología y el
aprendizaje en las aulas de las escuelas para el pensamiento. En C. Dede
(Comp.), Aprendiendo con Tecnología 1 (pp. 39-165). Buenos Aires:
Paidós. 2000.
Wright, P. (2015). Comparing e-tivities, e-moderation and the five stage model to
the community of inquiry model for online learning design. The Online
Journal of Distance Education and E-Learning, TOJDEL3(2).
‒ ‒
CAPÍTULO 33
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
En estas miradas caleidoscópicas, cada participante aporta su visión
particular, sus ideas y su opinión, de tal forma, que como en un calei-
doscopio, todas esas pequeñas piezas giran dentro del cilindro, se unen,
van componiendo diferentes imágenes, todas válidas, muy coloridas y
visualmente impactantes. Si queremos cambiar esa visión caleidoscó-
pica, lo único que necesitamos es girar nuevamente el artilugio para
seguir componiendo nuevas y espectaculares composiciones.
1.2. TRANSFERENCIA
‒ ‒
El desarrollo de los retos educativos y la co-creación grupal es transfe-
rido para dar forma a una actividad de formación del profesorado de
Galicia dentro del Plan Anual de Formación 2020-2021 de la Conselle-
ría de Cultura, Educación e Universidade de la Xunta de Galicia. Se
ofrece a todo el profesorado gallego bajo el nombre “G2002126 Olladas
Caleidoscópicas: un proceso de colaboración virtual” con 15 horas de
duración y certificación oficial de superación.
El prototipo debería ser más pequeño, desarrollarse en menos sesiones
y queríamos que, aunque conservara algunas partes originales, aportara
una mirada fresca e innovadora potenciando las habilidades digitales de
los docentes tan necesarias en esta época y desarrollando el espíritu crí-
tico, la empatía, la proactividad y el compañerismo.
Para ello se establece un cronograma con 5 sesiones de trabajo en línea
que se corresponden con 5 etapas desarroladas.
FIGURA 1.
‒ ‒
2. OBJETIVOS
FIGURA 2.
‒
Objetivos de cada fase, CAFI, CC BY NC ND
‒ ‒
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
Para completar ese modelo híbrido hemos introducido una pequeña
parte de pensamiento de diseño (Design Thinking) que es una metodo-
logía que suele emplearse para generar ideas nuevas e innovadoras.
‒ La responsabilidad individual
‒ La autoevalución grupal
‒ ‒
Educación Primaria, Educación Secundaria Obligatoria, Bachilleratos,
Formación Profesional, Orientación y Escuelas de idiomas.
FIGURA 3.
‒ ‒
3.1.2. El ecosistema virtual de aprendizaje
‒ ‒
iluminación, equipos) así como a la proactividad dentro del equipo. Es-
tán recogidas en la siguiente figura 4.
FIGURA 4.
‒ ‒
FIGURA 5.
‒ ‒
inicio de la formación, se les presenta una dinámica básica donde se
propone una charla informal con una escucha activa con tres puntos
principales que les permitan conocerse mejor y poder distribuirse los
roles con mayor efectividad. En esta primera propuesta se les plantean
tres puntos básicos sobre los que empezar a construir su pequeña co-
munidad:
‒ Preséntate y habla sobre ti.
‒ ‒
3.1.6. Habilidades sociales y desarrollo emocional
En cada una de las sesiones el clima relacional se hace más cálido y las
interacciones entre los participantes son más profundas donde cada
miembro contribuye de manera individual a la marcha del equipo.
A lo largo de la formación el docente va experimentando distintas emo-
ciones pasando por estadios de euforia con otros de emociones menos
positivas. En las dinámicas también se trabaja la gestión emocional in-
dividual, por ello es muy interesante que el docente sea consciente de
su propio estado y que sea capaz de regularlo. Bisquerra, R nos habla
sobre la conciencia emocional, que consiste en conocer las propias
emociones y las emociones de los demás. Esto se consigue empleando
la auto-observación y dedicando tiempo a la observación del compor-
tamiento de las personas que nos rodean.
En el trabajo grupal es relevante afrontar situaciones de desencuentro,
trabajar la asertividad, tener cierta tolerancia a la frustración e
‒ ‒
incorporar grandes dosis de empatía para entender mejor la situación en
la que se encuentra el grupo.
. . . Evaluación grupal
El investigador educativo, Fernández-Río, J. (2017), destaca la impor-
tancia del proceso evaluador para la implementación plena del proceso
cooperativo, para ello propone un proceso delimitado en tres fases: eva-
luación del aprendizaje individual, compresión de la evaluación coope-
rativa y participación en el planteamiento. Los participantes en Olladas
Caleidoscópicas tuvieron desde el principio que llevarlo a cabo, por
eso, antes de finalizar cada sesión, realizaban una práctica activa en
forma de resumen de aprendizaje donde evidenciaban y cristalizaban
los descubrimientos individuales y grupales como un espejo del apren-
dizaje significativo.
En este resumen se realizaba una retroalimentación entre los integrantes
y se recordaba la importancia de dar valor a lo que aprendemos, mien-
tras alcanzamos la meta marcada.
En cada sesión había un final diferente que luego era compartido en el
gran grupo a modo de celebración de éxitos:
‒ Conectar. Escoger nombre para el grupo y una imagen repre-
sentativa.
‒ ‒
aspectos que no estaban claramente definidos o que precisaban de un
enfoque diferente al que se le había dado hasta el momento.
Complementando esta coevaluación se desarrolló una sesión extraordi-
naria, de carácter voluntario, donde se recogieron todas las propuesta
de mejora de los participantes en relación a los contenidos, los cuader-
nos de trabajo, las funciones de la facilitación, la plataforma digital, etc.
De manera oficial, el programa de gestión de los docentes gallegos,
Fprofe, les remitió una encuesta a cada uno de ellos donde se recogen
otros aspectos del diseño y la puesta en práctica de la actividad.
‒ ‒
la adquisición de habilidades profesionales en el trabajo grupal, la toma
conjunta de decisiones, la comunicación avanzada y el liderazgo (Mal-
mqvist, Rådberg y Lundqvist, 2015).
‒ ‒
va desenredando, concretando y condensando en un único hilo. Esta
metodología, trasladada desde entornos más empresariales e industria-
les, ha llegado a la escuela para dotar al alumnado de recursos y diná-
micas que le van a servir de gran ayuda en su futura época profesional.
3.4. FACILITACIÓN
FIGURA 6.
‒ ‒
Escogimos el nombre de facilitación, porque siempre tuvimos muy pre-
sente que los protagonistas de la actividad era siempre los docentes.
Esta tarea fue intensa y tratábamos de ayudar a nuestros compañeros,
pero sin estorbar, dejándoles espacio para que pudieran debatir antes de
solucionar sus dudas dentro del equipo. Esto implicó que muchas veces
nos proporcionamos apoyo entre nosotras, debatimos y tomamos deci-
siones en tiempo real, dependiendo de los desafíos a los que cada grupo
estuviera haciendo frente en cada momento: modificar tiempos, guiar
el proceso, facilitar alguna explicación rápida, etc.
La facilitación ha resultado una parte del proceso fundamental, pero no
es sencillo llevarla a cabo, ya que las facilitadoras iban simultaneando
roles, intercalando la presentación de la jornada, con la gestión técnica
de las videoconferencias y grupos y el acompañamiento de la observa-
ción.
Desde el primer momento tuvimos muy claro ese papel secundario, a
veces casi en la sombra, que servía de guía y acompañamiento a los
docentes, pero sin ofrecer soluciones ni involucrarse directamente en el
desarrollo de los acontecimientos.
El rol en la facilitación consiste en promover el diálogo entre los parti-
cipantes y lograr una comunicación eficiente entre ellos, siempre man-
teniéndose a distancia de las conversaciones, a no ser que se solicite su
intervención. En este proceso facilitado, quizás no es tan importante el
nivel de conocimientos específicos sobre la temática principal, sin em-
bargo, es muy significativa la forma y el estilo seleccionado por el fa-
cilitador para guiar los aprendizajes.
Podemos definir muchos estilos de facilitación y todos son aceptables,
pero hemos intentado definir el perfil ideal de la facilitación en este
proceso abierto, flexible y permeable quedando resumido en la figura
7, donde indicamos las funciones básicas que se han puesto en valor a
lo largo de las cinco sesiones de trabajo al que le hemos añadido una
parte de mentorización entre iguales.
‒ ‒
FIGURA 7.
3.5.OBSERVACIÓN
‒ ‒
Los observadores se incorporaban virtualmente a los grupos de trabajo
y asistían expectantes a lo que sucedía comprobando cómo se desarro-
llaba el proceso y cómo los agentes educativos realizaban su trabajo en
los diferentes roles. Todos y todas nos hicieron llegar sus impresiones,
sus inquietudes sobre el proceso y sus comentarios de mejora que nos
ayudaron a tener una visión globalizada del proceso.
4. RESULTADOS
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
resultado final, este importa, pero no es la parte más valiosa ni
importante.
A todo ello hay que sumarle la idea subyacente, las tres miradas de las
que se compone la formación:
‒ La mirada de los participantes, valiosa, directa y llena de ma-
tices y aportaciones.
Olladas Caleidoscópicas engloba a las tres como una sola. Son miradas
con una óptica específica, distintas pero complementarias, que convi-
ven y se retroalimentan durante todo el proceso formativo.
6. CONCLUSIONES
Las sesiones virtuales han llegado para quedarse y formar parte de nues-
tro día a día. Ya no es necesaria la presencialidad para realizar un tra-
bajo de creación grupal, de hecho, si la valoramos de otra forma y me-
dimos mucho el tiempo dedicado a la misma o incluso sustituimos di-
rectamente procesos físicos por virtuales, sin que este cambio lleve aña-
dido una pérdida de calidad educativa.
El desarrollo de grandes aplicaciones para videollamadas, sencillas,
prácticas y muy potentes, así como el empleo de múltiples herramientas
digitales hacen posible un soporte fuerte y seguro sobre el que construir
un gran trabajo y obtener unos resultados asequibles.
La cultura digital se extiende por toda la sociedad y las aulas no deben
quedarse al margen de ella, tenemos que prepararnos para que nuestros
centros sean organizaciones digitalmente competentes y que nuestros
‒ ‒
docentes tengan desarrolladas sus habilidades digitales para poder se-
guir atendiendo a su alumnado en cualquier circunstancia.
Los retos educativos seguirán llegando, cada curso nos enfrentaremos
a nuevos obstáculos que tendremos que sortear y superar, pero si esta-
blecemos unas rutinas y unas dinámicas participativas, ninguno de ellos
quedará sin solución.
Además de las tres metodologías que hemos incluido (Aprendizaje
cooperativo, Aprendizaje basado en retos y Design Thinking) todavía
queda margen para seguir investigando y experimentando con otras
“mezclas pedagógicas”, reformulando y variando los porcentajes de las
ya empleadas o incorporando ingredientes activos en la nueva formula-
ción. Estamos ante una mezcla de ideas propicia para generar innova-
ción docente.
En el próximo de Plan de Formación 2021-2022, para el año académico
que se inicia en septiembre, hemos desarrollado una nueva edición de
Olladas Caleidoscópicas ampliando los retos iniciales, en este caso se-
rán cinco, con la incorporación de dos temáticas muy interesantes que
pocas veces se contemplan en la formación docente:
‒ En primer lugar, queremos incorporar la educación de las per-
sonas adultas. La EPA, tiene como finalidad, renovar los co-
nocimientos, actualizar las competencias y promover el desa-
rrollo profesional a personas mayores de 18 años.
‒ ‒
“Para ver claro basta con cambiar la dirección de la mirada” (Antoine
de Saint Exupéry, 1943)
FIGURA 8.
7. AGRADECIMIENTOS
‒ ‒
8. REFERENCIAS
‒ ‒
CAPÍTULO 34
NANCY CASIELLES
EOI Ourense
CARMEN MARÍA FERNÁNDEZ RODRÍGUEZ
EOI A Coruña
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
Ourense. En la EOI de A Coruña, donde se llevan a cabo este tipo de
proyectos desde 2019, se han logrado varios sellos nacionales y euro-
peos. En orden cronológico, los proyectos realizados han sido: “Cele-
brating books”, “Stories Time Capsule”, “AmbassadEURs”, “Miles of
Meals” y “Nowhere feels like home”, éste último formó parte del Plan
Proxecta impulsado por la Consellería de Educación.
La EOI de Ourense tiene la suerte de contar entre su claustro con Patri-
cia Conde Pardo, una de las personas embajadoras eTwinning en Gali-
cia y la única que pertenece al cuerpo de Profesores de Escuelas Ofi-
ciales de Idiomas. Ella ha realizado una gran labor de difusión de la
acción eTwinning y ha coordinado dos proyectos en escuela desde su
llegada y ambos han recibido el Sello de Calidad Nacional y están pen-
dientes de la evaluación europea.
Las personas embajadoras eTwinning son docentes que tienen una am-
plia experiencia en la implementación de proyectos eTwinning y que
han recibido varios reconocimientos por su trabajo mediante el Sello de
Calidad Nacional o Europeo o que incluso puede haber recibido algún
Premio Nacional o Europeo eTwinning.
Los criterios para que un proyecto reciba un Sello de Calidad son que
sean innovadores desde el punto de vista pedagógico, es decir, que sean
originales, utilicen diversos métodos pedagógicos y que el alumnado
sea el protagonista de estos interactuando de manera cooperativa entre
sí tanto con sus compañeros de centro como el alumnado de los centros
socios. Otro aspecto que se valora es la integración curricular, lo cual
supone que el proyecto se realice primordialmente durante el horario
lectivo y que esté relacionado con uno o varios elementos del currículo
escolar. Esta relación entre el proyecto y el currículo debe ser evidente
para el alumnado, que ha de percibirla de manera clara. Además, tam-
bién se valora el grado de cooperación entre los centros asociados y que
esa cooperación vaya más allá de la mera comunicación. Se trata, por
lo tanto, de que los centros asociados trabajen de manera conjunta en
una serie de actividades que han sido planificadas en común por todos
los socios y que tendrán unos resultados tangibles. Otro elemento a va-
lorar es el uso creativo de la tecnología y la elección estratégica de las
herramientas tecnológicas que mejor se ajusten al proyecto. No se
‒ ‒
valora, por lo tanto, el uso de un mayor número de herramientas, sino
su variedad, su accesibilidad y su adecuación a la edad del alumnado.
Se tiene en cuenta también la utilización de Twinspace, el espacio de
gestión de proyectos propio de la plataforma eTwinning. Del mismo
modo, juega un papel muy importante la e-seguridad y la netiqueta. Por
último, se valora que los objetivos definidos en el diseño del proyecto
se hayan alcanzado y que los resultados obtenidos sean tangibles, así
como que se haya llevado a cabo un proceso de autoevaluación a lo
largo del desarrollo del proyecto y que se haya realizado una labor de
difusión del proyecto, por ejemplo, a través de reuniones informativas
en los centros educativos socios, publicaciones en las páginas web de
estos, entradas en blogs, participación en medios de comunicación, etc.
Pensamos que eTwinning puede resultar muy útil en múltiples vertien-
tes: en relación con el centro, con el alumnado y con el profesorado. En
el primer caso, eTwinning sirve para la internacionalización de los cen-
tros. Los proyectos eTwinning suponen un trampolín para la realización
de otros programas dentro del marco de Erasmus+ y abren la puerta a
futuras visitas de estudios (véase Martínez Herranz) y a la acogida de
docentes internacionales para compartir buenas prácticas. Además, al
realizar proyectos en común, el profesorado se actualiza, conoce nuevas
metodologías que lo enriquecen y animan a mejorar la calidad educa-
tiva. Todos los proyectos eTwinning tienen carácter integrador y no
sólo aportan cohesión al claustro, sino que mejoran la comunicación
entre distintas áreas e idiomas, lo que redunda en la proyección nacional
e internacional del centro. Nuestra experiencia nos ha demostrado que
la colaboración entre el profesorado de un mismo centro educativo me-
jora sustancialmente el ambiente que reina en el mismo, lo cual fomenta
y favorece la realización de otros proyectos, es decir, contribuye a la
sostenibilidad de los proyectos europeos. Para autores como Miñarro,
eTwinning resulta un reto para el profesorado porque no son proyectos
exclusivos del profesorado de lenguas, sino que se realiza una media-
ción lingüística a través de una lengua común para los socios. Además,
el hilo conductor del proyecto pone en juego distintas destrezas y com-
petencias del alumnado y del profesorado que requieren un trabajo
cooperativo (2019: 89). Por otro lado, eTwinning significa considerar
‒ ‒
globalmente a la clase y su entorno, generar un clima educativo en el
que el profesorado es modelador y facilitador. Miñarro insiste en que
para esto hace falta un modelo pedagógico abierto y una formación ade-
cuada en los procesos de aprendizaje del alumnado (2019: 103).
En lo que respecta al alumnado, eTwinning amplía la visión que el
mismo tiene sobre la lengua extranjera. En ocasiones, nuestro alumnado
acude a las EOIs para conseguir un certificado de nivel. ETwinning les
aporta el valor añadido de comprobar dentro del centro educativo la
aplicación práctica e inmediata de su esfuerzo, desde que comienzan a
estudiar el idioma hasta que adquieren un nivel muy alto. Este proceso
lo realizan simultáneamente con otros hablantes, generalmente no nati-
vos, con los que comparten información sobre cultura, tradiciones, etc.
Para el alumnado adulto, eTwinning es una forma de socialización y
una oportunidad de continuar formándose, por lo que contribuye al ob-
jetivo general del aprendizaje a lo largo de la vida.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
reforzados al poder conocer de primera mano la cultura de un
país a través de sus ciudadanos. Esto incide en la motivación
para aprender una lengua extranjera, además de convertir al
alumno en un ciudadano tolerante que respeta la libertad y la
paz entre los pueblos.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
disponibles, que permiten la elaboración de un producto relevante y la
participación en una práctica social, para facilitar la socialización bus-
cando ser más competente en su trabajo diario” (Centro Nacional de
Innovación e Investigación Educativa (CNIIE), cit. en Cañizares 2018,
37).
‒ ‒
alumnado. La metodología semipresencial ofrece más libertad de hora-
rios para el aprendizaje, pero supone un mayor grado de autocontrol y
responsabilidad por parte del alumno, ya que sólo acude al centro una
vez a la semana.
Es importante recordar que muchos profesores de nuestros centros han
creado e impartido cursos semipresenciales en los niveles B2, C1 y C2
de inglés y francés en las EOIs de Santiago de Compostela, Ferrol, A
Coruña y Vigo desde el curso 2020-1 y que a partir del curso 2021-2
estas modalidades comenzarán a impartirse en otras EOIs gallegas
como la de Vilagarcía de Arousa. Por otro lado, tanto la EOI de A Co-
ruña como la de Ourense participan en el Consorcio Erasmus+ SBLEN-
DID coordinado por el Centro Autonómico de Formación e Innovación
de Galicia (CAFI). Esta iniciativa nos brinda la posibilidad de trabajar
colaborativamente, aprender de los compañeros y crear productos digi-
tales muy atractivos.
En un proyecto eTwinning, las destrezas orales pueden reservarse para
el aula y el resto se desarrollan online gracias a la plataforma Twins-
pace. Suponen experiencias de aprendizaje muy permeable y admiten
gamificación y breakout rooms en las diversas actividades dependiendo
del tipo de proyecto y del perfil del alumnado, que en EOIs es muy
heterogéneo y puede ausentarse o incorporarse a las clases a mitad de
curso por múltiples razones.
El entorno digital en el que se encuentra el alumnado ofrece funciona-
lidades muy variadas para la interacción entre el mismo: foros, debates,
tableros colaborativos, documentos de redacción compartida, vídeos,
etc. Cabe distinguir entre las herramientas que ofrece la propia plata-
forma Twinspace y las herramientas externas insertables mediante URL
o embebibles con código Iframe. Cabe destacar que Twinspace es una
plataforma segura, a la que el alumno accede a través de un usuario y
contraseña que han sido generados por el profesorado y que no está
sincronizada con Google ni envía notificaciones cuando alguien co-
menta o sube material. Estos puntos suelen suscitar cierta decepción por
parte del alumnado en un principio. No obstante, queda a criterio de los
socios el tipo de herramientas tecnológicas que se utilizará, pero priman
siempre la seguridad y etiqueta digital, aún trabajando con alumnado
‒ ‒
mayor de edad. Esta idea de lograr espacios digitales saludables de
creación de contenidos y comunicación es muy importante en eTwin-
ning y desde nuestros claustros se promueve que así sea.
Es importante señalar que llevar a cabo un proyecto eTtwinning no con-
siste en usar una gran cantidad de herramientas digitales y acumular
material en Twinspace, ya que todo lo realizado debe tener un objetivo
claro, el aprendizaje del alumno en todas las destrezas (orales, escritas,
mediación), y ello supone enseñar a usar esas herramientas y utilizarlas
de manera significativa para que progrese el proyecto entre todos y no
asíncronamente o de forma independiente. Es decir, lo que prima es la
calidad y no la cantidad. Es preferible utilizar un número reducido de
herramientas y asegurar su conocimiento y utilización por parte del
alumnado. Para conseguir este fin, a menudo el profesorado o incluso
el propio alumnado elabora videotutoriales en los que se explica de ma-
nera detallada el uso de una aplicación o recurso concretos. Estos vi-
deotutoriales pasan a formar parte del proyecto eTwinning como recur-
sos compartidos.
En los proyectos eTwinning se utilizan muchos tipos de herramientas
que se incrustan mediante enlaces, aunque las herramientas favoritas
son las de tipo colaborativo, entre las que destacan Google Drive para
redactar documentos en parejas o grupos, ya que se puede redactar dis-
tintos hilos narrativos, hacer una lluvia de ideas, etc. que después se
sometan a votación en el aula o se plasmen en una infografía o presen-
tación digital. Google Drive sirve de gran ayuda a los socios del pro-
yecto desde el punto de vista organizativo: al compartir carpetas y fi-
cheros todos los docentes pueden editar, subir material y crear links a
Twinspace siempre y cuando no se exceda la capacidad de la cuenta
Google.
También se utilizan herramientas como Screen-o-matic para crear y
compartir videotutoriales sobre cómo realizar una tarea o cómo manejar
una herramienta digital cuando no hay una guía conveniente para ello.
Gracias a este programa se puede capturar la pantalla del ordenador y
minimizar en una esquina el rostro del narrador del video. Las graba-
ciones se generan en MP4, se pueden subir directamente a YouTube,
guardar en el PC y utilizar de muchas formas. Hasta hace poco tiempo
‒ ‒
la subscripción gratuita a Screencast-o-matic ofrecía un límite de gra-
bación de cinco minutos que se ha extendido a 15 minutos. Otra opción
para grabar vídeos con captura de pantalla es Loom, muy similar a
Screencast-o-matic pero que permite compartir directamente el vídeo a
través de un link y se puede decidir si será público o no.
Hay que resaltar que un porcentaje de nuestro alumnado son nativos
digitales y que los que se han incorporado a las nuevas tecnologías en
edad más tardía no suelen tener problema para manejarse. Pueden tra-
bajar con otra persona y cuentan con el apoyo del docente si tiene difi-
cultades tecnológicas.
Algunos ejemplos de herramientas que más comúnmente se utilizan en
eTwinning son:
‒ Genially. Ha supuesto una revolución digital desde su crea-
ción en España y está en constante expansión y mejora de las
plantillas ofrecidas. Una vez que el usuario se registra, permite
crear diversos materiales como presentaciones, posters, info-
grafías y ebooks, siempre con una estructura previa adaptable
al producto final. Otra ventaja de Genially es que se puede
crear gamificación muy diversa (ruletas, baterías de pregun-
tas, paneles, juegos de memoria, etc). Genially se caracteriza
por la interacción, animación y por el hecho de que varias per-
sonas pueden ser editores con lo que dota de mucha autonomía
al alumnado que siempre lo encuentra atractivo y motivador.
Los productos creados con Genially son insertables en Twins-
pace y dentro de ellos se pueden introducir vínculos, vídeos,
imágenes, etc.
‒ ‒
colaborativamente un libro o una presentación y los productos
se pueden compartir en redes sociales, al igual que sucede con
Genially.
‒ ‒
en Twinspace. Otra herramienta similar, aunque no tan popu-
lar, es Animoto.
4. RESULTADOS
‒ ‒
como lengua extranjera. Pretendía lograr que los estudiantes trabajasen
juntos en un enfoque intercultural, intercambiando proyectos y publi-
caciones con sus enfoques de lectura.
Stories Time Capsule. El objetivo principal de este proyecto consistía
en conocer la historia de nuestra ciudad a través de las narraciones de
la gente. El proyecto proporcionó a los estudiantes una visión clara de
todos los cambios que han tenido lugar durante los últimos años y per-
mitió a los participantes comparar los cambios urbanos a su alrededor
con los de otros países. Los alumnos participaron en actividades de co-
municación colaborativa referidas al proyecto tanto en grupos naciona-
les como transnacionales. Todos los aportes y el intercambio de datos
permitieron a los estudiantes reflexionar sobre el legado histórico y la
proyección presente y futura de su ciudad.
AmbassadEURs. El objetivo principal de este proyecto era promover el
patrimonio cultural de cada país en relación con la cultura y los valores
europeos comunes. Como “AmbassadEUrs” de su país, los estudiantes
buscaron y destacaron los aspectos más importantes de la cultura de su
país. Al mismo tiempo, exploraron aspectos de la historia y la vida co-
tidiana que reflejan importantes valores europeos. También buscaron
vínculos cohesivos comunes entre el patrimonio cultural de sus países
y la cultura europea común. Realizaron actividades de comunicación
colaborativa referidas al proyecto tanto en grupos nacionales como
transnacionales.
Nowhere feels like home. Este proyecto se integró en la modalidad eT-
winning convocada por la Consellería dentro del Plan Proxecta 2020-1.
Fue un proyecto sobre cultura popular urbana. Desarrollamos activida-
des y productos colaborativos sobre diversos aspectos de las ciudades
participantes (tradiciones, fiestas, peculiaridades locales, sentimientos
colectivos, etc.). Implicó la realización de actividades de investigación
sobre el llamado patrimonio cultural inmaterial y fomentó la reflexión
sobre su conservación.
Miles of meals. Se partía de la idea de que Europa es un mosaico de
múltiples hábitos nutricionales que dependen de la ecología local e in-
fluyen en la cultura. En este proyecto eTwinning, estudiantes de
‒ ‒
diferentes grupos de edad y nacionalidades, entendían la nutrición
como fuerza impulsora para el desarrollo de la industria y la tecnología
a lo largo de la historia y viajaron a lo largo de un camino en el tiempo
de muchos kilómetros de comidas. Durante este viaje, a los estudiantes
se les asignaron los roles de científico, arqueólogo, especialista en ali-
mentos, dietista y chef para intercambiar información sobre la evolu-
ción de la nutrición de sus países y su impacto en la salud, el estilo de
vida y la expresión del folclore. Se orientaron con los principales hitos
históricos. El proyecto pretendía presentar la ruta nutricional que si-
guieron diferentes naciones por necesidades y condiciones especiales
para promover el entendimiento mutuo de las diferentes culturas ali-
mentarias, trazar paralelismos entre ahora y entonces y generar buenas
prácticas nutricionales para las generaciones futuras.
En la EOI de Ourense hemos realizado dos proyectos en el curso 2021-
2022. El primero de ellos se tituló Unstereotyping Europe with Asterix,
el cual realmente fue la continuación de un proyecto anterior que se
diseñó pero no llegó a implementarse en su totalidad por el inicio ines-
perado de la pandemia por COVID-19 y las profesoras decidieron que
era lo suficientemente interesante y el alumnado estaba lo suficiente-
mente motivado como para retomarlo este curso. La idea central de este
proyecto era utilizar la figura de Asterix y sus viajes a través de Europa
como eje central de un debate sobre estereotipos dentro del aula. No
debemos olvidar que los contenidos socioculturales suponen un ele-
mento clave del currículo de las escuelas oficiales de idiomas de Gali-
cia. Otro objetivo de este proyecto era fomentar la lectura en la lengua
objeto de estudio de nuestro alumnado. Como sabemos, las historias de
Asterix están traducidas a multitud de idiomas, por lo que se pueden
utilizar sin problema con los grupos de nuestros centros educativos. El
tercer objetivo del proyecto era conseguir que nuestro alumnado traba-
jara en equipo junto con el alumnado de otros centros extranjeros, con-
cretamente de Portugal e Italia, y que se llevara a cabo un intercambio
de ideas sobre otras culturas y los estereotipos que a menudos se aso-
cian con ellas con el fin de ayudar a derribar barreras culturales entre
los ciudadanos europeos. Este proyecto acaba de recibir el Sello de Ca-
lidad en España y está pendiente de la valoración en Italia y Portugal.
‒ ‒
El segundo proyecto eTwinning llevado a cabo en la EOI de Ourense
durante el curso 2021-2022 se titulaba Carnival Memories y tenía como
fin revitalizar de manera virtual la celebración cultural del Carnaval,
que tiene una gran relevancia en los tres países participantes, los dos
socios España y Grecia y el país invitado, Brasil. Por segundo año con-
secutivo y debido a la pandemia mundial por COVID-19, en 2021 no
fue posible realizar ningún tipo de celebración de carnaval. En la pro-
vincia de Ourense existen carnavales históricos como el Xinzo de Li-
mia, Laza, Verín o Viana do Bolo, que aspiran a convertirse en parte de
la Lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. La ausen-
cia de este tipo de celebraciones, que se han realizado sin interrupción
durante siglos y que ni siquiera la Guerra Civil consiguió soterrar por
completo, hizo que la comunidad educativa de la EOI viera necesario
poner en valor este elemento tan idiosincrático de la cultura ourensana
y conocer cómo se celebra esta festividad que mezcla lo pagano y lo
religioso en otras partes del mundo.
Este proyecto tuvo la peculiaridad de que uno de los centros educativos
participantes estaba localizado en Brasil y participaba como invitado
con acceso a Twinspace.. Como es sabido, el Carnaval en Brasil repre-
senta también uno de los máximos exponentes culturales del país, por
lo que nos pareció que sería muy apropiado conocer de primera mano
lo que supone esta celebración en el país iberoamericano. Con la cola-
boración de la Consejería de Educación de la Embajada de España en
Brasil, pudimos identificar en Sao Paulo un centro de educación de
adultos de gran tamaño que estaba muy interesado en participar en pro-
yectos internacionales.
El tercer centro implicado era un instituto de segunda oportunidad de la
ciudad de Kalamata, en Grecia. La EOI de Ourense ya tenía amplia ex-
periencia en trabajar con este centro, puesto que habíamos colaborado
en dos asociaciones de aprendizaje Erasmus anteriormente.
El alumnado de los tres centros educativos compartió sus experiencias
y las costumbres típicas de sus países en el Carnaval a través de entradas
en blogs, documentos de texto colaborativos, vídeos, video-presenta-
ciones, cuestionarios y concursos de fotografía. Una vez más, pudimos
comprobar que, a pesar de la distancia tan grande entre unos y otros
‒ ‒
países y las diferencias que existen en las manifestaciones culturales de
cada uno de ellos, las similitudes entre culturas son más fuertes que las
diferencias.
En los cuestionarios de autoevaluación pudimos comprobar que tanto
el alumnado como el profesorado quedaron muy satisfechos de su par-
ticipación en el proyecto y deseaba repetir en el futuro.
Este proyecto acaba de recibir el Sello de Calidad en España y está pen-
diente de su valoración en Grecia.
5. CONCLUSIONES
‒ ‒
6. REFERENCIAS
‒ ‒
Giraldo Granados, P. “LearningAPPs”. Observatorio de tecnología educativa 47.
Consultado el 1 de agosto de 2021.
https://intef.es/observatorio_tecno/learningapps/
Martínez Herranz, M. I. “Solo hay 1 paso: De un proyecto eTwinning a un
intercambio real”. Blog Red Formación del profesorado CM. Consultado
el 1 de agosto de 2021.
https://comunidad.educa.madrid.org/redformacion/2019/02/01/solo-hay-
1-paso-de-un-proyecto-etwinning-a-un-intercambio-real/
Miñarro López, L. M. (2019). Etwinning como programa de éxito en la escuela
del siglo XXI. Alcance, limitaciones y oportunidades. Tesis doctoral .
Universidad de Castilla-La-Mancha.
Monje, Antonio. “¿Qué es eXeLearning?”. eXeLearning. net. Consultado el 1 de
agosto de 2021.
https://exelearning.net/html_manual/exe_es/qu_es_exelearning.html
Muñoz Rodríguez, J. M. y Sánchez Rojo, A. (2020). “On Blended Learning
Flexibility: an Educational Approach”. Blended Learning: Convergence
between Teaching and Pedagogy. Springer, 21-44.
Portal eTwinning. Consultado el 1 de agosto de 2021.
https://www.etwinning.net/es/pub/index.htm
Santiago, R. et al. (2017). “¿De qué hablamos cuando hablamos de flipped
learning?”. Flipped classroom: 33 experiencias que ponen patas arriba el
aprendizaje. Editorial UOC.
‒ ‒
CAPÍTULO 35
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
incrementado la motivación de los alumnos. En concreto, concluyen
que la que se ha visto aumentada es la intrínseca, aquella que ayuda a
la satisfacer las necesidades psicológicas de los estudiantes, así como a
descubrir su propia competencia, autonomía y libertad.
Se interpreta la situación vivida como una oportunidad de mejora, de
implementación y de incorporación sistemática de las tecnologías a las
aulas, desarrollando, como se ha comentado, la competencia digital, no
solo de los discentes sino también de los docentes (Martínez-Garcés y
Garcés-Fuenmayor, 2020; Picón et al. 2020).
El hecho de que la educación presencial pasara a ser virtual supuso mu-
cho trabajo y esfuerzo de las partes implicadas en el proceso de ense-
ñanza-aprendizaje, pero, a la vez, dio paso a una forma diferente de
trabajo, motivador y atractivo para jóvenes que son nativos digitales,
aunque eso no siempre lleve consigo un dominio de las herramientas
digitales (Fernández Miravete, 2018). Por lo tanto, resulta necesario
que en los centros educativos se desarrolle su alfabetización digital. Es
decir, el alumnado debe aprender a utilizar las herramientas digitales
no solo para ser consumidores, sino también creadores de contenido,
prosumidores, y, a su vez, han de ser conscientes de cuál es el uso más
apropiado para cada momento. Es aquí donde entra en escena la com-
petencia digital (Bonilla-del-Río et al., 2018; Fernández y Gaytán,
2019).
El término competencia se definió en un proyecto de la OCDE como
algo más que puramente conocimientos y destrezas; la competencia,
implica la habilidad de dar respuesta a demandas de carácter complejo
que ponen en funcionamiento no solo destrezas, sino también actitudes,
en un contexto determinado (OECD, 2005). Partiendo de esta defini-
ción, se puede afirmar, por lo tanto, que la competencia digital va más
allá de usar una herramienta tecnológica.
La Comisión Europea explica qué se entiende por competencia digital:
“implica el uso seguro, crítico y responsable y el compromiso con las
tecnologías digitales para el aprendizaje, el trabajo y la participación en
la sociedad” (European Union, 2019, p. 10). Dentro de esta, se incluyen
‒ ‒
conocimientos, destrezas y actitudes que deben ser desarrolladas en el
aula para trabajar dicha competencia.
En cuanto a conocimientos, la escuela debe enseñar cómo entender la
tecnología como herramienta de trabajo para la comunicación, la crea-
tividad y la innovación. Para ello, se hace necesario que el alumnado
conozca cómo funcionan aparatos o aplicaciones digitales, aunque sea
a un nivel básico, así como los principios éticos y legales que aplican a
su uso. En lo referente a habilidades, se espera que sean capaces de
crear y compartir contenido y que, al hacerlo, aprendan a su vez a usar
las tecnologías como parte de su vida social y ciudadana. Finalmente,
como actitudes, se espera que cuando el alumnado trabaje lo haga con
responsabilidad y sabiendo dónde están los límites dentro del uso de las
herramientas digitales (European Union, 2019).
‒ ‒
1.1. ESCENARIOS EDUCATIVOS
‒ ‒
hidroalcohólico y la distancia entre pupitres de metro y medio, en el
caso de Asturias.
Este sería el caso más drástico, al igual que ocurrió en marzo 2020.
Consistiría en el cierre de los centros educativos y la continuidad del
proceso de enseñanza aprendizaje en un entorno virtual.
No debemos olvidar el cambio drástico que supuso para aquellos que
solo estaban acostumbrados a la educación presencial. Se intentó dar
respuesta de la mejor de las maneras posibles, pero quedó claro que la
educación necesitaba un cambio: “Así surgieron experiencias de edu-
cación a distancia convencional centrada en el material impreso, el
‒ ‒
correo y el teléfono; emisiones por radio o televisión y la utilización de
sistemas digitales, plataformas virtuales, etc.” (García, 2021, p.15)
Para poder llevarlo a cabo, en muchas consejerías de educación se ha
hecho hincapié en la necesidad de formar en herramientas al profeso-
rado, así como al alumnado, como una forma de asegurar la educación
pase lo que pase y potenciar de igual modo la competencia digital de
unos y otros (BOPA, 2020; Gobierno de Cantabria, 2020; Diari Oficial,
2020). Asimismo, se ha visto la necesidad que algunas familias tienen
con respecto a la disponibilidad de equipos electrónicos, por lo que se
ha ofertado un servicio de préstamos para aquellos que lo requieran.
Según la Consejería de Educación, este escenario se daría con el confi-
namiento de alumnos y profesores: “en esta situación será obligatorio
el cierre de los centros educativos y, por tanto, la actividad educativa se
desarrollará en línea” (BOPA, 2020, p. 3).
‒ ‒
pruebas de acceso a la universidad, porque es una de las cuatro asigna-
turas troncales que deben ser examinadas de manera obligatoria.
Sin embargo, aunque la materia de inglés está dividida en cuatro blo-
ques de contenidos, en las pruebas de acceso a la universidad no se
contemplan todos ellos: “tanto la comprensión oral como la producción
e interacción oral quedan excluidas de la prueba” (Arnaiz-Castro, 2018,
p. 57). Esto supone que, en su mayoría, los docentes de segundo de
bachillerato dejan un poco de lado estas destrezas para centrarse en
aquellas que son prescriptivas en la prueba. Es precisamente aquí donde
se comente el error que se pretende subsanar con el trabajo con herra-
mientas digitales.
En el caso concreto que nos ocupa, para llevar a cabo el trabajo durante
el confinamiento, desde la materia de Lengua Extrajera II de segundo
de bachillerato, se aprovecharon las herramientas de Google Suite que
se venían utilizando de manera esporádica y, desde la vuelta a las aulas,
así se ha seguido realizando, empleándolas como potenciadoras del
desarrollo de la competencia digital en las aulas (Nirmala et al., 2020;
Insani, y Farisi, 2020).
La elección de las herramientas digitales en el curso de segundo de ba-
chillerato vino dada por la versatilidad que ofrece el entorno Google
GSuite, actualmente Google Workspace (Heggart y Yoo, 2018; Mobo,
2021; Daud, y Hardian, 2021).
2. OBJETIVOS
‒ ‒
2.2. MAYOR PARTICIPACIÓN EN ACTIVIDADES
3. CONTEXTUALIZACIÓN Y METODOLOGÍA
Tras la vuelta a las clases después del parón del confinamiento, se vio
necesario trabajar por el desarrollo de la competencia digital. En con-
creto, en la comunidad autónoma de Asturias, la consejería de educa-
ción de Asturias en su circular de inicio de curso insistía en la necesidad
de impulsar el trabajo centrado es esta competencia, insistiendo en la
importancia que la innovación y la formación del profesorado tiene: “la
formación continua del profesorado y la apuesta firme por la innova-
ción para la mejora del sistema educativo; con el fomento de la compe-
tencia digital de los y las docentes y del alumnado” (BOPA, 2020).
Por ello, y teniendo en cuenta las propuestas de mejora recogidas en la
memoria del segundo curso de bachillerato, donde se apuntaba la nece-
sidad de ampliar la oferta de la clase virtual en Classroom ya estable-
cida para el curso anterior, se buscó mejorar diferentes aspectos.
Por un lado, desarrollar la competencia digital del alumnado siempre es
un objetivo en la enseñanza del bachillerato. Sin embargo, este año se
convirtió en uno de los principales, dada la situación sanitaria derivada
del COVID-19.
‒ ‒
De hecho, teniendo en cuenta que la mayoría de los alumnos que cursa
segundo de bachillerato tienen como objetivo el acceso a la universidad,
este año era una urgencia, puesto que fueron muchas las que durante el
curso 2020-21 decidieron impartir la docencia únicamente en formato
virtual.
Además, como se ha señalado más arriba, la materia de inglés es una
de las que los estudiantes necesitan para la prueba de acceso a la uni-
versidad. Pero, además, la que más sufre durante el curso de segundo
de bachillerato en cuanto a la enseñanza de sus destrezas. Dado que el
curso de segundo de bachillerato implica en sí mismo muchos retos y
objetivos determinados de carácter personal (derivados de la necesidad
de una media concreta para el acceso a la universidad), es mucha la
exigencia y dedicación de las diferentes asignaturas que conforman el
curso.
Desde hace más de una década, en el centro escolar donde se llevó a
cabo la experiencia, se ha apostado por la integración de las nuevas
tecnologías en el día a día del aula. Así, se optó por la instalación de
pizarras digitales y ordenadores en todas las aulas. El objetivo era tra-
bajar la competencia digital del alumnado. Para ello, se comenzó con la
formación del profesorado en el uso de herramientas del entorno Goo-
gle GSuite para su implantación en el aula.
A continuación, se especificarán los grupos con los que se llevó a cabo
la intervención en el aula durante el curso 2019/2020 y 2020/2021, las
herramientas que se utilizaron, la temporalización y cómo se llevó a
cabo la medición de los resultados para su análisis posterior.
Los dos grupos de segundo de bachillerato estaban formados por 27 y
28 alumnos y pertenecen a un colegio concertado donde el nivel de ba-
chillerato es privado. Ambos grupos cursaban el bachillerato en la es-
pecialidad de Ciencias, por lo que compartían la mayoría de las asigna-
turas optativas.
Ambos grupos cursaban la materia de Lengua Extranjera II: Inglés
como troncal de su especialidad y la carga lectiva era de cuatro clases
a la semana, teniendo las clases de inglés entre las 8.30 y las 12.00 de
la mañana; no obstante, el grupo de 27 alumnos tenían horas lectivas de
‒ ‒
55 minutos, frente a los 45 del curso de 28. Para suplir los 40 minutos
de diferencia entre una clase y otra, se optó por trabajar más ejercicios
online y recuperar el tiempo lectivo.
Los libros utilizados en la asignatura eran los mismos y pertenecían a
la editorial Burlington Books (VVAA, 2010). Asimismo, el libro de
lectura que se utilizó con ambos grupos era el mismo.
La constitución y características de cada uno de ellos se detallará a con-
tinuación.
El grupo A de segundo de bachillerato, perteneciente al curso 2019/20,
estaba formado por 27 alumnos, de los cuales, 16 eran chicas y 11 eran
chicos.
En esta clase, había una alumna que presentaba una discapacidad mo-
tórica, por lo que se movía en silla de ruedas y tenía dificultades para
escribir durante mucho tiempo a mano.
Por otro lado, había dos alumnos de altas capacidades. Uno de ellos
presentaba una actitud disruptiva en el aula, aunque sus resultados aca-
démicos, participación e interés eran muy buenos. El otro, por el con-
trario, presentaba una actitud no solo disruptiva, sino también pasiva,
por lo que sus notas se vieron afectadas negativamente.
Una de las alumnas del grupo tenía la materia de primero de bachille-
rato pendiente. Para el trabajo de recuperación, también tenía su aula
virtual, aunque esta no forma parte del estudio.
La actitud general de la clase era buena, aunque muchos mostraban des-
motivación por el trabajo y el estudio. El motivo principal era que no
tenían claro qué estudios harían al finalizar la etapa del bachillerato, por
lo que no veían relevante preocuparse en exceso por sus notas medias.
El grupo B de segundo de bachillerato, del curso 2020/21, estaba for-
mado por 28 alumnos, de los cuales 8 eran chichas y 21 chicos.
En esta clase, había un alumno disléxico que en principio no requirió
mayor adaptación metodológica que la de no tener en cuenta faltas or-
tográficas.
‒ ‒
Asimismo, al igual que el curso anterior, había un alumno que tenía
pendiente la materia de inglés de primero de bachillerato y contaba con
un aula virtual para el trabajo de recuperación.
La actitud general del aula era de desmotivación, aunque por causas
distintas. A diferencia que, en el caso anterior, estos alumnos sí sabían
qué querían estudiar en el futuro y se mostraban preocupados por sus
medias. Sin embargo, la fatiga pandémica hizo mella en ellos y empe-
zaron a cuestionarse el por qué y para qué estudiar, o a justificar la des-
gana o el poco interés por las medidas sanitarias a las que estaban so-
metidos.
En relación con las herramientas de Google que se usaron para incluir
en el curso de segundo de bachillerato, se pasan a detallar a continua-
ción:
‒ Google Classroom. Esta es una herramienta gratuita tanto para
profesores como alumnos. Para su uso, solo es necesario ser
usuario de una cuenta de Gmail, que es el caso en esta pro-
puesta, donde tanto alumnos como profesora tienen cuenta
corporativa del colegio que pertenece al dominio de Google.
Dentro de Classroom hay además un tablón, donde se pueden
dejar mensajes y abrir la posibilidad de responder y participar
al alumnado. Además, se puede trabajar con el resto de las
aplicaciones que se explicarán más abajo.
‒ Google Gmail. Es el correo de la plataforma de Google. Puede
estar personalizado, como es el caso del centro donde se llevó
a cabo la propuesta. Permite el acceso al correo electrónico,
así como la posibilidad de chatear o hacer llamadas tanto de
vídeo como de audio, y compartir archivos.
‒ Google Documentos. Esta herramienta permite crear y editar
textos, tanto de manera individual como colectiva; el trabajo
se guarda directamente y, además, permite al profesor hacer
un seguimiento de qué ha hecho cada uno.
‒ Google Drive. Es una nube virtual donde se pueden almacenar
archivos, bien creados en documentos de Google o bien
subidos directamente desde el ordenador.
‒ ‒
‒ Google Forms. Esta herramienta permite la creación de for-
mularios y cuestionarios personalizados. Los resultados se al-
macenan en una hoja de cálculo donde pueden ser analizados.
‒ Google Meet. Es un sistema de videoconferencias donde
alumnos y profesores pueden usar su cámara y video o incluso
chatear.
‒ Google presentaciones. Permite crear y editar presentaciones
directamente en el navegador y, al igual que en el caso de Do-
cumentos, puede hacer de manera individual o colaborativa y
el profesor tiene acceso a las distintas versiones que se creen,
viendo qué ha aportado cada uno.
4. RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Trabajos voluntarios
Curso 20.21 27 28 1
Curso 19.20 Pospandemia 26 1
Curso 19.20 Prepandemia 15 22 12
0 10 20 30 40 50 60
‒ ‒
digital. Una vez confinados en casa, no fue posible el formato papel y,
aunque los trabajos fueran opcionales, la gran mayoría optó por hacer-
los y entregarlos siguiendo el formato online. En cuanto al curso 20/21,
son pocos los alumnos que no entregan los trabajos opcionales en papel;
sin embargo, todos realizaron y entregaron los trabajos opcionales en
formato digital.
Trabajos obligatorios
Curso 20.21 28 28
Curso 19.20 Pospandemia 27
Curso 19.20 Prepandemia 25 27 2
0 10 20 30 40 50 60
‒ ‒
GRÁFICO 3. Realización de trabajos 19/20.
25
Una vez finalizado el curso, se pasa una encuesta a los alumnos con
diversas preguntas para valorar algunos puntos que ayudan a la evalua-
ción la eficacia de la programación. En la pregunta sobre su preferencia
a la hora de realizar trabajos, tanto obligatorios como voluntarios, en
papel o en formato digital, la mayoría de los alumnos escogió la forma
virtual. La razón argumentada por muchos de ellos fue que eran más
rápidos, los podían hacer en cualquier sitio con su Smartphone y obte-
nían mejores resultados.
28
‒ ‒
En el caso del curso 20/21, todos los alumnos mostraron preferencia
por los trabajos en digital. De igual manera, las razones que argumen-
taban estaban en relación con una mejora de los resultados académicos,
con respecto a los de papel, así como la posibilidad de hacerlos a través
de su teléfono en cualquier momento y lugar.
Uso de herramientas
40 27 27
22 26
20 18
20 7 11
6
1 1 1
0
Trabajos en papel Trabajos en digital
‒ ‒
GRÁFICO 6. Medias académicas.
Medias académicas
8 7 7 7 7
6 6 6
6 5
4
2
0
Primera evaluación Segunda evaluación Tercera evaluación Evaluación final
Las medias académicas son muy similares entre ambos cursos. Quizás,
la diferencia más significativa se produce en la segunda evaluación.
Esto es así, porque durante los meses de noviembre y diciembre fue
cuando más alumnado se encontraba confinado durante el curso 20/21
y la mayoría de las tareas se realizaron de manera online, para facilitar
su participación, mientras que el curso 19720 no fue así. Sin embargo,
durante el tercer trimestre, vemos que el aumento de notas vuelve a ser
alto por el uso de herramientas digitales, este caso en el curso 19/20,
que es cuando se declaró el estado de alarma y la educación pasó a ser
virtual completamente. No fue el caso del curso 20/21, donde, teniendo
en cuenta la cercanía de la EBAU, se optó por trabajar con métodos más
tradicionales de cara a la preparación de la prueba. Como se puede ob-
servar, las medias a final de curso son muy similares, pero se podría
afirmar que el hecho de que los trimestres que se usan mayoritariamente
herramientas digitales las medias suben, implicaría que su uso conti-
nuado mejoraría significativamente las notas medias.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
Si bien es cierto que usar las nuevas tecnologías, a través del uso de las
herramientas de Google, mejora la forma de trabajar las distintas des-
trezas de la materia de inglés, los resultados académicos globales son
muy similares. Tal vez se deba a que este uso de herramientas digitales
tuvo momentos de más incidencia y otros menores, por lo que cabría
analizar qué sucedería si la implementación fuese al mismo nivel a lo
largo de todo el curso.
‒ ‒
7. REFERENCIAS
Anguita Acero, J. M., Méndez Coca, M., & Méndez Coca, D. (2020). Motivación
de alumnos de Educación Secundaria y Bachillerato hacia el uso de
recursos digitales durante la crisis del Covid-19. Revista De Estilos De
Aprendizaje, 13(Especial), 68-81. https://bit.ly/3yBQbNb
Ala-Mutka, K. Punie, Y. y Redecker, C. (2018). Digital Competence for Lifelong
Learning. Policy Brief. http://doi.org/10.13140/RG.2.2.17285.78567
Bonilla-del-Río, M., Diego-Mantecón, J. M., & Lena-Acebo, F. J. (2018).
Estudiantes Universitarios: prosumidores de recursos digitales y
mediáticos en la era de internet. Aula abierta, 47(3), 319-326.
Boletín Oficial del Principado de Asturias. Resolución del 17 de septiembre de
2020, de la [Consejería de Educación Principado de Asturias]. Por la que
se aprueban las instrucciones de organización para el inicio de curso en
los centros privados tanto sostenidos con fondos públicos como privados
exclusivamente y que serán de aplicación hasta el fin de la crisis
sanitaria ocasionada por la COVID-19.
https://sede.asturias.es/bopa/2020/09/18/2020-07488.pdf
C. Castro, P.A. (2018). El inglés como lengua extranjera en España ¿en qué
convocatoria superaremos esta asignatura?
Diari Oficial de la Generalitat Valenciana. RESOLUCIÓN de 28 de julio de
2020, del secretario autonómico de Educación y Formación Profesional,
por la que se aprueban las instrucciones para la organización y el
funcionamiento de los centros que imparten Educación Secundaria
Obligatoria y Bachillerato durante el curso 2020-2021.
https://dogv.gva.es/datos/2020/07/30/pdf/2020_6219.pdf
Colás Bravo, M. P., de Pablos Pons, J., & Ballesta Pagán, J. (2018). Incidencia de
las TIC en la enseñanza en el sistema educativo español: una revisión de
la investigación. Revista de Educación a Distancia (RED), 18(56).
https://revistas.um.es/red/article/view/321471
Daud, A., & Hardian, M. (2021). The Application of Basic Principles of Online
Learning Through Google Suite for Education During Covid19
Outbreak. Ta'dib, 24(1), 111-122.
Fernández, M. O. G., & Gaytán, P. H. (2019). Experiencia del aula invertida para
promover estudiantes prosumidores del nivel superior. RIED. Revista
Iberoamericana de Educación a Distancia, 22(2), 245-263.
Fernández Miravete, Ángel D. (2018). La competencia digital del alumnado de
Educación Secundaria en el marco de un proyecto educativo TIC (1:1).
Edutec. Revista Electrónica De Tecnología Educativa, 63, 60-72 (382).
https://doi.org/10.21556/edutec.2018.63.1027
‒ ‒
García Aretio, L. (2021) COVID-19 y educación a distancia digital:
preconfinamiento, confinamiento y posconfinamiento. RIED. Revista
Iberoamericana De Educación a Distancia, 24(1), 09-32.
https://doi.org/10.5944/ried.24.1.28080
García Martín, J., & García Martín, S. (2021). Uso de herramientas digitales para
la docencia en España durante la pandemia COVID-19. Revista
Española De Educación Comparada, 38, 151-173.
https://doi.org/10.5944/reec.38.2021.27816
Gobierno de Cantabria (2020). Instrucciones de inicio de curso. Institutos de
Educación Secundaria. https://bit.ly/3gQW0jx
Heggart, K., & Yoo, J. (2018). Getting the most from Google Classroom: A
pedagogical framework for tertiary educators. Australian Journal of
Teacher Education, 43(3), 140-153.
https://search.informit.org/doi/10.3316/aeipt.220829
Insani, K., & Farisi, I. (2020, June). ICT literacy with google suite for education
(GSFE) in junior high school with different academic abilities. In
Journal of Physics: Conference Series (Vol. 1563, No. 1, p. 012058).
IOP Publishing.
Martínez-Garcés, J., Garcés-Fuenmayor J. (2020) Competencias digitales
docentes y el reto de la educación virtual derivado de la covid-19. En
Humanismo y Educación, 22(39).
https://doi.org/10.17081/eduhum.22.39.4114
Mobo, D. F. (2021). The Impact of Google Education Suite amidst the Pandemic:
The New Normal Approach. ICONTECH INTERNATIONAL
JOURNAL, 5(1), 1-4. https://doi.org/10.46291/ICONTECHvol5iss1pp1-
4
Mosquera Gende, I. (2020). Escenarios educativos mixtos, híbridos y
semipresenciales. UNIR Revista. https://bit.ly/3mNGY1Z
Nirmala, A. A., Triaswati, E., & Rahmawan, A. F. (2020). Implementation of the
GSE (Google Suite Education) Program at SD Muhammadiyah 09 Plus
in the Covid-19 Pandemic Era. Omega, 6(2).
OECD (2005). The OECD Program Definition and Selection of Competencies
(2005). The definition and selection of key competencies. Executive
summary, 30. http://www.oecd.org/dataoecd/47/61/35070367.pdf
Panadero, E., García-Pérez, D., Fernández Ruiz, J., & Sánchez Centeno, H.
(2020). Un año de transición hacia la Educación Superior: retos,
experiencias y estrategias en Segundo de Bachillerato. Estudios sobre
Educación, (39), 109+.
‒ ‒
Picón, G. A., de Caballero, K. G., & Paredes, N. (2020). Desempeño y formación
docente en competencias digitales en clases no presenciales durante la
pandemia COVID-19.
Sandoval, C. H. (2020). La Educación en Tiempo del Covid-19 Herramientas
TIC: El Nuevo Rol Docente en el Fortalecimiento del Proceso
Enseñanza Aprendizaje de las Prácticas Educativa Innovadoras. Revista
Tecnológica-Educativa Docentes 2.0, 9(2), 24-31.
https://doi.org/10.37843/rted.v9i2.1383
Valverde-Crespo, D., de Pro-Bueno, A. y González-Sánchez, J. (2020). La
información científica en Internet vista por estudiantes de Educación
Secundaria Obligatoria: Un estudio exploratorio de sus competencias
digitales. Revista Eureka sobre Enseñanza y Divulgación de las ciencias,
17(1), 1101.
Velasco, Y. A., Rodríguez, S. D., & Martínez, J. (2012). El uso de las TIC como
herramienta para el aprendizaje significativo del inglés. Rastros Rostros,
14(27), 115-119
VVAA. (2019). Burlington Internacional English B2+. Burlington Books.
‒ ‒
CAPÍTULO 36
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
Moodle. De acuerdo con Costello (2013, pp.190-191), las motivaciones
principales son el ahorro económico que supone al ser una plataforma
gratuita, su flexibilidad, su adaptabilidad y el temor al monopolio de
los SGA privados. Asimismo, ha sido adoptado por sus principios cons-
tructivistas sociales (Chao, 2008), ya que esta plataforma se basa en un
enfoque pedagógico centrado en un alumnado activo en su propio pro-
ceso de aprendizaje, frente al enfoque más tradicional del estudiantado
como receptor de conocimientos.
La implementación generalizada de los SGA ha permitido a las univer-
sidades desarrollar procesos formativos bajo el modelo de blended lear-
ning. En estos procesos el alumnado puede interactuar con contenidos
a su propio ritmo, además de crear y compartir elementos con el resto
del estudiantado. Esta forma de aprendizaje híbrida, adaptada al uso
actual que los/as alumnos/as occidentales realizan de la tecnología y sus
nuevas formas de comunicación, es mejor valorada que el aprendizaje
tradicional por el estudiantado (Martínez-Caro y Campuzano-Bolarín,
2011).
La estructura de acceso abierto de Moodle facilita la integración en este
SGA de otros paquetes de software, como H5P (abreviatura de Paquete
HTML5). H5P es software libre y permite crear, editar y compartir de
forma relativamente sencilla más de 45 objetos de aprendizaje interac-
tivos (puede verse una demostración en https://ir.uv.es/mlos/1). H5P
también está disponible en otras plataformas como Blackboard, Canvas
y Brightspace. Wicaksono et al. (2021) clasifican los tipos de contenido
H5P en actividades de texto, preguntas, imagen, juego, audio, presen-
tación, contenido complejo y nuevo tipo. Algunas actividades trasladan
al entorno virtual ejercicios tradicionales del aula (exámenes, dictados,
ordenación de imágenes e información, ejercicios de cloze, creación y
repaso de fichas, etc.). Otras actividades permiten combinar actividades
más simples, por ejemplo, el vídeo interactivo, la presentación interac-
tiva, los escenarios ramificados, etc.
‒ ‒
FIGURA 1. Algunos tipos de contenido h5p.
Fuente: https://h5p.org/content-types-and-applications
‒ ‒
los actuales y futuros docentes un espacio donde interactuar con
otros/as creadores/as y recibir retroalimentación sobre actividades,
ideas y su ejecución.
En el campo de la enseñanza de idiomas hay todavía pocos trabajos
sobre H5P, debido en parte a que se trata de una tecnología novedosa.
Sartor (2018) comenta brevemente su buena experiencia usando H5P y
su efecto positivo en la satisfacción del estudiantado. Canese Caballero
y Castillo Alvarenga (2020) crean un curso de inglés con fines especí-
ficos para estudiantes de primer año de universidad en Paraguay. El
curso se desarrolla a través de la plataforma Moodle y por las limita-
ciones de conexión a internet en algunas zonas del país deciden que
todas las actividades sean de tipo asincrónico. Después de analizar las
actividades disponibles en Moodle, optan por utilizar H5P para las ac-
tividades formativas. Emplean sobre todo el vídeo interactivo y la pre-
sentación interactiva porque permiten incorporar otros contenidos H5P.
Las autoras concluyen que H5P es muy útil para la enseñanza de idio-
mas por su flexibilidad, adaptabilidad y gran variedad de actividades
multimedia. Wicaksono et al. (2021) investigan el uso de H5P en la
enseñanza del inglés. Participan 19 estudiantes de la Politeknik Negeri
Jember (Indonesia). Los resultados sugieren que H5P tuvo un impacto
positivo tanto en la motivación como en la mejora del inglés.
En la Comunidad Valenciana, varias instituciones de educación supe-
rior (por ejemplo, la Universitat de València, la Universitat Jaume I y
la Universitat d’Alacant), así como los centros públicos de Infantil, Pri-
maria, ESO, Bachillerato y FP usan plataformas educativas basadas en
Moodle. Por tanto, para el estudiantado del máster en Profesor/a de
Educación Secundaria Obligatoria y Bachillerato, Formación Profesio-
nal y Enseñanzas de Idiomas de esta comunidad es fundamental saber
utilizar Moodle y H5P desde la perspectiva docente, ya que les será de
utilidad durante su formación (asignaturas y periodos de prácticas) e
imprescindible en un posible futuro laboral como profesores/as.
‒ ‒
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
Se emplearon tres tipos de materiales: un breve cuestionario de datos
sociodemográficos, actividades H5P y un cuestionario para recabar su
opinión sobre H5P y Moodle. El cuestionario de datos sociodemográfi-
cos tenía la finalidad de conocer a la muestra. Se preguntó la edad, la
lengua materna, el nivel de inglés y en qué medida les gustaba la tec-
nología educativa. Para crear este instrumento se utilizó la actividad
feedback de Moodle.
Las actividades H5P tenían el propósito de que el estudiantado experi-
mentara distintos tipos de contenido H5P para que posteriormente pu-
diera opinar sobre ellas. Se emplearon siete actividades H5P (ver Figura
2) de cinco tipos distintos: 1. Introduction to H5P (interactive video),
2. Course presentation game (presentation), 3. Alike prepositions vo-
cabulary (interactive video), 4. Listening Paul Auster (column), 5. City
names (find the words), 6. SDGs - theme of people (drag and drop) y 7.
Practice test (column). Las actividades 1 (ver Figura 3), 3 (ver Figura
4), 6 (ver Figura 5) y 7 fueron diseñadas por los/as autores de este tra-
bajo (disponibles bajo solicitud al autor principal). Las actividades 2 y
5 provienen de la web oficial de H5P y se pueden completar en línea en
los enlaces https://h5p.org/presentation#example=57130 y
https://h5p.org/find-the-words. La actividad 4 (ver Figura 6) es una ac-
tividad de comprensión auditiva a partir de una grabación sonora del
escritor Paul Auster. Su origen es un curso sobre H5P organizado por
la Universitat Jaume I (Castellón) en 2021.
‒ ‒
FIGURA 2. Visión general de las actividades en moodle
FIGURA 3. El vídeo interactivo puede incluir una sección con preguntas a modo de resumen
al final del vídeo. En la figura puede observarse una parte de esta sección en la actividad
Introduction to H5P (interactive video).
‒ ‒
FIGURA 4. Pregunta de elección múltiple en la actividad Alike prepositions vocabulary (in-
teractive video).
FIGURA 5. Actividad H5P SDGs – theme of people (drag and drop). La actividad consiste
en relacionar los nombres de los cinco primeros objetivos de desarrollo sostenible (ODS)
con sus objetivos.
‒ ‒
FIGURA 6. Pregunta de completar huecos en la actividad Listening Paul Auster (column)
‒ ‒
información adicional sobre H5P. Para crear el instrumento se empleó
la actividad feedback de Moodle.
En cuanto a la administración, los/as participantes completaron los ins-
trumentos a través del Aula Virtual (Moodle 3.9) de la institución en
abril de 2021. Como consecuencia de la situación de pandemia, la do-
cencia del curso 2020/2021 fue híbrida: las clases se dividieron en dos
mitades que asistían de forma presencial en semanas alternas. Por ello,
una parte del estudiantado participó en el estudio presencialmente en el
aula de informática y la otra parte desde casa. Para resolver posibles
dudas de los/as participantes que estaban en sus domicilios, se habilita-
ron sesiones de Blackboard Collaborate. Primero de todo, se explicó al
alumnado que iban a participar en un estudio que formaba parte de un
proyecto de innovación docente financiado por la Universitat de Valèn-
cia, se expusieron las líneas de trabajo del proyecto y se hizo una breve
introducción a H5P con apoyo audiovisual. A continuación, se descri-
bió brevemente lo que iban a hacer. Cabe mencionar que el estudian-
tado no presencial pudo seguir la explicación a través de Blackboard
Collaborate. Finalmente, el alumnado completó el cuestionario de datos
sociodemográficos, las actividades H5P y el cuestionario para recabar
su opinión sobre H5P y Moodle. Algunos/as estudiantes que utilizaron
los ordenadores del aula de informática tuvieron problemas con el so-
nido. Este problema se resolvió configurando adecuadamente la salida
de sonido.
En relación con el análisis de datos, los datos cuantitativos se analizaron
con el programa de análisis estadístico SPSS versión 26 para Windows.
Antes de todo, se efectuó un análisis de frecuencias para comprobar que
no había valores anómalos ni perdidos. Dado que las variables eran no-
minales y ordinales, el análisis estadístico se limitó a calcular las fre-
cuencias.
Para el análisis cualitativo se siguió la siguiente estrategia. En primer
lugar, de forma independiente, dos de los investigadores/as aplicaron la
metodología sugerida por Dörnyei (2003): a) examinar las respuestas
de cada participante en busca de elementos relevantes, y b) sobre la
base de las ideas encontradas, crear categorías más amplias que permi-
tan comparar las respuestas. En segundo lugar, los/as investigadores
‒ ‒
compararon las categorías que habían obtenido de forma independiente
y decidieron de forma conjunta las categorías finales.
4. RESULTADOS Y DISCUSIÓN
‒ ‒
relación con H5P, se les preguntó cuáles consideraban que eran los po-
sibles beneficios de usar H5P en la enseñanza de idiomas. Las respues-
tas pueden agruparse en varias categorías: aumento de la motivación y
la atención (“con H5P se pueden crear sesiones interactivas y muy di-
vertidas. A los estudiantes les gusta mucho este tipo de actividades”),
variedad de actividades con una única aplicación (“se puede crear y ac-
ceder a un número ilimitado de contenido, actividades y juegos interac-
tivos”), personalización de los contenidos y actividades (“presenta una
gran variedad de actividades que se pueden adaptar a diversas preferen-
cias de aprendizaje e intereses”), retroalimentación inmediata (“permite
ofrecer un feedback inmediato al alumnado”), desarrollo de la compe-
tencia digital (“el hecho de que sea a través de herramientas digitales
ayuda a que se fomente la competencia digital en clase”), accesibilidad
(“gracias a Moodle todos los/as alumnos/as pueden acceder a estas ac-
tividades”), posibilidad de seguimiento por parte del docente (“el/la
profesor/a tiene acceso a las respuestas de los/as alumnos/as. Así pues,
tiene un feedback sobre cómo han ido las clases y en qué se debe traba-
jar”) y ahorro de papel (“se ahorra papel”).
Los/las participantes también señalaron algunas desventajas: la crea-
ción de las actividades puede suponer mucho tiempo al profesorado
(“cuesta más tiempo y trabajo preparar el material que con otros méto-
dos”), el trabajo del estudiante no recibe retroalimentación cualitativa
(“el feedback no es muy cualitativo”), problemas técnicos o falta de
dispositivos para realizar las actividades (“si no hay una buena cone-
xión a internet, quizás sea un poco problemático”, “quizá puede haber
problemas técnicos o los/las alumnos/as pueden no contar con disposi-
tivos electrónicos en el aula”), la falta de competencia en tecnologías
por parte del estudiantado (“la baja competencia digital de los estudian-
tes”), la necesidad de formación del profesorado (“la necesaria forma-
ción para saber utilizarlo como profesores y ser capaces de crear el ma-
terial de forma rápida”) y fallos en el diseño de las actividades (“pueden
haber problemas técnicos a la hora de elaborar las actividades. Los/as
alumnos/as deberían tener acceso a un PDF o documento Word donde
hacerlo en caso de que fuese urgente”).
‒ ‒
GRÁFICO 3. Respuestas de los/as informantes (n = 43) a la pregunta ¿cómo valoras la
utilidad didáctica de Moodle para tu especialidad (enseñanza de idiomas)?
‒ ‒
señaladas por el alumnado (correcta visualización del contenido H5P
en distintos tipos de dispositivo y la necesidad de una conexión fiable
a internet) también son comentadas por Canese Caballero y Castillo Al-
varenga (2020) y Wicaksono et al. (2021). El profesorado poco puede
hacer para incidir en la conexión a internet, pero sí puede diseñar las
actividades teniendo en cuenta el mayor o menor tamaño de la pantalla
del dispositivo o recomendar al estudiantado usar uno u otro disposi-
tivo. Cabe comentar que en el presente estudio solo tuvieron problemas
de visualización de dos de los siete H5P algunos estudiantes que utili-
zaron móviles.
La segunda sección del cuestionario se interesaba por el uso del Aula
Virtual (Moodle 3.9) durante el periodo de formación en el máster en
Profesorado. Los/as participantes indicaron que el 69,8 % del profeso-
rado utilizaba el Aula Virtual a menudo o siempre, que el 20,9 % lo
hacía a veces, que el 9,4 % recurría al Aula Virtual casi nunca o nunca.
Salvo este último dato que podría ser un despiste al responder, los re-
sultados son coherentes con la situación de docencia híbrida del curso
académico 2020/2021. En cuanto al grado de satisfacción con el uso del
Aula Virtual por parte del profesorado, los resultados son relativamente
bajos: en una escala de 1 a 5, donde 1 significa insatisfecho y 5 satisfe-
cho, el 39,5 % señaló 3, el 30,2 % indicó 4, el 14 % 2, el 11,6 % 5 y el
4,7 % 1. Igualmente, es relativamente baja la valoración del impacto
del uso del Aula Virtual en el aprendizaje: en una escala de 1 a 5, donde
1 significa negativo y 5 positivo, el 37,2 % señaló 3, el 34,9 % indicó
4, el 14 % 2, el 11,6 % 5 y el 2,3% 1. Estos resultados contrastan con
la excelente valoración de la utilidad de didáctica de Moodle que habían
hecho los/as participantes anteriormente (ver Gráfico 3). De igual
modo, contrasta con el interés del estudiantado por recibir formación
sobre Moodle y H5P durante sus estudios del máster de Profesorado: el
90,3 % manifestó que le hubiera gustado recibir formación sobre
Moodle y el 97,7 % indicó lo mismo en relación sobre H5P. No sé pidió
al alumnado que justificara su mayor o menor grado de satisfacción, y
no se puede saber los motivos de sus respuestas. No obstante, en la sec-
ción de comentarios adicionales, algunos/as participantes manifestaron
algunas opiniones que sugieren que parte del profesorado hace un uso
‒ ‒
limitado de las actividades y los recursos disponibles en Moodle (“creo
que Moodle es una plataforma cuyo potencial didáctico aún no se ha
explotado, se nos enseña la mayor parte del tiempo con herramientas
desfasadas para la época en la que vivimos”, “no conozco todo lo que
ofrece Moodle ya que se usa solamente para entregar las tareas que nos
manda cada profesor, o para conectarnos en Blackboard para sesiones
online”, “el profesorado del máster únicamente utiliza Aula Virtual
para crear tareas y subir contenidos”). Esto está en relación con lo se-
ñalado por Cabero-Almenara et al. (2019): a pesar del uso extendido de
los sistemas de gestión de aprendizaje, no se están produciendo cambios
reales en las prácticas pedagógicas, sino que el profesorado tiende a
usar estos sistemas para transmitir conocimiento (compartir materiales
y recopilar tareas del estudiantado) en vez de desarrollar, inventar o
crear conocimientos.
El tercer apartado del cuestionario preguntaba por el uso de Moodle y
H5P en el centro de prácticas. El 72,1 % hizo las prácticas en un insti-
tuto de secundaria, el 16,3 % en una escuela oficial de idiomas y el 11,6
% en un centro de formación profesional. Según los/as participantes, el
34,9 % del profesorado usaba Aules (Moodle 3.9) muy a menudo o
siempre, el 30,2 % a veces, el 23,3 % casi nunca y el 11,6 % nunca.
Además, el 11,7 % recurría muy a menudo o siempre a otras platafor-
mas como Google Classroom, Canvas y Backboard y el 18,6 % lo hacía
a veces. En cuanto al uso de Aules por parte de los/as participantes, en
la tabla 1 puede observarse que apenas lo utilizaron. Dado que Aules es
el SGA oficial en los centros públicos de la Comunidad Valenciana,
sería deseable que el estudiantado tuviera un mayor contacto con la pla-
taforma durante las prácticas.
‒ ‒
TABLA 1. Uso de Aules por parte de los participantes (n = 43).
‒ ‒
resultados son coherentes con la elevada valoración de la utilidad di-
dáctica de Moodle y H5P para la enseñanza de idiomas (ver Gráficos 3
y 4).
Por último, el estudiantado disponía de un espacio para añadir informa-
ción adicional. Los comentarios pueden agruparse en tres ideas que re-
fuerzan o ayudan a explicar lo manifestado en otras partes del cuestio-
nario. La primera idea se relaciona con el primer bloque y es que
Moodle y H5P son herramientas con mucho potencial didáctico (“con-
sidero muy útil tanto el uso de Moodle como el de H5P. Este año ha
sido la primera vez que he oído hablar de H5P y me parece que ofrece
herramientas realmente beneficiosas para la docencia en mi especiali-
dad”). También se repite y explica la idea del segundo bloque de que el
profesorado del máster no aprovecha Moodle didácticamente al má-
ximo. En relación con este punto, una persona matiza “que depende
mucho de cada asignatura”. Por último, se refuerza lo dicho en el cuarto
apartado de ítems: la falta de formación sobre Moodle y H5P y el interés
por formarse (“me habría encantado aprender a crear contenido H5P en
el Máster o que los profesores lo hubiesen integrado en sus asignatu-
ras”, “deberían de enseñarnos a crear contenido de este tipo”).
5. CONCLUSIONES
‒ ‒
accesibilidad, entre otros aspectos. También identificaron posibles in-
convenientes, entre ellos, que el diseño de las actividades puede supo-
ner mucho tiempo al profesorado, que pueden surgir problemas con la
conexión a internet y que es posible que no todo el estudiantado cuente
con un dispositivo para completar las actividades. El empleo de Moodle
es habitual por los/las docentes del máster de Profesorado y de los cen-
tros de prácticas. En cambio, el uso de Moodle por parte del estudian-
tado durante las prácticas es limitado. Dado que Moodle es una plata-
forma básica para el profesorado, los/as futuros/as docentes deberían
familiarizarse con su funcionamiento desde la perspectiva docente du-
rante su formación. En cuanto a H5P, su utilización es prácticamente
inexistente tanto en el máster como en los centros de prácticas, y la
inmensa mayoría del estudiantado carece de nociones sobre este conte-
nido interactivo. Este hecho se justifica porque H5P es una tecnología
que está disponible en Moodle desde hace relativamente poco tiempo.
No obstante, es conveniente que se explore su uso por el potencial pe-
dagógico señalado por los/as participantes y por algunos/as autores/as
(Canese Caballero y Castillo Alvarenga, 2020; Wicaksono et al., 2021).
De hecho, la totalidad de los/as informantes estaría dispuesto/a a apren-
der a crear contenido H5P para la docencia.
Este estudio cuenta con varias limitaciones. En primer lugar, el tamaño
de la muestra no era elevado (n = 43) y todos/as los/as participantes
pertenecían a la misma institución universitaria. Por ello, no se puede
generalizar los resultados. En segundo lugar, el estudio se basa en las
opiniones de los/as informantes y solo se utilizó un instrumento para
recoger los datos. Por último, los/as informantes experimentaron 5 de
los 49 tipos de H5P disponibles actualmente. Por esto motivo, sus va-
loraciones no son extensibles a todos los tipos de contenido interactivo.
Las limitaciones mencionadas sugieren algunas líneas de investigación.
Se podría repetir el estudio con una muestra mayor, con informantes de
diversas instituciones, con mayor diversidad de contenidos H5P y con
instrumentos adicionales. Por ejemplo, se podría entrevistar a parte de
los/as participantes para enriquecer los datos cuantitativos del cuestio-
nario. También se podría enseñar a estudiantes del máster de Profeso-
rado a utilizar H5P de forma pedagógica para conocer los pros y los
‒ ‒
contras de ofrecer esta formación. Asimismo, se podrían plantear estu-
dios cuasiexperimentales para averiguar qué impacto tiene el uso de
H5P en la enseñanza de idiomas y en la motivación del estudiantado.
6. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
7. REFERENCIAS
‒ ‒
Chao, I. T. (2008). Moving to Moodle: Reflections two years later. Educause
Quarterly, 31 (3), 46-52. https://er.educause.edu/-
/media/files/articles/2008/8/eqm0837.pdf?la=en&hash=3FC5CAE3E681
9CDEAE8943FCEA93A6FEF1805886
Costello, E. (2013). Opening up to open source: looking at how Moodle was
adopted in higher education. Open Learning: The Journal of Open,
Distance and e-Learning, 28(3), 187-200.
https://doi.org/10.1080/02680513.2013.856289
Dörnyei, Z. (2003). Questionnaires in second language research: Construction,
administration, and processing. Lawrence Erlbaum Associates.
Hawkins, B. L. y Rudy, J. A. (2008). EDUCAUSE core data service: Fiscal year
2007 summary report. Educause. https://library.educause.edu/-
/media/files/library/2008/10/pub8005-pdf.pdf
H5P (s.f.). H5P - Create and Share Rich HTML5 Content and Applications.
Recuperado el 1 de septiembre de 2021. https://h5p.org/
Martínez-Caro, E. y Campuzano-Bolarín, F. (2011). Factors affecting students’
satisfaction in engineering disciplines: traditional vs. blended
approaches. European Journal of Engineering Education, 36(5), 473-
483. https://doi.org/10.1080/03043797.2011.619647
Molist, M. (4 de diciembre de 2008). Moodle llena la geografía educativa
española de campus virtuales. El País.
https://elpais.com/diario/2008/12/04/ciberpais/1228361065_850215.html
Moodle (julio de 2021). Moodle Statistics. Recuperado el 1 de septiembre de
2021 de https://stats.moodle.org/
Sartor, V. (2018, 9 de julio). Keep your students connected and engaged with
H5P. EFL Magazine. https://eflmagazine.com/keep-students-connected-
engaged-h5p/
Wicaksono, J. A., Rimbi B. S., Osamu I., y Adriadi N. (2021). The use of H5P in
teaching English. En Proceedings of the First International Conference
on Social Science, Humanity, and Public Health (ICOSHIP 2020) (pp.
227-230). Atlantis Press. https://doi.org/10.2991/assehr.k.210101.049
‒ ‒
APÉNDICE A
‒ ‒
Uso del Aula Virtual en el máster de Profesorado de Secundaria,
FP y EOI
8. En general, ¿con qué frecuencia usa el profesorado del máster el Aula
Virtual para la docencia?
a) Nunca b) Casi nunca c) A veces d) Muy a menudo e) Siempre
9. En una escala de 1 a 5, donde 1 significa insatisfecho y 5 satisfecho,
¿cuál es tu nivel de satisfacción con el uso del Aula Virtual en el máster
de Secundaria, EOI y FP?
a) 1 b) 2 c) 3 d) 4 e) 5
10. En una escala de 1 a 5, donde 1 significa negativo y 5 positivo,
¿consideras que el uso del Aula Virtual en el máster de Secundaria, EOI
y FP ha sido positivo para tu aprendizaje?
a) 1 b) 2 c) 3 d) 4 e) 5
11. ¿Te hubiera gustado recibir formación sobre Moodle durante los
estudios del máster de Secundaria, EOI y FP?
a) Sí b) No c) No estoy seguro/a
12. ¿Te hubiera gustado recibir formación sobre H5P durante los estu-
dios del máster de Secundaria, EOI y FP?
a) Sí b) No c) No estoy seguro/a
Uso de Aules (Moodle) y H5P en el centro de prácticas
13. ¿En qué etapa educativa hiciste las prácticas?
a) ESO y Bachillerato b) Escuela Oficial de Idiomas c) Formación Pro-
fesional
14. ¿Con qué frecuencia usaba el/la tutor/a Aules?
a) Nunca b) Casi nunca c) A veces d) Muy a menudo e) Siempre
15. ¿Con qué frecuencia usaba el tutor/a otro tipo de plataformas como
Google classroom, Canvas, Blackboard, etc. en clase?
a) Nunca b) Casi nunca c) A veces d) Muy a menudo e) Siempre
16. ¿Con qué frecuencia usabas tú Aules durante las prácticas?
‒ ‒
a) Nunca b) Casi nunca c) A veces d) Muy a menudo e) Siempre
17. ¿Con qué frecuencia usaba el/la tutor/a contenido interactivo H5P
en clase?
a) Nunca b) Casi nunca c) A veces d) Muy a menudo e) Siempre
18. Si has respondido b)-e) en la pregunta anterior, qué tipo de conte-
nido H5P. Escribe la respuesta.
19. ¿Con qué frecuencia usabas tú contenido interactivo H5P en clase
durante las prácticas?
a) Nunca b) Casi nunca c) A veces d) Muy a menudo e) Siempre
20. Si has respondido b)-e) en la pregunta anterior, ¿qué tipo de conte-
nido H5P? Escribe la respuesta.
Conocimientos sobre H5P y disposición a utilizarlo
21. ¿Sabes crear contenido interactivo H5P?
a) Sí b) No
22. Si has respondido afirmativamente a la pregunta anterior, ¿qué tipo
de contenido sabes crear? Escribe tu respuesta.
23. ¿Estarías dispuesto/a a utilizar contenido H5P creado por otros/as
profesores/as en tus clases?
a) Sí b) No c) No estoy seguro/a
24. ¿Estarías dispuesto/a a aprender a crear contenido H5P para tus cla-
ses?
a) Sí b) No c) No estoy seguro/a
Comentarios adicionales
25. A continuación puede comentar cualquier aspecto sobre Moodle,
Aules, Aula Virtual o H5P.
Gracias por completar el cuestionario. Para saber más sobre H5P pue-
des consultar la web oficial (https://h5p.org/)
‒ ‒
CAPÍTULO 37
1. INTRODUCTION
‒ ‒
custom link, a QR code or embedding it in on a webpage or into tradi-
tional discussion forums in different Learning Management Systems
(LMS) such as Blackboard or Moodle. The user interface is intuitive
and works in a similar way to other social media platforms students are
usually familiarized with (e.g. YouTube, Instagram). The length of the
video can be customized, and they can be limited from thirty seconds
to five minutes. Students can unlimitedly pause and re-record their vid-
eos, which can help them organize their ideas before the final version
of the video is posted.
Despite research has already been done with asynchronous videos
which were shared via email (Griffiths & Graham, 2009) or sharing
them in a video hosting website such as YouTube (Borup, West & Gra-
ham, 2012), this current research is unique as far as Flipgrid provides a
community-based tool for asynchronous video reflection. All the vid-
eos are stored in a single place which is accessible without installing
any software through a web browser or a mobile device (Android or
iOS).
Flipgrid is a useful and inclusive tool which gives voice and visibility
to all the students, regardless the ratio of students in the classroom, their
shyness or inhibition, which helps develop their digital and linguistic
competence in a friendly social learning environment. Once students
have recorded their videos on the different grids created by the teacher,
they can interact with other students once they have watched their vid-
eos. To do so, they can write replies or record another video to provide
them with feedback. Students’ discussion helps them to get to know
each other, improves communication and seem to be more mindful of
what they say by using efficiently their body language, facial expres-
sions and tone of voice (Bartlett, 2018). Teachers can also reply stu-
dents and provide feedback personalizing the system by including an
own personal assessment rubric.
‒ ‒
development. As the Bologna treaty highlights (1999), the establish-
ment of a completer and more far-reaching Europe is necessary, by con-
solidating its intellectual, cultural, social and scientific and technologi-
cal dimensions. The three main objectives of this process are to improve
competitiveness and international attraction of European education, to
increase employment of European students and to develop internal and
external mobility of students. Teachers cannot provide students with
only theoretical content knowledge, but they should make students be
competent enough to be autonomous, planning their time, leading the
way while being adaptable to all the situations.
In an e-learning context, Computer Supported Collaborative Learning
(hereafter, CSCL) facilitates these objectives since it uses ICT tools as
the devices of mediation in collaborative learning approaches which fa-
cilitate communication and the transmission and process of infor-
mation, valued characteristics in the 21st century educational and pro-
fessional domains. Collaborative learning is defined as the one in which
participants work in pairs or small groups to achieve a common goal
(Vinagre, 2010). Each student only reaches the own goals only if the
rest of the students reach their goals as well. It is a learner-centered
method with a constructivist and interactive perspective since learning
only takes place thanks to the interaction among students, exchange of
opinions and negotiation of meaning where learners work together, help
each other and use a variety of information tools and resources that al-
low for the pursuit of learning objectives and problem-solving activities
(Wilson, 1992). Collaborative learning rejects passive observation, rep-
etitions and memorization and promotes confrontation of opinions,
sharing of knowledge, multiple leadership and multidisciplinary skills.
Students develop their own learning strategies and are responsible for
their own learning process and their peers’. Participants develop a per-
sonal autonomy and assume their own learning rhythms according to
their interests and capacities while understanding the need to contribute
their best to the group to accomplish results that could not be achieved
individually. There is an interdependence relationship that fosters the
growing and development of individual processes, interpersonal rela-
tionships and productivity. It is characterized by:
‒ ‒
‒ Individual responsibility: all the members are responsible for
their individual performance in the group. The teacher should
be a counselor that facilitates and promotes an adequate learn-
ing atmosphere.
‒ Positive interdependence: the members of the groups must be
dependent on each other to achieve the common goal. This
interdependence is manifested through information ex-
changes, negotiations of meaning, topic discussions and ful-
fillments of tasks with all the members of a group.
‒ Collaborative skills: necessary skills to make the group work
efficiently (i.e., teamwork, leadership and conflict solving).
‒ Interaction: the members of a group interact to develop inter-
personal relationships and establish effective learning strate-
gies.
‒ Group process: the group reflects on a regular basis, assesses
its functioning and makes the necessary changes to increase
effectiveness. (Vinagre, 2010).
CSCL follows some principles that contribute to foster trust among its
participants and to get innovative results by a belonging feeling of all
the members of the group. Students have collaboration, leadership,
common vision, team process skills and information and technological
tools. All the members of the team actively participate and are moti-
vated enough to work collaboratively. Students work on a common task
or project. Its main goal is learning through scaffolding, which helps
students learn together efficiently using a computer. They can either
use the same computer or share the contents on line. Knowledge is
questioned and not memorized. Only by questioning the provided
knowledge will the student learn its content.
There are two different modalities of collaborative learning: (1) several
teachers work together creating material for different subjects so stu-
dents may have a multidisciplinary vision of the contents and (2) the
students are the ones that apply the principles of collaborative learning
(communication, problem solving and negotiation of meaning) to the
contents that are being taught. In this case, the teacher is in charge of
coordinating the process, making possible that all the groups
‒ ‒
collaborate in the same extent and helping to solve all the problems that
may arise. This second modality is the one that CSCL, and hence, the
Flipgrid tool, is based on. CSCL advocates for the use of computers
with an internet connection. Students, thus, communicate with other
students that belong to twin schools or other educational institutions
that are interested in interactive cultural activities. This way, students
practice their oral linguistic skills and learn to interact respectfully with
other peers with different cultures and traditions. They learn from other
students and teach and assess each other in a distended way.
When working with CSCL methodology, there are basically three dif-
ferent models: tandem learning, culture model and e-twinning model.
Tandem learning promotes those two students lean on each other to
learn. It can be done physically, face to face, or virtually, either syn-
chronously or asynchronously through emails, MOO, videoconference,
asynchronous discussions (i.e. VoiceThread, Flipgrid, chats). Tandem
learning is defined as learning through authentic communication with a
native speaker who can serve as a role model for the partner, correcting
and advising him/her in his/her attempts to express him/herself (Little
& Brammerts, 1996). Both students are both experts and learners in the
process. Students meet on a regular basis to help to improve the lan-
guage knowledge and competence of their second languages, to know
about the other student’s culture and way of living and to learn from
their mate’s experiences and knowledge.
Thanks to tandem learning, students receive a rich authentic second lan-
guage input that helps them shape their own output while feeling moti-
vated. It is a very useful practice since it promotes the development of
communication skills in a second language, intercultural communica-
tion and bilingual collaboration, autonomous learning and the ability to
behave correctly in the second language context. Students learn thanks
to a peer that provides authentic linguistic input.
The Culture model is a tele-collaborative learning model in the internet
which is centered on the learning of culture in the second language
class. Intercultural competence requires on the one hand, the under-
standing of certain established cultural concepts and on the other, the
development of new ways of interacting with the world. By comparing
‒ ‒
different cultures, students firstly find their similarities and differences.
It is a general and indirect contact with the culture that is fostered when
the student starts talking to the foreign peer. Students discuss about cer-
tain critical cultural topics. The foreign culture is analyzed and thus,
students are more objective when judging the other culture and when
learning and understanding the otherness of the foreign peer. This
model allows a networking of students of two different cultures and
countries that study in similar institutions and educational levels and
study each other’s language. They share cultural resources that are
available in a common website. Students use the foreign language for
class discussions and written work and the mother tongue to answer the
questionnaires that are provided by the partner school and the online
forums. In this latter case, students who participate in the forum write
the questions or the answers in the mother tongue but always get au-
thentic input in the foreign language when reading the proposed ques-
tions or the answers of the partner school. Thus, every student partici-
pates, and inhibition and lack of self-confidence is not a problem. The
Culture model helps students to know a different culture while improv-
ing their communicative competence in the target language.
Finally, the E-twinning model consists of knowing partner schools
thanks to the use of ICT and pedagogical innovation, practicing the tar-
get language and knowing other cultures. It is based on the European
Commission E-learning program whose objectives are to create links
among European schools, to encourage students and teachers to partic-
ipate in educational projects with European partner schools and to pro-
mote a European dimension in education, making students aware of the
plurilingual European society. In an E-twinning project, students use
different ICT tools (i.e. wikis, blogs, podcasts, chats, forums, skype) to
collaborate with the other schools and share resources and information.
The activities that schools have programmed are shared in a virtual
space called TwinSpace.
Whichever collaborative model helps students improve their linguistic
skills. According to Little and Brammerts (1996), students learn
through learning from the example of their native speaking peers, with
the help of their peers when writing (formulating) and through peer
‒ ‒
corrections. Peer scaffolding is essential in CSCL. Learning from and
with other peers is stimulating and engaging. Students do not feel inhi-
bition and are free to use the language without restraint. Working with
foreign students is a productive practice since they get authentic input
at the same time they create friendship or partnership links with their
peers. The learning process becomes a fruitful experience where all the
students learn and help each other in a distended and relaxed atmos-
phere without the pressure of being assessed by the teacher.
CSCL works through tasks. Müller-Hartmann (2007) structures telecol-
laboration tasks in three stages: establishing contact (introduction let-
ters, including pictures, puzzles, videos, packages with products from
one’s culture), establishing dialogue (prompts or questions (i.e. pre-,
while-, post-reading tasks when reading a book together) and critical
reflection stages (discussion of issues that came up, negotiation of mis-
understandings). Establishing a contact consists of preparing students
to the forthcoming events. Students need to know each other. Establish-
ing a dialogue stage gathers carefully interesting, designed tasks. Stu-
dents start a dialogue talking about the differences and similarities of
both cultures. Students discover the differences by themselves and feel
very motivated. When making a critical reflection, teachers design tasks
that enhance intercultural communication.
A study carried out by Ware and Pérez Cañado (2007), shows that every
activity done in a CSCL environment helps to improve the linguistic
competence through reinforcement activities, in which students work
the objectives of the course by exploring and practicing with their in-
ternational partners, linguistic exploration activities through which they
explore the foreign language directly (i.e. change the style and register
of a text) and communication activities through which ideas and opin-
ions about certain topics are exchanged and students correct their for-
eign partner’s mistakes that impede communication. This way, students
get feedback from their twins and do not feel the pressure or control of
the teacher, who is a facilitator, motivator, mediator, counselor, and
guide of the learning process of the classroom and also, a co-learner,
member of the team, assessor and ICT specialist that needs to find, se-
lect, offer and apply information in different ways according to the
‒ ‒
established learning objectives. Students learn the foreign language and
its culture in collaboration with other peers in a process in which they
learn to learn in a participatory and active way since it is a student-
centered interactive and motivating learning setting. Students are the
active agents that seek and construct their knowledge within a mean-
ingful context as it is represented in the following figure:
The student is involved in real tasks that take place in authentic contexts
and situations and interacts with other peers, the teacher, the infor-
mation resources and technology. The setting itself provides the neces-
sary scaffolding to develop both knowledge and skills, offers multiple
collaboration possibilities that let the student consider diverse perspec-
tives when facing certain topics and solving problems while reflecting
on the learning process. The use of ICT constitutes a decisive tool to
help students get access to a wide range of resources, collaborate with
other peers, consult experts, share their knowledge and solve complex
problems using cognitive tools. Students construct their own learning
by testing their ideas according to previous experiences, applying these
‒ ‒
ideas to new tasks, contexts and situations and integrating the new
knowledge to the preexisting intellectual constructs.
In addition, Berge (1995) explains there are certain necessary condi-
tions for successful online tutoring which can be summarized in four
areas: pedagogical, social, managerial and technical. The pedagogical
area is crucial since teachers moderate, tutor and facilitate online learn-
ing. They check if students’ responses focus on critical concepts, prin-
ciples and skills. The social area is in charge of creating a friendly social
environment in which learning is promoted. Human relationship, which
develop group cohesiveness, are upheld. The group behaves as a unit
and students help each other in a mutual cause. The managerial area
involves organizational, procedural and administrative roles whereas
the technical area encompasses the facilitation of participants feeling
comfortable with the systems and the software being used.
CSCL is one of the most promising ways of using ICT in the classroom.
It clearly guarantees social interaction among students. With the use of
groupware technology, students both interact and learn the target lan-
guage and its culture. Peer scaffolding is crucial in these stages because
students learn and correct themselves thanks to their peers’ help, feeling
no pressure and stress, being completely motivated and engaged in the
proposed tasks. Also, in their interaction processes, students construct
new knowledge, solve problems, learn theories and work together with
other peers. CSCL helps the improvement in students’ learning in
higher order cognitive processes, meta-cognition, social creativity and
information society skills (Ma & Pendergast, 2010), which makes its
practice necessary in every EFL classroom.
6 VoiceThread differs from Flipgrid as far as it offers a variety of media to be uploaded such as
‒ ‒
VoiceThread or YouTube. One year later, (2013) they found out that
the type of discussion prompt influences students’ opinions of asyn-
chronous videos. Pacansky-Brock (2014) researched on the use of
VoiceThread and the amount of video comments. She found out that
when providing an icebreaker and choices about what students could
respond, welcoming them by name and making students leave a com-
ment the first time they used VoiceThread, the number of video com-
ments significantly increased. When leaving voice or video comments,
instead of text ones, her undergraduate students reported stronger per-
ceptions of community.
Regarding the exclusive use of Flipgrid, the research is mainly focused
on higher education: Koivula (2015) defends it helps increase social
presence in online undergraduate courses and Green and Green (2018)
used it to enhance online discussions with university students. Mango
(2019) examined its use in her Arabic university courses. Serembus and
Murphy (2019) and Gurjar (2020) state that Flipgrid support the devel-
opment of the community of inquiry. Lowenthal, Borup, West and
Archambault (2020) studied its use in four universities during the
COVID-19 pandemic to foster the feeling of community. In order to
know the students’ perceptions of Flipgrid, Casañ-Núñez (2020) con-
ducted a research with thirty-seven students of a master’s degree in or-
der to know the advantages and disadvantages this tool provided them.
Carr (2020) also studied the perception of her arts college students to-
wards the Flipgrid discussion boards.
Oliver, Houchins, Moore and Wang (2020) used Flipgrid with middle
and high school students as part of a makerspace activity. All these
findings are summarized in the following table:
‒ ‒
TABLE 1. Summary of Flipgrid Works
Educational
Author Objectives Country
level
Borup, West To know the perceptions of the instruc-
Higher
& Graham tor and peers’ social presence with USA
education
(2012, 13) asynchronous video communication
To analyze how the number of video
Pacansky- Higher
comments can improve when using USA
Brock (2014) education
VoiceThread
Koivula To increase social presence in online Higher
USA
(2015) learning education
Green & Higher
To enhance online discussions USA
Green (2018) education
To analyze students’ perceptions and
Higher
Mango (2019) attitudes toward Flipgrid in the lan- USA
education
guage classroom
Serembus &
Higher
Murphy To develop a community of inquiry USA
education
(2019)
To examine how social networks in dis-
Higher
Gurjar (2020) tance learning facilitated authentic USA
education
learning
Lowenthal,
Borup, West Higher
To enhance the feeling of community USA
& Archam- education
bault (2020)
Casañ-Núñez To analyze the perceptions of students Higher
Spain
(2020) regarding the Flipgrid tool education
Oliver,
To analyze students’ reflections on
Houchins, Secondary
makespace projects in which Flipgrid is USA
Moore & education
used.
Wang (2020)
Source: Prepared by the author
2. OBJECTIVES
‒ ‒
3. METHODOLOGY
This research starts from the hypothesis that Flipgrid could be suitable
for improving baccalaureate education students’ English oral linguistic
competence.
3.1. PARTICIPANTS
3.2. INSTRUMENTS
‒ ‒
‒ Do you think Social Media have been one of the greatest
breakthroughs in the 21st century?
‒ How could the Internet change things for the rural world?
‒ ‒
and needed to provide feedback to their pairs on their linguistic com-
municative competence. This way, Spanish students assessed Ameri-
cans who talked in Spanish and vice versa. To do so, they recorded
another video in which they provided individual formative feedback for
their partners. They could freely watch all the videos and interact with
all the members included in each grid through some written messages
or oral video recordings.
3.3. PROCEDURE
‒ ‒
4. RESULTS
‒ ‒
the grade of the third term speaking test, the mean of the control group
is of 6.00 and for the experimental group 7.97. Thus, the difference is
not significant: p= .15. The mean of the final speaking grade for the
control group is 5.81 and 8.54 for the experimental group. These results
obtain a significant difference of p= .001. The descriptive statistics of
the categorized variables as well as the comparison between the grades
obtained in the two groups are presented in Tables 2 and 3 respectively.
Thus, despite three of the six tasks (tasks two, four and six) do not re-
port meaningful favorable results for the experimental group, these re-
sults confirm the hypothesis: a significant difference is observed in the
contrast of the data in favor of the experimental group which obtains
higher results in the different tasks performed (average score of the con-
trol group 5.16 versus 7.80 of the experimental group) and the final
speaking grade (p = .001).
TABLE 2. Mean (M) and standard deviation (SD) of categorized variables (six tasks, their
mean, first, second and third terms speaking grades and final speaking grade) of the control
group (CG) and experimental group (EG).
CG EG
M SD M SD
Video task 1 5,72 3,04 8,40 0,91
Video task 1 5,09 2,87 7,40 2,45
Video task 1 4,68 3,00 7,45 2,84
Video task 1 4,04 3,96 6,54 3,48
Video task 1 5,36 2,49 8,04 1,61
Video task 1 6,09 2,42 7,40 2,70
Mean 6 tasks 5,16 2,31 7,80 1,68
1st T. speaking
6,18 3,14 6,54 3,82
grade
2nd T. Speaking
6,18 3,20 8,40 0,97
grade
3rd T. Speaking
6,00 3,28 7,97 2,95
grade
Final speaking
5.81 1.77 8.54 1.36
grade
‒ ‒
TABLE 3. T-Student for independent samples analysis of categorized variables (six tasks,
first, second and third terms speaking grades and final speaking grade)
5. DISCUSSION
‒ ‒
In order to control that the groups were similar in academic perfor-
mance and that there were no significant differences in L2, the inferen-
tial analysis of the diagnostic test grades, done at the beginning of the
school year, was performed. These data show that Flipgrid prepares stu-
dents to improve academic performance in speaking exams, a fact that
is observed not only by comparing the control and the experimental
groups but also with the increase of two points in the grade from the
diagnostic test to the final test in the experimental group, which is a
significant difference of p= .007.
6. CONCLUSIONS
In the light of the results obtained in this exploratory research, and the
scarce studies focused on the EFL at the baccalaureate education level,
it would be suitable for baccalaureate education teachers to use collab-
orative tools such as Flipgrid, to improve students’ learning process and
oral academic performance. The large ratio of students per classroom
and the lack of resources may hinder the use of collaborative tools
which may potentially benefit students (Castejón & Santos, 2011).
The main limitations of this exploratory research are the sample size
and the ad hoc tasks, so any generalization to other populations should
be made cautiously. In future research it would be desirable to increase
the sample size. Based on the findings of this study, the constant asyn-
chronous interaction among the students, the development of interper-
sonal skills and its easy management make Flipgrid an extraordinary
and motivating tool in the EFL baccalaureate education classroom. Stu-
dents do not need to create an account to use the platform, but only a
link provided by the teacher. This helps reduce any overlooad of plat-
forms in the existing digital ecosystem (Stoszkowski, McCarthy & Fon-
seca, 2017). Moreover, since it is an asynchronous discussion, it pro-
vides the necessary flexibility for the community of students who par-
ticipate in the project, since they can experience the challenge regard-
less their physical learning location and their own personal schedules
at a lower cost (Griffiths & Graham, 2009; Lowenthal & Moore, 2020;
Petersen, Townsend & Onaka, 2020). As Maddix (2012) points out, it
‒ ‒
promotes reflection, participation and the development of learning
communities for students, which can influence on decreasing the feel-
ings of isolation7 and disconnectedness online learners can feel (Borup,
West & Graham, 2012; Kaufmann & Vallade, 2020). In order to to es-
tablish social presence in an online learning environment, a level of
comfort around the teacher and all the members of the program needs
to be achieved so a relaxing and distended atmosphere should be first
created.
Students participate more and do not feel inhibition since they feel more
protected behind the screen than in the face-to-face classroom discus-
sions. Thus, they are more involved and actively participate in all the
proposed grids.
The formative feedback easily provided either in a written or video-
based oral way, makes students be aware of their own learning process
while helping their partners build their spoken speech in the foreign
language. Since Flipgrid is a Microsoft software, it can be embedded
into other platforms commonly used in educational contexts (e.g.
Blackboard Collaborate, Microsoft Teams) and videos uploaded in
other platforms such as YouTube or Vimeo can also be embedded in
the discussion grids. As it usually occurs when working with ICT, in
order to have a successful Flipgrid experience all the students need to
have the suitable digital device and an optimal internet connection. Stu-
dents with hearing problems can also use this tool since the transcript
of the audio is provided for accessibility.
Flipgrid can be used to foster students’ linguistic competence, but it can
also be used in other non-linguistic areas in which, for instance, stu-
dents can orally explain their research on certain topics. Cross-curricu-
lar contents and critical thinking and reflection can be easily developed
and integrated in the curriculum thanks to the discussion the proposed
topics may arise (Rocca, 2010; Zhang et al., 2007). Since topics are
created by the teacher and time limits can vary, it is a valid tool for
7 The feeling of isolation or social presence has been defined as the ability “to project themselves
socially and emotionally, as ‛real’ people (i.e. their full personality), through the medium of commu-
nication being used” (Garrison, Anderson & Archer, 2000, p. 94).
‒ ‒
students of different ages and educational stages (i.e. Elementary
School, Higher Education). It can be used at the end of a didactic unit
to check if students have fulfilled the established goals or to present a
final project in a Project Based Learning didactic unit. It is a useful tool
for both, classroom and online learning which fosters oral linguistic
competence and promotes a social and multidirectional learning in
which students play an active role.
Flipgrid is a useful tool that facilitates social learning and helps students
develop video content digital skills. In the future, it is intended that
Flipgrid will be used with a bigger cohort of students to evidence more
direct peer interaction and collaborative discussion on common issues
they may encounter.
To successfully integrate this new tool, teachers should be cognizant of
the technological demands and expectations placed on students. It is
advisable that tools add instructional value and feedback on the use of
the tool needs to be provided by students. To do so, in future research,
students will be surveyed to gain insight on their perceptions of using
Flipgrid as a video-based discussion tool. Nevertheless, this research is
an important first step in investigating a new communication technol-
ogy which helps students improve their oral linguistic skill, interact and
engage with each other.
7. REFERENCES
‒ ‒
Carr, J. (2020). Teacher Candidate Perceptions on Alternative Asynchronous
Online Discussion Boards. Journal of Educational Technology and
Online Learning 3 (3), 288-310. DergiPark Akademik
Castejón, F.J. and Santos, M.L. (2011). Percepciones y dificultades en el empleo
de metodologías participativas y evaluación formativa en el Grado de
Ciencias de la Actividad Física. Revista Electrónica Interuniversitaria de
Formación del Profesorado, 14(4), 117-126. Universidad de Murcia
Fernández-Pampillón, A.Mª ( ). Las plataformas e-learning para la enseñanza
y el aprendizaje universitarios en internet. In C. López Alonso (ed.) &
M. Matesanz del Barrio (coord.). Las plataformas de aprendizaje. Del
mito a la realidad. (pp. - ), Biblioteca nueva
Garrison, D. R., Anderson, T., & Archer, W. (2001). Critical Inquiry in a Text-
Based Environment: Computer Conferencing in Higher Education. The
Internet and Higher Education 2 (2-3), 87-105. Science Direct
Green, T. and Green, J. (2018). Flipgrid: Adding Voice and Video to Online
Discussions. TechTrends 62, 128-130. Springer
Griffiths, M.E. and Graham, C. R. (2009). Using Asynchronous Video to Achieve
Instructor Immediacy and Closeness in Online Classes: Experiences
from Three Cases. International Journal on E-Learning (9), 325-340.
AACE
Joint Declaration of the European Ministers of Education. Bologna 19th June
1999.
Kaufmann, R. and Vallade, J. I. (2020). Exploring connections in the online
learning environment: student perceptions of rapport, climate, and
loneliness. Interactive Learning Environments, 1-15. Taylor & Francis
Ltd
Koivula, M. (2015). The Impacts of Asynchronous Video Reflection on
Perceived Learner Social Presence. [PhD Dissertation. University of
Minnesota], UM https://bit.ly/3i8Ha7W
Little, D. and Brammerts, H. (1996). A guide to language learning in tandem via
the Internet, CLCS occasional paper 46. CLCS, Dublin
Lowenthal, P. R., Borup, J., West, R. E. and Archambault, L. (2020). Thinking
Beyond Zoom: Using Asynchronous Video to Maintain Connection and
Engagement During the COVID-19 Pandemic. Journal of Technology
and Teacher Education 28 (2), 383-391. Kent State University
Lowenthal, P.R. and Moore., R.L. (2020). Exploring student perceptions of
Flipgrid in online courses. Online Learning Journal 24 (4), 28-41. The
Online Learning Consortium
‒ ‒
Ma, A and Pendergast, D. (2010). Innovative Pedagogies for Family and
Consumer Science/Home Economics Education –Utilizing Computer-
Based Collaborative Learning to Foster Lifelong Learning Attributes.
Family and Consumer Sciences Research Journal, 38 (3), 273-288.
Wiley-Blackwell
Maddix, M. A. (2012). Generating and facilitating effective online learning
through discussion. Christian Education Journal: Research on
Educational Ministry 9 (2), 372–385. SAGE Publications Ltd
Mango, O. (2019). Students’ Perceptions and Attitudes toward the use of Flipgrid
in the Language Classroom. In K. Graziano (Ed.), Proceedings of
Society for Information Technology & Teacher Education International
Conference (pp. 1970-1973). Association for the Advancement of
Computing in Education (AACE)
Müller-Hartmann, A. (2007). Online Intercultural Exchange: An Introduction for
Foreign Language Teachers. In R. O’Dowd (eds). Teacher Role in
Telecollaboration: Setting up and Managing Exchanges (pp .167-192).
Cromwell press Ltd
Nicol, D.J. and Macfarlane-Dick, D. (2007) ‘Formative assessment and self‐
regulated learning: A model and seven principles of good feedback
practice. Studies in Higher Education 31 (2), 199-218. Routledge
Pacansky-Brock, M. (2014). Learning out loud: Increasing voluntary voice
comments in online classes. In P. R. Lowenthal, C. S. York, & J. C.
Richardson (eds.), Online learning: Common misconceptions, benefits
and challenges (pp. 99–114). Nova Science Publishers
Petersen, J. B., Townsend, S. DC and Onaka, N. (2020). Utilzing Flipgrid
Application on Student Smartphones in a Small-Scale ESL Study.
English Language Teaching 13 (5), 164-176. Canadian Center of
Science and Education
Resta et alii. (eds.) (2004). Las tecnologías de la información y la comunicación
en la formación docente. Guía de planificación.: División de Educación
Superior. UNESCO.
Rocca, K. A. (2010). Student Participation in the College Classroom.
Communication Education 59 (2), 185-213. Routledge
Serembus, J. F. and Murphy, J. (2019): Crating an Engaging Learning
Environment Through Video Discussions. Nurse Educator 45 (2), 68-70.
Lippincott Williams and Wilkins Ltd
Stoszkowski, J., McCarthy, L. and Fonseca, J. (2017) ‘Online peer mentoring and
collaborative reflection: A cross-institutional project in sports coaching.’
Journal of Perspectives in Applied Academic Practice, 5(3), 118-121.
Edinburgh Napier University
‒ ‒
Thomas, L. and Jones, R. (2017). Student engagement in the context of commuter
students. The Student Engagement Partnership
Villa, A. and Poblete, M. (2004). Practicum y evaluación de competencias.
Profesorado, revista de currículum y formación del profesorado 8 (2), 1-
19. Universidad de Granada
Vinagre, M. (2010). Teoría y práctica del aprendizaje colaborativo asistido por
ordenador. Editorial Síntesis
Ware, P. D. and Pérez Cañado, M. L. (2007). Grammar and Feedback. Turning to
Language Collaboration. In R. O’Dowd (ed.) Online Intercultural
Exchange (pp. 107-126). Multilingual Matters
Wilson, J. D. (1992). Cómo valorar la calidad de la enseñanza. Paidós
Zhang, J. et al. (2007). Socio-cognitive Dynamics of Knowledge Building in the
Work of 9-and 10-year-olds. Educational Technology Research and
Development 55 (2), 117-145. Springer Boston
‒ ‒
8. APPENDIX
‒ ‒
CAPÍTULO 38
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
Partimos de la reflexión acerca de las necesidades a las que debe dar
respuesta la orientación educativa en este momento, así como del “per-
fil digital” que necesita y que tiene de facto el orientador, para exponer
las actuaciones que se han llevado a cabo con el fin de activar la orien-
tación educativa en un centro educativo concreto, dando lugar a nuevas
preguntas y líneas de trabajo.
2. JUSTIFICACIÓN
‒ ‒
Para lograrlo, los profesionales de la orientación deben poseer compe-
tencias profesionales, pedagógicas y digitales que les permitan utilizar
las herramientas tecnológicas para desarrollar estrategias de asesora-
miento eficaces, inclusivas e innovadoras. Estas competencias, además,
se desarrollan en contextos concretos con características singulares que
es necesario tener en cuenta para discernir adecuadamente las estrate-
gias y herramientas más apropiadas en cada caso.
La orientación en red
‒ ‒
Las TIC y la orientación de largo alcance
Es de sobra conocido que las TIC posibilitan acceso a una cantidad in-
gente de recursos y permiten realizar muchas de las tareas de manera
más sencilla y rápida, ahorrando tiempo y rentabilizando la informa-
ción. Además, a través de ellas podemos hacer un mejor uso de los datos
y la información disponible. Sin embargo, utilizarlas requiere forma-
ción y una inversión de tiempo en aprender cómo funcionan, cómo usar-
las y para qué tareas nos pueden servir. Por eso las propias TIC se con-
vierten a veces en una barrera en sí mismas antes de desplegar su po-
tencial facilitador y conllevan un coste de tiempo, estrés e incertidum-
bre que dificulta su incorporación efectiva.
No obstante, gracias a las posibilidades que ofrecen las TIC, a las de-
mandas de la enseñanza no presencial y a la configuración actual de la
relación entre las familias y los centros educativos, se impone cada vez
con más fuerza la necesidad de hacer llegar los contenidos de orienta-
ción a más colectivos, a entornos lejanos, a contextos en los que no
estamos de manera presencial; así, se buscan procesos de largo alcance
en los que la información y el asesoramiento no se ofrecen a un colec-
tivo en un momento concreto, sino que se ponen a disposición de quien
pueda usarlos para que puedan ser consumidos y utilizados por cada
uno a su ritmo y de acuerdo con su necesidad. De esta forma, la orien-
tación también se está viendo sacudida por la digitalización, que hace
repensar muchos de los procedimientos y fórmulas que se emplean en
ella (Crandall, North y Crandall, 2020).
En este sentido, como detallaremos un poco más adelante, hemos to-
mado como referencia el Marco Europeo para la Competencia Digital
del Profesorado, procurando fomentar en los docentes y los profesiona-
les de la orientación el desarrollo de estas competencias y centrándonos
específicamente en algunas de ellas que cobran especial sentido para
satisfacer nuestras necesidades: la selección, modificación y creación
de recursos; la reflexión en la práctica sobre las TIC y sus aportaciones
a la tarea educadora y al aprendizaje; la inclusión y autonomía del alum-
nado; y, finalmente, la comunicación y uso extensivo de la información
a través de las herramientas digitales. El dominio de estas competencias
‒ ‒
contribuirá, además, a hacer más relevante la labora orientadora y visi-
bilizar su funcionalidad y utilidad (Mason, Griffith y Belser, 2019).
‒ ‒
La orientación basada en evidencias
‒ ‒
competencias digitales, y es imprescindible conjugar ambas para dar
una respuesta que resulte adecuada a las necesidades de los destinata-
rios y sea viable para quien la realiza.
Desde hace varios años se vienen desarrollando estudios que exploran
las competencias digitales del orientador. Sin embargo, sigue siendo un
campo de investigación poco desarrollado y que requiere nuevos estu-
dios, especialmente en el ámbito nacional (Muñoz-Carril y González-
Sanmamed, 2015).
Entre las competencias digitales más relevantes, Sobrado y Ceinos
(2009) señalan: conocer los principales instrumentos y desarrollos tec-
nológicos diseñados específicamente para la orientación; aprovechar
las oportunidades que brindan los recursos TIC para mejorar los proce-
sos orientadores, manteniendo una actitud crítica ante ellos; promover
el uso de medios tecnológicos en los profesionales relacionados con la
acción orientadora; generar espacios de comunicación y trabajo cola-
borativo; y asesorar sobre recursos y materiales existentes.
Además, el uso de las herramientas digitales ha contribuido a cambiar
el tipo de orientación que se lleva a cabo: ya no es principalmente una
orientación individual, sino que también se ha convertido en una orien-
tación masiva que está disponible en la red para cualquier usuario, no
solamente para los destinatarios concretos para los que fue creada sino
para todo receptor potencial que quiera utilizarla, y no solo en el mo-
mento puntual en que se ofrece sino durante todo el tiempo que perma-
nezca disponible. Por tanto, llega –como el lema de los Juegos Olímpi-
cos– cada vez más alto, más rápido y fuerte. Y, por supuesto, mucho
más lejos, tanto a través de la información que se aloja en la red como
de las actividades síncronas y asíncronas que se realizan en línea.
Para acometer este planteamiento en la práctica es necesario detenerse
a revisar cuáles son las competencias digitales que requiere y debe po-
tenciar la orientación, tanto entre sus profesionales como entre los es-
tudiantes. Basándonos en el Marco Europeo para la Competencia Digi-
tal de los Educadores (figura 1), hemos optado por centrarnos en aque-
llas competencias que contribuyen en mayor medida al objetivo final,
que es mejorar el uso de las herramientas digitales y, con ello, la calidad
‒ ‒
de la orientación que desarrollan distintos agentes en las escuelas. Estas
competencias centrales son:
Competencias profesionales:
‒ Realizar una práctica reflexiva
Competencias pedagógicas:
‒ Seleccionar, modificar y crear recursos digitales
‒ ‒
FIGURA 1. SÍNTESIS DEL MARCO EUROPEO PARA LA COMPETENCIA DIGITAL DE
LOS EDUCADORES
Fuente: Redecker, C. (2017). European Framework for the Digital Competence of Educa-
tors: DigCompEdu (p.19). Unión Europea.
‒ ‒
que se ajusten a la singularidad del centro educativo en el que vamos a
ponerlas en marcha.
El CEIPS Santo Domingo es un centro público de Educación Infantil,
Primaria y Secundaria Obligatoria situado en el municipio de Algete
(Madrid). Se trata de un centro de línea 2 con aproximadamente 650
alumnos y 54 profesores repartidos entre las tres etapas y que se carac-
teriza por su reconocido proyecto de innovación tecnológica y pedagó-
gica, basado en la comunicación como eje vertebrador del proceso de
enseñanza-aprendizaje; así, propone que los estudiantes investiguen so-
bre los contenidos con el acompañamiento de los docentes y posterior-
mente comuniquen lo aprendido a través de creaciones transmedia en
distintos formatos y soportes. Por tanto, promueve una manera de tra-
bajar centrada en el alumno, con un profesorado generador de experien-
cias de aprendizaje y que utiliza las TIC para favorecer un aprendizaje
activo, cooperativo y creador por parte del estudiante. El centro ha sido
reconocido recientemente como Apple Distinguished School y ha en-
trado a formar parte de la red de Escuelas Change Maker9.
Evidentemente, una de las necesidades que se han detectado con mayor
claridad es la de integrar las TIC de manera relevante y efectiva en
la labor orientadora, acorde con el proyecto de centro. Su convenien-
cia, que ya se había ido revelando en los años anteriores, se convirtió
en una exigencia con el cambio a una situación de no presencialidad en
el curso 2019/20, maximizando las oportunidades de utilizar las TIC de
manera creativa y masiva en orientación.
En este contexto aparecen las fortalezas y debilidades del profeso-
rado del centro, especialmente de los tutores y tutoras. Al tratarse de
un centro de innovación tecnológica, se ponen recursos digitales y for-
mación a disposición del profesorado, de manera que se allana el ca-
mino para quienes acceden por primera vez a ellos y se facilita la labor
de quienes las utilizan habitualmente. Por tanto, nos movemos en un
contexto impregnado de TIC, pero no necesariamente de conocimiento
sobre cómo utilizarlas, y aún menos para la labor tutorial y orientadora,
9 Puede encontrarse más información sobre el proyecto en la web del centro: www.ceipsantodo-
mingo.com.
‒ ‒
que en ocasiones recae sobre docentes que necesitan asesoramiento pro-
fundo y materiales accesibles para realizar su tarea, especialmente en la
Educación Secundaria.
Por otro lado, se trata en muchos casos de profesionales que aceptan de
buen grado la formación, pero en “pequeñas dosis” y siempre que sea
de fácil disponibilidad. Con esta situación, se hacía preciso responder a
su necesidad de acceder a una orientación accesible, clara y sencilla y
de integrar actuaciones también en el plan de acción tutorial, además de
en la orientación académica y el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Por otro lado, para que las actividades de orientación sean verdadera-
mente efectivas es imprescindible cambiar el rol del alumnado en
ellas. Los estudiantes de Secundaria están acostumbrados a ser consu-
midores pasivos de los recursos de orientación académica y profesional
y a que sea el adulto (sea familiar, tutor u orientador) quien realice la
búsqueda de información, le proporcione los datos que necesita e, in-
cluso, tome decisiones por él. Por este motivo resulta necesario propi-
ciar un ambiente de aprendizaje suficientemente estimulante y provo-
cador como para ponerle en situación de activación cognitiva y emo-
cional y favorecer su implicación en el diseño de su trayectoria acadé-
mica y profesional.
Por supuesto, no todos los estudiantes realizan este proceso al mismo
ritmo ni con las mismas necesidades. La personalización de la educa-
ción se hace radicalmente presente en el proceso orientador, donde la
construcción del proyecto vital es absolutamente personal y en el que
la orientación debe dar cabida a las necesidades y singularidad de cada
uno. Esto es así especialmente en un centro pequeño, en el que el ase-
soramiento se realiza de manera individualizada y buscando atender los
ritmos, situaciones y necesidades de cada estudiante y sus familias.
Con ellas llega el siguiente punto de atención que hemos detectado, ya
que se trata de familias colaboradoras y exigentes, ávidas de informa-
ción y formación, pero con la necesidad de que ésta les llegue de ma-
nera rápida, clara y fácilmente “consumible”. Además, era necesario
dar respuesta a familias de Infantil, Primaria y Secundaria, con necesi-
dades muy dispares. Estas circunstancias han motivado la puesta en
‒ ‒
marcha de distintas actuaciones tanto dentro de la orientación acadé-
mica y profesional como del apoyo al proceso de enseñanza-aprendi-
zaje.
Dar respuesta a estas situaciones es el elemento que ha ido jalonando
cada punto del camino y que dio origen a los objetivos que se señalan
a continuación.
3. OBJETIVOS
‒ ‒
4. METODOLOGÍA
‒ ‒
colectivo destinatario, de forma que activen la atención sobre ellas y su
contenido. Para lograrlo se han introducido algunas estrategias de no-
vedad, sorpresa y misterio, junto con referencias a intereses personales
o sociales y dinámicas con diferentes retos y recompensas, tanto indi-
viduales como colectivos.
Junto a la motivación se ha buscado la sencillez, en dos vertientes: por
un lado, propiciando actividades que fueran lo más simples y útiles po-
sible; por otro, procurando que fueran reutilizables para otros niveles,
para otras tareas, compañeros o momentos, maximizando su rentabili-
dad y su alcance. También se han diseñado actividades con distintos
niveles de dificultad, unas abiertas y otras más estructuradas, para dar
respuesta a distintos ritmos de trabajo.
En la línea del Diseño Universal para el Aprendizaje, se han preferido
actuaciones que se adaptaran simultáneamente a las necesidades colec-
tivas e individuales, contribuyendo a fomentar la inclusión, pero tam-
bién que fueran lo suficientemente abiertas como para dar cabida a otros
colectivos y necesidades. De esta forma, se han generado propuestas
accesibles para el mayor número de personas y que, en la medida de lo
posible, se pudieran utilizar de manera autónoma por todas ellas. Para
lograrlo se han combinado tareas creativas y abiertas en las que cada
estudiante puede elegir el formato, el soporte o el tipo de producto que
quiere elaborar, con actividades que combinan diferentes tipos de pro-
ductos, de manera que todos pueden encontrar su área de habilidad y
aportar a la tarea.
Dentro de este planteamiento, hemos hecho especial hincapié en que
las actividades destinadas al alumnado no se enfocaran en la herra-
mienta digital que emplean, sino que estuvieran centradas en los proce-
sos cognitivos que queríamos poner en juego y en los elementos de re-
presentación, expresión e implicación que activa cada herramienta TIC,
partiendo de la rueda pedagógica iniciada por Hopkins y evolucionada
por Allan Carrington y de la rueda del DUA difundida por A. Márquez.
Entre ambas conjugan las herramientas digitales con los niveles de la
taxonomía de Bloom y con los principios del DUA, de forma que nos
proporcionan referencia sobre qué habilidades cognitivas están impli-
cadas, el nivel de complejidad cognitiva que estamos trabajando, qué
‒ ‒
acciones suponen, qué tipo de actividades están asociadas a ellas y qué
recursos digitales se pueden usar para lograrlo.
Por otro lado, antes de caracterizar cada propuesta debemos enfocar
nuestra mirada en el planteamiento que hemos asumido respecto al pro-
ceso de incorporación de las TIC. Basándonos en el modelo de progre-
sión del Marco Digital Europeo (2017), inspirado en la taxonomía re-
visada de Bloom, hemos tenido en cuenta 5 diferentes niveles progre-
sivos de desarrollo de las competencias digitales. A ellos hemos aña-
dido la competencia del trabajo en red como elemento transversal, ya
que la consideramos imprescindible para el desarrollo de dichas com-
petencias y por su valor, en unos casos, para favorecer el aprendizaje
inicial y el acercamiento a las herramientas tecnológicas y, en otros,
para avanzar, ya en niveles superiores, en la transformación y creación
de nuevas herramientas y conocimientos teóricos y prácticos a partir de
ellas. Estos niveles nos ayudan a guiar el diseño, aplicación y evalua-
ción de las herramientas y recursos que hemos utilizado o que hemos
creado, reflexionando sobre el punto del recorrido en el que nos encon-
tramos nosotros mismos respecto a cada propuesta y también sobre el
lugar en el que se sitúan los potenciales usuarios de las mismas. Con
ello hemos procurado introducir un momento de pausa y perspectiva en
el diseño y desarrollo de cada actuación.
Fuente: Elaboración propia a partir del modelo de progresión del Marco Europeo para la
Competencia Digital de los Educadores.
‒ ‒
4.3. ACTUACIONES DESARROLLADAS
10 https://www.symbaloo.com/mix/orientacionacademica9.
11 https://sites.google.com/view/orienta2enlared/home.
‒ ‒
“OrientaciónaunClic”12, donde se encuentran las presentaciones y los
plazos y convocatorias necesarios para ir avanzando en cada uno de los
niveles educativos, que las familias usan con bastante asiduidad. Pero
también hemos utilizado los muros digitales para el asesoramiento al
profesorado y a los tutores, creando un muro digital con información
sobre las distintas necesidades de apoyo educativo y los documentos
que el profesorado debe manejar y otro con los materiales y actividades
de tutoría. Por último, los hemos empleado como recursos colaborati-
vos entre orientadores para compartir herramientas y contenidos rela-
cionados con la orientación educativa.
El segundo bloque de actuaciones tiene que ver con la idea de generar
en los alumnos una mayor implicación y un rol más activo. Para eso
hemos utilizado recursos interactivos pautados, que además son mucho
más accesibles tanto en formato como en contenido y que permiten ir
de manera abierta o de manera pautada, guiando cada uno de los pasos.
Uno de los más versátiles es Thinglink, que permite colocar puntos in-
teractivos sobre el fondo de una imagen o incluso de un entorno de 360
grados en los que se van desplegando audios, vídeos, texto, enlaces y
documentos, de forma que se puede acceder de manera sencilla y rápida
a todas ellas. Así, por ejemplo, se ha utilizado esta herramienta para
hacer en tutoría un mapa relacionado con los derechos humanos, o para
colocar sobre un recorrido las actividades iniciales de orientación de 4º
de la ESO que han utilizado los tutores13.
También hemos generado un itinerario de aprendizaje a través de Ge-
nially con un laberinto de decisiones desde 3º ESO que además está
enlazado con las páginas de nuestra web y hemos reutilizado algunos
de los vídeos sobre toma de decisiones generados el curso anterior ha-
ciéndolos interactivos a través de EdPuzzle, introduciendo preguntas y
actividades de reflexión de manera que pudieran ir de una forma mucho
más pautada y guiada y enfocaran además a los alumnos a centrarse en
los contenidos que se les presentan.
12 https://padlet.com/orienta2enlared/r8xwnrdb1efke05z.
13 https://www.thinglink.com/scene/1312002720290308098.
‒ ‒
Otra de las herramientas digitales que han contribuido a este objetivo
han sido las infografías. Con ellas se cubren varias de las necesidades
detectadas, ya que nos permiten trabajar la organización tanto como
proporcionar acceso rápido y sencillo a cualquier recurso y generar do-
cumentos con información rápida y sintética sobre los enlaces más ha-
bituales necesarios para la tutoría, para la orientación o para el manejo
del profesorado. En esta línea de organización del trabajo hemos utili-
zado también herramientas digitales para organizar el trabajo del depar-
tamento, a través de mapas mentales, que han estructurado y ordenado
tareas e ideas, y del planificador Trello, que nos han permitido compar-
tir en tiempo real todos los retos, documentos y tareas.
Finalmente, uno de los grandes problemas que acechan a la orientación
educativa es, paradójicamente, la difusión de información. En los cen-
tros educativos y en los equipos de orientación se generan muchos con-
tenidos valiosos que, sin embargo, no llegan a ningún sitio y dejan a
veces de cumplir su función porque no se hacen llegar a sus destinata-
rios o no estos no saben utilizarlos. Por eso nos hemos empeñado espe-
cialmente en difundirlos a través de las redes sociales, concretamente a
través de Twitter y de un canal de Telegram con avisos y enlaces a re-
cursos o convocatorias interesantes. En este momento estamos ini-
ciando también programas de podcast de 5-15 minutos con diversas te-
máticas y destinatarios, por ejemplo para asesoramiento al profesorado
sobre cómo generar actividades de aprendizaje, para formación a fami-
lias acerca de cómo trabajar los prerrequisitos de la lectoescritura, etc.
Por supuesto, el formato vídeo sigue siendo uno de los formatos estrella
de la comunicación, tanto a través de webinar y de píldoras audiovisua-
les elaboradas desde el departamento como de vídeos elaborados por
estudiantes sobre profesiones o para informar al alumnado que cambia
de etapa, etc.
Una de las iniciativas en las que hemos participado y que consideramos
especialmente valiosa es la participación en un curso sobre recursos
TIC para la orientación educativa organizado por el CRIF Las Acacias,
que ha servido como fuente de información sobre las necesidades de
competencia digital de los orientadores y como fuente de recursos
‒ ‒
colaborativos y formación en red que sin duda contribuirá mejorar las
competencias y recursos de orientación.
5. RESULTADOS Y EVALUACIÓN
‒ ‒
‒ Y, finalmente, el último aspecto valorado, que para nosotros
ha sido esencial, ha sido el nivel de acogida por parte de los
diferentes sectores de la comunidad educativa, junto con el
uso que realizan los distintos sectores de la comunidad educa-
tiva de los recursos generados y la integración de algunos de
ellos en los documentos generales y las estructuras organiza-
tivas del centro, ya que con ello obtenemos información sobre
su potencial para consolidarse y tener mayor alcance.
‒ ‒
sesiones de valoración a través de mapas mentales colaborativos que
nos han permitido detectar tanto el nivel de satisfacción de los estudian-
tes, en este caso, como las propuestas de mejora y sugerencias que rea-
lizan.
La calidad de los recursos digitales generados se ha valorado a través
de los parámetros propuestos por las normas UNE (figura 4), que nos
ofrecen criterios claros y que nos han facilitado y guiado tanto en la
elección de la herramienta como en su diseño y ajuste, en un proceso
dinámico en el que los recursos se van ampliando y mejorando cíclica-
mente.
Fuente: INTEF.
‒ ‒
Por supuesto, han surgido dificultades a lo largo del camino que es
necesario reseñar y tener en cuenta para futuros ciclos de trabajo. El
obstáculo más destacable es que hemos tenido que enfrentar ha sido la
falta de tiempo, debida a la multitud de tareas que se llevan a cabo desde
la orientación educativa y a la situación dinámica en que se desarrolla.
Asimismo, en este proceso ha resultado complejo definir qué estrate-
gias son más adecuadas para cada colectivo y actividad de orientación,
por lo que sería conveniente retomar esa reflexión antes de iniciar ciclos
posteriores.
Otra de las propuestas de mejora que nos planteamos es definir exacta-
mente los contenidos relevantes para el canal, dada la complejidad de
un canal que acoge tanto a familias de Infantil y Primaria como de Edu-
cación Secundaria; por tanto, será necesario realizar un esfuerzo por
estructurarlo o bien multiplicar el canal ajustándolo a distintos colecti-
vos y necesidades.
También está en nuestro horizonte aumentar la realización de webinars
y podcast que hemos iniciado y el desarrollo de nuevas estrategias de
gamificación, así como centrarnos en mantener las propuestas que el
alumnado conoce y utiliza habitualmente y mejorar tanto la formación
digital de los profesionales del departamento como crear redes de orien-
tación con otros centros, con otros recursos y con otros profesionales
para poder mejorar nuestra labor.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
recursos elaborados han permitido que los contenidos llegaran más rá-
pido, más alto, más fuerte y más lejos, logrando uno de los objetivos
cruciales que nos planteábamos al inicio de nuestra intervención.
Además, se ha revitalizado la importancia de la orientación en las di-
versas etapas educativas y se ha facilitado la transición entre ellas. Con
ello se da continuidad en el centro a las actuaciones emprendidas en
niveles inferiores, facilitando la consolidación transversal de rutinas,
procedimientos y conocimientos adquiridos.
En un plano más profundo, uno de los avances que consideramos más
interesantes es la mejora de la formación y el conocimiento del entorno
profesional (fundamentalmente docentes, pero también familias) sobre
cuestiones relacionadas con la orientación, tanto en lo relativo a la ac-
ción tutorial y la orientación vocacional como en cuanto a contenidos y
procedimientos relacionados con el proceso de enseñanza-aprendizaje
y la atención a la diversidad. Además, muchos de estos conocimientos
se han llevado a la práctica en el aula, de forma que han mejorado tam-
bién la información y formación del alumnado. Incluso se han generado
iniciativas de formación y autoformación del profesorado. Esto muestra
la competencia real y potencial de los docentes para generar cambios y
acometer procesos de mejora, que una vez más viene a subrayar la im-
portancia del profesorado como elemento esencial del cambio y la ido-
neidad del asesoramiento profesional como un aspecto clave de la labor
orientadora.
En cuanto a la creación de contenidos y recursos digitales para la orien-
tación, es sin duda uno de los aspectos que han resultado más fructífe-
ros. Por un lado, ha aumentado exponencialmente el número de recur-
sos elaborados y también se han implantado nuevas formas de elaborar
contenidos sobre orientación educativa. Pero, además, se ha realizado
un intenso proceso de reflexión previo y durante la acción acerca de los
principios psicopedagógicos que avalan el uso de las distintas herra-
mientas, las habilidades y competencias que requieren para los usuarios
y las que trabajan en el alumnado y, finalmente, su utilidad para lograr
los objetivos propuestos. De esta manera, no solo ha crecido el uso de
herramientas digitales, sino que cada una de ellas ha contribuido
‒ ‒
explícitamente a la consecución de metas concretas y a la satisfacción
de las necesidades de los usuarios.
Todas estas reflexiones nos llevan a apuntar algunas áreas de mejora
que permitirían optimizar procesos de orientación facilitados por las
herramientas digitales. Por un lado, se hace imprescindible la formación
(inicial y permanente) de orientadores acerca de las TIC, así como la
formación del profesorado en general en ellas y sobre contenidos de
orientación educativa que mejoren el proceso de enseñanza-aprendi-
zaje. Para ello es necesario posibilitar espacios de asesoramiento, tra-
bajo en red y colaboración en los que se puedan llevar a cabo estas ta-
reas. Y estos espacios necesitan un tiempo que requiere del apoyo de-
cidido de las administraciones y los gestores en el aumento de recursos
personales en los servicios de orientación y la reducción de tareas me-
ramente administrativas que invaden la labor orientadora. Igualmente,
es necesario dar a conocer las herramientas disponibles, así como bus-
car vías adecuadas de encuentro, intercambio y difusión de los conoci-
mientos y recursos generados, maximizando el alcance del trabajo que
se realiza. Por último, se plantea como demanda ampliar el acervo de
estudios sobre herramientas tecnológicas y orientación, que sigue nece-
sitado de nuevos datos y resultados que orienten las políticas y las prác-
ticas.
En la experiencia descrita se ha mejorado la acción orientadora y, al
mismo tiempo, se ha contribuido a la información y formación de otros
miembros de la comunidad educativa, que se han implicado en mayor
medida en el proceso. Se han generado vías y momentos de comunica-
ción y de trabajo en red y se ha incrementado tanto la creación de re-
cursos y contenidos como su uso por parte de alumnado, docentes y
familias.
En definitiva, si bien algunos resultados son todavía iniciales y es ne-
cesario seguir mejorando y reactivando algunos procesos, la valoración
conjunta realizada conduce a pensar que las herramientas digitales han
supuesto un impulso favorecedor de las estrategias de orientación edu-
cativa y, de forma bidireccional, el planteamiento pedagógico que las
ha sustentado ha contribuido a su vez a realizar un mejor uso de dichas
‒ ‒
herramientas. Es nuestro pequeño granito de arena a la mejora real y la
innovación en un centro educativo.
7. REFERENCIAS
‒ ‒
Redecker, C. (2017). European Framework for the Digital Competence of
Educators: DigCompEdu. Centro Común de Investigación de la
Comisión Europea. doi:10.2760/159770
Sobrado, L. y Ceinos, C. (2009). Diseño de un mapa de competencias de las TIC
integradas en la actuación de los profesionales de la orientación. Bordón
61 (3), 137-149.
Zapatero, J.L., Villaescusa, M., del Mazo, A. & Gómez, M.J. (2019). De la
orientación educativa en red a la orientación para el cambio. Rev. Educar
y Orientar, 10, pp. 102-109. Disponible en https://copoe.org/revista-
copoe-educar-y-orientar/n10-abril-2019.
‒ ‒
CAPÍTULO 39
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
refiere a diversidad e inclusión. Aunque ya desde hace años, tanto a
nivel nacional como internacional, se pretende conseguir un sistema
educativo más inclusivo (UNESCO, 2015; ONU, 2017) en el día a día
se siguen observando medidas de atención a la diversidad basadas en la
segregación que no contribuyen a avanzar en este principio de inclu-
sión.
se ha perpetuado un patrón estructural de exclusión y segregación edu-
cativa discriminatorio, basado en la discapacidad, a través de un modelo
médico, que afecta desproporcionadamente y en especial a las personas
con discapacidad intelectual o psicosocial y a las personas con discapa-
cidad múltiple. (ONU, 2017, p. 16)
‒ ‒
de un proyecto eTwinning, “Learning Chess Together”, fue casi una
consecuencia natural.
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
3.1. APRENDIZAJE EXPERIENCIAL Y ABP (APRENDIZAJE BASADO EN
PROYECTOS)
Como se explica más arriba, uno de los principales objetivos del pro-
yecto fue, desde el principio, la implicación activa del alumnado en las
actividades. Para conseguirlo, el enfoque educativo del aprendizaje ex-
periencial (Dewey, 1938; Kolb, 2015) parecía muy adecuado.
El aprendizaje experiencial ofrece algo más sustancial y duradero.
Ofrece los fundamentos de un enfoque de enseñanza y aprendizaje
como un proceso para toda la vida que está sólidamente basado en las
tradiciones intelectuales de la psicología social, la filosofía, y la psico-
logía cognitiva. (Kolb, 2015, p. 3)
‒ ‒
Simplemente se refuerza la necesidad de que los docentes, como exper-
tos en didáctica vigilen que las experiencias educativas conducen a los
aprendizajes que se pretenden. Se aseguran de que las experiencias sean
un mero acto espontáneo y se conviertan en un verdadero acto de pen-
samiento. Además, Dewey criticaba la concepción de que el “método
de proyectos” podía ser utilizado como metodología única, en su opi-
nión era una manera más de enseñar entre muchas. En nuestro centro
compartimos especialmente esta última idea. Al mismo tiempo que se
atiende a la diversidad del alumnado, también se debe tener en cuenta
la diversidad del profesorado. No tiene sentido tratar de imponer una
metodología, esta tiene que encajar perfectamente con las ideas, la for-
mación, la experiencia y las características individuales de cada per-
sona. No todo el mundo tiene una gran habilidad musical, o de contar
historias; no todo el mundo tiene la misma capacidad de gestión de aula,
o de improvisación… Debemos reivindicar la necesidad de buenos pro-
fesionales que sean capaces de diseñar la mejor intervención educativa
tras un análisis de todas estas condiciones.
Para este proyecto se tomó el planteamiento de Dewey, al que se aña-
dieron elementos interesantes propios del ABP, como el producto final
en su papel de eje vertebrador del proyecto y el trabajo colaborativo. Es
decir, no se siguieron todos los pasos típicos del ABP.
En este caso, el producto final sería un libro interactivo, multilingüe, en
forma de Recurso educativo abierto (REA) que sirva a alumnado y pro-
fesorado de diferentes países a aprender lo más básico del ajedrez: el
movimiento de las piezas, y que sea fácilmente utilizable en diferentes
tipos de secuencias didácticas tanto presenciales como a distancia. La
UNESCO (2012) recomienda su uso explicitamente “Promover la for-
mulación de políticas específicas para la producción y el uso de recur-
sos educativos abiertos dentro de estrategias más amplias que impulsen
la educación”. Las tareas del alumnado serían ir creando materiales de
diversos tipos (audio, texto, vídeo, …) que posteriormente serían com-
pilados en el REA.
‒ ‒
FIGURA 1. Planteamiento del proyecto.
‒ ‒
se refiere, en este caso, simplemente a que todos colaboran en la elabo-
ración del producto final.
La integración del proyecto en la plataforma eTwinning, creada para
dar soporte a la colaboración entre centros educativos de diferentes paí-
ses de Europa, fue sencilla precisamente debido a estas decisiones me-
todológicas, ya que tanto la inclusión de un producto final como la co-
laboración activa del alumnado participante son aspectos clave de los
proyectos en la plataforma. Además, la participación en eTwinning
aportaba un motivo real para la utilización del inglés en las actividades,
ya que se colaboraba con otros centros europeos, con los que era nece-
sario utilizar el inglés para comunicarse.
A través de la plataforma, además de ir creando los materiales para el
producto final, sería posible organizar videoconferencias y partidas on-
line, de tal modo que el alumnado de los diferentes centros pudiese co-
nocer a las compañeras y compañeros con los que estaban trabajando.
Todo ello en un espacio donde todos los datos del alumnado se hallaban
convenientemente protegidos.
3.3. GAMIFICACIÓN
‒ ‒
Física afirman aumentar su disfrute y motivación hacia la práctica de-
portiva. (Arufe, 2019, p. 345)
‒ ‒
FIGURA 3. Narrativa de la gamificación: alumnado contra alienígenas.
‒ ‒
mediante el uso de una aplicación podían visualizar en tres dimensio-
nes. También se añadió un sistema de puntos, que resultaba muy útil
también para gestionar la conducta en clase, y coordinar otras activida-
des de aula que podían no encajar tan directamente en el proyecto. Se
establecían unos puntos por algunos logros que cada uno podía conse-
guir, y que se adaptaban a sus circunstancias (concentrarse durante un
período largo, escribir de manera ordenada, escuchar a los demás antes
de participar…). La combinación de los puntos conseguidos por las ta-
reas y por estas conductas les permitía ir rescatando cada una de las
piezas para avanzar al siguiente nivel. La gestión de los niveles y los
puntos se hacía directamente desde el aula virtual (Moodle).
‒ ‒
también tenían la posibilidad de pasarlo una y otra vez hasta que lo
entendiesen. De esta manera, el poco tiempo del que se disponía en el
aula, que como se explicaba más arriba, era sólo una hora semanal, po-
día ser dedicado casi en su totalidad al trabajo colaborativo, y también
a la comunicación con los otros centros: partidas y videoconferencias.
Las TIC han ofrecido durante los últimos años soluciones cada vez más
perfeccionadas para los desafíos de la enseñanza mixta (semipresen-
cial). En Galicia, la administración proporciona a los centros educativos
un sistema Moodle, de aula virtual, el cual es perfecto para servir como
núcleo coordinador de la parte presencial y no presencial tanto de las
clases y actividades como de la comunicación con las familias. Al tra-
tarse de software libre (Stallman, 2002), que no debe confundirse con
gratis, resulta especialmente sencillo conectar a través de ella todo tipo
de herramientas complementarias que den respuesta a todas las necesi-
dades que vayan surgiendo.
En primer lugar, el uso de las propias actividades incluidas en Moodle:
las entregas, los cuestionarios, las páginas… permiten que todo lo tra-
bajado en el aula esté disponible también en la plataforma para cual-
quier uso a distancia que se le quiera dar. Este mismo material también
resulta útil en el aula, a modo de repositorio, que facilita al profesorado
encontrar los recursos que va a utilizar. H5P es también una herra-
mienta muy interesante que permite la creación de actividades multi-
media interactivas, que en el caso de educación primaria permite que el
contenido digital sea mucho más atractivo para el alumnado. Mencio-
naré también el libro de calificaciones, especialmente configurable, y
que permite ofrecer feedback formativo de calidad al alumnado, que ha
demostrado ser la forma de evaluación que más favorece el aprendizaje
(Black et al., 2004, p. 10).
Evaluación para el aprendizae es cualquier evaluación para la cual la
primera prioridad en su diseño y práctica es servir al propósito de pro-
mover el aprendizaje del alumnado. Por lo tanto difiere de la evaluación
diseñada para servir principalmente los propósitos de fiscalización, cla-
sificación o certificación de competencia.
‒ ‒
seguro, ya que no es necesario que una empresa externa gestione los
datos, todo está alojado en los servidores de la administración, garanti-
zando así la protección de los datos.
En lo que se refiere a la parte más específica de la asignatura, el ajedrez,
se utilizó otra herramienta libre llamada Lichess, que permitió integrar
tableros de ajedrez interactivos en los que se podían practicar los con-
ceptos aprendidos y también jugar partidas. Todo ello también incrus-
tado en el centro de operaciones Moodle. Gracias a Lichess también se
pudo fácilmente crear el desafío final con los alienígenas.
También fue posible integrar la gestión de los elementos de gamifica-
ción, gracias a los módulos específicos Level Up y Stash, diseñados con
este propósito. De esta manera, sin necesidad de realizar un login en
ningún servicio externo, tanto alumnado y profesorado como familias,
podían en todo momento tener acceso a los puntos y niveles de la na-
rrativa, cuyos episodios iban apareciendo también en el aula virtual,
gracias a otra característica muy versátil ofrecida por las restricciones.
Cuando una alumna o alumno completaba un nivel, automáticamente
aparecía para ellos un nuevo capítulo de la historia.
El único elemento que no fue posible integrar en el aula virtual fue la
realidad aumentada utilizada en las recompensas. Afortunadamente,
esto no supuso ningún inconveniente, ya que la aplicación estaba insta-
lada en una tablet del centro que se llevaba al aula para que cualquiera
pudiese visualizar las piezas de ajedrez. De todos modos, este es un
aspecto a mejorar, pero por el momento está resultando difícil porque
la gran mayoría de las aplicaciones pertenecen a servicios privativos.
El desarrollo de software libre para la realidad aumentada aún no es el
suficiente para ofrecer soluciones prácticas para el aula.
Por último, las herramientas utilizadas como repositorio para los mate-
riales que iba creando el alumnado y para alojar el producto final, el
libro interactivo, fueron respectivamente, la plataforma de eTwinning
y eXeLearning. La primera de ellas, llamada Twinspace, ofrece un es-
pacio similar al aula virtual que tenemos en Galicia, pero donde se pue-
den registrar también el resto de los centros participantes en un pro-
yecto. Aunque su funcionamiento ahora mismo es un poco obsoleto
‒ ‒
permite alojar sin problemas los materiales creados. La segunda herra-
mienta mencionada, eXeLearning, era perfecta para el diseño del libro
interactivo (REA), permite su fácil instalación en todo tipo de sistemas
de aula virtual, y además es el formato nativo de Procomún, el reposi-
torio de REA gestionado por el Gobierno de España que se presentaba
como el alojamiento perfecto para un proyecto colaborativo.
Después de explorar otros como OER Commons, Ariadnne, etc, ofrecía
una mayor facilidad para subir el recurso, para su búsqueda posterior y
para incrustarlo donde se necesite.
‒ ‒
universal, se intenta permitir diferentes maneras de implicarse en las
tareas propuestas. Para intentar lograr esto, se planteaban diferentes po-
sibilidades para que el alumnado se autorregulase. Una de ellas, como
se ha mencionado era la gestión de un sistema de puntos por medio de
la gamificación. También se ofrecían recursos destinados a captar dife-
rentes tipos de interés: vídeos en los que campeones de ajedrez expli-
caban algún concepto, partidas con otros centros que podían motivar a
algunos a querer aprender un poco más, feedback frecuente de los ma-
teriales creados, con la idea de que algunos se sintiesen más satisfechos
del trabajo técnico que del contenido… En definitiva, se intentaba que
cada uno pudiese encontrar su propia manera para motivarse.
En este punto, la evaluación formativa, mencionada más arriba, permi-
tía que el profesor fuera obteniendo datos para lograr la flexibilidad re-
querida por el diseño universal. Para esto se necesitan evidencias de
aprendizaje. Estas se obtuvieron, por una parte, de los propios materia-
les creados por el alumnado, y también mediante un registro anecdótico
donde se recogía información relevante relacionada con los principios
del diseño universal ya mencionados: cuándo un alumno se ha mostrado
más motivado; cuándo una alumna ha expresado especial interés de
cara a una actividad; cuándo alguien ha tenido dificultades con algún
tipo concreto de información, etc. Y también se necesita un feedback
de calidad, donde se reconozca el trabajo bien hecho, y al mismo tiempo
se indique algún aspecto que se pueda mejorar. Es importante recordar
lo importante de que existan unas expectativas, pero que estas sean
reales, para lo cual, a partir del conocimiento de cada alumna y de cada
alumno, el docente les ayude, cuando sea necesario, a retocar las ideas
que van teniendo para la creación de los materiales, para que estén en
situación de hacer lucir sus puntos fuertes. Aquí es donde mejor se ve
el rol de guía y facilitador que el profesor debe tener en el aprendizaje
experiencial.
‒ ‒
4. RESULTADOS Y CONCLUSIONES
‒ ‒
manera natural un aspecto visual muy fuerte que facilita en gran medida
la comprensión.
‒ ‒
una programación didáctica, requisito para su aprobación por parte de
inspección educativa. No se ha profundizado en los detalles de esta pro-
gramación, simplemente se hará una mención a los estándares de apren-
dizaje recogidos en ella por resultar de interés en el análisis de los re-
sultados. De entre ellos, se seleccionaron los siguientes como impres-
cindibles para considerar una calificación positiva en la asignatura:
‒ Conoce el nombre de las piezas en varias lenguas y sabe colo-
carlas en el tablero.
‒ Reproduce con corrección algunos movimientos de las piezas
de ajedrez.
‒ Distingue el valor de las piezas de ajedrez.
‒ Aplica la captura de las piezas.
‒ Identifica jugadas erróneas.
‒ Realiza jaques.
‒ Respeta al rival antes, durante y después de las partidas.
‒ ‒
FIGURA 5. El alumnado del ceip nosa señora das dores juega una partida online con otro
centro.
‒ ‒
5. REFERENCIAS
Aciego, R., García, L., & Betancort, M. (2012). The benefits of chess for the
intellectual and social emotional enrichment in schoolchildren. The
Spanish Journal of Psichology, 2(15), 551-559.
Arufe, V. (2019). Fortnite EF un nuevo juego deportivo para el aula de Educación
Física. Sportis, 5(2), 323-350.
Black, P., Harrison, C., Lee, C., Marshall, B., & Wiliam, D. (2004). Working
Inside the Black Box: Assessment for Learning in the Classroom. Phi
delta kappan, 86(1), 8-21.
DECRETO 105/2014, do 4 de setembro, polo que se establece o currículo da
educación primaria na Comunidade Autónoma de Galicia, Consellería de
Cultura, Educación e Ordenación Universitaria (2014).
Dewey, J. (1938). Experience & Education. Kappa Delta Pi.
García Gaitero, F., García Gaitero, Ó., & Martín Martín, M. (2018). La
Gamificación como Recurso para la Mejora del Aprendizaje del Inglés
en Educación Primaria. Actas del II Congreso internacional de liderazgo
y mejora de la educación.
González Gándara, D. (2015). CLIL in Galicia: Repercussions on academic
performance. Latin American Journal of Content and Language
Integrated Learning, 1(8).
González Gándara, D. (2019). El ajedrez y las Competencias Clave en el sistema
educativo gallego. EDUCA 2019, Santiago de Compostela.
Graham, C. R. (2004). Blended Learning Systems: Definition, Current Trends,
and Future Directions. En Handbook of Blended learning: Global
Perspectives, Local Desings. Pfeiffer Publishing.
Johnson, D. W., & Johnson, R. T. (1999). Making Cooperative Learning Work.
Theory into Practice, 38(2), 67-73.
Kilpatrick, W. (1918). The Project Method. Teachers College Record, 19(4), 319-
335.
Kolb, D. A. (2015). Experiential Learning. Experience as the Source of Learning
and Development (Second). Pearson.
Krajcik, J. S., & Blumenfeld, P. C. (2006). Project-Based Learning. En The
Cambridge Handbook of the Learning Sciences (pp. 317-333).
Cambridge University Press.
Laal, M., & Laal, M. (2012). Collaborative learning: What is it? Procedia - Social
and Behavioral Sciences, 31, 491-495.
Marczewski, A. (2018). Even Ninja Monkeys Like to Play. Gamified UK.
‒ ‒
Meyer, A., Rose, D. H., & Gordon, D. T. (2014). Universal Design for Learning:
Theory and Practice. CAST Professional Publishing.
Navés, T., & Victori, M. (2010). Navés, T., & Victori, M. (2010). CLIL in
Catalonia: An overview of research studies. En Navés, T., & Victori, M.
(2010). CLIL in Catalonia: An overview of research studies. In CLIL in
Spain: Implementation, results and teacher training (pp. 30-54).
ONU. (2017). Informe de la Investigación relacionada con España bajo el artículo
6 del Protocolo Facultativo (CRPD/C/20/3). Organización de las
Naciones Unidas [ONU]. https://bit.ly/3sW16QC
Salgado López, I. (2021). Beneficios intelectuales del ajedrez en escolares y
adultos. https://bit.ly/3jJz33A
Stallman, R. (2002). Free Software, Free Society: Selected Essays of Richard M.
Stallman. Lulu.com.
Tourón, J., Santiago, R., & Díez, A. (2014). The Flipped Classroom. Cómo
Convertir la Escuela en un Espacio de Aprendizaje. Digital-text.
Trujillo, F. (2017). Aprendizaje basado en proyectos: Líneas de avance para una
innovación centenaria. Didáctica de la Lengua y de la Literatura, 78, 42-
48.
UNESCO. (2012). Declaración de París sobre los REA. https://bit.ly/38ilX6T
UNESCO. (2015). Declaración de Incheon y ODS 4 – Educación 2030 Marco de
Acción. UNESCO. https://bit.ly/38kukPk
‒ ‒
CAPÍTULO 40
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
indispensable para la formación de los estudiantes, y por lo tanto, uno
de los principios generales de la Educación Secundaria Obligatoria.
‒ ‒
Castilla La
CRAER. CRAER. CRAER.
Mancha
EOE.
Castilla EOE. DO.
Equipos de Atención
León EE. EE.
Temprana.
ELIC. ELIC. ELIC.
Cataluña Servicios Educativos Servicios Educativos Es- Servicios Educativos Espe-
Específicos. pecíficos. cíficos.
Equipos de atención
Ceuta y Me- temprana. DO.
Unidades de orientación.
lilla Unidades de orienta-
ción.
EOE.
Extrema- Equipos de Atención EOE. DO.
dura Temprana. EE. EE.
Equipos Específicos.
Departamentos de Departamentos de Orien- Departamentos de Orienta-
Orientación. tación. ción.
Galicia
Equipos de Orientación Equipos de Orientación Equipos de Orientación
Específicos. Específicos. Específicos.
Equipos de Orientación
Educativa. EOE. DO.
La Rioja
Equipos de Atención
Temprana.
Equipos de Orientación
Departamentos de Orienta-
Educativa.
EOE. ción.
Madrid Equipos de Atención
EE. Equipos de Orientación
Temprana.
Específicos.
Equipos Específicos.
Equipos de Orientación
Educativa.
EOE. DO.
Murcia Equipos de Atención
EE. EOE.
Temprana.
Equipos Específicos.
Unidad de Apoyo Edu- Unidad de Apoyo Educa-
cativo. tivo. DO.
Navarra Centro de Recursos de Centro de Recursos de Centro de Recursos de
Educación Educación Educación Especial.
Especial. Especial.
Berritzegunes zonales. Berritzegunes zonales. Berritzegunes zonales.
País Vasco
Berritzegune Central. Berritzegune Central. Berritzegune Central.
Servicios psicopedagó- Servicios psicopedagógi- Departamentos de Orienta-
Valencia gicos cos ción.
escolares de sector. escolares de sector.
Fuente: Castro (2012, p. 224-225)
‒ ‒
Dentro de los servicios internos, encontramos al Departamento de
Orientación, el cual posee una esencia basada en la interdisciplinarie-
dad, específicos en aquellas acciones relacionadas con el tratamiento de
manera personalizada de la orientación, tanto a nivel académico, como
profesionalizador, y que se ejecutan como sustento al quehacer docente
en el aula donde imparte sus funciones. Además, están compuestos por
distintos profesionales, relacionados tanto con la docencia, como la
atención a la diversidad, entre los que encontramos por ejemplo a los
psicopedagogos/as.
Las ocupaciones de los mismo, a su vez, se descomponen en distintas
temáticas, relacionadas con:
‒ Tratamiento de la diversidad
‒ El diagnóstico psicopedagógico.
‒ ‒
alternativas ante las distintas posibilidades académicas o pro-
fesionales.
1.4. LA TUTORÍA
‒ ‒
En este sentido, la orientación educativa no ha salido ilesa de todos es-
tos cambios, y ha tenido que reaccionar ante este gran reto.
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
Los documentos que incluímos eran de los años 2020 y 2021. Y utili-
zamos como descriptores “TIC” and “orientación educativa” siguiendo
para ello las directrices elaboradas por Cooper y Hedges (1994) y
Cooper (2009) en cuanto a: publicaciones examinadas por pares), y re-
ferencia bases de datos e índices de citas.
‒ ‒
aparecían duplicados, y se analizó tanto el abstract, como el título de
dicha selección. Todos ellos, se corresponden con:
1. Idioma de publicación en español, inglés o portugués entre los
años 2020 y 2021.
4. RESULTADOS
‒ ‒
En este sentido, la orientación con el alumnado se ha ejercido a través
de:
‒ Sesiones de formación colectivas online.
‒ Vídeos.
‒ Book Builder.
‒ EDpuzzle.
‒ Plataformas Moodle.
‒ Grupos de WhatsApp
‒ ‒
En cualquiera de ambos casos, para Del Mazo y Sanz (2020) los recur-
sos TIC más compartidos se corresponden con:
‒ Blog con Blogger o Wordpress: 26,42 %
‒ ‒
Sin embargo, conviene también centrarnos en los distintos ámbitos de
actuación de la orientación educativa, para examinar cómo la situación
pandémica que vivimos y el confinamiento han modificado su forma de
realizarse.
‒ En el ámbito de la atención a la diversidad:
‒ Valoraciones cualitativas: a través de videoconferencias, in-
formes online, cuestionarios online, y el empleo de material
digital elaborado y facilitado por la familia, de cara a ayudar
a la evaluación.
‒ Estrategias de intervención en cuanto a la diversidad: a través
de coordinación con el resto de las profesionales mediante vi-
deoconferencias, realización de actividades online, facilita-
ción de recursos digitales.
‒ En el ámbito de la orientación académica y profesional:
‒ Utilización de cuestionarios autoevaluables disponibles de
manera digitaly elaboración de cuestionarios online.
‒ Entrega de documentos propios de manera digital.
‒ ferias virtuales sobre ofertas de empleo, seminarios web y
conferencias online.
‒ Identificación de las estrategias y recursos de cara a la reali-
zación de la entrevista a través de análisis de distintos conte-
nidos digitales, y empleo de recursos digitales.
‒ Visionado de material audiovisual acerca de las distintas pro-
fesiones.
‒ En el ámbito de la acción tutorial:
‒ Potenciar la educación emocional online.
‒ Dar un espacio online a la hora de tutoría.
‒ Ofrecer a la comunidad educativa distintos recursos digitales
para la realización de estas tareas.
‒ Asesoramiento online a las familias
‒ En el ámbito del asesoramiento en el proceso de enseñanza y
aprendizaje:
‒ Ofrecer recursos versátiles.
‒ Facilitar la relación entre contenidos.
‒ Fomentar el protagonismo de los contenidos básicos.
‒ ‒
‒ Evitar la sobrecarga al alumnado.
‒ Utilizar medios de evaluación que se ajusten a la competencia
digital y habilidades del alumnado.
‒ Ofrecer un feedback online sobre los resultados.
‒ Ejecutar una evaluación con carácter procesual de informa-
ción desde distintos instrumentos digitales.
‒ Prestar vías de comunicación adaptadas al alumno/a: exáme-
nes escritos, exámenes orales… mediante videoconferencia.
5. DISCUSIÓN
6. CONCLUSIONES
En general, las TIC han supuesto una herramienta muy adecuada du-
rante la pandemia, especialmente de cara a distintas acciones relaciona-
das con la entrega de deberes, la difusión de contenidos académicos, el
mantenimiento de la relación con el alumnado, y, por supuesto, la do-
cencia virtual. Así como también, de cara al diagnóstico psicopedagó-
gico y los dictámenes de escolarización. Por lo que podemos concluir
‒ ‒
afirmando el hecho de que se ha producido una gran prevalencia en el
empleo de las TIC durante la pandemia en torno a la orientación.
7. REFERENCIAS
‒ ‒
CAPÍTULO 41
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
Por lo tanto, antes de proseguir, conviene aclarar el significado de cada
uno de estos términos.
Concepto de sexismo
Concepto de género
‒ ‒
Siendo por tanto un concepto dinámico el cual depende activamente de
la cultura y de los aprendizajes previos (Sánchez-Sandoval, Vizcaya,
Melero, y Verdugo, 2019).
En definitiva, el género hace alusión a las propiedades tanto de carácter
psicológico, como culturales que incorporamos en nuestra formación
de identidad, los cuales se asocian a los conceptos de masculinidad y
feminidad, es decir, a un significado social referente a comportamientos
o conductas sujetas a la clase social, la edad, la religión o la raza de la
propia persona (Cardona et al., 2015).
Es decir, un concepto que engloba a una serie de componentes como
son la identidad de género, los roles de género, la orientación sexual,
los aspectos propios de las personalidades, habilidades, intereses…
Concepto de identidad de género
Eso sí, todo este entramado terminológico, roles, estereotipos de gé-
nero, identidad de género…, tienen su origen en la primera infancia
(Moreno y Márquez, 2016; Bian, Leslie, y Cimpian, 2017) donde desde
nuestro punto de vista es más que necesaria una intervención de carácter
educativa en cuanto a la igualdad de géneros. Y continúan durante los
años escolares hasta la educación superior (Zúñiga y Cerros, 2013),
donde tampoco podemos dejar de lado una intervención educativa de
estas características.
Por lo que partimos de la hipótesis de que las distintas etapas de la edu-
cación formal son uno de los principales escenarios en los que se ve
inmersa la formación y consolidación tanto de los estereotipos como
los roles de género, y hasta incluso la propia identidad de género
(Acker, 2003; Araya, 2004; Salomone, 2007; Subirats, 1999).
En cuanto al propio proceso en sí de la construcción de la identidad de
género, encontramos dos grandes líneas de investigación. La primera
de ellas, centrada en el sujeto, y en los distintos procesos internos (como
por ejemplo las teorías cognitivas). Y la segunda, focalizada en este
caso en los factores tanto de carácter social, como situacional que ro-
dean al sujeto (como por ejemplo la teoría del aprendizaje social)
(García-Leiva, 2005).
‒ ‒
No hemos de olvidar que la cultura posee un papel clave en el proceso
de construcción de la identidad de género, aportando en cuanto a ello
diversas normas, expectativas, comportamientos e incluso actitudes en
función de cada sexo (García, Macedo, y Souza, 2016; Rocha-Sánchez
y Díaz-Loving, 2005). Lo cual nos conduce a hablar del término de
“identidad cultural de género” que supone el posicionamiento tanto pro-
pio como grupal en cuanto a la cultura, es decir, la pertenencia de un
sujeto a una categoría, la cual en este caso se corresponde con el sexo,
y la asunción de diversos patrones de comportamiento o rasgos propios
de ese sexo (Colás, 2007) que se corresponden con costumbres, creen-
cias, e incluso profesiones (Rodríguez, Inzunza, Madrigal, y Álvarez,
2013). Es decir, que, en esta construcción de la identidad de género, en
la que tantísima influencia tiene la cultura es precisamente donde se
originan las desigualdades entre hombres y mujeres.
A partir de estudios realizados con anterioridad, Egan y Perry (2001)
presentan una definición y caracterización de la identidad de género
desde cuatro posiciones teóricas diferentes pero influyentes entre sí que
se corresponden con la toma de conciencia a nivel individual de la per-
tenencia a una de estas categorías (hombre o mujer), la sensación de
compatibilidad con alguna de ellas, el sentirse presionado a estar con-
forme con la ideología de género establecida socialmente, y el desarro-
llo de distintas actitudes relacionadas con cada sexo.
Por otro lado, La entrada de las Tecnologías de la Información y la Co-
municación (TIC) y junto con ellas internet en nuestra sociedad ha sido
tan enérgica y activa que su influencia también se ha dejado ver en el
contexto educativo (Portugal y Burgos, 2014). Y por ende, en las for-
mas de enseñanza y aprendizaje, en los discentes y en los docentes, y
en el propio sistema educativo. Por ello, podemos hablar de una modi-
ficación sino también en las maneras de enseñar y de aprender, en los
alumnos y en los profesores, y en el propio sistema educativo actual
(González, 2012; Ibáñez, Jordano de la Torre, y Vermeulen, 2016). O
lo que es lo mismo, podemos asegurar que las TIC han supuesto una
modificación trascendente de las didácticas, las cuales no pueden ni de-
ben quedar al margen de los cambios que ocurren en la sociedad.
‒ ‒
Siguiendo con el hilo de las ideas expuestas con anterioridad, estas
transformaciones han dado lugar a un nuevo tipo de enseñanza, que
poco o nada tiene que ver con antiguas concepciones de la enseñanza
basadas en la relación jerarquizada profesor/tutor en el que el primero
es un mero transmisor de conocimientos y el segundo un mero receptor.
Sino que en la actualidad hablamos de una enseñanza con un gran ca-
rácter colaborativo entre ambos agentes, pero en la que principalmente
el rol protagonista recae en el alumnado, la cual posee como finalidad
máxima la adapatación de la misma a los intereses y motivaciones de
los nativos digitales (Prensky, 2005). Entendiendo por los mismos, den-
tro del terreno educativo, a aquellos estudiantes que han nacido en una
época totalmente incluida dentro del mundo tecnológico, y que como
consecuencia de ello, están inmersos en el uso, conocimiento y dominio
de las TIC.
Tan enorme ha sido la influencia de las TIC, tanto a nivel social como
educativo, que incluso su presencia y uso ha sido recogida a nivel le-
gislativo, concretamente a través de una de las ocho competencias que
establece la LOMCE (2013) denominándola: Competencia para el tra-
tamiento de la información y competencia digital.
Por lo tanto, este reconocimiento a nivel legislativo es un hecho muy
significativo que no debe reducirse a la integración física de las TIC en
la enseñanza y el aprendizaje, al igual que no debe quedar en la mera
digitalización de los contenidos (Martínez, 2015). Sino que este hecho
tan significativo debe de ir acompañado de procesos de multialfabeti-
zación, que se caractericen por tener un carácter global y múltiple, ga-
rantizando la transversalidad de las mismas (Del Moral y Rey, 2015)
mediante la promoción de una alfabetización de carácter informacional
en torno a cuatro grandes dimensiones de competencias, relacionadas
en este caso con la ITC Literacy (referida al manejo técnico de las TIC),
la Internet Literacy (relacionada con la conectividad, la navegación y la
seguridad a través de internet) y la Media Literacy (relacionada con la
capacidad de análisis) y la Information Literacy (que supone el punto
final de las competencias informaciones, y engloba tanto al acceso,
como el uso, la compresión y el análisis de la información) (Ferrari,
Puni, y Brečko, 2012).
‒ ‒
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
Se realizó una búsqueda entre los años 2015 y 2021. Empleando como
descriptores “TIC” and “igualdad de género” Además, se utilizaron al-
gunas de las indicaciones aportadas por Cooper y Hedges (1994) y
Cooper (2009) tales como: revistas revisadas por pares), y referencia
bases de datos e índices de citas.
Sobre estas ideas, las bases de datos empleadas fueron WOS, Scopus,
Dialnet, Psicodoc, Psycinfo y Eric. Aplicando como filtros para la bús-
queda estuviera a disposición el texto completo, y su idioma de publi-
cación fuese inglés, portugués o español.
‒ ‒
revisar tanto el título, como el resumen de cada uno de ellos. Final-
mente, el número de trabajos se redujo a 4, los cuales cumplían los si-
guientes criterios:
1. Son publicaciones que están escritas en español, inglés o portu-
gués comprendidas entre los años 2015 y 2021.
‒ ‒
4. RESULTADOS
‒ ‒
Etapa educativa: Universidad.
‒ ‒
Instrumento: Análisis documental.
Muestra: 18 publicaciones científicas.
‒ ‒
5. DISCUSIÓN
En primer lugar, hemos de destacar que uno de los resultados más des-
tacables de nuestra búsqueda se refiere a la escasa existencia de litera-
tura científica acerca de la educación en igualdad de género a través de
las tecnolo-gías, herramientas que contribuirían
a paliar problemas sociales como la brecha de género —tanto en el ám-
bito profesional como en el académico— en cuanto al uso de dispositi-
vos electrónicos (Calvo, 2019).
Tal y como se ha expuesto en los resultados, la gran mayoría de pro-
puestas vinculadas a la tecnología están basadas en la web social o web
2.0, por lo que se basan en favorecer la interacción y la colaboración
entre estudiantes para deconstruir estereotipos y debatir sobre temas re-
ferentes a la igualdad de género. De la misma manera, en todos los ni-
veles investigados existen propuestas para desarrollar ciertas compe-
tencias STEM o habilidades con TIC, ya sea de manera mixta, o única-
mente femenina.
Por ello, atendiendo a cada nivel educativo, en el que más intervencio-
nes se han encontrado se refiere al contexto universitario, quizá deve-
nido por la necesaria formación de los futuros profesores para/con estos
temas. Seguido del nivel de secundaria, lo cual puede estar directa-
mente relacionado con el hecho de ser una etapa
en la que se acentúa la violencia de género en las aulas, tal y como
indican Pastorino (2014) y González (2009), quien añade que el se-
xismo ha sido transmitido ya en niveles previos.
Por lo tanto, nos encontramos ante una situación que dista mucho de la
idealización de la etiqueta de «centro digital» (García-Aretio, 2019) que
las instituciones educativas tienen, ya que en la realidad diaria, los re-
cursos más utilizados para su tratamiento continúan siendo en su ma-
yoría «analógicos», tales como lecturas dirigidas, fichas, juegos de rol,
cuentos tradicionales, etc., siendo implementados de manera puntual
(López-Pascual, 2007; Solís, 2007).
‒ ‒
6. CONCLUSIONES
7. REFERENCIAS
‒ ‒
Díaz, S. M. (2016). El plan de igualdad en el contexto educativo. Un estudio
de caso. Etic@ net. Revista científica electrónica de Educación y Co-
municación en la Sociedad del Conocimiento, 16(1), 192-223.
Egan, S. K. y Perry, D. G. (2001). Gender identity: A multidimensional analy-
sis with implications for psychological adjustment. Developmental Psy-
chology, 37(4), 451-463.
Ferrari, A., Punie, Y., y Brečko, B.N. (2013). DIGCOMP: A framework for
developing and understanding digital competence in europe Publica-
tions Office.
Garaigordobil, M., y Aliri, J. (2013). Relaciones del sexismo con justificación
de violencia y con otras formas de prejuicio como la dominancia social
y el autoritarismo. Estudios de Psicología, 34(2), 127-139.
García-Aretio, L. (2019). Necesidad de una educación digital en un mundo di-
gital. RIED, 22(2), 9-22.
‒ ‒
Moreno, E., y Márquez, C. (2016). Determinantes Implicados en la construc-
ción de la violencia de género. El caso de las escuelas primarias en una
provincia de España. Archivos Analíticos de Políticas Educativas,
24(11), 1-28. doi:10.14507/epaa.24.2132.
‒ ‒
Sánchez-Sandoval, Y., Vizcaya, E., Melero, S., y Verdugo, L. (2019). Gender
stereotypes among Spanish university students about psychosocial risks
in childhood. IJERI: International Journal of Educational Research and
Innovation, 12, 217-232.
‒ ‒
CAPÍTULO 42
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
(Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, 2012). Autores como Iba-
rra, Rodríguez y Gómez (2012) o Mogessie (2015) reclaman también
mayor presencia de la evaluación entre iguales en la enseñanza univer-
sitaria.
Sin embargo, la implementación de la evaluación entre iguales no está
exenta de dificultades. Por ejemplo, el enorme número de datos numé-
ricos que se genera cuando esta evaluación es cuantitativa: si un docente
desea llevar a cabo una evaluación entre iguales en una clase de 25 es-
tudiantes utilizando una rúbrica de 5 ítems, en la que “todos evalúan a
todos”, se generan 3000 datos, lo cual puede desalentar a que dicho
docente acabe llevando a cabo la evaluación, debido al esfuerzo y
tiempo que puede representar analizar toda la información generada.
Para salvar esta dificultad, el docente puede organizar la evaluación
simplificando el número de trabajos que tienen que evaluar sus estu-
diantes, es decir, que cada estudiante evalúe un número determinado
(normalmente bajo) de trabajos de sus compañeros, como la experien-
cia que se describe en Custodio, Máquez y Sanmartí (2015). En este
tipo de casos, donde “todos evalúan a algunos”, se pierde representati-
vidad, ya que el trabajo de un estudiante no es evaluado por todos sus
compañeros y, además, si alguno de los estudiantes tiene un sesgo de
severidad a la hora de actuar como evaluador, los estudiantes evaluados
por él recibirán calificaciones significativamente más bajas que las que
hubieran recibido si hubiesen sido evaluados por otros compañeros sin
este sesgo. El sesgo de severidad o benevolencia ha sido señalado como
uno de los sesgos que pueden mostrar los estudiantes cuando evalúan a
sus compañeros (Myford y Wolfe, 2003).
Las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) y las herra-
mientas web 2.0 podrían, no obstante, ayudar a minimizar o superar
estas dos dificultades de las evaluaciones entre iguales. Además, el uso
de estas herramientas en las evaluaciones entre iguales podría estar aso-
ciada a mejoras en el aprendizaje respecto de las evaluaciones que se
realizan de manera tradicional, en papel, de acuerdo con el estudio de
Li et al. (2020).
‒ ‒
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
Los resultados recogidos en la evaluación cuantitativa fueron analiza-
dos estadísticamente por el docente con el software Minifac, que per-
mite detectar y cuantificar el sesgo de severidad o benevolencia de los
evaluadores. A continuación, se explica con más detalle cada una de las
tres herramientas digitales mencionadas.
‒ ‒
3.2. EVALUACIÓN ENTRE IGUALES CUANTITATIVA: MOARS
‒ ‒
‒ En la primera parte de la presentación, la noticia elegida ha
sido explicada y descrita con rigor y claridad.
‒ ‒
Al finalizar cada presentación, los evaluadores realizaban la evaluación
cualitativa y cuantitativa y el evaluado únicamente realizaba su auto-
evaluación en PollEverywhere (MOARS no permite la autoevalua-
ción), disponiendo todos de unos minutos para hacerlo. El docente tam-
bién fue evaluando las presentaciones de sus estudiantes, tanto cualita-
tiva como cuantitativamente, y para el evaluado, la valoración del pro-
fesor era indistinguible de las que recibía de sus compañeros.
Una vez concluidas todas las presentaciones orales, el docente activó la
posibilidad de que cada estudiante pudiera consultar, en MOARS, el
feedback cuantitativo recibido: lo que veían era una serie de gráficos de
barras (uno para cada una de las preguntas de la rúbrica, PR), en el que
se indicaba el número de compañeros (y porcentaje) que eligió cada una
de las siete opciones posibles de la escala Likert. Además, facilitó a
cada estudiante el enlace de su pregunta abierta de PollEverywhere en
el que podían consultar el feedback cualitativo recibido (figura 2).
‒ ‒
Desde la perspectiva del docente, los resultados de la evaluación reco-
gidos por MOARS están disponibles en dos formatos. En el primero de
ellos, “classroom results”, el docente ve los resultados de cada estu-
diante en forma de gráficos de barras (un histograma para cada pregunta
de la rúbrica, PR), con la posibilidad de exportarlos a una hoja de
cálculo, o puede ver los resultados en formato de rankings, con diferen-
tes opciones de configuración (figura 3). El segundo formato, “research
data”, exporta los datos de las evaluaciones para ser analizados estadís-
ticamente por Minifac o Facets.
‒ ‒
severidad o benevolencia de los compañeros que le evaluaron (Eckes,
2015). Para llevar a cabo este análisis estadístico utilizamos el pro-
grama gratuito Minifac (www.winsteps.com/minifac.htm), que es una
versión limitada de un software comercial llamado Facets. Ambos fun-
cionan únicamente bajo Windows y permiten realizar el análisis
MFRM, pero la versión gratuita solo permite procesar 2000 datos, aun-
que mantiene todas las funcionalidades de la versión comercial. Preci-
samente, cuando MOARS exporta los datos con la opción “Research
data” lo hace generando un archivo directamente compatible con cual-
quiera de estos dos programas, lo cual simplifica dicho análisis.
Al ejecutar Minifac el sistema genera un archivo con los resultados del
análisis estadístico. Entre ellos, el mapa de las medidas de las facetas
analizadas o mapa de Wright, que es una tabla generada por Minifac en
la que se ofrece un resumen visual de los resultados del análisis MFRM.
Debido a la limitación anteriormente comentada de Minifac solo se pu-
dieron analizar simultáneamente 5 de las 8 preguntas de la rúbrica de
evaluación, que es a lo que corresponde el mapa de Wright de uno de
los dos grupos-clase que se muestra en la figura 4.
La primera columna de esta tabla (“Measr”) muestra la escala común
en la que se han medido todas las facetas: el lógito, o logaritmo del
cociente entre la probabilidad de que un estudiante reciba una puntua-
ción en una pregunta (por ejemplo, 4) y la probabilidad de que reciba
la puntuación inmediatamente inferior (3). Esta escala puede oscilar en-
tre 0 (fijado en el nivel medio de las facetas) y ±∞.
La segunda columna (“Students”) distribuye a los estudiantes según la
primera faceta analizada: su rendimiento global en la actividad, en este
caso, es la calificación global de la presentación oral. Valores superio-
res o inferiores a 0 lógitos indican mayor o menor rendimiento de los
estudiantes. Pero además de en lógitos, esta faceta (y solo esta) también
está expresada en la escala original de la rúbrica, es decir, la escala Li-
kert del 1 al 7: es la información que se muestra en la quinta columna
(“Scale”). A la vista de los datos, el estudiante que ha mostrado mayor
rendimiento en la actividad ha sido el número 19, con 2,52 lógitos (y
6,48 en la escala original), seguido por un segundo grupo formado por
los estudiantes 23 y 28; un tercer grupo, formado por 9 estudiantes con
‒ ‒
lógitos entre 1,67 y 1,10 y, por último, un cuarto grupo con los estu-
diantes con menor rendimiento (lógitos inferiores a 1), cerrado por el
estudiante número 32, con solo 0,28 lógitos (4,98 en la escala de Likert
original).
La tercera columna (“Raters”) ordena a los estudiantes según la se-
gunda faceta analizada: su severidad como evaluadores. Valores posi-
tivos indican mayor severidad, valores negativos indican mayor gene-
rosidad o benevolencia y este sesgo es significativo, en uno u otro sen-
tido, cuando su valor absoluto es igual o superior a 1. Se observa una
cierta dispersión entre los valores extremos: el más severo fue el estu-
diante número 23, con 1,06 lógitos y el más generoso fue, con diferen-
cia, el número 29, con -1,50 lógitos. Vemos también que el estudiante
con peor rendimiento (32) fue el segundo más severo a la hora de eva-
luar a sus compañeros, algo que concuerda con estudios anteriores (Ji-
ménez y Llitjós, 2006), en los que comprobamos que estudiantes que
recibían calificaciones bajas de sus compañeros solían ser, a su vez,
muy estrictos calificando el trabajo de los demás. Por último, cabe aña-
dir que, como el profesor también participó en la evaluación de las pre-
sentaciones de los estudiantes usando MOARS, puede verse su posición
en esta columna (“PROFE”, con 0,92 lógitos) y, por tanto, comprobar
qué estudiantes no mostraron un grado de severidad significativamente
diferente a la de él (son aquellos dentro del rectángulo de esta columna).
La cuarta columna (“Items”) ordena la tercera faceta analizada, esto es,
las preguntas de la rúbrica (PR), en función de su dificultad: cuanto
mayor es el valor en lógitos, más difícil resultó ser ese ítem, es decir,
más difícil fue que los evaluados tuvieran una calificación alta en dicho
ítem. La afirmación PR5 (“la exposición oral ha sido clara y concisa,
con un tono de voz alto y relajado, postura corporal correcta y sin dete-
nerse a leer las diapositivas”) fue el ítem de evaluación considerado
más difícil, al ser el que recibió la puntuación más alta (0,50 lógitos) y
la afirmación PR4 (“la presentación es coherente y está bien organi-
zada. Sigue un orden lógico”) fue el ítem considerado más fácil (-0,51
lógitos). Es en esta faceta donde encontramos la menor dispersión entre
los valores mayor y menor.
‒ ‒
FIGURA 4. Mapa de Wright de uno de los dos grupos-clase analizados. Los estudiantes
están identificados con un código numérico.
‒ ‒
Para la obtención de la calificación final de la actividad de un estudiante
determinado (que le serviría como bonificación en la puntuación del
primer examen de la asignatura), se tuvo en cuenta la calificación otor-
gada por el docente y por sus compañeros de su presentación oral. Con
el objetivo de que se tomaran en serio su papel de evaluadores y para
evitar que dieran calificaciones arbitrarias, sin sentido o injustificadas,
se les advirtió que la calificación final de la actividad podría sufrir una
penalización si mostraban sesgos significativos de benevolencia o se-
veridad, de si su posición en la columna “Raters” en el mapa de Wright
quedaba muy alejada de la del docente o de si de la inspección de sus
datos como evaluadores se observaban calificaciones al azar, aleatorias
o incoherentes. El alumnado conocía estos criterios de evaluación, así
como la rúbrica de la evaluación entre iguales cuantitativa, con anterio-
ridad al inicio de las presentaciones.
4. RESULTADOS
‒ ‒
tuviera en cuenta, además de la del profesor, la valoración de sus com-
pañeros: un 64,7% lo consideró como positivo o muy positivo, pero un
35,3% lo valoró como “neutro”. Si bien todos los estudiantes conside-
raron que hubo tiempo suficiente para realizar la presentación oral, un
38,2% manifestó que el tiempo disponible para realizar las evaluacio-
nes (entre presentación y presentación) fue insuficiente.
En cuanto a la utilidad de las evaluaciones recibidas de cara a realizar
mejores presentaciones en el futuro, un 58,9% se mostró de acuerdo o
muy de acuerdo en que la evaluación cuantitativa recibida les sería útil
en futuras presentaciones, mientras que el porcentaje para esa misma
cuestión referida a la evaluación cualitativa fue del 76,5%. De hecho,
cuando se les preguntó cuál de las dos evaluaciones les resultaría más
útil de cara al futuro, el 17,6% de los estudiantes consideró que el
feedback cuantitativo (MOARS) les sería más útil para mejorar en fu-
turas presentaciones, mientras que el 47,1% opinó que el feedback cua-
litativo (PollEverywhere) es el que les sería más útil. El resto (35,3%)
consideró que los dos tipos de feedback son igualmente útiles de cara a
mejorar en futuras presentaciones. Sobre la evaluación cualitativa cabe
destacar que un 70,6% del alumnado consideró que los comentarios que
habían recibido eran “realistas” y en cuanto a la rúbrica, el 88,2% del
alumnado manifestó que había entendido qué se tenía que evaluar en
todas las preguntas de esta.
Por lo que concierne a la segunda parte, algunos de los comentarios
positivos recibidos con mayor frecuencia hacían referencia a la utilidad
del feedback recibido (“te ayudan a mejorar algunos aspectos para si-
guientes presentaciones”, “me pareció muy bien que los compañeros
pudieran opinar y aportar críticas constructivas sobre las presentaciones
de los otros”), incluso señalando que al no conocerse entre ellos, el
feedback recibido era más objetivo (“saber qué opinan mis compañeros
de mi manera de hacer una presentación objetivamente, ya que no me
conocían de nada”). También se registraron comentarios positivos en
relación con la ejecución de la actividad: que era dinámica (“es diná-
mica y moderna”), innovadora (“me gusta que se utilice el móvil para
evaluar y no hacerlo a mano”), o que, al tener que evaluar a otros com-
pañeros, les hacía prestar más atención (“al evaluar a los compañeros
‒ ‒
prestamos más atención a lo que se está explicando y como se explica
y se aprende más”). También hubo quien destacó como aspecto positivo
la posibilidad de subir nota con la actividad (“ayuda a subir nota, lo que
está muy bien para los que quieren subirla”) y la posibilidad de elegir
libremente el tema de la exposición (“libertad para poder elegir el
tema”).
En cuanto a los aspectos negativos, algunos comentarios lamentaban
que la exposición fuera individual (“propondría hacerlo por grupos”,
“la presentación, mejor en parejas”), que los evaluadores pudieran no
ser siempre objetivos o no estuvieran atentos (“algunas personas no han
sido objetivas a la hora de evaluar a los compañeros”, “a veces los com-
pañeros evalúan sin haber estado atentos a la presentación”), que se
tenga en cuenta la evaluación de los compañeros en la nota final (“no
dar tanta relevancia a la valoración de los compañeros a la hora de ca-
lificar definitivamente la nota de la presentación”), o que la escala de
valoración era demasiado amplia (“el rango de valoración era bastante
amplio”) o que había poco tiempo para evaluar, (“tener algo más de
tiempo para responder a las encuestas entre presentación y presenta-
ción”). Este último aspecto ya había sido identificado en la primera
parte de la encuesta.
Finalmente, se les preguntó “¿Cuál es tu valoración global hacia esta
actividad?” y un 94,1% del alumnado contestó con “positiva” o “muy
positiva”.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
cuantitativa. Destaca también el sentimiento de algunos estudiantes de
que la evaluación pueda no ser subjetiva y, por tanto, consideran posi-
tivo que la actividad se realizara al inicio de curso, cuando aún no se
conocían entre ellos, ya que eso evita sesgos de amistad. Valoramos
positivamente que los estudiantes hayan considerado innovadora esta
actividad, así como que consideren que han aprendido más sobre el
tema en cuestión y hayan estado más atentos a las presentaciones de sus
compañeros. A la vista de los comentarios recogidos en la encuesta, y
de cara a futuras experiencias similares, es importante que los estudian-
tes dispongan de suficiente tiempo para realizar la evaluación de sus
compañeros y tal vez sea adecuado reducir la amplitud de la escala de
valoración.
Distintos autores han señalado la necesidad de que el alumnado asuma
mayor implicación en el proceso de evaluación (Sanmartí y Jorba,
1995) y, cada vez de una manera más explícita, los currículos educati-
vos incluyen la evaluación entre iguales. En este sentido, MOARS y
PollEverywhere han demostrado ser dos recursos digitales que facilitan
la evaluación entre iguales, puesto que han permitido procesar estas
evaluaciones de una manera rápida, lo cual ayuda a reducir la carga de
trabajo del docente y la sensación de incomodidad que puede mostrar
parte del alumnado a la hora de tener que participar en ellas, ya que
incluso algún estudiante menciona expresamente como un aspecto po-
sitivo el poder realizar las evaluaciones con el móvil, en lugar de con
papel.
Por último, el análisis estadístico realizado con Minifac, aplicando el
modelo MFRM, ha permitido poner de relieve qué estudiantes mostra-
ron un sesgo de severidad o, especialmente, de benevolencia, incluso
pudiéndolo llegar a cuantificar. Además del sesgo propiamente debido
al estudiante, es posible que la dispersión en esta faceta pueda deberse
en parte a la inexperiencia del alumnado en este tipo de actividades o a
la ambigüedad en la redacción de las preguntas de la rúbrica. En futuras
experiencias de este tipo se tendrá en cuenta la elaboración conjunta de
la rúbrica de evaluación con el alumnado o la realización de algún ejer-
cicio previo de entrenamiento, como sugieren Dochy et al. (1999).
‒ ‒
6. CONCLUSIONES
7. REFERENCIAS
‒ ‒
Jiménez, G. y Llitjós, A (2006). Deducción de calificaciones individuales en
actividades cooperativas: una oportunidad para la coevaluación y la
autoevaluación en enseñanza de las ciencias. Revista Eureka sobre
enseñanza y divulgación de las Ciencias, 3 (2), 172-187.
Li, H., Xiong, Y., Hunter, C., Guo, X. y Tywoniw, R. (2020). Does peer
assessment promote student learning? A meta-analysis. Assessment &
Evaluation in Higher Education, 45 (1), 193-211.
Lui, A. y Andrade, H. Student Peer Assessment (2014). En R. Gunstone (Ed.),
Encyclopedia of Science Education. Springer.
Myford, C.M. y Wolfe, E. W. (2003). Detecting and Measuring Rater Effects
Using Many-Facet Rasch Mesurement: Part I. Journal of Applied
Measurement, 4 (4), 386–422.
Ministerio de Educación, Cultura y Deporte (2012). La enseñanza de las ciencias
en Europa: políticas nacionales, prácticas e investigación. Secretaría
General Técnica. DOI: https://dx.doi.org/10.2797/90921
Mogessie, M. (2015). Peer-assessment in higher education – twenty-first century
practices, challenges and the way forward. Assessment & Evaluation in
Higher Education, 42 (2), 226-251.
Nicol, D., Thomson, A. y Breslin, C. (2014). Rethinking feedback practices in
higher education; A peer review perspective. Assessment & Evaluation
in Higher Education, 39 (1), 102-122.
Orsmond, P., Merry, S. y Reiling, K. (1996). The importance of marking criteria
in the use of peer assessment. Assessment & Evaluation in Higher
Education, 21 (3), 239-250.
Panadero, E. y Alqassab, M. (2019). An empirical review of anonymity effects in
peer assessment, peer feedback, peer review, peer evaluation and peer
grading. Assessment & Evaluation in Higher Education, 44 (8), 1253-
1278.
Reese-Durham, N. (2005). Peer evaluation as an active learning technique.
Journal of Instructional Psychology, 32 (4), 338-343.
Rodríguez, G., Ibarra, M.S. y García, E. (2013). Autoevaluación, evaluación entre
iguales y coevaluación: conceptualización y práctica en las universidades
españolas. Revista de Investigación en Educación, 11 (2), 198-210.
Sanmartí, N. y Jorba, J. (1995). Autorregulación de los procesos de aprendizaje y
construcción de conocimientos. Alambique, 4, 59-77.
Wiliam, D. y Leahy, S. (2015). Embedding formative assessment. Learning
Sciences International.
‒ ‒
CAPÍTULO 43
CHIARA ULIANA
Universidad de Granada
1. INTRODUCTION
‒ ‒
motivation has been studied by many (Benson, 2007; Deci et al., 1991;
Dickinson, 1995; Girelli et al., 2018; Holec, 1981; Spratt et al., 2002)
and thus relating the lack of proper learning techniques to efficient lan-
guage acquisition results and the subsequent motivation. The results
observed here have been applied to Modern Chinese pedagogy which
will be briefly presented together with the results of classroom obser-
vation.
Each person learns has its own way of learning and studying which is
partially based on its cognitive style. The cognitive style is “an individ-
ual’s typical or habitual mode of problem solving, thinking, perceiving
and remembering” (Allport, 1937 as cited in Cassidy, 2004, p.420).
This is a fundamental part of the individuals’ learning styles, which is:
[…]Individual differences in learning based on the learner's preference
for employing different phases of the learning cycle. Because of our
hereditary equipment, our particular life experiences, and the demands
of our present environment, we develop a preferred way of choosing
among the four learning modes. (Kolb & Kolb, 2005, p. 195)
‒ ‒
Recommendation of 22 May 2018 on Key Competences for Lifelong
Learning Text with EEA Relevance., n.d.) and on a national level (Or-
den ECD/65/2015, de 21 de Enero, Por La Que Se Describen Las Rel-
aciones Entre Las Competencias, Los Contenidos y Los Criterios de
Evaluación de La Educación Primaria, La Educación Secundaria Ob-
ligatoria y El Bachillerato, 2015). Terms and concepts of “learning to
learn” (aprender a aprender) and “attention to diversity” (atención a la
diversidad) are very common in Spain, both in legislation and daily
teachers’ practice, hence considered fundamental in foreign language
education at all levels. On the other hand, face-to-face classes, online
classes and hybrid classes follow different rules and take different
steps; as many teachers realized during the last two years, it takes quite
a lot of more effort and time (Gao, 2020), especially if there is the need
of students’ active participation as during instrumental language
courses. Therefore, it is sometimes challenging to provide activities that
match all the learning styles and preferences present among the stu-
dents.
‒ ‒
some of the secondary aims of this study. Being aware of the cognitive
styles and learning strategies of students, as well as other spoken lan-
guages, the students’ native language and language conceptions with
the aim to create and provide more effective learning opportunities and
activities might be very beneficial for instructors of Modern Chinese as
a second language.
Chinese learning and teaching has become quite popular in Spain and
other countries during the last ten to twenty years. There has been a
surge on pedagogical materials creation and Chinese as foreign lan-
guage teachers’ courses and materials, even though few of these teach-
ing and learning materials take into consideration students’ actual needs
and issues. This field can be considered on the rise and that needs to be
studied with a broader and deeper view to take a step forward. There
are a few studies that observe Spanish speaking students common mis-
takes (Liu, 2019), learning materials (Zhao, 2016), learning strategies
(Reinaltt Higa & Miranda Mori, 2019), and learning concepts (Sánchez,
2020). While the literature for Modern Chinese language learning strat-
egies in other languages is much bigger, especially in English14; the re-
search on this topic in the Spanish speaking countries has not yet drawn
much attention (Reinaltt Higa & Miranda Mori, 2019).
‒ ‒
sake of it, because we find pleasure in doing it and in the results we get
out of it; while extrinsic or external motivation is instrumental, we do
something because we receive something in exchange, a certificate for
example (Deci & Ryan, 1980). Both of this kind of motivation are con-
sidered self-determined in contrast to “automated behaviors that require
less involvement of the higher cerebral functions” (Deci & Ryan, 1980,
p. 34). Self-determined behaviors are consciously chosen “based on
one's expectations about outcomes” (Deci & Ryan, 1980, p. 35). For
some, academic results and performance are also to be related to stu-
dents dropping out of university (Bean, 1985) and they can be seen as
a part of the motivation to keep going as forms of self-motivation are
associated with better academic outcomes at all levels of education (Gi-
relli et al., 2018). So it is viable to say that the better the results the
better the motivation and results, as explained by Girelli et al. (2018),
can be both credits or grades. Learners’ loss or lack of motivation “con-
cern various negative influences that cancel out existing motivation”
(Dörnyei & Ushioda, 2011, p. 138) and they have been serious issues
during the last two years for external reasons mainly driven by COVID-
19 pandemic (Zaccoletti et al., 2020), but not exclusively, and the shift
to online and hybrid learning. Motivation is not a simple concept; many
consider it multidimensional and it includes various aspects of one’s
life, not only goals or academic performance (Murphy & Alexander,
2000), but it is not to be discarded that one of the factors causing de-
motivation is the feeling of being powerless when facing an obstacle,
not having appropriate tools, knowing effective strategies to deal with
an issue or where to look for them. In this case, the issue is language
learning and specifically Modern Chinese without techniques that fit
the students’ needs and the language specificities. On the other hand,
some mention internalization as process that, as described by Schafer
(1968), transforms “regulation by external contingencies into regula-
tion by internal processes” (Deci et al., 1991, p. 328). This is probably
the last step many educators wish students to reach. It’s clear to all in-
dividuals involved in the education process that not all learners have a
strong internal motivation or maybe they have it just related to one sub-
ject (for math but not for history), but with the right steps teachers can
ease this process.
‒ ‒
Holec defines autonomy with the following words: “the ability to take
charge of one’s own learning’ where ‘to take charge of one’s learning
is to have and to hold the responsibility for all the decisions concerning
all aspects of this learning” (Holec, 1981, p. 3). In some cases autonomy
is said to be the result of motivation and in some other motivation fol-
lows autonomy (Spratt et al., 2002). Studies like Soenens & Vansteen-
kiste (2005) and Grolnick et al. (1991) have associated individual mo-
tivation and academic performance (Girelli et al., 2018). Autonomy and
motivation are strictly related to each other and the increase in one of
them might influence the positive growth of the other. Learners’ auton-
omy implies the possibility of students taking part in their own learning
process, which is one of the final aims of the application of this study.
On account of this, we have created a list of autonomous learning strat-
egies and activities to give to students with the aim to help them study
Modern Chinese more independently, both from the instructor and the
classroom materials.
‒ ‒
2. RESEARCH AIMS
3. METHOD
3.1 PARTICIPANTS
The students that took part in this research are the students that have
been studying Modern Chinese during 1, 2 and 3 years. Beginners were
not asked to take part in this questionnaire as long as they have not had
the time and expertise to develop any kind of independent learning tech-
nique and this would spoil the results. The majority of the test takers
are Spanish native speakers (89.7%) while a small amount (11.3%) of
students are natives of other languages (Chinese, English, Dutch, Hun-
garian, Italian/Russian bilingual, Spanish/English bilingual and Ital-
ian). The majority of students have been studying Chinese during 2
years (35.3%), a 26.5% have been studying during more than 3 years,
the same amount for 1 year and the smallest group (11.8%) studied for
less than 3 years.
‒ ‒
3.2 INSTRUMENT AND PROCEDURE
The data was recollected through the questionnaire, which was influ-
enced by studies like “Australian Students' Perceptions of the Chal-
lenges and Strategies for Learning Chinese Characters in Emergency
Online Teaching” (Gao, 2020), which was specific for online character
learning and training strategies, while the questionnaire in the present
study had more general aims. The questionnaire was created and ad-
ministered online with Google Forms. It has been adapted to match the
local university requirements and research interests. Questions were al-
most all open and students could describe what they do when studying
and attending to classes. The answers have been recollected and pro-
cessed to get to the results presented here.
When learning Modern Chinese, what’s harder for you? (You can
choose more than one option)
Item Answers
Tones 52.9%
‒ ‒
Pronounce sounds or letters like ZH/CH/SH 44.1%
Grammar 26.5%
Recognize and differentiate the characters that together with other 13.2%
characters form words of more than one character
‒ ‒
formal writing skills have never been trained they might find these as-
pects challenging as it is something new and never trained before.
Observing the results of Table 1, we can infer that students need more
exposure to listening and speaking materials and activities, more vo-
cabulary to express their thoughts and closer look at Chinese syntax.
All of these needs were taken into consideration producing correspond-
ing changes to pedagogy resulting in students’ improved language flu-
idity, increased independent production of sentences and thoughts, big-
ger variety of views expressed that differ from those offered by the
teaching materials, active participation to class activities and higher
quantity of questions asked to the teacher, which can be considered a
higher curiosity towards the subject matter studied.
What do you do during classes when new characters or words are ex-
plained?
Item Answers
Observe 1%
Use an app. 1%
‒ ‒
for note taking and searching for meaning. Even though instructors de-
scribe the loss of note taking habit among their students who frequently
ask for professors’ notes or slides, almost all of the students that took
part in this research claim to take notes during classes. Taking notes by
hand has shown to be very effective for conceptualization and memory
(Chikamatsu, 2003; Longcamp et al., 2008; Mueller & Oppenheimer,
2014; Shibata & Omura, 2018; Smoker et al., 2009; Yamamoto, 2008)
and writing Chinese characters by hand seem to be positive for learning
too, as well as being the most common techniques used for characters
memorization. It can be concluded that students are mainly dependent
on the instructors’ guidance during classes and thus have not developed
specially designed techniques for this situation or are not yet capable of
seize their own needs. The results here listed were considered as a lack
of an active role of the learners who feels like a passive receiver of
knowledge. To improve this aspect, according to contemporary peda-
gogy, students were motivated to take an active role in their own learn-
ing, applying the following strategies: active and cooperative learning,
problem solving, case observation, deduction, student to student tutor-
ing, learning techniques sharing, guided brainstorming, Group Reading
Activities (GRA), role playing, case study, etc. Students were also en-
couraged to ask many questions and were required to create content
summaries to share with the class.
Item Answers
‒ ‒
Associate them to what I already know 4%
Analyze them 2%
Nothing 2%
Listen to them 1%
‒ ‒
memory game applied to study, flashcards, etc. Some examples can be
found in the list in the conclusions.
Item Answers
One student wrote: “I have read somewhere that there are ways to iden-
tify them more quickly by radicals, but I don't know how to do it”. Co-
inciding with Gao (2020) who wrote: “explicit character knowledge can
lay a solid foundation for students to discover rules for learning a
wealth of other characters and benefit the expansion of characters and
vocabulary in their future study”, understanding the inner structure of
characters might ease students’ learning challenges, but as observed
from the results, some students (1) do not perceive the Chinese script
as part of an organized system, thus learning each character anew
and/or (2) if they do, they do not find it useful for their learning practice.
‒ ‒
4.5 RESEARCH QUESTION 5
What specific methods for learning sounds (of words) have you used to
learn the pronunciation of the new Chinese characters that you have to
study?
Item Answers
None 19%
Listen to the professor during the class and use the 13%
class materials
Write pinyin 1%
The results observed in Table 5, can be explained with the need of more
listening materials and speaking/pronunciation situations, activities and
materials. Again, many students (17) do not be aware of or use any
strategy to train their listening and/or speaking/pronunciation skills, but
more importantly, when revising the answers, it was quite clear how
students usually do not relate listening to a sound to producing it, the
“listen and repeat” expression was not widely used. Again, as observed
above, this aspect can be analyzed as the students’ necessity to be mo-
tivated to take a more active role in their own learning process. Except
for some students, we can see how these skills are left mainly to the
guidance of the professor during classroom activities.
‒ ‒
5. DISCUSSION
5.2 CONTEXT
‒ ‒
lock’ or ‘the lock’ both without any visible or audible difference to the
speaker. Context and syntax is fundamental for Chinese speakers and
students. Offering students materials with many examples, texts, dia-
logues, etc. might help them to grasp better these differences without a
grammatical explanation. On the other hand, explaining the use of a
corpus and giving them some exercises to understand how to use it
might foster their autonomy in the search for context when studying
new words.
‒ ‒
and don’t really know how to train that aspect of the language in auton-
omy out of the classroom. Some students repeat what they read or listen
to the class and do nothing further to train the listening and speaking
skills. This, according to the present study, is a matter that should defi-
nitely be addressed.
Results show that a portion of the students appear to rely on the instruc-
tors’ guidance for many aspects of their training and language learning;
and for all the previous reasons, pedagogy has been adapted as follows.
Students were given a list like the following one to use at their own
discretion. They were advised that each individual has its own way of
learning and training, and they should look for what fits them best. The
list is roughly divided into two big categories, even though it is highly
improbable that a language skill can be trained without involving at
least one of the others.
Sound
1. Try to associate tones to intonations of Spanish.
4. Listen to the word and try to write the character only in your
mind. You can correct yourself all the times you need until you
get it right.
‒ ‒
5. Listen and repeat while watching the word / sentence you are
studying.
6. Listen and repeat the word / sentence you are studying visual-
izing the character(s) in your mind.
7. Listen to words / sentences and try to write down only the char-
acter(s), without the pinyin.
11. Listen to music, watch movies, series, etc. with subtitles and
then without subtitles.
12. Listen to a word, write down the character (without pinyin) and
its meaning.
14. Create your own sentences using the words you are studying.
15. Script
16. Try to write the words you are studying with your mind.
17. Use flashcards trying to relate all the three aspects of a Chinese
word: visual form, sound and meaning.
‒ ‒
the three aspects of that unity; don’t forget to relate it to sound
and meaning.
28. Use a corpus to find new sentences of the words you are study-
ing.
And last for not least: Modern Chinese is a language to be used, get out
and use it!
5.5.2 Pedagogy
‒ ‒
skills autonomously; all this adding up to what previously already men-
tioned about methodology and active learning. All the previously men-
tioned teaching strategies and adjusted requirements relieved some of
the students’ issues with Modern Chinese learning and the students’
active participation and motivation grew exponentially.
6. CONCLUSIONS
‒ ‒
8. REFERENCES
‒ ‒
Dörnyei, Z., & Ushioda, E. (2011). Teaching and researching motivation (2nd
ed). Longman/Pearson.
Gao, X. (2020). Australian Students’ Perceptions of the Challenges and Strategies
for Learning Chinese Characters in Emergency Online Teaching.
International Journal of Chinese Language Teaching.
https://doi.org/10.46451/ijclt.2020.06.04
Girelli, L., Alivernini, F., Salvatore, S., Cozzolino, M., Sibilio, M., & Lucidi, F.
(2018). Affrontare i primi esami: Motivazione, supporto all’autonomia e
percezione di controllo predicono il rendimento degli studenti
universitari del primo anno [Coping with the First Exams: Motivation,
Autonomy Support and Perceived Control Predict the Performance of
First-year University Students]. ECPS - Educational Cultural and
Psychological Studies, 18, 7. https://doi.org/10.7358/ecps-2018-018-gire
Grolnick, W. S., Ryan, R. M., & Deci, E. L. (1991). Inner resources for school
achievement: Motivational mediators of children’s perceptions of their
parents. Journal of Educational Psychology, 83(4), 508–517.
https://doi.org/10.1037/0022-0663.83.4.508
Hartley, J. (1998). Learning and studying: A research perspective. Routledge.
Holec, H. (1981). Autonomy and Foreign Language Learning. Pergamon Press.
Huitt, W. (2011). Motivation to learn: An overview. Valdosta State University.
Jiang, X., & Cohen, A. D. (2012). A critical review of research on strategies in
learning Chinese as both a second and foreign language. Studies in
Second Language Learning and Teaching, 2(1), 9.
https://doi.org/10.14746/ssllt.2012.2.1.2
Kolb, A. Y., & Kolb, D. A. (2005). Learning Styles and Learning Spaces:
Enhancing Experiential Learning in Higher Education. Academy of
Management Learning & Education, 4(2), 193–212.
Lamb, M., Csizér, K., Henry, A., & Ryan, S. (Eds.). (2019). The Palgrave
handbook of motivation for language learning. Springer Nature
Switzerland AG.
Liu, S. (2019). Principales problemas en la adquisición del chino como lengua
extranjera a partir del análisis de errores de estudiantes españoles
[Main problems in the acquisition of Chinese as a foreign language from
the analysis of errors of Spanish students]. Universitat Autònoma de
Barcelona. Departament de Traducció i d’Interpretació i d’Estudis de
l’Àsia Oriental.
Longcamp, M., Boucard, C., Gilhodes, J.-C., Anton, J.-L., Roth, M., Nazarian,
B., & Velay, J.-L. (2008). Learning through Hand- or Typewriting
Influences Visual Recognition of New Graphic Shapes: Behavioral and
Functional Imaging Evidence. Journal of Cognitive Neuroscience, 20(5),
802–815. https://doi.org/10.1162/jocn.2008.20504
‒ ‒
Orden ECD/65/2015, de 21 de enero, por la que se describen las relaciones entre
las competencias, los contenidos y los criterios de evaluación de la
educación primaria, la educación secundaria obligatoria y el bachillerato,
no. 738 (2015).
Mueller, P. A., & Oppenheimer, D. M. (2014). The Pen Is Mightier Than the
Keyboard: Advantages of Longhand Over Laptop Note Taking.
Psychological Science, 25(6), 1159–1168.
https://doi.org/10.1177/0956797614524581
Murphy, P. K., & Alexander, P. A. (2000). A Motivated Exploration of
Motivation Terminology. Contemporary Educational Psychology, 25(1),
3–53. https://doi.org/10.1006/ceps.1999.1019
Querol, M. (2013). Gramática china. Nuevas perspectivas para su aprendizaje
[Chinese grammar. New perspectives for its learning]. In J. J. Ciruela
Alférez (Ed.), Aprender y enseñar chino: Jornadas académicas sobre la
lengua china y su enseñanza. Editorial Universidad de Granada.
Reinaltt Higa, K. A., & Miranda Mori, A. (2019). Estrategias de aprendizaje del
chino empleadas por los estudiantes de la carrera de Traducción e
Interpretación Profesional de la Universidad Peruana de Ciencias
Aplicadas [Chinese learning strategies used by students of the
Professional Translation and Interpreting degree at the Peruvian
University of Applied Sciences]. Universidad Peruana de Ciencias
Aplicadas.
Rubin, J. (1975). What the ‘Good Language Learner’ Can Teach Us. TESOL
Quarterly, 9(1), 41. https://doi.org/10.2307/3586011
Sánchez, L. J. R. (2020). Creencias acerca del aprendizaje del chino mandarín
en el contexto Aula Confucio en un colegio [Beliefs about learning
Mandarin Chinese in the Confusius classroom context in a secondary
school]. Pontificia Universidad Javeriana.
Schafer, R. (1968). Aspects of internalization. International Universities Press,
Inc.
Shibata, H., & Omura, K. (2018). Reconsideration of the Effects of Handwriting:
ITE Transactions on Media Technology and Applications (MTA), 6(4),
255–261.
Smoker, T. J., Murphy, C. E., & Rockwell, A. K. (2009). Comparing Memory for
Handwriting versus Typing. Proceedings of the Human Factors and
Ergonomics Society Annual Meeting, 53(22), 1744–1747.
https://doi.org/10.1177/154193120905302218
Soenens, B., & Vansteenkiste, M. (2005). Antecedents and Outcomes of Self-
Determination in 3 Life Domains: The Role of Parents’ and Teachers’
Autonomy Support. Journal of Youth and Adolescence, 34(6), 589–604.
https://doi.org/10.1007/s10964-005-8948-y
‒ ‒
Spratt, M., Humphreys, G., & Chan, V. (2002). Autonomy and motivation:
Which comes first? Language Teaching Research, 6(3), 245–266.
https://doi.org/10.1191/1362168802lr106oa
Stern, H. H. (1975). What Can We Learn from the Good Language Learner? The
Canadian Modern Language Review, 31(4), 304–319.
https://doi.org/10.3138/cmlr.31.4.304
Thomas, N., Bowen, N. E. J. A., & Rose, H. (2021). A diachronic analysis of
explicit definitions and implicit conceptualizations of language learning
strategies. System, 103, 102619.
https://doi.org/10.1016/j.system.2021.102619
Yamamoto, K. (2008). Banning Laptops in the Classroom: Is it Worth the
Hassles? Journal of Legal Education, 57, 477–520.
Yin, J. (印京华). (2003). 美国大学生记忆汉字时使用的方法-问卷查报告 [A
survey report on American college students’ strategies for memorising
Chinese characters]. Journal of the Chinese Teachers Association, 38(3),
69–90.
Zaccoletti, S., Camacho, A., Correia, N., Aguiar, C., Mason, L., Alves, R. A., &
Daniel, J. R. (2020). Parents’ Perceptions of Student Academic
Motivation During the COVID-19 Lockdown: A Cross-Country
Comparison. Frontiers in Psychology, 11, 592670.
https://doi.org/10.3389/fpsyg.2020.592670
Zhao, B. (2016). Análisis de materiales didácticos para la enseñanza de chino a
españoles [Analysis of didactic materials for teaching Chinese to
Spanish students]. Universidad Complutense de Madrid.
‒ ‒
CAPÍTULO 44
CARLOS CEIA
Faculty of Human and Social Sciences,
NOVA University of Lisbon – Portugal
1. INTRODUCTION
‒ ‒
‒ The future of digital education in 2030
‒ ‒
‒ Continuous training of trainers in the area of ICT - I would
add that this training is done in an interdisciplinary way, be-
cause a teacher today is obliged to master the digital tools of
distance learning and e-Learning and training in this area must
be a priority before that addictions and bad practices are ac-
quired, taking advantage of what is already acquired due to the
impossibility of teaching in person on a regular basis;
‒ ‒
FIGURE 1: AI Portugal 2030
Note that the key areas pointed to this national strategy do not include
languages, literature or cultural education: urban transformation
through sustainable cities, sustainable energy systems, environment
and biodiversity, mobility and autonomous driving, cybersecurity,
health and industry are the priorities. We should not assume that we are
outside this future. AI is already present in many educational activities
of today and they are not limited to hard sciences. Languages learning
is at the front, for example in the use of mobile applications such as
Duolingo or Wiz.Me. With millions of users we cannot forget this trend
in self-learning and how AI has been providing virtual self-aid tools
that, for now, do not substitute human teaching and tutoring, but can
succeed in the traditional schooling methods as a great helping tool for
anyone. Before we, as teachers, are beaten by AI, we should learn how
to include it in conventional teaching as assistant tools that can help all
of us teaching better and help students how to learn better as well.
‒ ‒
(<https://www.coe.int/en/web/digital-citizenship-education/-/being-
child- in-the-age-of-technology-difgital-cititzenship-education-hand-
book>). Aware of the inequalities that still exist among all students
from basic education to higher education in terms of access to techno-
logical means to support education, we can only fulfil the objective of
becoming digital citizens if we take safe and gradual steps with what
we can do today. I cannot accept the discourse of those who declare
themselves digitally excluded, refusing in every way and with every
excuse the use of technologies in teaching. I believe we can radically
change teaching in less than a decade. It should not be said that teaching
languages or literature or culture has a different reach, in this context,
from other more “scientific” teachings. Science is one and the area of
humanities cannot be excluded from technological progress.
Looking at the Council of Europe manual Digital citizenship education
handbook: Being online, well-being online, and rights online
(<https://ec.europa.eu/newsroom/just/items/672450>), the figure on p.
16 is an excellent source for reflection by all teaching teachers and pro-
grammers:
‒ ‒
Let us not devalue the creative capacity of the new generation of digital
teachers and students. The examples of revolution of / in the classroom
that the manual Being a Child in the Age of Technology
(<https://www.coe.int/en/web/digital-citizenship-education/-/being-
child-in-the-age-of-technology-difgital-cititzenship-education-hand-
book>) offers us are another good example of this ability to transform
traditional teaching into something more technologically attractive with
added pedagogical value: this is the case of <http: //www.web-
wewant.eu>, which looks like this:
Just as The Web We Want was developed by young people for young
people, the lessons in the Web We Want handbook for educators have
been designed by teachers for teachers across Europe and beyond. The
lesson plans propose ideas and activities to encourage young people to
develop the creative and critical thinking skills essential for a fulfilled
life in the world of tomorrow.
This project brings us suggestions for classes aligned with the European
e-Competence Framework (<https://www.ecompetences.eu>) orga-
nized in the following planned way:
FIGURE 3 <http://www.webwewant.eu/web/guest/lessons-plans>
‒ ‒
Whether for teaching languages or teaching literary and cultural con-
tent, there is a starting point here, for any teaching planning, which
seems to me to be vital. There is a detail to highlight: the project was
born from young people to young people, because we have to accept
that the national curriculum can no longer be designed by adults only
without having in mind what young people expect it to contain.
The <https://imagination.org> project, inspired by a 9-year-old Ameri-
can child, is another example of digital creativity that young people can
help us bring to the classroom with enormous educational gain. Telling
extraordinary creativity stories of children from around the world, as
proposed by the project (“The mission of Imagination.org is to find,
foster and fund creativity and entrepreneurship in children around the
world to raise a new generation of innovators and problem solvers who
have the tools they need to build the world they imagine. ”) has to be a
major design of any language class (L1 or L2). Digital is not a barrier
to linguistic creativity or literary imagination. On the contrary, it can
contribute to an expansion of the capacity for invention.
‒ ‒
1990 to the current Office 365. With Office 365, today we build bibli-
ographic databases, complex indexes, we use spell checkers, we inte-
grate word processing with images, audio and video, we integrate our
written research with digital library organizers, etc. in short, we have
become typewriters ourselves, without this signifying a form of loss of
power over writing. On the contrary, we write better, with better presen-
tation skills and resources, with greater orthographic and graphic rigor
and with greater rigor in scientific discourse. The digital humanities are
also just that: the acquisition of an extraordinary capacity to digitize
writing, scientific and literary, formal and informal. Think of the Eng-
lish Poetry Full-Text Database (EPFTD) (<http://xml.cover-
pages.org/chadwyck.html>), as an example, which includes texts from
1,350 poets who wrote between 600 A.D. and 1900 A.D.—mostly those
identified by The New Cambridge Bibliography of English Literature,
5 vols. (Cambridge: Cambridge University Press, 1969-1972). This is
just one example of the many databases created by the TEI encoding
scheme that revolutionized the humanities and beyond (see all projects
available at: < https://tei-c.org/Activities/Projects>). TEI, the Text En-
coding Initiative (originally set out in 1987 and developed over the fol-
lowing years), is one of digital humanities' great actions that have
changed our research fields. To understand that TEI has been the stand-
ard protocol for the digital encoding of scholarly texts in the humani-
ties, see the full description of the markup language in the official
Guidelines for Electronic Text Encoding and Interchange (<https://tei-
c.org/Guidelines>).
From all those activities relates to literary, cultural, and linguistic stud-
ies, e-reading is one of the most developed in the past decade. We can-
not argue against the growing advantages of having an audiobook to
listen to anywhere and in any device, we want over the traditional mode
of reading through a physical book. It is not just about availability and
flexibility when we want to highpoint the advantages of the digital book
over the physical one. It is most probable that the voice of a good actor
reading an audiobook will be more prominent for our understanding
‒ ‒
and fruition of that book rather than our own silent, reading voice. The
physical book has its own magic powers and will always have but can-
not compete with the possibilities of persuasion of the digital book. We
are today very different readers, and this condition has changed even
more after the Covid-19 pandemic came into our lives. We are just in
the beginning of a new era of digital reading and writing if we want to
recall the whole history of mankind literary apprenticeship. One exam-
ple of what the future of reading (literary and non-literary) might point
to is the app Headway (< https://headway.media/about-us>), which
sells fast and condensed reading like this:
15 minutes is all it takes to read a book summary on the Headway app.
Being reading nerds, our team does its best to find the most ground-
breaking nonfiction titles that will help you grow and evolve.
Almost 3 million people have already chosen Headway and joined our
community. Inside the app, you will also find audio versions of every
book, daily inspirational insights, the Spaced Repetition feature for
memorizing, widgets, and much more!
‒ ‒
digital humanities as a globally agreed concept. The digital landscape
that we see around us today is priceless and irreversible. Nothing in this
world goes back. Digital humanities are always forward-looking and
constantly evolving. Our capacity for scientific work either follows this
frantic evolution or we will be left behind and quickly leave this land-
scape. We should neither be surprised nor afraid of dialogue with the
computer sciences and with all sciences that have a more technological
knowledge base than the humanities. In other words, the language
teacher today is not just a teacher of linguistic communication, as he is
obliged to know all the ways in which this communication takes place
through technology and that affects the quality of learning; the profes-
sor of literature and culture may lock himself up in any dematerialized
convent of digital resources, but he will lose sight of all that can be
learned today on a writer's website, on interactive maps of a particular
culture, on forms of communication and digital research that allows us
to go further and to places that are physically impossible to reach, or to
perceive the networks of hyperlinks that any literary work can offer us;
the researcher in these areas (and in all others) has also changed the
way he works with quantitative and qualitative data, having today dig-
ital tools that make his job easier and that make it more and more com-
plex.
‒ ‒
today. Think also of instapoetry - defined “as posting short poetry sni-
ppets online to an audience mainly on social media” (<https://entrepre-
neurwriter.net/instagram-makes-poetry-profitable-at-
last/#What_is_Instapoetry>) - as an example of the digital dynamics of
literary genres under the rules of social media adapted to our most sa-
cred modes of literary production.
The concept of literary criticism has also been updated: there is more
literary criticism published on the websites of major world publishers,
in the form of comments from their readers or users (not necessarily
both at the same time), than criticism published in the traditional media.
Social media can change the fate of a literary work or an author for
better or for worse. Necessarily, the general, public understanding of
literary work has also become less scientific because of the demand for
an immediate return of literary taste that we can reduce to a simple
emoji. In fact, an emoji is worth more today than an adjective in many
contexts of interpersonal communication. This affects the entire appa-
ratus of literary and linguistic communication. Even from a pedagogical
point of view, a student of basic education in any country will use today
more emojis than adjectives in his/her communication with others,
whatever the context. This leads to changes in the literary and linguistic
education of our young people. Digital education is a complement to
literary and linguistic education and today's student must realize this.
Many of today's students have already assumed that their digital com-
munication processes are the very foundation of interpersonal commu-
nication and look at the formal learning of grammar and the formal uses
of languages they speak as secondary bases of communication. My gen-
eration learned the opposite. Digital education must come after lan-
guage education is consolidated in the first years of schooling. They
can be simultaneous, but educators must have a very solid training to
be able to manage discursive priorities in communication.
PHENOMENOL EDUCATION
‒ ‒
International Student Assessment Program (Pisa), the country experi-
enced a moderate setback in terms of comparison with the more devel-
oped countries, and now it wants to resume the path of innovation by
proposing a new approach. total teaching revolution. The project is
called Phenomenol Education, it is of constructivist inspiration, and it
is based on teaching oriented towards phenomena, in a free translation.
The paradigm shift depends on the assimilation of digital education ca-
pable of replacing traditional education. The theoretical assumptions of
this new revolution are almost indisputable:
Our society and business life are highly digital, but the educational in-
stitutions are only just taking the first steps in becoming digital. The
digitalization of teaching and education cannot be achieved by purchas-
ing computers, tablets or interactive whiteboards – as counterintuitive
as it may seem, thoughtlessly acquired technological equipment often
proves to be an obstacle slowing down digitalization. Digitalization of
the school should always involve enabling new, more efficient learning
and teaching processes in information technology – making new pro-
cesses possible – not simply replacing the pen or the blackboard with
an electronic version. Technology must always bring added value to
pedagogy.
Information technology can be used to enrich teaching and increase its
methodical diversity, thereby providing students with better prerequi-
sites for learning new things. However, using information technology
in teaching and learning must be carried out systematically, based on
the strategic goals of the curriculum and the educational institution. The
main focus in using technology in teaching is not on learning the tech-
nical skills, but on utilizing information and communication technology
pedagogically in different subjects and themes. In fact, the greatest ben-
efits of using technology are gained from systematic use, closely linked
to the learner’s learning process.
(<http://www.phenomenaleducation.info/change-with-digital.html>
The curricular design in a phenomenological system like this that Fin-
land is preparing for the future of its education has one disadvantage
from the outset, which we have known since the beginning of the 20th
‒ ‒
century in the phenomenology of Edmund Husserl. A phenomenologi-
cal method is, by definition, a method of showing phenomena, leaving
little or no scope for exercises of subjectivity and creativity in the in-
terpretation of these phenomena, which can lead to a type of education
that is too robotic. For me, it is still more interesting to discover the
intimate meaning of things from the point of view of Álvaro de Campos
- “The only intimate meaning of things / It is that they have no intimate
meaning at all.” (V - There is enough metaphysics in not thinking about
anything”) than from the more scientific view of Husserl that forces us
to look at things in their pure meaning, as they are revealed to us con-
sciously. The project places phenomena in the shadow of a complex
learning act:
‒ ‒
PROMOTING EFFECTIVE DIGITAL-AGE LEARNING
‒ ‒
content creation cannot be dissociated from what we do in the humani-
ties. It hardly expected that competences such as being able to search
for data, information and content in digital environments (1), being able
to analyse, interpret and critically evaluate the data, information and
digital content (1), or being able to interact through a variety of digital
technologies and to understand appropriate digital communication
means for a given context (2) are being learned leaving aside linguistic
or cultural competences (check all digital competences at
<https://ec.europa.eu/jrc/en/digcomp/digital-competence-frame-
work>).
We have yet another important new agenda: the Digital Education Ac-
tion Plan (2021-2027) (<https://ec.europa.eu/education/education-in-
the-eu/digital-education-action-plan_en>). The new European plan has
two pillars:
1. Fostering the development of a high-performing digital educa-
tion ecosystem
This agenda for the development of digital education, in all the strategic
lines identified here by the European Commission, will affect the future
of digital humanities and their teaching. Whether the creation of a Eu-
ropean Digital Education Hub, the update of DigComp 2.0, the creation
of a European Digital Skills Certificate, or the strengthening of teacher
training in the field of digital education, this European Plan should be
the plan for all our schools. Digital education is no longer the future -
it is already this troubled present that we live in and that we all learn
daily levels of overcoming never experienced. It is not a panacea for all
the problems we know, but it is a path that will help us to build better
teaching of languages, literatures, and cultures of all nationalities. This
plurality and interdisciplinarity in the field of languages, literature and
cultures has never been as effective as it is today, and this is due to the
ability we had to digitally approach each other. In the humanities, we
have the great advantage of knowing and being able to give examples
‒ ‒
of how to humanize these questions. No other area of knowledge can
do it better than we do.
The future ahead of us is already conditioned by new startups, new di-
gital industries, new educational technologies, greater accessibility to
digital educational content, etc. We are not surprised that in the last
fifteen years the number of students in e-Learning environments, in the
United States alone, has quadrupled. In countries with large demo-
graphic scales, such as India, there are cases of success where it seemed
impossible to reach education for millions of people living in precarious
conditions. We have restored home schooling on public TV; we have
suddenly learnt how to use distant learning and e-Learning with Zoom,
Google Meet, Teams, Hangouts, Moodle, etc.; we have redesigned all
our international conferences into virtual meetings; we have now pro-
jects to use digital textbooks and materials only (in 2020-21, ten Portu-
guese schools piloted this project by the Ministry of Education); we are
teaching face to face and at distance at the same time; we built portals
such as NOVA Research Portal (<https://novaresearch.unl.pt>) and
NOVA Repository (RUN) (<https://run.unl.pt>) that offer huge collec-
tions of e-journals, theses, dissertations, e-books and access to biblio-
graphical, statistical and financial databases relevant for all of the major
scientific areas; we have now digital and physical libraries as one; we
work with more and more complex databases such as Google Books
(<https://books.google.pt>), Project Gutenberg (<https://www.guten-
berg.org>), the UPenn’s Online Books Page (<http://onlinebooks.li-
brary.upenn.edu>) or everything at EBSCO
(<https://www.ebsco.com>); we have built large communities of
readers and have learnt how to share personal libraries, readings and
criticism, such as LibraryThing.com (<https://www.li-
brarything.com>); we have expanded our lifelong learning programs
and workshops to a larger public through digital platforms; we have
built institutional websites that are today part of our daily routine and
without which we would certainly be less effective.
We do not have to stop being human in the humanities. That is not what
this silent digital revolution is all about. Digital humanities serve to help
us become better teachers, better learners, better individuals. Although
‒ ‒
it is usual to criticize the digital humanities for aspiring to transform us
into digital machines, forestalling some dystopian times when mankind
will no longer need human interaction to teach and learn, that is rather
a contemporary urban myth that is not even new in scientific fiction.
The path we pursue is that of a dynamic intersection of digital technol-
ogies and the humanities, where we should anchor the teaching of liter-
ature, culture and languages. Anyone today can use digital resources,
but to study that use, to perform scientific analysis of the potentiality of
that use is something very different and this is our way.
‒ ‒
CAPÍTULO 45
CONSECUENCIAS DE COVID-19 EN LA
ENSEÑANZA-APRENDIZAJE
DE LENGUA EXTRANJERA
IRENE ACOSTA-MANZANO
Universidad de Málaga
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
Las medidas contribuyeron a la reducción de las posibilidades de trans-
misión del virus mediante la creación de entornos educativos seguros,
la detección precoz de casos positivos y su gestión adecuada (Boletín
Oficial de la Junta de Andalucía, 2020). Los principios básicos consis-
tían en la prevención personal, la limitación de contactos, la limpieza y
la ventilación de las aulas. En estas no se contemplaron especificacio-
nes para las enseñanzas de régimen especial de idiomas, es decir, las
Escuelas Oficiales de Idiomas (EEOOII).
Dada la inexistencia de investigaciones hasta la fecha en el contexto de
EEOOII, este estudio surgió con la motivación de observar las perspec-
tivas del profesorado y del alumnado de este colectivo en cuanto a las
consecuencias de la enfermedad COVID-19 en su aprendizaje durante
el período de confinamiento y el período de implementación de medi-
das para evitar su propagación.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
TABLA 1. Características sociodemográficas del alumnado participante.
Monográfico 4 (28,6%)
A1 3 (21,4%)
A2 3 (21,4%)
Curso
B1 3 (21,4%)
B2 4 (28,6%)
C1 4 (28,6%)
Multilin- No 2 (14,3%)
güismo (nú- Sí, una LE más 7 (50%)
mero de len- Sí, dos LEs más 3 (21,4%)
guas extran-
jeras) Sí, 3 o más lenguas 2 (14,3%)
Formación Profesional de Grado
1 (7,1%)
Superior
Nivel más
Bachillerato 2 (14,3%)
alto de for-
Diplomatura 1 (7,1%)
mación
Licenciatura o Grado Universitario 7 (50%)
Máster 3 (21,4%)
Francés 6 (43,9%)
Lengua Ex- Inglés 5 (35,7%)
tranjera (LE) Francés e inglés 2 (14,3%)
Francés, inglés y alemán 1 (7,1%)
‒ ‒
3.2. INSTRUMENTO
El instrumento fue distinto para la obtención de datos por parte del pro-
fesorado y del alumnado. La recogida de datos del profesorado se llevó
a cabo a través de un cuestionario con preguntas cualitativas y los datos
del alumnado se obtuvieron por medio de entrevistas cualitativas semi-
estructuradas.
‒ ‒
‒ ¿Los protocolos COVID-19 permiten la inclusividad en la en-
señanza en EEOOII ahora? ¿Por qué (no)?
‒ ‒
4. RESULTADOS
4.1.1. Retos
‒ ‒
inteligencias digitales, el desconocimiento tecnológico e incluso el re-
chazo a ciertas aplicaciones.
El profesorado afirmó que su adaptación de la metodología y los con-
tenidos de la modalidad presencial a virtual en cuestión de días también
supuso un gran reto a nivel personal. Señalaron las dificultades para el
correcto desempeño de la destreza oral: Las tareas de producción oral
fueron asimismo un problema porque no podía estar con todos al
mismo tiempo (R1); para practicar la interacción oral solo podía usar
Zoom, que permite dividir a los alumnos por mini salas, algo que no
podía hacer en todos los grupos porque se negaban a usar esta aplica-
ción (R2).
Se quejaron arduamente del desafío que constituyó la falta de medios y
apoyo institucional: la educación está penosamente infradotada y una
situación como la del COVID-19 pone este hecho en vergonzosa evi-
dencia. Sin embargo, la clase política y en definitiva los que controlan
el sistema educativo pretenden hacer ver que todo está bajo control
(R7); los recursos dotados por la Junta de Andalucía fueron inexisten-
tes y por ello no facilitaron nada (R6). Además, predominó la sensación
de desamparo porque tuvieron que encargarse de buscar sus propios re-
cursos y grabar tutoriales para el alumnado con menor competencia di-
gital, aun así, el alumnado se frustró mucho (R5). Comentaron que in-
cluso necesitaron acudir a formación exprés para poder utilizar recur-
sos que se adecuaran a los medios y conocimientos del alumnado (R2).
‒ ‒
de las clases no ha cambiado (R5). Parte del profesorado encuestado
habría preferido que se fuese un poco más permisivo. Ya llevamos mas-
carilla y gel hidroalcohólico todo el rato. Se podría permitir el contacto
entre compañeros de una misma clase para realizar actividades lúdicas
al ya llevar medidas de protección (R1).
Algunos señalaron que la implementación de los protocolos conllevó
consecuencias psicológicas que implicaron un gran reto. Dada la esca-
sez de interacción y actividades lúdicas que respeten la distancia de se-
guridad, sufren para intentar fomentar la motivación del alumnado e
intentar crear normalidad dentro de este caos (R8).
4.1.2. Soluciones
‒ ‒
El profesorado opina que la metodología empleada durante el confina-
miento fue inclusiva porque los recursos digitales eran simples y llega-
ban a todo el mundo independientemente de la distancia a la que estu-
vieran. Además, en todo momento se intentó llegar a todo el alumnado,
tanto eligiendo actividades de diferente nivel como adecuando el uso
de las nuevas tecnologías al distinto nivel de competencia digital del
alumnado (R3). Incidieron en que fue inclusiva siempre y cuando el
alumnado tuviera las competencias digitales mínimas y contara con los
recursos tecnológicos como acceso a internet y a un ordenador. No fue
tan inclusiva como hubiese deseado al requerir unas habilidades infor-
máticas y material tecnológico que no todo el mundo tenía (R4). Parte
del profesorado, no obstante, recalcó que las enseñanzas fueron solo en
parte inclusivas o para nada inclusivas. Aunque se recuperó un gran
número de alumnado que no había acudido antes por estar viviendo en
otras ciudades, el alumnado de mayor edad quedó totalmente excluido
de la enseñanza virtual. La edad fue un escollo importante (R3).
La mayor parte del profesorado consideró que los protocolos Covid-19
no permiten la inclusividad en la enseñanza dado que hay personas en
riesgo que no pueden asistir a clase (R2) y no pueden seguir las clases
telemáticamente por su falta de competencia digital (R5). No obstante,
insistieron en que los protocolos se pensaron para proteger la salud y
no para ser inclusivos (R5) y las EEOOII no están equipadas para suplir
la falta de medios por parte del alumnado.
‒ ‒
Parte de los entrevistados preferían las clases virtuales porque podían
acceder a ellas desde cualquier lugar y ahorraban tiempo de desplaza-
miento y dinero. Algunos incluso se sentían más seguros que en las
clases presenciales. Nos ahorramos tiempo de ir a la EOI y volver […]
Se ahorra mucho en todos los sentidos. Yo prefiero que se utilicen las
tecnologías, tanto para las clases como para las tareas. Prefiero la
clase online es más segura que la presencial (Entrevista #4).
Sin embargo, a otros les resultó una modalidad de enseñanza más fría
y les producía ansiedad el hecho de tener que aprender a utilizar apli-
caciones en el ordenador, aunque reconocieron que es lo que tocaba y
que, una vez que aprendían, ya todo era más sencillo. Comentaron que
al principio siempre era complicado: Al principio siempre es un poco
caótico, fallan las cosas, no sabes conectarte. Se olvidan las contrase-
ñas. A veces antes de empezar a hacer el ejercicio te tienes que pelear
con la aplicación (Entrevista#8).
Asimismo, los estudiantes señalaron que la conexión a internet era
clave a la hora de recibir educación de calidad y aprovechar el tiempo.
Las clases online no me resultan productivas porque tienes que tener
buen internet en casa y si no lo tienes, va peor. El aprendizaje online
es un poco más lento (Entrevista #13).
Algunos añadieron que hubo clases virtuales durante el confinamiento
que fueron un auténtico desastre por la falta de inteligencia digital del
profesorado: El año pasado fueron caóticas porque el profesor no tenía
muchas destrezas con el tema virtual. Nos puso un examen online que
no funcionaba. Se equivocó en el examen, no sabía y teníamos un
tiempo que no cuadraba y era imposible hacerlo porque no lo había
habilitado. Fue difícil hasta que se dio cuenta. El año pasado me afectó
muchísimo. Este año no. Como no hay muchos alumnos en clase, vamos
todos presenciales y no perdemos nada (Entrevista#3).
‒ ‒
recurrir a ellos como recurso didáctico. De hecho, varios aprendientes
comentaron disfrutar jugando con ellos en clase.
Algunos indicaron que deberían usarse incluso con más frecuencia por-
que hacen que las clases sean más dinámicas, aunque también hicieron
referencia al hecho de que les molestaba que se usasen para otros asun-
tos: Me molesta que la gente use el móvil para otras cosas como
Whatsapp o los móviles interrumpan la clase. También me molesta
cuando los profes miran WhatsApp. O todos o ninguno (Entrevista #8).
‒ ‒
hablando y no se escucha bien con mascarilla. Aprender un idioma con
mascarilla es muy fuerte. No vemos cómo pone la boca, no vemos nada.
En el aprendizaje de un idioma es horrible. Te acostumbras, pero se
pierde mucho por el camino. A día de hoy sin mascarilla pronunciaría
mucho mejor. La boca es muy importante para un idioma (Entre-
vista#1).
En las clases sincrónicas, algunos consideraron que eran perfectas:
Para mí está siendo perfecto. Cuando estás en casa tienes mucho ma-
terial. Cuando estás en clase, hablas más que nunca. Hacer un examen
desde casa es mucho más relajado que ir a clase y hacerlo allí. Por mí
que siga así siempre. Además, este año solo vamos a la mitad de las
clases porque somos la mitad. Lo bueno es que estamos todo el día
hablando al estar divididos. Muchas veces no hablas o te preguntan
poco cuando está toda la clase (Entrevista#8).
Otros opinaron que les afectaba socialmente y en cuanto a contenidos:
Hay menos interacción con los compañeros. En clase, hay profesores
que dan la mitad del temario, otros que dan lo mismo los dos días y
profesores que dan cosas distintas cada día. El día que no vas no apren-
des, tienes que mirar apuntes. Es más difícil aprender lo mismo (Entre-
vista#6).
Se quejaron de que solo habían recibido la mitad de las clases y las
consecuencias de ello en los exámenes oficiales de certificación: A la
hora de certificar, no sé si van a tener en cuenta que solo he podido ir
un día a clase. Yo intento ir todos los días y solo he recibido la mitad
de las clases. Son horas de aprendizaje perdidas que en casa no se
consiguen. Se intenta sacar el tiempo y al final no se saca. Lo que se
aprende con un profesor no es lo mismo que en casa (Entrevista#11).
En un tono más positivo, parte del alumnado de la EOI de Málaga ha-
lagó la buena aplicación de los protocolos contra la enfermedad CO-
VID-19: Las medidas de Málaga son fantásticas. Un 10, todo está lim-
pio, hay muchos dosificadores de gel hidroalcohólico disponibles en
todo momento. La distancia se mantiene. Nosotros mismos desinfecta-
mos las mesas (Entrevista#14).
‒ ‒
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
2020/2021, fue la utilización obligatoria de mascarillas. Las mascarillas
constituyeron una barrera tanto para la comunicación verbal como para
la comunicación no verbal.
En la comunicación verbal en general, las mascarillas empeoran la ca-
lidad del sonido e imposibilitan la visualización del movimiento bucal.
En el área de enseñanza-aprendizaje de una lengua extranjera en parti-
cular, el uso de mascarillas afecta considerablemente al conjunto de
aprendientes con problemas auditivos. Asimismo, las explicaciones fo-
néticas y sobre la posición de la lengua para la correcta pronunciación
de ciertos sonidos quedaron totalmente inaccesibles en el proceso de
enseñanza-aprendizaje que tuvo lugar durante la pandemia y bajo las
restricciones exigidas por los protocolos de actuación contra la enfer-
medad COVID-19.
En cuanto a la comunicación no verbal, las mascarillas reducen las ha-
bilidades de interpretación y comprensión ya que no permiten identifi-
car las emociones que los interlocutores expresan, en especial las posi-
tivas (Spitzer, 2020). El rostro es el medio principal de reconocimiento
de emociones positivas, fundamentalmente las sonrisas, que proporcio-
nan un reconocimiento social positivo (Scheller et al., 2012). Las mas-
carillas afectan la transmisión de emociones positivas como alegría, di-
versión, felicidad, placer, simpatía o sociabilidad entre otras (Scheller
et al., 2020) e intensifican las emociones negativas. De esta manera, las
mascarillas alteran el desarrollo de la interacción social positiva y la
empatía en el aula. Como mencionaron los docentes participantes en
este estudio, la interacción entre compañeros, el reconocimiento y la
muestra de emociones son un componente necesario en las escuelas
(Spitzer, 2020), en especial en el proceso de enseñanza-aprendizaje de
lenguas extranjeras. Las mascarillas, por lo tanto, repercuten negativa-
mente en la cohesión de grupo, dado que la disminución de la expresión
de emociones positivas interfiere con la fluidez y el desarrollo de la
clase. Es decir, como las emociones facilitan el proceso de aprendizaje,
las mascarillas alteran la pedagogía (Spitzer, 2020).
La obligación de implementar una modalidad de enseñanza sincrónica,
por la que la mitad del estudiantado seguía el trascurso de la clase desde
el aula presencialmente y la otra mitad por medio de videollamada,
‒ ‒
provocó que el alumnado con menor competencia digital en las Escue-
las Oficiales de Idiomas siguiera quedando excluido del proceso edu-
cativo tal y como sucedió durante el confinamiento. Por lo tanto, los
protocolos contra la propagación de la enfermedad COVID-19 no per-
mitieron la inclusión educativa del sector de nivel socioeconómico más
bajo y del alumnado con menor competencia digital. Las percepciones
de este estudio coincidieron con las apreciaciones de Cáceres-Muñoz et
al. (2020) puesto que las medidas establecidas por la Junta de Andalucía
esperaban que el alumnado contase con los medios necesarios para par-
ticipar en clases telemáticas sin que los propios centros proporcionasen
las infraestructurales o materiales y contasen con los recursos necesa-
rios para ello.
La mayor implicación de este estudio para el campo de la enseñanza-
aprendizaje de lengua extranjera por alumnado adulto fue la puesta en
evidencia de la importancia de la formación, de la disponibilidad de
recursos y de la adaptación al aprendiente o de la atención a la diversi-
dad, independientemente del nivel socioeconómico del estudiante tal y
como los informantes aludieron en sus propuestas de mejora. Como in-
formaron, la formación en competencia digital resulta en un aumento
de la autonomía telemática y de la democratización tecnológica. Estas
son fundamentales para conseguir el incremento de la competencia tec-
nológica, es decir, la facilitación del acceso a internet por parte de todos
los miembros del sistema educativo y la facilitación de los dispositivos
electrónicos necesarios para poder acceder a las clases virtuales.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
se relacionaron con la falta de recursos para acceder a las clases tele-
máticas y la disparidad de inteligencias digitales. Asimismo, durante la
aplicación de los protocolos contra la enfermedad COVID-19, los prin-
cipales desafíos estaban relacionados con el uso de mascarillas, las di-
ficultades de la enseñanza semipresencial o sincrónica y la distancia de
seguridad.
Las percepciones expresadas por el alumnado entrevistado fueron muy
diversas en cuanto a la enseñanza virtual, la utilización de plataformas
de aprendizaje en línea y las consecuencias de las medidas de preven-
ción en su aprendizaje de la LE.
Finalmente, cabe destacar que tanto los docentes como los aprendientes
de las Escuelas Oficiales de Idiomas participantes en este estudio recal-
caron la importancia de la formación digital para afrontar y prevenir las
consecuencias adversas del confinamiento y las medidas establecidas
en los protocolos.
7. REFERENCIAS
‒ ‒
Scheller, E., Büchel C. y Gamer, M (2012). Diagnostic features of emotional
expressions are processed preferentially. PloS one. 7: e41792.
https://doi.org/10.1371/journal.pone.0041792
Spitzer, M. (2020). Masked education? The benefits and burdens of wearing face
masks in schools during the current Corona pandemic. Trends in
Neuroscience and Education, 20(August), 110138.
https://doi.org/11.1116/j.tine.2020.110138
United Nations Educational Scientific and Cultural Organization. (2020).
Consecuencias negativas del cierre de las escuelas.
https://es.unesco.org/covid19/educationresponse/consecuencias
‒ ‒
CAPÍTULO 46
IRENE ACOSTA-MANZANO
Universidad de Málaga
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
representación el conjunto de adultos. Además, la única LE represen-
tada suele ser el inglés.
Asimismo, el Uso de la Lengua Extranjera Fuera de Clase (ULEFC) o
la Frecuencia de Uso de la Lengua Extranjera Fuera de Clase (FU-
LEFC) se ha topado con las mismas limitaciones que los estudios de las
emociones, es decir, las investigaciones en este campo se han limitado
a un rango de edad bajo (secundaria y universidad) y en el Inglés como
LE. Por ello, en un mundo donde las experiencias lingüísticas extramu-
rales no dejan de aumentar gracias a las redes sociales, juegos, etc., es
menester analizar las emociones, la frecuencia de uso y el uso de la LE
en estos contextos con el fin de comprender los intereses del alumnado
y mejorar así la calidad del proceso de enseñanza-aprendizaje de LE.
‒ ‒
La relación entre DALE y ACLE ha atraído considerable atención in-
vestigadora (Li, 2019) desde el estudio de Dewaele y MacIntyre (2014).
Los estudios en esta línea de investigación han demostrado que DALE
y ACLE están correlacionados significativa y negativamente, indepen-
dientemente del contexto del estudio (Dewaele y MacIntyre, 2014,
2016; Dewaele y Dewaele, 2017; Boudreau et al., 2018; Dewaele y Al-
fawzan 2018; Saito et al., 2018) y que DALE y ACLE son dos emocio-
nes independientes y no “extremos opuestos de la misma dimensión”
(Dewaele y MacIntyre, 2014, p. 261). Por lo tanto, la presencia de
ACLE no implica automáticamente la ausencia de DALE y viceversa.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
‒ Analizar las emociones positivas por medio de una medida
cuantitativa del DALE y preguntas cualitativas.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
TABLA 1. Características sociodemográficas de los participantes del estudio.
3.2. INSTRUMENTO
‒ ‒
adaptaciones culturales al español de las originales de Foreign Lan-
guage Enjoyment (FLE) de Dewaele y MacIntyre (2014) y de Foreign
Language Classroom Anxiety de Horwitz et al. (1986). Para traducirlas
y adaptarlas culturalmente al castellano, se suieron las indicaciones pro-
puestas por la International Test Commission (2018).
‒ ‒
TABLA 2. Escala de Disfrute en el Aprendizaje de una Lengua Extranjera.
‒ ‒
TABLA 3. Escala de Ansiedad en la Clase de Lengua Extranjera.
‒ ‒
‒ ¿Con qué frecuencia lee en la lengua extranjera fuera de clase?
(Ej.: redes sociales, libros, periódicos, revistas, etc.).
4. RESULTADOS
‒ ‒
ACLE es de 24,37, con una desviación estándar de 6,80, en un rango
de 8 a 40. La media de FULEFC es de 12,36, con una desviación están-
dar de 5,95 en un rango de 0 a 30. Es decir, el alumnado participante
presentó un nivel de disfrute y ansiedad relativamente elevado y una
frecuencia de uso extramural de la LE baja.
FIGURA 1. Razones por las que el alumnado participante comenzó a estudiar la le.
‒ ‒
FIGURA 2. Razones por las que el alumnado participante continuó estudiando la le.
‒ ‒
de LE, se sentían valorados y se divertían en clase. No obstante, un
porcentaje considerable estuvo en desacuerdo o indeciso con las afir-
maciones “En clase de LE nos reímos mucho” y “Soy un miembro va-
lorado en la clase de LE”. A la luz de estos datos, se entendió que, pese
a estos últimos ítems susceptibles de mejora, el alumnado se mostró
contento y satisfecho con la enseñanza que se lleva a cabo en las Es-
cuela Oficial de Idiomas de Málaga. Como se ha mencionado previa-
mente, la media de disfrute del alumnado de la EOI de Málaga fue de
40,88, en un rango de 10 a 50.
‒ ‒
FIGURA 3. Categorización de ocasiones (y razones por las) que afirmaron disfrutar la clase
de lengua extranjera especialmente.
‒ ‒
4.3. ANSIEDAD EN LA CLASE DE LENGUA EXTRANJERA EN LA EOI DE
MÁLAGA
‒ ‒
hablo en la LE. Es decir, las variables que estaban estrechamente rela-
cionadas con la producción oral sin preparación previa en clase.
Cuando los participantes contestaron la pregunta cualitativa ¿Podría
relatar detalladamente alguna ocasión en la que estuvo especialmente
estresado/a en la clase de lengua extranjera? ¿Qué provocó que fuese
tan estresante? ¿Cómo se sintió?, la mayoría sostuvieron que no solía
pasar. De los que respondieron con casos más concretos, señalaron que
las situaciones que les provocaban más estrés eran los exámenes, la
falta de preparación y hablar en público.
‒ ‒
FIGURA 6. Categorización de ocasiones en las que afirmaron utilizar la le fuera de clase.
‒ ‒
FIGURA 7. Medias de cada variable de la escala de fulefc.
MEDIA FULEFC
2,33 1,91
2,45 2,99
1,67
Destaca el hecho de que su utilización sea tan baja fuera del contexto
escolar, como en el caso de su empleo con amigos, familiares o cono-
cidos (Figura 8), para hablar consigo mismo en la LE (Figura 12) o para
escribir correos, libros, periódicos y cartas entre otros (Figura 11). Por
otra parte, el estudiantado presentó un uso más elevado de la lengua
extranjera fuera de clase para leer (Figura 9), ver películas, series o es-
cuchar música (Figura 10).
‒ ‒
FIGURA 8. Frecuencia con la que hablan en la le fuera de clase.
‒ ‒
FIGURA 10. Frecuencia con la que escriben en la le fuera de clase.
‒ ‒
FIGURA 12. Frecuencia con la que hablan consigo mismos en la le.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
al nivel de ACLE en adultos puede deberse a que los estudios anteriores
en alumnado adulto analizaron las emociones de los aprendientes de
inglés mientras que la mayoría del alumnado participante en este estu-
dio estudiaba francés en la EOI y sus motivaciones para comenzar a
estudiar la LE estaban más relacionadas con el placer. Además, la razón
principal del alumnado de francés para continuar estudiando era su in-
terés personal. El hecho de que la mayoría de los aprendientes de inglés
lo estudien por necesidad u obligación podría influir en los niveles de
ACLE que experimentan.
Los datos de FULEFC son particularmente bajos. El escaso contacto
que tienen con la LE fuera de clase está destinado a afectar negativa-
mente su desarrollo lingüístico de los estudiantes. Como señalaron
Lightbown (2014) y Collins y Muñoz (2016), el tiempo que se pasa en
la clase de LE es insuficiente para garantizar niveles relativamente altos
de competencia puesto que el aprendizaje de una LE requiere miles de
horas de exposición.
En cuanto a las diferencias de estos datos por idioma, los 78 estudiantes
de francés presentaron un nivel de DALE (41,71; D.E. = 3,62) más ele-
vado que los 74 participantes de inglés (40,01; D.E. = 5,31), un nivel
de ACLE y FULEFC (M = 23,76; D.E. = 6,06 y M = 10,36; D.E. = 5,28
respectivamente) inferior al alumnado de inglés (M = 25,01; D.E. =
7,45 y M = 14,47; D.E. = 5,92). Dicho disfrute superior, ansiedad y
utilización de la LE inferior por parte del alumnado de francés puede
deberse a que las motivaciones por las que comenzaron a aprender la
LE, y quizás consecuentemente su actitud hacia la LE, son totalmente
distintas.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
obligación. No obstante, la mayoría de las personas en ambos grupos
continuaban estudiando por interés personal. En cuanto a los niveles
que mostraron de los constructos analizados, los resultados fueron altos
para DALE, moderados para ACLE y bajos para FULEFC.
Esta investigación presenta la limitación de que los resultados no son
generalizables a toda la población de estudiantado adulto dado el carác-
ter voluntario de este estudio y el perfil de alumnado de las EEOOII.
Por lo tanto, se necesitan más estudios para expandir la investigación a
una población más amplia de estudiantes adultos de LE y contrastar los
resultados.
A pesar de estas limitaciones, este estudio contribuye al conocimiento
de las motivaciones, emociones y uso extramural de la LE en un rango
de edad, estudiantes adultos, típicamente desatendido en las investiga-
ciones en el área de LE.
7. REFERENCIAS
‒ ‒
Dewaele, J.-M. y MacIntyre, P. D. (2014). The two faces of Janus? Anxiety and
enjoyment in the foreign language classroom. Studies in Second
Language Learning and Teaching, 2(2), 237–274.
https://doi.org/10.14746/ssllt.2014.4.2.5
Dewaele, J.-M. y MacIntyre, P. D. (2016). Foreign language enjoyment and
foreign language classroom anxiety: The right and left feet of FL
learning? En P. D. MacIntyre, T. Gregersen and S. Mercer (Eds.),
Positive psychology in SLA (pp. 215–236). Multilingual Matters.
Dewaele, J.–M. y Alfawzan, M. (2018). Does the effect of enjoyment outweigh
that of anxiety in foreign language performance? Studies in Second
Language Learning and Teaching, 8(1), 21–45.
https://doi.org/10.14746/ssllt.2018.8.1.2
Dewaele, J.–M. y MacIntyre, P. D. (2014). The two faces of Janus? Anxiety and
enjoyment in the foreign language classroom. Studies in Second
Language Learning and Teaching, 2(2), 237–274.
https://doi.org/10.14746/ssllt.2014.4.2.5
Dewaele, J.–M. y MacIntyre, P. D. (2016). Foreign language enjoyment and
foreign language classroom anxiety: The right and left feet of FL
learning? En P. D. MacIntyre, T. Gregersen and S. Mercer (Eds.),
Positive psychology in SLA (pp. 215–236). Multilingual Matters.
Dewaele, J.–M., Chen, X., Padilla, A. M. y Lake, J. (2019). The flowering of
positive psychology in foreign/second language teaching and acquisition
research. Frontiers in Psychology, 10, 2128.
https://doi.org/10.3389/fpsyg.2019.02128
Dewaele, J.–M., Franco Magdalena, A. y Saito, K. (2019). The effect of
perception of teacher characteristics on Spanish EFL learners’ anxiety
and enjoyment. Modern Language Journal.
https://doi.org/10.1111/modl.12555
Dewaele, J.–M., Petrides, K. V. y Furnham, A. (2008). Effects of trait emotional
intelligence and sociobiographical variables on communicative anxiety
and foreign language anxiety among adult multilinguals: A review and
empirical investigation. Language Learning, 58(4), 911–960.
https://doi.org/10.1111/j.1467–9922.2008.00482.x
Dewaele, J.–M., Witney, J., Saito, K. y Dewaele, L. (2018). Foreign language
enjoyment and anxiety: The effect of teacher and learner variables.
Language Teaching Research, 22(6), 676–697.
https://doi.org/10.1177/1362168817692161
Gabryś-Barker, D. y Gałajda, D. (Eds.). (2016). Positive psychology perspectives
on foreign language learning and teaching. Springer International
Publishing. https://doi.org/10.1007/978–3–319–32954–3
‒ ‒
Horwitz, E. K. (2010). Foreign and second language anxiety. Language Teaching,
43(2), 154–167.
Horwitz, E. K. Horwitz, M. B. y Cope, J. (1986). Foreign language classroom
anxiety. The Modern Language Journal, 70 (2), 125–132.
https://doi.org/100.1017/S026144480999036X
International Test Commission (2018). ITC Guidelines for Translating and
Adapting Tests (2nd Ed.). International Journal of Testing, 18(2), 101–
134. https://doi.org/10.1080/15305058.2017.1398166
Jin, Y. y Zhang, L. J. (2018). The dimensions of foreign language classroom
enjoyment and their effect on foreign language achievement.
International Journal of Bilingual Education and Bilingualism,1–15.
https://doi.org/10. 1080/13670050.2018.1526253
Li, C. (2019). A Positive Psychology perspective on Chinese EFL students’ trait
emotional intelligence, foreign language enjoyment and EFL learning
achievement. Journal of Multilingual and Multicultural Development,
43(1), 246–263. https://doi.org/10.1080/01434632.2019.1614187
Lightbown, P. M. (2014). Making the minutes count in L2 teaching. Language
Awareness, 23(1-2), 3–23.
http://dx.doi.org/10.1080/09658416.2013.863903
MacIntyre, P. D. (1992). Anxiety and language learning from a stages of
processing Perspective. Digitized Theses. 2155. University of Western
Ontario: London, ON, Canada. https://ir.lib.uwo.ca/digitizedtheses/2155
MacIntyre, P. D. (2002). Motivation, anxiety and emotion in second language
acquisition. Individual Differences and Instructed Language Learning, 2,
45–68. https://doi.org/10.1075/lllt.2.05mac
MacIntyre, P. D. (2016). So far so good: An overview of positive psychology and
its contributions to SLA. In D. Gabryś-Barker y D. Gałajda, (Eds.),
Positive psychology perspectives on foreign language learning and
teaching (pp. 3–20). Springer International Publishing.
MacIntyre, P. D. y Gardner, R. C. (1989). Anxiety and second‐language learning:
Toward a theoretical clarification. Language Learning, 39(2), 251–275.
https://doi.org/10.1111/j.1467–1770.1989.tb00423.x
MacIntyre, P. D. y Gardner, R. C. (1994). The subtle effects of language anxiety
on cognitive processing in the second language. Language learning,
44(2), 283–305. https://doi.org/10.1111/j.1467–1770.1994.tb01103.x
MacIntyre, P. D. y Gregersen, T. (2012). Emotions that facilitate language
learning: The positive–broadening power of the imagination. Studies in
Second Language Learning and Teaching, 2(2), 193–213.
https://doi.org/10.14746/ssllt.2012.2.2.4
‒ ‒
MacIntyre, P. D. y Mercer, S. (2014). Introducing positive psychology to SLA.
Studies in Second Language Learning and Teaching, 4(2), 153–172.
https://doi.org/10.14746/ssllt.2014.4.2.2
MacIntyre, P. D., Gregersen, T. y Mercer, S. (2019). Setting an agenda for
positive psychology in SLA: Theory, practice, and research. The Modern
Language Journal, 103(1), 262-274. https://doi.org/10.1111/modl.12544
Olsson, E. y Sylvén, L. K. (2015). Out-of-class English and academic vocabulary.
A longitudinal study of CLIL and non–CLIL students in Sweden. Apples
– Journal of Applied Language Studies, 9(2), 77–103.
https://doi.org/10.17011/apples/urn.201512234129
Onwuegbuzie, A., Bailey, P. y Daley, C. E. (2000). The validation of three scales
measuring anxiety at different stages of the foreign language learning
process: The input anxiety scale, the processing anxiety scale, and the
output anxiety scale. Language Learning, 50, 87–117.
https://doi.org/10.1111/0023–8333.00112
Saito, K., Dewaele, J.–M., Abe, M. y In’nami, Y. (2018). Motivation, emotion,
learning experience and second language comprehensibility development
in classroom settings: a cross–sectional and longitudinal study.
Language Learning. http://eprints.bbk.ac.uk/id/eprint/21054
Sundqvist, P. (2009). Out-of-class English matters: out–of–school English and its
impact on Swedish ninth graders’ oral proficiency and vocabulary.
(Doctoral dissertation). Karlstad University, Sweden.
Swain, M. (2013). The inseparability of cognition and emotion in second
language learning. Language Teaching, 46(2), 195–207.
https://doi.org/10.1017/S0261444811000486
Young, D. J. (1992). Language anxiety from the foreign language specialist's
perspective: Interviews with Krashen, Omaggio Hadley, Terrell, and
Rardin. Foreign Language Annals, 25(2), 157–172.
https://doi.org/10.1111/j.1944–9720.1992.tb00524.x
‒ ‒
CAPÍTULO 47
TELECOLABORACIÓN INTERUNIVERSITARIA Y
APRENDIZAJE DE LENGUAS
FEDERICO SILVAGNI
Universidad Complutense de Madrid
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
temporización); posteriormente, en el capítulo 4, se exponen los resul-
tados cuantitativos y cualitativos recabados tras la participación de los
alumnos en el proyecto, que son valorados detenidamente en el capítulo
5. Cierra el trabajo un capítulo en el que, sobre la base de todo lo ante-
rior, se ofrece un balance de los elementos más reseñables del proyecto
y se adelantan las previsiones de mejora y ampliación de la iniciativa
para las ediciones futuras.
2. JUSTIFICACIÓN Y OBJETIVOS
‒ ‒
idioma extranjero sin la necesidad de desplazarse, lo que cobra aún más
relevancia en las circunstancias mundiales actuales.
Por todo lo anterior, UniLingua persigue objetivos tanto de ámbito edu-
cativo como institucional. Desde un punto de vista educativo, el pro-
yecto se centra principalmente —mas no exclusivamente— en los ob-
jetivos marcados por la política lingüística de la Unión Europea. Entre
los objetivos educativos, destacan los siguientes:
1. Impulsar el aprendizaje de idiomas.
‒ ‒
13. Mejorar y potenciar el diálogo y la colaboración entre alumnos,
PDI y PAS.
3. DESARROLLO
‒ ‒
temas de conversación y el medio electrónico de las reuniones. Este
planteamiento responde a la voluntad de que el intercambio represente
una oportunidad atractiva y motivadora para los alumnos, no una obli-
gación académica.
Al acabar cada reunión, los participantes cumplimentan un breve regis-
tro de reuniones a fin de que el equipo de UniLingua pueda monitorizar
el adecuado funcionamiento del proyecto y recabar datos útiles acerca
de las reuniones para la posterior evaluación y mejora del proyecto, así
como el desarrollo de posibles investigaciones.
Finalmente, cuando los alumnos deciden cerrar su relación de intercam-
bio, se les pide que cumplimenten un cuestionario final en el que eva-
lúan su experiencia individual, autoevalúan su aprendizaje y se coeva-
lúan. De nuevo, los datos recabados a partir de dichos cuestionarios ga-
rantizan la mejora constante de la iniciativa y constituyen valiosos ele-
mentos de análisis para futuras investigaciones.
Para más detalles sobre el desarrollo del proyecto, así como el conte-
nido del cuestionario de registro de las reuniones y del cuestionario fi-
nal, remitimos a Silvagni (2021).
4. RESULTADOS
‒ ‒
de Verona, la Universidad de Palermo, la Universidad de Borgoña, la
Universidad Libre de Berlín y la Universidad Estatal de Moscú. Las
universidades colaboradoras se captaron atendiendo a la demanda de
idiomas registrada en las inscripciones; concretamente, en el marco de
UniLingua se estableció un mínimo de diez solicitudes de un mismo
idioma para la activación del proceso de búsqueda de una nueva uni-
versidad colaboradora.
Los alumnos pudieron inscribirse a través del preceptivo formulario
hasta finales de abril de 2021 y, en total, se recibieron 696 inscripcio-
nes. A partir de las inscripciones, se crearon 270 parejas de intercambio
con las combinaciones lingüísticas siguientes (tabla 1):
español – italiano 61
español – francés 38
español – alemán 22
español – chino 13
español – ruso 9
inglés – italiano 4
inglés – francés 4
inglés – ruso 2
inglés – alemán 1
inglés – coreano 1
italiano – ruso 1
italiano – alemán 1
italiano – coreano 1
‒ ‒
4.2. RESULTADOS DE APROVECHAMIENTO
‒ ‒
GRÁFICO 2. ¿Te ha resultado satisfactoria la reunión?
‒ ‒
GRÁFICO 4. ¿Cuánto tiempo habéis utilizado tu lengua materna?
‒ ‒
A la hora de autoevaluarse, en la misma escala de 1 a 5, a la pregunta
“¿Crees que los intercambios te han ayudado a mejorar el dominio del
idioma que has practicado?", 49 alumnos (43,4%) se autoevaluaron con
un 5, 35 alumnos (31%) indicaron un 4, y 24 alumnos (21,2%), un 3.
Solo tres alumnos indicaron 2, y solo 2 indicaron 1 (gráfico 6). Puesto
que el 95,6% de las respuestas se sitúa entre el 3 y el 5, queda claro que,
globalmente, los alumnos viven el intercambio lingüístico como una
herramienta efectiva para el aprendizaje de idiomas.
GRÁFICO 6. ¿Crees que los intercambios te han ayudado a mejorar el dominio del idioma
que has practicado?
‒ ‒
GRÁFICO 7. ¿Crees que los intercambios han ayudado a tu compañero/a a mejorar el
dominio del idioma que ha practicado contigo?
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
La recepción de 696 solicitudes de participación en tan solo seis meses
para participar en la primera edición del proyecto indica un enorme in-
terés por parte de los alumnos en practicar idiomas, lo que confirma la
utilidad de UniLingua como estímulo para el aprendizaje de lengua y
apunta, pues, a la consecución del objetivo educativo 1 y los objetivos
institucionales 1 y 5.
‒ ‒
herramienta de aprendizaje y, por consiguiente, apuntan al logro de los
objetivos educativos 1, 4 y 6. De cara a futuros estudios, podría ser in-
teresante investigar si la autoevaluación y la coevaluación de los parti-
cipantes coinciden con su progreso real, y también si existe una relación
entre el número de reuniones y la experiencia de aprendizaje.
A su vez, la cumplimentación de cuestionarios que requiere un proceso
de autoevaluación y coevaluación explícito promueve la consecución
del objetivo educativo 7. Asimismo, la colaboración con siete universi-
dades extranjeras en esta primera edición indica un evidente logro de
los objetivos institucionales 3 y 4.
Conviene observar que el número de cuestionarios finales recogidos
(113) equivale a menos de la mitad de las parejas creadas (270), a pesar
de los múltiples avisos por correo electrónico que se enviaron desde
UniLingua a todos los implicados. El dato es esperable, ya que UniLin-
gua no constituye una obligación académica, con lo que es normal que
muchos alumnos no experimenten un sentimiento de responsabilidad
hacia la cumplimentación de los formularios. En cualquier caso, este es
otro aspecto de la participación que se intentará solventar de cara a fu-
turas ediciones.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
El análisis de resultados llevado a cabo también ha contribuido a la de-
tección de aspectos mejorables, que se procurarán resolver en las pró-
ximas ediciones. Entre ellos, destacan la necesidad de ampliar la capa-
cidad de respuesta a la elevada y variada demanda de intercambios por
parte de los alumnos, y fomentar la participación de los alumnos en los
cuestionarios finales.
7. AGRADECIMIENTOS
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Rienties, B., Lewis, T., O’Dowd, R., Rets, I., & Rogaten, J. (2020). The impact of
virtual exchange on TPACK and foreign language competence:
reviewing a large-scale implementation across 23 virtual exchanges.
Computer Assisted Language Learning, 1–27.
Silvagni, F. (2021). Aprendizaje de idiomas en el ámbito universitario a través del
intercambio virtual. In O. Buzón-García, C. Romero-García, & A. Verdú
Vázquez (Eds.), Innovaciones Metodológicas con TIC en Educación (pp.
2118–2134). Dykinson.
Toscu, S. (2018). The Impact Of Telecollaboratıon On Learners’ Intercultural
Communıcatıve Competence And Ideal L2 Self. Phd Thesis: Hacettepe
Üniversitesi.
Toscu, S. (2021). Dos and dont’s of an effective telecollaboration project.
Kuramsal Eğitimbilim Dergisi, 14(2), 202–222.
‒ ‒
CAPÍTULO 48
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
enseñanza en el que se combinan las clases presenciales tradicionales
en el centro con la enseñanza online desde casa. Este nuevo modelo se
ha implementado, sobre todo, en los últimos cursos de Secundaria y
Bachillerato en función de la madurez y autonomía de los alumnos.
Y es en este nuevo escenario educativo de semipresencialidad donde
las diferentes herramientas digitales puestas a disposición de los centros
entran en juego y cobran una especial relevancia. A lo largo del presente
artículo, discutiremos la utilidad de plataformas y herramientas tales
como Google Classroom, Google Calendar o Google Meet, para paliar
los efectos de la educación semipresencial.
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
Nos centraremos especialmente en este último apartado donde refleja-
remos cómo estas herramientas digitales no solo fomentan la interac-
ción asíncrona (Google Classrooom) con el intercambio de tareas y ac-
tividades sino también la síncrona (Google Meet) con la impartición de
clases online.
Implantada en mayor o menor medida según la Comunidad Autónoma,
la educación semipresencial se encuentra en el epicentro del debate
educativo. El modelo semipresencial ha sido la solución dada a las ne-
cesidades que han venido pautadas por la COVID-19 puesto que se han
tenido que disminuir las ratios y, lógicamente, los espacios disponibles
han impedido mantener las medidas de seguridad básicas y la distancia
social.
Según el nivel de incidencia en cada comunidad, se han ido adoptando
distintos planes de semipresencialidad. En el caso de la Región de Mur-
cia, comunidad objeto del estudio, esta se ha implementado en los dos
últimos cursos de la ESO y en Bachillerato con un sistema mixto quin-
cenal mediante el cual los alumnos asisten a clase tres días a la semana
y dos en la siguiente alternándose de forma consecutiva al estar los gru-
pos divididos en dos mitades con el fin de bajar la ratio en clase. Así,
en cada ciclo quincenal los alumnos asisten cinco días a clase de forma
presencial y luego otros cinco de forma online.
Los modelos en los que se desarrolla esta semipresencialidad también
varían según la comunidad. En algunos casos, por días alternos como
en Murcia, en otros casos por semana, turnos de tres horas, envío de
tareas o vídeos tutoriales, recursos en aulas virtuales, etc.
‒ ‒
Martínez y Sonia González para “Plan International España” el año pa-
sado, se hacía un análisis de la situación, poniendo especial énfasis en
la respuesta que los jóvenes dieron ante el confinamiento. Según dicho
estudio, la pandemia no sólo afectó la salud de niños y adolescentes,
sino que también tuvo un grave impacto en su entorno su desarrollo
debido a la interrupción de la educación, la alteración de las estructuras
de protección y a las cargas económicas para las familias.
Tras el cierre de los centros educativos, millones de estudiantes vulne-
rables de todo el país no sólo no tuvieron igual acceso a la formación
online a distancia, sino tampoco a servicios básicos que recibían en el
ámbito escolar. El impacto económico de la emergencia puede aumen-
tar el riesgo de vulnerabilidad y la violencia contra la infancia y la ado-
lescencia. Con el fin de mitigar dicho riesgo, las medidas de cuarentena
tenían que ir acompañadas de una ampliación de los actuales sistemas
de protección social para aumentar la cobertura y los beneficios para
las familias que se han visto afectadas por la pandemia.
En el contexto de cierre de centros educativos y de confinamiento, se
hicieron especialmente evidentes las brechas y la desigualdad, aumen-
tando en un 18.2% las llamadas al teléfono 016. En ese contexto social
de riesgo, la emergencia sanitaria ha agravado la situación de la infancia
y de la adolescencia porque la separó de los ámbitos en los que gene-
ralmente recibían apoyo.
Otro estudio se centró de forma más específica en el uso de las nuevas
tecnologías en la lucha contra la pandemia, estudio llevado a cabo por
la agencia española de protección de datos en el año 2020. Dicho estu-
dio analizó la implementación de soluciones tecnológicas pero integra-
das dentro de una estrategia de medidas jurídicas y organizativas efica-
ces y basadas en criterios científicos.
La agencia se centraba en prevenir abusos por parte de terceras partes
que pudieran conducir a la pérdida de libertades o de discriminación
con la excusa de la incertidumbre provocada por la situación sanitaria
de emergencia.
A lo largo del estudio se realizó un breve repaso de las principales tec-
nologías planteadas en la lucha contra la pandemia con el propósito de
‒ ‒
compilar diversas opciones que se habían estado manejando con el fin
de controlar su expansión y, especialmente, regular su uso.
Desde el punto de vista meramente sanitario, el Centro Nacional de
Epidemiología del Instituto de Salud Carlos III publicó una guía para
evaluar la gravedad de la pandemia en España. En el mismo se recono-
cía que la pandemia puso de manifiesto que los países no estaban ple-
namente preparados para evaluar con rapidez la gravedad de la pande-
mia.
Esta guía definió los tres indicadores que marcaban la gravedad de la
pandemia: la transmisibilidad del virus, la gravedad de la enfermedad
que produce y su impacto en la población. En definitiva, se permitía la
estimación de una serie de indicadores y parámetros con el fin de eva-
luar la gravedad de la pandemia.
Afirmaba, asimismo, la guía que la gravedad de una epidemia o pande-
mia debía valorarse según el resultado de varios indicadores. Según los
autores de la guía, la estimación de los distintos indicadores por grupos
de edad era muy importante para caracterizar el patrón de gravedad de
la pandemia, una información que podía ser crítica para el control de la
situación epidémica.
Un punto de vista diametralmente diferente fue el aportado por el Con-
sejo General de Economistas, que se centró en el impacto del Covid-19
en la economía española. Partiendo del Informe Anual 2019 del Banco
de España que se centraba de forma monográfica en la evolución de la
crisis sanitaria del Covid-19, su impacto económico inicial y las medi-
das de política económica, proporcionaba una visión sobre los princi-
pales desafíos que la economía española debería abordar a medio plazo.
A partir del desarrollo global de la crisis sanitaria se analizó el papel de
las políticas económicas ante la pandemia, especialmente en el caso de
España, y se proyectaron los retos para la economía española ante el
escenario post Covid-19. Los autores del estudio consideraban que la
profundidad de la crisis probablemente provocaría daños persistentes
en el crecimiento potencial de la economía española, siendo el bajo cre-
cimiento de la productividad el principal factor determinante del mo-
desto crecimiento potencial de la economía española.
‒ ‒
Reconocen que las tecnologías de la comunicación han constituido una
herramienta clave para reducir el impacto de las medidas de contención.
El teletrabajo es una opción real, sobre todo en determinadas profesio-
nes más allá del confinamiento, lo cual aumenta la flexibilidad en la
provisión de servicios.
También desde el campo de la psiquiatría se reflejó el impacto del Co-
vid-19 en la salud mental de niños y adolescentes. En un artículo de
Paricio del Castillo se asoció la pandemia con un incremento de factores
de riesgo psicosociales como el aislamiento, la violencia intrafamiliar
y el abuso de las nuevas tecnologías.
La autora propuso medidas de prevención en el ámbito familiar como
la comunicación positiva, la promoción de hábitos saludables y el pa-
renting, haciéndose imprescindible reforzar la accesibilidad a la red de
salud mental. Sugería también que se diseñaran estrategias de protec-
ción de la población infanto-juvenil en el contexto de la actual crisis
sanitaria.
Entre los efectos detectados en los estudios que se llevaron a cabo en la
población infantil destacaron el trastorno por estrés postraumático, la
ansiedad o la depresión. La población infanto-juvenil afectada por la
pandemia del virus ha seguido teniendo estímulos sociales, aunque ha
visto radicalmente mermada su variedad debido al confinamiento y al
decreto de distancia social, que han conllevado un cambio radical de
sus hábitos de vida con el cierre de las escuelas y la limitación de las
relaciones con pares y de la actividad psicomotriz en el exterior.
La pandemia ha alterado de forma drástica los modos de vida de la so-
ciedad española. Y una población especialmente vulnerable a estos
cambios son los niños y adolescentes que experimentaron los efectos
de las medidas de salud pública para frenar la pandemia.
Finalmente, podemos hacer mención a un estudio realizado por la Con-
federación de Salud Mental de España, que reflejó los efectos que la
pandemia tuvo sobre la salud mental no solo de las personas contagia-
das sino también de familiares y allegados. Los problemas de salud fí-
sica, el aislamiento, la falta de contacto social, la dificultad en la
‒ ‒
conciliación con la vida personal, los cambios de hábitos, o los proble-
mas laborales pasaron factura a la salud mental de la población.
Según el estudio, los problemas de salud mental han aumentado expo-
nencialmente durante la pandemia. A nivel de la población en general,
se observó un claro aumento en los niveles de ansiedad y estrés. Los
grupos específicos que se vieron especialmente expuestos incluían a la
población de personas migrantes y refugiados, las personas sin hogar,
los niños y adolescentes, personas desempleadas y personas mayores
confinadas en su lugar de residencia.
Algunos de los colectivos profesionales más afectados por la pandemia
y el confinamiento pertenecen al ámbito de la salud (enfermeros, médi-
cos), ámbito de la educación, y en el ámbito del cuidado de personas
mayores tanto en centros residenciales como a domicilio.
También se propusieron algunas medidas prioritarias dentro del pro-
ceso de reconstrucción. Entre ellas se incluyeron las siguiente: evalua-
ción del impacto del confinamiento, apoyo psicológico y acompaña-
miento personalizado, coordinación entre servicios y recursos, materia-
les de protección, medidas y ayudas para la adecuación de actuaciones
y conciliación, acciones formativas e informativas, y la implantación,
evaluación y adaptación de protocolos.
‒ ‒
Asimismo, se ofrecen sugerencia sobre cómo abordar esta problemática
a través de diversas soluciones de hibridación, de la enseñanza y apren-
dizaje mixtos, integrados y flexibles. Según García Aretio, el equilibro
de todos estos elementos, si se combinan con la flexibilidad adecuada,
puede dar respuesta a las diferentes necesidades de formación, especial-
mente en tiempos de posCovid.
Otro artículo reflejaba los efectos que la pandemia tuvo sobre la pérdida
de clases y su correlación con el rendimiento educativo. En dicho ar-
tículo, publicado por el Centro de Estudios de Economía de Madrid, sus
autores Sainz González y Sanz Labrador afirmaron que el retroceso en
el aprendizaje de los alumnos de entornos desfavorecidos podía resultar
en un incremento de sus tasas de repetición en los próximos años.
Reconocían los autores que el principal problema es que el impacto de
la pandemia iba a ser heterogéneo, con un efecto limitado entre los
alumnos de entornos favorecidos pero elevado entre los alumnos reza-
gados y desfavorecidos. Los estudiantes de familias desfavorecidas po-
dían tener menos apoyo académico por parte de sus padres, y los recur-
sos tecnológicos, las habilidades no cognitivas y los conocimientos de
los padres son igualmente diferentes.
El cierre de los centros educativos el pasado curso era una magnífica
oportunidad para volver a situar como prioridad política un problema
educativo que, sin ser nuevo, la actual situación ha expuesto con mayor
intensidad: el amplio porcentaje de jóvenes españoles que abandonan
los estudios sin finalizar una FP media o Bachillerato.
Un estudio parecido fue el publicado por Cabrera en la Revista de So-
ciología de la Educación en la que reflexionaba sobre los efectos del
coronavirus en la enseñanza ante el aumento de la desigualdad de opor-
tunidades. Según recoge dicho autor, el modelo educativo telemático
incrementa la desigualdad de oportunidades educativas poniendo de
manifiesto las carencias materiales de dispositivos electrónicos en los
hogares más desfavorecidos.
Lo que pretendía reflejar el autor es que la enseñanza telemática online,
al menos en el sistema actual, incrementa las desigualdades educativas
del alumnado. Según los datos recogidos, casi un millón de alumnos se
‒ ‒
vieron afectados por el cierre de los centros educativos por sus condi-
ciones personales y familiares.
Las aulas virtuales han sustituido a las aulas físicas en los centros, lo
que supone una novedad manifiesta que altera sustancialmente la vida
escolar cotidiana. La educación ha pasado de ser poco transcendente
como problema social a ser una preocupación esencial de la sociedad
española con la aparición del coronavirus.
Un informe publicado por Education at a glance reflejaba el impacto
del Covid-19 en la educación en el territorio nacional. Quienes prove-
nían de entornos privilegiados pudieron tener acceso a oportunidades
alternativas de aprendizaje con el explícito apoyo de sus padres. Pero
quienes pertenecían a entornos desfavorecidos, con frecuencia se que-
daron fuera del sistema al cerrar las aulas.
Otro informe reflejaba la situación de la educación durante la Covid-19
y después de ella. La pandemia ha provocado la mayor interrupción de
la historia en los sistemas educativos afectando gravemente a los estu-
diantes por los cierres de los centros educativos.
La crisis sanitaria agravó las disparidades educativas preexistentes al
reducir las oportunidades que tenían los jóvenes para continuar con su
aprendizaje. A medida que crecía la presión fiscal, la financiación de la
educación podría enfrentarse también a importantes problemas, lo que
aumentaría los déficits de financiación en materia de educación exis-
tentes antes de la pandemia.
Pero, por otra parte, la crisis ha estimulado la innovación en el sector
educativo, aplicando enfoques innovadores en apoyo de la continuidad
de la educación y la formación. Pero esos cambios han puesto, asi-
mismo, de manifiesto que el prometedor futuro del aprendizaje y los
cambios acelerados en las formas de impartir una educación de calidad
deben ser indisociables del imperativo de no dejar a nadie atrás.
Estas decisiones tienen unas enormes implicaciones sociales y econó-
micas y tendrán efectos duraderos en los docentes, los niños y los jóve-
nes, sus padres y, de hecho, en la sociedad en su conjunto. Debemos ser
conscientes de que sigue existiendo el riesgo de una caída en espiral en
‒ ‒
un bucle de retroalimentación negativa de exclusión y pérdidas en ma-
teria de aprendizaje.
El penúltimo estudio que aquí recogeremos fue el publicado por la or-
ganización Plena Inclusión en el que se recogía el derecho a la educa-
ción durante el Covid-19 a aquellos alumnos con discapacidad intelec-
tual o del desarrollo durante el confinamiento.
La Plataforma de la Infancia lanzó un informe con cien propuestas de
protección para la infancia en España, que incluían garantizar el acceso
a herramientas tecnológicas y conexión a internet para las familias du-
rante el confinamiento. También se alertó de la situación de mayor de-
sigualdad de los niños con discapacidad y sus familias.
Varios factores convierten al alumnado con necesidades educativas es-
peciales en un grupo más vulnerable ante la situación de continuar las
clases desde casa, así como ante la recuperación de rutinas educativas
e itinerarios formativos. La suspensión de tratamientos específicos
comporta un importante riesgo de involución o desequilibrio en el pro-
ceso educativo puesto que sufren en mayor grado la brecha económica,
social y tecnológica y carecen de los suficientes apoyos de accesibilidad
cognitiva y personales.
Las principales necesidades y dificultades detectadas son el acceso a
recursos tecnológicos para estar conectados con el centro educativo, el
acceso a internet, la falta de accesibilidad cognitiva de entornos digita-
les, el apoyo específico para las tareas, o la falta de acceso a prestacio-
nes vinculadas a la asistencia presencial a los centros educativos.
Por lo tanto, entre las sugerencias aportadas en el estudio podemos in-
cluir las siguientes: que se incluya el aprendizaje y el manejo de las
tecnologías de la comunicación como herramientas de uso habitual en
las aulas con todo el alumnado, que se contemple la colaboración fami-
liar como un valor en sí mismo que permita el avance de cada alumno
con discapacidad intelectual, que se planteen nuevos modelos y prácti-
cas más inclusivas, que se invierta en el sistema educativo para su ac-
tualización en políticas inclusivas, y que se instale un plan de preven-
ción de salud laboral.
‒ ‒
Finalmente, reflejaremos también un estudio de la Asociación Española
de Pediatría de Atención Primaria que reflexionaba sobre la nueva nor-
malidad educativa y de ocio en la vuelta a los centros educativos. La
pérdida del contacto personal con el profesorado y con sus pares ha
supuesto para todos los niños una merma en su aprendizaje, en su desa-
rrollo y en su bienestar socio-emocional. Ha supuesto también un riesgo
en términos de protección a la infancia y el derecho a la educación, lo
que tendrá un mayor impacto en aquellos más vulnerables, ahondando
la brecha social y las desigualdades ya existentes antes de la crisis sa-
nitaria.
La pérdida del apoyo directo del profesorado sobre el alumnado más
vulnerable, la desaparición en muchos casos de los refuerzos educati-
vos, la brecha digital, así como la inestabilidad económica son factores
que afectan de manera específica en su desarrollo y bienestar.
La infancia y adolescencia, y por ello el sector educativo y del ocio y
tiempo libre, requieren de un esfuerzo económico y planes de financia-
ción y refuerzo excepcionales. Es un necesario un plan Marshall para
la educación que tenga en cuenta las actividades socio-educativas.
Según los autores del artículo, son necesarias una serie de medidas a
adoptar como el impulso de medidas de conciliación de la vida familiar,
el incrementar las plantillas de personal docente y profesionales del
ocio y tiempo libre, incrementar las plantillas de equipos de orientación
y reforzar las medidas de protección frente al acoso escolar.
‒ ‒
4. RESULTADOS
Grupo A Grupo B
Miércoles
Miércoles
Viernes
Viernes
Jueves
Jueves
Martes
Martes
Lunes
Lunes
Semana 1
PRE ONL PRE ONL PRE ONL PRE ONL PRE ONL
Semana 2
ONL PRE ONL PRE ONL PRE ONL PRE ONL PRE
‒ ‒
ESO en adelante con el objetivo de disminuir la ratio de las aulas y
garantizar así la distancia mínima de seguridad. De este modo, como
hemos visto, las clases se han dividido en dos grupos: mientras que unos
asistían presencialmente al centro escolar, otros lo hacían online desde
casa a través de dispositivos electrónicos.
Además del lógico beneficio en materia de seguridad sanitaria, este mo-
delo de enseñanza posibilita una atención más personalizada de los
alumnos que asisten físicamente al centro por parte de los docentes. El
resto de la clase sigue las explicaciones desde casa de forma telemática,
lo que tiene algunos beneficios adicionales como la mejora de la capa-
cidad de organización del alumnado.
Desde el punto de vista del docente, este modelo semipresencial ha ter-
minado siendo un reto para ellos, al verse obligado a plantear tareas
para los que están ese día en el aula y para los que están en casa bien
sea mediante el envío de tareas en el aula virtual o las clases en strea-
ming. Por su parte, el alumno puede acabar recibiendo una lluvia de
actividades distintas a lo largo de la semana.
En el centro escolar, los docentes cuentan con suficientes equipos in-
formáticos con cámara y micrófono y tienen asimismo acceso a la pla-
taforma SED (Sistema Educativo Digital) desde la que poder establecer
comunicación con el alumnado, subir trabajos o tareas y compartir un
calendario de organización semanal y mensual. A medida que el curso
ha ido avanzando, los docentes se han ido amoldando a los nuevos
quehaceres y adaptando su forma de intervenir con el alumnado.
Una de las herramientas digitales educativas más utilizadas por los do-
centes a lo largo del curso ha sido Google Classroom para optimizar la
gestión de tareas y para mejorar la colaboración y la comunicación. De-
pendiendo del tipo de usuario su funcionalidad varía, pudiendo destacar
cuatro roles diferentes: profesores, alumnos, padres o tutores legales, y
administradores, como se puede ver en la siguiente tabla.
‒ ‒
TABLA 2. Distribución de funcionalidades según usuario
‒ ‒
que caduca el treinta de junio, con lo que evitamos tener que ir creando
el evento semanalmente.
A dicho evento debemos invitar a nuestros alumnos para que cuando se
conecten no tengamos que estar admitiendo su presencia. Para ello, mo-
dificamos nuestro evento e introducimos los correos corporativos de
nuestros alumnos, desmarcando los permisos para los invitados.
El último paso es el de añadir el enlace de Meet creado en nuestro Ca-
lendar y añadirlo en el Classroom para que esté accesible a nuestros
alumnos. Pinchando en el evento nos facilita la información del mismo
y podemos copiar el enlace de Meet.
Otra funcionalidad práctica que tiene Google Classroom es la de poder
silenciar a algún alumno una vez que ya tenemos los alumnos matricu-
lados. También podemos enviarle un correo electrónico e invitar a tu-
tores del alumno a unirse a la clase.
Desde trabajo de clase es donde podemos organizar nuestra clase y
donde ponemos a disposición de nuestros alumnos materiales, tareas o
cuestionarios. En este sentido, es importante tener una cuidadosa pre-
sentación de la clase para que los alumnos puedan acceder fácilmente.
Para ello, se pueden asignar nombres a los temas de nuestra asignatura
facilita que los estudiantes puedan acceder a la información correcta.
De igual manera, cada clase que tenemos creada en Google Classroom
tiene asociadas una carpeta de Drive y un Calendar. Así, podemos aña-
dir contenido que ya tengamos previamente creado o crear ese conte-
nido a la misma vez que el material. Si lo creamos, tenemos que indicar
dentro del Drive en qué carpeta se tiene que guardar nuestro archivo.
Pero si decidimos añadir el material, se puede hacer bien desde Google
Drive bien desde nuestro ordenador. También se puede hacer que el
material esté visible para todos los alumnos del grupo o solo para algu-
nos de ellos.
El material que creamos y subimos a la clase se puede publicar al ins-
tante, se puede programar para que se publique en una fecha y hora, o
se puede incluso guardar como borrador, pudiendo ser editado o elimi-
nado en todo momento.
‒ ‒
También nos permite crear en la clase una tarea. En una tarea. Cuando
añadimos o creamos un material se nos presentan diferentes opciones.
Una de ellas es que los alumnos puedan ver el archivo, pero no modifi-
carlo. Una segunda es que los alumnos puedan editar el archivo ya que
todos ellos lo comparten y lo editan. Y una tercera es hacer una copia
individual para cada alumno en la que cada alumno recibe una copia
del documento con su nombre y lo edita individualmente.
En dicha tarea podremos elegir a qué clase o clases les asignamos dicha
tarea, a qué alumnos asignarles una puntuación, una fecha límite de en-
trega, elegir el tema al que corresponde la tarea, o incluso añadir una
guía para su evaluación (rúbrica).
Ahora bien, un aspecto sobre el que debemos ser extremadamente cui-
dadosos es a la hora de eliminar una tarea. Si eliminamos una tarea,
también se eliminarán las calificaciones y los comentarios que los
alumnos hayan realizado en la misma. Sin embargo, los archivos adjun-
tos a las tareas se mantienen en la carpeta de Google Drive de la clase.
Otra funcionalidad que nos permite Google Classroom es la de usarlo
como tablón. En el tablón pueden publicar tanto los profesores como
los alumnos, dependiendo de la configuración que le demos a nuestra
clase. Cuando realizamos una publicación en el tablón, podemos indi-
car que se haga en un curso en concreto o en varios, que esté visible
para todos los alumnos o alguno en concreto, añadir contenido, y pode-
mos programarla para que se publique en un momento determinado o
incluso guardarla como borrador para publicarla posteriormente. Es im-
portante señalar que tanto los alumnos como los profesores pueden aña-
dir comentarios a publicaciones que aparezcan en el tablón.
En este tablón, el profesor puede eliminar cualquier publicación o co-
mentario propia o de los alumnos, por el contrario, los alumnos solo
pueden eliminar sus publicaciones o comentarios. Otra posibilidad que
nos brinda el tablón es que si deseamos que una publicación aparezca
siempre al principio del mismo y que no se pierda entre todas las publi-
caciones, se puede utilizar la opción de mover al principio.
4.2. GOOGLE MEET
‒ ‒
La otra aplicación a la que estamos haciendo referencia, y que se ha
convertido en nuestra herramienta de uso diario, es Google Meet, que
nos ha permitido dar clases online para aquellos alumnos que se encon-
traban en casa.
Lógicamente, el primer paso era crear una reunión, lo cual se puede
hacer desde el propio meet o desde Google Calendar. En el primer caso,
podemos crear la reunión dentro de meet pinchando en iniciar o unirse
a una reunión. En el segundo, podemos programar una reunión utili-
zando un evento desde Google Calendar.
Nada más iniciar la reunión podemos invitar a otros participantes. Y en
cualquier momento el administrador de la reunión puede eliminar a un
participante o silenciar el micrófono de algún participante.
Una de las ventajas de Google Meet es que nos permite compartir pan-
talla en una reunión o clase que tengamos con los alumnos. Para ello
pinchamos en “presentar ahora” y disponemos de tres opciones: toda la
ventana (en la que se comparte todo lo que se vea en la pantalla de
nuestro ordenador), una ventana (en la que se comparte solamente una
ventana de nuestro ordenador) y una pestaña de Google Chrome (en la
que se comparte una pestaña que seleccionemos de nuestro navegador).
Desde el punto de vista de los alumnos, tienen además la opción de
“levantar la mano”, Con esta opción pueden indicar que tienen una pre-
gunta o que quieren intervenir en la reunión. Nosotros, como profeso-
res, tenemos además la opción de bajar la mano a todos los participan-
tes.
Asimismo, la aplicación nos permite configurar algunos aspectos de
nuestra videollamada pinchando en los tres puntitos que aparecen abajo
a la derecha. Uno de estos aspectos es la configuración de la pizarra.
Nos permite abrir una jamboard, es decir, simular una pizarra en la
nube. Podemos crear una pizarra nueva o seleccionar una ya creada de
nuestro drive.
Así se nos pide que confirmemos si le damos acceso a los alumnos que
están invitados en esta videollamada, qué tipo de permiso le damos, si
‒ ‒
queremos darle acceso a las personas que tengan el enlace o si no que-
remos darle acceso a nadie a nuestra pizarra.
Otro aspecto que podemos configurar es la grabación de la reunión o
clase. Podemos grabar la reunión teniendo en cuenta que dicha graba-
ción incluye al participante que está hablando y las pantallas que se
comparten. Pero para grabar una reunión o clase debemos contar con el
permiso de todos los participantes. Una vez realizada la grabación, ésta
se guardará de forma automática en la unidad de Google Drive en una
carpeta llamada “meet recordings”.
También nos permite cambiar el diseño, pudiendo elegir entre automá-
tico, mosaico (en el que se muestran a todos los participantes hasta un
máximo de 16), foco (se muestra a la persona que habla), y barra lateral
(se muestra a la persona que habla y al resto en el lateral). Cuando que-
remos ver a todos nuestros alumnos tenemos que marcar la opción mo-
saica y movemos la barra al número de personas que queremos visuali-
zar. Así podemos tener a todos los alumnos controlados.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
Asimismo, hemos comprobado cómo diferentes herramientas digitales,
Google Classroom y Google Meet principalmente, nos han ayudado a
lo largo del curso a poder atender al alumnado tanto de forma presencial
como telemática. No obstante, este modelo de enseñanza semipresen-
cial, a pesar de la ayuda que supone estas herramientas, ha constituido
también un desafío para el alumnado.
Este desafío se ha visto reflejado en el cuestionario que, de forma anó-
nima, se distribuyó entre el alumnado de 2º de Bachillerato a finales de
curso. En dicho cuestionario se les planteaban preguntas como las si-
guientes: ¿has cumplido los propósitos que te planteaste al inicio del
curso?; ¿has aprovechado las clases online?; ¿estudias regularmente e
intentas llevar las materias al día?; en general, ¿cómo es el resultado
que esperas de tus calificaciones?; en tu opinión, ¿las dificultades de
este curso son comunes o individuales?; ¿te resultan útiles las platafor-
mas digitales puestas a tu disposición?; ¿consideras que la enseñanza
online está condicionando tu aprendizaje?; ¿te conectas a las clases on-
line? ; ¿qué dificultades tienes para seguir las clases online?
De las respuestas obtenidas, podemos extraer los siguientes resultados:
las clases online afectan su estudio y organización, lo que se refleja en
los resultados académicos; las dificultades de la enseñanza online son
mayormente comunes; las plataformas digitales son útiles pero condi-
cionan su proceso de aprendizaje; y los alumnos se conectan a las clases
online pero refieren ciertas dificultades técnicas y prefieren la ense-
ñanza tradicional.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
La educación semipresencial o “blended learning” se define como una
modalidad que combina el método de enseñanza tradicional caracteri-
zado por una presencialidad total, con un aprendizaje mediado por las
nuevas tecnologías de la información y la comunicación. Este tipo de
educación incluye entornos de aprendizaje en el que existe una interac-
ción física entre el alumnado y el docente. Por otro lado, ofrece espacios
de tiempo en los que el alumnado trabaja de forma autónoma, con una
enseñanza virtual guiada por el propio docente de una forma más indi-
recta.
Aunque hay varias formas de llevar a cabo la educación semipresencial,
en la Región de Murcia se optó por la docencia sincrónica presencial y
telemática en la que una parte del alumnado asiste a clase y otra parte
del mismo está en casa y asiste de forma virtual al mismo tiempo.
Esta situación ha puesto en evidencia la relevante labor del docente en
el desarrollo educativo y personal del alumnado. El docente no es un
mero transmisor de contenidos, sino que actúa como guía, apoyo y pro-
motor de cultura y valores. La educación semipresencial puede aportar
al alumnado una mayor flexibilidad en el aprendizaje, adaptándose al
ritmo y a la forma de aprender de cada uno, de manera individual. Por
otro lado, ofrece espacios de interacción y de cercanía entre el docente
y el discente y entre los propios compañeros.
Bien es cierto que estas adversidades iniciales se agravaron por la falta
de experiencia previa del profesorado en general, así como por la falta
del tiempo necesario para poder diseñar el nuevo escenario educativo
con plenas garantías.
Los exámenes finales también se vieron afectados, lo cual generó inte-
rrupciones en la trayectoria de aprendizaje y en el avance de los estu-
dios de los alumnos. Con el fin de conservar cierto equilibrio, los cen-
tros educativos tuvieron que reinventar los entornos de aprendizaje de
tal manera que la digitalización ampliara y complementara, pero sin
sustituirla, la relación estudiante-profesor.
Al entrar en la etapa de recuperación del Covid-19, será esencial refle-
xionar sobre la función de los sistemas educativos. A menudo, el cam-
bio real tiene lugar durante una crisis profunda y este momento nos
‒ ‒
plantea la posibilidad de que cuando las cosas vuelvan a la normalidad,
no regresemos al estatus quo. Será la naturaleza de nuestras respuestas
colecticas y sistémicas a estas perturbaciones lo que determinará cómo
terminará afectando al sistema educativo.
El impacto de esta pandemia y la crisis económica han generado un
cambio en cómo, cuándo y dónde ocurre el aprendizaje del estudiante.
La renovación e innovación pedagógica, siempre recomendada y gene-
ralmente aplazada, puede contar ahora con la gran oportunidad para ha-
cerse realidad y ganar en calidad y equidad educativas.
Nos encontramos ante una situación excepcional, nunca antes vivida,
que ha puesto de relieve las enormes dificultades de todos nuestros sis-
temas, especialmente el educativo. Nos enfrentamos a un escenario de
incertidumbre en el que toda la comunidad educativa está tratando de
dar las respuestas más adecuadas a su alumnado.
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Martínez, L., Morell, J.J., & Nuñez, C. (2020). La nueva normalidad educativa y
de ocio. Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria.
Oliva, J., Delgado, C., & Larrauri, A. (2019). Guía para la evaluación de la
gravedad de la pandemia en España. Centro Nacional de Epidemiología
del Instituto de Salud Carlos III, Madrid.
Paricio del Castillo, R. (2020). Salud mental infanto-juvenil y pandemia de
Covid-19 en España: cuestiones y retos. Revista de Psiquiatría Infanto-
Juvenil, 37 (2).
Plena Inclusión. (2020). El derecho a la educación durante el Covid-19. Madrid.
Sainz González, J. & Sanz Labrador, I. (2021). Los efectos del coronavirus en la
educación: Las pérdidas de clases y rendimientos educativos desiguales.
Centro de Estudios de Economía de Madrid.
Save the Children, (2020). La educación durante la Covid-19 y después de ella.
Madrid.
Unidad de evaluación y estudios Tecnológicos (2020). El uso de las tecnologías
en la lucha contra el Covid-19: Un análisis de costes y beneficios.
Agencia Española de Protección de Datos, Madrid.
‒ ‒
CAPÍTULO 49
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
Los contextos docentes cambiaron físicamente y, por consecuencia,
también metodológicamente. Es verdad que si analizamos con deteni-
miento esta mutación, no podemos hablar de una digitalización orde-
nada y planificada de la docencia como refuerzo a cada una de las ac-
ciones realizadas en el aula. La enseñanza de lenguas extranjeras en la
Educación Superior no estaba preparada para un cambio armónico y
reflexivo. Por el contrario, tal y como señala Hodges (2020), se puso en
marcha una multitud de recursos para ofrecer una respuesta de emer-
gencia basada en recursos digitales. Las instituciones, docentes y dis-
centes no se encontraban preparados para esta respuesta de emergencia,
lo que generó escenarios poco organizados, inestables, desproporciona-
dos y, en ocasiones, poco eficaces. En esta misma línea se pronuncian
también De Obesso y Núñez (2021) y afirman que, a diferencia de la
educación e-learning, que posee sus características y metodologías pro-
pias, la pandemia obligó a que toda la docencia, que no había sido di-
señada para ser impartida íntegramente a través de medios electrónicos,
tuviera que realizarse a través de medios tecnológicos en línea, for-
zando una adaptación metodológica, didáctica y pedagógica.
Lejos de la deseable digitalización, basada en la planificación y en la
reflexión, los docentes y el alumnado se han visto inmersos sin ninguna
preparación en un experimento de aprendizaje online, del que se tendrá
que valorar cuál es la profundidad del aprendizaje (Zimmerman, 2020).
Esta realidad en las universidades españolas, junto con las tesituras per-
sonales que vivía cada uno de los estudiantes, dio lugar a una desmoti-
vación generalizada del alumnado como muestran distintas investiga-
ciones, entre ellas la de Acosta (2021), que recoge un estudio sobre la
enseñanza de lenguas extranjeras en la Educación Superior en la Uni-
versidad Autónoma de Madrid (UAM). En este estudio se han aunado
tanto datos cualitativos como cuantitativos para analizar cómo ha sido
el proceso de enseñanza y aprendizaje durante el confinamiento con el
fin de poder andamiar dicho proceso y garantizar la consecución de ob-
jetivos de aprendizaje propios de cada una de las titulaciones de grado.
La pesquisa se realizó en la Facultad de Filosofía y Letras y en la Fa-
cultad de Ciencias Económicas y valora la respuesta de más de 200
alumnos que cursaban alguna asignatura de lengua extranjera. Las
‒ ‒
lenguas representadas en el estudio son el inglés, francés, alemán,
chino, japonés, coreano, árabe, italiano y portugués, principalmente.
Junto a la desmotivación que arrojan los resultados del estudio al que
se ha hecho referencia, deben ser mencionadas las dificultades que en-
contraron los estudiantes para poder profundizar en todas las destrezas
lingüísticas propias de la enseñanza de lenguas extranjeras y marcadas
por el Marco Común Europeo de Referencia para Las Lenguas (2001)
(MCER) en escenarios totalmente digitales o híbridos. El estudio re-
fleja, además, que las destrezas de producción oral y escrita, de manera
especial, quedaron descuidadas en la enseñanza durante el confina-
miento. El trabajo de la gramática y el vocabulario, alejados de su com-
ponente comunicativo, ocuparon el grueso de la docencia on line, y se
trató de forma desigual las destrezas marcadas por el MCER.
En medio de este escenario de desmotivación y carencias acumuladas
durante el confinamiento, se presenta el intercambio virtual, intercam-
bio lingüístico semidirigido o tándem como una buena opción para ele-
var el nivel de motivación de los estudiantes y andamiar aquellas des-
trezas que fueron trabajadas en menor medida durante el la época de
confinamiento.
Las principales cuestiones que se pretenden abordar en este trabajo y
que guían la investigación son: ¿es el intercambio virtual una herra-
mienta válida en el marco de la enseñanza de lenguas extranjeras en la
Educación Superior? ¿Cómo valora el alumnado la utilización de esta
metodología como parte integrante de las asignaturas que cursan en la
titulación de grado? ¿Posee esta metodología una relación directa con
los resultados de aprendizaje de los alumnos?
2. OBJETIVOS
‒ ‒
la lengua alemana en la enseñanza universitaria. Más en concreto, los
estudiantes que participan en este estudio son alumnos de las titulacio-
nes de grado de Traducción e Interpretación y de Estudios Ingleses que,
tras haber cursado dos semestres de lengua alemana, poseen un grado
de competencia aproximado de A2 según el MCER.
Para poder abordar este objetivo principal, se han propuesto los siguien-
tes objetivos específicos a modo de concreción:
‒ Comprobar si la motivación de los estudiantes se siente in-
fluenciada por la actividad regulada de intercambio lingüístico
con hablantes nativos.
3. METODOLOGÍA
A pesar de que se tiene una idea de qué se está hablando cuando nos
referimos a intercambio virtual, se considera relevante poder ofrecer
una definición más precisa con el fin de evitar posibles equívocos.
Para empezar, la misma literatura sobre lo que ahora se denomina in-
tercambio virtual, siguiendo la terminología que utiliza la Comisión Eu-
ropea (2018) en el marco de los intercambios Erasmus+, no siempre ha
sido la misma, y encontramos otras nomenclaturas, como señala Robert
‒ ‒
O’Dowd (2018). En el gráfico se pueden observar algunos de los tér-
minos que se han venido aplicando a lo largo del desarrollo de la meto-
dología del intercambio virtual durante las últimas décadas:
Internet-mediated
intercultural foreign Belz & Thorne, 2006
language education
Globally networked
Starke-Meyerring & Wilson, 2008
learning environments
‒ ‒
el éxito en el aprendizaje de su compañero a través de una interdepen-
dencia positiva.
En el término finalmente escogido, intercambio virtual, además de apa-
recer el medio en el que se desarrolla, también aparece este sentido de
aportación compartida y de reciprocidad. Se parte, por tanto, de una
igualdad radical entre los miembros del intercambio en el que las dife-
rencias de cada uno de ellos ya sean de carácter lingüístico, cultural o
de otra índole, se convierten en elementos enriquecedores y, en la ma-
yoría de los casos, el objeto meta en la relación de aprendizaje.
‒ ‒
Telecollaboration, or ‘virtual exchange’, are terms used to refer to the
engagement of groups of learners in online intercultural interactions
and collaboration projects with partners from other cultural contexts or
geographical locations as an integrated part of their educational pro-
grammes.
‒ ‒
países entre los que se entable el intercambio. En el caso que aborda
este estudio, el calendario académico de Alemania y España difieren
mucho en los periodos vacacionales y, por tanto, de inicio y finalización
del semestre. Este hecho supone un reto para encuadrar adecuadamente
las tareas y encuentros durante el intercambio dentro de la duración de
los semestres.
La Comisión Europea (2018) pone de manifiesto que este tipo de inter-
cambios posibilita que los participantes realicen experiencias capaces
de crear un conocimiento profundo y significativo en cada uno de ellos
de la mano de compañeros que se encuentran más allá de sus fronteras
y que pueden pertenecer a ámbitos culturales muy distintos. Las pecu-
liaridades que distinguen a este tipo de aprendizaje en línea de otros
son:
‒ Es este tipo de aprendizaje el alumno se centra en la interac-
ción y el diálogo entre las personas, y es en esta relación de la
que brota el conocimiento profundo. Sin embargo, en otros
programas de aprendizaje electrónico el alumno no se centra
tanto en la interacción interpersonal como en la gestión de los
contenidos de aprendizaje.
‒ ‒
‒ Debe considerarse que la competencia intercultural no brota
de manera espontánea por el mero contacto entre los partici-
pantes, sino que debe ser también tematizada explícitamente
con el fin de posibilitar una comprensión intercultural pro-
funda y una comprensión y valoración de las diferencias.
‒ ‒
los contenidos y competencias del programa de las asignaturas afecta-
das, se exponen a continuación algunas competencias y objetivos de
aprendizaje propios de una de las asignaturas en las que se desarrolla el
intercambio, en concreto, en la asignatura Segunda Lengua Extranjera
III – Alemán en los estudio de grado en Estudios Ingleses:
‒ Adquirir gradualmente autonomía en el proceso de aprendi-
zaje tomando conciencia de la necesidad de una actitud proac-
tiva ante el saber.
‒ ‒
Traducción e Interpretación en la Universidad Autónoma de Madrid.
Estos estudiantes tienen el español como lengua materna. El segundo
grupo, por otro lado, estaría compuesto por estudiantes de español
como lengua extranjera llegados a la Universidad Autónoma a través
del programa de intercambio Erasmus+ y estudiantes de la Universidad
de Bochum que permanecían en su universidad de origen. Todos estos
estudiantes tienen el alemán como lengua materna.
A partir de los mencionados grupos de estudiantes se crearon grupos de
trabajo estables para todo el intercambio compuestos por un estudiante
alemán y dos españoles. Esta proporción está motivada por el número
de alumnos de los que se disponía y no responde a otros criterios aso-
ciativos.
Respecto a la finalidad que se plantea el equipo docente durante el desa-
rrollo del proyecto debe decirse que, aunque según el tipo de intercam-
bio las metas pueden ser múltiples, como por ejemplo aprender una len-
gua franca como el inglés, en esta ocasión la meta consistía en profun-
dizar en la competencia en lengua extranjera que estaban estudiando en
sus titulaciones. Hay que recordar que la lengua materna de cada uno
de los estudiantes era la lengua meta del compañero. Por lo tanto, los
estudiantes de origen alemán pretendían practicar su dominio en lengua
española y viceversa.
En lo que se refiere al aspecto temporal del proyecto, tras las gestiones
de reclutamiento de estudiantes alemanes y el emparejamiento, el inter-
cambio virtual se dio entre los meses de octubre y diciembre de 2020.
Durante la semana de docencia en la UAM, los estudiantes preparaban
con ayuda de la auxiliar de conversación el léxico y expresiones espe-
cíficas adecuadas al tema a tratar durante las dos semanas en las que se
trabajaba cada uno de los temas en concreto.
Cada dos semanas los estudiantes debían participar en un foro sobre
una temática en concreto, dando sus opiniones, contando sus experien-
cias o planteando cuestiones a los compañeros. Asimismo, debían gra-
bar en vídeo conversaciones realizadas a través de cualquier plataforma
de videoconferencia, según las preferencias de cada grupo, sobre dos
de los temas a tratar.
‒ ‒
Las temáticas tratadas fueron consensuadas previamente con los estu-
diantes en diálogo con el equipo docente, ya que debían buscarse temas
adecuados a su nivel de competencia en lengua extranjera y cuestiones
que tematizaran de alguna manera la realidad cultural de los países de
origen y dieran lugar al diálogo enriquecedor que propiciara un am-
biente adecuado para crear actitudes positivas ante la diversidad cultu-
ral. En el siguiente listado pueden observarse los principales núcleos
temáticos tratados:
‒ sich vorstellen – presentarse: en este bloque temático los estu-
diantes debían tratar cuestiones como la procedencia, las afi-
ciones, gustos en general, actividades del tiempo libre y rela-
ción con otras lenguas y culturas.
‒ ‒
cada uno de sus países: cómo se celebra un cumpleaños, el
fallecimiento de un familiar, la Navidad…
‒ ‒
del tipo de escala de Likert (donde el 1 es totalmente desacuerdo y el 5
totalmente de acuerdo), en el que se valoraban distintos aspectos liga-
dos al desarrollo del intercambio y a la conciencia de avance en la com-
petencia lingüística en lengua extranjera, como la percepción de pro-
fundización en las distintas destrezas o sobre los factores afectivos den-
tro del grupo de intercambio. Por otro lado, se introdujo en el cuestio-
nario una pregunta abierta en la que los estudiantes podían evaluar el
intercambio virtual en general.
Ya que el cuestionario se realizó en una sesión de clase, la población
de muestra supone la totalidad de la población objeto de estudio, obte-
niendo así un total de 27 respuestas que fueron recogidas a través de un
formulario de Google en diciembre de 2020.
4. RESULTADOS
‒ ‒
competencia de expresión oral, mientras que un 41% ha valorado esta
pregunta con un 3, lo que se valora como una respuesta neutral. El as-
pecto receptivo de la comunicación oral obtiene una mejor valoración,
ya que el 55% considera que han mejorado su comprensión oral gracias
a la participación en el intercambio virtual. El 37% considera que no
han mejorado significativamente.
Aquí debe recordarse que los estudiantes solo realizaron dos grabacio-
nes de conversaciones, por lo que el trabajo y práctica sobre estas des-
trezas también se supone menor en el intercambio. Este aspecto debería
ser revisado para ulteriores ediciones del proyecto.
La valoración del avance en las destrezas relacionadas con la escritura
y la comprensión de textos escritos es más positiva que la anterior, si
bien es verdad que nos encontramos ante destrezas que permiten una
mayor reflexión durante el proceso de comprensión o expresión, y no
son tan espontáneas como las ligadas a la oralidad. Este aspecto les da
a los estudiantes mucha más seguridad y, por tanto, una mayor concien-
cia de corrección.
Según los datos recabados a través de la herramienta de recogida, el
70% de los estudiantes coincide en afirmar que ha mejorado su destreza
en comprensión lectora. Junto a este se encuentra el dato de que el 74%
de los encuestados considera haber mejorado en la expresión escrita.
Estos datos llaman la atención ya que las destrezas relacionadas con la
comprensión tienden a considerarse más fáciles, mientras que las que
se refieren a la producción más difíciles. Según estos datos, los estu-
diantes han constatado un avance ligeramente superior en la expresión
sobre la comprensión.
Respecto a la competencia intercultural, en la que se hace hincapié que
no solo se trata de conocimientos sobre la cultura meta, sino también
de actitudes ante otras culturas, los estudiantes constatan un gran
avance. Prácticamente el 80% de estos manifiesta haber avanzado en
esta competencia, y no solo en lo que a conocimientos respecta, sino
que se sienten más capaces de desarrollar actitudes de empatía, flexibi-
lidad y relativismo etnocéntrico ante situaciones multiculturales.
‒ ‒
Esta tónica positiva que se está observando en la mayoría de las cues-
tiones se mantienen en otras destrezas y conocimientos. Si se atiende a
la percepción del alumnado sobre la adquisición de nuevo vocabulario,
puede observarse que el 77% demuestra haber ampliado su léxico.
A modo de resumen de los datos cuantitativos expuestos, puede obser-
varse en el gráfico 1 que la puntuación media de los estudiantes a las
distintas destrezas sobre las que se les pedía que se autoevaluaran es
muy positiva, siempre por encima del 3 sobre 5.
5
4,5
4
3,5
3
2,5
2
1,5
1
0,5
0
Los datos cualitativos con los que se buscaba, más que una triangula-
ción, una interpretación más profunda de los datos cuantitativos, apun-
tan también hacia el éxito del intercambio virtual, como queda reflejado
en las siguientes opiniones de los alumnos:
‒ Me ha encantado el proyecto. Me ha dado mucha confianza en
mí misma.
‒ Recomendable para otros cursos.
‒ El proyecto ha sido útil y divertido.
‒ Enriquecedor para poder mejorar el nivel de alemán de una
manera motivadora.
‒ ‒
Asimismo, los datos cualitativos aportan una valiosa información para
la gestión de los grupos o para algunas posibles líneas de mejora. La
mayoría de ellas hacen referencia a la organización grupal para encon-
trar momentos en los que todos pudieran participar en la grabación de
los vídeos, por ejemplo. Algunos participantes aportan que la experien-
cia podría ser más gratificante y productiva si no tuviera lugar a través
de pequeños grupos, sino de parejas binacionales.
5. CONCLUSIONES Y DISCUSIÓN
Para concluir puede afirmarse que, según los datos expuestos, el inter-
cambio virtual entendido como una metodología de aprendizaje tutori-
zado en el que se ponen en contacto durante un tiempo amplio y estable
a varios aprendientes a través de medios digitales con el fin de conse-
guir una meta de aprendizaje compartida o individualizada en un marco
curricular concreto supone una buena herramienta para implementar en
el ámbito de las asignaturas de lengua extranjera en la Educación Su-
perior en la época pospandémica, ya que incide de manera directa y
positiva en la motivación de los estudiantes.
Asimismo, el proyecto basado en el intercambio virtual ha tenido un
profundo impacto en todas las destrezas lingüísticas y comunicativas,
también en aquellas que habían sido más descuidadas en la docencia
durante el periodo de confinamiento causado por la pandemia de la CO-
VID-19. Las competencias relacionadas con la lengua escrita presentan
un gran avance y los alumnos son conscientes de su mayor competencia
tanto en la expresión escrita como en la comprensión lectora. Aunque
sea en menor grado, las competencias relacionadas con la oralidad tam-
bién han sido reforzadas en este proyecto.
Para intentar mejorar este estudio, se propone una ulterior comparación
diacrónica de las competencias de los alumnos que han participado en
el intercambio virtual con los que no han participado a través de pruebas
estandarizadas, aunque la percepción subjetiva de los docentes partici-
pantes constata un mayor desarrollo de las destrezas de expresión oral,
comprensión oral y expresión escrita.
‒ ‒
Algunos estudiantes reclaman una experiencia one-to-one y, más allá
de las dificultades organizativas que esto podría acarrear, habrá también
que evaluar en qué medida afecta esta disposición a los resultados de
este estudio.
Para concluir, se propone también la ampliación del número de interac-
ciones orales durante el intercambio virtual con el fin de poder valorar
en qué medida el número limitado de grabaciones de conversaciones en
el proyecto es el responsable de que los resultados en las destrezas re-
lacionadas con la oralidad no sean tan positivos como los observados
en otros campos.
Seguro que la implementación de estas medidas y adecuaciones al pro-
yecto basado en el intercambio virtual entre estudiantes de español y
alemán solo confirmará la pertinencia del uso de esta herramienta en el
proceso reglado de enseñanza y aprendizaje de cualquier lengua extran-
jera.
6. REFERENCIAS
‒ ‒
Deardorff, D.K. (Ed). (2009). The SAGE handbook of intercultural competence.
Sage Publications.
Hodges, C., Moore, S., Lockee, B., Trust, T. y Bond, A. (2020). The Difference
Between Emergency Remote Teaching and Online Learning.
EDUCAUSE Review. https://er.educause.edu/articles/2020/3/the-
difference-between-emergency-remote-teaching-and-online-learning
O’Dowd, R. (2017). Virtual Exchange and internationalising the classroom.
Training Language and Culture, 1(4), 8-24.
https://doi.org/10.29366/2017tlc.1.4.1
O’Dowd, R. (2018). From telecollaboration to virtual exchange: state-of-the-art
and the role of UNICollaboration in moving forward. Journal of Virtual
Exchange, 1, 1-23. Research-publishing.net.
https://doi.org/10.14705/rpnet.2018.jve.1
O’Dowd, R., & O’Rourke, B. (2019). New developments in virtual exchange for
foreign language education. Language Learning & Technology, 23(3),
1–7. http://hdl.handle.net/10125/44690
Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, por el que se declara el estado de alarma
para la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por el
COVID-19. Boletín Oficial del Estado, núm. 67, de 14 de marzo de
2020, pp. 25390 a 25400. https://www.boe.es/buscar/doc.php?id=BOE-
A-2020-3692
Schenker, T. (2012). The effects of a virtual exchange on language skills and
intercultural competence [Tesis de doctorado. Michigan State
University]. Repositorio digital MSU. https://d.lib.msu.edu/etd/442
Vinagre, M., Wigham, C. R., & Giralt, M. (2020). E+VE-SFI: developing spoken
interaction in a foreign language. En F. Helm & A. Beaven (Eds).
Designing and implementing virtual exchange – a collection of case
studies (pp. 105-115). Research-publishing.net.
https://doi.org/10.14705/rpnet.2020.45.1119
Zimmerman, J. (2020). Coronavirus and the Great Online-Learning Experiment.
The Chronicle of Higher Education.
https://www.chronicle.com/article/coronavirus-and-the-great-online-
learning-experiment/
‒ ‒
CAPÍTULO 50
AITOR GARCÉS-MANZANERA
University of Murcia, Spain
1. INTRODUCTION
‒ ‒
Building on the above, the present empirical study intends to add to the
bulk of research on blended learning studies by gathering evidence on
how Primary Education undergraduates perceive blended learning in
relation to several key variables: (i) the effect on learning and teaching
methodologies, which include the degree of attention to the contents,
education needs, or autonomous learning; (ii) the impact on affective
variables such as how motivated undergraduates are, and how individ-
ualized they perceive the attention they receive. Another key concern
is the amount of anxiety as a result of this blended learning condition;
(iii) the purported beneficial or adverse impact on linguistic develop-
ment by examining the perceptions about each language-related skill
(e.g. Reading, Listening), and (iv) the effect on social interaction vari-
ables.
‒ ‒
use of hardware tools, such as webcams, computers, but also usual of-
fice software along with Learning Management Systems (LMS). In the
case of the latter, LMS have long been implemented in higher educa-
tion, but the lecturers’ acclimatization to these computer-mediated
teaching procedures came as unexpected. On the one hand, faculty were
challenged to adapt their materials, which were initially conceived for
face-to-face lessons, to the new teaching system. On the other hand,
some educators were fearful of not meeting the technological require-
ments since, as is expected, not all faculty members are equally skillful
in a digital environment.
These challenges are closely related to the responsibility of elaborating
educational resources that not only aid in enhancing learners’
knowledge, but that students are also able to exploit their performance
to the fullest in the same conditions as under a traditional-based teach-
ing-learning procedure.
As regards English as a Foreign Language (EFL) lessons, these have
been usually related to traditional face-to-face settings (Robinson,
2016), which has reflected upon educators given the difficulty of trans-
mitting the same knowledge through a computer screen. For instance,
conversation classes or speaking lessons, which are precisely reliant on
physical gestures and are fully communicative, face a noticeable chal-
lenge when they transition into a fully online environment (Bailey &
Lee, 2020).
With the outbreak of COVID-19, university boards opted for imple-
menting fully internet-based settings where their students could follow
the lessons either synchronously or asynchronously since this provided
a prompt solution (Dhawan, 2020). As reviewed by Garcés-Manzanera
(2020), teaching measures were varied according to the university
where they were implemented, but also, to the available technological
resources. In general terms, faculty members were made to use syn-
chronous computer-mediated tools that facilitated teaching. In light of
this, videoconferencing was the most widespread teaching modality
since it allowed for a very similar environment as in traditional face-to-
face lessons. Nonetheless, an urgent need to focus on more student-
centered approaches appeared on scene (Coman et al., 2020). The use
‒ ‒
of e-learning tools ensured that students may become protagonists of
their own learning process. Despite the existence of these tools, there
are some internal and external variables that might influence negatively
the e-learning process, for instance, delayed asynchronous feedback, or
demotivation.
As was announced before, the array of e-learning procedures is very
diverse, and hence teaching methodologies vary accordingly. In the
next section, I will explore the characteristics of both distance and
blended learning.
3. DISTANCE LEARNING
‒ ‒
learning’ constitutes. Using Bates & Poole’s (2003) categorization,
blended learning is not regarded as what current learning systems have
defined it. In fact, the combination of face-to-face lessons with technol-
ogy-based learning such as videoconferencing would be part of their
categorization of distributed learning. As reviewed by Garcés-Manzan-
era (forthcoming/2021), their characterization of distance learning is
well aligned with Brown’s (2003), who defined it as paper-based dis-
tance learning. As was mentioned previously, this type of distance
learning entails autonomous learning which, beyond the traditional as-
signments, involve a degree of engagement on the part of the students.
Hence, in subsequent research (e.g. Fischer et al., 2014), distributed
learning has been substituted with blended learning, as a modality in-
cluding not only synchronous and asynchronous channels of communi-
cation, either physical or distance-based, but also the completion of a
series of tasks. Nowadays, blended learning is associated with technol-
ogy-based practices “with a solid technological component” (Garcés-
Manzanera, forthcoming/2021).
These practices may vary depending on how technology-based tools are
implemented in the process of L2 teaching and learning. Firstly, two
divisions are distinguished: synchronous and asynchronous computer-
mediated communication. In the case of asynchronous computer-medi-
ated communication, the focus is predominantly student-centred since
the teaching-learning process falls upon the students (Garcés-Manzan-
era, forthcoming/2021; Lenkaitis, 2019). They are responsible for
viewing the potential videolessons uploaded, completing the assign-
ments, submit them on time, and subsequently take the main role in
their learning process. The different technology-based systems include
virtual learning platforms such as Moodle, where EFL-based assign-
ments may be possible through automatized quizzes. Equally possible,
learners may be able to boost their writing skills and receive customized
feedback via the different tools offered. Nonetheless, even if there is a
great degree of paucity in the learning process, “the absence of social
interaction might diminish the opportunities to develop other commu-
nicative-based skills” (Garcés-Manzanera, forthcoming/2021, p. n.d.).
‒ ‒
The second type of computer-mediated communication, which is syn-
chronous, involves a real-time connection between educators and stu-
dents. Hence, technology-based tools are mainly centered on videocon-
ferencing (Healey, 2016), online chats, as well as other resources such
as interactive dialogues (e.g. in Moodle settings). This way, synchro-
nous computer-mediated teaching ensures that the detached nature of
e-learning is counterbalanced. In a similar fashion, the synchronicity of
this mode of computer-mediated teaching is equally valid given the im-
mediateness, that makes it be closer to face-to-face interaction. Also,
peer interaction between learners and the social bond with the educator
is stronger, hence potentially leading to L2 development.
Traditionally, the role of synchronous computer-mediated communica-
tion (and here, teaching) has been associated with extra-practice con-
ducted outside of the official regular teaching hours (Chen et al., 2005;
Kern et al., 2004). In fact, the simultaneous nature of synchronous
teaching through technology-based tools makes it a site for social inter-
action (Vurdien, 2019) where learners may receive countless opportu-
nities to put their language skills into practice. Additionally, similar
conditions to authentic contexts may be reproduced in this synchronous
teaching. This allows for a dual interaction between students
(Chanrungkanok, 2004), in which social interaction may take place
through a wide variety of options, among which online chat and vide-
oconferencing are the most common choices.
Our study will be mainly focused on the language learning and teaching
methodological affordances that videoconferencing has offered thus
far. Although the research and pedagogical interest of online chats has
been widely looked into by different scholars (e.g. Blake, 2009; Loe-
wen & Reissner, 2009), the long-term effect of online chatting for learn-
ing a language is largely restricted by its solely written nature. Never-
theless, it has been reported to have beneficial effects on
language learning given the extra processing time provided to compre-
hend questions (Pellettieri, 1999).
Moving on to videoconferencing, this technology-based tool has been
in the limelight since the outbreak of COVID-19 in an attempt to
‒ ‒
provide students with the same opportunities they encounter in tradi-
tional lessons. The number of tools used to provide this immediateness
in the teaching-learning process is countless, but some of the most com-
mon ones have been Zoom since it allowed students to use the Chat
function. Such a function facilitates interaction between students in an
attempt to share different ideas, online educational resources, peer and
teacher support, but also for co-constructing knowledge. The combina-
tion of this function with the immediate nature of videoconferencing
has given rise to numerous studies which indicate that this technology-
based modality favors students’ engagement in producing more dis-
course (Yamada & Akahori, 2007). Regarding the pedagogical rele-
vance of videoconferencing in language-learning environments, previ-
ous research has revealed that videoconferencing led to a positive in-
crease in speaking skills, among which communicative competence
holds a pivotal role (e.g. Jauregui & Bañados, 2008; Jauregui et al.,
2012). Similarly, the resemblance of the conditions under which vide-
oconferencing lessons take place aids in the negotiation of meaning as
well as the modification of output (Bueno-Alastuey, 2013). Another
variable that has been reported to be affected positively by the use of
remote technology-based tools such as videoconferencing has been
anxiety to communicate. In fact, previous research has indicated that
this affective variable decreases with remote teaching (e.g. Bueno-
Alastuey, 2011; Satar & Ozdener, 2008). Conversely, videoconferenc-
ing has been found to affect accuracy (Ko, 2012) in a negative manner.
Nonetheless, this synchronous technology-based teaching tool has re-
ceived stringent support in the scholarly literature as an alternative to
face-to-face teaching (Wang, 2007) since it allows to merge both oral
and written language through its manifold functions. In light of this,
videoconferencing is pedagogically relevant since learners may interact
simultaneously with the material provided and with the teacher in con-
trast to asynchronous teaching modalities. Additionally, learners may
consult their doubts with their peers or through a quick internet search
in case they encounter any vocabulary issue. In essence, videconferenc-
ing emulates the same conditions and the manner in which traditional
learning is conducted. The only variation lies in the use of more sources
‒ ‒
that may help learners to exploit the language learning lesson to a
greater extent.
In what follows, I will attempt to establish the links between distance
learning and blended learning, considering the specificities of the
COVID-19 pandemic, and the usefulness of each approach.
4. BLENDED LEARNING
‒ ‒
in the Higher Education scene. Previous research (Garrison & Vaughan,
2008; Simon et al., 2018) has manifested the central pedagogical value
that blended learning holds. These tenets are:
1. Learner’s self-regulation, since blended learning allows for wi-
der flexibilization of the learning process.
‒ ‒
motivation are extremely relevant for learning to occur. In lan-
guage learning, anxiety or motivation may impair L2 enhance-
ment. Thus, blended learning has reported to be beneficial for
anxiety during asynchronous online lessons since more timid
learners feel more secure, and less pressured to express
themselves in English.
FINAL REMARKS
The present empirical study has one central axis, which is the teaching
modality (i.e. blended learning) as the main focus of the study. Second-
ary axes include: the subject (i.e. EFL), and the variables, which are
going to be presented shortly. Hence, the aim is to shed light on how
Primary Education undergraduates perceive blended learning in EFL
modules, and the effect that this condition might have had on certain
perceptual variables.
This study is guided by the following research questions:
‒ ‒
‒ What are the students’ perceptions in terms of:
‒ E-learning preference?
‒ Learning and teaching methodologies?
‒ Affective variables?
‒ Language skills?
‒ Peer interaction?
6. METHOD
6.2. INSTRUMENT
‒ ‒
a. E-learning preference (Q6).
b. Learning and teaching methodologies (Qs 1, 2, 3, 4, and 15).
c. Affective factors (Qs 5, 7 and 10).
d. Language skills (Qs 8, 9, 11, 12, and 13).
e. Peer interaction (Q14).
Question Description
i Sex (male or female)
ii Have you attended Primary Education lessons on a regular ba-
sis during the first term? (1= very rarely; 5= very frequently?
Iii What is your English level? (A1-A2-B1-B2-C1-C2)
1 I have learned a lot of contents. (1= very little; 5= a lot)
2 My attention to the lecturer’s explanation has been… (1= very
low; 5= very high).
3 This type of learning fits well with my education needs. (1= very
little; 5= a lot).
4 This is the best way to learn a foreign language. (1= disagree a
lot; 5= agree a lot).
5 This type of learning motivates me more.
6 I prefer this blended learning system. (1= disagree a lot; 5=
agree a lot).
7 This type of learning allows for a more individualized attention.
(1= disagree a lot; 5= agree a lot).
8 This type of learning has made me enhance my written skills
(Writing). (1= disagree a lot; 5= agree a lot).
9 This type of learning has made me enhance my oral skills
(Speaking). (1= disagree a lot; 5= agree a lot).
10 This type of learning favors the absence of anxiety when speak-
ing in English (Speaking). (1= disagree a lot; 5= agree a lot).
11 This type of learning favors the enhancement of reading com-
prehension skills (Reading). (1= disagree a lot; 5= agree a lot).
12 This type of learning has favored the enhancement of oral com-
prehension (Listening). (1= disagree a lot; 5= agree a lot).
13 This type of learning facilitates the comprehension of grammar
contents (Use of English). (1= disagree a lot; 5= agree a lot).
14 The interactions with my peers have been fruitful in this type of
learning.
15 This type of learning has facilitated autonomous learning. (1=
disagree a lot; 5= agree a lot).
The internal validity of the survey instrument was verified with
Cronbach’s a. Table 2 below displays the values of the test of internal
validity. As can be seen, the value (α = .909) is a satisfactory boundary.
‒ ‒
TABLE 2. Cronbach’s values.
Cronbach’s α
Estimate Cronbach's α
Point estimate .909
95% CI lower bound .874
95% CI upper bound .945
Note. Of the observations, pairwise complete cases were used.
Given that the main aim was to observe students’ perceptions about the
blended learning condition, the results have been analyzed by obtaining
the mean as the measure of central tendency, and the standard deviation
for the measure of dispersion. When necessary, references to the per-
centages will be made, especially in the figures used.
7. RESULTS
‒ ‒
FIGURE 1. Graph for question 6.
1.b. What are the students’ perceptions in terms of learning and teach-
ing methodologies?
The results corresponding to this question allude to how students per-
ceived learning and teaching methodologies from the perspective of
blended learning. Question 1 enquired students about how they had
learnt contents. As can be seen in Figure 2, students held a rather neutral
view (M= 3.47, SD= 0.99). Question 2 referred to the amount of atten-
tion paid to the lecturers’ explanations, with a very similar tendency as
in Q1 (M= 3.83, SD= 0.82), indicating that students believed their at-
tention was slightly high with blended learning. Regarding Question 3,
students did hold a neutral view toward the appropriateness of blended
learning as an adequate teaching-learning modality (M= 3.26, SD=
3.26). Question 4 enquired specifically about their perceptions on
blended learning as the best way to learn an FL. Students indicated that
they believed blended learning was not the best learning methodology
(M= 2.50, SD= 1.12). Finally, Question 15 focused on whether blended
learning facilitated autonomous learning. As can be seen in Figure 2,
students regarded blended learning as an adequate methodology foster-
ing autonomy in the process of learning (M= 3.67, SD= 0.99).
‒ ‒
FIGURE 2. Graph for questions 1, 2, 3, 4 and 15.
‒ ‒
FIGURE 3. Graph for questions 5, 7, and 10.
‒ ‒
FIGURE 4. Graph for questions 8, 9, 11, 12, and 13.
‒ ‒
8. DISCUSSION
‒ ‒
which were not. As pointed out in the scholarly literature (Hrastinski,
2019; Lorenzo & Gallon, 2019), the overall absence of significant en-
hancement of linguistic skills (e.g. Reading, Use of English, Listening
or Writing) might be closely associated with a reduced number of ad-
ditional technology-based learning resources. Besides the inclusion of
a synchronous component with the videoconferencing lessons, more
asynchronous activities might have contributed to strengthening and
furthering other more receptive linguistic skills (e.g. Reading).
Previous research had indicated that e-learning experiences did foster
more peer-interaction (e.g. Wang, 2004). In our study, undergraduate
students perceived peer-interaction as more positively than in previous
research and regarded it as valuable for individual and group interac-
tion. Nonetheless, we must not forget that our study was based upon a
blended learning condition, which includes a physical presence compo-
nent (i.e. face-to-face lessons). The scholarly literature (e.g. Lu et al.,
2014) has advocated for e-learning in the form of synchronous vide-
oconferencing teaching as valuable for peer interaction given the im-
mediacy of the context. However, these studies were fully conducted
under an online learning environment, where physical presence was not
a component. Thus, blended learning was seen as a favorable learning
condition for interaction between students. This ran counter to previous
research (Moradi et al., 2019) which indicated that online synchronous
teaching-learning activities favored rather timid or more intimated L2
learners to take part in the lessons.
9. CONCLUSION
The present study has attempted to shed light upon the language learn-
ing affordances of blended learning as a teaching-learning modality in
an EFL context. As was reported, higher education learners have re-
vealed a preference toward blended learning. Although they are more
digitally literate than their older counterparts, the presence of a physical
component in the learning process seems to favor that the online com-
ponent is more exploitable and beneficial from the perspective of lan-
guage learning. Additionally, the role of anxiety or motivation has not
‒ ‒
been considerably modified with the blended learning condition, which
leads us to believe that these variables are more related to the develop-
ment of the EFL lesson itself and learner-internal variables, than the
setting where it is conducted. Also, there seems to be a clear need to
focus on both productive and receptive written skills by including sev-
eral asynchronous exercises.
Nonetheless, the arguments presented in the previous section are
mainly tentative since perceptions are not the sole variables that have
to be examined. Despite the concluding remarks and the substantial ev-
idence gathered in our study, some limitations have to be reported: (i)
relevant variables such as socioeconomic factors were not considered
in this empirical study, and these are important ones given that some
students might have encountered difficulty in following the lessons re-
motely; (ii) the importance of digital literacy has been completely dis-
regarded since not all students might possess the same level of digital
competence; (iii) students were not asked about their previous linguistic
experience which, in some way, might affect their perceptions about
the usefulness of the blended learning condition.
On the basis of these limitations, further research should endeavor to
explore how blended learning is conducted in the real classroom, that
is, carry out observational research in an attempt to gather direct infor-
mation about the teaching methodology. In relation to this, the im-
portance of students’ performance shall be equally underscored in fu-
ture research attempts given the relevance of establishing correlations
between within-subject performance and their perceptions regarding
the different variables in the survey. Finally, it would be interesting to
explore whether affective variables (e.g. motivation or anxiety) are in
strong correlation with what they perceive in blended learning. More
light should be shed on whether the implications of digital literacy skills
affect in a dual manner the L2 development and the effectiveness of
blended learning.
‒ ‒
10. REFERENCIAS
Bailey, D. R., & Lee, A. R. (2020). Learning from experience in the midst of
COVID-19: Benefits, challenges, and strategies in online teaching.
CALL-EJ, 21(2), 178-198.
Bates, A. W., & Poole, G. (2003). Effective Teaching with Technology in Higher
Education: Foundations for Success. Jossey-Bass, An Imprint of Wiley.
Blake, C. (2009). Potential of text‐based internet chats for improving oral fluency
in a second language. The Modern Language Journal, 93(2), 227-240.
https://doi.org/10.1111/j.1540-4781.2009.00858.x
Bozkurt, A., and Sharma, R. C. (2020). Emergency Remote Teaching in a Time
of Global Crisis Due to CoronaVirus Pandemic. Asian Journal of
Distance Education 15 (1): i–vi. Accessed 10 January 2021.
http://asianjde.org/ojs/index.php/AsianJDE/article/view/447
Bueno-Alastuey, M. (2011). Perceived benefits and drawbacks of synchronous
voice computer mediated communication in the foreign language
classroom. Computer Assisted Language Learning, 24 (5), 419–432.
Bueno-Alastuey, M. (2013). Interactional feedback in Synchronous voice-based
computer mediated communication: Effect of dyad. System, 41(2), 543–
559.
Carrillo, C., & Flores, M. A. (2020). COVID-19 and teacher education: a
literature review of online teaching and learning practices. European
Journal of Teacher Education, 43(4), 466–487.
https://doi.org/10.1080/02619768.2020.1821184
Chanrungkanok, P. (2004). A naturalistic study of the integration of computer-
mediated communication into oral discussion in an EFL college
classroom in Thailand. PhD dissertation. Indiana University,
Bloomington, IN.
Chen, N., Ko, H., Kinshuk., & Lin, T. (2005). A model for synchronous learning
using the Internet. Innovations in Education and Teaching International,
42(2), 181–194. doi:10.1080/14703290500062599
Coman, C., Țîru, L. G., Meseșan-Schmitz, L., Stanciu, C., & Bularca, M. C.
(2020). Online teaching and learning in higher education during the
coronavirus pandemic: Students’ perspective. Sustainability, 12(24), 1–
22. https://doi.org/10.3390/su122410367
Dhawan, S. (2020). Online Learning: A Panacea in the Time of COVID-19
Crisis. Journal of Educational Technology Systems, 49(1), 5–22.
https://doi.org/10.1177/0047239520934018
Fischer, H., Heise, L., Heinz, M., Moebius, K. & Koehler, T. (2014). E-learning
trends and hypes in academic teaching. Methodology and findings of a
‒ ‒
trend study. In Proceedings of the International Association for
Development of the Information Society (IADIS) International
Conference on Cognition and Exploratory Learning in the Digital Age
(CELDA), Porto, Portugal, 25–27 October 2014; pp. 63–69.
Garcés-Manzanera, A. (forthcoming/2021). A comparison between online and
blended learning in an EFL course during the pandemic: exploring
undergraduates' perceptions. In "De la filosofía digital a la sociedad del
videojuego. Literatura, pensamiento y gamificación en la era de las
redes sociales. (pp. n.d.). Madrid, Spain: Dykinson.
Garrison, D. R. & Vaughan, N. D. (2008). Blended Learning in Higher
Education. framework, Principles, and guidelines. San Francisco:
Jossey-bass, A Wiley Imprint.
Gillett-Swan, J. (2017). The challenges of online learning: Supporting and
engaging the isolated learner. Journal of Learning Design, 10(1), 20- 30.
https://doi.org/10.5204/ jld.v9i3.293
Healey, D. (2016). Language learning and technology: Past, present and future. In
F. Farr & L. Murray (Eds.), The Routledge handbook of language
learning and technology (pp. 38–55). Abingdon, UK: Routledge.
Hrastinski, S. (2019). What do we mean by blended learning? TechTrends, 63 (5),
564–569.
Huber, S. G., and Helm, C. (2020). COVID-19 and Schooling: Evaluation,
Assessment and Accountability in Times of Crises—reacting Quickly to
Explore Key Issues for Policy, Practice and Research with the School
Barometer. Educational Assessment, Evaluation and Accountability, 32:
237–270. doi:10.1007/s11092-020-09322-y.
Jauregi, K., & Bañados, E. (2008). Virtual interaction through video-web
communication: A step towards enriching and internationalizing
language learning programs. ReCALL: the Journal of EUROCALL,
20(2), 183.
Jauregi, K., de Graaff, R., van den Bergh, H., & Kriz, M. (2012). Native-
nonnative speaker interactions through video-web communication: a
clue for enhancing motivation? Computer Assisted Language Learning,
25(1), 1-19. doi:10.1080/09588221.2011.582587
Kern, R., Ware, P. D., & Warschauer, M. (2004). Crossing frontiers: New
directions in online pedagogy and research. Annual Review of Applied
Linguistics, 24, 243–260. doi: 10.1017/S0267190504000091
Ko, C. J. (2012). Can synchronous computer-mediated communication (CMC)
help beginning-level foreign language learners speak? Computer-
Assisted Language Learning, 25(3), 217–236.
‒ ‒
Lenkaitis, C. A. (2020). Technology as a mediating tool: videoconferencing, L2
learning, and learner autonomy. Computer Assisted Language Learning, 33(5–
6), 483–509. https://doi.org/10.1080/09588221.2019.1572018
Loewen, S., & Reissner, S. (2009). A comparison of incidental focus on form in
the second language classroom and chatroom. Computer Assisted
Language Learning, 22(2), 101-114.
Lorenzo, N. & Gallon, R. (2019). Smart pedagogy for smart learning. Didactics
of smart pedagogy, pp. 41–69.
Lu, R., Goodale, T., & Guo, Y. (2014). Impact of videoconference with native
English speakers on Chinese EFL learners’ oral competence and self-
confidence. Open Journal of Social Sciences, 2(2), 54–60.
doi:10.4236/jss.2014.22008
Muir, T., N. Milthorpe, C. Stone, J. Dyment, E. Freeman, and B. Hopwood. 2019.
Chronicling Engagement: Students’ Experience of Online Learning over
Time. Distance Education, 40 (2), 262–277.
doi:10.1080/01587919.2019.1600367
Pazilah, F. N., Hashim, H., & Yunus, M. M. (2019). Using technology in ESL
classroom; Highlights and challenges. Creative Education, 10, 3205-
3212. https://doi.org/10.4236/ ce.2019.1012244
Pellettieri, J. L. (1999). Why-talk? Investigating the role of task-based interaction
through synchronous network-based communication among classroom
learners of Spanish (Unpublished doctoral dissertation). University of
California Davis, Davis, CA.
Satar, H. M., & Özdener, N. (2008). The effects of synchronous CMC on
speaking proficiency and anxiety: Text versus voice chat. The Modern
Language Journal, 92(4), 595-613.
Simon K. S., Cheung, S. K, Kwok, L., Kubota, K.,Lee, L. & Tokito, J. (Eds.)
(2018). Blended Learning. Enhancing Learning Success. Springer
International Publishing. doi:10.1007/978-3-319-94505-7
Vurdien, R. (2019). Videoconferencing: Developing students’ communicative
competence. Journal of Foreign Language Education and Technology,
4(2), 269-298.
Wang, Y. (2007). Task Design in Videoconferencing-supported Distance
Language Learning. Calico Journal, 24(3), 591-630.
Yamada, M., & Akahori, K. (2007). Social presence in synchronous CMC-based
language learning: How does it affect the productive performance and
consciousness of learning objectives? Computer Assisted Language
Learning, 20(1), 37-65.
‒ ‒
CAPÍTULO 51
IRENE ACOSTA-MANZANO
Universidad de Málaga
ELVIRA BARRIOS
Universidad de Málaga
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
las emociones positivas como la de Fredrickson pueden concienciar so-
bre el impacto que tienen las emociones positivas en la comunicación
en LE.
Las emociones positivas funcionan para "ampliar el repertorio momen-
táneo de pensamiento y acción de las personas y construir recursos per-
sonales duraderos" (Fredrickson, 2004. p. 1369). La teoría de ampliar
y construir responde a tres causas de las emociones positivas: la cons-
trucción de recursos que podrían ser útiles en el futuro, la ampliación
de los repertorios de pensamiento-acción y la eliminación de las conse-
cuencias indeseables que las emociones negativas pueden haber desen-
cadenado previamente (Fredrickson, 2003). Las emociones positivas
fomentan la curiosidad, la creatividad, el juego y la exploración, que a
su vez son beneficiosos para el proceso de enseñanza-aprendizaje de
LE. Consecuentemente, las emociones positivas pueden ampliar las
percepciones de los aprendientes, aumentar el compromiso con la LE y
la exploración en entornos desconocidos. Estas tareas consiguen que
los aprendientes sean más conscientes durante su aprendizaje de LE
(Mackey, 2006) y que creen recursos para el futuro (Gregersen et al.,
2014).
MacIntyre y Gregersen (2012) adoptaron la teoría de ampliar y cons-
truir de Fredrickson argumentando que las emociones positivas fomen-
tan la construcción de recursos, ya que tienden a ampliar las perspecti-
vas, lo que permite a los individuos absorber la LE mientras que las
emociones negativas tienden al efecto opuesto. MacIntyre y Gregersen
(2012) explicaron que las emociones negativas tienden a reducir el en-
foque y restringir la amplia gama de posibles fuentes de aprendizaje de
la LE. Por lo tanto, los estudiantes deben encontrar un equilibrio entre
las emociones positivas y las negativas en el aula de LE. Las emociones
funcionan como motor para ampliar la imaginación.
Dado que uno de los constructos clave de este estudio es el de DALE
es necesario definir el constructo de disfrute. Según Boudreau et al.
(2018), los seres humanos tienden a experimentar placer cuando satis-
facen una necesidad impulsada por una función biológica o un condi-
cionamiento social (Csikszentmihalyi, 1997). El disfrute es el placer un
paso hacia delante. El disfrute es la emoción que se siente cuando uno
‒ ‒
no solo satisface sus necesidades, sino que las excede para lograr algo
inesperado o sorprendente (Csikszentmihalyi, 2008). Si el placer puede
ocurrir simplemente realizando una actividad o completando una ac-
ción, el disfrute adquiere dimensiones adicionales como un enfoque in-
telectual, una mayor atención o un desafío óptimo (pág.153).
La diferencia entre placer y disfrute reside en que el placer se relaciona
con la satisfacción de las necesidades, mientras que el disfrute trata so-
bre la progresión y la superación de límites desafiantes (Boudreau et
al., 2018). Cuando las emociones se ven de esta manera, se crea una
relación compleja entre las emociones positivas y negativas, donde
cierto nivel de ansiedad es una característica necesaria para producir
experiencias agradables (Boudreau et al., 2018). El término DALE hace
referencia a las emociones positivas experimentadas durante el proceso
de enseñanza-aprendizaje de LE.
Se ha descubierto que varios factores, como el género, el grupo de edad,
la educación o el nivel de competencia, afectan los niveles de DALE
experimentados por los estudiantes de LE.
Según los resultados de Dewaele y MacIntyre (2019), las mujeres ex-
perimentan niveles más altos de DALE. Además, el DALE podría im-
pulsar el proceso de aprendizaje de LE de los aprendientes dados los
efectos motivacionales de la emoción (Dewaele et al., 2016; MacIntyre,
2002). Las participantes femeninas de Jiang y Dewaele (2019) también
obtuvieron niveles mayores de DALE en clase que los masculinos. Las
causas de esta diferencia de género se atribuyeron a que las calificacio-
nes académicas aumenten la determinación de las mujeres a tener éxito
en la clase de LE. Asimismo, las mujeres informaron de que aprender
en equipo, crear vínculos sociales y prestar atención a lecciones diver-
tidas e interesantes contribuía en mayor medida a aumentar sus niveles
de DALE. Las mujeres parecían más comprometidas y motivadas emo-
cionalmente en el aprendizaje de LE (Jiang & Dewaele, 2019). A dife-
rencia de este estudio, los hallazgos de Dewaele, Franco Magdalena y
Saito (2019) indicaron que el género no establece diferencias en los ni-
veles de DALE. En cuanto al género del profesor, Dewaele et al. (2019)
descubrieron que el género no estaba relacionado con el DALE de los
participantes, mientras que Split et al. (2012) y Dewaele y Mercer
‒ ‒
(2018) observaron que las docentes mostraban actitudes más positivas
hacia sus estudiantes, lo que podría afectar al nivel de DALE.
Con respecto a la edad, Dewaele y MacIntyre (2014) apreciaron un au-
mento en el DALE desde los preadolescentes hasta los treintañeros,
siendo el grupo de los cuarentañeros el que obtuvo puntuaciones signi-
ficativamente más altas que el resto de los grupos más jóvenes.
En cuanto a la formación y la competencia en la LE, Dewaele y Ma-
cIntyre (2014) descubrieron que los niveles de DALE aumentan signi-
ficativamente en todos los niveles de formación y que los grupos avan-
zados consiguen una puntuación de DALE más elevada que los grupos
de nivel intermedio.
Además, varios autores han ilustrado la importancia del papel del pro-
fesor para estimular el DALE. Los profesores que actúan como direc-
tores de orquesta tienen más probabilidades de aumentar el DALE de
los estudiantes que de reducir su ACLE (Dewaele & MacIntyre, 2019).
Dewaele et al. (2019) demostraron que la amabilidad del docente es el
mayor predictor más DALE. En el contexto chino, Jiang y Dewaele
(2019) advirtieron patrones similares a investigaciones anteriores, ex-
cepto por la aversión de estos estudiantes hacia los comportamientos
impredecibles de los docentes. En todos los estudios, DALE tendía a
activarse por el profesorado, mientras que la ACLE estaba más conec-
tada con el alumnado (Jiang & Dewaele, 2019). El entorno de aprendi-
zaje también influye en el DALE de los estudiantes (Khajavy et al.,
2018).
‒ ‒
reacción emocional negativa durante el aprendizaje o la utilización de
la segunda lengua”. Autores posteriores, no obstante, especificaron que
la ansiedad en la clase de LE (ACLE) no está conectada a la ansiedad
en general ni es un rasgo de personalidad, sino que depende del con-
texto de clase concreto (Horwitz et al., 1986). La ACLE consiste en un
conjunto de creencias, sentimientos, autopercepciones y comporta-
mientos estrechamente relacionados con el contexto de aprendizaje de
LE (Horwitz et al., 1986). MacIntyre y Gardner (1989), por su parte,
afirmaron que la ansiedad conlleva déficits en el rendimiento y apren-
dizaje de los aprendientes. Esta investigación dio pie al resto de estu-
dios sobre ACLE y sus efectos en el contexto de aprendizaje.
Algunos de los síntomas de ACLE que Horwitz et al. (1986) describie-
ron en aprendientes fueron los silencios repentinos, la evasión de la co-
municación, la afirmación de conocimiento de contenidos siendo inca-
paces de ponerlos en práctica, las quejas en cuanto a pronunciación, las
malas pasadas de los nervios cuando conocen la respuesta correcta y les
hacen escoger la incorrecta y la falta de resultados académicos satisfac-
torios en comparación con el tiempo que dedican a estudiar. Aida
(1994) añadió que el alumnado que padece mayor ACLE está menos
dispuesto a participar y sus resultados son peores que los de los que
padecen menos o ninguna ansiedad.
Los desencadenantes de ACLE se pueden categorizar en fuentes rela-
cionadas con el aprendiente, con con el contexto o con el docente. A lo
largo de los años muchos autores han estudiado las fuentes que ocasio-
nan ACLE (e.g., Bailey, 1983; Bensalem, 2017; Chan & Wu, 2004;
Gregersen & Horwitz, 2002; Gregersen, 2003; Horwitz et al., 1986;
Liu, 2006; Ohata, 2005; Price, 1991; Tóth, 2011; Von Worde, 2003;
Young, 1991, 1992). El estudio de Bailey (1983) concluyó que las fuen-
tes más comunes son las relaciones con el profesorado (la percepción
de las expectativas del docente o la necesidad de su aprobación), las
comparaciones con otros estudiantes, los exámenes y la comparación
entre los estándares y objetivos personales. Horwitz et al. (1986) atri-
buyeron la ACLE a creencias erróneas o irrealistas sobre el aprendizaje,
a tareas de producción y coproducción oral y a la infravaloración de la
dificultad de aprender una nueva LE. Price (1991) señaló como causa
‒ ‒
la infravaloración de los estudiantes de su capacidad para aprender una
LE. Young (1991) descubrió que las causas se relacionaban con creen-
cias sobre el aprendizaje de una LE del estudiantado y el profesorado,
las interacciones entre ambos, ansiedades personales, la dinámica de
clase y los exámenes. En 1992, Young añadió la falta de comprensión
oral a sus desencadenantes de ACLE. Gregersen y Horwitz (2002) ana-
lizaron cómo las tendencias perfeccionistas provocan ACLE. Von
Worde (2003) concluyó que también son causas de ACLE los efectos
del tratamiento del error, la falta de comprensión, las actividades orales,
las prácticas pedagógicas e institucionales, y la interacción con nativos.
Gregersen (2003) añadió el efecto peyorativo de que los compañeros se
rían del alumnado por sus errores. Chan y Wu (2004) afirmaron que las
causas de ACLE más comunes eran la actitud del profesorado, las ex-
pectativas de los padres, la dificultad de la tarea y evaluación, las inter-
acciones estudiante-docente en clase, la actitud de los compañeros y los
logros personales del estudiantado. Ohata (2005) coincidió en que las
causas eran la falta de confianza en su dominio de la LE, el miedo a una
evaluación negativa, las diferencias culturales, la competitividad y los
exámenes. Liu (2006) sumó a estos causantes de ACLE el bajo dominio
de la LE, la falta de vocabulario y el hecho de ser conminados a hablar
delante de sus compañeros y profesorado. Tóth (2011) señaló como po-
tenciador de ACLE las diferencias percibidas entre la utilización de la
LE fuera y dentro de clase, el objetivo de evitar errores, la presión de
tener que hacerlo bien en clase para la carrera, la posible evaluación
negativa por parte del profesorado y los compañeros, el miedo a parecer
menos competentes que el resto, el dominio de la LE de los compañe-
ros, y las experiencias de los compañeros en los países de la LE. Por
último, Bensalem (2017) confirmó que la posibilidad de suspender la
asignatura y el hecho de tener que comunicarse en la LE aumentaban
los niveles de ACLE.
‒ ‒
Benson (2001) categorizó el ULEFC en aprendizaje naturalista, apren-
dizaje autodirigido naturalista y aprendizaje autónomo. El aprendizaje
naturalista es el que tiene lugar inintencionadamente a través de la in-
teracción y/o comunicación con los hablantes de la LE. El aprendizaje
autodirigido naturalista se refiere a contextos de aprendizaje creados
para practicar la LE, sin la preocupación consciente de aprender la LE.
Por otra parte, el aprendizaje autónomo ocurre durante el proceso de
aprendizaje individual o autónomo, es decir, cuando el aprendiente se
encuentra solo o no está en presencia de un docente. Algunas investi-
gaciones han analizado el ULEFC y las emociones (Inada, 2017; Inada
& Inada, 2019; Lee & Lee, 2020; Ross & Rivers, 2018; Swandewi,
2020).
En cuanto a las emociones positivas, los hallazgos de Ross y Rivers
(2018) indicaron que el disfrute parecía correlacionarse en mayor me-
dida con el uso exitoso del lenguaje fuera del aula que dentro. Los par-
ticipantes del estudio de Swandewi (2020) afirmaron que su entu-
siasmo, determinado por sus capacidades autodidactas y de resolución
de problemas, hacía que usaran la LE fuera de clase por medio de in-
ternet, redes sociales, videojuegos, música y libros. Lee y Lee (2020)
descubrieron que el aprendizaje informal por medios digitales, como
hablar a través de redes sociales o ver videos de Youtube en la LE,
incrementaba el disfrute de los aprendientes de LE.
Con respecto a las emociones negativas, Inada (2017) halló que los es-
tudiantes que experimentaban mayor ACLE utilizaban el inglés menos
fuera de clase y estudiaban menos en casa. Inada e Inada (2019) confir-
maron que el ULEFC se relacionaba significativamente con el nivel de
ACLE; los estudiantes que apenas usaban la LE fuera de clase experi-
mentaban mayor ansiedad.
‒ ‒
relación dependía del grupo de edad (Dewaele & Dewaele, 2017) o no
existía (Dewaele et al., 2017).
Dewaele y MacIntyre (2014) fueron pioneros en analizar el efecto del
multilingüismo en el Disfrute en el Aprendizaje de Lengua Extranjera
(DALE), Foreign Language Enjoyment en inglés, y la Ansiedad en la
Clase de Lengua Extranjera (ACLE), Foreign Language Classroom An-
xiety en inglés. En su estudio, descubrieron que niveles más bajos de
DALE y más elevados de ACLE estaban relacionados con un nivel su-
perior de multilingüismo y/o viceversa entre otros factores como la
edad, el nivel de competencia en la LE, la percepción de su competencia
y el contexto de aprendizaje. Asimismo, el análisis de regresión en el
estudio Dewaele y MacIntyre (2019) identificó el número de LE cono-
cidas como un predictor de ACLE junto a otros 5 factores.
Cuando las asociaciones se compararon en tres grupos de aprendientes
en edad adolescente, los resultados del grupo de alumnado entre 14 y
15 años demostraron que el multilingüismo era un factor predictor de
DALE y ACLE (Dewaele & Dewaele, 2017). Los análisis de regresión
no mostraron esta asociación y predicción para los grupos de 12-13 y
16-18 años.
Los resultados del estudio de Dewaele et al. (2017), sin embargo, fue-
ron distintos a los de Dewaele y MacIntyre (2014, 2019) en el sentido
de que el número de LE que los participantes conocían no estaba rela-
cionado con las emociones de DALE (df (5, 185), F = 1.6, p = ns) y
ACLE (df (5, 185), F = 1.9, p = .09) que experimentaban.
En cuanto a la conexión del multilingüismo con la frecuencia de uso de
la LE fuera de clase, el único estudio relacionado que se ha encontrado
tras una búsqueda en las bases de datos de Scopus, Web of Science,
Dialnet y Google Scholar es el de Reda (2019). En su estudio, analizó
el uso del inglés de 5 aprendientes de bachillerato en Noruega. Los
aprendientes se caracterizaban por ser partes de minorías multilingües
en Noruega, es decir, todos hablaban al menos tres idiomas (inglés, no-
ruego y su lengua materna). De los 5 participantes, 3 eran de sexo fe-
menino (Arta, Sarah y Julia) y dos de sexo masculino (Danish y
Brahim). Arta nació y vivió en Noruega toda su vida, pero su lengua
‒ ‒
materna era el albano, la utilizaba en casa, con su familia y con algunos
amigos. Sarah había vivido en Noruega durante casi 3 años, su lengua
materna era el asirio, pero hablaba árabe y francés también. Julia nació
y se crió en Noruega, pero su lengua materna era el tamil, aunque solo
lo usaba oralmente con sus familiares y en casa. Danish nació y creció
en Noruega, hablaba urdu y punjabi con su familia. Las lenguas mater-
nas de Brahim eran el noruego por parte de madre y el árabe con su
padre. Utilizaba una lengua u otra según la persona con la que se comu-
nicaba. Tras el análisis de Reda (2019) del uso lingüístico de estas mi-
norías en Noruega, sus hallazgos mostraron que las minorías multilin-
gües utilizan el inglés con frecuencia fuera de clase.
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
España. Estos centros públicos, subvencionados a nivel nacional y ges-
tionados autonómicamente, se ciñen a planes de estudios conforme al
Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas (MCER) (Con-
sejo de Europa, 2001). Se animó al alumnado de las EEOOII a rellenar
el cuestionario del estudio por medio de correos electrónicos, platafor-
mas de aprendizaje virtuales y redes sociales.
Las edades de los participantes comprendían entre los 15 y los 72 años
(M = 40,71; D.E. = 13,26; Me = 43; Mo = 47). La representación feme-
nina (69,3%) fue mayor que la masculina (30,7%), acercándose mucho
a los datos indicados en los medios oficiales en cuanto a la distribución
de formación no obligatoria en EEOOII (66/34) (MECD, 2016, p. 4).
En cuanto al multilingüismo que la muestra presentó, la mayoría
(57,4%) no estudiaba ni había estudiado ninguna otra LE diferente a
aquella respecto de la cual cumplimentaron el cuestionario de recogida
de información, mientras que el 42,6% conocían, estudiaban o habían
estudiado al menos otra LE.
El 60% de la muestra contaba con estudios universitarios y el 73,4%
contaba con estudios superiores en el momento de la cumplimentación
del cuestionario. Según los datos registrados en el Instituto Nacional de
Estadística (2020), el 38,6% de la población en su conjunto cuenta con
estudios superiores. Por lo tanto, la muestra de este estudio tiene una
formación en estudios superiores bastante más elevada que la de la me-
dia nacional.
La mayoría de los participantes pertenecieron a las Comunidades Au-
tónomas de Andalucía (912) y las Islas Canarias (304). El alumnado de
la E.O.I. La Laguna, no obstante, fue el que presentó un mayor índice
de participación (23,7% de la muestra).
La Tabla 1 indica las características sociodemográficas de los partici-
pantes del estudio.
‒ ‒
TABLA 1. Características sociodemográficas de los participantes del estudio.
‒ ‒
EOI Lucena 199 (15,6%)
EOI Xauen 192 (15,1%)
EOI Accitania 97 (7,6%)
EOI Jerez de la Frontera 61 (4,8%)
EOI Granada 46 (3,6%)
EOI San Roque 44 (3,5%)
EOI Algeciras 38 (3%)
Escuela Ofi- EOI Motril 26 (2%)
cial de Idio- EOI Mairena de Aljarafe 18 (1,4%)
mas (EOI) EOI Roquetas de Mar 15 (1,2%)
Otra no especificada 12 (0,9%)
EOI Linares 7 (0,5%)
EOI Macael 5 (0,4%)
EOI Antequera 3 (0,2%)
EOI Fuerteventura 2 (0,2%)
EOI Murcia 1 (0,1%)
EOI Sevilla 1 (0,1%)
3.2. INSTRUMENTO
‒ ‒
3.2.2. Escala de Disfrute en el Aprendizaje de una Lengua Extranjera
‒ ‒
nerviosismo que se pueden experimentar en la clase de LE. Se utilizó
esta escala reducida porque se demostró que estos ítems mantenían la
fiabilidad de la escala original (MacIntyre, 1992). Los participantes tu-
vieron que responder la siguiente pregunta en una escala de Likert de 1
(Muy en desacuerdo) a 5 (Muy de acuerdo): ¿En qué medida está de
acuerdo con las siguientes afirmaciones? Responda conforme a la si-
guiente escala: Muy en desacuerdo / En desacuerdo / Indeciso/a / De
acuerdo / Muy de acuerdo.
‒ ‒
Menos de una vez al mes / Entre 1 y 4 veces al mes / Entre 1 y 2 veces
por semana / Entre 3 y 4 veces por semana / Entre 5 y 6 veces por
semana / Todos los días. Los ítems que tuvieron que rellenar fueron los
siguientes:
‒ ¿Con qué frecuencia habla en la lengua extranjera fuera de
clase? (Ej.: con amigos, familiares o conocidos, por negocios,
trabajo, internet, videojuegos, etc.).
‒ ‒
asociación del multilingüismo y DALE, ACLE y FULEFC se llevó a
cabo una prueba de normalidad de Kolmogórov-Smirnov, con la que se
constató que la distribución de los datos no era normal, por lo que se
optó por la prueba no paramétrica, de Kruskal-Wallis. Por último, prue-
bas post hoc de Dunn con corrección de Bonferroni se emplearon para
comparar los grupos por pares para establecer entre qué grupos se esta-
blecían diferencias significativas en cuanto a DALE, ACLE Y FU-
LEFC. Todos los datos se analizaron con el programa de estadística
para las Ciencias Sociales IBM SPSS 26.0 (IBM Corp, Armonk, Nueva
York, EEUU). La significancia se estableció en p ≤ 0,05.
4. RESULTADOS
‒ ‒
TABLA 4. Estadísticos descriptivos según el número de lenguas extranjeras aprendidas.
Multilin-
Media (Desviación estándar) de la variable
güismo
Idiomas
extra DALE ACLE FULEFC
(frecuen- (rango posible: 1-5) (rango posible: 1-5) (rango posible: 0-6)
cia)
1 LE (731) 4,22 (0,49) 3,10 (0,86) 2,13 (1,06)
2 LE (410) 4,22 (0,51) 3,00 (0,87) 2,24 (1,07)
3 o más
4,26 (0,43) 2,71 (0,89) 2,44 (1,23)
(132)
Muestra en
4,22 (0,49) 3,03 (0,87) 2,20 (1,08)
general
‒ ‒
TABLA 6. Comparaciones por parejas para ACLE.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
número de LE conocidas era un predictor de ACLE junto a otros 5 fac-
tores.
En cuanto a la relación entre el disfrute y el multilingüismo, los hallaz-
gos de este estudio coinciden con investigación previa ya que la rela-
ción existente fue muy débil y no significativa (r = 0,021; p = 0,457)
como en los casos del grupo de edad de 12 a 13 y 16 a 18 años (r =
0,094; p = 0,596 y r = -0,162; p = 0,275 respectivamente) de Dewaele
y Dewaele (2017).
Este estudio confirmó la relación existente entre el nivel de ACLE y el
multilingüismo, coincidiendo con los resultados de Dewaele y Dewaele
(2017), y Dewaele y MacIntyre (2019). No obstante, nuestros hallazgos
difieren con los obtenidos por Dewaele y MacIntyre (2014), cuyos re-
sultados no establecieron una asociación entre número de lenguas y ni-
vel de ACLE.
Con respecto a la relación entre el multilingüismo y el ULEFC, tras
realizar una búsqueda en las bases de datos de Web of Science, Scopus,
Dialnet y Google Scholar, esta investigación es la única que compara
cómo el número de LE que los aprendientes están estudiando, conocen
o han aprendido con anterioridad afecta al uso de la LE que hacen fuera
de clase.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
Deben reconocerse algunas limitaciones de este estudio. En primer lu-
gar, podría haber algún sesgo de autoselección dado que la participa-
ción en el estudio fue voluntaria. En segundo lugar, el estudio se realizó
con un número limitado de participantes en un contexto cultural, geo-
gráfico, educativo e institucional particular como es el contexto socio-
demográfico de las Escuelas Oficiales de Idiomas. Por lo tanto, los re-
sultados pueden no representar al conjunto de los estudiantes de
EEOOII en particular y de adultos en general.
A pesar de estas limitaciones, nuestro estudio contribuye a una com-
prensión más amplia de las asociaciones entre el nivel de multilin-
güismo y de DACE, ACLE y FULEFC. Dada la variedad de resultados
en los distintos estudios hasta la fecha en cuanto a la relación entre el
multilingüismo y las emociones, y la inexistencia de estudios que estu-
dien el efecto del multilingüismo en el uso extramural de la LE, parece
necesario continuar investigando en este campo con el fin de profundi-
zar en la comprensión de la interacción entre estos factores.
7. REFERENCIAS
Aida, Y. (1994). Examination of Horwitz, Horwitz, and Cope’s construct of
foreign language anxiety: The case of students of Japanese. The Modern
Language Journal, 78 (2), 155–168.
Alqarni, N. y Dewaele, J.-M. (2018). A bilingual emotional advantage? An
investigation into the effects of psychological and linguistic factors in
emotion perception in English of Arabic-English bilinguals and English
monolinguals. International Journal of Bilingualism.
https://doi.org/10.1177/1367006918813
Bailey, K. M. (1983). Competitiveness and anxiety in adult second language
learning: Looking at and through the diary studies. Classroom Oriented
Research in Second Language Acquisition, 67–102.
Bensalem, E. (2017). Foreign Language Learning Anxiety: The case of
trilinguals. Arab World English Journal (AWEJ), 8(1), 234–249.
http://doi.org/10.2139/ssrn.294-5904
Benson, P. (2001). Teaching and researching autonomy in language learning.
Pearson Education.
Boudreau, C., MacIntyre, P. D., & Dewaele, J.-M. (2018). Enjoyment and anxiety
in second language communication: An idiodynamic approach. Studies
in Second Language Learning and Teaching, 8(1), 149–170.
doi:10.14746/ssllt.2018.8.1.7
‒ ‒
Chan, D. Y. y Wu, G.-C. (2004). A study of foreign language anxiety of EFL
elementary school students in Taipei County. Journal of National Taipei
Teachers College, 17(2), 287–320.
Council of Europe. (2001). Common European Framework of Reference for
Languages: learning, teaching, assessment. Cambridge University Press.
Csikszentmihalyi, M. (1997). Happiness and creativity: Going with the flow.
Futurist, 31(5), 8–12.
Csikszentmihalyi, M. (2008). Flow: The psychology of optimal experience.
Harper Perennial.
Dewaele, J.-M. ( ). Multilingualism and affordances: Variation in self-per-
ceived communicative competence and communicative anxiety in French
L , L , L and L . International Review of Applied Linguistics, 48, –
. https://doi.org/10.1515/iral.2010.006
Dewaele, J.-M. y Dewaele, L. (2017). The dynamic interactions in foreign
language classroom anxiety and foreign language enjoyment of pupils
aged 12 to 18. A pseudo-longitudinal investigation. Journal of the
European Second Language Association, 1(1), 12–22.
https://doi.org/10.22599/jesla.6
Dewaele, J.-M. y MacIntyre, P. D. (2014). The two faces of Janus? Anxiety and
enjoyment in the foreign language classroom. Studies in Second
Language Learning and Teaching, 2(2), 237–274.
https://doi.org/10.14746/ssllt.2014.4.2.5
Dewaele, J.-M. y MacIntyre, P. D. (2016). Foreign language enjoyment and
foreign language classroom anxiety: The right and left feet of FL
learning? In P. D. MacIntyre, T. Gregersen and S. Mercer (Eds.),
Positive psychology in SLA (pp. 215–236). Multilingual Matters.
Dewaele, J.-M. y MacIntyre, P. D. (2019). The Predictive Power of Multicultural
Personality Traits, Learner and Teacher Variables on Foreign Language
Enjoyment and Anxiety. In Evidence-Based Second Language
Pedagogy, 263–286. Routledge.
https://doi.org/10.4324/9781351190558-12
Dewaele, J.-M. y Mercer, S. (2018). 11 Variation in ESL/EFL Teachers’
Attitudes towards their Students. Language teacher psychology.
Dewaele, J.-M., Franco Magdalena, A. y Saito, K. (2019). The effect of
perception of teacher characteristics on Spanish EFL Learners’ Anxiety
and Enjoyment. The Modern Language Journal, 103(2), 412–427.
https://doi.org/10.1111/modl.12555
Dewaele, J.-M., MacIntyre, P., Boudreau, C. y Dewaele, L. (2016). Do girls have
all the fun? Anxiety and Enjoyment in the Foreign Language Classroom.
Theory and Practice of Second Language Acquisition, 2(1), 41–63.
Retrieved from:
https://journals.us.edu.pl/index.php/TAPSLA/article/view/3941
‒ ‒
Dewaele, J.-M., Petrides, K. V. y Furnham, A. ( ). The effects of trait emo-
tional intelligence and sociobiographical variables on communicative anx-
iety and foreign language anxiety among adult multilinguals: A review and
empirical investigation. Language Learning, 58, –
Dewaele, J.-M., Witney, J., Saito, K. y Dewaele, L. (2017) Foreign language
enjoyment and anxiety: the effect of teacher and learner variables.
Language Teaching Research, 22(6), 676-697.
Fredrickson, B. L. (2001). The role of positive emotions in positive psychology:
The broaden and build theory of positive emotions. American
Psychologist, 56(3), 218–226.
Fredrickson, B. L. (2003). The value of positive emotions. American Scientist,
91(4), 330–335.
Fredrickson, B. L. (2004). The broaden-and-build theory of positive emotions.
Philosophical Transactions: Biological Sciences, 359, 1367–1377.
Fredrickson, B. L. (2006). The broaden-and-build theory of positive emotions. In
M. Csikszentmihalyi & I. Selega (Eds.), A life worth living:
Contributions to positive psychology (pp. 85–103). Oxford University
Press.
Gregersen, T. y Horwitz, E.K. (2002). Language learning and perfectionism:
Anxious and non-anxious language learners’ reactions to their own oral
performance. The Modern Language Journal, 86(4), 562–570.
Gregersen, T., MacIntyre, P. D. y Meza, M. D. (2014). The motion of emotion:
Idiodynamic case studies of learners’ foreign language anxiety. Modern
Language Journal, 98, 574–588. https://doi.org/10.1111/modl.12084
Gregersen, T. S. (2003). To err is human: A reminder to teachers of language-
anxious students. Foreign Language Annals, 36(1), 25–32.
Horwitz, E. K. Horwitz, M. B. y Cope, J. (1986). Foreign language classroom
anxiety. The Modern Language Journal, 70 (2), 125–132.
https://doi.org/100.1017/S026144480999036X
Inada, T. (2017). Determinants of foreign language classroom anxiety in a
Japanese EFL university classroom and its relationship to native
language use by students (Doctoral dissertation). Birkbeck, University of
London, UK.
Inada, T. y Inada, T. (2019). Is frequent use of English outside class related to the
degree of foreign language classroom anxiety? International Medical
Journal, 26(6), 505–509.
Instituto Nacional de Estadística (2020, October 13). Nivel de formación de la
población adulta por grupos de edad. CNED-2014 [Archivo de datos].
https://www.ine.es/jaxiT3/Tabla.htm?t=6369
International Test Commission (2018). ITC Guidelines for Translating and
Adapting Tests (2nd Ed.). International Journal of Testing, 18(2), 101–
134. https://doi.org/10.1080/15305058.2017.1398166
‒ ‒
Jiang, Y. y Dewaele, J.-M. (2019). How unique is the foreign language classroom
enjoyment and anxiety of Chinese EFL learners? System, 82(1), 13–25.
https://doi.org/10.1016/j.system.2019.02.017
Khajavy, G. H., MacIntyre, P. D. y Barabadi, E. (2018). Role of the Emotions and
Classroom Environment in Willingness to Communicate. Studies in
Second Language Acquisition, 40(3), 605–624.
https://doi.org/10.1017/s0272263117000304
Lee, J. S. y Lee, K. (2020). The role of informal digital learning of English and
L2 motivational self–system in foreign language enjoyment. British
Journal of Educational Technology. https://doi.org/10.1111/bjet.12955
Li, C., Dewaele, J.-M. y Jiang, G. (2019). The complex relationship between
classroom emotions and EFL achievement in China. Applied Linguistics
Review, 11(3), 485-510.
Liu, A. (2006). Anxiety in EFL classrooms: causes and consequences. TESL
Reporter, 39, 13–32.
MacIntyre P.D. (1999). Language anxiety: a review of the research for language
teachers. En D.J. Young (Ed.), Affect in foreign language and second
language teaching: A practical guide to creating a low-anxiety
classroom atmosphere (p. 27). Mc Graw-Hill.
MacIntyre, P. D. (2002). Motivation, anxiety and emotion in second language
acquisition. En P. Robinson (Ed.), Individual differences and instructed
language learning (pp. 45–68). John Benjamins.
MacIntyre, P. D. y Gregersen, T. (2012). Emotions that facilitate language
learning: The positive-broadening power of the imagination. Studies in
Second Language Learning and Teaching, 2(2), 193–213.
https://doi.org/10.14746/ssllt.2012.2.2.4
Mackey, A. (2006). Feedback, noticing and instructed second language learning.
Applied linguistics, 27(3), 405-430.
https://doi.org/10.1093/applin/ami051
MECD. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. (2016). Estadística de las
Enseñanzas no universitarias curso 2015–16. Resultados académicos del
curso 2015–2016. NOTA RESUMEN.
http://www.educacionyfp.gob.es/dam/jcr:3b8a66d0–0e97–4ac0–8f20–
a934b37db96d/nota1516.pdf
Motiei, G. (2018). Learner perceptions of emotions in the Foreign Language
Classroom. Universitat Pompeu Fabra.
https://www.tdx.cat/handle/10803/667129#-page=1
Ohata, K. (2005). Language anxiety from the teacher’s perspective: Interviews
with seven experienced ESL/EFL teachers. Journal of Language and
Learning, 3(1), 133–155.
‒ ‒
Olsson, E. y Sylvén, L. K. (2015). Extramural English and academic vocabulary.
A longitudinal study of CLIL and non-CLIL students in Sweden. Apples
– Journal of Applied Language Studies, 9(2), 77–103.
https://doi.org/10.17011/apples/urn.201512234129
Price, M. L. (1991). The subjective experience of foreign language anxiety:
Interviews with highly anxious students. Language Anxiety: From
Theory and Research to Classroom Implications, 101–108.
Reda, A. (2019). Multilingual students and their extramural English: A mapping
study of multilingual students from minority backgrounds’ extramural
English. (Master's thesis). University of Oslo.
https://www.duo.uio.no/bitstream/handle/10852/70131/Reda--
EDID4009-edited-.pdf?sequence=1&isAllowed=y
Ross A. S. y Rivers D. J. (2018). Emotional experiences beyond the classroom:
Interactions with the social world. Studies in Second Language Learning
and Teaching, 8(1), 103–126.
Spielberg, C. D. (1983). Manual for the state-trait anxiety inventory (STAI-Form
Y). Consulting Psychologists Press.
Split, J. L., Koomen, H. Y. y Jak, S. (2012). Are boys better off with male and
girls with female teachers? A multilevel investigation of measurement
invariance and gender match in teacher–student relationship quality.
Journal of School Psychology, 50, 363–378.
Sundqvist, P. (2009). Out-of-class English matters: out–of–school English and its
impact on Swedish ninth graders’ oral proficiency and vocabulary.
(Doctoral dissertation). Karlstad University, Sweden. http://www.diva-
portal.org/smash/record.jsf?pid=diva2%3A275141&dswid=118
Swandewi, C. K. (2020). The effect of ‘out-of-class’ activity on students’ lexical
competence and enthusiasm in learning EFL at Ampenan Primary
School. Asian EFL Journal, 27 (1), 210–256.
Von Worde, R. (2003). Students’ perspectives on Foreign Language Anxiety,
Inquiry, 8(1),1.
Young, D. J. (1991). Creating a low-anxiety classroom environment: What does
language anxiety research suggest? The Modern Language Journal,
75(4), 426–437.
Young, D. J. (1992). Language anxiety from the foreign language specialist’s
perspective: Interviews with Krashen, Omaggio, Hadley, Terrell, and
Rardin. Foreign Language Annals, 25(2), 157–172.
‒ ‒
CAPÍTULO 52
AITOR GARCÉS-MANZANERA
Universidad de Murcia, España
JOSÉ LUIS ROCA MARÍN
Universidad de Murcia, España
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
2. LA ENSEÑANZA BILINGÜE: AICLE Y EDUCACIÓN
FÍSICA
‒ ‒
vehículo de transmisión, sino también como vocabulario específico.
Además, uno de los objetivos de la implantación de AICLE ha de velar
porque los alumnos que participan en ese programa bilingüe superen
los objetivos planteados en la legislación educativa normal de tal forma
que sus conocimientos en el segundo idioma se asemejen a los de la
lengua materna (Masih, 1999). En este sentido, el contenido lingüístico
debe integrarse de forma natural en la materia en la que AICLE se im-
planta, pues hemos de mencionar los tres objetivos principales de esta
metodología: (1) contenido, (2) lengua, y (3) habilidades de diversa ín-
dole (Mehisto et al., 2008).
La implantación de AICLE, especialmente en niveles que incluyen tan-
tos cursos como la etapa de Educación Primaria, implica cambios a ni-
vel organizativo en cuanto al proceso de enseñanza-aprendizaje, por lo
que numerosos autores han puesto de manifiesto la necesidad de pro-
fundizar en el nivel de influencia de AICLE en dichas materias (véase
Cenoz et al., 2014; Pérez-Cañado, 2016).
En el ámbito específico de la materia de Educación Física, la imple-
mentación de AICLE ha sido más común que en otras materias (Baena
et al., 2017; Salvador et al., 2018; Zindler, 2013), con numerosos estu-
dios que exploran como afecta AICLE al aprendizaje de diferentes con-
tenidos en dicha materia (véase Salvador-García et al., 2019), el rol de
la motivación como consecuencia de la implantación de AICLE (Baena
et al., 2017; Salvador & Chiva, 2017, entre otros).
Tradicionalmente se ha puesto énfasis en la idoneidad de la Educación
Física como materia en la que AICLE puede fomentar el desarrollo de
habilidades lingüísticas, pero también sociales. Así, la adquisición de
una lengua suele tener lugar en entornos naturales y en contextos que
requieren no solo de reacción instantánea al interlocutor, sino también
de movimiento y motor (Magdaleno, 2011; Rodríguez-Abreu, 2010).
De esta forma, la integración de los contenidos de la lengua extranjera
junto con los de la Educación Física pueden hacer que los beneficios de
una complementen a la otra, dando lugar a un mayor aprendizaje.
La confluencia de ambas tiene que ver, sobre todo, por lo que implica
el propio término Educación Física, que según algunos autores (Dyson
‒ ‒
et al., 2004; McEvoy et al., 2017), implica la enseñanza y el aprendizaje
de lo relacionado con la esfera de la actividad física, pero también el
desarrollo de habilidades sociales, personales y cognitivas.
Estas habilidades sociales se ven reflejadas en la oportunidad que los
alumnos tienen para desarrollar su propia personalidad, y socializar, lo
cual es muy pertinente en el contexto que se genera (Andueza & La-
vega, 2017; Clancy & Hruska, 2005). Sin embargo, se ha de hacer hin-
capié en el hecho de que la mera participación en las sesiones lectivas
de Educación Física no lleva automáticamente al desarrollo de dichas
habilidades (Opstoel et al., 2019, citado en Salvador-García et al.,
2020).
Como hemos observado, la integración de AICLE en Educación Física
ha de abogar por un aprendizaje efectivo de la L2 en tanto que se den
las condiciones similares a las de la L2 (Clancy & Hruska, 2005). Por
otro lado, se ha considerado que la enseñanza de la Educación Física a
través de AICLE facilita la contextualización de los contenidos, y por
ende, su comprensión debido a las demostraciones prácticas que tienen
lugar cuando se explican determinadas acciones motrices (Ramos,
2007). De hecho, estas explicaciones conllevan que el alumno preste
atención con un enfoque dual: (a) se enfatiza en el vocabulario utili-
zado, lo cual favorece que se establezca una comparación entre la pro-
pia interlengua del alumno y el conocimiento (input) presentado (véase
“conflicto cognitivo”, Ellis, 2003); y (b) la posterior comprensión de lo
explicado pone de relieve que el alumno ha comprendido dicha expli-
cación. Esta conjunción se ve posteriormente reflejada en la ejecución
de las acciones motrices, así como de los ejercicios físicos propuestos
por el docente.
Sin embargo, no se puede entender el papel relevante de la unión de la
Educación Física con AICLE si no tenemos en cuenta las singularida-
des de ambas. Partiendo de la premisa de que el fin último de la Educa-
ción Física es orientar y favorecer el desarrollo de la actividad física,
más específicamente el cuerpo y el movimiento (Ramos & Ruiz Ome-
ñaca, 2011), no debemos olvidar que el alumnado que participa en ella
se expresa y se relaciona teniendo en cuenta a su yo, que también puede
ser desarrollado desde una lengua extranjera.
‒ ‒
Por ello, la integración de las estructuras lingüísticas planteadas para la
sesión lectiva han de estar integradas ya sea de forma explícita o implí-
cita en un contexto comunicativo significativo y real (Coral & Lleixà,
2013). Así, dado que la Educación Física está orientada a la acción por
tratarse de actividades enmarcadas en el contenido (Cummins, 2000),
ésta consigue que se asocie la comunicación con la ejecución de las
acciones motrices, de la misma forma que las actividades físicas pro-
puestas (Mentz, 2010). De la misma forma, esta asociación de la comu-
nicación con el ejercicio físico – y en el caso de Educación Primaria,
en su mayoría, relacionado con juegos colectivos – fomenta una mayor
motivación hacia el aprendizaje de idiomas, propiciada por esta moti-
vación intrínseca propia de la Educación Física (Sánchez Bañuelos,
1992). Si bien la motivación como concepto, y como área de alto interés
para la investigación y la práctica pedagógica, adquiere particular rele-
vancia en este contexto, dada la importancia para el presente estudio,
comentaremos la misma de forma más detallada en la sección 4.
Finalmente, la implantación del uso de la lengua extranjera (LE) como
vehículo para la transmisión de conocimientos puede englobar dificul-
tades como que los contenidos de la materia no lingüística, es decir, la
Educación Física, no sean comprendidos en su totalidad. Por ello, el
uso de la LE en este contexto implica que se deban aportar instrucciones
adicionales (véase Chiva & Salvador, 2016) además de las que ya se
han proporcionado. Pese a que esta acción implique una reducción del
tiempo disponible para la sesión lectiva, no hemos de olvidar que la
comprensión y ejecución correcta de lo explicado en la actividad física
ha de ser el fin último. Además de estas instrucciones adicionales, el
uso de la LE fomenta que se aporte apoyo tanto lingüístico (es decir,
relacionado con el vocabulario y las estructuras gramaticales) como a
nivel gestual para las cuatro destrezas, pero poniendo especial énfasis
en las destrezas de speaking y Reading (Coral, 2012; Hernando, 2015).
De la misma forma, la comunicación de los contenidos y su compren-
sión puede facilitarse a través de la proporción de materiales extra que
vayan más allá de la mera explicación oral (Coral et al., 2017). Sin em-
bargo, como se ha mencionado anteriormente, el uso de estas estrate-
gias pedagógicas para facilitar el aprendizaje de contenidos, y la
‒ ‒
comprensión de las diferentes actividades físicas planteadas, conlleva
que pueda existir una reducción del tiempo dedicado a la actividad fí-
sica.
Finalmente, la convergencia de AICLE con la Educación Física ha sido
materializada en un concepto denominado PE-in-CLIL (Coral i Mateu,
2013; Machunsky, 2007). De hecho, la mayoría de la investigación lle-
vada a cabo en este contexto (véase Coral, 2012; Christopher et al.,
2012; Figueras et al., 2011) muestra que debe existir un equilibrio entre
los contenidos motores, lingüísticos, pero también cognitivos. No obs-
tante, y pese a que algunos estudios (Coral, 2012) insisten en ello, la
inclusión del componente social es fundamental para comprender y po-
tenciar el aprendizaje de la lengua.
En la siguiente sección pasaremos a explicar cómo desarrollar una pro-
puesta basada en PE-in-CLIL según Coral (2013a).
FUNDAMENTACIÓN TEÓRICA
‒ ‒
dentro de lo que dicta, en primera instancia, la legislación educativa
curricular en Educación Física. Por otro lado, no se debe olvidar la im-
portancia de incluir las 4 Cs correspondientes al marco en el que AICLE
se inscribe (Coyle et al., 2010). Por ende, PE-in-CLIL ha de tratar el
contenido, la comunicación, la cognición, y por último, la cultura. Co-
ral (2013) identifica la primera C, es decir, contenido, con los tres blo-
ques relacionados con las experiencias motoras:
‒ Desarrollo motor, actividad física y salud.
‒ Danza y expresión corporal.
‒ Juegos y deportes.
‒ ‒
cognitivos. De esta forma, el alumnado puede usar las estruc-
turas lingüísticas de una forma pragmática.
En este sentido, Coral (2013) indica que “as the content is always the
dominant element […] vocabulary, structures and functions are depend-
ent on the former” (p. 45-46). Así pues, pese a que pueda parecer que
cada C sea independiente, la realidad es que hay una interrelación entre
ellas.
Por otro lado, la tercera C hace referencia a la cognición, que está rela-
cionada con las destrezas de pensamiento de bajo nivel (en inglés, Lo-
wer Order Thinking Skills [LOTS], en inglés) y de alto nivel (en inglés,
Higher Order Thinking Skills [HOTS]). Nos referiremos a las mismas
utilizando dichos acrónimos. Estas destrezas están interrelacionadas
con los mecanismos cognitivos, es decir, esfuerzo cognitivo, resolución
de problemas, así como habilidades de pensamiento crítico (Graham,
2008). En este sentido, LOTS hace referencia a habilidades que impli-
can la memorización, la comprensión, la aplicación de lo aprendido, la
identificación, el conflicto cognitivo (es decir, la comparación del co-
nocimiento previo con el recibido), entre otras. Por otro lado, HOTS
implica mecanismos cognitivos de mayor dificultad, como puede ser
analizar, sintetizar, juzgar, predecir, o resolver problemas de forma es-
tratégica (Coral, 2013a). En este caso, el rol de la cognición en PE-in-
CLIL resulta clave para comprender como funcionan muchas de las in-
teracciones entre iguales para la consecución de un ejercicio. Para ilus-
trar el papel de las diferentes destrezas cognitivas, supongamos que un
grupo de alumnos tiene que participar en un juego en el que han de
tomar decisiones. Como grupo, el análisis y evaluación de los pasos a
seguir engloba comparar ideas, hacer juicios sobre la opinión del resto,
identificar patrones o similitudes, y finalmente, aplicar una táctica de
resolución de problemas. Llevar este tipo de destrezas cognitivas a la
LE con la metodología AICLE implica que el alumnado se ve inmerso
en: (i) el desarrollo de sus capacidades lingüísticas, tanto por la com-
prensión de la explicación como por la posterior resolución de la acti-
vidad, y (ii) el desarrollo de sus destrezas cognitivas con una transfe-
rencia de lo ya conocido en su lengua materna hacia la LE.
‒ ‒
Finalmente, la cuarta C alude a cultura y ciudadanía, lo cual está estre-
chamente relacionado con las habilidades sociales, desarrollo personal,
la comprensión intercultural, pero sobre todo en el ámbito de Educación
Física, la cooperación y el trabajo en equipo.
Como menciona Coral (2013a), la materia de Educación Física se cen-
tra fundamentalmente en el aprendizaje duradero en el ámbito de lo fí-
sico, intelectual, social y emocional, que mediante la actividad física
ayuda a desenvolverse en diversos contextos (Doherty & Brennan,
2008), o al menos, a imitar reacciones semejantes a las de estos.
Coral (2013a) también hace referencia a 14 cuestiones / contenidos que
estructuran PE-in-CLIL. De entre estas, podemos destacar para el pre-
sente trabajo las siguientes: movimiento controlado y coordinado, mo-
verse con seguridad e imaginación, el uso y familiarización con un am-
plio rango de equipamiento deportivo, cooperación, resolución de pro-
blemas y creatividad a través de experiencias motrices.
Además, se nos mencionan también cuatro competencias clave en los
programas de AICLE en EF:
1. Comunicación en lengua extranjera.
2. Aprendiendo a aprender.
‒ ‒
lingüísticos o ambos. En este sentido, “the teaching objectives of the
lesson plans must offer a balanced combination of motor-oriented and
language-oriented goals” (Coral, 2013a, p. 48).
Por tanto, tras lo explicado en secciones previas, hemos de tener en
cuenta que en un enfoque en el que AICLE se integra con EF, los con-
tenidos han de estar ligados a las 4 Cs (véase Tabla 1).
Contenido
Desarrollo motor, actividad física y salud.
Expresión corporal y danza.
Juegos y deportes.
Comunicación
Vocabulario
Estructuras lingüísticas
Funciones del lenguaje
Cognición
LOTS
HOTS
Cultura
A continuación, una vez que ya hemos presentado esta tabla previa que
ha de contener los contenidos de los que versará la sesión lectiva, pasa-
remos a mostrar la programación de aula (véase Tabla 2) en la que au-
namos la organización de PE-in-CLIL basándonos en Coral (2013a):
TABLA 2. Programación de aula en PE-in-CLIL.
Objetivos didácticos
Contenidos motores relacionados
Vocabulario, estructuras y funciones
Habilidades críticas, personales y sociales
Recursos e infraestructuras necesarias
Secuenciación de actividades
(Indicando para cada actividad: objetivos y du-
ración).
‒ ‒
Uno de los aspectos más relevantes de esta secuencia didáctica tiene su
base en la introducción del apartado de vocabulario, estructuras y fun-
ciones, ya que integra los requerimientos de AICLE en cuanto a la LE.
No obstante, lo esencial de PE-in-CLIL radica en las actividades que se
propongan de tal forma que ese “aprendizaje por experiencia” tenga lu-
gar. No se puede negar que la especificidad de ciertos términos usados
en la clase de EF en la propia lengua materna puede suponer una com-
plicación muy importante, sobre todo si el alumnado implicado no está
acostumbrado a esta secuencia de aprendizaje. Por ello, el docente ha
de informar al alumnado de la importancia de conocer el vocabulario
base que será utilizado a lo largo de todas las sesiones. Por ello, puede
darse el caso de que se haga uso de nueva terminología, por ello es
importante que haya una fase introductoria en la sesión en la que se
introduzca la actividad, y se realice una activación del conocimiento
previo (Velazquez & Hernández, 2010). En cierto modo, en una sesión
lectiva tradicional de EF, las tres partes principales son: (1) calenta-
miento, (2) desarrollo de las actividades, y (3) relajación. En el caso de
PE-in-CLIL, la confluencia de las peculiaridades de la enseñanza de EF
junto con las de la LE hacen que, como se ha visto, la organización de
la sesión lectiva varíe en mayor o menor medida.
En el caso de la etapa de Educación Primaria, el tipo de alumnado ya
sea en niveles inferiores (por ejemplo, 1º o 2º curso) o superiores (5º o
6º curso), implica que llegan a la sesión listos para comenzar a moverse
y permanecer activos, y, por tanto, su atención a las explicaciones del
docente no sea lo efectiva que deseemos. Así, se ha de utilizar demos-
traciones prácticas para captar la atención – esto incluye dirigir su aten-
ción hacia objetos o equipamiento deportivo específico en el que expli-
quemos o ejemplifiquemos la actividad a realizar; también nos referi-
mos al uso de tarjetas visuales que propicie interés – por lo que el do-
cente ha de ser especialmente creativo en cómo presentar la sesión.
No debemos olvidar la importancia que adquiere en una sesión PE-in-
CLIL la fase de relajación o vuelta a la calma, ya que este tiempo, ade-
más de poder dedicarse a estirar desde el punto de vista de la actividad
física, también puede aprovecharse para reflexionar sobre las
‒ ‒
actividades realizadas y fomentar la cognición (Doherty & Brennan,
2008; Graham, 2008; Velázquez & Hernández, 2010).
En la próxima sección, trataremos el papel de la motivación, la autono-
mía y la orientación a la tarea. Abordaremos de forma teórico-práctica
cómo los fundamentos teóricos de la motivación pueden integrarse en
el aula de PE-in-CLIL.
‒ ‒
La motivación constituye un elemento crucial en cualquier materia, es-
pecialmente en Educación Primaria, pero su relevancia es mayor aún
en el contexto de la Educación Física (Florence, 1991), ya que esta en-
globa un gran componente cooperativo y social, enfocado a la supera-
ción de metas. Esta naturaleza social y cooperativa favorece, por un
lado, la integración con la LE, que también es comunicativa y social, y
por otro lado, que la motivación se incremente debido al valor que ad-
quiere el scaffolding para apoyar el aprendizaje.
Cecchini et al. (2013) realizaron un estudio donde observaron como la
aplicación de la TAD en aulas de Educación Primaria en EF en tercer
ciclo (5º y 6º cursos) mostraron que el trabajo cooperativo, así como la
construcción colectiva de metas favorecen la autonomía y la percepción
de la competencia propia. En este estudio también se observó la impor-
tancia del clima motivacional, pues el papel del docente ha de poner de
relieve la demostración de la habilidad a través de ciertas actividades.
Así, aquellos estudiantes motivados con orientación a la tarea demos-
traron obtener mayores habilidades y aprendizaje, fomentando la
cooperación.
Finalmente, la metodología también es importante, pues la presentación
de contenidos atractivos, y juegos y actividades nuevas, fomentan el
emplazamiento del alumnado para nuevas actividades físicas (Gutiérrez
& Pilsa, 2006). De igual forma, el factor del disfrute juega un papel
esencial ya que, si el grado de diversión es alto, se establecerá un com-
promiso positivo hacia la misma que garantizará que las tres necesida-
des psicológicas básicas se cumplan (Barreal-López et al., 2015). Se
potencia, pues, una motivación intrínseca del alumnado que crea una
dependencia positiva para futuras actividades físicas.
Tomando como base todo lo anterior, cabe mencionar la importancia
de todo lo anterior para PE-in-CLIL y para la propuesta didáctica que
aquí proponemos: (1) es esencial que las tres necesidades psicológicas
básicas adquieran importancia plena para que la motivación aumente
(Standage et al., 2005), y la forma de alcanzarlo es a través de activida-
des que fomenten la autonomía, la relación social así como la compe-
tencia, (ii) los contenidos deben tener un componente que garantice la
presencia de aspectos lúdicos (Gutiérrez-Pilsa, 2006) con el objetivo de
‒ ‒
favorecer la generación del disfrute (Barreal-López et al., 2015), y (iii)
el uso que los escolares hacen de la LE también indica un aumento de
la autonomía, de la cooperación, por la interacción social, lo que favo-
rece el incremento de la motivación asociada a la práctica de la activi-
dad física.
En el próximo apartado, presentaremos la propuesta didáctica basada
en PE-in-CLIL con el foco principal puesto en la autonomía y la conse-
cución de logros.
‒ ‒
TABLA 3. Propuesta didáctica: bloques esenciales.
‒ ‒
A continuación, pasaremos a explicar en detalle la secuenciación didác-
tica propuesta en la Tabla 3.
‒ Fase 1. Esta primera fase tiene por objeto la explicación pre-
via de los materiales, cuyo objetivo es activar el conocimiento
previo sobre acciones motrices básicas. Así, se le presentará
al alumnado una serie de realia (Coyle, 2013) para fomentar
este conocimiento. De la misma forma, se hará preguntas
acerca de qué son esos materiales (es decir, cones, hurdles,
ropes, sticks, bricks, entre otros) con el fin de activar y propi-
ciar el aprendizaje del vocabulario base. Posteriormente, nos
centraremos en el uso del mismo (What are they used for?).
Tras estas explicaciones y verificar que el alumnado com-
prende el uso de los objetos, se pide a los alumnos que se or-
ganicen en grupos de 4 o 5.
‒ ‒
‒ Posta 2. Para esta posta, se necesitará demarcar con cinta
americana dos líneas en el suelo. También será preciso con-
tar con botes de pintura vacíos, de un tamaño pequeño a me-
dio. Para el desarrollo de la actividad, los escolares tendrán
que avanzar de un lado a otro siguiendo la línea americana
sin demarcarse de la misma. Para incrementar la dificultad,
irán cogiendo más botes de pintura. Finalmente, la última
fase del ejercicio consistirá en que, al llegar a la meta, se
realicen 5 sentadillas. De esta forma, se fomenta que los es-
colares lleguen al límite de su capacidad física en este caso.
Teniendo en cuenta que siempre habrá momentos en que di-
chos discentes tengan que descansar, esto asegura que hay
una transición entre un ejercicio y el siguiente.
‒ ‒
explícitos relacionados con cómo dichas actividades han fomentado la
motivación y la autonomía en la realización de la actividad física.
‒ ‒
alumnos dentro del mismo grupo quieran ser mejores que el resto no
por la tarea en sí, sino por satisfacer su propio individualismo, como
preconiza la orientación al ego (Nicholls, 1989), reduciéndose pues la
motivación intrínseca de querer mejorar por sí solo. La tercera posta se
relaciona estrechamente con esta segunda posta, pues los alumnos se
verán forzados ya sea de forma implícita a compararse con el resto de
sus compañeros. Por otro lado, el grado de competencia puede verse
comprometido en tanto que el salto de altura implica un nivel de difi-
cultad mayor.
En cuanto a la cuarta posta, se infiere que el alumnado se encontrará
más motivado desde un punto de vista extrínseco, pues la competitivi-
dad se convierte en una variable externa fomentando tal actitud (Ryan
& Deci, 2000). Así, percibiremos una regulación externa, ya que hay
una presión o recompensa (superar al resto) (Deci & Ryan, 1985). Por
otro lado, también se garantiza que no exista desmotivación en tanto
que uno de las necesidades psicológicas básicas como es la relación
(Ryan & Deci, 1985), en tanto que las metas sociales son uno de los
aspectos esenciales en el aula de Educación Física (Moreno et al.,
2008), está cubierta. En este sentido, la actividad fomenta el trabajo
cooperativo (relación), lo que empuja al alumnado a una aceptación co-
lectiva, pero también una mayor competencia sobre la actividad, que
está fundamentada en la rapidez de su finalización. Esto requiere mayor
ejecución de las acciones motrices, entre otros aspectos.
En conclusión, podemos indicar que la propuesta didáctica planteada
garantiza, por un lado, que el docente observe el grado de desmotiva-
ción en el alumnado de primera mano, pues se ha pretendido que las
necesidades psicológicas básicas puedan ser inferidas a través del com-
portamiento manifestado. Por otro lado, se potencia que dichas necesi-
dades básicas, de mostrar carencias, se vean potenciadas, lo que con-
lleva un aumento de la motivación intrínseca en algunos casos (como
en el segundo poste) o la motivación extrínseca (en el caso del último,
por ejemplo).
‒ ‒
7. CONCLUSIONES
‒ ‒
8. REFERENCIAS
Andueza, J., and Lavega, P. (2017). Incidencia de los juegos cooperativos en las
relaciones interpersonales. Movimento 23, 213–228. doi:
10.22456/1982-8918. 65002
Baena-Extremera, A., Granero-Gallegos, A., Baños, R., & Ortiz-Camacho, M. D.
M. (2018). Can physical education contribute to learning English?
Structural model from self-determination theory. Sustainability, 10(10),
3613.
Barreal-López, P., Navarro-Patón, R. y Basanta-Camino, S. (2015). ¿Disfrutan
los escolares de Educación Primaria en las clases de Educación Física?
Un estudio descriptivo. Trances, 7(4), pp. 613-625.
Casimiro, A. J. (1999). Comparación, evolución y relación de hábitos saludables
y nivel de condición física-salud en escolares, entre final de Educación
Primaria (12 años) y final de Educación Secundaria Obligatoria (16
años). Unpublished PhD Thesis, Universidad de Granada, Spain.
Cecchini Estrada, J. A., Fernández-Losa, J. L., & González de Mesa, C. G &
Cecchini Applegatte, C. (2013). Aplicaciones del modelo de
autodeterminación en la educación física de primaria. Revista
Latinoamericana de Psicología, 45(1), 97-109.
Cenoz, J., Genesee, F., & Gorter, D. (2014). Critical analysis of CLIL: Taking
stock and looking forward. Applied Linguistics, 35(3), 243-262.
doi:10.1093/applin/amt011
Chiva, O., & Salvador, C. (2016). Aprendizaje integrado de educación física y
lengua inglesa. Aplicación crítico-deliberativa del método AICLE. Bar-
celona: INDE.
Christopher, A. A., H. B. Dzakiria, and A. H. B Mohamed. (2012). Teaching
English through Sports: A Case Study. Asian EFL Journal, 59, 20–29.
Clancy, M.E.; Hruska, B.L. (2005) Developing language objectives for English
learners in Physical Education. Journal of Physical Education,
Recreation & Dance, 76(4), p, 30- 35.
Coral, J. & Lleixà, J. (2016). Physical education in content and language
integrated learning: successful interaction between physical education
and English as a foreign language. International Journal of Bilingual
Education and Bilingualism, 19(1), 108-126, DOI:
10.1080/13670050.2014.977766
Coral, J. (2012). Aprenentatge integrat de continguts d’educació física i llengua
anglesa: educació física en AICLE al cicle superior de primària. (Tesis
doctoral). Universitat de Barcelona: Barcelona. Retrieved from
http://hdl.handle.net/2445/43177
‒ ‒
Coral, J. (2013a). Physical education and english integrated learning. How School
Teachers Can Develop PE-in-CLIL. Temps d'educació: revista de la
Divisió de Ciències de l'Educació(45), 41-64.
Coral, J. (2013b). Physical Education Year 6. P.E. World 6, Teacher’s book.
Zaragoza: Grupo Editorial Luis Vives.
Coral, J., Urbiola, M., Sabaté, E., Bofill, J., Lleixà, T., and Vilà Baños, R. (2017).
Does the teaching of physical education in a foreign language jeopardise
children’s physical activity time? A pilot study. Int. J. Biling. Educ.
Biling. 1–16. doi: 10.1080/13670050.2017.1407289
Coyle, D., Hood, P. & Marsh, D. (2010). CLIL. Cambridge, England: Cambridge
University Press.
Cummins, J. (2000). Language, power, and pedagogy: bilingual children in the
crossfire. Multilingual Matters. Clevendon: Multilingual Matters.
Deci, E. L., & Ryan, R. M. (2000). The “what” and “why” of goal pursuits:
Human needs and
the self-determination of behavior. Psychological Inquiry, 11, 227-268.
Deci, E.L., & Ryan, R.M. (1985). Intrinsic motivation and self-determination in
human behavior. New York: Plenum.
Deci, E.L., & Ryan, R.M. (1991). A motivational approach to self: Integration in
personality. In R. Deinstbier (Ed.), Nebraska symposiumon motivation:
Vol. 38. Perspectives on motivation (pp. 237-288). Lincoln, NE:
University of Nebraska Press.
Doherty, J. & Brennan, P. (2008). Physical Education and Development 3-11: A
Guide for Teachers. Oxon, Routledge.
Duda, J. L., & Tappe, M. K. (1989). The personal incentives for exercise
questionnaire: Preliminary development. Perceptual and Motor Skills,
68(3), 1122.
Duda, J. L., Chi, L., Newton, M. L., & Walling, M. D. (1995). Task and ego
orientation and intrinsic motivation in sport. International journal of
sport psychology.
Dyson, B., Griffin, L. L., and Hastie, P. (2004). Sport education, tactical games,
and cooperative learning: theoretical and pedagogical considerations.
Quest 56, 226–240. doi: 10.1080/00336297.2004.10491823
Ellis, R. (2003). Task-based language learning and teaching. Oxford: Oxford
University Press.
Figueras, S., Flores, C., & González-Davies, M. (2012). Educació Física en
anglès: Percepcions dels estudiants entorn d’una experiència
metodològica en el marc universitari. Aloma. Revista de Psicologia,
Ciències de l’Educació i de l’Esport, 29, 61–80.
‒ ‒
Florence, J. (1991): Tareas significativas en Educación Física Escolar.
Barcelona, INDE.
García-Ferrando, M. (1993). Tiempo libre y actividades deportivas de la juventud
en España. Ministerio de Asuntos sociales, Instituto de la Juventud.
Graham, G. (2008). Teaching Children Physical Education. Champaign, Human
Kinetics.
Gutiérrez, M., & Pilsa, C. (2006). Students’ attitudes towards physical education
and their teachers. Revista Internacional de Medicina y Ciencias de la
Actividad Física y el Deporte, 6, 212-229.
Hernando, A. (2015). Caracterización de los aspectos metodológicos empleados
en la enseñanza de la materia de Educación Física en los centros
públicos de secundaria con sección bilingüe en inglés de Castilla y León
(Tesis Doctoral) Universidad de Burgos: Burgos. doi:10.13140/
RG.2.1.4968.5528
Lynott, F. J. (2008). Integrating other subject matter without jeopard- izing
physical education goals: The content linkage approach. Strategies,
22(1), 10-17. doi:10.1080/08924562.2012.749170
Machunsky, M. (2007). Developing Material for Physical Education Lessons in
CLIL, at http://www.factworld.info/en/Article-17-3208. Accessed 10
June 2021.
Magdaleno Viejo, V. M. (2011). Cómo enseñar Educación Física en inglés.
Sevilla: Wanceulen.
Marsh, D. (2002). CLIL/EMILE – The European Dimension: Actions, Trends and
Foresight Potential. Finland: University of Jäyvskylä.
Masih, J. (1999). Learning through a Foreign Language: Models, Methods and
Outcomes, CILT: Lancaster.
McEvoy, E., Heikinaro-Johansson, P., and MacPhail, A. (2017). Physical
education teacher educators’ views regarding the purpose(s) of school
physical education. Sport Educ. Soc. 22, 812–824. doi:
10.1080/13573322.2015.107 5971
Mehisto, P., Marsh, D., & Frigols, M. J. (2008). Uncovering CLIL content and
language integrated learning in bilingual and multilingual education.
Oxford: Macmillan.
Mentz, O. (2010). Alle Fächer eignen sich—oder doch nicht? Überlegungen zu
einem bilingualen Fächerkanon. In S. Doff (Ed.), Bilingualer
Sachfachunterricht in der Sekundarstufe (pp. 29–43). Tübingen: Narr
Verlag.
‒ ‒
Merino, J.A., & Lasabaster, D. (2018). CLIL as a way to multilingualism.
International journal of bilingual education and bilingualism. 21 (1), 79-
92. https://doi.org/10.1080/13670050.2015.1128386
Moreno, J. A., González-Cutre, D., Chillón, M., y Parra, N. (2008). Adaptación a
la educación física de la escala de las necesidades psicológicas básicas
en el ejercicio. Revista Mexicana de Psicología, 25, 295-303.
Moreno, J., Hernández, A., y González-Cutre, D. (2009). Complementando la
teoría de la autodeteminación con las metas sociales: un estudio sobre la
diversión en educación física. Revista Mexicana de Psicología, 26(2),
213-232.
Nicholls, J. G. (1989). The competitive ethos and democratic education. Harvard
University Press.
Ntoumanis, N., Pensgaard, A. M., Martin, C., & Pipe, K. (2004). An idiographic
analysis of amotivation in compulsory school physical education.
Journal of sport and exercise psychology, 26(2), 197-214.
Pérez-Cañado, M. L. (2016). Stopping the “pendulum effect” in CLIL research:
finding the balance between pollyanna and scrooge. Appl. Ling. Rev. 8,
79–99. doi: 10.1515/applirev-2016-2001
Ramos, F. (2007). Opiniones de alumnos de un programa bilingüe andaluz sobre
su pro- grama y sobre el bilingüismo. Revista Electrónica de
Investigación Educativa, 9 (2). [Documento de Internet disponible en:
http://redie.uabc.mx/vol9no2/conteni- do-ramos2.html]
Ramos, F., & Omenaca, J. V. R. (2011). La educación física en centros bilingües
de primaria inglés-español: de las singularidades propias del área a la
elaboración de propuestas didácticas prácticas con AIBLE. Revista
española de lingüística aplicada, (24), 153-170.
Rodríguez Abreu, M. (2010, abril). El área de Educación Física en la enseñanza
secundaria bilingüe. EFDeportes.com, Revista Digital. Recuperado de
http://www.efdeportes.com/
Salvador-García, C., and Chiva-Bartoll, Ò (2017). CLIL in teaching physical
education: views of the teachers in the Spanish context. J. Phys. Educ.
Sport 17, 1130–1138. doi: 10.7752/jpes.2017.03174
Salvador-García, C., Chiva-Bartoll, Ò, and Vergaz, J. J. (2018). Percepción del
alumnado sobre el uso del método AICLE en educación física: estudio
de caso. Retos 33, 138–142.
Salvador-García, C., Chiva-Bartoll, O., and Capella-Peris, C. (2019). Bilingual
physical education: the effects of CLIL on physical activity levels. Int. J.
Biling. Educ. Biling. 1–10. doi: 10.1080/13670050.2019.1639131
‒ ‒
Sánchez Bañuelos, F. (1992). Bases para una Didáctica de la Educación Física y
el Deporte. Madrid: Gymnos.
Sánchez Bañuelos, F. (1994). Seminario Permanente de Investigación sobre
Didáctica de la Educación Física. Madrid, INEF.
Soini, M., Liukkonen, J., Jaakkola, T., Leskinen, E. and Rantanen, P. (2007).
Motivational climate and enjoyment of physical education in school.
Liikunta ja Tiede, 44, 45-51.
Standage, M., Duda, J.L., & Ntoumanis, N. (2005). A test of self-determination
theory in school physical education. British Journal of Educational
Psychology, 75, 411-433.
Velázquez, R. & Hernández, J.L. (2010) Programación de la enseñanza en
Educación Física. En González, C. & Lleixà, T. (coord.) Didáctica de la
Educación Física. vol. IV. (pp. 9-27). Barcelona: Graó.
Yli-Piipari, S. (2011). The development of students’ physical education
motivation and physical activity - A 3.5-year longitudinal study across
Grades 6 to 9. (Tésis doctoral). Faculty of Sport and Health Sciences,
University of Jyväskylä, Jyväskylä, Finlandia.
Zindler, K. (2013). Content and Language Integrated Learning (CLIL) and PE in
England: An Exploratory Study. Doctoral Dissertation, University of
Sheffield, Sheffiel.
‒ ‒
CAPÍTULO 53
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
A este respecto, cabe reseñar que estos artículos están en constante pro-
ceso de actualización, son «documentos dinámicos, sujetos a ciclos de
vida diferenciales» (Claes y Tramullas, 2021: 121); además, la actuali-
zación y la revisión del texto debe ser continua si se trata un tema tan
trascendente y relevante como la pandemia de COVID-19. Hoy en día,
Wikipedia cuenta con más de tres mil colaboradores. Otra característica
de esta enciclopedia en línea es su versatilidad y capacidad de incluir
rápidamente temas de actualidad, como el trabajado en el proyecto de
innovación docente que tratamos en este estudio.
Actualmente, Wikipedia se encuentra entre las diez páginas más visita-
das del mundo, pues puede ofrecer información rápida sobre cualquier
tema. Gracias a su auge, han ido surgiendo otros proyectos afines más
especializadas en otros ámbitos, como el diccionario de contenido libre
Wiktionary. Por todas estas razones, no debe sorprendernos que, en las
últimas décadas, Wikipedia haya sido el centro de interés de muchos
investigadores, convirtiéndose en objeto de estudio de numerosos tra-
bajos y tesis doctorales. Dado su carácter multidisciplinar y multilin-
güe, esta enciclopedia libre puede considerarse un recurso apropiado
para la formación de futuros traductores (Briales, Filsinger y Alonso,
2018).
Estos antecedentes apuntan a la conveniencia de seguir investigando
sobre las posibilidades de Wikipedia en la formación de traductores.
Por ello, durante el curso 2020/2021 se ha llevado a cabo un proyecto
de innovación docente titulado «Medios, traducción y Wikipedia frente
a la COVID-19. Una perspectiva de género», con el que pretendemos,
no solo profundizar en un tema de actualidad como es la perspectiva de
género en la pandemia del nuevo coronavirus, sino también utilizar Wi-
kipedia como recurso para la formación de traductores. Conviene seña-
lar que el presente proyecto emana en cierta medida de iniciativas an-
teriores que se ha desarrollado siguiendo esta misma línea:
‒ «Mujeres del flamenco en Wikipedia: competencia traductora y
digital para la difusión multilingüe del patrimonio y la diversi-
dad cultural». Acción 2 del Plan de Innovación y Desarrollo
Docente de la Universidad Pablo de Olavide 2017/2018. N.º de
investigadores: 5. IP: Elisa Alonso.
‒ ‒
‒ «Acción participativa en el aula de traducción: Wikipedia mul-
tilingüe para mujeres destacadas». Acción 2 del Plan de Inno-
vación y Desarrollo Docente de la Universidad Pablo de Ola-
vide 2016/2017. N.º de investigadores: 5. IP: Elisa Alonso.
‒ ‒
la lengua origen y la meta, sino que requiere otras destrezas o habilida-
des que van más allá del conocimiento de idiomas. A estas alturas de
desarrollo de la disciplina, no podemos caer en el error de considerar
esta labor como un proceso eminentemente lingüístico. Ante la necesi-
dad de hilvanar las diferentes aptitudes que deben adornar al traductor,
desde mediados del siglo XX han surgido numerosos estudios que po-
nen en valor esta compleja labor. Por esta razón, a su vez, no han sido
pocos los autores que han expuesto su modelo de competencias vincu-
ladas con el proceso traductológico (PACTE, 2017; Göpferich, 2007;
Kelly, 2002) que dista bastante de la consideración del conocimiento
de dos sistemas lingüísticos como único e indiscutible requisito para tal
tarea. Respecto de la adquisición de la competencia traductora, las au-
toras Basaure y Ahumada (2021: 39) sostienen lo siguiente:
‒ ‒
FIGURA 1. Modelo de competencia traductora de Göpferich.
‒ ‒
‒ Tools and research competence: consiste en la capacidad de
utilizar correctamente herramientas informáticas y motores de
búsqueda que faciliten la labor documental y traductora. Co-
rresponde con la Instrumental sub-competence del grupo
PACTE.
Los elementos que se encuentran fuera del círculo, tales como las nor-
mas o condiciones del encargo o las herramientas de las cuales el tra-
ductor puede hacer uso, de una forma u otra, también forman parte del
proceso traductor y deben tenerse igualmente en cuenta, sin embargo,
son factores externos y ajenos a las competencias y capacidades que
debe poseer el traductor para realizar su trabajo. A estas subcompeten-
cias el grupo PACTE (2017), encabezado por Hurtado Albir, le suma la
Knowledge of translation sub-competence que abarca el conocimiento
de cuestiones sobre la traducción en sí, como el proceso traductor o el
mercado profesional.
‒ ‒
uno de los objetivos formativos aplicados en la titulación. Por ello, es
necesario que el estudiante se aleje de la idea errónea de considerar la
traducción como una labor mecánica, sino que va más allá del conoci-
miento de las lenguas de trabajo. Desde la implantación del Espacio
Europeo de Educación Superior (EEES), las enseñanzas de grado en
España, legisladas por el Real Decreto 1393/2007 deben tener un ca-
rácter general y orientado a la práctica profesional (frente a las de más-
ter que son especializadas y con una vertiente profesional e investiga-
dora). Como se expondrá, el proyecto que nos ocupa aspira a dotar al
estudiantado de una formación humanista generalista, así como de com-
petencias orientadas a la práctica profesional mediante la adquisición
de las mencionadas subcompetencias a través de las diferentes activi-
dades.
‒ ‒
Wikipedia16 en cuanto a su utilidad en este campo, a la fiabilidad de su
contenido y a la facilidad de uso y de acceso17.
Como ya hemos indicado, el uso cada vez mayor de Wikipedia a nivel
global ha impulsado su empleo como material didáctico por parte de la
comunidad académica, incluso en el ámbito universitario, pues pro-
mueve la innovación metodológica en el uso de las TIC18. Sin duda, al
tratarse de una enciclopedia que presenta su contenido en una amplia
variedad de idiomas y con una cobertura tan extensa se perfila como un
recurso excelente para llevar al aula de traducción; por esta razón, he-
mos puesto en práctica esta iniciativa.
Si volvemos a nuestra investigación, el proyecto de innovación docente
aspira a mejorar la competencia documental, traductora y digital del
estudiantado a través de actividades de lectura crítica de textos especia-
lizados en la COVID-19 con perspectiva de género y la posterior edi-
ción de artículos de Wikipedia sobre este tema en inglés y español. A
continuación, exponemos información de relevancia sobre el proyecto
de innovación docente, como las fases o la metodología empleada, para,
finalmente, señalar los resultados correspondientes.
16 Para más información sobre el estudio completo, consúltese Alonso y Robinson, 2016.
17 Wikipedia es una de las primeras páginas que suelen aparecer en el buscador, independiente-
mente del tema.
18 Se recomienda la lectura del estudio realizado por Head y Eisenberg (2010) sobre el uso de
‒ ‒
traductora, documental y digital. No obstante, el citado proyecto de in-
novación docente contemplaba otros objetivos como el análisis de la
percepción de medios (prensa, redes sociales y Wikipedia) (Briales y
Alonso, 2021), y la visibilización de la cuestión del género (Velasco-
Montiel y Alonso, 2021) a los que remitimos para mayor información.
Las sesiones de trabajo se llevaron a cabo en la asignatura “Traducción
de software y páginas web”, (de 3.º curso del Grado y 4.º curso del Do-
ble Grado, respectivamente) tanto de inglés como de francés segunda o
tercera lengua; la descripción del proyecto de innovación a los estu-
diantes se hizo con una presentación de PowerPoint elaborada por el
equipo docente como material de apoyo.
Como ya hemos indicado, la plataforma de edición y traducción em-
pleada fue Wikipedia, mientras que el corpus de lectura estaba formado
por 44 artículos en diferentes idiomas en los que se trataba el tema de
la COVID-19 desde una perspectiva de género en distintos ámbitos
(economía, sanidad, etc.).
‒ ‒
En cuanto a su organización, se trataba de una propuesta basada en un
proyecto y en distintas tareas. Es un modelo que surge del aprendizaje
de lenguas y su principal objetivo es permitir la integración en el diseño
curricular de todos sus elementos (objetivos, contenido, metodología y
evaluación). Concibe el diseño didáctico a modo de tareas (iniciales y
finales) que el estudiantado debe realizar. Hurtado Albir (2019) ha tra-
bajado intensamente en este tipo de propuestas y entre las tareas dise-
ñadas por ella se encuentran, entre otras, las tareas de preparación para
traducir textos, las tareas para la adquisición de conocimientos, las ta-
reas de redacción de informes, etc. Se trata de un marco metodológico
flexible, ya que puede estar basado en tareas o en proyectos, lo que
permite integrar elementos metodológicos como el aprendizaje basado
en problemas, los estudios de casos, el aprendizaje cooperativo, el
aprendizaje situado, el aprendizaje invertido (flipped) o los modelos de
competencias.
El proyecto se organizó en distintas fases y tareas, en algunas de las
cuales -como fue el caso de la lectura de textos y la traducción de tex-
tos- se adoptó el modelo de flipped learning (aprendizaje invertido), ya
que el estudiantado realizaba la mayor parte del trabajo fuera de clase
y presentaba sus resultados en el aula, para someterlo a juicio de sus
compañeros y del profesorado.
A continuación, se presentan las siguientes etapas del proyecto de in-
novación docente:
a. Percepción inicial de medios y Wikipedia. Tanto el estudian-
tado como el profesorado responsable completan un formulario
inicial de percepción de distintos medios (prensa y redes socia-
les) y de Wikipedia. Esta encuesta se realizó a través de la he-
rramienta Google Forms, por lo que no solo permitió ver los
resultados, sino que a partir de estos se elaboraron gráficas con
los datos.
b. Presentación del proyecto de innovación docente e Instruc-
ciones. El equipo docente presenta al alumnado el proyecto de
innovación docente y proporciona las instrucciones pertinentes.
c. Organización de grupos y lectura de textos. Los alumnos se
dividen en grupos de trabajo de 3-6 y se asigna a cada grupo
‒ ‒
entre 1 y 6 lecturas relacionadas con el impacto del género/sexo
en la COVID-19. Estas lecturas han sido previamente seleccio-
nadas por el equipo docente y proceden de diferentes medios y
corresponden con artículos de todo tipo (especializados y divul-
gativos). Los artículos estaban redactados en español, inglés o
francés y procedían en todo caso de fuentes fiables.
d. Cada grupo realiza su labor, que consiste en lo siguiente:
‒ ‒
Previamente, el equipo docente les había explicado en clase
cómo editar en Wikipedia. De forma adicional, el estudian-
tado realizó reflexiones críticas sobre el proceso de docu-
mentación y de edición en Wikipedia. Como hemos podido
comprobar, estas constituyen un corpus de verbalizaciones
cualitativas de su percepción del proyecto en su conjunto y
de la enciclopedia libre como recurso documental.
‒ ‒
f. Evaluación de proyectos de edición/traducción y Conclusio-
nes. El profesorado evalúa el trabajo de los estudiantes y analiza
los resultados de los distintos cuestionarios para sacar las con-
clusiones pertinentes.
Estas han sido las fases del proyecto de innovación docente; si bien el
trabajo de los estudiantes se ha desarrollado entre 3 y 4 semanas, el
proyecto de innovación docente en su totalidad se ha llevado a cabo
durante meses, pues incluía otras tareas realizadas por el equipo docente
con anterioridad o con posterioridad como la selección, la asignación
de las lecturas o la elaboración de los formularios19, la evaluación de
proyectos, la redacción de resultados e informes del proyecto de inno-
vación docente, etc. Para la realización de esta labor, así como para la
consecución de los objetivos generales específicos planteados, era im-
prescindible una buena coordinación y comunicación entre los docentes
participantes en el proyecto de innovación. Como hemos podido com-
probar, durante las fases del proyecto de innovación, gracias a las acti-
vidades propuestas, el estudiantado ha puesto en práctica diferentes
subcompetencias de la ya mencionada competencia traductora. Para fa-
cilitar visualización de relaciones entre subcompetencia y la tarea rea-
lizada, se ha elaborado la siguiente tabla explicativa en la que se detalla
cada actividad llevada a cabo por el alumnado:
‒ ‒
TABLA 1. Relación de actividades y subcompetencias
Actividad Subcompetencia
-Communicative competence
-Psychomotor competence
Lectura grupal del artículo -Domain competence
-Tools and research competence
-Communicative competence
Resumen del artículo -Domain competence
-Psychomotor competence
-Communicative competence
Elección, lectura y comprensión del
-Psychomotor competence
artículo de Wikipedia
-Domain competence
-Communicative competence
-Psychomotor competence
-Translation routine activation competence
-Tools and research competence
Edición y traducción de contenido
-Domain competence
para los artículos de Wikipedia
-Translation norms and assignment
-Translator’s self concept and professional
ethos
-Tools and research competence
Edición (técnica) de los artículos en -Communicative competence
Wikipedia -Psychomotor competence
-Communicative competence
Presentación del trabajo realizado
-Psychomotor competence
‒ ‒
Traducción e Interpretación (HTEI) de la Universidad Pablo de Olavide
del curso 2020-2021. En cuanto al sexo, el 81 % de los encuestados son
mujeres, un 17 % corresponde con hombres y un 2 % de género no
binario; el rango de edad que predomina es de 18 a 21 años (75 %).
A continuación, se exponen los datos cuantitativos del proyecto de in-
novación docente en sí. Se han editado en Wikipedia un total de 35 900
palabras, 16 200 palabras en artículos de Wikipedia en inglés y 19 700
en Wikipedia en español. En lo que se refiere a la mejora de la compe-
tencia traductora, estos se pueden extraer a partir del formulario que se
distribuyó al final del proyecto (formulario de valoración final del pro-
yecto).
En el siguiente gráfico se muestran las respuestas del estudiantado a la
pregunta sobre precepción de mejora de la competencia traductora que
fue respondida por 155 de los 187 sujetos participantes en el proyecto:
My participation in this
innovation research project has
helped me improve my
translation skills:
Agree
11,6 %
Undecided
23,2 % Disagree
65,2 %
‒ ‒
cree que su participación en el proyecto haya mejorado su competencia
traductora.
Por lo general, como podemos comprobar en el siguiente gráfico, el
grado de satisfacción del estudiantado en el proyecto de innovación do-
cente ha sido elevado:
Dissatisfied
56,1 %
‒ ‒
su conjunto. Estas también se indican en el formulario de valoración
final a través de un espacio abierto en el que los participantes han po-
dido reflejar sus impresiones a partir del trabajo realizado. Por lo gene-
ral, estos comentarios hacen referencia a la innovación de la actividad
y a la actualidad de la temática escogida para el proyecto; no obstante,
otros alumnos han reseñado la utilidad de las actividades para la mejora
de la competencia traductora, así como de la competencia digital. A
continuación, mostramos dos ejemplos de comentarios recibidos en la
encuesta de valoración final del proyecto:
Overall, it has been very enriching to learn about html and web page
editing as well as gaining secondary skills such as text management and
translation. I think it is a very interesting project.
The project was very fresh and interesting because we had never done
anything similar at any other course.
5. CONCLUSIONES
‒ ‒
Asimismo, consideramos que el proyecto de innovación docente que se
ha llevado a cabo ha sido de gran utilidad para la mejora de la capacidad
analítica y sintética de los estudiantes, entre otras habilidades que im-
pulsan el desarrollo de la competencia traductora.
Por su parte, la estructuración del trabajo en grupo ha promovido la
organización y la cooperación entre los participantes. Estos han llevado
a cabo de manera colaborativa las diferentes actividades que conforman
este proyecto de innovación docente con el propósito de obtener un re-
sultado favorable y satisfactorio: lectura conjunta del artículo, puesta
en común de las ideas principales, resumen, lectura de los artículos de
Wikipedia, selección del contenido que se va a añadir, edición del ar-
tículo de Wikipedia escogido, presentación en el aula del trabajo reali-
zado al resto de compañeros y al docente. Toda esta labor se ha llevado
a cabo durante 3-4 semanas; sin embargo, toda la planificación previa
tuvo lugar meses antes, y las tareas de evaluación y cierre del proyecto
se llevaron a cabo con posterioridad. Para la realización de estas activi-
dades se ha seguido una didáctica orientada al proceso (no al producto)
y al estudiantado. Es, en ese sentido, una aproximación constructivista
social que ha seguido una cuidada planificación de tareas orientadas a
la mejora de competencias y subcompetencias concretas. El estudian-
tado ha seguido la metodología flipped learning orientada hacia tareas
de lectura y documentación sobre un tema de actualidad como es la
pandemia de COVID-19 desde una perspectiva de género; del mismo
modo, se ha enfocado en la edición y la traducción de contenido de
Wikipedia acerca de dicha temática. Por último, no debemos pasar por
alto que este proyecto de innovación docente puede considerarse una
herramienta para la empleabilidad; ha sido un trabajo riguroso que que-
dará para siempre documentado en Wikipedia y que podrá hacerse valer
como portafolios de trabajos y traducciones previas en futuros procesos
de selección.
En conclusión, a la luz de los resultados obtenidos en cuanto a percep-
ción de la mejora de la competencia traductora y volumen y calidad del
contenido editado o traducido en Wikipedia, consideramos que la rea-
lización y participación por parte tanto del estudiantado como del
equipo docente ha sido satisfactoria, pues se han alcanzado las metas
‒ ‒
propuestas en el inicio y los resultados obtenidos han sido positivos.
Por esta razón, con la debida organización del proyecto y estructuración
en tareas, se recomienda el uso de la metodología flipped learning para
mejorar la competencia traductora, pues se podrían alcanzar ambiciosos
objetivos, que favorezcan la formación de futuros traductores y que ten-
gan un impacto en la sociedad.
6. AGRADECIMIENTOS
‒ ‒
Claes, F. y Tramullas, J. (2021). Wikipedia y comunicación: perspectivas del
conocimiento libre. Área Abierta. Revista de comunicación audiovisual y
publicitaria, 115-122. Universidad Complutense de Madrid.
Crespo Fernández, E. (2021). Teaching word-formation through flipped learning:
a proposal for university lectures. Encuentro, 29, 17-33. Universidad de
Alcalá.
Göpferich, S. (2007). Towards a Model of Translation Competence and its
Acquisition: the Longitudinal Study TransComp. Behind the Mind:
Methods, Models and Results in Translation Process, 12-37,
Samfundslitteratur.
Head, A. J. y Eisenberg, M. B. (2010). How today's college students use
Wikipedia for course related research. First Monday, 15 (3).
Hurtado Albir, A. (2007). Competence-based Curriculum Design for Training
Translators. The Interpreter and Translator Trainer 1(2), 163-195.
Hurtado Albir, A. (ed.) (2017). Researching translation competence by PACTE
Group. Benjamin Translation Library.
Hurtado Albir, A. (2019). Research on the didactics on translation. Evolution,
approaches and future events. En: Tolosa Igualada, M. y A. Echeverri
(eds.) Porque algo tiene que cambiar. La formación de traductores e
intérpretes: Presente y futuro. MonTI 11 trans, 47-76.
Kelly, D. (2002). Un modelo de competencia traductora: bases para el diseño
curricular. Puentes, 1, 9-20.
Muñoz Raya (2004). Libro blanco del título de Grado en Traducción e
Interpretación. Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y
Acreditación.
http://www.aneca.es/var/media/150288/libroblanco_traduc_def.pdf
Real Decreto 1393/2007, de 29 de octubre, por el que se establece la ordenación
de las enseñanzas universitarias oficiales. Boletín Oficial del Estado, 30
de octubre de 2007, núm. 260.
Velasco-Montiel, C. y Alonso E. (2021). ¿Dónde están las mujeres? Formación
de traductoras con perspectiva de género desde un proyecto sobre
COVID-19 y Wikipedia. Intersecciones del género en educación: un
encuentro interdisciplinar. II Congreso Internacional de Innovación y
Tendencias Educativas. Dykinson.
‒ ‒
CAPÍTULO 54
‒ ‒
él, pero también es escucharlo. Para comunicarse es fundamental que
exista un remitente (o emisor) y un receptor (o destinatario). Para esta-
blecer comunicación, el mensaje debe ser comprensible para el recep-
tor. El mensaje (o signo) incluye siempre un significante y un signifi-
cado:
‒ El significante: es la forma que se utiliza para transmitir el
mensaje (un dibujo, una palabra, un gesto…) al receptor.
‒ El significado: es lo que representa el mensaje transmitido.
‒ ‒
un centro bilingüe, otros elementos: la expresión del rostro, los gestos,
las entonaciones de la voz.
‒ ‒
se entrega automáticamente a una interpretación, según su experiencia,
su visión del mundo, su cultura, su sensibilidad y su experiencia. Los
actores de la comunicación siempre actúan dentro de un marco com-
puesto por limitaciones situacionales, relacionales y ambientales. To-
das estas limitaciones en el aula pueden llevar al fracaso el intento de
comunicación, tanto bilingüe francés como no bilingüe... Para que esto
no suceda, se deben cumplir ciertos parámetros: debe haber un recono-
cimiento mutuo de los dos actores con puntos en común, diferencias, y,
sobre todo, hay que considerar la posibilidad de mutuo enriqueci-
miento.
La calidad de la enseñanza bilingüe francés dependerá entonces de la
calidad de la relación de comunicación que se establezca entre las per-
sonas. Es en esto que se puede decir que los actores están obligados a
hacer concesiones, negociar, conocer sus propias posibilidades y sus
límites, para, finalmente, aceptar el aporte de los demás, para que la
relación con el otro realmente se esté dando.
Los desafíos de la comunicación en educación bilingüe francés son di-
versos, podemos identificar cuatro factores que nos empujan a comuni-
carnos:
La necesidad: solo piense en todas esas situaciones de la vida
en las que no puede hacer frente solo.
La seguridad: para protegerse de ciertos peligros propios del
mundo que lo rodea, el hombre debe entrar en comunicación,
aunque solo sea para tratar de protegerse a los ojos de los demás
como una entidad digna de interés.
La facilidad: se entra en comunicación para buscar ayuda, para
aligerar la propia carga de trabajo, para acelerar la consecución
de un resultado, para mejorar la calidad del trabajo.
El placer: pensamos aquí en el descubrimiento del otro, el en-
frentamiento de opiniones, y todo eso también puede traer el
conocimiento de uno mismo.
‒ ‒
2. OBJETIVOS
‒ ‒
‒ Variable independiente: bilingüismo francés en el área de edu-
cación física.
a) Participantes.
b) Instrumentos.
‒ ‒
Tabla 2. Escalas de valoración de las actividades propuestas
1 Insuficiente
2 Regular
3 Bien
4 Muy bien
5 Excelente
c) Procedimiento.
‒ ‒
Desarrollo de actividades según la planificación y programa-
ción.
Feedback o retroalimentación a los estudiantes.
Para la organización y control del aula tiene como objetivo posibilitar
la comunicación al tiempo que se potencia el trabajo cooperativo. Al-
gunos de los elementos que destacar son:
Organización del espacio. La organización posibilita una diná-
mica cómoda y eficaz, que permita el encuentro entre los miem-
bros del grupo, y, a la vez, posibilite el trabajo individual y el
control del alumnado. La utilización del espacio debe garantizar
la prevención de accidentes por choques y golpes. Se evitará
que los alumnos más capaces en un contenido utilicen los me-
jores espacios, quedando los alumnos menos capaces a los es-
pacios secundarios. Del mismo modo, se tenderá a igualar la
utilización del espacio en función del sexo, favoreciendo el
tema transversal de coeducación.
Organización del tiempo. La sesión es dividida en tres momen-
tos esenciales. Inicial, donde podemos introducir contenidos
teóricos, así como la realización del calentamiento. Intermedia,
donde se realiza los contenidos fundamentales de la sesión, así
como la parte final donde se incluyen reflexiones, debates y los
ejercicios de vuelta a la calma, que pretenden reducir el grado
de activación adquirido en la clase. Al finalizar la clase, se deja
unos minutos de aseo personal por parte del alumnado.
Organización de los alumnos. Es conveniente utilizar los distin-
tos tipos de agrupamientos, es decir, el trabajo en gran grupo, el
trabajo grupal, así como el individual. En función del aprendi-
zaje, se potenciará la utilización de uno u otro agrupamiento.
Siguiendo las pautas de Benilde Vázquez (1990), se realiza
agrupamientos mixtos. Se ha mantenido criterios abiertos para
la formación de los grupos: en ocasiones se ha dejado a libre
elección del alumnado, pero sobre todo han sido controlados
por parte del profesor, para posibilitar grupos mixtos y donde
‒ ‒
se integran alumnos de las distintas culturas que conviven en el
aula, favoreciendo de esta forma el diálogo y la cooperación.
Destacar la importancia de un buen clima de aula. Se educan los si-
guientes aspectos: convivencia, respeto, participación, trabajo en
equipo, cooperación, cohesión y sensibilidad hacia los demás. Se incita
hacia una mentalización y madurez por parte del alumnado por la con-
secución de estos. Como finalidad se favorece las interacciones socio-
afectivas entre alumnos, para la cual se aprovechan las innumerables
oportunidades que en clase se dan.
Por otro lado, Delgado Noguera (1991) señala que los recursos didácti-
cos son fundamentales para el desarrollo del proceso de enseñanza-
aprendizaje, englobando a todos los instrumentos empleados tanto por
el profesor como por el alumno. Existe una gran variedad de recursos
dentro de los cuales se recalcan los siguientes:
‒ Recursos materiales. Se fomenta actividades que permiten
emplear el material de desecho, el autoconstrucción de mate-
riales por nuestro alumnado, de manera que contribuyamos al
tema transversal de educación del consumidor y la utilización
del material con uso novedoso.
‒ ‒
Las actividades parten del nivel de desarrollo del alumnado conside-
rando su evolución, capacidades y conocimientos previos.
Utilización de diferentes tipos de actividades para atender a la diversi-
dad del alumnado y desarrollar los diferentes objetivos y contenidos del
proceso de enseñanza-aprendizaje, favoreciendo la motivación. En cada
actividad, se posibilitan actividades de refuerzo y ampliación para
aquellos alumnos con un ritmo de aprendizaje menor y mayor respecti-
vamente.
Actividades variadas, significativas, progresivas, participativas, socia-
lizadoras e individualizadas.
El objetivo principal de la enseñanza de educación física francés en esta
etapa es el desarrollo de los contenidos de dicha área al tiempo que
aprenden a comunicarse en francés. Es decir, el método adoptado usa
principalmente la competencia comunicativa en francés. Para lograr
este objetivo, la metodología debe ser clara, sencilla y que se caracte-
rice por el continuo esfuerzo del estudiante para comunicarse.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
4. Reconocer el esfuerzo que los alumnos ponen en la tarea. Pro-
porcionar comentarios positivos (animar).
10. Ser un modelo para los alumnos a través del entusiasmo que
uno mismo manifiesta por aprender.
‒ ‒
interpersonal. Este es un proceso constructivo, interiorizar y desa-
rrollar normas que configuran el aprendizaje del nuevo sistema, el
uso de estrategias naturales y las instrucciones del profesor.
4. RESULTADOS
‒ ‒
elementos que lo integran y rodean. De esta manera, la evaluación ha
tenido en cuenta tres momentos claves:
Evaluación inicial o diagnóstica. Se realiza a principio de curso
y se le han dedicado varias sesiones. Se ha realizado con varios
cuestionarios y test de ámbito físico. Con ello, se detectan ca-
pacidades, experiencias, posibilidades, actitudes e intereses de
los alumnos. El resultado de dicha evaluación incide, principal-
mente, sobre el diseño educativo, puesto que se adapta a las ne-
cesidades y capacidades de los alumnos. En los cursos trabaja-
dos, los alumnos proceden de cursos anteriores del mismo cen-
tro en su gran mayoría, de modo que la continuidad es sencilla
y no hay grandes saltos.
Evaluación procesal. Ha permitido, en cada momento ver el ni-
vel de logro de los objetivos y analizar las posibles deficiencias
encontradas para poder ajustar los diseños y la metodología en
cada momento del proceso.
Evaluación sumativa. Normalmente, todas las unidades termi-
nan con una actividad culminativa, donde se ha puesto de ma-
nifiesto los objetivos fundamentales de las mismas. Estas acti-
vidades han servido para darle funcionalidad al aprendizaje,
para motivar al alumnado y completar el proceso de evaluación.
A continuación, se detallan algunos de los objetivos perseguidos:
‒ Identifica las capacidades físicas básicas y relacionadas con el
tipo de actividad que desarrolla.
‒ Mejora su condición física, así como cada una de las capaci-
dades físicas básicas, en relación consigo mismo.
‒ Resuelve problemas, situaciones lúdicas, que exijan el domi-
nio de las habilidades motrices básicas (carrera, salto, giro,
lanzamientos, recepciones).
‒ Adquiere las capacidades físicas básicas y coordinativas que
nos permitan solventar problemas motrices.
‒ Reconoce los aspectos reglamentarios fundamentales.
‒ Resuelve problemas, situaciones lúdicas, que exijan el domi-
nio de las habilidades genéricas (tiro, golpeos, bote,
‒ ‒
conducción, pase, recepción del pase y fintas) así como las
habilidades específicas propias de ciertos deportes.
‒ Identifica y compara los aspectos reglamentarios de los jue-
gos.
‒ Conoce las habilidades específicas propias de determinados
deportes.
‒ Autoconstruye materiales y los utiliza en juegos.
‒ Conoce los tipos de implementos para lanzar y explora sus po-
sibilidades.
‒ Practica juegos valorando su carácter lúdico-recreativo por
encima del competitivo.
‒ Reconoce y practica juegos populares, tradicionales y autóc-
tonos valorando su importancia.
‒ Acepta y respeta las normas de clase y las reglas específicas
de los juegos.
‒ Participa de forma activa en el funcionamiento de la clase, así
como en otras actividades relacionadas con el área, organizán-
dolas y cooperando en su realización.
‒ Participa en actividades grupales y muestra actitudes de
cooperación, respeto e igualdad sin discriminar a los compa-
ñeros.
‒ ‒
Tabla 4. Listado de feedbacks positivos utilizados
Bravo! Tu t’améliores
Tu l´as fait tout seul Tu fais vraiment du progrès!
Ça t´a pris longtemps et tu as réussi! Tu as fait un excellent travail!
C´était vraiment difficile… Bravo! C’est vraiment bien!
C´était une bonne idée de… C’est exactement comme cela qu’il faut faire
Tu as fait ça et ça a fonctionné. Je le savais que tu y arriverais.
Magnifique Tu comprends bien!
Hourra Félicitations! Tu l’as!
Merveilleux Tu as raison!
Formidable! Tu es un ange!
Génial! Ne lâche pas! Tu t’améliores!
Bien! Continue!
Épatant C’est bon!
Wow! À te regarder faire, cela semble facile!
Extraordinaire! Tu réussis beaucoup mieux aujourd’hui!
Sensationnel! C’est mieux que jamais!
Exceptionnel! Ça, c’est du travail bien fait!
Ingénieux! Bon travail!
Parfait! Je suis ravi de te voir travailler ainsi.
Fantastique! Tu travailles bien.
Admirable! Tu es rapide!
Époustouflant! Bon travail!
Fabuleux! Tu te surpasses!
Fameux! Ça, tu le fais très bien!
Félicitations! C’est toute une amélioration
Tu y es! C’est la bonne façon de le faire.
Tu as réussi! Tu n’as rien oublié!
Tu es sur la bonne voie! Ça a bien été aujourd’hui!
C’est ça! C’est ça!
C’est beaucoup mieux! Tu as une bonne méthode!
Tu y es presque! Tu fais vraiment de ton mieux!
Tu as compris C’est mieux!
Tu apprends beaucoup! C’est ton meilleur jour!
Bien pensé! C’est agréable d’enseigner à un élève comme toi
‒ ‒
Un ambiente positivo, un aliento sincero y un profundo sentimiento de
aceptación. Todo esto será un motor poderoso para brindarles a nuestros
estudiantes un marco saludable y puntos de referencia estables para el
futuro.
Entonces, en ese ambiente, crecen, desarrollan su capacidad para apre-
ciar lo que tienen, para comprender que el esfuerzo es importante, para
sentirse valorados y útiles mientras sienten una fuerte dosis de afecto.
Un equipaje y un regalo precioso e inestimable para ofrecerles… en
palabras sencillas.
Es importante destacar que los “tempos” de los menores son diferentes
a los de los adultos y, por este motivo, las actividades se han basado en
la variedad y motivación.
Se considera, como logros de aprendizaje, a las pautas, conductas o ac-
ciones que deben manifestar los estudiantes mediante el desarrollo de
conocimiento, hábitos, habilidades, capacidades y actitudes, a través
del proceso de enseñanza. Los resultados de los estudiantes han respon-
dido de manera positiva al proceso de enseñanza-aprendizaje.
En los resultados encontrados, se confirma una alta participación del
alumnado, siendo la valoración, a nivel general, bastante buena.
Tabla 5. Valoración de las actividades propuestas
CURSOS 1º 2º 4º
GRUPOS A B C A B C A B
Total 26 25 24 26 25 23 25 22
InsuFICIENTE 0 0 0 0 0 0 0 0
regular 1 2 1 0 3 1 0 3
bien 1 2 4 8 4 1 2 3
MUY BIEN 6 9 4 9 5 2 6 6
EXCELENTE 19 12 15 9 13 19 17 10
‒ ‒
Tras los resultados analizados, plantear una enseñanza bilingüe francés
en el área de educación física, mantiene unos resultados similares en
general a la no bilingüe, siendo los beneficios positivos aportados para
el desarrollo integral del alumno. Sin embargo, se deben tener en cuenta
otras variables como lugar de residencia (rural vs urbano) a la hora de
aplicar programas de intervención para la promoción de actividad física
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
hará vivir las situaciones más intensas, siendo una pieza clave por el
asentamiento de los contenidos.
El tiempo útil establecido en el curriculum de educación física, tal y
como señala Ruiz Heredia, C. M. et al. (2019), es bastante reducido.
Mejorar el tiempo de compromiso motor es vital. Motivar a los alumnos
y realizar las ubicaciones lo más correctamente posibles para el desa-
rrollo de la asignatura es trascendental.
El hecho de poder estar fuera del aula y realizar ejercicio físico, clave
para su desarrollo físico e intelectual, hace que la situación sea mucho
menos restringida. Canalizar las actividades físicas a través del bilin-
güismo francés abre nuevas posibilidades de aprendizaje. Por otro lado,
potenciar la imaginación y la creatividad son pilares básicos para obte-
ner buenos resultados.
6. CONCLUSIÓN
‒ ‒
interrupciones constantes para corregir leves errores. Es importante tra-
bajar con el vocabulario que rodea al mundo del estudiante y asequible
a sus conocimientos, un lenguaje familiar y vinculado a la vida real,
debe tener un reflejo de la realidad. De este modo, las clases de educa-
ción física bilingüe francés consiguen trabajar un lenguaje comunica-
tivo, que se utiliza para socializar, para realizar tareas comunicativas y
actividades interactivas.
Entre principios psicopedagógicos que guiarán la clase, hay tres muy
importantes y en los que implican un enfoque diferente en las orienta-
ciones metodológicas: la hipótesis de las inteligencias múltiples, defen-
dido por Gardner, H. (2019), que implica el uso del cerebro y distintas
capacidades y recursos a nuestra disposición; la educación emocional,
el objetivo es preparar a los estudiantes a vivir juntos mediante la adop-
ción gradual de las reglas de la vida colectiva; y el papel fundamental
de la motivación en el aprendizaje. De acuerdo con las disposiciones
legales y las diversas teorías del desarrollo y la educación. Piaget, J. y
Inhelder, B. (1996), Wallon, H. (1984); Vygotsky, L.S. (1978); Ausu-
bel, D. P. (1968); Scaife, M. y Bruner, J. S. (1975); Bandura, A. (1992).
El proceso de aprendizaje sigue los siguientes principios.
Experimentación/metodología de investi-
Actividad intensa por parte del alumnado
gación
Atención a la diversidad Detectar el de nivel desarrollo
Individualización Activo, flexible et creativo
Contenido interesante Interacción-comunicación
Aprendizaje funcional y significativo Partir de la realidad y contexto cotidiano
Trabajo cooperativo y en grupo Motivación y participación
Aproximación multidisciplinar Intra et inter disciplinaridad
‒ ‒
La comunicación, junto con la motivación (Cañabate Ortiz, D. et al.
2014), es una pieza clave para los logros del aprendizaje, una formación
que incluye un segundo idioma dentro de un área específica influye po-
sitivamente en la educación y enseñanza.
Para finalizar, la presente investigación puede reportar un análisis de
datos que constituyen una relación positiva entre la adquisición de con-
tenidos en educación física y la enseñanza bilingüe francés en estudian-
tes de primero, segundo y cuarto año. Todo ello mediante el sistema de
análisis estadístico descriptivo y desde una perspectiva cualitativa. Se
abordaron los niveles exploratorio, correlacional y explicativo relacio-
nando las variables de estudio.
Dicha valoración es el logro de aprendizaje, es la demostración plena
de lo que aprendió el alumno a través de la observación de sus acciones,
actitudes y su participación.
7. REFERENCIAS
‒ ‒
GIMENO SACRISTAN, J (1991). El curriculum: una reflexión sobre la práctica.
Morata. París.
RUIZ HEREDIA, C. M.; LARA SÁNCHEZ, A. J.; LÓPEZ GALLEGO, F.;
CACHÓN ZAGALAZ, J. et VALDIVIA MORAL, P. Á. (2019).
Análisis del tiempo de clase en EF y propuestas para su optimización.
Nuevas tendencias en educación física, deporte y recreación. Nº 35. Pág.
126-129. Federación Española de Asociaciones de Docentes de
Educación Física (FEADEF).
SCAIFE, M. et BRUNER, J. S. (1975). Capacity for joint visual attention in the
infant. Nature, 253, 265-266.
TORRES LUQUE, G.; MOLERO AMADOR, D.; LARA-SÁNCHEZ, P.;
LATORRE-ROMÁN, J.; CACHÓN-ZAGALAZ, M. et ZAGALAZ-
SÁNCHEZ, L. (2014). Influencia del entorno donde se habita (rural vs
urbano) sobre la condición física de estudiantes de educación primaria.
Apunts. Medicina de l´esport. Volumen 49. Issue 184. Pág. 105-111.
PIAGET, J. et INHELDER, B. (1996). De la lógica del niño a la lógica del
adolescente. Ensayo sobre la construcción de las estructuras operatorias
formales. Paidós iberia. Barcelona.
VÁZQUEZ GÓMEZ, B. (1990). Guía para una educación física no sexista.
Ministerio de Educación y Ciencia.
VYGOTSKY L. B. (1978). Pensamiento y lenguaje. La Pleyade. Buenos Aires,
Argentina.
WALLON, H. (1984). La evolución psicológica del niño. Critica. Grupo editorial
Grijalbo. Barcelona.
‒ ‒
CAPÍTULO 55
MARTA TORDESILLAS
Departamento de Filología Francesa
Facultad de Filosofía y Letras
Universidad Autónoma de Madrid
ARÁNZAZU GIL CASADOMET
Departamento de Filología Francesa
Facultad de Filosofía y Letras
Universidad Autónoma de Madrid
1. INTRODUCCIÓN
20Este trabajo se ha llevado a cabo en el seno del Laboratorio de Ciencias del Lenguaje y de la
Comunicación TiLc&Com y del grupo de investigación Lingüística Argumentativa y Enunciativa
(LAEC) de la Universidad Autónoma de Madrid, cuya IP es Marta Tordesillas.
‒ ‒
y fundamentación científicas innovadoras tanto en términos lingüísti-
cos, como didactológicos, desde el momento en que incorpora diferen-
tes marcos teóricos innovadores sobre la lengua, su concepción, su
composición y su uso.
Con el fin de dar cuenta de las bases reguladoras científicas innovado-
ras sobre las que se asienta la aplicación, plantearemos el tema a conti-
nuación partiendo, en un primer momento, de una reflexión sobre los
conceptos y pilares esenciales de la lengua, para, luego, pasar a la ex-
posición de los principios científicos que constituyen y caracterizan la
estructura de la propuesta, de manera que, en un tercer momento, trate-
mos y presentemos la herramienta y aplicación.
‒ ‒
presencia en la fundamentación científica de la esencia semántica, ar-
gumentativa y enunciativa, tópica y polifónica, de la lengua. Será esta
fundamentación la que nos lleve a plantear lo que hemos llamado Lin-
güística Argumentativa y Enunciativa (LAE21), Semántica Argumenta-
tiva y Enunciativa (SAE)22 y Didáctica Argumentativa y Enunciativa
(DAE)23, que han dado lugar a la producción de la herramienta infor-
mática que proponemos, la DAEapp.
Con el fin de poder mostrar el asentamiento científico sobre el que desa-
rrollamos la herramienta, así como su sentido y calado innovador, a
continuación pasaremos a realizar una breve reflexión sobre el concepto
de signo lingüístico, de lengua y de comunicación, luego nos centrare-
mos en las bases científicas sobre las que fundamentamos nuestra pro-
puesta lingüística y didáctica y que constituyen la base del desarrollo
de la herramienta, y, en un tercer momento, presentaremos la herra-
mienta que hemos concebido, basada en principios de semántica, de ar-
gumentación y de enunciativa.
‒ ‒
FIGURA 1. ‘Concept’ y ‘image acoustique’ [‘Concepto’ e ‘imagen acústica’].
y añade:
Ces deux éléments sont intimement unis et s’appellent l’un l’autre. Que
nous cherchons le sens latín “arbor” ou le mot par lequel le latin désigne
le concept de “arbre”, il est clair que seuls les rapprochements consa-
crés par la langue nous apparaissent conformes à la réalité, et nous écar-
tons n’importe quel autre que l’on pourrait imaginer.
Y Saussure precisa:
Cette définition pose une importante question de terminologie. Nous
appelons signe la combinaison du concept et de l’image acoustique :
mais dans l’usage courrant, ce terme désigne généralement l’image
acoustique seule, par exemple un mot (arbor, etc.). On oublie que si
arbor est appelé signe, ce n’est qu’en tant qu’il porte le concept “arbre
“ de telle sorte que l’idée de la partie sensorielle implique celle du total.
‒ ‒
Signo que, a su vez, se ve inscrito en el siguiente proceso que encontra-
mos expuesto en la obra de Saussure, Cours de Linguistique Générale
(Saussure)
‒ ‒
FIGURA 4. ‘Significado’ y ‘significante’.
‒ ‒
encuentra en la conceptualización del signo de Saussure. Por ende, se
establece una asimilación entre comunicación e información e informa-
ción con realidad del Mundo y Verdad.
En este marco, cabe recordar las definiciones de los conceptos de len-
gua y habla
En relación con la lengua, dice Saussure (1993, p. 25),
Mais qu’est-ce que la langue ¿ Pour nous elle ne se confond pas avec le
langage : elle n’en est qu’une partie déterminée, essentielle, il est vrai.
C’est à la fois un produit social de la faculté du langage et un ensemble
de conventions nécessaires, adoptées par le corps social pour permettre
l’exercice de cette faculté chez les individus (…). La langue, au con-
traire, est un tout en soi et un principe de classification.
La langue n’est pas une fonction du sujet parlant, elle est le produit que
l’individu enregistre passivement ; elle ne suppose jamais de prémédi-
tation, et la réflexion n’y intervient que pour l’activité de classement
dont il sera question … La parole est au contraire un acte individuel de
volonté et d’intelligence, dans lequel il convient de distinguer : 1º les
combinaisons par lesquelles le sujet parlant utilise le code de la langue
en vue d’exprimer sa pensé personnelle ; 2º le mécanisme psycho-phy-
sique qui lui permet d’extérioriser ces combinaisons. (Saussure, 1993,
pp. 31-32).
‒ ‒
‒ La asimilación de lengua escrita clásica y del principio de
norma;
‒ El peso de la clasificación gramatical de las lenguas clásicas
sobre las resultantes;
‒ La prioridad de la norma sobre el uso;
‒ La relación necesaria entre pensamiento y lengua;
‒ El tratamiento eminentemente formal de la lengua;
‒ La relación del ejercicio de la lengua con la política;
‒ La abstracción del fenómeno lingüístico;
‒ La consideración de la lengua como proceso externo al ser hu-
mano;
‒ La relativa importancia metafísica otorgada a la lengua;
‒ La creencia de que toda persona sabe cómo funciona la lengua,
puesto que la usa;
‒ El estrecho lazo de la lengua con la gramática;
‒ La formación académica morfosintáctica hacia la lengua;
‒ La distinción lengua científica, lengua ordinaria;
‒ La concepción de la lengua en su aspecto explícito;
‒ La consideración de la lengua como código;
‒ La dicotomía entre lengua y habla;
‒ El sujeto hablante real y único;
‒ El aprendizaje memorístico de la lengua;
‒ La asimilación del sentido con la referencia;
‒ La concepción veritativa de la lengua;
‒ La composición semántica como principios informativos que
se suman y se restan;
‒ El vínculo entre cerebro, cognición y lengua;
‒ La circunscripción de los elementos “subjetivos” en las figu-
ras estilísticas;
‒ El rechazo como lengua de elementos relativos a la intersub-
jetividad y al contexto.
‒ ‒
conceptos de signo, lengua y habla. Recordemos, por ejemplo, cómo
los propios discípulos de Saussure, Bally y Sechehaye, ya se hacían
preguntas sobre el tejido afectivo de la lengua que no veían incorporado
en la propuesta teórica de Saussure o comprobamos, también, las pro-
puestas que se formularon durante determinadas etapas, así, entre los
años 1930-1980, se buscó especificar, con carácter necesario, el con-
cepto de signo lingüístico24, tal y como podemos contrastarlo a conti-
nuación.
‒ ‒
FIGURA 7. Schéma de communication (Charaudeau) [Esquema de la comunicación].
‒ ‒
Conviene asimismo recordar que la lengua tiene un funcionamiento in-
terno e intrínseco propio, que es necesario conocer y reconocer como
objeto de estudio y este es, en estas páginas, nuestro principal objetivo.
Desde un nuevo panorama lingüístico planteado, nos permitimos pro-
poner, una didáctica integral, en la que entendemos oportuno atender
los nuevos enfoques y perspectivas anteriormente abordadas. Se trata
de los siguientes:
‒ el ejercicio consciente de la lengua, lo que conlleva el estudio
y la práctica de la conformación semántico-pragmática de la
lengua para el consiguiente oportuno ejercicio;
‒ la aproximación a la adquisición de la lengua materna y de la
lengua extranjera;
‒ el reconocimiento consciente del panorama lingüístico que
ofrece el momento científico; las diferentes ofertas científicas
y académicas; la presuposición científica que comportan los
manuales; el significado de su acontecer docente; el contexto
sociológico de los estudiantes;
‒ la concepción de un tipo de formulación lingüística activa
compartida por los interlocutores.
‒ ‒
etc.), o, inconscientes (gestos, mirada, boca, sudoración, coloración del
rostro, rasgos, tensión muscular, etc.). Y si la expresión citada cobra
también su sentido es porque la ausencia de expresión, más concreta-
mente, la ausencia de la manifestación de la expresión, es susceptible
de existir.
Si nos interesamos por el lenguaje no verbal es porque éste interactúa
con el lenguaje verbal29, objeto académico de nuestro interés, y forma
un todo que conforma el lenguaje. Aunque no parece que estemos acos-
tumbrados a tratar la enseñanza/aprendizaje desde esta perspectiva, la
del lenguaje como pilar de la expresión, y aún menos a incorporar, en
nuestros planteamientos metodológicos y didácticos, la consideración
del lenguaje verbal y no verbal, cabe señalar, por un lado, la incidencia
de uno sobre otro, y viceversa, a la vez que recordamos, su estrecho
vínculo con la lengua, concepto científico, formulado como principal
vehículo, supuestamente30 consciente, de expresión. Desde la citada re-
lación, es conveniente reconocer la realización expresiva el lenguaje,
de donde surge una atención especial hacia tres acciones principales en
el marco de la oratoria tanto lingüística, como retórica, como semiótica.
En este estudio, nos situaremos en el lenguaje verbal, principalmente
realizado a través de la lengua, con una atención esencial hacia la con-
figuración semántica y el uso consciente del mismo desde su conoci-
miento preciso, tanto de sus elementos, como de su gestión, y trascen-
dencia, con el fin de obtener nuevas propuestas de formación.
29 Entendemos que toda intervención lingüística, viene acompañada por algún tipo de realización no
verbal o semiótica, más o menos mostrada.
30 Y si decimos “supuestamente” es porque para los conocedores de otros medios de expresión
distintos de la lengua, el espacio, el olor, el color, etc. son susceptibles de ser también medios de
expresión conscientes.
‒ ‒
devenir de la lingüística general, de las ciencias del lenguaje y, por ex-
tensión, de la didáctica de la lengua, aunque esta última tenga un reco-
rrido propio, en particular a partir de los años 1970. Es oportuno men-
cionar que, paralelamente a estos fundamentos y desarrollos científicos,
han estado siempre presentes otras disciplinas, ámbitos, conceptos o
consideraciones que, en nuestros días, han cobrado un lugar más que
señalado, ya que el propio devenir científico ha requerido más que
nunca su atención, análisis y conceptualización y, de hecho, en nuestro
caso, ha conllevado una propuesta teórica como la Didáctica argumen-
tativa y enunciativa, DAE31. En aras de mostrar la fundamentación in-
novadora que formulamos y sobre la que se asienta la conceptualización
de la herramienta digital que presentamos, nos centramos, a continua-
ción, en estos cuatro pilares y en el papel que cumplen en el marco
teórico.
Cabe recordar es que la lengua es un concepto científico, sobre el que
versan diferentes hipótesis, sin que ninguna, como en tantos otros con-
ceptos a pesar de su transcendencia, tenga carácter definitivo. Al con-
cepto se suma su transcendencia como instrumento esencial de comu-
nicación (entendida en todas sus vertientes, emocional, económica, po-
lítica, etc.) y de interacción humana en el mundo, por lo que nos encon-
tramos con una combinatoria de gran complejidad.
FIGURA 9. Esquema de interacción compleja entre lengua (yo)/ser humano (ser)/ser dis-
cursivo (ego).
31 Aplicada desde 1996 por Marta Tordesillas y publicada en 2009, Cf. Tordesillas (2009).
‒ ‒
FIGURA 10. Proceso de conformación discursiva de la lengua y de su potencial desarrollo
comunicativo.
‒ ‒
tratables. De hecho, sus elementos son constituyentes de los pilares
científicos, que designamos como planos, que articulan la fundamenta-
ción teórica, que hemos llamado plano tópico, enunciativo, argumenta-
tivo y locutivo.
‒ ‒
La esencia del planteamiento que proponemos está basada en la con-
sideración de que, en la lengua en general, existen dos componentes,
a saber la enunciación y la argumentación, que tejen, en su base más
intrínseca, la configuración lingüística del discurso. Conociendo los
signos discursivos de la lengua, su configuración y sus desarrollos
potenciales, conocemos las formas lingüísticas, las dinámicas y las
arquitecturas, y viceversa.
‒ ‒
Así, desde una semántica y didáctica argumentativas y enunciativas,
desde la SAE y la DAE, proponemos un marco de trabajo lingüístico
(aplicable a toda la lengua), que se puede tratar desde una forma más
técnica y práctica. A continuación, formularemos el entramado técnico
sobre el que entendemos que se asienta el desarrollo lingüístico.
Partimos de los cuatro planos37: tópico, enunciativo, argumentativo, lo-
cutivo, que interactúan entre sí y que están presentes y cobran textura y
trascienden en el signo lingüístico dándole cuerpo de significado que, a
su vez, nuevamente desde la interacción, se hace signo discursivo38,
adoptando nuevamente una textura, en cuya ejecución cobra cuerpo de
sentido y se plasma y muestra en el discurso en dinámicas discursivas,
en su caso, organizadas en cadenas, en aras de responder al fin perse-
guido por el decir. Se hace especialmente interesante el decir y lo dicho,
lo implícito y lo explícito, la presuposición y la inferencia, las partes y
el todo, la palabra y el discurso.
Llegamos a la conformación de una semántica enunciativa y argumen-
tativa ejecutable en una práctica39, en este caso una práctica de sencilla
de escritura40 que nos permita observar claramente la textura semántica
de la lengua tal y como la venimos expresando.
Así, nuestro objetivo será, a partir de la observación de ejemplos, es
decir a partir de la lengua del discurso, que el aprendiente se sensibilice,
se familiarice y observe lo que el discurso dice de sí mismo41, es decir
que sea capaz de identificar una serie de semejanzas y, por extensión
de diferencias semánticas, de modo que consiga ver cuál es el tejido
trata de un intento de práctica que aplica algunos de los recursos que hemos formulado. Estamos
en fase de experimentación y ajustes de la propuesta, sabiendo que el primer problema que nos
encontramos para ello es la actual categorización (y designación de la categorización), y por lo tanto
recorte, de la lengua.
40 Esta propuesta es también válida para la enseñanza de la lengua materna, de modo que el estu-
diante identifique los recursos lingüísticos y discursivos que tiene a su disposición para decir.
41 Deseamos en estas páginas explicitar la formulación de que la comprensión de un discurso se
produce, en primer lugar, por la identificación de lo que el discurso dice de sí mismo, tanto en su
aspecto explícito, como en su configuración implícita.
‒ ‒
semántico que el discurso ofrece y, por ende, el sentido del discurso y
los instrumentos lingüísticos que lo componen. Estas semejanzas co-
rresponderán a una serie de unidades42 localizables en superficie e iden-
tificables a una serie de categorías discursivas, ya sean palabras, expre-
siones, enunciados, ordenación, composición, etc. explícitas, que com-
ponen la forma en la que se desarrolla el sentido de la lengua. Luego se
le ofrecerán organizadas, de modo que él mismo, encuentre a su dispo-
sición dichas categorías que, en realidad, son instrumentos de la lengua
para su expresión. Así, pasaremos a la fase deductiva-inductiva, del dis-
curso de la lengua. Entonces, se le propondrá al estudiante una práctica
que emule el ejemplo. De este modo, se explicará al estudiante un tipo
de conformación y funcionamiento explícito de la lengua: se le mos-
trará con ejemplos reales los componentes que conforman un discurso,
dicho de otro modo se pondrá de manifiesto un funcionamiento técnico
del discurso, que, por otro lado, responde a un tejido semántico. Se ini-
cia así, en paralelo, un doble trabajo de observación y de ejercitación.
La siguiente fase, consistirá en que observe las posibilidades que ofrece
la lengua para llevar a cabo el acto de decir y que, en cierto modo, tiene
que ver con la gestión discursiva presente y con papel que cumple el
locutor en su relación con la lengua para decir43 un discurso. Se le mos-
trará igualmente en el ejemplo, toda vez que éste responde a una gestión
determinada.
El tercer paso tendrá como objetivo mostrar los instrumentos categori-
zados, tanto de signos lingüísticos, como de gestión, que ofrece la len-
gua para que lleve a cabo una identificación, selección y aplicación de
estos de modo que pueda constituir el discurso deseado.
El cuarto paso pondrá de manifiesto los distintos soportes formales y
las distintas modalidades discursivas en los que pueden insertarse los
instrumentos y la gestión. En otras palabras, mostraremos cuál es el te-
jido semántico, pragmático y retórico del discurso y sus formas en toda
42 Es lo que nosotros llamaremos “signo discursivo”. Para un mayor conocimiento de esta noción,
véase Tordesillas (2003).
43 En términos tradicionales, podría entenderse decir, como “producir”, si bien hemos elegido el
concepto “decir” con el sentido de confeccionar un discurso desde la enunciación y en virtud del fin
locutivo perseguido.
‒ ‒
su expresión. Dejaremos constancia de las combinaciones posibles en
cualquiera de los componentes anteriores y la posibilidad de que el te-
jido del discurso sea más o menos explícito, más o menos acorde a un
orden. Realizaremos nuevas prácticas y, así, sucesivamente en virtud
del nivel de conocimiento, de “sofisticación” que busquemos en nuestra
actividad escrita e implementemos en la herramienta o, simplemente,
de la voluntad de esmero de discurso que se tenga como objetivo.
44 Para una mayor precisión de los planos expuestos, puede consultarse el artículo Tordesillas
(2005b). Obsérvese que, con respecto a los planos que aparecen en la obra La enunciación en la
lengua, he precisado un nuevo plano, el plano tópico, que permite una mayor especificación del
tejido significativo de la lengua.
45 Para mayores detalles acerca de ambas fases, véase García Negroni y Tordesillas (2001).
46 Podríamos incluir igualmente, por ejemplo: acuerdo, arenga, asamblea, bronca, careo, charla,
‒ ‒
discursivas47 (por ejemplo: la inducción, la explicación, la deducción,
el razonamiento causal, la analogía, la hipótesis, la alternativa, el di-
lema, la dialéctica, la paradoja, etc.), mediante posibles procedimientos
discursivos (entre otros: la sincronización, la acumulación de las escu-
chas y de los acuerdos, la venta de ventajas, las referencias y los argu-
mentos de autoridad, la llamada a las emociones, etc. y en el ámbito de
la refutación: la refutación frontal o directa, el rodeo, la defensa activa,
la defensa/resistencia pasiva, la prevención o anticipación, el compro-
miso, etc. o en el marco de la eliminación de los argumentos falaciosos:
falsos silogismos, argumento ad hominem, el equívoco, el argumento
circular, la falsa alternativa, la causalidad abusiva, el falso argumento
de autoridad, las pruebas no válidas, la evaluación no justificada, la pe-
tición de principio, la arenga, etc.) susceptibles de plantearse en distin-
tos procesos discursivos (en concreto el diálogo, el debate, la conversa-
ción, la entrevista, la conferencia, la conversación, la conferencia, la
discusión, la disputa, la negociación, la crítica, la reunión, la delibera-
ción, la venta, el reclutamiento, la noticia, el escrito, etc. o en grupo:
informe, debate negocio, comunicados, noticia, escritos publicitarios,
etc.).
De ahí que, partiendo de una cimentación enunciativa, locutiva, tópica
y argumentativa, diremos que conforma la base de un edificio discur-
sivo susceptible de presentarse en diferentes modelos, cuyo soporte dis-
cursivo, o edificio discursivo, favorece la formalización lingüística. Así
podemos encontrar un edificio discursivo cuya arquitectura se traza
desde el
‒ el tipo de edificación
‒ las partes de la edificación
‒ el tipo de combinación
debate parlamentario, deliberación, diálogo, discurso, discusión, disputa, elogio, encuesta, entre-
vista personal, escritos, explicación, exposición, flirteo, informe, instrucción, intercambio de opinio-
nes, interrogatorio, justificación, lección magistral, monólogo, negociación, plática, pleno, polémica,
presentación, recital, reclutamiento, reportaje, respuesta, reunión, riña, sermón, tertulia, etc.
47 Cabe señalar que los propios signos discursivos pueden ser moldes discursivos en sí mismos,
siempre que constituyan una unidad de discurso con un sentido global delimitado y propio con un
fin semántico en sí mismo que conforma el objetivo del decir.
‒ ‒
teniendo en cuenta que, para ello, se requiere un material lingüístico
que, a su vez, comporta componentes de diversa extensión, asociable a
los signos discursivos, tales como
‒ Actos discursivos
‒ Dinámicas y funciones
‒ Léxico y expresiones
‒ ‒
‒ Explicitación de la argumentación: actos de habla y de la enu-
meración de argumentos
‒ Realización: argumentación directa (argumento y conclusión
explícitas)
‒ Planteamiento del discurso según razonamiento (introduc-
ción+desarrollo+conclusón)
‒ Tipo de proceso discursivo: carta
‒ Material lingüístico: nombres, pronombres, verbos, modaliza-
dores, marcadores,
‒ operadores, expresiones, dinámicas discursivas, tema, opi-
nión, etc.
‒ ‒
(Marcador que introduce una consecuencia)+(expresión que introduce
una opinión)+tema.
b. ARQUITECTURA LINGÜÍSTICA particular48
‒ opinión
‒ tema
‒ ‒
encontramos tras cada botón interactivo y cómo se pueden realizar los
ejercicios. En la primera imagen, podemos apreciar la interfaz de la
DAEapp (Apprentissage de l’expression écrite en français)49:
49 Esta propuesta digital forma parte de otros desarrollos tecnológicos de la lengua, llevados a cabo
por Aránzazu Gil como el Dictionnaire sémantico-pragmatique d’adjectifs selon le temps et le mode
verbal en français contemporain (DSAV) en app y web (2009). Esta aplicación es un diccionario
digital que reúne las características lexicográficas propias de una plataforma en línea y cuyo conte-
nido, a saber, interpretado a partir de un vasto análisis semántico-pragmático de la lengua francesa,
permite al estudiantado servirse de un conocimiento léxico sobre los adjetivos franceses y su inten-
sificación a la hora de emplearlos en la expresión tanto escrita como oral de la lengua.
‒ ‒
ejemplos para sumergirse en las diferentes formas de entender la orga-
nización textual y el uso de expresiones y marcadores discursivos en
dicha lengua. Veamos estas dos secciones en el menú:
IMAGEN 2. Menú.
‒ ‒
IMAGEN 3. Comment rédiger en français [Cómo redactar en francés].
‒ ‒
IMAGEN 4. Architecture linguistique générale I [Arquitectura lingüística general I].
‒ ‒
En la imagen 6, sección de la DAEapp a la que se accede desde el menú
principal, el/la estudiante tiene acceso a las listas de expresiones utili-
zadas como material lingüístico:
‒ ‒
IMAGEN 7. Matériel linguistique (expressions introduisant un sujet) [Material lingüístico (ex-
presiones que introducen un tema)].
‒ ‒
IMAGEN 9. Matériel linguistique (expressions introduisant une évaluation)
[Material lingüístico (expresiones que introducen una evaluación)].
‒ ‒
Fuente: Marta Tordesillas (2014).
IMAGEN 12. Matériel linguistique (expressions introduisant une étape/une transition) [Ma-
terial lingüístico (expresiones que introducen una etapa/una transición)].
‒ ‒
En la imagen 14 y sucesivas, tenemos acceso a los marcadores discur-
sivos como material lingüístico. Así pues, clicando en cada tipo de mar-
cador, encontramos la diversidad lingüística que existen en lengua fran-
cesa para aplicarlos a la hora de redactar textos en francés, a saber, mar-
cadores que introducen una enumeración, una consecuencia/conclu-
sión, una causa/un argumento o una concesión.
‒ ‒
IMAGEN 16. Matériel linguistique (marqueurs introduisant une énumération) [Material lin-
güístico (marcadores que introducen una enumeración)].
IMAGEN 18. Matériel linguistique (marqueurs introduisant une cause/un argument) [Mate-
rial lingüístico (marcadores que introducen una causa/un argumento)].
IMAGEN 19. Matériel linguistique (marqueurs introduisant une concession) [Material lin-
güístico (marcadores que introducen una concesión)].
‒ ‒
Fuente: Marta Tordesillas (2014).
‒ ‒
IMAGEN 20. Exercices d’organisation textuelle [Ejercicios de organización texutal].
‒ ‒
IMAGEN 21. Exemple d’exercice d’organisation textuelle I [Ejemplo de ejercicio de organi-
zación textual I].
‒ ‒
IMAGEN 22. Exemple d’exercice d’organisation textuelle II [Ejemplo de ejercicio de organi-
zación textual II].
‒ ‒
Como segundo tipo de entrenamiento para la redacción de textos fran-
ceses y concretamente en cuento a la cohesión textual, la DAEapp pro-
pone la siguiente sección dedicada a ejercitar este campo. En las acti-
vidades, el/la estudiante ha de encontrar los marcadores correspondien-
tes a un proceso de la lengua, como por ejemplo enumerar, o bien es-
cribir el marcador discursivo que falta para que el texto tenga cohesión
entre los diferentes párrafos que lo componen. La corrección de estos
ejercicios es inmediata, si el marcador no es el adecuado aparecerán las
opciones viables. Véanse las imágenes 22, 23 y 24:
‒ ‒
IMAGEN 24. Exemple d’exercice d’usage d’expressions et marqueurs discursifs I [Ejemplo
de ejercicio de uso de expresiones y marcadores discursivos I].
‒ ‒
IMAGEN 25. Exemple d’exercice d’usage d’expressions et marqueurs discursifs II [Ejemplo
de ejercicio de uso de expresiones y marcadores discursivos II].
‒ ‒
4. CONCLUSIONES
‒ ‒
5. BIBLIOGRAFÍA
‒ ‒
Tordesillas, M. (2008a). À propos du signe linguistique. Énonciation,
argumentation et stéréotype [A propósito del signo lingüístico.
Enunciación, argumentación y estereotipo]. En A. Moreno Sandoval
(dir.), El valor de la diversidad (meta)lingüística: Actas del VIII
congreso de Lingüística (pp. 114-134). UAM Ediciones.
Tordesillas, M. (2008b). La enunciación: fundamentos de lenguaje, principios de
lengua, perspectiva docente. En M.ª C. del Daher, L. M. Almeida de
Freitas y M.ª C. Giorgi (eds.), Hispanismo 2006, Estudo de Linguagens,
vol. 2 (pp. 86-103). Publicaçao Uerj/Rede Sirius.
Tordesillas, M. (2009). Didáctica argumentativa y enunciativa. En M.ª C. del
Dalher y I. C. Rodríguez (ed.), Trajetórias em enunciacâo e discurso:
práticas de formaçao docente, vol. 2. (pp. 31-47). Editora Clara Luz.
Tordesillas, M. (2014). Primera parte. En M. Tordesillas, M. Basanta y L.
Berlanga, Lengua Francesa. Un enfoque discursivo I. De la polifonía
enunciativa a la argumentación escrita (pp. 9-64). UAM Ediciones.
‒ ‒
CAPÍTULO 56
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
responsable del futuro profesional, y que le dote [al estudiante] de ha-
bilidades para localizar, evaluar, gestionar y sintetizar la información,
para así afrontar con éxito los cambios de la sociedad del conocimiento”
(Romero y Crisol, 2012, p. 11).
Asimismo, el Marco Común Europeo de Referencia para las lenguas
(MCER) fundamenta su esquema conceptual en un análisis amplio que
va más allá de lo puramente lingüístico. Así lo recoge el Plan Curricular
del Instituto Cervantes (PCIC):
Este análisis explora, a través de las competencias generales, otras di-
mensiones que, desde la perspectiva siempre del alumno, permiten am-
pliar la visión de lo que significa hoy en día enseñar y aprender una
lengua extranjera. Esta visión ampliada incluye, además del uso social
–o, mejor dicho, en interpenetración con él– una dimensión intercultu-
ral y una dimensión del aprendizaje mismo de la lengua.
‒ ‒
‒ Ser capaz de comprender una amplia variedad de textos exten-
sos y con cierto nivel de exigencia, así como reconocer en
ellos sentidos implícitos.
‒ ‒
considerar al docente de cultura hispana como un agente invasivo de su
intimidad al animarlos a participar constantemente en clase.
Para ilustrar esto con dos ejemplos de creencias contextuales y cultura-
les, citamos a Santos y Chaparro (2005) cuando ejemplifican la si-
guiente situación:
[S]i un alumno austriaco ha aprendido su lengua materna —el ale-
mán—, una lengua extranjera como el inglés y una segunda lengua ex-
tranjera como el español en un contexto académico de metodología es-
tructural y contrastiva, en el que los errores son considerados como algo
negativo, resultará posible que, cuando continúe sus estudios de espa-
ñol en un centro de habla hispana y se adopte una metodología comu-
nicativa y permisiva ante el error, sienta y manifieste rechazo y un
cierto apego a su tradición académica: probablemente querrá ser corre-
gido con intensidad y recurrencia. (p. 115)
‒ ‒
Sin embargo, poniendo en una balanza las ventajas e inconveniente de
las metodologías activas de aprendizaje, creemos que merece la pena
emplearlas en el aula de ELE a pesar del condicionante que pueden su-
poner las creencias de los estudiantes. Entre los aspectos positivos que
supone el empleo de la evaluación por pares en el aula, destacamos los
recogidos por Bartolomé (2019):
‒ Favorece la autonomía en el proceso de aprendizaje.
Por todos estos motivos creemos que la evaluación entre iguales puede
resultar una actividad muy provechosa en el aula.
2. OBJETIVOS
Los objetivos que nos marcamos con esta investigación fueron los si-
guientes:
1. Fomentar el aprendizaje autónomo para así cumplir con lo es-
tablecido en los objetivos generales de los Niveles de Referen-
cia para el Español del Marco Común Europeo de Referencia
‒ ‒
para las Lenguas (MCER) que aparecen recogidos en el Plan
Curricular del Instituto Cervantes (PCIC). En dichos objetivos
generales se establece una triple dimensión desde la perspectiva
del aprendiente: el alumno como agente social, como hablante
intercultural y como aprendiente autónomo, siendo este último
el que nos interesa en este trabajo. También, se persigue con
este trabajo cumplir con el Real Decreto 1393 de 2007 (men-
cionado anteriormente) por el que se establece la ordenación de
las actuales enseñanzas universitarias oficiales y que en su
anexo I, sección 3 alude a una serie de competencias básicas
que ha de alcanzar el estudiante de grado y que suponen un
compendio de una competencia mucho más amplia: el aprendi-
zaje autónomo, es decir, el aprender a aprender en su profesión.
‒ ‒
1. Conocer la diferencia existente entre la nota otorgada por el es-
tudiante y la nota de la profesora para comprobar si se aproxi-
man o se alejan y así determinar si los estudiantes aplican con
precisión la rúbrica.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
escritos. En este curso la diferencia de nivel entre unos estudiantes y
otros también era muy variable, entre el nivel A2 de dos estudiantes y
el C2 de otro estudiante, el resto de la clase se encontraba en un nivel
que oscilaba entre el B2 y el C1.
La actividad de evaluación por pares con rúbrica que debían realizar los
estudiantes consistía en la redacción de un texto argumentativo sobre
un tema con un mínimo de 700 palabras y un máximo de 1000. No se
limitaba solamente a un texto argumentativo de opinión, sino que de-
bían incluir referencias bibliográficas que aportaran citas de autoridad,
por lo que se trataba también de un breve trabajo de investigación. Se
les dieron a elegir tres temas:
‒ No puedo vivir sin mi teléfono móvil ni internet.
‒ ‒
su propia corrección del texto. De esta manera, los estudiantes recibían
un doble feedback: la evaluación realizada por el compañero o la com-
pañera y la de la profesora.
En el contexto de la enseñanza semipresencial derivado de la pandemia,
la recogida de las redacciones y el reparto a cada estudiante de un texto
se hizo a través de la plataforma educativa Moodle. La entrega por parte
de los estudiantes se hizo a través de la creación de una tarea en Moodle
y el reparto de las redacciones para su corrección por parte del alum-
nado se hizo a través de la creación de una carpeta donde la profesora
subió las redacciones asignando aleatoriamente a cada una el nombre
de un estudiante. Cada estudiante debía corregir la redacción que lle-
vaba su nombre y había sido escrita por otro estudiante. No obstante,
Moodle dispone la herramienta Taller para realizar evaluación entre
iguales, pero por motivos de tiempo no la pudimos emplear.
A la hora de realizar la corrección, se proporcionó a los estudiantes una
plantilla que debían completar con la nota asignada a cada indicador de
logro de la rúbrica para después calcular la nota final y con un apartado
de comentarios y sugerencias de mejora de las habilidades de redacción
de los estudiantes evaluados. Esta plantilla se entregaría a cada estu-
diante evaluado para que fueran conscientes de los errores cometidos y
potenciales mejorías.
Tras la finalización de la actividad se les pidió a los estudiantes que
evaluaran la actividad realizada con un cuestionario para conocer su
grado de interés y satisfacción sobre la evaluación entre iguales con
rúbrica. Se analizaron las puntuaciones de los cuestionarios y se reco-
gieron en una tabla las notas de las redacciones –la de los estudiantes y
la de la profesora– para examinar la diferencia entre una nota y otra.
4. RESULTADOS Y DISCUSIÓN
‒ ‒
Egipto) y casi 8 de cada 10 estudiantes (un 80 %) la han utilizado poco
o nada en otras clases durante sus estudios universitarios e incluso un
75 % la han usado poco o nada antes de llegar a la universidad. En
España, el uso de esta metodología de aprendizaje es aún más bajo ya
que un estudio realizado entre estudiantes españoles por Bartolomé
(2019) reflejaba que un 90,2 % de los encuestados había usado poco o
nada dicha metodología.
Teniendo en cuenta los objetivos que nos marcamos al inicio de este
trabajo, podemos mostrar los resultados que se indican a continuación.
Empezaremos por el análisis del aprendizaje autónomo, si se ha conse-
guido o no, analizando las preguntas de los cuestionarios que se rela-
cionaban con ello. En concreto, nos centraremos en las preguntas que
se reflejan en la tabla 2.
TABLA 2. Resultados de las preguntas referidas al aprendizaje autónomo
Porcentaje de estudian-
Preguntas de la encuesta de satisfacción tes que respondieron
bastante o mucho
‒ ‒
heteroevaluación tradicional (docente-estudiante). Algo más de 6 de
cada 10 estudiantes creen que la evaluación por pares les ayuda a apren-
der de sus errores al tiempo que les permite comparar sus conocimien-
tos con los de sus compañeros al evaluarles. Más positivo aún es el nú-
mero de estudiantes (casi 8 de cada 10) que con esta herramienta meto-
dológica descubren los aspectos que deben mejorar en sus redacciones.
El segundo objetivo de esta investigación buscaba desarrollar otras
competencias que son muy útiles para la vida académica y profesional
del estudiante de ELE en un contexto hispanohablante, ya sea en su país
de origen o en un país de habla hispana. Las agrupamos en tres bloques
(generales, específicas y transversales), tal y como aparecen recogidas
en las guías docentes de las asignaturas. Para comprobar si los estudian-
tes habían adquirido dichas competencias hicimos un análisis cualita-
tivo de las plantillas de evaluación entregadas por los estudiantes y ob-
servamos cómo a través de los comentarios y observaciones que apor-
taban como feedback a sus compañeros, pudimos comprobar que se ha-
bían adquirido en prácticamente todos los casos.
De las 60 redacciones entregadas por los estudiantes, 59 han incluido
comentarios de mejora que el estudiante evaluador sugería al estudiante
evaluado y solamente una no ha incluido ningún comentario, probable-
mente porque consideraba que estaba perfecta ya que le había otorgado
la máxima nota (un 10). Se ha observado una gran implicación, interés
y trabajo por parte de los estudiantes correctores. Las observaciones
que aportaban a sus compañeros recogían desde aspectos formales
como los relativas al ámbito ortotipográfico (sangrías, subrayado, es-
pacios entre palabras, justificación de las líneas del texto, márgenes), el
uso de conectores, el empleo de formas impersonales, la extensión y
espaciado de los párrafos o la longitud de las oraciones, hasta aspectos
de contenido como el orden de presentación de los argumentos, las citas
y referencias bibliográficas, el enfoque del tema, la organización de las
ideas presentadas o la coherencia de la introducción y la conclusión
respecto a la defensa de las ideas argumentadas.
Consideramos que por el mero hecho de practicar la redacción del texto
argumentativo se han practicado las siguientes competencias:
‒ ‒
Generales:
‒ Dominar el registro culto del español: solo encontramos un
error de registro.
Específicas:
‒ Redactar trabajos de investigación breves: debían aportar citas
de autoridad y referencias bibliográficas en el trabajo, no se
trataba solamente de expresar su opinión sobre uno de los te-
mas a elegir.
Transversales:
‒ Tener capacidad de análisis y síntesis: para exponer sus argu-
mentos a la hora de redactar el texto y para analizar el de su
compañero o compañera.
Específicas:
‒ Analizar los discursos escritos: salvo un caso donde no se
aportó ningún comentario ni feedback por parte del estudiante
‒ ‒
evaluador, el resto del alumnado demostró una gran capacidad
de análisis de los discursos escritos en español.
COMPETENCIAS OBSERVACIONES
Utilizan expresiones asertivas como: "te recomendaría",
G Saber transmitir cono- "ten cuidado de...", "trata de no traducir literalmente", "la
E cimientos, competen- estructura podría ser...", "presta atención", "he corregido
N cias y destrezas los errores de gramática, espero que te ayuden", "Pero,
E has hecho bien. He leído con mucho interés"
R "Es mejor usar la palabra 'los jóvenes' en lugar de 'la
A gente joven'. Cuidado que no cometa el error en número y
L Conocer los funda- persona del verbo. También cuidado con género y nú-
E mentos disciplinares mero de los sustantivos. Cada comienzo del párrafo debe
S de la lengua española tener un espacio. Cada párrafo no debe ser ni muy largo
ni muy corto. Pero, has hecho bien. He leído con mucho
interés" (E33)51
51 Esta nomenclatura (E33) corresponde al identificador dado a cada estudiante de nuestro corpus.
‒ ‒
I utilizado conectores demasiadas veces: "además", "y",
C "sin embargo" (E44)
A
S
"Los párrafos no son delimitados. Faltan conectores (por
Cultivar el rigor en el
una parte, por un lado, por otro lado, por ejemplo, así que,
uso del español
mientras, aunque)" (E57)
"En la introducción, inserte una problemática y anuncie
Favorecer la capaci-
T las estructuras del desarrollo para que el trabajo sea más
dad crítica
R preciso desde el inicio" (E42)
A "Deberías consultar el diccionario antes de escribir para
N Desarrollar destrezas reducir algunos errores que se pueden evitar. Por ejem-
S para la vida académica plo, es "el Internet" en vez de "la internet". (E29)
V "Sería un texto mejor si hubiera tenido en cuenta algunas
E cositas: las formas de los adjetivos y de los verbos siem-
R Fomentar la motiva- pre concuerdan con lo poseído; el uso de artículos; las
S ción por la calidad preposiciones; usar los conectores de forma adecuada (la
A puntuación); el uso del subjuntivo, etc. En suma, es un
L texto bien escrito." (E12)
E "En primer lugar, me gustó mucho cómo incluiste tus ex-
S periencias personales en tu discurso. Pensé que las ideas
Saber comunicarse
seguían un orden lógico y me mantuvieron interesado a lo
con personas no ex-
largo del texto. ¡Buen trabajo! Sin embargo, creo que
pertas en la materia
usaste un tono muy coloquial, poniendo verbos en pri-
mera persona del singular." (E50)
Emplean con frecuencia estructuras asertivas positivas
que reflejan gran empatía hacia sus iguales: "Tus ideas
Acrecentar habilidades
son claras, traes informaciones como estadísticas, pero te
en las relaciones inter-
aconsejo que la próxima vez estructures tu trabajo con
personales
solo tres partes grandes con subpartes, porque tu organi-
zación no está clara." (E19)
‒ ‒
la nota de la profesora y del estudiante era de solo ±1 punto. En un
21,70 % de los casos, la diferencia oscilaba entre 1,1 y 2 puntos. Y tan
solo en un 15 % de las correcciones la diferencia era superior a 2 puntos.
GRÁFICO 1. Diferencias en puntos entre la nota otorgada por la profesora y la del estu-
diante.
21,70%
15%
Una posible explicación para que las diferencias entre la nota de la pro-
fesora y del estudiante sean tan escasas es la buena aplicación de la
rúbrica por parte de los estudiantes, según se extrae de las preguntas 3
y 12 del cuestionario. De hecho, un 81 % de los estudiantes consideran
que la rúbrica era bastante o muy clara y sencilla, y un 61 % considera
que seguir una rúbrica es una forma bastante o muy sencilla de evaluar.
Estos datos nos provocaron la curiosidad de saber quién evaluaba con
notas más altas y el resultado fue que la profesora califica las redaccio-
nes con más nota que el estudiante evaluador de una misma redacción
en un 66,70 % de los casos, como se puede ver en el gráfico 2. El estu-
diante califica con más nota que la profesora la misma redacción en un
30 % de los casos. Y, finalmente, en un 3,30 % de los casos, tanto pro-
fesora como estudiante otorgan la misma puntuación. El hecho de que
la profesora califique con notas más altas que los estudiantes puede de-
berse a que los estudiantes hayan señalado como errores algunos que
no lo son y esto rebaja la calificación.
‒ ‒
GRÁFICO 2. Análisis de los evaluadores (profesora y estudiantes) sobre quién evalúa con
notas altas.
66,70%
30%
3,30%
Profesora califica con más Estudiante califica con más Profesora y estudiante
nota que el estudiante nota que la profesora conceden la misma nota
‒ ‒
las clases y tienen vínculos de amistad entre ellos. Además, en ese
mismo estudio las correcciones no fueron anónimas y el hecho de co-
nocer a quien se evaluaba suponía una responsabilidad añadida.
En cuanto a los comentarios aportados por los estudiantes en el apartado
libre del cuestionario, son muchos los que señalan sugerencias e ideas
para implementarlas en futuras actividades, por ejemplo: poder calificar
con fracciones de 0,5 puntos porque a veces en un indicador de logro
no se llega a 3 puntos pero es injusto calificarlo con solo 2 puntos, por
lo que 2,5 sería lo más justo, según algunos alumnos; corregir los tra-
bajos en un grupo pequeño de tal manera que cada miembro aporte sus
comentarios y así hagan progreso juntos; reunirse los dos estudiantes
después de corregir los textos para explicar los errores y justificar el
feedback proporcionado; conocer los errores comunes de la clase; eva-
luar un mismo trabajo por varios compañeros; por último, que la profe-
sora evalúe al estudiante evaluador para ver cómo ha realizado la co-
rrección y enseñarle las posibilidades de mejora.
Sin duda, todas estas sugerencias indican una gran implicación de los
estudiantes con la actividad, las posibles mejoras de la misma y una
reflexión sobre su propio aprendizaje.
5. CONCLUSIONES
‒ ‒
Por último, la mayoría de los estudiantes considera este tipo de evalua-
ción útil, interesante y, desde nuestro punto de vista, por todo lo ante-
rior, necesaria.
A pesar de que la evaluación entre iguales es una metodología nueva
para la gran mayoría de los sujetos de este estudio, ya que como dijimos
en el apartado 2 casi 8 de cada 10 estudiantes (un 80 %) la han utilizado
poco o nada en otras clases durante sus estudios universitarios, creemos
que ha tenido consecuencias muy buenas para su aprendizaje por los
resultados planteados en el apartado 4.
A pesar de todos los aspectos positivos mostrados con este tipo de eva-
luación, este trabajo ha contado con una serie de limitaciones que nos
han llevado a revisar el proceso y analizar sus debilidades y potenciali-
dades: no se ha hecho un análisis cualitativo de las correcciones de los
estudiantes sobre el texto evaluado, solo nos hemos basado en la plan-
tilla de evaluación, por lo que podría darse el caso de que los evaluado-
res hayan contabilizado errores que no lo son o de que no hayan locali-
zado y corregido todos los errores. Además, sería aconsejable, si el
tiempo de docentes y estudiantes lo permite, una tutoría individual con
cada estudiante para repasar tanto la redacción que han corregido como
la que la profesora les corrigió. De esta manera se cerraría un ejercicio
con un feedback extraordinario que ayudaría muchísimo al estudiante
en su proceso de aprendizaje autónomo.
6. REFERENCIAS
‒ ‒
Martínez García, N. (2009). La (des)motivación del profesor de español en Japón.
En Barrientos Clavero, A., Martín Camacho, C., Delgado Polo, V. R.,
Fernández Barjola, M. I. (Coords.). El profesor de español LE/L2. Actas
del XIX Congreso Internacional ASELE. Vol. 2. Universidad de
Extremadura.
MEC (2006). Directrices para la Elaboración de Títulos Universitarios de Grado y
Máster. MEC.
Plan Curricular del Instituto Cervantes: Niveles de Referencia para el Español.
https://cvc.cervantes.es/ensenanza/biblioteca_ele/plan_curricular/default.
htm
Riesco González, M. (2008). El enfoque por competencias en el EEES y sus
implicaciones en la enseñanza y el aprendizaje. Tendencias
Pedagógicas, 13, 79-105.
Romero López, M. A. y Crisol Moya, E. (2012). Las guías de aprendizaje
autónomo como herramienta didáctica de apoyo a la docencia. Escuela
Abierta, 15, 9-31.
Santos Gargallo, I. y Chaparro, M. (2014). Análisis descriptivo de las creencias y
actitudes de alumnos no nativos de español ante los errores y las técnicas
de corrección en la interacción oral. Revista Internacional de Lenguas
Extranjeras, 3, 111–135.
http://revistes.publicacionsurv.cat/index.php/rile
‒ ‒
CAPÍTULO 57
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
Cuanto tratamos el texto dialogado, básicamente debemos señalar tres
tipos de construcciones o discursos: el discurso directo, el discurso in-
directo y el discurso libre (directo o indirecto). Por la dificultad que
entraña abordar todos los tipos y por la preponderancia del estilo directo
en la narrativa japonesa, el análisis desarrollado en este estudio se cen-
tra especialmente en la traducción de diálogos en estilo directo y su
combinación con texto puramente narrativo. Según la Nueva gramática
de la lengua española (NGLE), el estilo directo es aquel que “reproduce
de forma literal palabras o pensamientos” y que “suele aparecer con un
verbo introductor que ocupa diversas posiciones” (Real Academia Es-
pañola, 2010, p. 833).
Para abordar este tema, el estudio contrastivo del texto dialogado en
japonés y español obliga a destacar cuatro aspectos fundamentales, que
se plantean sucintamente en esta introducción: la estructura lingüística
de la cita en estilo directo, la puntuación del texto dialogado, los verbos
de lengua y el lenguaje de rol. En los siguientes subapartados se pre-
sentan estas cuestiones de manera contrastiva entre ambas lenguas.
Puede observarse que tanto el sujeto (aquí Taro wa) como el comple-
mento indirecto (Michiko ni) pueden aparecer tanto antepuestos
‒ ‒
(ejemplo 1) como pospuestos a la cita (ejemplo 2). En cambio, el verbo
de lengua (itta ‘dijo’) ocupa siempre la posición final de la oración, tal
y como ocurre con el verbo principal de cualquier oración. Por su parte,
en español el estilo indirecto tiene algo más de libertad en lo que res-
pecta a la posición de los miembros señalados, pero básicamente tiende
a seguir el esquema formal “sujeto + expresión introductoria + cita”.
La diferencia entre el estilo directo y el estilo indirecto es muy sutil en
japonés, ya que las estructuras sintácticas permanecen inalteradas en el
cambio de uno a otro y, por lo general, la única diferencia que se expe-
rimenta ocurre en el nivel de la puntuación. Así, para transformar el
estilo indirecto del ejemplo 1 a estilo directo basta con añadir unos pa-
réntesis de cita52, sin alterar ni la estructura sintáctica, ni los pronom-
bres, ni los tiempos verbales:
1. Tarō wa Michiko ni “zehi Maki ni aitai” to itta.
52Para facilitar la lectura de la transcripción del japonés, este trabajo emplea las comillas. En la
grafía japonesa original se utiliza una serie de signos de puntuación similares a los paréntesis lla-
mados kakko y heredados de la ortografía europea (Nihon Kokugo Jiten, s. f.).
‒ ‒
narración interrumpa la secuencia del texto citado. Partiendo de las fór-
mulas posibles más comunes en castellano, la tabla 1 resume la exis-
tencia o inexistencia de correlatos formales en la relación de la posición
del verbo de lengua de la narración (V) y el parlamento (P) para el texto
dialogado.
TABLA 1. Correlación de estructuras textuales del estilo directo respecto a la posición del
verbo de lengua (V) y el parlamento (P).
¿Existe un corre-
Estructura Ejemplo
lato en japonés?
‒ ‒
1.2. PUNTUACIÓN DEL TEXTO DIALOGADO
‒ ‒
1.3. VERBOS DE LENGUA
‒ ‒
múltiples maneras, como el uso concreto de ciertos pronombres perso-
nales, partículas finales, grado de formalidad, conjugaciones verbales...
Los límites entre el lenguaje de rol de la ficción y el lenguaje de rol del
japonés contemporáneo son difusos, de tal manera que prácticamente
ninguna obra actual está exenta de algún tipo de lenguaje de rol. Por
ejemplo, una mera conversación entre un hombre y una mujer ya im-
plica la presencia de lenguaje de rol.
3. Si bien un análisis pormenorizado del lenguaje de rol y su fun-
ción en el texto dialogado queda fuera del alcance de este tra-
bajo, conviene resaltar su relevancia en la construcción formal
de los diálogos, especialmente las conversaciones complejas o
largas. Esto es así porque, sin la ayuda de las acotaciones del
narrador, el lector japonés puede identificar rápidamente a cada
personaje por su forma de hablar. En cambio, teniendo en
cuenta que el español carece de un recurso equivalente tan desa-
rrollado, es habitual que en la traducción al español este len-
guaje tienda a neutralizarse o incluso desaparezca completa-
mente en el texto meta (Fukushima, 2013). Por ello, se puede
prever que el traductor que trabaja hacia el español deba recurrir
a estrategias específicas; una de ellas puede ser la compensa-
ción, de modo que se añadan en el texto meta, por ejemplo, aco-
taciones del narrador no presentes en el texto original. Este tipo
de estrategias implican cambios estructurales en el flujo de los
parlamentos de los personajes y, por lo tanto, requieren de una
atención especial.
2. OBJETIVO
‒ ‒
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
‒ Variedad de transiciones entre narración y citas: Los textos
recurren a distintas maneras de intercalar narración y cita en
términos de posición, longitud relativa o cambios de párrafo.
4. RESULTADOS
‒ ‒
4.1. TABULACIÓN
‒ ‒
Como ya puede observarse en el caso anterior, a esto hay que sumarle
un uso indiscriminado de mayúsculas y minúsculas, como sucede en
este otro ejemplo:
—Y, ¿qué es madurar?—Pregunté.
‒ ‒
cadena sintáctica del castellano (y, por ende, la puntuación), como este
caso:
Su respuesta hizo que me diese la vuelta—mira, mamá, eres muy
pequeña ¡necesitas madurar y ser grande como papá!—me contestó.
‒ ‒
—Ya, pero es que la abuelita era grande antes de que yo naciese.
Ahora ha empequeñecido para ser una abuelita —afirmó.
En estrecha relación con los dos puntos anteriores, el uso de los verbos
de lengua como parte de las intervenciones del narrador produce un
gran número de problemas. Dejando de lado la pertinencia o imperti-
nencia de incluir intervenciones del narrador no presentes en el texto
original, los errores más habituales se detectan en la forma y posición
de estos verbos.
Además de la tendencia a presentar la voz del narrador únicamente
cuando el parlamento del personaje en estilo directo ha concluido, en la
narración también se dan casos de duplicidad de voces y verbos. Ob-
sérvese en el siguiente ejemplo la redundancia (no solo sintáctica) pro-
ducida por dijo y aclaró.
Y de repente, me agarró desde atrás y me dijo:
‒ ‒
de una misma línea narrativa, la presencia del discurso libre provoca
problemas tanto en su detección como en su traslación al español.
Obsérvese el siguiente fragmento, en el que la narradora explica una
conversación que mantiene con su hijo:
Watashi wa “Otona tte chiisai hito wa iru yo. Hora, obaachan
nante otona na no ni okaasan yori chiisai yo” to nagekaketa.
—Ah, ya veo.
53Traducción literal (elaboración propia): “También hay adultos que son pequeños. Mira a la abuela.
Es pequeña aun siendo adulta”, solté yo. // “Es que la abuela ya se había hecho adulta antes de que
yo naciese. Ahora se ha encogido porque es una abuela”. Mmm, claro.
‒ ‒
—Era adulta antes de que yo naciera, pero ahora es abuela y ha
encogido—creo que entiendo lo que quiere decirme.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
6. CONCLUSIONES
7. REFERENCIAS
‒ ‒
CAPÍTULO 58
BÁRBARA HEINSCH
Universidad de Oviedo
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
discurso inicial sobre la diversidad lingüística como un valor en sí
mismo, ha derivado, “a pesar de la retórica política sobre la riqueza de
las lenguas como una de las principales características del continente”,
en “una progresiva instrumentalización de las lenguas con finalidades
únicamente económicas” (Climent-Ferrando, 2015, p. 15; cf. Heinsch,
2018, p. 46). Si bien en muchos de estos documentos se establece una
evidente vinculación de las lenguas al empleo, la competitividad y la
movilidad, existen otros editados por el Consejo de Europa que se cen-
tran claramente en el desarrollo de la competencia plurilingüe y pluri-
cultural, entre cuyos autores y asesores figuran siempre profesionales
del campo de la formación en lenguas extranjeras e investigadores. Este
es el caso por ejemplo de la Guía para el desarrollo y la implementación
de currículos para una educación plurilingüe e intercultural (2016) y el
Marco común europeo de referencia para las lenguas - Volumen com-
plementario (2020), obras (por ahora no disponibles en español) que
vienen a subsanar ciertas lagunas del MCER constatadas desde su pu-
blicación en 200154, en especial los aspectos relacionados con la citada
competencia, y a ofrecer descriptores adicionales.
54“Neither pluriculturalism nor the notion of intercultural competence – referred to briefly in CEFR
2001 Sections 5.1.1.3 and 5.1.2.2 – is highly developed in the CEFR book.” (Beacco et al, 2016, 31)
‒ ‒
desarrolla una competencia comunicativa a la que contribuyen todos los
conocimientos y las experiencias lingüísticas y en la que las lenguas se
relacionan entre sí e interactúan.” En otras palabras, poner en juego la
totalidad del bagaje lingüístico puede facilitar la comunicación entre
hablantes cuando no comparten las mismas lenguas, y también ayudar
en el aprendizaje de una nueva, lo que resulta de especial interés en el
presente contexto.
Con respecto a los diferentes usos del término “multilingüismo” en los
documentos oficiales, el Consejo de la Unión Europea aclara:
Aunque el Consejo de Europa utiliza el término «plurilingüismo» para
referirse a la competencia de las personas en múltiples lenguas, los do-
cumentos oficiales de la Unión Europea utilizan el término «multilin-
güismo» para designar tanto las competencias individuales como las
situaciones sociales. Ello se debe en parte a las dificultades para distin-
guir entre «plurilingüe» y «multilingüe» en lenguas distintas del inglés
y el francés. (2019, p. C189/15, nota 4)
Además, hay investigadores que defienden esta distinción por sus im-
plicaciones didácticas y la extienden también al ámbito de la cultura:
En nuestra opinión, la didáctica del plurilingüismo sólo contribuirá a
los objetivos que señala el Marco común europeo si va acompañada de
una didáctica de la pluriculturalidad que considere la diversidad como
un instrumento básico para el aprendizaje de la tolerancia y como base
esencial para la construcción y el desarrollo de la interculturalidad. Re-
cordemos que la multiculturalidad nos viene dada, pero que la intercul-
turalidad es preciso ir construyéndola paso a paso porque es indudable
que cuando abordamos el aprendizaje de una lengua extranjera estamos
abordando un proceso de aprendizaje intercultural puesto que debemos
enfrentarnos a esa otra cultura a la que se asoman nuestros ojos.
(Atienza et al, 2005, p. 337).
‒ ‒
estético-humanístico que predominaba en los estudios literarios alema-
nes de aquella época (Wierlacher, 2003, p. 257). Desde entonces se han
multiplicado las publicaciones en torno a este concepto generando de-
bates y controversias, a las que subyacen también diferentes nociones
de cultura. Fe de esta fragmentación dan, entre otros, los cientos de de-
finiciones propuestas por científicos de todo el mundo (Dervin, 2010,
pp. 3-5). Con la globalización se ha iniciado un cambio de paradigma
impulsado por autores que rechazan el concepto esencialista y naciona-
lista de cultura y destacan la pertenencia del individuo a varios colecti-
vos a la vez, por lo que no conciben la interculturalidad como un cons-
tructo basado en pares opuestos (lo ajeno vs. lo propio, identidad vs.
alteridad, etc.) y en la simple comparación de culturas, sino en redes
flexibles de interacción (Bolten, 2016, p. 77). Los modelos de compe-
tencia intercultural analizados en el presente contexto son precisamente
de algunos de estos autores.
Merecen aclaración también los compuestos con inter- y trans-, por
ejemplo “intercultural” o “transcultural”. Aunque en este estudio se uti-
liza el vocablo “interculturalidad”, existen muchas investigaciones que
prefieren el prefijo “trans”. El término “transculturalidad” se basa en
una noción de cultura contraria a la esencialista y nacionalista, es decir:
las culturas se consideran como constructos híbridos, dinámicos e in-
terconectados que se influyen mutuamente. Los autores que argumen-
tan en contra del uso del prefijo “inter-“aducen que este sugiere un lu-
gar, un espacio entre culturas, lo que implica que estas son delimitables,
constructos cerrados y homogéneos, que es justo lo que se considera
obsoleto (Plikat, 2019, p. 216), pero no deja de aludir al aspecto inter-
relacional e interaccional de la comunicación entre los diferentes ámbi-
tos culturales, por lo que se usará el vocablo en este contexto.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
de los posibles conflictos, obedecen a un principio de exotización e im-
piden conocer al otro en su autenticidad.
Por lo tanto, el objetivo general consiste en depurar dichas adscripcio-
nes culturales para elaborar un modelo flexible de formación intercul-
tural en programas universitarios de lenguas modernas que descubra y
aproveche el potencial intercultural que los aprendices ya tengan acu-
mulado. El diseño de dicho modelo se abordará desde las siguientes
premisas:
‒ Lo propio no se contrapone a lo ajeno, pueden coincidir parcial-
mente e incluso lo ajeno puede llegar a convertirse en algo propio.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
aprovechando el bagaje intercultural que los aprendices ya tengan acu-
mulado. Se trata de un modelo centrado en puntos de contacto entre
personas de diferentes ámbitos culturales en proceso de aprendizaje in-
tercultural (Theorie der Anknüpfungspunkte), que se presentará de ma-
nera gráfica y cuyos ítems se discutirán en detalle.
4. RESULTADOS
‒ ‒
destinatarios. Desarrollan un modelo de tres fases (Approach, Analyze,
Act) y nueve subcategorías (Griffith et al, 2016, p. 28 ss) con el objetivo
de contribuir al debate y que finalmente se genere un modelo de eva-
luación para su aplicación generalizada en todas las instituciones de en-
señanza superior de Estados Unidos. Si bien el artículo ofrece datos
interesantes y pone de manifiesto los puntos débiles que se atribuyen a
muchos modelos de competencia intercultural, para el contexto europeo
es fundamental que la competencia intercultural no se desvincule de la
lengua, y que un modelo que sea eficaz se adapte a un grupo concreto
de destinatarios de los que se puedan suponer un determinado grado de
madurez y un mínimo de conocimientos previos, como es el colectivo
de estudiantes de idiomas.
La investigación Interkulturelle Kompetenzen im Fremdsprachenunte-
rricht. Auf dem Weg zu einem Kompetenzmodell für die Bildungsstan-
dards (Eberhardt, 2013) también examina un gran número de estudios
conceptuales y empíricos, y analiza 20 modelos en base a ocho pará-
metros relevantes para su aplicación, entre los que recoge precisamente
los dos arriba mencionados: el modelo de competencia intercultural
tiene que ajustarse al contexto de aplicación de la enseñanza de lenguas
extranjeras (nº 4), tener en cuenta la interrelación entre cultura y lengua,
así como entre las competencias lingüísticas e interculturales (nº 5) y
respetar el grado de madurez intelectual de los alumnos (nº 8) (Eber-
hardt, 2013, pp. 121, 151). Entre los nueve modelos orientados a la di-
dáctica de lenguas extranjeras destaca el de Byram (1997) que cumple
con siete de los ocho parámetros fijados. Eberhardt amplía este modelo
para su aplicación en el aula de francés con alumnos del segundo curso
de la ESO, partiendo de los cinco savoirs establecidos por Byram para
formar 34 subcategorías y tres niveles de dominio, la mayoría de ellas
validadas a través de encuestas y entrevistas realizadas a una población
de 106 alumnos. Gracias a sus resultados, los docentes de lenguas ex-
tranjeras pueden disponer, según él, de un sistema que permita el desa-
rrollo de competencias interculturales de manera tan sistemática y dife-
renciada como el de las competencias funcionales y comunicativas y
los medios lingüísticos (Eberhardt, 2013, p. 476). Si bien el modelo está
limitado a un tipo concreto de alumnos, el estudio también arroja luz
‒ ‒
sobre aspectos fundamentales en cuanto a su diseño y validación, y so-
bre la importancia de distanciarse de una definición de cultura esencia-
lista y objetivista, ligada al concepto de nación (Eberhardt, 2013, p.
461).
Al igual que Eberhardt, Conti (2012) y Heiser (2013) parten de un con-
cepto de cultura abierto y flexible. Con relación al diálogo intercultural,
Conti (2012, p. 299) se centra en la perspectiva dialógica que modifica
la definición de identidad caracterizada por la delimitación: “Ich bin
wer ich bin, weil ich nicht du bin” pasa a “Ich bin wer ich bin, auch
durch dich”. La influencia del interlocutor en la propia identidad se pro-
duce por un continuo proceso de negociación con el otro y su pertenen-
cia a varios colectivos a la vez, de modo que la autora ve la necesidad
de introducir un concepto alternativo al del diálogo intercultural como
el de la interacción intercultural dialógica (Conti, 2012, p. 301).
Heiser (2013, p. 315) ve en la “Epoché – der temporären Urteilsenthal-
tung“ un objetivo de aprendizaje intercultural que solo se consigue por
una “Habitualisierung der Überlegung” (p. 372), es decir, la didáctica
intercultural solo puede preparar al aprendiz haciendo referencia, entre
otras cosas, a los prejuicios que puedan existir hacia el otro, y después
del encuentro intercultural reflexionar sobre lo que este haya supuesto
para el aprendizaje (cf. p. 360).
En la misma línea se sitúa el parámetro “perspective taking/suspending
judgment” utilizado en el modelo de Griffith et al (2013, p. 315) y de-
finido como “Active consideration of others’ potential viewpoints / ac-
tive refrainment from preconceived cultural schema interfering with in-
formation processing”. El Consejo de Europa se hace eco de este con-
cepto en su publicación Reference Framework of Competences for De-
mocratic Culture, de 2018, en el apartado “Openness to cultural other-
ness and to other beliefs, world views and practices”, en el que también
hace referencia a una especie de exotización que nada tiene que ver con
dicha apertura:
The attitude of openness towards cultural otherness needs to be distin-
guished from the attitude of having an interest in collecting experiences
of the “exotic” merely for one’s own personal enjoyment or benefit.
Openness instead involves:
‒ ‒
1. Sensitivity towards cultural diversity and to world views, beliefs, va-
lues and practices which differ from one’s own.
‒ ‒
also the concept of intersubjectivity are thus central” (Dervin, 2011, p.
38; cf. Conti, 2012), o incluso por la sustitución del término:
Terminológicamente, el propio concepto de «competencia intercultu-
ral» se ha puesto en tela de juicio. Autores como Phipps (2014) prefie-
ren los vocablos «comunicación interpersonal»; incluso la palabra «in-
tercultural» es origen de controversia, sugiriéndose alternativas a los
términos «comunicación intercultural» tales como «encuentros inter-
personales». (Méndez García, 2015, pp. 24-25)
55 Se llama la atención sobre el hecho de que el Consejo de Europa haya incorporado en el segundo
tomo de su Reference Framework of Competences for Democratic Culture descriptores validados
para las 20 competencias (entre las que figuran las dirigidas hacia la diversidad cultural) que sirvan
de base para la evaluación del nivel de dominio de las mismas (Council of Europe, 2018b, p. 11).
56 Nótese el matiz que introduce el Consejo de Europa en su noción-definición de diálogo intercul-
tural: en 2008, “el diálogo intercultural es un intercambio de opiniones abierto y respetuoso, basado
en el entendimiento mutuo, entre personas y grupos que tienen orígenes y un patrimonio étnico,
cultural, religioso y lingüístico diferentes” (Consejo de Europa, 2008, p. 14); diez años más tarde, la
formulación presenta un pequeño pero muy significativo cambio: “Intercultural dialogue is an open
exchange of views, on the basis of mutual understanding and respect, between individuals or groups
who perceive themselves as having different cultural affiliations from each other” (Council of Europe,
2018a, pp. 74-75). El subrayado es de la autora.
‒ ‒
of intercultural knowledge and practice in education is also crucial
more than ever. (p. 5)
57 Cf.p.ej. el programa “Sprach-Kitas: Weil Sprache der Schlüssel zur Welt ist”, implementado por
el Ministerio Federal de Familia, Tercera Edad, Mujer y Juventud en 2016 para niños en edad prees-
cloar (https://bit.ly/2XKcW4y), o los cursos ofertados por las universidades populares dirigidos a un
público adulto.
‒ ‒
Para el presente contexto se han utilizado tres de las preguntas cerradas,
las orientadas a las lenguas del aprendiente, y tres de las abiertas:
‒ P 2: ¿Suponen los siguientes aspectos en el aprendizaje del Español
como Lengua Extranjera una dificultad? (Pronunciación y entona-
ción, sintaxis, gramática, léxico y cultura)
GRÁFICO 1. El individuo plurilingüe. combinación de una o más lenguas maternas (m, 2m,
3m) con nº de otras lenguas del hablante. población encuestada: 98 estudiantes de ele
(universidad de münster, alemania)
40
35
30
25
20
15
10
5
0
M+2 M+3 M+4 M+5 M+6 2M+1 2M+2 2M+3 2M+4 3M+2
‒ ‒
propia (M+2), lo que no necesariamente es señal de éxito de la política
lingüística de la Unión si se tiene en cuenta el perfil del estudiantado,
matriculado en grados filológicos o con preferencia para las lenguas.
Otro dato que apoya el plurilingüismo de los participantes es que un
23,46 % de ellos habla dos lenguas diferentes en la familia, y un 4,08
% incluso tres, frente al 14,28 % hablantes de dos o más lenguas ma-
ternas.
En la misma encuesta se han buscado evidencias sobre si los participan-
tes relacionaban sus lenguas entre sí para el estudio de otra nueva, por
lo que se examinaron las preguntas P 2, P 3 y P 7 (Gráfico 2).
35
30
25
20
15
10
5
0
P 2: ¿Supone el P 3: Estilo de aprendizaje. P 7: Estilo de enseñanza.
aprendizaje ELE una Qué estrategias utilizas ¿Qué características
dificultad para ti (sintaxis, para estudiar ELE u otra tendría que tener un/a
gramática, léxico, lengua extranjera? docente de idiomas?
cultura)?
‒ ‒
nuevos contenidos en la lengua meta. Este tipo de observaciones se en-
cuentran sobre todo en P 2. Unos pocos comentarios en P 3 se refieren
al recurso a otras lenguas como estrategia (cognitiva). En lo referente al
estilo de enseñanza (P 7), se pide al profesorado
‒ que hable bien las dos lenguas (la que enseña y la materna del alum-
nado) para saber explicar y anticipar posibles dificultades (9 res-
puestas),
20,41
1,02
2,04
9,18
67,35
‒ ‒
participantes aduce no tener ninguna dificultad. Muchos de ellos vincu-
lan el aprendizaje cultural a una estancia en el país, otros manifiestan su
interés por la cultura aun desconociéndola y afirman que la diferencia
les gusta. Los que sí (9,18 %), o sí, a veces (2,04 %), han tenido proble-
mas son minoría. En cambio, el porcentaje de los que no contestan es un
poco mayor (un 20,41 %), lo que puede obedecer a varios motivos, por
ejemplo, inseguridad o no haber entendido bien la relación entre ambos
parámetros. Solo una persona afirma no estar muy interesada en el tema,
otra indica que la cultura no supone ninguna dificultad para ella porque
no interfiere para nada en su aprendizaje de la lengua, lo que sugiere que
en su mente la competencia lingüística está disociada de la cultural.
Teniendo en cuenta los comentarios concretos de los encuestados se
concluye que muchos de ellos hacen referencia a sus experiencias (po-
sitivas) con la cultura nueva y reflexionan sobre la suya propia, aunque
no de forma sistemática. Sus afirmaciones (“ampliar horizontes”, “me
gusta mucho /me interesa mucho la cultura española”, etc.) demuestran
una actitud abierta y una emocionalidad positiva, con pocas excepcio-
nes, del tipo “algunas veces no puedo comprender todo lo que hacen los
españoles (corrida de toros)”. Entre las personas con experiencias y vi-
vencias no tan positivas al principio se encuentran varias que con el con-
tacto directo en el país han cambiado de parecer. Una de ellas admite:
“Antes de vivir en España, la cultura era una dificultad porque tenía la
impresión de que solo conocía los estereotipos.” La asimilación de nue-
vos patrones culturales, junto a otras variables que intervienen en una
interacción intercultural, llegaron a modificar sus esquemas y las actitu-
des frente a sus interlocutores.
‒ ‒
‒ pertenencia simultánea a varios colectivos
‒ la importancia de los conocimientos previos, necesidades es-
pecíficas y madurez (intelectual) de los destinatarios de la for-
mación
‒ apertura a los cambios de identidad por la interacción intercul-
tural dialógica con el otro
‒ renuncia (temporal) a un juicio sobre el otro o la otredad
‒ apertura hacia e interés por la otredad cultural, otras perspec-
tivas, creencias o prácticas
‒ implicación emocional en el diálogo intercultural
‒ ‒
FIGURA 1. Theorie der Anknüpfungspunkte. Modelo de interacción intercultural e inter-
personal. Relación entre dos aprendientes: P1 y P2.
‒ ‒
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
relación con el/la docente, incluso más allá de su función en sentido es-
tricto, juega un papel considerable para el éxito del aprendizaje, no solo
lingüístico, sino también cultural, y ayuda a preparar al individuo a
desenvolverse con alegría y satisfacción en situaciones de encuentro in-
tercultural.
La jerarquización (H) determina el tamaño de los círculos. Da informa-
ción sobre la importancia que tienen para la persona determinados he-
chos, experiencias o elementos culturales. Se ha incluido un círculo que
lleva la H para llamar la atención sobre este parámetro, pero también
para señalar que el sujeto puede tomar decisiones conscientes en situa-
ciones de conflicto de intereses, por ejemplo, hacer valer o esconder en
un contexto intercultural su vinculación con elementos culturales de su
país de origen o su propia experiencia pedagógica para obtener benefi-
cios de índole social o relacional a través de este comportamiento.
Con la sigla “NaK“ se quiere hacer referencia a elementos de la cultura
„nacional“, del país de procedencia. Es cierto que nos encontramos ante
un cambio de paradigma, una reorientación en la manera de concebir la
interculturalidad, que se basa en el pensamiento multiopcional, según el
cual la cultura se puede entender como cultura nacional o como cultura
de una organización, un grupo o una pareja, y viceversa, los actuantes
se caracterizan por pertenecer a diferentes colectivos culturales y con-
textos cambiantes (Bolten, 2016, p. 78). No obstante, precisamente por
esta polivalencia (Mehrwertigkeit) en el nuevo concepto de cultura, la
cultura nacional se relativiza, pero no se excluye (Bolten, 2016, p. 78).
En el presente contexto no se refiere, sin embargo, a cultura en un sen-
tido esencialista, de una manera de ser, sino de proceder: ¿Cómo fun-
ciona la convivencia? ¿Cómo se manejan determinadas situaciones en
el lugar del que procede el interlocutor? Un ejemplo sería una mayor o
menor vinculación a la oralidad frente a los textos escritos, como en el
caso de una alumna española educada en Alemania a la hora de realizar
un examen en una universidad española: las indicaciones adicionales
orales de la docente no produjeron en ella la seguridad deseada en rela-
ción a su pregunta porque no estaban escritas en el enunciado, mientras
que el resto de la clase concedía más autoridad a la palabra de la docente
que al texto escrito en la hoja del examen, también redactado por la
‒ ‒
docente. En personas pluriculturales el círculo correspondiente a
“NaK“posiblemente es más pequeño, por lo que podrían manifestar una
mayor sensibilidad de cara a los estereotipos.
La historia personal de cada uno (L) – las relaciones familiares, el ca-
rácter, la psicología, vivencias traumáticas, expectativas, etc. – incide
decisivamente en la interacción. Estos factores pueden conducir fácil-
mente a malentendidos o interpretaciones erróneas si al desconocerlos
se cree que la reacción o comportamiento del interlocutor obedece a pa-
trones culturales. Al tratarse de constelaciones personales, que a menudo
guardan vinculación con determinados contextos sociales, económicos
y hasta políticos (cf. Dervin y Simpson, 2021, p. 3) es difícil su teoriza-
ción y modelación, y el peso que tienen en la práctica no es calculable.
Pero no por eso son menos importantes y hay que tenerlos siempre pre-
sentes en los programas de formación para la competencia intercultural.
Los participantes en un proceso de aprendizaje intercultural e interper-
sonal pueden partir de un plurilingüismo (M). El hecho de hablar más
de dos lenguas (o tener conocimientos de varias) modifica dicho pro-
ceso. En el caso del profesor, sus conocimientos de la lengua materna
de los alumnos, al igual que su propia competencia intercultural, repre-
senta una herramienta añadida para ajustar su metodología. En la men-
cionada encuesta a estudiantes de DaF, un grupo de alumnos de habla
francesa de nivel C1 en alemán incluso manifestó expresamente que un
docente debería poseer estas competencias (Heinsch, 2018, p. 52).
Otra sigla (N) se refiere a las novedades a las que el aprendiente se en-
frenta. ¿Cómo acoge la persona la lengua que está aprendiendo y qué
reacciones produce en ella los comportamientos que no espera, ya sean
positivos o negativos para ella? En este contexto cobra relevancia tam-
bién el concepto de Lernkultur, que se refiere a los patrones instruccio-
nales y el rol que corresponde a cada grupo de participantes en el pro-
ceso de enseñanza-aprendizaje:
Aus der DaF- und DaZ-Forschung ist jedoch auch bekannt, dass in vie-
len Lernkulturen, besonders auch osteuropäischen und nicht-westli-
chen, noch stark lehrerzentrierter Unterricht sowie fixe Rollenverhält-
nisse zwischen Lehrendem und Lernenden, in denen der Lehrperson
‒ ‒
eine große Autorität zukommt, vorherrschen (Grein, 2013, p. 8, citado
en Scheible y Rother, 2017, p. 17).
‒ ‒
unidireccionales, es decir el interés no es correspondido. También pue-
den quedarse a medio camino o no darse ningún movimiento.
En contextos multiculturales y en el aula de idiomas, los citados com-
ponentes como factores que influyen en el proceso de capacitación para
la interacción intercultural a veces son encubiertos, consciente o incons-
cientemente. Pero es importante tenerlos en cuenta y no sucumbir a la
tentación de exotizar las manifestaciones del interlocutor de procedencia
distinta solo porque en un principio no encajen con nuestro propio sis-
tema de percibir la realidad.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
Para ampliar esta investigación es necesaria, en un futuro trabajo, la
identificación descriptiva de las adscripciones culturales más frecuentes
dentro de la actividad docente, entre otras herramientas a través de en-
cuestas y entrevistas guiadas a una población significativa de estudiantes
plurilingües y pluriculturales, para después elaborar una parrilla alterna-
tiva de competencia intercultural de acuerdo con la teoría expuesta en
los apartados 4.3 y 5, que posteriormente ha de ser validada en la prác-
tica de educación superior.
Una vez validado, este modelo puede impulsar el diseño de nuevos ma-
teriales didácticos, de acorde al multilingüismo existente en el mercado
laboral y la realidad plurilingüe de los discentes.
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8. REFERENCIAS
Atienza Merino, J. L. (Dir.), Blanco Hölscher, M., Fáñez Pérez, B., Iglesias
Casal, I., López Téllez, G., López Vázquez, M. A. y Martínez García, J.
A. (2005). ¿Cómo se ven? ¿Cómo nos ven? Atrapados en los
estereotipos. Una investigación sobre las representaciones culturales de
estudiantes extranjeros de la Universidad de Oviedo. Ediciones de la
Universidad de Oviedo
Beacco, J. C., Byram, M., Cavalli, M., Coste, D., Egli Cuenat, M., Goullier, F. y
Panthier, J. (2016). Guide for the development and implementation of
curricula for plurilingual and intercultural education [Guía para el
desarrollo y la implementación de currículos para la educación
plurilingüe e inercultural]. Council of Europe. https://bit.ly/3DgsNIo
Bolten, J. (2016). Interkulturelle Trainings neu denken [Repensar la formación
intercultural]. Interculture journal. Online-Zeitschrift für interkulturelle
Studien, 15/ nº 26, 75-91. Universidad de Jena. https://bit.ly/3B9Cbfd
Byram, M. (1997). Teaching and Assessing Intercultural Communicative
Competence [Enseñar y evaluar la competencia comunicativa
intercultural]. Multilingual Matters
‒ ‒
Climent-Ferrando, V. (2015). El neoliberalismo lingüístico de la Unión Europea:
una tendencia creciente. Hermes: pentsamendu eta historia aldizkaria =
revista de pensamiento e historia, 51, 12-16. https://bit.ly/3ApbmU0
Comisión de las Comunidades Europeas (2003). Comunicación de la Comisión al
Consejo, al Parlamento Europeo, al Comité Económico y Social y al
Comité de las Regiones. Promover el aprendizaje de idiomas y la
diversidad lingüística: Un Plan de acción 2004 – 2006.
https://bit.ly/3AsEB8r
Consejo de Europa (2008). Libro Blanco sobre el Diálogo Intercultural. “Vivir
juntos con igual dignidad”. Gobierno de España. Ministerio de Cultura.
https://bit.ly/2URz10a
Consejo de la Unión Europea (2019). Recomendación del Consejo de 22 de mayo
de 2019 relativa a un enfoque global de la enseñanza y el aprendizaje de
idiomas (2019/C 189/03). Diario Oficial de la Unión Europea, 5.6.2019,
C189/15-C189/22. https://bit.ly/2VCH6pA
Council of Europe (2018a). Reference Framework of Competences for
Democratic Culture, vol. 1: Context, concepts and model [Marco de
referencia de competencias para una cultura democrática, vol. 1:
Contexto, conceptos y modelo]. Council of Europe Publishing.
https://bit.ly/3yx5Lug
Council of Europe (2018b). Reference Framework of Competences for
Democratic Culture, vol. 2: Descriptors of competences for democratic
culture [Marco de referencia de competencias para una cultura
democrática, vol. 2: Descriptores de competencias para una cultura
democrática]. Council of Europe Publishing. https://bit.ly/3fGd7Ec
Conti, L. (2012). Vom Realen ins Virtuelle und zurück: Wege des interkulturellen
Dialogs [De lo real a lo virtual y viceversa: formas de diálogo
intercultural]. En U. Reutner (Ed.), Von der digitalen zur interkulturellen
Revolution (pp. 293-316). Nomos
Dervin, F. (2010). Assessing intercultural competence in Language Learning and
Teaching: a critical review of current efforts [Evaluar la competencia
intercultural en la enseñanza-aprendizaje de lenguas]. En F. Dervin y E.
Suomela-Salmi (Eds.), New approaches to Assessment in Higher
Education (pp.157-173). Peter Lang. https://bit.ly/3fMCCnl
Dervin, F. (2011). A plea for change in research on intercultural discourses: A
‘liquid’ approach to the study of the acculturation of Chinese students.
[Un alegato a favor del cambio en la investigación sobre los discursos
interculturales: un enfoque ‘líquido’ para el estudio de la aculturación de
los estudiantes chinos]. Journal of Multicultural Discourses, 6(1), 37-52.
Taylor & Francis Online. https://bit.ly/3iy8iyC
‒ ‒
Dervin, F. y Simpson, A. (2021). Interculturality and the Political within
Education [Interculturalidad y lo político en la educación]. Routledge
Dervin, F., Chen, N., Yuan, M., Sude, Jacobsson, A. (2020). COVID-19 and
Interculturality: First lessons for Teacher educators [COVID-19 e
interculturalidad: primeras lecciones para formadores de profesores].
Education and Society, 38(1), 89-106. https://bit.ly/3B6XYEn
Eberhardt, J.-O. (2013). Interkulturelle Kompetenzen im
Fremdsprachenunterricht. Auf dem Weg zu einem Kompetenzmodell für
die Bildungsstandards [Competencias interculturales en la enseñanza de
lenguas extranjeras. Hacia un modelo de competencias para las normas
educativas]. Wissenschaftlicher Verlag Trier
Fäcke, C. y Meißner, F.-J. (2017). Einleitung [Introducción]. En C. Fäcke y F.-J.
Meißner (Eds.), Handbuch Mehrsprachigkeits- und
Mehrkulturalitätsdidaktik (pp. 1-16). Narr Francke Attempto
Griffith, R. L., Wolfeld, L., Armon, B. K., Rios, J. y Liu, O. L. (2016). Assessing
intercultural competence in higher education: Existing research and
future directions (Research Report No. RR-16-25). [Evaluar la
competencia intercultural en la educación superior: investigación actual
y líneas futuras (Informe de investigación nº RR-16-25)]. Educational
Testing Service. https://bit.ly/3yAaHhM
Heinsch, B. (2018). Kulturelle Deutungsmuster kulturellen Handelns. Bedeutung
für die Grundlagenforschung und Anwendung im DaF-Bereich [Patrones
culturales de interpretación de la acción cultural. Relevancia para la
investigación básica y la aplicación en el ámbito del Alemán como
Lengua Extranjera]. Acta Universitatis Carolinae. Philologica, 1,
Germanistica Pragensia, 43-56. Charles University.
Heiser, J. C. (2013): Interkulturelles Lernen. Eine pädagogische Grundlegung [El
aprendizaje intercultural. Una fundamentación pedagógica].
Königshausen & Neumann
Méndez García, M. d. C. (2015). La interculturalidad como elemento clave en la
enseñanza de lenguas. En Actas del I Congreso de español como lengua
extranjera del Magreb (pp. 20-26). Instituto Cervantes de Rabat.
https://bit.ly/3s3q4Nx
Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, Subdirección General de
Cooperación Internacional (2002). Marco común europeo de referencia
para las lenguas: aprendizaje, enseñanza, evaluación. Instituto Cervantes.
https://bit.ly/2X3DWvz
Plikat, J. (2019). Transkulturalität und transkulturelles Lernen [Transculturalidad
y aprendizaje transcultural]. En C. Fäcke y F.-J. Meißner (Eds.),
Handbuch Mehrsprachigkeits- und Mehrkulturalitätsdidaktik (pp. 216-
220). Narr Francke Attempto
‒ ‒
Scheible, J. A. y Rother, N. (2017). Schnell und erfolgreich Deutsch lernen – wie
geht das? Erkenntnisse zu den Determinanten des Zweitspracherwerbs
unter besonderer Berücksichtigung von Geflüchteten [Aprender alemán
rápido y con éxito - ¿cómo se hace? Conclusiones sobre los
determinantes de la adquisición de una segunda lengua, con especial
referencia a los refugiados]. Working Paper 72. Bundesamt für
Migration und Flüchtlinge. https://bit.ly/2WkeMsw
Wierlacher, A. (2003). Interkulturalität [Interculturalidad]. En A. Wierlacher y A.
Bogner (Eds.), Handbuch interkulturelle Germanistik (pp. 257-264).
Metzler
‒ ‒
ANEXO
‒ ‒
verständigen? Welchen Nutzen bringen diese Kommunikationsakte für Sie?
Entstehen dabei auch Nachteile?
6. Organización del aula de idioma. ¿Qué forma(s) de trabajo (en grupo, en pareja,
individual)? impulsa(n) más tu aprendizaje y por qué? / Arbeitsteilung im Klass-
enraum. Welche Arbeitsform (in der Gruppe, Partner- oder Einzelarbeit) fördert
Ihren Lernprozess am meisten? Warum?
7. Estilo de enseñanza. ¿Qué características tendría que tener un/a docente de idio-
mas y por qué? / Lehrstil. Welche Eigenschaften sollte ein/e Fremdsprachendoz-
ent/in vorweisen und warum?
‒ ‒
CAPÍTULO 59
1. INTRODUCCIÓN
En 1968 los Beatles publicaron la canción «The Inner Light» como cara
b del single Lady Madonna. El tema, caracterizado por sonoridades in-
dostanas, fue fruto del interés de George Harrison por la cultura del
subcontinente asiático. “The Inner Light” se grabó en los estudios EMI
de Bombay con músicos de la India y se mezcló en Londres. Dicho
episodio no tendría más interés sino fuese porque trae a colación la fi-
gura del profesor de sánscrito Juan Mascaró Fornés (Mallorca, 1897-
Cambridge, 1987) y porque éste, a su vez, representa una vía de unión
entre Oriente y Occidente a través de sus traducciones de las obras re-
ferenciales de la tradición védica como la Bagabath Gita o los Upa-
nishads del sánscrito al inglés. «The Inner Light» es un fragmento del
Tao Te Ching (o libro de las mutaciones) que se incluye en una de las
obras referenciales de traducciones de Mascaró –Lamps of Fire (1958)–
que dio lugar a la canción de los Beatles. Lamps of fire, juntamente con
las traducciones al inglés de los textos védicos, constituye el legado de
uno de los traductores más reconocidos internacionalmente en lenguas
orientales. Catedrático en la universidad de Cambridge y lector en Ox-
ford las traducciones de Mascaró contribuyeron activamente a la trans-
misión del legado oriental en Occidente. Gracias a sus traducciones y a
una intensa labor divulgativa la obra de Mascaró actualmente pervive
en la prestigiosa editorial Penguin Books sumando así varias decenas
de ediciones en todo el mundo. A pesar de ser un personaje poco cono-
cido, en los últimos tiempos Joan Mascaró ha dado lugar a obras de
nueva creación: la novela Reis del món (2020) de Sebastià Alzamora,
‒ ‒
el documental Llànties de foc (2017) de Sílvia Ventayol y Nofre Moyà,
el espectáculo Joan Mascaró: Música i Paraula (2018) o el reto #Inner-
LightChallenge2020 propuesto por la Fundación Material World du-
rante los meses del confinamiento por la covid-19. Sin embargo, la re-
lación de Mascaró con el guitarrista de los Beatles, George Harrison,
dio lugar a un grupo de composiciones musicales englobadas en el es-
tilo del raga-rock, una fusión que combina rasgos del rock & roll con
sonoridades típicas del subcontinente asiático. Dicho estilo encuentra
uno de sus ejemplos paradigmáticos en el tema de los Beatles «The In-
ner Light». Así pues, esta comunicación da a conocer la labor del pro-
fesor de sánscrito Joan Mascaró a través de sus traducciones al mundo
occidental gracias a una de las bandas de rock más importantes de la
década de los sesenta.
‒ ‒
los años de la República. Entonces su amor por la Bhagavad Gita, po-
siblemente el libro más importante de textos espirituales de la tradición
veda, y otras obras espirituales como los Upanishads, se había transfor-
mado en su principal propósito vital de hacer la traducción al inglés.
Así, la tarea de traducir las obras del sánscrito se convirtió en el medio
idóneo para devolver al mundo todo lo que aquellos libros le habrían
rebelado. La identificación con la obra y con el proyecto de hacer la
mejor traducción posible lo llevó a entregar veinte años de trabajo me-
ditado a dicho proyecto. Aunque las primeras traducciones de Mascaró
fueron del sánscrito al catalán para la revista La Nostra Terra (Càntic
XI de la Bhagavad Gita) no fue hasta el año 1936, los años del autoexi-
lio en Inglaterra, que iniciaría su etapa más prolífica de traducciones de
libros sagrados al inglés. De esta época, también es la traducción de los
Upanishads, obra que en 1938 le consagraría como uno de los orienta-
listas más respetados de su época. Entonces recibió el reconocimiento
del público y de la crítica. Durante la década de 1950 Joan Mascaró se
casó con Kathleen Ellis con quien tuvo dos hijos, Martín y María Co-
loma, y publicó dos obras de reafirmación: Poems de John Keats (1954)
y Lamps of Fire. From the Scriptures and Wisdom of the World (1958),
esta última basada en la traducción de pasajes de textos sagrados y mís-
ticos de todas las épocas y tradiciones del mundo. Pero la obra que ver-
daderamente lo consagró en el panorama internacional de las discipli-
nas orientales fue la traducción de la Bhagavad Gita que publicó el
grupo editorial inglés Penguin Books en 1962, obra que se sigue edi-
tando y que lleva millares de ejemplares distribuidos por todo el mundo.
De la misma época es la reedición de los Upanishads. Himalayas of the
Soul (1965) que se incluyó dentro de la prestigiosa colección The
Wisdom of the East Series en ese momento dirigida por Alan Watts, y
que también forma parte del catálogo de traducciones de la prestigiosa
editorial inglesa.
Uno de los méritos de las obras de Mascaró fue la captación poética de
sus traducciones, así como la interpretación exegética que las hizo ver-
daderamente accesibles al lector occidental. Personalidades como Ra-
bindranath Tagore o Jorge Guillén, fieles conocedores de la obra de
Mascaró, reconocieron en ella una gran labor poética por la fidelidad a
los textos sagrados y por el hecho de contribuir a la plenitud del hom-
bre. Son traducciones que, por otra parte, aportan un gran valor
‒ ‒
sugestivo y espiritual por rehuir de la tradición erudita de los clásicos
basada únicamente en la traducción cotejada, literal e intertextual de
ediciones originales. Mascaró supo aproximarse a los textos sagrados
con la rigurosa inquietud del poeta. Así es como erigió su labor de tra-
ductor: con la extrema fidelidad del estudioso y con la venturosa pasión
del poeta. En una carta de Tagore al traductor mallorquín podemos leer:
“(…) Ved aquí las razones por las cuales siento hacia vos un profundo
agradecimiento por vuestra versión [de los Upanishads] que, afortuna-
damente, no es estrictamente literal, y por tanto está más cerca de la
verdad [que las traducciones de los filólogos], y está llevada a cabo con
un espíritu correcto, y en un lenguaje sensible, que capta de esas gran-
des palabras la voz interna que trasciende toda limitación verbal” (Mir,
1998:318). Así pues, la captación del verdadero sentido espiritual de las
sagradas escrituras a un inglés sencillo y puro, lleno de armonía musi-
cal, hizo de sus traducciones un medio de gran trascendencia en el diá-
logo entre Oriente y Occidente. “Subyacentemente”, dirá Gregori Mir,
amigo y editor de la correspondencia de Mascaró, “enviaba un mensaje
de optimismo y de apertura espiritual desde otras culturas y tradiciones”
(Mir, 1998: 30). Y es que Mascaró, de la íntima relación que establece-
ría con las fuentes espirituales del Extremo Oriente, dilucidaría algunas
de sus convicciones más firmes como el amor en todas sus acepciones
y, ante todo, el valor a la vida. Este mensaje popularizado en sus ver-
siones al inglés de los títulos sánscritos de gran tiraje sirvió para difun-
dir unos textos poco conocidos y que a su vez sintonizarían con los
movimientos pacifistas y antimilitaristas que se oponían a las posicio-
nes occidentales en Vietnam. El mensaje de establecer puentes de diá-
logo entre civilizaciones y ayudar al individuo en su búsqueda del ca-
mino espiritual caló hondo en el momento en que los movimientos de
la nueva cultura se interesaban por Oriente. En dicho contexto Joan
Mascaró encarnó los valores del pacifismo que exploraron los Beatles
y que particularmente captó la atención de George Harrison. “En este
siglo”, afirmará el guitarrista de los Beatles, “Oriente y Occidente se
acercan y pueden aprender el uno del otro” (Pritchard, 1999: 246).
A partir de entonces el profesor de sánscrito se convirtió en una sólida
figura dentro del mundo de la cultura anglosajona impulsada por sus
habituales comparecencias en medios británicos como la BBC en cali-
dad de especialista en culturas orientales. A este hecho, hay que añadir
‒ ‒
que gracias a sus traducciones la generación de jóvenes que durante la
década de los años sesenta y setenta fijaron la mirada en Oriente como
forma alternativa al desencanto occidental se topó con las fuentes esen-
ciales que ofrecían las traducciones de Mascaró. Fue hacia la segunda
mitad de los años 60 que Joan Mascaró congenió especialmente con los
ideales de los movimientos de la nueva cultura, ideales que el hin-
duismo dictamina para llegar a la plenitud de la vida como son el re-
chazo a cualquier forma de violencia, amor por todas las cosas y el in-
dividuo como poder verdadero de transformación del mundo a favor del
bien común. Entonces, mientras los Beatles proclamaban consignas
universales como "All You Need is Love" Mascaró instaba a los paci-
fistas de todo el mundo a declarar la guerra a la guerra oponiendo la
ética filosófica a toda agresión militar (Maimó, 1990). A pesar de la
diferencia de edad entre Mascaró y Harrison, enseguida congeniaron.
Ambos coincidieron por primera vez en abril de 1967 en el programa
televisivo The David Frost Show de la BBC a propósito de un debate
sobre meditación trascendental. La intervención de Mascaró, invitado
en calidad de especialista en lenguas orientales y profesor de sánscrito
en la Universidad de Cambridge, trató el tema de la experiencia mística.
Su exposición profundizó en el sentido de la plenitud basada en la con-
templación de las formas artísticas o de la naturaleza, instando al pú-
blico y a los televidentes a sentirse en comunión con el Amor Univer-
sal.58
A raíz de este primer encuentro Joan Mascaró entabló relación epistolar
con George Harrison. El epistolario entre Harrison y Mascaró consta de
seis cartas escritas entre el mes de octubre de 1967 y el mes de enero
del año siguiente. Dicha correspondencia nos desvela aspectos funda-
mentales del proceso espiritual de George Harrison y del efecto persua-
sivo que ejerció la canción «Within You Without You» en Joan Mas-
caró. Las cartas también tratarán de la inspiración espiritual que supone
la lectura de fuentes orientales, el desasosiego de Harrison acrecentado
por la trivialidad de las masas y sobre todo por la reciente muerte de
Brian Epstein. En relación a este último aspecto Harrison confesará
58 Véase la intervención de George Harrison, John Lennon y Joan Mascaró en The Frost Programm
Show de la BBC fechada el día 4 de abril de 1967. Archivo obtenido el 12 de octubre desde
https://youtu.be/oS5qFP7M6Gc
‒ ‒
estar pasando por “uno de los peores momentos de su vida” como con-
secuencia de la muerte de su mánager. Seguidamente compartirá con
Mascaró el escepticismo hacia aquellos que banalizan las filosofías y
las religiones orientales o intentan sacar beneficio de las personas que
creen en ellas.
En su primera carta Mascaró interpelaba al músico a acercar el orienta-
lismo místico de la India a la cultura de masas. Entonces ya era cono-
cida la pasión de Harrison por la mística del subcontinente asiático a
raíz de su relación con el sitarista bengalí Ravi Shankar y el gurú de la
meditación trascendental Maharishi Mahesh Yogui. A lo largo de su
vida George Harrison supo rodearse de maestros y gurús que le guiaron
en los caminos hacia su búsqueda de lo trascendente. El reconocido
profesor de sánscrito de la prestigiosa universidad de Cambridge fue
uno de ellos y se dio a conocer gracias a las traducciones al inglés de
los principales libros sagrados de la India. Comenzaba así un intercam-
bio epistolar entre Mascaró y Harrison que se prolongaría hasta el mes
de enero de 1968, momento previo al viaje a la India de la banda de
Liverpool. En una de las cartas que el profesor de Santa Margalida re-
mitió a Harrison adjuntó un ejemplar de Lamps of Fire. The Spirit of
Religions, su libro de poemas y máximas de los grandes maestros espi-
rituales de todas las grandes tradiciones religiosas del mundo. Así pues
el libro cita autores y textos de la tradición cristiana (San Agustín,
Dante, Ramon Llull o la Bíblia), hindú (Tagore, Gandhi), china Confu-
cio, Lao Tzú) y musulmana (Maimónides, Corán). En la introducción
al inglés de esta obra publicada en Mallorca en 1958 escribe Mascaró:
“Los pasajes de este libro son lámparas de fuego. Unas resplandecen
más y otras menos pero todas ellas se funden en esta gran lámpara lla-
mada por San Juan de la Cruz “la lámpara del ser de Dios”” (Mascaró,
1958: 9). De esta obra George Harrison tomará el texto de «The Inner
Light» que forma parte del poema sánscrito Tao Te Ching (Libro del
curso y de la virtud) según aparece en la traducción inglesa de Mascaró.
‒ ‒
resultado una canción estéticamente oriental acotada en la música de la
India. La estética de la canción captó rápidamente la atención de Mas-
caró que después de haber pasado dos años estudiando lenguas orienta-
les en el Parameshvara College de Jaffna, actual Sri Lanka, se sentía
ciertamente familiarizado con dichas sonoridades. No era la primera
vez que George Harrison hacía una aproximación tan determinante a
las sonoridades de la India. Unos meses antes, el séptimo álbum de es-
tudio de los Beatles Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band (Parlo-
phone, 1967) abría la cara b con el tema "Within You Without You".
Dicha canción era música india propiamente dicha, grabada en los es-
tudios EMI de Bombay y con músicos de sesión indios. La letra ponía
de manifiesto un pensamiento espiritual que acompañaría a George Ha-
rrison durante toda su vida que versaba en una reafirmación del amor y
en la existencia de una realidad superior más profunda. Fue a partir de
la audición de "Within You Without You" que la música se convertiría
en el nexo, y a la vez en el pretexto, para desarrollar sinergias comunes
entre Mascaró y Harrison. A raíz de Sgt. Pepper’s Joan Mascaró tuvo
el deseo de manifestar su interés para sugerir al beatle algunas letras de
contenido espiritual para propiciar nuevas canciones. El proyecto vital
de Mascaró de servir a la humanidad en la tarea de difundir el legado
de la cultura oriental a través de Occidente vio en la alianza con los
Beatles la oportunidad de lograr un impacto mediático de gran trascen-
dencia. En noviembre de 1967 en relación a "Within You Without You"
escribe Mascaró a Harrison: “Es una canción motivadora y podría mo-
tivar a millones de almas; y hay más metas por cumplir, esto sólo es el
principio de una “Gran Obra””. (Vicens, 1997: 77). La "Gran Obra" en
la que se refiere Mascaró en su carta a Harrison surge de la convicción
de que los textos místicos de la tradición sánscrita pueden iluminar todo
aquello que da sentido a la vida de los hombres. Inspirado por la idea
de hacer una gran aportación al mundo Harrison escribe a Mascaró para
transmitirle que podría sacar nuevas letras de los libros recibidos. La
conexión ideológica de Joan Mascaró con los movimientos juveniles de
la nueva cultura fue un factor decisivo para propiciar el encuentro con
George Harrison. A sus setenta años Mascaró congeniaba con el movi-
miento pacifista juvenil que defendía aquello que el hinduismo dicta-
mina para llegar a la plenitud de la vida: el rechazo a cualquier tipo de
violencia, el cultivo al amor y al poder verdadero del individuo para la
‒ ‒
transformación del mundo a favor del bien común. A partir de la ya
mencionada cita del poema del Tao Te Ching –aparece anotada en la
segunda carta que el profesor de sánscrito escribe al músico– George
Harrison escribirá la ya mencionada canción. El texto en cuestión, un
anuncio de los beneficios de la sabiduría de quien observa el mundo
desde una mirada contemplativa, debió causar un gran efecto en el
beatle debido a que la canción no tardó en ser publicada. El poema dice
así: Without going out of my door / I can know all things on earth /
Without looking out of my window / I can know the ways of heaven /
For the farther one travels / The less one really knows. / The sage there-
fore / Arrives without travelling / Sees all without looking / Does all
without doing (Harrison, 2002: 118).
«The Inner Light» se materializó durante la estancia de los Beatles en
la India. La instrumentación fue grabada en cinco tomas por músicos
nativos justo después de las sesiones del álbum Wonderwall Music, –
banda sonora de la película homónima compuesta por Harrison– en
enero de 1968. Para esa ocasión Harrison dio con un grupo muy com-
pleto de músicos hindúes que tocaban instrumentos tradicionales (tam-
bura, armonio, sitar, sarod, tablas, varamandal y dilruba). Así pues, fue
en Bombay, durante las sesiones de Wonderwall, que Harrison grabó el
acompañamiento para «The Inner Light» con los mismos músicos. Y
una vez en Londres, el día 6 de febrero Harrison grabó la voz solista en
el estudio 1 de Abbey Road. Dos semanas después George Harrison
escribía a Mascaró, en un papel de carta llamativamente rojo, para co-
municarle que había dado fin a la canción del poema de Tao Te Ching:
“Me complace deciros que he grabado la música de «The Inner Light»
y os enviaré una copia más adelante, cuando esté terminada” (Vicens,
2107: 79). La carta venía con el mantra Jai Guru Dev (“Victoria de la
grandeza en el universo”) como añadido a la rúbrica del Harrison.59 Así
pues, George Harrison convirtió el texto de «The Inner Light» en un
tema musical que se convirtió en un mensaje de libertad inspirado por
la traducción del Tao, una de las "lámparas de fuego" de Mascaró. Años
más tarde, en su autobiografía George Harrison aclararía que «The
El mantra Jai Guru Dev se convirtió en uno de los preferidos de los Beatles. A partir de 1968 dicho
59
mantra puede leerse junto a la firma de la correspondència personal de John Lennon y George
Harrison y se escucha en el estribillo de la canción «Across the Universe» (Vicens, 2017).
‒ ‒
Inner Light» fue escrita especialmente para Joan Mascaró a quien defi-
nió como alguien dulce, entrañable: “La canción fue escrita especial-
mente para Joan Mascaró, quien me mandó el libro, es un anciano agra-
dable. Fue grato. Las palabras lo dicen todo” (Harrison, 2002: 118). El
valor de este episodio radica sobre todo en el interés que el profesor de
sánscrito pudo ver en la noble labor de favorecer el diálogo entre las
culturas de Oriente y Occidente en el momento que los Beatles eran la
banda más famosa del planeta. "Esperamos que las palabras sublimes
lleguen al corazón de las multitudes" dirá entonces Mascaró (Abeyà,
1997: 86). Naturalmente, el interés de Harrison por el profesor de sáns-
crito fue más allá de lo estrictamente musical. La idea de la existencia
de un Dios único en Mascaró confería la tranquilidad de una gran cer-
teza en Harrison, quien desde su adolescencia renegaba de la educación
católica recibida basada en los dogmas de fe.
‒ ‒
Concert for Bangladesh. George Harrison & friends (Apple, 1971)
considerado el primer álbum de pop editado con fines benéficos. De
este modo George Harrison materializaba un ideal motivado por la idea
de que la vida contemplativa debía manifestarse en acciones materiales.
Años después, Mascaró recordaría al menos en una ocasión el encuen-
tro con Harrison. En una carta fechada a principios de la década de los
setenta dirá: “Tuve el acierto de darle la idea que hiciera un disco espi-
ritual. Lo ha hecho y veo que The Times del pasado 23 de febrero pa-
sado dice que este disco de Harrison ha tenido tanto éxito que en un año
le ha dado un millón de libras en derechos de difusión, unos ciento se-
senta millones de pesetas. A veces una idea puede ser buena”
(Maimó,1990:94). En esta misma carta el profesor de sánscrito recor-
dará que Harrison fue muy amable con él y que le mandó una grabación
de Tagore como obsequio de la India. Para la gran mayoría de seguido-
res del cuarteto de Liverpool la canción pasó realmente inadvertida,
ocupando una sola semana la posición 96 de la lista Bilboard Hot 100
(Harry, 2000). Para Harrison este hecho se explicaría sobre todo por la
gran brecha que había entre la mayoría de la gente y la música oriental.
En contraste entre ambas caras del single tampoco facilitó una recep-
ción exitosa de la canción. El trepidante y frenético ritmo de «Lady
Madonna» se había inspirado en «Bad Penny Blues», el boogie de
Humphrey Lyttelton grabado en 1965 para Parlophone y en el sonido
del pianista americano Fats Domino (Guesdon y Margotin, 2015).
Desde entonces «The Inner Light» ha sido probablemente una de las
piezas menos conocidas de los Beatles.60 Sin embargo, la literatura
Beatle de corte más académico y riguroso no duda en destacar «The
Inner Light» como una de las canciones más coherentes e innovadoras
de la banda de Liverpool. Para David Rech el tema de George Harrison
es la medida en que la música, definida como una “inquietante melodía
modal”, alcanza perfectamente “la esencia verdadera y aforística de la
letra” (Rech, 1985: 114).
60 «The Inner Light» se volvió a editar, de forma oficial, en el año 1988 en el Box Set, una caja de
col·leccionista con quince discos; y en el año 1990 en el disco compacto Vol. 2-Past Masters, que
compilaba caras B y canciones de los Beatles que no habían aparecido anteriorment en los álbumes
ingleses.
‒ ‒
2.2. PERVIVENCIAS
Cinco décadas después la vigencia de «The Inner Light» se ha visto en
redes sociales a través del hashtag InnerLightChallenge2020#, una ini-
ciativa de la Material World Foundation (fundada por George Harrison
en los años 70) para paliar los efectos de la pandemia del Covid-19.61
La organización retaba a artistas de todo el mundo a realizar una apor-
tación artística en base al mensaje de la canción «The Inner Light». A
cambio, la Fundación se comprometía a donar dinero a las familias de
los músicos afectadas. Este episodio ha coincidido con varias propues-
tas para el fomento de la lectura, la dinamización cultural y diversas
iniciativas con el propósito de alcanzar más difusión la figura de Joan
Mascaró: la presentación de las novelas en catalán Reis del món (2020)
del escritor mallorquín afincado en Barcelona Sebastià Alzamora y de
Cicatrius d’intolerància (2019) de Antoni Gelabert Mas. Ambas nove-
las recuperan la figura de Joan Mascaró ahondando en su dimensión
cultural como puente entre Oriente y Occidente a partir de su faceta de
traductor. Ambas obras también ahondan en la contribución de Mascaró
con la cultura de masas a raíz de su relación con los Beatles y la canción
«The Inner Light». Además, desde el año 2019 a partir de la actividad
Joan Mascaró. Música i Paraula, diseñada con el fin de fomentar la
lectura de los principales textos de Mascaró, se ha divulgado la figura
del profesor de sánscrito a través de la red de bibliotecas públicas de las
Islas Baleares en un formato interdisciplinar que combina música, reci-
tados y breves explicaciones. A esta lista de acciones culturales hay que
añadir la reemisión del documental Llànties de foc (Ventayol y Moyà,
2011) y la creación de la reciente Biblioteca Digital de Estudios Orien-
tales Joan Mascaró i Fornés de la UIB, un espacio de recursos en línea
relacionados no sólo con bibliografía de Joan Mascaró sino también de
varios fondos de cultura oriental.62 Todo ello ha significado el redescu-
brimiento de la figura de Joan Mascaró a través de todo un conjunto de
actividades variadas e interrelacionadas que han fomentado el diálogo
intercultural y el interés por la cultura oriental. Títulos divulgativos y
de carácter interdisciplinar han servido para dinamizar espacios de
‒ ‒
lectura y vivificar desde instituciones públicas, editoriales y producto-
ras la figura de Joan Mascaró Fornés y su labor por la cultura catalana.63
3. VALORACIÓN FINAL
La relación entre Harrison y Mascaró sin duda fue paradójica. Dos per-
sonajes con edades distintas y modos de vida opuestos convergen en
sinergias espirituales compartidas. En Llànties de foc, la versión tradu-
cida al catalán de Lamps of fire, Joan Mascaró da forma a un pensa-
miento ecuménico que permanecerá próximo a Harrison y que deviene
el legado más importante del mallorquín, aquel de que toda religión
acabad describiendo la misma escena: “… a las relaciones del hombre
con Dios y con los otros hombres, sin dar preferencia a una mentalidad
religiosa sobre las otras, porque en todas las confesiones ve una activi-
dad positiva del hombre, y la aplicación práctica de su estudio es válida
para todas las naciones y todas las creencias” (Mascaró, 1986: 8).
63 El interés de Mascaró por la cultura oriental y por un abanico amplísimo de culturas –para poder
comprenderlas, dominó más de una decena de lenguas– comenzaba y acababa en la prioridad que
para él tenía la cultura y la lengua catalana. Amigo de personalidades muy relevantes dentro del
ámbito de la cultura catalana como Francesc de B. Moll, fue Mascaró quien le puso en contacto con
el empresario catalán Rafel Griera para que hiciera posible la continuación del Diccionari català-
valencià-balear. I no sólo esto, porque Joan Mascaró nunca desaprovechó la ocasión de difundir la
cultura propia. Fue en la BBC donde remarcó el papel de los poetAs mallorquines que escribieron
en catalán: “Creo que es urgente que el amor a nuestras letras augmente en nuestro pueblo. Los
amigos de Mallorca que sienten el valor de nuestra lengua y de las letras que son vida nuestra, y
por tanto parte de la vida universal, ¿no podrían formar pequeños grupos familiares para ayudar a
tantos de hermanos nuestros que no saben leer ni escribir? Quiero decir, ¿que no saben leer un
poema nuestro y no saben escribir una carta en nuestra lengua? (...) Pequeños grupos, íntimos,
familiares, pero iluminados por un ideal de amor a la cultura bella, la nuestra y la de los demás. Todo
arte, cuanto más íntimo es, más grande, y cuanto más grande, más universal” (Ros, 2000).
‒ ‒
4. REFERENCIAS
Abeyà, E. (1997). L’experiència de traduir Joan Mascaró. G. López y A. Mas
(coord.). Joan Mascaró Fornés (1897-1987). Universitat de les Illes
Balears. 85-88
Alzamora, S. (2020). Reis del món. Proa
Calafat, M. (2003). El pensament pedagògic en l’obra de Joan Mascaró i Fornés.
Universitat de les Illes Balears [tesis doctoral]
Cortacans, O. (1999). The Beatles. La connexió mallorquina. Les cartes inèdites
de George Harrison a Joan Mascaró. El Temps. 764. 20-23
Duran, B. (2018). Sexy Sadie, los Beatles a la sombra de Maharishi (Rishikesh y
Mallorca). The Beatles (EMI 1968). El Álbum del año de la Revolución.
T&B. 183-200
Gelabert, A. (2019). Cicatrius d’intolerància. Autoedición
Harrison, G. (2002). I, Me, Mine. Phoenix
López, G. – Mas, A. (1987). Joan Mascaró i Forné: 1897-1987. Universitat de les
Illes Balears
Mascaró, J. (1958). Lamps of Fire. From the Scriptures and Wisdom of the
World. Editorial Moll
Mascaró, J. (1993). La Creació de la fe. Editorial Moll
Munar, M. (1997). La idea d’educació en l’obra de Joan Mascaró i Fornés: resum
biogràfic i selección de textos. Universitat de les Illes Balears
Mut, J.M. (2016). El ioga de Joan Mascaró i Fornés. Universitat de les Illes
Balears [tesis doctoral]
Mut, J.M. (2000). Irracionalitat, racionalitat i transracionalitat en el pensament de
Joan Mascaró i Fornés. Taula: Quaderns de pensament. 33/34.197-210
Pritchard, D. – Lysaght, A. (1999). Los Beatles. Una historia oral. Editorial
Juventud
Ros, C. (2020). Joan Mascaró, la dimensión universal de l’ànima. AraBalears
Ventayol, S. – MOYÀ, O. (2011). Llànties de foc. Quindrop
Vicens, F. (2017). George Harrison. The Inner Light, una vida espiritual. Milenio
Vicens, F. (2017). Within You Without You. De Londres a Dheli cruzando el
universo. Música y orientalismo en los Beatles. Sgt. Pepper’s a través del
espejo. T&B.117-134
Vicens, F. (2017). Joan Mascaró o el místic desconegut. Caràcters.81.34-35
‒ ‒
CAPÍTULO 60
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
convocatoria de 2020, pero estos quedan fuera del análisis de este tra-
bajo, al no poderse estudiar todavía su impacto.
Este tipo de proyectos incluye intercambios de alumnado de aproxima-
damente una semana de duración: son las denominadas movilidades de
corta duración. Cada movilidad se lleva a cabo en uno de los países
socios, adonde acuden los demás. Cada centro suele llevar a cada mo-
vilidad entre seis y ocho alumnos (incluso diez si el precio de los vuelos
lo permite) y dos profesores. Durante esa semana se llevan a cabo dis-
tintas actividades coordinadas por el centro anfitrión. Todo ello inde-
pendientemente de las actividades que cada centro va realizando a lo
largo de los meses que dura el proyecto.64
En el proyecto sobre Patrimonio Cultural coordinado por el IES Alonso
Sánchez (2018-2021) además se han incluido movilidades de larga du-
ración (en adelante, MLD). Estas han consistido en intercambios de
alumnado de un mínimo de dos meses con los centros socios de Finlan-
dia e Italia. De hecho, se enviaron dos alumnas de bachillerato a Fras-
cati (Italia) durante tres meses y tres alumnos a Lammi (Finlandia) du-
rante dos meses en el curso 19/20. Para estas MLD se previeron planes
de estudio personalizados que se combinaron con trabajos sobre la te-
mática del proyecto.
Estas MLD se desarrollaron antes del confinamiento de marzo de 2020
motivado por la COVID-19. La pandemia nos obligó a cancelar una
movilidad corta a Alemania que estaba prevista para marzo de 2020 y
otra corta prevista para Italia para octubre de 2021. Asimismo, tuvimos
que cancelar las movilidades de larga duración a Italia y Finlandia pre-
vistas para el curso 2020/21. Aunque solo ofertábamos dos plazas para
ambas movilidades largas, en la convocatoria que efectuamos en el cen-
tro en junio de 2020 hubo once candidaturas, a pesar de estar en medio
de una pandemia. Ello es muestra del éxito que tuvieron esos primeros
intercambios de larga duración.
64 Los proyectos KA219 y KA229 tienen básicamente la misma estructura. La más reciente denomi-
nación KA229 se debe a que se introdujeron algunos leves cambios, como por ejemplo la elimina-
ción de las reuniones transnacionales del profesorado responsable.
‒ ‒
Por otra parte, la movilidad corta a Alemania, que hubo de cancelarse,
ha sido sustituida por una movilidad virtual efectuada en abril de 2021.
En esta movilidad virtual se intercambiaron actividades online.
Pasemos, pues, a continuación a repasar los datos fundamentales de los
cuatro proyectos.
1.1. PROYECTO 1
‒ ‒
los alumnos preguntas de reflexión para ver los efectos de las activida-
des. Los alumnos, además, elaboraron porfolios guiados. Las familias
realizaron cuestionarios al final.
Difusión del proyecto: se subieron los materiales creados, los documen-
tos, fotos, actividades, etc. a una página web. Los materiales se han
integrado en la estructura pedagógica de los centros. Se colocaron car-
teles del proyecto en lugares visibles, se hicieron notas de prensa y se
contactó con las autoridades locales para cada evento. En cada centro
ha habido un “rincón del proyecto” con información continua y cons-
tantemente renovada sobre el mismo. Se usaron medios como eTwin-
ning o Twitter.
1.2. PROYECTO 2
‒ ‒
cabo y analizar una investigación científica; b) desarrollar habilidades
TIC; c) desarrollar competencias interpersonales e interculturales; d)
intercambiar experiencias y buenas prácticas; e) llevar a cabo activida-
des de aprendizaje entre iguales y talleres; f) desarrollar la conciencia
medioambiental.
Evaluación del proyecto: mediante herramientas como documentos ela-
borados (presentaciones, fotos, folletos, vídeos, artículos de prensa, ho-
jas de trabajo, programaciones de lecciones, etc.), cuestionarios, listas
de asistencia, encuestas; entrevistas individuales y grupales con parti-
cipantes; informes de los coordinadores; actas de reuniones; resúmenes
de movilidades. Los coordinadores de cada centro efectuaron informes
trimestrales. En las reuniones se acordaron los documentos de evalua-
ción.
Difusión del proyecto: se han usado redes sociales, páginas web, sitio
web del proyecto, las autoridades locales y eTwinning. En cada centro
se creó el “Rincón del proyecto” con información y materiales. Se ha
informado al personal del centro, a alumnos y familias. Ha habido
reuniones con estudiantes y profesorado de instituciones educativas y
académicas locales. Se difundieron los productos (folletos, vídeos, etc.)
a bibliotecas y otros centros.
1.3. PROYECTO 3
‒ ‒
Breve resumen: en el Año Europeo del Patrimonio Cultural, cinco ins-
titutos de enseñanza secundaria de España, Alemania, Italia, Grecia y
Finlandia deciden pretenden explotar todas las posibilidades educativas
del patrimonio cultural con la idea clara de que conocer y compartir sus
diferentes manifestaciones incrementará la conciencia de pertenecer a
Europa como proyecto común. El potencial educativo, la naturaleza in-
terdisciplinaria y la esencia motivadora del patrimonio cultural nos
ayuda a hacer frente a las necesidades detectadas en las diferentes es-
cuelas, necesidades que van desde evitar el abandono escolar prematuro
hasta aumentar el rendimiento académico de los estudiantes. Las acti-
vidades tratan de abarcar todas las formas y manifestaciones posibles
del patrimonio cultural y todos los aspectos de la vida cultural, sus di-
ferentes niveles de protección jurídica: sitios naturales, bienes cultura-
les, bienes inmateriales (tradiciones, etc.), sitios de interés industrial,
desde las listas del Patrimonio Mundial de la UNESCO hasta los bienes
locales protegidos. Algunas de las actividades que se han llevado a cabo
durante los intercambios de estudiantes son: conferencias, seminarios,
Clases de AICLE, viajes guiados, exposiciones, talleres para preparar
los productos (folleto, galería de fotos en eTwinning, folletos, presen-
taciones multimedia, sitio web del proyecto).
Objetivos: 1. incrementar los vínculos interculturales mediante el co-
nocimiento del patrimonio cultural de los países involucrados en el pro-
yecto; 2. incrementar los conocimientos y habilidades de los estudiantes
en diferentes materias; 3. adquirir habilidades para realizar investiga-
ción científica: planificación, análisis e inferencia; 4. mejorar la termi-
nología lingüística sobre la regulación y gestión de las diferentes for-
mas de patrimonio cultural; 5. mejorar las competencias para utilizar
las TIC; 6. introducir métodos de enseñanza innovadores que hagan
más atractivo el aprendizaje; 7. aumentar las habilidades interpersona-
les, incluyendo a) relaciones sociales adecuadas de los alumnos en equi-
pos internacionales para que puedan adquirir las competencias necesa-
rias para el desarrollo personal y cívico y el acceso al mercado laboral,
b) superar las barreras emocionales, culturales y lingüísticas a través de
actividades internacionales; 8. fomentar la concienciación de los estu-
diantes y las familias sobre la pertenencia a la Unión Europea; 9.
‒ ‒
difundir y promover buenas prácticas y métodos para la protección del
patrimonio cultural en los países europeos también como elemento ge-
nerador de empleo; 10. contribuir al desarrollo profesional de los pro-
fesores.
Evaluación: las actividades para evaluar el logro de los objetivos y re-
sultados han sido variadas: pruebas que diagnostican los conocimientos
y habilidades de los estudiantes después de las actividades selecciona-
das; encuestas de evaluación después de cada actividad planificada (in-
cluidos talleres, seminarios, reuniones de expertos, etc.); entrevistas y
debates con los participantes sobre la utilidad y calidad de las activida-
des; análisis de la documentación del proyecto y de los productos; in-
formes anuales por parte de los coordinadores de los proyectos escola-
res; informe intermedio y final. Los indicadores de éxito para evaluar
el logro de los objetivos y resultados del proyecto han sido: a) cuanti-
tativos: número de talleres, conferencias, seminarios, viajes y otras ac-
tividades; número de participantes; número de profesores que partici-
pan; número de instituciones y empresas que cooperan en la ejecución
del proyecto; número de representantes de los gobiernos locales y de
las autoridades educativas a distintos niveles que apoyan la ejecución
del proyecto; número de publicaciones, incluidas las publicaciones en
internet; número de productos del proyecto; número de personas que se
han beneficiado indirectamente de las actividades organizadas en el
marco del proyecto; b) cualitativos: resultados de las pruebas y/o eva-
luaciones subjetivas de los participantes; ampliación de los conoci-
mientos y las competencias de los estudiantes; nivel de satisfacción de
los participantes en el proyecto; desarrollo de las capacidades interper-
sonales, analíticas y organizativas de los participantes en el proyecto;
aumento de las competencias interculturales y lingüísticas - aumento de
los conocimientos de otras culturas y naciones; profundización en la
capacidad de utilizar las TIC.
Difusión: redes sociales, sitio web del proyecto, sitios web de centros
escolares y autoridades locales, plataforma eTwinning y medios de co-
municación. Además, se ha creado un "rincón del proyecto" en el ves-
tíbulo de cada escuela, que contiene información y materiales sobre los
objetivos del proyecto y las actividades realizadas. El personal del
‒ ‒
centro y las familias han recibido información detallada sobre las acti-
vidades llevadas a cabo durante el proyecto, en particular, después de
cada intercambio de grupos de estudiantes. Los resultados se han pre-
sentado en los centros de enseñanza y han sido publicados en los sitios
web. Se han llevado a cabo una serie de actividades, seminarios, expo-
siciones y otros eventos informativos. También se han celebrado
reuniones con autoridades locales (por ejemplo Delegación Territorial
de Educación, Alcaldía, o Diputación Provincial).
1.4. PROYECTO 4
‒ ‒
para mejorar la calidad y la eficiencia de la educación y la formación
para hacer realidad el aprendizaje permanente y la movilidad; crear ma-
teriales nuevos e innovadores que permitan reducir la frustración esco-
lar y el abandono escolar prematuro; desarrollar nuevos métodos para
mejorar la calidad y la eficiencia de la educación y la formación y para
aumentar la creatividad y la innovación; prestar atención a los estudian-
tes con necesidades especiales, promoviendo la equidad y la cohesión
social, incluyendo estudiantes con trastornos sociales y con dificultades
económicas, e inmigrantes y fomentar el desarrollo de las habilidades
multiculturales e interpersonales mediante encuentros interculturales y
la comunicación en una lengua extranjera.
Evaluación: formularios de evaluación cualitativa y cuantitativa dise-
ñados sobre la base de los que ya existen en las escuelas participantes,
en los que se mide el impacto de los objetivos del proyecto en los par-
ticipantes. Los formularios de evaluación se han creado para todos los
grupos participantes, es decir, los profesores, los estudiantes y las fa-
milias, de una manera diferente. Estos cuestionarios se entregan a los
grupos de personas participantes al principio y al final del intercambio,
y una vez rellenadas por ellos han sido evaluadas por los coordinadores
del proyecto. Los resultados han sido documentados, comparados y
puestos a disposición de los miembros del personal participante.
Difusión: los centros escolares asociados han estado conectados a tra-
vés de internet, los medios de comunicación social y, en particular, eT-
winning, durante todo el proyecto y han podido compartir las actas, sus
opiniones y resultados a través de ellas. También se han celebrado con-
ferencias por Skype para intercambiar opiniones sobre los trabajos. Du-
rante las reuniones se ha debatido sobre los materiales creados y se han
ultimado los planes para las próximas reuniones. Durante las reuniones
se ha invitado a la prensa local para documentar las mismas. Los prin-
cipales grupos destinatarios son las comunidades escolares locales y los
miembros asociados, es decir, los profesores, estudiantes, padres y ma-
dres y los futuros estudiantes y sus familias que tienen acceso a la pá-
gina web de los distintos centros educativos. Como los institutos no son
sólo lugares de aprendizaje para los estudiantes, sino también para los
‒ ‒
profesores y los profesores en formación, sus seminarios también han
sido partícipes de la evolución de los logros en los centros participantes.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
‒ 5. Concienciación del alumnado sobre su pertenencia a la
Unión Europea y de la importancia del aprendizaje de lenguas
extranjeras (fundamentalmente inglés en nuestros proyectos)
por su valor como vehículo de comunicación. Todo ello re-
vierte en una mejora general de los datos académicos del cen-
tro y en concreto de la materia de inglés en los últimos años.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
2. La metodología para el análisis de os aspectos curriculares del
impacto de estos proyectos es también la de las unidades didác-
ticas en inglés con metodología CLIL-AICLE publicadas en la
página web del centro y en eTwinning y la Plataforma de Re-
sultados de Erasmus+. Para esta última plataforma pueden ser
consultadas en el siguiente enlace: www.ec.europa.eu/progra-
mmes/erasmus-plus/projects. Ahí se introduce el código de
cada proyecto y tenemos acceso a los diferentes materiales cu-
rriculares.
‒ ‒
pertinente analizar los resultados académicos generales para
comprobar si ha habido una mejora en los mismos en los que
estos proyectos (junto a, claro está, otros factores), hayan po-
dido influir. Para el análisis de la mejora de los resultados aca-
démicos generales los cursos 17/18, 18/19 y 19/20 tomamos
como fuente los Indicadores Homologados de Autoevaluación
que la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía envía
cada curso, tras las evaluaciones ordinaria y extraordinaria, a
cada centro a través del sistema de información Séneca. Cada
año en el centro volcamos los datos de esos indicadores en la
herramienta denominada “Matriz de indicadores homologa-
dos”, que consiste en un Excel, en el cual encontramos, de ma-
nera resumida, la evolución de distintos indicadores en los últi-
mos tres cursos con indicación de su evolución en comparación
con datos anteriores del propio centro (tendencia) y con los da-
tos de otros centros de Índice Socio Cultural (ISC) similar (re-
levancia). Los indicadores se agrupan en tres áreas: ense-
ñanza/aprendizaje, atención a la diversidad, y convivencia. A
continuación recogemos en la tabla 1 una selección de indica-
dores de la matriz. También analizamos para los resultados aca-
démicos los informes de resultados de la Prueba de Evaluación
de Acceso a la Universidad (PEVAU) que cada curso envía a
los centros el Servicio de Inspección Educativa, desglosado por
materias y comparando con la media de la provincia. Nos sirven
para conocer no sólo los resultados académicos generales, sino
también los de la materia de inglés.
‒ ‒
TABLA 1. Indicadores homologados de autoevaluación del IES Alonso Sánchez (selección
del área de enseñanza/aprendizaje). Septiembre 2020
4. RESULTADOS
‒ ‒
plus/projects) podemos ver que se encuentran alojadas en nuestro pro-
yecto sobre docencia bilingüe de 2015 trece unidades didácticas CLIL,
que cualquier visitante se puede descargar: sobre la catedral de Sevilla,
sobre los eventos de 1492, sobre Química, sobre minería en Huelva,
sobre minería en la literatura italiana, en la historia y en la actualidad
de Sicilia, sobre las minas de carbón en Alemania, sobre la vida y la
hospitalidad en la antigua Roma, sobre la alimentación y el ejercicio
físico, y sobre la docencia bilingüe en Andalucía.
Si entramos en la sección de nuestro proyecto sobre biodiversidad en la
Plataforma de Resultados llegamos a encontrar alojados hasta 45 mate-
riales distintos: una encuesta de satisfacción de visitantes de Doñana,
presentaciones, vídeos y seminarios sobre el Vesubio, Pompeya, pre-
servación, biodiversidad marina en Europa, especies en Aversa, espe-
cies endémicas en Europa, presentaciones de sus lugares de origen, his-
torias ecológicas de los lugares de cada centro socio, seis vídeos sobre
el seminario acerca de la gestión de residuos sólidos, sobre Aracena,
sobre fuentes alternativas de energía, sobre centrales eólicas, sobre
plantas hidroeléctricas y solares, sobre biodiversidad europea, sobre el
día internacional de la Tierra, película sobre reintroducción de especies,
cuatro vídeos de distintos países con diez modos de reducir los efectos
del calentamiento global, más presentaciones y vídeos sobre las distin-
tas regiones e institutos, exposiciones fotográficas sobre pinares, sobre
directivas acerca de las aves en los países participantes, sobre implica-
ción en la preservación de la naturaleza, y carteles sobre métodos para
reducir la huella ecológica.
Si nos centramos ahora en las cifras de solicitudes de matrícula en el
centro para primero de Bachillerato, encontramos los siguientes datos
para los últimos cursos.
Para el curso 16/17 hubo 28 solicitudes para 1º de Bachillerato de alum-
nado procedente de otros centros distintos del IES Alonso Sánchez.
Para el curso 17/18 fueron 38. Para el 18/19, 61. Para el 19/20, 44. Para
el 20/21, 27. Y para el 21/22, 48.
Destaca en primer lugar que, en un contexto generalizado de descenso
de la natalidad, las solicitudes han sido numerosas todos esos cursos.
‒ ‒
En segundo lugar, se aprecia una subida considerable desde el 17/18,
con la notable excepción a la baja del 20/21. Esta cifra más baja se
puede deber a que el proceso de escolarización coincidió con el confi-
namiento.
Por otra parte, en cuanto a los resultados académicos en general del
centro, en la matriz de indicadores de septiembre de 2020 se puede ob-
servar que, en el ámbito de enseñanza/aprendizaje, hemos ido obte-
niendo en estos últimos tres años cada vez mejores resultados que el
anterior en “Promoción del alumnado de ESO”, “Alumnado de ESO
con evaluación positiva en todas las materias”, “Alumnado de ESO que
alcanza la titulación”, “Promoción de alumnado de bachillerato”,
“Alumnado de bachillerato con evaluación positiva”, y “Alumnado de
bachillerato que alcanza la titulación”. Por tanto, la tendencia en todos
estos aspectos es positiva en el IES Alonso Sánchez.
Por ejemplo, si nos centramos en el porcentaje de alumnado de ESO
que alcanza la titulación, se ha mejorado en los tres últimos años lle-
gando a un 84,61% en el 19/20 (el curso 18/19 fue de un 74,12%, el
17/18 de un 56,25% y el 16/17 de un 66,67%). También hemos mejo-
rado en cuanto a alumnado de bachillerato que alcanza la titulación,
llegando el curso 19/20 a un 89,02% (el curso 18/19 fue de 81,54%, el
17/18 fue de un 73,12%, y el 16/17 de un 63,51%).
Hay otros indicadores del ámbito de enseñanza/aprendizaje en los que
la matriz nos muestra que durante los tres últimos cursos el centro ha
tenido resultados variables, en dientes de sierra: “Alumnado de ESO
con evaluación positiva en distintas materias”, “Eficacia del tránsito”,
“Alumnado con título en ESO que continúa estudios superiores”, y
“Alumnado titulado en bachillerato que continúa estudios superiores”.
En cuanto a los resultados generales en PEVAU, en la convocatoria de
junio de 2018, el centro obtuvo una calificación media de 7,33 frente a
6,24 de la media provincial de centros. En junio de 2019 fue de un 6,90
frente a un 5,96 de la provincia. Y en junio de 2020 fue de un 6,21
frente a un 6,24 de la provincia (en este último curso hay que tener en
cuenta la incidencia del confinamiento y la adaptación de la PEVAU).
Y en la materia de inglés, en la convocatoria ordinaria de 2018 la
‒ ‒
calificación media de inglés del centro fue de 7,88 (frente al 6,33 de la
media provincial de centros), en 2019 de 7,64 (frente al 6,06 provincial)
y en 2020 de 6,94 (frente al 6,55 provincial).
Otro resultado visible de los proyectos europeos llevados a cabo en el
centro es el desarrollo de la internacionalización en el mismo. De he-
cho, para el curso 21/22 el centro ha solicitado (y se le ha concedido)
la participación en un intercambio grupal con un centro de Reino Unido
financiado y convocado por la Administración Educativa andaluza.
Además, el centro ha participado en la convocatoria de 2020 de la Acre-
ditación Erasmus+, habiéndola conseguido, con lo que tiene garantiza-
dos los fondos para movilidad de profesorado y alumnado para el pe-
riodo 2021-2027. También el IES Alonso Sánchez ha sido uno de los
ocho seleccionados en Andalucía en la convocatoria de 2021 para im-
partir Lengua y Cultura Chinas a partir del curso 2021/22 en el marco
del programa de Aulas Confucio. Asimismo, el centro ha participado
en la convocatoria de 2021 de la Consejería de Educación de la Junta
de Andalucía para la selección de centros que impartan el Bachillerato
Internacional a partir del curso 2021-22, quedando el primero en pun-
tuación de los centros de Huelva. Como no se ha concedido dicho Ba-
chillerato a ningún centro de esta provincia en esa convocatoria, el IES
Alonso Sánchez está el primero en la lista de espera. Todos estos logros
han repercutido en la concepción del centro como institución de clara
vocación europea e internacional.
Por último, esta vocación de internacionalización se retroalimenta con
el hecho de que el IES Alonso Sánchez es un centro bilingüe de inglés
desde el curso 2009/10. Ahora mismo se imparten como bilingües todas
las líneas de la ESO y dos de Bachillerato. El número de alumnos que
solicitan nuestro Bachillerato bilingüe es estable los últimos años, es-
tando en torno a 45.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
una memoria final en la que, entre otros aspectos, se debe recoger el
impacto que el proyecto ha tenido. Sin embargo, se echan en falta (o al
menos no hemos encontrado) más publicaciones con datos de impacto
concretos que dejen clara la relación causa-efecto.
En nuestro apartado de referencias incluimos algunas aportaciones en
este sentido, como la de Martínez Serrano (2016) sobre el Centro de
Profesorado de Priego-Montilla, la de Mateo Gómez (2020) sobre uso
de juegos de mesa estratégicos para la enseñanza de las ciencias socia-
les, la de Mateo Gómez y Bravo Marín (2020) sobre historias persona-
les o la de Segovia Aguilar-Pavón Vázquez (2017) sobre creación au-
diovisual.
Otro aspecto que se debe subrayar es hasta qué punto la participación
en proyectos Erasmus+ promueve la integración de alumnado con bajo
índice socio-económico. De hecho, en las propias convocatorias se va-
lora positivamente que esté previsto que este alumnado participe. El
alumnado participante en estos proyectos no debe aportar ninguna can-
tidad económica, salvo algún dinero de bolsillo que quiera llevarse a la
movilidad. Nosotros hemos tenido alumnos que en estas movilidades
se habían montado en un avión por primera vez en su vida. Cada centro
establece sus propios criterios de selección del alumnado participante
(que deben ser públicos y transparentes). En el IES Alonso Sánchez
hemos incluido entre esos criterios algunos de nivelación socioeconó-
mica como la pertenencia a familias numerosas o monoparentales.
En la línea con lo anteriormente señalado, una cuestión importante de
la participación en estos proyectos europeos es su capacidad motiva-
dora y su influencia para que el alumnado que participa o quiere parti-
cipar en ellos no abandone los estudios antes de tiempo.
Y como se puede observar en los títulos y las temáticas de los proyec-
tos, se tratan temas transversales como la coeducación, la biodiversi-
dad, el patrimonio cultural o la integración. Son temas que vienen prio-
rizados en las propias convocatorias Erasmus+ al ser considerados ob-
jetivos estratégicos europeos. Valga como ejemplo que, en el marco del
proyecto sobre género coordinado por un centro alemán, el alumnado
de los diversos países que participaron en una movilidad en Italia
‒ ‒
elaboró un Kamishibai (o teatro portátil japonés) con mujeres famosas
de cada uno de los países. La actividad mereció un premio nacional
sobre igualdad de Italia, que fue entregado por la ministra del ramo.
También con estos proyectos, y obligados por la necesidad de comuni-
carse y trabajar a distancia, se desarrollan las nuevas tecnologías apli-
cadas a la enseñanza/aprendizaje. Ello ha tenido su máximo exponente
en la movilidad virtual que desarrollamos en mayo de 2021 en sustitu-
ción de una presencial a Alemania que estaba prevista para marzo de
2020 y se canceló por la pandemia de COVID-19. En esta movilidad
virtual participaron unos 400 alumnos de todos los países socios de ese
proyecto (Alemania, España, Finlandia, Grecia e Italia).
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
7. REFERENCIAS
‒ ‒
CAPÍTULO 61
1. INTRODUCCIÓN
A lo largo de la historia, han sido muchos los docentes que han inten-
tado progresar y perfeccionar la enseñanza a estudiantes con diferentes
capacidades. En el campo de las deficiencias auditivas, sin embargo,
son escasos los estudios relacionados con la adquisición y perfecciona-
miento de lenguas extranjeras. Por este motivo, este artículo se centrará
en la Euritmia, una metodología específica con la que se intentará de-
mostrar cómo el uso de diferentes posiciones y movimientos corporales
mejora, o al menos procura que aumente la precisión, de fonemas ex-
tranjeros por parte del alumnado. La Euritmia, hija de la metodología
educativa Waldorf, abarca un gran número de enseñanzas y aplicacio-
nes, desde la medicina hasta la metafísica. En este caso, son la Euritmia
Tonal y la Euritmia del Habla las que van a ser estudiadas como posi-
bles instrumentos durante el proceso de aprendizaje a estudiantes sor-
dos o con diferentes capacidades auditivas. Han sido precisamente los
condicionamientos de dichos estudiantes los que han servido como mo-
tivación para poder profundizar en el análisis de nuevas vías que facili-
ten la enseñanza de una lengua extranjera en general, y en este caso,
inglés en particular, puesto que su aprendizaje depende básicamente de
la memoria visual para pronunciar fonemas no escuchados con anterio-
ridad. Dada la entonación y ritmo que caracterizan a la mayoría de las
lenguas, se aprovechará el marco de la Euritmia Tonal de manera espe-
cífica para plantear algunos ejercicios mixtos.
‒ ‒
De entre todas las materias existentes en la materia, este artículo aborda
la Euritmia porque “what substantially distinguishes eurythmy from
other artistic movement forms is its therapeutic value and the psycho-
physiological theory upon which it is based” (Ogletree, 1976, p. 307)
65
. En este trabajo también se observará cómo la Euritmia se plantea
como alternativa terapéutica para alumnos con otras capacidades o tras-
tornos, como los alumnos con TDAH. Hay que tener en cuenta que la
gimnasia se diferencia de esta metodología en que el objetivo de esta
última es expresar mensajes, sentimientos e ideas hacia el exterior a
través del movimiento, evitando el uso de posiciones arbitrarias. Te-
niendo en cuenta los requisitos formales de esta publicación y que el
proyecto se encuentra todavía en desarrollo, este análisis se centrará en
un enfoque meramente teórico. No obstante, se incluirán algunos con-
sejos y ejercicios potenciales que podrían utilizarse en un estudio pos-
terior más amplio.
‒ ‒
de su programa, configurando y potenciando la educación del alum-
nado. En su Speech Eurythmy Course ([Curso de Euritmia oral]), Stei-
ner dio un claro ejemplo de cómo eran las clases en dichos centros: "the
entire course had the character of an immediate fresh improvisation.
Drawings were quickly made on the blackboard; exercises for exempli-
fication were carried out […]; everything came about in the form of
conversation and collaboration, not in mere lecturing" (2006, p. 6, 7)67.
El objetivo principal de la Euritmia era educar a los niños mediante el
enriquecimiento de sus dotes artísticas; y todas estas mejoras se basa-
ban en una serie de movimientos corporales. Estos movimientos no son
arbitrarios, puesto que existe uno específico para la representación de
cada sonido o fonema, así como para cada finalidad terapéutica. Ade-
más, existe una serie de ejercicios personales sesgados en función de
cada individuo. Steiner creía que "Eurythmy shape[d] and move[d] the
human organism in a way that furnishes direct external proof of our
participation in the suspensory world. In having people do eurythmy,
we link them directly to the suspensory world" (2006, p. 17)68. Creía
que existía una relación directa entre el cuerpo etérico – el cuerpo físico
– y el cuerpo astral. De esta manera, la Euritmia sería la única manera
a través de la cual podríamos ser capaces de desarrollar una completa
comprensión de un mensaje, surgiendo así la Euritmia del Habla. Stei-
ner buscó movimientos que fueran capaces de emitir los sonidos que
utilizamos en el habla. Después de haber estudiado los diferentes mo-
vimientos realizados por nuestros órganos del habla cuando produci-
mos diferentes sonidos, Steiner dio con distintos movimientos corpora-
les que eran afines a los movimientos de los órganos del habla.
Estos movimientos formativos se articularían especialmente con los
brazos y las manos, aunque también se podría utilizar el resto del
cuerpo, y tienden a recrear lo que hacen los órganos del habla y la
67 “todo el curso tenía el carácter de una improvisación fresca e inmediata. Los dibujos se hacían
rápidamente en la pizarra; [...] todo se producía en forma de conversación y colaboración, no de
mera conferencia”. (Traducción propuesta por Marina Lacasta Millera)
68 “la Euritmia da forma y movimiento al organismo humano de manera que proporciona una prueba
externa directa de nuestra participación en el mundo suspensivo. Al hacer que las personas practi-
quen la Euritmia, las vinculamos directamente con el mundo suspensivo”. (Traducción propuesta
por Marina Lacasta Millera)
‒ ‒
laringe cuando producimos un sonido. En este sentido, esta metodolo-
gía sería muy interesante para que un alumno con deficiencias auditivas
produjese sonidos nunca emitidos por su boca ni escuchados con ante-
rioridad. Steiner reconocía que estos movimientos estaban relacionados
no sólo con los diferentes sonidos, sino también con los sentimientos y
estados de ánimo. En su ensayo About the Essence of Gesture ([Sobre
la Esencia de los Gestos]), afirmaba que
the aim of Eurythmy is to represent in the movement of the individual
human limb or the whole human being what language represents in the
air formed by the human organism. And Eurythmy was indeed created
in such a way that the same impulses that the human organism transfers
into the formed air as a mediator of language or sing are translated into
movement. (2006, p. 44) 69
3.1. LA MEDICINA
‒ ‒
dentro de este ámbito, la Euritmia juega el papel de medicina alterna-
tiva, bastante similar a aquellas de osteopatía y homeopatía.
3.2. LA MÚSICA
3.3. LA TERAPIA
70 “como seres astrales hemos sido creados a partir del cosmos según las leyes musicales. [...]
Nosotros mismos somos un instrumento”. (Traducción propuesta por Marina Lacasta Millera)
71 “La investigación en neurofisiología confirma que existen vínculos íntimos entre nuestro movi-
miento y el desarrollo y la estimulación del cerebro. […] La Euritmia curativa puede [...] aportar
armonía y relajación al cuerpo, y estimular la conciencia espacial y la atención plena que aportan
facilidad y entusiasmo a los participantes”. (Traducción propuesta por Marina Lacasta Millera)
‒ ‒
La terapia kinésica, íntimamente ligada a la Euritmia, ha aportado gran-
des resultados en numerosos pacientes. Todos los movimientos están
controlados por nuestro cerebro, y al igual que sucede con el yoga y con
otras prácticas orientales, estos movimientos aportan armonía y disten-
sión al paciente.
3.4. LA EDUCACIÓN
De entre todas las expuestas por los distintos estudiosos, es Rudolf Stei-
ner quien ha dado la mejor descripción de todas. En sus ensayos, la
explica de la siguiente manera:
‒ Now just as in speech a sound, a phrase, the turning of a
phrase, a question, an exclamation, an ordinary statement […]
correspond to experiences of the soul, so we can find in
exactly the same way an expression of the human organism in
movement. Moreover, this movement can be just as unequi-
vocal as the sound itself. Here we have one kind of eurythmy
–speech eurythmy. (2006, p. 46)72
Por otra parte, James Emmot describió el Habla Visible o Discurso Vi-
sible como "a universal alphabet because it claimed to enumerate and
symbolize every sound, linguistic and no linguistic, that the vocal or-
gans themselves were theoretically capable of producing,” and indeed,
72 Ahora bien, así como en el habla un sonido, una frase, el giro de una frase, una pregunta, una
exclamación, una declaración ordinaria [...] corresponden a experiencias del alma, podemos encon-
trar exactamente de la misma manera una expresión del organismo humano en movimiento. Ade-
más, este movimiento puede ser tan inequívoco como el propio sonido. Aquí tenemos un tipo de
Euritmia: la Euritmia Verbal. (Traducción propuesta por Marina Lacasta Millera)
‒ ‒
it “claimed to hold the universal key to the representation of all vocal
sounds" (2017, p. 128)73. En ambos casos, tratan de plasmar la idea de
representar las diferentes cualidades del sonido. Sin embargo, el grupo
de Emmott se encontró con un problema universal. Tuvieron que en-
frentarse a las dificultades que se encuentran al intentar ordenar y orga-
nizar todos los sonidos humanos utilizados en el habla en todas las len-
guas. Para lograrlo, tuvieron que ir más allá de los alfabetos convencio-
nales y crear un nuevo sistema basado en símbolos completamente nue-
vos. "Melville Bell’s own phonetic system, Visible Speech, […], was
one of the major debts of the International Phonetic Alphabet (IPA) in
the late 1880s, which, based on physiological principles, marks the con-
solidation of the mechanical approach that defined modern vocal sci-
ence" (Emmott, 2017, p. 126)74. De hecho, Graham Bell fue capaz de
crear un nuevo alfabeto en el que cada carácter podía revelar cómo se
formaban los sonidos en los diferentes órganos del habla. No obstante,
es importante tener en cuenta que siempre se necesita un diagrama para
explicar completamente la posición de la lengua – aquellos diagramas
que sean animados siempre serán más útiles a la hora de mostrar el mo-
vimiento de los diferentes órganos del habla –.
Esta idea es de especial relevancia en relación con los alumnos con di-
ferentes discapacidades auditivas que aprenden inglés como lengua ex-
tranjera, ya que la mayoría de ellos probablemente nunca han escu-
chado muchos de los fonemas y, de esta manera, mostrar a estos alum-
nos la posición de los diferentes órganos del habla podría facilitarles la
producción de dichos fonemas con la mayor precisión posible. Junto
con el alfabeto fonético internacional, también es necesaria la Euritmia,
ya que cada uno de los movimientos representa la posición de los órga-
nos del habla. Las imágenes pueden considerarse, en palabras de
73 “un alfabeto universal porque pretendía enumerar y simbolizar todos los sonidos, lingüísticos y no
lingüísticos, que los propios órganos vocales eran teóricamente capaces de producir" y, de hecho,
"pretendía tener la clave universal para la representación de todos los sonidos vocales”. (Traducción
propuesta por Marina Lacasta Millera)
74 “El propio sistema fonético de Melville Bell, Visible Speech, [...], fue una de las principales deudas
del Alfabeto Fonético Internacional (AFI) a finales de la década de 1880, que, basado en principios
fisiológicos, marca la consolidación del enfoque mecánico que definió la ciencia vocal moderna”.
(Traducción propuesta por Marina Lacasta Millera)
‒ ‒
Bakker, " as aggregates of visual information [that] are easier to re-
member than verbal, sequential information" (1997, p. 56)75. Por lo
tanto, para un alumno con deficiencias auditivas será más fácil desco-
dificar y recordar una imagen – o más bien un movimiento – que repre-
sente la posición real de los órganos del habla. A continuación, se pre-
sentan, a modo de ejemplo, varias representaciones eurítmicas corres-
pondientes a distintas consonantes.
75 “como agregados de información visual [que] son más fáciles de recordar que la información
‒ ‒
FIGURA 2. Representación eurítmica de la consonante k.
‒
Fuente: Discover Eurythmy- Movement that Speaks and Sings.
‒ ‒
FIGURA 4. Representación eurítmica de la consonante b.
‒ ‒
elegance and capacity for revealing the innermost experiences of the
human larynx is extended to become whole-body movement" (2009,
p. 4)76. Sólo utilizando nuestro cuerpo e intentando recrear la posición
de los distintos órganos, el alumno podrá encarnar e imitar el sonido
o la palabra.
76“hablar y cantar a través de movimientos y gestos que revelan al ojo lo que el lenguaje y la música
aportan al oído. [...] La elegancia y la capacidad de revelar las experiencias más íntimas de la laringe
humana se amplían para convertirse en un movimiento de todo el cuerpo”. (Traducción propuesta
por Marina Lacasta Millera)
‒ ‒
En esta pequeña tabla, Graham intentó representar la posición de los
diferentes órganos del habla mediante símbolos simplificados. Su
objetivo era que todo alumno sordo fuera capaz de emitir cualquier
sonido nuevo con sólo mirar los gráficos – previa explicación del
mecanismo del alfabeto –.
5. APLICACIÓN DE LA EURITMIA
‒ ‒
acoustic world" (Gorenflo, 2008, p. 14)77. En este sentido, el
recurso alternativo que sustituye al comúnmente utilizado es
la Euritmia y el Habla Visible. Para Graham, su objetivo era
mantener los conocimientos previos adquiridos por los sordo-
mudos respecto al habla, enseñándoles al mismo tiempo la
pronunciación de los nuevos fonemas. Sin embargo, este "ins-
trumento del habla" debe ser educado paso a paso, como un
instrumento real, ya que el alumno nunca ha utilizado sus ór-
ganos vocales de esta manera. En cualquier caso, los alumnos
con deficiencias auditivas deben conocer, en primer lugar, los
movimientos utilizados en la Euritmia y el alfabeto de símbo-
los fonéticos – recordemos que un alumno sordo sólo podrá
percibir y producir perfectamente un sonido combinando los
movimientos de Euritmia, un alfabeto fonético y un diagrama
de las posiciones de los órganos del habla –. Una vez que esto
ocurra, estaremos preparados para realizar experimentos. En-
tre otros recursos, no debemos olvidar la importancia de la
lectura de los labios, ya que es una parte muy importante en la
producción del sonido. Hay que enseñar a los sordomudos a
modular la voz y a leer también con expresión. Con este obje-
tivo, el profesor debe utilizar la metodología de la Euritmia
Tonal.
77“ha adquirido entonces la facultad de poder imitar en sonidos del habla todo lo que oye, lo que
pasa por su alma. Básicamente, con sus sonidos lo abarca todo en el mundo acústico”. (Traducción
propuesta por Marina Lacasta Millera)
‒ ‒
141)78. Esta cita es el claro ejemplo de que no podemos ense-
ñar el inglés como lengua extranjera a un alumno con defi-
ciencias auditivas empezando por los patrones de habla y en-
tonación, sin haber enseñado primero a producir los diferentes
fonemas. Cornelia Jantzen, especialista en el trabajo con niños
disléxicos y sordos, se pregunta: "why should it not be possi-
ble to offer deaf pupils support for literacy through ‘making
language visible’ with symbol mastery of words?” (2014)79.
De esta manera, Jantzen propone una metodología con la que
el niño aprende a través de imágenes que representan símbolos
y palabras, en lugar de sonidos.
78 "¿no sería lo más correcto que dividiéramos primero las letras o elementos, así como los que se
ponen a trabajar en los ritmos del habla dividen primero las fuerzas o potencias de las letras o
elementos, luego las de las sílabas, y sólo después investigan los ritmos propiamente dichos?”.
(Traducción propuesta por Marina Lacasta Millera)
79 “¿por qué no se puede ofrecer a los alumnos sordos apoyo para la alfabetización ‘haciendo visible
el lenguaje’ con el dominio de los símbolos de las palabras?”. (Traducción propuesta por Marina
Lacasta Millera)
80 “cuando se utiliza con personas con TDAH, la terapia tiene como objetivo desarrollar la capacidad
del individuo para concentrarse y ser consciente de los sentimientos de forma controlada,
coordinada y hábil. A su vez, esto promueve el desarrollo psicosocial”. (Traducción propuesta por
Marina Lacasta Millera)
‒ ‒
6. PROPUESTA DE ACTIVIDADES DIDÁCTICAS
81 “poner de relieve el habla y la actividad musical en relación con el movimiento. Los elementos
‒ ‒
FIGURA 7. Dibujo de la vocal /a/ usado en la lectura de labios.
‒ ‒
Como hemos observado en el diálogo de Sócrates, para poder llevar
a cabo estas actividades debemos empezar por la unidad más básica:
el fonema. El alumno recibirá un diagrama transversal representando
la posición de los distintos órganos del habla al realizar un fonema,
con el símbolo correspondiente del alfabeto fonético. A continuación,
éste observará a un profesor realizando el movimiento de Euritmia,
pidiéndole que lo repita él mismo al final. Como "cada emoción se
sitúa en un lugar concreto del cuerpo, [...] la voz vibrará de distinta
manera según la zona corporal en la que el actor esté instalado. [...]
[La voz] se percibirá de forma distinta en el espacio" (Bustos, 2003,
p. 201). Habrá que estudiar a fondo qué parte del cuerpo es la encar-
gada de la producción del sonido y su vibración para producir el mo-
vimiento más conveniente. Cuando llevamos a cabo la Euritmia, todo
el cuerpo humano transmuta los diferentes movimientos en discurso
ordinario. Así, el profesor podrá desarrollar correlaciones entre cada
fonema o sonido y un movimiento concreto.
Aparte de todas estas técnicas, el euritmista también debe utilizar co-
lores específicos en el tejido, en función del sonido (colores vivos
para los sonidos cerrados y agudos, y viceversa). Además, los eurit-
mistas recomiendan utilizar trajes sueltos para acentuar el movi-
miento del sonido.
Fuente: Steiner
‒ ‒
la mano y los ojos. Es fundamental sentir las vibraciones en las cavi-
dades mientras se producen los nuevos sonidos o fonemas. Además,
los ejercicios con los pulmones son esenciales en cuanto a patrones
de entonación y ritmo. En un estudio dirigido por Harriet B. Rogers,
Sarah Fuller y Abel S. Clark, también se descubrió que rítmicamente
“senseless exercises gave great pleasure to deaf children when the
syllables were arranged rhythmically" (1874, p. 93)82. Por lo tanto,
debería ser más importante centrarse en el ritmo – como en las rimas
o canciones infantiles – que en el significado de las palabras. De he-
cho, en el libro Therapeutic Eurythmy for Children hay algunos con-
sejos y sugerencias sobre los métodos que se deben aplicar al utilizar
la Euritmia en clase. Y, aunque muchos de estos ejercicios fueron, en
primer lugar, concebidos como terapéuticos, podríamos utilizar mu-
chos de los movimientos rítmicos para potenciar los patrones de en-
tonación y los ritmos no perceptibles por los alumnos sordos. Algu-
nos de los ejemplos son los siguientes:
82 “los ejercicios que carecían de sentido proporcionaban un gran placer a los niños sordos cuando
las sílabas estaban dispuestas”. (Traducción propuesta por Marina Lacasta Millera)
‒ ‒
Fuente: Eurythmy Forms for Tone Eurythmy
7. CONCLUSIONES
‒ ‒
de ayuda visual como diagramas transversales e imágenes de resonan-
cia magnética que representen la posición de los diferentes órganos del
habla; al igual que la enseñanza o potenciación de diferentes técnicas –
como es el caso de la lectura labial –. Cuando una persona escucha un
sonido, se producen conexiones neuronales dentro de nuestro cerebro,
que al mismo tiempo nos permiten descodificar un mensaje lingüístico.
En este sentido, este artículo muestra una manera de conseguir, con el
uso de estos ejercicios, las mismas conexiones neuronales, pero a través
de imágenes y movimientos realizados por el profesor, en lugar de a
través de sonidos. Todo ello acabará ayudando al alumno con deficien-
cias auditivas a mejorar las dos competencias lingüísticas en las que
presentan más inconvenientes: la producción y la comprensión orales.
Hay que tener en cuenta que estos mismos patrones y ejercicios podrían
ser útiles en la enseñanza de otras lenguas extranjeras, sin necesidad de
compartir rasgos lingüísticos con el inglés. Gracias a la importancia de
los patrones de entonación en la lengua inglesa, la Euritmia Tonal será
notablemente relevante para lograr nuestro objetivo.
Por último, se destaca la importancia de desarrollar una investigación
en profundidad, en la que se puedan ahondar en los conceptos teóricos
presentados con anterioridad para poder proponer varios ejercicios
prácticos adaptados a un alumnado diverso, especialmente aplicables
en un contexto real con alumnos con deficiencias auditivas o con otras
capacidades diferentes.
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Gorenflo, H.J. (2008). Speech. Newsletter from the Section for the Arts of
Eurythmy, Speech and Music. Michaelmas (49), Margrethe Solstad
(Ed.), 1-56.
Graham Bell, A. (1872). Visible Speech as Means of Communicating
Articulation to Deaf-Mutes. American Annals of de Deaf and Dumb.
Gallaudet University Press, vol. XVII(1), 1-21.
Huckvale, M. (ed.). (2017). Speech, Hearing & Phonetic Sciences. Division of
Psychology and Language Sciences. University College of London.
https://www.phon.ucl.ac.uk/courses/spsci/iss/week5.php
Jantzen, C. (2014). Dyslexia: Learning Disorder or Creative Gift?. Floris Books.
Majorek, Tüchelmann, Heusser. (2004). Therapeutic Eurythmy- movement
therapy for children with attention deficit hyperactivity disorder
(ADHD): a pilot study. Complementary Therapies in Nursing &
Midwifery. Journal Elsevier, vol. X, 46-53. JSTOR, doi: 10.1016/S1353-
6117(03)00087-8.
Ogletree, E. J. (1976). Eurythmy: A Therapeutic Art of Movement. The Journal
of Special Education. Chicago State University, vol. X(3), 305-319.
Rabern, B. (2018). Cratylus. The Science of Meaning: Essays on the Metatheory
of Natural Language Semantics. Dereck Ball (Ed.), Oxford University
Press, Ebook, 101-156.
Ralph, J. (2009). Discover Eurythmy- Movement that Speaks and Sings. Discover
Eurythmy. Aberdeen, Ebook, 1-16.
Rogers, H.B., et al. (1874). Convention of Teachers of “Visible Speech”.
American Annals of de Deaf and Dumb. Gallaudet University Press, vol
XIX(2), 90-100.
Steiner, R. (1921). Curative Eurythmy. Rudolf Steiner Library & e.Lib.,
https://wn.rsarchive.org/Lectures/GA315/English/RSP1983/19221028v0
1.html
- - -. (2006). Eurythmy: An Introductory Reader. Rudolf Steiner Press.
- - -. (2009). Eurythmy Forms for Tone Eurythmy. Steiner Books, vol. IX.
Vogel, A., y Children, E. F. (2007). Therapeutic Eurythmy for Children. Trans-
lated and edited by Isabel DeAngelis-Suedhof, Steiner Books.
‒ ‒
CAPÍTULO 62
TRANSLINGÜISMO Y LITERATURA:
RETOS PARA LA ENSEÑANZA Y EL APRENDIZAJE DE
LAS LENGUAS EXTRANJERAS
FRANCESCA PLACIDI83
Universidad de Salamanca
1. INTRODUCCIÓN
83 La autora es beneficiaria de una ayuda para la Formación de Profesorado Universitario, que fi-
nancia un contrato predoctoral, concedida por la Universidad de Salamanca y cofinanciada por el
Banco Santander. También hace parte del Grupo de Investigación Reconocido TRADIC (Traduc-
ción, Ideología y Cultura) de la Universidad de Salamanca.
‒ ‒
or their aftermaths as they are lived out in many parts of the world today
(Pratt, 1992, p. 4).
‒ ‒
Toda lengua es un medio de identificación de un grupo, una reserva de
cultura, una codificación de historias y visiones del mundo. Como su-
giere un artículo de Spinelli (2018, pp. 109-110), en un mundo sin fron-
teras las relaciones entre las lenguas globales deben analizarse en tér-
minos de flujo, en lugar de limitarse a considerar meramente sus di-
mensiones geográficas. De hecho, la expansión y retracción de las len-
guas se debe a diferentes razones que van más allá de las fronteras geo-
gráficas, como son, por ejemplo, los acontecimientos históricos, econó-
micos y políticos, los fenómenos sociales que reflejan posiciones de
poder y las nuevas tecnologías de la comunicación. Las consecuencias
de este flujo pueden ser cruciales para la biodiversidad lingüística. El
mantenimiento y la promoción del multilingüismo son, por tanto, esen-
ciales en el mundo actual por sus implicaciones para la diversidad, la
democracia y los derechos humanos.
En este complejo contexto, los fenómenos de globalización pueden re-
saltar las diferencias y generar conflictos entre las fuerzas locales y glo-
bales. Además, los diferentes tipos de movilidad global han supuesto
retos adicionales para la inclusión social y la valorización del capital
lingüístico y cultural de los individuos en determinadas circunstancias.
Este estudio trata de explorar las posibles sinergias entre las soluciones
educativas en la enseñanza y el aprendizaje de idiomas a partir del pa-
trimonio literario y lingüístico mencionado anteriormente y que se ana-
lizará con más detalle a continuación.
El creciente debate sobre la pérdida y la marginación de las lenguas, el
papel hegemónico del inglés y la falta de la diversidad lingüística del
mundo ha propiciado una labor crítica en materia de política y planifi-
cación lingüística para determinar las responsabilidades y el impacto de
estas políticas en distintos niveles. El resultado de este debate abre nue-
vas perspectivas a las lenguas y las literaturas en el contexto de la glo-
balización, y pone de manifiesto la necesidad de promover la diversidad
lingüística mediante políticas lingüísticas de apoyo y educación. Uno
de los rasgos de dichas políticas de educación lingüístico-literaria que
queremos tomar como punto de partida para la propuesta que se descri-
birá al final de este artículo es justamente el fomento del multilin-
güismo.
‒ ‒
Las estrategias más sugerentes adoptadas en el ámbito de la educación
y la enseñanza/aprendizaje de idiomas para responder a este impacto
ecológico y social de la globalización buscan un equilibrio ideal entre
la diversidad lingüística y cultural, la equidad, la sostenibilidad y la efi-
ciencia. Por esta razón, los académicos, las instituciones y los profeso-
res están explorando “glocal educational solutions” (Spinelli, 2018, p.
115) que abordan la interfaz entre la diversidad local y la conectividad
global.
‒ ‒
con enfoques teóricos y con procesos de enseñanza-aprendizaje críticos
y transformadores en sintonía con un mundo en constante evolución.
En los modelos transformadores, la teorización puede utilizarse en un
proceso de aprendizaje continuo para fomentar un diálogo reflexivo,
una concienciación que permita transformar los hábitos mentales y las
condiciones sociopolíticas en las que se inscribe la experiencia forma-
tiva. El uso de conceptos teóricos en el proceso de aprendizaje no sólo
contribuye a la adquisición del conocimiento como algo estático o con-
servador, sino que también cataliza nuevas formas de comprensión, lo
que hace posible desarrollar nuevas maneras de pensar y de vivir.
A pesar de su diversidad, las pedagogías críticas parten de una concien-
cia aguda de las diferencias de poder y de los regímenes de dominación
que atraviesan las prácticas existentes. Al reflexionar sobre estas es-
tructuras e influencias jerárquicas, el proceso de aprendizaje se concibe
como una oportunidad de contrarrestar las fuerzas opresivas identifica-
das, ya sean sociales, institucionales, políticas, educativas, etc. La teo-
ría emerge, así como una herramienta formativa, pero también transfor-
madora porque está sujeta a evolución y fomenta el cambio en la prác-
tica social.
La investigación desde este enfoque formativo y transformador muestra
que el cambio de códigos en los centros educativos rara vez está respal-
dado por las instituciones o por la pedagogía. El cambio de idioma es-
pontáneo en las aulas, por ejemplo, ha estado tradicionalmente mal
visto y los profesores y los alumnos suelen sentirse culpables por esta
práctica. Aunque las políticas lingüísticas internacionales sugieran es-
pacios de implementación para las prácticas plurilingües y pluricultu-
rales en la educación lingüística, los sistemas políticos, económicos y
educativos rara vez parecen apoyar estas prácticas, con lo cual “multi-
lingual education programs still have a long way to go officially” (Gar-
cía, 2009, p. 157).
Es oportuno destacar dentro de los programas educativos el concepto
de diversidad y de su valor. Sin embargo, definir la diversidad de forma
que se refiera simplemente a las personas que parecen diferentes puede
impedir la exposición de las ventajas sociales y educativas (Ahmed,
‒ ‒
2007). Para explicar la complejidad de las sociedades contemporáneas,
y dadas las limitaciones de los conceptos de diversidad, multicultura-
lismo, integración y asimilación, hizo falta recurrir al concepto más am-
plio de superdiversidad, concebido inicialmente como un término des-
criptivo y analítico en el contexto del rápido cambio demográfico ex-
perimentado en Londres a principios del siglo XXI (Meissner, 2015).
La superdiversidad se refiere a los procesos y efectos cada vez más es-
tratificados y múltiples de la migración. Más que describir la diversidad
como resultado de la reciente migración, la superdiversidad tiene el po-
tencial de ofrecer una perspectiva interdisciplinaria sobre el cambio y
la complejidad de nuestros días en los mundos sociales y culturales en
constante transformación.
Una perspectiva basada en el concepto de superdiversidad se alinea con
los enfoques críticos que rechazan las conceptualizaciones simplifica-
doras de las realidades complejas basadas en fronteras nacionales y/o
étnicas. Una orientación hacia la superdiversidad hace que la compren-
sión de la diferencia se aleje de las antiguas oposiciones binarias de
cultura mayoritaria de acogida frente a cultura(s) minoritaria(s). La su-
perdiversidad pone de manifiesto la necesidad de que los responsables
políticos y los profesionales de los servicios públicos reconozcan las
nuevas condiciones creadas por la migración mundial y el cambio de-
mográfico. Este concepto ha empezado a influir en las políticas de di-
versos ámbitos, como el trabajo social, el urbanismo, la vivienda, el
mundo empresarial, la atención a la maternidad, los servicios sanitarios
y la educación, que es lo que más nos interesa en nuestro caso.
Gogolin (2011), entro otros, aplica un análisis de la noción de superdi-
versidad para diseñar actividades en varios niveles y metodologías mul-
tinivel con el fin de proporcionar respuestas a las preguntas que son
relevantes para las políticas y las prácticas educativas. Argumenta que
las tradiciones profundamente arraigadas que sostienen construcciones
binarias de la realidad son inadecuadas para entender cómo se enseña y
aprende. En su opinión, dentro de la población escolar, las característi-
cas y los efectos sociales de la superdiversidad tienen importantes efec-
tos tanto en el aprendizaje como en la enseñanza. Con un marco con-
ceptual que tiene en cuenta la idea de superdiversidad, se pueden revisar
‒ ‒
las construcciones binarias de la realidad y tener en cuenta la multipli-
cidad de las características de las realidades sociales marcadas por la
migración.
En este artículo, argumentamos que tanto la investigación como la prác-
tica educativa necesitan un trabajo constante y una atención continúa
destinada a la descripción, el desarrollo y la aplicación de políticas para
hacer frente a los retos de la superdiversidad y, lo que es más impor-
tante, para lograr la equidad educativa para todos los alumnos.
El fomento del multilingüismo es, en nuestra opinión, vital. Estamos
totalmente de acuerdo con las conclusiones de Spinelli (2018) según las
cuales el desarrollo de comunidades de práctica más amplias, en las que
los educadores y profesores puedan hacer visibles estas políticas y com-
partir recursos y formas alternativas de pedagogía que apoyen un apren-
dizaje y mantenimiento sostenible de las lenguas puede ser una base
crucial para una sociedad global pacífica, cohesionada y productiva.
3. UN ENFOQUE TRANSLINGÜÍSTICO
‒ ‒
El término “translanguaging” se atribuye a Colin Baker (2001), quien a
su vez se basó en la noción de “trawsieithu” de Cen Williams (1994).
Esta última pretendía describir un fenómeno que Williams había obser-
vado en las escuelas de Gales, a saber, una práctica pedagógica en la
que se da y se recibe información a través de lenguas distintas. No se
trata de un simple cambio de código, sino de un comportamiento que
normaliza el bilingüismo sin obedecer a una separación funcional digló-
sica. Williams y Baker compartían la idea de que la pedagogía basada
en el translanguaging ayudaba a maximizar la capacidad bilingüe del
alumno en el aprendizaje. Se trata de una práctica lingüística en la que
intervienen diferentes lenguas y variedades lingüísticas, pero, sobre
todo, de un proceso de construcción del conocimiento que hace uso de
la(s) lengua(s) individual(es), pero que va más allá. En este sentido, la
clasificación de las lenguas puede entenderse como una construcción
que frecuentemente se ha utilizado para controlar la variedad y la dife-
rencia y que, por tanto, excluye las prácticas lingüísticas mixtas y otras
formas de utilizar las lenguas en contextos multilingües. Como afirma
Canagarajah (2011), la enseñanza de idiomas no debería tener como
objetivo el dominio de una “lengua meta” inventada y ficticia, sino
desarrollar estrategias de negociación y un repertorio de códigos entre
los cuales los estudiantes deberían, según este autor, saber alternar. Asi-
mismo, considera que la pregunta que deberíamos hacernos no es si el
cambio de código es una pedagogía válida o si el translingüismo es be-
neficioso en sí mismo o si debería ser aceptado en las aulas. A partir de
la idea de que la lengua es una invención, Canagarajah (2011) opina
que los investigadores y docentes deberían observar de cerca la forma
en que la gente suele usarlas y basar sus prácticas pedagógicas en el uso
real, y no en lo que el sistema escolar establece como prácticas valiosas.
A lo largo de los años, el concepto de translanguaging ha llegado a
utilizarse para describir un cambio intencionado en el modo en el que
se va y viene entre las lenguas en una variedad de aulas bilingües, de
manera que las diferentes lenguas se utilizan de forma dinámica y fun-
cionalmente integrada para organizar y mediar en los procesos mentales
de comprensión, producción oral, lectura, escritura y aprendizaje.
‒ ‒
Conteh (2018) conceptualiza el translanguaging como el conjunto de
los procesos a través de los cuales tanto los individuos multilingües
como los monolingües utilizan recursos multimodales para construir
significados, dar forma a las experiencias y representar identidades en
sus encuentros sociales en contextos superdiversos específicos. La in-
vestigación sobre el translanguaging en las aulas ha arrojado resultados
que prometen ser positivos para la práctica en contextos formativos,
pero que aún no se han materializado por completo. Esto se debe, en
parte, a las presiones que ejerce la conciencia monolingüe sobre la con-
figuración y aplicación de los planes de estudio y a las exigencias de la
evaluación del sistema general.
La enseñanza de idiomas es quizás una de las áreas que más disputas
políticas genera en el conjunto de la educación. Los valores en los que
se basan los enfoques didácticos por lo general son fuertemente mono-
lingües, suelen privilegiar las lenguas estándar y los modelos en los que
los hablantes nativos enseñan y aprenden una sola lengua a la vez, lo
que impone rígidos modelos de evaluación y éxito. Si aceptamos que el
lenguaje es eminentemente un fenómeno social, también debemos
aceptar que, en tanto que está inevitablemente inscrito en las estructuras
políticas imperantes, las cuestiones de poder siempre serán centrales a
la hora de considerar el papel que desempeñan las lenguas en la educa-
ción. El translanguaging como pedagogía, en cambio, supone un desa-
fío radical a todo esto.
Como hemos mencionado más arriba, la noción de translanguaging se
ha desarrollado fundamentalmente en la lingüística aplicada y en el de
la educación bilingüe para describir a los hablantes cuyas prácticas lin-
güísticas y de alfabetización no encajan fácilmente en el modelo de las
lenguas estándares, distintas y supuestamente estables (Creese y Bla-
ckledge, 2010). La ideología del monolingüismo presupone y perpetúa
silenciosamente la idea de las lenguas estándares como sistemas de sig-
nificación estables e internamente coherentes en los que todos los ha-
blantes supuestamente son capaces de participar. Por el contrario, el
translanguaging articula un modelo en el que los hablantes operan a
partir de un repertorio lingüístico holísticamente integrado que puede
‒ ‒
incluir una variedad de rasgos lingüísticos tradicionalmente asociados
a diferentes estados-nación y comunidades lingüísticas.
El concepto de translanguaging da por sentado que los hablantes mul-
tilingües no cambian ni mezclan las lenguas entre sí, sino que, más bien,
seleccionan estratégicamente rasgos lingüísticos de repertorios hetero-
glósicos como respuesta a las posibilidades situacionales de los distin-
tos contextos comunicativos. Dos estudiosos clave para la idea del
translanguaging, Ofelia García y Li Wei (2014), agrupan estas prácti-
cas lingüísticas bajo el título general de “bilingüismo dinámico”.
Lee (2016) destaca hasta qué punto una orientación translingüística de
la escritura proporciona una oportunidad para reinventar las filosofías
de evaluación y para promover la justicia social en el ámbito lingüís-
tico. Hay que aclarar que la escritura translingüe puede considerarse
como un posible producto del translingüismo, un concepto amplio que
define una determinada orientación hacia la(s) lengua(s). Es importante
que el translingüismo localice los espacios donde puede manifestarse
como práctica lingüística. Entre estos espacios está también el de la es-
critura multilingüe, como veremos en el siguiente apartado.
Como señala Kiramba (2017), ciertas investigaciones recientes han do-
cumentado que los individuos lingüística y culturalmente diversos ac-
tivan toda la multiplicidad de sus repertorios lingüísticos colectivos de
recursos para alcanzar sus objetivos comunicativos en situaciones de-
terminadas. Esto indica que su uso de la lengua no está estrictamente
cerrado en compartimentos, sino que es fluido y móvil. Varios estudio-
sos han propuesto el translingüismo como una posible solución a los
desafíos educativos a los que se enfrentan los estudiantes con lenguas
y culturas distintas.
El análisis de Hélot (2014) sobre autores que cruzan fronteras lingüís-
ticas en libros destinados a público infantil explora cómo la manifesta-
ción del translingüismo en la escritura puede apoyar la creatividad en
el marco de pedagogías bilingües y de alfabetización múltiple. Tras
examinar diferentes expresiones del translingüismo por autores multi-
lingües y reflexionar sobre cómo estos autores negocian su identidad a
través de la traducción de su propia obra o de la invención de nuevas
‒ ‒
formas híbridas de lenguaje, Hélot cuestionó la posibilidad de concebir
el translingüismo como un enfoque pedagógico que pudiera tener apli-
cación en la formación de profesores bilingües en Alsacia, donde las
lenguas francesa o alemana se enseñan por separado. Argumentaba, en
este sentido, que el uso del translingüismo en los textos literarios resulta
más apropiado como instrumento para legitimar la mezcla de lenguas.
También sostenía que los textos translingües ofrecen una base excelente
para debatir lo que significa ser bi- o multilingües y explorar la noción
de identidad. La razón intrínseca que sustenta esta idea es que los auto-
res translingües rompen las barreras ideológicas tradicionales que se-
paran las lenguas y representan nuevas voces e identidades bi-/multi-
lingües.
Canagarajah (2013) señala que, aunque en los entornos educativos pre-
valece una orientación monolingüe, los textos multilingües son cada
vez más comunes como resultado del creciente contacto entre lenguas
diversas en la vida cotidiana. Concretamente, considera que los textos
multilingües son un modo de escritura importante para que los estu-
diantes multilingües representen sus identidades en lengua inglesa.
Además, Canagarajah afirma que las lenguas siempre están en contacto
y se influyen mutuamente.
Las principales limitaciones para el desarrollo de la escritura translin-
güe y del estudio de la escritura multilingüe son las ideas prevalentes
de base monolingüe, que conciben el desarrollo de la alfabetización
como una adquisición unidireccional de la competencia, lo que impide
a los individuos comprender plenamente los recursos que los multilin-
gües aportan a los textos (Canagarajah, 2011). Las políticas de homo-
geneización lingüística sitúan a los alumnos como adquirentes de com-
petencias útiles para el funcionamiento básico y la aceptación de roles
predeterminados vinculados a determinadas identidades. En cambio, la
escritura multilingüe se considera activa y se mueve de forma creativa
entre las lenguas y los discursos para lograr su objetivo comunicativo
(Canagarajah, 2011).
El enfoque translingüístico ha traído consigo cambios en los estudios
etnográficos en torno a las prácticas lingüísticas y de alfabetización, ha
desafiado los supuestos más arraigados en los que se basa la evaluación
‒ ‒
de la escritura y ha introducido nuevas pedagogías que consideran los
repertorios lingüísticos de los estudiantes como recursos educativos que
hay que aprovechar, en lugar de una manifestación de déficits que hay
que corregir. Sin embargo, como a menudo han argumentado los auto-
res más críticos con el giro translingüístico, aún no ha habido un desa-
rrollo de este enfoque que se aplique a la escritura universitaria, a las
prácticas en el aula y a las herramientas de evaluación, por lo que los
profesores aún no pueden aplicarlo fácilmente en sus respectivos entor-
nos institucionales.
84 Se toma en préstamo el título del segundo capítulo del inspirador libro de Vidal Claramonte (2021).
‒ ‒
estandarizadas a la luz de lo que arroja la realidad en ejemplos especí-
ficos de escritura. En contra del argumento común de que los estudian-
tes deben aprender las normas y los cánones para satisfacer las exigen-
cias de los dominantes, un enfoque translingüístico reconoce que, para
sobrevivir y prosperar como lectores críticos y escritores activos, los
estudiantes deben comprender cómo esas exigencias a menudo termi-
nan convirtiéndose en una realidad.
A partir de una comprensión de las diferencias no como un problema
sino como un recurso, el enfoque translingüístico promete revitalizar la
enseñanza de la lengua, de la lectura y de la escritura. Al abordar cómo
las normas lingüísticas son en realidad heterogéneas, fluidas y negocia-
bles, este enfoque contrarresta la exigencia tácita de que los escritores
deban ajustarse a normas lingüísticas fijas y uniformes. En nuestra opi-
nión, el reto consiste en incorporar más trabajos multilingües e interlin-
güísticos a los planes de estudio que cursa el alumnado para ofrecerle
herramientas útiles en una realidad transnacional y un mundo translin-
güe.
Los profesores pueden sacar partido de la heterogeneidad real en cuanto
a géneros, registro y lenguaje para explorar, con sus alumnos, la activi-
dad translingüística que ellos y otros escritores ya están llevando a
cabo, incluso cuando esto no se reconozca normalmente. Además del
beneficio que supone para todos ampliar los recursos lingüísticos pro-
pios, la cuestión prioritaria en este enfoque es el acercamiento que se
adopta a la diferencia lingüística. Quienes se identifican como mono-
lingües pueden adoptar un enfoque translingüe, mientras que los que se
identifican como multilingües pueden adoptar un enfoque monolingüe
a la diferencia lingüística.
Los escritores literarios bilingües suelen escribir en una u otra lengua,
como, por ejemplo, Joseph Conrad, que nació en Ucrania de padres po-
lacos, pero escribió principalmente en inglés, o Eva Hoffman, que se
trasladó a Canadá desde Polonia a los 13 años, pero utiliza el inglés.
Entre los cada vez más numerosos autores bilingües, muchos se auto-
traducen a una u otra lengua. Esto es, por ejemplo, el caso de la nove-
lista puertorriqueña Rosario Ferré, que primero escribió sus novelas en
español y las tradujo al inglés, y luego escribió una en inglés y la tradujo
‒ ‒
al español. Lo que se denomina “‘mixed-language’ bilingual writing”
(García y Wei, 2014, p. 27) es cada vez más frecuente. Por ejemplo, en
Estados Unidos muchos bilingües en el par de lenguas español/inglés y
que escriben preferentemente en inglés utilizan el translingüismo estra-
tégicamente para conseguir un efecto literario. Esto es el caso, por
ejemplo, de la escritura del dominicano-estadounidense Junot Díaz, ga-
nador del Pulitzer en 2008 por The Brief Wondrous Life of Oscar Wao
(2007). En esta novela, el español se interpone en una frase en inglés a
menudo sin comillas, ni cursiva, ni manera alguna de privilegiar una u
otra forma de hablar.
La cuestión de la lengua es un tema crucial en todas las literaturas, en
particular las migratorias y poscoloniales y en toda la escritura fronte-
riza. De hecho, la elección de la lengua refleja la voluntad expresiva y
comunicativa del autor. Muchos escritores emigrantes y fronterizos han
adoptado estrategias lingüísticas que se ramifican en tres grandes blo-
ques: predilección por la lengua neutra; experimentación con formas de
hibridismo, plurilingüismo y mestizaje; el uso del bilingüismo.
En la mayoría de los casos, la escritura poscolonial ha encontrado en la
hibridez y el multilingüismo una clave fundamental para la representa-
ción y la expresión de los vínculos con la tierra natal y la nueva patria.
En los textos de las escritoras afroitalianas, por ejemplo, es fácil encon-
trar elementos que remiten a los orígenes africanos, desde el uso de
proverbios hasta el empleo de expresiones enteras en lenguas africanas,
así como la presentación de canciones y leyendas populares de esas tie-
rras.
El discurso de los nuevos ciudadanos italianos, mediante el uso de un
lenguaje híbrido y contaminado, es la prueba tangible del cambio que
ha experimentado en los últimos tiempos la sociedad italiana, com-
puesta como está ahora por diferentes subjetividades. La literatura re-
fleja los cambios sociales, y encuentra en la expresión de un lenguaje
híbrido la clave para revelar el sentimiento de desdoblamiento del emi-
grante y, de manera más general, del extranjero. La reproducción de los
ritmos orales, la reiteración de expresiones coloquiales, los préstamos
lingüísticos, el uso de proverbios, el bilingüismo y el multilingüismo
‒ ‒
son algunas de las estrategias lingüísticas aplicadas por estos autores
para mantener vivos unos orígenes y unas tradiciones ya lejanos.
Fijando la mirada en el Belpaese, Reichardt (2021) especifica que el
término “literatura italófona” normalmente se refiere a todos los textos
escritos en lengua italiana, ya sea en Italia o más allá de sus fronteras.
Aunque las obras con características transculturales han existido desde
el principio de la historia literaria itálica, en la actualidad se hacen más
evidentes en la era del posmodernismo globalizado. La literatura italó-
fona contemporánea muestra inequívocamente hasta qué punto están
interrelacionados la migración y el poscolonialismo. Desde 1990, y de
manera muy marcada en el tercer milenio, ha crecido exponencialmente
el número de autores inmigrantes que han visto publicados sus textos
literarios.
Fundada históricamente en 1990/91 por la tríada Salah Methnani, Pap
Khouma y Mohamed Bouchane, la escuela literaria de la letteratura
della migrazione italófona se compuso, en sus inicios, solo por escrito-
res que escribían en italiano y vivían básicamente en Italia. Todos ellos
han desarrollado una identidad transcultural hibridada configurada por
su condición de italianos, por algunos rasgos definidos por la cultura,
otros por la residencia, la ciudadanía o la nacionalidad, el lugar de na-
cimiento, y/o la profesión, y/o la pertenencia social, etc. Si los primeros
autores inmigrantes escribieron sus libros con la ayuda de coautores
nativos (como Salah Methnani con Mario Fortunato o Pap Khouma con
Oreste Pivetta, etc.), con el cambio de milenio han ido surgiendo los
llamados Nuevos Italianos, un grupo de literatos más joven y emer-
gente, de “segunda generación”, que está configurando actualmente el
corpus de la literatura italófona contemporánea, genuinamente trans-
cultural. Una de sus representantes más destacadas es Igiaba Scego, na-
cida en Roma de padres somalíes, que ha alcanzado el estatus de icono
mediático como verdadera ciudadana transcultural de Italia. Como
rasgo característico, resulta sorprendente la participación de las mujeres
en este nuevo movimiento literario.
Esto demuestra que, en tiempos de globalización, la migración puede
abrir un Tercer Espacio híbrido en los países que no solo promueve
encuentros y movimientos de cruce entre las subculturas, intersecciones
‒ ‒
transculturales y/o interacciones étnicas, sino que de hecho los implica
a priori, también si se tiene en cuenta desde la perspectiva de género.
‒ ‒
pedagogía tiene que situar a los alumnos como intérpretes críticos de
sus recursos lingüísticos cotidianos, y así puede hacerse convirtiendo la
indagación sobre el multilingüismo en un tema central del programa. Si
este es el objetivo, la tarea pedagógica de los educadores, por tanto,
pasa por desarrollar el conocimiento implícito de los alumnos sobre su
lenguaje en el nivel práctico y sobre el dominio de la retórica ya conse-
guido hasta alcanzar un nivel de conciencia explícita.
Tomando como ejemplos algunos estudios e investigaciones sobre la
escritura translingüe como los de Corcoran (2017), de Piantanida
(2020) o de Pinoia (2021), avanzamos aquí una propuesta didáctica en
esta misma línea y basada en la obra en italiano de la autora Jhumpa
Lahiri.
De esta manera, perseguimos el objetivo de desarrollar técnicas peda-
gógicas que presten atención explícita al lenguaje en todas sus formas,
a través de tareas en el aula que inviten a nuestros alumnos a reflexionar
en profundidad sobre sus propias prácticas lingüísticas y sobre sus pro-
cesos de alfabetización y que les inciten a desarrollar vocabularios ana-
líticos sofisticados para describir estas prácticas.
Otro objetivo principal que asume esta propuesta didáctica basada en el
translingüismo es considerar la escritura como algo que siempre tiene
lugar en un espacio translingüe, “replacing the unidirectionality of
monolingualism with the recognition that we are all - students, teachers,
literary writers - constantly negotiating multiple languages, conven-
tions of writing, and linguistic loyalties” (Trimbur, 2016, p. 226).
El punto de partida de la presente propuesta didáctica es la investiga-
ción que desarrollamos sobre la enseñanza del italiano como lengua ex-
tranjera a través de la literatura (Placidi, 2020). Tomamos como pre-
misa metodológica la idea de que con una didáctica basada en la litera-
tura es realmente posible contribuir al desarrollo de las competencias
lingüísticas y sociales (Giusti, 2011), ya que la literatura es también una
herramienta cultural. Actualmente, la presencia de la literatura en la en-
señanza del italiano es evidente en la mayor parte de los manuales de
italiano como lengua extranjera. Nuestra idea de tomar la literatura ita-
liana translingüe fue inspirada, en concreto, por el manual de italiano
‒ ‒
Nuovo Contatto B2 de la editorial Loescher, cuya unidad 2, titulada
“Come cambia la società italiana”, se detiene en dos escritores migran-
tes que escriben en italiano: Kossi Komla-Ebri y Jhumpa Lahiri. Para
esta última autora el manual propone en lectura un fragmento del capí-
tulo “Il muro” del libro In altre parole. Para esta actividad el estudiante
tiene que leer el texto en el cual Lahiri cuenta su relación con la lengua
italiana. Durante la lectura se requiere prestar particular atención al uso
del presente histórico a través de los verbos subrayados en el texto, para
luego transformar dichos verbos del presente al tiempo verbal italiano
del “passato remoto”. En este sentido, en esta actividad es evidente que
el texto literario está siendo empleado como pretexto para trabajar un
hecho gramatical, sin aprovechar las posibilidades que también ofrece
en el nivel de contenidos culturales y lingüísticos.
Con nuestra propuesta didáctica nos proponemos ir más allá del simple
hecho lingüístico y gramatical en tanto entendemos que la principal
ventaja de utilizar un texto literario como esta enriquecedora lectura de
Jhumpa Lahiri en una clase de idiomas reside en la posibilidad de con-
siderarlo no solo como una herramienta para la educación lingüística e
incluso literaria, sino también, y especialmente, para la educación in-
tercultural. Los textos literarios pueden seguir siendo representativos
de lo otro, lo marginal y lo inexplorado: pueden considerarse no solo
como un medio para introducir una segunda lengua o cultura extranjera,
sino también como una oportunidad para reflexionar sobre los estereo-
tipos prevalentes en una sociedad determinada en un momento histórico
preciso. En concreto, sirven para deconstruir los enfoques monocultu-
rales y monolingües de la enseñanza y el aprendizaje de las lenguas
modernas
Como demuestra Piantanida (2020), adoptar un enfoque transnacional
en las clases de idiomas puede ayudar a desarrollar la competencia in-
tercultural de los estudiantes; de hecho, si se emplea un andamiaje ade-
cuado, el uso de literatura de viajes y escrita por migrantes y no nativos
en la clase de idiomas tiene el potencial de facilitar la mejora tanto de
las habilidades lingüísticas tradicionales como de la competencia inter-
cultural. Los escritos de los inmigrantes no nativos, que a menudo re-
flexionan sobre la alteridad, el desplazamiento y las experiencias
‒ ‒
interculturales, son herramientas didácticas especialmente inspiradoras,
debido a que
On the one hand, they stretch the boundaries of what constitutes ‘na-
tional’ writing. On the other, they allow for a combined teaching ap-
proach to the theme of interculturality: teaching with non-native litera-
ture as a tool for improving linguistic and intercultural competence, and
teaching on non-native literature as content, providing an opportunity
to discuss the meanings of intercultural expression and interculturality
itself. (Piantanida, 2020, p. 27)
85 Traducido al inglés por la misma autora con el título “Teach Yourself Italian” y publicado en The
New Yorker: https://www.newyorker.com/magazine/2015/12/07/teach-yourself-italian.
86 Véase la video-entrevista aquí: https://youtu.be/eEAHFFn8_d0.
‒ ‒
sobresalientes. La segunda parte de la unidad partiría de las notas de los
alumnos y de sus búsquedas sobre la autora. A continuación, tras la
lectura del fragmento literario propuesto, se invitaría a los estudiantes
a poner en común sus interpretaciones, ampliadas y enriquecidas con
sus experiencias personales de estancias en el extranjero y de ocasiones
en las que han necesitado utilizar una lengua no nativa con el objetivo
de fomentar la autorreflexión sobre el tema. Por último, a partir del
texto de Lahiri y de las reflexiones orales durante la clase, los alumnos
tendrían que producir un texto en el que plasmar y evaluar cómo ha sido
su experiencia de aprendizaje con la lengua italiana. Para ello, se les
invitaría a fijarse en los aspectos destacados por Lahiri, por ejemplo, la
metodología empleada por la autora para memorizar las palabras, las
sensaciones, las emociones, los fracasos y los éxitos vividos, la descrip-
ción del entorno donde tiene lugar ese aprendizaje, la motivación, los
objetivos, etc. Para sacar mayor partido del concepto de translangua-
ging del cual se ha hablado profusamente en apartados anteriores de
este artículo, se animaría al alumnado a mezclar en sus producciones
escritas, si lo consideran oportuno, también rasgos de su propia lengua
nativa o de otras lenguas de las que tengan conocimiento.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
lenguas extranjeras. Tomando los estudios italianos como punto de par-
tida, el análisis responde al auge en el panorama actual de la investiga-
ción del transnacionalismo como paradigma alternativo a un enfoque
exclusivamente nacional para abordar las necesidades de un mundo
cada vez más globalizado y caracterizado por la movilidad. Nuestro
análisis permite también destacar la necesidad de reenfocar el canon
empleado en la enseñanza de idiomas extranjeros y de avanzar hacia
una interrelación hibrida entre lengua y cultura que fomente, además,
la creación de espacios translingües y multilingües. Nos agrada pensar
que las clases del futuro puedan convertir en realidad la noción de “the
translanguaging corriente” de García, Johnson y Seltzer (2017), una co-
rriente fluvial y metafórica producida e impulsada por la energía posi-
tiva del bilingüismo de los alumnos que no siempre se puede ver o sen-
tir, pero que está hoy presente en las aulas de una manera constante,
que siempre está en movimiento y que es responsable de muchos de los
cambios en el actual paisaje social.
En tanto parte de la convicción de que la hibridez es constitutiva de la
lengua, la cultura y de todas sus manifestaciones, este trabajo defiende
la necesidad de que las prácticas pedagógicas, los planes de estudio y
los programas de enseñanza de las segundas lenguas incorporen y pon-
gan en primer plano dichas configuraciones híbridas. Como afirma Spi-
nelli, dichas prácticas pedagógicas “imply the notion of ʽhybridity’ that
is seen as a productive and creative solution, rather than an obstacle
with great potential for new world views in developing pedagogical
models and practices” (2018, pp. 121-122). Las soluciones pedagógicas
híbridas ofrecen fundamento a una interpretación ecológica y holística
del aprendizaje que busca conectar la parte con el todo para rechazar,
en primer lugar, los modos dominantes y excluyentes de comunicar,
aprender y ser, y para, en último extremo, establecer relaciones más
igualitarias, abiertas y democráticas.
‒ ‒
7. REFERENCIAS
Ahmed, S. (2007). The Language of Diversity. Ethnic and Racial Studies, 30(2),
235-256. https://doi.org/10.1080/01419870601143927
Anderson, J. (2008). Towards Integrated Second-Language Pedagogy for Foreign
and Community/Heritage Languages in Multilingual Britain. The
Language Learning Journal, 36(1), 79-89.
https://doi.org/10.1080/09571730801988553
Arthur, J. y Martin, P. (2006). Accomplishing Lessons in Postcolonial
Classrooms: Comparative Perspectives from Botswana and Brunei
Darussalam. Comparative Education, 42, 177-202.
https://doi.org/10.1080/03050060600628009
Atkinson, D., Eton, C., Takako, N. y Hanako, O. (2007). Alignment and
Interaction in a Sociocognitive Approach to Second Language
Acquisition. The Modern Language Journal, 91(2), 169-188.
Baker, C. (2001). Foundations of bilingual education and bilingualism.
Multilingual Matters.
Blackledge, A., Creese A., con Baynham, M., Cooke, M., Goodson, L., Hua, Z.,
Malkani, B., Phillimore, J., Robinso, M., Rock, F., Simpson, J., Tagg,
C., Thompson, J., Trehan, K. y Wei, L. (2017). Language and
Superdiversity: An interdisciplinary Perspective. En Creese, A. y
Blackledge, A. (Eds), The Routledge Handbook of Language and
Superdiversity, xxi–xlv. Routledge.
Burdett, C. (2018). Moving from a National to a Transnational Curriculum.
Languages, Society & Policy. https://doi.org/10.17863/CAM.25408
Canagarajah, S. (2011). Translanguaging in the classroom: Emerging issues for
research and pedagogy. Applied Linguistics Review, 2, 1-28.
https://doi.org/10.1515/9783110239331.1
Canagarajah, S. (2013). Translingual practice: Global Englishes and
cosmopolitan relations. Routledge.
Chambers, I. (1994). Migrancy, Culture, Identity. Routledge.
Conteh, J. (2018). Translanguaging as Pedagogy–A Critical Review. En Creese,
A. y Blackledge, A. (Eds), The Routledge Handbook of Language and
Superdiversity, 473-487. Routledge.
Corcoran, L. (2017). "Languaging 101": Translingual practices for the
translingual realities of the SEEK composition classroom. Journal of
Basic Writing, 36(2), 54-77.
Creese, A. y Blackledge, A. (2010). Translanguaging in the bilingual classroom:
A pedagogy for learning and teaching? Modern Language Journal, 94
(1), 103–115.
‒ ‒
Cummins, J. (2005). A proposal for action: Strategies for recognizing heritage
language competence as a learning resource within the mainstream class
room. Modern Language Journal, 89, 585-592.
Donato, C. y Pasquarelli-Gascon, V. (2015). The Language of the Other: Italian
for Spanish Speakers through Intercomprehension. Italica, 92(3), 713-
735.
Garcia, O. (2007). Foreword. En Makoni S. y Pennycook A. (Eds.), Disinventing
and reconstituting languages, xi-xv, Multilingual Matters.
García, O. (2008). Bilingual education in the 21st century: A global perspective.
Wiley-Blackwell.
García, O. (2009). Education, multilingualism and translanguaging in the 21st
century. En Mohanty A., Panda, M., Phillipson, R. y Skutnabb-Kangas,
T. (Eds). Multilingual Education for Social Justice: Globalising the
local, 128-145, Orient Blackswan.
García, O. y Wei, L. (2014). Translanguaging: Language, Bilingualism and
Education. Palgrave Macmillan.
https://doi.org/10.1057/9781137385765_3
García, O., Johnson, S. y Seltzer, K. (2017). The Translanguaging Classroom.
Caslon.
Giusti, S. (2011). Insegnare con la letteratura. Zanichelli.
Gogolin, I. (2011). The challenge of super diversity for education in Europe.
Education Inquiry, 2(2), 239-249.
Hélot, C. (2014). Rethinking bilingual pedagogy in Alsace: Translingual writers
and translanguaging. En Blackledge, A. y Creese, A. (Eds.)
Heteroglossia as practice and pedagogy, 217-237. Springer, Dordrecht.
DOI: 10.1007/978-94-007-7856-6_12
Horner, B., Lu, M., Royster, J. J. y Trimbur, J. (2011). Language difference in
writing: toward a translingual approach. Faculty Scholarship, 67.
https://ir.library.louisville.edu/faculty/67
Kellman, S. (2000). The translingual imagination. University of Nebraska Press
Kiramba, L. K. (2017). Translanguaging in the writing of emergent multilinguals.
International Multilingual Research Journal, 11(2), 115-130.
Kramsch, C. (2014). Teaching Foreign Languages in an Era of Globalization:
Introduction. The Modern Language Journal, 98, 296-311.
https://doi.org/10.1111/j.1540-4781.2014.12057.
Lee, J. (2016). Beyond Translingual Writing. College English, 79(2), 174-195.
Lin, A. M. Y. y Martin, P. (2005). (Eds.). Decolonisation, globalisation:
Language-in-education policy and practice. Multilingual Matters.
‒ ‒
Martín Ruano, M. R. (2003). Bringing the Other Back Home: The Translation of
(Un)familiar Hybridity. En Remael, A. y Logie, I. (Eds). Linguistica
Antwerpensia. Translation as Creation: the Postcolonial Influence, 2,
191-204.
Martín Ruano, M. R. (2015). (Trans)formative Theorising in Legal Translation
and/or Interpreting: a critical approach to deontological principles. The
Interpreter and Translator Trainer. 9(2), 141-155. DOI:
10.1080/1750399X.2015.1051767
Meissner, F. (2015). Migration in migration-related diversity? The nexus between
superdiversity and migration studies. Ethnic and Racial Studies, 38(4),
556-567. 10.1080/01419870.2015.970209
Otheguy, R., García, O. y Reid, W. (2015). Clarifying translanguaging and
deconstructing named languages: a perspective from linguistics. Applied
Linguistics Review, 6(3), 281-307. DOI: 10.1515/applirev-2015-0014
Piantanida, C. (2020). Transnational perspectives in the Italian language class: the
uses of non-native literature to develop intercultural competence. En
Almeida, A. B., Bavendiek U. y Biasini R. (Eds), Literature in language
learning: new approaches, 23-31.
https://doi.org/10.14705/rpnet.2020.43.1092
Pino-Rodríguez, A. M., Trujillo-Sáez, F. y González-Vázquez, A. (2019).
Translingüismo: revisión de la literatura y aplicación didáctica para la
enseñanza de ELE y ELE2. Foro de profesores de E/LE, (15), 1-10.
Pinoia, V. (2021). Insegnare l’italiano come lingua seconda o straniera attraverso
i testi della letteratura della migrazione: una proposta didattica. Italiano
LinguaDue, 13(1), 921-933.
Placidi, F. (2020). La letteratura e le TIC come risorse didattiche per
l’insegnamento dell’italiano: una proposta didattica a distanza (Trabajo e
Fin de Máster no publicado). Universidad de Salamanca, Castilla y
León.
Placidi, F. y Romano Martín, Y. (2021). Literatura y eXeLearning como recursos
didácticos para la enseñanza del italiano. En López Esteban, M. C. (Ed.).
Innovación en la Formación de los Futuros Educadores de Educación
Secundaria para el Desarrollo sostenible y ciudadanía mundial, 323-
336, Ediciones Universidad de Salamanca.
https://doi.org/10.14201/0AQ0303
Pratt, M. L. (1992). Imperial Eyes: Travel Writing and Transculturation.
Routledge.
Reichardt, D. (2021). The Transcultural Italophone Literature from its Beginnings
Through to the Third Millennium: Italy's Role Model for Europe.
Novecento transnazionale. Letterature, arti e culture, 5(2), 122-135.
Sara, L. (2015). Literatura poscolonial en clase de FLE: Cuando el texto literario
abre la puerta a nuevos mundos. Puertas Abiertas, (11).
‒ ‒
Spaliviero, C. (2020), Educazione letteraria e didattica della letteratura, Edizioni
Ca’ Foscari.
Spera, L. (2020). Educare al molteplice: la letteratura per l’insegnamento della
lingua italiana agli stranieri. L’arte di insegnare la lingua con la
letteratura, Versants, 2, 67, 25-33.
Spinelli, B. (2018). Localizing the Global: Exploring Responsive Forms of
Inclusive Pedagogy in Order to Preserve Linguistic Biodiversity. En
Hepp, M. y Nied Curcio, M. (Eds). Educazione plurilingue: ricerca,
didattica e politiche linguistiche, 105-22.
Steiner, G. (1998). Errata. El examen de una vida. Siruela.
Trimbur, J. (2016). Translingualism and Close Reading. College English, 78(3),
219-227.
Vidal Claramonte, Á. (2007). Resisting Through Hyphenation: The Ethics of
Translating (Im)pure Texts. En Manzanas, A. M. (Ed.). Border Transits,
223-241
Vidal Claramonte, Á. (2013). Towards a new research model in legal translation:
future perspectives in the era of asymmetry. Linguistica Antverpiensia,
New Series – Themes in Translation Studies, 12, 182–196.
Vidal Claramonte, Á. (2021). Traducción y literatura translingüe. Voces latinas
en Estados Unidos. Iberoamericana Vervuert.
Yilmaz, T. (2019). Translanguaging as a pedagogy for equity of language
minoritized students. International Journal of Multilingualism, 18(3),
435-454. DOI: 10.1080/14790718.2019.1640705
‒ ‒
CAPÍTULO 63
MANUEL RODRÍGUEZ-PEÑARROJA
Universitat Jaume I – IULMA
1. INTRODUCTION
‒ ‒
208) compares general English and the academic register by referring
to language use specificity and proficiency as the main differences be-
tween them: “academic English proficiency (i.e. a specific set of lan-
guage skills that supports academic literacy) and general English profi-
ciency (i.e. a wide range of language skills undifferentiated by context
that are measured by traditional assessments)”.
Davidson (2019) construes academic writing as a topic-focused and au-
dience-addressed type of writing that requires the fulfilling of specific
rules and writing conventions e.g. punctuation, grammar and spelling
norms, formal structure, in-text citations and referencing systems. By
the same token, Kovaks (2019, p. 29) defines it as a “standardised, ac-
curate, normative form of language” that is instrumental to several
(sub)fields and requires research, analysis, summarising, paraphrasing,
editing and proofreading. Bailey (2015) as cited in Bulqiyah et al.
(2021) depicts this writing register as a hands-on process in which stu-
dents first choose, read and make notes from previously selected
sources for a posterior plan, outline, paragraph organisation, rewrite
and proofread of their manuscript.
Accordingly, EFL students in HE contexts may feel overwhelmed with
academic writing tasks due to their complexity. It is the instructors’ role
to gradually introduce the aspects involved in this written register as the
number of specific requirements and conventions exceed topic-based
writing development. Given the need to tackle academic register-spe-
cific features progressively, recent advancements in information and
communication technologies (ICTs) applied to the writing skill
(Hockly, 2019) and the applicability of the task-based language teach-
ing approach (TBLT) with that aim, may well motivate students in mas-
tering this writing register.
The use of ICTs (e.g. computers, mobile phones, projectors) and Web
2.0 technologies (e.g. Moodle, educational blogs, educational software
and web pages) have been linked to students’ increase of motivation
and engagement in task accomplishment (Kaharuddin, 2020; Tavakoli
et al., 2019). Nonetheless, EFL learners’ individual differences such as
‒ ‒
their learning styles may differ and the degrees of motivation towards
the same task may vary (Rodríguez-Peñarroja, 2021). Correspondingly,
the association between today’s learners considered as digital natives
and the application of their digital competence to the educational con-
text is still under debate (Sommer, 2014). Their condition of digital
learners has been related to an increased ease of use of new technolo-
gies; however, the transference of their digital competence to the learn-
ing contexts may not always fulfil instructors’ initial expectations since
technology is mainly used for entertainment purposes (Waycott et al.,
2010). Thus, it is not only teachers but learners that need support in the
use of new technologies if applied to the educational context (Ali, 2020;
Vrasidas, 2015).
Instruction in the use of ICTs applied to learning contexts in general
and EFL learning is, therefore, necessary. Among the different ESL and
EFL teaching methodologies, the TBLT is a communicative language
teaching approach that supports experiential learning and highlights
meaning communication (Ellis, 2009). The core element of this lan-
guage teaching approach is the integration of task design in the planning
of instructional units. Samuda and Bygate (2008, p. 69) define a task as
a “holistic activity which engages language use in order to achieve
some non-linguistic outcome while meeting a linguistic challenge, with
the overall aim of promoting language learning through a process or
product or both.” TBLT-designed tasks require a previous analysis of
students’ needs, the design and sequencing of materials, tasks and in-
structional sessions in addition to specific teaching techniques and as-
sessment criteria (Norris, 2009).
As for the integration of TBLT and the use of ICTs in language learn-
ing, González-Lloret and Ortega (2014) suggest that task design incor-
porating the use of ICTs may have a positive motivational impact on
language learners while promoting language learning, which concurs
well with Tavakoli et al.’s (2019) assumptions of communicative tasks
design and their sequencing that may enhance motivation by the expe-
riential learning implied in task accomplishment.
‒ ‒
1.1 AUTOMATIC WRITING EVALUATION (AWE) TOOLS IN THE EFL
LEARNING CONTEXT
‒ ‒
As for the disadvantages, AWE tools have been reported as not taking
into consideration contextual and social aspects (Zhang, 2020) since the
feedback provided is mainly addressed to low-level writing subskills
i.e. lexico-grammatical aspects (Link et al., 2020). The second major
drawback is related to the effects of the feedback provided in students’
revision as it has been described as extensive (Ranalli, 2018) and hav-
ing a low impact if it is not integrated as a part of the instruction (Cotos,
2014; Chapelle et al., 2015).
On the other hand, these systems grant instantaneous and corrective
feedback to students (Wang et al., 2013) along with an objective and
holistic scoring of their writing (Li et al., 2015; Shermis & Burstein,
2003). Additionally, students may see their autonomy increased since
AWE technologies allow initial draft multiple revisions, editing and
polishing (Liao, 2016; Wang et al., 2013). Ranalli (2018) and Link et
al.’s (2020) studies on teachers’ perception of the use of AWE tools
indicated that instructors can devote more time to tackling writing in-
struction and focus their corrections and feedback provision on the
meaning conveyed by students, rather than its form. Last, these tools
have been also reported to heighten motivation and students’ writing
self-efficacy (Roscoe et al., 2018; Wilson & Roscoe, 2020).
Consequently, there is no broad consensus that AWE feedback provi-
sion is convenient and easy to use and understand by EFL learners.
Nonetheless, scholars seem to agree that the plausible benefits derived
from AWE tools use are subsumed to their incorporation in EFL in-
structional models. Some studies have found EFL students’ positive
perception and increased motivation when AWE tools are introduced
in EFL instruction.
Lee (2020) has investigated the effects of the use of the AWE software
Criterion® in the EFL learning context; advanced and intermediate EFL
learners participated in the study. Participants’ writing improvement,
writing proficiency development and their perceptions of the AWE pro-
gramme were examined over a year through a test–retest experimental
research design, interviews and journal entries. Results confirmed a de-
crease in writing errors, and style and grammar progress. Word count
and T-units also increased over instruction. Participants reported the
‒ ‒
perceived usefulness and helpfulness of Criterion feedback, which re-
duced their writing time and bolstered their confidence as EFL writers.
Koltovskaia’s (2020) study delved into EFL students’ engagement with
Grammarly AWE feedback. The author examined participants’ i) be-
havioural engagement i.e. revision operations, ii) cognitive engagement
i.e. noticing writing issues, and cognitive and metacognitive processes,
and iii) affective engagement i.e. emotional and attitudinal responses to
automated written corrective feedback. Results on revision operations
were not effectively accomplished by students as moderate changes on
their final drafts were made. Cognitive engagement as a result of cog-
nitive and metacognitive processes in essay revision was described as
proficiency-level dependent. Thus, higher proficiency allowed for the
use of wider revision strategies and a better understanding of the feed-
back provided by the system, which may have resulted in more accurate
revisions. Similarly, affective engagement seemed to depend on student
proficiency level. The author identified the lower proficiency partici-
pant to rely deeply on the feedback provided. On the contrary, the
higher proficiency student tended to question AWE feedback and
checked external resources to confirm the writing issues highlighted.
The evidence reported in the studies point to the likelihood that stu-
dents’ positive perception of AWE feedback provision may increase
their motivation towards EFL writing tasks and promote multiple revi-
sions. Nevertheless, to our knowledge, few studies have directly ad-
dressed EFL students’ motivation towards academic writing tasks if
AWE tools are cogently integrated into instruction. This research aims
to study EFL learners’ motivation through the integration of academic
writing in the EFL curriculum, by implementing a TBLT technology-
mediated task under the five key principles postulated by González-
Lloret and Ortega (2014): (i) focus on meaning, (ii) the design of a goal-
oriented task, (iii) addressing learners’ needs, (iv) real language use and
(v) experiential learning.
‒ ‒
2. OBJECTIVES
3. METHODOLOGY
3.1. PARTICIPANTS
The data for this study was collected from a total of eighty-six (N = 86)
students that voluntarily participated in the study. Thirty-six students
(N = 36) enrolled in the English Studies Bachelor’s Degree (henceforth
named ‘ES group’) and fifty students (N = 50) enrolled in the Adver-
tising and Public Relations Bachelor’s Degree (hereafter ‘AP group’)
at Universitat Jaume I.
The groups that participated in the study present differences which are
presumed to have an impact on their motivation towards task
‒ ‒
accomplishment. The first difference is the bachelor’s degree they
study, which directly affects their EFL exposure. The ES group take
university courses in English, yet the AP group instruction is mainly in
Spanish. Besides, their English proficiency level also differs: ES (M =
42.00 SD = 6.59) and AP (M = 33.20 SD = 6.04), which corresponds to
B2 and B1 levels respectively (Council of Europe, 2018).
The instruments for data collection and analysis used were i) the Quick
Placement Test (UCLES, 2001) to measure students’ proficiency in
English, ii) an adaptation of the Self-Determination Theory’s Intrinsic
Motivation Inventory (SDT, n.d.) that include 26 items divided into the
subscales of interest/enjoyment, perceived competence, effort/im-
portance, pressure/tension, and value/usefulness to be completed on a
1 to 5 Likert scale, iii) Google Forms to complete the IMI questionnaire
after task accomplishment, and iv) the SSPS v.26 software to compile
and analyse the data. In order to study the differences between groups,
a series of independent sample t-tests, one-way ANOVA and AN-
COVA parametric analysis were used. The internal consistency of the
IMI questionnaire was measured using Cronbach’s alpha coefficient as
shown in Table 1.
Interest/enjoyment 5 .816
Effort/importance 3 .867
Pressure/tension 3 .842
Value/usefulness 10 .930
‒ ‒
Based on Taber (2018), results for Cronbach’s alpha were found relia-
ble for the subscales of perceived competence, effort, pressure and the
total questionnaire. The subscale of interest is robust and the usefulness
subscale presents strong values of reliability.
‒ ‒
to read two extra research abstracts at home and answer some aware-
ness-raising questions related to the written title, abstracts sections and
structure, and the use of keywords. The second session in the pre-task
was devoted to discussing and checking their answers to the awareness-
raising questions set as homework. Next, students spent the whole class
planning and writing a 250-word first draft of their abstracts. Extra time
was provided to those who could not finish their task in class.
The task was aimed at promoting students’ digital competence through
the use of AWE online tools. Students were first given a checklist to
self-check their abstract drafts, which included aspects such as parts of
the abstract, long sentences cohesion, and coherence and contraction
use. Having self-checked their abstracts, students attended a workshop
on the use of the AWE online tools of Grammarly, Prowriting Aid and
Proofreading Tool, in which the teacher described the tools and their
characteristics as writing checkers. Then, students transferred their self-
revised drafts to the three different AWE tools to get computer-medi-
ated feedback. After that, they saved the three different versions with
the accepted changes and corrections in a Word file.
The post task involved students’ revision of their original drafts and the
revised versions from the AWE tools. Students wrote a final version of
the abstract after revising the three versions derived from the automated
feedback provision tools. Their final drafts were uploaded on the insti-
tutional Moodle platform for final assessment. Having completed the
task, students took an adaptation of the IMI in which they answered 26
motivation-related items on Google Docs.
‒ ‒
RQ1: What is students’ motivation towards the academic writing task
and the use of AWE tools? Does language exposure influence their mo-
tivation scores?
H1: The ES group will show higher mean results with reference to the
subscale of interest/enjoyment when compared to the AP group.
H2: The ES group will present higher mean scores with regard to the
subscale of perceived competence when compared to the AP group.
H3: The ES group will reflect lower effort/importance mean results
when accomplishing the task than the AP group.
H4: The ES group will reflect lower pressure/tension mean results
when accomplishing the task than the AP group.
H5: The ES group will show higher mean results as regards the subscale
of value/usefulness of the task than the AP group.
H6: The ES group will present overall higher mean results with refer-
ence to the IMI questionnaire when compared to the AP group.
RQ2: Are there statistically significant differences in students’ motiva-
tion towards academic writing and the use of AWE tools depending on
the instructional group they belong i.e. ES and PU, controlling their
English proficiency level?
H7: The ES group, in which English proficiency is upper-intermediate,
will present higher motivation scores than the AP group in which Eng-
lish proficiency is lower-intermediate.
4. RESULTS
The results section has been structured around the research questions
and subsequent hypotheses. To interpret participants’ answers to the
IMI questionnaire, the following motivation parameters have been es-
tablished in Table 3.
‒ ‒
TABLE 3. Mean range and motivation degrees’ interpretation
‒ ‒
perception was moderate. Both groups considered the task as highly
useful: ES group M = 3.91 and AP group M = 4.09. Last, overall results
of the IMI questionnaire show high motivation mean scores towards the
task itself: ES group, M = 3.44; AP group M = 3.67.
In order to compare motivational subscales results and check if the dif-
ferences between groups are statistically significant, a series of inde-
pendent samples t-tests were computed. The Kolmogorov–Smirnov
normality test and the Levene’s test of homogeneity of variances were
calculated on SPSS to satisfy the requirements of the parametric statis-
tics for the t-test.
Statistic df Sig.
Interest/enjoyment .106 86 .171
‒ ‒
Results from the Levene’s test of homogeneity of variances reveal that
the motivational subscales of perceived competence, effort/importance
and the IMI questionnaire mean scores are not approximately equal or
homogenous, albeit the subscales of interest/enjoyment, pressure/ten-
sion and value/usefulness have meet the assumption for homogeneity
of variances. Taking these results into account, t-tests were computed
in order to statistically test hypotheses 1 to 6 that concern the role of
language exposure in motivation.
Lower Upper
*Sig (2-tailed)
Note: Parameter 1 refers to equal variances assumed and 2 refers to equal variances not
assumed
‒ ‒
H1 assumed that the ES group will show higher mean results with ref-
erence to the subscale of interest/enjoyment when compared to the AP
group. As shown in Table 7, results from the t-test revealed that there
are no statistically significant differences in task interest/enjoyment be-
tween the ES group (M = 3.34, SD = .80) and the AP group (M = 3.35,
SD = 58), t (84) = −.051 p =.96, d = 0.01.
H2 postulated that the ES group will present higher mean scores with
regard to the subscale of perceived competence when compared to the
AP group. Results were found statistically significant with the AP
group participants perceived competence (M = 3.45, SD = .59) higher
than that in the ES group (M = 2.55, SD = .86), t (57.655) = −5.38 p =
.001, d = 1.25. The effect size for this analysis was found to exceed
Cohen’s convention for a large effect. These results indicate that the ES
group’s perceived competence was statistically significantly lower than
in the AP group.
H3 stated that the effort required to overcome the task by the ES group
will be lower than that of the AP group. Results from the t-test revealed
statistically significant differences between the ES group (M = 3.91,
SD = .91) and the AP group (M = 4.32, SD = .54), t (53.025) = −2.39 p
= .020, d = 0.56. These results suggest that the ES group effort to over-
come the task was significantly lower than the AP group, being a me-
dium effect size.
H4 predicted that the ES group will experience lower pressure/tension
when accomplishing the task than the AP group. Results from the inde-
pendent samples t-test were found to be statistically significant and the
ES group (M = 3.05, SD = .91) indeed felt more pressure than the AP
group (M = 2.56, SD = .91), t (84) = 2.48 p = .015, d = 0.54 when doing
the task. Cohen’s effect size was medium.
H5 concerned participants’ perception of the value/usefulness of the
task. Results indicate that there are no statistically significant differ-
ences between the ES group (M = 3.91, SD = .80) and the AP group (M
= 4.09, SD = .59), t (84) = −1.18 p = .238, d = 0.26. Nonetheless, mean
results suggest that the AP group has perceived the task slightly more
useful than the ES group, having a medium effect.
‒ ‒
H6 predicted that the ES group will show higher overall motivation to-
wards the writing task than the AP group. Results unveiled that the AP
group (M = 3.67, SD = .37) showed statistically significant higher mo-
tivation levels towards the task when compared to the ES group (M =
3.44, SD = .57), t (55.653) = −2.12 p =.038, d = 0.49; the Cohen’s effect
size was close to medium.
ANOVA
IMI_Mean_Score
Total 19.750 85
Results from the ANOVA indicate that there are statistically significant
differences in motivation between the ES group (M = 3.44, SD = .57)
group and the AP group (M = 3.67, SD = .37), F (1.84) = 5.15, p = .026.
‒ ‒
In other words, motivation mean scores significantly differed for the
different groups. Thus, to study the effect of the covariate English pro-
ficiency level, a one-way ANCOVA was conducted to determine a sta-
tistically significant difference between the ES and PU groups (inde-
pendent variable) on motivation (dependent variable) controlling for
their English proficiency (covariate).
Total 1121.442 86
Corrected 19.750 85
Total
‒ ‒
5. DISCUSSION
One of the goals of this research was to study EFL students’ motivation
towards academic writing after implementing a TBLT technology-me-
diated writing task that integrated the use of AWE tools. As illustrated
in Table 4, H6 mean score results, which indicate students’ overall mo-
tivation scores, support the assumption that the use of technology i.e.
AWE tools in the EFL teaching and learning contexts has a positive
impact on student motivation. This result concurs well with previous
studies where motivation was seen to be improved after students used
ICTs (Kaharuddin, 2020; Tavakoli et al., 2019) and the potential of
technology-mediated TBLT task design to enhance motivation (Gonzá-
lez-Lloret & Ortega, 2014).
For the first research question, results both negate and support some of
the hypotheses. Initially, participants in the ES group were expected to
outperform the AP group in the motivation subscales studied due to a
higher EFL exposure and their degree studies specificities, being the
ES group which, a priori, should reflect higher mean scores in the dif-
ferent motivation subscales. Contrary to expectations, participants in
the AP group presented higher interest towards the task (H1) and per-
ceived its value/usefulness (H5) more representatively than the ES
group. In addition, AP students showed statistically significant per-
ceived competence (H2) and low pressure (H4) in task accomplishment
along with overall motivation scores (H6). Results for the effort sub-
scale (H3) fulfilled the researcher expectations and it was the ES group
that presented statistically significant lower effort towards the task.
The second research question was aimed at unveiling motivation dif-
ferences between groups, taking into consideration EFL language pro-
ficiency. It was hypothesised that language proficiency as a covariate
would influence participants’ overall motivation mean scores. Results
from the one-way ANOVA illustrate statistically significant motivation
differences between groups, yet their EFL proficiency has not been
found to be a statistically significant predictor of motivation.
Findings from this exploratory study suggest that the differences ob-
served in the motivation mean scores subscales are not related to
‒ ‒
language exposure or language proficiency. The reason for these rather
contradictory results can be accounted for in part by Kovoltoskaia’s
(2020) conclusions with respect to cognitive and affective engagement
with the feedback provided by AWE tools, the extensive feedback pro-
vided by the AWE tools (Ranalli, 2018) and its limited scope for
spelling and grammar corrections as suggested by Link et al. (2020) and
Zhang (2020). This would appear to indicate that lower proficiency stu-
dents in the AP group accounted for higher motivation mean scores in
the motivation subscales as a result of a wider reliance on the extensive
feedback provided by the AWE tools and the perception of low-level
corrections as useful. On the contrary, we hypothesise that upper-inter-
mediate students in the ES group may have relied less on the AWE
feedback provided and applied their own revision techniques, along
with the perception that the AWE feedback provided is restricted to
lexicogrammatical aspects.
These results should be treated with caution as it is possible that some
limitations could have influenced the results obtained. To begin with,
time constrains have been found when designing the writing task as the
need to meet course curricular demands has considerably reduced par-
ticipants’ instruction in academic writing and the time devoted to the
task. An additional limitation is the lack of a control group and the num-
ber of participants since the groups are not completely homogenous,
which could have affected the validity of results to a certain degree.
Last, the use of open-ended questions as a part of the questionnaire
could have shed light on the rationale for students’ answers to the IMI.
6. CONCLUSION
The evidence from this study supports the idea that integrating AWE
tools in writing task design can promote different motivational aspects
in EFL students as previously suggested by Roscoe et al. (2018), Wil-
son and Roscoe (2020) and Lee (2020). The importance of our contri-
bution lies in the results, which may have confirmed that EFL exposure
and English proficiency differences do not have a significant impact on
motivation and the use of AWE tools. That assumption may reinforce
‒ ‒
the suitability of this type of task for tertiary education students. Be-
sides, we recommend the implementation of technology-mediated tasks
under a TBLT approach in EFL teaching and learning contexts due to
its active-learning enhancement, awareness-raising potential and task-
design sequencing (Tavakoli et al., 2019), not to mention the need to
avoid the digital divide when carrying out these types of tasks.
To sum up, we recommend the implementation of AWE tools for EFL
writing as a complement to more traditional writing instruction and
practice techniques. The key aspect involved in the use of AWE tools
is their potential to foster students’ self-revision and autonomy through
the provision of corrective feedback and recommendations for im-
provement (Liao, 2016; Wang et al., 2013), which can reduce their de-
pendence on language instructors’ feedback provision. Nevertheless,
students must be instructed on AWE tools usability and their limitations
(Ali, 2020).
Further research on motivation should adopt a mixed-methods ap-
proach for the study of both quantitative and qualitative data results.
Some important issues to resolve for future studies are i) the relation-
ship between EFL students’ motivation towards AWE systems and their
writing performance, ii) the impact of multiple revisions fostered by
AWE tools on students’ final drafts, iii) the typology of mistakes cor-
rected by students and iv) the effect of different feedback conditions on
students writing revisions i.e. teacher and/or computer generated, or a
combination of both.
7. REFERENCES
‒ ‒
Bulqiyah, S. Mahbub, M.A. & Nugraheni, D.A. (2021). Investigating writing
difficulties in essay writing: Tertiary students’ perspectives. English
Language Teaching Educational Journal, 4(1), 61–73.
https://doi.org/10.12928/eltej.v4i1.2371
Centre for Self-Determination Theory (SDT). (n.d.). Intrinsic motivation
inventory. Retrieved from https://bit.ly/3zxuxue (last accessed
16/07/2021).
Cotos, E. (2014). Genre-based automated writing evaluation for L2 research
writing: From design to evaluation and enhancement. New York, NY:
Palgrave Macmillan.
Council of Europe (2018). Common European framework of reference for
languages: Learning, teaching, assessment. Companion volume with
new descriptors. Cambridge University Press.
Chapelle, C. A., Cotos, E., & Lee, J. (2015). Validity arguments for diagnostic
assessment using automated writing evaluation. Language Testing,
32(3), 385–405. https://doi.org/10.1177/0265532214565386
Davidson, P. (2019). What is academic writing? InW. Zoghbor, S. Al-Alami, &
T. Alexiou (Eds.), Proceedings of the 1st applied linguistics and
language teaching conference: teaching and learning in a globalized
world (pp. 12–20). Dubai: Zayed University Press.
Deci, E. L., & Ryan, R. M. (2012). Self-determination theory. In P. A. Van
Lange, A. W. Kruglanski, & E. T. Higgins (Eds.), Handbook of theories
of social psychology: volume 1 (Vol.1, pp. 416–436). Sage.
https://doi.org/10.4135/9781446249215.n21
Driscoll, D. L., & Powell, R. (2016). States, traits, and dispositions: The impact
of emotion on writing development and writing transfer across college
courses and beyond. Composition Forum, 34, 1–16.
Ellis, R. (2009). Task‐based language teaching: Sorting out the
misunderstandings. International journal of applied linguistics, 19(3),
221–246.
González-Lloret, M., & Ortega, L. (2014). Towards technology-mediated TBLT.
Technology-mediated TBLT: Researching technology and tasks, 6, 1–22.
Hockly, N. (2019). Automated writing evaluation. ELT Journal, 73(1), 82-88.
https://doi.org/10.1093/elt/ccy044
Huang, Y., & Chen, B. (2019). Teaching EFL in Digital Age. Higher Education
of Social Science, 17(2), 25–29. http://dx.doi.org/10.3968/11416
‒ ‒
Hyland, K. (2008). Writing theories and writing pedagogies. Indonesian JELT,
4(2), 1-20.
Jo, C. W. (2021). Exploring General Versus Academic English Proficiency as
Predictors of Adolescent EFL Essay Writing. Written Communication,
38(2), 208–246. https://doi.org/10.1177/0741088320986364
Kaharuddin, A. (2020). Contributions of technology, culture, and attitude to
English learning motivation during COVID-19 outbreaks. Systematic
Reviews in Pharmacy, 11(11), 76–84.
Kovacs, G. (2019). Academic writingA challenge in translator training. New
Trends and Issues Proceedings on Humanities and Social Sciences, 6(5),
28–35. https://doi.org/10.18844/prosoc.v6i5.4371
Koltovskaia, S. (2020). Student engagement with automated written corrective
feedback (AWCF) provided by Grammarly: A multiple case study.
Assessing Writing, 44, 100450.
https://doi.org/10.1016/j.asw.2020.100450
Lee, Y. J. (2020). The Long-Term Effect of Automated Writing Evaluation
Feedback on Writing Development. English Teaching, 75(1), 67–92.
https://doi.org/10.15858/engtea.75.1.202003.67
Li, J., Link, S., & Hegelheimer, V. (2015). Rethinking the role of automated
writing evaluation (AWE) feedback in ESL writing instruction. Journal
of Second Language Writing, 27, 1–18.
https://doi.org/10.1016/j.jslw.2014.10.004
Li, Z., Dursun, A., & Hegelheimer, V. (2017). Technology and L2 writing. In C.
A. Chapelle & S. Sauro (Eds.), The handbook of technology and second
language teaching and learning (pp. 77–92). Hoboken, NJ: Wiley
Blackwell.
Liao, H. C. (2016). Enhancing the grammatical accuracy of EFL writing by using
an AWE-assisted process approach. System, 62, 77-92.
https://doi.org/10.1016/j.system.2016.02.007
Link, S., Mehrzad, M., & Rahimi, M. (2020). Impact of automated writing
evaluation on teacher feedback, student revision, and writing
improvement. Computer Assisted Language Learning, 33, 1–30.
https://doi.org/10.1080/09588221.2020.1743323
Munoz-Luna R (2015) Main Ingredients for Success in L2 Academic Writing:
Outlining, Drafting and Proofreading. PLoS ONE 10(6): e0128309.
https://doi.org/10.1371/journal.pone.0128309
‒ ‒
Nacera, A. (2010). Languages Learning Strategies And The Vocabulary Size.
Procedia Social and Behavioural Sciences, 2(2), 4021–4025).
https://doi.org/10.1016/j.sbspro.2010.03.634
Norris, J. (2009). Task-based teaching and testing. In M. Long & C. Doughty
(Eds.), The handbook of language teaching (pp. 578–594). Wiley-
Blackwell.
Ranalli, J. (2018). Automated written corrective feedback: How well can students
make use of it? Computer Assisted Language Learning, 31(7), 653–674.
https://doi.org/10.1080/09588221.2018.1428994
Rodríguez-Peñarroja, M (2021). Blended learning in higher education during
Covid-19 pandemic: Students’ assessment of digital transition. 13th
International Conference on Education and New Learning Technologies.
In Edulearn21 Proceedings (pp. 10613–10621).
Roscoe, R. D., Allen, L. K., Johnson, A. C., & McNamara, D. S. (2018).
Automated Writing Instruction and Feedback: Instructional Mode,
Attitudes, and Revising. Proceedings of the Human Factors and
Ergonomics Society Annual Meeting, 62(1), 2089–2093.
https://doi.org/10.1177/1541931218621471
Taber, K. S. (2018). The use of Cronbach’s alpha when developing and reporting
research instruments in science education. Research in Science
Education, 48(6), 1273–1296. https://doi.org/10.1007/s11165-016-9602-
2
Samuda, V. & Bygate, M. (2008). Tasks in second language learning.
Houndmills, UK: Palgrave Macmillan.
Shermis, M. & Burstein, J. (Eds.). (2003). Automated essay scoring: A cross-
disciplinary perspective. Hillsdale, NJ: Lawrence Erlbaum.
Sommer, H. (2014, March 30). Digital competence study: intermedia results
[video]. YouTube. https://www.youtube.com/watch?v=BtAFgBiTb5g
Tavakoli, H., Lotfi, A. R., & Biria, R. (2019). Effects of CALL-mediated TBLT
on motivation for L2 reading. Cogent Education, 6(1), 1–21.
https://doi.org/10.1080/2331186X.2019.1580916
University of Cambridge Local Examinations Syndicate (UCLES) (2001). Quick
placement test. Oxford University Press.
Vrasidas, C. (2015). The rhetoric of reform and teachers' use of ICT. British
Journal of Educational Technology, 46(2), 370–380.
https://doi.org/10.1111/bjet.12149
‒ ‒
Wang, Y. J., Shang, H. F., & Briody, P. (2013). Exploring the impact of using
automated writing evaluation in English as a foreign language university
students’ writing. Computer Assisted Language Learning, 26(3), 234–
257. https://doi.org/10.1080/09588221.2012.655300
Waycott, J., Bennett, S., Kennedy, G., Dalgarno, B., & Gray, K. (2010). Digital
divides? Student and staff perceptions of information and
communication technologies. Computers & Education, 54(4), 1202–
1211. https://doi.org/10.1016/j.compedu.2009.11.006
Wilson, J., & Roscoe, R. D. (2020). Automated writing evaluation and feedback:
Multiple metrics of efficacy. Journal of Educational Computing
Research, 58, 87–125. https://doi.org/10.1177/0735633119830764
Zhang, Z. V. (2020). Engaging with automated writing evaluation (AWE)
feedback on L2 writing: Student perceptions and revisions. Assessing
Writing, 43, 100439. https://doi.org/10.1016/j.asw.2019.100439
‒ ‒
SECCIÓN III
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
Entre las actividades o iniciativas de innovación docente que nos gus-
taría compartir en este foro se encuentran las siguientes: 1) Creamos
uno de los primeros cursos abiertos en línea de la Universidad de Cór-
doba en el año 2013 titulado “Introducción a la filosofía”
(www.uco.es/filosoque). 2) Creamos una página web con pódcast de
contenido filosófico y nivel asequible que podrían ser una herramienta
muy útil también para alumnos con dificultades visuales
(www.uco.es/filosofiahablada). 3) En 2013 creamos también un pro-
yecto de divulgación a través de vídeos cortos difundidos por YouTube
y por su propia página web. Estos vídeos ya tienen más de 120.000
visitas (www.filosoque.com y https://www.youtube.com/chan-
nel/UC7WKFV3px29Vdm69LJdW5mw). 4) A través del Aula de De-
bate de la Universidad de Córdoba, una estructura académica y admi-
nistrativa que se formó en 2012 con objeto de fomentar la mejora de la
expresión oral y del pensamiento crítico entre el alumnado universita-
rio, construimos una página web con información de los eventos que se
celebran y también con ejercicios básicos de pensamiento crítico que se
pueden realizar y evaluar en línea (www.uco.es/auladebate).
Resulta evidente que el propósito que perseguíamos con todos estos
proyectos era el de innovar la impartición docente de contenidos filo-
sóficos y difundir las ideas filosóficas de una manera más moderna y
eficaz (Bermúdez, 2021: 276-277).
2. DISCUSIÓN Y RESULTADOS
‒ ‒
Ahora bien, una de las características intrínsecas de la filosofía es su
capacidad de crítica, entendiendo este concepto como su origen etimo-
lógico indica: crítica viene del término griego krinein, que significaba
separar, distinguir, discernir, lo cual emparentaba el concepto con las
ideas de examinar algo o analizarlo. Pero esta labor de la crítica no se
quedaba en el análisis, sino que, derivado del mismo, se llegaba a una
valoración de lo analizado y esta valoración podía ser positiva o nega-
tiva, no toda la crítica ha de ser obligatoriamente negativa (Carpio,
2004: 38). Así, haciendo gala de su tradición, la filosofía no se limita a
aceptar acríticamente el concepto de innovación como si de una nueva
deidad laica se tratara. La filosofía no ha puesto a la innovación en una
hornacina como sí han hecho muchas otras disciplinas. Quizá conven-
dría cuestionar el propio concepto de innovación docente, porque po-
dría convertirse en una rémora, paradójicamente, para el desarrollo pe-
dagógico en el futuro.
No se puede estar innovando perennemente y ello por varios motivos.
Primero porque el cambio constante generaría desconcierto, tanto en el
alumnado como en el profesorado. Segundo porque impediría una ade-
cuada evaluación de los resultados. Y tercero, y probablemente más im-
portante, porque la innovación es la enemiga del perfeccionamiento y
cuando se encuentra un modelo que da resultados y que resulta atractivo
es conveniente trabajar con él para mejorarlo y perfeccionarlo, cosa que
la innovación, per se, no conseguiría. El perfeccionamiento requiere
dotar de continuidad a una metodología de modo que, tal vez, el proceso
adecuado debería ser este: primero la puesta en marcha de métodos in-
novadores de impartición docente. Luego comprobar su eficacia y sus
resultados a través de herramientas de valoración y evaluación que de-
berían extenderse en el tiempo. Una vez se comprueba que se ha encon-
trado un instrumento innovador adecuado, conviene insistir en él para
ir perfeccionándolo. Todo perfeccionamiento requiere de tiempo, que
suele ser, precisamente, lo que la innovación perenne arrebata. Además
del tiempo, el perfeccionamiento también necesita esfuerzo, insistencia,
repetición. Un zapatero alcanza la perfección haciendo un zapato a tra-
vés de la práctica, de la reiteración, de la insistencia, de la paciencia,
eso sí, cuando la experiencia ya le ha mostrado cuáles son los métodos
‒ ‒
adecuados para ello. Otra analogía que nos parece válida es la de esos
restaurantes callejeros de Singapur y Hong-Kong que han conseguido
una estrella Michelin, entre otros motivos, porque la práctica constante
de un mismo plato les ha hecho lograr el virtuosismo con los resultados.
La incorporación continua de formatos nuevos, que es lo que implica la
innovación, daría como resultado el alejamiento del objetivo que se pre-
tende conseguir, en este caso un modelo docente repleto de virtudes y
que nos diera los mejores resultados posibles.
Dicho todo esto, a lo largo del presente apartado de discusión y resul-
tados nos proponemos presentar una serie de proyectos de innovación
que hemos liderado y que han sido llevados a cabo en los últimos años.
El objetivo no puede ser más patente, ofrecer un recuento de nuestras
experiencias, de nuestros aciertos y nuestros errores para que, en el fu-
turo, otros compañeros sepan a qué atenerse en el caso de decidir afron-
tar o utilizar herramientas de innovación similares.
2.1 La primera experiencia grande de innovación docente de la que va-
mos a hablar aquí fue la organización en el año 2013 de un curso en
línea masivo y abierto (el equivalente en español de MOOC – massive
open online course). Se trataba de un curso titulado “Introducción a la
filosofía” y, como su propio indica, su propósito era introducir de una
manera prácticamente propedéutica ciertos contenidos filosóficos que
consideramos que podrían resultar de interés a la audiencia del siglo
XXI. En términos brutos, el curso fue un éxito para las expectativas que
manejábamos. Se inscribieron 1200 personas de todo el mundo, de los
cinco continentes, de lugares como Sudáfrica, Rusia, Australia o Sin-
gapur. De estos 1200 inscritos inicialmente, 99 completaron todas las
actividades y presentaron el ensayo final. Este guarismo supone un
8.25% de los inscritos que vieron todos los vídeos, completaron todas
las tareas y presentaron el ensayo final que fue corregido por mí. Si
comparamos esta tasa de éxito del 8,25% con la tasa de éxito de cursos
como Coursera, que en el año 2014 era de un 4-5%, ya podemos cons-
tatar que el curso funcionó bien, mejor que la tasa de éxito de Coursera
y, por supuesto, mucho mejor que nuestras expectativas (Collazos,
2014).
‒ ‒
Pero expliquemos con un poco más de detalle la configuración del curso
y los desafíos irresolubles que nos planteó. Para empezar, la idea del
curso surgió como colaboración con un profesor del departamento de
informática de la Universidad de Córdoba, Cristóbal Romero, sin cuya
dedicación y trabajo no habría resultado posible llevar a cabo el pro-
yecto. El diseño era sencillo: se trataba de una serie de vídeos breves, 4
o 5 por cada tema, y 7 temas en total. Tras los vídeos de cada tema había
un cuestionario que se autoevaluaba sobre los contenidos expuestos y
el participante podía ver el resultado final con las respuestas correctas
y su propio desempeño. Tras realizar los 7 temas en total (se abría un
tema cada semana), se proponía una tarea final, un ensayo breve, de no
más de 3000 palabras, sobre alguno de los temas propuestos en el curso.
La difusión de los vídeos alcanzó grandes cotas, de lo cual nos sentimos
satisfechos. Entre los problemas que tuvimos estuvo, ante todo, la ges-
tión de los foros. Cada tema tenía unos foros asociados de debate y dis-
cusión, y la cantidad de participantes, opiniones, preguntas y comenta-
rios que se vertieron en esos foros hizo imposible gestionarlos adecua-
damente, sobre todo por la falta de colaboradores que ayudaran a lle-
varlos adelante. Desde mi punto de vista, convendría que hubiera un
responsable de foro por cada 200 participantes, de modo que habrían
hecho falta unos 6 colaboradores para poder gestionar adecuadamente
los foros del curso. Lo que ocurrió fue que muchísimas preguntas que-
daron sin respuesta y numerosos comentarios cayeron en saco roto por-
que nadie había que pudiera atenderlos. Al encontrarme yo solo frente
a esa tarea no di abasto en las 7 semanas que duró el curso en línea
masivo abierto.
Por último, otra de las problemáticas que surgieron fue la necesidad de
hacer el curso utilizando la plataforma de Google Course Builder, ya
que otras más conocidas como Miriadax o Coursera requerían de un
desembolso económico considerable por parte de la universidad y no
contábamos con los recursos para hacer frente a esa condición.
No me gustaría terminar de comentar esta experiencia de innovación
docente sin hablar de la dificultad de corregir los 99 ensayos que se
entregaron. Aunque los textos eran relativamente breves, el número sí
era elevado y el tiempo requerido para corregirlos había que sumarlo al
‒ ‒
tiempo normal requerido para mis clases y mis tutorías como docente
universitario. Además, estaban escritos en varios idiomas (inglés, espa-
ñol y portugués, fundamentalmente). A fin de cuentas, un proyecto
como este tuvo un resultado muy positivo, pero a costa de una ingente
cantidad de trabajo por parte de los dos profesores que lo afrontamos,
pues las cuestiones técnicas tampoco fueron sencillas. No debemos ol-
vidar que, en su momento, fue la primera experiencia similar que se
llevó a cabo en la Universidad de Córdoba.
2.2 El proyecto siguiente comenzó su andadura en el año 2014 y aún
hoy sigue activo y abierto: www.uco.es/filosofiahablada. Se trata, como
se puede intuir, de una serie de pódcast de contenido filosófico que es-
tán colgados en la página web de la Universidad de Córdoba y que,
periódicamente, vamos aumentando con contenido nuevo. El origen de
todo esto está en un libro que escribí en el año 2012 titulado Breve his-
toria de la filosofía (Bermúdez, 2012). Este libro es, fundamental-
mente, un manual para alumnos universitarios del grado de historia,
pero que puede ser leído por cualquier tipo de público interesado en la
filosofía. El proyecto de filosofía hablada consistió en coger algunos de
los capítulos de ese libro, transformarlos a formato oral y grabar en
forma de pódcast esos contenidos. Desde Sócrates hasta Hanna Arendt,
la web de filosofía hablada sigue ofreciendo sus contenidos a todo el
mundo interesado en acceder a ellos. Es un proyecto modesto pero que
ha tenido cierta utilidad para mucha gente. Lo difundimos especial-
mente entre estudiantes y profesores de secundaria y bachillerato, por-
que el formato volvía más atractivo el contenido y porque podía resultar
muy útil para estudiantes con dificultades visuales, sobre todo porque
les permite acceder a materiales académicamente verificados, frente a
los cuales habrían tenido mayor dificultad.
Un de las virtudes de este proyecto es que está siempre disponible y
abierto a todo el mundo y, además, periódicamente vamos ampliando
sus fondos con pódcast nuevos de temática diversa, eso sí, siempre vin-
culada a la filosofía, aunque sea en sentido lato.
2.3 Filosoqué es un proyecto de innovación docente que pusimos en
marcha a finales del año 2013. Tratar de resolver si ha sido un éxito, un
fracaso o algo intermedio, resulta, para mí, altamente complejo.
‒ ‒
Prefiero pasar a una descripción lo más desapasionada posible de en
qué consiste el mismo para que el lector juzgue como estime oportuno
los resultados.
Filosoqué consiste, fundamentalmente, en vídeos cortos de divulgación
de contenido filosófico, aunque en ocasiones también hemos redactado
textos también breves. Los contenidos son de lo más variopinto, van
desde los principios ontológicos hasta la vida y filosofía de algunos au-
tores, pasando por la reflexión filosófica sobre la pornografía o el sui-
cidio.
Los vídeos aparecían, inicialmente, en la página web www.filo-
soque.com, sin embargo, cuando nos quedamos sin fondos, perdimos el
dominio y tuvimos que trasladar todo su contenido a YouTube, en el
canal de Filosoqué: filosoque - YouTube.
Entre las dificultades que encontramos estuvo y está la necesidad de
mantener contenido continuamente actualizado, cosa realmente agota-
dora para sostener sin ayuda. Sobre todo, cuando en los últimos años
hemos visto cómo la carga burocrática universitaria se hace mayor y,
por lo tanto, mucho más pesada, de modo que proyectos como este se
resienten inevitablemente. A largo plazo el sostenimiento de los vídeos
de Filosoqué solo se podría haber hecho resintiendo mis clases y mi
propia investigación, por lo tanto, supondría poner en riesgo la carrera
académica.
Los primeros vídeos de Filosoqué eran vídeos relativamente largos para
lo que significa el mundo de las redes, pues duraban entre 8 y 12 minu-
tos. Llegó un momento en que Francisco Jiménez, informático y colega
en el proyecto, se percató de que la mayor parte de las personas que
veían un vídeo de Filosoqué lo cortaban en el minuto 2 con 11 segun-
dos. Ese era nuestro horizonte, 2 minutos y 11 segundos, lo cual nos
llevó a recortar la duración de los vídeos originales. Así, los vídeos pa-
saron de durar entre 8 y 12 minutos a durar no más de 3 minutos. Algu-
nos de estos vídeos, por su brevedad, los etiquetamos como “píldoras
filosóficas” (https://www.youtube.com/watch?v=g4hkqT8a_Gk;
https://www.youtube.com/watch?v=sJGbL9ru0v0&t=1s). Esto trajo
sus propias dificultades, pues lograr sintetizar contenidos filosóficos,
‒ ‒
en ocasiones realmente complejos, en menos de 3 minutos era un desa-
fío enorme. Desafío que, en ocasiones, me ha llevado a pensar que quizá
solo se podría hacer sacrificando la precisión y la calidad filosófica en
el altar de la divulgación y el mantenimiento de la atención. No estoy
seguro de si semejante inmolación valía la pena. La labor de síntesis era
muy exigente, pero cuanto más cortos eran los vídeos mayor número de
personas los veían. Con el paso del tiempo, hemos visto que algunos de
estos vídeos han logrado tener 30.000 visitas, pero eso no es nada con
otros vídeos de contenido mucho más superficial y vacuo que tienen
millones de visitas. Quizá es que el ambiente en el que jugaba Filosoqué
no era el más adecuado para el proyecto y eso que el diseño de los con-
tenidos está hecho de manera que sean muy claros, muy divulgativos y
supusieran un golpe de aire fresco en las asignaturas de filosofía.
El proyecto ahí sigue, colgado en las redes, a disposición de cualquier
persona interesada. Se ha creado una pequeña comunidad de personas
en Filosoqué que siempre pueden resultar como fulcro para impulsar de
nuevo el proyecto en el futuro.
2.4 La web del Aula de Debate de la Universidad de Córdoba, mientras
estuvo activa entre los años 2012 y 2021, tenía una cantidad ingente de
materiales vinculados al pensamiento crítico y el debate académico. La-
mentablemente, la liquidación del Aula de Debate por parte de la Uni-
versidad de Córdoba no permite ya echar una ojeada a semejantes con-
tenidos que tenían, entre otros, una lista de las falacias más comunes
que había sido visitada por más de un millón de personas de acuerdo
con los datos de la web (www.uco.es/auladebate). Ahí había ejercicios
de pensamiento crítico, debates académicos grabados, conferencias,
charlas, reglamentos, consejos prácticos, discusiones, foros de debate y
un larguísimo etcétera. Ese material habrá que recuperarlo y tratar de
subirlo de alguna manera para que lo puedan utilizar y disfrutar todas
las personas interesadas. La cantidad ingente de trabajo que ese pro-
yecto de la web del Aula de Debate supuso no se puede sacrificar de
esa manera.
‒ ‒
3. CONCLUSIONES
‒ ‒
recae en el estudiante. Las dificultades de contacto con el profesor son
obvias. El participante puede enviar un correo electrónico al ponente, o
puede escribir en el foro que suele estar habilitado para ello, pero como
el cara a cara no hay nada. La enorme cantidad de posibilidades que
abre el intercambio personal no tiene parangón, a día de hoy, con las
herramientas que ofrecen los cursos y contenidos en línea.
Por otra parte, no obstante, estos modelos de innovación docente tam-
bién ofrecen una serie de potencialidades que, no por obvias son menos
valiosas. Por ejemplo, con escasísimos recursos económicos consegui-
mos crear una serie de materiales en los cuatro proyectos de innovación
aquí presentados que siguen estando disponibles para toda persona in-
teresada. Una vez hecho el trabajo inicial, con el desembolso que sea
necesario (nosotros solo tuvimos que pagar el dominio de Filosoqué, el
resto de proyectos fueron completamente elaborados gratis et amore),
el contenido puede estar a disposición de cualquiera indefinidamente.
Ahora bien, estas páginas aquí presentadas no estarían completas ni se-
rían justas si no las concluyéramos con la que es la cuestión más grave
que se trata aquí. No temo incluirla en el apartado de conclusiones por-
que el lector agudo habrá comprobado que la problemática atraviesa
todas las iniciativas llevadas a cabo de las que hemos hablado aquí.
¿Dónde quedará la universidad si vamos sustituyendo, paulatinamente,
la presencialidad por la virtualidad? ¿Dónde quedará el papel del do-
cente? ¿Qué ocurrirá con una generación de estudiantes que haya care-
cido del contacto directo con su profesor? La idea de mantener la inno-
vación como un elemento perenne en el quehacer cotidiano de la do-
cencia es, en sí misma, un error. No solo por lo que apuntamos al inicio
de estas páginas, a saber, que la innovación es la enemiga del perfec-
cionamiento, sino también porque la innovación por la innovación no
trae nada, no deja de ser una cuestión huera, carente de sentido si no se
va reconduciendo oportunamente y llevándola allá donde realmente
puede tener un efecto (y un afecto) positivo. El exceso de virtualidad,
de contenidos en línea, puede provocar que los profesores mismos po-
damos terminar siendo redundantes. Si se puede grabar el contenido
que hay que transmitir en una asignatura universitaria, y este contenido
no es cambiante, como puede ocurrir con muchos de los contenidos
‒ ‒
vinculados a las humanidades (filosofía, literatura, historia, etc.), en-
tonces conque alguien lo grabe una vez, ya puede quedar disponible per
saecula saeculorum y el profesor mismo será, como hemos dicho antes,
prescindible.
Así, resulta más que conveniente romper una lanza por el contacto per-
sonal entre el profesor y el alumno, que es, para mí, la auténtica esencia
de la educación. A través de ese contacto uno ve la forma de actuar de
la persona, ve cómo reacciona ante una pregunta o ante una respuesta,
se fomenta la empatía. Con la empatía ocurre que es una herramienta
formidable para los tiempos que corren. Decía Terry Eagleton, pensa-
dor anglosajón, que “la maldad es la ausencia total de empatía” (Eagle-
ton, 2010: 19). Podemos discrepar de su definición por la escasa preci-
sión que supone, pero si decidimos utilizarla, nos damos cuenta de que
el fomento de la empatía será, entonces, la primera manera de combatir
la maldad. De ahí que el contacto personal en el ámbito docente sea tan
importante, porque ayuda a comprender que detrás de la máscara de
profesor o de estudiante hay una persona, una persona como tú y como
yo, con las mismas cuitas, problemas y preocupaciones. ¿Cómo voy yo,
por tanto, a perjudicar a un ser con el que comparto tantas cosas?
Así las cosas, debo confesar que mi conclusión de estos años de pro-
yectos e iniciativas de innovación docente es positiva. Hemos logrado
llegar a audiencias que, de habernos quedado circunscritos al aula uni-
versitaria tradicional, jamás habríamos alcanzado. La cantidad de tra-
bajo que ha habido que realizar para poner en marcha estos proyectos
ha sido ingente. A cambio de este trabajo, el aprendizaje ha sido monu-
mental, pues estas tareas han tenido la virtud de ponernos en contacto
con mundos diversos a los que estábamos habituados y, en este caso, ha
sido positivo. En mi opinión, la pugna que hemos señalado casi desde
el comienzo entre innovación y perfeccionamiento debe resolverse con
sentido común y este indica que el proceso debería ser así: primero se
innova hasta dar con la herramienta adecuada. Una vez encontrada esta,
se trata de perfeccionarla trabajando sobre ella, insistiendo hasta alcan-
zar lo mejor de ella. Esto tiene que ser así porque de lo contrario esta-
ríamos cayendo en el error del que ya nos avisaba Séneca: “ningún
viento sopla a favor si no sabes a dónde vas”.
‒ ‒
. REFERENCIAS
‒ ‒
CAPÍTULO 65
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
1393/2007). Sin embargo, con el paso del tiempo se ha identificado la
existencia de ciertas carencias en el alumnado que les impedían afrontar
el TFG con solvencia (Colás et al. 2016; Ordeñana, 2018). Estas caren-
cias coinciden, en parte, con las competencias clave señaladas por la
Organización Internacional del Trabajo (OIT) para la reactivación del
mercado laboral con posterioridad a la crisis del COVID-19. Además
de carencias propias del desconocimiento del proceso investigador.
Teniendo en cuenta estos precedentes, se decidió redactar un Proyecto
de innovación docente de aplicación en el curso 20/21, orientado a di-
señar y evaluar las necesidades formativas complementarias de los
alumnos universitarios en la Facultad de Turismo y Comercio de la Uni-
versidad Complutense de Madrid.
A continuación, se expondrán las motivaciones teóricas que llevaron a
desarrollar dicho proyecto, las metodologías utilizadas para analizar las
necesidades formativas del alumnado, el diseño de los cursos de forma-
ción y la evaluación de la satisfacción del alumnado con los cursos. Por
último, se redactan una serie de conclusiones y propuestas de mejora
basadas en los resultados obtenidos.
‒ ‒
alumno pueda demostrar que ha adquirido las competencias estipuladas
para el Grado en cuestión (Holgado, 2016) y que es capaz de aprender
de forma activa y autónoma (Ordeñana, 2018).
Desde la implantación del TFG y TFM algunos trabajos han estudiado
las carencias que tienen los alumnos a la hora de enfrentarse a este pro-
yecto. En este sentido, algunos trabajos hacen referencia a la importan-
cia de innovar en las tareas de tutorización de los directores de TFG
para orientar al alumno y que no se sienta solo en dicho proceso (Gómez
et al., 2018). Otros, en cambio, ponen de manifiesto la necesidad de que
los alumnos reciban una formación especifica en investigación para re-
forzar sus competencias investigadoras (Colás et al. 2016). Del mismo
modo, aunque con especial hincapié en el área de derecho, Ordeñana
(2018) afirma que el TFG y las competencias necesarias para hacerlo
deben estar presentes en las asignaturas de la carrera de tal modo que
el TFG no se perciba como algo ajeno a dichas materias.
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
La metodología que se propone para analizar el objetivo anteriormente
propuesto se sirve de técnicas cualitativas y cuantitativas y se estructura
en 3 fases.
En una primera fase se ha realizado un diagnóstico prospectivo de las
necesidades formativas del alumnado, a través de 16 de entrevistas es-
tructuradas dirigidas a los profesores y directores de TFG del grado en
turismo.
Posteriormente, en una segunda fase, se han diseñado e impartido los
cursos de formación orientados a cubrir las necesidades antes detecta-
das.
En la tercera fase, se han realizado encuestas de satisfacción a los asis-
tentes en los talleres, lo que nos ha permitido determinar la adaptación
de los complementos formativos a las necesidades del alumnado, así
como posibles acciones de mejora.
3.1. MUESTRA
‒ ‒
TABLA 1. Muestra de las entrevistas estructuradas
Muestra
Femenino 68,8%
Género Masculino 25,0%
Otro 6,3%
25 a 34 años 6,3%
35 a 44 años 56,3%
Edad
45 a 54 años 12,5%
55 a 65 años 25,0%
Asociado 43,8%
Ayudante doctor 18,8%
Categoría
Contratado doctor 12,5%
Titular 25,0%
Ambos 25,0%
Perfil
Coordinador/a de TFG/TFM 18,8%
docente
Director TFG/TFM 56,3%
Número de años dirigiendo TFG Media de años 4,69
Experien-
cia
Número de años dirigiendo TFM Media de años 5,81
N=16
Fuente: elaboración propia
Muestra
Taller sistemas de cita- Taller edición de Taller escri-
ción docs. tura
Asistentes 25 23 26
Muestra N=13 N=12 N=15
%Participación 52,00% 52,17% 57,69%
%Estudiantes Grado 100% 100% 100%
%Estudiantes 4º Grado 100% 100% 100%
‒ ‒
4. RESULTADOS
Además, a las preguntas abiertas acerca de cuáles eran las carencias que
más detectaban a nivel de máster, se detectaron varios conceptos que se
repitieron con asiduidad y que quedan reflejadas en la tabla 4. No obs-
tante, dichas carencias se relacionaron más con el nivel de grado que
con el de máster. Una gran mayoría aludió a la existencia de carencias
generalizadas en cuanto a la capacidad de estructurar el discurso y la
utilización del lenguaje técnico. Asimismo, muchos indicaron la exis-
tencia de carencias en cuanto al dominio de los sistemas de citación,
una carencia que además está asociada a la falta del manejo de fuentes
de información. Por otro lado, aunque en menor medida destacaron la
falta de conocimientos sobre investigación o edición de documentos.
‒ ‒
TABLA 4. CARENCIAS DETECTADAS A NIVEL DE GRADO Y MÁSTER
‒ ‒
Más concretamente, se ha hecho hincapié en las siguientes competen-
cias:
Que los estudiantes…
así como los fundamentos más relevantes sobre los que se sustentan.
‒ ‒
TABLA 5. Objetivos, competencias y resultados de aprendizaje de los talleres diseñados
‒ ‒
(Fernández et al., 2012). Esta metodología implica un cambio en el rol
del profesor que pasa a convertirse en un orientador y dinamizador del
proceso de aprendizaje de los estudiantes. Por otro lado, el estudiante
adquiere un papel más activo pasando de ser un receptor de información
a construir su propio conocimiento a través de un proceso de aprendi-
zaje más autónomo (Delgado, 2005).
Además, teniendo en cuenta las circunstancias actuales donde el e-lear-
ning ha tomado un protagonismo especial durante la crisis del COVID-
19 ya que ha constituido la única forma de dar soporte tanto a los estu-
diantes como a los profesores. La impartición del learning by doing via
e-learning ha demostrado incrementar el proceso de aprendizaje al me-
nos en un 20% (Leyer y Wang, 2024), ya que esta metodología es la
más apropiada para captar la atención del alumnado y fijar los concep-
tos fundamentales. En este sentido, cabe señalar que algunos estudios
(Van Dam, 2004) han destacado la importancia de la metodología “lear-
ning by doing” para aumentar la capacidad de retención en procesos de
aprendizaje.
‒ ‒
TABLA6. Principales resultados de las encuestas de satisfacción
Conteni-
Profundi- Nivel
dos
dad de Duración Contenidos Utilidad del de sa-
frente a
los conte- adecuada claros curso tisfac-
expecta-
nidos ción
tivas
4,23 4,15 4,62 4,31 4,46 4,46
Taller siste-
mas de ci- DT 0,83 1,07 0,65 0,85 0,88 0,66
tación Máx 5 5 5 5 5 5
N=13
Min 3 2 3 3 2 3
4,42 4,17 4,42 4,83 4,50 4,67
Taller edi-
ción de DT 1,00 1,03 1,08 0,39 0,90 0,65
docs. Máx 5 5 5 5 5 5
N=12
Min 2 2 2 4 3 3
4,27 4,00 4,07 4,67 4,40 4,40
Taller escri- DT 1,16 0,93 1,03 0,62 0,99 0,63
tura
N=15 Máx 5 5 5 5 5 5
Min 1 3 2 3 2 3
4,30 4,10 4,35 4,60 4,45 4,50
Global DT 0,99 0,98 0,95 0,67 0,90 0,64
N=40 Máx 5 5 5 5 5 5
Min 1 2 2 3 2 3
5. DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES
‒ ‒
El taller de edición fue impartido íntegramente por antiguos alumnos,
el hecho de que éste sea el mejor valorado nos lleva a plantearnos que
la proximidad de edad entre ponentes y estudiantes mejora el nivel de
satisfacción. Este hecho que puede tener interesantes repercusiones
tanto a nivel teórico como empírico y pueden proponerse futuros estu-
dios que investiguen el efecto de esta diferencia de edad en la motiva-
ción de los estudiantes.
Por otra parte, se encuentras interesantes complementariedades entre
los miembros del equipo. En un primer término podemos contemplar
que la iniciativa del proyecto parte del PDI, ya que los estudiantes no
suelen estar familiarizados con este tipo de proyectos. Sin embargo, los
alumnos que han participado en el proyecto se han beneficiado ya que
ha mejorado su currículo. Han sido los alumnos los que han difundido
los talleres, y nos planteamos que quizá el éxito de la convocatoria se
deba en parte a la cercanía y adecuación del mensaje.
Así como el taller de edición lo impartieron los antiguos alumnos, sin
embargo, el taller de citación se llevó a cabo por PAS de la Biblioteca
y PDI. Estos conocimientos de índole más especializado necesaria-
mente debían de partir de personas con la formación necesaria. En el
taller de edición fue la experiencia práctica de los alumni y su conoci-
miento de las necesidades que estos demandan lo que ayudó a adecuar
el contenido y la forma de explicarlo a las necesidades del alumnado
Es decir, se han producido complementariedades que han influido po-
sitivamente en la puesta en marcha del proyecto, difusión y realización
de este.
El taller de iniciación a la investigación no se ha llevado a cabo con-
forme a lo previsto. Lo más cercano fue la integración de los contenidos
de este taller en mi asignatura del Máster en Planificación y Gestión de
Destinos Turísticos,
En futuros proyectos se deberá prestar especial atención a la participa-
ción de los alumnos en las encuestas de satisfacción y tal vez establecer
ciertos incentivos. Uno de los más efectivos puede ser condicionar la
emisión de un certificado de asistencia a la participación de dicha en-
cuesta. Por otra parte, pretendemos introducir indicadores que nos
‒ ‒
ayuden a reforzar la formación de complementariedades y medir el
efecto de la distancia en la edad.
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8. REFERENCIAS
Colás, Mª. P., González, T., Reyes, S., Villaciervos, P., Conde, J. (2016).
Necesidades de formación investigadora del alumnado universitario pra
la realización de los TFG. En Chocrón Giráldez, A. Mª. (coord..)
Calidad, docencia universitaria y encuestas: "Bolonia a coste cero".
Congreso sobre Calidad de la Docencia Universitaria y Encuestas (3.
2016. Sevilla). pp. 229-234
Delgado, A. M. (2005). Competencias y diseño de la evaluación continua y final
en el espacio europeo de educación superior. Madrid: Dirección General
de Universidades.
Ely, R.J. (2004), A field study of group diversity, participation in diversity
education programs, and performance. Journal of Organizational
Behaviour, 25, 755-780. https://doi.org/10.1002/job.268
Fernández, A., Porcel-Gálvez, A. Mª., Nuviala, A., Pérez, R., Tamayo, J. A.,
Grao, A., González, J. J. (2012) Estudio comparativo entre una
metodología de aprendizaje tradicional respecto a una metodología de
aprendizaje basada en el “learning by doing” para la consecución de
competencias específicas. Revista Upo Innova, Vol. I, 159-166
Gómez Parra, M. E., Serrano Rodríguez, R., Amor Almedina, M. I., & Huertas
Abril, C. A. (2018). Los trabajos de fin de grado (TFG) como innovación
en el EEES. Una propuesta de tarea colaborativa basada en la tutoría
piramidal. Educar, 54(2), 369. doi:10.5565/rev/educar.829
Holgado, J. (2016) El Trabajo de Fin de Grado: una oportunidad para la
investigación universitaria. En Chocrón Giráldez, A. Mª. (coord..)
Calidad, docencia universitaria y encuestas: "Bolonia a coste cero".
Congreso sobre Calidad de la Docencia Universitaria y Encuestas (3.
2016. Sevilla). pp. 235-240
‒ ‒
Ingellis, A. G., & Picazo Lahiguera, C. (2016). Análisis de un modelo de
tutorización de TFG en el Espacio Europeo de Educación Superior: una
aplicación en el Grado de Relaciones Laborales y Recursos Humanos.
Lan Harremanak. Revista de Relaciones Laborales, (32), 527–552.
doi:10.1387/lan-harremanak.15445
Leyer, M., Moormann, J., & Wang, M. (2014, July). Is learning-by-doing via E-
learning helpful to gain generic process knowledge? In 2014 IEEE 14th
International Conference on Advanced Learning Technologies (pp. 711-
713). IEEE.
Martín-Duque, C., Gómez-Bruna, D., Plumed-Lasarte, M., … Fernández-Muñoz,
J. J. (2017). Análisis de la formación en turismo en España: perspectiva
del sector público y privado desde una aproximación cualitativa. Revista
Lusófona de Educação, (38), 163–180. doi:10.24140/issn.1645-
7250.rle38.11
Ordeñana Gezuraga, I. (2018). Una experiencia de coordinación dirigida a
trabajar las competencias necesarias para superar con éxito el Trabajo de
Fin de Grado en Derecho. Libro de Actas IN-RED 2018: IV Congreso
Nacional de Innovación Educativa y Docencia En Red.
doi:10.4995/inred2018.2018.8555
OECD (2020) Key messages: responding to the impact of coronavirus (COVID-
19) on the tourism economy (https://www.oecd.org/coronavirus/policy-
responses/tourism-policy-responses-to-the-coronavirus-covid-19-
6466aa20/)
Schank, R. C. (2002). Designing World-Class E-Learning: How IBM, GE,
Harvard Business School and Columbia University Are Succeding at e-
Learning. USA: McGraw-Hill.
UNESCO (2020) COVID-19 y educación superior: de los efectos inmediatos al
día después. Análisis de impactos, respuestas políticas y
recomendaciones. Covid-19 respuesta.
UNWTO (2020a). Report: Travel Restrictions 3rd, World Tourism Organization.
https://www.unwto.org/covid-19-travel-restrictions
UNWTO. (2020b). UNWTO Global Tourism Dashboard, World Tourism
Organization. https://www.unwto.org/covid-19-resources.
Van Dam, N. (2004). The e-Learning Fieldbook. USA: McGraw-Hill.
‒ ‒
CAPÍTULO 66
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
quebradero de cabeza para los tutores, que se enfrentan a estudiantes
sin experiencia previa investigadora.
Por otro lado, el Real Decreto 99/2011 de 28 de enero, por el que se
regulan las enseñanzas oficiales de doctorado, define a esta fase educa-
tiva como el tercer ciclo de estudios universitarios oficiales, conducente
a la adquisición de las competencias y habilidades relacionadas con la
investigación científica de calidad, limitados a una duración máxima de
cuatro años. En esta etapa, los investigadores en formación deben pre-
sentar anualmente ante un tribunal los resultados actualizados de su
proyecto. Entre los retos de este ciclo algunas universidades exigen que
el alumno presente de manera adicional una publicación asociada a su
tesis, en una revista que ocupe una posición relevante (Jiménez Ramí-
rez, 2017).
Cuando nos referimos a innovación docente, podemos servirnos de al-
gunos de los indicadores que ofrece el grupo de investigación Interac-
tion and e-Learning (GRIAL) para medir la calidad de una práctica edu-
cativa innovadora (Sein, Lerís, Fidalgo y García, 2013): que mejore la
metodología existente, el impacto en el aprendizaje, la participación de
los alumnos, la adaptabilidad de los recursos a sus necesidades, la me-
jora de la motivación de los alumnos y unos mejores resultados de
aprendizaje.
El marco EEES fomenta un cambio de rol en el docente, que sirva como
guía para el alumno en el proceso de aprender a aprender, fomentando
el aprendizaje continuo (Fernández Cabezas, 2017). Una herramienta
indispensable en este proceso es la colaboración entre docentes (Kri-
chesky y Murillo, 2018) para la planificación de nuevas estrategias edu-
cativas y la detección de problemas para la adquisición de competencias
por parte de los alumnos. La observación del docente, unida a su propia
experiencia en la clase y el intercambio de impresiones con otros com-
pañeros del claustro, se convierte en una herramienta poderosa para la
mejora de la enseñanza y la aplicación de metodologías innovadoras.
Dentro de este camino hacia la innovación, algunos autores sugieren el
acercamiento a “aprendizajes significativos” mediante la aplicación de
métodos activos de aprendizaje como los seminarios prácticos donde se
‒ ‒
enseñe al alumno a “aprender a aprender” (Vadillo, Marta y Cabrera,
2010).
En este sentido, el aprendizaje cooperativo, dentro de esas metodolo-
gías activas, además de ser una herramienta para establecer relaciones
positivas entre los alumnos, resulta un motor para elevar el rendimiento
general de la clase (Johnson, Johnson y Holubec, 1999).
Diversos autores han tratado el tema de la interdisciplinariedad, que
tuvo un primer protagonismo a finales del siglo XIX y en los últimos
años, con “la naturaleza cambiante del conocimiento y la complejidad
que tienen los problemas para ser resueltos”, hacen que “aparezcan nue-
vos conceptos como la interdisciplinariedad, multidisciplinariedad y
transdisciplinariedad” (Llano et al, 2016).
El proyecto que se presenta defiende el empleo de seminarios de apren-
dizaje avanzado como formación complementaria en un entorno cola-
borativo e interdisciplinar. Ante la dificultad detectada en los alumnos
para afrontar un proyecto de investigación, como es el TFG, o una tesis
doctoral, se ha querido promover una iniciativa que resulte atractiva,
donde ellos adquieran el principal protagonismo.
Se ha tenido en cuenta la definición de innovación docente por su im-
pacto en el aprendizaje, donde se convierte el proceso de investigación
en una experiencia inmersiva, en el cual tanto profesionales del ámbito
de la comunicación, como los profesores coordinadores del seminario
se convierten en guías del aprendizaje cooperativo e interdisciplinar,
con el objetivo de mejorar la predisposición ante TFG y tesis doctora-
les.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
textos científicos. Finalmente, con el apoyo de los profesores responsa-
bles del proyecto y de los profesionales que asisten a los distintos en-
cuentros, se termina de definir la investigación que llevarán a cabo.
Además, se proponen una serie de objetivos secundarios con respecto
al proyecto. El trabajo colaborativo es un proceso en el que un individuo
aprende más de lo que aprendería por sí solo, fruto de la interacción de
los integrantes de un equipo, quienes saben diferenciar y contrastar sus
puntos de vista, de tal manera, que llegan a generar un proceso de cons-
trucción de conocimiento (Guitert y Jiménez, 2000). Por tanto, un ob-
jetivo sería la creación de encuentros y colaboraciones entre alumnos
de distintas disciplinas (últimos años de grado y primeros de docto-
rado).
Otro objetivo sería establecer sinergias entre el mundo académico y el
profesional, lo cual permite un enriquecimiento en ambos campos, y
finalmente resulta positiva la colaboración entre profesores de diferen-
tes disciplinas (en este caso Radio y Televisión), ya que está demos-
trado que la colaboración entre docentes es una condición esencial para
impulsar procesos de innovación y mejora en los centros educativos
(Donmoyer, Yennie-Donmoyer y Galloway, 2012).
Finalmente, el poder realizar sesiones periódicas durante varias sema-
nas permite una mayor conexión y confianza dentro del grupo, así como
la posibilidad de crear debate alrededor de temas de actualidad relacio-
nados con el ámbito de la comunicación. También a través de este pro-
yecto se potencia la publicación en entornos académicos de contenidos
científicos, cumpliendo así dos de los pilares básicos de una universi-
dad, como son la investigación y la docencia.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
destinados a la televisión, a los cuales se les extrae el audio y se añade
a las aplicaciones de pódcasts. A partir de esta temática convergente, se
unieron tres profesores de ambos campos: los profesores Dra. Teresa
Barceló y Dr. Gonzalo Fuentes, del ámbito de la Televisión, y la do-
cente Dra. Sara Ruiz, especializada en el campo de la Radio.
Se llevó a cabo un proceso de investigación cualitativa, debido a que se
adecua al esquema planteado por Enrique Navarro en su libro Funda-
mentos de la investigación y la innovación educativa (2017).
La primera fase fue llevar a cabo un trabajo exploratorio sobre las ra-
dios en España que son emitidas en vídeo y viceversa. A continuación,
se diseñó a través de Google un formulario con veintinueve variables a
analizar (creador del contenido, plataforma de estreno del programa,
plataformas secundarias de distribución y periodicidad entre otras) y se
seleccionaron tres empresas de comunicación: RTVE como empresa
pública, Cadena SER como empresa privada que más apuesta por esta
hibridación y El Terrat por ser una productora que hace hincapié en
desarrollar contenidos que se pueden visionar y también escuchar.
‒ ‒
Posteriormente, se contactó con CEINDO (Escuela Internacional de
Doctorado de la Universidad CEU San Pablo) para contactar con alum-
nos de doctorado cuyas líneas de investigación encajasen con el pro-
yecto. También se hizo una selección de alumnos aventajados de último
año de grado, con especial interés en el ámbito de la comunicación y de
la investigación académica. Se estableció un calendario de reuniones de
trabajo a lo largo de tres meses que se materializó en ocho encuentros
digitales.
‒ ‒
cuestionario de evaluación del seminario, para así conocer las fortalezas
y debilidades del proyecto y mejorarlo de cara a futuras ediciones.
‒ ‒
departamento de Comunicación Audiovisual y Publicidad en el que se
enmarcaba el evento. También hubo contactos con compañeros de asig-
naturas y con CEINDO (Escuela Internacional de Doctorado CEU) ya
que se buscaba el trabajo en equipo entre estudiantes de grado y de doc-
torado en una investigación común. De igual modo, se comunicó al de-
partamento de comunicación interna, CEU Informa, quienes también se
hicieron eco de la actividad. Los alumnos se fueron inscribiendo e in-
corporando al grupo de Teams en el que se desarrollarían los encuen-
tros.
‒ ‒
RTVE, tanto en la gestión de redes sociales como creación y presenta-
ción de contenidos multiplataforma donde se ha encargado del desarro-
llo de programas solo para web vinculados con el Festival de Eurovi-
sión como el magazín ‘Spain Calling’, el concurso musical ‘Eurocas-
ting’ o programas musicales como ‘Amaia, Alfred y amigos’, ‘Spain
Calling Internacional’ o ‘Miki y amigos’. También centra su labor en
el uso de las aplicaciones de retransmisión en directo como Periscope
para hacer programas solo para redes, como la retransmisión del Festi-
val de Eurovisión 2015 y el concurso ‘Buscando a Abba’. En su labor
de dirección ha codirigido el documental El milagro de la música sueca.
Después de dos semanas de trabajo se invitó a los alumnos a que asis-
tieran a las jornadas organizadas por la Fundación COPE y la Facultad
de Humanidades y CC. Comunicación de la Universidad CEU San Pa-
blo ‘Jornada de Innovación Radiofónica: La radio se transforma’. Tam-
bién se aprovechó a realizar un encuentro de seguimiento a los alumnos
para compartir el estado de sus investigaciones, preguntar dudas e in-
formar acerca de las siguientes sesiones.
El segundo encuentro con profesionales se centró en el ámbito acadé-
mico, con la participación del Dr. Luis Miguel Pedrero y del Dr. José
María Legorburu Hortelano. Luis Miguel Pedrero Esteban es catedrá-
tico e Investigador Principal del grupo ‘Innovación en Comunicación y
Medios’ en la Facultad de Comunicación y Artes de la Universidad Ne-
brija (Madrid). Durante 25 años ha desarrollado su labor docente e in-
vestigadora en la Universidad Pontificia de Salamanca. En su faceta
profesional como comunicador ha sido redactor de informativos en la
Cadena SER (Madrid y Zamora), guionista de programas musicales en
Los 40, M80 y Dial; colaborador en COPE Salamanca y Onda Cero
Salamanca; y consultor de Radio Blanca (Kiss FM). Entre sus numero-
sas labores, desde 2015 es presidente de paneles de expertos para la
renovación de la acreditación de títulos oficiales en la Fundación para
el Conocimiento Madri+d.
José María Legorburu Hortelano es doctor, licenciado en Ciencias de la
Información (Periodismo) y Profesor titular de Radio. Está acreditado
por la ACAP (2006) en las figuras de profesor contratado doctor y pro-
fesor de universidad privada. Ha sido decano de la Facultad de
‒ ‒
Humanidades y Ciencias de la Comunicación de la Universidad CEU
San Pablo y, con anterioridad, vicedecano y director del Departamento
de Comunicación Audiovisual y Publicidad. Es autor de multitud de
publicaciones científicas sobre la radio y el pódcast (artículos, capítulos
y libros) y ha dirigido numerosas tesis doctorales. Ha participado y par-
ticipa como investigador en diferentes proyectos del Plan Estatal de
I+D+i y de entidades privadas. Vicepresidente de la Unión Católica de
Informadores y Periodistas de España (UCIP-E), también es miembro
de la SEP, AE-IC, ECREA y APM-FAPE. Ha sido editor (redactor su-
perior) de los Servicios Informativos de Onda Cero y colaborador de la
Cadena COPE.
El tercer encuentro con profesionales tuvo como invitado a Mía Font
de El Terrat. Creador de contenidos, Diseñador y desarrollador web,
community manager. Coordina al equipo de community managers de El
Terrat en sus distintos espacios. Labor que lleva ejerciendo más de 22
años. Pero además es animador en Stop Motion, escritor y productor de
‘Nadie sabe nada’ (Cadena SER) y creador del espacio ‘Te lo tengo
dicho’ (El Terrat).
El último encuentro con profesionales vino a cargo de Nacho Rojo (Ca-
dena SER). Rojo es licenciado en Periodismo por la Universidad Com-
plutense, Máster de Periodismo EL PAÍS – UAM y actualmente trabaja
como director digital de la Cadena SER. En este medio es responsable
de la estrategia en Internet, redes sociales y de todo lo relacionado con
contenidos digitales (artículos, pódcast, streaming de audio y vídeo,
etc.), su distribución y monetización. Anteriormente fue director de
proyectos digitales en Prisa Noticias (El País, AS y Cinco Días). Co-
menzó su carrera de periodista digital también en Prisa (El País, Canal+,
Cinco Días) para después trabajar como redactor jefe o director de me-
dios como Baquía.com, Consumer.es, 20minutos.es y Público.es. Siem-
pre ligado a Internet y los medios, en la última década su desempeño
está centrado en la estrategia digital y la gestión.
Con el fin de que los estudiantes pudieran reflexionar sobre todo lo re-
copilado y hablado con profesionales y académicos, se reservó una se-
mana para el trabajo autónomo.
‒ ‒
Durante las dos últimas sesiones se puso en común los resultados de las
investigaciones por grupos. La pareja de alumnos que se encargaba del
estudio de El Terrat realizó su presentación este primer día. Se propuso
además que se presentaran a modo de ponencia para así servir de simu-
lacro en caso de que quisieran presentarlo en algún congreso. Los pro-
fesores compartieron además algunos de los congresos propuestos y se-
leccionados para presentar sus investigaciones.
En la última sesión se presentaron la Cadena SER y RTVE.es. También
se compartió con los estudiantes la encuesta de satisfacción.
‒ ‒
FIGURA 2. Resultados de la encuesta de satisfacción elaborada al finalizar el seminario
‒ ‒
6. DISCUSIÓN
7. CONCLUSIONES
‒ ‒
responsables. A su vez, sirven de guía para alumnos de último año de
grado, a los cuales puede despertar la curiosidad por la investigación.
El trabajo cooperativo permite la interacción entre los integrantes de los
distintos grupos, y a través del formulario creado por los profesores
pueden seguir una guía que les facilite la labor de investigación reali-
zada.
La presencia de profesionales ante un grupo reducido de alumnos per-
mite un diálogo fluido y debates sobre distintos aspectos de la investi-
gación, que se han trabajado previamente. Además, el profesional tam-
bién se nutre de los conocimientos de los jóvenes universitarios, que en
materias tan actuales pueden ofrecer nuevos puntos de vista originales
y diferenciadores.
La duración del seminario se considera adecuada, porque permite una
mayor confianza, implicación y compromiso entre los participantes, y
facilita una profundización en las competencias adquiridas. Además, la
investigación desarrollada a lo largo de los tres meses va siendo guiada
y dirigida por los profesores responsables, de manera que se sienten
arropados durante todo el proceso.
Los resultados que arroja la encuesta de evaluación posterior indican
que los alumnos se muestran satisfechos con el trabajo realizado, la du-
ración del proyecto y la posibilidad de acercarse a la investigación.
8. REFERENCIAS
Donmoyer, R., Yennie-Donmoyer, J. y Galloway, F. (2012). The search for
connections across principal preparation, principal performance, and
student achievent in an exemplary principal preparation program.
Journal of Research on Leadership Education, 7(1), 5-43.
Fernández Cabezas, M. (2017). Aprendizaje basado en proyectos en el ámbito
universitario: una experiencia de innovación metodológica en educación.
INFAD Revista de Psicología, 1(1), 269-278.
https://doi.org/10.17060/ijodaep.2017.n1.v2.939
Gómez, M.E., Serrano, R., Amor, M.I. y Huertas, C.A. (2018). Los trabajos de fin
de grado (TFG) como innovación en el EEES. Una propuesta de tarea
colaborativa basada en la tutoría piramidal. Educar, 54(2), 369-389.
https://doi.org/10.5565/rev/educar.829
‒ ‒
Guitert, M. y Jiménez, F. (2000). Aprender a colaborar. En Campiglio, A. y Rizzi,
R. Eds. Cooperar en clase: Ideas e instrumentos para trabajar en el aula.
M.C.E.P.
Jiménez Ramírez, M. (2017). Los nuevos estudios de doctorado en España:
avances y retos para su convergencia con Europa. Revista
iberoamericana de educación superior, 8(21), 123-137.
Johnson, D.W., Johnson, R.T. y Holubec, E.J. (1999). El aprendizaje cooperativo
en el aula. Paidós.
Krichesky, G.J. y Murillo, F.J. (2018). La colaboración docente como factor de
aprendizaje y promotor de mejora. Un estudio de casos. Educación XXI,
21(1), 135-156. DOI: 10.5944/educXX1.15080
Llano Arana, L., Gutiérrez Escobar, M., Stable Rodríguez, A., Núñez Martínez,
M.C., Masó Rivero, R.M. y Rojas Rivero, B. (2016). La
interdisciplinariedad: una necesidad contemporánea para favorecer el
proceso de enseñanza aprendizaje. Medisur, 14(3).
Navarro Asencio, E. (2017). Fundamentos de la investigación y la innovación
educativa. UNIR Editorial.
Oxford, R. (1997). Cooperative Learning, Collaborative Learning, and
Interaction: Three Communicative Strands in the Language Classroom.
Modern Language Journal, 81, 443-56.
Real Decreto 1393/2007, de 29 de octubre, por el que se establece la ordenación
de las enseñanzas universitarias oficiales. BOE, 260.
Real Decreto 99/2011, de 28 de enero, por el que se regulan las enseñanzas
oficiales de doctorado. BOE, 35.
Revelo-Sánchez, O, Collazos-Ordoñez, C.A., y Jiménez-Toledo, J.A. (2018). El
trabajo colaborativo como estrategia didáctica para la
enseñanza/aprendizaje de la programación: una revisión sistemática de
literatura. TecnoLógicas, 21(41), 115-134.
Sein-Echaluce, M., Lerís, D., Fidalgo Blanco, A. y García Peñalvo, F.J. (2013).
Knowledge management system for applying educational innovative
experiences. TEEM’13, 405-410.
https://doi.org/10.1145/2536536.2536598
Vadillo, N., Marta, C. y Cabrera, D. (2010). Proceso de adaptación de los
estudios de Comunicación al EEES. El caso de Aragón, una comunidad
pionera. Revista latina de Comunicación Social, 65, 187-203. DOI:
10.4185/RLCS-65-2010-892-187-203.
‒ ‒
CAPÍTULO 67
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
un medio para potenciar un feedback entre profesores y alumnos (Ba-
rrios Espinosa & García Mata, 2008). Por ello, ambos sujetos deben
prepararse para coexistir con la tecnología de forma armoniosa.
La innovación docente en la era de la información esta intrinsecamente
unida al dominio de las TICs (Pérez De La Fuente, 2013). Desde este
prisma, las reflexiones sobre la innovación educativa tecnológica se
centran en considerar que esta supone una transformación significativa
e implica un cambio en la concepción de la enseñanza, que repercute
en la práctica educativa y que tiene una finalidad: la mejora de la cali-
dad del aprendizaje. A este respecto, la innovación no es un fin, sino un
medio para mejorar la calidad y conseguir los objetivos que se proponen
los centros educativos. De este modo, no implica necesariamente una
creación, pero sí un cambio que conlleva mejoras en la calidad de la
enseñanza basadas en una intervención deliberada (De Pablos Pons &
Jiménez Cortés, 2007).
El futurible ya es presente y la nueva etapa de la enseñanza universitaria
es el resultado de la combinación de un contexto sociopolítico, dentro
de la sociedad de la información, con el impacto de los avances tecno-
lógicos sobre las instituciones educativas. Sus características se desgra-
nan en torno a la accesibilidad, la responsabilidad y la eficacia (Carrizo
Aguado & Alonso García, 2019).
Máxime a partir de la pandemia, pues en el presente año como con-
secuencia de la Covid -19 (enero- mayo 2021) se ha convertido en un
servicio formativo obligatorio para el docente y un vehículo principal
para la práctica virtual la utilización de la herramienta Teams para los
estudiantes, sirviendo como oportunidad para implementar como meto-
dología activa la experiencia interesante e innovadora y a su vez real de
la simulación de juicio on line en el primer año del grado en Derecho
en la asignatura de derecho civil donde los estudiantes han podido re-
presentar virtualmente las principales profesiones jurídicas propias de
la actividad forense (abogados demandantes, abogados demandados y,
jueces).
La hipótesis de partida consiste en verificar la relación existente entre
el uso de la herramienta Teams y la adquisición de competencias
‒ ‒
jurídicas por los estudiantes del primer año de Grado de Derecho, para
ello se ha tomado como referencia dos casos prácticos llevando a cabo
su representación mediante simulación en juicio on line en el que su
preparación y presentación se ha realizado de forma síncrona con el
objetivo de completar la última parte práctica de la evaluación continua
donde los alumnos han aplicado los conocimientos previamente adqui-
ridos en la asignatura de Derecho a la práctica jurídica de manera que
se ha ofrecido al estudiante una aproximación al ejercicio profesional,
sin barreras espaciales y con la sincronía propia del mundo real.
Como experiencia práctica el resultado final resulta ampliamente satis-
factoria desde el punto de vista de la adquisición de competencias teó-
ricas y prácticas de los alumnos, y su aplicación desde primer año de
grado permite que los estudiantes se familiaricen desde su comienzo
con la práctica de nuestros juzgados y tribunales.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
estudiante a lo largo de su carrera académica (Monterroso Casado &
Escutia Romero 2011).
La utilización de las TICs en la Universidad, y en particular los sopor-
tes telemáticos diseñados para conectar virtualmente al alumno y al pro-
fesor, optimizan el proceso de aprendizaje en la educación no presencial
(on line). En otras palabras, las TICs modifican el proceso didáctico,
posibilitando el formalismo (el seguimiento de instrucciones derivadas
de secuencias muy definidas y precisas), la interactividad (una relación
activa y constante con la información en condiciones de reciprocidad y
contingencia) o el dinamismo (Badía 2006). Lo que se pretende es con-
seguir un modelo pedagógico que se centre en el propio proceso de
aprendizaje del alumno (González Boticario & Gaudioso Vázquez
2003).
Las TICs se convierten en un instrumento encaminado a fortalecer el
interés de los alumnos por las tareas docentes que pueden experimentar
mejoras a través de estas tecnologías que facilitan su intervención, el
acceso a la información y las relaciones de colaboración. Su inclusión
en el proceso de enseñanza debe promover la creatividad, la expresión
personal y contribuir a la formación de una sociedad civil informada,
participativa, crítica y seria. La Universidad debe ser capaz de integrar
el desarrollo tecnológico para hacer más fácil e inmediata la consecu-
ción de sus objetivos (Carrizo Aguado & Alonso García, 2019).
La implantación de esta metodología en el primer año del grado en De-
recho en la asignatura de derecho civil cumple con los principales ob-
jetivos del EESS, tales como la adquisición por el alumno de compe-
tencias y habilidades, además de conocimientos; la permanente interac-
ción profesor-estudiante; y la evaluación continuada del alumno. En
este sentido, existen diferentes estudios relacionados con la metodolo-
gía docente de la simulación de juicios aplicados a alumnos de Derecho
(Lasheras Herrero & Ocón García, 2013; Cerrato Guri & Giménez
Costa & Marín Consarnau, 2011; González Granada, 2010).
El objetivo de este trabajo es analizar las implicaciones pedagógicas de
la enseñanza on line y, en concreto, demostrar cómo la metodología
activa de simulación de juicio a través de Teams es una técnica de
‒ ‒
innovación docente que permite potenciar el aprendizaje en un entorno
visual dinámico, real y virtual. A su vez, ayuda al grupo de alumnos a
vincularse y romper los miedos de los primeros instantes y trabajar so-
bre todo para fortalecer la colaboración.
Dicha técnica, no solo sirve para aumentar la motivación, sino que, ade-
más:
‒ ‒
Potenciar un aprendizaje en un entorno visual, dinámico, real y virtual.
Adquirir competencias multidisciplinares concretamente en el desarro-
llo de un lenguaje escrito y oral por parte de los estudiantes tanto a nivel
individual como colaborativo.
Ayudar a cada estudiante y equipo a vincularse y romper los miedos de
los primeros instantes y trabajar sobre todo para fortalecer la colabora-
ción.
Involucrar al estudiante en la solución de un conflicto jurídico real.
Motivar al estudiante en la asignatura de derecho civil y búsqueda de
soluciones.
Alcanzar una visión global de las disciplinas jurídicas implicadas.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
3.2. PRESENTACIÓN A LOS ALUMNOS DE DOS CASOS PRÁCTICOS REALES
En este sentido, el docente ha permitido que los alumnos del grupo de-
cidieran con total libertad los tres posibles roles que podían representar
el día de la simulación de juicio on line a través de Teams, (abogado
demandante, abogado demandado y juez), pues entendía que ya existía
una cierta madurez de equipo a través del diálogo en los meses anterio-
res y con ello se conseguiría un aprendizaje más significativo, ya que
deja una huella real en los resultados de aprendizaje de los estudiantes
(Aquino et. al, 2009) y agiliza los procesos de relación y comunicación
entre los docentes (Martínez, 2019). El objetivo del docente es la inter-
vención y cocimiento de los estudiantes de las tres personas principales
indicadas que intervienen en un proceso y cuál es su actividad
‒ ‒
limitándose a los escritos de parte y a la celebración de las vistas (Llopis
Nadal, 2020:7).
‒ ‒
3.6. PLANIFICACIÓN DEL TRABAJO
‒ ‒
para poder redactar su sentencia por escrito para poder finalizar con su
representación oral.
Llegado el día de celebración de juicio por parte del docente se les in-
forma previamente a los alumnos de cada equipo que se va a proceder
a grabar el juicio on line y se les solicita su consentimiento, de manera
tal que en todas las grabaciones de los equipos que han intervenido en
esta actividad ha constado su consentimiento a la grabación del juicio
on line.
‒ ‒
3.8. EVALUACIÓN INDIVIDUAL Y GRUPAL
4. RESULTADOS
‒ ‒
será una actividad que se realizará y se evaluará individualmente cual
es la competencia escrita: la elaboración de los principales escritos de
un procedimiento judicial, tales como demanda, contestación a la de-
manda y sentencia, y por otra parte la competencia oral: el acto del jui-
cio oral simulado on line demuestra que el alumno ha asumido los co-
nocimientos teóricos adquiridos en el aula virtual y en especial: la de-
fensa de las diferentes posturas procesales, el aprendizaje y la interven-
ción de las distintas personas que participan en el juicio.
Un segundo ítem será el resultado de un trabajo colectivo que consistirá
en la exposición de los anteriores escritos procesales mencionados a
partir del caso utilizado para la simulación de juicio y que cada grupo
habrá de presentar y representar el día de la celebración de juicio oral
on line. El hecho de que se involucre al grupo de manera conjunta y a
su vez individual asumiendo cada miembro del equipo el papel de abo-
gado demandante, abogado demandado y juez ha sido clave para con-
seguir otros objetivos tales como facilitar y mejorar la expresión oral
del alumno, su propia escucha, fomentar el pensamiento crítico y la re-
flexividad acerca de los beneficios y las dificultades que comportaba
realizar tal actividad en modalidad digital. Es el profesor quien ha de
decidir el valor que concede a cada uno de estos ítems dentro del por-
centaje destinado a esta actividad en la evaluación continua; a modo de
ejemplo, en el Grado en Derecho el total del 30% destinado a la eva-
luación continua se ha dado un punto sobre 10 a dicha actividad, si bien
tras el resultado tan positivo conseguido con la misma y fruto de la re-
flexión del profesor posterior considera que para el año que viene se le
debe dar mayor puntuación.
La docente considera que la capacidad argumentativa y comunicativa
de los estudiantes de manera individual y colaborativa a la vez mediante
la aplicación a los supuestos prácticos de los conocimientos teóricos
adquiridos ha quedado plenamente cumplida con la actividad de simu-
lación de juicio on line.
En esta línea, existen diversos estudios en los cuales el juicio simulado
es un medio a través del cual “el alumno adquiere el protagonismo de
la actividad … lo que redunda en una mayor calidad-profundidad y du-
ración-del aprendizaje” (Bellido Penedés, 2014) y, por ende, que la
‒ ‒
realización de dicha actividad se llevaba a cabo en alguna sala de vistas
de la Universidad que reprodujera una Sala de Vistas Real: “para inten-
tar conseguir la mayor similitud de la práctica con la realidad de las
vistas orales, y que su realización sea atractiva para el estudiante, es
fundamental disponer en el aulario de la Facultad, de una clase especia-
lizada que reproduzca una sala de vistas de un juzgado real” (Adan Do-
menech & Casanova Martí, 2014). Sin embargo, en el presente caso la
celebración de juicio a través de la herramienta Teams consecuencia de
la Covid 19, para nada desmerece la actuación en una sala de Vistas, es
más, fruto de una reflexión posterior la docente no descarta mantener
su formato on line por entender que los resultados obtenidos mejoran la
calidad de la actividad formativa on line, benefician más a los alumnos
de manera individual y a la vez grupal y les permite adquirir un com-
pleto protagonismo del desarrollo de la actividad hasta su presentación
final que hace viable perfectamente su implementación en esa modali-
dad en cursos futuros.
Finalmente, el reto planteado por la docente ha sido acogido por los
estudiantes con gran satisfacción según los resultados obtenidos, pues
al finalizar las clases se ha realizado una encuesta en la que se ha pre-
guntado al alumnado sobre su grado de satisfacción en dicha actividad,
obteniendo una respuesta muy favorable prácticamente. En ese sentido,
hay que indicar que en la Asignatura de Derecho Civil I, Grupo C y E
había 131 estudiantes matriculados y han participado 46 Grupo C y 36
Grupo E, todos han superado la actividad si bien unos con mejores ca-
lificaciones que otros. En concreto, dos equipos del grupo C (uno de
tres y otro de cuatro) y otros tres equipos del grupo E (tres estudiantes
cada uno) han obtenido la calificación de sobresaliente consecuencia
del extraordinario trabajo realizado desde el inicio de la actividad cuyo
fruto ha quedado perfectamente reflejado en la representación de la si-
mulación del juicio on line y en mi opinión ya desde primer año he
podido observar que van a ser excelentes profesionales del derecho.
‒ ‒
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
7. AGRADECIMIENTOS
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Carrizo Aguado, D. & Alonso García, M.ª N. (2019), métodos de planificación y
práctica docente con herramientas digitales: ¿Desencuentro con el
Reglamento Europeo de protección de datos?, REJIE Nueva época:
Revista Jurídica de Investigación e Innovación Educativa, Núm.19,
enero 2019, pp. 11-23.
Cerrato Guri, E., Giménez Costa, A. & Marin Consarnau, D. (2011), “La
metodología de simulación en una asignatura jurídica: guía de buenas
prácticas”, en El aprendizaje del derecho procesal. Nuevos retos de la
enseñanza universitaria (Dir. PICÓ I JUNOY), Edit. J. M.ª. Bosch,
Barcelona, pp. 349-353.
De Pablos Pons, J. & Jiménez Cortés, R. (2007), “Buenas prácticas con TIC
apoyadas en las Políticas Educativas: claves conceptuales y derivaciones
para la formación en competencias ECTS”, Revista Latinoamericana de
Tecnología Educativa, 2: 20.
González Boticario, J. & Gaudioso Vázquez, E. (2003). Sistemas interactivos de
enseñanza aprendizaje. Madrid: Sanz y Torres.
González Granada, P. y AAVV, (2010) “Acción pedagógica de simulación de
juicios. Metodología docente de derecho procesal en el EEES”, en
REJIE: Revista Jurídica de Investigación e Innovación Educativa,
núm.2, junio 2010, pp. 81-92, http://www.eumed.net/rev/rejie
Hamodi Galán, C. (2013), “El feedback entre profesorado y alumnado como
elemento potente para la regulación de los errores” en López Pastor, V.
M. / Monjas Aguado, R. / Vallés Rapp, C. (Coords.), La Evaluación de
Competencias en Educación Superior. La evaluación formativa y
compartida en enseñanza universitaria.
Lasheras Herrero, P. & Ocón García, J. C. (2013) “Una corta experiencia con
vocación de futuro. Simulación de juicios en la asignatura de Derecho
procesal”, en REDUR, núm. 11, diciembre 2013, pp. 235-237,
http://www.unirioja.es/dptos /dd/redur/numero11/lasheras-ocon.pdf
López Alonso, C. & Seré, A. (2004): Entornos formativos en el ciberespacio: las
plataformas educativas, Español Actual. Revista de español vivo, nº. 82,
pp. 9-20.
Monterroso Casado, E. & Escutia Romero, R. (2011) Enseñanza práctica en 3D:
juicio virtual, Revista d´ innovació educativa, Universitat de Valencia,
pp.46-54.
Palomino Lozano, R. (2007): El campus virtual en la enseñanza del Derecho:
elaboración de dictámenes e informes. III Jornadas Campus Virtual.
Madrid: UCM.
‒ ‒
Pérez De La Fuente, O. (2013), “Una experiencia de innovación docente con
nuevas tecnologías para aplicación del modelo Bolonia desde la
Filosofía del derecho”, Revista de Educación y derecho, 9: versión-on-
line.
Pérez Luño, E. A. (2001), Ensayos de informática jurídica, México: Fontamara.
Llopis Nadal, P. (2020), La simulación de juicios como actividad de innovación
docente del grado en derecho, Anuario da Facultade de Dereito da
Universidade da Coruña Vol. 24, pp. 222-230 ISSNe: 2530-6324 ||
ISSN: 1138-039X DOI: https://doi.org/10.17979/afdudc.2020.24.0.7497.
Zaragoza Martí, M. F. & Zaragoza Martí, A. (2017). Docencia invertida y la
simulación de juicios como nueva metodología del aprendizaje jurídico.
(R. Vila, Ed.) Investigación en docencia universitaria. Diseñando el fu-
turo a partir de la innovación educativa”, pp 754-764. Obtenido de
https://rua.ua.es/dspace/bitstream/10045/71196/1/Investigacion-en-
docencia-universitaria_78.pdf
‒ ‒
CAPÍTULO 68
1. INTRODUCCIÓN
87Sanz Caballero, I. M. (2021, 8 de julio). Experiencias con grupos de innovación docente en la rama
de Ciencias Sociales y Jurídicas. INNTED 2021 II. Congreso Internacional de Innovación y Tenden-
cias Educativas, 15 y 16 de julio. https://innted.org/simposios/s16/
88Por lo que se refiere a la aplicación de metodologías docentes activas en los últimos años en
España, con relación al Derecho romano hasta donde se sabe las mismas han consistido funda-
mentalmente en aplicar las metodologías activas conocidas como “Lección Magistral Participativa”,
“Metodología/Método del Caso” y/o “Aprendizaje por/Basado en Problemas” –a veces estas dos
últimas de manera confusa-. Por lo que respecta a la primera de dichas metodologías, véase Piquer
Marí, J. M. (2021). El profesor, la lección magistral participativa y la docencia online. La adecuación
de la docencia presencial al estado de alarma derivado del Covid-19. Cuadernos Jurídicos. IDIBE,
12-29. En relación a la aplicación de la Metodología del Caso y/o del Aprendizaje por Problemas,
véanse López Güeto, A. (2018). El método del caso aplicado a la enseñanza del derecho romano.
Docencia y Derecho. Revista para la docencia jurídica universitaria, 12, 1-14; Bernad Segarra, L. y
Buigues Oliver, G. (2014). Las nuevas metodologías en la enseñanza del Derecho: una experiencia
práctica en el campo del Derecho romano. REJIE: Revista Jurídica de Investigación e Innovación
Educativa, 9, 89-112; Muñoz Catalán, E. (2014). La hereditatis petitio desde una propuesta
‒ ‒
En los estudios de Derecho siempre han existido asignaturas histórico-
jurídicas por su carácter formativo y propedéutico89 en la medida en que
sirven para conocer, comprender e incluso aplicar el Derecho existente
en la actualidad. Esta realidad no solamente justifica que dichas asig-
naturas existan en dichos estudios desde hace mucho tiempo, sino que
también justifica que existan en el futuro si lo que se pretende es formar
a buenos juristas.
Por lo que respecta al Derecho romano, éste abarca el Derecho que se
promulgó y se aplicó de manera directa durante como mínimo veintitrés
siglos de historia, sin contar con todos los siglos posteriores en los que
metodológica activa. REDU. Revista de Docencia Universitaria, número extraordinario, 12 (3), 319-
333; Muñoz Catalán, E. (2013). EEES, competencias y aprendizaje del Derecho romano mediante
el método del caso (II): prisionero de guerra. REJIE: Revista Jurídica de Investigación e Innovación
Educativa, 7, 63-74; Muñoz Catalán, E. (2013). Metodologías activas para el aprendizaje del Dere-
cho romano basado en problemas: herencia, dote y régimen económico del matrimonio romano.
REJIE: Revista Jurídica de Investigación e Innovación Educativa, 8, 85-98; Ortuño Pérez. M. E.
(2011). La enseñanza del Derecho Romano a través de problemas. Revista de Educación y Dere-
cho, 4, 1-18; Bravo Bosch, M. J. (2008). Las nuevas metodologías docentes en relación con el De-
recho romano. Universitat d’estiu, Girona, 1-19.
En relación a la innovación educativa en la enseñanza del Derecho romano en los ámbitos cronoló-
gico y geográfico indicados, se ha empezado a aplicar una o más de una de las metodologías es-
pecificadas anteriormente a través de lo que se conoce como la “gamificación”; Zaera García, A. B.
y Polo Martín, R. (2020). Feedback: interacción en el aprendizaje a través de la gamificación. La
docencia del Derecho en línea: cuando la innovación se convierte en necesidad. Huygens, 129-136;
López-Rendo, C., Azaustre, M. J. y Rodríguez, E. M. (2019). Instrumentos de innovación docente
en la enseñanza-aprendizaje del Derecho romano. Revista internacional de Derecho romano, 23,
454-491. Lo mismo se puede decir respecto al uso de dichas metodologías pero a través del cine,
de documentales o incluso de series de televisión; Casinos Mora, F. J. (2020). “Derecho Romano
en acción”: Cine y Derecho Romano. La innovación educativa en Derecho: nuevos métodos para
una sociedad en transformación. Tirant lo Blanch, 57-70; Casinos Mora, F. J. (2019). Uso de pelí-
culas de cine y de series de televisión en la exposición teórica y práctica de la asignatura de Derecho
Romano. VII Jornades d’Innovació Docent en l’Educació Superior. Libro de Actas, 11-22.
Por lo que respecta a la aplicación de estas metodologías para la enseñanza de la Historia del
Derecho en los ámbitos cronológico y geográfico especificados, hasta donde se sabe se ha empe-
zado a aplicar el uso de una o más de una de las metodologías indicadas a través de la gamificación
y a través de los MOOC (Massive Online Open Courses), esto es, cursos en línea y de acceso
abierto –en el sentido de gratuito- que están configurados para permitir una presencia masiva de
“asistentes”. En lo concerniente a la gamificación para esta área de conocimiento, véase Zaera
García, A. B. y Polo Martín, R. (2020). Feedback: interacción en el aprendizaje a través de la gami-
ficación. La docencia del Derecho en línea: cuando la innovación se convierte en necesidad.
Huygens, 129-136. Por lo que se refiere a los MOOC, véase Pérez Juan, J. A. y Moreno Tejada, S.
(2016). Cursos MOOC en Historia del Derecho: una nueva forma de entender la enseñanza univer-
sitaria. Docencia del Derecho y TIC: innovación y experiencias metodológicas. Huygens, 201-217.
89En este caso, en el sentido de tener dichas asignaturas carácter preparatorio para acabar convir-
‒ ‒
influyó en el Derecho que se iba promulgando sobre todo en muchos
países occidentales –aunque no exclusivamente-. Además de esto, el
Derecho romano es la base sobre todo del Derecho privado de esos paí-
ses, incluso en la actualidad, por lo que esta disciplina permite conocer
y demuestra el origen más o menos remoto de numerosas instituciones
jurídicas existentes en la actualidad.
En cuanto a la Historia del Derecho, el ámbito cronológico que abarca
esta área de conocimiento va desde la propia existencia de las socieda-
des –y por ello desde la propia existencia del Derecho-90, su estudio
trata sobre toda institución jurídica existente a lo largo de la historia, y
esta disciplina –al igual que el Derecho romano- permite conocer y de-
muestra el origen más o menos remoto de numerosas instituciones jurí-
dicas existentes en la actualidad.
Por lo que respecta a las situaciones problemáticas existentes en la di-
dáctica de estas asignaturas, estas asignaturas siguen caracterizándose
por tener mucho temario, por tener un temario muy denso, por ser asig-
naturas enseñadas generalmente de manera muy teórica y por ser asig-
naturas poco motivadoras para la mayoría de los alumnos.
En relación a la problemática inherente a estas asignaturas, lo primero
que debe afirmarse es que, en la Universidad de Valencia, todas estas
asignaturas se imparten durante un solo cuatrimestre excepto Historia
del Derecho, que tiene carácter anual. Por lo general, la mayor parte del
horario de clase asignado a estas asignaturas se dedica a impartir lec-
ciones magistrales sobre su temario, hecho que impide –o que como
mínimo dificulta mucho- que haya interacción entre el profesor y los
alumnos, por lo que los alumnos tienen un papel (predominantemente)
pasivo en el proceso de enseñanza y aprendizaje de la teoría de estas
asignaturas. La forzosa impartición de casi todas estas asignaturas en
un solo cuatrimestre, la gran cantidad de temario existente y la densidad
del mismo implica que a los profesores les resulte imposible tratar todo
el temario existente en el horario de clase, sobre todo si optan por
90Entendiendo por “sociedad” una pluralidad de personas que conviven en un territorio, justificando
esto siempre un cierto grado de organización a través de normas independientemente de la natura-
leza y del grado de desarrollo de esas reglas.
‒ ‒
impartir lecciones magistrales sobre el temario, por lo que en este caso
los profesores deben elegir entre explicar con detalle solamente una
parte del temario o explicar más temario que en el caso anterior pero
sin entrar en detalles, explicándolo de manera general o incluso super-
ficial. Esto supone que el profesor necesariamente deba renunciar a ex-
plicar partes del temario interesantes o incluso importantes –aunque
menos interesantes o importantes que las que se decide explicar en el
horario de clase-. Por su parte, al tener los alumnos que estudiarse por
su cuenta el temario no tratado en clase esto les supone dificultades y
un importante esfuerzo adicional para poder prepararse conveniente-
mente de cara al examen y de cara a las pruebas de evaluación continua,
y dicha preparación suele hacerse de manera escasa o incluso defi-
ciente. Esta falta de tratamiento de parte del temario en dicho horario,
y la normalmente escasa o mala preparación del temario no tratado en
clase por parte de los alumnos, trae por consecuencia que los estudian-
tes no solamente tengan dificultades para sacar muy buenas notas en
estas asignaturas, sino que también implica que suelan tener lagunas a
la hora de prepararse asignaturas que estudian en cursos posteriores,
puesto que el contenido de éstas está estrechamente relacionado con el
de las disciplinas histórico-jurídicas; ese es el caso sobre todo del De-
recho civil respecto al Derecho romano, y, por lo que respecta a la His-
toria del Derecho, por su propia naturaleza el temario estudiado en esta
asignatura está estrechamente relacionado con prácticamente todas las
asignaturas de los Grados y Dobles Grados en los que se estudia Dere-
cho.
En otro orden de cosas, por las fechas de creación y de aplicación di-
recta del Derecho estudiado en dichas disciplinas la mayoría de los
alumnos no le ven utilidad a esas asignaturas, y ello es así a pesar de
que la regulación de una parte importante de las instituciones jurídicas
españolas actuales toma por base o incluso llega a ser traslación directa
del Derecho que se aprobó en el pasado. Esta opinión de muchos de los
alumnos suele redundar en el poco interés que tienen por conocer el
temario de estas asignaturas con la profundidad que sería deseable, esto
provoca que no suelan intentar retener los conocimientos adquiridos en
estas asignaturas, y en última instancia todo lo anteriormente dicho
‒ ‒
justifica que a muchos alumnos se les olvide rápidamente una realidad
consustancial al Derecho para su correcto conocimiento y análisis: la
importancia decisiva de la Historia en el Derecho sobre todo en su crea-
ción, pero también en su conservación o pervivencia.
Por último, al tratarse de asignaturas enseñadas de manera muy teórica
y por la poca utilidad que le ven los alumnos, a la mayoría de los estu-
diantes les motiva poco cursar estas disciplinas, y dentro del aula esto
se traduce sobre todo en que participan en clase mucho menos de lo que
sería deseable –cuando pueden participar, cosa que apenas puede ocu-
rrir en el horario en el que se imparten lecciones magistrales-. Además,
normalmente la valoración de la adquisición de competencias por parte
de los alumnos y la evolución de su adquisición se hace a través de
mecanismos no demasiado precisos para valorar dicha adquisición (es-
casas y breves participaciones en clase y por parte de pocos alumnos) o
con pocos mecanismos, muy comunes y que puede que no sean todo lo
precisos que sería deseable para conocer la verdadera adquisición de
competencias y la evolución de su adquisición (fundamentalmente la
resolución por escrito de pocos y breves comentarios de texto o casos
prácticos de distinta naturaleza). Teniendo en cuenta la importancia de
la valoración de la adquisición de competencias en el marco del Plan
Bolonia –sobre todo para la evaluación continua-, con esa participación
en clase generalmente tan baja y con ese tipo de mecanismos valorar de
manera rigurosa y objetiva dichas competencias y la evolución de su
adquisición resulta muy difícil.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
‒ El tratamiento por parte del profesor de todos los apartados
del temario existente y así evitar todos los inconvenientes e
incluso problemas relativos al rendimiento que le suponen a
los alumnos tanto para estas asignaturas como para otras que
deben estudiar posteriormente en los estudios de Derecho.
3. METODOLOGÍA
91Para conocer el origen, la definición, las características, la finalidad y los objetivos de las metodo-
logías activas docentes –o metodologías para el aprendizaje activo o incluso metodología participa-
tiva-, así como ejemplos de este tipo de metodologías, véanse Palma, E. E. y Elgueta, M. F.(2019).
Aprendizaje y didáctica del Derecho. De la clase magistral formativa y las metodologías activas.
Tirant lo Blanch, 117 y ss.; Luelmo del Castillo, M. J. (2018). Origen y desarrollo de las metodologías
activas dentro del sistema educativo español. Encuentro, 27, 4-21; Benito, Á. y Cruz, A. (coords.)
(2011). Nuevas claves para la Docencia Universitaria en el Espacio Europeo de Educación Superior
‒ ‒
asignaturas –concretamente aplicando metodologías tanto de origen re-
ciente como de origen antiguo, como se va a tener ocasión de ver-.
La primera de las acciones aplicadas para alcanzar esos objetivos
usando la metodología especificada anteriormente se aplicó durante
cuatro cursos, y todavía no se ha podido aplicar en la Universidad de
Valencia por falta de acceso al Servicio Audiovisual correspondiente.
Esta acción consistió en crear vídeos con contenido escrito y verbal de
una duración máxima de veinte minutos cada uno sobre el temario exis-
tente en los apartados que no daba tiempo a que se tratasen en el horario
de clase. Dichos materiales docentes se grababan a principios de curso
o como tarde al comienzo del cuatrimestre en el que se impartía la asig-
natura en cuestión, se grababan por el Servicio Audiovisual aplicando
las últimas tecnologías en materia de grabación y edición de contenido
audiovisual, una vez se había grabado y editado su contenido se subía
a YouTube con acceso limitado, y su contenido se ponía a disposición
de los alumnos de manera inmediata gracias como mínimo a la publi-
cación del enlace correspondiente a través del aula virtual de la asigna-
tura en cuestión. Por su propia naturaleza, este contenido era accesible
para todos los alumnos independientemente de la modalidad de docen-
cia que recibieran (presencial, a distancia o semipresencial). A lo largo
de los cursos en los que se pudo aplicar esta acción, en cada asignatura
se crearon entre cinco y diez vídeos con una duración de entre diez y
veinte minutos cada uno, y tanto el número de vídeos realizados como
su extensión dependió sobre todo del temario a impartir en cada asig-
natura y del calendario académico existente en cada uno de esos cursos
en la medida en que, por el número de clases presenciales que podían
darse en cada curso según dicho calendario, se podía planificar en cuán-
tas clases se podían tratar los apartados del temario, tratando el resto
del temario a través de dichos vídeos92.
(3.ª ed.). Narcea, 15-18 y 21-22; Vargas Vasserot, C. (2011). Metodologías activas en la enseñanza
del Derecho: prueba, ensayo y percepción por parte de los alumnos, 44-86; López Noguero, F.
(2005). Metodología participativa en la Enseñanza Universitaria. Narcea, 51, 53-57 y 93-95 y 100-
102.
92Una acción parecida a ésta –aunque siempre realizando Power Points y no solamente por profe-
sores, sino también por estudiantes- es la que han llevado a cabo durante el curso 2020-2021 unos
profesores de Derecho de la Universidad de Valencia con la realización de Power Points locutados;
‒ ‒
Con esta forma de proceder, el impacto esperado –y por ello los resul-
tados esperados- era el siguiente:
‒ Tratar por parte del profesor todos los apartados del temario
existente en las asignaturas que forman parte de dichas áreas
de conocimiento para transmitir los conocimientos necesarios
sobre dichas asignaturas.
‒ ‒
suficientemente amplia como para poder tratar con su respuesta varias
instituciones o incluso varios apartados del temario. Antes del co-
mienzo de la clase en cuestión –incluso a veces desde el principio del
curso-, los alumnos tienen acceso a los materiales docentes en los que
encontrar la respuesta correcta a esas preguntas (apuntes, manuales,
normativa, etcétera) para que puedan leerlos y/o estudiarlos con antela-
ción. Tras las respuestas de los alumnos, el profesor repregunta, corrige
lo afirmado por esos alumnos, compendia verbalmente lo contestado
correctamente por los alumnos y/o amplía lo contestado por los alum-
nos en cada pregunta con tal de que todos los alumnos conozcan la res-
puesta (más) correcta a esa pregunta. Lo mismo se hace en las clases
prácticas, pero con relación al contenido teórico ya tratado puesto que
en este caso se trata de afianzar o saber aplicar a la práctica la teoría ya
conocida, y partiendo de supuestos o fragmentos de textos con pregun-
tas a contestar sobre los mismos. Tanto para las clases teóricas como
para las clases prácticas, cada vez que un alumno participa de manera
constructiva para responder a estas preguntas se apunta su participación
para tenerla en cuenta a la hora de valorar su adquisición de conoci-
mientos y competencias y así redondear la nota al alza. Por la propia
naturaleza de esta acción y la forma de llevarla a cabo, gracias a la pla-
taforma de la que disponen tanto la universidad en la que empezó a
aplicarse esta acción como la Universidad de Valencia (Blackboard Co-
llaborate y todas las herramientas correspondientes) esta acción era ac-
cesible para todos los alumnos independientemente de la modalidad de
docencia que recibieran (presencial, a distancia, semipresencial o hí-
brida).
Con esta forma de proceder, el impacto esperado –y por ello los resul-
tados esperados- era el siguiente:
‒ Aumentar considerablemente tanto el número de alumnos que
participan en clase como el número de veces que participan.
‒ ‒
‒ Introducir un tipo de prueba que le permita a los propios alum-
nos participar activamente en la generación, obtención y apli-
cación de conocimientos en estas ramas del Derecho.
4. RESULTADOS
93Como ya se ha podido advertir, la metodología docente más utilizada para estas asignaturas con-
siste en que se transmita la teoría de estas materias a través de la impartición de lecciones magis-
trales y en que en la parte práctica se haga uso de pocos mecanismos, muy comunes y que puede
‒ ‒
tanto el número de alumnos que participaron en clase como el número
de veces que participaron fue considerablemente mayor que con el sis-
tema docente más común.
Con esta forma de proceder diariamente en las clases, se aprecia en pri-
mera persona la efectiva y constante adquisición de conocimientos y
competencias de todos y cada uno de los alumnos que participan.
Asimismo, con esta acción sobre todo los alumnos que participaban –
aunque no exclusivamente esos alumnos- podían comprobar diaria-
mente el grado de adquisición de conocimientos, y todos los cursos así
lo hacen saber expresamente algunos de los alumnos.
Se confirma que a través de esta forma de proceder existía una gran
interacción e interrelación entre el profesor y los alumnos, teniendo és-
tos un papel (mucho más) activo que el habitual en el proceso de ense-
ñanza y aprendizaje para generar, obtener y aplicar los conocimientos
de estas ramas del Derecho.
Sin embargo, se ha podido apreciar que sigue habiendo un número con-
siderable de alumnos que sigue sin participar en clase o que no partici-
pan lo suficiente. Además de esto, se ha podido observar una menor
interrelación entre los alumnos de la que sería deseable en el sentido de
que no muchos alumnos se rebatían entre sí en clase, y menos aún si el
profesor no incentivaba esa interacción.
En general, en tres cursos que se lleva aplicando esta acción, cada vez
que el profesor le ha consultado a los alumnos si prefieren esta forma
de proceder a la de las lecciones magistrales, todos los alumnos que
contestan afirman que prefieren mucho más este sistema
5. DISCUSIÓN
que no sean todo lo precisos que sería deseable para conocer la verdadera adquisición de compe-
tencias y la evolución de su adquisición (fundamentalmente la resolución por escrito de pocos y
breves comentarios de texto o casos prácticos de distinta naturaleza).
‒ ‒
metodologías activas en la enseñanza del Derecho romano y de la His-
toria del Derecho94, y ante la escasez de estudios dedicados a ahondar
en los antecedentes de las metodologías activas de origen reciente y en
el vínculo existente entre esas metodologías y las de origen antiguo, las
siguientes líneas solamente se van a dedicar a contribuir a la discusión
sobre el objeto recién indicado.
Una de las metodologías activas de origen reciente es la que se conoce
con el nombre de Aprendizaje por Problemas o Aprendizaje Basado en
Problemas.
Dicha metodología está basada en mayor o menor medida en el Cons-
tructivismo95 y consiste en reflexionar acerca de determinados
94Por lo que respecta a la enseñanza del Derecho en Occidente, la evolución de la organización que
fue adoptando dicha enseñanza, la forma de impartirla, las características académicas y/o profesio-
nales de sus enseñantes y el enfoque que se le fue dando a la enseñanza y aprendizaje del Derecho
en Occidente, véanse a modo de ejemplo Salazar Revuelta, M. (2020). De la enseñanza superior a
la enseñanza del Derecho en el marco de la sociedad romana (s. III a. C. – s. VI d. C.). REJIE.
Nueva época, 22, 21-26 y 29; Bernad Segarra, L. y Buigues Oliver, G. (2014). Las nuevas metodo-
logías en la enseñanza del Derecho: una experiencia práctica en el campo del Derecho romano.
REJIE: Revista Jurídica de Investigación e Innovación Educativa, 9, 97; Muñoz Catalán, E. (2013).
EEES, competencias y aprendizaje del Derecho romano mediante el método del caso (II): prisionero
de guerra. REJIE: Revista Jurídica de Investigación e Innovación Educativa, 7, 64; Toller, F. M.
(2005), Orígenes históricos de la educación jurídica con el método del caso. Anuario da Facultade
de Dereito da Universidade da Coruña, 9, 926-928 y 930-933; Vallet de Goytisolo, J. B. (1998). La
enseñanza del Derecho en el Altomedievo y su repercusión en el siguiente amanecer. Anuario da
Facultade de Dereito da Universidade da Coruña, 2, 605-619; Marrou, H.-I. (1985). Historia de la
educación en la antigüedad (trad. Yago Barja de Quiroga). Akal, 252-253, 282, 313, 335 y 372-373;
Bowen, J. (1976). Historia de la educación occidental. Tomo primero. El mundo antiguo. Oriente
Próximo y Mediterráneo. 2000 a. C. - 1054 a. C. (trad. Juan Estruch) Herder, 35 y 37-40. En cuanto
al mismo objeto pero respecto a la enseñanza del Derecho en España, véanse a modo de ejemplo
Peset Reig, M. (1969). Universidades y enseñanza del Derecho durante las regencias de Isabel II
(1833-1843). Anuario de Historia del Derecho Español, 39, 481-544; Peset Reig, M. (1968). La en-
señanza del Derecho y la legislación sobre universidades, durante el reinado de Fernando VII (1808-
1833). Anuario de Historia del Derecho Español, 38, 229-375; Gibert, R. (1967). Enseñanza del
derecho en Hispania durante los siglos VI a XI. Ius Romanum Medii Aevi auspice collegio antiqui
iuris studiis provehendis, Société d'histoire des droit de l'antiquité, Pars I, 5 b cc, Mediolani, Typis
Giuffrê.
95Bernad Segarra, L. y Buigues Oliver, G. (2014). Las nuevas metodologías en la enseñanza del
Derecho: una experiencia práctica en el campo del Derecho romano. REJIE: Revista Jurídica de
Investigación e Innovación Educativa, 9, 93 nota al pie número 7. Según estos autores, el Construc-
tivismo es base en mayor o menor medida de las más interesantes metodologías activas (concreta-
mente cinco: el Aprendizaje Servicio, el Aprendizaje por Proyectos, el Aprendizaje Cooperativo, la
Metodología del Caso y el Aprendizaje por Problemas) en el ámbito de la didáctica de las Ciencias
Sociales, permitiendo incrementar la implicación del estudiante en la adquisición de conocimientos
y competencias tal y como de manera especial se especifica en el Proyecto Tuning.
‒ ‒
conceptos a partir de un supuesto, combinando el trabajo individual y
el trabajo en grupo de los alumnos, y pudiendo analizarse la solución
dada y confrontarse con otras posibles soluciones96. En dicho método
no se trabaja sobre casos reales, por lo que no se reflexiona sobre solu-
ciones o conceptos ya tratados o desarrollados por las instituciones
competentes para pronunciarse sobre casos reales, sino que se trabaja
sobre supuestos ficticios creados por el profesor97. Además, en princi-
pio esta metodología debe aplicarse antes de que al discente se le haya
enseñado toda la teoría aplicable a ese problema98.
Si se tiene en cuenta lo anteriormente dicho sobre esta metodología y
sobre la forma de proceder que se ha observado en la didáctica de las
ramas del conocimiento indicadas, se puede apreciar que este método
se ha aplicado en dicha didáctica, concretamente en la parte práctica de
estas ramas del conocimiento.
Además de esta metodología, hay dos métodos docentes activos que se
conocen con los nombres de mayéutica (dentro del método socrático) y
Se puede afirmar que el constructivismo es una teoría del aprendizaje que se propone responsabi-
lizar al alumno de su propio aprendizaje a través de la experiencia, práctica o acciones sobre la
realidad u objeto de conocimiento. Por lo tanto, esta teoría le otorga al alumno un papel activo en el
aprendizaje, y de esta forma el alumno aprende a aprender; por eso para esta teoría el conocimiento
se construye y no se descubre. Para profundizar sobre el conocimiento del constructivismo, véase
a modo de ejemplo Coll, C., Martín, E., Mauri, T., Miras, M., Onrubia, J., Solé, I. y Zabala, A. (2001).El
constructivismo en el aula (12.ª ed.). Graó.
96Bernad Segarra, L. y Buigues Oliver, G. (2014). Las nuevas metodologías en la enseñanza del
Derecho: una experiencia práctica en el campo del Derecho romano. REJIE: Revista Jurídica de
Investigación e Innovación Educativa, 9, 97. Con relación al origen de esta metodología –además
de en relación a su definición, características y otras cuestiones-, véase Vargas Vasserot, C. (2011).
Metodologías activas en la enseñanza del Derecho: prueba, ensayo y percepción por parte de los
alumnos, 81-83 –entre otras-.
97Bernad Segarra, L. y Buigues Oliver, G. (2014). Las nuevas metodologías en la enseñanza del
Derecho: una experiencia práctica en el campo del Derecho romano. REJIE: Revista Jurídica de
Investigación e Innovación Educativa, 9, 97-99. En este sentido, Toller afirma que el Aprendizaje
por Problemas surgió “procurando ampliar así la creatividad del alumno y el abordaje participativo de
cuestiones de dogmática jurídica, como contrapartida a la sola discusión de soluciones ya dadas por
los tribunales”; Toller, F. M. (2005), Orígenes históricos de la educación jurídica con el método del
caso. Anuario da Facultade de Dereito da Universidade da Coruña, 9, 932-933.
98Aranda Jurado, M. del M. (2021). ¿Necesidad u oportunidad? Metodologías docentes innovadoras
‒ ‒
disputatio o método del debate (dentro de las quaestiones disputatae)
cuyo origen se remonta a la Antigüedad y a la Edad Media, respectiva-
mente.
El método socrático surge en la Antigua Grecia y consiste en enseñar a
través de la formulación de preguntas y contrapreguntas –en principio
realizadas por parte del enseñante- con cuyas respuestas se pretende
hacer encontrar la verdad o la respuesta más correcta y completa, en el
sentido de encontrar la verdad o la respuesta más correcta y completa
sin que otra persona –en principio el enseñante- la diga de entrada o
expresamente99. En definitiva, con este método se pretende construir
conocimiento activando el pensamiento –y en última instancia provo-
cando el pensamiento crítico- de quien tiene la duda o quiere saber la
verdad a través de preguntas y contrapreguntas y las respuestas a éstas
incitándole con dichas preguntas y respuestas a razonar, argumentar,
analizar, discernir y valorar100, acciones que desarrollan una o más com-
petencias íntimamente vinculadas con el pensamiento crítico y que se
encuentran en zonas medias de los dominios cognitivos101.
Por su parte, la mayéutica es la parte del método socrático en la que se
guía para conocer por “alumbramiento” la verdad o la respuesta más
correcta y completa a través de las respuestas a preguntas y contrapre-
guntas, y ello tras hacerle ver o confirmarle a la otra parte que ignoraba
la verdad o la respuesta más correcta y completa102. En palabras de
99En relación a la definición del método socrático y a su relación con la dialéctica, además de las
características del método especificado, véase a modo de ejemplo Toller, F. M. (2005), Orígenes
históricos de la educación jurídica con el método del caso. Anuario da Facultade de Dereito da
Universidade da Coruña, 9, 931-932.
100Letelier utiliza otros verbos relativos a las acciones que debe llevar a cabo quien tiene la duda o
quiere saber la verdad tras haberse activado el pensamiento crítico, y siendo esas acciones “mani-
festaciones concretas de estadios evolutivos del pensamiento -en la tradicional taxonomía del Bloom
se desarrollan desde la fase del conocimiento hasta la de evaluación-“. Dichos verbos son los si-
guientes: “identificar, comprender, clasificar, sintetizar, comparar, aplicar y evaluar (reglas y princi-
pios jurídicos)”; Letelier Loyola, E. (2017). Hacia el rescate del método socrático en el aprendizaje
actual del derecho procesal. Opinión Jurídica, 16 (31), 132. Sobre la importancia que Nussbaum le
atribuye al método socrático para la educación de las personas, véase la misma publicación en la
página 127.
101Letelier Loyola, E. (2017). Hacia el rescate del método socrático en el aprendizaje actual del de-
aplicación y su coexistencia junto con la lección magistral, véase a modo de ejemplo Toller, F. M.
‒ ‒
Platón en un fragmento de Teeteto, la mayéutica tiene las mismas ca-
racterísticas que el oficio de las parteras, si bien se diferencian en que
en aquél se examinan las almas y no los cuerpos. Señala como lo más
grande de su arte la capacidad que tiene de poner a prueba con seguri-
dad si lo que engendra el pensamiento del joven es algo imaginario y
falso o fecundo y verdadero103.
Si se tiene en cuenta lo anteriormente dicho sobre esta metodología y
sobre la forma de proceder que se ha observado en la didáctica del De-
recho romano y de la Historia del Derecho, se puede apreciar que este
método se ha aplicado en dicha didáctica, tanto en las clases dedicadas
a la parte teórica como en las dedicadas a la parte práctica de estas ra-
mas del conocimiento.
Por lo que respecta a la disputatio (o método del debate), ésta tiene su
origen en una quaestio y es una de las partes de las que consta toda
quaestio disputata. Según Corso de Estrada (como se indica en Toller,
(2005), Orígenes históricos de la educación jurídica con el método del caso. Anuario da Facultade
de Dereito da Universidade da Coruña, 9, 931-932. En relación con la aportación de Sócrates a la
educación y al saber a través de esta metodología especialmente frente a la utilizada por los sofistas
–además de con relación a la aplicación de la mayéutica y su coexistencia junto con la lección
magistral-, véase Obarrio Moreno, J. A. y Piquer Marí, J. M. (2015). Repensar la Universidad. Re-
flexión histórica de un problema actual. Dykinson, 46-50 y 72 –entre otras-. En relación con la apli-
cación de la mayéutica –o de una metodología activa parecida- y su coexistencia junto con la lección
magistral, véanse Salazar Revuelta, M. (2020). De la enseñanza superior a la enseñanza del Dere-
cho en el marco de la sociedad romana (s. III a. C. – s. VI d. C.). REJIE. Nueva época, 22, 11-37;
Marrou, H.-I. (1985). Historia de la educación en la antigüedad (trad. Yago Barja de Quiroga). Akal,
373.
Hasta donde se ha podido averiguar, no se puede asegurar que existieran estudios en Derecho ni
en Mesopotamia ni en el Antiguo Egipto, y con más motivo tampoco se puede afirmar con seguridad
qué metodología se utilizaba para enseñarlo, y ello a pesar de que al menos en el Antiguo Egipto
existían los “abogados profesionales (…), si no ya juriconsultos, (no están atestiguados hasta la
época romana): son oficialmente reconocidos por la ley, la cual delimita su competencia (excluyén-
dolos, por ejemplo, de los tribunales fiscales) y se les asigna un impuesto especial, el “impuesto de
los abogados””; Marrou, H.-I. (1985). Historia de la educación en la antigüedad (trad. Yago Barja de
Quiroga). Akal, 252-253; Bowen, J. (1976). Historia de la educación occidental. Tomo primero. El
mundo antiguo. Oriente Próximo y Mediterráneo. 2000 a. C. - 1054 a. C. (trad. Juan Estruch). Herder,
21-74. En consecuencia, si se tiene en cuenta en qué consiste la mayéutica –y por extensión el
método socrático- y el momento de su aparición y aplicación, se puede afirmar que es muy probable
que este método fuese la primera metodología docente activa que se utilizó en Occidente para la
enseñanza del Derecho.
103Bernad Segarra, L. y Buigues Oliver, G. (2014). Las nuevas metodologías en la enseñanza del
Derecho: una experiencia práctica en el campo del Derecho romano. REJIE: Revista Jurídica de
Investigación e Innovación Educativa, 9, 97-98.
‒ ‒
2005), en el ámbito educativo los contendientes de la disputatio podían
ser alumnos o profesores. En el primer caso, dos alumnos debatían en
justa dialéctica sobre una cuestión previamente fijada bajo la mirada de
uno o varios profesores. Tras una o varias exposiciones, un profesor
compendiaba los distintos argumentos a favor y en contra basados en
razonamientos y en la acogida de numerosos autores profanos y religio-
sos de toda la herencia cultural conocida, los atendía, sopesaba la solu-
ción y la daba. En el segundo caso, los profesores debatían entre sí en
presencia de la Facultad en pleno, pudiendo intervenir también los ba-
chilleres y los alumnos, y, al día siguiente, otro profesor unificaba ló-
gicamente las razones aducidas, aportaba las autoridades que avalaban
lo que sostendría, exponía su propia doctrina –determinatio magistra-
lis- y, finalmente, contestaba una a una las razones contrarias104.
Teniendo en cuenta lo anteriormente dicho sobre esta metodología y
sobre la forma de proceder que se ha observado en la didáctica de las
ramas del conocimiento especificadas, se puede apreciar que este mé-
todo se ha aplicado en dicha didáctica, tanto en las clases dedicadas a
la parte teórica como en las dedicadas a la parte práctica de estas ramas
del conocimiento –aunque se haya afirmado que esta interacción entre
alumnos se ha dado en menor medida de lo que se desearía-
La principal diferencia entre la mayéutica y la disputatio reside tanto
en la forma de proceder por los participantes en estas metodologías
como en la naturaleza de las partes intervinientes en ese análisis. En el
primer caso, mientras que en la mayéutica necesariamente debían for-
mularse preguntas y contestar a las mismas para llegar a conocer la res-
puesta, en la disputatio las intervenciones de los contendientes no ne-
cesariamente debían ser respuestas a preguntas previas, sino que podían
104Toller,F. M. (2005), Orígenes históricos de la educación jurídica con el método del caso. Anuario
da Facultade de Dereito da Universidade da Coruña, 9, 928-929, 933-934 y 939. Para conocer el
origen y la razón de la decadencia de este método didáctico –además de su coexistencia junto con
la lección en este período, prevaleciendo el uso de metodologías activas hasta finales de la Edad
Moderna-, véanse la fuente y las páginas recién indicadas. Sobre el origen de la disputatio, la razón
de su origen, su relación con el método dialéctico, su coexistencia con las lecciones y la forma de
desarrollar y aplicar esta metodología, véase Obarrio Moreno, J. A. y Piquer Marí, J. M. (2015).
Repensar la Universidad. Reflexión histórica de un problema actual. Dykinson, 78, 80-81, 109 y 111-
112.
‒ ‒
ser argumentos dados a iniciativa propia independientemente de que
dichos argumentos pretendieran rebatir afirmaciones hechas por el otro
participante o no. Por lo que respecta a la naturaleza de las partes inter-
vinientes en ese análisis, mientras que en la mayéutica los participantes
son en principio el enseñante y el/los discente/s, y por ello uno de los
intervinientes goza de mayores conocimientos que el otro y en principio
conoce o puede llegar a conocer la respuesta más completa, en la dispu-
tatio los contendientes a priori tenían el mismo nivel de conocimientos
–o uno muy similar-, participando necesariamente en la disputatio un
tercero imparcial con amplios conocimientos académicos para posicio-
narse según lo argumentado por los contendientes y según las razones
conocidas por él mismo.
En cualquier caso, tanto la mayéutica como la disputatio vienen a con-
sistir en una búsqueda activa de la respuesta o solución más correcta y
completa a un caso, un problema o una duda por parte de quien quiere
conocer esa respuesta o solución, confrontando las posibles respuestas
o soluciones hasta descubrir la respuesta o solución más correcta y com-
pleta. Si además de lo recién indicado se tiene en cuenta cuándo nacie-
ron estos dos métodos, y se añade que la Escolástica influyó en gran
medida en el origen y la generalización de la disputatio105, que la Esco-
lástica basó su doctrina en la filosofía grecolatina106 y que la mayéutica
tiene su origen en dicha filosofía, se puede apreciar el estrecho vínculo
existente entre la mayéutica y la disputatio107 y se puede afirmar que es
muy probable que la mayéutica influyera de manera directa o indirecta
en la existencia y características de la disputatio.
Tanto Bernad y Buigues (2014) como Toller (2005) indican que entre
la metodología del Aprendizaje por Problemas y el Método del Caso
hay importantes similitudes, hasta el punto de afirmar Toller que el
por Corso de Estrada y por Toller; Toller, F. M. (2005), Orígenes históricos de la educación jurídica
con el método del caso. Anuario da Facultade de Dereito da Universidade da Coruña, 9, 932-933.
‒ ‒
surgimiento de aquélla se dio en Estados Unidos por derivación de di-
cho método en Derecho108. Por otra parte, Gómez López-Egea (como
se indica en Toller, 2005) afirma que el Método del Caso guarda estre-
chas similitudes con el método socrático, y, en este sentido, Toller
afirma que “es generalmente aceptado” que el método de Sócrates es la
base y fundamento del Método del Caso109.
Al igual que en la disputatio –y en cierta medida al igual que en la ma-
yéutica-, en el Aprendizaje por Problemas los conocimientos para co-
nocer la respuesta al supuesto planteado se buscan activamente y se re-
flexiona sobre los mismos por parte de quien quiere conocer esa res-
puesta, máxime si esta metodología reciente se aplica antes de que al
discente se le haya enseñado toda la teoría aplicable a ese supuesto.
Además de esto, como en el Aprendizaje por Problemas se puede ana-
lizar la solución dada y confrontarla con otras posibles soluciones –cosa
que se ha podido apreciar que se hace-, y ya se ha indicado que tanto la
mayéutica como la disputatio implican confrontar las posibles respues-
tas o soluciones hasta descubrir la respuesta o solución más correcta y
completa, se puede afirmar que al aplicar el método del Aprendizaje
por Problemas también se están aplicando la mayéutica y la disputatio,
se puede apreciar el estrecho vínculo existente entre la mayéutica, la
disputatio y el Aprendizaje por Problemas, y por ello también se puede
indicar que es muy probable que el método del Aprendizaje por Proble-
mas se haya visto influido de manera directa o indirecta en su existencia
y características no solamente por la mayéutica o el método socrático
en general, sino también por el método de la disputatio, siendo estas
dos metodologías claros antecedentes del método del Aprendizaje por
Problemas.
108Bernad Segarra, L. y Buigues Oliver, G. (2014). Las nuevas metodologías en la enseñanza del
Derecho: una experiencia práctica en el campo del Derecho romano. REJIE: Revista Jurídica de
Investigación e Innovación Educativa, 9, 97-99; Toller, F. M. (2005), Orígenes históricos de la edu-
cación jurídica con el método del caso. Anuario da Facultade de Dereito da Universidade da Coruña,
9, 932-933.
109Toller, F. M. (2005), Orígenes históricos de la educación jurídica con el método del caso. Anuario
‒ ‒
6. CONCLUSIONES
Con relación al objetivo consistente en tratar por parte del profesor to-
dos los apartados del temario existente, con la acción llevada a cabo al
respecto dicho objetivo se ha alcanzado en la medida en que en general
dicha acción ha resultado ser adecuada para producir el impacto espe-
rado. Debido al éxito de esta acción, ojalá que la misma se pueda llevar
a cabo lo antes posible en mi actual universidad sobre todo para facili-
tarle a los alumnos la comprensión y el estudio de esos conocimientos
del temario, haciéndolos más accesibles y didácticos, y sirviendo para
que los alumnos se familiaricen con las nuevas tecnologías y afiancen
su uso en el ámbito educativo. Respecto a este éxito con relación al
impacto causado sobre los alumnos, como hasta la fecha dicho éxito no
se ha conocido con datos objetivos y contrastables a través de mecanis-
mos realizados por escrito –especialmente encuestas realizadas a los
alumnos, aunque no exclusivamente-, sino que se ha conocido a través
de las afirmaciones hechas verbalmente en clase por parte de los alum-
nos, se pretende crear y distribuir este tipo de mecanismos cuanto antes
para su realización de forma anónima y así darle más rigor a las afirma-
ciones relativas al alcanzamiento de este objetivo. En cualquier caso, se
puede apreciar que el uso de las nuevas tecnologías para la didáctica de
las disciplinas histórico-jurídicas no solamente es posible, sino que es
muy recomendable para la transmisión de conocimientos por parte del
profesor.
Por lo que respecta al objetivo tendente a incrementar lo máximo posi-
ble la participación en clase de los alumnos tanto en número de alumnos
como en tiempo de participación de cada alumno, con la aplicación de
la mayéutica, la disputatio y el Aprendizaje por Problemas dicho obje-
tivo se ha alcanzado en la medida en que en general dichas metodolo-
gías han resultado ser muy útiles para motivar a muchos más alumnos
a participar y a participar muchas más veces, por lo que esta forma de
proceder ha resultado ser adecuada para producir el impacto esperado.
Sin embargo, sigue habiendo bastantes alumnos que no participan o que
participan menos de lo que sería deseable, y no es frecuente que los
alumnos se rebatan entre sí. Por lo que respecta al primero de los pro-
blemas recién indicados, como parece ser que lo que se conoce con el
‒ ‒
nombre de “gamificación” ofrece grandes posibilidades en ese ámbito,
esto justifica que se pretende profundizar cuanto antes en el conoci-
miento y uso de la gamificación para la didáctica de las disciplinas his-
tórico-jurídicas por si durante las clases existiese la posibilidad de uti-
lizar algún juego en el que todos los alumnos participasen y cuyas res-
puestas a las preguntas hechas pudieran ser conocidas por el profesor a
la hora de valorar la adquisición de competencias por parte de los alum-
nos y la evolución de su adquisición. Por lo que se refiere al segundo
de los problemas apuntados, con tal de fomentar que más alumnos
aprendan a rebatirse entre sí y que lo hagan de manera argumentada y
lógica se pretende dedicar horario de clase exclusivamente a realizar
sesiones en las que, partiendo de un tema indicado de antemano que
esté estrechamente relacionado con el temario, los alumnos debatan en-
tre sí sobre el mismo ante la presencia del profesor. Tras una o varias
exposiciones, el profesor compendiaría los argumentos a favor y en
contra aportados por los alumnos, si fuera necesario añadiría otros ar-
gumentos, sopesaría la solución y se la daría a conocer a los alumnos.
Con esta forma de actuar, se pretende dedicar horario de clase sola-
mente a aplicar la metodología de origen medieval denominada dispu-
tatio, y en las demás clases se seguirían aplicando la mayéutica y el
Aprendizaje por Problemas.
Ante la escasez de estudios dedicados a ahondar en los antecedentes de
las metodologías activas de origen reciente y en el vínculo existente
entre esas metodologías y las de origen antiguo, y en la medida en que
desde hace unos años al menos en España está en boga el conocimiento
y la idoneidad de la aplicación de metodologías activas en la enseñanza
superior –entre otras razones no estrictamente académicas-, en el pre-
sente trabajo se quiso contribuir a desarrollar el conocimiento de dichos
antecedentes y vínculo. Tras averiguar el origen y las características de
las metodologías activas aplicadas en la didáctica de las disciplinas
mencionadas, se ha podido apreciar una presencia y un origen muy re-
motos en Occidente de métodos docentes activos, y la existencia y ca-
racterísticas de la metodología activa de origen reciente denominada
Aprendizaje por Problemas se debe en última instancia a la existencia
y características de metodologías antiguas de dicha naturaleza,
‒ ‒
influyendo éstas un notable influjo como base y fundamento para la
existencia y características de aquélla. Esta realidad demuestra una vez
más la influencia –a veces incluso inconsciente- de la historia en la con-
figuración de conceptos, instituciones, etcétera de origen reciente, es-
pecialmente –aunque no exclusivamente- en el ámbito de las Ciencias
Jurídicas, las Ciencias Sociales y las Humanidades, influencia muchas
veces desconocida o incluso desdeñada, y siendo muy beneficiosa para
los alumnos la aplicación en la actualidad de conocimientos de origen
antiguo en aras de alcanzar los objetivos marcados por numerosas ins-
tituciones y normas actuales para la formación de los discentes.
7. REFERENCIAS
‒ ‒
Fortea, M. A. (2019). Metodologías didácticas para la enseñanza/aprendizaje de
competencias. Materiales para la docencia universitaria de la
Universitat Jaume I, 1, 1-27. http://dx.doi.org/10.6035/MDU1
Gibert, R. (1967). Enseñanza del derecho en Hispania durante los siglos VI a XI.
Ius Romanum Medii Aevi auspice collegio antiqui iuris studiis
provehendis, Société d'histoire des droit de l'antiquité, Pars I, 5 b cc,
Mediolani, Typis Giuffrê.
Letelier Loyola, E. (2017). Hacia el rescate del método socrático en el
aprendizaje actual del derecho procesal. Opinión Jurídica, 16 (31), 117-
134.
López Güeto, A. (2018). El método del caso aplicado a la enseñanza del derecho
romano. Docencia y Derecho. Revista para la docencia jurídica
universitaria, 12, 1-14.
López Noguero, F. (2005). Metodología participativa en la Enseñanza
Universitaria. Narcea.
López-Rendo, C., Azaustre, M. J. y Rodríguez, E. M. (2019). Instrumentos de
innovación docente en la enseñanza-aprendizaje del Derecho romano.
Revista internacional de Derecho romano, 23, 454-491.
Luelmo del Castillo, M. J. (2018). Origen y desarrollo de las metodologías activas
dentro del sistema educativo español. Encuentro, 27, 4-21.
Machancoses García, E. (2021). La resiliencia del profesorado universitario ante
la necesidad de docencia virtual y semipresencial: los beneficios de los
Power Point locutados. La adecuación de la docencia presencial al
estado de alarma derivado del Covid-19. Cuadernos Jurídicos. IDIBE,
68-81.
Marrou, H.-I. (1985). Historia de la educación en la antigüedad (trad. Yago
Barja de Quiroga). Akal.
Muñoz Catalán, E. (2013). EEES, competencias y aprendizaje del Derecho
romano mediante el método del caso (II): prisionero de guerra. REJIE:
Revista Jurídica de Investigación e Innovación Educativa, 7, 63-74.
Muñoz Catalán, E. (2014). La hereditatis petitio desde una propuesta
metodológica activa. REDU. Revista de Docencia Universitaria, número
extraordinario, 12 (3), 319-333.
Muñoz Catalán, E. (2013). Metodologías activas para el aprendizaje del Derecho
romano basado en problemas: herencia, dote y régimen económico del
matrimonio romano. REJIE: Revista Jurídica de Investigación e
Innovación Educativa, 8, 85-98.
Obarrio Moreno, J. A. y Piquer Marí, J. M. (2015). Repensar la Universidad.
Reflexión histórica de un problema actual. Dykinson.
‒ ‒
Ortuño Pérez. M. E. (2011). La enseñanza del Derecho Romano a través de
problemas. Revista de Educación y Derecho, 4, 1-18.
Palma, E. E. y Elgueta, M. F. (2019). Aprendizaje y didáctica del Derecho. De la
clase magistral formativa y las metodologías activas. Tirant lo Blanch.
Pérez Juan, J. A. y Moreno Tejada, S. (2016). Cursos MOOC en Historia del
Derecho: una nueva forma de entender la enseñanza universitaria.
Docencia del Derecho y TIC: innovación y experiencias metodológicas.
Huygens, 201-217.
Pérez Juan, J. A. (2014). La enseñanza semipresencial y los recursos
audiovisuales en Historia del Derecho. Uso de las TIC en la docencia del
Derecho: aproximaciones docentes y metodológicas. Huygens, 57-65.
Peset Reig, M. (1968). La enseñanza del Derecho y la legislación sobre
universidades, durante el reinado de Fernando VII (1808-1833). Anuario
de Historia del Derecho Español, 38, 229-375.
Peset Reig, M. (1969). Universidades y enseñanza del Derecho durante las
regencias de Isabel II (1833-1843). Anuario de Historia del Derecho
Español, 39, 481-544.
Piquer Marí, J. M. (2021). El profesor, la lección magistral participativa y la
docencia online. La adecuación de la docencia presencial al estado de
alarma derivado del Covid-19. Cuadernos Jurídicos. IDIBE, 12-29.
Salazar Revuelta, M. (2020). De la enseñanza superior a la enseñanza del
Derecho en el marco de la sociedad romana (s. III a. C. – s. VI d. C.).
REJIE. Nueva época, 22, 11-37.
Sanz Caballero, I. M. (2021, 8 de julio). Experiencias con grupos de innovación
docente en la rama de Ciencias Sociales y Jurídicas. INNTED 2021 II.
Congreso Internacional de Innovación y Tendencias Educativas, 15 y 16
de julio. https://innted.org/simposios/s16/
Toller, F. M. (2005), Orígenes históricos de la educación jurídica con el método
del caso. Anuario da Facultade de Dereito da Universidade da Coruña,
9, 921-941.
Vallet de Goytisolo, J. B. (1998). La enseñanza del Derecho en el Altomedievo y
su repercusión en el siguiente amanecer. Anuario da Facultade de
Dereito da Universidade da Coruña, 2, 605-619.
Vargas Vasserot, C. (2011). Metodologías activas en la enseñanza del Derecho:
prueba, ensayo y percepción por parte de los alumnos.
Zaera García, A. B. y Polo Martín, R. (2020). Feedback: interacción en el
aprendizaje a través de la gamificación. La docencia del Derecho en
línea: cuando la innovación se convierte en necesidad. Huygens, 129-
136.
‒ ‒
CAPÍTULO 69
1. INTRODUCCIÓN.
110Este trabajo se inscribe dentro del ámbito de trabajo del grupo estable de investigación “Econo-
mía circular y sostenibilidad en organizaciones sostenibles” de la Facultad de ciencias Jurídicas y
Empresariales de la Universidad Francisco de Vitoria.
‒ ‒
suceda el encuentro universitario en el que el docente señala el camino,
guía al estudiante al modo que ya se seguía en la paideia griega. Para
que suceda ese encuentro es un requisito indispensable la voluntad y el
entendimiento, es decir, el deseo de saber (quererlo, lo que nos conduce
a la cuestión de la vocación intelectual de profesores y alumnos) y la
capacidad intelectual (intus-legere / inter-legere: leer con profundidad
y leer entre líneas) para profundizar en el saber. Ambas dimensiones, la
volitiva y la intelectual, unidas como virtudes propias del universitario
(ya sea docente o discente). El objeto universitario es por tanto el en-
cuentro, que consiste en que se aprehendan los saberes. El uso del tér-
mino con la “h” intercalada es de suma importancia, más allá de las
reminiscencias clásicas, pues el objetivo de la universidad no es sim-
plemente aprender (que se adquieran conocimientos) sino que los co-
nocimientos se interioricen (se aprehendan).
De esta definición clásica se desprenden los dos conceptos que guían
este trabajo, que son la formación integral y la comunidad de aprendi-
zaje.
‒ ‒
generación de conocimiento. La volitiva es consecuente de la anterior,
pues el trabajo intelectual, siendo riguroso, requiere esfuerzo, trabajo,
método, hábito. La formación de la afectividad también se refleja en
cuanto a la necesidad de canalizar los apetitos y las emociones al obje-
tivo planteado y respecto a la comunidad de la que se forma parte. Y la
formación del ámbito relacional se desprende del hecho de ser miembro
de una comunidad, que tiene sus costumbres, sus normas y sus objetivos
compartidos. Y todo ello no es sólo ad intra, sino que es difusivo: el
conocimiento y la comunidad se ponen al servicio del bien común y se
valoran en tanto en cuanto contribuyen a la mejora del conocimiento y
de las condiciones de vida de las personas (Gómez Calvo, 2016).
Así las cosas, la comunidad de aprendizaje es otro de los pilares uni-
versitarios. No hay formación integral si no hay comunidad. El apren-
dizaje nunca se comprende como un proceso introspectivo, individua-
lista, sino que demanda la presencia de la comunidad, a fortiori. El co-
nocimiento no se alcanza sino en el diálogo; la voluntad, la afectividad
y la relación no se forman sino en el encuentro. Pero hay algo que im-
porta explicitar, y es que, si bien el ámbito universitario pertenece por
igual a profesores y alumnos, no es menos cierto que también importa,
y mucho, la relación intrínseca entre los maestros (con sus iguales) y
entre los estudiantes (con sus iguales).
La formación universitaria, siendo integral, ha de ser absolutamente
respetuosa con la identidad personal, con el modo específico de ser de
cada alumno (Coll & Sánchez, 2008). El docente debe saber enseñar sin
adoctrinar, guiar sin adiestrar, equilibrar sin uniformar. La comunidad
de profesores ha de comprender esto, apostando por una misma forma
de ejercer la docencia. Pero, del mismo modo que respetar la pluralidad
e individualidad del alumnado es un bien, también debe respetarse y
promocionarse la pluralidad de la comunidad de docentes, que será vir-
tuosa en tanto en cuanto respete la libertad de cátedra en torno a objeti-
vos comunes (Freixa et al., 2014).
1.2. EL DESARROLLO DE COMPETENCIAS EN EL MARCO DEL EEES.
‒ ‒
el Espacio Europeo de Educación Superior (EEES), el cual, a fin de
cuentas, es firmado en Bolonia con la representación de todas las uni-
versidades europeas, celebrando y homenajeando lo mejor de la tradi-
ción universitaria.
En lo que se refiere a la relación entre profesores y universitarios, el
denominado Plan Bolonia enfatiza lo siguiente sobre formación integral
y comunidades de aprendizaje:
El profesor universitario antes que un mero transmisor de conoci-
miento, debe ser un facilitador del aprendizaje y del propio desarrollo
de los estudiantes, de manera que el aula se convierta en un espacio
colaborativo (Vidal-Abarca, 2010) entre aprendices (Louis & Marks,
1998; Mercer, 2001; Agejas, 2003; Bielaczyc & Collins, 2000), para el
aprendizaje significativo (Mayer, 2004).
Para promover el aprendizaje significativo entre un número elevado de
alumnos y con un perfil plural, los docentes deben formar parte de co-
munidades de aprendizaje (Huberman, 1989; 2004; Stoll et al., 2006;
Bielaczyc, Kapur y Collins, 2013; Kincheloe, 2009; Wenger et al.,
2010; Krichesky & Murillo, 2011; Wenger, 2011; Mercieca, 2017;
Wenger et al., 2017; McDonald & Cater-Steel, 2018 a, b). que les ofrez-
can ámbitos de formación continua en torno a modelos de formación
del profesorado, ya sean de corte más realista (Korthagen, 2010) o más
innovadores (Corno & Randi, 2000), pero en todo caso con un enfoque
de enseñanza que pone el foco en el discente.
Dicho esto, hay algo que cabe señalar y es que, para que las comunida-
des de aprendizaje alcancen sus metas, es vital que las universidades
sean capaces de generar espacios de trabajo para la reflexión, la puesta
en común de buenas prácticas, la evaluación de la docencia de otros y
la autoevaluación sobre la propia docencia, implementando mejoras en
la labor docente (Bruner, 1999, Vega González, 2016; De Dios Alija,
2018). Se trata, al fin, de un espacio donde tenga lugar un proceso con-
tinuo, reflexivo, colaborativo e inclusivo que se orienta al desarrollo de
aprendizaje (Fulland, 2002).
Desde que en 2010 se implantara el conocido como Plan Bolonia en
España se están tratando de modificar los ámbitos docente,
‒ ‒
investigador, tecnológico y administrativo de la Universidad (Villar
Angulo, 2005). La normativa europea ha supuesto cambios para el pro-
fesor vinculados a esta nueva cultura de aprendizaje (Monereo, C. &
Pozo, J.I., (2003); Pozo, 2016). La transformación más evidente tiene
lugar en el ámbito docente.
Esta transformación se comprueba sobre todo en la manera en que se
produce el proceso de enseñanza-aprendizaje, cada vez más centrado
en el aprendizaje de las personas. Mas que nunca, ahora, en pleno im-
pacto de la pandemia de COVID-19, se está tratando de equilibrar la
enseñanza presencial con la virtual, la manera de evaluar coordinando
para ello la evaluación continua con la formativa y la sumativa, y las
metodologías activas y modos reflexivos de trabajo que ayuden a desa-
rrollar competencias transversales para la empleabilidad, la sostenibili-
dad y la educación del compromiso social con la mirada puesta en el
perfil de egreso.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
de la argumentación, el pensamiento crítico, la síntesis e interrelación
de los saberes y las disciplinas, la adquisición de competencias y la
consolidación de principios y valores (Zabalza, 2003). Este proyecto
debe, necesariamente, tener reflejo en el diseño de un plan de estudios
coherente con la misión de la universidad. El diseño de las asignaturas,
tanto en su contenido como en sus metodologías para el aprendizaje,
constituye una pieza clave para lograr el objetivo.
De fondo late una decidida apuesta por la formación integral acorde con
el modelo que se denomina de “razón abierta” (Lacalle, 2014), cuyo
objetivo es profundizar en la comprensión de las ciencias particulares y
las profesiones desde una mirada amplia. Las grandes cuestiones no se
pueden abordar de manera reduccionista, sino que es necesario el con-
curso de diversas ciencias para dar respuestas capaces de englobar to-
dos los aspectos humanos y para encontrar sentido y significado a esas
preguntas. Es preciso superar la fragmentación del conocimiento y al-
canzar la unidad del saber. Solo de esta forma, la transdisciplinariedad
nos permitirá superar los límites de cada ciencia. Este es el propósito
de las que han dado en denominarse “comunidades de razón abierta”.
El fin principal que estas comunidades docentes persiguen es orientar
el aprendizaje de los alumnos hacia la formación integral mediante un
proceso de enseñanza que permita abordar el conocimiento de manera
global, ampliando para ello los límites que presentan las ciencias parti-
culares que se conciben como las partes necesarias del conocimiento
del todo que se alcanzará tras cursar el grado universitario.
Es preciso destacar que sin el apoyo expreso de los órganos de gobierno
de la universidad no es posible trabajar de este modo, ya que la consti-
tución de una comunidad docente requiere de la necesidad de disponer
tanto de espacios físicos como de tiempos específicos dedicados a esta
tarea.
3. METODOLOGÍA Y RESULTADOS
‒ ‒
personal previa fruto de la cual cada profesor debe asumir libre y res-
ponsablemente que quiere participar en la comunidad. No tiene sentido
incluir a un profesor como parte de una comunidad si no quiere o, por
diversas razones personales o académicas particulares, no puede ha-
cerlo en ese momento. En este sentido la universidad debe respetar la
respuesta personal de cada profesor, puede fomentar el trabajo en co-
munidad y presentar sus ventajas, pero no puede formar las comunida-
des sin tener en cuenta la opinión y situación concreta de cada uno de
sus miembros y su respuesta personal a este reto.
La constitución de la comunidad y el proceso de repensamiento se desa-
rrolla en varias fases. Durante la fase preliminar se trabaja mediante en-
cuestas y grupos de reflexión, con profesores y diversos responsables
académicos, con el objetivo de matizar el perfil del egresado de acuerdo
con las demandas de la sociedad actual, pero sin perder de vista el fun-
damento y misión propias de la universidad.
En el aspecto formal y metodológico organizan grupos de trabajo que
reciben una formación proporcionada por expertos en el ámbito de las
comunidades (Vega González, 2020) y en nuevas metodologías y flip-
ped learning (Santiago et al., 2017), en los que se invita a participar a
numerosos profesores de la facultad. También se celebran sesiones in-
ternas tanto en el ámbito de las jornadas anuales de innovación que or-
ganiza la universidad en las que se han dedicado sesiones temáticas a
esta cuestión como dentro de los programas de formación del profeso-
rado donde se ofrecen sesiones específicas relacionadas con estas cues-
tiones. Al concluir esta fase se constituyen las comunidades docentes
de aprendizaje, con el objetivo de trabajar según las necesidades iden-
tificadas.
En concreto, en 2018, se constituye la comunidad docente de aprendi-
zaje del Grado en Administración y Dirección de empresas (ADE) con
el objetivo de abordar el repensamiento de las asignaturas: Filosofía
aplicada (primer semestre), Historia económica y empresarial (primer
semestre), Microeconomía para Empresarios (primer semestre), Macro-
economía para empresarios (segundo semestre), Educación para la res-
ponsabilidad social (cuarto semestre), Dirección de Recursos Humanos
(quinto semestre), Historia del Pensamiento en Occidente (segundo
‒ ‒
semestre), y Economía española y mundial para empresarios (quinto
semestre), Control de gestión (quinto semestre), Ética (sexto semestre).
Una vez constituida la comunidad, la primera tarea es definir su propó-
sito y sentido, para ello, de manera previa han de identificarse las áreas
de conocimiento, expectativas e intereses de cada uno de sus integran-
tes.
El proceso de repensamiento, que se realiza entre 2018 y 2020, consiste
en investigar, reflexionar y encontrar respuestas que fundamenten el
sentido de cada asignatura en el contexto del Grado, en orden a desa-
rrollar y alcanzar plenamente el perfil de egreso esperado. De esta ma-
nera se pretende avanzar hacia una formación integral basada en un
concepto amplio y fundamentado de persona y guiar el aprendizaje que
surge del diálogo con otras ciencias y de la coordinación con profesores
de otras materias, para facilitar una toma de decisiones ética y una ac-
tuación responsable en el ámbito empresarial que será el propio de los
egresados. La búsqueda de la unidad del saber y la profundización en
los fundamentos y límites de las materias mediante el diálogo inter-
ciencias, permite conjugar la diversidad científica para superar la frag-
mentación y los reduccionismos en los que se puede caer si abordamos
las ciencias particulares de manera aislada.
Con objeto de avanzar en este propósito se mantienen reuniones men-
suales presenciales, en las que los profesores de la comunidad trabajan
en varias líneas. En un primer momento, se identifican los concetos
vertebradores y en un segundo momento, se consensua la definición de
estos conceptos para lo cual es necesario la lectura de diversos docu-
mentos y el acompañamiento de expertos que, previamente a la realiza-
ción de estas tareas, forman a los integrantes de la comunidad. En este
proceso se considera necesario identificar el hilo conductor del Grado
universitario y el itinerario formativo que se quiere seguir y que deberá
ser articulado gracias a las diferentes materias que lo constituyen. Este
hilo conductor puede ser establecido gracias a la identificación de los
conceptos que deben vertebrar la enseñanza. Tras el diálogo y reflexión
generado para trabajar este aspecto, se identifican y definen cuatro con-
ceptos clave para establecer con coherencia el relato del Grado, estos
conceptos son:
‒ ‒
‒ Empresa. Comunidad de personas que producen bienes y ser-
vicios para satisfacer necesidades reales de la sociedad, con-
tribuyendo al bien común y al progreso sostenible.
‒ ‒
disciplina desde un punto de vista científico y técnico y a partir de la
razón abierta, que es una razón ampliada que incluye al hombre com-
pleto (Lacalle, 2014). En esta orientación, no se contempla al profesor
como un mero transmisor de conocimientos y técnicas, sino que debe
dar testimonio de sabiduría.
De acuerdo con Lacalle (2014) en el fondo de toda asignatura subyacen
unos planteamientos antropológicos, epistemológicos, éticos y de sen-
tido que deben ser hechos explícitos en la docencia. La comunidad do-
cente puede y debe ser el ámbito de trabajo adecuado para profundizar
en estos planteamientos y diseñar cada asignatura de manera coherente
con él. En ocasiones no es fácil abordar estas cuestiones que transcien-
den el ámbito de la propia disciplina. Por ello, trabajar en comunidad
facilita que se generen los espacios de discusión necesarios que favo-
rezcan la perspectiva integral que es necesaria para comprender de ma-
nera global el proceso de enseñanza-aprendizaje. Trabajando de manera
aislada o incluso por áreas de conocimiento podemos perder esa pers-
pectiva general que es básica para alcanzar el objetivo que persigue la
formación integral y todo ello, por supuesto, sin olvidar el entorno con-
creto en el que tendrán que desarrollar su actividad profesional los egre-
sados.
El repensamiento así entendido no es un añadido a la materia, sino que
permite enriquecer la disciplina adecuándola al papel que la misma
desempeña específicamente en la formación y así poder responder ex-
plícitamente a la cuestión del sentido. Esto requiere una mirada distinta
que busca la unidad del saber a la luz de la razón abierta y que permite
superar el reduccionismo mencionado antes. De esta manera, una vez
establecido el fundamento antropológico que subyace en cada asigna-
tura, que debe ser acorde con una visión completa de la persona humana
tal y como queda expresado en la misión del grado, es necesario acotar
el marco epistemológico que determinará el objeto material y el objeto
formal de cada asignatura. La cuestión epistemológica es fundamental
para establecer el correcto diálogo entre disciplinas. Conocer los límites
de cada una muestra y genera la posibilidad de establecer puentes y
diálogo entre ellas. También tiene estrechas conexiones con la cuestión
metodológica ya que conocer el marco epistemológico contribuye a
‒ ‒
delimitar adecuadamente el método empleado en la docencia. Actual-
mente el reto metodológico es potente, las nuevas tecnologías y herra-
mientas docentes existentes presentan interesantes posibilidades para la
docencia, pero también pueden constituirse en un arma de doble filo
que pueden despistar al docente del objeto final de su docencia orde-
nando la materia al servicio del método. El profesor debe ser por tanto
muy cuidadoso a la hora de escoger las metodologías que va a emplear
en el aula seleccionando aquellas que mejor se adecuen a su materia y
a la situación y necesidades concretas de sus alumnos, sin olvidar que
las herramientas son sólo un medio y nunca el fin de la docencia.
Después, de acuerdo con la misión del Grado en ADE y en base a las
conclusiones a las que se va llegando en el proceso de reflexión y aná-
lisis en la comunidad de profesores, se cuestiona el mismo proceso de
enseñanza-aprendizaje, que debe dotar al alumno de las competencias
(conocimientos, aptitudes y actitudes) necesarias para comprender que
la empresa debe dirigir su acción al servicio de la persona y no al ser-
vicio exclusivo de los beneficios económicos. Este objetivo, que excede
claramente a los simples conocimientos técnicos, será posible si tiene
en cuenta el principio del bien común (Felber, 2012), el principio de la
solidaridad y el de subsidiariedad que se recogen en el ideario del
Grado. Experiencias concretas y reales en este sentido nos muestran
que este objetivo no está alejado de la realidad (Laloux, 2015 y Aretxa-
bala, 2018)
Todo el trabajo de repensamiento debe ser concretado y reflejado en la
guía docente de cada asignatura, que irá evolucionando a medida que
se avance en el proceso de reflexión, análisis y toma de decisiones. La
guía docente se constituye así, de acuerdo con Zabalza (2003), en un
instrumento fundamental para la docencia en el que se especifican los
objetivos de la asignatura, entendidos como fines de aprendizaje; las
competencias, entendidas como la posibilidad que la persona tiene para
integrar información, conceptos, conocimientos, habilidades, destrezas,
capacidades, aptitudes, creencias, valores, motivaciones y actitudes,
que faciliten la toma de decisiones y la puesta en práctica de los apren-
dizajes adquiridos. Mientras las competencias generales son propias y
comunes a todas las asignaturas del Grado, las competencias
‒ ‒
transversales son elegidas por los profesores en el marco de la ciencia
que enseñan y en función de los propósitos y el sentido que quieran
darle al proceso de enseñanza aprendizaje. Puesto que la indicación
suele ser que en cada asignatura no se trabajen más de seis competen-
cias, cada profesor debe hacer una selección precisa coherente y eficaz.
En base a esas competencias se identifican los resultados de aprendi-
zaje, que en todo caso deben expresar lo que se espera que el alumno
conozca, sea capaz de hacer y tenga la inclinación de poner en práctica
en el ejercicio de su futura profesión. Formularlos de manera correcta
no es fácil y desde luego, se hace mejor en comunidad, pues en ella se
intercambian impresiones acerca de las diferentes maneras de explicar
a los estudiantes cuáles son las actuaciones concretas que esperamos
que sepan, quieran y puedan desarrollar, así como el contexto y el grado
en el que deben hacerlo. Una vez definidas las competencias y descritos
los resultados de aprendizaje, en la comunidad se reflexiona sobre los
sistemas de evaluación que deben emplearse para lograr hacer un se-
guimiento del progreso del alumno en su camino de aprendizaje. La
evaluación, que en todo caso debe ser formativa para garantizar el co-
rrecto aprendizaje del alumno, es parte de un proceso continuo en el
que los estudiantes pueden hacerse conscientes de sus logros y caren-
cias y así desarrollar la responsabilidad sobre su propio aprendizaje.
(Lacalle et al., 2014).
Así concebido, el repensamiento es un proceso continuo, ya que re-
quiere la adaptación permanente y ágil de contenidos y metodologías al
contexto en el que se enmarcan los estudios de grado. En ocasiones el
proceso de repensamiento puede suponer cambios importantes en la
guía docente y en otras simples; sin embargo, será suficiente con reali-
zar pequeñas matizaciones de aspectos concretos que es necesario pun-
tualizar. El repensamiento afecta tanto a cuestiones de fondo como de
forma, no olvidemos que hoy en día las cuestiones de método son rele-
vantes y hay que sacar todo el partido posible a las posibilidades que
las nuevas herramientas metodológicas proporcionan.
En cuanto a las cuestiones de fondo, la universidad también ha apoyado
activamente la colaboración transversal y la multidisciplinariedad fo-
mentando la colaboración entre las ciencias positivas y las normativas
‒ ‒
y particularmente el diálogo estrecho entre la filosofía y las distintas
ramas del saber para conseguir ese diálogo fecundo de razón abierta
que se pretende alcanzar. Este esfuerzo se ha materializado tanto en los
diferentes Congresos Internacionales de Razón abierta, como en los
cursos de formación interna ofrecidos en este ámbito. Asimismo, en to-
das las comunidades docentes se impulsa la participación de profesores
de distintos ámbitos del saber entre los que tienen una posición desta-
cada los profesores del área de humanidades. Esta presencia de los pro-
fesores de humanidades resulta fundamental en este proceso ya que
contribuye sustancialmente a fomentar y generar el diálogo interdisci-
plinar que es necesario para conseguir la formación integral a la que
aspira la universidad y de esta manera transcender de la simple capaci-
tación técnica. Las humanidades en el grado de ADE son especialmente
relevantes ya que no podemos perder de vista que la actividad empre-
sarial es realizada por personas que producen bienes y servicios para
otras personas, por lo que comprender en profundidad quién es y cómo
se comporta el hombre será fundamental para organizar la actividad de
manera adecuada. Sin un fundamento antropológico completo y ade-
cuado corremos el riesgo de instrumentalizar la actividad y perder de
vista el objetivo principal de la acción empresarial (Font, 2019) convir-
tiéndola en una mera vía de obtención de beneficios. Un adecuado
marco antropológico permite comprender cómo la empresarialidad es
una facultad propia de la persona, fruto de la cual esta posee la capaci-
dad necesaria para afrontar con éxito los problemas que se derivan de
la actividad empresarial. No en vano la ciencia empresarial es una rama
de la teoría económica que permite comprender cómo el agente econó-
mico toma sus decisiones empresariales.
El proceso desarrollado contribuye y facilita el diseño de unos estudios
integrales de ADE que deben preparar al alumno para desarrollar esta
tarea con éxito y le permiten poner libre y conscientemente sus capaci-
dades al servicio de la generación de bien común, teniendo en cuenta
no sólo la dignidad de las personas que participan en la actividad, sino
también la de las personas a las que se dirige su acción.
‒ ‒
4. CONCLUSIONES
‒ ‒
El trabajo en comunidades docentes ha sido fructífero en la tarea de
repensar las asignaturas a la luz de una razón ampliada, pero a partir de
ahora quedan abiertas distintas líneas de trabajo para seguir profundi-
zando en el repensamiento a través de comunidades docentes. Una, sin
duda, es la de seguir avanzando en las metodologías de enseñanza-
aprendizaje para encontrar aquellas que mejor se adapten a los objetivos
perseguidos. No podemos hablar de formación integral sin metodolo-
gías adaptadas en función de ese objetivo. Otra línea de estudio ha de
ser el replanteamiento del temario, ya que el repensamiento realizado
nos obliga y lo seguirá haciendo en el futuro, a enseñar nuestra disci-
plina poniendo a la persona en el centro. Eso no significará necesaria-
mente cambiar los contenidos, pero sí el enfoque, la perspectiva y sobre
todo la finalidad y el propósito de estos. Asimismo, hemos de incorpo-
rar los conceptos vertebradores de empresa, persona, bien común y pro-
greso sostenible en el currículo para que la empresa se convierta en ge-
neradora del bien común. Por último, este camino recorrido por unos
cuantos profesores al abrigo de una comunidad docente debe ir abrién-
dose cada vez a más asignaturas porque el objetivo último es conseguir
una formación integral y esto no será posible sin la participación de
todas las disciplinas del Grado, de forma que todas ellas superen el re-
duccionismo de la razón instrumental y pongan a la persona en el cen-
tro.
5. REFERENCIAS
‒ ‒
Corno, L. & Randi, J. (2000) ¿Una teoría del diseño educativo basado en el
aprendizaje autorregulado? En Reigeluth, C. Diseño de la instrucción:
teorías y modelos: un nuevo paradigma de la teoría de la instrucción.
Santillana.
De Dios Alija, T. (2018) Comunidades docentes de aprendizaje para la formación
del profesorado, en Rodríguez, J. y Hunt, C y Barrientos, A. Cultura
digital y las nuevas políticas educativas. Gedisa
Felber, C. (2012), La economía del bien común. Deusto.
Freixa, M., Aparicio, P., & Triadó, X. (2014), El rol del profesorado como
elemento clave en las Instituciones y en el contexto de la educación
superior. En P. Figuera (Coord.), Persistir con éxito en la universidad:
De la investigación a la acción (139-157). Barcelona: Laertes.
Font, C. (2019), Hacia un nuevo paradigma empresarial. Más allá del beneficio.
En: Profundizando en temas de investigación de vanguardia. Pirámide.
Fulland, M. (2002). Los nuevos significados del cambio. Octaedro.
Gómez Calvo, V. y Gómez-Álvarez Díaz, O. (2016), La economía del bien
común y la economía social y solidaria, ¿son teorías complementarias?
CIRIEC-España, Revista de Economía Pública, Social y Cooperativa,
87, 257-294.
Krichesky, G. J., & Murillo, F. J. (2011). Las Comunidades Profesionales de
Aprendizaje. Una Estrategia de Mejora para una Nueva Concepción de
Escuela. REICE. Revista Iberoamericana sobre Cali-dad, Eficacia y
Cambio en Educación, 9(1), 1.
https://revistas.uam.es/reice/article/view/4718
Huberman, M. (1989), The professional life cycle of teachers. Teachers College
Record, 91(1), 31-58.
Kincheloe, J. L., Beck, C., Freese, A. R., Kosnik, C., Samaras, A. P., &
Steinberg, S. R. (2009). Learning Communities In Practice. Springer
Netherlands.
Korthagen, F. (2010). La práctica, la teoría y la persona en la formación del
profesorado. Revista Interuniversitaria de Formación del Profesorado,
68(24,2), 83-101.
Lacalle, M. (2014). En busca de Hacia la unidad del saber. Una propuesta para
renovar las disciplinas universitarias. UFV.
‒ ‒
Lacalle, M., De Dios Alija, T. & Abellán, A. (2014). Cómo elaborar una guía
docente. Formación integral y aprendizaje con competencias. UFV.
Laloux, F. (2015). Reinventar las organizaciones. Arpa.
Louis, K. S. & Marks, H. (1998). Does professional community effect the
classroom? Teachers´work and student experience in restructured
schools, American Journal of Education. 106 (4), 532-575.
Mayer R. (2004). Psicología de la Educación: Enseñar para un aprendiza-je
significativo. Pearson: Prentice Hall.
McDonald, J., & Cater-Steel, A. (2018a). Communities of practice: Facilitating
social learning in higher education. Springer.
McDonald, J., & Cater-Steel, A. (2018b). Implementing Communities of Practice
in Higher Education: Dreamers and Schemers. Springer.
Mercer, N. (2001), Palabras y mentes: cómo usamos el lenguaje para pensar
juntos. Madrid: Cognición y desarrollo humano. Paidós
Mercieca, B. (2017). What Is a Community of Practice? En J. McDonald & A.
Cater-Steel (Eds.), Communities of Practice: Facilitating Social Learning
in Higher Education, 3-25. Springer. https://doi.org/ 10.1007/978-981-
10-2879-3_1
Monereo, C. & Pozo, J.I., (2003). La universidad ante la nueva cultura educativa.
Enseñar y aprender para la autonomía. Síntesis.
Santiago, R.; Díez, A. & Andía, L.A. (2017) Flipped classroom: 33 experiencias
que ponen patas arriba el aprendizaje. UOC.
Stoll, L., Bolam, R., McMahon, A, Wallace, M. & Thomas, S. (2006)
Professional learning communities: A review of the literature. Journal of
educational change 7, 4, 221-258.
Vega González, M.; De Dios Alija, T. Fernández Cano A.C.; (2016) Propuesta de
un ciclo de mejora del aprendizaje situado en la enseñanza superior, en
Aprendizaje situado y aprendizaje conecta-do, implicaciones para el
trabajo, 13. Wolter Kluwer.
Vega González, M.A. (2020) Creando comunidades de aprendizaje en la
universidad. Una propuesta de aprendizaje experiencial. Morata.
Vidal-Abarca, E. (2010), Aprender y enseñar: una mirada desde la psicología. En
E. Vidal-Abarca, R. García Ros y F. Pérez González. Aprendizaje y
desarrollo de la personalidad, 19-43. Editorial.
‒ ‒
Wenger, E., McDermott, R. A., & Snyder, W. (2010). Cultivating communities of
practice: A guide to managing knowledge. Harvard Business School
Press.
Wenger, E. (2011). Comunidades de práctica: Aprendizaje, significado e
identidad. Paidós Ibérica.
Wenger, E., Fenton, M., Hutchinson, S., Kubiak, C., & Wenger, B. (Eds.).
(2017). Learning in landscapes of practice: Boundaries, identity, and
knowledgeability in practice-based learning. Routledge.
Zabalza, M. (2003) Competencias docentes del profesorado universitario. Narcea.
‒ ‒
CAPÍTULO 70
BEGOÑA CABANÉS-CACHO
Universidad de Zaragoza
ESPERANZA REINA LÓPEZ
Universidad de Zaragoza
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
El conseguir esta transformación en la educación pasa por lograr un apren-
dizaje integral adaptado a las exigencias del nuevo siglo.
Conforme con la clasificación de la educación planteado por Trilling et
al. (2015), el aprendizaje se logra pasando por las siguientes cuatro di-
mensiones:
‒ Las Aptitudes: “Cómo usar lo que sabemos” a través de la
creatividad, el pensamiento crítico, la comunicación y la cola-
boración.
FIGURA 1. Marco Center for Curriculum Redesign (CCR), Modelo de Educación en Cuatro
dimensiones.
‒ ‒
Una vía para estimular la actitud creadora e independiente de los estu-
diantes es a través de “simulaciones” mediante las cuales, se enfrentan
a situaciones a las que se van a exponer en un futuro profesional.
El empleo de la simulación permite acelerar el proceso de aprendizaje
y contribuye a elevar su calidad. En este contexto debemos entender, la
referida asignatura como un factor integrador, sistémico y con un im-
portante carácter transversal.
Es de capital importancia tener presente que no existe un único método
de enseñanza ideal ni universal. A la hora de optar por un método en
concreto, es necesario valorar que su selección y aplicación están mo-
tivadas por diversas circunstancias y exigencias a cumplir y de las es-
pecificidades del contenido.
El método que empleemos debe adecuarse al nivel exigido, preten-
diendo estimular la posterior actividad creadora con el objetivo de mo-
tivar el futuro desarrollo de habilidades y herramientas que posibiliten
vincular la etapa formativa con la “vida real”.
Atendiendo al tipo de estudiantes y sus futuras profesiones, donde to-
maran importantes decisiones dentro de las organizaciones desde dife-
rentes departamentos (contabilidad, marketing, finanzas, dirección, …)
la complejidad surge porque cada situación concreta requiere un análi-
sis y una solución específica. Esto viene dado por dos variables, por un
lado, el entorno VUCA (volátil, incierto, complejo y ambigüo), y por
otro, el rápido avance de las herramientas digitales y tecnológicas. Por
ello, nos planteamos una asignatura transversal basada en el modelo de
4 dimensiones, y a continuación, profundizamos en los conceptos clave
para su éxito como son el aprendizaje colaborativo y el modelo
70:20:10.
‒ ‒
éxito del resto. El trabajo dentro de los grupos se caracteriza por su no
competitividad, por la colaboración en la construcción del conoci-
miento y por el aprendizaje de todos los participantes.
Dentro de la asignatura que queremos desarrollar, lleva integrada la
participación en una competición en la que se dirige una empresa. La
competición se llama Global Management Challenge (en adelante,
GMC) donde los estudiantes en equipos de 3-4 personas toman decisio-
nes sobre las principales áreas de la empresa (marketing, finanzas, pro-
ducción y recursos humanos) durante 5 trimestres en un mercado simu-
lado. Para ello los estudiantes analizan la documentación de la empresa
que la organización les facilita, para que puedan analizar el histórico y
hagan predicciones sobre el entorno y sus competidores, definiendo qué
estrategia van a seguir. Con lo cual, deben basarse en el conocimiento
adquirido durante el grado, integrarlo y aprender a tomar decisiones en
común, lo que hace que unos aprendan de otros.
Como afirma Graeml et al.(2010), las simulaciones empresariales (Bu-
siness Games) son una sorprendente herramienta para la enseñanza y
práctica empresarial. Además, las simulaciones pueden ser llevadas a
cabo para la formación y entrenamiento en sub‐áreas tales como: direc-
ción de la producción, marketing, finanzas, contabilidad, dirección es-
tratégica, sistemas de información, entre otras. Facilitando la integra-
ción de estas y propiciando una experiencia mucho más real y efectiva
al estudiante.
Uno de los aspectos que más nos ha atraído del simulador, es la posibi-
lidad de que el alumnado adquiera el rol de directivo durante un periodo
de tiempo haciendo que este tome decisiones y vaya desarrollando ha-
bilidades como su estilo de liderazgo. Tal y como plantea Peña-Miguel
y Sedano-Hoyuelos (2014) un simulador empresarial no es solo herra-
mienta formativa para promover el aprendizaje, sino también sirve para
potenciar capacidades y habilidades. Así, se consideran metodologías
activas al plantear un escenario, y situando a los participantes en él,
activando un proceso cooperativo de aprendizaje (Abt, 1987).
Otro aspecto muy atractivo del simulador, es el hecho de que las em-
presas manejadas y el entorno competitivo son diferentes en cada ronda
‒ ‒
de la competición. Totalmente extrapolable a la realidad empresarial
donde una misma organización pasa por diferentes etapas y situaciones
en su ciclo de vida.
La gamificación nos da la posibilidad de que el alumnado pase a ser un
jugador activo, sumergiéndose en el mundo empresarial, donde emo-
cionalmente se sienta directivo de la empresa y tenga que enfrentarse a
retos y situaciones concretas que lo sacan de su zona de confort a través
del juego. Consiguiendo que se involucre de una forma lúdica en su
proceso de aprendizaje de forma activa, incrementando su nivel de
compromiso. Estando en línea con lo comentado por los autores Her-
nández et al. (2016) y Villalustre y Moral (2015).
Gracias al aprendizaje activo y colaborativo nos ponemos en situacio-
nes reales donde el alumnado construye su conocimiento lo que le per-
mitirá resolver situaciones futuras, es decir, conseguimos educar para
la vida.
A través de él, todos ganamos, tanto el profesorado como el alumnado.
Para los primeros, la formación se convierte en algo vivo, mejorando la
calidad de la enseñanza y adaptándonos a las nuevas exigencias que
demanda el mercado laboral, a través de actividades similares a la vida
real. Y para el alumnado, aprende a integrar el conocimiento adquirido
durante el grado, a trabajar en equipo y adquiere confianza en sí mismo.
‒ ‒
La complejidad que supone ese aprendizaje, el acceso al entorno laboral
y la toma de decisiones, junto nuestro deseo por ayudar a nuestros es-
tudiantes, nos lleva a apoyarnos en el modelo 70:20:10.
Este modelo fue desarrollado en los años 80 por los empleados Morgan
McCall, Robert W. Eichinger y Michael Lombardo 111del "Centro para
el Liderazgo Creativo" de EE.UU., como parte de un proyecto de in-
vestigación. Y, aunque estaba enfocado en origen, al desarrollo del per-
sonal en el seno de una empresa, su uso se puede extrapolar a los estu-
diantes, con las limitaciones y modificaciones que hemos necesitado
realizar. Nuestra adaptación del modelo 70:20:10, se centra en la bús-
queda del aprendizaje más efectivo, y basa su desarrollo en que este, se
consigue cuando la persona dedica el 10% de su tiempo a formación
(clases teóricas), el 20% a aprender de otras personas como compañeros
o tutores (exposición) y el 70% del tiempo trabajando (experiencia).
Extrapolándolo a nuestra asignatura, seria aproximadamente un:
‒ 10% para recordar e integrar los conocimientos explicados en
diferentes asignaturas y desarrollar el uso de herramientas ofi-
máticas que le permitan el análisis de datos,
2. OBJETIVOS
111 https://insights.tt-s.com/es-es/70-20-10-es-esta-la-formula-para-un-aprendizaje-de-exito
‒ ‒
innovación educativa y que, en un futuro próximo, esperemos que se
consolide como una asignatura transversal que favorezca el desarrollo
personal y profesional del alumnado.
En este artículo recapitulamos lo sucedido en estos tres cursos acadé-
micos y planteamos el diseño de la asignatura, para poder analizar los
pros y contras de la incorporación de la competición a la misma. A la
vista de todo esto, vamos a plantear los siguientes objetivos:
‒ Objetivo 1. El alumnado desarrolle las competencias más de-
mandadas en el mercado laboral: trabajo en equipo, liderazgo,
pensamiento crítico y análisis de datos
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
integrantes de los equipos de nuestra facultad que han llegado más lejos
en la competición en alguna de las ediciones anteriores.
El primer reto al que nos enfrentamos cuando nos concedieron el PII-
DUZ fue cómo tutorizar a equipos que están compitiendo en el mismo
mercado sin favorecer a ninguno.
En la ronda online, la primera, cada equipo de tutores está formado por
un profesor y uno o dos estudiantes que ya han participado en la com-
petición que acompañan a varios equipos de estudiantes de la Facultad
de Economía y Empresa y que compiten dentro del mismo mercado. El
proceso de acompañamiento se hace siguiendo la metodología
coaching, orientando a través de preguntas al alumnado, nunca les in-
dicamos que deben hacer, pero si les ayudamos a reflexionar para que
tomen las mejores decisiones. Consideramos vital que ellos sean parte
activa de su aprendizaje, y que el mismo se desarrolle de forma colabo-
rativa. Además, los tutores-estudiantes siguen evolucionando en su
aprendizaje ya que ejercieron de directivos de varias empresas durante
su participación en la competición y ahora ejercen de consultores dentro
del PIIDUZ.
En la ronda online los estudiantes dirigen una empresa durante 5 tri-
mestres, tomando una decisión por semana. La organización distribuye
a los equipos para que los mercados estén equilibrados, estando en cada
mercado entre 6 y 8. Finalmente se clasifican como máximo los 8 me-
jores equipos del total de mercados de la ronda online, que compiten en
la final autonómica de Aragón. A partir de aquí, nuestra labor es previa
al día de la competición en el que están incomunicados y toman las
decisiones correspondientes a 5 trimestres en un solo día. De esta ronda,
solo un equipo se clasifica para la Final Nacional que se disputa en el
mismo formato que el anterior. Hay que recalcar que en cada ronda di-
rigen una empresa diferente con un entorno diferente lo que potencia su
desarrollo.
Tras el primer año del PIIDUZ, curso 2019-20, fuimos conscientes de
que habíamos aplicado la metodología coaching de forma intuitiva. Du-
rante el segundo año, que se alargó con motivo del COVID19, curso
2020-21, se depuro la técnica incluyendo la metodología 70:20:10 que
‒ ‒
será fundamental para que el alumnado siga aprendiendo a lo largo de
su desarrollo profesional.
Para el curso 2021-22 hemos solicitado un nuevo PIIDUZ con nuevos
objetivos para continuar con dicha actividad.
No obstante, nos estamos planteando a medio-largo plazo que esta ac-
tividad se integrara dentro de una nueva asignatura o dentro de una
existente. Lo ideal sería una nueva asignatura de primer cuatrimestre,
para adaptarnos a la competición, ubicada en el último curso y trans-
versal a los cuatro grados de la Facultad de Economía y Empresa (Fi-
nanzas y Contabilidad, Marketing e Investigación de Mercados, Eco-
nomía y Administración y Dirección de Empresas – esta última en sus
modalidades de castellano, inglés y doble grado con Derecho). Plante-
ándose como objetivo que el alumnado desarrolle las siguientes com-
petencias en línea con lo que demandan las empresas, como son:
‒ Competencias genéricas transversales: Capacidad para la re-
solución de problemas; Capacidad de análisis y síntesis; Ca-
pacidad de organización y planificación; y Capacidad para to-
mar decisiones.
‒ ‒
manual de la competición y enseñaríamos a manejar herramientas in-
formáticas que les ayuden en el análisis de datos y toma de decisiones.
En el momento que empieza la competición y durante esas cinco sema-
nas aplicaríamos la metodología de coaching y las clases estarían orien-
tadas a que trabajen en equipos para analizar la información y conse-
cuencia de sus acciones para la toma de decisiones.
Tras la competición el alumnado prepararía un informe justificando y
argumentando sus decisiones, haciendo una crítica constructiva detec-
tando posibles errores y aciertos. Además, lo expondrían en el aula lo
que favorecería un debate guiado por el profesorado generando un
aprendizaje colaborativo.
Para superar dicha asignatura evidentemente tienen que sacar al menos
un cinco para aprobar. Los 10 puntos máximos que pueden obtener es-
tán divididos de la siguiente forma: hasta dos puntos en un examen so-
bre el funcionamiento de la empresa y su relación con el entorno, hasta
tres puntos por los logros en la competición y hasta cinco puntos por el
informe y su aportación al debate. Así, podemos valorar tanto el cono-
cimiento individual como el colectivo, evaluando no solo su evolución
en la competición, sino también el hecho de aprender de los fracasos.
El profesorado que imparta esta asignatura deberá tener un profundo
conocimiento en la dirección de empresas y en las metodologías em-
pleadas (aprendizaje activo y colaborativo, coaching y modelo apren-
dizaje 70:20:10).
En el debate final, recomendamos dedicar un tiempo a analizar con el
alumnado como han aprendido. Consideramos fundamental que sean
conscientes de que lo han hecho de varias formas. La primera de forma
colaborativa, compartiendo sus opiniones y argumentando para llegar a
una conclusión final más enriquecida, ya que en el mundo laboral es
muy probable que trabajen en equipos multidisciplinares. La segunda,
a través del modelo 70:20:10, donde un 10% lo dedicamos a la forma-
ción teórica, un 20% a aprender compartiendo conocimiento y reflexio-
nando y un 70% a ponerlo en práctica. En este modelo la adaptación es
la clave para avanzar en un entorno en constante cambio.
‒ ‒
Y, por último, tal y como está diseñada la asignatura o el proyecto de
innovación docente, permite al estudiante pasar por las cuatro dimen-
siones que forjaran su aprendizaje. La primera depende de la “aptitud
del alumno” que debe aprender a usar lo que sabe a través del desarrollo
de competencias clave como la creatividad, el pensamiento crítico, la
comunicación y la colaboración. En segundo lugar, el “conocimiento”
del alumno, que sabe y entiende. En tercer lugar, el “carácter”, es decir,
como este se comporta bajo su ética, conciencia y liderazgo. En cuarto
y último lugar, se produce el “meta-aprendizaje” ya que en la competi-
ción pasan por todas las etapas: aprender, desaprender y reaprender.
4. RESULTADOS
‒ ‒
Tabla 1. Resultados de la encuesta asociados al primer objetivo
Puntuación
Afirmaciones
entre 1 y 5
Capacidad para tomar decisiones. 2,94
Capacidad para trabajar en equipo. 2,82
Capacidad de organización y planificación. 2,76
Capacidad para la resolución de problemas. 2,71
Capacidad de análisis y síntesis. 2,71
Fuente: Elaboración propia
‒ ‒
A la vista de los resultados poco hay que añadir donde con una puntua-
ción de 4,53 sobre 5 el alumnado ha opinado que esta actividad (com-
petición GMC) les ha permitido integrar mejor los conocimientos. Y en
un segundo lugar, con un 4,47 sobre 5 dicen que GMC les ha ayudado
a entender el funcionamiento de la empresa. La realidad empresarial es
mucho más compleja de lo que se ve en el aula, y GMC nos permite
adaptar los contenidos a la realidad, garantizando una calidad educa-
tiva.
Además, el alumnado ha valorado con un 3,47 que disponían los cono-
cimientos previos y con un 3,35 les ha permitido relacionar la teoría
con la práctica. Es decir, se ha favorecido la retención de conocimientos
al ponerlos en práctica, reduciendo el efecto de la curva del olvido (Her-
mann Ebbinghaus).
Para el tercer y último objetivo “El alumnado aprenda a aprender”, los
datos obtenidos en la encuesta que se reflejan en la tabla 3. Donde el
alumnado indica valorando del 1 al 5 como ha contribuido su participa-
ción en la competición al desarrollo de las siguientes afirmaciones.
Siendo 1 No ha contribuido y 5 Ha contribuido mucho.
Tabla 3. Resultados de la encuesta asociados al tercer objetivo
El hecho de tener solo dos ítems analizados no nos permite sacar una
conclusión muy certera, por lo que consideramos habrá que seguir tra-
bajando en el futuro sobre este objetivo, ya que es clave. El alumnado
debe reflexionar sobre cómo ha aprendido, sobre el concepto de
reaprender y el uso del método 70:20:10 y sus aplicaciones en el apren-
dizaje a la largo de toda su vida, que le permitirá mantener un nivel de
empleabilidad alto, es decir, estar a la altura de nuevas situaciones o
circunstancias.
‒ ‒
5. DISCUSIÓN
Sin perder de vista nuestro objetivo inicial vamos a analizar las dos po-
sibles vías de continuidad. La actual, seguir con el proyecto de innova-
ción docente, y la futura, crear una asignatura o incorporar GMC a una
asignatura existente. Para ello vamos a realizar una comparativa de los
principales ítems que consideramos fundamentales para tomar la deci-
sión que recogemos en la Tabla 4.
Tabla 4. Comparativa resumen PIIDUZ vs. Asignatura.
‒ ‒
En el siguiente ítem, “Nivel de exigencia al alumnado”, en el caso del
PIIDUZ se lo marca el propio alumno y el profesor ejerce de acompa-
ñante. Mientras que en el desarrollo de la asignatura el profesorado
marca unos niveles de conocimiento y una implicación para la supera-
ción de la misma.
Con respecto al ítem de “Alcance (numero alumnos)” no hay mucho
que decir, porque en el PIIDUZ depende de la motivación del estudiante
para desarrollar una actividad extracurricular una vez que el curso ha
comenzado y ya ha elegido donde va a dedicar su tiempo. Y, sin em-
bargo, en el caso de la asignatura su elección seria en el momento de
realizar la matrícula y pensando en su itinerario para acabar la titula-
ción. Con lo cual tiene sentido pensar que habrá más estudiantes impli-
cados si fuera una asignatura.
Valorando el ítem “Profundidad de aprendizaje” en la asignatura, tene-
mos una serie de horas para que el alumnado aprenda a través de lear-
ning by doing y del método 70:20:10, debiendo entregar sus informes
de mejora, y, además, tienen que superar un examen con lo que todo
ello lleva implícito. En el caso del PIIDUZ su aprendizaje depende di-
rectamente del nivel de implicación del alumnado dado su carácter vo-
luntario y de cuantas rondas avanzan en la competición. Finalmente, el
nivel de profundidad del aprendizaje es muy variable en cada caso.
El ítem del “Tiempo de dedicación” en el caso del PIIDUZ es muy va-
riable, siendo la media bajo-medio, estando totalmente relacionado con
el carácter competitivo del equipo y de la capacidad de superación in-
dividual. Sin embargo, en el caso de desarrollarse en una asignatura
estas opciones desaparecen, porque tienen un número de horas de clase
y no depende del tiempo libre que dispongan.
Por último, el “Foco”, en el PIIDUZ, el alumnado está más disperso
porque es una actividad voluntaria y extracurricular que depende mu-
cho de él mismo. Mientras que, en la asignatura, atiende a unas normas
predeterminadas y depende más del profesor que es quien guía la acti-
vidad.
‒ ‒
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
han sido siete en total. Relacionado con lo anterior, está la educación
entre iguales, puesto que los nuevos participantes son tutorizados y se
sienten identificados con los estudiantes-coach.
Sopesando las ventajas e inconvenientes, no cabe duda que lo más po-
sitivo, sería integrarlo en una asignatura. El problema lo encontramos
en la complejidad del procedimiento para conseguir crear una nueva y
en la saturación de las programaciones actuales para integrar la compe-
tición GMC en una ya existente. En este momento vemos muy dificul-
toso conseguirlo por lo que seguiremos como está hoy en día, con cré-
ditos de libre elección a través del PIIDUZ. A pesar de suponer un gran
coste en tiempo y de no reconocimiento para los profesores que están
en el proyecto. Una posible salida es buscar el apoyo de otros profesores
que poco a poco se integren en el proyecto y así perciban, en primera
persona, los beneficios que este genera.
Si logramos el apoyo del profesorado, tendríamos que analizar los pla-
nes de los diferentes los grados de la Facultad de Economía y Empresa,
para detectar coincidencias con nuestra filosofía. Siendo una de las al-
ternativas la formación en estrategia que suele darse en todos los gra-
dos.
Y volviendo al origen, sobre si estamos adaptados en la universidad a
los tiempos actuales, sabemos que los cambios en educación a gran es-
cala son lentos. Para Lao Tse “Un viaje de mil millas comienza con el
primer paso” por ello, algunos profesores realizan cambios en las guías
docentes, introducen nuevas metodologías como la gamificación o pro-
ponen actividades extracurriculares para que la universidad no se quede
tan atrasada.
Por último, integrar GMC permitirá al alumnado tener su primera ex-
periencia práctica a través de la simulación y posiblemente incentivar
otra salida profesional, gracias a ejercer el rol de directivos de su propia
empresa para que creen la suya, fomentando la iniciativa emprende-
dora.
‒ ‒
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
‒ ‒
8. REFERENCIAS
‒ ‒
CAPÍTULO 71
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
más utilizado en otros grados y ello se debe a que se ha descubierto que
contar historias “engancha” más al receptor del mensaje que simple-
mente colocar información y las razones por las que se trata de conven-
cer sobre un punto en particular, pero no es simplemente contar una
historia, es saber contarla, y para ello se puede definir de una manera
sencilla y básicamente como “(…) una técnica de comunicación con-
sistente en narrar una historia, un relato personal con el objetivo que el
mensaje que se pretende transmitir quede grabado con la mayor fuerza
posible en el receptor” (Jiménez, 2016).
Por ello, considero que ya desde primer año de grado en derecho se
debe animar a los futuros abogados a que personalicen a sus clientes, a
que "cuenten su historia"; invitar a los docentes a utilizar las historias
para provocar cambios en la enseñanza del derecho, en los estudios de
derecho y en la sociedad más allá de la academia; aconsejar a los futuros
jueces y otros encargados de tomar decisiones legales en particular que
consideren el contexto y reconozcan la historia de vida única que repre-
senta cada litigante. El modelo del estado de derecho, o "la ley por la
ley", no debe bloquear la comprensión experimental del mundo por
parte de los futuros jueces, su "razón práctica", ni debe invocarse para
negar o devaluar las preocupaciones humanas reales que están en juego
en una determinada situación.
En los últimos años, el storytelling ha surgido con fuerza en facultades
jurídicas estadounidenses, de hecho, es ya frecuente en ellas que el pro-
fesorado emplee esta técnica en el desarrollo de sus clases o que se
ofrezcan cursos específicos sobre la materia. Por el contrario, la situa-
ción en nuestro país es, al menos por el momento, muy diferente. Sin
perjuicio de la eventual existencia de prácticas aisladas, hasta ahora.
Sin embargo, en el presente año como consecuencia de la Covid -19
(enero- mayo 2021) en el cual la utilización de la herramienta Teams se
ha convertido en un servicio formativo obligatorio para el docente y un
vehículo principal para la práctica virtual con los estudiantes, ha ser-
vido como oportunidad para implementar como metodología activa la
experiencia interesante e innovadora y a su vez real de la utilización del
storytelling en el primer año del grado en Derecho en la asignatura de
derecho civil donde los estudiantes han podido a través de dos casos
‒ ‒
prácticos incompletos o inconclusos conocer y manejar tanto los ele-
mentos mínimos que lo conformaban -demandante, demandado y juez,
conflicto subyacente-; así como los recursos y estrategias que lo hacían
más efectivo, apelando a su estudio o conocimiento y a sus sentimien-
tos, siendo para ello necesario la implicación, construcción y finaliza-
ción de estos por el propio alumno.
La hipótesis de partida ha consistido en verificar la relación existente
entre el uso de la herramienta Teams y la adquisición de competencias
jurídicas por los estudiantes del primer año de Grado de Derecho, para
ello se ha tomado como referencia dos historias reales con unos míni-
mos datos llevando a cabo su representación mediante storytelling on
line en el que su preparación y presentación se ha realizado de forma
síncrona con el objetivo de completar la última parte práctica de la eva-
luación continua donde los alumnos han aplicado los conocimientos
previamente adquiridos en la asignatura de Derecho civil a la práctica
jurídica de manera que se ha ofrecido al estudiante una aproximación
al ejercicio profesional, sin barreras espaciales y con la coexistencia
propia del mundo real.
Como experiencia práctica el resultado final ha resultado ampliamente
satisfactoria desde el punto de vista de la adquisición de competencias
teóricas y prácticas de los alumnos, y su aplicación desde primer año
de grado ha permitido que los estudiantes comenzaran a familiarizarse
desde su comienzo con la práctica de historias a través de casos reales
que diariamente se dan en los juzgados y tribunales.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
enseña y cómo se enseña, cuanto lo que se aprende y cómo se aprende
(Palomino 2009: 299), por lo que resulta preciso incorporar nuevas ma-
neras de enfocar la evaluación del proceso de aprendizaje.
En este sentido, Bolonia ha inaugurado un nuevo paradigma educativo
en el que el desarrollo de competencias del alumno desplaza la acción
directa e inmediata del docente como epicentro de la enseñanza. La me-
diatez, flexibilidad, apertura del sistema y proactividad funcionan como
ejes centrales del aprendizaje, mientras que el uso de las TICs refuerza,
cuando no fundamenta, las destrezas cognoscitivas adquiridas por el
estudiante a lo largo de su carrera académica (Monterroso Casado &
Escutia Romero 2011:46-54).
La implantación de esta metodología en el primer año del grado en De-
recho en la asignatura de derecho civil cumple con los principales ob-
jetivos del EESS, tales como la adquisición por el alumno de compe-
tencias y habilidades, además de conocimientos; la permanente interac-
ción profesor-estudiante; y la evaluación continuada del alumno. En
esta línea, existen diferentes estudios relacionados con la metodología
docente del storytelling aplicados a alumnos de Derecho (Muñoz,
2019:210-223, Rodríguez, 2014).
El objetivo de este trabajo es analizar las implicaciones pedagógicas de
la enseñanza on line y, en concreto, demostrar cómo la metodología
activa del storytelling a través de Teams es una técnica de innovación
docente que permite potenciar el aprendizaje en un entorno visual diná-
mico, real y virtual. A su vez, ayuda al grupo de alumnos a vincularse
y romper los miedos de los primeros instantes y trabajar sobre todo para
fortalecer la colaboración.
‒ ‒
un método eficaz para captar la atención de los estudiantes por más
tiempo (Muñoz, 2019:210-223).
‒ ‒
Adquirir competencias multidisciplinares concretamente en el desarro-
llo de un lenguaje escrito y oral por parte de los estudiantes tanto a nivel
individual como colaborativo.
Ayudar a cada estudiante y equipo a vincularse y romper los miedos de
los primeros instantes y trabajar sobre todo para fortalecer la colabora-
ción.
Convertir en protagonista al estudiante en la solución de un conflicto
jurídico real.
Perseguir que el significado de los hechos relatados se relacione con las
normas de Derecho sustantivo y probatorio que serán objeto de análisis
en la exposición de los casos reales.
Motivar al alumno en la asignatura de derecho civil en la búsqueda de
soluciones.
Alcanzar una visión global de las disciplinas jurídicas implicadas.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
protagonista de su propio aprendizaje. A su vez, con dicha metodología
se pretende conectar a los estudiantes con un mundo profesional y real
y sobre todo fomentar el trabajo por competencias. En definitiva, es un
aprendizaje de enseñanza contextualizada donde se abordan problemas
del mundo real pero representando el rol de profesional. Para poder
desarrollar la actividad de storytelling on line a través de Teams se de-
tallan, a continuación, las fases que se han establecido como estratégi-
cas:
‒ ‒
trabajo de un número reducido de personas con capacidades comple-
mentarias, comprometidas con un propósito, un objetivo de trabajo, un
planteamiento común y con una responsabilidad mutua compartida
(Blake & Mouton,2007).
En esa línea, hay un cambio de paradigma, en el que se deben emplear
cuantos medios humanos y materiales contribuyan a un aprendizaje en
colaboración (en pequeños grupos, promoviendo el trabajo en equipo
(Exley & Dennick 2007). Se trata, en definitiva, de crear nuevos entor-
nos de aprendizaje a partir de nuevas estrategias docentes.
‒ ‒
mes de abril y la primera semana de mayo), ello ha permitido un cono-
cimiento teórico de los dos temas que va a representar cada equipo me-
diante la técnica del storytelling on line.
‒ ‒
algo a lo que el storytelling nos puede ayudar (Foley & Robbins, 2001,
Rodríguez,2014:11).
‒ ‒
En este sentido, hay que decir como inconveniente que los alumnos de
primero de derecho no están familiarizados con la redacción de textos
procesales toda vez que no se encuentra en el programa de primer año
la asignatura de derecho procesal, pero sí la de derecho civil, y por ende
el Código Civil, pilar fundamental en la que se basa el fondo del asunto
de tales escritos. Por tanto, si bien el objetivo principal era trabajar pre-
ceptos del código civil en relación con los dos casos reales y búsqueda
de jurisprudencia relacionada con los mismos que les permitiera cons-
truir su relato conforme a la prueba aportada de una manera más “sen-
sorial” pues la esencia de un storyteller está en hacer sentir a la persona
emociones a su favor para lograr convencer al juez de su idea y obtener
una sentencia favorable en base al trabajo de fondo desarrollado, lo
cierto es, que tampoco ha sido obstáculo la falta de dicha carencia, pues
los propios alumnos tuvieron la habilidad de encauzar y buscar el sig-
nificado del contenido de los citados escritos. Además, durante la cons-
trucción de la historia real a través de sus roles, el profesor titular de la
asignatura y a su vez abogado en ejercicio ha destinado las clases vir-
tuales a explicar, resolver dudas o dificultades propias del estudio de
los casos, supervisar y acompañar a los alumnos en su crecimiento per-
sonal y colaborativo a lo largo de toda la actividad de manera tal que
adquirieran seguridad en su auto aprendizaje y en definitiva en la na-
rración adaptada a alumnos de primer año. En principio, la idea era que
una vez redactado el escrito de la demanda se pasase al otro miembro
del equipo para poder llevar a cabo la contestación a la demanda y fi-
nalmente ambos escritos al juez para poder concluir el relato final de la
historia.
‒ ‒
demanda con expresa imposición de costas a la parte demandada. A
continuación, el juzgador concede la palabra al abogado/a de la parte
demandada para ser también escuchado de igual manera que el anterior,
pero finaliza su intervención solicitando la desestimación íntegramente
de la demanda con expresa imposición de costas a la parte demandante.
Una vez finalizada la intervención de los estudiantes que representaron
a la parte demandante y demandada, el estudiante que representa al
juez/a asume el papel de narrador final del caso mediante una resolu-
ción, para ello dicta sentencia oral o de viva voz, en función de la argu-
mentación, motivación y solidez de las pretensiones defendidas por el
alumno de la parte demandada o parte demandante. Ahora bien, ni por
parte de los litigantes ni en la toma de la decisión se han obviado los
sentimientos. Nuestras emociones y nuestro afecto deben ser tenidas en
cuenta tanto en el arte del discurso legal normal como las reglas legales
"objetivas". En ese sentido, Maya Angelou dice una frase muy signifi-
cativa a la hora de cómo debe expresarse un abogado e intentar conven-
cer a un tribunal con su relato “(…) La gente olvidará lo que dijiste, la
gente olvidará lo que hiciste, pero la gente nunca olvidará cómo la hi-
ciste sentir”.
‒ ‒
siempre en positivo y animando a cada uno de los estudiantes del grupo
a realizar un aprendizaje constructivo y colaborativo. En definitiva, el
profesor ha pensado que debía asumir también un papel activo. “Su po-
sición debe ir dirigida siempre a estimular al alumno, a corregir aquellas
cuestiones incorrectas y, en definitiva, a moderar y encauzar el proceso
en los parámetros pretendidos” (Aguilar Cárceles &Tomás, 2011).
4. RESULTADOS
‒ ‒
demandante, abogado demandado y juez, ha sido clave para conseguir
otros objetivos tales como facilitar y mejorar la expresión oral del
alumno, su propia escucha, fomentar el pensamiento crítico y la refle-
xividad acerca de los beneficios y las dificultades que comportaba rea-
lizar tal actividad en modalidad digital. Es el profesor quien ha de de-
cidir el valor que concede a cada uno de estos ítems dentro del porcen-
taje destinado a esta actividad en la evaluación continua; a modo de
ejemplo, en el Grado en Derecho el total del 30% destinado a la eva-
luación continua se ha dado un punto sobre 10 a dicha actividad, si bien
tras el resultado tan positivo conseguido con la misma y fruto de la re-
flexión posterior del profesor considera que para el año que viene se le
debe dar mayor puntuación.
La docente piensa que la capacidad argumentativa y comunicativa de
los estudiantes de manera individual y colaborativa a la vez mediante
la aplicación a los supuestos prácticos de los conocimientos teóricos
adquiridos ha quedado plenamente cumplida con la técnica del storyte-
lling on line pues a través de la visualización del papel representado se
ha obtenido un resultado.
En esta línea, existen diversos estudios como por ejemplo se indica en
la página Litigiodeautor.com (Litigiodeautor, 2016) “(…) A los aboga-
dos nos llega todos los días material de primera para construir buenas
historias. William Herndon, abogado y socio de Lincoln, en su biogra-
fía del presidente indica que: “si alguien está buscando historias sobre
fraude, engaño, crueldad, promesas rotas, hogares desgraciados, no hay
mejor lugar para encontrarlas que en un despacho de abogados”. Razón
no le falta. Un ojo entrenado puede encontrar una historia convincente
incluso cuando el expediente entre manos es aburrido y monótono. Por
su parte Jonathan Shapiro establece que el storytelling es la abogacía
misma y es ahí donde radica la importancia de darle el tratamiento ade-
cuado a la figura, y tal afirmación es basada en lo que hacen los aboga-
dos “(…) —todos— es reunir información y compartirla con otros de
la forma más efectiva posible. Lo hacen para convencer a otros para
hacer o no hacer algo o para tomar una determinada decisión (…) El
relato (storytelling) —qué es, por qué importa, cómo hacerlo— no es,
por tanto, una metáfora de la abogacía. Es la abogacía misma”.
‒ ‒
(Shapiro, 2016). Ahora bien, hay que lograr llegar a tener esta habilidad
de contar historias, y esta “(…) capacidad de contar historias, así como
el arte que va asociado a ésta, es de las más antiguas que existen: co-
nectar emocionalmente a través de una historia, dejar que te lleguen y
toquen el corazón y la cabeza, el cuerpo y el espíritu: lo racional y lo
instintivo” (40defiebre s.f.).
Finalmente, el reto planteado por la docente ha sido acogido por los
estudiantes con gran satisfacción según los resultados obtenidos, pues
al finalizar las clases se ha realizado una encuesta en la que se ha pre-
guntado al alumnado sobre su grado de satisfacción en dicha actividad,
obteniendo una respuesta muy favorable prácticamente. La mayoría de
los alumnos hicieron un magnífico trabajo. Con las limitaciones que tie-
nen –algunos alumnos, por ejemplo, han expuesto que no había hablado
nunca en público-, fue sorprendente el buen trabajo que en general han
desarrollado la gran mayoría, asimismo con esta metodología se ha ob-
tenido un mayor rendimiento en la evaluación, así como mayores nive-
les de percepción de utilidad entre el alumnado. En concreto, dos equi-
pos del grupo C (uno de tres y otro de cuatro) y otros tres equipos del
grupo E (tres estudiantes cada uno) han obtenido la calificación de so-
bresaliente consecuencia del extraordinario trabajo realizado desde el
inicio de la actividad cuyo fruto ha quedado perfectamente reflejado en
la presentación oral de la historia del caso real.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
de que el relato de hechos que lo acompaña sea expuesto del mejor
modo posible. A fin de cuentas, es a estos hechos a los que pretendemos
anudar una serie de consecuencias jurídicas (Rodríguez, 2014:11).
Ahora bien, quizás en experiencias futuras sería más conveniente para
alumnos de primer año de derecho civil darles mayor libertad y uso de
las herramientas que se pueden utilizar en tecnología a la hora de reali-
zar la presentación por el grupo preparando la misma en páginas como
prezi, emaze, mentimeter, canva, powtoon, googleslides, etc. o bien Po-
werpoint, y proyectando una imagen donde se pueda iniciar a contar la
historia y que visualmente el docente y a su vez el estudiante que hace
el papel de juez quede con la imagen de lo que se proyectó. Asimismo,
también se debería trabajar más la creatividad permitiendo utilizar otros
elementos auxiliares, como videos o aspectos probatorios sin que hagan
perder el foco de lo que se está debatiendo (Kendall, 2020).
Con dicha actividad, los estudiantes ya desde primer curso pueden co-
menzar a plantearse su futuro profesional al identificar las principales
profesiones jurídicas que aparecen implicadas en la tramitación de un
proceso (en este caso únicamente abogado o juez).
Finalmente, la docente ha reflexionado también sobre la posibilidad de
introducir la idea de la competición entre grupos, de manera que se se-
leccionen los mejores para la realización de las actuaciones orales.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
son la clave para potenciar nuevas capacidades de aprendizaje, en par-
ticular la capacidad de comunicación profesor/alumno y en la misión
pedagógica, instructiva y evaluadora.
Forma parte de la innovación docente en Derecho que los alumnos se
impliquen y presenten por primera vez un caso práctico construido por
ellos mismos mediante la técnica del storytelling on line, ello les va a
posibilitar con los conocimientos adquiridos en el aula virtual desarro-
llar funciones propias del ejercicio de la profesión y obtener una solu-
ción al problema con argumentos escritos, orales y emocionales.
Permite adquirir y desarrollar competencias como la comprensión, re-
dacción de escritos jurídicos, la expresión oral, el trabajo en grupo, la
búsqueda de jurisprudencia, el manejo de bases de datos, destrezas, ha-
bilidades propias del trabajo individual y del colaborativo.
Para que sea un aprendizaje satisfactorio y se adquieran las máximas
competencias por parte del estudiante exige un compromiso muy
grande consigo mismo, con sus compañeros y con el docente, pues cabe
concluir que si bien los alumnos trabajan autónomamente para lograr
calidad en el trabajo realizado por cada equipo, a su vez también es
necesario un previo conocimiento de la práctica profesional por el do-
cente responsable de la asignatura y sobre todo que tenga capacidad de
acompañamiento, apoyo y guía al alumno con el fin de obtener su má-
ximo talento.
7. AGRADECIMIENTOS
‒ ‒
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Monterroso Casado, E. & Escutia Romero, R. (2011) Enseñanza práctica en 3D:
juicio virtual, Revista d´ innovació educativa, Universitat de Valencia,
pp.46-54.
Muñoz, E., (2019). “Narrativas en la enseñanza del derecho: un estudio de caso”,
Revista de Llengua i Dret, Journal of Language and Law, núm. 69,
(Junio 2018), pp. 210-223. DOI: 10.2436/rld.i69.2018.3021.
Núñez López, A., (2009) Storytelling en una semana, Planeta, Barcelona, 2011,
p. 9, lo define como el “arte de crear y narrar relatos con propósitos de
comunicación y conexión”.
Palomino Lozano, R. (2007): El campus virtual en la enseñanza del Derecho:
elaboración de dictámenes e informes. III Jornadas Campus Virtual.
Madrid: UCM.
Posner, R. A., (2009) Law & Literature, Harvard University Press, Cambridge
(Massachusetts), p. 425.
Rodríguez Álvarez, A. (2014) El proceso es un cuento: el storytelling en la
docencia del Derecho procesal, Reduca (Derecho). Serie Derecho
Procesal. 5 (1): 225-239.
Shapiro, J. (2016). Lawyers, liars, and the art of storytelling. Chicago, IL, United
States: American Bar Association.
Sitio web oficial de https://www.40defiebre.com, consultado el 1 de septiembre
del 2021.
Taranilla García, R., (2012) La Justicia narrante. Un estudio sobre el discurso de
los hechos en el proceso penal, Thomson Reuters Aranzadi, Cizur
Menor (Navarra).
Taruffo, M., (2010) Simplemente la verdad. El juez y la construcción de los
hechos, Marcial Pons, Madrid.
‒ ‒
CAPÍTULO 72
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
intercomunicado que nunca, donde se producen problemas y oportuni-
dades, como consecuencia del enorme incremento de la información y
de los conocimientos.
Entendemos, que la educación es siempre pieza esencial en toda estra-
tegia de desarrollo, tanto personal como social. Por ello, además de edu-
car en valores, hay un desafío irrenunciable que es la accesibilidad a la
información y al conocimiento. La educación sería entonces capacitar
eficazmente al estudiantado para conocer, aplicar y transformar las nue-
vas tecnologías, y al logro de ese gran objetivo, ayudan las TIC, pues,
aunque ellas no son la información ni el conocimiento, ni aportan fór-
mulas pedagógicas, sí que constituyen el soporte para permitir el inter-
cambio y la productividad en todos los campos, ya sea, de investiga-
ción, economía, etc., pero en especial, en el ámbito del Derecho Finan-
ciero y Tributario. Por eso las TIC deben ir a las universidades para
preparar a los estudiantes a integrarse y con ello, ayudar a mejorar el
rendimiento académico. La integración de estos recursos es el gran reto
de las políticas de mejora en la calidad educativa y su fórmula para el
progreso es hoy la investigación y la innovación. El objetivo no es otro
que lograr el éxito de todos los estudiantes para que nadie quede des-
colgado.
Por ello, el plan de estudios que permite a los estudiantes participar en
procesos de investigación los involucra más activamente en su apren-
dizaje y en la materia del estudio, apoyando el aprendizaje activo,
donde los estudiantes desempeñan un papel importante en el desarrollo
de la práctica investigadora, lo que ayudará sin duda, a construir la con-
fianza de las cualidades del estudiante, así como la capacidad de comu-
nicarse eficazmente y el sentirse un académico especializado.
En cierto modo la actividad investigadora del profesor universitario ac-
túa como garantía de la modernización de los contenidos docentes que
imparte al estudiantado y en su nivel de actualización en la misma no
debe descuidarse nunca la calidad del contenido que se transmite, para
no llegar a situaciones vacías de conocimientos reales o alejados de toda
realidad. Todo ello, desde una perspectiva puramente fiscal que es una
rama del Derecho donde los cambios son más habituales, acontecién-
dose con mucha rapidez y pudiendo abarcar una gran extensión dentro
‒ ‒
de las materias propias de esta área de conocimiento, de ahí, la necesi-
dad de una renovación continua del profesor con bastante intensidad.
Ahora bien, la cuestión es cómo analizar que esto realmente se está ha-
ciendo.
Es evidente que nos encontramos ante un nuevo panorama educativo,
donde el conocimiento actúa permanentemente para alcanzar el estudio
del aprendizaje que se impone y no puede soslayarse, dada la necesidad
imperiosa de seguir trabajando para que nuestros estudiantes se instru-
yan en el oficio de aprender. Este nuevo rol nos lleva a que el docente
tenga capacidades para conocer a su estudiantado y la facultad de poder
crear los materiales e instrumentos necesarios para plantearlos en el
aula con autonomía. Sin embargo, el papel del estudiante también ha
cambiado, ahora debe aprender a buscar y localizar información para
transformarla e integrarla en conocimiento a través de la investigación.
La presencia del docente sigue siendo un elemento vital en todo el desa-
rrollo de enseñanza y aprendizaje.
Otro aspecto importante para tener en cuenta es que, para implantar la
sociedad de la información en la comunidad educativa, no basta sim-
plemente con la introducción de tecnología digital, sino que venga
acompañada de contenidos, porque la universidad necesita tecnología
con contenidos apropiados para su proceso de aprendizaje, pues como
cualquier otra herramienta en el mundo se les saca rendimiento cuando
son apropiadas a cada caso. En este interesante proceso tecnológico, lo
que está ocurriendo cada vez en mayor medida es que estas tecnologías
de formación e información que se realizan en línea y fuera de las aulas,
se están transfiriendo también presencialmente en el aula, con lo que se
está creando una situación híbrida o mixta de enseñanza-aprendizaje,
centrada en los retos y posibilidades de las TIC. De lo que se trata es de
actualizar y reinventar el aprendizaje en las aulas para devolverle entu-
siasmo a la diada entre docente y estudiante.
De hecho, los docentes como guías, facilitadores de procesos de apren-
dizaje, para apoyar a los estudiantes en la adquisición de conocimientos
disciplinarios y habilidades estratégicas que pueden derivarse de la
práctica de investigación fiscal, tienen gran importancia como actores
principales en la renovación de la enseñanza y en desarrollar en el
‒ ‒
estudiantado competencias y estrategias que les permita seguir apren-
diendo y prosperar en este mundo global, en el que la tecnología digital
está en constante evolución, conectando a todo un planeta.
Con esta finalidad, la investigación sería entonces, el proceso de crear
nuevos conocimientos, pero avanzar en la creación de conocimiento re-
quiere muchos años de experiencia, simplemente porque se necesita
una cantidad significativa de tiempo para alcanzar conocimiento en un
área como la fiscal, lo que implica que no podrán convertirse en grandes
investigadores en un área temática simplemente con las clases, pero sí
les llevará a que puedan integrarse en el proceso de la comprensión en
un área en particular, que también es una forma de arrancar la investi-
gación y el conocimiento más rápidamente de lo que lo harían de otra
manera, haciendo exposición del desarrollo de nuevas tecnologías, teo-
rías y paradigmas.
‒ ‒
de las TIC a la investigación fiscal, haciendo más eficaz el procesa-
miento y divulgación de la información científica, consiguiendo que
investigar sea mucho más atractivo, ya que amplía redes de conoci-
miento más accesibles para la comunidad académica, con el acceso a
documentos científicos que permiten incrementar la labor científica, lo
que contribuye a la formulación de proyectos de investigación con más
incidencia en el campo del estudio. De esta forma, la labor del investi-
gador se ve mucho más favorecida con la infinidad de herramientas que
ofrecen las TIC para llevar a cabo sus tareas de forma más sencilla, que
deriven en resultados útiles en las etapas de investigación de las distin-
tas áreas académicas, para un mayor reconocimiento de los investiga-
dores.
Por todo ello, entendemos que un docente universitario que tiene una
gran trayectoria investigadora a nivel internacional transmite mayor ga-
rantía de conocimientos incluso inéditos y modernizados para transmi-
tir a su estudiantado. Un profesor universitario de asignaturas del ám-
bito del Derecho Financiero y Tributario debe guiar al alumnado con
una buena docencia universitaria hacia un nivel de excelencia en sus
conocimientos y prepararlo para el desarrollo de la investigación en las
ciencias jurídico-fiscales en nuestro caso, transformándolos en perso-
nas creativas e innovadoras que impulsen la autonomía y el pensa-
miento crítico, en esta cultura de cambio aprovechando las potentes he-
rramientas tecnológicas.
3. OBJETIVOS
‒ ‒
proyectos más actuales, por lo que inculcar material del curso con re-
sultados de investigación en la práctica tributaria más frescos es una
manera importante de reflejar la compresión actual.
Muchos son los retos en la cultura de utilizar la investigación en el aula
universitaria, buscando continuamente nuevas soluciones a las innova-
ciones que presenta cada contexto educativo. Se persigue la reflexión
sobre la práctica docente utilizando técnicas de investigación y acción,
a través de la utilización efectiva de los recursos de la biblioteca por
parte de los estudiantes, con el propósito de atraer conocimiento desde
el aprendizaje y, crear novedosas capacidades para difundir el pensa-
miento crítico, el razonamiento y la capacidad de argumentación jurí-
dica del estudiante a partir, en nuestro caso, de la investigación fiscal.
Por tanto, el principal logro de cualquier biblioteca universitaria será
apoyar las actividades de enseñanza, aprendizaje e investigación, ya
que esto es esencial para el desarrollo educativo de los estudiantes y,
sobre todo, mejorar la adquisición de conocimientos tributarios, como
es nuestro objetivo. Dado que las bibliotecas académicas ocupan el lu-
gar central y principal de la enseñanza y la investigación, en su misión
de apoyar el aprendizaje y la investigación, deben adquirir y organizar
información para la accesibilidad y uso de los estudiantes, siendo nece-
sario adoptar las nuevas tecnologías de la información y comunicación
para la consecución de un excelente nivel académico.
Para fortalecer los vínculos entre la enseñanza y la investigación hay
muchos pasos que se deben tomar, como poner a la atención de los es-
tudiantes nuevos resultados de investigación, es decir, presentarles la
publicación de un nuevo artículo fiscal interesante, pedirles que lo re-
visen ellos mismos y como actividad, que realicen un ejercicio para
conseguir que critiquen su diseño, con la idea de que realicen borrado-
res de los artículos, para apoyar la relación entre el aprendizaje de los
estudiantes y la disciplina de la investigación, creando un nexo entre la
enseñanza y la investigación. Proponiendo que la investigación en la
disciplina del aula tenga una relación explícita con el plan de estudios
que experimentan los estudiantes de estas disciplinas tributarias.
Los objetivos que se persiguen con este tipo de acción investigadora de
carácter innovador es demostrar la capacidad del estudiante de cumplir
‒ ‒
con los fines didácticos y garantizar la efectividad de su aprendizaje
desde su autonomía, adquiriendo la destreza y habilidades transversales
necesaria para la realización de una investigación rigurosa. El propósito
y la contribución de este trabajo es identificar los determinantes de la
utilización de la investigación ampliando el conocimiento existente,
transmitir el conocimiento a través de la enseñanza y crear nuevo co-
nocimiento a través de la investigación tributaria.
No obstante, conviene recordar que, aunque los docentes se conviertan
en guías y cómplices en la experiencia universitaria de cada estudiante,
se propone un aprendizaje individualizado amoldado a las particulari-
dades de cada estudiante que mediante el aprendizaje práctico desarro-
llen competencias transversales y sepan desarrollarlas en un entorno
real. El objetivo, por tanto, es que esta modalidad de aprendizaje siga
su andadura y no se detenga, que siga evolucionando conforme a los
tiempos, para conseguir enriquecedoras experiencias, profundas y
transformadoras, contribuyendo positivamente a la formación jurídica
del estudiantado.
En consecuencia, la propuesta es una investigación en la educación su-
perior que incluye el estudio del aprendizaje y la enseñanza en el con-
texto de una disciplina concreta de la asignatura Derecho Financiero y
Tributario, para obtener un gran desarrollo personal y profesional em-
poderando y movilizando al alumnado, se obtiene con el apoyo del pro-
fesor como contribuyente significativo al discurso académico en torno
a la teoría y la práctica de la enseñanza y el aprendizaje en sus diferentes
opciones, debiendo incluir la investigación disciplinar en el contexto de
una disciplina fiscal concreta que le proporcione al estudiante una for-
mación académica a través de los conocimientos y habilidades obteni-
dos.
4. METODOLOGÍA DE LA INNOVACIÓN
‒ ‒
realidad, se analiza la importancia de la investigación en la práctica do-
cente como instrumento para conseguir una educación innovadora y de
calidad. Se propone, la investigación en el tema del Derecho Financiero
y Tributario que consiste en el examen de las materias fiscales a través
de la identificación de las cuestiones pertinentes y la evaluación y apli-
cación de la situación del hecho en cada caso específico. Así, mediante
el uso de una serie de proyectos de investigación asignados, basados en
el temario de “la celeridad de impuestos medioambientales y digitales
tras la pandemia”, los estudiantes tendrán la oportunidad de estudiar
áreas significativas de modernos impuestos para obtener conciencia so-
bre el tratamiento de temas fiscales y desarrollar una capacidad en la
investigación fiscal.
Sobre la base de los casos presentados, se pedirá al estudiantado que
analice los hechos, identifique los problemas fiscales suscitados, loca-
lice las normas apropiadas, evalúe y desarrolle las conclusiones y reco-
mendaciones que haya concluido. Se realizará un documento de inves-
tigación final sobre un tema fiscal elegido por cada estudiante en com-
binación con los proyectos de investigación asignados, y se presentarán
a su lectura en el aula, en cada sesión semanal dedicada a las técnicas
de investigación fiscal, en donde se prestará especial atención al trabajo
autónomo que realizará el estudiante previamente al desarrollo presen-
cial de la actividad en el aula universitaria, que será expuesta a análisis
críticos mediante los distintos grupos de discusión lo suficientes hete-
rogéneos en que se haya dividido por parte del docente la clase para la
obtención de los resultados, siguiendo los métodos de enseñanza-apren-
dizaje que aúnan la técnica expositiva, el estudio del caso y la resolu-
ción de problemas. Con el propósito de que los alumnos se acostumbren
a cooperar con compañeros que serán críticos en el veredicto y no tie-
nen por qué compartir sus formas e ideas en el planteamiento del tra-
bajo.
En efecto, frente a los rápidos avances tecnológicos y la innovación en
el campo del aprendizaje, cada vez es más importante preparar a los
estudiantes para que sigan aprendiendo fiscal de por vida y sean capaces
de seguir practicando, repasando y actualizándose después de su paso
por la universidad. En este marco, los planes de estudio tutorizados
‒ ‒
basados en la investigación se enfocan en la localización de los estu-
diantes para que participen en la investigación académica sobre la dis-
ciplina y se involucren en hacer preguntas sobre su aprendizaje en el
contexto de la disciplina, que puede ser una manera poderosa de desa-
rrollar su comprensión de cómo aprender y mejorar sus reflexiones. La
investigación en la enseñanza ayuda a los estudiantes a recopilar o ana-
lizar datos, refinar ideas conceptuales o evaluar métodos y ser capaces
de comunicar ideas complejas.
En muchos casos, se ha observado que la introducción de los estudian-
tes en la investigación puede reportarles además de su profundidad en
la comprensión de la materia su entusiasmo en seguir estudiando. Crear
oportunidades para que los alumnos aprendan sobre investigación a pe-
queña escala o participación, es una manera innovadora de utilizar las
nuevas tecnologías de la información y la comunicación, proporcio-
nando a los estudiantes experiencias de investigación auténticas. Esta
metodología, puede alentar a los estudiantes a seguir sus propios blogs
de investigación y otras actividades de difusión de redes sociales tam-
bién permitirá a los estudiantes acceder y seguir la información actual
sobre investigación tributaria.
La tarea práctica se subirá al Aula Virtual con un tiempo de un mes de
antelación para que sea desarrollada la actividad por cada alumno, so-
bre una reflexión jurídica específica, acompañada de las instrucciones
necesarias para la realización de la práctica. A partir de ahí, se solicita
a los estudiantes que realicen la práctica tributaria acerca de la temática
que se les ha indicado, utilizando para ello sentencias o libros facilita-
dos acerca del tema para una mejor comprensión de los conceptos o
teorías a realizar en la redacción del trabajo.
La sesión en la que se efectuará la discusión quedará organizada del
modo expuesto en la tabla que se muestra a continuación:
‒ Exposición oral de la actividad por parte del docente 40’
‒ Presentación individual del trabajo 40’
‒ Debate crítico 40’
Una vez subidos al Aula Virtual todos los trabajos realizados indivi-
dualmente por cada estudiante, el día asignado para la presentación los
‒ ‒
alumnos deberán asistir a clase con su tarea. El profesor iniciará la clase
con una exposición oral de la actividad en la que planteará la proble-
mática realizada y estudiada por los estudiantes de forma que sea com-
presible para ellos, abordando las reflexiones que se han propuesto so-
bre el aprendizaje y realización de la investigación fiscal, que puedan
ser de utilidad para perfeccionar el trabajo que han llevado a cabo los
estudiantes sobre el tema indicado anteriormente, con el conocimiento
y la práctica de los argumentos más usuales en la redacción de las reso-
luciones y el control riguroso de los conectores lógicos del lenguaje,
que se torna en la parte más esencial de la argumentación.
Con ello, se pretende facilitar información para la comprensión de co-
nocimientos tributarios y estimular la motivación del estudiantado, ante
un tema que puede presentar dificultad y provocar que el análisis indi-
vidual sobre la problemática exigida no resulte del todo productiva,
dado que se trata de conceptos que no dominan por ser desconocidos
para ellos y en consecuencia, la explicación desarrollada por parte del
docente debe estar totalmente enfocada a la comprensión de los con-
ceptos específicos de la práctica, utilizando un lenguaje adecuado, claro
y que carezca de ambigüedades en la metodología.
Si bien, el planteamiento de la innovación práctica se ha llevado a cabo
a lo largo de cursos anteriores, no ha sido con esta misma temática, sino
con otros contenidos de igual transcendencia con resultados muy satis-
factorios y enriquecedores, afianzando los resultados de aprendizaje del
tema propuesto. A pesar de que este tema se haya llevado a efecto en el
primer semestre del curso, ello no obsta para que se le otorgue la im-
portancia que requiere por ser un tema básico donde la investigación
fiscal ha cobrado una importancia y un carácter extraordinario, presen-
tándose en la actualidad como una ciencia y técnica de la comunicación,
que ha renacido con gran vitalidad.
5. DISCUSIÓN
Según los resultados que hemos obtenido en cada una de las investiga-
ciones tributarias realizadas individualmente por cada estudiante, en-
contramos un gran número de aceptación en las competencias
‒ ‒
adquiridas en cuanto al manejo y uso de las fuentes del Derecho Finan-
ciero y Tributario, que giran en torno a la asimilación de la incidencia
del número de nuevos impuestos medioambientales y digitales previs-
tos tras la pandemia, como es el caso del nuevo Impuesto sobre Deter-
minados Servicios Digitales, los cuales podrían desempeñar un papel
importante en el campo de la investigación académica, una vez deter-
minado el tema sobre el que interesa conocer las perspectivas de los
estudiantes, con relación al diseño de la investigación. Por ello, el estu-
dio y conocimiento de los aspectos tributarios fortalecen y son la base
para el desarrollo de artículos de investigación y los estudios de fisca-
lidad internacional que son la base del aprendizaje para el estudiantado.
El presente estudio de investigación de impuestos realizado, con un di-
seño metodológico adecuado irían referidas a las cuestiones más inno-
vadoras del momento, para ser tomadas en cuenta para futuros estudios.
6. RESULTADOS
‒ ‒
a superar la dinámica del aprendizaje tradicional y experimentar un en-
torno de trabajo más colaborativo y un crecimiento mutuo ante las van-
guardias educativas.
La enseñanza de diferentes escenarios entronca perfectamente con el
aprendizaje digital y las herramientas educativas proporcionan al do-
cente el escenario y el tema, pero la experiencia que el docente elige
activar y compartir con la clase siempre es diferente, siempre nueva y
calibrada en la individualidad de los estudiantes.
El estudiantado en los referidos debates y análisis sobre el trabajo de
investigación ha manifestado su satisfacción con los resultados de las
evaluaciones realizadas al respecto y su espíritu crítico desarrollado en
la tarea, que sin duda enriquecerá su futuro como profesional del dere-
cho. La propuesta no puede ser más enriquecedora, pues los estudiantes
han referido que esta actividad innovadora les ha permitido afianzar los
conocimientos y aprendizaje propios de la asignatura de Derecho Fi-
nanciero y Tributario, lo que les ha permitido desarrollar un espíritu
crítico y provechoso respecto al papel que los mismos puedan jugar en
la consecución de un futuro docente.
7. CONCLUSIONES
‒ ‒
criterios de rigor científico, así como la selección de técnicas y análisis
de la información seleccionada.
Desde esta perspectiva cabe resaltar que investigar es un arte porque
presupone permanente creación, porque cada trabajo es una nueva ex-
periencia y nunca es igual al anterior ni se repite la misma práctica. Con
ello, es posible transitar hacia estructuras de contenidos más innovado-
ras, impulsando la búsqueda y aplicación de nuevos conocimientos. En
el campo de la investigación fiscal es necesario mantener una búsqueda
ordenada y sistemática para su conocimiento objetivo, con el fin de rea-
lizar una interpretación de los hechos que se analizan y predecir situa-
ciones futuras, para ello se requiere la realización de un adecuado uso
de los métodos y técnicas de investigación.
En Derecho Financiero y Tributario que es nuestro caso, para la gestión
de la investigación resultan de mucho interés las TIC al facilitar el tra-
bajo cooperativo de la comunicación entre los integrantes de un grupo
de investigación ya sea a nivel nacional o internacional, por su capaci-
dad de ofrecer gran información en línea de los resultados recogido en
la investigación y su poder de accesibilidad a través de las publicacio-
nes en revistas electrónicas que se encuentran recogidas en las bases de
datos de las universidades a disposición de los estudiantes y en las bi-
bliotecas cada vez más digitalizadas.
Es evidente, que la educación universitaria se encuentra en una coyun-
tura de profunda renovación en el proceso de aprendizaje del alumnado,
en donde el papel del docente se vuelve más relevante respondiendo
con nuevas competencias y utilizando las dinámicas y metodologías
más adecuadas para hacer del aprendizaje algo extraordinariamente
emocionante. Mediante la innovación docente nos hemos adaptado en
tiempo récord a la demanda de la educación, reinventando el concepto
de presencialidad, tanto en campus como en remoto, garantizando un
modelo educativo más innovador y muy experiencial en el que las ba-
rreras se difuminan, orientado al desarrollo profesional que prepare a
los estudiantes para un futuro de gran incertidumbre en el contexto ac-
tual que albergue una enseñanza de calidad.
‒ ‒
Con este sistema de educación disruptiva que ilustra nuevas formas
de transformar la educción que rompe con los esquemas estableci-
dos, se propone un aprendizaje integral adaptado a la nueva realidad,
donde los estudiantes disponen de un gran número de prácticas de
investigación, una preparación que los llevará a graduarse con mu-
chas horas de trabajo y de experiencias similares a las que encontrará
en el entorno profesional y un desarrollo investigador desde el pri-
mer día. En este reto, el docente ejercerá de conductor del aprendi-
zaje en la realización de las prácticas, en las que los estudiantes se
encontrarán con los problemas a los que deberá enfrentarse en un
futuro.
Asimismo, es necesario seguir desarrollando estrategias adecuadas para
abordar este nuevo impacto de las TIC en el papel que realizan docentes
y estudiantes a la hora de integrarse en los procesos de enseñanza,
aprendizaje e investigación que les ha permitido promover y facilitar la
actitud participativa y creadora de los estudiantes. Para su desarrollo,
los docentes utilizan la tecnología en atención a sus percepciones y en
la confianza para contribuir al mejor trabajo del aprendizaje del estu-
diantado, para conocer de primera mano lo que quieren y lo que pueden
hacer con las herramientas de la tecnología en las aulas y en analogía
con su trabajo, para ceder el papel de protagonista del estudiante. Asi-
mismo, la Comisión Europea está promoviendo el uso adecuado de las
TIC con el objetivo de mejorar la calidad en los procesos de aprendi-
zaje, facilitando el intercambio y la colaboración a distancia.
En consecuencia, los profesores si se lo proponen, pueden influir y afec-
tar a un gran número de estudiantes de manera tremendamente positi-
vas, motivando y dando a los estudiantes la sed de conocimiento hasta
el punto de que sean ellos mismos los que quieran no sólo consumir los
conocimientos existentes, sino realizar descubrimientos de investiga-
ción, lo que se transforma en una oportunidad única que tenemos como
docentes de ofrecerles. Indudablemente, el desarrollo de estudiantes in-
teligentes entre los investigadores de las generaciones actuales es otra
forma más de que los esfuerzos en el aula puedan verse a largo plazo
por la investigación. Es evidente que la investigación ha impulsado
‒ ‒
enfoques innovadores con la aplicación de las TIC, que se basan en la
colaboración tanto en la creación de estudios como en la publicación de
sus resultados, cabe precisar que, la relación entre investigación e inno-
vación conlleva una compleja relación entre la teoría y la práctica fiscal.
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Iberley (18 de enero de 2021). Impuesto sobre Determinados Servicios Digitales
(Tasa Google). https://www.iberley.es/temas/impuesto-sobre-
determinados-servicios-digitales-tasa-google-64900
Iglesias Caridad, M. (2020). Impuestos sobre Servicios Digitales: el TJUE
convalida el impuesto húngaro. Análisis de la sentencia de 3 de marzo de
2020. Nueva Fiscalidad, (2), 235-251.
Ley 4/2020, de 15 de octubre. Ley del Impuesto sobre Determinados Servicios
Digitales (2021). Revista Aranzadi de derecho y nuevas tecnologías,
(55).
OECD (2015). Addressing the Tax Challenges of the Digital Economy, Action 1-
2015 Final Report. https://n9.cl/1fc0v
OECD (2018). Tax Challenges Arising from Digitalisation – Interim Report
2018. https://www.oecd.org/tax/tax-challenges-arising-from-
digitalisation-interim-report-9789264293083-en.htm
PBS (2020). La nueva “Tasa Google” española. https://www.pbs.es/tasa-google/
Romera, J. y Semprún, A. (24 de enero de 2021): Inditex tributa en España 14
veces más que Apple, Amazon, Facebook y Google juntas. El
Economista. https://n9.cl/repgli
RTVE (18 de febrero de 2020). ¿Qué es la “Tasa Google” que ha aprobado el
Gobierno? https://www.rtve.es/noticias/20200218/tasa-google-
preguntas-respuestas/2001928.shtml
Sánchez Sánchez, E. (2016). El principio de igualdad en materia tributaria.
Thomson Reuters-Aranzadi.
Tort, R. (13 de enero de 2021): Decálogo de preguntas y respuestas sobre el
Impuesto sobre Determinados Servicios Digitales. ECIJA Blog.
https://ecija.com/decalogo-de-preguntas-y-respuestas-sobre-el-impuesto-
sobre-determinados-servicios-digitales/
Wolters Kluwers (2021). Impuesto sobre Determinados Servicios Digitales
(“Tasa Google”). https://guiasjuridicas.wolterskluwer.es
‒ ‒
CAPÍTULO 73
1. INTRODUCCIÓN
Desde un tiempo a esta parte en las guías docentes, los planes de estu-
dio, programas de formación de profesorado y demás se encuentran
anegados de las celebres competencias, habilidades o destrezas que l@s
discentes deben adquirir en los estudios que cursan. Este cambio apa-
rente en los fines docentes convive con una cantidad ingente de conte-
nidos y sistemas de evaluación basados en los extensos temarios. El
resultado es una falsa transformación del sistema educativo en el que la
concepción cuantitativa y mercantilista en el mejor de la casos sigue
imperando, cuando no exacerbándose.
Mientras tanto, la sociología, antropología y/o pedagógica escriben so-
bre las nuevas necesidades educativas de la actual sociedad de la infor-
mación; incluso se habla de una nueva era educativa que necesitará de
nuevas culturas académicas, alternativas a las existentes actualmente
(como se cita en Obaya V., Vargas R. y Delgadillo G., 2011). Esta pro-
funda contradicción eleva la tensión de un cuerpo educativo ya de por
si estresado debido a las exigencias que desde diversos sectores de la
sociedad se les demanda, tanto a l@s profesor@s como a l@s
alumn@s. Una presión incoherente, que lejos de mejorar los resultados
de la educación en las facultades de ciencias sociales y humanidades ha
dado lugar a una disminución de la calidad educativa.
‒ ‒
Esta fractura entre el discurso del sistema educativo y lo que realmente
exigen el sistema académico y la sociedad en su conjunto es el principal
motivo que me ha llevado a indagar y escribir sobre otras metodologías
y/o corrientes pedagógicas que pongan verdaderamente el acento en el
desarrollo de las habilidades y destrezas de mis alumn@s; y de todas
ellas la que a mi entender es más interesante para el estudio y la inves-
tigación de las ciencias sociales: el pensamiento crítico y creativo. Pese
a que para ello debamos sacrificar una parte del voluminoso programa
de estudio.
Soy consciente de que esta problemática no es ni mucho menos nove-
dosa, históricamente son numerosas las corrientes pedagógicas que han
desafiado al sistema educativo imperante112, al igual que se han creado
interesantes métodos docentes alternativos en la trayectoria del queha-
cer educativo. Mi intención en este capítulo es hablar de uno de estos
métodos docentes y su relación con una de estas corrientes pedagógicas
que, con el correr de los días, aumenta el número de simpatizantes, estas
son: el método socrático y la educación lenta. De orígenes distintos,
mas profundamente relacionados, ambas participan de la misma filoso-
fía educativa.
Pocos son los profesores universitarios del ámbito de las ciencias so-
ciales que conocen los beneficios de aplicar una metodología con tantos
siglos de antigüedad como es el método socrático, y menos abundantes
los que relacionan la implementación de este proceder con los princi-
pios educativos de la nueva corriente pedagógica de slow learning. El
diálogo socrático, como herramienta docente, es capaz de atravesar los
más de dos mil años de historia que le separa y dar la mano a una de
estas “nuevas” culturas educativas alternativas.
Este capítulo esta dirigido aquell@s docentes dedicados a la enseñanza
de las ciencias sociales que creen en el pensamiento autónomo y crea-
tivo de sus alumn@s, a l@s que buscan estrategias de aprendizaje que
les “hagan pensar”, aquell@s que compartan la idea del que llamaron
112Tal es el caso de la metodología iniciada a finales del siglo XIX por la doctora María Montessori
(2003) con su primera obra publicada en 1912 bajo el título de “Montesorri Method”, o el método
Waldorf o la escuela popular Paulo Freire o el sistema Amara Berri, por ejemplo.
‒ ‒
“el tábano de Atenas” el cual consideraba que “una vida sin examen no
merece la pena ser vivida”113 (Platón, 2003, p.148-186)
2. OBJETIVO
113Sentencia atribuida a Sócrates (470 a.C.- 399 a.c) en la obra Apología de Sócrates escrita en el
año 399 a.c por su discípulo Platón (427 a.C. - 347 a.c).
‒ ‒
3. METODOLOGÍA
114 La práctica del diálogo socrático en el aula universitaria no es de ninguna manera sencilla. Hace
falta cierta experiencia, preparación previa, conocimiento profundo de la materia y capacidad de
improvisación, hete aquí la razón del entrecomillado. El adjetivo sencillo hace referencia a la des-
cripción del autor.
‒ ‒
mi elección; en segundo lugar, este autor nos ofrece una descripción
pragmática, “sencilla” y clara sobre su ejecución. Por último, este filó-
sofo hace referencia concretamente al proceso dialógico en el aula, una
práctica grupal y no individualista.
A continuación, paso a describir muy brevemente los pasos que pro-
pone Boele, D. (2017, pp.32-33) los cuales complementaré con algunos
comentarios y ejemplos de mi práctica docente.
‒ En primer lugar, comenzaremos con una pregunta general.
Boele, D. nos recomienda que sea filosófica, es decir, que
pueda ser contestada en base a la experiencia personal. En mis
clases de Sociología he podido comprobar que es una exce-
lente manera de abordar un tema nuevo comenzando la jor-
nada con preguntas como, por ejemplo: ¿qué es el conflicto
social?, ¿qué es la burocracia?, incluso ¿que es la sociedad?
‒ ‒
Según se avanza en el proceso, el caso concreto se irá anali-
zando con el fin de encontrar una respuesta a la pregunta ini-
cial, es lo que Boele, D denomina “abstracción regresiva”
(2017, p.34-35).
4. RESULTADOS
115 “De lo que sí define” y “de lo que no define” el tema que se esta tratando.
116 Boele, D. habla también de ciertas “virtudes socráticas” que están relacionadas con la actitud
que deben tener los estudiantes que participan en el diálogo (2017, p.36). Aconsejo su lectura aque-
llos que deseen ponerlo en práctica.
‒ ‒
obstáculos”, por su relación contradictoria con las expectativas que po-
see nuestro sistema educativo117 y 2. Las dificultades reales con las que
me he topado en la implementación de esta estrategia docente pudiendo
convertirla en una ardua tarea; ha estas las he calificado de “obstáculos
verdaderos”. Igualmente, y sin ánimo de desalentar aquell@s amantes
de nuevas experiencias, señalaré claramente para que o quienes NO es
factible la práctica de los diálogos socráticos según los resultados que
se obtiene de su puesta en práctica. Veámoslos con mayor detalle.
‒ ‒
ferviente defensora de esta y otras estrategias de aprendizaje similares
ya que, si bien en cualquier otro campo de estudio producen consecuen-
cias interesantes, sumamente más fructíferas resultan en el ámbito de
las asignaturas de las ciencias humanas. Considero que como profe-
sor@s de lo social y de lo humano no nos debemos limitarnos a impartir
meros contenidos. Por el contrario, nuestro deber abarca comprometer-
nos en la enseñanza de una buena praxis, no solo sobre la construcción
del conocimiento y la elaboración de resultados de nuestras disciplinas,
que también; sino de formar ciudadanos críticos, capaces de crear alter-
nativas para la construcción de un mundo mejor. Es por este motivo
que, lejos de ser un problema, considero esencial el uso de este tipo de
herramientas docentes, como el dialogo socrático, ejemplos de cons-
trucción de conocimiento colectivo.
4.1.3 Por tod@s es sabido que uno de los principios del método socrá-
tico es que los conocimientos importantes no los aprendemos de otras
personas, sino que están dentro de nosotros mismos y lo experimenta-
mos cotidianamente, de ahí la famosa frase de Sócrates: “Solo el cono-
cimiento que llega desde el interior es verdadero conocimiento” (Só-
crates, 420 a.c). Esto puede ser chocante y considerarse un obstáculo
en el ámbito universitario actual donde el objetivo es impartir el conte-
nido de un programa de una asignatura. Sin embargo, pienso, y me
consta, que efectivamente la práctica del diálogo socrático no esta
reñida con impartir un plan de estudio. Son abundantes los temas del
programa que se pueden iniciar a través de un diálogo socrático. In-
cluso, profundizar sobre cuestiones particularmente críticas. Por otro
lado, no debemos de olvidar que también forman parte de los objetivos
del programa esas famosas “competencias” que l@s discentes deben
desarrollar.
4.1.4 Llegamos a la piedra angular de este ensayo: el tiempo, o mejor
dicho, la falta de este. Si el lector@ ha llegado hasta aquí ya se habrá
percatado que esta metodología demanda horas docentes por doquier;
ese bien tan escaso ante los extensos planes de estudio de las universi-
dades. Driess Boele nos advierte: “El diálogo socrático es un proceso
que implica un pensamiento lento y cuidadoso y se necesita mucho
tiempo” (2017, p. 35), es decir, esta fuertemente reñido con las
‒ ‒
velocidad y, por ende, con la cantidad. Empero, aquel/lla que esta le-
yendo deducirá sin error alguno que para la autora de este artículo este
es un “falso” obstáculo. El por qué de ello será abordado con más deta-
lle en el apartado de “Discusión”.
Ahora sí, paso a exponer las dificultades reales que presenta la implan-
tación de esta metodología en las aulas universitarias dentro de los pro-
gramas de formación de ciencias sociales y humanas.
4.2.1 El primero de todos es la falta de compresión del método por parte
de los estudiantes y de la comunidad educativa. Es cierto que, para los
docentes, no es un método fácil de llevarlo a la práctica, sin embargo
uno de los mayores hándicaps que me he encontrado en el aula son las
dificultades que tienen los estudiantes en entender la dinámica de este
procedimiento; unas reglas de juego muy distintas a las que están acos-
tumbrad@s y que son una traba para su correcto funcionamiento. De-
bido a ello, mi primera medida consiste en explicar “las reglas del
juego” del diálogo socrático, como también su filosofía y la finalidad
última que subyace en esta herramienta docente. A pesar de ello, fre-
cuentemente resulta complicado que el aula abandone esa “aptitud
orientada a la meta” (Boele, D. 2017, p. 37) bajo la cual han sido for-
mados. De la misma forma, deben renunciar a la actitud competitiva
que surge en los debate al uso en los que se trata de “con-vencer”, ven-
cer en el diálogo, en lugar de buscar el acuerdo conjunto, un resultado
donde todos ganamos. Comprometerse a encontrar o llegar al consenso
es indagar sobre “lo que tenemos en común”, como nos señala Boele,
D (2017, p. 47).
4.2.2 Otro de estos obstáculos “verdaderos” es lo que la profesora Bea-
triz Bossi ha descrito como las “reacciones emocionales negativas”
(2017, p.58) que pueden surgir en l@s alumn@s si el diálogo socrático
se realiza de manera excesivamente crítica. Este problema es especial-
mente cierto en l@s egresados de primero o segundo año. Aquellos no-
beles en la vida universitaria, que ya de por si les cuesta participar, pue-
den sentir miedo a ser juzgad@s y/o censurad@s o simplemente a
‒ ‒
equivocarse, sino actuamos con delicadeza. El recurso de explicar pre-
viamente la filosofía que subyace en el uso de esta herramienta docente
protege a los discentes de estas “reacciones emocionales negativas” y,
aún más, si nos preocupamos de recordar constantemente cual es el ver-
dadero objetivo de la tarea y el enorme valor que posee la duda como
instrumento para avanzar en la adquisición del conocimiento. En mis
clases he tenido que efectuar recordatorios frecuentes al respecto que
han animado a la participación.
4.2.3 Aulas abarrotadas: este es una verdadera barrera para cualquier
método docente. Tod@s estamos de acuerdo que con el alto número de
egresad@s cualquier metodología didáctica que no vaya más allá de
una clase magistral resulta utópica. Poco podemos hacer respecto a este
hecho que además supone una carga excesiva de trabajo para los profe-
sores y una disminución de la calidad educativa para l@s alumn@s.
Aunque nos quedan algún recurso como por ejemplo: la división del
aula en pequeños grupos o en dos grandes grupos y que sean estos los
que logren el consenso, tras lo cual haremos una puesta en común.
4.2.4. Como ya he señalado más arriba, la implementación de los diá-
logos socráticos no es fácil. A las barreras descritas hasta ahora hay que
añadir la falta de formación de los docentes en este tipo de metodolo-
gías cuyos objetivos van en dirección contraria a los fines sobre los que
esta construido el sistema educativo académico actual. Adicionalmente,
los diálogos socráticos exigen adaptarse al aula concreta y un alto nivel
de improvisación118, obligando al docente, las más de la veces, a ser
capaz de virar el “rumbo” de la clase. Solo con una preparación deta-
llada de la clase, la experiencia y la confianza del docente en esta prác-
tica se superará este obstáculo.
118Improvisar no significa “no preparar”, sino ser capaz de cambiar los objetivos propuestos ese día,
así como ser hábiles en el diálogo que vaya surgiendo.
‒ ‒
4.3. LAS LIMITACIONES DE ESTA METODOLOGÍA. PARA LO QUE
DEFINITIVAMENTE NO SIRVEN LOS DIÁLOGOS SOCRÁTICOS.
5. DISCUSIÓN
Hasta aquí creo que he cumplido con buena parte de uno de los objeti-
vos centrales que me plantee en este estudio, a saber: indagar las
‒ ‒
posibilidades que nos ofrece hoy en día el método socrático en la do-
cencia universitaria de las ciencias sociales y humanas. A continuación,
me emplearé en enmarcar esta metodología y sus resultados en la nueva
corriente educativa denominada pedagogía de la lentitud. Para lo cual
será de rigor unas breves líneas en torno a sus significados y propósitos,
a pesar de que much@s sospechen ya los fundamentos que la sustentan.
Seguidamente, veremos las analogías que comparte con los diálogos
socráticos como herramientas docentes.
119 Se le considera a Maurice Holt el principal impulsor del slow learning en Europa, a partir de la
publicación de su artículo “It’s Time to Start the Slow School Movement” en el año 2002.
120 Puig P. (2017) nos describe la tendencia Slow fashion como un movimiento dentro de la deno-
minada economía circular que rechaza la fabricación masiva de ropa y sus consecuencias ambien-
tales, defendiendo una producción de calidad. El termino fue acuñado por Kate Fletcher del Centre
for Sustainable Fashion de UK, en el año 2007
121 El movimiento slow science aboga por una “ciencia lenta”, menos burocratizada y dependiente
de la financiación externa que nos arrastra a primar más la cantidad que la calidad en nuestras
publicaciones. Un referente es la obra de Isabelle Stengers (2018), profesora de Filosofía de la
Ciencia en la Université Libre de Bruxelles.
122 Como continuación a su primer trabajo, Carl Honoré ha publicado: “La lentitud como método.
Como ser eficaz y vivir en un mundo veloz” (2013b) y “Bajo presión. Como educar a nuestro hijos
en un mundo hiperexigente” (2019)
‒ ‒
los principios de esta corriente filosófica. En su obra, Honoré, C nos
señala que tenemos inoculado el “virus de la prisa” (2013a), un virus
que se ha convertido en pandémico porque ha colonizado todos los ám-
bitos de nuestras vida y va penetrando en casi todas las culturas. Mas,
desde la antropología y/o la sociología sabemos bien cuando nació este
virus, donde y las circunstancias que lo provocaron.
Ya un autor como Max Weber en su obra “La ética protestante y el
espíritu del capitalismo” publicada por primera vez en 1905, nos alum-
bró acerca de ese nuevo “espíritu” que surge en la era moderna. Un
espíritu que “se trasluce”, en parte, en los textos de Benjamín Franklin
y su famosa afirmación “el tiempo es dinero”123, imponiéndose cual
sentencia con validez moral y universal. Un componente importante de
este nuevo ethos del capitalismo moderno, continua relatando Weber,
es la racionalización del tiempo, la preocupación por su cálculo y su
expresión más inmediata en la nueva ética económica moderna (Weber,
1991), que acaparar todos los ámbitos de nuestra vida cotidiana trans-
formando por completa e irremediablemente nuestra experiencia con el
tiempo. Desde entonces hasta ahora, tod@s nos hemos convertido en
portadores del “virus de la prisa”.
Desde el cine, cual etnógrafo del capitalismo según nos lo presenta Fi-
linich, N. R. (2019), Charlie Chaplin representa su mordaz tragicome-
dia “Tiempos Modernos” (1936) y los efectos perniciosos que produce
en el individuo el nuevo imperio de la ley del tiempo. El movimiento
imparable de la aguja del reloj inunda la pantalla al inicio del film, su
pulso inquebrantable marca el ritmo de la nueva vida moderna con
transcendentes consecuencias para nuestro modo de estar en el mundo.
Y como no, la era de la industrialización con su espíritu mercantilista
arribó también a las costas de la educación sojuzgando a las aulas. Sin
embargo, este nuevo orden pedagógico marcado por un tiempo frené-
tico y la cantidad de información que debe ser asimilada va a ser con-
testado desde distintos lugares y por diversas voces. Una de estas
123Debemos de tener presente que para Max Weber los texto de Benjamín Franklin no representan
en su totalidad al ethos capitalista, de tal forma Weber asegura: “sin embargo, no podemos afirmar
que dicho texto abarque todo lo que debe ser considerado como tal “espíritu”” (Weber, M. 1991, p.
22)
‒ ‒
respuestas es la pedagogía del caracol, como la ha denominado Zava-
lloni, G. (2010), una deriva más de ese movimiento global que “elogia
la lentitud”.
Mas, cabe preguntarnos ¿Cuáles son los fundamentos básicos de esta
“nueva” cultura educativa? Honorè, C. ya nos indica que el movimiento
slow. “Carece de sede social y de página web, no tiene un dirigente
único ni un partido político que haga bandera de su mensaje”. (2013a,
p. 10) Sin embargo, bien podríamos tomar como referencia los quince
principios que nos sugiere el maestro Domènech. J, (2009) estos son:
‒ ‒
14. La escuela tiene que educar el tiempo.
‒ ‒
administrativas y profesionales que interrumpen estos procesos crucia-
les de crecimiento intelectual y libertad personal. (2015, p. 1236)
‒ ‒
6. CONCLUSIONES
Tras la senda por la que hemos caminado podemos considerar, sin lugar
a duda, a los diálogos socráticos como una estrategia docente más de
la pedagogía lenta. Asimismo, nos hemos facultado para declarar que
el método socrático bien puede utilizarse para la enseñanza de las cien-
cia sociales y humanas, traspasando la didáctica de la filosofía. Es más,
ante el vacío existen, me posiciono en la defensa de esta, y otras herra-
mientas docentes similares, las cuales permiten a l@s alumn@s desa-
rrollar competencias sociales, a la vez que les forman en el pensamiento
autónomo y reflexivo que les capacita como ciudadan@s éticos y críti-
cos, conscientes de ser parte de una comunidad.
Este último punto no es baladí, la cuestión “de lo común”, “de lo co-
munitario” es hoy en día un tema marginal; incluso, paradójicamente,
para los que enseñamos en facultades de humanidades. Esto habla mu-
cho de nosotr@s, del sistema educativo y de la sociedad en la que esta-
mos inmersos; más, no estamos obligados a permanecer de brazos cru-
zados. Hunsinger, J., en su artículo en contra de la “velocidad cosmo-
polita” que se esta produciendo actualmente en las universidades, nos
propone que nos tomemos el tiempo necesario para discutir el conoci-
miento; y lo que es más importante, cito textualmente: “al reducir la
velocidad, quiero que tengamos más tiempo para pensar, no sólo para
pensar individualmente, sino para pensar como comunidad” (2013,
p.127)126. Enseñar a “pensar como comunidad” es la aportación más
brillante de este instrumento docente que son los diálogos socráticos.
Cierto es que, hoy por hoy, aplicar el slow learning a cada rincón del
campus universitario es una quimera. Por otra parte, pese a que nos ro-
dea el lenguaje del discurso burocrático en torno a las competencias,
habilidades o destrezas que l@s estudiantes deben de adquirir, el “cu-
rrículum oculto” o la pedagogía invisible127 del régimen capitalista
126 La traducción es mía. El original reza: “By slowing down, I want us to have more time to think,
not just think individually, but to think as a community.”
127 Acaso, M. (2012) en su obra “Las pedagogías invisibles. El espacio del aula como discurso” nos
propone hablar de pedagogías invisibles, esto supone entender el discurso pedagógico como sis-
tema de representación, lo que implica “aprende a analizar los mundos pedagógicos que les rodean
desde una perspectiva de semiótica crítica”. (2012, p. 51) la cursiva es de la autora.
‒ ‒
esquizoide adicto a la velocidad nos acompaña inexorablemente. Sin
embargo, no tenemos porque dejarnos arrastrar por el torbellino de la
corriente de este ordenamiento social.
El escritor y especialista en educación Ken Robinson en la conferencia
impartida “Enseñar es un arte” (2018) nos recordó a los docentes que
“…desde el sistema se puede luchar por el sistema…” y prosiguió de-
fendiendo:
[…] si trabajas en la educación entonces eres el sistema. Tú y todo el
mundo. No consiste en decir: tienen que cambiar los demás. Lo que tú
haces forma parte de ello. Cuando entras en clase, se cierra la puerta,
todos esos niños te miran y te prestan atención, lo que ocurre a conti-
nuación para ellos es el sistema educativo. A ellos les da igual quién
sea el ministro de educación, les da igual el informe PISA, nunca han
oído hablar de Andreas Schleker, les da lo mismo. Lo único que saben
es lo que tú vas a hacer ahora, y lo que tú les des, lo que les pidas, como
les respondas, eso es la educación para ellos. Por eso siempre digo que
el punto de partida eres tú. (Aprendemos juntos, 2018)128
‒ ‒
7. REFERENCIAS
Acaso, M. (2012). Las pedagogías invisibles. El espacio del aula como discurso.
Los libros de la Catarata
BBVA, Aprendemos juntos (Productora) (12 de noviembre 2018). “Educar es un
arte” Ken Robinson, educador y escritor. [ video en internet].
https://youtu.be/WP8WSK-6Pj0
Chaplin, C. (Director). 1936. Tiempos Modernos [ película]. United Artists.
Domènech. J, (2009). Elogia de la educación lenta. Grao.
Dress Boele (2017). Los beneficios del diálogo socrático. En Segura, C. (Ed.), El
método socrático hoy. Para una enseñanza y práctica dialógica de la
filosofía (pp. 29-56). Escolar y Mayo
Filinich, N. R. (2019). La mirada etnográfica de Charles Chaplin: la crítica del
capitalismo en Tiempos Modernos. Culturales, 7, 1–42.
https://doi.org/10.22234/recu.20190701.e452
García, J.J. (2017). El uso del método socrático en el análisis de los textos. En
Segura, C. (Ed.), El método socrático hoy. Para una enseñanza y
práctica dialógica de la filosofía (pp. 93-111). Escolar y mayo.
Holt, M. (2002) It’s Time to Start the Slow School Movement. Phi Delta Kappan,
84(4), 264-271. https://doi.org/10.1177/003172170208400404
Honoré, C. (2013a). “Elogio de la lentitud. Un movimiento mundial desafía el
culto a la velocidad”. RBA bolsillo
Honoré, C. (2013b). “La lentitud como método. Como ser eficaz y vivir en un
mundo veloz”. RBA bolsillo
Honoré, C. (2019). “Bajo presión. Como educar a nuestro hijos en un mundo
hiperexigente”. RBA bolsillo
Hunsinger, J. (2013). Against Speed Cosmopolitanism towards the Slow
University. Fast Capitalism 10 (1). doi:10.32855/fcapital.201301.011
Montessori, M. (2003) El método de la pedagogía científica aplicado a la
educación de la infancia. Biblioteca Nueva S.L
Mountz, A., Bonds, A., Mansfield, B., Loyd, J., Hyndman, J., Walton-Roberts,
M., Basu, R., Whitson, R., Hawkins, R., Hamilton, T., & Curran, W.
(2015). For Slow Scholarship: A Feminist Politics of Resistance through
Collective Action in the Neoliberal University. ACME: An International
Journal for Critical Geographies, 14(4), 1235-1259.
https://www.acme-
journal.org/index.php/acme/article/view/1058
‒ ‒
Obaya V., Vargas R. y Delgadillo G. (2011). Aspectos relevantes de la educación
basada en competencias para la formación profesional. Educación
Química, 22 (1), 63-68. Universidad Nacional Autónoma de México.
Platón. (2003). Diálogos: Apología de Sócrates. Gredos
Puig, P. (2017). Slow Fashion: moda, sostenibilidad y negocio. Universitat
Politécnica de València.
Segura, C. (2017). Prólogo. En Segura, C. (Ed.), El método socrático hoy. Para
una enseñanza y práctica dialógica de la filosofía (pp. 9-12). Escolar y
mayo
Slow Sciences Academy (2010) Slow-Sciences.org http://slow-science.org/
Stengers, I. (2018). Another science is possible: A manifesto for slow science.
Polity Press
Weber, M. (1991). La ética protestante y el espíritu del capitalismo. Premia
editora.
Zavalloni, G. (2010). Por una pedagogía del caracol. Aula de Innova-
ción Educativa 193-194, 23-26.
‒ ‒
CAPÍTULO 74
GORKA ZAMARREÑO-ARAMENDIA
Elena Cruz-Ruiz
ELENA RUIZ ROMERO DE LA CRUZ
Universidad de Málaga
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
1.1. EL USO DE YOUTUBE EN EL ÁMBITO UNIVERSITARIO
YouTube se define a sí mismo como “un foro donde los usuarios pue-
den interactuar, obtener información e inspirar a otras personas de todo
el mundo” (López Aguilar, 2018). De este modo, sirve de plataforma
de distribución para creadores de contenido original y para todo tipo de
anunciantes dada su capacidad de microsegentación..YouTube se ha
convertido en un punto de encuentro para quienes desean exhibir y ver
videos. El sitio web para compartir vídeos fundado en 2005, es un ser-
vicio gratuito en el que se almacenan administran y difunden videos
simplemente registrando los datos del usuario en una cuenta. Los usua-
rios de la red social pueden visualizar, buscar y subir vídeos, así como
realizar descargas. El crecimiento de Youtube ha sido exponencial, ya
en 2007 había almacenados en sus servidores 42,5 millones de videos
y las visitas diarias superaban los 100 millones (Cheng, Liu, & Dale,
2013). En la actualidad Youtube es la segunda página más visitada del
mundo (Alexa.com), está disponible en 90 países y soporta 80 idiomas
que se reparten entre los más de 2.000 millones de usuarios activos, que
consumen más de 1.000 millones de horas viendo videos lo que equi-
vale a que cada usuario visualiza unas 15 horas mensuales de conteni-
dos (Youtube, 2020).
A pesar del uso eminentemente recreativo con el que fue concebida la
red social Youtube, el potencial para su uso educativo es innegable y
no ha pasado desapercibido (Snelson, 2011, Blade, 2016) . Desde su
creación múltiples instituciones educativas y académicas han estable-
cido su presencia en YouTube creando sus propios sitios, denominados
canales de Youtube, destinados a compartir vídeos. A principios de
2009, YouTube procedió al lanzamiento de YouTube EDU
(http://www.youtube.com/edu), un conjunto de canales que tienen a co-
legios, institutos y universidades como protagonistas. De este modo, la
red social, se ha convertido en un importante recurso de información
abierta, con un gran potencial para la mejora del conocimiento de mul-
titud de temáticas (Zahn, Krauskopf, Hesse, & Pea, 2010), aprender y
mejorar los procedimoentos (Lee & Lehto, 2013) y como base de apoyo
al estudio universitario (Orús et al., 2016).
‒ ‒
La tendencia de consumo de videos educativos ha ido en aumento, no
sólo en Youtube sino que es una tendencia más amplia de visionado de
vídeos educativos, que según Purcell (2010) aumentaron del 22% al
38% entre 2007 y 2009. El potencial de YouTube para la educación en
línea ya se ha examinado anteriormente (Snelson, 2009). Una de las
ventajas de usar Youtube en la educación es que proporciona acceso en
línea a una enorme cantidad de videos públicos de una vasta temática.
El uso es muy sencillo por lo que es muy simple enlazar o incrustar
vídeos en los diferentes contenidos en línea. Las posibilidades para los
educadores son múltiples pudiendo crear modelos interactivos, simula-
ciones o tutoriales enlazando vídeos a través de las herramientas que
proporciona YouTube (Roodt & Peier, 2013). Fleck et al. (2014) con-
firmaron en sus investigaviones, que YouTube es beneficioso para los
estudiantes como herramienta de aprendizaje, además de ser una herra-
mienta eficaz para enseñar habilidades y tareas comunes en un entorno
formal o en el hogar. Roodt y Peier (2013) descubrieron que el uso de
YouTube en el aula tenía un efecto positivo en el compromiso general
de los estudiantes y en su compromiso conductual, emocional y cogni-
tivo.
Las investigaciones académicas han demostrado que el uso de YouTube
se extiende a todo tipo de disciplinas y conocimientos. En el campo de
la docencia médica, Jaffar (2012) demostró que el uso de YouTube
ayuda a mejorar el proceso de enseñanza-aprendizaje de la anatomía,
en el caso de que los vídeos examinan, diversifican y se orientan hacia
los objetivos establecidos en el curso. Burke et al. (2009) demostraron
que los profesores que utilizan esta red social la consideran un recurso
didáctico eficaz en el ámbito de las Ciencias Sanitarias. La investiga-
ción también señaló que los docentes que no utilizaban Youtube se ma-
nifestaban muy interesados en conocer sus posibilidades para utilizarlo
como recurso didáctico en las aulas. En el caso del marketing Burnett
(2008) encontró de gran utilidad la utilización de Youtube animando a
sus propios alumnos a realizar presentaciones de productos en línea que
luego eran colgadas en la red social. Por el contrario, Chen (2013) des-
cubrió que es los estudiantes para aprender lenguas extranjeras no se
‒ ‒
sienten animados ni atraídos a utilizar YouTube debido a las limitacio-
nes culturales y educativas que plantean los contenidos existentes.
En el ámbito específico de la Universidad, YouTube puede cumplir
múltiples funciones (Buzzetto-More, 2014). Son destacables las com-
petencias en comunicación que permiten desarrollar de las habilidades
de los estudiantes para encontrar, elegir y evaluar presentaciones au-
diovisuales. Ramírez-Ochoa (2016) ha indicado el beneficio que tiene
el uso de Youtube en las aulas universitarias cuando los estudiantes ac-
ceden a los contenidos a través de sus teléfonos móviles para compren-
der mejor lo que se enseña en el aula.
Algunos investigadores han indicado que el uso de Youtube entre los
alumnos tiene beneficios positivos ya que descubrieron que quienes lo
utilizaban mejoraba la comprensión de los contenidos del curso de
modo que obtuvieron mejores resultados académicos que quienes no lo
utilizaron (Rodríguez Villalobos & Fernández Garza, 2017). Los alum-
nos que reciben contenidos extra en forma de listas de reproducción
como material complementario del curso académico expresaron los be-
neficios que encuentran ya que mejora su mejora su comprensión y
tiene efectos sobre la participación y el pensamiento crítico (June,
Yaacob, & Kheng, 2014).
‒ ‒
Cuando existe una mediación tecnológica, en especial la utilización de
la web 2.0 debemos hablar de narración digital. Esta se define como la
combinación de la narración tradicional con diversos medios digitales,
como imágenes, audio y vídeo. Es decir, la narración oral tradicional
combinada con las herramientas multimedia y de las tecnologías de la
información propias del siglo XXI. Aunque la narración no es una
nueva forma de comunicación, la narración digital sí lo es. A través de
la narración digital se pueden crear historias relacionadas con la vida
de las personas, su trabajo y sus experiencias, utilizando como herra-
mientas la música, la imagen, el vídeo y la narración, historias que sue-
len compartirse en línea. (Kapaniaris, Papadimitriou, 2013). Miller
(2004), define la narración digital como el uso de plataformas de me-
dios digitales interactivos con fines narrativos, ya sea para crear histo-
rias de ficción o de no ficción. La narración digital interactiva (IDS)
permite al usuario influir en el flujo y a veces incluso en el contenido
de la historia. Esta nueva forma de transmitir información implica a
profesionales de múltiples disciplinas (Rizvik et al., 2019).
Gunter y Kenny (2008) trabajaron con herramientas como iMovie o
Movie Maker para crear trailers de dos minutos sobre las lecturas reco-
mendadas en el curso similares a los trailers de películas que se ven en
el cine (Woods & Beach, 2008). Estas creaciones digitales comunica-
ban aspectos del tema, la trama, los personajes y el escenario para tentar
al espectador a leer el libro en el que se basaba.
Los elementos multimedia que conforman la historia digital utilizan el
ordenador para contar una historia en torno a un tema específico que
puede tener un punto de vista particular. Por lo general las historias
digitales tienen una breve duración, entre 2 y 10 minutos archivándose
en un formato digital que puede visualizarse en cualquier medio capaz
de reproducirlos (B. R. Robin, 2016). Los archivos digitales pueden
subirse a internet en especial a plataformas de visualización como
Youtube o Instagram donde pueden ser compartidas, descargadas y co-
mentadas por los usuarios de estas redes sociales.
Robin (2006) realiza una clasificación de los diferentes tipos de relatos
digitales:
‒ ‒
1) narraciones personales: relatos que contienen relatos de incidentes
2) documentales históricos: relatos que examinan acontecimientos dra-
máticos que nos ayudan a comprender el pasado.
3) historias que informan o instruyen al espectador sobre un concepto
o
En la actualidad la narración digital es muy popular y se practica en una
gran cantidad de entornos como escuelas, universidad, bibliotecas, mu-
seos, empresas o instituciones. En los entornos educativos, los profeso-
res y los estudiantes crean narraciones digitales sobre todos los temas
imaginables y en cualquier disciplina.
La narración digital se puede ser una herramienta educativa para los
estudiantes de todas las edades y niveles que crean sus propias historias.
Una de las virtudes del relato digital es que aprovecha la creatividad de
los que deben utilizar diversos recursos como bibliotecas, internet para
investigar y posteriormente analizar y sintetizar la información (Robin,
2006).
La narración digital tiene un buen encaje en las aulas de educación su-
perior donde los estudiantes pueden utilizar las experiencias personales
y la información de la que disponen para seleccionar los temas del re-
lato, redactar un guión, seleccionar y grabar imágenes y producir la na-
rración multimedia para obtener el relato final. El resultado es un arte-
facto multimedia que ilustra con riqueza no sólo lo que el alumno ha
investigado y aportado personalmente, lo que ha aprendido de la expe-
riencia (Rosales-Statkus & Roig-Vila, 2017; Zamarreño-Aramendia, G;
Ruiz-Romero de la Cruz, E; Cruz-Ruiz, 2018).
La narración digital supone una oportunidad para capacitar a los estu-
diantes mediante diversas vías entre las que destacan la creatividad, la
intelectual y la cultural (Benmayor, 2008). El esfuerzo de crear un re-
lato digital multimedia, con los efectos acumulativos de técnicas y co-
nocimientos que requiere, produce un encaje de los conocimientos ad-
quiridos de manera individual o gracias a la mediación del profesor en
sus clases (Barber, 2016). Otra de las ventajas es que permite a los
‒ ‒
estudiantes evaluar la realidad que les rodea y producir su propia inter-
pretación de la misma (Gregori-Signes, 2020:247).
2. OBJETIVOS
‒ ‒
y las posibilidades tecnológicas disponibles entre los alumnos ya que
dada la pandemia de la Covid-19 y el confinamiento al que estaba so-
metida la población, podía haber dificultado la puesta en marcha y re-
solución satisfactoria de la experiencia. Finalmente se seleccionaron
dos grupos de primer curso de la asignatura de Historia Económica del
grado de Economía y Administración de empresas de la Universidad de
Málaga que sumaron 118 alumnos que trabajaron en grupos de 2 a 4
miembros. Los docentes se tuvieron que desarrollar las siguientes ac-
ciones:
‒ Preparación de guías para la elaboración de material audiovi-
sual.
‒ Evaluación
Tras finalizar los trabajos y haber sido evaluados, los participantes de-
bieron contestar un cuestionario cerrado de 12 preguntas que permitían
valorar (mediante la escala de Likert), la experiencia utilizando una en-
cuesta en línea realizada mediante la aplicación Survey Monkey.
4. RESULTADOS
‒ ‒
incluida en la Suite de Mac fue otra de las aplicaciones más utilizadas
con un 24 por ciento de los trabajos. El resto de los alumnos recurrió a
programas como el Sony Vegas, Movie Maker o You Cut o aplicacio-
nes profesionales de edición de video como Final Cut.
La encuesta fue enviada a todos los alumnos obteniendo 109 respuestas
de las 118 posibles. Los resultados de la encuesta indican que la edad
media es algo superior a los 18 años siendo mayoritariamente mujeres
63,9% del total de los participantes. La edad media de los participantes
se situó en los 18,75 años,
Preguntados por la utilidad de la experiencia, los alumnos reconocieron
que les había servido para comprender mejor los contenidos de la asig-
natura, alcanzando una valoración media de 4,42 puntos sobre 5. Una
puntuación similar recibe la pregunta sobre la adecuación de la expe-
riencia a la metodología de aprendizaje, recibiendo una valoración de
4.44 sobre 5 puntos.
Los alumnos expresaron en un 33 por ciento que el Relato Transmedia
les había permitido bastante a comprender el contenido de la asignatura
mientras que el 58,3 por ciento declararon que les había permitido mu-
cho. La valoración del trabajo grupal, es también muy positiva, el 63,9
por ciento declara haber sido muy útil mientras que el 25 por ciento
declara la experiencia como “útil”. La metodología de trabajo fue valo-
rada como “muy adecuada” por el 66,7 por ciento de los alumnos y
“útil” por el 19,4 por ciento. El grado de interés de la asignatura al desa-
rrollarse la asignatura es muy alta en el 61,1 por ciento de los encues-
tados y alta por el 22,2 por ciento (gráficos 1 y 2).
‒ ‒
GRÁFICO 1. Valore la comprensión de los contenidos de la asignatura.
‒ ‒
GRÁFICO 3. ¿En qué grado ha aumentado la experiencia HEMAK su interés por la asig-
natura?
‒ ‒
recomendada a otros compañeros como método de aprendizaje en un
91,7% de los casos. El desarrollo de la actividad en grupo también tuvo
el efecto positivo de que los alumnos que integraban los distintos gru-
pos de trabajo pudieron aprender competencias y conocimientos entre
ellos, un 87,9% de los encuestados indicó el alto grado de entendi-
miento e interacciones que experimentaron.
Preguntados por el grado de dificultad a la hora de realizar el ejercicio
(Figura 4), el 44,4% alumnos encontraron que la dificultad era normal,
mientras que un 36,1% la calificaron de difícil mientras que un 16,7%
la describió como muy difícil. La satisfacción global de la experiencia
HEMAK entre los alumnos (Figura 5) recibió una calificación media
de 4,61puntos, estando plenamente satisfechos el 69,4 % de los alum-
nos.
‒ ‒
GRÁFICO 5. Satisfacción global de la experiencia.
‒ ‒
que no eligieron ese determinado tema para la realización de su relato
digital.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
con las tesis de Burnett (2008) que sugirió que una solución para elevar
el nivel de uso de YouTube por parte de los estudiantes podría ser darles
la oportunidad de preparar y producir sus propios vídeos que reflejen lo
que han aprendido en el aula. De este modo, pueden expresar ideas y
opiniones que no han tenido la oportunidad de discutir con sus profeso-
res. Buzzetto-More, (2015) inciden en la utilidad de Youtube para me-
jorar la participación de los estudiantes en los cursos.
Una de las mayores trabas a la hora de replicar este tipo de experiencias
son los docentes. Una gran mayoría no utilizan Youtube en su práctica
docente ni animan ni dirigen a los estudiantes a utilizarlo. Wilson (2015)
sugirió algunas razones, una de las cuales se centra en que los profesores
carecen de conocimientos suficientes sobre las características que ofrece
YouTube para apoyar el proceso educativo en general y la enseñanza de
los estudiantes en particular. Las universidades deben ayudar a que se
diversifiquen las fuentes que utilizan en sus materiales didácticos pro-
porcionando la infraestructura técnica adecuada.
La principal limitación de este estudio está relacionada con el tamaño de
la muestra, que fue pequeña debido a dos factores. En primer lugar, las
limitaciones impuestas por la COVID-19 que obligó a realizar la docen-
cia completamente en línea desde los propios domicilios de decentes y
alumnos. En segundo lugar, la propia complejidad del proyecto que im-
pide atender a un gran número de alumnos dado el tiempo limitado de
tutorías personalizadas del que dispusieron los profesores implicados en
la experiencia.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
mensajes en las frecuencias en las que están escuchando. El relato digi-
tal, que marca a los nativos digitales y los conecta con los contenidos
impartidos, representa una de las más poderosas herramientas educati-
vas a nuestro alcance.
El reto planteado en la experiencia HEMAK demuestra que la narración
digital es una poderosa herramienta que puede ser eficaz en la univer-
sidad. El proceso de creación de un relato digital que hace una década
se limitaba a ordenadores de sobremesa o portátiles es posible cons-
truirlo hoy en día, gracias a los dispositivos móviles mediante herra-
mientas gratuitas disponibles en la web. Las historias digitales transme-
dia se pueden compartir en línea y visionarse en multitud de dispositi-
vos lo que genera un alto grado de interacciones.
El relato digital se reveló como una poderosa herramienta de colabora-
ción entre los alumnos y permitió un conocimiento mucho más pro-
fundo de los temas abordados en la asignatura. A pesar de que los alum-
nos tienen un alto nivel de competencias en el manejo de tecnologías
digitales y software de edición y producción, se detectó cierta repeti-
ción de temas y formas narrativas, lo que hace necesario que se refuer-
cen los conocimientos de los alumnos en torno a la forma de construir
los relatos, así como en técnicas audiovisuales específicas.
Como conclusión, la integración del relato digital como herramienta de
aprendizaje ha permitido mejorar los conocimientos no sólo del tema
que cada grupo eligió, sino que, al visionar los trabajos de sus compa-
ñeros, el conocimiento global mejoró. Este extremo se puede corrobo-
rar mediante los resultados obtenidos por los alumnos en las pruebas de
conocimiento. Esto demuestra la utilidad del relato digital y las plata-
formas de contenido como una oportunidad para la enseñanza y el
aprendizaje que abre múltiples oportunidades y posibilidades, incluso
en un entorno completamente virtual como el generado por la COVID-
19.
‒ ‒
6. REFERENCIAS
‒ ‒
Fleck, B.K., Beckman, L.M., Sterns, J.L. y Hussey, H.D. (2014), YouTube in the
classroom: Helpful tips and student perceptions, Journal of Effective
Teaching, Vol. 14 No. 3, pp. 21-37.
Gregori-Signes, C. (2020). Digital Storytelling and Multimodal Literacy in
Education. Porta Linguarum Revista Interuniversitaria de Didáctica de
Las Lenguas Extranjeras. doi.org/10.30827/digibug.53745
Gunter, G., y Kenny, R. (2008). Digital booktalk: Digital media for reluctant
readers. Contemporary Issues in Technology and Teacher Education,
8(1), 84–99.
Hilner, J. (2012), “How to use online video in your classroom”, available at:
www.edutopia.org/youtube-educational-videos-classroom (consultado el
10 mayo 2021)
Isabel Ramírez-Ochoa, M. (2016). Posibilidades del uso educativo de Youtube.
Youtube´s educational possibilities uses. Ra Ximhai. 12(6), 537-546.
Jaffar, A.A. (2012), “YouTube: an emerging tool in anatomy education”,
Anatomical Sciences Education, Vol. 5 No. 3, pp. 158-164
June, S., Yaacob, A., y Kheng, Y. K. (2014). Assessing the use of youtube videos
and interactive activities as a critical thinking stimulator for tertiary
students: An action research. International Education Studies.
doi.org/10.5539/ies.v7n8p56
Lee,D.Y., Lehto, M. R. (2013). User acceptance of YouTube for procedural
learning: An extension of the technology acceptance model., Computers
& Education, 61, pp. 193-208. doi.org/10.1016/j.compedu.2012.10.001
Orús, C., Barlés, M. J., Belanche, D., Casaló, L., Fraj, E., Gurrea, R. (20216). The
effects of learner-generated videos for YouTube on learning outcomes
and satisfaction., Computers & Education, 95, pp. 254-269,
doi.org/10.1016/j.compedu.2016.01.007
Rizvic, S., Boskovic, D., Okanovic, V., Sljivo, S., y Zukic, M. (2019). Interactive
digital storytelling: bringing cultural heritage in a classroom. Journal of
Computers in Education, 6(1), pp.143-166.
Robin, B. (2006). The educational uses of digital storytelling. In Society for
Information Technology & Teacher Education International Conference.
709-716. Association for the Advancement of Computing in Education
(AACE)
Robin, B. R. (2016). The power of digital storytelling to support teaching and
learning. Digital Education Review.
https://doi.org/10.1344/der.2016.30.17-29
‒ ‒
Rodríguez Villalobos, M. C., & Fernández Garza, J. (2017). Uso del recurso de
contenido en el aprendizaje en línea: YouTube. Revista Apertura. 9(1),
pp. 22-31
Roodt, S., & Peier, D. (2013). Using Youtube in the Classroom for the Net
Generation of Students. Issues in Informing Science and Information
doi.org/10.28945/1823
Rosales-Statkus, S., & Roig-Vila, R. (2017). El relato digital (digital storytelling)
como elemento narrativo en el ámbito educativo. Notandum.
doi.org/10.4025/notandum.44.14
Snelson, C. (2009). Web-based video for e-learning: Tapping into the YouTubeTM
phenomenon. In Collective Intelligence and E-Learning 2.0:
Implications of Web-Based Communities and Networking.
doi.org/10.4018/978-1-60566-729-4.ch009
Snelson, C. (2011). YouTube across the Disciplines : A Review of the Literature.
Journal of Online Learning and Teaching.
Woods, D. R. y Beach, C. (2008/2009). Book trailer projects from classroom to
community: Virginia Tech students reach out to the local high school.
Virginia English Bulletin, 58(2), pp.42–47.
Zamarreño-Aramendia, G; Ruiz-Romero de la Cruz, E; Cruz-Ruiz, E. (2018). El
Storytelling como herramienta para la construcción del relato transmedia
en la enseñanza de la Historia Económica y el Marketing. In E. / U. de
Zaragoza (Ed.), Comunicación digital en Entornos Múltiples. Zaragoza.
Zahn, C., Krauskopf, K., Hesse, F. W., y Pea R. Digital video tools in the
classroom: How to support meaningful collaboration and critical
advanced thinking of students?, New Science of Learning Springer, New
York (2010), pp. 503-523
‒ ‒
CAPÍTULO 75
1. INTRODUCTION
In 2011 The World Health Organization report indicates that more than
one billion people have some form of disability, and almost 200 million
of them have significant functional difficulties. In addition, it warns that
over the years disability will be a source of greater concern for their
growth.
Despite being a growing group, people with disabilities (PWD) are of-
ten discriminated in both developed and undeveloped countries
(ESEEOC, 2018). This is materialized in the low level of employment
of this group worldwide, specifically of people with intellectual disa-
bilities (PWID) (ILO, 2014). This low level of employment entails high
costs for countries. Specifically, in middle- and low-income countries,
people with disabilities have an unemployment rate of 80%, which is
double the unemployment rate of this same group in developed coun-
tries (Groce et al., 2011).
Although there is no universal definition for disability (Ofuani, 2011),
it is defined by the International Classification of Functioning (ICF) as
a multidimensional phenomenon that arises from a dynamic interaction
between people and their physical and social environments (Hawking,
2011; Kritsotakis, et al., 2017). However, for a long-time disability was
‒ ‒
perceived as a chronic form of illness (Glat, 1995). And it was from the
mid-twentieth century onwards, when research in psychology imposed
the need to recognize people with disabilities as a social construction.
People with disabilities begins to be recognized as a valuable resource
for companies (Carter, et al., 2001; Verdonschot, et al., 2009; Vornholt,
et al., 2018), however, their professional careers are still limited be-
cause of discrimination and prejudice towards this group by individu-
als, institutions and society itself (Brown and Kalitzidis, 2013; Odom
et al., 2011). On the one hand, Allport defines prejudices as "an aversive
or hostile attitude toward a person who belongs to a group, simply be-
cause he belongs to that group and is therefore presumed to have the
objectionable qualities ascribed to the group" (Allport, 1957, p.7). On
the other hand, other work define prejudice as having a preconceived
idea about certain groups or cultural practices, such as, for example,
people with disabilities (Dovídio, et al., 2010). This author also state
that minority groups try to defend themselves from these prejudices,
developing prejudices towards majority groups as well. People who
suffer prejudice from the rest of society develop negative consequences
in many aspects of their lives. An example of this can be self-depres-
sion, difficulty in feeling included in the general community, and as a
consequence self-isolation (Jahoda, et al., 2004; Metzel and Walker,
2001).
Another equally important concept in this area is discrimination. Dis-
crimination is defined by The International Labor Organization Con-
vention (ILO, 1958) as any distinction, exclusion, or preference of an
individual or group that affects equality of opportunity or treatment in
relation to employment. In other words, discriminating against people
with disabilities means treating them unfavorably because of their dis-
ability without just cause (Equality and Human Rights Commission,
2019).
In summary, and as pointed out by other work, discrimination and prej-
udice are the main barriers among which people with disabilities find
themselves to enter the labor market (Neves-Silva, et al., 2015).
‒ ‒
In this paper we are going to discuss first what are the main employment
barriers faced by people with disabilities. Subsequently, the main ben-
efits of hiring this group will be analyzed, as well as the possible solu-
tions in the literature to reduce discrimination and prejudice towards
this group. In section 1.4 we focus on one of the possible solutions, i.e.,
the relationship between the perceived usefulness of training and the
motivation to hire people with disabilities in the future. In the following
sections we define the objectives of this work, the methodology fol-
lowed, and the results obtained from the surveys are presented. Finally,
a discussion is made to justify these results and the conclusions ob-
tained from this work are described.
Having a job is a very necessary aspect for all people, since it allows
having security, having social interactions, and of course, having a sal-
ary (Lastuka and Cottingham, 2016). All these benefits are also appli-
cable to people with disabilities who, as people without this handicap,
also want to have income, job security, among other aspects (Ali et al.,
2011; Lindsay et al., 2016). However, people with disabilities have
greater difficulty finding employment than the rest of society (Burke et
al., 2013; Hoque et al., 2014; Turcotte, 2014). This results in exces-
sively high unemployment rates worldwide within this group (Houten-
ville and Boege, 2019; Mavranezouli et al., 2014). These high unem-
ployment rates result in very negative consequences at both the per-
sonal and economic levels of people in this situation.
Regarding the economic consequences, unemployed people, in partic-
ular people with disabilities, are more vulnerable to living in a situation
of social poverty (Alcock, 2008). This leads to greater pressure on so-
cial security systems (Saunders, 2007). In the personal area, unem-
ployed people have low self-esteem and a negative perception of their
psychological well-being (Feldman, 1996).
For these reasons, some countries have tried to incentivize the hiring of
these groups with neoliberal reforms (Deckop et al., 2006) and by
adapting the environment and optimizing performance (Gómez and
‒ ‒
Peñaranda, 2019). These measures have now allowed companies to
begin to value the human capital of people with disabilities (Gómez and
Peñaranda, 2019). However, achieving the full labor integration of peo-
ple with disabilities, and specifically with intellectual disabilities, re-
mains a major social challenge worldwide.
For this reason, some researchers have focused on studying the reasons
why employers are reluctant to hire people with disabilities (Burke et
al., 2013; Unger, 2002). The reasons that prevent the full social inclu-
sion of people with disabilities can be classified under different per-
spectives (Castañeda, et al., 2019).
Firstly, there are the external factors that prevent the labor integration
of this group, such as the barriers existing in the labor context, such as,
for example, the barriers of displacement (Evans, 2017). And secondly,
there are factors that affect the hiring process. Among the main con-
cerns of human resources managers are the higher costs of training and
supervision of this group (Kaye et al., 2011), the lack of knowledge of
the requirements associated with anti-discrimination laws (Gerwurtz
and Kirsh, 2009) and the belief of lower efficiency and performance of
these people at work (Markel and Barclay, 2009). These motives were
classified into two categories: supply-side barriers and demand-side
barriers (Kocman et al., 2018).
On the one hand, supply-side barriers are composed of the difficulties
associated with people with disabilities. For example, the skills re-
quired for employment or the necessary training of this group. On the
other hand, demand-side barriers refer to employer-related issues. That
is, with beliefs about the additional costs of hiring these people
(Domzal et al., 2008; Scott et al., 2017), or false beliefs that this group
is not qualified for the position in question (e.g., Kaye et al., 2011), or
even that their performance is inferior to that of employees without doc-
umented disability (Lengnick-Hallet et al., 2008; Scott et al., 2017).
And another existing barrier highlighted by managers is a lack of un-
derstanding of anti-discrimination laws (Gerwurtz and Kirsh, 2009).
All this ends in negative attitudes of managers and peers towards people
with is disability.
‒ ‒
All this, together with recent research on this topic, allows us to confirm
that the cause of discrimination is due to the way society perceives and
acts towards disability (ILO, 2014; Vornholt, et al., 2018), i.e., it is due
to demand-side barriers. Specifically, Gómez and Peñaranda (2019)
state that the factors that limit the social inclusion of people with disa-
bilities are divided into two: objective and subjective. The former refers
to the great ignorance that seems to exist about the disabilities and abil-
ities that people with disabilities have, as well as the great difficulties
in access to jobs and means of transportation. And the subjective factors
refer to the high social prejudices that exist towards people with disa-
bilities.
‒ ‒
awareness, mainly, when the collective has intellectual disa-
bilities (Lindsay et al., 2018). To all this must be added the
incentives that organizations in some countries may receive
for hiring this collective.
‒ ‒
However, despite these benefits, discrimination against people with dis-
abilities continues to be a major challenge for our society. In particular
for people with intellectual disabilities, whose discrimination is more
pronounced than for people with physical disabilities (ONCE Founda-
tion and Manpower Foundation, 2008).
To solve this problem, some researchers have tried to come up with
possible proposals to reduce discrimination. On the one hand these so-
lutions range from simple strategies to complex multidimensional pro-
grams (WHO, 2011). On the other hand, these solutions can be classi-
fied into solutions to overcome supply-side barriers, and to overcome
demand-side barriers.
Regarding solutions to supply-side barriers, there is the increased train-
ing of groups with disabilities or the removal of physical barriers to
access the workplace (Emmett, 2006; Goertz et al., 2010; Mitra and
Samba, 2006a; OECD, 2010). While solutions to remove demand-side
barriers focus on greater commitment from top management. In partic-
ular, in the design and implementation of effective strategies, including
disability training and qualification programs for employees (Bruyère
and colleagues, 2004). These measures provided a solution to the prob-
lems encountered by other researchers, who claimed that discrimination
was caused by negative stereotypes and attitudes held by both employ-
ers and colleagues towards this group and their ability to work (Alcover
and Pérez, 2011; Berry and Meyer, 1995; Crudden and McBroom,
1999; Havranek, 1991; Lawthom, 2000; Thomas, 2001; Ren et al.,
2008).
In line with the above, some researchers stated that employers acknowl-
edged that they were not sufficiently informed about intellectual disa-
bility and believed that greater visibility of employment for people with
intellectual disabilities would promote inclusive employment in this
group (Kocman, et al., 2018; Moore, et al., 2017; Post et al., 2010).
However, other work revealed that managers were not convinced of this
statement, i.e., they were not convinced of the effectiveness of training
‒ ‒
to incentivize inclusive employment (Carvalho-Freitas, 2007). Because
of this lack of consensus Marques et al. (2020) asserted the need for
further research to clarify whether or not training in this context was
effective for increased hiring of people with disabilities. And this is the
reason why this paper is going to address this research gap. This study
will attempt to answer the question of whether or not the perceived Util-
ity of training positively affects the motivation to hire people with in-
tellectual disabilities.
2. OBJETIVES
Based on the above, the aim of this paper is to know, therefore, the
effect that the perception of the usefulness of disability-related training
has on the motivation to hire this group. To achieve this objective, this
paper tries to answer the following question: Does a greater perception
of the Utility of disability-related training imply a greater motivation to
hire this group? This question gives rise to other secondary questions,
such as: Does the individual's age influence the motivation to hire, and
what about the individual's gender or grade point average?
For this purpose, a quantitative empirical study based on surveys will
be carried out. These surveys will be carried out with students from the
Business School of the University of Almeria. It has been decided to
study this population because it is assumed that these students will be
future leaders and will make future hiring decisions in companies when
they enter the labor market.
3. METHODOLOGY
In order to carry out this work, a structured survey has been proposed
as a means for data collection. In this sense, the survey was addressed
to the students of the Faculty of Economics and Business Administra-
tion of the University of Almeria. In this process, a total of 167 surveys
were obtained, of which 159 were valid. The average age of the partic-
ipants was 22.96 years, with a variability of between 21 and 34 years.
Additionally, it collected information on the degree that the student was
studying within those offered by the Faculty of Economic and Business
‒ ‒
Sciences of the University of Almería in the 2nd, 3rd and 4th years of
their studies. Sixty percent were women and 40% men.
The survey was conducted online by all students. It was divided into
three parts. The first one was related to demographic questions about
the respondents, such as, for example, year of birth, course, career, gen-
der, among other questions.
The second part corresponded to questions to find out the perceived
Utility of the training in relation to disability. Specifically, this part was
composed of 6 items. And finally, the third part was composed of ques-
tions to find out the subject's motivation in relation to the hiring of peo-
ple with intellectual disabilities. This part was also composed of 6
items. The survey used a 5-point Likert-type response format, with 1
being "totally disagree" and 5 "totally agree".
Based on the theoretical model, Motivation for hiring people with in-
tellectual disabilities was proposed as the dependent variable. Likewise,
the Utility of the training received on intellectual disability has been
considered as the main independent variable. Likewise, in order to con-
textualize the sample, three control variables were chosen: age, gender
and average score.
4. RESULTS
‒ ‒
variance of the other that is not related to the dependent variable. In this
sense, age, therefore, becomes a key control variable.
As for the relationship of Utility with gender, it can also be seen in
Table 1, that both variables have a statistically positive correlation
(r=0.28, p<0.001).
Table 2 shows the results of the OLS regression carried out. Firstly, it
can be observed that there are no multicollinearity problems, having a
small variance inflation factor (VIF). Similarly, we observe that the
model is significant as a whole, as the F-statistic is significant. The total
variance explained through the adjusted R2 is 10.91%.
Regarding the parameter values β, we can observe how Utility and Age
are positive and statistically significant. This would indicate that the
higher the Utility of the training received on intellectual disability, the
higher the Motivation for hiring people with intellectual disability. Sim-
ilarly, the older the age of the students the higher the Motivation for
hiring. As for gender and average score, the results indicate that there
is no relationship with the Motivation to hire.
‒ ‒
TABLA 2. Regression OLS
5. DISCUSSION
‒ ‒
perceived Utility of training. Some authors such as Gray (1983) or Rife
and Belcher (1994) analyzed the perceived Utility of the training re-
ceived in a job search workshop and the participants' subsequent moti-
vation for the subsequent job search. Their results were encouraging,
i.e., they obtained a positive relationship between the perceived Utility
of the training and job search motivation. For this reason, the central
research question guiding this study was: Does a greater perception of
the Utility of disability training imply a greater motivation to hire this
group? And if so, do other variables such as age, grade point average
or gender influence motivation?
The results of this study revealed a direct relationship between the per-
ceived Utility of disability training and the motivation to hire people
with this handicap. These results are consistent with the work of Gray
(1983) or Rife and Belcher (1994). This may be because people who
find disability training useful are more likely to apply what they have
learned in the future (Liu et al., 2014), i.e., to have a more inclusive
attitude, and to reduce the biases they had prior to the training. This
reduction of prejudice is directly related to less discrimination of this
group (ILO, 2014; Vornholt, et al., 2018), and as a consequence to a
higher motivation for future hiring of people with intellectual disabili-
ties.
Another result obtained in this study was the negative correlation be-
tween Utility and age. This means that both have a positive and signif-
icant relationship with Motivation, it indicates, a priori, the possibility
that both cooperatively suppress a part of the variance of the other that
is not related to the dependent variable. In this sense, age, therefore,
becomes a key control variable. That is, the older the students the
greater the motivation for future employment of people with disabili-
ties. These results are contrary to other research claiming a non-linear
relationship between age and attitude towards disability (Chan et al.,
2009; Livneh, 1982; Strohmer et al., 1984). These studies claim that
children and younger adults have more positive attitudes compared to
adolescents and older adults. One possible explanation for the results
obtained in this study is due to the effect of the higher educational level
of the respondents. That is, the students surveyed are older as their
‒ ‒
educational level increases. And it is possible that since the variability
of the age variable is small, the age effect could not be measured cor-
rectly, and therefore, the results obtained show the effect of educational
level and not of age. Based on this explanation, it can be said that the
data obtained are in line with the work of Zheng and colleagues (2016)
or Au and Man (2006), which stated that people with higher educational
levels had a more positive attitude towards disability.
6. CONCLUSIONS
Although our society is becoming more and more aware of the inclusion
of people with some form of disability, whether physical or mental,
their unemployment rate is still high in relation to the unemployment
rate of people without disabilities. Their unemployment rate remains
high in relation to the unemployment rate of people without disabilities.
In particular, this rate is even higher for people with intellectual disa-
bilities.
Governments and international organizations have taken numerous in-
itiatives through legislation and treaties to reduce employment discrim-
ination and thus the unemployment rate of this group. Although there
has been an improvement in the employability of this group, there is
still much to be done.
Of all the solutions proposed to reduce this discrimination, this work
has focused mainly on solutions focused on the demand side, that is, on
reducing discrimination through the elimination of false beliefs held by
senior management of companies and their own colleagues towards this
group.
One of the strategies proposed in the literature, and pointed out in pre-
vious sections, was the training of top management and employees in
relation to people with disabilities. This training will allow them to
know this group correctly, and to eliminate those false beliefs that in-
crease discrimination and social exclusion.
‒ ‒
However, the following question arises: is training enough to reduce
discrimination, or is it necessary to perceive the Utility of this training
in order to obtain a greater motivation to hire?
This paper has attempted to provide a partial answer to the above ques-
tion. That is, this work has focused on studying whether there is any
relationship between the perceived Utility of disability training for fu-
ture business leaders, and the future motivation of these leaders to hire
people with some type of disability.
For this purpose, a structured survey was carried out among students of
the Faculty of Business Administration, specifically in the 2nd, 3rd and
4th years of the business-related degrees. This group was chosen due to
the greater probability that they will be future business leaders in the
future.
The main result of this study is that a greater perception of the Utility
of training indicates a greater motivation for hiring people with disabil-
ities. That is, the more people consider that the training received is use-
ful to them, the more likely they are to use the contents received in the
training in the future. This conclusion is very important, as it confirms
that in order to have a more inclusive and less discriminatory society,
it is not enough to provide training to society on this group. It is also
extremely important that people who receive the training also perceive
its Utility.
The question that arises after analyzing these results is the following:
What factors influence the perception of the Utility of the training? An-
swering this question would allow to increase the perception of it, and
therefore, that disability training would have a greater inclusive effect
in society. That is why this work proposes to investigate in this line to
achieve a more inclusive and less discriminatory society in relation to
people with disabilities, and specifically to people with intellectual dis-
abilities.
Another future line of research is to extend this study to current busi-
ness leaders. That is, to conduct a survey of workers and business lead-
ers in relation to the Utility of training and motivation to hire people
with disabilities. And even a survey could be conducted pre and post a
‒ ‒
training course on disability to check the effects of this and the per-
ceived usefulness of the same and its relationship with the motivation
to hire this group.
In short, it is important and necessary to continue working in this area
and to continue providing solutions that allow us to continue reducing
the existing employment gap between people with disabilities and peo-
ple without this handicap. As explained in this document, social inclu-
sion benefits us all.
Because as stated in the introduction, the number of people with disa-
bilities continues and will continue to grow in the future, mainly due to
the aging of the population. And as Professor Stephen Hawking said,
"disability need not be an obstacle to success. I have had motor neuron
disease for virtually all of my adult life. However, it hasn't prevented
me from having a prominent career in astrophysics and a happy family
life" (Hawking, 2011). However, he also acknowledged that his situa-
tion was very different from that of most disabled people in that his
success in theoretical physics ensured him adequate support "to live a
worthwhile life" (Hawking, 2011).
Disability is part of life, part of the human condition, and almost every
human being will suffer a temporary or permanent disability at some
point in his or her life. That is why this group, which was born as a
minority, will gradually become an important majority. And for this
reason, we must work to improve the living and working conditions of
this group. The WHO maintains the importance of promoting training
and eliminating barriers that prevent people with disabilities from par-
ticipating in society, accessing quality education and, of course, occu-
pying suitable jobs (Hawking, 2011).
As for the limitations of this work, there have been two main ones. The
first is that in this work we have focused on students of the business-
related degrees as future business leaders, without taking into account
other academic grades of different fields as engineers, architects,
among others. The second limitation was the age variability of the
study. The survey was conducted by 2nd, 3rd and 4th year students, so
the age range was perhaps small to observe the effects by age. It is
‒ ‒
possible that conducting this study in a wider age range may change the
results of this study.
7. ACKNOWLEDGMENTS
This work was carried out thanks to the collaboration of the students of
the University of Almería, specifically, of the Faculty of Economics
and Business Studies, for the completion of the surveys sent.
8. REFERENCES
Alcock, P. (2008). Poverty and social exclusion. In T. Ridge and S. Wright
(Eds.), Unders-tanding inequality, poverty and wealth: policies and
prospects (pp. 36-60). Chicago, IL: University of Chicago Press.
Alcover de la Hera, C. M., and Pérez Torres, V. (2011). Trabajadores con
discapacidad: problemas, retos y principios de actuación en salud
ocupacional. Medicina y seguridad del trabajo, 57, 206-223.
Ali, M., Schur, L., and Blanck, P. (2011). What types of jobs do people with
disabilities want? Journal of Occupational Rehabilitation, 21(2), 199–
210.
Allport, G. W., Clark, K., and Pettigrew, T. (1954). The nature of prejudice.
Au, K. W., and Man, D. W. (2006). Attitudes toward people with disabilities: A
comparison between health care professionals and students.
International Journal of Rehabilitation Research, 29(2), 155-160.
Berry, J. O., and Meyer, J. A. (1995). Employing people with disabilities: Impact
of attitude and situation. Rehabilitation psychology, 40(3), 211.
Blau, P. (1964). Exchange and power in social life. Wiley.
Brown, S., and Kalaitzidis, E. (2013). Barriers preventing high-quality nursing
care of people with disabilities within acute care settings: a thematic
literature review. Disability & Society, 28(7), 937-954.
Bruyere, S. M., Erickson, W. A., and VanLooy, S. (2004). Comparative Study of
Workplace Policy and Practices Contributing to Disability
Nondiscrimination. Rehabilitation psychology, 49(1), 28.
Burke, J., Bezyak, J., Fraser, R.T., Pete, J., Ditchman, N., and Chan, F. (2013).
Employers’ attitudes towards hiring and retaining people with
disabilities: a review of the literature’. Australian Journal of
Rehabilitation Counselling, 19(1), 21–38.
Carter, J. M., and Markham, N. (2001). Disability discrimination: The UK's act
requires health services to remove barriers to access and participation.
‒ ‒
Chan, F. E., Da Silva Cardoso, E. E., and Chronister, J. A. (2009). Understanding
psychosocial adjustment to chronic illness and disability: A handbook
for evidence-based practitioners in rehabilitation. Springer Publishing
Co.
Crudden, A., and McBroom, L. W. (1999). Barriers to employment: A survey of
employed persons who are visually impaired. Journal of Visual
Impairment & Blindness, 93(6), 341-350.
De Carvalho Freitas, M. N. (2007). A inserção de pessoas com deficiência em
empresas brasileiras: Um estudo sobre as relações entre concepções de
deficiência, condições de trabalho e qualidade de vida no trabalho. Ph.D.
Thesis, Universidade Federal de Minas Gerais, Belo Horizonte, Brazil.
Deckop, J., Konrad, A.M., Perlmutter, F.D., and Freely, J.L. (2006). The effects
of human resource management practices on the job retention of former
welfare clients. Human Resource Management Journal, 45(4), 539–559.
Domzal, C., Houtenville, A., and Sharma, R. (2008). Survey of employer
perspectiveson the employment of people with disabilities: Technical
report. Office of Disability and Employment Policy, U.S. Department of
Labor.
Dovidio, J. F., Hewstone, M., and Esses, V.M. (2010). Prejudice, stereotyping
and discrimination and empirical overview. In Hewstone Hewstone, M.,
Glick, P., Esses, V.M., (Eds.), The SAGE Handbook of Prejudice,
Sterreotyping and Discrimination (pp. 3-29). Sage: London, UK.
Emmett, T. (2006). Disability, poverty, gender and race. In B.Watermeyer, L.
Swartz, T. Lorenzo, M. Schneider, & M. Priestly (Eds.), Disability and
social change: A South African agenda (pp. 207–233). Cape Town:
HSRC Press
ES Equal Employment Opportunity Commission (2018). Disability
Discrimination; USEEO: Washington, DC, USA. Available online:
www.eeoc.gov/laws/types/disability.cfm
Equality and Human Rights Commission (2019). Understanding Legal
Definitions of Discrimination and Unlawful Behavior in the Equality
Act. Equality and Human Rights Commission: London, UK,
Feldman, D. C. (1996). The nature, antecedents and consequences of
underemployment. Journal of Management, 22(3), 385-407.
https://doi.org/10.1177/014920639602200302
Evans, N. J. (2017). Disability in higher education: a social justice approach.
San Francisco, CA: Jossey-Bass.
Glat, R. (1995). Integração dos portadores de deficiência: uma questão
psicossocial. Temas em psicologia, 3(2), 89-94.
Gray, D. (1983). A job club for older job seekers: An experimental evaluation.
Journal of Gerontology, 38, 363-368.
‒ ‒
Gerwurtz, R., and Kirsh, B. (2009). Disruption, disbelief and resistance: a meta-
synthesis of disability in the workplace. Work, 34(1), 33–44.
Goertz, Y. H., Van Lierop, B. A., Houkes, I., and Nijhuis, F. J. (2010). Factors
related to the employment of visually impaired persons: A systematic
literature review. Journal of Visual Impairment & Blindness, 104(7),
404-418.
Gómez, E., and Peñaranda, S. (2019). El estado del arte de la responsabilidad
social empresarial e inclusión laboral de las personas con discapacidad.
Espacios, 40(22), 19-24.
Groce, N., Kembhavi, G., Wirz, S., Lang, R., Trani, J.-F., and Kett, M. (2011).
Poverty and disability: A critical review of the literature in low and
middle-income countries (Working Paper Series, No. 16). London,
England: UCL/Leonard Cheshire Disability and Inclusive Development
Centre.
Hartnett H.P., Stuart H., Thurman H., Loy B., and Batiste L.C. (2011).
Employers’ perceptions of the benefits of workplace accommodations:
reasons to hire, retain and promote people with disabilities. J Vocat
Rehabil, 34(1), 17–23.
World Health Organization (2011). World report on disability 2011. World
Health Organization.
Havranek, J. E. (1991). The social and individual costs of negative attitudes
toward persons with physical disabilities. Journal of Applied
Rehabilitation Counseling, 22(1), 15-21.
Hawking, S.W. (2011). Foreword. In World Report on Disability. World Health
Organization: Geneva, Switzerland.
Hoque, K., Bacon, K., and Parr, D. (2014). Employer disability practice in
Britain: assessing the impact of the positive about disabled people ‘Two
Ticks’ Symbol. Work,Employment & Society, 28(3), 430-451.
Houtenville, A., and Boege, S. (2019). Annual report on people with disabilities
in America: 2018. University of New Hampshire, Institute on Disability.
Houtenville, A., and Kalargyrou, V. (2012). People with disabilities: Employers’
perspectives on recruitment practices, strategies, and challenges in
leisure and hospitality. Cornell Hospitality Quarterly, 53(1), 40-52.
International Labour Organization (ILO) (2013). Ratifications of C111—
Discrimination (Employment and Occupation) Convention, 1958.; ILO:
Geneva, Switzerland, 2013
International Labour Organization (ILO) (2014). The Ability Factor: Employing
people with disabilities makes good business sense.
‒ ‒
Jahoda, A., and Markova, I. (2004). Coping with social stigma: People with
intellectual disabilities moving from institutions and family home.
Journal of intellectual disability research, 48(8), 719-729.
Kalargyrou V. (2014). Gaining a competitive advantage with disability inclusion
initiatives. J Hum Resour Hosp Tour, 13(2), 120–145.
Kaye, H. S., Jans, L. H. and Jones, E.C. (2011). Why don’t employers hire and
retain workers with disabilities? Journal of Occupational Rehabilitation,
21(4), 526–536.
Kocman, A., Fischer, L., and Weber, G. (2018). The employers’ perspective on
barriers and facilitators to employment of people with intellectual
disability: A differential mixed‐method approach. Journal of Applied
Research in Intellectual Disabilities, 31(1), 120-131.
Kritsotakis, G., Galanis, P., Papastefanakis, E., Meidani, F., Philalithis, A. E.,
Kalokairinou, A., and Sourtzi, P. (2017). Attitudes towards people with
physical or intellectual disabilities among nursing, social work and
medical students. Journal of clinical nursing, 26(23-24), 4951-4963.
Lammers, J. (2011). ‘How institutions communicate: institutional
Lastuka, A., and Cottingham, M. (2016). The effect of adaptive sports on
employment among people with disabilities. Disability and
Rehabilitation, 38(8), 742–748.
Lawthom, R. (2000). Against all odds: Managing diversity. Introduction to work
and organizational psychology. A European perspective, 387-406.
Lengnick-Hall, M.L., Gaunt, P.M., and Kulkarni, M. (2008). Overlooked and
underutilized: People with disabilities are an untapped human resource.
Human Resource Management, 47(2),255–273.
Lindsay, S., Hartman, L.R., and Fellin, M. (2016). A systematic review of
mentorship programs to facilitate transition to post-secondary education
and employment for youth and young adults with disabilities. Disability
and Rehabilitation, 38(14),1329–1349.
Lindsay, S., Cagliostro, E., Albarico, M., Mortaji, N., and Karon, L. (2018). A
systematic review of the benefits of hiring people with disabilities.
Journal of occupational rehabilitation, 28(4), 634-655.
Liu, E. X., Carter, E. W., Boehm, T. L., Annandale, N. H., and Taylor, C. E.
(2014). In their own words: The place of faith in the lives of young
people with autism and intellectual disability. Intellectual and
developmental disabilities, 52(5), 388-404.
Livneh, H. 1982. On the origins of negative attitudes toward people with
disabilities. Rehabilitation Literature, 43, 338–347.
‒ ‒
Livneh, H. (2012). On the origins of negative attitudes toward people with
disabilities. The Psychological and Social Impact of Physical Disability,
supra note, 70.
Markel, K.S., and Barclay, L.A. (2009). Addressing the underemployment of
persons with disabilities: recommendations for expanding organizational
social responsibility’. Employee Responsibilities and Rights Journal,
21(4), 305–318.
Marques, A. L., Romeo, M., Matalinares, M., and Yepes-Baldó, M. (2020).
Managers’ Conceptions and Their Effects on the Perception of
Employees with Disabilities. International Journal of Environmental
Research and Public Health, 17(19), 7039.
Mavranezouli, I., Megnin-Viggars, O., Cheema, N., Howlin, P., Baron-Cohen, S.,
and Pilling, S. (2014). The cost-effectiveness of supported employment
for adults with autism in the United Kingdom. Autism,18(8), 975–984.
Metzel, D., and Walker, P. (2001). The illusion of inclusion: Geographies of the
lives of people with developmental disabilities in the United States.
Disability Studies Quarterly, 21(4).
Mitra, S., and Sambamoorthi, U. (2006a). Employment of persons with
disabilities: Evidence from the National Sample Survey. Economic and
Political Weekly, 41, 199–203.
Moore, K., McDonald, P., and Bartlett, J. (2017). The social legitimacy of
disability inclusive human resource practices: the case of a large retail
organisation. Human Resource Management Journal, 27(4), 514-529.
Mundial, B. (2011). Informe mundial sobre la discapacidad 2011.
Neves-Silva, P., Prais, F. G., and Silveira, A. M. (2015). The inclusion of
disabled persons in the labor market in Belo horizonte, Brazil: scenario
and perspective. Ciencia & saude coletiva, 20, 2549-2558.
Odom, S. L., Buysse, V., and Soukakou, E. (2011). Inclusion for young children
with disabilities: A quarter century of research perspectives. Journal of
Early Intervention, 33(4), 344-356.
ONCE, F., and MANPOWER, F. (2008). Perspectivas del mundo empresarial,
respecto a la contratación de personas con discapacidad.[Informe].
Madrid: Autor.
Organization for Economic Co-operation and Development (2010). Sickness,
disability and work: Breaking the barriers. A synthesis of findings across
OECD countries. Paris, France: Author.
Ofuani, A. I. (2011). The right to economic empowerment of persons with
disabilities in Nigeria: How enabled?. African Human Rights Law
Journal, 11(2), 639-658.
‒ ‒
Post, M., Campbell, C., Heinz, T., Kotsonas, L., Montgomery, J., and Storey, K.
(2010). Collaboration between supported employment and human
resource services: strategies for success. Research & Practice for
Persons with Severe Disabilities, 35(1), 24–30.
Ren, L. R., Paetzold, R. L., and Colella, A. (2008). A meta-analysis of
experimental studies on the effects of disability on human resource
judgments. Human Resource Management Review, 18(3), 191-203.
Rife, J. C., and Belcher, J. R. (1994). Assisting unemployed older workers to
become reemployed: An experimental evaluation. Research on Social
Work Practice, 4(1), 3-13.
Saunders, P. (2007). Social exclusion: challenges for research and implications
for policy’. Economic and Labour Relations Review, 19(1), 73–92.
Scott, M., Jacob, A., Hendrie,D., Parsons, R., Girdler, S., Falkmer,T., and
Falkmer, M. (2017). Employers’ perception of the costs and the benefits
of hiring individuals with autism spectrum disorder in open employment
in Australia. PLoS ONE, 12(5), e0177607.
Strohmer, D. C., Grand, S. A., and Purcell, M. J. (1984). Attitudes toward persons
with a disability: An examination of demographic factors, social context,
and specific disability. Rehabilitation Psychology, 29(3), 131-145.
Thomas, A. (2001). The Multidimensional Character of Biased Perceptions of
Individuals with Disabilities. Journal of Rehabilitation, 67(2).
Turcotte, M. (2014). Persons with disabilities and employment (Catalogue No.
75-006-X). Statistics Canada. Retrieved April.
Unger, D. D. (2002). ‘Employers’ attitudes toward persons with disabilities in the
workforce: myths or realities? Focus on Autism and Other
Developmental Disabilities, 17(1), 2–10.
Verdonschot, M. M., De Witte, L. P., Reichrath, E., Buntinx, W. H. E., and Curfs,
L. M. G. (2009). Impact of environmental factors on community
participation of persons with an intellectual disability: a systematic
review. Journal of intellectual disability research, 53(1), 54-64.
Vornholt, K., Villotti, P., Muschalla, B., Bauer, J., Colella, A., Zijlstra, F., ... and
Corbiere, M. (2018). Disability and employment–overview and
highlights. European journal of work and organizational psychology,
27(1), 40-55.
Zheng, Q., Tian, Q., Hao, C., Gu, J., Tao, J., Liang, Z., ... and Hao, Y. (2016).
Comparison of attitudes toward disability and people with disability
among caregivers, the public, and people with disability: findings from a
cross-sectional survey. BMC public health, 16(1), 1-10.
‒ ‒
CAPÍTULO 76
HÉCTOR GONZÁLEZ-MAYORGA
Universidad de León
AGUSTÍN RODRÍGUEZ-ESTEBAN
Universidad de León
DIEGO GONZÁLEZ-RODRÍGUEZ
Universidad de León
1. INTRODUCCIÓN
Con la llegada del Espacio Europeo de Educación Superior (en ade-
lante, EEES) se produce una reforma desde un punto de vista metodo-
lógico con el objetivo de dotar al alumnado universitario de un mayor
protagonismo y participación en los procesos de enseñanza-aprendizaje
para la adquisición y desarrollo de las competencias profesionales ne-
cesarias. Esto supuso dejar atrás un paradigma educativo centrado en la
enseñanza para dar paso a otro centrado en el aprendizaje, reformulando
los roles del docente y del alumno, y dando paso a las ideas constructi-
vistas de Ausubel, Bruner, Piaget, Dewey o Vygotsky, entre otros (Har-
land, 2003; Jiménez et al., 2020; Marín et al., 2020). Así pues, dicho
paradigma de aprendizaje ha puesto de manifiesto la importancia de
metodologías activas, entendidas estas como “los métodos, técnicas y
estrategias que utiliza el docente para convertir el proceso de enseñanza
en actividades que fomenten la participación del estudiante y lleven al
aprendizaje” (Labrador & Andreu, 2008, p. 6).
De Miguel (2005, 2006) hace una descripción de los principales méto-
dos de enseñanza empleados en el ámbito universitario en función de
las competencias a desarrollar por parte del alumnado. Este autor dife-
rencia entre lecciones magistrales, estudios de casos, resolución de
‒ ‒
ejercicios y problemas, aprendizaje orientado a proyectos, aprendizaje
cooperativo, contratos de aprendizaje y aprendizaje basado en proble-
mas. Para muchos autores es, precisamente, el aprendizaje basado en
problemas (en adelante, ABP) uno de los mejores ejemplos de método
centrado en las teorías constructivistas, ya que permiten que el alum-
nado adquiera los conocimientos y desarrollen sus competencias de
forma progresiva con la ayuda del profesor, que ejerce como guía (Ber-
kel & Dolmans, 2006; Hmelo-Silver, 2004; Ronis, 2001; Savery &
Duff, 1995). Dicho aprendizaje se produce al aplicar dichos conoci-
mientos para resolver problemas similares a los que se van a encontrar
en su futuro desarrollo profesional. Asimismo, para la resolución de
dichos problemas, concretados en casos prácticos, será necesario que
los alumnos pongan en práctica aspectos competenciales como el tra-
bajo en equipo, la gestión del tiempo, la identificación de los aspectos
esenciales del caso a resolver o la formulación de los objetivos en fun-
ción de estos.
Duran et al. (2015) definen el ABP como un proceso de investigación
colaborativo que permite beneficiarse de diferentes puntos de vista para
transferir, desde una perspectiva crítica, el aprendizaje a situaciones
reales, además de proporcionar al alumnado habilidades para la resolu-
ción de problemas. Previamente, Barrows (1986), considerado como
uno de los autores de referencia en relación a esta metodología, esta-
bleció que el ABP ha de orientarse a la consecución de cuatro objetivos:
a) estructurar el conocimiento para utilizarlo en contextos prácticos; b)
desarrollar aquellos procesos cognitivos necesarios para el desarrollo
profesional; c) desarrollar destrezas de aprendizaje metacognitivo; y d)
aumentar la motivación del estudiante a través del desafío que supone
la resolución del problema. Por su parte, Biggs (2005) añade un quinto
objetivo, centrado en el desarrollo de la competencia para trabajar en
equipo y establecer conclusiones consensuadas.
En síntesis, son cuatro las principales características del ABP (Morales
Bueno, 2018; López, 2021):
‒ Se trata de una metodología centrada en el alumno.
‒ El profesor adquiere un rol de guía y facilitador del aprendi-
zaje.
‒ ‒
‒ Se trabaja en pequeños grupos (en torno a 4 o 5 componentes).
‒ El proceso de enseñanza y aprendizaje, así como el desarrollo
de las competencias, gira en torno al problema o caso práctico,
el cual ha de estar alineado con la práctica profesional para la
que se está formando el estudiante.
‒ ‒
equipos de orientación educativa y psicopedagógica o en departamen-
tos de orientación, tal y como se establece en el Artículo 72 de la Orden
EDU/849/2010, de 18 de marzo. En el ámbito de Castilla y León, dichas
funciones se encuentran reguladas tanto en la Orden EDU/987/2012, de
14 de noviembre, por la que se regula la organización y funcionamiento
de los equipos de orientación educativa de la Comunidad de Castilla y
León, como en la Orden EDU/1054/2012, de 5 de diciembre, por la que
se regula la organización y funcionamiento de los departamentos de
orientación de los centros docentes de la Comunidad de Castilla y León.
A continuación, se presentan los objetivos de la propuesta.
2. OBJETIVOS
3. DISEÑO DIDÁCTICO
‒ ‒
concreta mediante el documento de derivación, el cual se cumplimenta
cuando el tutor haya agotado todas las medidas ordinarias a su alcance
para dar respuesta a dichas necesidades educativas detectadas: acción
tutorial (inclusión, sensibilización, coordinación con familia y otros
profesionales implicados…), planes de acogida, actuaciones preventi-
vas y de detección de necesidades, distintos tipos de agrupamientos,
adaptaciones en la metodología y en los materiales y recursos, etc. En
el caso de Castilla y León, se puede encontrar el modelo de documento
de derivación junto con autorización de las familias en la Orden
EDU/1603/2009, de 20 de julio.
La segunda fase hace referencia a la recogida de información para de-
terminar las necesidades educativas del alumno y elaborar posterior-
mente el informe psicopedagógico. Esta fase se puede dividir, a su vez,
en diferentes momentos:
‒ Entrevista inicial con el tutor para completar la información
ofrecida por este en el documento de derivación, así como para
fijar los objetivos y delimitar las responsabilidades y el com-
promiso de trabajo de ambas partes.
‒ ‒
‒ Entrevista con la familia, para informar sobre la situación del
alumno en el contexto escolar y para obtener más información
que pueda ser relevante relativa al contexto familiar.
‒ ‒
FIGURA 1. Contenidos de la asignatura Evaluación y asesoramiento psicopedagógico.
Fuente: Unileon.es
Fuente: Unileon.es
‒ ‒
del proceso de evaluación y según el entrevistado, y las partes de la
entrevista. Asimismo, se le da especial importancia al concepto de rap-
port, entendido como una relación de confianza y entendimiento mutuo
para favorecer la interacción comunicativa (Carey et al., 1986). En
cuanto a la observación, se hace hincapié en el registro y muestreo de
la información y en los instrumentos de registro, haciendo hincapié en
la importancia de elaborar instrumentos mixtos propios, adaptados al
observador, que recojan las bondades de los registros anecdótico-narra-
tivos, las listas de cotejo y de estimación o los registros continuos.
Respecto a las pruebas diagnósticas, a continuación, se hace una des-
cripción de las más habituales para la evaluación psicopedagógica:
‒ WISC-V o Escala de Inteligencia de Wechsler para Niños-V:
es un instrumento de aplicación individual para la evaluación
de la capacidad cognitiva en niños desde 6 años a 16 años y
11 meses. Se trata de una de las pruebas de referencia para la
evaluación diagnóstica por su validez y fiabilidad. La escala
WISC-V ofrece puntuaciones que reflejan el funcionamiento
de diferentes áreas cognitivas, tales como la comprensión ver-
bal, la capacidad visuoespacial, el razonamiento fluido, la me-
moria de trabajo o la velocidad de procesamiento. Además,
ofrece la posibilidad de obtener un CI total. El tiempo esti-
mado de aplicación completa es de, aproximadamente, 75 mi-
nutos, mientras que la aplicación de las pruebas para la obten-
ción del CI total se sitúa en torno a los 50 minutos de duración.
‒ ‒
‒ PROLEC-R: se trata de una batería para evaluar los procesos
de lectura, siendo una de las pruebas más utilizadas en el
campo educativo. Esta prueba aporta información sobre las di-
ficultades lectoras que presenta el niño, además de los proce-
sos cognitivos relacionados con dichas dificultades. Está dise-
ñada para aplicarse en niños de 6 a 12 años, con una duración
de entre 20 y 40 minutos. Está compuesta por diferentes prue-
bas para medir procesos lectores como la identificación de
grafemas, el reconocimiento y lectura de palabras, la lectura
de aspectos gramaticales o la comprensión de significados.
‒ ‒
‒ Escala SNAP-IV abreviada: es una prueba muy similar a la
escala DuPAUL. De hecho, se suelen emplear como pruebas
complementarias y confirmatorias. Al igual que la anterior, el
SNAP-IV relaciona sus dieciocho ítems con los criterios diag-
nósticos del TDAH, siendo sus destinatarios padres y profeso-
res de alumnos de entre 3 y 17 años.
Cabe destacar que, a pesar de ser tres pruebas similares, se trabajan las
Escalas DuPAUL, SNAP-IV y CONNERS por ser los recomendados
en el Programa de Atención al Trastorno por Déficit de Atención e Hi-
peractividad de la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y
León129.
El tercer bloque de contenidos hace referencia a los informes de eva-
luación psicopedagógica y a los dictámenes de escolarización en el caso
del alumnado con necesidades educativas especiales. Para ello, en pri-
mer lugar, se trabaja la Instrucción de 24 de agosto de 2017, documento
legal que establece los grupos de alumnos con necesidad específica de
apoyo educativo en el ámbito de Castilla y León, así como los docu-
mentos prescriptivos necesarios para su inclusión en el fichero ATDI.
En el caso de los alumnos con necesidades educativas especiales (grupo
1), de los alumnos con altas capacidades intelectuales (grupo 3), de los
alumnos con dificultades de aprendizaje y/o bajo rendimiento acadé-
mico (grupo 4) y los alumnos con trastorno por déficit de atención con
hiperactividad que presenten necesidades específicas de apoyo educa-
tivo (grupo 5), han de tener informe de evaluación psicopedagógica
para su inclusión en la ATDI; mientras que para los alumnos con nece-
sidades educativas especiales (grupo 1) han de tener un dictamen de
escolarización, en el cual se incluirá una síntesis de los aspectos esen-
ciales del documento de evaluación psicopedagógica, así como la
129 https://bit.ly/3h0DEN8
‒ ‒
decisión de modalidad de escolarización más adecuada según las nece-
sidades del alumno.
Por último, se trabajan diversos recursos de asesoramiento psicopeda-
gógico a otros profesionales implicados en el proceso educativo del
alumno y a la familia. En este bloque se pone de manifiesto la impor-
tancia de la figura del orientador como agente educativo institucional
(Rodríguez Espinar, 2002). Así pues, se trabajan estrategias de colabo-
ración con los profesores en la mejora de los procesos educativos, ha-
ciendo énfasis en la importancia de la coordinación docente. Asimismo,
se pone de manifiesto la importancia de potenciar la relación y comu-
nicación entre padres y profesores.
Respecto a la asignatura de Orientación a familias de alumnos con ne-
cesidades específicas de apoyo educativo, tal y como se puede observar
en la Figura 2, se trabajan dos bloques de contenidos. Un primer bloque
de carácter teórico, en el cual se aborda la importancia de la estructura
familiar en el ámbito educativo desde un punto de vista sistémico, cen-
trado en la Teoría General de Sistemas de Bertalanffy y el modelo eco-
lógico de Bronfenbrenner; así como aquellas variables a tener en cuenta
en el análisis del contexto familiar del alumno, tales como las variables
físicas, sociodemográficas, organizacionales, procesuales, educativas y
actitudinales.
En segundo lugar, se vuelve a hacer hincapié en la importancia de la
entrevista como técnica de asesoramiento a las familias de los alumnos
con necesidad específica de apoyo educativo con el objetivo de garan-
tizar la colaboración con el centro educativa en la educación de sus hi-
jos. Asimismo, dichas entrevistas tienen la finalidad de hacer partícipes
a las familias en el desarrollo de los programas y los planes del centro.
Además, se pone de manifiesto la importancia de las redes de apoyo,
tanto institucionales como externas, como estructura de ayuda para la
consecución de objetivos relacionados con la orientación educativa.
Para llevar a cabo el ABP y las actividades que integran la propuesta,
en primer lugar, se establecen los grupos de trabajo, en ningún caso
superior a los cuatro componentes (tres o cinco componentes de forma
excepcional para algún grupo en caso de que el número de alumnos sea
‒ ‒
impar), nombrando un portavoz y un secretario en cada uno de ellos.
Una vez elaborados los grupos de trabajo, se presenta un caso práctico
extraído de un banco sido elaborados por los docentes de ambas asig-
naturas y sometidos a juicio de expertos por orientadores educativos de
la provincia de León, pertenecientes tanto del Cuerpo de Profesores de
Educación Secundaria de la especialidad de Orientación Educativa
como a centros privados concertados. Para la elección del caso práctico
se emplea la herramienta digital Randorium. Todos los casos prácticos
que componen el banco han sido elaborados por los docentes de ambas
asignaturas y sometidos a juicio de expertos por orientadores educati-
vos de la provincia de León, pertenecientes tanto del Cuerpo de Profe-
sores de Educación Secundaria de la especialidad de Orientación Edu-
cativa como a centros privados concertados. De forma previa al trabajo
el grupo y al desarrollo de las actividades didácticas, se hace una lectura
del caso con el fin de garantizar la comprensión de los elementos que
lo componen. Así pues, en primer lugar, se lleva a cabo un análisis ge-
neral del mismo.
A continuación, se presenta un ejemplo de caso práctico:
El caso de Andrea
‒ ‒
Desde el inicio de su escolarización, la madre de Andrea ha mos-
trado en todo momento intención de colaborar con el centro en el
proceso educativo de su hija. De hecho, desde el principio ha mos-
trado una cierta preocupación, ya que, según manifestó en la entre-
vista inicial con la tutora, la niña muestra un fuerte carácter en casa,
el cual no muestra en el colegio. Desde la tutoría se le han dado al-
gunas pautas, pero no es capaz de comprender muchas de estas, ya
que la madre no tiene un castellano muy fluido. De hecho, la comu-
nicación entre la madre y la niña en el hogar se produce en portu-
gués.
En este sentido, los profesores de Andrea han ido percibiendo con el
paso del tiempo que la niña presenta un cierto desconocimiento del
idioma, ya que en muchas ocasiones no comprende las instrucciones
que se le dan en las áreas curriculares. Además, presenta problemas
en lectura y escritura, ya que no es capaz de leer y únicamente es-
cribe a través de la copia textual. Este hecho está incidiendo directa-
mente en su rendimiento académico, ya que en el primer trimestre
no ha podido superar los objetivos de tres áreas curriculares: Lengua
Castellana y Literatura, Matemáticas y Ciencias Sociales. Desde un
principio, su tutora, Laura, ha solicitado ayuda a los maestros de len-
gua extranjera para la elaboración del Informe de Nivel de Compe-
tencia Lingüística, en el cual se ha determinado que la alumna tiene
un cierto nivel de desconocimiento del idioma (nivel A2 de caste-
llano). No obstante, Laura ha comenzado a sospechar que, posible-
mente, no se trate únicamente de un problema de desconocimiento
del idioma, sino que puede haber otras dificultades añadidas, por lo
que elabora el documento de derivación y se lo hace llegar al equipo
de orientación educativa y psicopedagógica que atiende al centro.
Por último, cabe destacar que la niña acude los martes y los jueves
por la tarde a ballet como actividad extraescolar, siendo esta una de
sus grandes motivaciones y de la que habla de forma recurrente en
la escuela con profesores y compañeros.”
‒ ‒
ACTIVIDADES Y EVALUACIÓN DE LAS MISMAS
‒ ‒
TABLA 1. Rúbrica de evaluación de la tarea de la entrevista.
INDICADORES DE CALIFICACIÓN
Bien (1) Mejorable (0,5) Mal (0)
No existen una clara
Se diferencian per- La entrevista tan sólo
diferenciación entre las
Estructura de fectamente el inicio, cuenta con el cuerpo o
partes de la entrevista,
la entrevista (x2) el cuerpo de la entre- parte donde se llevan a
o tan sólo se diferen-
vista y el cierre. cabo las preguntas.
cian dos partes.
Se ha tenido en Se ha tenido en cuenta
No se ha tenido en
cuenta al entrevis- al entrevistado para la
Adecuación de cuenta al entrevistado
tado para la adecua- adecuación en algunas
las preguntas para la adecuación de
ción de la totalidad preguntas, pero no en
las preguntas.
de las preguntas. todas.
El orden en que se han
El orden en que se El orden en que se han
formulado las pregun-
han formulado las formulado las pregun-
Orden y tas ha contribuido al
preguntas ha favore- tas apenas (o nada) ha
estructuración establecimiento y man-
cido el estableci- contribuido al estable-
de las preguntas (x2) tenimiento del rapport
miento y manteni- cimiento y manteni-
en algunas partes pun-
miento del rapport. miento del rapport.
tuales de la entrevista.
El nivel de confianza El nivel de confianza y Apenas hay nivel de
Mantenimiento y de cordialidad se de cordialidad se des- confianza y cordialidad
del rapport (x2) mantiene a lo largo vanece en algunas par- a lo largo de la entre-
de la entrevista. tes de la entrevista. vista.
Las preguntas for-
Algunas de las pregun-
Calidad lingüística muladas tienen una En general, las pregun-
tas formuladas no al-
de las preguntas calidad lingüística tas no alcanzan un mí-
canzan un mínimo de
formuladas acorde al desem- nimo de calidad acorde
calidad acorde al
(comunicación verbal) peño profesional do- al desempeño docente.
desempeño docente.
cente.
La postura corporal
Uno de los dos ítems Ninguno de los dos
del entrevistador es
(postura corporal o ítems (postura corporal
correcta para la reali-
contacto visual) no se o contacto visual) se
Comunicación zación de una entre-
desarrollan de forma desarrollan de forma
no verbal vista profesional.
correcta para la reali- correcta para la reali-
Además, existe con-
zación de una entre- zación de una entre-
tacto visual de forma
vista profesional. vista profesional.
recurrente.
A lo largo de la en- A lo largo de la entre-
trevista se emplean vista se emplean pre- A lo largo de la entre-
diversas preguntas guntas de indagación, vista no se hacen pre-
Preguntas de
de indagación, acla- aclaración o matización guntas de indagación,
indagación, aclaración
ración o matización en ítems que no son aclaración o matización
o matización
que no aparecen en relevantes para la eva- que no aparecen en el
el guion en momen- luación psicopedagó- guion.
tos clave. gica.
Fuente: Elaboración propia.
‒ ‒
TABLA 2. Hoja de registro basada en la rúbrica de la actividad.
Preguntas de aclaración
Comunicación no verbal
Calidad lingüística
TOTAL
Pareja
…………………..
1
…………………..
…………………..
2
…………………..
…………………..
3
…………………..
…………………..
4
…………………..
…………………..
5
…………………..
…………………..
6
…………………..
…………………..
7
…………………..
…………………..
8
…………………..
‒ ‒
Una vez recogida la información inicial, se desarrolla una actividad de
observación en una situación de clase. Para ello, se visualiza un video
relacionado con el caso práctico. Posteriormente, cada uno de los gru-
pos ha de elaborar un registro de observación ad hoc, teniendo en cuenta
dimensiones como la comunicación, las habilidades sociales, el estilo
de aprendizaje o las habilidades motoras. Una vez desarrollado el ins-
trumento, se vuelve a visualizar el video para que cada grupo lo utilice
para registrar lo observado, siendo el producto que tendrá que entregar
al profesor para su evaluación.
Llegado a este punto, es el momento de tomar decisiones: qué instru-
mentos de los presentados previamente en clase por el profesorado son
los más adecuados para la recogida de la información necesaria para la
evaluación psicopedagógica, produciéndose un pequeño debate en el
grupo. Una vez se tengan claros los instrumentos, se escogerán dos de
ellos, de tal manera que los miembros del grupo lleven a cabo una doble
actividad: por un lado, realizar un análisis de uno de ellos, haciendo
hincapié en aspectos como la ficha técnica del mismo, una descripción
detallada del procedimiento de aplicación, corrección, puntuación e in-
terpretación; y un comentario sobre la utilidad práctica del instrumento
en base al problema a resolver. Por otro lado, cada grupo tendrá que
elaborar un video realizando la simulación de aplicación completa de
otra de las pruebas seleccionadas, atendiendo a las instrucciones deta-
lladas de cómo ha de administrarse la prueba. Las pruebas son propor-
cionadas de forma parcial por el profesorado, atendiendo a los límites
y excepciones de uso y explotación de obras bibliográficas con fines
educativos recogidas en la página web de CEDRO (Centro Español de
Derechos Reprográficos).
Una vez recogida la información, se ha de proceder a la elaboración del
informe de evaluación psicopedagógica y del dictamen de escolariza-
ción en caso de que el caso lo requiera. Para ello se siguen los modelos
oficiales contenidos en la Orden EDU/1603/2009, de 20 de julio. En
esta actividad se hace especial énfasis en la correcta redacción de dichos
documentos, así como en la elaboración de orientaciones en los aparta-
dos destinados a la propuesta curricular, los cuales han de poner las
‒ ‒
bases a la posterior intervención a llevar a cabo con el alumno objeto
de estudio.
Por último, se realizan dos actividades relacionadas con la última fase
del proceso de evaluación psicopedagógica dirigida al asesoramiento.
Por un lado, la pareja del grupo que no realizó la actividad de entrevista
inicial con el tutor tendrá que realizar una simulación de entrevista, pu-
diendo elegir los destinatarios de la misma: profesores o familias. En
todo caso, al igual que en la actividad anterior, tendrán que elaborar un
guion e intercambiar los roles, de forma que todos se pongan en la piel
del orientador educativo y de la persona asesorada. Para la evaluación
de la actividad, se emplearán el mismo instrumento mostrado en las
Tablas 1 y 2 del presente trabajo. Por otro lado, como parte del aseso-
ramiento, cada grupo deberá llevar a cabo una búsqueda de, al menos,
dos redes de apoyo familiar que puedan ser de utilidad para el caso tra-
bajado, describiendo aspectos como la población a la que van dirigidas,
los objetivos que persiguen las mismas, los cauces de participación e
implicación de las familias y ejemplos de actividades desarrolladas en
ellas.
Una vez finalizadas las actividades propuestas que forman el ABP, se
lleva a cabo una autoevaluación final individual en forma de diana de
evaluación, en la cual cada uno de los alumnos ha de valorar el grado
de adquisición y desarrollo de las competencias generales y específicas
propuestas en las asignaturas participantes, así como el grado de utili-
dad para el desempeño de su desarrollo profesional futuro, siendo esta
una de las esencias de la metodología empleada en el diseño didáctico
aquí presentado.
4. CONCLUSIONES
‒ ‒
equipo. Esto, junto con las bondades del ABP presentadas en la intro-
ducción del capítulo, hacen de esta una propuesta metodológica de la
que se prevé una mayor adquisición y consolidación de las competen-
cias necesarias por parte del alumno para su futuro desarrollo profesio-
nal con respecto a otras basadas en el paradigma de enseñanza. Asi-
mismo, se antoja como aspecto esencial el acercamiento que se realiza
por parte del estudiante a situaciones-problema cercanos a la realidad
hace que la motivación aumente, dotando de sentido a los bloques de
contenido desarrollados en las asignaturas participantes en la propuesta.
Cabe destacar que se trata de una propuesta diseñada para implemen-
tarse de forma experimental en el curso académico 2021/2022, por lo
que se prevé que en próximos foros de difusión se puedan extraer las
primeras conclusiones respecto a la adecuación o rediseño de la pro-
puesta aquí presentada.
5. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
Este estudio forma parte del proyecto de innovación del Grupo de In-
novación Docente de la ULE en Métodos de Investigación en Educa-
ción (GID-INDOMIDE) financiado por el Vicerrectorado de Profeso-
rado de la Universidad de León desde 2017. Actualmente, el GID-IN-
DOMIDE continúa con su línea de innovación en comunicación oral a
la que ha incorporado la utilización de las TIC como herramienta im-
prescindible de comunicación en el ejercicio profesional de futuros
maestros, educadores sociales y orientadores.
6. REFERENCIAS
‒ ‒
estudiantes en el aprendizaje basado en problemas]. Medical Education,
40, 730-736. https://doi.org/10.1111/j.1365-2929.2006.02530.x
Biggs, J.B. (2005). Calidad del aprendizaje universitario. Narcea.
Carey, J. C., Hamilton, D. L., & Shanklin, G. (1986). Development of an
instrument to measure rapport between college teachers [Desarrollo de
un instrumento para medir la relación entre profesores universitarios].
Journal of College Student Personnel, 27(3), 269-273.
Castells, N., & Solé, I. (2011). Estrategias de evaluación psicopedagógica. En E.
Martín y I. Solé (Coords.), Orientación educativa. Modelos y estrategias
de intervención (pp. 73-90). Graó.
De Miguel, M. (2005). Modalidades de enseñanza centradas en el desarrollo de
competencias. Orientaciones para promover el cambio metodológico en
el marco del EEES. Universidad de Oviedo.
De Miguel, M. (2006). Metodología de enseñanzas y aprendizaje para el
desarrollo de competencias. Orientaciones para el profesorado
universitario ante el espacio europeo de educación superior. Alianza.
Duran, M., Özdemir, F., & Kaplan, A. (2015). A research on the use of problem
based learning approach: Teaching of probability sample [Una
investigación sobre el uso del enfoque de aprendizaje basado en
problemas: Enseñanza del muestreo probabilístico]. Turkish Journal of
Computer and Mathematics Education, 6(2), 250-284.
https://doi.org/10.16949/turcomat.46429
Guerra, A., Rodríguez-Mesa, F., González, F.A. & Ramírez, M.C. (2017).
Aprendizaje basado en problemas y educación en ingeniería: panorama
latinoamericano. Aalborg University Press.
Harland, T. (2003). Vygotsky’ zone of proximal development and problem-based
learning [Zona de desarrollo próximo de Vygotsky y aprendizaje basado
en problemas]. Teaching in higher education, 8(2), 263-272.
https://doi.org/10.1080/1356251032000052483
Hmelo-Silver, C.E. (2004). Problem-based learning: What and how do students
learn. Educational Psychology Review, 16(3), 235-266.
https://doi.org/10.1023/B:EDPR.0000034022.16470.f3
Instrucción de 24 de agosto de 2017 de la Dirección General de Innovación y
Equidad Educativa por la que se modifica la Instrucción de 9 de julio de
2015 de la Dirección General de Innovación Educativa y Formación del
Profesorado, por la que se establece el procedimiento de recogida y
tratamiento de los datos relativos al alumnado con necesidad específica
de apoyo educativo escolarizado en centros docentes de Castilla y León
(2017). http://www.educa.jcyl.es/dpsegovia/es/programas-
‒ ‒
educativos/programa-atencion-diversidad.ficheros/1110337-
ATDIInstruccion24082017Modif09072015datosacness.pdf
Jiménez, D., González, J.J., & Tornel, M. (2020). Metodologías activas en la
universidad y su relación con los enfoques de enseñanza. Profesorado.
Revista de Currículum y Formación de Profesorado, 24(1), 76-94.
https://doi.org/10.30827/profesorado.v24i1.8173
Labrador, M.J., & Andreu, M.A. (2008). Metodologías activas. Grupo de
Innovación en Metodologías Activas (GIMA). Universidad Politécnica de
Valencia.
López, B. (2021). El aprendizaje basado en problemas (PBL). En F. Boillos & R.
Busquiel (Coords.), La Educación Activa (pp. 107-120). Círculo Rojo.
Loyens, S.M.M., Magda, J., & Rikers, R.M.J.P. (2008). Self-directed learning in
problem-based learning and its relationships with self-regulated learning
[El aprendizaje autodirigido en el aprendizaje basado en problemas y sus
relaciones con el aprendizaje autorregulado]. Educational Psychology
Review, 20, 411–427.
Marín, J.A., Garzón, E., Fernández, J.M., & Campos, M.N. (2020). Metodologías
activas en el aula: Uso de flipped classroom en la universidad española.
En F.J. Hinojo, J.M. Trujillo, J.M. Sola & S. Alonso (Coords.),
Innovación docente e investigación educativa en la sociedad del
conocimiento (pp. 13-26). Dykinson.
Morales Bueno, P. (2018). Aprendizaje basado en problemas (ABP) y habilidades
de pensamiento crítico ¿una relación vinculante? Revista Electrónica
Interuniversitaria de Formación del Profesorado, 21(2), 91-108.
https://doi.org/10.6018/reifop.21.2.323371
Orden de 14 de febrero de 1996 sobre evaluación de los alumnos con necesidades
educativas especiales que cursan las enseñanzas de régimen general
establecidas en la Ley Orgánica 1/1990, de 3 de octubre, de Ordenación
General del Sistema Educativo. Boletín Oficial del Estado, 47 (1996).
https://www.boe.es/eli/es/o/1996/02/14/(2)/dof/spa/pdf
Orden EDU/849/2010, de 18 de marzo, por la que se regula la ordenación de la
educación del alumnado con necesidad de apoyo educativo y se regulan
los servicios de orientación educativa en el ámbito de gestión del
Ministerio de Educación, en las ciudades de Ceuta y Melilla. Boletín
Oficial del Estado, 83 (2010). https://www.boe.es/buscar/pdf/2010/BOE-
A-2010-5493-consolidado.pdf
Orden EDU/987/2012, de 14 de noviembre, por la que se regula la organización y
funcionamiento de los equipos de orientación educativa de la
Comunidad de Castilla y León. Boletín Oficial de Castilla y León, 227
(2012). https://www.educa.jcyl.es/es/resumenbocyl/orden-edu-987-
‒ ‒
2012-14-noviembre-regula-organizacion-funcion.ficheros/381826-
BOCYL-D-26112012-1.pdf
Orden EDU/1054/2012, de 5 de diciembre, por la que se regula la organización y
funcionamiento de los departamentos de orientación de los centros
docentes de la Comunidad de Castilla y León. Boletín Oficial de Castilla
y León, 241 (2012). https://www.educa.jcyl.es/es/resumenbocyl/orden-
edu-1054-2012-5-diciembre-regula-organizacion-
funcion.ficheros/383491-BOCYL-D-17122012-1.pdf
Orden EDU/1603/2009, de 20 de julio, por la que se establecen los modelos de
documentos a utilizar en el proceso de evaluación psicopedagógica y el
del dictamen de escolarización. Boletín Oficial de Castilla y León, 142
(2009). https://www.educa.jcyl.es/es/resumenbocyl/edu-1603-2009-20-
7-establecen-modelos-documentos-utilizar-p.ficheros/181343-23727.pdf
Rhem, J. (1998). Problem-based learning: An introduction [Aprendizaje basado
en problemas: Una introducción]. The National Teachning and Learning
Forum, 8(1), 1-4.
Rodríguez Espinar, S. (2002). La orientación y la función tutorial factores de
calidad de la educación. Ministerio de Educación y Ciencia.
Ronis, D. (2001). Problem-based learning for Math and Science: Integrating
inquiry and the internet [Aprendizaje basado en problemas para
matemáticas y ciencias: Integración de la indagación y de Internet].
Skylight.
Savery, J.R., & Duff, T. M. (1995). Problem-based learning: An instructional
model and its constructivist framework [Aprendizaje basado en
problemas: Un modelo instruccional y su marco constructivista].
Educational Technology, 35, 31-38.
Vizcarro, C. & Juárez, E. (2008). ¿Qué es y cómo funciona el aprendizaje basado
en problemas? En J. García Sevilla (Coord.), El aprendizaje basado en
problemas en la enseñanza universitaria (pp. 17-36). Universidad de
Murcia.
‒ ‒
CAPÍTULO 77
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
Por todo ello, se debe ser consciente de la importancia de formar a los
profesores de conservatorio de música en las diferentes ramas de inves-
tigación, ya que los resultados de estas pueden derivarse en conseguir
una mejora sustancial del sistema educativo acorde con las necesidades
emergentes en los diferentes niveles de enseñanza, tanto obligatorios
como no obligatorios.
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
3.1. MUESTRA
‒ ‒
La muestra de estudio ha sido extraída mediante muestreo intencional
no probabilístico. La muestra final de participantes ha sido de n=91, en
edades comprendidas entre 25-50 años con una media de edad de 34,5
años. De ellos n=16 son de La Rioja Alta (17,6%); n=44 de La Rioja
Media (48,3%); y, n=31 de La Rioja Baja (34,1%), como se representa
en la Figura 5.
Se evidencia una muestra del profesorado con una situación adminis-
trativa mayoritariamente de funcionarios interinos (62,6%), con estu-
dios del Plan de estudios de 1966 o anteriores (81,4%), en los que me-
nos de la mitad está en posesión del Curso de Aptitud Pedagógica
(39,6%) y sólo el 1,1% está en posesión del Diploma de Estudios Avan-
zados o similares; con lo que predomina una muestra de profesorado de
conservatorio a analizar administrativamente inestable, con baja forma-
ción pedagógica y escasa aportación investigadora.
3.2. INSTRUMENTO
‒ ‒
3.3. DISEÑO
‒ ‒
extraídos de la literatura científica al respecto. Estos ejes fue-
ron: experiencia, formación, percepción, enseñanza-aprendi-
zaje y evaluación.
‒ ‒
en las respuestas doblemente formuladas, se eliminarán dichos
Cuestionarios.
Para realizar los análisis, se ha dispuesto del programa IBM SPSS Sta-
tistics (versión 27.0).
4. RESULTADOS
‒ ‒
4.1. VALORES DE LAS RESPUESTAS SEGÚN LOS EJES-BASE TEMÁTICOS
QUE ORGANIZAN EL CONTENIDO DEL CUESTIONARIO
Ejes F p Ƞ2
Experiencia ,47 , 216 , 034
Formación 4,84 ,010* , 099
Percepción ,61 , 547 , 014
Enseñanza-aprendi-
2,51 , 087 , 054
zaje
Evaluación 2,02 , 139 , 044
Tal como recoge la Tabla 2, se aprecian diferencias estadísticamente
significativas en el eje Formación (F=4,84; p=,010), procediendo a su
estudio individualizado, haciendo una comparación entre los 3
conservatorios del estudio, mediante la prueba de t de Student para la
igualdad de medias. En la Tabla 13 se muestran los resultados
obtenidos.
TABLA 3. Eje Formación: comparación entre los conservatorios de Haro, Logroño y Ca-
lahorra
‒ ‒
La Tabla 3 reporta un valor no estadísticamente significativo en la
prueba de Levene, para los conservatorios de Haro-Logroño (F=,82;
p=,369) y Haro-Calahorra (F=,38; p=,541). Por otra parte, hay diferen-
cias estadísticamente significativas entre estos conservatorios (p=,021
y p=,004) con un nivel de significación de p<,05; lo cual indica que,
respecto al eje de Formación, los conservatorios de música de Haro y
de Logroño y los de Haro y Calahorra, se comportan de diferente ma-
nera y tienen distintas características que sería interesante comprobar
cualitativamente en qué consisten.
‒ ‒
La Tabla 4 reporta un valor no estadísticamente significativo en la
prueba de Levene en todos los ejes-base de estudio (F=3,52 y p=,640;
F=,27 y p=,606; F=4,71 y p=,330; F=,10 y p=,751; F=,23 y p=,630),
comprobando su homocedasticidad. Por otra parte, hay diferencias es-
tadísticamente significativas únicamente en el eje Experiencia
(p=,000); lo cual indica que, la situación administrativa es un factor
que está influido por la experiencia.
c) Resultados en función del departamento de trabajo
A continuación, en la Tabla 5 se muestran los resultados del análisis
ANOVA de los ejes-base en función del departamento de trabajo.
Ejes F p Ƞ2
Experiencia ,37 , 777 , 012
Formación 2,14 ,101 , 069
Percepción ,42 , 736 , 014
Enseñanza-aprendizaje 2,92 , 039* , 091
Evaluación 1,89 , 137 , 061
‒ ‒
La Tabla 6 reporta un valor no estadísticamente significativo en la
prueba de Levene, entre los departamentos: no sinfónicos y cuerda
(F=,02; p=,892), no sinfónicos y viento-percusión (F=3,80; p=,057), no
sinfónicos y teóricas (F=,28; p=,598) y cuerda y teóricas (F=,19;
p=,662). Por otra parte, hay diferencias estadísticamente significativas
entre los departamentos de cuerda y viento-percusión (p=,020) y cuerda
y teóricas (p=,014), con un nivel de significación de p<,05.
Seguidamente se muestran los resultados obtenidos en función del fac-
tor antigüedad en el puesto.
d) Resultados en función de la antigüedad en el puesto
En la Tabla 7 se recogen los resultados del análisis en cada uno de los
ejes respecto de la antigüedad del participante en el puesto de trabajo.
Ejes F p Ƞ2
Experiencia 15,74 , 000* , 263
Formación ,75 , 474 , 017
Percepción ,61 , 546 , 014
Enseñanza-aprendizaje ,77 , 465 , 017
Evaluación ,41 , 665 , 009
‒ ‒
TABLA 8. Eje Experiencia: comparación en función de la antigüedad en el puesto
‒ ‒
TABLA 9. Perfiles de profesorado
TABLA 10. Ejes-base: resultados análisis multivariante en función de los 4 perfiles de pro-
fesorado
Ejes F p Ƞ2
Experiencia 145,10 , 000* , 833
Formación 33,80 , 000* , 538
Enseñanza-aprendi-
5,31 , 002* , 155
zaje
‒ ‒
TABLA 11. Eje Experiencia: comparación entre los 4 perfiles de profesorado
Confianza 95%
Perfiles p Inferior Superior
Perfil 1 Perfil 2 ,000* 2,51 3,82
Perfil 3 ,000* 1,52 2,83
Perfil 4 ,000* 4,44 5,79
Perfil 2 Perfil 1 ,000* -3,82 -2,51
Perfil 3 ,000* -1,63 -,35
Perfil 4 ,000* 1,28 2,61
Perfil 3 Perfil 1 ,000* -2,83 -1,52
Perfil 2 ,000* ,35 1,63
Perfil 4 ,000* 2,27 3,60
Perfil 4 Perfil 1 ,000* -5,79 -4,44
Perfil 2 ,000* -2,61 -1,28
Perfil 3 ,000* -3,60 -2,27
Confianza 95%
Perfiles p Inferior Superior
Perfil 1 Perfil 2 1,000 -,62 1,14
Perfil 3 , 000* 1,82 3,58
Perfil 4 ,000* 1,19 3,01
Perfil 2 Perfil 1 1,000 -1,14 ,63
Perfil 3 ,000* 1,59 3,31
Perfil 4 ,000* ,95 2,74
Perfil 3 Perfil 1 ,000* -3,58 -1,82
Perfil 2 ,000* -3,31 -1,59
Perfil 4 , 431 -1,49 ,29
Perfil 4 Perfil 1 ,000* -3,01 -1,19
Perfil 2 ,000* -2,74 -,95
Perfil 3 , 431 -,29 1,49
‒ ‒
La Tabla 12 reporta diferencias estadísticamente significativas entre:
perfil 1-perfil 3 (p=,000), perfil 1-perfil 4 (p=,000), perfil 2-perfil 3
(p=,000), y perfil 2-perfil 4 (p=,000); lo que indica que el perfil 1 es
diferente a los perfiles 3 y 4 y el perfil 2 es diferente a los perfiles 2 y
4 en lo que se refiere al eje-base Formación. Por otro lado, no hay dife-
rencias estadísticamente significativas entre el perfil 1 y el perfil 2
(p=1,000), ni entre los perfiles 3 y perfil 4 (p=,431), lo cual informa de
que se comportan con similaridad en cuanto al eje Formación.
Finalmente, en la Tabla 13 se muestra el resultado la comparación entre
los 4 perfiles de profesorado en función del eje-base Enseñanza-apren-
dizaje.
TABLA 13. Eje Enseñanza-aprendizaje: comparación entre los 4 perfiles de profesorado
Confianza 95%
Perfiles p Inferior Superior
Perfil 1 Perfil 2 ,046* ,01 1,33
Perfil 3 ,001* ,29 1,62
Perfil 4 ,033* -,06 1,31
Perfil 2 Perfil 1 ,046* -1,33 -,01
Perfil 3 1,000 -,36 ,93
Perfil 4 1,000 -,71 ,63
Perfil 3 Perfil 1 ,001* -1,62 -,29
Perfil 2 1,000 -,93 ,36
Perfil 4 1,000 -1,00 ,34
Perfil 4 Perfil 1 ,033* -1,31 ,06
Perfil 2 1,000 -,63 ,71
Perfil 3 1,000 -,34 1,00
‒ ‒
FIGURA 1. Dendograma agrupamientos clústeres
‒ ‒
FIGURA 2. Perfiles profesionales de los profesores de conservatorios de La Rioja
8
VALOR DE LOS CENTROIDES
7
6
5
4
3
2
1
0
EXPERIENCIA FORMACIÓN ENSEÑANZA-
APRENDIZAJE
‒ ‒
Además, observando los resultados del análisis post hoc de Bonferroni,
se evidencia que los perfiles 1 y perfil 2 se comportan de manera similar
respecto al eje Formación y los perfiles 2, perfil 3 y perfil 4 lo hacen
con respecto al eje Enseñanza-aprendizaje.
Por consiguiente, en el eje Experiencia el comportamiento del profeso-
rado, se agruparía en 4 perfiles diferenciados, con puntuaciones medias,
bajas y muy bajas; en el eje Formación el profesorado se reduciría a 2
grupos diferenciados (perfil 1 + perfil 2 y perfil 3 + perfil 4), con pun-
tuaciones medias y bajas; y, en el eje Enseñanza-aprendizaje, el com-
portamiento del profesorado se aglutinaría en 2 grupos (perfil 1 y perfil
2 + perfil 3 + perfil 4), todos ellos con puntuaciones bajas. Datos a tener
en cuenta para valorar en el siguiente apartado de Conclusión y discu-
sión.
5. CONCLUSIÓN-DISCUSIÓN
‒ ‒
Según el comportamiento del profesorado, se han evidenciado 4 perfiles
diferentes, conformados por 22, 24, 24 y 21 docentes cada uno. Las pun-
tuaciones medias obtenidas de los perfiles, en función de los 3 ejes-base
Experiencia acumulada, Formación permanente y Enseñanza-aprendi-
zaje, muestran a su vez un subagrupamiento, dando respuesta al Objetivo
Específico 1.
Objetivo Específico 1. Conocer el peso que tienen los distintos ejes-
base de estudio: Experiencia acumulada, Formación permanente, Per-
cepción y motivación, Enseñanza-aprendizaje y Evaluación, en la con-
figuración de los perfiles que menciona el Objetivo General
De los 5 ejes-base de estudio: Experiencia acumulada, Formación per-
manente, Percepción y motivación, Enseñanza-aprendizaje y Evalua-
ción, solo los ejes Experiencia acumulada, Formación permanente y
Enseñanza-aprendizaje, han obtenido diferencias estadísticamente sig-
nificativas. Por lo que el resto de los ejes Percepción y motivación, y
Evaluación, no se pueden tomar como referencia influyente a la hora de
constituir los diferentes perfiles del profesorado.
Atendiendo a los otros 3 ejes-base y a los 4 perfiles que conforman el
profesorado de los conservatorios de música en La Rioja, el perfil 1 es
el que obtiene la máxima puntuación media en Experiencia acumulada
(7,05), Formación permanente (6,70) y Enseñanza-aprendizaje (4,46).
En el eje Experiencia acumulada, los otros tres perfiles obtienen pun-
tuaciones bajas y muy bajas (3,88; 4,87 y 1,94), en lo que se traduce
que el 24% del profesorado tiene una Experiencia acumulada media, el
26% una experiencia baja y el 50% una experiencia muy baja.
En cuanto al eje Formación permanente, el perfil 2 se comporta de ma-
nera similar al perfil 1, obteniendo puntuaciones que van de 6,45 a 6,70,
mientras que los perfiles 3 y 4, obtienen puntuaciones entre 4,00 y 4,60;
o lo que es lo mismo, el 50% del profesorado obtiene una puntuación
media en Formación permanente, mientras que el 50% obtiene una
puntuación baja.
En el eje Enseñanza-aprendizaje, los cuatro perfiles obtienen puntua-
ciones bajas o muy bajas. El perfil 1, con una puntuación media de 4,46,
representa el 24% del profesorado de los conservatorios de música en
‒ ‒
La Rioja, mientras que los otros tres perfiles, se comportan de una ma-
nera similar, con valores que van de 3,51 a 3,83, representando el 76%
del profesorado.
Por tanto, la Experiencia acumulada, es el eje-base que más influye en
el agrupamiento del profesorado, con la existencia de 4 perfiles, donde
sólo el 24% del profesorado obtiene puntuaciones medias, el 26% ob-
tiene puntuaciones bajas y el 50% obtiene puntuaciones muy bajas. Con
el eje-base Formación, el agrupamiento se reduce a 2 perfiles, donde el
50% del profesorado obtiene puntuaciones medias y el otro 50% ob-
tiene puntuaciones bajas. En cambio, en el eje Enseñanza-aprendizaje,
sólo el perfil 1 (24% del profesorado), obtiene puntuaciones bajas y el
otro grupo formado por los perfiles 2, 3 y 4 (76%), obtiene puntuacio-
nes muy bajas.
Objetivo Específico 2. Determinar la relación entre estos elementos en
la organización de posibles perfiles de docentes en los conservatorios
de música de La Rioja
El factor Situación administrativa, influye directamente en el eje Expe-
riencia acumulada, dependiendo de si el profesor es funcionario inte-
rino o funcionario de carrera. El factor Ubicación del centro educativo,
influye directamente en el eje Formación, evidenciándose un compor-
tamiento diferenciado en el conservatorio de Haro frente al profesorado
de los conservatorios de Logroño y Calahorra, que se comportan de una
manera similar respecto a este eje de Formación. Habría que realizar
estudios posteriores del por qué de esta causística del conservatorio de
Haro e intentar analizar la razón de la alta formación de sus profesores.
Posibles causas valorables: a) tradición musical en la zona, b)
conservatorio muy enraizado en la población, c) ayudas municipales o
comarcales, d) empresas patrocionadoras en la zona que faciliten becas
formativas, y e) existencia de figuras de reconocido prestigio en el
conservatorio que impartan cursos de formación y que atraigan a un
número elevado de profesores con deseo de formarse y crecer.
Por su parte, el factor Departamento de trabajo, influye directamente
en el eje Enseñanza-aprendizaje, apreciándose diferencias
estadísticamente significativas entre los departamentos de cuerda y
‒ ‒
viento-percusión y entre los departamentos de cuerda y teóricas
(lenguaje musical, armonía e historia). Como se ha podido constatar en
el marco teórico, tradicionalmente diferentes planes de estudio (1942,
1966), han dado a la cuerda la categogía de virtuosismo, siendo los
únicos junto al piano, habilitados para poder cursar los estudios
superiores de la especialidad de música de cámara, con lo que de alguna
manera se ha ido manteniendo en el tiempo en el terreno de la
enseñanza-aprendizaje.
Como medida para una rápida visualización de la puntuaciones medias
de los perfiles del profesorado de conservatorio, a la hora de incentivar
a los centros o a la hora de tomar decisiones futuras de mejora de la
calidad, se proponen una serie de marcadores musicales representados
en la Figura 3, Figura 4 y Figura 5.
100% 100%
100
80% 80%
80
60 60% 60%
40 40% 40%
20 20%
20%
0 0%
0%
Enseñanza-
Experiencia muy baja aprendizaje muy
bajo
Exoeriencia baja Formación baja Enseñanza-
aprendizaje bajo
Experiencia media Formación media
‒ ‒
responsabilidad, investigación, actividades musicales fuera del conser-
vatorio) y por último, seguir muy de cerca la Formación permanente en
investigación, didáctica y nuevas tecnologías.
‒ ‒
El que el profesorado de conservatorio esté formado en investigación,
conlleva a que los alumnos de Trabajo Fin de Estudios de último curso
de carrera, no se pregunten el por qué tienen que destinar un tiempo tan
valioso para realizar dicha asignatura cuando podían emplearlo en tocar
su instrumento, sintomatología de que algo no está funcionando bien en
el diseño de los estudios de conservatorio (Aróstegui, 2016; Macías,
2017; Curbelo, 2018; Narejos, 2020). Es por ello, que la formación ini-
cial y continua del profesorado, la investigación y el trabajo interdisciplinar
toman una importancia decisiva (López, 2013; Fernández y Casas, 2016).
Por otra parte, es necesario resaltar la conveniencia de que las personas
dedicadas a la enseñanza de su instrumento musical tengan la oportuni-
dad de desarrollar en paralelo una labor interpretativa, dada la repercu-
sión positiva que tiene en su trabajo docente con alumnos de cualquier
nivel, ya que constituye una parte fundamental de la formación continua
del profesor y de su labor docente, y debería ser fomentada por los cen-
tros, cuando no organizada directamente por ellos (Ruiz, 2020). Se re-
fiere a una actividad eminentemente práctica que necesita mantenerse
actualizada. Si una vez obtenida su plaza el profesor va perdiendo el con-
tacto con la práctica interpretativa de su instrumento, con el paso de los
años su sistema de enseñanza necesariamente se resentirá, mientras que
si consigue mantenerse en activo seguirá adquiriendo nuevas experien-
cias que podrá transmitir de primera mano a su alumnado.
Actualmente el sistema de contratación de los conservatorios superiores
es el mismo que el de la enseñanza secundaria. Por ello, para poder
ofrecer unos planes de estudios musicales superiores de calidad, es ne-
cesaria una buena selección del profesorado, que debería tener: una
carga lectiva inferior, un perfil especializado a través de una experiencia
investigadora, y una compaginación entre la actividad docente y la ac-
tividad investigadora (Rico, 2018).
Respecto al eje-base Formación permanente, no beneficia la paraliza-
ción que ha habido durante más de 30 años, hasta el año 2015, del in-
greso al Cuerpo de Catedráticos de Música y Artes Escénicas, donde
sólo se pide como requisito de participación, una titulación de máster
en investigación de 60 créditos ECTS, y que en muchos casos dicho
cuerpo se ha estado supliendo por profesorado que mínimamente
‒ ‒
cumplía con los requisitos (Vieites, 2020). No alienta la búsqueda de
un adecuado estatus administrativo, ya que actualmente la legislación
que regula el funcionamiento de las enseñanzas en los conservatorios
superiores es común a la de enseñanza secundaria obligatoria, aunque
la titulación que se obtiene al finalizarlas, sea equivalente al grado uni-
versitario (Jiménez y Ruiz, 2019). Además, existe una insuficiente aten-
ción prestada por las administraciones educativas y todavía faltan com-
promisos investigadores y conclusivos (Tello, 2020).
Los conservatorios profesionales siguen enmarcados en programacio-
nes didácticas obsoletas, apostando por lo tradicional como la mejor
metodología, hasta que llegue una normativa que les obligue a pasar a
las programaciones didácticas por competencias (Vernia, 2020). No se
ha encontrado una renovación académica significativa en cuanto a las
actuales demandas, que pasan por la docencia, la interpretación y la
reinvención para acceder a un campo laboral relacionado con la forma-
ción recibida. Como posibles líneas de formación que puedan adaptarse
a cualquier perfil docente, se puede hablar: interdisciplinar, cooperativa
y colaborativa, investigadora, especializada, permanente, y entre igua-
les (Vernia, 2019).
Por ende, los centros superiores de educación musical han seguido la
misma línea que las carreras universitarias más prácticas, es decir, han
intentado formar a sus especialistas para la actividad principal, en este
caso la interpretación. No obstante, la realidad laboral se debería impo-
ner no como un lastre que mine las horas de estudio interpretativo con
numerosas materias didácticas, sino como una revisión de todas las
asignaturas comunes o de formación básica desde el punto de vista di-
dáctico. La formación didáctica de los futuros docentes musicales no
tendría que limitarse al máster de profesorado, porque su formación pe-
dagógica no se tiene que desvincular de la realidad y, por tanto, debería
ser una constante. Se precisan cambios sustanciales en el enfoque del
proceso de formación, es decir, que la relación práctica-teoría debería
ser mayor, así como tendrían que impulsarse mayor cantidad de pro-
yectos de investigación e innovación dirigidos a una aplicación conti-
nua en el aula y abierta al cambio, y no como meras actuaciones pun-
tuales (Bernabé, 2015).
‒ ‒
Esta tesis doctoral, trata de contribuir a las investigaciones necesarias
para realizar una verdadera labor de andamiaje que permita a los profe-
sores de conservatorio conectar teoría y práctica, más aún, cuando la reali-
dad laboral del titulado superior de música, le obliga a ejercer en la mayoría
de casos como docente, bien en centros de enseñanza secundaria obligato-
ria, o con más suerte en conservatorios profesionales e incluso superiores,
más que como músico profesional (Bernabé y Torres, 2017).
Por último, respecto al eje Enseñanza-aprendizaje, se constata que a
menudo, las enseñanzas musicales en los conservatorios de música se
basan en metodologías arraigadas a la tradición, donde el docente no
siempre desarrolla en profundidad los conocimientos y habilidades psi-
copedagógicas adecuadas para la práctica educativa (Campayo y Ca-
bedo, 2018).
Aunque la búsqueda de una mejora en la calidad educativa no se realiza
desde solamente un punto de vista metodológico (Lerma, 2020), mejo-
rar en investigaciones metodológicas de enseñanza-aprendizaje, im-
plica bajar el grado de abandono en los conservatorios profesionales,
que es superior al 80%, y subir el 10% de los estudiantes que obtienen
una titulación superior de ese 20% restante que acaba el grado profe-
sional (Querol, 2017). Hay que evitar que las prácticas educativas inter-
pretativas en buena parte de los conservatorios españoles sigan ancladas
en modelos y métodos tradicionales, propios de anteriores culturas del
aprendizaje, donde destaca la figura del maestro como modelo supremo,
considerado artista antes que docente, y cuya reputación viene determi-
nada por su relación con instrumentistas legendarios o por su pertenencia
a determinadas escuelas, sin una carga de contenidos educativos y psico-
pedagógicos sólida y donde el estudiante se limita a ser un clon de su pro-
pio profesor (Bautista y Fernández, 2018).
Además, priorizar la salud física y psíquica del educando a su excelencia
debe ser un primer eslabón hacia una educación no solo humanamente
compatible, sino sostenible en el tiempo. Son los avances científicos
dentro del área de la Psicología de la música los que muestran la necesidad
de ensanchar el marco de la enseñanza musical, incorporando además del
aprendizaje y dominio de destrezas técnico-instrumentales junto a otras
disciplinas teóricas, el desarrollo de aspectos psicológicos que tienen
‒ ‒
que ver con el aprendizaje emocional, la neuroeducación, los procesos
motivacionales, la autoconfianza o el propio autoconcepto musical (Fer-
nández, de Paula y Blanco, 2021).
Por ende, se evidencia una falta de correspondencia curricular y com-
petencial existente entre las enseñanzas profesionales y superiores de
música de conservatorio, agravada por la transferencia competencial
autonómica de la legislación vigente en España, la cual genera una ma-
yor desigualdad geográfica. La realidad de un espacio superior artístico
que oferta diferentes líneas de estudios (interpretación, pedagogía, jazz,
música antigua, dirección, sonología, etc.) está siendo enfocada previa-
mente mediante una línea única de interpretación en las enseñanzas pro-
fesionales, que no necesariamente capacita ni para las competencias re-
queridas en el acceso ni en el currículum. Para ello, se debería plantear
una diversificación curricular en los itinerarios de estudios profesiona-
les mediante el uso de metodologías de enseñanza-aprendizaje y deter-
minación competencial específicas, respetando el currículum actual de
las citadas enseñanzas (Pascual y Peñalver, 2019).
El profesorado parte de una formación instrumental y competencia la-
boral común, garantizada por la posesión de una titulación similar de
acceso a la función pública docente de enseñanzas artístico-musicales,
pero el seguimiento en clase de los métodos estudiados puede condi-
cionar el modo en que los profesores complementan la formación téc-
nica del alumnado (Hallam, 2013). El profesorado debe tomar conciencia
de la disponibilidad actual de fuentes de información científica que le
brindan nuevos conocimientos sobre la enseñanza de su instrumento a par-
tir de diferentes hallazgos de estudios científicos sobre neuropsicología,
acústica o biomecánica aplicada al estudio de instrumentos musicales, así
como otros relacionados con la orientación didáctica del profesor (Lo-
renzo, Muñoz y Soares, 2018). Parece que puede existir una limitación
derivada del perfil profesional del docente de música, tradicionalmente
ambivalente entre la identidad como instrumentista o pedagogo. Por
ello, la búsqueda de la excelencia interpretativa no puede ser el argu-
mento para basar la enseñanza en repetir hasta que salga, error común
en la enseñanza-aprendizaje musical de conservatorios (Sloboda,
2014).
‒ ‒
Las metodologías didácticas musicales necesitan un cambio de cara al
futuro, debido a que las diferentes leyes educativas han sido más es-
tructurales que formales, ya que la administración no ha puesto al ser-
vicio del profesorado los medios adecuados para llevar a cabo dichos
planes (Rodríguez, 2018). Necesitan una transformación que lleva im-
plícita una formación específica y complementaria para el profesorado.
Por tanto, además de una formación en pedagogía, el profesorado de
conservatorio reclama más formación en aspectos como la inteligencia
emocional, la gestión de grupos y el manejo de recursos tecnológicos
(Muñoz y Bonastre, 2013). Por ello, la práctica educativa deberá diri-
girse, hacia la implementación de este tipo de estrategias y recursos,
optimizando la calidad de la enseñanza con una docencia más eficiente
(López, 2013). Aplicar una perspectiva de investigación a la reflexión
didáctica de la música puede apoyar el aprendizaje profundo en la teoría
de la educación musical (Holgersen, 2017), ya que puede informar los
enfoques pedagógicos en la formación del profesorado de música
(Georgii, Burnard y Holgersen, 2016).
‒ ‒
Como proyecciones futuras se constata la necesidad de continuar inves-
tigando para la mejora del sistema formativo musical. Por un lado, la
repetición en el futuro de estudios similares sobre el mismo objeto sería
deseable, con el fin de realizar un seguimiento de la implantación aquí
tratada. Se podría además extrapolar este tipo de investigación a otros
conservatorios profesionales y superiores de otras Comunidades Autó-
nomas y luego contrastar los resultados. Utilizando también la técnica
de clúster jerarquizado y obteniendo un coeficiente de generalizabili-
dad.
También se plantean nuevas líneas de investigación que este trabajo no
ha desvelado, como la aplicación de un programa de mejora en base a
los perfiles de los profesores de conservatorio aquí diagnosticados, y la
posterior recogida de datos: implementación de programas de forma-
ción continua, indicadores para la capacitación y selección del profeso-
rado de conservatorio, etc.
6. REFERENCIAS
‒ ‒
Bernabé, M. y Torres, M. (2017). ¿Qué formación didáctica recibe el futuro
profesorado de clarinete en el grado superior? Reflexiones y propuesta
curricular. Arbor, 193, 1-29.
Bisquerra, R. (2014). Metodología de la Investigación Educativa. Madrid: La
Muralla.
Campayo, E. y Cabedo, A. (2018). Investigación-acción como recurso para la
innovación y mejora de la práctica educativa en conservatorios: una
experiencia en las enseñanzas elementales de música en España.
Psychology, Society, & Education, 10 (1), 15-36.
Cardona, I. (2020, 14 de octubre). Trabajo en un conservatorio…¿soy músico o
pedagogo? https://www.melomanodigital.com/trabajo-en-un-
conservatorio-soy-musico-o-pedagogo.
Carmona, J. C. (2021, 16 de febrero). ¿Por qué es importante que los estudios
superiores de Música se cursen en la universidad?
https://elcorreoweb.es/opinion/ columnas/por-que-es-importante-
que-los-estudios-superiores-de-musica-se-cur sen-en-la-universidad-
AF7135929.
Cohen, L., Manion, L. y Morrison, K. (2018). Research Methods in Education.
Nueva York: Routledge.
Curbelo, O. (2018). La investigación en las enseñanzas superiores de música a
través del análisis de los trabajos fin de estudios en el Conservatorio
Superior de Música de Canarias. Edunovatic 2017. Conference
proceedings, 901-911.
Díaz, M. T. (2015). Los inicios de la profesión docente en los conservatorios de
música. Un estudio desde la perspectiva de los protagonistas. Revista
Musical Chilena, 223, 86-97.
Díaz, M. T. (2016, 6 de mayo). Los inicios de la profesión docente en los
conservatorios de música. http://socialmusik.es/inicios-profesion-
docente-conservatorios-musica.
Fernández, B. y Casas, A. (2016). Re-lecturas sobre Wundt y Seashore y
nacimiento de AEPMIM. La psicología en la música y con los músicos.
Epistemus, 4 (1), 133-160.
Fernández, B., de Paula, F. y Blanco, P. (2021). Profesionales de la psicología
como docentes en los conservatorios de música: hacia una educación
musical sostenible. Papeles del Psicólogo, 42(1), 37-48.
Gaines, J. M. (2018). Music Technology and the Conservatory Curriculum [Tesis
doctoral, Universidad de Columbia]. Repositorio institucional de la
Universidad de Columbia. https://doi.org/10.7916/D8NP3MW2.
‒ ‒
Georgii, E., Burnard, P., y Holgersen, S. (2016). Professional Knowledge in
Music Teacher Education. Aldershot: Routledge.
Gillanders, C. y Martínez, P. (2005). La investigación en el ámbito musical.
Música y educación: Revista trimestral de pedagogía musical, 64, 85-
104.
Goss, M. y Meneses, J. (2019). Análisis estadístico con JASP. Barcelona: FUOC.
Hallam, S. (2013). What predicts level of expertise attained, quality of
performance, and future musical aspirations in young instrumental
players? Psychology of Music, 41 (3), 267- 291.
Holgersen, S. (2017). Music teacher identity and professionalism.
Utdanningsforskning i musikk - didaktiske, sosiologiske og filosofiske
perspektiver, 1, 27-36.
Ibeas, M. (2015). Enseñanza-aprendizaje musical: una visión de los docentes de
instrumento en los conservatorios profesionales [Tesis doctoral,
Universidad del País Vasco]. Repositorio institucional de la Universidad
del País Vasco.
https://addi.ehu.es/bitstream/handle/10810/18219/TESIS_IBEAS_LOPEZ_MAR
TA.pdf.
Jiménez, M. A. y Ruiz, F. J. (2019). La incorporación al mercado laboral de los
egresados de conservatorio. Un estudio de caso de los titulados de
guitarra del Real Conservatorio Superior de Música de Granada, España.
AV Notas, 8, 93-108.
Jones, H. (2019). Ciencia de los datos: La guía definitiva sobre análisis de datos,
minería de datos, almacenamiento de datos, visualización de datos, Big
Data para empresas y aprendizaje automático para principiantes.
Nueva York: Bravex.
Lerma, A. (2020). Estudio de caso en el Conservatorio Profesional de Música
Cristóbal de Morales con el alumnado de orquesta de 4º de Enseñanzas
Básicas y tres alumnas de 2º de Enseñanzas básicas de violín [Trabajo
de máster, UNED]. Repositorio institucional de la UNED. http://e-
spacio.uned.es/fez/view/ bibliuned:masterComEdred-Jalerma.
López, G. (2013). Concepciones y prácticas instruccionales de profesores de
instrumentos de cuerda: Influencia en las concepciones y niveles de
comprensión musical de sus alumnos [Tesis doctoral, Universidad
Autónoma de Madrid]. Repositorio institucional Universidad Autónoma
de Madrid. https://repositorio.
uam.es/bitstream/handle/10486/661742/lopez_iniguez_guadalupe.pdf.
‒ ‒
López, R. (2013). La investigación artística en los conservatorios del espacio
educativo europeo. Discusiones, modelos y propuestas. Cuadernos de
música iberoamericana, 25, 223-241.
Lorenzo, O., Muñoz, S. y Soares, F. (2018). Estudio comparativo de métodos de
iniciación al violonchelo utilizados en los conservatorios de música
andaluces. Implicaciones para el profesorado. Psychology, Society, &
Education, 10 (1), 37-54.
Macías, R. (2017). ¿Investigar en los conservatorios? Mesa redonda en las II
Jornadas de investigación musical del Conservatorio Superior de Música
de La Mancha. Consonancias, 1, 193-205.
Mateos-Aparicio, G. y Hernández, A. (2021). Análisis multivariante de datos.
Cómo buscar patrones de comportamiento en BIG DATA. Madrid:
Pirámide.
Matias, C. (2021). The Handbook of Critical Theoretical Research Methods in
Education. Nueva York: Routledge.
Morales, A., Ortega, E., Conesa, E. y Ruiz, C. (2017). Análisis bibliométrico de
la producción científica en Educación Musical en España. Revista
española de pedagogía, 75, 399-414.
Muñoz, E. y Bonastre, C. (2013). La expresividad en la música. Quodlibet, 52,
40-52.
Narejos, A. (2020). La música en la investigación artística. Perspectiva
española actual. Quodlibet, 74 (2), 117-138.
Palacio, F., Apodaca, J. y Crisci, J. (2019). Análisis multivariado para datos
biológicos. Buenos Aires: CEBBAD
Pascual, E. y Peñalver, J. (2019). Conservatorios de música en España: de 6º
curso de enseñanzas profesionales a 1º curso de enseñanzas superiores.
Revista de estudios en Música, Cognición y Cultura. 7(1), 70-88.
Pastor, P. (2002). La investigación educativa musical. Eufonía: didáctica de la
música, 26, 84-88.
Querol, C. (2017). Análisis del modelo de liderazgo en la dirección de los
conservatorios profesionales en España [Tesis doctoral, Universidad de
Granada]. Repositorio institucional de la Universidad de Granada.
https:// digibug.ugr.es/bitstream/handle/10481/47789/2675793x.pdf.
Rico, C. (2018). Musicología en el Conservatorio Superior de Música de Navarra:
plan de estudios y necesidades docentes. En Actas del segundo congreso
nacional de Conservatorios Superiores de Música (Ed.), Formación y
evaluación en los diferentes niveles de la Educación Musical (pp. 75-89).
Noja: SEM-EE.
‒ ‒
Rodríguez, M. V. (2018). Modelos de enseñanza del lenguaje musical [Tesis
doctoral, Universidad Complutense de Madrid]. Repositorio institucional
de la Universidad Complutense de Madrid.
https://eprints.ucm.es/id/eprint/49380/1/ T40289.pdf.
Ruiz, J. M. (2020). El trabajo real en el conservatorio y la selección del
profesorado. Melómano, 262, 38-42.
Slodoba, A. (2014). The Acquisition of musical Performance Expertise:
Deconstructing the Talent Account of Individual Differences in Musical
Expressivity. En K. Anders (Ed.), The Road To Excellence: the
Acquisition of Expert Performance in the Arts and Sciences, Sports, and
Games (pp. 107-126). New York and London: Psychology Press.
Suárez, J. C., Recio, P., San Luis, C. y Pozo, P. (2019). Introducción al
Análisis de Datos. Aplicaciones en Psicología y Ciencias de la Salud.
Madrid: Sanz y Torres.
Tajul, M. (2020). Learning SPSS without Pain. A Comprehensive Manual for
Data Analysis and Interpretation of Outputs. Daca: ASA Publications.
Tello, I. (2020). Acompañamiento de danza y enseñanza musical en los
conservatorios de danza: investigaciones, publicaciones y aportaciones
didácticas. AV Notas, 9, 38-58.
Vernia, A. (2019). Music education as a base for employment opportunities. Situations
and projectes in schools of music and dance. En M. Hann y F. Hofecker
(Eds.), The future of music schools (pp. 179-190). Viena:
Musikschulmanagement.
Vernia, A. (2020). Educación musical en el panorama español. Contexto, niveles y
perfiles educativos. Didacticae, 7, 17-29.
Vieites, M. F. (2020). Las enseñanzas artísticas superiores en la ordenación
educativa en España. Una visión crítica. Foro de Educación, 18 (1), 209-
232.
‒ ‒
SECCIÓN IV
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
otros agentes sociales), en el marco de la convocatoria pública para la
promoción de Proyectos y Acciones de Innovación y Mejora en la Uni-
versidad de Murcia para el curso - . El trabajo que aquí se pre-
senta aborda en profundidad los detalles del primero de los dos Proyec-
tos de Innovación Docente referidos.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
razones principales es que la relación entre el docente y los estudiantes
se produce en términos generales “en forma lejana, y la impersonalidad
que se concibe no permite centralizar la atención en el sujeto que
aprende”. En ese sentido, en investigaciones previas realizadas (Carce-
lén, 2018) se señalaba la merma en el número de horas de docencia
presencial sobrevenida por la adaptación del sistema universitario es-
pañol al Espacio Europeo de Educación Superior (EEES), así como la
tendencia a la masificación de aulas, como agravantes de dicha reali-
dad. Sin embargo, cabe puntualizar que la dinámica de trabajo en Pro-
yectos, donde la actividad docente se desarrolla en formato taller, con-
trarresta esos aspectos favoreciéndose el acercamiento entre el profeso-
rado y los estudiantes.
Asumiendo por tanto esa relación cercana referida en las asignaturas
del área de Proyectos Arquitectónicos, se describen a continuación qué
instrumentos pedagógicos se han implementado en la presente expe-
riencia de innovación docente, de entre todos aquellos compendiados
por los expertos (Boza y Toscano, 2012, p. 126), destinados a incre-
mentar la motivación de los estudiantes:
‒ Instrumento nº1. El autocontrol sobre el aprendizaje. Se re-
fiere en realidad a la propia naturaleza de la metodología de
Aprendizaje Activo que históricamente ha sido la metodología
docente habitual implementada en los talleres de las asignatu-
ras de Proyectos. En este formato de docencia, el objetivo con-
siste en hacer que el estudiante se sienta responsable de su
propio aprendizaje, asumiendo el profesor un papel de mero
tutor/orientador durante el proceso de aprendizaje. Este hecho
implica que, para poder hablar por tanto de innovación, deban
implementarse instrumentos alternativos de motivación como
complemento del anterior.
‒ ‒
los requerimientos para superar la asignatura se establezcan de
acuerdo con las destrezas de partida del alumnado, para cuyo
conocimiento se recurre a la petición de un porfolio gráfico
personal al inicio de la experiencia, lo que permite así fijar el
alcance y el nivel de dificultad de los problemas a resolver.
‒ ‒
‒ Instrumento 5º. La valoración o utilidad de la tarea encomen-
dada. La utilidad de la tarea resulta determinante en la moti-
vación de los alumnos según Rinaudo, Chiecher y Donolo
(2003, p. 108-109). En ese sentido, la experiencia docente que
aquí se presenta plantea un punto de partida real respecto de
los problemas a resolver, en este caso, al atender las demandas
concretas formuladas por la comunidad universitaria (Profe-
sores, Estudiantes, y Personal de Administración y Servicios)
de la Universidad de Murcia, y materializadas en formato de
proyectos creativos elaborados por los estudiantes del Grado
en Publicidad y Relaciones Públicas. La incorporación de este
enfoque interdisciplinar a la experiencia buscaba, respecto de
los estudiantes de Arquitectura, la formación de “arquitectos
capaces de manejar estados de complejidad, de integrar mul-
tiplicidad de indicadores y dar respuestas amplias y compro-
metidas a una sociedad cada vez más exigente” (García Cla-
riana, 2016). Finalmente, y en este sentido de la utilidad de la
tarea, se introducen los incentivos o recompensas externas
como instrumento de motivación de los estudiantes, en este
caso, formalizados en la posibilidad de difundir el trabajo aca-
démico de los estudiantes tanto a través de publicaciones
como de exposiciones públicas.
3. MÉTODO
‒ ‒
El Proyecto de Innovación Docente en el que se ha enmarcado la pre-
sente experiencia docente se ha destinado a estudiantes de quinto curso
del Grado en Arquitectura —UPCT—, con una muestra conformada
por 35 sujetos que han participado de forma activa en la experiencia
(más 16 sujetos de tercer cuso del Grado en Publicidad y Relaciones
Públicas —UMU— participando en modo pasivo). El método em-
pleado ha exigido la planificación y el diseño de actividades docentes
con los que propiciar una serie de encuentros —que hemos denominado
intercambios—, entre los estudiantes de ambos Grados para la resolu-
ción de los problemas planteados, a través de los cuales se han ido im-
plementando los instrumentos pedagógicos descritos para reforzar la
motivación de los estudiantes.
‒ ‒
trabajo en las fases más prematuras del proyecto arquitectónico, y esta-
ban preparados para tenerlas en consideración a la hora de elaborar sus
proyectos creativos a lo largo del primer cuatrimestre, y que han servido
de punto de partida para los estudiantes de quinto curso del Grado en
Arquitectura durante el segundo cuatrimestre del curso.
Fuente: Autor
‒ ‒
base de trabajo preliminar a partir de la cual comenzar el proceso de
proyecto arquitectónico.
Fuente: Autor
‒ ‒
la toma de datos colaborativa mediante la observación, entrevistas y/o
encuestas.
Fuente: Autor
‒ ‒
mediante la cual desarrollar sus proyectos arquitectónicos de la mano
del cliente/promotor, como primera aproximación al contexto profesio-
nal.
Fuente: Autor
‒ ‒
Proyectos Arquitectónicos, Expresión Gráfica Arquitectónica, Compo-
sición Arquitectónica, y Urbanística y Ordenación del Territorio— y
asociado a la segunda entrega de la asignatura (Propuestas Arquitectó-
nicas), en el que se realizó una revisión y valoración de los trabajos
desarrollados, emitiendo los docentes una serie de críticas constructivas
de la que los estudiantes de Arquitectura podían obtener un aprendizaje
añadido.
Fuente: Autor
‒ ‒
someter a juicio y valoración pública las propuestas arquitectónicas rea-
lizadas, con el fin de seleccionar aquella o aquellas que mejor resolvían
las demandas del promotor real, y emplearlas así como instrumento de
negociación con el que evidenciar la necesidad real sobre la que se ha-
bía estado trabajando durante todo el proyecto. Esos resultados se reco-
gieron, además, en sendas publicaciones de resultados editadas por la
Universidad Politécnica de Cartagena (Carcelén, ) y por la Univer-
sidad de Murcia (Fernández y Carcelén, ).
Fuente: Autor
4. RESULTADOS
‒ ‒
Comunicación y Documentación de la Universidad de Murcia al inicio
del proyecto. El enunciado de trabajo para los estudiantes de quinto
curso del Grado en Arquitectura se ha formulado, por tanto, como un
encargo profesional teórico, desarrollándose como un ejercicio de re-
flexión sobre diferentes cuestiones relacionadas con la disciplina arqui-
tectónica en el contexto profesional.
Así, ha sido prioridad de los docentes entender cada propuesta como
una investigación en sí misma y, a la vez, cada una de ellas como parte
integrante de una línea de investigación de índole mayor. Para ello, se
ha propiciado durante el desarrollo del Proyecto de Innovación Docente
la diversidad de planteamientos en la respuesta de los estudiantes al en-
cargo académico, tratando con amplitud de miras parámetros como el
carácter efímero de las propuestas, la sostenibilidad, el genius loci, la
materialidad, la flexibilidad, etcétera. La experiencia docente que aquí
se presenta ha aportado a los estudiantes de quinto curso del Grado en
Arquitectura los siguientes resultados del aprendizaje, como comple-
mento a los propios de la asignatura en la que se ha enmarcado:
‒ Los estudiantes han tenido la capacidad de mediar y trabajar
de forma colaborativa tanto con los propios compañeros del
Grado en Arquitectura de la Universidad Politécnica de Car-
tagena, como con los estudiantes de las diferentes asignaturas
del Grado en Publicidad y Relaciones Públicas de la Univer-
sidad de Murcia. La herramienta de trabajo para conseguir este
resultado han sido las sesiones de trabajo colaborativo inter-
universitarias descritas, en las que los alumnos de uno y otro
grado han sido capaces de poner sus recursos en beneficio del
proyecto común.
‒ ‒
‒ Los estudiantes han sido capaces de elaborar material de difu-
sión y divulgación para conformar la muestra de una jornada
de exposición de resultados dirigida a un público no especia-
lizado en Arquitectura, pero que representan sin embargo al
usuario potencial de las propuestas desarrolladas.
‒ ‒
TABLA 1. Resultados de la valoración cualitativa, obtenida mediante encuesta anónima
cumplimentada por lo sujetos de la investigación
‒ ‒
trabajar con su equipo durante el proyecto, a la vez que reconocen que
dicha competencia resulta fundamental en el modo de trabajar en los
estudios y oficinas de Arquitectura y que, por tanto, se hace necesario
su aprendizaje durante los estudios universitarios.
Cuando se analiza la repercusión del enfoque interdisciplinar del pro-
yecto —valor , sobre —, así como el planteamiento de un enun-
ciado real de trabajo —valor , sobre — (dos de los instrumentos
que más acercan la experiencia académica al enfoque profesional) ob-
servamos cómo los valores medios obtenidos no descienden en ninguno
de los dos casos del valor , sobre , lo que nos lleva a considerar que
dichos instrumentos poseen un papel ciertamente importante a la hora
de incrementar la motivación de los estudiantes de quinto curso del
Grado en Arquitectura. Algunos de los comentarios de los estudiantes
se refieren a la importancia de comprender que la Arquitectura no es
solamente proyectar edificios, sino trabajar de la mano con una o varias
disciplinas con el fin de generar espacios habitables, ya sean arquitec-
tónicos o urbanos, y que los resultados siempre son mejores cuando se
trabaja de manera interdisciplinar por abordarse un mayor número y
complejidad de variables.
En lo que al empleo de incentivos o recompensas externas se refiere, y
contrariamente a lo que se esperaba de este instrumento de motivación,
los resultados de la encuesta evidencian una eficacia moderada en la
consecución de los objetivos del Proyecto de Innovación Docente. En
este punto, los comentarios de los estudiantes apuntan en dos direccio-
nes: por un lado, los participantes que afirman rotundamente cómo te-
ner conocimiento sobre las opciones de publicar y exponer sus trabajos
resultó muy motivador; por otro, aquellos estudiantes que identifican
en este instrumento un nuevo elemento de presión añadido a las exigen-
cias académicas de la asignatura.
Finalmente, el valor positivo obtenido en la última de las cuestiones de
la encuesta —valor , sobre — nos permite hablar de unos resultados
favorables en términos generales del planteamiento docente desarro-
llado, que como se señalaba al principio de este capítulo, buscaba la
implementación de una serie de instrumentos de motivación fundamen-
tados en el acercamiento a la práctica profesional de la Arquitectura.
‒ ‒
5. DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES
‒ ‒
el número de estudiantes cuyas calificaciones finales superan el estricto
aprobado, es decir, aquellos que han obtenido calificaciones de Notable
o Sobresaliente, que podría representar uno de los resultados más dis-
cutibles de este trabajo. Al fin y al cabo, el incremento de ese parámetro
resulta determinante si hablamos en términos de motivación del alum-
nado.
Por último, y salvando los inconvenientes señalados, se considera que
la experiencia presentada es transferible para su aplicación metodoló-
gica en otras asignaturas que integran los planes de estudios de los Gra-
dos en Arquitectura (gradualmente en extinción, y sustituidos por el
Grado en Fundamentos de Arquitectura) de las diferentes Escuelas de
Arquitectura del sistema universitario español. En ese sentido, los plan-
teamientos y los procedimientos establecidos para el desarrollo de este
trabajo permiten su adaptación y aplicación a otras asignaturas, con la
única premisa de que la docencia de éstas se cimente sobre un sistema
de evaluación de trabajos y portafolios —proyectos—, y se emplee una
metodología docente en el aula basada en el trabajo de tipo taller, que
propicie un ambiente idóneo para el aprendizaje activo deseado —tra-
bajo en equipo, colaborativo e interdisciplinar—. Además, y con el fin
de incrementar el acercamiento al contexto profesional, es deseable que
los enunciados de las tareas a desarrollar se formulen con un plantea-
miento lo más real posible, es decir, es conveniente la incorporación al
proyecto de agentes o participantes que asuman el papel de promotores,
y cuya tarea pasa por sentar las bases de la demanda o el problema a
resolver.
6. AGRADECIMIENTOS
‒ ‒
7. REFERENCIAS
‒ ‒
CAPÍTULO 79
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
virtuales con la formación académica tradicional, de manera que se
conviertan en un complemento para el aprendizaje, además de fo-
mentar la praxis y las destrezas adquiridas durante su educación den-
tro de la universidad, construyendo espacios especializados de gran
valor añadido.
El contexto en el que se enmarca este proyecto es el de la Facultad
de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de
Madrid, y las asignaturas para las que se ha desarrollado REDIAC,
son las materias artísticas que se imparten en el grado de Periodismo.
Estas materias, han permitido a los estudiantes realizar una forma-
ción transversal, conectando diferentes disciplinas y comprendiendo
la dimensión comunicológica del arte, además de los aspectos esté-
ticos del mismo.
El arte y la comunicación han tenido una profunda relación a lo largo
de la historia, la investigadora Vivian Romeu plantea esta vincula-
ción en torno a cuatro nodos conceptuales:
el nodo estético-histórico que aborda la relación entre el arte y la vida
desde una perspectiva contingente e histórica; el nodo estético-cogni-
tivo que se enfoca en la concepción del arte como vehículo del conoci-
miento universal, es decir, del conocimiento de lo inmutable, de lo ver-
dadero, y se ancla en una dimensión mayormente trascendentalista y
metafísica; el nodo estético-intuitivo que re-flexiona en torno a los pro-
cesos de creación del arte como procesos intuitivos, posicionándose con
ello a las puertas de la comunicación en tanto concibe la expresión clara
de lo intuido como el fin del arte; y el nodo estético-semiótico, que
aborda semióticamente los procesos de interpretación en el arte como
parte insoslayable de cualquier proceso comunicativo (2007, p.125)
‒ ‒
Museo de El Prado en Madrid—, de manea que el usuario pueda nave-
gar íntegramente por las obras.
Con más de dos décadas en funcionamiento, ArteHistoria se presenta
como un espacio en Internet donde se divulgan contenidos artísticos,
organizados y jerarquizados en diez secciones donde se pueden encon-
trar: obras de arte, artistas, monumentos, libros monográficos, museos,
lugares destacados, información sobre movimientos artísticos, escuelas
artísticas, además de un glosario donde el usuario puede consultar la
definición de cada uno de los términos.
WikiArt puede considerarse una de las principales enciclopedias artís-
ticas en línea, donde la comunicación de contenido artísticos destaca
por el amplio recopilatorio visual de obras y artistas, así por su clasifi-
cación y organización. Esta web está en línea desde 2010 y sus desa-
rrolladores tienen como país de origen Ucrania.
Siguiendo el ejemplo de estas importantes plataformas, REDIAC se
concibe como un repositorio de imágenes de arte contemporáneo adap-
tado a la asignatura de Movimientos Artísticos Contemporáneos. Este
recurso se convierte en un material específico y de gran utilidad para
los estudiantes de esta materia. Así mismo, el carácter abierto del pro-
yecto y la universalidad de los contenidos le hacen accesible al gran
público.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
dentro y fuera de las aulas que permitan incrementar la calidad
del proceso formativo y la aproximación al ejercicio profesio-
nal.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
tecnológico se ha utilizado para la elección del repositorio digital más
adecuado a nuestro fin, la elaboración de la herramienta propuesta, su
implantación y los roles definidos en ella para una correcta explotación.
‒ Disponibilidad de un amplio y accesible banco de imágenes
de Arte Contemporáneo para el estudio de las asignaturas ar-
tísticas (REDIAC).
4. RESULTADOS
‒ ‒
Para su creación hemos recurrido a los recursos digitales gratuitos que
ofrece la red, utilizando una plantilla de wix y recabando las imágenes
de los bancos virtuales que se ofrecen en abierto (wikimedia commons),
teniendo que estos materiales tienen como finalidad la divulgación edu-
cativa y académica.
‒ ‒
empiezan a debatirse. Las distintas figuras artísticas que trabajaron en
este momento, con su incidencia desigual hicieron de la pintura y la
escultura una aventura apasionante, estableciendo un puente de conti-
nuidad con el pasado, pero también un punto de partida y proyección
para otras maneras que surgirán en lo sucesivo. (Izquierdo, 2012, p.11)
‒ ‒
FIGURA 2. Página dedicada al Expresionismo
‒ ‒
Tema 3: Modernismo-Antoni Gaudí, Hector Guimard, Joseph
Hoffmann, Victor Horta, Joseph Maria Olbrich, Otto Wagner,
Gustav Klimt.
Tema 4: Escultura entre dos siglos- Auguste Rodin, Camille
Claudel, Constantin Brancusi
Tema 5: Pintura entre dos siglos-James Ensor, Edvard Munch.
Tema 6: Fauvismo-Henri Matisse, Maurice de Vlaminck, André
Derain.
Tema 7: Expresionismo-Max Pechstein, Ernst Ludwig Kirch-
ner, George Grosz, Otto Mueller, Ludwig Meidner, Wassily
Kandinsky, Franz Marc, August Macke, Egon Schiele.
Tema 8: Cubismo-Pablo Picasso, George Braque, Robert De-
launay, Fernand Leger, Juan Gris, Marcel Duchamp, Kazimir
Malevich.
Tema 9: Futurismo-Umberto Boccioni, Carlo Carrà, Giacomo
Balla, Luigi Russolo.
Tema 10: Dadaismo-Hans Arp, Sophie Taeuber, Francis Pica-
bia, Marcel Duchamp, Raoul Hausmann.
Tema 11: Abstracción Geométrica-Suprematismo (Kazimir
Malevich, Vladimir Tatlin) Neoplasticismo (Piet Mondrian,
Gerit Rietveld), Bauhaus (Paul Klee, Walter Gropius, Ludwig
Mies van der Rohe, Wassily Kandinsky), Funcionalismo (Le
Corbusier).
Tema 12: Realismos-Francia (Pablo Picasso, Marc Chagall,
Amedeo Modigliani, Tamara de Lempicka), Italia (Giorgio de
Chirico), Alemania (George Grosz, Otto Dix), México (José
Clemente Orozco, Diego Rivera, Frida Kahlo),
Tema 13: Surrealismo-Leonora Carrington, Ives Tanguy, Paul
Delvaux, René Magritte, Joan Miró, Salvador Dalí.
‒ ‒
GRÁFICO 1. Estadísticas de artistas y obras
‒ ‒
Este proyecto tiene un carácter abierto y permite ampliar tanto el nú-
mero de temas como el de artistas y obras, por lo que no descartamos
continuar incluyendo más referencias en los próximos cursos, am-
pliando este recurso en función de las necesidades de los futuros estu-
diantes de estas materias.
‒ ‒
Si tenemos en cuenta las posibilidades que ofrecen las redes sociales en
educación, se pueden ofertar actividades para trabajar competencias tan
básicas como la búsqueda, selección, gestión y transformación de la
información o la competencia de trabajo en equipo. La utilidad de la
propuesta conlleva tres ventajas añadidas, ambas redes son generalistas
y de manejo sencillo, prácticamente todo el alumnado está familiari-
zado con ellas y las usan habitualmente y no implican ningún coste eco-
nómico. Twitter y Facebook ayudarán al estudiante en la profundiza-
ción de los conocimientos tanto a nivel teórico como práctico, además
de mejorar sus destrezas con las nuevas tecnologías. (Izquierdo, 2016,
p.149-150)
Los resultados han sido constatables y a día de hoy Artenea cuenta con
un importante número de subscriptores (3690) de todas las nacionali-
dades. Esta publicación se nutre de un importante número de seguidores
en las redes sociales, Twitter (1781) y Facebook (1816).
Artenea y nuestras redes sociales han tejido una estructura de divul-
gación de contenidos artísticos para nuestros alumnos y por extensión
a un nutrido número de seguidores interesados en el mundo del arte y
el periodismo cultural, superando los límites de la asignatura y de la
propia universidad, colocando la publicación al nivel de otras de similar
contenido que circulan por la web. Plantear una metodología activa
combinando los herramientas tecnológicas con la enseñanza presencial
nos ha permitido adaptar la docencia al contexto socio-cultural contem-
poráneo, la Sociedad de la Información y al perfil de unos destinatarios,
ya conocidos como nativos digitales. (Izquierdo, 2016, p.153)
https://arteneablog.wordpress.com/
4.3.2. Espacio/Arte
‒ ‒
Antes de que se creara el Espacio/Arte, situado en el pasillo de Deca-
nato de la tercera planta, esta misma Facultad ya había acogido de
forma eventual y esporádica algunas muestras; es decir, que en la insti-
tución había existido la tradición de albergar exposiciones, pero sin una
programación fija. Sin embargo, es a partir del curso 2018-2019 cuando
empieza a organizarse este proyecto de forma más reglada bajo la su-
pervisión del vicedecano de estudiantes Cristóbal Fernández y con la
ayuda del órgano encargado del comisariado y la organización de las
exposiciones, un equipo formado por profesoras de la facultad (Violeta
Izquierdo, Alicia Parras y Natalia Gutierrez-Colomer), en su mayoría
vinculado con las enseñanzas artísticas, abriendo la posibilidad de par-
ticipar en estas experiencias también a becarios de colaboración depar-
tamentales como Érika Zurbano.
En el primer año de andadura se lanzó una convocatoria para que aque-
llos estudiantes que estuviesen interesados en exponer sus creaciones
enviaran sus propuestas al Vicedecanato. Finalmente, se presentaron
cerca de 25 proyectos, a los que se sumaron algunas propuestas de si-
nergias con otras asociaciones, y una comisión de evaluación realizó la
selección de los proyectos elegidos para ser expuestos.
La Facultad, además de acoger las muestras, también las documenta y
les da una mayor visibilidad a través de las redes sociales y su página
web. Gracias a la labor del encargado del Gabinete de Comunicación
de la Facultad, Miguel Ángel Tejedor, se puede encontrar online un lis-
tado cronológico muy detallado de todas las exposiciones que se han
llevado a cabo hasta el momento. Además, el blog Artenea, cuenta tam-
bién con una sección dedicada a Espacio Arte, donde se publican las
reseñas de las exhibiciones.
https://ccinformacion.ucm.es/espacioarte
https://arteneablog.wordpress.com/category/espacio-arte/
‒ ‒
en la que hemos colgado materiales didácticos en formato de video, con
el objetivo de que sirvan de apoyo a los estudiantes de materias artísti-
cas de las carreras de comunicación. Los objetivos están centrados en
la creación de un video individual relativo a una obra artística comen-
tada o sobre la biografía de un artista. Son piezas de corta duración, en
torno a 3 minutos en los que el estudiante adquiera destrezas encami-
nadas a la planificación del contenido (estudio, recopilación de infor-
mación, documentación). Realización de un guion sobre la obra a co-
mentar o a la biografía del artista, indagación sobre los hechos más re-
levantes relativos al autor, el contexto histórico, el movimiento artís-
tico, la obra y búsqueda de las imágenes y los contenidos específicos
sobre la obra tratada.
No son desdeñables las destrezas tecnológicas que el estudiante ad-
quiere durante la ejecución de este trabajo: utilización de programas de
edición de videos: edición y montaje, locución y narración del video,
inclusión de música y créditos.
Los resultados han sido muy elocuentes, el 90 % de los estudiantes ha
participado en la creación de videos, aunque todos no han conseguido
el nivel exigido para su publicación, en la actualidad contamos con 125
ejemplos en el portal de youtube donde se aloja la iniciativa, hay ejem-
plos en todas la tendencias artísticas que forman parte del temario de la
asignatura, el número de subscriptores al canal ha crecido notablemente
desde su puesta en marcha y el número de visualizaciones de cada video
es un claro exponente del interés que genera el proyecto.
https://www.youtube.com/c/ArteneaUCM
5. DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES
‒ ‒
revela un importante número de visitas diarias a nivel nacional e inter-
nacional lo que indica el interés generado en amplios sectores cultura-
les.
La utilización de plataformas en la enseñanza superior ha ido ganando
terreno en los últimos años y también las propuestas generadas y espe-
cíficamente creadas en las universidades, aunque en muchas ocasiones
se encuentran importantes obstáculos para su implantación como la:
Necesidad de una normativa a nivel europeo de derechos de autor, for-
mas de pago y compartición de materiales educativos. Necesidad de
unidades de apoyo ya que los diferentes grupos docentes necesitan de
unidades especializadas en TIC que den soporte tanto a usuarios como
a docentes. Necesidad de que la universidad como Institución, fomente
y construya plataformas que engloben todo el trabajo e-Learning de la
universidad limitando así las iniciativas individuales, pasando a inicia-
tivas globales. Necesidad de formación del profesorado para que exista
una uniformidad entre los estilos docentes de un centro. (Sanz, 2012,
p.103)
‒ ‒
un revulsivo para el alumnado y también para los profesores. Ha con-
tribuido a generar un modelo de enseñanza más flexible donde prima la
actividad y la construcción del conocimiento. Estas iniciativas han pro-
vocado una vía para integrar la enseñanza tradicional con los nuevos
entornos virtuales. Las redes sociales han supuesto una herramienta de
aprendizaje colaborativo, han ayudado a mantener el contacto dentro y
fuera del aula, además de aumentar la motivación por los contenidos
objeto de aprendizaje. (Izquierdo, 2016, p.152)
REDIAC busca generar un impacto en los docentes y en la propia ins-
titución universitaria, pero sobre todo en los estudiantes. Pretende ape-
lar a la motivación intrínseca del alumnado, a su participación y al desa-
rrollo de competencias transversales.
6. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
7. REFERENCIAS
‒ ‒
Gómez, M; Roses, S; Farías, P. (2012). El uso académico de las redes sociales en
universitarios. Comunicar, No. 38, Vol. XIX [En línea] Revista
Científica de Educomunicación. ISSN: 1134-3478. Año 2012. Pp. 131-
138. Disponible
en:http://www.revistacomunicar.com/index.php?contenido=detalles&
numero=38&articulo=38-2012-16
Izquierdo, V. (2012). Movimientos Artísticos Contemporáneos: del
Impresionismo al Pop Art, Fragua.
Izquierdo, V. (2016). Artenea: Arte y Periodismo, una experiencia de innovación
docente en la UCM. En S. Toledano, C. Hernández, A. Ardèvol y M.
Trenta (eds.). Del Verbo al Big, Cuadernos Artesanos de Comunicación,
115, pp.140-153. Tenerife: Sociedad Latina de Comunicación
Social.[ISBN-13: 978-84-16458-41-7 / D.L.: TF-605-2016 / DOI (del
libro): 10.4185/cac116 Página | 140 Libro colectivo en línea:
http://www.revistalatinacs.org/16SLCS/libro-colectivo.htm]
Jerónimo, J.A. (2008). Introducción a los sistemas de gestión de aprendizaje,
Construyendo la Comunidad de Aprendizaje en Red. Universidad
Nacional Autónoma de México. Facultad de Estudios Superiores
Zaragoza. Ed. Jerónimo. México.
Sanz, J.J (2012). Adaptación de las plataformas educativas a la construcción del
Espacio Europeo de Educación Superior (EEES). Revista Universitaria
Europea Nº17. Julio-diciembre, pp. 88-108.
Romeu, V. (2007). Arte y Comunicación. Apuntes para una reflexión sobre
comunicación artística. Anuario CONEICC de Investigación de la
comunicación, Nº XIV, México.
Velasteguí, P. (2019). Plataformas virtuales y su impacto en la Educación
Superior. Explorador Digital, 1(4), 5-21.
https://doi.org/10.33262/exploradordigital.v1i2.318
‒ ‒
CAPÍTULO 80
1. INTRODUCCIÓN
¿Las oyes? Son las golondrinas de hielo. Los alumnos están en escena
con las máscaras puestas, los móviles colocados a la altura de su boca
proyectan un primer plano de sus bocas recitando un poema escrito por
uno de los alumnos. Así da comienzo la obra que han creado los alum-
nos de HUB Creativo, Las golondrinas de hielo, una reflexión sobre la
libertad y la responsabilidad.
Esta obra, creada por un grupo de ocho alumnos, es una muestra del
talento artístico e inquietud creativa que poseen muchos de los alumnos
universitarios. En su recorrido por la Universidad, en el curso acadé-
mico 2020-2021 se creó HUB Creativo, un programa de creación artís-
tica encaminado a captar el talento latente entre el alumnado, y ofrecer-
les una oportunidad académica para su educación y desarrollo. Éste
debe ser entendido como un espacio para el impulso del desarrollo ar-
tístico y personal, y siempre en la búsqueda de la excelencia académica.
El programa está coordinado por Campus Creativo en el Museo Uni-
versidad de Navarra (MUN), y está dirigido a todos los alumnos de
Grado y Máster de la Universidad de Navarra (UNAV).
Este artículo relata y analiza el fundamento metodológico y la expe-
riencia pedagógica de este curso piloto, que tiene vocación de continui-
dad.
‒ ‒
2. NATURALEZA DEL PROYECTO
HUB Creativo es una iniciativa del área Campus Creativo del Museo
Universidad de Navarra, que tiene por objetivo promover el desarrollo
artístico, creativo y personal, a través de pequeños grupos de alumnos
seleccionados en todo el campus. Bajo esta premisa, se buscó relacionar
de forma ordenada y guiada a los alumnos con diferentes capacidades
creativas, para que en el entorno del Museo encontraran un espacio
donde ampliar su formación de forma conjunta e interdisciplinar, ade-
más de desarrollar habilidades que completen su formación académica.
HUB Creativo se estructuró, para esta primera edición piloto, en un pe-
queño equipo interdisciplinar, formado por alumnos procedentes de dis-
ciplinas y facultades diferentes. Se comenzó por un punto de partida
común, pudiendo consistir en una idea, un concepto, una realidad, una
imagen, una obra de arte o un elemento propio del Museo. A lo largo
del curso se buscó que los alumnos desarrollasen en grupo su propia
creación artística a partir de ese mismo punto de partida.
El programa combinó el conocimiento teórico con el práctico a través
de la investigación performativa, una innovadora metodología acadé-
mica conocida como practice-based research o research through per-
formance: se trata de una metodología en la que el proceso de aprendi-
zaje, creación y metacognición discurre paralelamente, que ofrece un
marco académico para fundamentar el aprendizaje y desarrollo, pero
que a su vez garantiza la libertad creativa y performativa, y dota de
herramientas para el autoanálisis del propio proceso. De esta forma, es
el alumno el responsable de su propio proceso de aprendizaje y crea-
ción, siempre guiado los firmantes de este capítulo.
Son varias las preguntas que dieron lugar al diseño de este novedoso
programa educativo:
‒ ¿Se puede fomentar el pensamiento creativo a través de es-
fuerzos conscientes?
‒ ‒
‒ ¿Cómo podemos, como docentes e investigadores, diseñar ini-
ciativas pedagógicas que se beneficien de la investigación ar-
tística?
3. EL PROCESO CREATIVO
‒ ‒
especial o genios; ésta se da más frecuentemente en el diálogo entre tres
elementos: el individuo, el dominio y el ámbito.
Csikszentmihalyi no sitúa al individuo como único protagonista, sino
como uno de los ejes de este modelo. Explica que: “la creatividad no se
produce dentro de la cabeza de las personas, sino en la interacción entre
los pensamientos de una persona y un contexto sociocultural” (Chemi,
Borup Jensen, Hersted, 2015, p.48). En este contexto, entiende por do-
minio las reglas implícitas y explicitas de una cultura, los valores, los
patrones de comportamiento compartidos, las normas y procedimien-
tos. El dominio debe estar incluido en el proceso creativo porque la
creatividad no ocurre en un vacío inconexo de su entorno. (Csikszent-
mihalyi, 1999). Es imposible introducir algo nuevo sin una referencia a
lo que lo precede, pero la introducción de una novedad no se considera
en sí misma un acto creativo (Csikszentmihalyi, 2015). Este acto debe
estar respaldado por el ámbito: los referentes en el campo en cuestión,
que tienen una influencia excepcional para reconocer y validar la inno-
vación. Conocidos también como gatekeepers, el autor hace referencia
a “profesores, críticos, editores, curadores, directores de agencias y
miembros de fundaciones, cuyo rol es decidir qué debería ser añadido
al conocimiento y ser transmitido a las futuras generaciones”
(Csikszentmihalyi, 2015, p. 211).
Es en este ecosistema de interacciones en donde ocurre el proceso crea-
tivo y el que motiva y fundamenta HUB Creativo. Gardner (1993)
apunta a que familiarizarse a nivel profesional con este proceso de ad-
quisición, internalización e incubación puede tomar hasta diez años. No
obstante, dada la naturaleza pedagógica del programa, no es uno de los
objetivos directos formar a artistas o creadores profesionales sino dar a
conocer el proceso y dotar al alumno de las herramientas para nave-
garlo. A tal efecto, el modelo de Csikszentmihalyi se presenta como el
marco teórico y pedagógico idóneo para enmarcar el desarrollo del pro-
ceso creativo y sus diferentes fases.
‒ ‒
‒ Preparación: Se refiere a enmarcar el problema y recoger in-
formación pertinente
‒ Incubación: Habla de observar y visualizar posibles estrate-
gias
‒ Iluminación: Es el momento de la generación de ideas
‒ Verificación/Implementación: Se trata de la valoración de
ideas y puesta en práctica
‒ ‒
FIGURA 2. ESTADOS DEL PROCESO CREATIVO
‒ ‒
FIGURA 3. INGREDIENT MODEL
‒ ‒
En esta ocasión, se seleccionaron ocho alumnos de Grado y Máster, de
cinco Facultades de la Universidad de Navarra, y originales de cuatro
países distintos. La conjunción de diferentes perfiles de estudiantes fue
un factor determinante en el proceso de selección de alumnos; la biblio-
grafía respalda los beneficios que aporta en las dinámicas grupales la
diversidad cognitiva, funcional y regional de sus miembros (Lant, Mi-
liken y Batra, 1992; Wiersma y Bantel, 1992; Kurzberg, 2005; Van der
Vegt y Bunderson, 2005). Los equipos generan pensamientos creativos
e innovadores a través de la interacción de sus miembros. Cuando la
fundación de un equipo está basada en una estructura jerárquica, la ten-
dencia es minoritaria en lo que se refiere a expresión innovadora y crea-
tiva. Sin embargo, cuando un grupo está articulado alrededor del diseño
de un objetivo común, se propicia la generación colectiva de procesos
impredecibles e innovadores, así como la emersión de respuestas crea-
tivas individuales y colectivas (Sawyer, 2007). Es lo que se conoce tam-
bién como capital social: “la habilidad de los actores de asegurar bene-
ficios en virtud de su pertenencia a estructuras sociales” (Csikszent-
mihalyi, 2015, p. 213)
En el trabajo en equipo, los participantes reciben impulsos, estímulos e
inspiración de los otros miembros del equipo, sobre los que reaccionan,
construyen y juegan. Esta idea introduce uno de los conceptos clave en
las dinámicas creativas colectivas: playfuylness. Se trata de una de las
claves del proceso, pues es a través del juego que los participantes ex-
perimentan y prueban nuevas posibles ideas y acciones, y con ello, ins-
piran y estimulan al grupo. Esta dinámica genera una interacción crea-
tiva que además fomenta el aprendizaje de las particularidades del tra-
bajo en equipo. Csikszentmihalyi, en su estudio de la experiencia crea-
tiva, acuñó el término flow, para describir el sentimiento que se da
cuando las habilidades pasan a un segundo lugar y uno siente que todo
viene de forma natural, cuando incluso se pierde la noción del tiempo
por la intensa concentración. “Este sentimiento óptimo de flow es el que
nutre el motor de la motivación intrínseca que impulsa la creatividad”
(Schmidt and Wolfe, 1998, citado en Csikszentmihalyi, 2015, p. 173).
‒ ‒
3.3. EL ROL DEL PROFESOR
‒ ‒
creativo protagonizado por los alumnos, la identificación de las distin-
tas fases creativas, el reconocimiento de problemas y obstáculos, y el
asesoramiento artístico o metodológico que el alumno necesita para
continuar.
4.1. EMERSIÓN
‒ ‒
materiales, nuevas organizaciones, nuevas funciones, nuevas perspec-
tivas, y nuevas formas de ser” (Cariani, 2008, p.2). Johnson (2001)
añade que la emersión es una forma elevada de conocimiento y com-
portamiento, arropada por “una nube lógica, pero con nadie al mando
en la oficina central” (2001, p. 233), que reside de aquellos recovecos
de la mente donde la conciencia parece que no es capaz de alcanzar
(Csikszentmihalyi, 1996). Los momentos de emersión impactan direc-
tamente el proceso creativo, dando una nueva forma al contenido, y de-
finiendo los siguientes pasos que el proceso requiere. Es por ello que
tanto los complejos procesos de creación deben considerar espacio para
lo inesperado, que, si bien es desconocido al comienzo del proceso, se-
rán momentos fundamentales en el transcurso del acto creativo.
En la aplicación pedagógica, para poder dar pie a episodios de emersión
en los alumnos resulta fundamental un diseño pedagógico fuerte y so-
lido, pero a su vez flexible. La búsqueda de este equilibrio recae sobre
el docente, quien debe ser facilitador del marco metodológico, fuente
de conocimiento, debe poder reconocer las necesidades de los alumnos,
facilitar las herramientas para el avance, pero no interferir en los pro-
cesos creativos que ocurren entre los alumnos participantes, sino man-
tener una actitud de no-intervención y no-manipulación.
4.2. DOCUMENTACIÓN
‒ ‒
cierta energía performativa que se materializara en otros aspectos de la
performance, -no necesariamente los elementos visuales-, y con ello,
indirectamente, afectan al espectador” (p.477)
En el proceso de documentación, los sujetos representan sus avances en
la indagación sobre la materia a través de diarios, testimonios, graba-
ciones, escritos, fotografías, sketches, moodboards, u otros soportes
(Nelson, 2013). Este proceso, que puede darse de forma individual o
colectiva, sirve dos propósitos: “En primer lugar, la memoria es imper-
fecta y sujeta a la percepción del momento, emborronada por el olvido
y la subjetividad. Al apoyar nuestra memoria con estas representacio-
nes, somos más capaces de analizar el proceso. En segundo lugar, el
tiempo cambia la percepción” (Hermans et al. 2021, p. 1568). Los pro-
cesos de documentación se suceden de forma recurrente y concatenada
a lo largo del proceso creativo y el desarrollo de nuevo material artís-
tico, lo que resulta en un acto natural de análisis, reflexión y autorre-
flejo. El conocimiento derivado de este proceso de documentación y
análisis afecta el comportamiento de los participantes durante su
desempeño (Haseman and Mafe, 2009, p.219).
4.3. REFLEXIÓN
‒ ‒
Los procesos de reflexión son el camino para que el estudiante desarro-
lle herramientas de autonomía en el aprendizaje y autocrítica. Es a tra-
vés de ellos que se accede consciente y reflexivamente a los conoci-
mientos y estrategias de aprendizaje (Roa Ordóñez, 2016). Estas herra-
mientas representan la garantía del avance en el proceso creativo y cog-
nitivo. No obstante, en este acercamiento auto-etnográfico López Cano
señala uno de sus peligros: que se limite a un discurso: “ensimismado,
descriptivo, testimonial, acrítico y complaciente que colabora más a la
construcción de la imagen pública del artista que a la transmisión de
conocimiento crítico y útil para su comunidad profesional” (2020a, p.
25). Tratándose de un ambiente universitario con participantes no pro-
fesionales, se abordó este proceso buscando evitar juicios y prejuicios
personales a través del refuerzo del sentimiento del compromiso colec-
tivo. Este concepto hace referencia a la tarea compartida con un colec-
tivo, y “crea un clima en el que el intercambio de conocimiento y la
construcción de nuevo conocimiento compartido puede surgir” (Chemi,
Borup Jensen, Hersted, 2015, p. 195).
Estos elementos ayudan a ilustrar cómo la metodología de practice-ba-
sed research es flexible, se adapta al propio alumno y al grupo, a sus
inquietudes y a su ritmo de trabajo, mientras le dota de las herramientas
y de la guía para poder formular sus propios resultados artísticos y aca-
démicos. En palabras de los investigadores performativos Saenz et al.:
“cuando el artista realiza una investigación sobre su propio proceso, le
permite acercarse a sí mismo” (2021, p. 1486). En suma, es el propio
alumno quien es dueño y guía de su proceso, y actúa en consecuencia.
5. HUB CREATIVO
5.1. OBJETIVOS
‒ ‒
− Crear un espacio para el desarrollo artístico y creativo en la Uni-
versidad de Navarra, que a su vez establezca una conexión di-
recta entre los alumnos de las diferentes Facultades y el MUN.
− Crear una plataforma pedagógica que integre una nueva meto-
dología de trabajo, y la creación artística en el entorno acadé-
mico, donde los alumnos puedan cultivar y perfeccionar su per-
fil artístico, y así completar su portfolio enriqueciendo su perfil
profesional.
− Ofrecer una oportunidad profesional real en la que se trabaja
bajo las mismas pautas con las que funciona el mundo artístico-
creativo. Si una o varias de las nuevas creaciones artísticas
desarrolladas destaca por su calidad artística, desde Campus
Creativo se planteará a la dirección del Museo, su exhibición o
puesta en escena dentro del propio espacio del MUN.
5.2. ALUMNADO
Este primer curso recibió quince solicitudes. Tras una entrevista perso-
nal a cada uno de los inscritos, se seleccionaron ocho alumnos para for-
mar parte del equipo piloto. Se muestra a continuación una relación de
los alumnos seleccionados:
‒ ‒
TABLA 4. Relación de alumnos seleccionados
Nacionali-
# Estudios y Facultad Arte Notas
dad
1º Comunicación Audiovi-
sual. Programa en Pro-
ducción de Artes Escéni- Coreógrafa
1 Ecuador
cas. Bailarina
Facultad de Comunica-
ción.
1º Filosofía. Escritura
2 Facultad de Filosofía y España Dramaturgia
Letras. Escenografía
2º Pedagogía. Escritura
3 Facultad de Educación y Perú Acuarela
Psicología Y combinadas
4º Diseño. Escritura
4 Escuela Técnica Superior España Dibujo
de Arquitectura. Dramaturgia
4º Literatura y Escritura
Dramaturgia
Creativa.
Dibujo
5 Facultad de Filosofía y España
Escritura
Letras.
Guitarrista
4º Psicología
6 Facultad de Educación y España Dibujo
Psicología.
Máster en Enfermería Dibujo
7 Chile
Facultad de Medicina. Fotografía
Dejó la Uni-
Creador de conte-
1º Comunicación Audiovi- versidad a mi-
nido
sual. tad de se-
8 Ecuador Youtuber
Facultad de Comunica- mestre y no
Edición de videos
ción. continuó con
Batería
el programa
Fuente: elaboración propia
La duración del curso fue de doce semanas, con una dedicación semanal
de 4 horas distribuidas siempre en horas no lectivas, consensuadas en
coordinación con todos los participantes al arranque del semestre. El
trabajo el aula estuvo dirigida por los autores de este capítulo, basado
en la metodología practice-based research (elaborado en el apartado
‒ ‒
4). y siempre diseñado de naturaleza colectiva. Esta metodología per-
mite que el alumno conozca y reconozca las diferentes fases del proceso
creativo, frecuentemente simultáneas y recurrentes. Este conocimiento
favorece que el alumno fluya desde el espectro racional y emocional,
espontáneo y racional, siendo ésta la clave para la emersión (ver apar-
tado 4.1).
Tras unas primeras sesiones de introducción y contextualización teó-
rico-prácticas, se procedió a tomar como punto de partida común la ex-
posición Memorándum, de Luis Gordillo, en ese momento en exhibi-
ción en el MUN, con la voluntad de integrar la actividad propia del
Museo dentro del programa creativo. El trabajo entonces estuvo articu-
lado en tres periodos: el proceso de conceptualización, el proceso de
diseño artístico práctico-teórico y un proceso de autorreflejo.
5.3.1. Conceptualización
‒ ‒
libertad y responsabilidad. En palabras de la misma alumna mencio-
nada anteriormente:
“Llegamos a la conclusión de que el tema que sobresalía y del que nos
interesaba hablar era la libertad, concretamente, sobre la vulnerabilidad
de la libertad. Para definir más esta idea pusimos en común nuestros
conceptos sobre la libertad desde una perspectiva personal. Llegamos a
la conclusión de que el ser humano necesita desarrollarse, estar en mo-
vimiento para sentirse vivo, para crecer, y este movimiento es la liber-
tad. ¿Y qué es también la libertad? Hacernos responsables de nuestros
propios actos con todas sus consecuencias, buenas y malas. En esta li-
bertad podemos alcanzar nuestros objetivos y conocernos a nosotros
mismos, crecer personalmente, pero también podemos sentir soledad,
incertidumbre, miedo. Pero eso es vivir, al fin de al cabo. Es un tema
que siempre es relevante, pero en las circunstancias actuales la libertad
es sobre lo que reflexionamos mucho y es una época en la que su sig-
nificado o nuestra forma de sentir esta libertad puede cambiar” (Presen-
tación HUB, 11 mayo 2021).
En esta fase, una de las plataformas online que fue sirvió de herramienta
y soporte fue Trello. Este instrumento permite la creación colectiva de
tableros virtuales, lo que favoreció la construcción de un discurso artís-
tico común, donde todos los alumnos participaron volcando sus inquie-
tudes y aportaciones. Sobre dichos tableros virtuales construimos nues-
tras reflexiones en las sesiones presenciales. Esta herramienta consti-
tuyó una forma de comunicación artística directa entre los alumnos, ga-
rantizando que el proceso fuera común, colaborativo, libre y accesible
a todos.
5.3.2. Diseño
‒ ‒
complejo, y en él los alumnos pudieron vivir en primera persona la re-
currencia de las diferentes fases creativas, su simultaneidad, y la nece-
sidad de perseverar en el acto creativo; mientras, desarrollaban herra-
mientas como aprender a trabajar en equipo, la importancia de la em-
patía, y la capacidad de escucha. El resultado artístico de este proceso
es una obra audiovisual y performativa titulada Las golondrinas de
hielo, que se detalla en el apartado 5.4.
5.3.3. Autorreflejo
‒ ‒
“El HUB ha impactado mucho en mi percepción sobre la creatividad y
los procesos creatives. He podido adquirir una visión teórica, imple-
mentándola a la práctica. Asimismo, he podido trabajar en equipo de
un modo que nunca antes lo había hecho.
Los alumnos debieron elegir entre: Nada aplicable (0%), Poco aplicable (0%), Aplicable (0%),
132
‒ ‒
con el tamaño del equipo. El mismo porcentaje de alumnos sugirió que
fuera de una duración mayor, con testimonios como:
“Me hubiera gustado que durara más tiempo y poder hacer cosas como
más expresión libre para coger confianza, ver más, hacer más en co-
mún”
“Me han parecido bien las horas de taller que hemos tenido y lo he
disfrutado mucho, por eso mismo me he quedado con ganas de más.
Quizá me hubiera gustado tener más clases sobre las parte teórica de la
creatividad porque resultaba muy interesante”
Sobre la guía y el rol de los tutores, Dr. Hermans y Dra. Pomés Jiménez,
los alumnos mostraron su satisfacción con comentarios como los si-
guientes:
“Han sido unos profesores increíbles, muy cercanos. Han aportado co-
nocimiento, experiencia personal, dedicación y profesionalidad artís-
tica”
“Creo que nos han dejado mucho espacio y mucha libertad, lo que es
de admirar siendo profesores. Han sabido comunicarse asertivamente
mientras nos transmitían sus conocimientos y daban espacio a que nos
retroalimentemos todos”.
‒ ‒
libertad y restricción: los alumnos llevan puesta su mascarilla, es la
pantalla de su móvil la que colocan frente a sus bocas, pero sus bocas
recitan el poema. Tras el poema, dos de ellos toman la escena. Tomando
elementos del poema, construyen un diálogo donde reflexionan sobre
la libertad, la responsabilidad, la dualidad de nuestras decisiones. En la
presentación, dos alumnas lo resumían con estas palabras: “Ser libre y
conocerte a ti mismo, te permite tener una mirada más amplia y abierta
sobre la vida, y está en nuestras manos tomar esa libertad o dejarla ir
como a las golondrinas” (Presentación HUB, 11 mayo 2021).
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
Representa un fiel reflejo del ámbito profesional al que se en-
frentarán nuestros alumnos.
7. REFERENCIAS
‒ ‒
Csikszentmihalyi, M. (1996). Creativity: Flow and the psychology of discovery
and invention. New York: Harper Collins Publishers.
Csikszentmihalyi, M (1999), "Implications of a Systems Perspective for the Study
of Creativity" in Sternberg, R. J. (Ed.) Handbook of creativity.
Cambridge: Cambridge University Press, pp. 313-338.
Csikszentmihalyi, M., & Schiefele, U. (2009). Arts education, human
development, and the quality of experience. (In: Arts in education:
Ninety-first yearbook of the National Society for the Study of Education
/ B. Reimer, R. A. Smith. - Chicago: University of Chicago Press, 1992,
S. 169-191.)
Csikszentmihalyi, M. (2015). The Systems Model of Creativity: The Collected
Works of Mihaly Csikszentmihalyi. Dordrecht: Springer Netherlands.
Csikszentmihalyi, M., & Hoopla digital. (2016). Flow: The psychology of
optimal experience. United States: Joosr Ltd.
De Assis, P. (2013). Epistemic Complexity and Experimental Systems in Music
Performance. En M. Schwab (Ed.). Experimental Systems. Future
Knowledge in Artistic Research (pp.151-165). Lovaina: Leuven
University Press.
De Assis, P. (2018). Logic of experimentation: rethinking music performance
through artistic research. Leuven University Press.
Engeström, Y. & Kerosuo, H. (2007). "From Workplace Learning to Inter-
Organisational learning and back: The Contribution of Activity
Theory",The Journal of Workplace Learning, vol. 19, no6, pp. 336-343.
Special issue: Activity Theory and Workplace Learning.
Faber, J. (2016).
Gardner, H. (1993). Creating minds. New York: Basic Books.
Haseman B., & Mafe, D. (2009). Acquiring Know-How: Research Training for
Practice-led Researchers. Research Methods for the Arts and
Humanities: Practice-Led Research, Research-Led Practice in the
Creative Arts.
Hermans, S. (2018). The Trumpeter Re-Conceived: An investigation of the
creative and performative skills required in New Music Theatre works”.
[Unpublished manuscript]. University of Melbourne
Hermans, S. (2021). Silencio, the Co-Creation of a New Music Theatre Piece.
Forum +, 28(1), 32-39.
‒ ‒
Hermans, S., MacDevitt, P., Pomés Jiménez, B., Saenz, I. (2021). Extending non-
professional performative projects: integrating research-through-
practice. En S. Olivero Guidobono (Ed.) El devenir de las civilizaciones:
interacciones entre el entorno humano, natural y cultural (pp. 1563-
1587). Dykinson S.L.
Hübner, F. (2020). The Practitioner in the Centre. A Flexible Approach to
Methodology in Practice-Based Research. in Craig Vear (ed.). Routledge
Handbook for Practice-Based Research. Routledge, forthcoming.
Johnson, S. (2001). Emergence. The Connected Lives of Ants, Brains, Cities and
Software. London: Penguin
Kurtzberg, T. R. (2005). Feeling creative, being creative: An emperical study of
diversity and creativity in teams. Creativity Research Journal, 17(1), pp.
51-65.
Lant, T.K., Milliken, F. J., & Batra, B. (1992). The role of managerial learning
and interpretation in strategic persistence and reorientation: An
emperical exploration. Strategic Manegement Journal, 13 pp. 585-608
Lave, J. & Wenger, E. (1991). Situated Learning: Legitimate Peripheral
Participation. Cambridge: Cambridge University Press.
Levinson, D.J. (1978). The seasons of a man's life. New York: Knopf
López Cano, R. (2020a). Investigación artística indisciplinada. En J. Swartz (Ed.).
Indisciplines: Actes del Congrés sobre la recerca en la práctica de les
arts (pp.23-26). Barcelona: Universitat de Barcelona.
López Cano, R. (2020b). Investigación artística en tránsito. Resonancias, 24(46).
López Cano, R. (2020c). La evaluación de la investigación artística formativa.
Estesis, 8(8), 28-41.
López González, M., Limb, C. J. (2012). Musical creativity and the brain.
Retrieved from: https://tinyurl.com/y38gbj47.
Östersjö, S. (2008). SHUT UP ’N’ PLAY!: Negotiating the Musical Work.
Sweden: Malmö Academies of Performing Arts
Portes, A. (1998). Social capital: Its origins and applications in modern sociology.
Annual Review of Sociology, 24, 1-24
Roa Ordóñez, H. (2016). Estrategias creativas y metacognitivas en el aprendizaje
musical. Civilizar. Ciencias Sociales y Humanas, 16(30),207-222.
Saenz, I. (2020). A ti músico, que estás pensando en investigar. Sonograma
Magazine, 46.
‒ ‒
Saenz, I., Hermans, S., Pomés Jiménez, B., MacDevitt, P., (2021). Los intérpretes
y la academia. Una revisión de los debates en investigación performativa
musical. En S. Olivero Guidobono (Ed.) El devenir de las civilizaciones:
interacciones entre el entorno humano, natural y cultural (pp. 1472-
1491). Dykinson S.L.
Sawyer, K. (2007). Group genius: The creative power of collaboration. Basic
Books.
Sawyer, R. K. (2012). Explaining creativity: The science of human innovation.
Oxford: Oxford University Press.
Van Der Vegt, G. S. & Bunderson, J. S. (2005) Learning and performance in
multidisciplinary teams: The importance of collective team
identification. Academy of Management Journal, 48(3), 532-547
Wallace, G. (1926/2014). The Art of Thought, UK: Solis Press
Wenger, E. (1998). Communities of Practice: Learning, Meaning and Identity.
Cambridge: Cambridge University Press.
Wiersma, B. F., & Bantel, K. A. (1992). Top management team demography and
corperate strategy changes. Academy of Management Journal, 35, pp.
91-121
‒ ‒
CAPÍTULO 81
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
2. OBJETIVOS
‒ ‒
OP7.- Difundir los resultados obtenidos en el proyecto de mejora do-
cente para permitir solucionar problemáticas similares.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
estudiantes. Se compararon las horas totales trabajadas con las horas
totales no presenciales que se recomiendan para asignaturas de 6 crédi-
tos ECTS (90 horas), como se indica en el Real Decreto 1125/2003, de
5 de septiembre (2003).
Igualmente, para poder analizar los datos relacionados con la carga de
trabajo fue necesario definir un conjunto de indicadores objetivos que
permitieron valorar las consecuencias de la carga de trabajo elevada,
así como el grado de adquisición de las competencias del tercer curso.
Con este fin, se cruzaron los datos del trabajo dedicado a cada asigna-
tura con los resultados obtenidos en las encuestas de satisfacción del
profesorado, las encuestas de satisfacción con el GIE y los porcentajes
de aprobados, suspensos y no presentados de cada asignatura.
Los recursos empleados para esta tarea fueron la sala de reuniones de
profesores de la ETSIIAB, así como las encuestas de satisfacción reali-
zadas. Los procedimientos y metodología empleados fueron la realiza-
ción de reuniones de coordinación, estudio de la carga de trabajo obte-
nida en la tarea 1 y comparación con los resultados del calendario de
actividades y encuestas de satisfacción.
La realización de esta tarea implica la consecución parcial o absoluta
de los objetivos OF, OP1 y OP2.
Tarea 3. Propuesta de acciones a realizar
En esta tarea se propusieron diferentes acciones para solucionar los pro-
blemas observados en la fase de análisis de datos. Estas acciones pro-
puestas están relacionadas con la planificación de las actividades, me-
todologías y evaluación de las asignaturas. Para ello, se realizaron
reuniones de coordinación con el equipo de profesores con docencia en
el curso (y otros profesores y estudiantes del GIE cuando ha sido nece-
sario).
A continuación, se repitió la Tarea 1. Recopilación y monitorización de
la carga de trabajo para obtener de nuevo las horas de trabajo no pre-
senciales dedicadas por los estudiantes en cada asignatura después de
las medidas adoptadas.
‒ ‒
Los recursos empleados para esta tarea fueron la sala de reuniones de
profesores de la ETSIIAB, así como las encuestas de satisfacción reali-
zadas y la hoja Excel completada por los estudiantes. Los procedimien-
tos y metodología empleados fueron la realización de reuniones de
coordinación y la monitorización de la carga de trabajo a través de la
hoja Excel proporcionada a los tres estudiantes.
La realización de esta tarea implica la consecución parcial o absoluta
de los objetivos OF, OP1, OP2, OP3, OP4, OP5 y OP6.
Tarea 4. Evaluación de resultados obtenidos
Una vez finalizadas las acciones de mejora propuestas y la recopilación
de la nueva carga de trabajo, se realizó de nuevo el análisis para deter-
minar si estas acciones propuestas surtieron efecto.
Asimismo, se continuaron con las reuniones de coordinación para se-
guir con una iteración más con respecto a la propuesta de acciones a
realizar para mejorar las actividades, metodologías, evaluación y asi-
milación de las competencias del tercer curso del GIE.
Los recursos empleados para esta tarea fueron la sala de reuniones de
profesores de la ETSIIAB. Los procedimientos y metodología emplea-
dos fueron la realización de reuniones de coordinación y la realización
de un nuevo calendario de actividades.
La realización de esta tarea implica la consecución parcial o absoluta
de los objetivos OF, OP1, OP2, OP3, OP4, OP5 y OP6.
Tarea 5. Elaboración de informes de seguimiento y memoria final
Durante la ejecución del estudio de mejora docente, se elaboraron un
informe específico de seguimiento y una memoria final para los dife-
rentes agentes en la que se describieron las actividades y procedimien-
tos empleados para alcanzar los objetivos planteados.
La realización de esta tarea implica la consecución parcial del objetivo
OP7.
Tarea 6: Presentación y difusión de los resultados
‒ ‒
Con la intención de lograr la máxima repercusión de los resultados ob-
tenidos y su difusión en los ámbitos científicos y académicos. Los re-
sultados derivados del presente estudio han sido presentados a congre-
sos y revistas de especial relevancia dentro del campo de innovación
educativa.
La realización de esta tarea implica la consecución parcial del objetivo
OP7.
4. RESULTADOS
‒ ‒
FIGURA 1. Hoja Excel empleada para la obtención del trabajo no presencial de los estu-
diantes
FIGURA 2. Planificación de tareas del primer semestre de tercer curso del GIE 2020-2021
‒ ‒
FIGURA 3. Planificación de tareas del primer semestre de 3º del GIE del curso 2019-2020
‒ ‒
TABLA 2. Dedicación no presencial recomendada por el EEES (dato inicial recomendado
en negrita)
‒ ‒
TABLA 4. Criterio propio de dedicación no presencial mínimo (dato inicial en negrita)
TABLA 5. Dedicación no presencial recomendada en una jornada laboral normal (dato ini-
cial en negrita)
Se puede observar, que este criterio es similar al anterior donde las ci-
fras calculadas son muy parecidas con un pequeño incremento en la
dedicación total de 9 horas y 30 minutos. A pesar de este incremento,
el límite máximo obtenido esta todavía por debajo del límite impuesto
por el EEES.
‒ ‒
A partir de los cálculos realizados se puede hacer un análisis más pro-
fundo, entendiendo cómo se obtiene cada dedicación no presencial por
parte del estudiante. En este sentido, se muestra en los siguientes gráfi-
cos la dedicación no presencial obtenida durante el estudio de la carga
de trabajo de los estudiantes para las tareas 1 y 3 indicada en la sección
3 durante los cursos 2019-2020 y 2020-2021. El gráfico 1 muestra la
carga de trabajo no presencial semanal para el curso 2020-2021, donde
las líneas rectas representan los límites calculados de arriba a abajo (es
decir, límite EEES en amarillo, criterio jornada laboral de 1944 h/año
en azul, criterio propio 3 h/día en gris y criterio propio 1 h/día en na-
ranja).
GRÁFICO 1. Horas por semana de la carga de trabajo no presencial para el curso 2020-
2021
‒ ‒
mismas tendencias indicadas antes. Además, se observa que se ha re-
ducido la carga de trabajo en las dos ultimas semanas y se realiza una
mejor distribución temporal en el curso 2020-2021, después de realizar
las acciones de coordinación.
GRÁFICO 2. Horas por semana de la carga de trabajo no presencial para el curso 2019-
2020
‒ ‒
GRÁFICO 3. Horas por asignatura de la carga de trabajo no presencial para el curso 2020-
2021
GRÁFICO 4. Horas por asignatura de la carga de trabajo no presencial para el curso 2019-
2020
‒ ‒
GRÁFICO 5. Horas por semana y asignatura de la carga de trabajo no presencial para el
curso 2019-2020
‒ ‒
Fuente: elaboración propia
Los datos analizados muestran que los límites indicados por el EEES
no se cumplen en las semanas 9 (Máquinas Eléctricas), 10 (Electrónica
de Potencia), 11 (Máquinas Eléctricas), 13 (Líneas Eléctricas) y 14
(Instalaciones Eléctricas de Baja Tensión). De este modo, al analizar
los datos de los gráficos 1 y 3 simultáneamente se aprecia que las asig-
naturas de Instalaciones Eléctricas de Baja Tensión, Electrónica de Po-
tencia y Máquinas Eléctricas presentan en general una carga de trabajo
adecuada, pero esta carga de trabajo se concentra a mitad y final del
semestre por lo que no se cumplen los límites indicados por el EEES,
habría que distribuir mejor temporalmente la carga de trabajo para evi-
tar picos altos de actividad.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
En concreto, se acuerda proponer solo dos actividades (entregas o exá-
menes) por semana, así como dividir la entrega de trabajos en dos par-
tes, para evitar la acumulación de todo el trabajo al final del semestre.
Además, se acuerda por parte de los profesores la acción de informar y
concienciar (semanalmente o cada dos semanas) a los alumnos durante
las clases de la importancia de una correcta planificación de las tareas
no presenciales.
Igualmente, se ha detectado que los alumnos se centran en la asignatura
de la cual tienen que hacer el trabajo o entrega, por lo que “desconec-
tan” del resto de asignaturas provocando, por una parte, la pérdida del
hilo de los contenidos impartidos y por otra parte un esfuerzo extra para
poder ponerse al día con las asignaturas que habían dejado de lado. Se
propone concienciar a los alumnos para que dividan sus esfuerzos en
todas las asignaturas y mejoren la planificación de estudio y trabajo no
presencial. Por último, se plantea hacer un examen de conocimientos
previos al inicio del curso para detectar carencias teóricas y poder así
reforzar estas áreas que pueden provocar retraso en futuras tareas.
Por otro lado, se ha propuesto adoptar acuerdos sobre los sistemas de
evaluación más adecuados, intentando disminuir el número de proyec-
tos o trabajos a los mínimos necesarios. Otro aspecto tratado y de má-
xima importancia es el diseño de planes de acción tutorial para orientar
a los estudiantes en cuanto a la planificación óptima y resolución de
dudas para disminuir la dedicación no presencial.
Para finalizar, se han estudiado diferentes índices de calidad antes y
después de la coordinación y de las medidas adoptadas para mejorar la
carga de trabajo del estudiante. El gráfico 6 muestra las tasas de sus-
pensos, aprobados y no presentados para cada una de las asignaturas de
la convocatoria ordinaria de los cursos bajo estudio 2019-2020 y 2020-
2021.
‒ ‒
GRÁFICO 6. Tasas se suspensos (SS), aprobados (AP) y no presentados (NP) para cada
una de las asignaturas para la convocatoria ordinaria 2019-2020 y 2020-2021.
‒ ‒
por lo que se deduce que las medidas y coordinación realzadas han sido
efectivas.
A pesar de que la tendencia y resultados obtenidos son buenos y todo
indica que las acciones de mejora realizadas han surtido efecto, todavía
es necesario mejorar la planificación del primer semestre de tercer
curso del grado GIE dado que presenta asignaturas con alta carga de
trabajo debido a la naturaleza de las asignaturas que lo componen (asig-
naturas de carácter práctico, donde es necesario realizar trabajos para
simular proyectos reales de ingeniería).
Finalmente, se llega a la conclusión de que la distribución de asignatu-
ras del plan de estudios actual no es la más adecuada. Las asignaturas
Máquinas Eléctricas, Instalaciones Eléctricas de Baja Tensión y Líneas
Eléctricas realizan mini-proyectos que elevan la carga de trabajo no
presencial por lo que sería aconsejable desplazar alguna de estas tres
asignaturas a otro semestre o curso.
6. CONCLUSIONES
Las principales conclusiones que se han obtenido del desarrollo del pre-
sente proyecto de Innovación Docente se detallan a continuación:
En general, la carga total de trabajo no presencial se encuentra en todos
los casos por debajo de límites máximos de dedicación aconsejados
(EEES, jornada laboral y criterio propio).
Los porcentajes de aprobados y suspensos han mejorado después de la
coordinación y propuesta de mejoras.
Existe una acumulación de actividades (trabajos y exámenes) en la
misma semana (sobre todo en las semanas correspondientes a mitad y
final del semestre), por lo que se obtienen picos de altos de carga de
trabajo. Esto se ha solucionado con la adecuada coordinación de los
profesores, asignando solo 2 entregas de trabajos (u otras actividades)
por semana, y permitiendo que se envíen las memorias durante el pe-
riodo de exámenes.
‒ ‒
La coordinación realizada ha sido efectiva dado que se ha disminuido
la carga de trabajo, como se observa en la recopilación de datos semanal
de los cursos 2019-2020 y 2020-2021. En este sentido, es fundamental
realizar una coordinación adecuada por parte de los profesores de tercer
curso del GIE para no sobrepasar los límites de trabajo no presenciales
propuestos por el EEES.
La planificación de los estudiantes es deficiente, acumulando la mayor
parte del trabajo no presencial y entregas para el final del semestre. En
este sentido, es necesario una motivación continua por parte de los pro-
fesores para que trabajen durante todo el semestre de manera constante.
Las asignaturas de Instalaciones Eléctricas de Baja Tensión y Líneas
Eléctricas presentan una carga de trabajo concentrada al final del se-
mestre por lo que no se cumplen los límites indicados por el EEES. Es
necesario distribuir mejor temporalmente la carga de trabajo para evitar
picos altos de actividad.
La asignatura de Máquinas Eléctricas tiene una carga de trabajo elevada
debido a la coincidencia de un examen parcial y la entrega de un trabajo
por lo que habría que separar temporalmente ambas actividades.
7. REFERENCIAS
‒ ‒
CAPÍTULO 82
∗ Este trabajo se enmarca dentro del Proyecto de Investigación «Biblioteca Virtual de la Filología
Española. Fase IV: implementaciones y mejoras. Metabúsquedas. Gestores bibliográficos»
(PID2020-112795GB-I00).
133 La labor que se había hecho para el español hasta esa fecha era muy deficiente y se limitaba a
lo realizado por algunos investigadores italianos (Fabbri 1979 y 2002, San Vicente 1995) y algunos
catálogos en papel de obras filológicas (Esparza-Niederehe 1995, 1999, 2005, 2012 y 2015).
‒ ‒
digitalizado y el enlace para poder verlo). En poco tiempo, la base de
datos creció y se convirtió en la BVFE, abierta al público como parte
de la Biblioteca de la Universidad Complutense de Madrid en 2010.
En 2014, el aumento de los registros en la BVFE obligó a un cambio de
ubicación (www.bvfe.es) que supuso la inclusión en el portal no sola-
mente de los diccionarios con que se había iniciado el proyecto sino
también de otras obras de carácter lingüístico que también habían em-
pezado a recopilarse. Se crearon así nuevas categorías para dar cuenta
de a) las gramáticas de la lengua (española o no), obras de gramática
histórica, historia de la lengua, manuales de enseñanza de lenguas, pro-
gramas de asignaturas y convocatorias de exámenes, etc.; b) los manua-
les de ortografía, ortología, prosodia, métrica, etc.; c) las obras en que
se contienen diálogos, coloquios, frases, conversaciones, etc., de interés
lingüístico, especialmente gramatical y para la enseñanza y aprendizaje
de lenguas.
Estas obras proceden de bibliotecas y repositorios nacionales y extran-
jeros (se han escrutado más de 200): la Biblioteca Nacional de España,
Hispana, la Biblioteca Virtual del Patrimonio Bibliográfico, Google
books, la Real Academia de la Lengua, las bibliotecas de universidades
españolas (Salamanca, Zaragoza, Sevilla, Granada, Valencia, Santiago
de Compostela...), bibliotecas provinciales, bibliotecas nacionales eu-
ropeas (Baviera en Múnich, la de Austria en Viena, la de Francia en
París, la de los Países Bajos en La Haya o las italianas de Roma, Flo-
rencia y Nápoles), norteamericanas, sudamericanas o australianas (La
Trobe University), entre otras muchas.
Desde finales de 2015, la BVFE se enriqueció con la inclusión de las
fichas biobibliográficas de los autores de las obras que contenía. Estas
fichas se estructuran así: 1) datos biográficos del autor y breve reseña
de su producción, 2) descripción de su obra lingüística (tanto de la in-
cluida en la BVFE como de la que no se encuentra) y 3) principales
referencias bibliográficas.
‒ ‒
El trabajo en la BVFE no ha parado134 y es en la actualidad una herra-
mienta única en su ámbito, tal y como refrendan los datos sobre las
visitas a su web. Y es que la BVFE nos ha facilitado mucho la investi-
gación: desde su nacimiento los investigadores tenemos acceso a nu-
merosas obras sin tener que acudir a bibliotecas, sin tener que localizar
ejemplares, sin tener que solicitar reproducciones y sin necesidad de
comparar catálogos, bibliografías y demás fuentes para comprobar si la
información dada es fiable.
134Para una historia de la BVFE y la explotación de sus materiales, véanse Alvar Ezquerra (2016,
2017, 2019); Alvar Ezquerra y Miró Domínguez (2013); Calero Hernández, Fernández de Gobeo y
Peña Arce (2018); Cazorla Vivas y García Aranda (2018); García Aranda y Peña Arce (2019, 2021),
Peña Arce y García Aranda (en prensa).
‒ ‒
ascendente/descendente, impresor ascendente/descendente, lugar de
impresión ascendente/descendente o biblioteca ascendente/descen-
dente.
La BVFE cuenta actualmente135 con 11 491 registros repartidos de la
siguiente manera: 2098 fichas biobibliográficas, 4715 diccionarios y
obras lexicográficas, 662 ortografías (incluidos los manuales de métrica
y prosodia), 469 diálogos y 3708 gramáticas y tratados gramaticales.
Por otro lado, una comparativa de los datos que arroja la BVFE en los
últimos años muestra la evolución y la utilidad de este recurso136:
TABLA 1.
Páginas visita-
Stílogo n.º visitas Visitantes distintos
das
2014 (oct.-dic.) 11 660 7749 149 216
2015 47 233 20 057 258 794
2016 62 418 26 604 337 094
2017 115 930 61 460 521 350
Google Analytics Usuarios Sesiones
2018 28 704 33 630
2019 47 000 51 306
2020 71 300 76 682
2021 (ene-may) 25 902 31 772
Fuente: elaboración propia
‒ ‒
En cuanto a la posición de la BVFE en los resultados de búsquedas de
Google Search, suele ocupar los primeros puestos al indagar sobre dic-
cionarios de metáforas, palabras en rifeño, diccionario mallorquín-cas-
tellano, diccionario menorquín, diccionario de andalucismos, vocabu-
lario quirúrgico, gramática analítica o diálogos españoles o al tratar de
averiguar los datos biográficos de Ambrosio Calepino, Vicente Salvá,
Esteban Pichardo, Carlos Felipe Beltrán, Pedro Marbán o Francisco de
Paula Mellado.
137Esta información está tomada de las páginas webs de la Universidad Complutense de Madrid
(www.ucm.es) y de la Universidad de Salamanca (www.usal.es).
‒ ‒
con aplicación de conocimientos de gramática, léxico, cultura y litera-
tura de dicha lengua”.
En el caso del grado de Estudios Ingleses, el principal objetivo es pro-
porcionar al alumnado un amplio conocimiento del mundo anglopar-
lante en todas sus facetas (lingüística, literaria, histórica, cultural, hu-
mana, etc.) que le permita desarrollar una actividad profesional, acadé-
mica e investigadora e integrarse de manera satisfactoria en el mundo
laboral.
El grado de Estudios Semíticos e Islámicos trata de ofrecer una forma-
ción rigurosa y suficiente, que otorgue a los estudiantes capacidad y
competencia en el conocimiento de las lenguas árabe, hebrea y aramea,
así como, en, cada caso, el turco, persa u otras lenguas del Próximo
Oriente Antiguo, y en las literaturas y en las más relevantes manifesta-
ciones culturales de la tradición y creación islámicas y judías: teología,
instituciones, historia, pensamiento, arte, derecho, ciencia.
El grado de Filología Clásica se centra en la lectura e interpretación de
los textos clásicos del mundo grecolatino (estructuras lingüísticas, lite-
raturas, pervivencia del Mundo Clásico y sus aspectos lingüísticos, li-
terarios, artísticos, culturales, humanísticos, políticos, éticos y sociales,
valores humanísticos.
El grado de Lenguas Modernas y sus Literaturas tiene como objetivo
proporcionar a los estudiantes el conocimiento de las lenguas modernas
insertas en su espacio histórico, social, literario y cultural.
El objetivo del grado de Literatura General y Comparada es la forma-
ción del alumno en los modelos interdisciplinares desde un doble enfo-
que teórico y práctico, que se traduce en dos objetivos transversales: (1)
enseñar para fomentar la reflexión sobre la literatura desde una pers-
pectiva que se apropia de otros discursos críticos, como el filosófico, el
lingüístico o el antropológico, y (2) aplicar estos conocimientos en el
análisis concreto de los textos o de la problemática diversa que propone
la comparación.
‒ ‒
El grado de Lingüística y Lenguas aplicadas tiene como objetivo la re-
flexión sobre el lenguaje a través de la diversidad y complejidad de las
lenguas.
El grado de Filosofía tiene como objetivo la formación de graduados
altamente capacitados en formación y competencias filosóficas para el
ejercicio profesional (conocimientos históricos, ideas contemporáneas,
corrientes filosóficas).
El principal objetivo del grado de Historia es procurar un conocimiento
racional y crítico del pasado de la humanidad, con la finalidad de que
el estudiante pueda comprender con mayor rigor y profundidad el pre-
sente y sea además capaz de hacerlo comprensible a los demás.
Por ello, el objetivo de esta propuesta es presentar, con la ayuda de los
materiales de la BVFE, una serie de estrategias de enseñanza para con-
seguir un aprendizaje significativo en la docencia de Humanidades. Se
pueden, por ejemplo, utilizar los contenidos de la BVFE para reflexio-
nar en el grado de Español. Lengua y Literatura sobre:
‒ Americanismos y léxico del español de América a través de
los textos de Antonio Alcedo (Vocabulario de las voces pro-
vinciales de la América, Madrid, Imprenta de Manuel Gonzá-
lez, 1789), de Francisco Javier de Santamaría (Americanismo
y barbarismo. Entretenimientos lexicográficos y filológicos,
México, Librería Cultura, 1921) o de Joaquín García Icazbal-
ceta (Vocabulario de mexicanismos, comprobado con ejem-
plos y comparado con los de otros países hispano-americanos,
México, La Europea, 1899)138;
‒ ‒
que se conocen en respuesta de los reparos propuestos en el
Diccionario geográfico histórico de España, tomo segundo pa-
labra Nabarra, Madrid, Gerónimo Ortega, 1803), de José Ne-
bot Pérez (Apuntes para una gramática valenciana popular,
Valencia, Imprenta de Ripollés, 1894), de Pedro del Castillo
(Cartilla de la lengua castellana; método breve y fácil para po-
der ser gramático. Obra muy útil para todos, particularmente
para los que tienen a su cargo la instrucción de la juventud,
Madrid, Pantaleón Aznar, 1787), de Rafael Salillas (El delin-
cuente español. El lenguaje (estudio filológico, psicológico y
sociológico) con dos vocabularios jergales, Madrid, Librería
de Victoriano Suárez, 1896), de José Ignacio Dávila Garibi
(Algunas observaciones acerca de la lengua ópata o tegüima,
rica en vocablos de interés para el estudio de la flora y de la
fauna regionales, México, Editorial Cultura, 1950) o de fray
Estevan Torresano (Arte de la lengua cakchiquel, 1794)139;
‒ ‒
de Santiago (Isla de la Gomera), Madrid, Cabildo Insular de
Gran Canaria, 1975)140;
https://bvfe.es/es/autor/10263-monlau-pedro-felipe.html
https://bvfe.es/es/autor/9167-adams-john-stowell.html
https://bvfe.es/es/autor/23233-orozco-y-berra-manuel.html
https://bvfe.es/es/autor/10811-uribe-uribe-rafael.html
‒ ‒
‒ Textos para la enseñanza del español como lengua extranjera
a través de las obras de Diego de la Encarnación (Arte de
grammática francesa en español. Tres libros, Madrid, Im-
prenta del Reyno, 1635), de Francisco Trenado de Ayllón
(Arte muy curiosa por la qual se enseña muy de raýz, el enten-
der y hablar la lengua italiana, con todas las reglas de la pro-
nunciación, y acento, y declaración de las partes indeclinables,
que a esta lengua nos oscurecen, Medina del Campo, Santiago
del Canto, 1596), de Giovanni Alessandro Lonchamps (Colo-
quios familiares moy conuenientes y prouechosos para qual-
quiera qualidad de per[sonas] desseosas de saber hablar y es-
criuer la lengua española, francesa e italiana, Bolonia, Gio-
seffo Longhi, 1681), de Stephan Barnabé (Discursos familia-
res con algunos proverbios, historias y fábulas, Unterweisung
Der Spanischen Sprach, Viena, Matthäus Rickhes, 1660)142;
https://bvfe.es/es/autor/9334-benot-eduardo.html
https://bvfe.es/es/autor/9373-borao-jeronimo.html
https://bvfe.es/es/autor/10303-muro-angel.html
142 Los enlaces en la BVFE a estos autores y obras son
https://bvfe.es/es/buscar.html?searchword=encarnaci%C3%B3n%2C+die
https://bvfe.es/es/autor/10799-trenado-de-ayllon-francisco.html
https://bvfe.es/es/buscar.html?searchword=lonchamps
https://bvfe.es/es/autor/9295-barnabe-stephan.html
‒ ‒
lenguaje. Sus transformaciones. Su estructura. Su unidad. Su
origen. Su razón de ser. Estudiados por medio de la compara-
ción de las lenguas, Salamanca, Imprenta La Minerva, 1901),
de Narciso Alonso Cortés (El pronombre «se» y la voz pasiva
castellana, Valladolid, Artes Gráficas Afrodisio Aguado,
1939), de José Godoy Alcántara (Ensayo histórico, etimoló-
gico, filológico sobre los apellidos castellanos, Madrid, Im-
prenta y Esteriotipia de M. Rivadeneyra, 1871) o de Emilio
Álvarez Giménez (Estudio sobre las faltas de lenguaje que se
comenten en Galicia, Pontevedra, Imp. de D. José A. Antúnez
y Comp., 1870)143.
‒ ‒
y Manuel de Torres, Nueva York, Imprenta de Tompkins y Floy, 1825;
¿Habla Vm. Español? Or, Do you speak Spanish? A pocket companion
for beginners who wish to acquire the facility of expressing themselves
fluently on every-day topics in a short, easy, and practical way, Nueva
York-Boston, Leypoldt & Holt-F. W. Christern-De Vries, Ibarra & Co.,
1868).
La BVFE también contiene obras en árabe, hebreo, arameo, turco y
persa que pueden ser de interés para algunas materias del grado de Es-
tudios Semíticos e Islámicos; sirvan como ejemplo el Arte para ligera-
mente saber la lengua aráuiga de Pedro de Alcalá (Granada, Juan Va-
rela de Salamanca, 1505), la Gramática árabe. Método teórico-práctico
de Francisco García Ayuso (Madrid, Academia de Lenguas-Librería de
Hernando, 1883), el Diccionario Strong de palabras originales del An-
tiguo y Nuevo Testamento de James Strong (Nashville, Tennessee -
Miami, Florida, Editorial Caribe Inc., 2002), A polyglot grammar of the
Hebrew, Chaldee, Syriac, Greek, Latin, English, French, Italian, Spa-
nish, and German languages, reduced to one common rule of syntax,
and an uniform mode of declension and conjugation, as far as practi-
cable. With notes explanator de Samuel Barnard (Filadelfia-Nueva
York-Baltimore-Boston, Abraham Small-Wilder & Campbell-F. Lu-
cas, jr.-Nunroe, 1825), la Gramática turca, o méthodo breve y fácil
para aprehender la lengua turca, con una colección de nombres, ver-
bos, y phrases más comunes, y varios diálogos familiares de Juan An-
tonio Romero (ms., siglo XVIII) o Allgemeines Polyglotten-Lexicon
der Naturgeschichte mit Erklaerenden Anmerkungen de Philipp An-
dreas Nemnich (Hamburgo-Halle, Nemnich-Johann Jacob Gebauer,
1793).
Las obras con el latín y el griego tienen una buena representación en la
BVFE, lo que podría ser explotado didácticamente en el grado de Filo-
logía Clásica. Se pueden consultar casi cien registros de diálogos, entre
los que destacan los de Juan Luis Vives; más de ochocientos ochenta
registros correspondientes a diccionarios y obras lexicográficas, entre
ellos los de Papías, Alonso Palencia, Bartlomé Bravo, Hadrianus Ju-
nius, Johannes Amos Comenius, Diego Jiménez Arias, Ambrosio Ca-
lepino o Elio Antonio de Nebrija; más de ochocientas gramáticas, entre
‒ ‒
las que sobresalen las de Elio Antonio de Nebrija (De institutione gram-
maticae, Gramática latina, Introductiones latinae) y sus versionadores
(Gregorio Mayans y Siscar, Jerónimo Martín Caro y Cejudo, Juan Gon-
zález de Dios, Lucas Espinosa, Agustín de San Juan Bautista, Joaquín
Berdoy, Juan Manuel de León, Juan Francisco Pastor, Antonio Cerezo,
Pedro de Salas); y más de sesenta ortografías y ortologías, entre ellas
las de Juan de Robles, Sigismondo di S. Silverio, Felipe Mey, Barto-
lomé Jiménez Patón, Gregorio Mayans y Siscar o Elio Antonio de Ne-
brija.
El enfoque plurilingüe y la formación en lengua, literatura y cultura que
exigen el grado de Lenguas Modernas y sus Literaturas pueden encon-
trar interesantes contenidos en la BVFE gracias a los registros sobre el
euskera, el catalán, el portugués, el alemán, el árabe, el chino, el danés,
el francés, el gallego, el griego moderno, el inglés, el italiano, el neer-
landés, el persa, el polaco, el rumano, el ruso o el turco, lenguas oferta-
das habitualmente para estos estudios.
Para el grado de Literatura General y Comparada se podrían proponer
prácticas con registros como las Analectas. Libro práctico de lengua y
literatura española. Gramática, preceptiva y composición de Mario
Méndez Bejarano (Madrid, Jaime Ratés Martín, 1907), el Diccionario
enciclopédico hispano-americano de literatura, ciencias y artes [...] de
la Editorial Montaner y Simón (Barcelona, 1887-1910), el Diccionario
universal de la lengua castellana, ciencias y artes. Enciclopedia de los
conocimientos humanos. Comprende lengua y gramática castellanas,
retórica y poética, crítica, literatura, bellas artes, paleografía, diplomá-
tica, heráldica, numismática […] de Nicolás María Serrano (Madrid,
Astort Hermanos, 1875-1881), los Elementos de gramática castellana,
con algunas nociones de Retórica, Poética y Literatura española de Joa-
quín Avendaño (Madrid, A. Vicente, 1849), la Enciclopedia del siglo
diez y nueve o Biblioteca completa de ciencias, literatura, artes, oficios,
etc. Por una Sociedad de Literatos españoles y de hombres especiales
en diversas ciencias y profesiones (Madrid, editorial Boix, 1842-1847),
la Enciclopedia moderna. Diccionario universal de literatura, ciencias,
artes, agricultura, industria y comercio de Francisco de Paula Mellado
(Madrid, Mellado, 1851-1855), de la Influencia de las ciencias en el
‒ ‒
lenguaje y la literatura de Miguel Colmeiro (Madrid, Viuda e Hija de
Fuentenebro, 1893), de La metáfora y el símil en la literatura científica
de Amalio Gimeno y Cabañas (Madrid, Huelves y Compañía, 1927),
del Manual de literatura moderna española, en prosa y verso, para el
estudio de la lengua castellana con una introducción conteniendo los
modelos de las oraciones más usuales de José Eusebio Gómez de Mier
(Hamburgo, J. J. Nobiling, 1853) o del Vocabulario etimológico de li-
teratura de Cecilio Agustín Robelo (Cuernavaca, s. n., 1880).
La reflexión sobre la lengua general o sobre las lenguas del mundo pro-
pias del grado de Lingüística y Lenguas aplicadas encuentra buenos
exponentes en la Arquitectura de las lenguas de Eduardo Benot (Ma-
drid, Juan Muñoz Sánchez, ¿1889?), el Catálogo de las lenguas de las
naciones conocidas, y numeración, división, y clases de estas, según la
diuersidad de sus idiomas y dialectos de Lorenzo Hervás y Panduro
(Madrid, Imprenta de la Administración del Real Arbitrio de Benefi-
ciencia, 1800-1805), los Elementos de la gramática universal aplicados
a la lengua española de Lamberto Pelegrín (Madrid, En la imprenta de
Achard, 1826), La lengua universal. Breves consideraciones sobre esta
cuestión patriótica de José Ojo y Gómez (Madrid, Imprenta de M. Ga-
liano, 1860), los Principios de gramática general de José Mamerto Gó-
mez Hermosilla (Madrid, Imprenta Real, 1835) o el Diccionario de len-
gua universal precedido del resumen de su gramática, y seguido de va-
rios apéndices muy importantes (Madrid, J. Martín Alegría, 1860), la
Cartilla de la lengua universal (Madrid, J. Martín Alegría, 1863) y la
Gramática de la lengua universal (Madrid, J. Martín Alegría, 1863) de
Bonifacio Sotos Ochando.
El grado de Filosofía puede servirse, para la perspectiva histórica, de
materiales como el Diccionario manual de filosofía de Marcelino Ar-
náiz y Benito Alcalde González (Madrid, Talleres Voluntad, 1927), de
los Egercicios públicos de doctrina cristiana, primeras letras, humani-
dades, filosofía, matemáticas, idioma francés y dibujo, que tendrán los
alumnos del Real Colegio de Humanidades de esta capital (Sevilla, Im-
prenta de D. Joaquín Roselló, 1827), de la Gramática de la lengua cas-
tellana, métrica y nociones de la filosofía del lenguaje de Fernando Ve-
larde (Nueva York, Tipografía de C. A. Alvord, 1861) o del Manual de
‒ ‒
psicología, ideología, gramática general, lógica e historia de la filoso-
fía de José Ortega y Espinós (Barcelona, Librería escolar de Miguel
Sala, 1850).
Finalmente, para trabajar las competencias y los objetivos establecidos
en el grado de Historia se podrían proponer tareas con el Diccionario
universal de historia y de geografía de Manuel Orozco y Berra (Mé-
xico, Tipografía de Rafael-Librería de Andrade, 1853-1856), con el
Diccionario universal de historia y de geografía de Francisco de Paula
Mellado, J. Pérez Comoto, F. F. Villabrille, V. Díez Canseco y C. Itu-
rralde (Madrid, Establecimiento tipográfico de Don Francisco de Paula
Mellado, 1846-1850), del Vocablos antiguos sacados del Fuero Juzgo,
de las Partidas, Historia del Rey Don Alonso, i del Infante Don Manuel
de Bernardo de Aldrete (Roma, Carlo Wllieto, 1606), o con el Diccio-
nario de voces españolas geográficas (Madrid, 1799) y con la Lista o
catálogo de los nombres de pesos y medidas de que por ahora se tiene
noticia (Madrid, 1791) de la Real Academia de la Historia.
‒ ‒
inglés a los españoles? ¿y los últimos? ¿qué características tie-
nen? ¿cuáles son sus principales destinatarios?
‒ ‒
‒ Grado de Historia: ¿cuáles son las obras de la Real Academia
de la Historia que contiene la BVFE? ¿cuál es su contenido?
¿son importantes? ¿por qué? ¿qué contienen los Vocablos an-
tiguos sacados del Fuero Juzgo, de las Partidas, Historia del
Rey Don Alonso, ¿i del Infante Don Manuel de Bernardo de
Aldrete? ¿qué interés puede tener esta obra para un historia-
dor?
4. RESULTADOS Y CONCLUSIONES
5. REFERENCIAS
‒ ‒
Alvar Ezquerra, M. (2017). La Biblioteca Virtual de la Filología Española
(BVFE). De su nacimiento a su consolidación. Situación del contenido
lexicográfico en junio de 2016. En I. Sariego et al. (Eds. y Coords.), El
diccionario en la encrucijada: de la sintaxis y la cultura al desafío digital
(pp. 447-460). Escuela Universitaria de Turismo Altamira.
‒ ‒
Esparza Torres, M. Á. y Niederehe, H.-J. (2015). Bibliografía cronológica de la
lingüística, la gramática y la lexicografía del español (BICRES V). Desde
el año 1861 hasta el año 1899. John Benjamins.
‒ ‒
CAPÍTULO 83
ANA ANCHETA-ARRABAL
Universitat de València
BORJA MATEU-LUJÁN
Universitat de València
CRISTINA PULIDO-MONTES
Universitat de València
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
celebrando el acto de la SAME desde el curso 2010/2011 trabajándola
de manera transversal en sus diversas titulaciones en educación como
las de Pedagogía, Educación Social, Filosofía o Magisterio. A partir del
año 2013 la SAME se trabaja como un proyecto de innovación docente
competitivo financiado por el Servicio de Formación Permanente e In-
novación Educativa (SFPIE) de la UV. El proyecto de innovación
SAME ha sido descrito ampliamente en todas sus dimensiones en la
página web que aloja su blog (https://proyectosame.blogs.uv.es/) y en
otras publicaciones previas (Ancheta-Arrabal, 2019; 2020; Ancheta-
Arrabal et al., 2018). No obstante, para contextualizar y situar el trabajo
aquí desarrollado se ofrece una breve descripción de cómo se plantea
desde la base que sustenta la innovación, qué agentes participan en el
mismo, cuáles son las metodologías que orientan la SAME y otras cues-
tiones que se consideran relevantes para su entendimiento.
El proyecto de innovación SAME se centra en la defensa del derecho a
la educación, apoyando a la Campaña Mundial por la Educación (CME)
impulsada por la UNESCO. La CME es un movimiento sólido e influ-
yente que nace en el año 2000 con el espíritu de cooperación e integra-
ción y de la diversidad, formado por una coalición internacional de
ONGDs, sindicatos del entorno educativo, centros escolares y movi-
mientos sociales diversos. Tras 20 años de existencia, la CME continúa
fortaleciéndose y diversificando su labor, además de ser el movimiento
más grande de la sociedad civil que trabaja a favor del reconocimiento
de la educación como un derecho humano.
Este proyecto de innovación surge como iniciativa colaborativa entre la
UV y la sociedad civil representada en la CME que cuenta con un largo
recorrido de más de diez cursos académicos. Su vigencia permite desa-
rrollar una acción transversal en diferentes titulaciones de la UV, apo-
yada en la implicación del alumnado y, especialmente, del profesorado
colaborador del proyecto. Esta acción abre un espacio de diálogo entre
alumnado, entidades sociales, profesorado universitario, personas in-
vestigadoras y representantes políticos y de la administración educa-
tiva, para analizar el avance mundial del derecho humano a la educa-
ción, en concreto en lo referido a los colectivos más vulnerables.
‒ ‒
Asimismo, a partir de este proyecto de innovación educativa se ha tra-
bajado desde 2013 con el alumnado para desarrollar una institución uni-
versitaria democrática, sostenible y cooperativa, a la par que, para dotar
de sentido crítico a las iniciativas de la institución universitaria, como
principal agente de movilización social, en la línea de lo que se conoce
como Responsabilidad Social Universitaria (RSU). Entre las funciones
del proyecto de innovación se encuentra crear sinergias que ayuden a la
transformación de las aulas universitarias, facilitando que llegue a las
aulas el contexto educativo exterior e incluyendo diversas problemáti-
cas mundiales. El trabajo realizado desde 2015 junto a la CME en la
SAME ha permitido también la educación y la formación para el desa-
rrollo sostenible y, en concreto, para implementar procesos de ense-
ñanza-aprendizaje proactivos en relación con los ODS con especial én-
fasis en el objetivo de educación y el desarrollo sostenible.
En este sentido, la contribución que aquí se presenta, expone una inves-
tigación sobre la metanarrativa que el mencionado trabajo ha construido
linealmente y desde diversas plataformas en torno a los contenidos
del actual ODS4 y el derecho a la educación. Como principal resul-
tado, mediante la implementación de esta innovación se constata la
consecución de algunas de las premisas que exige la educación para
el desarrollo sostenible (EDS, en adelante): por un lado, que cada ser
humano adquiere no sólo los conocimientos, como también las com-
petencias, las actitudes y los valores necesarios para forjar un futuro
sostenible mediante; por el otro, la aplicación de métodos de ense-
ñanza y aprendizaje participativos, que motivan al alumnado y los
dotan de autonomía para cambiar su comportamiento y actuar en pro
de dicho fin (UNESCO, 2015).
‒ ‒
sostenible ocupa la mayoría de las acciones de los objetivos de la cono-
cida Agenda 2030.
En concreto, la SAME enmarcada en las distintas ediciones del pro-
yecto innovación docente a partir del que se trabaja la misma en la UV,
conforma sus acciones y planificación en torno al lema y acciones de la
CME que se desarrollan en el nivel mundial en conexión con la educa-
ción en derechos humanos y para el desarrollo sostenible que se aborda
en los estudios universitarios.
Tal y como se ha comentado, la SAME comenzaría su andadura como
proyecto de innovación docente de la UV reconocido en el curso
2013/2014 a partir del trabajo que venían desarrollando con el alum-
nado a título individual los docentes colaboradores con la CME. Desde
dicho curso académico se iría renovando el proyecto y el trabajo de
innovación implicando a más titulaciones y docentes de dicha univer-
sidad.
El proyecto de innovación SAME se estructura mediante la metodolo-
gía del Aprendizaje Basado en Proyectos (ABP) y sobre la base del
aprendizaje colaborativo. La metodología del ABP permite trabajar en
torno a una problemática o tema de investigación que dota de especial
protagonismo a los componentes de este con un alto grado de relativa
autonomía y que culmina con un producto que se expone como resul-
tado (Larmer et al., 2015). Entre algunas de las potencialidades de la
citada metodología destacan: el trabajo interdisciplinar (Restrepo-Gó-
mez, 2005); la motivación en el aprendizaje (Johari y Bradshaw, 2008),
el pensamiento crítico para la resolución de problemas reales (Pozo y
Pérez, 2009); el fomento del aprendizaje significativo (Carrasco et al.,
2015); el aprendizaje entre pares (Gary, 2015); la autoevaluación, pla-
nificación y fomento del trabajo en grupo (Fernández-Cabezas, 2017).
A la par, la propia metodología del ABP integra el aprendizaje colabo-
rativo, un elemento transversal en la forma de trabajo adoptada en el
proyecto de innovación SAME en el que participan, como se ha citado
previamente, diversas titulaciones, departamentos, la coordinadora de
OGNDs de la Universidad de Valencia, profesorado y alumnado.
‒ ‒
El proyecto de innovación ocupa una programación que se lleva a cabo
a lo largo de todo el curso académico de manera colaborativa por el
equipo de personas implicadas entre la UV y la CME que está repre-
sentada por entidades del tercer sector. Se diseña realmente como un
proyecto preocupado por la transformación educativa, así como por la
colaboración que es preciso realizar por parte de los educadores y las
educadoras para que dicha transformación sea posible. Un proyecto que
incluye propuestas pedagógicas centradas en los y las estudiantes uni-
versitarias. Las acciones que se han propuesto desarrollar a lo largo de
la vida de este proyecto tienen un carácter social que lleva implícitos
procesos de enseñanza-aprendizaje que permiten la construcción colec-
tiva de una sociedad que debe recuperar el valor de la solidaridad. Se
desarrollan durante todo el cuatrimestre reuniones de coordinación en-
tre diferentes docentes de distintos departamentos de la Facultad de Fi-
losofía y Ciencias de la Educación, donde además de organizar las ac-
tividades se reflexiona, se dialoga sobre este tipo de actuaciones forma-
tivas y su repercusión en la docencia. Se establecen sinergias que ayu-
dan a gestionar el día a día de nuestras clases, a la par que en las reunio-
nes junto con la coordinadora de ONGD se expone su visión y sus ex-
periencias sobre la educación como partícipes del tercer sector. Esta
dinámica permite trabajar de forma colaborativa entre profesionales de
fuera y dentro de la Facultad, alcanzando unos resultados que han ubi-
cado esta iniciativa igualmente en el terreno de la cada vez más deman-
dada innovación social. En concreto, a través de este proyecto de inno-
vación los estudiantes y las estudiantes de la UV participantes en el
mismo ha podido alcanzar, entre otras, las competencias transversa-
les/genéricas especificadas en cada una de las titulaciones implicadas
como la capacidad de trabajo, planificación y organización en equipo o
la capacidad de resolver problemas y toma de decisiones de forma co-
laborativa, como pieza clave para conseguir realizar todas las acciones
desarrolladas en el proyecto.
Como se ha descrito con anterioridad, el proyecto viene definido por el
lema de la CME sobre la SAME y los ODS que ocupan la acción de ese
año. Cabe mencionar que el elemento transversal de las acciones se ha
ido estableciendo alrededor de la educación para el desarrollo
‒ ‒
sostenible. A partir de aquí, las Facultades de Filosofía y Ciencias de la
Educación en colaboración con otras facultades que se han venido su-
mando y los distintos departamentos que se encuentran representados
por agentes de estos en el proyecto de innovación, junto con la Coordi-
nadora de ONGD en la Comunitat Valenciana, se organizan por comi-
siones de trabajo (difusión, medios de comunicación, logística, etc.)
que se reúnen con una periodicidad de al menos una vez al mes a partir
de octubre para desarrollar la planificación del proyecto y que intensi-
fica su asiduidad a partir del mes de febrero. De este modo, el aprendi-
zaje colaborativo más que una metodología es la filosofía de este pro-
yecto.
Entre las acciones que se desarrollan se encuentran:
‒ Talleres formativos de sensibilización que se llevan a cabo en
las aulas del profesorado participante con la colaboración de
agentes de la CME de la Comunidad Valenciana. Estos talle-
res son un acercamiento teórico y práctico a la SAME que se
integran en el currículum de las distintas materias.
‒ ‒
Cabe destacar que el citado proyecto de innovación y el grupo que lo
compone de cara al curso 2021/2022 se ha mostrado abierto a integrar
participantes de otras facultades que no son las propias de las ciencias
de la educación, así como de otras universidades del territorio español
con el objetivo de construir una red de trabajo colaborativa más allá de
la ya consolidada como grupo de innovación estable.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
FIGURA 1. Características de la metanarrativa
‒ ‒
FIGURA 2. Textos e hilo argumental de análisis.
‒ ‒
4. ANÁLISIS
‒ ‒
del derecho a la educación. Las dimensiones que se trabajan desarrolla-
rían diversas competencias en la línea del pensamiento crítico, el trabajo
colaborativo y la toma de consciencia de la una realidad que es universal
en relación con las problemáticas que envuelven al derecho a la educa-
ción desde la RSU.
En la Imagen 1 se observa una recopilación de fotos realizadas durante
esta edición y el acto reivindicativo para solicitar un mayor compro-
miso de los gobiernos e instituciones con la financiación del derecho a
la educación como compromiso para con el ODS 4.1.
Fuente: https://proyectosame.blogs.uv.es/
‒ ‒
todos los hombres y mujeres a una formación técnica, profesional, y
superior de calidad, incluida la enseñanza universitaria. El derecho a
la educación y la equidad de género se viene trabajando desde las agen-
das precedentes a la Agenda 2030 y adquiere una mayor relevancia en
todos los sentidos si se quiere trabajar en una Facultad como en la que
se enmarca esta acción desde la solidaridad y la RSU. Además del ac-
ceso equitativo, una meta transcendental es la educación de las personas
adultas y el acceso de estas en términos de equidad, tal y como queda
representada en el material que se aglutina en la siguiente imagen en
forma de giff.
Fuente: https://bit.ly/3j1yFfu
‒ ‒
solo se contempla una educación de mínimos (lengua y matemáticas)
sino que otras disciplinas como la educación para la salud física son
esenciales para el pleno desarrollo de las personas. No en vano, una
educación que promueva la justicia social debe abordar el pleno desa-
rrollo de la personalidad en todos sus estudiantes independientemente
de su situación geográfica o sociofamiliar o su género.
Fuente: https://bit.ly/3zJRFWO
‒ ‒
se centre en un lema específico, desde el proyecto de innovación se
busca trabajar desde la interseccionalidad, para que el alumnado parte
de una visión compleja y multifactorial de la realidad que envuelve el
derecho a la educación y que se relaciona con materias y asignaturas de
las que el profesorado participa, como pueden ser Derechos Humanos
y Educación, Educación Comparada, Educación Internacional, entre
otras.
Fuente: https://bit.ly/3jHtxyB
Al igual que ocurre con la meta anterior, para la meta 4.7 también se
han seleccionado por su relevancia dos producciones. La primera de
ellas se identifica con dos recortes de periódico que muestran la tras-
cendencia de la SAME en el contexto valenciano en cuanto al nivel de
impacto de las acciones desarrolladas en la sociedad valenciana, objeto
referente de la RSU, mientras que el segundo se corresponde con un
vídeo realizado por una alumna implicada en el proyecto de innovación
de manera directa que participado en diversas ediciones.
En referencia a la imagen 3, cabe destacar que ambos periódicos son
los rotativos de gran tirada en el contexto valenciano y que representan
posiciones ideológicas distintas. El hecho de que dos periódicos con
líneas de estilo diferenciadas—una cercana a la centroizquierda y otra
‒ ‒
a la centroderecha—presenten las acciones del acto de reivindicación
SAME, muestran la importancia para seleccionar o dar cabida a una
noticia relacionada con la educación desde un prisma objetivo y que
trasciende las acciones estratégico-discursivas que suelen traer consigo
las noticias sobre educación. El primero se corresponde con un recorte
del periódico El Levante EMV (26/04/2018) y el segundo con un re-
corte de Las Provincias (18/04/2019). La relación de la imagen 2 con la
meta 4.7 recae, como se puede observar, en el fomento de una cultura
de paz y no violencia, y en la contribución a la cultura del desarrollo
sostenible. En ambos casos, el relato va más allá de la imagen global
que era el mensaje principal o titular de la historia que llevaba detrás,
pues la composición de estas es a partir de los microrrelatos elaborados
por las personas participantes y que podrían ocupar un mayor análisis
desde la implicación y percepción de los participantes que no es el ob-
jetivo del presente capítulo.
‒ ‒
educación en los derechos humanos y la educación para el desarrollo
sostenible en el camino hacia la meta transversal de educar en que De
aquí a 2030, asegurar que todos los alumnos adquieran los conoci-
mientos teóricos y prácticos necesarios para promover el desarrollo
sostenible, entre otras cosas, mediante la educación para el desarrollo
sostenible y los estilos de vida sostenibles, los derechos humanos, la
igualdad de género, la promoción de una cultura de paz y no violencia,
la ciudadanía mundial y la valoración de la diversidad cultural y la
contribución de la cultura al desarrollo sostenible. La transversalidad
del derecho a la educación y los elementos que lo componen y consti-
tuyen como un derecho catalizador de otros derechos, es una constante
en el trabajo desarrollado desde el proyecto SAME, las materias y asig-
naturas en el propio centro y desde la CME.
Fuente: https://bit.ly/3xWOj20
‒ ‒
en la imagen 4 se trata de la silueta de la planta de un pie en el que cada
uno de los dedos representa la diversidad humana a modo de metáfora
sobre la necesidad de incluir dicha diversidad para que la educación
pueda pisar fuerte y avanzar en y para nuestras sociedades. Cabe desta-
car, como sucede con los anteriores materiales, que cada año se trabaja
sobre un lema y este recurso o producción es una muestra de otros tan-
tos que componían una amalgama de estos y que representaban o dan
voz al conjunto del trabajo desarrollado en el proyecto.
Fuente: https://bit.ly/3iYWVyJ
‒ ‒
donoso vídeo que aborda de forma transversal la colaboración y la
cooperación docente entre los distintos lugares geográficos. La univer-
salidad de los problemas que se imbrican en el derecho a la educación
sobre la que se articula la Agenda ODS 30 muestra la representatividad
de temáticas y producciones desarrolladas, como es en este caso, la ca-
lidad educativa relacionada con la calidad docente.
Fuente: https://bit.ly/3BJ93Md
5. CONCLUSIONES
‒ ‒
establece, incidiendo en que la EDS permite a las y los educandos desa-
rrollar sus habilidades cognitivas y no cognitivas, como el pensamiento
crítico y las competencias para la colaboración, la resolución de proble-
mas, hacer frente a las complejidades y riesgos, el fomento de la resi-
liencia, y el pensamiento sistémico y creativo, y les empodera para que
actúen de manera responsable como ciudadanos, haciendo efectivo su
derecho a una educación de calidad como se define en el ODS 4-Edu-
cación 2030. Resultado o muestra de ello son las distintas producciones
que, a modo de muestra representativa, aglutinan o pueden conducir a
la percepción de un producto que muestra señas de un trabajo cons-
truido sobre los pilares que enmarca la Declaración de Berlín.
Acciones como ésta permiten repensar el concepto de desarrollo soste-
nible desde la educación tal y como plantea Gracia Calandín (2016) al
enfatizar que la educación, en tanto que busca el desarrollo humano y
no sólo el crecimiento económico, no puede soslayar las cuestiones
acerca de la justicia social y el empoderamiento. En consonancia con el
replanteamiento que hiciera la propia UNESCO (2015), para entender
la educación como una poderosa fuerza transformadora para promover
los derechos humanos y la dignidad que permita construir un futuro
mejor basado, entre otras premisas, en la solidaridad internacional y la
responsabilidad compartida; aspiraciones ambas que constituyen aspec-
tos fundamentales de la humanidad en común y, de modo concreto, del
equipo de personas implicadas en este modesto proyecto de innovación
junto con las ambiciones de la CME.
Todo ello redunda en el hecho de la educación como un poderoso faci-
litador del cambio positivo de las mentalidades y las concepciones del
mundo que puede apoyar la integración de todas las dimensiones del
desarrollo sostenible, de la economía, la sociedad y el medio ambiente,
garantizando que las trayectorias de desarrollo no se orienten exclusi-
vamente hacia el crecimiento económico en detrimento del planeta,
sino hacia el bienestar de todos dentro de los límites planetarios
(UNESCO, 2021). Una experiencia vivida y compartida que puede rea-
lizarse desde este proyecto comprometido con la RSU y unas formas de
hacer universidad y trabajo colaborativo abierto a la participación de
otras redes educativas y formativas en el compromiso con la EDS.
‒ ‒
6. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
7. REFERENCIAS
‒ ‒
de efectividad del uso de metodologías de participación (CEMPA). El
caso del aprendizaje basado en proyectos (ABP) en la docencia de la
contabilidad. Innovar, 25(58), 143-158.
Fernández-Cabezas, M. (2017). Aprendizaje Basado en Proyectos en el ámbito
universitario: una experiencia de innovación metodológica en educación.
International Journal of Developmental and Educational Psychology.
INFAD Revista de Psicología, 1(2), 269-278.
https://doi.org/10.17060/ijodaep.2017.n1.v2.939
García-Fernández, N., y Montenegro, M. (2014). Re/pensar las Producciones
Narrativas como propuesta metodológica feminista: experiencias de
investigación en torno al amor romántico. Athenea Digital, 14(4), 63-88.
Gary, K. (2015). Project-based learning. Computer, 48(9), 98-100. DOI:
https://doi.org/10.1109/MC.2015.268
Gracia Calandín, J. (2016) El desafío ético de la educación. Dykinson S.L.
Johari, A., y Bradshaw, A. (2008). Project based learning in an intership program:
A qualitative study of related roles and their motivational attributes.
Educational Technology Research and Development, 56, 329-359. DOI
10.1007/s11423-006-9009-2
Larmer, J., Mergendoller, J., & Boss, S. (2015). Setting the standard for project
based learning. ASCD.
Martínez-Guzmán, A., y Montenegro, M. (2010). Narrativas en torno al
transtorno de identidad sexual. De la multiciplidad transgénero a la
producción de trans-conocimientos. Revista Prisma Social, 4, 1-44.
Pozo, J. & Pérez, M. (2009). Aprender para comprender y resolver problemas. En
J. Pozo y M. Pérez. Psicología del aprendizaje universitario: La
formación en competencias. (pp. 31-53). Morata.
Restrepo-Gómez, B. (2005). Aprendizaje basado en problemas (ABP). Una
innovación didáctica para la enseñanza universitaria. Educadoras y
Educadores, 8, 9-19.
https://educacionyeducadores.unisabana.edu.co/index.php/eye/article/vie
w/562/654
UNESCO (2015). Rethinking Education. Towards a global common good?. Paris:
UNESCO. Retrieved October 28, 2015.
http://unesdoc.unesco.org/images/0023/002325/232555e.pdf
UNESCO (2016). Declaración de Incheon y Marco de Acción ODS 4 –
Educación 2030. UNESCO.
UNESCO (2021). Declaración de Berlín sobre la Educación para el Desarrollo
Sostenible. UNESCO.
‒ ‒
CAPÍTULO 84
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
normal del curso. Además, la experiencia que se presenta parte de aque-
llos conocimientos previamente adquiridos por el alumno en la realiza-
ción de entrevistas por lo que se sustenta en el aprendizaje significativo
y busca la cohesión grupal y el trabajo colaborativo. Con los objetivos
antes mencionados se recurre al recuerdo de un instante de felicidad
con el que crear lazos a partir de la memoria individual de ambos par-
ticipantes en el ejercicio. Todo ello entendiendo la clase como un gran
teatro que, como indica Guini, (2021, p. 76), “constituye un espacio
donde cohabitan la memoria cultural en tanto producto colectivo y la
memoria individual del espectador, las cuales mantienen un diálogo de
índole metafórica que perdura eternamente”.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
3. METODOLOGÍA
Con el fin de poder ofrecer una descripción lo más completa posible del
ejercicio propuesto, se emplea el estudio de caso de alcance descriptivo
de la actividad, así como de su sustento teórico y la presentación de
aquellos materiales que sirvieron de inspiración para su diseño, cons-
trucción, puesta en práctica y revisión.
Los participantes que formaron parte de la dinámica serán descritos en
profundidad en el apartado dedicado a los resultados, aunque, como se
indica previamente, eran estudiantes del Master Universitario en Radio
COPE cursando la materia “La construcción del relato radiofónico:
Contenido de significado y creatividad” en la asignatura 4: “El texto
naturalizado. Flujo comunicativo e invención del mensaje” en la que se
abordan, además de otros aspectos, el concepto, la evolución y los for-
matos de la ficción sonora, así como se exploran y se ponen en práctica
las habilidades narrativas para contar historias en formato sonoro de
forma colaborativa. Sin embargo, el contexto de limitación de movi-
miento derivó en el diseño de la actividad que se presenta en este capí-
tulo.
Finalmente se describen las distintas fases del proceso, así como se
plantean propuestas de mejora derivados de su puesta en práctica y re-
flexión posterior.
Los alumnos que asisten a los cursos de Máster suelen contar con una
formación similar ya que necesitan contar con una formación previa
que les capacita en habilidades y conocimientos que luego se completan
combinan y depuran a lo largo de los estudios de máster. Lo específico
de sus estudios ayuda a homogeneizar sus intereses, sin embargo, como
en cualquier aula, el universo que lo habita es diverso en cuanto a sus
conocimientos y habilidades, así como en su forma de adquirir la infor-
mación que les queremos transmitir. Por ello, el seminario puede man-
tenerse como una metodología conocida y de gran efectividad para la
‒ ‒
transmisión de conocimientos, aunque no puede limitarse a ella. Es el
conocido como paradigma del seminario (Davis, et al., 2013). que tan
extendido está en las universidades y contra el que distintos autores nos
invitan a trabajar para evitar acomodarnos ya que ello nos podría hacer
olvidar las necesidades de nuestros alumnos. Ahora bien, del mismo
modo que no se tomaría una única metodología para enseñar cualquier
asignatura a todos los alumnos, tampoco es recomendable seleccionar
aleatoriamente el método a aplicar en cada caso. Lo específico de cada
grupo de alumnos y las materias a impartirles debe impulsar a los pro-
fesores a buscar la mejor forma para transmitir el segmento de su ma-
teria. Para atender a ello, algunos autores (Robinson, 2015; Acaso,
2017) han planteado la necesidad de un cambio de paradigma en la en-
señanza. Ausubel (1983) en este sentido establece con su psicología
educativa que los profesores tienen la labor de seleccionar con inteli-
gencia los métodos más adecuados y añade lo relevante de estar en for-
mación constante para hacerlo de forma exitosa. Pero para ello es ne-
cesario que los profesores universitarios cuenten con el tiempo y los
espacios en los que poder encontrar y dar forma a las metodologías. La
formación continua del profesorado, así como los espacios de intercam-
bio de técnicas con sus semejantes para después poder contar con su
pequeño arsenal de armas con las que afrontar el día a día de su ense-
ñanza. Sin embargo, plantear un aprendizaje activo supone para el pro-
fesor un volumen diferente y aumentado de trabajo y un conocimiento
suficiente de la pedagogía a aplicar.
mucho más diferenciado y mucho más atento, mientras que dar leccio-
nes es menos fatigoso y corresponde a una tendencia mucho más natural
en el adulto en general y en el adulto pedagogo en particular. Por otra
parte, y esto es más importante, una pedagogía activa supone una for-
mación mucho más precisa (Piaget, 2001, p. 82)
‒ ‒
Cuando lo que ocurre en el aula se conecta con la vida real logramos
que el conocimiento pase de ser una representación a ser una experien-
cia, de ser algo ajeno a ser algo nuestro, y de ser algo muerto a ser algo
vivo.
‒ ‒
teatro cuyo énfasis está puesto en los participantes, quienes, a través de
la acción directa, participan activamente del hecho teatral, impulsando
un cambio en la praxis social” y su empleo en las aulas es cada vez más
habitual ya que, como indican Motos y Ferrándis (2015, p. 15) “se ca-
racteriza por su deseo de influir en la actividad humana para plantear
asuntos y problemas que los miembros de la comunidad tienen necesi-
dad de resolver”. Por otra parte, el Teatro Aplicado es híbrido y se desa-
rrolla en convivencia con otras áreas y disciplinas y, al buscar solucio-
nes, tiene como centro de atención al otro. Como indican Nicholson
(2005) y Prendergast y Saxton (2009) existe una gran variedad de prác-
ticas que se engloban como parte del Teatro Aplicado, aunque Sedano-
Solís diferencia 3 áreas claramente diferenciadas: El Teatro Aplicado
en Educación, Teatro Aplicado en salud y Teatro Aplicado en comuni-
dad. A esta última pertenece el Teatro del Oprimido creado por Augusto
Boal (1931-2009) inspirado en las teorías de Paulo Freire con el fin de
“transformar al pueblo, «espectador», ser pasivo en el fenómeno teatral,
en sujeto, en «actor», en transformador de la acción dramática”. Aun-
que la técnica más conocida es el teatro foro participativo, son múltiples
las técnicas desarrolladas por el autor brasileño: teatro legislativo, tea-
tro imagen, teatro invisible o el teatro periodístico.
En la actividad propuesta, se presenta la primera actividad de toma de
contacto con la creación y la interpretación de ficción sonora por lo que,
se desconoce si los alumnos cuentan con experiencia previa en la in-
vención de historias, su narración e interpretación. Por ello, la poética
de Boal se convierte en una herramienta de utilidad al acercar el teatro
y la creación al estudiante que hasta entonces ha sido espectador (u
oyente) y convertirle en actor y creador de una ficción sonora colectiva.
Como indica Boal (2001, p. 21) “todos los seres humanos son actores,
porque actúan, y espectadores, porque observan. Somos todos espect-
actores. El Teatro del Oprimido es una más entre todas las formas de
teatro”.
De forma concreta, y atendiendo a las distintas técnicas desarrolladas
por el teórico brasileño, el teatro periodístico da forma a la actividad.
Tratándose de un Máster en Radio y con alumnos cuya área de especia-
lidad es eminentemente periodística, se convierte también en el puente
‒ ‒
por el que transitar entre el periodismo que los alumnos tienen integrado
en su día a día y la creatividad necesaria para la construcción de narra-
tivas para la ficción sonora.
El teatro periodístico fue desarrollado inicialmente por el Grupo Núcleo
del Teatro Arena de San Pablo, Brasil, del cual fui director artístico
hasta que fui obligado a abandonar Brasil. Consiste en diversas técnicas
simples que permiten la transformación de noticias de diarios o de cual-
quier otro material no dramático en escenas teatrales (Boal, 2018, p.
53).
Las técnicas que se emplean son de gran variedad y van desde la simple
lectura de los textos periodísticos, hasta su presentación cruzada con
otra noticia, la lectura complementaria en la que se añaden datos de
interés para su comprensión, el empleo de la música, el uso de la acción
paralela o el recurso de las referencias históricas. También, como indica
el autor, se puede utilizar el apoyo audiovisual, la representación de
aquello que subyace del texto periodístico e incluso se puede presentar
descontextualizada para crear efectos en el espectador. Por ello, en el
ejercicio propuesto se trabaja la realización de entrevistas que dieran
lugar a un documento gráfico y sirvieran como dramaturgias para la
construcción de escenas o personajes de forma sencilla y casi intuitiva.
La ficción sonora es, como indica Rodero (2010, p. 10) “una fábrica de
sueños o de realidades. Porque la historia, contada en forma de radio
drama, es al mismo tiempo la descripción de la vida misma”. Las his-
torias humanas representadas por medio de la ficción y transmitidas de
forma creativa, tienen el poder de hacer sentir al oyente aquello que se
comparte. Ahí residen la principal virtud de la radio ya que cuenta con
la capacidad para crear imágenes mentales y conectar con las emocio-
nes.
‒ ‒
La ficción sonora era el centro temático de la actividad propuesta que
se desarrolló con las circunstancias, las etapas e instrucciones que se
indican a continuación.
‒ ‒
sucesivas, trabajar en la adaptación de un clásico del teatro
universal. Los ejercicios prácticos de trabajo de la interpreta-
ción y construcción de textos de ficción debían realizarse en
formato online. Sin embargo, desde el día 7 de enero de 2021
el temporal Filomena bloqueó la ciudad de Madrid e impidió
celebrar presencialmente o en versión híbrida la clase de la
materia “La construcción del relato radiofónico: Contenido de
significado y creatividad” en su asignatura 4: “El texto natu-
ralizado. Flujo comunicativo e invención del mensaje”.
‒ ‒
5.3. DESCRIPCIÓN DE LA ACTIVIDAD
Materiales necesarios:
‒ Ordenador, móvil o tableta con conexión a internet.
‒ Aplicación zoom o similar con opción de creación de salas
aleatorias.
‒ Papel y pinturas o similar para dibujar. Algunos ordenadores
y móviles contienen aplicaciones que permiten la misma fun-
ción.
‒ Auriculares (No son objetos necesarios, pero sí que son desea-
bles para el seguimiento de la puesta en escena de la activi-
dad).
‒ En el caso de querer crear un pódcast a partir de los testimo-
nios recopilados, se deberá contar con un software de graba-
ción y edición para poder realizar un montaje con los fragmen-
tos compartidos.
‒ ‒
2. Puesta en práctica de la actividad: Después de explicar los con-
ceptos teóricos se realiza una actividad práctica con la que apli-
car los conceptos informados previamente. En este sentido, Pia-
get (2001) da especial relevancia a la práctica y el aprendizaje
activo como desencadenante de la creatividad. Ausubel, (1983,
p. 275) añade además la influencia en la estructura cognoscitiva
de, los ejercicios prácticos:
Aumenta la fuerza de disociabilidad de los significados recién aprendi-
dos en un ensayo dado y con ello facilita la retención de éstos.
‒ ‒
1. Cambio de roles: Seguidamente, se realiza un cambio de pape-
les en el grupo y se vuelve a contar con 5 minutos para respon-
der a la pregunta y 2 minutos para dibujar lo recordado. Final-
mente, se abandonan las salas dedicadas al trabajo en parejas y
se vuelve a la sala principal donde se continuará con la actividad
de puesta en escena de los resultados.
‒ ‒
vocal en la construcción de sus personajes y traten de imitar las
voces, articulación o acentos de sus compañeros.
FIGURA 1. Capturas de pantalla de los dibujos compartidos por los alumnos durante la
sesión. En la imagen se observa que durante la explicación, los alumnos cubrían sus ros-
tros con los dibujos para así adquirir la identidad de sus entrevistados representados me-
diante los dibujos.
‒ ‒
entendido como arte dramático, pone el acento en la representación, en
el espectáculo y el espectador, en la estética de la recepción y en la
adquisición de unas destrezas actorales. La dramatización lo coloca en
la acción en sí misma, en el proceso que lleva a la representación.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
Se observa además un alto nivel de participación voluntaria. Al termi-
nar la dinámica los alumnos eran libres de compartir sus imágenes y
experiencias. La actividad, al tratarse de una prueba piloto de innova-
ción docente, no tenía una calificación asignada, sino que se realizó con
los objetivos previamente indicados. Sin embargo, se contó con un alto
nivel de participación e interés por parte de los estudiantes ya que todos
decidieron intervenir voluntariamente.
Se identifica que se trata de una actividad cuyo desarrollo en formato
online ayuda a su mejor funcionamiento. Las salas paralelas de la apli-
cación zoom facilitaron el traslado virtual a salas donde los alumnos
podían trabajar en silencio y observar atentamente a sus compañeros.
Además, la posibilidad de cubrir sus identidades por medio del papel
con el guion ilustrado (su dibujo), permitió trabajar el ejercicio de la
voz y la interpretación. También la cámara y la pantalla se convirtieron
en aliados en un momento en el que se dependía de la tecnología para
el aprendizaje. Por todo ello, se considera que se ha ideado una activi-
dad específica para circunstancias de distanciamiento social.
La evaluación personal de la actividad por parte de los alumnos parti-
cipantes fue positiva. Al final de la última sesión celebrada todavía en
remoto el 22 de enero de 2021 se reservaron unos minutos para la rea-
lización de las encuestas de evaluación docente en las que se ha obte-
nido un resultado notablemente satisfactorio. El feedback de los alum-
nos a lo largo del proceso también fue positivo.
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Nicholson, H. (2005). Applied theatre: The gift of drama. Palgrave Macmillan.
Guini, E. (2021). Teatro postdramático en tiempos de crisis: Tres ejemplos de teatro
documento y teatro de creación. Acotaciones. Revista de Investigación y
Creación Teatral, vol. I (46), 71-101. RESAD.
Piaget, J. (2001). Psicología y pedagogía. Crítica.
Robinson, K y Aronica, L. (2017). Escuelas creativas. Debolsillo.
Acaso, M. (2017). Reduvolution: Hacer la revolución en la educación. Paidós.
Ausubel, D. P. (1983). Psicología educativa: Un punto de vista cognoscitivo.
Trillas.
Bruner, J. (2000). La educación, puerta de la cultura. Visor.
Davis, J. R. y Arend, B. D. (2012). Facilitating Seven Ways of Learning: A
Resource for More Purposeful, Effective, and Enjoyable College
Teaching. Stylus Publishing.
Gardner, H. (2012). El desarrollo y la educación de la mente: escritos esenciales.
Paidós.
Rodero, E. (2013). Reorientando la enseñanza de la radio. Estudios sobre el
mensaje periodístico. Vol. 19, Núm. especial marzo, págs.: 381389.
Madrid, Servicio de Publicaciones de la Universidad Complutense.
Rodero, E y Xoengas, X. (2010). Ficción radiofónica. Instituto Radio Televisión
Española
‒ ‒
CAPÍTULO 85
‒ ‒
Sin embargo, a pesar de dicha reestructuración y revisión de la oferta
docente, la metodología activa entre docente/discente siguió basada en
el trabajo en espacios de aprendizaje compartidos en los que el profesor
y su grupo de estudiantes experimentan y discuten de manera presen-
cial, siendo esencial en dicha metodología la premisa de que el conoci-
miento se transmite “desde el hacer” en asignaturas como pintura, di-
bujo, escultura, grabado, etc., (Bellido Márquez, 2013).
Esta manera de formarse en las artes es, en realidad, consustancial al
desarrollo artístico: asumimos que el conocimiento técnico, procesual
y crítico viene dado por el “aprender desde la experiencia”, algo que,
lógicamente, requiere de una estrecha relación y diálogo en el aula o el
taller.
‒ ‒
Entendamos, pues, el aula-taller como punto de encuentro crítico entre
docentes y estudiantes, como comunidad social cuya interacción enri-
quece el diálogo crítico y la propia construcción de los lenguajes artís-
ticos en un aprendizaje colectivo (Roche y Alarcón Méndez, 2019).
‒ ‒
FIGURA 2. Aula taller de dibujo del natural en la facultad de bellas artes de la universidad
complutense.
Por todo ello, podemos afirmar que aprender de y con los compañeros
es parte de la esencia de la formación en las artes plásticas: constituye
un poderoso estímulo que fomenta el espíritu crítico, aumenta signifi-
cativamente la motivación de los alumnos y contribuye a un aprender
no solo “desde el hacer”, sino también desde el “cómo hace el otro”
(roche y alarcón méndez, 2019).
‒ ‒
FIGURA 3. Aula taller de dibujo de apuntes del natural en la facultad de bellas artes de la
universidad complutense.
‒ ‒
2. LA DOCENCIA DEL DIBUJO DEL NATURAL EN EL
CONTEXTO DEL GRADO EN BELLAS ARTES
146 https://www.ucm.es/gradobellasartes/construccion-y-representacion-en-el-dibujo
‒ ‒
2.1. PERCEPCIÓN, COGNICIÓN Y TRASLACIÓN GRÁFICA
‒ ‒
‒ Procesos de construcción. Reducción de la complejidad vi-
sual.
‒ ‒
“Procesos y Procedimientos del Dibujo”, en el primer cuatrimestre de
2º de Grado en Bellas Artes)147.
Nuestra experiencia docente confirma que es fundamental que el mo-
delo de estudio, es decir, el o la modelo, favorezca un alto grado de
complicidad con los dibujantes, de modo que el rol que cumple el mo-
delo desnudo va mucho más allá de un mero análisis del cuerpo.
Cuando se produce esta complicidad entre docente, discentes y modelo
se potencia la concentración, curiosidad y empatía, lo que contribuye
poderosamente a potenciar la auto exigencia, el rigor y la expresividad
en los dibujos resultantes.
Por ello, uno de los grandes alicientes de las asignaturas de dibujo del
natural de 2º de Grado en Bellas Artes es que los estudiantes comienzan
a dibujar la figura humana desnuda desde aproximaciones muy variadas
en tiempo, técnica, formato y objetivos del dibujo. Se practican tanto
sesiones de apuntes rápidos de pequeño formato que oscilan en tiempos
de pose entre el minuto y los quince minutos, como ejercicios en papel
de 100 x 70 cm. en sesiones de pose estática de entre 3, 6 o 9 horas
totales de duración.
Mediante el estudio de la figura humana los dibujantes desarrollan una
alta capacidad de control visual, compositivo, estructural y tonal sobre
la escena, pero, además, descubren cómo trabajar con los materiales y
la importancia de la comprensión expresiva de aquello que es obser-
vado. Esta es una situación que requiere capacidad de abstracción y un
enfoque espacial de la información, y en la que es muy interesante des-
cubrir cómo a partir de una premisa de ejercicio común, los estudiantes
desarrollan diversas estrategias de trabajo, a pesar de utilizar técnicas
comunes.
147 https://www.ucm.es/gradobellasartes/procesos-y-procedimientos-del-dibujo
‒ ‒
FIGURA 4. Jeremy Deller, "IGGY POP LIFE CLASS", 1974
‒ ‒
FIGURA 5. Cronograma de sesiones docentes de la asignatura “construcción y represen-
tación en el dibujo” en un supuesto de presencialidad total.
Las dinámicas de una clase típica es decir, presencial, son las siguien-
tes:
‒ Presentación del tema: concepto a trabajar, descripción del
ejercicio, presentación de las técnicas.
En marzo de 2020 se hace evidente que España está viviendo una situa-
ción de emergencia sanitaria derivada de la pandemia provocada por el
virus COVID-SARS19, lo que supone la entrada en un estado de alarma
‒ ‒
y en un severo confinamiento domiciliario. En los primeros momentos
se planteó un confinamiento de dos semanas. A medida que la gravedad
de la expansión de la infección progresaba, esas semanas iniciales se
convirtieron, finalmente, en un cierre total de casi tres meses.
A la hora de comprender el alcance de esta pandemia, no debemos ol-
vidar que la grave situación vivida en España se correspondía con un
preocupante escenario global ya que la enorme capacidad de infección
del virus y sus devastadores efectos aquejaba a todos los países del pla-
neta en mayor o menor medida.
Por ello, en apenas un par de días se suspendieron las clases sin margen
para adaptarnos a lo que ocurría a nivel sanitario o social. En muchos
casos los alumnos ni siquiera recogieron sus materiales ya que contaban
con que en breve podrían regresar a la facultad y continuar con su for-
mación presencial. Es importante destacar este aspecto, ya que deter-
minó en muchos casos cómo trabajarían los estudiantes en el período
no presencial que se abrió entonces en el curso 2019-20.
‒ ‒
Sin embargo, en cuanto al estudio de caso que nos ocupa, es necesario
explicar que la reacción de los estudiantes en estas primeras semanas
se manifestó de manera dispar: en algunos casos, interpretaron que sería
un lapso breve de tiempo que podrían recuperar después y, en otros, los
propios alumnos, o familiares cercanos, cayeron enfermos por el virus,
o se vieron seriamente afectados por la pérdida de trabajo e ingresos.
Además, anímicamente toda la comunidad docente se sentía desconcer-
tada ante lo que estaba ocurriendo a nivel sanitario. A esto se sumó la
dificultad añadida de tratar de conciliar la vida familiar y laboral du-
rante esos meses, lo que derivó, en términos generales, en un mayor
nivel de estrés, agotamiento y ansiedad para los docentes y, en especial,
para las mujeres las mujeres PDI tal y como se explica en el informe
“Desigualdades al descubierto en la universidad por la crisis de la CO-
VID-19. Impacto de género en las condiciones de trabajo, uso del
tiempo y desempeño académico en la UCM”: “por lo general, las mu-
jeres lo han pasado significativamente peor durante el confinamiento
que sus colegas hombres” (Bustelo, M; de Dios, P; Pajares, L (2021).
Para afrontar este inédito escenario fue fundamental la ayuda de los
Servicios Informáticos Complutense, de la coordinadora de Campus
Virtual de la facultad de Bellas Artes, del Vicerrectorado de Tecnología
y Sostenibilidad, de la coordinación general de Campus Virtual y la
Oficina de Software Libre UCM. Además, se generaron redes colabo-
rativas para facilitar la transición a lo digital (Vengadores UCM, grupo
de voluntarios especializados en plataformas y programas informáti-
cos).
Estas semanas constituyeron una verdadera prueba de estrés que afectó
severamente a toda la población. Desde la UCM se potenciaron servi-
cios de ayuda psicológica como PsiCall, gabinete psicológico gratuito
que por teléfono y mail prestó un servicio fundamental en esos meses a
toda la comunidad Complutense gracias a sus terapeutas voluntarios
(Fig. 6).
‒ ‒
FIGURA 6. Interfaz de la página de psicall ucm
‒ ‒
cuatrimestre, la dinámicas y metodologías hubieran tenido un impacto
menor a la hora de conseguir los objetivos docentes del curso.
‒ ‒
GRÁFICO 2. Página 1 de la adenda de la asignatura aprobada por junta de facultad durante
el curso 2019-20
‒ ‒
Para reseñar las adaptaciones curriculares (Gráfico 2), destacamos los
dos grandes aspectos implicados en dichas adaptaciones, es decir:
‒ La adaptación metodológica, o el uso de herramientas digita-
les para cursar los contenidos de la asignatura sin comprome-
ter la adquisición de competencias curriculares por parte de
los alumnos.
‒ ‒
estos de modo que los estudiantes sintieran, en la medida de lo posible,
que a pesar de la distancia física sí contaban con un atento seguimiento
docente.
Por otro lado, la adaptación del calendario académico permitió ampliar
el tiempo de trabajo con los alumnos. Así, si en condiciones habituales
el cuatrimestre hubiera tenido una duración de 14 semanas comprendi-
das entre el 20 de enero y el 29 de mayo de 2020, finalmente, en Comi-
sión Permanente de Junta de Facultad celebrada telemáticamente el 27
de mayo de 2020 se aprobó la reanudación de las clases presenciales
entre el 1 al 23 de septiembre de 2020 (ambos inclusive) para las asig-
naturas anuales y las del segundo cuatrimestre, respetando todas las me-
didas de seguridad, aforo y distancia obligadas.
Esta ampliación recuperó el contacto docente directo con los estudian-
tes y ayudó a que ellos contaran con los meses de verano para poder
realizar trabajos que, por distintos motivos, no hubieran podido llevar
a cabo durante el confinamiento.
En la adaptación temporal es importante destacar que, si bien durante
el confinamiento se siguió respetando el horario lectivo de la asigna-
tura, no resulta eficiente trabajar contenidos online en clases que, en
nuestro caso, suponen 3 horas consecutivas dos días por semana: tanto
para los alumnos como para la docente, este es un tiempo demasiado
prolongado para una comunicación online efectiva, y más si se tiene en
cuenta que los estudiantes deben atender otras asignaturas, también on-
line, a menudo durante prácticamente todo el día, los cinco días de la
semana laboral.
Por todo ello, para diseñar la asignatura de manera no presencial y ge-
nerar un mapa productivo y estimulante con estas coordenadas se recu-
rrió a un primer análisis acerca de cuál era el objetivo último de los
bloques de contenido del curso, buscando cómo trasladar dicho conte-
nido conceptual y procesual a las circunstancias sobrevenidas durante
el confinamiento.
‒ ‒
4.1. EL CAMPUS VIRTUAL
‒ ‒
FIGURA 7. Vista de la interfaz de la web vengadores ucm
‒ ‒
FIGURA 8. vista de una selección de recursos online culturales
‒ ‒
adecuaron las herramientas digitales y cuáles fueron las adaptaciones
metodológicas realizadas para la asignatura “Construcción y Represen-
tación en el Dibujo”, materia obligatoria de 6 créditos ECTS del se-
gundo curso del Grado en Bellas Artes de la Universidad Complutense
de Madrid.
Tras unos primeros días de desconcierto, en los días previos a las vaca-
ciones de Semana Santa de 2020 quedó patente que el confinamiento se
alargaría hasta final de curso y que, además, el período lectivo anterior
a las vacaciones de verano se prorrogaría dos semanas para compensar
la docencia no realizada en los primeros momentos del confinamiento,
(momento en el que docentes y alumnos aún se estaban adaptando a las
anómalas circunstancias y al trabajo virtual).
El hecho de que en Semana Santa - del 8 al 20 de abril de 2020- se
confirmara la ampliación del calendario lectivo permitió realizar una
planificación docente que ajustara los contenidos curriculares a la me-
todología de trabajo online y digital.
En el caso particular de la asignatura que nos ocupa, se pasó por anali-
zar el contenido que sí había podido impartirse presencialmente en la
primera parte del cuatrimestre, y utilizar las experiencias vividas en el
aula con los alumnos para impulsar una formación que, necesariamente,
debía ser más autónoma para los estudiantes.
Para ello se estudiaron en profundidad los objetivos de los bloques de
contenido aún no impartidos en relación con aquellos que sí habían po-
dido cursarse en las aulas con normalidad:
A. Bloques de contenido cursados presencialmente estudiando al mo-
delo:
‒ Conceptos de representación en el dibujo.
‒ ‒
‒ B. Bloques de contenido cursados telemáticamente sin estudio
de modelo:
‒ ‒
apuntes del día anterior), sesión de dibujo en formato de 100
x 70 cm de modelo del natural en una pose única, puesta en
común de resultados y discusión crítica.
‒ ‒
‒ Propuesta 3. Relaciones complejas fondo/figura en la compo-
sición gráfica bidimensional para la elaboración de apuntes
del natural de composiciones de elementos en los que se cons-
truya el dibujo a partir de una relación dinámica entre el fondo
y la figura/s.
‒ ‒
visual, los estereotipos fisonómicos y la relación entre una
"impresión global" de un individual frente a la descripción
pormenorizada de sus partes. Para ello los estudiantes debían
trabajar por parejas (por teléfono) para que cada uno de los
miembros de dicha pareja realizase los siguientes dibujos:
Cada martes, cada uno de los dos grupos recibía una clase online sín-
crona en su horario de clase (Grupo 8: de 9 a 12 h.; Grupo 7: de 12 a 15
h.). Dichas clases se agendaban con antelación, y se ponía a disposición
del alumno tanto la presentación visual de dicha clase, como la graba-
ción de la misma una vez celebrada la sesión. Debemos indicar que de-
jar colgados los materiales docentes y las grabaciones de las clases fue
en cierta manera controvertido por el temor al mal uso (descarga ilegal,
o difusión de estos no autorizada). Para evitar malas prácticas, se reco-
mendó indicar la siguiente información en cada campus:
“Aviso sobre el uso de materiales disponibles en Campus Virtual Salvo
autorización expresa, los materiales disponibles en el Campus Virtual
sólo se podrán utilizar por los alumnos de la UCM para el estudio de
la asignatura correspondiente. La publicación o distribución posterior
(incluida la divulgación en redes sociales o servicios de compartición
en Internet) puede vulnerar la normativa de protección de datos y/o la
de propiedad intelectual y generar responsabilidad de la persona in-
fractora”.
‒ ‒
FIGURA 9. Vista de las sesiones de clase síncronas entre el 24 de marzo y el 25 de mayo
de 2020.
‒ ‒
disposición de los estudiantes en el espacio del campus virtual), y se
convirtieron en un tiempo formativo de relevancia. Como hemos visto
en el desglose de esas clases, los contenidos abordaban conceptos críti-
cos de dibujo, análisis de referentes artísticos y explicaciones de técni-
cas, materiales y procedimientos de dibujo pero, más allá de eso, se
convirtieron en espacio de discusión crítica del grupo ya que era la
oportunidad de que los estudiantes analizaran los trabajos de los com-
pañeros, aprendieran cómo leer las obras de arte analizadas, y expresa-
ran las dudas o conflictos que pudieran tener en el desarrollo de sus
tareas.
Destacamos este aspecto porque, en realidad, en las clases presenciales
suele haber muy poco tiempo para las actividades teóricas que, por otra
parte, son enormemente formativas para los estudiantes, y les permite
desarrollar un estudio crítico sobre su trabajo.
5.3. EVALUACIÓN
Esta es una asignatura que se puntúa mediante evaluación continua pon-
derada de la siguiente forma:
a. Ejercicios propuestos durante el periodo de docencia pre-
sencial: Tres dibujos de formato 100 x 70 cm. realizados en
el aula a partir de pose del modelo humano desnudo, durante
el periodo presencial. Su evaluación conjunta es de hasta 2
puntos y pondera el 20% de la calificación final.
‒ ‒
e. Tres comentarios críticos de exposiciones/películas relacio-
nadas con la asignatura o trabajo teórico bajo las premisas
del/la docente: Su evaluación conjunta será de hasta 1 pun-
tos y ponderará el 10% de la calificación final.
‒ ‒
personas, (35 alumnos por grupo), por lo que dichas tutorías se sucedían
con mucha frecuencia, y podían tener una duración de entre 30 minutos
a, en algunos casos puntuales, más de hora y media.
‒ ‒
Por ello, y a pesar de que durante medio cuatrimestre los estudiantes no
pudieron trabajar a partir del estudio de la figura del modelo desnudo,
consideramos que los alumnos sí lograron adquirir los conocimientos y
competencias necesarias para estar correctamente preparados para con-
tinuar con sus estudios de Bellas Artes (Fig. 10). Plantear propuestas
docentes que les obligaran a mantener la práctica del dibujo diario,
junto con el hecho de poder desarrollar un proyecto personal facilitó
una mejor comprensión del dibujo como materialización compleja de
la experiencia visual y cognitiva.
‒ ‒
FIGURA 10. ejercicio autónomo sobre autorrepresentación: del espejo al selfie
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
Mi agradecimiento a los estudiantes de los grupos 7 y 8 de la asignatura
“Construcción y Representación en el Dibujo” del grado en Bellas Ar-
tes, curso 2019-20, por la valiosa experiencia profesional y personal
que compartí con ellos. Su compromiso y resiliencia son admirables.
Asimismo, agradezco a mis compañeros PDI y PAS, y a la comunidad
Complutense la ayuda generosa que establecieron para que todos pu-
diéramos seguir adelante en meses tan difíciles.
‒ ‒
8. REFERENCIAS
Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación, ANECA (2009).
Verifica Grado en Bellas Artes de la Facultad de Bellas Artes,
Universidad Complutense de Madrid.
https://bellasartes.ucm.es/data/cont/docs/14-2015-07-28-
VERIFICA%20GRADO%20EN%20BELLAS%20ARTES%20_%20VE
RIFICADO%20ANECA%2002.02.09.pdf
Arriazu Muñoz, R (2013). La adaptación del Plan Bolonia en las aulas: una
perspectiva histórica y crítica para entender las claves y estrategias de las
universidades españolas. Editorial Octaedro
Bellido Márquez, M. C (2013). Enseñar a aprender con metodología activa en el
Grado en Bellas Artes. Estudios sobre el mensaje periodístico. Vol. 19,
Núm. especial abril, págs.: 593 603. Madrid, Servicio de Publicaciones
de la Universidad Complutense.
http://oa.upm.es/53108/1/TFM_ELENA_VEGA_GONZALEZ.pdf
Bustelo, M; de Dios, P; Pajares, L (2021). Desigualdades al descubierto en la
universidad por la crisis de la COVID-19. Impacto de género en las
condiciones de trabajo, uso del tiempo y desempeño académico en la
UCM. Proyecto SUPERA, UCM.
https://www.ucm.es/supera/file/%20desigualdades-al-
descubierto_covid_ucm
Martínez García, A (2016). El dibujo como disciplina en el contexto de los
nuevos grados en Bellas Artes. Análisis crítico y comparado. Tesis
doctoral U. Murcia.
https://dialnet.unirioja.es/servlet/dctes?codigo=128406
Roche, N; Alarcón Méndez, Y. (2019). Retomar la lógica de taller. Tableros (N.°
10), Facultad de Bellas Artes. Universidad Nacional de La Plata La
Plata. Buenos Aires. Argentina
http://papelcosido.fba.unlp.edu.ar/tableros
VVAA (2009). Guía Docente de la asignatura Construcción y Representación en
el dibujo. Grado en Bellas Artes. UCM.
https://www.ucm.es/gradobellasartes/construccion-y-representacion-en-el-dibujo
VVAA (2009). Guía Docente de la asignatura Procesos y Procedimientos del
dibujo. Grado en Bellas Artes. UCM.
https://www.ucm.es/gradobellasartes/procesos-y-procedimientos-del-dibujo
‒ ‒
CAPÍTULO 86
JORGE OLIVERA
Universidad Complutense de Madrid
JESÚS CANO REYES
Universidad Complutense de Madrid
1. INTRODUCCIÓN
150 El proyecto, bajo el título “Escritura creativa para la creación de conocimiento en la materia de
Literatura Hispanoamericana”, fue concedido en la convocatoria Proyectos de Innovación 2020-
2021, Innova-Docencia de la Universidad Complutense de Madrid, y fue renovado para el curso
2021-2022.
‒ ‒
1.1. ANTECEDENTES DEL PROYECTO
‒ ‒
modalidad práctica “destinada a proveer de recursos y propuestas di-
dácticas innovadoras” (19). Por otra parte, en los tres años anteriores,
este proyecto tuvo como antecedente una modalidad de evaluación a
través de la escritura creativa realizada por diversos profesores de la
unidad de Literatura Hispanoamericana en el departamento de Litera-
turas Hispánicas y Bibliografía.
Los vectores que guiaron ese proceso de innovación fueron dos: intro-
ducir una práctica de aprendizaje diferente en la materia mencionada y
en función de ello establecer otra dinámica de evaluación.
El primer aspecto surgió por la necesidad de acercar la obra de los au-
tores del programa a nuestros alumnos, de modo que pudieran “leer” tal
y como lee un escritor. Para ello era primordial aprender a leer con
atención, puesto que, como sostiene el argentino Ricardo Piglia, un es-
critor es aquel que “entiende el modo en que los textos están construi-
dos y quiere ver cómo están hechos, ver si puede hacer algo parecido o
en el mejor de los casos algo distinto” (2015, p. 31). Se trata de un
círculo virtuoso en el que la lectura contribuye a la escritura y viceversa,
puesto que, sostiene Piglia nuevamente, “escribir cambia sobre todo el
modo de leer” (31). Asimismo, esta relación entre la enseñanza de la
literatura y la escritura creativa ha sido defendida por autoras como
Elaine Showalter (“Me gustaría ver una erosión de los límites entre la
crítica literaria y la escritura creativa” [2003, p. viii; la traducción es
nuestra]) o por Carolyn Heilbrun, que sostenía que el mejor entrena-
miento para enseñar narrativa es escribirla (Showalter, 2003, p. 89¸ la
traducción es nuestra).
El segundo vector tuvo relación con la práctica docente y con la nece-
sidad de establecer una metodología que, a través del ejercicio de la
escritura, permitiera visualizar los parámetros de lo que significa leer;
también, que facilitara la evaluación, conduciendo el proceso a una es-
trategia, no de repetición de contenidos, sino de comprensión profunda
del funcionamiento de los textos literarios y de los rasgos concretos que
conforman la obra de un escritor determinado. En resumen, al inicio del
proyecto la escritura aparecía como una forma de innovación que
‒ ‒
permitiría, en primer lugar, generar un método fecundo de lectura en
nuestros alumnos y, en segundo lugar, facilitar la evaluación formativa
desde una perspectiva creativa, con una mirada nueva sobre los textos.
La escritura como eje vertebrador de esta práctica favorecía en el plano
cognitivo el desarrollo de la comprensión de las estructuras de la len-
gua, del funcionamiento del lenguaje y de los recursos empleados en
cada caso por los autores estudiados; a su vez, brindaba a los estudian-
tes una nueva forma de entender qué significa escribir. Merece la pena
recordar que también en el contexto universitario -incluso en el de es-
tudiantes del Grado en Español: Lengua y Literatura- hay que avanzar
en el aprendizaje de la escritura, concebida como una “destreza diná-
mica, que evoluciona con el tiempo”, y que se sigue adquiriendo en
todas las etapas de la formación (Cassany, 2021, p. 162). En este con-
texto surge el concepto de creatividad en la escritura tal como lo definen
Gornick (2003) y Levy (2008), ligado a la “escritura personal” como
una modalidad de desarrollo del pensamiento para generar procesos dis-
ruptivos. De esta forma el procedimiento abría un área que aportaba
soluciones a una, por momentos, deficiente capacidad de nuestros estu-
diantes en las estrategias de expresión escrita como motor de desarrollo
y aprendizaje en la educación superior (Prado Aragonés, 2011).
2. OBJETIVOS
‒ ‒
Por otro lado, los objetivos de carácter específico inciden especialmente
en la forma de leer y escribir en una carrera donde habitualmente la
escritura, a pesar de ser eje central de todo el proceso de formación, no
es vista como un elemento a trabajar desde el punto de vista creativo,
como una forma de abordaje del conocimiento. Por eso mismo, se re-
quería:
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
innovación, ya que en cada una de las áreas mencionadas se presentaba
un aspecto sobre el que innovar. También nos interesaba la parte meto-
dológica, el cambio en aspectos que guardaran relación con la práctica
de nuestra clase, la planificación y las estrategias para trabajar determi-
nados temas. Desde este punto de vista, se planteaba la posibilidad de
investigar en esa labor y abrir un espacio nuevo a la innovación meto-
dológica, ya que la finalidad de este proyecto, “frente a la tradicional
metodología docente de transmisión vertical (profesor-alumno) de los
conocimientos a través de la clase magistral […] y su correlativa eva-
luación mediante el sistema de exámenes”, era establecer una dinámica
de “enseñar a aprender” que fomentara “las capacidades de autoapren-
dizaje y el espíritu crítico de los alumnos” (Gregorio y Casas, 2014, p.
426), en un área donde con frecuencia se ha trabajado desde el punto de
vista de los contenidos.
En el momento de inicio del proyecto, y dada la práctica anterior de
algunos integrantes del mismo, teníamos constancia de que la experien-
cia era susceptible de ser aplicada en cada asignatura y que favorecería
una nueva forma de evaluación ligada a los autores que se estudian en
el grado. Todo ello se haría en consonancia con las competencias gene-
rales y específicas consignadas en el plan de estudios de la titulación.
Asimismo, el proyecto se enmarcaba en la línea de innovación en re-
cursos educativos en abierto y enseñanza virtual, lo que se hacía viable
con la introducción de nuevas metodologías (modalidad de taller, enfo-
que creativo y comunicativo, el desarrollo de estrategias cognitivas para
la lectura de textos literarios) y la innovación de la evaluación forma-
tiva o continua de nuestros alumnos, llevada a cabo durante la práctica
de escritura y corregida en dinámica de tutorías -presenciales o virtua-
les-. Ello permitía en principio dos vías para la evaluación: coevalua-
ción y autoevaluación (Carrasco, 2011). En ambos casos, la innovación
suponía la introducción de elementos nuevos, “un cambio en las activi-
dades y métodos de producción”, que en nuestro caso se focalizó en
“cambios en la pedagogía, en la evaluación, en el involucramiento de
los actores” (Valencia y Valenzuela, 2017, p. 112).
‒ ‒
3.2. IMPACTO ESPERADO Y CRITERIOS DE INTERVENCIÓN
‒ ‒
forma de recabar los datos de la experiencia (Lugones s. f.)151: pertinen-
cia (con relación a los alumnos y a las necesidades de estos según el
proceso pedagógico planteado), confiabilidad (en cuanto a los métodos
y procedimientos empleados para recoger la información) y compara-
bilidad (en relación con la percepción de los alumnos respecto a sus
demás cursos y en función del estudio comparativo de la práctica de los
docentes que la aplicaron).
La metodología y el plan de acción se dividieron en fases que permitie-
ran visualizar los dos grandes procesos que queríamos implementar: los
ejes de aplicación que tenían que ver con la experiencia de innovación
y el desarrollo de una línea metodológica para la enseñanza y el apren-
dizaje en el Grado en Español: Lengua y Literatura.
4. DESARROLLO
151Aunque los indicadores señalados en el documento del BID se refieren a aspectos de la econo-
mía y de la innovación en las empresas, creemos que esos mismos elementos pueden tomarse
como punto de referencia para la evaluación de un proyecto pedagógico como este.
‒ ‒
actividad supuso un porcentaje de entre un 10% y un 15% de la evalua-
ción final de la asignatura.
En el mes de junio de 2021, una vez finalizadas las clases del segundo
semestre, el equipo del proyecto se reunió para elaborar y poner en co-
mún el análisis de los resultados y logros conseguidos. Para ello, se
utilizaron unas pautas de observación y un análisis de contenido de tipo
‒ ‒
cualitativo que permitieron la “medición” de los alcances del proyecto.
A esto se sumaron las encuestas de satisfacción realizadas en la última
etapa de la fase anterior mediante una pregunta dirigida a los estudian-
tes sobre su participación en el proyecto.
‒ ‒
contribuye a una lectura crítica de los autores del curso? ¿De
qué manera sirve la escritura para leer bien / mejor?”.
‒ ‒
modificadores de enfoque (Levy, 2008). Además de ello, se pidió a los
estudiantes mantener un ciclo de escritura de duración determinada (dos
semanas). A partir de esa primera instancia, se les invitó a revisar sus
textos para ver cómo se podía adaptar a la forma de los autores estudia-
dos en clase. El grupo en el que tuvo mayor aceptación fue en el de
cuarto: durante el desarrollo del tema de las vanguardias históricas, los
alumnos visualizaron una aplicación más inmediata y fácil del proceso
de escritura a través de recursos como el collage, el montaje, la repeti-
ción, el corte y la unión de elementos diferentes dentro de una misma
frase (buscar la oposición entre lo abstracto y lo concreto para trabajar
con la parte sensorial). Se enviaron 28 trabajos de los 33 alumnos ma-
triculados, entre los que cabría destacar una revisión de escritura van-
guardista a la manera de Vicente Huidobro (sobre todo en Altazor y
Ecuatorial) y las reescrituras de las narrativas fantásticas al modo de
Julio Cortázar, siguiendo en algunos casos elementos temáticos y en
otros atendiendo a aspectos formales (posición del narrador, el relato
dentro del relato, etc.). En el caso del tercer curso, centrado en la lite-
ratura del siglo XIX y comienzos del XX, la propuesta fue recibida con
cierta reticencia por parte del alumnado, pero finalmente se cumplió
con la solicitud y se recibieron 17 trabajos de un total de 23 alumnos
matriculados, entre los que habría que destacar las revisiones de escri-
tura de Horacio Quiroga (escritura de cuentos en clave de elementos
realistas, desarrollo de las descripciones, etc.) y las revisiones de cuen-
tos románticos al modo de Juana Manuela Gorriti (el exotismo, el tema
de lo oculto, el rol de la mujer en los cuentos del XIX); también, dife-
rentes versiones de poesía femenina del Modernismo (al estilo de Del-
mira Agustini o Gabriela Mistral…).
‒ ‒
Independencia americana. El ejercicio de escritura se planteó como una
parte de la actividad concreta a desarrollar dentro del proceso de eva-
luación total:
‒ ‒
4.2.3. Poesía Hispanoamericana del Siglo XX
‒ ‒
sobre el peligro de extinción de la raza de burro zamorano-leonés, y un
poema impresionante, “Madrid celeste”, que emplea el método del
montaje de The Waste Land (citas, notas a pie de página, etc.) para ha-
blar de Madrid en tiempos de pandemia.
‒ ‒
entrelazamiento de distintas líneas narrativas en un mismo párrafo en
Nefando de Mónica Ojeda… Además, una de las sesiones fue dedicada
a explicar en detalle las motivaciones del ejercicio de escritura creativa,
a ofrecer posibles ideas y ejemplos; en definitiva, a motivar a los estu-
diantes al respecto.
Se recibieron en total 23 “Cuadernos de lectura y escritura creativa”, de
entre los que cabe destacar algunos ejemplos: un texto muy conseguido
a la manera de Nefando en el que una actriz ensaya el personaje sha-
kesperiano de Julieta y se obsesiona con él hasta desaparecer, y en el
que formalmente se imbrican la narración heterodiegética y la concien-
cia del personaje; un relato de atmósfera difusa y onírica a partir de La
última niebla pero a través del calor y no la niebla, trasladado a la Es-
paña rural; un texto, a la manera de Varamo, construido a partir de re-
flexiones intrascendentes sobre el ordenamiento de los calcetines, de
carácter metaliterario y con digresiones y un humor muy particular.
‒ ‒
o varias corrientes críticas asignadas. Se puede proceder apli-
cando, si se prefiere, no tanto escuelas como conceptos-llave,
instrumentos cuya rentabilidad operativa les ha convertido en
representativos de un modo de trabajo americano: así, se bus-
carán los rasgos barrocos, real-maravillosos, periféricos, ale-
góricos, transculturados, heterogéneos, híbridos, etc. del frag-
mento elegido.
5. RESULTADOS
‒ ‒
en la lógica (no siempre, pero bueno). Personalmente, a mí me ha ayu-
dado [el ejercicio de escritura creativa] porque he empatizado con el
escritor; he sido yo, una estudiante, la que ha tenido que escribir un
poema con unas pautas imitando las técnicas de un movimiento, lo cual
me ha hecho entender mejor los poemas de los autores y también el
propio movimiento. Me parece curioso cómo es posible crear algo bo-
nito y expresivo de la amalgama de muchos fragmentos inconexos”.
6. DISCUSIÓN
‒ ‒
En cuanto a los objetivos específicos, la propuesta mostró que un por-
centaje considerable de alumnos se implicó en el desarrollo y que en
general fue valorada de manera positiva. En relación con el propósito
inicial, se varió el modo de leer para mejorar la lectura crítica, señalada
por los alumnos en sus respuestas al indicar que el ejercicio exige dete-
nerse y leer con atención, enfocar una lectura más pausada para enten-
der las particularidades de cada autor. En segundo lugar, este objetivo
específico se vio potenciado al proponer la escritura como vía de reco-
nocimiento de los recursos gramaticales de la lengua, no solo en la prác-
tica del ejercicio sino en la comprensión de los recursos de cada autor.
En tercer lugar, este proceso ha brindado a los estudiantes la posibilidad
de realizar un autoaprendizaje en la medida en que han tenido que poner
en práctica estrategias de escritura para la adquisición de conocimiento.
Por lo tanto, consideramos lograda la finalidad del ejercicio en función
de la respuesta obtenida (medida por el número de trabajos entregados,
el promedio de calificaciones y las respuestas a las preguntas plantea-
das).152 En última instancia, este proyecto buscaba fortalecer la evalua-
ción formativa mediante la innovación, y también en ese sentido se ha
instalado una práctica a través del autoaprendizaje, otorgando herra-
mientas para que este se produzca. Por otro lado, desde la perspectiva
docente, ha permitido una práctica de evaluación formativa que el
alumnado percibe como una propuesta innovadora.
Según las respuestas recibidas a las preguntas formuladas por este pro-
yecto, los alumnos aceptan que este tipo de acercamiento es motivador
y que permite conocer los autores y los contenidos desde una perspec-
tiva diferente, que no es usual en los estudios de filología y que, por
tanto, creen necesario seguir llevando adelante. Aun los alumnos que
han tenido más dificultad para realizar el ejercicio por su menor fami-
liaridad con la escritura aceptan que gracias a la actividad han entrado
en una dimensión del conocimiento diferente.
Si tomamos como referencia los vectores señalados por Rao y Wein-
traub (2013) -y que se dividen en dos grandes bloques: emocional y
152 Los alumnos enviaron finalmente ciento cuarenta y tres trabajos (143) de los doscientos (200)
pensados inicialmente.
‒ ‒
racional-, podemos establecer en líneas generales las pautas de los lo-
gros obtenidos con este proyecto.
6.1. EMOCIONAL
6.2. RACIONAL
‒ ‒
evaluación dentro del área. Si tomamos en cuenta los otros dos
vectores (sistemas y proyectos), la aplicación de la actividad
entra dentro de lo razonable al ser incluida dentro de una di-
námica ya establecida de funcionamiento de los cursos y de
evaluación de las asignaturas mediante una selección de las
pautas necesarias para su desarrollo. Con relación al tiempo y
al dinero, han sido optimizados ya que se aplicó en los cursos
en los que los participantes daban clases. En este sentido, el
uso de plataformas como Moodle, Google Drive y Google
Meet sirvieron para celebrar las tutorías y las dos conferencias
insertadas en el marco de este proyecto.
7. CONCLUSIONES
‒ ‒
impedido que también en estos cursos se produjera una reflexión sobre
esta instancia de aprendizaje. Los rangos de aceptación han variado se-
gún los cursos, desde una percepción motivadora hasta la resignación
de una tarea obligatoria para la evaluación. En este último caso, to-
mando en cuenta el porcentaje implicado en la actividad, aquellos alum-
nos que no se han sentido con la capacidad para llevarla adelante han
podido dejarla en suspenso sin ver perjudicada gravemente la evalua-
ción total; sin embargo, en la mayoría de los casos los alumnos la han
aceptado y realizado.
En cuanto a la forma de trabajar la escritura, el enfoque más seguido ha
sido el temático, es decir, la mimetización de los temas que caracterizan
a un autor, pero no los recursos formales con los que se fabrica su lite-
ratura. Esta última vertiente, ligada casi naturalmente al proceso de es-
critura, ha producido los trabajos más logrados y profundos.
De una manera u otra, los alumnos consideran que se trata de una ex-
periencia distinta, útil y motivadora. El punto en que coinciden la ma-
yoría de ellos es que este trabajo les permite focalizar de manera más
directa el estudio de las obras, es decir, hacer un acercamiento más re-
posado y exhaustivo sobre la lectura y acceder a los procesos de escri-
tura presentes en los textos para intentar desarrollarlos; indirectamente,
da recursos a los estudiantes para mejorar el proceso de lectura.
En otros aspectos igualmente relevantes, se señala la importancia de la
escritura como una forma de comprender el contexto y los temas de los
que tratan los autores, ponerse en su lugar para pensar como ellos y
entender el funcionamiento de un texto.
En menor medida, algunos alumnos manifiestan que su propio ejercicio
de escritura les ha conferido la capacidad de entender el funcionamiento
de la lengua en sus textos y en los de otros autores. No se trataba de que
en todos los casos se escribiera un buen cuento o poema, sino de traba-
jar la propuesta para comprender las estrategias implicadas en su crea-
ción.
En líneas generales, consideramos que ha sido una experiencia positiva,
no solo para el alumno, por lo señalado anteriormente, sino también
para el profesor, al que ha permitido mirar el curso desde otra
‒ ‒
perspectiva y por ello mismo plantear una forma diferente de acercarse
a los autores: aprender a leer como un escritor. Desde el punto de vista
de los docentes la evaluación es positiva en la medida en que se ha
desarrollado una pauta diferente de trabajo en clase, y a su vez, se ha
coordinado una práctica de evaluación común y motivadora para los
estudiantes.
8. AGRADECIMIENTOS
9. REFERENCIAS
‒ ‒
Mendoza Fillola, A. (2012). Didáctica de la Lengua y la Literatura. Pearson.
Núñez Delgado, P. y Santamarina Sancho, M. (2015). “Enfoques, métodos y
metodología para el desarrollo de la competencia en comunicación
lingüística”. En P. Núñez Delgado y I. Alonso Aparicio (Eds.). Innovación
docente en didáctica de la lengua y la literatura: teoría e investigación
(pp. 9-28). Octaedro.
Prado Aragonés, J. (2011). Didáctica de la lengua y la literatura para educar en
el siglo XXI. La Muralla.
Piglia, R. (2015). Los diarios de Emilio Renzi. Años de formación. Anagrama.
Rao, J. y Weintraub, J. (2012). “What’s Your Company’s Innovation Quotient?”
(18 enero 2012). SSRN. http://dx.doi.org/10.2139/ssrn.1987866
Rao, J. y Weintraub, J. (2013). “How innovative is your company’s culture?” MIT
Sloan Management Review, 54 (3), 28-37.
Showalter, Elaine (2003). Teaching Literature. Blackwell Publishing.
Valencia Álvarez, A. y Valenzuela González, J. (2017). “Innovación disruptiva,
innovación sistemática y procesos de mejora continua… ¿implican
distintas competencias por desarrollar?” En M. S. Ramírez Montoya y J.
R. Valenzuela González (eds.). Innovación educativa. Investigación,
formación, vinculación y visibilidad (pp. 109-134). Síntesis.
‒ ‒
CAPÍTULO 87
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
analiza su ejecución en dos de las asignaturas que han implementado
esta innovación.
‒ ‒
previamente se haya suscrito sin la necesidad de tener que visitar el sitio
web para ver si hay nuevas actualizaciones. Richard Berry (2006: 144)
destacaba que “aquellos precursores de la revolución del podcasting no
tenían ninguna noción de cómo iba a evolucionar, ni usaban el término.
Sin embargo, abrieron la puerta a nuevas oportunidades”.
‒ ‒
red Peer to Peer (P2P). Para Cebrián Herreros (2008: 201), matizando
estas diferencias, afina el término definiéndolo como “un proceso tec-
nológico que facilita la descarga automática de programas o de conte-
nidos fragmentados radiofónicos”.
Al pódcast podríamos definirlo como un fichero de audio digital, que
podría estar en cualquier formato, aunque debemos reconocer que el
más estandarizado por su calidad y peso es el Mp3, que cualquier usua-
rio podría crear para subirlo y distribuirlo posteriormente a Internet,
para que quede accesible a todo el mundo. Este formato permite que
sus seguidores puedan suscribirse y descargar de manera automática y
periódica gracias a la sindicación de archivos de sonido o el Really Sim-
ple Sindication (RSS). La sindicación hace que no sea necesario tener
que ver cada vez si se han subido contenidos nuevos, la descarga se
realiza de manera automática (Blanco, 2012).
‒ ‒
Por último, y con menor éxito, encontramos la interpretación del tér-
mino que hizo Doc Searls, editor del Linux Journal, como Personal
Option Digital sumado con broadcasting. Trató de redefinirlo con este
nuevo acrónimo que ponía especial atención a las posibilidades de elec-
ción personal que ofrece el pódcast sobre la emisión tradicional.
‒ ‒
En septiembre de 2004 se publica el primer agregador de podcasting,
llamado iPodder que se distribuía con licencia de software libre, para
que otras personas pudieran trabajar en su desarrollo. Un agregador es
un “programa que se encarga de recibir de forma automática los nuevos
contenidos de una web sindicada (a la que el receptor está suscrito). El
agregador interpreta los documentos RSS y permite visualizar su con-
tenido” (Sellas, 2009: 182).
En España el primer pódcast llegó en 2004 de la mano del periodista
José Antonio Gelado, que en un primer momento tenía la intención de
seguir realizando su programa de radio y distribuirlo en Internet, pero
que decidió ir más allá y al descubrir este nuevo movimiento de los
pódcasts supo cuál iba a ser el formato de su nuevo producto. De esta
manera se convirtió en el primer podcaster en nuestro país y, a la vez,
una referencia en el ámbito del podcasting de habla hispana (Sellas,
2009).
Para Gelado el podcasting ha generado un importante cambio en la ma-
nera en la que comprendemos cómo se distribuyen los contenidos au-
diovisuales y cómo los usuarios acceden a los medios. Además de esto,
el podcasting ha forzado a los medios de comunicación convencionales
a considerar su actitud frente a Internet y las posibilidades que llevaba
consigo y comprenderlo como un nuevo canal como jamás se había he-
cho hasta el momento, como creador de contenido expresamente con-
cebido para su distribución y consumo a través de la red (Gelado, 2006).
2. OBJETIVOS
‒ ‒
la Universitat Politècnica de València. De este, se derivan los siguientes
objetios específicos:
‒ Caracterizar los hábitos de consumo de audio del alumnado
antes y después de la implantación del proyecto;
‒ ‒
herramientas y a los contenidos, y nadie quede excluido. Ade-
más la utilización de archivos sonoros para la difusión de co-
nocimiento permite el acceso a personas con ciertas minusva-
lías.
3. METODOLOGÍA
Este proyecto surge del deseo del profesorado del grado en Comunica-
ción Audiovisual de la UPV de mejorar su docencia, así como de am-
pliar, mejorar y actualizar las técnicas docentes de sus asignaturas con
el fin de potenciar el aprendizaje activo del alumnado. El contexto edu-
cativo actual, tras el impacto de la COVID-19 y la adaptación exprés a
un contexto virtual, ha puesto de manifiesto la necesidad e importancia
y utilidad de las Tecnologías de la Información y la Comunicación para
el sistema educativo. En este apartado, se presentan los métodos, fases
del proyecto planteadas, así como la muestra de la investigación utili-
zada para dar respuesta a los objetivos planteados.
‒ ‒
Además, el último día de clase, una impartida la asignatura y tras la
implementación de este recurso en el aula, se volvió a pasar de nuevo
un cuestionario. La evaluación de la iniciativa a través de estos dos
cuestionarios permite, junto a la evaluación mediante rúbrica de los pó-
dcast, valorar el potencial del pódcast como herramienta educativa.
En concreto, el primer cuestionario estaba conformado por 14 pregun-
tas, 5 de ellas hacían referencia a cuestiones socioeconómicas y ayuda-
ban a generar un perfil de estudiante (sexo, edad, curso, grado que están
estudiando, uso de pódcast) y el resto eran preguntas en formato escala
de Likert en que el alumnado había de valorar ciertas afirmaciones re-
lacionadas con el uso del pódcast como herramienta de aprendizaje. El
segundo cuestionario era un poco más extenso con 29 preguntas. Las
14 incluidas en el cuestionario inicial más otras preguntas formuladas
con la finalidad de que el alumnado valorase el uso del pódcast en el
aula.
El trabajo de campo de esta investigación se realizó entre septiembre
de 2020 y julio de 2021. Los cuestionarios se crearon en Google forms
y solo se les permitía participar una vez, además de tener un tiempo
limitado para responderlos. Una vez recogidas las respuestas, estas fue-
ron procesadas con Excel para analizar, extraer y visualizar los resulta-
dos. Las variables de análisis se encuentran estrechamente ligadas con
el objetivo principal del presente trabajo, mediante el que se plantea
estudiar cómo se puede implementar el recurso educativo del pódcast
en asignaturas de un marcado carácter teórico en la enseñanza univer-
sitaria. A través de los dos cuestionarios se buscó detectar el grado de
conocimiento que tiene el alumnado sobre el uso de la herramienta, así
como también conocer el nivel de satisfacción del alumnado tras la rea-
lización del curso habiéndose aplicado esta innovación.
El proyecto de investigación en su conjunto contaba de distintas fases
y tareas que debían acompañar al alumnado en la realización de un
único pódcast de entre 5 y 10 minutos. Así, en una primera fase, que se
correspondió con el primer semestre del curso 2019-2010 y en el que
participaron 4 asignaturas (ver Tabla 1), se organizaron los grupos de
trabajo, se distribuyeron los temas a trabajar, se les formó en la creación
de pódcast, se les facilitaron los materiales necesarios para el desarrollo
‒ ‒
de los pódcast y para su evaluación, se trabajó el guion de los pódcast
y, finalmente, se grabaron. A continuación, se describen cada una de
las tareas:
‒ Tarea 1 – Elección y asignación del contenido teórico sobre
el que deberá tratar el pódcast. Se proporcionó al alumnado
una serie de temas y contenidos teóricos de entre las diferentes
asignaturas participantes en esta primera fase con el fin de tra-
tar la mayor parte contenidos teóricos de las asignaturas gene-
rando un repositorio de audioapuntes.
‒ ‒
Las asignaturas Grabación y Edición de Sonido y Proceso de
Realización Radiofónica revisaron este guion.
‒ ‒
GRÁFICO 1. Rúbrica para la evaluación de la tarea de elaboración del pódcast
3.2. MUESTRA
‒ ‒
trabaja desde hace más de 25 años el aprendizaje basado en proyectos.
Esto es que, a lo largo del Grado, el estudiantado se enfrenta cada se-
mestre al reto de un proyecto transversal en el que participan todas las
asignaturas de ese curso y semestre. De manera grupal, el alumnado
debe integrar los conocimientos adquiridos en las asignaturas para sacar
adelante una propuesta realista y profesional.
Las asignaturas que forman parte de este estudio son cinco (Tabla 1) y,
de ellas, solo en la asignatura de segundo curso “Teoría y Ecología de
los Medios Audiovisuales” y en la asignatura de “Comunicación Inter-
activa” de tercer curso se pasaron los cuestionarios. Las otras tres asig-
naturas que participan en el proyecto de innovación no participaron en
esta fase de evaluación e investigación ya que se trata de asignaturas
introductorias en las que se enseñó al alumnado, precisamente, a crear
un pódcast. Es decir, conocimientos necesarios para su posterior apli-
cación en otras asignaturas. Las asignaturas participantes fueron selec-
cionadas ya que forman parte del Proyecto de Innovación y Mejora
Educativa financiado por la Universitat Politècnica de València titu-
lado: Experiencias sonoras para el desarrollo de Competencias Trans-
versales: aprendizaje activo a través del uso del podcast en el aula
(PIME/20-21/222) basado en el uso del pódcast como recurso
‒ ‒
educativo. Los resultados presentados aquí corresponden a la segunda
fase de la investigación, realizada durante el curso 2020-2021.
‒ ‒
4. RESULTADOS
‒ ‒
La siguiente cuestión centra el tema en la vertiente educativa del pód-
cast. En concreto, se pregunta al alumnado si considera que puede ser
útil emplear el podcast como recurso para el aprendizaje. La mayoría
del alumnado lo considera muy útil y bastante útil. Por otra parte, un
porcentaje reducido del alumnado, un 2,1% y un 0,7%, lo consideran
poco útil y nada útil, respectivamente. Pueden comprobarse los resulta-
dos en el gráfico 4.
GRÁFICO 4. Encuesta inicial. Resultados a la pregunta “¿Piensas que puede ser útil utilizar
el pódcast como recurso para el aprendizaje?”
‒ ‒
resulta de gran ayuda para asimilar y asentar conocimientos. Por otro
lado, hay alumnado que dice preferir recursos audiovisuales y otros mé-
todos de enseñanza-aprendizaje como el debate.
A continuación, se pregunta al alumnado si han utilizado el pódcast
como recurso de aprendizaje con anterioridad. Como se observa en el
gráfico 3, la mayoría, un 81,1%, responde que sí y un 12,6% responde
que no, siendo el porcentaje restante correspondiente a No sabe/no con-
testa. En este punto, el alumnado se refiere a la experiencia docente
realizada con un Proyecto de Innovación Educativa anterior realizado
por el mismo grupo de profesorado en el que se introducía el pódcast
como herramienta de enseñanza-aprendizaje en asignaturas de los cur-
sos 1º, 2º y 3º del Grado en Comunicación Audiovisual (Alonso, Terol
y Fernández, 2021).
GRÁFICO 5. Encuesta inicial. Resultados a la pregunta “En alguna de las asignaturas que
has cursado en la carrera ¿se ha utilizado el podcast como recurso de aprendizaje?”
‒ ‒
el alumnado, puesto que le permite adquirir los conocimientos de ma-
nera autónoma. La mayoría del alumnado, un 62%, se muestra a favor
de que sea el alumnado quien se encargue de la elaboración del pódcast
bajo la supervisión del profesorado. El 48% restante considera que es
el profesorado quien debe encargarse de la realización de este recurso
educativo.
A continuación, se plantea la cuestión de si se considera interesante la
realización del pódcast como actividad transversal para poner en prác-
tica conocimientos de otras asignaturas. El 93% se muestran de acuerdo
y el 7% expresan su desacuerdo.
Para finalizar el formulario, se pregunta sobre la eficacia de las activi-
dades en que el alumnado debe ampliar conocimientos de manera autó-
noma. El 42% del alumnado las considera efectivas, mientras que el
58%, no.
‒ ‒
GRÁFICO 6. Encuesta final. Respuestas a la pregunta “¿Eres usuario de pódcast?”
‒ ‒
Respecto a las aplicaciones más empleadas para la escucha de pódcast,
en el gráfico 7 se puede observar que la que aplicación más usada es
Spotify con un 84,7% seguida de YouTube con un 70%. Por detrás que-
dan Ivoox (23,6%), Apple Pódcast (11,1%) y Google Pódcast (1,4%).
Se observa que el 2,8% de las respuestas indican que no emplean apli-
caciones para ello.
‒ ‒
GRÁFICO 8. Encuesta final. Respuestas a la pregunta “¿Piensas que ha sido útil utilizar el
pódcast como recurso para el aprendizaje?”
‒ ‒
a asimilar los conceptos en grupo y a desarrollar las posibilidades que
puede tener un tema” 153.
Seguidamente, se realiza de nuevo la pregunta sobre la idoneidad de
que sea el profesorado o el alumnado guiado por el profesorado quien
asuma la elaboración del pódcast, con respuestas que consideran que el
alumnado ha de ser quien realice el pódcast con la guía y supervisión
del profesorado en un 75%, mientras que el 25% restante consideran
que ha de ser el profesorado.
A continuación, el alumnado ha de responder a varias cuestiones en
formato escala de Likert. Los resultados obtenidos señalan que el alum-
nado responde mayoritariamente en los grados más elevados (4 y 5),
con el 36,1% y el 47,2%, respectivamente, en cuanto a estar de acuerdo
en que el pódcast es un trabajo interesante para el alumnado como ac-
tividad transversal porque pone en práctica conocimientos de otras asig-
naturas. También la consideración de que el desarrollo de pódcast en la
asignatura le ayuda a adquirir más fácilmente los conocimientos teóri-
cos obtiene respuestas mayoritarias en los grados más elevados (4 y 5),
con el 34,7% y el 55,6% respectivamente. De igual manera sucede en
la pregunta sobre que sea el alumnado quien ha de seleccionar los temas
para el pódcast, mostrando estar de acuerdo más del 60% de alumnado.
En cuanto a si las directrices del profesorado han sido claras para la
consecución de la tarea, así lo consideran más del 80% del alumnado,
valorando muy positivamente su revisión y ayuda.
Por otra parte, señalan pocas dificultades para la elaboración del pód-
cast, fundamentalmente en la grabación y en el montaje, considerando
la parte más complicada la elaboración del guion. Asimismo, el alum-
nado coincide en señalar la motivación que ha supuesto la realización
del trabajo, que ha mejorado su competencia en comunicación oral y su
capacidad de trabajo autónomo. También muestran una gran aceptación
con la accesibilidad de los pódcast del resto de grupos para su consulta
y la gran calidad de estos
‒ ‒
Finalmente, refieren un alto porcentaje de satisfacción general con la
experiencia de aprendizaje activo a través del audio.
5. DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES
‒ ‒
teléfono móvil y durante actividades que implican un desplazamiento,
como caminar o ir en transporte público. De hecho, el smartphone ha
desbancado para la escucha de audio al resto de dispositivos, como el
reproductor de mp3, que ningún estudiante declara ya utilizar. Respecto
a las aplicaciones para la escucha de podcast, Spotify continúa como la
más utilizada, seguida por YouTube e Ivoox, siendo esta última donde
se publicaron los pódcast generados por el alumnado, quienes destaca-
ron como positiva la accesibilidad a los documentos sonoros.
A modo de conclusión, la experiencia ha conseguido motivar al alum-
nado y ha contribuido a la consolidación de la materia y contenidos de
las asignaturas, así como al desarrollo de competencias transversales
fomentando el trabajo autónomo del alumnado, las actividades en grupo
y la comunicación oral. Dado el auge del audio en el actual ecosistema
mediático y la aceptación de este tipo de actividades entre el alumnado,
se abre un gran abanico de posibilidades para el desarrollo de activida-
des de aprendizaje activo a través del audio en el aula universitaria.
6. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
7. REFERENCIAS
Alonso-López, N. Terol-Bolinches, R. y Fernández-Planells, A. (2021). El
alumno como prosumidor. El uso del pódcast como recurso educativo
en los estudios delGrado de Comunicación Audiovisual. En Sotelo Gon-
zález, J. Y González García, J. (Coord.). Digital media. El papel de las
redes sociales en el ecosistema comunicativo en tiempos de COVID-19.
McGraw Hill.
‒ ‒
Arense-Gómez, A.; Terol-Bolinches, R. y Pedrero-Esteban, L.M. (2019). La in-
dexación del podcast en agregadores de audio y plataformas de strea-
ming musical: estrategias y criterios de categorización. Textual and Vis-
ual Media, 12.
Berry, R. (2006). Will the iPod kill the radio star? Profiling podcasting as radio.
Convergence: The International Journal of Research into New Media
Technologies, Vol. 12 (2), 143–162.
Blanco, M. (2013) “Análisis del conocimiento de podcasts en España e Hispa-
noamérica. Caracterización de los usuarios y factores que determinan su
consumo como nuevo medio de comunicación” (Inédita). Tesis doctoral
defendida en Universidad Pontificia de Salamanca. https://bit.ly/3pAn-
RXJ
Blanco, M., López Rivero, A. J., Rodero Antón, E., y Corredera, L. E. (2013).
Evolución del conocimiento y consumo de podcasts en España e Iberoa-
mérica. Trípodos, No 33, 53–72.
Cebrián Herreros, M. (2008). La radio en Internet: De la ciberradio a las redes
sociales y la radio móvil. Buenos Aires: La Crujía.
Gallego Pérez, J. I. (2010). Podcasting: Nuevos modelos de distribución para los
contenidos sonoros. Barcelona: UOC.
FECYT (2017). VIII Encuesta de Percepción Social de la Ciencia y la Tecnolo-
gía. http://bit.ly/Fecyt2017
Gelado, J. A. (2006). De los blogs al podcasting. ¿Continuidad o disrupción? En
J. M. Cerezo (Ed.), La blogosfera hispana: pioneros de la cultura digi-
tal. Madrid: Fundación France Telecom España.
Hammersley, B. (2004) “Audible Revolution”, Media Guardian,
https://bit.ly/2FjufAS
Piñeiro-Otero, T. (2012). Los podcast en la educación superior. Hacia un para-
digma de formación intersticial. Revista Iberoamericana De Educación,
58(1), 1-12. https://doi.org/10.35362/rie5811462
Salmon, G., y Edirisngha, P. (2008). Podcasting for learning in universities.
Berkshire: Open University Press.
Sellas, T. (2009). La voz de la Web 2.0. Análisis del contexto, retos y oportuni-
dades del podcasting en el marco de la comunicación sonora (Inédita).
Tesis doctoral defendida en la Universidad Internacional de Catalunya,
Palafrugell. http://www.tdx.cat/handle/10803/9351
Sellas, T. (2011). El podcasting. La (r)evolución sonora. Barcelona: Editorial
UOC.
Terol-Bolinches, R. (2016). Radio 3.0 en el entorno municipal: valores, herra-
mientas y recursos. El caso de la emisora municipal Llosa FM [Tesis
doctoral no publicada]. Universitat Politècnica de València.
https://doi.org/10.4995/Thesis/10251/67930
Wired. (2005) Issue 13:03. https://bit.ly/2WXQqFb
‒ ‒
CAPÍTULO 88
MARINA ARNAL-FERRÁNDIZ
Universidad de Córdoba
CRISTINA PEDROSA-JESÚS
Universidad de Granada
ASTRID CUIDA
Universidad de Valladolid
1. INTRODUCCIÓN
Dado que nos hemos encontrado con que las Tecnologías de la Infor-
mación y Comunicación (TIC) en el contexto de la primera pandemia
global de la historia, están inmersas en todos los ámbitos de nuestra
sociedad. Tenemos que aceptar que el contexto educativo no ha podido
quedarse al margen. Partimos de que es fundamental en la sociedad ac-
tual que el futuro profesorado de Educación Primaria debe también in-
tegrarlas en su praxis.
Este auge de las nuevas estrategias digitales también incluye las posi-
bilidades de acceso a las colecciones de los museos y centros de arte.
Presentándose como una oportunidad de acercamiento a la cultura y al
arte.
El presente estudio se diseña a partir de una experiencia docente de ac-
ción formativa que se desarrolla en el marco del Grado en Educación
Primaria de la Universidad de Córdoba (España).
Una de las características que se ha observado en el perfil del alumnado,
fue el alarmante porcentaje que no presentan inquietudes con el área ni
capacidades creativas. El hecho de que la mayoría se sintiera fuerte-
mente limitados a título personal, consecuencia quizás de factores
‒ ‒
culturales nos pareció alarmante. Nos encontrábamos ante el reto de
despertar interés hacia los procesos creativos desde el área de la expre-
sión plástica. Esto implicaba un gran desafío ante la actitud poco recep-
tiva y autolimitante hacia cualquier proceso de creación. Se observó, en
consecuencia, una importante tendencia a la copia de ideas y dibujos
encontrados en Internet, las cuales a su vez no presentaban ningún cri-
terio estético, lo que también añadía una cierta dificultad ante la posi-
bilidad de crear obras originales y singulares.
Para paliar esta dificultad consideramos interesante la metodología de
investigación performativa en el desarrollo de patrones de pensamiento
creativo. Más específicamente la a/r/tografía como una forma de inves-
tigación basada en la práctica, estrechamente relacionada con las artes
y la educación. Este tipo de metodología incluye investigaciones de
vida (para mayores explicaciones véase Irwin y Cosson, 2004). En
nuestra experiencia introdujimos, como ejercicio preliminar, una tarea
de auto indagación sobre las referencias visuales que a nivel personal
habían marcado sus vidas hasta el momento presente.
A diferencia de otros tipos de investigación educativa que indagan cen-
trando su interés en el conocimiento fundamentado en certezas, el en-
foque de la investigación educativa basada en las artes el objetivo no es
la certeza, sino la ampliación de la propia comprensión lo que se busca
es “mejorar las perspectivas”, (Barone y Eisner, 2006: 96). La a/r/to-
grafía se nutre de una perspectiva que ve a la investigación-acción como
una práctica de vida (Su- mara y Carson, 1997). De este modo, las prác-
ticas de los educadores y las prácticas de los artistas se convierten en
lugares de investigación, y ellos, a su vez, en investigadores.
‒ ‒
como a nivel individual, donde la toma de conciencia de ese punto de
salida nos parece fundamental para iniciar cualquier proceso de apren-
dizaje significativo. De esta manera decidimos animarlos a realizar una
primera tarea casi autobiográfica de indagación.
Partir de esta base, con o sin una reflexión teórica previa, subrayando
la idea de considerar el cambio permanente como un valor, en la intri-
gante búsqueda del hilo conductor que nos ha llevado a ser quienes so-
mos en el momento presente, es un camino para explorar en profundi-
dad y a conciencia. Esta perspectiva como punto de partida, produjo en
el grupo en general una fuerte implicación a título personal desde el
inicio.
A continuación, les planteamos indagar en el potencial educativo de los
museos, las exposiciones, los centros de arte, entendiéndolos como es-
pacios de aprendizaje. Lugares para interpretar, producir, reflexionar;
donde pueden tener cabida proyectos cuyo punto de partida sea algún
problema para resolver, una cuestión que investigar, una pregunta que
responder y se desarrollen a partir de ejes temáticos. Buscando que sus
propuestas sean creadoras de discursos y estén basadas en la experien-
cia de los participantes.
‒ ‒
educativo de los museos y centros de arte, entendidos como espacios
para la problematización y el cuestionamiento, la ruptura y el cambio,
nos inclinamos a pensar que la educación se presenta como una opor-
tunidad para reflexionar y un lugar para crear nuevos discursos que
son tan valorados como los que propone el museo (Roberts, 1997).
Desde esta postura y a partir de las distintas miradas y aportaciones de
los visitantes, entre los que queremos incluir la escuela, es posible dotar
de diferentes sentidos a los contenidos del museo. Padró matiza que los
museos son “lugares de duda, de pregunta, de controversia y democra-
cia cultural cuyo objetivo es formar lecturas desde múltiples frentes, es
decir, como terreno de cuestionamiento” (Padró, 2003, citada en Acaso,
2007: 140)
Pretendemos con esta experiencia ayudar al alumnado a descubrir cómo
las instituciones museísticas son lugares adecuados para el aprendizaje
significativo debido, no sólo a su ambiente rico en estímulos, sino tam-
bién a las posibilidades de interacción que ofrece. Cómo enmarcados
en la educación museística se pueden realizar proyectos de trabajo or-
ganizados gestados en colaboración entre maestros, educadores de mu-
seos y comunidades.
‒ ‒
evolución no paralela. Deleuze lo explica, entre otros ejemplos con la
idea del libro y el mundo: «el libro no es una imagen del mundo (...)
hace rizoma con el mundo, hay una evolución aparalela del libro y del
mundo» en la que el libro produce una desterritorización del mundo y
el mundo desarrolla una reterritorización del libro, que a su vez se des-
territorializa en sí mismo en el mundo. Los últimos son los Principios
de cartografía y de calcamonía por los que un rizoma no responde a
ningún modelo estructural y generativo. Un rizoma construye un mapa,
es una experimentación que actúa sobre lo real, el mapa rizomático no
reproduce, sino que construye. El mapa es abierto, conectable en todas
sus dimensiones, desmontable, alterable y susceptible de ser alterado.
Puede, según Deleuze: «dibujarse en una pared, concebirse como una
obra de arte, construirse como una acción política o como una medita-
ción». (nombrado en Roldan, 2002,13-172)
El trasfondo que tratamos de seguir en la metodología de esta experien-
cia se fundamenta en la naturaleza rizomática de la a/r/tografía que está
constantemente haciendo conexiones e invita a apartarse de la ruta ori-
ginal buscando otros caminos. Salirse de la línea recta entre un punto
A y otro B, priorizando la búsqueda conexiones y detalles contextuales
importantes, tratando de captar las particularidades del proceso. Aun-
que el punto B puede haber sido el destino original, la región del punto
B puede convertirse en el foco. En lugar de moverse del punto A al
punto B, podemos explorar el contexto del espacio inter- medio y, por
lo tanto, pasar a apreciar la complejidad y las particularidades de ese
espacio. (Irwin, 2019, 108-109)
‒ ‒
hemos querido ofrecer diferentes oportunidades de aprendizaje a través
de los recursos que pueden ofrecer los museos (Hein, 1998.
Inspirándonos en algunas estructuras de Aprendizaje Colaborativo Es-
tructurado, sugeridas por Spencer Kagan (2009) como la lluvia de
ideas, la línea de valor (folded value line) entre otras, que ayudan a pro-
mover el intercambio de visiones entre los miembros del grupo a través
de la discusión, la confrontación y la cooperación, intentamos aumentar
la capacidad de pensamiento crítico en los estudiantes considerando
cualquier problema o cuestión que vayan a tratar desde varios ángulos.
El empoderamiento de los estudiantes se ve favorecido con este tipo de
trabajo y es posible trabajar con ellos ciertas habilidades sociales y ca-
pacidades como la empatía y la colaboración. De este modo, mediante
conversaciones dinámicas se ha pretendido que los participantes pro-
pongan, cuestionen y compartan sus concepciones con las de los demás,
proporcionando así una experiencia de aprendizaje más significativa.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
‒ Divulgar el conocimiento cultural y patrimonial
‒ Recuperar el potencial educativo del arte contemporáneo
‒ Fomentar la interdisciplinariedad del proceso de ense-
ñanza/aprendizaje entre áreas del currículo de primaria
‒ Proporcionar recursos de desbloqueo creativo
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
FIGURA 1. Web de la Subdirección General de Promoción de las Bellas Artes
Fuente: https://bit.ly/3gRWciN
FIGURA 2.
Fuente: https://bit.ly/3zBPzbC
‒ ‒
clásica para observar las pinceladas que daba el artista en determinados
puntos del cuadro es de enorme interés para nuestro alumnado, pues le
puede ayudar mucho a observar la técnica o a desarrollar su propio es-
tilo. Las obras pueden explorarse por categorías, ya sean agrupados por
autores, técnicas, épocas y estilos, entre otros. Esto les permite aprender
sobre historia del arte y las tendencias de distintos periodos (Figura 3 y
4). Existe además una categoría de agrupación por gamas cromáticas,
que ha sido muy útil para explicar y comprender las bases de la teoría
del color aplicadas al arte (Figura 5). Se suma a todo ello la opción de
encontrar las exposiciones más cercanas usando la ubicación del Goo-
gle, que proporciona información actualizada. Visitas virtuales por al-
gunos museos y juegos como obras convertidas en puzles o encontrar
al personaje pictórico que más se parece a nosotros, esta última de gran
popularidad.
https://bit.ly/3mR19fg
‒ ‒
FIGURA 4.
https://bit.ly/3mTcYl6
FIGURA 5.
Fuente: https://bit.ly/3zI2skA
‒ ‒
series, libros y cuentos, carátulas de música, anuncios publici-
tarios, fotos, lugares, etc.). Con el material recogido deberían
elaborar dos trabajos colaborativos de tipo collage para después
presentarlos en clase al resto del grupo con su correspondiente
contextualización de las imágenes. En el primer collage debían
pegar todos aquellos referentes compartidos por el grupo, pu-
diendo darles a las imágenes que más salieran un mayor tamaño
y una posición más central dentro del formato. En el segundo
collage, sin embargo, debían poner aquellas imágenes que fue-
ran referentes visuales a nivel prácticamente individual.
‒ ‒
breve investigación sobre los proyectos educativos que ofrecían
los museos a su elección. El trabajo cooperativo se vio facili-
tado por la herramienta Blackboard Collaborate. La herra-
mienta nos permitió la creación de grupos de trabajo pequeños,
con su propio audio, video, pizarra, uso compartido de aplica-
ciones y chat privados, mediante los cuales podían exponer
ideas, compartir opiniones y gestionar el trabajo en equipo. Para
ayudarles a motivar una mirada crítica y significativa sobre las
obras de arte se pasó un cuestionario a modo de guía en la que
se podían apoyar para el comentario de las obras. La intención
era lograr hacer conexiones con sus propias experiencias de
vida, encontrando paralelismos y relaciones entre los objetos de
su cotidianidad y los del museo, sin perder de vista un lenguaje
adaptado a la didáctica del grado de primaria. Parte de las pre-
guntas eran las siguientes y a partir de ellas se abría el debate:
‒ ‒
como de modo virtual en caso de que fuera necesario. El alum-
nado debía realizar el cartel anunciador de la propuesta en el
que habían estado trabajado. Este ejercicio se hizo con el mismo
grupo, pero a lo largo del trascurso de otra asignatura; Educa-
ción Mediática y Aplicaciones Didácticas de la TIC, la cual se
dividía en cuatro bloques, entre los que se encontraba el de ar-
tística. Fue durante este bloque, con un total de 10 horas, du-
rante las cuales, en las horas de prácticas, se realizó este último
ejercicio.
Criterios de
90% - 100% 75% - 90% 60% -75% 50% - 60% 0 - 50%
evaluación.
Usa ideas de Usa ideas de
El producto no
El producto pre- otras personas, otras personas,
Supera las ex- es original, pero
senta cierta origi- pero hay algu- no hay casi evi-
Originalidad pectativas. Las usa nuevas
nalidad, usa nue- nas aportacio- dencias de
10% ideas son creati- ideas perspica-
vas ideas y pers- nes originales en ideas originales
vas e ingeniosas ces en el con-
picacia. el conjunto de la en el conjunto
junto de la obra.
obra. de la obra
Ocasionalmente Ocasionalmente
Sigue el proceso sigue el proceso sigue el proceso Ocasionalmente El proceso de
de trabajo de de trabajo de de trabajo de sigue el proceso trabajo ha sido
forma sistemática forma sistemática forma sistemá- de trabajo de desordenado e
y ordenada, ge- y ordenada, ge- tica y ordenada, forma sistemá- inconsecuente,
Elaboración
nerando un tra- nerando el tra- no completa su tica y ordenada, no completa su
10%
bajo terminado en bajo de arte ter- trabajo de arte no completa su trabajo y ca-
el que se obser- minado en el que terminado en el trabajo y carece rece de deta-
van detalles signi- se observan de- que se observan de detalles signi- lles significati-
ficativos talles significati- detalles signifi- ficativos vos
vos cativos
Siempre trabaja
Frecuentemente Ocasionalmente Depende del Depende del
de manera inde-
trabaja de ma- trabaja de ma- profesor o profe- profesor o pro-
pendiente, res-
nera indepen- nera indepen- sora, pero oca- fesora de ma-
Autonomía pondiendo y co-
diente, respon- diente, respon- sionalmente res- nera perma-
10% mentando solu-
diendo y comen- diendo y comen- ponde y co- nente para pro-
ciones pertinen-
tando soluciones tando soluciones menta solucio- poner e imple-
tes a problemas
pertinentes a pertinentes a nes pertinentes mentar
del trabajo visual
‒ ‒
problemas del problemas del a problemas del soluciones a su
trabajo visual. trabajo visual. trabajo visual. trabajo visual.
Supera las ex-
Los elementos Los elementos
pectativas en la Los elementos
del lenguaje vi- del lenguaje vi- Los elementos
aplicación de los del lenguaje vi-
Aplicación sual han sido sual han sido del lenguaje vi-
elementos del sual han sido
de elemen- aplicados en re- aplicados en re- sual no han
lenguaje visual, aplicados con al-
tos de len- lación con sus lación con sus sido aplicados
mostrando gran guna variedad en
guaje visual propósitos ex- propósitos ex- en relación con
variedad en rela- relación con sus
20% presivos, pero presivos, pero sus propósitos
ción con sus pro- propósitos expre-
son poco varia- carecen de va- expresivos.
pósitos expresi- sivos.
dos. riedad.
vos.
Buen manejo de
Demuestra un
materiales, he-
buen manejo de Buen manejo de
rramientas y pro-
materiales, herra- materiales, herra-
cedimientos; los Su manejo, se-
mientas y proce- mientas y proce- No considera el
selecciona ade- lección y cui-
dimientos; los se- dimientos; los se- propósito ex-
cuadamente sin dado de materia-
lecciona adecua- lecciona adecua- presivo de su
Manejo de proponer nuevas les, herramien-
damente y pro- damente sin pro- trabajo visual,
materiales, maneras de tra- tas y procedi-
pone nuevas ma- poner nuevas su manejo y
herramientas bajarlos mientos es defi-
neras de trabajar- maneras de tra- selección de
y procedi- de acuerdo con ciente, pero es
los bajarlos. De materiales, he-
mientos 20% el propósito ex- concordante con
de acuerdo con el acuerdo al propó- rramientas y
presivo plan- el propósito ex-
propósito expre- sito expresivo procedimientos
teado. Descuida presivo plan-
sivo planteado. planteado. Cuida es deficiente.
el manteni- teado.
Cuida las herra- las herramientas
miento de las
mientas y mate- y materiales.
herramientas y
riales.
materiales.
Demuestra una Es poco rigu-
No demuestra
alta motivación, roso/a en la ela- Demuestra es-
Demuestra moti- motivación ni
preocupación y ri- boración de su casa motivación.
vación, preocu- preocupación
Actitudes gor al elaborar trabajo visual, Es poco rigu-
pación y rigor en con ningún ri-
10% ideas en su tra- aunque muestra roso/a en la ela-
la elaboración de gor en la elabo-
bajo visual su- alguna motiva- boración de su
su trabajo visual. ración de su
perando las ex- ción y preocupa- trabajo visual.
trabajo visual.
pectativas ción.
Muestra claridad
en los objetivos y Muestra comuni-
fases de la tarea; cación fluida y
Asignación equi-
Comunicación constante; Asig-
tativa de roles y
fluida y cons- nación equitativa Relaciones inter-
responsabilida-
tante; Asignación de roles y res- personales res- No demuestra
des; Relaciones
equitativa de ro- ponsabilidades; petuosas y cor- las capacida-
Trabajo en interpersonales
les y responsabili- Relaciones inter- diales; Toma de des necesarias
equipo 20% respetuosas y
dades; Relacio- personales res- decisiones de para el trabajo
cordiales; Toma
nes interpersona- petuosas y cor- manera colectiva colaborativo.
de decisiones de
les respetuosas y diales; Toma de y consensuada
manera colectiva
cordiales; Toma decisiones de
y consensuada
de decisiones de manera colectiva
manera colectiva y consensuada.
y consensuada.
Fuente: elaboración propia
‒ ‒
4. RESULTADOS
La tarea de las referencias visuales fue muy bien recibida por el alum-
nado; para ellos representó un ejercicio de auto indagación que nos les
presentaba apenas dificultad ninguna, lo que facilitó el arranque de la
asignatura y a su vez les permitía conocerse mejor y situarse en una
actitud receptiva. En la figura 7, se muestra el resultado de uno de los
grupos; en él reflejaban aquellas referencias que tenían en común.
Como era de suponer, los resultados generales no guardaban grandes
diferencias entre unos grupos y otros.
Sin embargo, el resultado de los ejercicios de collage, donde debían
colocar aquello que los identificaba como individuos singulares se ca-
racterizaba, precisamente, por su variedad de referentes visuales y cada
uno de ellos contaba una historia personal. (Figura 8).
‒ ‒
FIGURA 7. Exercício grupal de referentes visuales comunes
‒ ‒
FIGURA 8. Ejercicio grupal de referencias visuales individuales
‒ ‒
Colección de Arte Ruso de San Petersburgo en Málaga, por citar unos
cuantos y que son muestra de una predisposición a la búsqueda y pes-
quisa de nuevos caminos, igualando la tendencia, aunque todavía do-
minante, hacia aquellos museos y centros de arte de mayor difusión.
En relación con las obras de arte escogidas sin más criterio previo que
la libre elección, se observa como la balanza se inclina hacia los siglos
XIX y XX, siendo aún muy tímida, pero no por ello menos importante,
la inclusión de obras de arte del siglo XXI (Figura 10).
‒ ‒
FIGURA 10. Gráfico del porcentaje de obras en razón a su etapa histórica.
20
15
10
0
Siglo XXI Siglo XX Siglo XIX Siglo XVIII Siglo XVII Siglo XVI Siglo XV
‒ ‒
FIGURA 11. Ejemplo de uno de los carteles grupales realizados por el alumnado para anun-
ciar su proyecto.
‒ ‒
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
cambiante, choca de algún modo con el hermetismo obsoleto, que aún
acompaña el mercado del arte.
Este hermetismo, heredado de épocas anteriores, imprime todavía un
marcado carácter elitista en el público en general, incluyendo dentro de
este amplio círculo de público a los agentes e instituciones educativas.
Queremos ser optimistas, sin embargo, en cuanto al cambio de direc-
ción de ese paradigma con la incorporación en la educación de las nue-
vas Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), pensamos
que con su uso se favorece como nunca antes, la búsqueda y creación
de nuevos puentes de conexión, nuevas propuestas y lo que es más im-
portante nuevas interrogantes.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
el arte actual como arte que habla del presente del artista y de sus vi-
vencias personales.
Consideramos que se consiguió ofrecer al alumnado, de forma motiva-
dora, una ventana de aproximación al arte y a la cultura, enriqueciendo
su relación con la educación primaria y permitiendo crear interconexio-
nes con las diferentes áreas de conocimiento.
En general se observó una actitud proactiva en un proceso de aprendi-
zaje participativo que fomentaba la reflexión y el placer de contemplar
y descubrir la presencia del arte en nuestra cultura.
Se observó también, que la experiencia permitía el análisis sobre las
obras contempladas de los contenidos propios de la asignatura.
La idea de plantear las sesiones como excursiones por diferentes mu-
seos sirvió de aliciente para combatir la sensación de claustrofobia y
aislamiento que podía sentir el grupo durante el confinamiento. Jugá-
bamos tanto con la intención de simular una salida exterior en el espacio
en diferentes museos de la geografía nacional e internacional; como en
el tiempo, ya que en la elección de las obras se dejaba libertad absoluta,
sin restricciones de estilos, ni épocas artísticas.
Consideramos que esta propuesta puede ser una opción plausible para
el profesorado universitario no sólo para la disciplina de Educación Ar-
tística y Visual, sino que por su potencial carácter interdisciplinar pre-
senta posibilidades de adaptación a otras áreas.
Insistimos, una vez expuestas algunas de las razones por las que el arte
de nuestro tiempo no entra en el currículo de forma efectiva, propone-
mos esta iniciativa para impulsar su inclusión.
Formalmente el desafío del trabajo del alumnado transitaba hacia la
búsqueda de un estilo plástico personal y subjetivo a través de la prác-
tica regular de la A/r/tografía. De la misma forma que la construcción
gramatical de un texto puede hacer reconocible al autor, o el encuadre
y la luz al fotógrafo. La intención es que el alumnado se sienta tentado
a encontrar su propio tono creativo, su marca personal que lo haga re-
conocible como autor combinando expresión artística, educación e in-
vestigación. En nuestro caso, los límites serían las técnicas expresivas
‒ ‒
escogidas y los materiales, insistiéndoles en que lo importante no es
tanto el cómo si no el qué se pretende comunicar, o al menos ponién-
doles sobre aviso de que lo segundo, el qué, no debe quedar, en este
caso, supeditado a lo primero, el cómo, puesto que estamos tratando de
comunicar ideas objetivas para el alumnado de primaria y el procedi-
miento para conseguirlo debe estar abierto a nuevas estrategias docen-
tes. El dominio y cuidado de la técnica escogida, la estrategia educativa
y el método de investigación, aunque deben trabajar al servicio del
mensaje también deben explorar todo su potencial con libertad.
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Falk, J. y Dierking, L. (2000) Learning from Museums: Visitor experiences and
the making of meaning. N. Altamira Press.
Hein, G. E. (1998) Learning in the museum. Londres y Nueva York: Routledge
Irwin, Rita L. y Alex de Cosson, eds. (2004). A/r/tography: Rendering self
through arts-based living inquiry [La a/r/ tografía: la autorrepresentación
mediante la investiga- ción de vida basada en las artes]. Pacific
Educational Press. Vancouver, BC.
Irwin, Rita L. (2013). La práctica de la a/r/tografía, traducido del inglés por Diego
García. Revista Educación y Pedagogía. Facultad Medellín de
Educación, 25, (65), 106-113. Universidad de Antioquia.
Kagan, S. (2009) Kagan Cooperative Learning.Kagan Publishing. San Clemente,
CA.
Padró, C. (2003) La museología crítica como una forma de reflexionar sobre los
museos como formas de conflictos e intercambios. Lorente, J.
P.Almazán.
Roberts, L. (1997) From knowledge to narrative: educators and the changing
museum. Smithsonian Institution Press. Washington.
Roldan, A. G. (2002). Claves A/R/Tográficas. La Pesquisa. Visual Cultures.
Culturas de lo visual en entornos educativos. Consultado el 26 de agosto
de 2021, https://bit.ly/3gAbtEq
Sumara, Dennis J. y Terrance R. Carson, eds., (1997). Action research as living
practice [Investigación-acción como una práctica de vida]. Nueva York.
‒ ‒
CAPÍTULO 89
RESUMEN
‒ ‒
La metodología, de corte cualitativo y acción participación, ha impli-
cado al alumnado en una exploración inicial por las webs de museos,
pidiéndoles que elijan las actividades educativas e instituciones a las
que acudir y las valoren. Se han coordinado actividades con el Museo
del Prado y la Sala Alcalá 31 y se han diseñado talleres y visitas espe-
cíficas en el Centro de Cultura Contemporánea Conde Duque. Parale-
lamente, se han realizado encuentros entre estudiantes de la Facultad de
Educación, Bellas Artes, educadoras de museos y otros agentes. Por
último, se ha introducido el uso de Instagram como herramienta de vi-
sibilización del trabajo de los estudiantes en este sentido.
Como resultado se presenta, de una parte, un prototipo de recurso edu-
cativo web cuya “validez” está siendo testada por los estudiantes en
función de sus necesidades. Y por otra la materialización de las accio-
nes y encuentros en dos contratos de transferencia con la Facultad de
Educación: “Laboratorio Pantono” con El Centro de Cultura Contem-
poránea CondeDuque y, el proyecto “Deslizar” con el Museo Nacional
del Prado, enfocados al desarrollo y consolidación de vínculos
Arte+Educación.para activar el paradigma del museo público como re-
curso formativo y profesional universalmente accesible.
El trabajo de educación en museos tiene una larga trayectoria, pero, la
consolidación y expansión de la actividad pedagógica y el reconoci-
miento de los departamentos y programas educativos en museos es re-
lativamente reciente. La presencia del profesorado en estos programas
también adquiere cada vez mayor relevancia, no sin grandes dificulta-
des. El éxito supone el reconocimiento de la etapa de formación univer-
sitaria del profesorado como clave de futuro y, la colaboración entre
instituciones, como necesaria para vincular a los agentes del Arte+Edu-
cación.
Por otra parte, la formación de profesorado necesita incorporar la reali-
dad del museo como herramienta de autoformación y profesionaliza-
ción que les permita además demandar al contexto del arte y colaborar.
‒ ‒
1. INTRODUCCIÓN
1.1.1. Arte+Educación
‒ ‒
1.1.2. Instituciones culturales, educativas y agentes.
‒ ‒
1.1.4. Educación en museos.
Sobre esta existe una amplia literatura muy ligada a la escuela y al pro-
fesorado, de ahí que haya experimentado una gran evolución y sea di-
fícil de enmarcar sin ligarla a un término más reciente, la Mediación.
En sintonía con García y Cebrián (2020), se piensa como el espacio,
dentro de la institución cultural, que se destina a la interrelación entre,
obra, sala, público y educadoras, con el fin de fomentar el acceso a la
cultura, la comprensión de las muestras y las actividades asociadas a
estas.
Estos haceres de la Educación en museos se inscriben en el marco con-
ceptual del Giro Educativo, Rogoff, (2008) que, a partir de los aprendi-
zajes mutuos, la horizontalidad, y autocuestionamiento de la propia ins-
titución, entiende la colaboración como clave del cambio de paradigma.
Es, este aspecto, lo que hace aún más interesante la Educación en mu-
seos y la Mediación para la formación del profesorado y no solo la ne-
cesaria formación artística más convencional. Como afirma Peters
(2019), al referirse específicamente al término Mediación, el objetivo
es recoger y promover las diferentes perspectivas involucradas –donde
el desconocimiento y/o la falta de conocimiento artístico, es un punto
de partida para generar un diálogo y nuevas experiencias de manera
que, a través de un análisis colectivo, de las obras se generen diversas
formas de expresión y conocimiento (y no una sola interpretación he-
gemónica). Esto, permite:
“poner en tela de juicio las evidencias ideológicas, aquellas interiori-
zadas bajo la forma de habitus que, al imponer un modo de ver, leer y
escuchar, nos vuelven ciegos, iletrados y sordos frente a la novedad
propuesta por el artista “(Péquignot, 2011, p. 92).
‒ ‒
aprendizaje evaluables específicos que pretenden proporcionar y facili-
tar al alumnado conocimientos y claves para el desarrollo de su sentido
estético, el aprendizaje de técnicas para la expresión, el uso y el cono-
cimiento de diferentes representaciones y expresiones artísticas, com-
petencias básicas en la construcción de propuestas visuales y audiovi-
suales, etc.
En este sentido, la LOMCE, en su Decreto 89/2014, plantea la necesi-
dad de preparar a las personas para enfrentarse a un mundo "repleto de
referencias estéticas que influyen en la construcción de nuestra identi-
dad, nuestra socialización y, también, en la elaboración de las ideas que
tenemos sobre el mundo en el que vivimos” (p.66).
Asimismo, la "conciencia y expresiones culturales" (en adelante, CEC)
está reconocida por la LOMCE como una de las siete competencias
clave que se articulan en todas las etapas educativas, sin embargo, no
está explícitamente desarrollada en los contenidos de las asignaturas ni
se emplean los instrumentos apropiados para dicho desarrollo. Por esta
razón, el presente proyecto se plantea, entre sus objetivos, arrojar luz
en torno a posibles lineamientos didácticos y curriculares en torno a los
cuales desarrollar la CEC en la escolaridad obligatoria.
Dicha competencia supone conocer, comprender, saber apreciar y va-
lorar con espíritu crítico además de tener una actitud abierta y respe-
tuosa hacia las manifestaciones culturales y artísticas. Asimismo, im-
plica saber utilizarlas como fuente de enriquecimiento y disfrute perso-
nal y ser consideradas como parte de la riqueza y patrimonio de los
pueblos (LOMCE, 2013). Incorpora también un componente expresivo
referido a la propia capacidad estética y creadora y al dominio de aque-
llas capacidades relacionadas con los diferentes códigos artísticos y cul-
turales, para poder utilizarlas como medio de comunicación y expresión
personal. Implica manifestar interés por la participación en la vida cul-
tural y por contribuir a la conservación del patrimonio cultural y artís-
tico, tanto de la propia comunidad como de otras. Requiere, por tanto,
conocimientos claros y efectivos que permitan el acceso a diferentes
niveles y a distintas escalas en un mundo global que comprende la con-
creción de la cultura en diferentes autores, obras, géneros y estilos,
tanto de las bellas artes (música, pintura, escultura, arquitectura, cine,
‒ ‒
literatura, fotografía, teatro y danza) como de otras manifestaciones ar-
tístico-culturales de la vida cotidiana (vivienda, vestido, gastronomía,
artes aplicadas, folclore, fiestas...). Asimismo, incorpora el conoci-
miento básico de las principales técnicas, recursos y convenciones de
los diferentes lenguajes artísticos y la identificación de las relaciones
existentes entre esas manifestaciones y la sociedad. Ello supone adqui-
rir conciencia de la evolución del pensamiento, las corrientes estéticas,
las modas y gustos, así como la importancia representativa, expresiva y
comunicativa de los factores estéticos en la vida cotidiana. En este sen-
tido el conocimiento de las instituciones culturales y sus programas
educativos aporta, no solo información, sino conocimiento, metodolo-
gías, estrategias y contacto con comunidades de aprendizaje, muy ale-
jadas de los contenidos que en la actualidad se imparten desde las ma-
terias artísticas en los contextos de educación formal y de formación de
profesorado.
Para poder alcanzar dichos objetivos, la enseñanza universitaria, en la
formación de profesorado de la Comunidad de Madrid, contempla en
los currículos de los diferentes Grados de Maestro en Educación Infan-
til y Maestro en Educación Primaria, y Grado en Pedagogía, asignaturas
obligatorias tales como: Fundamentos de la Educación Artística, en los
grados de Maestro de Educación Infantil y Primaria; Creatividad en
Educación Infantil y Didáctica de las Artes Plásticas y Visuales, en el
de Pedagogía.
De igual manera, aquellos licenciados o graduados que deciden dedi-
carse a la docencia en la etapa de la ESO, Bachillerato y/o Formación
Profesional, deben realizar un máster que les cualifique en las cuestio-
nes referidas.
Si tenemos en cuenta que las personas que llegan a las Facultades de
Educación son estudiantes que han hecho todo el itinerario educativo,
deberíamos encontrarnos con personas que ya han desarrollado parte de
esas capacidades y competencias y en cambio no es así.
Desde la experiencia en la enseñanza de estas asignaturas en la forma-
ción de profesorado se ha detectado, no solo una preocupante carencia
de estas, sino, en muchas ocasiones, un rechazo directo al arte y la
‒ ‒
creatividad, fundadas generalmente en el sentimiento de “incapacidad”.
A ello debemos sumarle los imaginarios en relación con las expresiones
artísticas contemporáneas, los procesos de funcionamiento de las artes
plásticas y visuales y, sobre todo, la falta de interés por la institución
cultural, como consecuencia de un imaginario obsoleto y alejado de la
realidad.
Si consideramos que todos estos estudiantes han aprendido de profeso-
res carentes de recursos, con prejuicios y resistencias hacia la educación
artística, es de suponer que seguirán los mismos pasos en el ejercicio
futuro de su profesión. Como consecuencia de lo cual, solo los muy
interesados y motivados, desde posiciones personales, buscarán la for-
mación que los prepare para afrontar los objetivos curriculares recogi-
dos en la legislación educativa (por ejemplo, en el Decreto 89/2014 de
24 de julio, del Consejo de Gobierno, en su Anexo II - Asignaturas es-
pecíficas) y, de esa forma, poder contribuir al desarrollo de la compe-
tencia CEC, anteriormente referida.
Esta misma legislación considera relevante la necesidad de adaptarse al
desarrollo de las tecnologías de la información y la comunicación y al
contexto cultural de las referencias estéticas, pues "han sufrido impor-
tantes transformaciones que han generado el consumo masivo de mú-
sica e imágenes". Se ha llegado a estos cambios como resultado "de las
diferentes manifestaciones artísticas que tienen una presencia constante
en el entorno y en la vida de las personas... De ahí la importancia de
tomar contacto con esas referencias a través de conciertos, representa-
ciones teatrales, museos, exposiciones".
Del análisis de esta situación, se deduce la existencia de un círculo vi-
cioso, en el que la falta de conocimiento funciona como un obstáculo
para el acceso a recursos que favorecen el aprendizaje curricular y la
adquisición de competencias, tal y como se explica al comienzo de esta
introducción. Si además consideramos que el artículo nº27 de la Decla-
ración de los Derechos Humanos contempla el derecho a participar en
la vida cultural, todas las carencias y el desconocimiento aquí expuestos
dificultan el ejercicio de este. El problema se agrava seriamente si te-
nemos en cuenta que la formación en las artes y el uso de los recursos
de las instituciones que la representan contribuye a desarrollar
‒ ‒
habilidades y capacidades muy útiles para favorecer el aprendizaje en
otras materias, es decir, aprendizajes transversales.
Frente a esta situación académica producto, en primer lugar, de la esca-
sez de horas y reconocimiento de la materia, Fernández Cao (2020), se
requieren aportaciones que contribuyan a su reparación o mejora, por
ejemplo: a nivel curricular, en la propia organización académica, en el
diseño de los contenidos de las asignaturas, etc. Pero, en última instan-
cia, es prioritario generar cambios en la formación inicial del profeso-
rado con el fin de que, en un futuro próximo puedan desarrollar su prác-
tica con nuevas perspectivas, e interesarse por su formación, sin perder
de vista las posibilidades que ofrecen las instituciones culturales, espe-
cialmente las públicas.
Pensemos que parte del conflicto reside en la infravaloración de lo pú-
blico y la falta de hábito de acercamiento al arte de una manera conec-
tada con el resto de las realidades.
‒ ‒
Madrid cuenta con instituciones muy significativas cuyos programas
educativos, sin duda, son insuficientes aún, pero que el profesorado no
acaba de explotar. Por su parte, los museos, a pesar del esfuerzo, no
terminan de encontrar las vías que atraigan, más y mejor, a este colec-
tivo.
Martín y Ledesma (2020), el primero como Consejero de Cultura hasta
el año 2019 y la segunda como responsable de públicos de la Consejería
de cultura, al recorrer los cuatro años de asesoría y programación de los
museos, centros y salas, propios de la Comunidad de Madrid: Centro
de Arte Dos de Mayo, Sala Alcalá 31, Sala Canal, Sala de Arte Joven,
entre otros, establecen sus objetivos en: idear e iniciar programas de
actividades que den a conocer los espacios museográficos y expositi-
vos, facilitar el acceso a la cultura, así como establecer y crear redes de
trabajo que permitan abrirse institucionalmente a otros ámbitos y a la
ciudadanía. Un trabajo que, como ellos mismos afirman, conlleva re-
flexionar sobre cuestiones de base como la posición de la institución
con respecto a la mediación con el público, cómo esta legitima sus pro-
gramas, qué nuevos formatos se pueden ensayar desde la institución,
etc.
“No hay que olvidar nunca que el arte es un ejercicio de voluntad co-
municativa que requiere de la participación y la comprensión. Por lo
tanto, es fundamental tener presente en todo momento a los públicos,
siempre enunciados en plural, a los que se dirigen las acciones.” (2020
p.170)
‒ ‒
El Museo Thyssen Bornemisza, desde el 2015, desarrolla programas
específicos para el profesorado, entre ellos, “Musaraña”, con el objetivo
de establecer vínculos entre el museo y centros educativos de España,
Portugal y Latinoamérica, reflexionar y compartir experiencias y nue-
vas metodologías; y “Sala de Máquinas”, taller destinado a estudiantes
de grado y ciclos formativos de Educación Infantil y Primaria, que
busca plantear nuevas metodologías, propuestas de trabajo, y colabora-
ción con futuros docentes.
El Museo Reina Sofía, con su programa “Gira”, expone como objetivo
principal crear vínculos, comunidades y afectos, por no mencionar el
ya instaurado material específico para profesorado descargable en la
red.
Muy recientemente el Museo Nacional del Prado ha desarrollado el pro-
yecto DESLIZAR, un proyecto ambicioso que recoge a la vez artistas,
profesorado, estudiantes, y educadoras, además de actuar en la intersec-
ción institucional escuela, museo, universidad.
Pese a todo, el acercamiento entre profesorado e Institución artística,
desde un lugar que no sean los talleres para colegios y poco más, man-
tiene el conflicto que se mencionaba en el apartado 1.2.2. De una parte,
las instituciones, a veces, no tienen claro conocimiento de las demandas
reales del profesorado y, por otro, el profesorado se muestra resistente
ante propuestas más experimentales e innovadoras que suponen un
claro esfuerzo en su hacer cotidiano.
1.2 ANTECEDENTES
‒ ‒
responsabilidad del artista en la educación. Durante la exposición, se
llevaron a cabo una serie de encuentros que constataron la necesidad de
trabajar en ese sentido.
“Agitar la incertidumbre. No exponemos acampamos”, de Marta García
Cano, abordaba, en formato videoinstalación, la precaria situación de
las artes en la formación del profesorado, con la colaboración de alum-
nos del grado de Educación Primaria de la Facultad de Educación de la
UCM. La experiencia hizo que el alumnado pusiera de manifiesto lo
extraños que resultaban para ellos los espacios del arte y la dificultad
en identificarse con ellos y contemplar la posibilidad de actuar sobre
los mismos con capacidad de afectarlos.
En el 2017, nuevamente dentro del marco del Grupo de Educación de
Matadero Madrid, se abre otro proyecto, “Educación panTono”. El ob-
jetivo era formar una comunidad dentro del espacio artístico de Mata-
dero, que pusiera en valor al profesorado, al tiempo que éste contribuía
al conocimiento y vínculo en el contexto de la creación contemporánea.
El grupo, formado por alumnos del grado de Pedagogía y Educación
Primaria de la Facultad de Educación de la UCM, acompañado por una
docente de la Facultad miembro de GED, permaneció un año en Mata-
dero. Producto de aquel proyecto se firmó un acuerdo de colaboración
entre Matadero Madrid y la Facultad de Educación que permitió a dos
alumnas del grado de Pedagogía llevar a cabo allí sus prácticas (G.
Cano, 2018). Una vez más, la experiencia pareció quedar en un hecho
aislado, poniendo de manifiesto, de nuevo, la dificultad de crear el
vínculo en un espacio que no termina de resultar cómodo.
Debemos sumar a estos proyectos de acción/investigaciones, la infor-
mación recogida entre 2015 y 2018 en las aulas de la universidad, a
través de diferentes herramientas: cuadernos de campo del alumnado,
ejercicios con cuestionarios abiertos sobre experiencias de programas
educativos en instituciones artísticas, etc., que, si bien no están analiza-
das formalmente, si han dejado ver las cuestiones que aquí se tratan,
por ejemplo, el imaginario del museo, que se basa en esta idea: “el mu-
seo es aburrido, sólo hay cuadros, no puedo hablar… ”.
‒ ‒
Con estos antecedentes, en el 2018 se lleva a cabo el primer proyecto
de innovación de una serie continua hasta el momento.
2. OBJETIVOS
2.1. GENERALES
2.2. ESPECÍFICOS.
2.2.1. De investigación.
Detectar y analizar las carencias en la formación artística y su dimen-
sión pedagógica en los estudiantes de la Facultad de Educación.
Recabar y analizar información sobre los recursos educativos de las ins-
tituciones culturales más relevantes en la Comunidad de Madrid, desde
la perspectiva de las necesidades de la formación del profesorado.
Determinar qué aprendizajes identifica el alumnado cuando participa
en dichas instituciones.
2.2.2. De acción.
‒ ‒
Desarrollar, activar y evaluar, propuestas colaborativas de educación
artística y conocimiento de los agentes, utilizando RRSS tipo Instagram
como herramienta.
2.2.3. De aprendizaje.
3. METODOLOGIA
‒ ‒
del arte y las instituciones, modo en que las perciben y qué valoran de
la experiencia.
A través del cuaderno de campo docente, en el que se anotan las revi-
siones de los cuadernos de bitácora de los estudiantes, se extraen valo-
raciones más personales de las diferentes acciones llevadas a cabo du-
rante el curso, estableciendo relaciones causa-efecto complementarias
a los cuestionarios, aclaratorias o de refuerzo. Además de añadir otras
categorías de carácter cualitativo. Todas estas herramientas han ido ali-
mentando la estructura y el contenido del recurso web colaborativo
hasta su diseño final.
Desde la acción-participación. Se organizan encuentros, seminarios ex-
perimentales y performativos de los que se extraen resultados a través
de observación participante, relatoría, cuaderno de campo y grupos de
discusión, lo que ha permitido enriquecer el estudio sobre el estado de
la cuestión desde una perspectiva cualitativa: necesidades, visión de fu-
turo y especialmente el impacto sobre las personas y la institución.
Investigación previa.
‒ ‒
Términos del análisis:
‒ Acceso
‒ Atractivo
‒ Claridad
‒ ¿Qué comunica exactamente?
‒ ¿Es interesante como educadora/docente?
‒ ¿Es interesante como alumna?
‒ Otros aspectos que destacar.
Investigación Acción.
Grados de Pedagogía y Primaria.
‒ Tres visitas a tres instituciones distintas a elegir.
‒ Nº de alumnos participantes, 143.
‒ Trabajos presentados, 429.
Cuestionario individual:
‒ ¿Por qué he elegido esa exposición y no otra?
‒ ¿De qué recursos educativos dispone la sala o el museo que
alberga la exposición?
‒ ¿Son accesibles?
‒ ¿Son útiles para el desempeño de mi futura profesión como
profesor?
‒ ¿Son útiles para mi formación en general? ¿Por qué? ¿para
qué?
‒ Reflexión sobre la tarea de los educadores de museos (en el
caso de hacer un taller, visita guiada, etc.)
‒ ¿Cuál es su metodología?
‒ ¿Qué puedo aprender de ella?
‒ Sobre la exposición. Qué me atrae, qué me genera rechazo,
qué me es indiferente. Qué preguntas me surgen en el reco-
rrido por la misma.
‒ ¿Qué hago para dar respuesta a esas preguntas?
‒ ¿Puedo ver en la exposición un motivo de visita como futura
profesora? ¿Por qué?
‒ ‒
‒ ¿Sería interesante utilizar los recursos educativos del museo
como profesor?
‒ ¿Cuál sería el recurso educativo ideal en un museo para tu for-
mación, por un lado, y con los alumnos en tu futuro profesio-
nal?
3.2.1.3. Encuentros.
‒ ‒
3.2.2. PID 78 “Cartografía crítica de recursos educativos y
pedagógicos en instituciones y entidades culturales del ámbito de las
artes visuales en la Comunidad de Madrid como herramienta para la
formación del profesorado. Desarrollo de estrategias”.
Investigación previa.
Investigación Acción:
‒ ‒
Encuentros y acciones.
Pantonitos
‒ Lugar: Facultad de Educación y Facultad de Bellas Artes
‒ ‒
Propuesta recurso on line.
Investigación previa.
‒ ‒
c. Explora los recursos educativos que ofrece la sala en su web
y en el espacio. Cita los tres más relevantes para ti.
d. Has realizado alguna actividad educativa.
e. Si has realizado una actividad educativa ponle nota.
f. ¿Qué entiendes por recurso educativo en un museo, galería o
sala de exposiciones?
g. Cita el/los 1-3 aprendizaje/s más significativos de tu expe-
riencia.
h. Si crees que la experiencia es recomendable para otras perso-
nas relacionadas con la educación, escribe una breve reco-
mendación.
Encuentros:
3. RESULTADOS Y ANALISIS.
En relación con las primeras valoraciones que se llevan a cabo sobre las
instituciones por los componentes del PID 111, no se aportan datos ya
que las circunstancias de pandemia han acelerado, la oferta y mejora de
la comunicación de recursos on line y presenciales, lo que resta valor a
esta primera información. Se ha revisado, si esta mejora ha tenido
‒ ‒
alguna repercusión respecto al uso que el alumnado hace de los recursos
y, al contrastar con las notas del cuaderno de campo docente basadas
trabajos anteriores de las estudiantes, la situación es la misma.
“Si no se qué existen, no los busco, ni siquiera los veo”. Alumna del
doble grado de Infantil y Primaria.
‒ ‒
Como resultado de los diferentes cuestionarios y los dos primeros en-
cuentros entre agentes, se muestran los gráficos 1, 2, 3 y 4 que se ana-
lizan intercalando los resultados del grupo de discusión.
‒ ‒
Se confirma el estado de la cuestión que da lugar al proyecto: el desco-
nocimiento de la institución cultural y sus recursos educativos. Incluso
cuando en las encuestas intervienen estudiantes del Grado de Bellas Ar-
tes y Máster o, hay una participación masiva del Grado de Educación
Infantil no hay diferencia significativa en los datos. Por esa razón el
gráfico aporta los porcentajes medios.
Surgen contradicciones significativas. No se visitan museos, se desco-
nocen, o no se saben identificar sus recursos, pero la mayoría afirma
que pueden ser espacios de aprendizaje. Una interpretación posible, que
aflora en el grupo de discusión, es pensar que la idea el museo es un
espacio de aprendizaje se aprende teóricamente y está en el imagina-
rio, pero no se traduce en aprendizaje significativo. Las visitas a insti-
tuciones culturales desde la escuela dejan, en general, un recuerdo de
aburrimiento y “no me enteraba de nada”. De ahí la diferencia entre la
teoría y la práctica.
Dada la falta de conocimiento, la motivación por la que deciden visitar
la institución viene dada por la preparación previa en el aula, a través
de las diferentes acciones, la presentación del recurso y el ofrecimiento
de talleres concretos. El grupo de discusión valoró especialmente cuatro
aspectos metodológicos:
‒ Poder ir en grupo y elegir con quien compartir la experiencia
Este aspecto se ve también reflejado en el gráfico 2.
‒ ‒
los diferentes componentes de la visita crea un proceso cons-
tante de reflexión sobre los temas tratados ya que, cada per-
sona cuenta con criterio y opinión propia y esto también en-
riquece la adquisición de nuevos conocimientos. Por otro
lado, me gustó mucho analizar diferentes obras desde otra
perspectiva totalmente diferente a la que estaba acostum-
brada. Esta visita abarca diversos temas como la cultura, gé-
nero, conducta, cuerpo… Pienso que esta visita es un claro
ejemplo de pedagogía crítica. Su propuesta de enseñanza
hace que nos cuestionemos y desafiemos a lo que ya creemos
que sabemos o tenemos instaurado en nuestro interior”.
alumna del Grado de Pedagogía. Visita al Prado.
Una pregunta clave ha sido qué entiendes por recurso, pues de ello de-
pende la autonomía para identificarlos e interpretar los datos. Al ser una
pregunta abierta, las respuestas, en general, no resultan especialmente
claras en el contexto institución cultural, de ahí que el análisis se haya
realizado extrayendo las palabras clave más repetidas.
Los encuentros realizados durante el PID 111, gráficos 3 y 4 ahondan
en las causas y dan sentido al estado de la cuestión. Se identifica la raíz
del problema, la escuela, y un obstáculo principal, la división entre la
educación formal y no formal. A partir de ahí se identifican necesidades
basadas en las carencias y se concretan posibilidades. El Grafico 3,
ahonda en la relación museo-escuela desde una perspectiva de deseo
por un lado y de conciencia de la realidad por otro.
‒ ‒
‒ ‒
Si volvemos a la reflexión expuesta sobre la visita al Museos Nacional del
Prado por una estudiante de Pedagogía, comprobamos que lo deseado (diá-
logo, libertad, participación, etc.), ya existe y es el desconocimiento lo que
mantiene la creencia contraria. La posterior valoración sobre estos encuentros
en los cuadernos de bitácora resalta las siguientes categorías.
‒ Reconocer al otro como igual y accesible. Lo que contribuye
a romper los imaginarios sobre el contexto del arte y su inac-
cesibilidad.
‒ Abrir la mente.
‒ ‒
“Este proyecto ha supuesto para mí una vía de escape donde proyectar
mi nuevo gusto por las actividades artísticas. He descubierto multitud
de autores y obras, y me he divertido haciéndolo. Al principio tenía un
poco de vergüenza por trabajar con gente que estudia arte porque no
sabía si iba a poder estar a la altura, pero al ser todo vía internet me
he centrado en mi trabajo semanal y no he pensado en si juzgarían mi
trabajo o no. Los he ido conociendo como compañeros a través de sus
actividades semanales y eso es lo que más me ha gustado. El encuentro
virtual ha sido un espacio precioso donde he podido ver la cantidad
de gente que hay a la que le preocupan los mismos temas que a mí,
independientemente de que sean de facultades diferentes, todos char-
lando sobre cómo vemos la educación desde múltiples perspectivas.
Esto se ha convertido en un claro ejemplo de cómo la educación es
cuestión de todos y todos tenemos algo que aportar. La sensación ge-
neral que me llevo es de empoderamiento, porque me han transmitido
que se puede avanzar y luchar contra los estereotipos que la educa-
ción y el arte llevan arrastrando mucho tiempo. Y que trabajar ciertos
temas con mis alumnos, como el género o la violencia, es algo total-
mente necesario y que sabiendo medir nuestra tarea, será beneficioso
para ellos, porque tal y como decía Rosa Luxemburgo: “Quienes no se
mueven no notan sus cadenas”. Por todo esto quiero cerrar la reflexión
con una de las frases que subieron a su instagram al comienzo del pro-
yecto y que creo que es uno de los lemas que he aprendido con ellas.”
La continua comunicación con las instituciones ha dado como resultado
una respuesta activa traducida en dos proyectos con los que se ha con-
vivido en la última fase, PID132.
‒ Laboratorio Deslizar con el Museo Nacional del Prado en el
que, salvo error u omisión, es la primera vez que participan
estudiantes de la Facultad de Educación, junto a artistas y me-
diadoras en proyectos desarrollados entre el museo y la es-
cuela.
‒ ‒
Un proyecto experimental que reúne a todos los agentes del
arte-educación en un espacio a caballo entre la Facultad y
CondeDuque.
5. CONCLUSIONES Y DISCUSIÓN.
‒ ‒
que debe ser la educación artística del profesorado fuera del ámbito de
las Bellas Artes. Lo que queda claro es, que la formación de profeso-
rado desde la Universidad debe considerar esa carencia para evitar que
se perpetúe, lo que significa, una acción más intensa y unificada por
desde los departamentos y áreas artísticas y la creación de herramientas
que lo faciliten.
Una vez conocida la institución cultural, la respuesta es positiva. Frente
al miedo se produce empoderamiento; ante la realidad desconocida,
sorpresa satisfactoria. Si algo ha sido valorado es el hecho de salir del
marco académico, lo que debe hacernos reflexionar, también, sobre
cómo estar en las aulas, con todo lo que ello implica de transformación
en las estructuras básicas de la organización del conocimiento.
Al menos en lo que a las artes respecta, la educación formal no puede
ignorar la no formal, la colaboración entre ambas se hace cada vez más
necesaria, en un mundo hiperconectado y contribuye a mejorar la cali-
dad de enseñanza en el propio contexto académico, desencadenando un
proceso de acción/reflexión transformador y una continua revisión del
qué, cómo y para qué se hace desde la institución.
6. PARTICIPANTES 154
REFERENCIAS
Dado el número de participantes, además de los ponentes, estos pueden consultarse en e-prints,
154
‒ ‒
G. Cano, M (2018) Cartografía de una realidad. ¿Cómo pueden trabajar las
instituciones culturales y educativas juntas? pedagogías feministas
políticas de cuidados y educación. Madrid. Ed. Matadero Madrid.
G. Cano, M., & Cebrián, A. (2020). Introducción. Territorio Mediación: un
escenario para remover intenciones en la formación de profesorado.
Arteterapia. Papeles De Arteterapia Y educación artística Para La
inclusión Social, 15, 91-96. https://doi.org/10.5209/arte.70689Peters, T.
(2019). ¿Qué es la mediación artística? Un estado del arte de un debate
en curso. Córima, Revista de Investigación en Gestión Cultural, 4(6).
doi:10.32870/cor.a4n6.7134
López Fdez Cao,M. (2020) El arte esencial en la educación. Tribuna 18 de junio
de 2020.
Martín Jiménez, J., & Ledesma Cid, M. (2020). Anexo: Educación artística,
mediación cultural y formación en los museos, centros de arte y salas
dependientes de la Comunidad de Madrid. Arteterapia. Papeles De
Arteterapia Y educación artística Para La inclusión Social, 15, 169-180.
https://doi.org/10.5209/arte.65868
Sánchez Serdio Martín, A. S. (2016). Arte y educación: la necesidad de un
encuentro incómodo entre esferas que se interrogan. Artnodes: revista de
arte, ciencia y tecnología, (17), 2.
Sánchez de Serdio, A., C. Añó y R. Fendler (2015). Giros y fricciones. La
mediación pedagógica como interrogación del museo a través de la
proliferación relacional. En Fundació Joan Miró (ed.) Lesson 0.
Barcelona: Fundació Joan Miró (45-55) recuperado 10/08/2021
https://app.box.com/s/stmenwyaszx2x6x5jfcqzo11ubol592l
Rogoff, I. (2008). Turning. E-flux journal, 1, E1-E10.
LOMCE. Ministerio de Educación y Formación Profesional. Competencias Clave
http://www.educacionyfp.gob.es/educacion/mc/lomce/el-
curriculo/curriculo-primaria-eso-bachillerato/competencias-
clave/cultura.html
UNESCO (2011). UNESCO ICT Competency Framework for Teachers.
Recuperado de
http://unesdoc.unesco.org/images/0021/002134/213475E.pdf
‒ ‒
CAPÍTULO 90
SONIA CARCELÉN-GARCIA
Universidad Complutense
Mª JOSÉ NARROS-GONZÁLEZ
Universidad Complutense
MARÍA GALMES-CEREZO
Universidad Complutense
MÓNICA DIAZ-BUSTAMANTE-VENTISCA
Universidad Complutense
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
Ante la situación generada por la crisis de la Covid19, se planteó la
necesidad de seguir trabajando en el contexto de las experiencias mu-
seísticas sin la posibilidad de acceder a estos espacios de forma presen-
cial. La mayoría de los museos están incorporando nuevas herramientas
tecnológicas y de comunicación para ampliar la experiencia museística,
lo que abre una oportunidad para que los museos se introduzcan en el
aula universitaria.
‒ ‒
(Buonincontri y Marasco, 2017). Por ejemplo, observar una perfor-
mance en un museo sería 100% participación pasiva, mientras que for-
mar parte de una performance sería 100% activa. La dimensión cone-
xión, comprende dos extremos: la absorción y la inmersión. La absor-
ción implica estar involucrado mentalmente en la experiencia, que es lo
que ocurre generalmente en las experiencias culturales en los museos.
La inmersión hace referencia a un estado físico de involucración en la
experiencia, como cuando se baila o se practica algún deporte. En este
sentido, un museo puede proponer una experiencia interactiva de reali-
dad virtual, siendo un tipo de conexión entre absorción e inmersión.
Pine y Gilmore consideran que las experiencias más enriquecedoras son
las que abarcan aspectos de los cuatro ámbitos, que se situarían en un
punto intermedio entre las dos dimensiones (Pine y Gilmore, 1998).
Todo lo expuesto anteriormente nos lleva a pensar que las nuevas he-
rramientas de comunicación son una oportunidad para mejorar la expe-
riencia museística.
‒ ‒
Estos datos indican que el segmento formado por estudiantes universi-
tarios es un público muy importante para los museos. Por ello, los mu-
seos están adaptando estos espacios a las preferencias de los jóvenes
españoles incluyendo avances y herramientas tecnológicas para hacer-
los más atractivos (D ́Agnano et al., 2015).
En 2019, la aplicación de los avances tecnológicos a las colecciones de
los museos supuso un incremento del 8,9% de las personas que realiza-
ron visitas a través de Internet. Además, en este mismo año, el número
de seguidores en redes sociales de los museos se incrementó notable-
mente en nuestro país. Todos los museos españoles aumentaron en nú-
mero de seguidores en 2019. En concreto el Museo Sorolla, por ejem-
plo, creció en un 29% su base social respecto al año anterior (Subdirec-
ción General de Museos Estatales, 2020).
Además del incremento de la presencia de los distintos museos en los
medios sociales, es interesante señalar el constante crecimiento en los
últimos años en la interacción directa que estos organismos tienen con
sus seguidores en las distintas redes sociales en las que están presentes.
Así, en el año 2019 se incrementó a nivel general un 18% la interacción,
destacando la red social Instagram cuyo porcentaje ascendió un 66%
(Nuestros Museos en un Vistazo, 2019).
Lamentablemente la situación creada por la crisis del Covid19 ha pro-
vocado que los principales museos españoles perdieran dos tercios de
sus visitantes en 2020. Concretamente el Museo del Prado y el Museo
Reina Sofía, registraron una bajada de visitantes del 73,5% y el 71,8%
respectivamente (ABC, 2021). Por ello, los museos, como muchos otros
sectores, han hecho un gran esfuerzo por introducir iniciativas tecnoló-
gicas con el objetivo de acercar los museos a la población de forma no
presencial. De hecho, gracias a estas iniciativas digitales llevadas a
cabo por los museos a través de las redes sociales e Internet se ha lo-
grado aumentar las visitas online a estos espacios e interactuar con los
visitantes.
A consecuencia de estos esfuerzos y a una estrategia digital bien plan-
teada, muchos museos han conseguido durante la pandemia ofrecer ex-
periencias museísticas significativas en las que el público ha podido
‒ ‒
seguir disfrutando de las colecciones a pesar de las circunstancias. In-
cluso se ha incrementado notablemente la interacción entre el museo y
sus visitantes. Por ejemplo, en el 2020 el Museo del Prado tuvo más de
7 millones de usuarios web y más de 3 millones de seguidores en Twit-
ter, Facebook, YouTube y Tik Tok. Por su parte, los “Microsites inter-
activos” del Reina Sofía (como “Repensar Guernica” o “Gigapixel”),
las cápsulas de audio albergadas en la web y los casi 300 vídeos de
exposiciones o muestras online organizadas durante el confinamiento,
han duplicado en número de las interacciones online con el museo res-
pecto al año anterior (ABC, 2021).
‒ ‒
(2020) proponen que las herramientas RA y RV en combinación con
los smartphones son una oportunidad para mejorar las experiencias cul-
turales en los museos. (Little et al., 2020). La misión educadora de los
museos también necesita de la integración de la tecnología para forta-
lecer el valor público de los museos e inspirar y hacer más atractivo el
aprendizaje (Riches Proyect, 2015). Los nuevos recursos digitales son
una oportunidad para mejorar las experiencias de los estudiantes per-
mitiéndoles personalizar, indagar y compartir los materiales del museo
o crear sus propios contenidos. Los estudiantes se convierten en co-
creadores, y coproductores de contenidos digitales, iniciando el cambio
hacia una cultura más participativa (Espacio Visual Europa, 2020).
‒ ‒
adquirir una combinación de conocimientos técnicos, creatividad y pen-
samiento complejo. Concluye que la principal ventaja de la tecnología
es la posibilidad de combinar la reflexión y la imaginación para realizar
tareas o producir objetos que no serían posibles sin dicha tecnología.
Por otra parte, el nuevo ecosistema digital permite que los alumnos ya
nos sean meros consumidores pasivos de contenidos, sino que también
deben producir contenidos. Así, a medida que los avances tecnológicos
van siendo más accesibles y potentes, se irán incorporando a los mode-
los de alfabetización en el contexto universitario, y su uso será más fre-
cuente (Alexander, Adams-Becker y Cummins, 2016).
2. OBJETIVOS
‒ ‒
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
‒ Su comportamiento futuro de visita a distintos tipos de mu-
seos, medido a través de variables nominales dicotómicas
(1=No; 2=Sí)
El tratamiento y análisis de los datos recogidos se ha realizado utili-
zando el programa IBM SPSS versión 25.
4. RESULTADOS
Mujeres Hombres
‒ ‒
La mayoría de los estudiantes se encuentran cursando una titulación
perteneciente a la rama de Ciencias Sociales (47.1%), en menor canti-
dad se hallan los estudiantes de Ciencias de la Salud (18,3%) y los de
Ingenierías y Arquitectura (17,7%), a continuación, se sitúa la rama de
Arte y Humanidades (10,4%), y los más minoritarios son los estudian-
tes de Ciencias Experimentales con un 6,5% del total (Tabla 1).
Sí 257 69,9
‒ ‒
4.2. VALORACIÓN DE LAS NUEVAS HERRAMIENTAS DE COMUNICACIÓN
Media
4,50
4,00
4,00
3,59
3,50 3,86
3,50
3,00
2,50 2,83
2,00
IMÁGENES 360º REALIDAD VISITAS TIK TOK APPS
AUMENTADA TEATRALIZADAS AUDIOGUÍAS
‒ ‒
Al ser la “Realidad Aumentada” la herramienta mejora valorada, se ha
profundizado en su estudio para valorar los motivos de preferencia
(Gráfico 3). Los estudiantes han considerado, con diferencias significa-
tivas (prueba de Friedman, p valor = 0,000) en una escala de 1 a 5 del
grado de desacuerdo/acuerdo, que las características de esta herra-
mienta por orden de importancia son: “Es una herramienta útil para am-
pliar mi cultura” con una media de 4,08 puntos, “Me gusta la posibili-
dad de interactuar con ella” (4,06 puntos), “Me resulta una actividad
muy atractiva” (4,05 ptos.), “Estaría satisfecho con la experiencia que
me proporcionaría su uso” (3,97 ptos.),”Despierta mi interés por el arte
y la cultura” (3,9 ptos.) y “Me incita a visitar los lugares que promo-
ciona” (3,87 ptos.) y con puntuación por debajo de la media teórica
“Esta herramienta no es para mí, no la usaría”, acorde con el sentido de
este rango.
Media
Me resulta una actividad
muy atractiva
4,05
Despierta mi interés por el Es una herramienta útil
arte y la cultura para ampliar mi cultura
3,90 4,08
‒ ‒
analizadas por la población objeto de estudio por cada uno de los ítems
propuestos en el cuestionario. Se observa, como la opción de “Esta he-
rramienta no es para mi, no la usaría” es, con diferencia, la menos ele-
gida por parte de los estudiantes; siendo la herramienta Tik-tok la que
más personas consideran que no es para ellos, y la realidad aumentada
la que menos estudiantes declaran que no usarían.
4,50
4,00
3,50
3,00
2,50
2,00
Estaría
satisfech Me gusta Me incita
Me Es una Esta
o con la la a visitar Despierta
resulta herramie herramie
experienc posibilida los mi interés
una nta útil nta no es
ia que d de lugares por el
actividad para para mí,
me interactu que arte y la
muy ampliar no la
proporcio ar al promocio cultura
atractiva mi cultura usaría
naría su usarla na
uso
Imagen 360º 3,95 3,96 3,78 3,98 3,97 2,31 3,66
Visitas teatralizadas 3,64 3,84 3,70 3,61 3,74 2,65 3,68
Realidad aumentada 4,05 4,08 3,97 4,06 3,87 2,25 3,90
Tik Tok 3,39 3,31 3,27 3,35 3,41 2,89 3,42
App Audioguía 3,69 3,87 3,74 3,67 3,71 2,57 3,69
‒ ‒
muestra empleado, a través del método de agrupación de Ward basado
en el análisis de la varianza que permite agrupar individuos en tipos o
grupos, internamente homogéneos y entre sí heterogéneos.
‒ ‒
una valoración de 5 puntos (en una escala de 1 a 5) a las herramientas
de: imágenes 360° (51,9 %), realidad aumentada (49,4%), visitas tea-
tralizadas (48,1%), TikTok (28,4%) y Apps de audio guías (50,6%). Lo
mismo sucede en cuanto a su grado de satisfacción con las herramientas
tradicionales a la hora de planificar y realizar visitas a museos, con las
mayores puntuaciones de todos los segmentos (en una escala de 1 a 5
puntos), y con calificación de 5 puntos sobre la misma escala: audio
guía (52,6%), visita guiada (55,9%), folletos (37,3%), guías de viajes
(37,5%), y con 4 puntos: guías de viaje (42,2%) y página web (45,7%).
Para ellos, cualquier motivo es válido para visitar un museo, destacando
las siguientes opciones: por aprender algo nuevo (96,3%), por conocer
nuestra historia (96,3%), por enriquecerme culturalmente (92,6%) y por
apreciar obras de arte (77,8%), y también es el subgrupo que realiza
mayor número de visitas por motivos profesionales (42%) y trabajos de
clase (38,3%). Declaran, en su gran mayoría, que visitarán los museos
en un futuro próximo y no presentan una preferencia específica por nin-
guno de ellos siendo el colectivo con mayor interés en todos los tipos
de museos en general.
‒ ‒
Destaca su interés en las nuevas herramientas de comunicación utiliza-
das en los museos, considerando muy atractivas las herramientas más
modernas y tecnológicas, aunque algo por debajo del primer grupo,
pero por encima del porcentaje medio del conjunto de la muestra cali-
fican con puntuaciones de 4 puntos a las herramientas: imágenes 360°
(32,6%) y realidad aumentada (42%). De las herramientas tradicionales
se muestran más satisfechos que los demás con las audioguías (34,4%),
con puntuación también de 4 puntos y por encima del porcentaje medio,
que asciende a un 29,5%. Sus principales motivaciones para visitar un
museo son muy variadas, igual que el segmento anterior, aunque otor-
gan una valoración algo inferior con calificaciones de 4 puntos a casi
todas las opciones de respuesta que se les han presentado. Sobresalen
las siguientes motivaciones: por curiosidad (47,10%), aprender algo
nuevo (52,9%), conocer nuestra historia (53,6%), apreciar obras de arte
(45,7%), enriquecerme culturalmente (46,4) y por hacer algo distinto
(37,7%). A su vez, manifiestan que es bastante probable que visiten un
museo en un futuro próximo y los tipos de museos que más les atraen
son los tradicionales y los que más les distinguen son los museos rela-
cionados sobre todo con sus estudios como museos de CC. Naturales
(84,8%), museo de sitio (74,6%) y temáticos (73,9%)
Segmento 3: No visitantes
‒ ‒
18% la valora con un 4). Así mismo, la mayoría declara una baja pro-
babilidad de visitar un museo en el próximo año, el 72% le otorga una
puntuación de 3 puntos o inferior. Aquellos que sí declaran que lo ha-
rán, se inclinan por las visitas a los museos de bellas artes (58,6%), arte
contemporáneo (52,3%) y museos temáticos (54,1%) principalmente.
‒ ‒
TABLA 4. Descripción de la tipología de segmentos obtenida en función de las caracterís-
ticas sociodemográficas y académicas de la muestra y su comportamiento de las visitas a
los museos
SEGMENTOS
1 2 3 4 Total
% verti- % verti- % verti- % verti- % verti-
cal cal cal cal cal
EDAD
Más de 25 años 23,50% 22,50% 21,60% 26,30% 22,80%
De 18 a 25 años 76,50% 77,50% 78,40% 73,70% 77,20%
ESTUDIO UNIVERSITARIO
Arte y Humanidades 21,00% 10,90% 10,80% 7,90% 12,80%
Ciencias de la Salud 19,80% 26,10% 22,50% 15,80% 22,60%
Ciencias experimentales 1,20% 5,10% 5,40% 0,00% 3,80%
Ciencias Sociales y Jurídi-
42,00% 39,10% 47,70% 55,30% 44,00%
cas
Ingenierías y Arquitectura 16,00% 18,80% 13,50% 21,10% 16,80%
OCUPACIÓN
Solo estudio 53,10% 59,40% 60,40% 55,30% 57,90%
Estudio y trabajo 46,90% 40,60% 39,60% 44,70% 42,10%
VISITA A MUSEOS EN LOS
ÚLTIMOS DOS AÑOS
No 0,00% 0,00% 98,20% 0,00% 29,60%
Sí 100,00% 100,00% 1,80% 100,00% 70,40%
Nº MUSEOS VISITADOS
1 13,60% 10,10% 0,00% 39,50% 15,60%
2ó3 42,00% 52,90% 0,00% 50,00% 49,00%
4ó5 18,50% 19,60% 0,00% 5,30% 17,10%
Más de 5 25,90% 17,40% 0,00% 5,30% 18,30%
UBICACIÓN DEL MUSEOS
En el extranjero 8,60% 12,30% 0,00% 10,50% 10,90%
En España 46,90% 44,20% 0,00% 76,30% 49,80%
Indistintamente 44,40% 43,50% 0,00% 13,20% 39,30%
GRUPO DE VISITA
Solo 39,50% 33,30% 0,00% 15,80% 22,80%
Con pareja 93,80% 84,80% 0,00% 73,70% 60,10%
Con hijos 37,00% 22,50% 0,00% 21,10% 18,80%
Con mis padres 70,40% 66,70% 0,00% 50,00% 45,70%
Con amigos 95,10% 90,60% 0,00% 94,70% 64,70%
Con un grupo organizado 63,00% 45,70% 0,00% 44,70% 35,60%
Fuente: elaboración propia
‒ ‒
TABLA 5. Descripción de la tipología de segmentos obtenida en función del atractivo atri-
buido a las herramientas de comunicación analizadas
SEGMENTOS
1 2 3 4 Total
% verti- % verti- % verti- % verti- % verti-
cal cal cal cal cal
Imágenes 360
1.0 (nada atractiva) 0,00% 2,90% 4,50% 2,60% 2,70%
2.0 8,60% 5,80% 8,10% 7,90% 7,30%
3.0 17,30% 24,60% 30,60% 21,10% 24,50%
4.0 22,20% 34,10% 32,40% 63,20% 34,00%
5.0 (muy atractiva) 51,90% 32,60% 24,30% 5,30% 31,50%
Realidad Aumentada
1.0 (nada atractiva) 0,00% 4,30% 4,50% 2,60% 3,30%
2.0 3,70% 3,60% 8,10% 10,50% 5,70%
3.0 9,90% 15,90% 18,90% 18,40% 15,80%
4.0 37,00% 34,10% 40,50% 44,70% 37,80%
5.0 (muy atractiva) 49,40% 42,00% 27,90% 23,70% 37,50%
Visitas teatralizadas
1.0 (nada atractiva) 4,90% 7,20% 7,20% 7,90% 6,80%
2.0 3,70% 15,20% 28,80% 23,70% 17,70%
3.0 17,30% 23,20% 26,10% 26,30% 23,10%
4.0 25,90% 27,50% 18,90% 26,30% 24,50%
5.0 (muy atractiva) 48,10% 26,80% 18,90% 15,80% 28,00%
TikTok
1.0 (nada atractiva) 14,80% 23,90% 27,00% 28,90% 23,40%
2.0 21,00% 20,30% 14,40% 15,80% 18,20%
3.0 13,60% 29,00% 29,70% 34,20% 26,40%
4.0 22,20% 15,90% 18,00% 13,20% 17,70%
5.0 (muy atractiva) 28,40% 10,90% 10,80% 7,90% 14,40%
Apps audioguías
1.0 (nada atractiva) 6,20% 5,80% 5,40% 7,90% 6,00%
2.0 8,60% 9,40% 15,30% 23,70% 12,50%
3.0 12,30% 25,40% 35,10% 21,10% 25,00%
4.0 22,20% 38,40% 25,20% 36,80% 30,70%
5.0 (muy atractiva) 50,60% 21,00% 18,90% 10,50% 25,80%
Fuente: elaboración propia
‒ ‒
TABLA 6. Descripción de la tipología de segmentos obtenida en función de la satisfacción
de las herramientas de comunicación tradicionales
SEGMENTOS
1 2 3 4 Total
% verti- % verti-
% vertical % vertical % vertical
cal cal
Audioguía
1 (nada satisfecho) 0,00% 6,50% 0,00% 0,00% 3,40%
2 3,50% 9,70% 0,00% 11,50% 8,00%
3 22,80% 22,60% 0,00% 34,60% 24,40%
4 21,10% 34,40% 0,00% 30,80% 29,50%
5 (muy satisfecho) 52,60% 26,90% 0,00% 23,10% 34,70%
Visita guiada
1 (nada satisfecho) 2,90% 2,80% 0,00% 0,00% 2,50%
2 0,00% 2,80% 0,00% 8,00% 2,50%
3 4,40% 13,80% 0,00% 20,00% 11,40%
4 36,80% 33,90% 0,00% 36,00% 35,10%
5 (muy satisfecho) 55,90% 46,80% 0,00% 36,00% 48,50%
Folletos
1 (nada satisfecho) 4,00% 3,20% 0,00% 6,50% 3,90%
2 5,30% 16,90% 0,00% 16,10% 13,00%
3 18,70% 25,00% 0,00% 35,50% 24,30%
4 37,30% 33,10% 0,00% 29,00% 33,90%
5 (muy satisfecho) 34,70% 21,80% 0,00% 12,90% 24,80%
Guías de viaje
1 (nada satisfecho) 3,10% 2,10% 0,00% 8,00% 3,20%
2 6,30% 16,50% 0,00% 28,00% 14,50%
3 10,90% 23,70% 0,00% 28,00% 19,90%
4 42,20% 30,90% 0,00% 28,00% 34,40%
5 (muy satisfecho) 37,50% 26,80% 0,00% 8,00% 28,00%
Página web
1 (nada satisfecho) 1,40% 2,50% 0,00% 0,00% 1,80%
2 7,10% 13,60% 0,00% 13,30% 11,50%
3 12,90% 22,90% 0,00% 40,00% 22,00%
4 32,90% 31,40% 0,00% 40,00% 33,00%
5 (muy satisfecho) 45,70% 29,70% 0,00% 6,70% 31,70%
Fuente: elaboración propia
‒ ‒
TABLA 7. Descripción de la tipología de segmentos obtenida en función de las motivacio-
nes de visita a los museos
SEGMENTOS
1 2 3 4 Total
% verti- % verti- % verti- % verti- % verti-
cal cal cal cal cal
Por curiosidad
1.0 (nada importante) 1,20% 0,70% 0,00% 2,60% 1,20%
2.0 1,20% 1,40% 0,00% 5,30% 1,90%
3.0 2,50% 19,60% 0,00% 52,60% 19,10%
4.0 17,30% 47,10% 0,00% 26,30% 34,60%
5.0 (muy importante) 77,80% 31,20% 0,00% 13,20% 43,20%
Por aprender algo nuevo
1.0 (nada importante) 0,00% 0,00% 0,00% 0,00% 0,00%
2.0 0,00% 2,90% 0,00% 7,90% 2,70%
3.0 0,00% 10,90% 0,00% 39,50% 11,70%
4.0 3,70% 52,90% 0,00% 21,10% 32,70%
5.0 (muy importante) 96,30% 33,30% 0,00% 31,60% 52,90%
Por conocer nuestra his-
toria
1.0 (nada importante) 0,00% 2,90% 0,00% 2,60% 1,90%
2.0 0,00% 5,10% 0,00% 10,50% 4,30%
3.0 0,00% 16,70% 0,00% 52,60% 16,70%
4.0 3,70% 53,60% 0,00% 13,20% 31,90%
5.0 (muy importante) 96,30% 21,70% 0,00% 21,10% 45,10%
Por hacer algo distinto
1.0 (nada importante) 4,90% 3,60% 0,00% 5,30% 4,30%
2.0 1,20% 9,40% 0,00% 23,70% 8,90%
3.0 8,60% 29,00% 0,00% 44,70% 24,90%
4.0 23,50% 37,70% 0,00% 26,30% 31,50%
5.0 (muy importante) 61,70% 20,30% 0,00% 0,00% 30,40%
Por acompañar a un fami-
liar
1.0 (nada importante) 23,50% 17,40% 0,00% 18,40% 19,50%
2.0 8,60% 31,20% 0,00% 21,10% 22,60%
3.0 28,40% 28,30% 0,00% 31,60% 28,80%
4.0 18,50% 19,60% 0,00% 28,90% 20,60%
5.0 (muy importante) 21,00% 3,60% 0,00% 0,00% 8,60%
Por realizar un trabajo de
clase
1.0 (nada importante) 24,70% 23,20% 0,00% 10,50% 21,80%
2.0 3,70% 15,90% 0,00% 21,10% 12,80%
3.0 22,20% 31,20% 0,00% 26,30% 27,60%
4.0 11,10% 23,20% 0,00% 26,30% 19,80%
‒ ‒
5.0 (muy importante) 38,30% 6,50% 0,00% 15,80% 17,90%
Por trabajo o motivo pro-
fesional
1.0 (nada importante) 23,50% 27,50% 0,00% 13,20% 24,10%
2.0 8,60% 18,10% 0,00% 26,30% 16,30%
3.0 19,80% 25,40% 0,00% 18,40% 22,60%
4.0 6,20% 21,70% 0,00% 31,60% 18,30%
5.0 (muy importante) 42,00% 7,20% 0,00% 10,50% 18,70%
Por apreciar obras de
arte
1.0 (nada importante) 1,20% 2,90% 0,00% 2,60% 2,30%
2.0 1,20% 2,90% 0,00% 13,20% 3,90%
3.0 3,70% 21,00% 0,00% 55,30% 20,60%
4.0 16,00% 45,70% 0,00% 23,70% 33,10%
5.0 (muy importante) 77,80% 27,50% 0,00% 5,30% 40,10%
Por enriquecerme cultu-
ralmente
1.0 (nada importante) 0,00% 0,00% 0,00% 2,60% 0,40%
2.0 0,00% 1,40% 0,00% 7,90% 1,90%
3.0 3,70% 5,80% 0,00% 52,60% 12,10%
4.0 3,70% 46,40% 0,00% 18,40% 28,80%
5.0 (muy importante) 92,60% 46,40% 0,00% 18,40% 56,80%
Por disfrutar de un am-
biente especial
1.0 (nada importante) 1,20% 5,10% 0,00% 7,90% 4,30%
2.0 2,50% 8,00% 0,00% 26,30% 8,90%
3.0 13,60% 18,10% 0,00% 50,00% 21,40%
4.0 9,90% 42,00% 0,00% 10,50% 27,20%
5.0 (muy importante) 72,80% 26,80% 0,00% 5,30% 38,10%
Por recordar cosas ya sa-
bidas
1.0 (nada importante) 7,40% 11,60% 0,00% 26,30% 12,50%
2.0 6,20% 15,20% 0,00% 15,80% 12,50%
3.0 16,00% 23,90% 0,00% 42,10% 24,10%
4.0 16,00% 39,10% 0,00% 15,80% 28,40%
5.0 (muy importante) 54,30% 10,10% 0,00% 0,00% 22,60%
Por casualidad
1.0 (nada importante) 33,30% 34,10% 0,00% 10,50% 30,40%
2.0 12,30% 21,70% 0,00% 26,30% 19,50%
3.0 25,90% 22,50% 0,00% 42,10% 26,50%
4.0 6,20% 17,40% 0,00% 15,80% 13,60%
5.0 (muy importante) 22,20% 4,30% 0,00% 5,30% 10,10%
Fuente: elaboración propia
‒ ‒
TABLA 8. Descripción de la tipología de segmentos obtenida en función de la probabilidad
de visita a un museo en el futuro
SEGMENTOS
1 2 3 4 Total
% verti- % verti- % verti- % verti- % verti-
cal cal cal cal cal
PROBABILIDAD DE VISITA
A MUSEO EN EL FUTURO
1 (nada probable) 0,00% 0,00% 22,50% 15,80% 8,40%
2 4,90% 2,90% 24,30% 21,10% 11,70%
3 14,80% 15,20% 25,20% 42,10% 20,90%
4 21,00% 37,70% 18,00% 15,80% 25,80%
5 (muy probable) 59,30% 44,20% 9,90% 5,30% 33,20%
VISITARÍA MUSEO DE BE-
LLAS ARTES
No 2,50% 11,60% 41,40% 42,10% 21,70%
Sí 97,50% 88,40% 58,60% 57,90% 78,30%
VISITARÍA MUSEO DE
ARTE CONTEMPORÁNEO
No 18,50% 23,20% 47,70% 47,40% 32,10%
Sí 81,50% 76,80% 52,30% 52,60% 67,90%
VISITARÍA MUSEO/GALE-
RÍA DE ARTE DIGÍTAL
No 28,40% 32,60% 53,20% 65,80% 41,30%
Sí 71,60% 67,40% 46,80% 34,20% 58,70%
VISITARÍA MUSEO AR-
QUEOLÓGICO, ETNOGRÁ-
FICO O ANTROPOLÓGICO
No 14,80% 15,90% 55,90% 73,70% 33,70%
Sí 85,20% 84,10% 44,10% 26,30% 66,30%
VISITARÍA MUSEO DE CC
NATURALES O HISTORIA
NATURAL
No 18,50% 15,20% 51,40% 71,10% 32,60%
Sí 81,50% 84,80% 48,60% 28,90% 67,40%
VISITARÍA MUSEO DE SI-
TIO
No 12,30% 25,40% 60,40% 44,70% 35,10%
Sí 87,70% 74,60% 39,60% 55,30% 64,90%
VISITARÍA MUSEO TEMÁ-
TICO
No 13,60% 26,10% 45,90% 52,60% 32,10%
Sí 86,40% 73,90% 54,10% 47,40% 67,90%
Fuente: elaboración propia
‒ ‒
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
tecnológicas, muy por encima de las tradicionales. El segmento “no vi-
sitante” valora muy por encima del resto de los segmentos la herra-
mienta Tik-Tok, ya que posiblemente, está especialmente interesados
en el uso de las redes sociales en general y, en concreto de la red social
Tik-Tok. El segmento “visitantes esporádicos”, a pesar de su poca fre-
cuencia de visita a los museos, también consideran muy positivamente
las herramientas tecnológicas para mejorar las experiencias museísti-
cas.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
que integrar estas herramientas en la experiencia museística para gene-
rar espacios de aprendizaje no formal, puede servir para fomentar la
reflexión y la imaginación y para elaborar tareas que no serían posibles
sin dicha tecnología. Incluso, se deberían ir integrando en el futuro otras
nuevas herramientas digitales a medida que vayan siendo más accesi-
bles (Alexander, Adams-Becker y Cummins, 2016).
La identificación de los segmentos nos ha permitido conocer qué tipo
de herramientas son las preferidas por los diferentes tipos de estudian-
tes. Esta información es muy valiosa para poder diseñar experiencias
de aprendizaje personalizadas según la rama de estudios a la que perte-
nece el estudiante, o según su relación previa con los museos. Por ejem-
plo, los estudiantes que nunca visitan museos, sin embargo, sí estarán
motivados a interactuar en Tik-Tok y compartir contenidos museísti-
cos; mientras que los estudiantes que los visitan con frecuencia estarán
más interesados en utilizar herramientas que les amplíen la información
del objeto cultural (Imagen 360º o App audio-guia); o los estudiantes
más tecnológicos preferirán experimentar con los contenidos museísti-
cos con herramientas sensoriales (RV o 360º). Todo esto nos lleva a
concluir que cualquier herramienta añadida a la visita presencial tiene
valor siempre que se integre adecuadamente en la experiencia museís-
tica.
Además, los resultados obtenidos sobre la preferencia de los estudiantes
sobre la Realidad Virtual, nos indica que este público está especial-
mente motivado hacia la búsqueda de una experiencia con el museo que
le impacte sensorialmente, le invite a reflexionar, y le estimule emocio-
nalmente. Al mismo tiempo que le permita interactuar y relacionarse
con otras personas (Schmitt, 2011; Trinh y Ryan, 2013).
En el futuro, se plantea realizar una segunda fase del estudio en la que
se investigará la valoración de los estudiantes de la experiencia museís-
tica vivida a través de las nuevas herramientas de comunicación inves-
tigadas.
‒ ‒
7. REFERENCIAS
ABC (5/01/2021): “Los grandes museos españoles perdieron dos tercios de sus
visitantes durante 2020”. ABC. https://www.abc.es/cultura/arte/abci-
grandes-museos-espanoles-perdieron-tercios-visitantes-durante-2020-
202101041349_noticia.html
Bakshi, H.,Throsby D. (2010). Culture of Innovation: An economic analysis of
innovation in arts and cultural organisations, London: NESTA
Bellini, N., Bergamasco, M., Brehonnet, R., Carrozzino, M., & Lagier, J. (2018).
Virtual cultural experiences: the drivers of satisfaction. Symphonya.
Emerging Issues in Management, (2), 52-65.
Buonincontri, P., & Marasco, A. (2017). Enhancing cultural heritage experiences
with smart technologies: An integrated experiential framework.
European Journal of Tourism Research, 17, 83-101.
Camarero, C., Garrido, M. J., Vicente, E. (2015). Achieving effective visitor
orientation in European museums. Innovation versus custodial. Journal
of Cultural Heritage, 16(2), 228-235.
Calver, S. J., Page, S. J. (2013). Enlightened hedonism: Exploring the relationship
of ser-vice value, visitor knowledge and interest, to visitor enjoyment at
heritage attractions. Tourism Management, 39, 23-36.
D’Agnano, F., Balletti, C., Guerra, F. y Vernier, P. (2015). Tooteko: a case study
of augmented reality for an accessible cultural heritage. Digitization, 3D
printing and sensors for an audio-tactile experience.ISPRS -International
Society for Photogrammetry and Remote Sensing. Spatial Inf. Sci., XL-
5/W4 (5): 207–213.
División de Estadística y Estudios, Secretaría General Técnica Ministerio de
Cultura y Deporte (Sept. 2019): Encuesta de hábitos y prácticas
culturales en España 2018-2019. Catálogo de publicaciones del
Ministerio de Cultura y Deporte.
Espacio Visual Europa (11/09/2020): “Museos Digitales y Aprendizaje 2021”.
EVE Museos e Innovación.
https://evemuseografia.com/2020/09/11/museos-digitales-y-aprendizaje-
2021/
Goldblatt, P. (2006). How John Dewey's Theories Underpin Art and Art
Education. Education and Culture, 22(1), 17-34. Recuperado el 17 de
agosto, 2021, de http://www.jstor.org/stable/42922581
‒ ‒
Jung, T., tom Dieck, M. C., Lee, H., Chung, N. (2016). Effects of Virtual Reality
and Augmented Reality on Visitor Experiences in Museum. In A.
Inversini, R. Schegg (Eds). Information and Communication
Technologies in Tourism 2016. Springer International Publishing, 621-
635.
Lee, H., Chung, N. Koo, C. (2015). Moderating Effects of Distrust and Social
Influence on Aesthetic Experience of Augmented Reality: Motivation-
Opportunity-Ability Model Perspective. In Proceedings of the 17th
International Conference on Electronic. Commerce 2015, 22.
Little, C., Patterson, D., Moyle, B., & Bec, A. (2018, January). Every footprint
tells a story: 3D scanning of heritage artifacts as an interactive
experience. In Proceedings of the Australasian Computer Science Week
Multiconference (pp. 1-8).
Little, C., Bec, A., Moyle, B. D., & Patterson, D. (2020). Innovative methods for
heritage tourism experiences: creating windows into the past. Journal of
Heritage Tourism, 15(1), 1-13.
Mehmetoglu, M., & Engen, M. (2011). Pine and Gilmore's concept of experience
economy and its dimensions: An empirical examination in tourism.
Journal of Quality Assurance in Hospitality & Tourism, 12(4), 237-255.
Pine, B. J., & Gilmore, J. H. (1998). Welcome to the experience economy.
Harvard Business Review, 76(4), 97-105.
Radder, L., & Han, X. (2015). An examination of the museum experience based
on Pine and Gilmore's experience economy realms. Journal of Applied
Business Research (JABR), 31(2), 455-470.
Riches Proyect (2015): Museum education with digital technologies:
participation and lifelong learning. Riches Resources Think Papers
Collection /06. https://resources.riches-project.eu/wp
content/uploads/2016/04/rch_thinkpapers_06.pdf
Schmitt, B. (2011). Experience Marketing: Concepts, Frameworks and Consumer
Insights. Foundations and Trends® in Marketing: Vol. 5: No. 2, pp 55-
112. http://dx.doi.org/10.1561/1700000027
Subdirección General de Museos Estatales. (diciembre de 2020): Nuestros
Museos en un Vistazo, 2019. Ministerio de cultura y deporte.
https://www.culturaydeporte.gob.es/dam/jcr:a4085737-de53-4025-ba43-
0e9810a25ba6/nm-profesionales.pdf
Trinh, T. T., & Ryan, C. 2013. Museums, exhibits and visitor satisfaction: A
study of the Cham Museum, Danang, Vietnam. Journal of Tourism and
Cultural Change, 11(4), 239-263.
‒ ‒
CAPÍTULO 91
‒ ‒
del aprendizaje pasivo del estudiante a una concepción donde el apren-
dizaje es interacción y se construye entre todos.
Jerez y Silva (2017), por su parte, insisten en esta línea y afirman que
se entiende como aquel proceso intencionado y permanente al interior
de la institución educativa, que pretende provocar transformaciones e
impactos reales y positivos sobre: los aprendizajes de los estudiantes,
el entorno y cultura institucional y la sociedad.
Con esta idea en la cabeza, un grupo multidisciplinar de profesores de
la UCM ha trabajado durante varios años en la configuración de herra-
mientas eficaces y útiles para el aprendizaje y la formación en las asig-
naturas artísticas que forman parte de los programas de los grados que
se imparten en la Facultad de Ciencias de la Información de la Univer-
sidad Complutense. Esta investigación parte, pues, de la concepción de
la innovación educativa como un proceso, concretamente, como “aquel
que se realiza con la participación de los sectores implicados, se funda-
menta en cambios planificados, se desarrolla de manera sistemática y
está orientado a mejorar procesos, productos y, o, grupos de capital hu-
mano para obtener ventajas competitivas para el sistema o el individuo
creador y creativo” (Si(e)te.Educación, 2012)155.
Las nuevas generaciones de estudiantes universitarios, y en especial los
vinculados al campo de la Información y la Comunicación, no conciben
ya su educación sin el uso imprescindible de las TIC como herramien-
tas. Numerosos estudios avalan esta teoría (Espuny, González, Lleixá,
y Gisbert (2011), Morales et al. (2016) o Peña, Rueda y Pegalajar
(2018) e incluso hay autores, como Rodríguez, López y Martín (2017),
que consideran que el alumnado está más predispuesto a usar las TIC
en el aprendizaje de lo que los profesores y procesos educativos les
pueden ofrecer.
Bolonia (1999) ya confirió al uso de las TIC una relevancia importan-
tísima en cuanto a competencia transversal, lo que obligó a iniciar una
‒ ‒
redefinición de los espacios de logro a adquirir por los futuros profe-
sionales. Los estudios realizados sobre el estado de integración de las
TIC en la universidad española han aumentado en los últimos años (Cu-
beles y Riu, 2018; Esteves, et al., 2018; De Pablos et al., 2019; Colomer
et al., 2020; Guillén y Mayorga, 2020; Liesa Orús et al., 2020; Llorent,
Tallon y De las Heras, 2020; Mercader, 2020). Sin embargo, entende-
mos que las competencias derivadas del uso de las TIC tienen que estar
combinadas con las competencias profesionales de oficio. No son las
tecnologías las que atraen la atención de los estudiantes, sino lo que a
través de éstas pueden conocer.
Este artículo tiene como objetivo compartir la experiencia de imple-
mentación de tres casos prácticos de innovación en la universidad en el
campo de la comunicación y el arte que intentan combinar el uso de las
TIC con una concepción evolutiva y abierta de la innovación. Una pra-
xis educativa desarrollada durante tres cursos académicos en los que se
ha procedido al empleo didáctico de las TIC y al uso académico de las
redes sociales. Comunicar e interactuar es una forma de desarrollarse e
integrarse en la sociedad y si el uso de las tecnologías audiovisuales
móviles en internet lo propicia, entonces esa actividad tiene una cuali-
dad educativa.
Compartimos con De Casas, Caldeiro y Havrankova (2020) que la al-
fabetización del usuario debe abandonar el papel pasivo de mero recep-
tor para convertirse en un “prosumidor” (Sánchez-Carrero & Contreras-
Pulido, 2012), es decir, un usuario activo, creativo y motivado. La idea,
como estos autores apuntan, es que los estudiantes se conviertan en su-
jetos que puede sobrevivir, no solo en la sociedad digital, sino también
en un contexto como el actual en el que prevalece la emergencia conti-
nua de aplicaciones.
La pandemia no solo ha obligado a los profesores a un esfuerzo de adap-
tación digital online. También ha supuesto un reto para los alumnos,
que en muchas ocasiones han tenido que buscar material para completar
su formación y que también se han visto forzados a elaborar trabajos en
formato digital sin formación previa para poder aprobar asignaturas que
optaron como método de evaluación por una evaluación contínua me-
diante proyectos.
‒ ‒
Los proyectos de innovación planteados se ajustan a los seis criterios
fijados por Bob Lenz (2017), uno de los grandes expertos mundiales en
el aprendizaje basado en proyectos (ABP), en el Buck Institute for Edu-
cation que dirige. En síntesis, serían estos: el proyecto debe suponer un
reto intelectual para el alumno; debe tener relación con su contexto, con
sus vidas; debe ser colaborativo; debe implicar gestión (management),
no se trata sólo de hacer un proyecto sino de gestionarlo; debe compor-
tar reflexión («no puedes aprender a aprender a menos que reflexiones
sobre lo aprendido», dice Lenz); y, por último, debe ser público («una
vez que el profesor ha revisado el trabajo, éste se hará público, el pro-
fesor no puede ser la única audiencia»).
El aprendizaje basado en proyectos es una metodología que tiene su
base en el constructivismo y los autores que más influencia ejercieron
en esta corriente son: Lev Vygotsky a través de la interacción social y
la zona de desarrollo próximo (1979); Jerome Bruner mediante el
aprendizaje por descubrimiento; Jean Piaget haciendo referencia a la
interacción con el medio y los estadios cognitivos (1970) y John De-
wey, centrándose en el concepto de aprender haciendo (1966). El cons-
tructivismo enfoca al aprendizaje como el resultado de construcciones
mentales; esto es, que los seres humanos, aprenden construyendo nue-
vas ideas o conceptos, en base a conocimientos actuales y previos (Kar-
lin & Vianni, 2001. Cit. en Galeana 2006).
Los tres proyectos de innovación cuyos resultados aquí se presentan
han permitido cumplir todos estos objetivos gracias a la continuidad y
al fomento del trabajo autónomo por parte de los alumnos, a la vez que
han supuesto un cambio de rol del profesorado, en línea con (Gisbert y
otros, 1997; Salinas, 1999; Pérez i Garcías, 2002), que se ha convertido
en guía y facilitador de recursos para orientar a los estudiantes a parti-
cipar en su propio proceso educativo impulsando nuevas actividades
dentro y fuera de las aulas que han permitido incrementar la calidad del
proceso formativo y la aproximación al ejercicio profesional.
La competencia digital o e-competencia no se limita a un conjunto de
habilidades técnicas como el manejo del equipo físico (hardware) o
‒ ‒
lógico (software), sino que también se relaciona con el conocimiento
curricular y la pedagogía (Valverde, 2011).
2. MATERIAL Y METODOLOGÍA
‒ ‒
principales movimientos y corrientes artísticas del arte contemporáneo
universal desde el último tercio del siglo XIX hasta mediados del siglo
XX, con la llegada de las vanguardias históricas. Se estructura en torno
a 13 temas principales: Impresionismo, Postimpresionismo, Moder-
nismo, Escultura entre dos siglos, Pintura entre dos siglos, Fauvismo,
Expresionismo, Cubismo, Futurismo, Dadaismo, Abstracción Goemé-
trica, Realismos, Surrealismo.
Durante varios cursos académicos, para vincularla con los estudios de
grado de Periodismo, se ha trabajado en la puesta en práctica de distin-
tas formas de comunicación y divulgación artística. El primer año, se
creó una plataforma digital para la publicación de los trabajos de los
alumnos, esencialmente reseñas de exposiciones artísticas, y se poten-
ció el uso de las redes sociales generalistas más conocidas (Facebook y
Twitter) con fines puramente divulgativos. Una de las tradicionales
quejas y demandas del alumnado universitario es la falta de conexión
entre el aprendizaje en el aula y la puesta en práctica de esas enseñan-
zas, por lo que la creación de una publicación propia para dar visibilidad
digital a sus trabajos daba satisfacción a una de sus peticiones e incre-
mentaba su nivel de motivación a la hora de realizar sus tareas.
Tanto la plataforma como las redes se identificaron con un nombre e
imagen característicos. Artenea es una denominación simbólica que
alude a la diosa griega del conocimiento, pero a su vez es un juego de
palabras entre Arte y Neo, que describe la idea de novedad vinculada al
Arte y a la propuesta educativa que se planteaba. Se creó un logotipo
que ayudaba a unificar la imagen de todos los recursos ante los alumnos
y también ante el resto de los seguidores. Y así surgió el primer blog
que engloba arte y periodismo desde la universidad, una interacción que
prepara activamente para un aprendizaje efectivo. https://artenea-
blog.wordpress.com/
El segundo año el objetivo fue la creación de un amplio y accesible
banco de imágenes de Arte Contemporáneo (REDIAC) que facilitase al
alumando el estudio de las asignaturas artísticas y fomentar el uso de
recursos concretos de la Facultad de Ciencias de la Información, como
el Espacio/Arte y los eventos expositivos allí programados, usándolos
para la realización de materiales elaborados de forma autónoma por los
‒ ‒
alumnos: reportajes, artículos, reseñas, críticas, videos, que se difundi-
rían de forma efectiva a través de la plataforma creada el año anterior,
Artenea, y también a través de las redes sociales.
Estas actividades han permitido el desarrollo de competencias transver-
sales entre los estudiantes, tales como la capacidad de trabajo en equipo,
planificación, gestión de proyectos, comunicación de resultados y res-
ponsabilidad profesional, y han supuesto un paso de gigante tanto en el
autoaprendizaje como en el aprendizaje cooperativo que se trabaja en
la gestión de estos proyectos. https://maccomplutense.wixsite.com/re-
diac
El tercer año, y analizadas las potencialidades de YouTube, con más de
mil millones de usuarios (un tercio del total de Internet), se apostó por
crear una plataforma de vídeos accesible a ese ingente caudal de visitas
que supone en la actualidad este canal al que se puede acceder a través
de versiones locales de 88 países y en 76 idiomas distintos.
Por tanto, el último de los proyectos de innovación consistió en la crea-
ción de un Repositorio Audiovisual de Arte Contemporáneo (REA-
VAC) que es, en realidad, una plataforma audiovisual en la que los es-
tudiantes cuelgan materiales didácticos en formato de videos, con el
objetivo de que sirvan de apoyo a otros estudiantes de materias artísti-
cas de las carreras de comunicación.
Los pasos para el desarrollo de este proyecto fueron los siguientes: De-
finición del tipo de repositorio; definición de objetivos y tipo de vídeos
que se subirían; creación del canal en youtube; diseño del repositorio
digital de Arte Contemporáneo (REAVAC) y definición de su estruc-
tura; elaboración de los materiales; propuestas de temas propios; acopio
de videos disponibles en la red y elaboración de vídeos propios; intro-
ducción de los videos elaborados y realización de las pruebas de digi-
talización.
En la creación de esta plataforma ha sido decisiva la implicación del
profesorado y también de los alumnos. En una primera fase, desarro-
llada por los docentes, se procedió a definir y planificar la plataforma,
para ello se creó un canal en youtube en el que poder incluir todos los
videos elaborados y se creó una guía para la elaboración de los videos
‒ ‒
que se incluirían en el repositorio, de manera que todo el alumnado tu-
viera las mismas instrucciones a la hora de realizar su trabajo. El reparto
de obras para realizar el video fue determinado por el profesorado al
objeto de que cada estudiante tuviera una obra diferente y poder contar
con un mayor número de resultados susceptibles de ser utilizados.
La elaboración de vídeos de arte se ha erigido como un recurso valiosí-
simo para los estudiantes, que han utilizado esta herramienta de manera
eficaz y útil para fijar los conceptos aprendidos en clase durante las
sesiones teóricas que forman parte de los programas. Se les pidió la
realización de un vídeo de tres minutos en el que comentaran una obra
artística de las incluidas en el programa de la asignatura con una breve
biografía del autor.
Igual que ocurrió con REDIAC, la plataforma de youtube REAVAC
está dedicada a los principales movimientos artísticos que configuran
el nacimiento del arte contemporáneo, así como los artistas más signi-
ficativos que forman parte de estas corrientes y las obras más destaca-
das de estos. Se estructura, por tanto, en torno a los 13 temas principales
sobre los que versa la asignatura: Impresionismo, Postimpresionismo,
Modernismo, Escultura entre dos siglos, Pintura entre dos siglos, Fau-
vismo, Expresionismo, Cubismo, Futurismo, Dadaismo, Abstracción
Goemétrica, Realismos, Surrealismo.
Esta actividad permitió a los estudiantes adquirir conocimientos artísti-
cos, ya que de manera previa a la realización del vídeo tenían que pla-
nificar su contenido, estudiar al autor y la obra, recopilar información,
documentación e imágenes; les permitió también desarrollar destrezas
periodísticas: realización de un guion sobre la obra a comentar o a la
biografía del artista; búsqueda de fuentes solventes relativas al autor, al
contexto histórico, al movimiento artístico y a la propia obra, así como
edición y montaje de un vídeo; y finalmente les capacitó para llevar a
cabo destrezas tecnológicas: utilización de programas de edición de ví-
deos, locución y narración e inclusión de música y créditos.
https://www.youtube.com/c/ArteneaUCM
‒ ‒
3. ANÁLISIS Y RESULTADOS
TABLA 1. Principales datos del tráfico en el blog Artenea durante su primer año
Países visitantes 89 24 65
Número de entradas 87 27 60
Las primeras cifras de tráfico del blog, creado en wordpress por su gra-
tuidad, arrojan datos más que interesantes para el análisis, ya que junto
al importante número de visitas de la plataforma se lograron también
un número importante de subscriptores (2.710), lo que permitió augurar
estabilidad para este proyecto estudiantil.
Uno de los resultados que más emoción despertó en los alumnos fue el
elevado número de países origen de las visitas, un total de 89, algo que
para una generación sin fronteras como la de los millenials resulta su-
mamente importante.
En ese primer año del proyecto, los alumnos colgaron en la web 87
entradas, algo que teniendo en cuenta el carácter cuatrimestral de la
asignatura y todo el trabajo necesario para ponerla en marcha resultó
más que significativo.
‒ ‒
Este proyecto se llevó a cabo con docentes y alumnos de tercer año del
Grado en Periodismo en la UCM durante los cursos académicos 2015-
2016, 2016-2017 y 2017-2018.
Tras el tercer año de implantación del proyecto, se procedió a realizar
encuestas de satisfacción a los alumnos del último curso académico, un
total de 150, a los que se les plantearon distintas preguntas relacionadas
con los objetivos marcados en las asignaturas y con el nivel de utiliza-
ción e implantación de las TIC y redes sociales en la materia.
El 97,80 % de los alumnos manifestó haber utilizado las redes sociales
para informarse sobre los contenidos y las propuestas de la asignatura
de Movimientos Artísticos Contemporáneos. Cuando se les preguntó
por su consideración acerca de la utilidad de las redes sociales en la
asignatura para el aprendizaje de la misma, la respuesta mayoritaria, en
un 83,52 %, fue afirmativa; un porcentaje mucho menor, el 4 %, estimó
que no facilitaba el aprendizaje; y un 12 % dijo que podría prescindir
de ellas.
Los datos objetivos de número de visitas no dejan lugar a dudas sobre
la progresión del proyecto Artenea.
‒ 2015: abierto en el mes de noviembre, el blog alcanzó la cifra
de 2.193 visitas, con un total de 872 visitantes.
‒ 2016: en su segundo año completo, el blog ascendió hasta las
12.066 visitas y 6.291 visitantes.
‒ 2017: en este año, el blog sigue una línea ascendente, que cul-
mina en 41.275 visitas y 26.509 visitantes.
‒ 2018: al cumplir tres años de su puesta en marcha, el blog al-
canzó su cota máxima con 49.639 visitas y 35.747 visitantes,
siendo el año con mejores resultados hasta ese momento.
Los resultados del segundo de los proyectos (REDIAC) son los siguien-
tes: Se han incluido en el repositorio de imágenes un total de 79 artistas
y 856 obras. La clasificación de los movimientos se hizo atendiendo a
los 14 temas que incluye la asignatura de Movimientos Artísticos, que
es la matriz de los tres proyectos realizados.
‒ ‒
GRÁFICO 1. Distribución de los artistas atendiendo a los movimientos a los que pertenecen
‒ ‒
Los resultados del tercero de los proyectos (REAVAC) son los siguien-
tes: el canal de youtube creado para la difusión de vídeos sobre arte
elaborados por los alumnos cuenta, en la actualidad, con 465 subscrip-
ciones.
Los vídeos se han organizado en 14 listas de reproducción, de las cuales
13 están dedicadas a distintos movimientos artísticos de vanguardia y 1
está centrada, específicamente, en biografías de artistas destacados de
la historia del arte contemporáneo.
Para que la plataforma pueda servir como un referente para el estudio
del arte contemporáneo solo se han colgado las grabaciones que, ade-
más de seguir las especificaciones marcadas por los profesores, han
conseguido realizar un recurso con contenidos de calidad. De los tres
grupos de la asignatura de Movimientos Artísticos Contemporáneos,
con un total de 240 estudiantes, ha participado un 70% del alumnado,
es decir, un total de 168 estudiantes.
En el canal se han subido 122 videos en los que han participado 135
alumnos, ya que algunas piezas han sido realizadas por parejas.
Aproximadamente un 20% de los vídeos subidos son biografías de ar-
tistas y otro 20% están dedicados a obras del Impresionismo. Por el
contrario, tan solo 2 se refieren a obras del Futurismo. Esto es un indi-
cador de tres circunstancias: el planteamiento inicial (se inició con bio-
grafías de artistas), los intereses de los alumnos y la dificultad que en-
cuentran los estudiantes para definir y explicar por su complejidad al-
gunos movimientos artísticos.
La comparativa se puede apreciar en el siguiente gráfico comparativo:
‒ ‒
GRÁFICO 2. Distribución de vídeos de REAVAC por movimientos artísticos
30
Nº de vídeos en cada lista de reproducción
20
10
0
Número de vídeos
1- Impresionismo
2-Postimpresionismo
3-Modernismo
4-Escultura entre dos siglos
5-Pintura entre dos siglos
6-Fauvismo
7-Expresionismo
8-Futurismo
9-Cubismo
10-Dadaismo
11-Abstracción geométrica
‒ ‒
GRÁFICO 3. Lista de los 10 vídeos con más reproducciones
Nº de reproducciones de los 10
vídeos con mas visualizaciones
Nº DE VISUALIZACIONES
Los resultados reflejan que las mujeres visitan más el canal de youtube
que los hombres (80% frente a 20%) y el análisis por edades revela que
un 52,5% de los usuarios tienen entre 18 y 24 años y un 30,1% entre 25
y 34 años, frente a un 10,3% que tienen entre 35 y 44. Solo un 7% tiene
más de 44 años.
4. DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES
‒ ‒
año que subieron algún trabajo a la web, en el tercer y último proyecto
hasta ahora, REAVAC, han participado 168 estudiantes, el 70% del to-
tal de matriculados. Constatamos que la constancia en la innovación
supone ventajas, como que los estudiantes puedan ver el producto del
trabajo de compañeros de cursos anteriores, lo que claramente anima a
la participación.
Mantener abierta la web Artenea y que ésta trascienda el curso acadé-
mico del proyecto de innovación, igual que se ha hecho después con
REDIAC y REAVAC, nos permite ver datos como que frente a las
10.663 visitas que tuvo la plataforma en su primer curso académico,
este último año ha sido visitada por 36.677 personas de 103 países di-
ferentes.
Las 87 entradas iniciales se han convertido, a fecha 10 de mayo de
2021, en un total de 271, de las cuales, 107 son reseñas de exposiciones;
22 son entrevistas a artistas y 26 son reportajes. También hay 19 entra-
das relacionadas con el arte y el cine; 3, con el arte y los libros y 1 con
el arte y la música.
De igual forma, datos como que el número de visitas a la web Artenea
(10.633) durante el primer curso académico y el primer proyecto de
innovación se hayan visto duplicados en el tercero de los proyectos
(27.560 visualizaciones en un solo curso académico) también invitan a
pensar que la transferencia de conocimiento de la universidad a la so-
ciedad también ha ido creciendo a medida que evolucionaban los pro-
yectos de innovación.
Esta conclusión nos sitúa en la línea de investigación desarrollada por
Chesbrough (2003), que habla de un enfoque interpretativo de la inno-
vación educativa y enfatiza el concepto de «innovación abierta», cuya
idea central es que en un mundo en el que el conocimiento está distri-
buido, las organizaciones no pueden desarrollar de forma exclusiva su
propia investigación ni su propio sistema de innovación. Según este au-
tor, lo que sí pueden hacer es utilizar innovaciones de otras organiza-
ciones. Las ideas valiosas pueden provenir de múltiples fuentes desde
dentro y fuera de la organización, y pueden convertirse en producto
también dentro o fuera del sistema en el que han sido generadas.
‒ ‒
Entendemos que esto es en lo que se han convertido los tres proyectos
de innovación sobre los que versa el presente artículo.
Analizando la procedencia geográfica de los usuarios de REAVAC,
el tercero de los proyectos, se observa el acceso al canal de youtube
desde 14 países distintos (España, Méjico, Argentina, Colombia,
Chile, Perú, Guatemala, Corea del Sur, Marruecos, Uruguay, Bél-
gica, Brasil, Ecuador y Turquía), es decir, se constata que la herra-
mienta está siendo utilizada en ámbitos ajenos a los estudiantes de
la asignatura.
Los proyectos de innovación llevados a cabo no solo han servido para
mejorar las competencias artísticas y periodísticas de los estudiantes,
objetivo inicial de estos, sino que también han servido como material
de estudio para la asignatura en tiempo de pandemia.
Analizados los días de consulta de los vídeos subidos a la plataforma
REAVAC hemos hallado resultados significativos que nos permiten si-
tuar el canal de youtube como una herramienta de estudio durante la
época de pandemia que ha permitido a los estudiantes contar con mate-
rial para preparar a distancia sus exámenes. El gráfico 4 refleja que el
mes de enero es precisamente cuando hay un mayor número de accesos
al canal y de visualizaciones, coincidiendo con el período de exámenes.
‒ ‒
Modernismo y el Impresionismo son los que presentan un mayor índice
de interés:
4000
2000
0
Nº de reproducciones
1- Impresionismo 2-Postimpresionismo
3-Modernismo 4-Escultura entre dos siglos
5-Pintura entre dos siglos 6-Fauvismo
7-Expresionismo 8-Futurismo
9-Cubismo 10-Dadaismo
11-Abstracción geométrica 12-Realismos
‒ ‒
‒ Favorece la renovación metodológica.
5. APOYOS
6. REFERENCIAS
Blanco, R & Messina, G (2000). Estado del Arte sobre las Innovaciones
Educativas en América Latina. Santiago de Chile, Convenio Andrés
Bello-Unesco.
Carbonell, J. (2001): La aventura de innovar. El cambio en la escuela. Madrid:
Morata, 127 p.
Chesbrough, H (2003). Open Innovation: The New Imperative for Creating and
Profiting from Technology. Boston: Harvard Business School Press.
Cubeles, A. & Riu. D. (2018). The effective integration of ICTs in universities:
the role of knowledge and academic experience of professors.
Technology, Pedagogy and Education, 27 (3), pp. 339-349.
https://doi.org/10.1080/1475939X.2018.1457978
De casas, P., Caldeiro, M.C & Havránková, T. The Knowledge and the Use of
Educational Applications from University Students in Spain and the
Czech Republic. Research in Education and Learning Innovation
Archives, [S.l.], n. 24, p. 39-55, june 2020. ISSN 2659-9031. Available
at: <https://ojs.uv.es/index.php/realia/article/view/16696>. Date
accessed: 06 may 2021. doi:http://dx.doi.org/10.7203/realia.24.16696.
‒ ‒
De Pablos, J.M., Colás, M.P.; López, A. & García, I. (2019). Uses of digital
platforms in Higher Education from the perspectives of the educational
research. REDU. Revista de Docencia Universitaria, 17(1), pp. 59-72.
https://doi.org/10.4995/redu.2019.11177
Domingo, M y Marqués, P. (2011). «Aulas 2.0 y uso de las TIC en la práctica
docente». Comunicar, n.º 37, p. 169- 175. Disponible en línea en:
<https://doi.org/10.3916/C37-2011-03-09> [Consulta: 4 marzo 2019].
Espuny, C., González, J., Lleixá, M & Gisbert, M (2011). «Actitudes y
expectativas del uso educativo de las redes sociales en los alumnos
universitarios». En: «El impacto de las redes sociales en la enseñanza y
el aprendizaje» [monográfico en línea]. Revista de Universidad y
Sociedad del Conocimiento (RUSC). Vol. 8, n.º 1, págs. 171-185. UOC.
[Fecha de consulta:
dd/mm/aa].<http://rusc.uoc.edu/ojs/index.php/rusc/article/view/v8n1-
espuny-gonzalez-lleixa-gisbert/v8n1-espuny-gonzalez-lleixa-
gisbert>ISSN 1698-580X
(16) (PDF) Actitudes y expectativas del uso educativo de las redes
sociales en los alumnos. Available from:
https://www.researchgate.net/publication/258432290_Actitudes_y_expe
ctativas_del_uso_educativo_de_las_redes_sociales_en_los_alumnos
[accessed May 16 2021].
Esteves, M.; Pereira, A.; Veiga, N.; Vasco, R. & Veiga, A. (2018). The use of
new learning technologies in higher education classroom. International
Journal of Engineering Pedagogy (iJEP), 8 (2), pp. 115-127.
https://doi.org/10.3991/ijep.v8i2.8146
Guillén, F.D.; Mayorga, M.J. (2020). Identification of variables that predict
teachers’ attitudes towards ICT in Higher Education for teaching and
research: A study with regression. Sustainability, 12 (4), pp. 1-14.
https://doi.org/10.3390/su12041312
Havelock, R., & Huberman, A. (1980). Innovación y problemas de la educación:
teoría y realidad en los países en desarrollo. Edición española, ISBN:
92-3-301527-0. París, Francia: Organización de las Naciones Unidas
para la Educación, la Ciencia y la Cultura. Recuperado de:
https://unesdoc.unesco.org/ark:/48223/pf0000136018
Jerez, O. y Silva C. (eds.) (2017). Innovando en Educación Superior:
Experiencias clave en Latinoamérica y el Caribe 2016-2017, 1, Gestión
curricular y desarrollo de la docencia. Santiago, Chile: Facultad de
Economía y Negocios, Universidad de Chile.
‒ ‒
Karlin, M., & Viani, N. (2001). Project-based learning. Medford, OR: Jackson
Education Service District. Retrieved July 9, 2002, from
http://www.jacksonesd.k12.or.us/it/ws/pbl/ 17.
Lenz, B. (2017). Aprendizaje Basado en Proyectos (ABP)[YouTube].
EduCaixaTV. Recuperado de
https://www.youtube.com/watch?v=UOJAduuwNOs
Liesa, M., Latorre, C., Vázquez, S. & Sierra, V. (2020). The technological
challenge facing higher education professors: Perceptions of ICT tools
for developing 21st century skills. Sustainability, 12 (13).
https://doi.org/10.3390/su12135339
Llorent, M.; Tallon, S. & De las Heras, B. (2020). Use of Information and
Communication Technologies (ICTs) in Communication and
Collaboration: A Comparative Study between University Students from
Spain and Italy. Sustainability, 12 (10).
https://doi.org/10.3390/su12103969
Margalef, L. & Arenas, A. (2006). ¿Qué entendemos por innovación educativa?
A propósito del desarrollo curricular. Perspectiva Educacional,
Formación de Profesores, 47, 13-31 Pontificia Universidad Católica de
Valparaíso Viña del Mar, Chile
Mercader, C. (2020). Explanatory model of barriers to integration of digital
technologies in higher education institutions. Education and Information
Technologies. https://doi.org/10.1007/s10639-020-10222-3
Morales et al (2016): Examining teachers' conception of and needs on action
research Issues in Educational Research, 2016, Vol 26(3), 464-489
[ Contents Vol 26 ] [ IIER Home ]
Peña Hita, M., Rueda, E., & Pegalajar, M. del C. (2018). Posibilidades didácticas
de las redes sociales en el desarrollo de competencias de Educación
Superior: percepciones del alumnado. Píxel-Bit. Revista De Medios Y
Educación, (53), 239-252. https://doi.org/10.12795/pixelbit.2018.i53.16
Rodríguez, M. R., López, A., & Martín, I. (2017). Percepciones de los estudiantes
de Ciencias de la Educación sobre las redes sociales como metodología
didáctica. Pixel-Bit. Revista de Medios y Educación, 50, 77-93. doi:
10.12795/pixelbit.2016. i50.05.
Sánchez-Carrero, J. y Contreras, P. (2012). De cara al prosumidor: producción y
consumo empoderando a la ciudadanía 3.0. Icono14 10(3), 62-84, doi:
10.7195/ri14.v10i3.210
‒ ‒
Si(e)te.Educación
Revista de Investigación en Educación, nº 10 (1), 2012, pp. 7-29
http://webs.uvigo.es/reined/
Unesco. (2016). Texto 1: Innovación Educativa. Herramientas de apoyo para el
trabajo docente. Recuperado de
http://unesdoc.unesco.org/images/0024/002470/247005s.pdf. [ Links ]
Vallina de los Ríos, I., & Pérez Navío, E. (2020). El aprendizaje basado en
proyectos y las tecnologías de la información y la comunicación dentro
de un centro escolar. Un estudio de caso. EDMETIC, Revista de
Educación Mediática y TIC, 9(2), 116-136.
https://doi.org/10.21071/edmetic.v9i2.12018
Valverde, J. (2011). Docentes e-competentes. Barcelona: Octaedro.
‒ ‒
CAPÍTULO 92
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
Aquellas que nos interesaron inicialmente por sus implicaciones con
nuestra rama de conocimiento fueron: Gimp (programa de tratamiento
y retoque fotográfico), Krita (software de dibujo y pintura), Artnatomy
(herramienta de acceso libre para el aprendizaje sobre fundamentos
anatómicos), Comic creator (dibujo de comics) o Blender (programa
3D). De igual modo, se planteó también trabajar con otros programas
de código abierto como Processing, para fomentar sus posibilidades en
el ámbito artístico.
Con éste proyecto de innovación sobre El uso del software libre en la
teoría y práctica artística, se han analizado herramientas digitales que
complementan y expanden las posibilidades expresivas del dibujo, la
pintura o la escultura. Estas disciplinas, imprescindibles en la forma-
ción artística, encuentran hoy una nutrida demanda profesional en ám-
bitos competenciales como la ilustración, el concept art, la animación
2D, 3D o el matte painting, versión contemporánea de la pintura paisa-
jística. Dada la relevancia actual de estas ramas de creación artística,
presentes en la industria cultural y en permanente crecimiento tecnoló-
gico, se hace necesario su análisis desde el mundo académico158.
La metodología propuesta no sigue un recorrido lineal, sino que trata
de fomentar el acercamiento del alumno a través de casos prácticos,
talleres y conferencias. El objetivo principal, se centra fundamental-
mente en crear recursos educativos en abierto, fomentar la enseñanza
virtual e incentivar el manejo y diseño de herramientas de aprendizaje
para las nuevas generaciones.
El proyecto ha evolucionado y ha dado pie a otra investigación dentro
de la innovación educativa, como continuación de éste primer estudio
llevado a cabo en 2016, donde se profundiza en otros programas de libre
acceso específicos para el dibujo y la pintura digital, titulado: Dibujo y
Pintura digital. Herramientas de software libre para la creación artística.
Los resultados obtenidos en ambos proyectos se han virtualizado a tra-
vés de un blog (http://softwarelibrebellasartes.blogspot.com.es) con la
intención de garantizar su difusión y continuar con el aprendizaje,
‒ ‒
cuyos textos escritos por la autora, se recogen resumidamente a conti-
nuación.
2. Objetivos propuestos en el proyecto
Los objetivos propuestos respondían a los criterios establecidos en la
docencia de las asignaturas de perfil tecnológico del grado de Bellas
Artes con el fin de ampliar su implantación a otras asignaturas de corte
“analógico”. Entre ellos destacamos los aspectos más relevantes 159:
‒ Introducir el uso de herramientas de edición de imagen (2D y
3D) con programas de “software libre”.
159 Oliva, Lozano, Mónica. Memoria del PIMCD, El uso del software libre en la teoría y practica
artística. https://eprints.ucm.es/id/eprint/35342/. En línea a 22 de noviembre de 2021.
‒ ‒
‒ Elaborar talleres y conferencias sobre los programas y recur-
sos libres trabajados a lo largo del proyecto como modelo de
aprendizaje y método de investigación.
160 Ibídem.
‒ ‒
3. METODOLOGÍA EMPLEADA EN EL PROYECTO
4. RECURSOS HUMANOS
‒ ‒
superar tanto los obstáculos técnicos que puedan surgir desde la prác-
tica artística, como las carencias conceptuales que desde el uso tecno-
lógico puedan plantearse en los procesos de creación. De esta forma, se
amplia la experiencia estética y la creación artística con nuevas meto-
dologías que ofrecer al alumno, formando un grupo de corte científico
y artístico.
‒ ‒
Miembros externos a la UCM:
‒ Dr. Yago Torroja Fungairiño, profesor titular de la Universi-
dad Politécnica de Madrid en el Departamento de Electrónica
e Informática Industrial.
‒ ‒
En la conferencia realizada por Yago Torroja, se expuso la interrelación
de las máquinas de dibujar con la creación artística, no solo desde el
punto de vista del objeto producido, el dibujo, sino también desde el
objeto productor; la máquina en sí. Se presentaron las máquinas de di-
bujar como exponentes del arte cinético, prestando especial atención a
su relación actual con la electrónica y los microprocesadores. 162
En el taller, Capturando el viento, se plantearon varias estaciones de
trabajo, para elaborar la construcción de máquinas de dibujar basadas
en diferentes tecnologías y enfoques (máquinas de perfil analógico o
digital).
El taller se planteó como un trabajo prospectivo y de experimentación,
cuyo objetivo no fue tanto la producción (ya sea de dibujos o máqui-
nas), como el abrir espacios de búsqueda e investigación; lo que dio pie,
en función de las inquietudes de los participantes, a utilizar Arduino
como el software libre que mejor se adaptaba a alguna de las máquinas
realizadas163.
‒ ‒
FIGURA 1: Cartel del evento diseñado por Mónica Oliva. Imagen: Juan Cabello. Derecha:
aula del Espacio Fundación Telefónica. Fotografía: Mónica Oliva.
‒ ‒
5.1.2. Modelado digital: Introducción a Blender como herramienta
para la creación artística
‒ ‒
FIGURA 2. Izquierda: cartel del evento diseñado por Darío Lanza. Aula de Acciones Com-
plementarias.
6. UNIDADES DIDÁCTICAS
164 Oliva, Lozano, Mónica. Memoria del PIMCD, El uso del software libre en la teoría y practica
artística. https://eprints.ucm.es/id/eprint/35342/. En línea a 22 de noviembre de 2021. Todas las uni-
dades didácticas están recogidas en la memoria del proyecto. Auí se recoge un breve resumen de
las mismas.
‒ ‒
6.1. BLENDER: MODELADO DE UN ROSTRO EN 3D Y SU CONSTRUCCIÓN
TRIDIMENSIONAL
FIGURA 3: Cabeza realizada con el software Pepakura e impresa para su montaje. Foto-
grafía: Mónica Oliva
‒ ‒
programación, incluso para aquellos sin una formación especializada.
Además, está orientado al prototipado y producción de gráficos, anima-
ciones e interacciones. Es una herramienta orientada claramente a dise-
ñadores y artistas.
La unidad didáctica a cargo de Lali Barriere, se centró sobre la progra-
mación de curvas y movimiento, utilizando como lenguaje Processing.
El empleo de dichas herramientas produjo imágenes de gran belleza in-
sertas en la corriente del arte generativo.
Las curvas que se pueden dibujar directamente en Processing son, en
primer lugar, elipses y circunferencias, junto con sus arcos, aunque en
nuestro caso se centró la atención en los splines y las curvas de Bézier,
dos formas distintas de interpolación para seguidamente pasar a realizar
una práctica libre pero guiada165.
‒ ‒
manipulación de la anatomía y con los gestos faciales. Se seleccionaron
diversas opciones, optando como mejores propuestas: Artnatomy, apli-
cación de libre acceso creada por la artista Victoria Contreras Flores
dentro del Dpto. de Dibujo de la Facultad de BBAA de Valencia (UPV,
2005); y en segundo lugar, Responsive face, ideada por Ken Perlin, do-
cente del Media Research Lab de Nueva York, para las jornadas
SIGGRAPH 2000. La primera está pensada como una herramienta para
el docente y el estudiante en el aprendizaje de la morfología y anatomía
de la expresión de la cara, a la hora de representar sus sentimientos y
emociones. El segundo recurso permite al internauta manipular los ges-
tos y sentimientos de un rostro virtual, un personaje sintético encua-
drado en un primer plano166.
A través de estas aplicaciones de acceso libre, los alumnos de la asig-
natura de Anatomía Morfológica Aplicada de la Facultad de Bellas Ar-
tes de la UCM de 3º y 4º curso, realizaron como ejercicio autónomo un
proyecto de tres dibujos con tres expresiones faciales diferentes y su
esquema de los músculos implicados.
FIGURA 5: Dibujos de la estudiante Laura Riquelme como resultado del empleo de Artna-
tomy. Fotografía: Carmen Pérez González
‒ ‒
diseñado para la creación de imágenes con un tratamiento de dibujo y
pintura tradicional pero a través del uso de técnicas digitales. El pro-
grama dispone con una paleta muy variada de pinceles de uso artístico.
Su acceso está abierto a profesionales de la ilustración, del concept art,
diseño de escenarios, del cómic y a todos aquellos que quieran dar el
salto de las técnicas tradicionales a las digitales.
A su vez, la web de Krita no sólo ofrece la descarga completamente
gratuita y legal del software sino también información de ayuda, tuto-
riales, así como artistas que utilizan el programa.
Para hacer accesible la práctica a los neófitos del dibujo artístico la pro-
fesora planteó como recurso didáctico más utilizado en la ilustración
digital: el Photobashing. Esta práctica consiste en crear una capa de
fondo con la fotografía (retrato) de una persona que se utiliza de base
sobre la que comenzar a esbozar el dibujo. De ella se extraen las líneas
principales y luces, solucionando los problemas iniciales de composi-
ción y encaje del dibujo para posteriormente ocultar la capa/fondo y
seguir trabajando libremente sobre el retrato167.
‒ ‒
FIGURA 5: Capa base de fondo con la que se trabaja el inicio del retrato. a la izquierda
proceso de pintura libre. fotografía: maría de iracheta
‒ ‒
un ordenador. Junto con la explicación, expone los resultados de un
proyecto artístico personal que desarrolla junto a Uncoded en Noruega.
Se trata del proyecto LightHamar, un sistema de iluminación urbana
interactiva que fue instalado en la localidad de Hamar. Con ello, se
muestra al estudiante un ejemplo de creación artística profesional como
modelo de actividad inserta en el mercado laboral. La instalación
consistía en globos inflados con helio a los que se les había introducido
1 LED de alta potencia a cada uno. En unos casos eran leds
monocromos azules y en otros leds RGB. El conjunto de globos
reaccionaba a la voz y sirvió como elemento de escena para un coro de
voces de la localidad en un evento público. Los globos se estimulaban
con la presencia o cercanía de los peatones, encendiéndose o
apagándose168
a 22 de noviembre de 2021.
‒ ‒
través de ejemplos de artistas profesionales que utilizan soluciones libre
para ejecutar su obra.
La tecnología CNC se ha desarrollado en muy diferentes ámbitos; desde
la ingeniería, a la arquitectura, pasando por la moda, la artesanía o la
publicidad. Se basa en la relación entre un proceso computerizado de
dibujo y programación y la aplicación del mismo a una pieza mediante
una máquina que lleve a cabo las órdenes programadas o dibujadas.
Estas máquinas suelen ser: fresadoras, tornos, de corte laser,
rectificadoras de electroerosión, estampadoras, prensas, etc. Los
métodos de control de sistema libre más interesantes actualmente para
CNC son: EMC2 (sistema linux específico para CNC) y REP-RAP
(sistema de impresión 3D preparado para funcionar en Windows, Linux
y Mac)169.
Horcajada expone la serie “Carpichos” (2014) del colectivo compuesto
por Beatríz Coto y Santiago Lara, quienes presentan su trabajo
mediante un texto publicado en el “Manual de supervivencia maker”:
Estas series representan las conexiones en la sociedad del
conocimiento, pero también plantean interrogantes o dudas sobre la
mercantilización de este conocimiento, de nuestra memoria y nuestra
creación colectiva como sociedad. Y lo hace siempre desde un punto de
vista simbólico, crítico y sin dramatismo.170
La obra resultante son unos grabados sobre madera, empleando una cor-
tadora láser que ofrece una gran calidad en la ejecución, pero que en
este caso se ha utilizado a modo de pirograbador, técnica de grabado
tradicional, que con el láser como herramienta, permite una producción
rápida.
nualsupervivenciamaker.com/manual/inspiracion_corte_con_laser.html
‒ ‒
FIGURA 7. Serie Caprichos 4, “Guerra y capitalismos. Colectivo Laramascoto. 2014
‒ ‒
fue creado por el investigador y profesor de matemáticas Phillip
Kent171.
‒ ‒
campos de Erbil en el Kurdistán irakí, donde el voluntariado ayuda a
los cristianos refugiados que han sido expulsados bajo amenaza de
muerte por el Daesh. Patricia recoge el sufrimiento de los cristianos de
Irak a través de los testimonios de los afectados por las acciones terro-
ristas, que incluyen a una anciana desahuciada por el “Estado Islá-
mico”, las lágrimas del obispo de Mosul, los voluntarios de los campos
de Erbil o la felicitación navideña de los cristianos perseguidos con el
objetivo la crear una máquina de dibujo que transcriba esas voces.
‒ ‒
movimiento. Igualmente utiliza el software libre Audacity (editor de
audio), desde donde descarga las voces de los vídeos testimoniales.
Esto le permite graduar el volumen de salida con mayor precisión y
obtener unos grafismos de gran calidad estética.
Por último, con un Servomotor de modelismo (motor de corriente con-
tinua) obtiene el movimiento necesario para que al añadir un bolígrafo
rojo de punta fina, la máquina de dibujo resulta module el grafismo. El
resultado final son gráficos, ondas de sonido que “transcriben" las vo-
ces de los testigos del horror en Irak.
‒ ‒
6.8.2. Camuflaje de un objeto como propuesta de ilusión óptica
En segundo lugar, también para la asignatura de Análisis de la Forma,
el alumno José Carlos García Luengo, expone como resultado de su
proyecto artístico una unidad didáctica sobre el camuflaje como ilusión
óptica. Propuesta docente planteada por la profesora Mónica Oliva.
Desde un discurso ecológico, critica en su proyecto el uso de la
naturaleza como vertedero de las actividades del ser humano. Como
metáfora visual, decide camuflar un contenedor de basura en un entorno
natural, haciendo uso del sofware libre de edición de imagen, Gimp 2.8.
FIGURA 10. Imagen del matorral con y sin el cubo de basura. Fotografía: José Carlos Gar-
cía.
‒ ‒
Proceso:
FIGURA 11. Empleo de las herramientas de edición de imagen para siluetear el cubo. Fo-
tografía: José Carlos García.
‒ ‒
de un formato a escala natural. José Carlos utiliza PosteRazor, un soft-
ware de impresión que permite imprimir imágenes de gran formato
(poster) a tamaño DIN A4 en una impresora de escritorio. En general,
las impresoras ya llevan en las propiedades de impresión está opción; y
existen varias aplicaciones con posibilidades similares como Easy
Poster printer.
En su caso, el alumno no disponía de una impresora de calidad y supo
buscar soluciones libres para compensar los costes de impresión en co-
pisterías. Dividió la imagen en varias hojas, seis en total, realizando la
impresión en hojas adhesivas para su ensamblado en el cubo. Como
resultado final, se logró el camuflaje del objeto que fue de nuevo em-
plazado en el mismo lugar en el que se realizó la primera fotografía,
logrando una mimesis del cubo in situ.
‒ ‒
7. CONCLUSIONES DEL PROYECTO. ASPECTOS
NOVEDOSOS PARA LA DOCENCIA
‒ ‒
Aunque el proyecto de innovación inicia su andadura en 2016, el uso
docente que se ha hecho de él a lo largo de estos años y sobre todo a
raíz de la pandemia ha sido considerable dada la necesidad del alum-
nado de tener que adaptarse a la docencia on line y, en consecuencia, al
trabajo desde casa. Motivo principal por el que se ha decidido participar
en este congreso donde vuelve a estar a la orden del día la creación de
metodologías alternativas a la docencia presencial. Con el software li-
bre se han superado las barreras de acceso tecnológico al software pri-
vativo, en unas circunstancias de crisis global que invitan al alumno a
un auto-prendizaje tutelado. Cada vez son mas numerosos los recursos
y aplicaciones en abierto que facilitan el aprendizaje con tutoriales ac-
cesibles a todos, lo que reconduce el papel del docente a una posición
de mayor acompañamiento y apoyo reflexivo en su camino hacia el
aprendizaje autónomo.
El reto está en saber utilizar estas soluciones libres con un propósito
consciente, que en nuestro ámbito artístico conlleva emplear las herra-
mientas digitales como cualquier otra herramienta tradicional, donde la
técnica o los medios no son un fin en sí mismo, sino un medio más de
creación.
Por último, cabe destacar la importancia que ha tenido la difusión del
proyecto a través de las páginas webs creadas para este fin donde se
encuentran las unidades comentadas que aquí resumimos, y que cons-
tituyen un modelo de apoyo esencial para la docencia on line de nues-
tros alumnos. Desde sus inicios hasta este curso 2021, el blog sobre el
uso del software libre, según las estadísticas recogidas en la web, ha
recibido 22, 9 mil visitas y en los últimos 12 meses 2,63 mil de usuarios.
De estas visitas 9,77 mil sones de España y 731 en el último curso 2021.
Cifras que evidencia su difusión.
‒ ‒
Figura 13. Captura de pantalla de las estadísticas que recoge el blog http://softwarelibrebe-
llasartes.blogspot.com.es
‒ ‒
8. WEBGRAFÍA:
‒ ‒
Roosendaal, Ton. Blender Foundation 2002. Recuperado el 20 de agosto de 2021
[En línea]: https://www.blender.org/
VV.AA. PepakuraDesigner. Recuperado el 20 de agosto de 2021. Disponible en
https://tamasoft.co.jp/pepakura-en/download/index.html
VV.AA. Contraptor. Recuperado el 20 de agosto de 2021. Disponible en
http://www.contraptor.org/
VV.AA. 2015. Manual de supervivencia Maker. Madrid: Makespace Madrid. [En
línea]:
http://manualsupervivenciamaker.com/manual/inspiracion_corte_con_la
ser.html
‒ ‒
CAPÍTULO 93
1. INTRODUCCIÓN
173Este texto presenta los resultados parciales obtenidos en el proyecto Co-Crtic.Ar, durante el año
2021. En este proyecto participan: Ph.D. Maximiliano Bron, docente de la Universidad de la Rioja
(Argentina); Ph.D. Héctor Farina, docente de la Universidad de Guadalajara (México); Mg. Carlos
Terrones, docente de la Universidad San Martín de Porres (Perú) y Angélica María Rodríguez, do-
cente de la Universidad Autónoma de Manizales (Colombia). El proyecto de investigación está radi-
cado y es financiado por las cuatro universidades y hace parte del trabajo de colaboración interna-
cional de las mismas.
‒ ‒
ser más que opiniones, lo que impide ser objetivo en el ejercicio de una
ciudadanía crítica.
Esta carencia de criterios nos deja entrever que se presentan bajos ni-
veles de argumentación, tal y como lo sustentan los estudios de Rodrí-
guez, et. al. (2018), Rodríguez, et. al. (2020), Tovar (2019), Nieto y
Ruiz (2020), entre otros; razón por la cual, se requiere una formación
que fortalezca la capacidad argumentativa de los futuros profesionales,
para que construyan sus propios criterios y seleccionen las mejores ra-
zones para actuar (Searle, 2001). De igual forma, se requiere intencio-
nar los procesos didácticos para desarrollar habilidades que les permita
leer críticamente los textos y contextos.
La toma de decisiones apresuradas y sin criterios, el poco o casi nulo
análisis de la información que circula en las redes, la aceptación de las
falsas noticias, la falta de autonomía para asumir una postura propia, y
la poca capacidad para argumentar y sustentar su postura, son algunos
de los problemas que se hacen visibles en la aguda crisis social que
padecemos; problemas que se manifiestan en la baja participación ciu-
dadana, lo que termina por ser una afrenta a la democracia.
Ante la desinformación que circunda en los diferentes medios y los dis-
cursos de odio que se movilizan en las redes, nuestros jóvenes requieren
hacer uso de las herramientas que ofrece la literacidad crítica para fa-
vorecer el desarrollo de habilidades de nivel superior, tal y como lo
exponen Bloome, et. al. (2005), Aliagas, et. al. (2009), Arce (2012),
Vargas (2015), Tosar (2018; 2021) y otros más, y con ello identificar
los discursos falsos que, en su mayoría, inciden en la toma de decisiones
de orden social y político, dado que la intencionalidad de quienes los
profieren es performativa.
Este panorama poco alentador ha llevado a que la academia tome con-
ciencia sobre la importancia de formar nuevos profesionales compro-
metidos con su realidad social. Para el caso de la Universidad Autó-
noma de Manizales tal compromiso se hace evidente en su Misión, al
plantear en esta la contribución “(…) a la formación de personas éticas
y emprendedoras, con pensamiento crítico e innovador, en un marco de
responsabilidad social” (Misión -UAM). Una misión que se ha
‒ ‒
vinculado desde las diferentes asignaturas con elementos didácticos
para promover el desarrollo de competencias generales y específicas
que fortalezcan la criticidad como un valor intelectual.
Es así, como el curso de competencias comunicativas ha venido enfo-
cando su programa al fortalecimiento de una de las habilidades más im-
portantes que debe poseer todo pensador crítico: la argumentación;
claro está, sin desconocer las demás dimensiones y procesos que se re-
quieren para pensar críticamente, tales como la metacognición, las ha-
bilidades socioemocionales, la resolución de problemas y el pensa-
miento histórico, entre otras.
En los últimos tres años, intencionalmente, en este curso se realiza én-
fasis en la lectura crítica y en la escritura de textos argumentativos,
siendo estos los procesos esenciales, desde los cuales se fortalecen las
otras dos habilidades comunicativas (habla y escucha). Razón por la
cual, argumentar juega un papel preponderante en este proceso, dado
que para asumir una postura propia; valorar los textos, tanto propios y
ajenos, así como para juzgar las acciones propias y las de los demás, es
fundamental tener criterios sustentados de forma racional y razonable.
Argumentar, resulta ser esencial a la hora de discutir y persuadir con
buenas razones; también, resulta ser esencial para pensar de manera crí-
tica el mundo, para abrir la mente a las multiperspectivas que se generan
en torno a un mismo problema, en aras de plantear soluciones razonadas
y razonables al mismo.
Asimismo, es importante destacar que una de las exigencias actuales de
la educación superior en Latinoamérica, en la era de las tecnologías, es
la formación en habilidades blandas para la vida; en las denominadas
competencias generales, máxime cuando el mundo cambiante exige a
los nuevos profesionales asumir una postura crítica (oral y escrita) para
afrontar la crisis social en la que están sumidos estos pueblos. Esto con-
lleva a aprender a usar el conocimiento para dar solución a los proble-
mas y para mejorar los procesos de convivencia ciudadana, mejorar, los
procesos comunicativos para ejercer una sana ciudadanía.
Tal como afirma Mora (2004):
‒ ‒
Las necesidades del nuevo contexto de educación superior exigen, ade-
más de los conocimientos, formar a los individuos en un amplio con-
junto de competencias que incluyan conocimientos, pero también las
habilidades y actitudes que son requeridas para el puesto de trabajo”,
es por eso que el “aprender a aprender” resultó clave en el proceso de
enseñanza aprendizaje en comunicación digital, puesto que los conoci-
mientos son cambiantes y mucha información obsolescente en un corto
período. Entonces, resulta fundamental el aprendizaje para toda la vida
que favorezca la actualización continua que se exige a los nuevos pro-
fesionales de la comunicación (p.20).
‒ ‒
detectar discursos falaces en los medios de comunicación y en las redes
sociales.
Ante esta situación, cuatro docentes de diferentes universidades lati-
noamericanas (Universidad Autónoma de Manizales, Colombia; Uni-
versidad Nacional de la Rioja, Argentina; Universidad de Guadalajara,
México; Universidad San Martín de Porres, Perú) hemos encontrado en
las cátedras espacios para aportar a estos desafíos de la educación digi-
tal, en un mundo donde circulan diferentes discursos y Fake News; dis-
cursos que muchos de nuestros jóvenes de la población latinoamericana
no logra identificar como engañosos.
Partiendo de este problema se ha asumido un compromiso social, apor-
tando desde las clases compartidas, de los cuatro docentes, elementos
didácticos para fortalecer la argumentación y ofrecer a los estudiantes
las herramientas que brinda la literacidad crítica a la formación del pen-
samiento crítico. Para ello se ha tomado como estrategia didáctica la
discusión de problemas socialmente relevantes (PSR), para favorecer la
capacidad argumentativa, vinculando elementos de la literacidad crítica
propuesta por Cassany (2006) y Tosar (2021).
De acuerdo con lo anterior, se ha pensado en el proyecto Co-Critic.Ar.
Un proyecto de trabajo colaborativo internacional, en el que los docen-
tes de las cuatro universidades investigan y realizan procesos de desa-
rrollo en conjunto con sus estudiantes en aras de comprender ¿Cuáles
son las relaciones que se presentan entre la argumentación transmedia,
las herramientas de literacidad crítica y la asunción de posturas razona-
das y razonables (críticas) frente al planteamiento de soluciones a los
problemas socialmente relevantes? Y con ello, contribuir desde el aula
al fortalecimiento de la capacidad argumentativa de los estudiantes,
para que aprendan a identificar discursos falaces y a asumir posturas
propias para transformar la realidad social.
‒ ‒
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
de investigación y el objetivo de desarrollo para establecer relaciones
entre argumentación, literacidad crítica y pensamiento crítico y trans-
formar esa realidad existente discutida (consumo de Fake News).
En esta investigación, los estudiantes son parte activa desde el inicio
del proyecto, no solo para trabajar en torno al fortalecimiento de su ca-
pacidad argumentativa, dado que con ellos se van chequeando los avan-
ces alcanzados en sus niveles de argumentación, los obstáculos que se
han identificado, los que se superan y los que persisten; sino porque son
parte de un problema que aqueja su realidad y se involucran desde sus
productos (narrativas transmedia) para transformarla, ofreciendo como
producto de desarrollo pedagógico una página Web con contenido
transmedia como material de trabajo para otros maestros interesados en
desarrollar habilidades de pensamiento crítico con sus estudiantes.
Docentes
IAP
Estudiantes (PSR)
‒ ‒
tercera y cuarta etapa final se analizan los resultados obtenidos en ar-
gumentación y pensamiento crítico a lo largo del proceso, la cual está
a cargo de los docentes. (Ver figura 2).
‒ ‒
TABLA 1. Adaptación de los niveles de argumentación de erduran, osborne y simon (2004)
Niveles Argumentati-
Características
vos
‒ ‒
maestros que deseen trabajar en torno al desarrollo de habilidades para
el pensamiento crítico y iv). Insumos para quienes deseen trabajar el
problema de las noticias falsas. Cambios de orden social, en la que los
estudiantes son agentes activos al crear los productos de desarrollo en
aras de dar solución al problema.
4. RESULTADOS
Niveles de argumentación
‒ ‒
TABLA 2. EVIDENCIA DEL DISCURSO DE LOS ESTUDIANTES
‒ ‒
problémico, poca articulación entre las ideas a la hora de expresarlas
por escrito; asimismo, no se evidencia un buen uso de conectores dis-
cursivos, como los que exige la argumentación (Fuentes, 2018).
La escritura se torna poco legible en los textos del 70% de los estudian-
tes. Sus argumentos, realmente son opiniones, basados en sus experien-
cias y creencias, sin mayor sustento y sin una estructura argumentativa.
Les costó, además, identificar las tesis de los textos leídos y las razones
o argumentos brindados por los autores para sustentar sus posturas. Esta
fase se evidenció en los procesos de socialización, cuando al evaluar
los argumentos presentados en el texto sugerido para la lectura, más de
un 80% de los estudiantes consideró que los argumentos sí daban cuenta
de la tesis expuesta. No obstante, luego de hacer el análisis de estos, se
identificó que los argumentos que brindaba uno de los autores a favor
del uso del glifosato no eran consecuentes con la tesis sugerida; más
bien eran contraargumentos para el opositor; con lo cual, nunca llegó a
sustentar la tesis y sus argumentos más fuertes, eran de orden econó-
mico, no social y constitucional, como lo proponía Duque (2019) en su
tesis.
Esta falencia inicial identificada dio paso al diseño de la secuencia di-
dáctica para intervenir el aula. Se enseñaron algunos tipos de argumen-
tos y se realizaron ejercicios sobre argumentación, analizando otros tex-
tos, para el caso sobre las noticias falsas. En especial se analizaron tex-
tos de las redes, como lo fue la noticia que circuló en la que se describía
cómo el virus había sido creado a propósito en China con fines políticos
y otros discursos en torno a la efectividad del dióxido de cloro para
atacar el virus que provoca la COVID-19.
A la luz de esta búsqueda se identificaron noticias al respecto, sobre las
cuales se trabajaron. En el curso se brindaron a los jóvenes, herramien-
tas de la literacidad crítica y se realizaron talleres intercátedras en clases
compartidas de los cuatro docentes con los cuatro grupos de estudiantes
de las universidades participantes. Herramientas como:
‒ Aprender a diferenciar entre los hechos y las opiniones. Para
ello se realizó análisis del discurso, del uso del lenguaje, en
aras de identificar cuándo con algunos términos, los medios
‒ ‒
expresaban las noticias alejándose de los hechos e introdu-
ciendo un lenguaje subjetivo y cargado de emociones.
‒ ‒
GRÁFICO 2. Niveles de argumentación en los estudiantes, fase de intervención
En esta fase, se observa que los estudiantes se han movilizado del nivel
1 al nivel 2. En nivel 1 está el 61% de los estudiantes, se ha presentado
una movilización del 9 % de los estudiantes hacia el nivel 2. Así, en el
nivel 2 se pasó del 25% al 34%, lo cual, si bien aparentemente es un
avance poco significativo, es importante decir, que en cuestiones argu-
mentativas se requieren procesos permanentes, no solo de una de las
asignaturas. Los debates, talleres, foros y lecturas han sido útiles para
avanzar.
En los demás niveles no se ha presentado movilización, El porcentaje
de estudiantes en el nivel 3 permanece 5%; y en los niveles superiores
no se halla ningún estudiante. Tal y como se observa en la matriz de la
tabla 3.
‒ ‒
TABLA 3. Evidencia del discurso de los estudiantes, fase de intervención didáctica
‒ ‒
Tal y como se expresó líneas atrás, el avance ha sido poco, pero como
se ve en el discurso, se evidencian algunas herramientas de la literaci-
dad crítica usadas por los estudiantes para identificar las noticias falsas.
Aún no hay análisis del discurso, ni de la intencionalidad del autor, solo
han usado la herramienta de verificación de la fuente y veracidad de la
información; por lo cual, es importante seguir trabajando en este as-
pecto.
El ejemplo del estudiante del nivel 2 evidencia el paso dado en el uso
de operadores, de conectivas y la exposición de manera ilada entre las
premisas a la conclusión. Este estudiante en la fase inicial estaba en el
nivel 1, y ahora sus discursos son más claros y coherentes. Sin embargo,
bien usa datos, los mismos no son relevantes para brindar apoyo a la
conclusión que llega. No obstante, es importante destacar que hay ma-
yor coherencia en la exposición de las ideas que presenta.
Podría decirse que la discusión de un problema socialmente relevante,
como lo es el de las noticias falsas, les ha llevado a analizar mejor las
fuentes usadas y a su vez estimula la participación en los debates y foros
sobre las noticias que han aparecido durante la pandemia. Abordar un
tema candente ha abierto espacios de discusión entre los diferentes es-
tudiantes de las diversas universidades, lo cual ha permitido conocer
cómo se percibe y conciben el problema en diferentes partes de Lati-
noamérica.
Además de los discursos argumentativos, es importante destacar que
otros resultados, que apuntan al objetivo de desarrollo ya empiezan a
ser evidentes en el proceso. A la fecha se ha creado la imagen del sitio
Web en el que se dispondrán las narrativas transmedia. De igual forma,
los estudiantes, por sí mismos, han creado textos cortos sobre el pro-
blema de las Fake News, de los cuales, tres de ellos están en proceso de
edición para ser publicados en un libro digital. Se han realizado podcast
en formato entrevista y audiovisuales en debate sobre los temas traba-
jados; asimismo, se han realizado entrevistas a expertos sobre pensa-
miento crítico y sobre las noticias falsas. Estos productos se pondrán en
el sitio Web con la intención de brindar a los docentes interesados en
trabajar sobre el pensamiento crítico un material pedagógico útil.
‒ ‒
En este sentido, se ha identificado que esta estrategia de un trabajo con-
junto de cátedras compartidas o clases espejo brinda a los estudiantes,
no solo la oportunidad de compartir con otros docentes, sino espacios
de diálogo intercultural para plantear soluciones a los problemas socia-
les que se analizan.
De igual forma, pese a los pocos avances se considera que las herra-
mientas de la literacidad crítica y de la argumentación son útiles para
pensar de manera crítica la realidad, discutirla, asumir posturas propias
y empezar a transformarla, con lo cual se da alcance al objetivo general,
al empezar a establecer relaciones entre las categorías seleccionadas.
Se espera que al finalizar el proceso, se alcancen todos los objetivos
planteados y poder caracterizar las relaciones que se están generando
entre estas estrategias didácticas para formar en pensamiento crítico.
Argumentación
Fake
News
(PSV)
Resolución de
problema
Literacidad crítica
(PSV)…(Estrategias
ABP)
‒ ‒
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
estructurados y basados en algunos criterios, con lo cual se aporta al
desarrollo de habilidades para el pensamiento crítico (Facione 1990;
2007).
La asunción de criterios propios para asumir postura y evaluar los jui-
cios propios y ajenos es un elemento requerido en la argumentación y
resulta ser uno de los fundamentos del pensamiento crítico, como lo
afirman Paul y Elder (2003). En este aspecto, apenas se están empe-
zando a movilizar los estudiantes en su desarrollo, pues como se evi-
dencia en los ejemplos de los discursos, gran parte de sus soportes o
criterios son basados en experiencias, más que en autores o fuentes con-
fiables.
Por otra, se puede decir, que en este proceso la discusión de problemas
socialmente relevantes contribuye a que los estudiantes planteen diálo-
gos interculturales para resolver problemas reales desde sustentos razo-
nados (Fernández, et, al, 2006). Asimismo, las narrativas transmedia,
como lo propone Jenkins (2003; 2013) resultan ser medios de expresión
para transformar la realidad. Estos productos que los estudiantes están
realizando dan cuenta de las soluciones que están planteando para iden-
tificar discursos engañosos en las denominadas “noticias falsas”.
Puede decirse, entonces, que cada uno de los elementos de este proyecto
han aportado a que nuestros futuros profesionales empiecen a pensar su
propia realidad y con sus acciones y discursos empiecen a transfor-
marla, corroborando lo que expone Searle (1969; 1995); ya que la reali-
dad social es creada, constituida, instituida y transformada a través del
uso intencional del lenguaje. Ellos, nuestros estudiantes, han identifi-
cado un problema, lo han intervenido con discursos y acciones en aras
de cambiar esa realidad social y aminorar el consumo de noticias falsas.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
desarrollo de los niveles argumentativos; pues las clases espejo resultan
ser de gran aporte cognitivo para nuestros estudiantes y para la com-
prensión de los problemas sociales que aquejan al pueblo latinoameri-
cano.
En este sentido, a la luz de los objetivos trazados en este proyecto, que
como se expuso, tiene componentes de investigación y de desarrollo, se
han evidenciado algunas conclusiones parciales; entre ellas se destaca
el aporte de la literacidad crítica para elaborar argumentos de autoridad,
pues los estudiantes, a la luz de las herramientas que la literacidad crí-
tica les brinda han empezado a buscar fuentes confiables e información
veraz para apoyar sus ideas (Cassany, 2005; 2006) y (Tosar, 2018;
2021).
Esta búsqueda de fuentes confiables les ha llevado a su vez a tener cri-
terios para realizar las lecturas de textos y contextos, identificando con
ello Fake News y exponiendo su postura frente a las mismas, brindando
argumentos cada vez mejor estructurados y claros a la hora de valorar
estos discursos poco confiables. Asimismo, la producción de narrativas
transmedia se convierte en un medio para iniciar procesos de cambio
frente a la realidad del problema del consumo de Fake News vivenciado
en Latinoamérica, propiciando con ello espacios de trabajo colabora-
tivo, en el que se expresan las multiperspectivas en aras de expresar
mejores soluciones que aporten a la comprensión y solución del pro-
blema. Estos diálogos interculturales de los estudiantes de los cuatro
países se han materializado en podcast, videos y cortos que servirán de
insumo en el sitio Web
A través del trabajo colaborativo, los docentes, no solo han generado
espacios de diálogo para la co-creación de las clases espejo y los dise-
ños del proyecto para la intervención en el aula, sino que se han posi-
bilitado encuentros de co-creación para que los estudiantes diseñen,
creen y construyan sus propias narrativas apropiándose del espacio
Web en aras de que sus productos sean un insumo para docentes que
quieran trabajar en pos del desarrollo del pensamiento crítico.
Asimismo, se considera que este trabajo generado por el proyecto Co-
crtic.Ar es apenas el inicio de un espacio que se espera tenga gran
‒ ‒
impacto social, dado que existen otros tantos problemas comunes que
nos permitirá seguir trabajando en pos del desarrollo de habilidades
para el pensamiento crítico, no solo con estudiantes de estas cuatro uni-
versidades participantes, sino con nuevas universidades que han empe-
zado a vincularse en este proceso y que esperan que esta fase termine
para hacer parte del proyecto con sus estudiantes en la discusión de un
nuevo problema. Lo cual, nos permitirá realizar aportes a largo plazo.
Por último, es importante mostrar que si bien los avances han sido len-
tos en el desarrollo de los niveles argumentativos es imperante seguir
trabajando en torno a ejercicios de lectura y escritura de esta tipología
textual. Resulta significativo, además, seguir trabajando en talleres que
formen a los estudiantes sobre los tipos de argumentos y la identifica-
ción de falacias para obtener mejores resultados.
Por otra parte, una de las limitaciones que se ha evidenciado en el pro-
ceso formativo ha sido el tiempo; ya que un semestre es muy poco para
lograr resultados efectivos; la población es cambiante y no sigue ejer-
citando el proceso argumentativo en otras asignaturas. No obstante, al-
gunos estudiantes continúan en el proceso de manera voluntaria, aun-
que en algunas universidades, como la UAM, la Universidad de Gua-
dalajara y la Universidad San Martín de Porres, ya hayan finalizado su
semestre y el curso. Estos estudiantes voluntarios continúan trabajando
con los estudiantes de la Universidad Nacional de la Rioja, Argentina,
dado que este es el único curso que está activo durante todo el año.
Para concluir se sugiere vincular en otras asignaturas de las universida-
des participantes procesos de lectura crítica y escritura proposicional en
dominios específicos y a así mejorar la capacidad argumentativa para
que los estudiantes aprendan a pensar por sí mismos, basados en crite-
rios con sustento epistemológico.
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
‒ ‒
asimismo, agradecimientos al Dr. Maximiliano Bron, al Dr. Héctor Fa-
rina y al Mg. Carlos Terrones, colegas y artífices de este proyecto, con
quienes hemos construido, además del proyecto, espacios académicos
y de crecimiento personal para debatir cuestiones socialmente relevan-
tes de manera crítica.
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Fernández, M., García, J. N., De Caso, A., Fidalgo, R. y Arias, O. (2006). El
aprendizaje basado en problemas: revisión de estudios empíricos
internacionales. Revista de Educación, 341, 397- 418.
http://www.revistaeducacion.educacion.es/re341/re341_17.pdf
Ferreiro, E. (1997). La revolución informática y los procesos de lectura y
escritura. Estudos Avançados, 2(29), 277-285.
France, D. (2003). El lugar del relativismo en los intercambios filosóficos de los
alum-nos. Perfiles Educativos, 24(96), 5-32.
http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=13209602#
Fuentes, C. (2018). Diccionario de conectores y operadores del español.
Arco/Libros.
Jenkins, H. (2003). Transmedia Storytelling. MIT Technology Review [en línea].
http://www.technologyreview.com/biomedicine/13052/
Jenkins, H. (2013). Convergence Culture. La cultura de la convergencia en los
medios de comunicación. Paidós.
Levitsky, S. y Ziblatt, D. (2018). Cómo mueren las democracias. Ariel.
Nieto, L; Ruiz, F. (2020). Estudio de caso como estrategia para el desarrollo de la
argumentación en docentes en formación. Educ. Pesqui, 46, 1-16.
https://doi.org/10.1590/S1678-4634202046216221
Paul, R. y Elder R. (2003) Una mini-guía para el pensamiento crítico, conceptos y
herramientas. Fundación para el Pensamiento Crítico.
http://www.criticalthinking.org/resources/PDF/SP-
ConceptsandTools.pdf.
Perelman, C. & Olbrechts-Tyteca, L. (1989). Tratado de la argumentación: la
nueva retórica. Gredos.
Plantin, C. (2005). La argumentación. 3ª ed. Barcelona: Editorial Ariel.
Rodríguez Ortiz, A. M. (2020). Democracias pluralistas: ¿una alternativa para el
Gobierno colombiano? Cuadernos De Filosofía Latinoamericana,
41(122), 89-110. https://doi.org/10.15332/25005375/5530
Rodríguez, A. M. (2018). Elementos ontológicos del pensamiento crítico. Teoría
de la educación. Revista Interuniversitaria, 30(1), 53-74.
https://doi.org/10.14201/teoredu3015374
Rodríguez, A. M., Pamplona, D; Torres, I. (2020). Desarrollo de niveles
argumentativos a partir de una unidad didáctica basada en la discusión
de problemas socialmente vivos. Academia Y Virtualidad, 12(2), 5-21.
https://doi.org/10.18359/ravi.4282
‒ ‒
Rodríguez, A. M; Coral, R; Andino, M; Portilla, O. (2018). Habilidades de
argumentación. Una propuesta para el planteamiento de posibles
soluciones a los conflictos interpersonales. Revista Educación y
Desarrollo Social, 2(2), 32-54. https://doi.org/10.18359/reds.2966
Searle, J. (1969). Speech Acts. An Essay in the Philosophy of Language.
Cambridge at the University Press.
Searle, J. (1995). The Construction of Social Reality. The Free Press.
Searle, J. (2001). Rationality in Action. The MIT Press.
Tosar, B. (2018). Literacidad crítica y aprendizaje de las ciencias sociales en las
aulas de educación primaria. Enseñanza de las ciencias sociales: revista
de investigación, 17, 5-12.
https://raco.cat/index.php/EnsenanzaCS/article/view/343290
Tosar, B. (2021). Literacidad crítica: Enseñar a leer el mundo para
transformarlo a través del encuentro. Kindle.
Toulmin, S. (2007). Los usos de la argumentación. Península.
Van Dijk, T. (1999). El análisis crítico del discurso. Anthropos, 186(1), 23-36.
Van Eemeren, F.H., Grootendorst, R., Jackson, S. & Jacobs, S. (1997).
Argumentación. En: T. A. Van Dijk (Ed.). El discurso como estructura y
proceso. Estudios sobre el discurso I. Una introducción
multidisciplinaria (pp. 305-334). Gedisa.
‒ ‒
CAPÍTULO 94
GUILLERMO SANAHUJA-PERIS
Universitat Jaume I
ROCÍO BLAY-ARRÁEZ
Universitat Jaume I
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
personal; los profesores ya han trabajado con este grupo en anteriores
cursos y la matrícula suele estar entre los 30 y 60 alumnos. Esos alum-
nos suponen una ratio que permite la atención e interacción permanente
entre profesor/a y alumnos.
Por otra parte, tanto el contenido de la asignatura como su filosofía pe-
dagógica según la propia guía docente (“tiene como objetivo un apren-
dizaje cooperativo y progresivo del alumno/a [...] El aprendizaje coope-
rativo refuerza aspectos característicos del proceso de convergencia eu-
ropea; permite al alumno ser el protagonista, hacerse más responsable
de los estudios, y donde el profesor es facilitador y mediador en el pro-
ceso de enseñanza-aprendizaje”) deviene en un marco de trabajo óp-
timo para profundizar y continuar en los procesos de innovación dada
la tradición y experiencia en el aprendizaje cooperativo que se ha dado
a lo largo de los años en esta materia.
2. MARCO TEÓRICO
‒ ‒
proyecto, se ha asumido una determinada perspectiva sobre del proceso
de enseñanza-aprendizaje en el contexto actual que demanda una actua-
lización de la metodología docente aplicada. Esta actualización o evo-
lución pasa por implementar distintos procesos de innovación que se
ordenan en relación a cinco coordenadas: el proceso de enseñanza-
aprendizaje en la sociedad de la información, el aprendizaje coopera-
tivo y participativo, y el aprendizaje sobre la evaluación y autoevalua-
ción.
‒ ‒
elementos clave: el propio alumno, el contenido del aprendizaje y el
profesor, que actúa de mediador entre los dos. Esta perspectiva docente
se centra mucho más en la interacción entre alumnas/nos, la construc-
ción compartida del conocimiento, el aprender a aprender y la ense-
ñanza-aprendizaje de contenidos procedimentales y actitudinales, con-
siderando al docente como un práctico autónomo, un artesano que re-
flexiona, toma decisiones y crea durante su propia intervención en
clase.
Para poder delimitar y concretar es proyecto en materia de innovación,
aprendizaje cooperativo y participativo, se siguieron las experiencias
publicadas de Gros y Lara (2009), Santos Pastor et al (2012), Gandía y
Montagud (2014) y Ausín et al (2016). En diferentes artículos, todos
estos autores reflexionan sobre las dificultades y resultados obtenidos a
través de sus modelos pedagógicos. De su lectura se puede concluir que
el valor de esta metodología reside en la sustitución de una enseñanza
mecánica y memorística por actividades que se planteen como restos,
facilitando el aprendizaje autónomo y los ritmos propios, mejorando la
calidad de la participación, generando cambios significativos en la
forma de entender la enseñanza y plasmándose todo ello en un aumento
del rendimiento académico del alumnado. La mayoría de estos trabajos
reconoce que pese a los resultados positivos, la aplicación de la inno-
vación supone una carga de trabajo superior tanto para alumnos como
para docentes.
‒ ‒
anticipar y planificar la acción, y de identificar los criterios de evalua-
ción; y a adquirir estrategias que les posibiliten hacerlo autónoma-
mente” (2010:26).
La pedagoga incide además en una cuestión capital. Mantiene la utili-
dad de incluir una evaluación por pares en el proceso de aprendizaje
puesto que los aprendices no cuestionan habitualmente las ideas del
profesorado mientras que “cuando es un igual el que dice algo, se tiende
más a compararlo con lo que uno piensa o hace, y a buscar cómo saber
cuál de las dos representaciones es mejor”(2010:28). Es decir, que des-
pierta el sentido crítico y la motivación por la calidad. Este artículo
además fue compartido, leído y analizado en una sesión de clase junto
con el alumnado.
3. OBJETIVOS
‒ ‒
optativas del grado de Publicidad y RR.PP. así como a las
asignaturas “Industrias Culturales” de los grados de Comuni-
cación Audiovisual y Periodismo.
4. METODOLOGÍA
‒ ‒
Las competencias genéricas y específicas:
CG01 - Adaptación a nuevas situaciones
CG02 - Aprendizaje autónomo
CG03 - Capacidad de análisis y síntesis
CG04 - Capacidad de gestión de la información
CG15 - Motivación por la calidad
CG16 - Razonamiento crítico
CG18 - Resolución de problemas
Temario de la asignatura:
Tema 1. Introducción. Generalidades: Aproximación al con-
cepto de industria cultural e industria creativa.
Tema 2. Las industrias culturales y las industrias creativas:
economía creativa, sociedad creativa, ciudad creativa.
Tema 3. Clasificación y radiografía económica de las Indus-
trias Culturales y Creativas.
Tema 4. Perfiles profesionales y emprendimiento en el ámbito
de las industrias culturales y creativas. Modelos de negocio
en las industrias creativas y culturales.
Tema 5. Características principales de la prensa, la radio y la
televisión en España.
‒ ‒
Tema 6. Principales características de industria editorial, mu-
sical, cinematográfica y del videojuego en España.
Tema 7. Características principales de otras industrias deno-
minadas "creativas" en España.
Metodología didáctica:
‒ ‒
Sistema de evaluación de la asignatura:
A. Elaboración de trabajos académicos (70%) (0-10). (Incluye
"elaboración de los trabajos académicos": 50%, presentación
oral (10%) y resolución de casos (10%)).
A.1. En grupo (3-5 integrantes) (0-10): Análisis de
la situación actual de una "industria cultural y / o
creativa" seleccionada entre grupo y profesorado.
Investigación sobre tendencias en la industria.
(35%)
A.2. Individual (0-10): Cuaderno de bitácora. Im-
plica la elaboración desde el análisis y juicio crítico
de un cuaderno de bitácora (en papel o bloque con
acceso limitado) que comprenderá todos los temas
tratados en clase. (35%)
B. Examen escrito (30%) (0-10).
‒ ‒
TABLA 1. Acciones de innovación por áreas de actuación
‒ ‒
finalmente, han coparticipado en la concepción del examen y han eva-
luado por pares el trabajo de los compañeros a partir de un sistema de
rúbricas compartido para cada una de las tareas evaluables. A continua-
ción, se describe en profundidad cada una de las acciones, apuntando
además las competencias que se ponen en práctica con su desarrollo.
PLANIFICACIÓN
‒ ‒
resultados de aprendizaje que mantiene la propia guía, de la
consolidación del aprendizaje de cara al futuras experiencias
y de las otras dos pruebas que eran sujetas de evaluación.
PRÁCTICA EDUCATIVA
‒ ‒
FIGURA 1. Infografía creada por una alumna en su cuaderno de bitácora digital
‒ ‒
referentes o estudios fundamentados sobre las tendencias de
la industria cultural en cuestión.
En este punto, fueron los mismos alumnos quienes – bajo la guía y su-
pervisión del profesorado- asumieron las funciones docentes, preocu-
pándose por adaptarse a nuevas situaciones, gestionando la información
con capacidad crítica y bajo las pautas del design thinking generaron y
expusieron al resto de compañeros el material que posteriormente era
material docente evaluable a modo de unidades didácticas. Este proceso
innovador implicaba algunos de las competencias generales y específi-
cas como: CG01 - Adaptación a nuevas situaciones; CG04 - Capacidad
de gestión de la información; CG15 - Motivación por la calidad; CG16
- Razonamiento crítico y CG18 - Resolución de problemas.
‒ ‒
‒ Coloquios con profesionales: a lo largo de la asignatura se
celebraron cuatro coloquios con profesionales que vinieron al
aula (presencial o digital) para contar la realidad del día a día
de su industria cultural. En este caso fueron:
EVALUACIÓN
‒ ‒
Este proceso innovador implica algunos de las competencias
generales y específicas como: CG01 Adaptación a nuevas si-
tuaciones: CG16; Razonamiento crítico y CG18 Resolución
de problemas
‒ ‒
TABLA 2. Rúbricas del cuaderno de bitácoras
‒ ‒
Fuente: Elaboración propia
‒ ‒
4.4. CALENDARIO DE EJECUCIÓN DE LAS DIFERENTES FASES Y
ACTIVIDADES (DIFERENCIANDO POR SEMESTRES ACADÉMICOS).
‒ ‒
Lectura “Aprender a aprender”. Presenta-
15 de
7 12 T6 ción de rúbricas y debate sobre modelo de
abril
examen.
Características principales de la industria
cinematográfica y discográfica (por parte
16 de
13 T5/T6 de alumnos) +
abril
Coloquio con David Hernández,
Director de NMPNU.
Características principales de la industria
22 de
8 14 T6 videojuego, moda y diseño (por parte de
abril
alumnos)
Características principales de la industria
publicitaria con el Prof. Miquel Boix +
Coloquio con Ismael Ledesma, ex-coordi-
23 de
8 15 T5 nador de Comunit-Ad y Director de Cuen-
abril
tas de The Serious / Carolina Beguer, Di-
rectora de Comunicación de Grupo Gi-
meno
Fuente: Elaboración propia
5. RESULTADOS
‒ ‒
TABLA 4. Comparativa del rendimiento académico
4 4,69
‒ ‒
Alumna 1: "El aprendizaje, tanto individual como grupal y del resto de
mis compañeros, me ha resultado muy satisfactorio y estoy muy con-
tenta y orgullosa de los resultados obtenidos. Tanto la mecánica de la
asignatura como su organización me han gustado bastante, además, se
ha hecho muy ameno dado que la teoría es muy interesante y presenta
gran creatividad y actualidad. En general, una de las asignaturas más
interesantes para finalizar con nuestra carrera académica."
‒ ‒
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
Periodismo de la propia Universitat Jaume I. En el futuro inmediato se
tratará de validar este modelo con nuevas experiencias.
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8. REFERENCIAS
Ausín, V., Abella, V., Delgado, V., & Hortigüela, D. (2016). Aprendizaje Ba-
sado en Proyectos a través de las TIC: Una Experiencia de Innovación
Docente desde las Aulas Universitarias. Formación universitaria, 9(3),
31-38. https://dx.doi.org/10.4067/S0718-50062016000300005
Cloquell, R., Fortea, M. A., Grau, R. i García, I. (2005). “Planificación de la do-
cencia universitaria de acuerdo con el crédito europeo”. En M. A. For-
tea i L. Lapeña (eds.), El camí cap a la convergència educativa a Eu-
ropa: una oportunitat per a la millora educativa en l’UJI.. Castelló: Pu-
blicacions de la Universitat Jaume I.
Gandía, J. y Montagud. M.D., (2011). Innovación docente y resultados del
aprendizaje: un estudio empírico en la enseñanza de la contabilidad de
costes. Revista Espanola de Financiacion y Contabilidad. XL. 677-698.
10.1080/02102412.2011.10779716.
Gros Salvat, B., & Lara Navarra, P. (2009). Estrategias de innovación en la edu-
cación superior: el caso de la Universitat Oberta de Catalunya. Revista
Iberoamericana De Educación, 49, 223-245.
https://doi.org/10.35362/rie490681
‒ ‒
Ibarra, M.S., Rodríguez. G. y Gómez (2012) M.A., "La evaluación entre iguales:
beneficios y estrategias para su práctica en la universidad", Revista de
Educación, núm. 359, pp. 206-231. DOI:
http://dx.doi.org/10.4438/1988-592X-re-2011-359-092.
Pérez Gómez, A. (2002). “Las finalidades de la educación”. En J. Torreblanca
(coord.), Los fines de la educación. Madrid: Editorial Biblioteca Nueva
Sanmartí, N. (2010) Aprender a evaluarse: motor de todo aprendizaje. Aula de
Innovación Educativa, 192, 26-69.
Santos Pastor, M., Castejón, F. y Martínez, L. (2012). La innovación docente en
evaluación formativa y metodología participativa. Un proyecto compar-
tido a raíz de la implantación de los nuevos grados. Psychology, So-
ciety, & Education, Vol. 4(1), 73-86.
Traver Martí, J. A. (2004). “L’aprenentatge cooperatiu: el valor del diàleg en
educació”. En AA.VV. Jornades d’intercanvi d'experiències. València:
Conselleria de Cultura, Educació i Esport.
Valverde Berrocoso, J. y Ciudad Gómez, A. (2014). El uso de e-rúbricas para la
evaluación de competencias en estudiantes universitarios. Estudio sobre
fiabilidad del instrumento. REDU. Revista de Docencia Universitaria.
12(1):49-79. https://doi.org/10.4995/redu.2014.6415
‒ ‒
CAPÍTULO 95
1 INTRODUCCIÓN
174Según la Ley 982 de 2005, dictada por el Congreso de la República, la hipoacusia es la “dismi-
nución de la capacidad auditiva de algunas personas” (artículo 1).
‒ ‒
planteó Mansion (1974): el sentido musical, el buen oído y la voz ha-
blada timbrada175.
Debido a esa contradicción, la pérdida auditiva constituye una de las
“discapacidades” que generan exclusión directa del estudio de la mú-
sica, lo que expone la importancia del oído en la recepción, la codifica-
ción, la reproducción y la producción del sonido, en relación con una
manifestación artística, destinada durante siglos a personas “superdota-
das”. Por ello, el estudio del canto lírico en personas con hipoacusia se
constituye como un reto importante para indagar sobre la problemática
que subyace frente a procesos relacionados con la comprensión, la in-
terpretación y la producción del sonido, propios de los códigos de la
disciplina musical, que pueden ser resignificados mediante el análisis
pedagógico.
En este punto, es viable referenciar un contexto epistemológico, desde
donde puede cuestionarse la naturaleza y el alcance de los conocimien-
tos o saberes asociados a la expresión musical. Por ejemplo, en relación
con el canto lírico, es necesario determinar si se trata de la puesta en
práctica de saberes adquiridos, a partir del desarrollo de unas condicio-
nes físicas óptimas, como el oído perfecto o la calidad vocal extraordi-
naria, los cuales se enmarcan en una epistemología tradicional. Por otro
lado, también puede hacerse referencia a la elaboración y la puesta en
práctica de un discurso pedagógico músico-vocal que invita al estu-
diante a realizar un estudio anatómico-fisiológico profundo de su apa-
rato de fonación, propioceptivo e interpretativo, que se relaciona con
un pensamiento contemporáneo caracterizado por la relación entre el
cuerpo, la voz y el desarrollo técnico del estudiante.
Para cualquier estudiante de canto, la comprensión del sonido vocal
−cómo se produce y qué estructuras intervienen− constituye la primera
etapa de su formación; es el momento en que comienza a reconocer su
175 El timbre, según Trallero (2008), es una cualidad del sonido que asocia con el color que este
pueda tener; sin embargo, otra definición más precisa se encuentra en Segre y Naidich (1981),
quienes afirmaron que el timbre está caracterizado por los armónicos que se forman en las cavida-
des de resonancia de la voz. Estas cavidades son únicas para cada ser humano, lo que hace que
el timbre de cada persona también sea irrepetible. Autores como Mansion (1974) utilizan la expre-
sión “voz timbrada” para referirse a la intensidad de esos armónicos.
‒ ‒
propia voz y a distinguir en ella las distintas cualidades del sonido. Este
proceso requiere, generalmente, del acompañamiento de un docente
consciente de las necesidades del estudiante y de la posibilidad de una
constante retroalimentación sonora externa que facilite el manejo y el
control vocales. En la medida en que se desarrollan las potencialidades
vocales y el estudiante comienza a optimizar el uso de cada una de las
estructuras involucradas en la producción de la voz, disminuye la capa-
cidad de retroalimentación externa o, lo que es lo mismo, deja de escu-
char el sonido de su propia voz. En la persona con hipoacusia, este
efecto hace que se dificulten la comprensión y el reconocimiento vocal,
así como las cualidades del sonido, donde es la altura la que más afecta
el resultado musical.
Esta investigación sistematizó un momento importante de la experien-
cia pedagógica que se desarrolló en el Departamento de Educación Mu-
sical (DEM) de la UPN con una estudiante con hipoacusia que aspiraba
a titularse como licenciada en educación musical, cuyo instrumento
principal fue el canto lírico.
Esta propuesta se enmarcó en el periodo comprendido entre la presen-
tación del examen de ingreso al DEM de la UPN, en noviembre de
2017, hasta el intercambio de experiencias con profesores de la Univer-
sidad Autónoma de Bucaramanga, en diciembre de 2018. La delimita-
ción de fechas permitió la organización y la descripción de una serie de
eventos cruciales para el desarrollo vocal y musical de la estudiante.
Entre los aspectos desarrollados, se encuentran los siguientes: los pro-
cesos que llevó a cabo la estudiante durante la admisión, el reconoci-
miento por parte de los docentes del DEM de las características de la
estudiante, la presentación de exámenes de canto, la mastoidectomía176
a la que tuvo que someterse, la participación como cantante de coro en
la puesta en escena de ópera y zarzuela, y la integración de la música
popular a su quehacer como cantante, entre otros.
176 Mastoidectomía: extirpación quirúrgica de una porción de la apófisis mastoides del hueso tem-
poral, que se realiza para tratar una otitis media crónica, o una mastoiditis, cuando los antibióticos
sistémicos resultan ineficaces (Océano, 1996).
‒ ‒
2 OBJETIVOS
3 METODOLOGÍA
‒ ‒
del canto se constituyen en objetivos principales, los cuales apuntan a
transformar la relación que existe entre los códigos preestablecidos por
los maestros de canto y la realidad del estudiante con necesidades de
aprendizaje diferentes.
Dentro del paradigma descrito, esta investigación se situó en un enfo-
que cualitativo que, de acuerdo con Fernández (2011) y Bonilla y Ro-
dríguez (2008), hace un análisis reflexivo de la realidad subjetiva; es
decir, no parte de supuestos teóricos, sino que analiza la realidad de los
individuos, su comportamiento, actitudes y valores, a partir del trabajo
realizado sobre la marcha. Este, a su vez, demanda un estudio profundo,
rico en ideas, más descriptivo, donde los resultados obtenidos permitan
una mayor comprensión del fenómeno que se estudia. En este tipo de
investigación, es importante “captar la realidad social ‘a través de los
ojos’ de la gente que está siendo estudiada, es decir, a través de la per-
cepción que tiene el sujeto de su propio contexto” (Bonilla y Rodríguez,
2008, p. 84).
Para contextualizar la relación entre la metodología utilizada y esta pro-
puesta investigativa, se hace hincapié en que se buscó generar una re-
flexión crítica sobre la propia práctica pedagógica con base en un ejer-
cicio hermenéutico, comprensivo e interpretativo de las estrategias y
los recursos utilizados como parte del proceso pedagógico-vocal de una
estudiante con pérdida auditiva en canto lírico. Igualmente, se pretendió
contribuir al cambio o a la transformación del pensamiento de los do-
centes con respecto a la pérdida auditiva, teniendo en cuenta, según
Bryman (2000), las dinámicas propias de las ciencias sociales y de los
paradigmas cualitativos.
La sistematización de experiencias, método por el cual se logra un im-
portante aprendizaje a partir de la reconstrucción y la interpretación de
vivencias específicas, constituyó el eje de esta investigación, que se
realizó de acuerdo con la propuesta de cinco tiempos de Jara (2011).
Esto implicó: formar parte de la experiencia y de los registros de esta;
tener preguntas iniciales para definir los objetivos; sistematizar los pro-
cedimientos que habían de utilizarse y las fuentes de información; re-
cuperar el proceso vivido, que demandó una reconstrucción de la histo-
ria; hacer el análisis crítico de la experiencia con base en el proceso
‒ ‒
reconstruido; y, por último, plantear las conclusiones como punto de
llegada.
Esta metodología trabaja sobre los procesos donde intervienen diferen-
tes actores, quienes forman parte de la investigación en un contexto de-
terminado; toma esas experiencias como procesos históricos; ordena y
reconstruye lo sucedido; y comprende e interpreta lo que sucede en el
presente, con lo que se logra el aprendizaje (Jara, 2001).
Para el desarrollo de la investigación, se partió de la práctica con una
estudiante de canto lírico con hipoacusia y se hizo una interpretación
crítica de esta, lo que contribuyó al desarrollo de la práctica y al forta-
lecimiento de la teoría. Además, este trabajo pretendió, como lo sugirió
el autor mencionado, compartir, confrontar y comparar el aprendizaje
logrado con otras experiencias, ello, con el propósito de enriquecer el
quehacer de los docentes de canto y ampliar la perspectiva de ingreso
de estudiantes con hipoacusia a los programas de música.
Otro aspecto importante en Jara (2001) es que, en esta investigación, la
generación de conocimiento se dio como un proceso activo y no de
transmisión unilateral que involucró a la investigadora y la estudiante,
donde muchas veces se asumieron saberes empíricos, subjetividad y
emociones para lograr ciertas metas, dado que se estaba frente a una
experiencia innovadora que no había sido abordada en profundidad. Lo
anterior se señaló en la literatura estudiada y referenciada, y se reafirmó
en Páramo (2017), quien sostuvo que, debido al carácter cualitativo de
esta metodología que comprende como elemento definitorio la cercanía
y la comunicación entre los actores de la investigación, la búsqueda de
significado social conlleva a que el investigador y el investigado se in-
volucren de forma activa y se transformen durante el proceso.
Desde esta perspectiva, esta sistematización pretendió analizar crítica-
mente los aspectos que orientaron el proceso de inclusión de la estu-
diante y valorar los saberes adquiridos durante el proceso de formación,
teniendo en cuenta su limitación auditiva, para que esta experiencia pu-
diera servir de apoyo para futuros cantantes e investigaciones con ca-
racterísticas similares. La recuperación de las experiencias que vivió la
estudiante y la identificación de los factores de cambio contribuyeron a
‒ ‒
su desarrollo integral; con esto, se incorporaron los conocimientos en
su experiencia pedagógica.
Asimismo, las personas que formaban parte directa de esta investiga-
ción encontraron barreras durante el desarrollo de la experiencia en sus
diferentes etapas, sobre todo al inicio, en las relacionadas con los códi-
gos que tradicionalmente unen el canto lírico con el oído musical per-
fecto. Sin embargo, buscar otras realidades y formas de aprender, y ver
el canto lírico desde una perspectiva más humana, acorde con la reali-
dad de cada persona, hicieron que se abriera una mirada crítica hacia el
conocimiento de expertos que, aunque ajenos al proceso en sí, brinda-
ron aportes esenciales gracias a su conocimiento sobre pedagogía del
canto, lo que permitió una transformación visual del futuro. Es impor-
tante resaltar que este proceso de aprendizaje se complementa con la
evaluación, otra característica presente en Jara (2011), quien midió y
valoró los resultados, aportó una interpretación crítica para el proceso
y posibilitó el resultado obtenido.
De igual forma, cabe mencionar que las experiencias donde se recoge
una gran cantidad de riquezas acumuladas son procesos únicos, inéditos
e irrepetibles (Jara, 2011); por tanto, difícilmente se podría dar una ex-
periencia igual con otro estudiante, aunque este posea las mismas ca-
racterísticas auditivas que la estudiante con la que se trabajó. Lo ante-
rior, dado que los aspectos tan prioritarios, como la actitud de la estu-
diante, la tenacidad y la entrega total, no siempre van de la mano con
las aptitudes musicales de una persona. Así, la recolección de los datos
necesarios para el desarrollo de esta investigación se realizó a partir de
las entrevistas, la observación y las historias de vida.
4 RESULTADOS
‒ ‒
mayor importancia, como refirieron Segre y Naidich (1981); además,
el cuerpo, motor del aparato de fonación, aporta la energía necesaria
para la producción del sonido (Miller, 2000) y funciona como medio de
expresión de las emociones.
Teniendo en cuenta el cuarto paso descrito por Jara (1994) como el
“tiempo clave del proceso” (p. 117), se realizó un análisis de las con-
tradicciones que marcaron este proceso de sistematización, a partir de
las cuales se pudo responder a la pregunta “¿por qué pasó lo que pasó?”.
Tales contradicciones se aislaron teniendo en cuenta las cuatro catego-
rías (educación inclusiva, pedagogía, hipoacusia y canto) a partir de las
cuales se analizaron los resultados obtenidos de los instrumentos apli-
cados tanto a los docentes de la estudiante como a los demás profesores
y estudiantes del propio DEM.
Por otro lado, según los docentes que orientaron las asignaturas musi-
cales, como la de gramática y la de armonía, la hipoacusia de la estu-
diante no refirió un problema mayor. Para ellos, la dificultad estuvo en
la formación inicial, y asociaron sus buenos resultados con la respon-
sabilidad, la tenacidad y el alto nivel de compromiso que ella mostró en
sus clases. El anterior planteamiento contradice a teóricos como Tra-
llero (2008), para quienes la importancia del oído es fundamental en la
comprensión de las características del sonido, principalmente la altura;
sin embargo, este es soportado por otros autores, como Heidelbach
(1970, como se citó en Seidner y Wendler, 1982), quien demostró que
las metas claras, la fuerza de voluntad y otros aspectos subjetivos aso-
ciados a la personalidad del cantante pueden suplir deficiencias vocales
o físicas. Los recursos pedagógicos y didácticos dentro de las clases,
como las ayudas audiovisuales por parte de los docentes, facilitaron el
proceso de enseñanza-aprendizaje.
Asimismo, los cuestionarios que fueron respondidos por los profesores
del DEM demostraron que, aunque la mayoría posee conocimiento pe-
dagógico, en un proceso de inclusión educativa es necesario que sus
actores tengan, además de formación disciplinar, formación para la di-
versidad (Rodríguez et al., 2019). Esto implica conocer el tipo de
‒ ‒
diversidad funcional177 que posee el estudiante para posibilitar el desa-
rrollo de recursos metodológicos que faciliten los procesos de ense-
ñanza-aprendizaje sin afectar los contenidos que se deban impartir.
Igualmente, es posible que el arraigo de un paradigma tradicional, an-
clado en las características físicas del estudiante de música como fun-
damentales para el buen desempeño profesional, haya limitado en los
docentes de música el estudio de pedagogías incluyentes, sobre todo en
temas como la pérdida auditiva.
Los estudiantes del DEM mostraron un panorama diferente frente a las
cualidades que debe tener un aspirante para estudiar canto: en los futu-
ros maestros se ve una clara tendencia al cambio de paradigma y es muy
posible que esta experiencia contribuya a mostrar una forma diferente
de interpretar la música.
En cuanto a los aspectos pedagógico-vocal y didáctico, esta sistemati-
zación, que se realizó desde el estudio del canto lírico como disciplina
facilitadora para el desarrollo musical, aboga por la capacidad del do-
cente para reconocer las dificultades del estudiante y potencializar sus
habilidades (Alessandroni, 2013). Para la investigadora, los conoci-
mientos sobre pedagogía vocal adquirieron mayor relevancia al permi-
tirle reflexionar sobre la metodología utilizada en clase, hasta ese mo-
mento estandarizada para estudiantes sin dificultades auditivas, con el
fin de buscar herramientas para desarrollar una consciencia clara de la
afinación.
Entre estas herramientas están las subjetivas, asociadas muchas veces a
saberes empíricos, como las imágenes, tomadas de la pedagogía vocal
tradicional y resignificadas, a las que se asocia el reconocimiento de las
alturas del sonido, teniendo en cuenta la vibración de cada nota musical,
la visualización del aparato de fonación y la consciencia al emitir un
sonido. Así, se intenta saber qué pasa internamente cuando se está afi-
nado, con el fin de lograr una memoria muscular que permita
177 La expresión “diversidad funcional” fue introducido inicialmente en el Foro de Vida Independiente
y Divertad en 2005 con la finalidad de sustituir las formas peyorativas “discapacidad”, “minusvalía”,
etc., por Romanach y Lobato (2005, como se citó en Mareño y Manzuero, 2010). Los autores anali-
zaron los cuatros modelos de “discapacidad” más influyentes de occidente: el individual, el social,
el biopsicosocial y, por último, el de la diversidad.
‒ ‒
reproducirlo y mejorarlo tímbricamente. Finalmente, se tienen las he-
rramientas objetivas, como el sentir las vibraciones externas en los ins-
trumentos; por ejemplo, el piano o la guitarra.
Así las cosas, para enseñar canto lírico a una persona con hipoacusia es
necesario analizar, primeramente, los procesos de comprensión, inter-
pretación y producción del sonido. En este caso, la ausencia de una me-
todología clara desde el principio, asociada con la falta de literatura es-
pecializada sobre el tema, propició que el aprendizaje técnico vocal se
constituyera en la principal herramienta para que la estudiante pudiera
apreciar el sonido de una forma distinta: no desde “afuera”, sino desde
“dentro”. Escucharse a sí misma, conocer su aparato de fonación y lo-
grar la propiocepción asociada a este condujeron a que, en las asigna-
turas musicales como gramática y armonía, se vencieran las dificulta-
des, como con la entonación.
De igual forma, fue posible reflexionar sobre la importancia de la for-
mación de maestros de música con hipoacusia que promovieran el re-
conocimiento de su condición y el desarrollo de estrategias pedagógicas
que partieran de una comprensión profunda del fenómeno artístico y
musical desde la diversidad y que facilitaran el desarrollo de acciones
incluyentes enfocadas hacia los diferentes niveles educativos.
El aporte realizado por los expertos en canto lírico de instituciones ex-
ternas a la UPN ofreció una mirada más amplia sobre la enseñanza del
canto a nivel nacional; para ellos, es necesario que los docentes de la
especialidad no solo sean buenos cantantes, sino que complementen su
quehacer con estudios de pedagogía vocal, lo que ha de permitir una
mejor comprensión de los procesos vocales individuales de cada estu-
diante. De la misma manera, estos avalaron la inclusión de personas
con hipoacusia en el canto lírico, aunque acotaron que, si el estudiante
tuviera conocimientos musicales previos a la pérdida auditiva, sería
más fácil el proceso de desarrollo vocal. Uno de ellos afirmó que, si el
aparato de fonación no tiene ningún problema, tampoco debe tenerlo la
audición, y que para el cantante es mejor no escucharse.
Esta opinión de los expertos en canto lírico contrasta con la de los teó-
ricos mencionados y la de los maestros de la LEM, a quienes se les
‒ ‒
aplicó el cuestionario. Al respecto, el 58,8 % condicionó el estudio del
canto a las circunstancias auditivas del estudiante.
Si se considera lo enunciado por Hernández et al. (2010), el papel activo
de la investigadora y la atención a los detalles posibilitaron la descrip-
ción y el análisis de los diferentes momentos de las sesiones de trabajo,
y facilitaron la comprensión y la reflexión permanentes sobre el proceso
pedagógico-vocal de la estudiante. La matriz elaborada a partir del pen-
samiento de la estudiante también contribuyó a este análisis.
Durante los dos semestres registrados en esta sistematización, se ob-
servó un crecimiento técnico, vocal, musical y personal de la estudiante,
lo que le permitió abordar un repertorio nuevo con mayor rigor técnico
e interpretativo y abrir su campo de acción hacia el repertorio popular;
esto último también le aportó mayor tranquilidad y confianza para pre-
sentarse ante el público. No obstante, aún persisten algunos problemas
de afinación, sobre todo en las notas más agudas, pero se está traba-
jando en ello para afianzarlas. Al respecto, se tiene que la tensión que
se presenta en la mandíbula durante el repertorio lírico desaparece en el
popular, por lo que se piensa que está asociado a una situación de ner-
vios, aún sin resolver.
Según la estudiante, este corto proceso le ayudó con la constancia y la
resiliencia en el trabajo personal y profesional; a sobrepasar las barreras
de un diagnóstico y a mostrar quién era realmente. Igualmente, sus ca-
pacidades le dieron la posibilidad de reconocerse y aprender de una ma-
nera más amable y menos destructiva; sin embargo, siente que faltan
aspectos para lograr un proceso de inclusión satisfactorio, como la fle-
xibilidad en el currículo y la capacitación de los profesores, además de
la necesidad de aplicar la evaluación alternativa en algunas asignaturas.
Lo anterior también sirvió para que los docentes fueran amables con
ella, pero sintió que estaban desorientados en cuanto al manejo de la
clase en el aula, aunque todos modificaron, de alguna forma, sus prác-
ticas, y la hicieron sentir incluida y sin la ansiedad que genera la com-
petencia. Por último, el entorno, determinante para su seguridad emo-
cional y autoestima, hizo que evolucionara como persona; y la estu-
diante exhortó a los docentes a que se animaran, a que abrieran las
‒ ‒
puertas de la inclusión y a que no desistieran, pues los resultados posi-
tivos podían tardar años en aflorar.
5 DISCUSIÓN
‒ ‒
la credibilidad de un maestro. Sin embargo, este trabajo propone rede-
finir los códigos asociados con la calidad, la capacidad y el oído musi-
cal, a fin de mostrar otra forma de ver el canto, la cual trasciende las
condiciones físicas de la persona para adentrarse en su capacidad de
receptar la información asociada al reconocimiento del aparato de fo-
nación y en la expresión de lo que la persona siente a través del sonido
musical (Hemsley, 1998). Esto hace que no se pueda separar la técnica
vocal de la interpretación.
Para esta investigación, la ambigüedad presupuesta en los términos ca-
lidad o capacidad musical puede ser, en sí misma, el motivo para un
trabajo de investigación, dado que estos podrían estar asociados a fac-
tores como gustos personales, crianza, lugar de nacimiento, etc. Por otra
parte, surgieron muchas dudas a lo largo de la investigación, aunque
ninguna relacionada con el papel que estas pueden jugar en la vida de
otras personas que, como la estudiante, se han sentido minimizadas por
intentar realizar un sueño.
Asimismo, este proyecto ha de ser importante como documento de con-
sulta para futuras investigaciones en el campo de la pedagogía musical
inclusiva, o como guía para desarrollar experiencias similares, porque
obedeció a la necesidad de aportar al mar de investigaciones musicales
y vocales, dentro de las cuales resulta novedosa, debido a la escasa li-
teratura encontrada que apoye o refute su realización.
6 CONCLUSIONES
‒ ‒
A partir de una mirada crítica, esta experiencia generó un aprendizaje
significativo que apunta a orientar futuras experiencias con una pers-
pectiva transformadora y a diversificar las estrategias pedagógicas y di-
dácticas. Ello, con el fin de comprender, en ese reconocimiento de los
“otros”, la manera como el acceso de un estudiante en condición de
hipoacusia enriqueció el escenario educativo y cultural y generó trans-
formaciones en el pensamiento de los docentes con respecto a las dife-
rencias y posibilidades consecuentes a la práctica.
La metodología utilizada, que fomentó la búsqueda de significado so-
cial, posibilitó la transformación de los actores de esta investigación.
Algunas de estas transformaciones, desde el ámbito pedagógico, son la
posibilidad de enfrentar sin temor la diversidad funcional, y que esta
modifique la práctica misma, la resignificación de los códigos propios
del canto lírico en procesos relacionados con la comprensión, la inter-
pretación y la producción del sonido en personas con hipoacusia. Sin
embargo, las transformaciones más importantes son de orden socioafec-
tivo, las cuales dan significado al esfuerzo, la tenacidad y la confianza,
que hacen que las personas adelanten las empresas más difíciles y obli-
gan a ver más allá de lo obvio, lo razonable y lo socialmente correcto.
Con base en el pensamiento de Zambrano (2016), esta investigación
evaluó de forma crítica el trabajo que se realizó para que la estudiante
afianzara los conocimientos técnicos, musicales y pedagógicos que ha-
rían posible su inmersión en el mundo laboral; y se comprobó que estas
prácticas no solo tenían lugar en el salón de clase, sino afuera de este,
en tanto que la estudiante formaba parte del coro de la Fundación Arte
Lírico de Bogotá, donde demostró sus fortalezas y enfrentó sus debili-
dades, siempre con el acompañamiento directo de la investigadora en
calidad de docente y cantante.
Como aspectos negativos, se observaron la reticencia a los cambios por
parte de algunos docentes a quienes se les aplicó el cuestionario y la
ausencia o carencia de un currículo flexible que permitiera a la estu-
diante potencializar sus habilidades a partir del reconocimiento de su
diferencia; esto, sumado al desconocimiento sobre la patología que pre-
sentaba la estudiante.
‒ ‒
Desde la evaluación, otra de las características que Jara (2011) señaló
como importantes fue el proceso de sistematización, puesto que este
posibilitó el resultado esperado y obtenido. Cabe señalar que, aunque
no fue un tema ampliado por esta sistematización, porque la estudiante
con quien se realizó el trabajo fue capaz de integrarse al sistema de
evaluación de cada materia y generar sus propias estrategias, los profe-
sores deben generar otras propuestas evaluativas alternas para los estu-
diantes con diversidad funcional.
‒ ‒
Con base en los análisis de las entrevistas a expertos y docentes de la
estudiante y en la propia práctica del canto lírico, se demostró que los
aspectos físicos no siempre son esenciales para que un estudiante se
convierta en un buen cantante o viceversa. No obstante, la constancia
en el estudio, la aptitud frente al canto y la guía de un docente con co-
nocimientos en pedagogía vocal son factores capaces de revertir las di-
ficultades anatomo-fisiológicas de un estudiante.
‒ ‒
Es muy común escuchar que la música es el verdadero lenguaje univer-
sal; entonces, para muchos tiene, en sí misma, un carácter incluyente.
Sin embargo, desde la perspectiva de esta investigación, se ve la nece-
sidad de hacer una revisión consciente de los parámetros curriculares a
los que se exponen los estudiantes de las distintas especialidades musi-
cales, tanto en el ingreso a la educación superior como en su permanen-
cia y culminación de estudios, sobre todo si poseen alguna diversidad
funcional.
Por otro lado, esta investigación cuestiona lo expuesto por el informe
de autoevaluación con fines de acreditación de alta calidad presentado
por el DEM en 2016 en relación con el ingreso de estudiantes con algún
tipo de diversidad funcional, y en cuanto a si las condiciones están da-
das para garantizar un proceso de aprendizaje satisfactorio. Aunado a
lo anterior, se tienen las entrevistas realizadas a los docentes que han
formado parte del proceso pedagógico de la estudiante y que afirmaron
que no recibieron, por parte del DEM, capacitación o charla alguna que
los contextualizara con respecto a la pérdida auditiva. Además, está el
testimonio de la propia estudiante; y se analizaron los cinco retos plan-
teados en los Lineamientos de Política de Educación Superior Inclusiva
e Intercultural del Ministerio de Educación Nacional (2020) como fun-
damentales para la educación superior inclusiva.
Esta problemática también fue avalada por Leguizamón (2010), para
quien la falta de formación del profesorado en “discapacidad” es el
principal motivo para que personas con diversidad funcional sean ex-
cluidas de la formación musical.
El análisis de los cuestionamientos de tipo pedagógico frente al pensa-
miento que reflejan los profesores y estudiantes del DEM y el criterio
de los expertos entrevistados arrojaron que, aunque los docentes de
canto y de música en general tienen, en su mayoría, formación pedagó-
gica, es necesaria la preparación respecto a la educación inclusiva. Esto,
para la puesta en práctica de un discurso que realmente responda a las
características de cada estudiante. Tal afirmación confirma lo planteado
en la pedagogía musical activa descrita por Villena et al. (1998).
‒ ‒
Las respuestas de los estudiantes y profesores fueron gratificantes, pues
ellos mostraron un pensamiento en contra del “deber ser” del estudiante
de música y a favor de las capacidades subjetivas del sujeto, más allá
de sus condiciones físicas, así como abierto a la inclusión y a la bús-
queda de herramientas que permitan el desarrollo de un proceso educa-
tivo satisfactorio para estudiantes con diversidad funcional.
Las principales recomendaciones que se derivan de esta sistematización
están asociadas a la formación del profesorado. Es muy importante,
cuando se trabaje en un proceso educativo inclusivo, que los docentes
conozcan a fondo el tipo de diversidad funcional del estudiante, o que
estén en disposición de aprender sobre esta. En ese sentido, el campo
pedagógico resulta necesario para investigar aspectos propios de la pe-
dagogía musical, como la didáctica y las estrategias empleadas para al-
canzar una técnica vocal adecuada, asociada a la individualidad de cada
estudiante.
De la misma forma, resulta importante la realización de actividades que
combinen esfuerzos para desarrollar nuevas apreciaciones éticas, esté-
ticas y valorativas propias de la música, específicamente del canto lí-
rico, así como la posibilidad en la investigación de una flexibilización
del currículo relacionado con este tipo de proyectos. Ello, para garanti-
zar que las corrientes teóricas hegemónicas no generen una exclusión
de la población con necesidades educativas especiales178 y de muchos
que no poseen conocimientos musicales previos. Igualmente, la opinión
de los expertos apoya totalmente la inclusión en la formación musical
de personas que, aunque tengan alguna diversidad funcional, pueden
llevar a cabo un proceso pedagógico musical satisfactorio.
Los resultados obtenidos a partir de los cuestionarios aplicados a los
docentes muestran que es necesario continuar con la realización de in-
vestigaciones que contribuyan, con hechos concretos, a cambiar la
178 La expresión es tratada ampliamente en la Ley Orgánica 1 de 1990, o Ley Orgánica General del
Sistema Educativo (LOGSE) de 1990 del Gobierno de España. Esta deroga la Ley General de Edu-
cación de 1970 y que, a su vez, fue modificada por la Ley Orgánica de Educación (LOE) de 2006,
la cual regula el tratamiento de los tipos de enseñanza establecidos en los diferentes apartados, al
adecuarlos a los alumnos con necesidades especiales.
‒ ‒
forma de pensar y de ver el proceso de formación musical desde la pers-
pectiva de la inclusión.
Esta sistematización puede ser considerada material de consulta. A pe-
sar de que a partir de ella se generaron conclusiones que posibilitan un
desarrollo más claro y certero de experiencias similares, no es posible
lograr un proceso enseñanza-aprendizaje satisfactorio si se trata de co-
piar lo que aquí se describe, pues cada experiencia tiene características
particulares; y cada actor que la conforma, vivencias que aportar al pro-
ceso.
También se recomienda el uso de las nuevas tecnologías para desarro-
llar habilidades sonoras que no se exploraron ni se tuvieron en cuenta
en el marco de esta investigación, dado que se salían del campo de ac-
ción de la investigadora e implicaban una serie de estudios que pueden
ser objeto de futuras investigaciones.
Finalmente, este trabajo cierra un ciclo importante en el desarrollo vo-
cal de la estudiante, mas no constituye un cierre en el proceso educa-
tivo. Muchos son los caminos que han de seguir recorriendo juntas, in-
vestigadora y estudiante, al igual que los obstáculos por vencer.
7 AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8 REFERENCIAS
‒ ‒
Alessandroni, N. (2013). Pedagogía vocal contemporánea y profesionales
prospectivos: hacia un modelo de diagnóstico en técnica vocal. Boletín
del Arte, 13, 1-5. Obtenido de
http://sedici.unlp.edu.ar/bitstream/handle/10915/34571/Documento_com
pleto.pdf?sequence=1&isAllowed=y
Arnal, J., Del Rincón, D., & Latorre, A. (1992). Investigación educativa:
fundamentos y metodologías. Labor.
Beck, S., Rieser, J., & Erdemir, A. (2017). Singing without hearing: a
comparative study of children and adults singing a familiar tune.
Psychomusicology: Music, Mind and Brain, 27(2), 122-131.
doi:https://doi.org/10.1037/pmu0000176
Bonilla, E., & Rodríguez, P. (2008). Más allá del dilema de los métodos. La
investigación en ciencias sociales. Norma.
Bryman, A. (2000). Quantity and quality in social research. Routledge.
Fernández, A. (2011). La investigación social. Trillas.
Hemsley, T. (1998). Singing and imagination. A human approach to a great
musical tradition. Oxford University Press.
Hernández, R., Fernández, C., & Baptista, P. (2010). Metodología de la
investigación. McGraw-Hill.
Hu, A., Hofmann, E., Davis, J., Capo, J., Krane, N., & Sataloff, R. (2015).
Hearing loss in singers: a preliminary study. Journal of Voice, 29(1),
120-124. doi:https://doi.org/10.1016/j.jvoice.2014.05.007
Jara, O. (1994). Sistematización de experiencias. Alforja.
Jara, O. (2001). Dilemas y desafíos de la sistematización de experiencias.
Seminario ASOCAM. Cochabamba. Obtenido de
https://cmapspublic.ihmc.us/rid=1HDJ380WH-1FY8F8S-
1FYD/Jara%20dilemas.pdf
Jara, O. (2011). Orientaciones teórico-prácticas para la sistematización de
experiencias. Centro de Estudios y Publicaciones Alforja.
Leguizamón, M. (2010). La educación musical y la discapacidad. II Congreso
Iberoamericano de Investigación Artística y Proyectual y V Jornada de
Investigación en Disciplinas Artísticas y Proyectuales. La Plata.
Obtenido de http://sedici.unlp.edu.ar/handle/10915/39492
Ley 982 de 2005. (2 de agosto de 2005). Congreso de la República. Obtenido de
https://www.alcaldiabogota.gov.co/sisjur/normas/Norma1.jsp?i=17283
Ley General de Educación de 1970. (4 de agosto de 1970). Jefatura del Estado.
Obtenido de https://www.boe.es/boe/dias/1970/08/06/pdfs/A12525-
12546.pdf
‒ ‒
Ley Orgánica de Educación. (3 de mayo de 2006). Jefatura del Estado. Obtenido
de https://www.boe.es/eli/es/lo/2006/05/03/2/con
Ley Orgánica General del Sistema Educativo. (3 de octubre de 1990). Jefatura del
Estado. Obtenido de
https://www.boe.es/boe/dias/1990/10/04/pdfs/A28927-28942.pdf
Mansion, M. (1974). El estudio del canto. Ricordi.
Mareño, M., & Manzuero, F. (2010). La discapacitación social del "diferente".
Revista Sociológica del Pensamiento Crítico, 4(1), 95-105. Obtenido de
http://scholarlyexchange.org/ojs/index.php/InterSoc/article/view/4564
Miller, R. (2000). Training soprano voices. Oxford University Press.
Ministerio de Educación Nacional. (2020). Lineamientos Política de Educación
Superior Inclusiva e Intercultural. Obtenido de
https://www.mineducacion.gov.co/1759/w3-article-
357277.html?_noredirect=1
Océano. (1996). Diccionario de medicina. Mosby.
Páramo, P. (2017). La investigación en ciencias sociales: técnicas de recolección
de la información. Universidad Cooperativa de Colombia.
Rodríguez, N., Daza, A., & Monroy, E. (2019). Propuesta de formación
profesoral en generación de adaptaciones para la educación superior.
Revista Científica Virtual Hexágono Pedagógico, 10(1), 136-144.
doi:https://doi.org/10.22519/2145888X.1493
Segre, R., & Naidich, S. (1981). Principios de foniatría para alumnos y
profesionales de canto y dicción. Editorial Médica Panamericana S. A.
Seidner, W., & Wendler, J. (1982). La voz del cantante. Bases foniátricas para la
enseñanza del canto. Henschel Arte y Sociedad.
Trallero, C. (2008). El oído musical. Obtenido de
http://diposit.ub.edu/dspace/bitstream/2445/11525/1/EL%20OIDO%20
MUSICAL.pdf
Universidad Pedagógica Nacional. (2009). Manos y pensamiento: inclusión de
estudiantes sordos a la vida universitaria. Universidad Pedagógica
Nacional.
Villena, M., Vicente, A., & Vicente, M. (1998). Pedagogía musical activa.
Corrientes contemporáneas. Anales de Pedagogía, 16, 101-122.
Obtenido de
https://revistas.um.es/analespedagogia/article/view/285621/207351
Zambrano, A. (2016). Pedagogía y didáctica: esbozo de las diferencias, tensiones
y relaciones de dos campos. Praxis y Saber, 7(13), 45-61.
doi:https://doi.org/10.19053/22160159.4159
‒ ‒
CAPÍTULO 96
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
investigación, ya que los resultados de las mismas pueden derivarse en
conseguir una mejora sustancial del sistema educativo acorde con las
necesidades emergentes en los diferentes niveles de enseñanza, tanto
obligatorios como no obligatorios.
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
3.1. MUESTRA
‒ ‒
edades comprendidas entre 25-50 años con una media de edad de 34,5
años. De ellos n=16 son de La Rioja Alta (17,6%); n=44 de La Rioja
Media (48,3%); y, n=31 de La Rioja Baja (34,1%), como se representa
en la Figura 5.
3.2. INSTRUMENTO
‒ ‒
3.3. DISEÑO
‒ ‒
extraídos de la literatura científica al respecto. Estos ejes fue-
ron: experiencia, formación, percepción, enseñanza-aprendi-
zaje y evaluación.
‒ ‒
en las respuestas doblemente formuladas, se eliminarán dichos
Cuestionarios.
Para realizar los análisis, se ha dispuesto del programa IBM SPSS Sta-
tistics (versión 27.0).
4. RESULTADOS
‒ ‒
4.1. VALORES DE LAS RESPUESTAS SEGÚN LOS EJES-BASE TEMÁTICOS
QUE ORGANIZAN EL CONTENIDO DEL CUESTIONARIO
Ejes F p Ƞ2
Experiencia ,47 , 216 , 034
Formación 4,84 ,010* , 099
Percepción ,61 , 547 , 014
Enseñanza-aprendi-
2,51 , 087 , 054
zaje
Evaluación 2,02 , 139 , 044
TABLA 3. Eje Formación: comparación entre los conservatorios de Haro, Logroño y Ca-
lahorra
‒ ‒
p=,369) y Haro-Calahorra (F=,38; p=,541). Por otra parte, hay diferen-
cias estadísticamente significativas entre estos conservatorios (p=,021
y p=,004) con un nivel de significación de p<,05; lo cual indica que,
respecto al eje de Formación, los conservatorios de música de Haro y
de Logroño y los de Haro y Calahorra, se comportan de diferente ma-
nera y tienen distintas características que sería interesante comprobar
cualitativamente en qué consisten.
La tercera comparativa de resultados en función del eje-base
Formación, que se ha realizado entre el conservatorio de Logroño y el
conservatorio de Calahorra. Los resultados reportan valores no
significativos (F=,07; p=,797) sin significación estadística de
diferencias (p=,245). Es decir, las características de los conservatorios
de Logroño y Calahorra son similares respecto al eje Formación.
b) Resultados en función de la situación administrativa
Seguidamente, para cada uno de los ejes-base considerados, en la Tabla
4 se presentan los resultados en función del factor de situación admi-
nistrativa. En esta ocasión, como únicamente existen dos componentes
(funcionario interino y funcionario de carrera), se ha calculado la
prueba de Levene y el valor t de Student.
‒ ‒
La Tabla 4 reporta un valor no estadísticamente significativo en la
prueba de Levene en todos los ejes-base de estudio (F=3,52 y p=,640;
F=,27 y p=,606; F=4,71 y p=,330; F=,10 y p=,751; F=,23 y p=,630),
comprobando su homocedasticidad. Por otra parte, hay diferencias es-
tadísticamente significativas únicamente en el eje Experiencia
(p=,000); lo cual indica que, la situación administrativa es un factor
que está influido por la experiencia.
c) Resultados en función del departamento de trabajo
A continuación, en la Tabla 5 se muestran los resultados del análisis
ANOVA de los ejes-base en función del departamento de trabajo.
Ejes F p Ƞ2
Experiencia ,37 , 777 , 012
Formación 2,14 ,101 , 069
Percepción ,42 , 736 , 014
Enseñanza-aprendi-
2,92 , 039* , 091
zaje
Evaluación 1,89 , 137 , 061
Tal como recoge la Tabla 5, se aprecian diferencias estadísticamente
significativas en el eje Enseñanza-aprendizaje (F=2,92; p=,039),
procediendo a su estudio individualizado. Dada la existencia de 4
departamentos: a) Instrumentos no sinfónicos, b) Cuerda, c) Viento-
Percusión, y d) Asignaturas teóricas (lenguaje musical, armonía e
historia), se presentan a continuación los resultados compartivos entre
ellos, mediante la prueba de t de Student para la igualdad de medias.
‒ ‒
TABLA 6. Eje Enseñanza-aprendizaje: comparación entre los departamentos de trabajo
Ejes F p Ƞ2
Experiencia 15,74 , 000* , 263
Formación ,75 , 474 , 017
Percepción ,61 , 546 , 014
Enseñanza-aprendi- ,77 , 465 , 017
zaje
Evaluación ,41 , 665 , 009
‒ ‒
Tal como se observa en la Tabla 7, existen diferencias estadísticamente
significativas únicamente en el eje Experiencia (F=15,74; p=,000). La
Tabla 18 representa los resultados del análisis entre el eje-base
Experiencia con la antigüedad en el puesto, atendiendo al intervalo de:
a) menos de 5 años, b) de 5 a 15 años y, c) más de 15 años.
‒ ‒
4.3. PERFILES DEL PROFESORADO
TABLA 10. Ejes-base: resultados análisis multivariante en función de los 4 perfiles de pro-
fesorado
Ejes F p Ƞ2
Experiencia 145,10 , 000* , 833
Formación 33,80 , 000* , 538
Enseñanza-aprendi-
5,31 , 002* , 155
zaje
‒ ‒
comparando cada uno de los 4 perfiles de profesorado de conservatorio
con los otros tres. Para ello, la Tabla 11 muestra la dependencia de los
cuatro perfiles de profesores de conservatorio mediante la prueba post
hoc de múltiples comparaciones de Bonferroni (Goss y Meneses, 2019).
Confianza 95%
Perfiles p
Inferior Superior
Perfil 1 Perfil 2 ,000* 2,51 3,82
Perfil 3 ,000* 1,52 2,83
Perfil 4 ,000* 4,44 5,79
Perfil 2 Perfil 1 ,000* -3,82 -2,51
Perfil 3 ,000* -1,63 -,35
Perfil 4 ,000* 1,28 2,61
Perfil 3 Perfil 1 ,000* -2,83 -1,52
Perfil 2 ,000* ,35 1,63
Perfil 4 ,000* 2,27 3,60
Perfil 4 Perfil 1 ,000* -5,79 -4,44
Perfil 2 ,000* -2,61 -1,28
Perfil 3 ,000* -3,60 -2,27
‒ ‒
TABLA 12. Eje Formación: comparación entre los 4 perfiles de profesorado
Confianza 95%
Perfiles p Inferior Superior
Perfil 1 Perfil 2 1,000 -,62 1,14
Perfil 3 , 000* 1,82 3,58
Perfil 4 ,000* 1,19 3,01
Perfil 2 Perfil 1 1,000 -1,14 ,63
Perfil 3 ,000* 1,59 3,31
Perfil 4 ,000* ,95 2,74
Perfil 3 Perfil 1 ,000* -3,58 -1,82
Perfil 2 ,000* -3,31 -1,59
Perfil 4 , 431 -1,49 ,29
Perfil 4 Perfil 1 ,000* -3,01 -1,19
Perfil 2 ,000* -2,74 -,95
Perfil 3 , 431 -,29 1,49
‒ ‒
TABLA 13. Eje Enseñanza-aprendizaje: comparación entre los 4 perfiles de profesorado
Confianza 95%
Perfiles p Inferior Superior
Perfil 1 Perfil 2 ,046* ,01 1,33
Perfil 3 ,001* ,29 1,62
Perfil 4 ,033* -,06 1,31
Perfil 2 Perfil 1 ,046* -1,33 -,01
Perfil 3 1,000 -,36 ,93
Perfil 4 1,000 -,71 ,63
Perfil 3 Perfil 1 ,001* -1,62 -,29
Perfil 2 1,000 -,93 ,36
Perfil 4 1,000 -1,00 ,34
Perfil 4 Perfil 1 ,033* -1,31 ,06
Perfil 2 1,000 -,63 ,71
Perfil 3 1,000 -,34 1,00
‒ ‒
FIGURA 1. Dendograma agrupamientos clústeres
‒ ‒
FIGURA 2. Perfiles profesionales de los profesores de conservatorios de La Rioj
8
VALOR DE LOS CENTROIDES
7
6
5
4
3
2
1
0
EXPERIENCIA FORMACIÓN ENSEÑANZA-
APRENDIZAJE
‒ ‒
‒ Además, observando los resultados del análisis post hoc de
Bonferroni, se evidencia que los perfiles 1 y perfil 2 se com-
portan de manera similar respecto al eje Formación y los per-
files 2, perfil 3 y perfil 4 lo hacen con respecto al eje Ense-
ñanza-aprendizaje.
5. CONCLUSIÓN-DISCUSIÓN
‒ ‒
Según el comportamiento del profesorado, se han evidenciado 4 perfiles
diferentes, conformados por 22, 24, 24 y 21 docentes cada uno. Las pun-
tuaciones medias obtenidas de los perfiles, en función de los 3 ejes-base
Experiencia acumulada, Formación permanente y Enseñanza-aprendi-
zaje, muestran a su vez un subagrupamiento, dando respuesta al Objetivo
Específico 1.
‒ ‒
En el eje Enseñanza-aprendizaje, los cuatro perfiles obtienen puntua-
ciones bajas o muy bajas. El perfil 1, con una puntuación media de 4,46,
representa el 24% del profesorado de los conservatorios de música en
La Rioja, mientras que los otros tres perfiles, se comportan de una ma-
nera similar, con valores que van de 3,51 a 3,83, representando el 76%
del profesorado.
‒ ‒
número elevado de profesores con deseo de formarse y crecer.
100% 100%
100
80 80% 80%
60 60% 60%
40 40% 40%
20 20% 20%
0 0% 0%
Enseñanza-
Experiencia muy baja aprendizaje muy
bajo
Exoeriencia baja Formación baja Enseñanza-
Experiencia media Formación media aprendizaje bajo
‒ ‒
Según los tres marcadores, se observa que habría que intervenir en orden
de prioridad, en metodologías de Enseñanza-aprendizaje, seguidamente
en factores relacionados para mejorar el eje-base Experiencia acumu-
lada (cargos de responsabilidad, investigación, actividades musicales
fuera del conservatorio) y por último, seguir muy de cerca la Formación
permanente en investigación, didáctica y nuevas tecnologías.
‒ ‒
2002; Gillanders y Martínez, 2005; Morales, Ortega, Conesa y Ruiz,
2017; Gaines, 2018; Carmona, 2021).
El que el profesorado de conservatorio esté formado en investigación,
conlleva a que los alumnos de Trabajo Fin de Estudios de último curso
de carrera, no se pregunten el por qué tienen que destinar un tiempo tan
valioso para realizar dicha asignatura cuando podían emplearlo en tocar
su instrumento, sintomatología de que algo no está funcionando bien en
el diseño de los estudios de conservatorio (Aróstegui, 2016; Macías,
2017; Curbelo, 2018; Narejos, 2020). Es por ello, que la formación ini-
cial y continua del profesorado, la investigación y el trabajo interdisciplinar
toman una importancia decisiva (López, 2013; Fernández y Casas, 2016).
Por otra parte, es necesario resaltar la conveniencia de que las personas
dedicadas a la enseñanza de su instrumento musical tengan la oportuni-
dad de desarrollar en paralelo una labor interpretativa, dada la repercu-
sión positiva que tiene en su trabajo docente con alumnos de cualquier
nivel, ya que constituye una parte fundamental de la formación continua
del profesor y de su labor docente, y debería ser fomentada por los cen-
tros, cuando no organizada directamente por ellos (Ruiz, 2020). Se re-
fiere a una actividad eminentemente práctica que necesita mantenerse
actualizada. Si una vez obtenida su plaza el profesor va perdiendo el con-
tacto con la práctica interpretativa de su instrumento, con el paso de los
años su sistema de enseñanza necesariamente se resentirá, mientras que
si consigue mantenerse en activo seguirá adquiriendo nuevas experien-
cias que podrá transmitir de primera mano a su alumnado.
Actualmente el sistema de contratación de los conservatorios superiores
es el mismo que el de la enseñanza secundaria. Por ello, para poder
ofrecer unos planes de estudios musicales superiores de calidad, es ne-
cesaria una buena selección del profesorado, que debería tener: una
carga lectiva inferior, un perfil especializado a través de una experiencia
investigadora, y una compaginación entre la actividad docente y la ac-
tividad investigadora (Rico, 2018).
‒ ‒
sólo se pide como requisito de participación, una titulación de máster en
investigación de 60 créditos ECTS, y que en muchos casos dicho cuerpo
se ha estado supliendo por profesorado que mínimamente cumplía con
los requisitos (Vieites, 2020). No alienta la búsqueda de un adecuado
estatus administrativo, ya que actualmente la legislación que regula el
funcionamiento de las enseñanzas en los conservatorios superiores, es
común a la de enseñanza secundaria obligatoria, aunque la titulación que
se obtiene al finalizarlas, sea equivalente al grado universitario (Jiménez
y Ruiz, 2019). Además existe una insuficiente atención prestada por las
administraciones educativas y todavía faltan compromisos investigado-
res y conclusivos (Tello, 2020).
Los conservatorios profesionales siguen enmarcados en programacio-
nes didácticas obsoletas, apostando por lo tradicional como la mejor
metodología, hasta que llegue una normativa que les obligue a pasar a
las programaciones didácticas por competencias (Vernia, 2020). No se
ha encontrado una renovación académica significativa en cuanto a las
actuales demandas, que pasan por la docencia, la interpretación y la
reinvención para acceder a un campo laboral relacionado con la forma-
ción recibida. Como posibles líneas de formación que puedan adaptarse
a cualquier perfil docente, se puede hablar: interdisciplinar, cooperativa
y colaborativa, investigadora, especializada, permanente, y entre igua-
les (Vernia, 2019).
Por ende, los centros superiores de educación musical han seguido la
misma línea que las carreras universitarias más prácticas, es decir, han
intentado formar a sus especialistas para la actividad principal, en este
caso la interpretación. No obstante, la realidad laboral se debería impo-
ner no como un lastre que mine las horas de estudio interpretativo con
numerosas materias didácticas, sino como una revisión de todas las
asignaturas comunes o de formación básica desde el punto de vista di-
dáctico. La formación didáctica de los futuros docentes musicales no
tendría que limitarse al máster de profesorado, porque su formación pe-
dagógica no se tiene que desvincular de la realidad y, por tanto, debería
ser una constante. Se precisan cambios sustanciales en el enfoque del
proceso de formación, es decir, que la relación práctica-teoría debería
ser mayor, así como tendrían que impulsarse mayor cantidad de
‒ ‒
proyectos de investigación e innovación dirigidos a una aplicación con-
tinua en el aula y abierta al cambio, y no como meras actuaciones pun-
tuales (Bernabé, 2015).
Esta tesis doctoral, trata de contribuir a las investigaciones necesarias
para realizar una verdadera labor de andamiaje que permita a los profe-
sores de conservatorio conectar teoría y práctica, más aún, cuando la reali-
dad laboral del titulado superior de música, le obliga a ejercer en la mayoría
de casos como docente, bien en centros de enseñanza secundaria obligato-
ria, o con más suerte en conservatorios profesionales e incluso superiores,
más que como músico profesional (Bernabé y Torres, 2017).
Por último, respecto al eje Enseñanza-aprendizaje, se constata que a
menudo, las enseñanzas musicales en los conservatorios de música se
basan en metodologías arraigadas a la tradición, donde el docente no
siempre desarrolla en profundidad los conocimientos y habilidades psi-
copedagógicas adecuadas para la práctica educativa (Campayo y Ca-
bedo, 2018).
Aunque la búsqueda de una mejora en la calidad educativa no se realiza
desde solamente un punto de vista metodológico (Lerma, 2020), mejo-
rar en investigaciones metodológicas de enseñanza-aprendizaje, im-
plica bajar el grado de abandono en los conservatorios profesionales,
que es superior al 80%, y subir el 10% de los estudiantes que obtienen
una titulación superior de ese 20% restante que acaba el grado profe-
sional (Querol, 2017). Hay que evitar que las prácticas educativas inter-
pretativas en buena parte de los conservatorios españoles sigan ancladas
en modelos y métodos tradicionales, propios de anteriores culturas del
aprendizaje, donde destaca la figura del maestro como modelo supremo,
considerado artista antes que docente, y cuya reputación viene determi-
nada por su relación con instrumentistas legendarios o por su pertenencia
a determinadas escuelas, sin una carga de contenidos educativos y psico-
pedagógicos sólida y donde el estudiante se limita a ser un clon de su pro-
pio profesor (Bautista y Fernández, 2018).
Además, priorizar la salud física y psíquica del educando a su excelencia
debe ser un primer eslabón hacia una educación no solo humanamente
compatible, sino sostenible en el tiempo. Son los avances científicos
‒ ‒
dentro del área de la Psicología de la música los que muestran la necesidad
de ensanchar el marco de la enseñanza musical, incorporando además del
aprendizaje y dominio de destrezas técnico-instrumentales junto a otras
disciplinas teóricas, el desarrollo de aspectos psicológicos que tienen
que ver con el aprendizaje emocional, la neuroeducación, los procesos
motivacionales, la autoconfianza o el propio autoconcepto musical (Fer-
nández, de Paula y Blanco, 2021).
Por ende, se evidencia una falta de correspondencia curricular y com-
petencial existente entre las enseñanzas profesionales y superiores de
música de conservatorio, agravada por la transferencia competencial
autonómica de la legislación vigente en España, la cual genera una ma-
yor desigualdad geográfica. La realidad de un espacio superior artístico
que oferta diferentes líneas de estudios (interpretación, pedagogía, jazz,
música antigua, dirección, sonología, etc.) está siendo enfocada previa-
mente mediante una línea única de interpretación en las enseñanzas pro-
fesionales, que no necesariamente capacita ni para las competencias re-
queridas en el acceso ni en el currículum. Para ello, se debería plantear
una diversificación curricular en los itinerarios de estudios profesiona-
les mediante el uso de metodologías de enseñanza-aprendizaje y deter-
minación competencial específicas, respetando el currículum actual de
las citadas enseñanzas (Pascual y Peñalver, 2019).
El profesorado parte de una formación instrumental y competencia la-
boral común, garantizada por la posesión de una titulación similar de
acceso a la función pública docente de enseñanzas artístico-musicales,
pero el seguimiento en clase de los métodos estudiados puede condi-
cionar el modo en que los profesores complementan la formación téc-
nica del alumnado (Hallam, 2013). El profesorado debe tomar conciencia
de la disponibilidad actual de fuentes de información científica que le
brindan nuevos conocimientos sobre la enseñanza de su instrumento a par-
tir de diferentes hallazgos de estudios científicos sobre neuropsicología,
acústica o biomecánica aplicada al estudio de instrumentos musicales, así
como otros relacionados con la orientación didáctica del profesor (Lo-
renzo, Muñoz y Soares, 2018). Parece que puede existir una limitación
derivada del perfil profesional del docente de música, tradicionalmente
ambivalente entre la identidad como instrumentista o pedagogo. Por
‒ ‒
ello, la búsqueda de la excelencia interpretativa no puede ser el argu-
mento para basar la enseñanza en repetir hasta que salga, error común
en la enseñanza-aprendizaje musical de conservatorios (Sloboda,
2014).
Las metodologías didácticas musicales necesitan un cambio de cara al
futuro, debido a que las diferentes leyes educativas han sido más es-
tructurales que formales, ya que la administración no ha puesto al ser-
vicio del profesorado los medios adecuados para llevar a cabo dichos
planes (Rodríguez, 2018). Necesitan una transformación que lleva im-
plícita una formación específica y complementaria para el profesorado.
Por tanto, además de una formación en pedagogía, el profesorado de
conservatorio reclama más formación en aspectos como la inteligencia
emocional, la gestión de grupos y el manejo de recursos tecnológicos
(Muñoz y Bonastre, 2013). Por ello, la práctica educativa deberá diri-
girse, hacia la implementación de este tipo de estrategias y recursos,
optimizando la calidad de la enseñanza con una docencia más eficiente
(López, 2013). Aplicar una perspectiva de investigación a la reflexión
didáctica de la música puede apoyar el aprendizaje profundo en la teoría
de la educación musical (Holgersen, 2017), ya que puede informar los
enfoques pedagógicos en la formación del profesorado de música
(Georgii, Burnard y Holgersen, 2016).
‒ ‒
de conservatorio, ya que aunque la muestra analizada haya sido prácti-
camente la totalidad del profesorado de conservatorio de La Rioja
(92%), en un principio hubo que matizar y explicar con gran detalle el
motivo del estudio y su anonimato en las respuestas, ya que el profeso-
rado no está acostumbrado a este tipo de investigaciones.
Como proyecciones futuras se constata la necesidad de continuar inves-
tigando para la mejora del sistema formativo musical. Por un lado, la
repetición en el futuro de estudios similares sobre el mismo objeto sería
deseable, con el fin de realizar un seguimiento de la implantación aquí
tratada. Se podría además extrapolar este tipo de investigación a otros
conservatorios profesionales y superiores de otras Comunidades Autó-
nomas y luego contrastar los resultados. Utilizando también la técnica
de clúster jerarquizado y obteniendo un coeficiente de generalizabili-
dad.
También se plantean nuevas líneas de investigación que este trabajo no
ha desvelado, como la aplicación de un programa de mejora en base a
los perfiles de los profesores de conservatorio aquí diagnosticados, y la
posterior recogida de datos: implementación de programas de forma-
ción continua, indicadores para la capacitación y selección del profeso-
rado de conservatorio, etc.
6. REFERENCIAS
‒ ‒
Bautista, A. y Fernández, B. (2018). Monográfico sobre Investigación en
Interpretación Musical: Implicaciones para el desarrollo Profesional
Docente. Psychology, Society and Education, 10 (1), 1-13.
Bernabé, M. (2015). Formación para la Ciudadanía Intercultural. ¿Qué sucede en
los Conservatorios Superiores? REICE, 13 (3), 21-36.
Bernabé, M. y Torres, M. (2017). ¿Qué formación didáctica recibe el futuro
profesorado de clarinete en el grado superior? Reflexiones y propuesta
curricular. Arbor, 193, 1-29.
Bisquerra, R. (2014). Metodología de la Investigación Educativa. Madrid: La
Muralla.
Campayo, E. y Cabedo, A. (2018). Investigación-acción como recurso para la
innovación y mejora de la práctica educativa en conservatorios: una
experiencia en las enseñanzas elementales de música en España.
Psychology, Society, & Education, 10 (1), 15-36.
Cardona, I. (2020, 14 de octubre). Trabajo en un conservatorio…¿soy músico o
pedagogo? https://www.melomanodigital.com/trabajo-en-un-
conservatorio-soy-musico-o-pedagogo.
Carmona, J. C. (2021, 16 de febrero). ¿Por qué es importante que los estudios
superiores de Música se cursen en la universidad?
https://elcorreoweb.es/opinion/ columnas/por-que-es-importante-
que-los-estudios-superiores-de-musica-se-cur sen-en-la-universidad-
AF7135929.
Cohen, L., Manion, L. y Morrison, K. (2018). Research Methods in Education.
Nueva York: Routledge.
Curbelo, O. (2018). La investigación en las enseñanzas superiores de música a
través del análisis de los trabajos fin de estudios en el Conservatorio
Superior de Música de Canarias. Edunovatic 2017. Conference
proceedings, 901-911.
Díaz, M. T. (2015). Los inicios de la profesión docente en los conservatorios de
música. Un estudio desde la perspectiva de los protagonistas. Revista
Musical Chilena, 223, 86-97.
Díaz, M. T. (2016, 6 de mayo). Los inicios de la profesión docente en los
conservatorios de música. http://socialmusik.es/inicios-profesion-
docente-conservatorios-musica.
Fernández, B. y Casas, A. (2016). Re-lecturas sobre Wundt y Seashore y
nacimiento de AEPMIM. La psicología en la música y con los músicos.
Epistemus, 4 (1), 133-160.
‒ ‒
Fernández, B., de Paula, F. y Blanco, P. (2021). Profesionales de la psicología
como docentes en los conservatorios de música: hacia una educación
musical sostenible. Papeles del Psicólogo, 42(1), 37-48.
Gaines, J. M. (2018). Music Technology and the Conservatory Curriculum [Tesis
doctoral, Universidad de Columbia]. Repositorio institucional de la
Universidad de Columbia. https://doi.org/10.7916/D8NP3MW2.
Georgii, E., Burnard, P., y Holgersen, S. (2016). Professional Knowledge in
Music Teacher Education. Aldershot: Routledge.
Gillanders, C. y Martínez, P. (2005). La investigación en el ámbito musical.
Música y educación: Revista trimestral de pedagogía musical, 64, 85-
104.
Goss, M. y Meneses, J. (2019). Análisis estadístico con JASP. Barcelona: FUOC.
Hallam, S. (2013). What predicts level of expertise attained, quality of
performance, and future musical aspirations in young instrumental
players? Psychology of Music, 41 (3), 267- 291.
Holgersen, S. (2017). Music teacher identity and professionalism.
Utdanningsforskning i musikk - didaktiske, sosiologiske og filosofiske
perspektiver, 1, 27-36.
Ibeas, M. (2015). Enseñanza-aprendizaje musical: una visión de los docentes de
instrumento en los conservatorios profesionales [Tesis doctoral,
Universidad del País Vasco]. Repositorio institucional de la Universidad
del País Vasco.
https://addi.ehu.es/bitstream/handle/10810/18219/TESIS_IBEAS_LOPEZ_MAR
TA.pdf.
Jiménez, M. A. y Ruiz, F. J. (2019). La incorporación al mercado laboral de los
egresados de conservatorio. Un estudio de caso de los titulados de
guitarra del Real Conservatorio Superior de Música de Granada, España.
AV Notas, 8, 93-108.
Jones, H. (2019). Ciencia de los datos: La guía definitiva sobre análisis de datos,
minería de datos, almacenamiento de datos, visualización de datos, Big
Data para empresas y aprendizaje automático para principiantes.
Nueva York: Bravex.
Lerma, A. (2020). Estudio de caso en el Conservatorio Profesional de Música
Cristóbal de Morales con el alumnado de orquesta de 4º de Enseñanzas
Básicas y tres alumnas de 2º de Enseñanzas básicas de violín [Trabajo
de máster, UNED]. Repositorio institucional de la UNED. http://e-
spacio.uned.es/fez/view/ bibliuned:masterComEdred-Jalerma.
López, G. (2013). Concepciones y prácticas instruccionales de profesores de
instrumentos de cuerda: Influencia en las concepciones y niveles de
‒ ‒
comprensión musical de sus alumnos [Tesis doctoral, Universidad
Autónoma de Madrid]. Repositorio institucional Universidad Autónoma
de Madrid. https://repositorio.
uam.es/bitstream/handle/10486/661742/lopez_iniguez_guadalupe.pdf.
López, R. (2013). La investigación artística en los conservatorios del espacio
educativo europeo. Discusiones, modelos y propuestas. Cuadernos de
música iberoamericana, 25, 223-241.
Lorenzo, O., Muñoz, S. y Soares, F. (2018). Estudio comparativo de métodos de
iniciación al violonchelo utilizados en los conservatorios de música
andaluces. Implicaciones para el profesorado. Psychology, Society, &
Education, 10 (1), 37-54.
Macías, R. (2017). ¿Investigar en los conservatorios? Mesa redonda en las II
Jornadas de investigación musical del Conservatorio Superior de Música
de La Mancha. Consonancias, 1, 193-205.
Mateos-Aparicio, G. y Hernández, A. (2021). Análisis multivariante de datos.
Cómo buscar patrones de comportamiento en BIG DATA. Madrid:
Pirámide.
Matias, C. (2021). The Handbook of Critical Theoretical Research Methods in
Education. Nueva York: Routledge.
Morales, A., Ortega, E., Conesa, E. y Ruiz, C. (2017). Análisis bibliométrico de
la producción científica en Educación Musical en España. Revista
española de pedagogía, 75, 399-414.
Muñoz, E. y Bonastre, C. (2013). La expresividad en la música. Quodlibet, 52,
40-52.
Narejos, A. (2020). La música en la investigación artística. Perspectiva
española actual. Quodlibet, 74 (2), 117-138.
Palacio, F., Apodaca, J. y Crisci, J. (2019). Análisis multivariado para datos
biológicos. Buenos Aires: CEBBAD
Pascual, E. y Peñalver, J. (2019). Conservatorios de música en España: de 6º
curso de enseñanzas profesionales a 1º curso de enseñanzas superiores.
Revista de estudios en Música, Cognición y Cultura. 7(1), 70-88.
Pastor, P. (2002). La investigación educativa musical. Eufonía: didáctica de la
música, 26, 84-88.
Querol, C. (2017). Análisis del modelo de liderazgo en la dirección de los
conservatorios profesionales en España [Tesis doctoral, Universidad de
Granada]. Repositorio institucional de la Universidad de Granada.
https:// digibug.ugr.es/bitstream/handle/10481/47789/2675793x.pdf.
‒ ‒
Rico, C. (2018). Musicología en el Conservatorio Superior de Música de Navarra:
plan de estudios y necesidades docentes. En Actas del segundo congreso
nacional de Conservatorios Superiores de Música (Ed.), Formación y
evaluación en los diferentes niveles de la Educación Musical (pp. 75-89).
Noja: SEM-EE.
Rodríguez, M. V. (2018). Modelos de enseñanza del lenguaje musical [Tesis
doctoral, Universidad Complutense de Madrid]. Repositorio institucional
de la Universidad Complutense de Madrid.
https://eprints.ucm.es/id/eprint/49380/1/ T40289.pdf.
Ruiz, J. M. (2020). El trabajo real en el conservatorio y la selección del
profesorado. Melómano, 262, 38-42.
Slodoba, A. (2014). The Acquisition of musical Performance Expertise:
Deconstructing the Talent Account of Individual Differences in Musical
Expressivity. En K. Anders (Ed.), The Road To Excellence: the
Acquisition of Expert Performance in the Arts and Sciences, Sports, and
Games (pp. 107-126). New York and London: Psychology Press.
Suárez, J. C., Recio, P., San Luis, C. y Pozo, P. (2019). Introducción al
Análisis de Datos. Aplicaciones en Psicología y Ciencias de la Salud.
Madrid: Sanz y Torres.
Tajul, M. (2020). Learning SPSS without Pain. A Comprehensive Manual for
Data Analysis and Interpretation of Outputs. Daca: ASA Publications.
Tello, I. (2020). Acompañamiento de danza y enseñanza musical en los
conservatorios de danza: investigaciones, publicaciones y aportaciones
didácticas. AV Notas, 9, 38-58.
Vernia, A. (2019). Music education as a base for employment opportunities. Situations
and projectes in schools of music and dance. En M. Hann y F. Hofecker
(Eds.), The future of music schools (pp. 179-190). Viena:
Musikschulmanagement.
Vernia, A. (2020). Educación musical en el panorama español. Contexto, niveles y
perfiles educativos. Didacticae, 7, 17-29.
Vieites, M. F. (2020). Las enseñanzas artísticas superiores en la ordenación
educativa en España. Una visión crítica. Foro de Educación, 18 (1), 209-
232.
‒ ‒
SECCIÓN V
EXPERIENCIAS INNOVADORAS
PARA LA FORMACIÓN DOCENTE
CAPÍTULO 97
1. INTRODUCCIÓN
Existe una necesidad cada vez más urgente de que los educadores se
preparen para ser ciudadanos del mundo; personas que no solo son ca-
paces de trabajar y vivir en un entorno globalizado y rápidamente cam-
biante, sino que también poseen una reflexión crítica para mejorar su
práctica docente, su competencia intercultural y su mentalidad interna-
cional. La relevancia y el significado de preparar una ciudadanía capaz
de hacer frente a los rápidos cambios exigen oportunidades en el apren-
dizaje profesional de los docentes. Estos deberían incluir la construc-
ción de conocimientos interculturales para que las nuevas habilidades
y conceptos globales puedan incorporarse activamente en las escuelas
y aulas de todo el planeta.
Con este propósito buscamos en este estudio indagar en la posibilidad
de implementar el uso de e-porfolio, porfolio electrónico, o porfolio
digital, como una herramienta de evaluación innovadora en docentes en
formación. Esta herramienta de evaluación destaca por permitir poner
el aprendizaje en contexto, facilitar un entorno de reflexión y hacer vi-
sible las habilidades y los logros que se han conseguido desarrollar (An-
nacontini & Paiano, 2019; Bairral & dos Santos, 2012; Fuglík & To-
chácek, 2019; Lorenzo et al., 2020; May, 2013; Morris, 2020; Ross et
al., 2020; Shepherd & Skrabut, 2011). Todo esto en un entorno digital
que facilita la colaboración y la difusión de los resultados, así como el
desarrollo de la competencia digital de los futuros docentes y de
‒ ‒
aquellos en formación permanente (Cambridge, 2010). En sí mismo, el
proceso desarrollo del porfolio ayuda a los estudiantes a replantear
cómo se encuentran en su proceso de aprendizaje; facilita que los estu-
diantes adultos vean la educación de manera diferente, como integra-
dora y continua; además, este instrumento fomenta el aprendizaje sig-
nificativo logros (Bairral & dos Santos, 2012; Cameron & Miller, 2014;
Chuang, 2010; Darling‐Hammond et al., 2010; Jones & Shelton, 2011;
May, 2013; Shepherd & Skrabut, 2011).
Por otro lado, se plantea de esta manera un estudio formal y sistemati-
zado que considera aspectos tecno-pedagógicos sobre la utilización de
una herramienta como el Wakelet como soporte del porfolio electrónico
y la propuesta de un modelo de e-porfolio para la realización en base a
esta herramienta.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
3. METODOLOGÍA Y DISEÑO DE LA INVESTIGACIÓN
‒ ‒
‒ Ha facilitado el aprendizaje de forma autónoma.
‒ Ha permitido mejorar el proceso de aprendizaje de la materia.
‒ Ha facilitado la visualización de los contenidos de la materia.
‒ ‒
4. RESULTADOS
22%
64%
Herramientas digitales
Características y usos
Aprendizaje de idiomas
Reconocimiento profesional
‒ ‒
A continuación, en la tabla 1 podemos ver las referencias bibliográficas
a los autores que se han considerado relevantes para este estudio en base
a los 4 ejes de referencia que se han estimado relevantes: características
y uso; reconocimiento profesional; aprendizaje de idiomas y herramien-
tas digitales.
& Urbina, 2012; Trevitt et al., 2012; Kruger et al., 2013; May,
2013; Samaras & Fox, 2013; Cameron & Miller, 2014; Tur & Ur-
bina, 2014a; Tur & Urbina, 2014b; Wuetherick & Dickinson,
2015; Digión et al., 2016; Rust & Ikard, 2016; Stocks & Trevitt,
2016; McDougall & Holden, 2017; Farrell, 2018; Farrell, 2019;
Salazar Mercado & Arévalo Duarte, 2019; Allela et al., 2020; Lo-
renzo et al., 2020; García-Zabaleta et al., 2020; Gutiérrez Morales
& Sánchez Mendiola, 2020; Morris, 2020.
Herramientas Aprendizaje de Reconocimiento
profesional
‒ ‒
4.1.1. Los e- porfolios en educación
‒ ‒
cristaliza las percepciones, y anticipa la dirección futura (Jones & Shel-
ton, 2011, p. 31).
‒ ‒
pasaríamos a la actividad de reorganizar toda la evidencia recopilada en
nuevos bloques temáticos, como temas basados en competencias o ba-
sados en objetivos. El objetivo de este último paso es presentar el apren-
dizaje, por ejemplo, para la evaluación. La reflexión no se basa en una
única evidencia, sino en el proceso de aprendizaje en su conjunto (Cas-
tañeda & Soto, 2010; Darling‐Hammond et al., 2010; Farrell, 2019; Jo-
nes & Shelton, 2011; Samaras & Fox, 2013; Santamaría, 2010; Shih et
al., 2010; Tur & Urbina, 2012).
Bairral & dos Santos (2012) llegan a proponer que la importancia del
porfolio no radia en su producto final en sí, sino en el proceso de cons-
trucción y deconstrucción que implica el proceso de reflexión y pensa-
miento crítico que lo acompaña. Para concluir, el último paso llegaría-
mos a la colaboración en donde pueden entrar en juego simplemente el
vínculo entre el docente y el estudiante o incluso entre los estudiantes
entre sí (Jones & Shelton, 2011; Tur & Urbina, 2012, 2014; Zubizarreta,
J, 2009).
Cabe destacar que Tur y Urbina (2012) establecen una comparativa to-
mando estos principales procesos de los e-porfolios para establecer una
comparativa con los PLE (Entorno Personal de Aprendizaje o según sus
siglas en inglés Personal Learning Eviroment). Los PLE se definen
como la combinación de elementos: recursos, actividades, y fuentes de
información, que se utilizan en para la gestión personal del aprendizaje.
De forma similar a los porfolios, tal y como se puede ver en el gráfico
3, en el desarrollo de los PLE se considera que existen tres procesos
principales: leer, reflexionar y compartir (Digión et al., 2016; Shepherd
& Skrabut, 2011; Tur & Urbina, 2012).
En este sentido, en primer lugar, reflexionar sobre el aprendizaje es un
proceso básico que tienen en común los e-porfolios y el PLE. Sin em-
bargo, también se pueden observar algunas ligeras diferencias en ambos
procesos de reflexión. En los porfolios electrónicos, la reflexión gene-
ralmente tiene como objetivo desarrollar habilidades de metacognición.
Mientras que, en los PLE, la reflexión también puede involucrar los
procesos de creación, redacción, análisis y publicación. De esta manera,
la reflexión en los PLE también incluye el proceso de documentación
de los e-porfolios (Digión et al., 2016; Tur & Urbina, 2012).
‒ ‒
GRÁFICO 3. Relación entre los PLE y los e-porfolios.
PLE
• Lectura
E-PORTFOLIO
• Reflexión y
documentación
• Colaborar y compartir
‒ ‒
demandas de un portafolio reflexivo (Jones & Shelton, 2011; Stocks &
Trevitt, 2016; Trevitt et al., 2012).
Existen diversos tipos de porfolios dependiendo de su finalidad (Farrell,
2018; Kruger et al., 2013). Concretamente, Farrell (2018) concreta cua-
tro en base a sus usos y propósitos para la práctica del e-portfolio en la
educación superior:
1. Evaluación: Los porfolios se han convertido en una forma co-
mún de evaluación sumativa en todas las disciplinas de la edu-
cación superior. La razón fundamental para adoptar los porfo-
lios electrónicos para la evaluación es doble: en primer lugar,
los porfolios electrónicos pueden ser una forma de evaluación
auténtica, significativa y centrada en el estudiante porque cap-
tura evidencia del aprendizaje de los estudiantes en contexto y
a lo largo del tiempo. En segundo lugar, la evaluación del por-
tafolio electrónico es un método válido y confiable de evalua-
ción de la demostración de los resultados del aprendizaje por
parte de los estudiantes.
‒ ‒
4. Carreras: Los objetivos principales de los porfolios de trabajos
profesionales son apoyar la transición de los estudiantes de la
educación superior al lugar de trabajo y desarrollar las habili-
dades de empleabilidad de los estudiantes.
Samaras & Fox (2013) y Allela et al. (2020) entre otros, examinaron la
aplicabilidad del uso de los porfolios electrónicos en docentes en for-
mación. Los participantes catalogaron sus experiencias culturales en un
portafolio electrónico que incluye narrativas personales y metodologías
visuales utilizando las plataformas electrónicas de videos, historias di-
gitales, fotografías y blogs. Este intercambio de ideas críticas y refle-
xiones a través del portafolio electrónico incluía reflexiones de los do-
centes y planes de acción de libre redacción y sugerencias para la im-
plementación de la investigación.
A continuación, exploramos algunas de las tensiones clave que están
involucradas en el uso de los porfolios (Allela etal., 2020; An & Wilder,
2010; Bairral & dos Santos, 2012; Darling‐Hammond et al., 2010; Di-
gión et al., 2016; García-Zabaleta et al., 2020; Gutiérrez Morales &
Sánchez Mendiola, 2020; Ritzhaupt et al., 2010; Samaras & Fox, 2013;
Trevitt et al., 2012):
‒ ¿Qué se evalúa con los porfolios? Aquí, la pregunta, es si la
“práctica” a representar es la enseñanza o el aprendizaje de los
participantes sobre la enseñanza (es decir, representaciones
del progreso para convertirse en un “mejor” docente). Se trata
de una tensión en torno a si estamos evaluando un resultado
(un producto) o un proceso. Cuando los porfolios están desti-
nados a certificar que los profesores han alcanzado un cierto
nivel de competencia como profesionales, nos inclinaríamos
por lo primero. En la medida en que los porfolios representen
evaluación en un curso que ve conscientemente a la enseñanza
(y a los docentes) como un trabajo en progreso (un proceso),
nos inclinamos hacia lo último.
‒ ‒
prueben su pensamiento, sentimientos, actitudes, valores y
toma de decisiones en un proceso de autocrítica. Sin embargo,
la mayoría de los escritos académicos, particularmente en las
ciencias, hacen que el autor sea invisible. El estilo personal y
reflexivo adoptado en los porfolios, uno que sitúa explícita-
mente al escritor como sujeto, es contracultural a gran parte
del trabajo académico tradicional. Dado que este trabajo de
reflexión y colaboración puede ser nuevo para los participan-
tes debe de reforzarse mediante seminarios, por ejemplo, de
forma que permitan que finalmente sea una parte de la activi-
dad profesional continua de los docentes.
‒ ‒
claramente con las metas y objetivos del programa para que el
cuerpo docente y los participantes puedan examinar los resul-
tados de sus experiencias y considerarlos en el contexto de los
resultados de aprendizaje deseados.
‒ ‒
formas creativas de ayudar a los participantes a beneficiarse
de la experiencia, por ejemplo, podemos (i) brindar orienta-
ción, pero ser flexibles, y (ii) sugerir formas de ayudar a los
participantes a usar el portafolio como un vehículo para crear
documentación que sirven para múltiples propósitos.
‒ ‒
4.2. ANÁLISIS DEL WAKELET COMO PLATAFORMA PARA EL
E-PORFOLIO
‒ ‒
GRÁFICO 4. Relación de herramientas necesarias para el desarrollo de las fases de los
e-porfolios.
REFLEXIONAR
COLABORAR
permitan la faciliten la faciliten
recopilación de edición y compartir la
información de creación de información
diversas fuentes. información. seleccionada y
poder trabajar en
línea con otros.
‒ ‒
‒ Imágenes
‒ enlaces a contenido que ya ha utilizado en Wakelet y a otras
webs
‒ archivos PDF
‒ tweets
‒ vídeos de YouTube
‒ enlaces a Google Drive o OneDrive
‒ enlaces a Flipgrid
‒ ‒
4.2.2. Análisis de la viabilidad del Wakelet
‒ ‒
GRÁFICO 5. Resultados del cuestionario.
0 5 10 15 20 25 30 35 40
4 3 2 1
‒ ‒
Analizando los resultados de forma individual podemos ver en el grá-
fico 7 como la tendencia general es que la valoración positiva hacia el
uso y las posibilidades del Wakelet, sea mayor en aquellos casos en los
que los usuarios de la herramienta tienen experiencia previa en la do-
cencia.
GRÁFICO 7. Respuestas diferenciando el origen de la muestra.
‒ ‒
FIGURA 2. Propuesta didáctica para la implementación del e-porfolio
‒ ‒
FIGURA 3. Visualización del e-porfolio en la herramienta Wakelet.
‒ ‒
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
7. REFERENCIAS
‒ ‒
Farrell, O. (2018). Failure to Launch: The Unfulfilled Promise of Eportfolios in
Irish higher education: An Opinion Piece. DBS Business Review, 2.
https://doi.org/10.22375/dbr.v2i0.30
Farrell, O. (2019). Developing critical thinking through eportfolio based
learning: An exploration of the experiences of non-traditional online
distance learners. http://hdl.handle.net/2262/85988
Flick, U., Von Kardoff, E., & Steinke, I. (2014). A companion to qualitative
research. Sage.
Fuglík, V., & Tochácek, D. (2019). Using an Electronic Portfolio to Support the
Learning Process of Lower-Secondary School Pupils When Choosing a
Career. E-Learning and Digital Media, 16(1), 15-25.
https://doi.org/10.1177/2042753018811868
García-Zabaleta, E., Díez-Gómez, A., Santiago Campión, R., & Valdemoros San
Emeterio, M. Á. (2020). El potencial pedagógico del Estudio de Caso
mediante el uso del e-portfolio y la e-rúbrica: Una experiencia
interdisciplinar. Edutec. Revista Electrónica de Tecnología Educativa,
74, 149-169. https://doi.org/10.21556/edutec.2020.74.1599
George D., & Mallery, P. (1995). SPSS/PC + Step by: A Simple Guide and
Reference. Belmont (CA): Wadsworth Publishing Com pany.
Graham, K. (2018). TechMatters: Doing Digital Curation with Wakelet. LOEX
Quarterly, 45, 3. https://bit.ly/3yHzboR
Gutiérrez Morales, G., & Sánchez Mendiola, M. (2020). El uso del portafolio
electrónico en evaluación educativa en Medicina. Revista Española de
Educación Médica, 1(2). https://doi.org/10.6018/edumed.445671
Horst, H. A. (2008). Blurring the boundaries: Connectivity, convergence and
communication in the new media ecology. Belong Current Horizont, 13.
https://hdl.handle.net/1959.7/uws:59490
Jones, M., & Shelton, M. (2011). Developing Your Portfolio - Enhancing Your
Learning and Showing Your Stuff: A Guide for the Early Childhood
Student or Professional (2.a ed.). Routledge.
https://doi.org/10.4324/9780203835036
Kruger, E. J., Holtzman, D. M., & Dagavarian, D. A. (2013). Comprehensive
Education Portfolio with a Career Focus. Journal of Continuing Higher
Education, 61(1), 46-53. https://doi.org/10.1080/07377363.2013.759494
Lam, R. (2018). Portfolio Assessment for the Teaching and Learning of Writing.
Springer Singapore. https://doi.org/10.1007/978-981-13-1174-1
López-Fernández, O. (2008). Digital learner portfolio as a tool for innovating
assessment in the European Higher Education Area. Interactive
Educational Multimedia, 16, 54 - 65. https://bit.ly/2WF4W4M
‒ ‒
López-Fernández, O., & Rodríguez-Illera, J. L. (2009). Investigating university
students’ adaptation to a digital learner course portfolio. Computers &
Education, 52(3), 608-616.
https://doi.org/10.1016/j.compedu.2008.11.003
Lorenzo, A. R., Camiño, R. R., Pérez, B. M. H., Hernández, M. G., & Herrera, L.
S. (2020). El portafolio electrónico como herramienta para el
aprendizaje en red. 15, 6. https://bit.ly/2WIduIb
May, T. (2013). Identifying the Characteristics of Written Formative Feedback
Used by Assessors in Work-Based Qualifications. Journal of Vocational
Education and Training, 65(1), 18-32.
https://doi.org/10.1080/13636820.2012.727855
Mosquera, I. (mayo de 2021). Wakelet: la navaja suiza de las herramientas
digitales. Obtenido de Observatorio de tecnología educativa nº 50,
INTEF: https://bit.ly/38q7S7t
Morris, T. H. (2020). Creativity through Self-Directed Learning: Three Distinct
Dimensions of Teacher Support. International Journal of Lifelong
Education, 39(2), 168-178.
https://doi.org/10.1080/02601370.2020.1727577
Perennes, L., & Duhaut, D. (2009). E-portfolio for Lifelong Learning. 2009
International Conference on Education Technology and Computer, 101-
105. https://doi.org/10.1109/ICETC.2009.43
Ritzhaupt, A. D., Ndoye, A., & Parker, M. A. (2010). Validation of the Electronic
Portfolio Student Perspective Instrument (EPSPI): Conditions under a
Different Integration Initiative. Journal of Digital Learning in Teacher
Education, 26(3), 111-119. https://bit.ly/3jtBpUk
Ross, J., Curwood, J. S., & Bell, A. (2020). A Multimodal Assessment
Framework for Higher Education. E-Learning and Digital Media, 17(4),
290-306. https://doi.org/10.1177/2042753020927201
Samaras, A. P., & Fox, R. K. (2013). Capturing the Process of Critical Reflective
Teaching Practices through E-Portfolios. Professional Development in
Education, 39(1), 23-41. https://doi.org/10.1080/19415257.2012.682318
Santamaría, F. (2010). Evolución y desarrollo de un Entorno Personal de
Aprendizaje en la Universidad de León. Digital Education Review, 18,
13. https://bit.ly/38v1NGV
Shepherd, C. E., & Skrabut, S. (2011). Rethinking Electronic Portfolios to
Promote Sustainability among Teachers. TechTrends: Linking Research
and Practice to Improve Learning, 55(5), 31-38.
https://doi.org/10.1007/s11528-011-0525-5
‒ ‒
Shih, L.-F., LeClair, J. A., & Varden, S. A. (2010). The Integrated Technology
Assessment: A Portfolio-Based Capstone Experience. Information
Systems Education Journal, 8(63), 1-11. https://bit.ly/3kywHUA
Surur. (24 de abril de 2019). OneNote now supports cool Wakelet embeds.
MSPoweruser. https://mspoweruser.com/onenote-now-supports-cool-
wakelet-embeds/
Stocks, C., & Trevitt, C. (2016). The Place of Trust in Continuing Professional
Learning Programmes: Supporting Authentic Reflection in Portfolio
Assessment. International Journal for Academic Development, 21(3),
219-229. https://doi.org/10.1080/1360144X.2016.1188819
Texier, J. D., & De Giusti, M. R. (2014). Elements of Resource Representation in
Institutional Repositories: A Bibliographic Review. Journal of
Information and Organizational Sciences, 10. https://bit.ly/38zfNPT
Top, E. (2012). Blogging as a social medium in undergraduate courses: Sense of
community best predictor of perceived learning. Social Media in Higher
Education, 15(1), 24-28. https://doi.org/10.1016/j.iheduc.2011.02.001
Trevitt, C., Stocks, C., & Quinlan, K. M. (2012). Advancing Assessment Practice
in Continuing Professional Learning: Toward a Richer Understanding of
Teaching Portfolios for Learning and Assessment. International Journal
for Academic Development, 17(2), 163-
175.https://doi.org/10.1080/1360144X.2011.589004
Tur, G., & Urbina, S. (11-13 julio 2012). PLE-based ePortfolios: Towards
Empowering Student Teachers’ PLEs through ePortfolio Processes
(Comunicación). The PLE Conference 2012 proceedings. Aveiro,
Melbourne. https://bit.ly/3h7nzpd
Tur, G., & Urbina, S. (2014). Affordances and Limitations Derived from Student
Teachers’ Perceptions and Performance on their Eportfolios. Digital
Education Review, 26, 23. https://doi.org/10.1344/der.2014.0.1-23
Zubizarreta, J. (2009). The Learning Portfolio. Reflective Practice for Improving
Student Learning. Wiley.
‒ ‒
CAPÍTULO 98
LOURDES ARANDA
Universidad de Málaga
EUGENIA FERNÁNDEZ-MARTÍN
Universidad de Málaga
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
el alumnado, utilizando técnicas donde se facilite la colaboración y
cooperación del grupo clase (Biggs y Tang, 2011; Cavanagh, 2011;
Hammond et al., 2010; López Melero, 2018), aproximar la práctica real
a los conceptos teóricos (Fullan et al., 2015; Sepúlveda et al., 2017), así
como, utilizar los recursos tecnológicos disponibles y a nuestro alcance
(De la Rosa, 2016; Gómez y Ruíz, 2018; Moriña et al., 2014), que per-
mitan apoyar el proceso de enseñanza aprendizaje en Educación Supe-
rior para un mayor beneficio formativo.
En el contexto de las universidades, especialmente en la actualidad, se
muestra que las estrategias metodológicas más innovadoras y significa-
tivas en la labor docente, se apoyan en el uso de TIC y recursos digitales
(Suárez Lantarón, 2017; Pinos Castillo, 2018; Valenzuela y Hernández,
2017) para una formación más completa del alumnado universitario
(Fernández Martín, 2020). De hecho, la innovación en los procesos me-
todológicos docentes se suele generar a través de la utilización de las
TIC, concretamente en la universidad, se desarrollan a través del Cam-
pus Virtual (CV), pues favorece la autonomía del alumnado, así como
el aprendizaje activo y el significativo (Ortega et al., 2017).
En este sentido, en estas plataformas de formación universitaria, se con-
centran diversas herramientas (Fernández, 2020a), destacando princi-
palmente las más utilizadas, a saber, foros de participación, videocon-
ferencias, retroalimentación de tareas, Chats, etc. Como a continuación
se especifica.
El foro de participación. Una utilización innovadora de esta herrra-
mienta permite el registro lectura y exposición de ideas, comentarios,
conocimientos, etc. Lo que favorece la cooperación y la participación
(Fernández Martín, 2018; García y López, 2012), derivando en un
aprendizaje conjunto por parte del alumnado (Hargeaves y Fullan,
2014).
El envío de tareas con la opción de retroalimentación. Su correcto uso
puede facilitar una retroalimentación de la tarea o actividad (Fernández-
Martín y Aranda, 2019) enviada por el alumnado, así como la autoeva-
luación del mismo.
‒ ‒
Las videoconferencias. Pueden ser un elemento útil para la mejora de
los procesos de enseñanza y aprendizaje, sobre todo, en Educación Su-
perior (Pinos Castillo, 2018), dentro del CV exciten diversas opciones
que consisten en una denominada sala virtual donde alumnado y profe-
sorado pueden comunicarse por video y audio. En este punto, destacan
ciertos instrumentos on line denominados seminarios, como el Semina-
rio Virtual B, basado en el programa open source “BigBlueButton BN”,
o como el Seminario Virtual C, basado en el programa Black Board
Collaborate (Fernández Martín, 2020a).
Otra tendencia innovadora para desarrollar y apoyar la formación uni-
versitaria, son los Wiki (León de Mora, 2010) ya que permite al alum-
nado crear fácilmente contenido, como caso páginas web. En este sen-
tido destacan los wikis colaborativos, idóneas para el trabajo en equipo.
Chat dentro del CV. Permite el diálogo y comunicación inmediata de
manera virtual, aunque no se almacena el registro de las conversaciones
una vez se abandona el Chat. En este sentido, los chats no formales,
como las redes sociales de mensajería instantánea, son capaces de suplir
estas limitaciones.
Concretamente, los Chats o redes sociales pueden ser un excelente re-
curso de innovación académica (León de Mora, 2010; Marín y Cabero,
2019; Rodríguez et al., 2017; Suárez Lantarón, 2017). Destacando en
este sentido, Skype, WhatsApp (Suárez Lantarón, 2017), Instagram,
Twitter (López, 2019), o incluso Facebook (Heredia et al., 2018) son
hermanitas que, imprentadas de manera novedosa en el ámbito formal,
pueden completar la labor docente y la adquisición de aprendizajes (Ro-
dríguez et al., 2017; Ruíz, 2019; Marín y Cabero, 2019; López, 2019;
Odetti y Valentiluz, 2017) de una manera más atractiva para el alum-
nado.
Por otro lado, respecto a la dolencia presencial en las aulas universita-
rias, es posible incluir una metodología innovadora sin necesidad del
uso exclusivo de TIC, sino con el apoyo y aprovechamiento de estos
recursos tecnológicos, como un recurso más pero no el único.
En este sentido la utilización de una metodología que promueva la
cooperación, colaboración, el desarrollo de valores, la investigación, el
‒ ‒
aprendizaje por descubrimiento, así como los aprendizajes dialógios,
conjuntos, sociales, y la convivencia del grupo clase (López Melero,
2018; Atxurra et al., 2015), son estrategias que posibilitan la innovación
de las técnicas docentes en las aulas de la universidad. Esto se pude
conseguir mediante metodologías de referencia como son las comuni-
dades de aprendizaje, el aprendizaje servicio, el trabajo por proyectos
de investigación, o el aprendizaje a través de situaciones problemáticas
(López Melero, 2018).
En cualquier caso, un factor calve para determinar la metodología desa-
rrollada en las aulas universitarias, es sin lugar a dudas el profesorado.
El profesorado, será responsable de facilitar -o determinar en muchos
casos- los aprendizajes que el alumnado pueda o no pueda adquirir (Gó-
mez y Ruíz, 2018; Pozo y Bretones, 2015; Rodríguez, 2014). En este
sentido, numerosos autores defienden que es beneficioso que el profe-
sorado sea capaz de implantar actividades de cooperación en el grupo-
clase de su alumnado mediante la innovación y mejora de recursos y
técnicas docentes (Heredia et al., 2018, López, 2019; Marín y Cabero,
2019; Ruíz, 2019).
En el campo universitario, el uso de una metodología innovadora a tra-
vés de la utlizaición de TIC, redefine la función del docente (Ortega et
al., 2017), lo que obliga a los profesionales de la educación a evolucio-
nar y adaptarse a unos cambios que no solo son instrumentales, sino
también cognitivos y sobre todo actitudinales.
Estos procesos de mejora y de innovación de la labor docente en el ám-
bito de las universidades, requieren ser valorados atendiendo a su efi-
cacia y calidad, lo que se comprueba teniendo en cuenta las considera-
ciones y puntos de vista de los beneficiarios de todo el este proceso de
renovación: el alumnado universitario en formación. Para ellos, es ne-
cesario valorar determinadas dimensiones, destacando la actuación do-
cente, la metodología empleada, y los recursos tecnológicos utilizados,
entre otras.
‒ ‒
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
3.1. PARTICIPANTES
‒ ‒
de respuesta cerrada denominado “QUACINE-Cuestionario de actitu-
des frente a la innovación educativa” (Traver-Martí y Ferrández-Be-
rrueco, 2016). El cuestionario constaba de 17 ítems con respuestas tipo
Likert con 5 posibles respuestas, las cuales se puntuaron de la siguiente
forma:
‒ 1 sería: “Estoy en desacuerdo”, con lo que refleja el ítem.
‒ 2 sería: “No estoy de acuerdo”, con lo refleja el ítem.
‒ 3 sería: “No tengo una opción definida”, con lo que se dice en
el ítem.
‒ 4 sería: “Estoy de acuerdo”, con lo que se dice en el ítem.
‒ 5 sería: “Estoy muy de acuerdo”, con lo que refleja el ítem.
3.3. PROCEDIMIENTO
‒ ‒
4. RESULTADOS
‒ ‒
el rendimiento del alumnado mejorará si el profesorado es ac-
cesible y cercano.
‒ ‒
universitario tienen una actitud positiva y acorde al enunciado
del ítem, es decir, la mayor parte del alumnado considera para
ser un buen profesor/a debe implicarse en el hecho educativo.
‒ ‒
considera que la estructura departamental en las universidades
influye positivamente en la mejora educativa.
‒ ‒
‒ “Considero que para mejorar la práctica docente es necesaria
la utilización de nuevos métodos de enseñanza acordes con la
realidad profesional y social”, los estudiantes están muy de
acuerdo o de acuerdo en un 54,5% y un 36,4% respectiva-
mente. Se puede observar que el 90,9% del alumnado univer-
sitario tienen una actitud positiva y acorde al enunciado del
ítem, es decir, la mayor parte del alumnado considera impres-
cindible adaptar la metodología seguidas en las universidades
a la nueva realidad profesional y social.
‒ ‒
5. DISCUSIÓN
Los hallazgos de este estudio muestran que la mayor parte de los alum-
nos y alumnas del Grado de Educación Primaria de la Universidad de
Málaga muestran una actitud positiva y en concordancia con los si-
guientes supuestos: que para incorporar propuestas innovadoras a las
aulas universitarias el profesorado debe estar en continuo proceso de
formación y renovación y así, que sepa transmitir los contenidos de su
asignatura dedicando tiempo a la preparación del material docente, ade-
más debe realizar funciones de guía y orientación a los estudiantes, que
la cercanía del profesorado mejorará el rendimiento del alumnado uni-
versitario, que el profesorado debe implicarse en la tutorización del
aprendizaje y en general en la enseñanza, la importancia de fomentar
espíritu crítico y autónomo además de la formación universitaria, que
el fomento de la motivación del profesorado en la enseñanza repercute
directamente y positivamente en el aprendizaje de los estudiantes, que
la docencia tenga un mayor reconocimiento administrativo y que los
ratios sean menos elevados en las aulas, y por último, valoran positiva-
mente e incluso consideran que es necesario que se adapten las meto-
dologías a la nueva realidad profesional y social incorporándose la uti-
lización de las TIC`s y de los lenguajes audiovisuales para mejorar la
docencia en la universidad.
La innovación es un proceso que genera importantes cambios en los
procesos educativos en general, y en la práctica docente en particular.
Todos estos cambios hacen necesario comprender la complejidad y los
aspectos a tener en cuenta para su implementación (Pila Martínez,
2020). Pues bien, coincidiendo con nuestro trabajo, estos autores con-
sideran que el “profesorado debe involucrarse, y estar predispuesto al
cambio, él juega un rol importante en todo el proceso de innovación, ya
que él es el que lo pone en práctica” (Pila Martínez, 2020, p. 214).
Los resultados encontrados en nuestro trabajo señalan una actitud posi-
tiva a la inclusión de las herramientas digitales en el contexto educativo,
ya que el alumnado considera que facilita de forma relevante a las me-
joras en la enseñanza-aprendizaje en la formación superior.
‒ ‒
Siguiendo esta línea de trabajo Cabero et al. (2016), apuntan a que las
herramientas tecnológicas en el contexto educativo y especialmente en
la enseñanza superior aportan las siguientes ventajas en la formación de
los estudiantes:
Permiten la creación natural de una inteligencia colectiva, amplían las
fronteras del proceso de enseñanza-aprendizaje, facilitan la comunica-
ción, favorecen la construcción colaborativa del conocimiento, impli-
can un cambio en la gestión de los procesos de enseñanza, fomentan
una visión compartida del conocimiento, favorecen la socialización del
grupo, son espacio de encuentro entre los diferentes actores del proceso
enseñanza aprendizaje; permiten centralizar en un único sitio todas las
actividades docentes, aumentan la fluidez y sencillez de la comunica-
ción entre profesores y alumnos, facilitan la coordinación y trabajo de
diversos grupos de aprendizaje, aumentan la interacción entre profeso-
res y alumnos, facilitan la retroalimentación de los estudiantes a tiempo,
mejora el aprendizaje. (p.3)
‒ ‒
profesorado tome un papel facilitador y de guía en los procesos de
aprendizaje del alumnado, etc. Pero dentro de todos estos cambios, cabe
destacar la inclusión de las herramientas TIC`s en las aulas universita-
rias donde el profesorado debe estar en continua formación, ya que jue-
gan un papel de especial importancia, siendo la actitud de los estudian-
tes muy positiva, puesto que consideran que todas estas transformacio-
nes son fundamentales para poder mejorar sus propios aprendizajes.
Por último, hay que señalar que este trabajo cuenta con algunas limita-
ciones como el número de estudiantes y el estudio motivacional en un
solo grado, concretamente en el Grado de Educación Primaria. Por ello,
este trabajo tendrá una continuidad y en futuras investigaciones se tra-
bajará con una muestra mayor y se contará con la participación de es-
tudiantes de otras titulaciones universitarias.
Es decir, referente al tamaño muestral, el hecho de incluir un mayor
número de sujetos nos permitirá el estudio de una población mucho más
amplia como para tener la certeza de poder generalizar los datos obte-
nidos de esa muestra a la población en general. En cualquier caso, por
criterios de selección, en el presente estudio nuestra pretensión fue es-
tudiar un subgrupo de la población, garantizando la validez de esta a
través del rigor científico con el que seleccionamos dicha muestra. Aun-
que el hecho de aumentar el “n”, podría ser una notable mejora para
este estudio.
Asimismo, el hecho de implementar en un futuro otros grados univer-
sitarios, además del Grado de Educación Primaria, puede considerarse
un acierto para enriquecer y completar los datos y resultados del tra-
bajo. Concretamente, centrándonos en disciplinas propias de ciencias
de la educación, sería muy interesante poner bajo la lupa grados como
los de Educación Social, Educación Infantil y Pedagogía, además del
Grado de Educación Primaria estudiado en el presente trabajo, ya que
nos podría asegurar una comprensión más profunda y completa de las
percepciones de los estudiantes de la Facultad de Ciencias de la Educa-
ción acerca del uso de estrategias educativas innovadoras por parte del
profesorado en Educación Superior.
‒ ‒
En este sentido, también resulta interesante mencionar, y tener en cuEnta
en futuras investigaciones, los posgrados de ciencias de la educación,
debido a que los participantes serían alumnos y alumnas con una mayor
experiencia en las aulas universitarias, y por tanto, podrían tener un ma-
yor criterio a la hora de exponer sus percepciones y puntos de vista sobre
el tema a tratar.
Igualmente, tras lo mencionado, surge el interés por recabar esta misma
información en otras universidades españolas en las Facultades de
Ciencias de la Educación o Facultades de Educación, ya que las estra-
tegias docentes consideradas innovadoras, pueden variar dependiendo
de las Facultades, así como la percepción de lo que es innovador o no
en materia de educación. En este sentido, el alumnado podría arrojar
unos resultados interesantes a analizar respecto a su punto de vista en
relación con las técnicas y metodologías desarrolladas por el profeso-
rado de cada universidad.
En este punto, el hecho de asumir la importancia del profesorado uni-
versitario en cuanto a la innovación en las aulas nos lleva a sugerir una
mayor y mejor formación del mismo en estrategias y técnicas que sean
consideradas realmente innovadoras, consecuentes y correctamente
fundamentadas, encauzadas al pleno desarrollo de un proceso de ense-
ñanza y aprendizaje optimizado y perfeccionado.
Tendiendo esto en cuenta, hay que destacar que en los últimos años, ha
habido un crecimiento desmesurado en materia de metodologías inno-
vadas en el ámbito universitario, debido a los periodos de no presencia-
lidad provocados por el confinamiento sobrevenido por la Covid-19. A
este respecto, el profesorado tuvo la necesidad, y obligación, de adap-
tarse a una metodología y técnicas docentes diferencies a las que venían
desarrollándose tradicionalmente en las aulas, lo que impulsó un movi-
miento sin precedentes en cuanto a la innovación de la labor del profe-
sorado universitario. De ahí la inminente importancia de realizar estu-
dios como el desarrollado en la presente investigación, sobre todo, te-
niendo en cuenta la visión de los receptores de todo el proceso: el alum-
nado.
‒ ‒
Para completar la discusión del presente trabajo, hay que destacar que
otra posible línea de investigación que se deriva de los resultados ha-
llados en este estudio, se encamina a la necesidad de estudiar la percep-
ción del alumnado en materia de innovación metodológica en las aulas,
considerando a nivel comparativo a alumnos y a alumnas. Esto es de-
bido a que la manera de percibir los procesos y técnicas que se desarro-
llan en las aulas, pueden variar dependiendo de la persona en cuestión
que las experimenta, en este sentido es posible valorar si estas diferen-
ciaciones perceptivas tienen que ver también con el género, o por el
contrario, no.
Esto podría ayudar a conocer mejor los intereses y percepciones del
alumnado en cuanto a lo que considera innovación docente real y fun-
cional, lo que nos llevaría a conocer y saber aplicar las técnicas más
procedentes y adecuadas para el alumnado teniendo en cuenta las pecu-
liaridades de cada persona.
En otro orden de cosas, es importante mencionar que, en materia de
innovación y mejora educativa, se ha considerado tradicionalmente el
uso de las tecnologías de la información y la comunicación. Ante esto,
hay que añadir que la inclusión de estas herramientas virtuales durante
el proceso de formación de nuestro alumnado, puede ser un beneficio
si sabemos aplicar y utilizar las mismas como un recurso más de me-
jora, y no como medio. Es decir, la implementación de estos instrumen-
tos digitales es beneficiosa en el momento en que completa y mejora el
proceso formativo del alumnado; en caso contrario, el uso de esta tec-
nología de manera aleatoria o sin sentido, podría provocar todo lo con-
trario, o sea, un deterioro del proceso de enseñanza y aprendizaje. Por
tanto, una vez más, comprobamos la importancia de un profesional do-
cente correctamente formado y adecuado a las necesidades formativas
del alumnado universitario.
En este sentido, hay que destacar que los periodos de confinamiento
que provocó la pandemia de la Covid-19, provocó que las tradicionales
clases presenciales fueran imposibles, y el uso de otras estrategias y
recursos virtuales se convirtió en una imposición -y necesidad- para
desarrollar una función docente correcta, o incluso, simplemente para
desarrollar una función docente. Esto provocó una evidente
‒ ‒
proliferación sin precedentes de metodologías en línea, virtuales o a
distancia, lo que provoco en algunos casos una innovación real, debido
a las mejoras incorporadas, pero en otros caso, pudo provocar una ma-
nera diferente de hacer las cosas, pero en ningún caso innovando o me-
jorando la labor. De nuevo, he ahí la necesidad de la calidad de la labor
docente.
Por otro lado, y para finalizar, gracias a los resultados hallados en esta
investigación, podemos destacar la importancia y beneficio que tiene
para el alumnado incluir mejoras educativas mediante estrategias do-
centes innovadoras en su proceso de enseñanza y aprendizaje. Así como
el papel protagonista que tiene el profesorado universitario en todo el
proceso de formación.
Se sugiere, por tanto, una mayor formación del docente para desarrollar
estas metodologías de manera acorde y adecuada con las necesidades
del alumnado. Así como, el adecuado uso de las tecnologías de la in-
formación y la comunicación en coherencia con la realidad social, y
sobre todo, profesional del estudiantado.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
7. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Fernández Martín, E. (2018). La innovación en la formación inicial del
profesorado. Revista Innovamos, 9, 12-13.
Fernández Martín, E. (2020a). Análisis de estrategias metodológicas docentes
apoyadas en el uso de TIC para fomentar el Aprendizaje Cooperativo del
alumnado universitario del Grado de Pedagogía. Revista
Interuniversitaria de Formación del Profesorado, 95(34.2), 79-100.
Fernández-Martín, E. (2020b). Estudio de las percepciones del alumnado
universitario sobre el uso de redes sociales como herramienta didáctica
en la formación inicial. En M. C. Pérez Fuentes (Ed.), Innovación
Docente e Investigación en Educación. Dykinson.
Fernández-Martín, E., y Aranda, L. (2019). Análisis del uso de herramientas
digitales para facilitar el feedback como estrategia para la optimización
del proceso de enseñanza aprendizaje. En M. C. Pérez Fuentes (Ed.),
Innovación Docente e Investigación en Educación y Ciencias Sociales
(pp. 627-634). Madrid: Dykinson.
Fullan, M., Rincon-Gallardo, S., y Hargreaves, A. (2015). Professional capital as.
accountability. Education Policy Analysis Archives, 23(15), 2-17.
García, M., y López, A. (2012). Explorando, desde una perspectiva inclusiva, el
uso de las TIC para atender a la diversidad. Revista de currículum y
formación del profesorado, 16(1), 278-293.
Gómez, I. M., y Ruíz, M. (2018). Interdisciplinariedad y TIC: nuevas
metodologías docentes aplicadas a la enseñanza superior. Revista de
Medios y Educación, 52, 67-80.
Hammond, J. A., Bithell, C. P., y Jones, L. (2010). A first year experience of
student-directed peer-assisted learning. Active Learning in Higher
Education, 11(3), 201-212. https://doi.org/10.1177/1469787410379683
Hargreaves, A., y Fullan, M. (2014). Capital profesional. Transformar la
enseñanza en cada escuela. Morata.
Heredia, H., Romero, M., y Amar, V. (2018). Facebook, un espacio para
compartir la lectura. Una experiencia en un aula de Educación
Secundaria Obligatoria en España. Educacao em Foco, 23(1), 201-224.
León de Mora, C. (2010). Entornos colaborativos en docencia virtual: redes
sociales y wikis. Universidad de Sevilla, Secretariado de publicaciones.
López, C. (2019). La red social Twitter como herramienta didáctica: una
metodología de innovación docente en Educación superior. En R. Roig-
Vila (Ed.), Innovación e investigación en la enseñanza Superior: Nuevos
contextos, nuevas ideas. España: Octaedro.
‒ ‒
López Melero, M. (2018). Fundamentos y Prácticas Inclusivas en el Proyecto
Roma. Morata.
Marín, V., y Cabero, J. (2019). Las redes sociales en educación: desde la
innovación a la investigación educativa. Revista Iberoamericana de
Educación a Distancia, 22(2), 25-33.
Moriña Diez, A., Perera Rodríguez, V. H., y Melero Aguilar, N. (2014). Análisis
de las barreras y ayudas que los estudiantes con discapacidad identifican
en la Universidad. Ciencias.
Odetti, C., y Valentiluz, S. (2017). Jóvenes y Educación. Acerca de las relaciones
con las Tecnologías de la Información y la Comunicación en la Escuela
Secundaria. Revista de la Escuela de Ciencias de la Educación, 1(12),
133-149.
Ortega-Avila, A.B., Gijon-Nogueron, G., Cantero-Tellez, R., Cervera-Marin, J.A.
(2017). ¿Son útiles las TIC en la enseñanza? Experiencia de innovación
metodológica a través de Campus Virtual en Ciencias de la Salud. En
Ruiz-Palmero, J., Sánchez-Rodríguez, J. y Sánchez-Rivas, E. (Edit.).
Innovación docente y uso de las TIC en educación. Málaga: UMA
Editorial.
Pila Martínez, J.C., Andagoya-Pazmiño, W.G. y Fuertes-Fuertes, M.E. (2020). El
profesorado: un factor clave en la innovación educativa. Revista educare,
24(2), 212-232.
Pinos Castillo, L. F. (2018). Análisis comparativo sobre alternativas para sistemas
de videoconferencias interactivas en Internet: Caso de estudio
Universidad Católica de Cuenca. Revista de Producción Ciencias e
Investigación. Pro-Sciences, 8(2), 26-31.
Pozo-Muñoz, C., y Bretones-Nieto, B. (2015). Dificultades y retos en la
implantación de los títulos de grado en las universidades españolas.
Revista de Educación, 367, 147-172.
Rodríguez, M., López. A., y Martín, I. (2017), Percepciones de los estudiantes de
ciencias de la educación sobre las redes sociales como metodología
didáctica. Revista de Medios y Educación, 50, 77-93.
Rodríguez-Izquierdo, R. M. (2014). Modelo formativo en el Espacio Europeo de
Educación Superior: valoraciones de los estudiantes. Aula abierta, 42,
106-113.
Ruíz, A. (2019). Competencia digital y TICs en interpretación: «renovarse o
morir». EDMETIC, Revista de Educación Mediática y TIC, 8(1), 55-71.
‒ ‒
Sepúlveda, M. P., Gallardo, M., Mayorga, M. J., y Madrid, D. (2017). La
evaluación del prácticum: un proceso clave en la construcción y
reconstrucción del pensamiento práctico. Ensayos. Revista de la Facultad
de Educación de Albacete, 32 (1), 93-110.
Suárez Lantarón, B. (2017). El WhatsApp como herramienta de apoyo a la
tutoría. Revista de Docencia Universitaria, 15(2), 193-210.
Valenzuela González, E., y Hernández Valenzuela, D. L. F. (2017). Una
experiencia educativa, la e-tutoría en educación virtual con la aplicación
del desarrollo tecnológico. Memorias del Encuentro Internacional de
Educación a Distancia, 5(5), 1-23. Arnau, J. (2018). Fundamentos de la
vía media. Alianza
‒ ‒
CAPÍTULO 99
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
‒ Evaluar y sustentar la propia actuación sobre bases teóricas
relevantes así como en principios y valores coherentes con una
sociedad ética.
Existen vínculos internos entre los 3 tipos de sesión, dado que las que
se destinan a la construcción de conocimiento se orientan a asegurar
una base pedagógica para el trabajo de los claustros (procesos de inno-
vación, funcionamiento de un claustro, herramientas pedagógicas,...) y
las sesiones de tutoría tienen por objeto el trabajo del autoconocimiento
y de otras competencias sociales y personales implicadas en la labor de
un claustro docente, desde la perspectiva individual y colectiva (de
acuerdo con las recomendaciones de autores como Weare y Grey, 2003,
en Palomera, Fernández-Berrocal y Brackett, 2008).
Así, en el contexto de la formación de maestros y maestras, nos propo-
nemos como objetivo que los alumnos y las alumnas asuman funciones
‒ ‒
docentes como miembros de un claustro que se propone mejorar la
práctica pedagógica de un centro educativo construido de manera simu-
lada por ellos y ellas mismas. El planteamiento de trabajo, vivencial y
experimental, se sustenta en los principios de un proceso de innovación,
desde el que se analizan y cuestionan prácticas convencionales y en los
que el cambio de mentalidad constituye un requisito esencial. Así
mismo se busca que comprendan y experimenten las implicaciones que
todo ello supone a nivel pedagógico y organizativo, movilizando sus
competencias interpersonales e intrapersonales.
La mayor parte de este proceso se articula a través de la simulación de
claustros docentes, en los que la comunicación, la argumentación peda-
gógica, la toma de decisiones y la resolución de problemas se convier-
ten en los ejes fundamentales del propio aprendizaje. El grupo clase se
organiza en dos subgrupos que se constituyen como el claustro de un
centro de nueva creación. Cada subgrupo, es decir, cada claustro, se
estructura de modo que cuente con un equipo directivo (constituido por
el director, el jefe de estudios y el secretario), tutores tanto de Infantil
como de Primaria y especialistas (música, inglés, educación física y
maestros de apoyo). A lo largo del curso, los claustros deben tomar de-
cisiones con el fin de diseñar una propuesta educativa que atienda a la
dimensión ideológica (principios educativos), a la dimensión metodo-
lógica (papel de alumno y de docentes, metodologías de referencia, etc.)
y a la dimensión organizativa (espacios, tiempos, grupos de alumnos y
organización docente).
Al inicio del curso se trabaja explícitamente sobre las funciones del
claustro, tratando de dar a conocer el papel y las funciones que podrían
adoptarse, en tanto que miembros del claustro y en tanto que miembros
del equipo directivo. Todo ello, desde la perspectiva del liderazgo com-
partido, de modo que los alumnos asuman que “la educación, como ar-
quitectura social que es, reclama la intervención de múltiples líderes,
dentro de una responsabilidad colaborativa, en la que la interdependen-
cia exige la actuación de liderazgo de cada uno en su ámbito específico
de intervención. Es decir, evolucionar hacia la idea de organización en
la que se ejerce el ‘poder con’, en el que se acentúa el componente ético
del liderazgo, asentado en la justicia, la solidaridad y el cuidado y en el
‒ ‒
que no podemos dejar de lado el componente emocional” (Ruiz Corbe-
lla, 2013, p. 96).
Un aspecto que se considera esencial en un proceso de esta naturaleza
es la evaluación, en la que se implican tanto alumnos como docentes;
en este sentido estamos de acuerdo con Fraile et al. (2020) respecto de
la importancia de promover en los estudiantes la capacidad de construir
criterios de referencia que les permitan valorar la calidad de su propio
trabajo y del de los demás. De este modo, los alumnos realizan al menos
una autoevaluación posterior a su primer claustro y una autoevaluación
final, ambas a través de cuestionario. Y, con el fin de estimular los pro-
cesos de valoración y de alentar el planteamiento de objetivos de me-
jora, las docentes desarrollan varias acciones:
A principio de curso se recomienda a los claustros la realización de se-
siones de valoración.
A lo largo de las sesiones de claustro, realizan un seguimiento sobre la
labor de los alumnos y alumnas, con la finalidad de recoger información
acerca de la forma como se produce la comunicación, el proceso de
toma de decisiones, se resuelven los conflictos, se argumentan las pro-
puestas, etc. Dichas observaciones se comparten con los propios alum-
nos tras cada sesión, en un documento sobre el que se plasman los as-
pectos a mejorar, las sugerencias de mejora, posibles estrategias a in-
corporar, etc. Asimismo, se proporciona retroalimentación por indica-
dores a través de la herramienta Class Dojo.
Se mantienen reuniones con los equipos directivos de cada claustro, a
fin de conocer su percepción acerca del funcionamiento y desarrollo de
estos y asesorar en caso de ser necesario, con el fin de optimizar los
procesos en que se encuentran inmersos.
De forma puntual, se proporciona retroalimentación individualizada a
alumnos concretos, también a través de la herramienta Class Dojo.
En el presente artículo desarrollaremos la valoración de los alumnos
respecto de los claustros docentes a través de los cuestionarios de auto-
evaluación diseñados ad hoc.
‒ ‒
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
discurso, valoración de aportaciones ajenas, e implicación equilibrada
de los miembros. Seguidamente se pregunta por el principal ámbito de
mejora del claustro (deben elegirlas de entre las 12 dimensiones ante-
riores). Finalmente, el alumno deberá responder de manera abierta a 4
preguntas ligadas a la valoración y la mejora.
Las muestras obtenidas de los cuestionarios de valoración inicial son
las siguientes:
‒ ‒
4. RESULTADOS
‒ ‒
(46,3% de la muestra), “contribución a la resolución de conflictos, ma-
lentendidos,...” (43,1% de la muestra) y “presentación de propuestas e
ideas” (37,8% de la muestra).
Analizados los datos separadamente, es decir, por promoción, nos en-
contramos con ciertas diferencias. Los claustros del curso 18-19 consi-
deran que les representan más las dimensiones “escucha activa” (70%),
“presentación de propuestas e ideas” (56%) y “expresión de opiniones
propias” (46,6%), mientras que las que menos les representan son las
dimensiones “organización del trabajo durante el claustro” (60%), “ini-
ciativa para hacer progresar, avanzar o hacer crecer el trabajo” (36,6%)
y, ex-aequo, “expresión de opiniones propias” (30%) y “contribución a
la resolución de conflictos, malentendidos,...” (30%).
Los claustros del curso 19-20 consideran que les representan más las
dimensiones “escucha activa” (63,8%), “aceptación de otros argumen-
tos, propuestas, ideas, opiniones” (36,1%) y “expresión de opiniones
propias” (30,5%). Por otro lado, consideran que las dimensiones que
menos les representan son: “presentación de propuestas e ideas”
(44,4%), “expresión de opiniones propias” (38,8%) y, ex-aequo, “con-
tribución a la resolución de conflictos, malentendidos,...” (33,3%) e
“iniciativa para hacer progresar, avanzar o hacer crecer el trabajo”
(33,3%).
Los claustros del curso 20-21 se vieron más representados en las di-
mensiones “escucha activa” (72,4%), “aceptación de otros argumentos,
propuestas, ideas, opiniones” (58,6%) y “presentación de propuestas e
ideas” (55,1%). Por otro lado, consideran que las dimensiones que me-
nos les representan son “contribución a la resolución de conflictos, ma-
lentendidos,...” (68,9%), “organización del trabajo durante el claustro”
(55,1%) y “presentación de propuestas e ideas” (51,7%).
Finalmente, en el cuestionario se propone a los alumnos que señalen
aquella dimensión en la que consideran que deben empezar a trabajar a
título individual. Se trata de una pregunta abierta que hemos categori-
zado, si bien nos encontramos con cerca de un 34% de alumnos que no
responden a la pregunta, por lo que sus respuestas han debido ser inva-
lidadas (por ejemplo, algunos alumnos no se refieren a sí mismos sino
‒ ‒
al claustro en conjunto). Tomados los datos de forma global, los resul-
tados muestran que la participación y la expresión y comunicación de
ideas son los ámbitos de mejora más señalados por los alumnos tras su
primer claustro (lo que representa un 43% del 66% de las respuestas
válidas, una vez eliminadas las que se no se adecuan a la pregunta).
En relación con los claustros del curso 18-19, se anuló una tercera parte
de las respuestas, consistentes en propuestas de mejora de todo el claus-
tro (de clima, principalmente, y de organización de la participación).
Los alumnos que respondieron a la pregunta sobre qué desearían mejo-
rar tras el primer claustro se centraron en diversos aspectos, si bien un
número concreto de ellos (una tercera parte de la muestra) se refirió a
aspectos vinculados con la mejora de la participación (tener más inicia-
tiva o seguridad en sí mismo, menos vergüenza, ser más asertivo a la
hora de defender una postura, intervenir más,...). Los aspectos residua-
les a los que aludían sólo unos pocos alumnos tenían que ver con escu-
char ideas, aceptar el turno de palabra, afrontar conflictos, conocer me-
jor a los compañeros o abrir la propia mente.
En cuanto a los alumnos de la promoción 19-20, un 36,1% no respondió
a la pregunta, bien porque planteó una mejora de claustro, bien porque
realizó algún tipo de análisis o crítica. Del resto de alumnos, otro 36,1%
centra sus propuestas en la participación y en la expresión de ideas,
muchos de ellos matizando de algún modo qué cuestión concreta debe-
rían trabajar (nervios, timidez, vergüenza, inseguridad,...). El resto de
alumnos excepto dos, que creía no tener nada que mejorar, realizó pro-
puestas divergentes: informarse bien acerca de lo que tratará el claustro,
mejorar la impulsividad o el respeto por el turno de palabra, contribuir
a resolver conflictos o la escucha activa.
Algunas de las respuestas de los claustros del curso 20-21 (31%) tam-
bién han tenido que ser anuladas, por orientarse al claustro en general
en lugar de a uno mismo. El resto se mueven, fundamentalmente, en la
necesidad de mejorar la participación (31%) y la expresión y comuni-
cación de ideas o propuestas (27,5%). En ambos casos los matices apor-
tados por los alumnos aludían a los mismos aspectos que sus compañe-
ros de las promociones anteriores (perder el miedo al qué dirán, superar
inseguridades, vencer la timidez). Algún alumno se propone mejorar su
‒ ‒
capacidad para ayudar a desbloquear situaciones, escuchar de forma
más activa o respetar el turno de palabra.
‒ ‒
ámbito de mejora. En el claustro del CEIP Sa Bruixola, sin embargo,
hay mucha más dispersión de datos.
En el curso 19-20 (recordemos que respondió el 100% de los alumnos),
los ámbitos de mejora propuestos son la participación (30%) y la opti-
mización del tiempo (16%); para el resto de ámbitos, existe mucha dis-
persión y equilibrio en los datos. En el claustro del CEIP Ad Astra, la
participación es la dimensión principal, mientras que en el del CEIP Sa
Roqueta lo es la optimización del tiempo que, sin embargo, es de las
menos propuestas por los miembros del CEIP Ad Astra.
En el curso 20-21 las principales dimensiones fueron la optimización
del tiempo (33,3%), la coherencia en la toma de decisiones y la partici-
pación, si bien con pocas diferencias respecto del resto de dimensiones
(de nuevo encontramos dispersión de datos). Por claustros, el CEIP
Agazzi señala la optimización del tiempo como principal ámbito de me-
jora (40%) mientras que el CEIP Sa Font señala la coherencia en la
toma de decisiones como principal ámbito de mejora (37,5%).
Preguntados por la valoración que realizan acerca de la capacidad de su
claustro para funcionar acorde con 12 dimensiones diferentes (en una
escala de 1 a 6, de baja a alta), las dos dimensiones que, de media, se
sitúan por debajo de 4 puntos son la participación de todos los miem-
bros (media de 4) y la optimización del tiempo (media de 3,7). Por en-
cima de 4 sitúan el abordaje profundo de las temáticas (4,36), la valo-
ración de las aportaciones de los demás (4,39), la generación de un
clima agradable (4,42), la comunicación adecuada (4,43) y el manteni-
miento de un discurso claro y transparente (4,47). Por encima de 4,5
puntos de media (pero por debajo de 5 puntos), sitúan la toma de deci-
siones consensuada (4,50), la organización en la realización de las ta-
reas (4,52), la coherencia en la toma de decisiones (4,70) y la coopera-
ción (4,74).
Tomados estos datos por claustros, y considerando sólo la puntuación
más alta y más baja, encontramos que 5 de los claustros otorgan de me-
dia menor puntuación a la dimensión “optimización del tiempo” (CEIP
Capdevila, CEIP Sa Barca, CEIP Delta, CEIP Sa Roqueta y CEIP Aga-
zzi). Los tres claustros restantes la otorgan a las dimensiones
‒ ‒
“participación de todos los miembros” (CEIP Ad AStra), “organización
de las tareas” (CEIP Sa Bruixola) y “cooperación” (CEIP Sa Font). En
relación con la mayor puntuación de media, existe menos contundencia
de los datos, pues nos encontramos con una mayor dispersión: tres
claustros coinciden en la dimensión “cooperar” (CEIP Delta, CEIP
Agazzi y CEIP Sa Roqueta), mientras que dos de ellos coinciden en la
dimensión “valorar las aportaciones de los demás” (CEIP Capdevila y
CEIP Sa Bruixola). Los tres claustros restantes seleccionan dimensio-
nes diferentes: “organización de las tareas” (CEIP Ad Astra), “coheren-
cia en la toma de decisiones” (CEIP Sa Barca) y “clima distendido”
(CEIP Sa Font). Insistimos, en cualquier caso, en que las diferencias
entre las muestras de cada claustro no permiten aventurarse en exceso
en la extracción de conclusiones relevantes.
El cuestionario de valoración final de funcionamiento de los claustros
finaliza con tres preguntas abiertas, de las que procedemos a presentar
los resultados, que han sido categorizados con el fin de realizar el aná-
lisis cualitativo pertinente. Debemos señalar que, de nuevo, hallamos
respuestas que han debido ser eliminadas, por no adecuarse a la pre-
gunta.
En primer lugar a los alumnos se les pregunta por las posibles estrate-
gias que mejorarían el funcionamiento de su claustro. Las respuestas de
los alumnos se caracterizan por ser poco concretas y/o estar poco desa-
rrolladas, y en algún caso se confunden con las finalidades que deberían
perseguir los claustros. En todo caso, las categorías en las que hemos
situado dichas estrategias son las siguientes:
‒ Estrategias para la mejora de la comunicación (usar una co-
municación asertiva, por ejemplo).
‒ ‒
‒ Estrategias para la mejora de la organización del trabajo en el
seno del claustro (incluyen todas aquellas que persiguen una
mejora de la calidad de las tareas y de los procesos que se ac-
tivan en los claustros, como por ejemplo, realizar búsquedas
de información previas a la toma de decisiones).
‒ ‒
funcionamiento de sus claustros y su propio papel en ellos (sin duda,
porque se les presupone una visión más global y un mayor y mejor co-
nocimiento del proceso que desarrollan sus claustros). Lo cierto es que,
exceptuando el caso de algunos alumnos que han asumido alguna fun-
ción como equipo directivo y que desde el primer momento considera-
ron que su principal objetivo estaba alineado con la mejora de la parti-
cipación (por timidez, inseguridad, falta de confianza los miembros del
claustro), la mayoría de miembros de los equipos directivos alude, en
sus objetivos, a estrategias de gestión de grupos, de organización de
tareas o de comunicación con los demás. En la valoración de su propio
papel dejan entrever también el rol desde el que realizan dicha valora-
ción: por lo general responden más desde su función en tanto que miem-
bros del equipo directivo que como miembros del claustro.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
explícita del “significado de participación”, que se ha trabajado de
forma más específica con las últimas promociones, o bien a la diferen-
cia en las dinámicas de participación que se han generado en los distin-
tos grupos. Sin embargo, cabe decir que el número de respuestas que
estarían categorizadas en “baja satisfacción” también se ven reducidas
sutilmente a medida que avanzan las distintas promociones.
Si nos referimos a las formas de participación, observamos que la ma-
yor parte de las respuestas donde se consideran representados implican
una competencia más bien pasiva, y aquellas que suponen mayor acti-
vidad por parte del alumno, es donde se sienten menos representados.
Sin embargo, debemos hacer notar que en la primera promoción y en la
última, una de las respuestas que les representan se vincula también a
una competencia más activa, como sería “expresión de opiniones pro-
pias”.
Otra cuestión que debería destacarse es la coincidencia masiva, en todas
las promociones, sobre aquella forma de participación que se corres-
ponde con la “escucha activa”, consecuencia posiblemente, del entre-
namiento recibido en los cursos anteriores a esta asignatura. Aunque, y
en contradicción a esta respuesta, nos encontramos que una forma de
participación que menos les representa y que se repite de alguna u otra
forma, es la “contribución a la resolución de conflictos”. Todo ello se
corresponde con las observaciones directas que las docentes hemos po-
dido advertir a lo largo de las sesiones de claustro, ya que, en general
la actitud frente a la presentación de alguna idea es positiva y favorece
la comunicación, pero por otro lado, al generarse algún conflicto, son
muy pocos los alumnos que tienen o utilizan herramientas para resol-
verlo.
Por otra parte, estos datos resultan coherentes con el hecho de que los
alumnos acaban de realizar su primer claustro; en él, sus miembros rea-
lizan una primera toma de contacto con el que será su funcionamiento,
adoptan alguna decisión relativa a la organización que seguirán y co-
mienzan a realizar las primeras propuestas. No existe, pues, un reco-
rrido, ni como grupo ni como claustro, que requiera de intervenciones
de otra naturaleza. Desde esta perspectiva, tiene sentido que la escucha
activa y la presentación de propuestas sean consideradas dimensiones
‒ ‒
más representativas que la organización del trabajo o la contribución a
la resolución de conflictos. Sí resulta llamativo que la presentación de
propuestas aparezca como dimensión poco representada, si bien se co-
rresponde con algunos de los objetivos de mejora que se proponen al-
gunos alumnos al final del cuestionario.
En las respuestas asociadas a las dimensiones a mejorar, nos encontra-
mos con que probablemente muchos de los alumnos no entendieron
bien a qué se refería la pregunta y por ello nos vimos obligadas a inva-
lidar muchas de las respuestas. Así mismo, las respuestas válidas tienen
que ver con la participación y la expresión de ideas propias.
Retomando el apunte anterior, sobre la necesidad de mejora de la orga-
nización, de la participación equilibrada y del clima, se puede observar
la relación que existe entre estos tres aspectos (puesto que cada uno de
ellos alimenta al otro) y la necesidad personal y grupal de sentirse có-
modo y seguro en cada uno de los claustros. Este es un aspecto que
suele aflorar en intercambios con equipos directivos o con alumnos, e
incluso en las valoraciones que los claustros realizan por iniciativa pro-
pia. De hecho, en alguna ocasión, algún claustro ha realizado una diná-
mica de conocimiento mutuo con el fin de mejorar el grado de confianza
de los miembros, esperando de este modo que mejore la participación
en los claustros. Del mismo modo, los alumnos suelen comentar que
cuando se organizan para trabajar en grupos más pequeños se sienten
más seguros y, por tanto, intervienen con mayor frecuencia y comodi-
dad.
La autoevaluación final como claustro también señala que los alumnos
de cohortes distintas coinciden en destacar los mismos ámbitos de me-
jora, fundamentalmente la optimización del tiempo y la participación
de todos los miembros del claustro. Sus valoraciones en algunas de las
dimensiones propuestas coinciden también de un curso a otro, si bien
en relación con otras se producen ciertas variaciones (por ejemplo, en
cuanto a la toma de decisiones consensuada). Consideramos que los re-
sultados obtenidos muestran que los alumnos conceden importancia a
procesos clave del funcionamiento de un claustro docente (la participa-
ción, la gestión del tiempo o la organización), necesarios para la
‒ ‒
activación de otro tipo de procesos, tales como en análisis pedagógico
y la valoración de propuestas o la toma de decisiones.
Si nos centramos en la primera parte de estos resultados, cabría destacar
que los alumnos denotan una mejora justamente en aquellos aspectos
que habían destacado como mejorables en su primera autoevaluación,
que son la participación y la optimización del tiempo (o como mencio-
nábamos anteriormente, la “gestión” de éste). Aunque en este sentido,
de manera poco destacada, se puede extraer una falta de coincidencia
entre los diferentes claustros, ya que algunos, en concreto el CEIP Cap-
devila (17-18) y en CEIP Ad-Astra (18-19), se decantan más por la
“participación” si lo contrastamos con los demás claustros que se incli-
nan más hacia la “gestión del tiempo”. Si bien no ha sido posible refle-
jar la valoración que, como docentes, hemos realizado de cada claustro,
lo cierto es que ésta coincidiría con la valoración que los alumnos plas-
man en los cuestionarios. Cada claustro, constituido de forma azarosa,
se configura como un nuevo grupo social que genera sus propias diná-
micas, en el que se establecen determinados roles y se adoptan deter-
minadas rutinas, que son leídas en términos de cultura de claustro por
todos los miembros y que configuran determinados tipos de respuesta
por parte de cada individuo. Las diferencias en las valoraciones de cada
claustro podrían pues, responder a este conjunto de dinámicas.
Conforme a lo analizado a través de las respuestas de valoración sobre
la capacidad de su claustro para funcionar acorde con 12 dimensiones
diferentes, se debería considerar que las dos que obtienen las puntua-
ciones más bajas (“participación de todos los miembros” y “optimiza-
ción de tiempo”) coinciden con las que, en el ámbito individual, se ha-
bían propuesto mejorar en la autoevaluación del primer claustro. Ello,
sin duda, dota de cierta consistencia a los resultados obtenidos. Por otro
lado, las puntuaciones más altas están vinculadas con todo aquello que
tiene que ver con la “toma de decisiones”, por lo que podemos resolver
que el aprendizaje en relación a la argumentación, comunicación y re-
solución de situaciones pedagógicas se ha desarrollado positivamente a
lo largo del semestre. Así pues, cabe decir que no hay ninguna puntua-
ción referida a las dimensiones, en ninguno de los ocho claustros, que
esté ubicada por encima de los 5 puntos, con lo que deducimos que los
‒ ‒
alumnos consideran que cabría una mejora en cada uno de los claustros
en las distintas dimensiones, correspondiéndose esto con el mensaje de
continuidad que se intenta transmitir desde la asignatura “Innovación
Educativa”.
Al igual que en la autoevaluación del primer claustro, al analizar los
resultados de la autoevaluación final nos encontramos con la necesidad
de eliminar diversas respuestas, por su falta de adecuación a la cuestión
que se plantea. De igual modo, los datos obtenidos son bastante pobres
en calidad del contenido, ya que, vemos que los alumnos utilizan bási-
camente vocabulario y opciones ya facilitadas en las preguntas anterio-
res, sin que se cree un discurso propio, articulado y contextualizado que
permita profundizar en la comprensión del proceso de valoración reali-
zado.
En conjunto, el análisis de todos estos resultados apunta a la relevancia
de las dimensiones de participación y de organización en el abordaje
del trabajo de los alumnos.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
procesos de valoración y orientaría mucho mejor las intervenciones fu-
turas que, como docentes, deberemos realizar. Del mismo modo, una
de las cuestiones que debería quedar pendiente como mejora para los
siguientes cursos, sería buscar alternativas para que las muestras fueran
más representativas, animando a los alumnos, quizás con más énfasis y
con razones de tipo pedagógico, a responder ambos cuestionarios. De
esta forma, otro aspecto a mejorar estaría ligado a la formulación y ex-
plicación del cuestionario final, de manera que los enunciados fuesen
más inteligibles y se pudiesen completar con alguna explicación oral
para que así, la accesibilidad a la información fuese mayor y se pudiese
asegurar la coherencia entre lo que se pregunta y lo que se responde.
Del mismo modo, el análisis de los resultados separados de los miem-
bros de los equipos directivos nos muestra que su visión difiere sensi-
blemente de la de los demás miembros del equipo docente y que, por
tanto, podrían estar contaminando los resultados globales. Por ello, re-
sultaría interesante explotar los resultados de los claustros excluyendo,
en un momento dado, las respuestas de los miembros del equipo direc-
tivo, posibilitando la comprensión de la valoración que realizan los
miembros del claustro que no tienen un papel de liderazgo activo.
Por otra parte, tras el recorrido docente de los últimos cursos en la asig-
natura “Innovación Educativa” y el análisis de los resultados obtenidos,
llegamos a dos conclusiones principales como docentes, que pensamos
pueden ser clave para el desenvolvimiento de los posteriores cursos.
En primer lugar se ha podido observar la necesidad de generar más es-
trategias para que los alumnos se sientan más apoyados por parte de las
docentes a la hora de tomar decisiones, ya que la inseguridad que les
supone realizar esta experiencia por primera vez sin haber completado
sus estudios es, a veces, notable. Este apoyo quizás debería darse de
manera conjunta por una parte, tratando de ofrecer un asesoramiento a
todo el claustro en global y por otro lado, dándose también a los equipos
directivos de manera concreta, ya que necesitan conocer con claridad
cuáles son sus funciones, teniendo en cuenta además, que a veces las
propuestas para elegir un modelo de aportación de ideas, nace de ellos.
Así mismo, hemos podido observar que muchos alumnos también ne-
cesitan este apoyo a nivel individual, convirtiéndose este asesoramiento
‒ ‒
es un aspecto necesario para la realización de propuestas y para la me-
jora de la participación. Teniendo en cuenta que los feedbacks que les
vamos dando después de cada claustro son grupales, podríamos plan-
tearnos alguna manera de ofrecer una retroalimentación de forma indi-
vidual, por ejemplo a través del programa “class dojo” (con el cual se
ha hecho una prueba piloto por primera vez durante este curso) o alguna
otra herramienta que nos permita valorar aquello que hemos visto en la
sesión y aquello que podría mejorarse, de manera que la comunicación
entre docentes y alumnos fuese más fluida y, sobre todo, inmediata. Por
ejemplo, una de las dimensiones a las que cabría atender mejor sería la
relacionada con el afrontamiento y resolución de los conflictos. De esta
manera, conociendo las consecuencias negativas que pueden suponer
los conflictos (y que se han materializado en algunos de los claustros),
podríamos ofrecer herramientas de manera colectiva e individual, para
poder prevenirlos, resolverlos y transformarlos.
En segundo lugar, se ha apuntado una necesidad explícita de planifica-
ción y gestión del tiempo así como de la participación de todos los
miembros del claustro. Así pues y relacionándolo con lo mencionado
anteriormente, se podría organizar de manera conjunta un cronograma
de tareas o bien un listado de éstas para que se pudiese ir planificando
todo aquello que es necesario diseñar o determinar. Aún así, una de las
cuestiones claves que no podría obviarse ante este tipo de planificación,
es la flexibilidad que debe caracterizar a este tipo de sesiones, ya que,
dependiendo del claustro y de aquello que pretendan determinar, el
tiempo debe convertirse siempre en un recurso y no en una limitación
rígidamente controlada.
Por otro lado, para fomentar la participación de todos los miembros del
claustro, existe un instrumento creado por las docentes, que quizás se
podría utilizar de manera más óptima. Se trata de una rúbrica de eva-
luación, donde a través de distintos ítems se valora la participación de
los alumnos en sus claustros. Así pues, si a esta herramienta se le diese
mayor continuidad y se fomentara su uso después de cada claustro, los
alumnos podrían hacer un seguimiento más personalizado de su propia
situación y se podrían plantear mejoras a corto plazo.
‒ ‒
Finalmente, desearíamos añadir algunas cuestiones que hemos venido
observando en el transcurso de los cuatro cursos anteriores, fruto del
análisis de las actitudes y conductas de los alumnos. Entre éstas podría-
mos hablar de una reflexión pedagógica notable, que tiene lugar en el
momento en que se plantean entre todos los miembros del claustro un
modelo de escuela que pueda dar respuesta a sus futuros alumnos. Ade-
más, la mayoría de ellos se ven inmersos en una especie de crisis, ya
que la creación de algo innovador (con todo lo ello supone) conlleva
que se planteen la eficacia y los principios de todo aquello que han vi-
vido y que conocen. Ya que si consideramos la definición más habitual
de la innovación, ésta se basa en realizar cambios en la formación y por
tanto en el aprendizaje, que produzcan mejoras en los resultados de
aprendizaje. (Sein-Echaluce, Fidalgo, y García Peñalvo, 2014).
Por otro lado, la diferencia entre los conocimientos que demuestran los
alumnos a principio de curso y al final de éste, condiciona todo aquello
que van creando y responde directamente a los objetivos marcados de
la asignatura. Entre ellos, aparecen dos que son vitales a los largo de
todos los claustros, uno tendría que ver con la comunicación y la reso-
lución de conflictos, y el otro con la participación y la toma de decisio-
nes. En este sentido, el planteamiento de la asignatura implica que cada
alumno construya, de forma guiada, su propio recorrido de aprendizaje
en el marco establecido; de ahí la importancia de la autoevaluación ini-
cial, del seguimiento de las docentes y de la autoevaluación final, para
que cada alumno determine sus propios objetivos, analice de qué forma
los va asumiendo y comprenda cómo podría mejorar en las competen-
cias que todo ello supone.
En conjunto, esta investigación nos lleva a concluir que se hace nece-
sario continuar con el tipo de trabajo al que da cobertura el plantea-
miento de objetivos de la asignatura y que cristaliza en la estructura
tanto organizativa como pedagógica de ésta, sin perder de vista todo
aquello que se requiere mejorar: la retroalimentación precisa y contin-
gente (individual y grupal), y el asesoramiento y la provisión de recur-
sos y estrategias para los claustros y los equipos directivos que los li-
deran.
‒ ‒
7.AGRADECIMIENTOS/APOYOS
8.REFERENCIAS
‒ ‒
CAPÍTULO 100
JUAN-FRANCISCO ÁLVAREZ-HERRERO
Universidad de Alicante
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
estas metodologías, incluso llegando a asegurar que con estas metodo-
logías activas el alumnado sale peor preparado y con menos conoci-
miento que con las metodologías tradicionales.
El Plan Bolonia ya aboga por conferir un mayor protagonismo al papel
del alumnado en el proceso de enseñanza-aprendizaje, y supuestamente
las universidades están haciendo esfuerzos para que este plan se lleve a
la práctica. En ese sentido, muchas universidades han generado accio-
nes formativas dirigidas a sus docentes con la intención de producir
cambios en esta dirección (Silva y Maturana, 2017). Sin embargo, los
resultados obtenidos hasta el momento en la mayoría de los casos, están
muy lejos de que se puedan considerar satisfactorios, y en muchas ins-
tituciones, a fecha de hoy día, se sigue haciendo lo mismo.
A raíz de la pandemia de la COVID-19, se ha presentado una fantástica
oportunidad de hacer mejor las cosas. El tener que pasar de la noche a
la mañana de una modalidad de clases presenciales a otra modalidad de
clases online, ha hecho que se tenga que recurrir a las tecnologías digi-
tales y a otra forma de dar clase. Con ello, muchos docentes han tenido
que adaptar y modificar su forma de dar clase, al ver que la forma tra-
dicional, en esta nueva modalidad de enseñanza no presencial se que-
daba bastante deficiente para seguir con los procesos de enseñanza-
aprendizaje del alumnado. Así, las metodologías activas suponen una
excelente oportunidad para la transformación y la innovación en los
procesos de enseñanza-aprendizaje universitarios (Jiménez, 2019).
Las metodologías activas encajan muy bien con el uso de las tecnolo-
gías digitales, y aunque también presentan algunas carencias cuando se
las aplica de forma no presencial, se adaptan mejor a este tipo de cir-
cunstancias (Jiménez et al., 2020).
Metodologías activas en la actualidad hay muchas. Casi podríamos de-
cir que surgen nuevas cada año, aunque algunas son metodologías que
se han utilizado siempre o combinación de estas, pero que alguien ha
venido a renombrar con un nombre que las hace más atractivas. Algu-
nas de las más conocidas y utilizadas son: Aprendizaje Basado en Pro-
yectos (ABP), Aprendizaje Servicio (ApS), Flipped Classroom, Gami-
ficación y Aprendizaje Basado en el Juego (ABJ), Visual Thinking,
‒ ‒
Aprendizaje Basado en Problemas, Estudio de caso, Educación Maker,
Aprendizaje Basado en el Pensamiento, etc.
En el ámbito y contexto universitario, aunque todas ellas podríamos
considerarlas como válidas, vamos a destacar solo cinco de ellas:
Aprendizaje Basado en Proyectos, Aprendizaje Servicio, Gamificación
– Aprendizaje Basado en Juegos, Flipped Classroom y Visual Thinking.
Vamos a conocer un poco de cada una de ellas.
‒ ‒
Hay algunas premisas que son obligatorias en el ABP y estas son:
‒ Debe partir de una pregunta o propuesta motivadora que esté
contextualizada y cercana al alumnado.
‒ ‒
Para su diseño, gestión y seguimiento se pueden utilizar diversas herra-
mientas (que pueden combinarse en función de las necesidades): una
plantilla con una serie de campos a rellenar que describen y caracterizan
el proyecto, una línea del tiempo, un análisis DAFO (Dificultades,
Amenazas, Fortalezas y Oportunidades) antes de iniciar su diseño, una
plantilla canvas, una tabla de doble entrada que enfrente competencias
a desarrollar con criterios de evaluación, así como una webquest, un
recurso digital que supone un estupendo soporte no solo para el diseño
sino también para la gestión y realización del proyecto (Álvarez-He-
rrero, 2016; 2018b).
Se la puede considerar como una variante del ABP, dado que la finali-
dad pasa por el mismo objetivo solo que en esta ocasión, además se
busca en la realización del proyecto, prestar un servicio a la comunidad.
No se trata de un voluntariado, ni de una buena acción, sino que tras
este Aprendizaje Servicio hay detrás y siempre un aprendizaje que el
alumnado se lleva a la vez que está colaborando y participando de al-
guna actividad, de alguna acción que reporta unos beneficios o una me-
jora de la sociedad, del mundo, de las personas (Batlle, 2013).
Es un proyecto solidario donde se une lo educativo (aprendizaje del
alumnado) con su compromiso social y su formación cívica. Así, tiene
como objetivo dar respuesta a las necesidades sentidas y reales de la
comunidad. El alumnado además se identifica con su entorno y se com-
promete en la mejora de esa realidad. Se vinculan los aprendizajes cu-
rriculares o académicos con aquella educación en solidaridad y valores
tan necesaria en nuestros días. Nuevamente, la misión y el rol del do-
cente es el mismo que con el ABP, se trata de un guía, un orientador en
el proceso de enseñanza-aprendizaje-servicio (Gil y Chiva, 2018).
Al igual que ocurría en el ABP en su diseño se ha de tener en cuenta
que se han de contemplar una serie de actividades conducentes a la rea-
lización o consecución del servicio. Igualmente hay que difundir y co-
municar el trabajo realizado en este ApS. Como advertíamos antes, no
se trata solo de realizar un servicio a la comunidad, sino que además se
busca estimular y mejorar el aprendizaje del alumnado, a través del
‒ ‒
desarrollo de las diferentes competencias y habilidades. Existen multi-
tud de ejemplos que se están empezando a dar en el ámbito universitario
(Deeley, 2016; Lorenzo et al., 2017; Rubio y Escofet, 2018): acompa-
ñamiento en su aprendizaje a personas con algún tipo de discapacidad;
acompañamiento a personas enfermas de cáncer; mejorar el medio am-
biente mediante: la repoblación, reforestación, limpieza de parajes na-
turales, campañas de sensibilización en el reciclaje, etc.; creación de
viseras y salvaorejas para los sanitarios durante la pandemia de la CO-
VID-19; compromiso con los ODS (Objetivos de Desarrollo Sosteni-
ble); campañas de información y sensibilización a los ciudadanos sobre
cualquier cuestión social o cultural que permita una mejora en la cali-
dad de vida o la convivencia; y así un sinfín de posibilidades (Batlle,
2020).
Algunas de las acciones que se ponen en juego con el ApS son: trans-
formar, investigar, actuar, contagiar, denunciar, colaborar, experimen-
tar, reflexionar, ayudar, identificar, sensibilizar, mejorar, acompañar,
alertar, difundir, etc.
‒ ‒
la utilización del juego de manera puntual; sea un juego serio, digital o
analógico, uno creado para la ocasión, o comercial, o bien un juego
adaptado a los contenidos curriculares; es lo que venimos a llamar
Aprendizaje Basado en el Juego (ABJ). Pero por otro lado tenemos que
podemos montar toda una propuesta pedagógica para trabajar una serie
de contenidos curriculares a través del desarrollo de un juego que tiene
una trama, historia o hilo argumental, con una serie de reglas, donde el
participante va participando en retos que al ir superando va pasando de
nivel, y que se obtienen puntuaciones, premios y recompensas que per-
miten al jugador ir avanzando en el rol que asume dentro del juego, y
todo ello sin perder de vista que estamos creando experiencias intere-
santes de aprendizaje utilizando las mecánicas del juego. En este se-
gundo caso, hablamos de la Gamificación.
Así, la utilización del Kahoot, Quizalize o Quizizz en el aula y sin estar
ligado a otro tipo de actividades lúdicas, supone un ejemplo de ABJ,
pero el desarrollar todo un entramado alrededor de una historia como
por ejemplo en un hospital donde a partir de los retos y misiones que
va superando el jugador va ascendiendo desde auxiliar de enfermería, a
enfermero/a, médico residente, médico adjunto, jefe de servicio y final-
mente a director médico del hospital; y todo ello con sus puntuaciones,
reglas y resto de mecánicas del juego, estaríamos hablando de un claro
ejemplo de gamificación (Oliva, 2016; Peñalva et al., 2019). Para dise-
ñar y desarrollar la gamificación existen también instrumentos, como
el canvas de gamificación, que permiten estructurar y gestionar todos
los componentes y variables que deben estar presentes en esta propuesta
de metodología activa.
Por último, reseñar que, aunque hay autores que las consideran meto-
dologías activas diferentes a la gamificación y el ABJ que aquí estamos
tratando, hay otros que las incluyen dentro de este tipo de experiencias.
Hablamos del Escape Room y del Break Edu, dos propuestas muy si-
milares, en las que al alumnado se les plantea mediante la resolución de
una serie de enigmas, juegos o retos, encontrar una clave o contraseña
que les permita escapar de algún lugar (Escape Room) o bien permitir
o impedir que ocurra alguna cosa que se busca (Break Edu).
‒ ‒
Al igual que como en todas las metodologías activas, la gamificación y
el ABJ exigen otra forma de evaluar, y de nuevo tenemos que contem-
plar las diferentes modalidades de evaluación, así como diferentes ins-
trumentos de evaluación.
‒ ‒
muy cómoda a la hora de trabajar online con el alumnado, pues puedes
llevar tu clase a cualquier momento y lugar (Bergmann y Sams, 2016).
Existen multitud de recursos digitales que nos facilitan el desarrollo de
esta metodología (Santiago y Bergmann, 2018), y tiene la particulari-
dad de que encaja muy bien combinándola con otras metodologías ac-
tivas como por ejemplo el ABJ. Y también es cierto, como ya comen-
tábamos en la introducción, que no es una metodología válida para to-
dos los grupos-clases, ni todas las disciplinas, ni para todos los conte-
nidos (Berenguer-Albaladejo). Aun así, son muchas las experiencias
documentadas sobre el uso y buen uso del flipped classroom en las au-
las universitarias (Santiago et al., 2018; Sola et al., 2019).
‒ ‒
diagramas, marcos, conectores y sombras. Y entre las herramientas que
necesitamos para realizarlos dependerán de si los realizamos de forma
analógica (rotuladores, pinturas, lápices, borrador, sacapuntas, papel o
cuaderno) a si lo realizamos de forma digital (dispositivo tecnológico:
Tablet, tableta gráfica, Smartphone, ordenador, etc. y el software, que
dependerá de sistema operativo: Sketches, Procreate, Tawe, etc.). Todo
ello, poco a poco va generando una técnica que permite codificar y tam-
bién interpretar los códigos, los giros visuales y otro tipo de estrategias
gráficas que se utilizan en el visual thinking (Gholam, 2017; Keogh et
al., 2020).
El alumnado a la hora de recoger las notas o apuntes de una clase los
puede recoger de forma visual, siguiendo los sencillos pasos que esta-
blece esta técnica-metodología: mirar, ver, imaginar y mostrar. De esta
manera el visual thinking ofrece al alumnado un acercamiento a la reali-
dad a través de imágenes, que organizadas y estructuradas les van a
permitir acceder a contenidos de una manera simple y sencilla (Akoun
et al., 2019). Nuevamente esta metodología permite desarrollar un am-
plio espectro de competencias y habilidades. Entre sus numerosos be-
neficios encontramos que la utilización de esta técnica fomenta la aten-
ción del alumnado, estimula la investigación autónoma, facilita la com-
prensión de los conceptos trabajados, motiva y desarrolla la creatividad,
permite que el alumnado aprenda a extraer las ideas fundamentales de
un discurso-charla-exposición, así como a que sea capaz de sintetizar,
estructurar y organizar contenidos, por no hablar del desarrollo del pen-
samiento y de la estética.
‒ ‒
Entre las diferentes competencias que se desarrollan en este tipo de me-
todologías, tal y como hemos visto son: aprender a aprender, trabajo
colaborativo, aprendizaje experiencial, aprendizaje distribuido, se faci-
lita un tratamiento interdisciplinar y global de los contenidos, se desa-
rrolla la comunicación y el trabajo en grupo, el pensamiento crítico,
creativo y divergente, etc. Los contenidos se trabajan de una forma con-
textualizada, haciéndose eco de los intereses, las necesidades y la reali-
dad más cercana al alumnado (pues se trata de contenidos reales), pero
sobretodo se evidencia siempre su funcionalidad, que uso o servicio di-
recto tienen en el día a día del alumnado, dando respuesta en todo mo-
mento a esa pregunta que suelen hacerse los estudiantes ¿y esto para
que me sirve en mi vida? Y el alumnado es consciente en todo momento
de esta funcionalidad, de lo que está aprendiendo y para que sirve.
2. OBJETIVO
3. METODOLOGÍA
3.1. MUESTRA
‒ ‒
estudios que se imparten en la Universidad de Alicante, aunque sí hay
que reseñar que un elevado porcentaje de los participantes eran de es-
tudios y grados de la Facultad de Educación (26, el 44.8%).
3.2. PROCEDIMIENTO
3. Aprendizaje Servicio
5. Flipped Classroom
6. Visual Thinking
Los docentes participantes, tras trabajar cada uno de los bloques de con-
tenidos vistos, con las diferentes metodologías activas planteadas, y de
realizar pequeñas actividades sobre estas, se les planteaba una actividad
final en la que tenían que diseñar y a ser posible implementar, una pro-
puesta en la que estuviese presente una o varias de las metodologías
trabajadas.
‒ ‒
ventajas y dificultades que les veían en su implementación en las aulas
universitarias.
4. RESULTADOS
Antes de pasar a presentar los resultados cabe indicar que, dado que las
propuestas finales presentadas por los docentes participantes en la for-
mación podían presentar la combinación de más de una de las metodo-
logías activas presentadas en el curso, los porcentajes y frecuencias ob-
tenidos son los acumulados, es decir, una misma propuesta contabiliza
en una o más metodologías activas en función de las que haya hecho
uso. Dicho esto, en la Tabla 1 se recogen las frecuencias y porcentajes
acumulados de uso de cada una de las metodologías activas planteadas
en el curso.
Tal y como se puede apreciar en los resultados de la Tabla 1, hay dos
metodologías que han sido las más utilizadas con diferencia a las otras
tres, y estas han sido principalmente la de flipped classroom, utilizada
49 veces, un 84.5% de las veces; y la de ABJ – Gamificación, 38 veces
utilizada (65.5%). Por otro lado, la metodología activa menos utilizada
ha sido la de visual thinking, que solo dos docentes de los 58 partici-
pantes, la utilizaron en sus propuestas finales de intervención en el aula
con metodologías activas.
‒ ‒
TABLA 1. Resultados de las metodologías activas utilizadas en sus actividades finales por
los docentes en formación
Metodología activa n %
Aprendizaje Basado en Proyectos 7 12
Aprendizaje Servicio 16 27.6
Aprendizaje Basado en Juegos - Gamificación 38 65.5
Flipped Classroom 49 84.5
Visual Thinking 2 3.4
Fuente: elaboración propia
‒ ‒
argumentaban en su no utilización en que consideraban que
requería que los docentes supiesen dibujar bien para llevarla a
cabo y poderla explicar a su alumnado con garantías.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
Pero también coincidimos con Collado-Valero et al. (2021) en que
queda mucho camino por recorrer y se debe prestar una especial aten-
ción al uso de este tipo de metodologías con un plan de seguimiento y
de formación continua del profesorado para que sigan implementado
una enseñanza de calidad en sus clases, sin desperdiciar la oportunidad
que ha surgido a raíz de la pandemia de la COVID-19.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
universidad sea un hecho y no una simple anécdota. Este plan de segui-
miento implicaría conocer si pasado un tiempo el profesorado sigue uti-
lizando e implementando estas metodologías en sus clases o si por el
contrario han desaparecido. Y debe estar apoyado con una continuidad
y ampliación de este tipo de formaciones aquí planteado, que permitan
al profesorado seguir avanzando y descubriendo las posibilidades que
presentan este tipo de metodologías. Y a partir de ahí a buen seguro que
se implementan aquellas que aquí hemos visto que tenían menor éxito
por exigir una mayor preparación, así como el que el docente sepa re-
conocer cuando aplicarlas, cuando aplicar una u otra o bien una combi-
nación de ellas, así como saber cuando no es procedente aplicarlas.
Otras futuras líneas de investigación nos llevarán a realizar este plan de
seguimiento, así como seguir ofreciendo formaciones iniciales sobre
metodologías activas al profesorado universitario. Y será también muy
interesante, con una muestra mayor de participantes, analizar si se pro-
ducen diferencias por sexo o por los diferentes grados y disciplinas que
imparten los docentes universitarios.
7. REFERENCIAS
‒ ‒
Ausín, V., Abella, V., Delgado, V., y Hortigüela, D. (2016). Aprendizaje basado
en proyectos a través de las TIC: una experiencia de innovación docente
desde las aulas universitarias. Formación universitaria, 9(3), 31-38.
http://doi.org/10.4067/S0718-50062016000300005
Batlle, R. (2013). El aprendizaje-servicio en España: el contagio de una
revolución pedagógica necesaria. PPC Editorial.
Batlle, R. (2020). Aprendizaje-servicio. Compromiso social en acción. Santillana
Activa.
Berenguer-Albaladejo, C. (2016). Acerca de la utilidad del aula invertida o
flipped classroom. En M. T. Tortosa, S. Grau, y J. D. Álvarez (Coords.),
XIV Jornadas de Redes de Investigación en Docencia Universitaria:
investigación, innovación y enseñanza universitaria: enfoques
pluridisciplinares (pp. 1466-1480).
http://rua.ua.es/dspace/handle/10045/59358
Bergmann, J., y Sams, A. (2016). Dale la vuelta a tu clase. Lleva tu clase a cada
estudiante, en cualquier momento y cualquier lugar. SM.
Collado-Valero, J., Rodríguez-Infante, G., Romero-González, M., Gamboa-
Ternero, S., Navarro-Soria, I. y Lavigne-Cerván, R. (2021). Flipped
Classroom: Active Methodology for Sustainable Learning in Higher
Education during Social Distancing Due to COVID-19. Sustainability,
13, 5336. https://doi.org/10.3390/su13105336
Colomo-Magaña, E., Soto-Varela, R., Ruiz-Palmero, J., y Gómez-García, M.
(2020). University Students’ Perception of the Usefulness of the Flipped
Classroom Methodology. Education Sciences, 10, 275.
https://doi.org/10.3390/educsci10100275
Contreras, R. S. (2016). Gamificación en aulas universitarias. Bellaterra - Institut
de la Comunicació.
https://ddd.uab.cat/pub/llibres/2016/166455/Ebook_INCOM-
UAB_10.pdf
De Pablo, F., y Lasa, M. (2019). ¡Dibújalo! Innova, crea y comunica de manera
visual. LID Editorial Empresarial.
Deeley, S. J. (2016). El Aprendizaje-Servicio en educación superior: Teoría,
práctica y perspectiva crítica. Narcea Ediciones.
Fernández-Fontecha, A., O’Halloran, K. L., Tan, S., y Wignell, P. (2019). A
multimodal approach to visual thinking: the scientific sketchnote. Visual
Communication, 18(1), 5-29.
https://doi.org/10.1177/1470357218759808
Gil Gómez, J. y Chiva Bartoll, O. (2018). Aprendizaje-servicio universitario:
Modelos de intervención e investigación en la formación inicial docente.
Octaedro.
Gholam, A. P. (2017). Visual Thinking Routines: A Mixed Methods Approach
Applied to Student Teachers at the American University in Dubai.
‒ ‒
Journal of Inquiry and Action in Education, 9(1), 2.
https://digitalcommons.buffalostate.edu/jiae/vol9/iss1/2
Ha, A. S., O’Reilly, J., Ng, J. Y., y Zhang, J. H. (2019). Evaluating the flipped
classroom approach in Asian higher education: Perspectives from
students and teachers. Cogent Education, 6(1), 1638147.
https://doi.org/10.1080/2331186X.2019.1638147
Jiménez, E. (2019). Metodologías activas de aprendizaje en el aula: Apuesta por
un cambio de paradigma educativo. Aula Magna McGraw Hill.
Jiménez, D., González, J. J., y Tornel, M. (2020). Metodologías activas en la
universidad y su relación con los enfoques de enseñanza. Profesorado,
Revista de Currículum y Formación del Profesorado, 24(1), 76-94.
http://doi.org/10.30827/profesorado.v24i1.8173
Keogh, F. M., Lee, A., y Gibbon, F. (2020). Visual Thinking Strategies:
Experiences of an arts-based curriculum in an Irish University Medicine
and Health Faculty. All Ireland Journal of Higher Education, 12(1).
https://ojs.aishe.org/index.php/aishe-j/article/view/408/705
León, M. J., y Moya, E. C. (2011). Diseño de cuestionarios (OPPUMAUGR y
OPEUMAUGR): La opinión y la percepción del profesorado y de los
estudiantes sobre el uso de las metodologías activas en la universidad.
Profesorado. Revista de Currículum y Formación de Profesorado, 15(2),
271-298.
Lobato, C., y Madinabeitia, A. (2011). Perfiles Motivacionales del Profesorado
ante la Formación en Metodologías Activas en la Universidad.
Formación universitaria, 4(1), 37-48. https://dx.doi.org/10.4067/S0718-
50062011000100006
Lorenzo, M. M., Mella, I., García, J. y Varela, C. (2017). Investigar para
institucionalizar el aprendizaje servicio en la universidad española.
RIDAS, Revista Iberoamericana de Aprendizaje Servicio, 3, 118- 130.
http://doi.org/10.1344/RIDAS2017.3.9
Marín, I. (2018). ¿Jugamos?: Cómo el aprendizaje lúdico puede transformar la
educación. Paidós Educación.
Marín, J. A., Garzón, E., Fernández, J. M., y Campos, M. N. (2020).
Metodologías activas en el aula: uso de flipped classroom en la
universidad española. En F. J. Hinojo, J. M. Trujillo, J. M. Sola y S.
Alonso (Coords.) Innovación Docente e Investigación Educativa en la
Sociedad del Conocimiento (pp. 13-26). Dykinson.
Martín, M. (2018). El trabajo por proyectos. Una vía para el aprendizaje activo.
Santillana Activa.
Oliva, H. A. (2016). La gamificación como estrategia metodológica en el
contexto educativo universitario. Realidad y Reflexión, 44, 108-118.
http://hdl.handle.net/10972/3182
‒ ‒
Peñalva, S., Aguaded, I., y Torres-Toukoumidis, Á. (2019). La gamificación en la
universidad española. Una perspectiva educomunicativa. Revista
Mediterránea de Comunicación/Mediterranean Journal of
Communication, 10(1), 245-256.
https://doi.org/10.14198/MEDCOM2019.10.1.6
Prieto, A. (2017). Flipped Learning. Aplicar el Modelo de Aprendizaje Inverso.
Narcea.
Roig-Vila, R., y Álvarez-Herrero, J. F. (2019). Repercusión en Twitter de las
metodologías activas ABP, Flipped Classroom y Gamificación. RIED.
Revista Iberoamericana de Educación a Distancia, 22(2), 79-96.
https://doi.org/10.5944/ried.22.2.23272
Romero-Rodríguez, J. M., Gómez-García, G., Rodríguez-Jiménez, C., y Ramos,
M. (2020). Uso de metodologías activas en la universidad española:
análisis de las principales innovaciones. En E. Colomo, E. Sánchez, J.
Ruiz y J. Sánchez (cords.), La tecnología como eje del cambio
metodológico (pp. 464-467). UMA Editorial.
Rubio, L. y Escofet, A. (coords.) (2018). Aprendizaje-servicio (ApS): claves para
su desarrollo en la Universidad. Octaedro.
Santiago, R., Díez, A., y Andía, L. A. (2018). Flipped classroom. 33 experiencias
que ponen patas arriba el aprendizaje. Editorial UOC.
Santiago, R., y Bergmann, J. (2018). Aprender al revés: Flipped Learning 3.0 y
metodologías activas en el aula. Paidós Educación.
Silva, J., y Maturana, D. (2017). Una propuesta de modelo para introducir
metodologías activas en educación superior. Innovación educativa
(México, DF), 17(73), 117-131. http://bit.ly/silvama
Sola, T., Aznar, I., Romero, J. M., y Rodríguez-García, A. M. (2019). Eficacia del
método flipped classroom en la universidad: Meta-análisis de la
producción científica de impacto. REICE. Revista Iberoamericana sobre
Calidad, Eficacia y Cambio en Educación, 17(1), 25-38.
https://doi.org/10.15366/reice2019.17.1.002
Tang, T., Abuhmaid, A. M., Olaimat, M., Oudat, D. M., Aldhaeebi, M., y
Bamanger, E. (2020). Efficiency of flipped classroom with online-based
teaching under COVID-19. Interactive Learning Environments, 1-12.
https://doi.org/10.1080/10494820.2020.1817761
Väisänen, S., y Hirsto, L. (2020). How Can Flipped Classroom Approach Support
the Development of University Students’ Working Life Skills?—
University Teachers’ Viewpoint. Education Sciences, 10(12), 366.
http://doi.org/10.3390/educsci10120366
Vergara, J. J. (2016). Aprendo porque quiero. El aprendizaje Basado en Proyectos
(ABP), paso a paso. SM - Biblioteca Innovación Educativa.
‒ ‒
CAPÍTULO 101
DAVID APARISI
Universidad de Alicante
JOSÉ RAMÓN RODRÍGUEZ
Universidad de Alicante
BEATRIZ DELGADO
Universidad de Alicante
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
1.1. DEPRESIÓN Y RENDIMIENTO ACADÉMICO
Debemos tener en cuenta qué entendemos por depresión y para ello nos
centraremos en la definición mantenida por la Organización Mundial
de la Salud (OMS) que la entiende como un desorden en la mente que
se suele dar con frecuencia y tiene unas características concretas como
es la perdida de interés por lo que se está haciendo, la tristeza, tener un
sentimiento de culpabilidad junto con una falta de autoestima, en refe-
rencia con los estudiantes, se destaca además, perdida del sueño, falta
de apetito, cansancio y poca concentración en las tareas. La OMS
(2017) publicó que los estudiantes que tenían una autoestima baja pue-
den llegar a tener depresión que, si persiste, puede hacerse crónica y
dificultar el desarrollo de los estudios universitarios junto con su vida
cotidiana. Teniendo en cuenta lo afirmado por la OMS y diversos estu-
dios que hablan de la depresión, podemos encontrar varios niveles de
síntomas depresivos en los alumnos de universidad a nivel mundial. Por
ejemplo, en un estudio realizado por Tomoda, Mori, Kimura, Takahashi
y Kitamura (2000), en Japón es de un 20,7%; en otro estudio que reali-
zaron Adewuya et al. (2006), concluyeron que en Nigeria era del 8,3%
y Garlow et al. (2007), destacaron que en Estados Unidos era del 6,6%.
Por tanto, el porcentaje más alto se encontró en Japón, pero sobre todo
en estudiantes que se encontraban en el primer curso académico de uni-
versidad, destacando que en este país existe un nivel bastante elevado
de exigencia para poder cursar las diferentes carreras que se ofrecen.
Por lo que, considerando los estudios anteriores, podemos hablar de que
la depresión puede afectar a que los estudiantes se adapten a la univer-
sidad.
Por otro lado, hay investigadores que inciden en que el acceso a la uni-
versidad a una edad temprana, hace que las universidades deban dar a
los estudiantes herramientas suficientes para que los jóvenes puedan
alcanzar un nivel académico óptimo. Además, tienen en cuenta que el
proceso de adaptación no es sencillo, ya que como se ha esclarecido en
la mayoría de ocasiones, la edad y otros agentes influyen en que los
jóvenes abandonen los estudios. Este estudio destaca también que es
normal que en los dos primeros trimestres exista un alto nivel de aban-
dono asociado a varios factores como la ansiedad, depresión, problemas
‒ ‒
económicos, bajo rendimiento y problemas familiares (Poczwardowski,
Grosshans y Trunnell, 2003). En cambio, Dyrbye et al. (2006) destacan
que el problema de la deserción académica transciende del ámbito edu-
cativo y se relaciona directamente con la salud de los estudiantes. Estos
autores destacan que este problema se propaga por los pocos recursos
económicos que tiene la educación, que no ofrece posibilidades de in-
versión para el estudio de este problema. Este problema en el ámbito
universitario hace que variables como la organización, sea uno de los
factores principales que hacen que los alumnos terminen abandonando
sus estudios. El precio que se paga tanto de manera humana, social o
económica, hace que la universidad reduzca la hospitalidad a los nuevos
alumnos, no se mejore en la enseñanza ni en la relación estudiantes-
docentes. En este caso, todos estos factores hacen que se produzca an-
siedad en los jóvenes que acaban de comenzar y, aunque un nivel equi-
librado de ansiedad en ocasiones puede ser beneficioso, cuando estos
niveles suben es cuando aparece la depresión, haciendo que el rendi-
miento del alumnado baje. Por tanto, hay que procurar que esa ansiedad
que se genera en los primeros meses de actividad universitaria, sea úni-
camente para la adaptación del alumnado y generar que disminuya o
desaparezca mediante la motivación, orientación y apoyo social. Según
Diener (2000), se deben identificar qué agentes psicosociales son los
que favorecen que los alumnos tengan una mejor adaptación al sistema
universitario y alcancen las metas que se propongan.
En este punto, debemos tener en cuenta que el paso del instituto a la
universidad es una experiencia emocionante para algunos estudiantes,
pero es una experiencia abrumadora y estresante para otros (Sennett,
Finchilescu, Gibson, y Strauss, 2003). Entrar a una carrera universitaria
crea un ambiente estresante que, a menudo, lleva a un rendimiento aca-
démico bajo, problemas psicológicos, físicos y de ajuste (Sherina, Ram-
pal y Kaneson, 2004). Siguiendo una misma línea, diversos estudios se
centraron en el ámbito universitario concluyendo que existía un gran
número de estudiantes que tenían ansiedad y depresión y, que estas va-
riables tenían efecto en el abandono de los estudios, rendimiento aca-
démico y el equilibrio emocional (Balanza, Serafín, Morales y Gue-
rrero, 2009). En este sentido, Ninan y Berger (2001) ya habían insistido
‒ ‒
en que existía una morbilidad asociada entre la ansiedad y la depresión;
ambas implicadas en la evaluación dependiendo de la gravedad y el
tiempo que perdurara estos trastornos. Por estos motivos, según Arrivi-
llaga, Cortés, Goicochea y Lozano (2003), debemos ocuparnos de los
factores que desencadenan la depresión en estudiantes universitarios de
primer año. Para concluir, Cassaretto (2003) realizó varios estudios en
los que identifica que, si la depresión se diagnosticara de forma tem-
prana, no únicamente se reducirían las cifras de abandono académico,
sino que además mejoraría la salud mental de los alumnos respecto al
consumo de tabaco, alcohol, conductas alimentarias, etc. Por su parte,
Campo et al. (2005), en una investigación realizada en alumnos de pri-
mer curso de universidad, encontraron que la depresión podía darse por
factores de estrés en el estudiante como los relacionados con su futuro,
es decir, la falta de éxito o el desempleo juvenil. Estos aspectos generan
niveles altos de estrés que, si no son rebajados, podrían convertirse en
depresión.
‒ ‒
internos que les causan un malestar psicológico. Además, como señalan
Arco, López, Heilborn y Fernández (2005), dentro del entorno univer-
sitario puede haber situaciones que creen un efecto adverso en la salud
psicológica y hagan que aparezca la sensación de ansiedad. Como he-
mos indicado anteriormente, entrar en la universidad requiere una adap-
tación en la vida diaria de los alumnos, muchos tienen que separarse del
ambiente familiar, cambian su residencia y, por ende, adquieren más
responsabilidades, cambian las actividades que hacían a diario, etc.
En definitiva, la universidad tiene unas características a nivel organiza-
tivo y académico que muchas veces pueden generar en los estudiantes
situaciones de ansiedad y malestares psicosociales, viendo un bajo ren-
dimiento sobre todo en el primer año de universidad. Por ello, es rele-
vante acercarnos a la realidad de los estudiantes universitarios teniendo
en cuenta la salud mental que estos tienen (Pérez et al., 2011). No obs-
tante, si nos fijamos en el informe del instituto nacional de juventud, no
se tiene en cuenta como se debería la salud mental del alumnado, ya
que en muchas ocasiones se considera que la juventud forma parte del
segmento de la población sano. Este informe también destaca que los
jóvenes españoles, ya sean hombres o mujeres, afirman que son felices
en términos generales, estando por encima de la media de los jóvenes
de otros países a nivel europeo (Injuve, 2013).
Para poder entender qué efectos tiene la ansiedad sobre los estudiantes
y su rendimiento académico y teniendo en cuenta lo visto anterior-
mente, debemos partir de un concepto adaptativo. Debemos tener en
cuenta que la anticipación a situaciones que implican una complejidad
pone en funcionamiento un proceso de adaptación para afrontar el
nuevo reto. Esta función de adaptación activa mecanismos cognitivos y
conductuales que nos ayudan a evitar el daño. Además Spielberger
(2013), destaca los mecanismos cognitivos se accionan automática-
mente y los conductuales por el contrario son controlados por las per-
sonas que padecen síntomas de ansiedad. Esta manera de entender la
ansiedad, se relaciona también con el rendimiento académico, ya que
refleja una propuesta activa de recursos durante su proceso, el cual de-
penderá de la cantidad demandada o, dicho de otra manera, de la com-
plejidad de la tarea. Se ha de considerar también la capacidad de los
‒ ‒
estudiantes para controlar las interferencias que pueda causar la preo-
cupación de los peligros que anticipamos. Por último, se debe tener en
cuenta la disponibilidad de recursos que se tienen para afrontar las di-
ferentes situaciones. En los casos anteriores, la ansiedad se ha analizado
sobre el rendimiento académico y cognitivo. De esta manera, una ver-
tiente interesante manifiesta que, en mucho de los casos, los alumnos
con ansiedad bajan su rendimiento en situaciones de estrés y ante acti-
vidades complejas (Eysenck et al., 2007). Por tanto, los síntomas nega-
tivos que tiene la ansiedad en la eficacia del procesamiento del entorno,
es dependiente de dos variables relacionadas con la atención de la per-
sona que lo padece: inhibición y desplazamiento (Eysenck, 2013). Sin
embargo, otros autores destacan que la ansiedad no pone en peligro el
rendimiento del alumnado cuando se utilizan estrategias de compensa-
ción, como son el aumento del esfuerzo o el uso de más recursos de
procesamiento. En este caso, la necesidad de revisar la teoría que se
propuso inicialmente vino atribuida por los progresos en las teorías de
la explicación del proceso de atención. Estas mejoras en la investiga-
ción permitieron que se pudiese desarrollar una descripción detallada
de cómo la ansiedad afecta a la atención. Estos avances recogidos en la
teoría del control de la atención, explican cómo funcionan los procesos
de atención en los estudiantes (Spielberger, 2013).
‒ ‒
se les ha dado la misma importancia (Baptista, 2003). Por ejemplo, hay
autores que, en el contexto psicológico, apoyan que las emociones son
dependientes y, por ese motivo, se producen cuando el ser humano in-
teractúa con el entorno que le rodea (Fernández-Berrocal y Extremera,
2008; Salovey y Caruso, 2008).
Cuando hablamos de modelos teóricos sobre la inteligencia emocional
debemos fijarnos en Mayer, Salovey, Caruso y Cherkasskiy (2011), los
cuales destacan que en la última década, la literatura ha sabido distin-
guir entre dos conceptos referentes al análisis de la inteligencia emo-
cional: a) la teoría que establece la inteligencia emocional como un mo-
delo de destreza, es decir, los acercamientos que estudian las capaci-
dades cognitivas que ayudan a aplicar la recepción de información que
viene directamente de nuestras emociones para establecer una mejoría
del desarrollo mental; y, por otro lado: b) los modelos que se conocen
como mixtos, estos se refieren a las aproximaciones que incluyen el
concepto de inteligencia emocional, de las destrezas que provienen del
cerebro con manifestaciones estables de la personalidad y del compor-
tamiento.
El test que desarrolló Goleman para evaluar los factores incluidos en su
modelo de inteligencia emocional, es el EQ-test (Goleman, 1995). Este
test tiene diez situaciones con cuatro respuestas. Este modelo propone
una valoración de los límites y las fortalezas, enfocando toda la infor-
mación competencial obtenida. Respecto a la evaluación, actualmente
se defienden principalmente tres medidas según Boyatzis et al. (2000).
La primera es la medida basada en medidas realizada mediante autoin-
formes o escalas, que evalúan tanto las habilidades como los observa-
dores exteriores, es decir, lo primero es incluir un instrumento clásico
para medir como son los cuestionarios y los autoinformes. En esta me-
dida los indicadores se componen por enunciados cortos que se realizan
de forma verbal que evalúan a la persona y su inteligencia emocional
teniendo en cuenta la aproximación de los niveles en habilidades emo-
cionales concretas. La segunda es la medida de habilidad que incluye
que el individuo resuelva diferentes problemas de carácter emocional
y, finalmente, su contestación se compare con unos criterios estableci-
dos de puntuación. Petrides y Furnham, (2001), destacan un tercer
‒ ‒
método de evaluación, que es denominado como evaluación de 360º.
Este método está basado en la observación exterior, es decir, solicita-
mos a otros estudiantes de la misma clase en este caso que den su opi-
nión de cómo perciben ellos a la persona evaluada. Según Mayer, Sa-
lovey, Caruso y Sitarenios, (2003), este método proporciona informa-
ción sobre cómo interactúa el estudiante con el resto de los estudiantes
de su entorno, cómo resuelve las situaciones de conflicto y cómo
afronta situaciones más estresantes. Por lo tanto, este método permite
evaluar cómo los demás perciben el nivel de habilidad emocional del
individuo. No obstante, se considera adicional a los otros métodos ya
que evita problemas sociales.
Si hablamos de inteligencia emocional se debe tener en cuenta que la
mayoría del alumnado no participa activamente en la vida universitaria
y que las tutorías ofrecidas son más formales que reales, que escasean
las prácticas, que los contenidos son teóricos y que el examen sigue
siendo hoy en día el instrumento de evaluación por excelencia, y junto
a esto los elevados porcentajes de medias de retraso en la graduación o
en el significativo nivel de abandono (Michavila, 2001). Si nos fijamos
en diferentes estudios sobre la inteligencia, variables como Inteligencia
General (C.I.), la personalidad y la inteligencia emocional aparecen
como factores explicativos del rendimiento académico (Parodi, Bel-
monte, Ferrándiz y Ruiz, 2017). Estos estudios buscan esclarecer su in-
fluencia y relación con aspectos como el éxito en el ámbito profesional
y personal, siendo el rendimiento académico el factor más importante
de análisis del éxito profesional. En la educación universitaria, factores
como la personalidad o las emociones se unen en un binomio que cada
vez cobra más relevancia y valor en una formación ajustada a las nuevas
demandas de esta y futura sociedad. Cabe destacar que, si hablamos de
inteligencia emocional en el ámbito de la educación y más en concreto
de la educación universitaria, hablamos de proporcionar un marco para
comprender y facilitar al estudiante, una mayor capacidad emocional
para reconocer las señales emocionales, procesar la información emo-
cional, y utilizar el conocimiento emocional para adaptarse a los desa-
fíos socioemocionales en la universidad. La educación universitaria es
alabada por el progreso académico, es decir, por el aporte de
‒ ‒
conocimientos a sus estudiantes, sin mirar si estos se adaptan a sus ne-
cesidades e inquietudes. Por este motivo, cabe cuestionarse si los alum-
nos salen bien preparados para enfrentarse a la adaptación a la vida uni-
versitaria (Jaeger, 2003). Swaner (2007) indica que los alumnos, en va-
rias ocasiones, no disponen de suficientes competencias emocionales y
sociales, las cuales les sirvan para poder sacar provecho de todos sus
conocimientos académicos. Por este motivo, si estas competencias no
son atendidas adecuadamente, los estudiantes no terminan de adaptarse
y por tanto, abandonan sus estudios. Por este motivo, las universidades
deben mejorar en la consecución del desarrollo emocional, personal,
social e intelectual de manera integral por parte de todo su alumnado.
De esta manera conseguirán una mejor preparación de cara a un futuro
profesional para todo el alumnado. Esta preparación requiere que los
profesores involucren a todos los estudiantes en un aprendizaje signifi-
cativo teniendo en cuenta el proceso tanto de enseñanza como de apren-
dizaje (Harwar, 2007). Los sujetos que son capaces de desarrollar la
capacidad de comprenderse a sí mismos, el mundo que les rodea, de
construir relaciones significativas y fomentar cambios positivos, tienen
una ventaja en la educación, el trabajo y, en definitiva, en la vida (Kuh
et al., 2010). Tras esta afirmación, habría que reflexionar en qué ocu-
rriría si este tipo de alumnos pudieran desarrollar sus capacidades emo-
cionales. Es en este punto cuando debemos plantearnos la posibilidad
de que todos los alumnos puedan desplegar sus capacidades para abor-
dar con eficacia la nueva información recibida, así como la habilidad
para adaptarse exitosamente a contextos muy distintos de los que deben
enfrentarse. Si los alumnos fuesen capaces de realizar esta acción, el
éxito en su adaptación a la universidad estaría asegurado (Gardner,
2001). Por otro lado, la relación del rendimiento académico con la in-
teligencia emocional ha sido confirmada por diversos estudios científi-
cos, aunque varias de las correlaciones son moderadas, con lo cual, se
debe tener en cuenta que existen otros factores que ayudan al rendi-
miento académico a parte de las emociones (Enríquez, 2011; Mavrove-
lli et al., 2007; Petrides y Furnham, 2001; Petrides, Furnham, y Mavro-
velli, 2007; Salguero et al., 2010; Salguero, Palomera y Fernández-Be-
rrocal, 2012). Pero volviendo a la adaptación a la universidad del alum-
nado, destacamos que, respecto al nuevo movimiento de trabajar la
‒ ‒
inteligencia emocional, las universidades han tenido que hacer un cam-
bio metodológico en sus aulas. Los nuevos planes educativos apuestan
el aprendizaje de las competencias y en el aumento de las asignaturas
prácticas. Todo esto supone un cambio significativo en la docencia, ya
que las competencias hacen que la educación verdaderamente sea inte-
gral al englobar las 4 dimensiones de todo ser humano (saber, saber
hacer, saber ser y saber estar). Esto supone un referente obligatorio para
poder formar a los estudiantes en la inteligencia emocional (Kincheloe,
Steinberg y Villaverde, 2004). Además, debemos ser conscientes que
los agente tanto sociales como emocionales están presentes en lo refe-
rente a todo lo educativo, es decir, todo lo que tiene que ver con la in-
teligencia emocional tiene interacción en los estudiantes mediante el
rendimiento de estos. Por tanto, debemos tener en cuenta esto para la
formación de los nuevos docentes. De esta forma, los alumnos deben
asumir su competencia en el manejo explícito e implícito de competen-
cias sociales y afectivas. El docente tiene un papel de mediador que
repercute en la consecución de los conceptos más significativos y en el
progreso emocional que engloba la convivencia de todos los agentes
involucrados en la comunidad educativa, tanto dentro como fuera del
aula, teniendo en cuenta la eficacia y las emociones (Abarca, Marzo y
Salas, 2002). Teniendo en cuenta esto, las universidades pueden ser más
eficaces si utilizan la inteligencia emocional para preparar a sus estu-
diantes para la vida después de la universidad. La reducción de la tasa
de abandono también tiene un impacto significativo en los centros uni-
versitarios ya que, cuanto mayor sea el número de alumnos que perma-
nece en sus estudios, las universidades se centrarán más en el alumnado
y aprovechará más su rendimiento.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
puntuaciones de depresión (hipótesis 1) y ansiedad (hipótesis 2) en es-
tudiantes con menor rendimiento académico, y mayores niveles de in-
teligencia emocional en estudiantes con mayor rendimiento académico
(hipótesis 3).
3. METODOLOGÍA
3.1. PARTICIPANTES
‒ ‒
los diferentes grupos de la muestra por Sexo x Edad (χ2 = 1,56; p =
0,46).
3.2. INSTRUMENTOS
‒ ‒
ítems y diseñada para establecer la dificultad de los síntomas de depre-
sión en personas adultas y adolescentes, pudiéndose administrar a jóve-
nes a partir de 13 años. En cada ítem, la persona a la que se le administra
tiene que elegir una respuesta alternativa entre cuatro propuestas orde-
nadas de menos a más gravedad, describiéndose la frase que más se
adecuado a su estado de ánimo en las última dos semanas. A la hora de
corregir este instrumento, cada ítem es valorado de 0 a 3 puntos depen-
diendo de la opción que ha escogido la persona. Una vez sumadas todas
las puntuaciones se obtiene una puntuación global. Beck et al. (1996)
en la realización de este cuestionario, comprobaron que existía una so-
lidez interna del instrumento BDI-II tanto en muestras médicas y mues-
tras no médicas, con un coeficiente alfa de 0,92. Dicho instrumento ob-
tuvo puntuaciones altas de consistencia interna en muestras de pobla-
ción global, estudiantes universitarios y personas con trastornos psico-
patológicos (Sanz et al., 2003). El BDI-II se tradujo al español por Sanz
et al. (2003), quienes contrastaron esta traducción y respetaron el ins-
trumento general en el inglés que era su lengua original. Además, una
primera aplicación de este instrumento, mostró que la fiabilidad y vali-
dez de las puntuaciones de la prueba eran adecuados. La consistencia
interna del cuestionario BDI-II en este estudio fue óptima siendo el
valor del alfa de Cronbach de 0,86.
‒ ‒
solucionar los diferentes problemas que surjan (Reparación emocional),
engloba una planificación abierta, el pensamiento creativo, la motiva-
ción y la atención para poder resolver cualquier problema. Por tanto, el
instrumento evalúa las variables percibidas emocionalmente como:
Atención, Claridad y Reparación. El TMMS-24 que es la adaptación de
la versión original, se compone de 24 ítems, 8 ítems en cada subescala
(Salovey et al., 1995). Este cuestionario analiza cómo los sujetos con-
trolan sus sentimientos y estados de ánimo reales a través de una escala
Likert (1= Muy desacuerdo a 5= Muy de acuerdo). La claridad en cómo
evaluar participantes lejanos lograr un entendimiento acerca sus estados
emocionales reales (p. ej. “yo soy normalmente muy claro acerca de
mis sentimientos"). El TMMS-24 demostró poseer consistencias inter-
nas eficaces, con valores de consistencia interna alfa de Cronbach de,
82,, 87,, 86, para las subescalas de Reparación, Claridad, y Atención,
respectivamente (Salovey et al., 1995). En las escalas del instrumento
también se muestra como estas poseen validez predictiva de varios ras-
gos afectivos. La claridad y la reparación se encuentran asociados con
un mejor control emocional, incorporando la satisfacción interpersonal
y la autoestima (Salovey, Stroud y Epel, 2002), y además según Gold-
man, Kraemer y Salovey (1996), al número de enfermedades. En esta
investigación, se alcanzaron excelentes índices internos de consistencia
(Alfa de Cronbach) para las subescalas de Comprensión emocional
(0,92), Atención (0,90) y Reparación (0,89).
‒ ‒
3.3. PROCEDIMIENTO
Para valorar la relación que existe entre las variables del rendimiento
académico y las variables psicosociales (depresión, ansiedad, e inteli-
gencia emocional) se realizó el estudio de diferencia de medias y de
análisis de varianzas. Para ello, se calcularon las pruebas ANOVAS
para analizar las variables psicosociales teniendo en cuenta el rendi-
miento académico de los alumnos.
Para controlar la influencia del tamaño muestra en las diferencias esta-
dísticas más significativas se realizó el análisis del tamaño del efecto.
Para realizarlo, se utilizó el índice d planteado por Cohen (1988) que
da la posibilidad de estimar la magnitud de las diferencias encontradas,
siendo su explicación la siguiente: estimaciones < a, 20 establecen un
tamaño muy pequeño del efecto, establecidas entre 0,20 y 0,49 estable-
cen un tamaño pequeño, establecidas entre 0,50 y 0,80 establecen un
tamaño moderado y, estimaciones > 0,80 un tamaño grande del efecto
(Cohen, 1988).
‒ ‒
4. RESULTADOS
Significación
SB NT AP S
estadística
M (D.T.) M (D.T.) M (D.T.) M (D.T.) F p
Depresión 28,67 (6,50) 29,65 (6,48) 32,22 (6,99) 31,91 (9,46) 5,23 ,001
Nota: SB = sobresaliente; NT = notable; AP = aprobado; S= suspenso.
‒ ‒
GRÁFICO 3. Diferencias de ansiedad en estudiantes con distintos niveles de rendimiento
académico.
SB NT AP S Significación
estadística
M (D.T.) M (D.T.) M (D.T.) M (D.T.) F p
Ansiedad 31,27 (8,82) 31,92 (10,02) 32,72 (9,66) 30,73 (6,21) ,33 ,80
Nota: SB = sobresaliente; NT = notable; AP = aprobado; S= suspenso.
‒ ‒
GRÁFICO 4. Diferencias de inteligencia emocional en estudiantes con distintos niveles de
rendimiento académico
Significación
SB NT AP S
estadística
M (D.T.) M (D.T.) M (D.T.) M (D.T.) F p
Atención 31,00 (6,20) 28,88 (6,38) 28,90 (6,70) 28,64 (5,75) 1,03 ,37
Comprensión 31,73 (5,25) 29,07 (6,65) 28,06 (5,88) 25,09 (4,91) 3,99 ,00
Reparación 29,83 (6,84) 28,73 (6,64) 27,88 (6,39) 30,64 (4,88) 1,20 ,30
Nota: SB = sobresaliente; NT = notable; AP = aprobado; S= suspenso.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
universidad (garcía y adrogué, 2015; vargas, talledo, heredia, quispe y
mejía, 2018).
‒ ‒
5.3. RENDIMIENTO ACADÉMICO E INTELIGENCIA
EMOCIONAL
‒ ‒
universitarias, de esta forma los estudiantes adquirirían estrategias para
saber identificar las diferentes emociones y poder aplicar esa identifi-
cación en su vida. por otro lado, ferguson y austin (2010) hallaron que
el rendimiento académico está afectado por la inteligencia emocional,
así los estudiantes que tenían un mayor conocimiento de la inteligencia
emocional mejoraban su rendimiento académico. este estudio también
coincide con lo que afirma swaner (2007), el cual indica que los alum-
nos no tienen establecidas unas competencias tanto sociales como emo-
cionales adecuadas que le beneficie a la hora de aprovechar sus cono-
cimientos y obtener un adecuado rendimiento académico. estos datos
estarían vinculados a la reparación de las emociones, es decir los estu-
diantes no tienen la capacidad de manejar correctamente sus emociones
y, por tanto, no obtienen un adecuado rendimiento. además, kuh et al.
(2010) señala que los alumnos tienen la capacidad de comprender sus
emociones, de comprender su entorno, de adaptarse a los cambios y
construir nuevas relaciones, tienen mayores posibilidades de adaptarse
a la universidad y tener un rendimiento adecuado en sus estudios.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
una enseñanza y entrenamiento sobre las habilidades para comprender
las emociones puede traducirse en un aumento en el ajuste y el éxito
académico del alumnado.
7. REFERENCIAS
‒ ‒
Arrivillaga, M., Cortés, C., Goicochea, J. y Lozano, T. (2003). Caracterización de
la depresión en jóvenes universitarios. Universitas Psicologica, 3,17-26.
Balanza, S., Morales, I. y Guerrero, J. (2009). Prevalencia de Ansiedad y
Depresión en una Población de Estudiantes Universitarios: Factores
Académicos y Sociofamiliares Asociados. Clínica y Salud, 20(2), 177-
187.
Baptista, A. (2003). Teoría de la selección natural, psicología evolucionista y
emociones. Ansiedad y Estrés, 9 (2), 145-173.
Barchard, K. y Christensen, M. M. (2007). Dimensionality and higher order
factor structure of self-reported emotional intelligence. Personality and
Individual Differences, 42 (6), 971-985. doi:
http://dx.doi.org/10.1016/j.paid.2006.09.007.
Bar-On, R. (2004). The Bar-On Emotional Quotient Inventory (EQ-i): Rationale,
description, and summary of psychometric properties. Measuring
emotional intelligence: Common ground and controversy, 111-142.
Beck A. T., Epstein, N., Brown, G. y Steer, R. A. (1988). An inventory for
measuring clinical anxiety: psychometric properties. Journal of
Consulting and Clinical Psychology, 56, 893-897.
Beck, A. T., Steer, R. A. y Brown, G. K. (1996). BDI-II. Beck Depression
Inventory-second edition. Manual. San Antonio: The Psychological
Corporation
Belló, M., Puentes-Rosas, E., Medina-Mora, M. y Lozano, R. (2005). Prevalencia
y diagnóstico de depresión en población adulta en México. Salud
Pública de México, 47(1), 4-11.
Beuke, C., Fischer, R. y McDowall, J. (2003). Anxiety and depression: why and
how measure their separate effects. Clinical Psychology Review, 23,
831-848. doi: http://dx.doi.org/10.1016/S0272-7358(03)00074-6.
Bhave, S. y Nagpal, J. (2005). Trastornos de ansiedad y depresión en jóvenes
universitarios. Clínicas pediátricas de Norteamérica, 52, 97-134. doi:
http://dx.doi.org/10.17060/ijodaep.2014.n1.v1.392.
Boyatzis, L. A., Goleman, D. y Rhee, K. (2000). Clustering competence in
emotional intelligence: Insights from the emotional competence
inventory (ECI). Handbook of emotional intelligence (pp. 343-362). San
Francisco: Jossey-Bass. https://doi.org/10.1177/0018726700538001.
Branon, L. y Feist, B. (2001). Psicología de la Salud. Madrid: Thompson. doi:
8080/10.1037/0882-7974.5.1.58.
‒ ‒
Brown, T. A., Campbell, L., Lehman, C., Grishman, J. y Mancill, R. (2001).
Current and lifetime comorbility of the DSM-IV anxiety and mood
disorders in a large clinical sample. Journal of Abnormal Psychology,
110, 585-599. https://doi.org/10.1097/00005053- 199807000-00005.
Campo, A., Díaz, L., Rueda, G. y Barros, J. (2005). Validación de la escala de
Zung para depresión en universitarias de Bucaramanga, Colombia.
Revista Colombiana de psiquiatría, 34, 54-62.
Cassaretto, M. (2003). Estrés y afrontamiento en estudiantes de psicología.
Revista de psicología, 21, 363-392.
Castro-Johnson, M., y Wang, A. Y. (2003). Emotional intelligence and academic
performance of college honors and non-honors freshmen.
(Multiperspectivism in Honors). Journal of the National Collegiate
Honors Council, 4 (2), 105-115.
Cerezo, R., Bernardo, A., Esteban, M., Sánchez, M. y Tuero, E. (2015).
Programas para la promoción de la autorregulación en educación
superior: Un estudio de la satisfacción diferencial entre metodología
presencial y virtual. European Journal of Education and Psychology, 8
(1), 30-36.
Cermakova, L., Moneta, G. B. y Spada, M. M. (2010). Dispositional flow as a
mediator of the relationship between attentional control and approaches
to studying during academic examination preparation. Educational
Psychology, 30 (5), 495-511.
https://doi.org/10.1080/01443411003777697
Cohen, J. (1988). Statistical power analysis for the behavioral sciences (2nd ed.).
Hillsdale, NJ: Erlbaum.
Cuijpers, P., Li, J., Hofmann, S. G. y Andersson, G. (2010). Self-reported versus
clinician-rated symptoms of depression as outcome measures in
psychotherapy research on depression: A meta-analysis. Clinical
Psychology Review, 30, 768- 778.
http://dx.doi.org/10.1016/j.cpr.2010.06.001
Diener, E. y Suh, E. (2000). Culture and Subjective Well-being. Cambridge:
Massachusetts Institute of Technology. doi:
https://doi.org/10.1177/0022022104270107.
Dyrbye, L., Thomas M. y Shanafelt T. (2006). Systematic Review of Depression,
Anxiety, and Other Indicators of Psychological Distress Among U.S. and
Canadian Medical Students. Academic Medicine 81, 354-73.
El-Anzi, F. O. (2005). Academia achievement and its relationship with anxiety,
self-esteem, optimism, and pessimism in Kuwaiti students. Social
Behavior and Personality, 33 (1), 95–103.
‒ ‒
Enríquez, H. A. (2011). Inteligencia emocional plena: Hacía un programa de
regulación emocional basado en la conciencia plena. Universidad de
Málaga. Facultad de Psicología.
Eysenck, M. W., Derakshan, N., Santos, R. y Gutierrez-Calvo, M. (2007).
Anxiety and cognitive performance: attentional control theory. Emotion,
7, 336–353. doi: http://dx.doi.org/10.1037/1528-3542.7.2.336.
Eysenck, M. W. (2013). Anxiety: The cognitive perspective. Hove, UK:
Psychology Press. doi: https://doi.org/10.1080/10615809308248376.
Ferguson, F. J. y Austin, E. J. (2010). Associations of trait and ability emotional
intelligence with performance on theory of mind tasks in an adult
sample. Personality and Individual Differences, 49 (5), 414-418.
http://dx.doi.org/10.1348/026151010X502999.
Fernández-Berrocal, P., Extremera, N. y Ramos, N. (2004). Validity and
reliability of the Spanish modified version of the Trait Meta-mood Scale.
Psychological Reports, 94, 751-755.
Fernández-Abascal, E. y Jiménez, M. P. (2000). Cien años de estudio para la
emoción. Revista de Historia de la Psicología, 21 (2), 707-717.
Fernández-Berrocal, P. y Ramos, N. (2002). Corazones inteligentes. Barcelona:
Kairós.
Fernández-Berrocal, P. y Ruiz, D. (2008). La inteligencia emocional en la
educación. Electronic Journal of Research in Educational Psychology, 6
(15), 421-436.
Fernández-Lasarte, O., Ramos-Díaz, E. y Sáez, I. A. (2019). Rendimiento
académico, apoyo social percibido e inteligencia emocional en la
universidad. European Journal of Investigation in Health, Psychology
and Education, 9 (1), 39-49. http://dx.doi.org/10.30552/ejihpe.v9i1.315
García, A. y Adrogué, C. (2015). Abandono de los estudios universitarios:
dimensión, factores asociados y desafíos de la política pública. Revista
Fuentes, 16, 85-106. http://dx.doi.org/10.12795/.
Gardner, H. (2001) La inteligencia reformulada. Las inteligencias múltiples en el
siglo XXI. Barcelona: Paidós.
Garlow, S. J., Rosenberg, J., Moore, J. D., Haas, A. P. Koestner, B., Hendin, H. y
Nemeroff, C. (2007). Depression, desperation and suicidal ideation in
college students: results from the American foundation for suicide
prevention college screening project at Emory University. Depression
and Anxiety, 0, 1-7.
Goldman, S. L., Kraemer, D. T. y Salovey, P. (1996). Beliefs about mood
moderate the relationship of stress to illness and symptom reporting.
Journal of Psychosomatic Research, 41 (2), 115-128.
‒ ‒
Goleman, D. (1995). Emotional intelligence. New York: Kairós.
Goleman, D. (1998). Working with emotional intelligence. New York: Bantam.
Harwar, D. W. (2007). Aprendizaje participativo y los propósitos fundamentales
de la educación liberal: llevar la teoría a la práctica. Educación Liberal,
93 (1), 6-15. https://doi.org/10.5944/reec.26.2015. 14447.
Injuve (2013). Informe Juventud en España 2012. Madrid: Instituto de la
Juventud. Recuperado de
http://www.injuve.es/sites/default/files/2013/26/publicaciones/
IJE2012_0.pdf
Jaeger, A. J. (2003). Competencias laborales y el currículo: Una investigación
sobre inteligencia emocional en la formación profesional de postgrado.
Investigación en la Educación Superior, 44 (6), 615-639.
Jaeger, A. J. (2004). The Place for Emotional Growth in Professional Education.
Journal of Public Affairs Education, 10 (1), 43-65.
Kincheloe, J., Steinberg, S. y Villaverde, L. (2004). Repensar la inteligencia.
Chile: Ediciones Morata.
Kuh, G. D., Kinzie, J., Schuh, J. H. y Whitt, E. J. (2010). Student success in
college: Creating conditions that matter. San Francisco: Jossey-Bass.
doi: https://doi.org/10.1080/10668920600742093.
Lanciano, T. y Curci, A. (2014). Incremental validity of emotional intelligence
ability in predicting academic achievement. The American Journal of
Psychology, 127(4), 447-461.
Law, R., Groome, D., Thorn, L., Potts, R. y Buchanan, T. (2012). The
relationship between retrievalinduced forgetting, anxiety, and
personality. Anxiety, Stress, y Coping, 25, 711-718.
https://doi.org/10.1080/10615806.2011.630070.
Livingstone, H. y Day, A. I. (2005). Comparing the construct and criterion-
related validity of ability-based and mixed-model measures of emotional
intelligence. Educational and Psychological Measurement, 65 (5), 851-
873.
Mavrovelli, S., Petrides, K. V., Rieffe, C. y Bakker, F. (2007). Trait emotional
intelligence, psychological well-being and peer-rated social competence
in adolescence. British Journal of Developmental Psychology, 25, 263-
275.
‒ ‒
Mayer, J. D., Salovey, P., Caruso, D. R. y Sitarenios, G. (2003). Measuring
emotional intelligence with the MSCEIT V2.0. Emotion, 3 (1), 97-105.
https://doi.org/10.1037/1528-3542.3.1.97.97
Mayer, J. D., Salovey, P. y Caruso, D. R. (2008). Emotional intelligence: new
ability or eclectic traits? American Psychologist, 63 (6), 503-517.
https://doi.org/10.1037/0003-055x.63.6.503.
Mayer, J. D., Salovey, P., Caruso, D. y Cherkasskiy, L. (2011). Emotional
intelligence. The Cambrige Handbook of intelligence, 27, 528-549.
doi:10.1017/
MacCann, C., Fogarty, G.J., Zeidner, M., y Roberts, R.D. (2011). Coping
mediates the relationship between emotional intelligence (EI) and
academic achievement. Contemporary Educational Psychology, 36 (1),
60-70.
Michavila, F. (2001). ¿Soplan vientos de cambios universitarios?. Boletín de la
Red Estatal de Docencia Universitaria, 1 (1), 9-12.
https://doi.org/10.1016/j.sbspro.2017.02.042.
Mikulic, I. M., Crespi, M. C. y Cassullo, G. L. (2010). Evaluación de la
inteligencia emocional, la satisfacción vital y el potencial resiliente en
una muestra de estudiantes de Psicología. Anuario de Investigaciones,
17, 169- 178.
Muris, P., Dreessen, L., Bogels, S., Weckx, M. y Melick, M. (2004). A
questionnaire for screening a broad range of DSM‐defined anxiety
disorder symptoms in clinically referred children and adolescents.
Journal of Child Psychology and Psychiatry, 45 (4), 813–820.
Nelson, D. y Nelson, K. (2003). Emotional intelligence skills: Significant factors
in freshmen achievement and retention. Anaheim, CA: American
Counseling Association.
Ninan, P. y Berger, J. (2001). Symptomatic and syndromal anxiety and
depression. Depression and Anxiety, 14 (2), 79-85.
https://doi.org/10.1002/da.1049
Organización Mundial de la Salud (OMS) (2017). Campañas mundiales de salud
pública de la OMS. Boletín de la organización mundial de la salud.
Parker, J. D., Duffy, J. M., Wood, L. M., Bond, B. J. y Hogan, M. J. (2005).
Academicachievement and emotional intelligence: Predicting the
successful transition from high school to university. Journal of the First-
Year Experience y Students in Transition, 7 (1), 67-78.
‒ ‒
Parodi, A., Belmonte, V., Ferrándiz, C. y Ruiz, M. (2017). La relación entre la
inteligencia emocional y la personalidad en estudiantes de educación
secundaria. Revista INFAD de Psicología. International Journal of
Developmental and Educational Psychology., 2 (1), 137-144.
Pérez, C., Bonnefoy, C., Cabrera, A., Peine, S., Muñoz, C., Baquedano, M. y
Jiménez, J. (2011). Análisis, desde la psicología positiva, de la salud
mental en alumnos universitarios de primer año de Concepción (Chile).
Avances en Psicología Latinoamericana, 29 (1), 148-160.
Petrides, K. V. y Furnham, A. (2001). Trait emotional intelligence: Psychometric
investigation with reference to established trait taxonomies. European
Journal of Personality, 15 (6), 425-448. https://doi.org/10.1002/per.416
Petrides, K. V., Furnham, A. y Mavrovelli, S. (2007). Trait emotional
intelligence: moving forward in the field of IE. New York, NY: Oxford
University Press. doi: https://doi.org/10.1177/175407391665049.
Poczwardowski, A., Grosshans, O. y Trunnell, E. (2003). Enthusiasm that
maintains in the classroom: Strategies of reinvestment in the work.
American Journal of Health Behavior, 27 (4) 322-341.
Pratt, M., Bowers, C., Terzjan, B. y Hunsberger, B. (2000). To facilitate the
transition to the university: evaluation of a social program of
intervention of and discussion. Journal of College Student Development,
41 (4), 427 -435.
Rabadán, M. y Orgambídez, A. (2018). Ansiedad idiomática en Español como
Lengua Extranjera y rendimiento académico en la Enseñanza Superior.
Revista De Estudios E Investigación En Psicología Y Educación, 5 (1),
29-35. https://doi.org/10.17979/reipe.2018.5.1.2905
Regner, E. (2008). Validez convergente y discriminante del inventario de
cociente emocional (EQ-i). Interdisciplinaria, 25 (1), 29-51.
Rodríguez, M. (2009). Factores psicosociales de riesgo laboral: ¿nuevos tiempos,
nuevos riesgos? Observatorio Laboral, 2 (3), 127-141.
Salguero, J. M., Fernández-Berrocal, P., Balluerka, N. y Aritzeta, A. (2010).
Measuring perceived emotional intelligence in the adolescent
population: Psychometric properties of the Treait Meta-Mood Scale.
Social Behavior and Personality, 38, 1197-1210.
https://doi.org/10.2224/sbp.2010.38.9.1197.
Salguero, J. M., Palomera, R. y Fernández-Berrocal, P. (2012). Perceived
emotional intelligence as predictor of psychological adjustment in
adolescents: a 1-year prospective study. European Journal of
Psychology of Education, 27, 21–34.
‒ ‒
Salovey, P., Mayer, J. D., Goldman, S. L., Turvey, C., Palfai, T. P. y Pennebaker,
J. W. (1995). Emotional attention, clarity, and repair: Exploring
emotional intelligence using the Trait Meta-Mood Scale. DC US:
American Psychological Association.
Salovey, P., Stroud, L. R., Woolery, A. y Epel, E. S. (2002). Perceived emotional
intelligence, stress reactivity, and symptom reports: Further explorations
using the trait Meta-Mood Scale. Psychology y Health, 17 (5), 611-627.
https://doi.org/10.1080/08870440290025812
Sánchez-Gelabert, A. y Elias, M. (2017). Los estudiantes universitarios no
tradicionales y el abandono de los estudios. Estudios sobre Educación,
31 (1), 27-48.
Sandín, B. y Chorot, P. (2008). Concepto y categorización de los trastornos de
ansiedad. Manual de Psicopatología. Madrid: McGraw-Hill.
https://doi.org/10.1080/08870440290025812
Sanz, J., Navarro, M. E. y Vázquez, C. (2003). Adaptación española del
Inventario para la Depresión de Beck-II (BDI-II): 1. Propiedades
psicométricas en estudiantes universitarios. Análisis y Modificación de
Conducta, 29, 239-288.
Sennett, J., Finchilescu, G., Gibson, K. y Strauss, R. (2003). Adjustment of black
students at a historically white South African university. Educational
Psychology, 23 (1), 107- 116. http://dx.doi.org/10.28535/31-5-155
Sherina, M. S., Rampal, L. y Kaneson, N. (2004). Psychological stress among
undergraduate medical students. Medical Journal of Malaysia, 59 (2),
207-211.
Smith, C. K., Peterson, D. F., Degenhardt, B. F. y Johnson, J. C. (2007).
Depression, anxiety, and perceived hassles among entering medical
students. Psychology, Health y Medicine, 12 (1), 31-39.
https://doi.org/10.1177/0020764008090843.
Spielberger, C. D. (2013). Anxiety: Current trends in theory and research.
Filadelfia: Elsevier. https://doi.org/10.1177/1559827613508542
Swaner, L. E. (2007). Vinculación de aprendizaje participativo, Salud Mental
Estudiantil y el bienestar, y Desarrollo Cívico: Una Revisión de la
literatura. Educación Liberal, 93 (1), 16-25.
Toews, M. L. y Yazedjian, A. (2007). College adjustment among freshmen:
Predictors for white and hispanic males and females. College Student
Journal, 41 (4), 891-900. https://doi.org/10.4236/health.2012.43018
6,460
‒ ‒
Tomoda, A., Mori, K., Kimura, M., Takahashi, T., y Kitamura, T. (2000). One-
year prevalence and incidence of depression among first-year university
students in Japan: A preliminary study. Psychiatry and Clinical
Neurosciences, 54, 583-588. https://doi.org/10.1046/j.1440-
1819.2000.00757.x.
Tuero, E., Cervero, A., Esteban, M. y Bernardo, A. (2018). ¿Por qué abandonan
los alumnos universitarios? Variables de influencia en el planteamiento y
consolidación del abandono. Educación XX1, 21 (2), 131-154.
https://doi.org/ 10.5944/educXX1.20066
Vargas, M., Talledo-Ulfe, L., Heredia, P., Quispe-Colquepisco, S. y Mejia, R.
(2018).
Influencia de los hábitos en la depresión del estudiante de medicina
peruano. Revista Colombiana de Psiquiatría, 47 (1), 32-36.
https://doi.org/10.1016/j.rcp.2017.01.008
‒ ‒
CAPÍTULO 102
BARBARA MAZZA
Sapienza University of Rome
ELENA VALENTINI
Sapienza University of Rome
‒ ‒
tools. Moreover, it discusses the point of view of the actors involved in
these courses and projects: we present some results of ongoing research,
based on interviews with Deputy Chancellors for Education and figures
responsible for innovative teaching projects, and a questionnaire aimed
at professors involved in innovative didactics projects.
The theoretical framework discusses two main issues that are relevant
for the analysis: an overview of the institutional framework focusing
the attention on the main phases of the Bologna process that have ins-
pired the development of these courses and projects; a brief review on
the evolution of faculty development, identifying the crucial role of ac-
tive learning and collegiality.
‒ ‒
development, professional development activities (e.g. in-service train-
ing for faculty), support to innovative pedagogy, communities dealing
with teaching and learning practices. Moreover, the High-Level Group
on the Modernization of Higher Education (2013) recommended to
each university to “develop and implement a strategy for the support
and on-going improvement of the quality of teaching and learning”
(recommendation 2) and that “all staff teaching in higher education in-
stitutions in 2020 should have received certified pedagogical training”
(recommendation 4) (Ivi, 31).
A key document regarding the quality of teaching and learning is
“Standards and Guidelines for Quality Assurance in the European
Higher Education Area”, prepared by the European Association for
Quality Assurance in Higher Education (ENQA) in co-operation with
the European Students’ Union (ESU), the European Association of In-
stitutions in Higher Education (EURASHE) and the European Univer-
sity Association (EUA). It was adopted by the Ministers of Higher Ed-
ucation of 45 countries in the Bergen meeting in 2005 and revised in
the meeting in Yerevan (Armenia) on 14-15 May 2015 (ENQA et al.,
2015). These standards and guidelines have reflected the statement of
the European Ministers of Education in the 2003 Berlin communiqué
(Squarzoni, 2016). These documents show that attention to teaching
and learning quality relies on quality assurance policies developed in
the European Higher Education Area already several years ago. The
common framework for quality assurance systems at the European, na-
tional and institutional levels has inspired these policies. However, in
more recent years the relevance of teaching quality has been growing,
in relation to the student-centered approach (ENQA et al., 2015). These
principles have been more recently reaffirmed by the European Com-
mission and by the European University Association (EUA). The Eu-
ropean Ministers have underlined the user-centered approach at Göte-
borg meeting in 2017. Moreover, in the recent Paris communiqué
(EHEA, 2018) they “have confirmed a formal commitment for peda-
gogical training and continuous professional development of university
teachers” (Serbati et. al., 2020, p. 44, our translation).
‒ ‒
The European University Association (EUA) has recently denounced
resistance to innovation in university teaching and has urged to promote
improvement and innovation actions in teaching and learning processes
(Gaebel and Zhang, 2018).
The most recent EU Commission document concerning the Digital Ed-
ucation Action Plan (2021-2027) (European Commission, 2020) set the
expected result of enriched digital pedagogical skills of higher educa-
tion staff for the Action 12 (Digital Opportunity Traineeships).
Considering the consequences of these processes, we need to underline
that the Italian National Recovery and Resilience Plan aimed at repair-
ing the economic and social damage caused by the pandemic crisis, pro-
vides for investments to create Teaching and Learning Centers (TLC).
They aim at improving the teaching skills (including digital skills) of
higher education teachers in all disciplines (Italian Government, 2021).
179 We recommend to see Serbati et.al., 2020 and Lotti and Lampugnani, 2020 to examine in depth
this issue.
‒ ‒
About 15 years ago Sorcinelli et al. (2006) distilled the history of fac-
ulty development into five ages referring to the U.S. context180: the
age of the scholar (the 1950s and 1960s) focused on content mastery
skills; the age of the teacher (the 1960s and 1970s) focused on improv-
ing the teaching skills of the faculty; the age of the developer (the
1980s, an important decade of growth for the field of faculty develop-
ment) which “recognized the expertise of faculty developers whose ef-
forts formalized and extended faculty development programs” (Meyer,
2014, p. 2); the age of the learner (the 1990s), characterized by a chang-
ing paradigm from teaching to student learning in higher education; the
age of the network, which “focuses on collaboration across faculty to
encourage interdisciplinarity and more recently focuses on the elec-
tronic network – the Internet – and assisting faculty to learn how to best
use technology for face-to-face courses and ultimately fully online
courses” (Ibidem). The same scholars (Beach et. al. 2016) have added
the sixth age of evidence, based on more learner-centered teaching
practices such as active and collaborative learning, and more evidence-
informed approaches to faculty development such as faculty learning
communities.
Moreover, within the broader research area of faculty development the
literature on faculty development for e-learning has been developing
(Meyer, 2014; Ranieri et. al. 2017).
The evolution of the conceptualization and the stages regarding the fac-
ulty development shows the strategic and growing role of active learn-
ing and collegiality in developing teaching capabilities, also consider-
ing the evolution of learning and teaching paradigms and the enlarge-
ment of the skills of university teachers (Felisatti and Serbati, 2015).
We have consequently focused our attention on these crucial factors.
De-privatizing teaching has been recognized as a critical issue (Fedeli
and Taylor, 2019): “this means requiring faculty to open their class-
rooms to their peers, sharing teaching practices also through peer ob-
servation and participation in faculty learning communities. Peer
‒ ‒
observation has been associated with improved practice and greater in-
volvement among faculty in innovative teaching (Gosling, 2014; Jen-
sen and Aiyegbayo, 2011; Kohut, Burnap and Yon, 2007; McGrath and
Monsen, 2015)” (Ivi, p. 7).
The role of peer instruction in active learning has been extensively ex-
plored in relation to student learning (Watkins and Mazur, 2013), as
well as active learning in general (Meyers and Jones, 1993). Both are
considered strategic also in adult learning and particularly in promoting
forms of collegiality which are crucial factors in faculty development.
In recent years, we have noticed a growing interest in the use of tech-
nology to support peer observation processes in the context of studies
on web-based tools for faculty development. Biddau et al. (2021) note
that activities based on feedback, collegial discussion, collaborative re-
flection, or teaching observation through collaborative use of technol-
ogy can effectively promote collective reflection and collegiality be-
tween teachers.
2. OBJECTIVES
‒ ‒
‒ to study the use of the technologies in fostering the didactic
innovation;
3. METODOLOGY
‒ ‒
start-up of the planned innovation; duration of the courses, reference
structures, organization of activities; types of projects initiated; types
of utilities involved; in-depth objectives, themes, and contents in the
training programs; provision of certifications (recognized nationally
and/or internationally). The information was then processed through
qualitative analysis of occurrences and analysis of keywords related to
activities, projects, objectives, themes and contents.
Moreover, we have interviewed Deputy Chancellors for Education and
figures responsible for these innovative teaching projects, to investigate
the projects in question, which are not reported in this paper.
N. teachers
Starting Role of the in-
Structure responsi- engaged in
Mega Selected pro- year of the terviewed privi-
ble for the ID pro- the ID
university ject or projects selected leged wit-
ject/projects projects since the
project/ nesses
beginning to 2021
Deputy Chan-
CTU-Center for edu-
cellors for Edu-
University of Mi- cational innovation
- - cation and -
lan and multimedia
Third Mission
technologies
(ongoing)
IRIDI-Educa-
Educational Re-
University of Tu- tional Research
search Incubator for 2017 - About 600
rin Incubator for In-
Innovation
novation
Educational Pro-
Advisors for in-
gram and Quality
University of Pa- Teaching for novative teach-
Assurance Office 2016 About 800
dua learning ing and e-
and Digital Learning
learning
e Multimedia Office
AlmaD-Club;
Head of the
Training for
Quality Assurance Quality Assur-
University of Bo- new recruits;
and Didactic Innova- 2018 ance and Di- About 1000
logna Laboratories for
tion Center dactic Innova-
educational in-
tion Center
novation.
Dipartimento di
AppI-Learning
Formazione, Lingue, Responsible for
University of Flo- to teach
Intercultura, 2018 DIDeL-eLearn- -
rence DIDeL-eLearn-
Letterature e ing Didactic -
ing Didactic
Psicologia
Deputy Chan-
Deputy Chancellor Teaching to
University of Pisa 2019 cellor for Edu- About 200
for Education teach
cation
Working group
QuID-Quality Deputy Chan-
University of QuID-Quality and
and Innovation 2017 cellor for Edu- About 400
Rome Sapienza Innovation in Educa-
in the Didactics cation
tion
‒ ‒
Federico-For-
mation Experi-
Federico’ Coordina- ences Didactics
Coordinator of
University of Na- tors and Staff (in Competences
2019 the “Federico” About 280
ples Federico II charge of the Uni- Evaluation Or-
Project
versity) ganization Re-
flexivity Innova-
tion
Finally, interviews were carried out with 314 teachers involved in the
projects in some of the mega universities in question (Turin, Bologna,
Pisa, Rome, Naples Federico II). Part of the results has already been
discussed in Mazza and Valentini (2020). But this essay reports a spe-
cific study, aimed at estimating: the degree of satisfaction with the
training experience calculated on the basis of positive evaluations start-
ing from 6, on a scale of 0-10; the usefulness rate with respect to the
teaching needs of individual teachers calculated on the basis of the
number of dichotomous responses (positive/negative in which the re-
spondent also reported the reasons); the rate of effectiveness with re-
spect to the ability to generate an effective change in teaching styles
and methods (estimated on the basis of the positive declaration of the
effective introduction of at least one of the proposed practices) and the
type of change generated in teaching and evaluation activities. The col-
lected data were processed through bivariate and multivariate analyses
and made use of regressive multivariate type, aimed at verifying the
validity and linearity in the “conversion” of behaviors and, therefore,
in the effective introduction of new teaching and evaluation practices,
starting from the calculation of the % variation between those who did
not adopt every single practice before the course and those who adopted
it following participation in the course.
4. RESULTS
The Italian mega universities have launched the first experiments in the
field of teaching innovation since 2016, with the aim of addressing the
problem of support in innovation and qualification of teaching. On that
occasion, many Italian universities (not only falling into the category
of Mega Universities) participated in the first opportunities for
‒ ‒
reflection and implemented initiatives aimed at setting up, for the first
time, a university teaching training system. Already at that time, some
objectives took up the indications of the European Commission (from
the Bologna process onwards), already focusing on some aspects that
will be sanctioned in a more consolidated way in 2017 at the Göteborg
summit. These include the attention to the adoption of international
practices, the dialogue and collaboration between different universities,
and the orientation towards a student-centered approach.
Consequently, between 2016 and 2019, we witnessed the launch of
teaching innovation projects in the universities examined, of which half
are concentrated between 2017 and 2018, therefore precisely in re-
sponse to the indications of the European Commission on the objective
to establish the European education area by 2025.
The intent of Italian universities is therefore to proceed in a systematic
and continuous manner. Not surprisingly, 6 out of 8 entities have cre-
ated a dedicated structure, while the remaining have preferred to entrust
the management of these processes to existing structures equipped with
the necessary skills to support these projects: the pedagogical-psycho-
logical area combined, in one of the two cases, with the University com-
puter center.
4 out of 6 dedicated and ad hoc structures make explicit in their denom-
ination the primary objective focused on innovation didactics. In some
cases, universities have highlighted a more regulatory approach aimed
at quality assurance, while others have instead focused on the central
role of digital and multimedia for e-learning training. Interesting is the
case of the Federico II university that, exploiting the acronym Federico,
which has a strong identity, expressed the significance of the project,
as well as the mission itself: Formation Experiences Didactics Compe-
tences Evaluation Organization Reflexivity Innovation, thus declaring
that it is a work of reflection and evaluation of training experiences that
are made feasible not only by the skills of the teachers but also by the
state of the overall organization of the University towards promoting
teaching innovation.
‒ ‒
This name clearly expresses compliance with the “Education and train-
ing 2020” (ET2020) strategy, to which all the cases under examination
adhere, which aims at combating skills imbalances and promoting ex-
cellence in skills development; creating inclusively and connected
higher education systems; ensuring that higher education institutions
contribute to innovation; promoting the effectiveness and efficiency of
higher education systems. All this starting from a substantial involve-
ment of the University’s governance as a vector for the dissemination
and promotion of innovative and advanced practices in university edu-
cation. This emerged both from the analysis of the projects and from
the words of privileged witnesses. To confirm this, the objectives stated
in the projects were examined, extrapolating the keywords from the in-
dividual texts. The analysis shows that all the sites aim at the creation
of training projects with the objective of improving learning and teach-
ing through the dissemination of methods and techniques concerning
teaching innovation, through student-centered approaches, learning by
doing paths, and sharing of good practices, with particular attention to
ensuring alignment with national and international standards on the
subject. In this sense, the orientation of the universities fully responds
to the objective indicated by the European Commission and/or by other
institutions in the European Higher Education Area mentioned above:
to create new opportunities for mutual learning beyond national borders
and for collaboration on common projects to improve learning and
teaching, promote research and foster innovation. Furthermore, in 4 out
of 6 cases, the objectives include, to an even greater extent, the im-
portance of starting collaborations and networks at the national and in-
ternational level for sharing projects and common actions, as well as
focusing on training processes. in which to enhance the importance of
transversal skills. Indeed, transversal skills are integrated with discipli-
nary knowledge and competencies, allowing students to implement
knowledge, skills, and competencies that can be used in the labor mar-
ket.
In half of the cases, the value of these projects is also underlined for the
purpose of establishing a community of teachers who share new ap-
proaches and an orientation towards innovation, as well as the
‒ ‒
importance of de-privatizing teaching in favor, among other things, of
greater collegiality in the planning of teaching and study courses, as
well as the assurance of the quality of university teaching and training
itself.
In this regard, it is interesting to note that the target of the projects is
mainly focused on RTDBs or, in any case, on new hires so that they
acquire the didactic guidelines at which the University is aiming. De-
spite this, a clear majority (6), albeit in different ways, envisages the
involvement of all the tenured professors of their own university. This
confirms not only the intention to spread the culture of innovative
teaching to the point of transforming it into a consolidated practice, at
least in the medium to long term, but also to provide services and sup-
ports aimed at fostering innovation and change. In some cases, it is
mainly about supports related to IT and technological services: from
the provision of Moodle courses (5 cases) to the presence of structures
that support teachers in the design of videos, e-learning activities, etc.
(4 cases), in others, training and/or professional updating activities are
provided for teachers who intend to update themselves on teaching in-
novation methods and tools. If we look at the issues addressed in the
various courses, they concern, in all cases, teaching methods, tech-
niques, and strategies with particular attention to the methods of active
learning, blended and flipped, in addition to the use of ITC for teaching;
in most cases (7) the methods and practices of evaluation, especially of
a formative, summative and transformative nature; in half of the cases
(4), the planning of the courses; in some cases (2) even the design of
the CDs.
Considering the development of teaching training courses, almost half
of the cases, are evaluating or defining the establishment of a University
Teaching Learning Centre - as an extension of the existing structure -
which operates in a stable form in the training of university teaching.
This occurs above all in those mega universities that, currently, carry
out projects that have been consolidated over time and that by now have
already had an audience of participants between 600 and 1,000 units or
that have initiated various projects over time, complementary to each
other and dedicated respectively to aspects of the method and the role
‒ ‒
of technologies (as in Milan, Padua, Bologna, and Naples) or to differ-
entiate the paths between new hires and “senior” structures, as in Rome.
The widespread awareness among all the mega universities examined
relates to the innovative conception of the role of teachers, increasingly
seen as “facilitators” in learning processes, in which the needs of stu-
dents assume a central value. Therefore, the renewal of teaching is also
encouraged by the strategic role of peer observation and peer collabo-
ration models, often with the support of tutors, coaching, and/or men-
toring, in the training of university teachers that involves the combina-
tion of seminars and collegial discussions (4) with workshops or labor-
atory activities and project activities (7). In most cases, these activities
take place over a year or a maximum of two years. Most of these are
non-mandatory activities (except in Rome and Turin) and, in half of the
cases, also guarantee the provision of a certification that can be spent
nationally and/or internationally. This precisely in the perspective of
increasingly favoring a dialog within the European scientific commu-
nity and implementing the recognition and value of teaching, as a fun-
damental mission of the university, alongside research and the third
mission.
The survey carried out on teachers who participated in innovative
teaching projects made it possible to highlight the point of view of the
participants, also highlighting some widespread concerns, as well as
understanding the degree of effectiveness in spreading a shared culture
oriented towards the transformation and innovation of teaching prac-
tices.
First, it should be noted that the degree of satisfaction, i.e. the appreci-
ation of the training experience received during the innovative teaching
courses provided by the University, is 78%, with equivalent values for
seminars and workshops, 79.1% and 78.8% respectively. Secondly, fol-
lowing participation in the courses, the usefulness rate of training for
teachers, perceived by the participants, is estimated at 89.5%. The re-
sponses denote an awareness of the work of the proposed training pro-
jects and this confirms the importance of the process. Only a minority
(10.5%) express concerns that, often, derive from the gap between the
way in which teaching is evaluated in the university system and the
‒ ‒
difficulty in placing this process is a mechanism of evolution and pro-
found change of the role of university teaching. In detail, among the
positive responses, the interviewees considered that these initiatives al-
low them to explore and experiment with new teaching methods
(28.2%), improve the organization and management of the didactic ac-
tivities of the degree program (19.7%) and make the training offer more
attractive (15.3%), but also help train newly hired teachers (12.8%), get
to know each other better among colleagues (11.7%) and align with
international standards (8.5%). Those who, on the other hand, have ex-
pressed more critical opinions (10.5%), believe that such projects are
not useful because the disciplinary specificity does not make it possible
to apply the same teaching methods to different fields of knowledge
(32.9%) and the courses should be organized and managed differently
(24.2%), also in consideration of the fact that teaching innovation fur-
ther increases the amount of work for the teacher (13.2%) and is a waste
of time (4. 4%), as the research activity mainly is recognized in the
evaluation of the teacher (14.3%). Finally, they fear that this process is
aimed at standardizing teaching methods to the detriment of the teach-
er's autonomy (11%).
Confirming the value of the experience, the effectiveness rate of the
training course is 96.5%. This rate is calculated based on those who
have declared that they have changed their way of teaching, introducing
some practices that show differences consistent with the disciplinary
specificities of the teachers. Among the elements that were introduced
following the training, there are above all: collaborative learning
(31.9%) and flipped classroom (20.4), while among those whose use
has been significantly increased there are: peer to peer evaluations (with
an increase of + 595% from before the course to after the course), joint
lessons with colleagues (+ 568.8%), classroom research (+ 537.5%),
role-playing game and simulations (+ 446.7%), testimonials from pro-
fessionals and experts in the classroom (+ 364.3%), participation in
congresses, seminars, etc. (278.5%), project work (+ 258.6%), extra-
classroom lessons at museums, companies, etc. (227.8%), short presen-
tations of homework (190.9%), group work in the classroom (+
105.6%), verification quiz at the beginning/end of the lesson (80%, see
‒ ‒
Tab .2). In confirmation of what was examined, the inversely propor-
tional correlation coefficient stands at r = -0.72, and therefore denotes
high effectiveness in the change generated by participation in the
course.
PRE POST V%
MR% MR%
Peer to peer evaluation 1,2% 9,4% 595,0%
Interdisciplinary lessons shared with colleagues 1,4% 8,5% 568,8%
Research activities in classroom 1,2% 7,5% 537,5%
Role playing/simulations/educational games 1,9% 7,6% 446,7%
Testimony from professionals and/or external experts 2,2% 7,3% 364,2%
Participation in congresses, seminars etc. 2,2% 6,8% 278,5%
Project work 4,5% 8,4% 258,6%
Extra-classroom lessons (e.g. museums and company visits) 2,8% 6,6% 227,8%
Short presentation of homework 3,4% 7,2% 190,9%
In classroom working group 5,6% 8,3% 105,6%
Quiz at the beginning/at the end of the lesson 5,5% 7,1% 80,0%
*TOT. MR% answers =3929.
** The inverse regression model is significant at the level r =-0.72.
Source: data n.s. processing (2020)
‒ ‒
TABLE 3. Assessment methods that respondents use and would like to use
POS
Assessment methods PRE V%
T
TOT. TOT.
Used use
49,2
Oral exam and/or written assignment 1,8% -98,5%
%
20,4 19,0
Intermediate tests -62,3%
% %
Exercises and/or term papers and/or presentation of pro- 22,4 27,9
-49,6%
jects during the course with partial evaluations % %
13,7
Review by external parties 0,5% 21,2%
%
37,2
Peer review between groups of students 6,4% 133,3%
%
Tot. MR% 559 226
*TOT. MR% answers =Pre: 559; POST 226.
** The inverse regression model is significant at the level r =-0.61.
Source: data n.s. processing (2020)
Also in this case confirming what has been examined, the correlation
coefficient, inversely proportional, indicates a high efficacy in the
change generated by participation in the course, even if lower than that
recorded for didactic practices (r = -0.61). This probably means that
evaluation is a more delicate moment, which involves a little more ret-
icence in adopting innovative practices.
More generally, the respondents justify the overall evaluation of the ef-
fectiveness of their experience in the context of the innovative teaching
project because these initiatives appreciate different aspects: they intro-
duce more dynamic and interactive teaching methods (15.5%), making
it possible to perfect the design of their own courses (11.4%). In this
way, it is possible to better understand the needs of students (8.9%),
introduce the use of digital tools in teaching (8.7%) which improve per-
formance (8.3%) and student achievement (7%), providing them with
transversal skills (6.9%) and making assessment tools more effective
(6.3%). The degree of effectiveness related to the possibility of intensi-
fying collegiality is lower, creating the conditions for working in a col-
legial manner with colleagues (5.6%) and improving coordination be-
tween the programs of the course of study (4.7%). Similarly, few
‒ ‒
believe that the course becomes more applicative and professionalizing
(3.6%), improving the performance of students so that they can take
and pass the exam within the year (3.5%) and above all that it can be-
come an opportunity for confrontation with the labor market (18%).
5. DISCUSSION
‒ ‒
6. CONCLUSIONS
7. ACKNOWLEDGEMENTS
This study has been undertaken within the framework of the Project
“The relationship between innovative didactics and the third mission”
funded by Sapienza University of Rome.
8. REFERENCES
‒ ‒
Brennan, J., Naidoo, R. and Franco, M. (2017). From Academic Profession to
Higher Education Workforce: Academic Careers in the UK. In M. de L.
Machado-Taylor, V. M. Soares and U. Teichler (Eds.), Challenges and
Options: The Academic Profession in Europe (pp. 231-252). Springer
Censis (2019). La classifica Censis delle università italiane (edizione 2019/2020).
https://www.censis.it/sites/default/files/downloads/Classifica%20Censis
%20delle%20Universit%C3%A0%202019-2020_0.pdf
Cummings, W. K. and Teichler, U. (Eds.) (2015). The Relevance of Academic
Work in Comparative Perspective. Springer
Eble, K.E. and McKeachie, W.J. (1985). Improving undergraduate education
through faculty development. Jossey-Bass
EHEA (2018). Paris Ministerial Communique.
http://www.ehea.info/media.ehea.info/file/2018_Paris/77/1/EHEAParis2
018_Communique_final_952771.pdf
ENQA, ESU, EUA, EURASHE (2015). Standards and Guidelines for Quality
Assurance in the European Higher Education Area (ESG). Brussels,
Belgium. https://www.enqa.eu/wp-
content/uploads/2015/11/ESG_2015.pdf
European Commission (2011). Supporting growth and jobs – an agenda for the
modernisation of Europe’s higher education systems.
http://ec.europa.eu/education/library/policy/modernisation_en.pdf
European Commission (2013). Report to the European Commission on improving
the quality of teaching and learning in Europe’s higher education
institutions. Luxembourg: Publications Office of the European Union.
European Commission (2020). Digital Education Action Plan (2021-2027).
Resetting education and training for the digital age.
https://ec.europa.eu/education/education-in-the-eu/digital-education-
action-plan_en
Fedeli, M. and Taylor, E.W. (2019, 14-15 February). Towards successful
learning: Controversies and common ground. 2019 European Learning
& Teaching Forum, Organised by EUA, University of Warsaw, Poland
Felisatti, E. and Serbati, A. (2015). Apprendere per imparare: formazione e
sviluppo professionale dei docenti universitari. Un progetto innovativo
dell’Università di Padova. Giornale Italiano della Ricerca Educativa,
14, VIII, 323-339
Felisatti, E. and Serbati, A. (eds) (2017). Preparare alla professionalità docente e
innovare la didattica universitaria. Franco Angeli
Gaebel, M. and Zhang, T. (2018). Trends 2018: Learning and Teaching in the
European Higher Education Area. European University Association
‒ ‒
Henard, F. and Roseveare, D. (2012). Fostering quality teaching in higher
education: Policies and practices. OECD Publishing
High Level Group on the Modernisation of Higher Education (2013). Report to
the European Commission on improving the quality of teaching and
learning in Europe’s higher education institutions. Publications Office
of the European Union
Italian Government (2021). Italian National Recovery and Resilience Plan.
https://www.governo.it/sites/governo.it/files/PNRR.pdf
Kehm, B. and Teichler, U. (2012). The Academic Profession in Europe: New
Tasks and New Challenges. Springer
Little, D. (2014). Reflections on the state of the scholarship of educational
development. To Improve the Academy. 33 (1), 1-13.
https://doi.org/10.1002/tia2.20005
Lotti, A. and Lampugnani, P. A., (eds) (2020). Faculty Development in Italia.
Valorizzazione delle competenze didattiche dei docenti universitari.
Genova University Press
Marini, G., Locke, W. and Withchurch, C. (2019). The future higher education
workforce in locally and globally engaged higher education institutions:
A review of literature on the topic of ‘the academic workforce’. Working
paper CGHE, 43
Mazza, B. and Valentini, E. (2020). The Synergy between Innovative Didactics
and the Third Mission to Integrate the Three University Missions. Scuola
Democratica, 3, 521-543. http://dx.doi.org/10.12828/99902
Mazza, B., Fontana, R., Valentini, E. and De Marchis, E. (2019, 5-8 June).
Towards a communication model for University education (pp. 120-26).
Proceedings of the 1st International Conference of the Journal Scuola
Democratica, Vol. II. Cagliari, Italy
Meyer, K.A. (2014). An analysis of the research on faculty development for
online teaching and identification of new directions. Journal of
Asynchronous Learning Networks, 17(4), 93-112.
http://dx.doi.org/10.24059/olj.v17i4.320
Meyers, C. and Jones, T. B. (1993). Promoting Active Learning. Strategies for the
College Classroom. Jossey-Bass
Mezirow, J. (1991). Transformative dimensions of adult learning. Jossey-Bass
Perla, L. and Vinci, V. (2021). Modellistiche co-epistemologiche per la
formazione del docente universitario: il progetto Prodid Uniba.
Excellence and Innovation. Learning and Teaching. Special Issue.
https://journals.francoangeli.it/index.php/exioa/article/view/11125
‒ ‒
Perulli, A. (2018), La terza missione degli accademici. Cosa si intende e come si
fa. In A. Perulli, F. Ramella, M. Rostan and R. Semenza (Eds.), La terza
missione degli accademici italiani (pp. 17-35). Il Mulino
Ranieri, M., Raffaghelli, J. E. and Pezzati, F. (2017). Digital resources for faculty
development in e-learning: a self-paced approach for professional
learning. Italian Journal of Educational Technology, 26(1), 104-118.
https://doi.org/10.17471/2499-4324/961
Serbati, A., Aquario, D., Da Re, L., Paccagnella, O. and Felisatti, E. (2020).
Exploring good teaching practices and needs for improvement:
Implications for staff development [Esplorare le buone pratiche
didattiche all’università e i bisogni di miglioramento: implicazioni per lo
sviluppo della formazione dei docenti]. Journal of Educational, Cultural
and Psychological Studies, 20, 43-64. https://doi.org/10.7358/ecps-2020-
021-serb
Sorcinelli, M.D., Fostering 21st Century Teaching and Learning: New Models for
Faculty Professional Development. In A. Lotti, and P. A. Lampugnani
(eds) (2020). Faculty Development in Italia. Valorizzazione delle
competenze didattiche dei docenti universitari (pp. 19-25). Genova
University Press
Sorcinelli, M.D., Austin A., Eddy, P. and Beach A. (2006). Creating the future of
faculty development. Jossey-Bass
Squarzoni, A. (2016), Adaption of EAFS: Central Asia Engineering Accreditation
Standards & Guidelines (CAEAS&G). In C. Borri, S. Gerasimov, E.
Guberti, J. C. Quadrado, O. Umankulova, U. Winkelmann (eds), The
QUEECA Experience Developing and Implementing a Central Asia
Accreditation of Engineering Education Consistent with European
Standards (pp. 25-29). Firenze University Press
Watkins, J. and Mazur, E. (2013). Retaining students in science, technology,
engineering, and mathematics (STEM) majors. Journal of College
Science Teaching, 42(5), 36-41
‒ ‒
CAPÍTULO 103
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
de aprendizaje asociadas a cada calificación (Stevens y Levi, 2013). El
uso de las rúbricas para evaluación está cada vez más extendido, pero
el enfoque por competencias no forma parte de la práctica docente ha-
bitual (Velasco-Martínez y Tójar, 2018), por lo que vemos conveniente
facilitar ese enfoque con un punto de vista global, en este caso en los
tres Grados de Comunicación de la Universidad Villanueva de Madrid
(España).
Tanto profesores como alumnos consideran que la implementación de
la evaluación mediante rúbricas en la educación superior es efectiva
(García, Belmonte y Galián, 2017), y además aporta tres ventajas: au-
mentar la consistencia de la calificación, evaluar el rendimiento de los
estudiantes y, cuando se usa en varios cursos como en el caso que nos
ocupa, proporcionar unos parámetros comunes para evaluar hasta qué
punto el plan de estudios está logrando las metas programáticas (Tim-
merman, Strickland, Johnson y Payne, 2011).
La fiabilidad de la rúbrica dependerá de lo acertados y fáciles de aplicar
que sean los parámetros, por lo que hemos trabajado especialmente este
punto. A la vez es importante lograr un equilibrio para aportar claridad
suficiente sobre los criterios de evaluación sin que eso reste libertad e
iniciativa al alumno (Atkinson y Lim, 2013).
Como se detallará a continuación, el presente artículo presenta un mo-
delo de rúbrica estructurado en forma de “árbol”, con un tronco común
a toda una Facultad (extensible al conjunto de Grados de una Universi-
dad si así se desea), un segundo nivel de criterios de evaluación aplica-
bles al conjunto de una titulación y una tercera ramificación adaptable
a una asignatura en concreto. Se regirá por dos principios aparente-
mente contrapuestos que en este caso deberán convivir: el de ser una
estructura lo suficientemente sólida como para poder aplicarse al con-
junto de una facultad o universidad y lo suficientemente flexible como
para acomodarse a las necesidades concretas de cada asignatura sin ne-
cesidad de hacer modificación alguna.
Esta propuesta de evaluación docente se aplicará en el curso 2021-22,
a modo de experiencia piloto, en un número reducido pero representa-
tivo de asignaturas de los Grados de Publicidad y Relaciones Públicas,
‒ ‒
Comunicación Audiovisual y Periodismo de la Universidad Villanueva.
Como es lógico, el uso de rúbricas no garantiza su eficacia, sino que
esta herramienta requerirá ir acompañada de un análisis de fiabilidad y
validez (Cano, 2015). Para ello, en una fase posterior se realizarán gru-
pos de discusión con profesores y encuestas a los alumnos que ayudarán
a introducir las mejoras que sean necesarias de cara a su aplicación de-
finitiva en toda la Facultad de Comunicación en el curso 2022-23, y que
serán abordadas en posteriores investigaciones.
En última instancia, la principal aspiración de este “árbol de rúbricas”
será la de servir de plantilla o punto de partida para aplicarse en cual-
quier otra facultad o universidad en la que se quiera implantar el modelo
de evaluación mediante rúbrica como alternativa a los sistemas tradi-
cionales de calificación.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
El cometido fundamental de este “árbol de rúbricas” será elaborar una
plantilla de rúbricas válida para una Facultad de Comunicación, pero
que se pueda aplicar a cualquier otra facultad o al conjunto de titulacio-
nes de una universidad aprovechando una base común, adaptando una
parte de los contenidos y añadiendo o suprimiendo otros (Dawson, P.,
2017). Para ello, habrá que cumplir los siguientes objetivos:
‒ Que esta plantilla sea lo suficientemente flexible como para
adaptar de forma automática indicadores, descriptores, baremos
y criterios de evaluación a cada curso y a cada asignatura, sin
necesidad de redactar las plantillas desde cero.
‒ ‒
de calibrar y medir, en contraposición con las hard skills, que
se pueden cuantificar y precisar en un curriculum vitae (Hen-
darman &.Cantner, 2018).
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
El siguiente paso fue agrupar las competencias con contenidos simila-
res, eliminar duplicidades y, sobre todo, trasladar a un lenguaje lo más
preciso posible la letra de estas competencias, para transformarlas en
un criterio evaluable por el profesor y entendible por el estudiante.
Paralelamente a este proceso de ordenación, clarificación y homogenei-
zación de los objetivos de aprendizaje, se añadieron de forma explícita
las principales habilidades que demanda el mercado laboral (con carác-
ter general y al margen del ámbito profesional del que se trate), muchas
de las cuales inspiran las competencias de las memorias de los Grados
pero sin precisar la forma de medirlas. En especial, se dio cabida a las
conocidas como soft skills, cada vez más consideradas por las empresas
en los procesos de selección de personal y que suelen quedar fuera de
los métodos tradicionales de evaluación al no ser tan fáciles de calibrar
como las hard skills, que miden conocimientos concretos. En concreto,
9 de las 10 soft skills que el World Economic Forum ha identificado
como las más demandadas por las empresas en el próximo 2025 están
recogidas expresamente en esta plantilla (innovación y pensamiento
analítico; estrategias de aprendizaje y aprendizaje activo; resolución de
problemas complejos; análisis y pensamiento crítico; creatividad, ori-
ginalidad e iniciativa; liderazgo e influencia social; control, monitori-
zación y uso de la tecnología; programación y diseño tecnológico; y
generación de ideas, resolución de problemas y razonamiento). El úl-
timo concepto (flexibilidad, tolerancia al estrés y resiliencia) es más
propio del desempeño profesional y, por tanto, más difícil de medir en
la etapa universitaria, aunque su adquisición se puede considerar como
una consecuencia directa del logro de las nueve competencias anterio-
res y, por tanto, del cumplimiento satisfactorio de los indicadores de la
rúbrica de evaluación.
El siguiente paso fue redactar los criterios de evaluación que debían
aplicarse a cada uno de estos epígrafes obtenidos en función de estos
dos criterios, para lo cual se siguieron las recomendaciones recogidas
en la bibliografía existente al respecto sobre este tipo de modelos de
evaluación y se atendió a la experiencia docente de la propia facultad.
En ese sentido, y frente a modelos anteriores, se hizo especial hincapié
en simplificar al máximo la plantilla de rúbricas, con el objetivo de
‒ ‒
cubrir las necesidades de evaluación con un número reducido de indi-
cadores y descriptores. Ello facilitará, sin duda alguna, la implantación
de este modelo por parte de las direcciones académicas de las universi-
dades, su aplicación por parte del claustro y su comprensión por parte
del alumnado.
En el plano de la redacción, se optó por priorizar las oraciones afirma-
tivas y utilizar expresiones que concreten lo más posible los objetivos
que se pretenden alcanzar, huyendo de términos excesivamente genéri-
cos. En cuanto a los contenidos, se puso especial énfasis en vincular las
rúbricas a expresiones que calibren el nivel de aprendizaje, no a una
nota numérica, definiendo con claridad los logros que se están deman-
dando. Por último, en lo que respecta a la estructura, se descartaron las
rúbricas lineales y se abrió la posibilidad tanto a introducir distintas
pautas de baremación como a aplicar criterios de evaluación invalidan-
tes, es decir, que su no cumplimiento impidiera la evaluación del con-
junto de la plantilla o de una parte de ella.
En el trabajo de revisión bibliográfica hemos observado que se han
desarrollado estudios y rúbricas para competencias concretas (Menén-
dez, J.L., et ál., 2017) o para trabajos específicos (Villamañe, M. et ál.,
2017), pero son menos numerosos los que intentan trabajar competen-
cias genéricas (Villarroel, V. y Bruna D., 2014), como por ejemplo las
competencias transversales (Alsina, J., 2013). Por eso, consideramos
pertinente esta investigación para tratar de trabajar las rúbricas a nivel
más global de competencias del grado, tanto generales como transver-
sales y específicas.
‒ ‒
4. RESULTADOS
COMPETEN-
BLOQUE INDICADOR DESCRIPTOR
CIAS
Domina los contenidos
prácticos de la asigna-
1.1. COMÚN A (Resultado de la evaluación del bloque 1.2 en función CB1, CB2,
tura y está preparado
LA FACULTAD de los baremos que se determinen) CB3, CB4
para aplicarlos en el ám-
bito profesional
MUY BAJO (0): Ha cometido 3 faltas de ortografía o
más y/o presenta graves problemas de expresión y
redacción (criterio invalidante)
PUBLICIDAD:
BAJO (1): Ha cometido dos faltas de ortografía y/o
CB4; CG4,
1. Utiliza correctamente presenta reiterados errores gramaticales graves y
CE1 Y CE5
y con precisión el len- problemas para argumentar y relacionar ideas
COMUNICA-
guaje (oral y escrito) MEDIO (2): Ha hecho una exposición ordenada de las
CIÓN AUDIO-
para desarrollar una co- ideas aunque con errores gramaticales y sintácticos
VISUAL: CT2
municación eficaz en los leves.
Y CE16
distintos formatos de la ALTO (3): Es capaz de expresarse con corrección
PERIO-
comunicación aunque con algún error gramatical, ortográfico o sin-
DISMO: CG1,
táctico puntual
CT2 Y CE15
MUY ALTO (4): Escribe con total corrección sin faltas
de ortografía, domina la redacción y demuestra un ni-
1.2. COMÚN A
vel de expresión muy satisfactorio
LA FACULTAD
MUY BAJO (0): No solo no ha trabajado en equipo,
sino que con su actitud negativa ha penalizado la la-
bor de sus compañeros
PUBLICIDAD:
BAJO (1): No ha manifestado una actitud proactiva y
2. Trabaja en equipo, CT5
se ha limitado a dejarse llevar por el ritmo y los objeti-
muestra una actitud COMUNICA-
vos marcados por los compañeros, con lo que no ha
proactiva y contribuye a CIÓN AUDIO-
favorecido el aprendizaje colectivo
alcanzar los objetivos VISUAL: CG4,
MEDIO (2): Ha asumido los objetivos del grupo, ha fa-
marcados favoreciendo CG5 Y CT3
vorecido el buen clima interno y ha cumplido con dili-
el aprendizaje personal y PERIO-
gencia las tareas encomendadas cuando se le ha re-
colectivo DISMO: CG7,
querido, aunque sin liderar propuestas propias
CT3, CE6
ALTO (3): Ha mostrado una actitud proactiva, se ha
implicado en la toma de decisiones con una actitud
constructiva y ha favorecido con ello el aprendizaje
‒ ‒
personal y colectivo
MUY ALTO (4): Ha adoptado una actitud de liderazgo
pero favoreciendo en todo momento la convivencia y
el trabajo en equipo, y ha implicado al resto del grupo
en la búsqueda de la excelencia y la consecución de
objetivos ambiciosos.
MUY BAJO (0): Ha plagiado una parte o la totalidad
del trabajo sin citar la fuente original (criterio invali- PUBLICIDAD:
dante) CB3, CT6,
3. Respeta los principios
BAJO (1): Ha citado de forma incorrecta algunas refe- CG5
de la ética y deontología
rencias bibliográficas o ha utilizado argumentos, COMUNICA-
profesional en la elabo-
obras o planteamientos ajenos sin aclarar de forma CIÓN AUDIO-
ración de sus trabajos,
precisa y explícita su procedencia VISUAL: CG3,
que son originales con
MEDIO (2): no aplica CG10 Y CT5
ausencia total de plagio
ALTO (3): no aplica PERIO-
(***)
MUY ALTO (4): El trabajo es original y las referencias DISMO: CG6,
al trabajo ajeno están referenciadas de acuerdo con CG9 Y CT5
las normas académicas y profesionales
MUY BAJO (0): No ha cumplido los plazos de entrega
fijados (criterio invalidante)
PUBLICIDAD:
BAJO (1): Ha entregado fuera de plazo, aunque den-
CT5
tro de un margen de retraso razonable fijado con an-
COMUNICA-
telación por el profesor (este retraso puede suponer
4. Cumple los plazos de CIÓN AUDIO-
una penalización en la nota final si así lo estipula,
entrega en los trabajos VISUAL: CB5,
también con antelación, el docente)
CT4
MEDIO (2): no aplica
PERIO-
ALTO (3): no aplica
DISMO: CT5
MUY ALTO (4): Ha cumplido los plazos de entrega
estipulados
MUY BAJO (0): No ha mostrado interés alguno por
ser original, conformándose con presentar una pro-
puesta elemental que no innova en el planteamiento
inicial
BAJO (1): Ha propuesto algunos enfoques originales
y creativos en la fase inicial del proyecto, pero no los
ha llevado a la práctica
MEDIO (2): Ha planteado ideas innovadoras, creati-
1. Fomenta la creatividad vas y originales en la fase inicial del proyecto, pero
y la originalidad en sus las ha plasmado solo en parte en el trabajo final
trabajos para crear pro- ALTO (3): Ha planteado ideas innovadoras, creativas CT4
puestas publicitarias in- y originales en la fase inicial del proyecto, las ha tras-
novadoras y eficaces ladado de forma eficaz al grupo y ha trabajado activa-
2. 1. COMÚN
mente para que se lleven a la práctica. El trabajo final
AL GRADO DE
es innovador y creativo.
PUBLICIDAD Y
MUY ALTO (4): Desde el primer momento ha orien-
RELACIONES
tado todo su trabajo en la búsqueda de la originalidad
PÚBLICAS
y la creatividad, y como resultado de ello ha desarro-
llado un producto innovador y genuino capaz de des-
tacar entre la competencia en una situación profesio-
nal real.
MUY BAJO (0): No ha asimilado los conocimientos o
2. Es capaz de hacer un
se ha limitado a memorizarlos, pero sin dar muestras
razonamiento crítico con
de haberlos entendido
los conocimientos adqui-
BAJO (1): Ha aprendido de forma superficial los cono-
ridos y de relacionar con- CB2, CB3,
cimientos de la asignatura pero no ha sido capaz de
ceptos, más allá del CT2
relacionar conceptos ni de reflexionar sobre ellos
mero aprendizaje de
MEDIO (2): Ha entendido los conceptos y ha mos-
unos conocimientos, así
trado interés por incorporarlos a un proyecto profesio-
como de aplicarlos a
nal, aunque aún con mucho margen de mejora
‒ ‒
campañas publicitarias ALTO (3): Ha aprovechado los conocimientos adquiri-
de calidad dos para, a través del análisis, la reflexión y la con-
textualización, ser capaz de aplicarlos a una situación
real
MUY ALTO (4): Ha demostrado un total dominio de
los conceptos de la asignatura, ha sido capaz de rela-
cionarlos y razonar sobre ellos, ha incorporado con
actitud constructiva las opiniones de los demás y ha
demostrado ser capaz de aplicarlos a un producto
profesional de calidad
MUY BAJO (0): No ha mostrado interés alguno por
ser original, conformándose con presentar una pro-
puesta elemental que no innova en el planteamiento
inicial
BAJO (1): Ha propuesto algunos enfoques originales
y creativos en la fase inicial del proyecto, pero no los
ha llevado a la práctica
MEDIO (2): Ha planteado ideas innovadoras, creati-
1. Fomenta la creatividad vas y originales en la fase inicial del proyecto, pero
y la originalidad en sus las ha plasmado solo en parte en el trabajo final
trabajos para crear pro- ALTO (3): Ha planteado ideas innovadoras, creativas CT4, CE9
ductos innovadores en el y originales en la fase inicial del proyecto, las ha tras-
campo audiovisual ladado de forma eficaz al grupo y ha trabajado activa-
mente para que se lleven a la práctica. El trabajo final
es innovador y creativo.
MUY ALTO (4): Desde el primer momento ha orien-
tado todo su trabajo en la búsqueda de la originalidad
y la creatividad, y como resultado de ello ha desarro-
2. 2. COMÚN
llado un producto innovador y genuino capaz de des-
AL GRADO DE
tacar entre la competencia en una situación profesio-
COMUNICA-
nal real.
CIÓN AUDIO-
MUY BAJO (0): No ha asimilado los conocimientos o
VISUAL
se ha limitado a memorizarlos, pero sin dar muestras
de haberlos entendido
BAJO (1): Ha aprendido de forma superficial los cono-
cimientos de la asignatura pero no ha sido capaz de
2. Es capaz de hacer un
relacionar conceptos ni de reflexionar sobre ellos
razonamiento crítico con
MEDIO (2): Ha entendido los conceptos y ha mos-
los conocimientos adqui-
trado interés por incorporarlos a un proyecto profesio-
ridos y de relacionar con-
nal, aunque aún con mucho margen de mejora CB2, CB3,
ceptos, más allá del
ALTO (3): Ha aprovechado los conocimientos adquiri- CG7, CT1,
mero aprendizaje de
dos para, a través del análisis, la reflexión y la con- CE2
unos conocimientos, así
textualización, ser capaz de aplicarlos a una situación
como de aplicarlos a la
real
creación de un producto
MUY ALTO (4): Ha demostrado un total dominio de
audiovisual de calidad
los conceptos de la asignatura, ha sido capaz de rela-
cionarlos y razonar sobre ellos, ha incorporado con
actitud constructiva las opiniones de los demás y ha
demostrado ser capaz de aplicarlos a un producto
profesional de calidad
MUY BAJO (0): No ha mostrado interés alguno por
ser original, conformándose con presentar una pro-
1. Fomenta la creatividad puesta elemental que no innova en el planteamiento
2. 2. COMÚN y la originalidad en sus inicial
CT4, CG3,
AL GRADO DE trabajos para generar BAJO (1): Ha propuesto algunos enfoques originales
CE5
PERIODISMO proyectos periodísticos y creativos en la fase inicial del proyecto, pero no los
innovadores ha llevado a la práctica
MEDIO (2): Ha planteado ideas innovadoras, creati-
vas y originales en la fase inicial del proyecto, pero
‒ ‒
las ha plasmado solo en parte en el trabajo final
ALTO (3): Ha planteado ideas innovadoras, creativas
y originales en la fase inicial del proyecto, las ha tras-
ladado de forma eficaz al grupo y ha trabajado activa-
mente para que se lleven a la práctica. El trabajo final
es innovador y creativo.
MUY ALTO (4): Desde el primer momento ha orien-
tado todo su trabajo en la búsqueda de la originalidad
y la creatividad, y como resultado de ello ha desarro-
llado un producto innovador y genuino capaz de des-
tacar entre la competencia en una situación profesio-
nal real.
MUY BAJO (0): No ha asimilado los conocimientos o
se ha limitado a memorizarlos, pero sin dar muestras
de haberlos entendido
2. Es capaz de hacer un
BAJO (1): Ha aprendido de forma superficial los cono-
razonamiento crítico con
cimientos de la asignatura pero no ha sido capaz de
los conocimientos adqui-
relacionar conceptos ni de reflexionar sobre ellos
ridos y de relacionar con-
MEDIO (2): Ha entendido los conceptos y ha mos-
ceptos, más allá del
trado interés por incorporarlos a un proyecto profesio-
mero aprendizaje de
nal, aunque aún con mucho margen de mejora
unos conocimientos, así CB2, CB3,
ALTO (3): Ha aprovechado los conocimientos adquiri-
como de trasladarlos a la CT2, CG4
dos para, a través del análisis, la reflexión y la con-
actualidad periodística y,
textualización, ser capaz de aplicarlos a una situación
a partir de todo ello, ge-
real
nerar informaciones ve-
MUY ALTO (4): Ha demostrado un total dominio de
races y de calidad a par-
los conceptos de la asignatura, ha sido capaz de rela-
tir de un acertado cono-
cionarlos y razonar sobre ellos, ha incorporado con
cimiento de la actualidad
actitud constructiva las opiniones de los demás y ha
demostrado ser capaz de aplicarlos a un producto
profesional de calidad
MUY BAJO (0): No ha recabado información o lo ha
hecho de forma insuficiente para elaborar un proyecto
de publicidad o relaciones públicas
BAJO (1): Ha buscado información de forma superfi-
cial, pero sin someterla a los procesos necesarios
para que pueda ser utilizada en un producto de publi-
cidad o relaciones públicas con una mínima calidad
1. Ha aprendido a gestio-
MEDIO (2): Se ha documentado, ha buscado informa-
nar de una forma orde-
ción y la ha adaptado para elaborar con ella un pro-
nada y eficiente la infor-
yecto publicitario, aunque con mucho margen de me-
mación y documentación
jora
3. 1. A APLI- necesarias para empren- CB3, CT1
ALTO (3): Ha hecho una gestión satisfactoria de los
CAR EN ASIG- der un proyecto de publi-
documentos y fuentes disponibles, seleccionando, ve-
NATURAS DEL cidad o relaciones públi-
rificando y analizando un volumen considerable de
GRADO EN cas (GESTIÓN DE LA
datos con la calidad suficiente para hacer con ellos
PUBLICIDAD Y INFORMACIÓN)
un proyecto publicitario o relaciones públicas
RELACIONES
MUY ALTO (4) Ha recabado numerosa información
PÚBLICAS
de distintas fuentes, preocupándose en todo mo-
mento por documentarse lo mejor posible y sacar el
máximo rendimiento a los datos disponibles para ha-
cer con ellos un proyecto de publicidad o relaciones
públicas de calidad aplicable a una situación real
MUY BAJO (0): No ha aplicado ninguna de las herra-
2. Domina las herramien-
mientas digitales ni métricas que se consideran nece-
tas digitales y métricas
sarias para diseñar una campaña publicitaria eficaz CE2, CE3,
necesarias para analizar
BAJO (1): Ha aplicado de forma incorrecta o insufi- CE6, CE10,
mercados y diseñar cam-
ciente algunas o todas estas herramientas o métricas
pañas de publicidad
digitales incluidas en la asignatura
‒ ‒
eficaces (DOMINIO DE MEDIO (2) Ha aplicado de forma coherente todas o la
HERRAMIENTAS) mayor parte de las herramientas y métricas digitales
incluidas en la asignatura, aunque el resultado final
presenta algunas deficiencias o errores
ALTO (3): Ha demostrado que domina las herramien-
tas digitles y métricas necesarias en un proyecto pu-
blicitario, las aplica de forma coherente y enriquece
con ello el producto final
MUY ALTO (4): Ha aprovechado al máximo las herra-
mientas y técnicas digitales a su disposición para
crear un proyecto profesional competitivo e innovador
MUY BAJO (0): Ha utilizado documentos y fuentes de
forma insuficiente, sin rigor y sin profundidad alguna,
sin que con ellos se pueda elaborar con ellos un pro-
ducto escrito, sonoro o visual con una mínima calidad
BAJO (1): Ha buscado la información imprescindible
para realizar un producto audiovisual elemental, pero
sin mostrar interés alguno por aprovechar las fuentes
1. Es capaz de identifi-
disponibles para mejorar el proyecto
car, analizar y relacionar
MEDIO (2): Se ha documentado y ha buscado los tex-
adecuadamente cual-
tos, datos y documentos necesarios para elaborar
quier tipo de fuente o do-
con ellos un producto audiovisual de calidad, aunque
cumento (escrito, sonoro CB3
con mucho margen de mejora
o visual) como base para
ALTO (3): Ha hecho una gestión satisfactoria de los
la elaboración de relatos
documentos y fuentes disponibles, seleccionando, ve-
(GESTIÓN DE LA IN-
rificando y analizando un volumen considerable de
FORMACIÓN)
datos con la calidad suficiente para hacer un producto
audiovisual publicable
3. 2. A APLI- MUY ALTO (4): Ha recabado numerosa información
CAR EN ASIG- de distintas fuentes, preocupándose en todo mo-
NATURAS DEL mento por documentarse lo mejor posible y sacar el
GRADO EN máximo rendimiento a los datos disponibles para ha-
COMUNICA- cer con ellos un proyecto audiovisual de gran calidad
CIÓN AUDIO- MUY BAJO (0): No ha aplicado ninguna de las tecno-
VISUAL logías comunicativas que se consideran necesarias
para elaborar un proyecto audiovisual de calidad en
los formatos actuales
BAJO (1): Ha aplicado de forma incorrecta o insufi-
ciente algunas o todas las tecnologías y técnicas co-
2. Ha aprendido a utilizar
municativas incluidas en la asignatura
las tecnologías y técni-
MEDIO (2) Ha aplicado de forma satisfactoria todas o
cas comunicativas en to-
la mayor parte de las técnicas digitales incluidas en la
dos los formatos para CG8, CE7,
asignatura, aunque el resultado final presenta algu-
aplicarlas a productos CE8, CE10
nas deficiencias o errores
audiovisuales de calidad
ALTO (3): Ha demostrado que domina las herramien-
(DOMINIO DE LAS HE-
tas y técnicas digitales y que es capaz de aplicarlas a
RRAMIENTAS)
un proyecto audiovisual competitivo y de calidad y en-
riquecer con ellas el producto final
MUY ALTO (4): Ha aprovechado al máximo las herra-
mientas y técnicas comunicativas digitales a su dispo-
sición para crear un proyecto profesional competitivo
e innovador
1. Ha aprendido a bus- MUY BAJO (0): Ha utilizado los datos y fuentes de in-
3. 3. A APLI- car, seleccionar y anali- formación de forma superficial, sin aplicar criterios de
CAR EN ASIG- zar textos y documentos, veracidad, calidad o utilidad y sin mostrar interés al-
CB3, CT1,
NATURAS DEL así como interpretar, va- guno por enriquecerlos
CG2, CE8,
GRADO EN lorar y contrastar esta in- BAJO (1): Ha buscado la información imprescindible
PERIODISMO formación con el fin de para realizar un producto de comunicación elemental,
elaborar con ella pero sin contrastarla y/o analizarla lo suficiente como
‒ ‒
productos de comunica- para hacer un producto de comunicación homologa-
ción veraces y útiles ble con lo que demanda el mercado
para la sociedad (GES- MEDIO (2): Ha buscado, seleccionado, contrastado y
TIÓN DE LA INFORMA- analizado textos y documentos, que pueden aplicarse
CIÓN) a un producto de comunicación aunque con mucho
margen de mejora
ALTO (3): Ha hecho una gestión adecuada de la in-
formación, seleccionando, verificando y analizando
un volumen considerable de datos y fuentes con la
calidad suficiente para hacer un producto de comuni-
cación veraz y útil a la sociedad
MUY ALTO (4): Ha gestionado con criterios profesio-
nales un volumen elevado de datos, que ha orde-
nado, contrastado y enriquecido preocupándose en
todo momento por sacar el máximo rendimiento a la
información disponible para hacer con ella un pro-
yecto de comunicación de gran calidad
MUY BAJO (0): No ha aplicado ninguna de las herra-
mientas periodísticas digitales que se consideran ne-
cesarias para elaborar un proyecto profesional de ca-
lidad
BAJO (1): Ha aplicado de forma incorrecta o insufi-
2. Domina las herramien-
ciente algunas o todas las herramientas periodísticas
tas periodísticas del en-
incluidas en la asignatura
torno web relacionadas
MEDIO (2): Ha aplicado de forma satisfactoria todas o
con la visualización de
la mayor parte de las herramientas periodísticas digi-
datos, la verificación de CE18,CE19,C
tales incluidas en la asignatura, aunque no ha sabido
fuentes, el posiciona- E20,CE21
trasladarlas de forma eficaz a un proyecto de comuni-
miento web y/o la comu-
cación
nicación en redes socia-
ALTO (3): Ha demostrado que domina las herramien-
les. (DOMINIO DE LAS
tas periodísticas digitales, ha sabido aplicarlas a un
HERRAMIENTAS)
proyecto de comunicación y ha enriquecido con ello
el producto final
MUY ALTO (4): Ha aprovechado al máximo las herra-
mientas periodísticas digitales a su disposición para
crear un proyecto profesional competitivo e innovador
‒ ‒
2. Trabaja en equipo, cumple los plazos previstos, muestra una ac-
titud proactiva y contribuye a alcanzar los objetivos marcados
favoreciendo el aprendizaje personal y colectivo.
‒ ‒
podrá aplicarse solo a esa práctica, al conjunto de los trabajos prácticos,
a la totalidad de la asignatura...
Aunque se recomienda unificar lo máximo posible los criterios, espe-
cialmente dentro de una misma Facultad, esta flexibilidad dentro de un
esqueleto común permitiría modular la aplicación de la rúbrica a las
particularidades de cada Grado (y, en menor medida, de cada asigna-
tura), otro de los objetivos marcados en la presente propuesta. De esta
manera, por ejemplo, se puede considerar que en el Grado en Perio-
dismo el criterio invalidante debe fijarse en 3 faltas de ortografía, pero
en una titulación de la rama de Ciencias sea conveniente elevar el nú-
mero de errores a partir del cual se debe aplicar este criterio penaliza-
dor. O, por ejemplo, el docente o la dirección del Grado pueden decidir
que la deficiente redacción o la comisión de un plagio deben ser casti-
gados con un 0 solo en la parte práctica en cuestión y no en la totalidad
de la asignatura, para que, a modo de “aviso para navegantes”, el
alumno tenga la posibilidad de enmendar el error y se cumpla así otro
de los objetivos marcados, el de favorecer su aprendizaje (Blanco, A.,
2008) y culminar la asunción de las competencias profesionales. Por el
contrario, se puede considerar que estos errores son lo suficientemente
graves como para acarrear el suspenso para el alumno al que, previa-
mente, se le han explicado los criterios de la rúbrica y sus implicacio-
nes.
La trascendencia de estas tres pautas de evaluación mencionadas se jus-
tifica por el hecho de que se consideran requisitos imprescindibles para
el buen desempeño del futuro profesional, más allá de la mera asunción
de unos contenidos teóricos que se vuelquen después en un examen
(ANECA, 2013). Al margen del campo laboral del que se trate, resulta
vital que el candidato sepa expresarse con corrección, se comporte se-
gún unos principios éticos y deontológicos elementales y sea capaz de
ajustarse a los ritmos de trabajo marcados. El último de estos ítems, el
que hace referencia a la actitud proactiva y al trabajo en equipo, se ha
incluido para dar cabida a dos cualidades cada vez más valoradas por
los empleadores, en la línea de las soft skills antes mencionadas.
Una vez computada la evaluación numérica de este bloque en función
de unos baremos acordados previamente mediante el programa de
‒ ‒
rúbricas que se decida emplear, el resultado se aplicará al bloque 1 del
mapa de rúbricas.
La segunda de las ramificaciones propuestas para este “árbol de rúbri-
cas” se refiere a los criterios de evaluación que habrán de ser comunes
a los distintos Grados de una facultad, aunque presentados con una re-
dacción adaptada a las particularidades de cada titulación. En ellos se
valorarán dos aspectos que se consideran también fundamentales: la vo-
cación innovadora y la creatividad del estudiante y su capacidad para
relacionar conceptos y hacer razonamientos críticos más allá de la ad-
quisición de unos conocimientos concretos. Ambas capacidades están
incluidas, como hemos visto, en la relación de habilidades que más de-
mandan las empresas.
Desde este segundo escalón del mapa de rúbricas partirán a su vez otros
dos elementos de evaluación, habilidades blandas o soft skills de nota-
ble importancia: la capacidad del estudiante para gestionar la informa-
ción que deberá utilizar en su trabajo y su dominio de las herramientas
digitales necesarias para el buen desempeño profesional. En la pro-
puesta presentada para este proyecto ambos principios están redactados
de una forma que puedan aplicarse por igual a los distintos Grados del
área de Comunicación, aunque, por supuesto, otros muchos plantea-
mientos similares son igualmente válidos.
En este sentido, se ha considerado que, para adaptar cada elemento a
las particularidades concretas de cada asignatura, no es necesario des-
cender a un mayor detalle tanto en la redacción como en la terminología
empleadas, lo que tendría como consecuencia un aumento sustancial
del número de indicadores y descriptores que componen la plantilla. A
corto plazo, un “árbol de rúbricas” mucho más poblado facilitaría, qué
duda cabe, la evaluación del docente al proporcionarle unos criterios
más precisos de lo que demanda en su asignatura. Pero, en la práctica,
multiplicaría el número de rúbricas necesarias y dificultaría la aplica-
ción de un sistema de evaluación homogéneo, haciendo imposible cum-
plir otro de los objetivos marcados, el de diseñar un sistema de rúbricas
de fácil aplicación para el conjunto de una facultad o una universidad.
En su lugar, se ha considerado que en la redacción inicial (“domina los
contenidos prácticos de la asignatura y está preparado para aplicarlos
‒ ‒
en el ámbito profesional”) están sustanciados los propósitos de apren-
dizaje de todas las materias y cada profesor podrá ajustar ahí sus crite-
rios de evaluación para la asignatura correspondiente.
Una vez dibujado este “árbol de rúbricas” y establecidos los principios
de evaluación, el otro elemento que determinará su eficacia será el di-
seño de un sistema de baremación que sea capaz de ajustarse a las ne-
cesidades de cada materia, sin caer en plantillas demasiado encorseta-
das o en modelos demasiado complejos. Para ello, y mediante el pro-
grama de rúbricas que se determine, se asignará un porcentaje de la nota
a cada uno de los bloques y a cada uno de los elementos de la rúbrica.
De esta forma, por ejemplo, el criterio de dominio de las herramientas
digitales podrá tener un peso primordial en algunas asignaturas y pe-
queño o inexistente en otras. Lo mismo puede ocurrir en otros ítems,
como el de la correcta gestión de la información o el trabajo en equipo,
aunque se recomienda de los del primer bloque (expresión, ética, cum-
plimiento de plazos o actitud proactiva) sean lo más homogéneos posi-
bles, en línea con otro de los propósitos de este proyecto.
Por último, pero no menos importante, las habilidades y capacidades a
evaluar necesitan de unos criterios de medición claros y precisos que
cumplan los objetivos marcados en el proyecto, es decir, que sean en-
tendibles por todas las partes, no estén asociados directamente a una
nota sino a un aprendizaje y no sean lineales. Bajo estas premisas se
asoció a cada ítem a evaluar una serie de indicadores que, como el resto
de parámetros, pueden servir de base para futuras rúbricas, de simple
inspiración o ser descartados y sustituidos por otros nuevos.
En el caso que nos ocupa, y para unificar las evaluaciones en todas las
asignaturas, se han otorgado cuatro categorías o niveles de cumpli-
miento:
‒ Muy bajo (0 puntos)
‒ Bajo (1)
‒ Medio (2)
‒ Alto (3)
‒ Muy alto (4)
‒ ‒
A cada uno de estos grados de cumplimiento se les ha asignado un texto
descriptor que precisará los elementos que se están valorando, tal y
como se muestra en la plantilla recogida al principio de este epígrafe, y
que ayudará al profesor a medir el desempeño del estudiante y a este a
asimilar su nivel de aprendizaje. En este sentido, se considera funda-
mental contar con una redacción individualizada para cada apartado del
árbol de rúbricas, para así reducir al máximo la subjetividad del docente
y la discrecionalidad de la nota (Jonsson, A. y Svingby, G., 2007, y
Jonsson, A., 2014).
Por último, cada uno de estos niveles de aprendizaje llevará a su vez
asociada una nota numérica, como ya se ha comentado, que con el pro-
grama de rúbricas empleado se ponderará en función de las necesidades
de cada caso, pudiendo ser comunes a una universidad, una facultad o
una titulación, o específicos para determinadas asignaturas. En este
punto se asienta la principal virtud del sistema de evaluación por rú-
brica: permitir adaptar los elementos de evaluación a las necesidades de
cada materia.
5. DISCUSIÓN
La propuesta que se ha realizado es el resultado del análisis de la bi-
bliografía de referencia, así como de las competencias y planes de es-
tudio vigentes sobre los que aplica el “árbol de rúbricas”. No obstante,
los autores plantean cuatro futuras líneas de trabajo que servirán para
mejorar y validar el sistema aquí planteado:
‒ ‒
‒ Acabada esta primera parte de la investigación, se testará en
algunas asignaturas del segundo semestre, de los tres grados y
con características diferentes entre sí, para hacer una primera
valoración de la puesta en marcha. Este análisis se llevará a
cabo a través de técnicas cualitativas con profesores y alum-
nos que permitirán profundizar en aspectos como el proceso y
los resultados de la implementación del “árbol de rúbricas”.
En el curso 2022-2023 se espera tener un modelo definitivo y
aplicarlo a todas las materias de la facultad.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
general a lo más concreto, que se aplicará en una facultad de tamaño
pequeño, el Área de Comunicación de la Universidad Villanueva (Ma-
drid, España), pero que se ofrece como plantilla para adaptarlo a cual-
quier otra Facultad o universidad con las mínimas modificaciones po-
sibles.
El “árbol de rúbricas” propuesto cuenta con un tronco común que re-
coge y unifica los criterios de evaluación que se consideran imprescin-
dibles para todas las asignaturas de una facultad o de una universidad,
y que habrán de aplicarse de forma automática en todas las asignaturas
(corrección ortográfica, ausencia de plagio y cumplimiento de los pla-
zos, además del trabajo en equipo). De este bloque central parte una
primera ramificación con indicadores adaptados a las necesidades de
cada titulación (fomento de la creatividad, innovación y originalidad,
por un lado, y capacidad para hacer un razonamiento crítico, por otro),
y de este segundo escalón, a su vez, un tercer nivel con criterios de
evaluación más específicos para determinadas asignaturas, como la ges-
tión que hace el estudiante de la información y su dominio de las herra-
mientas digitales, adaptado siempre a la idiosincrasia de cada titulación.
Una vez definidos estos criterios, se aplicarán las fórmulas de barema-
ción que se consideren más oportunas mediante las herramientas digi-
tales disponibles en el mercado (ya sean específicas de rúbricas o más
generales, como el programa Excel de Microsoft), resultando de ello un
programa que hará los ajustes de forma automática sin necesidad de
participación del profesor –que se limitará a evaluar cada indicador- y
que previamente se habrá adaptado a las necesidades de cada materia.
En este dibujo de rúbrica se han perseguido una serie de objetivos, que
se consideran cumplidos:
‒ La plantilla de rúbricas en forma de “árbol” es lo suficiente-
mente sólida como para cubrir todas las necesidades de eva-
luación pero, a la vez, lo suficientemente flexible como para
adaptarse a cada asignatura sin necesidad de elaborar planti-
llas ad hoc para cada materia. Para ello, se han reducido y sim-
plificado al máximo los ítems a considerar, ante el temor de
que una excesiva complejidad disuada a los docentes de poner
‒ ‒
en marcha este modelo y dificulte la aceptación por parte del
alumnado.
‒ ‒
8. REFERENCIAS
Alsina, J. (2013). Rúbricas para la evaluación de competencias. Barcelona: ICE y
Ediciones Octaedro.
ANECA. (2013). Guía de apoyo para la redacción, puesta en práctica y
evaluación de los resultados del aprendizaje. Madrid: ANECA.
Atkinson, D., y Lim, S.L. (2013). Improving Assessment Processes in Higher
Education: Student and Teacher Perceptions of the Effectiveness of a
Rubric Embedded in a LMS. Australasian Journal of Educational
Technology, 29(5), 651-666.
Blanco, A. (2008). Las rúbricas: un instrumento útil para la evaluación de
competencias. En L. Prieto (Coord.). La enseñanza universitaria centrada
en el aprendizaje (171-188). Barcelona: Octaedro/ICE Universidad de
Barcelona.
Cano, E. (2015). Las rúbricas como instrumento de evaluación de competencias
en educación superior: ¿uso o abuso? Profesorado. Revista de
currículum y formación de profesorado, 19(2), 265-280.
CRUE. (2020). Declaración por un Espacio Europeo de Educación Superior más
inclusivo, innovador e interconectado. Madrid: CRUE Universidades
Españolas.
Dawson, P. (2017). Assessment rubrics: towards clearer and more replicable
design, research and practice. Assessment & Evaluation in Higher
Education, 42(3), 347-360. DOI: 10.1080/02602938.2015.1111294
García, M., Belmonte, M. y Galián, N. (2017). Opinión del alumnado sobre el
empleo de rúbricas en la universidad. Estudios pedagógicos (Valdivia)
43(2), 93-113.
Hendarman, A.F., Cantner, U. (2018) Soft skills, hard skills, and individual
innovativeness. Eurasian Bus Rev, 8, 139–169.
https://doi.org/10.1007/s40821-017-0076-6
Jonsson, A. (2014). Rubrics as a way of providing transparency in assessment,
Assessment & Evaluation in Higher Education, 39(7), 840-852, DOI:
10.1080/02602938.2013.875117.
Jonsson, A. y Svingby, G. (2007). The use of scoring rubrics: Reliability, validity
and educational consequences. Educational Research Review, 2, 130–
144.
López-Ruiz, J.I. (2011). Un giro copernicano en la enseñanza universitaria:
formación por competencias. Revista de Educación, 356, 279-301.
Marín, V., Cabero, J., Barroso, J. (2012). La rúbrica de evaluación en el proceso
de formación del docente universitario. La propuesta del proyecto
DIPRO 2.0. Educar, 48(2), 347-364.
‒ ‒
Menéndez, J.L., Gregori, E., y Arbesú, I. (2017). Discusión de una rúbrica para
valorar la calidad educativa de las guías docentes en la educación
superior. Observar, 11(1), 1-24.
Stevens, D. y Levi A. (2013) Introduction to rubrics: an assessment tool to save
grading time, convey effective feedback, and promote student learning.
Stylus Publishing.
Timmerman, B.E.C., Strickland, D.C., Johnson, R.L., & Payne, J.R. (2011).
Development of a 'universal' rubric for assessing undergraduates'
scientific reasoning skills using scientific writing. Assessment &
Evaluation in Higher Education, 36(5), 509-547.
Universidad Villanueva (2021). Competencias y salidas profesionales del Grado
en Comunicación Audiovisual. https://www.villanueva.edu/wp-
content/uploads/2020/10/Competencias-comunicacion-audiovisual.pdf
Universidad Villanueva (2021). Competencias y salidas profesionales del Grado
en Periodismo. https://www.villanueva.edu/wp-
content/uploads/2020/10/Competencias-periodismo.pdf
Universidad Villanueva (2021). Competencias y salidas profesionales del Grado
en Publicidad y Relaciones Públicas. https://www.villanueva.edu/wp-
content/uploads/2020/10/Competencias-publicidad.pdf
Velasco, L.C. y Tójar, J.C. (2018). Uso de rúbricas en educación superior y
evaluación de competencias. Profesorado. Revista de currículum y
formación de profesorado, 22(3), 183-208.
Villamañe, M., Álvarez, A., Larrañaga, M. y Ferrero, B. (2017). Desarrollo y
validación de un conjunto de rúbricas para la evaluación de Trabajos Fin
de Grado. ReVisión, 10(1).
Villarroel, V. y Bruna D., (2014). Reflexiones en torno a las competencias
genéricas en educación superior: Un desafío pendiente.
Psicoperspectivas, 13(1), 23-34.
World Economic Forum (2021). These are the top 10 job skills of tomorrow –
and how long it takes to learn them.
https://www.weforum.org/agenda/2020/10/top-10-work-skills-of-
tomorrow-how-long-it-takes-to-learn-them/
Zabalza, M.A. y Zabalza M.A. (2010). Planificación de la docencia en la
universidad. Madrid: Narcea.
‒ ‒
CAPÍTULO 104
CARLOS PÉREZ-CAMPOS
Campus Capacitas. Universidad Católica de Valencia
MARÍA HUERTAS GONZÁLEZ-SERRANO
Dpto. de Educación Física y Deportiva .Universitat de València
SAMUEL LÓPEZ-CARRIL
Dpto. de Educación Física y Deportiva .Universitat de València
Dpto Actividad Física y Ciencias del Deporte Universidad de Castilla La-Mancha
RÓMULO JÁCOBO GONZÁLEZ-GARCÍA
Campus Capacitas. Universidad Católica de Valencia
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
adapten a las circunstancias del momento, entre dichos estilos se pre-
senta el modelo de aprendizaje experiencial.
Las actividades en el medio natural, están cada vez más a la orden del
día, y son muchos, los que ya se suman a la práctica de actividad física
en un entorno natural, como una manera de desconexión y una buena
alternativa saludable de ocio, tiempo libre y formación.
En la etapa de educación secundaria, en el área de Educación Física, se
especifica en el curriculum de la asignatura el bloque dedicado a las
actividades físicas adaptadas al medio natural, cuyo fin, es promover y
fomentar la actividad física, aprovechando los recursos y espacios na-
turales próximos al centro educativo e intentar transmitir ciertos valores
como una actitud cuidadosa y de respeto al medio natural a través de la
práctica deportiva.
La realización de actividades físicas en el medio natural, han facilitado
la creación de espacios alternativos, para que los individuos adquieran
cierta sensibilidad con el medio natural y se relacione con el entorno
que tiene a su alrededor. Es así, como la utilización de espacios al aire
libre próximos al centro educativo se convierte en una actividad moti-
vante por sí misma, ya que es una actividad donde los alumnos salen
del centro y se desinhiben practicando deporte y actividad física, ade-
más de interactuar con el medio ambiente y trabajar los contenidos del
currículum de Educación Física.
La educación debe de incorporar planteamientos que sensibilicen al
alumnado con el medio que le rodea (Navarrete y Domingo, 2002) y,
fomentar su conocimiento para una mayor integración con el mismo.
En esta misma línea de sensibilización y conocimiento con el entorno
se plantea la propuesta siguiendo el marco de la agenda 2030, este en-
torno permite que el profesorado introduzca objetivos de desarrollo soste-
nible en la dinámica de las clases de Educación Física, sensibilizando así
al alumnado respecto al cuidado y respeto del entorno natural, creando ciu-
dades y comunidades sostenibles.
En este sentido, las actividades físicas en el medio natural, son consi-
deradas como una alternativa llena de aspectos positivos y una gran ri-
queza didáctica y pedagógica, que fomentará en el alumnado el interés
‒ ‒
hacia dicha asignatura y por consiguiente a los contenidos que se im-
partan en la misma.
En términos generales, la Educación Física pretende que los alumnos
interactúen con los espacios naturales más próximos a sus centros edu-
cativos y adquieran una serie de habilidades que les permitan apreciar
y disfrutar del medio natural que les rodea, además de crearles interés
y la motivación suficiente para que de manera autónoma tomen la ini-
ciativa de realizar cualquier tipo de actividad deportiva, lúdica o de
ocio. Además, y de acuerdo con Lozano, Correas, y Costa (2016) el
esfuerzo del profesorado invertido en el planteamiento tareas y activi-
dades adaptadas al propio contexto, permitirá al alumnado experimen-
tar sensaciones que puedan infundirles un interés por la práctica de es-
tos contenidos fuera del ámbito formal.
Presentamos a continuación, un recorrido por la literatura que justifique
a modo teórico todo lo que posteriormente se expondrá en la parte prác-
tica, analizamos el concepto, la clasificación, las características más
importantes de las Actividades Físicas en el Medio Natural (en adelante
AFMN), y los valores educativos que fomentan su implementación.
Cuando se habla del concepto, muchos son los autores que a lo largo
del transcurso de los años y con la evolución de las actividades físicas
en la naturaleza, han tratado de darle una definición al término de Ac-
tividad Física en la Naturaleza. De acuerdo con Parra (2016), existe una
gran discordancia cuando se habla de la querencia de los espacios, y
son muchos los autores que defienden el uso desde un punto de vista
didáctico, deportivo, rendimiento, medio ambiental, etc., ya que varía
en función del entorno o las características de la actividad/es que se
vayan a realizar.
Los autores definen el término como un medio tridimensional, de limi-
tes indefinidos, lo definen como toda acción llevada a cabo en un en-
torno natural o artificial (Acuña, 1991), como el conjunto de activida-
des de carácter interdisciplinar que se desarrollan en contacto con la
‒ ‒
naturaleza e incertidumbre con el medio, que permiten desenvolverse
en él siempre dentro del máximo respeto (Pinos, 1997).
‒ ‒
A modo de resumen, y siguiendo a Caballero (2012), las AFMN, tienen
que desarrollarse en dicho medio, deben de posibilitar su interacción
con la naturaleza, poseen cierto grado de incertidumbre, por lo que
existe cierto grado de riesgo, la motricidad es el vehículo de interacción,
posee un carácter vivencial, del mismo modo tienen un componente
emocional considerable y fomentan las relaciones sociales entre sus
participantes.
Con la jornada multideportiva que se desarrolla en el presente capítulo,
se pretende fomentar la práctica de Actividades en el Medio Natural,
reforzar la cohesión y la socialización, además de vivir una jornada dis-
tendida con la práctica de actividad física y deporte, donde se ven re-
flejadas cada una de las características mencionadas.
‒ ‒
de contenidos, mejora la autonomía del individuo, su sociabilidad y su
solidaridad, y sin lugar a dudas sensibiliza en cuanto a la educación
medioambiental se refiere con la necesidad actual en la que nos encon-
tramos.
En necesaria una reflexión por parte de las instituciones y por consi-
guiente de los docentes, sobre la querencia que actualmente realizan los
seres humanos de la naturaleza, fomentando una actitud crítica ante el
alumnado del mal uso de los recursos naturales, las políticas sin sentido
sobre el cuidado medioambiental y el abuso que se ejerce en la natura-
leza en numerosas ocasiones, de esta manera si se conocen las conse-
cuencias, se aprenderá a valorar el medio.
Por todo ello, la actividad multideportiva que se llevó a cabo en la playa
con los alumnos del Máster Universitario de Formación del Profesorado
de Secundaria, Bachillerato, Formación Profesional y Enseñanza de
Idiomas, concretamente de la especialidad de Educación Física, tiene
como objetivo transmitir a los futuros docentes de dicha asignatura, que
el contacto entre el ser humano y la naturaleza multiplica las opciones
de disfrutar a través de actividades deportivas y recreativas en el medio
natural. Esto junto con la metodología de aprendizaje experiencial
donde el alumno es protagonista de la acción, pretende provocar la
transmisión de estos valores a sus futuros alumnos.
2. OBJETIVOS
‒ ‒
‒ Fomentar el respeto y aprovechamiento del entorno natural
de la ciudad de Valencia.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
física, y 33 futuros graduados en el ciclo superior de Técnico en anima-
ción de actividades físicas y deportivas (en adelante TAFAD).
El aprendizaje experiencial a menudo se utiliza como sinónimo del tér-
mino "educación experiencial", pero mientras que la educación expe-
riencial es una filosofía más amplia de la educación, el aprendizaje ex-
periencial considera el proceso de aprendizaje individual. Como tal, en
comparación con la educación experiencial, el aprendizaje experiencial
se refiere a cuestiones más concretas relacionadas con el alumno y su
contexto de aprendizaje. Del mismo modo, además de ser una metodo-
logía experiencial también es vivencial y reflexiva, puesto que el plan-
teamiento de la propia jornada y de su estructura está diseñada para que
el alumnado sea protagonista de su aprendizaje, protagonista de su ac-
ción y por lo tanto, prima por encima de todo su participación y refle-
xión posterior de dicho proceso.
En el caso que nos aborda, se pretende que el alumnado aprenda a partir
de su propia experiencia y para ello la actividad debe de estar planifi-
cada, diseñada y organizada para fomentar su participación. El prota-
gonista de la acción debe de enfrentarse a distintas situaciones a través
de las cuales aprenda los conceptos y contenidos curriculares progra-
mados con anterioridad. Destacar que, en este tipo de metodología, se
debe de tener en cuenta que durante esta actividad ha habido un apren-
dizaje significativo, es decir, la metodología empleada se define como
aquella que construye su propio aprendizaje y, además, la dota de sig-
nificado.
Si lo planteamos desde la experiencia, el aprendizaje significativo pre-
sumiblemente no se olvida y se mantiene en las capacidades del alum-
nado. Eso sí, los alumnos y las alumnas son los responsables de su pro-
pio aprendizaje, por lo tanto, debemos de conseguir que jueguen un pa-
pel activo y participativo. Con todo, creemos que son muchas las ven-
tajas de introducir esta metodología en la formación del futuro docente.
A modo de resumen y como hemos explicado anteriormente, la meto-
dología que ha protagonizado la asignatura de recursos y más concre-
tamente la actividad desarrollada en la playa y que expondremos a con-
tinuación, se ha basado en el aprendizaje significativo, vivencial,
‒ ‒
experiencial y reflexivo, haciendo al alumnado protagonista de su pro-
pio aprendizaje. La propia experiencia y su reflexión posterior en el
ámbito que protagonizaba la jornada de multiactividad deportiva en la
playa, ha dado sentido al presente texto.
‒ ‒
Así pues, con la realización de la actividad multideportiva en la playa
de la Patacona en Alboraya (Valencia), se pretende aprovechar este es-
pacio para realizar una jornada formativa, deportiva, lúdica y recrea-
tiva, donde se trabajen ciertos aspectos del currículum educativo de los
deportes en el medio natural, además de inculcar a los alumnos el buen
uso y aprovechamiento del espacio.
4. PROPUESTA
‒ ‒
va a desarrollar, Voley playa, RugbyTag, Balontiro, Rafting, Touch-
ball, Fútbol burbuja, Hockey playa y FutVas con una organización cir-
cular, en la figura 1 puede observarse dicha distribución, teniendo en
cuenta que la actividad cuatro es la más próxima al mar.
4.
Rafting
5. 3.
Touchball Balontiro
6.
Fútbol
Punto de 2.
Rugby
Burbuja Reunión Touch
7. 1.
Hockey
playa 8. Voley
Fútbol
Vas
Parte del material necesario para llevar a cabo algunas de las activida-
des propias de la jornada son facilitadas por diferentes colaboradores,
la Federación de Hockey de la Comunidad Valencia (FHCV), cede el
campo hinchable y todo el material necesario para la práctica del ho-
ckey playa. Del mismo modo, la empresa Avensport cede el material
necesario para la práctica del Rafting (lanchas, chalecos y remos) y las
bolas hinchables para la práctica del fútbol burbuja.
‒ ‒
evento, se solicita la colaboración de diferentes personas con perfiles
afines a la actividad.
En la jornada participan los dos profesores titulares de la asignatura de
recursos didácticos para la enseñanza de la educación física del master
del profesorado que imparten clase en los 4 grupos que lo cursan, alum-
nos voluntarios egresados de ediciones anteriores, especialistas en la
organización de eventos deportivos en el medio natural (Avensport),
profesores del departamento de enseñanza y aprendizaje de la educa-
ción física de la facultad de Magisterio y Ciencias de la Educación y de
la facultad de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte tanto de la
UCV como de la Universidad de Valencia, y finalmente, alumnos en
formación del ciclo superior de TAFAD.
‒ ‒
puntos), empate (2 puntos), o derrota (1 punto). Dicho resultado se ano-
tará posteriormente en la tabla de puntuaciones que se encuentra en el
punto de reunión. El orden que aparece establecido en la Tabla 1 es el
que deberán seguir los equipos para cada ronda.
1º 2º 3º 4º 5º 6º 7º 8º
Ronda Ronda Ronda Ronda Ronda Ronda Ronda Ronda
1-10 9-11 8-12 7-13 6-14 5-15 4-16 3-17 VOLEY P.
2-11 1-12 9-13 8-14 7-15 6-16 5-17 4-18 RUGBY TAG
3-12 2-13 1-14 9-15 8-16 7-17 6-18 5-10 BALONTIRO
4-13 3-14 2-15 1-16 9-17 8-18 7-10 6-11 RAFTING
5-14 4-15 3-16 2-17 1-18 9-10 8-11 7-12 TOUCHBALL
6-15 5-16 4-17 3-18 2-10 1-11 9-12 8-13 F.BURBUJA
7-16 6-17 5-18 4-10 3-11 2-12 1-13 9-14 HOCKEY P.
6-17 7-18 6-10 5-11 4-12 3-13 2-14 1-15 FUTVAS
OUT OUT OUT OUT OUT OUT OUT OUT OUT
9-18 8-10 7-11 6-12 5-13 4-14 3-15 2-16 1-17
‒ ‒
TABLA 2. Tabla de puntuaciones.
EQUIPOS 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18
VOLEY PLAYA
RUGBY TOUCH
BALONTIRO
RAFTING
TOUCHBALL
FÚTBOL
BURBUJA
HOCKEY PLAYA
FÚTBOL VAS
TOTAL
Tras varias visitas a los diferentes enclaves que tiene la playa de Valen-
cia, se seleccionó una zona concreta que se denomina la playa de la
Patacona, perteneciente a la localidad de Alboria. Cuenta con cierta in-
fraestructura que facilita el desarrollo de algunos deportes como es el
caso del Voley playa, en este caso se contaba con un espacio reservado
a tal efecto, la administración responsable mantiene varios campos para
la práctica de dicho deporte repartidos en diferentes zonas de la playa.
‒ ‒
FIGURA 2: Código QR y material Voley Playa
Vóley Playa
Reglas Código QR M aterial
• Red de Vóley.
• 2 pelotas vóley de colores.
• Cinta marcadora de campo.
• 4 conos chinos grandes.
Fuente: https://www.youtube.com/watch?v=dt8wmf2-mN0&t=1s
En el caso del deporte del Rugby Tag, a pesar de que no hay contacto
entre los jugadores, el espacio de la playa reúne unas condiciones idea-
les para su práctica, pues facilita el contacto con el suelo evitando le-
siones por el impacto que en ocasiones se produce al entrar en contacto
con este.
‒ ‒
FIGURA 4. Código QR y material Rugby Tag
Rugby Tag
Reglas Código QR M aterial
• 3 pelotas de rugby.
• 6 conos agujeros.
• 6 picas.
• 8 cintas velcro rojas.
• 8 cintas velcro azules.
• Cinta marcadora de campo.
• 3 conos chicos sujeta pelotas de rugby. .
Fuente: https://www.youtube.com/watch?v=dt8wmf2-mN0&t=1s
‒ ‒
debo de dejar el balón en el suelo y pasar al equipo contrario. Si recu-
pero mi cinta la coloco y vuelvo al juego.
No se puede participar en el juego si no tengo las dos cintas correcta-
mente colocadas. No se puede golpear, ni coger al contrario, la única
forma de recuperar el balón es robando una cinta cuando el contrario
tenga el balón en posesión o interceptando un pase.
4.5.3. Balontiro
Balontiro
Reglas Código QR M aterial
‒ ‒
FIGURA 7. Balontiro
Fuente: https://www.youtube.com/watch?v=dt8wmf2-mN0&t=1s
4.5.4. Rafting
Rafting
Reglas Código QR M aterial
• 2 Lanchas.
• 14 Remos.
• 1 Boya con muerto.
• 14 Chalecos salvavidas
• 2 Cabos de 60 metros
• Hinchador.
‒ ‒
FIGURA 9. Rafting
Fuente: https://www.youtube.com/watch?v=dt8wmf2-mN0&t=1s
4.5.5. Touchball
El deporte del Touchball, originario de Suiza, consiste en lanzar una
pelota para que golpee sobre una red que está delimitada por un área de
3 metros de diámetro. Tras el rebote se consigue punto si la pelota toca
el suelo fuera de esta área y dentro de los límites del campo.
Touchball
Reglas Código QR M aterial
• 2 redes de rebote.
• Piquetas sujeción para la arena.
• 4 pelotas de goma de colores.
• Cinta marcadora de campo.
• 6 conos con agujeros.
• 6 picas.
• 14 petos.
‒ ‒
FIGURA 11. Touchball
Fuente: https://www.youtube.com/watch?v=dt8wmf2-mN0&t=1s
‒ ‒
material es que te permite golpear al contrario con el cuerpo que está
protegido con una burbuja de aire.
Hay cierta dificultad a la hora de desplazarse y sobretodo a la hora de
volver a incorporarse cuando un jugador es derribado por el contrario o
incluso por un compañero. El objetivo radica en introducir la pelota en
la portería contraria, pero tanto el terreno como el material condicionan
considerablemente el juego.
Fútbol Burbuja
Reglas Código QR M aterial
• 2 pelotas fútbol.
• Cinta marcadora de campo.
• 6 conos con agujeros.
• 6 picas.
• 12-14 burbujas.
• 2 porterías
• Hinchador eléctrico
Fuente: https://www.youtube.com/watch?v=dt8wmf2-mN0&t=1s
‒ ‒
4.5.7. Hockey Playa
Hockey Playa
Reglas Código QR M aterial
• Campo Hinchable.
• Estacas de madera.
• 14 sticks.
• 3 pelotas balonmano.
• 14 petos de color.
• Alagadores
• 2 motores.
Fuente: https://www.youtube.com/watch?v=dt8wmf2-mN0&t=1s
‒ ‒
El hockey playa es un deporte que se práctica de forma habitual, por lo
tanto, las reglas que se establecieron están reguladas por su federación,
pero en este caso, sufrieron pequeñas adaptaciones al entorno y las ca-
racterísticas propias de la jornada.
4.5.8. FutVas
FutVas
Reglas Código QR M aterial
Fuente: https://www.youtube.com/watch?v=dt8wmf2-mN0&t=1s
‒ ‒
Se establecieron la reglas del fútbol, pero con ciertos condicionantes
que determinaban el desarrollo de la competición. El objetivo es marcar
gol en la portería contraria, cada jugador debe llevar en su mano un
recipiente (en este caso un vaso de plástico) con una tercera parte del
vaso llena de agua.
No se puede participar en el juego en el momento que no se tenga agua
en el recipiente. Existe un recipiente (cubo) en una de las bandas del
campo a la altura de medio campo del que se puede ir rellenando. El
gol solo es válido si todos los jugadores del mismo equipo tiene agua
en sus recipientes.
Tras la explicación teórica de la práctica experimentada, habiendo
puesto el foco en una metodología experiencial, donde el protagonista
de la acción es el propio alumno que participa activamente en el desa-
rrollo de la actividad, y su posterior reflexión ante la misma, se muestra
un enlace donde puede verse a modo de resumen lo comentado en el
capítulo (https://www.youtube.com/watch?v=dt8wmf2-mN0).
5. CONCLUSIONES
‒ ‒
Teniendo como mapa de ruta la agenda 2030, varios de sus objetivos
destacan el cuidado y respeto por el medio ambiente, por crear espacios
limpios, ciudades sostenibles, sensibilizar en el aprovechamiento de los
espacios naturales como medio de vida y conservación. La actividad
provocó reflexiones profundas en el alumnado futuro docente, que des-
taca la necesidad de salir del aula y de recintos vallados, para de realizar
más acciones en el medio natural, con el fin de conocerlo, valorarlo y
por consiguiente respetarlo.
Consideramos importante a la hora de plantear la actividad promover
la relación entre el alumnado universitario futuro profesor de educación
física, cada año cursan el master del profesorado una media de 120
alumnos en la UCV, y siendo personas que reúnen un mismo perfil,
inquietudes muy similares, practican deporte de forma regular o profe-
sional, no llegan a establecer vínculos de unión más que con cuatro a
seis compañeros. Este interés tiene una relación directa con el favore-
cimiento de la enseñanza recíproca que se produce a través de las expe-
riencias conjuntas, de las reflexiones en grupo, y de las necesidades
surgidas durante la jornada.
El planteamiento experiencial de la sesión, el contacto directo con el
medio natural, la metodología vivencial, favoreció la participación del
alumnado fomentado su pensamiento crítico y su continua reflexión,
situaciones que de normal no se dan en el día a día del aula.
La retroalimentación aportada por los futuros docentes y debido a sus
aportaciones en relación con el cuidado del medio, el aprovechamiento
del entorno natural, la utilización de los espacios abiertos para favore-
cer la formación, de cómo influye emocionalmente romper con los es-
pacios establecidos y saturados, de lo obsoleto que queda el mobiliario
y la disposición del conjunto del aula (alumnado y profesorado), entre
otros temas muy interesantes, se concluye que la estructura, el plantea-
miento y las experiencias vividas durante la jornada en la playa, es un
espacio idóneo para la formación del futuro docente.
‒ ‒
6. AGRADECIMIENTOS/APOYOS
7. REFERENCIAS
‒ ‒
Moreno, J. A., Rodríguez, P. L., & Pérez, S. (2006). Actividades acuáticas en el
medio natural. Universidad de Murcia, 7.
Navarrete, G., & Domingo, L. (2002). Las actividades físicas en el medio natural,
como propuesta integradora en el currículum de Educación Física.
Buenos Aires, 8(47), 2.
Parra, C. (2016). Los Espacios para la enseñanza de las Actividades Físicas en el
medio natural. Wanceulen S.L.
Pinos, M. (1997). Actividades físico deportivas en la naturaleza para niños y
jóvenes. Gymnos.
Roura, V. (1990). Un planteamiento diferente de las actividades acuáticas.
«Bañarse en el mar». Apunts, (21), 25-30.
‒ ‒
CAPÍTULO 105
DIEGO MARTÍN-ALONSO
Universidad de Málaga
MARÍA-VICTORIA MARTOS-PÉREZ
Universidad de Málaga
LAURA PAÑAGUA
Universidad de Málaga
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
magisterio y a través de entrevistas, observan que estos perciben que la
investigación educativa es de poca calidad, ya que –dicen los estudian-
tes- los resultados no son útiles ni tienen pertinencia para su práctica
diaria.
Estas demandas –que lindan entre la inseguridad ante el futuro profe-
sional y la protesta por la formación recibida– son complejas de estu-
diar en tanto que obedecen a cuestiones de naturaleza diversa, aunque
interrelacionadas. En concreto, la literatura científica identifica lo que,
para simplificar el análisis, podríamos identificar como dos causas prin-
cipales. Estos serán los dos temas en los que nos centraremos en este
texto. El primero tiene que ver con la precariedad y contexto competi-
tivo en que se ha visto envuelto el profesorado en las últimas dos déca-
das –en especial desde la llegada del Espacio Europeo de Educación
Superior- y que le termina alejando de una investigación y docencia
vinculada con el interés social y las necesidades del aula. El segundo
motivo para entender este desencuentro tiene que ver con el choque de
paradigmas que se produce entre las demandas de los docentes en for-
mación y la naturaleza del oficio docente. Posteriormente, concluimos
el texto planteando que, aunque debemos buscar vías para la superación
de estos dos obstáculos, nos encontraremos con un tercero que hace
imposible la enseñanza del oficio docente: las tensiones y contradiccio-
nes que aparecen al ahondar en la pregunta “¿cómo aprender a ser do-
cente?”.
‒ ‒
En concreto, desde la aprobación en España del Real Decreto
1312/2007 la acreditación del profesorado se establece como el princi-
pal requisito para la promoción en la carrera profesional. En particular,
el principal criterio para acceder a plazas de profesorado universitario
y promocionar en ellas es la cantidad de publicaciones en revistas con-
sideradas como de alto impacto. Esto tiene consecuencias devastadoras
para la calidad de la investigación educativa, así como para la forma-
ción docente.
Por un lado, al primar la productividad investigadora para la “supervi-
vencia” profesional, el profesorado universitario se ve impulsado a
priorizar la investigación sobre la docencia. Se deja de lado la prepara-
ción de las clases, los espacios, la creación de materiales y, especial-
mente, la relación con el alumnado. Esto es, el profesorado asume como
propios los mandatos de los baremos de acreditación y termina dedi-
cando su tiempo de trabajo no a la mejora de su docencia, sino a la
búsqueda del mayor número de publicaciones posible.
Esto genera una situación paradójica: Los docentes que anteponen sus
clases a la investigación construyen un currículum con menos potencial
para competir por plazas docentes. Se provoca así el ingreso de profe-
sionales con menos competencias docentes y que, además, están espe-
cializados en investigación de corte positivista, un paradigma que no es
el propio del oficio educativo181. Esta situación nos permite comenzar
a entender las demandas y descanto del profesorado en formación.
En segundo lugar, lo que se prioriza de la actividad investigadora es su
productividad. Es más importante la cantidad de publicaciones en espa-
cios académicos (cuantas más, más puntos) que su sentido o interés so-
cial. La investigación no necesita estar vinculada con las necesidades
del profesorado ni de la comunidad educativa. El personal investigador
apuesta por ser estratega, eligiendo la hiperespecialización, de forma
que esto le permitirá aumentar su productividad y el número de publi-
caciones indexadas, independientemente de que su tema de especiali-
zación atienda o no a las necesidades de las prácticas del profesorado.
181No ahondamos en esta cuestión pues no es el foco de nuestro trabajo. Para profundizar en ello
puede consultarse: Díez (2009), Garcés (2013), Saura y Bolívar (2019).
‒ ‒
Además, las revistas que permitirán una mayor puntuación son de corte
positivista, en tanto que este es el paradigma hegemónico de investiga-
ción (Fernández y Postigo-Fuentes, 2020). Encontramos aquí otro es-
coyo en la formación docente, pues el profesorado universitario se es-
pecializa y construye un conocimiento que no es el propio del oficio
docente.
A diferencia de la investigación en ciencias naturales, que pretende la
búsqueda de un conocimiento universal, técnico y con capacidad de
predecir resultados, las ciencias de la educación buscan la comprensión
de lo singular, de lo único e imprevisible. El oficio docente no es un
oficio técnico de aplicación de metodologías que se pretenden válidas
en cualquier contexto y tiempo. Al contrario, la práctica docente se sos-
tiene en la deliberación sobre lo mejor para cada caso concreto y en
cada imprevisible momento. (Martín-Alonso y Guzmán, 2021, p. 2569)
3. DOS PARADIGMAS
‒ ‒
El marco epistemológico tiene que ver con los modos de acceso y cons-
trucción del conocimiento y, consecuentemente, con la naturaleza del
conocimiento que se considera válido y legítimo (Schon, 1995).
Situarse (consciente o inconscientemente) en un marco concreto supon-
drá esperar que la formación acerque a un conocimiento en particular y
no a otro (Pañagua et al., 2019). Y si, como sucede en la formación
docente, el profesorado se mueve desde una posición epistemológica
distinta a la del alumnado, este podrá sentir que el conocimiento al que
comienza a tener acceso no es válido, en tanto que no es el que esperaba
para su formación.
Ahondamos a continuación en cuáles son estas dos miradas y sus dife-
rencias.
‒ ‒
(Gitlin et al., 1999; MacDonald et al, 2001). Por ejemplo, en el estudio
realizado por Manso y Garrido (2021) el 69% de los estudiantes en-
cuestados decía estar de acuerdo con la afirmación “las prácticas resul-
tan mucho más útiles que la formación teórica”.
En esta línea, también destacan los estudios que el profesorado en for-
mación vive la necesidad de que tanto su formación como la investiga-
ción proporcionen recursos prácticos (Gitlin et al., 1999; Murillo y Pe-
rines, 2017). Aquí práctico significa que puedan aplicar los resultados
de la investigación a sus futuros contextos escolares. La investigación
debe proporcionar -dicen los estudiantes- propuestas concretas para la
práctica docente. Esto es, esperan que la formación les acerque a la in-
vestigación y que esta les permita el acceso a nuevas metodologías y
estrategias didácticas, ayudándoles a superar lo que consideran como el
modelo tradicional de enseñanza (que estaría basado en el libro de
texto, una enseñanza homogénea y una relación jerarquizada-de poder).
Es decir,
creen que los resultados de la investigación son útiles cuando les seña-
lan qué deben hacer concretamente en sus clases, proporcionando algo
similar a un manual o instructivo breve que señale ejemplos, esquemas,
resúmenes e información específica de cómo utilizar la estrategia o idea
investigada. (Murillo y Perines, 2017, pp. 90-91)
‒ ‒
identificado. Cualquier desviación respecto del desarrollo esperado será
causada por problemas de o en el sujeto, que no alcanza las etapas pre-
vistas. Se requerirá entonces de una intervención (psico)pedagógica que
corrija la falta del sujeto y le permita llegar a la etapa de desarrollo que
se espera de él.
Desde esta lógica se hace necesario conocer en detalle cuáles son las
etapas de desarrollo y sus características, así como los modelos (todos)
de intervención en cada posible caso. Esta es la “mochila de recursos”
de la que antes hablábamos, una demanda comprensible desde este
marco pues, en tanto que se conoce cuál debe ser el desarrollo de los
niños y niñas, es congruente esperar saber qué se debe hacer en cada
caso.
Sin embargo, desde esta lógica se anula la subjetividad y la singularidad
de cada experiencia humana. La “intervención educativa” y los niveles
de desempeño esperados en cada etapa educativa dejan en segundo
plano la difícil tarea de estudiar la complejidad de la experiencia vivida
y cómo el entorno influye en las necesidades y deseos de cada sujeto.
El oficio docente pasa de acompañar el proceso de subjetivación y
emancipación de los niños y niñas para reducirse a buscar la interven-
ción más efectiva y eficiente para que el alumnado alcance unos obje-
tivos cognitivo-conductuales homogéneos y establecidos con anteriori-
dad a su llegada al aula.
‒ ‒
cuanto menos, aventurado (Martín-Alonso, 2019; Rivera, 2000)182.
Queda así un espacio para que cada niño y niña tenga un desarrollo
propio, fuera de los márgenes de lo conocido.
Resulta, por tanto, comprometido pretender programar las etapas de su
desarrollo, lo que hacemos en el aula y, como se observa en algunas
programaciones, hasta los posibles imprevistos (¡!) que puedan apare-
cer y cómo abordarlos. Esto sería como pretender salir con amigos y
amigas y que, antes de salir de casa, supiéramos qué va a tomar cada
uno, de qué temas vamos a hablar, en qué lugares vamos a estar, en qué
sitios nos sentaremos, cómo va a fluir la conversación y cuándo termi-
nará el encuentro.
Evidentemente el ejemplo anterior es una ficción. No podemos saber
qué ocurrirá, ni mucho menos pretender controlar al otro, pues, en el
momento en que entramos en relación, queda un espacio que no es
nuestro, sino del otro. Eso lo convierte en un espacio de no-saber y de
imprevisibilidad. Como decía Machado, a través de su apócrifo Mai-
rena:
Cuando un hombre algo reflexivo [...] se mira por dentro, comprende la
absoluta imposibilidad de ser juzgado con mediano acierto por quienes
lo miran por fuera, que son todos los demás, y la imposibilidad en que
él se encuentra de decir cosas de provecho cuando pretende juzgar a su
vecino.
182Aunque el constructivismo ha sido y sigue siendo una tradición pedagógica importante, son di-
versos los autores que cuestionan sus propuestas (Biesta, 2017; Figueroa et al., 2017; Solé y Mo-
yano, 2017)
‒ ‒
Desde ese lugar es comprensible demandar "el conocimiento de todo lo
que hay que saber", pero esto, como hemos visto, no es posible. Si es-
peramos “saberlo todo”, tener una mochila de recursos con la que actuar
a cada momento, solo podremos frustrarnos, pues no alcanzaremos
nunca a obtener algo que no existe. Entonces, ¿cuál es el conocimiento
necesario en el oficio educativo? ¿Hacia qué saberes orientarse en la
formación docente? Son muchos los estudios que han abordado esta
cuestión y, aunque con sus diferencias, podríamos señalar a un lugar
común: el juicio pedagógico (Biesta, 2017).
4. JUICIO PEDAGÓGICO
‒ ‒
Si la escuela se centrase solo en los dos primeros ámbitos –cualificación
y socialización- estaría vinculada únicamente a cuestiones de natura-
leza cognitivo-conductual, pues se trataría de alcanzar el máximo desa-
rrollo posible en determinadas capacidades y habilidades (que podría-
mos llamar competencias) preestablecidas como las necesarias para for-
mar trabajadores productivos y una “buena” ciudadanía. Bajo esta
norma homogeneizadora tiene sentido establecer objetivos, pretender
saber qué necesita el alumnado a cada momento y establecer programas
de intervención (en forma de programas de refuerzo, adaptaciones cu-
rriculares, etc.) que corrijan a quienes se desvíen de la norma. En este
marco sí podría bastarnos para el oficio educativo con un conocimiento
técnico, acumulable y aplicable, pues sería posible (e incluso deseable)
establecer unos criterios generalizables a todos los niños y niñas.
Sin embargo, entre los propósitos de la educación se encuentra, en pri-
mer plano, el acompañamiento en el proceso de subjetivación, en el ha-
cerse un yo, único y singular. Es el proceso de búsqueda del deseo pro-
pio y de los modos de vivirlos dentro de las propias capacidades y ca-
rencias. El deber ético y profesional de dar espacio a la singularidad de
cada criatura crea una condición de imprevisibilidad y no-saber res-
pecto a lo que ocurrirá en el aula. Porque si cada criatura es única, es
una nueva persona que llega al mundo y a nuestro aula, no podemos
pretender saber quién es, qué necesita, ni cómo actuar. Cada momento
de clase es una experiencia nueva y, por tanto, no podemos tener un
conocimiento preestablecido sobre lo que hacer: el oficio educativo se
mueve en el terreno de la incertidumbre.
Entonces, ¿cómo orientar la práctica educativa? ¿Cómo hacer para que
la incertidumbre no se convierta en inseguridad o en un “todo vale”? El
docente debe decidir a cada momento qué hacer, poniendo en juego
todo lo que conoce. Pero, como decimos, esto no basta, pues la situa-
ción que se le presenta va a ser siempre novedosa, nunca podrá recurrir
a una aplicación escrupulosa de un recurso o conocimiento previo. Se-
rán necesarios la deliberación y el juicio pedagógico.
La pregunta no es tanto si los profesores deberían ser competentes para
hacer cosas –se podría decir que, por supuesto, deberían ser competen-
tes-, sino que las competencias, la capacidad para hacer cosas, no es en
‒ ‒
sí misma, jamás, suficiente. Por decirlo claramente: un docente que po-
sea todas las competencias que requiere un educador pero que sea inca-
paz de juzgar qué competencia hay que desplegar y cuándo, es un do-
cente inútil […] Emitir estos juicios no es algo que se haga en los do-
cumentos de políticas educativas, sino que radica en el corazón mismo
de lo que ocurre en las aulas y en las relaciones entre profesores y alum-
nos. (Biesta, 217, p. 152-153)
‒ ‒
ser docente?” debe modificarse por otra que nos permita pensar sobre
“¿cómo aprender a ser docente?”.
‒ ‒
exclusivamente en cuestiones de “desarrollo personal”183. Porque no
podemos pensarnos como sujetos independientes, somos en relación
con el otro y la cultura.
Precisamente de esto nos habla Biesta cuando identifica los tres campos
de trabajo del oficio educativo: cualificación, socialización y subjetiva-
ción. Estos tres ámbitos no se abordan por separado, como si fuesen
asignaturas independientes. Al contrario, cuando se aprende a hacer, se
está aprendiendo a ser, construyéndose unos modos de vivir y vivirse
en relación con los demás. Pensemos, por ejemplo, en el aprendizaje
del oficio de mecánico. Cuando un estudiante de Formación Profesional
aprende a arreglar un motor o usar una herramienta concreta no aprende
sólo el uso de este instrumento. También aprende cuál es su lugar dentro
del taller, cómo debe ser su relación con los demás trabajadores y tra-
bajadoras, cuál será la relación con los clientes, etc. Y, también, esto
guardará relación con su propia manera de vivirse con la mecánica y su
pasión –o no- por ese trabajo.
Algo similar podemos pensar para el oficio educativo. No podemos
pensar solo en aprender a usar “herramientas”, porque nos dejaríamos
la parte imprescindible vinculada al propio ser docente, necesaria para
eso que llamábamos juicio pedagógico. Tampoco podemos centrarnos
solo en el desarrollo personal, porque de nada serviría –y quizá no sería
posible- llegar a ser una persona lúcida sin un conocimiento profundo
de la didáctica y la pedagogía ¿De qué servirían una extraordinaria cla-
rividencia sin un conocimiento en el que apoyarse? ¿Resolver las situa-
ciones del aula con mucho ingenio y sin ningún conocimiento pedagó-
gico no sería trabajar desde ocurrencias? ¿Qué diferenciaría entonces
esa práctica de la que pudiera hacer cualquier otro adulto? Y, final-
mente, ¿es posible la sabiduría sin saber?
183 Vemos esto, por ejemplo, en una cierta mitificación de autores que trabajan desde el coaching y
la inteligencia emocional como única fuente y propósito de lo educativo.
‒ ‒
6. REFERENCIAS
‒ ‒
Martín-Alonso, D., & Guzmán, E. (2021). La universidad va por un lado y la
práctica por otro. Estudio de casos sobre las relaciones universidad-
escuela. En Buzón-García, O., Romero-García, C. y Verdú, A. (Eds.)
Innovaciones Metodológicas con TIC en Educación (p. 2560-2577).
Dykinson.
Murillo, J., & Perines, H. (2017). Cómo los docentes no universitarios perciben la
investigación educativa. Revista Complutense de Educación, 28(1), 81-
99. http://dx.doi.org/10.5209/rev_RCED.2017.v28.n1.48800
Pañagua, L., Martín-Alonso, D., & Blanco, N. (2019). Escritura reflexiva y
desarrollo de saberes experienciales. Tensiones y posibilidades. Revista
Interuniversitaria de Formación del Profesorado, 94(33), 11-28.
Pérez-Gómez, A. I. (2010). La naturaleza del conocimiento práctico y sus
implicaciones en la formación de docentes. Infancia y Aprendizaje,
33(2), 171-177. https://doi.org/10.1174/021037010791114652
Perines, H., & Murillo, J. (2017). Percepciones de los docentes en formación
sobre la investigación educativa. Estudios pedagógicos, 43(1), 251-268.
Real Decreto 1312/2007, de 5 de octubre, por el que se establece la acreditación
nacional para el acceso a los cuerpos docentes universitarios. Boletín
Oficial del Estado. Madrid, 6 de octubre de 2007, núm. 240.
Rivera, M. M. (2000). La atención a lo singular en la relación educativa.
Cuadernos de pedagogía, 293, 10-13.
San Fabian, J. L. (2020). El reconocimiento de la actividad investigadora
universitaria como mecanismo de regulación del mercado académico.
Márgenes, Revista de Educación de la Universidad de Málaga, 1(1), 23-
44. http://dx.doi.org/10.24310/mgnmar.v1i1.7208
Saura, G., & Bolívar, A. (2019). Sujeto académico neoliberal: Cuantificado,
digitalizado y bibliometrificado. REICE. Revista Iberoamericana sobre
Calidad, Eficacia y Cambio Educativo, 17(4), 9-26.
https://doi.org/10.15366/reice2019.17.4.001
Schon, D. A. (1995). Knowing in action: The new scholarship requires a new
epistemology. Change, 27, 27–34.
Sisto, V. (2020). Desbordadas/os: Rendición de cuentas e intensificación del
trabajo en la universidad neoliberal. El caso de chile. Archivos Analiticos
de Políticas Educativas, 28(7), 1-26.
Solé, J., & Moyano, S. (2017). La colonización Psi del discurso educativo. Foro
de Educación, 15(23), 101-120. http://dx.doi.org/10.14516/fde.551
Valle, J.M. y Manso, J. (2018). La voz del profesorado: Acceso a la profesión
docente e inserción en el puesto de trabajo. CGCDL.
Van Manen, M. (1998). El tacto en la enseñanza: El significado de la
sensibilidad pedagógica. Paidós.
‒ ‒
CAPÍTULO 106
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
formación y nos licenciamos, el número de docentes en la orla de gra-
duación era muy próximo al de discentes, algo que incluso ha llegado a
revertirse en años posteriores. Estamos ante una disciplina fundamen-
tal, pero que, sin embargo, no está sabiendo demostrar su valía y utili-
dad educativa, profesional o social.
Aunque ya se está lejos de los tiempos en los que cada facultad, cada
departamento, era una torre de marfil que se alzaba hacia las estrellas y
desde la que se miraba distante a la geografía de los mortales, lo cierto
es que revertir la desvinculación generada por esta práctica no va a ser
fácil ni inmediato. Atraer a gente, motivada y con talento, para que opte
por este conocimiento sobre otros, no se puede hacer apelando a la gran-
deza teórica del proyecto geográfico o su milenario legado. Antes al
contrario, es necesario ofrecer evidencias, hechos y generar oportuni-
dades compatibles con las decisiones que una persona joven puede to-
mar en el presente en marcha.
Muchas son las estrategias que se plantean por la comunidad geográ-
fica, en la que contamos por fortuna con un grupo muy dinámico y com-
prometido de Didáctica de la Geografía, integrado en la Asociación de
Geógrafos Españoles (AGE):
Se hace cuando se propone el trabajo con fuentes, para crear escenarios
para la adquisición de competencias próximos a la realidad (Cortés Du-
mont & Martínez Romera, 2021); cuando se plantean ideas para abordar
los contenidos disciplinarios a partir de eventos condicionantes del pre-
sente (Armas Quintá et al., 2018; Iraola Mendizábal, 2011; Mendizábal
& Martínez Romera, 2012, 2019; Rosake, 2020; Tonda Monllor & Se-
bastiá Alcaraz, 2018); cuando se acercan a las nuevas tecnologías edu-
cativas con objeto de evaluar los beneficios de su integración en los
procesos formativos (Buzo et al., 2018; de Miguel González, Lázaro y
Torres, et al., 2016; García Vidales & García Cuesta, 2017; Martínez
Romera, 2019; Martínez Romera & Antequera-Barroso, 2020; Vega
Valverde, 2017); cuando se pone en uso el propio proceso de ense-
ñanza-aprendizaje como objeto de investigación geográfica para intro-
ducir a los discentes en las disquisiciones de la investigación geográfica
(Capel, 2009; Martínez Romera et al., 2021; Martínez Romera & Agui-
lar Cuesta, 2021); o cuando se trabaja para establecer sinergias
‒ ‒
formativas entre evaluación y formación en competencias profesionales
(Cortés Dumont & Martínez Romera, 2020; García-Peñalvo et al.,
2020; Grande de Prado et al., 2021; Martínez Romera et al., 2016; Mar-
tínez Romera & Cebrián Robles, 2018).
Es a este último punto al que deseamos sumar la presente, ya que con-
sideramos presenta una doble relevancia. De un lado la indudable im-
portancia de fortalecer las competencias profesionales de los futuros
titulados, garantizando así que tengan instrumentos útiles que le puedan
ayudar a obtener un desempeño laboral efectivo; y de otro, fortalecer lo
que es una de las características más distintivas de la Geografía en el
contexto de las facultades de filosofía y letras, su fuerte vinculación con
metodologías objetivas de análisis. Algo que, además, nos parece espe-
cialmente pertinente en un contexto como el actual en el que el soslayo
de la razón por la emoción o de la objetividad por el interés están afec-
tando ya claramente otras disciplinas, otrora prestigiosas por su riguro-
sidad en el campo de las ciencias sociales, como lamentablemente nos
recuerdan los últimos escándalos del Centro de Investigaciones Socio-
lógicas y sus cuestionarios de opinión (Requena, 2020).
‒ ‒
implicar al resto de la clase mediante la aplicación de una rúbrica fede-
rada a aplicar sobre la exposición oral de sus pares.
3. METODOLOGÍA
‒ ‒
La solución técnica utilizada al efecto fue CoRubric, aplicación online
de uso gratuito desarrollada por los laboratorios del Grupo de Investi-
gación en Tecnologías Educativas de la Universidad de Málaga
(GTEA). Se trata de una rúbrica digital federada que permite la partici-
pación sincrónica y diacrónica de los estudiantes en la aplicación del
instrumento, así como permite diseñar y ponderar todos sus aspectos
sea desde una perspectiva individual o colaborativa.
En el caso que nos ocupa, evitar el impacto de tiempo sobre el proceso
formativo en contenidos geográficos, la rúbrica fue elaborada por el
docente y presentada en clase con antelación suficiente para que apren-
dieran a aplicarla. De modo que la aportación didáctica se acotara a la
funcionalidad buscada: poner a alumnado frente a una situación de
toma de decisiones sobre la calidad de un trabajo geográfico. El instru-
mento así diseñado se presenta en la Tabla 1.
‒ ‒
2. 1. Expresión oral
(Uso correcto de la voz: voz audible, dicción y entonación)
1 - Ininteligible. Voz inaudible, pronunciación deficiente y entonación monótona. Hace
desconectar rápidamente de la exposición
2 - Dificultad clara para entender lo que se dice. Defectos recurrentes en algunos, o
todos, los aspectos de uso de la voz señalados
3 - Se puede atender al mensaje, pero existen momentos de cierta recurrencia en los
que audición, dicción o entonación se muestran deficientes
4 - En todo momento se puede atender a la exposición oral sin dificultad. Volumen,
dicción y entonación refuerzan la atención sobre la exposición.
2. 2. Expresión gestual y disposición
(Uso adecuado de la gesticulación y presentación de una expresión corporal relajada)
1 - Se muestra rigidez de gestos y nervios incontrolados, lo desconecta a orador y pú-
blico
2 - Sigue presente la rigidez corporal pero con intentos evidentes de controlar el ner-
viosismo
3 - La mayor parte del tiempo gestos y disposición corporal son adecuados
4 - En todo momento se muestra relajado, se mueve libremente y con desenvoltura
en el espacio de exposiciones. Todo refuerza la conexión orador-público
2. 3. Manejo de recursos
(Sirven de apoyo al discurso y su mensaje, no se muestran superfluos o innecesarios)
1 - Utiliza los recursos como sistema de lectura, evitando proyectarse al público
2 - Se produce un uso recurrente de los recursos (papel, diapositivas, vídeos...) como
sistema de lectura asistida, haciendo ocasional el contacto visual con el público
3 - La mayor parte del tiempo los recursos se muestran con útiles para enfatizar la co-
municación, solo puntualmente se producen momentos de lectura o apoyo que resul-
tan demasiado prolongados o injustificados
4 - En todo momento los recursos utilizados son una aportación clara al discurso,
complementando, enriqueciendo o aclarando, la comunicación oral. Que en todo mo-
mento busca proyectarse y conectar con la audiencia.
‒ ‒
2 - Con escaso éxito o seguridad limitada, se intenta responder a las preguntas, orga-
nizar las intervenciones o gestionar imprevistos
3 - En general se responde con solvencia a las preguntas, se gestionan bien las inter-
venciones, así como los imprevistos. Se hace un uso desmedido del tiempo, o la su-
peración de lo anterior tensiona la marcha general de la intervención sin que se sepa
reconducir
4 - En todo momento se responde con seguridad y precisión a las preguntas, los tur-
nos de intervención son organizados y se controla su impacto en la marcha de la ex-
posición. Los imprevistos se resuelven con naturalidad y sin que supongan un agravio
insalvable para la exposición
‒ ‒
4. ANÁLISIS
‒ ‒
36, 100, 70, 65,
11 24 50 82,6 84,7 80,6 86,1 83,3 72,2 75,0 86,8 81,9 91,7
8 0 1 3
36, 100, 69, 69,
12 26 75 78,1 79,5 73,9 78,2 76,9 66,7 70,5 85,6 80,8 90,4
8 0 9 2
100, 72, 68,
13 24 75 80,9 0,0 81,3 81,0 76,4 80,6 86,1 76,4 85,8 81,9 89,6
0 2 1
100, 59, 56,
14 24 25 66,8 0,0 66,7 63,9 68,1 61,1 62,5 62,5 72,6 63,9 81,3
0 7 9
25, 100, 75, 71,
15 27 50 81,9 85,2 80,2 84,0 76,5 80,2 76,5 86,7 82,7 90,7
7 0 3 6
100, 64, 61,
16 24 50 73,5 0,0 79,2 74,5 73,6 76,4 73,6 68,1 67,7 79,2 56,3
0 6 1
100, 77, 75,
17 24 100 85,9 0,0 86,1 86,1 83,3 88,9 86,1 79,2 90,3 88,9 91,7
0 1 0
32, 100, 67, 64,
18 26 100 78,6 84,0 72,2 80,8 74,4 61,5 70,5 87,2 82,1 92,3
6 0 3 1
100, 65, 62,
19 24 75 73,5 0,0 76,4 74,1 79,2 73,6 69,4 68,1 74,0 66,7 81,3
0 3 5
26, 100, 78, 74,
20 25 100 85,0 85,3 85,3 85,3 84,0 86,7 78,7 87,7 85,3 90,0
4 0 0 7
100, 77, 72,
21 27 100 76,0 0,0 75,9 75,1 77,8 70,4 74,1 77,8 75,6 71,6 79,6
0 2 8
100, 55, 56,
22 25 35 64,7 0,0 66,0 62,7 61,3 65,3 61,3 54,7 70,7 65,3 76,0
0 3 0
100, 66, 58,
23 25 75 72,7 0,0 74,0 70,7 78,7 73,3 60,0 74,7 75,3 70,7 80,0
0 7 7
100, 67, 60,
24 26 75 73,0 0,0 75,6 77,4 78,2 75,6 78,2 71,8 67,9 74,4 61,5
0 3 3
100, 60, 57,
25 25 100 71,5 0,0 72,7 70,2 70,7 70,7 69,3 62,7 75,3 70,7 80,0
0 0 3
100, 67, 63,
26 24 50 76,1 0,0 75,7 75,0 77,8 70,8 76,4 68,1 82,6 77,8 87,5
0 4 9
100, 78, 76,
27 26 100 81,0 0,0 81,4 79,7 82,1 75,6 78,2 74,4 84,0 79,5 88,5
0 8 9
35, 100, 74, 71,
28 27 50 80,1 79,6 77,8 80,2 77,8 75,3 77,8 84,6 80,2 88,9
4 0 7 6
100, 64, 62,
29 24 50 73,5 0,0 80,6 74,5 77,8 73,6 72,2 66,7 66,3 72,2 60,4
0 6 5
Me 100, 69, 66,
706 71 76,9 0,0 79,2 76,3 79,0 75,6 73,8 71,8 78,7 76,3 81,0
dia 0 6 1
‒ ‒
En 17 de las 29 ocasiones, la calificación docente es inferior a la media
discente. El caso más acusado se encuentra en ID 14, con 41.8 puntos
porcentuales menos respecto de la media evaluadora discente, según
criterio docente. En general, discrepancias del orden de los 20 y 30 pun-
tos porcentuales no son extrañas, a tal punto que se pueden considerar
excepciones los casos de convergencia o próximos a la convergencia:
ID 1 (-0.8), ID 7 e ID 19 (+1.5).
El criterio muestra también discrepancias internas significativas, como
reflejan los valores medios, mínimos y máximos. Situación que se pre-
cisa para cada uno de los apartados: en el caso del primero, para una
calificación media de 79.2 puntos, el rango de valores asignados oscila
entre los 66 y los 100; para la segunda categoría, con un valor medio de
76.3, el rango oscila entre los 66.7 y los 100; en el caso del subapartado
2.1 esta horquilla se amplia hasta los 61.3 en su límite inferior, 61.1
alcanza en el apartado 2.2 y 60.0 en el 2.3; el apartado 3 es el primero
que cuenta con un límite superior distinto al máximo, para una media
de 69.6 puntos, el rango oscila entre 55.3 y 83.3; para 3.1 el mínimo
desciende a 54.2 y el máximo a 80.2 y en 3.2 se identifica el rango más
amplio con mínimo de 54.7 y máximo de 100; el cuarto y último apar-
tado presenta una media de 78.7, con mínimo de 63.1 y máximo de 100;
situación que se reduce ligeramente en 4.1, con mínimo de 63.9 para
hacerse máximo en el apartado para 4.2, cuyo mínimo desciende hasta
56.3.
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
tiene que ver con la percepción del instrumento como externo, en la
medida que no se ha participado en su construcción y puede ser enten-
dido como un falso ejercicio de autonomía crítica. Lo que hasta cierto
punto podría entenderse como cierto aquí, si bien la naturaleza ajena de
los discentes a cuestiones de innovación didáctica matizan este aspecto.
Otro elemento a tener en cuenta, y también señalado, es que la tradición
formativa clásica de las facultades la implicación en los procesos de
evaluación no se entiende como un instrumento formativo, a diferencia
de lo que constituye el eje de la presente. Una cuestión que, no obstante,
debe ser tenida en cuenta desde ópticas analíticas de contraste como la
sociometría de aula (Bezanilla, 2011; Martínez Romera, 2018; Men-
doza-Silva, 2021; Moreno, 1951). Las evidencias encontradas en este
sentido indican que cuando los discentes no tienen debidamente adqui-
rida sus competencias profesionales, en este caso vinculadas al pensa-
miento crítico autónomo objetivo e imparcial, las pasiones humanas
ocupan su lugar. Así, elementos invisibles al instrumento, pero no a las
dinámicas de clase, como la mayor o menor afinidad entre pares pueden
llevar a sesgar la calificación en su favor o en su contra.
Otro aspecto a destacar y que, entendemos, refuerza estas tesis, es que
la evaluación para miembros de un mismo grupo no son siempre homo-
géneas, lo que se desprendería normalmente de un trabajo grupal arti-
culado y madurado a lo largo del tiempo. A tal punto que para un mismo
trabajo existen discrepancias relativamente importantes en las puntua-
ciones de los diferentes miembros. Si bien es cierto que la capacidad
comunicativa de cada cual puede tener un efecto determinante en esto,
su reiteración a lo largo de la lista de clase invita a pensar en elementos
adicionales de reflexión.
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
Si bien también ha sido necesario señalar que el propio desarrollo de la
experiencia requeriría controlar aspectos adicionales, como las dinámi-
cas sociales mediante metodologías como la sociometría, incluso en su
ausencia el ejercicio autónomo al que se invita a todos y cada uno de
los discentes produce un efecto positivo sobre su formación.
A partir de las deficiencias encontradas en la presente, así como de los
indicios explicativos a los comportamientos divergentes docente-dis-
cente, esperamos desarrollar propuestas en el futuro que permitan se-
guir arrojando nueva luz y mejores estrategias formativas para las nue-
vas generaciones de intelectuales y profesionales de nuestro país. Tarea
a la que esperamos se siga sumando, como ya lo hacen, un número cre-
ciente de académicos de ramas y facultades no necesariamente vincu-
ladas con la educación.
7. REFERENCIAS
Armas Quintá, F., Rodríguez Lestegás, F., & Macía Arce, X. (2018). La olvidada
geografía rural en el currículo y manuales de la educación secundaria.
REIDICS, Revista de Investigación en Didáctica de las Ciencias
Sociales, 3, 4-19.
Bezanilla, J. M. (2011). Sociometría: Un método de investigación psicosocial.
PEI Editorial.
Blanco, A. (2008). Las rúbricas: Un instrumento útil para la evaluación de
competencias (E. L. Prieto, A. Blanco, P. Morales, & J. C. Torre, Eds.).
Octaedro-ICE de la Universidad de Barcelona.
Buzo, I., Guallart, C., Miguel González, R., Lázaro, M. L., & Velilla, J. (2018).
Atlas Digital Escolar: Una herramienta que revoluciona la forma de
aprender Geografía. Boletín de la Real Sociedad Geográfica, CLIII, 411-
416.
Canabal, C., & Margalef, L. (2017). La retroalimentación. La clave para una
evaluación orientada al aprendizaje. Profesorado. Revista de Curriculum
y Formación del Profesorado, 21(2), 149-170.
Cano, E. (2015). Las rúbricas como instrumento de evaluación de competencias
en educación superior: ¿uso o abuso? Profesorado, Revista De
Curriculum y Formación Del Profesorado, 19(2), 265-280.
Capel, H. (2009). La enseñanza digital, los campus virtuales y la geografía.
Ar@cne, 125. https://bit.ly/2v7Vx7O.
‒ ‒
Cebrián-de-la-Serna, M. (2014). ERubrics in cooperative assessment of learning
at university/las eRúbricas en la evaluación cooperativa del aprendizaje
en la universidad (Vol. 22, Número 43). https://goo.gl/XoEDZU
Cortés Dumont, S., & Martínez Romera, D. (2020). TIC, Geografía y Alumnado.
Experiencia para la mejora de la participación y evaluación en contextos
virtuales. En Tecnologías educativas y estrategias didácticas (Sánchez
Rivas, Enrique, Colomo Magaña, Ernesto, Ruiz Palmero, Julio&Sánchez
Rodríguez, José, pp. 257-265). Universidad de Málaga.
Cortés Dumont, S., & Martínez Romera, D. (2021). Explotación Geográfica del
Catastro de Ensenada en Educación Superior. El Ejemplo de Aguilar de
la Frontera. En Luces en el camino: Filosofía y ciencias sociales en
tiempos de desconcierto (Bermúdez Vázquez, Manuel, pp. 1295-1309).
Dykinson.
de Miguel González, R., Lázaro y Torres, M. L., Velilla Gil, J., Buzo Sánchez, I.,
& Guallart Moreno, C. (2016). Atlas Digital Escolar: Aprender
Geografía con ArcGIS Online. En La investigación e innovación en la
enseñanza de la Geografía (Sebastiá Alcaráz, Rafael y Tonda Monllor,
Emilia María). Universidad de Alicante.
Foung, D., & Chen, J. (2019). A learning analytics approach to the evaluation of
an online learning package in a Hong Kong University. Electron. J. E
Learn, 17, 11-24.
Fraile, J. P., Panadero, R., & E. (2017). ¿Cómo emplear las rúbricas para
implementar una verdadera evaluación formativa? Revista Complutense
de Educación, 28(4), 1321-1334.
García Vidales, A., & García Cuesta, J. L. (2017). Aplicaciones Didácticas de las
TIC ́ s a la enseñanza de la Geografía en Secundaria: El estudio de la
población española a través del paisaje. ReiDoCrea: Revista electrónica
de investigación y docencia creativa, 6, 37-49.
García-Peñalvo, F. J., Corell, A., Abella-García, V., & Grande, M. (2020). La
evaluación online en la educación superior en tiempos de la COVID-19.
Education in the Knowledge Society, 21, 12.
Grande de Prado, M., García Peñalvo, F. J., Corell, A., & Abella-García, V.
(2021). Evaluación en Educación Superior durante la pandemia de la
COVID-19. Campus Virtuales, 1(10), 49-58.
Iraola Mendizábal, I. (2011). El paisaje rural y su implicación ambiental:
Reflexión en torno a las fases de evaluación en el aula y en el Prácticum
de la Escuela de Magisterio (J. de L. T. En Delgado Peña, M. L., & M.
J. Marrón Gaite, Eds.). AGE.
‒ ‒
Marín-García, J. A., & Santacreu-Mascarell, C. (2015). ¿Qué sabemos sobre el
uso de rúbricas en la evaluación de asignaturas universitarias? Intangible
Capital, 11(1), 118-145.
Martínez Romera, D. (2017). La evaluación de diseños de intervención para el
Prácticum como instrumento de formación e investigación en el Máster
de Profesorado de Ciencias Sociales. Revista Practicum, 2.
https://doi.org/10.24310/RevPracticumrep.v2i2.9857
Martínez Romera, D. (2018). Sociometría, una metodología al servicio de la
investigación en el aula de Ciencias Sociales. En Propuestas
interdisciplinares de innovación docente e intervención educativa
(Aguilar Cuesta, A. I. & Cruz Chust, A. M., pp. 120-128). VIU.
Martínez Romera, D. (2019). Recursos para innovar en geografía e historia: Un
camino hacia las TAC. En Tecnologías para la formación de
profesionales en educación (Alías Garcia, Antonio, Cebrián Robles,
Daniel, Ruiz Rey, Francisco José y Caraballo Vidal, Israel). Dykinson.
https://doi.org/10.2307/j.ctv105bcxd.18
Martínez Romera, D., & Aguilar Cuesta, Á. (2021). Campus virtual y prácticum:
Una relación productiva para el Máster de Profesorado de Ciencias
Sociales. En Procesos de enseñanza-aprendizaje innovadores mediados
por tecnología (pp. 213-222). Octaedro.
Martínez Romera, D., & Antequera-Barroso, J. (2020). Posibilidades de los
juegos de construcción urbana para el aprendizaje de nociones
geográfico-matemáticas. En Claves para la innovación pedagógica ante
los nuevos retos: Respuestas en la vanguardia de la práctica educativa
(Cobos-Sanchiz, D., López-Meneses, E., Molina-García, L., Jaén-
Martínez, A. y Martín-Padilla, A. H., pp. 2119-2127). Octaedro.
Martínez Romera, D., & Cebrián Robles, D. (2018). Análisis videográfico para la
evaluación de los aprendizajes en las prácticas externas de la formación
inicial de docentes de secundaria. Educar, 55, 1.
https://doi.org/10.5565/rev/educar.873
Martínez Romera, D., Cebrián Robles, D., & Cebrián-de-la-Serna, M. (2016).
Evaluación de competencias docentes con e-Rúbricas en Máster de
Profesorado. Journal for Educators, Teachers and Trainers, 7, 120-141.
Martínez Romera, D., Cebrián-de-la-Serna, M., & Priego de Montiano, G. (2021).
The Influence of Students’ Gender on the Use of Virtual Campuses. A
Case Study. Pixel-Bit, Revista de Medios y Educación, 60, 169-210.
https://doi.org/10.12795/pixelbit.78445
Mendizábal, I., & Martínez Romera, D. (2012, octubre 15). La educación en
paisaje rural como diálogo entre los nuevos modos de vida y la herencia
material e inmaterial del pasado. Actas. I Congreso Internacional de
Educación Patrimonial, Madrid.
‒ ‒
Mendizábal, I., & Martínez Romera, D. (2019). La agricultura de montaña como
contenido curricular. En La reconfiguración del medio rural en la
sociedad de la información: Nuevos desafíos en la educación geográfica
(Xosé Carlos Macía Arce, Francisco Xosé Armas Quintá, Francisco
Rodríguez Lestegás, pp. 745-756). AGE.
Mendoza-Silva, A. (2021). Innovation capability: A sociometric approach. Social
Networks, 64, 72-82. https://doi.org/10.1016/j.socnet.2020.08.004
Moreno, J. L. (1951). Sociometry, Experimental Method and the Science of
Society: An approach to a new political orientation.
Requena, J. G. (2020). Un dilema totalitario. Análisis de la pregunta 6 del
Barómetro Especial de abril de 2020 del Centro de Investigaciones
Sociológicas. Derecom, 29, 205-210.
Rosake, P. (2020). Turismo y COVID-19: Aportes de la geografía para un
abordaje complejo. Cardinalis, 8(15), 319-334.
Tonda Monllor, E., & Sebastiá Alcaraz, R. (2018). La geografía escolar que se
investiga académicamente. En V. P. M. Sales, D., & X. Souto González
(Eds.), 2018) Repensamos la geografía e historia para la educación
democrática (pp. 11-21). Servicio de Publicaciones.
Vega Valverde, M. (2017). Aplicaciones didácticas de la Cronogeografía. A
propósito de nuestra relación espacio—Tiempo. En Repositorio Abierto
de la Universidad de Cantabria. http://hdl.handle.net/10902/
Vidal Ledo, M. J., Barciela González-Longoria, M., & Armenteros Vera, I.
(2021). Impacto de la COVID-19 en la Educación Superior. Educación
Médica Superior, 35.
http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0864-
21412021000100023&nrm=iso
Zheng, F., Khan, N. A., & Hussain, S. (2020). The COVID 19 pandemic and
digital higher education: Exploring the impact of proactive personality
on social capital through internet self-efficacy and online interaction
quality. Children and Youth Services Review, 119, 105694.
https://doi.org/10.1016/j.childyouth.2020.105694
‒ ‒
CAPÍTULO 107
AINHOA BERCIANO
Universidad del País Vasco/Euskal Herriko Unibertsitatea
CLARA JIMÉNEZ-GESTAL
Universidad de la Rioja
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
de establecer relaciones posicionales entre objetos, tanto desde la pers-
pectiva de uno mismo como desde otro punto de vista, de dar indica-
ciones de cómo llegar de un sitio a otro o de hacer uso de mapas y
escalas correctamente.
En las últimas décadas, diversos estudios han abordado investigaciones
sobre la orientación espacial desde distintos enfoques. Algunos trabajos
pioneros, en la década de los ochenta, plantean interrogantes acerca de
la capacidad espacial y su relación con la resolución de tareas cotidia-
nas en la enseñanza de la geometría (p. ej., Bishop, 1983). Posterior-
mente se han llevado a cabo numerosas investigaciones atendiendo a
las distintas etapas educativas que a continuación pasamos a mencionar
muy someramente.
Así, para la etapa educativa de educación infantil encontramos investi-
gaciones que plantean el modo de trabajarla de modo significativo en
edades tempranas o las repercusiones docentes en esta etapa (Berciano,
Jiménez-Gestal y Salgado Somoza, 2016; Martínez López y Sotos Se-
rrano, 2020; Ruíz-Higueras, García, y Lendínez, 2013; Jiménez-Gestal,
Berciano y Salgado, 2019); entre otros.
Para la etapa de educación primaria y secundaria los estudios son muy
variados; por ejemplo, hay trabajos que analizan el tipo de tareas vin-
culadas con la orientación espacial y la visualización que aparecen en
los libros de texto (Gonzato, Godino, y Neto, 2011; Gonzato, Fernández
Blanco y Díaz Godino, 2011), los distintos contextos de aprendizaje y
su relación con la capacidad de visualización espacial (Gutiérrez,
1996), el tipo de estrategias que usan estudiantes de secundaria en ta-
reas de rotación espacial (Gorgorío, 1998), las concepciones de estu-
diantes en contextos de representación del espacio (Parzysz, 1991), etc.
Para la etapa universitaria, trabajos como el de López Fernández y Mar-
tínez Medina (2015) ponen de manifiesto la importancia de la orienta-
ción en otras áreas de conocimiento, como la didáctica de la geografía.
Finalmente, encontramos investigaciones que abordan la necesidad de
medir la capacidad de orientación espacial por medio de tests psicomé-
tricos (p.e., Kozhevnikov y Hegarty, 2001).
‒ ‒
Respecto al tema que nos atañe, las tareas asociadas a la orientación
espacial y, más en concreto, en la realización de un mapa o plano, Ca-
llejo y Llopis (1992) proponen actividades interdisciplinares que faci-
liten la comprensión del espacio por medio de tareas que trabajen la
orientación espacial, entre ellas los planos y mapas, planteando un nexo
de unión entre las matemáticas y las ciencias sociales.
Por otro lado, Berthelot y Salin (1992) afirman que para la realización
de un plano o mapa es necesario: determinar un sistema de referencia
pertinente, articular los diferentes planos obtenidos por la representa-
ción de los espacios locales situados alrededor de los puntos de referen-
cia y representar los desplazamientos y su coordinación en el espacio
considerado.
En los últimos años se han realizado varias investigaciones sobre la im-
plicación didáctica de tareas de representación de mapas o planos en
distintas etapas educativas.
Para el caso de la educación infantil, Berciano, Jiménez-Gestal y Sal-
gado (2017) centran su interés en el tipo de símbolos que usan niños y
niñas de 5 años de edad cuando se enfrentan a tareas de representación
de una trayectoria en un contexto cotidiano, destacando que en todos
los casos analizados, las niñas y los niños tienen la necesidad de plas-
mar los cambios producidos en el eje vertical en el espacio real. Para
ello, utilizan distintos símbolos dependiendo del desarrollo y habilidad
motriz de cada niño o niña.
En Secundaria, Torres y Climent (2010) realizan un estudio con alum-
nado de 1º y 4º de la E.S.O. sobre representación plana de entornos y
uso de símbolo en mapas, concluyendo que hay grandes diferencias en-
tre ambos grupos y que algunas de las dificultades se deben en gran
medida a las características del entorno a representar.
Para el caso de la etapa universitaria, el trabajo de Berciano y Jiménez-
Gestal (2021) plantea el valor de la comunicación entre iguales para la
enseñanza-aprendizaje de conceptos matemáticos asociados a una tarea
de representación de un plano de un contexto conocido, a partir de un
análisis centrado en alumnado del Grado de Educación Infantil.
‒ ‒
Sin embargo, son escasos los trabajos que abordan la temática en esta
etapa educativa, por lo que en este trabajo nos planteamos analizar qué
dificultades tienen estudiantes del Grado Educación Infantil en la reali-
zación de este tipo de tareas.
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
3.2. PARTICIPANTES
3.3. TAREA
‒ ‒
repisa de la ventana, instrumentos de dibujo en la repisa de la pizarra y
botellas de diferentes formas y capacidades encima de un armario).
Los materiales de dibujo que se han proporcionado han sido hojas DIN-
A3, reglas, escuadras, cartabones, lapicero, goma de borrar, sacapuntas
y pinturas de colores. Igualmente, para realizar las medidas, el alum-
nado ha dispuesto de cintas métricas.
Para poder realizar de modo individual un plano del aula, el alumnado
ha tenido alrededor de una hora y ha recibido las siguientes instruccio-
nes:
‒ En la hoja DIN-A3 que se os ha proporcionado debéis dibujar
un plano del aula, en la que localicéis todos los elementos que
sean significativos para identificarla.
‒ Podéis moveros por la clase y utilizar los instrumentos de me-
dida para obtener los datos que necesitéis.
Indicadores Descriptores
Estima las proporciones de los principales elementos arquitectónicos del aula
Proporción
Utiliza una escala para representar las medidas
Mantiene proporciones con las dimensiones del aula
Proporción mobiliario
Los objetos mantienen las proporciones entre sí
Formas Se identifican las formas de los objetos que representan
Representa los objetos mediante una única proyección
Perspectiva
Mezcla dos proyecciones
Identifica los diferentes elementos
Orientación
Respeta la ubicación de los objetos
Identifica todos los elementos relevantes para realizar el plano
Pertinencia Faltan elementos relevantes (puertas, ventanas, …)
Identifica elementos irrelevantes
‒ ‒
4. RESULTADOS
4.1. PROPORCIÓN
‒ ‒
4.2. PROPORCIÓN MOBILIARIO
‒ ‒
4.3. FORMAS
‒ ‒
4.4. PERSPECTIVA
Del total de planos analizados, sólo 3 de ellos (el 18%) muestran errores
de perspectiva. Es un error que se da en menor medida que los anterio-
res, pero cuya aparición llama la atención en los casos detectados. En
los 3 casos el error se debe a haber mezclado tipos de perspectivas en
la representación plana de los objetos. Se puede apreciar tanto mezcla
de proyección vertical con proyección horizontal como incluso proyec-
ción caballera en otro caso.
Así, en la figura 4, podemos ver cómo se ha mezclado la proyección
vertical con la proyección horizontal de los objetos que componen el
aula, usándolas a conveniencia para que el reconocimiento de dichos
objetos sea mucho más claro. Todos los objetos han sido proyectados
sobre el plano horizontal, salvo aquellos cuya proyección podría dar
lugar a dificultades para un reconocimiento claro del mismo: el para-
güero (en la parte baja del plano) y los objetos que hay en la repisa de
la ventana (parte derecha del plano) han sido proyectados en el plano
vertical.
FIGURA 4. Plano con mezcla de perspectivas
‒ ‒
4.5. ORIENTACIÓN
Del total de planos analizados, sólo 2 de ellos (el 10%) muestran errores
de orientación. Este es uno de los dos indicadores con menor índice de
error entre los evaluados.
Aún así, ambos planos muestran errores de orientación que se deben a
la incorrecta ubicación relativa de objetos o incluso a la inversión de
las dimensiones del aula. Este último caso es el que se puede apreciar
claramente en el plano que mostramos a continuación (ver Figura 5.
FIGURA 5. Plano con errores de orientación (en el que se han invertido las dimensiones
del aula)
‒ ‒
4.6. PERTINENCIA
‒ ‒
4.7. COHERENCIA EN CONJUNTO POR PLANO
5. DISCUSIÓN
‒ ‒
Igualmente, a pesar del tamaño de la muestra, hemos visto cómo hay
una gran variación en el tipo de plano realizado y en el tipo de error
cometido en cada uno de los casos, dando lugar a representaciones pla-
nas muy diversas con un grado de corrección muy distinto; este hecho,
ya fue contrastado por Torres y Climent (2010) con alumnado de se-
cundaria y pone de manifiesto la necesidad de aumentar el tamaño
muestral para realizar una investigación más exhaustiva sobre el tipo de
representación plana que realiza el alumnado del Grado de Educación
Infantil en un contexto cotidiano.
A pesar de que todos los indicadores son importantes y deben tenerse
en cuenta para el análisis de un plano (acorde con Berciano y Jiménez-
Gestal, 2021), sí queremos hacer una mención especial a los que están
estrechamente relacionados con los conocimientos matemáticos nece-
sarios que Berthelot y Salin (1992) plantean para la realización correcta
de un plano. Estos son los que involucran la capacidad de: 1) establecer
correctamente las medidas del aula, para posteriormente, por medio de
escalas, adecuar la representación plana a las características del soporte
físico del que se dispone, un DIN-A 3 (indicador: proporción); 2) medir
correctamente los objetos que componen el interior del aula para poder
realizar adecuadamente las representaciones correspondientes (indica-
dor: proporción del mobiliario); 3) hacer un uso correcto de los sistemas
de referencia tanto relativos como absolutos para la correcta ubicación
de los objetos en el espacio, permitiendo así su representación plana
(indicador: orientación).
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
Infantil, vea las dificultades que entraña la realización de la misma y
pueda plantear, en una segunda fase, un análisis de ejemplos de aula
para realizarla con niños y niñas de edades tempranas, favoreciendo así
un aprendizaje significativo tanto desde la perspectiva disciplinar como
la docente (Berciano, Jiménez-Gestal y Salgado Somoza, 2016; Martí-
nez López y Sotos Serrano, 2020; Ruíz-Higueras, García, y Lendínez,
2013; Jiménez-Gestal, Berciano y Salgado, 2019).
Finalmente, queremos mencionar que esta actividad y la investigación
llevada a cabo ponen de manifiesto el gran desafío en la formación ini-
cial del profesorado de Educación Infantil; que debe habilitar a este
alumnado para poder afrontar con garantías su futura labor profesional,
capacitándole tanto a nivel matemático como docente (EACEA, 2011),
y, por tanto, implica generar situaciones de aprendizaje significativas
que partan de la realidad académica de este alumnado y planteen retos
valiosos para su formación. Este hecho requiere de una mayor investi-
gación en el ámbito de la didáctica de la matemática con este colectivo
y plantea grandes líneas de investigación para el futuro.
7. REFERENCIAS
‒ ‒
Callejo, M.L. y Llopis, C. (1992). Planos y mapas. Actividades interdisciplinares
para representar el espacio. Narcea.
Clements, D.H. y Sarama, J. (2009). Learning and Teaching Early Math. The
Learning Trajectories Approach. Taylor & Francis.
EACEA (2011). Mathematics education in Europe: common challenges and
national policies. Eacea. Education audiovisual, eacea p9 eurydice and
culture executive agency.
http://eacea.ec.europa.eu/education/eurydice/documents/thematic
reports/132en.pdf.
Diezmann, C. M. y Lowrie, T. (2009). Primary students’ spatial visualization and
spatial orientation: an evidence base for instruction. In: proceedings of
the 33rd conference of the international group for the psychology of
mathematics education, 19-24 july 2009, Aristotle University of
Thessaloniki.
Gonzato, M., Godino, J. D. y Neto, T. (2011). Evaluación de conocimientos
didáctico-matemáticos sobre la visualización de objetos
tridimensionales. Educación Matemática, 23, 5-37.
Gonzato, M., Fernández Blanco, T. y Díaz Godino, J. (2011). Tareas para el
desarrollo de habilidades de visualización y orientación espacial.
Números, Revista de Didáctica de las Matemáticas, 77, 99-117.
Gorgorió, N. (1998). Exploring the functionality of visual and non-visual
strategies in solving rotation problems. Educational Studies in
Mathematics, 35, 207-231
Gutiérrez, A. (1996). The aspect of polyhedra as a factor influencing the
studients’ability for rotating them. En Barturo, A.R. (ed.), New
directions in geometry education (pp.23-32). Centre for Math and
Science Education.
Jiménez-Gestal, C., Berciano, A., Salgado, M. (2019). Cómo trabajar la
orientación espacial de modo significativo en Educación Infantil:
implicaciones didácticas. Revista de Educación Matemática, 31(2),61-
74. DOI: 10.24844/EM3102.03
Kozhevnikov, M., y Hegarty, M. (2001). A dissociation between object
manipulation spatial ability and spatial orientation ability. Memory &
Cognition, 29(5), 745–756. https://doi.org/10.3758/BF03200477
López Fernández, J.A., y Martínez Medina, R. (2015). La representación espacial
en la formación inicial del profesorado de educación primaria, En J. De
la Riva, P. Ibarra, R. Montorio y M. Rodrigues. Análisis espacial y
representación geográfica: innovación y aplicación (pp. 1435-1443),
Universidad de Zaragoza-AGE.
‒ ‒
Martínez López, R., Sotos Serrano, M. (2020). Aprendizaje de conceptos
geométricos y de orientación espacial, a través del juego, en Educación
Infantil. Edma 0-6: Educación Matemática en la Infancia, 9(2), 21-36.
Parzysz, B. (1991). Representation of space and students’ conceptions at high
school level. Educational studies in mathematics, 22, 575-593.
Rico, L. y Lupiañez, J.L. (2008). Competencias matemáticas desde una
perspectiva curricular. Alianza.
Ruiz, M. L. (2006), la actividad lógica en la escuela infantil. En chamorro, m.c.
(coord.), Didáctica de las matemáticas. Pearson.
Ruiz-Higueras, L., García, F. J. y Lendínez, E. M. (2013). La actividad de
modelización en el ámbito de las relaciones espaciales en la Educación
Infantil. Edma 0-6: Educación Matemática en la Infancia, 2(1), 95-118.
Torres, J.M. y Climent, N. (2010). Conocimiento sobre orientación espacial en
estudiantes de e.s.o. En M. Moreno, A. Estrada, J. Carrillo y T.A. Sierra
(eds.) Investigación en educación matemática XIV (pp. 581-596).
SEIEM.
‒ ‒
CAPÍTULO 108
SANTIAGO GUIJARRO-ROMERO
Departamento de Educación Física y Deportiva
Universidad de Granada, España
CAROLINA CASADO-ROBLES
Departamento de Educación Física y Deportiva
Universidad de Granada, España
DANIEL MAYORGA-VEGA
Departamento de Didáctica de la Expresión Musical, Plástica y Corporal
Universidad de Jaén, Jaén, España
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
cardiorrespiratoria durante la etapa escolar están positiva y fuertemente
asociados con una mejor salud y calidad de vida (Bermejo-Cantarero
et al., 2021; Eddolls et al., 2018), así como con un mejor rendimiento
académico y cognitivo (Ruíz-Ariza et al., 2017). Lamentablemente, du-
rante las últimas décadas los niveles de capacidad cardiorrespiratoria
de los escolares han ido disminuyendo (Raghuveer et al., 2020). En la
actualidad, el 33% de los varones y el 46% de las mujeres a nivel mun-
dial presentan niveles no saludables de capacidad cardiorrespiratoria
(Tomkinson et al., 2017). Por tanto, promover en los escolares un nivel
saludable de capacidad cardiorrespiratoria es una cuestión prioritaria de
salud pública que debe ser afrontada desde diferentes contextos como
el deportivo y el escolar, entre otros (Tomkinson et al., 2017; World
Health Organization, 2018).
La Educación Física, por su carácter obligatorio en el currículum edu-
cativo y debido a que es desarrollada por profesionales cualificados en
el campo de la actividad física y la salud (Viciana et al., 2015), es con-
siderada un contexto clave y fundamental para la promoción de un nivel
saludable de capacidad cardiorrespiratoria en los escolares (Association
for Physical Education, 2020). La Educación Física se define como el
aprendizaje planificado y progresivo relacionado con la conducta mo-
tora que tiene lugar en el horario programado del plan de estudios es-
colar y que se imparte a todo el alumnado por un profesorado especia-
lista (Association for Physical Education, 2020). El plan de estudios de
la Educación Física implica tanto moverse para aprender (por ejemplo,
aprender a través del movimiento una variedad de habilidades y cono-
cimientos más allá de la propia actividad física, como por ejemplo,
cooperar con los compañeros) como aprender a moverse (es decir, vol-
verse más competente físicamente; Association for Physical Education,
2020). El contexto para el aprendizaje es la práctica de actividad física,
donde los escolares experimentan una amplia gama de actividades
como juegos motores, deportes, actividad física en el entorno natural y
expresión corporal (Association for Physical Education, 2020). En este
sentido, para lograr el objetivo de adquirir y mantener un nivel saluda-
ble de capacidad cardiorrespiratoria, la Asociación de Educación Física
recomienda que los escolares estén involucrados al menos el 50% del
‒ ‒
tiempo de la clase de Educación Física en actividad física con intensi-
dad moderada-vigorosa (Association for Physical Education, 2020).
Desafortunadamente, esta recomendación casi nunca se cumple (Hollis
et al., 2017; (Hollis et al., 2016), excepto cuando se diseñan y llevan a
cabo intervenciones específicas en el contexto de la Educación Física
para cumplir dicha recomendación (Lonsdale et al., 2013).
La Organización Mundial de la Salud recomienda que los escolares
realicen al menos de media al día 60 minutos de actividad física de in-
tensidad moderada-vigorosa (World Health Organization, 2020). Sin
embargo, estudios previos muestran que los niveles de actividad física
moderada-vigorosa de los escolares disminuyen año tras año conforme
se avanza desde la niñez hacia la adolescencia, e incluso durante el
avance de la propia adolescencia (Farooq et al., 2020). Este hecho ha
dado lugar a que más del 80% de los escolares a nivel mundial no cum-
pla con las recomendaciones diarias de actividad física (Guthold et al.,
2020). Por ello, planificar las sesiones de Educación Física con el obje-
tivo de cumplir la recomendación de involucrar al alumnado al menos
el 50% del tiempo de la clase en actividad física moderada-vigorosa es
muy importante (Frömel et al., 2021).
Además, estudios previos demuestran que la asignatura de Educación
Física es un medio efectivo para facilitar a los escolares el cumpli-
miento de las recomendaciones diarias de actividad física (Chen et al.,
2014; Mayorga-Vega et al., 2018; Sanz-Martín et al., 2021; Viciana et
al., 2019). Por ejemplo, Mayorga-Vega et al. (2018) observaron que los
días en los que los escolares tenían Educación Física, éstos acumulaban
mayores niveles de actividad física moderada-vigorosa en comparación
con los días sin Educación Física. Igualmente, estos autores observaron
que el porcentaje de escolares que cumplía con las recomendaciones
diarias de actividad física moderada-vigorosa era también superior en
los días con Educación Física en comparación con los días sin Educa-
ción Física. Por otro lado, la literatura previa muestra que también es
posible mejorar los niveles de capacidad cardiorrespiratoria de los es-
colares mediante la realización de una unidad didáctica de acondicio-
namiento físico a corto plazo (Guijarro-Romero et al., 2020; Mayorga-
Vega et al., 2016). Por ejemplo, Guijarro-Romero et al. (2020) y
‒ ‒
Mayorga-Vega et al. (2016) comprobaron que la aplicación de una
unidad didáctica de acondicionamiento físico dos veces por semana
durante nueve semanas consistente en sesiones basadas en métodos
tradicionales de acondicionamiento físico (por ejemplo, entrenamiento
en circuito, carrera continua, o farlek) mejoraba los niveles de
capacidad cardiorrespiratoria de los escolares.
Sin embargo, a la hora de llevar a cabo la planificación de la Educación
Física para lograr una adquisición y mantenimiento eficaz de unos ni-
veles saludables de capacidad cardiorrespiratoria en los escolares, el
profesorado tiene que hacer frente a numerosas limitaciones (European
Commission/EACEA/Eurydice, 2013; Guijarro-Romero et al., 2019;
Hardman et al., 2014; Viciana et al., 2014). En primer lugar, se encuen-
tra el reducido tiempo curricular asignado a la asignatura de Educación
Física (Guijarro-Romero et al., 2019; Hardman et al., 2014). Tal y
como reveló el informe de la UNESCO (Hardman et al., 2014), de me-
dia a nivel mundial en las escuelas se dedican 99 minutos a la asignatura
de Educación Física, es decir, el equivalente a dos sesiones de 50 mi-
nutos aproximadamente. En el caso de España el tiempo es algo mayor
(119 minutos), aunque sigue siendo escaso. La segunda limitación, muy
relacionada con la anterior, tiene que ver con el hecho de que el profe-
sorado de Educación Física tiene que desarrollar un elevado volumen
de objetivos y contenidos curriculares durante el curso académico
(Guijarro-Romero et al., 2019; Viciana et al., 2014). Debido a ello, tien-
den a reducir la duración asignada a cada unidad didáctica en la progra-
mación, dando lugar a que su efectividad respecto a la consecución del
objetivo de desarrollar y mantener un nivel saludable de capacidad car-
diorrespiratoria en los escolares se vea también reducida (Robles et al.,
2010; Viciana et al., 2016). De acuerdo con el principio de continuidad
en el entrenamiento de Verkhoshansky y Verkhoshansky (2011), las
unidades didácticas de acondicionamiento físico cuyo objetivo sea me-
jorar la capacidad cardiorrespiratoria de los escolares deben ser aplica-
das durante un tiempo suficiente para que se produzca el estímulo ne-
cesario que dé lugar a la mejora deseada (es decir, de 8 a 12 semanas
aproximadamente). Relacionado con lo mencionado anteriormente so-
bre la duración de las unidades didácticas, debe destacarse que el
‒ ‒
profesorado de Educación Física tiende a incluir normalmente una gran
variedad de actividades durante un periodo corto de tiempo. Como con-
secuencia, se dificulta directamente la consecución de un estímulo su-
ficiente y continuo que permita lograr una mejora de la capacidad car-
diorrespiratoria de los escolares. En tercer lugar, se encuentran las con-
tinuas y constantes interrupciones de las clases de Educación Física de-
bido a diferentes contingencias educativas (por ejemplo, vacaciones,
excursiones, o inclemencias meteorológicas) (Guijarro-Romero et al.,
2019; Viciana et al., 2014). La cuarta limitación es la coincidencia ho-
raria del profesorado y, por tanto, la necesidad de utilizar las mismas
instalaciones e incluso los mismos materiales (Guijarro-Romero et al.,
2019). En quinto lugar, señalar que en la mayoría de las ocasiones la
distribución de las clases de Educación Física no está basada en crite-
rios relacionados con la actividad física (Guijarro-Romero et al., 2019;
Viciana et al., 2014). Por ejemplo, cuando las clases de Educación Fí-
sica se imparten en días consecutivos, dando lugar a que no pase tiempo
suficiente para que los escolares se recuperen de la clase previa, así
como a que exista un tiempo elevado sin realizar actividad física desde
que finaliza la segunda sesión de la semana hasta que tiene lugar la
primera sesión de la siguiente semana (Guijarro-Romero et al., 2019).
O bien cuando la franja horaria destinada a la clase de Educación Física
es la primera o última hora de la mañana en la que puede hacer mucho
frío o los escolares pueden no haber finalizado la digestión, o en la que
puede hacer mucho calor dependiendo de la zona geográfica en la que
esté ubicado el centro escolar, respectivamente (Guijarro-Romero et
al., 2019). Sumado a todas las limitaciones mencionadas anteriormente,
otra limitación de la planificación de la Educación Física es el hecho de
que después de un periodo de desentrenamiento los niveles de capaci-
dad cardiorrespiratoria disminuyen (Carrel et al., 2007; Guijarro-
Romero et al., 2021; Malina et al., 2004). Por ejemplo, en el contexto
de la Educación Física, Guijarro-Romero et al. (2021) comprobaron
que después de mejorar los niveles de capacidad cardiorrespiratoria de
los escolares con una unidad de acondicionamiento físico a corto plazo
(dos sesiones por semana durante nueve semanas), dichos niveles re-
gresaban a los valores basales después de cuatro semanas de desentre-
namiento.
‒ ‒
Con el objetivo de solventar las limitaciones anteriormente señaladas
presentes en la asignatura de Educación Física para desarrollar y man-
tener un nivel saludable de capacidad cardiorrespiratoria en los escola-
res sin reducir el tiempo destinado al desarrollo del resto de objetivos
curriculares de la asignatura, Viciana y Mayorga-Vega (2016) plantean
un modelo innovador de unidad didáctica denominado “unidades didác-
ticas reforzadas”. En el siguiente apartado del presente trabajo se expli-
can con detalle las características y fundamentos principales de las uni-
dades didácticas reforzadas. Además, se presenta una propuesta de apli-
cación práctica de este modelo innovador de unidad didáctica centrada
en el mantenimiento de los niveles de capacidad cardiorrespiratoria a
través de una unidad didáctica reforzada con contenidos de expresión
corporal y actividades en el medio natural. Esta propuesta, además de
mantener los niveles de capacidad cardiorrespiratoria, permitiría al pro-
fesorado alcanzar otros objetivos curriculares a nivel conceptual y pro-
cedimental sobre los contenidos utilizados para llevar a cabo la unidad
didáctica reforzada, es decir, expresión corporal y actividades en el me-
dio natural.
‒ ‒
desaprendizaje. Respecto a la duración de la unidad didáctica, ésta debe
fundamentarse en literatura previa en la que se haya demostrado que
una duración determinada proporciona unos resultados positivos y sa-
tisfactorios con relación al objetivo que se pretende conseguir con los
escolares. Igualmente, en función del objetivo perseguido con el re-
fuerzo, éste tendrá un diseño determinado en cuanto a metodología y
tipo de actividades que lo componen se refiere. Por ejemplo, si el obje-
tivo del profesorado es mantener las mejoras adquiridas en la capacidad
cardiorrespiratoria de los escolares a través de una unidad didáctica de
acondicionamiento físico, el diseño de las tareas que compongan el re-
fuerzo a aplicar deberá estar orientado a lograr una intensidad mode-
rada-vigorosa mediante la realización de movimientos globales que im-
pliquen la acción de un elevado número de grupos musculares (por
ejemplo, correr, saltar). Además, dichas tareas deberán ser llevadas a
cabo con la máxima continuidad posible, es decir, durante el mayor
tiempo posible de la clase de Educación Física, asegurando de esta
forma una cantidad de práctica mínima para lograr el objetivo de man-
tenimiento deseado.
En la Figura 1 se muestra el esquema de intervención de la propuesta
de unidades didácticas reforzadas. Después de realizar una unidad di-
dáctica tradicional de acondicionamiento físico para el desarrollo de la
capacidad cardiorrespiratoria en las clases de Educación Física durante
el primer trimestre (es decir, dos sesiones por semana durante ocho se-
manas), los escolares completarían una unidad didáctica reforzada (es
decir, de mantenimiento) dos veces por semana durante seis semanas.
Concretamente la unidad didáctica de mantenimiento, estaría dividida
en dos partes: Por un lado, tres semanas (dos sesiones por semana) en
las que se aplicaría un refuerzo de la capacidad cardiorrespiratoria me-
diante contenidos de expresión corporal (por ejemplo, zumba), y por
otro lado, tres semanas (dos sesiones por semana) mediante contenidos
de actividades en el medio natural (por ejemplo, carreras de orienta-
ción). El término expresión corporal se refiere a aquellas actividades
que permiten a los escolares mejorar su creatividad y la capacidad de
expresarse a través del movimiento corporal (Ministerio de Educación,
Cultura y Deporte, 2015). Estudios previos han demostrado que las
‒ ‒
intervenciones llevadas a cabo mediante contenidos de expresión cor-
poral son efectivas para mejorar los niveles de capacidad cardiorrespi-
ratoria de los escolares (Fong Yan et al., 2018). Respecto a las activi-
dades físicas al aire libre, se refieren a aquellas actividades en las que
los escolares pueden aprender sobre el entorno que les rodea y las po-
sibilidades de realizar diferentes actividades físicas dentro de él (por
ejemplo, juegos de pista o carreras de orientación; Granero y Baena,
2007). Igualmente, la actividad física al aire libre favorece el desarrollo
de la capacidad cardiorrespiratoria, ya que las actividades que se reali-
zan en el aire libre o entornos naturales requieren correr o caminar rá-
pido (Granero y Baena, 2007). Este tipo de actividades pueden ser rea-
lizadas en espacios naturales como, por ejemplo, parques, fuera del cen-
tro escolar, o en centros escolares que dispongan de zonas verdes dentro
del recinto escolar (Dyment y Bell, 2008; Haug et al., 2010). En este
sentido, Frömel et al. (2021) sugieren que la Educación Física debe in-
cluir cada vez más sesiones al aire libre, e incluso cuando sea posible
en entornos naturales.
‒ ‒
conocimientos a nivel conceptual y procedimental de los contenidos
utilizados para realizar el refuerzo.
‒ ‒
dorsales y pectorales), así como ejercicios de baja intensidad como ca-
minar lentamente alrededor de la pista. Es importante destacar que du-
rante el desarrollo de las sesiones es fundamental que el profesorado
ponga especial hincapié en lograr que los escolares estén involucrados
al menos el 50% del tiempo de la clases en actividad física de intensidad
moderada-vigorosa (Association for Physical Education, 2020). A con-
tinuación, se presenta un esquema de las actividades a realizar durante
la parte principal de cada sesión de la unidad de acondicionamiento fí-
sico.
4.1.1. Sesión 1
4.1.2 Sesión 2
4.1.3. Sesión 3
‒ ‒
18 minutos: Cinco series de dos minutos y medio de saltos a la comba
individual (pies juntos, pies alternos, alternando un pie y luego otro,
comba cruzada). Entre serie y serie habría un minuto de descanso pa-
sivo.
10 minutos: Juego del balón prisionero con una pelota.
4.1.4. Sesión 4
4.1.5. Sesión 5
4.1.6. Sesión 6
4.1.7. Sesión 7
‒ ‒
repeticiones que puede hacer en cada ejercicio, sin importar las que
realicen el resto de compañeros y compañeras de clase.
10 minutos: Juego de los 10 pases por equipos con un balón de rugby.
Cada dos minutos y medio se cambian los equipos que se enfrentan
entre sí.
4.1.8. Sesión 8
4.1.9. Sesión 9
4.1.10. Sesión 10
4.1.11. Sesión 11
‒ ‒
4.1.12. Sesión 12
4.1.13. Sesión 13
4.1.14. Sesión 14
4.1.15. Sesión 15
‒ ‒
4.1.16. Sesión 16
4.2.1. Sesión 1
‒ ‒
4.2.2. Sesión 2
4.2.3. Sesión 3
4.2.4. Sesión 4
4.2.5. Sesión 5
4.2.6. Sesión 6
4.2.7. Sesión 7
‒ ‒
es decir, una misma pareja haría de policía y de ladrón para otras pare-
jas.
15 minutos: Juego de balón prisionero con cuatro pelotas.
4.2.8. Sesión 8
4.2.9. Sesión 9
4.2.10. Sesión 10
‒ ‒
intensidad moderada-vigorosa, se establecería un límite de tiempo para
encontrar realizar la carrera completa.
4.2.11. Sesión 11
4.2.12. Sesión 12
‒ ‒
FIGURA 2. Mapa carrera de orientación.
‒ ‒
5. CONCLUSIONES
6. AGRADECIMIENTOS
7. REFERENCIAS
‒ ‒
Carrel, A. L., Clark, R. R., Peterson, S., Eickhoff, J., y Allen, D. B. (2007).
School-based fitness changes are lost during the summer vacation.
Archives of Pediatrics and Adolescent Medicine, 161(6), 561–564.
https://doi.org/10.1001/archpedi.161.6.561
Chen, S., Kim, Y., y Gao, Z. (2014). The contributing role of physical education
in youth’ s daily physical activity and sedentary behavior. BMC Public
Health, 14, 110. https://doi.org/10.1186/1471-2458-14-110
Dyment, J. E., y Bell, A. C. (2008). Grounds for movement: Green school
grounds as sites for promoting physical activity. Health Education
Research, 23(6), 952–962. https://doi.org/10.1093/her/cym059
Eddolls, W. T. B., McNarry, M. A., Lester, L., Winn, C. O. N., Stratton, G., y
Mackintosh, K. A. (2018). The association between physical activity,
fitness and body mass index on mental well-being and quality of life in
adolescents. Quality of Life Research, 27(9), 2313–2320.
https://doi.org/10.1007/s11136-018-1915-3
European Commission/EACEA/Eurydice. (2013). Physical Education and sport
at school in Europe Eurydice Report. Publications Office of the
European Union.
Farooq, A., Gibson, A. M., Martin, A., Janssen, X., Reilly, J. J., Wilson, M. G.,
y Hughes, A. (2020). Longitudinal changes in moderate‐to‐vigorous‐
intensity physical activity in children and adolescents: A systematic
review and meta ‐ analysis. Obesity Reviews, 21(1), e12953.
https://doi.org/10.1111/obr.12953
Fong Yan, A., Cobley, S., Chan, C., Pappas, E., Nicholson, L. L., Ward, R. E.,
Murdoch, R. E., Gu, Y., Trevor, B. L., Vassallo, A. J., Wewege, M. A.,
y Hiller, C. E. (2018). The effectiveness of dance interventions on
physical health outcomes compared to other forms of physical activity:
A systematic review and meta-analysis. Sports Medicine, 48(4), 933–
951. https://doi.org/10.1007/s40279-017-0853-5
Frömel, K., Vašíčková, J., Skalik, K., Svozil, Z., Groffik, D., y Mitáš, J. (2021).
Physical activity recommendations in the context of new calls for
change in Physical Education. International Journal of Environmental
Research and Public Health, 18(3), 1177.
https://doi.org/10.3390/ijerph18031177
Granero, A., y Baena, A. (2007). Importancia de los valores educativos de las
actividades físicas en la naturaleza. Habilidad Motriz, 29, 5–14.
Guijarro-Romero, S, Casado-Robles, C., y Mayorga-Vega, D. (2019). Unidades
didácticas reforzadas, alternadas, irregulares e intermitentes como
herramienta para desarrollar y mantener un nivel saludable de capacidad
cardiorrespiratoria a través de la Educación Física. En S. Alonso García,
J. Romero Rodríguez, C. Rodríguez-Jiménez, y J. Sola Reche (Eds.),
Investigación, Innovación docente y TIC. Nuevos Horizontes
Educativos (pp. 232–244). Dykinson S.L.
‒ ‒
Guijarro-Romero, S, Mayorga-Vega, D., Casado-Robles, C., y Viciana, J.
(2021). Effect of a four-week detraining period on secondary school
students’ cardiorespiratory fitness: A cluster-randomized controlled
trial. Medicina Dello Sport. https://doi.org/10.23736/S0025-
7826.21.03890-4
Guijarro-Romero, S., Mayorga-Vega, D., Casado-Robles, C., y Viciana, J.
(2020). Effect of a physical education-based fitness intermittent
teaching unit on high school students’ cardiorespiratory fitness: a
cluster-randomized controlled trial. Journal of Sports Medicine and
Physical Fitness, 60(5), 700–708. https://doi.org/10.23736/S0022-
4707.20.10328-1
Guthold, R., Stevens, G. A., Riley, L. M., y Bull, F. C. (2020). Global trends in
insufficient physical activity among adolescents: a pooled analysis of
298 population-based surveys with 1·6 million participants. The Lancet
Child & Adolescent Health, 4(1), 23–35. https://doi.org/10.1016/S2352-
4642(19)30323-2
Hardman, K, Murphy, C., Routen, A., y Tones, S. (2014). UNESCO-NWCPEA:
World-wide survey of school Physical Education. United Nations
Educational, Scientific and Cultural Organization.
Haug, E., Torsheim, T., Sallis, J. F., y Samdal, O. (2010). The characteristics of
the outdoor school environment associated with physical activity.
Health Education Research, 25(2), 248–256.
https://doi.org/10.1093/her/cyn050
Hollis, J. L., Sutherland, R., Williams, A. J., Campbell, E., Nathan, N.,
Wolfenden, L., Morgan, P. J., Lubans, D. R., Gillham, K., y Wiggers, J.
(2017). A systematic review and meta-analysis of moderate-to-vigorous
physical activity levels in secondary school physical education lessons.
International Journal of Behavioral Nutrition and Physical Activity,
14(1), 52. https://doi.org/10.1186/s12966-017-0504-0
Hollis, J. L., Williams, A. J., Sutherland, R., Campbell, E., Nathan, N.,
Wolfenden, L., Morgan, P. J., Lubans, D. R., y Wiggers, J. (2016). A
systematic review and meta-analysis of moderate-to-vigorous physical
activity levels in elementary school physical education lessons.
Preventive Medicine, 86, 34–54.
https://doi.org/10.1016/j.ypmed.2015.11.018
Lonsdale, C., Rosenkranz, R. R., Peralta, L. R., Bennie, A., Fahey, P., y Lubans,
D. R. (2013). A systematic review and meta-analysis of interventions
designed to increase moderate-to-vigorous physical activity in school
physical education lessons. Preventive Medicine, 56(2), 152–161.
https://doi.org/10.1016/j.ypmed.2012.12.004
Malina, R. M., Bouchard, C., y Bar-Or, O. (2004). Growth, maturation, and
physical activity (2nd ed.). Human Kinetics.
‒ ‒
Mayorga-Vega, D., Martínez-Baena, A., y Viciana, J. (2018). Does school
physical education really contribute to accelerometer-measured daily
physical activity and non sedentary behaviour in high school students?
Journal of Sports Sciences, 36(17), 1913–1922.
https://doi.org/10.1080/02640414.2018.1425967
Mayorga-Vega, D., Montoro-Escaño, J., Merino-Marban, R., y Viciana, J.
(2016). Effects of a physical education-based programme on health-
related physical fitness and its maintenance in high school students: A
cluster-randomized controlled trial. European Physical Education
Review, 22(2), 243–259. https://doi.org/10.1177/1356336X15599010
Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. (2015). Real Decreto 1105/2014 de
26 de diciembre, por el que se establece el currículo básico de la
Educación Secundaria Obligatoria y del Bachillerato. Boletín Oficial
Del Estado, 169–546.
Raghuveer, G., Hartz, J., Lubans, D. R., Takken, T., Wiltz, J. L., Mietus-Snyder,
M., Perak, A. M., Baker-Smith, C., Pietris, N., y Edwards, N. M.
(2020). Cardiorespiratory fitness in youth: An important marker of
health. Circulation, 142(7), e101–e18.
https://doi.org/10.1161/CIR.0000000000000866
Robles, J., Giménez, F., y Abad, M. (2010). Motivos que llevan a los profesores
de Educación Física a elegir los contenidos. Retos, 18, 5–8.
https://doi.org/10.47197/retos.v0i18.34642
Ruíz-Ariza, A., Grao-Cruces, A., de Loureiro, N. E. M., y Martínez-López, E. J.
(2017). Influence of physical fitness on cognitive and academic
performance in adolescents: A systematic review from 2005–2015.
International Review of Sport and Exercise Psychology, 10(1), 108–
133. https://doi.org/10.1080/1750984X.2016.1184699
Sanz-Martín, D., Ruiz-Tendero, G., y Fernández-García, E. (2021). Contribution
of physical education classes to daily physical activity levels of
adolescents. Physical Activity Review, 9(2), 18–26.
https://doi.org/10.16926/par.2021.09.18
SHAPE America. (2013). Grade-level outcomes for K-12 Physical Education.
Author.
Tomkinson, G., Lang, J., Tremblay, M., Dale, M., LeBlanc, A., Belanger, K.,
Ortega, F., y Léger, L. (2017). International normative 20 m shuttle run
values from 1 142 026 children and youth representing 50 countries.
British Journal of Sports Medicine, 51(21), 1545–1554.
https://doi.org/10.1136/bjsports-2016-095987
Tomkinson, G. R., Lang, J. J., Tremblay, M. S., Dale, M., Leblanc, A. G.,
Belanger, K., Ortega, F. B., y Léger, L. (2017). International normative
20 m shuttle run values from 1 142 026 children and youth representing
50 countries. British Journal of Sports Medicine, 51(21), 1545–1554.
https://doi.org/10.1136/bjsports-2016-095987
‒ ‒
UNESCO. (1962). New methods and techniques in education: Report of a
meeting of experts. Paris, 12-20 March, 1962.
Verkhoshansky, Y., y Verkhoshansky, N. (2011). Special strength training.
Manual for coaches. Verkhoshansky SSTM.
Viciana, J., Martínez-Baena, A., y Mayorga-Vega, D. (2015). Contribución de la
educación física a las recomendaciones diarias de actividad física en
adolescentes según el género; un estudio con acelerometría. Nutricion
Hospitalaria, 32(3), 1246–1251.
https://doi.org/10.3305/nh.2015.32.3.9363
Viciana, J., y Mayorga-Vega, D. (2016). Innovative teaching units applied to
Physical Education – changing the curriculum management for
authentic outcomes. Kinesiology, 48(1), 142–152.
https://doi.org/doi:10.26582/k.48.1.1
Viciana, J., y Mayorga-Vega, D. (2017). Influencing factors on planning
decision- making among Spanish in-service Physical Education teachers
. A population-based study. Electronic Journal of Research in
Educational Psychology, 15(3), 491–509.
https://doi.org/10.14204/ejrep.43.16112
Viciana, J., Mayorga-Vega, D., y Merino-Marban, R. (2014). Physical
education-based planning for developing and maintaining students’
health-related physical fitness levels. En: Todaro R (Ed.), Handbook of
physical education research. Role of school programs, childrens
attitudes and health implications (pp. 237–252). Nova Science
Publisher.
Viciana, J., Mayorga-Vega, D., y Mompeán Campillo, M. (2016). Cumplimiento
de los estándares curriculares de condición física-salud en Educación
Física. Estudio de la planificación en la formación inicial. Cultura,
Ciencia y Deporte, 11(32), 87–95.
https://doi.org/10.12800/ccd.v11i32.709
Viciana, J., Mayorga-Vega, D., y Parra-Saldías, M. (2019). Adolescents’
physical activity levels on physical education and non-physical
education days according to gender, age, and weight status. European
Physical Education Review, 25(1), 143–155.
https://doi.org/10.1177/1356336X17706683
World Health Organization. (2018). Global action plan on physical activity
2018-2030: More active people for a healthier world. World Health
Organization.
World Health Organization. (2020). WHO guidelines on physical activity and
sedentary behaviour. World Health Organization.
‒ ‒
CAPÍTULO 109
INNOVACIÓN EN LA FORMACIÓN
DEL PROFESORADO DE CONSERVATORIO
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
Por todo ello, se debe ser consciente de la importancia de formar a los
profesores de conservatorio de música en las diferentes ramas de inves-
tigación, ya que los resultados de las mismas pueden derivarse en con-
seguir una mejora sustancial del sistema educativo acorde con las ne-
cesidades emergentes en los diferentes niveles de enseñanza, tanto obli-
gatorios como no obligatorios.
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
3.1. MUESTRA
‒ ‒
La muestra de estudio ha sido extraída mediante muestreo intencional
no probabilístico. La muestra final de participantes ha sido de n=91, en
edades comprendidas entre 25-50 años con una media de edad de 34,5
años. De ellos n=16 son de La Rioja Alta (17,6%); n=44 de La Rioja
Media (48,3%); y, n=31 de La Rioja Baja (34,1%), como se representa
en la Figura 5.
3.2. INSTRUMENTO
‒ ‒
3.3. DISEÑO
‒ ‒
experiencia, formación, percepción, enseñanza-aprendizaje y
evaluación.
‒ ‒
en las respuestas doblemente formuladas, se eliminarán dichos
Cuestionarios.
Para realizar los análisis, se ha dispuesto del programa IBM SPSS Sta-
tistics (versión 27.0).
4. RESULTADOS
‒ ‒
4.1. VALORES DE LAS RESPUESTAS SEGÚN LOS EJES-BASE TEMÁTICOS
QUE ORGANIZAN EL CONTENIDO DEL CUESTIONARIO
Ejes F p Ƞ2
Experiencia ,47 , 216 , 034
Formación 4,84 ,010* , 099
Percepción ,61 , 547 , 014
Enseñanza-aprendizaje 2,51 , 087 , 054
Evaluación 2,02 , 139 , 044
Tal como recoge la Tabla 2, se aprecian diferencias estadísticamente
significativas en el eje Formación (F=4,84; p=,010), procediendo a su
estudio individualizado, haciendo una comparación entre los 3
conservatorios del estudio, mediante la prueba de t de Student para la
igualdad de medias. En la Tabla 13 se muestran los resultados
obtenidos.
TABLA 3. Eje Formación: comparación entre los conservatorios de Haro, Logroño y Ca-
lahorra
‒ ‒
diferencias estadísticamente significativas entre estos conservatorios
(p=,021 y p=,004) con un nivel de significación de p<,05; lo cual indica
que, respecto al eje de Formación, los conservatorios de música de
Haro y de Logroño y los de Haro y Calahorra, se comportan de diferente
manera y tienen distintas características que sería interesante compro-
bar cualitativamente en qué consisten.
‒ ‒
F=,27 y p=,606; F=4,71 y p=,330; F=,10 y p=,751; F=,23 y p=,630),
comprobando su homocedasticidad. Por otra parte, hay diferencias es-
tadísticamente significativas únicamente en el eje Experiencia
(p=,000); lo cual indica que, la situación administrativa es un factor
que está influido por la experiencia.
c) Resultados en función del departamento de trabajo
A continuación, en la Tabla 5 se muestran los resultados del análisis
ANOVA de los ejes-base en función del departamento de trabajo.
Ejes F p Ƞ2
Experiencia ,37 , 777 , 012
Formación 2,14 ,101 , 069
Percepción ,42 , 736 , 014
Enseñanza-aprendizaje 2,92 , 039* , 091
Evaluación 1,89 , 137 , 061
‒ ‒
La Tabla 6 reporta un valor no estadísticamente significativo en la
prueba de Levene, entre los departamentos: no sinfónicos y cuerda
(F=,02; p=,892), no sinfónicos y viento-percusión (F=3,80; p=,057), no
sinfónicos y teóricas (F=,28; p=,598) y cuerda y teóricas (F=,19;
p=,662). Por otra parte, hay diferencias estadísticamente significativas
entre los departamentos de cuerda y viento-percusión (p=,020) y cuerda
y teóricas (p=,014), con un nivel de significación de p<,05.
Seguidamente se muestran los resultados obtenidos en función del fac-
tor antigüedad en el puesto.
d) Resultados en función de la antigüedad en el puesto
En la Tabla 7 se recogen los resultados del análisis en cada uno de los
ejes respecto de la antigüedad del participante en el puesto de trabajo.
Ejes F p Ƞ2
Experiencia 15,74 , 000* , 263
Formación ,75 , 474 , 017
Percepción ,61 , 546 , 014
Enseñanza-aprendi-
,77 , 465 , 017
zaje
Evaluación ,41 , 665 , 009
‒ ‒
TABLA 8. Eje Experiencia: comparación en función de la antigüedad en el puesto
‒ ‒
TABLA 9. Perfiles de profesorado
TABLA 10. Ejes-base: resultados análisis multivariante en función de los 4 perfiles de pro-
fesorado
Ejes F p Ƞ2
Experiencia 145,10 , 000* , 833
Formación 33,80 , 000* , 538
Enseñanza-aprendi-
5,31 , 002* , 155
zaje
Tal como recoge la Tabla 10, se aprecian diferencias estadísticamente
significativas en los 3 ejes-base de estudio: Experiencia (F=145,10;
p=,000), Formación (F=33,80; p=,000) y Enseñanza-aprendizaje
(F=5,31; p=,002), procediendo a su estudio individualizado, compa-
rando cada uno de los 4 perfiles de profesorado de conservatorio con
los otros tres. Para ello, la Tabla 11 muestra la dependencia de los cua-
tro perfiles de profesores de conservatorio mediante la prueba post hoc
de múltiples comparaciones de Bonferroni (Goss y Meneses, 2019).
‒ ‒
TABLA 11. Eje Experiencia: comparación entre los 4 perfiles de profesorado
Confianza 95%
Perfiles p Inferior Superior
Perfil 1 Perfil 2 ,000* 2,51 3,82
Perfil 3 ,000* 1,52 2,83
Perfil 4 ,000* 4,44 5,79
Perfil 2 Perfil 1 ,000* -3,82 -2,51
Perfil 3 ,000* -1,63 -,35
Perfil 4 ,000* 1,28 2,61
Perfil 3 Perfil 1 ,000* -2,83 -1,52
Perfil 2 ,000* ,35 1,63
Perfil 4 ,000* 2,27 3,60
Perfil 4 Perfil 1 ,000* -5,79 -4,44
Perfil 2 ,000* -2,61 -1,28
Perfil 3 ,000* -3,60 -2,27
Confianza 95%
Perfiles p Inferior Superior
Perfil 1 Perfil 2 1,000 -,62 1,14
Perfil 3 , 000* 1,82 3,58
Perfil 4 ,000* 1,19 3,01
Perfil 2 Perfil 1 1,000 -1,14 ,63
Perfil 3 ,000* 1,59 3,31
Perfil 4 ,000* ,95 2,74
Perfil 3 Perfil 1 ,000* -3,58 -1,82
Perfil 2 ,000* -3,31 -1,59
Perfil 4 , 431 -1,49 ,29
Perfil 4 Perfil 1 ,000* -3,01 -1,19
Perfil 2 ,000* -2,74 -,95
Perfil 3 , 431 -,29 1,49
‒ ‒
La Tabla 12 reporta diferencias estadísticamente significativas entre:
perfil 1-perfil 3 (p=,000), perfil 1-perfil 4 (p=,000), perfil 2-perfil 3
(p=,000), y perfil 2-perfil 4 (p=,000); lo que indica que el perfil 1 es
diferente a los perfiles 3 y 4 y el perfil 2 es diferente a los perfiles 2 y
4 en lo que se refiere al eje-base Formación. Por otro lado, no hay dife-
rencias estadísticamente significativas entre el perfil 1 y el perfil 2
(p=1,000), ni entre los perfiles 3 y perfil 4 (p=,431), lo cual informa de
que se comportan con similaridad en cuanto al eje Formación.
Finalmente, en la Tabla 13 se muestra el resultado la comparación entre
los 4 perfiles de profesorado en función del eje-base Enseñanza-apren-
dizaje.
Confianza 95%
Perfiles p Inferior Superior
Perfil 1 Perfil 2 ,046* ,01 1,33
Perfil 3 ,001* ,29 1,62
Perfil 4 ,033* -,06 1,31
Perfil 2 Perfil 1 ,046* -1,33 -,01
Perfil 3 1,000 -,36 ,93
Perfil 4 1,000 -,71 ,63
Perfil 3 Perfil 1 ,001* -1,62 -,29
Perfil 2 1,000 -,93 ,36
Perfil 4 1,000 -1,00 ,34
Perfil 4 Perfil 1 ,033* -1,31 ,06
Perfil 2 1,000 -,63 ,71
Perfil 3 1,000 -,34 1,00
‒ ‒
conservatorio de música de La Rioja resultantes, en función de los ejes-
base: Experiencia, Formación y Enseñanza-aprendizaje.
‒ ‒
FIGURA 2. Perfiles profesionales de los profesores de conservatorios de La Rioja
8
VALOR DE LOS CENTROIDES
7
6
5
4
3
2
1
0
EXPERIENCIA FORMACIÓN ENSEÑANZA-
APRENDIZAJE
‒ ‒
‒ Además, observando los resultados del análisis post hoc de
Bonferroni, se evidencia que los perfiles 1 y perfil 2 se com-
portan de manera similar respecto al eje Formación y los per-
files 2, perfil 3 y perfil 4 lo hacen con respecto al eje Ense-
ñanza-aprendizaje.
5. CONCLUSIÓN-DISCUSIÓN
‒ ‒
Según el comportamiento del profesorado, se han evidenciado 4 perfiles
diferentes, conformados por 22, 24, 24 y 21 docentes cada uno. Las pun-
tuaciones medias obtenidas de los perfiles, en función de los 3 ejes-base
Experiencia acumulada, Formación permanente y Enseñanza-aprendi-
zaje, muestran a su vez un subagrupamiento, dando respuesta al Objetivo
Específico 1.
‒ ‒
En el eje Enseñanza-aprendizaje, los cuatro perfiles obtienen puntua-
ciones bajas o muy bajas. El perfil 1, con una puntuación media de 4,46,
representa el 24% del profesorado de los conservatorios de música en
La Rioja, mientras que los otros tres perfiles, se comportan de una ma-
nera similar, con valores que van de 3,51 a 3,83, representando el 76%
del profesorado.
‒ ‒
número elevado de profesores con deseo de formarse y crecer.
100% 100%
100
80 80% 80%
60 60% 60%
40 40% 40%
20 20% 20%
0 0% 0%
Enseñanza-
Experiencia muy baja aprendizaje muy
bajo
Exoeriencia baja Formación baja Enseñanza-
Experiencia media Formación media aprendizaje bajo
‒ ‒
Según los tres marcadores, se observa que habría que intervenir en orden
de prioridad, en metodologías de Enseñanza-aprendizaje, seguidamente
en factores relacionados para mejorar el eje-base Experiencia acumu-
lada (cargos de responsabilidad, investigación, actividades musicales
fuera del conservatorio) y por último, seguir muy de cerca la Formación
permanente en investigación, didáctica y nuevas tecnologías.
‒ ‒
2002; Gillanders y Martínez, 2005; Morales, Ortega, Conesa y Ruiz,
2017; Gaines, 2018; Carmona, 2021).
El que el profesorado de conservatorio esté formado en investigación,
conlleva a que los alumnos de Trabajo Fin de Estudios de último curso
de carrera, no se pregunten el por qué tienen que destinar un tiempo tan
valioso para realizar dicha asignatura cuando podían emplearlo en tocar
su instrumento, sintomatología de que algo no está funcionando bien en
el diseño de los estudios de conservatorio (Aróstegui, 2016; Macías,
2017; Curbelo, 2018; Narejos, 2020). Es por ello, que la formación ini-
cial y continua del profesorado, la investigación y el trabajo interdisciplinar
toman una importancia decisiva (López, 2013; Fernández y Casas, 2016).
Por otra parte, es necesario resaltar la conveniencia de que las personas
dedicadas a la enseñanza de su instrumento musical tengan la oportuni-
dad de desarrollar en paralelo una labor interpretativa, dada la repercu-
sión positiva que tiene en su trabajo docente con alumnos de cualquier
nivel, ya que constituye una parte fundamental de la formación continua
del profesor y de su labor docente, y debería ser fomentada por los cen-
tros, cuando no organizada directamente por ellos (Ruiz, 2020). Se re-
fiere a una actividad eminentemente práctica que necesita mantenerse
actualizada. Si una vez obtenida su plaza el profesor va perdiendo el con-
tacto con la práctica interpretativa de su instrumento, con el paso de los
años su sistema de enseñanza necesariamente se resentirá, mientras que
si consigue mantenerse en activo seguirá adquiriendo nuevas experien-
cias que podrá transmitir de primera mano a su alumnado.
Actualmente el sistema de contratación de los conservatorios superiores
es el mismo que el de la enseñanza secundaria. Por ello, para poder
ofrecer unos planes de estudios musicales superiores de calidad, es ne-
cesaria una buena selección del profesorado, que debería tener: una
carga lectiva inferior, un perfil especializado a través de una experiencia
investigadora, y una compaginación entre la actividad docente y la ac-
tividad investigadora (Rico, 2018).
‒ ‒
sólo se pide como requisito de participación, una titulación de máster en
investigación de 60 créditos ECTS, y que en muchos casos dicho cuerpo
se ha estado supliendo por profesorado que mínimamente cumplía con
los requisitos (Vieites, 2020). No alienta la búsqueda de un adecuado
estatus administrativo, ya que actualmente la legislación que regula el
funcionamiento de las enseñanzas en los conservatorios superiores, es
común a la de enseñanza secundaria obligatoria, aunque la titulación que
se obtiene al finalizarlas, sea equivalente al grado universitario (Jiménez
y Ruiz, 2019). Además existe una insuficiente atención prestada por las
administraciones educativas y todavía faltan compromisos investigado-
res y conclusivos (Tello, 2020).
Los conservatorios profesionales siguen enmarcados en programacio-
nes didácticas obsoletas, apostando por lo tradicional como la mejor
metodología, hasta que llegue una normativa que les obligue a pasar a
las programaciones didácticas por competencias (Vernia, 2020). No se
ha encontrado una renovación académica significativa en cuanto a las
actuales demandas, que pasan por la docencia, la interpretación y la
reinvención para acceder a un campo laboral relacionado con la forma-
ción recibida. Como posibles líneas de formación que puedan adaptarse
a cualquier perfil docente, se puede hablar: interdisciplinar, cooperativa
y colaborativa, investigadora, especializada, permanente, y entre igua-
les (Vernia, 2019).
Por ende, los centros superiores de educación musical han seguido la
misma línea que las carreras universitarias más prácticas, es decir, han
intentado formar a sus especialistas para la actividad principal, en este
caso la interpretación. No obstante, la realidad laboral se debería impo-
ner no como un lastre que mine las horas de estudio interpretativo con
numerosas materias didácticas, sino como una revisión de todas las
asignaturas comunes o de formación básica desde el punto de vista di-
dáctico. La formación didáctica de los futuros docentes musicales no
tendría que limitarse al máster de profesorado, porque su formación pe-
dagógica no se tiene que desvincular de la realidad y, por tanto, debería
ser una constante. Se precisan cambios sustanciales en el enfoque del
proceso de formación, es decir, que la relación práctica-teoría debería
ser mayor, así como tendrían que impulsarse mayor cantidad de
‒ ‒
proyectos de investigación e innovación dirigidos a una aplicación con-
tinua en el aula y abierta al cambio, y no como meras actuaciones pun-
tuales (Bernabé, 2015).
Esta tesis doctoral, trata de contribuir a las investigaciones necesarias
para realizar una verdadera labor de andamiaje que permita a los profe-
sores de conservatorio conectar teoría y práctica, más aún, cuando la reali-
dad laboral del titulado superior de música, le obliga a ejercer en la mayoría
de casos como docente, bien en centros de enseñanza secundaria obligato-
ria, o con más suerte en conservatorios profesionales e incluso superiores,
más que como músico profesional (Bernabé y Torres, 2017).
Por último, respecto al eje Enseñanza-aprendizaje, se constata que a
menudo, las enseñanzas musicales en los conservatorios de música se
basan en metodologías arraigadas a la tradición, donde el docente no
siempre desarrolla en profundidad los conocimientos y habilidades psi-
copedagógicas adecuadas para la práctica educativa (Campayo y Ca-
bedo, 2018).
Aunque la búsqueda de una mejora en la calidad educativa no se realiza
desde solamente un punto de vista metodológico (Lerma, 2020), mejo-
rar en investigaciones metodológicas de enseñanza-aprendizaje, im-
plica bajar el grado de abandono en los conservatorios profesionales,
que es superior al 80%, y subir el 10% de los estudiantes que obtienen
una titulación superior de ese 20% restante que acaba el grado profe-
sional (Querol, 2017). Hay que evitar que las prácticas educativas inter-
pretativas en buena parte de los conservatorios españoles sigan ancladas
en modelos y métodos tradicionales, propios de anteriores culturas del
aprendizaje, donde destaca la figura del maestro como modelo supremo,
considerado artista antes que docente, y cuya reputación viene determi-
nada por su relación con instrumentistas legendarios o por su pertenencia
a determinadas escuelas, sin una carga de contenidos educativos y psico-
pedagógicos sólida y donde el estudiante se limita a ser un clon de su pro-
pio profesor (Bautista y Fernández, 2018).
Además, priorizar la salud física y psíquica del educando a su excelencia
debe ser un primer eslabón hacia una educación no solo humanamente
compatible, sino sostenible en el tiempo. Son los avances científicos
‒ ‒
dentro del área de la Psicología de la música los que muestran la necesidad
de ensanchar el marco de la enseñanza musical, incorporando además del
aprendizaje y dominio de destrezas técnico-instrumentales junto a otras
disciplinas teóricas, el desarrollo de aspectos psicológicos que tienen
que ver con el aprendizaje emocional, la neuroeducación, los procesos
motivacionales, la autoconfianza o el propio autoconcepto musical (Fer-
nández, de Paula y Blanco, 2021).
Por ende, se evidencia una falta de correspondencia curricular y com-
petencial existente entre las enseñanzas profesionales y superiores de
música de conservatorio, agravada por la transferencia competencial
autonómica de la legislación vigente en España, la cual genera una ma-
yor desigualdad geográfica. La realidad de un espacio superior artístico
que oferta diferentes líneas de estudios (interpretación, pedagogía, jazz,
música antigua, dirección, sonología, etc.) está siendo enfocada previa-
mente mediante una línea única de interpretación en las enseñanzas pro-
fesionales, que no necesariamente capacita ni para las competencias re-
queridas en el acceso ni en el currículum. Para ello, se debería plantear
una diversificación curricular en los itinerarios de estudios profesiona-
les mediante el uso de metodologías de enseñanza-aprendizaje y deter-
minación competencial específicas, respetando el currículum actual de
las citadas enseñanzas (Pascual y Peñalver, 2019).
El profesorado parte de una formación instrumental y competencia la-
boral común, garantizada por la posesión de una titulación similar de
acceso a la función pública docente de enseñanzas artístico-musicales,
pero el seguimiento en clase de los métodos estudiados puede condi-
cionar el modo en que los profesores complementan la formación téc-
nica del alumnado (Hallam, 2013). El profesorado debe tomar conciencia
de la disponibilidad actual de fuentes de información científica que le
brindan nuevos conocimientos sobre la enseñanza de su instrumento a par-
tir de diferentes hallazgos de estudios científicos sobre neuropsicología,
acústica o biomecánica aplicada al estudio de instrumentos musicales, así
como otros relacionados con la orientación didáctica del profesor (Lo-
renzo, Muñoz y Soares, 2018). Parece que puede existir una limitación
derivada del perfil profesional del docente de música, tradicionalmente
ambivalente entre la identidad como instrumentista o pedagogo. Por
‒ ‒
ello, la búsqueda de la excelencia interpretativa no puede ser el argu-
mento para basar la enseñanza en repetir hasta que salga, error común
en la enseñanza-aprendizaje musical de conservatorios (Sloboda,
2014).
Las metodologías didácticas musicales necesitan un cambio de cara al
futuro, debido a que las diferentes leyes educativas han sido más es-
tructurales que formales, ya que la administración no ha puesto al ser-
vicio del profesorado los medios adecuados para llevar a cabo dichos
planes (Rodríguez, 2018). Necesitan una transformación que lleva im-
plícita una formación específica y complementaria para el profesorado.
Por tanto, además de una formación en pedagogía, el profesorado de
conservatorio reclama más formación en aspectos como la inteligencia
emocional, la gestión de grupos y el manejo de recursos tecnológicos
(Muñoz y Bonastre, 2013). Por ello, la práctica educativa deberá diri-
girse, hacia la implementación de este tipo de estrategias y recursos,
optimizando la calidad de la enseñanza con una docencia más eficiente
(López, 2013). Aplicar una perspectiva de investigación a la reflexión
didáctica de la música puede apoyar el aprendizaje profundo en la teoría
de la educación musical (Holgersen, 2017), ya que puede informar los
enfoques pedagógicos en la formación del profesorado de música
(Georgii, Burnard y Holgersen, 2016).
‒ ‒
de conservatorio, ya que aunque la muestra analizada haya sido prácti-
camente la totalidad del profesorado de conservatorio de La Rioja
(92%), en un principio hubo que matizar y explicar con gran detalle el
motivo del estudio y su anonimato en las respuestas, ya que el profeso-
rado no está acostumbrado a este tipo de investigaciones.
Como proyecciones futuras se constata la necesidad de continuar inves-
tigando para la mejora del sistema formativo musical. Por un lado, la
repetición en el futuro de estudios similares sobre el mismo objeto sería
deseable, con el fin de realizar un seguimiento de la implantación aquí
tratada. Se podría además extrapolar este tipo de investigación a otros
conservatorios profesionales y superiores de otras Comunidades Autó-
nomas y luego contrastar los resultados. Utilizando también la técnica
de clúster jerarquizado y obteniendo un coeficiente de generalizabili-
dad.
También se plantean nuevas líneas de investigación que este trabajo no
ha desvelado, como la aplicación de un programa de mejora en base a
los perfiles de los profesores de conservatorio aquí diagnosticados, y la
posterior recogida de datos: implementación de programas de forma-
ción continua, indicadores para la capacitación y selección del profeso-
rado de conservatorio, etc.
6. REFERENCIAS
‒ ‒
Bautista, A. y Fernández, B. (2018). Monográfico sobre Investigación en
Interpretación Musical: Implicaciones para el desarrollo Profesional
Docente. Psychology, Society and Education, 10 (1), 1-13.
Bernabé, M. (2015). Formación para la Ciudadanía Intercultural. ¿Qué sucede en
los Conservatorios Superiores? REICE, 13 (3), 21-36.
Bernabé, M. y Torres, M. (2017). ¿Qué formación didáctica recibe el futuro
profesorado de clarinete en el grado superior? Reflexiones y propuesta
curricular. Arbor, 193, 1-29.
Bisquerra, R. (2014). Metodología de la Investigación Educativa. Madrid: La
Muralla.
Campayo, E. y Cabedo, A. (2018). Investigación-acción como recurso para la
innovación y mejora de la práctica educativa en conservatorios: una
experiencia en las enseñanzas elementales de música en España.
Psychology, Society, & Education, 10 (1), 15-36.
Cardona, I. (2020, 14 de octubre). Trabajo en un conservatorio…¿soy músico o
pedagogo? https://www.melomanodigital.com/trabajo-en-un-
conservatorio-soy-musico-o-pedagogo.
Carmona, J. C. (2021, 16 de febrero). ¿Por qué es importante que los estudios
superiores de Música se cursen en la universidad?
https://elcorreoweb.es/opinion/ columnas/por-que-es-importante-
que-los-estudios-superiores-de-musica-se-cur sen-en-la-universidad-
AF7135929.
Cohen, L., Manion, L. y Morrison, K. (2018). Research Methods in Education.
Nueva York: Routledge.
Curbelo, O. (2018). La investigación en las enseñanzas superiores de música a
través del análisis de los trabajos fin de estudios en el Conservatorio
Superior de Música de Canarias. Edunovatic 2017. Conference
proceedings, 901-911.
Díaz, M. T. (2015). Los inicios de la profesión docente en los conservatorios de
música. Un estudio desde la perspectiva de los protagonistas. Revista
Musical Chilena, 223, 86-97.
Díaz, M. T. (2016, 6 de mayo). Los inicios de la profesión docente en los
conservatorios de música. http://socialmusik.es/inicios-profesion-
docente-conservatorios-musica.
Fernández, B. y Casas, A. (2016). Re-lecturas sobre Wundt y Seashore y
nacimiento de AEPMIM. La psicología en la música y con los músicos.
Epistemus, 4 (1), 133-160.
‒ ‒
Fernández, B., de Paula, F. y Blanco, P. (2021). Profesionales de la psicología
como docentes en los conservatorios de música: hacia una educación
musical sostenible. Papeles del Psicólogo, 42(1), 37-48.
Gaines, J. M. (2018). Music Technology and the Conservatory Curriculum [Tesis
doctoral, Universidad de Columbia]. Repositorio institucional de la
Universidad de Columbia. https://doi.org/10.7916/D8NP3MW2.
Georgii, E., Burnard, P., y Holgersen, S. (2016). Professional Knowledge in
Music Teacher Education. Aldershot: Routledge.
Gillanders, C. y Martínez, P. (2005). La investigación en el ámbito musical.
Música y educación: Revista trimestral de pedagogía musical, 64, 85-
104.
Goss, M. y Meneses, J. (2019). Análisis estadístico con JASP. Barcelona: FUOC.
Hallam, S. (2013). What predicts level of expertise attained, quality of
performance, and future musical aspirations in young instrumental
players? Psychology of Music, 41 (3), 267- 291.
Holgersen, S. (2017). Music teacher identity and professionalism.
Utdanningsforskning i musikk - didaktiske, sosiologiske og filosofiske
perspektiver, 1, 27-36.
Ibeas, M. (2015). Enseñanza-aprendizaje musical: una visión de los docentes de
instrumento en los conservatorios profesionales [Tesis doctoral,
Universidad del País Vasco]. Repositorio institucional de la Universidad
del País Vasco.
https://addi.ehu.es/bitstream/handle/10810/18219/TESIS_IBEAS_LOPEZ_MAR
TA.pdf.
Jiménez, M. A. y Ruiz, F. J. (2019). La incorporación al mercado laboral de los
egresados de conservatorio. Un estudio de caso de los titulados de
guitarra del Real Conservatorio Superior de Música de Granada, España.
AV Notas, 8, 93-108.
Jones, H. (2019). Ciencia de los datos: La guía definitiva sobre análisis de datos,
minería de datos, almacenamiento de datos, visualización de datos, Big
Data para empresas y aprendizaje automático para principiantes.
Nueva York: Bravex.
Lerma, A. (2020). Estudio de caso en el Conservatorio Profesional de Música
Cristóbal de Morales con el alumnado de orquesta de 4º de Enseñanzas
Básicas y tres alumnas de 2º de Enseñanzas básicas de violín [Trabajo
de máster, UNED]. Repositorio institucional de la UNED. http://e-
spacio.uned.es/fez/view/ bibliuned:masterComEdred-Jalerma.
‒ ‒
López, G. (2013). Concepciones y prácticas instruccionales de profesores de
instrumentos de cuerda: Influencia en las concepciones y niveles de
comprensión musical de sus alumnos [Tesis doctoral, Universidad
Autónoma de Madrid]. Repositorio institucional Universidad Autónoma
de Madrid. https://repositorio.
uam.es/bitstream/handle/10486/661742/lopez_iniguez_guadalupe.pdf.
López, R. (2013). La investigación artística en los conservatorios del espacio
educativo europeo. Discusiones, modelos y propuestas. Cuadernos de
música iberoamericana, 25, 223-241.
Lorenzo, O., Muñoz, S. y Soares, F. (2018). Estudio comparativo de métodos de
iniciación al violonchelo utilizados en los conservatorios de música
andaluces. Implicaciones para el profesorado. Psychology, Society, &
Education, 10 (1), 37-54.
Macías, R. (2017). ¿Investigar en los conservatorios? Mesa redonda en las II
Jornadas de investigación musical del Conservatorio Superior de Música
de La Mancha. Consonancias, 1, 193-205.
Mateos-Aparicio, G. y Hernández, A. (2021). Análisis multivariante de datos.
Cómo buscar patrones de comportamiento en BIG DATA. Madrid:
Pirámide.
Matias, C. (2021). The Handbook of Critical Theoretical Research Methods in
Education. Nueva York: Routledge.
Morales, A., Ortega, E., Conesa, E. y Ruiz, C. (2017). Análisis bibliométrico de
la producción científica en Educación Musical en España. Revista
española de pedagogía, 75, 399-414.
Muñoz, E. y Bonastre, C. (2013). La expresividad en la música. Quodlibet, 52,
40-52.
Narejos, A. (2020). La música en la investigación artística. Perspectiva
española actual. Quodlibet, 74 (2), 117-138.
Palacio, F., Apodaca, J. y Crisci, J. (2019). Análisis multivariado para datos
biológicos. Buenos Aires: CEBBAD
Pascual, E. y Peñalver, J. (2019). Conservatorios de música en España: de 6º
curso de enseñanzas profesionales a 1º curso de enseñanzas superiores.
Revista de estudios en Música, Cognición y Cultura. 7(1), 70-88.
Pastor, P. (2002). La investigación educativa musical. Eufonía: didáctica de la
música, 26, 84-88.
Querol, C. (2017). Análisis del modelo de liderazgo en la dirección de los
conservatorios profesionales en España [Tesis doctoral, Universidad de
Granada]. Repositorio institucional de la Universidad de Granada.
https:// digibug.ugr.es/bitstream/handle/10481/47789/2675793x.pdf.
‒ ‒
Rico, C. (2018). Musicología en el Conservatorio Superior de Música de Navarra:
plan de estudios y necesidades docentes. En Actas del segundo congreso
nacional de Conservatorios Superiores de Música (Ed.), Formación y
evaluación en los diferentes niveles de la Educación Musical (pp. 75-89).
Noja: SEM-EE.
Rodríguez, M. V. (2018). Modelos de enseñanza del lenguaje musical [Tesis
doctoral, Universidad Complutense de Madrid]. Repositorio institucional
de la Universidad Complutense de Madrid.
https://eprints.ucm.es/id/eprint/49380/1/ T40289.pdf.
Ruiz, J. M. (2020). El trabajo real en el conservatorio y la selección del
profesorado. Melómano, 262, 38-42.
Slodoba, A. (2014). The Acquisition of musical Performance Expertise:
Deconstructing the Talent Account of Individual Differences in Musical
Expressivity. En K. Anders (Ed.), The Road To Excellence: the
Acquisition of Expert Performance in the Arts and Sciences, Sports, and
Games (pp. 107-126). New York and London: Psychology Press.
Suárez, J. C., Recio, P., San Luis, C. y Pozo, P. (2019). Introducción al
Análisis de Datos. Aplicaciones en Psicología y Ciencias de la Salud.
Madrid: Sanz y Torres.
Tajul, M. (2020). Learning SPSS without Pain. A Comprehensive Manual for
Data Analysis and Interpretation of Outputs. Daca: ASA Publications.
Tello, I. (2020). Acompañamiento de danza y enseñanza musical en los
conservatorios de danza: investigaciones, publicaciones y aportaciones
didácticas. AV Notas, 9, 38-58.
Vernia, A. (2019). Music education as a base for employment opportunities. Situations
and projectes in schools of music and dance. En M. Hann y F. Hofecker
(Eds.), The future of music schools (pp. 179-190). Viena:
Musikschulmanagement.
Vernia, A. (2020). Educación musical en el panorama español. Contexto, niveles y
perfiles educativos. Didacticae, 7, 17-29.
Vieites, M. F. (2020). Las enseñanzas artísticas superiores en la ordenación
educativa en España. Una visión crítica. Foro de Educación, 18 (1), 209-
232.
‒ ‒
CAPÍTULO 110
CAROLINA CASADO-ROBLES
Departamento de Educación Física y Deportiva, Universidad de Granada
España
SANTIAGO GUIJARRO-ROMERO
Departamento de Educación Física y Deportiva, Universidad de Granada
España
DANIEL MAYORGA-VEGA
Departamento de Didáctica de la Expresión Musical, Plástica y Corporal
Universidad de Jaén
España
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
Sin embargo, dado el tiempo tan limitado dedicado a la asignatura de
Educación Física en el currículo educativo (Hardman et al., ), esta
no debería entenderse como un contexto único y aislado para alcanzar
el objetivo de promoción de hábitos saludables, sino como el recurso a
través del cual se dote de autonomía al alumnado para ser físicamente
activo en su tiempo libre (Viciana y Mayorga-Vega, ). En este sen-
tido, el recreo escolar como franja extracurricular ha demostrado con-
tribuir de forma eficaz a los niveles diarios de práctica de actividad fí-
sica de los escolares, observándose que pueden llegar a contribuir en
torno al % de las recomendaciones diarias de actividad física (Brooke
et al., ; Viciana et al., ). Además, los recreos presentan la ven-
taja de tener oportunidades diarias de práctica (cinco días a la semana)
frente a la Educación Física que normalmente tiene una frecuencia se-
manal de dos o tres días a la semana (Erwin et al., ; Hardman et al.,
). Por tanto, utilizar los recreos escolares además de la asignatura
de Educación Física en la tarea de promocionar hábitos saludables de
actividad física entre los escolares parece una estrategia viable y nece-
saria.
Para integrar ambas franjas de tiempo (es decir, Educación Física y re-
creos escolares) la aplicación del modelo innovador de Unidad Didác-
tica Irregular propuesto por Viciana y Mayorga-Vega ( ) podría ser
una opción excelente. Este modelo de Unidad Didáctica Irregular lleva
la flexibilidad y dinamismo de la planificación en Educación Física a
su máximo nivel, utilizando otras franjas más allá de la Educación Fí-
sica. Una de las principales ventajas, es que permite reforzar e incre-
mentar la cantidad de oportunidades de aprendizaje del alumnado utili-
zando otras franjas de tiempo extracurricular como, por ejemplo, el re-
creo escolar (Viciana y Mayorga-Vega, ).
Por tanto, su aplicación podría permitir el incremento de los niveles de
actividad física de los escolares durante la franja extracurricular del re-
creo y su consecuente contribución a la adquisición del nivel diario re-
comendado (Larson et al., ). Al mismo tiempo, el uso de este
‒ ‒
tiempo extracurricular permitiría mostrar a los escolares diferentes op-
ciones para realizar actividad física en su tiempo libre y, por tanto, pro-
mover la adquisición de unos hábitos de actividad física más saludables.
Sin embargo, para alcanzar este objetivo es imprescindible que durante
las clases de Educación Física el profesorado utilice métodos de ense-
ñanza que doten de autonomía al alumnado (Viciana y Mayorga-Vega,
).
‒ ‒
‒ Afiliación: Todos los alumnos/as que conforman el equipo,
independientemente de su mayor o menor competencia en el
deporte, son partícipes y contribuyen al éxito del equipo. Por
ello, los equipos permanecen estables durante toda la unidad
didáctica, desarrollando la afiliación al mismo. Esta afiliación
reporta ciertos beneficios como, por ejemplo, la adquisición
de diferentes roles dentro del equipo (asumiendo sus obliga-
ciones y/o competencias) o favoreciendo el fomento de la
cohesión grupal.
‒ ‒
‒ Festividad: La naturaleza festiva del deporte debe acompañar
este modelo, especialmente en el evento final de la temporada.
‒ ‒
para la enseñanza del fútbol sala. La Figura muestra el esquema de la
unidad didáctica propuesta. La presente propuesta podría ser aplicada
en el último ciclo de Educación Primaria Obligatoria y cualquier curso
de la etapa de Educación Secundaria Obligatoria.
‒ ‒
‒ La cuarta fase es la “Fase de competición formal”, en la que
los equipos se enfrentan entre sí según un calendario de com-
peticiones y que se desarrollaría en los recreos escolares.
‒ ‒
surgir durante las competiciones y cómo evitarlas o solucio-
narlas. Por ejemplo, discusiones acerca del resultado obtenido
o las decisiones arbitrales.
‒ ‒
progresar al campo contrario. Si un equipo llega con la pelota
controlada más allá de los dos conos rivales que marcan el final
del campo, anota un punto.
Nivel/
Nivel
Habili- Nivel bajo Nivel medio-alto Nivel alto
medio-bajo
dad
Conduce con el
Conduce con el pie Conduce con am- Conduce con am-
Conduc- pie
dominante con difi- bos pies, pero con bos pies con flui-
ción dominante con flui-
cultad dificultad dez
dez
Pase desviado y sin Pase desviado, Pase preciso, pero Pase preciso y
Pase
fuerza pero con fuerza sin fuerza con fuera
‒ ‒
Fase dirigida por el profesor/a. Sesiones 2 y 3
Sesión 2
‒ ‒
hay alguna duda con el reglamento o acciones dudosas, este alumno/a
participaría como árbitro para solucionar el conflicto. Este equipo va a
ir rotando cada día y todo el alumnado pasará por estos roles. En con-
creto serían:
‒ Árbitro/a-observador/a: Observan y anotan una serie de aspec-
tos de fair play y resultados del partido, cuyos elementos se
definirán en las próximas clases.
‒ Escudo o bandera.
‒ ‒
común de las preguntas respondidas para explicar el reglamento y as-
pectos técnico-tácticos del deporte. Los juegos podrían ser:
1. Juego: Pared y tiro a puerta. El alumnado hace una fila en el
centro del campo, excepto un alumno/a que sería portero y otro
alumno/a que será el encargado de realizar la pared. El
alumno/a del centro sale conduciendo el balón, pasa al compa-
ñero/a que tiene que hacer la pared, que la devuelve, controla y
tira a puerta. Las preguntas por responder podrían ser:
‒ ‒
‒ Para sacar una falta o un saque de banda, el equipo defensor
debe dejar un mínimo 5 metros de distancia al balón para co-
locar barrera (Verdadero).
Sesión 3
‒ ‒
‒ Están presentes y preparados puntualmente según el calenda-
rio (1 punto).
‒ ‒
‒ Calentamiento (Conducción de balón): Juego de cara y cruz
con balón. El alumnado se coloca por parejas en el centro del
campo, de pie y dándose la espalda. Los que están orientados
hacia la derecha son “cara” y hacia la izquierda “cruz”. Por
ejemplo, si el profesor/a indica “cara”, el alumno/a “cara” sal-
drá a coger el balón del centro (con el pie) y golpear para in-
tentar darle al alumno/a “cruz”. El “cruz” correrá hacia la línea
de fondo en línea recta para salvarse. Gana el que consiga to-
car con el balón a su pareja 3 veces.
‒ ‒
Fase de práctica autónoma. Sesiones 4-11
Sesión 4
‒ ‒
lado, realizando un regate. Posteriormente, envía el balón hacia
el compañero/a, el cual repite el mismo ejercicio.
‒ ‒
3. Los 5 pases. El equipo se divide en dos grupos de igual número
de alumnos/as y se delimita un espacio donde se desarrollará el
juego. El equipo que está en posesión del balón intenta realizar
el mayor número de pases consecutivos, mientras el equipo
contrario intenta interceptar el balón y hacerse con la función
de atacante. Adjudicaremos un punto al equipo que consiga rea-
lizar 5 pases seguidos sin que la pelota haya sido tocada por
algún alumno/a del otro equipo o haya salido de los límites del
terreno de juego.
‒ ‒
portería puede ser en precisión entre dos conos o con un com-
pañero/a colocado de portero/a.
Ejercicios de regate
‒ ‒
el tiro a puerta. Cuando acaba el tiro, el alumno/a que realizó el
tiro ocupa la posición del alumno/a que realiza el pase y el pa-
sador recoge la pelota y vuelve a la fila.
‒ ‒
el balón; Hay que tirar desde una distancia menor de 3 metros;
o tengo que dar 4 pases antes, entre otros.
‒ ‒
Sesiones 5-11
‒ ‒
partidos cada recreo según el calendario de competiciones y una rota-
ción para el duty team. De forma previa al inicio de las competiciones,
el profesor/a establecería el calendario de competiciones en formato
liga, así como designaría el equipo encargado de las labores de apoyo
(duty team) y las zonas de juego de cada partido, dejándolo colgado en
el tablón de anuncios del gimnasio para su consulta.
De este modo, cada recreo de competiciones comenzaría la primera
ronda de partidos de diez minutos de duración, y tras su finalización, se
realizaría la recogida de las hojas de registro del duty team. Posterior-
mente, se realizaría la rotación del siguiente equipo encargado de dichas
labores de apoyo y se comenzaría el siguiente partido o ronda de parti-
dos. Con esta rotación, se pretende que todos los alumnos/as implicados
tengan una participación en los recreos, no dejando a ningún equipo
exclusivamente con funciones de apoyo.
5. CONCLUSIONES
‒ ‒
escolares adquieran hábitos saludables de práctica de actividad física.
Además, mediante este modelo innovador el alumnado puede transferir
el aprendizaje del aula de Educación Física a una franja de tiempo ex-
tracurricular, aprendiendo opciones de mantenerse físicamente activo
durante su tiempo libre.
6. AGRADECIMIENTOS
7. REFERENCIAS
‒ ‒
Larson, J. N., Brusseau, T. A., Chase, B., Heinemann, A., y Hannon, J. C.
( ). Youth physical activity and enjoyment during semi-structured
versus unstructured school recess. Open Journal of Preventive
Medicine, 4, - . https://doi.org/ . /OJPM. .
Martínez de Ojeda Pérez, D., Méndez-Giménez, A. y Pérez, J. V. ( ). Efectos
del modelo Educación Deportiva en el clima social del aula, la
competencia percibida y la intención de ser físicamente activo: un
estudio prolongado en primaria. Sport TK-Revista EuroAmericana de
Ciencias del Deporte, 5( ), - .
Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. ( ). Ley / Ley Orgánica
para la Calidad de la Mejora Educativa. Boletín Oficial Del Estado, 295,
- .
Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. ( ). Real Decreto / , de
de febrero, por el que se establece el currículo básico de la
Educación Primaria. Boletín Oficial del Estado, 52, - .
Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. ( ). Real Decreto / de
de diciembre, por el que se establece el currículo básico de la
Educación Secundaria Obligatoria y del Bachillerato. Boletín Oficial del
Estado, 3, – .
Organización Mundial de la Salud. ( ). WHO guidelines on physical activity
and sedentary behaviour. Organización Mundial de la Salud
Perlman, D. ( ). The influence of the Sport Education Model on amotivated
students’ in-class physical activity. European Physical Education
Review, 18( ), – . https://doi.org/ . / X
Siedentop, D. ( ). The Sport Education Model. Sport education: Quality PE
through positive sport experiences. Human Kinetics.
Siedentop, D., Hastie, P. A., y Van der Mars, H. ( ). Complete Guide to
Sport Education (3ed.). Human Kinetics.
Viciana, J. ( ). Planificar en Educación Física. Inde.
Viciana, J. y Mayorga-Vega, D. ( ). Innovative teaching units applied to
physical education. Changing the curriculum management for authentic
outcomes. Kinesiology, 48( ), - . https://doi.org/ . /k. . .
Viciana, J., Mayorga-Vega, D. y Martínez-Baena, A. ( ). Moderate-to-
Vigorous Physical Activity Levels in Physical Education, School
Recess, and After-School Time: Influence of Gender, Age, and Weight
Status. Journal of Physical Activity and Health, 13( ), - .
https://doi.org/ . /jpah. -
‒ ‒
Viciana, J., y Mayorga-Vega, D. ( ). The three-axes model of planning in
physical education. Retos, 33, – .
https://doi.org/ . /retos.v i .
Wallhead, T. L., Garn, A. C., y Vidoni, C. ( ). Effect of a Sport Education
program on motivation for Physical Education and leisure-time physical
activity. Research Quarterly for Exercise and Sport, 85( ), – .
https://doi.org/ . / . .
Wallhead, T. L., Hagger, M., y Smith, D. T. ( ). Sport Education and
extracurricular sport participation: An examination using the Trans-
Contextual Model of motivation. Research Quarterly for Exercise and
Sport, 81( ), – . https://doi.org/ . / . .
‒ ‒
CAPÍTULO 111
1. INTRODUCCIÓN
‒ ‒
tecnológico, mientras los países del denominado tercer mundo, habita-
dos por el 76 % de la población global, solo invierten el 3,1 % (2008,
p.7).
En las tierras del llamado nuevo mundo, este tipo de formación cobra
fuerza, fundamentalmente en Estados Unidos, en los años sesenta del
pasado siglo, y algunos autores relacionan el inicio de la formación doc-
toral en este país con la necesidad de los norteamericanos de eludir el
reclutamiento para la guerra en Vietnam, de ahí que aumenten conside-
rablemente el número de doctores en los años 70 y se mantenga ese
crecimiento continuado hasta finales de los noventa e inicios de los años
2000 en Estados Unidos (Navas y Londoño, 2011).
‒ ‒
En las universidades de América Latina el surgimiento de la formación
doctoral se produce en fecha posterior, a finales de los años 80 e inicios
de los 90. Según Cruz (2006, p.1), “los programas doctorales en las
universidades latinoamericanas son pocos y de incipiente desarrollo o,
como lo sugirió, recientemente, José Luis Villaveces (2005) de presen-
cia tardía”. El propio autor precisa que únicamente el 13.0% de poco
más de 2000 universidades e instituciones de educación superior en
América Latina y el Caribe, cuentan con las capacidades necesarias
para formar doctores e investigadores.
Cruz ofrece datos muy reveladores sobre la formación doctoral en La-
tinoamérica:
no llegan a 2000 los programas de doctorado que se ofrecen y buena
parte de esta oferta se concentra en Brasil, México, Chile, Cuba, Ar-
gentina y Venezuela. Casi una tercera parte de esa oferta se encuentra
en el campo de las ciencias humanas y sociales, poco más de una cuarta
parte en las ciencias básicas y apenas una tercera parte más en ingenie-
ría, tecnología y ciencias médicas (Sebastián, 2001). Brasil es el país
latinoamericano que mayor participación (1.5%) tiene en la producción
mundial de artículos científicos, seguido de México (.7%), Argentina
(.6%) y Colombia (.1%). En el marco de los países de la OCDE, México
participa con el .7%, comparado con el 34% de Estados Unidos, 9.5%
de Japón y 3.5% de España (2006, p.1).
‒ ‒
2011; Cruz, 2006; Núñez Jover, 2002; Morles y León, 2002; López y
Almuiñas, 2019).
Algunas de las tendencias que marcan la formación doctoral en esta
parte del mundo, según Nyquist y Woodford (como se citó en Dávila,
2012) identifican entre otros rasgos: reducción de la duración de sus
programas de doctorado, a fin de lograr mejor empleabilidad; formar
egresados para que se puedan desempeñar en entornos diversos; mayor
variedad en el perfil de doctorandos para favorecer enfoques interdisci-
plinarios; mayor comprensión el entorno económico y mejor manejo de
las tecnologías de información y comunicación.
Y entre los problemas que presenta el posgrado en la región, que po-
drían ser extensivos a la formación doctoral, podrían citarse, de acuerdo
con Rama (como se citó en Dávila 2012), la carencia de integración de
los programas con las necesidades de los países; la débil investigación;
la reducida cantidad de opciones disciplinarias y cierta tendencia a la
lógica mercantil. Unido a ello se destacan las dificultades de financia-
miento y desestructuración institucional (Barsky y Dávila, 2009).
En cuanto a los objetivos que se declaran en los programas doctorales,
un breve análisis comparativo de los objetivos que la formación docto-
ral persigue en algunos países que destacan por su mayor desarrollo en
esta parte del mundo, evidencia la apuesta por el desarrollo investiga-
tivo como parte de la formación doctoral, y como resultado esperado,
el aporte de la producción de nuevo conocimiento al desarrollo de los
países como puede apreciarse en las líneas que siguen.
Núñez Jover, refiriéndose a los objetivos de la formación doctoral en
Brasil afirma:
El objetivo del doctorado se definió del siguiente modo: proporcionar
formación científica o cultural amplia y profunda, desarrollando la ca-
pacidad de investigación y el poder creador en las diferentes ramas del
saber. La maestría fue caracterizada como una etapa preliminar en la
obtención del grado de doctor o como un resultado final que revela el
dominio del tema escogido y la capacidad de sistematización. Esto úl-
timo para personas que no pretendan realizar una carrera científica. En
realidad, durante mucho tiempo prevaleció la idea de la maestría como
etapa preliminar del doctorado (2002, p.72).
‒ ‒
Pueden advertirse fuertes similitudes con la forma en que se concibe la
formación doctoral en Colombia, según Cobo y Millán:
Los programas de doctorado tienen como objetivo la formación de in-
vestigadores con capacidad de realizar y orientar en forma autónoma
procesos académicos e investigativos en un núcleo de conocimiento
profesional, disciplinario e interdisciplinario. Sus resultados serán una
contribución original y significativa al conocimiento, es decir, un
aporte al avance de la ciencia, la tecnología, las humanidades, las artes
o la filosofía. En consecuencia, los programas de maestría y doctorado
deben contribuir a fortalecer las bases de la capacidad nacional de ge-
neración, transferencia, apropiación y aplicación del conocimiento y
responder a las necesidades de formación de las comunidades académi-
cas y científicas y de desarrollo tecnológico de los sectores de la pro-
ducción (2002, p.80).
‒ ‒
orientarse a la profundización del estudio de problemas nacionales, re-
gionales y locales. Su validez tendría que expresarse en la medida en
que tal orientación se logre.
Existe en la actualidad en el Ecuador 12 programas doctorales de
acuerdo con la información pública en este sentido ofrece la Comisión
Permanente de Posgrado del Consejo de Educación Superior del país.
La siguiente tabla muestra en detalle las denominaciones de los progra-
mas, las instituciones universitarias que los ofrecen y el año en que fue-
ron aprobados.
Año de aproba-
Programas doctorales Universidades que los ofrecen
ción
Economía del Desarrollo Flacso 2014
‒ ‒
A ese dato se suma la cantidad de doctores graduados del país, pues
hasta septiembre del 2020, la Secretaría Nacional de Educación Supe-
rior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt), “registraba 431 títu-
los de Doctor o PhD de nacionalidad ecuatoriana. De esa cifra, 29 fue-
ron obtenidos en universidades nacionales y 402 en universidades ex-
tranjeras” (Revista Líderes, 2020, p.16).
La formación doctoral en universidades extranjeras presenta entre otras
dificultades: la débil o ausente cultura investigativa de muchos de los
aspirantes latinoamericanos, entre los cuales se insertan los ecuatoria-
nos; el insuficiente apoyo por parte de tutores para lograr el desarrollo
de competencias investigativas en los aspirantes; problemas de estos
para redactar textos científicos; para la búsqueda avanzada en internet,
así como para la gestión de publicación de artículos científicos. Todos
estos elementos traen como resultado la demora en la defensa de la tesis
e incluso, en no pocos casos, el abandono de los estudios doctorales, y
con ello afectaciones en la eficiencia terminal.
A ello se une otra limitación importante, y es que la selección de los
temas y los problemas de investigación está mediada por el interés de
los programas de universidades extranjeras, y no en todos los casos ese
interés coincide con las necesidades y demandas nacionales, por ello en
numerosas ocasiones, esta producción de conocimiento nuevo, a pesar
de toda su validez y legitimidad, no redunda en la totalidad de los casos
en beneficio del país de origen del aspirante.
A partir de estas reflexiones, y considerando el contexto, así como el
crecimiento del número de doctores en el Ecuador se presentan las si-
guientes interrogantes científicas: ¿sería pertinente asumir la formación
doctoral docente, mediante programas de universidades nacionales?
¿qué elementos podrían considerarse como ventajosos para acometer
ese tipo de formación desde las universidades ecuatorianas? ¿cómo va-
loran los expertos esta posibilidad?
2. OBJETIVOS
‒ ‒
‒ Profundizar en la valoración de los expertos acerca de los ele-
mentos que podrían considerarse como ventajosos para aco-
meter ese tipo de formación desde las universidades ecuato-
rianas.
3. METODOLOGÍA
4. RESULTADOS Y DISCUSIÓN
‒ ‒
en cuanto a que, en efecto, el país se encuentra alineado con esta ten-
dencia, aunque se presentan también valoraciones críticas al respecto.
En la línea de pensamiento que respalda el criterio de la inserción del
Ecuador en las tendencias internacionales, una de las expertas entrevis-
tadas apunta:
-En efecto, en la última década se ha observado un conjunto de cambios
que atraviesan la educación superior en general, siendo las transforma-
ciones más importantes e intensas las que ocurren a nivel de posgrado,
el cual posee una estructura educativa más global que local, dadas las
formas mundiales de producción de saberes, de ahí que constituye un
espacio de conformación de la educación transnacional.
En su respuesta contextualiza dicha inserción, apoyándose en el marco
institucional y legal que las norma y potencia:
En el caso ecuatoriano, las ofertas de posgrado, han estado dirigidas
hacia una formación mayoritariamente profesionalizante, sin embargo,
a partir del año 2013 el Consejo de Educación Superior del Ecuador
(CES) dio paso al nuevo Reglamento de Régimen Académico en sus
diversos niveles de formación, instaurándose un nuevo marco norma-
tivo que modifica los criterios establecidos, regulándose y reorientán-
dose el quehacer académico de las IES en un concepto de organización
y pertinencia dirigida a la incorporación de investigación y a la interna-
cionalización de las ofertas académicas de postgrado; es así como en la
actualidad el Reglamento de Régimen Académico, así como los indica-
dores de evaluación buscan el desarrollo de capacidades investigativas,
generación de conocimientos originales que constituyan un aporte sig-
nificativo a diferentes áreas del saber, a nivel de Maestrías de Investi-
gación y Doctorados, ligados a la producción de conocimientos; en ese
sentido las IES han incorporado elementos como criterios de calidad y
pertinencia en su oferta de Programas de Posgrado, por lo que en defi-
nitiva, para Ecuador constituye un avance hacia la construcción de la
Matriz Cognitiva que permita superar brechas de conocimiento y po-
breza y posicionar a las universidades como de clase mundial.
Otra de las entrevistadas, coincide con este criterio al afirmar que el
Ecuador ha comenzado a insertarse dentro de esta tendencia dado el
‒ ‒
creciente interés por parte de las universidades del país en desarrollar y
poner en práctica estudios de posgrado, tanto en maestría como en doc-
torado. Destaca, por un lado, como limitación el retraso que, en su opi-
nión, presenta el Ecuador con respecto a otros países, pero valora posi-
tivamente la posibilidad de inserción: “actualmente se abre una muy
buena ventana de oportunidad para avanzar en este sentido, al igual que
ya lo han hecho otros países hace ya tiempo”.
En el criterio contrario, pueden citarse dos de los expertos que expresan
una opinión crítica: una de ellas señala que para poder incorporarse a
las tendencias actuales, se requiere “entender el posgrado como parte
esencial del ámbito de la educación general, lo cual exige un enfoque
siempre contextualizado que permita encontrar respuestas pertinentes
relacionadas con el desarrollo continuo de las competencias profesio-
nales”, en tanto la otra opinión es mucho más crítica, al afirmar que:
“en el Ecuador no se logra entender la importancia el cuarto nivel” cree
que únicamente se considera como elemento de currículo para acceder
a empleos básicamente estatales”
En el ítem1.2: necesidad de formación doctoral del claustro universita-
rio en el Ecuador se recogieron valoraciones no sólo unánimes que res-
paldan esa necesidad, sino caracterizadas por el énfasis y la pasión de
los entrevistados en torno a esta idea.
‒ ‒
Otro experto, argumentó que definitivamente sí, se necesita masa crí-
tica, metodológicamente formada, para construir teorías en la línea de
explicar la realidad crítica en la cual construimos sociedad.
“Sí, categórico”, expresó un directivo en el campo de la comunicación,
“porque es el camino para impulsar la investigación, no solo en ciencias
duras sino en ciencia social. Si el Ecuador quiere prosperar y propender
a salir del subdesarrollo debe impulsar el estudio de cuarto nivel espe-
cialmente de Doctorados, ambos con un fuerte contenido en investiga-
ción en todo orden del saber”.
Constituye una necesidad con total seguridad lo afirmo, expresaba una
especialista en temas financieros y continuaba:
Por ello es imperativo perfeccionar la formación doctoral en las univer-
sidades ecuatorianas, de manera que favorezca eficazmente al avance
de la ciencia y de la sociedad, identificándose nuevas áreas de desarro-
llo, a partir de la oferta de programas de formación doctoral, basados
en la investigación, a mi juicio, son prioridades que deben observar las
IES para dar respuesta a las demandas económicas, sociales y de los
procesos de desarrollo que exige el país en la coyuntura actual.
Se relacionó esta necesidad con el aporte al crecimiento económico y
desarrollo social del país; con el acercamiento universidad-sociedad-
empresa; en el ámbito profesional, con la existencia de profesionales
más aptos para enfrentar sus funciones, así como con la gestión del co-
nocimiento: “la formación doctoral es una inversión en generación de
conocimiento y resulta un instrumento estratégico para la consolidación
de políticas de desarrollo, así como de creación de saberes científicos,
técnicos y humanos”, expresó uno de ellos:
Me encuentro en total acuerdo con la necesidad de que en nuestro país
se profundice el estudio científico de múltiples problemáticas, for-
mando investigadores que adopten una perspectiva amplia y de alto ni-
vel para el análisis de la realidad, que permita la creación de sinergia
interdisciplinaria, intersectorial, intercultural, y posibilite la recombi-
nación de conocimientos y saberes; dotando al país de un pilar para su
desarrollo científico
‒ ‒
Otra arista tocada fue la influencia de la formación de doctores en la
imagen de las instituciones universitarias fue valorada, argumentaba
sobre esto una encuestada:
No puede obviarse que la formación doctoral contribuye también a pon-
derar la imagen de marca de una universidad. Hoy existe, sobre todo en
Estados Unidos y Europa, una mirada a la necesidad de perfeccionar las
marcas universitarias, y precisamente la formación doctoral y las publi-
caciones emanadas de ella, forman parte de los indicadores que más
tributan a la imagen y la reputación de las altas casas de estudio.
Luego de constatado el consenso existente en relación con la necesidad
de la formación doctoral en el Ecuador, y en particular de los profesores
universitarios, era necesario profundizar en la segunda idea a considerar
expresada en los ítems 1.3 Posibilidad de incorporación de la formación
doctoral del claustro y otros profesionales desde programas nacionales,
como parte de sus ofertas de posgrado y 1.4. Posibilidad de Posibilidad
de incorporación de la formación doctoral del claustro y otros profesio-
nales parte de la oferta de posgrado de la Universidad Católica de San-
tiago de Guayaquil
‒ ‒
Esta posibilidad se ancla en la certeza del desarrollo del pensamiento
epistémico logrado en el país, y en la pertinencia de la
internacionalización de la investigación y la formación en el mundo
contemporáneo, y así, una de las respuestas pone de relieve que:
Cabe recordar que para formar doctores es necesario contar con los pro-
fesionales que posean la formación requerida para servir de tutores o
directores científicos de tesis y conformar los tribunales de evaluación
de los trabajos, para ello se deberán considerar estrategias que permitan
a las IES viabilizar dicho reto, como diseñar su oferta doctoral contando
con la asesoría de una o varias universidades internacionales con expe-
riencia en esta materia, con las cuales se deberían suscribir convenios
de participación y cooperación.
‒ ‒
El hecho de contar con una masa crítica de doctores en el país, y lo que
ello implica en cuanto al estudio de los problemas de mayor urgencia
para la nación, es uno de los elementos fundamentales para la factibili-
dad de la formación doctoral en programas nacionales, a juicio de otro
experto, quien, en ese sentido, fue categórico:
Por supuesto que las universidades ecuatorianas, en el momento actual,
están en capacidad de suplir las necesidades académicas de cuarto nivel,
y con mucha más pertinencia ante las problemáticas que acogen al país.
En la actualidad es un reto posible de afrontar, principalmente porque
cuentan con el claustro, pues hay universidades como la UCSG que in-
virtió considerables recursos en formar a sus docentes para este objetivo
a largo plazo y que hoy vería sus frutos.
Sobre la interrogante de si la Universidad Católica de Santiago de Gua-
yaquil podría contarse entre las instituciones universitarias que asuman
el reto de ofrecer programas doctorales, una directora de carrera y ex-
perta en finanzas internacionales, asevera:
La formación doctoral ocupa un sitial preponderante como área clave
de desarrollo de la UCSG, corresponde entonces organizar metodoló-
gicamente el proceso para garantizar la preparación de doctores com-
petentes y preparados para alcanzar la transformación del estado inicial
en un estado deseado de su problema de investigación que incida en el
desarrollo del país. Considero factible la formación doctoral en la
UCSG, la cual permita al estudiante adquirir dicho conocimiento y
desarrollar destrezas respecto al origen, los paradigmas y las metodo-
logías de investigación, otorgándole la capacidad de incursionar y eje-
cutar actividades académicas de excelencia, generando y aplicando co-
nocimiento de una forma original e innovadora.
‒ ‒
debe ser la generación y renovación de nuevos conocimientos, que con-
lleven a mantener la excelencia académica que siempre ha destacado a
nuestra institución.
Desde el campo de la comunicación, un entrevistado sustenta la nece-
sidad y factibilidad de la formación doctoral en periodismo y comuni-
cación, puesto que existen graduados y profesores que:
Necesitan continuar mucho más allá con sus inquietudes académicas, a
lo que se suman las necesidades de muchos profesionales del perio-
dismo y comunicación que requieren escalar un peldaño más, incluso
para aspirar a cargos más importantes o mejor remunerados. Todas esas
razones vuelven muy importante, necesario y factible, se realice una
formación doctoral en periodismo y comunicación, y quien mejor para
hacerlo que la UCSG.
Desde su posición de Director del Sistema de Radio y Televisión de la
UCSG, otro entrevistado postula:
La necesidad de avanzar, para generar nuevos niveles profesionales y
del saber, nos obliga a dar el paso de crear titulación doctoral. La UCSG
posee una carrera de comunicación de buen nivel. Es la única que posee
un sistema de medios que permiten acceder a las herramientas necesa-
rias para generar productos multimediales y transmediales, e impulsar
investigaciones. Creo que no se debe ver como opción, sino como reali-
dad mandatoria.
‒ ‒
En el campo de la economía y la administración, un especialista de
gran experiencia valora:
‒ ‒
5. CONCLUSIONES
6. REFERENCIAS
‒ ‒
Castro. J. y Balmaseda, O. (2002). Experiencias nacionales Cuba. En: Gestión de
la Calidad del Postgrado en Iberoamérica. Experiencias Nacionales.
Ediciones AUIP. https://www.auip.org/es/auip-conecta/293-espana
Carreño, C. I. (2011). Posgrados sobre desarrollo en América Latina: origen y
evolución. Revista Educación y Educadores, 14 (2).
https://educacionyeducadores.unisabana.edu.co/index.php/eye/article/vie
w/1927
Comisión Permanente de Doctorado. CES. (2021). Oferta de programas
doctorales.http://appcmi.ces.gob.ec/oferta_vigente/especializaciones/esp
ecializacion.php
Consejo de Educación Superior (2015). Reglamento de Régimen Académico.
https://www.ces.gob.ec/
Cobo, G. y Millán, S.(2002). Experiencias nacionales Colombia. En: Gestión de
la Calidad del Postgrado en Iberoamérica. Experiencias Nacionales.
Ediciones AUIP. https://www.auip.org/es/auip-conecta/293-espana
Consejo de Educación Superior (2015). Reglamento de Régimen Académico.
https://www.ces.gob.ec/lotaip/
Cruz, V. (2014). Tendencias del postgrado en Iberoamérica. Revista Ciencia y
Sociedad, 39 (4), 641-643.Instituto Tecnológico de Santo Domingo.
Cruz, V. (2006). Desafíos del postgrado y el doctorado en América Latina.
Ponencia presentada en Universidad 2006.https://www.auip.org›
archivos › PonenciaCuba06
Dávila, M. (2012). Tendencias internacionales en posgrados. Revista Integración
y Conocimiento, No. 1.
https://revistas.unc.edu.ar/index.php/integracionyconocimiento/article/vi
ew/5630
IESALC-UNESCO (2008): Declaración Final de la Conferencia Regional de
Educación Superior en América Latina y El Caribe. Cartagena de Indias,
Colombia.
Ley Orgánica de Educación Superior (LOES). (2009).
https://www.ces.gob.ec/documentos/Normativa/LOES.pdf
López, J. y Almuiñas, J.L. (2019). La eficiencia en la formación doctoral en la
educación superior latinoamericana. Revista Cubana de Educación
Superior, 2. http://www.rces.uh.cu/index.php/RCES/article/view/290
Morles, V. (1989). Educación, Poder y Futuro. Ediciones de la Universidad
Central de Venezuela.
Morles, V. y León, J.R. (2002). Los estudios de posgrado en Iberoamérica y el
Caribe. En: Gestión de la Calidad del Postgrado en Iberoamérica.
Experiencias Nacionales. Ediciones AUIP.
‒ ‒
Navas, M. y Londoño, E. (2011). Tendencias de los propósitos en la formación
doctoral en Educación Siglo XXI. Caso Región Andina. Omnia, 17 (1),
139-153. https://www.redalyc.org/pdf/737/73718406010.pdf
Navas, M. y Ruiz, V. (2004). Aproximación a la Concepción Doctoral en los
Doctorados en Educación en Latinoamérica. Memorias Congreso
Universidad 2004, p. 140-151.
Núñez Jover, J. (2010). Las políticas de posgrado, sus fundamentos conceptuales
y la largar batalla contra el subdesarrollo. En: Mollis, Núñez Jover y
García. Políticas de posgrado y conocimiento público en América Latina
y el Caribe. Desafíos y perspectivas. Consejo Latinoamericano de
Ciencias Sociales – CLACSO e Instituto de Investigaciones Gino
Germani, 1ra edición. p. 57-134
Núñez Jover, J. (2002). Evaluación académica, posgrado y sociedad. En: Gestión
de la Calidad del Postgrado en Iberoamérica. Experiencias Nacionales.
Ediciones AUIP.
Revista Líderes. (2020). La formación de más PHD genera retos al Ecuador.
https://www.revistalideres.ec/lideres/formacion-phd-genera-retos-
ecuador.html.
8. ANEXOS
‒ ‒
Dra. Teresa Alcívar, profesora de la UCSG y Directora de la Maestría en
Finanzas Internacionales de la Universidad Católica de Santiago de
Guayaquil.
Dra. Verónica Peña, Profesora investigadora de la Universidad Católica de
Santiago de Guayaquil, experta en temas de educación,
internacionalización y gestión educativa.
Dra. Ana Teresa Badía, profesora investigadora de la Universidad de La Habana,
experta en formación de posgrado, formación doctoral y en temas de
periodismo, comunicación y TIC.
Dr. Alberto Franco, Director del Sistema de Radio y Televisión de la Universidad
Católica de Santiago de Guayaquil y experto en temas de comunicación
audiovisual y convergencia de medios.
Dr. Cristian Cortés, profesor invitado de diversos programas de posgrado de
Universidad Católica de Santiago de Guayaquil, y experto en temas
culturales, educativos y comunicación.
Dr. Lenin Hurtado, profesor de la Universidad Católica de Santiago de
Guayaquil, experto en temas de ciencias jurídicas.
‒ ‒
CAPÍTULO 112
DANIEL MAYORGA-VEGA
Departamento de Didáctica de la Expresión Musical, Plástica y Corporal
Uniersidad de Jaén
España
SANTIAGO GUIJARRO-ROMERO
Departamento de Educación Física y Deportiva, Universidad de Granada
España
CAROLINA CASADO-ROBLES
Departamento de Educación Física y Deportiva, Universidad de Granada
España
‒ ‒
(Caspersen et al., 1985). Lamentablemente, la capacidad cardiorrespi-
ratoria de los escolares ha ido disminuyendo en las últimas décadas
(Tomkinson et al., 2019), convirtiéndose hoy en día en un problema a
nivel mundial (Tomkinson et al., 2016). En concreto, de media, en la
actualidad entre los escolares el 46% de las mujeres y al 33% de los
varones presentan un nivel de capacidad cardiorrespiratoria no saluda-
ble (Tomkinson et al., 2016). Por tanto, la consecución en los escolares
de unos niveles saludables de capacidad cardiorrespiratoria es una cues-
tión prioritaria de salud pública (Tomkinson et al., 2017; World Health
Organization, 2018).
La edad escolar es un periodo de la vida crucial, puesto que el estilo de
vida se establece durante estos años, pudiendo influir en la conducta y
el estado de salud cuando lleguen a la edad adulta (Longmuir et al.,
2014). La Organización Mundial de la Salud recomienda que los esco-
lares deberían realizar al menos, de media, 60 minutos diarios de acti-
vidad física de intensidad moderada-vigorosa a lo largo de la semana
(World Health Organization, 2020). Sin embargo, en la actualidad a ni-
vel mundial alrededor del 80% de los escolares no cumplen con las re-
comendaciones de actividad física (Guthold et al., 2020). La promoción
de la práctica regular de actividad física en los escolares que les permita
alcanzar unos niveles saludables de capacidad cardiorrespiratoria se
puede realizar desde múltiples contextos (Mayorga-Vega, 2020). Entre
ellos, la escuela, y especialmente la asignatura de Educación Física, tie-
nen un papel clave en el desarrollo de unos niveles saludables de capa-
cidad cardiorrespiratoria en los escolares (Association for Physical
Education, 2020). De hecho, en la mayoría de los currículos educativos
de Educación Física aparece la mejora de la capacidad cardiorrespira-
toria como uno de los objetivos principales a conseguir con la asigna-
tura (European Commission/EACEA/Eurydice, 2013; Ministerio de
Educación Cultura y Deporte, 2014).
‒ ‒
Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO)
(UNESCO, 1962). Según dichas recomendaciones, la planificación se
asoció con la evolución de la sociedad, atendiendo las necesidades fu-
turas de los escolares más que las actuales, dando lugar a la planifica-
ción a corto y largo plazo de conceptos aplicados a las etapas educati-
vas. En este sentido, la recomendación número 18 de la UNESCO
(1974, p. 8) indicaba que “la planificación institucional debe estar diri-
gida a asegurar la máxima eficiencia y flexibilidad”. Como resultado
de dicha recomendación, en el ámbito educativo la planificación se ha
asociado teóricamente a las características de flexibilidad, eficiencia y
basada en objetivos (Viciana, 2002). Todas las naciones, dependiendo
de su propia política educativa, características socio-culturales y socio-
económicas, factores políticos e ideológicos, así como influencias ex-
ternas, han desarrollado sus currículos educativos a partir de los cuales
las comunidades autónomas y centros escolares programan sus metas
educativas de acuerdo al perfil general de sus escolares y sus caracte-
rísticas comunitarias. Siguiendo estas metas educativas planificadas por
los centros, el docente de Educación Física programa la asignatura
adaptando su enseñanza a los escolares (Kelly & Melograno, 2004;
Viciana, 2002).
La planificación de la Educación Física es entendida como un proceso
de toma de decisiones del docente en el cual influye numerosos factores
como, por ejemplo, la formación inicial, el currículo de enseñanzas mí-
nimas, el entorno, la experiencia docente, la experiencia de actividad
física, la socialización con otros docentes, los materiales e instalacio-
nes, el centro educativo o el nivel de preparación de la asignatura
(Viciana & Mayorga-Vega, 2017). En este sentido, en el contexto de la
Educación Física, Viciana (2002, p. 12) define la planificación como
“una función reflexiva del docente que consiste en organizar flexible y
sistemáticamente los contenidos del currículo de Educación Física y la
intervención docente, en función de los objetivos educativos, para pre-
ver, justificadamente, un plan futuro de actuación eficaz”. Una de las
estructuras de la planificación más utilizadas en Educación Física ha
sido basado en la unidad didáctica, también conocida como unidad de
instrucción (Viciana, 2002). Sin embargo, contrario a las características
‒ ‒
que teóricamente definen a la planificación, la unidad didáctica ha sido
tradicionalmente concebida como un número particular de sesiones
(completas) consecutivamente impartidas para trabajar un objetivo u
objetivos curriculares (Viciana, 2002). Con respecto a la toma de deci-
siones del profesorado de Educación Física para planificar la asigna-
tura, por ejemplo, las características de las unidad didácticas para con-
seguir desarrollar el aprendizaje deseado en los escolares (es decir, tipo,
duración, frecuencia, contenidos, o metodología), el periodo máximo
de desentrenamiento sin que dicho aprendizaje llegue al nivel basal, así
como los refuerzos necesarios para mantener el aprendizaje previa-
mente alcanzado debería estar basada en la mejor evidencia científica
que haya mostrado unos resultados satisfactorios en relación con el ob-
jetivo particular que deseamos conseguir (Mayorga-Vega et al., 2020).
‒ ‒
dedicado a la asignatura de Educación Física es especialmente reducido
durante la etapa de Educación Secundaria Obligatoria donde el tiempo
relativo de las clases se reduce a menudo en beneficio de otras aéreas
curriculares (European Commission/EACEA/Eurydice, 2013). Por
ejemplo, de media, en los países europeos se pasa de dedicar a la asig-
natura de la Educación Física un 9-10% del tiempo curricular en la
etapa de Educación Primaria a tan solo 6-8% en la etapa de Educación
Secundaria Obligatoria (European Commission/EACEA/Eurydice,
2013).
Junto con el escaso tiempo curricular asignado a la asignatura, una se-
gunda limitación es el hecho de que los docentes de Educación Física
tienen que desarrollar un gran volumen de objetivos y contenidos curri-
culares durante el curso académico (Guijarro-Romero et al., 2019;
Viciana, Mayorga-Vega, & Merino-Marban, 2014). Por ejemplo, el cu-
rrículo de enseñanzas mínimas de Educación Primaria de la comunidad
autónoma de Andalucía establece siete objetivos generales del área que
los docentes de Educación Física tienen que alcanzar con sus escolares
a través de cuatro grandes bloques de contenidos (el cuerpo y sus habi-
lidades perceptivo motrices, la Educación Física como favorecedora de
salud, la expresión corporal: expresión y creación artística, y el juego y
el deporte escolar) (Consejería de Educación Cultura y Deporte, 2015).
En tercer lugar, se encuentran las continuas interrupciones de las clases
de Educación Física a lo largo del curso escolar debido a diferentes
contingencias como periodos vacacionales (por ejemplo, navidad, se-
mana santa o días festivos), condiciones meteorológicas (por ejemplo,
lluvia, nevada, o frío o calor extremo), actividades académicas (por
ejemplo, excursiones, seminarios o talleres) o suspensión de clases (por
ejemplo, huelgas o pandemias sanitarias) (Guijarro-Romero et al.,
2019; Viciana, Mayorga-Vega, & Merino-Marban, 2014).
Una cuarta limitación de la planificación de la Educación Física es la
coincidencia horaria con otros grupos que realizan la asignatura y la
necesidad de utilizar las mismas instalaciones y/o materiales (Guijarro-
Romero et al., 2019; Viciana, Mayorga-Vega, & Merino-Marban,
2014). Por ejemplo, en caso de coincidencia horaria de clases, a la hora
de planificar el profesorado de Educación Física también se tiene que
‒ ‒
coordinar con los otros docentes del área para asegurarse de que tienen
disponible el material e instalaciones necesarios. En quinto lugar, en
numerosas ocasiones la distribución de las clases de Educación Física
no se basa en criterios relacionados con la actividad física (Guijarro-
Romero et al., 2019; Viciana, Mayorga-Vega, & Merino-Marban,
2014). En este sentido, por ejemplo, en algunos centros las clases de
Educación Física se imparten en días consecutivos, dando lugar a que
no se descanse adecuadamente para la segunda sesión, así como que
pasan un número elevado de días sin realizar actividad física desde que
finaliza la segunda sesión, especialmente si se tiene en cuenta que el
80% de los escolares solo realizan actividad física durante las clases de
Educación Física (European Commission/EACEA/Eurydice, 2013).
Otro ejemplo es el hecho de que cuando las clases se ubican a primera
o última hora de la mañana donde, dependiendo de la zona geográfica
en la que se ubique, en el centro escolar las temperaturas pueden ser
excesivamente bajas o elevadas, respectivamente (Guijarro-Romero et
al., 2019; Viciana, Mayorga-Vega, & Merino-Marban, 2014). También
la clase de Educación Física a primera hora de la mañana puede hacer
que muchos escolares no cumplan con el tiempo de espera recomen-
dado entre el desayuno y la práctica de actividad física. Por último, otra
limitación de la planificación de la Educación Física, especialmente re-
lacionado con el desarrollo de la condición física, es el hecho que los
niveles obtenidos decrecen después de un periodo de desentrenamiento
(Guijarro-Romero et al., 2019; Viciana, Mayorga-Vega, & Merino-
Marban, 2014). Por ejemplo, después de un programa de desarrollo, los
niveles de condición física de los escolares vuelven al nivel basal en
varias semanas (Carrel et al., 2007; Guijarro-Romero et al., 2021a).
‒ ‒
hasta 10 unidades didácticas por curso escolar, y el 19,6% planificaba
con 11 o más unidades didácticas. De forma similar, Robles Rodríguez
et al. (2010) reportaron que hasta el 72,5% del profesorado en servicio
planificaba cuatro o más unidades didácticas de deportes, cuando los
deportes representan, por ejemplo, tan solo uno de los cuatro grandes
bloques de contenidos del currículo de Andalucía (Consejería de
Educación Cultura y Deporte, 2015). Concretamente sobre la condición
física, comúnmente se proponen unidades didácticas de 4-6 sesiones
(dos sesiones/semana) con el objetivo de mejorar la condición física
(por ejemplo, Aragón Bonilla, 2016).
Esta práctica habitual provoca que los escolares estén continuamente
esforzándose por aprender (cometiendo errores y reconduciendo su pro-
pio aprendizaje), y cuando apenas lo consiguen (si lo consiguen), se
cambia el tipo de aprendizaje (es decir, comienza otra unidad didáctica)
(Viciana, Mayorga-Vega, & Cocca, 2014). Dicho procedimiento es
poco motivador, ya que tiene como consecuencia enfrentar siempre al
alumnado con una tarea en la que fracasa, en lugar de permitirle seguir
en situación de éxito (Viciana, Mayorga-Vega, & Cocca, 2014). Ade-
más, la unidad didáctica tradicional está basada en la consecución de
objetivos aislados mediante contenidos aislados, no estableciendo rela-
ciones entre objetivos curriculares de otras unidades didácticas y, con-
secuentemente, no consiguiendo aprendizajes significativos (Viciana &
Mayorga-Vega, 2016). Por último, en el mejor de los casos donde los
escolares realmente consigan alcanzar ese aprendizaje al final de la uni-
dad didáctica, dado que después se pasa a nuevas unidades didácticas y
no se refuerzan los aprendizajes previamente adquiridos, a las pocas
semanas el aprendizaje conseguido se habrá perdido (Viciana,
Mayorga-Vega, & Cocca, 2014).
A pesar de todas las dificultades previamente mencionadas, estudios
empíricos previos han demostrado la eficacia de las unidades didácticas
tradicionales de corta duración para mejorar los niveles de condición
física de los estudiantes en el ámbito de la Educación Física (Guijarro-
Romero et al., 2021b; Mayorga-Vega et al., 2013, 2016). Las unidades
didácticas tradicionales se estructuran en varias sesiones completas
consecutivamente impartidas y centradas en un solo objetivo curricular
‒ ‒
(Viciana, 2002). Sin embargo, con estas unidades didácticas tradicio-
nales (es decir, trabajar toda la sesión durante varias sesiones seguidas
para alcanzar un único objetivo) solo se lograría el propósito de mejorar
la condición física y, posteriormente, considerando el limitado tiempo
curricular asignado a la asignatura de Educación Física (European
Commission/EACEA/Eurydice, 2013; Hardman et al., 2014), habría
que desarrollar una gran cantidad de objetivos curriculares en un pe-
ríodo reducido de tiempo. Además, en las unidades didácticas anterior-
mente mencionadas el aprendizaje fue aislado, sin vínculos con otros
contenidos que permita obtener un aprendizaje más significativo
(Viciana & Mayorga-Vega, 2016).
Basada en la concepción original de la planificación (es decir, flexible,
eficaz y basada en los objetivos educativos), y una distribución innova-
dora del tiempo de aprendizaje de la unidad didáctica a lo largo de la
programación anual, Viciana y Mayorga-Vega (2016) proponen las uni-
dades didácticas innovadoras con el objetivo de resolver los diferentes
problemas con los que se encuentran los docentes de Educación Física
a la hora de llevar a cabo la planificación. Concretamente, el modelo de
unidad didáctica intermitente consiste en la realización de unidades di-
dácticas basadas en franjas de la sesión en vez de sesiones completas
(por ejemplo, calentamiento, una parte de la parte principal o vuelta a
la calma) (Figura 1). De este modo, este modelo de unidad didáctica
permite trabajar dos o más objetivos curriculares relacionados durante
la misma sesión. Por tanto, manteniendo el tiempo de práctica en un
mismo contenido curricular, las unidades didácticas intermitentes per-
miten aumentar la frecuencia de práctica durante el curso académico,
además de conectar el aprendizaje entre dos o más contenidos durante
las mismas sesiones. Por último, este modelo de unidad didáctica con-
sigue el desarrollo y mantenimiento del aprendizaje de manera más efi-
caz, evitando el desentrenamiento que suele ocurrir tras realizar una
unidad didáctica tradicional (Viciana & Mayorga-Vega, 2016).
‒ ‒
FIGURA 1. Unidad didáctica (UD) tradicional vs. intermitente (calentamiento, primera mitad
de la parte principal y vuelta a la calma)
‒ ‒
escolares de Educación Primaria y Educación Secundaria Obligatoria,
respectivamente. Los hallazgos mostraron que unidades didácticas in-
termitentes de pocos minutos de duración por sesión (1-4 minutos), du-
rante 2 sesiones semanales, mejoraban la flexibilidad de la musculatura
isquiosural. Además, las unidades didácticas realizadas durante la
vuelta a la calma parecían más efectivas que durante el calentamiento.
Asimismo, los estiramientos estáticos como dinámicos eran igualmente
efectivos.
‒ ‒
ser más intensos que los deportes de espacios separados (por ejemplo,
bádminton) (Hellin et al., 2019). Por último, además de los contenidos
en general, para lograr el objetivo de mejorar los niveles de condición
física de los escolares con la unidad didáctica intermitente, los docentes
de Educación Física deberían llevar a cabo estrategias adicionales
como, por ejemplo, mediante estrategias de enseñanza tales como una
selección efectiva de las actividades, la organización y gestión de la
clase o la instrucción (Lonsdale et al., 2013).
‒ ‒
clases de Educación Física como, por ejemplo, carrera continua, entre-
namiento en circuito, juegos de carrera o fartlek. En la segunda mitad,
los escolares realizarían tareas para aprender aspectos técnicos y tácti-
cos de deportes de invasión como, por ejemplo, fútbol sala y balon-
cesto. Las sesiones finalizarían con una vuelta a la calma de 5 minutos
aproximadamente. Por ejemplo, se podrían realizar una actividad ligera
como caminar lentamente por la pista deportiva y/o estiramientos está-
ticos. Como se ha indicado previamente, el/la profesor/a deberá poner
énfasis en alcanzar una intensidad de moderada a vigorosa al menos el
50% del tiempo de la sesión. A continuación, se expone un esquema de
las actividades a realizar en durante la parte principal de cada sesión de
las unidades didácticas intermitentes.
Sesión 1
5.2. SESIÓN 2
‒ ‒
Pases en desplazamiento. Ejercicios de conducción más pase al compa-
ñero.
5.3. SESIÓN 3
Sesión 4
5.5. SESIÓN 5
‒ ‒
Deportes de invasión (18-20 min): Fútbol sala: Ejercicios de 1 vs 1 y 2
vs 2 cambiando de opositor/es. 2 vs 2 + 1 comodín. Todos los ejercicios
sin finalización.
5.6. SESIÓN 6
5.7. SESIÓN 7
5.8. SESIÓN 8
5.9. SESIÓN 9
Condición física (18-20 min): 3 x 3,5 min carrera rápida. 1,5 min recu-
peración entre series. 5 min del juego de meter la pelota en la caja: Por
‒ ‒
equipos, uno del equipo lleva una caja de folios con cuerdas como si
fuese una mochila (fabricada por ellos en la clase de plástica). El obje-
tivo es conseguir encestar el mayor número de veces. La caja va rotando
por los miembros del equipo cada vez que se consigue un punto.
Deportes de invasión (18-20 min): Baloncesto: Conducción/ manejo li-
bre de balón por el espacio. Conducción/ manejo libre de balón por el
espacio robando y golpeando el balón de los demás. Ídem los dos ante-
riores, pero limitando el espacio. Conducción/ manejo en ziz-zag entre
conos. Conducción/ manejo de balón y pases con el compañero ha-
ciendo una pared. Rondo por equipos de 5-6 estudiantes.
5.10. SESIÓN 10
5.11. SESIÓN 11
Condición física (18-20 min): 2 x 9,5 min Fartlek con distancias donde
correr más rápido, subir cuestas, subir escaleras, etc. 1 min de descanso
entre series. 5 min del juego el Quema con varias pelotas.
Deportes de invasión (18-20 min): Baloncesto: Ejercicios de lanza-
miento, desde parado, en desplazamiento después de conducir el balón,
con la pierna dominante y no dominante, después de recibir el pase de
un compañero. Lanzamientos en suspensión y con los pies en el suelo.
‒ ‒
Lanzamientos desde diferentes posiciones (recorrido de la bombi-
lla/zona de baloncesto). Entradas a canasta. Juego del 21.
5.12. SESIÓN 12
5.13. SESIÓN 13
5.14. SESIÓN 14
5.15. SESIÓN 15
‒ ‒
cono (4-5 m), elevación de rodillas sobre banco sueco, aperturas de bra-
zos y piernas, burpees.
Deportes de invasión (18-20 min): Baloncesto: Situaciones de igualdad
numérica con y sin condiciones como en la sesión 14.
5.16. SESIÓN 16
6. CONCLUSIONES
‒ ‒
tareas relacionadas con la condición física desarrolladas a lo largo de la
parte principal de la sesión lo que además podría reducir la percepción
de un alto esfuerzo físico continuo de los escolares.
7. AGRACEDIMIENTOS
8. REFERENCIAS
‒ ‒
Castillo Garzón, M., Ortega Porcela, F., & Ruiz Ruiz, J. (2005). Mejora de la
forma física como terapia antienvejecimiento. Medicina Clínica, 124(4),
146–155. https://doi.org/10.1157/13071011
Consejería de Educación Cultura y Deporte. (2015). Orden de 17 de marzo de
2015, por la que se desarrolla el currículo correspondiente a la
Educación Primaria en Andalucía. Boletín Oficial de La Junta de
Andalucía, 9–696.
Consejería de Educación y Deporte. (2021). Orden de 15 de enero de 2021, por la
que se desarrolla el currículo correspondiente a la etapa de Educación
Primaria en la Comunidad Autónoma de Andalucía, se regulan
determinados aspectos de la atención a la diversidad, se establece la
ordenación de la e. Boletín Oficial de La Junta de Andalucía. Boletín
Extraordinario Número 7 de Lunes, 18 de Enero de 2021, 1–1024.
European Commission/EACEA/Eurydice. (2013). Physical Education and sport
at school in Europe.
Guijarro-Romero, S., Casado-Robles, C., & Mayorga-Vega, D. (2019). Unidades
didácticas reforzadas, alternadas, irregulares e intermitentes como
herramienta para desarrollar y mantener un nivel saludable de capacidad
cardiorrespiratoria a través de la Educación Física. In S. Alonso García,
J. Romero Rodríguez, C. Rodríguez-Jiménez, & J. Sola Reche (Eds.),
Investigación, Innovación docente y TIC. Nuevos horizontes educativos
(pp. 232–244). Dykinson.
Guijarro-Romero, S., Mayorga-Vega, D., Casado-Robles, C., & Viciana, J.
(2021a). Effect of a four-week detraining period on secondary school
students’ cardiorespiratory fitness: A cluster-randomized controlled trial.
Medicina Dello Sport.
Guijarro-Romero, S., Mayorga-Vega, D., Casado-Robles, C., & Viciana, J.
(2021b). School physical education-based reinforced program through
moderate-to-vigorous physical activity improves and maintains
schoolchildren’s cardiorespiratory fitness: A cluster-randomized
controlled trial. Science & Sports.
https://doi.org/https://doi.org/10.1016/j.scispo.2020.12.011
Guthold, R., Stevens, G., Riley, L., & Bull, F. (2020). Global trends in
insufficient physical activity among adolescents: A pooled analysis of
298 population-based surveys with 1.6 million participants. The Lancet
Child & Adolescent Health, 4(1), 23–35. https://doi.org/10.1016/S2352-
4642(19)30323-2
Hardman, K., Murphy, C., Routen, A., & Tones, S. (2014). UNESCO-NWCPEA:
World-wide survey of school Physical Education. United Nations
Educational, Scientific and Cultural Organization.
‒ ‒
Hellin, M., Garcia-Jiminez, J., & Garcia-Pellicer, J. (2019). Intensity of Physical
Education lessons in children according to the type of activity: Soccer,
badminton, aerobics and motor skills. Journal of Physical Education and
Sport, 19(1), 148–155.
Kelly, L., & Melograno, V. (2004). Developing the Physical Education
curriculum. An achievement-based approach. Human Kinetics.
Longmuir, P., Colley, R., Wherley, V., & Tremblay, M. (2014). Risks and
benefits of childhood physical activity. Lancet. Diabetes and
Endocrinology, 2(11), 861–862.
Lonsdale, C., Rosenkranz, R., Peralta, L., Bennie, A., Fahey, P., & Lubans, D.
(2013). A systematic review and meta-analysis of interventions designed
to increase moderate-to-vigorous physical activity in school physical
education lessons. Preventive Medicine, 56(2), 152–161.
https://doi.org/10.1016/j.ypmed.2012.12.004
Mayorga-Vega, D. (2020). Recomendaciones sobre actividad física, conducta
sedentaria y sueño en escolares de Educación Primaria. In M. Molero
Jurado, A. Martos Martínez, A. Barragán Martín, M. Simón Márquez,
M. Sisto, R. del Pino Salvador, B. Tortosa Martínez, J. Gázquez Linares,
& M. Pérez Fuentes (Eds.), Variables psicológicas y educativas para la
intervención en el ámbito escolar. Nuevas realidades de análisis (pp.
247–258). Dykinson S.L.
Mayorga-Vega, D., Casado-Robles, C., & Guijarro-Romero, S. (2020).
Planificación en Educación Física mediante unidades didácticas
innovadoras: Desde la teoría a la evidencia científica. In G. Gómez
García, M. Ramos Navas-Parejo, C. Rodríguez Jiménez, & J. de la Cruz
Campos (Eds.), Teoría y práctica en investigación educativa: Una
perspectiva internacional (pp. 1777–1790). Dykinson S.L.
Mayorga-Vega, D., Montoro-Escaño, J., Merino-Marban, R., & Viciana, J.
(2016). Effects of a physical education-based programme on health-
related physical fitness and its maintenance in high school students: A
cluster-randomized controlled trial. European Physical Education
Review, 22(2), 243–259. https://doi.org/10.1177/1356336X15599010
Mayorga-Vega, D., Viciana, J., & Cocca, A. (2013). Effects of a circuit training
program on muscular and cardiovascular endurance and their
maintenance in schoolchildren. Journal of Human Kinetics, 37(1), 153–
160. https://doi.org/10.2478/hukin-2013-0036
Merino-Marban, R., Fuentes, V., Torres, M., & Mayorga-Vega, D. (2021). Acute
effect of a static- and dynamic-based stretching warm-up on standing
long jump performance in primary schoolchildren. Biology of Sport,
38(3), 333–339. https://doi.org/10.5114/biolsport.2021.99703
‒ ‒
Ministerio de Educación Cultura y Deporte. (2014). Real Decreto 126/2014, de
28 de febrero, por el que se establece el currículo básico de la Educación
Primaria. Boletín Oficial Del Estado, 19349–19420.
Raghuveer, G., Hartz, J., Lubans, D. R., Takken, T., Wiltz, J. L., Mietus-Snyder,
M., Perak, A. M., Baker-Smith, C., Pietris, N., Edwards, N. M., & null
null. (2020). Cardiorespiratory fitness in youth: An important marker of
health: A scientific statement from the American Heart Association.
Circulation, 142(7), e101–e118.
https://doi.org/10.1161/CIR.0000000000000866
Robles Rodríguez, J., Giménez Fuentes-Guerra, F., & Abad Robles, M. (2010).
Motivos que llevan a los profesores de Educación Física a elegir los
contenidos deportivos en la E.S.O. Retos, 18, 5–8.
https://doi.org/10.47197/retos.v0i18.34642
Tomkinson, G., Lang, J., Tremblay, M., Dale, M., LeBlanc, A., Belanger, K.,
Ortega, F., & Léger, L. (2017). International normative 20 m shuttle run
values from 1 142 026 children and youth representing 50 countries.
British Journal of Sports Medicine, 51(21), 1545–1554.
https://doi.org/10.1136/bjsports-2016-095987
Tomkinson, G. R., Lang, J. J., & Tremblay, M. S. (2019). Temporal trends in the
cardiorespiratory fitness of children and adolescents representing 19
high-income and upper middle-income countries between 1981 and
2014. British Journal of Sports Medicine, 53(8), 478–486.
https://doi.org/10.1136/bjsports-2017-097982
UNESCO. (1962). New methods and techniques in education: Report of a
meeting of experts. Paris, 12-20 March, 1962.
UNESCO. (1974). Revised recommendation concerning technical and vocational
education. UNESCO at its 18th session, Paris, November 1974.
Viciana, J. (2002). Planificar en Educación Física. INDE.
Viciana, J., & Mayorga-Vega, D. (2016). Innovative teaching units applied to
physical education - Changing the curriculum management for authentic
outcomes. Kinesiology, 48(1), 142–152.
Viciana, J., & Mayorga-Vega, D. (2017). Influencing factors on planning
decision-making among Spanish in-service Physical Education teachers.
A population-based study. Electronic Journal of Research in
Educational Psychology, 15(3), 491–509.
https://doi.org/10.14204/ejrep.43.16112
Viciana, J., Mayorga-Vega, D., & Cocca, A. (2014). Modelo de aprendizaje
exitoso en educación física y su mantenimiento. Estudio del efecto del
refuerzo intermitente sobre la condición física. Revista Iberoamericana
de Psicologia Del Ejercicio y El Deporte, 9(1), 155–171.
‒ ‒
Viciana, J., Mayorga-Vega, D., & Merino-Marban, R. (2014). Physical education-
based planning for developing and maintaining students‘ health-related
physical fitness levels. In R. Todaro (Ed.), Handbook of physical
education research: Role of school programs, children´s attitudes and
health implications (pp. 237–252). Nova Science Publishers.
Viciana, J., Mayorga-Vega, D., & Mompeán Campillo, M. (2016). Cumplimiento
de los estándares curriculares de condición física-salud en Educación
Física. Estudio de la planificación en la formación inicial. Cultura,
Ciencia y Deporte, 11(12), 87–95.
https://doi.org/10.12800/ccd.v11i32.709
World Health Organization. (2018). Global action plan on physical activity 2018-
2030: More active people for a healthier world.
World Health Organization. (2020). WHO guidelines on physical activity and
sedentary behaviour.
‒ ‒