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LAS

CASAS DE RELIGIOSOS EN CATALUÑA


DURANTE EL

PRIMER TERCIO DEL SIGLO XIX


LAS

CASAS DE RELIGIOSOS
EN CATALUÑA
DURANTE EL

PRIMER TERCIO DEL SIGLO XIX


POR

D. CflYETfllMO B ñ í ^ ñ Q U E ^ Y f^OVl^ñLTñ

CANÓNIGO CHANTRE DE LA CATEDRAL DE BARCELONA

TOMO II

?
BARCELONA

IMPRENTA DE FRANCISCO J. ALTÉS Y ALABART


Calle de los Ángeles, núms. 22 y 24
1906
CAPÍTULO OCTAVO. - DOMINICOS

ARTICULO PRIMERO

REAL CONVENTO DE DOMINICOS DE BARCELONA, BAJO EL TÍTULO DE

SANTA CATALINA, VIRGEN Y MÁRTIR


DOMINICOS 7

y unas ocho ó diez casitas juntas que ha-


bía comprado para la fábrica del conven-
to á un tal Aguilar y Monfart, junto al
Call-juich, esto es la aljama ó judería.—
ATota.—Estas casas ocupaban sin duda el
terreno en que hoy se halla la isla limi-
tada por las calles del Cali, Santo Do-
mingo, Marlet y Arco de San Ramon.—
En esta residencia el día de Viernes
Santo de 1222 tomó el hábito de dicha
religión San Raimundo de Peñafort, na-
tural del castillo de este nombre en Cata-
luña, canónigo y arcediano hasta enton-
ROCEDIA ces de la Santa Iglesia. Las reducidas
este tí- dimensiones de la capilla que los religio-
tulo del sos habían edificado eran desproporcio-
de la nadas con el numeroso concurso de fieles
antigua que á ella acudían al rezo del Santo Ro-
capilla sario ; bien así como la estrechez del
á la que el cenobio convento bastaba apenas para los indivi-
sustituyó, según na- duos de la Orden, é impedía de todo
r r a la historia de los punto ulteriores admisiones; por cuyos
hechos, que Pi y Ari- motivos los PP. Predicadores tuvieron
món escribe como que trasladar aquella devoción á la ve-
s ¡ gue: « Empuñaba cina parroquial de San Jaime Apóstol.
el báculo episcopal Pero en 31 de octubre de 1223 el magis-
fde esta ciudad el be- trado municipal les cedió unas casas para
nemérito D . Beren- construir nuevo convento en el lugar de
guer de Palou, cuando vol- una capilla consagrada á Santa Catalina
viendo de la Corte pontificia Virgen y Mártir, que corresponde hoy
romana, adonde lo llama- (1854) á la plaza de este nombre, calle de
ron importantes asuntos, y las Freixnras,» etc.
pasando por Bolonia, pren- «Hacia el año 1252 el templo estaba ya
dado del celo apostólico que levantado hasta el arranque de los arcos;
tuvo ocasión de admirar en y por no alcanzar las liberalidades de los
los Religiosos de la Orden devotos particulares á concluir obra tan
de Predicadores, fundada suntuosa, el rey D. Jaime I de Aragón
por el español Santo Domin- concedió un derecho impuesto sobre las
go de Guzmán, les suplicó mercancías que se descargaban en el
muy vivamente que viniesen á establecer Puerto de Barcelona para costear el re-
su instituto en Barcelona bajo su especial mate de la fábrica. Ya en el citado 31 de
amparo y protección. Aunque por el octubre de 1223 el mismo Rey había otor-
pronto no pudo ver cumplidos sus deseos, gado á la Orden el privilegio de extraer
logrólo sin embargo en 1219, en cuyo año de la Azequia Condal el agua necesaria
los PP. Dominicos llegaron á este país. para el consumo de la casa y el riego de
El Prelado les proporcionó cierta exten- la huerta contigua... Y á fin de estimular
sión de terreno propio de Pedro Gruny, el celo de todos dio prematuramente el
título de Real al convento que se levan-
taba.»
NOTA.—La inicial de este capítulo fue copiada de un libro
de coro de los Benitos de San Feliu de Guíxols.
«En 1268 estaban ya concluidas algunas
s CAPITULO OCTAVO

capillas colaterales, costeadas por los no- tonces también muy estrecha calle de
bilísimos Don Berenguer y Doña Blanca Colomines y plazuela de Santa Catalina.
de Moneada, cuyos restos yacían en una Por O., 1.° con esta plaza, 2.° c'on la calle
urna embutida en la pared de la de San del Tragí y 3.° con la de Freixuras,
Jacinto, donde una inscripción perpetua- igualmente muy angosta, que comenzaba
ba la memoria de aquellos ínclitos bien- en la boca septentrional de la del Tragí
hechores...» (1). Según revelaban las lí- para terminar en la Baja de San Pedro,
neas del templo, la construcción de éste sin alargarse por lo tanto más al Medio-
continuó en el siglo xiv. día de dicha boca de la del Tragí. Y final-
El autor hasta aquí copiado nos ha di- mente, por N. dibujaban el límite del
cho ya el lugar de la Condal ciudad donde convento, ó mejor de su huerta, los jar-
se hallaba la grandiosa fábrica de Santa dincitos traseros de las casas de la calle
Catalina; y cuando esto no fuera, á voces Baja de San Pedro. La huerta, pues, ocu-
lo pregonan el nombre del mercado que paba el lado de Cierzo, desde los indica-
ocupa su solar y la memoria de mil an- dos jardincitos hasta el convento, cuj7a
cianos. Al comenzar de mi siglo xix el línea, comenzando en la actual fuente pú-
convento lindaba por Oriente parte con blica de frente la calle de Avellá, corría
los muros traseros de las casas de la calle hacia NE. no sin hacer, adelantado ya el
de La Claveguera; parte con un pasaje recorrido, un recodo y por lo mismo un
interior que del recodo de esta calle, y ángulo saliente hacia montaña. Así suce-
siguiendo hacia S. la misma dirección día que desde allí el resto del edificio,
general de ella, salía por la casa número aunque corriendo á NE., quedaba avan-
5 y 7 actual de la de Gombau á ésta; par- zado dentro de la huerta.
te con el lado occidental de la primera El convento, formado por dos claustros
casa de esta calle; y finalmente con la y el mentado brazo que se metía en la isla
calle de Giralt Pellisser, entonces muy y de Claveguera, Fonollar y Gombau, ha-
muy estrecha, la que por su cabo N. no llábase en el centro de la gran fábrica; y
llegaba más que hasta la boca de la de el templo con su patio delantero en el
Gombau. El indicado pasaje interior era límite meridional. En el período consti-
llamado del nombre de las casas de uno tucional, ó sea de 1820 á 23, los revolu-
y otro de sus cabos (daba á las dos calles) cionarios derribaron la parte de con-
pasaje de Casa Vidal; y tenía una capi- vento que daba á la calle del Tragí, y se
llita, ó nicho, con una imagen de la Vir- prolongó la calle de Freixuras desde la
gen Inmaculada, hoy guardada en una fuente hasta la plazuela de Santa Cata-
casa de la calle de La Claveguera; y lina, quedando desde entonces limitado
además tenía también un patio al cual el convento por O. por esta calle.
salían las grandes ventanas con rejas de En el lugar apellidado hoy plazuela de
la biblioteca del convento (2). La actual Santa Catalina, precedía en 1835 al fa-
calle de Alvarez no existía. moso templo, (que extendido á lo largo de
Por S. lindaba el convento con la en- la calle de Colomines, tenía los pies á
Poniente y el ábside á E. en la calle de
Giralt Pellicer), un patio, entre cuyas cer-
(1) D. Andrés Avelino Pi y Arimón. Barcelona anti- cas y las casas vecinas corría una calle-
gua y moderna. Barcelona, 1854. Tomo I, págs. 562 y 563. juela. De él da curiosas, aunque antiguas,
(2) Debo las noticias del pasaje á la relación de D. An-
tonio Moratones, hecha en Barcelona á 2 de octubre de noticias un manuscrito que se guardaba
1882, y á varias otras relaciones del monacillo de este con- en el archivo del convento, el cual dice
vento D. Jaime Torallas, hechas en Barcelona á 2 de ene-
r o y 27 de febrero de 1887, 21 de mayo y 3 de junio de 1888; así: «Nota dels títols pertañents á la ad-
y las del lindero oriental del convento al mismo y á planos quisició del terreno que en 1822 era
de Barcelona, y á otras fuentes tales como las relaciones
del P. Romualdo Espinas, fraile de este convento, que más
pórtico y pati devant la iglesia de S.'a
adelante citaré Catharina. = Part del sobredit terreno
DOMINICOS 9

fou donat al Convent per scntentiri, en el margen: Calen, fol. 22 Tocant á lo


1252, per D. Berenguer de Palau.» que antes eran sepulturas y capellas per
«La restant part del terreno ais 13 motiu de haber caigut ¡os claustros que
deis idus de octubre de 1320 en poder de estaban atovats y podridas las higas se
Bartomeu Vilalta Not. Pub. de Barcelo- destroiren la major part de las sepultu-
na Sibilla muller de Pere Clascar ab ras.» Este claustro cementerio no llegó á
consentiment de son marit vengué á los últimos tiempos del cenobio, y en los
Fr. Bernat Puigcercós Prior y al Con- suyos abarcaba mayor área ó espacio que
vent, que consistia en un espay de terra la actual plazuela, según lo demuestra el
en franch alou que tenia entre lo seu mismo manuscrito al escribir que «En
hort y lo Convent prop la iglesia conti- 1830 se obriren las sanjas per los fona-
guo al terreno que fou de Berenguer ments de la reedificado del derribo cons-
Palau; del cual espay sen destina part titucional, y en iotas las de devant de la
per lo cementiri, que's tanca ab parets, iglesia se han trobat sepulturas y una
y altre part per un carrer que asenyalá multitut de ossos que se han recu-
lo Convent; per preu de 65 lliuras barcs lli•/» (l).
(En el margen Pergam. lletra C. n.° 44.) En 1835 precedia, pues, al templo, cuyo
« Comensá la pietat dels fiéis á adornar frontis quedaba como unos 5 metros más
dit cementir ab magnificas sepulturas, retrasado que las actuales edificaciones
tí vista de lo que se animà lo Convent d del mercado, este patio, rodeado de una
cubrir lo voltant del cementiri ab voltas cerca cuya puerta de entrada se abría en
cuberías ab molta perfecció formant un el lado de Poniente, ó sea frente de la
clauslro que servía per la decencia de iglesia, la cual puerta sostenía en lo alto
las sepulfuras y juntament per fer las un Santo Domingo colocado en un nicho,
professons los diumenges ó altres festes y estaba cerrada por una verja de hierro.
segons acostuma aquest Convent, y á Cruzada esta puerta, tenía el visitante á
imitació de la capella de N.& S. a de Mi- su derecha primero la parte trasera de
sericordia erigida per Bernat Olceto una alta casa propia del convento, y lue-
antes de 1265, que era ahont es ara la go la capilla de Nuestra Señora de Gra-
capella de San Ramon, altres devots cia; á su frente la fachada del templo,
erigiren lambe allres capellas al rede- lisa, sencilla, no sin un hermosísimo ro-
dor del cementiri, una de esias fou la setón en lo alto y en lo bajo un pórtico
capella de S. a Bárbara sobre la qual saliente de labrada piedra de tres arcos,
habia una campana bastant gran ab las y en la izquierda la cerca. En el centro
armas dels Palous, en un chapitell es- del pórtico abríase la grandiosa puerta
taban las armas del Rey (En el margen mayor de la iglesia, y en su testera NO.
Perga. B. n.° 64), en la sepultura que los la de la portería del convento (2), así co-
artillers lenian en esla capella esíaban mo en la de SE. la de la dicha capilla de
las armas imperials de bronce, y en ella la Virgen de Gracia. La imagen de esta
feyan las funcions. En laporla hi habia capilla consistía en una pintura.
una reixa que donaba al clauslro. Altra Penetremos en el templo á cuya entra-
de ditas capellas era dedicada á S. Ce- da se desplegaba ante los ojos la gran-
brià, que erigí Francisco Armengol... diosa perspectiva de una hermosísima
Altre á S. Honofre y S. Blay en la que nave central gótica, parecida á la del
D. Alonso Meca tenía sepultura. En lo Pino, si algo, muy poco, menor en la an-
paratge ahont estaba N.' S' de Gracia, chura, mayor en la longitud, y dos late-
qual capella derriba lo gobern constitu-
cional,... tambe hi habia magnifichs se- en Manuscrito que perteneció al archivo de Santa Ca-
pulcres; entre altres lo de D. Pere de talina, y me lo prestó el P. Romualdo Espinas.
(2) Debo estas noticias del patio á muchos testigos que
S. Climent y lo de D. Jaume Carles. (En lo vieron.
10 CAPÍTULO OCTAVO

rales. Su arquitectura, según explica el tos, «cuyos arcos se apoyaban en los ma-
experto arquitecto Don José Casademunt, chones divisorios de las capillas,»es decir,
que vio el templo y dibujó su plano, «su en los muros que de unas separaban las
arquitectura, repito, era de estilo gótico otras capillas: «la cubierta del presbite-
de muy buen gusto tanto en la forma to- rio constaba de una sola bóveda com-
tal, como en la delicadeza de sus deta- puesta de ocho aristas; cuyos arcos, des-
lles». Ni podía ser menos datando la cansando sobre unos resaltos de machón,
construcción de los dos mejores siglos situados en los ángulos del expresado po-
del arte ojival, anteriores al xv que inició lígono, remataban en una gran clave,
la decadencia. «Contenía una gran nave colocada en el centro de la bóveda.»
central y dos laterales, en las que estaban «La altura de los machones, contada
colocadas las capillas,» todo de pulidos desde el pavimento hasta el arranque de
y obscuros sillares de piedra, sin colores los arcos, era de 73 palmos (Í4'i8 me-
ni postizos adornos en la nave central, lo tros), la altura ó sagita de los arcos tora-
que daba al templo el majestuoso y severo les era de 57 (11'08 metros), y la de las
aspecto de nuestra basílica. «Posterior- aristas de las bóvedas de 59 [IV48 me-
mente á la edificación de las referidas tros); de modo que la altura total de la
naves, se ensanchó la de la parte dere- referida nave era de 130 palmos [25'26
cha,» ó de la Epístola, «en cuya obra se metros) contados desde el suelo hasta la
colocaron las capillas,» ó mejor retablo, parte superior del intradós de dichos ar-
«que existían en la nave primitiva. No cos torales, y de 132 [25'66 metros) has-
guardaba ninguna relación esta obra con ta la clave de las aristas de las bó-vedas.»
la primitiva... señalando su forma que su El célebre pintor y profesor de Bellas Ar-
antigüedad no se remontaba más allá del t e s ' D . Luis Rigalt, cuando sepultado en*
siglo xvi.» cama en 1894 esperaba tranquila y cris-
«Tenía la nave principal 286 palmos tianamente el golpe de la Parca, me decía
catalanes de longitud (55'59 metros) que recreaba el ocio del lecho paseando
contados desde la parte interior de la pa- su imaginación por el templo de Santa
red de la fachada hasta la cara opuesta Catalina y admirando aquella bóveda.
de la pared testera del presbiterio; de és- Era tal la acertada y sólida disposición
tos había 220 (42'76 metros) hasta dicho de ella que, cuando en días siniestros se
presbiterio, el cual estaba elevado unos quiso derribarla, no hubo medio de abatir
tres palmos del piso del templo, y los 66 sus arcos transversales, y menosprecian-
(12'82 metros) restantes era la profundi- do la seguridad de los edificios vecinos, se
dad del propio presbiterio: éste remataba tuvo que acudir á barrenos colocados en
en un semipolígono de diez lados. El an- sus arranques. ¡Tanto empeño hubo en
cho de la misma nave, contado desde la acabar con Santa Catalina!
moldura más saliente de un machón» de «Las distancias de los machones no
un lado «á la de su opuesto» de otro, «era eran iguales..., de cuya inexactitud resul-
de 77 palmos (14'96 metros), angostán- tó la desigualdad de las capillas,» pues
dose en el presbiterio, en el que quedaba unas eran más anchas que otras, bien
sólo de 74 palmos». (14'38 metros). De que, siendo poca la diferencia, el ojo no
donde resulta que, si á esta nave le falta- experimentado apenas lo notaba- «El
ban cuatro palmos, ó mejor dicho, 0'74 frente de estos machones,» 6 sea el frente
metro para llegar á la amplitud de la del del muro que separaba á una capilla de
Pino, en cambio le sobraban 0'69 metro otra, «estaba adornado con molduras con-
sobre la longitud. torneadas con curvas cóncavas y conve-
«Cubrían esta nave hasta el presbiterio xas, de diferente estructura en cada una
siete bóvedas por arista,» ó sea una bóve- de ellas,» es decir, con esos manojos de
da ojival dividida en siete compartimien- columnitas ó baquetas que rodean las co-
DOMINICOS
u
lumnas de nuestra Catedral, «de diferente da llorarán siempre los amantes de las
estructura en cada uno de ellos, forman- bellezas artísticas.»
do en la mayor parte de los mismos unos «Además de lasventanas indicadas, exis-
resaltos delicados y de muy buen gusto. tían en el presbiterio siete de 50 palmos
Estaban sentados estos machones sobre (9'72 metros) de altura por 13 (2'52 me-
un zócalo de ó palmos de altura (/ metro tros) de ancho,» fila de ventanales que
ó mejor O197). A la altura total de estos corría por debajo de la fila arriba dicha.
machones,» ó sea en su parte superior, «Estas últimas ventanas, si bien estuvie-
«seguía una cornisa de poco más de un ron en uso por algún tiempo, al presente
palmo» de anchura, «la que recorriendo estaban tabicadas, lo que seguramente se
todo el interior de la nave, contornaba ejecutó al tiempo de construir la nueva
dichos machones, formando una especie sacristía y capilla del Sacramento, á cau-
de capitel.» sa de que esta obra, impidiéndoles la luz,
Los arcos de entrada en las capillas se las dejaba enteramente inutilizadas,» y
apoyaban en unos capiteles formados de además tapaba algunas el gran retablo
hojas en los lados de los machones, á 50 moderno. «Las demás ventanas de que se
palmos (971 metros) de altura. «La for- ha hecho mención estaban adornadas con
ma de los arcos era la de los llamados vidrios de distintos colores, los que, á más
apuntados {punta de almendra), excepto de producir muy buen efecto, servían
el tercero de la parte derecha entrando al para modificar la luz.»
templo, que tenía la figura de una semi- «Debajo del rosetón de la fachada y á
elipse peraltada,» ó sea, que se le había los 40 palmos {7'77 metros) de elevación
substituido por una curva la punta supe- del suelo, estaba colocado el coro, cuyo
• rior. «Todos ellos remataban 5 palmos ancho ocupaba toda la extensión de la
{0'97 metros) más abajo de la expresada nave mayor, y su fondo la distancia que
cornisa.» abarcaban las dos últimas capillas. Esta
«Sobre los arcos de las capillas,» así co- obra, si bien hecha al estilo de la del tem-
mo alrededor déla parte superior del ábsi- plo, contaba mucha menos antigüedad,
de, había colocadas veintiuna ventanas, pues antes estaba colocado, según el uso
hoy llamados vulgarmente ventanales, de las antiguas iglesias, al centro de la
«que corrían todas á un nivel por la par- nave principal.»
te superior, teniendo trece de ellas 50 pal- «Las antiguas capillas laterales tenían
mos (9'72 metros) de altura, seis sólo 20 de fondo 30 palmos (5' 20 metros) cada
(3'90 metros) y las dos restantes 11 (2'13 una..., cubiertas por una bóveda por aris-
metros), siendo el ancho de todas igual á ta,» es decir, gótica, «á la altura de 70
11 palmos.» El vano ó abertura de tales palmos {13'60 metros) de su pavimento.
ventanales venía dividido por dos colum- Éste estaba un palmo más elevado que el
nitas, y en la parte superior por calados de la nave principal por medio de una
radiados, «excepto las que daban al pres- grada...» (1). Sin embargo, las capillas
biterio, que carecían de ellos. A la misma
altura de las referidas, y al centro de la (1) Todas las anteriores noticias relativas á la parte
arquitectónica del templo están tomadas de la preciosa
fachada principal, había otra ventana ó relación técnica escrita en 1837 por el arquitecto D. José
claraboya circular, de 45 palmos- {8'76 Casademunt, quien por encargo de la Junta de Comercio
levantó los planos de dicho templo, sacristía, aula capitu-
metros) de luz,» es decir, el gran rosetón, lar y claustro del mismo convento. Con muy acertado
enteramente igual al de la fachada de la acuerdo, y adicionado con una atinada disertación propia,
Catedral de Tarragona y al de la iglesia la dio á luz en Barcelona en 1886 el hijo del indicado señor,
muy querido amigo mío, D. Adriano, arquitecto también,
del monasterio de San Cugat del Vallés. y de no vulgar nombradía. Los párrafos copiados arriba
«Esta ventana era la mejor en su clase de se leen en dicha obra, cuyo titulo es Santa Catalina, á
págs. de la 13 á la 16. Me limité á copiarlos y á añadirles
todas las de los edificios góticos que po- en las medidas en palmos las equivalencias en metros, y
seíamos en esta ciudad, obra cuya pérdi- así como alg'unas aclaraciones en términos vulgares de los
12 CAPÍTULO OCTAVO

del lado del Evangelio, tercera y cuarta Su elevación era la misma que la de las
del que entra por la puerta principal, ca- restantes capillas, siendo de creer que
recían de clave en su bóveda, la que en todas se construyeron en una misma épo-
modernos siglos había sido substituida ca» (2).
por una linterna, ó sea uno como temple- Hasta aquí la parte arquitectónica del
te rodeado de ventanillos. No así en el interior del templo; antes de salir de él
lado opuesto del templo, donde todas las examinemos sus retablos y adornos, co-
capillas antiguas, ó góticas, conservaban menzando por el mayor de aquéllos. Un
sus bóvedas y sus claves (1). anciano, de mi familiaridad, en su niñez
Unía á unas capillas con otras un des- monaguillo de Santa Catalina, bajo cuyo
ahogado paso de 2'50 metros de anchura, techo por lo mismo con sus compañeros
situado no en el centro de los machones de oficio vivía, recordaba, y me reseñó,
ó muros divisorios, sino junto á la pared los menores detalles tanto del templo
exterior, circunstancia que claramente cuanto del convento. De entre ellos me
muestra que, según el arquitecto cons- repitió mil veces la fecha de la construc-
tructor, los retablos debieron primitiva- ción del retablo mayor en él esculpida,
mente estar colocados de espaldas al 1688, la que de sí da gran luz sobre el
mayor. gusto que lo dibujó, que no fué otro que
Las capillas del lado de la Epístola ex- el llamado barroco. Consistía en la mesa,
perimentaron en tiempos del Renacimien- siete gradas y el desahogado sagrario de
to un notable ensanche, pues derribado la exposición empotrado en el fondo de
su muro del fondo, fueron prolongadas él. A los lados corría un alto basamento,
más allá de su línea en 6'47 metros. «Es- que llegaba al nivel del mentado sagra-
tas capillas estaban decoradas con unas rio, y tenía una puerta en cada uno de
pilastras dóricas sin base, las que, junto aquéllos. Además adelantaba un brazo
con el zócalo en que descansaban, tenían por cada costado de la gradería. Sobre
36 palmos {7l05 metros) de altura, sobre este basamento se apoyaban tres grandes
las que se apoyaban unos arcos de medio columnas por lado, salomónicas y atesta-
punto {redondos), que por el auxilio de das de esculturas de hojas y angelitos á
unas pechinas sostenían unas cúpulas es- ellas adheridas como hiedra. Estas colum-
féricas ó elipsoides, siendo la más nota- nas no venían colocadas en línea recta,
ble la de la capilla dicha de San Raimun- sino en triángulo, ya que dos de cada
do por las bellas pinturas con que estaba lado se levantaban junto á la pared del
adornada.» fondo, j la tercera delante del par, sobre
el brazo saliente del basamento. En el
«Al extremo de estas capillas, al lado»
centro del retablo un inmenso nicho con-
meridional «del presbiterio, estaba la ca-
tenía la colosal y gigantesca imagen de
pilla del Sacramento,» colocada de tal
la titular, de pie apoyada sobre la acos-
guisa que su eje quedaba paralelo al del
tumbrada media rueda erizada de garfios.
templo. Su forma y carácter era análogo
En lo alto terminaba al retablo una muy
al de las últimamente «mencionadas, es-
adornada cornisa, que seguía la misma
tando cubierto su centro con una cúpula,
forma del basamento, y sostenía un fron-
en cuyo centro tenía una linterna que
tón triangular con un florón á cada lado
comunicaba luz al interior de la capilla.
y en el centro una estatua de la Fe. Otras
dos, que á su vez representaban las otras
técnicos. Ni debe nadie inculparme por las copias, pues
nunca mi ignorancia y falta de maña llegará á la destreza
dos virtudes cardinales, ocupaban los la-
en describir de quienes tanta competencia poseían. dos del retablo en el basamento sobre
(1) Relaciones muy circunstanciadas del ex monacillo las indicadas puertas. La única imagen
de Santa Catalina D. Jaime Torallas. Hechas en mil oca-
siones, pero respecto del particular en Barcelona á los ¿6
de febrero de 1895.—Un dibujo de D. Pablo Rigalt, padre
del referido D. Luis. (2) D. José Casademunt. Obra citada, pág. 17.
DOMINICOS 13

que en este altar se veneraba era la de retablos y un armario. El principal de


Santa Catalina. Todo en él lucía por su aquéllos ofrecería á la pública venera-
grandiosidad, prolijo adorno y rico do- ción, según costumbre entonces invaria-
rado (1). ble, á Jesucristo crucificado. Los latera-
Los muros laterales del presbiterio les se hallaban colocados en la parte
quedaban ocultos en la parte baja por una superior de la nave de la capilla. Uno de
caja-banco provista de elevados respal- ellos presentaba la Asunción de la Vir-
dares divididos en compartimientos ver- gen (6) y el otro San Pío V. Bajo la mesa
ticales, cada uno de los cuales en lo alto de uno de los cuales se guardaba en una
terminaba con un círculo, por el que aso- urna parte de la cama en que dormía San
maba medio cuerpo de un Santo dominico, Ignacio de Loyola cuando viniendo á
todo ello de escultura y dorado (2). Sobre Barcelona se hospedaba en el convento
los respaldares y círculos se extendía un de dominicos (7). En la parte inferior del
inmenso lienzo al óleo en cada lado del muro de la capilla y al lado del Evange-
presbiterio, de los cuales uno presentaba lio adornaban la pared los indicados gran-
á Santo Domingo y el otro á Santa Catali- des armarios, uno de los cuales, bajo la
na, virgen y mártir, lienzos de «un mérito apariencia de tal, ocultaba la puerta que
particular» (3). En las más solemnes festi- comunicaba con el presbiterio, y por la
vidades del año el mal gusto de los últimos que acudían á dar la Comunión los frai-
tiempos ocultaba estos lienzos tras exten- les (8). También brillaba en esta capilla
sos y riquísimos damascos. Las dos gran- una tabla del siglo xv, que representaba
des lámparas de la barandilla de entrada la aparición de Cristo á la Magdalena,
al presbiterio pendían, una del pico de pintada por Fr. Pablo Senis, religioso que
una monumental águila y la otra de la fué de esta casa (9).
boca de un igualmente notable león, am- La puerta principal de la capilla del
bos de bronce (4). Las puertas de los la- Santísimo abríase en la primera capilla,
dos del retablo ya nombradas daban res- ó más próxima al presbiterio, en el lado
pectivamente, la del lado del Evangelio de la Epístola. Ésta, entre dicha entrada
al oratorio de la tras-sacristía destinado á la de la Comunión y la nave del templo,
á dar gracias después de la santa Misa, y tenía un retablo colocado de espaldas al
la de ía Epístola al pasillo que de la sa- mayor, y en el fondo, ó muro meridional,
cristía conducía á la capilla del Santí- una de las puertas del mismo templo, la
simo (5). llamada de San Jacinto, que dio nombre á
Pasemos ahora á reseñar las capillas la calle, hoy subsistente, que desemboca-
laterales. La del Santísimo, cuyo lugar y ba frente de ella. Dijéronme que esta
arquitectura arriba indiqué, contenía tres puerta cobijaba en el tímpano una her-
mosa imagen de alabastro, de la Virgen,
(1) Relaciones del ex monacillo D. Jaime Torallas; de gótica, que he visto en un museo particu-
D. Felipe Carranca, que tenía un hermano fraile de Santa lar (10). En la misma capilla había el altar
Catalina y frecuentaba el templo; de D. Luis Rigalt; de
D. Cayetano Estalella, empleado de la cocina del conven-
de San Antonio, cuya imagen hoy {1900),
to; del Padre Jaime Ros, religioso del mismo convento; y so- colocada en un retablo de Santa Marta, es
bre todo la vista de un facsímile del retablo,hecho por un
lego del convento.
(6) Relación del fraile de este convento P . Jaime Ros.
(2) Mil relaciones, unas del nombrado Torallas y otras
En Barcelona 10 de febrero de 1882.
de otros. (7) Relaciones del fraile de este convento P. Romualdo
(3) Memoria descriptiva de la antigua iglesia y con- Espinas. Barcelona 24 de marzo de 1882, y del P. Jaime
vento de Santa Catalina de esta ciudad, diluidos en el Ros.
año 1837: leída por el socio D. Andrés Pi y Arimón, en (8) Relación citada del P. Jaime Ros.
la sesión literaria del 15 de morsa de 1842.—Inédita.— (91 Villanueva. Viaje literario. Tomo XVIII, páginas
Academia de Buenas letras de Barcelona.—Se lee á pá- 180 y 181 . . ,. , . .,
gina 13. (10) Tiene 47 centímetros de altura. L a vi en 16 de abril
'4) Relaciones de los nombrados D. Jaime Torallas, don de 1895 en el museo que tenía en Martorell D. Francisco
Felipe Carranca y otros. I Santacana.
(5) Relaciones de D. Jaime Torallas.
1-t CAPITULO OCTAVO

de mármol blanco, mide 1'60 metro, y da machón y de espaldas al retablo mayor,


testimonio de la no común habilidad del apoyábase el de San Magín de Tarra-
escultor que la ideó (1). gona ó de Brufagaña, mártir (cuya esta-
Bajando hacia la fachada, la segunda tua se halla hoy en un lado del retablo
capilla de este lado de la Epístola en el de San José en la Esperanza); y en el
machón, ó sea entre la nave y el pasillo fondo el de San Jacinto (8). Frente del
que unía á las capillas, y por lo mismo primero de estos retablos, en la mis-
de espaldas al presbiterio, ostentaba el ma capilla, veíase un hermoso y grande
retablo de San Pedro Mártir (2), cuya lienzo que representaba el milagro del
imagen de tamaño natural, de talla, he ermitaño San Magín cuando, para satis-
visto por mis ojos en un altar del actual facer la sed de sus perseguidores, hizo
convento de Beatas dominicas; yen el fon- con el báculo brotar del suelo una fuente.
do el del Santo Patriarca de Guzmán (3). Todo curioso puede aún hoy examinar
En esta capilla estaba depositada «una este cuadro en el fondo de la capilla
espina de la corona de Cristo, dádiva de de San José, de la iglesia de los Santos
San Luis, Rey de Francia, cuya carta Justo y Pastor, donde se halla (9). Des-
original se guarda en el archivo {de este cansaba en esta capilla, según dije arriba,
convento) fecha en París en noviembre de Don Berenguer de Moneada, muerto en
1262» (4). La misma capilla guardaba en Sevilla á 13 de noviembre de 1268. «Su
un sarcófago gótico los restos del vene- cadáver, insiguiendo su última disposi-
rable P. Cendra, prior que fué de esta ción, fué trasladado á esta ciudad con el
casa, quien, según narraba su epitafio, de su esposa, que se hallaban depositados
obró milagros y murió en olor de santi- con los restos de sus hijos en una urna
dad, por cuyo motivo la Orden pide hoy cuadrilonga, de piedra, sostenida por dos
su canonización (5). He aquí las palabras hipógrifos de mal gusto, embutida en la
del citado epitafio, ó laude: «Hic jacet ve- pared de la derecha de la capilla de San
nerabais P. Fr. Petrns Cineris qui dum Jacinto, y en la que, con caracteres pin-
viveret XIV cecos illuminavit IV sur- tados sobre la madera inmediata, se leía
dos restituit auditu VII claudos cura- este epitafio» (10). «En esta urna descansan
vi t et V alios paralíticos et XXIV infir- los huesos de los E s S. S. D. Berenguer
mos vivendi spe amissa sanavit obiit D a Blanca de Moneada, y de sus Illtres
MCCXLIV"(6). hijos desde los años 1263 y 1769 otros de
nuestros primeros bienhechores...» (11).
El machón que de la siguiente separaba
esta capilla, sostenía el magnífico pulpito, Caminando para los pies del templo, la
de una sola pieza de piedra hermosísima- capilla cuarta presentaba á la pública
mente esculturada (7). veneración la Virgen del Rosario en una
En la tercera capilla, arrimado á este riquísima imagen de tamaño natural, de
mármol blanco, obra de Tomás Orsoli-
(1) L a he visto en varias ocasiones. Relaciones citadas
no (12), regalada al convento por el Papa
de D. Jaime Torallas de 20 de diciembre de 1894, de don
Felipe Carranca de 24 de junio de 1884, y de otros.
(2) Relación del citado D. Felipe Carranca.
(3) Relaciones de Torallas y Carranca. (8) Relaciones de Torallas y de Carranca.
(4) Villanueva. Obra citada. Tomo XVIII, págs. 200 (9) Relación de D. Jaime Torallas de 2 de enero de 1895.
y 201. (10) D. Andrés Pi y Arimón.—Memoria descriptiva,
(5," Relación citada del P. Jaime Ros. citada, pág. 15.
(6) D. Antonio de Campmany. Inscripciones sepulcra- (11) D. Antoniode Campmany. Inscripciones sepulcra-
les que se hallan en varias timas y lápidas en algunos les que se hillan en varias urnas y lápidas en algunos
templos y claustros de la Ciudad de Barcelona. Manus- templos y claustros de la Ciudad de Barcelona. Inédito.
crito de la Biblioteca de la Academia de la Historia.— Se hallan en la Academia de la Historia. Madrid.—Pape-
Papeles Coresmar.—Memorias históricas.—D. 103. Madrid. les Caresmar.— Memorias históricas. Manuscrito, D. 103.
(7) Relaciones de Torallas de 10 de junio de 1888 y 10 de (12) Relación del catedrático del Instituto provincial,
enero de 1895, de Carranca de 24 de junio de 1884 y de don nacido en el vecindario de Santa Catalina, D. Simeón
Cayetano Estalella de 11 de enero de 1894. Tuyet. Hecha en Barcelona á los 19 de agosto de 1880.
DOMINICOS 15

San Pío V (1). Hoy (mayo de 1900) esta sells, según Ceán Bermúdez, y de el del
imagen ocupa altar propio en el crucero mismo Viladomat según Pi y Arimón y
de la iglesia de Santa Marta. El retablo, Fontanals del Castillo (4). La gran pro-
aunque plenamente barroco, brillaba por fundidad, que como todas las de su lado
la prolijidad y riqueza de sus dorados tenía esta capilla, las estatuas y lienzos
adornos, los que extendiéndose fuera de que la rodeaban, y el riquísimo adorno
los límites de aquél, tapizaban toda la que tapizaba todos los muros y techo, le
capilla hasta dar con la nave mayor, daban un aspecto inusitado de magnifi-
motivando así la carencia del acostum- cencia.
brado altar del machón. El nicho prin- La quinta capilla tenía en el machón,
cipal cobijaba bajo un templete con cor- y de espaldas al presbiterio, el altar de
tinajes la dicha imagen, la que por sobre Santa Magdalena, bajo cuya mesa se
del esculturado mármol estaba vestida guardaba el sarcófago con los huesos de
al uso del siglo xvni; con cuyo motivo Vifredo (Jofre) de Blanes, compañero de
poseía esta Virgen riquísimos vestidos, San Vicente Ferrer, y del cual este Santo
adornados de perlas y piedras preciosas. se servía para predicar cuando él no po-
A sus lados tenía arrodillados, recibiendo día efectuarlo por sí (5). En el fondo de
el rosario, á Santo Domingo y á Santa la capilla el altar de San Raimundo de Pe-
Catalina de Sena, imágenes de tamaño ñafort. Este, con pertenecer, como digo,
natural, de escultura,colocadas hoy en el al fondo, venía también colocado de es-
altar del Rosario de San Agustín. En el paldas al mayor, porque derribados los
derrame ó abocinado del muro que rodea- muros que frente del altar separaban
ba el retablo, veíanse siete pinturas re- esta capilla de las ulteriores, formaba
presentando sendos misterios del rosario, ella una pequeña iglesia, situada como la
y en las dos esquinas exteriores de este del Remedio de la parroquia de San Jai-
abocinado, colocadas sobre pedestales, me de Barcelona, es decir, paralela á la
las estatuas de David y Salomón, así nave principal. El retablo tenía camarín,
como en otros lados de la capilla los diez desde el que asomaba en el nicho princi-
otros Patriarcas de la Antigua Ley. Al pal la imagen del Santo (6). Tras de la
derredor del retablo y pinturas seguían mesa y algunas gradas aparecía el mag-
luego los acostumbrados pares de ánge- nífico y grande sarcófago gótico, de már-
les, cornisas y flores propios del gusto mol blanco, que se halla ahora en la ca-
barroco (2), alternados con preciosos lien- pilla del mismo Santo, en nuestra Cate-
zos. Cuatro de éstos, de nueve pies de dral, el que contenía entonces entero, y
longitud, que representaban misterios de hoy descoyuntado, su cuerpo. Descansa-
la vida de Cristo, procedían del diestro ba el sarcófago sobre columnas de már-
pincel de Antonio Viladomat (3); así como mol obscuro, de la altura de una perso-
otro gigantesco y precioso que mostraba na (7), y por entre ellas los devotos
la venida del Espíritu Santo, de el de Cro- alargaban el brazo, y con la punta del
dedo tocaban al Santo, mediante un agu-
(1) P i y Ariraón. Barcelona antigua y moderna. Te-
mo I, pág. 564.
(2) Relaciones de Torallas, de Tuyet y de otros. He visto (4) D. Juan Ceán Bermúdez. Obra citada. Tomo I, pá-
y he fotografiado un precioso grabado ó lámina antigua gina 377. D. Andrés Pi y Arimón en la Memoria descrip-
cuyo título dice así: «V.° (verdadero) Ret.° (retrato) de la tiva, ya citada, pág. 13.—D. J. Fontanals del Castillo. Un
Virgen del Rosario como se venera en su propia Capilla recuerdo de Antonio Viladomat... Barcelona 1872, pági-
del convento de Santa Calhalina V.» y M.' Orden de Pred.» na 15. En cambio ni Pi ni Fontanals mentan, al hablar de
de Barz.™ Diez y seis 111.»» y Rvr.»"' SS. Arzob." y Obis- Viladomat, los cuatro anteriores lienzos.
pos de España concedieron 680 dias de Indulg.» á los q re- (5) Relación del P. Jaime Ros, citada.
zaren una Ave María delante de dicho Retrato.—Matheo (6) Relación de D. Felipe Carranca, de 24 de juaio de
Gonzáles lo g r a v ó en Zaragoza.» 1884.
(3) D. Juan Ceán Bermúdez.—Diccionario histórico de (7) Relación citada de D. Simeón Tuyet, de 19 de agosto
los más ilustres profesores de las Bellas Artes. Tomo V, de 1880. El Sr. Tuyet fué uno de los que extrajo del sepul-
pág. 239. cro el cuerpo santo p a r a salvarlo en 1835.
16 CAPITULO OCTAVO

jero practicado en la cara inferior de mundo tendido sobre ella, todo protegido
la urna (1). El Crucifijo necesario para por una verja de hierro que recorría los
la Misa, ó sea de la grada, gozaba gran cuatro lados de su derredor. La piedra
celebridad, no sólo por el marfil que lo ocultaba la hoya donde primitivamente
formaba y su mérito artístico (2), sino, y descansó el cadáver del Santo (9). La
principalmente, por haber pertenecido al abertura todo el año permanecía cerrada,
mismo Santo y haber recibido sus ora- pero el día de la festividad del Santo era
ciones (3), y por gozar de las indulgencias abierta, y la cavidad iluminada toda por
de la visita á las cinco basílicas de Ro- una lámpara (10). Contaban los religiosos
ma (4). El muro de la misma capilla os- que con extraersede ella anualmente para
tentaba un lienzo que representaba al satisfacer á la piedad de los fieles gran
Santo confesando al Rey (5). Esta peque- cantidad de tierra, capaz de llenar cuatro
ña iglesia de San Raimundo tenía también ó seis barriles, nunca se vio bajar el ni-
coro alto en sus pies, al que se entraba vel de su suelo (11). La losa se ve hoy bajo
por una silla del coro mayor, en la apa- la mesa del altar de la capilla del mismo
riencia tal, pero en la realidad puerta (6). Santo de nuestra Catedral.
A este coro de San Raimundo supongo L a sexta capilla sostenía en el machón
perteneció una prenda que de Santa Ca- el retablo de Santo Domingo en Soriano,
talina guarda el Museo municipal arqueo- cuya imagen, guardada actualmente en
lógico de Barcelona, que no es otra que Santa Marta, consistía en un hermosísimo
un «órgano de caja (portátil), del si- lienzo de 2X1'50 metros, que presentaba
glo XVII, de la clase de los litúrgicos. Es- la Virgen María entregando en Soriano
meradamente decorado, de un solo tecla- á un lego dominico un retrato en pintura
do compuesto- de 19 tubos, de agradable de Santo Domingo (12). En el fondo de la
y potente sonido: en sus puertas tiene capilla, y por lo mismo á mitad del muro
pintadas en unos óvalos Santa Cecilia á lateral de la pequeña iglesia de San Rai-
la derecha y Santa Catalina á la izquier- mundo, había el altar de Santa Catalina
da» (7), además de mil otros adornos en de Sena (13).
pinturas y dorados. «Pintó la cúpula Finalmente, la capilla séptima de este
de la capilla de San Raimundo, Mariano lado de la Epístola, ó sea la contigua á la
Illa» (8). fachada del templo, en el machón tenía
Mas debemos dar algunos pasos atrás, según unos el retablo de los Santos Após-
y volver á la capilla quinta del templo, toles (14), según otros nada (15). En el
en cuyo machón he dicho apoyaba el re- fondo, y por lo mismo en los pies de la
tablo de Santa Magdalena, pues frente de pequeña iglesia de San Raimundo, el de
este altar, y por lo mismo frente la capi- San Telmo (16). Además en el muro inte-
lla de San Raimundo, en la nave central, rior de la fachada abríase allí una puerta
veíase en el suelo una abertura y á su que salía á la capilla exterior de Nuestra
lado una gran losa de mármol con la fi- Señora de Gracia, ó de las Gracias. Cer-
gura de cuerpo entero de dicho San Rai- ca de esta puerta, adherido á la cara inte-
rior del frontis del templo, hallábase el
(1) V a r i a s personas.
(2) Relación, citada ya, de D. Cayetano Estalella, de 20 (91 Relaciones de Torallas, Carranca, D. Cayetano Cor-
de junio de 1895. net y Mas, etc.
(3) Relación citada de D. Simeón Tuyet, de 19 de agosto (10; Relación de Carranca.
de 1880. (11) Relación del P . J a i m e Ros, de 3 de marzo de 1880.
(4) Relación citada de Estalella, de 20 de junio de 1880. (12) Relación citada de Torallas, de 10 de enero de 1895.
(5) Relación de D. Jaime Torallas, de o de enero de 1895. He visto el cuadro en Santa Marta en la sacristía.
(6) Relación de D . Felipe Carranca, de 1886. ;13) Relaciones de Torallas, de 20 de diciembre de 1894 y
(7) Copia de la etiqueta, ó tejuela, puesta en el Museo 2 de enero de 1895 y de Carranca, de 24 de junio de 1884.
al órgano. (14) Relación de Carranca, de 24 de junio de 1884.
¡8) D. José y D. Adriano Casademunt. Obra citada, (15) Relación de Torallas, de 26 de febrero de 1895.
pág. 18. (16; V a r i a s relaciones de Torallas.
DOMINICOS 17

retablo churrigueresco, pero dorado, del de Inocencio IIIÍ Bisbe de Lleyda, y ha-
Santo Sepulcro, existente hoy, aunque bent donadas llarguissimas almoyuas
cortado, en Santa María (1). per la fabrica desta Iglesia, y cumplit
Dejemos las capillas y retablos de este ab las lleys de bon prelat morí lo X VII
lado de la Epístola, y atravesando el d abril del any MCCL V.»
templo por junto su fachada, dirijámonos Otra. «Aqui reposan los ossos del Re-
á las de el del Evangelio. En este paso to- verendissim Pare fr. Berenguer de Cas-
pamos cotí las dos regias pilas del agua tellbisbal, català, noble en sanch, y mes
bendita, aisladas, de mármol blanco sos- en santedat, sosi del B.fr. Miquel Fabra
tenidas por sendos angelotes, desnudos, en las conquistas de Mallorca y Valen-
de la misma piedra, hermosamente es- cia, y desprès de esser prior de aquest
culturados, y que todo curioso puede hoy convent, elegit Bisbe de Girona; acepta
examinar en San Miguel de la Barceló - per obediencia de sos superiors y prechs
neta (2). del capítol de Girona la elecció, y en
En la primera capilla de este lado, ó dita Iglesia fou gran espill de prelats;
sea la arrimada á la fachada del templo, y per la compra del si ti y construcció de
se veneraba á San Daniel, imagen colo- aquesta iglesia dona copiosissimas al-
cada hoy en el lado del Evangelio del moynas. Mori a VI de febrer del any
altar de San José en la iglesia de la Es- MCCLIII.» Es el célebre obispo de Ge-
peranza. El retablo, de gusto del Renaci- rona al cual Jaime I mandó cortar la len-
miento, está actualmente en Santa Marta gua, por cuya extralimitación tuvo el Rey
y cobija á la Virgen del Rosario (3). En que hacer pública penitencia.
el machón esta capilla lo mismo que las La tercera. «Aqui reposan los venera-
tres siguientes carecían de retablo. bles ossos del R. Pare Don fra Bernat
El de Santo Tomás de Aquino ocupaba de Mur, català, persona de moltas pren-
el fondo de la segunda capilla, cuyos das, lo qual essent Bisbe de Vich, á imi-
muros estaban tapizados de adornos y tació de Don Pere de Castellas (que
doradas esculturas hasta dar con la nave essen bisbe de Barcelona se feu religiós
central. Sostenían además (4) tres nota- desta ordre en aquest convent) prengué
bles sarcófagos, ó urnas góticas, provis- també en ell lo hàbit de frare Predica-
tas todas de sus laudes, y dos además de dor. Donà molta almoyna per edificar
sendas figuras de obispos esgrafiadas en esta iglesia, y ple de bonàs obras morí
su frente. Además de aquéllas, un lienzo á VI de novembre de MCCLXIIII» (5).
al óleo, colocado sobre cada una de ellas, En el Museo provincial de antigüedades
explicaba el nombre y méritos del difun- de Barcelona se guardan estas tres urnas.
to. He aquí el contenido de tales epitafios: El fondo de la tercera capilla estaba
«Aquí reposan los venerables ossos del ocupado por el retablo de San Vicente
R. Pare fr. D. Guillermo de Barbera, Ferrer, y los muros de ella tapizados de
català, frare de gran virtud; en lo qual adornos como los de la anterior (6). En
essent Prior de aquest convent, posaren un reducido almacén de la iglesia de San
los ulls lo archebisbe de Tarragona, Agustin de esta ciudad, en enero de 1892,
Sant Ramon de Penyafort, lo B. fr. Mi- vi la imagen del titular de este retablo, la
quel Fabra, per anomenarlo ab poders que es de escultura, de tamaño natural,
y representa al Santo en ademán de pre-
dicar con el brazo levantado.
(1) Relación del P . Jaime Ros. citada.
(2) Relaciones de Carranca, de 24 de junio de 1881 y de
Cayetano Estalella, de 1886.
(3) Relaciones de Torallas, de 20 de diciembre de 1894 y (5) D . Antonio Elias de Molins. Catálogo del Museo
del P . Jaime Ros, citada.—He visto muchas veces esta ima- Provincial de antigüedades de Barcelona... Barcelona
gen y retablo. 1S88. Págs. 175, 176,177, 178 y 179.
(4) Relaciones de Torallas y Carranca, en varias fechas. (6) Relaciones de Torallas y Carranca, en varias fechas.
TOMO II
18 CAPÍTULO OCTAVO

En el fondo de la cuarta capilla veíase nario por otra en espiral, ó de caracol,


el retablo de San Antonino (1). de piedra, que llegaba al terrado, y de
La quinta capilla en el fondo tenía la aquí á la cúspide de dicha torre por otras
puerta llamada de San Jaime, que fran- intrincadas de madera, de las que harto
queaba paso al claustro, y en el machón tendré que hablar en la reseña de los su-
el altar de Santa Rosa (2). En alto, bajo frimientos del aciago día de Santiago del
su techo, cobijaba una tribuna (3), en la 1835 (9). Mas volvamos al interior del
que los coristas y novicios cantaban to- templo. En el machón superior de la mis-
dos los días una Salve á la Virgen situada ma capilla sexta, y de espaldas al presbi-
casi al frente en su altar del Rosario. terio, se hallaba el retablo é imagen de la
Llamábase chistosamente la salve del Virgen de Montserrat, conocidos allí por
jabón, porque su limosna procedía de el altar de la Bona Sort, que daba nombre
una renta fundada, donada al convento á la capilla (10).
para la compra del jabón del lavado de La séptima y última capilla contenía el
los hábitos, con la imposición del deber altar de San Martín, colocado de espaldas
de cantar esta salve (4). al mayor, en el muro que mediaba entre
A la sexta capilla la base del campana- el presbiterio y la puerta que de la capi-
rio, que venía adherido al machón infe- lla conducía á la sacristía (11). Al inteli-
rior (5), entre el pasillo y la nave , le gentísimo pintor y profesor de Bellas
robaba casi la mitad de su anchura; así Artes Don Luis Rigalt entusiasmábale
como le mermaba otra gran parte de su un lienzo de este retablo, debido al pincel
altura el magnífico órgano en ella sus- de Don Juan Illa, el cual representaba no
pendido ó colocado (6). Para expresarme sé si la Sagrada Forma Eucarística ó si
el valor de este instrumento decíame un la Santa Espina colocada en un hermosí-
fraile de esta casa que entonces eran simo vericle y rodeada de serafines. Po-
estimados por los tres mejores órganos seía Illa la habilidad, me añadía Don
de Barcelona, el de la Catedral, el de Luis, de dar á sus pinturas tal tinte que
Santa María del Mar y el presente (7); y parecían de oro (12). -
otro testigo me añadió que éste igualaba El coro, construido hacia el año 1270,
en magnitud al de la primera de dichas en un principio ocupó el centro del plano
iglesias (8). Se llegaba á él por la escale- del templo, pero en 1546 el Prior Pedro
ra principal del convento, la que caía á Mártir Coma, después obispo de Elna, lo
sus espaldas; y de él se subía al campa- trasladó á los pies del templo, edificando
los atrevidos arcos que lo sostenían so-
(1) Biblioteca provincial universitaria. Sala de manus- bre la puerta principal (13). Abarcaba toda
critos. Llibre de las sepulturas que son en la Iglesia del la anchura de la nave en el espacio de
Convent de Santa Catharina Verge y Martyr de Barce-
lona, del Orde de Predicadors, fet lo Any 1764. Per lo dos pares de capillas, dimensiones que le
P. Fr. Miquel Bosch Sagristà.—Pigs. 50, n.° 5; 51, n.° 6; áaban el área de una extensa plaza. Le
y 130, n.° 85.
(2) Relaciones de D. Jaime Torallas de 24 de junio de
rodeaban las filas de las graciosamente
1884, de 20 d: diciembre de 1894 y de 10 enero 1895; de Ca- esculturadas sillas de nogal, que todo
rranca, citada, y Llibre de las sepulturas, citado, página curioso puede hoy contemplar, bien que
33, n.° 48.
• (3) Relaciones de D. Simeón Tuyet de 26 de febrero de
achicadas, en el coro de los Santos Justo
1886, da D. Felipe Carranca, citada, y de D. Jaime Tora-
llas de 10 de junio de 1888.
(4) Relación citada de D. Simeón Tuj'et.
(5) Véase el adjuntoplano del templo levantado por el (9) Relación del fraile de este convento D. Jostí Cid, de
Sr. Casademunt. 16 de julio de 1882.
(6) Relaciones de varios de los testigos citados, que (10) Muchas relaciones de D. J a i m : Torallas y de otros.
eran personas que frecuentaban el templo. (11) Muchas relaciones de D. Jaime Torallas y de Ca-
(7) Relación del P. Romualdo Espinas, de 31 de diciem- rranca.
bre de 1888. (12X Me lo dijo en Barcelona a 12 y 14 de enero de 1894.
(8) . Relación de D. Francisco Auguá, de K) de junio de (13) Villanueva. Obra citada. Tomo XVIII, págs. 179
1884. - .-.•-.•....... .. . . ._ y 180: '••'•-'••'•'- . . . . \ -
DOMINICOS 1»

y Pastor, adonde fueron trasladadas (1). 1892 vi algunos de los más inferiores en
Pero en Santa Catalina terminaban por un depósito de San Agustín de esta ciu-
elevados respaldares, provistos de sendos dad, que á mi ver databan del siglo xvi
santos ó venerables de la Orden, de es- ó xvii. No los trataban de igual modo que
cultura, bajo los cuales una hoja narraba los revolucionarios del 1835 los sensa-
en resumen su Hñdsr edificante (2). Se en- tos religiosos. He aquí fielmente puesto
t r a b a á este coro desde la galería alta del por escrito uno de los párrafos de la
próximo claustro mediante la pieza don- conversación que en 3 de marzo de 1880
d e había los armarios de los libros de tuve con un respetable anciano, fraile,
coro. Esta ocupaba el ámbito del piso pedagogo, ó sea maestro de jóvenes, que
alto de una de las dos capillas laterales había sido de este convento, el P. Jaime
que la construcción del coro cortó por la Ros: «El orden más grande reinaba en
mitad de su altura, es decir, el ámbito de aquel claustro y la majestad más edifi-
la más apartada de la fachada, y desde cante en su culto. Sería prolijo describir
ella se entraba en otra pieza igual forma- todos los actos y modo de éste: baste
da por el ámbito de la otra capilla, ó sea apuntar que en el coro la numerosa comu-
la contigua al frontis, la que en los últi- nidad guardaba el más completo silencio,
mos tiempos fué aula de Filosofía, y en que cada religioso ocupaba su propia si-
ella un lienzo mostraba pintado á San lía, y que el rezo se cantaba con pausa y
Vicente Ferrer explicando en clase (3); ajuste. El cantor, previas las genuflexio-
porque de esta pieza «dicen haber servido nes é inclinaciones de rúbrica, se acerca-
de aula á San Vicente Ferrer cuando en- ba á los padres á los que correspondía el
señó Lógica en este convento» (4). Estas canto de alguna lección ó verso, y quita-
•dos piezas conservaban las bóvedas góti- da la capilla modestamente le indicaba
cas de las capillas de que eran parte. que tuviese la bondad de bajar al atril, y
De los libros de este coro me dijo un efectuarlo. Junto á éste estaban siempre
autorizadísimo testigo, D. José María Bo- de pie dos coristas prontos para volver
cabella, el editor de los libros litúrgicos las páginas, en cuya operación, para evi-
m á s acreditado que en el siglo xix ha te- tar detrimento á los magníficos pergami-
nido Barcelona, que eran los mejores de nos que las formaban, eran previamente
l a ciudad, y quizá de Europa; que por adiestrados por un padre. Para evitar las
ellos antes de la quema daban unos in- manchas que produce el contacto repe-
gleses miles de duros; que estaban ador- tido de los dedos, pendían de lo alto del
nados de hermosísimas pinturas de colo- facistol dos tiras de lienzo, de las cuales
r e s vivísimos y oro con figuritas y otros la de la derecha servía para que el coris-
caprichos en las capitales y otros huecos; ta de aquel lado levantara la hoja, y la
y que después de la quema de 1835 él mis- opuesta para recibirla el de la izquierda
m o vio sus preciosas hojas cortada? á y aplacarla sobre las restantes. Hasta la
sablazos, extendidas por los suelos de la operación de trasladar estos libros for-
escalera y claustro como si fueran peda- maba objeto de especial estudio. Antes
zos de estera ó basura (5). De ellos en de la entrada de la Comunidad en el coro
dos coristas limpiaban con un paño todas
las sillas. Los cuatro hebdomadarios, ó
(1) Relación citada del P. Jaime Ros, de D. Jaime To- sea encargados de la celebración de la
r a l l a s , de 24 de junio de 1884, y de otros.
(2) Relación citada del P. Jaime Ros y de otros.
Misa conventual, con no pasar de simples
(3) Relaciones del P . Romualdo Espinas, de 16 de julio padres eran hombres notables por sus
d e 1884 y de 31 de mayo de 1887. letras, etc.»
(4) Villanueva Obra citada. Tomo XVIII, pág. 201.
(5) Relación de dicho señor, hecha en Barcelona en 9 de Hasta aquí el P. Ros, y note el lector
junio de 1880, ratificada en 23 de febrero <le 1883. Tam- que los frailes trataban sus libros como
bién vio las páginas por el suelo D. Ramón Nivera. Me lo
dijo en Barcelona á 31 de marzo de 1882. I oro en paño, mientras los revolucionarios
20 CAPÍTULO OCTAVO

los pusieron en los filos de brutales sables todos los interrogados por mí que tuvie-
y en los pies de los caballos; por esto sin ron el placer de verlo se deshicieron en
duda á los religiosos se les llama hoy obs- ponderaciones de la magnificencia de esta
curantistas y á ellos ilustrados, que ya iglesia (3'.
dijo el P. Almeida que en el mundo andan No le faltaba tampoco la honra de po-
las cosas con los nombres trocados. seer mortales despojos de las pasadas ge-
Mas dejemos estas, si amargas, no me- neraciones. Así en una estancia escondida
nos ciertas verdades, y bajemos otra vez en el retablo mayor bajo del sagrario de
al plano del templo. Cada machón, ó sea la exposición, guardábase en un ataúd el
muro de separación entre una y otra ca- cadáver de una reina, cuyo nombre igno-
pilla, estaba adornado en el canto, ó sea ro, pero cuya noticia tengo de boca de
en la nave central, con un lienzo de for- un monacillo de este templo que me dijo
ma ovalada, de cosa de un metro de longi- haberlo visto mil veces (4). Al r e s e ñ a r l a s
tud, representando escenas de la vida de capillas indiqué ya. algunos de los precio-
Santo Domingo, de la de Santo Tomás, y sos sarcófagos que sus muros sostenían,
quizá de otros. Las capillas cerraban su omitiendo la relación de algunos o t r o s
entrada con una buena verja de hierro. por razón de ignorar en cuál de ellas se
Los retablos, á juzgar por los pocos que hallaban, tal como el de D. Poncio d e
dé su número quedan, por las láminas y Alesto y de su mujer (5).
por las descripciones, aunque modernos, El pavimento, perfectamente embaldo-
habían sido trazados dentro de su género sado de piedra, ocultaba bajo sendas
con exquisito gusto por regla general. losas sepulcrales numerosas y notables
Por todos lados abundaban las esculturas tumbas, de las que hallé detallada reseña
doradas y los adornos, de modo que uno en el Llibre de las sepulturas que son en
de sus admiradores me comparaba en esta la Iglesia del Convent de S'a Catharina
parte este templo al de Belén de Barcelo- Verge y Martyr de Barcelona, del Orde
na (1), añadiéndome otro que cuando des- de Predicadors, fet lo Any 1764. Per lo-
pués del incendio se estableció allí una P. Fr. Miquel Bosch Sagristà, pero con-
guardia de nacionales, individuo de ella tinuado hasta principios de mi siglo xix (6).
hubo que con ojo al rico y abundante oro Por él sabemos que la tumba de los reli-
de los adornos y retablos quemados que giosos se hallaba, según costumbre, en el
quedaría en sus cenizas, ocupaba el día centro del plano del templo, al pie de las
en trasladar á su casa espuertas de estos gradas del presbiterio (7); que -la de don
escombros (2). Un tercero me aseguró que José de Mora, Marqués de Llió, se halla-
la parte arquitectónica por sus dimensio- ba en el mismo plano frente á la capilla
nes y líneas guardaba tan perfecta igual- del Rosario (8); que había la del Barón d e
dad con la de la catedral de Perpiflán que Selles (9); que en los pies del templo en-
se las creía á ambas obra de un mismo tre las pites del agua bendita veíase otra
arquitecto. Bien es verdad que entre la de la que escribe el libro: «A 21 de se-
arquitectura y la ornamentación no me- tembre de 1779 fou enterrat en dit vas
diaba homogeneidad, pero á pesar de este D. Domingo de Duran y Muxiga, y lo-
defecto, hijo de la tiranía de las modas y
la miseria de nuestro ánimo, el todo re- (3) No puedo citar los nombres porque llenarían h a r t o
sultaba grandioso por la magnitud, seve- espacio.
ro por la arquitectura, rico y hermoso (4) D. Jaime Torallas, Barcelona 27 de julio de 1895.
(5) D. Antonio Elías de Molins. Obra citada, pág. 180.
por la ornamentación, de tal modo que (6) Biblioteca provincial universitaria. Sala de m a -
nuscritos. E s un magnífico tomo de 25 */, X 17 ' / , centíme-
tros, encuadernado con pergamino, y escrito en letra q u e
más parece dibujada qne escrita.
(1) D. Ramón Reixach. Barcelona 21 de enero de 1892. (7) P á g . 47.
(2) D. Ramón Nivera. Barcelona 31 de marzo de 1882, (8) P á g . 76.
ratificado en 4 de enero de 1883. (9) P á g . 82.
DOMINICOS L'I

any següent lo hereu, son fill, feu fer notat avant arriba en la put Ciutat a nou
ossera al cap de la mateixa sepultura, y de mars propassat, per mar ab dos tar-
mudar las Llosas las Armas y la Inscrip- tanas (naves de este nombre) y fou depo-
ció; ab modo rumbant y ayrós, ab fargas sitat lo dit cos del dit Ille señor don
diferents, y perfils blanchs, ab lo mar- Guilem de S' Climent, en lo monestir
mol negre, ab lo nom de D. Francisco dels frares descalsos carmelitas de Sl Jo-
son fill» (1); que allí cerca existia la «Se- seph dit die de, nou de mars que arriba,
pultura del lli'" S. D. Fr. Franco Roger y lo die present fou aportat del dit mo-
Bisbe de Solsona, fill de aquest convent, nestir de S1 foseph á enterrar en lo dit
y Provincial que fou de la Provincia de monestir desancla Catharina: lo qual te
Aragó. Mori lo dia 18 de Janer de 1663, fets en marmessors los magc,,s consellers
y fou enterrat en terra ferma al peu de cap y segon de la present ciutat per los
la Pica del Aygua beneyta de la part de quals fou ordenada la dita sepultura
Sl Telm» (2); que frente de esta misma que lo die put ses feta en esta forma, ço
capilla había la tumba de D. Francisco es que lo dit cos com estadit fou deposi-
de Dusay (3), así como en medio de la ca- tat en lo monestir de S* Joseph en lo
pilla de San Jacinto la de D. José de Alós qual, en lo temps que allí ha estat, se li
Marqués de Puerto-nuevo (4); que delante son fets molts officis y ditas mollas mis-
el altar de San Pedro Mártir la de Pa- sas per los pares de aquell monestir, per
lou, Barón de Castell de Fels (5); que ha- á fer dit enterro en lo monestir de Sta Ca-
bía una segunda: «Sepultura de casa tharina hi assistiren tot lo clero délas
Dusay Cavallers Nobles, que antes era Iglesias parrochials desanda marià de
al Pati detras del Sepulcre. Es al devant la mar Stíl niaria del pi y S* Jaume y las
del (santo) Sepulcre cerca la paret» (6), y quatre ordens mendicants de religiosos
que había la «Sepultura de la casa de de la merced de la trinitat, saucta ma-
Corbera, y Santcliment Baró de Llinàs drona y S* francisco de Paula, los quals
£>. Cayetano de Pignatelli Marqués de per llur orde, anant devant setanta y
Rubí. Es devant del Altar de S' Mar- sinch couens de pa y aportauen creman
tí» (7). Al hablar de esta sepultura no sé Cent sinquanta atxas, y quisqun capella
resistir á la tentación de copiar aquí un y religiós aportava un siri en la ma, de
cuadrito que representa un solemne en- sera de pes de tres onsas; poch mes o
tierro del siglo XVII. «Dimecres á VIH manco, aportaven lo cos alt sobre los
(de abril de 1609).— En est dia se feu lo musclos cubert ab un dosser de vellut ne-
enterro, eo sepultura del eos del Ille se- gre y sobre, la creu eo, hàbit de S* yago,
ñor don Guilem de Sl Climent comenador y entorn del tumol anaven los comana-
del orde de S* yago, embaxador que fou dors del dit hàbit, desprès anaven los
per la mag' del Rey nre señor en Ale- marmessors ab molts cauallers deutes
manya lo qual morí en Alemanya y fou del dit deffunct, criats que hauia tin-
aportat desde allí, per enterrar en la guts en flandes y altres persones, tots ab
sita sepultura, que tenía ell y los de sa gramallas de dol que passaven en nume-
casa, en lo monestir de Sta Catharina ro mes de xexanta, y arribat en lo dit
dels frares de predicadors desta ciu- monestir de Sta Catharina fou posat ab
tat en la capella de S< martí per esser un tumol alt, que per dit effecte fou fet
natural desta Ciutat: lo qual com está al mig del cor ab molta luminaria y au-
tor xeras per lo entorn deia Iglesia que
(1) Págs. 86 y 87. foren possadas las ditas atxas que fou
C2) Pág.88. cosa de veurer, que aparexia la dita Igle-
(3) Pág.89.
<4) P á g . 101. sia fos tota foch...» (8).
<5) P á g . 113.
(6) P á g . 123. (8) Dietari del Antich Consell Barceloní. Barcelona
(7) P á g . 131. 1899. Mes de abril de 1609, ó sea tomo VIII, pág. 497.
22 CAPÍTULO OCTAVO

Pero salgamos ya del templo, que harto mejores producciones del inmortal Ti-
en él nos detuvimos, y, sea por la puerta ciano» (4), y de la que me dijo un venera-
de la capilla de San Martín, ó según otros ble religioso de la casa «que poco tiempo-
la llaman de la Santa Espina, sea por la antes del incendio un vendedor de estam-
del presbiterio, lado del Evangelio, en- pas ofrecía á los frailes por ella 500 duros
tremos en la sacristía. «Al lado {septen- y una copia tan igual que nadie la distin-
trional) del presbiterio había la sacristía, guiera, lo que en aquella época en la que
la mayor y más bella quizás de cuantas las obras de arte eran generalmente me-
existían en esta capital: formaba un cua- nos apreciadas, y de más valor el dinero,
drado de 50 palmos (9'79 metros) de suponíalo inmenso en el cuadro- (5). Otro
lado, cttyo techo era una bóveda á cielo testigo, que también me había ponderado-
raso, de la forma de las que se denomi- la abundancia de lienzos al óleo del con-
nan por esquilfe, teniendo por cubierta vento, al lamentar la pérdida de esta pin-
una armadura de madera; recibía luz por tura de la sacristía me ratificó el dicho d e
unas ventanas colocadas en los arran- los dos anteriores, añadiéndome noticia
ques de las expresadas bóvedas...» (1). de las cortas dimensiones del cuadro, que
Concorde con el arquitecto Casademunt, á su decir no llegaba á un par de pal-
cuyas son las transcritas palabras, un mos (6).
vecino, testigo ocular, me calificó esta Las cómodas y armarios atesoraban
sacristía de «sin igual» (2). Rodeábanla multitud grande de sagrados indumen-
por tres de sus lados las acostumbradas tos (7), y en especial de capas pluviales
y suntuosas cómodas con armario, de es- preciosas (8), de tal modo que por este
culturada madera obscura, con el esca- concepto de los ornamentos se consi-
parate del Crucifijo en el centro de uno deraba á esta sacristía como la prime-
de los lados. En el occidental substituían ra de todas las de Barcelona después d e
á la cómoda dos grandes armarios, uno la de la Catedral (9). Por el valor de los
de los cuales guardaba colgados indu- cortos despojos de ellos escapados al
mentos sagrados, y el otro, colocados en- incendio de 1835, que han llegado á mi
gradería, adornos del altar, entre los noticia, puede deducirse la magnificencia
cuales veíanse altas imágenes, que antes d é l o s perdidos. Aún hoy (1900) quedan
de la irrupción napoleónica eran de pla- custodiados en poder de unas monjas
ta. Lucía en el centro de la pieza una un terno de plata con flores de oro teji-
grande y hermosa mesa con sobre de das, otro terno encarnado de lama de oro
mármol de colores, destinada á los indu- bordado, una casulla de plata con flores
mentos de la misa cantada (3). Como el tejidas, otra igual al terno encarnado di-
convento abundaba en lienzos al óleo, y cho, otras dos de lama de plata, otra con
el abonado testigo que los vio, D. Luis flores de color, otra de damasco, otra de
Rigalt, no recordara el lugar de su colo- raso con flores de oro bordadas, otra en-
cación, opino que algunos, siendo los mu- carnada de lama de oro, y otras v a r i a s
ros de la sacristía punto tan á propósito lisas; pero no debo omitir otra casulla d e
para ellos, decorarían esta pieza. Pero sí tejido de plata con profusión de bordados
me consta por testimonio de D. Andrés
Pi y Arimón la existencia allí de una pin- (4) Memoria descriptiva de la antigua iglesia y con-
tura «sobre madera, de la Santísima Vir- vento de Santa Catalina ya citada, pág. 13. -Barcelona^
gen con el Niño Jesús, que era de las antigua y moderna. Tomo I, pág. 564.
(5) Relación del P. Jaime Ros d-í Barcelona á 3 de m a r -
zo de 1880.
(6) Relación ya citada de D. Simeón Tuyet.
¡1 D. José Casademunt y D. Andriano Casademunt. 17) Relación del fraile de este convento P. Miguel Cal-
Obra citada, pág. 17. vila, hecha en Olot á 23 de agosto de 1883.
(2) D. Pascual Maimí. Barcelona 16 de febrero de 1882. (8) Relación citada del P. Jaime Ros.
(3) Relación de D. Felipe C a r r a n c a d i 24 de junio de (9) Relación del fraile agustino de Barcelona P. L u i s
1884. Selles, hecha en Barcelona á 30 de abril de 1881.
DOMINICOS 23

de oro, plata y sedas de colores, riquísi- cara: el fuego del liberalismo de 1835 lo
ma y hermosísima, que se decía ser rega- tragó.
lada por Benedi;to XIII Papa (1). Otra de las preciosidades históricas que
Igualmente abundaban allí las venera- poseía esta casa, y que es posible se cus-
bles reliquias, bien que algunas estaban todiase en la sacristía para ser empleada
en sus respectivos altares, según vienen como adorno de la iglesia en ciertas so-
ya indicadas arriba en la reseña de los lemnidades, era el gallardete, ó pendón
retablos y capillas. Debo mencionar una principal, de la armada de Don Juan de
bajo varios conceptos insigne, que se Austria en el combate de Lepanto, y ade-
custodiaba entre las de la sacristía, á más cuatro banderolas de la misma pro-
saber: «un libro en folio, pergamino, que cedencia que tenían dibujada la Virgen
contiene el libro IV de las Sentencias, del Rosario (3).
escrito de mano de Santo Tomás de Aqui- Desde la sacristía dirigiéndose por de-
no hasta la distinción XLIV en que con- trás del ábside á la capilla del Santísimo,
tinúa otra mano de aquel tiempo, que hallábase un oratorio con sagrario, don-
debió ser de algún amanuense, de quien de los religiosos se recogían á dar gracias
es también la nota final: Explícit I III. finida la Misa, y en uno de cuyos lados
sententiarum secundum fratrem Iho- un armario guardaba los muy numerosos
maní de Aquino. No tengo dada, dice vasos sagrados del servicio de este tem-
Villanueva, en que es el borrador origi- plo (4). En la forma en que un religio-
nal, como se ve en las enmiendas y aña- so puede poseer, la generalidad de los
diduras al margen, y según lo declara padres de este convento tenían cáliz pro-
una nota que hay al principio, que es pio y muchos también indumentos; de
anterior á la canonización del Santo, y donde resulta que las riquezas en oro,
dice así: Hunc librum scripsit mami sua plata y arte, ya del uso común, ya del
Fr. Thotnas de Aquino, qui has postillas particular de los religiosos eran inmensas
fecit ob cuius amorem et reverentiam, en esta sacristía, según me lo testificaron
licet sit et littera illegibilis... tamen varios sacerdotes del mismo cenobio (5).
verax, semper decenter servetur, nec Junto á la sacristía en el lado opuesto
abjiciatur propter illegibilitatem. Lo al templo había el lavamanos, en cu-
mismo dejó atestiguado al principio del yos muros veíase pintado en azulejos
libro el M. Fr. Domingo Hermanno Cris- el acto en que Don Jaime I entregaba al
tianopulo, cuando pasó por aquí en 1762 prior el diploma de donación del agua
acompañando al general Fr. Juan Tomás del convento (6). Desde esta pieza salíase
de Boxadors, asegurando era conforme á un patio llamado del pozo de Santo Do-
este carácter con el de los otros escritos mingo, el cual por E. lindaba con la calle
del Santo doctor que se guardan en Ña- de Giralt Pellisser, por S. con la sacristía
póles, Málaga y Toledo» (2). En época no y por O. con el convento, ó mejor con el
lejana tuve comisión de buscar este libro, aula capitular. Tomaba su nombre del
emanada, bien que mediatamente, de la célebre pozo, que tenía en su área, y cuya
más alta autoridad de la tierra; la des- agua se bendecía y regalaba el día de San-
empeñé con el interés y porfía pedido to Domingo (7). De este día y de esta agua
por la cosa y por quien la hacía; mas una vecina del convento me trazó una
todo en vano, como en su lugar se expli-
(3) Relación del P. Jaime Ros, citada.
(4) Del oratorio me dieron cuenta Torallas en 27 de ju-
lio de 1895 y Carranca. De los vasos sagrados no sólo ellos,
(1) He leido el inventario que las monjas hicieron de sino otros testigos.
estos ornamentos, y de la casulla de Benedicto he visto yo (5) Relaciones citadas del P. Ros y del P. Calvila.
mismo parte. (6) Relación de D. Simeón Tuyet. ya citada.
(2) Villanueva. Obra citada, tomo XVIII, págs. 199 y (7) Relaciones de D. Jaime Nubiola de Barcelona á 8 de
200. marzo de 1880, de Carranca y de otros.
CAPITULO OCTAVO
•_u
pincelada que pinta aquella época. «El sima muestra del gusto y pureza del arte
día de Santo Domingo por la tarde, dijo, gótico», y añade: «Ciertamente, mientras
el rosario era continuo en Santa Catali- subsistió, no tuvo en Barcelona rival que
na; y toda la gente acudía á beber y á le igualase en lo airoso, esbelto y delica-
recoger agua de Santo Domingo. El pozo do» (3). Fué construido con los caudales
tenía su polea y un cántaro de cobre, que para la fábrica de los principales
cuyo pico venía rodeado de puntas de edificios del convento dejó Don Beren-
metal que impedían la suciedad de apli- guer de Moneada (4). Pi y Arimón, apo-
car los labios al pico. Aquel día por las yándose en la fecha de algunos epitafios
calles vecinas había feria, en la que se de las tumbas de su pavimento y en la de
vendían melones y cántaros para dicha algunos sarcófagos, cree «que estaba ya
agua. El vecindario guarnecía ó adorna- concluida su fábrica á principios del si-
naba sus casas con cubrecamas salpica- glo xiv» (5); opinión equivocada, ya que
dos de hojas á ellos cosidas» (1). en este tiempo no había aún aparecido el
Dejemos la sacristía y sus dependen- adorno y esbeltez del ojival flamígero, ú
cias, y dirijámonos al claustro gótico, ondulante, gusto que por todos lados bri-
para lo que atravesaremos la pieza de la llaba en este claustro; mientras por otro
escalera principal, la que, como escribí lado los epitafios, con datar de época an-
arriba, venía adherida al templo á espal- terior, pudieron ser allá traslados según
das de la capilla de la Bona Sort. «A la costumbre entonces reinante de trasladar
parte de abajo (es decir, detrás de las á los claustros nuevos las losas y sarcó-
cinco capillas inferiores del lado N. de la fagos antiguos. Muy competentes perso-
iglesia), y tocando á dicho templo, había nas que frecuentaron aquel claustro me
un claustro, cuya arquitectura de estilo han certificado de la exactitud del dibujo
gótico árabe (flamígero) era de gusto de Parcerisa que lo representa en los Re-
más sublime que la del templo. Este cuerdos y bell esas de España (6); bien
claustro era rectangular, formado por que una de ellas me añadía que la vista
cinco arcos grandes en cada lado ma}Tor, de la realidad producía mucho mejor
y cuatro en los menores, los que sentaban efecto que la del dibujo (7). Sus muros
sobre unos robustos machones, construi- todos estaban formados de pulidos silla-
dos al efecto. Cada uno de los expresados res de piedra. Cada uno de sus graciosos
arcos se subdividia en otros dos, que es- arcos ojivales contenía dentro de sí, se-
taban apoyados por unas columnitas de gún arriba indiqué, otros dos menores
mármol muy delgadas, de una sola pieza, sostenidos por airosísima columnita de
las que estaban adornadas con sus bases sección cuatrilobada, de mármol; y al es-
y capiteles de mármol blanco ricamente pacio comprendido entre el arco mayor
trabajados. Los lados mayores del expre- y los dos menores adornaba un hermosísi-
sado rectángulo tenían 148 palmos (28c76 mo rosetón con calados. Tanto estos arcos
metros) de longitud, y los menores 133 como los transversales de la bóveda de
(25'85 metros). El ancho de su pórtico las galerías apoyaban sobre un capitel
(galería) era de 20 palmos (3'88 metros) corrido, ó friso, historiado con mil figu-
y estaba cubierto con unas bóvedas por ritas. Por la parte alta del exterior, ó sea
arista (ojivales con nervios ó aristones de la que daba al patio del mismo claus-
y claves), que se apoyaban en los refe-
ridos arcos mayores» (2). Don Pablo Pi-
(3) Recuerdos y bellezas de España. Cataluña. Tomo
ferrer gradúa este claustro de «elegantí- I, pág. 72.
(4) D. José y D. Adriano Casedemunt. Obra citada,
pág. 18.
(5) Barcelona antigua y moderna. Tomo I, pág. 565.
(1) Relación de D. a María Campins hecha en Barcelona (6) D. Luis Rigalt. Barcelona 23 de enero de 1883, y don
á 18 de enero de 1888. Simeón Tu5'et ya citado.
(2) D. José Casedemunt. Obra citada, pag. 18. (7) D. Simeón Tuyet.
ALA MERIDIONAL DEL GLAUS TRO DE SANTA CATALINA

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•Jo CAPITULO OCTAVO

tro, terminaba á manera de festón el muro Mas regresando á las galerías bajas,
una hilera de arquítos ojivales trilobados hallamos en dos de ellas, en la oriental y
cegados de hermosísimo efecto (l). Ale- la del S., notables sarcófagos puestos en
graba la estancia en este claustro el su- sus muros; de lo que nos certifica la exis-
surro de una fuente que continuamente tencia actual de algunos de aquellos en el
manaba (2). Hacia el ángulo S. de su pa- Museo provincial de antigüedades de esta
tio abríase la boca de un pozo de riquísi- ciudad. De ellos citaré el de Guillermo
ma y fresca agua, que la bondad de los de Torre, noble soldado, que murió en
frailes tenía á disposición de todo el ve- 1298 (7); el de «madona romia samnntada
cindario (3); completando la decoración é de madona constança de coll» (8) y el
de este patio los típicos naranjos y bien de Doña Geralda de Moneada, finada en
alineados rosales (4). 1310 (9), y omito otros. No debo empero
El piso alto de este claustro carecía de preterir lanoticia de los siguientes: «Hallá-
galería en tres de sus lados (5), poseyén- banse en el propio claustro tres sepulcros
dola sólo en el meridional, ó sea en el de mármol blanco en que yacían los despo-
adherido al templo, donde servía de paso jos de otras tantas personas reales. En uno
cubierto para comunicar con el coro. de ellos, ornamentado con muchas labores
Formábanla catorce arquitos también y figuras llorosas, descansaba el cuerpo
ojivales y columnitas así descritas é his- del primogénito de un Conde de Ampurias,
toriadas por Villanueva: «Su labor es del Infante de Aragón, que moriría de tierna
siglo XIII, ó muy próxima á él. Estas co- edad, según la capacidad de la urna y la
lumnas octágonas, altas sólo cinco pal- estatua con traje infantil que se veia ten-
mos (1 metro), sirvieron antes de adorno dida en la cobertera. En la orla estaba
en el coro, que estaba en el piso (en el esculpida la inscripción: Hic jacet incly-
plano) de la iglesia, construido hacia el tns Jacobus, primogenitus inclyti infan-
año 1270, de donde las trasladó al sitio tis Raimundi Berengarii, primi comitis
actual el maestro F r . Jaime Ferrán, Prior montanearnm de Pradis, postea vero
en 1550, para cubrir el tránsito al coro, Impnriarum» (10). Según Villanueva esta
que cuatro años antes había construido urna databa del siglo xiv (11). «Las dos
en alto en el testero (en los pies) de la restantes tenían labradas de muy buena
iglesia el Prior Fr. Pedro Mártir Coma, escultura sus correspondientes figuras
Obispo después de Elna... E n uno, pues, del tamaño natural que representaban
de estos capiteles (de las columnitas de mujeres tendidas con corona en la cabeza,
la galería alta) está representado de re- y eran el uno de Doña María Álvarez,
lieve San Raimundo sobre el mar, soste- hija natural de Don Jaime II de Aragón
niendo con el báculo la punta de la ca- y esposa del Conde de Ampurias, y el
pa» (6) que le sirve de vela cuando mila- otro de Doña Blanca, también hija natu-
grosamente vino de Mallorca á Barcelona ral del dicho Rej r » (12). «Otra inscripción
por sobre las aguas. hay apreciable para los literatos, y es la
que puso el historiador Pedro Miguel
Carbonell en la sepultura de sus padres
(1) Véase el dibujo de Parcertsa y otro de D. Luis Ri- y familia; dice así : D. O. M.=F. Carb.
galt existente hoy en el Museo provincial de antigüeda-
des, donde tiene el número 1507, y del que está tomado mi
parenti óptimo, Grati ae coniugi bene
adjunto grabado.
(2) Relación ya citada del P. Jaime Ros de 3 de marzo
de 1880. (7) Museo dicho, n . ' 842. Catálogo de D. Antonio E l i a s
(3) D. Simeón Tuyet y a citado y D. J a i m e Nubiola. de Molins, y a citado, p á g . 179.
Barcelona 8 de marzo de 1888. (8) Número 836. Catálogo, p á g . 190.
(4) Relación y a citada de D. Cayetano Estalella, em- (9) Número 839. Catálogo, pág. 191.
pleado que fuá del convento. (10) Pi y Arimón. Barcelptm antigua y moderna. To-
(5) Relaciones de D. Luis Rigalt y del P. Romualdo mo I, pág. 565.
Espinas, ya citados. (11) Obra citada. Tomo XVIII, pág. 201.
(6) Obra citada. Tomo XVIII, págs. 179 y 180. (12) P i y Arimón. Obra y lugar citados.
DOMINICOS 27

merenti P. Mich. Carhonellus Reg. le daba una altura total de unos 39 me-
Archivarius ci'vi's Barcinonensis sibi tros^?). Cuatro ventanales ojivales abier-
et snis posterisque ann. Christi tos en caras alternadas del polígono
MCCCCLXXXXIII. XI. kal. mart., Fe- daban luz y aire al primer piso alto, y
rrando II. feliciter regnante.—S. P. F. otras cuatro en las intermedias al se-
C.» (1). Mas este lugar sepulcral no era, gundo (8). En el ámbito de las prime-
según parece, urna ó sarcófago, sino ras ventanas, ó sea de las de primer
tumba en el suelo, y venía colocada al piso, volteaban las campanas (9), una de
pie de una capillita con un Crucifijo ca- las cuales hállase hoy en la Merced y
vada en el muro (2). A esta imagen se re- lleva la fecha 1637 (10). En alto terminaba
fiere sin duda la Consueta del sacristán el campanario por una corona de alme-
cuando escribe que éste el día 2 de no- nas que recorría todo el borde de las
viembre «entre 8 y 9 horas del mati ocho caras, y un elevado chapitel, ó ri-
anirà á fer las absoltas deis sastres, rámide de base igual á la del campanario,
frente al Sant Cristo del claustro» (3). cuyas aristas venían graciosamente ador-
Al par de la tumba de Carbonell otras nadas de cardinas, ó sea dientes de sie-
muchas, según manifiesta un no moderno rra, y la cúspide de una muy grande asta
lienzo que presenta este claustro, enno- de hierro con una veleta (11). Cada uno
blecían el pavimento (4). de los dientes de sierra dichos era un
A las paredes, además de las mentadas conejo (12). Los pulidos sillares de piedra
urnas sepulcrales, adornaban los retratos que formaban este campanario, la rela-
al óleo y con marco de los numerosos tivamente corta anchura de su sección,
dominicos que ciñeron la tiara ó el bi- unida á la muy larga altura y la gra-
rrete cardenalicio ; y al pie de cada cia de sus líneas y chapitel, dábanle el
retrato algunas noticias biográficas del aspecto de esbeltez que enamora en las
retratado (5). obras ojivales. Para indicarme su ele-
El hermoso aspecto de este claustro vación, un niño vecino del convento de-
venía armónicamente completado por la cíame después, hecho ya hombre machu-.
parte superior del muro del templo que cho, que en su techumbre los gavilanes
con sus ventanales calados y contrafuer- tranquilamente devoraban el fruto de
tes veíase sobresalir en su lado meridio- sus asaltos, los palomos, sin hacer caso
nal, pero sobre todo por el aéreo campa- de los gritos y estridentes silbidos de
nario que se levantaba en el ángulo de las turbas de chiquillos que desde la
Oriente, y dominaba toda la casa y aún calle, amedrentando y aventando al rap-
la ciudad. Su base, ó sección, describía tor (13), pretendían salvar la víctima;
un octógono no del todo regular (6). Por y el monaguillo de este templo Torallas
sobre del nivel de la techumbre del tem- me añadía que la flecha de Santa Catalina
plo contaba aún dos pisos altos de eleva- se veía desde Ordal.
dísimo techo y el airoso chapitel; lo que
(7) D. Adriano Casademunt. Obra citada, pág. 18.
(8) Precioso apunte de lápiz tomado por el profesor de
(t) Villanueva. Obra citada. Tomo XVIII, pág. 201. la Lonja D. Pablo Rigalt. Se ve que está tomado á vista
(2) D. Antonio de Capmany. Memoria, manuscrito ci- •- del natural. Este señor trabajó mucho en Santa Catalina
tado. antes de 1830. Lámina de Parcerisa. Relación de Carranca
(3) Titulo de la Consueta: «En aquest llibre están no- de 24 de junio de 1884, y de otros.
tadas totas las obligacions del P. Sagristà del Convent (9) Relación de Carranca de 24 de junio de 1884.
(10) Relación de D. Jaime Torrallas de 27 de julio de 1895.
de Santa Catharina Verge y Martyr...* Biblioteca pro-
(11) Lámina de Parcerisa. Relación del fraile de este
vincial-universitaria. Sala de manuscritos.
convento D. José Cid, Barcelona 16 de julio de 1882, y re-
(4) Pintado por Arau, y poseído por la señora de Man-
lación de D. Carlos López de Pastor, Barcelona 22 de mayo
j a r r é s , esposa de D. Francisco de Bofarull y Sans. de 1894.
(5) Relación del P. Romualdo Espinas de 31 de diciem-
(12) D. José Gudiol. Nociones de Arqueologia... Vich
bre de 1888, y de otros.
(6) D. José y D. Adriano Casademunt. Obra citada, 1902. Pág. 351.
(13) D. Pascual Maimí. Barcelona 16 de febrero de 1882.
pág. 18, varias láminas que luego citare'.
28 CAPÍTULO OCTAVO

Desde la calle, ó mejor, desde la teste- del claustro, en cuyo lado occidental la
r a septentrional del pórtico del tempio, puerta daba.
lugar donde se abría la puerta, entrábase El lado occidental del claustro, ó sea el
en la portería, dependencia que constaba próximo á la calle de Freixuras, tenía cer-
de un pasillo y las cámaras de los porte- ca del templo esta puerta, y además otra
ros, éstas á la izquierda del que entraba, en el extremo opuesto. El meridional, ó
mientras en la derecha en el pasillo había sea el adherido al templo, tenía sólo la
la puerta del claustro, y a n t e s de ella el arriba mentada puerta de San Jaime que
monumento levantado por la gratitud de comunicaba con el interior de la iglesia
los frailes á su Padre General Fr. Tomás en la capilla de Santa Rosa. El oriental,
Ripoll, gran bienhechor de la casa (1). «Su ó sea más cercano á la calle de Giralt Pe-
busto,bien labrado en mármol de Carrara, llicer, tenía cerca del templo la que con-
estaba colocado dentro de un nicho» (2), á ducía á la escalera y sacristía, y en el
cuyo pie una ancha lápida, también de extremo opuesto la de la sala capitular ó
mármol blanco, reseñaba sus favores y capilla de la Buena Muerte. Y finalmente,
excelencias con los siguientes términos: la N. ó" del lado de montaña tenía cer-
«Rever»'0 Patri F. Thomae Ripoll tarra- ca de la anterior la puerta de comunica-
conensi. ord. Praedc'" Generali Magis- ción con el segundo ó siguiente claustro.
tro, ac hujus coenobii filio amantissimo La sala capitular extendíase á lo largo
viro doctrina, selo, pietate ac prudentia de casi toda la anchura del claustro pri-
tirbi, et orbi clarissimo cujus inmensis mero, del otro lado de su muro oriental,
sumptibus, atque ingenti studio ecclesia de modo que su longitud de N. á S. era la
plurimis sacris, et praeciosis ornamen- misma del dicho lado, quitado sólo el
tis ditata sacrarium nobis undequaque corto terreno ocupado por la escalera
armariis, et supellectilibus refertnm bi- arriba indicada. Medía 21'50 metros de
bliothaeca iam pridem ab ipso erecta, longitud por 10'25 de anchura. Constituía
infinitis propemodum, ac selectissimis una hermosa capilla ojival, de piedra,
libris cumulata, redditibus aucta, atque con bóvedas del mismo gusto arquitectó-
ad publicant utilitat em expósita conven- nico, divididas en cuatro compartimien-
tus denique totus bellorum clade ferme tos cruzados de sus aristones, con cla-
dirutus semel, ac iterum restauratus et ves (4). Parece que á éstas adornaba, ó
ad commodiorem, ac nobiliorem formam quizá mejor afeaba, una mano de pintura
ex omni parte redactus,fratres ejusdem azul con floreos blancos (5). La altura de
conventus filii patri, ac benefactori mu- ellas superaba en mucho la de las galerías
nificentissimo grati animi monumentum del claustro, ya que por sobre de la te-
posuere anno Domini MDCCXXXIII, chumbre de éstas se abrían las ventanas
aetatis suae LXXXI, asumptionis ad que daban luz á la sala (6). Su pavimento
mag"'" ordinis IX= Obiit Romae XXII. tampoco carecía de despojos mortuorios
septembris anno MDCCXLVII. aetatis colocados en sus respectivas tumbas (7).
XCV ann.» Actualmente esta lápida se
En esta sala, ó mejor grande y magní-
halla afortunadamente salvada en el Mu-
fica capilla, hallábase instalada la vene-
seo provincial de antigüedades de Barce-
rable y muy conocida Congregación de
lona (3). Cruzada esta pieza ó pasillo de
la portería, se hallaba á mano derecha, ó
sea revolviendo hacia Levante la puerta (4) Relaciones del P . Jaime Ros de 3 de marzo de 1880
y 10 de febrero de 1882, y otros. Plano inserto en la obra
citada de D. José' y D. Adriano Casedemunt.
(5) Relación de D. Felipe Carranca de octubre de 1886.
(1) Muchos testigos me explicaron la forma y lugar de E s t a circunstancia de la pintura del techo sólo lo dijo este
la portería, tales como Torallas, Carranca, P . Espinas, señor. El P . Ros me dijo que esta sala era de piedra.
etcétera. # (6) Relación del P. Romualdo Espinas de enero de 1886.
(2) Pi y Arimón. Memoria descriptiva, etc., ya citada. (7) Llibre de las sepulturas que son, etc., ya citada,
(3) Tiene el número 1105. Catálogo citado, pág. 246. págs. 41 y 125.
DOMINICOS 29

la Buena Muerte, y alli celebraba todos qual spra está situada en lo primer Claus-
los lunes sus acostumbrados ejercicios (1). tro (llama primero al que aquí hemos lla-
Esta Congregación, fundada en 1700 en mado segundo) devant lo nitxo cerca la
la capilla de San Juan del convento de porta que dona al deprofundis (10).—Nu-
agustinos calzados, antiguo, hoy cuartel mero 105. Sepultura de Bernat Baró Co-
de artillería de la calle de la Industria, al rredor Rl de Cambis; qual li consigna
derribo de este cenobio fué trasladada á lo M. R. P. Jaume Soler Prior actual de
la que describo (2), y después del 1835 su- est Convent al Febrer de 1805, y per ella
cesivamente á las iglesias de Santa Clara paga dit Baró lo dret acostumat de 7
y San Felipe Neri. lliuras 10 sous (7 libras 10 sueldos equi-
Adherido al lado septentrional del has- valentes á 20 pesetas). Está situada al
ta aquí descrito primer claustro, y de él primer Claustro enfront de la porta que
s tas
separado sólo por una pared, extendíase dona al refetó, passadas alg. sp » (11).
un segundo, cuyas caras occidental y En el ángulo N. de este segundo claus-
oriental eran continuación de las de la tro hallábase otra escalera, que conducía
misma dirección del primero, y cuyas di- á los pisos altos (12), y además siguiendo
mensiones venían á igualarse aproxima- desde este claustro hacia montaña, y me-
damente con las de aquél. No así en cuanto diante un no largo corredor que venía á
al gusto ni á su perfección, ya que sus prolongar la galería oriental de él, se sa-
arcos, aunque de piedra, eran de medio lía á la huerta, de modo que desde la
punto (3), sus galerías más bajas que las puerta de San Jaime, marchando siem-
del anterior (4), sus adornos casi nulos (5) pre de frente y en línea recta, se pasaba
y sólo tenía edificadas las galerías de E. del templo á la huerta, recorriendo las
y S. (6), bien que con el mismo número de galerías orientales de los dos claustros y
cuatro y cinco arcos respectivamente que este cacho de corredor que atravesaba el
el claustro primero (7). Adornaban su pa- ala de edificio rayana de la huerta (13).
tio los típicos naranjos (8) y sus paredes No estaba negada á las mujeres la en-
numerosos lienzos con sus marcos que trada en el primer claustro, pero sí en
representaban los Beatos y Santos de la éste, incluido ya en la clausura mona-
Orden (9), así como avaloraban su pavi- cal (14).
mento las acostumbradas tumbas. Del Al entrar en este segundo claustro, vi-
Llibre de las sepulturas copio los dos si- niendo del primero por la única puerta
guientes asientos, que se refieren á dos que los unía, enfilada por las galerías
de ellas: «Numero 102 sepultura de... orientales de ambos, hallábase á mano
derecha la puerta del Deprofundis. Cru-
zada ésta, encontrábase el visitante en
(1) Muchos testigos de entre los citados ya.
(2) D. Antonio A y m a r y Puig, en el Suplemento-lite-
dicha desahogada y magnífica pieza (15),
rario del Correo Catalán del 11 de febrero de 1891, pág. 1. en la que se le presentaban dos puertas
(3) Sobre si sus arcos eran ó no apuntados se contradi- en el muro de enfrente, á saber: la del
cen los testigos: D. Jaime Torallas, monacillo que fué del
convento, D. Simeón Tuyet y D. Carlos López de Pastor constado á la derecha, y la de las depen-
sostuvieron la afirmativa; mientras el P . Romualdo Espi- dencias de la cocina á la izquierda, mien-
nas, sesudo fraile de esta casa, la negativa. Parece que la
construcción de este claustro databa de época moderna, y
tras en el muro de la izquierda se le abría
esto viene á corroborar el dicho del último.
(4) Relación de D. Simeón Tuyet de 19 de agosto de 1880.
(5) Varios de los citados testigos. (10) Libro citado, pág. 147.
(6) Relaciones del P . Espinas de 16 de julio de 1884 y de (11) Libro citado, pág. 150.
Torallas de 20 de diciembre de 1894; y un plano del archivo (12) Relación del P. Romualdo Espinas de 6 de febrero
del mismo convento. de 1891.
(7) Plano procedente del archivo del mismo convento. (13) Relación del P. Espinas, citada.
(8) Relación del P. Romualdo Espinas de 16 de julio de (14) Relación del P . Romualdo Espinas de 24 de marzo
1884. de 1882.
(15) Relación de D. Felipe Carranca de 24 de junio de
(9) Relaciones del P . Espinas de enero de 1886 y 31 de
1884, del P. Jaime Ros y de otros.
diciembre de 1888.
30 CAPITULO OCTAVO

la de los refectorios (1). Y escribo refec- Álvarez no existía, el transeúnte, al ter-


torios, porque se contaban dos, el de co- minar la de Giralt, topaba con el recodo
midas cuadragesimales ó de pescado del convento (el que allí frente esta calle
primero, y á seguida el de carne, uno á abría la puerta del Tragí de la cocina) y
continuación del otro, extendidos al lado tenía que revolver á la derecha, ó sea ha-
del último claustro hacia la huerta. Eran cia Oriente, entrándose por la de Gom-
hermosas y muy desahogadas piezas, tam- bau (5). En la misma, cerca del convento,
bién abovedadas, aunque no góticas, pero frente de esta última calle, un nicho ele-
sí adornadas con numerosos lienzos al vado cobijaba una imagen de la Virgen,
óleo. La muy competente persona que me sin duda del Rosario, y como una parra
certificó de estas pinturas, el citado arri- del interior del patio, introduciéndose por
ba D. Luis Rigalt, me añadía que en este un agujero de la cerca, extendiera sus
convento había grandes lienzos en los que sarmientos y uvas alrededor de esta ca-
se veían muchos frailes predicadores, co- pillita, la imagen tomó ante el pueblo el
locados aquéllos en sendos marcos, aun- nombre de la Virgen de la Parra (6); ca-
que barrocos, de mucho carácter; que no lles, nicho, planta, nombre y demás típi-
recordaba ni el mérito ni el lugar de su cos de la patriarcal Barcelona del comen-
estancia, pero que sí tenía muy presente zar del siglo xix.
que los había en el refectorio, pieza en la Por detrás de las primeras casas de la
cual él había comido; que estos del refec- calle de Gombau extendíase hacia Orien-
torio eran bastante grandes; que á su de- te, según arriba indiqué, un brazo del
rredor corrían lemas, y que procedían de convento, cuyos bajos ocupaban primero
un pintor de chispa, ya que sus figuras, el espacioso depósito de letrinas y luego
con vestir todas el mismo hábito domini- otra pieza paso para la tercera, que era
cano, tenían expresión (2). Estas piezas, el almacén de la madera ó carpintería (7).
como la capitular, recibían luz por el El lado N. del convento, ó sea de hacia
Acecino claustro por medio de ventanas montaña, formaba una ala muy larga,
abiertas sobre el nivel de la techumbre que procediendo desde las piezas última-
de su galería (3). mente nombradas, ó sea de las espaldas
Del otro lado de los refectorios, ó sea de las casas de la calle de Gombau, llega-
á su Oriente, caía la cocina (buena pieza ba, no sin formar antes un recodo en án-
de planta cuadrada), sus dependencias y gulo recto hacia atrás, hasta la de Frei-
su patio, el cual venía á estar en la actual xuras. Consistía este recodo en que el
unión de la calle de Giralt Pellicer con edificio en cierto punto echaba unos pa-
la de Alvarez; de modo que procediendo sos hacia atrás, continuando empero en
de la de Colomines, y caminando por la la misma dirección de la anterior parte
de Giralt, hallábanse en la izquierda ma- adelantada (8). El piso bajo de dicha ala
no, por el orden que voy á nombrarlas, ocupaban almacenesde la casa, tales como
las siguientes piezas: el ábside del tem- el de los adornos del templo y otros (9). A
plo, la sacristía, el patio del pozo de San- sus pies extendíase la grande huerta, que
to Domingo, el del noviciado y el de la abarcaba desde los jardincitos ó patios
cocina, patios inrerpuestos entre el ala
del convento y la calle (4). Y como la de
parciales, tales como el plano inserto en la obra de los se-
ñores Casademunt, citada.
(1) Relación de Carranca de 24 de junio de 1884. (5) Relaciones varias del antiguo monacillo del conven-
(2) Relaciones de 23 de enero de 1883 y 22 de enero de to Torallas, del nombrado Estalella, y de otros.
1894. (6) Relaciones v a r i a s de Torallas, Estalella y otros.
(3) Relaciones del P. Romualdo Espinas de enero de (7) Diseños de plano de Estalella ya citados.
1886 y de Torallas de 28 de noviembre de 1886. (8) Relación del P . Romualdo Espinas de 26 de mayo
(4) Diseños de plano que me dibujó el antiguo depen- de 1888, y planos de Barcelona, uno del siglo x v n y otro
diente de la cocina de este convento D. Cayetano Estale- del x v i u .
11a, relaciones varias de D. Jaime Torallas, y otros datos (9) Relaciones de Torallas y Estalella.
DOMINICOS 31

traseros de las casas de la calle de San he podido ver por mis propios ojos un
Pedro Baja (1), hasta el convento, cuya cacho de 10'50 metros de largo de la só-
línea septentrional arrancaba de frente lida cerca de la dicha huerta, á la cual
el ángulo formado por la calle de Tragí y cerca adornaban en su borde superior
la de Freixuras. Frente ó casi frente de graciosas almenas (ó sea tnarlets), testi-
la bocacalle de Tragí hallábase la fuente monio del título de Real de que gozaba
pública, aún hoy (1900) en pie y en ser- el convento (4).
vicio, la cual marcaba el límite N., ó me- No le faltaba agua, y por lo mismo lo-
jor NO., del edificio convento (2), y á su zanía, á esta huerta, pues ya Jaime I
lado septentrional abríase la puerta del concedióla al convento abundante y po-
Tragí, formada por un arco redondo mo- table, procedente de la Acequia Condal;
derno, la que directamente daba al huer- agua que, además de la huerta, surtía á la
to (3). Cogía, pues, el edificio el actual cocina y á los refectorios (5). En aquélla
mercado, excluyendo de él la pescadería; recogíase en espacioso lavadero, ó zafa-
y la huerta la calle intermedia entre estas reche, situado junto la cerca divisoria
dos construcciones, la pescadería, la calle con la casa de la calle de San Pedro nú-

::±i MÍWTVT '^h^^^f^^?^^


ALMENAS Ó SEA MARLETS,, DE LA CERCA DE LA HUERTA

de Lacy y los edificios de su Septentrión mero actual 32, propiedad en 1835 de los
hasta dar con los jardincitos de la Baja señores Lletxós (6), hoy de Don Joaquín
de San Pedro, salvas empero las prime- Salgot y Gros. Y sin duda á prevención
r a s casas de la calle de Freixuras, que á de los eclipses que suelen aquejar á los
manera de baluarte las edificaron para su manantiales, la previsión de los frailes
reparo los frailes. Esta huerta por el lado construyó en la misma huerta una no-
de NE. llegaba hasta lindar con parte de ria (7). Además por los años de 1830 á
la cerca trasera de la casa número 38 1831 el convento adquirió algunas plumas
actual de la nombrada calle Baja. Allí del de Moneada; y el Ayuntamiento, en
recompensa de haber consentido los frai-
(1) Escrituras de venta por el Estado de parcelas de les en 1830 en la construcción de la fuente
esta huerta autoi izada por D. Manuel Clavillart en 23 de pública de la calle de Freixuras enclava-
junio de 1847.
(2) Relaciones del P . Romualdo Espinas de 24 de marzo
da en el maro del convento, concedió á
de 1882 y 31 de mayo de 1887, y de D. Jaime Torallas de éste las sobras de la misma fuente (8).
20 de febrero de 1887. Di jome muy redondo el P. Espinas Junto al nombrado lavadero, y á su
que t r a s de la fuente había edificio, no huerta, pues la
fuente formaba la esquina de aquél. Algunos otros datos
parecen indicar lo contrario; es decir, todos convienen en (41 L a s vi en marzo de 1899.
que el edificio llegaba hasta la fuente, discrepando sólo (5) Relaciones del P. Espinas de 16 de julio de 1884 y de
en si incluida esta ó excluida. Sin embargo, atendiendo al otras fechas.
g r a n peso del dicho del sesudo P. Espinas, al de otro tes- (6) Diseños de plano trazados por D. Cayetano E s t a b -
tigo, y sobre todo á dos planos que en el mermadísimo ar- lia y relación del fraile de este convento P. Manuel Ribe
chivo del convento he visto, creo verdad que el edificio de 6 de junio de 1880.
llegaba hasta el extremo septentrional de la fuente, ó sea (7) Escritura de venta de esta parte de la huerta por
que la fuente tenía t r a s de sí-edificio, y no huerta. Empe- el Estado, autorizada por el notario D. Manuel Clavillart
r o , en el adjunto plano mi dibujante siguió la opinión en Barcelona á 23 de junio de 1847.
opuesta. (8) Relaciones del P. Romualdo Espinas de 16 de julio
(3) Relación de D. Jaime Torallas y de otros varios. de 1884, y 31 de mayo de 1887.
32 CAPÍTULO OCTAVO

Oriente, un frondoso parral, adherido á en el que se habla de los deshechos de


la cerca, ofrecía honesto solaz á los re- éste consistentes en piedras «de sillería,
creos de los frailes (1); así como un sen- maderas...» (9) En 1823 la revolución
cillo cobertizo prestaba abrigo á los fru- constitucional derribó esta ala de edificio,
tos recogidos y aperos, y una reducida de modo que la entrada á los claustros
cuadra á las bestias de labranza (2). quedó abierta para todo transeúnte (10).
Por el lado occidental el convento tuvo Caído el despotismo constitucional, y
en el siglo xrx dos distintos límites. En restituidos á los frailes sus terrenos, con-
los primeros lustros llegaba hasta la ca- sintieron éstos, como más á la larga se
lle de Tragí, con cuya bocacalle N. enca- n a r r a r á en su lugar y día, en la apertura
jaba el extremo S. de la de Freixuras, de la prolongación meridional de la calle
terminando por lo mismo ésta frente la de Freixuras; y entonces el convento dio
fuente (3). La muy ancha ala de edificio á censo los solares limitados por dicha
comprendida entre los claustros y la prolongación y la calle de Tragí (11) me-
nombrada calle de Tragí contenía la mag- diante el pago de una peseta de pensión
nífica portería (4), la tahona (5), la cocina, anual (12); y procedió á la edificación del
los refectorios, la farmacia y otras de- ala del convento que quedaba entre los
pendencias en el piso bajo; y la enferme- claustros y la mentada prolongación,
ría, el hospicio de la Orden, ó sea las prolongación que, como todas las calles
habitaciones destinadas á los frailes tran- que rodeaban al convento, tenía muy
seúntes de otras provincias (6), la acade- corta anchura ó mejor harta estrechez,
mia, la pública biblioteca (7) y quizá pues no pasaba de unos 3'70 metros (13).
otras en el alto. Y sin duda las principa- En la parte baja de esta ala construyó on-
les de estas piezas lucían por su hermosa ce tiendas con entresuelo (14), cada una de
arquitectura ojival y magnificencia, cuan- ellas dotada de una puerta con una ven-
do el señor Pi y Arimón escribe que su tana á cada lado. En la vecina á la fuente
edificación se hizo «á expensas de los mu- colocó la tahona con comunicación inte-
chos caudales que donó en vida y legó rior con el claustro para el paso del
después de su muerte .. Don Berenguer pan (15); mientras en el extremo meridio-
de Moneada, que. murió en Sevilla a 13 nal puso la portería según arriba expli-
de noviembre de 1268...» y que estas pie- qué, y quizá en la parte vecina al claus-
zas «se levantaban cuando las paredes tro alguna otra dependencia. En el piso
del templo» (8). Corrobora esta opinión alto dispuso inmensas salas dotadas de
un documento del Archivo del mismo grandes ventanas, destinadas aquéllas á
convento, de fecha posterior al derribo, la pública biblioteca. El nefasto 1835 sor-
prendió esta obra sin terminar, pero tan
(1) Relación citada de D. Cayetano Estalella de enero
de 1886.
(2) E s c r i t u r a de venta por el Estado, citada. (9) Archivo del convento. Borrador de memorial a l
(3) Muchos testigos, ó mejor frailes y vecinos que, si Ayuntamiento.
no lo vieron, lo supieron de fijo. Además resulta de mu- (10) Jaime Torallas recordaba el terreno hecho una pla-
chos documentos del archivo del convento que he tenido á za de ruinas.
la vista. (11) Relaciones de varios. Muchos documentos. L a pri-
(4) Biblioteca provincial-universitaria. Sala de manus- mera casa en su c a r a meridional aún hoy (1900) tiene la
critos.—Manuscrito anónimo titulado: Noticias de Barce- fecha MLCCCXXX, sobre la p u e r t a .
lona 1815 (í 1S23. Por el contexto se ve que es obra de un (12) Me lo dijo el dueño de la más meridional de estas
dominico de este convento.—Nota suelta, borrador, colo- casas, D . Bernardo F à b r e g a s , en mayo de 1888.
cada dentro del libro p a r a ser t r a s l a d a d a á él. (13) Lo medi en pasos por el adoquinado antiguo, que
(5) Acuerdos del Ayuntamiento. Sesión del 6 de marzo no se quitó h a s t a por los años de 1890 ó quizá m á s t a r d e .
de 1823, pág. 496. (14) Relaciones del P . Espinas, del vecino D. Pablo
(6) Relaciones del P. Espinas de v a r i a s fechas. Mota, de D. J a i m e Torallas y de otros, y escritura auto-
(7: Relaciones del P . Espinas de v a r i a s fechas, del pa- rizada por el notario D. Manuel Clavillart en Barcelona á
dre Manuel Ribé, fraile de este convento.—Pi y Arimón 12 de mayo de 1846.
en la memoria inédita citada. ¡ (15) Muchísimos testigos dan cuenta de esta tahona, ta-
(8) Memoria inédita ya citada, p á g . 14. les como Estalella, Munné, e t c .
DOMINICOS 33

adelantada, que la tahona y tiendas esta- jugaban á lo que en la tierra se llama


ban ya habitadas, y construidos los gran- á bot xas (6).
des salones de la biblioteca (1). El ala en segundo lugar mentada con-
El convento no tenía más que pri- tenía en la parte occidental celdas de
mer piso alto y segundo, y aún éste de frailes, las que, como indiqué, daban al
muy apocado techo (2). La grande ala huerto (7); y atravesado el cruce con el
de edificio que partiendo de la escalera corredor de la primera ala, caminando,
de junto al templo, llegaba al huerto, pues, á Oriente, hallábase la celda prioral,
formando el lado oriental de ambos claus- la enfermería, y la biblioteca colocada
tros, estaba en su primer piso alto atra- allí provisionalmente (8). Cuando la co-
vesada por su centro por un ancho corre- munidad se reunía en Capítulo lo efectua-
dor, que desempeñaba el papel de eje. Su ba en la sala prioral (9), á cuyo efecto
entrada daba en la nombrada escalera, y rodeaban á esta numerosísimas sillas de
el balcón de su opuesto extremo al huerto, baqueta, adornadas en sus respaldares
teniendo en ambos lados de su longitud con sendas imágenes de fundadores y
celdas, de las cuales las de Oriente reci- santos (10). Dije arriba que esta ala de
bían luz y aire por los patios del pozo de edificio en su mitad oriental se adelan-
Santo Domingo, del noviciado y de la taba un trecho dentro de la huerta, for-
cocina; y la de Occidente por los claus- mando por lo mismo un recodo y un
tros (3). El ala que, contigua á la huerta, ángulo recto saliente: la celda de este
cruzaba perpendicularmente en su extre- ángulo gozaba la dignidad de haber al-
mo N. á la indicada, tenía igualmente su bergado á San Vicente Ferrer (11).
corredor dotado de celdas, que miraban Los corredores brillaban por su buena
á la referida huerta (4). Penetrando por anchura y bóveda moderna; y las celdas,
la puerta de la escalera de junto al tem- aunque no grandes, tenían sala y alcoba
plo en el corredor en primer lugar men- con buenas luces (12). Los muros y cercas
tado, hallábase ante todo el noviciado, ó bien mostraban á la legua á qué clase de
sea las celdas de primer piso habitadas edificio pertenecían, pues más que pare-
por los novicios, extendidas desde dicha des parecían por su solidez murallas,
escalera hasta frente la calle de Gombau, acreditando el dicho, en esta tierra vul-
y luego el constado, incomunicado con gar, de obra de frare (13).
el noviciado, y con escalera procedente Antes de terminar la descripción de la
del deprofundis (5). Los dependientes se- parte material del edificio, no sé, ni quie-
glares del convento, tales como monaci- ro, prescindir de copiar fielmente aquí
llos y auxiliares de la cocina, calificáron- una nota anónima que hallé entre los
me de centro impenetrable estas dos papeles del archivo del mismo convento
dependencias; y sólo veían que los jóve- salvados del incendio, y en poder, cuan-
nes, cuando en sus ratos de recreo baja- do la leí, del Padre Provincial exclaus-
ban al patio ó huerta del noviciado, trado , Padre Romualdo Espinas. Dice
así:
. (1) Relaciones del P . Espinas, de Torallas y de otros.
D. Cayetano Cornet y Mas me dijo había estado en estos (6) V a r i a s relaciones de Torallas y de Estalella.
salones después de la quema de otros lados del convento. (7) Descripciones citadas del P . Espinas y de Torallas.
(2) Relaciones de D. Simeón Tuyet de 19 de agosto de (8) Diseño,no plañe, del convento sólo borroneado, exis-
1880 y del P . Jaime Ros de 10 de febrero de 1882. tente en el archivo del mismo convento.—Descripciones
(3) Descripciones menudamente hechas por el P. Ro- del P. Espinas y de otros.
mualdo Espinas en varias ocasiones, pero especialmente l9) Relación del P . Jaime Ros de 10 de febrero de 1882.
en 24 de marzo de 1882, y por D. Jaime Torallas en 27 de (10) Relación del P. Ros, citada últimamente, y de don
julio de 1895. Felipe Carranca de 24 de junio de 1884.
(4) V a r i a s relaciones citadas del P . Espinas y relación (11) Me lo dijo el P. Romualdo Espinas.
de Torallas de 1895. (12) Relación de D . J a i m e Torallas de 27 de julio de 1895.
(5) Descripción del P. Espinas últimamente citada y de (13) Relación de D. Simeón Tuyet, de 26 de febrero, de
otros. 1886.
TOMO II 3
34 CAPÍTULO OCTAVO

«La Iglesia te palms stíperf* . 61.500


él, que ilustran la de la tierra (5). Del
Lo hort te palms superf3 . . . 139.500
orden que en este archivo reinaba me
Los claustros 42.000
certificó su bien dispuesto índice, que he
Los patis formaban ps supfs .. 46.500
visto entre sus papeles modernos salva-
Los edificis formaban ps snpfs 108.250
dos de las llamas.
Y no sólo contenía esta dependencia
total de palms superficials. . 398.750 los documentos referentes al propio con-
De estos ne han destruit per fer plaza vento, sino los concernientes al común ó
los marmesors de nostre Pare Adam generalidad de los demás, pues toda jun-
ta de prelados regulares se reunía en
cosa de 100.000 palms
Santa Catalina (6), y allí en el departa-
esto es del hort. . . . 28.000 mento llamado Arxiu dels Regulars se
de pati 32.400 custodiaban los papeles que á las ca-
de edificis 39.600.» sas religiosas en común se referían (7),
privilegio ó distinción debida sin duda á
Se refiere el anónimo autor al derribo la mayor antigüedad de Santa Catalina
de 1823, y al hacerlo nos certifica de la sobre las demás de la ciudad.
grande cabida ó extensión del solar del La Comunidad deputaba un sacerdote
convento. para archivero, el cual en 1835 se llamaba
A este histórico convento, poblado Domingo Vila (8). El lugar del edificio
siempre de ilustradísimos frailes, no le donde se albergaba el archivo estaba en
faltaba su rico archivo, provisto de nu- sus últimos tiempos cercano á la biblio-
merosísimos y bien ordenados documen- teca, ó sea en el brazo de convento pró-
tos de todas sus edades. De la existencia ximo á las calles de la Claveguera y de
de él nos dan incontrastable testimonio Tarros (9).
el dicho categórico del Padre Jaime Ros, En un principio hallábase la biblioteca,
presbítero, de esta casa (1); el de Don Si- según indiqué, en el cuerpo de edificio
meón Tuyet, vecino de ella, que la fre- que daba á las calles de Freixuras y Tra-
cuentaba á todas horas (2); Villanueva, gí. E n el derribo sufrido por esta ala de
al estampar que la Espina de la Corona edificio en 1823 fué pacíficamente trasla-
de Cristo, que poseía el templo, era «dá- dada al brazo oriental que se alargaba
diva de San Luis Rey de Francia, cuya hacia las calles de Tarros y Claveguera,
carta original se guarda en el archivo, donde mediante el derribo de los tabiques
fecha en París en noviembre de 1262» (3), de varias celdas del primer piso alto se
y los numerosos restos que de él pude yo le dispuso un desahogado salón y depen-
mismo registrar y estudiar, además de dencias (10); local que interinamente debía
los que se guardan en la parroquia de
San Agustín de la presente ciudad (4),
y de los valiosos que quedan en la sala (5) H e aquí el título del libro: «Lumen Domus, ó anals
de manuscritos de la Biblioteca provin- del convent de Santa Catharina V . y M. de Barcelona,
orde de Predicadors, compost per lo R. P . F r . Fransec
cial universitaria de Barcelona. De entre Camp-Rubí, y adicionat y posat en ordre cronològic per
los últimos no debo omitir el Lumen Do- lo R. P . Lector F r . P e r e Mártir Angltfs bibliotecari de dit
convent en lo any 1742, essent Prior lo M. R. P . Mestre
mus, que forma tres abultadísimos y gran- F r . Joseph Mercader en son segón priorat.»
des volúmenes que contienen la historia (6) Libro de acuerdos capitulares del monasterio de
detalladísima del convento desde 1219 á San Jerónimo de Vall de Hebrón, págs. 320 y 352.
(7) Vide el capítulo V I de este libro, artículo 1.°, donde
1803, y mil otras noticias no referentes á sacándolo del libro de las resoluciones del convento del
Carmen calzado, de Barcelona, folio 227, se lee: «Si se de-
sitja major noticia de tot assó se pot a n a r a l A r x i u dels
(1) Relación de 3 de marzo de 1880. Regulars, que es en Santa Catarina.»
(2j Relación de 26 de febrero de 1886. (8) Relación citada de D . Simeón Tu5Tet.
(3) Obra citada. Tomo XVIII, págs. 200 y 201. (9) Relación citada de D. Simeón Tuyet.
(4) Se me dijo por un sacerdote de dicha iglesia. (10) Relación del P . Manuel Ribé, y a citada.
DOMINICOS 33

ocupar hasta la conclusión del nuevo en varios mapas geográficos, manuscritos,


el ala de la calle de Freixuras, según ya etcétera, c u i d a d o s a m e n t e arreglada,
en otro lugar escribí. abierta al estudio público, la Biblioteca
Constábala antigua de varias piezas,co- de los Padres Predicadores, justo es y pre-
locada en el brazo de casa que se levanta- ciso el confesarlo, constituía un manan-
ba entre el segundo claustro y la huerta. tial puro é inagotable de la instrucción
«Corredores de la librería del medio y de popular. ¡Quién nos dijera á nosotros, que
España» leí en un plano (1). De su atrio, ó tantas veces saboreamos en su delicioso
antesala, y de los científicos adornos de él, retiro el sosegado y dulce placer de la
nos certifica un manuscrito del siglo xvm, lectura, que vendríamos á pisar en otra
el que refiriéndose á la biblioteca habla época sus umbrales, y nos sorprendería
así: «y ocupando el lugar sobre el Portal el espectáculo más desconsolador!» (3).
M or otro del R mo Ripoll instituidor de esta El mismo autor (liberal por más señas) en
riquísima Joya para cuya manutención otra de sus obras nuevamente menta «los
señaló correspondientes réditos como y 22.000 volúmenes, los innumerables pre-
para dos Bibliotecarios á fin que puedan ciosos y raros manuscritos y cartas geo-
emplearse en las oras señaladas á vtilidad gráficas que contenía» (4) dicha biblio-
•del Publico, por cuyo Beneficio instituyó teca; volúmenes y documentos que, al
esta apreciable prenda, que comprehende ser sacados del convento después del in-
mas de 15 mil volúmenes (que después cendio, y por lo mismo sufridas ya las
crecieron en número) siendo por la ma- consiguientes depredaciones, llenaron
yor parte selectisimos en todas faculta- aún treinta y seis carros, según los contó
des: ella tiene su atrio correspondiente, un vecino de la calle de Tragí, de cuya
qual en la diversidad de curiosos Mapas, boca lo tengo (5).
que presentan entrambos globos, y las Contestes los textos arriba citados ates-
quatro partes del Mundo, con todas sus tiguan lo selecto de las numerosas obras
Naciones y Ciudades Principales, es digno de esta biblioteca, y aun cuando callaran,
embeleso de la curiosidad y recreo de lo pregonaran muy alto los abundantes
todo buen gusto» (2). De que luego creció, despojos de ella, que ya en la provincial-
y no poco, el número de los volúmenes, universitaria, ya en manos de todos se
nos certifica un testigo ocular, Don Ave- prestan al examen del curioso. Sin per-
lino Pi y Arimón, cuyas son las siguien- quirirlos de los impresos viniéronme á la
tes líneas: «Hora es ya de decir que el vista la gran colección de concilios de
convento de Santa Catalina poseía otra Labbe, la Crónica de Cataluña de Carbo-
preciosidad mayor, si cabe, que las refe- nell, impresa con caracteres góticos en
ridas: la Biblioteca. Fué fundada, dotada 1547, varios tomos del Flórez, y mil otros,
y enriquecida con las mejores obras de todos de verdadero mérito. De los ma-
todas las ciencias y artes por el General nuscritos, el Magister Franciscus Victo-
d e la Orden el P. M. Fr. Tomás Ripoll. ria ordinis Praedicatornm in 1 parte
Si algo supone en la historia literaria una D. Thomae commentaria; la Postilla lit-
colección selecta de 22.000 volúmenes, teralis Fr. Nicolai Eymerici super Lu-
cam; otras Postillae del mismo autor
sobre otros Libros sagrados; doce en fo-
£1) Plano del convento de principio del siglo xix. Este lios, cuyos títulos dicen así: el primero,
plano, sin título, lo vi en los restos del archivo de este
•convento que conservan los P P . dominicos. Memorias del succehit desdel añ 1608 al
(2) F r a g m e n t o de un cuaderno que describe las capillas 1626; el segundo, Memorias del succehit
-c iglesias de Barcelona, por donde deduzco que el cuader-
no ó libro sería una descripción de la ciudad, ó al menos
d e su parte religiosa. Es del tiempo en que regía la Orden (3) Barcelona antis»" y moderna. Tomo I, pág. 5£6.
•dominicana el Rdmo. Boxadors (segunda mitad del sl- (4) Memoria descriptiva, citada ya, pág. 14.
.glo xviii).—Se halla en la sala de manuscritos de la Bi- (5) El tejedor vecino D. Pablo Mota. Me lo dijo en Bar-
blioteca provincial-universitaria de Barcelona. celona á 5 de mayo de 1882.
35 CAPITULO OCTAVO

desdel añ 1626 al 1631 inclusive; los otra con este título: Hic sunt aliqua bre-
cuatro siguientes son memorias de lo viter collecta de sancta vita et miraculis
acaecido en Filipinas desde 1680 á 1697; Fr. Raymundi de Pennaforti... Y digo
el siguiente se titula: Memorias ó memo- que este códice es raro y tínico porque es
rials pertañents al St Tribunal de la el que sirvió cuando se entendió en la
Santa Inquisició; otro Memorias desdel beatificación del Santo, el único fidedigno
Any 1675 fins á 1700 inclusive, de co- de donde entonces se tomaron las noticias
sas pertañents á nostra sagrada Reli- de sus virtudes y milagros, como escrito
gió, y los cuatro restantes se refieren á y sacado en 1351 de las memorias que ha-
hechos religiosos de los mismos años (1). bía escritas en el archivo de esta casa...»
Se me aseguró por respetable persona, «Volviendo ahora á los códices vi allí
que esta biblioteca poseía un autógrafo dos arábigos manuscritos, dignos de ser
cíe San Raimundo de Peñafort (2). Villa- examinados por quien tenga más pericia
nueva escribe una larga reseña de los que yo en su lectura. Del uno de ellos,
manuscritos que allí llamaban su erudita en 4.°, bien entendí que sea el Coran...»
atención, del cual voy á copiar aquí al- «Algo más podré decir de un códice
gunos párrafos. «Dejando aparte, dice, la griego sin nota alguna en otro idioma que
noticia de varios manuscritos de religio- indiqué lo que es... pude al cabo sacar en
sos de mi orden (la dominica) que han limpio que es la colección de las actas
enriquecido considerablemente mi Biblio- del sínodo VI General Constantinopoli-
teca de escritores, abunda esta biblioteca tano III del año 680, copiadas en papel,
(de Santa Catalina) de códices preciosos en 4.°, y á lo que parece en el siglo xvi...»
y raros, cuya noticia puede interesar á «Volvamos de la Grecia á Cataluña y
los literatos, tal es un manuscrito del si- hablemos de otros códices lemosines,
glo xiv en 4.° papel, que contiene Doctri- pues tan usado y justo es que cada cual
nas morales, divididas en sesenta y cinco alabe su nación. Y á fe que en orden á la
capítulos. Su autor es un Judío Catalán, noticia de los jueces ó regidores de este
y acaso hijo de Barcelona, llamado Ja- principado, llamados Consellers, es exce-
fuda...» lente un códice intitulado: Llibre aon es-
«Un cuaderno fol. men. que sólo com- tan escrits tots los noms dels Consellers
prende diez tablas astronómico-geográfi- de Barcelona desde el temps del Rey
cas. No es obra antigua, pero de gran Don Jaume, dit lo Conquistador, qtiels
exactitud en la demarcación. Compren- instituy ab tots los privilegis, etc. fins
de todo el continente de América y Áfri- al present any 1602. Su autor es Jaime
ca...» Ramón Vila, escrito por Guillem Dru-
«Del célebre Don Francisco Eximeniz sian, Mallorquín. Tampoco es desprecia-
hay el Vita Christi, y el libro de las Do- ble otro libro manuscrito que trata De les
na*, manuscritos del siglo xv. Otro vol- batalles y conquestes que los nobles Se-
fol. contiene otros escritos del mismo; es nyors Reys Dar ago han fet as. Comienza
á saber...» del Conde Don Ramón Berenguer IV y
«Lo que es muy raro y tínico en su lí- acaba en el sitio de Gerona puesto por el
nea es un códice manuscrito en pergami- Rey Felipe IV de Francia. Esto hace creer
no del año 1351 donde después de la le- que el autor, que no se sabe quién sea, es-
yenda de Santo Tomás de Aquino, sigue cribió por este tiempo, esto es, á fines del
siglo XIII. El carácter del manuscrito pa-
rece ser del siglo xiv.»
(1) Todos los libros aquí citados y los manuscritos se
hallan, excepción hecha del Carbonell y del Flórez, en la
Biblioteca provincial-universitaria. «Comencé y concluí la copia de un es-
(2) El P. José' Antonio Cata, que ordenó los manuscritos
de la provincial-universitaria, me dijo haberlo visto allí, crito raro' de que voy á hablar. Hállase
6 de febrero de 1882, en Barcelona. incluido en un vol. fol. que merece de por
DOMINICOS 37

sí su descripción. Contiene las obras de «En la biblioteca catalana, que se está


aquel Manuel Diez de quien hablé en la preparando (habla en 1805), se pondrán
carta XXXII como autor del libro de Me- en claro los trabajos hasta ahora ocultos
nescalia. Aquí he hallado otras obras del de este hábil archivero y laborioso histo-
mismo desconocidas á los bibliófilos, las riador del siglo xv {Pedro Miguel Carbo-
cuales declara el epígrafe, que copiaré nell). En la biblioteca de este mismo con-
entero, y será lo mejor: Así cotnensan los vento me vinoá las manos un códice, que
libres de madtsines fetes de diverses re- contiene, como digamos, algunos de sus
septes, que é tretes del tresort de beutat, ocios y apuntaciones sueltas. Comienza
segons aquelles é trobades pus nobles he por una poesía lemosina, que intitula...»
pus aprovades per espericncia dalgunes Sigue una copia hecha por Carbonell de
notables persones.. » una obra de D. Rodrigo Sánchez de Aré-
«De Arnaldo Ter rem, Terreny ó Terre- valo, obispo de Oviedo, y así otras co-
na... hay aquí un manuscrito inédito é pias. «Todo esto contiene el volumen
ignorado De divino extremo judicio, con sobredicho. También se guarda un códice
un apéndice de Factis Antichristi... Hay manuscrito del siglo xiv, y es la versión
también una obrita intitulada: El caballe- catalana del libro de Consolatione, de
ro determinado, y es traducción en verso Boecio, que trabajó Fr. Antonio de Ge-
castellano hecha por D. Hernando de nebreda... para uso y consuelo del Infante
Acuña, dedicada á Carlos V, de la obra Don Jaime, hijo del último Rey de Ma-
francesa que compuso Mi'cer Oliver de la llorca, durante su prisión y trabajos con-
Marche en abril de 1483... Del canónigo siguientes á la privación de su reino...»(l).
Tarafa hay una Crónica de Caballers Además de tantos tesoros científicos y
Catalans, ó sea tratado de las familias literarios, poseía esta biblioteca en un
ilustres de este principado con sus escu- reservado otra de libros heterodoxos, en
dos pintados. Es copia mandada sacar la cual se guardaban, al decir de muchos
por Jaime Ramón Vila en 1603. Tampoco délos testigos por mí interrogados, los pro-
es de omitir la noticia de un vol. 4.°, ma- hibidos por la Inquisición. He tenido en
nuscrito, intitulado Desengaño de Judíos. la mano el índice de lo que se conté en lo
Es puntualmente la carta de Rabi Isaac, quartet de los Llibres prohibits de esta
traducida en Español por Fr. Alonso de Llibreria del Convent de S" Catharina
Esquivel en Oran el año 1602...» Verge y Mártir de Barcelona (2).
«Por el mismo motivo quiero acordar Pero ¿para qué insistir en probar el
algunos opúsculos comprendidos en un gran valor científico y literario de esta
vol. 4.°, manuscrito, obra de Don Fran- biblioteca? Todos los autores de su tiem-
cisco de Navarra, Obispo de Badajoz, y po, sin distinción de campos políticos ni
después Arzobispo de Valencia, y son...» religiosos, la colocan en las nubes, y has-
«Dejo de decir algunas otras curiosida- ta el Ayuntamiento revolucionario de
des que son comunes, v. g., algunas Bi- 1823, que arrasó parte del edificio y la
blias manuscritas con lujo y prolijidad en quiso arrebatar, en sesión de 13 de marzo
el siglo xiv, entre ellas son preciosas dos de 1823 la llama «preciosidades que encie-
en 8.° y vitela finísima...» rra aquel establecimiento» (la biblioteca),
«Se me olvidaba decirte que he copiado y acuerda que para librarla de peligros,
un Cronicón que escribió el maestro fray sea trasladada, si es necesario, al salón
Pedro Arenys de las cosas que pasaron del convento «hasta que venga el caso de
durante su vida, que comenzó á 10 de Di-
ciembre de 1349, y duró hasta el 1443,
período memorable por los graves acon- (1) Villanueva. Obra citada. Tomo XVIII, págs. de la
176 á la 205.
tecimientos que afligieron y alegraron la (2) Biblioteca provincial-universitaria de Barcelona.—
iglesia y esta corona...» Sala de manuscritos.
38 CAPÍTULO OCTAVO

encargarse de ella la Universidad» (1). A cenobio tan antiguo y principal n a


No sin razón, pues, gozaba públicamente podía faltarle correspondiente patrimo-
la fama de ser la mejor de Barcelona (2). nio, de cuyas fincas intento tejer aquí
Todo aficionado puede en las públicas sucinta reseña.
bibliotecas, en las privadas, en los bara- 1.° Poseía las dos primeras casas d e
tos de libros, distinguir perfectamente de la cara septentrional de la calle de Gom-
los demás los procedentes de la presente; bau, marcadas antes con los números 5 y
llevan en el corte grabada con fuego la 6, y después, en 1845, con los 10 y 11 y ac-
insignia de Santa Catalina, esto es, una tualmente, con los 1 y 3, compuestas de
rueda de tormento, truncada y provista piso bajo y cuatro altos. Lindaba la 5 á
de garfios en su circunferencia, además E. con la número 6, á Mediodía con la
del rótulo de ella inscrito en la portada nombrada calle, y á O. y N. con honores
de algunos (3). del mismo convento, dando el patio de
El convento-destinaba al cuidado de la ella al huerto de éste. La de número 6
biblioteca un padre y un lego, los cuales, lindaba á E. con la de Vidal, ó sea la an-
tres horas por la mañana y tres por la terior á la del pasaje arriba mentado,.
tarde, con toda afabilidad, no sólo pro- propiedad del mismo Vidal; á S. con la
porcionaban al estudioso los libros desea- calle y á N. con honores del convento (6).
dos, sino graciosamente papel y tinta (4). 2.° La casa número 1, de la numera-
Un conocido abogado de esta ciudad, don ción antigua, de la calle de Colomines,
Pedro Urgellés, decíame años atrás, que que constaba de piso bajo y tres altos, y
cuando estudiante, acudía con frecuencia lindaba á E. con la calle de Giralt Pelli-
á esta biblioteca; que allí era recibido con cer, á N. con la mentada calle de Colo-
mucha bondad y sencillez por el fraile mines, á O. con el número 2 de la misma
bibliotecario, con el cual entraba en se- vía, y á S. con un particular (7).
guida en amigable conversación; que no- 3.° La casa número 2, de la misma nu-
tando éste la afición del joven por el estu- meración y calle, mentada en la nota an-
dio de la esfera amilar, así que le veía terior (8).
entrar le conducía al aposento donde ésta 4.° La casa número 3 de la misma
se hallaba. calle y numeración, esquina oriental de
Después de las anteriores noticias, in- la de San Jacinto, en cuya calle tenía en-
útil se hace añadir que la biblioteca de tonces el número 1, lindando por lo tanto
Santa Catalina prestaba valioso servicio por E. con la número 2, y por O. con la
al pueblo barcelonés; pero por si alguien calle de San Jacinto (9). De donde resul-
dudase de ello, copio aquí palabras de un ta que el convento poseía las tres casas
testigo ocular autorizado, el P. Villanue- de la calle de Colomines que van de la de
va: «Es esta biblioteca pública desde que Giralt Pellicer á la de San Jacinto.
la dotó y aumentó para este objeto el 5.° La casa número 9 de la misma
M. R. Fr. Tomás Ripoll, General de mi calle de Colomines y antigua numera-
Orden, é hijo de esta casa. He visto el fru- ción (10).
to que el público saca de este estableci- 6.° La casa de un piso bajo y tres ó
miento, enriquecido con buenas ediciones
y gran copia de libros de todas ciencias (6) E s c r i t u r a de venta por el Estado autorizada por e!
y artes» (5). notario de Hacienda D. Manuel Clavillart, en Barcelona
á 10 de septiembre de 1845.
(7) E s c r i t u r a de venta por el Estado autorizada por el
(1) Arch. municipal. Libro de acuerdos de 1823, p . 573. notario D. Manuel Clavillart, en 28 de abril de 1842.
(2) Varios ancianos por mí interrogados. (8) Escritura de venta por el Estado ante Clavillart»
(3) Todo estudioso lo ha visto mil veces. en Barcelona á 10 de junio de 1844.
(4) Relación ya citada del P. Miguel Calvila. Relación (9) E s c r i t u r a de v e n t a por el Estado ante D . Manuel
ya citada del P . Jaime Ros.—P. Tomás Bou. Quatre con- Clavillart, en Barcelona á 16 de diciembre de 1840.
versas entre dos personatjes... Barcelona 1830, pág. 153. (10) E s c r i t u r a pasada ante el notario Clavillart, en B a r '
(5) Obra citada. Tomo XVIII, pág. 198. celona á 30 de diciembre de 1842.
DOMINICOS 39

cuatro altos, situada en el ángulo S. del tal modo dispuso las aberturas traseras
patio que precedía á la iglesia, edificada que no dominasen la dicha huerta. Ven-
por los frailes muy pocos años antes de didas por el Estado en 1844, fueron derri-
la exclaustración. Confinaba á E. con el badas, y en el solar de ellas edificadas las
templo ó capilla de Gracia, á S. con la actuales.
calle de Colomines, á O. con la plazuela 10.° La casa número 9 antiguo, cuya
de Santa Catalina, y á N. con el mentado correspondencia con el actual ignoro, de
patio ¡i). Hoy esta casa no existe. la misma calle de Freixuras, situada en
7.° En la calle de Freixuras, la casa la cara occidental de ella (8).
número 18 antiguo, 4 actual, compuesta 11.° La número 10, de las mismas cir-
de piso bajo, entresuelo y un alto, que cunstancias de la anterior (9).
lindaba á E. y S. con la huerta del con- 12.° Así como la de número 11, que
convento, á O. con la calle, y á N. con la constaba de piso bajo y tres altos (10).
siguiente (2). Medía su área 5.881 palmos ¿Poseía en aquellos sus barrios el con-
cuadrados (3). vento otras fincas? Así me lo dijo una
8.° En la misma calle la casa número anciana habitante de ellos; mas omitien-
17 antiguo, 6 actual, que constaba de los. do este dato, me limito en este punto á
mismos pisos que la anterior, y lindaba á reseñar los que leí en públicas escrituras.
E. con la huerta del cenobio, á S. con la Convienen las relaciones orales en la
casa anterior, á O. con la mentada calle, baratura extraordinaria de los alquileres
y á N. con la de número 16 (4). Su solar exigidos de sus inquilinos por los frailes,
constaba de 5.864 palmos cuadrados (5). y en el. crecidísimo aumento que súbita-
9.° La igual á las dos anteriores, se- mente experimentaron luego de haber
ñalada de número 16 antiguo, que proba- pasado las casas á manos de particula-
blemente, aunque no pueda categórica- res. Subían á unas cuantas pesetas al
mente afirmarse, es la 8 actual, lindante mes, y aun éstas cobradas con suma bon-
por E con la huerta del convento, p o r S . dad y afabilidad. Un amigo del respetable
con la de número 17, por O. con la men- anciano, que me contó el caso (11), habi-
tada calle de Freixuras, y por N. con Gi- taba una de las mentadas casas de la cara
rona (6). Su solar medía 5.902 palmos cua- oriental de la calle de Freixuras, y du-
drados (7). . rante el tiempo de los frailes pagaba por
Estas tres casas de la calle de Freixuras ella 4 duros mensuales; pero como al
edificó en sus últimos tiempos el conven- cabo de pocos años de la exclaustración
to para que sirvieran de reparo ó abrigo comprase estas casas un particular, pidió
á su huerta, que caía tras ellas. Mas no éste por la misma habitación 12.
buscando en su construcción el lucro, y 13.° En la falda meridional de la sie-
temiendo por otro lado las imprudentes rra de San Pedro Mártir, sobre el monas-
miradas y quizás insultos de sus inquili- terio de Pedralbes, la torre, ó casa de
nos, no las dio más que un piso alto, y de recreo del convento, aún hoy apellidada
en la tierra Santa Catarina ó lo Lleó,
(1) Escritura de venta por el Estado ante el notario compuesta de típica y desahogada casa
Clavillart, en Barcelona á 16 de diciembre de 1840.
(2) E s c r i t u r a de venta por el Estado pasada ante el de labranza con su patio de entrada cer-
notario Clavillart, en Barcelona á 24 de diciembre de 1844.
(3) Anuncio de l a subasta por el Estado inserto en el
Diario de Barcelona del 5 de julio de 1836. ts) Escritura de adjudicación por el Estado, pasada
(4) Escritura de venta por el Estado ante el notario ante el notario Clavillart, en Barcelona á 7 de marzo de
Clavillart, en Barcelona á 24 de diciembre de 1844. 1842.
(5) Anuncio de la subasta por el Estado, inserto en el (9) Escritura de venta de la casa siguiente por el Esta-
Diario de Barcelona del 3 de julio de 183o. do, ante Clavillart, en Barcelona á 16 de junio de 1840.
(6) Escritura de venta por el Estado ante el notario (10) Escritura de venta por el Estado ante el notario
Clavillart, en Barcelona á 24 de diciembre de 1844. Clavillart, en Barcelona á 16 de junio de 1840.
(7) Anuncio de la subasta por el Estado, inserto en el (11) D. José Pons, editor en Barcelona muy conocido y
Diario de Barcelona del 3 de julio de 1836. respetado. Me lo dijo en Barcelona á 5 de abril de 1887.
40 CAPITULO OCTAVO

cado y dependencias agrícolas «junto tentosamente hallada en la Edad Media,


con tres mundinas de tierra huerta den- y consta el nombre del sacerdote custo-
tro del mismo, y la pieza de tierra hortiva dio del año 1300. En fuerza de bula de
de tenida una mojada y una mundina, con Paulo V, expedida en 1607, el santuario
el algivar grande y la mina» (1). Del león con todas sus gracias y pertenencias
de piedra, por cuya boca fluye en el quedó agregado al convento de domini-
grande y abierto depósito, ó zafarache, cos de Barcelona. «Desde que está á su
el agua de la mina, fluye igualmente el cuidado se ha pintado la iglesia con san-
nombre popular de la finca. La rasante tos y beatos de la Orden de predicadores,
del nivel del agua de este aljibe coincide y se ha en g r a n manera aumentado su
con el castillo de Montjuich, lo que de- lustre y decencia. Pero las destrucciones
muestra que ambos edificios se hallan á y guerras han destrozado los altares, que
una misma altura. Unidas á esta casa, y á pesar de la suma escasez del santuario
junto á ella, poseía el convento 23 piezas se van reedificando decentes y vistosos,
de tierra que con otras dos, algo separa- como también el oratorio erigido en el
das, sumaban 82 mojadas, y una cuarta, pozo donde se halló la santa imagen.
de ellas unas de pan llevar, otras de viña, Junto á la iglesia está el religioso vicario
otras de olivos y algunas yermas (2). del Santuario en una casa capaz para
Caían estas tierras al derredor de la casa, hospedar los devotos que van á obsequiar
unas del lado del llano hacia casa Cam- á la Reina de los Angeles» (5), y son en
paña, otras de el del monte, llegando á su gran número. Hoy la iglesia, aunque in-
cresta; de modo que la ermita de San Pe- tacta, es bodega, y la sacristía, lagar. La
dro mártir pertenecía al convento; y el imagen estaba, en 1902, cuando la vi-
día 29 de abril, fiesta de este Santo, los sité, en un altar lateral de la parroquia de
padres dominicos celebraban en ella una Canovellas.
Misa cantada, y subían á visitar la ermita 15.° En el mismo término de Canove-
los pueblos de la redonda. Las más de llas el Mas Canyellas, compuesto de casa
estas tierras las cultivaba por sí mismo de cuatro cuerpos, dependencias agríco-
el convento, deputando al efecto un lego las y 64 y media cuarteras de tierra de
que dirigía los trabajos, el cual, en 1835, varias calidades (6).
se llamaba Buenaventura Bastardas. Y 16.° En el mismo término el Mas Da-
tan bien debió de hacerlo, que la llamada viu, que consta de casa de tres cuerpos,
desamortización, expulsados los frailes, dependencias agrícolas y 85 cuarteras de
confirmó á Bastardas en su cargo hasta tierra de diferentes calidades (7).
la venta de la finca (3). 17.° En el término de Vilanova de la
14.° En el término de Canovellas del Roca del Vallés y calle de Ariolf, tenía
Valles poseía el convento el santuario de el convento el Mas Grau de Validario,
la Virgen de Bellulla, que constaba de compuesto de casa, 69 cuarteras de tierra
iglesia con varias capillas, casa grande de diferentes cultivos y 83 de yermo unas
y 34 cuarteras de tierra (4). La imagen es y bosque otras (8).
de bronce, y aunque de cortísimas dimen- 18.° En el mismo Vallés y término de
siones (pues tendrá cosa de un palmo), Parets, la Torre de Malla, antiguamente
cuenta antiquísima fecha, ya que fué por-
(5) P . F r . Ramón Pujol, dominico, en la Historia de la
to Escritura de venta por el Estado ante el notario imatge de Ntra. Señora de Bellulla. Barcelona, 1851,
D. Manuel Clavillart, en Barcelona á 7 de enero de 1842. pág. 13.
(2) E s c r i t u r a de v e n t a por el Estado ante el notario (6) E s c r i t u r a de venta por el Estado ante el notario
D. Manuel Clavillart, en Barcelona á 7 de enero de 1812. Clavillart, en Barcelona á 6 de agosto de 1844.
(3) Relaciones del P . Romualdo Espinas, de 31 de di- (7) L a misma escritura anterior de 6 de agosto de 1844.
ciembre de 1888 y 4 de enero de 1889. (8) E s c r i t u r a de venta por el Estado ante el notario
(4} Venta por el Estado ante el notario D. Manuel Cla- Clavillart, en Barcelona á 24 de julio de 1848.—Diario de
villart, en Barcelona á 1 de octubre de 1845. Barcelona del 13 de abril de 1836, pág. 837.
DOMINICOS 41

apellidada Castell de Vilatzir (1), cuya casas de la calle de Argenter y sobre


importancia ignoro. otros bienes (7).
19.° En el término de Subirats el Mas Leída esta relación de propiedades y
den Saball, compuesto 'de casa, depen- derechos del convento,creerá el inexperto
dencias agrícolas, y 213 jornales de tierra que la casa nadaba en riquezas, y, sin
de distintas cualidades desde la campa embargo, no creerá la verdad. La manu-
hasta el bosque y el yermo, y dadas al- tención de una tan numerosa comunidad,
gunos de vinas á primeras cepas (2). la conservación de un tan dilatado edifi-
20.° En el mismo término el Masct cio, el sostenimiento de un culto tan es-
den Saball, compuesto de casa y 107 jor- pléndido como el de Santa Catalina, y las
nales de tierra, igualmente de diferentes numerosas limosnas, unido á la cortedad
calidades, cultivo y bosque (3). de los rendimientos de las fincas urbanas
21.° En el término del Prat de Llobre- de entonces, especialmente de las de las
gat poseían los dominicos dos heredades, angostísimas calles de este convento, y á
la una el convento de Santa Catalina, la la de siempre de las rústicas, explican
otra el colegio de San Vicente y San Rai- por completo esta que parece paradoja.
mundo; mas como de los documentos por Y al afirmar la casi pobreza del convento
mí con empeño examinados no se des- no hablo á humo de pajas. Cuando des-
prende cuál pertenecía al uno y cuál al pués del período constitucional los supe-
otro, las describiré aquí ambas. La pri- riores de la casa discurrieron sobre lo
mera, de nombre Casa Maresma, consta- que conviniese hacer del terreno produ-
ba de casa con 100 mojadas de tierra de cido por el derribo que parte del edificio
cultivo, 16 de pinar y 27 de tierra incul- sufrió en aquel triste período, consultaron
ta (4). La segunda, llamada TorreLlunell, al Superior de España, el cual, por boca
tenía casa y 94 mojadas aproximadamen- del Padre Vicente Sopeña, procurador
te de tierra de distintas clases (5). general de la Orden, contestó desde Ma-
Fuentes orales ó escritos de eruditos drid en 25 de julio de 1827 con estos tér-
indican alguna otra propiedad siempre minos: «Es indispensable ocupar con ca-
de poca importancia, mas omito su reseña sas, oficinas, etc. ¿Pero, me dirá V., c ómo
por no hallar basada en documentos feha- lo haremos? Si el convento tuviese treinta
cientes la noticia de ellas. ó cuarenta mil duros, sería yo el primero
22.° Además de las fincas poseía este en decir que se edificasen casas de cuenta
convento censos ó censales, la mayoría del convento. Pero dicho caudal no exis-
de cortísima pensión. Sin embargo, tengo te, ni existirá en tres siglos. No hay, pues,
noticia de uno de 160 libras (426*66 pese- otro remedio que vender. ¿Qué vendere-
tas) de pensión anual (6), y de otros tres mos? ¿La torre de Pedralbes? ¿La de...,?
cuyas pensiones en junto sumaban 213 Nada de esto porque estas torres son pro-
libras (568 pesetas), radicados sobre unas ductivas y nada valen las tierras puestas
en venta» (8). Conste, pues, que en 1827 el
convento no tenía 30.000 duros ni creía
(1) C a r t a del P . Vicente Sopeña, dirigida desde Madrid poderlos ahorrar en tres siglos.
en 25 de julio de 1827 al P. Superior de Barcelona, existen-
te en el archivo del convento. Otro testigo. Diario de En 1835 la comunidad de Santa Catali-
Barcelona del 2 de diciembre de 1835, pág. 2711. na constaba de 70 frailes entre sacerdo-
(2) E s c r i t u r a de venta por el Estado ante el notario tes, coristas, ó sea profesos no sacerdotes,
Clavillart, en Barcelona á 28 de noviembre de 1843.
(3) E s c r i t u r a de venta por el Estado ante el notario y legos (9); y además el mismo convento
Clavillart, en Barcelona á 28 de noviembre de 1843.
(4) E s c r i t u r a de venta por el Estado ante el notario
Clavillart, en Barcelona á 23 de julio de 1841. (7) Escritura de redención al Estado ante el notario
(5) E s c r i t u r a de venta por el Estado ante el notario Clavillart, en Barcelona á 13 de abril de 1842.
Clavillart, en Barcelona á 10 de julio de 1844. (8) Archivo, ó mejor, fragmento del archivo del con-
(6) E s c r i t u r a de redención al Estado otorgada ante el vento salvado. E s carta original.
notario Clavillart, en Barcelona á 5 de septiembre de 1848. (9) Relaciones del P. Jaime Ros, de 3 de marzo de 1880,
42 CAPÍTULO OCTAVO

albergaba el noviciado. Los coristas su- dos por el prior servían de vicarios en el
maban 24(1). Santo Hospital (4).
Con tan numerosa y edificante comu- El culto de Santa Catalina brillaba por
nidad los servicios que el convento pres- lo grave, espléndido y solemne: así me
taba á la Religión y á la sociedad civil lo aseguraron testigos presenciales, y
eran inapreciables. La educación del do- cuando no, un dato, aunque en sí pequeño,
minico se dirigía á formar buenos predi- confirmará esta verdad, á saber que la
cadores y buenos maestros, como abajo conventual se celebraba con ministros ma-
diré, que no en vano llevaba su religión yores y presbítero asistente al modo de
el apellido de Orden de predicadores. Así las catedrales, siendo los cuatro hebdo-
es que á todos los Padres se les obligaba madarios hombres notables por sus le-
á predicar: en su iglesia abundaban los tras, aunque simples Padres (5). Y el Ge-
sermones, y no faltaban ni aun en el re- neral de la Orden, en 22 de abril de 1826,
fectorio, donde se ejercitaban en este mi- queriendo remover los obstáculos que á
nisterio los coristas (2). esta solemnidad ofrecía la existencia en
Y no sólo en su templo predicaban los Santa Catalina de la parroquia de San
hijos de Santo Domingo, sino que fre- Cucufate, escribe al Prior que sólo él y
cuentemente ocupaban los pulpitos de los sus ministros guarden las llaves del tem-
demás. El infatigable predicador de los plo y sus dependencias, y «que disponga
postreros años de los conventos, Padre que esa Religiosa Comunidad, de hoy en
Presentado Manegat, solía decir los ser- adelante, cumpla todas las funciones ecle-
mones de cuaresma de Santa María del siásticas, y ejerza en ellas el sagrado
Mar vulgarmente llamados del cabasset, ministerio en los días, horas, y con la
nombre que pide aquí una explicación. solemnidad edificante con que eran cele-
Antes del 1835 en dicha iglesia en ciertos bradas antes del 7 de marzo de 1820, sin
días de las semanas de cuaresma se pre- faltar ni omitir alguna de ellas sin espreso
dicaban por las mañanas dos sermones; permiso mío» (6).
uno muy temprano para la menuda plebe, Una ilustrada anciana que concurría
y otro á las diez, ó cosa así, para los ma- frecuentemente á Santa Catalina me de-
gistrados de la Real Audiencia, los cuales cía que «los sermones, en tiempo d é l o s
asistían en cuerpo. Los primeros eran frailes, eran severos y de respeto» (7).
encargados á un orador de estilo sencillo Bien sabido es que la piadosa predilec-
y popular; los segundos á un Padre gra- ción del dominico estaba por el Santo
nado y de autoridad. A éstos se les lla- Rosario, y á la difusión de su práctica se
maba sermones del Acuerdo, que tal era dirigían muchos de los sermones de los
el nombre del cuerpo de la Audiencia; á frailes predicadores. En Santa Catalina
aquéllos del cabasset, del cual iban pro- todas las tardes se rezaba el Rosario, y
vistas para la compra todas las mujeres en las de los días festivos se cantaba, y
del auditorio. seguía una plática. La devoción al Ro-
Los confesonarios en Santa Catalina sario vivía con potente fuerza en aquellos
eran numerosos y bien servidos, y los barrios, de modo que algunos habitantes
enfermos de la ciudad asiduamente asis- de ellos, no pudiendo acudir al público
tidos en sus necesidades espirituales por del convento, le rezaban en familia en la
los dominicos (3). Dos dominicos destina- capilla de la Virgen del mismo título de

y a citada, y del P. Pedro Carranca. El primero me dijo


que eran 70 frailes, y el segundo 69.
U) Relación del P . Romualdo Espinas, que era uno de (4) Relación del P . Jaime Ros, de 10 de febrero de 1882.
ellos, hecha en Barcelona á 21 de diciembre de 1880. (5) Relación ya citada del P. Ros, de 3 de marzo de 1880.
(2) Relación de un P a d r e de esta casa. (6) Leí copia en el resto del archivo del convento que
(3) Relación del P. F o r t i á n Novellas, hecha en Torelló estaba en manos de los dominicos exclaustrados del 1835.
no recuerdo que' fecha. (7) D. a María Campins. Barcelona á 18 de enero de 1888.
DOMINI 43

dicha iglesia (1). «Todos los sábados, al primero, y al efectuarlo el niño-ángel,


anochecer, salían los frailes dominicos que iba unido á la primera, entonaba
de su convento cantando el Rosario, cu- nuevamente el Resurrexit, y luego, jun-
yos misterios explicaban en la plaza á la tadas en una las dos procesiones, regre-
escasa luz de unos faroles que llevaban saban al templo por el patio y puerta
los monacillos en. la punta de un bastón. principal (4).
No he visto nada desde entonces que se Muchos y solemnísimos cultos se cele-
asemeje á aquella multitud que se apiña- braban en Santa Catalina, como es natu-
ba con reverente afán en torno de los ral, el día del Santo de Aquino, con una
Padres, ondulando en la fantástica pe- procesión á la que asistían los alumnos
numbra que avanzando la noche iba con- del Seminario (5). Asimismo llamaban la
virtiéndose en tupidas tinieblas. Raro era atención los actos del día del de Peñafort
el día festivo que no tuviese por la tarde (7 de enero), compatrón de la ciudad. De-
su correspondiente procesión. El primer mos aquí la palabra á los documentos
domingo del mes se celebraba la de la auténticos que elocuentemente los descri-
cofradía del Rosario, los segundos...» (2) birán. Dice la consueta del Padre Sacris-
Así habla un liberal, explicando el aspec- tán: '(Desembre—A primers de aquest
to de la Barcelona de 1808. mes (el Sacristán) formará memorial
La procesión del Corpus la celebraba pera convidar al Ajuntament pera la
este convento el domingo después de festa de San Ramón, y lo entregará al
Corpus, y en el día de la octava la repetía Pare Prior... Passats dotse ó mes días,
por el claustro y patio (3). Pero la proce- anirá á la secretaría de dita ciutat per
sión notable por su singularidad era la lo despatg» (6). El libro de Acuerdos del
vulgarmente llamada de los enamorats, Ayuntamiento provisional de 1823 es-
ó sea de la mañana del domingo de Pas- cribe: '<En este día el Exmo. Ayuntamien-
cua de Resurrección. A las seis de ella la to en número de todos los señores va á la
comunidad cantaba horas; y terminadas, Santa Iglesia Catedral á las nueve en
un chico vestido de ángel cantaba en el punto de la mañana, y de allí en proce-
presbiterio la antífona Resurrexit propia sión con el Iltre. Cabildo y Clero Ecle-
del día. Luego el mismo chico la repetía siástico á la Iglesia de Santa Catalina de
con igual canto en el pulpito cual si anun- PP. Dominicos para asistir al oficio y ser-
ciara al pueblo la nueva del triunfo de món. En dicha procesión lleva el pendón
Cristo; y en seguida salían del templo dos del Santo el Sor. Regidor antiquior y los
procesiones; una por la puerta del claus- dos señores más antiguos, y las seis va-
tro llamada de San Jaime, y en ella ras del palio los seis Regidores más mo-
era llevado por manos del Prior el San- dernos, y los demás señores con el que
tísimo; mientras otra, con la Virgen ves- preside, detrás del Gremial con velas en-
tida de blanco, pasaba de la puerta prin- cendidas» (7). El Santo vestía de canóni-
cipal al claustro atravesando la portería. go, era llevado en andas, y durante la
Sin penetrar en el segundo claustro, las función quedaba en el presbiterio (8). Y
dos procesiones se encontraban en el sigue el citado libro de Acuerdos munici-

(1) Relación de D. Simeón Tuyet, ya citada, de 26 de (4) Son varios los testigos que me hablaron de esta pro-
febrero de 1886. L a familia del Sr. Tuyet era una de las cesión, tales como los citados ya señores Carranca y To-
que rezaba estos rosarios, y las de Moré, Armengol y rallas, pero quien en modo minucioso me la describió fué
otras. el monacillo de este convento Torallas, en 2 de enero de
(2) D. José Coroleu. Memorias de un menestral de 189-1. También la testifica Coroleu. Obra citada, pág. 49.
Barcelona.—Barcelona 1888, págs. 59 y 60. (5) Relación del P . Joaquín Vidal, mercedario. Barce-
(3) Biblioteca provincial-universitaria. Sala de manus- lona 29 de enero de 1887.
critos.—Cuaderno sin foliación, cuyo titulo es: «En aquest t6) Cuaderno cuyo título es: «En aquest llibre...» citado.
llibre están notadas totas las obligacions del P. Sagristà (7) Hoja postiza colocada entre los folios 240 y 241.
del Convent de Santa Catharina Verge y Mártyr.» (8) Relación del P. Romualdo Espinas, de enero de 1884.
44 CAPITULO OCTAVO

pales: «Gasto=Al P. Prior de Dominicos ya con lo concurrencia á suscripciones


por cera y función de Iglesia prebio re- para aliviar las calamidades generales (3),
curso que presenta al Exmo. Ayunta- ya de otras mil maneras según las cir-
miento se libran 100 libras.» cunstancias pedían. Y aquí no puedo
«Uno de los SS. Regidores por turno omitir hacer mención de la escuela pú-
presenta el sermón á un Religioso del blica y gratuita sostenida por el conven-
convento y se le dan 10 libras.» to. Entrábase en ella por la puerta de la
«Al que lleva la bandera de Santa Eu- Virgen de la Parra, y atendiendo á que
lalia en la procesión se le dan 14 sueldos.» la casa empleaba en ella siete Padres, y
«A la Capilla de música de la Santa á que la enseñanza, aunque primaria, era
Iglesia para asistir á la procesión y can- completa, opino que la concurrencia de
tar el oficio 20 libras.» alumnos sumaría elevada cifra, y por lo
«Cuatro cirios de nueve onzas cada mismo que el servicio prestado á la ciu-
uno para el tabernáculo del Santo, 3 li- dad resultaba valioso (4).
bras 15 sueldos.» Este convento tanto en antiguos tiem-
«Las velas que se necesitan para los pos cuanto en los modernos produjo hom-
Señores que van á la procesión, cuyo bres notables lo mismo en santidad que
gasto puede calcularse poco más ó menos saber. De entre los venerables beatos y
á unas 20 libras.» santos, cuya reseña completa repugna
Suma «154 libras 9 sueldos» (1) iguales por prolija á la condición ó índole de este
á 82 duros, 1 peseta, 87 céntimos. libro, recuerdo de presto á tres mártires
En resumen los testigos oculares afir- del Japón recientemente canonizados, á
man que el culto de Santa Catalina bri- saber: Fr. Domingo Castellet, natural de
llaba por su magnificencia y esplendidez, Esparraguera; Fr. Jacinto Orfanell, va-
y que sería tarea harto prolija reseñar lenciano, y el arriba citado Fr. Luis
por menudo todos sus edificantes actos (2). Hexarch, barcelonés, martirizados en el
De las misiones con tanta constancia y siglo xvn; á F r . Gil de Federich, mártir
fruto sostenidas por los Dominicos en mu- también; á Fr. Poncio de Planella, por
chas tierras de infieles, no hay que escri- ser inquisidor martirizado por la parte de
bir, que harto las enaltecen las historias Urgel, quien obró, según se dice, muchos
todas y la veneranda sangre de mil már- prodigios; al arriba mentado Beato Pe-
tires. En el archivo de mi antigua Comu- dro Cendra, prior que fué de esta casa; al
nidad de presbíteros de San Taime de Beato Vifredo de Blanes, y otros (5), cu-
Barcelona se guardan varias cartas au- yos retratos ornaban los muros del segun-
ténticas del Beato Fr. Luis Hexarch, do claustro. No quiero resistir á la tenta-
mártir misionero de Filipinas y del Ja- ción de insertar aquí un aparte del sermón
pón, hijo de hábito de Santa Catalina. Y que en 2 de agosto 1829 pronunció en
en estos mismos días (1900) la brutalidad Santa Catalina el muy conocido canónigo
china va acrecentando el largo catálogo déla CatedralDr.D. Felipe BertrányRos.
de los misioneros dominicos mártires que Dice así: «Este religioso claustro de Bar-
allí lleva sacrificados. celona, fundado por el señor Obispo de
Fuera del orden religioso no faltaban esta ciudad Don Berenguer de Palou, fa-
servicios prestados por el convento, ya
con la sopa de los pobres, ya con la bi- (3) Libro de acuerdos capitulares de San Jerónimo de
blioteca, según arribanosdijo Villanueva, Vall de Hebrón —Sesión del 15 de octubre de 1804, página
320, en otras sesiones y págs. Allí se habla de Santa Ca-
talina.
(1) Hoja citada. (4) Relación del alumno de esta escuela D. Jaime Nu-
(2) Relación ya citada de D. Jaime Torallas, monacillo biola. Barcelona 8 de marzo de 1880, y de otros.
del convento, de 2 de enero de 1894. Relación ya citada del (5) Relaciones y a citadas del P . Romualdo Espinas
P . Jaime Ros, de 3 de-marzo de 1880. Id. de D. a María Cam- P a r a Orfanell véase Revista Popular, primer semestre
pins, ya citada, etc. de 1888, págs. 310 y 311.
DOMINICOS 45

vorecido por el Señor Don Jaime prime- de la Rota, penitenciario del Pontífice,
ro de Aragón, distinguido por Honorio dimisionario de las mitras de Barcelona
tercero, el primer convento de la provin- y Tarragona, etc., etc.
cia de Aragón, el segundo de todo el rei- Viniendo ahora á los últimos tiempos,
no, ha dado en todos tiempos varones también hallamos en Santa Catalina hom-
eminentes en virtud y sabiduría. Él ha bres notables. Al recorrer el siglo xvm,
producido un santo canonizado, diez már- topamos con el insigne amador de la Re-
tires, veinticinco religiosos muertos en ligión y de las letras P. Tomás Ripoll,
olor de santidad, tres generales de la del cual ya harto nos dijo la lápida de la
Orden, dos cardenales, cuatro arzobis- portería arriba copiada, quien no sólo
pos, diez y siete obispos, dos maestros hizo en este convento, del cual era hijo,
del Sacro Palacio, tres penitenciarios del las obras allí narradas, sino que edificó
Papa, dos teólogos del concilio tridentino, el hermoso templo de San Magín de Biu-
doce confesores de reyes, treinta predica- fagaña, y brilló por sus grandes virtudes.
dores de príncipes, cinco embajadores, El Papa Clemente XII le quiso elevar á
cuatro albaceas de monarcas, tres pro- la dignidad cardenalicia, mas él por hu-
vinciales de la Tierra Santa, diez inquisi- mildad rehusó aceptar el cargo, y para él
dores generales, cuatro teólogos de Ca- indicó al P. Lambertini, que fué nombra-
sanata» (1). Y muchos de estos preclaros do, y muy luego colocado en el trono
hijos de Santa Catalina llevaron apelli- pontificio con el nombre de Benedic-
dos tan caros para Cataluña, como son to XIV (3). En el siglo xix florecen en
los de Nadal, Coma, Segarra, Castells, Santa Catalina el P. Domingo Comerma,
Roca, Ginabreda, Pou, Moneada, Angue- provincial que fué, bibliotecario y escri-
ra, Ferrer, etc. (2). tor (4); el P. Segismundo Riera, gran pre-
De los escritores antiguos recuerdo á dicador; e l P . Lector, Nonell, á quien oigo
F r . Francisco Diago, lector de Teología, calificar de eminencia; el P. Maestro, Clo-
que escribió la Historia de los victorio- tet, hombre también de gran fama; el
sísimos antiguos Condes de Barcelona; P . Prior, Domingo Roma; el P. Pablo
á Fr. Antonio Vicente Domènech, que Carbó, lector de Filosofía y Teología,
escribió la Historia general de los san- maestro en la última, regente de la Mi-
tos y varones ilustres en santidad del nerva de Roma, teólogo del Concilio Va-
Principado de Cataluña; á Fr. Gabriel ticano y el amado de los Papas, al cual
Casafages con su Summa S. Thomae in todos hemos admirado por su saber, sen-
compendium redacta;&\ cardenal Fr. Juan cillez y virtud; el P. Manuel Ribé, cuyos
Casanova y su De potestate Papae su- sermones cautivaban; y otros varios, en-
pra concilium; á Fr. Pedro Coll, prior tre los cuales no debo omitir algunos
de este convento, y á sus libros sobre escritores populares, tales como el padre
Aristóteles, y á muchos otros, pero sobre Tomás Bou, nombre de mucho saber, fus-
todos á San Raimundo de Peñafort, ter- tigador del constitucionalismo del año
cer General de la Orden, doctor y cate- 1820, y del cual tendré harta ocasión de
drático de Bolonia, canónigo y paborde escribir en su lugar.
que había sido de la Catedral de Barce- El convento de Santa Catalina, ese
lona, confesor de Jaime I, fundador de la convento al cual, como á los demás, los
Merced, capellán de Gregorio IX, autor que falsamente blasonan de ilustrados,
de las constituciones de este Papa, oidor califican de centro de ignorancia y obs-

(1) Sermón de la Beata Juana de Asa, madre de (3) Relación ya citada del P. Romualdo Espinas, de 31
Santo Domingo de Gusmán... Barcelona 1829, pág 31. de diciembre de 1888.
(2) Reedificación de la iglesia de Santa Catalina... (4) D. Antonio Elías de Molins, en su Diccionario bio-
Barcelona 1S98, pág. 6. gráfico y bibliográfico.
46 CAPÍTULO OCTAVO

curantismo, tuvo en el siglo xv una de del Patriarca de Guzmán celebraban los


las primeras imprentas españolas (1): divinos oficios en Santa Catalina frailes
¡tanto celo por la ciencia animaba ya en- franciscos. Esta participación en la fiesta
tonces á sus frailes! En él además, y esto religiosa debía indudablemente traer co-
enaltece su importancia y dignidad, se mo consecuencia la de la mesa de aque-
habían celebrado capítulos provinciales llos días de los dos fundadores de las dos
y no pocos generales, de modo que en la Ordenes (6),
Orden mereció el título de convento ca- Los primeros años de religión del do-
pital 2). minico estaban sujetos á extremado ri-
Un hermoso vínculo de caridad unía á gor. El novicio, dedicado á continuos
las Ordenes mendicantes, como lo de- ejercicios espirituales, nunca pasaba los
muestra el siguiente asiento de la consue- umbrales de la cas?, para salir de ella, ni
ta del sacristán de este*convento: «Per forastero alguno los del noviciado para
la germandat que hi ha entre las reli- entrar en él. Un dependiente de la cocina
gions mendicants, sempre que avisen de de este convento interrogado por mí res-
S. Fransech, de S. Agustí y del Carme pecto de esta dependencia, me contestó
que hi ha un religiós mort, deurà inme- que ignoraba los detalles de «aquel cen-
diatameut (el, sacristán) ferh celebrar un tro impenetrable» (7): son sus palabras.
aniversari, pues ditas comunitats prac- Salido del noviciado el joven, y emitida
tican lo mateix cuatit seis avisa haber su profesión, entraba en el coristado del
mort un de esta comunitat» (3). Así tam- mismo convento, en el que cursaba Filo-
bién la misma consueta previene al sa- sofía, Lugares teológicos, ó sea Melchor
cristán que en la víspera de la fiesta del Cano según el lenguaje de la Orden, Teo-
Patriarca ó fundador de cada religión, logía, Moral y Sagrada Escritura; con
no sólo mendicante, sino de todas, avise cuyos estudios y los correspondientes
dos Padres para que el día siguiente va- ejercicios literarios podía laurearse de
y a n á celebrar en el templo de dicha or- Lector, dignidad equivalente al Doctora-
den, observando así una urbanisma prác- do; advirtiendo que en ningún convento
tica de mutuo obsequio ó galantería (4). ni colegio de Cataluña se confería ésta
Y sin duda el vínculo de caridad subía mas que en Santa Catalina, adonde por
de punto al tratarse de los franciscos, lo mismo debían acudir los frailes de todo
pues hallo que el día de San Francisco el Principado que la deseasen. De ímpro-
de Asís los Padres que iban á celebrar en bo debe calificarse el estudio del corista
la iglesia de ellos eran seis, y que cuando dominico, y de poco envidiable su vida.
en 18 de octubre de 1818 llega á Barcelo- Tenía diariamente dos meditaciones, la
na el Reverendísimo General de los fran- misa conventual y el rezo en el coro con
ciscos, F r a y Cirilo de Alameda y Brea, es la comunidad, dos clases, una academia,
recibido por las dos comunidades, la de llamada comúnmente circunferencia, que
franciscos y la de dominicos, en la puerta consistía en disertación y argumentos, y
del templo de aquéllos y acompañado dos paseos de media hora cada uno por
bajo palio (5). A su vez en la festividad el segundo claustro, durante los cuales,
bajo la vigilancia del lector, se argumen-
taba sobre la lección del día. En cambio
(1) Correo Tipográfico. Año XII, número 128, ó sea de
15 de enero de 1888. el recreo escaseaba, reducido sólo á un
(2) C a r t a del P . Provicial, escrita al P . Prior F r . Juan rato después de la comida y otro después
T a p i a s desde Manresa, á 26 de julio de 1824.
(3) En aquest llibre están notadas totas las obliga-
de la cena. Se decía al corista que el car-
cions del P. Sagristá,ya citada. No tiene foliación.
(4) En aquest llibre... citada.
(5) Biblioteca provincial-universitaria. Sala de manus- té) D. Ramón N. Comas. Excursió desde'l carrer de
critos.—Manuscrito anónimo, titulado Noticias de Barce- la Avellana... Barcelona 1901, pág. 44.
lona 1815 á 1823. Del contexto se deduce que este manus- (7) Relación de Cayetano Estalella, y a citada, de 20 de
crito es obra de un fraile de Santa Catalina. junio de 1895.
DOMINICOS 47

go del dominico era praedicare aut doce- El régimen ú organización de la Orden


re, y así que debía habilitarse para ejer- guarda casi completa igualdad con el de
cerlo dignamente, y se castigaba con los franciscos. A toda rige un General,
rigor al que rehusaba doblegarse de bue- bien que en España, á lo menos desde la
na voluntad al yugo del continuo trabajo. Bula ínter graviores de Pío VII, dada á
El corista no salía de casa más que la petición de Carlos IV en 15 de mayo de
tarde del jueves, y aun esto fuera de ad- 1804, el Superior General era español. Ig-
viento y cuaresma (1). noro si antes de esta Bula gozaban los
La única ventaja de que disfr-utaba el dominicos de España de tal privilegio ú
corista estudiante era la dispensa de co- otro parecido. A la provincia gobernaba
mer de vigilia en los días no mandados un Provincial, y á las casas un Prior. El
por la Iglesia (2). cargo del primero duraba seis años, y
Con tales principios, con los cargos de procedía de nombramiento del Capítulo
predicar y enseñar, con la tradición de general; el del segundo duraba cuatro
estudio que reinaba en la Orden, y con años y venía de nombramiento del Capi-
la continua emulación de unos con otros tulo provincial; y el de Prior duraba tres
frailes, los dominicos resultaban sa- años, y procedía de elección de la comu-
bios (3), de cuya fama gozaban ante el nidad en los conventos formales ó de im-
pueblo ilustrado. Y esta sabiduría venía portancia, y de nombramiento del Padre
hermosamente hermanada con una sen- Provincial en las simples residencias ó
cillez de paloma y un tino práctico espe- conventos pequeños. El General venía
cial, sabiduría y espíritu que indudable- asesorado por la junta de los llamados
mente bebían los dominicos en los escritos socios del General, que eran pocos en
del Águila de Aquino. La generación que número, á saber uno por cada provincia,
precedió á la mía me ha testificado la y los ex generales; el Provincial por la de
existencia de tales excelencias, y yo mis- los padres de provincia, ó sea ex provin-
mo la pude comprobar con el trato de los ciales, maestros en Teología y predica-
restos de la exclaustración de 1835. Nues- dores generales; y el Prior por su consejo
tro profundo pensador, Obispo de Vich, nombrado por el Provincial. El Capítulo
Torras y Bages, enseña en mil lugares general se reunía cada tres años, y el
de su precioso libro La tradició catalana provincial cada cuatro, bien que á los
que los dominicos brillaron esplendente- dos se aunaba uno intermedio para tratar
mente en nuestro suelo, y formaron el los asuntos urgentes. Al fenecer del si-
genio pensador y prático del catalán (4). glo xix, que en lo tocante á corporaciones
Las imágenes de Santo Tomás, y la regulares historio, el cargo generalicio
restauración moderna de algunas comu- español ha desaparecido, y el único que
nidades religiosas, ponen á la vista de existe dura doce años. En 1871 se reunió
todo el mundo cuál sea el hábito domi- en Gante Capítulo general, el cual revisó
nico. Consiste en túnica ceñida con una todas las constituciones de la Orden, y
correa, escapulario y capilla, los tres de reduciéndolas á un cuerpo de leyes bien
lana blanca, capa negra con capilla su- dispuesto y unificado, formó con ellas un
perior también negra, y cerquillo en la código.
cabeza con sombrero negro. Según su regla, el dominico come de
vigilia todo el año, bien que esta obser-
(1) Relación del P. Romualdo Espinas, de 4 enero 1889. vancia admite numerosas dispensas; y
(2) Relación del P . Pedro Carranca, quien lo mismo ayuna desde 14 de septiembre hasta Pas-
que el P . Espinas fueron coristas de este convento. Barce-
lona 11 de febrero de 1884.
cua de Resurrección, en todos los viernes
(3) Relación del abogado contemporáneo de los frailes del año, y en las vigilias de algunos
D . Cayetano Martí de Eixalà. Barcelona 30 de septiembre santos.
de 1880.
(4) P á g s . 230, 232, 459 y otras. [ Reinaba en los dominicos la buena ob-

*
4s CAPITULO OCTAVO

servancia ; y la mejor prueba de este dro Urgellés (5), Don Francisco Auge (6),
aserto reside en el buen testimonio que pero sobre todo el respetable catedrático
de sí dieron estos religiosos en el día de del Instituto provincial de esta ciudad
la exclaustración, cuando apartados de Don Simeón Tuyet, nacido frente la igle-
las cercas de los claustros y de la vigi- sia de Santa Catalina, y constantemente
lancia de los superiores, pudieron obrar metido en el convento; quien al ser por
con libertad completa. Sólo uno, ó dos ó mí interrogado sobre la observancia, me
tres dejaron definitivamente el hábito y contestó con inusitada energía y me dijo:
entraron en la vida seglar; siguiendo la «Pudo haber en Santa Catalina algún
gran masa de los individuos de las comu- fraile malo, tal como un corista que des-
nidades ó la vida regular en conventos pués de la exclaustración se hizo soldado
de extrañas tierras, ó la reglada del sa- de América y hasta se casó; pero la masa
cerdote secular, y en ella dando edifican- de la comunidad era buena y observante;
tes ejemplos. Me consta esto tanto por lo yo mismo lo vi» (7). Entre otras pruebas
que mis propios ojos vieron en los domi- de su aserción citaba Tuyet el hecho de
nicos exclaustrados que habitaron en que, con ser de sí fácil la dispensa de la
esta ciudad condal, tales como los Padres comida cuadragesimal, siempre eran mu-
Romualdo Espinas, Jaime Ros, Manuel chos los frailes de Santa Catalina que
Ribé, Pedro Carranca, etc., cuanto por lo concurrían al refectorio de vigilia, de-
que en los de otras ciudades catalanas jado el de carne. Entre los cuales recor-
vieron graves amigos. daba al Padre Escola, misionero regre-
Todo entendido en observancia regu- sado de Filipinas por tísico, el cual á pe-
lar pregona la inmensa importancia que sar de su enfermedad ni un día faltó al
en ella ejerce la guarda del silencio, re- refectorio de vigilia (8). Los que motejan
medio seguro contra hablillas y partidos. de glotones y sibaritas á los frailes com-
El impresor de quien más comúnmente prenderían, si abrigaran buena fe, su
se servían los conventos de Barcelona en craso error, al saber que en Santa Cata-
el primer tercio de mi siglo xix era Don lina el gasto diario de la manutención de
Vicente Verdaguer, gerente de la librería cada religioso subía á cincuenta cénti-
llamada de la Viuda Pla; pues bien, la mos, cantidad que no sólo hoy, sino en
primera condición que de su calzado exi- todo el siglo xix, merece el dictado de
gía Verdaguer era que al caminar no muy exigua. Y este dato me consta por
rechinase, para no turbar el profundo quien tan íntimo fué de las interioridades
silencio de los conventos al recorrer sus de este convento que hasta sabía el nú-
piezas (1). Testifican la buena observan- mero de cerdos que anualmente mataba
cia ó disciplina de los dominicos varios la casa (9). Una señora, hija del en aquel
ancianos fidedignos, que intervinieron en tiempo conocido farmacéutico de la calle
ellos y de cuya boca lo tengo, tales como Baja de San Pedro, Doña Asunción Saga-
el librero Don José María Bocabella, nie- rra, me dijo indignada contra la calumnia
to del arriba mentado Verdaguer (2), Don de que los frailes anduvieran á caza del
Ramón Sans, conocedor del convento de chocolate de la tarde, que á su casa con-
Brufagafla (3), el Reverendo Don José currían muchos religiosos, y que nunca
Castells, catedrático que fué del Semina-
rio de Barcelona (4), el abogado Don Pe-
(5) Relación de 23 de noviembre. Olvide' apuntar el año.
(6) Relación de 10 de junio de 1884.
(7) Relación, ya citada, de 19 de agosto de 1880.
ti) Relación de D. José' María Bocabella, nieto de Ver- . ;8j Relación, ya citada, de 19 de agosto de 1880. L a con-
daguer. Barcelona 9 de junio de 1880. currencia á este refectorio me la testificaron varios, como
(2) Relación, ya citada, de 9 de junio de 1880. el citado Carranca, seglar, y su hermano el P. Pedro, frai-
(3) Relación que me hizo en San Gervasio, á o de junio le, etc.
de 1887. (9) D. Felipe Neri Carranca, y a citado. Relación de 13
(4) Relación de 14 de abril de 1895. de enero de 188o.

*
DOMINICOS 49

vio que se les diese ni una sed d'aigua, para aquellas calles, las cuales en oca-
según expresión de la tierra (l). Repito sión reciente, cuando en 1828 el convento
que al aseverar la buena observancia de celebró las grandes fiestas de la beatifica-
los dominicos excluyo de ellos á alguna ción de la madre del Santo de Guzmán,
muy contada individualidad, que no de- Juana de Aza, espontáneamente se enga-
bía el cuerpo de frailes predicadores lanaron de mil modos y maneras según
aventajar al Apostolado. Además la na- la sencillez del tiempo (3). Pero sobre
turaleza de las cosas trae de sí en toda todo este afecto y entusiasmo brilló con
religión que en los conventos grandes la claridad meridiana cuando en la nefasta
observancia logre mejor rigidez que en noche de Santiago de 1835, dueños de la
los pequeños del campo. ciudad los revolucionarios,. los vecinos
El orden más admirable reinaba en el de Santa Catalina, no sin peligro grande,
convento, y de ello nos dan elocuente acudieron valerosamente al socorro del
prueba el del coro, su limpieza y arreglo convento y ahuyentaron á los incendia-
arriba mentado, y la ya varias veces cita- rios, hasta que la presencia de la fuerza
da consueta del sacristán, en la que cuida- pública alentó á los malvados y contuvo
dosamente vienen apuntados los deberes á los buenos, como con harta pena lo de-
de éste y las advertencias conducentes á mostraré en su lugar y tiempo (4).
evitar descuidos. Pláceme copiar aquí un Se ha dicho, ¿qué no se ha fantaseado
par de sus anotaciones: «A cosa de mitg contra los frailes?, se ha dicho, repito, que
Janer convidará á Casa Puerto nuevo, eran tiránicos con sus dependientes. El
pera que vinguían á vestir la imatge de dato del modo de cobrar y la cuantía de
María SS'"a que ha de servir en lo día de los alquileres de sus casas responde con
la Purificació.—Nota.—De axó cuida al sobrada elocuencia á esta calumnia, y
present lo P. del Rosari...» además el ya nombrado pintor D. Luis
«Dos ó tres semanas antes del P. S. Rigalt, que con su padre D. Pablo pintó
Domingo avisará al Mestre de casas pe- las decoraciones para las mentadas fies-
ra estreñinar y limpiar tota la Iglesia y tas de la Beata Juana de Aza, y con este
Altars motivo pasó muchos tiempos en el con-
«Agost.—Día 1 ó 2 anirá á convidar vento trabajando y comiendo allí, ponde-
ais cuatre obrers per la festa del P. S. raba y ponía en las nubes la afabilidad ó
Domingo. Avisará també al Mestre de amabilidad, como se dice hoy, de los frai-
capella de la Catedral pera las Matinas les para todos sus operarios, y se indigna-
y ofici de tntísica» (2). ba contra quien dijera lo contrario (5).
Además nos certifica plenamente del Además es necesario dejar escrito que
buen ejemplo de los religiosos de Santa la paz y unión reinaban por completo en-
Catalina el acendrado afecto que les pro- tre los dominicos (6).
fesaba el vecindario, el cual formaba co- Amigo inseparable de la verdad, no
mo una gran familia reunida alderredor puedo limitarme á elogios de la obser-
del templo. Para ellos lo era todo el ro- vancia; debo recordar una peca que aquí,
sario, y el vecino Sr. Tuyet afirmábame como en las otras Ordenes calzadas, la
haberlo rezado en la puerta de su casa. afeaba. También el dominico gozaba de
Había allí la tradición de que los domini-
cos más afamados procedían de familias
del barrio. El entusiasmo por el convento (3) Relación de D. Luis Rigalt, pintor que trabajó en la
subía allí á elevado grado. El día de San- decoración del templo, ya citada, y de otros.
(4) Son varios los testigos de este afecto y entusiasmo
to Domingo era de verdadero regocijo del vecindario por el convento.
(5) Relación del mismo D. Luis, de 14 de enero de 1894.
(6) F r . Mariano Rais y F r . Luis Navarro. Historia de
(1) En Barcelona á 16 de abril de 1899. \ la provincia de Aragón, Orden de predicadores. Zara-
1'2) En aqnest llibre están... ya citada. 1 «nin, 1819, pág. 11.
TOMO II
so CAPÍTULO OCTAVO

peculio (1), y con él compraba (siempre, guerra de la Independencia, habló de la


por supuesto, mediante permiso del supe- observancia tal como la dejaron aquellos
rior) libros y ornamentos ó indumentos años de turbulencia, y no pudo en modo
sagrados y quizá alguna friolera que ig- alguno pintarla tal como la mejoraron
noro. Tal práctica, como ya arriba llevo los superiores en los tiempos subsiguien-
indicado, si no mata, lastima el voto de tes. Debiéronse indudablemente de pro-
pobreza y distrae al religioso con asuntos ducir en los dominicos las evoluciones de
que debiera tener olvidados. En la res- los franciscos arriba narradas.
tauración moderna de los dominicos en Por esto también al que me objete con
España el peculio ha desaparecido, y hoy la noticia de los de 30 á 40 dominicos que
reina entre ellos en absoluto la vida se secularizaron en el año 1821 (3) contes-
común. taré las mismas palabras que escribí en
Este es, en resumen, el concepto que los franciscos, á saber: 1.° Que este nú-
según mi pobre sentir, después de oídas mero poco significa comparado con el
numerosas relaciones orales y leídos los total de los frailes de la Orden en las
papeles de los archivos, formé de la ob- veintiuna casas dominicas de Cataluña.
servancia de los dominicos catalanes, 2.° Que la salida de los conventos de tales
ignorando el estado de los de otras pro- elementos no pudo producir otro efecto que
vincias, donde el carácter ligero de sus purificarlos en su observancia. Este es el
habitantes y otras causas pudieran quizá sistema que siguen los vigilantes jesuítas
dar diferentes resultados. Contra de mi para salvar su observancia, es decir, po-
concepto, la observancia dominica en ba- ner en la calle á los que dan muestra de
lance final favorable y laudatorio de ella, falta de vocación. Y 3.° Que algunos di-
objete quizá alguno con el siguiente tex- gan con su proceder que no pueden
to de un libro de la Orden publicado en aguantar la vida del convento, prueba la
1819: «Aunque los claustros, dice, se ha- rigidez de ella. Por todo esto queda en
bían resentido de la corrupción del siglo, pie mi afirmación favorable á la buena
no faltaban en ellos varones de oración y observancia de la Orden dominicana de
ciencia, cuyo espíritu servía de freno á Cataluña.
los tibios y relajados, y sostenía en mu- Sigue la lista de los Provinciales que
chos conventos la disciplina monástica en el primer tercio del siglo xix rigieron
con edificación de los fieles» (2). Tres con- la provincia regular dominicana de Ara-
testaciones ó soluciones admite semejante gón, de la que formaban parte los con-
objeción, á saber: 1.° Que el mismo texto ventos de Cataluña.
confiesa que «en muchos conventos la En 1803 fue nombrado el Padre Maes-
disciplina monástica» era sostenida «con tro Manuel de Casanova.
edificación de los pueblos.» 2.° Que cons- E n 1807 el Padre Maestro Vicente Lla-
tándonos por los testimonios arriba indi- conaz.
cados la buena observancia de los cata- E n 1815 el Padre Maestro Pedro Olivas.
lanes, y tratando el citado texto de los E n 1819 el Padre Maestro Domingo Co-
conventos de varias otras provincias, y merma.
aun de los de España en general, pudo
Su sucesor, ignoro en qué año, fué el
referirse á los de' otras partes y no á los
Padre Maestro Gundisalvo Ferragut.
de Cataluña. Y 3.° Que escrito en los
Siguió el Padre Maestro José Casau-
años inmediatamente posteriores á la
rrán.
Y finalmente el Padre Maestro Pedro
(1) Consueta del sacristán. Marca lo que por ciertas
penalidades se da a cada fraile, tales como p a r a misas
tardas. (3) Noticia oficial de los secularizados dada por el Go-
(2) P . Mariano Rais y P. Lnis N a v a r r o . Obra citada, bernador de Cataluña, en 5 de julio de 1821. Diario lie
pág. 1C¿ Barcelona del 6 de julio de 1821, pág. 1331.
DOMINICOS 51

Barri, que vio la terrible exclaustración cual copiada literalmente dice así: Col·le-
de 1835. gi de Sf Vicens y S' Ramo fundat pel-
la Sra Eulalia Ferrer y Jorda. 1668. A
la derecha de la fecha hay grabado el
ARTÍCULO SEGUNDO escudo de la religión dominicana, y á la
izquierda el de la casa de Ferrer» (3). .
COLEGIO DE SAN VICENTE Y SAN Constaba el edificio de la capilla, colo-
RAIMUNDO, DE BARCELONA cada de S. á N. en el límite occidental
del colegio, frente por frente de la calle
Como los carmelitas y franciscos, te- de San Olegario. Si esta capilla, en tiempo
nían los dominicos en Barcelona su cole- de las Arrepentidas, tuvo puerta grande
gio, cuyos titulares eran los Santos Vi- en la calle, y recuerdo perfectamente ha-
cente Ferrer y Raimundo de Peñafort. berla yo cruzado, en el de los frailes ca-
«Fué fundado en 1668 por Eulalia Ferrer recía de ella, substituida sólo por una
Jordá, en el sitio que hoy ocupan las casas portezuela excusada y olvidada. La en-
de la calle de Tallers más inmediatas á trada entonces se efectuaba por una pie-
la muralla, enfrente del antiguo semina- za del colegio situada al lado en los pies
rio» (1). Estas palabras, escribía Pi yAri- de la capilla. Esta tenía una sola nave,
món en 1854, cuando todavía las murallas de 17 metros de longitud por 4'80 de an-
ceñían á la ciudad vieja, y en el punto á chura, sencilla, bien que cubierta por
.que se refiere pasaban por el límite de las una bóveda dividida por arcos transver-
casas del cabo de la nombrada calle de sales en compartimientos, dotados de un
Tallers y la plaza de la Universidad. En- luneto en cada cabo; es decir, estilo del
tonces llevaba el nombre de Antiguo Se- siglo XVIII que la construyó. Carecía de
minario el gran edificio después llamado crucero y de capillas laterales, conforme
Hospital militar; y con esta sencilla acla- á su carácter de mera capilla interior.
ración queda marcado el lugar de la fun- Tras ella caía la sacristía; y al lado de la
dación del colegio. «En 1758 fué trasla- Epístola, ó sea el oriental del templo, el
dado el colegio al edificio, continúa Pi, convento-colegio; edificio destituido de
en que desde 1845 residen las Religiosas todo valor artístico, formado por un pa-
Arrepentidas, sito en la calle de San tio en cuyos lados N. y S. había muy sen-
Pablo» (2). Hoy (1900), derribado este cillas galerías, y á cuyo derredor giraban
edificio, hay edificadas sobre su solar, las naturales dependencias de la casa. Al
bien que retiradas por la parte oriental pie del lado N. de ésta se extendía á lo
cosa de un metro, las dos casas de núme- largo de la calle de la Cadena, de la que
ro 74 y 74 bis, las cuales lindan por E., la separaba una cerca, la no despreciable
que es por donde retrasaron su línea, con huerta del mismo colegio, larga, por tér-
la calle de la Cadena, por S. con la de mino medio, de 38 metros, y ancha de
San Pablo, y por O. con otra casa que 32'50 (4). Y á no suceder la gran catás-
forma la esquina con la de San Jerónimo. trofe de 1835, el colegio experimentara
«Todavía, sigue escribiendo Pi, se con- otro traslado á un edificio nuevo, levan-
serva en este (colegio) un monumento tado al objeto en Gracia en un campo del
que hace referencia á la fundación del mismo colegio, según estaba proyecta-
primitivo edificio. Es una lápida colocada
encima de uno de los pilares que sostie-
nen los arcos de la galería del patio, la (3) Obra citada. Tomo II, pág. 185.
(4) Las anteriores precisas noticias proceden de los
planos de Barcelona levantados en 1859 por el arquitecto
municipal D. Miguel Garriga y Roca, y de relaciones ora-
(1) D . Andrés Pi y A rimón. Barcelona antigua y mo- les de D. Antonio Cortés, que había vivido junto al cole-
derna. Barcelona 1854. Tomo II, pág. 185. gio, y lo había recorrido. Yo recuerdo la capilla donde
(2) Obra citada. Tomo II, pág. 185. había concurrido al jubileo de las 40 horas.
CAPITULO OCTAVO

do (l). No pedía otra cosa el mal acondicio- 5.° «Las ierras que posseheix en ¡o
nado edificio de la calle de San Pablo (2). terme de Barcelona, so es: sis mojadas
Para el sostenimiento de sus superiores, anomenadas del Campo Santo cerca lo
alumnos y casa, poseía el colegio los si- convent de Jesús en lo Torrent de la Olla,
guientes bienes, que no eran pocos: y dos mojadas y tnitxa sobre lo convent
. 1 . " Cinco casas en la calle de Tallers, nou dels Franciscanos,y set quart as sobre
en el lugar donde primitivamente estuvo la Torre de la Porga» (7). El lugar donde
el colegio, frente del Hospital militar, en 1820, año de las anteriores palabras,
marcadas en 1841 con los números 47, 48, estaba el Campo Santo y el derruido con-
49, 50 y 51, bien que ya entonces las tres vento de franciscos de Jesús, harto lo
primeras formaban una sola (3). expliqué en el capítulo VII, hablando de
2.° La heredad del Prat arriba indica- dicho convento. El Torrente de la Olla
da al tratar de los bienes del convento de atravesaba las islas del ensanche situa-
Santa Catalina (4). das entre las calles de Claris y de Lauria,
3.° La «Casa y térras que lo Collegi bajando hacia la ciudad antigua (8). L a s
de PP. Dominicos de la ciutat de Barce- dos mojadas y media caían tras de la ac-
lona posseheix en lo terme de Sarria ab tual parroquia de Jesús, y por lo mismo
lo nom de Torre Gomis, ó del Frare donde se asientan hoy las islas y calles
blanch,de tinguda algunas nou mojadas de su NO., por cuya razón algunas d e .
de terra campa, de dotse de viña plan- estas calles llevan nombres de Santos
tada, y de algunas vuit de terra her- dominicanos, tales como de Santo Do-,
ma» (5). Esta heredad no debe confundir- mingo, de San Pedro Mártir.
se con la hoy comunmente apellidada 6.° «Set mojadas d prop de vuit del
Gomis, situada en el extremo de la carre- camp anomenat de las deu mojadas en lo
tera que pasa rozando la iglesia de Jo- terme de Barcelona (el año 1824, cuando
sepets de Gracia. Es otra, asentada al se escribía este documento, Gracia era un
pie de la montaña, junto á esta Gomis, barrio de Barcelona) debaix de la Tra-
entre ella y el manicomio de la Nueva vesera é inmediatas per la part de Orient
Belén, en terreno que unas veces ha per- al Torrent de la Olla» (9). Al escribir
tenecido á Sarria y otras á San Gervasio, este aparte asaltóme la duda de si esta
hoy á Barcelona. finca sería la misma del número anterior;
4.° «La casa y térras tan campas com pero me decidí por la negativa, fundán-
plantadas de viña que lo Collegi de PP. dome: 1.° en la distinta cabida de una y
Dominicos de la ciutat de Barcelona te y otra; 2.° en el diferente nombre; y 3.° en
posseheix en lo terme de San Vicens de que el inteligente y enterado último P r o -
Sarria ab lo nom de la Torre Perrera ó vincial del tiempo de la exclaustración.
Mas Pla (6). Padre Romualdo Espinas , me dijo q u e
las tierras del colegio situadas allí abar-
caban g r a n parte del terreno que media
(1) Relación del celebre P . Pablo Carbó, alumno que
f uc: de este colegio, hecha en Barcelona á 23 de septiembre
entre la parroquia de Jesús, la Travesera
de 1882. y el Torrente de la Olla, lugar distinto del
(2) Relación del P . Romualdo Espinas, de 4 de enero de la finca anterior.
de 1889.
(3; Escritura autorizada por el notario de Hacienda Respecto de este terreno el eruditísimo-
D. Manuel Clavillart, en Barcelona á 19 de abril de 1841.
(4) E s c r i t u r a ante el notario Clavillart, de 2 de abril
en asuntos locales, D. Antonio A y m a r
de 1840.
(5) Copiado de la nota original de los «Pactes y arren- (7) Xota original de los *Paetes y arrendament», a r r i b a
dament» de esta heredad, de 24 de junio de 1820, existente citada.
en la Biblioteca provincial-universitaria. Sala de manus- (8j Recuerdo el torrente como si lo viera, y además,
critos, ve'ase el Plano general de alineación de la villa de Gra-
(6) P a l a b r a s copiadas del título ó rótulo de la escritura cia, de 30 de junio de 1889.
de arriendo de 1824. Biblioteca provincial-universitaria. (9) P a l a b r a s del titulo ó rótulo de la escritura de a r r i e n -
Sala dj manuscritos. do de 1824. ya citada.
DOMINICOS 53

y Puig, escribe: «Para atender á las nu- colegio se cultivaban, eran la Filosofía y
merosas demandas de terreno para edi- la Teología; pero sólo por parte de los
ficar, los Padres Dominicos de esta ciudad frailes sobresalientes, excluidas las me-
s e vieron precisados á conceder, como dianías (5), de guisa que el desaplicado,
concedieron, á censo por los años inme- avisado tres veces en un año, era despe-
diatos al 1835, un campo de 10 mojadas de dido (6). En el colegio, como en los con-
extensión que formaba parte de la dota- ventos, el fraile debía asistir á las medi-
ción de su colegio, cuyo campo compren- taciones y actos de coro, á las aulas y
día desde la calle mayor al Torrente de atender ahincadamente al estudio. Cada
la Olla, y desde la Travesera hasta cerca día antes de la comida se había de defen-
la calle de Buenavista; excluido de este der en circunferencia una conclusión,
perímetro el convento de Jesús y una exceptuados empero los días festivos y
porción de terreno de la calle Mayor en- los de quincena (quindenis), y en cada
tre las de Junqueras y Santo Domin- semana debían celebrarse unas conclu-
go» (1). Y copié este texto que parece siones. Abarcaba el curso desde la Nati-
contrariar mi dicha opinión para así dar vidad de la Virgen, 8 de septiembre, has-
nueva prueba de mi imparcialidad. ta el día de San Buenaventura, 14 de
7.° Otro campo en Gracia de nombre julio. Los colegiales al salir á paseo, en
Camp de cal Frare blandí, situado junto los contados días que esto era lícito, no
á la calle del Ángel, detrás de la casa so- podían entrar en casa alguna, debiendo
lariega comunmente llamada Can Par- del colegio enderezarse directamente al
dal (2) campo. Todos los colegiales habían de
Mas de las fincas aquí señaladas en los proceder de los conventos de Cataluña y
números 5.°, 6.° y 7.° los mismos frailes Rosellón, en la proporción siguiente: la
antes de la exclaustración del 1835 iban mitad del de Santa Catalina, dos del de
enajenando partes para con el producto Puigcerdà, y los demás de los otros con-
de la enajenación edificar nuevamente el ventos según arancel dictado por el Pro-
colegio en forma y lugar más convenien- vincial. Sin embargo, teniendo Santa Ca-
te que el de la calle de San Pablo (3). talina y el convento de Gerona estudio
8.° Otra finca llamada Can Arnat, si- en su recinto, no usaban por regla gene-
tuada en la Travesera de Gracia, junto ral de este derecho, y no enviaban frailes
al convento actual de las Damas negras; al colegio. La designación de las perso-
la que constaba de casa y tierras. Ambas nas de los colegiales debía hacerse por
cosas, es decir, casa y tierra, compró el las Comunidades de sus respectivos con-
señor Santaló, y derribando la primera, ventos por medio de votación secreta. El
edificó allí su quinta (4). colegial no podía permanecer en el cole-
Es inútil apuntar que esta casa tenía gio más que siete años (7). Y estas ordi-
biblioteca, siendo como era colegio de es- naciones de los estatutos gozaron de vigor
tudio. Me consta además por boca de hasta el postrer momento, como lo prue-
quien después de 1835 vio parte de sus li- ban los distintos oficios que he leído por
bros. Ignoro, empero, la importancia de mis ojos, por los cuales oficios el Padre
ella. Rector de los últimos años, Fr. Esteban
Las disciplinas, ó materias que en este Serrat, pide á los conventos que para lle-
nar las vacantes del colegio procedan al

(1) El Correo Catalán del 12 deagosto de 1905, pág. 2.


(2) Relación del P. Romualdo Espinas, de 4 de enero de (5) Relación del P . D. Jaime Ros, de 3 de marzo de 1880.
1889. (6) Biblioteca provincial-universitaria. Sala de manus
(3) Relación del P. Romualdo Espinas, de 4 de enero de critos. Statuta qiiae pro giíbcrnationc Collegii Ss. 17;/-
1889. centii el Raymundi... decreta et ordinata sunt anuo Do-
(4) Relación del P. Romualdo Espinas, de 4 de enero de mini 1668.
1889. II (7) Statuta quac pro giibernatiouc, y a citada.
54 CAPÍTULO OCTAVO

nombramiento de colegiales, y les advier- món,» leo los siguientes curiosos asien-
te de los dichos requisitos y particulari- tos (5).
dades. Añade además que el Provincial Fol. 1.— «Principi del Collegi á 19 de
ha de aprobar las elecciones de los candi- Octubre de 1668.—Lo primer Rector fet
datos; que los electores atiendan á que per la Sera. Fundadora Reverent Pe
los elegidos posean la competente idonei- Fra Francesch Masfarner.»
dad; que el Colegio al recibir á éstos la Fol. 2 —«A 3 de Octe 1672 se llegí la
indagará y sujetará los candidatos á un patent del Collegial Fr. Thomas Ripoll
riguroso examen de lengua latina, despi- fill del Con* de S'a Catlï1 ... entra per
diéndoles para sus conventos, caso de ha- theolec jurant statuta.»
llarlos menguados, y además que se pre- Fol. 32 v°.—«Día 2 de Maitg del any
senten provistos de ropa interior y 1808 al mitg día entra per Rector lo
exterior (1). M. R. P. Lector Fr. Antonino Esta-
Gobernaban al Colegio un Padre Rec- per...»
tor de elección de los frailes del mismo Fol. 33.—En 2 de mayo de 1815 entra
Colegio que reuniesen determinadas cir- de Rector el mismo Estaper, así como e n
cunstancias, un Vicerrector, un Regente 4 de mayo de 1818 entra Fr. Esteban Se-
de estudios, un Maestro y los competen- rrat.
tes Lectores, ó sea catedráticos. El cargo Fol. 34.—Entra Rector en 1 de octubre
rectoral duraba dos años, prohibida la de 1824 Fr. Pablo Tomás Genovés.
reelección, y el Rector en los asuntos gra- Fol. 35 v.°—En 27 de noviembre de
ves debía oir en consulta á todos los frai- 1826 e l P . Domingo Roma.
les del colegio. Éste no estaba sujeto á Fol. id.— «Día 29 Juliol de 1828 se in-
los visitadores y visitas de la Orden (2). tima la absolució del Rectorat lo R. P.
Los Lectores eran elegidos por el Rector Pt. Fr. Domingo Roma, y la demaná
y Consiliarios del Colegio mediante opo- per anar á enseñar en lo Monastir de
sición (3). S* Geroni de la mont any a.» (Hebron).
En 1835, lo mismo que en los más de los Premisa natural de este hecho es la opi-
años, la Comunidad del Colegio contaba nión de sabios de que gozaban los domi-
corto número de frailes. En aquél, además nicos.
de los superiores y lectores, se componía Fol. 36.—En 25 de abril de 1829 entra en
de unos seis estudiantes de Filosofía, al- el rectorado el Padre Presentado Esteban
gunos muy pocos de Teología, el lego Serrat, hecho que se repite en 27 de junio
cocinero, y había además un portero se- de 1831.
cular (4), formando así un total de unos Fol. 38.—Último y notable asiento de
15 hombres. este libro: «Día 17 de Maig de 1834 en-
En el libro manuscrito, cuyo objeto in- tra per 1
Rector de est Collegi lo M. R. P.
dica la nota de la primera página, conce- Pres Fr. Segimon Riera habentse r inti-
bida en estos términos: «En est llibre se mat la Patent en Tarragona lo día l del
continuarán los Rectors y Collegials dest mateix mes y any á las 8 horas del matí.
Col/egi de S. Vicens Ferrer y S. Ra- Per ser la veritat ho firman.—Fr. Es-
teve Serrat Depositan'. — Fr. Joseph
Arrufat Depositario Y he calificado de
(1) Biblioteca provincial-universitaria. Sala de manus- notable este asiento porque se refiere al
critos. Papeles sueltos originales metidos dentro de un
volumen titulado En est llibre se continuarán los Rectors P. Riera, quien en la nefanda noche del
y Collegi sils dest Collegi de Sant Vicens Ferrer y Sant incendio del 1835, villanamente fué muer-
Ramón. to en los momentos que se esforzaba en
(2) Statuta quae pro gubernatione, ya citada.
(3) Papeles sueltos, citados, original.
(4) Relación ya citada del P . Pablo Carbó, alumno de
esta casa, y del P . D. Ramón Bernadet, también alumno, ;o) Biblioteca provincial-universitaria. Sala de manus-
hecha esta en Barcelona á 4 de abril de 1889. critos.
« DOMINICOS 55

salvar el capital que tenía preparado para tos. En ellos apoya sus extremos el arco,
la edificación del nuevo colegio. Las ne- el que afecta la forma trilobada, conte-
g r a s circunstancias de este asesinato ven- niendo en el lóbulo mayor, ó sea del cen-
drán descritas en su lugar. tro, una graciosa concha ó pechina. So-
bre de la puerta se ve un escudo de un
obispo, que opino será el del constructor
ARTÍCULO TERCERO del edificio, el mentado Valldaura. Sobre
del escudo ábrese un grande nicho que
SANTO DOMINGO, DE VICH contiene una buena imagen de talla de
tamaño natural, que representa la Vir-
En el arrabal de Vich, antes apellidado gen del Rosario. Y sobre de este nicho
de Cloquer, y hoy calle de San Francis- aparece el ventanal único de la fachada,
co, existía en pasados siglos una iglesia cuadrado, con adornos barrocos en los
y convento habitado por los franciscos cuatro ángulos.
primero claustrales, y después observan- Las líneas de Salarich arriba transcri-
tes. Éstos, en 1571 ó 1574, se trasladaron tas llevan razón al calificar de espaciosa
al Colegio de Santo Tomás, y entonces la iglesia, pues su nave mide 38'50 metros
el edificio pasó á ser albergue de una Co- de longitud por 9'95 de anchura, siendo de
munidad dominica (1). «Por los años 1660 5l70 la profundidad de las capillas de cada
el Obispo D. Fr. Francisco Crespi de lado, ó sea la anchura de las como naves
Valldaura, religioso de la misma Orden, laterales. Cuenta, además del muy ancho
empezó á edificar el actual convento é crucero, cuatro capillas por lado con muy
iglesia, que no pudo concluir, por sor- desahogado paso que las une. Cobija á la
prenderle la muerte en 1662. Prosiguióse nave la acostumbrada bóveda semicilín-
después el edificio á costa del General de drica de compartimientos (que aquí son
la Orden D. Fr. Tomás Ripoll, y siendo cuatro) separados unos de otros por ar-
prior del convento el P. Fr. Francisco cos transversales, y provistos de lunetos.
Gómez de Figueroa; mas tampoco pudo Está la iglesia adornada además de grande
concluirse, quedando como está (esto se cúpula semiesf erica en el cruce con el cru-
escribía en 1854), siendo de esto la cau- cero. Las bóvedas de las capillasy presbite-
sa, según tradición, el lujo con que se rio muestran la forma de arista cruzada.
edificaba, que disgustó al dicho General. En los machones suben en la nave sendas
Es la iglesia más espaciosa de la ciudad antas, que en alto terminan con capiteles
después de la Catedral: es de una nave de caprichosas hojas. Éstos apean la cor-
toscana, con crucero, y entre otras no nisita, que rodea todo el templo. En las
despreciables pinturas, son notables las capillas vense otras antas que apean el
del altar mayor y presbiterio, de D. Lu- arco de entrada en ellas. En tiempo de
ciano Romeu» (2). los frailes los muros de este templo sólo
Levántase la barroca fachada de este estaban blanqueados.
templo y convento en la cara S. de la El retablo mayor guarda perfecta con-
Rambla, también al Mediodía de la ciudad. sonancia con la parte arquitectónica. En
El frontis de la iglesia presenta una lisa su orden inferior presenta la acostumbra-
pared de manipostería revocada, ador- da mesa, gradas y sagrario en el centro,
nada sólo de arriba abajo en su línea cen- con un gran pedestal en los lados. En el
tral. En lo bajo la puerta tiene á cada primer alto anchísimo nicho con la Vir-
lado un par de baquetillas, con capiteli- gen del Rosario, á cuyos pies vense arro-
dillados Santo Domingo y Santa Catalina
(1) Véase lo dicho en el capítulo VII de este libro, ar- senense. A los lados del nicho un par de
ticulo 6.°, ó sea de los franciscos de Vich. grandes columnas de orden compuesto, y
(2) D. Joaquín Salarich. Vich, su historia, sus momi-
tnenios, sus hijos y sus glorias. Vich 1854, pág. 244. luego un santo dominico, papa, á cada
56 CAPÍTULO OCTAVO
t

lado. Termina este orden por la impres- pilla del Santísimo, aquélla de orden
cindible muy acentuada cornisa, sobre la griego, adornada en su remate alto por
cual se asienta como remate un grandísi- un óvalo que contiene un lienzo al óleo.
mo lienzo de forma apaisada, que repre- L a dicha capilla queda, pues, colocada al
senta la venida del Espíritu Santo. La lado del presbiterio, y merece especial
imagen de la titular ostenta grande esta- mención por su semejanza con el templo,
tura, y viene vestida de telas, al paso que tanto en las bóvedas y cúpula, cuanto en
las demás son de talla, de tamaño natu- su retablo, el cual presenta á las Santas
ral. Todo en este retablo brilla por la no •Rosa de Lima y Catalina de Sena, en es-
común magnitud y la riqueza. tatuas de escultura de tamaño natural, y
Pero lo que más atrae la atención del además dos lienzos por lado con Santos
artista en este presbiterio son los nume- de la Orden. El retablo está dorado y bar-
rosos y buenos cuadros al óleo, que lle- nizado Adornan los muros laterales de
gan á catorce, los que con el ya mentado la capilla tres lienzos, uno de los cuales
del remate del retablo presentan los quin- presenta los mártires del Japón; y el pa-
ce misterios del Rosario. Hállanse colo- vimento una grande y hermosa losa se-
cados en buenas guarniciones y tras de pulcral de mármol con un escudo herál-
ellos desaparecen por completo los mu- dico de un caballero y la laude que
ros laterales de aquella parte de la iglesia. manifiesta pertenecer aquélla á D. Fran-
He aquí la reseña de los retablos late- cisco Juan de Cassador y á los suyos.
rales: Lado del Evangelio.— En la primera
Lado de la Epístola.—La primera ca- capilla, ó de junto al frontis, se venera á
pilla, ó sea de bajo del coro, en un retablo Santa Lucía, colocada en un retablo ba-
barroco de columnas salomónicas, dora- rroco, pero no de columnas salomónicas,
do, guarda la Virgen de Loreto presen- dorado y barnizado.
tada en una imagen pequeña. La puerta del claustro substituía al re-
En la segunda capilla el gremio de tablo en la segunda capilla.
blanquers y asahonadors tiene San Bar- La tercera ofrece á la pública devo-
tolomé, figurado por una estatua de es- ción un Crucifijo de tamaño natural, pues-
cultura de tamaño natural, colocada allí to en un retablo de las mismas condiciones
en un retablo barroco, pintado y dorado. del de la primera capilla.
Un retablo de orden corintio, pintado y Un grande y hermoso lienzo al óleo, de
dorado, cobija en la tercera capilla una unos dos metros de longitud, presenta en
bastante buena escultura de tamaño na- la cuarta capilla á San Gonzalo de Ama-
tural, que representa á San Antonio de rante, colocado el lienzo en su retablo de
Padua. orden jónico, pintado y dorado.
Y en la cuarta capilla un muy hermoso En la testera del brazo del crucero un
é historiado retablo barroco, aunque no retablo exactamente igual á su fronteri-
de columnas salomónicas, pintado y do- zo, ó sea del opuesto brazo, guarda en el
rado, presenta al Doctor de Aquino en nicho ó escaparate bajo la imagen de la
una escultura de tamaño natural muy Beata Juana de Aza, y en el gran nicho
del carácter del retablo. alto una buena estatua de tamaño natu-
Ocupa la testera del brazo del crucero ral de Santo Domingo. También este
de este lado un gran retablo, greco-ro- brazo en su parte superior luce la hermo-
mano, corintio, barnizado y dorado, que sa puerta del opuesto lado y con los mis-
en un nicho bajo contiene al Ecce Homo, mos adornos; pero aquí en lugar de vano
y en el grande, ó superior, San Francisco tiene un retablo corintio con la Virgen
de Asís, escultura de tamaño natural. de la Buenanueva, estatuíta de mármol
En el muro de la parte superior de este de unos 60 centímetros, vestida por enci-
brazo ábrese la hermosa puerta de la ca- ma de la talla. Lucen, pues, los retablos
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CLAUSTRO DE LOS DOMINICOS DE VICH. —1894


(Fotografía del autor).
DOMINICOS .)/

de este templo por su barroquismo, no sección cuadrada, la que al llegar á la


siempre privado de gusto, y por su ri- altura del tejado de la cúpula se ochava,
queza. y además su contextura de mampostería
Arriba quedó implícitamente indicado la convierte en de pulidos sillares. Pre-
el lugar donde se halla el coro, el cual senta una ventana en cada una de las
posee uña fila de las acostumbradas sillas ocho caras. Termina en lo alto_ por una
de obscuro palo, provistas de altos res- balaustrada barroca.
paldares. El de la silla central contiene Al Oriente del templo hállase el con-
un lienzo de unos dos metros de altura, y vento, buen edificio de dos pisos altos,
representa una aparición de la Virgen en que rodea á un precioso claustro, cua-
el coro. En él se lee este lema: "Beata drado, de 27'90 metros de lado total, ó
Maria Virgo F. F. Praedicatores ad sea incluidas las galerías, cuya anchura
psallendum sapienter in choro adhorta- mide en cada una 3'35. Cada una cuenta
batur his verbis: fortiter, viri fortes.» seis arcos sostenidos por esbeltas colum-
Los respaldares de las restantes seis si- nas de mármol pardo del país, las cuales
llas de cada lado tienen sendos lienzos, se apoyan sobre trabajado pedestal depie-
de obra de un metro, con un Santo de la dra y bases áticas, y terminan por hermo-
Orden en cada uno, de medio cuerpo, y sos capiteles de orden compuesto. Los tam-
bastante bien ejecutado. Tampoco es ma- bién primorosamente esculturados arcos
lo el órgano, y está situado junto al coro. están divididos en dos, pero los cabos de
Honran el pavimento del templo algu- éstos que vienen á unirse en el centro,
nas losas sepulcrales, entre las cuales no apoyan en columna ni sostén alguno,
considero dignas de mención por sus es- quedando así graciosamente suspendidos
culturas una del presbiterio, y otra ba- en alto. «No son menos preciosos los la-
rroca hermosísima del brazo oriental del bores de los arcos, reentrantes en su mi-
crucero. tad al estilo árabe, en que se ven escul-
Todo en esta iglesia respira profuso pidas figuritas, flores y otros caprichos,
adorno, riqueza y dentro de su orden formando un conjunto agradable y ri-
buen gusto. co» (1). Cobija á la galería occidental
Al lado del Evangelio del presbiterio preciosa bóveda dividida en comparti-
cae la sacristía, dotada de su correspon- mientos por arcos transversales que
diente cómoda-armario de obscura ma- arrancan de cada columna, y adornados
dera, de orden barroco, bastante histo- aquéllos de dos lunetos en cada cabo y
riada de molduras de buen gusto dentro además de esculturados florones en el
de su orden. Colgado en el muro se ve un centro de ellos. El ala meridional tiene
lienzo hermoso que representa á Santa la bóveda en construcción, y las dos res-
Catalina de Sena. tantes carecen de ella. La cisterna del
Desde la sacristía ábrese á espaldas del centro del patio luce igualmente su bro-
retablo mayor un pasillo que va á la ca- cal de esculturada piedra.
pilla del Santísimo, y en su suelo aparece Súbese al primer piso alto por una des-
una losa sepulcral que tiene una hermosa ahogada escalera de peldaños de mármol
figura de bajo relieve representando un ceniciento; la cual escalera en uno de sus
obispo, que según reza su laude no es rellanos ostenta en el muro una capilla ó
otro que Don Francisco Crespi de Vall- nicho barroco de piedra trabajada. Los
daura, dominico, quien, como dije, empe- pisos altos sustituyeron las galerías del
zó la construcción, bien que la muerte le claustro por típicos balcones de ménsula,
impidió terminarla. La Virgen tiene ca- ó sea losa, jambas, y dinteles de bien la-
marín donde se ven algunos lienzos. brados sillares. Dan al patio los corredo-
Al lado de la Epístola junto al presbi-
terio se levanta el campanario, que es de (1) D. Joaquín Salarich. Obra citada, pág. 244.
58 CAPÍTULO OCTAVO

res, y al exterior las celdas; las que cons- la 153 y á S. con la mentada huerta de
tan de sala, alcoba y recámara, todo no Trinitarios. Y la 153 que lindaba á E. con
pequeño. la anterior, á N. con la Rambla, á O. con
El ángulo NE. del convento luce en su un particular y á S. con la dicha huerta
exterior, á nivel del primer alto, un nicho de Trinitarios (6).
con un Santo Tomás de tamaño natural, 5.° En el término de la misma ciudad
barroco, de piedra, de muy buena factu- de Vich una pieza de tierra llamada
ra, obra del escultor vicense Jacinto Mo- Camp de la era closa, de unas 6 cuarte-
reto, de la primera mitad del siglo xvm (1). ras de extensión, situada junto á la parte
La casa no tenía huerta contigua al trasera de las casas de la cara occidental
edificio, pero sí al otro lado del río, en el de la calle de San Francisco, y entre és-
lugar del antiguo convento, calle de San tas y el camino que conduce á Tara-
Francisco, aún hoy conocida vulgarmen- dell (7).
te por la huerta de los frailes, cuyo es- 6.° Junto á la casa llamada en Vich
cudo de armas tiene sobre la puerta (2). de San Sixto, otra pieza de tierra de 2
He aquí la reseña de las propiedades cuarteras, 4 cuartanes de tenida (8).
de este convento, de las que pude lograr 7.° En el término de Vich dos piezas
noticia.—1.° Una casa con huerto, sita en de tierra, llamadas una Torre de Bona jas
la calle de San Francisco de Vich, dotada y otra Soleya de la Torre, de cabida en
de seis habitaciones, lindante á E. con junto 2 cuarteras, 8 cuartanes (9).
dicha huerta, á S. con la casa y huerta 8.° Tres otras piezas de tierra sitas en
de un señor Vila, á O. con la mentada el mismo término de la ciudad, de nom-
calle, y á N. con la casa y patio de Don bre una Desvío del río Gurri, de 3 cuar-
Antonio Rovira (3). teras, otra Forcada de 1 '/« cuartera, y la
2.° Otra casa con huerto en la misma tercera Den Pau Serra de 2 cuarteras (10).
calle de San Francisco extramuros de la 9.° En el mentado término de Vich
ciudad de Vich, señalada en 1845 con el Otra pieza de tierra nombrada Camp de
número 13 (4). la Roqueta, de unas 4 cuarteras (11).
3.° Otra casa con huerto en la misma 10.° En el término de Tona un campo
calle contigua á otra del mismo conven- de cerca 2 cuarteras de buena calidad
to (5). apellidado Camp dels frares (12).
4.° Junto al templo, y en fila en la Y quizá poseía el convento alguna otra
Rambla, otras tres casas con sendos huer- propiedad, cuya noticia se escapó á mi
tos, á saber, la en 1844 marcada de nú- pesquisa.
mero 151, que lindaba á E. con el templo El historiador de Vich, Don Joaquín
del mismo convento, á N. con la Rambla, Salarich, escribe en honor de esta casa
á O. con la número 152, y á S. con la religiosa las siguientes lineas: «Una de
huerta de los PP. Trinitarios. La número las mayores glorias de este convento es
152, lindante á E. con la anteriormente
nombrada, á N. con la Rambla, á O. con (6) Escritura de venta por el Estado pasada ante «1
notario Clavillart, en Barcelona á 29 de mayo de 1844.
(7) Escrituras de venta ante el nombrado notario Cla-
(1) D. Juan Ceán Bermúdez. Diccionario histórico de villart, en Barcelona á 28 de diciembre de 1840.
lus más ilustres profesores ríe las Bellas Artes. Artículo (8) E s c r i t u r a de v e n t a ante Clavillart, de 15 de julio de
ile Moreto. 1845. L a ermita de San Sixto dista de Vich un kilómetro
(2) Visité esta casa en 15 de diciembre de 1894, y otras largo.
veces con posterioridad. (9) Escritura de venta ante Clavillart, de 22 de enero
(3) Escritura de venta por el Estado ante el notario de 1849.
D. Manuel Clavillart, en Barcelona á 28 de diciembre (10) Escritura de venta ante Clavillart, de 31 de agosto
de 1840. de 1S49.
,4) Escritura de venta por el Estado ante Clavillart, (11) Escritura de venta ante Clavillart, de 28 de diciem-
en Barcelona á 8 de noviembre de 1845. bre de 1840.
(5) Escritura ante Clavillart, en Barcelona á 20 de no- (12) Escritura de venta ante Clavillart, de 17 de julio
viembre de 1845. ' de 1844.
DOMINICOS 59

el haber dado á nuestra Universidad su Hállase este cenobio al Poniente de la


primer catedrático, que fué el sabio P. ciudad con el frente á Mediodía, el tem-
M. F . Jaime Albareda, que murió en 1639. plo á Oriente, y el convento á su O. La
También fueron hijos de este convento fachada de la iglesia, aunque en su ma-
y catedráticos de nuestra Universidad, el yor parte lisa, respira magnificencia.
P. M. F. José Bonall, que murió en 1695; Tiene tres puertas, cuyas hojas están cu-
y el P. M. F. Tomás Sola, fallecido en biertas de hierro con filas simétricas de
1714. Suprimida la Universidad, no sólo grandes y hermosos clavos. La central á
continuaron algunos padres de este con- uno y otro lado viene provista de dos
vento siendo catedráticos de nuestro Se- antas toscanas. Del un par de antas al
minario, sino que algunos de ellos hon- otro pasa por sobre la puerta una cornisa
raron, enseñando en ella, á la Universidad de ancho friso, en cuyo centro se destaca
de Cervera, como el P. M. F . José Urpiá, un adornado escudo barroco de centro
hermano del bisabuelo materno del ilus- liso. Sobre de esta cornisa ábrese en el
tre Balmes, el cual falleció en esta ciudad muro un gran nicho rodeado de escultu-
á 16 de Julio de 1794» (1). Sin duda prueba ras barrocas, el cual cobija un Santo do-
la opinión de sabios que gozaban los do- minico , estatua de piedra, de tamaño
minicos el hecho de que no sólo sean natural, y de mucha expresión. A uno y
llamados á enseñar en sus colegios, sino otro lado del nicho termina el adorno una
que también en las universidades, semi- graciosa pirámide con una bola en su
narios y conventos de otras ordenes. cúspide, en una de las cuales se lee
Ignoro el número de frailes que com- «Any», y en el otro «1770». El interior
ponían esta comunidad, pero opino serian del templo sorprende por la grandiosidad,
unos 10. pues su única nave (que está desprovista
Hoy el templo continúa abierto al culto, de crucero) mide 52 metros de longitud
la una mitad del convento alberga los por 15'23 de anchura, pasando de 5 la
juzgados, y la otra la Casa de Caridad. profundidad de las capillas de cada lado.
Posee cinco capillas en cada uno, y en el
anchurosísimo presbiterio un lienzo de
ARTICULO CUARTO muro en cada lado capaz para otra. Las
capillas no vienen unidas por pasillo al-
SAN PEDRO MÁRTIR, DE MANRESA guno. Afea al templo la discordancia del
gusto de sus líneas, pues desde el pavi-
*E1 convento de Santo Domingo es fun- mento hasta la cornisa, con inclusión de
dación del año 1318. Su primer prior fué las capillas laterales, luce las ojivales; al
F r . Llotgér, inquisidor de esta provincia, paso que desde allí para arriba aparecen
que se hizo famoso en la causa de los las greco-romanas; y así tiene bóveda de
Templarios y de Arnaldo de Vilano- cañón, dividida por arcos transversales
va» (2). «Dióse principio á la primera en compartimientos con lunetos aunque
iglesia en 13 de marzo de 1321. Empero, apocados, y en ellos ventanas modernas.
como no fuese de la capacidad que exigía Las de las capillas, aunque hoy tapiadas
el gentío que acudía á ella, se construyó ostentan las graciosas formas góticas.
de 1412 á 1437 la que actualmente existe, El grandioso retablo mayor data de
consagrándola el dia 23 de abril de 1438 principios del siglo xix, y así viene dicho
F r . Gonzalo, obispo anguriense del reino su gusto. Ocupa todas las tres caras del
de Inglaterra» (3). fondo del ábside que es semipoligonal, y
siguiendo la dirección de ellas, queda di-
()) Obra citada, págs. 244 y 245. vidido de arriba abajo en tres comparti-
(2) Villanueva. Viaje literario. l o m o VII, pág. 188. mientos, y aun alargándose por los lados
{31 D. Cayetano Cornet y Mas. Guia del viajero en
Manresa y Cardona. Barcelona 1860, pág. 1J6. extiende, adheridos á los del presbiterio,
60 CAPÍTULO OCTAVO

grandes cuadros, que vienen á formar glo xvii, pues viene formado de cuadritos
dos otras caras del mismo retablo; y así de bajo relieve, distribuidos en pisos y
hacen que éste rodee con sus blancas y separados por cornisas, frontones y co-
doradas esculturas todo el presbiterio. lumnitps.
En cuyo centro se levanta, majestuoso En la tercera en 1835 había dos altares,
y aislado, el sagrario en forma de tem- cuyos santos y gusto de los retablos ig-
plete. «Es de los mayores (este templete) noro.
que se conocen, y está todo dorado inte- La cuarta tuvo entonces también dos
rior y exteriormente» (1). Adornan al retablos, de los que hoy existe el del fon-
templete la estatua de Melquisedech á un do, que es de orden corintio, y está pin-
lado y la de Aarón en el opuesto. Lo mismo tado y dorado. En él se conserva una no
el templete que el resto del retablo tienen grande imagen de la Virgen, que en pa-
columnas del orden compuesto. El com- sados tiempos estaba sobre la puerta del
partimiento central del retablo en el pri- convento, y de la que dice la tradición
mer piso forma un como grande nicho que habló á San Ignacio de Loyola.
con la imagen del titular San Pedro Mártir, La quinta capilla en un grande retablo
buena escultura de tamaño natural. Dos barroco dorado, pero no de columnas sa-
grandes columnas le acompañan en cada lomónicas, guarda la imagen de escultura
lado. En el piso segundo otra escultura del Santo de Aquino. En el muro lateral
representa al Niño Jesús. En los compar- de esta capilla se ve un osario de piedra
timientos laterales el primer orden, ó pi- gótico sin inscripción.
so, ostenta las estatuas, también de ta- Lado del Evangelio.—ha. capilla deba-
maño natural, de Santo Tomás de Aquino jo del coro presenta hoy en un grande
y San Buenaventura, doctores de la Igle- lienzo á San Ignacio de Loyola, el cual
sia, uno á cada lado; y en el segundo dos lienzo en tiempo de los frailes estaba en
santos obispos de alto relieve que se aso- otro lugar que muy luego indicaré.
man en sendos óvalos. En las esquinas Ignoro qué retablo y qué Santo venía
del presbiterio con la nave aparecen un cobijado por la segunda capilla en 1835.
santo Papa á cada lado, también buenas El grandioso retablo de la tercera ca-
esculturas de tamaño natural. Todo re- pilla está dedicado á la madre de Santo
sulta grande, rico y majestuoso, bien que Domingo la Beata Juana de Aza, y en él
del gusto de su tiempo. se ven hasta cinco buenas estatuas de ta-
Sigue la reseña de los retablos laterales. maño natural. El orden del retablo es
Lado de la Epístola.—La primera ca- el corintio, luciendo grandes columnas y
pilla, ó sea de bajo el coro, con lo que gusto.
dicho queda que éste es coro alto en los Carezco de noticia de los retablos y
pies del templo, presenta hoy en un pe- Santos que en 1835 ocupaban las capillas
queño retablo un Crucifijo. cuarta y quinta de este lado.
La segunda capilla es mucho más pro- Aunque los muros y bóvedas de este
funda, ó sea larga, que las demás, te- templo están blanqueados, la grandiosi-
niendo bóveda gótica en su primera mi- dad de la fábrica, sus despejadísimos ám-
tad, y cúpula en la segunda ó del fondo. bitos, y la riqueza de sus retablos mayor
Se dice que esta segunda mitad y su cú- y laterales le dan un aspecto de majestad
pula proceden de tiempo posterior al que enamora.
1835. La capilla está dedicada á la Virgen En el coro se conservan aún hoy dos
del Rosario y al Santísimo Sacramento. grandes lienzos de 3'45 metros de longi-
Su retablo evidentemente data del si- tud, de los cuales uno presenta el Rosario
adoptado por todas las religiones, y el
(1) D. Cayetano Cornel y Mas. Guia del viajero en
otro á la Virgen amparando á toda la
Manresa y Cardona. Barcelona, 1860, pág. 117. Orden dominicana.
IGLESIA DE LOS DOMINICOS DE MANRESA. — 1 9 0 3 IGLESIA DE LOS DOMINICOS DE MANRESA. —1903
(Fotografia del autorj. (Fotografia del autor).
DOMINICOS 61

Al lado O. del presbiterio vese la no de un luneto en cada lado. Los arcos


grande sacristía con las cómodas-arma- transversales apoyaban sus cabos en
rios del tiempo de los frailes, las que na- ménsulas barrocas. Un grande y hermoso
da notable ofrecen. brocal del pozo con montantes de hierro
Al O. del templo, ó sea á su lado del para la polea adornaba el centro del
Evangelio, hallábase el convento al de- patio.
rredor de su muy espacioso claustro. En el exterior, ó sea en las caras que
Describía éste un perfecto cuadrado de daban al patio, corría por sobre de los
113 pies (1) (31'50 metros) de lado in- arcos una cornisita, ó faja de piedra, que
cluidas las galerías. Siete arcos de medio separaba del piso bajo el alto. Este care-
punto, apoyados en pilares de sección cía de galería, pero en su lugar abría un

MUESTRA DE LOS ARCOS Y PILARES DEL CLAUSTRO

cuasi cuadrada, formaban la galería de balcón sobre cada arco del piso bajo. He
cada uno de los cuatro lados Tanto los visto un buen trozo de la galería, y algu-
pilares cuanto los arcos y adornos eran no de los arcos y pilares, y comprendí
de pulida piedra, pues entre arco y arco que este claustro por su regularidad, su
el muro venía adornado con relieves en atildado estilo de Renacimiento, la mag-
formas geométricas, tales como círculos nitud no común de sus partes, y el rico
y triángulos curvos, todo bastante gra- material hubo de tener muy agradable
cioso. Las galerías medían en su anchura aspecto de severa riqueza y majestad (2).
3'67 metros, y estaban cubiertas por atil- Oigamos aquí al Guia del viajero en
dadas bóvedas de Renacimiento, es decir Manresa y Cardona publicado en 1860.
divididas por arcos transversales en tan- '<En su claustro (el presente), que lo pro-
tos compartimientos cuantos eran los ar- pio que el resto del convento sirve ahora
cos del patio, compartimientos provistos de cuartel de infantería, había una capi-

(1) Un antiguo plano que se guarda en el archivo de la (2) Visite' el Templo de Santo Domingo en 27 de diciem-
comandancia de Ingenieros militares de la plaza de Bar- bre de 1893, y más tarde en 8 de julio de 1903 el templo y
celona. los restos que quedan del convento.
62 CAPITULO OCTAVO

lla, donde es tradición que vivió algunos convento la ancha calle llamada Nueva
meses San Ignacio de Loyola, cuando en de Santo Domingo.
1522 pasó de Montserrat á Manresa. En El convento, mal pecado, es I103- (1900)
este convento, dice el P. Villanueva, co- teatro, cuyo salón de espectáculos ocupa
menzó su carrera de la perfección, diri- el patio del claustro. El templo goza la
gido por un religioso dominico llamado suerte de estar abierto al culto como pa-
F r . Gabriel Perellós... En memoria de rroquia.
esto, y por especial cuidado del celoso En 1835 lo poblaban 6 sacerdotes, 7 co-
dominico P. F r . Francisco Enrich, en el ristas y 4 legos, total 17 frailes; ocupados
primer altar de la iglesia, á mano iz- los de coro en el culto, los ministerios
quierda debajo del coro, se ve un cuadro espirituales y el estudio, para el cual no
al óleo en el que están representados los faltaba al convento su buena biblioteca
principales actos del santo Fundador de provista de libros modernos y anti-
la Compañía de Jesús en este convento. guos (5).
Es el mismo lienzo, aunque restaurado, El pueblo manresano, edificado de las
que había en la antigua capilla del claus- virtudes y celo de sus frailes, les amaba
tro, que... servía de sala capitular antes cordialmente, y en el día de la desgracia
de la exclaustración de 1835» (1). «En la dio de ello elocuente prueba. En la pre-
misma capilla del claustro, escribía Villa- visión del peligro les previno que en caso
nueva, y en su único altar, se venera una de agresión tocasen la campana, y él
cruz grande, la cual es tradición que car- acudiría á salvarles; y cuando luego los
gaba sobre sí el Santo patriarca algunas religiosos salieron sin atropello, el mismo
noches paseando los claustros en ejerci- pueblo corrió á recoger y salvar los ob-
cio de penitencia. Un letrero que se es- jetos del convento, mientras las personas
cribió en ella conserva la memoria de de ellos se retiraban á sus respectivas
esto» (2). casas. Allí en la ciudad continuaron vi-
«En las paredes del claustro hállanse viendo , de ningún manresano perse-
algunos antiguos sarcófagos y cenotafios. guidos (6), y á todos dando edificante
En la capilla de Santo Tomás, en unas ejemplo (7).
cajas de metal forradas de terciopelo, Sigue la breve reseña de las propieda-
están también depositados los restos de des no menguadas de este convento.
los antiguos príncipes de Pignatelli, se- 1.° «La casa sita en la calle del Borne
ñores de Rajadell.» de la ciudad de Manresa... compuesta de
«La torre de esta iglesia está todavía dos habitaciones, la primera de las cuales
sin concluir» (3). tiene de sitio 1950 palmos cuadrados; y la
«Al Poniente del convento extendíase segunda, por estenderse encima de la sa-
su buena huerta, de una cuartera dos cristía de la capilla del Rosario, tiene
cuartanes y medio de tenida, que lindaba 2925 palmos cuadrados; y está contigua
á E. con el convento 5' la plaza de ante dicha casa al mismo convento» (8).
la iglesia llamada Clos, á S. con la calle 2.° En el término de la misma ciudad
de Santo Domingo, y á N. con el conven- una hermosa heredad, llamada Manso
to y el paseo apellidado Muralla (4). Ac- Morera, dotada de capilla pública, cuyo
tualmente por el terreno que fué huerta titular era el mismo del templo mayor
pasa rozando de S. á N. los muros del
(5) Relación del corista de este convento P . Migtul
Riera, oída en Manresa á 28 de diciembre de 1881.
(6) Relación del P . Riera, ya citada.
(1) P á g , 118. (7) Relación de D . Antonio Sola. Barcelona 5 de no-
(2) Obra citada. Tomo VII, pág. 189. viembre de 1890.
<3) D. Cayetano Cornet. Obra citada, p á g . 119. (8) E s c r i t u r a de v e n t a por el Estado ante el notario
(4) Escritora de venta pasada ante el notario D. Ma- de Hacienda D. Manuel Clavillart, en Barcelona á 4 de
nuel Clavillart, en Barcelona á 10 de julio de 1849. mayo de 1842.
DOMINICOS KJ

San Pedro Mártir. Constaba de casa de extendido en sentido perpendicular al eje


labranza, de 61 l¡2 cuarteras entre campo del templo.
y viña, que «cultivaba la comunidad por El interior del templo responde perfec-
cuenta suya», 34 cuarteras entre viña y tamente a la fecha de arriba. Consta de
olivar, un huerto de 2 cuartanes, y 316 una muy larga y ancha, pero poco eleva-
cuarteras de bosque y yermo (l). da nave, sin crucero, sin tribunas ó trifo-
3.° En el mismo término de Manresa rium, con seis capillas laterales por lado,
veinticuatro campos de no dilatada ex- sin pasillo que mutuamente las una. El
tensión, variando de 10 cuartanes á 3 estilo toscano allí imperante dejó muy
cuarteras y medidas intermedias (2). sencillas y peladas las antas que suben
en sendos machones, así como la cornisa
que corre por todo el templo en el arran-
ARTÍCULO QUINTO que de bóvedas. Esta cornisa hace las
veces de capitel de las antas. La bóveda
SAN RAIMUNDO, DEL PANADÉS está dividida por arcos transversales,
continuación de las antas, en siete com-
A obra de un kilómetro al Poniente del partimientos, sencillos, provistos de un
pueblo llamado Monjos, sentada sobre luneto en cada lado, con sendas venta-
una humilde meseta cuyo pie baña un nas, unas abiertas, otras tapiadas. Todos
frondoso torrente llamado Foix, se levan- los arcos describen el semicírculo. Los
ta la casa dominica conocida bajo el título de ingreso en las capillas apoyan en an-
de San Raimundo del Panadés. Da frente tas que miran al interior de ellas, y se
á N., teniendo el templo al E. extendido hacen de notar por lo apocados ó bajos.
de Septentrión á S. La fachada de éste, El fondo del ábside es plano. Todo está
lisa, de manipostería revocada, nada de revocado y blanqueado. El coro es coro
particular ofrece. Sólo merece anotarse alto en los pies del templo. La nave con
que en su ángulo NE. se halla pegada á el vestíbulo mide 38'92 metros de longi-
un torreón cilindrico, que sin duda hacía tud por 9'07 de anchura y 3 de profundi-
las veces de campanario, y que su puerta dad de las capillas de cada lado, resul-
principal está adornada de una anta tos- tando así una anchura total de la iglesia
cana en cada lado, de un ancho cornisa- de 15'07 metros. Descontado el vestíbulo,
miento que pasa de una á otra anta por la longitud de la nave queda en 31'82 me-
sobre la puerta, y sobre de esta cornisa tros.
un frontón triangular, cortado en su án- El retablo mayor consta de dos cuer-
gulo superior por una capilla cobijada pos, uno sobrepuesto al otro, de estilo
por una concha con sus estrías. En el diferente y en ambos malo, pues se pue-
friso del cornisamento se lee: 1730. La den graduar de mal proyectados, peor
torre indicada del ángulo fué parte del trabajados y malísimamente decorados.
castillo señorial de la familia del Santo El inferior parece indicar un plan que no
titular. se llevó á término, y al que, en lugar de
Cruzado el umbral, se halla como unves- continuar la obra, se le añadió otro reta-
tíbulo del último período del estilo gótico, blo, que podría por sí sólo subsistir como
el cual vestíbulo está separado de la nave tal en una iglesia de menores proporcio-
del templo por una verja. Esta pieza se- nes. Éste consta de su base corrida, co-
ría sin duda la primitiva capilla. Se halla lumnas á uno y otro lado y una cornisa
que pasa de unas á otras; todo de senci-
llísima construcción sin ni molduras. So-
(1) E s c r i t u r a de venta por el Estado ante el notario
Clavillart, de Barcelona á 7 de mayo de 1842. bre la cornisa se lee: MDCCCXXV. En la
(2) Escrituras de venta ante el notario Clavillart, en grada superior descansa un sagrario de
Barcelona á 15 de abril de 1844, 20 de junio de 1845, 13 de relativo valor artístico por su composi-
julio de 1845 y 28 de febrero de 1846.
64 CAPÍTULO OCTAVO

ción y dorado, el cual, procedente de otra contiene esta inscripción: «En esta caixa
parte, paró allá por la razón que luego es estat lo eos de San Ramón de Penya-
indicaré. En su puerta tiene pintada la fort.% Esta caja se dice, no sin fundamen-
imagen del Buen Pastor. Sobre del sagra- to, que procede del convento de Barcelo-
rio el nicho principal contiene la imagen na. La del nicho fronterizo está cerrada,
del Santo de Guzmán, de talla, pero de contiene un cadáver y la inscripción reza
mal gusto. En el segundo orden, ó piso que: «Assí está lo eos del venerable Pare
alto, se presenta en su centro San Rai- Fra Pere Joan Guasch, Mestre en Sa-
mundo de Peflafort, y en la terminación grada Teología, fill de Vilafranca de
superior otro Santo Domingo. Panadésy fundador de esta Santa Casa.»
El enigma de este retablo, compuesto Se ve claramente que en los muros la-
de dos cuerpos hetereogéneos queda ex- terales del templo, sobre cada arco de
plicado con saber que antes de la guerra entrada en las capillas, había un lienzo ó
de la Independencia el retablo era homo- cuadro, que, á juzgar por tres de ellos
géneo y estaba completo; que los france- que se conservan (çn 1902) dentro de al-
ses robaron el gran lienzo que formaba gunas capillas, presentarían los doce
la mitad superior, y que en 1815 los frai- Apóstoles. Los tres existentes represen-
les, sobre la mitad ó parte inferior, colo- tan á San Pedro, San Juan y San Andrés.
caron, traídos de otros templos ó partes, Brillan por el correcto dibujo y cierto sa-
la actual mitad superior. Al indicado gran bor que recuerda los buenos tiempos de
lienzo un historiador de aquella guerra lo nuestro arte pictórico.
califica de famoso, y añade que represen- Hay allí otros dos lienzos de unos 2
taba al titular, y «que fué pintado en Roma metros de longitud que representan uno
á expensas del Rmo. Mtro. General Ripoll la infancia de San Raimundo de Peñafort,
que lo regaló al convento» (1). y el otro su despido de la familia para
Al pie del altar, en medio del presbite- entrar en religión. Han sido estropeados
rio, se ve una losa sepulcral de gusto neo- por una mano atrevida que quiso reto-
pagano, de buena labor, de bajo relieve, carlos. Sólo la cabeza del padre del Santo
cuya inscripción dice así: Vas del senyor aparece intacta y de ella se puede de-
March Joan de Espuny y de Argensola ducir que el valor artístico del lienzo no
y dels seus. El escudo heráldico está di- era para despreciado. Finalmente hay allí
vidido en dos mitades, una de las cuales otro lienzo que pinta á la Virgen del Rosa-
presenta una ave con las alas extendidas, rio, el que presenta un conjunto de la Tri-
y el otro tres puños cerrados. Y como es- nidad, la Virgen y los ángeles, muy her-
te mismo escudo se halla en las claves moso y en figuras muy bien acabadas (2).
del vestíbulo arriba descrito, es de creer De los dos lienzos referentes á San Rai-
que Despuny construiría parte ó toda la mundo escriben unos excursionistas las
capillita, ó á lo menos sería uno de sus siguientes líneas: «En nuestra visita pudi-
insignes benefactores, y que sus restos mos fijarnos especialmente en un retablo
pasarían de la iglesia antigua ó vestíbulo que representa la infancia de San Rai-
al presbiterio de la nueva. mundo, en el cual se descubren algunos
A uno y otro lado del presbiterio, á rasgos bastante característicos. Se con-
cierta altura del muro, aparece un nicho serva en la parte baja de la predicha to-
con sendas cajas. La del lado de la Epís-
tola es un ataúd de madera, sencillo, está (2) En 7 de julio de 1902 visite este convento, pero
vacío y descerrajado, y en su parte baja hallándose ausentes de él los actuales poseedores, no pude
penetrar en el templo, y sólo pude ver su interior desde
una verja, ó puerta c e r r a d a por una verja, que comunica
con la habitación de los colonos. En los pormenores que
(1) P. Mariano Rais y P. Luis Navarro. Historia de la no pude apresar h a suplido mi falta mi amigo el reveren-
provincia de Aragón, Orden de predicadores. Zaragoza, do Dr. D. Cayetano Viaplana, párroco de Arbós, quien á
JSI9, pág. 110. mi ruego visitó el templo, y me escribió los datos.
DOMINICOS 65

rn . En la sacristía pudimos admirar


rre. conservan algunos muy interesantes para
otro retablo compañero del que habernos la historia patria. Los más notables los
mentado al hablar de la torre, y que tam- retiró el señor Puig, y cuidadosamente
bién representa como aquél un hecho de los guarda en su casa de Esparraguera
la vida de San Raimundo, y una jarra (es Puig y Llagostera). Ya en uno de
(lavatorii), original ejemplar de cerá- nuestros números anteriores dimos cuen-
mica, que con exquisita franqueza el ta de las obras que nuestro delegado (el
señor Puig (poseedor del convento) puso Sr. Puig) nos regaló procedentes de
á disposición de nuestra Sociedad» (la aquella biblioteca» (3). Nunca pensara
Associació d'excursions catalana) (1). la Orden religiosa, que cuidadosamente
Los santos de los altares laterales vis- reunió tales obras, que un día debieran
tieron casi todos el hábito dominico y andar en manos de fabricantes, y ser ob-
tanto sus imágenes cuanto sus retablos, jeto de regalos. ¿Cuáles fueron las obras
que por regla general son aquí barro- regaladas? «Don José Puig y Llagostera,
cos (2), se hallan actualmente (1902) in- socio delegado en Esparraguera (regaló):
tactos. 1 vol. en fol. Historia general de los san-
Los asientos del coro ofrecen la ma- tos y varones ilustres en santidad del
yor sencillez, y en el respaldar de el del Principado de Cataluña. Barcelona,
presidente se lee: «Esto vigilans, et con- 1602.—I vol., Tractatus de sacrificio
firma fratres tiwsj> misse, editi per reverendissimum Tito-
El convento, de edificación pobre en mam de vio Caietanum cardinalem sanc-
los materiales, no deja de mostrar aliento ti xisti; edición en fol. con caracteres
en las dimensiones. No forma claustro. góticos. Roma, 1531» (4).
Con la iglesia describe tres lados de un Todavía en 1892, cuando un sacerdote
gran patio rectangular, que quizá estaba amigo del que escribe estas líneas visitó
destinado á convertirse un día en claus- el convento, se guardaban en él dos ó tres
tro. El templo forma el lado E., el edifi- cofres de papeles del archivo de los frai-
cio habitable el N. y otro casi inhabitable les, bien que no procedían de épocas muy
el O., quedando abierto el S. Tiene un remotas (5).
piso bajo, uno alto y un segundo que es Los bienes de esta comunidad, cuya no-
desván. Nada de particular ofrecen estas ticia ha llegado hasta mi conocimiento,
construcciones como n o sea lo desahoga do son los siguientes: 1.° Una heredad lla-
de sus piezas. El corredor del ala habita- mada Settabra, sita en el término de San-
ble caía hacia el patio, y las celdas al ex- ta Margarita y Monjos, compuesta de dos
terior. El dicho patio en su lado N. mide casas y 87 jornales de tierra; de ellos
de luz 28 pasos regulares ó sea unos 20 unos tierra campa, otros viña, otros viña
metros. En el dintel de una puertecita dada á primeras cepas, 4 de 3rermo y 48
del piso bajo leí: «1673.» de bosque (6).
De que la casa poseía biblioteca nos lo 2.° Otra heredad de nombre Mas de la
certifican las siguientes líneas de los mis- llana, situada en Castellví, que constaba
mos excursionistas de arriba: «En una de de la casa y 135 jornales de tierra, parte
las estancias del primer piso (de este con- dados á primeras cepas (7).
vento) se encuentran (la visita ó excur- 3." Si bien alguna persona del país me
sión es de abril de 1879) los restos de la
biblioteca, entre cuyos volúmenes, desde ¡3) Butlletí citado. Tomo de 1878 y 1879, pág. 15S.
los del siglo xvi al del xvm, todavía se (4) Butlletí citado. Tomo de 1878 y 1879, pág. 88.
(5) El vicario de Villafranca y el canónigo D. Buena-
ventura Ribas.
(i; Butlletí de la Associació d'excursións aMalana, (6) E s c r i t u r a de venta por el Estado ante el notario
1878, 1879, págs. 157 y 153. D. Manuel Clavillart, en 9 de junio de 1845.
('-) Que son barrocos lo leo en relación de los citados (7) Escritura de venta por el Estado ante el notario
excursionistas. Butlletí citado, lugar citado. don Manuel Clavillart, á 27 de septiembre de 1845.
TOMO II
66 CAPÍTULO OCTAVO

h a dicho que la heredad Senabra era la tenía asiento la casa solariega de la fa-
que forma el convento y sus tierras ad- milia de San Raimundo de Penyafort,
juntas, tengo.mis razones para creer equi- término municipal de Santa Margarita y
A^ocada tal afirmación. Si ella fuera ver- Monjos, distante de esta villa (de Vila-
dadera, no podría aquí colocarse en este franca) 4 kilómetros, construyóse en 1602
tercer lugar la buena huerta que se ex- y en honor de este Santo su actual iglesia
tiende al pie de los muros del convento y monasterio, tomando posesión los reli-
y que pertenece á él, porque y a vendría giosos de él en 1603, por orden del Reve-
comprendida en el número 1.° de esta re- rendo P. F r a y D. Juan Guasch, Doctor y
seña; mas como creo equivocada dicha Lector en Filosofía, hijo de esta villa, el
afirmación, anoto aquí en este tercer nú- cual fué elegido por prior del propio mo-
mero la indicada huerta, que es bastante nasterio. En 12 de agosto de 1604 instalá-
grande (1). Por otra parte.no se compren- ronse en su iglesia los Santos Sacramen-
de que un cenobio como éste, y situado tos... El día 4 de agosto, con motivo de la
en despoblado, careciera de buena huerta festividad de su patrón Santo Domingo,
cuando la tenían hasta los situados en los celébrase en el mencionado punto su tra-
más tupidos centros de población. dicional aplech, al que concurren los ve-
La comunidad que poblaba esta casa cinos de varios pueblos del Panadés» (3).
contaba reducido número de religiosos, Hoy, como dije, templo y convento es-
tal como cuatro ó cinco (2), ocupados los tán en poder de un particular; pero aquél
presbíteros en administrar sacramentos continúa apto para el culto y abierto
á los vecinos de aquellos pueblos, auxi- á él.
liando en esto á los párrocos de la re-
donda.
Un muy anciano vecino de aquella co- ARTÍCULO SEXTO
marca contaba que, siendo malsano el
país en razón de los charcos que allí de- NUESTRA SEÑORA DE LA ANUNCIACIÓN,
jaba el torrente ó pequeño río Foix, y DE GERONA
hallándose el convento en lugar solitario,
la Orden mandaba á él los religiosos que «El convento de los padres dominicos
merecían alguna punición ó castigo; es fundación del Obispo de esta ciudad
mientras por otro lado un sacerdote de Don fray Berenguer de Castellbisbal, re-
Villafranca me decía que, siendo aquella ligioso de la misma Orden. Estaba ya he-
región muy sana, eran enviados á San cho en 1253, puesto que á 30 de diciembre
Raimundo los convalecientes y delicados. de ese año fué y a admitido por la Orden
A contradicción tan patente hallo una ex- como uno de sus conventos. Dícelo una
plicación fácil, aunque ignoro si acerta- inscripción que está en su iglesia en la
da. Antiguamente existían los charcos, y pilastra entre las capillas de San Dalma-
el país era malsano, y entonces la casa cio Moner y Santo Tomás, donde se lee:
sería correccional: después, desaguados tertio kal. jannarii anno Dñi MCCLIII
los pantanos (hoy no existen y el país es fuit acceptus hic Gerundae convetitus.
sano), tornaría en sanatorio ó casa de L a iglesia actual se comenzó á construir
convalecencia. tan pronto, que ya hay breve de indul-
De la fundación y antigüedad de este gencias para su prosecución, dado por el
convento leo: «En el lugar conocido an- papa Inocencio IV el año XII de su pon-
tiguamente por Penyafort, donde antes tificado, que fué el siguiente (1254) y úl-
timo de su vida» (4).
(1) L a vio un sacerdote amigo que visitó la casa.
(2) Relación de un exnovicio franciscano que después (3) Apuntes históricos de Villafranca del Panadés y
del 1835 habitó por muchos años en Santa Margarita, he- su comarca... Villa/ranea, 1888, págs. 252 y 253.
cha en septiembre de 1892. (4) Villanueva. Viaje literario. Tomo XIV, pág. 162
Vi" A.DOMINICOS-' • 67

;• Y efectivamente, la iglesia y claustro se conservan de*tales hierros algunos in-


llevan el tipo perfecto de su edad, así significantes fragmentos. Por lo demás,
como el de su región. De su edad, porque, toda la sencilla fachada presenta pulidos
aunque ojivales, respiran en varias de sillares de piedra, de un color rojizo su-
sus líneas y elementos la tradición romá- bido, interrumpidos sólo por el no peque-
nica; y de su región, porque aledaña ésta ño rosetón, de calados góticos de sección
á Francia, construye en gótico a mitad prismática muy severa, cobijado todo por
4el siglo xm, cuando tal gusto, por regla un guardapolvo. • •
•general, no entró en España hasta fines No lejos del templo, en el ángulo S. del
de él y principios del siguiente. Asiéntase patio que le precede, se eleva el campa-
el imponente edificio al E. de la ciudad, .nario. De cortas dimensiones y sencillo,
entre el caserío y su muralla, en elevada tiene una planta, ó sección, original, la
meseta, que domina al pueblo y á su fér- que describe la mitad de un octógono.
til vega. Anchísima escalinata de 39 gra- Termina en alto por una como garita. Su
das precede al rellano, ó atrio, en cuyo estilo es gótico.
lado oriental se abre la puerta del templo, Mediante el ascenso por las cuatro gra-
y en la de S. la del convento. Aquélla, das que preceden al umbral de la iglesia,
plenamente románica, está dotada en el y cruzado éste, sorprendía la grandio-
derrame, ó lados, de superficies que for- sidad, esbeltez y hermosura de aquella
man dos ángulos salientes y dos entran- grande y única nave, ojival, sin crucero,
tes con sendas columnitas en los últimos, émula de la del Pino, de Barcelona. Su
éstos con capiteles cubiertos de hojas. longitud total mide 42'63 metros, y su an-
Los mismos ángulos y las mismas colum- chura 12'12, sin contar la profundidad
nitas, convertidas en toros, se prolongan de las capillas laterales, la que en el lado
más allá de la cornisita y describen los de la Epístola sólo llega á 278 metros, al
arcos de la dicha puerta en forma redon- paso que en el del Evangelio se extiende
da graciosamente peraltada ó de herra- al doble, amén de la extraordinaria de
dura. Pero lo más notable y precioso de dos de ellas que luego describiré (2). Las
esta abertura, los hierros que decoraban capillas laterales se contaban allí en nú-
el maderamen de la puerta, ha, por la- mero desigual según los lados, porque si
mentable desgracia, desaparecido. Toda el del Evangelio poseía cinco, la más cer-
su cara exterior hallábase cubierta de cana al frontis en el de la Epístola estaba
una como red de graciosas mallas en substituida ppr la escalera del coro y así
losanje, cada una de las cuales contenía sólo tenía cuatro. El ábside describía un
u n caprichoso objeto robado á la natura- semipolígono de cinco caras, dotadas en la
leza, cuál una flor, cuál un murciélago, mitad altade sendos ventanales. Tampoco
ésta una hoja, aquélla una lagartija, otra carecían de estos típicos vanos los muros
un gorrión, etc., elegantísimo é intere- de la nave. En el del lado de la Epístola
sante tipo de la ornamentación gótica. se abría uno sobre cada capilla, pero con
Todo ha sido destruido y aquellas riquí- la particularidad que unos tenían la acos-
simas muestras del fino gusto de los ar- tumbrada forma prolongada ojival, mien-
tistas del siglo xm, conservadas por los tras otros la inusitada cuadrada. El muro
frailes durante seis centurias, pasaron á del lado del Evangelio sólo tenía tres ven-
los usos más ordinarios y viles (1). Sólo tanales; éstos de forma alancetada con
en el Museo de antigüedades de Gerona calados. Se hallaban dos sobre las dos
primeras capillas, y el tercero sobre la
(1) Me describió menudamente estos detalles el conser-
je del actual Museo de Antigüedades de Gerona D. Narci- (2) Plano de este convento, levantado por el Teniente
so Bonet, carpintero que fué en las obras de la instalación Coronel de Ingenieros D. Fernando Camino, en 13 de julio
del cuartel en Santo Domingo. Me lo dijo en Gerona á 23 de 18-16, existente en el archivo de la Comandancia gene-
d e agosto de 1893, y me lo repitió en 6 de septiembre. ral de Ingenieros de Cataluña.
68 CAPÍTULO OCTAVO

postrera. Los ventanales largos venían artístico que en ellas reconocían (1). ¿Qué
adornados de la invariable coiumnita santo se veneraba en tan suntuosa cuanto
central y los calados radiados de su ojiva, moderna capilla? Opino que á San Dal-
y los cuadrados tenían un círculo inscrito macio Moner, hijo de hábito del mismo
en él, y dentro de éste las graciosas cuatro convento, y por lo tanto una de sus ma-
hojas tan usadas en los calados góticos. yores honras. Nació Moner en Santa Co-
Los calados de este templo son prismáti- loma de F a r n é s en 1291, y á los 23 años
cos en su sección, y con la robustez de de su edad tomó aquí el hábito dominica-
sus partes, sus seis caras planas y su gra- no, «y como ya estaba adelantado en co-
cia, indican aún al ojo menos avisado que nocimientos, á poco tiempo le hicieron,
proceden de la primera época del estilo oji- que explicase Lógica, en lo que empleó
val, y de país vecino á Francia, como indi- dos años... Entregóse enteramente á la
qué arriba. La elevada bóveda de la nave, oración y á la penitencia, sin dejar por
lo propio que las de las capillas, concuer- esto de ser útil al prójimo... Su peniten-
dan admirablemente con el estilo general cia fué asombrosa... P a r a no incomodar
de la construcción, luciendo las más puras á sus hermanos con sus suspiros, llantos
formas góticas, con sus compartimientos, y penitencia se metía por el dia en un
sus aristones y sus claves hermosamente rincón ó cueva del monte inmediato al
esculturadas y policromadas. Los aristo- convento, y por la noche en los desvanes
nes son de sección cuadrada, achaflanadas de la iglesia... Después en otra cueva
sus aristas. Apoyan sus arcos, no en co- dentro de la cerca del convento, donde
lumnitas que procedan del suelo, sino en estaba separado de todo trato con sus her-
diminutas ménsulas. Daban majestad al manos menos para los actos de comuni-
templo los muros de pulidos sillares, de dad en iglesia y refectorio, cueva que
los cuales no desdecía el pulpito de piedra hoy (1826) lleva todavía su nombre,
igualmente esculturada, pero de estilo ba- donde vivió los últimos tres años de su
rroco. Encima de otro bóveda semejante vida, terminada en el Señor á 24 de sep-
á las mentadas, extendíase sóbrela puer- tiembre 1341, á la edad de 50 años. Hizo
ta principal el anchuroso coro. Dios por él muchos milagros...»
La primera capilla del lado del Evan- «Poco tiempo después la gratitud y de-
gelio, ó sea la contigua á la fachada, ve- voción de los marqueses de Santa Pau le
nía cobijada por una cúpula de forma hizo un sepulcro, que se puso tras de la
como oval con radios y pinturas al fresco. puerta de la iglesia donde se colocó su
Llamaba la atención la segunda. Alár- cuerpo... En 1613 se le hizo una capilla
gase a l a profundidad de 19'22 metros, y á mano derecha de la iglesia bajo el ór-
forma otra como iglesia, dotada de cru- gano... Practicadas diligencias, la Con-
cero, cúpula y sacristía; todo empero de gregación de Ritos confirmó la inmemo-
estilo greco-romano, y no mal trazado. rialidad del culto» de este Santo «en 9 de
Luce por., el prolijo adorno de bonitas agosto de 1721, y el día 13 lo aprobó Su
esculturas barrocas de yeso, esparcidas Santidad... Los religiosos han hecho des-
por todos sus arcos, pechinas, cúpula, pués una suntuosa capilla concluida en
sacristía y todos sus cuerpos salientes. marzo de 1751» (2), la cual no puede ser
Cuando por los años de 1875 aproximada-
mente empezaron á desprenderse algu-
(1) Al describir este templo escribo lo que vi en la vi-
nos fragmentos de estas esculturas de la sita que le hice en septiembre de 1893. E n ella me acom-
cúpula, y la autoridad mandó quitar las pañó, y muy bondadosamente me sirvió de cicerone, el
de esta parte, notaron los á la sazón pre- Teniente del regimiento 57 de línea, allí acuertalado, señor
Ruiz, quien me contó este hecho. Repetí la visita en 30 de
sentes que los operarios encargados de mayo de 190-1, y entonces me acompañó y guió el Teniente
la operación las sacaban enteras, y así se Coronel de Ingenieros Jefe de la plaza Sr. Sánchez de la
Campa.
las llevaban, evidente prueba del valor (2) España Sagrada. Tomo XLIV, págs. 226, 227 y 228.
DOMINICOS W

otra que ésta, ya que la que voy á men- dos por los santos dominicos que cobijan.
tar en cuarto lugar, también suntuosa, Proceden de siglos modernos.
saben todos de cierto que estaba dedicada Del mayor del convento nos escribe
á la Virgen del Rosario. Villanueva que lo vio en los comienzos
Cerrada actualmente por un tabique la de mi siglo xix. «El retablo actual es de
tercera capilla, no la vi, y así no la des- lo más horrendo y monstruoso que ha
-cribo. podido construir el gusto churrigueres-
La cuarta capilla forma una como igle- co: en fin, obra de los principios del siglo
sia menor. Su longitud se extiende á pasado. Del antiguo quedan algunos cua-
17'15 metros, y la anchura de su nave á dros respetables, que son la prueba de la
5'85. Tiene crucero. Como la segunda, chabacanería de aquel gusto que prefirió
pertenece al estilo neo-pagano, pero ca- tallas y estatuas t?.n indecentes á tablas
rece de las prolijas esculturas que ador- regulares» (1). He visto el ara de este re-
nan á aquélla. Sin embargo, acompañan tablo, la que ciertamente no pecaba de
á sus muros antas toscanas, que sostienen falta de dimensiones, pues mide 3'20 me-
la cornisa y los cuatro arcos torales, so- tros de longitud por 1'65 de anchura, todo,
bre los cuales en el cruce del crucero se como es natural, de una pieza de piedra.
levanta la cúpula, provista de arcos en Luce guarniciones barrocas.
sentido de radios. No le falta camarín Las capillas del lado de la Epístola,
con desahogada escalera de piedra que muy cortas en profundidad y desprovis-
conduce á él. Cuando en 1893 y 1904 visi- tas hoy de sus retablos, no merecen men-
té este convento, á la sazón convertido ción especial.
en cuartel, las dos grandes capillas se- Todas las capillas en tiempo de los
gunda y cuarta estaban utilizadas para frailes estaban cuidadosamente cerradas
almacén y guardarropa del batallón, y por correspondientes verjas (2).
se hallaban limpiamente encaladas y bien En tiempo de los frailes adornaba la
tratadas. parte alta del muro del presbiterio del
El templo, como consecuencia de su lado del Evangelio un gran lienzo al óleo
actual empleo, no conserva ningún reta- de unos cinco metros en cuadro, con su
blo. El del Rosario, ó sea el que estaba marco, representando el combate naval
en la cuarta capilla acabada de mentar, de L e p a n t e Cuando en días no lejanos,
se halla como mayor en la iglesia del después de la exclaustración, se quitó de
Mercadal. Su orden arquitectónico es el su lugar, habiendo los albañiles y peones
greco-romano, pues además de la mesa, notado que poniéndolo en agua perdía la
g r a d a s y sagrario de la exposición de capa de pintura, se la quitaron toda, y
orden compuesto, consta de un gran ni- en dos días quedó destinado á los usos
cho en el piso alto, un par de columnas domésticos propios del lienzo (3). Pero
del mismo género compuesto á cada lado, dejemos para su lugar estas proezas de
por sobre de las cuales corre una ancha la Revolución, y sigamos en la descrip-
cornisa con dentillones. Termina en alto ción del monumento.
por medio de un frontón triangular muy El pavimento del templo estaba forma-
rebajado, sobre de cuyo centro se asienta do de innumerables sepulturas, que ate-
la Santísima Trinidad en medio de un soraban innumerables cadáveres y aún
sol ó radios. La planta del retablo des- hoy guardan los necesarios para llenar
cribe una curva cóncava en su parte de-
lantera. Todo está pulcramente barnizado
y dorado. (1) Obra citada. Tomo XIV, pág. 163.
(2) P P . Mariano Rais y Luis Navarro. Historia de la
En la misma iglesia del Mercadal se provincia de Aragón, Orden de predicadores. Zaragoza
1819, pág. 99.
conservan dos otros retablos de Santo (3) Me lo explicaron dos testigos oculares, á saber el
Domingo, donde son fácilmente conoci- carpintero D. Narciso Bonet y un su compañero.
70 CAPITULO OCHAVO

muchos carros. Habían ido absorbiendo No parecen trabajados en piedra, sino


parte de las venerandas generaciones de modelados y vaciados en barro. En el
seis siglos. Una de las sepulturas forma- lado occidental faltan seis arcos con sus
ba un grandioso salón, cuyo techo per- columnitas, quedando señales de que hubo
mitía bajar allí en procesión con cruz allí una glorieta del mismo gusto como
alta, y á cuyo derredor corría un estante para poner la fuente solieron tener én
seguido para la colocación en él de los aquel tiempo los claustros grandes. Todo
ataúdes. Ha sido terraplenada. en este claustro está construido de puli-
Hoy, y hace años, dividido horizontal- dos sillares, desde el antepecho de las
mente el templo por un techo de madera galerías del piso bajo, en el que se apo-
á nivel del coro, forma dos grandes cua- yan las columnitas, hasta el arranque de
dras dormitorio de la tropa, teniendo el los arcos del piso alto. Las c a l e r í a s , en
excusado en el fondo del ábside en el lu- lugar de bóvedas, tienen bigas. El patio
gar del retablo mayor. La vista de estas se halla pulidamente embaldosado en
cuadras causan al visitante marcado sen- cuatro declives. Por lo demás no dudo en
timiento agri-dulce: agrio por tanta pro- graduar de verdadera joya este claustro,
fanación, dulce por la incolumidad de la único en nuestra tierra, tipo de las cons-
parte arquitectónica, la que con sólo trucciones que aquí levantaba el siglo xni,
quitar el techo postizo y los pilares que ejemplar que debe cuidadosamente estu-
lo sostienen, restituiría a su prístino esta- diar quien desee conocer la historia del
do la hermosa iglesia. arte de construir.
Adherido al lado de la Epístola, ó sea Los varios osarios góticos y lápidas
al meridional del templo, ábrese el an- funerarias del mismo estilo, que, proce-
churoso y hermosísimo claustro. Suplan- dentes del cenobio, enriquecen al Museo
ta describe un cuadrado, cuyo lado total, de Antigüedades de Gerona, dan testimo-
es decir, incluidas las galerías, mide31'50 nio del modo como estaban dec orados y
metros. Las del piso inferior rodean los ennoblecidos los muros del claustro. Vi
cuatro lados. Las del superior sólo tres, allí una lápida de piedra, de 90 centíme-
pues faltan en el occidental. Difiere dia- tros por 50, en la que escrito con mayús-
metralmente el gusto de las galerías su- culas góticas se lee: *Htc jacet Fr. A.
periores del de las bajas, ya que el de Poncii de cujus bonis aqua fontis isti
aquéllas es el greco-romano y el de éstas monasterio fuit adducta et magna ps
el gótico, ó mejor de transición. Cada ecclesie reparata obiit... año Dñi MCCXC
lado de las superiores cuenta diez arcos, VI Teio nñs julii.»
de medio punto, sostenidos por delgadas Otra lápida también de piedra, de 73 X
y largas columnitas toscanas. Cada una 43 centímetros, cuyo dictado es: «Hic ja-
de las galerías bajas tiene quince arcos, cet Fr. G. saedos olim rector ecclesie
apuntados, pero en muy graciosa ojiva Sec Me Dostelrico q mita bona i vita et
trilobada y peraltada. Los arcos apoyan i morte fecit fribus pdicatoribns et spa-
sus cabos en esbeltas columnitas parea- lit q° magnam pte claust. costruxit.
das terminadas en alto en primorosísimos Obiit aní pdie vdus decembris año Dni
capiteles de gusto especial, mezcla de MCCLXXVI.» '
románico y del gótico. Del románico en Allí vi varios osarios, principalmente
cuanto guardan la forma general de los del siglo xiv, de formas airosas según
de aquél y algunas de sus historias ó figu- costumbre, de las cuales años atrás el
ras caprichosas; y del gótico en cuanto conserje del Museo que había intervenido
abundan en su decoración los vegetales, como operario en la habilitación del con-
naturales unos, caprichosos otros, pero vento para cuartel, me dijo procedían
todos trabajados con la exquisita finura del dicho cenobio. «Así la iglesia como
de los mejores tiempos del arte gótico. los claustros y capítulo están llenos de
CLAUSTRO D E LOS DOMINICOS DE GERONA. — 1 9 0 4

(F»t»grafia del autor).

CLAUSTRO DE LOS DOMINICOS DE CASTELLÓN DE A M P U R I A S . — 1 8 9 9

(Fotografia del autor).


' DOMINICOS Tí

inscripciones sepulcrales,» escribió Villa- nuestra vuelta alderredor del claustro.


nueva (í). En fin este templo, claustro y En ésta, frente á la S. vese otra gran
dependencias con su hermosura y gran- puerta, la del refectorio, en el friso de
deza atestiguan la existencia de inteligen- cuyo dintel se lee también en mayúsculas
cia, delicado gusto y medios, fueran pro- romanas: «Oculi omnium inte sperant,
pios, fueran de la piedad popular, en la Domine, et tu das escam illortim. Ps.
corporación que los levantó. 144.» Este refectorio es un desahogado
El lado N. del claustro viene formado salón de 32'12 metros de longitud por8'36
por el templo, es decir, el templo consti- de anchura, de estilo neo-pagano, con
tuye el ala de edificio del lado N. del bóvedas divididas por arcos transversa-
claustro. les en cinco compartimientos, dispuestos
En la galería oriental, frente de la N., por arista cruzada. Esta pieza, junto con-
ábrese una hermosa puerta ojival, que la escalera de entrada al claustro, ocupa
daba acceso á la sacristía, pieza grande todo el lado occidental de él.
y de elevada techumbre que venía exten- Al S. de este refectorio y con entrada
dida en el lado E. del mismo claustro. En por él, hallábase un segundo refectorio,
este mismo lado ábrese la puerta del no- cuya longitud se extendía como á la mi-
viciado, el que se extendía por aquel lado tad del primero. Hoy forma la entrada
del edificio, teniendo un corredor de cel- principal de la escalera que conduce á
das y una capillita ú oratorio. las habitaciones y oficinas de la Coman-
En la galería meridional del claustro, dancia General de la provincia.
junto al ángulo E., hállase la puerta del Siguiendo la planta del edificio de N. á
aula capitular, puerta que por su mucha S., he dicho que ante todo se halla el
anchura y corta altura presenta feo as- templo. En segundo lugar el claustro
pecto, pero viene adornada en cada lado mayor descrito ya, rodeado de las varias
por una muy hermosa ventana, cuyo vano dependencias expresadas y de otras cuya
está partido por una esbeltísima colum- reseña por prolija omito. En tercer lugar,
nita románica, y terminada en lo alto siempre caminando á S., se halla otro
por dos arquitos de medio punto, es decir, claustro que fué derruido en la guerra
ventana ajimezada con arcos redondos. del francés. Finalmente se halla en cuarto
El aula constituye una buena capilla góti- lugar parte de la huerta.
ca, sin crucero, con ábside semipoligonal El segundo claustro describe una planta
de tres lados, bóvedas divididas en com- cuadrada, ya que de N. á S. mide en su
partimientos ojivales, con aristones seve- lado total 24'80 metros, y en el de E. á O.
ros como los del templo mayor, con cla- 23'96. Actualmente se conserva de este
ves. Mide 17'55 metros por 6'40. claustro sólo el antepecho que del patio
En el extremo opuesto de la misma ga- separaba las galerías, y la cisterna con
lería meridional del claustro, frente de su brocal, que es de piedra, de gusto ba-
la O., abríase otra gran puerta, en cuyo rroco. Se me ha dicho que unas colum-
dintel se lee en mayúsculas romanas: nitas pareadas románicas, muy delgadas
<In silentio et spe erit fortitudo ves- y graciosas, que hoy forman la glorieta
tra. Isaiae. 30», la que daba á la espa- del jardín de la Comandancia General,
ciosa escalera principal del convento, proceden de este claustro, y á la verdad
ahora escalera de la Comandancia Ge- lo creo, fundando mi creencia, no tan
neral. sólo en el dicho indicado, sino también en
Pasemos á la galería occidental, en la diferencia que las separa de las del
claustro mayor. Las del menor saben á
época anterior á éstas, bien que próxima,
(i; Obra citada. Tomo XIV, pág. 164.—Respecto del y están dibujadas, aunque con gracia y
claustro también lo atestigua el continuador de Flórez.
Tomo X L V , pág. 1%.
esbeltez, con mayor sencillez que las prU
72 CAPÍTULO OCTAVO

meras. Los arcos por ellas sostenidos Universidad, y por Oriente con la mura-
describen el medio punto. Así este claus- lla. A su lado E. tenía huertecitos que
tro sería románico, pero de las últimas llegaban también á la muralla. Del lado
etapas de este estilo. Los capiteles no vie- meridional del convento el terreno era
nen adornados de historias, sino de gran- angosto; pero en el occidental se exten-
des hojas en penacho. Formada ya por día y se extiende g r a n trecho á lo largo
mí esta suposición, la vino á quebrantar de la tortuosa calle del Portal nou. Y
el dicho de un autor alemán que después aún hay más, pues por un puente que
del 1835 ha visitado esta casa, quien es- cruza sobre esta calle el convento, al de-
cribe que «el segundo claustro es del cir de un anciano, alargaba su propiedad
siglo xiv, y está en gran parte destruí- á un edificio de la cara occidental de ella,
do» (1). Atendiendo á la longitud del an- ó sea de la mentada calle.
tepecho hoy subsistente y á la anchura En el cachito de huerta, ó terreno, del
de los arcos, es lícito opinar que éstos se S. de lo edificado, entre éste y la muralla
contarían en unos 14 en los largos y de de Gerona, conservábase en 1846, ahora
12 á 13 en los cortos. Aceptando el dicho no, la capillita que fué cueva de San Dal-
del alemán, hay que creer que las indica- macio.
das columnitas de la glorieta del jardín Tenía además el convento para el abas-
actual proceden de la que habría en el tecimiento de aguas un gran acueducto,
claustro primero. en algunos de cuyos trechos podía pasar
El cuerpo de edificio del lado meridio- un hombre de pie sin encorvarse. Con-
nal de este claustro, ó sea el ala S. de ducía sus aguas á la mentada cisterna
este claustro, ala que le separa de la del claustro menor. La lápida arriba co-
huerta, está formada por un inmenso piada de F r . A. Pons nos certificó de
salón rectangular que mide 24'24 metros quién fué el que condujo el agua de fuen-
de longitud ó sea de E. á O., por 10'03de te al convento; y por lo mismo del autor
latitud, ó sea de N. á S. Su techo, de teja- de esta obra. Sus restos, ahora profana-
do á dos vertientes planas y muy eleva- dos, descansaban tras de la dicha lápida
do, está sostenido por cuatro grandes en un nicho del muro del claustro mayor.
arcos ojivales, que le dividen en cinco Dejemos ya la prolija descripción de la
compartimientos iguales. Este techo está parte material de este edificio, el que
dispuesto al modo del de Santa Águeda, tanto por su extensión, cuanto por su
de Barcelona. En cada compartimiento suntuosidad y hermosura, merecía dete-
hay una ventana en el muro, pequeña, y nerse en él. No es un convento: es un
con arco de medio punto. Hay quien cree pueblo, pero un pueblo monumental.
que esta inmensa pieza un día lejano fué «La biblioteca abunda poco en obras
otra capilla (2). modernas, escribía Villanueva al visitar
Un segundo cacho de huerta poseía al la de esta casa, mas esta taita está bien
Occidente de su claustro mayor, hoy con- recompensada con los muchos libros an-
vertida en jardín de la Comandancia. tiguos y ediciones r a r a s que no se adquie-
El convento estaba rodeado por todos ren sino á peso de oro. Entre ellos ha} r
lados de huertas, ó tierra no edificada algunos que fueron propios del historia-
suya. Así á su N., ó sea del lado del Evan- dor y archivero real de Barcelona Pedro
gelio del templo y aun tras su ábside, se Miguel Carbonell, el cual mostró su gusto
extiende un como campo, que linda por en la elección de buenos libros y en la
Septentrión con el terreno de la antigua curiosidad y limpieza de sus notas, mu-
cho mejor que en las producciones que
(1) Schulcz Ferencz. Monuments d'Architectnrc inè- nos dejó de su ingenio. No sé por qué
dits. Premier fasciculc. Gerona.—París, pág. 22. camino pararon acá estas alhajas. Diré
(2) Citado plano del ingeniero D. Fernando Camino,
de 1846. de algunas.»
SANTO DOMINGO DE GERONA
DOMINICOS 73

«I. Existe, pues, en esta biblioteca, una dicadores» (2). Interesantes noticias y do-
colección de opúsculos de re rustica de cumentos debía de contener este archivo,
Catón, Varrón, Columella yPalladio, im- perteneciendo como pertenecía á una ca-
presa en Reggio, año 1482...» sa seis veces secular, y poblada de tan
r «II. Los comentarios de las Noches leídos frailes.
Átticas de Aulo Gellio, impressi, dice al A la biblioteca dedica el continuador
fin, Venetüs... MCCCCLXXVII... Carbo- de Flórez las siguientes palabras: «La bi-
nell nota que compró este libro de las blioteca de este religiosísimo convento
galeras venecianas en 1478.» manifiesta que había tenido en todos
«III. Los 37 libros de la Historia na- tiempos sabios distinguidos que la fueron
tural de Plinio,» 1480. enriqueciendo con las mejores obras...
«IV. Las poesías de Cátulo, Tibulo, Se hallaban en ella muchos manuscritos
Propercio y Papino Stacio...» 1472. y códices antiguos, y no se descuidaron
«V. Las Comedias de Plauto.» Venè- aquellos religiosos en recoger los prime-
cia. 1472. «Carbonell dice que las compró ros ensayos del arte divino de la pren-
de un librero veneciano, año 1486.» sa» (3).
«VI. Historia eclesiástica Eusebii Por la relación que un historiador de
Pamphili». Mantua, 1479. la Orden teje de los sufrimientos del
«VIL Las vidas de los XII Césares de tiempo del famoso sitio de 1809, sabemos
C. Suetonio Tranquillo...» Milán, 1494. que los dominicos entonces hechos pri-
«VIII. El Tito Livio impreso en Ve- sioneros eran diez y ocho; de donde de-
necia...» 1495. duzco que la comunidad comúnmente se
Y otros libros y ediciones incunables, compondría en tiempos normales de unos
que omito en gracia á la brevedad, y que veinte á treinta religiosos.
el continuador de Flórez y Villanueva Igualmente la misma relación nos cer-
reseñan. Quien añade después de dicha tifica de que el convento poseía dos here-
lista: «A este tenor hay algunas otras dades, llamadas Torre del Pla y Mas
ediciones cuyo mérito conocen bien los Bertrán; pero con otras que no nombra,
literatos» (1). Las antiquísimas fechas pues escribe «hízose (terminada la gue-
apuntadas dicen que se trata de los lla- rra) otro cálculo (de los perjuicios cau-
mados incunables, ó sea del tiempo de la sados) sobre las haciendas del convento,
cuna de la imprenta, y por lo mismo de y en solas dos heredades, llamadas una
libros de valor arqueológico muy gran- déla Torre del Pla, y otra del Mas Ber-
de; y que todo el conjunto muy numeroso trán, declaran los peritos » (4). La
de ellos constituía un inapreciable tesoro. primera de estas fincas estaba situada á
«En el archivo del mismo convento hay la vista de la ciudad en el término de Pa-
algunos Tratados militares... En el mis- lau Sacosta; y la segunda también cer-
mo archivo se conserv r an las obras ma- cana á Gerona en el de Vilablareix (5).
nuscritas originales del famoso hijo de Ya llevo indicado el destino actual del
esta casa F r . Nicolás Eymerich, Inquisi- templo y convento. Aquél, dividido á mi-
dor de toda la corona de Aragón en la tad de su altura por un techo, es dormi-
última mitad del siglo xiv, el cual murió torio de la tropa. Este también cuartel, y
en 1399, y tiene su entierro en esta igle- además comandancia general del ejército
sia. Dichas obras son conocidas, aunque de aquella provincia. Ha sufrido, pues, el
por la mayor parte no se imprimieron,
por la cabal razón que dio de ellas la Bi- (2) Villanueva. Obra citada. Tomo XIV, pág. 170.
blioteca de escritores de la orden de Pre- (3) España Sagrada. Tomo XLV, pág. 1%.
(4) P . Mariano Rais y P . Luis Navarro. Obra citada,
pág. 99.
(1) Villanueva. Obra citada. Tomo XIV, págs., de 164 (5) P. Mariano Rais y P. Luis Navarro. Obra citada,
á 168. p á g s . 101 y 102. -
74 CAPÍTULO OCÏAVO

convento la modificación de algunas de cabo; en el cruce con el crucero, cúpula


sus piezas. ó media naranja, apoyada sobre cuatro
verdaderas pechinas con sus estrías;
antas que adheridas á los machones
ARTÍCULO SÉPTIMO de la nave suben á apoyar la airosa cor-
nisa que corre por sobre del triforium;
bóvedas por arista cruzada en las capi-
SANTO DOMINGO, DE CASTELLÓN DE llas, y, finalmente, todo está encalado.
AMPURIAS Mide este templo 46 pasos regulares, ó sea
unos 30 metros de longitud, 13 pasos de
En la abiertísima llanura del Ampur- latitud en la nave, más 6 de profundidad
dán, entre Figueras y el mar, á orillas de las capillas de cada lado. Tras del áb-
del Muga, asiéntase la hoy pobre villa de side cae bajo una antigua torre la muy
Castellón de Ampurias, en la Edad Media grande sacristía, de bóveda ojival, la que
capital de su condado. En el solar que presenta las particularidades de ser baja
entonces ocupaba el señorial castillo, y y de ladrillo.
aun sobre grandiosos restos de sus mu- Convertida hoy esta iglesia en gran
rallas , levantóse en siglos de Renaci- cuadra de caballería de ejército, si afor-
miento el convento de Santo Domingo, tunadamente conserva ilesa su parte ar-
ahora aún, por suerte, en pie. Hállase al quitectónica, carece de todo retablo y
Poniente de la villa con el templo á N. y adorno de otra clase; y así nada respecto
el convento al S., dando la fachada de de sus retablos y utensilios me dijo la vi-
aquél á una plazuela cuadrada. Forman sita que en 11 de septiembre de 1899 le
este frontis pulidos sillares de piedra, á hice. Atesoraba antes de perder su natu-
los que los muchos años dieron obscuro ral destino el entierro de dos de los Con-
y adusto aspecto, pues data de 1767 según des del lugar, los cuales fueron trasla-
inscripción esculpida en él. El gusto ba- dados á la parroquial (1). Pasó asimismo
rroco dibujó la gran puerta de su centro, del convento á ella, donde es objeto de
á la que adornan á cada lado sendas ba- veneración, un Crucifijo «de tamaño na-
ses, antas estriadas, y capiteles. Sobre tural, de grandísimo mérito, de rostro
éstos apoya el gran dintel, base del fron- devotísimo, y del que se dice que habló á
tón triangular, que con una capillita en Santo Domingo» (2).
lugar de su ángulo superior, termina el En el brazo S. del crucero se abre la
decorado de la puerta. El antiguamente puerta que le pone en comunicación con
usado rosetón circular de las fachadas de el claustro, notable éste por la esbelta
los templos ojivales se convirtió aquí en altura de sus arcos y la grandiosidad
cuadrado, guarnecido en sus cuatro lados de su área, pues de N. á S. mide 30'40
de anchas molduras. Acaba en alto el metros y de E. á O. 35'80, comprendidas
frontis por el ángulo central descrito por las galerías, cuya anchura alcanza 4'20.
las dos vertientes. Cruzado el umbral, Las forman en cada lado 6 arcos gracio-
aparece la iglesia; de estilo greco-roma- sísimos de medio punto ó redondos, pe-
no, grande, esbelta y adornada. Tiene raltados, apoyados en estrechos pilares
crucero; tres desahogadas capillas por de sección cuadrada con unos como capi-
lado; arcos de medio punto de entrada á teles toscanos y con bases de varias mol-
ellas; ancho paso que une unas á otras; duras á guisa de toros y escocias, todo
triforium ó sea tribunas; coro alto; tanto de labrada piedra. Cubren á las elevadas
en las tribunas cuanto en el coro, baran-
dillas de albañilería caladas; en la nave, (1) C a r t a que en 9 de enero de 1894 me hizo el obsequio
bóveda redonda dividida en comparti- de escribirme el Regente de aquella parroquia D. Juan
mientos, dotados de un luneto en cada Rodó, pbro.
I (2) C a r t a citada del Sr. Redó.
DOMINICOS 75

galerías bóvedas de ladrillo, por arista la tercera en Pau (1); con cuyos no cor-
cruzada. Empero en este claustro sólo tos réditos, además de sostener la iglesia,
hay edificadas las galerías de tres de sus la casa y sus habitantes, distribuía abun-
lados, faltando la del oriental. El patio dante limosna; lo que, junto con el buen
carece hasta de adoquinado, teniendo comportamiento de éstos, les ganaba
ahora plantadas filas de plátanos, los que, acendrado afecto de los habitantes de la
á pesar de estar en su niñez, me impidie- villa (2).
ron fotografiar bien el exterior del claus- La comunidad constaba de unos ocho
tro, porque no pudiendo en el Ampurdán frailes (3).
faltar la f ur iosa Tramontana, movían se de Al fenecer del siglo xix el convento es
uno á otro lado con vertiginoso A^aivén hospital servido por hermanas-y escuelas
cuando visité el edificio. municipales, al paso que el templo sirve
Éste sólo cuenta con un piso alto, á usos militares.
pero desahogado. Su ala occidental, úni-
ca que en su interior presenta distribu-
ción de convento, está atravesada á lo ARTÍCULO OCTAVO
largo de su eje por un hermoso corredor
abovedado, de 55 pasos de largo por 4 de SANTO DOMINGO, DE PERALADA
anchura, dotado de grandes piezas en el
lado del claustro y celdas en el exterior. Si al salir de Castellón de Ampurias,
Estas llaman la atención por su sala con en lugar de pasar el hermoso y moderní-
balcón abovedada, su alcoba con arco simo puente del Muga, seguimos su álveo
trilobado de ingreso, y su recámara con agua arriba, y caminamos ocho kilóme-
ventana. El corredor, que á continuarse tros, daremos con la histórica villa de
la edificación interior del piso, debía en- Peralada y su muy renombrado castillo,
filar el ala S., está sólo iniciado, y en el situados en la misma llanura del Ampur-
cruce con el de la O. luce dos capiteles dán al NE. de Figueras. Los agustinianos
de los comienzos del arte ojival, consis- tuvieron allí, en apartados siglos, un con-
tentes en una como cornisita con gran- ventito, el que, dejado por estos religio-
des hojas de yedra sobrepuestas. Tras sos, fué convertido por Don Francisco de
del templo, en una prolongación del con- Dalmáu, Vizconde de Rocabertí, señor de
vento, elévase éste hasta segundo piso la tierra, en 1578, en uno de dominicos (4).
alto en el que se ve el corredor y celdas El edificio carece de toda importancia
del noviciado. Todas las piezas de esta arquitectónica, hecha e x c e p c i ó n del
casa están cobijadas por bóvedas de aris- claustro,pues no pasa de las dimensiones
ta cruzada; lo que, unido á la grandio- y carácter de una casa particular. Su
sidad, le da aspecto de riqueza. Los poco templo, más que de tal, debe calificarse
ha mentados capiteles ojivales, la torre de desahogada capilla, que ni aun puerta
y su sacristía gótica, y los muros exte- tiene en el exterior. Ábrese ésta en la en-
riores de los lados meridional y occiden- trada del edificio, y aquélla es una sen-
tal, todos de robustos sillares de piedra, cilla pieza del piso bajo de la casa, uno
certifican de la verdad arriba escrita, de
que el convento vino á suceder en el lo-
cal al palacio-castillo de los antiguos y (1) D. Pedro N a v a r r a y Ribas. Castellón, 12 de septiem-
bre de 1899.
poderosos condes de Ampurias. (2) Relación de la octogenaria de la villa D. a Benita
Estos, junto con el común déla villa, lo Paronella y Cornelia, hecha en Castellón á 12 de septiem-
bre de 1899.
fundaron en 1317. (3) L a misma relación de la Sra. Paronella y la citada
Este convento, al decir de un anciano carta del Sr. Rodó.
(1) D. José Pella y F o r g a s . Historia del Ampurdán.
de la villa, poseía tres heredades, una de Barcelona, 1SS3, pág. 720. D. Francisco Muns. Los már-
ellas en Castellón, otra en Vilacoloma y tires del siglo XIX. Barcelona. 18SS, pág. 56.
76 CAPÍTULO OCTAVO

como almacén, dotado empero de pulida


aunque baja bóveda del Renacimiento, ARTÍCULO NOVENO
dividida por arcos transversales en cua-
tro compartimientos adornados de un SANTO DOMINGO, DE PUIGCERDÀ
lunetito en cada extremo. Mide 21 pasos
de largo, y tras del escenario (que en es- Entre elevados brazos de la cordillera
tos tiempos, abolido allí el culto de Dios, pirenaica, hállase tendida la verde y loza-
se ha dado al mundo en un teatro) se ven na llanura de Cerdaña, desde cuyo lado
en la testera tres nichos, que cobijaron septentrional la preside una pintoresca
sendos retablos (1). villa, sentada, como en majestuoso tro-
El claustro «de reducidas proporciones, no, sobre la cumbre de una colina, de
bajo 3r sombrío, impone al que por vez la que recibe el nombre de Puig-cerdá.
primera lo visita... Pequeñas columnas Desde todos los rincones del valle se des-
pareadas, en número de 52, sostienen los cubre la eminente población, descollando
arcos sumamente rebajados... Los capi- antes de 1863 por sobre los techos de su
teles, aunque bárbaramente trabajados al caserío la no pequeña mole del templo de
estilo bizantino, son todos de diferentes Santo Domingo y la característica torre
asuntos» (2). Este claustro, excluidas sus de su campanario con la aguda flecha de
galerías, mide en una dirección 14 pasos su cubierta. Cae este convento al NE. de
y en la otra 15. Cuenta seis arcos en cada la villa, con el templo al S; y el convento
galería larga y cinco en las cortas. Sigue al N. del edificio. Precedía á aquél una
en todo el gusto imperante en los si- buena plaza cuadrada, espacio que real-
glos x y xi; y así consta del antepecho; zaba el buen aspecto de la rica portada
sobre de él los pares de columnitas con de blanco mármol de la iglesia. Formaba
sus bases áticas y sus acostumbrados ca- aquélla un cuerpo adelantado, en el que
piteles, historiados unos, lisos otros; los á uno y otro lado de la anchísima puerta
abacos; y finalmente los arquitos, pero extendíase un pedestal ornado de moldu-
aquí muy rebajados, circunstancia que ras ojivales. Sobre él apoyaban en las
engendra en mí la duda de si en moder- jambas, ó derrame de la puerta, tres án-
nos tiempos sufrieron éstos alguna reedi- gulos entrantes y tres salientes, con sen-
ficación y cambio. das y delgadas columnitas en los prime-
Hacia Poniente poseía este convento ros, provistas de sus bases y sus capiteles
algunas tierras de poca importancia, asi adornados de figuras y raros animales.
como la contigua huerta, pero de la que El larguísimo dintel, en su frente ó friso,
ignoro en qué lado caía. estaba incrustado de caprichosas y anchí-
La exigua comunidad se componía or- simas hojas, mientras el grandioso arco
dinariamente de dos sacerdotes y un lego, ojival que terminaba en alto la puerta
dedicados aquéllos á los ministerios sa- venía formado por la prolongación de los
grados y asistencia de moribundos. indicados ángulos entrantes y salientes
Cuando en 1894 visité la casa estaba de las jambas y de las columnitas conver-
ocupada en parte por el hospital, y en la tidas allí en toros. Por la parte exterior
otra por la Guardia civil. del arco corría un guardapolvo guarne-
cido de hojas en forma de dientes de
sierra, y en la cúspide la acostumbrada
macolla ó col. A cada lado de la puerta
en la pared exterior del cuerpo saliente,
también de mármol, veíanse, apoyados
(1) Visité esta casa en 6 de agosto de 1894.
en el mentado pedestal, dos nichos ador-
(2) L' Excusionista. Butlletí mensual de la Associació nados en lo alto de sus frontones góticos,
Catalanista d'E.xcmsións científicas. Barcelona, 1881. y á la altura de los capiteles de las co-
Vol. I, págs. 703 y 704.
^§ÈÈÜ

CLAUSTRO D E LOS DOMINICOS DE P E R A L A D A

(Fotografia de D. José Pitchot).

PUERTA D E L TEMPLO DE LOS DOMINICOS D E PUIGCERDÀ

(Fotografia de un desconocido).
DOMINICOS 77

lumnitas de la puerta; sobre de estos pictórica de la Edad Media, que abraza


nichos, sendas ménsulas, y más arriba sus casi todo su ámbito y que debió de ser
afiligranados doseletes para la colocación muy notable»,(1). Algunos otros lienzos
de imágenes. Terminaba en alto el cuer- al óleo, de regular mérito, poseía esta
po saliente de la portada por una corni- casa, bien que ignoro el lugar que en el
sa. Con tanta riqueza chocaba el resto de convento ocupaban (2).
la fachada, de mampostería sin revocar, También, atesoraba insignes reliquias,
como obra en construcción. tales como la toalla en que estuvo envuel-
Pero no chocaba el esbelto y magnifico ta la cabeza del Bautista después de cor-
campanario de piedra, gótico, adornado tada, un muslo de Santa Úrsula, un dedo
de molduras, de gárgolas en forma de de Santo Tomás de Aquino, una reliquia
grandes pájaros, ó aguilotes y de aguda del Patriarca de Guzmán y otras (3).
flecha, que daba carácter al edificio y aun Adherido al lado septentrional del tem-
á la villa que vivía agrupada á su derre- plo, ó sea del Evangelio, hallábase el
dor. Hoy ha desaparecido. La voz públi- convento, que debía con sus cuatro alas
ca unánime de la villa cuenta que, con formar el claustro; pero aún no lo forma-
motivo de construir aceras en algunas ba por las razones que explican los Pa-
calles, á instigación de un individuo cono- dres Rais y Navarro en las siguientes
cido en Barcelona çov Joanet de la alcal- líneas: «Esta Comunidad había vendido
día, fué derribado cuando la revolución parte de sus fincas para levantar casi de
de 1868. nuevo su iglesia y convento, una y otro
La única nave del templo mide 59 pa- arruinado en la guerra de 1793. Tenía ya
sos de longitud por 15 de anchura. Éste gastados en el año 1808, 14,400 libras
carece de crucero; tiene cuatro grandes (7680 duros) y aún le faltaba mucho
capillas por lado y coro alto, unidas hasta 27,100(14,453 duros 1 peseta y 64
aquéllas por un pasillo de comunicación. céntimos) á que ascendía el daño que ha-
El espacioso templo fué levantado por bía sufrido. La iglesia estaba ya del todo
los mejores tiempos ojivales, y así lucía reparada.» He aquí la reparación á que
las más airosas líneas góticas, formando aludí arriba: «Del convento no había po-
una grandiosa y elevada nave con capi- dido reponerse más que uno de los cuatro
llas laterales, todo de pulidos sillares. lienzos, que era el de Poniente: los demás
Mas la restauración de fines del siglo xvni estaban aún descubiertos» (4). Esta ala
y principios del xix, de la que muy luego sigue la línea de la fachada del templo, y
trataré, se complació, no en restituir las tiene un piso bajo y dos altos. En la cara
cosas al primitivo estado, sino en cons- que mira al interior del convento, ó sea
truir dentro de la iglesia gótica otra de á Oriente, y que debía formar el claustro,
estilo greco-romano con las acostumbra- posee galería sólo en el piso bajo, com-
das cornisas, bóvedas con arcos trans- puesta de pilares de sección cuadrada y
versales y demás adornos. arcosde medio punto ó redondos, midiendo
Destinada la iglesia hace muchos años toda esta galería 35 pasos de longitud por 5
á usos profanos, no conserva sus reta- de anchura. Esta misma ala es la cara, que
blos, y sólo sé que uno de ellos, existente mira al exterior, ó sea á Poniente, posee
en el templo de San Martín de Arabo, galería (destinada sin duda á lugar para
sufragáneo de Saneixa, está formado de tomar el sol) en los tres pisos, formada.
pinturas, algunas de ellas, al decir de
quien las visitó, de gran valor artístico. (1) L'Excursionista. Butlletí mensual de la Associa-
Además, hablando de este templo escri- ció Catalanista d'Excursions científicas. Vol. III, pági-
bía en 1889 un excursionista: «En una de na 300, ó sea número de 30 de noviembre de 1889.
(2) Noticias recogidas de los ancianos de la villa.
cuyas capillas se entrevén todavía los (3) Noticias recogidas de los ancianos de la villa.
grandiosos perfiles de una composición (4) Historia de la provincia de Aragón, pág. 7.V
78 CAPÍTULO OCTAVO

en cada uno de doce arcos. Daba en tiem- Clavetería, de 5 jornales. — 15.° El prado
po de los frailes esta cara á un pequeño llamado :J/as de Bordas, de 3 jornales» (3).
barrio de casitas bajas,.que por lo mismo Como convento de dominicos no podía
no impedían.el sol. Hoy, derribadas estas esta casa carecer de biblioteca, la que he
casitas, forma su solar una plaza, prolon- oído calificar de buena (4).
gación septentrional de la que cae frente La Comunidad, cuando la última ex-
del templo. La huerta del convento esta- claustración, se componía de unos 13
ba cabe él en la parte trasera (1). padres y 3 legos, dedicados á lo que los
Los bienes de esta Comunidad consis- .frailes de los demás conventos de la Or-
tían en 1835 en cuatro fincas, sitas una den. Los servicios que con esto prestaban
en Saneja, otra en Creixans, otra en Lli- al vecindario y las abundantes limosnas
bia y la cuarta en Valtarga, términos les captaban las voluntades del pueblo.
todos de la Cerdaña (2). El amigo mío, Además de las limosnas semanales se
que en Puigcerdà tomó desboca de los repartían otras extraordinarias. Cuando
ancianos la anterior noticia de las propie- en invierno, siempre crudísimo en Cerda-
dades del convento, dejóla en ésta su ña, alguna familia de proletarios sentía
marcada vaguedad. A ella un documento necesidad, el padre acudía al convento,
oficial, que tengo á la vista, añade datos al lego Fr. Sala, en demanda de trigo. El
más concretos. Ignoro, empero, si las lego, con la franca sencillez de los frailes
piezas de tierra en este documento escri- de aquel tiempo, le preguntaba que cuán-
tas forman ó no parte de algunas de las tos individuos contaba la casa, y á la
fincas arriba dichas. He aquí esta reseña medida del número de éstos agrandaba
oficial: «La heredad sita en el término del el saco de grano, diciendo al campesino
pueblo de Rigolisas, que perteneció al su- que en tiempo de verano, cuando pudie-
primido convento de Dominicos de Puig- se, se lo devolviera en varias y cortas en-
cerdà, ha sido dividida por la comisión tregas (5). ¡Qué contraste con las casas
agricultora de la misma en las suertes ó de empeño modernas, á las que en último
porciones siguientes: — 1.° El campo lla- término para hoy el padre de familia
mado de la Corva, de 9 jornales. — 2.° apurado!
Otro campo del mismo nombre de 2 jor- La fundación de este convento databa
nales.—3.° El campo llamado de la Bosca, de 1288 (6).
de 10 jornales.—4. 9 El campo llamado Actualmente el templo está en poder
Pla de Embeix, de 3 jornales. —5.° Otro del Ayuntamiento, el cual tiene las cár-
campo del mismo nombre de 2 jornales. celes en las capillas laterales y alquila
— 6.° Otro campo también del mismo la nave para cochera. El convento es
nombre de 7 jornales. — 7.° El campo lla- cuartel.
mado de la Clavctería, de 3 jornales.—
8.° El campo llamado de la Costa, de 9
jornales.—9.° El campo llamado de dalt
de las Costas, de 1 jornal. —10.° El cam-
po llamado el Término de Saneja, de 5
jornales. — 11.° El campo llamado del
Llano de Saneja, de 5 jornales.—12.° Otro
campo del mismo nombre, de 3 jornales.
—13.° El prado llamado de la Creu, de 5 (3) Anuncio de la subasta por el Estado, inserto en el
Diario de Barcelona del lunes, 10 de julio de 1837, pági-
jornales.—14.° El prado llamado de la na 1530.
(4) Muc'ias personas me dieron en Puigcerdà testimo-
nio de la biblioteca.
(5) Relación de un vecino de Puigcerdà, hecha á mí en
(1) Relaciones de dos hijos de la villa, hechas allí mis- Puigcerdà á 6 de septiembre de 1882.
mo cuando la visité en agosto de 188-'. (6) D. Francisco Muns. Los mártires del siglo XIX,
(2) Noticias tomadas en Puigcerdà, por un amigo mío. pág. 5o.
DOMINICOS 79

ARTICULO DÉCIMO á mis manos, califican de hermoso-(1),


constaba de una sola nave, ancho cruce-
SANTO DOMINGO, DE TARRAGONA ro y cinco capillas en cada lado unidas
por un pasillo. La despejada nave medía
Este convento fué fundado en 1253 á 38 metros de longitud total, 9'90 de an-
expensas de la ciudad y del Cabildo. chura y 3'90 la profundidad de las capi-
Ocupaba el solar donde actualmente exis- llas de cada lado. Pertenecía al gusto del
ten las casas de la Diputación provincial Renacimiento; estaba revocado y blan-
y del Ayuntamiento. Al N. del edificio queado, y carezco de ulteriores datos,
caía el templo, extendido de Oriente á pues arrasada la iglesia como está desde
Occidente á lo largo de la adjunta calle muchos años, no pude visitarla.

DOMINICOS DE TARRAGONA.
CIU ¿e U. S^Ln»

T-T«¡«n. I a. Julia i' U:i

del Rosario. La fachada de éste y la del De los retablos, utensilios y adornos,


convento, que por lo dicho ocupaba el sólo puedo escribir que los Padres Rais y
lado S. de la iglesia, constituían el occi- Navarro gradúan esta iglesia de «bien
dental de la plaza de la Fuente, hoy lla- alhajada» (2).
mada de la Constitución, y parte del me- Del claustro subsiste aún hoy (1900)
ridional, ya que algunas, aunque cortas, una ala y mitad de otra, bien que tapia-
dependencias del mismo convento esta- dos los arcos de ésta, y con una gran es-
ban asentadas sobre la exigua calle sin calera frente de aquélla. Describía un
salida, ó cacho de calle sin nombre, del cuadrado de 25'80 metros de lado total,
rincón S. de dicha plaza. Por la parte
posterior terminaba el edificio por la ca- (1) P. Mariano Rais y P . Luis Navarro. Historia de la
lle de Salinas. provincia de Aragón... cilada, pág. 124.—P. Francisco
Alvarado. El Filósofo rancio. Barcelona, 1881. Tomo VI,
El espacioso templo, al que tres escri- carta 43.
tores dominicos, cuyos escritos llegaron (2) Obra citada, pág. 124.
80 CAPÍTULO OCTAVO

ó sea inclusas las galerías, bien que en la igual distancia, y Pontils, algo más cer-
dirección de N. á S. parece le faltaban cano. «San Magín está situado... en un
algunos pocos centímetros para llegar á reducido valle, formado por las estriba-
esta medida. Constaba de galería en to- ciones de las sierras de la plana de An-
dos sus pisos, que eran uno bajo y tres cosa y del pico de Montagut. EL valle,
altos. La formaban seis arcos en cada que es sumamente escabroso, tiene pocas
ala de las tres galerías bajas y doce en tierras de cultivo, apiñados bosques de
la de las superiores, todos de medio pun- pinos y encinas al S. y al O., y en el resto
to, ó sea redondos, apoyados en anchos otros magníficos de robles, en los que se
pilares de sección rectangular, sencillí- admiran troncos gigantescos, que miden
simos, sin más capitel que una menguada tres y cuatro metros de circunferen-
cornisita, todo de ladrillo en las galerías cia» (2). Allí brota el arroyo de San Ma-
altas, revocado y pintado. Sólo la galería gín, que luego de nacido serpentea ju-
baja luce piedra en los pilares, y viene guetón por el fondo de la hondonada
cobijada por bóvedas, las cuales son por acompañado en alguna de sus riberas de
arista cruzada. Las restantes tienen bigas. un hermoso paseo de los indicados robles
La galería constituía el corredor del res- seculares. Otro igual paseo, culebreando
pectivo piso, y á su lado exterior caíanlas por la pendiente, sube desde la milagrosa
celdas. El patio del claustro, en tiempo de fuente del fondo hasta el santuario. Ter-
los frailes embaldosado, conserva aún mina, en alto, la sierra del lado N., por una
hoy en su centro el hermoso brocal del fila de peñas, cortadas verticalmente; y
pozo, formado por un antepecho de plan- algo inferior á ellas, á mitad de la cuesta
ta octogonal, de labrada piedra cenicien- que mira á S., asiéntase el renombrado
ta, é historiados montantes de hierro, santuario-convento. El país enamora y
según gusto barroco, destinados al sostén hechiza por su lozana verdura, escabro-
de la polea. Sobre el cacho de calle sin sidad y natural poesía, dignas de la re-
salida y sin nombre del rincón S. de la galada historia del Santo Magín, catalán,
actual plaza hallábase la cocina ó alguna allí anacoreta, obrador de milagros y
de sus dependencias, y entre ella y el mártir, de Tarragona.
claustro el deprofundis y un refectorio, En cambio el convento y templo nada
alargándose el otro refectorio por el lado presentan que atraiga la atención del ar-
occidental de la plaza desde allí hasta la queólogo. Precede á la iglesia, y á su lisa
portería, que estaba junto al templo en la fachada, una plaza, abierta por el lado
misma plaza (1). opuesto á aquélla, y provista de pobres
Ignoro el número de religiosos que for- edificios en los restantes. «Data el templo
maba esta comunidad. del año 1703, y consta de una bien pro-
porcionada nave con crucero» (3), «y tres
capillas por lado, siendo de bastante buen
ARTÍCULO UNDÉCIMO gusto su estilo arquitectónico» (4) greco-
romano, ó mejor toscano. Los muros os-
SAN MAGÍN, DE BRUFAGAÑA tentan antas toscanas y cornisas, y la
bóveda es de medio punto, dividida en
Aunque aledaño de la provincia de compartimientos con lunetos en los cabos
Barcelona, hállase San Magín dentro los de éstos. Mide la longitud total de la nave
límites de la de Tarragona, en montaño- 29'50 metros, 7 su anchura, y 2'80 la pro-
sa región, entre los lugares de Santa Co-
loma de Queralt, del que le separan dos (2) D. José Castellanos. Butlletí de la Associació </'
horas de andadura, Llacuna, colocada á excursions catalana. Año XIII, pág. 245.
(3) A. Aulestia y Pijoan. Memorias de la Associació
Catalanista d'excttrsións cienlificas. Vol. VII, pág. 39.
(1) Visite' este claustro en 28 de diciembre de 1893. (4) Sr. Aulestia. L u g a r citado.
DOMINICOS 81

fundidad de las capillas de cada lado (1). Maestro General de Predicadores, sin-
«En el centro del crucero se ve, unos pal- gularísimo bienhechor de este convento,
mos bajo el nivel del suelo, el sepulcro de cuya iglesia hiso á sus costas, año
San Magín,» de forma rectangular, «tapa- 1703» (2).
do por una losa con una estatua yacente. El convento, ó habitaciones, separán-
Está rodeado de una baranda de hierro dose de la costumbre general, no describe
(que como barroca sigue líneas ondulan- un claustro. Constituye un cuerpo ó ala
tes), cuyos ángulos forman un templete de edificio en el lado meridional del tem-
(baldaquino) con un altar, donde hay col- plo ó sea del Evangelio. La prolongación
gadas muchas presentallas de cera. Por de esta ala hacia la plaza que precede al
una escalera del lado del presbiterio, en templo, prolongación que forma el lado
cuyo dintel se lee sube y calla, se va al S. de la misma plaza, contenía las depen-
camarín, donde se venera la imagen del dencias destinadas á los seglares, tales
Santo anacoreta, de madera, y según tradi- como hospedería, hostal, tienda de co-
ción, construida por un antiguo ermitaño. mestibles, caballerizas, etc.
Hay también algunos cuadros modernos,» Un pintoresco camino que serpentea
de los cuales uno representa al Ecce homo entre el bosque, sube desde el convento
y otro á la Divina Pastora. «En la sacris- al pie de las escarpadas rocas que en lo
tía se ve una arca-cómoda de madera alto terminan la tierra, y mediante una
tallada», de nogal con asas de bronce escalera en su último trecho, conduce á
dorado, «con el escudo de Ja orden domi- la cueva, donde ejercía áspera penitencia
nicana, una caja de cobre presente de los el Santo. Está defendida, en su boca, por
prohombres de la cofradía de San Magín, una verja; muestra en su fondo la ima-
de los Encantes de Barcelona, en 1667, y gen arrodillada del penitente, mientras
una capa pluvial ofrenda de los devotos un ángel le trae un pan, y la culebra in-
del mismo barrio, en 1749.» fernal airada se retuerce en un rincón.
«La actual iglesia, parroquia de San Una cruz de madera, clavada sobre esta
Magín (de Rocamora), constituía antigua- cueva en la cresta de la sierra, indica el
mente una capellanía, cuyo obtentor era lugar á los habitantes de la redonda.
uno de los hijos de los Barones de La Por opuesto lado, según arriba escribí,
Llacuna, ó casa Cervelló. El año 1603 otro deliciosísimo camino, por entre muy
pasaron á formar allí convento los frailes copudos y seculares robles, que á trechos
dominicos de Santa Catalina de Barce- se esconde bajo verde bóveda, conduce,
lona, hasta el de 1835 en que sufrieron describiendo curvas, hasta el pie de la
inicua muerte los Padres... El edificio se montaña, á la fuente milagrosamente
titulaba antes Hospital de San Magín... abierta por el Santo para refrigerar la
El actual templo fué construido á expen- sed de sus verdugos. Mana dentro de una
sas del P. Fr. Tomás Ripoll... Así lo pro- pieza ó edificio abovedado, dividido por
clama un gran cuadro colgado en una de una reja en dos estancias, de las cuales
las salas de la (actual) rectoría (antes la más baja de nivel contiene los cuatro
convento), que lo representa sentado re- caños de la prodigiosa agua, y la otra,
cibiendo los planos de la nueva iglesia elevada sobre la anterior obra de tres ó
que le ofrece un fraile. La inscripción cuatro gradas, tiene un altar con la ima-
de tan interesante tela, recomendable por gen del mártir, en el acto de hacer brotar
su correcta factura, es la siguiente: El la fuente (3).
Reverendísimo P. Fr. Thomas Ripoll,
(2) D. A. Aulestia, y a citada, págs. 39 y 40.
(3) D . A. Aulestia. Obra citada, pág. 40.—D. José Cas-
tellanos. Obra citada, pág. 247.—Relación de mi querido
(1) Datos que me transmitió la bondad de mi querido amigo D. Francisco Maspons y Labros, quien visitó este
amigo é ilustre escritor D. J u a n Segura, Pbro., en carta lugar. Barcelona 1 y 5 de diciembre de 1893.—Relación de
de Santa Coloma, de 6 de septiembre de 1899. | D. Juan Segura, pbro.
TOMO II 6
82 CAPÍTULO OCTAVO

Los vasos sagrados y demás objetos de protección que aquéllos prestaban á la


plata y oro del culto abundaban en este comarca (6).
santuario hasta formar la carga de una Los bienes que poseía este convento y
caballería (1). Ni esto debe engendrar cuya noticia llegó hasta el que estas lí-
admiración, pues las dádivas van siempre neas escribe son:
al compás de la devoción al Santo, la que 1.° Las tierras adjuntas al santuario,
en aquella tierra llega á muy elevado las que aunque de poético y deleitable
punto. Refiérense allí muchas curaciones aspecto, poco y muy poco debían de re-
y milagros obrados por el Eremita y por dituar, pobladas en su casi totalidad de
medio de sus portentosas aguas. La bosques situados muy lejos de toda vía
afluencia de los pueblos es grande, espe- de comunicación (7).
cialmente en el día de la fiesta, 19 de 2° El manso Taxet, sito en el término
agosto. Un excursionista que asistió á de La Llacuna y Miralles, al que la riera
ella, en 1889, escribe: «Este año, á pesar de este último pueblo parte por mitad.
de ser día laborable, concurrieron al san- Componíase de casa con oratorio y de-
tuario más de tres mil personas» (2). pendencias agrícolas, y 92 '/a jornales de
Tampoco le faltaba al convento su bue- tierra, de los cuales 12 V2 eran de tierra
na biblioteca según testimonio de un re- campa, 4 de viña y 70 de bosque (8).
ligioso de la casa (3) y según lo pregonan 3.° Un censal de pensión anual de 215
algunos restos de ella que aún hoy (1900) libras (114 duros,3 pesetas,32 céntimos) y
quedan en la casa-convento. otro de pensión de 140 (74 duros, 3 pesetas,
En 1835 la comunidad de San Magín se 32 céntimos) (9); pero la piedad de los fie-
componía de cuatro ó cinco Padres, dos les suplía las deficiencias de estos pobres
coristas y tres legos. Empero, obra de un bienes.
mes antes del atentado de aquel aflo, los Hoy el templo es parroquia, y el con-
superiores, temerosos y con previsión de vento casa rectoral.
la terrible escena que debía desarrollar-
se en aquella soledad, enviaron los dos
coristas á Lérida, un Padre atacado de ARTÍCULO DUODÉCIMO
reuma á Barcelona, un lego al Panadés
y otro á Ciutadilla (4). NUESTRA SEÑORA DEL ROSARIO,
Los pueblos de la redonda profesaban DE TORTOSA
mucho afecto y veneración á esta comu-
nidad, de modo que para que se perpe- En la orilla misma del caudaloso Ebro,
trara el atropello de 1835 fué preciso que y dando frente á las aguas, en el punto
fueran allá foragidos de Santa Coloma llamado en Tortosa La barana, levántase
de Queralt, y una vez calmada la tem- la muy barroca fachada de esta iglesia,
pestad, y erigido en parroquia el santua- de mampostería revocada y terminada en
rio, su primer y muy querido párroco fué alto por curvas y una espadaña en el
el antiguo y santo Prior (5). Ni podía su- lado de la Epístola. No está destituida de
ceder otra cosa dado el buen ejemplo de adornos la puerta, que pertenece al estilo
estos frailes, sus copiosas limosnas, y la greco-romano. Consta de dos cuerpos; el
bajo, compuesto de cuatro gradas, la aber-
(1) Relación del P . Damián Vilar, fraile de este con-
vento, quien los tuvo una temporada en su poder después (6) Relación del cecino de la parroquia D. Ramón Sans,
del 1835. Me lo dijo en T a r r a g o n a á 11 de agosto de 1880. hecha en Vallcarca á 5 de junio de 1887, y del dicho mona-
(2) D. José Castellanos. Obra citada, pág. 246. cillo, en Barcelona á 15 de junio de 1895.
(3) P . Domingo Vilar, ya citado. (7) Es público en el lugar.
(4) Relación citada del P. Damián Vilar, que era uno (8) E s c r i t u r a de venta por el Estado ante el notario
de los dos coristas. D. Manuel Clavillart, en Barcelona á 26 de marzo de 1845.
(5) Relaciones de un vecino de la parroquia y de un (9) E s c r i t u r a s de redención al Estado ante Clavillart,
monacillo del mismo Prior. de 21 de diciembre de 1848 y 8 de marzo de 1849.
DOMINICOS 83

tura terminada en arco redondo, y una tamaño casi natural, y un dosel á cada
anta á cada lado, provista de pedestal, lado con San Francisco de Asís en el del
base, capitel jónico y una hermosa guir- Evangelio y Santo Domingo en el opues-
nalda de flores pendiente de las volutas ó to, según certifican los respectivos escu-

IGLESIA DEL ROSARIO, DE TORTOSA

caulículos de éste. Otra guirnalda igual dos sostenidos al pie de estas imágenes
adorna la sumidad del arco de la puerta. por sendos angelotes. En un plafón del
Corona á este cuerpo bajo una propor- pie de la Virgen se lee: J?osa plantata
cionada cornisa. El alto consta de una super rivos aquarmn.
capilla ó nicho central con una Virgen Cruzado el umbral, agrada el templo
del Rosario, de esculturada piedra, de por sus largas dimensiones, la elevada
84 CAPÍTULO OCTAVO

bóveda, el prolijo adorno de sus partes y espaciarse en los ratos de recreo. Poseía
.la riqueza de éste; mas apena el exagerar fincas, pero ignoro cuáles.
do barroquismo que lo dibujó. Consta de Este convento fué fundado en 1362 por
una nave, sin crucero, con cuatro gran- Bartolomé Pons (3). Primitivamente estu-
des capillas por lado, unidas por pasillo, vo situado extramuros de la ciudad, cerca
y otra á la altura del presbiterio, lado del de la puerta de San Juan, hoy ensanche,
Evangelio, más profunda que las demás, y era grandioso. Su posición le ocasionó
destinada al Santísimo. Además tiene dos derribos, uno en 1648 cuando sitió á
triforium alto, ó sea tribunas. Los ma- Tortosa el mariscal Schomberg; el se-
chones que separan unas de otras las gundo y definitivo, durante la guerra de
capillas vienen adornados de sendas an- sucesión. Trasladado al lugar actual no
tas, provistas de altos pedestales, bases y alcanzó su completa reedificación (4).
capiteles corintios. Por sobre de éstos y La Comunidad que servía al convento
del triforium circuye todo el templo la del Rosario contaba reducido número de
cornisa. La bóveda sigue la acostumbra- frailes (5). Hoy (1900) la iglesia del Ro-
da forma de compartimientos y lunetos, sario continúa por suerte abierta al culto,
bien que en el presbiterio describe un pero amenazada de muerte, porque cons-
cuarto de esfera. Las partes salientes de truido sobre el Ebro en estos últimos
estos muros y bóvedas (revocados y en- años un hermosísimo y elevado puente
calados) aparecen adornados de prolijas de hierro, apoya éste su cabo oriental á
esculturas doradas. El templo mide 45 unos cinco ó seis metros del templo, fren-
pasos regulares en su longitud total, 15 en te de su fachada y enfilándola; y así la
la anchura de la nave y 8 en la profundi- rampa ó cuesta que desde el plan terreno
dad de las capillas. subirá al puente tragará toda la iglesia y
El retablo mayor, barroco y casi todo aun otros edificios.
dorado, queda muy aplastado al fondo
del ábside, y se compone de cornisas y
columnas, unas cilindricas con enreda- ARTÍCULO DECIMOTERCERO
mientos de guirnaldas, otras salomónicas
y nichos. Los santos del piso ú orden COLEGIO DE SANTO DOMINGO Y SAN
principal son los mismos del cuerpo alto JORGE, DE TORTOSA
de la puerta. Los retablos laterales son
también barrocos, y en buena parte están Al N. de la ciudad, y al extremo de
dorados. El pulpito luce extraordinario una calle allí sin salida, hállase este con-
adorno de esculturas barrocas, de vege- vento-colegio, el cual unido al contiguo
tales y niños, y termina en alto su torna- colegio episcopal de San Jorge y San Ma-
voz por un Santo dominico (1). tías (hoy de San Luis), forma la contera
En el lado de la Epístola y separadas de la misma calle. Ésta toma de aquél el
del templo por un callejoncito, poseían nombre de Santo Domingo y termina al
los frailes unas casitas viejas, en las que frente, ó sea en el fondo oriental, con la
habitaban, esperando tiempo favorable puerta del convento á la derecha, ó sea
en que pudiesen derribarlas y edificar el al S., con la iglesia, y á la izquierda, ó
convento. De ellas pasaban al coro me- sea al N., con el mentado colegio de San
diante un puentecito sobre el callejón (2). Luis. El templo hállase extendido de E.
La Comunidad carecía de huerta donde
(3) D. Francisco Muns y Castellet. Los mártires del
siglo XIX. Barcelona 1S88, pág. 55.
;i) Visité este templo en 10 de julio de 1900. (4) Datos que me proporció el muy erudito escritor tor-
, ;2) Me lo-contó un anciano vecino del templo, de nom- tosino D. Federico Pastor Lluís, por los que le doy mil
bre D. Isidro Cervera. Me lo dijo en Tortosa á 13 de julio gracias. Tortosa, 2 de agosto de 1900.
de 1900. (5) Relación citada de D. Isidro Cervera.
CLAUSTRO DE LOS DOMINICOS DE TARRAGONA. — 1 8 9 5 P U E R T A D E L TEMPLO DE LOS DOMINICOS DE TORTOSA. — 1 9 0 3

(Fotografia del autor). (Fotografia de D. Gerardo Vergés).


DOMINICOS 83

á O.,'paralelo a. la vía pública, de tal cuya profundidad sólo mide 4 pasos. To-
modo que su puerta principal se abre, no dos los muros, aunque hoy blanqueados,
en los pies, sino en la segunda capilla del están formados de pulidos sillares de
lado de la Epístola, calificando de primera piedra. Conforme con el gusto que lo
la próxima á la fachada. Luce esta puerta trazó, su ábside presenta la forma semi-
por su prolijo adorno barroco. Su vano poligonal de tres lados en el fondo y dos
termina en arco de medio punto. En su en los lados; los arcos de entrada en las
exterior la acompañan dos pedestales á capillas anchísimos y tan ligeramente
cada lado, con sendas columnas de base apuntados que á duras penas se nota lo
ática, capitel jónico-griego, adornadas sean; la bóveda se halla dividida en tres
en la parte baja de multiplicados bajos grandes compartimientos casi cuadrados
relieves y de estrías en el resto. En los cruzados por los acostumbrados aristo-
intercolumnios, ó sea entre columna y nes diagonales, y en cuya interjección
columna, aparecen, colocados uno sobre aparece una clave diminuta. Los aris-
otro, dos nichos ó marquesinas, termina- tones que separan unos de otros los com-
dos en concha, los que cobijan sendas compartimientos apoyan sobre ménsulas
imágenes de escultura. Por sobre los ca- de los muros, unidas á otras por una cor-
piteles, abacos y la puerta, corre una nisita. La bóveda del ábside presenta ma-
cornisa de historiado friso. Sobre de ella, yor complicación, pues además de las
en el centro, se levanta otro cuerpo con nervaturas, ó aristones, que partiendo de
cinco marquesinas iguales á las de los los ángulos del semipolígono confluyen
intercolumnios, puestas en_línea recta en la clave central, cada triángulo for-
una al lado de la otra con sendas imáge- mado por estas nervaturas ostenta en el
nes. En alto este cuerpo viene terminado centro otra pequeña clave con nervatu-
por otra cornisa, en cuyo friso se lee: ras procedentes de sus tres ángulos
«Quam terribilis est locus iste: non est del triángulo; de tal modo que el total
aliiid hic nis¿ domus Dei et porta coeh'.» forma una como red de nervaturas y cla-
Y finalmente, sobre este cuerpo, otro que ves, éstas á guisa de sus nudos. Igual sis-
contiene un grande escudo heráldico de tema guardan las bóvedas de las capillas;
un cardenal constituye el superior remate pero la complicación llega á lo indescrip-
de la puerta. Las caras de todos los ele- tible en la bóveda que sostiene el coro
mentos ó partes de ella se hallan tapiza- alto, donde los aristones describen cur-
das de bajos relieves, lo que unido á las vas en mil sentidos, y verdaderamente
multiplicadas esculturas y adornos le dan constituyen una red. La impresión que
inusitado aspecto de riqueza. Los más de produce la vista de este templo es agra-
estos adornos, á pesar de su barroquis- dable por la riqueza de sus muros de pu-
mo, brillan por su buen gusto, bien que lida piedra, la sencillez de las más de sus
los deslustran el pésimo de algunas de partes y la homogeneidad del gusto de
las líneas generales, especialmente de las sus líneas. Bajo el coro alto ábrese la
terminaciones ó "límites superiores. puerta que conduce al claustro, notable
El interior del templo, dibujado como aquélla porque en su abocinado aparece
fué en la época de la transición del gusto el extraordinario grosor del muro, el que
ojival al del Renacimiento, ó quizá más mide allí unos dos metros.
exactamente expresado, en la de la úl- El retablo mayor, hoy colocado en la
tima degradación de aquél, presenta as- iglesia del seminario, es barroco, pero de
pecto muy distinto. Constituye una ancha buen gusto. Consiste en un grande lienzo
nave de 42 pasos regulares de longi- al óleo, que representa á Santo Domingo.
tud por 14 de anchura, sin crucero, pero A cada lado del lienzo hay tres columnas
con cuatro capillas por lado que se co- estriadas y con capiteles de orden com-
munican por muy menguado pasillo, y puesto. Por sobre de ellos, de uno al otro
% CAPÍTULO OCTAVO

lado del retablo, corre una buena cornisa. vense sendos grandes nichos á guisa de
Los pedestales de las columnas, en sus grandes puertas, las que, según se ve,
plafones, lucen también lienzos, bien que contenían otros tantos altares. En el pri-
pequeños. Ignoro cuál fuera en 1835 el mero, ó sea el oriental, aun hoy se con-
remate superior del retablo. Hoy es otro serva la imagen, que es un gran bajo
lienzo que tiene la Purísima. relieve que representa la Anunciación,
Salidos otra vez del templo á la calle, faltando sólo la mesa del altar. En el
topamos en el fondo de ella con la puerta opuesto no queda más que el nicho. Am-
del convento, monumental también, aun- bos pertenecieron al pleno Renacimiento.
que mucho más sencilla que la de aquél. Este claustro en su primer piso alto
A uno y otro lado del vano, ó abertura, posee también galería de arcos redondos
se levanta sobre su pedestal una media apoyados en columnitas toscanas. Cuén-
columna toscana, por sobre cuyo capitel tanse ocho arcos en cada lado. Parece
y abaco corre de una á otra una buena que también hubo arcos en el segundo
cornisa, en cuyo friso se lee con ma- alto; pero tapiado como se halla hoy todo,
. yúsculas romanas: Domus sapientiae, y mil veces encalado, no puede ni el ojo
Sobre la cornisa descansa, en el centro, más avisado descifrar con certeza la ver-
un cuerpo dividido en tres compartimien- dad respecto de este piso. Tal construc-
tos, de los cuales el central ostenta unas ción, á pesar de la inusitada magnitud de
armas reales, y los dos laterales sendos sus partes, resulta pobre y mezquina á
nichos para imágenes, terminando todo causa de que en ella sólo se empleó el la-
en lo alto por un frontón triangular á la drillo revocado hasta en las columnas;
usanza griega. de modo que el edificio agrada por su
Da de frente la puerta á un grande y grandeza, alturas y espíritu, y desagrada
anchísimo corredor, á cuya derecha ábre- por la pobreza de los elementos de cons-
se el no menos espacioso claustro, adhe- trucción empleados.
rido por N. con este corredor, y por O. Al Oriente del claustro, y con puerta
con los pies ó fachada del templo. El en él, cae el gran refectorio, pieza mo-
claustro, aproximadamente cuadrado, derna muy despejada y abovedada por
mide 37 pasos de lado total, ó sea inclui- cuatro compartimientos con lunetos. Al
das las galerías, cuya anchura se extien- mismo lado del claustro ábrese otro patio
de á 6. Forman á éstas cuatro grandes menor, con cisterna, y la cocina colocada
arcos ojivales por lado, apoyados en ma- junto al refectorio.
chones. Dentro de cada arco ojival vie- Hoy (1900) el templo alberga las escue-
nen comprendidos dos redondos mucho las creo municipales; el convento es cuar-
menores, sostenidos sus extremos del cen- tel (1), y de tal modo está lo que pude re-
tro por una columnita toscana que parte correr del piso alto, que no muestra as-
por mitad el vano. El espacio compren- pecto de convento.
dido entre la parte superior de estos ar- Los anuncios de las .subastas de los
quitos redondos y la inferior, ó interna, bienes de conventos, publicados en 1823,
del ojival que los cobija, viene cegado nos dan noticia de las siguientes propie-
por un tabique adornado en el centro con dades de esta casa:
una abertura circular. Un antepecho sos- 1 fi «Una heredad de Masía titulada lo
tiene todas estas columnas, y separa del Molinas, sita en el término de la villa de
patio la galería. La del piso bajo viene Amposta, de extensión 415 jornales de
cobijada por bóvedas, por arcos ligera- tierra... existente en dicha heredad un
mente apuntados divididas en comparti- pozo de noria con una casa.»
mientos, y éstos dispuestos por arista
cruzada. En los extremos de la galería
(1 Visité este templo y convento el día 11 de julio de
meridional, es decir, frente la E. y la O., 1900 Describo, pues, lo que vi.
DOMINICOS §7

2.° «Otra heredad, sita en el término ban, no una, sino mil veces á un grave
de Tortosa y partida de A r e n e s . de 6 señor, de cuya boca lo tengo, que el pago
jornales de tierra y un cuarto y medio de anual les costaba tres cuartos (9 cénti-
otro...» (1). mos), y aun éstos destinados á la compra
Ignoro el crecido número de volúmenes del papel sellado que se necesitaba. De-
que indudablemente atesoraría la biblio- clamen en el entretanto los que hoy pa-
teca de este convento; pero atendiendo gan buenas docenas de duros por cada
al carácter de establecimiento docente curso, declamen digo, crepantibus buccis,
de esta casa, á la sabia Orden á que per- contra aquellos tiempos en que á su decir
tenecía, á los muchos y profundos maes- el saber era patrimonio de una clase.
tros que albergó, y á los multiplicados Con añadir á lo apuntado que cuando
residuos que de las bibliotecas de los con- el seminario conciliar se separó del edifi-
ventos de Tortosa formaron más tarde cio colegio de San Matías, también los
gran parte de la actual del Seminario, dominicos corrieron con la enseñanza de
opino que sería muy numerosa y esco- este seminario, y que sus comunidades
gida (2). no pecaban de numerosas, quedan paten-
Este colegio de Santo Domingo y San tizados los buenos servicios que presta-
Jorge fué fundado en 1367, y en 1545, por ban á la ciudad y á su diócesis y co-
decreto pontificio y real, recibió los pri- marca.
vilegios de que gozaban los principales He aquí palabras del ilustre y sabio
colegios de España. En él se enseñaban canónigo doctoral actual, muy dignas de
públicamente y con valor académico los ser copiadas: «Los historiadores de esta
cursos de Filosofía, Teología y Moral. Y ciudad, y otros de Cataluña, tratan de
como contiguo á él hallábase el otro co- este colegio (de Santo Domingo), hacien-
legio de San Jorge y San Matías, dirigido do grandes elogios de la enseñanza que
por los mismos dominicos, donde se en- en él se daba; y con este motivo citan los
señaba Humanidades y también Filosofía, nombres de muchos sabios lectores y
resultaba que en aquel angosto cabo de aventajados discípulos que brillaron en
la ciudad encontraban la mitad de su ca- sus aulas. En cuanto á los primeros sólo
rrera los que aspiraban á alguna literaria haremos mención de éstos: P. Jaime Gil,
secular y toda los de la sacerdotal. El Maestro que fué del Sacro Palacio; P. Je-
colegio de San Matías, de su fundador rónimo Xavierre, General de la Orden,
Carlos V, apellidado también imperial, confesor del Rey Don Felipe III, y des-
era seminario conciliar, y viniendo á car- pués Cardenal; P . Baltasar Sorio...; Pa-
go de los mismos religiosos del de Santo dre Pedro Satorre, que acompañó como
Domingo, estaba unido á él por comuni- teólogo al Obispo de Tortosa... cuando
cación ó paso interior. En él había becas, fué al concilio de Trento; y otros que
mediante las cuales el alumno era gra- ocuparon sedes episcopales ó desempe-
tuitamente mantenido, y ó asistía á las ñaron elevados cargos en la Orden...» (3)
aulas de la misma casa, ó á las del pró- Dedica el autor luego todo su folleto a
ximo colegio-convento de Santo Domin- reseñar la vida, virtudes, saber y servi-
go. Tocaba allí en lo fabuloso la baratura cios de los lectores dominicos de dicho
de los estudios en el calumniado tiempo colegio del 1835, que después pasaron á
de los frailes. Dos jóvenes que concurrían profesores del Seminario conciliar. Son
á las clases del colegio dominico conta- éstos: «P. Mariano Roquer, P. Narciso
Puig, P . Tose Pascual, P. Buenaventura
Gran, P. Tomás Femenía, P. Miguel
(1) Ambas fincas vienen en el Diario de Barcelona del
16 de abril de 1823, págs. 944 y 945.
(2) Sobre la formación de la del Seminario véase al
Dr. D. Ramón O'Callaghan. Episcopologio lie la Santa (3) D. Ramón O'Callaghan. Los antiguos lectores do-
iglesia de Tortosa. Tortosa 1893, pág. 146. minicos. Tortosa 1897, pág. 6.
88 CAPÍTULO OCTAVO

Arin, P. Pedro Espinós, y P. Juan Arau.»


Forman estos nombres una verdadera ARTÍCULO DECIMOCUARTO
corona de gloria de aquel colegio, la re-
seña de cuyos méritos no cabe en este mi NUESTRA SEÑORA DEL ROSARIO,
pobre libro. Sin embargo, no omitiré DE ULLDECONA
apuntar que el primero de los nombrados
fué rector y reorganizador en 1824 del Ulldecona, último pueblo de Cataluña
seminario conciliar de la diócesis; que el en la línea que conduce al vecino reino
segundo, Padre Narciso Puig, después de de Valencia, hállase atravesado corno
la exclaustración, fué afamado catedrá- por un eje de E. á O. por larga calle cen-
tico de la Minerva de Roma y autor, tral, que lleva el nombre de Mayor. El
junto con el célebre P. Francisco Xarrié, convento y la puerta llamada de Tortosa
de un muy apreciable compendio de la formaban antes del actual ensanche del
Teología tomística (1); que el tercero, pueblo la contera oriental de esta calle,
P. José Pascual, mereció el calificativo colocada la iglesia en la cara de tierra,
de gran sabio (2); que el cuarto, Padre el convento, fronterizo á ella, en la de
Buenaventura Gran, gozó de glorioso hacia el mar, y la puerta del pueblo en el
nombre como teólogo, maestro y predi- fondo oriental. De donde claramente re-
cador que arrastraba los auditorios, que sulta que la calle se interponía entre la
fué rector del seminario por espacio de iglesia y el convento, inconveniente que
27 años y estimado de todos los Prela- se obviaba por un ancho paso que colo-
dos (3), y que así brillaron los demás (4). cado sobre la puerta del pueblo unía
El fin del presente libro, limitado á cor- ambos edificios monásticos.
poraciones regulares, prohíbeme entrar La fachada del templo, lisa y revocada,
en la descripción del muy artístico y her- luce, sin embargo, por la puerta, cuyas
mosísimo colegio de San Matías y San jambas vienen formadas de anchos silla-
Jorge, hoy de San Luis, del cual arriba res, así como el arco de anchísimas dove-
hice mención. «El Emperador Carlos V las, circunstancias que la dan mucho ca-
lo fundó el año 1544... con objeto de edu- rácter. El campanario, cuya sección es
car á los jóvenes moriscos recién con- cuadrada, también sencillo, liso y revoca-
vertidos; mas cuando á principios del do, se levanta en el lado E. de la fachada.
siglo XVII fueron expulsados los moriscos El interior del templo consta de una sola
de España, sirvió aquel colegio para ins- nave, no muy elevada, mezcla extraña de
truir á los jóvenes de esta diócesis, hijos gusto del Renacimiento y del ojival expi-
de padres pobres, y á los que no eran rante. La longitud total del templo mide 53
pobres si se mantenían á sus expensas. pasos regulares, la anchura de la nave 11,
Dicho colegio, á instancia del Sr. (Obispo) y 3 la profundidad de las capillas de cada
Sáez, fué elevado á Seminario conciliar lado. Posee esta iglesia ancho crucero y
por Real cédula de 25 de diciembre de cuatro capillas por lado. Muestran el gus-
1824» (5). to neopagano los blanqueados muros, los
arcos redondos de entrada en las capillas,
las dos antas del crucero, la cornisita de
liso friso que apo}7ada en ellas recorre
(1) D- Ramón O'Callaghan. Los antiguos lectores, pá- luego todo el templo, la media naranja ó
ginas 12 y 13.
(2) D. Ramón O'Callaghan. Obra citada, págs. de 14 sencilla cúpula del centro del crucero, y
A18. la también sencilla bóveda de cañón, del
(3) D. Ramón O'Callaghan. Obra citada, págs. de 19 presbiterio. Exhiben el ojival la bóveda
A 24. i. -•=
(4) D. Ramón O'Callaghan. Obra citada, las restantes de la nave dividida en cuatro comparti-
páginas. mientos con sus cruzados aristones y pe-
;ó) D. Ramón O'Callaghan. Eptscopologio, citada, pá-
gina 241.
I quenas claves, las de las capillas y la de
CLAUSTRO DE LOS DOMINICOS DE ULLDECONA. —1900
(Fotografia del autor).

CLAUSTRO DE LOS DOMINICOS DE LÉRIDA. —1898


(Fotografia del autor).
DOMINICOS ®
bajo el coro iguales á aquéllas, y las abo- galerías carecen dé bóvedas. Por sobre
cinadas ventanas, empero destituidas de los arcos corre en el exterior del claustro
calados. una cornisita, y de ella para arriba la
E l retablo mayor, dedicado á la Virgen manipostería revocada substituye á' les
del Rosario y al Patriarca de Guzmán, sillares. Del resto del edificio sólo me
fué destruido por los franceses, como llamó mi atención la desahogada escalera
diré en su día; pero en los últimos tiem- dotada de sencilla cúpula con un escudo
pos consistía en un fresco pintado en el heráldico en el centro.
muro del fondo que representaba un cor- Este convento poseía una huerta cer-
tinaje ó dosel, en cuyo centro aun hoy se cada, separada sólo de él por el ancho de
ve, tapiado, el nicho ó balcón central la carretera, una heredad apellidada
p a r a la imagen. Debajo de él la no revo- Comú, sita en el monte de Múntciá, y
cada pared indica el lugar de las gradas. otras fincas (2).
Los laterales, según costumbre de los re- En los tristes días de la última exclaus-
gulares, estaban dedicados á Santos de la tración la Comunidad se componía de
Orden, tales como San Pedro mártir, San cinco padres y un lego (3).
Vicente Ferrer, San Valentín, Santa Ca- Hoy el convento alberga el Ayunta-
talina, etc., y la Virgen Dolorosa en el miento y las escuelas de niños de ambos
de la Comunión, «que ocupaba el brazo sexos, por cuya razón sobre su puerta
izquierdo del crucero.» Este ostentaba un se lee: Casa Consistorial, El coro del
templete barroco con columnas salomóni- templo contiene el juzgado municipal, y
cas. La sacristía poseía una cruz proce- el resto se ve ha servido á varios usos,
sional de plata (1). hallándose poco menos que desocupado.
Salido de la iglesia el visitante para En la fachada, otro gran rótulo dice: Cár-
dirigirse al fronterizo convento, caúsale celes municipales.
agradable impresión la severa y rica fa- Fué fundada esta casa religiosa en 4
chada de éste, toda de pulidos sillares de de octubre de 1593 (4).
ennegrecida piedra, y con un piso bajo y
dos altos. Adornan á su puerta una anta
á cada lado, una cornisa de liso friso, y ARTÍCULO DECIMOQUINTO
sobre el centro de ella un nicho, termina-
do en concha, que contiene la imagen SANTO DOMINGO, DE LÉRIDA
de Santo Domingo. En los más altos silla-
res de la fachada se lee: «Año 1743.» El «El convento de Santo Domingo... de
edificio forma un cuadrado alrededor del Lérida fué el tercero creado en la pro-
claustro, terminado por todos lados, me- vincia de Aragón, y según Tamayo de
nos por el O., que está sin construir. Este Salazar asegura, se debe á los desvelos
claustro mide 31 pasos y medio en cuadro del fundador de la Orden, el propio San-
de lado total, ó sea inclusas las galerías, to Domingo, quien por el año 1219, al
y 4 y medio la anchura de éstas. Consta pasar por Lérida, pidió á Don Jaime el
cada una, en los tres lados construidos, Conquistador, que se hallaba en ella cele-
de 5 arcos, redondos, apoyados sobre pi- brando Cortes, la fundación de esta casa,
lares de sección cuadrada, unos y otros que se la concedió el piadoso monarca
de pulidos sillares, y achaflanadas en señalando el sitio para su fábrica detrás
curva entrante sus aristas. Apoyan los de la Catedral y al NO. de la misma. En
pilares sobre el corrido antepecho. Sus el año 1227, según el citado autor, ya esta-

(1) Visité este convento en 13 de julio de 1900; y además (2) Citada carta del sacerdote de Ulldecona.
debo estas noticias de los retablos laterales y de la cruz (3) Carta citada.
á la bondad de un sacerdote del pueblo, quien me las escri- (4) D. Francisco Muns. I.os mártires del siglo XIX.
bió en c a r t a de 4 de marzo de 1895. Barcelona 1888, pág. 56.
90 CAPITULO OCTAVO

ba concluida» (1). Esta construcción sufrió longitud, 13 de latitud la nave y 6 el fon-


un derribo en tiempo de Pedro el Cere- do de las capillas de cada lado, resultan-
monioso y el convento se trasladó á dife- do así, y de lo arriba apuntado, que brilla
rente sitio, mas también aquí derribado por su magnitud, esbeltez y hermosu-
en 1640 por las guerras de Felipe IV, no r a (4), de tal modo que puede afirmarse
pudo albergar á los religiosos, los cuales que «esta iglesia era la mejor de la ciu-
«se retiraron á una casa de la calle de dad después de la Catedral» (5).
Caballeros, que convertida luego en con- Su retablo mayor, colocado hoy como
vento, ensanchóse con nuevas obras, con- mayor también en el templo del Hospicio,
tando en 1699 con 25 religiosos, y teniendo presentaba, como era natural, las desma-
ya aulas de Filosofía y Teología, que es- ñadas líneas de época moderna, consis-
taban agregadas á la Universidad. En el tiendo en un gran nicho central, acompa-
mes de octubre de 1707 fué casi del todo ñado por cada lado de un par de no
destruida esta casa por las tropas sitiado- pequeñas columnas corintias y una ima-
ras... En 23 de septiembre de 1735 se puso gen con su pedestal. Terminaba en alto
la primera piedra de la nueva iglesia» (2) por un frontón cortado por la represen-
en el mismo sitio de la anterior, la que tación del Padre Eterno en el centro, y
fué consagrada en 23 de enero de 1752 (3). abajo por el sagrario de la exposición
Extendida como se halla en sentido pa- unas gradas y el altar. Por el mismo esti-
ralelo á la dicha calle, su fachada lateral, lo, aunque con más gracia y riqueza,
ricamente formada de pulidos sillares de mostrábase el de la Virgen del Rosario,
piedra, ocupa buen trecho de ella, desde colocado en el fondo del brazo oriental
la esquina de la de la Virgen del Rosario del crucero, el cual constaba de mesa,
para abajo. Termina, pues, el edificio-igle- gradas, pequeño sagrario, gran nicho
sia y convento, por E. la calle de Caba- central con su titular, dos columnas co-
lleros, por N. la del Rosario, y por S. la rintias á cada lado, el par del centro más
de Santo Domingo. Precede al templo en adelantadas que el exterior, y por sobre
el ángulo descrito por aquellas dos pri- de todo muy pronunciadas cornisas, con
meras calles, un gran pórtico, pieza cua- una nube por remate. Pero lo califiqué
drada, abovedada, cuyo ingreso con- de más rico que el mayor porque estaba
siste en una puerta ojival con una venta- formado de mármol jaspeado de Tarra-
na del mismo orden á cada lado. gona. Hoy, aunque con aditamentos en
Consta el templo de una nave de ele- la parte superior, constituye el mayor de
vado techo, dotada de gran crucero, tres la parroquia de San Francisco. Al lado
capillas laterales por lado sin pasillo de oriental del presbiterio, y con entrada por
comunicación, ábside semicircular que el brazo del crucero, abríase una capilla
da á la calle de Santo Domingo, bóvedas dotada de pequeño crucero y cúpula, que
divididas en compartimientos y provistas estaba dedicada al Crucifijo, y bajo de la
de lunetos, gran cúpula en el cruce, todo cual existía la tumba de los frailes (6).
de estilo greco-romano. Por la base de la «La Cofradía del Santísimo Rosario,
cúpula corre una hermosa cornisa, y cada tan antigua como los PP. Dominicos,»
una de las cuatro pechinas de su pie os- estaba «instalada en este convento, del
tenta un grande y esculturado medallón cual salía todos los domingos el Rosario
con un santo dominico. Rodean el inte-
rior de la cúpula ocho lunetos con sendas
ventanas. Este templo mide 48 pasos de (4; Visité este convento en 20 de junio de 1898.
(5) Sr. Pleyán. Obra citada, pág. 412.
(6) De estas noticias descriptivas de los retablos, unas
(1) D. José Pleyán de Porta. Apuntes de historia de las adquirí directamente visitándolos donde se hallan,
Lérida, Lérida 1873, pág. 410. otras proceden de mi amigo el presbítero leridano don
(2) D. José Pleyán. Obra citada, pág. 411. Buenaventura Corominas, que me las proporcionó en va-
(3) D. José Pleyán. Obra citada, pág. 412. rias entrevistas.
G A L E R Í A ALTA DF.L CLAUSTRO DE LOS DOMINICOS DE SOLSONA. — 1 8 9 7
(Fotografía del autor).

CLAUSTRO DE LOS DOMINICOS D E B A L A G U E R . — 1 8 9 8

(Fotografia del autor).


DOMINICOS 91

de la Aurora recorriendo las calles» (1). guos hallábanse depositados en este con-
Adherido al lado occidental de la igle- vento... los cuerpos de tres religiosos,
sia, ó sea de la Epístola, ábrese el notable que aunque no está reconocida (oficial-
claustro, cuadrado, cuyo lado total mide mente en la Iglesia) su santidad, se ins-
23'80 metros, inclusas las galerías, cuya criben en los catálogos de Santos de Ca-
anchura de cada una es de 3'72 metros. taluña» (5).
Lo califiqué de notable por su pulcritud y Después de mil vicisitudes, que en su
originalidad. Tiene galerías completas día explicaré, ha parado finalmente este
tanto en e1 piso bajo cuanto en los dos al- convento é iglesia en albergue del Insti-
tos, terminando arriba por un historiado tuto provincial y sus dependencias, de la
alero. Cuenta cinco arcos por lado en Escuela normal, Caja de Ahorros, Museo
cada piso, de orden greco-romano, sin provincial de antigüedades y otras insti-
columna alguna, substituidas éstas por tuciones.
anchos pilares y antas, que del pedestal
del suelo llegan al techo del primer alto.
Todo es de ladrillo sin revocar, menos los ARTÍCULO DECIMOSEXTO
pedestales de piedra y los capiteles de
dichas antas. Las galerías están cubier- SANTO DOMINGO, DE BALAGUER
tas por muy regulares bóvedas por arista
cruzada, divididas en compartimientos Separado de la ciudad sólo por el álveo
correspondientes á los arcos. De todos del caudaloso Segre, bien que á ella uni-
modos este claustro, por su perfecta regu- do por el antiguo y majestuoso puente
laridad, por la profusión de sus galerías de piedra de la carretera de Tàrrega,
completas, por la pulcritud de sus bóve- leA-ántase al E. de la población el históri-
das, por el juego de su ladrillería y por co convento de frailes predicadores de
el historiado alero que le remata, produ- Balaguer, frente á frente del peñón en
ce muy agradable efecto, por más que en que antes se asentaba el castillo de los
algo lo afee el achatamiento del techo de Condes de Urgel y hoy el renombrado
los dos pisos altos. santuario del Cristo. «Dióse principio á
En el lado Poniente del edificio exten- su fundación á principios del año 1323 en
díase su huerta. que el Rey D. Jaime II de Aragón pudo
A este convento no le faltaba su buena alcanzar la licencia del Papa Juan XXII.
biblioteca (2) ni tampoco su bien provista Mucho tiempo debió emplearse en la
hacienda (3), cuyos pormenores empero construcción del edificio, pues que en el
ignoro. año 1350 no estaba concluido aún...» (6).
La Comunidad se componía de 30 frai- Sin embargo, el verdadero fundador que
les (4). en su testamento ordenó la fundación y á
«Florecieron siempre los religiosos de ella destinó rentas, fué D. Armengol de
esta santa casa tanto por su virtud como Cabrera, 16.° Conde de Urgel; Don Jai-
por su sabiduría, vióse honrada también me II sólo merece el título de ejecutor.
de San Vicente Ferrer, y dio algunos Mas la hermosa fábrica del siglo xiv no
hombres notables á la Iglesia, entre ellos alcanzó al xix; las continuas guerras de
nuestro obispo D. Guillermo Aranyó... y la Edad Media la destruyeron en parte,
D. Gil Pérez de Cerveira, que fué obispo bien que cual otro fénix resucitó de sus
de Tuy más tarde. Desde tiempos anti- despojos y de los del castillo. La iglesia,
colocada al S. del edificio y de frente á la
(1) Sr. Pleyán. Obra citada, pág. 412.
(2) Relación del fraila de este convento P. Damián
Vilar, hecha en T a r r a g o n a en 11 de agosto de 1880. (5) Sr. Pleyán. Obra citada, pág. 412.
(3) Relación ya citada de D. Buenaventura Corominas. '6) D. J. Sàbat y Anguera. Apuntes para la historia
(4) Relación y a citada del P. Damián Vilar. de Balaguer. Lériña 1886, pág. 48.
9S CAPÍTULO OCTAVO

ciudad, pertenece al estilo ojival. Consta el suelo, vine en fundada conjetura de


de una grande y desahogada nave, pero que muchas tumbas ennoblecerían en
poco elevada, dotada de cuatro capillas tiempo de los dominicos el pavimento,
por lado, sin pasillo de comunicación, las que quedarían ocultas cuando en años
todo ricamente construido de pulidos si- posteriores al 1S35 éste fué nuevamente
llares de piedra, empero con. posteriori- enladrillado.
dad al 1835, revocado y encalado. Sus Del retablo mayor no existe rastro. De
medidas se extienden á 35 metros de lon- los laterales quedan la mayor parte. La
gitud, 12'80 de latitud en la nave, y4'14 forma general de ellos consiste en un
lá profundidad de las capillas de cada gran lienzo al óleo en el lugar principal,
lado. En ello el ojo menos avisado sor- otro menor sobre éste,y á los lados de am-
prende marcada desproporción entre la bos columnitas ó medias columnitas y
excesiva anchura de la nave y.su corta otros pequeños adornos de Renacimiento.
longitud; mas cesa la sorpresa al exami- He aquí la reseña de estos retablos. Lado
nar la fachada de este templo y el patio del Evangelio caminando de la fachada
que le precede. De esta inspección evi- al presbiterio: 1.° Un gran Crucifijo del
dentemente resulta que antiguamente el tiempo de los dominicos de 1835. 2.° Es
templo abarcaba dicho patio contando posterior á este año. 3.° Un gran lienzo
dos otras capillas por lado, cuyo arco representando dos monjas dominicas al
ojival de entrada y los escudos heráldi- recibir una aparición del Niño Jesús, el
cos que á cada uno adornaban, vense cual lienzo en el día de mi visita á esta
aún hoy claramente en el muro del con- casa, 16 de junio de 1898, adornaba el
vento que forma el lado N. del mismo muro lateral del presbiterio. Sobre el
patio. La fachada consiste en una mala lienzo hallábase colocado en 1835 el órga-
pared revocada, con una puerta de Rena- no. 4.° En el lienzo mayor San Pedro
cimiento terminada por un frontón trian- Mártir, en el superior San Jacinto. Lado
gular que contiene en su centro un nicho. de la Epístola, marchando en la misma
En el friso del dintel aclara toda duda dirección: 1.° Santas Apolonia, Lucía y
esta inscripción: «Haec est domus Dei Ágata, pintadas en otro lienzo. 2.° En el
et porta coeli-1716.» Tan pobre fachada, cuadro mayor (en 1898 también colocado
pues, y el acortamiento del templo fueron en el muro del presbiterio) la Beata Juana
resultado de los destrozos allí causados de Aza, y en el superior el Santo de Pe-
por la guerra de sucesión. El ábside des- ñafort; el 3.° es moderno, y el 4.° presen-
cribe un semipolígono de siete caras, do- taba á la veneración en el lienzo mayor
tadas de sendos ventanales ojivales las San Vicente Ferrer y en el superior el
tres del centro. Presenta formas muy sen- Santo de Aquino. Aquél hallábase en
cillas la bóveda, pues guarda la de cañón 1898 colgado en un lado de la misma ca-
recto apuntado, dividido empero por ar- pilla.
cos transversales sin nervaturas cruza- Pero lo más notable de esta casa es sin
das ni claves. En el ábside empero y en duda el claustro, cuya descripción hacen
las capillas hállanse los aristones y las poco menos que inútil la multitud de gra-
claves, circunstancias que dan pie para bados y fotografías, que por todas partes
creer que la bóveda de la nave ha sufrido y en manos de todos lo retratan, de modo
algún derribo y reconstrucción. El coro que sólo el deseo de evitar que esta rela-
es alto, sostenido sobre una bóveda ción quede incompleta oblígame á apun-
también ojival y dotado hoy con la sille- tar de él cuatro noticias. Cae al N., ó lado
ría, gótica sí, pero muy sencilla, que en del Evangelio, del templo, y puede califi-
1835 pertenecía á los franciscos de Cer- carse de cuadrado, ya que en la dirección
vera. Por los fragmentos de losas sepul- de E. á O. mide en su total, ó sea inclu-
crales que aún actualmente aparecen en sas las galerías, 30 metros y 31 en la per-
DOMINICOS 93

peñdicular á ésta, siendo de 3'50 en unas corte de las tres rasgadas ventanas ojiva-
y 3'90 en otras la anchura de aquéllas. les que dan luz al templo..., el delicado
Las columnas y los arcos, más que de ta- perfil de sus calados y lo filigranado de
les, pueden graduarse de graciosísimas la columna central que los sostiene, el
columnitas y calados góticos robados á bien trabajado rosetón (será la clave) que
algún ventanal del mismo gusto. Aqué- cierra las aristas ó dovelas de dicho ábsi-
llas delgadísimas y formadas de superfi- de y el hermoso dibujo de las figuras que
cies planas y curvas colocadas en ángulos lo adornan representando la coronación
entrantes y salientes, éstos describiendo de la Virgen, por lo correcto del dibujo,
los trilobados de los dichos calados, y delicado de las formas y buena ejecución
apoyadas en los capitelitos de igual esti- de los pliegues de los ropajes. En su pe-
lo, sacan completamente verdadera mi queña sacristía, antes rico panteón de
apreciación. Ni esto debe extrañar, ya personas ilustres, la clave de ja bóveda y
que, según narra la tradición, formaron el escudo calado y como desprendido de
un día la hermosísima galería del palacio ella son una muestra de la riqueza y buen
señorial de los Condes de Urgel, asentado gusto de este recinto... Y por otros res-
en la fronteriza loma del otro lado del tos mutilados, y empotrados en la obra
río. En el centro de cada lado en tiempos nueva que se descubren acá y acullá, po-
modernos se abrió una puerta con arco demos apreciar, como hemos dicho, la
redondo rebajado. De todos modos este riqueza de su primitiva construcción.»
claustro resulta ligero, elegante, gran- «Desde 1351 hasta 1413 el convento de
dioso, homogéneo y único en su clase. P P . Dominicos de Balaguer fué uno de
Cuenta 18 arcos y el central moderno en los primeros de la Orden de la Corona de
los lados que corren de E. á O., y 17 más Aragón tanto por su suntuosidad y rique-
dicho central en los contrarios. En 1835 za, cuanto por los varones ilustres que
ennoblecían sus muros sarcófagos de pie- moraron en su seno y por los Capítulos
dra con los restos de personas notables, provinciales ó Congregaciones celebra-
y aun hoy se ven en sus esquinas interio- das en su recinto» (1).
res esculturados escudos heráldicos. En 1835 el convento no contaba más
En la galería oriental una característi- que con un piso alto situado alrededor de
ca puerta de arco apuntado, acompañada su claustro,.ó sea en sus cuatro alas. Al
á cada lado de una ventana de arco igual, E. del edificio, y algo prolongada hacia
daba acceso al aula capitular, desahoga- el S., extendíase la cercada huerta de 3
dísima sala cuadrada, atravesada de N. á jornales de superficie. La que, junto con
S. por un arco gótico rebajado. unos 12 jornales de regadío y multiplica-
De la detenida inspección de este edifi- dos censos, formaban el patrimonio de la
cio aún el ignorante en historia deducirá casa (2).
su antigua magnificencia y la homoge- Del número de religiosos que forma-~
neidad y pureza de su gusto ojival. Por ban la Comunidad sabemos que en 1810
todos lados, ya en la iglesia, ya en ei eran seis, los cuales, al huir de los fran-
claustro, ya en sus dependencias, asoman ceses aquel año, se llevaron y salvaron
preciados vestigios de su estilo y hermo- las reliquias, las mejores ropas de la sa-
sura. Y este mi pobre juicio, hijo de la cristía y los papeles más importantes del
visita que en 1898 hice á esta casa, viene archivo (3).
plenamente confirmado por las siguientes
palabras de un competente admirador de (1) D. Fernando Timoneda y Pikmant, en el Álbum
histórich, pintoreschy monumental de Lleyda y sa pro-
ella: «Todavía el viajero al penetrar hoy vincia. Lleyda 1880, págs. 87 y 88.
día (1880) en su hermosa iglesia... puede (2) Noticias adquiridas de boca de los ancianos de Ba-
admirar lo abierto y bien cortado de su laguer.
(3) P . Mariano Rais y P. Luis Navarro. Historia de la
majestuoso ábside; la elegancia y buen provincia de Aragón... pág. 111.
<n CAPÍTULO OCTAVO

como por ser de prolija escultura y de


ARTÍCULO DECIMOSÉPTIMO mucho relieve, cual estilaba el barroquis-
mo» (1).
SAN PEDRO MÁRTIR, DE CERVERA En frente de ésta, ó sea en el lado
del Evangelio, «se acabó de construir, en
Al S. de la ciudad, en una hondonada el año 1718, la magnífica de Santo Tomás
que se abre cerca los pies del gran templo de Aquino: es grandiosa, sólida y ele-
parroquial, á un tiro de piedra de él, há- gante, afectando la forma de cruz latina,
llase el convento de San Pedro mártir de y coronada por esbelta cúpula» (2). Su
Cervera, vulgarmente apellidado de San- retablo mayor luce por la bella escultura
to Domingo. La iglesia mide 34 metros y el oro que lo cubre, y escribo mayor
de largo por 9'90 de anchura en la nave porque en ella se cuentan hasta cinco al-
y 4'10 en la profundidad délas capillas de tares.
cada lado. Consta de una desahogada L a capilla contigua á la del Rosario en
nave, sin crucero, con seis capillas por tiempo de los frailes llamábase de San
lado, ábside semipoligonal de cinco lados, Felipe por estar dedicada al Sacerdote
todo de estilo gótico. La bóveda de la mártir de este nombre, que murió en Cer-
nave guarda la forma del cañón recto deña. «El Santo cuerpo fué donado por
tan acentuadamente apuntada que su el limo. D. F r a y Ambrosio Martín, Ar-
sección describiría una ojiva equilátera, zobispo de Càller, á D . Juan Grau y
circunstancia de la que recibe él muy Montfalcó, quien con tan excelente pre-
marcada esbeltez. Sostiénenla macizos sente quiso ennoblecer la capilla de sus
arcos transversales, de sección cuadrada, antepasados. Guárdase en una artística
con los ángulos achaflanados; y la ador- urna de madera cubierta de terciopelo
nan en los cabos de sus compartimientos encarnado galoneado de oro... colocada
apocados lunetos; particularidad que, á (en tiempo de los frailes) dentro de la
despecho de la forma o'jival de esta bó- peana que sustentaba la imagen del San-
veda, delata la reciente época, 1732, de to. Es una estatua magnífica por su talla,
su construcción. Las de las capillas guar- y aun más por su dorado y estofado: re-
dan la extricta disposición gótica con presenta á San Felipe, revestido como
cruzados aristones y claves. Sólo en los para decir misa; recomendamos á los in-
arcos transversales y nervios aparecen teligentes las bellísimas pinturas que de-
los sillares de pulida piedra. La altura coran la parte central de la casulla,
total del templo debe calificarse de men- representando cuatro escenas culminan-
guada, de muy sencilla toda la construc- tes de su martirio» (3). El malísimo gusto
ción, y de escasas y apocadas las solas del sencillo retablo mayor y sus chillones
tres ventanas que al interior dan luz. colorines exigen que le ocultemos tras
Decora á las capillas notable profusión del silencio.
de esculturados escudos heráldicos. Lla- Entre el ábside del templo y la muralla
man la atención las dos contiguas al pres- de la ciudad hállase oprimida una corta
biterio, porque habiendo sido prolongadas huerta de las que poseía la casa. Al N.
por su fondo gozan de mucha mayor ca- del mismo ábside y de esta huerta levan-
pacidad que sus hermanas. La del lado tábase el convento compuesto de un piso
de la Epístola, dedicada en tiempo de los bajo y otro alto con su claustro, cuyas
dominicos á la Virgen del Rosario, hoy dimensiones totales se extienden de N.
al Patriarca de Guzmán, «tiene un riquí- á S. á 43 pasos y de E. á O. á 36. Opino
simo altar y camarín, verdadera joya en
su género, dorado todo á costa de gran- (1) D. Fausto de Dalmases. Guía histórico-descriptiva
des dispendios, tanto por la pureza y es- de la ciudad de Cervera. Cervera 1890, pág. 214.
(2) D . Fausto de Dalmases. Obra citada, pág. 214.
pesa capa del precioso metal que le cubre, (3) D. Fausto de Dalmases. Obra citada, lugar citado.
DOMINICOS 45

que en 1835 la casa no tenía edificadas tística obra de apartados siglos. Visité
sus cuatro alas al derredor del claustro, este templo en 24 de junio de 1895, y el
sino sólo la oriental, la septentrional y claustro en 8 de julio de 1899, en cuya
quizá la de O. Arrasados casi por com- última época la Orden dominica, reincor-
pleto los claustros, no puedo describirlos, porada del edificio, reconstruía una de
quedándome de ellos tres solos datos: 1.° las antiguas alas, y con amor de anticua-
las siguientes palabras de Villanueva: rio recogía, y siquiera amontonaba, los
«los claustros son de bastante buen gusto, dichos restos de pasadas edades.
y están llenos de urnas sepulcrales sin Tras del muro de las arriba indicadas
inscripción alguna» (1). 2.° Una fila de ojivas del lado N. del claustro, y en nivel
arcos de la primitiva época ojival, que mucho más bajo, vense los restos del pri-
forman, no la división entre el patio y la mitivo y desahogado templo, los cuales
galería del mismo claustro, sino su pared llevan muy marcado el tipo de los co-
exterior del lado N.; arcos que al decir mienzos del arte ojival. Las ruinas de
de la gente de la ciudad continuaban en este convento, cuando las visité, podían
otras caras del claustro, conteniendo ca- graduarse de museo de antigüedades.
da uno en su seno un sarcófago. Y 3.° los Poseía el convento algunos huertos á
numerosos y típicos restos de construc- él contiguos, é ignoro sus demás bienes.
ciones antiguas que se ven esparcidas «Habitó por algunos días en este con-
por el área de este arrasado claustro. Vi vento S. Vicente Ferrer, convidado para
allí muchos capiteles románicos, fustes predicar en esta villa (ciudad) por sus
de columnas del mismo orden, otros de paheres con cartas que le escribieron á
> sección cuatrilobada muy toscos, sarcó- 10 de junio, 1 de agosto, 9 y 27 de octubre
fagos de piedra góticos con tapa de dos de 1409, las cuales existen en los registros
vertientes y escudos heráldicos, ménsulas del ayuntamiento» (3). Y parece que en
con pulidísimos escudos del mismo gé- una de las estancias del Santo en Cervera
nero, calados ojivales, etc. En el muro gozó de una muy notable aparición del
del lado E. se ve una puerta de los últi- Patriarca deGuzmán(4). «Cuando á los
mos tiempos ojivales, formada de gran- pocos años de su muerte fué Vicente...
des dovelas, filetes, guardapolvo y algu- canonizado se le levantó un altar en la
nas esculturas; y otra gran puerta, de iglesia de este convento, adornado de
arco redondo, de grandes dovelas, con magníficas tablas góticas, representando
una ventana de arco apuntado á cada sucesos diversos de su prodigiosa exis-
lado. Estos datos, unidos á unos traga- tencia. Una de ellas: «San Vicente Ferrer
luces enteramente románicos, una ven- apaciguando los bandos de los Vilare-
tana en losanje y una pequeña cornisa gut y los Centellas, en las calles de Bar-
también románica, que ornan todos el celona», puede admirarse en el Museo
exterior del muro meridional del templo, Nacional de Pinturas: las restantes ig-
me inducen á dudar de la época de la noramos dónde se encuentran» (5).
fundación de esta casa, fijada por Villa- Los autores que tratan de la historia
nueva y otros «á principios del si- de Cervera reseñan los varios hombres
glo xiv» (2), ó á lo menos de que en esta célebres que fueron conventuales de esta
época se levantase el edificio, ya que casa, en cuyo número mentan al Padre
presenta despojos de elementos trabaja- Tomás Ripoll, después General de la Or-
dos en días muy anteriores. De todos den, y del que quedó aquí un retrato; y
modos apena profundamente el espíritu el Padre Francisco Xarrié, renombrado
del visitante contemplar arrasada la ar-

(3) Villanueva. Obra citada. Tomo IX, pág. 24.


<1) Viaje literario. Tomo IX, pág. 24. (4) D. Fausto de Dalmases. Obra citada, págs. 210 y 211.
(2) Obra citada. Tomo IX, págs. 23 y 24. (5) D. Fausto de Dalmases. Obra citada, pág. 211.
96 CAPÍTULO OCTAVO

catedrático moderno de la Universidad, líneas del mismo estilo ojival de la época


y, del que ya hice mención al hablar de la de su apogeo artístico, ó sea del siglo xiv;
Orden en general en el capítulo de Santa y por lo mismo arcos apuntados, bóvedas
Catalina. Añaden que «se han celebrado por arista cruzada con nervios y claves,
en este convento cuatro capítulos pro- ábside semipoligonal, que aquí cuenta
vinciales, uno de ellos con motivo d é l a cinco lados, ventanas rasgadas, pero mo-
erección de nuestra Universidad literaria, dernamente tapiadas, y los demás ador-
El Rey fundó en la misma dos cátedras nos propios de dicho gusto, bien que usa-
perpetuas para estos religiosos: una de dos con sobriedad. Consta de una sola
Teología y otra de Filosofía de la opi- nave, sin crucero, y con tres capillas por
nión tomista» (1). lado, amén de otra bajo el coro. La cual
En 1808 la comunidad constaba de 8 re- nave mide 53 pasos en su total longitud,
ligiosos (2). y 16 de anchura (3).
El retablo mayor muestra proceder de
época muy moderna, probablemente de
ARTÍCULO DÉCIMOOCTAVO principios de mi siglo xix, pues consta en
el piso bajo de la mesa y la gradería en
SANTO DOMINGO, DE SEO DE URGEL el centro, y unos pedestales en cada lado.
E n el alto á cada costado tiene dos gran-
En el extremo NE. de la ciudad, al lado des columnas griegas de orden compues-
de los ábsides de la Catedral, y de ellos to, levantadas sobre los dichos pedestales.
separado por el ancho de una calle, le- En el centro se abre el gran nicho con la
vántase este antiguo convento. estatua del titular, de escultura, de tama-
En 1273 fué fundado por F r a y Pedro de fio natural. En lo alto termina el retablo
la Cadireta, mártir. por la imprescindible grande cornisa con
La lisa fachada, de sillares de piedra friso adornado y dentillones; y sobre de
en parte revocada, ostenta arriba una ella en el centro un remate formado por
ventana circular, y abajo la graciosa un cuadro que ostenta la cifra de María (4).
puerta también de piedra, típica de los Los retablos laterales no merecen es-
tiempos de la transición del orden romá- pecial mención. Están dedicados á Santo
nico al ojival. La disposición de los la- Tomás de Aquino, á Santa Catalina de
dos, ó derrame de ésta, pertenece plena- Sena y á otros bienaventurados predilec-
mente al primero, ya que consta de las tos de la Orden dominicana.
acostumbradas superficies en ángulos en- En los cuales tenían su asiento cinco
trantes y salientes, con las delgadas é cofradías, que para edificación y mejora-
imprescindibles columnitas en aquéllos. miento de la piedad de los fieles sostenían
Por sobre de sus apenachados capiteles los dominicos (5).
corre la cornisa; y el arco que de ella Al lado del Evangelio, adherido al tem-
arranca, formado de toros y filetes con plo, hállase el convento, formando las
un guardapolvo exterior, claramente ma- cuatro alas de un claustro cuadrado, de
nifiesta en su poco acentuada punta de 36 pasos de lado total, ó sea inclusa la
almendra que pertenece al orden ojival. anchura de las galerías. Pertenece al or-
Al lado S. de la fachada se eleva el alto
campanario, sencillo y de planta cua-
(3) Noticias que de la visita practicada por encargo
drada. mío á este templo en diciembre de 1895, me dio mi querido
El interior del templo luce las airosas amigo el Sr. Marqués de Dou. Además yo había visitado
este convento en julio de 1882.
(4) Describo lo que veo en una fotografía de este re-
tablo.
(1) D. Fausto de Dalmases. Obra citada, págs. 212 y 213. (5) Noticias que m e dio un curioso hijo de l a Seo, de
(2) P . Mariano Rais y P . Luis N a v a r r o . Obra citada, nombre D. Ramón Sansa, en muchas conferencias que
página 107. i tuve con ¿1 en esta ciudad de Barcelona.
P U E R T A D E L TEMPLO DE LOS DOMINICOS DE SEO D E U R G E L
CLAUSTRO DE LOS DOMINICOS D E SEO D E U R G E L . — 1 9 0 1
(Fotografía del M. Iltre. Sr. D. Ramón Salvia).
(Fotografia del M. Iltre. Sr. D. Ramón Salvia).
t

DOMINICOS 07

den toscano con ocho arcos por lado,


tanto en el piso bajo cuanto en el alto, ARTICULO DECIMONOVENO
pues ambos (únicos del edificio) poseen
galería. Las bases, fustes, capiteles y ar- COLEGIO DE SAN JAIME, DE PALLAS
cos son de piedra, pero no otras partes (1). «SCHOLA CHRISTU DE TREMP
Mas ya en tiempo de los frailes la-mitad
de la galería superior hallábase tapiada Este convento-colegio fué fundado en el
para formar en su seno la celda prioral año 1590 (6) y edificado en lugar por de-
y otras, que por cierto gozaban la fama más pintoresco. La villa descansa sobre
de ser las mejores de la casa. A la gran elevada meseta, cortada en su lado me-
escalera, que conduce al piso alto, cobija ridional por las aguas del Noguera Pa-
un cimborio de muchas pretensiones (2). llaresa, y en el oriental por las de la
Al pie de los lados E. y N. del edificio profunda riera nombrada Tremp. Estas,
extiéndese su huerta, cercada (3). caminando perpendicularmente á las pri-
Ignoro el número de frailes de esta co- meras, vienen á entregarles su caudal al
munidad. mismo pie de la villa. Antes, empero, es-
Los libros, que, procedentes de este cúrrense allí mismo por debajo de un
convento y del de agustinos, han ido á hermoso puente, edificado por los frailes
engrosar la biblioteca ya numerosa del para unir el convento con la villa. Aun-
palacio episcopal de la Seo, dan testi- que estrecho, yérguese este puente á mu-
monio de la buena que poseía este con- cha altura; es de piedra, muy hermoso y
vento (4). cuenta con un gran ojo central y otro pe-
Al cual tampoco faltaban bienes con queño á cada lado. Junto á este puente,
que atender al culto, manutención de la frente de la villa, del otro lado del ba-
comunidad y limosnas. Así poseía un rranco, estaba asentado en el borde de la
gran campo de más de 30 jornales, tan pendiente de la riera el majestuoso con-
cercano á la ciudad que casi toca con ella; vento. Como la madre del torrente parte
otro campo de regadío situado en el ex- términos entre el de Tremp y el de Ta-
tremo superior de la Armingolassa; otro larn, resulta que el cenobio, con llevar
campo muy extenso, situado junto al Fi- nombre del primero, pertenecía al se-
ral, cerca del Seminario; otro campo y gundo.
una viña, ahora todo viña; otro campo El templo quedaba extendido de N. á
magnífico, llano, de regadío, situado en S., dirigida al Septentrión su fachada
Alas, llamado Campo del Parés de Alas; con el campanario en su lado oriental,
otro campo de secano, conocido por la mientras por S. y O. le rodeaba el con-
Vinya del frare Antón; y otras piezas de vento, que por lo mismo daba sobre el
tierra (5). profundo barranco. Cada celda tenía allí
Actualmente el templo continúa, por su modesta galería, desde la cual podía
suerte, abierto al culto; mientras que el su habitante espaciar regaladamente la
convento alberga la Audiencia de lo cri- vista hacia la villa y el campo, al paso
minal, cárceles y dependencias de jus- que la desigualdad del terreno permitió
ticia. construir debajo del edificio grandes al-
macenes para la recolección de las cose-
chas, y en los ulteriores declives escalo-
nar la huerta, en la que aún hoy se ven
(1) Noticias dadas por el indicado Sr. Marques y señor frutales de los religiosos.
Sansa.
(2) Noticias dadas por los dos mismos señores.
(3) A ú n hoy se ve y puede apreciar.
(6) D. Antonio Mir Casases, en el Álbum liistórich,
(4) Noticias que de estos libros me dio un respetable pintorcsch y monumental de Llcyda y sa provincia.
canónigo de aquella Catedral. Lérida 1880, pág. 301.
(5) Noticias procedentes del nombrado D. Ramón Sansa.
7
TOMO II
98 CAPÍTULO OCTAVO

Derribado hace años el edificio, y me- «P'"°. La viña gran . . 2600 lliuras
jor dicho, con saña arrasado, su inspec- ítem. La Sort de la Ca-
ción actualmente resulta inútil y su des- pella 100 »
cripción imposible. Del templo, empero, » La Viña del Clot
quedan los zócalos, de un metro escaso junt ab la terra-
de altura, de cuya vista resulta que aquél .herma 130 »
medía 36 pasos de longitud por 13 de an- » La viña Espasera. 1850 »
chura, y que contaba seis capillas por » Lo hort de Cerca
lado (1). Relaciones de ancianos enseñan la palanca . . . 205 »
que estaba dedicado á la Virgea de la » La Sort de la Mo-
Buena Suerte, cuya imagen ocupaba el lina 525 »
nicho principal del retablo mayor, y que » La Sort et a de Rech
el campanario terminaba por una cúpula confrontant ab
de azulejos de color. El claustro mereció Piucos 150 »
elogios de los que lo vieron. Atendiendo » La Viña de las da-
á la forma de los zócalos, al año de la mas ab la Costa.
fundación y al testimonio de los viejos, Y la viña de de-
el estilo de esta construcción debió ser el vant lo Convent
greco-romano (2). De todos modos, al de- enjunt. . . . . 1225 »
cir de quien lo habitó, este convento me- » La Sort de davall
recía el dictado de muy bueno (3). del C a m í . . . . 115 »
El templo estaba bien provisto de indu- » La viña de davall
mentos y vasos sagrados, tales como del safretg . . . 625 »
ostensorio, ó sea custodia, globo, cáli- ». La viña dels gos-
ces, etc., siendo de notar entre los postre- sos . . , . . . 300 »
ros dos preciosos, cuyo valor en junto
subía á 900 libras ó sea 480 duros (4). 7825 lliuras»
Asimismo no andaba corto en bienes, (4173 duros, 1 pes., 65 cen.J.
cuya reseña completa hoy es imposible
tejer. Limitaréme en consecuencia á indi- « Y pera que constia ho firmam de
car aquellos cuya noticia brota de alguno mans proprias en Talarn als 8 de
de los documentos por mí registrados, ó Agost de 1800.—Per Anton Asila prom
de las narraciones oídas. He aquí copia y per mí firmo jo Jacinto Camí, prom.—
de un curioso papel que leí original: '¿Los Salari de dits experts 4 lliuras, 10 sous»
infrascrits experts de esta Vila de Ta- (12 pesetas) (5)..
larn havém passat á estimar las térras De un documento también original se
proprias del Convent de Snt Jaume de desprende que todas las viñas del de-
Pallas en virtut de la esquela que acom- rredor del cenobio estaban cercadas de
paña. Y segons nostra pericia las havém paredes (6).
valorat en lo modo següent: En un papel de este convento referente
(1) En mayo de 1897 por encargo mío visitaron estas
á la relación de frutos y rentas, hacedera
ruinas mis queridos amigos é infatigables investigadores para el pago de la contribución impuesta
de la historia patria, los señores D. Francisco C a r r e r a s y á los bienes de la Iglesia en el primer
Candi y D. Joaquín Miret y Sans, quienes me trajeron las
anteriores noticias. tercio del siglo xix, llamada Subsidio
(2) Datos de los mismos señores 3- relación que me eclesiástico, leo: «La renda afecta al sub-
mandó el presbítero Rdo. D. José P r a t s , desde Tremp á sidi es solament aquella que no paga
12 de abril de 1891.
(3) El fraile D. Francisco Soler, en relación que me Real catastro (territorial nombrado hoy).
hizo personalmente en Olot á 30 de agosto de 1883.
(4) Relación ya citada del P . Francisco Soler.—Datos (5) Vi este documento en poder del presbítero de
recogidos de entre los ancianos de Tremp por D. Tomás Tremp, D. Salvador Mir y Casases.
Mir. (6) El mismo documento últimamente citado.
DOMINICOS 99

De consegüent la relació se ha fet dels cada á la instrucción indica que en este


censáis, censos, y de las viñas de cerca colegio, como en todos los de regulares
lo convent; y de la Borda, Miralles y de aquellos tiempos, se daba á los alum-
Castelló ja pagan Real catastro.—Esta nos seculares gratuitamente. Y en ver-
relació se ha fet solament del que té dad que esta casa merecía estimación y
aquest convent en lo Bisbat de Urgell, respeto, pues hasta en sus últimos tiem-
pues en Vich y Girona se paga subsidi pos produjo y tuvo hombres notables,
per lo que tenim en aquells Bisbats» (1). debiéndose contar entre ellos los ya cita-
Relaciones orales me dieron noticia de dos lectores P. Jacinto Clotet, P. Pontí,
una muy grande hacienda situada cerca prior y escritor, y además el P. Tomás
del cenobio, del otro lado del Noguera, Bou, también escritor, el obispo dominico
de la que conjeturo sería alguna de las Sr. Alemany, que fué quien defendió aquí
piezas arriba mentadas con los nombres las postreras conclusiones, el Arzobispo
de Borda, Miralles ó Castelló (2). de Tarragona Sr. Armañá y otros (5).
Las abundantes limosnas que distribuía Por supuesto y sabido es inútil apuntar
esta casa y los cargos improductivos de que el convento poseía buena biblioteca.
sus frailes explican el empleo de tales Me lo aseguró un colegial que cursó en
rentas. Constantemente el convento cos- él (6), cuyo testimonio corrobora el dicho
teaba carne para todos los enfermos de la de un presbítero, en cuya casa se deposi-
villa, al paso que los frailes, ocupados tó gran parte de ella en los días aciagos
unos en regir, otros en enseñar y otros en de la fuga de 1835 (7), y el de un excursio-
servir á maestros y discípulos, no podían nista, diligente investigador de datos
ni predicar, ni acudir á distintos minis- históricos, á quien en modernos días se
terios, que producen justas y debidas re- ha ofrecido en Tremp la compra de res-
muneraciones. La manutención de cada tos de ella (8). Y escribo restos, porque,
colegial corría de cuenta del convento al decir de quien puede saberlo, parte de
que le enviaba al colegio (3). los libros fueron vendidos para envolver
Las asignaturas que enseñaban en él comestibles (9).
eran Lógica y Metafísica, cuyo último En los días de la postrera dispersión la
lector se llamaba P. Jacinto Clotet; Éti- Comunidad se componía de 7 padres, 14
ca, Física é Historia de la Filosofía, últi- coristas ó estudiantes frailes y 3 legos,
mo lector P. Tose Costa; Teología Dog- formando un total de 24 religiosos, dedi-
mática, último lector P. José Santanera; cados al estudio y enseñanza (10).
Escritura y Teología moral, postrer lec-
tor el P. Prior Jaime Pontí. Los cursos
de esta escuela gozaban de valor acadé- ARTÍCULO VIGÉSIMO
mico, ávidamente aprovechado por los
estudiantes de la comarca. Por esto, la- NUESTRA SEÑORA DEL ROSARIO,
mentando un escritor de Tremp la des- DE CIUTADILLA
trucción de este edificio, escribe: «Ni la
consideración de haber recibido en sus Al N. del pueblo, del que dista obra de
aulas generosa y sólida instrucción los un kilómetro, y á un tiro de perdigones
hijos más preclaros de la comarca fué de la moderna carretera que une Mont-
bastante á salvarlo de la piqueta demole-
dora» (4). La expresión «generosa» apli- (5; Relación y a citada del presbítero Sr. P r a t s y otras
fuentes.
(6) Rdo. P. Francisco Soler, ya citado.
(1) Papeles del convento, existentes en poder de dicho (7) Rdo. D. Salvador Mir y Casases, ya citado.
señor presbítero. (8) Señores Miret y C a r r e r r a s , ya citados.
(2) Noticias recogidas por los señores C a r r e r a s y Miret. (9) Relación ya citada de D. José Prats, pbro.
(3) Relación ya citada del P . Francisco Soler. (10) Relación ya citada del colegial de esta casa padre
(4¡ D. Antonio Mir Casases. Obra citada, pág. 299. Francisco Soler.
100 CAPÍTULO OCTAVO

blanch con Tàrrega, hállase recostado mente trabajado. En él descansa sin duda
entre olivares, en la pendiente de humil- el fundador del convento, individuo de la
de sierra, el convento de Nuestra Señora familia de Guimerà, la cual tiene su tum-
del Rosario. Fundólo por los años de ba en el presbiterio con grande losa se-
1582 á 1587 la antigua y noble familia de pulcral en la boca, provista de muy clara
Guimerà, señora del lugar; dato que, laude.
cuando no lo certificara la historia, lo Junto al templo, á su lado oriental, yér-
anunciarían los escudos heráldicos de la gueseel campanario de planta cuadrada,
misma casa, esculpidos en el pulpito del todo de sillería, terminado en alto por una
templo y en los ángulos del convento. barandilla barroca y una techumbre pira-
La fachada (compuesta de la del tem- midal, de apocada altura.
plo al E. y la del convento al O.), aunque El convento, con lucir exteriormente
por las exiguas dimensiones manifiesta muro de sillería, interiormente aparece
las cortas del edificio; sin embargo, por muy pobre y sencillo. Gira alrededor de
los muy pulidos sillares que en todos sus un pequeño claustro cuadrado, de 13 pa-
lados la forman, presenta aspecto de no- sos de lado total, con tres arcos de medio
ble riqueza. La abertura de la anchurosa punto en cada lado, todo de ladrillo sin
y rica puerta del templo termina por un ni siquiera revocar y sin gusto alguno (1).
dintel recto con friso y cornisa, sobre de Sólo tiene galería en el piso bajo, substi-
la cual apoyan directamente y se levan- tuida en el único alto por un balcón p o r .
tan, en el centro una capilla griega con lado.
la Virgen, y en los lados un San Fran- La poca importancia de esta casa pro-
cisco de Asís y una Santa Clara, cobija- dujo sin duda su pobreza en vasos sagra-
dos por sendos doseletes. Obra de un dos, indumentos y biblioteca. Parece que
metro sobre ellos perfora al muro un el buen clima y salubridad de la comarca
hermoso rosetón de unos dos metros de la convertían en casa de convalescència,
diámetro, adornado de calados ojivales. donde pasaban el verano los frailes sali-
El templo mide 20 metros de longitud dos de una enfermedad.
y 12 de anchura en el crucero, luciendo «Las fincas del convento fueron cator-
todos sus muros y bóvedas pulida sillería. - ce, de poca extensión, pero la mayor
Es gótico de los últimos tiempos de este parte regadío y cercanas ó contiguas al
gusto, de una nave, sin capillas laterales, convento, con buen huerto y pozo inte-
pero con crucero, con ábside semipoligo- rior, olivares y una en secano» (2) que
nal de fondo de tres caras, y una pequeña parece era de mucha tenida.
ventana en cada una de ellas. No cuenta • Si el convento era pequeño, no resulta-
más que con tres retablos, á saber: el ba mayor la Comunidad, la que, al decir
mayor, formado de cuatro columnas sa- de un dominico del cercano de San Ma-
lomónicas y cornisas, dorado y muy gín, se componía en sus últimos tiempos
adornado, cuyo nicho principal cobija la de un padre y un lego (3). Y sin duda es-
Virgen del Rosario; el del brazo del cru- tos frailes daban allí buen ejemplo y eran
cero del lado del Evangelio, dedicado á queridos, ya que, después de arrojados de
Santo Domingo, y el del opuesto, cuya
imagen era el Crucifijo y la Virgen Dolo-
rosa. (1) Debo todos los datos descriptivos de este convento,
en primer lugar á la bondad del señor Cura-párroco d¿
El muro del lado del Evangelio del Ciutadilla. Rdo. D. Jerónimo Ribera, en c a r t a de 29 de
presbiterio ostenta á unos tres metros de junio de 1891, y en segundo lugar á mis amigos el señor
Marqués de Dou y D. Francisco Brunet y Recasens, quie
altura un hermoso sarcófago, de piedra nes lo visitaron respectivamente en 1891 y 1896, sacán-
parecida al alabastro de Sarreal, con la dome además el último algunas fotografías de él.
estatua de un caballero armado de punta (2) Citada carta del Rdo. Sr. Ribera.
(3) Relación de D. Damián Vilar, pbro., hecha á mí en
en blanco en su cobertera, todo finísima- T a r r a g o n a á 11 de agosto de 1880.
DOMI: 101

su claustro por el nefasto 1835, uno de hasta 1717, año en que por la creación de
ellos, el P. Gregorio Oliva, quedóse en el la de Cervera se abolieron todas las de
pueblo como adscrito á su parroquia, «y Cataluña (3). Todo curioso notará aquí
á veces sirvió los cargos de este curato, que los colegios y universidades se con-
donde murió» (1). fían á los dominicos, prueba evidente del
El templo, como de sólida edificación, concepto de sabios de que justamente go-
consérvase actualmente algo bien, tenien- zaban.
do sin embargo destruido el adoquinado, De la noticia de tal fundación fluye la
el órgano, la balaustrada del coro y dos re- idea de la forma especial de este edificio,
tablos; pero del convento casi sólo quedan en nada parecido á un convento, sino á
las paredes, pues si bien la galería baja un hospital, y mucho mejor á una casa
del claustro sostiene aún su techo, el piso solariega particular del siglo xvi, que
alto ya lo perdió (2). Así pues, estando esto sería en sus principios. Efectivamen-
este edificio en ruinas, sirve hoy de habi- te, es una casa-palacio de dicha época,
tación á pobres y mendigos. con 28 metros de fachada, dirigida al
Mediodía, toda de rojizos y pulidos silla-
res de piedra; con un piso bajo, un alto y
ARTÍCULO VIGÉSIMOPRIMERO los desvanes, con su salido alero de tejas;
con su gran puerta de prolongadas dove-
CONVENTO-COLEGIO DE SAN MIGUEL las y sobre de ella unos losanjes conte-
Y SAN GABRIEL, DE SOLSONA niendo las insignias de Llovera, es decir,
el lobo y dos eras; con cuatro grandes
El segundo obispo de Solsona, D. Juan ventanas en el primer piso, ajimezadas ó
Alvaro, cisterciense, procuró la funda- sea partidas por una columnita central, y
ción en esta ciudad de un convento de terminadas por arquitos trilobados, bien
dominicos en el edificio del hospital lla- que en tiempos posteriores transforma-
mado d'en Llobera, nombre que sin duda das en balcones; con escalera exterior
provenía del fundador de este caritativo que conduce á las cuadras subterráneas,
establecimiento. Administrándolo el muy también de pulida piedra; con bóvedas
litre. Sr. D. Joaquín de Setalí, caballero apuntadas, y con la huerta, sin duda anti-
de Montesa, y D. Juan de Villalba, el guo jardín, extendido frente de esta fa-
nombado señor Obispo, de acuerdo con chada, y provisto de gran zafareche ó
ellos, impetró de Paulo V una bula, fecha depósito de agua, igualmente formado de
á 11 de las calendas de diciembre de 1614, pulidos sillares de piedra.
por la que se convierte el hospital en co- Si el exterior del edificio muestra una
legio de dominicos, donde se enseñe Filo- casa-palacio de los tiempos postreros del
sofía, Teología y otras ciencias. En 5 de orden ojival, no lo indica menos su inte-
septiembre de 1615 los P P . José Osach y rior. Su corto corredor de ingreso viene
Cipriano Mustí, en nombre del provincial, adornado de dos pilares por lado, en los
tomaron posesión del colegio. Su primer que apoyan sendos arcos góticos rebaja-
colegial fué el corista Francisco Roca, dos. Su pequeño patio central, ó zaguán,
después obispo de Solsona. En 1620 se es casi cuadrado, de 9 metros de lado,
obtuvo del mismo Paulo V que erigiese todo de piedra pulida, sin galería en el
este colegio en Universidad literaria con piso bajo, pero con hermosa galería de
poder para conferir grados en todas las delgadas columnitas en el alto. Ésta tiene
facultades, la cual Universidad subsistió arcos ojivales en cada lado. La galería des-

(1) Carta citada del Rdo. Sr. Cura-párroco Ribera. (3) L a s antecedentes noticias proceden de un episcopo-
(2) Noticias del dicho Sr. Cura-párroco y del citado logio solsonense manuscrito, custodiado en el archivo
D. Francisco Brunet. episcopal de Solsona.
102 CAPÍTULO OCTAVO

cansa sobre graciosas cartelas. El lado E., | ras, todo del mejor gusto, que está dedi-
en lugar de galería, ostenta la típica esca- ; cada al Santo Doctor de Aquino (1). Hoy
lera, con una fuente á su pie, y á su mitad i esta casa es Seminario Conciliar.
de ella un pilar que sustenta la puerta del La Comunidad de esta casa, además de
piso, y en alto dos arcos que vienen á la huerta contigua al convento, poseíalos
unirse con las galerías de N. y S. No fal- bienes siguientes:
tan sobre algunos de los arcos de esta 1.° Una viña cercana al Paseo del
galería las mentadas insignias del lobo y Camp, en la partida de San Pedro Mártir.
las eras. Agrada este edificio por la gra- 2.° Una cabana, llamada del Gelí, en
cia de sus líneas ojivales y la sobriedad ' la partida de San Honorato.
de adornos. De tal modo lleva impresa 3.° Otra cabana, llamada dels frares,
la fisonomía de las viviendas de los poten- en la misma partida de San Honorato. Y
tados de la Edad Media, que el leído en 4.° Unos campos cerca del cemen-
historia, al penetrar en este patio, cree I terio.
aún ver allí al fatigado caballero armado Existen dudas sobre si poseían otra he-
de punta en blanco, apeándose de su cor- | redad, cuyo nombre por lo mismo omi-
cel al pie de la escalera, mientras corren ! to (2). En Solsona se da el apellido de
los escuderos y pajes á tener el estribo, | cabanas á unas casitas situadas en las
y las antes ansiosas damas asoman en la i viñas de la redonda de la ciudad, las cua-
galería para ahora gozosas saludarle. I les casitas tienen unidas á sí, á su derre-
El templo es una ala de edificio eviden- dor, cinco ó seis jornales de tierra cada
temente añadido en el siglo xvn al dorso i una.
ó cara N. del antiguo palacio. Corre de Poblaba esta casa una Comunidad de 5
O. á E. La puerta, que da, pues, á Ponien- i padres, ó lo más 6, con los legos corres-
te, hállase adornada de una anta floreada pondientes. Aquéllos estaban dedicados
en cada lado y un frontón triangular, á la enseñanza completamente gratuita,
cortado en su ángulo superior por una : hasta para los no religiosos, ds la Filoso-
capillita que contiene el escudo de Santo I fía y Teología, á la predicación y al con-
Domingo. En el friso ó dintel se lee: «Por- fesonario, bien que más á la dicha ense-
tae inferí non prevalebunt adversus ñanza que á estos ministerios. Se les
eam,» y en los capiteles de las antas: confiaban los sermones de más empeño,
«Anno 1641.» El interior del templo mide y sus penitentes y dirigidos pertenecían
21'50 metros por 5'50. Tiene una sola á las clases más ilustradas (3), nueva con-
nave, dos nichos por lado, no capillas, firmación del concepto de sabios con que
para altares, bóvedas divididas en com- el mundo justamente honraba á los domi-
partimientos adornados de graneles lune- nicos.
tos en los cabos, y con esto queda indi-
cado su gusto de pleno Renacimiento.
Posee, á pesar de lo dicho, una capilla en (1) Al describir estos edificios escribo lo que por mis
ojos examiné el dia 23 de junio de 1897.
el lado del Evangelio, próxima al presbi- (2) Noticias recogidas de los ancianos de Solsona.
terio, hermosa, cuadrada, con ábside y (3) Noticias que de ancianos fidedignos recogió en Sol-
sona y me transmitió el señor Canónigo D. Celestino Ribe-
con cúpula exagonal adornada de moldu- ra, cuya bondad agradezco.

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