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Contenido.

Contenido.

Sinopsis.

Playlist

Dedicatoria.

Advertencia.

Capítulo 1.

Capítulo 2.

Capítulo 3.

Capítulo 4.

Capítulo 5.

Capítulo 6.

Capítulo 7.

Capítulo 8.

Capítulo 9.

Capítulo 10.

Capítulo 11.

2
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Capítulo 12.

Capítulo 13.

Capítulo 14.

Capítulo 15.

Capítulo 16.

Capítulo 17.

Capítulo 18.

Capítulo 19.

Capítulo 20.

Capítulo 21.

Capítulo 22.

Capítulo 23.

Capítulo 24.

Capítulo 25.

Capítulo 26.

Capítulo 27.

Capítulo 28.

Capítulo 29.

Capítulo 30

3
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Capítulo 31.

Capítulo 32.

Capítulo 33.

Capítulo 34.

Capítulo 35.

Capítulo 36.

Nota del Staff.

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Sinopsis.
Toda bruja sabe que no debes usar hechizos para vengarte.
A Blair no le importa mucho el bien y el mal, pero ya está
en el radar del consejo. ¿Cuál es la mejor manera mortal de
vengarse de un ex novio infiel?

Hechizando a su padre, por supuesto.

Se suponía que Dax era una retribución, pero resulta ser

mucho más. Se siente atraída por él de una manera que nunca
antes había sentido por un hombre, pero está claro que Dax es
mucho más que el hombre promedio. Hay un misterio para él, y
ella está decidida a descifrarlo.

Con múltiples entidades sobrenaturales respirándole en el

cuello y su necesidad de evitar la ira del consejo, Blair está
desesperada por conseguir todo lo que quiere. Podría tomar más
de lo que está dispuesta a dar para desenredarse de las mentiras
y el caos que ha creado.

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Playlist
I hope you're miserable until your dead – Nessa Barrett
Step Mom – Catie Turner
Breakfast – Dove Cameron
I Did Something Bad – Taylor Swift
Bad Girls – M.I.A.
Rhiannon – Fleetwood Mac
Look What You Made Me Do – Taylor Swift
Bad Child – Tones And I
Dark Horse – Katy Perry, Juicy J
Voodoo – Godsmack
Smack a Bitch – Rico Nasty
Guys My Age – Hey Violet
Blood In The Cut – K.Flay
W.I.T.C.H - Devon Cole
Problem – Natalia Kills
Enemy – Imagine Dragons, JID, Arcane, League of Legends
G Walkin' on Yo Coffin – Lil Boodang
Magic – Coldplay
Bad Things – Jace Everett
What's New – Megan Thee Stallion
Hotter Than Hell – Dua Lipa

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 ●

Dedicatoria.

Para mis pequeñas perras

PD: Ryan, me alegro de que nunca hayamos follado. Hiciste una
canción cruda sobre mi nombre, así que nombré a un villano en
tu honor *emoji con el dedo medio*

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Advertencia.
Tenga en cuenta que este libro es más oscuro que mis otros
trabajos.
Para obtener una lista completa de
torceduras/tropos/desencadenantes, visite mi sitio web en
autoresarahblue.com/content-warnings/
Si no te gusta el término papá, esta es tu advertencia para dar la
vuelta ahora.

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Capítulo 1.
Blair.
Mi prima Stevie abre la tapa de la coctelera mientras
mezcla la última bebida que quiere agregar al menú. Ella vierte
el líquido en una copa de martini y la desliza sobre la barra de
obsidiana y abrocha el tallo de la copa entre dos dedos.
—¿Cómo se llama este?
—Poción de amor número 9, —dice entre risas. Pongo los
ojos en blanco y tomó un sorbo. Sabe a mierda.
Farfulló un poco mientras trato de averiguar qué puso en el
cóctel. Es un color rosado-rojizo y lo sostengo a la luz.
—¿Qué diablos hiciste?
—Jugo de granada, vodka de durazno, granadina y jugo de
naranja.
—Cambia el jugo de granada por otra cosa, —le digo, y ella
gime, pero vuelve a la mesa de dibujo.

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 ●

—Estás de humor… bueno, más de humor que de

costumbre, —dice Stevie.
Stevie es todo lo que yo no soy. Ella ama la vida del
aquelarre y se lleva bien con todos. Sus atuendos siempre están
llenos de color, usa faldas largas y vaporosas y extrañas pinzas en
su cabello. Ella es más o menos la bruja por excelencia, y bueno,
yo no. Si no fuera mi prima, probablemente pensaría que está
siendo falsa, pero la conozco mejor que nadie y hechicería a
cualquier alma que intentara lastimarla
—Es Ryan. —Yo suspiro. Sintiéndome como una de esas
chicas que garabatea la inicial de un chico en un diario. Yo no
soy esa chica. En todo caso, estoy escribiendo su nombre en un
diario para llevar un registro de las personas que necesitan un
buen envenenamiento o impotencia eréctil.
—No lo entiendo, Blair. ¿Por qué sigues saliendo con él?
—Su magia —digo con un suspiro.
—Te refieres a su firma mágica. Tú y yo sabemos que es un
exsul.
Sé que tiene razón. He hecho varios hechizos para averiguar
qué es. Desafortunadamente,es un simple humano con magia
latente en su sangre. Probablemente, sus padres o sus familiares
tienen magia. Pero para Ryan, su magia está latente, haciéndolo
completamente ordinario.
No puedo decirle que soy una bruja si no es parte de la
comunidad sobrenatural.
—Es como si pudiera sentir su magia queriendo conectarse
con la mía. Como cada vez que follamos, está burbujeando hacia
la superficie, pero no puede salir.
Stevie hace una mueca.
—Esa no es una imagen que necesitaba en mi cabeza tan
temprano en la mañana.
—¿Quieres una imagen peor? —Algo que pensé que nunca
diría. —Estoy tan cansado de superarlo todo el tiempo.

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 ●

Stevie escupe su bebida y no puede evitar descontrolarse

reír.
—Blair, tienes que romper con él. Realmente no te gusta y
sigues fingiendo ser alguien que no eres cerca de él. Tengo que
decir que es bastante patético tratar de verte jugar, a la señorita
bonita alrededor de él.
Mi boca se abre.
—Stevie, tienes suerte de que te amo o te encantaría tu ropa
con algo de encogimiento, así que pensarías que estás ganando
peso.
—Eso es simplemente malvado. —Nunca lastimaría a Stevie;
ella sabe que es mi suave lugar. Stevie es mi persona segura, y
debe ser protegido a toda costa.
Se desliza sobre el nuevo cóctel y tomó un sorbo.
—Esto es mucho mejor. Agrégalo al menú. ¿Está Heather
imprimiendo los nuevos menús para esta noche?
—Sí, dijo que volvería alrededor de las tres.
—Bien, me encontraré con Ryan para almorzar, pero
regresaré mucho antes de la cena.
—No te olvides de la reunión a medianoche, con luna llena
y todo.
Gimo y me siento en el taburete.
—¿Realmente tengo que ir?
—Te has perdido los dos últimos y estás en libertad
condicional. No puedes arriesgarte. Son nuestro aquelarre. Sabes
que tenemos que hacer nuestros rituales para mantener el
aquelarre con fuerza.
El consejo gobierna a todas las brujas del mundo. Su trabajo
es asegurarse de que no tenemos otra situación o complot contra
el aquelarre de Salem entre manos de meterse en problemas.
Como el andar con humanos, es un delito, pero hasta ahorita
solo tenía algunas represalias, como no poder usar magia, pero si
me meto más en problemas con ellos, podrían potencialmente

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 ●

encarcelarme, restringir mi magia aún más o intentar

quitármela completamente. Sin embargo, nunca dejaría que eso
sucediera. tendrían que matarme primero.
—¿Quieres decir que esos cabrones quieren tirar de mi poder
para mantener el aquelarre fuerte? ¿Por qué debería hacer eso,
Stevie?
—Sabes que no es tan simple. La tía Josie perderá su mierda
si no lo haces. —dice, dándome sus grandes ojos azules
suplicantes.
—A la mierda mi mamá. Puede que no venga solo para
fastidiarla. Escojo mis largas uñas mate oscuras. Si mi mamá
quiere que venga al idiota del círculo de luna llena, voy a
necesitar ser incentivado. No sería tan malo si no me trataran
como si fuera una paria.
—Blair, eres tan terca. Por favor, solo ven. ¿Por favor?
—Bien, pero solo para ti, Stevie. Si mi mamá dice una cosa
sobre cómo estoy usando mi magia, estoy fuera.
Stevie me da una enorme y radiante sonrisa. Ella es la
única persona en nuestro aquelarre que realmente me importa.
El resto de ellos son un montón de personas abrazando a los
lunáticos que se acercan demasiado al lado de los
despreocupados. Nosotros tenemos magia, somos seres mágicos.
Las brujas no deberían desperdiciar nuestro poder en círculos de
baile alrededor de un fuego y plantas de fresas en crecimiento.
Deberíamos usarlo en beneficio de nuestra especie, y bueno,
nuestro propio beneficio personal.
Soy la única bruja en nuestro aquelarre que tiene un
ingreso estable. Entre mi restaurante, Hex, y una serie de
inversiones fortuitas, soy la única manteniendo el aquelarre a
flote. Todos quieren vivir en el bosque haciendo agua de luna y
mierdas, mientras vivo aquí en el mundo real haciendo nuestras
vidas posible. Está bien. Lo menos que podrían hacer es dejar de
burlarse de mis métodos.

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 ●

¿Follé y hechice a varios tipos de finanzas para llegar a

donde estoy hoy?
Seguro.
¿Merecían perder sus propias acciones y bonos en el proceso?
Indudablemente.
No elegiría a un hombre humano que no lo mereciera.
—Me aseguraré de que todo sea perfecto. Ve a almorzar,
rompe con el perdedor y vuelve para que podamos animarnos a
estar solteros juntos de nuevo.
Soltero.
La palabra sabe espesa en mi lengua. No es que necesite
estar en una relación.
Solo necesito a alguien.
Stevie es prácticamente mi único amigo, y es bueno tener a
alguien que le gusta pasar tiempo conmigo. Todo mi aquelarre
me odia. Todos en mi restaurante piensan que soy una perra. Es
agradable tener a alguien que realmente disfruta pasar tiempo
conmigo, o al menos la versión de mí que está con él. Agarro mi
bolso de la parte superior de la barra y le doy a Stevie una
sonrisa tensa.

Ryan es agente de bienes raíces y tiene varias presentaciones

hoy, así que llegó primero al café y lo espero. Puedo hacer esto,
¿verdad?
No hay futuro aquí, él es completamente humano con
magia latente, y bueno, soy yo.
—Oye, hermosa, —escucho detrás de mí y veo a Ryan
vestido con un traje azul marino, tan guapo como siempre. Tiene
cabello oscuro, ojos azules y hoyuelos profundos que he lamido
en bastantes ocasiones.

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 ●

—Oye, tú.
—¿Cómo va todo en Hex?
—Bien. Stevie está preparando un montón de cócteles
nuevos a medida que nos acercamos a la Víspera de Todos los
Santos. He sido su probador de sabor. —hago una mueca
—Dios, tienes la nariz más linda. —Se inclina y besa mi
nariz, antes de que tome asiento a mi lado. Me siento como una
colegiala cuando se trata de Ryan. Es aún más patético porque es
cuatro años menor que yo. Él no tiene sentido, nunca antes
había sido tan descerebrado por un chico.
—¿Cómo te fue en tus jornadas de puertas abiertas?
—Genial, debería tener una oferta para el final de la
semana. —Él saca su teléfono y mira algo antes de mirarme y
darme su sonrisa encantadora. Te juro que no sé cómo es un
exsul. Seguramente, debería ser una sirena de algún tipo.
Me sonrojo, y me odio por eso. Odio no ser realmente yo
misma con él. Bueno, excepto en el dormitorio. A Ryan le gusta
que lo dominen, pero no le gusta devolver el favor. No ayuda que
no pueda usar ninguna magia en el dormitorio, tampoco.
—Eso es genial, así que um, estaba pensando...
—Oh, antes de que menciones nada. Mi papá acaba de
mudarse a la ciudad y las cenas con él son incómodas en el mejor
de los casos. ¿Te importaría venir conmigo mañana por la noche?
¿Quiere que conozca a su padre? Nunca he conocido a la
familia de un compañero antes.
¿De verdad le gusto tanto?
—Por supuesto. Me encantaría conocer a tu padre.
—Dices eso ahora, pero él es un poco idiota.
—Mencionaste que no estaba mucho por aquí.
—Él siempre enviaba dinero y regalos de cumpleaños y esas
cosas, pero siempre parecía que fuera era una decepción para él.
No estoy seguro de cómo un niño podría ser una decepción, pero

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 ●

así es como siempre se sintió. Al menos mi mamá y mi padrastro

son geniales.
—¿Viven en Arizona?
—Sí, así que no los veo mucho. —Él agarra mi mano y la
sostiene a través de la mesa. El toque es tan domesticado y dulce,
no puedo romper con él. Podemos seguir con esto un poco más.
¿Qué es lo peor que podría pasar?
—¿Cuál es el nombre de tu papá?
—Dax. Ni siquiera estoy seguro de dónde vivía antes, pero
dijo que se quedaría en la ciudad durante unos meses y quería
verme.
—¿Quieres verlo?
—Tal vez. Quiero decir, no veo que nos convirtamos en
mejores amigos, pero creo que darle una oportunidad no es
malo. Le sonrío y él me devuelve la sonrisa. Se inclina sobre la
mesa y deposita un suave beso en mis labios.
—¿Cuáles fueron tus noticias, Blair?
Me aclaro la garganta.
—Solo me preguntaba si escuchaste acerca de la Fiesta de
Halloween en la ciudad.
—Sí, parece divertido. Sin embargo, falta un mes entero.
—Claro, solo quería ver si planeabas ir.
—Probablemente, sería un buen momento para repartir
tarjetas de presentación y ver quién quiere alistar su casa.
—Asiento con la cabeza y la camarera trae nuestros sándwiches
y bebidas.
—¿Necesitas algo más? —pregunta, solo mirando a Ryan.
Ella toca su hombro antes de que ella se dé la vuelta, y no puedo
evitarlo cuando susurro inter.
La camarera tropieza con el aire y yo jadeo con fingida
sorpresa, su bandeja de las aguas resuenan en tierra con ella.
—¿Estás bien? —Ryan le pregunta, siendo demasiado
jodidamente agradable.

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Se quita el polvo y mira al suelo, preguntándose en qué se

ha tropezado. Frunce el ceño y se aleja, dejando las aguas heladas
en el piso.
—Pobrecita —dice Ryan, y contengo el poner los ojos en
blanco, mira hacía abajo.
—Cariño, necesito ser breve. Tengo un cierre y hay que
llegar. Odio cuando me llama cariño. No soy dulce.
Pero no he hecho nada para demostrar que no lo soy,
¿verdad? Coloca dos billetes de veinte en la mesa y besa un lado
de mi cabeza mientras toma su comida para llevar.
—Te llamaré esta noche con los detalles para la cena con mi
papá.
—Suena bien, —le digo mientras se aleja. Tomó un sorbo de
mi café mientras la camarera vuelve a salir y comienza a limpiar
el desorden de antes.
—Lo siento mucho por esto, —dice, y pongo los ojos en
blanco.
—Perdón por tocar a mi novio o perdón por hacer un lío de
ti misma? —pregunto, y ella me mira boquiabierta con los ojos
muy abiertos. pongo otros veinte sobre la mesa, porque siempre
debes dar propina a tu mesero pase lo que pase.
—Ser cuidadosa la próxima vez. —Le digo mientras me
pongo mis gafas de sol negras y caminó hacia mi auto.
Mientras camino por el camino de adoquines, el ruido de
un motor me distrae. Veo como una gran figura conduce una
motocicleta por el sauce de las calles bordeadas. Deben ser
indicios de la firma de Ryan que se aferran a mí desde solo estar
cerca de él, pero te juro que es como si me hubieran salpicado en
la cara con agua fría con las notas mágicas que estoy recogiendo.
Niego con la cabeza y continuo con mi caminata hacía mi coche.

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Capítulo 2.
Dax.
Esto es el Infierno... literalmente.
Las reuniones en el Infierno son monótonas y tienden a
arrastrar por lo que se siente como una eternidad. Pensarías que
estamos en una sala de conferencias como en Hilton y no en las
ardientes profundidades de la desesperación. Las paredes son
blanquecinas, hay una larga mesa de obsidiana en el medio de la
habitación con varios sillones de orejas de cuero para que los
invitados se sienten. Lilith se sienta en la esquina, su cabello
rubio recogido en una coleta alta mientras toma notas. ¿Lucifer
realmente necesita notas de las reuniones?
Milcom también está presente, su ejecutor de clases. Me
pregunto por qué está aquí y no en la Tierra buscando al
demonio.
Lucifer se sienta a la cabecera de la mesa. Asiente con la
cabeza a modo de saludo para ambos de nosotros y comienza la

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 ●

reunión. Probablemente pensarías en Satanás como un gran ser

malvado, pero estarías equivocado. En realidad es bastante guapo
y encantador. En lo que respecta a los jefes, podrías hacerlo peor.
La vida en el infierno no es terrible, pero vivir libremente
entre los mortales es mucho más divertido. Pero los demonios
necesitan reglas, o de lo contrario habría un caos total.
Mi trabajo es asegurarme de que se sigan estas reglas.
Miro al otro lado de la mesa a Asmodeus. Es un capullo tan
pomposo. Él está dentro de su forma humana, como lo estoy yo.
Ambos fuimos bendecidos por el mismo Satanás para tener
formas mortales corpóreas que no envejecen. Es bueno no tener
que poseer algunos pobres hijos de puta cuando estamos del lado
de la tierra. Mientras se ve como una fraternidad idiota de la
universidad, mi traje de carne es uno que exige respeto. Estoy tan
atrapado en mis pensamientos sobre tener un compañero para
esta misión, ni siquiera escuché la pregunta que Lucifer acaba de
hacer.
—Sí, mi señor, he estado esparciendo mi semilla por todas
partes, el plan para darte muchos demonios con inclinaciones
mágicas, —arrulla Asmodeus. Maldito besa el culo. Y totalmente
lleno de mierda. No estoy seguro de dónde lo consiguió Lucifer.
—En su mente que necesitábamos intentar crear demonios
medianos. Pero por lo que sé, nunca se ha hecho con éxito. Todos
son tristemente humanos sin magia para sostenerlos.
—¿Y tú, Daxaddon? —Odio mi nombre completo, pero
cuando Satanás te llama por él, tú respondes.
—Mi progenie no ha demostrado tener ninguna habilidad,
—digo.
—Es una pena. De cualquier manera, como su descendencia,
estoy seguro de que se unirá a nosotros en el Infierno de una
forma u otra. ¿Planeas volver a intentarlo o tus misiones te
mantienen demasiado ocupado?

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—Lo que ordenes, mi señor, —respondo e inclinó la cabeza

como el pequeño demonio obediente soy.
—Muy bien. Con el aumento de la población de demonios
en la Tierra, es importante que mantengamos un nivel de decoro.
Lo último que necesito son más problemas con los ángeles o las
brujas otra vez, —se queja Lucifer. Su condición de ángel caído
siempre ha sido un punto doloroso para él. —¿Qué estamos
haciendo con la cantidad estúpida de posesiones? pregunta
Lucifer.
—Estamos trabajando para capturar a los demonios que
están destruyendo las mentes de los mortales durante sus
posesiones.
—Sí, te los devolveremos, mi Señor, —dice Asmodeus, con
una sobreabundancia de confianza. Todavía no hemos podido
encontrar al demonio que va saltando de cuerpo a cuerpo
derritiendo los cerebros de cada mortal que poseen.
—Necesitamos el precedente de que se sancionen las
posesiones, pero sólo en la manera adecuada. Poseer, usar, borrar,
—dice Lucifer. Milcom repicando un gruñido de acuerdo es el
único ruido que hace en toda la reunión. ¿Por qué está aquí?
—Sí, mi Señor, —Asmodeus y yo decimos en sincronía.
—Tenemos inteligencia de que el demonio que estamos
buscando podría estar en Reliquias Profundas, —dice Asmodeus.
Lo fulmino con la mirada porque no compartió esta
información conmigo antes de la reunión. Sabe lo que hay en
Reliquias Profundas, lo que yo no he podido ver rostro. Mi
conciencia culpable, algo que ni siquiera sabía que tenía, me ha
estado pesando últimamente.
—Muy bien. Si no tienen éxito en esta misión, considérense
ambos de vuelta al deber de cría.
Asmodeus sonríe, claramente no es lo correcto para
amenazarlo. Justo lo que la tierra necesita, un montón de

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 ●

engendros demoníacos corriendo por ahí que parecen como esta

mierda engreída.
Lucifer asiente con la cabeza y sale del espacio de reunión
junto con una alegre Lilith y un Milcom deprimido.
Junto mis dedos sobre la mesa. Ahora que el jefe ha salido
de la habitación, puedo abandonar el acto.
—¿Por qué diablos no me dijiste sobre la inteligencia en las
Reliquias Profundas?
—¿Qué pasa, Dax? ¿Preocupado por encontrarte con tu
desove?
—Sabes que ese lugar está inundado de seres sobrenaturales.
No podemos simplemente rodar allá arriba sin ser detectado.
—Como si eso hubiera sido un problema antes, —se burla,
hurgando en sus uñas. Su cabello rubio chisporrotea con zarcillos
de humo, su demonio de la sombra interior quiere salir a la
superficie.
—Tenemos que jugar así de inteligente. Sé que no te
importa dejar embarazadas a un montón de mortales, pero
preferiría no hacerlo.
—Qué demonio tan conservador, Dax. ¿Qué haremos
contigo?
—Con suerte, después de esta misión, déjarme en paz para
no tener que mirar tu cara fea de nuevo.
—Oh, Dax, deja de fingir que no estamos a medio camino de
trenzarnos el cabello uno al otro y hacer pulseras de la amistad.
—Asmodeo se ríe mientras abre los portales del infierno sin saber
adónde va.
Gimo y me rasco la barba. Aquí no hay nada.

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Las Reliquias Profundas.

Cuando dejé la pequeña ciudad costera soñolienta, que
parece un destino de vacaciones perfecto es en realidad el centro
de cada ser sobrenatural que puedas imaginar. Brujas, hombres
lobo, vampiros, golems, demonios y ángeles Cualquier jodida cosa
no mortal que se te ocurra, vive aquí.
Me tiene nervioso mientras conduzco mi motocicleta por las
calles de un solo carril. He 'alquilado' un pequeño bungalow para
quedarme mientras estoy en la ciudad. Por alquilado, significaba
alojamiento y comida gratis exigidos de los inquilinos o de lo
contrario sus almas estarían ligadas a la mía por la eternidad.
Estúpidos cabrones ni siquiera se dieron cuenta de que no era un
demonio de la encrucijada.
Es un apartamento de dos dormitorios, a dos cuadras de la
playa. Quería dos dormitorios en caso de que Asmodeus decida
ayudar en este caso, casi puedo garantizar que me dejara hacer
todo el trabajo mientras jode, literalmente, probablemente
impregnando cualquier cosa que lo deje entre sus piernas.
Conjuro mi dispositivo móvil humano que rara vez uso y
decido enfrentarme frente a frente. Siendo un completo idiota,
sigo la ruta de los mensajes de texto.
Yo: Ryan, soy Dax. Estoy en el pueblo. ¿Te gustaría
encontrarnos para la cena?
Ryan: Ah, claro. Traeré a mi novia.
Una novia es buena, una barrera de terceros a la naturaleza
incómoda de la cena será lo mejor. Preferiría que no trajera a
Janet, su madre. Aunque yo sigo pensando que la mujer que
consiguió el trato de su vida. No podía simplemente fecundar a
una mujer mortal y dejarla con mi heredero. Tuve que hacer un
trato por uno, y eso es exactamente lo que hice con Janet. Ella
sabía entrar en nuestro arreglo, es que su hijo podría ser medio
demonio. Pero Janet no podía tener hijos y no estaba casada. Si
ella me diera un hijo, le prometí, que ella podría criarlo y

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 ●

encontraría el amor de su vida dentro de un año. Lo que ella

hizo, me hizo hacer un trato secundario con otro caballero que
estaba desesperado por amar. Todavía no significa que quiera
tener algo que ver con ella, sin embargo.
Me tomó años darme cuenta de que descargar mi decepción
en un niño estaba equivocado. Lidiar con todo esto de tener
conciencia es nuevo, y realmente no me gusta una mierda. Pero
me gustaría hacer las cosas bien con Ryan. La forma en que lo he
tratado como si fuera menos no está bien, incluso si es un
humano débil. También es por eso que no quiero ser parte de la
creación de descendencia demoníaca más abandonada. ¿Cómo
podemos seguir creando criaturas que son tan frágiles y con
vidas que duran un abrir y cerrar de ojos?. Si yo pudiera volver
al pasado, nunca hubiera engendrado un hijo. No cometería el
error de nuevo.
Probablemente debería dejar de llamar a Ryan un error en
mi cabeza.
Yo: Genial, ¿mañana suena bien?
Ryan: Claro. Te enviaré un mensaje de texto con el
lugar.
Yo: Está bien.
Dejó el teléfono móvil y saco mis archivos sobre el demonio
que ha me ha estado eludiendo durante meses. Lo que están
haciendo está jodido, incluso para estándares demoníacos. Esto es
algo que bordea la crueldad total. Ellos poseen un nuevo ser
humano cada tres o cuatro semanas. Las posesiones parecen
estándar, la mente del mortal está apagada y en segundo plano.
A veces tienen alguna idea de lo que está pasando con su
cuerpo, pero por lo general, están más en un éxtasis.
Las posesiones pueden ir de varias maneras: sin problemas,
cuando el demonio avanza y el mortal no recuerda el tiempo que
ha pasado o horriblemente, por lo general cuando un demonio

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 ●

abusa tanto del cuerpo del mortal que una vez que salen de la
forma mortal, el humano muere inmediatamente.
O lo que este demonio está haciendo, que es la destrucción
completa. Están mezclando la mente poseída así que tanto que
cuando el demonio se mueve, el recipiente está en un estado
constante de miedo y locura.
De las siete posesiones, una de ellas asesinó a toda su
familia, otro se quitó la vida, dos de ellos están en un asilo para
criminales y los otros tres han estado desaparecidos desde la
posesión. Lo más probable es que hayan fallecido.
Tenemos algunos sospechosos, demonios conocidos vagando
por el reino, no hay pistas reales. La pregunta más importante es:
¿por qué siguen en formas en movimiento? Si encuentran un
recipiente mortal en el que puedan prosperar, ¿por qué seguir
poseyendo repetidamente?
Hay un crujido y sé de inmediato que es de Asmodeus en el
portal. Ni siquiera llama a la puerta, simplemente entra.
—Por favor, dime que no volverás a pasar el cursor sobre ese
archivo. Es hora de tener algo divertido. Pasamos demasiado
tiempo en el infierno. Vamos a comer algunas delicias mortales.
Gimo, pero estoy de acuerdo. Me vendría bien un descanso.
Ha pasado un tiempo desde que he disfrutado de los placeres que
esta dimensión tiene para ofrecer.
—Conozco el lugar perfecto, e incluso podríamos obtener
algo de información. —Dice, y yo arqueo una ceja hacia él. Han
pasado años desde que volví a esta ciudad, pero no mucho ha
cambiado.

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El establecimiento se llama Hex, y automáticamente sé que

una bruja es dueña del bar. Lo cual es sorprendente.
La mayoría de las brujas con las que me he cruzado son
jodidamente raras. A ellos les gusta permanecer en sus grupos en
el bosque adorando a sus diosas. Para la mayoría, no les presto
atención. Se apegan a sí mismos y se mantienen lejos de los
demonios.
La mitad del lugar está acondicionado como una taberna o
un bar. Con recuerdos mágicos recubriendo las paredes. La parte
superior de la barra es elegante y negra. Me recuerda a la mesa
de reuniones de Satanás. La parte posterior de la barra está
diseñada para parecerse a un laboratorio de alquimia.
con diferentes licores disfrazados de pociones. El resto del
restaurante está listo, con mesas y sillas de madera. El ambiente
destinado a hacerte sentir como si estuvieras en la casa de una
bruja.
Una mujer demasiado emocionada aparece en el bar.
Claramente una bruja, se ve alegre y como ella abraza a los
árboles en su tiempo libre. Pelo rojo largo hacia abajo con pinzas
de mariposa
—¿Qué puedo ofrecerles, caballeros? —ella pregunta,
dándole a Asmodeus una sonrisa.
—Buen amor. ¿Qué me recomienda? —él pide.
Su voz es alegre. Demasiado alegre. ¿Por qué estas brujas
siempre son tan jodidamente felices?
—Bueno, yo soy el mixólogo aquí. ¿Qué tipo de cócteles te
gustan?
—Tart, me gustan con un poco de mordisco.
—Oh, bueno, deberías probar la poción de amor número 9.
La acabo de crear esta mañana.
—¿Suena encantador, Dax? —Me da un codazo.
La bruja me mira y sus ojos se abren como platos. Ella mira
una puerta detrás de ella y luego enfría su rostro, mirándome.

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¿Puede ella percibir lo que nosotros somos? Por lo general, las

brujas tienen algún sentido de otra magia, pero no
específicamente demonios.
Miro el menú.
—Tendré un ojo de tritón.
—Gran elección, ya vuelvo, —chilla mientras se da vuelta
para hacer nuestras bebidas.
Asmodeus mira fijamente su trasero y se frota el labio
inferior.
—¿Qué opinas?, ¿la tasa de éxito es para una descendencia
mágica si ambos padres tienen su propia magia?
—Cállate la boca, Asmo.
—Solo digo que tiene que aumentar las posibilidades de
crear algo.
—Toda esta mierda del programa de reproducción es
repugnante.
—Dice el pequeño demonio triste con el niño no mágico.
—Tú tampoco tienes hijos mágicos, imbécil.
—Todavía no, —responde. Pongo los ojos en blanco mientras
la bruja del jardín nos desliza los cócteles.
—Gracias, —le digo y Asmodeus intenta entablar una
conversación con ella.
—Vuelvo enseguida, —dice, mientras se agacha debajo de la
barra. La sigo con mi mirada mientras se acerca a la criatura
más impresionante que he visto.
No puedo sentir sus poderes desde aquí, pero no hay duda
en mi mente de que ella es una bruja Ella tiene la piel pálida,
cabello negro que está ligeramente fuera de control alrededor de
su cara, grandes ojos de gacela y una boca en forma de corazón.
Vistiendo una falda a cuadros negra que muestra sus
tatuajes negros y grises en sus muslos. Su blusa también es negra
y ajustada alrededor de sus senos. Puedo ver otro tatuaje que
sobresale de la manga de su camisa.

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Ambas brujas me miran con los ojos muy abiertos antes de

ir a la parte de atrás.
—¿Qué carajo? —dice Asmodeo. —¿Crees que saben lo que
somos?
—Tal vez, pero la bruja detrás de la barra parecía bastante
amigable contigo.
Sonríe.
—Ella lo hizo, ¿no?
Tomó un sorbo de mi bebida. Otros clientes están de pie
junto a la barra, demorándose para bebidas y esperando con
impaciencia.
—¿Qué diablos? ¿Dónde está Stevie? He estado esperando por
diez putos minutos.
—Blair, ¿qué clase de mierda es esta?. —Otro gime.
De repente, ambas mujeres se doblan debajo del poste de la
barra y detrás de la barra. La del pelo oscuro es fogosa, todo lo
contrario a la bruja atendiendo el bar antes.
—¿Qué diablos quieres, Lionel? —ella le pregunta al cliente
y yo observo la caída de la mandíbula de Asmodeus.
—Una maldita bebida, es por eso que estoy parado en este
bar, —el hombre que ahora sabe cómo responde Lionel.
La bruja bonita le sonríe, y juro que puedo ver sus ojos
volverse color rojo. De repente, el taburete de Lionel se rompe y
cae al suelo. Su culo golpeando el suelo duro mientras gime.
—No importa, quiero ese en su lugar, —susurra Asmodeus
en mi oído, y me pongo rígido.
—¿Te importaría hacer un trato? —digo con confianza.
Sus ojos brillan cuando enciende su taburete.
—Quien embolsa a la bruja obtiene el derecho de
fanfarronear cuando capturamos a este hijo de puta, —dice
Asmodeus.
—Trato. —Nos damos la mano y el humo gris se entrelaza
entre nuestras manos entrelazadas, sellando nuestro trato.

26
 ●

La bruja de cabello oscuro se mueve de su lugar en el bar.

ella me da una sonrisa afectada. Ella tiene la marca de belleza
más linda sobre su labio y una luna creciente en su collar
alrededor de su garganta que quiero agarrar. Si bien es hermosa,
casi parece que ha estado llorando o gritando por lo sonrojadas
que están sus mejillas.
—¿Qué puedo traerles, muchachos? —pregunta con una voz
áspera que dispara directamente a mi verga. Tomo mi bebida
para poder pedir algo nuevo.

27
 ●

Capítulo 3.
4 horas antes…

Blair.
Cuando regresé a Hex después de reunirme con Ryan, fui a
casa y cambié algo más mi estilo. Palmeo la falda oscura y pienso
en cómo no debo cambiar mi forma de vestir cuando me
encuentre con él, ¿Qué tan ridículo es eso? En verdad, quiero
darme una bofetada por darme cuenta de cómo
Cuánto me cambio para adaptarme a lo que creo que quiere
Ryan. ¿Qué debería importarme?
¿Qué piensa el humano de mí? Entonces recuerdo sus besos
en la nariz y el hecho de que me compro flores la semana pasada.
Nunca nadie ha sido tan cariñoso conmigo, y nunca me di
cuenta de que era algo que anhelaba desesperadamente.
Patético, Blair.
Soy una de las brujas más poderosas que conozco, y soy un
charco poco profundo para este hombre blanco básico. ¿Cuándo
diablos se convirtió esto en mi vida? Sin embargo, heme aquí,

28
 ●

brillando como una colegiala por el hecho de que quiere que

conozca a su padre.
Al abrir la puerta de Hex, me saluda la sonrisa radiante de
mi primo.
—¿Lo has hecho?
—No, él quiere que conozca a su papá, —le digo. Dejando
caer mi bolso y girando mi dedo, indicándole a Stevie que me
haga una bebida.
—¡Blair! Termina con él. Te está convirtiendo en alguien que
no eres. Sé que crees que anhelas su firma y sé que te sientes
atraído por él. Pero, ¿vale la pena su afecto, si no te conoce
realmente?
—Solo necesito algo de tiempo —digo.
—Bueno, ¿qué sabes sobre su padre?
—Nada, excepto que no tienen una buena relación.
Stevie se estremece.
—¿Crees que te acaba de invitar a hacer las cosas menos
extrañas? —Me sonrojo y miro hacia la parte superior de la
barra.
—No sé.
—Bueno, ¿tiene alguna foto de su papá? ¿Sabes su nombre?
Saco mi teléfono y me desplazo por el Facebook de Ryan.
tengo que ir muy atrás en algunos de sus álbumes, como si no
me sintiera lo suficientemente patética. Hay algunas fotos de su
graduación de secundaria y sacó hacia arriba. Reconozco a su
mamá y su padrastro. Tiene fotos de ellos en su hogar. El hombre
que no reconozco es increíblemente atractivo. Pensé que Ryan era
guapo, pero su padre es el hombre más atractivo que he visto en
mi vida.
Stevie me arrebata el teléfono.
—Santa madre, el papá del chico malo es jodidamente
caliente.

29
 ●

Tomo mi teléfono y miro la imagen. Su padre, Dax, lleva

puesta una chaqueta de cuero y jeans. Su cabello oscuro está
recogido hacia atrás y hay algunas motas de gris en el costado.
Tiene los mismos hoyuelos que Ryan. El se ve como pasa mucho
tiempo al sol y veo los tatuajes en sus dedos.
—Esto tiene que ser como hace seis años. De ninguna
manera él todavía está tan caliente.
—Nunca sabes. Oye, tal vez sea su padre mágico, y tú
puedes mejorarlo, —bromea Stevie.
Cállate, Stevie.
Ella levanta las manos en fingida rendición. Gimo y me
levanto de la barra.
—Necesito registrar algunos recibos. Estaré en la parte de
atrás por unas horas hasta la apertura.
—Está bien, no lo olvides. Yo, tú, círculo de brujas bajo la
luna llena esta noche.
Me quejo de las brujas engreídas, pero asiento con la cabeza.
Camino a la oficina trasera y tomó asiento en mi escritorio,
cerrando mi bolso en mi cajón de abajo mientras busco nuestras
finanzas. Esta es la parte que más odio sobre ser dueño de un
negocio. Tengo la mitad de la idea de encantar a algunos
perdedores financieros para hacer este trabajo para mí. Todo lo
que se necesita son algunas sugerencias aquí y allá y son como
masilla en tus manos. La mayoría de las brujas en mi aquelarre
usan pociones. Pero tengo algunos hechizos que cautivan más a
la gente por caprichos. Realmente no es una mala idea.
Las cosas no se han estado sumando últimamente, y no sé si
es algo que estoy haciendo mal o si alguien me está robando.
Siento como mi cabeza va a explotar en cuanto ingrese todos los
gastos del último licor y orden perecedero.
Mi teléfono suena dos veces y sonrió al ver que es el nombre
de Ryan. Él dijo que me enviaría un mensaje de texto sobre la
cena con su padre, y eso es lo que estoy completamente segura de

30
 ●

ver en los mensajes de texto. Pero en cambio veo dos voces muy
largas notas
Ryan rara vez envía notas de voz, pero me encojo de
hombros y presiono reproducir de todos modos, preparada para
la conversación que estoy a punto de escuchar.
—Vamos, Trébol. Solo conozco a un Clover. —Ella está en
mi aquelarre.
—¿Sabes lo mucho que he querido follarte? Te ves tan dulce.
—¿Pensé que estabas saliendo con Blair? —dice trébol.
—Tenemos citas, pero en serio no saldría con una chica
como Blair. Ella es el tipo de chica con la que te follas hasta que
encuentras una mujer con la que valga la pena casarte.
—¿Alguien como yo?
—Sí, alguien dulce e inocente como tú. No una perra gótica
aspirante.
Estoy hirviendo, pero dejo que comience el siguiente
memorándum.
—Ella es una gran perra. Me sorprendió que estuvieras
saliendo, —dijo Clover molesta.
—Como dije, nena, ella no es la que quiero. Quiero tu dulce
y apretado coño. No una puta acabada. Escucho un movimiento
de ropa y papel siendo arrugado, antes de que Clover gima en voz
alta sobre la grabación.
Sabiendo que las grabaciones desaparecerán, grabo mi
pantalla y me siento a través, escuchándolos de nuevo.
Puedo sentir el humo saliendo de mis palmas, y no puedo
evitarlo cuando dejo salir un fuerte grito, la única forma que
conozco para dejar salir esta ira y el despliegue de magia dentro
de mí. Mi magia vibra bajo mis venas, necesitando liberarse. Hace
que las paredes tiemblen, y Stevie no tarda mucho en entrar
corriendo por la puerta. Mis mejillas se sienten calientes, pero no
lloraré por el bastardo.

31
 ●

—¡Blair! —Stevie grita mientras abre la puerta. Estoy

paseando por la pequeña oficina, pateando cajas de leche y
abriendo los puños. —¿Qué ocurre?
Le entrego mi teléfono y ella se ve confundida por un
momento antes de presionar reproducir.
—Santa mierda, —susurra, y yo asiento. —Blair, tus iris son
rojos. Necesitas recuperar tu glamour.
Dejó escapar un sonido gutural de mi garganta mientras
trato de concentrarme. Esto siempre sucede cuando no puedo
controlar mis emociones. Por lo general, soy capaz de sostener el
glamour en mis ojos sin pensar en ello. Cambian de color con mis
emociones, y eso no es algo que quiero que la gente vea,
sobrenatural o no.
—Voy a maldecirlo tan jodidamente fuerte, Stevie. Para que
nadie nunca más lo amará, que se quedará calvo, que su pene
nunca se ponga duro de nuevo. Le voy a dar tan mal la espalda
que no puede ni dormir sobre su espalda nunca más. Voy a
hechizarlo hasta la saciedad, que cada vez que tiene orine, salga
un poco y tenga siempre los pantalones orinados. Voy a hacer
que odie el día en que alguna vez pensó en usarme como esto.
Todavía estoy paseando, tratando de calmarme.
—No puedes hacer eso, Blair, —dice Stevie en voz baja.
—¿Y por qué diablos no? Él se lo merece.
—Estoy de acuerdo, se lo merece. ¿Pero ya estás en lo que
golpea con el consejo por intervenir con los humanos? Ella se
encoge de hombros, y sé que está bien. Estoy a solo una
infracción de un tribunal con el consejo. Si la jodo enormemente
de nuevo, el consejo podría encarcelarme, o algo peor.
Tiro de los mechones de mi cabello. No se van a enterar
digo, tratando de razonar con ella.
Dijiste lo mismo sobre el corredor de bolsa.
No puedo evitarlo cuando gritó de nuevo. Tiene que pagar,
Stevie. ¡Él me hizo lucir como una tonta enamorada!.

32
 ●

Ella hace un gesto de silencio con sus manos y trato de

respirar uniformemente de nuevo.
—Lo sé, Blair. ¿Tal vez podamos pensar en algunas formas
humanas de joderlo? Mientras no uses tu magia, no hay nada
que el consejo pueda hacer.
—¿Qué? ¿Como un asesinato? —preguntó, todavía hirviendo.
—Eso es extremo. Quizá algún roce de neumáticos. Tal vez
joder con sus casas abiertas. No sé.
—Tiene que lastimarlo de verdad, Stevie. Necesito que se
sienta tan mal como yo escuchando esos mensajes.
—Entonces tendremos que encontrar una manera de hacer
que duela. Te quedas atrás aquí por la noche. Yo me ocuparé del
frente de la casa.
Asiento y continúo mi paseo. Necesito canalizar esta magia
en alguna parte.
Está burbujeando dentro de mí, y si no encuentro alguna
salida para ello, va a estallar en el momento equivocado.
Por mucho que lo intento, no puedo concentrarme en hacer
más contabilidad para Hex. Planear mi venganza contra Clover,
en su lugar. Como es sobrenatural, está abierta toda la maldita
temporada. Claro, ella puede llevarme ante el consejo. Pero
mientras yo no le haga daño de verdad, debería estar limpio. Los
pensamientos de su muerte siguen manteniéndome nivelado y no
haciendo explotar este edificio por venganza.
Tal vez podría hacer que su coño sepa a cloroformo, para
que Ryan nunca lo llame dulce otra vez. O mejor aún, que sea
cloroformo, para que pase entre sus piernas. Tanto para el coño
dulce e inocente.
O podría maldecir mágicamente toda su ropa para tener
'perra traidora' bordada en ellos. Realmente, las posibilidades son
infinitas.
Los dos la van a pagar.

33
 ●

Debo estar de vuelta aquí cocinándome durante horas

cuando Stevie irrumpe en mi oficina con los ojos muy abiertos
—No vas a creerlo, joder.
—¿Qué? —Yo digo.
—El padre de Ryan está aquí y se ve jodidamente sexy.
—¿Y? No planeo encontrarme con él nunca más. —Le doy la
mano para que se vaya.
—Blair, ¿querías una forma no mágica de joder a Ryan? A la
mierda ser su novia, conviértete en su madrastra y dale un hijo
que realmente ame.
Una sonrisa maliciosa se apodera de mi rostro y miro a mi
inocente prima.
—Stevie, no pensé que tuvieras este tipo de maldad dentro
de ti.
—No voy a dejar que ese imbécil te haga daño, Blair.
Además, su padre es como, muy, muy caliente. Ven y velo por ti
mismo.
Hago un vistazo en el espejo, empujando mis tetas hacia
arriba en mi camisa negra y haciendo lo mejor que puedo con mi
cara. Alboroto mi salvaje cabello oscuro mientras Stevie me
arrastra junto a la barra. Se me hace agua la boca cuando miro
al hombre sentado en el bar. Ryan fue simplemente un intento
débil de crear al hombre hermoso en frente de mí.
Mi mirada con los ojos del padre de Ryan termina
abruptamente cuando Lionel se queja sobre sus bebidas. Mi
fusible ya estaba corto cuando deletreé la pata de su taburete
para que se rompiera y se cayera al suelo.
Giro y sonrió al padre de Ryan y su acompañante.
—¿Qué puedo traerles, muchachos? —Ambos me sonríen con
avidez y me doy cuenta que esta va a ser la trama de venganza
más satisfactoria que podría haber imaginado
—Difícilmente diría que somos niños, amor, —dice su
amigo.

34
 ●

Ahora que estoy cerca, puedo ver lo verdes que son los ojos
del padre de Ryan y luego me golpea como una pared de ladrillo
mágica. Su magia es fuerte. se siente como una fogata
abrazándome alrededor de mis extremidades. Mis ojos se
ensanchan y me mira fijamente.
Me aclaro la garganta.
—No, definitivamente hombres. ¿Qué puedo conseguirles?
Dax bebe su vaso vacío y se estremece.
—No esa maldita bebida de nuevo.
—¿Whisky? Asiento con la cabeza y me doy la vuelta,
deseando haberme subido la falda más alta. Astutamente dejó
caer una pajilla y me inclinó para recogerla, con la esperanza de
que él observara el movimiento.
Le sirvo dos dedos de whisky en un vaso bajo, me giro y se
lo entregó. Nuestros dedos se tocan y le juró a Hécate que siento
electricidad. Mi frente se arquea casi como una pregunta para él.
¿Qué carajo eres?
—No te he visto aquí antes. ¿Viaja por negocios?
—Pregunto.
—Somos detectives, trabajando en un caso, —dice su amigo,
y el padre de Ryan pone los ojos en blanco.
—Oh, interesante. ¿Es un caso popular?
—No, lo siento, confidencial, —dice el joven rubio.
—No pareces lo suficientemente mayor para ser detective,
—le digo, arqueando una ceja.
—Me halagas. Te prometo que soy mayor de lo que parezco.
—De seguro es mayor. Eso lo puedo asegurar. —Le da un
codazo en el hombro y puedo ver la irritación en su rostro.
—Bueno, este es mi lugar. Es probablemente el mejor lugar
para comer en la ciudad además de Lucia 's, el lugar italiano al
final de la calle.
—Anotado, —dice el hombre rubio con una sonrisa.
—¿Cómo te llamas, hermosa?

35
 ●

Pongo los ojos en blanco.

—Blair, ¿y el tuyo?
—Soy Asmo y este es Dax.
—Dax, —repito y miro la cara del hombre. Maldición, él es
tan caliente. Sus ojos verdes brillan con potencia, sus hoyuelos se
hacen más profundos cuando me da una sonrisa de comercial.
—¿Puedo invitarte a una bebida, Blair? —Dax pregunta con
su voz profunda y retumbante. No se sii es solo humano, no hay
manera en el infierno.
—Soy una chica tequilera.
—Tu mejor tequila entonces, —dice, y yo sonrío.
—¿Ustedes dos también quieren tragos? —Ambos asienten y
yo agarro el tequila y tiro los anteojos.
Lionel decide ponerse alborotador de nuevo.
—¿Qué diablos, Blair? Los chicos bonitos obtienen bebidas
gratis y ni siquiera puedo pagar para que me sirvan.
Murmuró un silentium rápido y la boca de Lionel
rápidamente deja de moverse. Sé que es descuidado usar tanta
magia con clientes humanos, pero realmente no me importa, ha
sido un mal día. Lionel es un hombre lobo odioso que necesita un
bozal, o aprender modales.
—Aprende algunos jodidos modales, Lionel, y tal vez te
sirvan. —Lo fulmino con la mirada cuando vuelvo a servir
nuestros tragos.
—Me encanta una mujer directa, —dice Asmo.
—No va a suceder. Puedes dejar de coquetear conmigo —le
digo, y su rostro se arruga.
—¿Qué, y quieres a este viejo bastardo? —dice, señalando a
Dax.
Le entregó a Dax y Asmo sus tragos y le sonrío a Dax antes
de disparar de vuelta el tequila.
—Sí, —digo, inclinándome sobre la parte superior de la
barra más cerca de Dax.

36
 ●

Capítulo 4.
Dax.
No es una bruja ordinaria. Cuando ella dispara su tequila y
da una sonrisa radiante, puedo sentir su magia. es casi como la
mía llamándola. Es algo que nunca había sentido antes.
No duele que le haya dicho a Asmo que se vaya a la mierda,
o silenciado al hombre lobo al final de la barra. ¿No necesita salir
de aquí, de todos modos? Es casi Luna llena. Ella es directa,
confiada y por lo que puedo sentir de ella poderes
extremadamente poderosos. Una combinación que cualquier
demonio buscaría en una mujer.
—Entonces, Dax, —dice mi nombre como si estuviera
probando el sabor en su lengua. Me gusta eso. Parece tener
veintitantos años, pero las brujas pueden ser engañosas. Ella
podría estar en sus cientos.

37
 ●

—Blair —digo su nombre en respuesta. Le queda bien. no

puedo imaginar a alguien llamado Blair que no es poderosa.
Pongo mi mano en mi mejilla, mi codo en la mesa. Sé que a las
mujeres les encantan mis hoyuelos, así que le doy una mirada
coqueta, sonríe mientras responde.
—¿Eres detective? —ella pregunta, y sé que no le creyó a
Asmo cuando lo dijo para empezar.
—En un sentido.
Traza mis tatuajes en los dedos que dicen Odio por un lado
y Amor por el otro. —No conozco muchos detectives que tengan
tatuajes como estos. —Su tacto me tiene tambaleándome, pero lo
mantengo bajo control. Asmo nos está mirando, haciendo
pucheros mientras mira.
—¿Importa lo que soy? —Pregunto.
—No tienes idea de lo mucho que importa, —dice en voz
baja. Se abre la puerta principal del restaurante y Blair maldice.
—Disculpa un momento. Me olvidé de la banda que tocará esta
noche.
Ella me da una última mirada, una advertencia para que
no vaya a ninguna parte. Como si lo planea. Observó mientras se
aleja con su falda corta y no puedo evitar imaginarme
deslizando mis dedos hacia arriba y provocándola hasta que pida
liberación.
Asmodeus se aclara la garganta a mi lado.
—Bueno, esto es un maldito busto de noche.
—¿Qué pasa con la bruja feliz? —Le pregunto, dándole una
sonrisa.
—Nadie es tan feliz, no es natural, —dice, poniendo los ojos
en blanco. Ondula su mano hacia la pelirroja para llamar su
atención. —Amor, ¿puedo conseguir otro
whisky, por favor?
—Por supuesto. —Ella se anima y comienza a servirle otra
bebida. Giro mi taburete y veo cómo Blair ayuda al hombre y a

38
 ●

la mujer a montar su escenario. Él tarda más de lo que me

gustaría. Quiero hablar más con ella, a ver cuánto tiempo toma
hasta que pueda llevarla a casa conmigo.
Mentiría si dijera que no he estado con mi parte justa de
mortales, pero además del hecho de que ella es una bruja, nunca
me había sentido tan atraído por alguien alguna vez. Lo que soy
me hace ser sexual por naturaleza, pero esto es lo más fuerte que
he sentido. Incluso si nuestra magia no estaba tratando de
unirnos, su apariencia y el comportamiento lo harían por mí.
quiero una mujer que me desafíe pero también me deja
desafiarla. No he estado tan emocionado sobre algo desde que
obtuve mi cuerpo corpóreo. Un cuerpo que Blair parece ser
atraído. Para un simple mortal, buscamos tener una diferencia de
edad significativa. Mi forma humana me envejece alrededor de
los cuarenta y cinco, Blair parece estar en su último momento de
los veinte
La pareja toca una canción. El hombre toca su guitarra
mientras la mujer canta. Es un ruido de fondo agradable, pero no
tan fuerte como para que no puedas mantener una conversación.
Blair les sonríe y parece genuino. Ella parece tener múltiples
lados de su personalidad, todos los cuales estoy ansioso por
obtener familiarizado con Blair viene y se para entre mis piernas,
es una cosita diminuta. Se inclina sobre la barra, y creo que me
va a tocar, pero luego tira de vuelta un cóctel que le ha servido
su compañero de trabajo. Ella toma un sorbo y vuelve a colocar
la bebida en la parte superior de la barra. Pequeña burla.
Ella se apoya en mi costado, sin tocarme, pero para que
pueda escucharla cuando ella habla
—¿Cuánto tiempo estarás en la ciudad?
—Al menos unas pocas semanas. ¿Alguna sugerencia sobre
la ciudad?
—Oh, definitivamente puedo pensar en algunas cosas.

39
 ●

Mi mano está en la curva de su cintura. La suave tela negra

de su camisa se frota contra la punta de mis dedos. Ojalá
estuviera tocando su piel. Nunca he sentido esta energía
magnética para tocar a alguien como yo lo hago con ella. Tiró
un poco más cerca para que su cadera se empuje contra mi
pierna. Observó el ascenso y caída de sus pechos mientras respira
más pesadamente, pero parece calmarse y derretirse contra mi
toque.
—Estoy abierto a todos y a cualquier sugerencia.
—Está la playa, por supuesto, y hay muchas rutas de
senderismo. La fiesta de Halloween se acerca.
—¿Qué sucede en este festival?
—Te disfrazas, hay comida, juegos, premios.
—¿Y quieres ir?
—Me encanta disfrazarme, me encanta jugar a fingir,
—dice, con los ojos brillantes como profundos estanques de miel.
—¿Qué te gusta hacer?
¿Qué me gusta?
—Me gusta mi moto, el whisky y poder relajarme.
—¿Te gusta bailar? —pregunta, agarrando mi mano y
tirando de mí hacia la pista de baile, sin siquiera darme la
oportunidad de responder.
La banda toca su versión de Rhiannon de Fleetwood Mac, y
yo no puedo evitar reírme. Blair audazmente pone sus manos
alrededor de mi cuello y juega con mi pelo. Pongo una mano en
su cintura y la otra en la parte de atrás, empujándola más cerca
de mí. Estamos casi al ras uno contra el otro, es cálida y suave
ella es, y tengo que detener todos los pensamientos de diferentes
maneras en que podría colocar su cuerpo contra el mío.
Sus ojos parpadean de color rosa por un momento hasta que
vuelven a su color marrón miel. Nunca antes había conocido a
una bruja con esa habilidad y quiero preguntarle sobre eso pero
no estoy seguro de si debo revelar que sé que es una bruja o no.

40
 ●

Él podría llevarla a cuestionar lo que soy, y lo último que quiero

hacer es asustarla.
Una de sus manos se desliza hacia mi pecho contra la suave
textura de la camisa a cuadros que estoy usando. Ella me mira y
sonríe antes de moverla alrededor de mi cuello.
Lionel arruina nuestro momento tocando a Blair en el
hombro y señalando su boca. Blair me mira con los ojos muy
abiertos, pero susurra por debajo de su aliento. Hace que Lionel
se vaya y ella se encoge de hombros.
—¿Cuál es su problema?
—Tiene problemas de conducta. Algo así como un perro sin
entrenar, —dice ella.
—Mmm, pero el mal comportamiento puede ser divertido de
vez en cuando.
Ella se inclina más cerca de mí.
—Estoy de acuerdo. Demasiada gente piensa en términos de
negro y blanco y no todos los tonos de gris intermedios.
—¿Qué tono de gris serías, Blair?
—En un buen día, peltre, en un mal día, carbón.
—¿Qué tipo de día fue hoy?
—Era un día de carbón... hasta que entraste en mi bar.
—¿Cómo puedo hacerlo mejor? —le pregunto.
Ella tira de mí hacia abajo por mi cuello cuando nuestros
labios se tocan, es un beso mas tranquilo del que estaba esperado
de ella. Tampoco esperaba la forma en que mi magia me llevaría
a hacerlo más profundo. Sus labios son suaves, no usa la lengua,
pero es suficiente para hacerme querer más. Quiero devorarla. El
gemido se escapa mientras ella se separa del beso, jadeando y
mirándome.
Sus ojos son brillantes y confundidos y parpadean de color
púrpura antes de volver a la fase anterior marrón. Ella frunce el
ceño, pero todavía me sostiene alrededor de mi cuello.
—¿Qué vas a hacer?

41
 ●

Me inclinó para susurrarle al oído.

—Supongo que solo vas a necesitar esperar y descubrirlo,
pequeña bruja. —No pude evitarlo. Tal vez el misterio de quién o
qué soy la mantendrá lo suficientemente intrigada como para
querer verme otra vez, o incluso déjarme llevarla a casa esta
noche.
—¿Puedes volver a decirlo? —pregunta ella, confundida.
Empujo un mechón de su cabello detrás de su oído y ella se
inclina hacia el tacto.
—Pude sentirlo tan pronto como me miraste a través de la
barra.
—¿Qué acabas de decir? —ella pregunta de nuevo, como si
estuviera dispuesto a poner todo en la mesa. La gente no confía
en los demonios, con razón. Lo último que quiero hacer es alejar
a esta feroz bruja cuando la acabo de encontrar.
—A su debido tiempo, —le digo. Caminamos de regreso a la
barra y sacó un taburete ella. La bruja pelirroja coloca dos
bebidas para nosotros en la parte superior de la barra mientras
Asmo intenta hablarme. Mi atención está en otra parte mientras
veo a Blair deletrear mi bebida.
Por lo que puedo decir, no es un hechizo dañino, así que
actúo como si no viera nada. La bruja es tortuosa, y me gusta.
Cualquier diversión que esté planeando tener conmigo, lo
permitiré. Si ella cree que necesito una poción de actuación, está
equivocada. En el momento en que me deje tenerla, no se
levantará de la cama por días. Estoy un poco emocionado de
sentir el efecto de cualquier hechizo que haya lanzado sobre mí.
Da un sorbo a su bebida y puedo decir que está sumida en
sus pensamientos. Blair es curiosa, y me pregunto cuánto de este
tirón está sintiendo en su extremo. Colocó una mano
tranquilizadora en su espalda y se me ocurre que vive en el
mundo actual y probablemente sigue muchas costumbres
mortales.

42
 ●

Le entrego mi teléfono.
—¿Tu número? —Pregunto con confianza, sonríe y pone su
número en mi teléfono.
—Estoy ocupado mañana por la noche, ¿pero tal vez podría
hacer algo esta noche?
—Ella está ocupada esta noche, —dice la pelirroja de la
nada. Tal vez debería tomarme el tiempo para recordar su
nombre. Ella mira su teléfono.
—Blair, tenemos que irnos en veinte minutos.
Blair gime y me mira, como si estuviera tratando de resolver
un rompecabezas.
—¿Qué harás mañana en la noche?
—Conociendo a un viejo amigo. —Es mentira, pero no la
conozco lo suficiente como para contarle todos mis negocios. Ella
asiente y toma un sorbo. —Tal vez ¿después?
—Planea algo memorable y podría considerar una cita
contigo, —dice. Me provoca, colocando su pequeña mano en mi
muslo. No puedo evitarlo, es difícil con ella.
Me inclino y le susurro al oído.
—Será mejor que dejes de molestarme, pequeña bruja, o te
atrapo y me salgo con la mía en el callejón.
Ella susurra su réplica rápidamente.
—Ahí es donde te equivocas, Dax. Será salirme con la mía
contigo. —Ella besa mi mejilla mientras gira del taburete y se
dirige a la oficina trasera con su compañera bruja. Algunos otros
empleados todavía estamos aquí y me imagino que nos van a
echar pronto por hora de cierre
Asmo se queja a mi lado.
—Necesitamos encontrar un mejor bar.
—Oh, estás triste porque ninguna de las brujas bonitas
quería follarte.
—¡Ey! Yo tampoco veo que te acuestes —dice de vuelta.
Pongo los ojos en blanco.

43
 ●

—La anticipación y la preparación son la mitad de la

diversión. Especialmente con una mujer como ella.
—Bastardo con suerte, apuesto a que le gustan las cosas
desagradables.
—Solo podemos esperar. —Chocamos nuestras copas cuando
las mujeres vienen a decir adiós.
—Heather cerrará el bar pronto, pero supongo que te veré
por aquí, —Blair dice jugueteando con su bolso, y es la primera
vez que no la veo como la bruja exigente y segura de sí misma.
No me gusta. La tiró cerca, mi mano en su cintura.
—Te veré antes de lo que piensas. Dulces sueños, Blair. —si
solo ella supiera lo que intento decir.
—Buenas noches, Dax. Nos separamos y las dos brujas salen
del restaurante
Mi vida se volvió mucho más interesante de lo que
imaginaba que sería cuando regresé a la Ciudad de las Reliquias.
—¿Vas a sacar tu polla y masturbarte sobre esta barra
pegajosa, o vamos a ir a casa y trabajar en este caso?
—Alguien es un mal perdedor.
—Vete a la mierda, Dax.
Colocó una cantidad considerable de dinero en efectivo en
la parte superior de la barra mientras Asmo y yo salimos
por la entrada trasera y ambos nos dirigimos al pequeño
bungalow que estamos "alquilando".

44
 ●

Capítulo 5.
Blair.
—¿Qué le hiciste a su bebida? —Stevie pregunta mientras
salimos de Hex.
La noche es fresca pero la luna brilla intensamente en el
cielo oscuro. Hace que mi estómago se revuelva. No quiero ir a
esto en absoluto, lo último que necesito es lidiar con miradas
sucias y susurros de mi aquelarre, o de mi madre, cumplidos
ambiguos no impresionados.
—Solo algo para mantenerme fresco en su mente. —Dax
podría haberme dicho que tuviera dulces sueños, pero creo que él
tendrá muchos de sus propios sueños.
—No creo que vayas a tener ningún problema con eso.
Estaba follándote con los ojos toda la noche. Me pidió tu número.
—No puedo evitar ruborizarme y Stevie me señala la cara.
—Hablar de Ryan nunca te hizo ruborizar

45
 ●

—Acabo de conocerlo, Stevie. No digo que no voy a disfrutar

de la seducción, pero eso es todo lo que es, venganza.
—Sí, claro, Blair, —dice, poniendo los ojos en blanco
mientras ambos nos subimos a mi Jeep.
—Vi que tus ojos se volvían rosados.
—Cállate la boca, no, no lo hiciste.
—Claro que sí. Es posible que puedas mentirte a ti mismo,
pero no a mí, querida prima.
Me burlo, pero ella no está muy lejos. Nunca sentí la
conexión instantánea como con Dax esta noche. Es preocupante,
es demasiado conveniente y fácil. Él no ayuda a que sea muy
guapo y realmente agradable. También parece excitarme un poco
con mi enfoque directo.
—No dejaré que llegue tan lejos. Lo usaré para vengarme y
seguir adelante.
—UH Huh. Lo que tú digas, Blair.
—De todos modos, tenemos un problema mayor entre
manos. —Conduzco rápido por la parte de atrás mientras nos
dirigimos a la ceremonia.
—¿Qué es eso?
—Esa capullo de Clover va a estar en este idiota del círculo
mágico.
—Bueno, si le dices que sabes que se acostó con Ryan, lo
hará público y tu venganza no será tan fuerte. ¿Cuál es tu plan
con él, de todos modos?
—Humillación pública, —respondo inexpresivo.
—¿Y Trébol?
Tengo algunas ideas. Stevie gime a mi lado.
—Por favor, por el amor de Hécate, no arruines la
ceremonia esta noche.
—Sin promesas.

46
 ●

Se tarda casi una hora en llegar a la abertura en el bosque

donde se encuentra el aquelarre, tiene nuestro ritual mensual
para mantener fuerte nuestra magia. Está protegido así que los
hombres lobo no se acercarán al ritual. Esta ceremonia es todo
un montón de mierda. Nunca he participado y sentí una oleada
de poder, si cualquier cosa, me siento agotado cada vez que vengo
a una de estas cosas. Es por eso que lo he estado evitando. Para
ser honesto, me sorprende que el consejo no me haya convocado
para asistir. Especialmente no después de mis transgresiones
anteriores. Podría ser nómada, dejar mi aquelarre, pero mi madre
me obligó a unirme a través de un ritual de vínculo de sangre
irrevocable cuando cumplí doce años. Tan lejos como yo sé que
ninguna bruja ha sido capaz de dejar un aquelarre cuando se
han unido a través de la sangre
La pequeña mano de Stevie tira de la mía mientras me
arrastra hacia el centro del campo. Las brujas están conversando
mientras los ancianos ponen todo en el orden preciso para la
ceremonia. El peligro de incendio es real con la cantidad de velas
que estas pirotecnia traen a estas cosas.
—Blair, —me saluda mi madre con su voz aguda. De mi
madre, su apariencia la hace parecer como si no fuera una
madre en absoluto. Miramos alrededor de la misma edad, pero es
rubia, de ojos azules y ágil.
—Josie, —respondo. He estado llamando a mi mamá por su
nombre de pila desde que cumplió trece. Nunca nos hemos
llevado bien. Ella es conocida por mentirme y tratándome como
si fuera un idiota. Además, ella siempre me ha hecho sentir que
realmente no me quería. Como si tener hijos fuera algo que
realmente nunca busco.

47
 ●

Gracias por traerla, Stevie.

Stevie frunce las cejas hacia mi mamá y luego me mira.
—Blair, me siento confundido.
Miró profundamente a los ojos de mi prima y puedo decir
que ella ha estado bajo un deletrear. Un hechizo para traerme
aquí, aparentemente.
—¿Qué quieres, Josie? —Miro a Stevie que parece inconexo y
tembloroso Parecía estar bien toda la noche. Me pareció un poco
extraño lo mal que ella quería que viniera esta noche. Pero ella
siempre ha tratado de ayudarme a encajar en el aquelarre.
—Es hora, Blair. Es hora de que dejes de ser tan egoísta y
tomes tu lugar como Suma Sacerdotisa.
Mis ojos están muy abiertos mientras la miro.
—Nunca he querido eso. Lo sabes perfectamente.
—No es una elección. La magia elige.
—¿Qué? Así que tú y tu banda de perras del bosque pueden
alimentarse de mi ¿fuerza? No lo creo. Stevie, vámonos.
—Blair, no me siento bien. —Mi prima hermosa,
generalmente animada, está de rodillas, sus dedos buscando
agarre en la hierba mientras jadea. Su largo cabello rojo es como
una cortina que fluye sobre su rostro.
—¿Stevie? —Me pongo en cuclillas junto a ella y le froto la
espalda.
—¿Qué hiciste? —Le gritó a mi madre, sabiendo muy bien
que mis iris están rojo llameante.
—Pensé que serías difícil. No salí de mi camino para crearte
para que puedas ser insolente, Blair. Cumple con tu deber para
con tu aquelarre y la precioso Stevie será liberado del hechizo.
—Stevie, ¿puedes sentir cuál es el hechizo? Sana. Saná. Saná.
—Lo susurró con intención cada vez, la cura momentáneamente
y luego comienza a vomitar de nuevo. El hechizo debe haber sido
lanzado por la totalidad del aquelarre para no permitirme
curarla.

48
 ●

—Es tu sobrina, —le digo a mi madre.

—Ella es carne de cañón. —Miro a los ojos malvados de mi
madre y me pregunto cómo me designaron como la perra del
aquelarre. Tal vez es hereditario, y sólo se escurrió hacia mí, pero
nunca haría esto. Nunca lastimaría a Stevie, o trataría de
empujar a una bruja a un papel que no quiere.
—Stevie, encontraré otra manera de curarte. Nos vamos.
pongo el brazo de mi prima sobre mi hombro y cuanto más nos
alejamos del lugar ceremonial, más se convulsiona contra mí.
—Mierda.
La acompaño de regreso al círculo, tratando de pensar en
formas de salir de esto. No soy un sanador, no es la magia en lo
que soy bueno. Soy bueno en ofensiva y magia defensiva, pero no
curativa o diagnóstica. ni siquiera puedo entender qué magia la
está afectando.
—Vas a pagar por esto. Stevie... Stevie. —le doy una
palmada a su cara sonrojada para despertarla.
—Entra en el círculo, Blair, —ordena mi mamá.
—Vete a la mierda.
Mi mamá mueve su muñeca y susurra por lo bajo. Stevie se
cae de mis brazos y empieza a convulsionar en el suelo. Sus ojos
están rodando en la parte de atrás de su cabeza y observó cómo
sus venas comienzan a sobresalir sobre su pálida piel.
—¡DETENTE! —Grito sintiendo el suelo temblar debajo de mí.
Mi madre no se detiene y me voy a mover. Es como si mis
extremidades estuvieran sujetas por enredaderas. Miró por
encima de mi hombro y vea a los miembros del aquelarre
cantando.
Stevie comienza a gorgotear en su vómito y no puedo
soportarlo más. Me caigo de rodillas.
—¡Bien! Lo haré. Suelta a Stevie. — Mi madre me da una
cruel sonrisa mientras suelta a mi prima. Me arrastró hacia ella
y empiezo a cantar.

49
 ●

—Sana. Saná. Saná. —Esta vez el hechizo curativo funciona

mientras sus pulmones se llenan con aire y ella jadea para
respirar. Sus dedos se aferran a mis brazos mientras observo el
color volver a su rostro.
—Lo siento mucho, Blair, —me susurra Stevie.
—Shh, no es tu culpa, —le digo, acariciando su cabello. Una
parte de mí se pregunta si podría simplemente sacarnos de aquí
ahora. Ha levantado el hechizo. Pero también hay muchos de
ellos. Stevie es débil en este momento, y yo soy fuerte, pero no lo
suficiente para enfrentarse a todo el aquelarre. Hay una docena
de brujas a considerar.
Estas perras van a lamentar el día en que querían que yo
fuera su Suma Sacerdotisa.
—Terminemos con esta mierda.
—En medio del círculo, —me indica mi madre, y tomó mi
lugar como el resto de las brujas que cierran sus manos y forman
un círculo a mi alrededor.
Dos de las brujas obligan a Stevie a arrodillarse para ser
parte del círculo. Necesitan a todo el aquelarre para un ritual
como este.
Me paro en el medio solo pensando en lo jodido que ha sido
hoy. La traición me sabe a ceniza en la lengua. Me alimenta
para la retribución. Sé que convertirme en Suma Sacerdotisa
significa que el aquelarre se alejará de mi poder, pero también
me hace saber todo y el poder más alto de estas brujas.
Mi palabra es ley, y me acaban de convertir en su enemigo.
Convertiré en mierda este aquelarre de adentro hacia afuera
antes de dejar que nos lastimaran a Stevie y a mí otra vez. Una
sonrisa maníaca toma sobre mi cara mientras el aquelarre
comienza a cantar.
—Surge novum. Tempus advenimiento. Surge novum.
Tempus advenimiento. Sacerdotes no decente. Surge novum.
Tempus advenimiento. Surge novum. Tempus advenimiento.

50
 ●

Sacerdos non decet. Sacerdos non decet.

—Todos suenan como un montón de imbéciles sin sentido,
—es lo último que digo antes de sentirlo, el tirón. Me sacude
hasta la médula y me lleva a mis rodillas Mi respiración es
dificultosa, y se siente como si mi corazón fuera a explotar fuera
de mi pecho.
Mis manos arañan el suelo, tratando de encontrar algo que
me dé consuelo. Todo lo que puedo oler es el aire brumoso y el
hedor a tierra. No puedo ver nada y todo lo que siento es dolor.
Sus cánticos aumentan y estoy azotado sobre mi espalda.
Mi pecho sube y baja a un ritmo rápido. Las yemas de mis
dedos se aferran a mi pecho. Me siento como que me estoy
muriendo. Mi cuerpo se eleva al aire, elevado y sostenido en el
frío de la medianoche como un sacrificio.
Un sacrificio. Un maldito sacrificio.
Trató de estabilizar mi respiración para escuchar su canto,
y todo se vuelve claro. No quieren que sea Suma Sacerdotisa en
absoluto. Quieren tomar mi poder. Miró alrededor del círculo,
veo la cara engreída de Clover, la cara de Jenna, los ojos azules
son casi tan grandes como su sonrisa. Los ojos de mi madre están
cerrados, ella dirige el canto. No, diablos no. No voy a dejar que
esto suceda.
Sobre mi cadáver.
El grito que me sale es antinatural y fuerte. Empujo cada
onza de magia fuera de mi cuerpo, con la esperanza de acabar
con el dolor y salvarme. He sacudido edificios con mi angustia
anterior, pero esta vez partí la tierra. Como un terremoto, la roca
se mueve debajo de nosotros, abriendo el núcleo de la tierra.
Espero que Satanás haga acto de presencia y succione estos coños
a las profundidades del Infierno.
El daño puro de mi magia hace que dejen de cantar y tiran
mi cuerpo al suelo frío. Barro y hojas se pegan a mi piel helada
mientras trato de recuperar el aliento. Estoy agotado.

51
 ●

Nunca he exudado tanta energía mágica en mi vida. Ruedo

a mi lado para ver el ancho de Stevie, sus ojos mientras se
arrastra hacia mí. La mitad del aquelarre está en la otra parte
del descanso, en el suelo, mientras que la otra mitad está
atrapada aquí conmigo y Stevie. Todos ellos están tirados en el
suelo por cualquier magia que lancé. Todos ellos todavía se ven
respirando, por desgracia.
Lo que no daría por un maldito talismán transportador en
este momento. Stevie me lo hace y me aparta el pelo de la cara.
—Necesitamos salir de aquí ahora.
—Joder, estoy tan cansada, Stevie. —Puedo sentir mis ojos
cayendo. Solo quiero dormir en este suelo frío, solo por un rato,
hasta que sea fuerte de nuevo.
Stevie me da una bofetada fuerte en la cara.
—¡Levántate! —Ella resopla y la escucho lanzar algunos
hechizos de protección.
—Stevie, no puedo.
Mi prima llora encima de mí.
—Blair, levantarás tu trasero. ¿De qué otra manera
obtendrás venganza? —Mi prima me conoce bien. Puede que no
logre que salgamos las dos con vida de aquí, pero exigir venganza
es la forma más alta de motivación.
Gimo y me pongo de lado y Stevie me ayuda a poner mi
brazo sobre su hombro mientras ella medio me lleva al Jeep. Ella
está agitada y sin aliento mientras me empuja hacia la puerta
del pasajero. Puedo sentir a las otras brujas siguiéndonos antes
de que Stevie coloque un hechizo para dormir sobre el grupo de
los traidores.
Todos caen al suelo; Puedo escuchar sus cuerpos golpeando
el suelo, siento como Stevie se esfuerza por abrocharme en el
coche.
A pesar de que todos están durmiendo en el suelo, la mitad
de las velas se han apagado. No puedo evitar gritarles.

52
 ●

—Ustedes, perras, son jodidamente afortunadas. Estoy tan

cansada en este momento, —gritó, incluso aunque sé que están
todos dormidos y no pueden oírme. Si no estuviera tan mareado
le diría a Stevie lo orgulloso que estaba de ella, que eran muchas
personas para poner a dormir de una vez.
—Tienen suerte de que esté tan cansada o destrozaría las
protecciones y que los hombres lobo las tengan. —Stevie no
reacciona a mi intento de hacer las cosas más ligeras.
Cierra la puerta, y mi cabeza rápidamente cae contra el
vidrio. Registro el portazo de otra puerta cuando el Jeep se sacude
con el pie de Stevie presionando fuertemente en el acelerador
—Blair, ¿estás conmigo, Blair?
—Sí —susurro, pero todo lo que quiero hacer es dormir. No
he llorado en años, pero en este momento me siento cerca. Sabía
que no le agradaba a mi aquelarre, pero para sacrificarme,
jodidamente asesinarme, por mi poder. Eso está más allá de
cualquier cosa que yo alguna vez creí capaz. Si esta noche probó
algo, es que ellos se metieron con la bruja equivocada.
Stevie conduce como un murciélago salido del infierno
hacia nuestra casa.
—Ellos saben dónde vivimos, Stevie.
—¿Crees que podrían atravesar tus protecciones?
Niego con la cabeza. Ya me he asegurado de que Stevie y yo
seamos los únicos seres mágicos permitidos entrar en las
instalaciones.
—¡Mierda! ¡Mierda! —Grito de ira y de dolor. Me duele la
cabeza y todo lo que quiero hacer es meterme en la cama y
dormir durante un millón de años. Quiero olvidar esto.
Stevie es la única persona viva a la que le importa un
carajo. ¿Soy realmente una persona desagradable?
No puedo evitarlo, pero ese solo pensamiento es lo que me
hace llorar, años de penitencia, la ira, la frustración y el miedo
brotan de mí.

53
 ●

—¿Blair? —Stevie susurra con pánico. Me limpio los ojos

rápidamente y me desplomo en el asiento.
—Estoy bien, Stevie. —Resoplo.
—No, no lo estás, Blair. Está bien dejarlo salir.
—No, no es. —Suspiro y golpeo mi cabeza contra el vidrio
de la puerta y me contraigo de dolor. Debo quedarme dormido en
algún momento, porque me siento succionado en una secuencia
de sueños.

54
 ●

Capítulo 6.

Dax
Asmodeus y yo nos dirigimos al almacén donde ha habido
actividades sospechosas. Recibimos una pista de uno de los
vampiros informantes de Asmo. Hace frío cerca de los muelles de
importación, su configuración espeluznante estándar para
alguna mierda puede salir mal. Sin embargo, nada se siente
mágico, solo asqueroso.
—Los humanos son malvados, —se queja Asmo a mi lado
mientras patea su zapato lejos de las agujas usadas en el suelo.
—No siento nada, ¿verdad?
—No, solo otra ventaja de callejón sin salida. Estoy cansado.
Vamos a casa .
De repente, hay una grieta sobre uno de los contenedores de
envío. El aire está lleno de azufre e inmediatamente sé que otro
demonio acaba de usar un portal cercano.

55
 ●

—Es divertido verlos chicos.

—¿Kasdeya? —Respondo, tomando la figura delante de mí.
—Hermoso y mortal, debes proteger cada parte de tu cuerpo a su
alrededor.
Su cabello oscuro está en una larga cola de caballo y su
atuendo parece que se supone que debe estar en algún tipo de
película de acción. Ella hace clic en su lengua y luego la raspa
sobre sus dientes. Mientras mira a Asmodeo. Ella generalmente
pasa la mayor parte de su tiempo en el infierno, así que no tengo
idea de por qué ella está aquí.
—Voy por Kas ahora. Realmente no crees que nuestro Señor
enviaría dos hombres incompetentes para hacer el trabajo de una
mujer, ¿verdad?
Asmodeus gime a mi lado. Si alguien aquí no está feliz de
ver a Kasdeya, es él. Solían tener algo, y luego ella lo encerró en
la dimensión de las hadas durante décadas. Todavía no habla de
lo que pasó.
—En serio, ¿te envió para averiguar quién también está
haciendo las posesiones?
Asmo se queja.
—Por supuesto, ustedes dos parecen demasiado preocupados
por beber y probar a los lugareños. Pero estoy aquí para
asegurarme de que el trabajo realmente se haga. —Me pregunto
cuánto tiempo nos ha estado mirando. ¿Me vio con Blair? La idea
de eso me hace estar irracionalmente enojado.
—¿Qué intenciones tienes? —Le pregunto, cansado de su
mierda.
—¿Por qué compartiría eso contigo? —Ella se arquea una
ceja oscura hacia mí. —Solo quiero que este caso termine. Dame
a los demonios que necesitan una simple plaza en la muñeca.
Casos simples como, ángeles sin alas desgarradores, no decirle a
los humanos sobre lo sobrenatural a menos que sea necesario, sin

56
 ●

cambiar a forma de demonio en medio de los conciertos. Ya

sabes, las cosas directas.
—Los hemos estado cazando durante semanas sin suerte
encontrarlos. Cada vez que nos acercamos, dejan a los poseídos en
ruinas.
—Creo que tendremos que ver quién lo resuelve primero.
—Ella guiña un ojo a Asmodeo y los portales vuelven a abrirse
arrastrándose a cualquier agujero del que vino. —Esto sigue
empeorando cada vez más, —Asmo se aferra a mí.
Estamos a punto de partir a casa, olvido lo infructuoso que
ha sido esta noche, y comencemos de nuevo mañana cuando
escuchamos el gemido.
—¿Escuchas eso?
—Sí, ¿qué es eso?
—Suena como alguien llorando, —le digo. Por lo general,
simplemente lo ignoraría, pero el hecho de que nos inclinarán a
esta ubicación me dan ganas de comprobarlo afuera.
Caminamos alrededor de algunos contenedores de envío,
nuestros pasos haciendo leves ruidos inclinados mientras
caminamos sobre el muelle mojado. Los sonidos provienen de una
mujer, encorvada por un contenedor de envío. Probablemente en
sus veintes.
Ella está acuñando su cabeza entre sus palmas. Su cabello
rubio está mojado y pegado a su rostro. Ella está arañando su
piel mientras se mece.
—Haz que se detenga, haz que se detenga, —llora.
Ella golpea su propia cabeza con fuerza contra el
contenedor de envío que se ha inclinado mientras continúa
hablando consigo misma. Ella ni siquiera nos nota cuando nos
acercamos.
Asmodeo se agacha a su lado, y se estremece. Ella lo mira
con los ojos muy abiertos. Puedo decir que ella sabe lo que somos
por lo asustada que está.

57
 ●

—Por favor. Por favor, no lo vuelvas a hacer. Solo haz que se

detenga.
—¿Qué te hicieron? —Asmo pregunta con voz suave.
—La vi. Podía ver y sentir todo. Con mis manos. Ella usó
mis manos. —Ella extiende las manos frente a ella. Están
temblando y frías. No hay evidencia de intoxicación, pero está
claro que se siente responsable.
—¿Sabes quien te hizo esto? —Le pregunto.
—Se llamó a sí misma Mara, —dice y hace una mueca
después de que dice el nombre. Mira a su alrededor como si
hablar su nombre podría traerla de vuelta para recogerla de
nuevo. —Necesito que desaparezca. Necesito que pare.
Se golpea la cabeza de nuevo, duro.
—Podría hacer que desaparezca, —le dice Asmo
amablemente, dándole su sonrisa deslumbrante.
—Puede. ¿Puedes hacerlo desaparecer? —La mujer triste lo
mira con esperanza en sus ojos. Supongo que los métodos de
Asmo son mejores que los de esta mujer sufriendo mientras se
pone sobre sus ancas y se acerca a ella.
—¿Es eso lo que quieres? —él pide.
—Sí, —súplica, agarrando su camisa. —Hazlo.
Miro cómo Asmodeo se apaga la mandíbula, casi como un
tierno abrazo, como su otra mano envuelve su cuello. Ella le
sonríe, casi como si la furia en su cabeza se detuviera. Él
rápidamente le rompe el cuello con sus manos poderosas y la
mujer se derrumba al suelo.
—Información y un alma recopilada, —dice, chupándose los
dientes. —No fue una mala noche, después de todo.
—Afortunadamente, Kas se fue antes de encontrarla.
—De ninguna manera estoy dejando que esa perra egoísta
derribe a este demonio. —Generalmente Asmo es un idiota
perezoso y no le gusta trabajar. Estoy un poco contento con Kas
que entró y encendió el fuego debajo de su trasero perezoso.

58
 ●

—Mara no suena familiar, —le digo.

—Deberíamos actualizar a Lucifer, —dice Asmo, y asiento
con la cabeza. Los secretos del diablo son una forma de desarmar
tu alma. No joder. Tengo demasiado que esperar. Como una
pequeña bruja,
Esta noche fue mucho mejor de lo que podría haber
imaginado. He encontrado un nuevo juguete y la primera
información real que me acercará al cierre de este demonio
abajo.
No puedo evitarlo cuando una sonrisa se apodera de mi
rostro cuando regresó al portal del bungalow.

Es tarde, casi la una de la madrugada cuando finalmente

descanso mi cabeza. No necesito muchas horas de sueño, pero
con mi cuerpo corporal, necesito descansar un poco.
Tan pronto como estoy completamente bajo, comienza una
secuencia de sueños. Que es extraño.
Porque nunca sueño, solo camino en los sueños de otras
personas.
Ah, debe ser lo que Blair puso en mi bebida. Ella no quería
que me olvidara de ella, ¿ella? Ella lleva lencería negra, tatuajes
que no puedo descifrar sobre su cuerpo. Solo puedo ver
visualmente las partes de ella que he visto en persona. El
descenso depende de mi imaginación.
Ella me acurruca su dedo para que me dirija a venir y
sentarme en el sofá con ella, Blair no habla, lo cual no es
sorprendente. Es mi subconsciente Blair, en realidad no tiene la
capacidad de hablar. Solo he conocido a otros Demonios que
tienen esta habilidad, principalmente con mis gustos similares.

59
 ●

Saber que la pequeña bruja me deletreó para soñar con ella

hace algo que no he sentido en mucho tiempo. Por lo general,
solo estoy interesado en follar, usando el cuerpo que me
presentan y continuo. La energía y la ferocidad de los encuentros
sexuales me alimentan, y quiero tomar lo que están dispuestos a
dar.
Pero ahora mismo, con esta bruja sexy frente a mí, tengo
otros planes. Cojo su mandíbula en mi sueño y beso su mejilla.
—Si vamos a follar bebé, no va a estar en un sueño. Tal vez
podría hacerte una pequeña visita, ¿eh?
—Sueña Blair —solo me sonríe. Nunca he tenido a alguien
que me visite en mi dormir. No me gusta su aburrimiento. Creo
que es hora de visitar a Blair en sus sueños y darle una muestra
de su propia medicina.
No me lleva mucho tiempo encontrarla, afortunadamente
ella está dormida. Me concentro mientras invado su
subconsciente.
Su sueño es una pesadilla.
Miró mientras levitan su cuerpo en el aire. El bosque grueso
a nuestro alrededor con otras brujas cantando. Ella grita
perforantemente fuerte y cae al suelo. Al momento siguiente, su
sueño gira y ahora estamos dentro de su habitación.
Ella yace en la cama en posición fetal, no llorando, pero su
cuerpo sacude. Este no es el tipo de sueño que estaba pensando
que iba a tropezar. Contempló darme a conocer y tener cuidado
con el hecho de que la mayoría de la gente no recuerda sus
sueños, así que decido entrometerme.
—¿Blair? —Digo mientras voy y me siento en su cama.
—En serio, ¿estoy soñando contigo ahora mismo? —Ella
gime.
—¿Qué pasó esta noche?

60
 ●

—Nada vale la pena mencionar, —dice ella, cambiando la

posición en la cama. Sus ojos son rojos, y creo que ha estado
llorando.
—No parecía que nada que no valga la pena mencionar.
—¿Lo viste? —Ella pregunta mientras juega con su edredón.
—Solo una pequeña parte.
—Stevie es el único que se preocupa por mí, Dax. También
podrías cortar y correr ahora. Aparentemente soy una puta perra
que no vale la pena casarse y mi aquelarre no quiere tener nada
que ver conmigo tampoco.
—No voy a ir a ningún lado, —le digo.
—¿Por qué?
Ignoro su pregunta porque ni siquiera estoy seguro de por
qué estamos tan atraídos a estar juntos.
—Si necesitas ayuda con tu aquelarre, puedo ayudar.
—Van a pagar. Solo necesito descubrir cómo.
—¿Estaban tratando de lastimarte? —Pregunto con una ceja
fruncida.
—Más que lastimarme.
—¿Qué puedo hacer? —Preguntó.
—No importa. Es solo un sueño, —responde ella. Quiero
responder y decirle que no es solo un sueño. Algo sobre esta
pequeña y frágil bruja me dan ganas de ayudarla a vengarse,
Voy a abrir la boca y me arranca de su sueño. Ella debe
estar despertando. Jadeo mientras me siento en mi cama,
acariciando mi cabello sudoroso.
No estaba planeando pasar por Hex hoy, pero algo profundo
dentro de mi me dice que Blair necesita ayuda. La realización me
golpea esta noche.
La cena con Ryan.
Yo: ¿Todavía nos reunimos esta noche?
Ryan: 7 pm en Lucia's
Yo: te veré allí.

61
 ●

Asmodeo entra a mi habitación con un aspecto peor que el

desgaste.
—Estaba siendo convocado.
—Joder, ¿anoche?
—¿Qué otra cosa podría ser?
Asmodeo toca mi hombro y nos vamos al infierno. Misma
sala de juntas como la última vez, tomamos nuestros asientos
cuando noto otros tres demonios en la mesa de la junta. Lilith,
Milcom y Toth. Lilith es básicamente de Lucifer
Asistente glorificado y Milcom y Toth han sido su mano
derecha desde el principio de los tiempos. Los tres han sido
bendecidos con corpóreos cuerpos también y se les permite viajar
entre todos los reinos. Milcom es uno de los que más viaja a la
tierra. Tiene cabello largo y oscuro y está construido como una
casa de mierda de ladrillo. Se ha construido una gran reputación
para sí mismo como la de Lucifer. Y se sabe que tiene un
problema de temperamento importante. Toth es más tranquilo,
honestamente, no estoy seguro de cómo no es más violento con
cuánto tiempo ha estado un demonio, su habilidad para
mantener la calma ha salvado el culo de Lucifer más veces de lo
que puedo contar.
Hablando del diablo, Lucifer entra. No toma asiento pero se
encuentra antes que nosotros. Un movimiento de potencia
completo.
—¿Actualización? —él ladra. Asmo me parece la pequeña
perra completa que es. Lilith, Milcom y Toth tienen sus ojos
entrenados en mí.
—Encontramos a uno de los poseídos. Está claro que cuando
poseen, el mortal está presente en todo momento. La mujer
mortal dijo que fue testigo de la posesión mientras estaba
consciente. Dijo que el nombre del demonio es Mara.

62
 ●

Lucifer se estremece por el nombre de Mara y se toca la

barbilla. Mira a Milcom, quien parece avergonzado. ¿Qué diablos
está pasando aquí?
—Cuando encuentres a Mara, debes capturarla y llevarla al
infierno. Su alma no debe ser destruida. Ella tiene que estar
intacta. ¿Entiendes?
—Sí, Señor, —decimos Asmodeo y yo al unísono.
Lucifer va a abandonar la reunión antes de mirar la parte
posterior de la cabeza de Milcom.
—Milcom, ¿una palabra por favor? —El demonio sigue a
Lucifer fuera de la habitación, mientras que Lilith y Toth, salen
del espacio de la reunión.
—Bueno, eso fue extraño, —dice Asmo, y asiento de
acuerdo.
—Vamos a salir de aquí.
Pisa el suelo de nuevo y los dos regresamos al bungalow.
Mis pensamientos son rampantes. Antes, no le importaba lo
que pasó con el demonio causando estragos. Ahora parece que
todo ha cambiado.
—Necesitamos averiguar quién es Mara, —digo, y Asmo
pone los ojos en blanco.
—No de nuevo mierda.

63
 ●

Capítulo 7.
Blair.
Despierto sintiéndome como la muerte absoluta. Es como si
apenas hubiese dormido nada incluso aunque sea casi mediodía.
Un cuerpo cálido está junto al mío, su mano posado en mi
cintura, y me doy la vuelta para ver a Stevie. sus mejillas son
rojas y parece que ha estado llorando toda la noche.
Ni siquiera estoy seguro de cómo me metí en la cama.
—¿Stevie? —Sus ojos se abren y rápidamente me envuelve en
un fuerte abrazo.
—Gracias a la puta luna. Me asustaste.
—Lo siento, —murmuró, apretando nuestro abrazo.
—¿Qué vamos a hacer, Blair?
—Yo me encargaré, Stevie. Lo primero es lo primero. Ambos
necesitamos usar nuestros collares que me encantaron el verano
pasado. No permitirán que nadie en el aquelarre pueda meterse

64
 ●

en nuestras mentes. Además de eso, no hay forma de que puedan

hacer lo que quieren a menos que sea luna llena. Entonces, en su
mayor parte estamos a salvo por ahora.
—Por ahora, —dice, mirándome.
—Si crees que voy a dejar que te lastimen…
—No, lo sé, Blair. Solo hay doce de ellos y dos de nosotros.
—Creo que tenemos que averiguar por qué estaban tratando
de sacrificarme y hacer que sea lo que sea lo que buscan no
suceda. Si no, terminaré asesinándolos a todos. Lo más probable
es que todos estén cagados de miedo en este momento y nos
dejará solos por un tiempo.
—¿Estás tan seguro? —No, no estoy seguro, pero si pasó
demasiado tiempo pensando sobre lo que me pasó, voy a dar
vueltas. Ahora mismo no es un momento para ir en espiral.
Necesito agotar esta energía en otra parte.
—Estoy seguro, —beso la mejilla de mi prima mientras me
levanto para hacer mi camino al baño. —Voy a joderle la vida a
algunas personas y luego trabajaré en Hex durante unas horas.
Quédate aquí si no te sientes seguro. Las salas te protegerán.
—Se supone que debo trabajar esta noche, —dice, mirando
hacia abajo.
—Cerraré Hex. Realmente no me importa, No necesitamos el
dinero del restaurante, de todos modos. Es más para mantenernos
ocupados. Especialmente ahora que estoy quitando todas mis
contribuciones financieras del fideicomiso del aquelarre.
Stevie asiente con la cabeza.
—Solo si estás seguro.
—Estoy seguro, Stevie. Quédate en casa. Regreso más tarde.
Me acerco y le doy a mi prima un abrazo más antes de
prepararme para el día.
Lo único que me hará sentir mejor es hacer que alguien se
sienta peor que yo.

65
 ●

Salgo de la tienda UPS con una sonrisa en la cara, unos

trescientos papeles en una mano y cinta de embalaje en la otra.
Con puro regocijo, colocó con delicadeza uno de los volantes cada
diez pies como voy pasando por la calle principal. Recibo algunas
miradas, pero la gente está leyendo los folletos y eso es todo lo
que importa.
Mirando el papel amarillo brillante, sonrío. Lennon, el
aburrido empleado de imprenta, estaba más que ansioso por
utilizar sus conocimientos de diseño para ayudarme a crear esta
obra maestra. Es una foto de Ryan sosteniendo un gatito en un
brazo y un perro en el otro. Tomé esta foto hace
aproximadamente un mes cuando me invitó a un evento de un
refugio de animales que estaba organizando su agencia de
corretaje. Excepto tanto él como las niñas tienen rayos láser
saliendo de sus ojos y el encabezado arriba dice “Ryan Fuller, el
corredor de bienes raíces menos confiables. No confíes en él tu
casa o tu coño”. Los rayos láser de los ojos del gato están
incendiando casas en el fondo. Como dije, Lennon tiene un
talento serio.
Todavía estoy enojado por todo pero, como predije, hacer
que alguien tenga un peor día que el mío, eso me hace sentir
mejor. La mejor parte es que lo sé, tiene una jornada de puertas
abiertas, por lo que no verá estos durante unas horas.
Suponiendo que nadie le envíe un mensaje sobre ellos.
Además, tengo planes para su jornada de puertas abiertas,
de todos modos. Ya busqué el listado a través de Zillow. Es
bastante impresionante. Altavoces bluetooth cableados alrededor
de la casa y todo. Busqué a la familia en línea, los tontos usan el

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 ●

nombre de su perro como contraseña. Así que obtener acceso no

es difícil.
Continúo mi paso pausado hacia el centro, dando unos
veinte pasos. Grabando un cartel, veinte pasos y otro cartel. Debo
exudar no jodas conmigo con mi energía, porque nadie me
detiene. Incluso vi al Sheriff Clemons conducir. Negó con la
cabeza, pero siguió conduciendo. Una sabia elección, viejo.
Después de una hora de cubrir Hallowsdeep con hermosos
volantes amarillos, finalmente me subo a mi Jeep y conduzco
hasta el próximo destino. 7884 Médula Camino, la próxima
parada en mi plan para hacer de la vida de Ryan un infierno.
Compruebo mi reloj, son casi las tres y la jornada de puertas
abiertas está llena de al menos cuatro parejas diferentes.
Aprovecho esta oportunidad para entrar en la casa, conectando
mi iPhone y reproduciendo la segunda grabación.
El sonido estalla por toda la casa. La desdichada voz de
Clover resuena primero por la casa.
—Ella es una gran perra. Me sorprendió que estuvieras
saliendo con ella. —Miro a mi izquierda y la mujer literalmente
agarra sus perlas y agarra la mano de su esposo para dejar el
hogar. Para mí, solo parece que la comisión de Ryan sale volando
de la puerta principal. Un agente inmobiliario no es nada sin su
reputación.
—Como dije, nena, ella no es la que quiero. Quiero tu dulce
y apretado coño. No una puta acabada. —Todavía no veo a
Ryan, pero dejó que el sonido se reproduzca repetidamente. La
grabación comienza de nuevo, y no puedo evitar estar orgulloso
de lo creativo que he conseguido con mi venganza sin magia. No
he hecho nada que pueda hacerme entrar en problemas con el
consejo. Las leyes humanas pueden ser otra historia, pero no
puedo ser descuidada.
—Esta es la presentación menos profesional a la que he
asistido, —dijo una mujer en chillidos y ahí es cuando veo a

67
 ●

Ryan. Está en el panel de audio, tratando de averiguar cómo

desactivar el sonido. Sin saber que el sonido se escribe y haga lo
que haga, no se apagará.
Es en ese momento que me ve, y su rostro cae por completo.
—Blair, puedo explicarlo. —Mira a su alrededor mientras
sus posibles compradores de vivienda se van. Pasa su mano
rastrillando su cabello con frustración. Veo a Ryan más claro que
nunca antes. Le importa demasiado lo que piensa la gente.
mientras yo sentía que me escondía, definitivamente no me hizo
desfilar como si estuviera orgulloso de estar conmigo. Lo miro
ahora y no se compara con su padre, apariencia o no. Un simple
hombre humano que no tiene nada que ofrecerme.
—No es necesario, Ryan. El audio es muy claro. Soy una
perra, y Clover tiene un dulce coño. ¿Ella te pega como yo, Ryan?
—Su cara se sonroja, y él mira alrededor de la habitación con un
pánico mayor. —¿Qué haría el conservador de idiotas de Hallows
Deep si supieran que a su agente inmobiliario favorito le
encantaba ser enjaulado mientras su polla estaba enjaulada?
Saco una pelusa inexistente en mi hombro. No me avergüenzo de
lo que Ryan y yo hicimos como adultos consentidos.
Podría ser una perra, pero no usaría eso en su contra para
vengarme. Sé que solo estamos él y yo en esta habitación y él se
preocupa más por su imagen que nada. Le importa más cómo la
gente percibe a un hombre siendo dominado sobre el cuidado de
la próstata de un hombre.
—Blair, ¿tú hiciste esto? —Ahora parece enojado.
—Enviaste estos clips de audio directamente a mi teléfono.
—Parecía apropiado mostrar a tus clientes qué tipo de hombre
eres.
—Blair, ¿cómo pudiste hacer algo tan cruel?
—¿Yo soy cruel? Me engañaste, Ryan. Me hiciste pensar que
era importante para ti, que esto iba a alguna parte.

68
 ●

—¿Por qué pensarías eso, Blair? Nunca fuimos realmente

oficiales. Nosotros jodidamente nos divertimos. Pero es obvio que
yo era correcto. eres una perra Clover es mucho mejor que tú.
Me río. Clover es una de las brujas más débiles de nuestro
aquelarre, obtendrá lo que le espera a ella a continuación.
—Haz que la grabación se detenga, —gritó, apretando
botones.
—Acabo de empezar, Ryan. Jodiste con la perra equivocada.
Sigo reproduciendo la grabación, sabiendo que tan pronto
como salga del alcance, se apagará, de todos modos. Eso se sintió
muy bien. Tan agradable que por unos momentos olvidó mi
aquelarre, o del hecho que necesito lidiar con todo esta situación.
Mi subidón me abandona lentamente a medida que me acerco
más y más a Hex. Al menos admiro los carteles amarillos
brillantes de Main Street mientras estaciono mi auto y camino el
resto del camino hasta el restaurante.
Es bueno no tener a nadie aquí. Cerré por la noche, así que
todos los empleados parecían estar contentos. Mira, no es una
perra de jefe.
Stevie dijo que podría venir conmigo. A ella no le encanta
sentarse en la casa todo el día, así que dejó la puerta principal
abierta mientras regresó a la oficina.
Es hora de analizar qué diablos está pasando con las
finanzas. Estoy definitivamente en un estado de ánimo mientras
abro los múltiples sistemas de contabilidad y miro los números
Nada de esto tiene sentido. Quiero romper, pero a la vez
mantenerme unido. Si me derrumbo, no podré recoger los
pedazos una vez más.
Hay mucho que hacer. Stevie depende de mí. Soy genial en
la magia y manejando personas, incluso puedo cocinar una
comida decente. Pero cuando se trata de números, pociones y
repostería, por lo general se lo dejo a Stevie. es como si los

69
 ●

números se movieran mientras miro la pantalla. Supuestamente

estas cosas son a prueba de idiotas, pero claramente no.
Gimo, cruzó los brazos sobre el escritorio y apoyó la cabeza.
me daré cuenta de todo por nosotros. Por qué el aquelarre quería
lastimarme y usó a Stevie para hacerlo. Demonios, si se trata de
eso, nos mudaremos tan lejos de aquí que nunca podrán
encontrarnos. La parte más profunda y orgullosa de mí misma
aunque no lo permitirá. Hallowsdeep puede ser un pozo negro,
pero es mi alcantarilla.
Hay un ligero golpe en la puerta. "Adelante", le digo,
asumiendo que es Stevie. Para mi sorpresa, es un Dax muy
atractivo. Él está usando una camisa gris que es tan apretada
que puedo ver sus pezones. Las mangas cortas muestran todos sus
hermosos tatuajes negros y grises. Su cabello es un desastre
organizado en la parte superior de su cabeza Se ve delicioso, y no
he olvidado que Ryan no ha sufrido bastante. Dax es la venganza
más sexy que podría haber pedido.
—Oh hola.
—Oye, espero no estar interrumpiendo nada, —dice con
una sonrisa en su rostro.
—Simplemente sentado aquí tratando de averiguar a dónde
va este dinero.
Se acerca y se para detrás de mí.
—Soy un poco experto en libros de contabilidad. ¿Quieres
un poco de ayuda?
Por lo general, mi orgullo no me deja pedir ayuda. Pero Dax
no necesitaba ofrecerse, y la cantidad de tiempo que he pasado
flotando sobre estas pantallas de computadora tratando de
resolverlo es suficiente para que yo cumpla y acepte su ayuda.
Me levanto de la silla y él se sienta. me mira expectante y
luego golpea su rodilla.
—Vas a querer ponerte cómoda, nena.

70
 ●

Me sonrojo. Joder, sonrojarme, acomodo la falda y me siento

en su rodillas. Su mano grande se envuelve alrededor de mi
cintura, agarrando mi cadera mientras usa la otra mano para
navegar con el mouse.
Se desplaza, abre recibos, no me habla pero se enfoca en los
números Dax entrecierra los ojos y gime. Saca unas gafas de
montura negra y se las pone. ¿Cómo los diablos eso lo hace más
caliente? Es como la fantasía del sexy de profesor mayor y sexy de
todas las chicas. me muevo su regazo un poco, y su agarre se
vuelve más fuerte en mi cadera.
—Tu caja registradora es lo que falta. Pero solo cada tres
días.
—¿Qué?
Señala la pantalla, sus dedos se clavan en mi carne,
haciéndome deslizarme un poco más en su regazo. Sus jeans
rozando la piel desnuda de la parte posterior de mis muslos.
—Son cantidades pequeñas. Como de quince a veinte
dólares. No es suficiente para notarlo regularmente. También
parece que las cantidades de tus productos no coinciden con lo
que se está entregando. Parece que no ha estado sucediendo por
mucho tiempo. Tal vez unas pocas semanas.
—¿Entonces uno de mis empleados me está robando? —Solo
agrega una o unas personas a la lista de todos los que odian a
Blair.
No puedo evitarlo cuando mi espalda se hunde contra el
pecho de Dax. Estoy agotada, solo puedes ser golpeado tantas
veces antes de romperte. Se siente como si fuera yo contra el
mundo ahora mismo. Bueno y Stevie, que está tan asustado de
nuestro aquelarre, tiene miedo de salir de la casa.
—¿De qué color gris es? —Pienso en nuestra última
conversación y en cómo calificó nuestro día en la escala de
blanco a negro. Me hace sonreír un poco el hecho de que lo
recuerde.

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 ●

—Honestamente, un maldito tono negro, —le digo. La

vulnerabilidad no es algo que solía mostrar, pero me tranquiliza..
—¿Puedo hacerlo mejor? —susurra en mi oído. Ahora me
doy cuenta de que ambas sus manos están sobre mí. Uno
jugueteando con el final de mi falda mientras que el otro está
plantado en la parte superior de mi muslo. Su piel bronceada
contra mis muslos pálidos y tatuados.
—¿Lo harías mejorar? —Pregunto, tratando de no sonar
como si estuviera jadeando por ello.
Su cara está tan cerca de la mía, y su voz es tan grave y
profunda cuando responde.
—Follaría tu coño con mis dedos tan fuerte que tus jugos
empaparían mis jeans.
Gimo y tiro mi cabeza hacia atrás contra su hombro. Esto
no es para siempre. Si bien me encanta estar a cargo y tomar el
control de un hombre, a veces es bueno desconectar tu mente y
simplemente disfrutar del placer.
Necesito la liberación de que solo dejar ir tu mente y dejar
que alguien más tome el control te da.
—¿Quieres eso, pequeña bruja? ¿Debería deslizar mis manos
por esta pequeña y linda falda y ver lo mojada que estás para mí?
—Sí, Da-Dax. —Él gime, escuchando su nombre deslizarse de
mis labios. Su barbilla barbuda se frota contra mi garganta
mientras coloca besos húmedos y fervientes a lo largo de mi
quijada. Me ajusta para que mis piernas estén anchas y
separadas, sujetando sus muslos fuertes y musculosos. Me siento
expuesto de la manera más deliciosa posible.
—Me encantan las malditas faldas de estos dioses, —dice,
mientras levanta la prenda.
Estoy usando un par de bragas negras lisas. Ojalá me
hubiera puesto algo mas lindo Pero, estaba vestida con modestia
para la venganza, no para que me jodieran con los dedos.

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 ●

Desliza mi ropa interior a un lado, dos de sus dedos

deslizándose a través de mi humedad mientras gime contra mi
cuello. Tan pronto como sus dedos me tocan, siento exactamente
lo que me estaba perdiendo con Ryan. Es como si la magia de Dax
estuviera llamando a la mía, haciendo que la conexión y la
química sexual sean mucho más intensas.
—¿Este coño va a ser apretado para mí, Blair?
Gimo pero no respondo, así que él golpea ligeramente mi
coño, haciéndome dar una sacudida y empujar más fuerte contra
su gran polla erecta que se tensa en sus jeans.
Resoplo, pero niego con la cabeza.
—Sí, tócame, por favor.
—Mmm, no te tomé por el tipo mendigo, pequeña bruja.
—Maldita sea, tócame.
Golpea mi coño ligeramente de nuevo.
—Esa no es forma de preguntar.
—Por favor, Dax. Por favor, tócame.
—Esa es mi niña buena. Me gusta eso, Blair. Quiero que
seas una buena chica, pero sólo para mí. Solo este lado dulce
para mí.
—Sí, tócame. —Sus dedos entran con dureza. No jodiendo, él
mete tres dedos dentro de mí mientras usa su palma para frotar
mi dolorido clítoris.
La sensibilidad de sus pequeños toques me va a enviar al
límite rápidamente. Muevo mi culo contra su polla gorda,
haciéndolo gemir, y él empuja de vuelta contra mi trasero.
—Joder, —Dax sisea mientras acelera su ritmo contra mi
coño, curvando sus dedos dentro de mí, golpeando mi punto G.
Su otra mano se envuelve alrededor de mi cintura. Su mano
empuja con fuerza en la parte inferior de mi abdomen.
—Me encanta sentir mis dedos follando tu coño desde
afuera, —gime, y eso es lo que me lleva al límite. Retorciéndome
encima de su regazo mientras aguanto mi orgasmo, mi magia

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 ●

está completamente en la superficie, haciéndome sentir como si

estuviera cayendo y volando, todo a la vez. El orgasmo crece y
crece hasta que me destroza por completo. Colapsando contra el
pecho de Dax. Dax se quita los dedos y puedo sentir mi centro
queriendo agarrarlo de nuevo y mantenerlo allí para siempre.
Lleva su mano a mis labios.
—Chupa, —ordena, acercando los dedos a mis labios, que
chupó con avidez, saboreando mi sabor en sus grandes dedos. Los
desliza fuera de mi boca y gira mi mandíbula para besarme en
los labios, saboreando mi esencia en mi lengua.
—Mmm, la próxima vez te probaré directamente desde la
fuente, —dice con confianza
—¿Qué pasa contigo? —pregunto, bajando mi falda hasta
donde solo estoy sentado sobre su único muslo.
—Tengo que irme, desafortunadamente. —Se encoge de
hombros y pequeños zarcillos de culpa se disparan por mi
columna vertebral. Tiene su cena con Ryan esta noche. —¿Puedo
sacarte mañana?
—Me gustaría eso, —digo, asintiendo con la cabeza.
—¿Quieres que te recoja aquí o en tu casa?
—Envíame un mensaje de texto y te enviaré mi dirección.
Golpea mi trasero suavemente y me pongo de pie,
sintiéndome mucho más ligera, se inclina y susurra en mi oído.
—Cariño, será mejor que lleves una de estas lindas y
pequeñas faldas cuando vengo a recogerte, ¿sí?
—Sí, —respondo sin aliento. Besa el lado de mi cabeza y me
da una sonrisa antes de salir de mi oficina, cerrando la puerta
detrás de él. Tan pronto como se va, me dejo caer en mi silla.
—¿Qué diablos fue eso? —susurro para mí mismo. Sentirme
más ligero y sabiendo que hizo de mi día un mejor tono de gris.

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 ●

Capítulo 8.
Dax.
Tan pronto como cierro la puerta de la oficina de Blair, me
dirijo rápidamente al baño del restaurante. ¿Qué diablos tengo,
diecisiete? Ni siquiera recuerdo el tiempo en que me corrí en mis
pantalones.
Incluso esa pequeña diversión me alimentó más que las
orgías en el pasado. Me siento optimista y lleno de energía. Voy a
necesitar tanto de ella, posiblemente lo pueda conseguir. Ni
siquiera puedo imaginar lo que se sentirá finalmente follarla
Ni siquiera vine aquí para tocarla. Vine a pedirle una cita.
Como una especie de caballero refinado. Pero su estrés era claro,
y no pude ayudarme a mí mismo. Quería relajarla y hacerla
sentir mejor.
No estoy seguro de qué diablos me está pasando, y no estoy
seguro de que me guste. Soy un demonio, por el amor de Dios. No

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 ●

es como si esto pudiera ir a ninguna parte. No conozco a los

demonios que están con otros seres sobrenaturales. Eso no
funciona cuando corres de un lado a otro entre los reinos.
Gimo mientras me quito los jeans y luego mi ropa interior
que está mojada con mi liberación. Con consternación, me los
quito y los tiró a la papelera en la esquina. Me vuelvo a poner
los jeans y la textura contra mi pene no es muy buena. Miro mi
reloj, sabiendo que no tengo suficiente tiempo para volver a casa
y llegar a la cena a tiempo con Ryan.
Con una extraña sensación en el pecho, dejó a Hex y caminó
por la calle. El lugar donde nos reuniremos está a solo unas
cuadras de distancia. Me portalé aquí, así que no me di cuenta de
los volantes amarillos brillantes pegados por toda Main Street en
mi camino aquí.
Me acerco a uno y echó un vistazo. Me sorprende cuando
veo la cara de Ryan en el cartel, llamándolo un sabueso de
maricones no confiable.
Sé que no debería reírme, pero lo hago. El cartel es
jodidamente gracioso. Arrugó lo que estaba en mis manos y lo
tiró a la basura con una última risa, y Me pregunto a quién
cabreó. Me pregunto si debería preguntarle sobre eso en la cena y
si me diría la verdad. Seguro que la cena no va a ser tan
agradable como esperaba originalmente. Los volantes
probablemente ya lo tienen en un estado de ánimo cabreado.
Realmente considero reprogramar.
Mis sentimientos sobre cómo he tratado a Ryan son
bastante complicados. Traté de estar allí para eventos
importantes, como graduaciones y algunos cumpleaños. Pero no
sentí que me quisiera allí, y odio decirlo, realmente nunca me
permití cuidar profundamente de él. ¿Cómo se supone que vas a
formar una conexión con alguien que creaste a quien, el cual
vivirá muchas veces? Si las cosas fueran diferentes, tal vez podría
soportarlo. Nuestra relación ha sido casi inexistente por mi

76
 ●

propio miedo. Pero eso depende de mí, no de él. Necesito hacerlo

bien. Lo que eso implica, no tengo ni puta idea. Pero yo necesito
que esta sensación persistente en mi estómago desaparezca.
La campana suena sobre la puerta del restaurante italiano
cuando entró. Es acogedor con sólo alrededor de una docena de
mesas cubiertas con manteles a cuadros. Me doy cuenta de Ryan
inmediatamente y camino hacia la mesa y tomó asiento.
—Ryan, te ves bien.
—Gracias, —dice secamente. Se ve peor por el desgaste.
—Vi los carteles. Si quieres reprogramar, podemos.
—Ya estamos aquí, —dice, recogiendo su menú, sin hacer
contacto conmigo.
—¿Sabes quién los puso?
—Sí, le pagué a alguien para que fuera por la ciudad y los
quitara.
—¿Necesita ayuda para tratar con la persona que hizo esto?
Se burla y toma un sorbo de su agua.
—No te he necesitado antes. ¿Por qué empezaría ahora?
—Asiento, porque sus sentimientos son válidos. He estado
ausente, sin amor y sin interés.
—Me lo merezco.
Levanta la vista de su menú con los ojos muy abiertos, y la
sorpresa se apodera de su rostro.
—Quería reunirme porque quiero hacerlo mejor contigo,
Ryan. Sé que es demasiado tarde para ser considerado tu padre.
Hice eso, rompí la relación. No es nada que hayas hecho. Pero me
gustaría que pudiéramos intentar volver a ser amigos.
—¿Quieres ser mi amigo?
—Solo si eso es algo que quieres. entendería si no lo
hicieras.
—¿Puedo pensar en ello?
—Por supuesto, —digo cuando la camarera se detiene junto
a la mesa.

77
 ●

—¿Qué será, señores? —pregunta, dándole a Ryan una

brillante sonrisa.
—Tomaré los raviolis de espinacas, —dice, entregándole el
menú.
—Ternera a la parmesana y dos cervezas —digo—.
—¿Era una niña? —le pregunto a Ryan mientras la
camarera se va.
—Sí, una perra con la que estaba saliendo, —dice, tomando
otro sorbo de agua.
—No estaba bromeando si necesitas ayuda para manejar la
situación.
—¿Qué vas a hacer, golpearla? —dice, riéndose en su silla.
—No te rías —Por lo general, no estoy preparado para el
asesinato casual, pero no del todo.. Por lo menos, podría hacer un
demonio como la mierda y asustar a la chica.
—No, solo está molesta porque la dejé. Estoy seguro de que
ella se enfriará eventualmente.
—Entonces, ¿cómo ha ido el trabajo?
—Bien hasta hoy. Con suerte, no todos vieron los carteles.
—Estoy seguro de que estará bien, —le digo. Siento que no
estoy en mi propia piel.
Esta pequeña charla y hacer las cosas bien me hace sentir
picazón. Todavía no siento nada de afecto genuino hacia Ryan, y
hace que la sensación de chapoteo en mi estómago se siente peor.
Tal vez si me deja hacer algo por él, comprar algo para él, tal vez
me sentiría mejor.
Los pensamientos me alivian un poco cuando me doy
cuenta de su naturaleza egoísta. Se trata de cómo me siento, no
de Ryan. Al menos sigo siendo un demonio egoísta de corazón.
—Si no, iré tras su negocio. —Ambos levantamos nuestras
cervezas cuando el servidor se cayó, y probablemente sea la
primera vez que me siento orgulloso de Ryan.

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 ●

—Salud por eso. —Chocamos nuestras copas, y ahí es

cuando la conversación se ralentiza. Ninguno de nosotros sabe
realmente de qué hablar, no puedo explicar exactamente que
estoy buscando a un demonio que está poseyendo
irresponsablemente a las personas. Realmente no quiero
escucharlo hablar sobre vender casas.
Nos salva el servidor que trae nuestra comida, y comemos
en un silencio incómodo. El teléfono de Ryan suena a mitad de
un bocado y él sonríe ampliamente.
—Gracias a la mierda. —Me mira y se limpia la boca con la
servilleta.
—Tengo que irme, uno de los prospectos en la jornada de
puertas abiertas de hoy todavía quiere escribir. Pensé que iba a
perder este trato.
—Claro, por supuesto. Mantenerse en contacto.
—Sí, seguro. Gracias por la cena.
Sigo comiendo mi comida y no puedo dejar de pensar en
cómo todavía no me permito sentir una conexión. ¿Qué dice eso
sobre mí?
Sacudo la sensación rápidamente y redirijo mi atención a
Blair y qué tipo de planes tengo para la brujita.
En este punto, volver al bungalow es como respirar. La
pequeña cabaña en la playa con el revestimiento azul claro se
está volviendo cómoda…
Desagradable.
Puedo oírlo antes de verlo. Los bajos gemidos y gruñidos no
me disuaden de abrir la puerta principal. No me sorprende
cuando veo a Kas, con el culo en el sofá, y Asno golpeando detrás
de ella. Si estuviera con una mujer mortal, él fácilmente podría
destrozar su pelvis.
—Bueno, esto es jodidamente acogedor, —les digo a ambos.
Asmo ni siquiera se detiene sus embestidas, solo sigue golpeando

79
 ●

a Kas. Su culo se mueve con cada empujón mientras sus bolas

chasquean contra ella.
—Únete o vete a la mierda, —dice Kas bruscamente.
Afortunadamente para ella, todo lo que puedo ver es su culo
enrojecido en el aire. No estoy realmente inspirado para
profundizar en el mirar.
—Prefiero mantener mi pene completamente intacto. No
eres exactamente mi tipo.
—¿Qué diablos significa eso? —ella ladra
Asmo le golpea el culo con fuerza.
—No hables, lo estás arruinando.
—En ese sentido, que tengas una hermosa velada.
Cómo no parecen estar poniendo horas de trabajo esta
noche, decido irme. He enviado varias cartas a los demonios
tanto en el Infierno como en esta dimensión sobre un demonio
llamado Mara. Es extraño, pero nadie parece saber quién es ella.
La familiaridad en los ojos de Lucifer y Milcom era
inconfundible cuando mencionamos su nombre.
Escucho los gemidos de Kas a través de la pared y agarro mi
chaqueta y las llaves. No hay forma en que vaya a hacer
cualquier trabajo aquí esta noche.
El mejor lugar que se me ocurre para obtener algunas
respuestas es un antro local que es conocido por albergar seres
sobrenaturales llamados Eternity. Adecuado, ya que la mayoría
de estos seres viven una existencia inmortal. Conduzco mi
motocicleta por la costa. Podría usar el portal, pero hay algo
acerca de una motocicleta que también disfruto mucho. La brisa
fresca contra mi cara, el ruido sordo debajo de mi cuerpo, la
ligereza de la moto al girar en una curva cerrada. Puede que sea
uno de los mejores inventos que los mortales en esta dimensión
han creado.
El bar está ubicado no lejos de los muelles, donde Asmo y yo
encontramos a la mujer poseída. Incluso desde el exterior, puedo

80
 ●

sentir demonios, hombres lobo, y algunos vampiros. Gimo,

bajándome de la bicicleta y haciendo mi camino adentro. El bar
está desaliñado y asqueroso, claramente se hace el
mantenimiento apenas suficiente para mantener el
establecimiento en pie. El suelo está pegajoso y las luces están
bajas. Localizo un taburete de bar de madera vacío y dejo caer mi
trasero.
El taburete cruje como si estuviera llorando por soportar mi
peso, y sabiamente decido no poner mis brazos sobre la barra
profanada.
—¿Qué será? —pregunta el cantinero. Vampiro. Interesante.
—Whisky. —Él asiente y me sirve un vaso bajo y lo desliza
sobre la barra Ninguna persona en particular aquí se destaca en
la pregunta. Excepto por uno.
Está parado en la esquina, casi envuelto por las sombras.
sabría esto, de un demonio en cualquier lugar. Prácticamente
puedo oler su hedor desde aquí.
Belcebú.
Trayendo mi whisky conmigo, me dirijo a la esquina del
bar, donde está parada la pequeña comadreja.
—Beelzebub, —lo saludo con demasiada amabilidad.
—Daxaddon, —responde con escepticismo.
—¿Por qué estás en Hallows Deep?
—Sin razón.
—Hmm, ¿sabes algo sobre estas posesiones deshonestas?
—Por supuesto que no, el Señor estaría tan disgustado.
—Sí, sí, lo haría. —Miro a mi alrededor. A nadie aquí parece
importarle un culo a nadie más que ellos mismos. Agarró a
Beelzebub por el cuello de su camisa y lo arrastró al callejón
trasero del edificio. Me aseguro de mantener el contacto con su
piel grasosa, en caso de que decida usar un portal. —¿Qué hiciste
de nuevo, para obtener un cuerpo corpóreo? —Yo le pregunto.
—Yo—yo ayudé a encontrar al Arcángel Miguel.

81
 ●

—Mmm, eso es correcto. —lo golpeo fuerte en el estómago.

Si fuera humano, lo hubiera matado. —No te creo, Bee Snatch.
Siempre sabes lo que está pasando en el inframundo, como la
pequeña rata que eres. —Un nuevo golpe en el riñón lo hace
farfullar y escupir. —Ahora dime. ¿Dónde puedo encontrar a este
demonio?
—No lo es, —balbucea.
—¿Qué es eso? —Lo golpeó una vez más, no lo golpeo tan
fuerte como anteriormente. Básicamente lo estoy reteniendo en
este punto.
—Mara no es un demonio.
—Eso es imposible. Estas son posesiones claras.
—Ella es, —dice resoplando, —una mediana.
—No hay tal cosa, —respondo, sabiendo muy bien que
ningún demonio ha procreado otro demonio Nos hacemos, no
nacemos.
—Es por eso que ella no puede poseer correctamente,
además de que está jodidamente loca.
—¿Cómo la conoces? ¿Cómo es que nadie ha oído hablar de
ella?
—Porque ha estado aquí, viviendo como humana hasta hace
poco. Sospecho que cuando cumplió dieciocho años, las cosas
cambiaron.
—¿Quién es su padre? —Le doy un puñetazo en el riñón, sin
siquiera darle una oportunidad de hablar.
—¡Deja de golpearme! —grita, y lo golpeó en la nariz.
—¡Puaj! —Empuja mi pecho, y dejo que se derrumbe en el suelo.
—¿Quién es su padre?
—Ya lo sabes, —dice antes de alejarse del portal.
—¡Mierda! —Grito. Sabía que no debería haber terminado el
contacto físico con él. Sus palabras "ya lo sabes". Lo que significa
que ella fue engendrada por Milcom,

82
 ●

¿Lucifer? Milcom parecía el más culpable durante esa

reunión discutiendo. Mara y él se han mantenido al día sobre
estas posesiones. ¿Quién es ella? ¿No habría encontrado un barco
y se habría quedado en él?
Al menos parte del rompecabezas está conectado. Vuelvo al
bar y pongo veinte en la mesa antes de irme y tomar mi bicicleta
para conducir a casa.
Desafortunadamente para mí, Kas y Asmo todavía están
jodiendo. Necesito alcanzarlos mañana. Por ahora, tal vez pueda
pasar tiempo en sueños en los sueños más dulces de la brujita.

83
 ●

Capítulo 9.
Blair.
Todavía estoy un poco aturdido cuando salgo de Hex y
conduzco a casa. Mi sed de venganza contra Ryan se apaga en
este momento. La mitad debido a lo bien que se sintió pegar esos
carteles alrededor de la ciudad. La otra mitad debido a cuán duro
me vine alrededor de los dedos talentosos de su padre.
Ahora solo necesito averiguar qué quiere mi aquelarre y
cómo hacer que paguen por lo que hicieron. Como con cualquier
grupo de individuos débiles, necesito encontrar el eslabón más
débil y usarlos para mi ventaja. Planeo usar Clover para esa
parte de mi plan. Mayormente porque no es una bruja muy
talentosa y porque se acostó con Ryan. No me importa si ella
creyó sus mentiras, ella todavía me llamó perra y trató de
sacrificarme con el resto del aquelarre.

84
 ●

Luego está el asunto del robo en el restaurante. En

situaciones normales eso sería de alta prioridad, pero la forma en
que la gente está jugando conmigo últimamente, está más abajo
en la lista. Ya tengo una idea de como atraer a la rata fuera, con
la ayuda de Stevie. Ella es la mejor en pociones.
Hablo en voz alta para mí mismo, tratando de inventar un
plan sobre el aquelarre. Secuestrar a Clover, tal vez alguna
tortura ligera. sacarle todo lo que pueda. Tal vez unir sus pies
con cemento y tirarla al océano. tal vez dejarla viva.
Sinceramente, dependerá de mi estado de ánimo.
Verdaderamente, la persona que necesita pagar más es mi madre.
Si puedo encontrar una manera de despojarla de su magia,
esa sería la última recompensa. Desafortunadamente, ninguna de
estas perras asustadas ha mostrado sus rostros en el pueblo desde
el ritual. En la primera oportunidad que tengo, me quedo con
uno de ellos extrayendo información.
Aparco mi coche en el garaje de mi casa, y la puerta
automáticamente se cierra, Stevie está sentada en el sofá viendo
uno de sus programas cuando caminó hacía ella.
—¿No saliste en absoluto hoy?
—No, he estado viendo Under Deck todo el día, —dice ella.
—Me parece bien. Sin embargo, tengo algo para mantenerte
ocupado.
—¿Qué es eso? —pregunta ella, interesada. Stevie no es de
los que se quedan ociosos. Mientras ella podría tener la
personalidad optimista general de las otras brujas, ella no tiene
un espíritu completamente libre. Le encanta trabajar en Hex y
tener sus manos sucias.
—Trufas de la verdad. Necesito alrededor de una docena.
—Oh, ¿y de quién estamos exigiendo la verdad?
—Bueno, dos docenas, en realidad. Necesito un lote para
Hex. Alguien esta robando. Y podría necesitar más si mi próximo
plan se hace realidad.

85
 ●

—¿Qué plan es ese?

—Encerrar a uno de esos traidores en el sótano y obtener
las respuestas que necesito.
Stevie suele ser dulce y amable, pero asiente con la cabeza,
completamente de acuerdo con el plan de secuestro. Me siento
un poco mal por estar ayudando a sacar este lado de ella, pero es
necesario. No solo me lastimaron a mí, sino que fueron por las
dos.
—Tengo una cita con Dax mañana.
Ella arquea una ceja mientras revisa los gabinetes de la
cocina, obteniendo los materiales que necesita para las trufas.
—¿Adónde van?
—No estoy seguro. Me va a recoger aquí.
—¿Necesitas que desaparezca para cuando regreses?
—Con la forma en que fueron las cosas hoy en mi oficina,
diría que sí.
—¿Qué pasó en tu oficina?
—Una dama nunca cuenta, —digo por encima del hombro
mientras camino hacia mi habitación.
Puedo escuchar a mi prima decir: —No eres una dama.
La ignoro y me preparo para la noche. No hay nada más
que hacer que no lo haya hecho ya. Ciertamente no voy a dejar
que esas brujas me conviertan en un encierro asustado. Voy a
disfrutar de mi cita con Dax mañana, y me imagino el resto a
medida que avanza.
Tal vez estoy siendo estúpido por suponer que necesitan
una luna llena, pero es cuando la magia de todos es la más
fuerte. Necesitan eso y la totalidad del aquelarre juntos para
atacarme de nuevo. Tengo tiempo y no planeo desperdiciarlo,
pero tampoco planeo no vivir mi vida en él mientras tanto.
La forma en que Dax me hizo sentir es la más viva que
recuerdo sentir. Mereces sentirte bien, ¿verdad?

86
 ●

Mis manos se deslizan por mi falda plisada, alisando la tela

escocesa azul marino. Normalmente no soy obediente, pero algo
en Dax me hace querer escuchar y obedecer. Él diciéndome
cuánto me ama en faldas y cómo lo hace, por él me hace querer
ser una buena chica. Lo combinó con una camiseta negra
ajustada. Mantengo mi maquillaje bastante simple, un ojo de
gato negro, algo de rímel y lápiz labial desnudo.
—Voy a ir a la casa de Bianca, —me dice Stevie mientras
sale de la casa.
—¿Pensé que ustedes dos terminaron? —Bianca es un
vampiro, y fue difícil para ellas hacer que sus horarios funcionen
con el poco tiempo nocturno que tenemos durante la mitad del
año.
—No significa que no podamos conectarnos a veces.
—Punto justo. Sin embargo, no dejes que te muerda.
—Pero me gusta un poco, —se queja.
—Mientras sea lo que quieras, Stevie. —Me consuela saber
que ella está con Bianca esta noche. En su mayor parte, las
brujas se mantienen alejadas de los vampiros Así que nuestro
aquelarre no debería darle ningún problema.
—Te enviaré un mensaje de texto cuando me dirija a casa.
—Está bien, ten cuidado, —le digo mientras cierra la puerta
del porche. Todavía no es la puesta del sol, así que me imagino
que tendrá que pasar a la clandestinidad con Bianca por unas
horas.
Compruebo mi apariencia en el espejo una vez más. casi
dejo que mis inseguridades me agarran por un momento, y luego
recuerdo cómo Dax me hizo sentir. Nos vamos a centrar en eso, y
no en la montaña de problemas que estoy lidiando actualmente.

87
 ●

El estruendo del motor de una moto me saca de mis

pensamientos al ver a Dax conduciendo por mi camino de grava.
Maldita sea, se ve bien.
Estaciona su bicicleta, se quita el casco y se pasa los dedos
por su cabello. Tiene una camiseta gris oscuro que muestra su
piel besada por el sol y tatuajes
—Oye, —dice.
—Oye, tú. —Besa un lado de mi cabeza y tira del dobladillo
de mi falda.
—Buena chica —susurra en mi oído. Sí, definitivamente me
hace querer escuchar eso una y otra vez.
¿Qué diablos me está pasando? Casi me derrito contra su
toque cuando su mano se desliza hasta mi cintura.
—¿A dónde vamos? —preguntó mientras un trueno suena
en la distancia.
—Quería llevar mi motocicleta allí, pero parece que va a
llover. ¿Podemos tomar tu coche?
Asiento con la cabeza y lo miro. ¿Debería invitarlo a entrar
ahora y montarlo como si estuviera en un rodeo?
—No bebe. Te llevaré a cenar, luego podemos volver aquí
para el postre. —Me guiña un ojo. Siempre es lo peor cuando un
hombre sabe que está bueno y el efecto que tiene sobre ti. Estoy
tan completamente jodida.
—Sí, podemos tomar mi Jeep.
Introduzco el código y abro la puerta del garaje. Dax me
sigue hasta el asiento del conductor lateral del coche y me abre
la puerta. Mientras me subo al asiento del conductor, podría
doblarse un poco para que pueda mostrar un poco de la ropa
interior de encaje descarado que tengo debajo.
—Pequeña bruja traviesa, —dice mientras cierra la puerta y
rodea el auto antes de meterse en el asiento del pasajero.
—¿A dónde?
—Empieza a conducir hacia North Grove.

88
 ●

—¿Vamos a salir de la ciudad?

—Sí, a menos que eso sea un problema, —pregunta. No
parece enojado, pero genuino, que si no quería irme de la ciudad,
él no me obligaría.
—No, solo ha pasado un tiempo. —Doy marcha atrás con el
Jeep por el camino de entrada y presione el botón, cerrando la
puerta del garaje.
Nos quedamos en silencio por unos momentos mientras
conduzco hacia la autopista. La mano de Dax se pasea por mi
muslo y dibuja círculos perezosos en mi piel. Me está volviendo
loca.
—Entonces, ¿cuántos años tienes, de todos modos?
Se ríe, y es profundo y grave.
—Más viejo de lo que parezco, supongo.
—Hmm, críptico. No un vampiro, definitivamente no un
ángel, ¿tal vez un mago?
—Tal vez, —dice, la presión de su pulgar aumenta en mi
muslo.
—¿De verdad no vas a decirme lo que eres?
—Paciencia, niña. —Me aprieta el muslo y no puedo evitar
el sonido de placer que se escapa de mis labios. —Dobla a la
izquierda aquí arriba, —indica Dax, enciendo mi luz intermitente
y giro hacia la calle lateral.
—¿Cangrejos de Carly? —Pregunto.
—Probablemente debería haberme asegurado de que te
gustaran los mariscos, pero lo asumí de su menú en Hex.
Sonrío, los recuerdos me inundan demasiado rápido.
—Mi papá solía tráeme aquí en mi cumpleaños.
—¿Todavía está por aquí?
—En algún lugar, solo lo veo en mi cumpleaños.
Él frunce el ceño y su mano se queda quieta en mi muslo.
Probablemente no sea la mejor idea para dejar tus problemas de
abandono de papá en un tipo que no ha sido el mejor padre.

89
 ●

—Envió dinero, pero simplemente no podía ser un buen

padre, así que hizo lo mejor que pudo. —digo, y Dax asiente con
la cabeza. No puedo detenerme de la palabra vomitar. —No es
para todos, ser padre. Sé que no es para mí, pero mierda sucede a
veces. No lo convierte en una mala persona.
—Blair, nena, toma un respiro.
Lo hago y exhalo, dándole una sonrisa.
—¿Listo para entrar? —él pide.
—Sí. —Voy a abrir mi puerta y él me chasquea la lengua.
Así que espero a que salga del Jeep, caminé y abrí la puerta. Iba a
saltar, pero me agarra por la cintura y me deja en el pavimento.
Carly 's está en medio de la nada. Es mitad interior, mitad
exterior, con enorme toldo para proteger a los clientes de la
entrada en lluvias torrenciales o del sol. Dax mantiene su mano
colocada firmemente en mi espalda baja mientras caminamos
hacia el puesto de anfitriona.
—Mesa para dos, —dice y la mujer frunce el ceño, mirando
la tablet.
—Será una hora.
Dax toca su mano y hace contacto visual con ella.
—Estoy seguro que si Ud. mira de nuevo, hay una mesa
abierta. Sus palabras son suaves e hipnotizantes.
—Bueno, no sé cómo me perdí eso, —dice la anfitriona,
agarrando dos menús y acompañándonos a la mejor mesa de
todo el lugar. Está justo en un lago, así que podremos comer y
ver cómo cae la lluvia. Dax saca mi silla y tomó asiento,
aplanando mi falda debajo de mi trasero.
Dax se sienta frente a mí y sonríe.
—Mage sigue siendo mi mejor opción.
Reconoce mis sospechas, pero no responde.
—¿Quieres conseguir una docena de cangrejos?
—¿Eso suena bien, hush puppies y calamares también?

90
 ●

—Lo que quieras, nena, —dice, dándome una sonrisa. ese

jodido hoyuelo aparece y casi muero y caigo al lago. —Luces
deslumbrante esta noche, —dice.
—Gracias, tú tampoco te ves tan mal.
Él sonríe y pone su codo sobre la mesa, su mandíbula
apoyada en su puño.
—No eres como otras brujas que he conocido.
—¿Cunty, o retozando desnuda en el bosque? —Su risa es
fuerte y en auge y me hace sonreír.
—Joder, eres lindo.
La camarera se acerca a nuestra mesa y me mira con
demasiada dureza. Realmente estaba tomando la resolución de no
lastimar a las personas que coquetean con mi cita, pero si ella no
se detiene pronto, felizmente romperé esa resolución.
Afortunadamente, ella redirige su atención hacia mí.
—¿Qué puedo traerte de beber, cariño?
—Quiero un flechazo de naranja, por favor. —Ella sonríe y
asiente con la cabeza, mirando de nuevo a Dax.
—Tendré lo mismo. Una docena de cangrejos grandes,
calamares y Hush puppies. Gracias. —Ambos devolvemos nuestros
menús al mesero y ella se aleja.
—¿Hay algo que me vayas a decir sobre ti, Dax?
—A ver, soy geminiana, mi color favorito es el verde, odio la
avena, y me gusta el béisbol.
—Muy vago, —digo, mientras juego con el mantel frente a
mí.
—¿Qué pasa contigo?
—Virgo, negro, odio mi aquelarre. Me gusta mi prima
Stevie.
—¿Qué le pasa a tu aquelarre? —él pide. La camarera
educadamente pone nuestros tragos, y tomó un sorbo fuerte.
—Más bien, ¿qué no les pasa? han dependido de mi
financieramente durante los últimos cinco años, y luego trataron

91
 ●

de sacrificarme algunos días atrás. —Sus ojos se agrandan, pero

parece casi como una reacción forzada. ¿Posiblemente ya sabía?
—¿Qué vas a hacer?
—Planeo obtener algunas respuestas antes de actuar.
Él asiente con la cabeza.
—¿Algo en lo que pueda ayudar?
—¿Qué sabes exactamente sobre los aquelarres? —Sus ojos
verdes son brillantes y su hoyuelo está haciendo acto de
presencia de nuevo.
—Estoy bien informado.
—Hmm, —digo mientras tomo su respuesta. Quiero ayuda,
pero la verdad es que realmente no conozco a Dax. Así que
traerlo a este drama cuando no sé si puedo confiar plenamente
en él no me parece prudente.
—Lo tomaré bajo consideración.
—Bastante justo, —dice. El ayudante de camarero viene y
deja nuestros cangrejos y costados y se me hace la boca agua.
Esta no es una buena manera de comer frente a un chico
que te gusta por primera vez, pero a Dax no parece importarle
mientras separamos nuestros cangrejos y comemos en silencio. La
lluvia entra de repente y golpea el techo de metal y gotea en el
lago. Nuestras manos están sucias y Dax tiene un poco de Old
Bay en un lado de la cara, pero algo acerca de esta cita se siente
más íntima que otras en las que he estado.
No estoy seguro de cómo es eso posible cuando el hombre se
niega a renunciar a cualquier información personal.
Terminamos nuestra comida, y la lluvia sigue siendo
bastante fuerte. Hay un fregadero al aire libre y voy a lavarme
las manos. De repente, Dax está detrás de mí, su cuerpo más
grande que rodea el mío mientras se lava las manos también. Este
No debería ser atractivo, pero lo es.
—Gracias por venir conmigo, —dice en susurros, Nuestras
manos entrelazadas y jabonosas bajo el agua corriente.

92
 ●

—Gracias por la cena.

—Mi placer. ¿Quieres tomar un helado antes de llevarme a
buscar mi moto? —Me doy la vuelta, agarrando una toalla para
secarme las manos. El tiene una sonrisa en su rostro. La forma en
que lo expresó, dándome una opción, pero no manera que este
hombre no vaya a volver a casa conmigo.
—Eso suena genial.
Dax paga la cuenta y usa su cuerpo más grande para
proteger el mío mientras corremos bajo la lluvia hacia mi coche.
Todavía abre la puerta de mi auto y espera a que llegue hasta
que se sube al coche. Ambos estamos mojados en mi Jeep y las
ventanas están brumosas cuando se inclina sobre la consola,
agarrando mi nuca con mi mojado cabello. El beso es feroz y
exigente. Dax no está pidiendo ningún permiso. Solo toma
mientras su lengua separa mis labios, creo que me va a tocar
más, pero el beso continúa. Su lengua domina la mía y me
muestra quien está a cargo. Me pone húmedo y necesitado. Froto
mis muslos juntos buscando fricción.
Dax rompe el beso, su cabello oscuro húmedo y sexy. Él me
sonríe y me guiña.
—Paciencia, niña.
Quiero rogar, pero lo miro fijamente por un momento,
tratando de recopilar suficiente información para que pueda
encender el motor y llevarnos a casa tan pronto como sea
posible.

93
 ●

Capítulo 10.
Blair.
Una vez que he reunido suficiente poder mental para
encender el auto, despejo mi garganta y conduzco de regreso a
Hallows Deep.
—¿Helado? —pregunta con voz. Sé que él sabe lo que me
está haciendo. A ningún hombre, o lo que sea, se le debería
permitir ser tan sexy.
—¿En serio?
—La lluvia está parando, ¿por qué no? —dice, sonriéndome.
¿Por qué no? Porque has mojado mis bragas y tienes que
hacer algo al respecto. En lugar de decir eso en voz alta, asiento
con la cabeza y le doy una sonrisa tensa.
—¿Conos de caldero?
—Olvidé que todo en esta ciudad tenía temática de
Halloween.

94
 ●

—¿Has estado aquí antes?

—Sí, hace mucho tiempo.
Asiento con la cabeza y no le pregunto más. No estoy
seguro de por qué, pero la idea de él criando a Ryan hace que me
duela el estómago. Dax es venganza.
Voy a disfrutar cada momento, pero él no puede ser más
que eso.
Está oscuro, pero las luces de Main Street son brillantes
cuando nos acercamos a la tienda de helados. Entonces es cuando
veo una masa de cabello castaño oscuro y rizado y se que es
Clover.
—Joder, —siseo.
—¿Qué ocurre?
Quién sabe la próxima vez que tendré una oportunidad
como esta. Dax no es humano. Adivino que su brújula moral
también está un poco descentrada. Tal vez él no pensará que soy
una lunática absolutamente trastornada por proponer un
secuestro por segunda actividad en una cita.
—¿Cuál es su postura sobre el secuestro?
—¿Como extraterrestres? —Me mira, perplejo. Vivimos en
un mundo con vampiros y hombres lobo, si no crees en
extraterrestres, eres un idiota.
Pero ahora no es el momento de hablar sobre las formas de
vida fuera de la Tierra.
—No, como esa perra de ahí, está en mi aquelarre, y he
estado esperando para encontrarla a uno de ellos para encerrarlo
en mi sótano. Lo miró con escepticismo, este es el punto de
inflexión de nuestra cita y corre por las colinas.
Me mira con los ojos muy abiertos por un momento.
—Eres una sorpresa, eso está claro, Blair.
—No necesito tu ayuda. Solo necesito meterla en mi baúl.
—¿Cómo planeas meterla en tu baúl? —Arquea una ceja
a mi.

95
 ●

—Tengo la fuerza suficiente, —le digo, y él se ríe.

Se encoge de hombros.
—Estoy dentro. ¿Cuál es el plan, jefe? —No estoy para
mentir, no estoy completamente sorprendida. Siento que Dax es
un alma gemela, la gente a quienes han sido despreciados pueden
entender la venganza.
Observó mientras Clover camina por la calle y el
pensamiento intrusivo de golpearla con mi auto pasa por mi
mente. La necesito viva, me recuerdo a mi misma. Aunque la
idea de sus rizos marrones atrapados en la parrilla de mi auto
son igual de atractivos. Me sacudo físicamente, mi cabeza se está
convirtiendo en un lugar aterrador últimamente.
—¿Crees que podrías hacer que ella caminara detrás de la
oficina de correos? —Pregunto.
—Sí, ¿y luego qué?
—Yo haré el resto. Solo llévala detrás de la oficina de
correos. Dax ni siquiera me pregunta mientras estacionó el Jeep
detrás de la oficina de correos y él sale a traer a Clover de vuelta
aquí. ¿Por qué estoy tan excitado por el hecho de que él está
totalmente de acuerdo con ayudarme a secuestrar a esta perra?
Ryan nunca lo haría, ¿cómo están incluso relacionados? Además
de la apariencia física, son completamente opuestos, pero
supongo que no debería ser una sorpresa ya que él no tenía una
mano dura en criándolo
Me quedó lo suficientemente cerca para poder escuchar la
conversación. Él la agarra suavemente por el codo y quiero darle
un puñetazo en la cara, a pesar de que es él quien la tocó. Clover
ya ha tocado suficientes cosas mías.
—Disculpa, cariño, —dice con su voz deliciosamente
profunda, te juro que me siento mojada.
—¿Oh, sí? —pregunta ella, dándose la vuelta tan pronto
como lo mira a los ojos. Es como si estuviera paralizada. Al igual
que nuestra anfitriona fue antes.

96
 ●

—¿Puedes venir conmigo detrás de la oficina de correos?

—Oh por supuesto. Soy Clover.
—Es un lindo nombre. ¿Qué haces, Clover?
—No hay trabajo real en este momento, —dice, y pongo los
ojos en blanco.
Una vez que están lo suficientemente cerca del Jeep, salto y
agarró a Clover por el brazo.
—Hola, Clover.
Sus ojos son enormes y claramente está fuera de cualquier
trance que Dax le haya puesto.
—¿Bla-Blair?
—La única, perra. ¿Quieres hacer esto de la manera fácil o
difícil? —Ella va a gritar y rápidamente la silencio con un
silentium. Ella empieza a golpearme, tratando de salir de mi
alcance. —Buenas noches, Clover. Somnum.
Ella cae allí mismo sobre el cemento y definitivamente
suena como si le hubiera golpeado el hombro bastante duro.. No
es tan satisfactorio como si alguien la golpeara con un Jeep, pero
es lo suficientemente satisfactorio.
La empujo con mi bota y me aseguro de que salga antes de
abrir la puerta. La agarró por debajo de las axilas y gruñó. Su
peso muerto es demasiado pesado para que lo levante. Hechizos
para levantar algo tan pesado pasan por mi cabeza.
—Fuerza de suficiente, —murmura Dax mientras la lanza
sobre su hombro y la coloca bruscamente en el maletero. Ya
estaba excitado, pero el hecho de que simplemente la arrojó allí
como una maldita muñeca de trapo, lo que aumenta aún más su
atractivo.
—La habría metido allí, eventualmente.
—¿UH Huh? ¿Seguimos comprando helado?
—Ella debería estar fuera por lo menos cinco horas.
Sus ojos brillan de emoción mientras cierra el baúl y toma
mi mano en su caminar de regreso hacia la heladería.

97
 ●

Su mano es cálida y grande.

Ryan nunca tomó mi mano cuando caminábamos. Nunca
me di cuenta de cómo disfrutaría esto. Cómo sería para un
hombre estar tan enamorado de ti y quiero reclamarte en todas
direcciones.
—¿Así que estás totalmente de acuerdo con lo que acabamos
de hacer? —Le pregunto.
—¿Dijiste que te lastimó?
—Sí —digo y miro hacia abajo a mis pies mientras
caminamos.
—Entonces sí, jodela. —Necesito un cambio de bragas.
Le sonrío y él se inclina y coloca un suave beso en mis
labios mientras esperamos en la fila para comprar un helado.
Dax ordena Moose Tracks y obtengo cono de menta con chispas
de chocolate, del tipo verde, porque el tipo blanco es raro.
Nos sentamos en un banco cercano mientras comemos.
—Todo el asunto del secuestro no cambia que quiera
invitarte esta noche —digo con confianza.
Me sonríe y toma un sorbo de mi helado antes de colocar
un rápido, beso frío en mis labios.
—Bien, —dice antes de besarme de nuevo. —¿Deberíamos
irnos? —Ambos terminamos lo último de nuestro helado y
tiramos lo que queda a la basura. Toma mi mano en la suya de
nuevo mientras caminamos de regreso al Jeep. Compruebo y
estoy segura de que Clover todavía está desmayado en el maletero
cuando Dax abre mi puerta y salto.
Hay mariposas en mi estómago y sé que debería aplastarlas.
No son sentimientos emocionales. Son jodidos sentimientos.
Quiero su cuerpo encima del mío. ¿Bien? Bien.
Dax mantiene su mano en mi muslo todo el camino de
regreso a mi casa, y desearía poder mantener a esta perra en mi
auto mientras me salgo con la mía.

98
 ●

Pero ella necesita ser encerrada y atendida primero. Aunque

el envenenamiento por carbono y monóxido es una forma válida
de matar a alguien. ¿Por qué me siento asesina esta noche?
Cuando estacionó el Jeep en el garaje, Dax me mira con una
ceja levantada.
—¿Quieres que la lleve a tu sótano?
—Si no te importa.
Ambos salimos del Jeep y abro la cajuela mientras Dax la
arroja sobre su hombre. Abro la puerta de la casa principal. No
es capaz de cruzar el umbral, mis protecciones impidiéndole
físicamente entrar. Lo quito bajo mi aliento.
Me arquea una ceja.
—Dax. ¿Estás de acuerdo con que tome una gota de tu
sangre?
Él asiente, y me alegro de que no sea raro por eso. Usando
un conjuro aguja, extraigo una gota de su sangre y la de Clover.
Cuando gotea sobre el umbral, hago algunos cánticos para abrir
las salas para mis invitados. El sonríe cuando le hago un gesto
para que pase. Llevándolo a la puerta del sótano, enciendo las
luces y él me sigue.
—Esperaba una mazmorra, no un puto sótano bien
terminado, —dice, riendo, y yo me encojo de hombros.
Abro el dormitorio de invitados con el marco de la cama de
hierro fundido y hago que la acueste en la cama. Tomando dos
corbatas de seda, las envuelvo alrededor de sus muñecas.
—Necesito hacer algunos hechizos para asegurarme de que
no pueda salir. ¿Quieres esperar en la sala de estar? No debería
tardar. —Besa un lado de mi cara y sube las escaleras. ¿Quién
sabía que el secuestro podría ser tan romántico?
Deletreo sus lazos para que no pueda salirse de ellos.
Silencio la habitación para que nadie escuche sus gritos, y puse
una protección en la puerta para que Stevie y yo seamos los
únicos que podamos entrar y salir. Afortunadamente, no hay

99
 ●

ventanas, así que eso no será un problema. Ella estará fuera por
unas pocas horas más, de todos modos. Así puedo disfrutar el
resto de mi velada.
Tardó unos quince minutos en asegurarme de que Clover no
despierte en cualquier lugar en cualquier momento mientras
subo las escaleras a la sala de estar. Viendo a Dax sentado en mi
sofá me hace algo. Su complexión es grande y se ve relajado con
las piernas abiertas mientras su mirada aprecia mi decoración.
Está lamiendo lo que parece chocolate de sus dedos, y lo miró
boquiabierta.
—Dax, ¿qué estás comiendo?
—Esos chocolates del mostrador, realmente buenos. Maldita
sea, ¿Los hiciste tú? —dice, lamiendo el último trozo de chocolate
de su pulgar. Es sexy, pero diablos no tengo ni idea de qué hacer.
—Dax, nena, ¿cuántas te comiste?
—Cuatro, —dice mientras palmea su regazo.
—Um, ¡solo dame un segundo! —Corro a la cocina y miro
las trufas y gemido. Llamó a Stevie y agradezco a Hécate
mientras responde. —¡Stevie! Mierda. Dax está aquí y se comió
cuatro de tus trufas de la verdad. ¿Qué tengo que hacer?
Ella se ríe por teléfono.
—Lo correcto sería tomar una y sincerarte, —dice ella.
No soy un gran fan de esa idea.
—¿Qué pasa si digo algo sobre Ryan?
—Riesgo, recompensa, —dice mientras se ríe. Puedo escuchar
a Bianca diciendo algo para ella en voz baja. Cuelgo, sin decir
nada más. Tomó una respiración profunda antes de hacer estallar
una trufa en mi boca mientras camino de regreso a la sala de
estar.
—Joder, eres tan hermosa. ¿Tú lo sabes? —dice, palmea su
regazo de nuevo. Esta vez, me siento a horcajadas sobre su regazo
como me indicó. Me acaricia el pelo.

100
 ●

—He estado pensando en cómo te sentirías en mi regazo

toda la noche. Eres la criaturita más impresionante que he visto
en mi vida.
—Te comiste trufas de la verdad de espelta —le espetó, los
chocolates ya se están tomando efecto.
—Mmm, ¿es eso lo que sientes? —Sus grandes manos se
deslizan sobre mis muslos, y aprieta. —Estos jodidos muslos, no
puedo dejar de pensar en ellos. Quiero morderlos.
—Me has hecho estar tan jodidamente húmeda esta noche,
—le digo, sintiéndome perdida y feliz. Cada pensamiento
simplemente derramándose de mis labios.
Su agarre se aprieta en mis muslos, y gime.
—Las cosas indecentes que quiero hacerte, Blair.
—Dime, —susurro.
—Quiero inclinarte y azotar tu trasero hasta que me
ruegues que pare. Quiero follarte mientras duermes y despertarte
con un orgasmo.
Me haces querer hacer cosas que nunca antes había querido
hacer. Quiero mirar tus ojos bonitos cambiar de color cuando
lama tu coño que no pueda respirar. —No puedo evitarlo
mientras me muevo contra su longitud. —Nunca he deseado
tanto a alguien. Quería cuidar de alguien tan bien. Quiero
mimarte a la mierda, —dice.
—Quiero eso. Tócame, Dax.
Sus ojos verdes son tan oscuros cuando me mira a la cara.
Su pulgar deslizándose entre mis labios y tirando de mi labio
inferior.
—¿Qué quieres de mí, pequeña bruja?
“Quiero que seas mi papi, Dax. nadie me ha tratado como
tú esta noche. Es patética. Me siento patético. Pero creo que
podrías cuidar de mí. —Me tapo la boca con las manos y gimo.
Quiero morir en el acto. Cómo es mortificante y vergonzoso, de
ninguna manera eso es algo que Dax quiere. Apenas me admití a

101
 ●

mí misma que quería que un hombre tomara el control y cuidara

de mí, y aquí estoy vomitando palabras al hombre más atractivo
que he tenido. Mis manos empujan contra su pecho mientras
trato de salir de su regazo. Su agarre es implacable mientras me
desliza hacia arriba.
Él gruñe y golpea mi trasero.
—No es patético. Mi pequeña, poderosa y traviesa bruja. ¿La
bruja quiere que yo sea su papi?
—Sí, —digo sin aliento mientras mis manos agarran sus
hombros.
—¿Qué más quiere mi niña?
—Quiero saber lo que eres, —susurro, y puedo sentirlo
tratando de luchar contra el hechizo.
Él gime, pero responde:
—Demonio, Incubus. —El querer follarme mientras duermo
,mejor ahora, y definitivamente no me opongo. —¿Estás asustada?
—No. Creo que me gustaría eso. Me gusta que seas un
demonio. —Beso su barba. —Mi demonio. —No puedo evitar
querer besarlo y lamerlo por todas partes.
Su magia está empujando contra la mía, y es la sensación
más adictiva que he experimentado. —Tu magia. Nunca me
había sentido así antes.
—Yo tampoco, —dice mientras me mira con lo que parece
admiración.
—Muéstrale a papá lo mojada que estás.
Agarro su mano y la deslizó entre el encaje de mis bragas
para que pueda sentir lo húmeda que estoy por él.
—Me vine en mis pantalones el otro día. Joder —suelta, y
me río. Él parece tan irritado por admitir eso. Tenía mis
sospechas, pero es agradable saber que tengo ese efecto en él como
el lo tiene en mi.

102
 ●

La dinámica con la que estamos bailando es algo que

siempre he querido. Un hombre que tiene tanta confianza en
cómo se toma y se entrega a mí.
—He querido esto durante mucho tiempo.
—¿Qué?
—Un hombre que pueda quitarme las decisiones, hacerme
sentir que puedo el control. —Se lame los labios y mira mi pecho.
—Te voy a arruinar por cualquier otra persona, Blair. —Lo
miro por un momento y me aclaro la garganta. No puede hablar
en serio.
—Tenías muchas trufas. Si no quieres hacer esto ahora
mismo, está bien —digo.
—Blair, si no me muestras tu coño mojado en cinco
segundos, voy a ponerte sobre mis rodillas.
Mis ojos se agrandan, me pongo de pie y me quito las
bragas, entregándolas suavemente a él. Toma el cordón negro, lo
amontona y lo lleva a su nariz y gime.
—De rodillas, niña.
—Sí papi.

103
 ●

Capítulo 11.
Dax.
—Si papi.
Blair se desliza hasta ponerse de rodillas, obedientemente
entre mis piernas. Miro alrededor de su sala de estar y pienso en
cómo quiero que sea esta noche. Definitivamente no esperaba
verter toda mi alma después de comer algunos chocolates al azar
en su mostrador.
Sus manos van a desabrochar mis pantalones, agarró sus
muñecas
—Un día tendré tu boca alrededor de mi polla, pero esta
noche vamos a tomar las cosas con calma, Blair. ¿Hay algo que
no te guste?
—¿Que tu polla no está en mi boca? —ella dice y se siente
como si estuviera tratando de empujar contra las trufas de la
verdad. Eso no funcionará.
Sus ojos suplican a los míos, en su profundo color miel.

104
 ●

—Quítate el glamour.
Eso hace que ella se levante.
—No me gusta quitarlo. Me hace sentir vulnerable.
—Quiero leer fácilmente cómo te hago sentir, hermosa, pero
si no estás lista, puedo ser paciente.
—¿Podemos esperar? —pregunta en voz baja, y tomo su
mejilla. Su piel es suave y cálida.
—Por supuesto. Volviendo a mi primera pregunta. ¿Hay
algo que no te guste?
—Nada me viene a la mente actualmente. —Sus manos se
agitan en su regazo.
—Te ves tan jodidamente lindo. ¿Cuándo van a desaparecer
estas irritantes trufas?
—Probablemente otra hora. —Gimo, sin gustarme
completamente la idea de cada pensamiento que viene a mi
cabeza derramándose de mi boca.
—Tendremos que hacer que esto dure, nada como el otro día
en tu oficina. Quiero verte. Quítate el top.
Se lame los labios y lentamente se quita la blusa de la falda.
El material es elástico y se adhiere a su piel mientras desliza su
camisa fuera de su cuerpo. Lleva un sostén de encaje negro y es
la primera vez que veo algunos de sus otros tatuajes. Ella tiene
un mandala de una flor de loto adornada con dos lunas debajo
de sus senos y una ramita de lavanda tatuada en su clavícula del
lado izquierdo.
Mi dedo recorre la parte superior del encaje. Sus tetas son
llenas y de color blanco cremoso. Básicamente derramando sobre
el material rogando ser tocado.
—Esto también, niña —digo, tirando del cordón. Ella me
mira mientras sus brazos se envuelven detrás de su espalda y se
desabrocha el sostén, enviándolo al suelo. Sus pezones se perforan
con pesas a través de cada pezón. El final de cada barra tiene

105
 ●

tachuelas moradas. El color contrasta perfectamente con su piel

pálida.
Empujo suavemente la barra hacia un lado, probando su
sensibilidad, ganándome un gemido.
—Tan hermosa, Blair. —Ella se sonroja y mira hacia otro
lado. Pongo mi pulgar debajo de su barbilla y la obligo a
mirarme.
—¿Mi pequeña bruja feroz no sabe cómo tomar un
cumplido? —Aparta la mirada de nuevo y agarró su mandíbula
con más firmeza. —Papi va a tener que trabajar en eso, ¿no?
Siéntate en mi regazo. —Suelto su mandíbula me relajo contra su
sofá, juntando mis piernas para que ella pueda estar a
horcajadas sobre mí. Me preocupa que se haya quedado callada y
necesito asegurarme de que esté bien.
Deslizo mis manos por sus brazos y no puedo evitarlo
mientras miro sus tetas, rebotan ligeramente, cuando ella se
sienta a horcajadas sobre mí. casi se me olvida que me dio sus
bragas y nada nos separa, excepto el hecho de que todavía está
vistiendo su linda faldita. Eso puede quedarse.
—Blair, ¿estás bien? —preguntó, frotando sus brazos.
—Estoy bien. No estoy acostumbrado a la atención,
¿supongo?
—Mmm, tendremos que trabajar en eso. Porque planeo
darte mucha atención. Tan suave y hermoso. —Me acarició
contra sus pechos y ella me empuja. Mi lengua inclinándose
hacia adelante y trazando el piercing poniendo todo su pezón en
mi boca. Hago girar el piercing con la lengua haciendo clic en el
metal entre mis dientes antes de chupar de nuevo. Sus manos
agarra mis hombros para sostenerla mientras ella gime mientras
chupo más fuerte.
—¿Sensible, niña?

106
 ●

—Muy, no te detengas. —Su voz es puro pecado. Si no

supiera ya que es una bruja, un súcubo habría sido un segundo
cercano.
Palmeo sus dos tetas y le doy atención a cada una con mi
boca. Tirando de los piercings con suficiente presión para hacerla
retorcerse en mi regazo. Luego cambiándolo y tomando todo su
pezón en mi boca.
Mis palmas se arrastran hacia su estrecha cintura,
finalmente descansando sobre sus gruesos muslos. Se ven aún
mejor presionados contra mis piernas. Amaso los pulgares en
ellos, y Blair se inclina para colocar besos a lo largo de mi cuello.
Ella no es suave mientras chupa y muerde la piel. Me gusta que
no sea mansa ni tímida.
Ella tira de mi barba corta mientras me pellizca el lóbulo de
la oreja.
—Cuidado, bruja. —Agarró un puñado de su trasero y la
muelo sobre mi polla para que pueda sentir lo que me está
haciendo.
—No quiero tener cuidado, —dice ella.
—¿Qué deseas?
—Quiero complacerte. —Sus palabras se disparan
directamente a mi polla y gimo.
—¿Por dónde empezar contigo? —Me lamo los labios
mientras miro sus tetas una vez más. No sé por qué, pero la idea
de un polvo rápido en su sofá simplemente no me convence. Blair
merece ser devorada y adorada.
—¿Dormitorio? —preguntó, arqueando una ceja hacia ella.
Ella va a levantarse de mi regazo, pero la mantengo quieta,
recogiendo su culo en las palmas de mis manos. Sus piernas se
envuelven alrededor de mi cintura mientras estoy de pie y me
dirige escaleras arriba hasta su dormitorio.
Su habitación es mucho más femenina, desabrochó la
hebilla y empujo mis pantalones y calzoncillos abajo. Mi polla

107
 ●

llorona saltando libre. Blair jadea cuando la ve. Cuando Satanás

te da un cuerpo corpóreo, por supuesto, va a darte una buena
polla para darte una buena polla.
Me acarició lentamente mientras ella aprecia mi longitud y
levanta su peso sobre sus codos para mirarme con avidez. Uso mi
pulgar para deslizar algunos de mi líquido preseminal como
lubricante y follar mi puño más fuerte. Creo que me podría venir
tan solo con su toque.
—De rodillas.
Ella hace lo que le pido, dándose la vuelta. Su perfecto culo
pálido alto en el aire como ella descansa sobre sus antebrazos y
codos, presentándose a mí. su excitación. Está pegajoso en sus
muslos. Mi palma frota un suave círculo en su mejilla izquierda
antes de darle un ligero golpe.
Es la primera vez que noto el tatuaje del ciclo lunar en su
columna. Colocó un beso a la luna llena en el medio de su
columna antes de agarrar un puño lleno de su falda y muele mi
longitud contra su culo.
—¿Es esto lo que quieres, niña? ¿Quieres que te folle duro
por detrás? ¿Tomar tu faldita y montarte hasta que te llene con
mi semen?
—Sí, por favor. Nunca lo he deseado tanto. —Se siente como
si nuestra magia se entrelazara, y si fuera inteligente, detendría
esto. Ni siquiera he estado dentro de ella y ya me siento adicto.
Es demasiado, demasiado rápido.
Nunca dije que fuera inteligente.
Alineo mi polla contra su coño goteante y frotó la cabeza
hacia arriba y por su hendidura. Es en ese momento cuando la
realidad se hunde.
—¿Control de la natalidad? —Preguntó en voz baja, enojado
conmigo mismo por detener nuestro impulso.
—DIU, y una poción.

108
 ●

—Gracias a la mierda. —Empujo dentro de ella duro y

rápido. Sin preámbulo. —Tan jodidamente mojado por tu papá,
¿no es así, niña?
—Sí, me haces sentir tan bien. No te detengas. Con una
mano en su cadera y la otra agarrando su falda, la follo duro, su
culo golpeando contra mi pelvis y mis bolas golpeando su clítoris
con cada embestida. Puedo sentirme a mí mismo a punto de
venirme, y eso no servirá.
Salgo de ella y agarró la base de mi polla con fuerza,
haciéndome gemir. Una vez que pasa la sensación, me meto
dentro de ella otra vez, pero la levantó con un brazo envuelto
alrededor de su pecho. Así que su espalda está al ras de mi pecho.
Tengo que subirme la falda para poder rodear
perezosamente su clítoris.
—Tu apretado coño estaba tratando de hacer que me
corriera antes de que estuviera lista, —susurro contra su cabello.
Ambos estamos sudorosos y sin aliento mientras la follo con
empujes lentos y superficiales en su húmedo y perfecto coño.
—Quiero sentir que te corres alrededor de mi polla, niña.
¿Puedes hacer eso por mi? —Ella no responde, y aceleró el ritmo
de mis embestidas y la presión contra su clítoris. —¿Puedes hacer
eso por mí, Blair?
—Sí, oh, joder. Ya voy. —Su cuerpo más pequeño se
estremece contra el mío, y siento que se aprieta alrededor de mi
longitud. Estrellas brillantes parpadean detrás de mis ojos
mientras mi magia hormiguea bajo mi piel. Mi magia nunca ha
estado tan presente durante el sexo. A medida que su magia más
suave se acerca a la mía, me empuja por encima del borde. Gimo
en su cuello mientras la lleno con mi semen, su cuerpo tiembla
contra el mío y puedo sentir mis muslos queriendo ceder.
Continúo sosteniéndola contra mi pecho por un momento
hasta que sus pequeñas manos golpean mi antebrazo
—Necesito orinar, —susurra, sus mejillas sonrojándose.

109
 ●

—Está bien —digo, soltándola de mis brazos y me acuesto

en su cama.
¿Qué mierda fue eso?
Sin duda, el sexo más intenso y placentero de mi vida.
Apenas conozco a Blair, pero ese fue el sentimiento más eufórico
que jamás haya sentido. Debería tener miedo de encariñarme,
pero como un adicto, todo lo que puedo pensar es pensar en
cómo obtener mi próxima dosis de esta bruja.

110
 ●

Capítulo 12.
Blair.
Cierra la puerta del baño detrás de mí e inmediatamente
abre el grifo para el lavabo. De ninguna manera voy a poder
orinar sabiendo que él va a escucharme a través de la puerta. No
debería importarme, solo se comió mi coño como si estuviera en
una misión de francotirador para hacerme perder todas mis
células cerebrales.
—¿Qué demonios fue eso?
Su semen se filtra por mi muslo y gimo mientras me siento
en el inodoro. No llamo a los hombres papi, no les dejo ver mi
verdadero yo. Soy todo dura, strap-ons, y un buen momento.
No soy un bebé, una niña o una pequeña bruja. Soy Blair
Bellamy, perra reina, y me ha derretido hasta convertirme en un
charco pegajoso de felicidad oculta. Mi corazón se acelera y mis

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 ●

codos están sobre mis rodillas mientras mis palmas se presionan

contra mi cara.
No se suponía que fuera así; se suponía que iba a estar
dentro y fuera.
Mierda.
El padre de Ryan, hace que me sienta como un inutil
pedazo ce mierda que es y moverme a su voluntad sin contar con
lo que viene.
Daños colaterales.
He hecho cosas peores a la gente y no he sentido nada. Pero
la forma en que me sentía con Dax, fue íntima. Fue más que una
cogida de venganza y mi cabeza, corazón, y el coño no están en
la misma página.
Debería estar pensando en cómo echarlo de mi cama y cómo
puedo evitarlo en el futuro. Pero lo que realmente quiero son sus
brazos grandes y largos envueltos alrededor de mí y su barba
presionada contra la parte posterior de mi cuello.
¿Qué carajo?
Hizo que me corriera más duro que nunca en mi vida.
Nuestra magia nos empujó el uno contra el otro. Ni siquiera
podría mantener mi glamour incluso si lo intentara. No es que
pudiera pensar con la forma en que se metió encima. Las cosas
que me dijo, me estoy mojando solo de pensarlo otra vez.
Normalmente estoy a cargo en el dormitorio y me había
convencido de que era lo que me gustaba. Pero en realidad ceder
el control a él fue completamente diferente. Fue el encuentro
sexual más placentero de mi vida, es como si estuviera
despertando a una nueva faceta de mí mismo.
Era dueño de mi cuerpo, sabía lo que necesitaba. Me hizo
querer hacer cualquier cosa para poder complacerlo, y lo disfruté.
Mucho más de lo que alguna vez disfruté ser dominada en el
dormitorio. Pensé que estar a cargo solo demostraba cómo todos

112
 ●

me ven. Francamente, cómo me veo a mí mismo la mayor parte

del tiempo.
No sé lo que estoy haciendo, pero sé que Dax no puede
enterarse de Ryan y que no he terminado de explorar qué es esto.
Tal vez se desvanecerá y es tan emocionante porque es tan nuevo
y diferente. Tal vez lo consiga demasiado cansado de mí. Quiero
decir, es un maldito demonio después de todo, no son conocidos
por practicar la monogamia.
Un golpe en la puerta me sobresalta.
—Blair, ¿estás bien ahí dentro?
—Sí, sólo un segundo. —Limpio la obscena cantidad de
semen de mis muslos y tiró de la cadena antes de lavarme las
manos y cerrar el grifo. Abro la puerta y Dax entra para lavarse
las manos y enjuagarse la boca.
No puedo evitarlo cuando lo miro boquiabierta, este
espécimen de un hombre en mi baño. Su culo apretado se
flexiona mientras cambia su peso sobre sus pies. El pelo de Dax es
un desastre ya que va en diez direcciones diferentes sobre su
cabeza. Quiero tocarlo de nuevo, sentir las suaves hebras debajo
de mis dedos. Ni siquiera puedo pelear conmigo internamente, lo
deseo tanto.
—Blair, ¿estás segura de que estás bien?. —Se da la vuelta y
me mira, sus ojos verdes clavados en los míos.
Apartó la mirada y suspiró.
—Simplemente nunca ha sido así antes, estoy procesando
todavía.
—¿Quieres que vaya? —pregunta, y yo frunzo el ceño
cuando lo miro. Tiene que ser alrededor de las dos de la mañana.
Y la verdad es que no quiero que se vaya.
Odio que quiera que se quede, que me siento vulnerable.
¿Qué tipo de bruja ruda quiere ser abrazada?
—Me gustaría que te quedes, —le digo en voz baja.

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 ●

—Bien, porque aún no he terminado contigo. —Me sonríe

mientras toma mi mano y me arrastra hacia la cama. Me subo,
acurrucandome bajo el
—Gracias por quedarte.
—Quería. Sabes todo lo que dije, lo quise decir, ¿verdad?
Él está detrás de mí y me siento más seguro al no mirarlo
cuando hablo. —Esto es nuevo para mí, normalmente soy el
dominante. Me siento tan cómoda contigo y me asusta un poco.
—Cariño, ¿te comiste otro de esos chocolates?
—No, es estúpido. Nos acabamos de conocer. Vamos a
dormir.
—Oye, —dice, dándose la vuelta para que lo mire. —Se
sentía diferente y especial para mí también, Blair. —Me besa en
la mejilla y yo meto la cara contra su pectoral. —Ve a dormir,
pequeña bruja. seguro que vas a tener dulces sueños.
Los dulces sueños ni siquiera se comparan con cómo duermo
junto a Dax, es como llegar a vivir nuestra noche juntos desde
su punto de vista, viendo como él me ve. Es increíble la forma en
que me mira, como si fuera dulce pero poderosa. Cuánto se
divierte mientras me saborea y me toca. No estoy seguro cómo mi
subconsciente sabía que necesitaba estas afirmaciones, pero
duermo largo y duro, sin querer escapar de las imágenes que mi
mente ha conjurado.

—Bueno, ¿no es lindo? —mi prima arrulla desde el marco de

mi puerta.
Abro un párpado y veo que Dax básicamente me está
acariciando como si fuera un peluche. Una de sus enormes

114
 ●

piernas encima de la mía, su mano envuelta alrededor de mi

cintura, sus labios en mi garganta.
—Vete a la mierda, Stevie —digo, intentando que me deje
en paz. Tratando de no cambiar mi peso y no despertar a Dax.
—No se puede hacer. Tenemos que hablar de la mujer
chillona en el sótano.
—¿Está mal que me olvidé de mi cautivo?
—Parece que estabas bastante preocupado, —dice Stevie,
dándome un guiño. Noto la marca de mordedura en su cuello y
pongo los ojos en blanco.
Señaló su garganta con mi única mano libre.
—Parece que eres uno de habla.
Su mano se cierra alrededor de su garganta.
—Joder, quise darle glamour a eso antes de volver a casa.
—Déjame despertar a Dax y luego nos ocuparemos de
Clover.
—¿UH Huh? Estaré en la sala de estar cuando estés lista.
—Cierra la puerta suavemente detrás de ella y el agarre de Dax
alrededor de mi cintura se aprieta, y él besa mi garganta
suavemente.
—¿Supongo que esto significa que no hay sexo matutino?
—Podría poner un hechizo silenciador —digo en broma.
Besa mi garganta y gime. Puedo sentir su dureza contra mi
cadera.
—Necesito encontrarme con Asmo, de todos modos.
Tenemos algo de trabajo que hacer.
—¿Te importa compartir?
—Creo que ambos compartimos suficiente anoche, —dice,
colocando otro beso en mi garganta
—Bueno, si no dejas de besarme, solo hay una manera de
que esto vaya.
Me besa de nuevo.
—Lo sé, joder. Está bien, me estoy levantando.

115
 ●

Dax se para completamente desnudo mientras recoge su

ropa y comienza a vestirse. ¿Por qué ese pequeño salto que hacen
en sus pantalones es tan caliente?
—¿Puedo sacarte de nuevo? —pregunta, y mi estpido corazn
negro crece un un poco.
—Tal vez, —digo. Él no sonríe. Se inclina sobre la cama y
toma mi mandíbula.
—No estaba jugando anoche, Blair. Quiero mimarte,
cuidarte, hacer que te corras tan jodidamente duro que no
puedas pensar. No juegos.
—Si, me gustaría eso.
—Ahí está mi dulce niña buena, aunque solo para mí, Blair.
puedes ser mala con todos los demás. —Me sonríe y se inclina
fuera de la cama. Agarró su muñeca así él no puede escapar.
—¿Puedo planear la próxima cita?
—Por supuesto, niña. —Me besa y agarró una de mis
camisetas de dormir, lanzándola sobre mi cabeza y un par de
pantalones cortos sueltos debajo mientras acompaño a Dax a la
puerta delantera. Stevie está sentada en el sofá mirándonos y
asumo que Dax se sentirá incómodo y simplemente se irá, pero
me sorprende ahuecando mi mandíbula y dándome un tierno
beso antes de salir de casa y subirse a su motocicleta.
—Santa mierda, cuéntamelo todo, —dice Stevie tan pronto
como la puerta mosquitera cierra
Le cuento a Stevie los detalles de la velada, nuestra cita, el
secuestro de Clover, el percance de la trufa y luego le digo cómo
me hace sentir.
—Blair, solo porque otras personas han impuesto lo que
sienten por ti constantemente no significa que seas quien eres.
—Te conozco desde siempre y segura que puedes ser dura en los
bordes, pero nunca me he sentido más amado por nadie más que
por ti. Siempre me has protegido a mí y siempre me haces reir.
Disfruta esto —dice, sosteniendo mi mano en el sofá. —Creo que

116
 ●

es bueno para ti. No lo pienses demasiado. Solo pasa tiempo con

él y ver a dónde va.
—¿Qué pasa con Ryan?
—Cruza ese puente cuando sea necesario, —dice,
encogiéndose de hombros.
Ignorar el problema es definitivamente la mejor manera de
hacerlo, así que asiento con la cabeza y aprieto su mano.
—Entonces, ¿supongo que tenemos que ir a interrogar a
Clover ahora? —Pregunto.
—Supongo que sí. ¿Vas directamente con las trufas?
—Creo que me gustaría que ella se retorciera primero.
—Obviamente, —dice Stevie riendo. Todavía traemos dos
trufas con nosotros al sótano.
Abro la puerta y me recibe un trébol de cara roja sentado
en un charco de su propia orina mientras grita pidiendo ayuda.
—Hay salas y mi vecino más cercano está a media milla de
distancia, perra estupida. Stevie y yo somos los únicos que
podemos oírte —le digo y ella se burla
—La gente vendrá a buscarme, Blair, a diferencia de ti, hay
gente que se preocupa por mí.
Me burlo,
—¿Quién? ¿Ryan? A él no le importas una mierda, Clover.
—El aquelarre se preocupa, —responde ella.
—¿Realmente lo hacen, Clover? Probablemente seas el menos
talentoso de todo el aquelarre.
Ella jadea.
—¡Eso no es cierto!
—No sé. ¿Qué opinas, Stevie? ¿Es ella el eslabón más débil?
—Quiero decir, ella era lo suficientemente tonta como para
caminar por la ciudad después de lo que hicieron, —responde
Stevie.
—Lo que nos hicieron, —la corrijo. Me apoyo en el marco
de la puerta pareciendo casi desinteresado en la conversación.

117
 ●

—Así es como va el trabajo, Clover. Tú nos dices lo que

necesitamos saber y te dejamos ir a tu casa destrozando el culo
de vuelta a la naturaleza donde puedes vivir otro día patético
como una bruja mediocre acabada. ¿Cómo suena eso, hmm?
—No te diré nada, —dice, tratando de tirar de sus ataduras.
—Pero creo que lo harás. ¿Con qué deberíamos empezar,
Stevie? ¿Las uñas de los pies?
Clover chisporrotea en la cama, temblando de un lado a
otro.
—¡No lo harías!
—¿Alguna vez me has visto mentir sobre la tortura, Stevie?
—No, nunca R. Eres un captor muy honesto, —dice Stevie
con una mirada directa a la cara de Clover y asintiendo con la
cabeza.
—Te haré un trato, Clover sobrante. Te comes esta pequeña
y sabrosa trufa de la verdad. Dime lo que quiero y limpiaré la
cama para que no tengas que hacerlo en tu propia orina.
Mira entre Stevie y yo, sopesando sus opciones.
—Te diré lo que quieras, pero tienes que liberarme.
—No se puede hacer, pequeño tres hojas. Mira lo que me
imagino, es cualquier ritual que tú y tu pandilla de zorras
alegres estaban tratando de lograr requirió todo el aquelarre.
Si, no sé, faltara una brujita ratoncita, no sería capaz de ser
realizado. Eres mi póliza de seguro. Si quieres seguir estando en
una cama libre de orina y alimentación diaria, creo que
realmente debes considerar las siguientes palabras. ¿Qué dices?
—.La miró como si pudiera ganarse la vida fácilmente.
Infierno. Traga con fuerza, asiente con la cabeza y abre la
boca. Stevie deja caer una trufa en su lengua. Observó mientras
mastica y traga.
—¿Por qué el aquelarre estaba tratando de sacrificarme?
—No teníamos otra opción.
—¿Por qué no?

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 ●

—Ella es poderosa. Ella prometió que si le dábamos a ella

que el aquelarre se volvería poderoso, que ya no te
necesitaríamos.
—¿Quién es ella?
—No sé, solo tu mamá se reunió con ella en persona.
—¿Qué quiere ella de mí?
—No sé. Ya sabes, sólo hacemos lo que dice Josie. Ella dijo
que nosotros éramos necesarias para hacer esto, que su poder se
distribuiría a lo largo de la asamblea de brujas. Que seríamos más
fuertes.
—¿Estás seguro de que había un extraño? ¿Esta no es mi
madre tratando de deshacerse de mí?"
—Como dije, no me reuní con la mujer, solo Josie lo hizo, no
puedo estar seguro que ella no se lo está inventando.
Gimo, frustrada, y tiró de mi cabello desordenado y sin
cepillar.
—¿Acaso tu le creíste a Ryan cuando dijo que no estaba
saliendo conmigo?
Ella trata de mantener la boca cerrada.
—No.
—Desafortunadamente, no valías la pena el esfuerzo que
tomó encerrarte aquí. Espero que encuentre sus comodidades
reconfortantes hasta la próxima luna. Clover.
—¡Falta casi un mes!
—Deberías haber pensado en eso antes de acostarte con mi
exnovio e intentar matarme. Tienes suerte de que esto sea todo lo
que te estoy haciendo.
Desató sin decir palabra sus ataduras. Aprieto las
protecciones para que ella no pueda dejar la habitación.
—¿Cuál es el plan ahora? —Stevie me pregunta mientras
subimos las escaleras.

119
 ●

—Averigüe quién está robando en Hex, entonces

necesitamos rastrear a mi madre. —La idea hace que me duela el
estómago y Stevie y yo gemimos al unísono.

120
 ●

Capítulo 13.
Dax.
—Mira lo que arrastró el sabueso del infierno. Necesitas
una puta ducha.
Asmo dice tan pronto como entró por la puerta. Necesito
una ducha, pero también me gusta la idea de oler como Blair. Su
olor es terrenal con toques de lavanda y feminidad. Anoche fue
más allá de lo que pude haber imaginado
Mentiría si dijera que no he tenido mi parte justa de socios.
Soy un incubus y yo hemos estado vagando por el mundo
durante mucho tiempo, pero anoche me dio una energía que
nunca antes había experimentado. Estoy esperando a que pueda
obtener mi próxima solución.
Pongo los ojos en blanco y tiro mi casco sobre la mesa de la
cocina.
—¿Me perdí algo?

121
 ●

—Tenemos algunas pistas, —dice, golpeando con el dedo

sobre la mesa.
—¿Te importa compartir?
—Tú primero.
Pongo los ojos en blanco de nuevo.
—Obviamente, pasé la noche en casa de Blair.
—¿Pasó un buen momento?
—Asmo, si no cierras la boca sobre ella pronto, voy a perder
mi mierda.
—Cálmate, papá demonio, —dice riendo. Nunca te
emborraches con pendejos y vomites sus fantasías. Solo lo traerán
de vuelta en el peor de los casos.
—Pensé que podríamos trabajar con Kas en lugar de contra.
Su sugerencia fue hacer una búsqueda y ver quién en Hallows
Deep ha sido incluido como desaparecido o fue encontrado
recientemente.
—¿Este cambio repentino de corazón tiene algo que ver con
ustedes dos jodiendo de nuevo? —No mencionó que creo que
buscar personas desaparecidas es en realidad una idea bastante
inteligente.
—Sí lo hace. Aquí, estas son las personas que han sido
denunciadas desaparecidas y todavía están o fueron reportadas
como desaparecidas y luego reaparecieron. Son solo tres personas.
—Me entrega un archivo. —Primero está Paige Taft, veintiséis,
trabaja en Inferno, desapareció hace cuatro días y se mostró al
azar ayer en el trabajo. Se lame el dedo y saca el siguiente.
—Luis Jefferson, treinta y cinco años, trabajador social,
desaparecido durante dos semanas y aún no ha sido visto.
Asmo baja el último archivo y es una cara que he visto
recientemente.
—Lo último es a Clover Cross, veinticuatro años, bruja
conocida, desapareció anoche.
—Bueno, puedes sacar a Clover de la lista.

122
 ●

—¿Por qué?
Me encojo de hombros.
—Ayudé a Blair a secuestrarla anoche.
Deja escapar una carcajada y arruga la información de
Clover.
—Es un secuestro cuando es un adulto. Joder, suena
divertida. —No me gusta que hable de mi bruja, pero no puedo
dejar que lo sepa. Mi bruja. Joder, ella no puede ser mi nada. Tan
pronto como termine este caso, será enviado uno nuevo aquí o en
el Infierno. No puedo formar un vínculo genuino con ella, pero
tampoco puedo mantenerme alejado.
—El tipo no es el modus operandi habitual del demonio.
Mara parece preferir poseer mujeres. —Solo una víctima fue un
hombre.
—Me parece bien. Paige trabaja en Inferno en dos días.
Podemos extenderlo a ver si está poseída. Incluso si no lo es, es un
club solo para sobres, así que tal vez podremos obtener algo de
información.
—Está bien, ¿qué necesitamos para entrar?
Asmo me sonríe.
—Oh, no lo mencioné, es solo para socios. A menos que
puedas pensar en una cita, parece que Kas y yo nos haremos
cargo de esto.
Lo miro.
—Voy a estar allí.
—¿Crees que tu pequeña bruja malvada estará dispuesta a
hacerlo?
Quiero estrangularlo hasta la mierda eterna.
—Dejas que me preocupe por él. ¿Desde cuándo es solo
entrada de socios?
—Dado que un montón de hombres lobo estaban allí
masturbándose por todo el lugar, agarrando sus nudos. Se
aseguró de que la nueva política hace que los sumisos se sientan

123
 ●

más cómodos viniendo. —Se ríe de su propio chiste. Pongo los

ojos en blanco.
—Bueno, si no hay razón para ver tu maldita cara molesta
por dos días, me pondré en camino.
—Aw, Daxy-poo, no seas tan bebé. Estoy seguro de que tu
preciosa Blair no está para eso, podemos encontrarle a alguna
mujer patética de la calle que quiera ir contigo.
Levanto mi dedo medio sobre mi hombro mientras voy a mi
habitación y a alejarme de su molesta voz.
¿Estaría Blair dispuesta a ir a un club de sexo sobrenatural?
claro, nosotros hemos tenido relaciones sexuales y había
dinámicas de poder en juego, pero nada como lo que sucedería en
un lugar como Inferno. La única manera de averiguarlo es
preguntando.
Ella tiene suficiente en su plato, y no quiero parecer que
soy un enfermo de amor, así que me reuniré con ella mañana
para ver si es algo que ella incluso consideraría. La parte más
profunda de mí espera que ella diga que sí y que esta Paige no es
en realidad Mara y podemos pasar un buen rato.
Nuestra magia no estaba en juego anoche. Quiero que ella
vea lo que puedo hacer, y quiero desesperadamente ver cómo
usaría su magia conmigo mientras follamos.
Tristemente lavo su olor y gimo mientras acaricio mi polla
para pensar en su dulce coño envuelto alrededor de mí.

—¿Qué estamos haciendo aquí otra vez? —pregunta Asmo.

—Vine aquí, y estabas aburrido e insististe en
acompañarme, —le recuerdo.

124
 ●

—Sí, bueno, ya no podía sentarme en ese agujero de mierda

y Kas está ocupado.
—Coño azotado.
—Y orgulloso, —dice con una sonrisa.
—¿No te encerró en una dimensión de hadas durante una
década?
—Sí, pero la perdoné.
—Patético —digo y él se encoge de hombros.
—De nuevo, ¿por qué estamos aquí? —pregunta, mirando los
diferentes productos en los estantes. Todo está destinado a
parecer brujería real, aunque es solo mierda para los turistas
mortales que vienen a la ciudad en esta época del año.
Con Halloween a la vuelta de la esquina, el negocio parece
ir bien.
Aparentemente, la tienda es propiedad de una bruja que se
encuentra en la asamblea de brujas de Blair.
—¿Cómo puedo ayudarlos, caballeros? —dice una mujer
mayor delgada. Ella ha de tener cincuenta y tantos años con
cabello largo y blanco, ojos casi azul plateado y piel pálida
blanca. Su muñeca está adornada con unas dos docenas de
brazaletes, y ella está con un maxi vestido amarillo brillante.
—Gran pregunta, —dice Asmo, y lo ignoro, convirtiendo mi
encanto en esta mujer. Parte de mi magia son las palabras de
sugerencia. Puedo hacer solo cualquier sugerencia que parezca
una buena idea para la persona con la que estoy hablando.
Los sobrenaturales son duros, la mitad de ellos tienen
protecciones contra mis poderes.
Espero que ella no lo haga.
—Estoy buscando una bruja que pueda hacer un hechizo
específico, —digo y puedo decir que despierta su interés, pero me
trata como si fuera un ser humano.
—Seguramente un hombre tan guapo no necesita una
poción de amor.

125
 ●

Le sonrío.
—Por supuesto que no, estoy buscando a la Suma
Sacerdotisa.
—Oh, qué gran conocimiento de la jerarquía del aquelarre.
—¿Quién es la sacerdotisa? —le pregunto, sacando mi
magia.
—Josie Bellamy, —responde aturdida.
—¿Dónde está?
—Ocultándose.
—¿Escondiendo dónde?
—Ella no dijo.
—¿Por qué estabas tratando de sacrificar a Blair?
La bruja muestra algo de sorpresa, pero todavía la tengo
bajo mi fuerza.
—Ella es lo suficientemente fuerte.
—¿Qué significa eso?
La bruja mayor va a abrir la boca cuando suena el timbre
de la puerta principal. Golpeando mi concentración fuera de
control y terminando nuestra conexión.
Ella niega con la cabeza y señala con el dedo la puerta
principal.
—Necesitas salir ahora.
—Aw, pero realmente quería una tabla Ouija. Tengo
algunos amigos en el infierno que necesito para consultar con,
—se queja Asmo y la bruja gruñe.
—¡Afuera!
Asmo roba una piruleta de la mesa de pago y ambos
dejamos el comercio. La fuerte campana sonando con nuestra
partida mientras nos dirigimos a la calle Main.
—¿Y yo soy el que está siendo azotado?
—Cállate la boca, Asmo.
Se mete la piruleta en la boca y la lame desagradablemente.
Quiero empujarlo por su garganta, aunque sé que no lo matará.

126
 ●

—Bueno, nada de lo que dijo el viejo pájaro tenía ningún

sentido. —Lame.
—No, pero es más información de la que tenía antes.
—¿Ella te pidió que la ayudaras? —Lame.
—No, —digo.
—Coño azotado. —Lamer.
—Joder, dame eso. —Arrancó la piruleta de su boca y se la
tiró a media calle, donde un automóvil conducía dramáticamente
sobre el duro asfalto.
—¡Ey! Estás más nervioso de lo normal. Me debes una
piruleta.
—Tú lo robaste, —le digo, mirándolo con incredulidad
mientras seguimos caminando a un área donde podemos usar el
portal sin ser detectados.
—Todavía era mío.
Lo ignoró hasta que salimos del ojo público para que
podamos entrar al portal. Enojado con él, ambos hacemos un
portal por separado al bungalow. Lo único peor que tener que
volver a casa y lidiar con Asmo es volver a casa y encontrar Kas
sentada en nuestro sofá inesperadamente.
Gimo cuando pasó junto a ella y Kas chasquea la lengua
con molestia.
—De verdad deberías mejorar tus modales, Dax. Has estado
vivo lo suficiente para saber cómo tratar a un huésped de la casa.
—Estaba diciendo lo mismo, —dice Asmo, sentándose junto
a Kas y envolviendo un brazo alrededor de su hombro. No confío
en ella, y la cantidad de tiempo que le tomó envolver a Asmo
alrededor de su dedo es desconcertante.
—¿Por qué estás aquí?
—Grosero, —dice, hurgando sus largas uñas negras.
—Estaba aquí para decirte que nos conseguí una invitación a
Inferno dentro de dos noches. Pero viendo cómo actúas como un

127
 ●

animal en público, tal vez Asmo, y debería irme. Ni siquiera

tienes una cita, de todos modos.
—Tendré una cita.
—Ni siquiera le has preguntado, —me recuerda Asmo.
—Iré a Hex y hablaré con ella al respecto. No te preocupes
por mí. Preocúpate por ti.
—Oh, y por favor dime, ¿quién será esta cita? —Kas
pregunta.
—Esta bruja mala que conoció la otra noche, —dice Asmo.
—No preocupes a tu corazoncito malvado por eso. Solo sé
que estaré allí.
Kas arquea una ceja pero desliza dos invitaciones hacia mí.
—Te sugiero leer sus políticas antes de irnos. No podemos
joder esto. tenemos que entrar allí, espero que este sea el mortal
que Mara decidió poseer, hacer el trabajo y salir.
—Creo que se como hacer mi puto trabajo, —respondo
bruscamente, agarrando las invitaciones y regresando a mi
habitación. Tengo un maldito dolor de cabeza, y ahora necesito
encontrar la manera de preguntarle a Blair si vendrá conmigo.
Supongo que voy a hacer un viaje a Hex esta noche, no
importa lo patético que sea.

128
 ●

Capítulo 14.

Blair.
Stevie no quería venir a Hex conmigo esta noche, y no lo
culpo. Si bien yo siempre fui la oveja negra del aquelarre, Stevie
fue más ampliamente aceptada. La traición hacia ella es más
profunda que lo que me hicieron.
Siempre me pregunto si podría haber hecho algo para
encajar mejor, pero no puedo resolverlo. ¿Por qué siempre fui tan
diferente? No me gusto el aspecto natural de ser una bruja. Me
gusta la magia verbal, no las pociones, que es principalmente en
lo que se especializa mi aquelarre, a menos que sea un conjuro
basado en rituales de grupo.
Desde que era pequeño, siempre estuve un poco apagado.
Un poco demasiado duro en los bordes, las otras brujas fueron
dirigidas a no asociarse conmigo. El única razón por la que tengo
a Stevie es porque sus padres fallecieron y ella vino a vivir
conmigo y mi madre. De lo contrario, no tendría a nadie. Hasta

129
 ●

mi madre nunca parecía aceptarme, y no estaba seguro de por

qué. Recuerdo un cumpleaños cuando mi padre vino de visita. Le
pregunté por qué no podía vivir con él. Me dijo un día de mayor
que podía, pero por ahora tenía que quedarme con mi mamá. Al
principio le creí hasta que me hice mayor y se dio cuenta de que
probablemente solo estaba haciendo lo que hacen los adultos,
mentirle a sus niños para que dejen de hacer preguntas.
Al menos no me miró como si algo estuviera mal conmigo.
Si soy honesta, cada vez que veía a mi padre, me miraba con
asombro. Sin embargo, su participación fue limitada, y fue algo
que acepté hace mucho tiempo. Acepté el hecho de que éramos
mi madre y yo. Ella nunca abusó de mí físicamente, pero ella fue
muy clara al dejarme saber lo decepcionada que estaba. Ella trató
a Stevie más como una hija que a mi.
Debería haber crecido odiando a Stevie por eso, pero no
funcionó de esa manera. Stevie me puso por encima de mi madre,
y siempre le he sido leal.
Este pueblo tiene muchos recuerdos negativos y gente en él.
Consideré dejar Hallows Deep, pero algo me mantiene
arraigado aquí. No estoy seguro si es magia o el aquelarre, pero
tengo una atracción magnética hacia este lugar. Es casi como si
no pudiera irme, una pequeña parte de mí también se niega a ser
como él.
Con demasiada fuerza, agarró el volante mientras estaciono
y agarró el Tupperware de trufas de la verdad y me dirijo a Hex.
Está ocupado y Heather parece tener todo bajo control. Lo juro si
ella es la indicada robando, estaré devastadA y fuera de uno de
los mejores gerentes que he tenido
Ella es parte ángel, pero nunca sospecharías con la boca
sucia tiene sobre ella.
Mi plan es pasar el último turno y dar la verdad trufas y
entonces puedo manejar el negocio con la persona que roba
cuando todos no estan.

130
 ●

—Hola, Blair. ¿Puedes decirle a Otto que necesitamos un

toque nuevo en el Sam Adams? me pregunta Heather detrás de la
barra.
—Claro, —digo, caminando hacia la parte de atrás y
encontrando a Otto. Cuando lo miro, parece el mayor culpable.
Siempre está cansado cuando viene a trabajar. Por lo que puedo
decir, es humano. Me pregunto si él tiende a robar por
costumbre. Sus rasgos siempre se ven un poco apagados.
Es robusto, de cabeza calva y barba oscura. Su camisa
blanca está manchada, pero se queda en la parte de atrás, así que
no me preocupo mucho por su apariencia por lo general.
—Otto, necesitamos un nuevo Sam Adams.
Él gruñe, acercándose y agarrándolo inmediatamente. No
estoy seguro si ES mudo o elige no hablar, pero nunca lo he oído
hablar.
Paso a su lado y me siento en mi oficina con las trufas.
Suspiro, mirando los chocolates y recordando cómo se sintió
cuando Dax y yo habíamos comido. Era a la vez liberador y
aterrador al mismo tiempo, no me gusta como me gusto eso. Me
gusta mucho, y la forma en que me hace sentir no me resulta
familiar.
Hablando de familiares, tal vez debería convertir al ladrón
en un ratón y alimentarlos a Fez. La idea me hace sonreír,
aunque sé que no podría realmente convertir a alguien en un
ratón.
Pierdo el tiempo en línea, revisando y viendo si alguien en
el aquelarre ha sido activo o publicado algo sobre mi madre. Mi
investigación no da resultados. Miro mi teléfono y me doy
cuenta de que es hora de cerrar. Dejo mi oficina mientras mis
empleados están limpiando para la noche.
—Oh, lo olvidé por completo. Stevie hizo estos chocolates
para agradecer a todos por el relevo mientras ella está enferma.

131
 ●

—Abro la parte superior del contenedor, extendiendo la caja y

observando cómo cada empleado toma un chocolate.
—Mmm, —dice Heather mientras se lo mete en la boca,
también lo hacen Otto, Glen, Lucas, Bethany y Lilly. La única
persona que falta es Jeremy. Así que si no es uno de ellos,
entonces sabré automáticamente quién lo hizo.
Una vez que todos hayan tragado. No pierdo el tiempo.
—¿Quién ha robado en el restaurante?
—Otto, —dicen todos al unísono, y no se me escapa que
puede que de alguna manera no responda a la pregunta. Parece
que no es mudo por elección.
—Todos pueden irse menos Otto, —digo y todos mis
empleados se van por la puerta principal. Espero hasta que se
hayan ido todos antes de mirar la gran cantidad de hombre más
grandes. Si no tuviera magia, tendría miedo de su presencia más
grande.
—Oto, ¿es esto cierto? ¿Me has estado robando?
Puedo decir que está tratando de luchar contra la magia de
la trufa. ¿Tal vez necesitaba comer dos porque es un hombre tan
grande?
Finalmente, un movimiento de cabeza.
—¿Por qué me estás robando, Otto?
Mira a su alrededor, y su mirada es temblorosa e incierta.
El me quita la guardia cuando veo que su cuerpo de alguna
manera se hace más grande y me golpea el cofre, arrojándome
contra una mesa y sillas.
Me deja sin aire y respiro con dificultad antes de poder
hablar.
Cadere, canto, con la esperanza de tirarlo al suelo. No se cae
y reviso mi magia, asegurándome de que todavía esté allí.
¿Qué diablos está pasando?
Otto sigue haciéndose más y más grande frente a mí, su
forma se ve menos y menos humana a medida que crece. No

132
 ●

parece que esté hecho de piel y hueso. Es casi como si estuviera

hecho de arcilla. Su estatura es casi siete pies de alto ahora, su
piel de un tono terroso rojizo. Envuelvo mi cerebro alrededor de
su apariencia y me pregunto qué es él.
Mierda. Un maldito golem. Contraté a un maldito golem y
no tenía ni idea. Estoy tratando de pensar mucho sobre qué
magia puedo usarse en él, él no es una persona corpórea, no es
una persona en absoluto, en realidad. Antes de que se me ocurra
cualquier cosa, su mano grande está alrededor de mi garganta,
empujándome contra la mesa.
Bloquea mis vías respiratorias y mi capacidad para hablar.
Saca un cuchillo de su bolsillo y comienza a cortarme las
muñecas. Los cortes son superficiales, lo suficiente como para
hacerme sangrar, pero no lo suficiente como para matarme. Justo
lo suficiente para frenarme y dejarme inmóvil. Puedo sentir la
pegajosidad de mi sangre goteando por mis muñecas. Me muevo
en sus brazos, tratando de obtener el cuchillo de su mano. Mis
manos están cubiertas de sangre y apenas puedo obtener un
aguante de cualquier cosa. Escuchó un estruendo en su pecho
con frustración mientras él continúa tratando de cortarme. Lo
golpeo con mis puños y él sigue cortando, causándome cortes a lo
largo de mis antebrazos y palmas. No se que hacer.
Es demasiado jodidamente fuerte y no puedo decir nada con
su mano en mi garganta.
¿Quiere mi sangre para algo? Estoy empezando a sentirme
mareado, y necesito mantenerme unido, necesito encontrar una
manera de salir de este desorden.
Pruebo un poco de magia sin palabras y muevo sillas y
otros artículos en la habitación para golpearlo, pero nada lo
desconcierta. Es demasiado fuerte y puedo sentir mis vías
respiratorias sufriendo. Si bien soy una bruja y puedo vivir
durante mucho tiempo, todavía puedo ser asesinada, y parece
que eso es exactamente lo que Otto está a punto de hacerme.

133
 ●

El pánico llena mi torrente sanguíneo. Empujo mi magia

fuera de mí con fuerza. Dispuesto mi mano para quemarlo. Todo
lo que hace es hacer su mano más fuerte alrededor de mi cuello.
Él está mirándome, sin emociones, sus rasgos embarrados. Puedo
ver donde están los ojos ira y la forma de una boca, pero ya no
es humano.
Alguien creó a Otto para cumplir sus órdenes, y claramente,
su orden más alta era para sacarme. Me siento mareado cuando
mis uñas raspan contra su mugrienta piel cuando escucho un
gruñido salvaje desde la esquina.
Otto sale volando por la habitación y yo jadeo para
recuperar el aliento. Me siento mareada y trato de aplicar
presión a mis muñecas. Intento usar un hechizo curativo, pero la
falta de sangre y el ejercicio de la magia me están frenando. cada
vez que susurro "sana" mi brazo comienza a sanar pero se abre de
nuevo. Después de esto necesito pasar más tiempo aprendiendo
magia curativa más fuerte. Un sonido de sillas me alerta a la
esquina de la habitación mientras observo a Otto golpear el
suelo, Dax saltando encima de él. Sus puños son poderosos
cuando golpea a Otto. Mis éxitos no hacen mella en absoluto,
pero veo como Dax lo golpea lo suficientemente fuerte como para
romper la arcilla.
—¿Pensaste lastimar a mi maldita bruja? Pedazo de mierda
sin sentido.
Dax golpea a Otto nuevamente, golpeándolo fuerte en la
cara repetidamente. No es el mismo sonido como si estuviera
golpeando un hueso, suena como un terremoto en el restaurante
mientras los poderosos puños de Dax lo golpeaban una y otra
vez. Las tablas del piso se agrietan por la mitad bajo el peso de la
cabeza de Otto golpeando la madera. Las paredes de la habitación
tiemblan y el restaurante está siendo destruido. Mis ojos se abren
en estado de shock mientras Dax arrastra a Otto por la parte
superior de la barra, los vasos se rompen ruidosamente contra las

134
 ●

paredes y pisos. Su fuerza es asombrosa. Pero en el momento en

que toma una oportunidad de mirarme, Otto ataca.
Dax respira pesadamente cuando Otto es capaz de agarrar a
Dax por la cintura y correrlo contra una pared, la espalda de
Dax golpea con fuerza contra la pared, todas las imágenes
enmarcadas estrellándose contra el suelo. Otto envuelve su mano
alrededor de la garganta de Dax, haciendo lo mismo que me hizo
a mí, pero no intenta cortarlo. Solo trata de bloquear o aplastar
sus vías respiratorias.
Me siento débil, muy débil, pero necesito actuar rápido.
Piensa, piensa. El es básicamente un objeto inanimado. Aunque
puede moverse, se mueve a instancias de su creador, es arcilla.
—Surge sursum, —digo mientras veo al golem levantarse del
piso. Lo sorprende lo suficiente como para que su agarre se afloje
de la garganta de Dax, y cae del suelo mientras el golem sigue
flotando hasta que golpea el techo.
Dax vuelve a ponerse de pie cuando viene a ver cómo estoy.
Con Otto en el techo por ahora, estamos bien. Sus grandes
palmas agarran mi cara mientras mira mis brazos y ojos. Un
gemido bajo sale de sus labios.
Saca una navaja de bolsillo de su bolsillo trasero y me
estremezco cuando abre la cuchilla.
—Voy a cuidar de ti, estás bien, nena. Te tengo —dice
mientras se corta la muñeca y deja caer su sangre sobre mis
brazos sangrantes. Acaricia mi cabello mientras veo su sangre
sanar mis heridas. Todavía me siento tan fuera de sí, como si no
pudiera pensar.
—Detendrá el sangrado y sanará tus heridas, pero aún así
perdiste mucha sangre. ¿Cómo te sientes? —No respondo y sus
palmas están en mi cara.
—¿Pequeña bruja?
—Cansado, —le digo, presionando mi cara contra su palma.

135
 ●

—Tenemos que quitarle el rollo de la boca y destruirlo,

—dice, y me doy cuenta de que no sé una mierda sobre golems. Si
él no estuviera aquí, probablemente habría muerto.
—¿Por qué estás aquí?
—No importa. ¿Puedes bajarlo del techo? —asiento y muevo
mi muñeca, enviando a Otto al suelo. El peso de su cuerpo
rompiendo incluso más tablas del suelo. No creo que el seguro
cubra este desastre.
Está lo suficientemente aturdido como para que Dax pueda
sentarse a horcajadas sobre él, sus manos tiemblan mientras
aprieta los dientes y se abre la boca con sus poderosos puños.
—Blair, agarra el pergamino. Puedo decir que Dax está
reuniendo cada gramo de fuerza que tiene para mantener la
boca abierta. —Otto golpea el costado de Dax, y él se estremece,
pero continúa sosteniendo su mandíbula con firmeza.
Siento que podría caerme, pero me tambaleo hacia donde lo
tiene Dax. Inmovilizado, agarró el pergamino que sobresale de su
boca pastosa. Tan pronto como lo tengo, Dax suelta a Otto, una
pequeña llama que aparece de Dax en sus dedos mientras abro el
pergamino y leo el nombre antes de que Dax lo encienda.
Tan pronto como el pergamino se enciende en llamas, Otto
se convierte en polvo debajo del cuerpo de Dax, haciendo que sus
rodillas aterricen en la madera dura.
Caigo con fuerza al suelo junto a él, me duelen las piernas,
me siento mal. Quiero meterme en un agujero y dormir durante
días. Los musculosos brazos de Dax están envueltos a mi
alrededor rápidamente. Silencios se hacen en mi cabello oscuro
cuando siento como me levanta y me acuna contra su pecho.
—Necesitas descansar un poco, un poco de sangre también.
Te voy a llevar a casa, dulce niña. Papá te va a cuidar.
—Nadie me cuida nunca. —Es como un vómito de palabras
cuando miro a sus ojos verdes.

136
 ●

—Ahora alguien lo hace. Esto podría hacerte sentir más

náuseas. Pero prométeme que estarás bien.
—¿Qué-
Es como si fuera absorbido por un vacío y mi cuerpo se
mueve dentro de sí mismo o es sacudido como una lata de
pintura mientras un fuerte estallido resuena en mis oídos.
Instantáneamente frente a mi casa. Dax me pone sobre la hierba
mientras vació el contenido de mi estómago. Su mano grande
frota círculos relajantes en mi espalda.
—¡Sácalo todo, nena. Estás bien. voy a cuidar de ti. Lo
hiciste tan bien para tu primer portal. Y la forma en que
manejaste ese golem. Estoy muy orgulloso de ti.
Gimo porque nada más sale de mi estómago y Dax me
recoge de nuevo, con la cabeza colgando hacia atrás. Quiero
dormir. Me empuja ligeramente. —Quédate despierto por mí,
niña. Necesito revisarte antes de irte a dormir.
Parpadeo hacia él y escuchó el chillido de mi prima desde el
porche.
—¡¿Qué le pasó a ella?!
Las manos suaves y pequeñas de mi primo se sienten
diferentes a las de Dax.
—Ese gran calvo hijo de puta la atacó en Hex. Era un
golem.
—¿Otto era un maldito golem?
—Aparentemente. Perdió mucha sangre y usó mucha magia.
—Tengo algunas pociones de transfusión. Llévala al
dormitorio. Veo la sangre seca, pero ¿dónde están los cortes?
—Ya me encargué de eso.
—Vamos, —dice Stevie, llevándonos a la casa, y no puedo
evitarlo cuando me duermo contra el pecho cálido y perfecto de
Dax. Se siente tan bien, tan seguro. ¿Quién hubiera pensado que
el lugar más reconfortante para mí sería los brazos de un
demonio.

137
 ●

Capítulo 15.
Dax.
Doy dos pasos a la vez mientras sostengo a Blair con fuerza
contra mi pecho. Nunca experimenté realmente miedo hasta hoy.
Si bien Blair no es tan frágil como una humana, ella tampoco es
completamente inmortal. Las brujas pueden vivir por un tiempo
extremadamente largo; la bruja más antigua que conocí tenía
alrededor de dos milenios. Mientras puedan vivir una vida
expansiva, también pueden ser asesinados con bastante facilidad,
al menos en términos de otros sobrenaturales.
Se ve tan frágil cuando la colocó delicadamente en su cama.
si ese hijo de puta fuera algo más que un golem, lo habría hecho
sufrir. Pero los golems no tienen sentimientos, están hechos de
seres, su única motivación es la voluntad de cualquier ser que los
haya creado.
Estaba tan concentrada en sacar a Blair de allí y
deshacerme del golem, ni siquiera llegué a leer el pergamino. El

138
 ●

pergamino siempre tiene el nombre del creador del golem en él.

Parecía que Blair pudo leerlo antes de prenderle fuego, pero no
sabré más hasta que se despierte.
Sus respiraciones son uniformes y su pecho se eleva
constantemente, haciéndome sentir mejor. Apartó el cabello
oscuro y desordenado de su rostro y acarició su mejilla, un
sonido del lado de la habitación me tiene en alerta máxima hasta
que me doy cuenta de que es su familiar deslizándose de su jaula.
Rápidamente se desliza por el suelo y sobre la cama.
Su cuerpo constriñe suavemente su brazo, consolándola.
Su familiar entrecierra sus ojos hacia mí y sisea.
—No me mires así —le digo, devolviéndole la mirada.
La lengua de la serpiente sobresale, pero él apoya la cabeza
en su palma. Lo que sé de los familiares es que tienen un vínculo
directo con su homólogo mágico.
Casi como una telepatía de emociones, pero no creo que
realmente puedan comunicarse. Sin embargo, conociendo a Blair,
probablemente pueda hablar con el puta serpiente. Ella me ha
sorprendido a cada paso con lo que sé de estereotipos en brujas
Stevie abre la puerta del dormitorio de Blair y me da una
sonrisa tensa.
—Fez, tranquilo, abajo, ella está bien, —arrulla a la
serpiente. Sus palabras consolándolo, la lengua se desliza entre el
pulgar y el índice de Blair. Stevie acaricia a la serpiente, que ni
siquiera sabía que podía acariciar a una jodida serpiente. Ella
inclina la barbilla de Blair hacia atrás con el pulgar y vierte una
sustancia gris oscura en su boca. —Poción de reposición de
sangre, —me dice mientras cierra la boca de Blair y dice algo en
voz baja, lo que la hace tragar.
—Por el amor de Dios, nunca había visto a Blair tan débil
en mi vida, son dos veces en una semana. No me gusta esto.
—Stevie se ve nerviosa mientras frota círculos relajantes en el
brazo de Blair.

139
 ●

—Hablé con la bruja dueña de esa tienda de mierda en

Main Street.
—¿Marta? ¿Qué dijo ella? —Stevie pregunta, arqueando una
ceja.
—Ella dijo que la madre de Blair está escondida y algo sobre
cómo ella es —asiento hacia Blair— lo suficientemente fuerte.
Stevie mira el cuerpo dormido de Blair.
—Clover dijo algo sobre alguien diciéndole a Josie que el
sacrificio tenía que ocurrir, que si lo hacían, el aquelarre sería
más fuerte.
—¿Se estaba debilitando el aquelarre?
Stevie asiente con la cabeza.
—En realidad es un poco extraño. Blair y yo somos lo
general, sí, el aquelarre es más débil. Por eso tenemos los rituales
de la luna, lentamente a lo largo del mes, los otros miembros del
aquelarre se sienten más débiles.
—¿Cómo se siente Blair después del ritual?
Sus cejas se fruncen.
—Debilitado.
—Deben tirar de su poder. ¿Esa perra todavía está en el
sótano? —Pregunto.
—¿Trébol? ¿Sí, por qué?
—Vamos a tener una pequeña charla.
Stevie ni siquiera lo cuestiona. Ella mira a Fez.
—Háganos este despierta.
La serpiente asiente con su extraña cabecita y me hace
temblar. Le doy a Blair una última mirada preocupada mientras
sigo a la bruja pelirroja hasta el sótano. Ella abre la puerta y
cuando voy a entrar, me bloquea una pared invisible,
haciéndome gruñir de frustración.
—Mierda. Blair es mucho mejor en las salas que yo.
—¿Sangre? —Pregunto, solo como una suposición porque así
es como se me permitió entrar en la casa.

140
 ●

—Podemos intentarlo, —dice Stevie, conjurando una aguja

y pinchando mi dedo y pronunciando un conjuro mientras la
gota salpica el suelo.
Puedo sentir que las protecciones se abren y entramos por la
puerta. Miradas de Clover repugnante, ratonil, con la misma
ropa que Blair y yo la llevamos. Huele rancio en la habitación. Le
hago una mueca, y ella me mira con amplios ojos.
—¡Tú! —gritó, empujando su cuerpo contra la cabecera.
supongo que Blair sabía que sus protecciones eran lo
suficientemente fuertes y que no necesitaba estar atada.
—¡Tú la ayudaste a secuestrarme!
—En realidad, eres un adulto. Es un secuestro —digo,
plantando mi trasero en la esquina de la cama. —Tenemos
algunas preguntas para ti, Clover.
—Respondí a sus preguntas y me prometió que me
cuidarían. Todo lo que he comido es un sándwich.
—El mal comportamiento no se recompensa, Clover. —Le
digo, recogiendo una invisible pelusa de mis pantalones.
—¡Yo no hice nada!
—Intentaste sacrificar a Blair. Pero eso no es de lo que estoy
aquí para hablar. Es evidente que tienes una gran necesidad de
saber.
—Dios, ¿por qué me acosté con él? Ni siquiera valió la pena.
Solo ayúdame a conseguirme fuera de aquí. Mi aquelarre es
fuerte. Lo que quieras, podemos dártelo.
Le chasqueó la lengua y me levanto de la cama. No estoy
seguro de qué diablos está hablando pero ese no es el punto.
—Los rituales mensuales antes de que intentarán matarla.
¿La estabas drenando?
—No te estoy diciendo una mierda.
Soy tan rápido que no me ve venir mientras mi mano
envuelve su garganta y empujo su cabeza hacia atrás con fuerza
contra la cabecera. Puedo sentir mi poder irradiando de mí y solo

141
 ●

le toma un momento darse cuenta de que Bueno. Stevie está en

silencio en la esquina, observando pacientemente.
—Pensaría mucho en lo que sale de tu boca a continuación,
Clover. Hay cosas mucho peores que morir. ¿Sabía usted que
tengo muchos amigos en el infierno que están aburridos hasta la
médula?. Ellos estarían tan emocionados de tener una pequeña
cosa de juego como tú. Sencillo, sencillo y sobre todo, estúpido de
cojones. Consideraría recolectar cualquier cerebro restante en
células que tienes dando vueltas en esa cabecita tuya y responde
a mis malditas preguntas. ¿Lo entiendes? —Le doy a su garganta
un poco de apretón antes de soltarla y ella asiente con la cabeza
mientras las lágrimas se le escapan.
—Solo estábamos tomando un poco de su poder. Blair es
diferente. Nuestro aquelarre recoge el poder de la tierra. Una vez
que nació Blair, todo cambió. No pudimos recargar lo mismo. Es
como si nuestro aquelarre estuviera únicamente atado a Blair. La
mayoría de los ancianos han estado buscando una manera de
cambiar eso. Entonces solíamos hacer los rituales y todos estaban
felices. Pero cuando la posibilidad de no tener nuestro poder
atado a Blair surgió, el aquelarre lo tomó. ¡Lo lamento! Está bien,
por favor no me lastimes.
—No sé qué planes tiene Blair para ti. Pero déjame hacer
una maldita cosa clara. Intentas lastimar a Blair otra vez, sientes
el olor de alguien queriendo lastimar a Blair y no me digas, estás
acabado.
Traga saliva y llora mientras asiente con la cabeza. Miro
hacia la esquina y Stevie sonríe maliciosamente. No es una bruja
tan dulce después de todo. Stevie evoca un altavoz y saca su
teléfono de su bolsillo.
—Esto es para ayudarte a pensar en cómo no fuiste honesto
con Blair y conmigo antes.
Mira lo que me hiciste hacer por Taylor Swift estalla en los
parlantes y Clover gime mientras continúa llorando en sus

142
 ●

palmas. Stevie y yo salimos de la habitación y ya no se escucha

el sonido de la música.
—Eres una bruja engañosa, ¿lo sabías?
Ella se encoge de hombros.
—He aprendido de los mejores. Creo que Blair estará
orgullosa de la canción en repetición. Parece una excelente forma
de tortura.
—¿Cuánto tiempo planeas quedarte con ella?
—Blair quiere quedarse con ella hasta la luna llena como
póliza de seguro.
Asiento con la cabeza.
—Elegante.
—Realmente te gusta mi prima, ¿eh?
Gimo y me rasco la barba. No sé cómo manejar estos
sentimientos que estoy teniendo para Blair. Este abrumador
sentimiento de posesividad y cuidado no es algo que haya
experimentado. Claro, he tenido sentimientos de lujuria e incluso
disfruté de algunas citas aquí y allá. Pero esta conexión y
necesidad de Blair es completamente desconocida.
—Es complicado.
—Como la mayoría de las cosas con Blair. Debería
despertarse en unas pocas horas. ¿Planeas quedarte?
Debería irme a casa, dormir en mi cama. Pero no hay
manera en el infierno de que pueda irme.
—Sí, me quedaré con ella.
—Si Fez se vuelve demasiado territorial, solo dale un masaje
en la barbilla, —dice, caminando por el pasillo a lo que supongo
que es su dormitorio. Abro suavemente la puerta de Blair, ella
está en la misma posición que la dejé. Fez está durmiendo,
envuelto suavemente alrededor de su brazo.
Todavía lleva su atuendo de antes, una parte de mí quiere
cambiarlo para que esté más cómoda, pero decido dejarla

143
 ●

tranquila mientras me desvisto a excepción de mis boxers y me

meto en la cama.
El golem no fue un gran desafío para mí, pero el cabrón de
arcilla era fuerte. Fácilmente me quedo dormido con planes para
visitar a mi pequeña bruja y ver cómo le va en su subconsciente.
No me toma más de un momento encontrarla.
Se ve impresionante con un vestido ceñido negro mientras
arranca los pétalos de una flor, mientras se sienta debajo de un
sauce; las hojas mecidas por el viento.
—¿Dax? —dice ella con voz suave. Sus cejas están fruncidas
mientras tomo asiento junto a ella. —¿Eres parte de mi sueño de
verdad, o es algo que puedes hacer?
—Puedo soñar caminando como un demonio.
—¿Es la primera vez que vienes a uno de mis sueños?
—No, —respondo y ella me sonríe.
—¿Ves algo interesante?
—Mmm, los sueños que he visto no han sido felices.
—Tararea mientras arranca otro pétalo de la flor.
Sus ojos son de color rosa cuando me mira, y no puedo
contener mi sonrisa cuando la miro.
—Solía venir a este árbol con Stevie cuando éramos
pequeñas. Era nuestra fortaleza. No dejamos entrar a ninguna de
las otras chicas aquí. Sé que parezco dura ahora, pero en ese
entonces, Stevie me protegía de las otras jóvenes brujas.
Mi mano descansa sobre su muslo mientras mi espalda
empuja contra la fuerte corteza.
—¿Por qué te echaron fuera?
—No estoy seguro. Siempre fue así. Y al principio lo intenté.
lo intenté, pero era jodidamente difícil encajar, Dax. Contuve lo
fuerte que era, era educada, y traté de entrar en las pociones y el
lado terrenal de la magia. No importaba lo que hacía, así que
finalmente me incliné hacia lo que pensaban de mí. Pensaron que

144
 ●

era raro y diferente y me amargué. Si ellos iban a llamarme

perra, iba a ser la perra más grande que alguna vez tenían.
—No hay nada de malo en ser diferente.
—No, es difícil cuando no sientes que tienes a nadie.
—Tienes a Stevie, y ahora me tienes a mí.
Su cabeza descansa sobre mi hombro y suspira.
—Desearía que fuera así de fácil.
—Vamos a hablar más sobre eso cuando estés consciente.
—Uf, bien. —Quita la cabeza de mi hombro y me mira.
Ella es tan hermosa así, quiero más tiempo con ella
tranquila y relajada. Su cabello oscuro ondea con la brisa y lo
colocó detrás de su oreja.
—¿Me prometes una cosa? —ella dice.
—Cualquier cosa.
Ella me mira, sus ojos de un extraño tono amarillo, cerca de
los de su serpiente.
—Que nunca dejarás de mirarme de la forma en que lo
haces, —dice ella, y yo sonrío.
—¿Cómo es eso exactamente, pequeña bruja?
—Como si fuera algo precioso, alguien por quien vale la
pena preocuparse.
Voy a abrir la boca para responder cuando me arrancan de
su sueño, Abro los ojos a una Blair de ojos rojos que yacía a mi
lado. Cambian rápidamente a rosa cuando recupera el aliento y
se da cuenta de que somos yo y Fez deslizándose alrededor su
brazo más fuerte. Se mira los antebrazos antes de mirarme a mí.
Ella acaricia suavemente la parte superior de la cabeza de la
serpiente, calmandolo.
—¿Estabas en mi sueño?
—Sí, —le digo honestamente, y ella asiente con la cabeza.
—¿Estoy bien? —pregunta ella, sus ojos parpadean en
confusión, le acarició el pelo en su cara y la serpiente me sisea.

145
 ●

—Sí, tus heridas están curadas y Stevie te dio algunas

pociones. El gólem está muerto. ¿Viste el nombre antes de que el
pergamino fuera destruido?
—Mara, —susurra, y mi corazón se detiene.

146
 ●

Capítulo 16.
Blair.
—¿Mara? —Dax repite, restregándose la cara con sus dedos
tatuados.
—Sí, ¿el nombre significa algo para ti? Porque no a mí.
Dax sale disparado de la cama y comienza a pasearse por la
habitación.
—Mierda, Mierda. ¡Mierda! —Grita. Fez está tan harto de la
conversación mientras froto su mentón y se desliza de regreso a
su acogedor y cálido recinto.
—¿Dax?
—Ella es la razón por la que estoy en Hallows Deep.
—¿Bueno?
—Ella es un demonio que ha estado poseyendo a la gente y
dejando un serio recuento de cadáveres y peor detrás. Asmo y yo
tenemos la tarea de traerla de regreso al infierno.

147
 ●

—¿Qué tiene eso que ver conmigo?

—Exactamente. Mierda. ¿Qué quiere ella contigo? Esto es
malo. —su ritmo no se detiene mientras sus dedos acarician su
cabello oscuro. Las pocas canas alrededor de sus sienes parecen
más frecuentes esta noche. Él parece preocupado y no me gusta,
pero tampoco puedo evitar la cálida sensación que me envuelve
el corazón alrededor de alguien que se preocupa por mí.
Me pongo de pie y estoy tambaleante. Dax está
rápidamente a mi lado, agarrando mi brazo y ayudándome a
sentarme en la cama. Mi edredón susurrando alrededor de mi
cuerpo, mis manos contra la tela suave, soportando mi peso
mientras me siento.
—¿Por qué me querría un demonio? —Froto mi sien y gimo.
—No lo sé, pero vamos a averiguarlo.
Froto mi cabeza, una migraña formándose justo detrás de
mi ojo derecho.
—Nena, ¿estás bien?
—Me duele la cabeza —digo, no me gusta la vulnerabilidad
en mi voz.
—Vamos a cuidar de ti. Necesitas dormir más. Podemos
hablar en la mañana.
—¿Dax?
—¿Si bebe? —dice mientras abre mis cajones, poniéndome
ropa cómoda.
—¿Por qué estuviste en Hex esta noche?
—Podemos hablar de eso mañana.
—No, podemos hablar de eso ahora. —Hago puchero, con los
brazos cruzados y mi labio inferior saliente. Es un poco patético,
nunca he sido tan petulante en mi vida.
Me da una mirada severa.
—Escucha, brujita, no te voy a dar nalgadas en tu culo
perfecto cuando no te sientes bien. Pero lo haré cuando te sientas

148
 ●

mejor. Te dije que hablaríamos mañana cuando estés recuperada.

Ahora déjame cuidarte. ¿Entendido?
Suspiro pero asiento con la cabeza.
—Brazos arriba, —dice, y yo escucho. Me quita la camisa y
el sostén y me pone mi camisa grande de Fleetwood Mac puesta.
Se pone de rodillas y me quita mis zapatos antes de que sus
manos se deslicen por mis muslos y me quite la falda. —Estas
putas faldas me van a matar.
Me río y luego me estremezco ante la sensación de mi
cabeza palpitando. Dax ahueca mi mandíbula.
—¿Es la migraña de hoy o algo más?
—Suceden cuando uso mucha energía o cuando estoy
estresado.
Asiente con la cabeza y va a mi baño. No pasa mucho
tiempo antes de que me entregue dos cápsulas de Tylenol y un
vaso de agua. Los tomó rápidamente y colocó el agua en mi
mesita de noche. Alivia su gran cuerpo a continuación a la mía,
tirando de mí para que mi cabeza descanse sobre su brazo.
—Dos noches seguidas. ¿Qué dirán los otros demonios?
—Bromeo. Él se pone rígido debajo de mí antes de besar mi
cabello.
—Duerme un poco, Blair.
Estoy fuera antes de que pueda responder

Me siento tan bien, tan llena, tan cálida. Un sentimiento

suave y confuso me abruma y no quiero despertar. No quiero que
este sentimiento desaparezca. La sensación de hormigueo se
arrastra por mi columna vertebral, y es cuando me doy cuenta
de que estoy casi apunto del orgasmo

149
 ●

Parpadeo rápidamente mientras veo a Dax devorando mi

coño. Sus pulgares abro mis labios mientras su lengua lame mi
clítoris. Su barba roza entre mis muslos, y suspiro de satisfacción
mientras continúa chupando y lamiendo alrededor de mi clítoris.
Estoy tan mojada que puedo escucharlo tragar mi semen.
—Joder, tu lengua se siente tan bien en mi coño, Dax. Por
favor, no te detengas. Vas a hacer que me corra por toda tu cara.
¿Quieres eso? —Él tararea y chupa aún más fuerte mi clítoris, su
agarre en mis muslos se vuelve casi brutal. Una vibración de un
gruñido de su garganta me hace saltar del borde cuando mi
espalda se arquea fuera de la cama y me convulsiono por la
fuerza del orgasmo.
Espero que se detenga y me suelte los muslos, pero no lo
hace. Él aguarda chupando mi clítoris a un ritmo palpitante.
Puedo sentir mi clítoris hincharse contra su lengua ya que no se
suelta.
—Santo- —Sus labios dejan mi clítoris y golpea mi coño con
las puntas de sus dedos haciéndome correrme de nuevo.
Mi cuerpo tiembla mientras veo su cabeza levantarse entre
mis muslos. Un hilo de mi semen gotea desde su labio inferior
hasta su barba. Me sonríe, ese maldito hoyuelo haciendo acto de
presencia. Besa mi muslo y se limpia la barbilla antes de
arrastrarse por mi cuerpo y colocar un casto beso en mis labios.
Lo miro con los ojos muy abiertos.
—Estoy un poco sorprendido de cuánto tiempo te tomó
despertarte, —dice, acariciando contra el hueco de mi cuello.
—Alguien es extremadamente cariñoso en las mañanas
—Empuña su polla, alineando la cabeza de su polla contra mi
coño ya muy mojado.
—Tenía tantas ganas de follarte, niña. Pero quería
asegurarme de que estabas realmente de acuerdo con esto.
Realmente no hemos tenido la oportunidad de hablar de todo.

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 ●

Desliza la punta de su longitud hacia arriba y por mi entrada,

esperando el permiso.
Envuelvo mis piernas alrededor de él y entierro mis talones
en su culo firme, empujándolo contra mí. Me besa y ambos
sonreímos mientras nos besamos. Es jodidamente adorable y
asqueroso al mismo tiempo. Nunca he sido tan despreocupado y
fácil.
Esto no se parece en nada a la última vez que tuvimos sexo.
Dax se toma su tiempo. Es un perezoso follar por la mañana, y
me gusta mucho más de lo que nunca debería. Sus trazos
lánguidos y la forma en que sus manos tocan suavemente mi
cabello y mi cara. Es demasiado.
Al no poder manejar la intimidad, tomó el asunto en mis
propias manos. y empujó hacia arriba desde el fondo más rápido,
haciendo gemir a Dax.
—¿Estás tratando de ir arriba, pequeña bruja?
—Solo fóllame —digo con dureza.
Es casi como si Dax pudiera saborear la mentira, pero no me
llama por mi mierda. —¿Lo necesitas rudo, niña?
Asiento con la cabeza cuando la mano de Dax se envuelve
alrededor de un lado de mi garganta. Puedo sentir que la sangre
se me sube a la cara y no puedo hablar. Mis respiraciones son
superficiales y duras mientras Dax acumula un ritmo brutal,
follándome sin descanso.
Es casi como si estuviera enojado, pero eso no puede ser
correcto. Un duro sin ataduras, joder es lo que todo hombre,
demonio, es lo que querría, ¿verdad?
—¿Quién soy? —pregunta, su agarre en mi garganta se
afloja. Esperando a que pueda hablar. En el fondo sé lo que
quiere que diga, pero tengo ganas de decirlo, solidificar lo que es
esto, y no puedo tener eso, ¿verdad?
—Dax, —respondo. Seguramente todo esto de papá era una
forma de apaciguarme.

151
 ●

Él realmente no quiere eso. Realmente no quiero eso, me

miento a mí mismo. Si dejo que el tomé ese papel, le estoy dando
el control a otra persona. Todo en mi vida ahora mismo es un
puto lío. No hay forma de que quiera aguantar todo eso.
—Equivocado. ¿Quién soy? —Miro su rostro, se ha ido la
sonrisa de antes, se ve determinado y me atrevo a decir, molesto.
Puedo decir que se está irritando conmigo, que no le estoy
dando lo que él quiere. Quería esta dulce intimidad matutina, y
cambié el juego para darle lo que me siento cómodo. Niego con la
cabeza, y los gemidos continúan.
Aprieta mi garganta más fuerte. Apenas puedo respirar
como su vello púbico muele contra mi clítoris.
—Vamos, mi jodida polla, ahora mismo, —casi gruñidos
Siento que mi coño se contrae contra su impresionante longitud
y observó cómo se sacude y me sigue por el borde.
Tan pronto como llega, se voltea y se acuesta boca arriba.
No está sonriendo dulce como lo fue la otra noche, y me
pregunto cómo me las arreglé para follar
Esto arriba. ¿Podría realmente querer algo más conmigo?
¿Debería romper? ¿Derribar mis paredes y permitir eso?
—¿Dax?
—Ve a darte una ducha, Blair, —dice, dándose la vuelta.
Miró fijamente a su forma por un momento. No quiero tener
estos sentimientos. Tal vez sea mejor si lo he cabreado. Él puede
cortar y correr ahora. No valgo la pena invertir tiempo y energía.
Se me atraganta la garganta de la emoción y voy a darme la
vuelta y me voy a la ducha cuando su mano se extiende y agarra
mi antebrazo.
—Ven aquí, Blair, —dice, y es vergonzoso lo rápido que saltó
en la oportunidad de estar en sus brazos.
—Lo siento, —le digo sobre sus hombros.

152
 ●

—No, lo siento. Estaba actuando como un imbécil. esto es

tan nuevo. Creo que nosotros necesitamos hablar sobre algunas
cosas.
—Está bien, —respondo, feliz de no tener que mirarlo a los
ojos.
—Esto es jodidamente intenso y se ha estado moviendo a
una velocidad deformada. Creo que nosotros necesitamos
dejarnos saber dónde estamos parados.
—Está bien, —le digo, jugando con el vello de su pecho. No
me siento cómodo poniendo todas mis cartas sobre la mesa.
—Esta conexión que tenemos va más allá de lo físico. Algo
con nuestra magia nos une, y quiero ver adónde va. Quiero salir,
cuidarte, tratarte bien. Pero no puedo hacer eso si no dejas
entrar, Blair.
Me giro para enfrentarlo. Se ve genuino y mi corazón se
hunde. Todo esto está construido en una mentira y, sin embargo,
este hombre hermoso, poderoso, a veces aterrador, está ofreciendo
todo lo que he querido. Le sonrío, un plan formándose en la parte
de atrás de mi mente sobre cómo darme todo lo que quiero.
—Es difícil para mí, —digo suavemente.
—Entiendo. Solo necesito que trates de ser honesto conmigo,
¿de acuerdo?
—Puedo intentarlo —Sonríe, dándome una sonrisa.
—Eso es todo lo que pido. Ahora, mete tu lindo trasero en la
ducha para que podamos desayunar.
Me inclino y le doy un beso rápido. Antes de levantarme lo
miró inquisitivamente.
—Nunca me dijiste por qué estuviste en Hex anoche. Si no
hubiera estado allí, las cosas podrían haber empeorado mucho.
Se frota la barba y golpea ligeramente la cabeza contra la
cabecera.
—Nosotros tenemos una pista sobre el ser humano que
Mara podría estar poseyendo actualmente.

153
 ●

Frunzo el ceño y lo miro.

—¿Y?
Y ella trabaja en Inferno.
Lo miró boquiabierto. Por supuesto, he oído hablar de eso.
despertó mi interés, pero es una invitación de pareja solamente,
no es necesario que te quedes con tu pareja. No había salido con
un sobrenatural en mucho tiempo, y no había forma de que
Stevie iba a ser mi pareja.
—¿Y?
—Y necesito una cita para tener acceso, e iba a pedirte que
ven conmigo.
—¡Sí! —Sonrío y rebotó en la cama.
—Pero, —dice, arqueando una ceja hacia mí, —no estoy
seguro de si eso es una buena idea ahora después del incidente
del golem. No me gusta la idea de meterte en peligro.
No puedo evitarlo cuando cruzó los brazos y lo miró.
—En todo caso, tiene aún más sentido para mí ir. Me voy,
Dax.
—Cariño, no creo que me haya aclarado la dinámica de
cómo está la relación. Cuando dijiste que querías que fuera tu
papi, ¿Qué significó eso para ti?
Me encojo de hombros y juego con la colcha, no me gusta la
idea de explicar todo. ¿Por qué este hombre tiene que hablar
tanto?
¿No podemos simplemente pasar un buen rato y
preocuparnos por esta mierda?, no sé, ¿nunca?
Sacude la cabeza, notando lo terco que soy.
—Te diré lo que significa para mí. Nunca nadie me ha
llamado así antes, pero me encanta escucharlo de tus labios,
Blair. Hace que mi corazón se acelere y mi polla se endurezca.
Para mí, significa que estoy a cargo de tu placer y de mantenerte
a salvo. Nunca quiero que cambies quién eres, y no espero que
seas sumisa a mí todo el tiempo. Me encanta que seas poderosa y

154
 ●

confiada, pero conmigo, quiero llegar al punto en que puedas

confiar en mí lo suficiente como para cuidar las cosas por ti.
Mi mandíbula cae mientras asimilaba todo lo que acababa
de decir. ¿Quiere cuidar de mí? Pero siempre me he cuidado. Me
ha quedado claro que no soy el domme que siempre traté de ser.
Siendo su sumisa en el dormitorio será bastante fácil. Pero la
vulnerabilidad de su cuidado es aterradora.
—Nunca había tenido a nadie que me cuidara antes.
Él sonríe, maldito hoyuelo.
—¿Intentemos y veamos cómo van las cosas?
Viejas inseguridades se arrastran y no puedo evitarlo, es
como si hubiera tomado una maldita trufa de verdad otra vez.
—Tú solo me estarías viendo, ¿verdad?
Sus cejas se fruncen y sus manos tocan mi mandíbula.
—Pequeña bruja, tomas tanto jodido espacio en mi mente
que no hay forma de que pueda ver a nadie más.
—Ok, trataré.
—Buena niña. Ahora ve a darte una ducha y vamos a
comer unas crepas. —Mi estómago gruñe cómicamente, salgo de
la cama y caminó al baño. No estoy seguro de cuándo mis
tramas se volvieron tan complicadas o cuándo la mayoría de
Hallows Deep se convirtió en mi enemigo. Más allá de mi
aquelarre y algún lunático demonio tratando de matarme, ahora
necesito encontrar una manera de hacer que Ryan olvide que
alguna vez existí.

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 ●

Capítulo 17.
Blair.
Dax me acerca la silla mientras nos sentamos en mi lugar
favorito para desayunar. Archibald 's ha sido un elemento básico
en Hallows Deep durante todo el tiempo que recuerdo. Tampoco
ha cambiado mucho desde que yo era una niña.
Todas las mesas y las sillas no coinciden. La mesa redonda
en la que estoy sentado es un viejo tablero de linóleo,
probablemente fabricado a principios de los años ochenta.
Mientras tanto la silla en la que estoy sentado parece pertenecer
a la mesa de comedor de alguien en 1954. Juro que el hombre solo
conduce por la ciudad viendo quién está tirando mierda y la usa
para llenar la pequeña tienda de desayunos.
Es nostálgico y lindo, me encanta aquí, y la compañía
tampoco es tan mala. Estoy agradecido de que Dax no haya
tenido esta mañana en mi contra.

156
 ●

Sabía lo que él quería y me sentía inseguro y no podía

dárselo en ese momento. Es tan paciente conmigo, solo espero no
agotar esa paciencia.
—¿Sabes lo que quieres?
—Azúcar morena, fresas y conservas de limón, por favor.
—Lo entendiste. —Besa mi cabello antes de ir al mostrador
para hacer nuestro pedido. ¿Quién sabía que un demonio podría
ser tan agradable? La única vez que lo he visto un poco irritado
fue cuando estaba en mi bar con Asmo, pero honestamente, el
chico puede ser bastante molesto. Sería difícil no tener un
temperamento corto con él. No mencionaremos el verlo
destrozado un golem con sus propias manos, eso fue en defensa
propia.
Observó el trasero de Dax con sus vaqueros oscuros mientras
hacía cola para pedir nuestros alimentos. El timbre de la puerta
principal suena, rompiendo mi concentración y me quedo
boquiabierto cuando veo pavonearse a la mujer más
deslumbrante que he visto en mi vida a través de la pequeña
tienda. Ella hace que el lugar se vea barato con lo elegante que
es. Tiene el pelo largo y oscuro recogido en una cola de caballo,
vaqueros ajustados que forma a la curva de su culo y una
camiseta negra que se pega tan fuerte a su torso, como una
segunda piel.
Sus zapatos con suela roja repiquetean contra el azulejo
gastado y envejecido cuando coloca su mano perfectamente
cuidada en el hombro de Dax.
Veo rojo.
El sonido de las patas de mi silla rozando contra el azulejo
es discordante, y casi todos en la pequeña tienda se giran para
mirarme. estoy a mitad de camino de donde está Dax y esta
amenaza desconocida está de pie cuando veo que Dax quita su
mano prístina.
—¿Qué quieres, Kas?

157
 ●

—Una crepa, obviamente.

Ella va a poner su mano en su hombro y él hace una
mueca.
—No me toques.
—Oh, a Asmo no le importa.
—Sí, bueno, me importa una mierda, —responde Dax y mi
corazón negro como la tinta crece dos tallas mas grande.
Sin ninguna preocupación en el mundo, me paro junto a
Dax y entrelazo nuestros dedos juntos. Me sonríe antes de mirar
a la mujer a mi lado.
—Oh, ¿nueva niña? —La mujer llamada Kas pregunta, y mi
corazón se desinfla a su tamaño estándar. No dejo que la
irritación se muestre en mi cara. No es el hecho de que ella me
está hablando, o la idea de que soy uno de los muchos que han
llenado este papel para Dax. Si estaba siendo honesto, al menos
soy el primero en llamarlo papá, así que aún hay eso.
—Oh, ¿eres la vieja niña? —Le pregunto con voz aguda. ella
me da una sonrisa tan siniestra solo por eso, sé que es
sobrenatural.
Muerde la lengua antes de mirarme de arriba abajo. Me
han medido muchas mujeres, y si no me equivoco, es una
apreciación de intriga.
—Tú debes ser la bruja malvada de la que Asmo sigue
hablando, puedo ver la apelación, Daxaddon.
Dax gime a mi lado y su mano se aprieta alrededor de la
mía. Kas está poniendo a prueba su paciencia.
—Asmo tiene bastante boca sobre él, —le digo. Es evidente
que ella es un demonio. si sabe el nombre completo de Dax y sale
con Asmo también. Sé que necesito tener mi guardia con ella.
Pero algo en su actitud resuena conmigo. Algo dentro de mí me
dice que haga de esta mujer mi amiga en lugar de mi enemigo.

158
 ●

—No tienes idea. Parece que tienes toda la boca sobre ti

también, pequeña bruja. —No me gusta particularmente que el
apodo cariñoso de Dax salga de sus labios.
Dax parece tener sentimientos similares.
—¿Qué quieres, Kas? —Dax le pregunta, claramente
exacerbado por ella dando vueltas alrededor de la conversación.
—Solo asegurándome de que todo salga según lo planeado
para la noche .
—Todo estará bien.
—No podemos darnos el lujo de joder esto, —dice ella.
—No tienes idea. ¿Puedes dejarnos solos?
Kas lo ignora y me enfrenta.
—¿Qué te vas a poner mañana? —pregunta.
—Uh, probablemente una falda, un top corto o un sostén.
Kas toca su barbilla.
—Encuéntrame en Luxe en North Grove en una hora.
—¿Qué?
—Si vienes a Inferno con nosotros, debes lucir bien. Me
aseguraré de que ustedes dos no arruinen esto por no estar
preparados.
Dax abre la boca para responderle y yo paso frente a él.
—Me reuniré allí en una hora.
Kas me da otra sonrisa malvada, y juro que puedo escuchar
a Dax básicamente gruñir a mi lado.
—Te veo allí.
Ella gira sobre sus talones, saliendo de la tienda sin decir
una palabra más.
—No creo que sea una buena idea, —dice Dax a mi lado.
—Estará bien, —le digo, apretando su mano
tranquilizadoramente.

159
 ●

Dax me lleva a Luxe en la parte trasera de su motocicleta.

Está preocupado por la reunión con Kas mientras me quita el
casco y lo pone en la moto. También tiene mucho cuidado al
alisarme la falda.
—Realmente no tienes que hacer esto, —dice.
—¿Qué parte?
—Comprando con Kas. Me gusta la ropa que usas.
—Kas parece estar bien y quiero estar preparado mañana.
Dax sacude su cabello de su casco y saca su billetera,
sacando su tarjeta de crédito.
—No te preocupes por el costo, lo que quieras conseguir. No
me enfadaría si tienes algunas cosas para que te las quites más
tarde.
Se inclina, agarrando mis nalgas mientras besa detrás de mí
oreja.
—¿Cualquier solicitud?
—Me gustaría verte en algo rosa, —dice, sonriendo tan
ampliamente que sus hoyuelos en exhibición. Le doy una mirada
sin calor. Si el hombre está pagando, no voy a discutir.
—¿Hay un límite de crédito en esto? —Pregunto, sosteniendo
la tarjeta con dos dedos.
—No, lo que quiera mi pequeña bruja.
—Hm, ¿al detective demonio paga bien? —digo en broma,
colocando la tarjeta en mi cartera.
—Mmm. Envíame un mensaje de texto cuando hayas
terminado e iré a buscarte. Si kas hace algo para enojarte, puedo
volver de inmediato.
—Puedo manejarla digo con confianza.
—Lo sé, niña. —Se inclina, dándome un beso que
probablemente no sea para un lugar público, pero disfruto de

160
 ●

ello. Estoy en la nube nueve sobre todo lo que ha hecho por mí

últimamente. La forma en que me trata en privado y en público
no es algo que he experimentado antes. Me siento apreciado y
honestamente, todo esto de ser mimado es bastante agradable.
Dax no vuelve a subirse a su bicicleta, sino que camina
unas cuantas tiendas más por la calle. ¿Haciendo qué? No tengo
ni idea. Todo lo que sé es que papá me dio su crédito y sería una
estupidez mirarle los dientes a un caballo regalado. Además,
quiero mirarme caliente en Inferno, y aunque no sepa lo que
siento por Kas, la mujer tiene un gusto increíble.
Tan pronto como entré en la boutique, un hombre pequeño
vestido de negro con cabello castaño perfectamente peinado me
saluda. Al principio me mira como si no perteneciera aquí, pero
él me habla de todos modos.
—Bienvenido a Luxe. ¿Tienes una cita?
—Voy a conocer a alguien llamado Kas digo. Su
comportamiento cambia a uno más útil, su mirada menos
escrutadora mientras sonríe.
—Oh maravilloso, sígueme. Mi nombre es Baron y estaré
ayudando. Si hay algo que necesites, por favor házmelo saber.
¿Agua, champán?.
¿Quién llama a su hijo Barón? le doy un vistazo similar al
que me dio y asiento con la cabeza.
—El champán sería genial —digo. Baron inclina la cabeza y
camina fuera a buscar el champán. La tienda coincide con el
nombre. Todo lo colgado es de gama alta y caro. La tienda es de
un blanco prístino, con lencería y ropa costosa colgada en las
paredes y en delicados percheros.
Camino hacia la parte de atrás de los probadores, y me
saluda el sitio de Kas en un catsuit completo. No tengo ni idea de
cómo se metió en el cuero ajustado, pero no miento si digo que le
queda espectacular. Le da forma a su cuerpo perfectamente,
parece una combinación de superhéroe malvado y dominatriz.

161
 ●

—Ah, viniste, —dice mientras se gira en el espejo,

admirando su propio culo. No puedo culparla.
—Pensé que podría usar toda la ayuda que pudiera obtener.
Kas asiente con la cabeza.
—Tu estilo es lindo, no me malinterpretes. el infierno es
exclusivo, y como sub de Dax, debe cumplir con un cierto
requisito.
—¿Quién dice que él no es el sumiso?
Kas echa la cabeza hacia atrás en una risa profunda.
—No me malinterpretes, bruja. Estoy seguro de que puedes
jugar arriba cuando quieras. —Sus tacones hacen clic mientras
camina hacia mí y me levanta la barbilla. —Pero el hecho es que
ese sentimiento que da Dax cuando toma el control, te dice que
hacer, es más fuerte que cualquier sentimiento que obtienes al
estar a cargo de otra persona. ¿Me equivoco?
—No te equivocas —digo con un suspiro exagerado.
—No suenas demasiado molesto por eso. Si Dax no te da lo
que necesitas, cariño, puedo llenar ese vacío. —Su pulgar está
debajo de mi barbilla y me hace mirar sus ojos castaños con
forma de almendra. Ella sonríe maliciosamente de nuevo, y es
cautivadora. Tan cautivadora que casi necesito sacudir la cabeza
para despejarme.
—Estoy feliz con Dax, —digo deliberadamente.
—Bueno, si alguna vez cambias de opinión y quieres una
mami en lugar de un papi, la invitación sigue en pie. —Ella se
ríe como un maníaco mientras camina de regreso al probador
para probarse otra cosa.
Los demonios están jodidamente locos.
Niego con la cabeza de nuevo y mientras camino de regreso
a la entrada principal, Baron me detiene y me ofrece mi
champán. Tomó con ternura el vaso, sosteniendo el tallo entre
dos dedos.

162
 ●

—Aquí estás. Kas y yo hemos tomado la libertad de elegir

algunos artículos para ti. —Él retiene una cortina de rubor rosa.
—Si algo no encaja bien, házmelo saber y puedo conseguirte un
nuevo tamaño.
Me aclaro la garganta.
—¿Tienes algo en rosa? —pregunto en voz baja, esperando
por la mierda que Kas no escucha.
Baron me sonríe y asiente para recoger algunas prendas
más. Bajo mi champán con unos cuantos tragos grandes y colocó
el vaso vacío en el banco.
Tomó la primera opción, y el material se siente rico contra
mis dedos. No es algo que normalmente compraría para mí. Mi
guardarropa está compuesto por diferentes faldas plisadas,
algunos jeans y todo tipo de camisas negras que puedas
imaginar. Si bien no está fuera del ámbito de lo que compraría,
el precio es más de lo que gastaría.
Cuando me lo pongo, sé que a Dax le encantará y decido
mostrárselo a Kas, en contra de mi mejor juicio.
Su sonrisa es amplia mientras me mira de arriba abajo.
—Esa es definitivamente es uno para Infierno.
Asiento con la cabeza, no queriendo que me coquetee de
nuevo o que diga algo más. Me pruebo un montón de sujetadores
y lencería diferentes que Barón mantiene entregándome
diferentes cosas para probar, y no puedo evitar agregar casi todo
a la pila de mantener. Gente que dice que el dinero no puede
traerte felicidad nunca antes había probado sujetadores de
trescientos dólares. la forma en que las telas se sienten contra mi
piel me hace sentir segura.
Nunca me había gustado tanto ir de compras y no puedo
decidir si es porque no estoy gastando mi propio dinero, o que
todo lo que compre me lo quitaran las hábiles manos de Dax.
Una vez que mi montón es lo suficientemente alto, me vuelvo a

163
 ●

poner mi atuendo y Baron trae todo adelantado por mi. Creo que
podría acostumbrarme a este tipo de compras.
Kas sale al mismo tiempo, todavía tan inmaculadamente
vestida como antes. Barón también trajo sus selecciones al frente.
—¿Conseguiste todo lo que necesitas, pequeña bruja?
Pongo los ojos en blanco ante este demonio adelantado.
—Mi nombre es Blair. No soy tu pequeña bruja.
—Desafortunadamente. He estado buscando una brujita
traviesa con quien jugar. Parece que tendré que seguir buscando.
—Sí, tú haces eso, —le digo, y Kas se ríe.
—No estoy seguro de quién es más delicado con quién, tú o
Dax.
No le respondo, y Baron muestra mi total.
—Serán siete mil ochocientos veinticuatro dólares con doce
centavos.
Le doy una sonrisa y le entregó la brillante tarjeta dorada
de Dax. Kas sonríe a continuación a mí en aprobación.
Kas paga por sus cosas, pagando casi el doble de lo que
pagué yo. Ambas tomamos nuestras bolsas de compras por la
puerta principal. La motocicleta de Dax está allí, pero él no, así
que le envió un mensaje de texto diciendo que estoy listo para
irme.
—Dax debería estar aquí en cualquier momento, —le digo a
Kas.
—Esperaré hasta que regrese.
—No tienes que hacer eso.
—Sí. Los demonios pueden tener la reputación de ser
despiadados e insensibles, pero ese no es el caso. Eres importante
para Dax, así que eres importante para mí y para Asmo. Estoy
feliz por ustedes dos, realmente lo estoy. Pero yo necesito que
sepas que no puede haber cagadas en Inferno. Tenemos que
asegurarnos de que este trabajo esté bien hecho.

164
 ●

Aprecio la ética de trabajo de Kas casi tanto como la aprecio

a ella.
—Confía en mí, quiero que atrapen a esta perra tanto como
tú. Cualquier cosa que pueda hacer para ayudar, me apunto.
Kas me sonríe.
—Es una pena. —Ella sacude la cabeza cuando siento unos
brazos musculosos envolverme la cintura.
—¿Lista para ir, cariño? —pregunta su voz grave.
—Sí, —le digo, mientras estoy dando vueltas en sus brazos.
—Ella no fue demasiado difícil, ¿verdad?
—No, creo que en realidad podría gustarme. —Hago un
sonido de arcadas falsas mientras rebusco en mi billetera y le
devuelvo a su tarjeta de crédito.
—¿Recibiste muchas cosas bonitas? —pregunta con una
sonrisa traviesa.
—Lo hice, gracias, papi, —sonríe y me besa bruscamente. El
rastrojo de su barba contra mis mejillas me hace sonreír en el
beso. El rompe lejos y la forma en que me mira, carajo. Es como
si todos mis problemas no existieran cuando estoy con Dax. —Sin
embargo, tendrás que esperar para ver.
—Puedo ser paciente, niña. ¿Puedes? —pregunta
seductoramente mientras coloca el casco en mi cabeza y toma
mis bolsas para ponerlas en sus monturas laterales.
Se pone su propio casco, sube primero a su bicicleta antes
de darme una señal de mano para saltar sobre la espalda.
Sé que debería estar estresado. Están pasando tantas cosas
que están fuera de mi control. Pero todo lo que puedo hacer es
disfrutar de la sensación de envolver mis brazos alrededor de sus
esculpidos abdominales y respirando su aroma almizclado. Creo
que Dax podría ayudarme a hacer que todo esté bien.

165
 ●

Capítulo 18.

Blair.
—Esta es una idea terrible, Blair, —me dice Stevie mientras
trabajo para conseguirme listo para la noche. Dax me recogerá
en una hora para ir al infierno.
—Él me pidió que viniera. Claramente, este demonio Mara
es una amenaza para mí. En cuanto antes se haya ido, antes
todo podrá volver a la normalidad.
Stevie me mira mientras se sienta en mi cama.
—No has estado en Infierno antes. No sabes en lo que te
estás metiendo.
—¿Qué, y tú tienes? —Pregunto. Mira hacia otro lado y sus
mejillas se sonrojan. —Espera, ¿has estado en un club de sexo
sobrenatural y nunca me lo dijiste?
—Nunca te gustó Bianca, así que sí, nunca te lo dije.
Solíamos ir los jueves por la noche. Era compre uno, llévese otro

166
 ●

bolsas de sangre. —Hago una mueca y la miró fijamente. —No lo

entiendes, Blair. Este no es solo un club al que puedes ir, mirar y
esperar. Si no participas, pareces sospechoso. Sabes cuán
paranoicos sobrenaturales son unos de otros. Especialmente una
bruja colgando fuera con un puñado de malditos demonios.
—Puedo manejar eso, —le digo, encogiéndome de hombros.
nunca uso mi cabello así, pero me siento muy lindo, y sé que Dax
lo disfrutará.
—No me gusta, Blair. Ella envió un golem tras de ti, Dax
dijo que está poseyendo personas y revolviendo sus cerebros. ¿Y si
ese es su plan para tí?
—Dax no permitirá que me pase nada —digo.
—Apenas lo conoces, —responde Stevie, dándome una
mirada de disculpa.
—Stevie, ¿alguna vez me has visto metido de cabeza en algo
como esto? No sé qué tiene exactamente Dax, pero nunca se
sintió así. Sentirse seguro y apreciado a su alrededor. Sabes lo
poderoso que soy, y lo haré estar con tres demonios que tienen
cuantos años. Te prometo que seré cuidadosa.
Ella gime y se frota la cara.
—Todavía no me gusta.
—Lo sé.
—¿Te habló Dax sobre lo que vas a hacer esta noche?
—Me recogerá temprano para que podamos discutirlo.
—Lo juro hasta la luna y de regreso, Blair. Será mejor que
me llames si te sientes incómoda. Vendré a recogerte de
inmediato.
—Gracias, Stevie. —Me acerco y envuelvo mis brazos
alrededor de mi primo. Su pobre cara está aplastada contra mis
tetas ya que ella está sentada y yo estoy de pie.
—¿Mencioné lo jodidamente caliente que te ves esta noche?
—No, no lo habías hecho, —digo, alejándome de nuestro
abrazo y mirando en el espejo. Es una falda plisada de cuero

167
 ●

suave. Estoy usando una tanga de encaje negro y liga debajo. Si

me agacho, alguien va a tener una vista de mi pálido culo.
Medias transparentes negras cubren mis piernas hasta la mitad
del muslo. Los broches conectando a las medias a mi liga tienen
calaveras en ellas. Es adorable.
La parte superior podría clasificarse como un sujetador. Está
hecho de un encaje más delicado, cubre mis pezones y se
entrecruzan alrededor de mi pecho y espalda.
Puedes ver fácilmente el bulto de mis piercings a través del
material. Todo esto tomaría un pequeño tirón y mis senos
saldrían.
Mi maquillaje es delicado, solo un poco de delineador de
ojos alado, base y un labio desnudo Mi cabello es su ser indómito
habitual, las ondas oscuras se encuentran con mi espalda. Pero
puse dos moños pequeños a cada lado, apartando mi cabello de
mi cara
Me siento hermosa y sé que a Dax le va a encantar el look.
Recibí la aprobación de Kas, y está claro que Stevie también está
de acuerdo. Una vez más, respiro hondo y me miro en el espejo.
El movimiento en el reflejo me llama la atención.
—¿Qué pasa, Fez? —Le pregunto a mi familiar mientras me
acerco a su recinto. Él lamentablemente no responde, pero puedo
sentir su estrés. —Todo va a estar bien esta noche, bebé —lo
arrullo, dándole rasguños en la barbilla mientras su mitad
superior se envuelve alrededor de mi muñeca.
—Creo que solo está celoso de que haya otro hombre en tu
vida. Nunca trajiste a Ryan aquí —dice Stevie y tarareo en
acuerdo.
—Hablando de Ryan, ¿alguna idea sobre cómo hacerle
perder la memoria?
—Es una mala idea, Blair. Interferir con un humano va a
causar problemas con el consejo, sin duda.
—Eso es solo si se enteran.

168
 ●

—Sí, y si se enteran, podrían prohibirte usar tu magia.

Me burlo y pongo los ojos en blanco.
—Perder mi magia por unas semanas valdría la pena. —El
consejo solo puede hacer mucho. La mera idea de perder la magia
es aborrecible para la mayoría de las brujas, por lo que se
mantienen en línea. A decir verdad, los reto a quitarmela. Nunca
he oído que la magia de una bruja haya sido realmente tomada.
Parece una amenaza vacía.
—¿No sería más fácil decírselo a Dax?
—UH no. Creo que sería más fácil hacer que Ryan me olvide
y continuar con lo que sea lo que tengo con Dax sin tener eso
colgando sobre mi cabeza.
—Creo que lo entendería, Blair.
Me encojo de hombros, ignorando a Stevie. ¿Qué sabe ella,
de todos modos? Juro que Fez pone los ojos en blanco mientras se
desliza de nuevo en su terrario, y escucho un ligero golpe en la
puerta principal.
—Stevie, te prometo que te llamaré si algo sale mal. Todo
estará bien. No tienes que preocuparte. —Se levanta de la cama y
vuelve con a su habitación, irritada conmigo. —Oh, ¿cuándo fue
la última vez que alimentamos a Clover?
—Oh, mierda, —dice Stevie, cambiando de dirección de su
dormitorio a la cocina. Me hace reir. Pobre Clover, con mucha
energía en mi paso, abro la puerta y soy recibido por una enorme
sonrisa, dos hoyuelos y hambrientos ojos verdes.
—Joder, te ves increíble, pequeña bruja.
No puedo evitarlo mientras el calor sube por mi cuello
hasta mis mejillas.
—Gracias —digo suavemente.
—Estaba pensando que podríamos llevarnos tu Jeep. El
portal no era tan agradable en tu estómago la última vez.
Además, quiero asegurarme de que tengamos tiempo para hablar.
—¿Dónde están Kas y Asmo?

169
 ●

—Se reunirán con nosotros allí.

—Está bien, déjame tomar mis llaves. —Voy a la cocina a
buscar mis llaves y miro cómo Stevie prepara un sándwich de
mantequilla de maní y miel para Clover. —Me voy, Stevie.
—Por favor, ten cuidado, —dice, dándome una mirada
severa.
—Lo haré. —Le doy una sonrisa y giro sobre mis talones.
Caminando de regreso a donde Dax me está esperando. No puede
dejar de mirar mi atuendo. Suavemente pasa un dedo por uno de
los pequeños moños en mi cabello y sonríe.
—Me gustan estos. —Su dedo se desliza por la columna de
mi garganta antes de que se deslicen sobre uno de mis pezones.
—Y esto. —Ahora ambas manos están en la piel desnuda de mis
costados mientras arrastran hacia abajo el suave cuero de mi
falda. Su mano izquierda tira ligeramente del material.
—Y realmente me gusta esto. No sé si ponerte sobre mis
rodillas y darte una nalgada por lucir tan tentador. O deslizar
mis dedos en tu apretado coño y recompensarte por lucir tan
bien para papá.
Tragó ruidosamente.
—¿Ambos? —pregunto y él se ríe. Su risa siempre dispara
directo a mi núcleo. Es profundo y pedregoso, y no creo que
nadie entienda esto de Dax, este lado despreocupado, feliz y
generoso. Sé que es rápido, pero parece que ambos nos
recompensamos con la más íntima y mejores lados el uno del
otro.
—Yo conduciré, nena. —Asiento con la cabeza y dejo caer
mis llaves en su gran palma.
Caminamos hacia mi garaje y me abre la puerta del
pasajero. Su mano se extiende tiernamente en mi espalda baja
mientras me ve subir al asiento. Cierra la puerta y rodea el
vehículo, y se mete en el asiento del conductor.

170
 ●

Ajusta el respaldo del asiento y los espejos antes de

encender el motor, pulsa el botón de la puerta del garaje por él
mientras da marcha atrás para salir de la entrada. Tan pronto
como estamos en la carretera abierta, él tiene una mano en el
volante, y la otra descansando protectoramente en mi muslo.
—¿Has estado en un club como este antes?
—No, —respondo, sintiéndome un poco inferior. Su pulgar
frota círculos en mi muslo mientras habla y presta atención a la
carretera.
—No he estado específicamente en Inferno, pero he estado
en otros clubes antes. Lo que he oído sobre Inferno parece
bastante común en comparación con otros clubs. Cuando
llegamos allí como socios, obtienes una pulsera para designar qué
te interesa. Blanco significa que estás allí para mirar y estás
abierto.
El azul es para sumisos que buscan Doms, el rojo es para
Doms que buscan sumisos. Creo que usan púrpura aquí para los
interruptores. Si solo te interesa jugar con tu pareja, tu
muñequera será blanca y la designación que decidas. Esto
permite que otras personas sepan que no estás interesado en
jugar con ellos.
—Está bien, —respondo, tratando de recordar todas las
combinaciones de colores.
—Tendremos bandas asociadas que demuestren que soy tu
Dom y tú eres mi sumiso. Estos términos están sueltos en estos
clubes, pero te ayuda a darte más protección. Mientras estemos
allí, no quiero que hables con nadie que no sea yo, Kas o Asmo.
—Entiendo. —A decir verdad, hablar con extraños no es
realmente mi mejor fuerza, de todos modos.
—Si alguien te molesta, quiero que me lo digas de
inmediato. Sé que eres poderosa, Blair. Pero es mi trabajo
manejar ese tipo de mierda. —Asiento con la cabeza y continúa.
—Estaremos mirando a ver si la mujer que trabaja ahí, Paige, está

171
 ●

siendo poseída por Mara. Kas y Asmo van a ser los que verán si
es ella. Tenemos órdenes estrictas de devolverla ilesa al infierno,
así que va a ser difícil. Si es ella, podría necesitar un portal para
ir a casa rápidamente. Solo necesito que estés preparado para eso.
—¿Cómo sabrás si está poseída?
—Hay algunos avisos. Ojalá fuera tan fácil como echar
agua bendita en una perra, pero no lo es. Lo más probable es que
ella sea capaz de sentir que somos demonios y su
comportamiento cambiará.
—¿Paige es una humana, trabajando en un club de sexo
sobrenatural? —pregunto, confundido acerca de cómo eso es
posible.
—No, en realidad es medio cambiaformas, de qué tipo no
pudimos ficharla. Parece que Mara está subiendo la apuesta
sobre a quién está poseyendo. Es por eso que si hay algún indicio
de peligro de que ella se acerque a ti, te llevare a casa.
—Entiendo. Stevie mencionó algo sobre Inferno que quería
mencionar. —Dax asiente con la cabeza y masajea mi muslo. Me
lamo los labios antes de decirlo. —Ella dijo que este club no es
realmente tolerante con los observadores.
—Si vienes a jugar, se espera que juegues.
—Kas dijo algo similar. Quiero asegurarme de que estás
cómoda, cualquier cosa que no quieras hacer, no lo haremos.
Estaré comprobando contigo toda la noche. Verde significa que te
encanta, amarillo significa que estás indeciso y rojo significa
alto. También podemos tener una palabra de seguridad si te
gusta.
Es estúpido, pero sí, quiero una extraña palabra de
seguridad.
—Planchette, —digo y lo miró sonreír a mi lado.
—Planchette será, —dice, encendiendo la luz intermitente y
poniéndonos en la carretera. Es ahora cuando los nervios entran

172
 ●

en acción. —¿Hay algo que definitivamente no quieras hacer esta

noche?
—No quiero compartir, nada humillante. Estoy interesado
en jugar contigo, pero esta noche no creo que quiera nada más
que tu mano. Se aferra a mi muslo, se aprieta y juró que su
palma sigue acercándose a mi coño —¿Hay algo fuera de la mesa
para ti?
—Joder, eres linda. Yo tampoco comparto. Como siempre,
me encanta tu afilada lengua, pero aquí, en este lugar eres mía y
tener buen comportamiento es importante. —Él me mira,
dándome una ceja levantada.
—Puedo ser bueno.
—Sé que puedes, niña.
—¿Hay algo más que quieras cubrir antes de que lleguemos
allí?
—Solo sé que si alguna vez te sientes incómodo, siempre
puedes decírmelo. Oh, sacar mi teléfono de mi bolsillo. La primera
foto es una foto de Paige, así que sabes lo que estás buscando.
Lo miro con los ojos muy abiertos. Un hombre entregando
su teléfono voluntariamente. Él ni siquiera tiene una pantalla de
bloqueo mientras miro la foto, memorizando las facciones de una
mujer rubia frente a mí. Ella es bonita. Por un lado, espero que
sea ella la poseída y esto termine esta noche, por otro, espero que
no.
Si lo que dijo Dax es cierto, y Mara está dentro de esta
mujer, el daño que ella está haciendo es insuperable.
No puedo evitarlo cuando miro sus contactos. Solo quedan
dos números guardados allí 'pequeña bruja' y Ryan. Hace que mi
estómago se hunda. No puedo pensar más en eso, deslizó su
teléfono en el bolsillo de su chaqueta.
Dax se detiene en un lugar de estacionamiento vacío y noto
de inmediato que el edificio está protegido. Para un humano, el

173
 ●

edificio ni siquiera será visible. A mi, sin embargo, parece un

almacén con la radiante palabra Infierno en el frente.
—¿Estás listo? —Dax me pregunta, desabrochándose el
cinturón de seguridad. Le sonrió y asiente con la cabeza. Tomó
unas cuantas respiraciones profundas mientras él sale del auto y
camina alrededor del frente para abrirme la puerta.
—Puedo hacer esto.

174
 ●

Capítulo 19.
Dax.
Tomó la mano más pequeña de Blair en la mía mientras
caminamos hacia la entrada de Infierno. Joder, se ve bien. Sé que
me opuse a que ella fuera de compras con Kas, pero lo que está
usando esta noche hace que valga la pena.
El conjunto que lleva puesto con los dos moños en el pelo
casi me tiene devorándola a la vista. Definitivamente vale siete
grandes.
He considerado dar la vuelta al auto y llevarla a casa y
follarla toda la noche más veces de las que me gustaría admitir.
Sobre todo porque ella se ve impresionante y la quiero toda para
mí. La otra parte de mí, la cual está pasando un momento difícil,
es la idea de que ella está en peligro. Todo este plan comenzó
conmigo solo necesitando a Blair como cita para entrar al club.
Ahora que sabemos que Mara podría estar persiguiendo a
mi pequeña bruja, no me gusta nada.

175
 ●

Se ve nerviosa, pero todavía confiada en la forma en que

camina. Parte de mi espera que rompa una regla o dos para
poder doblarla en esa costosa pequeña falda que compré y
golpear su culo alegre hasta que esté bonito y rosado.
—Recuerda, no hables con nadie más que conmigo, Asmo y
Kas.
—Sí, papi, —dice, rodando los ojos y besando mi mejilla. He
sido lo suficientemente decente antes de ser un demonio para ser
bendecido con esta seductora traviesa.
Arqueo una ceja hacia ella, pero ella toma mi mano con
fuerza mientras saluda a Asmo y a Kas
Kas le da una mirada de aprobación pero no dice mucho,
ella parece más ansiosa por hacer este trabajo que nadie, y
estaría mintiendo si dijera que no sospechaba de sus intenciones.
Kas lleva a Blair a un lado para darle una charla de ánimo
o alguna mierda. Me mantengo observándola mientras Asmo
viene y se para a mi lado. Los dos estamos vestidos más
casualmente mientras me inclino y le susurro.
—Tenemos que estar atentos a Kas.
—¿Qué crees que hago todo el día?
—No ese tipo de ojo, idiota.
—Escucha, podría estar casi cegado por el coño prístino de
Kas y cambiando de culo. Pero no soy lo suficientemente tonto
como para dejar que ella se lleve todo el crédito por la captura.
Somos socios. Si alguien va a tomar el crédito por traer a la perra
psicópata de vuelta al infierno, seremos nosotros.
—Solo quiero asegurarme de que estamos en la misma
página.
—No me impedirá dejar que me supere frente a una
multitud de personas.
Pongo los ojos en blanco pero me encojo de hombros. Asmo
va a hacer lo que quiera, y como siempre y cuando se dé cuenta
de que el trabajo es lo primero y que no se puede confiar en Kas,

176
 ●

—Eso es todo lo que necesito saber.

—¿Listo para ir, niña? —susurro contra la concha de la
oreja de Blair. Ella huele a lavanda y salvia. quiero lamer la
columna de su garganta y ver a qué sabe.
—Sí, —murmura, dedicando una última mirada a Kas.
Asmo nos abre la puerta. El vestíbulo está tenuemente
iluminado; la decoración te permite ser sórdido, pero de una
manera exclusiva. El libertinaje puede ocurrir aquí, pero los pisos
y las superficies en las que se sienta están limpios. Los talones de
Kas resuenan contra el azulejo de obsidiana mientras nos saluda
la anfitriona. Una mujer vampiro con pálida piel y cabello rubio
sucio se encuentra detrás del puesto de anfitriona negro.
—Necesitaré tus invitaciones y el pago del club, —dice ella.
Kas entrega dos boletos y le paga a la mujer antes de que Asmo y
Kas agarren sus bandas moradas.
—Oh, mierda, ¿están abiertos a otras personas? —Blair dice
a mi lado.
—Honestamente, no sé quién es el desviado sexual más
grande de los dos.
Entrego nuestros boletos y pago a la mujer. Entrar aquí no
es barato, pero la mayoría de las criaturas que vienen aquí viven
mucho tiempo. Supongo que tienen más que suficiente dinero.
Colocó la banda blanca y azul y la pongo en la pequeña
muñeca de Blair antes de tomar mi blanco y rojo, colocándolo
sobre mí mismo. Blair me da una sonrisa que me hace sentir que
valgo algo, como la pequeña seguridad de solo quererla significa
el mundo. Si alguna vez encuentro al hijo de puta que la engaño,
le haré un anillo en el cuello.
Tomando la mano de Blair en la mía, me inclino.
—¿Recuerdas las reglas?
—No hables con nadie más y no ser un bocón.
—Buena niña.

177
 ●

—¿Por dónde quieres empezar? —Pregunto, caminando

hacia la sala principal. Nos saluda una visión de una mujer de
rodilla, arroz esparcido por el suelo.
Puedes ver las muescas de los pequeños granos contra su
carne pálida. Sus rodillas son de color rosa brillante, claramente
ha estado en posición por un tiempo. No tiene ropa excepto las
cuerdas negras envueltas alrededor de ella con fuerza, mostrando
sus tetas.
Su dom, que claramente es un cambiaformas de algún tipo,
le sonríe amenazadoramente mientras salpica sus tetas con
apretados latigazos de un flogger. Su vibra es un poco más sádica
de lo que me gusta. Aunque me gusta infligir algo de dolor, no
me inclino hacia la humillación o el dolor que no conduce al
placer. La mueca en ella muestra que esto es más el tipo de dolor
que no se inclina en la dirección del placer.
La boca de Blair está abierta de par en par mientras observa
el espectáculo.
—Mierda santa. ¿Es eso lo que quieres hacerme? —pregunta.
Apartando su mirada de la pareja y mirándome.
—No.
Ella traga y asiente con la cabeza. La llevó por el pasillo, los
pasillos son oscuros, nuestros pasos hacen un ruido bajo contra el
piso de madera. Los pasillos nos conducen al escenario principal,
con muchos asientos. me siento primero tirando de ella a mi
regazo. Los asientos no tienen reposabrazos pero son resistentes,
madera de roble con cojines de terciopelo negro. Esta etapa es
sencilla. Iluminado tenuemente con un anillo atornillado al
techo y una pared que muestra varios juguetes para usar. Allá
una pareja ya en medio de una escena. Miro, sabiendo que esto
es algo que me gustaría que Blair viera.
—Esto es más de mi estilo, —le digo. Dándole vueltas para
que sea perfecta la presión de su culo contra mi entrepierna y su
espalda esté presionando contra mi pecho.

178
 ●

Su cuerpo sobre el mío se siente tan bien. Muevo su cabello

de su hombro ligeramente para que mis labios estén cerca de su
oreja.
La siento tensarse cuando el primer golpe de su palma se
encuentra con la piel. El hombre es un segador con el que me he
encontrado antes, Ronan. La cosita tomando su mano parece un
hada. No he visto muchos de ellos en esta dimensión. Pero ella
parece estar divirtiéndose. Su piel es de un castaño dorado y
largas trenzas cubren sus senos mientras se pone de puntillas.
Sus muñecas están atadas con cuerda aprobada, pero parece que
Reaper está usando magia para no forzar sus muñecas
La mano de Blair agarra mi muslo mientras observamos.
—No estás contando para mí, pequeña hada, ¿debería
agregar veinte más? —Ronan dice.
—No, señor, —jadea la mujer pequeña.
Cachetada. Su mano se encuentra con la nalga de nuevo y
observó cómo su carne se enrojece y ella intenta juntar los
muslos para tener algo de fricción.
Su mano ahueca su coño mientras le hace chasquidos.
—Soy dueño de tus orgasmos por la noche, querida hada.
Necesitas ser castigado. Una vez que haya tomado tu castigo,
entonces decidiré si puedes venirte.
Blair muele su culo con fuerza contra mi polla endurecida y
yo gimo.
—¿Te gusta lo que ves, pequeña bruja?
—Creo que sí, —dice ella.
—Apuesto a que si deslizara mis dedos debajo de esta falda,
te encontraría empapada.
Ella asiente con la cabeza y le doy un beso en el costado del
cuello.
—Recuerden, estamos aquí para jugar, pero también estamos
aquí para hacer un trabajo. Mantén tus ojos y tus oídos abiertos.

179
 ●

Ella vuelve a asentir con la cabeza, pero sigue apretándose

contra mí, no seguimos prestando atención a la pareja frente a
nosotros. Excepto por el sonido de él golpeando su culo rebotando
en el pequeño espacio, todo lo que puedo hacer es sentir a la
mujer que me está tocando. Necesito más.
—¿Estás listo para jugar, niña?
—Sí, —dice ella. La agarró por la cintura y la pongo de pie.
Ella está un poco inestable cuando se pone de pie y comienza a
caminar. Justo en un pecho firme que no es mio El pelo se me
eriza en la nuca y puedo sentir el calor de llamas queriendo
escapar de mis palmas.
—Ah, ¿y qué tenemos aquí? —El gran hombre lobo le
pregunta a mi bruja. Puedo decir que ella realmente está
tratando de ser buena y no hablar con él. Pero cuando él agarra
su muñeca y mira su pulsera, suspira. —¡Qué puta lástima.
Podría haberte dejado en celo hasta la próxima luna llena.
—Quítame tus sucias y malditas manos de perro, —dice
Blair, chasqueando sus dedos, lo que hace que el hombre lobo
gruñe y apriete su mano contra su pecho.
—Maldita idiota, —dice con una voz que suena más animal
que humana. No lo creo, simplemente lo agarró por el cuello y lo
sostengo contra el muro. Su fuerza no es nada comparada con la
mía.
—No pongas tus manos en lo que es mío, perro
—Yo—yo no sabía.
—¿Qué no le regaló? Su puto brazalete o el hecho de que
ella acaba se acaba de moler en mi polla. ¿Qué es exactamente lo
que no quedó claro? —Lo jalo apartándolo de la pared y golpearle
la cabeza con más fuerza contra ella. una mano que
Blair me toca los bíceps y me enfada.
—¿Qué? —mirando por encima de mi hombro. Es Kas con el
ceño fruncido.

180
 ●

—Tenemos un trabajo que hacer, —dice, arqueando una

ceja.
—Buena noche, perro —digo, arrojándolo al suelo.
Kas me mira como si me hubieran crecido cinco cabezas
mientras voy y agarro a Blair por la muñeca.
—Esa es una regla rota, Blair. Ven conmigo ahora.
Ella no parece asustada; se ve excitada mientras me sigue
con entusiasmo. Mira a su alrededor en las diferentes
habitaciones y encuentra una que esté abierta, pero no tiene
asientos para los espectadores, pero todavía está disponible para
el público.
—De rodillas, niña.
—Sí papi.
—No actúes tan jodidamente dulce ahora, pequeña bruja.
¿Cuál era la regla?
—No hables con nadie más.
—No solo hablaste con ese hombre perro certificado, sino
que rompiste sus dedos. Tan caliente como fue, se supone que
debemos mantener un perfil bajo, no llamando la atención. ¿Lo
entiendes?
Sus ojos cambian a púrpura mientras me mira. Sabiendo lo
insegura que ella se siente al respecto, colocó un cabello suelto
detrás de su oreja y me inclinó hacia adelante.
—Tu glamour se ha reducido, nena. —Ella niega con la
cabeza antes de lamer sus labios y me mira desde su lugar en el
suelo con esas piscinas profundas de miel —Puedes usar magia
aquí. ¿Estás de acuerdo con que use el mío?
—Sí.
—Tu boca estará llena y tus manos estarán sujetas. Si
quieres que me detenga, mátame con un poco de magia. ¿Bueno?"
—Sí, —dice con entusiasmo, lamiendo sus labios de nuevo.
—Saca mi polla, niña.

181
 ●

Ella no habla, solo usa sus pequeñas manos para

desabrochar mis jeans antes de deslizarme por mis calzoncillos.
—Manos a la espalda. —Inmediatamente sigue las órdenes,
colocando sus manos detrás de su espalda y cruzándolas. No soy
un demonio de las sombras, pero tengo suficiente magia de
sombras para envolver mi niebla humeante alrededor de sus
muñecas.
La magia se arremolina fuera de mí como si fueran
extremidades adicionales, las volutas de humo lo suficientemente
oscuros como para notarlo pero lo suficientemente fácil como
para ver a través. Asegurandolas para que no pueda usar sus
manos. Uso otro zarcillo de niebla para girar su barbilla hacia
mí.
—Lame la punta, nena. Es jodidamente complicado para ti.
La yema de su lengua barre con avidez la hendidura de mi
polla, hasta todo el líquido preseminal.
Chupa la cabeza. Ella sigue con entusiasmo las
instrucciones. Sus labios se enganchan alrededor de la cabeza de
mi pene mientras su lengua traza pequeños círculos alrededor de
las crestas.
Mierda. Se ve perfecta así. Mi magia con entusiasmo y
obediencia la rodea mientras ella está de rodillas para mí. Sus
tetas perfectas a la vista.
Bueno, casi.
Un zarcillo de niebla desliza el encaje hacia abajo
exponiendo sus pezones erectos perforados y gime alrededor de
mi longitud mientras lame y chupa según las instrucciones.
Jodidamente perfecto.
Los ojos marrones de Blair me miran seductoramente,
esperando dirección. Mira a mi izquierda y nota que tenemos
algunos espectadores.

182
 ●

—¿Color? —le pregunto, asegurándome de que la exposición

no sea demasiado. Sus labios se separan de la cabeza de mi polla
y ella me sonríe.
—Verde, definitivamente verde.
—Papá te va a joder la garganta ahora. ¿Quieres eso,
pequeña bruja? ¿Quieres que te use hasta que llene esa boquita
traviesa con mi semen?
—Sí, —jadea, abriendo la boca con entusiasmo.
Golpeo la punta de mi polla en su lengua esperando tres
veces antes de deslizarme profundamente por su garganta. Dejó
que las sombras jueguen con sus tetas, rodando los piercings de
sus pezones mientras tomó dos puñados de su cabello y empujó
en su boca caliente y húmeda.
Ella tararea alrededor de mi longitud, tomándome como si
estuviera hecha para mí.
—Soy el único que saca lo mejor de esta boca, ¿me oyes,
cariño?
Blair mueve su cabeza sobre mi polla y aceleró el paso.
follándola más y más profundamente. Veo como las lágrimas
caen de sus ojos, pero ella no vacila.
Ella sigue tomando lo que le doy.
—Qué buena chica, tomando cada puto centímetro de mí.
Eres mía, pequeña bruja.
Sus ojos se vuelven rosados y no me molestó en decírselo, ya
que estoy en trance en el color y lo que significan. No puedo
imaginar que signifiquen algo más que algo bueno.
—Joder, niña. Vas a hacer que me corra. Quiero que te
tragues cada puta gota. Muéstrale a papá lo buena chica que
puedes ser.
Sus ojos no dejan los míos, rosados, seductores, y lágrimas
rodando por su rostro hermosamente. No puedo escuchar a nadie
más, solo puedo escuchar los sonidos húmedos de mi polla

183
 ●

entrando y saliendo de sus labios y el sonido de asfixia que hace

cuando ella me lleva demasiado profundo.
—Eso es todo, niña, hazlo agradable y húmedo. Tan
jodidamente bueno para mí. Me encanta tu boca.
Ella tararea y mis embestidas aumentan de velocidad
mientras la follo dentro y fuera en su garganta caliente. Puedo
sentirla empujando contra mis sombras, queriendo liberar sus
manos, y solo me hace entrar en su boca con más fuerza. Hasta
que no pueda soportarlo más. Apenas puedo soportar cuando mi
orgasmo me golpea y descargo chorros de semen en su garganta.
Espero hasta que traga como le dijeron, antes de soltar sus
muñecas y agacharme para levantarla del suelo.
—Lo hiciste muy bien, nena. Vamos a buscarte un trago
antes de hacer algo más.
—Realmente me gustó eso.
—¿Qué parte? —Pregunto.
—Tus sombras, probablemente lo más. Pero nunca pensé que
me gustaría la idea de ser observado, pero lo hice. La idea de que
la gente mire y desee lo que tengo, pero ellos nunca pudieron.
—Nunca, —le digo, tranquilizándola.
Compro un agua de veinte dólares mientras la siento en mi
regazo en uno de los puntos de cuidado posterior. Son dos
grandes seccionales negras suaves. La zona tiene luces bajas y
cálidas, está separado del resto del club, por lo que el nivel de
ruido es menor.
Hay un bar a la derecha y algunas personas dando vueltas,
pero en general es menos caótico que el club central. Sus muslos
se sientan a horcajadas sobre mi regazo y su cabeza descansa
sobre mi hombro mientras le entrego la botella de agua.
Asmo se deja caer en el sofá junto a nosotros y nos hace
rebotar ligeramente en el mullido sofá. Tanto Blair como yo le
lanzamos una mirada de muerte.

184
 ●

—Tengo que decir, bruja mala, eres mucho más agradable

con la boca llena.
—Cállate la boca, cabrón rubio, —le responde Blair. Escucho
a Kas reírse junto a Asmo mientras farfulla levemente. Maldita
sea, me gusta mucho cuando ella es mala con otras personas.
Con Asmo especialmente.
—Sigue siendo tan jodidamente malo conmigo, y me
enamoraré de ti. ¿Por qué crees que todavía estoy con Kas?
—Asmo dice.
—Estoy con Dax, —dice y le aprieto el culo en señal de
aprobación.
—Sí, lo estás, —respondo, besando el costado de su cuello
mientras ella levanta su botella de agua y toma un trago. Un
ligero rastro de gotas de agua desde la esquina de su boca, y uso
mi pulgar para limpiarlo. Sonrío cuando veo el rubor. Chupar mi
polla frente a la gente no la hace sonrojar, pero mi ternura en
privado sí. Me da más ganas de derribar sus muros y descubrir
otras formas en que puedo hacer su rubor aparecer Sé que ella es
mía, es solo cuestión de averiguar cómo mantenerla.
—¿Alguna señal de Paige? —Le pregunto a Kas más que a
Asmo.
—No aún no. Asmo y yo íbamos a jugar y ver si podemos
encontrar algo.
—Suena bien, estaremos aquí por un tiempo.
Kas mira con añoranza a Blair y no me gusta.
—Puedes irte ahora, —le digo bruscamente. Ella pone los
ojos en blanco antes de agarrar a Asmo por el cuello y
arrastrarlo a hacer lo que diablos planean hacer.
—Creo que me gustaría hacer más esta noche, —me dice
Blair sentándose con más firmeza en mi regazo.
—¿Qué deseas? Haré todo lo posible para darte lo que desees.
Ella se sonroja y mira hacia otro lado por un momento
antes de encontrarse con mi mirada.

185
 ●

—Creo que me gustaría probar lo que estábamos viendo

antes.
—¿Quieres que azote este dulce trasero, pequeña bruja?
—aprieto y amaso la carne tierna enfatizando cuán de acuerdo
con ese plan estoy.
—Sí, creo que me gustaría eso.
—Bebe tu agua, y lo pensaré. —Ella hace pucheros, y es
lindo como el infierno. Estoy acabado.

186
 ●

Capítulo 20.
Blair.
Sentarse a horcajadas sobre el regazo de Dax. Sus muslos
son musculosos y los siento presionados. Creo que podría vivir
aquí para siempre. Lo que hicimos en la primera habitación no
se sentía como un castigo. Se sintió como un alivio, es extraño.
Siempre me sentí como si fuera un rompedor de reglas. Que no
me gustaba cuando la gente me decía qué hacer o ser castigado
cuando hice algo mal.
Con Dax, se siente diferente. Sus reglas cuando vinimos aquí
eran por seguridad, y las rompí, así que me mostró quién está a
cargo. Me encantó cada momento de ello, especialmente su
magia tocando la mía. Nuestra conexión es tan profunda, sé que
estoy cayendo rápido. Empujo todos esos pensamientos
persistentes fuera de mi mente mientras simplemente saboreo el

187
 ●

ahora. Su cuerpo calentando el mío, su mano firme agarrando mi

trasero y sus ojos enfocados en mí terminando mi agua.
—¿Estás bien, nena? —Sus ojos verdes observando cada
movimiento que hago, asegurándose de que estoy bien.
—Muy bien, —digo, deslizándome hacia abajo para
presionarme contra su longitud que ya se está poniendo duro de
nuevo.
Él sonríe mientras acaricia su barba en mi cuello, sus manos
en puños en mi falda y culo Él gime en mi oído mientras me
muevo contra él. Lo necesito para aliviar algo de esta tensión
para mí.
—¿Tiene que venir mi pequeña bruja?
—Por favor, —digo.
—¿Por favor qué?
—Por favor, papi. —Él gime y abruptamente me levanta, mi
culo en sus manos y mis piernas envolviendo alrededor de su
cintura.
—Voy a hacerte sentir tan bien, —dice, nada más que una
promesa deslizándose de su lengua. Sé sin duda que este hombre
va a destrozarme, esta vez con una audiencia más grande.
Me lleva más adentro del club, a la porción en la que aún
no hemos estado.
Todos los pasillos se ven iguales aquí, así que no estoy
seguro de hacia dónde se dirige. Sus botas resuenan en el piso de
madera cuando las paredes negras pasan a mi lado. Mis ojos
viajan a una habitación diferente por la que pasamos. Cada una
de las habitaciones tiene una decoración similar, pero con
diferentes intenciones. Observó a los demás asistentes al club
mientras él me lleva, una mezcla de todos los diferentes
sobrenaturales. Pasamos una habitación con una pared con
ganchos, cada uno sujetando una correa diferente. Sería casi
imposible perderse la escena de Asmo acostado sobre sus hombros,
su espalda apoyada en algún mueble, el culo levantado, los

188
 ●

brazos alrededor de sus muslos, la polla completamente erecta

mientras Kas lo clava. Ella acaricia su longitud como el
consolador púrpura se retira dentro y fuera de su culo. Sus dedos
se aferran con fuerza a los muslos y ambos se sonríen mientras
ella toma el control.
Joder, deseo que Dax no me este cargando en este momento
para que pudiéramos hacer una breve parada en boxes y mirar el
resto del show.
Suspiro cuando ya no puedo verlos. Tal vez después de que
atrapen a Mara, puedo venir y hacer esto de nuevo y realmente
podré asimilar el monumentos. Podría sentarme en el regazo de
Dax y él podría tocarme mientras los observábamos tocándose
unos a otros. Si bien de ninguna manera estoy dispuesto a
compartir a Dax, es claro como el cristal que no me importa que
la gente mire, y disfruto mucho estar siendo observado.
La habitación a la que me lleva está más centrada en el
público. Más grande que la anterior, y hay seis sillas que
permiten a los mirones.
La habitación es sencilla. Hay una pared con diferentes
flageladores, paletas e instrumentos colgando
amenazadoramente. Un candelabro de color morado oscuro está
en el medio de la habitación, iluminando tenuemente el espacio.
Pero lo sensacional de la sala es el banco del medio. Realizado en
madera de roble con cinco tramos de acolchado burdeos. Hay
restricciones en las cuatro secciones exteriores acolchadas,
claramente allí para sujetar las pantorrillas y los antebrazos. Me
doy cuenta de que esto es un banco de azotes. Nunca he visto
uno en persona, pero ahora que lo he hecho, me siento
intimidada, especialmente cuando miro las ataduras.
—No te preocupes por eso. No los necesitaremos, —dice Dax,
haciéndome desviar la mirada del banco a su rostro. parece que
quiere devorarme, y francamente dejaría que me comiera vivo
por la forma en que me hace sentir.

189
 ●

—Bragas, —dice, extendiendo la palma de la mano hacia

arriba.
Sin dudarlo, me levanto la falda y voy a bajarme la tanga.
El problema es que mi liga está en medio. Dax chasquea la
lengua pero se pone de rodillas y es una vista tan hermosa.
Sonríe a los broches de calavera, pero los desabrocha, soltando el
cordón que ata las medias a la liga. Sus dedos tatuados se
deslizan lentamente a lo largo de la carne pedregosa de mi muslo
mientras tiernamente rueda mi tanga el resto del camino por mis
piernas. Él coloca un pequeño beso en el tatuaje de Hécate en la
parte superior de mi muslo antes de levantarse en toda su altura
y embolsando las bragas.
Si no estaba ya mojado antes, ahora lo estoy.
—En el banco, pequeña bruja. —Observo el mueble y pienso
en la mejor manera de seguir adelante. Dax sonríe y toca una de
las secciones inferiores designado para mis piernas. —Piernas
primero, niña.
Colocó una rodilla en la primera sección acolchada. El cuero
es fresco contra mi piel. Antes de levantar mi siguiente pierna.
Miro a Dax en busca de aprobación mientras su mano empuja
suavemente mi espalda, haciendo que mi pecho presione
firmemente contra la gran pieza central del banco.
—Aquí los antebrazos, —dice, tomando mis brazos y
poniéndolas en las dos últimas bases. Mi cara está plana contra
el cuero fresco mientras miro a mi izquierda, donde dos parejas
se han sentado para ver el espectáculo.
—¿Color?
—Verde, —respondo, y su mano se desliza por mi columna.
—Tan sexy así, niña. Listo y esperándome para azotar tu
dulce trasero y hacer que te corras, ¿es así?
—Sí, papi, —le digo y veo que el segador agarra su polla por
fuera de sus pantalones mientras observa. Es el mismo hombre
que vi antes, ahora que miró más de cerca su muñeca, es de color

190
 ●

rojo sólido. La mujer con la que estaba jugando anteriormente no

es la única persona con la que está dispuesto a interactuar, y
parece que disfruta viendo mi show y el de Dax tanto como
nosotros lo vimos antes.
—Qué buena chica para mí, pero creo que necesitas un
recordatorio para seguir las normas. ¿Es eso lo que necesitas,
Blair? Necesitas que te azote y te muestre
—¿Quién está a cargo de ti?
—Por favor.
—Tan dulce cuando lo pides amablemente. —Sus yemas de
los dedos se deslizan por mi columna y la anticipación se cierne
sobre mí. Se inclina para que solo yo pueda escuchar.
—Usa tus palabra segura si es demasiado. —Solo mi mano
esta noche. Asiento con la cabeza como su palma de mi mano se
mete debajo de la falda, levantándola y dejando al descubierto mi
trasero en la habitación.
No es vergüenza lo que calienta mis mejillas, es deseo. El
deseo que veo en los ojos de los que miran, viendo lo que no
pueden tener. Sabiendo que Dax quiere esto tanto como yo solo
se suma a la anticipación y al deseo.
Dax juega conmigo, sus dedos deslizándose suavemente por
mi espalda y sobre mi culo. Me toma un momento darme cuenta
de que la sensación fresca que está recibiendo las extremidades no
es el aire fresco del club. Son las sombras de Dax saliendo a jugar
de nuevo. Me mojo más por la sensación de ellos contra mi piel,
presionando mis antebrazos y pantorrillas a la parte baja del
banco. Mi torso es libre, pero no puedo moverme mucho con mis
brazos y piernas atados por su magia. Tú no pensaría en una
sustancia ahumada como fuerte, pero el agarre es firme, y me
sujeta con fuerza.
Con impaciencia, muevo mi trasero hacia Dax. Oigo una
risa oscura antes del primer golpe. Tortazo. Su palma golpea mi
nalga izquierda y siento la picadura inmediatamente. No es una

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 ●

mueca o un silbido lo que sale de mis labios, es un delicado

gemido. Amasa la piel en su mano, aliviando un poco el escozor.
—Quiero que este coño gotee, niña. Sólo entonces te daré lo
que necesitas. ¿Entiendes?
No respondo de inmediato y una ráfaga de aire me alerta
de las siguientes nalgadas se dirigió a mi manera. El crujido
audible del encuentro de la carne golpea mis sentidos antes de
que lo haga la picadura real. No puedo evitar hacer contacto
visual con los sobrenaturales viendo mi castigo. La mujer que fue
azotada antes con las largas trenzas se sienta al lado del Reaper.
Su mano está jugando con su coño y el de ella están envueltos
alrededor de su polla mientras se trabajan el uno al otro. Se
tocan mientras nos miran a mí y a Dax. ¿Por qué es así de
increíblemente caliente?
Perdido en el espectáculo frente a mí, el fuerte crujido de
otro golpe hace que gima e intento moverme en el banco. Me
estoy acercando a la sobrecarga sensorial, mi necesidad de que
Dax me haga correrme crece dentro de mí. la anticipación de
cuando me dejará venir está consumiendo mis pensamientos.
—¿Lo entiendes? —repite Dax.
—Sí, papi, —respondo automáticamente esta vez.
—Qué buena bruja para mí. ¿Crees que si te azoto lo
suficientemente fuerte tu magia saldrá y jugará con la mía?
Gimo ante la idea. Mi mente está trabajando horas extras
en cómo podría jugar con él. Sus sombras son impresionantes,
pero puedo mover objetos sin la necesidad de sombras. Mantengo
ese pensamiento en el fondo de mi mente.
Dax me golpea donde mi muslo se conecta a mi culo, la
punta de su dedo siempre rozando ligeramente contra mi coño.
Me siento cada vez más húmedo por él. Él es tan consumidor.
Incluso con la gente mirándonos, estoy completamente
embelesado por Dax y su magia. Sus sombras se aprietan

192
 ●

alrededor de mis miembros afectados, provocando otro gemido, y

trato de mover mi torso para obtener fricción.
El dedo de Dax se desliza desde mi núcleo húmedo y me
lame el culo.
—Este culo se ve hermoso con mis marcas. La próxima vez
voy a tapar este dulce culo. Haz que me ruegues que te folle por
el culo cuando tus mejillas estén bonitas y rosadas.
Gimo ante sus palabras y trato de empujarme más cerca de
su mano.
—Por favor, Dax. Por favor.
—¿Ya súplicas, niña? Te dije lo que quería. Estás mojado,
pero no goteando. ¿Qué necesito hacer?
Hago un ruido petulante, no estoy segura de lo que quiere
de mí.
—Mmm, creo que sé lo que necesitas. —Sus manos se
deslizan por mis muslos y su toque es ardiente, tan cálido que
intento alejarme de su palma. Los golpes rotan entre cada mejilla
y son de ritmo rápido. Pierdo la cuenta pero al menos diez azotes
calientes sobrenaturales en cada mejilla. Mi culo se siente como
si fuera un maldito fuego. Es doloroso, pero de una manera que
me hace querer rogar por más. Estoy jadeando y abrumado
cuando Dax desliza sus dedos de mi clítoris a mi entrada, sus
dedos ya no calientes, tarareando en aprobación.
—Ahí está mi chica que gotea. Es hora de tu recompensa.
Ojalá pudiera verlo. Todo lo que puedo hacer es observar a
nuestros espectadores. Sus ojos rotan entre mi trasero enrojecido
y lo que sea que esté haciendo Dax. Mis respiraciones son pesadas
como la anticipación permanece en el aire. Una de sus sombras
suelta una de mis antebrazos y tiernamente empuja mi cabello
hacia atrás y acaricia mi columna. Se siente dulce y cariñoso.
¿Quién sabía que las sombras serían mi novedad?
—Dax —digo en un tono impaciente.
—Siempre te hablo de la paciencia, cariño.

193
 ●

Un gruñido bajo de vertebrados sale de mi pecho. Mi culo

está caliente, mi coño está goteando, y necesito que él haga algo
al respecto ahora. Las manos grandes de Dax agarra mi trasero,
separándome, y me estremezco ante su toque. Sin siquiera verlo,
sé que está sonriendo. Sus jodidos hoyuelos calientes
probablemente en exhibición. Quiero decirle que se atragante con
hojas de afeitar, pero antes de cualquier cosa puede salir de mi
boca, la boca mágica de Dax está en mi clítoris.
Estoy tan mojada que puedo oírlo sorbiendo mi humedad,
devorando hasta la última gota de mí mientras su lengua
prodiga mi clítoris. Sus labios crean la cantidad perfecta de
succión en los nervios demasiado sensibles. La ternura de mis
mejillas mientras las agarra solo amplifica el placer.
—Sí, por favor no te detengas. Santa mierda.
Él tararea contra mi clítoris y no se detiene. Su nariz se
acaricia contra mi entrada y desearía poder tenerlo todo, tener
su boca sobre mí, sus sombras rodeándome, su polla llenándome
hasta el borde. Quiero todo lo que pueda darme.
Dax deja de lamerme y yo gimo de frustración.
—Es hora de darte la vuelta.
Ni siquiera me da una advertencia cuando sus sombras me
dan la vuelta sobre mi espalda. Los zarcillos humeantes que
sostienen mis piernas se abren y se abren mientras él sonríe a mi
coño necesitado. No estoy seguro de cuándo exactamente Dax se
desnudó, pero supongo que esperaba que me tocara. Es
devastadoramente perfecto. Su pecho está salpicado de tatuajes y
vello en el pecho. Es musculoso, pero no de una manera
demasiado corta. Lamento mis labios mientras tomo cada
centímetro de él, incluyendo su polla perfecta que se curva
ligeramente hacia arriba.
Me encuentro con la mirada de Dax, nuestros ojos se
cruzan, y sé que este es el momento en el que quiero que salga mi
magia. Propius susurro, arrojando el cuerpo de Dax en mío. Tiene

194
 ●

que usar sus manos para agarrarse a la parte del banco que
anteriormente estaba sosteniendo mis antebrazos. El banco gime
de repente con el movimiento, meciéndonos hacia atrás mientras
el peso de su cuerpo se aplasta contra el mío.
Dax gime, acercando sus labios a los míos. El beso es duro y
apasionado, nuestras lenguas luchando por el dominio. Sus
sombras aprietan mis muslos como sus manos sostienen mi torso
con fuerza. Dax me besa en la mandíbula y me tira uno de mis
piercings en el pezón con los dientes antes de chupar el pezón
erecto en su cálida boca. El deslizamiento de la cabeza de su polla
contra mi humedad me hace gemir Él sonríe mientras me empuja
brutalmente, haciendo que el banco cruja.
No existe nadie más en la habitación. Solo somos Dax y yo
mientras me llena el coño y me sostiene con su magia. Le pasó
las uñas por el pelo cuando entra dentro y fuera de mí. Él tiene
una mano sosteniendo mi garganta ligeramente mientras usa la
otra para frotar mi clítoris.
—Necesito sentir que te corres en mi polla, pequeña bruja,
—dice, apretando mi garganta, haciendo que mis ojos se pongan
en blanco mientras mi orgasmo me golpea con fuerza.
Sus sombras se mantienen firmes mientras mis piernas
tiemblan y agarró su longitud. La mano en mi garganta se afloja
cuando bajo de mi liberación. Los ojos verdes de Dax mirando con
asombro cómo la transpiración cubre nuestros cuerpos y
jadeamos ligeramente.
—Quiero otro, niña. —Creo que muero solo un poco.
Dax mira a alguien en la audiencia. Ni siquiera puedo
apartar la mirada de Dax. Él es el centro de todo en este
momento. Es solo cuando el segador de antes le da un juguete,
me doy cuenta de que de alguna manera se comunicó con el
hombre.
El zumbido rompe mi atención, y veo como Dax coloca la
varita en mi clítoris sobreestimulado e hinchado. Me tambaleo

195
 ●

tan pronto como el dispositivo me toca y sonríe. Sus embestidas

se han ralentizado, pero todavía me folla profundamente con
cada uno.
Mis manos están presionando contra su pecho, y él me
chasquea la lengua, sus sombras alejándolos y por encima de mi
cabeza.
—No puedo, —digo.
—Sí puedes. Dale a papá uno más.
—Jodeme
Sus embestidas aumentan y el zumbido del juguete es tan
fuerte que parece que mi cerebro está amortiguado por la
estática. El orgasmo se construye lentamente. Es como si se
hiciera cargo todo mi cuerpo, mi visión se nubla, mi audición se
apaga. mi puta cara está entumecida Mi coño se aprieta con
fuerza contra la impresionante longitud de Dax mientras él me
folla más fuerte. Sólo cuando su cuerpo se inclina sobre el mío
me doy cuenta de que está próximo.
—Joder, este coño es perfecto.
De repente, su magia desaparece, y mis piernas y brazos
caen de repente, haciéndome estremecer. Dax sale y me mira
disculpándose.
—Lo siento, nena. Perdí mi control sobre ellos por un
momento.
—Está bien, —digo. Totalmente lista para que me envuelva
en una manta suave y acurrucarse durante unas buenas diez
horas.
Dobla mis piernas para mí, de modo que ahora están
apoyadas en una parte inferior del banco.
—¿Estás bien? —pregunta, acariciando mi piel y empujando
mi cabello atrás.
—Más que bien —digo, sonriéndole.
Sus manos firmes agarran mi torso para sentarme. Me
siento un poco mareado, finalmente miró a la multitud. Mi

196
 ●

mandíbula cae cuando veo a la persona que pasa por delante de

nuestro escenario.
—¿Stevie?

197
 ●

Capítulo 21.
Dax.
Es una sensación realmente incómoda cuando la mujer con
la que acabas de tener el sexo de tu vida llama el nombre de su
prima tan pronto como sale tu polla mojada.
Mirando por encima del hombro, me sorprendo cuando veo
a la bruja pelirroja en el brazo de un vampiro. La mujer con la
que está tiene la piel de tono oliva y pelo oscuro y rizado; ella es
delgada y se eleva sobre Stevie.
—¿Por qué diablos está tu primo aquí? —pregunto, mirando
a Blair. Está completamente feliz. Tenía muchas ganas de
abrazarla y tomarme un tiempo para relajarme, pero ahora
parece que alguien ha decidido arruinar mis planes. Rápidamente
agarro mi ropa y empiezo a vestirme.
—No tengo ni idea. —Ella lo dice de una manera airada.
Como si quisiera tomar una siesta, no lidiar con esta mierda.

198
 ●

Probablemente fuimos un poco demasiado duros considerando

que se suponía que estaban haciendo un trabajo. Pero contenerse
con Blair está demostrando ser imposible Quiero darle todo,
explorar el uno al otro y el mundo juntos. Mierda, realmente me
estoy adelantando. ¿Puedo culparme?
Ella es especial No solo la forma en que nuestra magia se
conecta, sino que es como si encajamos tan bien juntos, lo que
cada uno ha estado buscando.
Ella va a bajarse del banquillo y está un poco precaria, la
miró levemente con una mueca mientras mueve sus muslos. No
debería sentirse tan bien sabiendo que mi semen actualmente
está goteando por su muslo, pero lo hace.
Agarro su mano y la estabilizó. Empujo hacia abajo su
falda, asegurándome de que no esté expuesta mientras nosotros
caminamos por el pasillo detrás de su prima. La limpiaré tan
pronto como tengamos que volver a las habitaciones más
relajantes. Blair agarra el brazo de su prima bruscamente,
girándola para mirarnos.
—¿Qué diablos, Stevie?
Las mejillas de la bruja se calientan y el vampiro con el que
está no parece divertido.
—¿Qué mierda es esta, Stevie? —pregunta el vampiro. —A la
mierda esto. Encuentra tu propio viaje a casa, —dicen antes de
alejarse de Stevie. La bruja parece más irritada que molesta.
—Supongo que captó la pista de que la usé para entrar aquí
esta noche. —Stevie pone los ojos en blanco y veo las similitudes
entre ella y Blair en su manierismos Aunque no se parecen
mucho, parece gastar tanto tiempo juntos ha hecho que
aprendan algunas cosas de cada uno otro.
—¿Y por qué exactamente es eso? —le pregunta Blair.
—Tenía que asegurarme de que estabas bien, lo cual, por lo
que vi, estás más que bien.
—Ew, ¿viste? —pregunta Blair.

199
 ●

—Durante unos cinco segundos, apenas vi nada.

—No te pedí que vinieras, Stevie.
—No, le pediste eso a Dax. —Blair parece que está a punto
de darle una bofetada a su prima. —Dios, eres tan jodidamente
difícil, Blair. Eres lo mas importante en toda mi vida. Perdóname
por estar preocupado por ti y querer asegurarme de que estés
bien.
Blair parece atónita por las palabras de su prima y no
responde de inmediato.
—Gracias por preocuparte por mí, Stevie, pero tiene que
haber una línea. Creo que verme joder por mi novio demonio y
sus sombras tiene que ser esa línea.
Novio suena tan trivial, pero lo aceptaré. El reclamo público
de Blair me hace algo. Un estruendo posesivo de espuelas de
aprobación en mi pecho mientras los primos siguen hablando.
—¿Novio? —Stevie pregunta por mí, arqueando una ceja y
mirando entre nosotros.
—Sí, —dice Blair, encogiéndose de hombros y mirándome
con seguridades.
—Como su novio, necesito llevarla para que se relaje. Puedes
venir con nosotros si quieres. Me imagino que Asmo y Kas
también estarán allí.
—Claro, ahora que no tengo a Bianca conmigo y solo tengo
el azul con la muñequera puesta, prefiero no estar deambulando
sola por el club, —dice Stevie, asiento con la cabeza. Ella es
importante para Blair. Si alguien intentara algo, necesitaría dar
un paso al frente y ponerlos en su lugar.
Efectivamente, tan pronto como entramos en la habitación,
Asmo tiene la cabeza sobre el regazo de Kas mientras acaricia su
desordenado cabello rubio.
Sus ojos se iluminan tan pronto como ve a Stevie.
—¿Y quién es esta hermosa criatura? —ella pregunta.
Stevie le sonríe y saluda.

200
 ●

—Soy la prima de Blair, Stevie, —dice ella.

—Ella es una bruja agradable normal, —dice Asmo con
sarcasmo y Stevie lo mira fijamente.
—Y tú eres el demonio menos atractivo que Blair rechazó en
el bar. ¿Todavía estás dolido por eso o por el trato que te acaba de
dar Kas?
Asmo mira boquiabierto a Stevie mientras Kas le da una
sonrisa tortuosa, acariciando el lugar junto a ella.
—Ven, siéntate aquí, dulce bruja. —Stevie sonríe a petición
suya y con entusiasmo se sienta a su lado. Asmo gime cuando
Kas deja de acariciar su cabello para centrar su atención en
Stevie.
—No es una bruja tan agradable después de todo —dice
Asmo con un nuevo interés en la bruja no tan agradable.
—Esto es jodidamente nauseabundo. ¿Me abrazarás?
—pregunta Blair.
Asiento con la cabeza y me siento en los suaves cojines,
llevándola hacia abajo conmigo a nuestra posición favorita de
ella sentada a horcajadas sobre mi regazo. Mis manos se frotan
hacia arriba y hacia abajo sobre sus muslos, círculos lentos
alrededor de su espalda.
Hablo lo suficientemente bajo para que los imbéciles a
nuestro lado no escuchen.
—¿Estás bien bebe? ¿Necesitas algo?
—No. —Ella suspira, presionando su mejilla contra mi
pecho, acariciando contra el material suave de mi camisa.
¿Alguna señal de Paige?
Niego con la cabeza y sigo frotando su espalda, mi mano
vaga hacia abajo a su trasero, y ella se estremece ante el toque.
—Lo siento, —digo, aunque no lo siento por un solo maldito
segundo. Ver su culo pálido ponerse más rosado con cada golpe.
Al ver cuánto le gustaba cuando me calentaba las manos y
golpeaba ella en golpes rápidos. Ella fue hecha para mí y está

201
 ●

envuelta en este hermoso paquete que quiero pelar capa por

capa. ¿Qué hace funcionar a Blair? ¿Qué le encanta hacer en su
tiempo libre? ¿Le gusta viajar? Todas las preguntas que tengo
para ella se agitan en mi cabeza cuando ella aparece inclinarse
contra mi pecho dramáticamente.
—A la izquierda, de pie junto a la barra, ¿es Paige? —me
pregunta en voz baja.
—Seguro que lo es, —respondo y chasqueo los dedos para
llamar la atención de Kas y Asmo.
Asmo parece un perro viejo que acaba de ser reemplazado
por un lindo cachorro nuevo, como Kas tiene un mechón del
largo cabello rojo de Stevie entre sus dedos. Los ojos de Kas se
encontraron con el mío e inclinó la cabeza en dirección a la
barra. Sus ojos se abren por un momento antes de volver a
ponerse su fachada fría.
—Bruja dulce, me encantaría continuar con esta
conversación, pero tengo algo de lo que debo ocuparme.
—Eh, ¿de acuerdo? —Stevie responde. Kas y Asmo están de
pie, al igual que yo, quitando a Blair de mi regazo y colocándola
suavemente sobre su tierno trasero. Ella se estremece y desplaza
su peso.
—¿Por qué no te quedas aquí con las brujas y Asmo y yo
nos encargaremos de esto? —dice Kas. Le doy una mirada.
—De ninguna manera voy a dejar que te encargues de esto,
—le respondo. Stevie y Blair ambos miran la conversación como
si fuera un partido de tenis. Dejó de prestar atención a ellos
cuando Kas aplaude mientras trata de hacer su punto.
—Como el infierno, voy a dejar que tontos y tontos se
encarguen de esto. Si quieres un trabajo bien hecho, envías a una
mujer. Es por eso que Lucifer me asignó a este caso, para
asegurarse de que sus incompetentes pliegues de penes no lo
arruinaran.

202
 ●

Mi temperamento está en la superficie, y no puedo evitarlo

cuando mi dedo está cerca de su cara.
—Hay una tonelada más en juego con este caso de lo que tú
te das cuenta. No la dejaré escapar. Ni siquiera me importa una
mierda si eres parte de llevarla de regreso al infierno, pero esto
debe hacerse bien.
—¡Crees que hay mucho en juego para ti, no tienes idea!
—Kas me grita de vuelta. Ambos temperamentos demoníacos
hierven a fuego lento en la superficie.
—Sí, ¿y qué diablos tienes que ganar, Kas?
—¿Cómo te diría?, no lo entenderías, de todos modos.
—¿Qué significa eso? —Asmo le pregunta suplicante.
Demonios, este hombre es patético. Él le toca el brazo y ella se lo
aparta.
—Ustedes dos son unos idiotas y si no hacemos algo pronto,
vamos a perder nuestra oportunidad, —dice Asmo. Kas y yo
estamos tratando de calmarnos mientras nos miramos. Asmo en
el en medio de nosotros como si fuera nuestro hijo y
estuviéramos en medio de una entrega de custodia.
—¿Podemos terminar con esto? —pregunta, y Kas y yo
resoplamos.
Es en ese momento que escuchamos un fuerte aullido a
nuestra izquierda. El pelo rojo de Stevie está en las garras de
Paige-Mara.
—¿Qué deseas? ¿Cómo me encontraste? —Dice, sus ojos
saltando entre nosotros tres y finalmente aterrizando en Blair.
—Deja ir a mi prima, ahora, —dice Blair con calma,
levantándose de su asiento.
—Solo si vienes conmigo, —responde Mara, sus ojos ahora
inmóviles de Blair. Voy a dar un paso hacia Mara y ella me
gruñe. Tira y saca una cuchilla de debajo de su vestido y la
sostiene contra la garganta de Stevie.

203
 ●

—Más cerca y lo haré. —No puedo decirlo desde aquí, pero

parece que puede ser un objeto oscuro.
El daño que podría causar en comparación con una cuchilla
estándar es severo. La mano de Kas toca suavemente mi brazo,
haciéndome saber que me quede atrás. No es el demonio
indiferente habitual al que estoy acostumbrado.
—No puedes tener a Blair, —le digo.
—Blair, Blair, Bair, maldito Blair. Ella es realmente la
favorita de todos, ¿no?. Yo no pedí esto. Pero este traje de piel está
llegando a su fecha de vencimiento.
Observo cómo los iris de Blair se vuelven negros. parece un
demonio con los ojos cambiando a ese color. El humo sale de sus
puños. Mara sonríe a Blair.
—Perfecto, eres perfecto, —casi le arrulla a Blair. Ella está
tan distraída que no le está prestando atención a Stevie. ¿Quién
pisa fuerte el dedo del pie de Mara y corre hacia los brazos de
Kas. Kas saca inmediatamente a Stevie del club, mientras estoy de
pie con Asmo a mi lado.
—Envíala al infierno y yo sacaré a Blair de aquí, —le
susurro a Asmo.
Parece irritado porque Kas nos abandonó, pero asiente con
la cabeza. Mara observa con fascinación cómo pequeñas ascuas
de llamas se arrugan en la piel de Blair.
Está claro que Mara piensa que ella sería el recipiente
perfecto, y lo peor, es que no creo que ella esté equivocada.
—Blair, —le digo suavemente, tratando de llamar su
atención. Me preocupa un poco si ella está completamente
presente y descarga su magia en alguien además de Mara.
—Joder, está bien. A la cuenta de tres. Uno, dos, tres.
Al mismo tiempo, Asmo y yo nos lanzamos. Mis brazos se
envuelven alrededor de Blair, su toque quemándome la piel, y me
estremezco. Veo como Asmo intenta agarrar a Mara, pero justo
cuando él la agarra, un profundo humo negro como la tinta sale

204
 ●

disparado de las manos de Paige. Observó cómo gira en espiral

por el aire hacia Asmo. Sin siquiera pensar, usamos el portal al
patio delantero de su casa.
Aterrizamos bruscamente en la hierba mientras Blair jadea
y yo le acaricio la espalda. Mi piel se repara rápidamente de las
quemaduras que dejó en mi piel, y espero que se curen antes de
que ella esté completamente de vuelta.
—¿Qué carajo real? ¿Puedo tener un puto día normal?
—dice, poniéndose de pie por su cuenta y mirándome, viendo
fácilmente las marcas de carbón en mi camisa mientras mi piel
cura la carne quemada. —¿Hice eso?
—Está bien. Me curo rápido.
Ella se acerca y toma mi brazo. Y ella jadea.
—¿Dónde está Stevie?
—Kas la envió fuera antes de que pudiera pasar algo,
realmente necesito ver dónde está y si Asmo salió de allí.
Ella asiente con la cabeza.
—Mis protecciones son fuertes. Debería estar a salvo aquí.
La miro a ella y a la casa, no me gusta dejarla sola ni un
poco.
—Tan pronto como sepa que están bien, volveré de
inmediato.
—El humo negro. ¿Era esa su verdadera forma de demonio?
—pregunta.
—Sí, Satanás no reparte trajes de carne libremente. tienes
que probarlo si quieres viajar a otras dimensiones y encajar.
—Entonces crees que es un demonio mayor que vino a la
tierra, ¿a qué? ¿Encontrar el recipiente correcto?
—No, creo que es más complicado que eso.
Ella camina y se estremece.
—¿Estás bien, cariño?
—Me duele el culo, y también me duelen las manos. —Miro
hacia abajo a la piel y miró con asombro cuando la piel se

205
 ●

injerta de nuevo junto con las llamas que ella conjuró. No es lo

mismo que el mío. Mis propias llamas no me queman. —Esto
nunca sucedió antes —dice, mirándome, sus ojos marrones llenos
de inquietud.
—Entra, dúchate, límpiate. Voy a encontrar a todos y
traerlos de vuelta aquí.
—Está bien, —dice ella, puedo ver que hay un pequeño
temblor en sus manos mientras se aleja. Blair siempre trata de ser
fuerte.
Suspiro mientras envuelvo mis brazos a su alrededor y
sostengo mi espalda contra su pecho con fuerza.
—Papá se va a encargar de todo, ¿de acuerdo? —ella asiente
con la cabeza contra mi pecho, conteniendo las lágrimas,
mientras le doy un apretón más antes alejándose y entrando al
bungalow.
Abro la puerta y escaneo la sala de estar y
afortunadamente encuentro a su prima y Kas. Observó mientras
Stevie se sienta a horcajadas sobre el regazo de Kas. Las manos de
Kas envolvieron a lo largos mechones rojos mientras Stevie
ahueca su mandíbula mientras se besan.
—Esto es jodidamente dulce y todo, pero ¿dónde está Asmo?
Kas aparta la boca de la de Stevie rápidamente y me mira
como si estuviera escondiendo al idiota de cabeza rubia en mi
bolsillo.
—¿Él no está contigo?
—No, tuve que sacar a Blair cuando Mara dejó el cuerpo de
Paige.
—Joder, —gime Kas.
—¿Blair está bien? —Stevie pregunta.
—Ella está preocupada por ti, y creo que está un poco
asustada por lo que sucedió.
—Nunca antes había visto sus ojos ponerse negros así, solo
otros colores. —Stevie dice.

206
 ●

—Ella está de regreso en la casa esperándote. Puedo llevarte

allí mientras Kas y yo tratamos de encontrar a Asmo.
Stevie asiente con la cabeza e intenta levantarse del regazo
de Kas, quien ansiosamente la empuja hacia abajo.
—Todos nos mantendremos unidos.
—Lo que sea, —respondo mientras Stevie le dice a Kas a
dónde debe dirigirse. Con dos pops rápidos, estamos de vuelta en
frente de la casa de Blair.
Stevie y yo entramos por la puerta principal y tan pronto
como Kas intenta pasar el umbral, las protecciones de Blair la
retienen.
—Lo siento, Kas, Blair es mucho mejor en las protecciones
que yo. Ella tendrá que darte acceso.
—O no, —digo, subiendo las escaleras para encontrar a
Blair. Su serpiente está enrollada alrededor de su muñeca. Ella no
ha cambiado su atuendo al club mientras está de lado, de
espaldas a la puerta.
—Nena —digo, y me voy a sentar a su lado. Fez me da una
mirada de mierda, bueno, una de aspecto de mierda para los
estándares de las serpientes.
—Dax, no creo que sea completamente una bruja.
Suspiro y asiento con la cabeza. Tan pronto como el humo
salió de sus manos, sabía que no era del todo una bruja.
—Lo sé, pero sigues siendo mi pequeña bruja.
Ella rueda los ojos y se burla. La serpiente sacando la
lengua y lamiendo su antebrazo.
—¿Qué sabes de tu papá? —Pregunto.
—Poco. Por lo general, solo me deja hablar cuando me visita
por mi cumpleaños.
—¿Cuándo es tu cumpleaños?
—Viernes, —responde ella.
—¿Tu cumpleaños es en una semana y no me dijiste? —Ella
se encoge de hombros, acunando su cabeza más en su almohada.

207
 ●

—¿Se supone que debes conocer a tu papá?

—Sí, puntualmente, cada cumpleaños. Él nunca se lo pierde.
Siempre da dinero, me saca a comer y me da el abrazo más largo
al final de la noche.
—¿Tal vez tu mamá sabe algo?
—Viendo que ella trató de sacrificarme y se escondió, no
estoy seguro de cómo se supone que debo preguntarle.
—Kas y yo necesitamos encontrar a Asmo, y después de eso,
creo que debemos localizar a tu mamá. Mara parece más
poderosa y calculada de lo que pensé. Tal vez si sabemos más
acerca de por qué quiere usarte como recipiente, más fácil será
derribarla.
Ella asiente con la cabeza, me inclino y beso su sien, a Fez
no le gusta eso en absoluto, pero ignoro la malhumorada mierda.
—Oh, ¿quieres que Kas tenga acceso a su casa?
—No, —responde ella, y yo sonrío.
—Duerme un poco. Volveré tan pronto como encuentre a
Asmo. ¿Tal vez cambiar a ropa más cómoda?
Ella asiente con la cabeza y pongo la manta encima de ella,
en caso de que decida que no quiere levantarse. Giro sobre mis
talones, dejando su casa con un hoyo de preocupación en mi
estómago.

208
 ●

Capítulo 22.
Blair.
Un ligero apretón alrededor de mi muñeca me despierta y
miró hacia abajo para ver a Fez que se envolvió alrededor de mi
brazo. Pensé que tal vez Dax tendría que volver en algún
momento de la noche, pero la otra mitad de mi cama estaba fría
y vacío
Anoche fue, realmente no sé cómo poner en palabras cómo
anoche se sintió. Por un lado, me sentí completamente liberada
sexualmente, tuve el mejor orgasmo de mi vida, y estoy en medio
de lo que es claramente un despertar sexual. La segunda mitad
me aterroriza. Después de Mara, Paige, quienquiera que sea.
Joder, agarré a Stevie, es como si me hubiera desmayado.
Como algo oscuro saliendo de mí y no tenía control de eso, como
si no fuera yo el que conducía la rueda. Uno podría compararlo

209
 ●

con estar poseído. Ese tren de pensamiento me tiene

enloqueciendo.
Siempre he sido una bruja. Es quien soy, lo que soy. Pero
ahora... ahora, no estoy tan segura. Tal vez yo también soy otra
cosa, y por eso nunca encajo.
Por qué mi aquelarre nunca me aceptó realmente y por qué
nunca sentí que pertenecía. Tal vez pertenezco a algún otro
grupo de sobrenaturales.
Las posibilidades de que mi mamá me hable, o que yo pueda
encontrarla, son bajas. Pero hay alguien que podría ser capaz de
ayudar. A Stevie no le va a gustar.
Cuando bajó las escaleras, escucho un llanto en el sótano y
hago rodar mis ojos. ¿Quién sabía que mantener vivo a un ser
humano era un puto trabajo?
Honestamente, no es de extrañar que tantos secuestradores
maten a sus víctimas. Si Clover no tenía una fecha de desalojo
para después de la luna llena, podría estrangularla.
En contra de mi propia voluntad, le preparo una taza de
fideos, tomó unas galletas y una botella de agua, y los llevó
abajo. Tuve que tomar el silencio de la habitación porque nos
olvidamos de darle de comer cuando no podíamos oírla.
Suena el tono bajo de “Look What You Made Me Do” de
Taylor Swift, y sonrio Han pasado unos días desde que Stevie lo
dejó reproducir en repetición. Cuando abro la puerta, encuentro
a Clover acurrucada en la esquina, sus brazos envueltos alrededor
de sus rodillas.
—Te traje el desayuno —digo.
—Por favor, apaga la música. Te lo ruego.
Coloco la comida encima de la cómoda y me doy unos
golpecitos en la barbilla con el dedo dos veces, contemplando su
pedido. Lógicamente, sé que tal vez he tomado esto demasiado
lejos. Pero se folló a mi novio y trató de matarme, así que lo
aplastó..

210
 ●

—¿Qué información me puedes dar? Si es lo suficientemente

bueno, tal vez apague la música.
Sus ojos escanean la habitación como una persona
enloquecida mientras trata de pensar en algo valioso.
—Creo que podría saber dónde está tu mamá, —dice,
mirando hacia abajo.
—¿Por qué no te creo?
—Dije que podría. No es que lo sepa con seguridad.
—¿Qué sabes?
—Ryan la ayudó a comprar una cabaña en North Point,
todo en efectivo, y no creo que esté bajo su nombre.
Toco mi barbilla de nuevo, irritada con esta pequeña perra
por no decirme esto cuanto antes.
—¿Por qué me dices esto ahora?
—Porque amo a Taylor Swift, y ustedes, psicópatas, están
arruinando todo para mi.
—¿Sabes qué, Clover? Creo que podría creerte. La baja de esto
significa que voy a tener que hablar con Ryan.
—El sexo realmente no valía la pena todo esto, —dice ella.
—Definitivamente no te equivocas ahí, —le digo antes de
darme la vuelta, silenciando la música y salir del sótano.
Cuando regresó a la cocina, Stevie tiene su cadera
presionada contra la encimera de la cocina mientras sopla el
vapor de su té para enfriarlo. Su cabello parece un nido de ratas
y parece que no ha dormido mucho.
—Te ves como una mierda —digo, sirviéndome una taza de
la tetera.
Ella ignora mi comentario, pero pone los ojos en blanco y
coloca su tasa en la encimera.
—¿Apagaste la música? —pregunta mientras pone dos
pedazos de pan en la tostadora.
—Parece que la pequeño Clover ha decidido ser realmente
útil.

211
 ●

—¿Oh sí?
—Dijo que Ryan ayudó a mi madre a comprar una
propiedad en North Point. —Stevie me arquea una ceja y empuja
el mecanismo para hacer el pan desaparecer.
—¿Así que vas a tener que hablar con Ryan?
—Parece de esa manera, pero primero tuve una idea, tal vez
para tener una idea de lo que pasó anoche.
—¿Tu papá? —ella pregunta.
—Ojalá, pero sabes que él siempre aparece en mi
cumpleaños. Estaba pensando en Adelaida.
—¿Estás bromeando? —ella pregunta mientras la tostadora
explota y ella lo ignora
—Escucha, sé cómo te sientes acerca de la adivinación, pero
no puedes negarlo. Ella es buena en lo que hace. En un mundo
lleno de cosas que no tienen sentido, ¿De verdad crees que no hay
ningún valor en lo que ella pueda saber?
—No es que piense que la adivinación es una mierda, es solo
Adelaide. —Ella se vuelve así que no puedo ver su cara. Mi prima
es fácil de leer, por lo que su giro me dice lo suficiente.
—Te la follaste —digo con confianza, más como una
declaración, no como una pregunta.
Ella chilla y se da la vuelta.
—Tal vez, algunas veces, y tal vez no la llame de vuelta:
—Stevie, pequeña perra.
—Tal vez ella no se enoje. Tal vez me vio haciéndola pasar
por fantasma en las cartas.
Stevie se encoge de hombros e inclina la cabeza, como si
estuviera tratando de obligarse a creerle a su lógica defectuosa.
No puedo evitarlo cuando ladro una carcajada.
—No tienes que venir si no quieres.
—Creo que deberíamos permanecer juntos.
—Yo también lo creo.

212
 ●

—¿Alguna noticia de Dax? pregunta mientras unta la

mermelada en su tostada.
—No, ¿tal vez debería decirle a dónde vamos?
—Creo que es una respuesta muy madura. Mírate,
creciendo siendo una buena niña.
Mis ojos se abren y la miro.
—¿Cuánto viste anoche?
—Suficiente, —dice ella antes de encogerse de hombros y
tomar su té y tostadas en su habitación.
—Salimos en media hora.
Ella distorsiona algún tipo de acuerdo, y resopló. Agarrando
un muffin del mostrador y caminar de regreso a mi habitación
para vestirme. Le envío un mensaje de texto a Dax, no esperando
una respuesta.
Yo: Me voy a North Point hoy. 4573 Terrace Place, solo
quería avisarte.
Dax: Gracias por avisarme, nena. lo siento no pude
regresar anoche.
Yo: ¿Has encontrado a Asmo?
Dax: Es complicado. Llámame si me necesitas, y quédate
segura. Comunícate conmigo para que no me preocupe por ti,
¿de acuerdo?
Sonrío hacia mi teléfono.
Yo: Si papi.
Él no responde, y no espero que lo haga. Es claro que
aunque Asmo lo pone nervioso, se preocupa por el molesto
demonio. Cuelga el teléfono y prepárate para el día. Mirando
hacia adelante a lo que Adelaide ve, sin ganas de ver a Ryan.
¿Será capaz de decir que estoy jodiendo a su papá? Si me hubieras
preguntado hace unos días, ese habría sido el plan.
Meterme debajo de su piel. Pero ahora, no me gusta la idea
de que Dax se sienta usado. Él me hace sentir culpable, y la culpa

213
 ●

no es una emoción con la que esté familiarizado. Necesito un

complot con Stevie sobre cómo hacer que Ryan se olvide de mí.
Pero con Mara encendiendo un fuego debajo de mi trasero y
nuestra seguridad en juego. Ryan está al final de la lista. Al
menos Heather se está ocupando de los empleados en Hex
mientras se realizan renovaciones de la pelea con el golem.
Honestamente, a pesar de lo peligroso que ha sido todo, la
cantidad de acción que he visto últimamente me ha dado un
nuevo propósito, la idea de dirigir un restaurante casi se siente
trivial.

Tuvimos que tomar un viaje compartido para recoger mi

Jeep del club, afortunadamente este iba de camino a donde vive
Adelaide, en las afueras de Hallows Deep. Técnicamente es North
Point.
La cabaña de Adelaide es aislada y pequeña, solo sabrías
dónde encontrarla si eres parte de la comunidad. Es una cabaña
de madera de troncos de un piso, rodeada de flores silvestres que
claramente no mantiene. En la chimenea sale una columna de
humo, aunque no hace frío. Soy agradecida de que Adelaide sea
una nómada, si fuera parte del aquelarre, no hay manera en el
infierno podríamos haber venido aquí.
La puerta se abre a la cabaña, y la bruja mira primero a
Stevie antes que a mí. Su piel es de color marrón claro y su
cabello es muy corto para su cabeza. Lleva pantalones de yoga
negros y una camiseta blanca corta. No la imagen habitual que
tendrías de un adivino. Pero ella es la mejor en lo que hace en
esta costa. Me pregunto qué tan vaga va a ser sobre las
respuestas que necesito.

214
 ●

—Me preguntaba a qué hora vendrías, —dice ella.

—¿Qué, las tarjetas no pueden decir tiempos específicos?
—Stevie murmura a mi lado.
Adelaide le da una mirada mordaz, y quiero pinchar en las
costillas. ¿Por qué está siendo tan pequeña mierda?
—Veo que todavía estás molesto por tu lectura, Stevie,
—dice Adelaide mientras caminamos hacia la pequeña sala de
estar. Adelaide nos hace un gesto para que nos sentemos en el
sofá de dos plazas color crema. Hay una mesa cuadrada con un
mantel negro entre nosotros mientras Adelaide toma asiento
frente a nosotros. —Te dije que no puedo forzar una lectura,
Stevie.
—Ya es suficiente, —dice Stevie, mirando a Adelaide. ¿Qué
demonios pasó entre estos dos?
—Bien. Blair, tú eres la que está aquí para la lectura, de
todos modos.
—Sí, estoy enfocado en el presente y el futuro.
—El presente y el futuro no son nada sin el pasado.
—barajea. Las cartas son preciosas, pintadas a mano. Las espaldas
son todas negras con serpientes entrelazadas frustradas. Ella
baraja mientras tararea, su profunda mirada que nunca deja la
mía. Adelaide coloca tres cartas sobre el suave mantel frente a
nosotros.
Pasado. Presente. Futuro.
Observo cómo sus uñas largas, oscuras y moradas se
deslizan sobre la primera carta. Indicando mi pasado. “La Luna”,
dice ella. Es una tarjeta bellamente detallada, negra con oro, al
igual que el otro lado. Una luna en el fondo y dos peces Koi
dando vueltas unos a otros en la parte superior. La carta no me
mira y ya sé que su significado es negativo
—Alguien en tu pasado ha tergiversado algo, o ha creado
un malentendido. Hay mucho miedo y ansiedad en tu pasado.

215
 ●

Asiento con la cabeza, no queriendo decir en voz alta lo mal

representado que me siento como niña y cuánto más necesita ser
aclarado para que mi pasado tenga sentido.
La carta del medio me está mirando, las serpientes doradas
se burlan de mí, como si fuera una broma. Adelaide voltea la
carta.
—Justicia, —dice Adelaide, tarareando, sus ojos mirándome.
El negro y la tarjeta dorada me enfrenta, la espada prominente
en el medio con escamas igualando a cada lado. —Parece que las
cartas no han decidido si la justicia se valida. Si bien el karma
está destinado a ser tuyo, la responsabilidad en tu fin debe ser el
pago.
—Bueno, eso es una mierda, —me quejo.
—Las cartas no mienten, al igual que tu lengua, —Adelaide
se muerde y me siento más derecho.
—¿Me alcanzarán mis mentiras?
—¿No lo hacen siempre? —Adelaide dice, mirando la última
carta, la más intimidante de los tres. Tan pronto como se voltea
la tarjeta, el silencio en la habitación es palpable. El dorado de la
tarjeta casi se ve borroso mientras miro la imagen frente a
Adelaide y no a mí mismo.
—El ahorcado, —dice ella. Inmediatamente va a su
representación de la tarjeta.
—Esto es malo, —susurra Stevie, —no deberíamos haber
venido aquí.
—No es irreverentemente malo, —dice Adelaide. —El
ahorcado significa muchas cosas, la falta de sacrificios, o la
necesidad de sacrificio. Pero también significa la necesidad de
apatía. El sacrificio no siempre es literal. A veces es un sacrificio
que corta tan profundamente, que preferirías morir antes que
lograrlo.
—Bueno, eso es reconfortante, y no es realmente para lo que
vine aquí.

216
 ●

—No puedo decirte lo que eres, Blair. Esas son preguntas a

las cuales no tengo respuestas, pero podemos consultar las cartas.
Por mucho que quisiera decirle que se vaya a la mierda con
sus cartas, asiento con la cabeza. Da la vuelta a la carta y la
coloca a lo largo contra la carta actual.
“La empresa”. La carta con la reina me mira fijamente. No
necesito la adivinación de Adelaide para decirme qué significa
esto.
—Encuentra a tu madre, y lo sabrás todo.
—¿Dónde está ella? —Pregunto.
—Mis tarjetas no son un GPS. Eso, tendrás que resolverlo
por tu cuenta.
—Bueno, esto ha sido fascinante, —dice Stevie
sarcásticamente a mi lado.
—No culpes a las cartas por tu posible desgracia, y no seas
grosero a la mujer a la que engañaste cuando no te gustó lo que
escuchaste.
—Vamos, Blair, —dice Stevie, tirando de mi brazo.
—¿Qué te dijeron las cartas? —Le pregunto a Stevie.
—Uf, el ermitaño, que estaría solo. Aislamiento.
—Eso podría significar tantas cosas, —le digo.
—Blair, eres todo lo que tengo. Si realmente fuera eso,
significa que no estuvieras conmigo. —Me detengo en seco,
mirándola. La tarjeta de Stevie reclamando que ya no estaré, y
yo sacando la carta del verdugo.
Sacrificio. Ya hubo un sacrificio en mi honor, ¿Habrá otro?
—A la mierda la adivinación —digo, forzando una sonrisa
para Stevie.
—Sí, a la mierda la adivinación. Ahora, vamos a buscar tu
saco de mierda, exnovio infiel.
—Sí, vamos a hacer eso.

217
 ●

Por mucho que lo intento, las palabras de Adelaide me

siguen durante todo el día. Podría ser un sacrificio tan fuerte que
desearías haber muerto. Ella no pudo haberme dado una puta
tarjeta decente. A la mierda la adivinación.
Pensamos que el primer lugar para buscar a Ryan sería en
su corretaje. Desafortunadamente, él no estaba allí,
afortunadamente su asistente es un hombre y fácilmente
persuadido. Él tiene otra jornada de puertas abiertas hoy. Estoy
un poco enojado porque los carteles no ralentizaron al menos un
poco su negocio.
Es una casa más pequeña que la última jornada de puertas
abiertas a la que asistí. Los asistentes son un poco menos
engreídos y no hay sistema de sonido para hacer estallar
provocativas sonidos.
—¿Tal vez debería preguntarle? —Stevie dice. No es una
mala idea, no es probable que me de cualquier información tan
fácilmente.
—Claro, llamaremos a ese plan A, —digo, y Stevie me
sonríe.
Me escondo en el vestíbulo mientras Stevie se reúne con
Ryan en la sala de estar.
—Stevie, hola. ¿Estás buscando una casa nueva? no te culpo
por querer mudarse de Blair.
—Sí, honestamente, vivir con ella ha sido muy difícil
últimamente.
—¿Ha estado llorando sin parar?
—Algo así, —dice Stevie. Sí, llorando con pasión por tomar
la polla gigante demoníaca de tu padre.

218
 ●

—Bueno, este es un nuevo sistema HVAC de tres

habitaciones y dos baños. —Ryan comienza a enumerar las
características de la casa.
—En realidad, estaba pensando en quedarme con mi tía
Josie por un tiempo.
Su teléfono no funciona y me envió la dirección de su
nuevo lugar en North Point y yo simplemente no hemos podido
encontrarlo.
—Oh, no puedo dar información privada.
—Entiendo. Oh, acabo de hornear estos chocolates. Están
para morirse. ¿Quieres uno? —Stevie pregunta. Amo a mi primo.
—Estoy tratando de reducir, pero esos se ven increíbles.
Recoge el chocolate del pequeño recipiente que trajo Stevie. no
me sorprende que lo tomé, ha comido muchos productos
horneados de Stevie antes.
—Maldita sea, estos son asombrosos.
—Gracias, son una receta nueva. Odio volver a preguntar,
pero ¿Cuál es la dirección?
—7867 Knuckle way —dice, sacudiendo la cabeza,
confundido sobre por qué le dijo la dirección.
—Gracias, oh, ¿y por qué engañaste a Blair?
—Ella me intimidó y quería sentirme como un hombre en
control otra vez.
Pongo los ojos en blanco. Eso es lo que piensa en el fondo.
Pero sé la verdad. Es solo un imbécil codicioso.
—Eso es triste, Ryan. Deseandote lo mejor. ¡No! —Stevie dice
cuando se encuentra conmigo en el vestíbulo y corremos hacia el
coche.
—Parece que estamos conduciendo de regreso a North Point,
—digo.
—Parece de esa manera, —responde Stevie.

219
 ●

Capítulo 23.
Dax.
—Apenas puedo sentirlo, —dice Kas cuando volvemos al
bungalow.
—¿Qué quieres decir con sentirlo?
—No seas pesado, compartimos sangre, —responde ella y yo
pongo los ojos en blanco, queriendo quemar las imágenes de mi
mente. No mentiré y diré que no disfruté dándole a Blair mi
sangre. A pesar de que ella no tiene idea de que eso significa que
puedo sentirla siempre. Le diré, eventualmente.
—¿Qué estás sintiendo? —Le pregunto a Kas.
—Está debilitado seguro. No muerto, bueno, tan muerto
como un demonio puede estar, de todos modos.
Podemos ser enviados de regreso al Infierno, y nuestras
almas pueden ser destruidas allí. Pero aquí en la Tierra, no hay
mucho que pueda hacer mucho daño. Nuestros cuerpos sanan.
No podemos ser exorcizados cuando tienes un cuerpo corpóreo.

220
 ●

Algunos objetos oscuros que pueden enviarte de vuelta al

infierno. Pero son difíciles de llegar. La mayoría fueron
confiscados y devueltos al infierno hace unos siglos.
—¿Deberíamos ir al club y ver si alguien vio algo?
Kas asiente, agarrando mi antebrazo, y regresamos al club.
El espacio para eventos no tiene el mismo atractivo que hace
unas horas. No cuando tenía a mi linda brujita en el brazo,
debajo de la palma de la mano y encima de mi. Debería dejar que
Kas se encargue de esto y volver a meterme en la cama con ella,
sé que está estresada por todo lo que pasó esta noche y es mi
trabajo cuidarla.
Sin embargo, la mirada en los ojos de Kas es mortal, y
necesito asegurarme de que no haga nada loco. No hay tanta
gente en el club como antes. Ha muerto. Aunque los actos que
suceden a nuestro alrededor parecen más intensos que antes en
la noche. Parece que más tarde en la noche, cuanto más sádicos
se vuelven los asistentes al club, creo que se correlaciona con la
forma en que muchos más vampiros están ahora aquí.
Escaneo el espacio atenuado y veo si hay alguien que
conozca. Por suerte veo a Ronan, el Segador, de antes. Tiene un
nuevo sub atado en la misma posición de pie. Este tipo
claramente tiene mucha resistencia.
—¿Ronan?
—¿Qué? —pregunta antes de azotar a la pequeña rubia
frente a nosotros. Ella gime, pero empuja su trasero hacia su
toque.
—¿Has visto a Asmodeus?
—¿La molesta rubia? Lo azotaría para que esté en buena
forma, ese. Ese chico no tendría una lengua tan afilada después
de que termine con él.
—Sí, ese es.
—El demonio que fue exorcizado salió de la habitación con
él.

221
 ●

—¿Ellos qué? —Kas pregunta detrás de mí. Juro que puedo

ver vapor ondeando de sus oídos.
—No dispares al mensajero, —responde Ronan, azotando a
la mujer de nuevo.
—¿Alguna idea de la ubicación del portal?
—Parecía un bar de mierda, —responde Ronan.
—Eterno, —digo, mirando a Kas y luego a Ronan. —Gracias
por tu ayuda, Ronan.
—No, gracias por ese hermoso espectáculo de antes. Si
alguna vez quiere a alguien para jugar con…
Mis manos están alrededor de su garganta.
—No termines esa frase. —libero su garganta y se ríe a
carcajadas.
—Realmente no sé cómo los demonios obtuvieron esta
reputación de ser los grandes males del mundo sobrenatural.
Todos ustedes son un montón de cachorros enamorados.
—Lo que sea. Vamos, Kas, sé a dónde tenemos que ir. —Ella
no pregunta mientras nos dirigimos al bar de mierda que visité
no hace mucho tiempo.
—Este lugar es repugnante, —dice Kas mientras su zapato
con suela roja se pega a alguna sustancia pegajosa en las tablas
del suelo. —¿Por qué ella lo traería aquí?
—Tengo a alguien que podría saber, —digo, escaneando la
habitación, buscando la mierda grasienta. —Beelzebub, —susurro
hacia ella.
—Odio a ese tipo, —dice, levantando su zapato,
inspeccionando los fondos y gimiendo —¿Ese es Erlik? —Kas
pregunta, señalando al hombre parecido a Thor en la esquina.
Erlik es demasiado bonito para su propio bien. Realmente no
estoy seguro de cómo Lucifer empareja el cuerpo con el alma. En
este caso, acertó. Bonito en por fuera, estúpido de cojones por
dentro.
—Quédate aquí. Iré a hablar con él.

222
 ●

Asiento con la cabeza, no queriendo tener nada que ver con

él. Voy a patear el culo de Asmodeus cuando lo encontremos. Me
está quitando un tiempo precioso que tengo con Blair.
En cambio, estoy en este bar apestoso, tratando de averiguar
dónde está un demonio enloquecido que se lo ha llevado. Todo lo
que tenía que hacer era llevarla al Infierno, pero de alguna
manera ella consiguió el borde superior sobre él.
Puedo escuchar su conversación pero no miro, no quiero
irme lejos.
—Erlik, ha pasado tanto tiempo. ¿Cómo estás cariño?
—¿Kasdeya? Luciendo hermosa como siempre.
—Oh, gracias muñeca, —arrulla Kas. —Escucha, estoy
buscando a alguien. ¿Has visto a Beelzebub o Asmodeus por
casualidad?
—No he visto a Asmodeus en décadas, pero Beelzebub acaba
de estar aquí. Él se fue como hace diez minutos. Comprándole un
artefacto a un tipo rico.
—¿Alguna idea de quién podría ser este tipo rico? —Kas
pregunta. Puedo decir que ella hace que su voz sea lo más dulce
posible, probablemente sea un verdadero desafío para ella.
—Douglas, ¿algo? Se estaba jactando de ello. Dijo que su jefe
va a estar tan feliz una vez que tenga el artículo.
—Hmm, jefe, como en, ¿no Lucifer? —Kas pregunta. Puedo
oírlo barajar incómodo en su asiento.
—Quiero decir, estoy seguro de que es algo independiente
sancionado por el señor.
—Muy bien, mantendremos esto en secreto entre nosotros
dos. ¿Qué dices, Erlik? No le digo a Lucifer que no entregaste un
traidor y le dices que no uno Estuve aquí esta noche. ¿Cómo
suena eso?
—Suena bien para mí, —dice.

223
 ●

El sonido de sus tacones me hace darme la vuelta. Esta

irritada y probablemente tratando de no estrangular a Erlik.
—¿Te suena el nombre de Douglas?
—Douglas Cummings es uno de los hombres más ricos de la
ciudad. Es dueño de una empresa inmobiliaria. —No le digo que
es la empresa para la que trabaja mi hijo.
—¿Sabes dónde vive?
—Sí, sé dónde vive. Pero—miro mi reloj—son casi las 5 de la
madrugada. Vamos a tener dificultades para acceder a su casa.
—¿Por qué?
—Es un humano que sabe todo sobre lo sobrenatural. Una
especie de coleccionista.
—¿Sabes esto porque?
Me encojo de hombros. No queriendo admitir que me tomé
el tiempo para observar a este hombre y ver para quién trabajaba
exactamente mi hijo. La forma en que sentía, el afecto por Ryan
se aseguraba de que estuviera a salvo de este mundo. Que él
podría vivir una vida feliz y saludable, una que no me incluyera
a mí o a mis problemas.
—Todo lo que sé es que podría estar reteniendo a otros seres
sobrenaturales en su casa o tener armas contra nosotros.
Necesitamos ser inteligentes.
—Tenemos que actuar rápido, es lo que tenemos que hacer.
Belcebú podría saber dónde están Asmo y Mara. Si no lo
seguimos ahora, podríamos perder nuestra oportunidad.
—Bien, —me quejo, —no deberíamos usar el portal
directamente a su propiedad.
—Bueno. Bueno, vámonos —dice, agarrando mi brazo, con
la intención de enganchar un conductor. Esta es la mayor parte
del tiempo que he pasado con Kas en más de tres décadas, y
Tengo que decir que no lo estoy disfrutando.

224
 ●

La casa de Douglas Cummings huele a Soy un hombre

blanco rico con una diminuta polla. Está en lo alto de una
colina en las afueras de Hallows Deep.
Una valla de hierro forjado rodea la casa y la propiedad,
que es fácilmente tres acres de césped perfectamente cuidado. En
la cima de la colina se sienta su atroz casa de diez mil pies
cuadrados. Es blanco y llamativo con lo que parece pilares de
mármol que sostienen el toldo delantero de la casa.
—Este lugar es de mal gusto, —dice Kas antes de saltar la
cerca. Hago lo mismo caminando hasta la casa principal. Es poco
probable que Beelzebub haya hecho algo además del portal aquí.
Así que nos tomamos nuestro tiempo, siendo cautelosos mientras
caminamos en el hogar. Kas y yo tenemos un oído excelente y
parece que hay alrededor de dos o tres personas en el hogar.
—Vamos a llamar a la puerta, —dice Kas, y la miro. Quiero
conseguir esto, me encojo de hombros y la sigo. Me pregunto
cómo la parte de atrás de su talón no se hunde en la hierba con
cada paso.
La mano perfectamente cuidada de Kas golpea contra la
puerta completamente blanca, el dorado aldabas de león
golpeando ligeramente con su golpe.
Una mujer de aspecto tímido abre la puerta.
—¿Puedo ayudarle?
Kas pone su dedo debajo de su barbilla y la mira
profundamente a los ojos, poniéndola bajo una ola de persuasión
cognitiva. Lo que Kas quiere, está mucama desprevenida
proporcionará el uso según sea necesario, pero Kas, ella tiene la
habilidad más allá de cualquier otro demonio que haya visto.
—Llévame con tu jefe, —dice, y la criada gira sobre sus
talones. La criada usa zapatos planos, lo que tiene sentido con la
limpieza de una casa tan grande. Los escalones no hacen ruido,
pero los tacones de Kas resuenan contra los opulentos suelos de
mármol mientras la criada abre las puertas corredizas del

225
 ●

estudio. Revelando un tortuoso Douglas entregando una daga a

Beelzebub. Una daga que reconozco inmediatamente.
Le doy a Kas una mirada que espero insinúe lo que estoy
pensando, ni siquiera esperó a que ella entienda el contexto a
medida que me acerco a Douglas Cummings y envuelvo mis
sombras alrededor de su garganta, muñecas y la hoja con mucha
delicadeza alrededor de la hoja. Kas ni siquiera duda mientras
empuja
Beelzebub lo tira al suelo y comienza a golpearlo en la cara.
—¿Trajiste más demonios inmundos a mi casa? —Douglas
grita. Tenía suficiente de él. Con un mínimo esfuerzo, mis
sombras se aprietan alrededor su garganta, los rollos en su cuello
no los disuadieron de asfixiarlo. Sostenerlo con tan poco esfuerzo
que me hace sonreír. Observo como se le saltan los ojos y se
vuelve morado. Hasta que ya no respira.
La criada se queda de pie en la esquina mientras Kas golpea
a Beelzebub con el asesinato escrito en su expresión.
—Kas, haz que la sirvienta haga una trampa para el
demonio —digo.
—¿Con que? —dice ella, arrastrándose fuera de Beelzebub.
Pongo una mano en el hombro para que no pueda usar el portal
en cualquier lugar. Le entregó la hoja y miró hacia el cuerpo sin
vida de Douglas.
—Estoy seguro de que puedes ser creativo.
Kas le entrega la espada a la sirvienta.
—Esto es lo que vas a hacer, querida.

226
 ●

Capítulo 24.
Blair.
Mis manos agarran el volante del Jeep mientras conducimos
de regreso a North Point. No he visto a mi mamá desde esa noche
en el bosque. La mirada en su cara era algo que nunca olvidaré.
Parecía que estaba haciendo lo correcto, como si la idea de
finalmente deshacerse de mí fuera lo mejor.
Si bien no he pensado mucho en el matricidio en el pasado,
es completamente diferente. Necesito hacer lo que tengo que
hacer, para protegerme.
Está claro que el amor incondicional no es algo real, al
menos cuando se trata de mis padres. Un padre semiausente y
una madre que me hubiera matado.
—¿Crees que ella estará allí?
—Tal vez, —digo, tratando de concentrarme en el camino.
—¿Quieres que lo esté? —Stevie pregunta.

227
 ●

—No estoy segura. ¿Qué le dices a tu madre después de que

intento sacrificarte?
—Buen punto.
La cabaña está básicamente en el medio de la nada. Es un
viaje lleno de baches cuando el Jeep maneja el camino de grava.
Es desolado, y honestamente es un gran lugar para esconderse.
No tengo ni idea de por qué contrató a Ryan para que fuera su
agente inmobiliario. Ella nunca se interesó mucho en mi vida, o
que hablábamos a menudo, al menos ella
Tenía que estar al tanto del hecho de que estábamos
saliendo.
Este camino de entrada tiene que tener al menos tres millas
de largo antes de que lleguemos a la cabaña. Se ve descuidado y
decrépito. Si lo pasaste o tropezaste sobre él durante una
caminata, uno pensaría que nadie vive aquí. su coche no está
fuera y como es de día, no puedo decir si hay luces encendidas en
la casa.
Suspiro mientras estaciono el auto, y tanto Stevie como yo
salimos.
—¿Sientes algo? —pregunta y niego con la cabeza. Quisiera
asumir que puso las protecciones alrededor de la casa. Al menos
algo.
Caminamos por el porche de la cabaña, curvando mis
manos para mirar en las ventanas y no ver nada. El porche de
tablones cruje cuando llegó a la puerta principal.
Con suerte, giró la perilla y veo si está cerrada. No lo esta,
el material de oro se siente desalentador en mi palma mientras
lo giro. La puerta cruje inquietantemente cuando lo abro por
completo. El interior está completamente pulido, mirando nada
como el exterior. Es simple y no de gama alta, pero es limpio y
suficientemente moderno.
El vestíbulo es pequeño. Hay botas de lluvia y una sola
chaqueta colgando en el gancho. De frente hay una sala de estar

228
 ●

de concepto abierto, comedor combinado con la cocina

combinación de cocina. Hay un televisor en silencio con los
subtítulos y un pequeño sofá morado en la sala de estar. El
espacio del comedor no tiene nada y la cocina de madera lisa
está impecable.
Hay tres puertas en la parte trasera de la cabina. Me
imagino que son dormitorios y un baño.
—Sigamos juntos, —dice Stevie, agarrando mi muñeca, no
quiero sonar como una pequeña perra asustada en este
momento, pero algo se siente mal. Ominoso, casi. Mi madre
puede ser una perra furiosa, pero ella es la Suma Sacerdotisa.
Aparentemente es la más poderosa del aquelarre, ella no
saldría de su casa y la dejaría abierta así. Al menos habría tenido
protecciones levantadas. Como mínimo, la puerta habría estado
cerrada. Josie es muchas cosas y la paranoica está bastante alta
en la lista.
Un golpe bajo hace que Stevie y yo saltemos. Lo escuchamos
de nuevo.
Golpe.
Golpe.
Golpe.
El ruido es rítmico y casi como si alguien estuviera
golpeando en una puerta
—Creo que viene de la puerta de la izquierda, —le digo a
Stevie. Asiente con la cabeza, su agarre casi magullando mi
muñeca.
—Esto es tan jodido, —dice Stevie.
—Perspicusos —susurro. Es un hechizo defensivo.
Cualquiera que esté mirando nos verá, pero no claramente. Los
confundirá y al menos nos dará una oportunidad de escapar si es
necesario. Estoy preparado para hacer lo que tengo que hacer si
se trata de esto.

229
 ●

—Buena idea, —susurra Stevie. El ruido sordo no se detiene.

Sólo se hace más y más fuerte. Stevie y yo caminamos hacia la
puerta donde el sonido viene.
No quiero avisar a quienquiera o lo que sea que esté en esa
habitación para nuestra presencia. Mi mano agarra lentamente
la manija de bronce de la puerta. Tan despacio como puedo me
las arreglo, giró el pomo y abro la puerta. El ruido nunca se
detiene, sigue el ritmo de antes, así que lo abro aún más. El
agarre de Stevie es fuerte en mi parte superior del brazo mientras
ambos miramos dentro de la habitación.
Lo que encuentro no era lo que sospechaba en absoluto. es
mi madre demacrada y agotada. No se ha cepillado el pelo y lleva
puesto una bata de noche. Sus pies son negros y repugnantes,
como si hubiera estado corriendo fuera alrededor por días. Ella
golpea su cabeza violentamente contra la pared del dormitorio.
Puedo ver sus labios moviéndose, pero no puedo escuchar nada de
lo que está diciendo.
—¿Josefina? —Yo digo. Ella mira, confundida, obviamente
sin poder verme. Vuelve la cabeza hacia la pared y continúa
golpeándose la cabeza.
Un rastro de gotas de sangre desde la línea del cabello,
bajando por los pómulos y la mandíbula hasta el suelo.
—Perspicuss finis —susurro. La mano de Stevie casi está
cortando la circulación a mi brazo. —¿Josefina? —pregunto,
llamando de nuevo el nombre de mi madre.
Se vuelve y nos mira a mí ya Stevie. Quien me mira, no es
totalmente mi madre. Si bien puedo sentir la presencia de su
magia, ha sido significativamente debilitado.
—Haz que se detenga —dice, mirándome. Hay un destello
enloquecido en sus ojos.
—¿Detener a quién?
—El dolor. Ella se lo llevó todo. Estuve bien por un tiempo.
Ella dijo que yo era buena. Pero yo no era lo suficientemente

230
 ●

buena. No soy suficientemente fuerte. —Ella está paseando,

mirando la pared de nuevo. Hay una mancha de su sangre
contra la pintura blanquecina.
—¿Quién dijo que?
—¡Puaj! ¡No seas jodidamente estúpido! —grita antes de
caminar de nuevo. Sus ojos vuelven a la pared y se golpea la
cabeza de nuevo.
—¿Qué carajo hacemos? —Stevie pregunta.
—Ella te necesita a ti, no a mí, —murmura mi madre. Ella
se golpea la cabeza realmente duro en la pared. La sangre brota
de su cabeza ahora más constantemente.
—Tendremos que recolectar su sangre, —comienza a dibujar
un símbolo contra la pared blanca.
—Joder, tienes que detenerla, —grita Stevie y me muevo. Mi
mano envolviéndose alrededor de su antebrazo, apartando su
mano de la pared.
Mi mamá empuja su cabeza hacia atrás, golpeándome en la
cara, haciéndome estremecerse y gemir. Sigue dibujando en la
pared.
Stevie intenta que deje de escribir y ella agarra a Stevie por
el cuello y la arrastra por la habitación. Escuchó un crujido y
miró hacia arriba y veo que ella no se mueve Sus brazos cojean
alrededor de sus costados mientras su cuerpo yace precariamente
contra el tocador.
Las palabras escapan de mis labios antes de que pueda
siquiera pensar en lo que siento.
—Mortem a sofocatio. —Observó cómo la mano de mi
madre se levanta de la pared, ya no crea el símbolo que estoy
bastante seguro que fue creado para llamar a Mara. Sus manos
se envuelven alrededor de su garganta mientras su cuerpo
restringe el flujo de aire de su cuerpo. Ella cae de rodillas, ya que
sus pulmones no pueden absorber nada de aire. Las venas de su
cuello y cara se vuelven azules y sus ojos se salen de sus órbitas.

231
 ●

Hasta que no hay nada más que silencio en la cabina, el último

ruido que escucho antes de que corra hacia Stevie es el cuerpo sin
vida de mi madre golpeando el duro piso de madera
Debería sentir más, hay un precio que pagar por la magia
de la muerte, mi alma debería estar fracturada. Debería sentirme
partido por la mitad. Mi magia debe ser repugnante contra el
mal que acabo de usar, pero no lo hace; se sienta tranquilo y
contento dentro de mí.
No debería ser posible, las brujas han muerto lanzando
magia de muerte antes. Es probablemente una parte de por qué
son tan dóciles ahora. Miro mis manos que tiemblan mucho.
Aunque sé que no usé mis propias manos para matar a mi
madre, bien podría haberlo hecho con cómo se siente esto. mi
magia no está rebelándose contra mí, pero mi mente está en
espiral.
Mis ojos están llorosos, pero contengo las lágrimas. Estoy de
rodillas frente a Stevie, ahuecando su bonita cara en mis manos.
Puedo decir que está respirando. Gracias Hécate.
—Stevie, cariño, tienes que despertarte, tenemos que salir de
aquí.
No estoy seguro de cuánto del diseño necesitaba ser
completado. Si lo que dibujo es suficiente para alertar a Mara.
Solo sé que necesito conseguirle a mi primo el vete a la mierda.
Stevie gime y cambia su peso ligeramente. Sus ojos aún no
se han abierto, y estoy entrando en pánico. La adrenalina se está
acabando, acabo de matar a mi propia madre Su cuerpo está
justo allí. No estoy seguro de cuánto quedó de ella dentro de ese
caparazón, pero todavía era ella hasta cierto punto. Mientras yo
podría no haberla amado, trató de matarme. ¿Cómo
conceptualiza alguien matando a la persona que los trajo a este
mundo?
—Stevie, por favor, tenemos que irnos. —Ella no se mueve, y
yo simplemente estoy perdido. No se que hacer.

232
 ●

Con manos temblorosas, sacó mi teléfono de mi bolsillo y

marcó Dax. Él contesta al primer timbre.
—Oye, nena, ¿qué..., —comienza.
—Dax —digo, sabiendo que sale como un graznido.
—Nena, ¿dónde estás? ¿Qué ocurre?
—¿Puedes abrirme un portal? Necesito ayuda, Stevie, ella
está… Puedo oír las lágrimas en mi voz, pero todavía no se han
filtrado de mis ojos.
Hay barajado.
—Dax no puede venir, pero yo lo haré. —Es la voz de Kas,
asiento sin convicción con la cabeza, pensando que podía oírme.
Ella cuelga el teléfono, y me pregunto cómo va a saber dónde
estamos. Así que le envió un mensaje de texto a la dirección al
teléfono de Dax.
Tengo que volver a escribir los números de la casa dos veces
antes de hacerlo bien y disparar el texto. Ni siquiera dos
segundos después escuchó un gran pop y la puerta principal se
abrió de golpe.
Kas irrumpe en la habitación, mira a mi madre muerta en
el suelo y el cuerpo arrugado de Stevie contra el tocador. Ella no
habla, solo levanta a Stevie como si no pesara nada.
Aparentemente, la fuerza del demonio es una cosa universal.
La sigo afuera donde nos paramos frente al Jeep.
—Tus llaves, —dice.
—¿Qué?
—Tus llaves, pequeña bruja. Siéntate en el asiento trasero
con ella y yo conduciré tu coche a casa.
Asiento con la cabeza y colocó las llaves en su palma
perfectamente cuidada. Subiendo al asiento trasero, desliza a
Stevie a mi lado, acarició su largo cabello rojo entre las yemas de
mis dedos mientras Kas se sienta en el asiento delantero y
conduce como un murciélago fuera del infierno de vuelta a
Hallows Deep.

233
 ●

Ella no dice una palabra hasta que estamos en la carretera.

—¿Se encuentra bien?
—Sí, le daré algunas pociones cuando lleguemos a casa.
Creo que golpeó su cabeza bastante duro.
—¿Quién era ese allá atrás?
Miro por la ventana y suspiro
—Mi madre.
—Oh, mierda, —dice Kas.
—Sí, ha sido una semana bastante mala.
—Escucha, tan pronto como regresemos, tengo que irme.
Dax me necesita.
—¿Está todo bien? —pregunto, preocupada por Dax y
también egoístamente queriendo que él esté aquí conmigo.
—No, —responde Kas, sin darme detalles y mis
pensamientos comienzan a girar en espiral.
¿Cómo alguien mata a un demonio? ¿Hay cosas peores que
podrían pasar?
No pasa mucho tiempo antes de que Kas básicamente tire
del freno electrónico de mi auto y saltando y tomando a Stevie
en sus brazos. Abro la puerta principal y ella comienza a
seguirme, pero está bloqueada por mis protecciones. No puedo
llevar a Stevie, así que ahora voy a tener que darle acceso a otro
demonio a mi casa.
—Necesito tu sangre —digo, y ella me tiende la mano. le
pinchó el dedo con una aguja conjurada y le permito entrar en
mis protecciones. Ella coloca suavemente
Deja en el sofá a Stevie, besa su cabello y se va
inmediatamente. Tengo un enfermo sentimiento profundo y
horrible sobre lo que le está pasando a Dax, pero ahora mismo
necesito cuidar de Stevie.
La dejó desatendida para recoger los suministros de la
cocina. Agradezco a Hécate tener todo etiquetado con detalles
retentivos. Hago estallar el corcho en el dolor calmante, relajante

234
 ●

muscular y poción de crecimiento óseo y tírelos todos en su boca.

Ella no traga, así que tengo que mantener su boca cerrada y
taparle la nariz hasta que afortunadamente se traga cada gota.
Me siento junto a su cuerpo durante horas hasta que
finalmente se despierta.
—¿Blair? —Me pongo de rodillas y acaricio su cabello.
—Estoy aquí. ¿Te sientes bien?
—Sí, ¿cómo llegamos a casa?
—Es una larga historia. Vamos a llevarte a la cama.
Ella asiente y pone demasiado peso de su cuerpo sobre mí
para apoyarla. Pero eventualmente, con mi brazo alrededor de su
cintura, podemos meterla en su habitación. La dejó caer en su
cama y su familiar, Gary, ronronea y se abraza junto a su pecho.
—Cuida de ella. Ven a buscarme si necesita algo —le digo al
gato. Él me parpadea tres veces, lo que tomó como confirmación
y comprensión.
Fez es increíblemente inteligente, Gary, no tanto. Pero él es
el familiar de Stevie y estará en contacto con sus emociones.
Resopló por el esfuerzo y no puedo evitar que tan pronto
como llegue a mi habitación caer sobre mi colchón, sin siquiera
molestarme en cambiarme de ropa. Sé que hay algunas
salpicaduras de sangre en mi parte superior. Los problemas del
mañana van a ser los problemas del mañana.
Enfrentar el hecho de que maté a mi madre no necesita
venir hoy, ni hacer los pensamientos negativos sobre lo que
podría estar pasando con Dax. Él probablemente no pueda
permitirme distraerlo más de lo que ya lo he hecho.
Por mucho que trate de animarme a mí mismo para no caer
en un ataque de pánico, no puedo dormir. Abro mi mesita de
noche y tomó un trago de la poción para dormir. Él me golpea
fuerte y rápido. Eliminar cualquier pensamiento inminente de mi
cerebro y arrullándome en un sueño profundo.

235
 ●

Capítulo 25.
Dax.
Me siento un jodido asesino; hemos estado en esto durante
horas y el pequeño cerdo todavía no ha chillado. Mis ojos miran
a Beelzebub atado a una silla en una trampa del diablo. Con
cuidado de dejarlo en el centro y que mi pie no pasó por encima
de la línea. El pentagrama está dibujado con sangre, cortesía de
Kas.
Creo ella podría haberse divertido demasiado abriendo el
intestino de Douglas y teniendo a la sirvienta dibujando la
trampa en el suelo. La pobre doncella se para en la esquina, los
ojos vidriosos, sangre en sus dedos y delantal.
Beelzebub esperaba hacer un trato con Douglas por el objeto
oscuro que la criada sostiene. La hoja fue creada por el Arcángel
Miguel después de que Lucifer descubriera cómo dar cuerpos
corpóreos a los demonios. Querían una manera de enviarnos de
vuelta al infierno y causar un daño real. Quiero saber por que lo

236
 ●

quería para él, si se lo estaba dando a Mara y dónde está el Hell

Asmo.
Necesito una siesta, una buena cogida, y un sándwich de
bagel.
No puede usar un portal, pero como tiene un cuerpo
corpóreo, no hay exorcismo para hacerlo. Está atrapado aquí
hasta que lo liberemos. La silla a la que está atado es una silla de
escritorio de madera y cuero. La sangre corre por su rostro
mientras Kas instruye a la criada para cortarlo. El cuchillo
exhuma la magia oscura, rasgando fácilmente a través de su
carne.
—¿Dónde está Asmodeo? —Kas le gruñe a Beelzebub.
—Ya te dije. No sé una mierda.
—Cariño, ¿te importaría cortarle la garganta un poco?
—Kas instruye a la mucama. La mujer, que estaba en el lugar
equivocado en el momento equivocado, asintiendo con la cabeza
a las instrucciones de Kas.
La hoja plateada está fuertemente presionada en su mano
mientras ella le corta la garganta, lo suficiente para quemar y
sangrar, no lo suficiente para matar.
—¿Por qué conseguiste esta espada? —pregunto. Él sonríe,
sus dientes torcidos cubiertos de sangre. Me queda claro que
Lucifer le dio un cuerpo tan feo como su personalidad.
—¿Como si les dijera a ustedes dos excéntricos sin sentido?
—le pregunta a Kas, tosiendo y chisporroteo. Se ve más
desaliñado que de costumbre.
—Dice el tipo que está amarrado y en una trampa del
diablo. Creo que nuestra sirvienta necesita ser un poco más
creativa.
—No te estoy diciendo una mierda.
—Cariño, ábrele los pantalones para mí, ¿quieres querida?
—Kas dice, hablando con la criada. Los ojos de Beelzebub se abren

237
 ●

como platos. Las manos de la criada tiemblan mientras se

desabrocha los pantalones.
—Dime algo valioso o nuestra encantadora amiga aquí te
va a cortar tu patético pito. Eso es un objeto oscuro, Beelzebub, lo
que significa que solo el mismo Lucifer podría ayudarte. De
verdad creo que estaría tan dispuesto a ayudarte a volver a crecer
una polla cuando tenías información sobre Mara y no se lo
dijiste?
—¡Detente, espera! —grita.
—Puedes parar, por ahora, —le dice Kas a la criada.
—No sé dónde está Asmo, pero sé dónde vive Mara. Bueno,
ha vivido. A veces vive en las casas de las personas que posee. Ella
probablemente lo llevó allí.
—Escúpelo —digo, enojándome.
—Encima de la cafetería en la calle principal, —dice.
—Eso está a dos puertas del restaurante de Blair. Tienes que
estar bromeando. ¿Qué quiere con ella? —le pregunto,
conteniendome de entrar en la trampa del diablo.
—Ella quiere que ella sea su recipiente. Es hora de que
Lucifer sea derrocado. Mara es lo suficientemente poderosa para
hacerlo. Solo he estado ayudándola a llegar a su potencial.
Ya sabíamos sobre el barco. ¿Pero este plan descabellado
para derrocar a Satanás?. Kas y yo nos reímos del demonio
engañado frente a nosotros.
Muchos han tratado de apoderarse del Infierno como propio
y han fracasado estrepitosamente. Pensar que un demonio sin
forma atrapado en la Tierra podría derrocarlo es cómico.
—Haz lo que quieras con la sirvienta, pero vámonos, —le
digo a Kas.
—Deberíamos matarlo, es lo que nuestro Señor querría,
—dice ella.

238
 ●

—De acuerdo, —respondo, sonriendo ante su sed de sangre.

Ella podría parecer que Asmo no le importa una mierda, pero
está claro que eso está lejos de ser el caso.
—Cariño, —Kas llama a la criada.
—Sí, —responde ella en trance.
—Golpéalo justo en el corazón.
Ella levanta la hoja y Beelzebub mece su cuerpo en la silla.
—Dile a Lucifer un hola cuando regreses al infierno, hijo de
puta, —dice Kas antes de que la criada dejé caer la espada sobre
su corazón. Su alma de tinta negra gotea hasta el suelo como
arena volcánica mientras lo arrastra de regreso al infierno. Su
cuerpo siguiendo el traje y arrugándose a un traje de carne que
ya no se puede usar.
La sirvienta deja el círculo y camina hacia Kas.
—Lo hiciste muy bien, cariño.
Ella acaricia el cabello de la sirvienta, sonriéndole con amor
antes de que Kas le rompa el cuello. El crujido es rápido y
silencioso, su cuerpo cae al suelo.
—Vámonos. —Le arranca el delantal a la sirvienta y
envuelve la hoja en él antes de dármelo y lo guardo en mi
bolsillo.
—¿Realmente tenías que matarla?
—Ella no habría sido capaz de vivir con lo que le hice hacer.
Disfrutará en cualquier lugar de descanso que se elija para ella,
—dice Kas. No lo admitiré, pero probablemente tenga razón.
Dejamos atrás el desorden de esta mansión, tres cadáveres.
Los detectives tendrán un día de campo con el caso. Seguro que
especulan sobre rituales satánicos, y no estarán muy lejos.
Kas y yo usamos el portal a la cafetería. Mi codo golpea el
cristal de la ventana de la puerta antes de meter mi brazo y
abrirla. Ninguna alarma suena y nos dirigimos a la buhardilla de
arriba de la tienda. Cuando trato de abrir la puerta de la
habitación, da resistencia.

239
 ●

—Joder, —dice Kas a mi lado.

—¿Qué es? —pregunto y ella gruñe por lo bajo.
—Algo anda mal con Stevie, —dice ella.
—¿Le diste tu sangre?
—Como si no le hubieras dado nada a tu pequeña bruja.
Me encojo de hombros, sabiendo que le di a Blair mi sangre.
Pero fue para curar sus heridas, no para rastrearla como si fuera
un animal con microchip. Mi teléfono suena y es el número de
Blair. Respondo de inmediato.
—Oye, nena, ¿qué… —trato de preguntar.
—Dax, —dice ella, sonando como si estuviera al borde de las
lágrimas.
—Nena, ¿dónde estás? ¿Qué ocurre?
—¿Puedes abrirme un portal? Necesito ayuda, Stevie, ella
está —Definitivamente está a punto de colapsar, estoy a punto
de abrirme un portal directo a ella. Kas me arrebata el teléfono
de mi mano.
—Dax no puede venir, pero yo lo haré. —Ella cuelga el
teléfono y yo la miro como si estuviera loca.
—Tu bruja está bien, Stevie no. Iré a ellos y los traeré de
vuelta a su casa. Investiga esto. Volveré tan pronto como pueda.
Puedo sentir a Asmo cada vez más fuerte de todos modos.
Probablemente sea mejor que lo encuentres y no yo, podría
asesinar a todos a la vista.
—Asegúrate de que esté bien, —le digo, sabiendo en el fondo
que no ha habido daño físico a ella, pero algo no está bien. Ella
asiente con la cabeza antes de conectar a donde sea que estén
Blair y Stevie. Lo juro por Satanás si ella fue a algún lugar sin
decirme y ponerse en peligro, voy a joderla.
Empujo mi hombro con fuerza contra la puerta y la madera
se astilla cuando la bisagra superior se cae y la puerta se abre de
par en par. La habitación está vacía, un colchón en el suelo con
un edredón estampado encima y dos almohadas, y una jodida

240
 ●

tonelada de sangre manchando las sábanas. Es siniestro lo

silencioso que es aquí, pero alguien claramente ha estado aquí
recientemente. Hay una mecedora de madera al lado de la cama
y una maleta con ropa que no combina. Parece que hay un
rastro de sangre en el piso, comenzando desde la cama y
dirigiéndose hacia al tocador..
Mi teléfono suena y espero que sea Blair o Kas con una
actualización.
Ryan: ¿Quieres ir a cenar mañana?
Joder, ¿ahora es cuando decide acercarse? Si no consigo
algunos de estos problemas resueltos, no hay forma de que pueda
hacer que esto suceda, pero rechazar su invitación me hace
parecer como si no me importara.
Yo: Estoy ocupado con el trabajo, pero estoy seguro de que
puedo hacer que funcione.
Ryan: Genial, el mismo lugar que la última vez.
Yo: Claro. Nos vemos mañana.
¿Qué es una obligación más en mi plato? Beelzebub está
muerto, Asmo está sigue desaparecido. Nadie sabe a quién posee
Mara en este momento, y mi chica está bajo coacción. ¿Cómo
pasé de la mejor noche de mi vida a la peor?
Estoy a punto de decir a la mierda e irme a casa para
asegurarme de que Blair está bien, cuando observó que las gotas
de sangre fluyen hacia un charco más grande que salpica el
suelo.
Entonces es cuando una tarjeta en el suelo me llama la
atención. Adelaide Forten, augurio de lo inhumano. La tarjeta es
negra con lámina dorada y una sola huella dactilar
ensangrentada yace en la esquina. Busco alrededor de la
habitación y nada más parece estar mal. Portal a la dirección en
la tarjeta, una pequeña cabaña delicada en North Point. Mi
puño ni siquiera golpea la puerta antes de que la puerta se abra.
—Me preguntaba cuándo te vería, demonio, —dice ella. Si
soy honesto, nunca he visto un adivino más relajado en mi vida.

241
 ●

—¿Sabes por qué estoy aquí?

—Recogiste mi tarjeta y sé dónde la encontraste.
—Mara, —respondo.
—Sí, solo uno de los muchos demonios poderosos que he
tenido el disgusto de reunirme últimamente.
—¿Era uno de ellos un hombre rubio que parece tener poco
más de veinte años?
Arquea una ceja y asiente con la cabeza para que la siga.
Entramos frente a la casa donde claramente se encuentra con los
clientes. Ella empuja la cortina negra, y pasó por donde hay una
sala de estar y una cocina. Su decoración es simple, pero no lo es
hasta que veo el desastre sangriento en el que está Asmo acostado
en su sofá me da sospecho.
Agarró a la bruja por el brazo.
—¿Por qué él está aquí?
—Lo encontré en mi patio delantero así. No me toques,
demonio. —Sisea, apartando su brazo.
—Tienes suerte de que no lo dejes ahí afuera. No es que crea
que puede desangrarse. Pero algo anda mal con él.
—Él no se está curando. ¿Qué carajo? Saco mi cuchillo,
asegurándome de que no es un objeto oscuro y cortó mi brazo,
goteando mi sangre sobre sus heridas.
Lo que hace que se curen. Realmente no estoy contento de
poder sentir a este hijo de puta en el futuro previsible. Esto tiene
poco sentido.
—Lo llevare a casa.
—Bien, y puedes decirle al resto de tus amigos demonios que
se vayan a la mierda. Montón de cabrones desagradecidos.
—No tengo ningún otro amigo demonio —digo, y ella pone
los ojos en blanco. Agarra a Asmo por la cintura y llámanos al
bungalow, donde está Kas esperando.
—¿Qué pasó? —pregunta, mirando el rostro pálido de Asmo
mientras lo coloca en el sofá.

242
 ●

—Él no estaba sanando. Perdió mucha sangre.

—¿Le diste la tuya? —pregunta y yo asiento con la cabeza.
Acaricia su ensangrentado, enmarañado cabello, sacando un
cuchillo de su bolsillo y cortándose el suyo, dejando caer un poco
de su propia sangre en su lengua. No estoy seguro si es un
movimiento posesivo o esperando que ella pueda ayudarlo a
sanar más rápido. Sea lo que sea, trabaja rápidamente mientras
parpadea sus ojos hacia nosotros.
—¿Asmo? —Kas pregunta.
—Bebé, joder. Esa perra está loca, —dice mientras se sienta.
—Su loco culo intentó poseerme, trató de limpiarme de mi
cuerpo. Supongo que ella no entiende cómo funcionan los
cuerpos corporales. Tenía un objeto oscuro, una especie de bisturí,
seguía sangrando, esperando que mi alma regresara al infierno y
ella pudiera tomar el recipiente.
—¿Ella te dijo esto?
—Sí, en realidad es muy habladora. Realmente loco también.
Dijo que la vergüenza sería apoderarse de mi cuerpo porque le
gustaría tener más demonios como amigos.
—¿Qué más dijo ella? —Pregunto.
—Dijo que fue criada como humana, pero hace
aproximadamente un año siguió haciendo cosas malas que se
sentían bien. Lentamente sintió que su cuerpo no podía
sostenerla más y entonces ella estaba libre de los confines de su
forma mortal. Ha estado poseyendo personas desde entonces.
Ninguno de los barcos puede retenerla por mucho tiempo,
expulsándola.
—¿Quieres decir que ella no los está poseyendo y dejándolos,
está siendo empujada fuera?
—Sí, o la nave muere y tiene que irse, —dice Asmo.
—¿Y cree que Blair será el recipiente perfecto?
—Ella dijo que ha sido bendecida.
Kas y yo fruncimos el ceño.

243
 ●

—¿Bendecida?
—No en el sentido de Jesús, aleluya. No estoy muy seguro
de lo que quiso decir, pero ella piensa que es perfecta y no se
detendrá hasta que la consiga. Ella es fuerte, Dax. Tenemos que
llevarla de vuelta al infierno rápido.
—¿Cómo te tomó ella, de todos modos?
—Ella sostuvo el objeto oscuro en mi garganta, —dice.
—¿Cómo llegaste a Adelaide's? —Le pregunto, esperando que
todavía tenga suficiente fuerza para responder.
—Lo encontré en la habitación. Apenas podía pensar lo
suficientemente claro como para abrir un portal. Pero con la
dirección frente a mí, pude concentrarme.
Se queda dormido y miró entre ellos.
—¿Tienes esto cubierto?
—Sí, pero tendré que ver a Stevie más tarde. —Asiento con
la cabeza y miro la forma en que mira a Asmo. Algo se hunde en
mis entrañas, haciéndome darme cuenta que es la forma en que
miró a Blair. —Blair probablemente se enfadará cuando llegas
ahí, —dice Kas.
—¿Por qué?
—Probablemente sea mejor escucharlo de ella.

244
 ●

Capítulo 26.
Dax.
De nuevo, encuentro a Blair en su cama, durmiendo con su
ropa. Afortunadamente, no con la misma ropa que le dejé la otra
noche. Su cabello aviva su rostro contra la almohada mientras
respira con dificultad. Ella está acurrucada de lado,ni una manta
encima de ella. Una camisa negra ajustada se aferra a su pecho y
ella está vistiendo una falda negra.
Me encanta mirarla así. Su rostro se relajó y su boca hizo
un puchero. Nada le molesta cuando está así. Ella es pacífica y
flexible. Mientras el sueño se apodera de ella, nadie la persigue ni
la defrauda. Blair se merece todo y estoy aquí para asegurarme
de que ella lo reciba, que le doy lo mejor y las partes más oscuras
de mí hacia ella, sabiendo muy bien que las quiere a las dos.
He visto el brillo en sus ojos cuando hablo de las cosas que
quiero y cómo ella admira mi violencia. Fuimos hechos el uno

245
 ●

para el otro y no hay manera en el cielo o en el infierno que la

voy a dejar ir.
Mientras le retiró el cabello de la nuca, noto algunas
manchas de sangre. Parece que ella puede haber sido arañada. La
ira y el miedo rasgan a través de mi pecho y me quito la camisa
mientras jadeo pesadamente.
Ella es mía.
Jodidamente mio. Y alguien la hirió, la tocó, y yo no estaba
allí. Estaba jodidamente ocupado encontrando a Asmo,
torturando a un demonio y encontrando objetos. ¿Es así como se
vería nuestra vida, yo constantemente lejos, sin poder estar allí
para ella mientras hago el trabajo sucio de Lucifer? No hay
escapatoria de lo que soy y para quién trabajo. Pero por segunda
vez en mi vida, ojalá pudiera ser otra cosa, algo mejor.
Me quito toda la ropa, mi respiración pesada mientras miro
hacia abajo a mi bruja. Trato de empujar mis oscuros deseos
hacia abajo, sabiendo que este no es el momento.
Pero para mí lo es. Necesito esta prueba de que ella es mía.
Que en cualquier estado ella me pertenece.
Ni siquiera se mueve cuando mi rodilla golpea el colchón y
mi cuerpo la sigue, arrastrándose detrás de ella. Su cuerpo está
frío por no estar cubierto, agarró la manta y nos cubro. Sé que
solo debo dormir, mi cuerpo lo necesita, entre comer y ducharse.
Pero en este momento, mi anhelo por ella, dulce y contento lo
consume todo.
Mis dedos rozan la suave tela de su falda, levantándola,
revelando la delicada textura de las bragas de encaje que lleva
puestas. Levantó la manta para mirar su culo. Las bragas son de
color rosa y se ven impresionantes en contraste. Hay un leve
hematoma en la nalga derecha, pero nada que no se cure a su
debido tiempo. Estoy bastante seguro de que si Blair quisiera,
podría curarlo con una poción o un deletrear. Pero ella no lo
hizo. Ella eligió usar mi marca, usar las bragas que la compré, en

246
 ●

el color que seleccioné. Es como si me estuviera invitando a tocar.

Soy un demonio, un íncubo en eso. Esta es mi fantasía. Ella sabe
que esto es algo que quiero, y ella accedió, queriéndolo. No hubo
quejas cuando la desperté saboreándola.
Sabiendo que ella quiere esto tanto como yo, mi cuerpo se
mueve antes que mi mente lo hace. Un demonio solo tiene tanta
moderación y el mío se ha ido como mis dedos cuando se
sumergen en sus bragas desde el frente, empujando su culo de
felpa contra mi erección dura. Me muevo contra sus suaves
mejillas y ella ni siquiera se mueve. Deslizó mis dedos junto a su
clítoris, sabiendo que necesito mojarla y prepararla para mí. La
idea de ella inconscientemente sabiendo que soy yo, que ella sabe
que necesito que esto me haga más difícil.
Retiro mi mano y lamo mis dedos antes de comenzar a
frotar suavemente su clítoris. Espero que se despierte bastante
rápido, pero no lo hace. Lentamente inserto dos dedos dentro de
su cálido coño, sintiendo un ligero apretón cuando se vuelve más
húmedo para mí. Mis movimientos son lentos y medidos, incluso
perezosos. Solo quiero disfrutar tocándola así el mayor tiempo
posible. Me pregunto si puedo traerla al borde del orgasmo y ella
puede despertarse justo cuando se balancea a través de su cuerpo.
No espero que se quede quieta y me deje seguir tocándola,
pero ella lo hace. Ha empapado lentamente mi mano, lista para
lo que sea que le dé y lo hago.
Avivando su clítoris unas cuantas veces más, finalmente se
mueve, pero no se despierta. Necesito más. Necesito estar dentro
de ella. Empujó sus bragas a un lado; la magullado curva de su
culo en exhibición perfecta para mí mientras deslizo la cabeza de
mi polla de ida y vuelta sobre su entrada mojada. Blair todavía
no se despierta. Con reverencia y cuidado, me deslizo lentamente
dentro de ella. Ella está tan mojada y cálida para mí. Es como si
estuviera hecha para mí, para lo que sea que le dé, ella es mía.

247
 ●

Mi brazo se envuelve alrededor de su pecho, abrazándola

con fuerza mientras la follo lentamente. No tengo prisa por que
esto termine pronto. Nunca quiero dejar esta cama.
Es cálido y seguro y no hay nada aquí que pueda
lastimarla. Nos duele.
Le pellizco el pezón perforado entre el pulgar y el índice y
tarareo aprobación mientras su coño se aprieta a mi alrededor.
Escuchó una ráfaga de aire y Blair se acelera la respiración.
—¿Dax? —ella lo dice tan bajo.
—Soy yo —digo, sin detener mis embestidas, todavía largas
y profundas, disfrutándola.
—Te extrañé, —dice, su brazo sujetando el mío, sus uñas
cavando en mi antebrazo.
—Yo también te extrañé, cariño.
Nos quedamos así; me la follo con ternura con devoción, ella
agarrando mi brazo y empujando su culo contra mi pelvis. Sus
ojos están cerrados. Sé que está despierta pero todavía está
cansada.
—¿Quieres venirte, pequeña bruja?
—Por favor, Dax.
Saco y ella gime levemente por el movimiento. Volteándola,
miro sus brillantes ojos rosados y sonrió, apartando su cabello de
su rostro antes de agarrar sus mejillas y besarla frenéticamente.
Estoy sin aliento y abrumada por la emoción cuando nuestros
labios se separan, sus ojos todavía sonrosados mientras entro en
ella de nuevo. Ella tiene una pequeña sonrisa en su rostro, y es
como si la tensión fuera dejando su cuerpo mientras mis labios y
mis manos la tocan con reverencia. Esta vez, meciendo mi pelvis
con fuerza contra su clítoris.
Todavía parece fuera de sí y aturdida, la fricción no hace lo
suficiente por ella.
—¿Tienes algún juguete, cariño?

248
 ●

Ella señala al azar a la mesita de noche. Tristemente tengo

que retirarme de nuevo para inclinarme y abrir el cajón. Ella
tiene bastante recorrido aquí, un montón de cosas que espero
explorar en el futuro. Pero ahora mismo, encuentro lo que
quiero. La pequeña bala rosa. Pruebo la configuración y parece
que mi chica lo cargó.
Qué fortuito.
Colocándome entre sus muslos cremosos, me sostengo en mis
espinillas cuando empiezo a follarla y sostengo la bala contra su
clítoris.
—Mierda, —gime ella. Su espalda arqueándose fuera de la
cama, una de sus manos agarra la colcha debajo de nosotros, el
otro agarra con fuerza alrededor de mi muñeca. Ella me mueve
para que la bala esté justo donde tiene que estar.
Siento y la escucho mojarse más, los sonidos obscenos de
nuestra cópula instándome a ir más rápido. Veo como mi pene se
vuelve más húmedo con cada empuje.
—Tan jodidamente húmedo para mí, niña. ¿Vas a venir por
papá?
—Sí, dioses, te sientes tan bien.
—No hay dioses aquí, pequeña bruja, solo tu demonio.
—No te detengas.
—No me detendré hasta que sienta que te corres alrededor
de mi polla. Incluso entonces, —puede que no me detenga.
Subo la configuración aún más alto, el zumbido del juguete
es fuerte en la habitación. Su agarre en mi muñeca se aprieta, su
cabeza se golpea hacia atrás cuando su coño comienza a
ordeñarme. Enviándome al límite. Mantengo el juguete sobre su
demasiado sensible clítoris mientras la follo sin piedad,
mostrándole lo que me hace, que ella es mía, que ella necesita
cuidar mejor lo que me pertenece.
Ella casi grita en mi oído cuando me corro, la sensación del
juguete y cuán duro la estoy follando demasiado. Los dos

249
 ●

estamos jadeando cuando la miro en el rostro. Ella me da una

sonrisa soñolienta y extiende sus brazos hacia mí. No loca, no
asustada, sino con deseo. Esta bruja más pequeña y frágil, que ha
sido a través de quién sabe qué, quiere consolarme. ¿Cuándo fue
la última vez que sentí el confort deseado para mí?
Me acuesto, mi cabeza sobre sus suaves pechos, los brazos
envueltos alrededor de su cintura mientras sus pequeños brazos
se envuelven alrededor de mi cabeza. Esto era lo que necesitaba

El sonido de las cacerolas es lo que me despierta, mi cara

presionada contra las tetas más perfectas que he visto. Los beso
con delicadeza y hay una suave risita sobre mí. No puedo
evitarlo cuando me alejo y le sonrío.
—¿Qué hora es?
—Alrededor de las nueve, creo, —dice ella. —¿Quieres
ducharte antes de desayunar? —Asiento con la cabeza. Me siento
repugnante después de los últimos días.
Mis pies golpean el piso de madera y camino primero hacia
la ducha. puedo ver en el espejo que Blair está mirando mi
trasero mientras me muevo.
—¿Estás mirando o uniéndote, pequeña bruja?
—Ambos, —dice ella, caminando detrás de mí y
abofeteándome el trasero. Gira la palanca de la ducha,
extendiendo la palma de la mano para probar la temperatura. La
ducha es pequeña, pero servirá: una simple ducha de vidrio con
azulejos blancos, un inodoro y un pequeño tocador cubierto de
productos.
—¿Está todo bien con Asmo?
—Sí, lo encontramos. Está con Kas.

250
 ●

Ella asiente con la cabeza, sin dejar de extender la palma de

la mano bajo el chorro de agua. No hablamos, un millón de
palabras colgando entre nosotros esperando salir. Una vez que el
agua cumple con sus requisitos, ella toma mi mano y me empuja
hacia la ducha.
A ella le gusta el agua caliente. Le iría bien en el infierno.
El pensamiento se agita en mi estómago por el hecho de que
nunca podría llevarla allí. Que esto puede sólo durar un tiempo.
No puedo pensar en esto, en todo lo que perderé por lo que soy.
El agua tibia golpea mi pecho y la parte posterior de la
cabeza de Blair mientras presiona el lado de su cara contra mi
pecho. Envuelvo mis brazos alrededor de ella. Uno en su espalda
baja y la otra envuelta en su cabello mojado.
—Maté a mi mamá, —susurra Blair.
—¿Estás bien? —Le pregunto, porque no estoy seguro de qué
más podría decir.
—Siento que debería sentirme más. ¿Es como si la primera
emoción fuera alivio?. Mi alma debería estar manchada, debería
tener dolor físico por usar ese hechizo Maté a mi mamá, llegué a
casa, me fui a dormir y luego tuve sexo contigo. Eso no es
normal.
—¿Te estabas protegiendo?
Ella coloca su cabeza contra mi pecho de nuevo y asiente
con la cabeza.
—Ella le hizo daño a Stevie, y estoy bastante seguro de que
estaba llamando a Mara a la cabaña.
—Hiciste lo que tenías que hacer. No ser humanos significa
que sentimos cosas diferentemente. Aunque estemos rodeados de
ellos, nuestras expectativas de nuestras emociones no deberían ser
las mismas.
—Ojalá pudiera ser humana a veces, —dice ella.
—Yo también —digo, sorprendiéndola. Su rostro se aparta
de mi pecho para que ella pueda mirarme.

251
 ●

—¿Por qué?
Suspiro ruidosamente. Ella me acaba de decir algo que hizo,
y lo que tengo que decir ha estado pesando sobre mí.
—Tengo un hijo, —digo. Se ve un poco perturbada —Ha
crecido, probablemente alrededor de tu edad. Lucifer tenía toda
esta idea de que podía crear más demonios, y nos envió a este
reino para impregnar a los humanos. Así que ahora tengo un
hijo, que biológicamente es mitad demonio, pero realmente no lo
es. Es simplemente humano.
—Entonces, ¿por qué querrías ser humano? —pregunta ella,
con las cejas fruncidas.
—He sido un padre de mierda. Lo veo de vez en cuando,
pero siempre mantengo mi distancia. La idea de sobrevivir a mi
hijo por varios miles de años me hizo sentir enfermo. ¿Cómo
podía permitirme preocuparme por alguien que sabía que iba a
morir? ¿Y en un plazo que para mí es un abrir y cerrar de ojos?
—¿Te preocupas por él?
—Lo máximo que me he permitido. Se supone que me
reuniré con él para cenar esta noche.
—¿Por qué no le dices lo que eres? ¿Cuéntale lo que me
acabas de decir?
—Siempre me ha preocupado que tener un demonio por
padre hubiera sido peor que tener uno ausente.
Vuelve a colocar su cabeza en mi pecho, respirando
suavemente.
—Dile lo que lo eres, Dax. Creo que te sorprenderá cómo
actuaría si supiera la verdad.
—La verdad es realmente difícil a veces.
—Sí, realmente lo es. —Ella me sostiene alrededor de mi
cintura con fuerza. Ninguno de nosotros se ha lavado, pero estoy
contento de tenerla aquí. Es bueno tener a alguien así, alguien
con quien puedas ser abierto y honesto. Cuando se trata de otros
demonios, siempre sostengo mis cartas cerca de mi pecho, nunca

252
 ●

queriendo expresar emociones vulnerables. Con Blair es diferente,

como si pudiera ser más de lo que he sido condicionado para
serlo.
El cálido rocío continúa golpeándonos, y planeo seguir su
consejo y decirle a Ryan todo lo que pueda.

253
 ●

Capítulo 27.
Blair.
Dax, Stevie y yo nos sentamos en silencio alrededor de la
mesa a desayunar lo que Stevie hizo.
Sé que está mal, pero realmente disfruto cuando Stevie está
estresada porque hace una tonelada de productos horneados.
Tengo un Croissant de chocolate, tocino y waffles en mi plato.
Los tres están rociados con almíbar. Lo único que rompe el
silencio es el llanto de Clover en el sótano.
—¿Tal vez deberíamos dejarla ir? —Stevie dice.
—Quiero decir que mi madre está muerta, por lo que el
aquelarre ya no está completo. No creo que puedan hacer nada.
Stevie me mira como si tuviera cinco cabezas mientras discuto
descaradamente la muerte de mi madre y el hecho de que yo la
maté.
—Oh, está bien. ¿Así que quieres dejarla ir?
—Sí, podemos hablar de eso más tarde.

254
 ●

La mano de Dax está en mi muslo, el toque siempre me

reconforta y me tranquiliza.
—Voy a trabajar con Kas y Asmo para ver a quién Mara
posiblemente ha poseído a continuación. Creo que lo mejor para
ustedes dos es quedarse en casa. Si necesitas salir por cualquier
razón, ¿me avisas por favor?.
—Sí, puedo hacer eso, —le digo, mientras tomo un trozo de
tocino de su plato, me sumerjo en mi río de almíbar antes de
darle un bocado.
—¿Estás seguro de que estás bien y no necesitas que me
quede?
—Estoy seguro de que.
Terminamos el resto del desayuno. El silencio es escueto e
incómodo. No estoy seguro de por qué Stevie se siente incómodo.
Tal vez nos escuchó follando, o el hecho de que ella sabe que maté
a mi madre. Dax probablemente no sabe qué decir después de
descargar sobre mí lo que probablemente pensó que era una
bomba. Casi lo soltó, siguió el consejo de Stevie y le contó todo.
Pero después de escuchar la suavidad en su voz, cómo desearía
haber sido mejor, cómo no se permitía amar a Ryan, yo no podía
hacer eso. ¿Cómo puedo ser responsable de lastimar a Dax?
Entonces, hoy va a ser para pociones, experimentación y el
comienzo de volver a colocar el mundo sobre su eje.
Acompañó a Dax a la puerta principal una vez que
terminamos nuestro desayuno, ambas de sus grandes palmas
acunan mi mandíbula.
—Voy a arreglar todo. Solo necesito que lo hagas
prométeme que te mantendrás a salvo.
—Te lo prometo —digo mientras coloca un tierno beso en
mis labios, sus pulgares suavemente rondando mi cara.
—Recuerda avisarme si sales de la casa.— me da una
mirada que me hace cosas.

255
 ●

—No saldré de casa. Ve a atrapar a esa perra psicópata que

está tratando de arrebatadme el cuerpo. Me mira antes de crear
un portal y salir de mi patio delantero.
Regreso a la cocina donde está sentado Stevie, con las manos
apoyadas debajo su barbilla
—¿Cuál es el plan?
—Crea una poción que haga que la gente olvide, pruébala
en Clover y luego dárselo a Ryan para que me olvide.
Stevie suspira y asiente con la cabeza.
—¿Estás seguro de que no solo quieres decirle la verdada?
—Después de anoche, no hay manera. Me dijo cuánto le
gustaría ser humano, para que no se sintiera como se siente
acerca de tener un hijo.
Stevie me mira boquiabierta mientras toma su grimorio,
hojeando las páginas.
—Sabes que esto es algo que te meterá en problemas con el
consejo, ¿verdad?
—Vale la pena el riesgo, —digo. Inclinándose sobre su
hombro.
Su dedo índice sigue unas pocas líneas de textos.
—Creo que si modificamos esta poción para restaurar la
memoria de alguien, podríamos hacer que funcione.
—Sabía que podía contar contigo, —le digo mientras
empiezo a recoger algunos de los ingredientes. Lavanda, conos de
aliso, bayas de saúco, incienso, suciedad de cementero. —Tengo
que decir, estoy impresionado de que ya tengas toda esta mierda
en la cocina.
Stevie está inmóvil, con la cadera apoyada contra el
mostrador.
—Creo que nosotros deberíamos hablar de anoche.
—Creo que deberíamos olvidarnos de eso.
—Blair, mataste a tu madre. Usaste magia de muerte en
otra bruja. Algo más que puede meterse en problemas con el

256
 ●

consejo. Puede que no te preocupes por tu vida por la forma en

que haces las cosas. Pero yo lo hago. Necesito que te preocupes.
Necesito que te cuides.
Coloco el frasco con la tierra del cementerio sobre la mesa y
miro a mi primo, su cabello rojo un desastre, bolsas debajo de sus
ojos.
—Ella trató de matarme primero, y ella iba a hacerlo de
nuevo. Ella te dejó inconsciente, por el amor de Dios. ¿Qué se
suponía que debía hacer?
—No digo que fuera injustificado. Estoy diciendo que estás
siendo descuidada y actuando como si no te afectará. Ni siquiera
sé cómo estás caminando después de usar un hechizo como ese.
—Stevie me mira de arriba abajo, como si tal vez mi carne se está
cayendo o hay algún signo de desgaste que no puede ver.
—Estoy bien, Stevie.
—¡Ese es el jodido punto, Blair! No deberías estar bien. No
después de matar a tu madre, tanto psicológica como físicamente.
—Siento no estar llorando en un rincón o no tener el alma
hecha jirones en pedazos, Stevie. Esto es lo que soy. Ahora, ¿me
vas a ayudar con esta poción o no?
—Sabes qué, hazlo tú mismo. Si no puedes encontrarlo en ti
mismo para preocuparte sobre tu seguridad, ¿por qué debería
hacerlo yo? —Stevie gira sobre sus talones y sube a su habitación.
Es la primera vez que veo a mi prima realmente enojada conmigo
y se siente como ácido bajando por mi garganta y estómago. Pero
soy demasiado terco para disculparme.
Puede que no sea mi especialidad, pero puedo hacer que esto
funcione. Refunfuñando e irritado, sacó el caldero de debajo del
fregadero y lo colocó sobre la estufa. Es 2022 pero todavía tienes
que usar un puto caldero, adivina eso. Una estufa eléctrica está
bien, pero si no usa un conducto antiguo como este pedazo de
chatarra milenario, no funciona.

257
 ●

Sigo las instrucciones. Agregando las flores, agua de luna y

una gota de mi sangre. Una vez que llega a ebullición, añado el
secado de ingredientes como tierra de cementerio, bayas de saúco,
lavanda y conos de aliso.
Las instrucciones dicen que se deje hervir a fuego lento
durante quince minutos, sin tocar ni revolviendo cualquier cosa.
Me aseguro de que la estufa no esté demasiado caliente y observó
cómo burbujea y lentamente se vuelve un asqueroso tono de
oliva. Francamente, la poción parece mierda. Al menos tengo el
sujeto de prueba perfecto en el sótano para administrar la poción
para eso. Nos beneficiará a todos si Clover se olvida de sus
pequeñas minis vacaciones aquí.
Después de quince minutos, tengo que hacer un
encantamiento sobre la poción.
—Nunc obliviscere me, obliviscere me in aeternum. —Repito
el canto cinco veces como se indica antes de colar la poción en
un recipiente de vidrio.
Honestamente, parece demasiado fácil, pero no voy a pedirle
ayuda a Stevie. Clover está llorando en el sótano, acurrucado en
la cama, cuando abro la puerta.
—Bueno, Clover, odio decírtelo, pero hoy es el día del
desalojo.
—¿En realidad? ¿Me estás dejando ir?
—Asumiendo que esta poción funcione, entonces, sí.
—¿Qué es? —ella pregunta.
—Si te dijera lo que es, entonces no sabrías si funciona o
no.
—¿Me matará?
—Lamentablemente no, ahora vas a beber, o te gustaría
seguir siendo un aprovechado en mi sótano?
Le paso el vial a su mano extendida, su puño lo agarra con
fuerza antes de tomarla. Veo como ella se atraganta levemente

258
 ●

cuando la poción lenta gotea por su garganta. Una mancha de

líquido verde está en la comisura de la boca y se ve mal.
Después de unos minutos, Clover mira interrogativamente
alrededor de la habitación.
—¿Sabes quién soy?
—¿Blair?, —afirma. Hmm, tal vez no funcione.
—¿Sabes por qué estás aquí?
—¿Dónde estoy? —ella responde, y trato de contener mi
sonrisa.
—¿Qué es lo último que recuerdas?
—Tenía muchas ganas de helado, —dice ella.
—Así es, y te golpeaste la cabeza y te traje aquí para
asegurarme de que estés bien.
—Eso es amable de tu parte, —responde, y yo sonrío y
asiento con la cabeza.
—Creo que tu cabeza está bien ahora. ¿Quieres ir a casa,
Clover?
—Eso estaría bien. Me siento cansado.
—Golpearte la cabeza te hará eso. Te llamaré un Uber —le
digo como subimos las escaleras.
Ingresé la dirección de la casa de Clovers en la aplicación,
solo cinco minutos después, gracias a Dios. Necesito a esta chica
fuera de mi casa.
—Tienes una linda casa, —dice ella.
—Gracias, Clover.
—No vienes mucho al aquelarre.
—Al aquelarre realmente no le gusto, —le digo.
—Solo porque tu mamá nos dijo que nos alejáramos. —Otro
golpe en el costado para no sentirme culpable por mi reciente
asesinato.
—Aquí, puedes destacarte aquí. El nombre de su conductor
es Jeff, y conduce un Honda Civic gris. Encantado de conocerte,
Clover. La empujo hacia el porche delantero y cierro la puerta

259
 ●

detrás de mí. Esta casa está inquietantemente tranquila, y yo

considero decirle a Stevie que lo hice solo y que no la necesitaba.
Que su consejo fue una mierda y la magia puede ayudarme
a resolver todos mis problemas. No lo creo, al menos soy lo
suficientemente maduro para no hacer eso. Lo que realmente
tengo que hacer es darle a Ryan esta poción antes de que se
reúna con Dax esta noche.

Sé que le prometí a Dax qué le diría si salía de la casa, pero

¿Cómo puedo decirle 'Salí de la casa para envenenar a tu hijo con
una poción para que se olvidara de mí existencia para que
pudiéramos estar juntos’? No creo que haya una tarjeta Hallmark
con algo así en él. Miro mi teléfono, sabiendo que Ryan
probablemente llegue al restaurante en cualquier momento.
¿Cómo diablos voy a hacer que se lo coma?
Estaciono mi auto en el estacionamiento de Lucia 's,
esperando a que Ryan llegue aquí. Mi plan es defectuoso y lo sé,
pero tiempos desesperados y todo eso. Mira como Dax salta de su
motocicleta, luciendo jodidamente caliente. Me aseguré de
estacionar en la esquina para que no vea mi Jeep. Cuando se
quita el casco y sacude su cabello, casi quiero salir de mi
escondite y decirle que se olvide de la cena.
En lo que podría ser el peor momento del siglo, Ryan se
detiene en su BMW y estaciona justo al lado de Dax y sale de su
auto.
Está bien, plan B. Observó cómo Dax y Ryan entran al
restaurante. Sabiendo que tengo que ponerlo en su comida de
alguna manera. Aquí está la esperanza de que ordene algo con
pesto.

260
 ●

Esperé unos cinco minutos hasta que sé que están sentados

y entró al establecimiento desde la entrada de empleados.
Sorprendentemente, no entiendo nada de las preguntas mientras
miro a través de la puerta de la cocina para ver dónde están
sentados.
—¿Qué número de mesa es ese? Se me olvida —Le preguntó
a uno de los asistentes en chefs.
—Mesa veintiuno.
—Gracias, —respondo, asintiendo con la cabeza antes de
agarrar un delantal para encajar.
—¿Quién eres? —pregunta uno de los trabajadores.
—Rellenando, Hex está cerrado por renovaciones. Lucía me
pidió que viniera a llenar.
El hombre me mira. Es flaco, alto y literalmente mira hacia
abajo, hacia mí por encima de su gran nariz. Sus ojos oscuros me
miraban amenazantes.
—Esta es mi cocina, no jodan nada.
—Lo tienes, —digo. Tan pronto como se aleja, espero a que
la camarera lleve su orden a la parte de atrás.
Me tiemblan las manos y me pregunto si podré sacar esto
adelante, estoy desesperado por hacer que esto funcione. Tal vez
estoy más desesperado por hacer algo en mi vida parecer menos
caótico. Parece que nada ha ido bien, pero necesito que esta cosa
esté bien.
Necesito a Dax.
El riesgo vale la recompensa. Si puedo hacer que Ryan me
olvide, entonces no herire a Dax, y podemos seguir estando
juntos como lo hemos estado. Si se entera de que le he mentido,
es posible que nunca quiera volver a verme. Este momento en que
me doy cuenta de que Stevie tenía mérito en lo que estaba
diciendo. Si yo fuera honesto por adelantado, podría haberme
ahorrado esta vergonzosamente y desesperada aventura.

261
 ●

No estoy seguro de cómo habría reaccionado Dax, pero

sabiendo ahora que le mentí todo este tiempo, cuando ha sido
tan abierto conmigo. No puedo dejar que suceda, estoy
demasiado metido.
El pedido terminó, y suspiro, mirando su pedido. Joder, no se
quién ordenó qué. Agarró a la camarera por la manga antes de
que pudiera irse.
—¿Qué ordenó el chico más joven?
—El penne alla vodka, —dice, mirándome como si tuviera
cinco cabezas.
—Gracias, —digo y gimo. De todas las cosas para ocultar
esta turbia poción verde, tendría que escoger esto. El chef me
arrebata el pedido de la mano y vuelve a mirarme.
En serio voy a prenderle fuego a este imbécil si no deja de
hacer eso. Lo observó mientras lava los platos, con toda la
intención de hacer mi movimiento cuando la comida está lista
para ser acelerada. Tengo la tapa de la poción abierta, lista para
hacer que funcione. Pasan unos ocho minutos antes de que su
comida esté lista. El cocinero suena el timbre cuando la mesera
viene a tomar sus platos. Soy rápido, descargando la mezcla verde
en el Penne y mezclándolo con la salsa lo mejor posible.
Sonrío con satisfacción cuando la camarera toma su plato y
lo pone delante de él.
—¿No te parece un poco extraño este color de la salsa?
—Ryan le dice a su papá.
—Quiero decir, todavía se ve bien, —dice Dax. Gracias, Dax.
Ryan toma un tenedor lleno y se lo mete en la boca. Siento
una abrumadora sensación de triunfo. Hasta que una enfurecida
Clover de pelo rizado irrumpe en restaurante y golpea el tenedor
de la mano de Ryan, haciéndolo salpicar en el suelo y llama la
atención de todos los que están cenando.
—Clover, ¿dónde has estado? —pregunta Ryan.

262
 ●

Los ojos de Dax se agrandan cuando mira a Clover y su

mirada recorre el resto del restaurante
Clover mira a Dax y hace una mueca.
—He estado encerrado en el sótano de Blair.
—Mierda, —dice Ryan.
—Intentó envenenarme, pero es una mierda para las
pociones. Fingí olvidar todo, pero la perra psicópata tampoco se
da cuenta de lo delgadas que son sus paredes. Ella-
La sartén que agarro en mi mano golpeó su cabeza y ella se
desploma en el suelo.
—¿Blair? —Dax pregunta, mirando entre mí y Ryan. A
nadie realmente le importa sobre la chica que debería haber
mantenido encerrada en mi sótano, fuera de combate en el piso.
—¿Conoces a Blair? —Ryan le pregunta a Dax.
—Ella es mi novia, —responde con orgullo, hasta que ve la
mirada en los ojos de Ryan.
—Tienes que estar bromeando, Blair. ¿Te follaste a mi papá?
¿Para vengarse de mí porque no quería estar contigo? Que
patético.
Dax deja el tenedor y frunce el ceño mientras mira la mesa.
—No fue así, Dax —digo.
—¿No fue? —él pide. Sus manos se apretaron en puños sobre
la mesa.
—Quiero decir, comenzó de esa manera, pero es por eso que
estoy aquí. Pensé que sería más fácil que Ryan me olvidara para
que así todo fuera bien.
—Espera, ¿me haces olvidar? ¿Cómo alguien usa la comida
para hacer que alguien olvide algo?
—Ese no es el punto, quiero estar con Dax. Es por eso que
estoy aquí para hacer las cosas bien —digo. Veo como Dax mira
hacia abajo a la mesa, casi puedo sentir la decepción que se
cernía sobre él.

263
 ●

—No eres más que una perra que hace las cosas a tu interés,
—dice Ryan.
—No la llames perra, —gruñe Dax.
—Así que eso es todo entonces. ¿La eliges a ella? No podrías
ser un buen padre para mí toda mi vida y ahora vuelves diciendo
que quieres una relación y entonces mi ex-novia te seduce, ¿y
ahora me abandonas?
—No, simplemente no la llames perra, —dice Dax,
pasándose la mano por el pelo oscuro. Veo lo conflictivo que está.
Cómo causé esto, los problemas que causé para él. Estaba
tratando de ser mejor, más que un demonio. Él quería esta
relación con su hijo y la he ido y la he jodido.
Dax mira a su hijo suplicante. Y no puedo soportar la
expresión de su rostro.
—Dax, cuéntale todo a tu hijo. Siento mucho haberte
puesto en esta posición. Ryan, debes saber que él no sabía que
salíamos antes de que empezaran las cosas. Eso no cambia el
hecho de que tenemos sentimientos el uno por el otro. Me
gustaría hacer esto bien. —Miro a Ryan suplicante. Odio esto
gilipollas, pero estaría dispuesto a hacer un trato con el diablo
para quedarme con Dax.
—No, a la mierda esto. Elige —dice Ryan y mi corazón se
hunde. Dax mira destruido mientras mira entre nosotros.
Tomó la decisión por él.
—Habla con tu hijo, Dax. Lo siento mucho.
—Blair…, —comienza Dax.
—Está bien, Dax. Sabes donde encontrarme. Hacer las cosas
bien con Ryan.
—Te vas directo a casa, ¿verdad? —Dax pregunta, todavía
preocupado por mi seguridad. Me duele el corazón y asiento
mientras contengo las lágrimas.
—Esto es jodidamente rico, —dice Ryan, y trato de dejar de
poner los ojos en blanco.

264
 ●

Clover gime en el suelo y Ryan la ayuda a sentarse.

—¿Podemos ir a un lugar más privado para discutir algunas
cosas? —Dax le pregunta a Ryan, y fuerzo una sonrisa mientras
giro sobre mis talones y dejó la casa de Lucia. Sin derramar las
lágrimas llenan mis ojos mientras salgo por la puerta principal.
Todavía tengo la esperanza de que podamos arreglar esto, pero no
veo cómo gracias a la posición que mi egoísmo nos ha puesto a
todos dentro.
Escuché que Ryan acepta hablar con Dax, pero necesita
llevarse a Clover primero en casa. Claramente debí haberla
golpeado con la sartén solo un poco más fuerte.
El golpe de la pesada puerta de madera aclara mis
pensamientos al igual que el aire fresco. El otoño está a la vuelta
de la esquina y el aire se siente más fresco y cubierto de rocío
contra mi piel. Mientras miro hacia arriba, un hombre guapo
con cabello rubio y ojos azules brillantes con un abrigo negro
oscuro se me acercan.
—¿Eres Blair Bellamy? —pregunta.
—¿Quién pregunta? —Respondo.
Alguien se me acerca sigilosamente por detrás, colocando
pesados hierros grilletes alrededor de mis muñecas.
—Blair Bellamy, estás bajo arresto por el secuestro e intento
de envenenamiento de Clover Simmons, así como el intento de
interferencia con la memoria de un exsul. Serás llevado al frente
del cabildo en aproximadamente tres horas.
Es la última voz que escucho antes de que todo se vuelva
negro y todo pensamiento racional se me escapan.

265
 ●

Capítulo 28.
Blair.
Mis párpados están pesados mientras parpadeo rápidamente
varias veces. Voy a mover mi mano para frotarme los ojos, pero
los fríos y pesados grilletes de hierro me impiden poder llegar a
mi frente. Hacen ruido mientras caen de nuevo al suelo. Me
duelen los brazos de estar atados detrás de mí, y gimo,
absorbiendo la apariencia de mi celular.
Tonterías clásicas de brujas, todo destello, sin clase. Estoy en
lo que consideraría un calabozo. Hay pisos de adoquines fríos; se
siente mojado y mohoso aquí. Hay un colchón que no es apto
para que ningún humano se acueste en la esquina, y un lavabo
justo al lado. Hay un hilo de líquido que gotea contra el adoquín,
y cierro los ojos solo escuchando el golpeteo rítmico de agua
salpicando contra la piedra. Goteo, goteo, goteo.

266
 ●

Realmente me fui y lo jodí todo. ¿Quién no está enojado

conmigo en este punto? Fez es realmente la única persona en la
que puedo pensar, y él no es una persona en absoluto. En este
momento, sentada en este espacio frío y lúgubre, me siento más
sola que nunca en mi vida, y eso es decir algo. Mi obstinación y
egoísmo me ha llevado a mi peor miedo: Irrevocablemente y
deprimentemente sola.
Debería estar más molesto por el hecho de que estoy a
punto de ser presentado en frente al consejo y cualquier castigo
que repartan. El hecho es que probablemente lo merezca. La
magia tiene controles y equilibrios y he estado tambaleándome
en el borde durante demasiado tiempo. Actuando como si fuera
mejor que los demás porque mi madre y aquelarre me
despreciaron. He usado mi trauma para justificar mi
comportamientos, y darme cuenta de eso hace que mi estómago
se revuelva. No pensé en eso.
Habría un día en que la retribución no me impulsaría, pero
no sé lo que podría motivarme. Mi autorreflexión tiene lágrimas
goteando por mi rostro. Detengo el suministro de agua
rápidamente y tengo que usar mi hombro para limpiar mis
lágrimas.
Espero que al menos Stevie todavía se preocupe por mí y me
ame es la única cosa que me mantiene unido en este momento.
Si me atrevo a pensar en el arrepentimiento y la tristeza escrita
en el rostro de Dax desde esta noche, voy a girar en espiral. Yo
solo necesito pasar esta noche, responder las preguntas del
consejo, aceptar mi castigo, y seguir adelante.
—Vamos, —ladra una voz junto a los barrotes de hierro
forjado de mi celda. miro y es el mismo hombre que me abordó
fuera del restaurante.
Por primera vez en mi vida, mantengo mi lengua afilada
encerrada, me levanto en mis pies, y camino hacia los bares. Él
los desbloquea con una llave maestra ridículamente grande que

267
 ●

se sostiene en un anillo con al menos otras veinte llaves de

diferentes formas y tamaños. Suenan mientras me acompaña a
donde sea que vayamos. El tintineo de ecos en los pasillos de la
piedra por la que estamos caminando. Casi como un ruido
burlón, como 'ja, perra, es hora de finalmente enfrentar tu
merecido'.
Caminamos por múltiples senderos estrechos. Hace frío y
claro bajo tierra donde estamos. El hombre me sostiene por el
codo mientras marca el comienzo a un área grande y abierta.
Todavía hay el mismo piso de adoquines, pero la habitación es
enorme y hay vidrieras en la parte superior de la habitación,
fácilmente setenta pies de altura. El hombre me pone de rodillas
sobre el suelo duro, frío, e irregular suelo. Maldita sea, ¿ni
siquiera puedes conseguir una silla durante tu sentencia?
Hay tres tronos frente a mí y ya sé quién vendrá antes que
ellos. Los he conocido antes, no aquí, pero antes cuando llegué
mis dos primeros strikes.
Entra la primera mujer, Isabel la verdadera. Ella parece estar
en su principios de los treinta, pero estarías equivocado. Ella es
fácilmente una de las más antiguas brujas vivas a casi dos mil
diez. Su cabello negro está suelto en un moño, su rostro pálido
está sin maquillaje y es desafiante. Su rostro muestra que ella no
acepta una mierda, y ella no sabe lo que es sonreír. Ella es
pequeña, pero espantosa.
La siguiente bruja es Hadiza, sin apellido. Ella es la más
cálida de las montón en apariencia, de todos modos. Ella al
menos sonríe. Su piel es de color marrón oscuro, su cabello en
largas trenzas llegando a su cintura. Su vestido es de color
naranja brillante y se vee amable, pero sé mejor. Hadiza puede
ser la más cruel con castigos de los tres.
Por último, tenemos a Nimue. Si alguien va a estar de mi
lado, es ella. Ella ahogó a unos cuantos hombres en lagos allá por
el siglo XV. Si alguien quiere entender mi necesidad de venganza,

268
 ●

ella lo hará. Ella todavía usa ropa que sería más adecuada para
una feria del Renacimiento. Su cabello rubio sucio alcanza su
trasero con dos largas trenzas en la parte delantera.
Las tres brujas toman sus respectivos lugares frente a mí. En
sincronización completa, todos cruzan la pierna izquierda sobre
la derecha y me miran.
Hadiza habla primero.
—Blair Bellamy, ha pasado bastante tiempo.
—Estaba esperando que prestes atención a nuestra
advertencia. —Nimue habla a continuación. Ella siempre ha sido
un petardo.
—¿Poner en peligro a uno de los suyos? Lastimar a alguien
en su propio aquelarre, es simplemente abismal, —grita
Elizabeth.
—Cuéntanos, ¿por qué secuestraste y envenenaste a tu
compañera bruja? En el proceso, ¿también casi exponiéndonos a
un simple mortal? —pregunta Hadiza.
—Es como si estas jóvenes brujas no recordarán Brasa
Valais, Trier, Pendle o Salem. Te diré, lo hago. Ver la carne de
algunas de mis hermanas arder en el apostar. Mírate —escupe
Elizabeth.
—Ni siquiera leal a los de tu propia especie, no
reconociendo lo que sacrificaron tus antepasados para que ahora
puedas vivir libremente.
Miro a Elizabeth, la vieja idiota. Recuerdo la historia de
aquellos juicios, cómo las brujas no se defendieron, cómo dejaron
que la mayoría de los mortales murieran en la hoguera para
ellos. Mataron a muy pocas brujas reales durante cualquiera de
los ensayos más famosos. Parece que a las brujas les gusta
reescribir la historia.
—Ahora, ahora, Elizabeth, déjala hablar, —dice Nimue.
Me aclaro la garganta y miró a Nimue mientras hablo.
—Hay dos razones por las qué secuestré a Clover y todo lo que

269
 ●

siguió. El primero empezó con ella, mi compañera bruja, como

tan amablemente has dicho, Elizabeth, durmió con mi entonces
novio. —Veo como Nimue hace una mueca ante la mención de
un novio.
—Si eso no fuera suficiente, todo mi aquelarre trató de
sacrificarme para ser el recipiente por un demonio. Eso tampoco
parece fraternal, ¿verdad, Elizabeth?
—¿Y cómo vas a ser creído? ¿Hay alguien que pueda dar
cuenta de esto?¿
—Sí, mi primo, Stevie.
—¿Stevie Sutton? —pregunta Hadiza.
—Sí.
—Llámala, August, —le dice al hombre en la esquina. Nos
sentamos y esperamos, todas las brujas mirándome.
Tardó unos veinte minutos, es entonces cuando me doy
cuenta de que August entra aquí.
¿El consejo tiene un demonio en la nómina?
Los ojos muy abiertos de Stevie miran alrededor de la
habitación y se pegan a mí, de rodillas en el piso. Su expresión
dice uno de 'te lo dije' y 'perra tonta'.
—¿Stevie Sutton? —pregunta Hadiza.
—Sí, suma sacerdotisa.
—Tu prima dice que tu aquelarre trató de sacrificarla, ¿es
correcto?
—Sí, señora.
—¿Por qué causa?
—Josie pensó que el aquelarre sería más poderoso si Blair
estuviera fuera de la imagen.
Las tres brujas fruncen el ceño. Hadiza se inclina para
susurrarle a Nimue y luego a Elizabeth.
—¿Por qué el aquelarre creería que sería más fuerte sin
Blair?

270
 ●

—Han estado tirando de su poder durante algún tiempo,

—dice Stevie, tratando de ser breve, pero también darles
suficiente información para que no joderlo.
—¿Y por qué un aquelarre estaría sacando poder de otra
bruja, y no de la tierra? —Nos estás diciendo que esto ha estado
sucediendo durante años y nunca lo han dicho? —pregunta
Isabel.
—Sí, eso es lo que estamos diciendo.
—¿Cómo disculpas a los mortales por casi enterarse de
nuestra especie? —pregunta Isabel.
—Honestamente, eso es más culpa de Clover que mía. Si ella
no irrumpió allí, él no habría sido más sabio.
—¡No interferimos con los humanos! —Hadiza dice en voz
alta. ¿Cómo es que las brujas nos asustamos fácilmente?
Fácilmente podríamos asumir cualquier cosa que la humanidad
trató de hacer contra nosotros. Pero siempre han sido tan
solitarios, tan pasivos, tan diferentes a mí.
—Algo es diferente en esta bruja, —dice Nimue.
—Ella no es como nosotros, —coincide Hadiza, asintiendo
con la cabeza.
—Nunca hemos tenido que dar un tercer strike. Debemos
hacer un ejemplo de ello.
—¿Incluso si lo que hizo fue en defensa propia? —Stevie
dice.
Hadiza voltea su cabeza hacia ella, sus trenzas vuelan hacia
la izquierda de su rostro.
—August, llévala a casa. —Stevie va a abrir la boca, pero
veo como el demonio la abre y se la lleva.
—Los demonios pueden ser útiles, pero no completamente
confiables, —dice Hadiza, claramente, leyendo mi confusión sobre
la presencia de August aquí.
—Ahora qué hacer contigo, —dice Elizabeth, incluso cuando
está siendo villana, ella no sonríe.

271
 ●

—Necesito mi magia, necesito protección ahora mismo,

—suplico.
—Deberías haber pensado en eso antes de despedir la
propuesta del consejo, —dice Elizabeth.
—Tú no entiendes. Alguien viene detrás de mí, si no tengo
mi magia, no tengo nada.
—No es nuestro problema. La magia tiene un precio.
¿Pensaste que podrías usar magia para resolver todos tus
problemas y no habría consecuencias? Conocías las reglas, has
sido advertido. Si somos indulgentes contigo, ¿Sabes lo que
podrían hacer otras brujas?
—Ha pasado demasiado tiempo desde que tuvimos una
sentencia, hermanas, —dice Elizabeth.
—No dejaré que te lleves mi magia —digo. Mis grilletes
alrededor de mis muñecas son ajustados. Demasiado apretado.
Voy a lanzar un hechizo y nada funciona.
—Ah, toda una herramienta, esos grilletes. Como dije, los
demonios pueden ser muy útiles realmente, —dice Hadiza. Miro
a Nimue. Ella no me rescatará, incluso si ella piensa que el
castigo es demasiado duro.
Las tres brujas se levantan de sus sillas a un ritmo
inquietantemente similar antes de que caigan sobre mí. Cada
uno de ellos poniendo una mano en mi hombro.
—Creo que un mes es justo, —dice finalmente Nimue.
—Así será, hermana, —dice Elizabeth.
La magia me golpea con dureza y siento que me está dando
un infarto. Como toda mi magia está siendo arrugada en una
bola de papel y lanzada con fuerza contra mi pecho. Como si
estuviera encerrado dentro de mi cuerpo, salvaje y rogando por
salir sin escapatoria.
—Ahora tu magia se sentirá como la de Clover, —dice
Hadiza. —Agust, sé bueno y dejala.

272
 ●

—Claro que sí, —dice. Con las cadenas todavía encadenadas

a mis muñecas, él me lleva a la entrada de mi entrada.
—Nada personal, —dice mientras me suelta los grilletes.
Froto tiernamente mis muñecas Me siento tan derrotado y
simple. Es doloroso tener tu magia dormida dentro de tu propio
cuerpo. ¿Qué tipo de hechizo puede incluso hacer eso?
Con mi orgullo y esperanzas hechos jirones, camino el largo
camino, la grava crujiendo bajo mis pies. Cuando llego a mi
puerta amarilla, tocó mi mano contra la madera. Todavía puedo
sentir mis protecciones. Al menos estaré a salvo aquí. Supongo
que tendré que esconderme aquí hasta nuevo aviso. Si no tuviera
la seguridad de eso, no sé qué haría.
—Blair, no, —oigo decir a Stevie, esperando que se moleste
por la audiencia.
Pero eso no es lo que sucede.
Veo como Clover sostiene un cuchillo muy similar, el que vi
a Paige sostenga contra la garganta de Stevie en el club de sexo.
—¿Clover?
—Adivina de nuevo, —dice, trago
—¿Mara?
—Realmente deberías ajustar tus protecciones después de
dejar que una víctima de secuestro se vaya, —dice ella.
—Claramente, debería haber matado a Clover.
—Eso también habría funcionado. Este es un traje de carne
conveniente, pero ya se está agotando, es débil. Te prometo que si
lo haces fácil, no lastimaré a tu querida prima. Intentaré que sea
indoloro para ti, no falla.
—¿Qué no es mi culpa?
—Que tú eras el que le importaba.
—¿De qué estás hablando, Dax?
—Papá equivocado. —El cuchillo se acerca a la garganta de
Stevie, y no tengo idea de qué hacer.
—Deja ir a Stevie, —pido.

273
 ●

—¿Me dejarás entrar? —Ella empuja la hoja hacia abajo, un

riachuelo de sangre goteando por la columna de la garganta de
Stevie.
—Te dejaré entrar, —le digo.
—¡Blair, no!
Sucede tan rápido, pero en cámara lenta al mismo tiempo.
observó como la tinta, humo, la negrura sale de la boca de Clover
mientras se empuja a través de mis propios labios. La sensación es
dolorosa y completamente extraña.
Mara se mete en cada grieta de mi ser. Es como si fuéramos
una compartiendo el mismo cuerpo con dos mentes, pero ella
tiene el control total. No puedo mover mis extremidades, no
puedo parpadear, no puedo hablar. Solo soy un pasajero en mi
propio cuerpo La peor parte es que no hay escapatoria.

274
 ●

Capítulo 29.
Dax.
Esta angustia es realmente la única forma en que puedo
describir cómo me siento. La traición de Blair duele, pero cuanto
más lo pienso, menos me sorprende. No dudo de sus sentimientos
por mí, pero hasta dónde llegó para ocultar lo que hizo es
preocupante. Es obvio que su intención inicial era lastimar a
Ryan, mi hijo. La persona de la que no puedo olvidarme en esta
ecuación. Me pregunto cuando cambió para ella. Cuando ya no
estaba destinado a la venganza. Su reacción en la ducha no fue
que yo tuviera un hijo, es que ella ya sabía y estaba tratando, a
su manera, de hacer las cosas bien. yo no quería dejarla ir, no
debería haberla dejado ir.
Ella necesita estar a salvo en este momento con Mara
suelta. Solo puedo esperar que ella fuera lo suficientemente

275
 ●

inteligente como para ir directo a su casa y no hacer ninguna

estupidez.
Luego está el hecho de que estoy sentado frente a mi hijo, a
punto de decirle todo lo que soy, sobre lo que siento por él, y
ahora necesito agregar una conversación sobre Blair en la
mezcla. Voy a necesitar grandes cantidades de whisky para
superar esto.
Todo empezó a tener sentido cuando Ryan dejó a la bruja
Clover en su casa. Estaba viendo a Blair, la engañó con Clover y
eso por lo qué estamos todos en la posición que estamos ahora.
Odio admitir que hay celos burbujeantes dentro de mí porque vio
a mi bruja, pero lo empujó profundamente abajo. Hay otras
preocupaciones en este momento.
—¿Entonces? ¿Querías hablar? —Ryan dice, deslizando un
vaso a través de su barra.
—Es hora de que te explique lo que soy y por qué soy como
soy. —Frunce el ceño y tomó un sorbo de su copa, evaluándome.
—No sabía que había un término especial para un imbécil
que abandona.
—Soy un demonio, —digo.
Él suelta una carcajada.
—Realmente pensé que esta noche no podía volverse más
loca, pero aquí tienes Sí, está bien, eres un demonio. Vete a la
mierda de mi casa.
Duele, y es desagradable. Pero me transformo ligeramente
en mi verdadero yo. Es más de una transformación media ya que
no puedo dejar este formulario. El mira como los cuernos negros
descienden de mi cabeza, mis ojos se ennegrecen y mi forma se
agranda Sus ojos se abren con miedo, y casi derrama su whisky.
Tan pronto como realizo la transformación, vuelvo fácilmente a
mi forma estándar.
Las reglas de Lucifer sobre exponernos a los humanos no son
tan estrictas como otros sobrenaturales Él entiende que hay un

276
 ●

tiempo y un lugar. Al hacer tratos, cuando es absolutamente

necesario. Le gusta el borde del miedo a los humanos, sabiendo
que hay demonios entre ellos, pero no lo suficiente como para
causar histeria con los otros sobrenaturales en esta dimensión.
—Santo infierno, —dice Ryan.
—De hecho, entonces, como estaba diciendo, soy un
demonio.
—¿Eso significa que soy un demonio? —Ryan pregunta, casi
me río mientras lo veo pasar una mano por su cabello, esperando
encontrar cuernos.
—No, y eso es de lo que quería hablar.
—¿Bueno?
—Me he mantenido alejado por lo que soy y por el hecho de
que eres humano. La idea de conocerte siempre me ha parecido
tan inconcebible. Que mi esperanza de vida es casi infinita y la
tuya es muy corta.
Se bebe el resto de su whisky.
—Estás diciendo que te mantuviste alejado ¿Porque no
querías verme morir?
—Precisamente, —respondo, feliz de que esté captando la
esencia.
—¿Mi mamá sabía lo que eres?
Hago una mueca, no queriendo arrojar a la mujer debajo
del autobús.
—Es complicado.
Él suspira, sirviéndose otro vaso.
—Esto es mucho para asimilar, toda la noche es mucho para
asimilar.
—Puedo entender eso. —Saco mi teléfono, esperando que
Blair me envíe un mensaje de texto.
Sin suerte.

277
 ●

—¿Qué pasa con Blair? Ella es humana, —dice Ryan. Le doy

una mirada que muestra que está siendo ingenuo. —¿Sabes que?
Esa rastrea. siempre hubo algo fuera de lugar en ella.
—No hay nada malo con ella, —digo a la defensiva.
—¿De verdad te gusta?
—Si, —respondo.
Me gustas más de lo que te gusta.
—No, es completamente diferente. Probablemente sea
egoísta pedirte que la dejes, pero voy a preguntar.
—¿Y si digo que no? —pregunta Ryan.
—No creo que pueda alejarme de ella. Va más allá de los
sentimientos y atracción.
—¿Es algo demoníaco? —pregunta, haciendo una mueca.
—Algo como eso. Lo entendería si no quieres tener nada que
ver conmigo, Ryan. Sé que me lo merezco, y sé que estar con Blair
solo me confunde. Pero quiero que sepas que me preocupo por ti.
Tengo la capacidad de. Me gustaría pasar más tiempo contigo,
pero si eso no es algo que quieras, lo entendería. No hay un libro
de reglas sobre cómo ser padre como un demonio. He hecho un
trabajo de mierda hasta ahora, pero me gustaría cambiar eso.
—Realmente necesito tiempo para procesar todo esto, —dice
Ryan, indicándome claramente para salir de su casa.
—Gracias por escucharme, —le digo, y él asiente con la
cabeza, no diciendo nada más mientras me lleva a través de su
puerta principal. La cierra suavemente, y dejó escapar el aliento
que estaba conteniendo. No fue fácil, pero se sintió como si el
peso que había estado cargando conmigo durante tanto tiempo
finalmente fuera levantado de mi pecho.
Ahora necesito ir a buscar a Blair y tener una conversación
muy diferente con mi pequeña bruja astuta.

278
 ●

Mara.
Maldición, este recipiente se siente perfecto. Finalmente es
mi pareja perfecta. Mi felicidad dura poco mientras observo a la
pelirroja tratar de escapar de la casa. Parece que la magia de mi
recipiente está inactiva. No importa, el mío no lo esta.
rápidamente persigo a la pelirroja, agarrándola por el cabello y
arrastrándola al sótano. Casi tropiezo con el cuerpo de la
embarcación que acabo de dejar. Traté de ser amable con la
forma en que la dejé, pero estaba demasiado emocionado.
Además, Blair realmente no se preocupaba por ella, así que me
ocupé del problema por ella.
—Blair, ¿qué diablos hiciste?
No le respondo, ya que no soy Blair y el idiota estaba allí,
presenciando todo el asunto.
—Todavía podría matarte, ¿sabes? —Le digo. Realmente, no
disfruto matando, bueno, la mayoría del tiempo. He tratado de
dejar mis vasos intactos. Mientras yo sabía que Josie moriría,
eventualmente, pensé que se lo merecía. Ella iba a sacrificar a su
propia hija por gritar en voz alta. Luego estaban, por supuesto,
algunas almas desafortunadas en el camino que estaban tratando
de detenerme, por lo que tuvo que suceder. Pero en general, el
proceso de matar es desordenado e injustificado en la mayoría de
los casos. Mira cómo mantuve vivo al demonio macho rubio.
Mientras era principalmente un experimento científico,
realmente no quería que muriera. Él es muy divertido, y tengo la
esperanza de que podamos ser amigos ahora que estoy en una
forma que puede sostener mi poder.

279
 ●

De todos modos, no hubiera querido tener un recipiente

masculino de forma permanente. Lo hice dos veces, y fue
divertido tener un pene durante unas semanas, pero después de
eso, la mujer es mucho más agradable. la suavidad de la figura
femenina es mucho más profunda y cautivadora. Probablemente
tiene algo que ver con haber tenido una forma humana
femenina durante tantos años antes de que no pudiera estar
contenido en él por más tiempo. No nos olvidemos de nuestra
capacidad para tener orgasmos múltiples.
He pasado mucho tiempo tratando de averiguar por qué
Blair fue bendecida y yo no. ¿No soy lo suficientemente adorable?
¿No se preocupaba por mí porque no era media bruja? ¿Puedo
siquiera confiar en que la información que dio Beelzebub era
exacta?
No importa, ahora soy Blair y me amarán.
Lanzó a la bruja a la habitación del sótano. No trata de
hacer cualquier cosa para lastimar mi recipiente, así que tengo la
amabilidad de no restringirla.
—No intentes nada, —digo, sosteniendo el objeto oscuro
cerca de su cara.
Subo la puerta lo mejor que puedo, moviendo fácilmente
varios artículos pesados para usarlos como barricada. He
investigado un poco sobre las brujas, pero no estoy
completamente seguro de todas sus habilidades. Con suerte, la
bruja toma mi advertencia en serio y se queda quieta, al menos
hasta que salga de la ciudad.
Subo las escaleras hasta que encuentro lo que asumo es el
dormitorio de Blair. Una serpiente me sisea salvajemente,
temblando frenéticamente.
—Cállate, o te aplastaré con mis propias manos, —le digo.
Detiene su silbido y se enrosca en un rincón de su recinto.
Agarró su bolso, miro sus tarjetas de crédito y sacó su
teléfono.

280
 ●

—¿Cuáles eran tus contraseñas, Blair?

Afortunadamente, no los necesito ya que todas sus
aplicaciones están basadas en huellas dactilares.
—No se puede vencer a la tecnología.
No voy a dejar que te quedes con mi cuerpo, perra loca.
—Oh, eres fuerte. Ninguna de mis otras naves podía
hablarme. Es como tener un mejor amigo incorporado. ¿Dónde
crees que los demonios realmente odiarían ir? —digo mientras
busco su información bancaria, felizmente sorprendida por los
fondos. —Aprecio que seas tan ahorrador. Ahora realmente
podemos derrochar por la mejor ubicación Los demonios
probablemente no son fanáticos del frío que me imagino.
Una vez que mi magia regrese, te expulsaré.
—¿Te refieres a mi magia? Solo necesitas sentarte y disfrutar
del viaje, Blair.
Dax vendrá a buscarme.
—Oh, espero que lo haga. Parece muy divertido. Tal vez
podría llevarlo a dar una vuelta antes de zarpar hacia nuestra
nueva vida. ¿Quizás Svalbard? Eso parece como un lugar muy
anti-demonio. Tal vez hay vampiros ahí en la oscuridad. He
querido probar con un vampiro.
Puedo sentir la mueca de Blair.
—¿No es Svalbard? ¿Qué tal Islandia?
Un golpe en la puerta rompe mi concentración, y pongo el
teléfono en la mesa para ver quién es.
—Oh, tal vez sea tu demonio caliente.
Si lo lastimas.
—¿Qué vas a hacer, Blair? ¿Darme el tratamiento silencioso?
Bajo las escaleras, disfrutando de cómo se siente este cuerpo.
Estoy feliz de que Blair tenga cuidado tan bien de este recipiente
para mí. Eso fue tan dulce de su parte.
Nosotros realmente vamos a ser los mejores amigos. Una vez
que supere este pequeño ataque.

281
 ●

Abro la puerta de madera para ver al demonio del sex club.

Dax, como ella le llamaba. Es bastante robusto y guapo. Puedo
ver la apelación.
—¿Puedo entrar? —él pide. Su mirada es esperanzada y
suplicante.
—Por supuesto, —digo, extendiendo un brazo y llevándolo
al suave sofá.
—Te ves mejor de lo que pensé que te verías, —dice.
—Soy fuerte, puedo manejarlo, —digo, tratando de descifrar
el contexto de la conversación.
—Le conté todo a Ryan. Incluyendo el hecho de que quiero
estar contigo. Pero necesito hablar sobre por qué sentiste que
necesitabas mentirme y cómo podría por tanto tiempo. —Él
coloca una mano en mi muslo, y se siente bien. En realidad es
lindo. Con suerte, esto llevará a más.
—Lo siento, Dax. Estaba siendo inmaduro.
Dax levanta una ceja hacia mí y me asiente con la cabeza.
—Si nos vamos a poner a partir de aquí, necesito tu honestidad,
pequeña bruja.
Sonrío, asintiendo con la cabeza, y Dax parece
desconcertado frente a mí.
—Blair, ¿por qué estás sonriendo y tienes una lágrima
rodando por tu mejilla al mismo tiempo?
Limpio la lágrima intrusiva de mi mejilla.
—Alergias, —respondo, poniéndome de pie.
—Déjame ir a buscar una servilleta.
—¿Blair?
No respondo de inmediato y gimo mientras me doy la
vuelta. Dax está sosteniendo el objeto oscuro que específicamente
le dije a Beelzebub que me consiguiera. Ese roedor inútil e
incompetente.
—¿Blair? —él repite.

282
 ●

—Blair no puede atender el teléfono en este momento,

—respondo. —Ella va a ser mi mejor amiga, sin embargo. Así que
a menos que planees apuñalarme con esa espada y lastimar a tu
preciosa brujita, te sugiero que retrocedas y me dejes salir de aquí
en paz. Prometo cuidarla bien —digo, frotándome las manos
contra mi nuevo cuerpo.
—Te vienes conmigo, —dice, dando un paso adelante.
—No iré contigo a menos que hayas cambiado de opinión y
quieras volver a divertirte. Puedo ser más como Blair si eso es lo
que quieres, lo prometo.
—¡Joder, deja ir a Blair! —él dice.
—No, ella es mía, y es perfecta. Mi nuevo mejor amigo va a
estar realmente enojado si te lastimo. Así que creo que deberías
irte.
—Blair, nena, ¿puedes oírme?
—¡Te dije que ella no está en casa!
¡Dax! apuñalarla!
—Blair, ¿cómo puedes decir tal cosa?
—¿Qué te está diciendo? —me pregunta
—No es asunto tuyo.
¡Dax! Portalla al Infierno.
—Blair, realmente no estás siendo una buena amiga en este
momento, —le digo.
—Blair, dime. Vuelve a mí, —suplica Dax.
Las palabras salen de mi boca, Blair empuja fuertemente
contra las paredes
—Apuñalala..
Dax parece dolido mientras levanta el brazo, la hoja brilla
en su mano. Pero él no me apuñala en el corazón, el único lugar
que me enviaría al Infierno. Él me apuñala en un punto de
soplado en el intestino. Quitándome el aire. Jadeo pesadamente
mientras un ruido pop a mi alrededor hace que mis oídos

283
 ●

zumben. Me agarra del brazo más o menos mientras me

transporta al infierno.

284
 ●

Capítulo 30
Dax.
Nunca en mis malditos sueños más salvajes me hubiera
imaginado usar un portal directamente a los aposentos privados
de Lucifer. Estuve aquí una vez hace mucho tiempo, porque
cuando hizo mi cuerpo corpóreo, esa es la única razón por la que
puedo para visualizar llevándonos aquí.
Su habitación es lujosa y oscura, las sábanas de satén negro
cubren una cama con dosel. Cama tamaño king california. Las
paredes tienen un lujoso papel tapiz de filigrana en negro
terciopelo. La mitad de la habitación está llena de glamour hasta
el punto de que no puedo distinguir qué más hay en la
habitación. La chimenea crepita y atrae mi atención y ahí es
donde veo a Lucifer sentado en un gran sillón de orejas, con una
sorprendida Lilith en su regazo.

285
 ●

La herida en el estómago de Blair es profunda y la sangre

cubre mis temblorosas manos. Mientras aterrizamos a la fuerza
en la profunda y rica alfombra burdeos. Mi mirada viaja entre su
cuerpo y donde se suelta la cola de caballo rubia de Lilith de la
mano de Lucifer y ella salta de su regazo, tirando de su camisa
hasta abajo para cubrir sus pechos. Mi enfoque está demasiado
puesto en Blair para preocuparme por Lucifer follando a su
asistente.
Solo puedo esperar que pueda rogarle que me deje curar a
Blair una vez que expulse. Mara de su cuerpo. Haría cualquier
cosa, daría cualquier cosa para asegurarme de que ella esté bien.
Que puedo arreglar lo que hice. Sé que no hubiera podido
conseguir la ventaja si no hería a Mara, pero no me hace sentir
nada mejor. Lastimé a Blair cuando le dije que nunca lo haría.
—¿Qué es esto? —Lucifer se pone de pie y camina hacia
donde estoy agachado en el suelo acunando el cuerpo de Blair.
—¿Por qué has traído a mi hija aquí?
—¿Mara es tu hija?
Frunce el ceño y se pone de rodillas. Él acaricia la cara de
Blair afectuosamente.
—Ambos lo son, —dice.
—Lilith, amor. Trae Milcom para mí.
—Sí, señor, —dice ella. Poniéndose más ropa antes de que
ella salga del portal de la habitación.
—Tienes que salvarla —digo.
—Las salvaré a ambos, —dice, mirándome, confundido.
—¿Cómo conoces a mi hija? —pide.
De todas las mujeres que pude haber encontrado, por
supuesto, era la del jefe. —Estamos involucrados
sentimentalmente. La quiero mucho —digo. Él me mira de arriba
abajo antes de ponerse de pie y tomar una cuchilla de la cómoda.
Estaría mintiendo si no pensara que iba a destruir mi alma
aquí mismo y ahora.

286
 ●

Me sorprende cortándose levemente la muñeca y

chorreando unas gotas de sangre en la herida de Blair. No tarda
mucho en cerrarse, y no me imagino que se curará por dentro.
Pruebo la piel, tocándola ligeramente con mi pulgar mientras
observo el propio injerto de piel.
—¿Quién la apuñaló? —pregunta, su tono amenazante.
—Lo hice, —digo.
—¿Hiciste qué? —Ahora casi grita, sigue agazapado junto al
cuerpo de Blair.
—Ella me dijo que lo hiciera. Quería a Mara fuera de ella.
Él chasquea la lengua.
—La situación con Mara es lamentable. Necesito persuadirla
para que no lastime a Blair.
—¿Cómo planeas hacer eso?
—No te preocupes por mis planes, Daxaddon. Tengo la
mitad de la mente para rasgar tu alma, aparta y prende fuego a
tu cuerpo corpóreo frente a todo el Infierno para que sea testigo.
Cierro la boca. No quiero molestarlo más de lo que ya lo he
hecho. Observó la forma en que mira a Blair, veo cierto parecido.
el pelo oscuro, los ojos marrones Si fuera cualquier otra
circunstancia, le preguntaría si sus ojos también cambian de
color. Está claro que ama a Blair a su manera. Nunca conocí a la
madre de Blair, pero parece que obtiene su falta de paciencia
para las personas de su padre también.
—Milcom, mi señor, —dice Lilith, trayendo al gran demonio
al opulento dormitorio.
—Ha preguntado por mí, mi señor, —dice Milcom, y tragó
audiblemente.
—Si bien. Una vez que mis hijas se despierten, podemos
hablar. Lilith, amor. ¿Me traerás algunas sales aromáticas?
—Sí, señor, —responde Lilith, y no me pierdo el ligero
movimiento de la boca de Lucifer. La pequeña mano de Lilith
agarra el vial antes de entregárselo a su señor.

287
 ●

—Gracias amor. Usted está despedido. —La pequeña

demonio femenina hace pucheros, su labio inferior sobresale
mientras mira a la entidad más poderosa del infierno.
—Ahora cariño, ¿qué he dicho sobre hacer pucheros? Te veré
en un momento.
—Sí, señor, —dice con descaro, y la mano de Lucifer se
aprieta. Yo no lo haría, dudo que el culo de Lilith vaya a pagar
por eso más tarde.
Mi mano ahueca la parte posterior de la cabeza de Blair
mientras descansa sobre mi muslo. Lucifer lleva la sal a su nariz,
y rápidamente toma una gran bocanada de aire antes de
sentarse y mirar a su alrededor.
—¿Vas a destruirme ahora? —pregunta Mara, mirando a
Lucifer a los ojos.
—¿Sabes quién soy? —él pide.
—Mi padre no me amaba lo suficiente como para
protegerme, —dice Mara, arrastrando los pies sobre su trasero, ya
no en mis brazos y tomando una actitud defensiva. Es difícil
correlacionar el hecho de que la persona que está asustada y
temblando no es mi bruja. La persona a la que quiero consolar
está en el fondo, lo sé.
Pero Blair no es quien está presente en este momento.
Todo lo que quiero hacer es sacar a este demonio de mi
chica y salir de aquí. Esta reunión familiar no es algo para lo que
me inscribí y, francamente, necesito conceptualizar que me estoy
enamorando de la hija del rey del infierno.
—Dulce niña, no. Nunca querría destruir a ninguna de mis
hijas, quiero que ambos sean felices y estén completos. —Nunca
he escuchado el sonido de Lucifer y parecer tan… humano.
—¿Pero por qué? ¿Por qué visitaste a Blair y le diste magia
para que se mantuviera íntegra y nunca me visitaste?
—Milcom, ¿le gustaría responder eso? —Lucifer dice, girando
para mirar al gran demonio, que parece aterrorizado. Es casi

288
 ●

cómico, si lo que está en juego no estuviera tan drogado en este

momento, probablemente estaría disfrutando de la lengua de
Milcom
Los ojos de Lucifer son de un rojo llameante, y mi pregunta
de antes es respondida cuando se trata de ese rasgo en particular.
—Mi señor, me he disculpado. Fue un error. No lo sabía.
—Tu error ha causado daño a mis dos hijas. ¿Cómo puedo
dejar que olvide esto, Milcom?
—Por favor, mi señor. Haré lo que sea.
—Sí, sí, lo harás. —La daga con la que apuñalé a Mara
todavía está a mi lado, hasta que Lucifer lo conjura en su mano,
sosteniéndolo contra el cuello de Milcom.
—El sacrificio perfecto que necesito para crear un cuerpo
propio para mi querida Mara.
—No por favor. Lo lamento.
Lucifer chasquea la lengua.
—Esto va a doler un poco. —Lucifer corta su garganta.
—Daxaddon, sé amable y pásame esa palangana.
Inmediatamente estoy de pie entregándole la palangana de
cristal de la mesa. Lo sostiene bajo su garganta, recolectando la
sangre de Milcom. Todavía no tengo idea de lo que planea hacer,
observó fascinado cómo el alma de Milcom se desliza de sus labios
y su cuerpo corpóreo se desmorona en el suelo. —Me ocuparé de
tu alma más tarde
Lucifer dice. ¿Quién sabe si Milcom entiende? él no va a
poder poseer a alguien en el infierno, solo otra alma perdida sin
propósito vagando por los pozos de fuego. Puede correr, tratar de
esconderse en esta dimensión, pero sería una pérdida de tiempo.
Lucifer lo encontrará y destruirá completamente su alma por su
traición.
—Mara, cariño. Por favor, deja el cuerpo de Blair. Prometo
darte un lindo, nuevo y brillante propio.
—¿Cómo puedo confiar en ti? —ella dice.

289
 ●

—Soy muchas cosas, Mara. Un mentiroso no es uno de ellos.

Tu eres mi hija y planeo arreglar las cosas contigo. No sabía que
vivías. Envíe a Milcom a la Tierra para ver si alguno de mis hijos
tenía mi regalo. Regresó e informó que eras completamente
humano, sin ninguna habilidad mágica.
Lilith encontró a Blair y me habló de ella. Así que cada año
en su cumpleaños, me aseguraba de que su cuerpo fuera lo
suficientemente estable para manejar la parte demoníaca de su
naturaleza.
—¿Por qué Blair no sabe quién eres? —ella pregunta.
—¿Ella te está diciendo eso? —él le pregunta.
—Sí, —responde Mara.
—Pensé que sería más fácil para ella vivir su vida como
bruja. Tan duro como lo intenté, y pensé que crear demonios en
la tierra era la motivación, es transparente que tengo más
sentimientos de los que consideraba.
—¿La amas? —ella pregunta.
—Las amo a las dos, y me gustaría hacer las cosas bien,
—dice.
—¿Cómo… cómo me vas a dar un cuerpo corpóreo? ¿Cómo
será? —pregunta.
—Necesito tu alma para recolectar la sangre en la
palangana, y podré crear tu cuerpo. Leo el alma para ver qué
cuerpo te queda mejor.
—¿Y Blair? —ella pregunta.
—Mientras dejes el cuerpo de Blair suavemente, ella debería
estar bien. Ella ha nacido, no ha sido creada de esta manera, por
lo que debes tener cuidado.
—Realmente nunca quise lastimarla. —Ella solloza.
—Lo sé, querido. Por favor, déjame hacer las cosas bien.
—Está bien, —responde Mara. Ambos miramos la
desposesión más gentil que hemos visto tener lugar. Mara se
desliza fuera del cuerpo de Blair como un lento zarcillo de humo

290
 ●

de cigarrillo. Estoy detrás de ella en un instante mientras

sostengo su cuerpo inerte una vez que Mara se expulsa por
completo.
Blair está respirando y mantengo mis dedos en su pulso.
Lucifer me mira, y asiento mientras él maneja la transformación
de Mara. Mientras he tenido mi propia transformación, otra cosa
es verlo.
La sangre levita, cada glóbulo actúa como una pieza de
rompecabezas mientras flota en el aire y rodea el alma de Mara.
Comienza como un cúmulo de sangre, pero lentamente se
transforma en una mujer humana. Los ojos de Lucifer están
cerrados mientras se concentra en crear su forma. Toma su
forma, más alta y más delgada que Blair. Su pelo tiene formas del
mismo color que su padre y su hermana, pero más largas y
rectas. Exhibe su forma desnuda mientras se derrumba en el
suelo en su nuevo cuerpo.
Lucifer rápidamente agarra una manta y la envuelve
alrededor de ella mientras tiene escalofríos. Ella sostiene su mano
frente a su cara e inspecciona sus nuevas manos.
—Soy una persona otra vez, —dice, con una sonrisa
radiante en su rostro.
—Como debería haber sido. No puedo disculparme lo
suficiente, cariño. Te prometo gastar toda mi energía en hacer las
cosas bien contigo y tu hermana.
Ella asiente con la cabeza.
—Creo que le debo una disculpa a Blair, —dice, y me burlo.
El cuerpo de Blair se mueve en mi agarre, sus ojos
parpadean rápidamente cuando su mano roza mi mandíbula, sus
ojos son morados mientras me mira.
—¿Dax?
—Estoy aquí, cariño. Tu vas a estar bien.
—Voy a matarla, joder, —dice. Ella intenta levantarse, pero
la abrazo contra mí.

291
 ●

—Bueno, creo que el parricidio debe ser la línea. No

agregamos el sororicidio.
—Sí, creo que no, —le dice Lucifer a Blair, y ella lo mira
fijamente. Nunca he visto a alguien darle una mirada como esta.
Sin mencionar el ligero escalofrío que veo en Lucifer mientras la
observa.
—Dax y yo necesitamos un momento. ¿Deberíamos usar el
portal a casa, o hay algún lugar para que nos acostemos aquí?
—Por supuesto, tengo sus habitaciones listas. ¿Lilith? —dice
su nombre, y aparece en su habitación, con los brazos cruzados
sobre su cuerpo.
—Amor, ¿puedes mostrar a las niñas su habitación?
—Ahora que se me permite ser parte de la conversación, me
encantaría. Por favor sígame. —Ella le da a Lucifer una mirada
de mierda, y el hombre no puede entender un descanso de las
mujeres en su vida hoy. Observó mientras se sienta en su cama,
manos en la frente y los codos en las rodillas. nunca lo hubiera
imaginado al mismo diablo teniendo tantas vulnerabilidades.
Tomó la mano de Blair en la mía. Ella se estremece ante el
toque, pero toma mi mano. Entre ella y Mara mientras Lilith
dirige a Mara a la primera habitación.
—Mara, esta es tu habitación. Si necesita algo, por favor
hágamelo saber, —dice.
—Eres realmente bonita y agradable. ¿Eres mi… um…
madrastra?
—Cielos, no, pero podemos hablar más tarde, —dice Lilith,
mostrándole a Mara su sonrisa mientras Blair y yo nos paramos
en el pasillo. La propiedad de Lucifer grita lujo y riqueza. Lilith
nos da una sonrisa tensa mientras nos dirige unas cuantas
puertas abajo.
Ella abre la puerta, haciéndonos pasar. Hay una gran cama
tamaño king con organza lavanda colgando de los pilares. El
suelo es de baldosas blancas y hay una tumbona morada en la

292
 ●

esquina, así como una estantería, llena hasta el tope, rebosante

de libros. Incluso hay una cantidad decente de plantas en la
habitación. Definitivamente no es lo que esperarías de un
dormitorio en el Infierno.
—Gracias, —dice Blair. Lilith toca su brazo.
—Dale tiempo. Si alguien puede confirmar que le importas,
soy yo, —dice dándole a Blair una pequeña sonrisa antes de girar
sobre sus talones y salir de la habitación.
Blair mira a su alrededor, sus dedos se deslizan por
diferentes partes de la habitación.
Voy a pararme detrás de ella, mi mano toca su cadera y ella
se estremece de nuevo.
—Lo siento, —dice ella.
—Blair, ¿qué pasa?
Ella se da vuelta para mirarme, sus ojos están llorosos, y
ahora miro sus ojos azul brillante como las lágrimas caen. Sus
brazos se envuelven a sí misma y suspira.
—Este ha sido el peor día imaginable. Primero todo con
Ryan, entonces el consejo me quita la magia. Soy poseída por mi
hermana psicópata perdida hace mucho tiempo. Luego, la peor
parte fue verte apuñalarme. Verte acercarte a ella.
—Sé que te lo dije, lo sé. Pero eso no me impide verlo.
—Cariño, sabes que nunca, nunca te lastimaría. Alguna vez.
Ella asiente con la cabeza, las lágrimas siguen cayendo.
—Lo sé. —Ella resopla y se limpia las lágrimas. —Luego está
la conceptualización de que soy la jodida hija del diablo y que
cómo me sentía toda mi vida podría haber sido fácilmente
explicada. He estado ahí arriba sufriendo, Dax. Él me mintió, él
tenía tantas posibilidades de decirme lo que era. Y aparentemente
soy un mentirosa como él.
Miro hacia abajo con su ropa manchada de sangre. Sin
saber cómo puedo hacer esto mejor para ella. No creo que haya
mucho que pueda decir. Entonces decido ofrecer comodidad.

293
 ●

—¿Te gustaría tomar un baño? —le pregunto

—¿Tomarás... tomarás uno conmigo? —Asiento con la
cabeza. Ella está conmocionada y tratando de envolver su mente
en todo lo que ha sucedido. No la toco mientras caminamos
hacia el baño. Una enorme tina de cerámica con patas está en él
en medio del cuarto. Mi mano agarra el grifo mientras abro el
agua y tapó el desagüe. Blair está detrás de mí, sin desvestirse.
—¿Puedo desvestirte? —Le pregunto y ella asiente con la
cabeza. Con ternura, comienzo a quitarle la ropa, empezando por
la parte superior. Se adhiere a su piel con fuerza dado la sangre
seca. Beso el lugar donde la apuñalé. Ni siquiera hay una marca,
pero conozco el lugar. Un pequeño suspiro deja sus labios y su
mano acaricia mi cabeza mientras me pongo de rodillas para
quitarle los zapatos, la falda y las bragas.
Me desvisto rápidamente y extiendo un brazo para que
Blair entre en el agua tibia. Una vez que se ha acomodado, me
coloco detrás de ella. Asustado de cómo ella reaccionaría, pero
necesitando que sepa cuánto me importa, envuelvo mis brazos
alrededor de su cintura y mece su espalda contra mi cuerpo.
Ella se relaja contra mi pecho, la parte posterior de su
cabeza descansa sobre mi hombro. Sus manos se envuelven
alrededor de mis antebrazos mientras el agua tibia suaviza sus
músculos
—Lo siento, —susurra.
—Yo también. Debería haber estado allí.
Se gira ligeramente para poder mirarme.
—No hiciste nada malo, Dax.
—Eres mía para protegerte, Blair. No debí dejarte fuera de
mi vista sabiendo que Mara todavía estaba ahí fuera. Fue
imprudente.
—Te lastimé, —dijo ella.
—Sí —digo, sin saber qué más responder. Ella me lastimó.
—Que no es algo tan simple como decir lo siento. Yo la perdono,

294
 ●

pero reconstruyendo la confianza que perdimos tomará tiempo.

Sin mencionar que no planeo dejarla salir de mi vista nunca
más.
—¿Está todo bien con Ryan? —ella pregunta.
—No estoy seguro. Le conté todo y le dije que quería ser
mejor. También le dije que no podía dejarte.
—¿Qué dijo él?
—No mucho, pero espero que vuelva viendo todo lo que
acaba de pasar con Lucifer, tu papá, me dan ganas de esforzarme
más.
—Hablaré con mi padre, Lucifer, quienquiera que sea, sobre
este programa de mejoramiento.
—Creo que después de esta noche ya ha cambiado de
opinión.
—Lo sé, yo estaba allí, —dice ella.
—¿Viste todo? —Ella asiente con la cabeza.
—Lo siento mucho, nena. —La sostengo más fuerte contra
mi pecho mientras inclina su cabeza y pasamos el resto del baño
en un agradable silencio. Ella se queda dormida contra mí, suaves
respiraciones salen de sus labios. lavó su cuerpo, quitando la
sangre y la mugre del día. Mi mente trabaja un millón de millas
por minuto mientras trato de pensar en cómo puedo mejorar
esto.
Envuelvo a Blair en una toalla esponjosa, la seco y la colocó
en la cama para descansar.
Salgo del dormitorio y deambulo por el pasillo para
encontrar a Lilith. Esta sentado en un escritorio, mirando
manualmente diferentes formularios.
—¿Lilith?
—Hola, Dax. ¿Hay algo que necesites?
—Necesito comunicarme con Kas o Asmo. ¿Tenemos un
tele-portal que pueda usar?
—Por supuesto, sígueme.

295
 ●

Sus tacones resuenan en el piso de madera mientras me

lleva a una habitación más pequeña, un demonio en su
verdadera forma se encuentra ante el tele-portal.
—Lilith, —dice, bajando la cabeza.
—Dax necesita hacer una llamada.
El demonio se mueve hacia un lado, y pongo mi mano en el
portal de comunicación. Es como mirar a través de un pozo de
los deseos. Viendo que quieres en un reflejo, la imagen no es
clara pero es lo suficientemente clara.
Veo la cara de Asmo. Parece que está en medio de algo.
—¿Asmo? —digo.
—Realmente tienes una mierda de tiempo, Dax. ¿Qué
quieres y dónde encontraste un tele-portal?
—Estoy en el infierno con Blair, la situación de Mara se ha
resuelto. Te necesito y a Kas para encontrar a Stevie y asegurarse
de que esté bien.
—¿Stevie está en problemas? —Oigo decir a Kas, aunque no
puedo verla.
—Esta bruja es un dolor en mi trasero. Iremos a ver cómo
está, —dice Asmo.
—Gracias. —Observó cómo sus ojos se abren ante mi
esfuerzo por mostrar gratitud.
Asiento con la cabeza hacia el demonio y salgo de la
habitación con Lilith.
—Gracias también, Lilith.
—Por supuesto, ya sabes, he estado esperando este día.
Lucifer la visitaba en su cumpleaños, siempre. Era su día favorito
de todo el año. Pero verla más a menudo era duro para él.
Entonces él me enviaría a vigilarla. Blair tiene un lugar especial
en mi corazón.
—En el mío también, —digo.
—Te deseo toda la suerte del mundo explicándole eso, —dice
ella.

296
 ●

—Gracias, —digo.
Ella me da palmaditas en la espalda.
—Vendrá.
Nos separamos en el pasillo y vuelvo a entrar en el
dormitorio. Veo como Blair duerme y sé lo que tengo que hacer.
No puedo evitarlo, necesito hacer que se sienta segura de que está
teniendo sueños sanos y que los eventos de hoy no son
inquietantes en sus sueños.

297
 ●

Capítulo 31.
Blair.
Me desperté sobresaltado, con el corazón acelerado y la
respiración pesada. Parpadeo abro los ojos, miro a mi izquierda y
veo a Dax mirándome con preocupación mientras toma mi
mejilla.
—¿Estabas en mi sueño?
—Lo estaba, —dice. Gimo y empujó mi cara más contra la
almohada.
—Quiero irme a casa, —digo.
—Lo sé, cariño, pero creo que primero debes hablar con tu
papá.
—¿Estás diciendo eso como mi novio o alguien que trabaja
para él? —preguntó bruscamente.
—Como tu novio, —responde secamente.

298
 ●

—No tengo mucho que decirle. Me mintió toda mi vida, me

dejó con mi terrible madre. ¿No estaba allí para Mara, causando
que se volviera una mierda?. Y mira que lío ha hecho con hacer
que los demonios se reproduzcan en la tierra. Siento que no lo
conozco o no quiero conocerlo.
Dax empuja suavemente mi cabello detrás de mi oreja antes
de que su gran palma tome mi mejilla de nuevo, y besó mi frente.
—No voy a mentir, Blair. La idea de que estés a la altura de
Lucifer me aterroriza y me excita.
No puedo evitar soltar una pequeña risita.
—Me pregunto cómo jodidamente la hija del jefe te va a
salir bien —digo.
Él gime, pasándose la otra mano por la cara.
—No me lo recuerdes.
—Al menos las cosas tienen sentido ahora. Todavía tengo
muchas preguntas.
—Es por eso que necesitas hablar con él, nada más, para
obtener respuestas a tus preguntas.
—Ugh, probablemente tengas razón.
Una parte de mí quiere que Dax intente tocarme, recuperar
esa conexión que tenemos físicamente. La otra parte de mí está
cagada de miedo de ser íntima de nuevo. Sé que le dije que me
apuñalara, y si estuvo en mi último sueño de noche, él sabe que
solo estaba viendo eso una y otra vez. No puedo evitar fijarme en
eso. He pasado por el infierno y he regresado, literalmente, en los
últimos días, y ese es el único evento que simplemente no puedo
borrar de mi mente.
—Oye, —dice, ambas manos sosteniendo suavemente mi
cara.
—Oye, —le respondo con voz suave.
—No voy a ninguna parte. Soy tuyo, Blair, y tú eres mía.
Nada va a cambiar eso. No me importa si tengo que arrastrarme
por el resto de mi vida o si tenemos que pasar la eternidad

299
 ●

aprendiendo a confiar el uno en el otro nuevamente. Vale la

pena. Lo vales.
Asiento con la cabeza y apoyó la mejilla contra su pecho.
Escucho su respiración mientras me acaricia la espalda. No me
estremezco mientras me toca paso a paso. En el fondo del ser de
mi alma, sé que Dax nunca me haría daño, pero mi corazón y mi
cerebro tienen dificultades para entender lo que sucedió. Hay un
ligero golpeteo de nudillos en la puerta, y Dax me mira para una
confirmación. Asiento con la cabeza.
—Adelante, —grita Dax.
Es Lilith. No sé mucho sobre el demonio que tengo delante,
pero parece muy gentil. Ella no es lo que te imaginas que es un
demonio.
Se ve dulce y como una muñeca Barbie.
—Lamento despertarte, pero estamos desayunando en el
comedor formal en media hora. Estamos esperando que te unas a
nosotros.
—¿Estamos siendo? —digo.
—Tu padre, yo, Mara y ustedes dos, —dice, con su voz
estable.
—Está bien, —respondo. Lilith sonríe y gira sobre sus
talones, su larga cola rubia de caballo rebotando detrás de ella.
Ella cierra la puerta, y yo gimo contra el pecho de Dax. Este
desayuno va a ser incómodo en el mejor de los casos.

El comedor formal es amplio, parece que acortaron el

comedor para albergar a seis personas. Mi padre, el maldito
diablo, se sienta en la cabeza de la mesa. De niño siempre vi
nuestro parecido. Sabía que era mi padre, no sólo en apariencia,

300
 ●

sino en la forma en que me miraba cariñosamente. ¿Cómo podría

él preocuparse tanto por mí pero mentirme y dejarme con la
gente? ¿Quién me deseaba mal?
Mara y Lilith se sientan al otro lado de la mesa. Lilith
sonríe mientras Mara mira hacia abajo, mientras su tenedor
empuja su huevo revuelto alrededor del plato.
Dax y yo tomamos nuestros asientos uno al lado del otro. Él
desliza su silla más cerca de la mía para que pueda poner una
mano tranquilizadora en mi muslo. Su pulgar frotando círculos,
manteniéndome centrado mientras miro a mi padre.
—Blair —mi padre comienza a hablar.
—¿Por qué mentirme? ¿Por qué no me lo dijiste cuando tuve
la edad suficiente para saber lo que era? ¿Sabes lo miserable que
estaba allá arriba? Cómo no encajaba. ¿Sabías que mi madre y su
aquelarre intentaron sacrificarme por Mara? —digo mirando
deliberadamente a mi media hermana.
—Lamento mucho eso, Blair. Ahora que estoy en mi cuerpo
corpóreo, algunos de mis pensamientos son un poco más claros,
—dice Mara.
—Oh, como cuando te apoderaste de mi cuerpo y te ibas a
follar a mi novio y mudarnos a una tundra ártica?
—Sí, ese sería un momento en el que no estaba pensando
con claridad. Fue confuso para mi mente no tener un recipiente,
y tenía a Beelzebub en mi oído diciéndome mentiras.
—Su alma ya ha sido destruida, —dice mi padre, tomando
un sorbo de zumo de naranja. Qué extremadamente doméstico.
—¿Por qué tener hijos? —digo, mirándolo.
—Sé que no quieres escuchar todo esto ahora, pero te amo.
Haría cualquier cosa por ti y tu hermana. Pensé que al dejarte
vivir tu vida en la tierra, estaba haciendo lo mejor para ti. Si la
gente supiera que yo tengo descendientes viviendo en una
dimensión diferente, te verían como mi debilidad, y no podía
permitir que te convirtieras en un objetivo.

301
 ●

—¿Por qué volviste para cada cumpleaños, entonces?

—Pregunto. El toque de Dax es gentil y evita que me rompa.
—Necesitaba asegurarme de que tu cuerpo pudiera contener
tu mitad demoníaca. Así que cada cumpleaños te concebí a mi
favor para que estuvieras a salvo.
—¿Pero no para Mara?
Mara mira hacia abajo y mi padre parece legítimamente
culpable.
—No lo sabía. Me gustaría que te quedaras en el infierno
conmigo, Mara. Para que podamos llegar a conocernos mejor.
Mi cuerpo se tensa y me duele el estómago. Él quiere que
ella se quede, pero yo no. Todavía no me quiere aquí. Mi papá me
mira. —Blair, me gustaría que te quedaras también. Pero lo
entendería si no estás preparado para eso. De cualquier manera,
me gustaría mostrarte cómo puedes abrazar tu lado demoníaco.
Creo que hay algunas cosas que puedo hacer para que tu cuerpo
sea capaz de manejar tanto a la bruja como al demonio dentro
de ti.
—No tengo mi magia en este momento, —le digo.
—¿Tú qué?
—El consejo, —digo.
—Malditos cabrones, —escuchó murmurar a mi padre y mis
cejas se levantan. —Me gustaría mostrarte mi afán por ser un
mejor padre recuperando tu magia.
Mis ojos se abren como platos, pero asiento con la cabeza.
Mi padre se levanta de su silla y extiende una mano. Dax aprieta
mi muslo antes de soltarme y me pongo de pie. Puedo entender
por qué la mayoría de la gente encontraría a mi padre
amenazante, pero no puedo ayudar sino sentir esperanza.
La mano de mi padre se extiende y yo la tomo. Su portal es
más suave que el de Dax.
Aterrizamos en el piso de adoquines en el centro de la
habitación donde tomaron mi magia

302
 ●

Las tres brujas están sentadas en sus tronos y jadean

cuando ven la cara de padre
—Lucifer, ¿a qué le debemos el placer? —dice Hadiza.
—Me ha llamado la atención que le quitó la magia a mi
hija. Me gustaría que se restableciera de inmediato.
—¿Hija? —Isabel pregunta.
—Sí, hija. Como puedes ver, su lado demoníaco a veces
prevalece sobre su naturaleza de bruja y no puedes
responsabilizarla por eso. No es su culpa que su alma difiere de la
tuya.
—Hay reglas, —dice Elizabeth.
—Creo que estoy por encima de tus reglas, y como una
extensión de mí mismo, también lo está Blair.
—No, no podemos dejar que esto siga así, —dice Elizabeth,
levantándose. Es entonces cuando ella está levitando en el aire y
justo en frente de la cara de mi padre.
—No estaba preguntando, Elizabeth, —le dice con calma a
la cara, observó como la bruja traga, con los ojos muy abiertos
mientras mira profundamente a la mirada del diablo.
—Está bien, —dice Isabel. Hadiza y Nimue bajan de su
estrado y se ponen delante de nosotros. Todas sus manos tocan
mi brazo mientras cantan. Es como si la bola de magia enjaulada
se suelta como una bomba en mi pecho. Mi padre me mantiene
estable mientras mi magia vuelve a mí.
Nimue mira a mi padre con avidez y él le sonríe.
—Mira tu ojo errante, Nimue, creo que has conocido a
Lilith. Ella inmediatamente mira se aleja y regresa a su silla.
—Me gustaría que se supiera que cualquier infracción
presentada al consejo sobre mi hija ahora será traída
directamente a mí. ¿Entendido?. —Las brujas se ven
extremadamente molestas. Realmente nunca había pensado en
nepotismo antes, pero actualmente soy un gran admirador.

303
 ●

Mi padre me tiende la mano y yo la tomo. Nos

teletransportamos al comedor formal pero que parece ser su
biblioteca privada.
—¿Podré acceder al portal? —Le pregunto.
—No veo por qué no, —dice. Toma un libro del estante y su
palma se desliza por el frente antes de abrir el texto y comenzar
a leer.
—Creo que puedo hacer de manera similar lo que hice por
Mara, básicamente haciendo que tu cuerpo siga siendo tuyo, pero
lo suficientemente corpóreo como para contener el demonio
dentro de ti.
Una vez que sabemos que es seguro, es realmente cuando
más de tus habilidades como demonio serán visibles.
Me ha estado pesando otra pregunta.
—¿Por qué mi mamá?
—Ella era poderosa. Pensé que reproducirse con un fuerte
sobrenatural, la habilidad aumentaría las probabilidades.
—¿Por qué sin embargo?
—¿No es el deseo innato de la mayoría de las criaturas
reproducirse, continuar su legado?
—La maté —le digo, sus ojos marrones mirando los míos.
—Lo sé, y destruí su alma cuando llegó aquí.
Asiento con la cabeza. Es un hombre difícil de leer, muy
lógico y directo con la forma en que maneja las situaciones.
Incluso si todavía estoy herido, está claro que a él le importa y la
violencia es su forma de demostrarlo. Puedo apreciar eso.
—¿Puedes quedarte aquí? —Me dirige a un espacio en la
biblioteca que es abierto. Observó con los ojos muy abiertos
mientras agarra un cáliz de cristal y se corta la muñeca,
sangrando en la copa. Su sangre es oscura y espesa mientras
llena el cristal.
—Esto no va a doler, —me dice. Cierro los ojos mientras
siento su círculo de sangre a mi alrededor. Siento que la

304
 ●

sustancia se filtra en mis poros. Si creyera sentirse poderoso

antes, esto no es nada. Es como un golpe completamente
abrumador de fortaleza.
Jadeo, abriendo los ojos. Mi cuerpo sigue siendo mío, pero
como si estuviera siendo reforzado, me siento impenetrable. Los
ojos de mi padre todavía están cerrados mientras él está
concentrado. Mirando hacia abajo a mi piel, me veo igual, pero
me siento más como si todo lo que me ha retenido en la tierra ha
sido lavado y estoy en mi forma definitiva. Como si ya no
tuviera que fingir.
Ya sé lo que soy y todo mi potencial está listo para ser
liberado.
Exhala mientras se sienta en la tumbona detrás de él. No se
mira desgastado, más bien cansado.
—¿Estás bien? —Yo le pregunto. Es la primera vez que lo veo
sonreír. Es pequeño, pero definitivamente una sonrisa.
—Estoy bien, cariño. ¿Cómo te sientes?
—Entero.
—Lamento no haberlo hecho antes.
—Más vale tarde que nunca —digo, encogiéndome de
hombros.
—Espero que tú y Mara descubras qué queréis pasar tiempo
aquí conmigo. Eso es todo lo que quiero.
—¿Tal vez podamos hacer las cenas los domingos o alguna
mierda? —Veo como Lucifer empieza a reír. Es retumbante y
profundo mientras se agarra el estómago.
—Tú, querida, definitivamente eres mía. Ahora, vamos a ver
a los demás. —Asiento con la cabeza mientras me dirige hacia el
pasillo. Tomó más del lugar que anoche. Es una finca hermosa y
opulenta. Claramente el infierno, bueno, al menos esta parte del
infierno no es lo que la mayoría de la gente asumiría.
Pasamos por delante de la habitación donde Dax y yo nos
alojamos anoche.

305
 ●

—Cuando sea que quieres visitar, esa habitación está ahí

para ti. Y Daxaddon, —dice la última línea con un poco de
desdén.
—¿No te gusta Dax? —Le pregunto.
—Daxaddon es un buen demonio, bueno en lo que hace.
Ciertamente no tiene edad apropiada, —dice.
—¿Cuán mayor eres tú que Lilith? —Yo le pregunto. Él me
mira.
—Joder, la manzana no cayó muy lejos, —dice,
manteniendo abierta la puerta del comedor formal. Dax parece
aliviado de verme cuando llego y me siento al lado de él.
Su mirada está evaluando mientras me mira de pies a
cabeza, cuando su mano toca mi muslo siento su magia con más
fuerza que nunca. El actúa como si el toque lo sorprendió y sus
ojos son cautelosos mientras mira a mi padre.
—¿Ella está completa ahora? —él pide.
—Sí, ella debería poder acceder a todas las partes de su
poder, no tan frágil como ella alguna vez lo fue.
Dax suspira aliviado. Su agarre en mi muslo es aún más
fuerte que antes.
—Esperaría que la ayudaras con su entrenamiento,
Daxaddon, —dijo mi padre.
—Por supuesto, mi señor, —responde Dax, inclinando la
cabeza y yo pongo los ojos en blanco.
Mara me mira al otro lado de la mesa mientras se muerde
las uñas.
—¿Blair?
—¿Sí?
—Me gustaría pasar algún tiempo contigo. No ahora, pero
tal vez después de haber estado en este cuerpo unos días?
—Mientras no me hagas daño a mí ni a nadie que me
importe, creo que estará bien.

306
 ●

—¡Lilith me va a enseñar a usar un portal hoy! —Mara le

dice a la mesa, Lilith y mi papá sonriéndole.
—¿Me vas a enseñar a hacer eso? —Me inclino hacia
Daxaddon.
Se inclina y susurra, para que solo yo pueda escuchar.
—Ay, brujita, voy a enseñarte tantas cosas.

307
 ●

Capítulo 32.
Dax.
—Necesito asegurarme de que Stevie esté bien y creo que yo
estaría más cómoda en casa, —le dice Blair a su padre.
—Siempre eres bienvenido aquí, y espero que quieras
visitarme pronto. —dice. Nunca antes había visto a Lucifer tan
suplicante. El hombre suele dar demandas, miradas y miradas.
No parece esperanzado ni cerca de suplicar. Pero la forma en que
mira a Blair es como si ella se fuera ahora mismo, nunca lo hará
regresar.
—Te prometo que volveré pronto.
—Daxaddon, una palabra, —dice Lucifer, mirando a Blair y
luego a mí. Asiento con la cabeza mi cabeza como Lucifer se pone
de pie y lo sigo a su biblioteca.
—Mi señor, —digo.

308
 ●

—Así es, su señor. Necesito que cuides de Blair. Enséñale

sobre su lado demoníaco. Asegúrate de que no se enrede en nada
desagradable.
—Por supuesto, mi señor, —le digo, listo para largarme de
aquí. Él podría haber sido dulce con Blair, pero la mirada que me
está dando en este momento es maliciosa.
—¿Y Daxaddon? —dice mientras salgo de la habitación.
—¿Sí? —Digo, dándome la vuelta para mirarlo.
—Hazle daño y puedes considerar tu alma destruida.
—trago saliva y asiento con mi cabeza.
—No se me ocurriría, mi señor —digo. Hay una primera vez
para todo. Ser advertido por el diablo sobre su hija es
definitivamente la primera vez que nunca quiero volver a
experimentar.
El infierno nunca ha sido mi lugar favorito. He disfrutado
de la libertad que Lucifer me ha dado y no planeo joder eso.
Sobre todo. No quiero volver a ver a Blair herida o molesta nunca
más. No estoy seguro de cómo es la vida cuando estamos curados
y no estamos trabajando activamente contra algún gran mal.
Pero estoy ansioso por averiguarlo.
—Blair, ¿estás lista para irte a casa? —le pregunto
—Sí, —dice ella, levantándose de la silla y tendiéndome una
mano.
Sin estremecerse cuando toco su piel. Su toque se siente
diferente ahora, como si estuviera menos frágil contra mi toque.
—Uh, así que supongo que los veré pronto, —dice, mirando
entre Lucifer, Lilith y Mara.
—Quizás una vez que Daxaddon te enseñe a usar un portal,
—dice Lucifer.
—Quizás, —dice ella. No querer estar en esta incómoda
familia funciona un segundo más, la llevó a su patio delantero.
Ni siquiera parece mareada mientras se para derecha en el
césped.

309
 ●

—¿Eso es lo que se supone que se siente?

—Solo será más fácil cuanto más lo hagas. podemos
empezar a trabajar en ello mañana si quieres.
—Me gustaría eso, —dice ella, dándome una sonrisa tensa.
—¿Quieres que me vaya? —le pregunto
—No, —dice ella, mordiéndose la uña. —Estoy nervioso por
ver a Stevie.
—Si ella no está aquí, debería estar con Kas y Asmo,
respondo.
Ella asiente con la cabeza y caminamos hacia la puerta
principal. Ella exhala cuando gira el pomo de la puerta. Tan
pronto como se abre la puerta, un olor inquietantemente
asqueroso se escapa, haciéndonos querer a los dos vomitar.
—¿Qué diablos es eso? —dice, usando su brazo para cubrirse
la nariz. Sus ojos llorosos.
—Clover, —respondo.
Sus ojos se abren cuando me mira y luego se encoge de
hombros, dándose la vuelta y caminando hacia el camino de
entrada, lejos del hedor.
—¿Al bungalow? —le pregunto Ella asiente con la cabeza,
tomó su mano suave en la mía y nos portal a la sala de estar.
Error épico.
—¡Ah! —Blair chilla mientras vemos a Asmo follar a Stevie
por detrás mientras ella cae sobre Kas. Todos ellos se vuelven
hacia nosotros.
—Vete a la mierda, —me dice Asmo.
—Parece que ustedes no estaban muy preocupados por lo
que estaba pasando con nosotros. Estaremos en mi habitación.
Ven a buscarme cuando hayas terminado con… sea lo que sea.
Muevo un brazo en su dirección y colocó un gesto tranquilizador
en la espalda de Blair y la dirijo a mi habitación.
Blair observa los alrededores, sin parecer impresionada.

310
 ●

—No es lo que hubiera imaginado para el dormitorio de un

demonio.
—Solo estoy alquilando el lugar.
Blair se sienta en la cama. Sus dedos recorriendo la colcha
de retazos cubriéndolo.
—Ahora que las cosas con Mara están hechas, ¿qué significa
eso para tí?
Me siento a su lado, poniendo una palma en su mano.
—Bueno, actualmente tengo un nuevo demonio para
entrenar y planeo seguirla a donde quiera ir.
Ella me mira por debajo de sus pestañas.
—¿Eso es realmente lo que tú deseas?
—Eso es realmente lo que quiero.
Ella se encoge de hombros.
—¿Para que podamos ir a cualquier parte? —ella pregunta.
—Hay múltiples dimensiones para explorar. He pasado
principalmente la mayor parte de mi tiempo en el Infierno y en
la Tierra.
—¿No tienes un trabajo que hacer?
—El nepotismo tiene sus ventajas, —le digo, sonriéndole.
—¿Te lo perderías? ¿Cazar demonios, ponerlos en línea?
—No, pero extrañaría no despertarme contigo todos los días,
ver tus sueños en la noche, tu suave culo en mis manos. Esas son
cosas que no podría vivir sin ellas.
Ella sonríe y apoya su cabeza en mi hombro. Todavía siento
que ella está reteniéndose de mí, pero al menos ella no se inmuta.
¿Conoces a alguien que pueda sacar el cuerpo de Clover de
mi casa?
—Sí, conozco a un chico.
—Él conoce a un chico, —dice en voz baja. No pasa mucho
tiempo hasta que nuestro momento se arruine y Stevie abre la
puerta. Huele a sexo y parece que ha estado completamente
profanada mientras mira a su prima.

311
 ●

—¿Estás bien? —ella pregunta.

Blair se burla.
—Claramente lo estás haciendo mejor que yo, demasiado
bien para limpiar la bruja muerta en nuestra casa.
—Oh sí. Odio decirlo, pero me olvidé de ella, —dice.
Apoyada en el marco de la puerta y mirando a Blair, pregunta:
—¿Y qué sucedió? ¿Cómo la sacaste de ti?
—Sabes, el caso simple de que soy la hija del diablo y Mara
era un engendro demoníaco desquiciado en busca de un
recipiente que pudiera contenerla. Ahora tiene su propio cuerpo.
Todavía parece una loca, pero supongo que tengo una hermana.
Stevie parece incómodo. Pero Kas entra y le frota el brazo.
—¿Supongo que te llevaste todo el crédito por su captura?
—Kas le dice a Dax.
—No, me dijeron que si no trataba bien a Blair, mi alma
sería destrozada en pedazos.
—Realmente necesitaba el favor de Lucifer, —oigo decir a
Kas.
—¿Por qué necesitas el favor de Lucifer? —Pregunto. Todos
mirando a Kas.
—Es complicado, y no importa ahora. Supongo que es hora
de que vaya.
—Espera, ¿te vas? —Stevie le pregunta.
—Ha sido divertido, dulce bruja, pero no puedo quedarme
aquí por más tiempo.
Stevie mira a Kas.
—Entonces voy contigo.
Kas le acaricia la cara con profundo afecto.
—Es muy peligroso.
—¿Por qué? ¿Por qué harías que me gustaras y luego
simplemente desaparecer?

312
 ●

—Soy un demonio, cariño, —afirma Kas claramente

mientras se da la vuelta. Stevie se sienta en la cama con Blair.
Claramente, ambos necesitan tiempo juntos.
Beso un lado de la cabeza de Blair antes de salir de la
habitación y seguir a Kas donde está hablando con Asmo en la
sala de estar.
—Un poco duro, incluso para ti, Kas.
—Es lo que ella necesita. ¿Preferirías que la pusiera en
peligro?
—¿En qué peligro estás, Kas?
—Oh, como si todos fuéramos mejores amigos ahora porque
trabajamos juntos en un caso. No te preocupes por mí, no
realmente. No hay razón para que me ayudes. Esto es algo que
necesito hacer por mi cuenta.
—Voy contigo, —dice Asmo.
Kas besa a Asmo y le sonríe.
—Hay una razón por la que te puse en el reino de las hadas
hace esos años. Ahora te dejo que te encargues de nuestra bruja.
Ser el socio que siempre has querido ser, —dice Kas. Asmo va a
abrir su boca, pero en un instante Kas ha salido de la habitación.
—Tengo que ir tras ella, —dice Asmo.
—¿Realmente no sabes a qué le tiene tanto miedo?
—Sabes, Kas, ella mantiene todo en un puto secreto. ¡Qué
perra! ¿Hacer que me preocupe por ella otra vez para
simplemente levantarme y dejarme? —Él rastrilla su mano a
través de su cabello rubio desgreñado. —Y ella incluso me ha
hecho con la pelirroja. ¿Qué se supone que debo hacer ahora,
Dax?
—¿Tal vez lo que Kas te dijo que hicieras? Si alguien
probablemente puede ayudar, es Blair, pero ella tiene mucho que
aprender primero.
—Lucifer realmente lo hizo. ¿Él procreó en este reino?

313
 ●

—Lo hizo, y creo que el programa de reproducción se

suspenderá.
—Él puede descontinuarlo todo lo que quiera, pero las
tartas de crema siempre estarán en temporada, —bromea Asmo,
tratando de ocultar cómo se siente. Me hace sentir incómodo.
—Está bien estar molesto, ¿sabes?
—No estoy jodidamente molesto. Estoy loco. Si alguna vez
vuelve a aparecer y me convierto en un idiota azotado por el
coño otra vez, tienes permiso para golpearme en el rostro.
—Anotado.
—Perdón por la niña muerta en la casa de Blair. Realmente
lo olvidamos.
—Está bien, enviar un wendigo por ahí.
—¿Todavía lo comerá si no está fresco?
—Mientras tenga suficiente hambre. Sin embargo, todos
deberíamos quedarnos aquí esta noche. —digo.
Asiente con la cabeza y se sienta en el sofá a mi lado.
—¿De verdad te estás follando a la hija del jefe?
—Sí, realmente lo estoy haciendo.
Blair sale caminando de mi habitación con un Stevie con los
ojos llorosos sosteniendo su mano.
—¿Ella realmente nos dejó? —le dice a Asmo.
—Ven, roja.
Ella se acerca y se sienta en su regazo.
—¿Pensé que ustedes dos no se gustaban? —dice Blair.
—Nosotros no, —dice Stevie, poniendo su cabeza contra el
pecho de Asmo mientras ella llora levemente y él acaricia su
largo cabello.
—No sé tú, pero a mí me vendría bien un poco de helado,
—me dice Blair.
—Eso suena perfecto, pequeña bruja.

314
 ●

Capítulo 33.
Blair.
—¡Ugh! ¡No funciona!
—Va a tomar un poco de práctica, cariño, —dice Dax.
Ha sido tan ridículamente paciente conmigo. Han pasado
dos semanas desde nuestra breve visita al infierno. No hemos
tenido sexo, no puedo usar el portal para salvar mi vida. Más, la
casa todavía huele a trébol muerto.
Nada se siente bien. Pensé que saber lo que era mejoraría las
cosas, pero todo ha sido mucho más duro. Es como si estuviera
atrapado entre ser una bruja y un demonio y no soy muy bueno
en ninguno de los dos en este momento.
No ser bueno en las cosas no es algo que haya
experimentado antes. Siempre soy bueno en las cosas, pero
últimamente parece que no puedo dejar de fallar. Desde que soy
parte demonio, ya no estoy en el aquelarre, algo que pensé que

315
 ●

quería, pero ahora me siento sola. Firmé el traspaso de Hex a

Stevie, que tiene más tiempo para manejar el día a día. Ya no
estoy seguro de cuál es mi pasión.
—¿Estás visualizando el dormitorio?
—Sí, estoy jodidamente visualizando el dormitorio. Hemos
pasado por esto. ¡No puedo hacerlo!
Me arquea una ceja y se cruza de brazos.
—He sido paciente contigo, Blair. Pero creo que necesitas un
incentivo.
Me cruzo de brazos y combinó su energía.
—¿Un incentivo?
—Entra a tu habitación y te azotaré y haré que te corras.
No portal y te azotaré para darte la liberación catártica que
necesitas en la sala de estar sin dejarte venir.
Mis mejillas se calientan, y sé que él lo ve cuando sonríe.
Para ser sincero, ninguna opción es realmente mala, pero venir y
no venir es enorme. Lo necesito. Necesito sus manos sobre mí,
poniéndome en ese espacio sin sentido que solo él puede.
—Entonces, pequeña bruja, ¿qué va a ser?
—Ya no soy solo una bruja.
—Siempre serás mi pequeña bruja, —dice, metiendo mi
cabello detrás de mi oreja.
—Intentaré de nuevo.
—Attagirl, muéstrale a papá lo que puedes hacer.
Mi cara es probablemente del color de un tomate mientras
despejo mi mente e imagino mi dormitorio. Las sábanas suaves,
mis plantas, Fez. Entonces me imagino exactamente lo que Dax y
yo podríamos estar haciendo juntos en mi habitación. Inhalo y
exhalo, despejo mi mente de todo menos de la ubicación en la
que quiero estar y lo que espero.
Es una sensación un poco estática cuando siento que mi
cuerpo cambia de lugar donde estoy de pie a donde quiero ir.
Cuando abro los ojos, me saluda el hermoso rostro de Dax. Ojos

316
 ●

verdes brillantes, arrugados en los bordes y sus hoyuelos en

pantalla completa mientras ahueca mi rostro.
—Parece que mi chica solo necesita la motivación adecuada.
Lo empujó con fuerza en los hombros, olvidando la nueva
fuerza que viene con ser un demonio. Se va volando contra mi
pared, haciendo una huella en forma de Dax esté en el panel de
yeso.
—Mierda, lo siento. —Se levanta de los polvorientos paneles
de yeso sonriendo.
—Tu trasero va a pagar por eso, niña. ¿Cómo lo quieres?
—tiro de mi falda, sin saber qué decir exactamente. Su mano se
envuelve alrededor de mi cuello. Veo cómo sus pupilas se dilatan
mientras mira sobre mi cuerpo. —¿Quieres que ponga este
cuerpo perfecto sobre mi rodilla y azotarte? ¿Te inclinas sobre la
cama? Tal vez debería tenerte parado en la esquina, con el culo
afuera, esperando mi mano. Eso te enseñará a no presionarme.
La anticipación de cuando voy a tocarte te hará temblar y
mojarte, deseándome. ¿Verdad, niña?
—Tu regazo, —respondo.
—Excelente elección, —dice. Tomando asiento en mi cama,
se desliza hacia atrás, toma una almohada y la coloca a su
izquierda. Voy a seguirlo y él chasquea la lengua. —Mucha ropa,
tirala.
Hago precisamente eso, no romper el contacto visual con él.
Necesito esto tanto y él lo sabe. Admitir que he estado luchando
últimamente es difícil para mí, y sé cómo puede hacerme sentir,
en qué tipo de mentalidad puede ponerme, y lo deseo.
Lo necesito.
Si estas dos semanas han demostrado algo, es que Dax es el
hombre que necesito en mi vida. Su paciencia es asombrosa, su
cuidado por mí es de otro mundo, y sé lo que es, pero es difícil
expresarlo. Es demasiado pronto.

317
 ●

Mi camisa y sostén están fuera. Deslizó mi falda hacia abajo

y se la tiró a Dax. Él me da su sonrisa torcida y arrogante antes
de que me quite las bragas y las coloque en su palma. Cómo hizo
la primera noche en mi salón, la trae a su cara y olfatea antes de
agarrar mi antebrazo y llevarme de vuelta. Apoyando mi cabeza
en la almohada que colocó allí para mí. no mentiré, la
configuración es cómoda.
—¿Recuerdas tu palabra de seguridad? —Asiento con la
cabeza y él golpea mi trasero.
—Palabras, niña.
—Planchette, —digo.
—Buena chica, —responde, sus manos amasando mis
nalgas. No es difícil, pero sin embargo, es una advertencia sobre
lo que está por venir.
—Extrañé este culo, —dice. Mientras su mano deja mi
mejilla y rápidamente vuelve a descender sobre mi carne. Gimo y
me sacudo en su regazo, mis manos moviéndose para proteger mi
trasero. No recuerdo que me golpeara tan fuerte al final.
—Ah ah. No puedo permitir que lastimen las manos de mi
dulce brujita.
Sus sombras que tanto me gustan se envuelven alrededor de
mis muñecas, sujetándolas a mi espalda. Incluso si tratara de
escabullirme de su alcance, no sería capaz. Otro zarcillo de humo
me acaricia la cara.
—Sabes que eres mi chica, verdad y nunca te lastimaría.
¿Esto es lo que quieres?
—Sí, papi, —respondo relajándome con su toque. La primera
bofetada me dolió y me impactó. Pero sé lo que se siente cuando
me lleva al límite de un dolor intolerable y me trae tanto placer.
Cachetada.
La bofetada me sobresalta, pero esta vez no intentó salir de
su regazo. Tomo su gran mano golpeando mi mejilla izquierda y
luego la derecha.

318
 ●

Siento mi cuerpo relajarse contra el suyo. El dolor me moja

y no puedo ayudar cuando intento frotar mis muslos juntos.
Su próxima bofetada es donde mi trasero se encuentra con
mi muslo y se escapa otro aullido a mí.
—¿Eso es bueno, Blair? —él pide.
—Te necesito —digo. Una parte de mí queriendo que me
golpee más fuerte, la otra parte queriendo que me folle sin
sentido. Estoy casi en el punto de ser un muñeca floja y
despreocupada en sus manos mientras amasa mi tierno trasero
antes de abofetear de nuevo
—Siempre estaré aquí cuando necesites esto, Blair. Cuando
necesitas salir de esa hermosa cabeza tuya. Eres mío para cuidar.
Cachetada.
—Mía para apreciar.
Cachetada.
—Mía para amar.
Cachetada
El sonido del último golpe rebota en la habitación y son
como campanas zumbando en mis oídos. Sus sombras
desaparecieron de mis muñecas inmediatamente cuando me
siento a horcajadas sobre su regazo. Me estremezco cuando mi
culo toca sus muslos vestidos de mezclilla, pero miro su
expresión. No creo haber visto a Dax ser tímido antes. Él parece
que está preocupado de que voy a correr hacia las colinas o no
decirlo de vuelta.
—¿Tuyo para amar? —Pregunto.
Él asiente con la cabeza y sus manos se envuelven alrededor
de mi cintura.
—Ese momento probablemente no fue el más profundo.
Estas sesiones son igual de catárticas para como ellos lo son para
ti. Te amo, Blair. Quise decir todo lo que dije.
Envuelvo mis brazos alrededor de su cuello y lo aprieto
fuerte.

319
 ●

—Yo también te amo, lo sabes.

Como mi cara está presionada contra su cuello, no puedo
verlo sonreír, pero lo siento.
Mi corazón late con fuerza en mi pecho mientras me alejo
del abrazo y aplasto mis labios contra los suyos. Él gime en mi
boca mientras tomo el control y profundizó el beso aún más. Le
muestro con cada paso de mi lengua lo mucho que lo quiero, lo
mucho que significa para mí.
Necesitando más, necesitándolo dentro de mí, levanto mi
peso de su regazo, apoyando mis rodillas en el colchón y
serpenteando mis manos entre nosotros para desabrochar sus
jeans y desabroche la cremallera. Me ayuda deslizándose los
pantalones hacia abajo mientras liberó su polla de los confines de
sus calzoncillos.
Sin que nuestros labios se separen, aprieto su longitud y lo
empujo dentro de mí. Dax gime en mi boca mientras me hundo
en su polla, tomándolo por completo.
No puedo ayudar cuando un pequeño ruido de lamento me
deja mientras agarro sus hombros y lo monto.
—¿Cómo podría vivir sin este coño? —pregunta y aprieto a
su alrededor. —¿Mi pequeño demonio tiene alguna sombra
propia?
Me concentro mucho, al igual que hice con el portal,
imaginando lo que puedo hacer. Veo como un pequeño zarcillo
se expande de mí. Es como si viniera de mí, pero no sé por dónde
empiezo y termina. El zarcillo empuja tiernamente el cabello de
Dax hacia atrás antes de que empuje su rostro contra mis pechos.
te juro que casi lo asfixió mientras acerco su rostro a mi pecho.
Sus manos agarran mi caja torácica justo debajo de la curva de
mis tetas.
Su lengua se extiende, prodigando mi pezón y jugando con
la perforación. El zarcillo es como una extensión mía mientras

320
 ●

juega con el cabello de Dax. Rebotó sobre su polla lentamente,

frotando mi clítoris contra su pelvis.
Con las manos de Dax envueltas alrededor de mi cintura,
estoy sorprendida por la sensación de sus sombras separando mi
trasero, agarrándome para moverme más rápido. Estoy intrigado
y no puedo evitarlo cuando tengo un zarcillo de mi propia magia
envuelve la suya.
—Joder —sisea Dax, su boca saliendo de mi pezón mientras
mira hacia arriba, a mí. —Vamos, salta en la polla de papá,
pequeña bruja.
Tan pronto como las palabras salen de su boca, mi ritmo se
acelera. Moviéndome contra él, tratando de encontrar mi placer.
—Eso es, úsame, hazme un lío, niña.
Esa es la frase que me mata cuando me destrozo encima de
él. Combinando las manos y sombras me sostienen y me siguen
empalando en su dura longitud. Mantiene el mismo ritmo,
empujando dentro de mí. Aprieto a su alrededor y no puedo
evitarlo mientras mi cuerpo tiembla por la intensidad de mi
orgasmo.
Su cálido semen me llena mientras sus manos se aprietan
alrededor de mi cintura, su barba se frota contra mi pecho
mientras me sostiene. Envuelvo mis brazos alrededor de él y
descanso mi cara contra su hombro.
Ambos jadeamos, los corazones se aceleran mientras nos
abrazamos. Miro hacia abajo y me doy cuenta de que está
completamente vestido mientras yo estoy desnuda, una vez más.
Me siento mucho más ligero que hoy. Tener intimidad con
Dax es catártico. Nunca dejaré pasar esto.
—Lo hiciste increíble, —dice.
—¿Montar tu polla?
Él se ríe. El ruido en su pecho me hace sonreír.
—Siempre eso, pero usar los portales y tus sombras. Lo
hiciste muy bien, nena.

321
 ●

—Gracias, —le digo, agarrando su cuello con más fuerza.

—Tengo un buen maestro.
—Mi polla todavía está dentro de ti. No me des ideas.
Acaricio su rostro, amando la sensación de su barba contra
mis dedos.
—Quería preguntarte algo.
—Bueno.
—¿Es divertido Halloween en el infierno?
Él sonríe.
—Lo más divertido.
—¿Podemos ir?
—Mi niña puede hacer lo que quiera.

322
 ●

Capítulo 34.
Blair.
Antes de que pueda comenzar oficialmente mi primer
Halloween en el infierno, llegamos al Festival de Halloween en
Hallows Deep. Mentiría si dijera que yo podría perderlo. He
estado allí todos los años desde que era pequeña. Stevie y yo lo
haríamos siempre ahorrando nuestro dinero para poder comprar
manzanas acarameladas, embudo de pasteles, y dispararle a
quienquiera que haya estado en el tanque de agua ese año. El
aire es nítido y frescas, y la nostalgia de las líneas de mi infancia
Main Street.
Vendedores, mesas de juego, puestos para tallar calabazas y
toda la comida que pueda imaginar.
Convencí a Dax para que se disfrazara. Estamos vestidos
como Gomez y Morticia Addams. Me costó amenazar con

323
 ●

llamarlo papá delante de mi papá, el diablo, para convencerlo de

que se vista como corresponde. Pero finalmente cedió, y yo no
podría estar más feliz. Se ve delicioso mientras besa mi brazo. Él
se negó a afeitarse la barba, pero también habría odiado
separarme de eso. Tengo extensiones en mi cabello y me siento
poderosa mientras empuja el cabello largo de mi hombro.
Me muevo sobre mis pies, estar bajo la completa atención de
Dax me hace algo. Sin mencionar el objeto extraño dentro de mí
provocando una ligera presión y hormigueo muy dentro de mí. Si
Dax cree que es el único capaz de sorpresas en el dormitorio,
tiene otra idea por venir. Esto definitivamente es una sorpresa de
Halloween que apreciara.
Estamos frente al concurso de tallado de calabazas y observó
cómo un niño de ocho años tiene una calabaza caníbal
devorando a otra. semillas y calabazas, y gelatina simulando
tripas por todos lados. Me hace sonreír.
—Joder, me encanta Halloween.
—Cuando estamos juntos, cariño, todas las noches es
Halloween.
Yo jadeo.
—¿Lo viste?
Yo le pregunto. Sus ojos brillan con picardía. Todavía
temprano en el día, pero las luces de Main Street hacen que su
piel brille. Él se ve perfecto
—Tenía que saber qué parte estaba jugando.
—Juegas bien, —le digo, tirando de la chaqueta de su traje.
—Entonces, ¿este es el festival de Halloween que tanto amas?
Me encojo de hombros.
—Tuve algunos de mis mejores recuerdos aquí. Fue siempre
algo que Stevie y yo esperábamos. Y como dije, me gusta jugar a
fingir.
—Creo que tenemos que volver a revisar este asunto del
maestro que mencionaste.

324
 ●

Me encojo de hombros ante su sugerencia mientras veo a mi

prima acercarse, tomados de la mano con Asmo. Desde que Kas se
fue, se han vuelto más cercanos. Me alegro de que mi prima
encontró a alguien en quien puede confiar, especialmente porque
las cosas con Dax y yo se han vuelto tan intensas.
—¿Cómo va la remodelación en Hex? —le pregunto. Pensé
que me sentiría más tranquilo cuando tratara de dejar el
restaurante, pero realmente, es solo un alivio. La idea de correr
parecía más abrumadora que agradable después de todo lo que ha
pasado.
—¡Excelente! La nueva iluminación va a entrar. Parecía una
pelea con lo mal que estaba el restaurante.
—¿Cómo va la jubilación, viejo? —Asmo le dice a Dax.
—No estoy jubilado, —responde.
—Pensé que eso es lo que te consiguió la hija del jefe. Una
cómoda pensión y sin trabajo administrativo.
Dax frunce el ceño.
—Mi trabajo en este momento es entrenar a Blair.
—Correcto, —dice Asmo, poniendo los ojos en blanco, y veo
a Dax ponerse rígido.
Tenía la sensación de que esto se avecinaba, que a Dax no le
gusta que lo encierren en este pequeño pueblo. Quiero hablar
más con él al respecto, pero ha estado tan invertido en ayudarme
a aprender cómo ser un demonio que no sabía cómo traer arriba
este asunto. Tal vez el Infierno sea el lugar adecuado para tener
esta conversación.
—¿Manzana de caramelo? —Stevie pregunta y yo asiento
con la cabeza, Dax me suelta la mano mientras la sigo a la
cabina. —Te vas pronto, ¿no?
—Stevie —suspiro. Por lo que puedo decir, Dax no quiere
estar aquí. Yo también he tenido el prurito de extender mis alas.
No estoy seguro si es por poder abrazar lo que realmente soy o

325
 ●

todo lo que pasó con mi aquelarre y mi madre. Hallows Deep no

tiene la misma atadura que solía tener.
—No estoy loco. Solo te voy a extrañar. Prometes visitarte
tanto como pueda.
—¿Tanto como puedas? —dice, sus grandes ojos llorosos me
suplican.
—Te lo prometo. ¿Qué hay de ti y Asmo?
—Bueno, él es un demonio y yo soy una bruja. Él tiene
cosas que hacer en el Infierno, y bueno, yo estoy aquí.
—Si alguien puede conseguirte un pase de entrada al
infierno, probablemente sea yo.
Ella envuelve sus brazos alrededor de mí y me abraza con
fuerza.
—Si alguien vale ir al infierno por, eres tú. Eres mi mejor
amiga, Blair.
La abrazó aún más fuerte.
—Esto es patético. No estamos conduciendo un puto puente
en un Ford Thunderbird. Siempre volveré a la ciudad. creo que
necesito esto para ver más del mundo. Bueno, el universo.
¿Supongo que universos?
Stevie solloza y se limpia los ojos.
—Solo desearía poder estar contigo y Asmo y que Kas nunca
se fuera.
—Lo sé, Stevie. —La abrazo una vez más antes de pedir
nuestro caramelo, manzanas y nos reunimos con los chicos.
Stevie le da un mordisco a Asmo y yo hago lo mismo para Dax.
No puedo evitar reírme cuando se frustra con lo grande que es el
mordisco que trata de tomar.
Hay un carraspeo detrás de nosotros, y nos giramos para
ver a Ryan de pie.
—Papá, Blair, —dice.
—Oye, Ryan, —responde Dax.
—¿Puedo hablar con ustedes dos por un minuto?

326
 ●

—Seguro. —Dax toma mi mano. Stevie me da una mirada

estremecedora sobre mi hombro mientras sigo a Dax y Ryan por
la calle. Casi tropiezo con una calabaza antes de recoger la cola
de mi vestido y pasar por encima de ella.
—Esperaba que quisieras hablar, —dice Dax, y puedo
escuchar el anhelo en su voz. Pero cuando miro a Ryan, que está
mirando nuestras manos unidas, todo lo que puedo sentir es
arrepentimiento. Remordimiento por cómo sucedió todo esto. No
me siento mal por las cosas que le hice a Ryan, necesariamente,
sólo las secuelas.
—Creo que tal vez podríamos ser amigos, como cuando estás
en la ciudad nos ponemos amigos del almuerzo. No creo que
tenga la capacidad para mucho más que eso. Pero en cuanto a
ustedes dos, no es de mi incumbencia. ¿Y Blair?
—¿Sí?
—Nunca me disculpé por cómo te traté, y espero que estés
feliz con Dax.
—Gracias, y lamento cómo sucedió todo, me importa Dax
mucho, y te agradezco que dejes de lado lo que hice para darle
una oportunidad. Realmente es alguien que vale la pena conocer.
—Si tan solo Ryan supiera una fracción de quién es Dax.
Lamentablemente, no creo que eso suceda nunca. Veremos a
Ryan envejecer mientras permanecemos igual. No puedo
imaginar cómo Dax ha tenido que llegar a estos términos con
eso.
Dax me sonríe y me aprieta la mano.
—Así que la próxima vez que esté en Hallows Deep tal vez
podamos ver las renovaciones que Stevie hace para Maleficio, —le
dice Dax a Ryan.
—Eso estaría bien. Me gustaría eso. —Ryan va a alejarse
pero se detiene al mismo al girar sobre sus talones contra el
pavimento de la carretera. —Odio preguntar, pero ¿alguno de
ustedes sabe lo que le pasó a Clover?

327
 ●

—No, —Dax y yo decimos al mismo tiempo. Ryan asiente

con la cabeza.
—Bueno, nos vemos.
—Nos vemos, —responde Dax.
Tan pronto como Ryan está fuera del alcance del oído,
aprieto la mano de Dax.
—¿Estás bien con eso?
—Sí, honestamente, es más de lo que merezco, y creo que es
todo lo que cualquiera de los dos podemos manejar.
Asiento con la cabeza mientras caminamos de regreso a
donde Stevie y Asmo nos están esperando. Asmo ahora tiene una
cerveza en una mano y un pastel de embudo en la otra.
—¿Estás seguro de que quieres llevarla al infierno? La
comida no está ni cerca de bien.
—Oh, estoy seguro.
—Voy a trabajar para conseguirle a Stevie un pase de
visitante al infierno, —le digo a Asmo y Dax. Ambos me miran
con incredulidad.
—La princesa de la oscuridad ya está buscando hacer
favores, al parecer. Me gusta, bruja mala. Realmente no eres tan
mala.
—Lastimas a mi prima y me aseguraré de que mi padre me
enseñe cómo profanar un alma.
Asmo levanta sus manos completas en un movimiento de
rendición.
—Calmarse, no queremos que tu padre se entere de esto.
Lo miro, y Dax toma mi mano.
—¿Estás listo para ir?
—Estoy listo. —Le doy a Stevie una sonrisa más, una llena
de promesas. Cuando llegue el Infierno, voy a encontrar una
manera de tener a mi prima todo el tiempo que pueda.
Ella simplemente no lo sabe todavía.

328
 ●

Como no está lo suficientemente familiarizado con el

Infierno, Dax es el que nos envía un portal. Él nos lleva a un
lugar en el que no he estado antes. Bueno, realmente, el único
lugar en el infierno que he sido ha sido la casa de mi papá. Hay
un desajuste de criaturas aquí, no solo humanos.
—¿La mayoría de las personas se ven como cuando
murieron? —le susurré a él.
—Solo en el Infierno. En cualquier otro lugar, serían como
esa tinta negra que viste cuando Mara dejó ese cuerpo. O cuando
Lucifer destruyó el cuerpo de Milcom.
—No estaba despierto para eso —digo.
—Probablemente lo mejor.
Dax sostiene mi mano con fuerza mientras nos abrimos
paso a través de las ataduras de la gente. Estamos en una especie
de estacionamiento, pero no hay autos.
—¿Dónde estamos?
—En línea con el mejor evento para el que puedes conseguir
asientos en el Infierno.
—¿Cual es? —Preguntó, apretando su mano. Golpea mi
trasero y me tenso. Él me mira con una ceja levantada, sin tener
idea sobre el tapón anal que tengo dentro de mí y cuánto me
afectó ese pequeño golpecito.
Se inclina, su mano empujando mis largas extensiones
detrás de mi cabeza.
—Paciencia, niña.
Inmediatamente me humedezco. Bueno, más húmedo.
Y él lo sabe mientras me sonríe. Sus dedos jugando con las
hebras largas Es como si un temporizador se apagará a nuestro
alrededor y tan pronto como lo hace, todos están desfilando
rápidamente a través de dos puertas dobles. son negros y
mediocre. Dax tiene un agarre firme en mi cintura cuando
entramos al edificio.

329
 ●

A partir de ahí es casi como una estación de tren con

diferentes pasillos que puedes llevar a cualquier lado. La
habitación es grande, pero oscura y no hay escritura en ninguna
parte.
¿Esto es un cine?
—Ah, por aquí, —dice Dax, llevándome a toda prisa por un
pasillo específico. A comienzos tropiezo conmigo mismo un par
de veces. Muy pocas personas están pasando por el mismo pasillo
como nosotros y me pongo receloso.
—¿Dax?
—¿Si bebe?
—¿Qué estamos haciendo?
—Celebrar Halloween de la única forma en que un demonio
debería hacerlo.
—¿Lo que significa?
—Lo que significa que estoy a punto de hacer que te corras
frente a una multitud de demonios. Van a ver como te hago
retorcerte y temblar bajo mi toque, restringido para que no haya
nada que puedas hacer al respecto. ¿Cómo te suena eso, niña?
Mis ojos están muy abiertos cuando lo miro. Estoy muy
decaído. Recuerdo la noche en el club y lo mucho que disfrutaba
que me observaran. Pero todavía estoy un poco nerviosa.
—¿Cuánta gente? —Pregunto.
—Estamos en una de las habitaciones más pequeñas, sólo
dos docenas.
Asiento con la cabeza. Solo dos docenas en demonios, ¿de
acuerdo? Puedo manejar eso, creo.
—Si no estás de acuerdo con esto, no tenemos que hacerlo.
—No, quiero hacerlo, —le digo mientras besa un lado de mi
cabello.
—La palabra segura todavía cuenta en el infierno, —dice.
—Dax, estás despierto, —dice una mujer. Ni siquiera puedo
mirarla porque estoy demasiado ocupado mirando a Dax.

330
 ●

—Vamos nena, va a ser genial. —Oh, ¿le creo? Con

entusiasmo

Mi coño está a la vista de unos quince demonios que nunca

antes había visto. Estoy sentado en un columpio sexual de cuero.
Mi culo posado en un arnés y mis pies en estribos. Mis manos
agarran las cadenas en el costado, tratando de relajarme en la
posición. Dax está sonriente, luciendo seductor como el pecado
mientras me ve en esta posición.
Es entonces cuando finalmente ve la joya rosa brillante que
brilla contra mi culo.
Él chasquea la lengua y tira ligeramente de la joya.
—¿Esto es para mí, pequeña bruja?
—Estaba a la altura de lo que me prometiste en Inferno,
—respondo.
Dax empuja el enchufe dentro y fuera de mí, lentamente.
Miro a la multitud como observan con cada empuje superficial.
—Qué buena chica, preparando este culo para mí. creo que
deberías ser recompensado.
Le sonrío mientras mira a la multitud. Él mira a los dos
caballeros más cercanos a nosotros. Están inclinados hacia
delante, con los antebrazos sobre las rodillas, como si estuvieran
tratando de acercarse lo más posible al espectáculo.
—Cuidado, muchachos, están en la zona de chapoteo.
—¡Dax!
—Oh, pequeña bruja, no estás en posición de regañarme.
Además, la forma en que mi coño está brillando para mí, sé que
te gusta.

331
 ●

Culpable.
—Es Halloween, así que tenía planes de dejar tu trasero solo
esta noche y concentrarme en tu coño. Pero parece que has
cambiado el de esta noche. —Su dedo se desliza a través de mi
humedad, haciéndome temblar.
—Tan encantadora esta noche. ¿Vas a ser mi dulce brujita
está noche?
—¿Es eso lo que quieres? —Le pregunto, arqueando una ceja.
—Te quiero tan mojado que tu semen esté goteando del piso
para que todo el Infierno vea. Luego, una vez que estés bien
empapado, voy a follarte el coño con este precioso complemento.
Después de que te corras, voy a tomar tu trasero. —Cambio mi
peso en el arnés, y Dax pone una mano en mi pantorrilla, para
estabilizarme.
Inclinándose para susurrar para que solo yo pueda
escuchar.
—Muéstrales lo que tu papá te hace, niña.
Dax cae de rodillas. Sus sombras ensanchando mis muslos y
sus pulgares extendiendo los labios de mi coño mientras su
lengua lanza mi entrada y rueda mi clítoris. Mi espalda se
arquea sin ningún lugar adonde ir. La cadena que sujeta el
columpio tintinea cuando las sombras de Dax me mueven de un
lado a otro, lo que me hace follar su rostro.
Su barba causa la fricción más áspera contra mí, y gimo
cuando sus dedos se deslizan dentro de mí. Juro que casi puedo
oír lo mojada que estoy. Miro salir a la audiencia y ver cómo los
asistentes se tocan o miran con fascinación. Tener el poder de
excitar a la gente me hace sentir más poderosa que ser un
demonio o tener magia. Me siento sexy y deseada, pero nadie me
desea más que el hombre entre mis piernas en este momento.
Con dos dedos grandes follando dentro y fuera de mí, los
labios de Dax chupan bruscamente en mi clítoris y sus sombras se
envolvieron alrededor de mis muslos, no pude detener mi

332
 ●

inminente orgasmo si quisiera. Mis piernas tiemblan en los

estribos mientras tiran mi cabeza hacia atrás y gemir en éxtasis.
Dax no deja de tocarme hasta que mi cuerpo tiembla y suelto
una mano, empujando su cabeza. Sus labios dejan los míos y me
estremezco cuando sus dedos me dejan.
—Mmm, no está lo suficientemente mojado. Les prometí a
los buenos caballeros un chapuzón en esta zona, —dice.
Poniéndose de pie y reinsertando sus dedos en mi sensible coño.
La presión de sus dedos en tándem es eufórica. Es como una
opresión en mi barriga. Sus dedos se enganchan hacia arriba
golpeando mi punto G. Es implacable con su mano, la carne de
su palma frotando contra mi clítoris mientras sus dedos follan y
fuera de mi.
—Eso es todo, —me anima Dax. Saco una de mis manos de
las correas y agarrar sus muñecas, con fuerza. Me sonríe
maliciosamente y no para de agregar otro dedo.
Es como si un maremoto golpeara mi núcleo desde el
estiramiento de sus dedos, empujando al borde. Una inundación
de liberación se escapa de mí y sobre la mano de Dax.
Hasta que escuchó la salpicadura de mi orgasmo golpeando
el piso de madera.
Dax me mueve en el columpio para que pueda ver el suelo.
—Buena chica, ahora creo que les gustaría ver tus tetas
rebotar mientras te follo por detrás.
Lo miro con los ojos muy abiertos, recuperando el aliento.
Él ni siquiera espera una confirmación mientras me contorsiona
en el columpio. Me da la vuelta para que una correa esté en mi
pecho, por encima de mis senos. El otro está alrededor de mi
vientre, mientras envuelve mis piernas en los estribos. Mis brazos
cuelgan frente a mí, sin saber qué hacer con ellos.
—No te preocupes, niña. Yo me encargaré de eso por ti,
—arrulla Dax. Las sombras envuelven una mano, dejándola
detrás de mi espalda, antes de que él tome la otra.

333
 ●

Es como si estuviera flotando en el aire, completamente a

merced de Dax. Podría hacer cualquier cosa que quisiera hacerme.
No puedo evitarlo mientras saco mi propia magia, mis sombras
entrelazadas con las suyas alrededor de mis muñecas.
Las manos de Dax agarran mis caderas bruscamente
mientras me penetra de un solo golpe, haciéndome gemir. Una de
sus manos tirando ligeramente del tapón anal haciéndome
retorcerse contra las correas. No tengo a dónde mirar excepto a
la audiencia que nos mira con éxtasis. Sé que mis tetas están
rebotando salvajemente con cada una de sus estocadas. No se lo
toma con calma mientras me folla. El hombre tiene experiencia,
mostrando a estos otros demonios a quién pertenezco y qué
voluntad es un hecho.
Disminuye la velocidad momentáneamente cuando su
atención se dirige al tapón anal. El estirarme con su longitud y el
tapón es intenso mientras mi respiración lucha por ponerse al día
con mi placer. Él saca el enchufe de mí y me estremezco por la
pérdida. Apenas lo empuja hacia adentro.
—Este culo va a ser mi muerte, —gime, antes de repetir
quitando e insertando el enchufe. La presión añadida con sus
embestidas profundas me hace gemir. Veo como algunos
demonios frente a mí se mueven.
Uno de ellos se saca la polla de los pantalones y se acaricia
mientras nos ve. Observo sus movimientos mientras Dax
continúa cogiéndome, sus embestidas son tan fuertes que todo lo
que puedo escuchar es nuestra respiración y el chasquido de
nuestra piel.
—¿Vas a venir por papá? —él pide. Gimo, no me siento
cerca.
—Tus palabras, Blair.
—Toca mi clítoris, —suplico, y no tengo que mirarlo para
saber qué está sonriendo. Una de sus sombras se envuelve debajo
de mí y juega con mi clítoris mientras me folla sin piedad. La

334
 ●

sensación es irreal. Envuelto en cuero suave alrededor de mi

cuerpo. Cómo Dax está jugando con mi clítoris, coño y culo. Ser
restringido y a su voluntad mientras otros observan. Envíos de
sobrecarga de estimulación me envían sobre el borde, un grito
arrancándome. Me aprieto alrededor de la longitud de Dax
mientras quita el enchufe. Oigo el ruido metálico del metal
golpeando el suelo y jadeo mientras se empuja lentamente dentro
de mí.
—Tan bueno para mí, preparando este culo. No creo que
esté cerca del rosa suficiente, —dice. Me aseguré de estar
lubricado y listo para funcionar antes del evento, y no puedo
esperar a sentir la recompensa de mi planificación previa.
Dax hace girar el columpio, de modo que la audiencia
ahora puede ver dónde está dentro de mi culo. —Creo que mi
dulce demonio necesita que le enrojezca el culo mientras la
enculo.
—Joder, —digo con voz áspera, el agarre de Dax en mis
mejillas castigando mientras él se queda quieto dentro de mí. Está
claro que sus sombras mantienen firme el columpio. Él agarra mi
mejilla izquierda mientras golpea la otra. Mi jadeo es fuerte
cuando los golpes me golpean abajo.
—Eso es todo, niña.
Cachetada.
—Tan jodidamente perfecto.
Ya no puedo ver a la audiencia, pero sé que todos se están
excitando con esto. Mostrar que se está poniendo para ellos. Sus
azotes no son tan duros como los ha hecho antes, pero
definitivamente me está sonrojando las mejillas.
Acelera el paso. Meciéndose dentro y fuera de mí con
fuerza. El golpe de su pelvis contra mi trasero, golpeando la
tierna carne que acababa de golpear. Él gime detrás de mí
mientras se queda quieto, llenándome con su liberación.

335
 ●

Dax me mantiene en esta posición por un rato, dejando que

la multitud mire mientras él gotea de mí. Suspiro satisfecho,
sabiendo que debería sentirme humillado, o avergonzado. Todo lo
que siento es satisfacción y orgullo, casi puedo sentir los celos
irradiando de la audiencia sobre el reclamo muy público de Dax
sobre mí. Él gira el columpio para que ahora pueda enfrentar a la
audiencia nuevamente.
Me toma un momento ordenando mis pensamientos, pero
cuando mi mente se aclara y miró a la multitud, que aplauden
levemente antes de salir sus asientos
La cantidad de liberación es obscena cuando miro el suelo y
la pelvis de Dax. Sus sombras me liberan mientras me ayuda a
salir del arnés. Ayudándome a estar de pie, sus manos se
envuelven alrededor de mis brazos mientras besa mi frente.
—Feliz Halloween, mi amor.
—Feliz Halloween, papi. —Se ríe, me levanta y me trae de
vuelta a una zona más cómoda.
El mejor Halloween de todos.

336
 ●

Capítulo 35.
Blair.
Dax me acuna en sus brazos, una suave manta lila me
envuelve cuando nos sentamos en un sofá de terciopelo rojo.
Realmente no tengo idea de dónde son, pero en los brazos de Dax,
siempre me siento seguro.
Me acaricia el pelo y hace suaves círculos en mi espalda.
—Eso fue algo increíble, —dice.
—¿Te gustó? —Pregunto.
—Pensé que iba a tener un ataque al corazón frente a una
multitud de demonios con lo ridículamente sexy que te veías con
el culo preparado con ese lindo tapón anal.
Mi cabeza está presionada contra su corazón. Lo escucho
latir. Lo que hicimos fue increíblemente caliente, pero ahora es el
momento de enfrentar la realidad. He estado esperando
discusiones sobre el futuro, pero es obvio que mis problemas de
abandono se están burlando de mí en el fondo de mi mente.

337
 ●

—Entonces, ¿tienes un lugar para vivir en el infierno? ¿O

volvemos a casa de mi padre?
Me levanto de su regazo para poder leer su rostro. Él hace
una mueca.
—Tengo un lugar, pero si te sientes más cómodo en el
palacio, podemos ir allí también.
—Me gustaría ver tu casa.
—Es un departamento pequeño, nada como la casa de
Lucifer.
Coloco mi palma contra su mandíbula, y su piel calienta la
mía. Su barba me hace sonreír.
—Cualquier lugar contigo es perfecto.
Me sonríe, mis hoyuelos favoritos a la vista.
—Entonces salgamos de aquí, —dice.
El agarre de Dax es fuerte en mi cintura mientras me hace
pararme, su brazo envolviendo a mi alrededor mientras nos
conduce a su apartamento.
Los apartamentos en el Infierno son, bueno, el Infierno.
Usamos el portal justo al lado de la ventana, es un estudio. Con
cama, cocineta, y un cuarto para baño. Parece que hay algún
tipo de sistema ferroviario público justo fuera de la ventana. El
ruido exterior es como me imagino que es Nueva York durante
Año Nuevo.
Dax se rasca la nuca.
—Realmente no pasó mucho tiempo aquí. —Puedo sentir lo
incómodo que está. Colocó un brazo tranquilizador sobre su
antebrazo.
—Es solo un lugar para dormir, —le recuerdo.
—¿Estás seguro de que no preferirías ir a Lucifer 's?
—Todavía soy una bruja, ¿sabes? —Le recuerdo, levantando
una ceja.
—Silentium, —susurro, apagando todo el ruido exterior.
Aunque el apartamento no es el mejor, al menos es tranquilo.

338
 ●

Dax me sonríe tímidamente mientras va a la cama Los dos

todavía estamos completamente desnudos del club. Algo que he
encontrado es que al hombre le encanta dormir desnudo. Le
encanta que yo duerma desnudo también, algo de fácil acceso.
No puedo negar que disfruto cuando me despierto con él
encima de mí, sabiendo que siempre me quiere. Sé que es parte de
su naturaleza íncubo, pero es solo para mi Dax no anhela a
nadie más de la forma en que me anhela a mí.
Especialmente con mi naturaleza demoníaca completamente
despierta. Es como si no pudiera conseguir suficiente.
Está claro que Dax no se siente del todo cómodo aquí, él
estaba más cómodo en Hallows Deep, pero nunca completamente
relajado.
Dax se acuesta, tirando hacia atrás de la manta de gamuza
beige para que gatee adentro. Su brazo ya estaba esperando que
yo lo abrazara. Sonrío y cambio en la cama No es muy cómodo,
pero de ninguna manera voy a pedir ir al palacio en este punto.
Mi cara está presionada contra su hermoso pecho, y las
yemas de mis dedos dibujan patrones contra su estructura
muscular.
—¿Dax?
—¿Si bebe?
—No querrás quedarte en Hallows Deep, ¿verdad?
—Quiero estar donde tú quieras estar.
—Dax, puedo decir que no disfrutas quedarte allí.
Su cuerpo se mueve para poder mirarme a los ojos.
Probablemente tratando de medir mis emociones del color de mis
ojos. He perdido completamente el glamour a menos que estemos
rodeados de humanos.
—Blair, podría pasar el resto de mi vida en esa ciudad y
estar bien. mientras tú estás conmigo.
Me apoyo en mi codo para mirarlo.

339
 ●

—Creo que me gustaría hacer algunos trabajos contigo,

experimentar los universos contigo.
El sonríe.
—¿Te gustaría eso?
—Mientras pueda ver a Stevie a menudo, sí, me gustaría
eso.
Él asiente con la cabeza.
—Sobre Stevie, —dice.
—No quiero pensar en eso ahora mismo —digo,
acurrucandome en su pecho.
—Está bien, bueno, mañana podemos hablar con Lucifer y
obtener nuestra primera asignación.
Sonrío contra su piel y él besa suavemente mi cabello.

La presión y la temperatura del agua en el apartamento de

Dax son una mierda. Supongo que las personas que se
encuentran en el infierno no deberían vivir una vida de lujo,
sino maldición. ¿No puede un demonio conseguir agua caliente
semidecente? Ambos nos duchamos y nos vestimos rápidamente
antes de llevarnos a la casa de mi papá.
Estoy de pie junto a Dax, nuestros dedos entrelazados,
mientras tomo unas profundas respiraciones
—Solo imagina una habitación en el palacio y déjanos ir
allí.
Asiento con la cabeza. Las imágenes flotan en mi mente
cuando finalmente aterrizó en un cuarto y portal.
Salón equivocado. Maldita habitación equivocada.
Tristemente, nos trasladé a la habitación de mi padre.
Parece haber dejado la más grande impresión.

340
 ●

Desafortunadamente, mi papá también tiene a Lilith sujeta y

completamente desnuda contra una Cruz de San Andrés.
—¡Oh, mierda, lo siento! —digo, agarrando la mano de Dax
y arrastrándolo fuera del cuarto. Estoy demasiado mortificado
como para siquiera mirar las caras de mi padre y Lilith.
Dax se ríe una vez que se cierra la puerta del dormitorio de
mi papá. golpeo su pecho ligeramente.
—Cierra la puta boca.
Está casi encorvado sobre la risa, con las manos en las
rodillas.
—¿Sabes? Dicen que las torceduras son hereditarias. —Lo
miro y me alejo. ——Oh, vamos, nena, tienes que admitir que es
gracioso, —dice, siguiéndome por el pasillo. Tengo la intención de
deshacerme de él cuando camine directamente hacia Mara.
—¿Qué es tan gracioso? —ella pregunta. Parece diferente,
un poco menos loca. Pero ella todavía tiene una energía
femenina soltera blanca muy fuerte.
—Nos transporté a la habitación de papá y él estaba, eh,
teniendo un momento con Lilith.
—Oh, no te sientas tan mal. He entrado en mi parte justa.
son como conejos —dice, y yo hago una mueca.
—¿Cómo te estás adaptando al infierno? —le pregunto,
tratando de hacer una pequeña charla y no mencionar el hecho
de que ella me poseía.
—Me gusta aquí. No creo que quiera irme nunca, —dice. le
doy una sonríe, sin saber muy bien adónde llevar la
conversación.
—Genial, eh—
Dos pasos me alertan de que mi papá y Lilith están
caminando por el pasillo. No hay vergüenza en absoluto escrito
en su rostro. Parece que el infierno es mucho más abierto a la
sexualidad que la Tierra.

341
 ●

—Mis hijas están juntas. ¿Almorzamos todos? —mi papá

pregunta. Mis mejillas están rosadas, pero asiento con la cabeza.
Miro a Lilith y ella solo se mira feliz y despreocupada como
siempre, su larga cola de caballo rubia aún en perfecta condición
mientras caminamos hacia el comedor formal.
Todos ocupamos el mismo lugar en la mesa que antes. Unos
sirvientes traen comida. Están encadenados y me pregunto qué
hicieron para conseguirles esto.
Curro. Mi padre puede ser muchas cosas, pero parece que
solo castiga a esas almas que verdaderamente lo merecen. Al
menos puedo esperar.
—¿Qué te trae al infierno, cariño? —pregunta mi padre.
No puedes decirle a tu papá que viniste aquí para un club
de sexo de Halloween.
—Dax quería mostrarme el infierno en Halloween —digo.
Mi papá mira a Dax, pero luego asiente con la cabeza.
—Ya veo, y la razón por la cual ustedes están aquí.
—Me gustaría ir a las asignaciones con Dax.
—Hm, ¿y cómo va tu entrenamiento? —Mira a Dax por esa
respuesta. Su mano está orgullosamente en mi hombro.
—Estamos trabajando en perfeccionar el portal y su fuerza,
pero ella lo está haciendo asombroso.
—Y no deseas quedarte en el Infierno, tomar el lugar que te
corresponde como mi ¿heredero? —mi papá pregunta. Casi me
atraganto con el sándwich que estoy comiendo y mira a Mara.
—Creo que estaría mejor en otro lugar, —le digo.
—Muy bien, ¿y tú, Mara?
—Me encantaría quedarme, si te parece bien, Blair. —ella
me mira culpablemente, como si estuviera tomando algo de mí.
—Lo prometo, estar con Dax, viajar en múltiples
dimensiones. Eso es lo que deseo.
—Muy bien, pero tengo una estipulación, —dice mi papá.
—¿Bueno?

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 ●

—Yo elijo tus misiones, no un manejador. De esa manera,

puedo verte a menudo.
—Eso funciona para mí, —digo. Miro a Dax, y no se ve tan
feliz acerca de esta revelación, pero le sonríe a su señor.
Terminamos nuestra comida con una conversación amable.
Las cosas no están tan cercanas como incómodas como lo fueron
la última vez. Mara es bastante callada y no puedo evitar hacer
lo mismo cuando le doy una sonrisa casual. Tal vez no me olvide
de ella poseyéndome, pero puedo tratar de perdonar. Ella me
devuelve la sonrisa y la observó relajarse.
Mi padre se seca el costado de los labios con la servilleta y
desliza la silla atrás.
—Muy bien, Blair y Dax. ¿Vamos a mi estudio a discutir su
primera tarea juntos?
Le sonrío y me deslizó de mi silla, ansiosa por ver cuál es
nuestro primer trabajo. Dax toma mi mano mientras seguimos a
mi papá al estudio.
Abre la puerta y entramos, Dax la cierra detrás de nosotros.
Mi papá le da a Dax un archivo.
—Este es el reino de los Kraken. Hay algunos demonios que
siguen prendiendo fuego a la mierda, matando gente. Sin una
fuente de alimento, los Krakens se están volviendo volátiles.
Ninguno de estos demonios es corpóreo. Tú deberías poder
exorcizarlos o apuñalarlos con ese útil cuchillo que tienes, Dax.
Dax asiente con la cabeza.
—¿No crees que esto es demasiado? —él pide.
—Ella es la hija del diablo, y la mayoría de estos demonios
son de bajo nivel. Debería estar dentro y fuera muy rápido.
—Dax vuelve a asentir con la cabeza.
—Después de completar tu misión, regresa para la siguiente.
Dax me entrega el archivo.
—Dax, ¿puedes darnos un minuto a mi papá y a mí?
—Claro, —dice, apretando mi mano.

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 ●

—Gracias por confiarme una misión real.

Mi papá me abraza y eso me recuerda todos mis
cumpleaños. Siento su amor por mí en su abrazo.
—Por supuesto. ¿Hay algo más, Blair?
Nos separamos de nuestro abrazo.
—Si un alma fuera a, no sé, terminaría en el Infierno. Y
realmente quería esto, un alma para tener un cuerpo corpóreo.
¿Es algo que harías por mí?
Mi padre me sonríe. Mejor aún, cariño. te enseño como
hacerlo tú mismo.
—Oh, ¿y mi familiar puede quedarse aquí cuando Dax y yo
estemos en misiones?
—Por supuesto cariño.
Lo abrazó de nuevo. El abrazo es fuerte y cálido.
—Gracias Papa.
—Siempre, mi querida Blair.
Se sienta en su escritorio y salgo de la oficina, tomando la
mano mi mano en la mía.
—¿Todo está bien? —él pide.
—Será, —respondo.
—El reino de los kraken no es una broma. ¿Seguro que estás
preparado para esto?
—Absolutamente, —respondo. Él sonríe mientras nos
transporta a una dimensión y es el comienzo de una aventura
que nunca podría haber imaginado, incluso en mis más salvajes
sueños. No importa qué color de gris traiga cada día o en qué
universo estamos adentro, siempre estaremos al lado del otro.

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 ●

Capítulo 36.
Dax.
Por mucho que me pique esta dimensión del agua, no me
importa la vista de Blair en bikini. Ella no se broncea; ella
deletrea su piel para quedarse perfectamente pálida como es. Su
serpiente toma el sol junto a ella, con suerte él puede relajarse en
el infierno por un tiempo en esta próxima misión. Él toma
demasiado del tiempo de mi bruja.
El traje de baño negro se pega a sus pechos, dándome una
excelente vista de sus pezones perforados.
—Tenemos que volver al infierno, nena.
—Pero no quiero, —dice, girando la toalla y dándome una
vista gratuita de su culo. Todavía hay un pequeño moretón en su
mejilla izquierda. Ella nunca cura sus moretones después de una
sesión. Nuestro juego solo ha conseguido más intenso a lo largo

345
 ●

de los años. El impulso de agacharme y morderlo, luego seguir mi

camino con ella, es fuerte.
—Lo siento, cariño, las vacaciones terminaron. Lucifer tiene
un nuevo trabajo para nosotros. Mara también está lanzando
una especie de fiesta del infierno.
Mara ha llegado a crecer en nosotros. Ella toma seriamente
su trabajo como princesa del infierno. Aunque Blair es mayor, no
es un título ella quería, ella quiere explorar y puede sonar
engreído, pero pasar su tiempo conmigo.
—Uf, las vacaciones son mucho mejores. ¿De qué sirve ser
inmortal si tienes un puto trabajo?
Ella no está equivocada, pero le encanta la emoción de la
caza tanto como yo. La semana pasada, tuve que bajar el tono
un poco cuando estaba torturando a un demonio con fuego. Mi
polla se pone dura pensando en la sed de sangre en sus ojos de
esa noche. Está casi garantizado que estamos follando después de
que hagamos algo violento. Es un ciclo interminable que no
nunca quiero quitarme de esta pequeña bruja ha capturado mi
mente, cuerpo y alma. Donde ella va, voy yo.
Tendrás que hablar de eso con tu padre.
Ella pone los ojos en blanco y se acuesta de espaldas de
nuevo. Me arrastró encima de ella, mis codos sujetando su cara
mientras la salpicó con besos. —¿No te gusta viajar por el
universo conmigo? —digo, besando detrás de su oreja. Su cuerpo
está caliente por el sol mientras presiona contra el mío Me
encanta verla así, relajada, sin preocupaciones del mundo.
Estos últimos años han sido difíciles entre la muerte de
Ryan y lo que Blair hizo para mantener a Stevie para siempre.
Pero el tiempo nos está curando a ambos. Quiero mas de estos
momentos Blair, suave sin tensión debajo de mí, solo nosotros.
—No podía imaginarme la vida de otra manera, —dice. Sus
dedos se enredan alrededor del cabello en la nuca de mi cuello.

346
 ●

—Sabes, nunca le doy mucha importancia a las almas

gemelas, pero creo que eres la mía —le digo. Su magia se
despliega, sus ojos sonrosados mientras me mira. Amo que ella ha
abrazado completamente su lado demoníaco. No duele saber el
estado de ánimo de la pareja por el color de sus ojos. Me ha
ahorrado muchos problemas.
Veo ojos rojos, corro por los cerros.
Ojos azules, le estoy dando lo que su corazón deseé.
Ojos morados, estamos jodiendo en el acto.
Los ojos rosados siguen siendo mis favoritos, y uno de sus
escenarios estándar cuando estamos juntos. Conociendo lo
mucho que siente por mí es más de lo que un pobre demonio
como yo podría alguna vez esperar.
—Yo también lo creo —dice, besando un lado de mi boca.
Nunca me cansaré de su toque. Sus dedos juegan con la parte de
atrás de mi cabello, y yo contempla arriesgar una polla arenosa
para estar dentro de ella ahora mismo.
—Te haré un trato. Levanta tu buen culo para que podamos
ir al infierno. Cualquiera que sea la dimensión en la que se
encuentre nuestra misión, te llevaré de compras.
Ella ríe. Sé muy bien que al ser hija de Lucifer en el camino
ella está dispuesta a robar el dinero de otras personas que están
mucho mejor que yo. Pero al final del día, a Blair le encanta
gastar mi dinero más que el suyo.
—Necesito más ropa interior. Alguien los sigue rompiendo.
Yo jadeo.
—¿Quién haría algo así? —Su sonrisa es cautivadora
mientras ella bromea conmigo.
—No estoy seguro. Pero mi sospecha es que es
extremadamente guapo, un supremo hablador sucio que tiene
sombras traviesas.

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 ●

—Suena como un hijo de puta con suerte para mí —digo,

acariciándome contra ella. Ella se ríe mientras mi barba le hace
cosquillas en el cuello.
—Oh, ciertamente lo es.
—¿Qué suerte tenemos de hablar? —Muevo mi polla dura
contra su estómago.
—¿No dijiste que teníamos que irnos?
Miro mi reloj inexistente.
—Creo que hay suficiente tiempo para que uno de nosotros
baje.
Ella pone los ojos en blanco y me agarra por la nuca,
empujando mi cuerpo encima del suyo. Hago todo lo que puedo
para quitarle todo mi peso de encima, pero desde que pudo
abrazar su lado demoníaco, es tan fuerte como la mierda.
—Eres la mejor venganza que podría haber pedido,
—susurra.
—Te amo, pequeña bruja.
—Yo también te amo —dice, besándome suavemente. Esta
felicidad se siente como un producto de mi imaginación. Si bien
la forma en que nos encontramos podría no ser la historia más
saludable, ni lo son los elementos que nos unieron. No cambiaría
nada en el universo por la forma en que me envuelven alrededor
de esta pequeña criatura por el resto de mi vida.
A veces la venganza puede ser dulce. Y Blair es el tipo más
dulce que podría alguna vez has imaginado.

Fin …

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Nota del Staff.

La presente traducción es realizada sin fines de lucro,

totalmente gratuita.
No busco hacer ningún daño, más bien fomentar la
lectura, realizada por una lectora apasionada con libros
de todo tipo.
Sin desprestigiar a los autores que invierten su
tiempo creando estas obras que tanto amamos. Lo único
que pedimos es su total discreción, y compromiso, si en
caso de poder comprar el libro original, hacerlo, dando
publicidad de la buena para demostrar que los amamos, y
que admiramos su trabajo.

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Sweet Dreams
Translations
Inglés - Español.

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