Centro Respiratorio
Centro Respiratorio
Centro Respiratorio
El centro respiratorio está formado por varios grupos de neuronas localizadas bilateralmente en el
bulbo raquídeo y la protuberancia del tronco encefálico; se dividen en tres grupos principales 1)
grupo respiratorio dorsal, localizado en la porción ventral del bulbo, que produce principalmente
la inspiración, 2) grupo respiratorio ventral, localizado en la parte ventrolateral del bulbo, que
produce principalmente la espiración, y 3) centro neumotáxico, que está localizado dorsalmente
en la porción superior de la protuberancia, y que controla la frecuencia y la profundidad de la
respiración.
El grupo dorsal se extiende a lo largo de la mayor parte de la longitud del bulbo raquídeo. La
mayoría de sus neuronas están en el interior del núcleo del tracto solitario (NTS); que es la
terminación sensitiva de los nervios vago y glosofaríngeo, que transmiten señales sensitivas hacia
el centro respiratorio desde: 1) quimiorreceptores periféricos; 2) barorreceptores, y 3) diversos
tipos de receptores de los pulmones.
La señal nerviosa que se transmite a los músculos respiratorios, no es una descarga instantánea de
potenciales de acción. Por el contrario, en la respiración normal comienza débilmente y aumenta
de manera continua a modo de rampa durante aproximadamente 2s, después se interrumpe de
manera súbita durante aproximadamente los 3 s siguientes, lo que inactiva la excitación del
diafragma y permite que se produzca la espiración; este ciclo se repite una y otra vez, y la
espiración se produce entre ciclos sucesivos. Así, la señal inspiratoria es una señal en rampa. La
ventaja evidente de la rampa es que se genera un aumento progresivo del volumen de los
pulmones durante la inspiración, en lugar de jadeos inspiratorios. Se controlan dos características
de la rampa inspiratoria, como se señala a continuación:
2. Control del punto limitante en el que se interrumpe súbitamente la rampa, que es el método
habitual para controlar la frecuencia de la respiración; es decir, cuanto antes se interrumpa la
rampa, menor será la duración de la inspiración. Este método también acorta la duración de la
espiración. Así, aumenta la frecuencia de la respiración.
Un centro neumotáxico limita la duración de la inspiración y aumenta la frecuencia respiratoria
Un centro neumotáxico, transmite señales hacia la zona inspiratoria. El efecto principal de este
centro es controlar el punto de «desconexión» de la rampa inspiratoria, controlando de esta
manera la duración de la fase de llenado del ciclo pulmonar. Cuando la señal neumotáxica es
intensa, la inspiración podría durar tan solo 0,5 s, con lo que los pulmones solo se llenarían
ligeramente; cuando la señal neumotáxica es débil la inspiración podría continuar durante 5 s o
más, llenando de esta manera los pulmones con una gran cantidad de aire.
La función del centro neumotáxico es principalmente limitar la inspiración, que además tiene el
efecto secundario de aumentar la frecuencia de la respiración, porque la limitación de la
inspiración también acorta la espiración y todo el período de cada respiración.
1. Las neuronas del grupo respiratorio ventral permanecen casi totalmente inactivas durante la
respiración tranquila normal. Por tanto, la respiración tranquila normal está producida solo por
señales inspiratorias repetitivas procedentes del grupo respiratorio
2. Las neuronas respiratorias no parecen participar en la oscilación rítmica básica que controla la
respiración.
Además de los mecanismos de control respiratorio del sistema nervioso central que actúan
totalmente en el interior del tronco encefálico, señales nerviosas sensitivas procedentes de los
pulmones también contribuyen a controlar la respiración. Los receptores más importantes, que
están localizados en las porciones musculares de las paredes de los bronquios y de los
bronquíolos, son los receptores de distensión, que transmiten señales a través de los vagos hacia
el grupo respiratorio dorsal de neuronas cuando los pulmones están sobredistendidos. Estas
señales afectan a la inspiración de una manera muy similar a las señales que proceden del centro
neumotáxico; es decir, cuando los pulmones se insuflan excesivamente, los receptores de
distensión activan una respuesta de retroalimentación adecuada que «desconecta» la rampa
inspiratoria y de esta manera interrumpe la inspiración adicional. Este mecanismo se denomina
reflejo de insuflación de Hering-Breuer. Este reflejo también aumenta la frecuencia de la
respiración, al igual que ocurre con las señales que proceden del centro neumotáxico. En los seres
humanos el reflejo de Hering-Breuer probablemente no se activa hasta que el volumen corriente
aumenta más de tres veces el valor normal (aproximadamente >1,5 l por respiración). Por tanto,
este reflejo parece ser principalmente un mecanismo protector para impedir una insuflación
pulmonar excesiva, y no un ingrediente importante del control normal de la ventilación.