Material de Apoyo Und. 1
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SINTESIS BIBLICA I
TABLA DE CONTENIDO
Unidad 1
INTRODUCCION…………………………………………………………………….. 3
OBJETIVOS …………………………………………………………………………. 4
EL ANTIGUO TESTAMENTO……………………………………………………… 5
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INTRODUCCION
Bienvenidos al estudio de Síntesis Bíblica. Este manual ha sido escrito con el fin de que sirva
a los estudiantes para conocer acerca de las generalidades del Antiguo Testamento. Nadie
comprenderá las Escrituras del Nuevo Testamento de manera apropiada, sino conoce el
Antiguo. El interés en el Antiguo Testamento es para conocer la contribución arqueológica,
histórica, geográfica y lingüística que conduce a la mejor comprensión de las culturas del
oriente próximo, que preceden a la era cristiana. En la literatura mundial el Antiguo
Testamento ocupa un lugar único. Ningún libro ha sido tan extensamente distribuido y
trasmitido con cuidadosa exactitud.,
El Antiguo Testamento ha sido aclamado por hombres de estado y sus súbditos, por hombres
letrados y personas de escasa preparación secular, por ricos y pobres. Habla a todas las
generaciones y se desarrollan grandes verdades doctrinales por ejemplo revelaciones acerca
de los atributos de Dios. Nos da entendimiento de la majestad, del poder, de la santidad y de
Dios, su amor, bondad registrados en los Salmos.
Esta compuesto por 39 libros que se dividen en cuatro (4 ) grandes grupos para su estudio:
Pentateuco, Históricos, Poéticos y Proféticos. Fue escrito durante un periodo de 1000 años,
desde (1.400 a 400 a. C. ). Autores de algunos libros son desconocidos. La lengua original de
la mayor parte del Antiguo Testamento como lo fue en los tiempos del Nuevo Testamento
para los judíos y cristianos.
Es nuestro deseo que estas paginas puedan ser de ayuda al estudiante y lector de la biblia
para entender mejor sus relatos.
DIOS TE BENDIGA
DIRECCION I.B.C.
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OBJETIVOS
OBJETIVO GENERAL
Conocer las características del Antiguo Testamento.
OBJETIVOS ESPECIFICOS
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UNIDAD 1
EL ANTIGUO TESTAMENTO
OBJETIVO DE APRENDIZAJE
DESCRIBIR LAS DIVISIONES DEL ANTIGUO TESTAMENTO
El Antiguo Testamento fue escrito por hombres que hablaban y escribían el hebreo. El hebreo
es el idioma original de todo el Antiguo Testamento, excepto unos seis capítulos de Daniel
(2:4 a 7:28), aproximadamente tres de Esdras (4:8 al 6:18 y 7:12-26) y un versículo de
Jeremías (10:11). Estos capítulos están escritos en lengua aramea, hermana del hebreo.
a. La LEY o los cinco libros de Moisés, era tenida en la más alta estima y considerada
como el fundamento de la Biblia hebrea.
b. Los PROFETAS:
a. Los profetas anteriores: Josué, Jueces, Samuel y Reyes.
b. Los profetas posteriores: Jeremías, Ezequiel, Isaías y los doce profetas menores.
c. Los ESCRITOS
1. Los poéticos: Salmos, Proverbios, Job
2. Cinco rollos: Cantar de los Cantares, Rut con Jueces y Lamentaciones,
Eclesiastés, Ester, Daniel, Esdras, Nehemías y Crónicas.
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Considerando Esdras y Nehemías como un libro y los doce profetas menores como un rollo, el
Canon Judío se componía de 24 libros. Combinando Rut con Jueces y Lamentaciones con
Jeremías, a veces calculaban el número de libros sagrados como 22, exactamente el número
de letras del alfabeto hebreo.
PENTATEUCO: La palabra Pentateuco se deriva de dos palabras griegas que son: Penta que
significa cinco y Teuco que significa libros, o sea, libros o tomos. Al principio estos libros no
llevaban nombre, sino que formaban un “rollo”, palabra importante en el versículo inicial de
cada libro.
LIBROS HISTORICOS: Las porciones históricas del Antiguo Testamento ocupan más de la
mitad del volumen entero. No solamente tenemos los libros exclusivamente históricos, tales
como Samuel y Reyes, sino también mucho material histórico contenido en la ley y los
profetas.
Los libros históricos son tan diferentes como la posición que ocupan en el Canon,
comprendiendo desde las sencillas y populares narraciones contenidas en Génesis, hasta el
punto de vista eclesiástico de la historia que el escritor sacerdotal de crónicas presenta.
Contiene las más tempranas y las más tardías enseñanzas del Antiguo Testamento.
Es importante notar que los hebreos fueron el primer pueblo en el mundo antiguo en poseer
un sentido de la historia. Egipto y Babilonia son civilizaciones más antiguas, no ofrecen
paralelo alguno. Aunque crónicas abundaron desde tiempos antiguos, esto que podríamos
llamar materia prima, no fue utilizada para formar un escrito histórico unificado. La diferencia
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parece ser que Israel poseía un secreto “descubrieron que los acontecimientos humanos se
iban desarrollando bajo un propósito divino”.
Creyendo en el futuro, les interesaba el pasado, no solamente los hechos sino su significado.
Fueron los primeros en afirmar que DIOS se manifiesta en el factor tiempo, regulando el
destino de los hombres y de las naciones.
“Los hebreos afirmaron la realidad y la importancia del tiempo, para ellos no eran una mera
ilusión, algo de lo que el hombre debe escapar, sino algo que debe ser redimido”. Los hebreos
eran verdaderos genios como narradores, haciendo con su imaginación histórica una viva
realidad de los hechos antiguos. Mil años parecen un día cuando leemos las hermosas
narraciones de los escritos judíos.
Poseen claridad y sencillez que los hacen accesible a toda clase y tipo de hombre y una
corriente de sinceridad capaz de conmover a un corazón de piedra.
Es necesario que el lector moderno entienda de una vez que la historia bíblica difiere de la
historia moderna. P. HYATT ha hecho notar que los escritos históricos se dividen en dos
clases: Objetivos y Subjetivos.
La historia objetiva narra los acontecimientos, evitando en todo lo posible los prejuicios
personales del investigador.
La historia subjetiva busca descubrir los hechos e interpretar su significado para el hombre.
Consiste en “acontecimientos unidos por el hilo de interpretación.
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Los historiadores modernos son objetivos, teniendo como finalidad narrar los acontecimientos,
mientras que los escritores del Antiguo Testamento eran subjetivos, interesados
principalmente en el efecto que los hechos pudiesen tener sobre el lector. No quiere decir
esto, que no se tratasen de relatar los hechos tan cercanos a la realidad como les era posible,
sino que su mayor interés radicaba en el significado de estos hechos para el individuo y para
la raza.
También iluminan verdades Neotestamentarias. Son llamados libros proféticos por dos
verdades fundamentales:
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El concepto del pacto entre Jehová e Israel forma la base del mensaje profético.
El tema principal de ellos es la fidelidad a Jehová la que es portadora de bendición, mientras
que la infidelidad produce consecuencias funestas.
Los libros históricos señalan como se cumplió al pie de la letra el mensaje profético. Los
repetidos fracasos de Israel narrados en estos libros demuestran claramente cuan imposible
era que la Ley por sí sola efectuara la verdadera salvación. Se necesitaba un redentor divino.
El Antiguo Testamento no contiene toda la literatura poética del pueblo israelita. Solamente se
incluyeron en los libros sagrados poemas de valor religioso, y no todos fueron incluidos en el
canon. Se dice de Salomón que escribió 3.000 proverbios y compuso 1.005 cantos. Los
escritos bíblicos citan colecciones poéticas conocidas con el nombre de “las guerras de
Jehová”. Números 21:14 y el libro de Jasar. Josué 10:12.
La poesía lírica era muy popular en Israel, esto lo demuestran el número de sinónimos que
existían en Israel para la palabra Canto, de los cuales hay al menos trece. La poesía hebrea
tiene dos marcadas características: Acento Rítmico y Paralelismo. Las líneas individuales se
caracterizan por su énfasis acentual. La línea corriente tiene tres acentos, aunque
frecuentemente es de dos o cuatro.
Los poetas hebreos diferían de los griegos y de los modernos en las sílabas que recibían el
acento, introduciendo entre tres o cuatro sílabas no acentuadas, Las líneas individuales están
unidas por lo que se conoce con el nombre de paralelismo, es decir una rima más de sentido
que de forma.
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Hay tres clases comunes de paralelismos:
1. SINONIMO: La segunda línea repite en fraseología el pensamiento de la primera.
Salmo 2:4 “El que mora en los cielos se reirá, el señor se burlará de ellos”.
Job 22:3-11 “Es la forma más corriente en Job.
2. ANTITETICO: La segunda línea es un contraste de la primera. Proverbios 10:1, 5:7
Las líneas en la poesía hebrea se agrupan de las más diversas maneras. En algunos poemas
es fácil distinguir una división de estrofas, a veces al final de una estrofa aparece un estribillo.
(Salmo 107:8).
En la poesía hebrea aparece muy poca Rima. En jueces 16:24 encontramos lo que se llama
“un himno compuesto de una sola rima”. En el primer versículo del Salmo 14, se repite una
rima. El autor de Isaías 140-66 de vez en cuando hace rimar algunos fragmentos de su
composición. De lo contrario, la poesía de Israel carece de esta característica tan esencial a
nuestro concepto de poesía.
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La poesía bíblica se parece mucho a los que hoy llamamos verso libre. Por lo tanto, cambia
muy poco cuando es traducida.
La poesía hebrea tiene una tremenda eficacia porque se halla libre de conceptos abstractos.
Siempre apela a los cinco sentidos.
1. LIRICA: El libro de los Salmos es una colección imperecedera de poesía lírica religiosa.
2. GNOMICA ó PROVERBIAL: Proverbios, parte de Eclesiastés y muchos aforismos
aislados del Antiguo Testamento.
3. DRAMATICA: Job ha sido llamado “La epopeya de la vida interior”. Centrando su interés
en la lucha de Job con la duda.
4. ELEGIACA: Lamentaciones, encontramos otras endechas y cantos fúnebres en los libros
históricos y en los profetas (II Samuel 1:19-27 y Amos 5:1-3).
Los libros Poéticos son llamados también libros de Sabiduría. Ellos describen las experiencias
del pueblo de Dios, en las variadas circunstancias de la vida terrenal, pero aparte del
ambiente puramente externo de esas experiencias son producidas por el espíritu en la vida de
los que pertenecen a dicho pueblo interpretadas para nosotros por el Espíritu Santo, escritas
por los santos hombres de Dios.
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Este grupo de libros pertenecen a la Edad de Oro de la historia hebrea, a excepción de Job
(época de David y Salomón).
Los libros que se clasifican como poéticos son: Job cuyo autor es desconocido, Salmos a
quien se atribuyen varios autores entre los cuales tenemos a David, los hijos de Coré, Asaf,
Eman, Etan, Salomón, Moisés, y Hageo. Proverbios, Eclesiastés y Cantares que son
atribuidos a Salomón.
LIBROS PROFETICOS: Pertenecen a las épocas oscuras del pueblo elegido por Dios. Los
profetas eran hombres a quienes Dios levantaba durante los períodos oscuros de la historia
de Israel. Eran los evangelistas, los patriotas religiosos de ese entonces, II Reyes 17:13, en
todas partes del Nuevo testamento leemos que Dios había hablado por medio de los profetas.
El período de los profetas abarcó 500 años, desde el siglo noveno del siglo cuarto, luego las
voces de los profetas fueron silenciadas hasta que vino Juan el Bautista.
Los profetas hablaron intrépidamente a los reyes y al pueblo por igual acerca de sus pecados
y fracasos. El trabajo del profeta fue instituido en la época de Samuel, cuando el reino fue
dividido y Judá e Israel se establecieron como monarquías separadas, aparecieron los
grandes profetas.
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El termino PROFETA (en hebreo Nabhi) llegó a usarse en forma general como resultados de
un rápido extendimiento de ese movimiento espontáneo que era a la vez religioso y político.
La supremacía filistea sobre Israel dio como resultado el resurgimiento de un grupo leal de
entusiastas que creían que, si seguían a Jehová fielmente, su pueblo podría de nuevo ser
liberado. Estos grupos de profetas fueron de un lugar a otro esparciendo su fervorosa fe en el
Dios de sus padres. El término “Nabhi” procede evidentemente de una raíz que significa
“hablar”; estos hombres eran por lo tanto oradores en nombre de Dios.
Los profetas eran anunciadores más que adivinadores. Los profetas hebreos no se
preocuparon tanto por lo que ocurría en el futuro, como por lo que tiene que ocurrir como
resultados del pecado y de la naturaleza de Dios.
Las profecías en su sentido más puro fueron sermones contemporáneos que mantienen su
valor para todas las edades porque contienen los buenos propósitos de Dios que siempre se
cumplen.
Los profetas tenían más interés en la vida que en la lógica. Ningún verdadero profeta habló
jamás por su propia autoridad. Eran los representantes de Jehová siempre predicando con la
autoridad que le daba su Espíritu. “Así dice Jehová” es su repetida expresión.
El deber principal del profeta era ocuparse de la vida moral y religiosa de su propio pueblo en
su época, mientras la nación andaba en obediencia a Dios, no se enviaba profeta. Todos los
escritos son reproches a causa de las condiciones de los profetas no tenían carácter general.
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El profeta era siempre hebreo, no solamente hablaba del juicio que sobrevendría a causa de
su pecado, sino que también anticipaba acontecimientos futuros. Los acontecimientos de los
que hablaba se referían a la nación de Israel en primer lugar y algunas profecías referentes al
futuro.
Los profetas eran hombres intrépidos, denunciaban los pecados que veían a su alrededor,
instaban a los hombres a volverse de los ídolos a Dios. A los profetas les concernían atacar el
frío formalismo de su religión, constantemente recordaban al pueblo que Dios era el único
Dios verdadero.
Seis vivieron en la época de la destrucción de Israel por Asiria, Joel, Jonás, Oseas, Isaías
y Miqueas.
Siete vivieron en la época de la destrucción de Judá por Babilonia, Jeremías, Ezequiel,
Daniel, Abdías, Nahum, Habacuc, Sofonías.
Tres vivieron en la época de la restauración del pueblo a su tierra: Hageo, Zacarías y
Malaquias.
Para su estudio los profetas se agrupan según el tiempo en que vivieron a saber:
PROFETAS PRE-EXILICOS: Según el orden de sus escritos son: Abdías, Joel, Jonás, Amos,
Oseas, Isaías, Miqueas, Nahum, Habacub, Sofonías y Jeremías
PROFETAS EXILICOS: (Cautiverio Babilónico): Fueron Ezequiel y Daniel y Jeremías que
abarcó por un tiempo este período.
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