07 - Acuña. Diversidad Ling (Uística
07 - Acuña. Diversidad Ling (Uística
07 - Acuña. Diversidad Ling (Uística
* Este artículo se publicó por primera vez en la Revista de historia bonaerense IX, 24: 47-51
1. Introducción
Con este marco, la práctica docente habitual en las escuelas en las que había niños
monolingües de alguna lengua indígena, consiste en enseñanza de la lectura y la escritura del
español (y en español), lengua con la que esos chicos nunca han estado en contacto hasta llegar
al aula.
Las jurisdicciones con población aborigen duplican y hasta triplican las cifras de nivel
nacional de analfabetismo y de repitientes (Acuña y Sierra 2001). La escuela que no atiende (tanto
en el sentido de prestar atención y como en el de desarrollar políticas educativas específicas) a sus
alumnos en su diversidad se vuelve ineficaz e ineficiente. Paradójicamente la evaluación de las
instituciones y de la sociedad no es ni institucional ni social y suele volverse en contra de los
mismo alumnos. "No les da la cabeza" es el argumento asociado al sentido común, que suele ser
reforzado por el sentido común académico: "No pueden simbolizar. En su lengua no hay palabras
para hablar de abstracciones".6
Lo obvio se pierde: Cualquier persona a la que se le enseña a leer y escribir en una lengua
que no conoce seguramente tendrá muchas dificultades para aprender lo que se le enseña, por no
hablar de lo que no se le enseña (a hablar y entender esa otra lengua). Los docentes de un
departamento en el que el 67% de los alumnos son monolingües de wichí en el momento de
ingresar a la escuela, afirman que a los chicos les lleva dos años escolares completar los
contenidos de 1er grado. Esta afirmación es tranquilizadora desde la práctica docente y contribuye
a disminuir la presión sobre los chicos, pero no es realista, ya que no se está actuando sobre el
problema, no se están buscando soluciones en los contenidos ni en los enfoques de enseñanza,
en este caso para enseñar el español con metodología y tiempos de segundas lenguas.
Ahora bien, por qué la escuela debería ocuparse de enseñar en la lengua de la familia. Hay
respuestas de muy distinto orden para esta pregunta.
La primera respuesta es política: porque esos niños son argentinos y la obligación de los
estados es brindar educación en la/s lengua/s del país, como lo hacen Canadá y Suiza, por
ejemplo, con las distintas lenguas que se hablan en su territorio.
Desde el punto de vista del aprendizaje, la lingüística demuestra que es necesario que los
niños bilingües alcancen un nivel de competencia elevado en las dos lenguas 7 con el objeto de
alcanzar las ventajas cognitivas propias de los bilingües y de poder transferir las habilidades
escolares aprendidas en la lengua primera a la segunda lengua: el aprendizaje de la lectura y de la
escritura en la lengua materna se traslada a la segunda lengua (y a todas las otras lenguas que
puedan aprenderse en el futuro).
"Consideramos que la institución escolar debe tomar como punto de partida el desarrollo lingüístico
que los alumnos y las alumnas han alcanzado antes de ingresar en la escuela, como así también
las experiencias que tienen fuera de ella. A partir de: quiénes son, de dónde vienen, cómo hablan,
qué leen o escriben, etc., debemos proporcionarles los instrumentos lingüísticos que les permiten
el acceso a una educación y un progreso académico, social, cultural y económico." [El subrayado
es nuestro]
Sin embargo, en los Contenidos Básicos Comunes, la diversidad sólo aparece como
contenido aun tan tempranamente como en el primer ciclo. Entre los contenidos conceptuales
del Bloque 3: La reflexión acerca de los hechos del lenguaje (Ministerio de Cultura y Educación
1996: 30-33) figuran:
"Tal vez en su escuela o en la comunidad a la que pertenece haya hablantes de otras provincias o
de otros países hispanoamericanos; invítelos a conversar para que hablen de sus pueblos y sus
costumbres. Es una excelente oportunidad para que los chicos observen entonaciones, palabras y
giros desconocidos de modo que sistematicen las primeras nociones sobre dialectos y variedades
lingüísticas."
El tema aparece entonces en la reforma educativa como contenido escolar encarado desde
el respeto a la diversidad, pero no como marco para el diseño de la tarea. La diversidad no está
dentro del aula, sino afuera. No es que todos somos diferentes, sino que la diferencia se encuentra
fuera de las paredes del aula, es vagamente pintoresca, hay que ser tolerante con ella y puede ser
objeto de estudio y clasificación. No hay ninguna referencia a cómo se encara la diversidad interna
no sólo desde el respeto sino desde los enfoques de enseñanza. Es decir, no se entiende que se
trata de algo sobre lo que se debe actuar para que los alumnos puedan creardesde la diferencia.
"... la tolerancia es tratada como un contenido actitudinal, pero esto no se corresponde con el
tratamiento que la cuestión tiene en los contenidos conceptuales, donde prácticamente no se han
introducido nuevos elementos de conocimiento de la diversidad y de la relación entre las distintas
sociedades." (Novaro 1999: 301).
"...en los manuales, observamos la enumeración detallada de las características de los pueblos
indios con anterioridad a la llegada de los españoles y el escaso lugar dado a la evolución de las
sociedades indígenas luego de la conquista." (Novaro 1999: 310) y más adelante afirma: "Los
indios eran, son y serán el taparrabo y la pluma, son el pasado. Lo demás es contaminación."
(Novaro 1999: 306).
"Así, desde los contenidos conceptuales, la visión sigue siendo etnocéntrica y en alguna medida
contradictoria con los contenidos actitudinales que se postulan." (Novaro 1999: 311).
En 1999 Plan Social Educativo del Ministerio de Educación organizó un taller sobre
educación intercultural bilingüe. En ese momento se estaban llevando adelante proyectos de
diferente origen que atendían a la diversidad cultural y lingüística aborigen en las provincias de
Chubut (mapuche), Santa Fe (toba y mocoví) , Chaco (toba, mocoví, wichí y otras culturas), Jujuy
(variedades del español), Formosa (wichí), San Juan (huarpe) y Salta (chiriguano-chané).
(Ministerio de Cultura y Educación 1999)
El taller se realizó bajo la coordinación del Dr. Luis Enrique López (PROEIB-Andes) y giró
alrededor de la definición de bilingüismo e interculturalidad. De acuerdo con lo discutido se llegó a
la definición de educación intercultural bilingüe para la Argentina que encontramos en la
Resolución del Consejo Federal de Cultura y Educación 107/99:
"La educación intercultural bilingüe constituye una educación atenta a la diversidad de culturas y
lenguas de las poblaciones a las que responde. Al mismo tiempo considera la relación de estas
culturas y lenguas con las sociedades nacionales e internacionales en las que están insertas.
Constituye un enfoque flexible y abierto dirigido a responder a las necesidades de aprendizaje de
las poblaciones aborígenes, así como a sus intereses y expectativas. Este enfoque surge de sus
demandas respecto de una educación acorde con sus particularidades lingüísticas, culturales y
sociales.
Esta educación es intercultural en tanto reconoce el derecho que las poblaciones aborígenes
tienen a recuperar, mantener y fortalecer su identidad así como a conocer y relacionarse con otros
pueblos y culturas coexistentes en los ámbitos local, regional, nacional e internacional."
En este último punto hacemos un punteo de otras cuestiones que forman parte también del
diseño de una educación intercultural bilingüe.
Pero para que quienes desean trabajar en una educación intercultural bilingüe puedan
hacerlo, es necesario que exista un marco institucional en el que se consiga:
Es imprescindible que sean aborígenes quienes tomen las decisiones, soliciten las
asistencias técnicas, participen del análisis y reformulación de los proyectos y de la evaluación de
los resultados. El papel de los especialistas es asesorar, aconsejar, comparar, diseñar, proponer e
implementar.
Martín Fierro –alguien que sabía mucho de quedar en los márgenes de la atención de la
civilización– decía que él hablaba de "Males que conocen todos, / pero que naides contó". Lo que
decimos en este artículo ya ha sido contado muchas veces, sólo se trata de un intento más de
llamar la atención.
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Bibliografía
Acuña, Leonor y María Concepción Sierra. "Situación sociolingüística del departamento ramón lista
(provincia de Formosa)". VIII Congreso de la Sociedad Argentina de Lingüística. Mar del Plata,
2000 ms.
APPEL, René y Pieter Muysken. Bilingüismo y contacto de lenguas. Ariel, Madrid, 1996.
Censabella, Marisa. Las lenguas indígenas de la Argentina. Una mirada actual. Eudeba,
Buenos Aires, 2000.
GLEICH, Utta von. Educación primaria bilingüe intercultural en América Latina. Schriftenreihe
der GTZ n° 214. Deutsche Gesellschaft für Technische Zusammenarbeit (GTZ), Rossdorf, 1989.
Novaro, Gabriela. "Diversidad cultural y conocimiento escolar: el tratamiento de los indios en los
contenidos educativos". Cuadernos del Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento
Latinoamericano 18, 1999: 297-314.
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1
El porcentaje parece bajo y podría reafirmar el prejuicio de "en la Argentina no hay indios". Sin
embargo, nótese que para la misma fecha Venezuela posee un 1,5% de población indígena;
Colombia, 2,2%; Paraguay, 2,3%; Costa Rica, 0,8%; El Salvador, 2,3 % y Brasil, 0,2%. (Datos
tomados de Gleich 1989).
2
Marisa Censabella presenta estimaciones de máxima y de mínima de hablantes de las distintas
lenguas indígenas en nuestro país incluidos los migrantes paraguayos (hablantes de guaraní) y los
migrantes bolivianos (hablantes de quechua). La suma representa un porcentaje de la población
total que oscila entre el 2,4 y el 4,1%. (Censabella 2000). Los números parecen altos, pero sólo el
censo nacional de población que se hará en los próximos días nos dará una información más
precisa.
3
En este último caso tenemos además una ambigüedad todavía mayor, ya que, como señala
Alejandro Raiter, la lengua materna no se enseña en la escuela sino que los chicos la aprenden en
su casa. La escuela se ocupa, en todo caso de contenidos y habilidades escolares relacionadas
con esa lengua.
4
El vacío institucional es tan grande que, en 1998 cuando el Ministerio de Cultura y Educación
intentó hacerse cargo de la problemática de español como segunda lengua y de las lenguas
indígenas, la discusión del tema y la redacción de los contenidos de español estuvo a cargo del
área de lenguas extranjeras.
5
Citamos solamente la Resolución del CFCyE 107/99 porque es clara y exhaustiva, pero
recuérdese que la Ley Federal de Educación establece la regionalización de la enseñanza y que
las distintas jurisdicciones redactaron los contenidos educativos sobre la base de sus propios
diagnósticos sociolingüísticos.
6
Compartimos la postura de aquellos que consideran que no se puede honrar semejantes
muestras ignorancia y de prejuicio con una explicación o aclaración.
7
Estos temas han sido interés de la lingüística con más intensidad desde la década del 60. Las
investigaciones han dado como resultado opiniones muy diferentes y hasta contradictorias en
relación con las ventajas y desventajas del bilingüismo. Una primera aproximación a estos temas
psicolingüísticos en relación con la problemática educativa de población aborigen puede hacerse a
través de trabajos generales como el de Gleich o el manual de Appel y Muysken (citados en la
bibliografía de este trabajo). El profundo artículo de López "Donde el zapato aprieta: tendencias y
desafíos de la educación bilingüe en el Perú" (Revista Andina (1996) 14, 2: 295-384) –seguido por
una discusión con especialistas– puede ser una buena introducción para quien se interese por esta
temática.