Las Batallas
Las Batallas
Las Batallas
Historia Dominicana
Nombre:
Carmen Manuela Cuevas Santana.
Matrícula:
BA-2021-00349.
Tema:
RESUMEN DE LAS BATALLAS CELEBRADAS DURANTE LA INDEPENDENCIA
DOMINICANA :
Durante la independencia dominicana, se libraron varias batallas clave que
marcaron el curso de la lucha por la independencia. Algunas de las batallas más
importantes incluyen:
3. Batalla de Azua (1844): Esta batalla tuvo lugar en la ciudad de Azua, donde las
fuerzas dominicanas lideradas por el general Pedro Santana derrotaron a las tropas
haitianas, consolidando la independencia dominicana.
La batalla de Beller
La Batalla de Beller, tuvo lugar el 27 de octubre de 1845 en el Cerro de Beller, en la
ciudad de Dajabón, en la parte noroeste del país y estuvo a cargo del general
Francisco Antonio Salcedo (Tito). Esta batalla consistió en la liberación del país del
dominio haitiano, la cual ha sido reconocida en la historia dominicana como una de
las batallas más encarnizadas y de corta duración.
En el lugar donde se produjo el combate, el general haitiano Seraphin había
construido un fuerte amurallado al que denominó "El Invencible". Estaba rodeado de
trincheras y fortificaciones menores por todos los flancos, colocándose la artillería
en un promontorio aparentemente inaccesible para las tropas dominicanas. Sin
embargo, el entonces presidente y jefe máximo del ejército dominicano, Pedro
Santana, envió a las tropas dominicanas a combatir hasta la muerte, si era
necesario, contra las fuerzas haitianas, pero las tropas regulares del Cibao tenían
otro objetivo más, que era desalojar a los haitianos del territorio nacional
dominicano.
El general Salcedo confió su misión al coronel Pedro Eugenio Pelletier. También
mandó una pieza de artillería con el capitán Benito Martínez y tropas de Puerto
Plata y de la Línea Noroeste. El a la izquierda estuvo al mando de los tenientes
coroneles José Silva y Andrés Tolentino, con otra pieza de artillería a cargo del
teniente coronel José María López. En la parte central se hallaban las tropas de
Santiago, Moca y La Vega, ambos batallones a las órdenes del coronel Nicolás
Gómez y el teniente coronel Lorenzo Mieses.
La Batalla de Santiago
La batalla del 30 de marzo o batalla de Santiago fue la segunda batalla posterior a la
Guerra de la Independencia Dominicana y se libró el 30 de marzo de 1844, en
Santiago. En esta batalla, el general José María Imbert, al mando de una parte del
ejército del norte, derrotó al general Jean-Louis Pierrot, quien comandaba las
tropas del ejército haitiano en una relación numérica superior a su favor.
Antes de iniciar la batalla en Santiago, los dominicanos se aprestaron a realizar
preparativos consistentes en obtener dinero para la compra de armas. Con la
asistencia de Matías Ramón Mella y Pedro de Mena, se lograron donativos de
muchas personas pudientes de Santo Domingo. En Santiago, personajes como
Ángel Daniel, Juan Luis Bidó, Ramón Bidó y otros dominicanos también se unieron
a la causa. Comenzaron a llegar refuerzos a Santiago desde Baní al mando del
coronel Ramón Santana. El general Francisco Antonio Salcedo avanzó hasta
Talanquera y Escalante con el propósito de contener el avance militar haitiano
hacia Santiago. Este militar estableció su cuartel general en Escalante, cerca de
Guayubín, Montecristi. Las tropas de Pierrot avanzaron rápidamente y este tomó a
Dajabón el 23 de marzo de 1844.
El 27 de marzo de 1844, el general y comandante de operaciones en Santiago,
José María Imbert, fue llamado por la Junta de Gobierno dominicano con el
propósito de que organizara el contraataque a los haitianos.
Imbert atrincheró la ciudad, construyó fosos y tomó precauciones importantes para
ganar una batalla junto al comandante Achilles Michel quien dirigió junto a otros
compatriotas a los que adiestró en el dominio de las armas, la batalla del 30 de
marzo de 1844, en Santiago; construyó los fuertes “Dios», «Patria» y «Libertad”
en los que fueron vencidos los haitianos. Se hizo acompañar de los oficiales Pedro
Eugenio Pelletier, Ángel Reyes, Ramón Franco Bidó, Gaspar Polanco Borbón, José
Nicolás Gómez, Fernando Valerio, José M. López, Lorenzo Mieses, Dionisio Mieses,
Toribio Ramírez, Marcos Trinidad López, entre otros. El 27 de marzo, el general
haitiano Pierrot dividió sus tropas. Se acercó a la ciudad de Santiago de los
Caballeros con más de 2000 soldados en cada columna. Antes del amanecer, las
tropas invasoras se atrincheraron en Gurabito. Después de haber cruzado el río
Yaque del Norte y de atrincherarse, el ala derecha se dirigió hacia el camino de La
Herradura, y todos los haitianos.
La Batalla de Azua
La batalla del 19 de marzo o batalla de Azua fue la primera gran batalla en defensa
de la República Dominicana contra el ejército haitiano y se libró el 19 de marzo de
1844. Una fuerza de 2500 soldados dominicanos que fueron reclutados para
enfrentarse con el ejército haitiano, una parte del ejército del sur, estaba dirigido por
el general Pedro Santana, derrotaron a 10,000 soldados del ejército haitiano
encabezados por el General Souffront.
Luego de declarada la independencia dominicana, el presidente haitiano Charles
Hérard organizó su ejército con 30 000 hombres. Dicho ejército fue dividido en tres
flancos para entrar en la nación recién proclamada. El primero estaba al mando del
general Pierrot con 10 000 hombres, que entrarían por el norte y tomarían Santiago
y Puerto Plata. El segundo estaba dirigido por el propio Hérard y pretendía tomar
Azua y San Juan de la Maguana, y el tercero, dirigido por Souffrand, debía entrar
por Neiba. En la que atacaran el 19 de marzo.
El 19 de marzo de 1844 se produjo en Azua el enfrentamiento de las tropas
dominicanas lideradas por el general Pedro Santana y las tropas haitianas
encabezadas por el presidente haitiano, Charles Hérard Ainé. Esta justa implicó el
inicio del afianzamiento de las ideas de independencia que se pusieron de
manifiesto en el trabucazo del 27 de febrero de 1844. Con la división del ejército
haitiano, Hérard pretendía unir la columna del sur con la del norte para atacar a
Azua, pero las tropas dominicanas, dirigidas por Fernando Taveras, Vicente Noble,
Dionisio Reyes, y Pedro Santana las fuerzas del General Broum que estaban
posicionadas en las Marías, desarrollándose el primer combate en la fuente de
Rodeo.
Por otro lado, las tropas del general Souffrand avanzaron hacia Azua, enfrentándose
en el Paso de la Hicotea con los dominicanos comandados por Manuel Mora. Las
tropas de Hérard pasaron por los Jovillos persiguiendo a Luis Álvarez, pero las
tropas dominicanas del General Lucas Díaz, apostadas en el Paso del Jura,
atacaron al ejército haitiano. Al entrar las tropas haitianas a San Juan fueron
enfrentadas por José del Carmen García, Francisco Soñé, Lucas Díaz y Jean E.
Ceara y desalojándolas del río Jura. El mismo día 19 las fuerzas del jefe haitiano
Tomás Héctor entraron en Azua y la encontraron desierta, pero el ataque fue
rechazado por los dominicanos. Los haitianos atacaron por el camino de Los
Conucos. Allí fueron enfrentados por Matías de Vargas, José Leger y Feliciano
Martínez.
Las batallas de Sabana Larga
Las batallas de Sabana Larga y de Jácuba fueron los últimos y decisivos encuentros
armados que sostuvieron dominicanos y haitianos para poner fin a casi 12 años de
conflictos después de la independencia dominicana. La primera se libró el 24 de
enero de 1856 en Sabana Larga, Dajabón. Tropas dominicanas del ejército del
norte, dirigidas por el general Juan Luis Franco Bidó, derrotaron a una fuerza del
ejército haitiano al mando del emperador haitiano Faustin Soulouque. Otra parte del
ejército haitiano se atrincheró en Jácuba, cerca de Puerto Plata, pero fueron
vencidos por los generales Pedro Florentino y Lucas Peña, poniendo fin a las
invasiones haitianas en territorio dominicano.
Héroe de la misma: Juan Luis Franco Bidó, derrotaron a una fuerza del Ejército
haitiano al mando del emperador haitiano Faustino.
La Batalla de Palo Hincado
Se considera como la primera reconquista española, esta batalla puso fin al control
francés en la isla de La Española, marcando el inicio del período conocido como
«España boba».
Este hecho tuvo como campo de batalla la sabana de Palo Hincado, cerca de El
Seibo. Un grupo de valientes hombres comandado por el cotuisano Juan Sánchez
Ramírez venció a las tropas francesas comandada por el general Jean Louis
Ferrand.
Los dominicanos lucharon por mantener su nacionalidad y por preservar su
identidad, ya que con la ocupación francesa que se inicia en 1802, los franceses
pretendían hacer desaparecer una nación, la cual se había conformado en los
elementos que componen la nacionalidad como el origen, la historia, la lengua, la
religión y las costumbres.
Los héroes de esta batalla: Juan Sánchez Ramírez, Ciriaco Ramírez y Cristóbal
Huber Franco eran los comandantes en el sur y el capitán Diego Polanco era el
comandante de Santiago de los Caballeros y la región del Cibao / Norte.
La Batalla de la Barranquita
La ocupación norteamericana de 1916, Valverde, Mao, tiene su origen en la toma
irresponsable de una serie de préstamos y venta de bonos que comprometían la
soberanía nacional y que nunca pudieron cumplirse, que a partir de 1868 iniciaron
los presidentes Buenaventura Báez y Ulises Heureaux para su propio beneficio y
para alimentar la corrupción de sus respectivos gobiernos.
El combate se produjo en la Barranquita, cerca del municipio de Esperanza. Los
dominicanos que se enfrentaron a los militares estadounidenses eran comandados
por el general Carlos Daniel Grullón.
En el enfrentamiento, que permitió detener el avance de los invasores, murieron
varios dominicanos, entre los que están Máximo Cabral Reyes, Francisco Peña,
Carlos Gutiérrez Jiménez, Magdaleno Zapata y Agustín Cabral hijo. Los militares
estadounidenses comandados por el almirante John H. Pendleton, habían
desembarcado por Montecristi.
La batalla de la Barranquita simboliza el heroísmo de los dominicanos en la lucha
contra la intervención militar de Estados Unidos, en el año 1916.