Novela
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Son las 9:30 y yo voy rumbo a mi primer día en la universidad, visto unos
pantalones cargo de color negro junto a un polo blanco y unas zapatillas del
mismo color, también traigo una mochila con un cuaderno y lapiceros, nada del
otro mundo. No me alegra mucho el tener que ir a esa prisión, donde lo único
que haremos es escuchar durante largas horas la aburrida voz de los
profesores, pero por lo menos no estoy en casa, donde lo único que se oye son
los gritos de mi madre hacía la persona que alguna vez llamé padre con tanto
cariño.
Cuando por fin encuentro un asiento, que por cierto está al final, el profesor
continúa con su clase, que al cabo de dos horas culmina.
-Ethan tú harás pareja con Miriam- dice alargando el nombre de la chica- estoy
seguro de que se llevarán muy bien.
-Hola- escucho detrás mío, lo que hace que gire sobre mis talones. - soy
Miriam.
-Ho- Ho- Hola- dije tartamudeando y ella solo rió de una forma tan delicada
que hizo que yo me quede viéndola mucho más de lo que desearía.
-Con respecto al trabajo- dice Miriam sacándome de aquel trance- ¿Te parece si
lo realizamos en mi casa el sábado?
Yo solo asentí y ella me pidió mi número para que más tarde pueda mandarme
su dirección.
𝆹𝆹𝆹
Una vez termina la canción apago el celular y me coloco unos pantalones flojos,
luego salgo de mi habitación por un vaso de agua y mientras bajo las escaleras
escucho la puerta de mi casa abrirse y veo a mi madre entrar por ella con una
sonrisa de oreja a oreja.
- Me fue de maravilla, no sabes cuantas ventas hice hoy, una de ellas fue de
una suma muy grande. - Ella empieza a contarme su día sin omitir algún
detalle, mientras yo solo puedo fijarme en el brillo de felicidad que deslumbran
sus ojos, me hace muy feliz el saber que su trabajo es una forma de
desestresarse para ella.
Mi madre sabe que cuando de pizza se trata yo no puedo negarme así que ella
va a colocarse ropa más cómoda mientras yo me pongo la primera sudadera
que encuentro.
Mientras espero que mi madre termine de alistarse, reviso mi celular y me doy
cuenta que tengo una notificación nueva de alguien que no tengo agendado.
Hola 20:05✓✓
¿Hola? 20:13✓✓
Ethan soy Miriam. 20:20✓✓
El sábado no podré
debido a problemas
familiares. 20:21✓✓
Si si no te preocupes
Miriam, el domingo nos
vemos. 20:23✓✓
Passeig de la Creu, 18, 08860
Castelldefels. 20:23✓✓
Escucho a mi madre bajar por las escaleras y apago el celular, dejando en visto
a la chica de mis sueños.
La pizzería no queda tan cerca de casa que digamos así que tenemos que hacer
un viaje de 30 minutos y lamentablemente hay mucho tráfico, mi madre
decide prender la radio y empieza a sonar una de las canciones que ella y yo
solíamos cantar hace algunos años.
Nossa, nossa
Assim você me mata
Ai, se eu te pego
Ai, ai se eu te pego
Delícia, delícia
Assim você me mata
Ai, se eu te pego
Ai, ai, se eu te pego
Era de tarde y mamá había salido a comprar algunas cosas que faltaba para la
mesa navideña, en ese entonces yo tenía 6 años y me encontraba jugando con
mis carritos en la sala, ese día yo escuché la puerta abrirse y fui corriendo a ver
si era papá; pues a mí me gustaba recibirlo con un abrazo y luego él me hacía
volar por los aires como un superhéroe mientras me decía lo mucho que me
quería; pero esa tarde fue muy diferente, como quisiera olvidarlo.
Ese día papá llegó ebrio con una botella de licor en la mano izquierda, su
cabello estaba hecho un desastre y su camisa ni que decir, pero mis ojos
cayeron sobre la persona que estaba al lado, era una señora de cabello largo y
de color negro, era alta, estaba bien maquillada, llevaba puesto un vestido
color guinda, ella era muy diferente a mi madre, la cual siempre vestía ropa
sencilla y cómoda, ya que no le gustaba llamar la atención, la mujer le
susurraba algo en el oído a mi padre mientras él se reía, yo no sabía lo que
estaba sucediendo así que solo me acerqué a saludarlo como siempre lo hacía.
𝆹𝆹𝆹