Yumbo Toma

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UNIVERSIDAD AGRARIA DEL ECUADOR

FACULTAD DE CIENCIAS AGRARIAS


DR JACOBO BUCARAM ORTIZ
CARRERA AGRONOMIA

TEMA
REGISTRO TOMATE

AUTOR
YUMBO DUTA BYRON GEOVANNY

NARANJAL– ECUADOR
2023-2024

MANUAL TÉCNICO

BUENAS PRÁCTICAS AGRÍCOLAS –BPA-


EN LA PRODUCCIÓN DE TOMATE BAJO CONDICIONES PROTEGIDAS

Introducción

E l cultivo de tomate en Colombia utiliza gran cantidad de agroquímicos. Un alto porcentaje de


los costos de producción está relacionado con la compra y aplicación
de insumos, entre ellos los agroquímicos, productos que los tomateros usan de una manera excesiva
y que, además de encarecer los costos de producción, causan serios disturbios al medio ambiente y a
la salud de los consumidores y de los mismos productores.

Desde el punto de vista de sanidad vegetal, el empleo excesivo de plaguicidas y su aplicación tipo
calendario rompen el equilibrio biológico y destruyen los insectos benéficos. Muchas de las
especies dañinas de plagas de importancia secundaria se tornan primarias ante la presión de
plaguicidas.

No rotar los cultivos, no eliminar los residuos de cosecha, usar en forma indiscriminada
agroquímicos, no atender adecuadamente las múltiples labores que demanda el mantenimiento del
cultivo, desconocer el manejo del clima dentro del invernadero y los patógenos y plagas que afectan
el cultivo, y no aplicar prácticas agronómicas diferentes al empleo de plaguicidas como única
herramienta de control de plagas son, entre otras, las razones que hacen de este sistema de
producción un método altamente contaminante, donde se requiere con urgencia la capacitación del
productor en el manejo integrado del cultivo bajo invernadero, encaminado a la aplicación y
establecimiento de esquemas de buenas prácticas agrícolas que permitan asegurar la inocuidad del
producto y evitar daños al medio ambiente.

Las Buenas Prácticas Agrícolas —BPA— y las Buenas Prácticas de Manufactura — BPM— son
todas las acciones tendientes a reducir los riesgos microbiológicos, físicos y químicos en la
producción, cosecha y acondicionamiento en campo, procesamiento, empaque, transporte y
almacenamiento, y se definen como un conjunto de actividades que incorporan el manejo
integrado de plagas —MIP— y el manejo integrado del cultivo
—MIC—, con el fin de proporcionar un marco de agricultura sustentable, documentado y
evaluable, para producir frutas y hortalizas respetando el medio ambiente (FAO, 2004). Además de
los aspectos de higiene e inocuidad, se consideran como base para alcanzar la sustentabilidad de la
producción agrícola, la salud de los trabajadores y el cumplimiento de las normativas laborales
dentro del marco de la producción agraria comercial. La
obtención de productos hortícolas bajo un sistema de Buenas Prácticas Agrícolas constituye una
necesidad urgente, debido a la preocupación de los gobiernos por contribuir significativamente a la
mejora de la calidad de vida de sus habitantes, y a las exigencias impuestas por los exportadores o
empresas agroindustriales que trabajan bajo un sistema de “análisis de puntos críticos de control y
riesgos” (HACCP, por su sigla en inglés), o por aquellas que están en proceso de certificación (FAO
2003).

El desarrollo de guías de BPA y la implementación de programas de aseguramiento de la inocuidad


son importantes para que los productores cuenten con herramientas que, al aplicarlas, garanticen al
consumidor colombiano productos sin contaminantes químicos, biológicos y físicos para evitar los
casos frecuentes y cada vez más crecientes de enfermedades transmitidas por alimentos, para
incrementar las exportaciones y diversificar los productos a exportar, o para competir con los
productos que puedan entrar al país como consecuencia de los acuerdos internacionales que se están
discutiendo. El país debe ofrecer productos competitivos que cumplan con los requisitos de calidad,
sanidad e inocuidad establecidos por los compradores, aspectos determinantes dentro de la nueva
dinámica del comercio de productos agrícolas.

Teniendo en cuenta lo anterior, es necesario emprender acciones para desarrollar un plan de


producción de hortalizas enfocado a consolidar sistemas de Buenas Prácticas Agrícolas, acorde con
la tendencia mundial de producción más limpia, que permitan cumplir con los preceptos de
sostenibilidad y manejo ecológico del agroecosistema, como requisitos fundamentales para buscar
la sostenibilidad, la rentabilidad y la competitividad del sistema de producción hortícola y, además,
de acceder a los mercados externos.

El país, consciente de la necesidad de implementar sistemas de Buena Prácticas Agrícolas, ha


venido desarrollando normatividad al respecto. Por esa razón, el Instituto Nacional de Normas
Técnicas —Icontec—estableció la norma técnica NTC 5400, la cual reglamenta las Buenas
Prácticas Agrícolas para frutas, hierbas aromáticas y culinarias y hortalizas frescas. En la
elaboración de la norma participaron productores, comercializadores, gremios, entidades del
gobierno y expertos del sector. Se tuvieron en cuenta documentos como el protocolo EureGAP para
productos hortofrutícolas, los reglamentos técnicos, decretos, resoluciones y normas técnicas
colombianas vigentes, y los conocimientos y experiencias de quienes participaron en el proceso de
reglamentación.

También el Servicio Nacional de Aprendizaje —SENA—, a través de la Dirección de Formación


Profesional, Grupo de Innovación y Desarrollo Tecnológico, desarrolló la línea programática de
Buenas Prácticas Agrícolas y pecuarias para la cadena agroindustrial, elaborando una guía para la
implementación de Buena Prácticas Agrícolas en el país.

Igualmente, el Consejo Nacional de Política Económica y Social —Conpes— con el Departamento


Nacional de Planeación —DNP—, han desarrollado un documento acerca de la política nacional de
sanidad agropecuaria e inocuidad de alimentos para el sistema de
medidas sanitarias y fitosanitarias, Documento 3375, del 5 de septiembre de 2005, el cual contiene
los lineamientos de políticas que permitirán mejorar las condiciones de sanidad e inocuidad de la
producción agroalimentaria nacional, con el fin de proteger la salud y vida de las personas y de los
animales, aumentar la competitividad, y fortalecer la capacidad para obtener la admisibilidad de los
productos agroalimentarios en los mercados internacionales.

La finalidad de este manual es brindar una herramienta a técnicos y productores para que tengan
una base de manejo agronómico, teniendo en cuenta la aplicación las Buenas Prácticas Agrícolas
en todos los procesos productivos de la producción de tomate bajo condiciones protegidas.

1. Implementación de Buenas Prácticas Agrícolas en sistemas de producción


de tomate bajo cubierta

1.1. Introducción

L as Buenas Prácticas Agrícolas son todas las acciones que se realizan en la producción de
hortalizas, desde la preparación del terreno hasta la cosecha, el embalaje y el transporte, orientadas
a asegurar la inocuidad del producto, la protección al medio
ambiente y la salud y el bienestar de los trabajadores.

La aplicación de las normas de BPA es voluntaria. Sin embargo, se cree que en un tiempo cercano
las BPA serán indispensables para poder poner los productos en los principales mercados locales e
internacionales. Los consumidores están cada vez más interesados en obtener alimentos sanos,
producidos respetando el ambiente y el bienestar de los trabajadores. Las BPA nacen como nuevas
exigencias de los compradores traspasadas a los proveedores. Para el productor, la ventaja principal
es poder comercializar un producto diferenciado. La “diferencia” para el consumidor es saber que
se trata de un alimento sano, de alta calidad y seguro, que al ser ingerido no representa un riesgo
para la salud. Este tipo de producto diferenciado le otorga al productor mayores posibilidades de
venta a mejores precios.

Mediante el cuidado del ambiente se busca reducir la contaminación, conservar la biodiversidad y


valorizar los recursos naturales como el suelo y el agua. El uso irracional de productos químicos ha
causado la contaminación de suelos y aguas, y los residuos de pesticidas permanecen en el medio
y su acumulación puede producir pérdidas de la
biodiversidad, además de intoxicaciones en los seres humanos. Por el contrario, el cuidado del
ambiente tiene beneficios para el propio productor, se mantiene una mayor productividad a lo largo
del tiempo al evitar la pérdida de la fertilidad de los suelos, es menor la contaminación de aguas y
suelo, etc. Por otra parte, al incidir en el bienestar de los trabajadores se mejora la calidad de vida y
la higiene, se atiende la salud y se previenen las intoxicaciones.

Ingresar a la producción bajo BPA significa para los productores adoptar manejos previamente
comprobados, para lo que es fundamental la capacitación sobre higiene y seguridad, aplicación de
agroquímicos, manejos durante la cosecha, entre otros. Significa además un gasto o inversión en
tiempo y dinero, tanto en capacitación como en infraestructura, insumos y servicios.

La adopción de las BPA implica llevar registros de todas las actividades que se realizan. Esto hace
que el productor tenga una visión más clara y ordenada de lo que está sucediendo en su predio. De
todas maneras, el productor tiene que analizar previamente los beneficios de las BPA antes de
embarcarse en este tipo de producción.

Dada la importancia que tienen las BPA en el comercio mundial, en el cuidado del medio ambiente
y el bienestar de los trabajadores, la FAO ha decidido difundirlas, y capacitar y colaborar en su
adopción.

Buenas Prácticas Agrícolas significa “hacer las cosas bien y dar garantía de ello”.

1.2 Definición de las BPA

Las Buenas Prácticas Agrícolas son un conjunto de normas, principios y recomendaciones técnicas
aplicadas a las diversas etapas de la producción agrícola, que incorporan el Manejo Integrado de
Plagas —MIP— y el Manejo Integrado del Cultivo — MIC—, cuyo objetivo es ofrecer un producto
de elevada calidad e inocuidad con un mínimo impacto ambiental, con bienestar y seguridad para
el consumidor y los trabajadores y que permita proporcionar un marco de agricultura sustentable,
documentado y evaluable.
En general, las BPA se basan en tres principios: la obtención de productos sanos que no representen
riesgos para la salud de los consumidores, la protección del medio ambiente y el bienestar de los
agricultores (figura 1).

Manejo
integrado
Medio del cultivo
ambiente
Manejo
integrado
de plagas

Higiene e BPA
BPB
inocuidad
alimentaría
PAA
Aspect
os Productos
microbioló Seguridad Consumidores
gicos fitosanitarios
de las
personas
Trabajadores
agrícolas
Figura 1. Esquema de los principios básicos de BPA

Para la implementación de un programa de BPA es importante el conocimiento previo de las


acciones o líneas que rigen este sistema de calidad, como son: el medio ambiente, la sanidad e
inocuidad de los productos, su trazabilidad por medio de registros, y la seguridad para los
trabajadores y consumidores. Deben tenerse en cuenta, además, otros temas como el agua, el suelo,
el empaque, el transporte y la manipulación.

1.3. Ventajas de la adopción de las BPA

 Mejorar las condiciones higiénicas del producto.


 Prevenir y minimizar el rechazo del producto en el mercado debido a residuos tóxicos o
características inadecuadas en sabor o aspecto para el consumidor.
 Minimizar las fuentes de contaminación de los productos, en la medida en que se
implementen normas de higiene durante la producción y recolección de la cosecha.
 Abre posibilidades de exportar a mercados exigentes (mejores oportunidades y precios).
En el futuro próximo, probablemente se transforme en una exigencia para acceder a
dichos mercados.
 Obtención de nueva y mejor información de su propio negocio, merced a los sistemas
de registros que se deben implementar (certificación) y que se pueden cruzar con
información económica. De esta forma, el productor comprende mejor su negocio, lo
cual lo habilita para tomar mejores decisiones.
 Mejora la gestión (administración y control de personal, insumos, instalaciones, etc.) de
la finca (empresa) en términos productivos y económicos, y aumentar la
competitividad de la empresa por reducción de costos (menores pérdidas de insumos,
horas de trabajo, tiempos muertos, etc.).
 Se reduce la cadena comercial (menos intermediarios) al habilitar la entrada directa a
supermercados, empresas exportadoras, etc.
 El personal de la empresa se compromete más con ella, porque aumenta la
productividad gracias a la especialización y dignificación del trabajo agropecuario.
 Mejora la imagen del producto y de la empresa ante sus compradores (oportunidades de
nuevos negocios) y, por agregación, mejora la imagen del propio país.
 Desde el punto de vista de las comunidades rurales locales, las BPA representan un
recurso de inclusión en los mercados, tanto locales como regionales o internacionales.
Así mismo, constituyen una excelente oportunidad para demostrarse a sí mismas y a
otras comunidades semejantes que se pueden integrar con éxito, al tiempo que mejoran
su calidad de vida y su autoestima, sin dejar de lado sus valores culturales.

1.4. Filosofía de las BPA

El concepto de BPA implica:

 Protección del ambiente: se minimiza la aplicación de agroquímicos y su uso y


manejo son adecuados, por tanto no se contaminan suelos y aguas y se cuida la
biodiversidad.
 Bienestar y seguridad de los trabajadores: esto se logra mediante capacitación,
cuidado de los aspectos laborales y de la salud (prevención de accidentes, de enfermedades
gastrointestinales, higiene), y buenas condiciones en los lugares de trabajo.

 Alimentos sanos: los alimentos producidos le dan garantía al consumidor, porque son
sanos y aptos para el consumo por estar libres de contaminantes (residuos de pesticidas,
metales pesados, tierra, piedras, hongos).

 Organización y participación de la comunidad: los procesos de gestión son


participativos, ayudan al empoderamiento y a la construcción de tejido social y
fortalecen el uso de los recursos en busca de procesos de sostenibilidad.

 Comercio justo: los productores organizados cuentan con poder de negociación, logran
encadenamientos con productores de bienes y servicios, se fomenta la generación de valor
agregado a los productos de origen agropecuario, y así el productor recibe una justa retribución
por su participación en el proceso de producción.

1.5. Componentes básicos de las Buenas Prácticas Agrícolas

De acuerdo a la línea programática de Buenas Prácticas Agrícolas y pecuarias para la cadena


agroindustrial del Servicio Nacional de Aprendizaje SENA, algunos de los componentes básicos de
las Buenas Prácticas Agrícolas son:

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