Manual Sobre El Duelo Humanización

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MANUAL SOBRE EL DUELO

El duelo es la reacción normal ante la pérdida ya sea la pérdida de una persona querida, un animal, un objeto,
etapa o evento significativo. “El apoyo emocional recibido en estos primeros momentos es crucial”.
5 tipos de perdidas según Pangrazzi:
1. Pérdida de la vida (perder un ser querido, o la vida de sí mismo)
2. Pérdidas de aspectos de sí mismo (autoestima, valores)
3. Pérdidas de objetos externos (trabajo, hogar, u objetos importantes)
4. Pérdidas emocionales (rupturas con pareja o amistades)
5. Pérdidas ligadas con el desarrollo (afecta etapas de la vida: infancia, adolescencia, adultez etc.…)
¿Cómo afectan las pérdidas?
-Dimensión física (vacío de estómago), emocional (tristeza, enojo, miedo), cognitiva (confusión), conductual
(aislamiento social), social (aislamiento) y espiritual (¿porque a mí?).
Mitos sobre el duelo
1. El duelo se resuelve aproximadamente en un año.
2. El duelo es como una depresión.
3. Dentro de los diferentes tipos de muerte, hay unas que son peores que otras.
4. Cuando la muerte es “natural”, sobre todo de una persona mayor, no genera duelo.
5. Los hombres lo llevan mejor, para ellos es diferente, se recuperan antes.
6. Quien más llora es quien más dolor tiene.
7. Las personas jóvenes lo llevan mejor.
8. El duelo es un proceso lineal de cinco fases (shock, negación, negociación, depresión y aceptación).
Se va saltando de una en una hasta llegar a la quinta y, una vez ahí, todo habrá acabado.
Mitos respecto al duelo en niños y niñas: (Ferrufino, 2020)
1. Los niños no sufren.
2. El duelo en los niños no provoca un sufrimiento tan profundo como en los adultos.
3. Los niños cuentan con suerte, porque son tan jóvenes que no entienden sobre la muerte.
Concepción y abordaje en relación a la muerte, según la psique de su etapa de desarrollo.
Usualmente se cree que la niñez no debe saber la verdad en relación de la muerte, los adultos tienden a
mentir o a no decir con claridad un acontecimiento de pérdida. La manera de expresar sentimientos como
impresión, tristeza, ansiedad o enojo depende de su edad y desarrollo. 4 conceptos principales de la muerte:

 Irreversibilidad (la muerte es permanente).


 Irrevocabilidad (todo funcionamiento se detiene con la muerte).
 Inevitabilidad (la muerte es universal para todos los seres vivos).
 Causalidad (las causas de la muerte).
0-3 años: Hay una ignorancia relativa del significado de la muerte y no se considera como algo definitivo.
3-7 años: se ve la muerte como algo temporal y reversible. Surgen preguntas, ¿cómo come el fallecido? o ¿si
va al baño?
7-10 años: comienzan a entender la muerte como un evento final pero quizás no entiendan que es universal.
Es posible también que teman quedarse solos, especialmente por la muerte de un adulto importante para
ellos. Por ejemplo, cuando una tía muere, es posible que un niño o niña en estas edades le pregunte a su
madre: “mamá, ¿cuándo te vas a morir?”.
Adolescencia: En este período, la muerte se entiende al mismo nivel que la adultez, pero pueden resistirse a
expresar cualquier emoción al respecto. Es probable que sientan una amplia gama de emociones como
tristeza, enojo, culpa e impotencia y puedan participar en consumo de drogas y alcohol.
ETAPAS DEL DUELO (Elizabeth Kuble)
1. Negación: Relacionada con el estado de schock o de embotamiento emocional. La frase que podría
resumir la esencia de esta etapa es “Esto no me puede estar pasando a mí”.
2. Ira: Luego de superar la negación comienzan a surgir sentimientos de frustración, de impotencia con
respecto a la propia capacidad de modificar las consecuencias de la pérdida. Sentirse frustrado
conlleva que aparezca sentimientos de enojo, de irá. “si yo hubiera estado, si yo hubiera hecho…”
3. Negociación: La persona guarda la esperanza de que todo continúe igual, que las cosas no cambien.
Las intenciones de volver el tiempo atrás es un deseo frecuente “¿Qué hubiera sucedido si…?”.
4. Depresión: la persona empieza a asumir de forma definitiva la realidad de la pérdida, y ello genera
sentimientos de tristeza y de desesperanza junto con otros síntomas típicos de los estados depresivos,
como el aislamiento social “Extraño a mi ser querido, ¿por qué seguir?”.
5. Aceptación: comienza el estado de calma asociado a la comprensión de la muerte o las pérdidas
como parte natural de la vida humana, “Todo va a estar bien”. Se trata de aprender a convivir con esta
pérdida y crecer a través del conocimiento de los sentimientos.

PAUTAS PRÁCTICAS DE AUTOCUIDO PARA PERSONAS EN DUELO

Prácticas cotidianas y a las decisiones sobre ellas, que realiza una persona, familia o grupo para cuidar de su
salud; estas prácticas son ‘destrezas’ aprendidas a través de toda la vida, de uso continuo.
Físico-somático (“Si necesitas desacelerar y descansar, hazlo”): No abandonarse, comer e hidratarse, dormir
adecuadamente, escucha el cuerpo, hacer ejercicio, evitar consumir alcohol, tabaco y drogas, realizarse
masajes.
Emocional-racional (“Los psicólogos reciben una formación que les permite ayudar a las personas a manejar
de forma más productiva el temor, el sentimiento de culpa o la ansiedad”): están el conjunto de emociones
que se producen en el ser humano ante una pérdida. Entender y aceptar sus sentimientos, expresar
emociones, conversar con otros, red de apoyo, momento de soledad, Consultar con un profesional de salud
mental calificado.
Cognitiva-mental: Cuando las emociones superan la normalidad, pensar y concentrarse es difícil. No exigir
demasiado a nivel intelectual, evita lo que contamina la mente, redacta objetivos a corto plazo, informarse en
los procesos de duelo.
Espiritual: La espiritualidad es una dimensión humana, universal de todas y todos. Crear un espacio especial,
busca cosas que nutran espiritualmente, realiza una práctica de silencio diariamente.
Objetivos de la terapia psicológica para trabajar podrían ser los siguientes
Aceptar la pérdida, gestionar las emociones y el dolor, adaptarse a un medio diferente al usual, recolocar
emocionalmente a lo que se perdió y seguir viviendo.
FAVORECER LA EXPRESIÓN DE LAS EMOCIONES / MANIFESTACIONES ESPERABLES
Para Soler y Jordá (1996) el duelo es necesario en la vida de las personas, ya que cumple una función de
adaptación a una realidad completamente nueva, permitiendo enfrentarse y ajustarse al medio. Se podrá
presentar únicamente una o varias o incluso no existir ninguna alteración en alguna de estas esferas
(Cognitiva, afectiva, fisiológica y conductual).
Tristeza: Es el sentimiento más común, persistente y el primero que reaparece cuando, tiempo después, se
recuerda el hecho.
Rabia: La rabia y la agresividad son reacciones secundarias a la angustia.
Culpa: sentimiento que más dolor produce es la culpa, que se puede acompañar de autorreproche. La
mayoría de las veces la culpa es irracional y hace que se sufra de forma exagerada.
Apego: Sin apego, no hay dolor. El apego a un ser humano es el que genera gran parte del dolor posterior
ante su pérdida. Esto puede llevar a duelos prolongados o patológicos.
Ansiedad: puede oscilar desde una ligera sensación de inseguridad a fuertes ataques de pánico y cuanto
más intensa y persistente sea la ansiedad más sugiere una reacción de duelo patológica.
Ausencia de sentimientos: La anestesia emocional o el embotamiento sensorial suelen ocurrir
inmediatamente después de conocer la noticia de la muerte del ser querido. Suele durar desde unos instantes
hasta unos días y es vivida como una extrañeza por no poder experimentar las emociones de dolor que
naturalmente deberían sentirse donde hay confusión, pero se usa como una protección de su flujo de
sentimientos.
Recomendaciones para acompañar en el duelo: Expresar pensamientos y emociones y también nuestro
dolor ante la pérdida. Sentirse cerca de la persona fallecida y de sus familiares. Compartir recuerdos, todo lo
que ha dejado en nuestra vida la persona que ha fallecido. Demostrar apoyo.
Evita usar estas expresiones: “Distráete que te irá bien. No llores más que te estás torturando, que no le
dejas descansar.” “La vida continúa. Es ley de la vida. Resígnate. Ha sido la voluntad de Dios. Ahora ya no
sufre. El primer año es el peor, luego ya verás. Son jóvenes, ya volverán a tener otro/a hijo/a.”
Ante una pérdida, es preferible huir de las típicas frases que frenan la expresión emocional tras la
muerte: “Ahora eres el hombre de la casa”, “eres la responsable de tus hermanos”, “Tu madre necesita que
estés bien”, “Hay que ser fuertes”, estas afirmaciones solo afectan la experiencia del duelo en los niños, niñas
y adolescentes.
Luto en el embarazo: las emociones pueden intensificarse y prolongarse, esto puede afectar la salud de la
madre y del bebé por lo que se pueden practicar (ejercicios de respiración): La velocidad y la profundidad de
las inspiraciones son capaces de influir en las emociones, el estrés y la atención.
RITUALES DE DESPEDIDA

Son actos simbólicos que ayudan a expresar los sentimientos ante una pérdida, a poner un poco de orden en
el caótico estado emocional. Se realiza debido a que algunas personas no pueden acompañar en la
despedida de su ser querido (Haciendo y leyendo una carta de despedida. Incluyendo un objeto simbólico en
el ataúd. Preparar un escrito).
PAUTAS PARA ALIVIAR EL DUELO EN LOS PROFESIONALES DE LA SALUD

El Burnout o agotamiento (síndrome de agotamiento profesional) y la fatiga por compasión son síndromes
derivados de la actividad de ayudar y proporcionar cuidado a aquellas personas que presentan una
necesidad. Pautas: Apoyarse en los compañeros, en amigos y familia, prácticas de meditación, Comenzar el
día con un discurso interno y externo; positivo y optimista, sin dejar de ser realista con la situación.
PAUTAS PARA PROFESIONALES EN ATENCIÓN A PACIENTES

Cuando el paciente entre en la situación de los últimos días: Llamar a los familiares, Identificar y darle la
información, Dar la opción a preguntar y responder preguntas.
Cuando el paciente fallezca: Avisar telefónicamente a la familia, Dar la opción de que puedan llevar algún
objeto simbólico, Enviar una carta de condolencia, ofrecer el contacto con psicólogos.
MODELOS DE LLAMADA TELEFÓNICA Y CARTA INSTITUCIONAL

“Señora González, le pido que se siente en una silla, puesto que le voy a dar una mala noticia, su padre D.
Agustín González, hace dos horas, tras el agravamiento clínico de su estado ha fallecido. Siento mucho tener
que comunicarle esta triste noticia.”

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