El Lobo Y El Perro. Diferencias Y Similitudes. Efectos de La Domesticación
El Lobo Y El Perro. Diferencias Y Similitudes. Efectos de La Domesticación
El Lobo Y El Perro. Diferencias Y Similitudes. Efectos de La Domesticación
EFECTOS DE LA DOMESTICACIÓN
El tema de esta ponencia va enfocado a comprender mejor el comportamiento del perro. Para ello
es imprescindible responder a una pregunta ¿que es el perro? Todos sabemos que el perro es un
ser especial y para muchos es nuestro mejor amigo. Quizás uno de los motivos para explicar este
sentimiento y este vínculo hacia el perro y que responde a la pregunta planteada es que el perro es
una creación del hombre.
El resultado del proceso de domesticación (llevado a cabo por el hombre) , de la cría selectiva
realizada por el hombre y también el hecho de haber incorporado el perro a nuestras vidas como
animal de compañía, han marcado las diferencias físicas y de comportamiento entre el lobo y el
perro.
ORIGEN
El perro hace miles de años no existía, apareció tras un proceso realizado por el ser humano,
llamado domesticación. Ese proceso se realizó a partir de su antecesor salvaje.
-Uno de los interrogantes que hasta hace poco no tenía respuesta clara era sobre quién fue ese
antecesor.
En un principio se pensaba que las razas de perros provenían de distintas especies de cánidos y la
teorías más difundidas fue la enunciada por el etólogo austríaco Konrad Lorenz (1903-1989),
Premio Nobel de Medicina y Fisiología en 1973, quien sostenía que la mayoría de las razas caninas
descendían del chacal dorado (Canis aureus) mientras que sólo algunas de ellas descendían del
lobo(Canis lupus). Esta teoría estaría sustentada por varios hechos concretos. Uno de ellos es que
tanto el chacal como el lobo presentan el mismo número de cromosomas (material genético) que el
perro, que por apareamiento se pueden obtener híbridos fértiles y que esta interfecundidad entre
especies permitiría explicar la variedad de las razas actuales. Otro de los hechos es el notable
parecido físico del chacal con algunas razas de perros, su facilidad para coexistir con el hombre y su
tendencia a ladrar ante determinadas circunstancias. Esta teoría fue refutada en su día por varios
estudios.
La teoría aceptada en la actualidad entre la mayoría de los científicos considera al lobo como al
único antecesor salvaje del perro. Más aún, algunos científicos sostienen que el perro no es una
especie diferente del lobo sino una subespecie. Por este motivo, en algunas publicaciones científicas
ya no aparece el perro con su denominación usual de Canis familiaris, sino como Canis lupus
familiaris, afirmando que el perro tal como lo conocemos en la actualidad no es otra cosa que un
lobo doméstico. De hecho en 1993 la Comisión Internacional de Nomenclatura Zoológica recalificó a
los perros como una variante de lobo, cambiando su nombre científico de Canis Familiaris a Canis
Lupus Familiaris. Aunque hoy en día existe controversia con este tema.
Sin embargo, esto no significa que lobos y perros presenten exactamente el mismo comportamiento.
Ambos comparten patrones básicos, pero también existen notorias diferencias que aparecieron
durante el proceso de domesticación (que veremos más adelante.)
-Otro de los interrogantes que generan algunas discusiones en el ámbito científico es respecto de
cuál de todas las clases de lobo fue la que dio origen a su congénere doméstico. En este aspecto
existen básicamente dos tipos de lobos. La hipótesis más sólida sostiene que los lobos del norte
serían los antepasados más probables de las razas caninas nórdicas mientras que el lobo de la
India lo sería de las demás razas caninas. También existe una alta probabilidad de que después del
origen del perro hayan continuado existiendo apareamientos entre perros y lobos, lo cual podría
haber producido mayor variabilidad entre los animales. Esta última sería una de las razones
principales que explicarían el porqué de la diversidad de razas caninas que existen en la actualidad.
-Finalmente, otro de los interrogantes o respuestas más buscadas por los científicos se refiere a la
antigüedad que tendría el perro en nuestro planeta, es decir, cuando se produjo esa domesticación y
donde.
DOMESTICACIÓN
Varios estudios recientes han dado pasos importantes para conocer el linaje que llevó a
determinados lobos a convertirse en perros hace miles de años. Pero la controversia sigue abierta.
Averiguar cómo entraron los perros en nuestra sociedad es una tarea que se ha mostrado difícil para
la ciencia y ha generado intensas discusiones.
Las razas de perros actuales contienen tal remix genético, fruto de innumerables cruces que han
sufrido, que es muy difícil desandar el camino de la evolución. Varios estudios buscaron trazar su
árbol genealógico investigando familias genéticas después de analizar el ADN de cientos de razas
de cánidos actuales.
*El primero de estos estudios, en 2002, concluía que los primeros perros domesticados
debieron surgir en algún punto de Asía, en lo que actualmente es China, hará unos 15000 años.
*Posteriormente, en 2010 se publicó otro estudio que incluía el análisis de 900 perros y 400
lobos de distintas razas, para tratar de encontrar el origen de esta domesticación. Ese trabajo
defendía que el origen más probable era Oriente Medio, donde se tienen referencias arqueológicas
de perros domesticados de hace 12.000 años . ”Los perros parecen compartir más similitud genética
con los lobos grises de Oriente Medio que con cualquier otra población de lobos en todo el mundo”,
dijo el investigador de UCLA Robert Wayne, quien firmaba ese estudio, que indicaba que el 80% de
las razas de perros son razas modernas que han evolucionado en los últimos cientos de años,
aunque haya algunas que se remontan a miles de años.
Finalmente dos investigaciones publicadas en 2013 nos arrojan más luz sobre estos enigmas:
-El primer estudio del 2013 de la Universidad sueca de Uppsala ha identificado varias
diferencias genéticas entre lobos y perros que fueron determinantes para su domesticación,
relacionadas con el desarrollo del sistema nervioso y con el metabolismo del almidón. Este equipo
internacional de investigadores cree haber encontrado pruebas sobre cómo se produjo el primer
acercamiento entre perros (entonces aún lobos) y humanos. Según ellos, comenzaron a acercarse a
las poblaciones humanas para escarbar en las basuras en busca de comida con la que completar su
dieta. Esta hipótesis la han planteado los investigadores después de analizar secuencias completas
de los genomas de 60 perros domésticos de 14 razas con 12 lobos de distintas partes del mundo. El
análisis sugiere que, por un lado, la diferenciación incluyó unos cambios de comportamiento en los
que se favoreció la selección de rasgos como una menor agresividad y menos miedo a las
personas, y por otro, el incremento en la expresión de una enzima que facilita la digestión del
almidón y con él los cereales que podían producir las primeras sociedades agrarias.
Este planteamiento no descarta que antes del desarrollo de la agricultura, los nómadas no
capturasen lobeznos para educarlos como guardianes o cazadores. Sin embargo, sugiere que, en
los orígenes de la revolución agraria, la aparición de restos de alimentos ricos en almidón en las
inmediaciones de los poblados humanos atrajeron a los lobos convirtiendo estos espacios en lugar
de encuentro entre los humanos y los lobos más sociables y que este acercamiento favoreció la
domesticación.
Erik Axelsson, investigador de la Universidad de Uppsala y líder del estudio, aclara que no cree que
hubiese mucha comida disponible en aquellas basuras neolíticas. “Creo que algunos lobos eran
buenos complementando su dieta normal con los restos de estas basuras. Quizá esta capacidad fue
muy importante para estos lobos e hizo que tuviesen éxito”, explica Axelsson. Además, “para poder
acceder a ese alimento que era importante para ellos, los lobos tenían que ser tolerantes al estrés
(no salir corriendo cuando los humanos se acercasen)”, añade. De esta manera, poco a poco, los
lobos perdieron tamaño cerebral y redujeron el de sus dientes, mientras mejoraban su capacidad
social y se empezaban a ganar el apelativo de mejor amigo del hombre.
Este estudio señala que la domesticación de los perros llegó de la capacidad de ciertos lobos para
procesar el almidón de los cereales, que fue sustituyendo en los basureros humanos a una parte de
su dieta carnívora.
-Y el segundo estudio publicado en noviembre del 2013 en la revista Science. Los
investigadores biólogos de la universidad de UCLA de este último estudio entre los que se
encuentra el ya citado Wayne ponen el objetivo en el estudio del ADN mitocondrial de cánidos
prehistóricos: el libro genético de fósiles de los primeros perros y de razas de lobos extintas tenían la
clave para desenmarañar esta evolución tan fructífera. Este grupo internacional de investigadores
incluyeron en la coctelera lobos y coyotes modernos, perros actuales de muy diversas razas, pero
también 18 muestras fósiles de canis antiguos, desde el primer fósil de tipo perro, de Bélgica y hace
31.000 años, hasta 10 tipos de lobos de hace miles de años.
Las conclusiones de este estudio son sorprendentes: los perros comenzaron a domesticarse
en Europa central y fue mucho antes de lo pensado, entre 18.800 años y 32.100 años, aún en el
último periodo glacial, en Paleolítico Superior (40-30 000 antes del presente (AP) y el 12-10 000 AP).
Y ya estaban integrados con los humanos hace 15.000 o 20.000 años, antes de que se desarrollara
la agricultura. Los perros domésticos son la culminación de un proceso que se inicio con los
cazadores-recolectores europeos y los cánidos con los que interactuaron y no como parte del
desarrollo de las comunidades sedentarias basadas en la agricultura. Los análisis genéticos
revelaron que los perros modernos están estrechamente vinculados con los cánidos prehistóricos
cuyos fósiles fueron desenterrados en Europa. Este parentesco es mayor que el que existe entre los
cánidos prehistóricos europeos y los lobos asiáticos, lo que mostraría que el origen de los perros
está en la domesticación de los lobos de Europa y no de Asia. Si hubo otros casos anteriores o en
otros lugares, como parecen atestiguar los fósiles, fueron intentos fallidos. Pero, en todo caso, el
estudio consolida un concepto revolucionario: El perro fue el primer y único animal domesticado
antes de la agricultura.
Hay que entender que la domesticación de los perros fue un proceso gradual. En principio,
los lobos merodeaban alrededor de los campamentos de los cazadores-recolectores del Paleolítico
para aprovechar los restos de comida que dejaban los humanos. En contrapartida, los humanos se
beneficiaban de que la presencia de los lobos alejaba a otros depredadores. Poco a poco, los lobos
se adaptaron a una dieta más rica en almidón, y así pudieron prosperar alimentándose de los
desperdicios de los primeros asentamientos humanos. Lobos y hombres fueron habituándose
progresivamente a la presencia del otro, hasta que los humanos comenzaron a alimentar
directamente a los lobos, a adiestrarlos, a criarlos y a seleccionarlos para diversas tareas
CAMBIOS MORFOLÓGICOS
Los primeros resultados de la domesticación consistieron en la aparición de un tipo de perro de
menor tamaño que el lobo, con dientes más pequeños y mandíbulas menos potentes. La reducción
general del tamaño del cuerpo es una característica de la domesticación y puede estar relacionada
con las carencias dietéticas originadas por el cautiverio al que fueron sometidos estos animales.
Sin embargo, una de las consecuencias más importantes de la domesticación es que los animales
obtenidos por este proceso muestran una gran variabilidad intraespecífica.
Para que se pueda encuadrar la teoría de la domesticación del lobo con la aparición de tantos y tan
variados descendientes, ésta tuvo que llevarse a cabo en varios lugares y al mismo tiempo. Esto
implicaría una variabilidad de morfología, fisiología y comportamiento llevando al “Canis lupus
familiaris” a la diversificación en multitud de razas adaptadas al medio donde se movía su
compañero humano.
Esto permitió que aparecieran razas caninas de tamaños sumamente diversos, a través de un
proceso selectivo que abarcó a numerosas generaciones de perros. Es así que hoy en día podemos
observar desde perros del tamaño de un chihuahua hasta del de un gran danés.
Las diferencias morfológicas también se manifestaron en el sistema nervioso central. El
animal doméstico presentó una disminución del peso del cerebro y una reducción del volumen del
cráneo. Por ejemplo, este cerebro es de 150 a 170 centímetros cúbicos en el lobo y supera en al
menos 30 centímetros cúbicos al de la mayoría de los perros; mientras el tamaño promedio del
cerebro del lobo es al menos un sexto más grande que el de un perro de similar estructura física.
Existen otras diferencias morfológicas: los lobos tienen un hocico más largo que muchas
razas de perros conseguidas por selección artificial, al buscar que la mordida del perro sea más
potente y las mandíbulas hagan más presión. Los lobos adultos no tienen las orejas caídas, tienen
las orejas erguidas, como los perros pastores o los perros nórdicos, sin embargo, los cachorros de
lobo si las tienen caídas, pero en cambio muchos perros empleados en caza tienen las orejas
caídas, lo cual da mayor predisposición a padecer otitis.
CAMBIOS FISIOLÓGICOS
Las diferencias más importantes entre lobos y perros respecto a la fisiología tiene relación con la
reproducción, en parte por la selección de animales con caracteres juveniles de poca agresividad y
mayor tolerancia hacia el hombre.
La madurez sexual, los lobos por norma general es a los 22 meses de edad, el 2º año.
Mientras que en el perro la madurez sexual se suele alcanzar el primer año de edad. En cuanto al
tiempo entre estros, las lobas entran en celo 1 vez al año y los perros suelen entrar 2 veces al año.
Las lobas en cuanto al celo tienen un ajuste muy importante con el fotoperiodo, suelen entrar en
invierno todas, mientras que en los perros hay una asincronia total, pueden criar o tener el celo en
cualquier época del año.
La duración del celo es mayor en los lobos que en los perros. Por ejemplo, el proestro en
cautividad en los lobos viene a durar 15 días y en libertad puede durar 45 días, entre 15 y 45 días
Mientras que la duración media para las perras es de 9 días.
El estro es cuando las hembras están receptivas. En los lobos dura un tiempo medio de 9-15 días,
mientras que en las perras es una media de 7 días En una población el estro puede durar un mes,
en la población, no en cada individuo.
Y por último el diestro es igual en lobos y perros, 60 días
Tanto en hembras de lobo como de perro que entran en diestro pero no se quedan preñadas pueden
padecer una pseudogestacion (embarazo psicológico). Las lobas pseudogestantes pueden tener
leche en las mamas pero esta leche no es funcional.
También hay diferencias en el celo de los machos. Los lobos machos entran en celo en sincronía
con las hembras, en invierno, una vez al año. Los perros machos prácticamente están en celo todo
el año. Hay estudios donde se han medido varios parámetros biológicos como el nivel de
testosterona, el peso testicular y del epidídimo de lobos y perros machos y se comprobó que en los
lobos alcanzan un valor máximo en los meses de invierno pero en los perros eran valores altos de
estos 3 parámetros durante todo el año.
La gestación dura como media tanto en lobas como perras 63 días.
Ya que hablamos de celo y gestación, aprovechamos para decir que el comportamiento sexual
también presentó algunos cambios de importancia. Los componentes iniciales del cortejo, que
constituyen una parte muy importante del comportamiento sexual del lobo, muchas veces son más
reducidos o incluso inexistentes en el perro. Otra característica que presentan los lobos es la
monogamia. Aunque los perros muestran preferencias en el momento de la elección de la pareja
sexual, resulta muy frecuente observar animales que muestran una mínima selectividad en este
aspecto. Todas estas modificaciones en el comportamiento sexual han traído como consecuencia
más relevante un incremento de la actividad sexual durante el proceso de domesticación.
ORGANIZACIÓN SOCIAL
También hay diferencias en cuanto a la organización social.
En cuanto a la unidad social, los lobos viven en manadas y estas manadas son unidades
familiares. La estructura básica de una manada es un lobo, una loba y sus hijos descendientes de
varios años. A veces puede producirse la incorporación de un individuo no emparentado
genéticamente pero son casos puntuales, lo normal es que sea una unidad familiar, padre, madre y
los hijos de varios años.
Nosotros tenemos perros como mascotas y no tienen una estructura social porque vive el perro con
la persona. Pero en casos en los que se forman grupos de perros, perros asilvestrados o perros
vagabundos se ha visto que no es una estructura social igual son grupos de perros y perras que se
juntan sin relación de parentesco y no forman una unidad familiar como las manadas de los lobos.
En cuanto a la reproducción, partimos de la base que una manada de lobos, es una pareja con sus
crías. Solamente se reproduce la pareja alfa, es decir, la pareja dominante. Mientras que en los
perros todas las hembras crían y se forman distintas parejas.
En las manadas de lobos todos los individuos participan en el cuidado de los cachorros, mientras
que en los perros, cada perra cuida de sus cachorros y no se produce este cuidado cooperativo,
realmente en la domesticación lo que hace el hombre es hacerse cargo, cuidar de esos cachorros
entonces esta cualidad de cuidado cooperativo desaparece porque no tiene sentido en los perros.
Cuando se forma un grupo de perros salvajes al criar todas las hembras y criar dos veces al año se
podría pensar que sacaran muchos mas cachorros adelante que una manada de lobos pero
realmente el éxito reproductivo de las manadas de lobos es mayor porque en la de perros al no
haber sincronía con el fotoperiodo muchas de las camadas de perros se producen en circunstancias
climatológicas muy adversas y al no haber ese cuidado cooperativo al final por termino medio, la
productividad de esos grupos de perros es menor que en las manadas de lobos.
En cuanto la estructura social hablamos de la jerarquía que existe en las manadas. Uno de los
inconvenientes que conlleva la vida en grupo es la aparición de conflictos por la posesión de un
recurso, especialmente cuando éste es escaso. Los lobos acostumbran a competir por recursos
como el alimento o la posibilidad de aparearse con un animal en concreto. Si cada vez que dos
miembros de la manada entrasen en competencia tuvieran que luchar para elegir un ganador, las
peleas serían continuas, con los inconvenientes obvios que tal situación supondría.
La jerarquía es un sistema de organización social por el que se establece un orden de prioridad a la
hora de acceder a un recurso, evitando con ello la utilización continua e innecesaria de la violencia.
La jerarquía o poder dentro de la manada está definida por el macho alfa. En los perros esta
jerarquía se ha rebajado ya que se ha perdido esa estructura social.
Como hemos dicho la agresión ritualizada está muy marcada y definida en los lobos, sin embargo en
los perros se ha rebajado mucho porque el hombre interviene en los conflictos. Cuando se produce
un conflicto entre perros, no solo el hombre interviene durante el conflicto también interviene antes y
después, esto provoca que se relajen esas pautas de comportamiento y desaparezcan en los
perros.
Territorialidad
COMUNICACION VISUAL
Los lobos tienen un repertorio de señales visuales para transmitir información Y la expresión facial
de los lobos transmite mucha información, en los perros no transmite exactamente la misma
información esa expresión facial. Y en cuanto las señales visuales las diferencias más importantes
entre lobos y perros es que mientras que en los lobos esas señales que indican dominancia las
exhiben generalmente los individuos dominantes en los perros las exhiben prácticamente todos
porque todos en cierta manera se sienten dominantes.
En cuanto al marcaje territorial, las señales visuales más destacadas son las posturas que
hacen los individuos al orinar, es una señal del estatus social del individuo dentro de la manada.
Cuando ves a los perros machos levantar la pata para orinar, esa postura es una señal visual de
dominancia. Los machos lo hacen erguidos y las hembras en cuclillas pero también levantan un
poco la pata. El objetivo de esto es dejar la señal porque aparte de ser una señal visual que los otros
individuos de la manada saben y entienden que esos individuos son dominantes, también
levantando la pata dejan la señal a la mayor altura posible para que un posible rival o un intruso se
dé cuenta del tamaño del individuo por la altura a la que deposita esa señal.
Otra señal importante de marcaje territorial es cuando hacen rascaduras, habréis visto a los
perros que después de orinar rascan el suelo, eso es una señal, funciona como señal visual, si ves a
un perro haciendo eso sabes que es dominante y si ves las marcas en el suelo también, pero no
solo señal visual también es señal olorosa porque dejan sustancias que tienen las glándulas
interdigitales. En cuanto a las señales visuales se realizó un estudio para ver este repertorio de
señales que exhiben los lobos y compararlas con los perros, que señales retienen los perros y si
todos los perros retienen las mismas señales. Se comparó las señales visuales de los lobos con 10
razas de perros y se comprobó que los perros que físicamente se parecen más a los lobos retienen
muchas mas señales visuales que los perros de razas que se parecen menos. Los autores de este
estudio sugieren que rasgos físicos de fenotipo están estrechamente ligados a rasgos
comportamentales como son la emisión de señales visuales.
COMUNICACION OLOROSA
Los lobos para marcar su territorio, utilizan tanto el marcaje oloroso como el visual: marcaje
con la orina, las rascadas en el suelo y secreciones de las glándulas anales, generalmente
depositadas sobre las heces
Hemos comentado ya las señales visuales relacionadas con el marcaje oloroso, los lobos
utilizan tanto el marcaje visual como el oloroso: marcaje con la orina, las rascadas en el suelo,
levantar pata, también secreciones de las glándulas anales, generalmente depositadas sobre las
heces.
Pero no todas las veces que los perros o los lobos hacen sus necesidades, orinan o defecan
están emitiendo señales olorosas. También hacen sus necesidades simplemente para liberar la
vejiga, siendo considerado una simple micción o excreción. El marcaje oloroso es solo si
previamente hay una inspección olfativa del terreno o si estas señales se depositan en sitios
elevados, caminos al borde del territorio, en puntos estratégicos del territorio (cruces de caminos)
donde la probabilidad de ser detectados por otros congéneres es mayor.
Al igual que en las señales visuales, en las manadas de lobos este marcaje oloroso lo realiza la
pareja dominante, la pareja alfa, mientras que los perros, todos los perros marcan el territorio en su
condición de individuos dominantes.
COMUNICACION ACÚSTICA
En cuanto la comunicación acústica, el repertorio vocal de una especie es el numero de señales, de
tipos definidos de señales que emite esa especie.
Básicamente se pueden agrupar las señales acústicas que emiten los lobos en 4 grandes tipos, los
aullidos, los ladridos, los gruñidos y los gemidos-quejidos que son vocalizaciones afiliativas de tipo
armónico Los lobos y los perros tienen el mismo repertorio en cuanto a número de señales, lo que si
hay diferencia es en la frecuencia con la que emiten esas señales y fundamentalmente en dos tipos
de vocalizaciones, los aullidos y los ladridos.
En cuanto a los aullidos, los lobos por norma general aúllan más que los perros. Los lobos
viven en estado salvaje, viven libres, en grupos, no están siempre juntos, entonces es una señal
idónea para transmitir información a larga distancia.
Tienen dos funciones básicas los aullidos, una es la de evitar que se aproximen lobos de distintas
manadas, separación de individuos de distintas manadas, defensa del territorio y la otra es la de
juntarse, reunirse los individuos de la misma manada, estas son las dos principales funciones que
tienen los aullidos. En los perros evidentemente al vivir en nuestra casa con nosotros han perdidos
esa función
Dentro de los aullidos, un tipo de vocalización es el coro de aullidos, esto es cuando un individuo de
la manada empieza a aullar y a emitir otro tipo de vocalizaciones y al final se forma un característico
coro de aullidos. No hay estudios para ver si perros que vivan salvajes emitan coros o no, aunque
hay determinadas razas como los perros de trineo, los esquimales que emiten bastantes coros de
aullidos.
Y el otro tipo de vocalización por la que identificamos a los perros es el ladrido. Los perros
por norma general ladran más que los lobos. Mientras que en los perros se ha seleccionado desde
el principio de la domesticación para que ladraran, es una carácter que se ha exagerado para que
avisaran al hombre de que llegaban otros hombres o incluso otros animales que pudieran ser
peligrosos, eso hace que los perros ladren mucho más que las especies de cánidos salvajes, por
eso en un carácter hipertrofiado (que se ha desarrollado mucho)
Los perros tienen una gran variabilidad en cuanto la estructura acústica de los ladridos y emiten
ladridos en muchos contextos diferentes. Se han realizado estudios para ver si los ladridos pueden
servir como señales referenciales, es decir, hay distintos ladridos, con distintos parámetros
acústicos, en función en el contexto en el que se emiten y de esta forma servir no solo para la
comunicación para la que están “seleccionados” los perros que es comunicarse con el humano sino
también para comunicarse entre perros y actuar como señales referenciales.
En cuanto a los lobos ladran mucho menos pero hay dos tipos de ladridos descritos. Uno que
actúa como una función de alarma para alertar a los otros individuos de la manada de un peligro o
de algo que quieren que el resto de individuos estén pendientes, en la literatura científica se llama
woof, es un ladrido de alarma y son cortos y los emiten todos los individuos de la manada,
indistintamente si son dominantes o no. Y luego está el ladrido de amenaza que se ha descrito
cuando por ejemplo los lobos de otras manadas se acercan a un cubil donde están los cachorros en
estado salvaje, es un ladrido de amenaza para advertir al otro de que esta metiéndose en un
territorio que no le corresponde.
CAMBIOS CONDUCTUALES
Son notables también los cambios conductuales, su carácter difiere en cómo actúan ante
situaciones desconocidas, ante las actividades lúdicas y en su predisposición a ser
adiestrados por el hombre, debido a lo que se denomina neotenia: la persistencia de un carácter
infantil o comportamientos juveniles una vez alcanzada la edad adulta, lo que hace que el perro
acepte nuestra autoridad y pueda ser adiestrado mediante juegos.
a) En primer término, disminuyeron la agresividad y las reacciones de escape y de defensa
que se observan en los animales salvajes. Como consecuencia, se produjo un aumento de la
docilidad, imprescindible para facilitar el manejo de los animales
b) La diferencia que en buena parte marca que las demás sean posibles, es la pérdida del
carácter desconfiado por parte del perro. El lobo es extremadamente tímido y asustadizo ante las
situaciones desconocidas, miedo ante estímulos nuevos, mientras que el perro es una especie muy
confiada y con facilidad para asumir nuevas situaciones. Muchos perros podrían irse con un
desconocido que los acaricie y les dé algo de comida, mientras que un lobo que se encuentre con el
hombre en el bosque lo evitará. Esto se debe a que los animales excesivamente alertas o
hiperactivos que exploraban absolutamente todo lo que acontecía a su alrededor o que se
escapaban ante el más mínimo estímulo desconocido, no eran adecuados para el tipo de
convivencia que necesitaba el ser humano con un animal doméstico.
Para acabar comentar que durante el proceso de domesticación, los perros se han seleccionado
para tener una serie de habilidades cognitivas sociales y estrechos vínculos que les permiten
comunicarse con los humanos de una forma única. Los perros tienen la habilidad de interpretar el
comportamiento social y comunicativo del hombre. Los estudios realizados sugieren que esta
habilidad tiene un componente hereditario y evolucionó inicialmente durante la domesticación.