Derecho Administrativo
Derecho Administrativo
Derecho Administrativo
Hechos
El Congreso sancionó las leyes 13.246, 13.897 y 14.451, que ordenaban al Poder Ejecutivo
a organizar en el Ministerio de Agricultura las Cámaras Regionales Paritarias de
Conciliación y Arbitraje obligatorio, y una Cámara Central.
El caso se origina por un conflicto entre Fernández Arias y Poggio en el cual la Cámara
Regional de Trenque Lauquen, condenó a Poggio a entregar el predio en cuestión;
contra dicho pronunciamiento, el condenado dedujo recurso extraordinario, que al
ser denegado motivó una queja ante la Corte Suprema, donde impugnó la
constitucionalidad de las leyes 13.246, 13.897 y 14.451, ya que por éstas se crearon
órganos administrativos dotados de facultades jurisdiccionales lo que contraria al
Artículo 95 de la Constitución Nacional, que impide al Poder Ejecutivo el ejercicio de
funciones judiciales, resulta violatorio el Art. 67 inc. 11 de la Constitución toda vez
que se faculta a las Cámaras Paritarias para resolver sobre materias propias de
autoridades judiciales de las provincias, e incumple el Artículo 18 de la Constitución
Nacional, en cuanto se reconoce a toda persona el derecho de defensa en juicio ante
el Poder Judicial. Las leyes cuestionadas extraen de la esfera judicial ciertos
conflictos para que sean resueltos exclusivamente por tribunales administrativos.
Resolución
Artículo 109 CN: “En ningún caso el presidente de la Nación puede ejercer funciones
judiciales, arrogarse el conocimiento de causas pendientes o restablecer las fenecidas.”
ORGANIZACIÓN DEL PODER
Artículo 18 CN: “Ningún habitante de la Nación puede ser penado sin juicio previo fundado
en ley anterior al hecho del proceso, ni juzgado por comisiones especiales, o sacado de los
jueces designados por la ley antes del hecho de la causa.” DERECHO A JUICIO
Artículo 1 CN: “La Nación Argentina adopta para su gobierno la forma representativa
republicana federal, según la establece la presente Constitución.” DIVISIÓN DE PODERES
Acá la Corte hace un punteo por la CN y dice que hay una razón que justifica que existan
estos tribunales que es la necesidad de especialización de ese tribunal.
Declaró inconstitucional en este caso porque no hubo control judicial suficiente.
Los tribunales jurisdiccionales administrativos no pueden tener una resolución final a menos
que la persona renuncie expresamente a ir a la vía judicial.
La Corte en Fernandez Arias pone como requisitos para crear tribunales administrativos
jurisdiccionales:
Poder Ejecutivo
- Decretos Legislativos — P.L
- Resuelve recursos — P.J
Poder Legislativo
- Dicta actos administrativos — P.E
- Juicio Político — P.J
Poder Judicial
- Actos administrativos — Consejo de la Magistratura
- Acordadas — P.L
La función administrativa
Criterio Subjetivo:
Mira a los sujetos, ¿quien legisla? Los legisladores, ¿quien juzga? El poder judicial, quien
administra? el administrador. Este criterio nos queda corto, a veces el legislativo en un juicio
político juzga, o administra al contratar. No es que cada poder hace exclusivamente esa
función con la que lo identificamos.
Criterio Objetivo/Material:
Para esta teoría serían actos legislativos los que establecen reglas de conducta humana en
forma general e imperativa (o sea, son actos legislativos los que crean normas o reglas de
derecho), jurisdiccionales los que deciden con fuerza de verdad legal una cuestión
controvertida entre dos partes, determinando el derecho aplicable. Y son actos de la función
administrativa los que constituyen manifestaciones concretas (por oposición a abstractas,
como lo son la legislación y la jurisdicción) de voluntad estatal.
Hechos
El caso llegó a la Corte Suprema para que determinara si a EDESUR se le podía exigir que
pagará esta indemnización o, bien, si la ley y el contrato de servicio público limitaba la
responsabilidad de esta empresa al pago de la multa.
La segunda cuestión que debía resolver la Corte era si el reclamo por esta indemnización
podía ser resuelto por el ENRE o si sólo podía ser decidido por la justicia.
Decisión de la Corte
La Corte Suprema resolvió que EDESUR podía ser demandada por los daños y perjuicios
causados por no haber prestado el servicio de provisión de energía eléctrica en las
condiciones previstas en el contrato (Voto de los jueces Petracchi, Boggiano, Maqueda,
Highton de Nolasco,Belluscio, Zaffaroni y Lorenzetti. Fayt votó en disidencia, rechazando el
recurso por cuestiones formales. Argibay consideró innecesario resolver esta cuestión).
Los jueces basaron su decisión en que el contrato de servicio público con EDESUR
expresamente establecía esta obligación. Además, señalaron que la limitación a la
responsabilidad civil sólo podría surgir de una ley dictada por el Congreso que justificara,
debidamente, la razón de ser de esa medida.
Para estos jueces, esto no sería una consecuencia posible porque la ley no autoriza
aumentar las tarifas para amortizar los costos causados por el propio incumplimiento del
servicio. Zaffaroni fue el único juez que argumentó que esta posición encontraba justificativo
en el artículo 42 de la Constitución Nacional que asegura la protección económica de los
usuarios de los servicios públicos.
En segundo lugar, la Corte resolvió que este reclamo no podía ser resuelto por el ENRE
sino que correspondía que fuera analizado y decidido por la justicia.
En ESTRADA la Corte dice que es conveniente que estos órganos administrativos sean los
que resuelvan las controversias por estar en cercanía con las cuestiones técnicas, y
permiten resolverlas más uniformemente.
Requisitos para crear Tribunales Administrativos:
Fallo Pogonza
Hechos
El Sr. Jonathan Jesús Pogonza desempeñaba tareas como arrendador y pintor bajo las
órdenes de NS & R S.A. El hombre en el momento en que ingresó a trabajar se encontraba
en perfecto estado de salud.
El día 9 de octubre del año 2017, en ocasión del trabajo, sufre un accidente. Éste se resbaló
con grasa que había en el piso, se dobla el pie izquierdo y, posteriormente, continúa con sus
actividades regulares. No obstante, cuando avizoró que su pie comenzó a inflamarse dio
inmediato aviso a la administración y a la ART. Fue atendido en el centro médico
correspondiente de la aseguradora donde fue diagnosticado con una luxación, esguince y
torcedura de articulaciones y ligamentos del tobillo y pie izquierdo. Sólo se le recetaron
analgésicos y tres días de reposo.
Es así que solicitó que se condene a la ART a que indemnice también al actor por
las secuelas psíquicas del accidente, que pague el tratamiento psicológico y la
incapacidad psicológica resultante del mismo que el perito especialista dictamine al haber
omitido otorgarla la ART. Deja en claro que los porcentajes de incapacidad denunciados,
son aproximados e iniciales para su cuantificación basados en lo que dictaminó el médico
de parte y que será el tribunal quien decida el porcentaje real, en más o en menos, de
acuerdo a la prueba rendida. Se destaca que, en ninguna oportunidad, la ART se encargó
de evaluar los antecedentes y las tareas que desarrolla el actor. Tampoco se encargó de
reseñar en forma clara los padecimientos de aquél, ni ningún tipo de medidas para con el
empleador.
Decisión de la Corte
Las mismas tales cuestiones, mediante la ley 27.348, están razonablemente justificados ya
que reconocen fundamento en los objetivos previamente declarados en las leyes 24.557 y
26.773 que organizaron, en cumplimiento de un mandato constitucional, el sistema especial
de reparación de los accidentes y las enfermedades laborales.
Los primeros no son sistemas de reparación tarifados, difieren en cuanto a los márgenes de
responsabilidad que establecen y, por todo ello, suponen exigencias probatorias más
gravosas y una muy precisa y detallada ponderación de las circunstancias variables propias
de cada caso.
En cambio, el régimen especial de la ley de riesgos del trabajo, que otorga una más amplia
cobertura, es tarifado y procura lograr automaticidad y celeridad en el acceso a las
prestaciones e indemnizaciones que contempla.
En el caso “Fernández Arias c/ Poggio”1 sostuvo que aquellos se constituyen en una de las
modalidades universales de responder de forma práctica a los premiosos reclamos de los
hechos que se presentan en la realidad.
Asimismo, remarcan que la idea de una administración ágil, eficaz y dotada de amplia
competencia se traduce en un instrumento apto para resguardar, en determinados aspectos,
fundamentales intereses colectivos de contenido económico y social, que de otra manera
podrían ser insuficiente o tardíamente satisfechos. Por su parte, destacó que la validez de
los órganos administrativos con el alcance indicado, no implica un otorgamiento
incondicional de facultades jurisdiccionales pues su actividad se encuentra sometida a
limitaciones de jerarquía constitucional que no se pueden transgredir como el control judicial
suficiente, que impide que los pronunciamientos de los órganos administrativos sean
producto de un poder absoluto y discrecional fuera de toda especie de revisión judicial
posterior.
Por su parte, en el caso “Ángel Estrada” sostuvo que las garantías constitucionales del art.
18 de la Carta Magna y el derecho de defensa de la persona y los derechos en juicio
quedan a salvo cuando los organismos administrativos dotados de jurisdicción con el fin de
resolver conflictos entre particulares han sido creados por ley, su independencia e
imparcialidad se encuentren aseguradas, el objetivo económico y político tenido en cuenta
por el legislador, en miras de su creación, restringiendo de esta forma la jurisdicción que la
Constitución atribuye a la justicia ordinaria haya sido razonable y, que sus decisiones estén
sujetas a control judicial amplio y suficiente
López de Reyes
Hechos
1. Principio de igualdad ante la ley: El caso cuestionaba si era constitucional que una ley
tratara de manera diferente a hombres y mujeres en circunstancias similares.
2. Control de constitucionalidad: La Corte reafirmó que tenía la facultad de controlar si una
ley era contraria a los derechos y garantías establecidos en la Constitución.
Decisión de la Corte
Los fallos "Fernández Arias" y "Ángel Estrada" tienen algunas coincidencias importantes en
relación con el control judicial de los actos administrativos y el principio de juridicidad, temas
centrales en ambos casos, aunque los contextos específicos difieren. A continuación, te
detallo las coincidencias clave:
- Ángel Estrada: En este fallo de 1938, se debatió la revisión de actos administrativos del
Poder Ejecutivo, en este caso, relacionados con la cancelación de una concesión otorgada
a la empresa Ángel Estrada. La Corte también afirmó que el control judicial de los actos
administrativos es posible, y que las facultades discrecionales no son absolutas, debiendo
respetar siempre la ley y los derechos constitucionales.
Conclusión
En resumen, ambos casos coinciden en la afirmación del control judicial sobre los actos
administrativos, incluso cuando se trata de actos discrecionales, siempre que haya una
posible afectación de derechos o principios constitucionales. Ambos fallos reafirman el
principio de juridicidad y el papel del Poder Judicial como guardián de los derechos
constitucionales frente a los actos de la administración.
NORMATIVAS
NO NORMATIVAS
Jurisprudencial y Doctrina
Unilateral: Cuando es el resultado de una declaración de voluntad común entre dos o más
partes, destinada a reglar sus derechos. En el acto unilateral falta esa “declaración de
voluntad común” y es por el contrario una sola parte, en este caso la administración, la que
expresa su voluntad, llamada por ello “unilateral.”
TIPOS DE REGLAMENTOS
➔ ADMINISTRATIVOS:
1. AUTÓNOMOS (Art 99, inc 1)
2. EJECUCIÓN
➔ LEGISLATIVOS:
3. DELEGADOS
4. NECESIDAD Y URGENCIA
Cuando hablamos de la función administrativa damos por hecho que el presidente ejerce
esa atribución, es el responsable de administrar el país, de ahí sale que el presidente
conserva la titularidad del poder administrativo.
El jefe de gabinete ejerce la administración general del país, pero el presidente tiene la
titularidad y es responsable políticamente de la administración general del país. El jefe de
gabinete también dicta reglamentos autónomos para ejercer la administración general del
país. ○ Estos dictados se deben someter a un control judicial
El Poder Ejecutivo tiene la atribución para dictar los reglamentos de ejecución, que son
normas complementarias de las leyes, que ayudan a su aplicación e interpretación. Regulan
y complementan la normativa, sin alterar el espíritu de la ley, puede alterarse la letra pero no
el espíritu. La constitución no fija un plazo para reglamentar una ley, si el ejecutivo no
reglamenta una norma para que yo no pueda ejercer mi derecho, es una
inconstitucionalidad por omisión.
“Expide las instrucciones y reglamentos que sean necesarios para la ejecución de las leyes
de la Nación, cuidando de no alterar su espíritu con excepciones reglamentarias” ○ Estos
reglamentos son los DECRETOS: Es el que emite el Presidente cuando una ley del
Congreso de la Nación lo autoriza. La ley puede delegarle funciones legislativas en materia
de administración pública y emergencia pública y tiene que establecer el plazo para ejercer
ese derecho y las pautas dentro de las cuales puede actuar.
3. DELEGADOS — Potestad del Legislativo Se encuentra fundamentado en el Art. 76 de la
C.N, con zona de reserva del Legislativo.
“Participa de la formación de las leyes con arreglo a la Constitución, las promulga y hace
publicar. El Poder Ejecutivo no podrá en ningún caso bajo pena de nulidad absoluta e
insanable, emitir disposiciones de carácter legislativo. Solamente cuando circunstancias
excepcionales hicieran imposible seguir los trámites ordinarios previstos por esta
Constitución para la sanción de las leyes, y no se trate de normas que regulen materia
penal, tributaria, electoral o de régimen de los partidos políticos, podrá dictar decretos por
razones de necesidad y urgencia, los que serán decididos en acuerdo general de ministros
que deberán refrendarlos, conjuntamente con el jefe de gabinete de ministros.”
FALLO “Consumidores Argentinos”: Este fallo consideró que el uso del DNU debe ser
excepcional
Hechos
Consumidores Argentinos (ONG cuyo objetivo es educar a los consumidores) presentó una
acción de amparo contra el Poder Ejecutivo Nacional con el objetivo de que se declarara la
inconstitucionalidad del DNU 558/02 que modificó la ley 20.091 de Entidades de Seguro.
La Asociación señaló que las modificaciones privan al consumidor de ejercer su derecho por
la falta de publicidad con respecto a la cesión de la cartera y eso iba en contra del Art. 42
CN, por ej. el art. 1° del decreto 558/02 incorporó la posibilidad de que las aseguradoras,
ante una situación de iliquidez transitoria, realicen y constituyan deuda subordinada a los
privilegios generales y especiales derivados de los contratos de seguro.
Primera y segunda instancia: declaró la inconstitucionalidad del decreto 558/02, que había
modificado diversas disposiciones de la ley 20.091. “Artículo 42.- Los consumidores y
usuarios de bienes y servicios tienen derecho, en la relación de consumo, a la protección de
su salud, seguridad e intereses económicos; a una información adecuada y veraz; a la
libertad de elección, y a condiciones de trato equitativo y digno.
Las autoridades proveerán a la protección de esos derechos, a la educación para el
consumo, a la defensa de la competencia contra toda forma de distorsión de los mercados,
al control de los monopolios naturales y legales, al de la calidad y eficiencia de los servicios
públicos, y a la constitución de asociaciones de consumidores y de usuarios.
La legislación establecerá procedimientos eficaces para la prevención y solución de
conflictos, y los marcos regulatorios de los servicios públicos de competencia nacional,
previendo la necesaria participación de las asociaciones de consumidores y usuarios y de
las provincias interesadas, en los organismos de control.”
Decisión de la Corte
Los jueces pueden controlar la existencia del estado de necesidad y urgencia, la que no
puede ser una mera conveniencia política
No hay necesidad y urgencia para el dictado del decreto imputado. No estaba creada la
Comisión Bicameral Permanente a la que refiere el Art. 99 inc. 3 CN, dijo que “la ausencia
de una intervención legislativa que permita inferir la voluntad del Congreso de ratificar o
derogar el decreto 558/02 resulta suficiente para determinar su invalidez constitucional”. (La
Comisión se creó el 2006 con la ley 26.122). Respecto de este último punto, consideró que
la falta de control legislativo habilita a examinar si hubo necesidad y urgencia.
En este sentido, corresponde reconocer que hubo emergencia económica reconocida por la
Corte en varios fallos, pero no hay ningún elemento aportado por el Estado Nacional para
justificar la omisión de recurrir a una ley.
Agregó que el decreto no cumplía los requisitos exigidos, como para sostenerse la validez
de su dictado, ya que se apartaba de la constante doctrina de la Corte en la materia, antes y
luego de la reforma constitucional de 1994, por lo que correspondía declarar su
inconstitucionalidad.
Morales Blanca
Hechos
Blanca Azucena Morales interpuso una demanda contra la ANSES (Administración Nacional
de la Seguridad Social) solicitando el otorgamiento de un beneficio de pensión. La Cámara
Federal de Apelaciones de Comodoro Rivadavia confirmó la sentencia de primera instancia
que había fallado a su favor, ordenando a la ANSES que concediera el beneficio solicitado.
Además, la Cámara impuso las costas del juicio a la ANSES, lo que provocó el recurso
extraordinario por parte de la
La Corte argumentó que el artículo 3 del decreto no tenía sustento constitucional, ya que no
se demostraron las circunstancias excepcionales que justificarían el uso de un decreto de
necesidad y urgencia para modificar las disposiciones de la Ley 27.423, que establece un
marco claro para el tratamiento. de las costas en causas de seguridad social. En particular,
el artículo 36 de dicha ley establece que, en las causas de seguridad social, las costas se
impondrán según el principio general contenido en el Código Procesal Civil y Comercial de
la Nación, es decir, a la parte vencida en el juicio, salvo en los casos donde los jubilados,
pensionados, afiliados o sus causahabientes.
Decisión de la Corte
Imposición de Costas:
En este caso específico, la Corte determinó que la ANSES, como parte demandada, había
resultado vencida, por lo que era responsable de cubrir las costas del juicio. La Ley 27.423
establece que, en causas de seguridad social, las costas se impondrán según el principio
general contenido en el Código Procesal Civil y Comercial de la Nación. Este principio indica
que las costas deben ser asumidas por la parte que pierde el juicio, lo que busca garantizar
un acceso equitativo a la justicia y proteger los derechos de los beneficiarios de la seguridad
social.
Pino Severino
Hechos
El caso se originó a raíz de un accidente laboral sufrido por Carlos Pino Severino, empleado
de una empresa de transporte. Durante la ejecución de sus tareas laborales, Pino Severino
sufrió una lesión incapacitante, lo que motivó su reclamo de indemnización por accidente de
trabajo ante la justicia.
Pino Severino argumentaba que la indemnización prevista por la Ley de Riesgos del Trabajo
LRT resultaba insuficiente para cubrir el daño real que había sufrido. Además, planteó que
la aplicación de la normativa implicaba una vulneración de sus derechos constitucionales,
en particular, el derecho a la integridad física ya una compensación justa.
El planteo fue dirigido contra la Aseguradora de Riesgos del Trabajo ART contratada por el
empleador, y también involucró a la empresa en cuestión, dado que el trabajador también
buscaba responsabilizar a su empleadores en forma directa por la falta de medidas de
seguridad adecuadas en el ámbito. laborales.
Cuestiones jurídicas y
Decisión de la Corte
La Corte fijó jurisprudencia en el caso CSJ 30/2013 (49-P)/CS1 “Pino, Seberino y otros c/
Estado Nacional –Ministerio del Interior- s/Personal Militar y Civil de las FFAA y de Seg.”,
del 7 de octubre de 2021. Allí se establece que las facultades legislativas del Presidente son
excepcionales y sólo puede actuar así cuando las cámaras del Congreso no pueden
reunirse o cuando la situación que requiere solución legislativa sea de una urgencia tal que
deba ser remediada inmediatamente.
Dijo la Corte que deben existir “condiciones de rigurosa excepcionalidad” que habilitan los
dictados de un DNU, que implican la “limitación y no ampliación” de las facultades del PEN,
se exige un auténtico “estado de necesidad y urgencia”, se debe tener la necesidad de
alegar “estándares judicialmente verificables”, sin usar “criterios de mera conveniencia”,
ni tampoco “elegir discrecionalmente” entre presentar una ley o sancionar un
decreto. También recuerda que “el Poder Judicial deberá entonces evaluar si las
circunstancias invocadas son excepcionales, o si aparecen como manifiestamente
inexistentes o irrazonables”. Es decir, la Justicia revisa su factibilidad.
La Corte también permitió que el trabajador pudiera reclamar por vía de la responsabilidad
civil del empleador, abriendo la posibilidad de obtener una indemnización complementaria,
más allá de lo previsto por el régimen de la LRT.
Votos en disidencia
Uno de los votos más destacados en disidencia fue el de Carlos Fayt, juez de la Corte
Suprema de Justicia. En su voto, Fayt no coincidió con la decisión mayoritaria que
declaraba inconstitucionales ciertas disposiciones de la Ley de Riesgos del Trabajo LRT.
Estafa
En resumen, Carlos Fayt votó por la validez constitucional de la Ley de Riesgos del Trabajo,
sosteniendo que el sistema de compensación tarifada y la limitación a la vía civil establecida
por dicha ley eran constitucionales, y que no vulneraban el derecho del trabajador a una
reparación. justa. De acuerdo con su voto, el trabajador podía acceder a un sistema de
cobertura eficiente y rápida, aunque no fuera necesariamente integral.
Este voto disidente se contrapone a la opinión mayoritaria de la Corte, que demostró que las
limitaciones del régimen de la LRT vulneraban derechos fundamentales, como el acceso a
una reparación integral del daño y el derecho de acceso a la justicia civil para reclamar una
indemnización adicional.
En este caso, la Corte también enfatizó que la administración debe promover condiciones
que permitan a los consumidores ejercer sus derechos de manera efectiva, lo que incluye el
acceso a la justicia y mecanismos de reclamo accesibles y eficaces. Esta perspectiva
refuerza la idea de que la responsabilidad del Estado no se limita a la acción negativa, sino
que también implica un deber de garantizar condiciones justas y equitativas en las
relaciones económicas.
Fallo Mouviel
Raúl Mouviel y otros fueron condenados a una pena de 30 días de arresto por infracción a
los edictos policiales sobre “desordenes y escándalo” (Art. 1°, Inc. c y Art. 1°, Inc. a,
respectivamente). La condena fue impuesta por el jefe de policía de la Capital porque el
Estatuto de la Policía federal (Art. 7 Inc. a) del Estatuto de la Policía Federal), lo autorizaba
a emitir y aplicar edictos dentro de la competencia asignada por el Código de Procedimiento
en lo Criminal y para reprimir actos no previstos por las leyes, en materia de policía de
seguridad. Agraviándose la defensa del fallo respectivo por considerarlo violatorio de los
Arts. 29, 68, Inc. 11, 26 y 27, 83, Inc. 3°, y 90 de la Constitución nacional. Esta medida
policial fue apelada ante el Juez en lo penal correccional, quién confirmó la medida. Contra
esta sentencia, los imputados dedujeron recurso extraordinario alegando que el régimen de
faltas vigentes concentraba en cabeza del jefe de policía las facultades legislativa, ejecutiva
y judicial, lo que resultaba violatorio del principio de división de poderes.
Decisión de la Corte
Los artículos 18 y 19 de la Constitución establecen que ningún habitante de la Nación
puede ser penado sin juicio previo fundado en leu anterior al hecho del proceso” y nadie
está obligado a hacer lo que la ley no manda ni privado de lo que ella no prohíbe”.
El poder legislativo establece a través de leyes, los presupuestos necesarios para configurar
una falta y su sanción. No puede delegar en el Poder Ejecutivo la total configuración de
delitos ni la libre elección de penas, porque sería una delegación de facultades indelegables
por esencia. El poder ejecutivo podrá hacer reglamentos que ejecuten las leyes nacionales
sin alterar su espíritu, reglamentar circunstancias concretas de las acciones reprimidas
siempre que exista una ley anterior definida para respetar el principio de división de poderes
y garantía de “ley previa”. Reglamentar es tornar explícita una norma que ya existe y a la
que el poder legislativo le ha dado sustancia y contenidos definidos.
El estatuto de la Policía Federal faculta al jefe de policía a emitir y aplicar edictos para
reprimir actos no previstos por las leyes en materia de policía de seguridad, la cual excede
la facultad reglamentaria del Poder Ejecutivo e importa por parte del poder legislativo una
delegación de potestades propias y exclusivas (violando el principio constitucional de
delegación de poderes).
Fallo Etcheverry
Hechos
La Cámara hizo lugar a la acción de amparo instaurada por una sociedad pesquera y
declaró la inconstitucionalidad e inaplicabilidad con relación a la actora de dos resoluciones
del Ministerio de Economía e Infraestructura, la 11/02 que fijó derechos a la exportación
para consumo a determinadas mercaderías y la resolución 150/02 que dispuso que la AFIP
solo daría curso a los pedidos de estímulos a la exportación correspondientes a aquellos
exportadores que hubieran dado cumplimiento a la totalidad de las obligaciones fiscales
derivadas de tributos nacionales. Contra dicha decisión la AFIP interpuso recurso
extraordinario. La Corte Suprema de Justicia de la Nación confirmo la sentencia apelada.
Los jueces Lorenzetti, Fayt, Maqueda, Zaffaroni, declaran que la invalidez de tal resolución
-que estableció derechos de exportación, conocidos como “retenciones”- estaba limitada al
lapso comprendido entre marzo y agosto de 2002, porque hubo una ley del Congreso que
ratificó expresamente la legislación delegada.
El voto de los doctores Lorenzetti, Fayt y Maqueda señaló que las retenciones son tributos y
que, de acuerdo a los artículos 4°, 17 y 52 de la Constitución Nacional, sólo el Congreso de
la Nación puede crearlos. Destacaron los ministros que esa limitación es propia del régimen
representativo y republicano de gobierno y que ninguna carga tributaria puede exigirse a las
personas si no ha sido creada por el Poder Legislativo, único poder del Estado investido de
tal atribución. Agregaron que la Constitución Nacional confió al Congreso Nacional el poder
de crear los recursos y votar los gastos públicos y sólo asignó al Poder Ejecutivo la facultad
de recaudar los recursos para emplearlos en los gastos designados. Remarcaron, con cita
de Juan Bautista Alberdi, que esta manera de distribuir el poder tributario fue adoptada con
el objeto de evitar que en la formación del tesoro sea “saqueado el país”, desconocida la
propiedad privada y abatida la seguridad personal así como que, en la elección y cantidad
de los gastos, se dilapide la riqueza pública. Sostuvieran los ministros que suscribieron el
voto que las leyes que el Estado Nacional invocaba para justificar la resolución dictada por
el Ministerio de Economía no habían delegado al Poder Ejecutivo Nacional el poder de
establecer retenciones como las que pretendía aplicar. También señalaron que si bien es
cierto que en materia de comercio internacional es necesario que el Poder Ejecutivo cuente
con herramientas que le permitan en forma ágil implementar políticas económicas para
proteger la producción local, los precios del mercado interno o la competitividad, ellas deben
provenir de una ley sancionada por el Congreso que establezca de manera cierta e
indudable pautas claras para su ejercicio, lo que no ocurría en el caso.
Fallo Famyl
Hechos
Famyl S.A. promovió acción de amparo contra el Estado Nacional -Poder Ejecutivo
Nacional, Ministerio de Economía y Obras y Servicios Públicos- con el fin de obtener que se
declare la inconstitucionalidad de la Ley 25.063, vetada y promulgada parcialmente por
Decreto N° 1517/98 Y que, en consecuencia, se mantenga la exención del Impuesto al Valor
Agregado para la actividad que desarrolla.
Decisión de la Corte
La Cámara Federal de Apelaciones de La Plata confirmó el pronunciamiento de la instancia
anterior, en cuanto hizo lugar a la acción y declaró la inconstitucionalidad de los arts. 1°, inc.
f) y 7° del Decreto 1517/98. Para así decidir, consideró, en primer término, que la actora se
encuentra legitimada activamente, porque reviste calidad de agente de retención del tributo
cuestionado, con obligaciones sustanciales y formales cuyo incumplimiento le acarrea
sanciones legales. Asimismo, estimó que la vía intentada es procedente, ya que los incisos
a) y d) del art 2° de la ley 16.986 se encuentran superados por el art 43 de la Constitución
Nacional y porque se discute una cuestión de puro derecho. En cuanto al fondo del
asunto, precisó que el art 1°, inc. e), apartado 4) de la ley 25.063, derogó la exención que
gozaban las prestaciones de los servicios de medicina prepaga en el IVA (art. 7°, inc. h,
último párrafo, punto 7, de la Ley 23.349, Decreto 280/97) y que, mediante el inc. m) del
mismo art se estableció la alícuota reducida del 10,5%. El Poder Ejecutivo, mediante el
decreto en crisis, vetó la norma en lo referido a la reducción de la alícuota y promulgó
parcialmente la ley, aun en la parte que derogaba la originaria exención, con invocación de
la facultad consagrada en el art 80 de la Constitución Nacional.
Entendió que, de la inteligencia de los arts. 80, 83 Y 99, inc. 3°, de la C.N. surge que, en la
especie, si bien el veto es válido, era improcedente la promulgación parcial, dado el carácter
y naturaleza de la norma observada, pues no se trata de una norma separable del resto del
texto legal y la observación no mantiene la unidad, armonía y espíritu del proyecto de ley
sancionado, conformada en el caso por la imposición del gravamen a una actividad antes
exenta, pero con la determinación de una alícuota reducida.
¿qué puede hacer el PEN frente a una ley que considera inconstitucional?
¿Si el Congreso avala expresamente un DNU, puede luego la Corte declararlo inconstitucional?
¿El silencio del Congreso tiene incidencia en el posible control judicial posterior? ¿Las Cámaras
del Congreso tienen plazo para expedirse sobre la validez del DNU?
Competencia
CUESTIONES de competencia:
Caracteres de competencia:
El órgano superior que delega sigue siendo responsable por esa competencia que delegó
en el inferior, sino que también la puede recuperar en cualquier momento y hasta puede
ejercerla de forma concurrente (REVOCACIÓN)
- SIEMPRE PROCEDE, a menos que una Ley disponga lo contrario o cuando se trate de un
órgano técnico - Facultades que el ordenamiento jurídico le dan al inferior.
- Ej: Un Ministro ejerce temporalmente una competencia del secretario, se avoca a una
competencia del inferior. Es responsabilidad de lo de arriba lo que hace.
Como regla se puede avocar. No puede avocar cuando una norma lo prohíbe expresamente
o la competencia del inferior se le dio en razón de Idoneidad. - EN LOS ORGANISMOS
TÉCNICOS NUNCA PROCEDE LA AVOCACIÓN
Fallo Cima
La falta de notificación de la baja dentro del término de vigencia de la ley 20.713, que
autorizaba a disponerla, no hace a la validez del acto sino a su eficacia. Cuando el órgano
de la Administración Pública ejercita una atribución determinada, es preciso que cuente con
la aptitud legal para llevarla a cabo, puesto que ello hace a su propia competencia,
elemento que reviste el carácter de esencial en todo acto administrativo.
Fallo Vadell
Hechos
El actor promovió demanda por daños y perjuicios contra la Provincia de Buenos Aires,
imputándole las consecuencias dañosas derivadas de las omisiones en que incurrió el
La Corte entendió que corresponde hacer lugar a la acción de daños contra la Provincia de
Buenos Aires, fijando la responsabilidad de ésta en un 70% pues además de las citadas
omisiones del Registro Inmobiliario, también concurrió a ocasionarlo la irregular actuación
del escribano.
Destacó, a su vez, que el escribano, si bien como fedatario cumple una función por la que el
Estado lo somete a su superintendencia, no concurren las notas características de una
relación de empleo público por las que sea posible establecer la responsabilidad del Estado
por las consecuencias de su desempeño.
El Tribunal recordó su vieja doctrina según la cual quien contrae la obligación de prestar un
servicio debe hacerlo en condiciones adecuadas para llenar el fin para el que ha sido
establecido, siendo responsable de los perjuicios que causare su incumplimiento o irregular
ejecución, principio que encuentra su fundamento en la aplicación subsidiaria del
art.1112CC y que pone en juego la responsabilidad extracontractual del Estado en el marco
del derecho público, no siendo necesario recurrir al art.1113CC, como ha ocurrido en
sentencias anteriores de esta Corte que, sus miembros
en su actual composición, no comparten.
Esta idea objetiva de la falta de servicio encuentra fundamento en la aplicación por vía
subsidiaria del art. 1112CC que establece un régimen de responsabilidad "por los hechos y
las omisiones de los funcionarios públicos en el ejercicio de sus funciones, por no cumplir
sino de una manera irregular las obligaciones legales que les están impuestas".
Las entidades autárquicas no pueden ampararse en las normas de derecho común que
establecen la personalidad de las sociedades o personas de existencia ideal ni sostener que
son ajenas a los actos de administración que se realizan sin intervención de ellas, pues
dichas entidades se desenvuelven en la órbita del Estado y éste puede atribuirles las
funciones y obligaciones que estime convenientes (Fallos:275:197). Por tal motivo, los
conflictos de índole patrimonial que se susciten entre ellas deben ser dirimidos por quien
ejerce la jefatura común de todas ellas, es decir, el Poder Ejecutivo Nacional.
Se revoca un programa de radio llamado “Por la vida y la libertad” sin explicar razones ni
causa, se consideraba que era una vía de hecho (porque era arbitraria y lesionaba el
derecho constitucional de libertad de expresión). Por tal motivo se plantea un amparo.
CONSIDERANDO 12: Este está bueno porque reafirma la presunción de legitimidad de los
actos administrativos, básicamente dice que si hay un vicio se tiene que demostrar su
existencia para desvirtuar la presunción y acá no se demostró que la finalidad de levantar el
programa de radio era distinta a la que invocó a radio. Y bueno en el C.15 dice algo similar,
no se acreditó en debida forma la arbitrariedad manifiesta exigida en el obrar administrativo
para que proceda la acción de amparo iniciada en primer lugar.
Hechos
El caso es que la empresa Plaza de Toros (representada por un tal Señor Bonorino) inició
una causa ante un juez de la provincia de Buenos Aires impugnando una ley local que
prohibía instalar Plazas de Toros en su territorio, se fundaba en el libre ejercicio de industria.
El artículo 14 que permite toda industria lícita no es absoluto pues se encuentra sometido a
las leyes que reglamentan su ejercicio. Las cuestiones que tengan que ver con la salud y
moralidad de los vecinos están reservados a las provincias.
Decisión de la Corte
Debido a la falta de suficientes salas de teatro, los artistas del espectáculo sufrieron una
grave crisis ocupacional. Circunstancia por la cual, el Poder Legislativo dictó la Ley Nº
14.226, la cual declara obligatoria la inclusión de espectáculo de variedades en los
programas de las salas cinematográficas de todo el territorio de la Nación. La norma
anteriormente mencionada prohibió cobrar al público una suma extra por los números
ofrecidos, por lo que las empresas cinematográficas debían soportar los gastos adicionales.
Esto último fue posteriormente modificado por la Resolución Nº 1.446/57 que autorizó a
cobrar por separado los ‘actos en vivo’.
La S.A. propietaria del Cine Callao se rehusó a cumplir la norma citada, por lo cual, la
Dirección Nacional de Servicio de Empleo la intimó para que iniciase la presentación de los
‘números en vivo’. A pesar de la intimación, la S.A continuó incumpliendo la norma, motivo
por el cual la D.N.S.E. inició un sumario administrativo. En dicho acto administrativo se le
impuso a la sociedad una multa y se la obligó a cumplir con la ley 14.226 bajo
apercibimiento de clausura.
Esta concepción de poder de policía incluye la facultad de dictar leyes como la 14.226 con
la finalidad de evitar los daños económicos y sociales que genera la desocupación.
“El Poder Judicial no está facultado para pronunciarse sobre el mérito o eficacia de los
medios elegidos por el legislador para alcanzar los fines propuestos. A los jueces sólo les
compete verificar que los derechos afectados no sean desnaturalizados por la norma
reglamentaria y que ésta guarde cierta proporcionalidad con los fines a alcanzar”.
El grupo sobre el que recae la restricción es ajeno a la situación de emergencia, por esto los
medios elegidos no guardan relación con los fines perseguidos. El estado contaba con los
medios para superar la crisis ocupacional.
La Corte Suprema toma postura hacia la tesis amplia respecto del poder de policía. Los
derechos individuales podrán ser restringidos no sólo por motivos de seguridad, salubridad
y moralidad sino también para salvaguardar los intereses económicos de toda la
comunidad.
Hechos
Decisión de la Corte
4- Deja en claro que el artículo 186 de la Constitución de Córdoba regula de forma amplia
las funciones y atribuciones y las finalidades inherentes a la competencia municipal, al
reexpresamente a “gobernar y administrar los intereses públicos locales dirigidos al bien
común” y reconocer la potestad de atender un amplio espectro de materias, entre las que
se menciona expresamente la regulación del mercado. Por lo tanto, no resultaría razonable
entender que la ordenanza municipal impugnada en cuanto tiene como objeto proteger un
estilo de vida comunitario asumido por los vecinos y decidido por un amplio consenso.
5- Entiende que la decisión tomada por los vecinos de la comuna de Arroyito y luego
plasmada en la ordenanza municipal impugnada no importa una violación a ninguna
norma del bloque federal de derecho, ya que ni la constitución ni los tratados
internacionales ni ninguna otra ley contemplan una prohibición a un supuesto como el
sub-examine. Y sostuvo que la libertad de comercio es reconocida en el art. 14 de la
Constitución Nacional, “conforme a las leyes que reglamenten su ejercicio” y que esta
ordenanza fue dictada acorde a proteger al trabajo como el bien jurídico que prevé este
articulo
6- Al analizar la LCT y señala que la Ley de Contrato de Trabajo diseña en su art. 204 un
régimen diferenciado donde la regla general es el descanso sabático y dominical al
establecer que “queda prohibida la ocupación del trabajador desde las trece (13) horas del
día sábado hasta las veinticuatro (24) horas del día siguiente. Este tipo de disposiciones no
suponen en modo alguno una regulación del contrato de trabajo, materia que compete a
la legislación nacional.
Son una competencia en donde la norma define acabadamente tanto los presupuestos
como las consecuencias, detalla en qué consiste la competencia estatal y no da ninguna
subjetividad (BLANCO LEGAL) al funcionario público para actuar.
Ej si el alumno cumple con los requisitos de regularidad y aprueban los parciales con 6
están promocionados, no interviene mi subjetividad ante los hechos.
La norma deja un espacio (blanco legal) para que el sujeto que actúa como órgano del
estado, ponga allí una valoración o un criterio, la norma lo habilita a actuar de diferentes
maneras todas igualmente justas o posibles.
Las normas están redactadas a través de una cópula que te pone un podrá o te faculta a
elegir entre diferentes supuestos. ➔ El Derecho Administrativo tiene variantes dentro de la
discrecionalidad — Importa el argumento que se exponga para explicar por qué se elige una
variante sobre esta.
➔ DOBLE ORDEN JURISDICCIONAL:
IMPLÍCITAS
EXPRESAS
Son funciones del Estado cuyo fin es compatibilizar los derechos individuales cuando sea
necesario para lograr el bienestar general.
El Estado actúa en ejercicio de su función pública, sobre los individuos, limitando sus
derechos individuales.
Poder de policía: es parte de la función legislativa cuyo objeto es limitar y regular (dentro de
los límites constitucionales y a través de leyes), derechos individuales reconocidos en la
Constitución Nacional para proteger el interés general o social (arts. 14 y 28). A través del
poder de policía el Estado verifica que los administrados cumplan sus deberes,
reglamentando derechos pero sin alterarlo. Este poder es la base jurídica de los derechos
legislativos.
Fallo Sola
Los agravios suscitan cuestión Federal suficiente para su tratamiento por la vía intentada
porque se controvierte la interpretación de normas y principios constitucionales y federales y
la validez de actos de autoridad nacional y la decisión definitiva del superior tribunal de la
causa es contraria al derecho que el apelante funda en ellos.
El tribunal considera que los únicos magistrados y funcionarios que pueden ser sometidos a
juicio político son los que enumera el artículo 53 de la Constitución nacional y que una ley
de Rango inferior no puede crear más inmunidad que las que contiene la Carta Magna, lo
contrario implicaría crear otras inmunidades no instituidas por los constituyentes otorgando
una garantía de antejuicio que únicamente puede conferir la constitución.
Esto motivó que el tribunal considera se que el acto dictado por el poder ejecutivo no
revestía la arbitrariedad en Boca desde que se jugó la conducta del funcionario como
incompatible con los requerimientos del artículo 2 de la ley mencionada anteriormente, ya
que debía ser adecuada a las graves responsabilidades que pesan sobre el fiscal
general.
Admitido el control de los elementos reglados del acto cabe examinar si la cámara crédito
debidamente la existencia de los vicios denunciados por los actores.
Los fiscales permanecerían a sus funciones mientras durase su buena conducta según la
ley 21383 y por lo tanto sólo podían ser dejados cesantes por la objetiva comprobación de
haber incurrido en Mala conducta en el desempeño, esa conducta no sólo no se probó sino
que por el contrario el Ministerio de Educación y Justicia se expidió en el sentido de que
cabía eximir a los actores de la responsabilidad de los cargos que les se les imputaba y
que la conducta de aquellos había importado el cumplimiento de un deber destacando que
el cumplimiento de una obligación legal no podía constituir un ilícito.
Luego de ese acto se dictó el decreto de cesantía impugnado dónde nos invoco hecho
concreto alguno para atribuir Mala conducta a los autores. Ello conduce a descalificarlo por
vicio grave en la causa según el artículo 7 de la ley de procedimiento administrativo ya que
aquel solo se fundó en una situación de conflicto como presunta
causa de remoción que por sí misma no habría autorizado adoptar tal medida.
El agravio relativo a la condena que por daño moral admitió la cámara remita cuestiones de
hecho, prueba y derecho común propias de los jueces de la causa y ajenas al recurso
extraordinario.
Fallo Scarpa
La actora había sido designada en esa función en el año 2012 y, en el año 2015, la
Dirección Nacional de los Registros Nacionales de la Propiedad Automotor y de Créditos
Prendarios decidió el cese invocando “razones de servicio”.
A partir de ello, entendieron que, en el caso en examen la disposición que había dispuesto
el cese de la actora no había invocado ningún hecho concreto como causa de la remoción,
sino que sólo se fundó en "razones de servicio”, que, por sí mismas, no constituían un
fundamento suficiente para la revocación de la designación.
Por otra parte, destacaron que el hecho de que la disposición se hubiese dictado en
ejercicio de facultades discrecionales no eximía a la administración de exponer las razones
en la que se fundaba su decisión pues, justamente, es en esos supuestos en los que se
impone una observancia mayor de la debida motivación.
El juez Carlos Rosenkrantz disintió con la solución adoptada por la Corte por considerar que
la decisión administrativa que había cesado a la actora en su cargo de interventora del
Registro de la Propiedad Automotor estaba motivada y, por ello, no tenía vicio que justificara
su declaración de nulidad.
En primer lugar, señaló que la actora había sido designada en un cargo de carácter precario
lo cual permitía revocar esa designación por razones de oportunidad, mérito o conveniencia.
Por lo tanto, estimó que si bien la administración debía fundar la decisión adoptada no
correspondía a los jueces revisar si ese fundamento resultaba suficiente o insuficiente pues
ello implicaría darles la potestad de sustituir las funciones que el ordenamiento jurídico
había asignado a otro poder del Estado.
Partiendo de esa base, sostuvo que en el caso, en el que la designación de la actora tenía
carácter precaria, el acto cuestionado cumplía con el requisito de motivación previsto en el
artículo 7°, inciso e), de la ley 19.549 pues había invocado razones de servicio, la idoneidad
del reemplazante y las normas legales y reglamentarias que habilitaban a la administración
a designar interventores en los registros seccionales.
Finalmente, destacó que ante la falta de una norma que dispusiera lo contrario, el principio
de paralelismo de las formas impedía exigir a la administración una mayor motivación en el
acto de remoción de la actora que la que había expresado en el acto de designación.
Fallo Delegación Bahía Blanca
Hechos: el Consejo tenía un programa de radio estatal que fue levantado sin justificación
de causa ni aviso previo.
- Intención: que se ordene a la LRA 13 Radio Nacional Bahía Blanca reponer el espacio
radial semanal utilizado por la
actora. - Derecho: Arts. 14 y 31 CN y 23 Ley 23.054 (a la libertad de expresión de las ideas
sin censura previa).
- Doctrina: Holding y Obiter Dictum: El tribunal adujo que “mientras en algunos supuestos
el ordenamiento jurídico regula la actividad administrativa en todos sus aspectos, en otras
ocasiones el legislador autoriza a quien debe aplicar la norma en el caso concreto para que
realice una estimación subjetiva que completará el cuadro legal.”.
Asimismo, la Corte dijo respecto del alcance del control de los jueces sobre las
competencias regladas y discrecionales del Poder Ejecutivo que “frente al reconocimiento
de que no existen actos reglados ni discrecionales cualitativamente diferenciables, sino
únicamente actos en los que la discrecionalidad se encuentra cuantitativamente más
acentuada que la regulación y a la inversa, al no poder hablarse hoy en día de dos
categorías contradictorias y absolutas como si se tratara de dos sectores autónomos y
opuestos sino más bien de una cuestión de grados, no cabe duda de que el control judicial
de los actos denominados tradicionalmente discrecionales o de pura administración
encuentra su ámbito de actuación en los elementos reglados de la decisión, entre los que
cabe encuadrar, esencialmente, a la competencia, la forma, la causa y la finalidad del acto.
Que, admitiendo el control de los elementos reglados en los actos donde se ejercitan
potestades discrecionales, tal como ocurre con aquel frente al que se persigue la protección
judicial en este caso, cabe examinar si se ha acreditado debidamente la existencia de vicios
de causa y desviación de poder (este es un límite con la interpretación
armónica de la norma). Tiene que haber una interpretación armónica de los hechos y la
normativa, que sea proporcional la regulación (proporcionalidad de medio con fin), para no
incurrir en desviación de poder (defecto en la finalidad del acto). La causa tiene dos
vertientes: un antecedente de hecho y otro de derecho. Aquí la de hecho es
el levantamiento del programa, el de derecho es que la administración estaba avalada para
hacerlo. El elemento motivación es donde tienen que justificar el porqué de la decisión,
frente a esas condiciones, no existen actos
reglados ni discrecionales cualitativamente diferenciales, sino únicamente actos en los
que la discrecionalidad
se encuentra cuantitativamente más acentuada que la regulación y a la inversa.
Considerando 9, 10 y 11-
- Sentencia: se declara procedente el recurso extraordinario interpuesto, se revoca la
sentencia apelada y se rechaza
la acción de amparo.
Acto Administrativo
Gordillo:
Primera definición
Con estos elementos podemos si lo deseamos dar una definición elemental de acto
administrativo, diciendo que es una declaración realizada en ejercicio de la función
administrativa, que produce efectos jurídicos directos. Sin embargo, esta definición
—aunque dogmáticamente correcta— peca de una deficiencia metodológica y práctica, cual
es la de ser excesivamente amplia y vaga como para permitir una adecuada y precisa
utilización técnica, y parecería necesario continuar todavía con la investigación.
Segunda definición
Si nos damos por satisfechos con este estado de la investigación, podemos entonces decir
que acto administrativo es una declaración unilateral realizada en ejercicio de la función
administrativa, que produce efectos jurídicos en forma directa. Sin embargo, pareciera
también, a nuestro juicio, que ello es todavía prematuro.
Tercera definición
Elementos
Quienes propugnan la teoría de los actos de gobierno sostienen que éstos son actos de
contenido político dictados por el Poder Ejecutivo, que no están sujetos a control
jurisdiccional; dicho de otro modo, que son irrevisibles o inatacables jurisdiccionalmente;
que contra ellos el particular afectado no puede interponer acciones o recursos judiciales
tendientes a lograr la declaración de su ilegitimidad.
Sin embargo, fácil es advertir que tal teoría es totalmente incompatible con el sistema
constitucional argentino, por diferentes razones:
1º) Afirmar que un acto no pueda ser atacado judicialmente por el particular afectado es
contrario a la garantía de la inviolabilidad de la defensa en juicio (art. 18 de la Constitución);
2º) es también violatorio del artículo 95 de la Constitución, que prohíbe al Poder Ejecutivo
ejercer funciones judiciales, pues no otra cosa estaría aquél haciendo si su decisión
resultara irrevisible por un tribunal de justicia:
3º) Viola el art. 100 de la Constitución, que otorga a la Corte Suprema de Justicia de la
Nación y demás tribunales federales inferiores el conocimiento y decisión “de las causas en
que la Nación sea parte,” y de las controversias sobre puntos regidos por esta Constitución,
con lo cual es clara la amplitud de las atribuciones de los jueces, de las que no se puede
constitucionalmente excluir sector alguno de actividad del Estado.
SEGUNDO PARCIAL
Contexto histórico
En la Argentina se llevó a cabo la copia del Poder Judicial y de los tribunales federales de
Estados Unidos.
● Distintos juristas como Vélez Sarsfield que planteaba una mirada civilista
donde la Nación no puede ser demandada por una persona jurídica.
● Se establece entonces el modelo inglés en donde el Estado sea demandado
y sí esto es posible o no se resuelva en la CSJN.
Ley 3352
Año 1930
19599
Fallo Serra
Hechos
Cuestiones planteadas
● Sin embargo, existe mérito suficiente para la habilitación de la instancia por reforma
del art.280 CPPCCN ayudando a reforzar el criterio de especialidad que orienta al
tribunal para tratar más a fondo sobre problemas graves constitucionales y federales
que pueden llegar afectarlos.
Decisión de primera instancia: declarar la caducidad del cobro de honorarios por la dirección
e inspección de una obra contratada que no se llevó a cabo, apela la actora.
Decisión segunda instancia: revoca la sentencia ya que considera que no hay caducidad, la
Municipalidad de la ciudad de Buenos Aires interpone un Recurso extraordinario, se
rechaza.
Decisión de la Corte (holding): desestimar la queja, por haber recurrido Serra fuera de
término y por lo tanto no hubo un agotamiento previo de la instancia administrativa por no
ser una sentencia definitiva o equiparable (conf. Art.14 ley 48).
Habilitación de instancia
Fallo Gorgordo
Hechos
En el marco de una causa en la que se dedujo demanda contencioso administrativo la
Cámara, confirmando el pronunciamiento del anterior, declaró no habilitada la instancia
considerando extemporánea la demanda por haber vencido el plazo previsto en el artículo
25 de la ley 19.549. Contra dicha decisión la demandante dedujo apelación federal.
Decisión de la CSJN
La no revisabilidad judicial del acto administrativo que rechaza, en cuanto al fondo, una
denuncia de ilegitimidad, se deriva de su condición de remedio extraordinario toda vez que
está previsto para asegurar el control de legalidad y eficacia de la actividad administrativa, y
a través de él, el respeto de los derechos e intereses de los administrados. Ello no causa
lesión al derecho de defensa de quien omite articular dentro del término perentorio fijado en
el dec. 1759/72 (Adla, XXXIIB, 2125) el recurso administrativo pertinente, pues sería
irrazonable otorgar el mismo efecto a la denuncia de ilegitimidad que a un recurso deducido
en término.
Año 2000
Ley 25344
Fallo Coronel
Según surge del texto del fallo de la Corte, los quince actores que entablaron la demanda
prestaban servicios como personal transitorio en la Municipalidad de Coronel Du Graty,
localidad ubicada al sudoeste de la Provincia del Chaco.
La Corte sostuvo que la realización de una obra pública configura el ejercicio de una
actividad discrecional por parte de la Administración que se lleva a cabo en función del
merito, oportunidad y conveniencia de aquella y que constituye el ejercicio de una facultad
que, como regla, excluye la revisión judicial, cuyo ámbito queda reservad para los casos en
que la decisión administrativa resultare manifiestamente ilegal o irrazonable, a la par que
ocasione un daño a terceros que no sea susceptible de una adecuada reparación. Si los
agravios del apelante versan tanto sobre la inteligencia de una ley de naturaleza federal
cuanto sobre la arbitrariedad que imputa a la sentencia, y la ambigüedad de la fórmula
empleada en el auto de concesión del recurso torna difícil comprender la extensión con que
se ha concedido el remedio federal, es aconsejable atender a los planteos de la recurrente
con la amplitud que exige la garantía de la defensa en juicio.
Fallo Clarín
Cabe revocar la sentencia que hizo lugar a la medida cautelar requerida por el actor
-diputado nacional-, y ordenó la suspensión de la aplicación y los actos de ejecución de la
ley 26.522 -regulación de los Servicios de Comunicación Audiovisual- mientras se sustancia
la causa, con caución juratoria, al mismo tiempo que tuvo por entablada la acción contra el
Estado Nacional, pues el a quo debió haber considerado que una cautelar que suspende la
vigencia de toda la norma con efecto erga omnes, tienen una significativa incidencia sobre
el principio constitucional de división de poderes, por lo que su procedentecia debe ser
evaluada con criterios especialmente estrictos que la cámara no aplicó.
Fallo Giustiniani