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LOS PARTIDOS

POLÍTICOS
EN TABASCO
VOLUMEN I

Beatriz Pérez Sánchez


Los Partidos Políticos
en Tabasco
Volumen I
Guillermo Narváez Osorio
Rector

Luis Manuel Hernández Govea


División Académica de Ciencias Económico Administrativas
Los Partidos Políticos
en Tabasco
Volumen I

Beatriz Pérez Sánchez


Primera edición, 2021

© Universidad Juárez Autónoma de Tabasco


www.ujat.mx

ISBN: 978-607-606-569-3

Para su publicación esta obra ha sido dictaminada por el sistema académico


de pares ciegos. Los juicios expresados son responsabilidad del autor o
autores y fue aprobada para su publicación.

Queda prohibida la reproducción parcial o total del contenido de la presente


obra, sin contar previamente con la autorización expresa y por escrito del
titular, en términos de la Ley Federal de Derechos de Autor.

Hecho en Villahermosa, Tabasco, México


Contenido

Introducción 8

Antecedentes históricos 19

De las ligas de resistencia al Partido Revolucionario


Institucional 75

El sistema de partidos de Tabasco 131

Las elecciones de Tabasco: 1988- 1994 174

Las elecciones federales, estatal y municipales


1997-2012 224

Conclusiones 266

7
Introducción

L
a evolución de la democracia en los siglos XIX y XX
ha estado condicionada por la necesidad de adaptarse a
las nuevas circunstancias y retos que implica gobernar
un vasto territorio y un gran número de individuos asen-
tados en él, que conjuntamente llegan a integrar lo que se
conoce hoy como Estado-Nación. Esta razón fundamental
explica, en buena medida, el paso de la democracia directa a
la democracia indirecta, ya que bajo las características del Es-
tado-Nación, la subsistencia de la democracia sólo es posible
mediante el mecanismo de representación.
Se entiende por democracia representativa al régimen
político constituido por el conjunto de instituciones y pro-
cedimientos que hacen posible que el ciudadano elija a sus
representantes, otorgándoles capacidad de decisión para que
tomen las medidas concernientes al gobierno de la sociedad.
Existen distintas formas de representación según los repre-
sentados y los intereses de éstos, pero lo que distingue a la
representación política es el hecho de que el representante
sólo debe atender los intereses generales de la sociedad y no el
interés particular de sus electores. Por lo tanto, se dice que su
mandato no es revocable porque ya no es responsable frente a
sus electores, sino frente a la sociedad en su conjunto.
Históricamente, la democracia representativa ha debido
responder a dos cuestiones fundamentales para la sobrevi-

8
Introducción

vencia de las sociedades: 1) hacer que los gobiernos y las ins-


tituciones políticas se sustenten en la voluntad popular; 2)
traducir la voluntad popular con eficacia en decisiones de in-
terés general. Es así como las elecciones se han convertido en
el mecanismo por excelencia para la participación ciudadana,
resolviendo un problema de tiempo y espacio. A través de las
elecciones, los órganos representativos se integran a partir de
los diversos intereses que se dan en la sociedad, traduciendo
las distintas voluntades políticas de los ciudadanos en escaños
o curules.
No obstante, al parecer se dificulta hoy tratar de promover
y/o alcanzar plenamente los fines que persigue la democracia
representativa sin la presencia de una sociedad plural, esto es,
una sociedad articulada en organizaciones, toda vez que éstas
son indispensables, tanto para la expresión de la voluntad
popular al integrarse el poder público, como para canalizar
la participación de los grupos sociales en la defensa de sus
intereses legítimos.
Conviene señalar que, tanto en el proceso de democrati-
zación del Estado, como la democratización de la sociedad,
suponen la existencia y consolidación necesaria del Estado
de Derecho, esencial para la definición de un régimen demo-
crático. En este sentido, los sistemas electorales, tratan de
funcionar como mecanismos racionalizadores de la lucha de
los partidos políticos que compiten entre sí para alcanzar el
poder público.
Los partidos políticos instituyen formalmente la plurali-
dad con base en ideologías y programas que expresan a dis-
tintos sectores sociales. Son los principales agentes de la vida

9
Los Partidos Políticos en Tabasco

política, por esta misma razón han de ser analizados dentro


del marco de su propio sistema gubernamental.
Cuna de la civilización en México y puerta de entrada
para Hernán Cortés a Mesoamérica, son las frases con que la
historia oficial ha definido a Tabasco (De la Torre & Navarro,
2002), y son sin embargo contrapuestas con una sociedad
recientemente participativa, con una historia un poco vacía
de movimientos sociales incluso durante los periodos más
álgidos de la historia de México, con una nula oposición
electoral hasta 1987 en que aparece en la arena política el
Frente Democrático Nacional y una concepción tradicional
de la política.
Las divergencias que se suscitan con quienes sostienen
otros puntos de vista, originan la lucha política, que asume
varias formas de parte de quienes se oponen a conservar el
estado de las cosas, la conspiración, cuando la libertad está
restringida, y aun el levantamiento armado; y de la otra par-
te, la persecución, la represión y aún la cárcel. Tales fueron,
los movimientos precursores de la independencia y, por el
contrario, las violentas reacciones del poder sustituto.
En la evolución de los partidos políticos, se toma como
punto de partida 1928-1929 como un parteaguas en la his-
toria de los partidos, la evolución del partido como un des-
pués de estos años es reconocer un proceso inseparable de
la formación del México posrevolucionario. Y hablar de un
antes es reconocer que, en el pasado, también se ha llama-
do partidos a los grupos que, aun no estando constituidos
formalmente, manifestaban una misma opinión o interés
frente a los problemas que más directamente afectan a la so-

10
Introducción

ciedad. Los antecedentes históricos constituyen información


útil para el conocimiento de la política partidista tabasqueña
de ayer y hoy. Por ello, se da importancia a las Ligas de Re-
sistencia que unidas formaron al Partido Socialista Radical
Tabasqueño y constituyeron una de las experiencias regiona-
les del sureste, inédita en el resto de la geografía nacional de
esa época. A diferencia de los partidos caudillistas el Partido
Socialista Radical Tabasqueño a través de las Ligas de Resis-
tencia expresaron las demandas de las clases explotadas y su
influencia regional y nacional contribuyó a frenar el viraje
derechista de los gobiernos posrevolucionarios.
La naturaleza específica, los problemas y contribuciones
de los partidos sólo pueden ser comprendidos en toda su pro-
fundidad si se les estudia a nivel local y sobre todo atendiendo
las circunstancias históricas, a las tradiciones institucionales y
a las características nacionales y estatales que constituyen su
marco gubernamental.
La ciencia política en México ha explorado muy poco los
estudios políticos regionales. Esto implicó un vacío que de
alguna manera cubrió la historia y la antropología contem-
poránea. Sin embargo, como recurso metodológico utilizado
por otras disciplinas, los estudios políticos regionales pueden
coadyuvar a caracterizar principalmente los sistemas políticos
locales que presentan elementos heterogéneos y diferenciados
internamente, así como el marco jurídico y no jurídico en
que se sustentan (Reveles, 1995).
Analizar la vida institucional y electoral de una entidad
como Tabasco poco estudiada, permitirá la evaluación de
la vida política local como la interpretación de los procesos

11
Los Partidos Políticos en Tabasco

políticos nacionales. El estudio político regional de los par-


tidos políticos en el estado de Tabasco implica considerar el
proceso de lucha de actores con carácter desigual en las con-
diciones de participación, competencia y representación po-
lítica determinadas por el partido en el poder y el Ejecutivo
(Garrido, 1992). Por ello es necesario sumar a la definición
acumulativa de los partidos políticos modernos las caracterís-
ticas de los partidos políticos en Tabasco.
En la investigación, sin pretender elaborar un análisis
histórico profundo, fue necesario identificar y reconocer los
eventos históricos y particularidades del comportamiento
político en Tabasco a fin de rescatar una presencia social ac-
tiva, que llevara a considerar el surgimiento de los partidos
políticos en la entidad.
La presente investigación contribuyó a que la autora ob-
tuviera su grado de Maestría en Ciencia Política, en la cual
se analizó la vida política de Tabasco desde sus orígenes, y se
precisó un periodo de 1988 a 1994, años después fue retoma-
da para continuar otro periodo de estudio en un proyecto de
investigación sin financiamiento en la División de Ciencias
Económico Administrativas cuyo periodo de estudio se deli-
mitó de 1995 hasta el 2012.
Gracias al apoyo de mis compañeros profesores investiga-
dores de la División Académica de Ciencias Sociales y Hu-
manidades de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco
que me precedieron y que elaboraron la Historia del H. Con-
greso del Estado fue posible resumir y sistematizar la historia
política de la entidad, además de permitir una mayor preci-
sión de diversas fuentes históricas tabasqueñas y considerar

12
Introducción

las intenciones persuasivas de los autores que muchas veces


no posibilitan vislumbrar siempre lo ocurrido, así como el
estudio reciente de otros autores que ayudaron a superar los
obstáculos de hilar testimonios no científicos y narrativos.
Se utilizó el enfoque teórico del devenir histórico, en el
que prevalece el análisis de los orígenes y evolución del par-
tido, si bien en algunos momentos domina la crónica y no
se presentan planteamientos analíticos elaborados sino des-
cripciones. Se reunieron acontecimientos de la vida nacional
y local, buscando un orden cronológico, bajo una periodiza-
ción. Se abordó brevemente la participación política en los
periodos: colonial, la independencia, la época revolucionaria
y la formación propiamente de los partidos políticos.
Se analiza una segunda etapa histórica, donde a partir del
principio de la soberanía popular, las discrepancias políticas
trataron de resolverse mediante el voto, y en una tercera eta-
pa, coincidiendo con la maduración de la democracia, se dio
rango constitucional a los partidos políticos, considerados
como la expresión de las distintas corrientes de opinión de la
ciudadanía. Por ende, se utilizó el enfoque organizacional
en términos de financiamiento y el enfoque de participación
electoral: candidatos, campañas y resultados obtenidos y las
relaciones entre partido y gobierno.
El objetivo general que se planteó fue investigar y estudiar
la participación política en el estado de Tabasco a fin de co-
nocer el sistema de partidos que se fue formando y su impac-
to político en la sociedad tabasqueña, en el marco del federa-
lismo mexicano y en especial en el periodo de 1988 a 2012.
Periodo en el que se inició una oposición partidista real (Aziz,

13
Los Partidos Políticos en Tabasco

1992) en que irrumpió en la arena política el Frente Demo-


crático Nacional (FDN) y culminó con la victoria del Partido
de la Revolución Democrática (PRD) en las elecciones para
gobernador, presidentes municipales y diputados, como fe-
nómeno inédito.
Ello implicó también como objetivo específico: la tarea de
conocer los aspectos relevantes de la legislación electoral de
México y de Tabasco a fin de entender similitudes y diferen-
cias en materia de partidos políticos, que permitan determi-
nar la magnitud jurídica de la participación y su impacto en
la competencia electoral.
La hipótesis que se formuló determina que el desarrollo
del capitalismo como sistema planetario tiende a una inser-
ción competitiva de las regiones al comercio mundial que
permita su modernización, y en aras de la modernización se
ha refuncionalizado el papel del Estado en la conducción po-
lítica, al afectar la soberanía de Tabasco en su práctica política
e impidiendo con esta acción una genuina representación de-
mocrática hasta llegar al 2012 (Garrido, 1988).
Se utilizaron los métodos analítico y comparativo en lo
referente a la elaboración de generalidades de orden causal y
a la explicación de los acontecimientos históricos específicos.
Se partió de los casos auténticos en los que se presentaron
los partidos políticos, puesto que los periodos históricos por
analizar estaban dados históricamente, no existe por lo tanto
la posibilidad de profundizar en aquellas variables que pu-
dieran ser de interés. Se emplearon técnicas estadísticas que
permitieron controlar el impacto de las variables que se pre-

14
Introducción

sumen más relevantes para la explicación de la conformación


de los partidos políticos. No obstante, de utilidad limitada,
puesto que las variables que se consideran más notables en
la ciencia política, no lograron ser precisadas, por ello se es-
tablecieron descripciones generales y se evaluaron relaciones
cuantitativas fundamentadas en las votaciones.
Se estableció el método comparativo, para considerar
aquellas situaciones en que las características comunes de los
partidos nacionales y sus representaciones locales, a fin de
determinar las específicas combinaciones de circunstancias
que preceden a la producción de los partidos políticos en Ta-
basco, como para excluir la adjudicación de un papel deter-
minante a factores, que pudiendo facilitar el desarrollo de los
partidos políticos a estudiar, no fueron condición necesaria
ni causa suficiente de los mismos.
Se abordó el sistema de partidos en la entidad: como pun-
to de partida se consideró la hegemonía del partido oficial,
que no permitía pensar en que pudiera darse en el futuro
una competencia partidista. Se indagó la presencia y arraigo
de los partidos de oposición, de la participación ciudadana a
favor de partidos diferentes del PRI que sustentaran la im-
portancia del sistema electoral en Tabasco.
La presencia geográfica del Partido de la Revolución De-
mocrática (PRD) se concentra en sus orígenes en ciertos mu-
nicipios petroleros de la Chontalpa (Cárdenas, Macuspana y
Nacajuca), lo cual permitió suponer que gran parte del cre-
cimiento de la oposición se ligó a los cambios introducidos
por la dinámica petrolera. Además, se consideraron algunas
variables socioeconómicas tales como: la alta marginalidad

15
Los Partidos Políticos en Tabasco

que influye en la cultura política, aspectos de la población:


número, fecundidad, mortalidad, educación, urbanismo...
Las condiciones de los procesos electorales representan un
punto vital en la vida política del estado de Tabasco, puesto
que reflejan la acción democrática de la sociedad, por ende,
se abordaron las elecciones: presidenciales, federales, locales,
para gobernador y presidentes municipales.
Los conflictos electorales, el éxodo por la democracia y
otros. Las elecciones en cada uno de los estados desde 1988
hasta 1994 adquirieron una especial relevancia en la medida
que se convirtieron en el termómetro que indicaba el avance
o el retroceso de la modernización política del país (Curzio,
2000).
A partir de 1994 las elecciones en diversos estados permi-
tieron identificar rasgos tales como la posibilidad de la alter-
nancia de forma real, un sistema electoral más previsible y la
reducción de las impugnaciones. En Tabasco el PRI pasó en
pocos años de ser el partido dominante a enfrentarse con un
alto grado de competitividad al PRD. El crecimiento de su
rival se logró en detrimento del propio PRI, sus principales
líderes salieron de sus filas.
Como resultados esperados en el presente trabajo, se ana-
lizó la concepción tradicional de la política donde la nula
oposición al PRI se dio hasta 1987 en que apareció en la
arena política el Frente Democrático Nacional (hoy Partido
de la Revolución Democrática). Se analizó la relación que se
establece entre las variables economía y política y se constató
que la línea de causalidad no es tan nítida ni tiene un carácter

16
Introducción

unívoco, por ende, se señala que no es posible desligar am-


bos fenómenos. Finalmente, entre las conclusiones se afirma
que el sistema político mexicano se puede conocer mejor que
todo a nivel local.
En Tabasco el PRI vio venir sus primeros síntomas de de-
cadencia, por las políticas económicas del régimen que acen-
tuaron la desigualdad, proceso que fue clave de lo que iba a
acontecer a nivel político, durante la década de los setenta y
más tarde en lo político durante las décadas por venir.
En el periodo de estudio de 1988 a 2012 se produjeron
cambios importantes en el sistema de partidos de México,
que se reflejaron parcialmente en las estadísticas oficiales.
Entre otros cambios, por citar algunos: en las elecciones de
1988, un partido de oposición ganó con más del 50 % de
los votos en las elecciones federales en cinco estados del país.
La reforma electoral de 1994 y las elecciones significaron
un punto de inflexión en el proceso político nacional, supu-
sieron una transformación del espacio electoral en México.
Sin embargo, en Tabasco las elecciones para gobernador ge-
neraron un conflicto que llevó a considerar que las elecciones
tabasqueñas fueron un rezago respecto a la dinámica nacio-
nal.
Los resultados electorales de los comicios celebrados en
2012 en Tabasco permitieron que el Partido de la Revolución
Democrática (PRD) se presentara como ganador, puesto que
logró acceder a la gubernatura estatal por primera vez, así
como también la mayoría en el congreso local y las diputacio-
nes federales respectivas, así como los dos escaños del Senado

17
Los Partidos Políticos en Tabasco

por mayoría relativa y también, aportó uno de los mayores


porcentajes de votación estatal a su candidato presidencial,
Andrés Manuel López Obrador (AMLO).

18
Capítulo 1

Antecedentes históricos

La investigación sobre los partidos políticos en Tabasco parte


del enfoque del devenir histórico, en el que prevalece el aná-
lisis de los orígenes y evolución de los partidos.
En el presente capítulo si bien es cierto que domina la
crónica y no hay planteamientos analíticos elaborados, sino
descripciones, la tarea fue reunir acontecimientos de la vida
nacional y local, buscando un orden cronológico, bajo una
periodización.
Por ende, se comentan brevemente la participación polí-
tica en los periodos: colonial, independencia y época revolu-
cionaria, así como la formación de los partidos políticos en
Tabasco.
Cuna de la civilización en México (De la Torre & Navarro,
2002) y puerta de entrada para Hernán Cortés (Gobierno del
Estado de Tabasco, 1994) a Mesoamérica, son frases con que
la historia oficial ha definido a Tabasco, son sin embargo con-
trapuestas con una sociedad recientemente participativa, con
una historia un poco vacía de movimientos sociales incluso
durante los períodos más álgidos de la historia del país, con
una casi nula oposición electoral hasta 1987 en que aparece
en la arena política el Frente Democrático Nacional y una
concepción tradicional de la política oficial.

19
Los partidos políticos en Tabasco

Una por la casualidad y la otra por las características de la


instauración del autoritarismo en el México posrevoluciona-
rio, han sido parte de la realidad del Tabasco de hoy; ambas
se entremezclan con una nueva forma de participación polí-
tica ciudadana que recientemente surgió. Por ende, estudiar
la evolución de los partidos políticos antes de 1928 requiere
estudiar la historia de México en todos sus aspectos. Por ello
en este apartado se toma como punto de partida 1928 como
un parteaguas en la historia de los partidos; la evolución del
partido como un después de este año es reconocer un proceso
inseparable de la formación del México posrevolucionario. Y
hablar de un antes conlleva a conocer las formas de expresión
de las masas populares que aún sin organizaciones políticas se
manifestaron a través de la historia (Garrido, 1995).
La forma particular en que el poder político se desenvuel-
ve en Tabasco no podría entenderse si no se consideran las
características del Estado Mexicano surgido de la revolución,
que imprime elementos generales presentes en los estados y
regiones del país, aunque con particularidades distintas. Por
ende, se divide la historia política tabasqueña en varias eta-
pas, con base en las tendencias nacionales o “partidos” (utili-
zadas como sinónimo).
Con el logro de la Independencia la lucha por el ejercicio
del poder público parceló el escenario político en numero-
sas corrientes; fue hasta fines del siglo XIX que empezaron a
concretizarse los partidos políticos como tales. Las corrientes
inorgánicas que lucharon por el poder en México se indivi-
dualizaban a partir de su enfoque sobre el problema de cómo
organizar al nuevo Estado.

20
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Así se encuentran monarquistas y republicanos,


federalis-tas y centralistas, liberales y conservadores y otras
vertientes (Ruiz, 1974).
En México la polarización política se dejó sentir de modo
inorgánico con el surgimiento de las tendencias liberales y
conservadoras, separadas por toda una brecha política, eco-
nómica y religiosa. Los grupos liberales y conservadores se
enfrentaron en la lucha por el poder, sin establecer formal-
mente un partido. Este enfrentamiento se dio desde la par-
ticipación electoral de la época hasta la organización de un
movimiento armado. Es importante conceder atención a las
experiencias partidistas en épocas anteriores, como antece-
dentes históricos que fueron parte de una compleja red de
relaciones del Estado Mexicano en formación. Sin embar-
go, habría que considerar la dificultad que existe para hacer
hallazgos que aporten más a lo dicho, por aquellos que se
especializan en la vida partidista y solo quede reconocer o
fortalecer la teoría, producto de lo investigado. Esto se expli-
ca comenta Castrejón Díez porque:
Políticamente iniciamos el siglo con una ausencia casi
total de partidos políticos, con un férreo control ejerci-
do por gobernadores y prefectos políticos para fortalecer
el poder presidencial, con una separación de la iglesia y
el Estado y una amplia tolerancia a la tradición liberal
que no generará fricciones con la jerarquía eclesiástica y
con una profunda desconfianza hacia Estados Unidos,
tanto por su intervención en nuestros asuntos internos
como por la pérdida del Territorio. La fuente de legiti-
midad política era la interpretación de la historia, la paz
y el orden. (Castrejon, 1995)

21
Los partidos políticos en Tabasco

Para situarse metodológicamente, de lo general a lo par-


ticular en el curso de la historia de Tabasco es necesario re-
cordar los hechos históricos en que participó México luego
de tres siglos de dominación colonial, evento conocido como
la insurrección popular de 1810; señalar en forma resumida
algunos acontecimientos que fueron marcando la construc-
ción de los “partidos” en Tabasco. Las expresiones y mani-
festaciones que han dado vida a las instituciones más activas
e importantes de la estructura política de la entidad, son las
mismas que han llevado a elaborar las leyes que norman las
relaciones sociales, políticas y económicas de los habitantes
de Tabasco. Los partidos políticos son producto de estas rela-
ciones políticas y económicas determinadas históricamente.
En Tabasco, sólo se dieron intentos de movimientos po-
pulares que amenazaban con romper la tranquilidad de la
provincia como repercusión lejana de las sangrientas luchas
que en esos momentos se libraban en otras latitudes del suelo
mexicano, hasta su independencia. Por ende, vale la pena ir
señalando brevemente el surgimiento de los “partidos” pre-
cisamente como tendencias, conforme se desarrollaban los
hechos a partir del México colonial y su repercusión en Ta-
basco.
1.1 Tabasco colonial
En la historia de Tabasco a lo largo del periodo colonial, se
observa que las relaciones con el centro de la Nueva España
fueron prácticamente nulas, debido a la lógica mercantilista,
primera etapa del capitalismo, que daba mucha importan-
cia a los metales preciosos y Tabasco es una región despro-
vista de recursos minerales como el oro y la plata (Campos

22
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

& González, 1983). El marco de referencia de la historia de


Tabasco se constituye a partir de su organización política
durante el virreinato, hasta 1786 (Gobierno del Estado de
Tabasco, 1994). Hernán Cortés (y después de la batalla de
Centla el 25 de marzo de ese mismo año), nombró al sitio
de su arribo: Santa María de la Victoria. Sin embargo, no
dejó ningún asentamiento, por ello posteriormente enviaron
a Rodrigo de Sandoval (fines de 1521), a Luis Marín y Ro-
drigo Rangel (1524), y a Juan de Vallecillo (1525) quienes
no lograron tampoco establecerse. Por tal motivo fueron en-
cargados de pacificar a los naturales de Tabasco: Alonso de
Estrada y Gonzalo de Sandoval durante dos años hasta la lle-
gada de Baltasar de Osorio Gallegos, en 1528, que fue nom-
brado alcalde mayor por Hernán Cortés. El cuadro No. 1
presenta a quienes gobernaron a Tabasco durante la colonia.

Cuadro No. 1
Gobernantes de Tabasco durante la colonia 1525-1821

NOMBRE PERIODO TÍTULO

1) Juan de Vallecillo 1525-1527 Capitán y fundador del Ayutamiento


de Santa María de la Victoria

2) Baltasar Osorio 1527-1528 Capitán y Teniente de justicia mayor

3) Adelantado Francisco de 1529-1530 Alcalde mayor


Montejo

4) Baltasar Osorio 1530-1535 Alcalde mayor

23
Los partidos políticos en Tabasco

NOMBRE PERIODO TÍTULO

5) Adelantado Francisco de 1535-1549 Gobernador de Yucatán, Cozumel y


Montejo Tabasco (ejerció por tenientes)

6) Ayuntamiento de Santa 1549


María de la Victoria

7) Don Alonso de Manri- 1550- 1551 Alcalde mayor de Coatzacoalcos y Ta-


que basco

8) Marcos de Ayala Truje- 1551-1561 Teniente de alcalde mayor


que

9) Alonso Gómez Sotoma- 1561-1565 Teniente de alcalde mayor


yor

10) Luis de Céspedes y 1565 Alcalde mayor


Oviedo

11) Vasco Rodríguez 1577 Teniente de alcalde mayor

12) Juan Ruiz de Aguirre 1584 Alcalde mayor

13) Lázaro Suárez Córdoba 1596 Alcalde mayor

14) Juan de Miranda 1604 Alcalde mayor

15) Cristóbal Gutiérrez 1615 Justicia mayor


Flores

16) Juan González de Cas- 1615-1617 Alcalde mayor


tro

24
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

NOMBRE PERIODO TÍTULO

17) Fernando Martínez de 1617 Alcalde mayor


Leyva

18) Simón Rodríguez 1640 Alcalde mayor

19) Juan del Águila 1661 Alcalde mayor

20) Francisco Benítez Mal- 1663 Alcalde mayor


donado de Tejeda

21) Rodrigo Flores de 1664 Alcalde mayor


Aldana

22) Miguel Flores del Ri- 1667 Alcalde mayor


vero

23) Juan del Águila 1668 Alcalde mayor

24) Diego de la Gala 1675 Alcalde mayor

25) Pedro Cámara Peña 1680 Alcalde mayor

26) Antonio Cueto y Bra- 1682 Alcalde mayor


camonte

27) Francisco Benítez Mal- 1686 Alcalde mayor


donado

28) Pedro de Sagarraga 1693-1698 Alcalde mayor

29) Pedro Gutiérrez de 1698 Alcalde mayor


Mier y Terán

25
Los partidos políticos en Tabasco

NOMBRE PERIODO TÍTULO

30) Julián Santiago Borrego 1699 Alcalde mayor

31) José Antonio Torres 1702 Alcalde mayor

32) Jerónimo Álvarez del 1703 Alcalde mayor


Valle

33) Alonso Felipe Andrade 1704-1706 Alcalde mayor

34) Mateo Reygadas Agüe- 1706 Alcalde mayor


ro

35) Pedro Álvarez de Mi- 1707 Alcalde mayor


randa

36) Juan Francisco Medina 1708 Alcalde mayor


Cachón

37) José A. Torres 1709-1711 Alcalde mayor

38) Graniel de Gil 1711-1716 Teniente de capitán general y alcalde


mayor

39)Juan Sánchez Andrés 1711-1716 Interino

40) Andrés de Arce 1716-1720 Teniente de capitán y alcalde mayor

41)Andrés Gordillo 1720-1725 Teniente de capitán general y alcalde


mayor

42) Miguel de Lastri 1725-1726

43) Juan Bautista Sigaran 1726-1728 Sargento mayor y alcalde

26
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

NOMBRE PERIODO TÍTULO

44) Antonio de la Concha 1728-1733 Teniente de capitán y artillería y alcal-


Puente de mayor

45) Gregorio de Lijaurzaval 1733-1737 Teniente de capitán general y alcalde


y Anzola mayor

46) Francisco de Barrio Lla- 1737-1742 Teniente de capitán general y alcalde


guno mayor

47) Manuel de la Puente 1742-1746 Teniente de capitán general

48) Matías Quintana 1748 Interino

49) José Rodríguez 1748-1751 Sargento mayor

50) José Tenreyro 1751-1752 Teniente de capitán

51) Antonio Canto 1752-1757 Teniente de capitán general y alcalde


mayor

52) Esteban Gutiérrez de la 1754-1764 Teniente de capitán general y alcalde


Torre mayor

53) Francisco Ximenéz de 1759-1756 Interino


Meza

54) Pedro Durán Maldo- 1764-1772 Alcalde mayor


nado

55) Nicolás Bulte 1772-1774 Alcalde mayor

56) Esteban Crespi 1775 Interino

27
Los partidos políticos en Tabasco

NOMBRE PERIODO TÍTULO

57) Sebastián Maldonado 1775-1778 Teniente de capitán general y alcalde


mayor

58) Pedro Durán Maldo- 1778-1780 Interino


nado

59) Francisco Villamil 1783 Gobernador político y militar, inte-


rino

60) María Mendiguren 1784 Gobernador interino

61) Francisco de Amuzquí- 1784-1791 Gobernador civil y militar


var

62) Juan de Amestroy 1791-1793 Gobernador interino

63) Miguel Castro y Araos 1793-1810 Gobernador político y militar

64) Lorenzo Santa-María 1810-1811 Gobernador interino

65) Andrés Girón 1811-1813 Gobernador interino

66) Lorenzo Santa-María 1813-1814 Gobernador interino

67) Francisco de Heredia 1814-1817 Gobernador político y militar

68) Lorenzo Santa-María 1817-1818 Gobernador interino

69) Ángel del Toro 1818-1821 Gobernador político y militar

Fuente: Diccionario Enciclopédico de Tabasco, Tomo I, 1994, Gobierno del Estado de Ta-
basco, pp. 200-201.

28
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Posteriormente fue asignado por la Audiencia de México,


Francisco de Montejo, quien obtuvo la alcaldía mayor de Ta-
basco de 1535 a 1549. En esos 14 años ejercieron el mando,
a su nombre, los tenientes de gobernador y capitán gene-
ral: Adelantado Francisco de Montejo (hijo), Juan de Gati-
ca, Gonzalo Nieto y Francisco de Montejo (sobrino).En un
principio Tabasco dependía del virrey de la Nueva España,
y de la Audiencia de México, de 1543 a1548; al igual que
Yucatán y Chiapas, pasó a la jurisdicción de la Audiencia de
los Confines, con sede en la ciudad guatemalteca de Gracias
a Dios; se reincorporó a la de México hasta 1550, en que el
tribunal de los Confines se mudó a la ciudad de Guatemala y
por real cédula de 9 de enero de 1560, promulgada en 1561,
volvió a estar sujeta, en lo judicial a la Audiencia de México.
En 1564 se estableció la Gobernación o Capitanía Gene-
ral de Yucatán, bajo cuya responsabilidad administrativa y
militar quedaron esa provincia y las de Campeche y Tabasco.
A pesar de este esquema oficial, durante el siglo XVI y la ma-
yor parte del XVII Tabasco se manejó independientemente
de la autoridad de la península y en comunicación directa
con el virrey y la Audiencia de México, debido sobre todo al
desinterés de Mérida y a la menor dificultad en las comuni-
caciones.
1.1.1 Caracterización del tabasqueño
Una definición del tabasqueño de esta época colonial se en-
cuentra con base en la interpretación de la historia y el descu-
brimiento de ciertos vicios nacionales en las observaciones de
la psicología y la cultura mexicana. Samuel Ramos en su obra
El perfil del hombre y la cultura en México, caracteriza a los

29
Los partidos políticos en Tabasco

mexicanos con una constitución mental legada por la histo-


ria, con una cultura derivada, es decir impuesta, alimentada,
de la cultura europea, cuya reacción nacionalista rechaza la
tesis auto denigratoria, que arraigó el sentimiento de inferio-
ridad étnica.
Por una parte, la vida mexicana, a partir de la época co-
lonial, tiende a encauzarse dentro de formas cultas traídas de
Europa, el idioma y la religión. El único agente civilizador en
el Nuevo Mundo fue la iglesia católica. Por otra, desde antes
de la conquista, se considera que los indígenas eran reacios a
todo cambio, vivían apegados a sus tradiciones, eran rutina-
rios y conservadores. En el estilo de su cultura quedó estam-
pada la voluntad de lo inmutable.
Sin embargo, en relación a la búsqueda de característi-
cas particulares, regionales, de carácter monográfico, López
Obrador (1986) señala:
….El poder del clero era incipiente. Para entender con
claridad esta peculiaridad, es necesario señalar que en
Tabasco, desde la época colonial, el clero no ejercía gran
influencia sobre la sociedad. En efecto, la falta de me-
tales preciosos, en torno a los cuales giró la economía
colonial, hizo que los españoles le dieran poca impor-
tancia a la acción evangelizadora. Además, las condicio-
nes naturales del territorio (pantanos, clima caluroso,
abundancia de mosquitos) dificultaron el asentamiento
y la labor de las misiones religiosas.

En la Memoria presentada por el Dr. José Eduardo de


Cárdenas, el 24 de julio de 1811, se brinda una descripción
del carácter peculiar del tabasqueño:

30
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

El carácter de los hijos del país es religioso, dócil, senci-


llo y festivo; y tan liberal que frisa con lo pródigo: con-
tado será el tabasqueño que sufra dignamente la nota
de avaro. Cierto que son desidiosos; pero el problema
de si este vicio pernicioso es por genialidad o por falta
de dirección, deberá remitirse al tiempo próximo futuro
para que lo resuelva. El lujo devastador no se conoce
por allá. Todos aman el aseo, pero sin artificio: desean
parecer bien sin perecer por ello. (De Cárdenas, 1979)

Finalmente Manuel R. Mora, ex gobernador de Tabasco,


en su obra Ensayo Sociológico de Tabasco, señala que las cos-
tumbres heredadas a través de generaciones:
Son formas de conducta practicadas por los hombres,
conceptos rudimentarios del mundo que los rodea y de
sí mismos, aparecidos con el advenimiento de la prime-
ra tribu que plantó en Tabasco su tienda. Desde enton-
ces los hombres de la selva, de este pedazo de trópico
bañado por el Golfo, han permanecido fieles a la tradi-
ción, excepto ligerísimas variaciones por lo que hace al
atavío personal. Trabajan la tierra como lo hacían antes
de la conquista; su sentido religioso, fetichista más bien,
es el mismo; la higiene, los métodos curativos, la supers-
tición, todo se ha transmitido fielmente a través de los
años sin perder sus peculiaridades más lejanas. Tabas-
co, con especialidad los doscientos veinte mil campesi-
nos natos, viven en pleno estado de conciencia mítica.
(Mora, 1947)

Una particularidad característica del determinismo geo-


gráfico señala que los tropicales como los tabasqueños tienen
un acento provinciano, que guarda semejanza con el de los
cubanos, los andaluces, los argentinos y veracruzanos. Este
acento característico se explica en razón de que en el español

31
Los partidos políticos en Tabasco

que se habla en Tabasco hasta el día de hoy, se conservan


palabras perfectamente castizadas y de la época medieval.
La forma de hablar del tabasqueño tiene influencias de otras
lenguas, es decir, el español de Tabasco ha sido influenciado
por lenguas indígenas como el chontal, principal lengua en
Tabasco después del español, el zoque, el náhuatl y el chol.
Los defectos en la forma de hablar sólo son prosódicos,
puesto que se construyen bien las frases, pero se tiene la cos-
tumbre de suprimir la letra “s” al final de las sílabas de las
palabras, lo mismo que la letra “z”, la cual tiene el mismo
sonido en México. Así se dice “vamo” en vez de “vamos”. La
pronunciación de las palabras de los rancheros de Tabasco,
es un poco diferente de las personas o gente que vive en las
ciudades. El acento con que hablan se parece mucho al de
los gauchos argentinos. Existen algunas palabras que todavía
conservan el sonido y se dicen tal como se decían en la época
del romance. Como por ejemplo: escribía, rompido, rompi-
da, ringlera, topar, apear, topador.
Todos los verbos al conjugarlos con la segunda persona
del singular en los tiempos presentes de indicativo e impe-
rativo los dicen agudos. Ejemplos claros son los siguientes:
dicen querés en vez de quieres, tenés en vez de tienes, comé
en vez de come. También suelen cambiar la letra f por la j,
y así dicen por ejemplo juera en vez de fuera. Y en el caso
del verbo ir, en las terceras personas dicen jue, en vez de fue.
Otro ejemplo es la palabra fuerte la cual dicen como juerte.
Por otra parte, suelen también usarse las contracciones en
algunas palabras. Por ejemplo dicen via a vera…, en vez de
decir voy a ver a... también suelen agregar la letra “d” al co-

32
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

mienzo, es decir, la primera letra, o verbos ir y entrar. Así di-


cen yo iba a dir a verte, en vez de yo iba a ir a verte, y por qué
dentraste sin permiso, en vez de por qué entraste sin permiso.
Otro caso es el de la letra H, la cual le han transformado su
sonido en el de la letra J. Así por ejemplo dicen jallar en vez
de hallar y jallé en vez de hallé (Gamas, 1998).
Recapitulando, los acontecimientos más importantes de
la historia de Tabasco se agrupan en tres periodos: a) 1800 a
1863, b) 1863 a 1910; y c) 1910-1920.
1.2 Federalismo y centralismo 1800 a 1863
Para los analistas de la historia ha sido difícil analizar este
periodo por sus continuas variaciones en el ámbito de la lu-
cha entre centralismo y federalismo, dentro de cuyo marco
se dieron acontecimientos de gran envergadura para el país,
tales como la separación definitiva de Texas, la temporal de
Yucatán y la Guerra contra Estados Unidos de Norteamérica
(Rosique, 1990). Estos acontecimientos sacudieron fuerte-
mente la política tabasqueña, las disputas por el poder en-
tre los mandos civiles y militares se convirtieron en un mal
crónico, común a los no pocos gobiernos en este período.
También durante esta época, Tabasco, aunque brevemente,
se separó de la República y sufrió además los embates de las
fuerzas invasoras norteamericanas que causaron estragos a su
capital.
Se consideran algunos hechos que permitan conocer las
tendencias que llevaron a optar por un partido u otro. Desde
la conquista en que Tabasco se convirtió en la puerta de Amé-
rica hasta la organización administrativa del Estado Coloni-

33
Los partidos políticos en Tabasco

zador, Tabasco constituyó una de las provincias del virreinato


de la Nueva España. Época en que Carlos IV de Borbón se
encontraba a la cabeza de la monarquía española. Europa en-
vuelta en luchas internas por los mercados, requería que los
países tomaran “partido”.
Napoleón Bonaparte en su lucha contra Inglaterra, trata-
ba de imponer un bloqueo continental que tenía como ob-
jetivo cerrar las puertas de Europa al comercio inglés, a fin
de favorecer a Francia con las producciones y los mercados
de los demás países europeos. Por ello necesitaba tener bajo
control absoluto a Portugal y a España.
En España, la crisis económica que se vivía desde el siglo
anterior trajo consecuencias sociales y políticas contrarias al
régimen en diversos niveles de la sociedad hispana, al grado
de fraccionarla en dos partidos: los carlistas, defensores del
rey y seguidores de las políticas de su ministro Manuel Go-
doy; y los fernandistas que adoptaron este nombre por contar
entre sus filas al hijo de Carlos IV; el príncipe de Asturias y
heredero al trono, Fernando.
La división entre carlistas y fernandistas se acentúo con-
forme más profunda se hacía la crisis económica y con las
medidas adoptadas por la Corona para solventar las fuertes
erogaciones generadas por las derrotas navales sufridas ante
la poderosa armada inglesa. En medio de estas circunstan-
cias desfavorables, España se adhirió formalmente al bloqueo
continental.
En abril de 1808 Napoleón obligó a Fernando a abdicar a
favor de su padre, y éste a su vez, a favor de Napoleón, quien,

34
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

a través de una proclama, el 6 de junio nombró a su hermano


José Bonaparte, “Rey de las Españas”. La reacción del pueblo
español a la invasión francesa se expresó bajo la forma de
guerra de guerrillas. Surgieron las juntas provinciales, como
las de Asturias, Galicia y Sevilla.
Las clases sociales de la nobleza y el clero se sintieron ame-
nazadas ante las posiciones políticas de estas juntas provincia-
les y para defenderse de esta tendencia regionalista proponían
el establecimiento de las Cortes, con un modelo bicameral al
estilo inglés.
Por ende, los primeros indicios de actividad legislativa en
Tabasco se encuentran en los últimos años de la colonia, de-
rivados de la representación de la provincia de Tabasco, ante
las Cortes de Cádiz, realizada por el Presbítero José Eduardo
de Cárdenas y Romero.1
En sus propuestas se traslucen los intereses de la oligar-
quía regional tabasqueña, de hacendados criollos que se veían
perjudicados con la política ejercida por la corona españo-
la, revestían la aspiración al establecimiento de relaciones de
igualdad entre las colonias y la metrópoli, con ventajas en
beneficio de la oligarquía regional y de la clase media criolla,
principalmente la de la ciudad de México, representado por

1 De Cárdenas y Romero José Eduardo. Nació en Cunduacán, Tab., el 13 de octubre de 1765,


murió el 23 de enero de 1821. Cursó filosofía y teología en el Seminario Tridentino de Mérida, Yuc.,
y derecho canónico en la Real y Pontificia Universidad de México. Ordenado sacerdote, fue juez
eclesiástico. Coadjutor y vicario foráneo de distrito de la parroquia de Cunduacán. En 1805 recibió
los grados de licenciado y doctor en sagrada teología por la Universidad de Guatemala. En 1810 el
Ayuntamiento de San Juan Bautista lo eligió diputado por Tabasco a las Cortes Generales y Extraor-
dinarias de Cádiz. Prestó juramento el 27 de febrero de 1811. El 24 de junio de 1811 presentó a
esa asamblea su Memoria a favor de la provincia de Tabasco. El municipio y la ciudad de Cárdenas,
Tab., llevan estos nombres en su honor y no como se ha dicho que es en honor de Lázaro Cárdenas
del Río. Diccionario Enciclopédico de Tabasco Tomo I 1994 Gobierno del Estado de Tabasco. ICT.

35
Los partidos políticos en Tabasco

su Ayuntamiento. La contraparte de las juntas provinciales lo


representaba la Suprema Junta Central (1808-1810) la cual
asumía el ejercicio de la soberanía en nombre del rey y tra-
taba de imponer su autoridad sobre las juntas provinciales.
Resultó vencedora la propuesta de las Cortes, pero con la
variante de tipo liberal, a semejanza de la Asamblea Nacional
Francesa, dejando sin posibilidad el establecimiento de las
Cortes por estamentos, y dando paso al principio de repre-
sentación de acuerdo con la población.
Siguiendo este principio, se eligió un diputado por cada
50,000 habitantes, de acuerdo al censo de 1797, y se incluye-
ron a los territorios americanos.
La economía novohispana afectada por las disposiciones,
las prohibiciones y los estancos, las marcadas diferencias so-
ciales, y el control de la mayoría de los puestos administra-
tivos y militares por parte de los españoles peninsulares, en-
contraron un canal de expresión y un medio de lucha en el
Ayuntamiento de México que era el organismo que represen-
taba los intereses de los criollos acomodados y de clase media,
natural y políticamente antagónico a la Real Audiencia que
representaba los intereses de los funcionarios y de los grandes
comerciantes peninsulares.
En la provincia de Tabasco las noticias de los aconteci-
mientos referentes a la abdicación de los monarcas, fueron
conocidas hasta los días 22 y 25 de junio de 1808, a través
de periódicos que provenían de La Habana y de cartas de
Campeche y de Mérida. Las autoridades de la provincia or-
ganizaron un desfile por las principales calles de la villa, en

36
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

el que se portaba un retrato de Fernando VII, contando con


la participación de diputados enviados de los ocho partidos
(territorios, hoy municipios) distritales en que estaba políti-
camente dividida la provincia; se juró lealtad al monarca en
un acto solemne realizado en la Plaza Mayor.
La Iglesia Parroquial representada por el Dr. José Eduardo
de Cárdenas y Romero, pronunció senda prédica alusiva a los
acontecimientos. Estos actos se repitieron en cada una de las
cabeceras de los partidos tabasqueños.
Cabe señalar que Tabasco dependía políticamente del vi-
rreinato de la Nueva España y de la Real Audiencia, pero
administrativamente (el erario) dependía de la Intendencia
de Yucatán, de igual modo, en materia eclesiástica, dependía
del obispado yucateco.
Tabasco era controlado por su Gobernador Militar y Polí-
tico Don Frey Miguel de Castro y Araos,2 quien gobernó de
1793 a 1810. Fue este Gobernador el designado por el Virrey
Pedro Garibay en noviembre de 1808, a realizar elecciones
para el primer Ayuntamiento de Villahermosa, el cual a su
vez, debía nombrar un diputado que representara a la provin-
cia ante las Cortes Generales y Extraordinarias de la Nación
Española que habrían de reunirse en Cádiz.
Ante estos eventos, la discusión en 1814 acerca de la
Constitución Liberal de Cádiz, dio pie a la formación de dos
partidos: los Realistas Liberales (o constitucionales), partida-
rios de la Carta de 1812 y los Realistas Absolutistas, que apo-
yaban las medidas que Fernando VII había tomado. Aunque

2 Miguel de Castro y Araoz nació en Sevilla España en 1743 y murió en Mérida, Yucatán en 1820.

37
Los partidos políticos en Tabasco

en oposición a los realistas, fueran liberales o absolutistas,


existían pequeños grupos independentistas que simpatizaban
con las ideas de Hidalgo y Morelos.
En México, como consecuencia de los acontecimientos
que se desarrollaban en España, se intensificó la inquietud en-
tre las elites dirigentes y una primera tendencia buscó organi-
zarse, eran los “escoceses”, llamados así porque sus dirigentes
se reunían en las logias del antiguo rito masónico escocés. En
México en 1813 nació el “Partido Escocés” a consecuencia
de la promulgación en 1812 de la Constitución española de
Cádiz, y su programa sostenía el establecimiento del sistema
representativo. Los escoceses eran españoles en su mayoría
y eran apoyados por los oficiales de las fuerzas armadas. Al
abrogarse la constitución española, en vez de debilitarse, esta
tendencia comenzó a fortalecerse y para 1819 los escoceses
eran mayoritarios entre las elites dirigentes.
La independencia de México fue resultado de una alian-
za entre las masas campesinas que luchaban en el sur y los
dirigentes de la oligarquía terrateniente que se encontraba
al frente del “Partido Escocés”. El movimiento de rebelión
contra la fidelidad a la Corona Española, logró con Agustín
de Iturbide a la cabeza, encontrar los compromisos necesarios
para proclamar la independencia ante España (1821) pero
careció de una base social y de tesis definidas.
El domingo 8 de septiembre de 1821 fueron juradas la
independencia y el Plan de Iguala en Tabasco, “por el pueblo
y tropas de Villahermosa”. Conviene citar aquí, el siguiente
párrafo del Dr. Diógenes López Reyes:

38
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

La lucha por la Independencia no tuvo en Tabasco pa-


ladines de fuerza y decisión; en su mayoría todos se vol-
vían en loas y alabanzas al monarca español, al virrey y
a los jefes realistas. Cuando se tenían noticias de
algún descalabro insurgente, de la prisión o el
fusilamiento de algún jefe de la rebelión como
Hidalgo, Allende, Morelos, Matamoros, Mina etc.,
repicaban las campanas del Principal; tambores y
clarines recorrían las calles de la villa convocando al
pueblo para que se reuniesen en la Plaza Mayor para
oír los nuevos comunicados enviados por el virrey o el
Capitán General de Yucatán y se organizaba una
manifestación de realistas fieles, con música, cohetes y
antorchas recorriendo las principales calles de la
población para terminar con baile y holgorio en la
plaza. El pueblo bajo, indígena, seguía indiferente a
estas procesiones, sin comprender el motivo de tales
arrebatos; ignorantes, degradados por siglos de miseria
y explotación, no era considerado como un ser
consciente, capaz; era un paria, una cosa; más bien, un
estorbo. Tal fue la triste situación por la que atravesó
el pueblo de Tabasco durante esa dura época
llamada colonial. Otras provincias de la Nueva
España gozaron de consideraciones y privilegios que
los humildes de Tabasco desconocieron por completo;
todo fue servidumbre, explotación, oscurantismo y
miseria (López, 1980).

Estas diferencias entre las clases poseedoras y el resto de


la población engendraron por otra parte una nueva doble
escisión: entre el Estado y la Iglesia y entre el centro y las
provincias. Esta triple fractura dio origen a las dos grandes
tendencias políticas o partidos. En el inicio de la vida repu-
blicana en un Tabasco ignorante, indígena, los participantes
en las contiendas políticas, miembros de un pequeño grupo
integrado por propietarios de haciendas, comerciantes, mi-

39
Los partidos políticos en Tabasco

litares y eclesiásticos y por lo mismo, eran ellos (los cultos)


quienes venían ostentando, desde la época colonial, los dife-
rentes cargos públicos (ver cuadro No. 2).

Cuadro No. 2
Jefes superiores políticos (1821-1824)

Fuente: Diccionario Enciclopédico de Tabasco, Tomo I, 1994, Gobierno del


Estado de Tabasco, pág. 539.

En México en 1826, se dio en el seno de las logias del rito


yorkino la organización de la tendencia “progresista”. El na-
cimiento del “Partido Yorkino” tuvo por consecuencia la re-
organización del “Partido Escocés” y los dos “partidos” logra-
ron dividir a las elites del país, los masones del rito “escocés”
de tendencia monarquista y defensores de las instituciones
de la colonia española y los adeptos del rito “yorkino” parti-
darios de la República Federal, de la separación entre iglesia
y Estado y contrarios a la influencia española, se presentaron
con posturas irreconciliables.
Esta bipolarización de la vida política condujo a un perío-
do de pronunciamientos y de violencia; los dos partidos ante
la falta de un programa definido, se desacreditaron entre las
clases dominantes y los caudillos recurrieron de nuevo a las
armas. A la proclamación de la primera República Federal,

40
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

las tendencias comenzaron a identificarse como “centralistas”


y “federalistas”. El federalismo simbolizaba los cambios so-
ciales, la separación entre la iglesia y el Estado y el respeto a
los gobiernos estatales, en tanto que el centralismo se identi-
ficaba por el contrario al absolutismo del período colonial, a
la intolerancia religiosa e ideológica, al mantenimiento de las
estructuras económicas existentes y a la constitución de un
poder central.
Estos partidos en el curso de un cuarto de siglo se enfren-
taron, sin embargo, ninguno de los dos llegaron a constituir
tendencias políticas organizadas como las que comenzaban
a manifestarse en esta época en los países europeos y en los
Estados Unidos, más bien representaron el enfrentamiento
entre dos facciones en las que el personalismo y las relaciones
culturales, económicas y sociales tenían un papel determi-
nante.
En un reflejo de la lucha entre los poderes locales y los
federales, que ocurría en el centro del país, en Tabasco se ges-
taba la lucha entre federalistas y centralistas. Las estructuras
económicas y sociales de los años de la colonia estaban vigen-
tes y sólo una minoría encontraba medios de expresión.
A finales de 1823 se celebraron elecciones en Villahermo-
sa para renovar el Ayuntamiento y nombrar al presbítero José
María Ruiz de la Peña diputado por Tabasco ante el Segundo
Congreso Constituyente. Correspondió a este representante
solicitar a esa asamblea que Tabasco se considerase Estado de
la República, petición que fue aprobada el 7 de febrero de
1824. Por ende Tabasco quedó en situación de integrar su
Congreso local. Después de celebrarse los comicios respecti-

41
Los partidos políticos en Tabasco

vos, el día 3 de mayo de 1824 entró en funciones el primer


Congreso Constituyente de la entidad.
La cronología de las Legislaturas es un hilo conductor de
la participación política de ese entonces:
• El decreto del 7 de agosto de 1824, que pone en vigor la
Ley para la Organización Provincial del Gobierno Inte-
rior del Estado, determinó los principios fundamentales
de la república federal y la división de poderes; cumplién-
dose así en el ámbito local, las mismas funciones que el
Acta Constitutiva de la Nación cumplió respecto a la
Constitución Nacional de 1824; es decir, puede consi-
derarse a esta ley como las primicias de la primera cons-
titución local que fue elaborada el 5 de febrero de 1824,
tarea del primer congreso del Estado.
• Corresponde a la segunda Legislatura Tabasqueña de
1825 recategorizar a las principales poblaciones del Es-
tado. En materia educativa se dieron los primeros pasos
para la creación de un Colegio o Liceo de Enseñanza Su-
perior en San Juan Bautista.
• En un marco de pugnas que se daban en el enfrentamien-
to de dos grupos políticos, los liberales y conservadores,
la Tercera Legislatura de 1827 se preocupa por la admi-
nistración de justicia, elaborando la Ley Reglamentaria
para los juzgados y Tribunales del Estado y en materia re-
ligiosa (27 de diciembre de 1827). Además de elaborar el
Reglamento de la Milicia local del Estado (4 de noviem-
bre de 1828). El Reglamento para el Gobierno del H.
Congreso del Estado de Tabasco (11 septiembre 1828).

42
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

• Y la Ley de Expulsión de Españoles (20 de marzo de


1829), que secundaba las medidas adoptadas poco an-
tes por el Congreso Nacional en este mismo sentido y
dando como consecuencia la expulsión de 72 de los 80
españoles, provocándose con ello una fuga de capital que
condujo a una disminución de la actividad económica en
la entidad.
En México ante las elecciones de Presidente y vicepresi-
dente de la República se encontraban los yorkinos de ideas
liberales, defensores de la República Federal y los imparciales
que contaban entre sus filas a criollos americanos que junto
con los escoceses (partido del rito masónico escocés), nove-
narios y algunos yorkinos formaron alianzas en la lucha por
el poder.
En el breve curso de un año la inestabilidad política ter-
minó con el establecimiento de un “régimen centralista al
servicio del clero y de la milicia privilegiada” disolvió las le-
gislaturas de los Estados y se sustituyó la Constitución por las
7 leyes constitucionales.
Los intentos de los federalistas para reformar las estructu-
ras coloniales no tuvieron ninguna trascendencia y el progra-
ma reformista de Gómez Farías no logró más que ahondar el
conflicto entre el gobierno y la iglesia, ya que fue rápidamen-
te detenido por un levantamiento de los centralistas, que con
Antonio López de Santa-Anna a la cabeza, se apoderaron del
gobierno para impedir la aplicación de las reformas.
Con la promulgación de las 7 leyes, se consolida el cen-
tralismo en México, la primera ley consideraba los derechos

43
Los partidos políticos en Tabasco

y obligaciones de los mexicanos y habitantes de la república,


leyes que se ocupaban de establecer la división de poderes y
la organización del gobierno. Es decir, eran el instrumento
jurídico con el que la clase privilegiada pretendía conservar
sus fueros y privilegios, acaudilladas por el clero y el ejército.
Las consecuencias no tardaron en aparecer: la separación
de Texas de la República central, la guerra de Texas con su
correspondiente solicitud para anexarse a los Estados Unidos
de Norteamérica, y en el sureste, en Yucatán, había manifes-
taciones revolucionarias contra el centralismo, y finalmente
se declararon independientes de México mientras no volviese
a adoptarse el sistema federal.
Se incluyen las reacciones en contra de las 7 leyes en So-
nora, Tampico, Jalisco, Durango y San Luis Potosí. Ocurre
en 1838-1839, la Guerra con Francia o Guerra de los pasteles
que para ponerle fin el gobierno mexicano accedió a todas las
exigencias de los acreedores franceses.
Esta situación ahondó las divisiones. Durante todos esos
años, los dirigentes del “partido centralista” trataron en vano
de desarrollar un aparato de Estado sin lograrlo. Estando el
propio ejército dividido, numerosos pronunciamientos y fre-
cuentes revueltas crearon condiciones favorables a la inter-
vención extranjera.
El carácter elitista de la vida política se acentúo aún más
y la legislación de este período estableció por ejemplo nue-
vas restricciones al derecho electoral creando en particular
un voto de tipo censatario y la elección indirecta en segun-
do grado. Durante la segunda República Centralista (1841-

44
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

1846) se redactó una nueva Constitución que reafirmó los


privilegios de la iglesia católica y del ejército y creó nuevas
restricciones en materia de participación política. En Méxi-
co, cuando el gobierno de Santa-Anna hacía frente a Estados
Unidos, la invasión norteamericana encontró a un pueblo
dividido, lo que facilitó las intenciones expansionistas (1846-
1847). Después de haber sido restablecida la Constitución
de 1824 los dirigentes del partido centralista se negaron a
colaborar en la lucha contra los invasores, la iglesia negó al
gobierno la ayuda económica necesaria y a México le fue am-
putada más de la mitad de su territorio.
En Tabasco, el 19 de octubre de 1850 se celebraron comi-
cios en el estado para elegir gobernador y vicegobernador,3 en
los cuales participaron dos grupos a manera de partidos po-
líticos; cuya denominación es un sarcasmo de la presunción
de la fortaleza de los grupos que se basa en el dicho popular
“se van a dar piedra con cocoyol”, es decir que ambos son
fuertes contendientes: el partido de la piedra que postulaba
a don Justo Santa Anna y a Don Manuel Ponz y Ardil, y el
partido El cocoyol, postulando a don Juan de Dios Salazar y
a don Calixto Díaz.

3 De 1831 a 1849 uno de los requisitos para ser gobernador era el de tener un capital de por lo
menos 5 mil pesos, si se era nativo del Estado, o de 10 mil si fuera originario de otro. En 1850 el des-
empeño del cargo se condicionó a poseer bienes por 12 mil pesos o, en su defecto, a dedicarse a una
profesión o industria que produjera 2 mil pesos al año. Estas restricciones desaparecieron en 1857.
El mandato del gobernador duraba cuatro años, con posibilidad de reelección no inmediata (Consti-
tución de 1825); o dos años, pudiendo reelegirse el titular por una sola vez y nuevamente transcurrido
un lapso igual al tiempo en que hubiera manejado el gobierno (reformas de 1831 y 1850); o cuatro
con las mismas opciones anteriores (Constitución de 1857 y reformas de 1883) o sin limitaciones
para la reelección (reformas de 1890), o sin la posibilidad de hacerlo inmediatamente (reformas
de 1914 y Constitución de 1919). La elección, a su vez, se ha hecho por conducto de las juntas
electorales (1825), las juntas municipales secundarias (1831), la Junta General del Estado (1850), en
forma indirecta (1857) y directamente conforme a la Ley Local Electoral (desde 1883). Diccionario
Enciclopédico de Tabasco Tomo II 1994, Gobierno del Estado de Tabasco, pág. 551.

45
Los partidos políticos en Tabasco

De las elecciones resultó triunfador el Partido de la Pie-


dra, y por tanto, don Justo Santa Anna se convirtió en go-
bernador por décima ocasión, quien tomó posesión el 9 de
agosto de 1851. En el curso del periodo de 30 años que va del
inicio de la primera República Federal, al fin de la dictadu-
ra santanista (1824-1855), los dos partidos siguieron siendo
tendencias que solo se enfrentaron sin realizar organizaciones
estables y definidas.
En México las dos tendencias que lo dividían, cambiaron
de denominación y comenzaron a identificarse como Partido
Conservador y Partido Liberal. En la misma época en que
el resto de los países latinoamericanos, los centralistas repre-
sentaban la tendencia jacobina de integración nacional, en
México, por el contrario fueron los centralistas quienes se
identificaron mejor a la denominación de conservadores y los
federalistas a la de liberales. Sin embargo los dos “partidos”
no llegaron tampoco a constituirse como organizaciones es-
tables, solo tendencias que dividían a las elites del país.
El triunfo del Plan de Ayutla significó una grave derrota
para la corriente conservadora, de acuerdo con los postula-
dos del Plan, se convocó a un Congreso Constituyente y a
elecciones.
Los liberales alcanzaban de esta manera el poder político,
al mismo tiempo que se apreciaban entre sus filas, impor-
tantes diferencias, que se explicaban a partir de la derrota en
la guerra con Estados Unidos, los militares habían perdido,
sin embargo mucho de su prestigio y un buen número de
intelectuales, surgidos de las capas medias de la población,
comenzaron a dominar el debate político, permitiendo a

46
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

las elites de los “partidos” agruparse en los periódicos que


constituyeron un poderoso medio de difusión de sus tesis,
manteniendo además los liberales la tradición de reunirse en
las logias, de esta manera hacia 1843 dos tendencias se vis-
lumbraban ya en el seno de los liberales: la de los “puros” o
“radicales” y la de los “moderados”.
Por un lado estaban los llamados puros o radicales que
pugnaban por medidas violentas que reformaran al país en
un corto plazo, y por otro, los moderados que pretendían
alcanzar reformas liberales gradualmente y de manera progre-
siva procurando no enfrentar abiertamente a las fuerzas con-
servadoras. En Tabasco, en tanto los diputados emitían gran
cantidad de importantes decretos inspirados por el triunfo
del federalismo, la agitación política nacional se reflejaba a
través de la inestabilidad del gobierno local. Tabasco en 1855
se convirtió nuevamente en Departamento y por ende el
Congreso local fue suprimido.
En México el Congreso Constituyente de 1856-1857
representó probablemente la confrontación ideológica más
importante de los “partidos” en el curso del siglo XIX. Luego
de largos debates, se impusieron en el seno del Congreso las
tesis de los “moderados” y la Constitución de 1857 organizó
así a México como República Representativa, democrática,
Federal y fundada en la separación de poderes, eliminando a
la religión católica como religión oficial y proclamó la liber-
tad de enseñanza.
En Tabasco el 5 de abril de 1857 se juró la Constitución y
en apego a ella se convocaron a elecciones para gobernador y
diputados, las cuales habrían de celebrarse el día 24 de mayo.

47
Los partidos políticos en Tabasco

En esta ocasión participaron dos grupos a manera de parti-


dos, los cuales habían sido bautizados (como sucedió en las
elecciones anteriores) recíprocamente de manera sarcástica, el
Partido de la Tortuga nombre que aludía burlonamente a su
candidato don Justo Santa Anna y que estaba integrado por
liberales.
El grupo oponente llamado por sus contrarios el Parti-
do del Pejelagarto, mofándose de su candidato don Victorio
Victorino Dueñas, y que contaba con el apoyo de los con-
servadores y que resultó ser ganador. El Congreso Consti-
tuyente inició su periodo de sesiones el 27 de julio de 1857.
En México el “partido conservador” apoyado por la Iglesia
Católica rechazó entonces la Constitución y hundió al país
en una nueva guerra civil. Los “clubes” liberales y conserva-
dores que estaban organizándose como formaciones políticas
permanentes detuvieron sus actividades.
En Tabasco con el levantamiento de Félix Zuloaga pro-
clamando el Plan de Tacubaya, se dio un reflejo de lo que
sucedía en el ámbito nacional, pues así como había dos pre-
sidentes de la República el usurpador Zuloaga y el legítimo
Juárez; paralelamente en Tabasco había dos gobernadores:
Sarlat y Dueñas.
Ante la presión liberal en 1859, fueron recibidas y acata-
das las leyes de Reforma dictados por el gobierno juarista y
a mediados de ese año se celebraron elecciones para renovar
la Legislatura. El 23 de noviembre de 1858 el Congreso lo-
cal expidió la Ley Electoral del Ayuntamiento. En el curso
de la guerra de 3 años (1858-1860), los dos “partidos” se
opusieron con violencia, mientras el gobierno juarista decre-

48
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

taba leyes buscando limitar el poderío económico y político


del Ayuntamiento. En todo este período, el conflicto entre el
centro y la región persistía, es decir se seguían políticas ajenas
a los intereses regionales. Con una república que adopta el
sistema centralista, que cuando no anulaba los poderes loca-
les los subordinaba a los dictados del centro, concentrándose
el poder político y militar de la entidad.
Por su parte cuando los federalistas o liberales controlaban
la política nacional en Tabasco, el clima era propicio para que
los intereses y las fuerzas políticas locales se manifestaran con
mayor soltura, sin que desapareciera el conflicto fundamen-
tal entre el centro y la región, que se esperaba a través de la
disputa por el poder que de forma permanente existió entre
gobernador y comandantes generales en turno.
Cabe aclarar que en la interacción de las fuerzas regiona-
les y centrales, el Congreso Tabasqueño, durante la época en
cuestión, es quizá, el organismo que refleja con mayor nitidez
los intereses de la oligarquía local, lo cual puede apreciarse
en el resultado de su labor legislativa, señalando a manera de
ejemplo, el Reglamento Agrario de 1826, las leyes que orde-
nan el establecimiento de tribunales especiales para vagos, lo
que recuerda la llamada acumulación originaria de Inglaterra
(Marx, 2011); y la que fija el requisito de poseer propiedades
que garantizaran ingresos mínimos, determinados para aque-
llos ciudadanos que aspiran a ocupar ciertos puestos públicos.
La segunda Legislatura acató en 1859 las leyes de refor-
ma y se expidió la Ley electoral de Ayuntamientos. Con las
fuerzas liberales en 1860-1863 se dieron las elecciones para
Gobernador.

49
Los partidos políticos en Tabasco

En Europa, México era codiciado por Napoleón III para


fundar un imperio latino en América bajo la tutela france-
sa, que frenara el expansionismo norteamericano. Se utilizó
como pretexto para ello, una ley expedida por Juárez el 17
de julio de 1861 que ordenaba la suspensión del pago de la
deuda externa por 2 años, con el fin de reactivar la reorga-
nización económica del país. Los gobiernos de España e In-
glaterra afectados conciliaron, pero los franceses decidieron
intervenir militarmente.
1.3 Liberales y conservadores 1863 - 1910
En México, para 1864, Maximiliano y Carlota se hicieron
cargo del trono imperial, sostenido con el apoyo de las fuer-
zas intervencionistas francesas y los conservadores mexica-
nos, contando con la firme oposición de Juárez y su gobierno
constitucional.
La influencia francesa (1860-1867) que fue el último epi-
sodio de la guerra civil, constituyó además el último gran
enfrentamiento de los “dos partidos”.
En Tabasco, como una herencia de los centralistas, se de-
bilitaron aún más las fuerzas regionales, durante sus perma-
nencias en el poder supremo, aplicaron medidas drásticas,
como los cierres de los puertos al comercio exterior, la semi
extensión de las milicias cívicas, la imposición de fuertes con-
tribuciones y de préstamos forzosos, y la desaparición de los
poderes políticos locales entre otras (Soto, 1990).
Es precisamente esta debilidad regional la que fue apro-
vechada por el gobierno liberal de Juárez para inclinar la ba-
lanza a favor del centro, buscando consolidar el Estado Na-

50
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

cional, que además en ese momento se presentaba como la


mejor alternativa para enfrentar los grandes problemas del
país, aun teniendo que sacrificar parcialmente las autonomías
regionales.
En términos económicos, es conveniente considerar que
los ingresos más importantes que tenía Tabasco provenían
anteriormente del cobro de los derechos aduanales y de la
recaudación de las alcabalas.
Con el gobierno juarista, los derechos de aduana pasaron
a formar parte del ingreso federal y las alcabalas fueron par-
cialmente suprimidas en aras del libre tránsito de mercancías
por el suelo nacional, además del establecimiento de barreras
arancelarias para el comercio exterior, mismas que producían
efectos negativos en una economía agro exportadora y en un
comercio local con fuerte sustento en el consumo de artícu-
los de importación.
En Tabasco en 1862 la lucha que a nivel nacional se es-
tableció entre federalistas (liberales y civiles) y centralistas
(conservadores, militares y clero), se trató de una lucha entre
federalistas “comerciantes y hacendados que representaban la
clase dominante en el estado, contra centralistas, militares y
fuereños” quienes asumieron el modelo de política y econo-
mía planteado por el liberalismo, buscando su independencia
y el control político.
La lucha finalmente se decidió a favor de la revolución de
Ayutla y la guerra de reforma. El triunfo del liberalismo se
estableció en Tabasco a manos de Victorio Victorino Dueñas,
Gobernador al momento de la revolución francesa.

51
Los partidos políticos en Tabasco

El 27 de febrero de 1864, Tabasco entró en el halo repu-


blicano como la primera entidad libre de la influencia con-
servadora de la regencia y del pretendido imperio mexicano,
gracias a la contra ofensiva liberal-burguesa del estado, ini-
ciado en octubre de 1863, cuando simultáneamente se insu-
rreccionaron los pueblos de Cárdenas y Comalcalco, Teapa
y Tacotalpa bajo el mando de Andrés Sánchez Magallanes,
Gregorio Méndez Magaña, Lino Merino, Rosario Bastar y
José María.
Bajo esta circunstancia, Gregorio Méndez Magaña, por
decreto, fue erigido Gobernador y Comandante Militar el
8 de septiembre de 1864. Así, durante todo el imperio, Ta-
basco funcionó como entidad republicana, con el poder en
manos de un militar liberal bajo las órdenes de Porfirio Díaz,
jefe de la línea de oriente y máximo líder militar de la resis-
tencia liberal.
El efímero Imperio del Archiduque austriaco impuesto
por los franceses marcó el apogeo de la lucha entre conser-
vadores y liberales y constituyó sin dudas el fin del “partido
conservador” en tanto que tendencia defensora de los intere-
ses de la antigua oligarquía. El periodo de bipartidismo bur-
gués del siglo XIX, que como en otros países se caracterizó
en México por la oposición entre conservadores y liberales,
concluyó así con la derrota militar de los primeros.
En Tabasco, Gregorio Méndez gobernó con facultades de
excepción, sirviendo a la clase liberal burguesa a la que él per-
tenecía, por ende el 24 de diciembre de 1864 promulgó una
ley que puede considerarse agraria, en la cual prácticamente
se esclaviza a los campesinos a vivir una vida de miseria en las

52
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

haciendas que existían en el estado y que al mismo tiempo,


establecía pleno dominio a los comerciantes sobre los em-
pleados y redujo el acceso de cualquier individuo a escalas
más altas en el nivel económico.
Después de la expulsión de franco-traidores y al término
del gobierno mendista y principalmente ante las elecciones
en puerta, el grupo liberal-burgués se dividió; por un lado,
los militares de la guerra, que en su mayoría eran hacendados
y el de los civiles que eran casi todos comerciantes; esta lucha
fue interna al grupo liberal-burgués.
Benito Juárez retornó el poder a los civiles cuando entró
en vigor el decreto del 5 de mayo de 1867 expedido por Por-
firio Díaz y resultó triunfador en las elecciones de 1868; fue
reelegido para el periodo de 1868-1872; esto después de una
guerra de 10 años, cuyo fin principal era la instauración del
régimen liberal a través de la Constitución de 1857 en un
nuevo estado nacional.
Es decir, el aparato de Estado no existía más que formal-
mente y el gobierno Juarista trató de fortalecerlo, aprove-
chándose de la inexistencia de luchas partidistas.
Diversas formas constitucionales buscaron entonces forta-
lecer el poder presidencial y en el curso de los meses en que
los liberales gobernaron a México, se fue manifestando una
clara tendencia a la centralización para imponer las reformas;
el gobierno debía enfrentarse a los múltiples caciques que ha-
bían sido los aliados “del partido conservador”: terratenien-
tes, miembros de la jerarquía eclesiástica y una fracción de los
oficiales del ejército.

53
Los partidos políticos en Tabasco

Para las elecciones de Tabasco, Felipe Serra4 a la cabeza


del Partido Radical, representaba a los burgueses comercian-
tes-civiles del estado en oposición a los progresistas, cuyo lí-
der era Victorio Victorino Dueñas que se formaba por los
burgueses hacendados, militares, es decir, las dos facciones
del grupo liberal burgués emanado de las luchas de interven-
ción.
El nuevo Congreso entrado en funciones el 16 de sep-
tiembre de 1867, también producto de esa elección, procla-
mó ganador a Felipe J. Serra, como gobernador electo para
el periodo 1868-1871 y primer gobernador constitucional
en Tabasco de la república restaurada. Sin embargo, desde el
momento de su elección se dieron levantamientos militares
debido a la atomización del poder estatal, a raíz de la pugna
interclasista que se recrudeció y dominó la vida política hasta
1894 en que Abraham Bandala arribó al poder en Tabasco.
Estos levantamientos se explican por varios factores:
1. La manipulación de las elecciones, que bajo la Ley Elec-
toral de 1857 establecía que el gobierno pagaría viáticos
de los electores; con estos “pagos” obtenían el favor de
los electores.

4 Felipe de Jesús Serra nació en Atasta, villa cercana a San Juan Bautista, Tab. (hoy Villaher-
mosa), el 6 de enero de 1822, murió en 1905. Empezó a figurar en la vida pública en 1847 como
secretario del gobernador Justo F. Santa Anna. Participó entonces en acciones contra los invasores
norteamericanos. Fue diputado local en 1859 y vicegobernador en 1860. Combatió contra la In-
tervención Francesa y acompañó a Gregorio Méndez en la batalla de El Jahuactal. Gobernó Tabasco
del 22 de julio de 1863 al 4 de octubre de 1864; del 6 de junio al 31 de diciembre de 1867 como
interino, y del 1º. de enero de 1868 al 19 de julio de 1871 como mandatario constitucional. Ade-
más, cinco veces cubrió las ausencias del gobernador Abraham Bandala: 1) del 20 de septiembre
al 27 de octubre de 1895; 2) del 11 de noviembre de 1896 al 10 de enero de 1897; 3) del 20 de
noviembre de este año al 12 de enero de 1898; 4) del 10 de noviembre al 29 de diciembre de 1899 y
5) del 3 de noviembre al 24 de diciembre de 1900. En 1904 fue declarado Benemérito del Estado.
Diccionario Enciclopédico de Tabasco Tomo II, 1994, Gobierno del Estado de Tabasco, pág. 620.

54
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

2. Que a los militares no se les reconocieran sus méritos


insertándolos en el aparato gubernamental.
3. La atomización del poder que dejó a los militares con las
fuerzas reales de poder y a los civiles con sólo la legalidad
de su lado.
Estas rebeliones terminaron con la persecución de los lí-
deres y en 1871 se convocó a elecciones y los aspirantes al
Congreso del partido serrista volvieron a ganar, esto determi-
nó nuevos levantamientos.
Con el apoyo de Victorio Victorino Dueñas, se logró que
Serra huyera el 19 de julio de 1871 y renunciara el 25 de julio
de ese mismo año.
Juárez se negó a reconocer el gobierno de Dueñas, quien
renunció y la IV Legislatura del Congreso local (integrado
desde el 1º. de septiembre de 1869 y funcionando hasta el
1º. de septiembre de 1871), y nombró gobernador interino
al Dr. Ignacio Vado Ruz, convocando a elecciones para go-
bernador y diputados. Así el nuevo periodo comprendido del
1º. de enero de 1872 al 31 de diciembre de 1875 fue elegido
gobernador Victorio Victorino Dueñas.
Dueñas tomó el poder por sexta vez (1871-1875) y las
legislaturas funcionaron en el mayor periodo de paz que co-
noció el estado, desde la república restaurada, legislaron de
manera profusa y se ocuparon principalmente del sistema
tributario, protegiendo fuertemente los intereses locales, lo-
grando así una autonomía y el pleno dominio de los comer-
ciantes y hacendados.

55
Los partidos políticos en Tabasco

Dueñas logró la fusión política de las dos fracciones radi-


cales y progresistas para el periodo 1876-1877, y el Partido
Unión Liberal triunfó con los candidatos de la concordia,
llevando al poder a Santiago Cruces Zentella como goberna-
dor y a Eusebio Castillo (Gobierno del Estado de Tabasco,
1994)5 como vicegobernador. Esta elección permitió el cam-
bio pacífico del poder y la estabilidad en la sociedad tabas-
queña en contraste con el ámbito nacional, donde Porfirio
Díaz había retornado a la época del militarismo y el uso de la
fuerza como medio de ascenso al poder.
Por ende, los caudillos militares continuaron siendo los lí-
deres de las fuerzas políticas y los “partidos” que comenzaban
a surgir entonces en torno a ellos no eran más que pequeños
grupos de notables locales.
Es importante hacer hincapié en la participación de los
cuadros militares en los procesos políticos de México. Con
la independencia política era lógico que la conducción de la
sociedad recayera en los que la habían consumado, puesto
que la burocracia colonial era en alta medida, peninsular. Los
militares poseían el prestigio de haber logrado la desvertebra-
ción de España y la fuerza que proporciona pertenecer a la
única entidad organizada compacta, a excepción de la iglesia.

5 Eusebio Castillo nació en San Juan Bautista, Tab., el 13 de diciembre de 1834; murió en la
finca Angustias, municipio de Pichucalco, Chis., el 7 de octubre de 1897. De oficio albañil, par-
ticipó en la lucha contra la intervención norteamericana y en la Guerra de Reforma. Militó en el
batallón Leales a Tabasco, y en abril de 1859 en la brigada de voluntarios del batallón Juárez que
marchó en defensa de Veracruz, amenazado por las fuerzas de Miramón. En 1860 estuvo a cargo
de la comandancia militar de Tabasco, y el 27 de febrero de 1864 contribuyó al triunfo sobre los
franceses. De 1868 a 1870 fue comandante del puerto de San Juan Bautista. Fue dos veces presi-
dente municipal de la capital del Estado en 1875; vicegobernador del 25 de diciembre de 1882 al 4
de enero de 1883; gobernador sustituto y constitucional del 1º. de enero de 1855 al 21 de marzo de
1887. Diccionario Enciclopédico de Tabasco, Tomo I, 1994, Gobierno del Estado de Tabasco, pág. 84.

56
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

El escenario político del XIX fue dominado por las fuer-


zas castrenses aun cuando algunos ilustrados compartieron
con ellas el ejercicio del poder público. Con la muerte de
Juárez, Sebastián Lerdo de Tejada ascendió a Presidente de la
República en su calidad de Presidente de la Suprema Corte y
Vicepresidente de la Nación.
Después de tres años, algunas de sus políticas llevaron el
surgimiento del descontento acumulado: primero por soste-
ner al gabinete juarista y luego entró en conflicto con José
Ma. Iglesias a la postre Vicepresidente, quien pretendía la
silla presidencial, sin contar con la sublevación del más no-
table de los generales republicanos: Porfirio Díaz, que ante la
ausencia de organizaciones políticas, el recurso de las armas
fue de nuevo la vía preferida, reclamando la “no-reelección”,
y derrocando al gobierno de Lerdo de Tejada. El 23 de no-
viembre de 1876 Porfirio Díaz entró a la capital de la repú-
blica, se autoerigió Presidente de la República y procedió al
nombramiento de gobernadores. En Tabasco fue nombrado
el General Juan V. Ramírez Calzada, quien entró en funcio-
nes el 24 de diciembre de 1876.
En el curso de las tres décadas y media en que Díaz gober-
nó a México (1876-1911) se propuso como proyecto edifi-
car un Estado fuerte y centralizado en el que la mayor parte
de los poderes se concentraran en manos del Ejecutivo, para
ello se propuso prescindir de los partidos. La constitución
de 1857 fue abandonada en muchos aspectos, y los partidos
dejaron de ser los centralizadores de la vida pública.
La primera preocupación de Díaz fue la de eliminar las
diferencias que existían en las elites dirigentes. Se dedicó en-

57
Los partidos políticos en Tabasco

tonces a renovar los cuadros del ejército, guardó una acti-


tud de tolerancia frente a la iglesia y nombró en los cargos
públicos de importancia a varios de sus opositores. Gracias
a esa política de “conciliación” logró ganarse el apoyo de la
mayor parte de los liberales y de muchos antiguos miembros
del “partido conservador”. Los lerdistas, iglesistas y juaristas
desaparecieron progresivamente y pronto no hubo más que
partidarios del general Díaz y de su gobierno.
En Tabasco en este contexto fue decisiva la labor del mo-
vimiento regenerador derivado de la inconformidad de los
militares, ante las elecciones. El grupo llamó a su movimien-
to Brigada Regeneradora, en adhesión a los planteamientos
del Plan de Tuxtepec. El gobierno de Ramírez Calzada duró
hasta el 31 de mayo de 1877 en que entregó el poder a Simón
Sarlat Nova, primer gobernador constitucional del porfiriato,
también se eligió nuevo vicegobernador y se inauguró nueva
legislatura.
En Tabasco en el periodo de 1877 a 1895 se destacó un
grupo político ligado a los comerciantes españoles, repre-
sentado por el progresista Simón Sarlat Nova (Soto, 1990)6
quien gobernó el estado del 1º. de junio de 1877 al 31 de
diciembre de 1880. Su triunfo obedece a la vieja tradición
política familiar, de conservadores. Su padre, el máximo re-
presentante del estado, sirvió a las filas de franco traidores

6 Simón Sarlat Nova nació en San Juan Bautista, Tab., el 13 de diciembre de 1839; murió en la
ciudad de México el 14 de abril de 1906. Médico cirujano graduado en la capital de la República,
gobernó Tabasco en cuatro ocasiones: como interino en la administración de Victorio V. Dueñas
(1873-1874) y por elección en tres periodos (1877-1880, 1887-1890 y 1891-1894). Realizó impor-
tantes obras materiales, entre ellas el Palacio de Gobierno, inaugurado el 13 de diciembre de 1894,
y creó el Instituto Juárez. Después se desempeñó como cónsul en Barcelona, España. Regresó a
México a mediados de 1900. Falleció siendo senador por Tabasco. Fue nombrado Benemérito del Es-
tado. Diccionario Enciclopédico de Tabasco Tomo II, 1994, Gobierno del Estado de Tabasco, pág.616.

58
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

de Maximiliano, y ahora con un presidente de la República


conservador era obvio. La elección de Sarlat desató de nuevo
la oposición partidista, se reflejó en la vieja lucha de los con-
servadores en contra de los liberales, con el coronel Eusebio
Castillo a la cabeza de los radicales de la Chontalpa.
Sarlat logró terminar su período sin mayores contratiem-
pos y eligió a su sucesor. Volvió a ejercer el poder de 1887 a
1894 cuando se acabó el reinado del Doctor Sarlat, dando
comienzo a la era del bandalismo que terminaría 16 años des-
pués en 1910, al estallar la Revolución Mexicana. A partir del
1º de enero de 1911 Don Policarpo Valenzuela (Gobierno
del Estado de Tabasco, 1994)7 fue el gobernador constitucio-
nal del estado y terminó toda una era en la vida pública del
estado de Tabasco.
El poder y la personalidad caudillista de quienes goberna-
ban, serían la gran historia de esos años, ya sea ocupando el
cargo de gobernador o ejerciendo su influencia durante casi
20 años con pocos intervalos en que el gobierno fue ocupado
por hombres ajenos a su liderazgo político. Como se observa
con estos hechos, el sistema político estaba basado en estruc-
turas de corte conservador, apoyado en caudillos regionales.
En México en el curso de los últimos decenios del siglo
XIX, se hicieron varias tentativas para reorganizar al “Parti-
do Liberal” como organización electoral permanente, pero
fracasaron en virtud de la falta de apoyo de parte de las au-

7 Policarpo Valenzuela, chontalpeño, comenzó a sobresalir como liberal juarista durante la inter-
vención francesa. Empresario maderero, hacendado y comerciante, él y su familia llegaron a controlar la
cuarta parte de la tierra de Tabasco, y eran dueños de los barcos Usumacinta, Tres Hermanos, Chontalpa,
Clara Ramos, Hidalgo y Lumijá, con los cuales manejaban el mayor volumen de transportación fluvial.
Fuente: Diccionario Enciclopédico de Tabasco, Tomo I, 1994, Gobierno del Estado de Tabasco, pág. 208.

59
Los partidos políticos en Tabasco

toridades. En vista de las elecciones de 1892, Díaz aceptó


la constitución de un nuevo “partido”, la “Unión Liberal”
que se encargó de presentar su candidatura a la Presidencia.
Sin ocultar que se identificaban con las tesis de la burguesía
europea del fin de siglo, los dirigentes de la nueva formación
adoptaron el positivismo, pretendiendo encontrarle funda-
mento “científico” al gobierno de Díaz, por ello le llamaron el
“Partido Científico”. Y fue la fuerza política más importante
de esos años; controlaban después de ganar las fraudulentas
elecciones la casi totalidad de las finanzas y de la enseñanza,
así como importantes inversiones en la agricultura y en la
industria.
Con Don Porfirio, cuando aumentaba el descontento en
las ciudades y en el campo, los aparatos de represión de la
dictadura ahogaban toda tentativa de disidencia, así los mo-
vimientos de huelga de los miembros de Cananea (1906) y
el de los obreros de la fábrica textil de Río Blanco (1906-
1907) fueron reprimidas de forma sangrienta. Es decir, para
el régimen porfirista se fue haciendo cada vez más evidente
que su supervivencia dependía de la lealtad de las estructu-
ras regionales de autoridad: Díaz y los gobernadores hicieron
depender al Estado Nacional del apoyo de los grupos oligár-
quicos y por eso dejaron muchas veces que éstos organizaran
los asuntos locales a su antojo.
Por otra parte la ausencia de una oposición política verte-
brada y sistemática, capaz de extenderse en toda la entidad,
no hacía más que reflejar los obstáculos de la geografía local
para iniciar una actividad política alternativa. En Tabasco, el
equilibrio político era excluyente de la participación de los

60
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

sectores amplios de la población, y la política se reducía a


un selecto grupo que se movilizaba en todos los niveles de la
organización pública.
Sin embargo, la tentativa de industrialización del país no
podía ocultar el fracaso de las políticas de Díaz en materia
agraria. La pequeña propiedad y las tierras comunales habían
sido asfixiadas por el sistema latifundista y la casi totalidad de
los campesinos se habían convertido en peones.
Los gobernadores porfirianos mantenían y reproducían
las características típicas del régimen; la orientación de los
asuntos públicos beneficiaba a la gran hacienda, a los comer-
ciantes extranjeros y a los cada vez más importantes latifun-
distas urbanos, como lo fue en este rubro el mismo Policarpo
Valenzuela en Tabasco.
Don Porfirio al someter a los otros poderes al Ejecutivo y
al hacer de los gobernadores de los estados sus representantes,
logró pacificar al país y pudo iniciar, apoyándose en los capi-
tales extranjeros, el desarrollo económico de México. De las
organizaciones que se opusieron al régimen de la dictadura
dos son de singular importancia: el Club liberal “Ponciano
Arriaga” fundado en San Luis Potosí por Camilo Arriaga, y el
Partido Liberal Mexicano (PLM) fundado por Ricardo Flores
Magón y Juan Sarabia (1905), y por consiguiente sufrieron
una fuerte represión.
Otros “partidos” que pedían una renovación sin por ello
impugnar abiertamente al régimen, comenzaron a organizar-
se. Entre estos oposicionistas se encuentra Francisco I. Ma-
dero, quien organizó el Partido Nacional Anti releccionista

61
Los partidos políticos en Tabasco

(PNAR; 1909), el cual formando coalición con el “Partido


Nacionalista Democrático” designó a Madero y a Francisco
Vázquez Gómez, como candidatos a la presidencia de la Re-
pública.
Por una parte un grupo de militares encabezados por el
general Bernardo Reyes, fundó el Partido Nacionalista De-
mocrático que se oponía a los “científicos”, y por otra un
grupo de intelectuales vinculados al régimen constituyente
el “Partido Democrático” opuesto también a los científicos.
Porfirio Díaz decidió reelegirse por séptima ocasión y
acentúo la represión contra los “partidos de oposición”. Ante
la división de las fuerzas que se reclamaban del porfirismo,
desautorizó al “Partido Nacional Porfirista” forzándolo a di-
solverse; desorganizó al “Partido Rayista” enviando a su jefe
al extranjero.
Estrechó vínculos con los dirigentes del “Partido Nacional
Reeleccionista” (1909) que presentó su candidatura a la Pre-
sidencia, acompañado de nuevo en la fórmula electoral por
Ramón Corral. Las elecciones presidenciales que fueron muy
poco democráticas, dieron oficialmente el triunfo a la formu-
la Díaz-Corral, en tanto que Francisco I. Madero permaneció
encarcelado en San Luis Potosí.
Sin embargo, logró fugarse de la cárcel para establecerse
en San Antonio Texas, en donde redactó el Plan de San Luis,
por el cual declaró nulas las elecciones y decidió no reconocer
ya al gobierno de Díaz e hizo un llamado a la insurrección.
Los levantamientos armados estallaron y el movimiento re-
volucionario se extendió rápidamente en el norte del país.

62
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

La Revolución Mexicana no fue más que una sucesión de


revueltas populares, la primera contra el régimen de Porfirio
Díaz y la oligarquía que gobernaba al país desde hacía más
de 30 años.
1.4 La época revolucionaria 1910-1920
En Tabasco, en víspera de la revolución, los primeros distur-
bios manifestaron una lucha por el poder y no un cambio en
sí de las estructuras sociales, económicas y políticas. La clase
media ascendió al poder y los campesinos y obreros no vieron
mejorado su nivel de vida, tal situación prevaleció hasta la
llegada de las ideas revolucionarias.
Pese a la crisis revolucionaria, es interesante observar que el
Congreso no desaparece, prevalece (ver cuadro de las Legis-
laturas). Con Manuel Mestre se hace evidente que el poder
Ejecutivo requería combinar la fuerza de las armas con la
necesidad de normar y crear un orden jurídico-político. Las
acciones de facto son insuficientes, si antes no se garantizaba
la incorporación de intereses, vía el proceso legislativo.
En los inicios del cambio (1911-1912) las fuerzas armadas
tabasqueñas no son capaces de crear un relevo de poder, pero
si bien las circunstancias no les son favorables, se debe a que
el Dr. Manuel Mestre Ghigliazza mantiene todavía la transi-
ción. De hecho, al tiempo que corre de abril de 1911 a 1914,
con la caída del gobernador huertista Alberto Yarza, podría
definirse como la búsqueda para resolver las contradicciones
que surgen entre los diversos sectores de la clase dominante.
Por lo tanto, la alternativa de Mestre es la de un régimen que
representa la forma más pacífica, pero a la vez la más incom-

63
Los partidos políticos en Tabasco

pleta, en cuanto alcances revolucionarios, y es también parte


de un entorno político de carácter urbano que en el fondo se
contrapone a toda situación violenta.
El primer brote de rebeldía surgió en Huimanguillo con
la fundación en 1902 del Club Liberal Antireelecionista Mel-
chor Ocampo, que fue rápidamente clausurado por el jefe
político de la localidad, sin embargo Fernando Aguirre Colo-
rado, presidente del club y Cornelio Colorado continuaron
operando en la clandestinidad, conforme a las instrucciones
de Ricardo Flores Magón, organizador de los opositores de
Díaz desde la ciudad de México.
La revolución se inicia en lugares aislados como Huiman-
guillo, pese a que era la entrada al sureste, sin un programa
amplio definido, pero se demuestra que en ese momento los
cambios tienden a ser más políticos que de carácter econó-
mico. Por eso la dictadura de Victoriano Huerta, (1913) los
toma por sorpresa y mientras Mestre es desplazado, al mismo
tiempo da a los revolucionarios elementos para mantenerse
activos e incluso radicalizar sus posiciones, mientras que las
clases superiores comienzan también a alejarse de la influen-
cia política (Cedeño, 1990).
Cuando Victoriano Huerta usurpa el poder asesinando a
Madero y a su vicepresidente José María Pino Suárez el 13 de
abril de 1913, obligó al gobernador Mestre a entregar el go-
bierno al general Agustín Valdés el 28 de abril de 1913. Con
esta acción, y pese a las limitaciones de las brigadas revolucio-
narias, el huertismo las impelió a impulsar su consolidación y
además adquirir fuerza propia.

64
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

De esta manera Pedro C. Colorado y Ernesto Aguirre


siguieron operando en la sabana del oeste (Huimanguillo);
Sola Torres e Isidro Cortés se adueñarían de Cárdenas y parte
de Comalcalco, y Carlos Greene (Gobierno del Estado de
Tabasco, 1994)8 en prácticamente toda la Chontalpa.
En el aspecto nacional, Huerta lanza un Decreto auto
invistiéndose como Presidente Constitucional e inmediata-
mente declaró disuelta la XXVI Legislatura Federal y la Cá-
mara de Senadores, afectando a los diputados por Tabasco
Félix F. Palavicini, (Soto, 1990),9 Tirso Inurreta y Marco E.
Becerra.
El Congreso Constituyente, instalado en Querétaro y for-
mado por muchos militares y políticos que habían participa-

8 Carlos Greene nació en Cárdenas, Tab., en 1890 y murió en 1924. Fue general de brigada en
el Ejército Constitucionalista. Desempeñó la gubernatura del Estado de mayo a agosto de 1919; de
octubre de este año a febrero siguiente, de abril a junio y de agosto a octubre de 1920. Tuvo que
abandonar el poder porque su escolta penetró al recinto del Congreso y mató a los diputados Manuel
Lezcano y Alberto Nicolás Cámara, e hirió a otros dos, uno de los cuales, de apellido Escoffi, falleció
días después. Debido a estos hechos, el Senado de la República declaró desaparecidos los poderes de
la entidad. Greene participó más tarde en el movimiento delahuertista y perdió la vida en combate.
Fuente: Diccionario Enciclopédico de Tabasco Tomo I, 1994, Gobierno del Estado de Tabasco, pág. 283.
9 Félix Fulgencio Palavicini nació en Teapa, Tab., en 1881; murió en la ciudad de México en
1952. Ingeniero topógrafo (1901) por el Instituto Juárez de Villahermosa, se dedicó al periodismo
y la política. En Tabasco fundó El Precursor y en 1903 pasó a la capital de la República. En 1906
enseñó trabajos manuales en la Escuela Anexa a la Normal; en 1907 viajó a Europa, becado por
Justo Sierra; y en 1908 editó El Partido Republicano. En 1909 fue uno de los organizadores del
Centro Antireeleccionista; acompañó a Francisco I. Madero en su primera gira de propaganda y
a su regreso se hizo cargo de la dirección de El antirreleccionista, en sustitución de José Vascon-
celos. Fue diputado a la XXVI Legislatura y estuvo preso del 10 de octubre de 1913 a fines de
abril de 1914. Al triunfo del constitucionalismo, fue nombrado ministro de Instrucción Pública,
cargo que desempeñó del 25 de agosto de 1914 al 26 de septiembre de 1916. En ese lapso unifi-
có la enseñanza del castellano, convocó a concursos para la redacción de libros de texto e impulsó
la enseñanza rural. El 1º. de octubre de 1916 fundó el periódico El Universal. Fue diputado al
Congreso Constituyente (1916-1917), embajador extraordinario ante los gobiernos de Inglaterra,
Francia, Bélgica, Italia y España (1920), y Argentina (1938-1942). Es autor de Los diputados, diez
civiles notables de nuestra historia, Pro-Patria, La enseñanza técnica, Problemas de educación, La patria
por la escuela, Palabras esotéricas, Grandes de México, Lo que vi, La estética de la tragedia mexica-
na, Mi vida revolucionaria, e Historia de la Constitución de 1917. Escribió también las novelas Los
irredentos (1923) y ¡Castigo! (1926) y dirigió la obra México, Historia de su evolución constructiva.
Diccionario Enciclopédico de Tabasco Tomo II, 1994, Gobierno del Estado de Tabasco, pág. 478.

65
Los partidos políticos en Tabasco

do en la lucha armada, empezó sus sesiones el 1o. de diciem-


bre de 1916. Se dividió en dos grupos, el de los renovadores
y el de los radicales.
Los primeros que apoyaban a Carranza, propusieron al-
gunas reformas que satisfarían paulatinamente los intereses
del pueblo y los trabajadores, en tanto que los radicales, par-
tidarios de las ideas de Flores Magón y de los anarquistas
de la Casa del Obrero Mundial, abogaban por cambios más
profundos, por lo que fueron llamados “los jacobinos”. Al
cabo de varios meses de acalorados debates, se promulgó la
Constitución el 5 de febrero de 1917. En este periodo se va
dando la gradual separación del triunvirato sonorense y las
alianzas que se aglutinan en torno a Álvaro Obregón y que se
harán visibles en 1920 con el Plan de Agua Prieta y la muerte
de Carranza.
En el aspecto regional en Tabasco, los grupos armados van
desapareciendo más no las situaciones de violencia política.
La efervescencia política se ubica en los siguientes procesos:
• El tránsito de la XXVI Legislatura huertista a la denomi-
nada “renovada”.
• La promulgación de la Constitución Política local en
1919.
• La fundación del Partido Radical Tabasqueño.
• La gestación del aparato político garridista.
Desde el año de 1914 comenzaron a perfilarse en Tabas-
co nuevas formas de organización en pequeños grupos que
sin llegar a ser partidos políticos, sí tenían una importante

66
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

actividad. La divulgación de las ideas se dio por medio de


publicaciones independientes o de alguna agrupación; des-
tacan Antonio Hernández Ferrer y Francisco J. Santamaría,
particularmente el periódico local “El Demócrata” de Rafael
Martínez de Escobar, fundado en 1915.
Por otra parte, los registros históricos señalan a la XXVI
Legislatura, pese a su discontinuidad, como la diputación de
la transición y de las grandes reformas, pues en muchos sen-
tidos articuló la vida política en Tabasco.
La permanencia de ocho años de la XXVI Legislatura da
cuenta (1913-1921) que el proceso se orientó teniendo como
eje la figura del gobernador, y que también fue sometida por
las presiones de los grupos revolucionarios. El hecho de que
los diputados, durante el primer decenio del siglo, fueran
varias veces reelectos, obedece a la contradictoria mezcla en
que se vincula la experiencia parlamentaria, con la necesidad
de mantener un tipo de dirigencia política para orientar los
cambios desde el poder.
Entre los acuerdos de los revolucionarios, está la fundación
del Partido Radical Tabasqueño (PRT) el 7 de noviembre de
1917 encabezado por Carlos Greene. De aquí en adelante el
PRT será una pieza fundamental de la vida política local. Es
clave en el conflicto entre Greene y Domínguez que ocupa
todo el periodo hasta 1919; posteriormente también será de-
finitivo en la pugna entre escobaristas y el mismo Greene y
finalmente en la contienda electoral en la que se enfrentaron
Tomás Garrido Canabal y José D. Ramírez Garrido por la
gubernatura en 1922-1923.

67
Los partidos políticos en Tabasco

El 6 de julio de 1918 se lanzó la convocatoria para ele-


gir titular del Poder Ejecutivo. Los candidatos fueron: Luis
Felipe Domínguez y Carlos Greene. Para contender con el
Radical Tabasqueño se formó otro partido denominado Par-
tido Liberal Constitucionalista; los primeros se identificaron
como los “rojos” aglutinados en torno de Greene y los her-
manos Martínez de Escobar, mientras los segundos denomi-
nados como los “azules”, y eran abanderados por Luis Felipe
Domínguez.
Los “rojos” iniciaron la publicación de El Radical, con
sus activos articulistas: José D. Ramírez Garrido, Santa-
maría, Manuel Lezcano, Pedro Casanova Casao, Aureliano
Colorado, Porfirio Jiménez Calleja, Alberto Nicolás Cáma-
ra y Santiago Ruiz Sobredo. A su vez los “azules” editaban
el periódico El Liberal, contando con el apoyo de Armando
Correa Bastar, Rogelio Ruiz y Rojas, Conrado Cadena, Ma-
nuel y Ramón Marenco, Miguel Orrico de los Llanos (Soto,
1990)10, Lorenzo Calzada, Marcos Torres Collado y Fernan-
do Suárez, entre otros.
El arribo del constitucionalismo en Tabasco dejó por sal-
do el tránsito de cuatro gobernadores provisionales antes de
la elección y triunfo de Greene como primer gobernador
constitucional. De esta manera ocuparon el cargo: Luis Feli-
pe Domínguez, Joaquín Ruiz, Luis M. Fernández Hermosi-
llo, Heriberto Jara y Carlos A. Vidal.

10 Miguel Orrico de los Llanos nació en Villahermosa el 18 de septiembre de 1894. Hizo sus prime-
ros estudios en Macuspana. Se graduó en el Colegio Militar. Durante la Revolución combatió bajo las
órdenes de Venustiano Carranza, de cuyo gabinete fue miembro. Fue comandante de la 7ª. Zona Mili-
tar en Hermosillo y comandante de Regimiento en Mexicali. Obtuvo el grado de general brigadier en
1940. Gobernó Tabasco de marzo de 1955 a diciembre de 1958, en sustitución de Manuel Bartlett Bau-
tista. Diccionario Enciclopédico de Tabasco Tomo II, 1994, Gobierno del Estado de Tabasco, pág. 474.

68
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Las elecciones pusieron de manifiesto los alcances y la


importancia de las alianzas internas y su vinculación con el
poder federal, pues siendo Rafael Martínez de Escobar un
influyente miembro del grupo de Carranza, y además pro-
minente elemento, junto con Ramírez Garrido, en el Par-
tido Radical, la solución, provisionalmente debía inclinarse
a favor de Greene. Asimismo, se ven las posibilidades de la
contrarrevolución: de los hacendados y comerciantes españo-
les, que ven en Domínguez una carta de apoyo. Sin contar la
rebelión felicista en el Usumacinta y un clima de violencia en
más de las tres cuartas partes de los municipios de la entidad.

Cuadro No. 3
Partidos Políticos de Tabasco (1850-1931)

Fuente: elaborado con base en información de la Historia del Congreso del Estado de
Tabasco, Tomos I-III, Gobierno del Estado, 1990

69
Los partidos políticos en Tabasco

1.5 Formación de los partidos políticos en Tabasco


Por lo anterior, se observa que las fuerzas políticas actuaron
disparadamente y por ende resultaron ser parte del saldo re-
volucionario. Pese a que el ejército constitucionalista aparen-
temente controlaba la situación, ante los villistas y zapatistas,
se requería de organismos no militares para contrarrestar el
efecto inmediato de la revolución que trajo consigo la crea-
ción de muchos ejércitos y el surgimiento del caudillismo.
El proceso de formación de los partidos políticos se ini-
ció una vez que los conflictos tendieron a terminarse, obede-
ciendo a los imperativos estatales. A partir de 1911 se inicia
aunque de manera incipiente, la regulación de los partidos
políticos. En un principio sólo se pide que se constituya una
asamblea de cien ciudadanos que tenga un programa político
y de gobierno, se le solicita nombrar representantes en los
colegios electorales municipales; en 1916 sólo se les exige que
no lleven denominación con connotación religiosa y que se
forme para favorecer una determinada raza o creencia. Por
ende es hacia fines de 1916 que se da el inicio de la vida par-
tidaria (Haddad, 1996).
Un partido político es un grupo organizado que aspira
a tomar el poder con el apoyo de los ciudadanos señala la
teoría clásica de la representación. Por ende los partidos polí-
ticos podrían dar salida a las pugnas de manera política bajo
mecanismos de conciliación. Esto permitiría sentar el poder
presidencial y dar una imagen de transformación y unidad
nacional, permitiendo la transmisión del poder de manera
pacífica y finalmente eran una opción para los grupos que no
habían participado por o durante la guerra civil. La necesidad

70
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

de postular candidatos a Diputados al Congreso de Queré-


taro, promovió la creación de partidos políticos y dar así una
imagen democrática al mundo.
Los intelectuales, los profesionistas, comerciantes y miem-
bros del ejército de extracción media se esforzaron en darle
un tono liberal moderado a sus planteamientos. En este pe-
riodo, el parlamentarismo como fórmula de participación,
podía ser más efectiva que el choque armado contra el po-
der. El sistema de partidos fue el instrumento en la pugna
ínter constitucionalista que trasformó la arena partidista en
un laboratorio donde era posible ensayar, por acierto y error,
fórmulas políticas de negociación.
En agosto de 1922 se fundó en Villahermosa el Partido
Liberal Progresista, cuyo presidente era Manuel Ferrer Vega,
ex militar felicista amnistiado a la caída de Carranza. Bajo el
manto protector que le daba el nombre de liberal y progresis-
ta, en realidad reagrupó dominguistas, bandalistas, huertistas
y felicistas. El 5 de julio de 1922, el Partido Liberal Consti-
tucionalista Tabasqueño, filial del menguado y para entonces
antiobregonista PLC, lanzaba la candidatura a la gubernatura
del general José D. Ramírez Garrido, quien arribó a Tabasco
el 8 de septiembre y se apoyó en el grupo guinda, que era el
sector escindido por el PRT, mientras tanto Tomás Garrido
sería lanzado por el Partido Cooperatista Nacional y secun-
dado en la entidad por el PRT.
La sucesión presidencial desde 1920 hasta 1928 trajo
como consecuencia levantamientos y asonadas militares, en
los dos primeros cambios presidenciales en 1920 y 1924, se
aglutinaron las cabezas dispersas del carrancismo, pero tam-

71
Los partidos políticos en Tabasco

bién ahí se manifestaron líderes que habían dado un giro


radical y positivo a los postulados de 1910, como Carrillo
Puerto y Salvador Alvarado. Tabasco no fue ajeno a este pro-
ceso, con la presencia de Carlos Greene. El movimiento de
apoyo a De la Huerta implicó para la entidad militarmente
una zona estratégica, puesto que el Golfo de México se con-
virtió en la entrada de armamento para la rebelión.
La radicalización norteña dio lugar a la formación de un
polo muy cohesionado, con un poderoso bloque formado
por Garrido Canabal en Tabasco, Adalberto Tejada en Ve-
racruz, Felipe Carrillo Puerto en Yucatán y Ramón Felipe
Torres en Campeche. Concluida la rebelión, Tomás Garrido
renunció a la gubernatura el 4 de abril de 1926 para aceptar
la candidatura del Partido Socialista Radical Tabasqueño para
Senador por Tabasco. En este breve período, Tomás Garrido
sentó las bases de la estabilidad de su régimen, reorganizó las
finanzas locales y estableció las bases de su proyecto socioe-
conómico y estableció ante todo la estructura política que
garantizaría su influencia en el estado.
El ascenso de Álvaro Obregón a la presidencia de México
en diciembre de 1920, señaló el fin de una era de rápidas y
violentas transformaciones políticas y sociales. El caudillis-
mo se prolongó hasta 1928, en que fue asesinado después de
ser reelecto Obregón, posteriormente en la forma de jefatura
máxima hasta 1935 en que Cárdenas asumió el poder.
1.6 Conclusiones
México surgió como país con la promulgación de la Inde-
pendencia, pero para ello fue necesario un periodo forma-

72
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

tivo de las bases para la unificación nacional, la cual ha sido


ubicada hasta finales del siglo XIX. Existieron factores que
obstruyeron dicha integración: las amenazas externas e inter-
nas que alteraron el control y la unidad territorial, así como
la existencia de una sociedad dividida en sectores con iden-
tidades culturales propias y diferenciadas, y por último, la
imposibilidad de erigir una autoridad suprema debido a la
supervivencia de la corporación eclesiástica y militar y al for-
talecimiento de los intereses privados.
La historia política de Tabasco, como parte de la historia
nacional, refleja el devenir histórico de la misma. Sin embar-
go, en las fases más trascendentales de la historia patria, la
praxis política del pueblo tabasqueño presenta peculiarida-
des o radicalismos, adelantándose en algunos momentos a
los grandes acontecimientos nacionales como en el caso del
triunfo liberal y la expulsión del invasor francés, en contras-
te con la lucha revolucionaria de 1910, en la cual el pueblo
tabasqueño no participó en la medida que lo hicieron otras
regiones del país, a pesar de contar con revolucionarios de
la talla de Ignacio Gutiérrez o Luis Felipe Domínguez que
interpretaron el sentir del pueblo ante la opresión de la dic-
tadura porfirista.
El ascenso al poder de una voluntad política que fuera
capaz de iniciar el proceso de unificación nacional ocurrió
en los periodos conocidos como República restaurada (1867-
1876) y el Porfiriato (1877-1910). De tal forma que al reor-
ganizar la estructura económica y política se logra el dominio
sobre el territorio y la incorporación de un número impor-
tante de sus habitantes dentro del proyecto nacional.

73
Los partidos políticos en Tabasco

Las limitantes de la unidad estatal son una herencia colo-


nial. Los tres siglos de dominio no produjeron la integración
y la cohesión nacionales, por el contrario, preservaron las
fuerzas desintegradas y en pugna, a pesar del control impues-
to por la corona (De Gortari, 1982).
En México como en Tabasco, los partidos en esta épo-
ca eran sólo denominaciones históricas (como los partidos
conservador y liberal) o grandes movimientos de masas sin
organicidad ni tradiciones partidarias como el Partido Anti
reeleccionista de Madero, tan sólo membretes o grupillos sin
un seguimiento ciudadano que dependían de la voluntad,
para aparecer o para desaparecer, de un caudillo o un político
influyente (Córdova, 1994).

74
Capítulo 2

De las ligas de resistencia al


Partido Revolucionario Insti-
tucional

En el presente capítulo se continúa abordando la historia po-


lítica de Tabasco a fin de conocer la evolución de las orga-
nizaciones políticas, por ende, es importante hablar del Ga-
rridismo puesto que constituye parte de los experimentos o
ensayos en la reestructuración del poder político, hasta llegar
a la fundación del partido oficial. En relación a Tomás Garri-
do Canabal interesa rescatar las organizaciones llamadas Li-
gas de Resistencia que unidas formaron al Partido Socialista
Radical Tabasqueño y al Partido Feminista Revolucionario
de Tabasco, ambas organizaciones políticas constituyeron
experiencias regionales del sureste inéditas en el resto de la
geografía nacional en esa época.
Se consideran brevemente las gestiones de varios goberna-
dores que como líderes políticos marcaron la historia de la
entidad. La fuerza local manifestada por caudillos políticos y
militares tales como Tomás Garrido Canabal en Tabasco, del
general Saturnino en San Luis Potosí y del coronel Adalberto
Tejeda en Veracruz significaron en su momento –década de
los años veinte y treinta– alternativas de poder que rivaliza-

75
Los partidos políticos en Tabasco

ron con el ejercido por personal político que controlaba los


órganos federales de gobierno al triunfo de la Revolución de
1910. La visión moderna de la sociedad utilizada como mo-
tor ideológico del desarrollo empresarial de la entidad, cons-
tituyó la principal fuente de poder de Tomás Garrido como
líder regional.
En esa época de la historia del país, la lucha por la destruc-
ción del Estado porfirista originaba la dispersión del poder y
de los focos de autonomía local. Al triunfo de los rebeldes y
con la hegemonía del “grupo sonorense”, poco a poco y con
base en las alianzas políticas establecidas con los jefes mili-
tares diseminados por todo el territorio nacional, el aparato
inicia su consolidación.
Es decir, puesto que el proceso de afirmación del Estado
depende de la unión de fuerzas políticas, el poder de los cau-
dillos regionales alcanza su plenitud (Corrales, 1982).
A diferencia de los partidos caudillistas el Partido Socia-
lista Radical Tabasqueño, a través de las Ligas de Resistencia,
expresaron las demandas de las clases explotadas y su influen-
cia regional y nacional contribuyó a frenar el viraje derechista
de los gobiernos posrevolucionarios.
El antecedente de las Ligas de Resistencia proviene del
partido regional de carácter campesino, el Partido Socialista
de Yucatán (PSY) más tarde llamado Partido Socialista del
Sureste, quien se convirtió rápidamente en la organización
local más fuerte del país.
Así, bajo la dirección de Felipe Carrillo Puerto, ese par-
tido amplió sus bases con obreros, profesores y pequeños

76
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

comerciantes. La unidad de la base eran los subcomités lla-


mados Ligas de Resistencia y gracias a su acción se logró una
gran influencia en la implantación de otros partidos como el
Radical Tabasqueño en las costas del Golfo de México y en
el sureste. A principios de 1921 era ya una verdadera agrupa-
ción de masas (Garrido, 1995).
2.1 Las Ligas de Resistencia y el Congreso
Influenciado por las ideas de Felipe Carrillo Puerto y Salva-
dor Alvarado, Garrido organizó a las ligas tomando ejemplo
de las organizadas en Yucatán.
En principio, organizó a los trabajadores según la rama de su
actividad, de modo que existieron tantas ligas como activida-
des había en el estado; así, por ejemplo, existía la liga de artes
gráficas, de alijadores, abastecedores de cerdo, res, aguadores,
albañiles, cocineros, obreros industriales, lancheros y balse-
ros, meseros, peluqueros, astilleros y mucho otros más de una
extensa lista.
El gobierno local con Tomás Garrido radicalizó la revolu-
ción a diferencia de otras regiones del país, primero con un
jacobismo antirreligioso y segundo en la atención a la edu-
cación y en las campañas antialcohólicas; tales procesos con
base en una activa participación popular (Torres, 1990).
Bajo la preocupación de crear canales de movilidad polí-
tica, no sólo de actores individuales, sino de representantes
de las formas corporativas colectivas, se gestaron nacientes
organizaciones de trabajadores que respondían a una mística
nacional-socialista, incluso su Escudo Socialista Tabasqueño,
presentaba el lema “Tierra y Libertad”.

77
Los partidos políticos en Tabasco

En la formación de asociaciones con base en el cooperati-


vismo, las Ligas de Resistencia, actuaban en forma paralela a
los avances en la organización obrera, pero sin la intromisión
de la influyente Confederación Regional Obrera Mexicana,
la asociación cupular de los trabajadores a nivel nacional y
comandado por Luis N. Morones. La disciplina a la que fue-
ron sometidos los obreros y los campesinos era tan estricta
que llegó en ocasiones a decirse que se trataba de grupos mi-
litarizados con tendencias similares a las de los grupos fas-
cistas organizados por Hitler y Mussolini (Chávez, 1987), al
respecto Manuel R. Mora señala:
La liga de resistencia que en el lapso garridista tuvo el
control de los trabajadores de Tabasco, no fue propia-
mente un organismo sindical, sino por el contrario, una
institución burocrática establecida por el poder público
para servirse a sí mismo. La liga de resistencia nunca
recurrió a las armas clásicas del movimiento sindical (los
obreros de Tabasco regían sus relaciones con las empre-
sas a través de un Código Obrero del Estado y no por
la Ley Federal del Trabajo) y sus dirigentes eran desig-
nados por el gobierno, como se estilaba bajo el sistema
corporativo de Mussolini (Mora, 1947).

Las Ligas de Resistencia son la forma que se adaptó a las


características de producción agrícola, que agrupaba a los tra-
bajadores del plátano roatán y del cacao. Estas uniones que
en los años veinte no llegaban a ser sindicatos, pues tenían
una orientación mutualista, con una estructura de control
partidista, se fusionaban con la Liga Central de Resistencia.
La Liga Central de Resistencia contaba con la influencia
de un hombre fuerte, típico desde el porfiriato hasta el tiem-

78
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

po de las instituciones del maximato callista. Las Ligas de


cada una de las municipalidades estaban adheridas a la Liga
Central de Resistencia radicada en la capital. La Liga Central
de Resistencia se fundó en septiembre de 1924. Sin embargo,
ya en octubre de 1922, Homero Margalli y Quintín Arauz
Carrillo habían fundado los dos primeros sindicatos: el de los
cargadores del muelle y el de los balseros que transportaban
los trozos de madera desde Tenosique por el Usumacinta.
El sistema de partidos local con el PRT a la cabeza, había
logrado encauzar las divisiones y preferencias electorales, de
ahí que la función de la Liga Central de Resistencia compati-
bilizara con el aparato político que daba cuenta de la estabili-
dad y del control político.
Al paso del tiempo se creó el Partido Socialista Radical
Tabasqueño, se formó con la unión de todas las Ligas de Re-
sistencia, y su cuerpo directivo estaba integrado por los mis-
mos dirigentes de la Liga Central de Resistencia. Al respecto
Martínez Assad señala:
Estaba conformada por una estructura organizativa bas-
tante sólida que agrupaba en forma piramidal los po-
deres estatales. Estaba compuesta de un presidente, un
vicepresidente, un tesorero, un secretario, un agente de
reclamaciones, un agente de trabajo. El presidente es el
que ocupa el puesto de gobernador del estado o está se-
ñalado a ocuparlo. Los demás miembros de la directiva
son los diputados o altos empleados del gobierno. Le
sigue la liga de resistencia de las cabeceras, integrada de
la misma forma por un presidente, puesto que ocupa el
diputado de distrito; un tesorero, un secretario, e igual-
mente un agente de reclamaciones, cargos ocupados por
los presidentes municipales y otros empleados. Está en-

79
Los partidos políticos en Tabasco

seguida la liga de resistencia de las ciudades, villas, pue-


blos y rancherías, con una presidencia que ocupa el pre-
sidente municipal, de nuevo un tesorero, un secretario,
un agente de reclamaciones y otro de trabajo. La base
está integrada por la liga de resistencia de los gremios,
que repite la misma jerarquía” (Martínez Assad, 1979).

Esta doble representación obliga a sus dirigentes a man-


tenerse en constante comunicación con sus representados y
aliados y los dirige tanto en el ejercicio de los derechos legales
cuanto en la lucha democrática.
Es singular observar que la dirección de la Liga Central
residía bajo el dominio del gobernador en turno de tal ma-
nera que fungía como presidente real y del partido político.
En 1926 se otorgó personalidad jurídica a la Liga Central
de Resistencia, para que ejerciera sus derechos relativos a su
carácter sindical.
Las otras formas de organización típicas del proceso ga-
rridista con gran peso político en la entidad eran la Unión
de Productores de Plátano y la Unión de Productores de Ga-
nado, surgidas en los primeros meses de 1930, así como la
organización de profesores en las Ligas.
La tendencia de lo que se denomina el garridismo impli-
caba una relación vertical que permitía el contacto del go-
bierno con la población. Tomás Garrido era un intermediario
de las demandas sociales y económicas de la población en la
entidad con el gobierno del Centro.
Para las Ligas eran necesarios sistemas de movilización
adecuados y los espacios políticos para mantener el control
institucional, puesto que ocupaban un lugar importante en

80
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

la negociación tripartita con el poder estatal y las uniones de


productores.
Por lo tanto, es en la Cámara de Diputados y en las presi-
dencias municipales donde vendría a reflejarse este peso polí-
tico. Por ende, el control y autoridad de Garrido se mostraba
en la movilidad política de la directiva de la Liga Central de
Resistencia a cargos de diputados en las Legislaturas XXVII
a XXIX.
El órgano de difusión del Partido Socialista Radical Tabas-
queño era el periódico Redención fundado en 1924. Tabasco
era una entidad donde se vivía una mezcla de contradictorias
fuerzas, con las relaciones entre caudillos y movilización po-
pular y la estabilidad gubernamental.
Entre 1927-1928 la entidad recibió los impactos de los
acontecimientos nacionales próximos, en primer lugar, la
postulación presidencial y asesinato de Obregón y posterior-
mente la rebelión de Arnulfo R. Gómez y Francisco Serrano.
Y de nueva cuenta se violentaban las relaciones políticas en
especial las del centro con las regiones.
Pero ciertamente en las pugnas con los políticos naciona-
les había un elemento de contraste muy poderoso: las ligas de
resistencia y el Congreso.
Esta situación obligó al candidato a gobernador Ausencio
Conrado Cruz a desplegar una buena campaña en todos los
municipios de la entidad, brindando atención a la actividad
social, por ello es acompañado con un representante estatal
que desarrolla una inevitable y necesaria influencia.

81
Los partidos políticos en Tabasco

La fórmula garridista permitió neutralizar y encauzar las


presiones que, en otras circunstancias, colocaran en difícil
situación al gobernador, gracias a un entramado social no-
vedoso y disciplinado y el apoyo condicionado del centro.
La estructura garridista permitía un control político, Cruz
como gobernador y Garrido como Senador y presidente de
la Liga Central, garantizaba el manejo de la política local en
el centro y también la permanente supervisión de los avances
en la entidad.
Garrido mantenía una fluida comunicación con políticos
como Álvaro Obregón, Plutarco E. Calles, Abelardo Rodrí-
guez, Manuel Pérez Treviño, Aarón Sáenz y Carlos Riva Pa-
lacio. La muerte del general Obregón, candidato electo a la
presidencia de la República, el 17 de julio de 1928, originó
una crisis política nacional.
Tomás Garrido era un seguidor de Obregón, inclusi-
ve después de su muerte se unió al grupo de simpatizantes
del relevo de Obregón: Aarón Sáenz, y así lo harían saber
también los delegados de Tabasco, que habrían de asistir a la
Convención Nacional de la que surgiría el Partido Nacional
Revolucionario, el 4 de marzo de 1929 en la ciudad de Que-
rétaro.
Sin embargo, Garrido Canabal finalmente apoyó a Pas-
cual Ortiz Rubio a fin de asegurar su futuro y el de su organi-
zación ante la influencia del posible Jefe máximo, el general
Calles. Garantizar la posibilidad de un tránsito pacífico de
gobernador en la entidad y la reelección del mismo Garrido
Canabal.

82
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

2.1.1 El gobierno de Tomás Garrido (1931-1934)


El 7 de mayo de 1930 se efectuaron las elecciones para elegir
gobernador para el periodo del 1º de enero de 1931 al 31
de diciembre de 1934; resultó ganador Tomás Garrido, por
cierto, sin contrincante alguno. El segundo periodo adminis-
trativo de Garrido tiene la característica de reflejar su acción
política, económica y social consolidada en un proceso resu-
mido en los siguientes puntos:
• Campaña desfanatizadora
• Campaña antialcohólica
• Campaña nacionalista
• Campaña cooperativista
• Campaña pro-higiene personal y comunal.
• Campaña educativa
En 1931, ante la crisis mundial, el lema de campaña del
Partido Socialista Radical señalaba: “No hable usted de cri-
sis, trabaje para vivir y cultive la tierra que es su felicidad”
(Redención mayo de 1931). Con la estabilidad política y la
reestructuración de la economía local se vislumbró la con-
gruencia regional, el encuentro político con la modernidad,
sin embargo, pese a la era institucional programada por Ca-
lles, en Tabasco no se podía renunciar del todo a la eficaz y
personal forma de control y de proyección política, de ahí su
relativa autonomía y tolerancia en relación al centro.
El éxito de las campañas desfanatizadoras y antialcohóli-
cas fue logrado gracias a la juventud tabasqueña organizada

83
Los partidos políticos en Tabasco

por Garrido, táctica utilizada por el fascismo en Europa, pero


sobre todo la juventud representaba una poderosa palanca de
enfrentamiento ante cualquier intento de oposición, quienes
ejercían una impresionante capacidad de organización y mo-
vilización.
Con esta fuerza se combinaba la presión política que Ga-
rrido podría ejercer y la neutralización del adversario y de
hacer operativa la proyección ideológica de su gobierno.
El cuerpo de elite auspiciado en esa organización juvenil
era el de los Camisas Rojas, cuyo objetivo era mantener la
agitación en el estado en torno a la cuestión educativa. Al
igual que otros organismos como el Bloque de Jóvenes Re-
volucionarios cuyo principal líder fue Carlos A. Madrazo*
recibían instrucción militar y se crearon filiales en cada mu-
nicipio y por supuesto estaban ligadas al Partido Socialista
Radical Tabasqueño.
Encabezada por Carlos Alberto Madrazo y Antonio
Ocampo, el movimiento de los Camisas Rojas, cuya impor-
tancia trascendió las fronteras estatales y fue motivo de las
más acres críticas contra el garridismo, surgió formalmente
en 1932 a instancias de una iniciativa estudiantil (aunque era
más bien juvenil, pues también había campesinos y obreros).
El proceso de formación de los Camisas Rojas llevaba años
gestándose, desde 1921, después de la asonada delahuertista,
comenzaron a formarse pequeños grupos juveniles que, en
el primer momento, adoptaron el nombre de Voluntarios de
Tabasco. Aquellos jóvenes se organizaron como un pequeño
ejército privado a las órdenes de Garrido, quien los utilizó en

84
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

principio para destruir los remanentes de la rebelión de De


la Huerta y para que se cumplieran los primeros decretos en
contra de la Iglesia y el alcoholismo.
En 1929, los Voluntarios de Tabasco fueron reemplaza-
dos por un nuevo grupo llamado Vanguardia Revolucionaria
cuyo objetivo inicial fue apoyar la candidatura de Aarón Sáe-
nz a la presidencia de la República, cuando asesinado Obre-
gón, había que elegir a un presidente sustituto.
Ese mismo año, el grupo se fusionó a otra organización
estudiantil encabezada por Napoleón Pedrero Fócil y se
adoptó el nombre de Club Juvenil Revolucionario. En 1931,
la designación fue nuevamente cambiada por la de Bloque
Juvenil Revolucionario, pero la realidad es que no se trataba
de un solo bloque, sino que comenzaron a proliferar por toda
la entidad grupos juveniles con tendencias muy similares.
Fue por ello que, en 1932, gracias a una iniciativa de Car-
los Madrazo, la designación del grupo fue sustituida por la
que sería definitiva: Bloque Juvenil Revolucionario.
La finalidad era unificar y cohesionar a los distintos gru-
pos que hasta entonces se hallaban diseminados: “Los prin-
cipales componentes fueron estudiantes del Instituto Juárez,
aunque contó también con burócratas, obreros y empleados
de establecimientos comerciales.
Alfonso Bates Caparroso fue quizás el principal organiza-
dor; sobrino de Alcides Caparroso, diputado al Congreso de
la Unión y primo de Amado Caparroso, ayudante distingui-
do por Garrido” (Martínez Assad, 1979).

85
Los partidos políticos en Tabasco

Como gobernador a Tomás Garrido le correspondió la


etapa de canalizar los intereses políticos, organizar la fuer-
za sindical de los trabajadores y asegurar el inicio de la era
del “oro verde” que partía del puerto de Frontera hacia los
mercados extranjeros. El incipiente desarrollo de las comu-
nicaciones en Tabasco no permitía que se transportaran las
mercancías de otra manera, contrasta con otras regiones del
país que desde 1910 contaban con una red ferroviaria, como
son los casos del norte y del centro de México, así como tam-
bién Veracruz, el Istmo y Yucatán tenían una red ferroviaria,
Tabasco contaba con menos de 20 kilómetros de vía férrea
estrecha, de San Juan Bautista a Carriza, de Cárdenas a Río
Grijalva, no concluidas.
Los grandes ejes de los transportes y comunicaciones eran
los ríos, donde se concentraba la población, y las brechas pre-
colombinas, de las cuales una fue habilitada como camino
real entre San Cristóbal de las Casas y San Juan Bautista.
El estado de Tabasco despachaba sus productos por mar
desde Frontera. Navegación fluvial y carros de mulas fueron
los únicos medios de transporte tierra adentro hasta la cons-
trucción del ferrocarril.
El gobierno comenzó los trabajos en 1935, en los momen-
tos en que la gran fiebre platanera proporciona una visión op-
timista del futuro desarrollo de las plantaciones; el ferrocarril
es concebido como un medio para acelerar la transformación
de la economía de las plantaciones de Tabasco; el transporte
de cacao, unos cuantos miles de toneladas por año, podía
conformarse con los carros muleros.

86
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Pero la vía férrea, terminada penosamente en 1950, lejos


de los grandes centros de poblamiento (va a lo largo de las
terrazas pleistocénicas, para evitar las ciénagas y abaratar así
las grandes obras de ingeniería sobre los ríos descendentes,
abiertos en meandros), llega demasiado tarde, cuando el auge
del plátano había finalizado. Esta vía de comunicación quedó
reducida al transporte de maíz y maderas preciosas, provocó
cierto desmonte y la aparición de pequeños poblados como
Teapa y Tenosique.
En 1948 se termina la construcción de carreteras que
unen los centros de población septentrional a sus estaciones;
la Cárdenas-Estación Chontalpa y la de Villahermosa-Teapa,
dando un revés inesperado a la vía férrea. Las plantaciones de
cacao y caña de azúcar, así como los ingenios, se establecieron
a lo largo de estas carreteras (Revel-Mouroz, 1980).
En el orden de las actividades gubernativas, Garrido recu-
rrió a las facultades extraordinarias en cuestiones de finanzas
públicas. En 1933 creó el Consejo Local de Economía. Para
hacerlo funcionar se aplicaron varios impuestos con el fin de
canalizar recursos al fomento de la agricultura.
Proliferaron cooperativas y asociaciones de productores
de 1930 a 1934 en aras de paliar los graves efectos de la re-
cesión de 1929 sobre la economía doméstica del campesino,
involucrado en el cultivo del plátano Roatán.
Por ende, las cooperativas de consumo y las uniones de
productores llegaron a constituir las piedras angulares de un
nuevo andamiaje social. En la creación del Consejo de Eco-
nomía se estableció que además de ser presidido por el go-

87
Los partidos políticos en Tabasco

bernador, se integraría con los presidentes municipales, con


miembros de la Banca y el Comercio y por la mesa directiva
de la Liga Central de Resistencia del Partido Socialista Radi-
cal Tabasqueño.
2.1.2 Partido Feminista Revolucionario de Tabasco
Las características de la Revolución en Tabasco, principal-
mente en la chontalpa, donde adquirió más fuerza, consis-
tieron en escaramuzas de poca trascendencia, ocupaban las
poblaciones más importantes que luego abandonaban, sin
permanecer largos periodos en campamentos, por lo que no
fueron necesarias las mujeres en las acciones armadas o en
estos campamentos.
Por ende, no se dio el caso de las adelitas fieles a sus juanes.
Las mujeres tabasqueñas fueron incorporadas abruptamente
en la vida política durante el régimen garridista, cuando no
solo se les concedió el derecho de votar a nivel local, sino
también ejercieron un rol importante en la aplicación del
proyecto educativo racionalista (Torres, 2001).
El proyecto reformista de Garrido requería la integración
de todos los sectores sociales, controlados por los jerarcas del
poder, por ello, se dio la irrupción de las mujeres en la po-
lítica como promotoras y difusoras de las medidas radicales
emprendidas por el régimen.
La mayoría de las mujeres eran de la clase media, maestras,
quienes participaron activamente en las ligas antialcohólicas,
de resistencia, maestras ateas y en algunos casos, artesanas y
campesinas para ponderar medidas como el cooperativismo
y la productividad.

88
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

En cuanto a la participación política de la mujer, el decre-


to del 6 de marzo de 1925 emitido por el gobernador Tomás
Garrido Canabal, concedió el derecho de votar y ser votada
en los comicios electorales para elegir ayuntamientos, aunque
con la salvedad de no ocupar el cargo de Primer Regidor. Los
requisitos eran tener cumplidos 21 años, suficiente ilustra-
ción y probadas tendencias socialistas.1
Este decreto considerado progresista, las excluía en comi-
cios para diputados federales y gobernador; esta medida bus-
caba consolidar el proyecto político de Garrido en las dife-
rentes regiones de la entidad donde las maestras eran ideales
por su estrecho contacto con las comunidades.
El acta del cabildo del 26 de mayo de 1926 registra a las
primeras regidoras: las maestras Celerina O. de González,
Reynalda Hernández y Francisca Rodríguez, elegidas en co-
micios efectuados en 1925 en el municipio del Centro donde
se asienta la capital Villahermosa, en la cual se anota también
la asistencia del cuerpo edilicio del que ellas formaron parte.
Esta concesión a las mujeres es citada como ejemplo, ante
la Alianza de Mujeres del Mundo, cuya matriz estaba en Es-
tados Unidos, y de la cual México formaba parte, al igual que
39 naciones más, y cuyas delegadas solicitan gestiones ante
las cámaras parlamentarias de las naciones que no consideren
derechos políticos a las mujeres para que se les concedan.
El presidente Calles respondió a esta demanda enviando por
medio de la Secretaría de Gobernación la referida iniciativa a
la Cámara de Diputados, donde manifestó que:

1 Decreto 9 del gobernador Tomás Garrido. Periódico Oficial del Estado de Tabasco 2ª. Época,
Núm. 153, de 14 de marzo de 1925, p. 1

89
Los partidos políticos en Tabasco

En Tabasco, ya la mujer ha tomado participación varias


veces, como en el ayuntamiento de la capital, Villaher-
mosa, en el que las mujeres no lo han hecho mal (Re-
dención, 1926).

Demostrando audacia en el activismo social y político,


algunas mujeres crean el Club Feminista “Carmen Serdán”,
encabezado por Ana Santamaría; el programa plantea una se-
rie de propuestas para mejorar la condición de las mujeres
en el ámbito educativo, familiar y laboral, sin agregar nada
nuevo en sus derechos políticos, sin embargo, se adecua a los
objetivos del régimen garridista (Santamaría, 1926).
Las activistas vinculadas al poder político realizaron una
estrategia para institucionalizar su participación y lograr una
mayor injerencia política que incidiera en sus demandas de
género, creando en 1931 el Partido Feminista Revoluciona-
rio de Tabasco (PFRT), cuya presidenta, la maestra María
Luisa Chacón era la esposa de Tomás Garrido Canabal (Mar-
tínez Assad, 1979).
El programa del Partido Feminista Revolucionario de Ta-
basco consideraba reivindicaciones económico sociales, abor-
daba la cuestión política en los artículos 7 y 8 que señala:
Establecer un grupo consultivo para tratar los derechos
de la mujer; irlas preparando para llegar a un acuerdo
político sobre derechos políticos. Sin embargo, no se
especifican qué tipo de derechos políticos. En 1932 la
estrategia incluyente de Garrido les permitió participar
en las elecciones de diputados.

Los logros de la mujer tabasqueña, algunos de los cuales se


adelantaron al ámbito nacional, fueron coyunturales; consti-

90
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

tuyeron estrategias para asegurar la adhesión de las mujeres


a las que consideraban de gran importancia para sus fines
electorales y para la consolidación del proyecto político ga-
rridista, por ende la concesión del sufragio a la mujer en Ta-
basco no significó una incorporación masiva de las mujeres a
la vida política.
En los años posteriores al garridismo no participaron en
forma significativa en los movimientos en demanda de sufra-
gio que protagonizaron otras mujeres en otros estados de la
república.
2.1.3 Tomás Garrido en el gabinete de Lázaro
Cárdenas
En Tabasco, el 13 de mayo de 1934 se efectuaron elecciones
para Gobernador en las que participó como único candida-
to del Partido Socialista Radical Tabasqueño Manuel Lastra
Ortiz, y fue electo para el periodo de 1º de enero de 1935 al
31 de diciembre de 1938, aunque sólo gobernó hasta 1935.
Garrido al concluir su gestión fue invitado por Lázaro
Cárdenas al gabinete presidencial, nombrándolo Secretario
de Agricultura y Ganadería, puesto que desempeñó del 1º.
de diciembre de 1934 al 1º de julio de 1935. En los primeros
meses de su gestión, los desplantes de fuerza y el traslado de
los camisas rojas a la ciudad de México empezaron a recibir
críticas de la prensa nacional, así como enfatizar la rivalidad
con algunos miembros del gabinete.
Por su parte, Cárdenas efectuó intensos cambios entre los
gobernadores, los jefes de zonas militares y especialmente de
los hombres fuertes o caudillos heredados de la revolución,

91
Los partidos políticos en Tabasco

con la idea de desactivar la oposición del callismo. En esta


etapa eliminatoria se incluyó a Tabasco, puesto que en la ma-
rejada anticlerical que deliberadamente había provocado Ca-
lles, al presionar para que fuera expulsado del país el obispo
Pascual Díaz, Garrido manifestó su apoyo.
El hecho de que las Camisas Rojas en México repetían
acciones anticlericales a las que estaban acostumbrados en
Tabasco, parecía dividir las lealtades, esta actitud de Garrido
en el enfrentamiento entre Calles y Cárdenas concluyó con
la expulsión de Calles del país. Cuando se produjo el rom-
pimiento entre Cárdenas y Plutarco Elías Calles, el llamado
hombre del sureste renunció a su cargo y al poco tiempo se
radicó en Costa Rica, hasta 1940 en que regresó al país.
En Tabasco, Rodulfo Brito Foucher2 encabezó la expe-
dición punitiva que llegó a Villahermosa el 14 de julio de
1935, suscitando un enfrentamiento armado con saldo de
muertos y heridos, y provocó la desaparición de los poderes
locales que presidía Manuel Lastra Ortiz. La separación de
Garrido del gabinete presidencial y la posterior crisis entre

2 Rodulfo Brito Foucher nació en Villahermosa, Tab., en 1899; murió en la ciudad de México
en 1970. Muy joven se trasladó a la capital de la República para realizar sus estudios de abogado
en la Escuela Nacional de Jurisprudencia. Participó en política durante el periodo revolucionario.
Partidario de Adolfo de la Huerta y acérrimo enemigo de Tomás Garrido Canabal, fue un entusiasta
de la rebelión que encabezaba el primero tratando de impedir la llegada de Plutarco Elías Calles a la
Presidencia. Durante la rebelión delahuertista fue gobernador de Campeche y subsecretario de Go-
bernación, pero al fracaso del movimiento se desterró a los Estados Unidos. Ese tiempo lo aprovechó
para realizar estudios de postgrado en las universidades de Nueva York y de Columbia. Regresó a
México en 1927 y ocupó la cátedra de derecho en la Universidad Nacional, la cual impartió hasta
1935. Ese mismo año encabezó una expedición punitiva contra el gobierno que influenciaba Tomás
Garrido Canabal; el resultado fue un saldo de varios muertos, entre ellos su hermano Manuel. De
nuevo salió al extranjero. Sus destinos fueron Estados Unidos y Alemania. En la Universidad de
Berlín estudió filosofía e historia política. Retornó al país durante la presidencia de Manuel Ávila
Camacho, y en 1942 sucedió en la rectoría de la Universidad Nacional Autónoma de México a Mario
de la Cueva. Un movimiento estudiantil lo obligó a renunciar. Ha sido, hasta ahora, el único rector
tabasqueño que ha tenido la UNAM. Diccionario Enciclopédico de Tabasco Tomo I, 1994, Gobierno
del Estado de Tabasco, pág.56-57.

92
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

el centro y la región, determinó la separación de poderes en


Tabasco. La ecuación Cárdenas-Calles-Garrido denota un
primer momento en que Garrido resulta imprescindible en
el escenario nacional, no sólo por su relación con Calles, sino
por el impacto de las transformaciones socioeconómicas de
Tabasco. La revolución inauguró o reforzó la importancia de
la sucesión presidencial en los destinos de los estados, que
en Tabasco se evidenció con la presencia del hombre fuer-
te o caudillo y de forma contradictoria chocó con la nueva
geopolítica nacional en la que el presidencialismo empezó a
vertebrarse.
En Tabasco, ante las elecciones para renovar la XXXIV
Legislatura en julio de 1935, la coyuntura permitió la intro-
misión del presidente para limpiar a los callistas, y dar opor-
tunidad a los viejos oponentes políticos que deseaban abrirse
espacios en la estructura política tabasqueña.
A raíz del conflicto entre garridistas encabezados por Au-
sencio C. Cruz contra los estudiantes expedicionarios coman-
dados por Brito Foucher, que degeneró en una balacera en el
centro de la capital de Tabasco, el Presidente de la República
mandó una iniciativa a la XXXVI Legislatura del Congreso
de la Unión para consultar sobre la decisión de declarar des-
aparecidos los poderes constitucionales.
La decisión presidencial contra la soberanía de Tabasco
era un hecho que el tiempo político de Tomás Garrido y de
las Ligas de Resistencia concluía y que Cárdenas no iba a per-
mitir un aislamiento local, por ello propuso una terna para
elegir de inmediato un gobernador provisional, por supuesto
de su confianza. El Congreso designó a Áureo L. Calles, y

93
Los partidos políticos en Tabasco

gobernó Tabasco de septiembre de 1935 a marzo de 1936.


El gobernador intentó con poco éxito desactivar la enorme
influencia de Garrido Canabal (ver cuadro No. 4).
Cuadro No. 4
Gobernadores (1923-193)

Fuente: Diccionario Enciclopédico de Tabasco Tomo I, 1994, Gobierno del Estado de Ta-
basco, pp. 550-551

94
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

En esta época de consolidación del Estado, surgen y se


afianzan las instituciones políticas del país, lográndose la
gradual sustitución del caudillismo personalista por el poder
institucional así como la política de unidad nacional a partir
de la integración del Partido de la Revolución Mexicana en
1938.
El antecedente de ese proyecto es la creación del Partido
Nacional Revolucionario en 1929, con la incorporación de
las diferentes clases sociales al partido oficial en un régimen
corporativo, así como la integración de los comités regionales
del PRM en los Estados de la Federación.
La organización del partido aparecía como un hecho ex-
traño, señala Arnaldo Córdova (1994) en una sociedad que
jamás había tenido un verdadero régimen de partidos y muy
pocos sabían lo que era un partido político.
2.2 Las elecciones de 1936: Víctor Fernández Ma-
nero
El estado de Tabasco protagonizó durante estos años un ra-
dicalismo político como secuela del autoritarismo de Tomás
Garrido, lo que se manifiesta en la formación de bloques po-
líticos como el frente rojo, el Partido Reconstructor Tabas-
queño, polarizados en garridistas y antigarridistas que viven
una intensa lucha por el poder.
La actividad política presenta el surgimiento de varias fac-
ciones personalistas que se manifiestan en las campañas elec-
torales para la elección de gobernador, como las de 1936 en
que contienden: Nicolás Aguilera, propuesto por los britistas

95
Los partidos políticos en Tabasco

y Víctor Fernández Manero3 señalado como garridista, o la


de 1938 en que se enfrentan Francisco Trujillo Gurría, Ma-
nuel Bartlett4, el General Ernesto Aguirre Colorado y Ma-
nuel Jáidar, a través de sus respectivos comités. Las pugnas
entre britistas y garridistas originaron conflictos sangrientos
en el estado, lo que obligó a someterse a la fuerza militar re-
presentada por el General Miguel Henríquez Guzmán.
Con una cámara local inexistente y poderes municipales
que sufren la renuncia de los presidentes municipales y se
convierten en Comités Administrativos, no fue posible mejo-
rar la situación. Se logró con la intervención del poder federal
que las Ligas de Resistencia se convirtieran en sindicatos, a
fin de liquidar las bases del régimen garridista, del garridismo
sin Garrido, para terminar con el cacicazgo político.
Con esta medida, el grupo britista ante las elecciones para
la renovación de la cámara y del Poder Ejecutivo local en
1936, había movilizado a obreros y campesinos, agrupados
en sindicatos y comités agrarios, creando una base propicia

3 Víctor Fernández Manero nació en Villahermosa, Tab., el 17 de noviembre de 1898; murió


en la misma ciudad en 1976. Médico por la UNAM, fue agregado cultural de la embajada en París
(1931) y diputado federal (1934). Postulado por el Partido Nacional Revolucionario, resultó electo
gobernador de Tabasco para el periodo del 1º. de abril de 1936 al 31 de diciembre de 1938. En ese
lapso, sofocó un movimiento sinarquista encabezado por el michoacano Salvador Abascal que trataba
de realizar “la reconquista espiritual de Tabasco”. Fernández Manero fundó el Hospital Juan Graham.
Cassasús. Diccionario Enciclopédico de Tabasco, Tomo I, 1994, Gobierno del Estado de Tabasco, pág.
245.
4 Bartlett Bautista, Manuel. Nació en Tenosique, Tab., en 1894; murió en la ciudad de México en
1963. Estudió preparatoria en el Instituto Juárez de la capital del estado. Al conocerse el asesinato de
Madero y Pino Suárez (febrero de 1913) encabezó una protesta contra el usurpador Victoriano Huer-
ta, por lo cual fue expulsado. Se recibió de abogado en 1920 y durante algún tiempo ejerció el ma-
gisterio. Fue síndico del Ayuntamiento de Villahermosa y presidente del Comité de Salud Pública,
abogado consultor del Ayuntamiento de la ciudad de México, defensor de oficio en el fuero militar,
diputado al Congreso Local, Jefe del Departamento Consultivo de la Secretaría de Hacienda, juez de
distrito en Veracruz, Toluca, Puebla y el Distrito Federal (1929-1940), ministro de la Suprema Corte
de Justicia, en cuyo carácter negó el amparo a las compañías petroleras cuyos bienes se expropiaron
en 1948, y gobernador de Tabasco del 1º. de enero de 1953 al 23 de marzo de 1955. Diccionario
Enciclopédico de Tabasco Tomo I, 1994, Gobierno del Estado de Tabasco, pág. 49.

96
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

para enfrentarse a los garridistas integrados a su vez en coo-


perativas y ligas de resistencia, bajo su influencia se llevan a
cabo las primeras huelgas laborales en Tabasco desde que Ga-
rrido tomó el poder. El grupo britista denominado: Comité
Libertador, cambió su nombre por el Comité Pro-Recons-
trucción de Tabasco.
El Partido Nacional Revolucionario designó como can-
didato a la gubernatura de Tabasco al Dr. Víctor Fernández
Manero, como consecuencia el Frente Rojo apoyó a esta can-
didatura. El Partido Reconstructor Tabasqueño integrado
por los Partidos Socialista Mexicano y Unión Revoluciona-
ria Tabasqueña, postuló a Nicolás Aguilera. El Frente Rojo
adherido al PNR estaba formado por garridistas ex Camisas
Rojas y la agrupación denominada Centro Libertador Pro
Tabasco. Al candidato del Partido Reconstructor lo apoya-
ron las agrupaciones femeniles: Unión Femenil Revolucio-
naria, Frente Único de la Mujer, Unión Femenil Tabasqueña,
Unión Femenil Carmen Serdán.
Sin embargo, sólo se registró la candidatura de Fernán-
dez Manero. Ambos partidos se acusaron de hechos violentos
que incluyen la aprehensión de periodistas; no obstante, fue
evidente el apoyo de que gozó Fernández Manero por parte
de las autoridades y el reconocimiento de su triunfo electoral.
Fernández Manero gobernó del 1º. de abril de 1936 al 31
de diciembre de 1938, su arribo al poder se consideró una
imposición del presidente Cárdenas.
Ocurrieron serios enfrentamientos entre los grupos lo-
cales y virulentos brotes aislados de oposición sinarquista y
campesina en la región de la Chontalpa y el puerto de Fron-

97
Los partidos políticos en Tabasco

tera, cuna del sindicalismo tabasqueño y de La Liga Central


de Resistencia. Durante este periodo se enriquece la actividad
legislativa con la expedición no sólo de decretos, reformas o
adiciones de leyes, sino también con la creación del Código
Civil del Estado. Son dignas de mencionarse las reformas y
adiciones del art. 5º de la Constitución Política local que es-
tablece la educación socialista en el estado y del artículo 72
en que se prolonga el periodo para gobernador a 4 años; y
designa como fecha para entrar en funciones el 1º. de enero
(Haddad, 1996).
2.3 Las elecciones de 1938: Francisco Trujillo
Gurría
Las elecciones para gobernador en 1938 manifiestan de nue-
va cuenta la desarticulación en la que se encontraba la en-
tidad, sin capacidad para que un grupo se imponga a otro.
Participan cuatro candidatos para lograr la nominación del
Partido de la Revolución Mexicana: el general Ernesto Agui-
rre Colorado, Manuel Bartlett Bautista, el Senador Francisco
Trujillo Gurría5 y el comerciante Manuel Jáidar.
En esta contienda política, es evidente la participación
de las ligas agrarias y sindicatos, que se inician en las lides
políticas al desintegrarse las Ligas de Resistencia, luchas que

5 Francisco Trujillo Gurría nació en San Juan Bautista (hoy Villahermosa), Tab., en 1898; murió
en la ciudad de México en 1948. Estudió en las escuelas Porfirio Díaz y Romero Rubio, y la prepara-
toria y la carrera de abogado en el Instituto Juárez. Fue estudiante e impresor a la vez, director y editor
de los periódicos El estudiante, Vida nueva y Equilibrio social; regidor suplente del Ayuntamiento
de Centro (1922), subsecretario de Gobierno (1923), nombrado por el gobernador Tomás Garrido
Canabal; diputado al Congreso de la Unión (1928-1930), agregado comercial de la embajada de
México en Francia (1930), senador de la República (1936-1938), gobernador de Tabasco (enero de
1939 a diciembre de 1942), durante cuya gestión construyó escuelas de mampostería, repartió tierras
y formó ejidos; y secretario de Trabajo y Previsión Social (1943-1946). Diccionario Enciclopédico de
Tabasco, Tomo II, 1994, Gobierno del Estado de Tabasco, pág. 676.

98
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

no sólo representan sus intereses económicos, sino su rea-


firmación como grupos de poder. Al escindirse la fuerza del
garridismo se enfrentan las agrupaciones entre sí surgiendo
nuevos bloques políticos que buscan el apoyo de las clases
populares.
Durante la campaña electoral, se fueron definiendo los
campos de lucha. El General Aguirre Colorado logró un gran
arraigo entre los campesinos de las ligas agrarias y sindica-
tos campesinos del estado, así como la unión de ejidatarios y
productores de plátano, convirtiéndose en el rival más fuerte
para Francisco Trujillo, que a su vez fue apoyado por el go-
bierno local e inclusive por el gobierno federal.
Ambos candidatos, Ernesto Aguirre y Francisco Trujillo
se declararon triunfadores, pero fue reconocido oficialmente
Francisco Trujillo como candidato del PRM a la candidatu-
ra a gobernador. Al efectuarse las elecciones constitucionales
el Frente Rojo Radical Tabasqueño se integró con el comité
Pro-Aguirre Colorado y solicitaron el registro de la candida-
tura independiente de Aguirre.
Sin embargo, pese a los reclamos de fraude electoral, se
declaró triunfador a Francisco Trujillo Gurría, por supuesto
con el apoyo de Cárdenas. Trujillo Gurría gobernó del 1º. de
enero de 1938 al 31 de diciembre de 1942.
En 1938, con la candidatura de Manuel Ávila Camacho
por el PRM a la Presidencia de la República, la gubernatura
de Tabasco fue representada de 1939 a 1942 por Francisco
Trujillo Gurría y a partir de 1943 por Noé de la Flor Casa-
nova. Durante este periodo la actividad política tabasqueña

99
Los partidos políticos en Tabasco

presenta una tendencia hacia la conciliación, buscan el apoyo


de las organizaciones obreras y campesinas, a las cuales tratan
de manipular para sus fines políticos, apelando la consigna de
la unidad nacional.
En 1941 se modificó tres veces la Ley Electoral: en mayo,
para aumentar de nueve a 17 los distritos electorales, esta
reforma obedeció a los conflictos regionales entre los muni-
cipios que integraban los distritos electorales quienes rivali-
zaban por imponer a sus representantes en las diputaciones
locales; en septiembre, para que la elección de gobernador
se realizara el primer domingo de julio en años terminados
en cero o en cifra par; y en diciembre, para renovar cada tres
años la Legislatura.
2.4 Las elecciones a gobernador de 1943 y diputa-
dos en 1944
En las elecciones para Gobernador en 1942 resultó ganador
Noé de la Flor Casanova6 para el periodo del 1º. de enero de
1943 al 31 de diciembre de 1946; los resultados electorales
registran la siguiente votación:
• Lic. Noé de la Flor Casanova, PRM 36,432 votos.
• Lic. Aníbal Ocaña Payans, Centro Demócrata Tabasque-
ño, 143 votos.

6 Noé de la Flor Casanova nació en Teapa, Tab., el 29 de mayo de 1902; murió en la ciudad de
México el 10 de agosto de 1987. Realizó sus estudios profesionales en la UNAM, de la que obtuvo
el título de licenciado en derecho el 21 de marzo de 1930, con la tesis Delincuentes políticos y po-
líticos delincuentes, trabajo que amplió y publicó en 1940 con el título Ensayo de una tematología
iberoamericana. Dedicado a la política, fue gobernador de Tabasco de 1943 a 1946, último periodo
constitucional de cuatro años. Diccionario Enciclopédico de Tabasco, Tomo I, 1994, Gobierno del
Estado de Tabasco, pág. 252.

100
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

• Manuel Jáidar, Partido Renovador, 152 votos.


• Lic. Joaquín Urrutia Rabelo 1 voto.
En el gobierno de Noé de la Flor Casanova, (quien con-
taba con la simpatía del Secretario de Gobernación y del
Presidente de la República) en materia política se reformó la
Constitución del Estado con el objeto de reducir la represen-
tación popular, cambiándose el número de diputados a siete
y fijándose una nueva distribución territorial.
En otras iniciativas de ley, se amplió a tres el período de
gobierno de los alcaldes municipales y a seis de gobernador.
En 1944 se convocó a elecciones para la renovación de la
cámara local, originando la efervescencia política en la que
salieron a flote las rencillas entre los grupos antagónicos, re-
sentidos por los conflictos que culminaron con el desafuero
de los diputados trujillistas.
Esta contienda electoral constituyó la última escisión po-
lítica a nivel local y el último enfrentamiento serio al partido
oficial, al registrarse el Centro Demócrata Tabasqueño para
contender contra el Partido de la Revolución Mexicana.
Este partido filial del Partido Demócrata Mexicano fue
registrado en la Secretaría General de Gobierno el 19 de ju-
lio de 1944, a solicitud de Ulises González Bernglio, Calixto
Merino Bastar y Armando Palavicini. El Centro Demócrata
aglutinó a varios de los integrantes del grupo trujillista.
El partido postuló candidatos a diputados locales para los
17 distritos y organizó subcomités en los diferentes muni-
cipios, los que fueron hostilizados por algunas autoridades

101
Los partidos políticos en Tabasco

municipales que no le reconocieron. Gregorio Merino Bastar


era el Presidente del Comité Directivo del Centro Demócrata
Tabasqueño.
Este partido alcanzó cierta popularidad en algunas regio-
nes, sin embargo no logró la fuerza deseada por sus integran-
tes, tornando la dinámica política de la entidad a sus cauces
normales al integrarse la nueva legislatura, que estaba inte-
grada por los diputados propuestos por el PRM.
En materia constitucional, se reforman varios artículos.
En la reforma al artículo 72 se señala que el gobernador en-
trará en funciones el día 1º de enero, durará en su cargo seis
años y por ningún motivo volverá a ocupar ese puesto.
Esta reforma busca una concordancia entre los periodos
estatales y presidenciales, mismo que se logrará hasta el go-
bierno de Miguel Alemán, adecuándose el ejercicio del poder
de la entidad con los planes sexenales a nivel federal.
Por otra parte, durante la fase de consolidación del Estado
capitalista mexicano, Tabasco refleja las características del sis-
tema mexicano en su conjunto, asimilando la política estatal
del nuevo partido, el Partido Revolucionario Institucional.7
Así los viejos antagonismos entre los grupos políticos de
la entidad fueron desapareciendo, llegando a la conciliación
que garantizó la sucesión para gobernador en forma pacífica.

7 El 18 de enero de 1946 en la Convención Nacional del PRM se acordó declarar desaparecido


el Partido de la Revolución Mexicana, para crear el Partido Revolucionario Institucional, así como
también sus estatutos, principios y programa, adoptándose el lema “Democracia y Justicia social”, en
vez de “Por una democracia para los trabajadores”, Cfr. en Haddad Chávez Pedro H. op. cit., p.214.

102
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

2.5 Elecciones para gobernador 1946: Francisco


Javier Santa María
Tabasco se integra a la política de la federación, no sólo en
la elección cupular de los gobernadores por el presidente en
turno, sino sobre todo, en los conflictos, como se demuestra
en el gobierno de Bartlett Bautista, cuando se vio obligado a
separarse del poder por el distanciamiento con el presidente
Ruiz Cortines a quien no le agradaba. Esta situación se repite
por la protección que recibió del presidente Ávila Camacho
el elegido para lograr la nominación por el PRI a candidato
a Gobernador en 1946: Francisco Javier Santamaría, quien
fue apoyado por obreros y campesinos y por el Sindicato de
Trabajadores de la Educación.
Se anotaron otros aspirantes: Gonzalo Martínez de Es-
cobar que contaba con el sostén de la Unión Cooperativa
de Ganaderos, y por grupos estudiantiles y empleados de la
Secretaría del Trabajo en Tabasco, así como algunos órganos
informativos; Francisco Jiménez Paoli, representante de los
productores de plátano; José López de Llergo, rico ganadero
del estado, y Porfirio Jiménez Calleja, que se presentó como
candidato independiente.
Santamaría estaba poco identificado con los grupos po-
líticos de la entidad, puesto que había permanecido varios
años fuera del estado, alejado de la política y dedicado a la
investigación lexicográfica.
Esta característica, más que ser una debilidad fue una
fortaleza, dado que le permitió gobernar al margen de las
diferencias de éstos y porque además inició su gobierno en el

103
Los partidos políticos en Tabasco

momento coyuntural en que se aplica el llamado “Pacto de


Unidad Nacional”, impulsado por el presidente Miguel Ale-
mán, realizando su gestión de gobierno sin contratiempos.
Santamaría ocupó el poder del 1º de enero de 1947 al 31
de diciembre de 1952. Durante su gobierno, se fortaleció la
relación de la entidad con la federación, se estrecharon los
vínculos con los Ayuntamientos, permitiendo las condicio-
nes políticas para el desarrollo de diversas obras materiales.
En los últimos años de la administración alemanista, que
coinciden con los años de gobierno de Santamaría, el am-
biente político tabasqueño refleja la tendencia anticomunista
que caracteriza al programa alemanista en el contexto de la
posguerra, surgiendo entre algunos grupos locales, posiciones
o agrupaciones en que patentizaron esta tendencia muy con-
veniente para abanderar sus causas particulares.
El Comité Político Orientador Tabasqueño, integrado
por Fernando Alipi Oropeza como presidente, el Prof. Cor-
nelio Colorado, Antonio Viana Berenguer y otros, afirmaban
que el objetivo de esta agrupación era fundar un partido que
interviniera en los actos electorales y combatir al comunismo
soviético y al funesto “garridismo comunista”.
Pretendía, además, la participación directa del pueblo ta-
basqueño en forma de plebiscito en la designación de los can-
didatos para diputados propietarios y suplentes en la próxima
contienda electoral. Durante las elecciones para diputados de
1947, esta agrupación acusó al gobernador Santamaría de
querer imponer a sus favoritos y de apoyar a los garrido co-
munistas.

104
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

En 1952, al acercarse la sucesión presidencial y la de go-


bernador, las diferencias que parecían olvidadas se reanuda-
ron. Por una parte, el general Henríquez Guzmán lanzó su
candidatura a presidente de la república, quien tenía cierto
arraigo en la entidad por su participación en la historia po-
lítica del estado en décadas anteriores, y por otra de manera
local, la integración de la coalición de partidos de Tabasco
por elementos de la Confederación de Trabajadores de Mé-
xico y el Frente Popular Tabasqueño que según ellos mismos
manifestaron el descuido del PRI. Sin embargo, no se tra-
taba de alguna oposición al PRI, sino más bien diferencias
personales propias del ambiente político nacional, pues esta
coalición se adhirió a la fórmula priísta de Adolfo Ruiz Cor-
tines y Manuel Bartlett Bautista, repudiando la candidatura
de Henríquez Guzmán.
2.6 Los conflictos en el gobierno de Manuel Bart-
lett Bautista (1953-1955)
La sucesión de Francisco J. Santamaría fue una de las más
pacíficas de la entidad tabasqueña, la cual parecía el inicio
de un régimen de estabilidad, sin embargo, los sucesos que
pondrán fin al gobierno de Bartlett Bautista no concuerdan
con esta idea.
Manuel Bartlett ocupó el Poder Ejecutivo de Tabasco el
31 de diciembre de 1953, y se separó del cargo el 23 de mar-
zo de 1955; logró la nominación del PRI por la gestión a su
favor del presidente en turno Miguel Alemán, sin contar en
cambio con la intervención del entonces candidato del PRI
a la presidencia de la República, Adolfo Ruiz Cortines. Por
otra parte, desde 1953 se registraron varios problemas:

105
Los partidos políticos en Tabasco

• Las promesas incumplidas de campaña, en relación al


inicio de las obras federales, señalando como único cul-
pable a Bartlett.
• El descontento de las clases populares, por el aumento
de los impuestos, a los artículos de primera necesidad y
ante el anuncio del aumento del precio de la carne, por la
devaluación del peso en 1954.
• El proceso de selección de presidentes municipales. En
Comalcalco surgió la formación del Partido Político Mu-
nicipal Independiente, integrado por Antonio Ruiz Pe-
ralta, Presidente; Elías Falcón Sastré, secretario y Manuel
Granel Sastré, Tesorero.
• La imposición del Profesor de Dibujo José Natividad Ca-
rrera Tosca como director del Instituto Juárez, el cual no
contaba con título universitario ni gozaba de la simpatía
de la intelectualidad tabasqueña.
• El descontento estudiantil llegó a su máxima expresión
ante el aumento de 5 centavos a los pasajes del transporte
público urbano y estalló una huelga en protesta por el
alza.
• La situación se agravó cuando el Comité de Defensa de
los Derechos Cívicos del Pueblo, encabezado por José
Manuel Hidalgo del Valle, director del periódico “Noti-
cias” y otros ciudadanos, en mitin celebrado en el parque
Juárez, pidieron la desaparición de poderes.
• El gobierno federal envió tropas federales para controlar
la situación ante la ausencia del gobernador, 15 presi-
dentes municipales, algunos diputados locales, el procu-
rador de justicia y el secretario general de gobierno Juan

106
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Morales Torres, quienes se encontraban en la ciudad de


México para informar al presidente.
Ante estos sucesos, el 23 de mayo de 1955, después de
más de 2 años, Bartlett pidió licencia por 6 meses para sepa-
rarse del cargo.
El congreso local nombró al General Miguel Orrico de los
Llanos gobernador de Tabasco, quien fungió como interino
hasta el 23 de septiembre del mismo año en que fue descono-
cido por el Congreso local Manuel Bartlett Bautista; Orrico
de los Llanos fue nombrado gobernador sustituto, fungiendo
como tal hasta el 31 de diciembre de 1958.
La designación de Orrico de los Llanos se debió a pro-
puesta de Carlos A. Madrazo ante el Presidente de la Re-
pública, Ruiz Cortinez. En agradecimiento, Orrico de los
Llanos nombró a Madrazo, primero Secretario General de
Gobierno y más tarde, representante de la entidad en el Dis-
trito Federal.
Con Orrico de los Llanos, según Pepe Bulnes, se termi-
naron todas las corrientes: bartlettistas, santanistas, trujillis-
tas, noecistas, garridistas, para convertirse en un gobierno de
unidad, logrando que desaparecieran luchas pasadas (Bulnes,
1955). Orrico de los Llanos permitió la crítica al gobierno, la
libertad de expresión y de asociación, lo que se manifestó al
autorizar que se protocolizara y se reconociera al Partido Re-
novador Municipal del Centro, encabezado por el Director
del Periódico “La Voz”.

107
Los partidos políticos en Tabasco

2.7 El gobierno de Carlos A. Madrazo (1957-


1962)
En 1958 en relación a la sucesión presidencial, coincidente
con la de Gobernador, los círculos políticos nacionales y loca-
les comenzaron a movilizarse en torno a los posibles candida-
tos. En Tabasco la noticia de la designación de Carlos Alberto
Madrazo Becerra como candidato del PRI a la Gubernatura,
provocó la definición de grupos en pro y en contra. Sin em-
bargo, asumió el poder el día 1º de enero de 1957.
En la agricultura, Madrazo estableció un radical cambio
en la estructura social, económica y política de la entidad,
el proceso de integración y modernización condujo al poder
político y económico a los grupos ganaderos, pero también
dio paso a una creciente división de clases del medio rural.
Por una parte, se integró un grupo que incrementó su poder
económico por la actividad ganadera e incluso diversificaron
su economía con el cultivo de otros productos, pero por otro
lado apareció un campesino que arrendó sus tierras y que
compartió fuertes carencias con el desarrollo de un sector de
jornaleros agrícolas. Con Madrazo se consolidaron los cul-
tivos de plantación como el plátano, cacao y copra princi-
palmente; así como el incipiente pero acelerado auge de la
actividad pecuaria, el control de los ríos y la expansión de la
frontera agrícola.
Factores que aceleraron el proceso de modernización de la
región sureste fueron la construcción de caminos al interior
de la entidad que enlazaron de forma permanente diversas
zonas productivas y sobretodo la vinculación de Tabasco con
el resto de la república a través de la carretera del circuito del

108
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

golfo. Este medio de comunicación significó para Tabasco


pasar de una producción fundamentalmente de tipo domés-
tico, condicionada por el aislamiento territorial, a la integra-
ción económica tanto del interior como al centro dinámico
del país, al respecto Jean Revel-Mouroz (1980), señala:
Se observa que en Tabasco las vías de comunicación
modernas fueron creadas, primero, para desarrollar un
movimiento de colonización ya existente (el caso del fe-
rrocarril); pero en una segunda etapa, desde 1950, la
construcción de nuevos caminos organiza y lanza la co-
lonización: la carretera Costera del golfo, pavimentada
por completo en 1960, es el estímulo para la instalación
de ranchos ganaderos en el este de Tabasco, entre Vi-
llahermosa y Frontera; con la red de carreteras de Pa-
raíso y Frontera a Ciudad del Carmen, las plantaciones
de cocoteros cubren la costa, como en la zona de Puerto
Ceiba. La red tan densa de carreteras construida por Pe-
mex en Chontalpa y la región de Macuspana, la utilizan
también los pequeños plantadores y los ganaderos para
dar salida a sus productos hacia Villahermosa. En fin, la
carretera interior Villahermosa-Champotón, terminada
en 1967, ha multiplicado la roturación, las milpas y los
pastizales.

Los grupos de trabajadores y agrupaciones importantes


en ese momento y que se fortalecieron a través del tiempo,
estaban representadas por:
• La sección 29 del Sindicato Nacional de Trabajadores de
la Educación, dirigida por el Prof. Fausto Méndez.
• La sección 44 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de
la República Mexicana con sede en Ciudad Pemex con
Pedro Bastriano Pérez como Secretario General.

109
Los partidos políticos en Tabasco

• La sección XXI del Sindicato Nacional de Trabajadores


de la Educación presidido por el Prof. Ramón Arias Cus-
todio.
• La Delegación 1 de la sección 31 del S.T.P.R.M. con Ar-
mando Sánchez Solís, como Secretario General.
• La Asociación Local del Centro, presidida por Marcial
Hernández Falcón.
• La Unión Ganadera Regional de Tabasco con Natividad
Palacios como presidente.
• La Cámara Nacional de Comercio de Villahermosa, pre-
sidida por Marco A. Priego Broca.
• La Unión Nacional de Crédito de Productores de Pláta-
no Tabasco presidida por el Ing. Carlos Macías B.
• La Unión Única de Transportes de Pasajeros del Es-
tado, presidida por el Lic. Carlos E. Dagdug.
Vale la pena señalar algunas de las características de la
población tabasqueña en la época de Madrazo. Entre 1960-
1964 se registra una población joven, de 20 o más años de
205,494 habitantes, de los cuales en julio de 1961 sólo vota-
ron 110, 343 empadronados, lo que representa el 53.7% de
su población joven, con una oposición de 825 votos y una
abstención del 46.3%, según fuente de Pablo González Casa-
nova en su obra La Democracia en México (1965).
Para 1964 en las elecciones presidenciales del 5 de julio,
la población de 20 años o más era de 222,224 personas, y se
registra que votaron 147, 592 habitantes lo que significa que
votó el 66.4% lo que deja al abstencionismo en un 33.6%

110
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

y a 914 votos de la oposición, según fuente de la Comisión


Federal Electoral (Cedeño & Castellanos, 1990).
Tabasco ocupaba el décimo lugar con población en edad
de votar, y el tercer sitio con menos votos favorables a la opo-
sición al PRI. Las campañas electorales no tenían la misma
intensidad que en la actualidad, puesto que una vez lanzada
la convocatoria emitida por el PRI para candidatos a la XLIII
Legislatura Local, sólo había expectación en la forma de ele-
gir a los candidatos.
Pasado este punto, cesaba la información periodística aún
en el cambio de la Legislatura, sin contar además que el PRI
por ese entonces era la única agrupación partidista en la en-
tidad.
EL PRI continuaba encuadrando prácticamente a todos
los sectores productivos de la entidad y eran generalmente
los directivos de las siguientes organizaciones los candidatos
a diputados:
• Federación de organizaciones populares (CNOP).
• Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesi-
nos.
• Federación de Trabajadores del Estado de Tabasco.
• Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos
del Estado de Tabasco.
• Unión Nacional de Productores de Cacao.
• Unión Regional Ganadera.

111
Los partidos políticos en Tabasco

• Unión Nacional de Crédito de Productos de Plátano


“Tabasco”.
• Unión Regional de Productores de Cacao y sus deriva-
dos.
• Comité Estatal Coordinador de la Federación de Sindi-
catos de Trabajadores al Servicio del Estado.
Durante su gestión, el Poder Legislativo emitió varios de-
cretos, elevando a la categoría de pueblos a diversas ranche-
rías de los municipios de Balancán, Huimanguillo, y Emi-
liano Zapata, tales como Sánchez Magallanes y El Triunfo, a
fin de vincularlos más a la vida municipal, dada su influencia
en amplias zonas estratégicas. Madrazo les imprimió una ca-
racterística a los procesos electorales municipales durante su
sexenio, estableció que las candidaturas surgieran de conven-
ciones municipales a las que el Comité Directivo Estatal del
PRI convocaba, donde se seleccionaría a los candidatos en
forma abierta y directa. Es decir, se efectuaban las Conven-
ciones Municipales para una fecha determinada y abriéndose
un período para el registro de precandidatos.
Carlos A. Madrazo es considerado el más importante de
los gobernadores que ha tenido la entidad. Desarrolló una
vasta obra pública, ganándose una legitimidad poco común
entre los ejecutivos estatales de la época. En el ascenso de
su carrera política logró que el presidente Díaz Ordaz lo de-
signara como Presidente del Comité Ejecutivo Nacional del
PRI el 6 de diciembre de 1964, justo unos días antes que le
correspondiera dejar el cargo de Gobernador Constitucional
de Tabasco.

112
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

El presidente en turno consideró que, a pesar de las refor-


mas, la estructura del PRI mostraba debilidades, producto de
una escasa participación popular, por ello se propuso iniciar
varias innovaciones para promover la democratización inter-
na del partido, acrecentar la participación de las bases en sus
decisiones y reducir el peso de antiguos políticos regionales.
La confrontación de los puntos de vista de Madrazo con
las posiciones conservadoras de miembros de la cúpula políti-
ca, llevó a la renuncia del líder tabasqueño a finales de 1965,
dejando un planteamiento de retos a la estabilidad y legiti-
mación del sistema político. Al respecto Francisco Reveles
señala (2000):
En su gestión intentó, entre otros objetivos, democrati-
zar los procesos internos de candidatos. Tuvo diferentes
conflictos con dirigentes locales, sectoriales y con varios
gobernadores, los cuales fueron motivo para su destitu-
ción. Su trayectoria se vio abruptamente truncada por
su muerte accidental en 1969”.

2.8 El gobierno de Manuel Rafael Mora Martínez


El presidente Díaz Ordaz enfrentó problemas sociales y po-
líticos que se habían venido arrastrando de administracio-
nes anteriores, surgieron discrepancias en el seno del PRI,
aumentó la abstención en las elecciones, tanto locales como
federales. Se produjeron movimientos de protesta de cam-
pesinos a partir del año de 1965, en varias partes del país.
En julio de 1968 se suscitaron movimientos estudiantiles a
nivel superior en la ciudad de México, que culminaron el 2
de octubre con trágicas consecuencias en la Plaza de las Tres
Culturas en Tlatelolco.

113
Los partidos políticos en Tabasco

La designación de Gustavo Díaz Ordaz –secretario de Go-


bernación bajo el mandato de López Mateos– se realiza en el
marco de cambios en el número y presencia de Partidos Polí-
ticos en el Congreso de la Unión, cuando ante la debilidad de
una oposición partidista, aunada al escaso interés de la ciu-
dadanía en la gestión política, llevó a que el 28 de diciembre
de 1963 se aprobara una reforma de Ley Federal Electoral,
que introdujo la figura denominada “Diputados de Partido”.
Por este mecanismo aseguraron su ingreso a la Cámara de
Diputados los partidos: Acción Nacional, Popular Socialista
y Auténtico de la Revolución Mexicana. Los criterios de re-
novación política planteados desde el período del Lic. Adolfo
López Mateos, permitieron que se redujera el peso que tenían
sectores como los empresarios y militares en las dos Legisla-
turas federales (1964-1967 y 1967-1970), y en cambio creció
en forma considerable el peso de la Confederación Nacional
de Organizaciones Populares rebasando en ese entonces el
60% de todas la curules de la Cámara baja.
En Tabasco, con Gustavo Díaz Ordaz como presidente
(1964-1970), el 5 de julio de 1964 se celebraron elecciones
para Gobernador, y resultó electo Manuel R, Mora Martínez8,
quien gobernó del 1º de enero de 1965 al 31 de diciembre
de 1970. En las elecciones federales del 5 de julio de 1964,
el PAN en ningún caso registró candidatos. El Partido Popu-

8 Manuel R. Mora nació en Villahermosa, Tab., el 1º. de junio de 1917. Estudió la primaria y
secundaria en su estado natal, preparatoria en la ciudad de México y filosofía y letras en la UNAM.
Desde muy joven participó en actividades políticas. Algunos de sus cargos fueron: presidente del
comité estatal del Partido de la Revolución Mexicana (PRM) en Tabasco; oficial mayor del gobierno
de Tabasco durante la gestión de Francisco J. Santamaría (1946-1952); diputado federal (1961-1964)
y gobernador del estado durante el periodo 1965-1970. Diccionario Enciclopédico de Tabasco, Tomo
II, 1994, Gobierno del Estado de Tabasco, pág. 430.

114
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

lar Socialista registró como candidato al Lic. Tomás Aguilar


Yedra por el I Distrito y a Román Ramírez Contreras para el
II Distrito. El Partido Auténtico de la Revolución Mexicana
registro solamente candidato al II Distrito a Eduardo Gaspar
Bautista.
Para Senadores el Partido Revolucionario Institucional no
enfrentó oposición alguna y en los dos tipos de elecciones
resultó ganador. Para el año electoral de 1965, una de las pri-
meras medidas de cambio consistió en la elaboración de listas
de precandidatos a cargos de elección popular y para elegir
posteriormente de manera directa a los candidatos.
Para su segundo informe de Gobierno, correspondiente al
bienio 1967-1968, el Lic. Mora señaló la actividad político
electoral en los siguientes términos:
• El día 2 de julio de 1967 se efectuaron elecciones para
designar diputados federales por el 1o. y 2º Distrito del
Estado, cuya emisión total fue de 150, 855 votos.
• El 3 de diciembre de 1967, se efectuaron las votaciones
para renovar los Ayuntamientos, emitieron su voto 119,
373 ciudadanos.
• El día 18 de agosto de 1968, se llevaron a cabo elecciones
para designar Diputados Locales a la XLVI Legislatura.
El total de votantes ascendió a 148, 193.
• El 24 de febrero de 1968, considerando el aumento del
número de habitantes, se reestructuraron los distritos
electorales locales en once, en lugar de los nueve que ve-
nían funcionando.

115
Los partidos políticos en Tabasco

En las elecciones de diputados federales del 2 de julio de


1967, por primera vez el Partido Acción Nacional (PAN) re-
gistra como candidato para el I Distrito al Dr. Manuel Bara-
hona González y a Oscar Alpuche Canabal para el II Distrito.
El Partido Popular Socialista (PPS) registra a Tomás Ramírez
Jiménez para el I Distrito y a Román Ramírez Contreras para
el II Distrito. El Partido Auténtico de la Revolución Mexica-
na (PARM) sólo registró candidato en el II Distrito a Alfredo
Jiménez de Lara (Haddad, 1996).
2.9 El gobierno de Mario Trujillo García (1971-
1976)
En la elección de Presidente de la República en 1970 en el
estado de Tabasco el PRI obtuvo 231,420 votos para su can-
didato Lic. Luis Echeverría Álvarez y el candidato del PAN,
Lic. Efraín González Morfin, registró 2, 494 votos, el PPS
y el PARM no participaron en la contienda. La elección del
candidato del PRI para desempeñar la gubernatura recayó en
el diputado federal Agapito Domínguez Canabal,9 quien rin-
dió protesta el 29 de marzo de 1970 y murió un mes después
en la ciudad de México, víctima de una embolia.
La dirigencia política postuló al Lic. Mario Trujillo García
quien en ese momento era candidato a senador. Triunfante
como gobernador, dirigió el Estado del 1º de enero de 1971

9 José Agapito Domínguez Canabal nació en Montecristo, Tab., (hoy Emiliano Zapata), en 1913;
murió en 1970. Estudió en el IPN sin llegar a titularse. Presidió la Federación de Estudiantes del
IPN y organizó el Primer Congreso Nacional Estudiantil que se reunió en Frontera. Fue diputado
federal en dos ocasiones (1955-1958 y 1967-1970). Ocupó diversos puestos en el PRI y en el sector
público, entre otros: asesor de los secretarios de Salubridad y Asistencia y de Gobernación, jefe del
Departamento de Salud en el Departamento del Distrito Federal y delegado de la Oficina Federal
de Hacienda en San Luis Potosí, Yucatán y Tabasco. Murió cuando realizaba su campaña para la
gubernatura de Tabasco. Diccionario Enciclopédico de Tabasco, Tomo I, 1994, Gobierno del Estado
de Tabasco, pág. 161.

116
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

al 31 de diciembre de 1976. En las elecciones de diputados


federales el 5 de julio de 1970 el PRI resultó ganador en los
dos distritos electorales, con sus candidatos Tte. Corl. Ma-
nuel Piñera Morales y Lic. Rubén Darío Vidal Ramos.
El PAN registró como candidatos a Oscar Alpuche Rueda
para el I Distrito, favorecido con 1,508 votos, y para el II
Distrito registró a Cornelio Gil García quien logró 388 votos
contra los 103,589 del PRI en los dos distritos, con un total
de empadronados de 294,828. El PPS y el PARM no regis-
traron candidatos. En la elección de Senadores el 5 de julio
de 1970 sólo el PRI registro candidatos.
La XLVII Legislatura discutió y aprobó la reforma a la
Constitución en su artículo 22 por el cual se concedió la ciu-
dadanía a los jóvenes de 18 años, también se reformó con fe-
cha 20 de diciembre de 1971 el artículo 37, fracción II, para
reducir a 21 años la edad necesaria para ser electo diputado,
toda vez que más del 60% de la población tabasqueña era
menor de 25 años. En 1974 se adoptó el sistema de Dipu-
tados de Partido, para la integración de la Legislatura Local,
también en el mismo año, se envió la iniciativa para decretar
una nueva Ley Local Electoral.
En 1973 al efectuarse las elecciones para integrar la Cua-
dragésima Novena Legislatura del Congreso de la Unión, y
como consecuencia del crecimiento demográfico registrado
en la entidad, aumentaron los distritos electorales federales
en la entidad de dos a tres distritos.
En esa dinámica, con fundamento en lo estipulado por el
Artículo 141 de la Ley Local Electoral y previa aprobación

117
Los partidos políticos en Tabasco

del Congreso, se crearon en 1973 tres Distritos Electorales


más, en los municipios de Jalpa de Méndez, Nacajuca y Te-
nosique. En las elecciones de diputados federales del 1º de
julio de 1973 registraron candidatos el PRI, el PAN y el PPS,
en el recién establecido tercer distrito, el PARM no registró
candidatos, como se observa en el cuadro No. 5.
En lo económico el sistema mexicano, en una redefinición
de estrategias de desarrollo para 1970 señaló el agotamiento
de alternativas para el mejoramiento económico, y por ende
corrieron cambios paralelos en lo político, replanteándose
cuáles debían ser las formas de participación ciudadana y
cuáles los canales más adecuados para garantizarla.
En lo económico era importante replantear los rubros de
la intervención estatal, la reformulación de las estrategias de
los grupos empresariales, un cambio en las actitudes sindica-
les y en lo político la asimilación de nuevos grupos por la vía
de la denominada “apertura democrática”.
En el caso de Tabasco los impactos de estas medidas se
reflejaron en la necesidad de inyectar recursos frescos a la
zona de la Chontalpa, proyecto iniciado una década antes y
también en una extensión de 115,668 hectáreas se crearía en
la zona de los ríos el Plan Balancán-Tenosique. Vincular el
crecimiento económico con el desarrollo político fue el reto
impuesto a nuestro país.
En Tabasco la base social y política del estado comenzó a
cambiar debido a la importancia y trato que como grupo re-
cibieron los productores por parte del gobierno estatal. Para
1975 la Asociación de Cacaoteros manifestó una membresía

118
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Cuadro No. 5
Elecciones de diputados federales 1º. de julio de 1973

Fuente: Haddad Chávez, Pedro H., Historia electoral y política de Tabasco, Villahermosa,
Tabasco, México 1996, p. 262 y 263.

de veinte mil productores, los copreros de doce mil quinien-


tos y los ganaderos de veinticinco mil.
Este solo hecho permitió espacios políticos en diversos
niveles de la vida constitucional tabasqueña. Al impulsar la
economía colectiva de los productores, garantizaría que ellos
mismos se comprometieran con el esfuerzo estatal. De tal
forma que la capacidad organizativa influiría en la Cámara
de Diputados local, las regidurías de los ayuntamientos y en
general en el sector público para dar estabilidad y posibilida-
des de desarrollo económico.
Para abordar los problemas sociales y económicos y por
recomendaciones del Poder Ejecutivo Federal se organizó el
10 de noviembre de 1973 la Comisión Estatal Partidista.

119
Los partidos políticos en Tabasco

En su integración participaron los representantes de cada


uno de los sectores, incluyendo las altas autoridades estatales,
con el gobernador del estado el Lic. Mario Trujillo García;10
por el sector empresarial, la Delegación de la Cámara Na-
cional de la Industria de la Transformación representada por
Javier Abreu Montaño; por la CONACO, Federico Calzada
Valencia; por la Unión Regional Ganadera, Natividad Pa-
lacios; Unión de Productores de Cacao, Guillermo Brondo
Ruiz; Unión Regional de Productores de Coco y sus deri-
vados, el Arq. Miguel Bosch López de Llergo; la Asociación
Hotelera de Tabasco con Rolando Chávez Greene, y por el
Sector obrero el Dip. Andrés Sánchez Solís y los líderes obre-
ros Adolfo Blas, Cirilo Rodríguez y Alfredo Rivas. Los nue-
vos dirigentes de la Liga de Comunidades Agrarias y Juan
Córdoba Candelero, de la Unión de Ejidos Colectivos del
Plan Chontalpa.
A principios de la década, en el sector petrolero el líder
obrero Andrés Sánchez Solís, afianzó la sección 31 del Sindi-
cato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana a
fin de contribuir en el desarrollo del nuevo Distrito Pemex en
la ciudad de Villahermosa. Se logró ampliar la base del poder
obrero con la creación de la Sección 44 del Sindicato. Esta
medida permitió lograr la autonomía sindical de Tabasco del

10 Mario Trujillo García nació en Villahermosa, Tab., el 21 de enero de 1920. Realizó sus prime-
ros estudios en Villahermosa y en la ciudad de México. Fue alumno de una de las escuelas al aire libre
implantadas por Tomás Garrido Canabal. Cursó la secundaria en el Instituto Juárez. De regreso a la
capital de la República ingresó a la Escuela Nacional Preparatoria y luego a la de Leyes. Licenciado
en derecho (1942) por la UNAM, militó en la Confederación de Jóvenes Mexicanos y fue secretario
particular del secretario del Trabajo (1945), delegado a la primera reunión de la Organización Inter-
nacional del Trabajo en Ginebra y a la segunda celebrada en México, director de Previsión Social en
la Secretaria del Trabajo (1949), delegado de la Confederación Nacional Campesina en varios estados
y del PRI en Guerrero y en México, diputado federal (1967-1970) y gobernador de Tabasco (1971-
1976). Más tarde fue director general de la Comisión Nacional de la Industria Azucarera. Diccionario
Enciclopédico de Tabasco, Tomo II, 1994, Gobierno del Estado de Tabasco, pág. 676.

120
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

control de grupos sindicales de Minatitlán y Coatzacoalcos.


La segunda mitad del decenio de los setenta, coincide con
el arribo del Lic. José López Portillo a la Presidencia de la
República, época en que los problemas nacionales se agudi-
zan notablemente: el inevitable endeudamiento externo, dos
devaluaciones de la moneda, al mismo tiempo que se abren
retos de la abundancia de recursos originados por el auge pe-
trolero.
Ante la grave situación económica, el gobierno planteó
una ampliación de los canales de participación política, mis-
mos que incidieron en el PRI como en el resto del Sistema de
Partidos, conllevando profundos cambios en el ordenamien-
to electoral federal. La reforma política iniciada se entiende
como una necesidad del Estado y como resultado de la pre-
sión de pequeñas agrupaciones surgidas en este contexto. Por
ello se amplió el esquema de partidos, compuesto por el PAN,
PRI, PPS y PARM.

2.10 El gobierno de Leandro Rovirosa Wade


(1977-1982)
En Tabasco, el 31 de diciembre de 1976, el Ing. Leandro
Rovirosa Wade11 recibió el Gobierno para cubrir el periodo

11 Leandro Rovirosa Wade nació en Villahermosa Tab., en 1918. Ingeniero civil por la UNAM,
ha desempeñado los siguientes cargos en el sector público: director general de Obras Marítimas
de la Secretaría de Marina, presidente de la Comisión Nacional de Programa Marítimo,
secretario de Recursos Hidráulicos (1970-1975) y gobernador de Tabasco (1976-1982); y en el
sector privado: presidente del consorcio de siete empresas que construyó la presa de Mal Paso, hoy
Nezahualcóyotl; presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Construcción en dos
periodos y fundador del Centro Impulsor de la Habitación y de la Construcción, que actúa como
Comisión de Vivienda del sector empresarial. Ha presidido también la Sociedad de Ex alumnos de
la Facultad de Ingeniería de la UNAM y el Patronato Universitario para la Reconstrucción,
Rehabilitación y Readaptación del Palacio de Minería. Es miembro de número de la Academia
Nacional de Ingeniería y Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística. En 1993 se le otorgó en
Tabasco el Premio de Ingeniería. Diccionario Enciclopédico de Tabasco, Tomo II, 1994, Gobierno del
Estado de Tabasco, pág. 608.

121
Los partidos políticos en Tabasco

constitucional de 1977-1982. En su gestión modificó la fi-


sonomía tabasqueña; se experimentaron nuevas estrategias
en la búsqueda de la futura petrolización de su economía y
buscó el desarrollo regional equilibrado ante las nuevas exi-
gencias nacionales.
Ciertamente existían tendencias nocivas en la vida econó-
mica y social de Tabasco, como los efectos de la ganaderiza-
ción, las constantes migraciones sociales y viciadas relaciones
en el campo, mismas que fueron impactadas en una nueva
dinámica por la actividad petrolera.
Para dar respuesta a las demandas sociales la atención di-
recta del poder ejecutivo implicó nuevas y crecientes funcio-
nes, comprometiendo en un nuevo pacto a todos los niveles
de gobierno. La relación con los municipios se modificó,
pues se obligó al establecimiento de los planes municipales
a través de los Comités Municipales de Planeación, así como
también recibieron importantes recursos financieros que ad-
ministraron directamente. La estructura político administra-
tivo buscó armonizar varios aspectos o condiciones necesarias
como punto de partida para el cambio, que no se había logra-
do antes: la relación entre el poder federal y el gobierno local,
establecer una vía de desarrollo urbano, industrial y agrícola,
así como garantizar la libertad y la participación política. Se
hicieron presentes agencias y dependencias oficiales de carác-
ter federal.
Desde 1977 se constituyó junto con Pemex, las Secretarías
de Patrimonio y Fomento Industrial, Reforma Agraria, Asen-
tamientos Humanos y Agricultura y Recursos Hidráulicos.

122
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

La Comisión Dictaminadora de Reclamaciones en el es-


tado de Tabasco encargada de recibir, canalizar y diagnosticar
las crecientes quejas de los campesinos tabasqueños, se com-
plementó con la política gubernamental para desarrollar el
urbanismo.
La causa de la urbanización creciente y de la concentra-
ción de población en las ciudades de Villahermosa, Cárdenas,
Comalcalco y Macuspana era parte de la naturaleza misma
del proceso de reestructuración económica propiciado por el
petróleo.
Por una parte, las desproporciones en el ingreso per cápita
aumentaron y sólo de manera indirecta se incorporó la po-
blación tabasqueña al proceso lucrativo petrolero, en apoyos
como el transporte y el comercio. Por otra, el gobierno local
se preocupó por contener una crisis social de grandes con-
secuencias. La necesidad de enfrentar estos retos, obligaron
a formular esquemas de programación como los Convenios
Únicos de Coordinación implementado por el ejecutivo fe-
deral en 1976, y en 1979, el Comité Técnico para Desarrollo
del Sistema de Información del Estado de Tabasco.
En lo político, la nueva Ley de Organizaciones y Proce-
sos Electorales otorgó mayores facultades y una nueva fiso-
nomía al Poder Legislativo, por el aumento del número de
Diputados y el fortalecimiento del Sistema de Partidos. Esta
situación alteró la importancia de la División Distrital Elec-
toral, planteando nuevas estrategias para la representatividad
política. Sin embargo, entre la L y LI Legislaturas Federales
(1976-79 y 1979-82) respectivamente, crecieron los distritos
a tres y a cinco distritos respectivamente. En el ámbito local

123
Los partidos políticos en Tabasco

la Cámara de Diputados aumentó el número de sus inte-


grantes de 14 a 17, de acuerdo a las Reformas al Artículo
51 fracción IV de la Ley Electoral del Estado de Tabasco en
sesión de julio 12 de 1976.
Los grupos que tradicionalmente definieron el escenario
político, cambiaron simultáneamente con el avance de la ex-
tracción petrolera: se reorganizaron y fueron favorecidos por
un aumento de precios en sus productos y el impulso en la
productividad del campo.
El caso más palpable fue el de los cacaoteros. Se incorpo-
raron nuevos actores sociales como el sindicalismo petrolero,
el esfuerzo organizativo de los planes Chontalpa y Balan-
cán-Tenosique, la actividad de colonos y nuevos gremios de
profesionistas y asociaciones de prestadores de servicios que
demandaban participación.
Los cambios en la estructura productiva se tradujeron en
cambios en los procesos políticos. Todos los nuevos proce-
sos por los que se ampliaron las actividades agropecuarias y
petroleras confluyeron también en la diversificación y ensan-
chamiento del Sistema Político local.
En Tabasco con una economía petrolizada, es importante
señalar una de las múltiples contradicciones generadas por
PEMEX: el Pacto Ribereño. Se creó el Comité Promotor del
Desarrollo Socioeconómico del estado de Tabasco para cen-
trar su atención en la franja costera de la entidad, donde se
generó un proceso de movilización de los campesinos afecta-
dos por el derrame de aceite en sus plantaciones que deman-
daron ser indemnizados.

124
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Este organismo encargado de analizar la conflictiva situa-


ción es conocido como el Pacto Ribereño, que cubrió dos
etapas. La primera va de 1976 a 1979 y se caracterizó por el
nacimiento del pacto y ampliación hacia las zonas ejidales e
indígenas de Nacajuca y Jalpa de Méndez, mientras que la
segunda fase transcurre entre 1980-1983, que abarca desde la
gira de trabajo de la Comisión de Energéticos de la Cámara
de Diputados del Congreso de la Unión, hasta el cierre de
300 de los 512 pozos en operación entre septiembre-octubre
de 1983.
La fuerza del Pacto Ribereño se demostró por las más de
600 movilizaciones con diversa intensidad y que en sus mo-
mentos más graves se ubicaron en el mes de noviembre de
1976 cuando fueron bloqueados en unas horas los campos
petroleros en los importantes distritos de Agua Dulce Vera-
cruz y Comalcalco, Tabasco. El otro momento se originó en
abril de 1983, cuando en un solo día bloquearon 178 pozos.
Para septiembre la cifra llegó a 300 pozos en 7 campos petro-
leros. La demanda era el pago de cuatro mil millones de pesos
por indemnizaciones. El nuevo gobierno se encontró con una
situación complicada, el 15 de marzo el ejército intervino
para recuperar las instalaciones petroleras ocupadas.
El pacto abandonó la Confederación Nacional Campe-
sina y el 23 de septiembre se adhirió a la Central Indepen-
diente de Obreros y Campesinos, aliada al Partido Socialista
Unificado de México.
Como respuesta el 27 de abril el gobernador puso en mar-
cha el Programa para el Desarrollo Integral de la Zona Cos-
tera de Tabasco, PRODECOT, con la finalidad de asimilar

125
Los partidos políticos en Tabasco

el proceso a la dinámica de desarrollo estatal, creando para


ello comités encargados de promover y operar el programa
(Velásquez, 1982).
Tabasco ha vivido sus transiciones políticas permitiendo
una actividad partidista centrada en el PRI, pero a fines de los
ochenta tiende a cambiar esta situación. En México la refor-
ma política propuesta por Miguel de la Madrid, presidente
electo mostró preocupación por la creciente insatisfacción
hacia el sistema político, que exigía ampliar el espacio para la
expresión de los ciudadanos y los partidos políticos.
En los últimos veinte años, incluyendo la elección pre-
sidencial, se habían mostrado síntomas de abstencionismo,
del deterioro en las formas de control en el PRI, las protestas
de carácter urbano y la reorganización opositora del Partido
Acción Nacional en el norte del país.
Ante la sucesión presidencial en 1982, se vivieron unas
elecciones con candidatos y partidos nunca antes vistas en
la historia electoral del país. Contaron con registro electoral
aparte del PRI, PAN, PARM y PPS, las organizaciones políticas
como el PCM, PDM, PST y PRT, que se encargaron de sensibi-
lizar a sectores sociales emergentes. Gracias a la reforma polí-
tica, la elección de 1982 por primera vez y después de 1952,
el proceso electoral tenía la característica de contar con más
de dos candidatos registrados a la presidencia de la república.
El PRI, apoyado por el Partido Auténtico de la Revolución
Mexicana y por el Partido Popular Socialista, postuló al Lic.
Miguel de la Madrid Hurtado. Por el Partido de Acción Na-
cional el Ing. Pablo Emilio Madero.

126
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

El Partido Socialista Unificado de México postularía a Ar-


noldo Martínez Verdugo. El Partido Revolucionario de los
Trabajadores lanzaría a la primer mujer candidata en la histo-
ria electoral presidencial de México, la señora Rosario Ibarra
de Piedra.
El Partido Demócrata Mexicano, brazo político de la
Unión Nacional Sinarquista, propuso al Sr. Ignacio González
Gollaz y el Partido Social Demócrata postuló a Manuel Mo-
reno Sánchez. El PSUM, surgió de la coalición de izquierda,
producto del PSR, PCM, MAUS y MAP, misma que había
tenido presencia en 1979. El PSUM abrió la polémica por la
participación del clero en la política.
En Tabasco, el PRI logró la concertación frente a cam-
biantes circunstancias cuyo origen fue un perfil poblacional
cada vez más complejo.
Sin embargo, esta situación tendió a cambiar a fines del
sexenio del Lic. Enrique González Pedrero, gobernador de
Tabasco en el periodo 1983-1988. Para revalorar la activi-
dad municipal a partir de las reformas del artículo 115 de
la Constitución por el que la administración de recursos y
decisiones autónomas de los municipios, se convirtió en una
necesidad y por lo tanto implicaría una manera de encauzar
la presencia de grupos sociales en espacios importantes para
la acción socioeconómica y política.
Por ende, se requería estimular la participación política
por la vía de los partidos políticos y por la observancia pun-
tual del derecho y respeto al voto ciudadano.

127
Los partidos políticos en Tabasco

2.11 Conclusiones
• El régimen garridista constituye un proceso reformista
radical que conmovió las bases sociales de Tabasco al in-
tegrar a todos los sectores sociales en la aplicación de las
medidas fundamentales del régimen.
• El régimen caudillista se ubica como uno de los casos
típicos de “caudillismo” propios del periodo callista en
que se emplearon estrategias populistas para lograr el
consenso social.
• La inclusión de las mujeres tabasqueñas en la vida pú-
blica logró su máxima expresión en la conquista del su-
fragio, a diferencia de otras mujeres del resto del país, las
tabasqueñas obtuvieron este derecho en el marco de la
estrategia incluyente del régimen garridista, aunque li-
mitado en 1925 a los comicios municipales y en 1932
para elecciones a diputados. En consecuencia, en 1933 se
crea el Partido Feminista Revolucionario. Sin embargo,
la mayoría de las mujeres permanecieron al margen de
este proceso sin ejercer sus derechos ni comprender su
trascendencia.
• El Partido Socialista Radical Tabasqueño a través de las
Ligas de Resistencia expresaron las demandas de las clases
explotadas y su influencia regional y nacional contribuyó
a frenar el viraje derechista de los gobiernos posrevolu-
cionarios.
• Con la candidatura en 1936 de Víctor Fernández Mane-
ro para Gobernador por el Partido Nacional Revolucio-
nario, formalmente se termina la influencia política de
Garrido y del caudillismo en Tabasco.

128
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

• En las elecciones para la renovación de la Cámara local


en 1944 se registró el Centro Demócrata Tabasqueño
(filial del Partido Demócrata Mexicano) para contender
contra el Partido de la Revolución Mexicana. Esta con-
tienda electoral constituyó la última escisión política a
nivel local, el último enfrentamiento serio al partido ofi-
cial. Sin embargo, la nueva Legislatura se integró por los
diputados propuestos por el PRM
• Carlos A. Madrazo es considerado el más importante de
los gobernadores que ha tenido la entidad, desarrolló una
vasta obra pública, ganándose una legitimidad poco co-
mún entre los ejecutivos estatales de la época.
• El petróleo por una parte redefinió varios mecanismos
socioeconómicos locales, por ejemplo, permitió nuevas
capacidades en el papel de las asociaciones de produc-
tores agrícolas y ganaderos. Impulsó drásticos y defini-
tivos cambios en la composición sindical, generándose
un influyente papel del sindicalismo petrolero, también
se redefinió el curso de los planes agroindustriales de la
Chontalpa y de Balancán-Tenosique. Por otra parte, el
petróleo generó conflictos como el Pacto Ribereño.

129
Capítulo 3

El sistema de partidos
de Tabasco
En el presente capítulo se enfatiza que hasta el año de
1988 indagar sobre el sistema de partidos en Tabasco
no ofrecía rasgos significativos de competencia o
conflicto, se llegó a decir que Tabasco vivía en
una democracia perfecta, puesto que era una entidad
uniformemente priista.
La hegemonía del partido oficial era tan abrumadora
que no se pensaba en que pudiera darse en el futuro
una competencia partidista. Por ende, se analiza la vida de
los partidos a través de sus elecciones,
considerando las principales reformas electorales y
continuando con la flecha del tiempo analizaremos las
elecciones de 1982-1985 y 1985-1988 a fin de señalar
el incipiente avance de la oposición.
La presencia y arraigo de los partidos de oposición, señala
Reveles (1995) se ha incrementado, desde
la reforma política de 1977. Sin embargo, en
algunos casos su ascendiente sobre los ciudadanos es
raquítico en ciertas coyunturas y en algunas regiones,
situación que se explica en parte por la falta de
competitividad del sistema electoral y la incapacidad
de las viejas y nuevas organizaciones para
insertarse en la sociedad. Pero, por otra parte,
la participación ciudadana a favor de partidos diferentes
del PRI es lo que hizo patente la importancia del
sistema electoral. Tabasco, no escapa de esta realidad.

131
Los partidos políticos en Tabasco

En México, la representación política es un


elemento imprescindible para la articulación de la vida
política formal del régimen. La arena política se estira
paulatinamente y sus limitaciones se encuentran en la
ambigüedad del pragmatismo autoritario que es
democrático en el discurso, y autoritario en su estructura y
su acción.
Por ende, no es fácil trascender a la
óptica meramente electoral y/o esencialmente anecdótica
de los partidos políticos, puesto que la sociedad en
general se entera de la vida de los partidos políticos a
través de los medios de comunicación, cuando se acercan
las elecciones. Por ello continuando con el hilo
conductor histórico se analiza la vida de los partidos a
través de las elecciones.
Tradicionalmente, el énfasis en el análisis del sistema de
partidos en México –y en Tabasco también– se ha
puesto en la historiografía de la organización y/o en la
de sus líderes políticos.
Un punto de consenso en la literatura
especializada sobre sistemas de partidos es que su
carácter no fragmentado y la existencia de una
relativa disciplina contribuyen al funcionamiento
armónico y cooperativo entre las ramas ejecutiva y le-
gislativa de gobierno en el marco de un sistema
presidencial. Y por el contrario, mientras más
fragmentado se encuentre el sistema y menos disciplinadas
sean sus unidades, mayores serán las posibilidades
de conflicto y las amenazas para la parálisis
gubernamental.

132
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

En Tabasco la disciplina partidaria, de acuerdo con


Mainwaring y Scully (1996), se encuentra estrechamente
relacionada con las siguientes reglas o prácticas del sistema
electoral, entre otras:
• El control en la selección de candidatos: cuanto mayor
sea la intervención de los dirigentes partidarios en la de-
finición de las candidaturas y en la confección de la lista
de candidatos, mayor será el grado de lealtad o disciplina
de los futuros congresistas para con el líder partidario;
• El control del orden en el diseño de la lista (proporcional)
del partido, es decir, en casos como el mexicano, donde
existe una lista bloqueada y cerrada para la elección de los
diputados de representación proporcional, lo lógico es
que quienes resulten electos sientan que le deben el cargo
al líder del partido y no a los electores.
En Tabasco, los siguientes datos indican que el partido
más disciplinado es el PRI, más habituado a la colaboración y
apoyo de los legisladores hacia el Ejecutivo. Por lo que toca a
la elección de los candidatos de la oposición éstos consiguen
la nominación en virtud de decisiones de líderes partidarios
locales o nacionales. De esto resulta que el sistema de parti-
dos es altamente disciplinado.
El sistema de partidos es de pluralismo limitado hasta
1988. En este pluralismo limitado señala Linz: “son los go-
bernantes quienes deciden qué grupos pueden existir y bajo
qué condiciones”. La limitación del pluralismo “puede ser
legal o de facto, aplicada con un grado relativo de eficacia, es-
trictamente reservada a los grupos políticos o extendiéndose
a los grupos de interés; ese pluralismo alcanza a los grupos no

133
Los partidos políticos en Tabasco

creados por el Estado o independientes de él, que son sufi-


cientemente influyentes en el proceso político” (Domínguez,
2004).
El Partido Revolucionario Institucional PRI fue creado en
1929 como una “federación de caciques”(Garrido, 1995), un
centro ceremonial de la política y un centro de distribución
del poder. El PRI fue capaz de mantener la hegemonía a
pesar del sistema de partidos cuya creación fue promovida
por él mismo. Pero el régimen ha tenido que hacer trampas
muchas veces en la competencia electoral para mantener esa
hegemonía del PRI (Domínguez, 2004). El único recurso
que ha encontrado para asegurar al partido su papel de par-
tido dominante.
Sin embargo, existen autores (Labastida & López, 2004)
que señalan que a pesar de que resulta difícil ubicar el proceso
mexicano como representativo de transitar a la democracia,
es a partir de 1988 que se inicia una transición prolongada
que culmina en 1996-1997. Afirman que se produjo una di-
solución paulatina de un régimen autoritario y se estableció
una forma de democracia predominantemente electoral y es
prolongada en el entendido del largo lapso de negociaciones
para instaurar las reglas políticas aceptables para los actores
políticos principales.

134
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Cuadro No. 6
Partidos políticos en Tabasco

Fuente: elaboración propia con base en las siguientes fuentes: Diccionario Enciclopédico de
Tabasco, Tomo II, Gobierno del Estado de Tabasco, 1994 pág. 495, y Cedeño del Olmo y
Castellanos Coll, Cap. V “Los procesos electorales, candidatos y partidos de la vida política de
los ochenta”, Historia del H. Congreso del Estado de Tabasco, LIV Legislatura Tomo VI Ed.
Grupo Corporativo GOME. México 1994.

3.1 Reformas electorales 1946-1994


En busca de una imagen de democracia liberal, donde el plu-
ralismo es un aspecto importante, durante el periodo pos-
revolucionario se permitieron partidos políticos, aunque en
un esquema de partido hegemónico desde 1946, que man-
tiene la centralización de la organización y la vigilancia de
los comicios y su control por parte del Ejecutivo. Asimismo
la exclusión de la participación electoral a las organizaciones

135
Los partidos políticos en Tabasco

que no asuman la forma de partido político, con lo que se


contribuye a una mayor institucionalidad del juego político
y se estimula el surgimiento de nuevos partidos, supeditados
al hegemónico.
La reforma de 1963 se explica como respuesta a una si-
tuación social y política compleja, caracterizada por los mo-
vimientos sindicales disidentes, como el de maestros (1958-
1959), la indisciplina del PAN al régimen cuando propuso la
renuncia a sus cargos de los seis diputados triunfadores en las
elecciones de 1958, y la polarización política, producto del
impacto de la Revolución de Cuba.
Se amplió de manera limitada la representación política
mediante los llamados diputados de partido, para favorecer
a los partidos minoritarios que obtuvieran 2.5 % de la vota-
ción.
Sin embargo, como ya lo señaló Reveles, los cambios real-
mente importantes se iniciaron en 1977, como respuesta a
una serie de tensiones que comenzaron con el movimiento
de los médicos (1965) y continuaron con la represión que
ejerció sobre el movimiento estudiantil de 1968. Además
de que en las elecciones de 1976 compitió por la presiden-
cia exclusivamente el candidato del PRI José López Portillo,
evidenciando la inexistencia de un sistema multipartidista
competitivo en México.
Entonces se dio el reconocimiento constitucional de los
partidos políticos como “entidades de interés público”, la in-
troducción del registro condicionado al resultado de la elec-
ción con un mínimo de 1.5% de la votación, y la ampliación

136
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

de la Cámara de diputados de 300 a 400 miembros, 100 de


ellos electos por el principio de representación proporcional,
exclusivos para la oposición, con lo que se garantizaba un
mínimo de pluralidad.
La reforma de 1986 suprimió el registro condicionado y
estableció la “cláusula de gobernabilidad” mecanismo que
aseguraba la mayoría en el PRI en la Cámara de diputados
aun sin 50% o más de la votación y se trasladó el criterio de
representación proporcional a la integración de la Comisión
Federal Electoral. Por ende, la oposición en Tabasco surge
como una extensión de los partidos políticos nacionales que
gracias a estas reformas políticas promovidas por el Estado
amplió el esquema de partidos. Sin embargo, de 1988 en
adelante se da el mayor cuestionamiento del régimen posre-
volucionario, que expresa una crisis del sistema electoral y
una crisis de legitimidad, la cual da lugar a un proceso suce-
sivo de reformas negociadas.
En Tabasco el PRI ha actuado prácticamente sin oposi-
tores, sobre todo desde la candidatura de Carlos Madrazo
(1958) hasta la nominación de Rovirosa (1976) en donde
el único candidato a la gubernatura con registro es del PRI.
Como consecuencia directa de la reforma política de 1977,
en Tabasco desde la esfera gubernamental se auspicia el creci-
miento del espectro de partidos.
PAN
En México el Partido Acción Nacional fue la agrupación po-
lítica partidista, fuera del PRI, con una clientela electoral más
sólida. Fundado en México en 1939, como una reacción de

137
Los partidos políticos en Tabasco

derecha a la política impulsada por el presidente Cárdenas, es


el partido que asimiló la importancia de la contienda electo-
ral para la confrontación política (Woldenberg, 1990).
Sin embargo, en las elecciones presidenciales de 1958 el
PAN con Luis H. Álvarez como candidato, tomó fuerzas ob-
teniendo 705,303 votos, es decir representa el 10% de los
votos obtenidos por el PRI, quedó por encima de la Federa-
ción de Partidos del Pueblo Mexicano, el Partido Naciona-
lista Mexicano y el brazo político del sinarquismo, el Partido
Fuerza Popular, partidos que quedaron fuera de la arena po-
lítica.
En Tabasco, no obstante, cuando los partidos de oposi-
ción aparecen por primera vez en la contienda electoral para
diputados federales en 1964 el PPS y el PARM registran can-
didatos a diputados federales, el PAN no participa. Es hasta
la elección de diputados federales del 2 de julio de 1967,
cuando el PAN participa en la contienda electoral.
PARM
El Partido Auténtico de la Revolución Mexicana se consti-
tuyó en 1954. Se trató de una pequeña escisión del PRI,
básicamente de militares que no encontraban un lugar den-
tro del partido gubernamental. Por su ideología, pero sobre
todo por sus prácticas, durante años fue considerado como
un auténtico apéndice del partido oficial. En cinco eleccio-
nes presidenciales seguidas (1958, 1964, 1970, 1976 y 1982)
postuló al candidato del PRI.
En 1982 a pesar de haber postulado para la presidencia
de la República a Miguel de la Madrid, no alcanzó la vota-

138
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

ción suficiente para refrendar su registro, sin embargo, fue


sustituido por el otorgamiento de registro definitivo, y logró
volver a presentarse en las elecciones de 1985. En Tabasco el
PARM participó en las elecciones para diputados federales en
1964, 1967,1982, 1985 y en 1994.
PDM
El otro referente a la derecha del PRI es el Partido Demócra-
ta Mexicano. Sus fuentes son añejas y se nutre de la tradi-
ción sinarquista que en algunas zonas del país tiene arraigo
y atracción. Profundamente impregnado de un catolicismo
integrista es una fuerza relevante en el Bajío y algunos esta-
dos del occidente medio del país. En 1978 logró su registro
condicionado y en 1979 el definitivo. En Tabasco, en 1982,
alcanzó 595 votos y en 1985 registró 2, 814 votos en las elec-
ciones para diputados federales.
PPS
De los partidos de izquierda el Popular Socialista es el de
mayor tradición electoral en México. Durante años fue el
único reconocido legalmente y por ello el referente electoral
a la izquierda del PRI. Fundado en 1948 por Vicente Lom-
bardo Toledano como Partido Popular, en 1960 agrega a su
nombre el distintivo de Socialista. Desde 1958 el PP –luego
PPS– apoyó en todas las elecciones presidenciales al candida-
to postulado por el PRI, autodenominado marxista-leninista,
se reprodujo a la sombra del partido oficial. En Tabasco fue
fundado el 20 de junio de 1948. Participa en las elecciones
para diputados federales de 1964, 1967,1973; para diputa-
dos locales en 1980, 1983, 1986,1989 y 1994.

139
Los partidos políticos en Tabasco

PSUM
El Partido Mexicano Socialista fue el fruto de dos fusiones
sucesivas (1981 y 1987) de organizaciones de izquierda. En
noviembre de 1981, el Partido Comunista Mexicano (PCM),
el Partido del Pueblo Mexicano, el Partido Socialista Revolu-
cionario, el Movimiento de Acción Popular y el Movimiento
de Acción y Unidad Socialista, se disolvieron para dar paso
a la constitución del Partido Socialista Unificado de México
(PSUM).
Primero el PCM- que logró su registro condicionado en
1978 y el definitivo en 1979- se colocó como la agrupación
de izquierda más votada, aunque muy lejos del PRI y del
PAN, luego el PSUM sostuvo ese lugar. En Tabasco partici-
pa electoralmente en 1982 y 1985.
3.2 Participación electoral de los partidos de
oposición 1982-1985
En las elecciones de 1982, los candidatos a la gubernatura au-
mentaron a cuatro: Enrique González Pedrero del PRI, Ra-
món Ramírez Contreras del Partido Popular Socialista, José
A. Hernández Alamilla del Partido Socialista de los Trabaja-
dores y Roberto Jiménez López del Partido Socialista Unifi-
cado de México (Diario de Tabasco, 1982).
Por su formación política González Pedrero llegó a Tabasco
por decisión del Presidente de la República, para ser candi-
dato a Gobernador de su partido, y resultó ganador. La ex-
pectativa tradicional por arraigo y poderío local, que señalaba
como siempre que sería tal o cual candidato, se rompió con
el esquema de la llegada de un tabasqueño que no residía en

140
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Tabasco (Reveles, 2000). De esta manera se vieron favoreci-


dos de inmediato en la entidad particularmente el Partido
Socialista de los Trabajadores y el Partido Popular Socialista.
Un indicador se encuentra en la asignación de diputaciones
plurinominales, como se verá a continuación.
En el caso de las curules de representación proporcional,
en 1980 se asignaron 2 al PPS. Tal distribución de curules
se mantuvo en 1983; en 1986 consiguió un diputado de
representación proporcional, al igual que un diputado para el
PST; en 1989 se asignaron 3 diputados para el PPS, y 2 para
el Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional. Es hasta
1992, en que el PRD y el PAN se ven beneficiados con dos
diputados cada uno, y dos para el PFCRN (Haddad, 1996).
Entre las elecciones de 1979 y 1982, los partidos que más
avanzaron con propuestas de candidatos fueron el PST y el
PAN, dado que el primero pasó de 5 a 17 planillas para al-
caldes y el PAN, a pesar de que no presentó en las dos elec-
ciones candidatos, pasó de cero a 10 fórmulas de diputados.
Por su parte el PPS manifestó una tendencia más uniforme y
el Partido Comunista Mexicano-Partido Socialista Unificado
de México en el registro de diputados disminuye.

141
Los partidos políticos en Tabasco

Cuadro No. 7
Diputados electos por el principio de representación proporcio-
nal1980-1982

Fuente: elaboración propia con base en el Catálogo Político Electoral 1962-1994 Instituto
Estatal Electoral.

En las elecciones para conformar el Congreso local de la


L Legislatura (1980-1982), el Partido Popular Socialista ob-
tiene diputados electos por el principio de representación
proporcional para la primera y segunda circunscripción, así
como regidores por el mismo principio de representación
proporcional inaugurando así un sistema de partidos, en
donde el PRI es virtualmente el ganador (Cedeño & Caste-
llano, 1994).
En las jornadas electorales estatales se elegiría candidato
a gobernador, candidatos a diputaciones federales, locales y
presidentes municipales. Para las elecciones de Diputados
Federales para el periodo 1983-1987, el PAN presentó can-
didatos en los cinco distritos:

142
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Cuadro No.8
Partido Acción Nacional. Candidatos a diputados federales

Fuente: elaboración propia con base en el Catálogo Político


Electoral 1962-1994 IEE.

3.3 Participación en las elecciones federales 1983-


1987
La contienda en Tabasco para diputados federales y senadores
se dispuso entre 76 candidatos propietarios y suplentes, los
postulados fueron sostenidos por seis partidos políticos sin
contar con la lista de los diputados plurinominales.

Cuadro No. 9
Presencia de los partidos en las elecciones a Diputados Federales
1983-1987

Fuente: elaboración propia con base en el Catálogo Político Electoral 1962-1994 IEE

143
Los partidos políticos en Tabasco

Entre 1982 y 1985, en términos de procesos federales, la


población empadronada en Tabasco creció en un 22.2 %, sin
embargo, la cifra de votantes efectivos decreció en número
totales en 15 mil 753.
Los datos oficiales en 1982 señalan que en 1982 sufraga-
ron en números redondos 327 mil y en 1985 sólo lo hicieron
311 mil ciudadanos. Esta situación, aunada al abstencionis-
mo, orilló a que el índice de evasión al voto se disparara de
28.5 a 47.2 %.

Cuadro No.10
Candidatos a Senadores1983-1987

Fuente: elaboración propia con base en el Catálogo Político Electoral 1962-1994 IEE.

En estas elecciones para diputados federales los candida-


tos del PRI resultaron electos de acuerdo con la siguiente vo-
tación:

144
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Cuadro No. 11
Partido Revolucionario Institucional
Diputados Federales electos (1983-1987)

Fuente: elaboración propia con base en el Catálogo Político Electoral 1962-


1994 IEE.

La característica de 1985 es que del total de la votación


de los cinco distritos federales en que se divide la entidad, el
PRI disminuye su votación y la oposición tiende a mostrar
avances fragmentados sin considerarse una alternativa real,
como lo muestra el siguiente cuadro:

Cuadro No.12
Comparación de votos para diputados federales 1982- 1985

Fuente: Jaguar, febrero 2, 1988, p. 3. Con base en datos de la Comisión


Estatal Electoral.

145
Los partidos políticos en Tabasco

3.4 Elecciones locales 1982-1985


En las jornadas electorales estatales se eligieron en el mes
de noviembre: gobernador, congreso local y ayuntamientos.
Como candidato a Gobernador el PRI nominó a Enrique
González Pedrero y fue registrado el 25 de agosto a partir de
la postulación que hiciera la CNC.
El apoyo de los tres sectores fue hecho público por los
dirigentes de los sectores campesino, obrero y popular, dipu-
tado Víctor M. López Cruz, Diputado Andrés Sánchez Solís
y Óscar Priego Gallegos respectivamente.
3.4.1 Elecciones para gobernador
En las elecciones para gobernador el PRI realizó cambios en
su comité directivo para adecuarse a la campaña por la gu-
bernatura. El titular del Ejecutivo estatal Leandro Rovirosa
Wade y conforme a las disposiciones señaladas en la Ley Es-
tatal de Organizaciones Políticas, se aportaron 5 millones de
pesos como apoyo a los trabajadores electorales con miras a
las elecciones del 14 de noviembre.
Se consideró que el PRI como el PST alcanzaron un mi-
llón 2560 mil pesos cada uno, en tanto que el PPS, un millón
de pesos y el PAN y el PSUM la cantidad de 750 mil pesos
cada uno, como prerrogativa de los partidos.
Los candidatos a la gubernatura registrados fueron por el
PRI: Enrique González Perrero, PPS Ramón Ramírez Con-
treras, PST José Ángel Hernández Alamilla y PSUM, Rober-
to Jiménez López. Durante su campaña electoral González
Pedrero hizo hincapié en revitalizar los comités seccionales en

146
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

la entidad como condición para garantizar elecciones demo-


cráticas y que debía recurrirse a la consulta directa a las bases
para la asignación de cargos de elección popular. Buscó así
ejercer el poder en forma diferente a la tradicional, con el fin
de otorgarle mayor legitimidad a su futuro gobierno.
Tomando en cuenta el padrón electoral que inscribió a
442 mil 54 ciudadanos en la elección para gobernador, el
PRI obtuvo 289,159 votos.
Del resto de los partidos el que más votación obtuvo fue
el PPS con 6,185 sufragios según la Comisión y progresiva-
mente el PST, el PSUM y el PAN.
3.4.2 Elecciones para diputados y presidentes mu-
nicipales
El 13 de septiembre, en el Teatro Esperanza Iris de Villaher-
mosa, Pedro Ojeda Paullada, Presidente del PRI nacional,
tomó protesta a los aspirantes a candidatos a presidencias
municipales y diputados, en esta ocasión registraron candi-
datos el Partido Socialista Unificado de México y el Partido
Socialista de los Trabajadores.
El Partido Popular Socialista propuso candidatos a alcal-
días en: Balancán, Cárdenas, Centro, Comalcalco, Huiman-
guillo, Jalapa, Jonuta, Macuspana, Tacotalpa, Teapa, y Teno-
sique, en total 11 municipios.
Presentaron candidatos a diputados locales en los siguien-
tes municipios:

147
Los partidos políticos en Tabasco

Cuadro No.13
Candidatos a diputados locales PPS

Fuente: elaboración propia con base en el Catálogo Político Electoral


1962-1994 IEE.

En cuanto a los 17 ayuntamientos con planillas formadas


por ocho regidores propietarios, ocho suplentes, contendie-
ron 752 candidatos, 212 por el PRI, 176 del PPS, 272 del
PST y 32 del PSUM. Se esperaba la votación de 447, 509
ciudadanos empadronados, mismos que depositarían su voto
en las 912 casillas establecidas en la entidad.
De los candidatos a ingresar al Congreso del Estado par-
ticiparon 144 en total: 34 del PRI, 20 del PAN, 34 del PPS,
21 del PSUM y 34 del PST.
Respecto a los diputados de mayoría relativa, la votación
se generó a favor del PRI y a continuación para los candidatos
del PPS, PST Y PSUM, en ese orden para las representacio-
nes proporcionales, nuevamente ganó el PRI, en segundo lu-
gar, el PPS y con el 7.02 % de la votación total, lo sumaron el
PST, PAN y PSUM y finalmente los regidores, la tabla quedó
con el PRI a la cabeza, luego el PST, que obtuvo mayor apoyo
en Cárdenas y Macuspana y luego el PAN y PSUM.

148
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

En esta Legislatura por primera vez una sesión del Con-


greso del Estado fue presidida por el vicepresidente de la Le-
gislatura por el mes de diciembre, Ander Pérez de la Cruz,
diputado por el PPS de la primera circunscripción plurino-
minal.
En Cárdenas el ayuntamiento estuvo integrado por dos
regidores propietarios y suplentes de representación propor-
cional propuestos en los comicios por el Partido Socialista de
los Trabajadores, además de los regidores de mayoría relativa
pertenecientes al PRI.
3.4.3 Las elecciones de 1985 y el Congreso local:
renovación de la LII Legislatura
La reforma al Artículo 115 constitucional permitió el surgi-
miento de una participación creciente, la cual debía organi-
zarse en forma equilibrada, al interior del PRI se observaba
una tendencia a las divisiones.
Por ello, para la formación de los cuadros políticos en los
municipios se centraron en una depuración y actualización
del padrón del partido y la organización de los comités sec-
cionales.
Se estableció que para la elección de candidatos en el caso
de la selección de diputados, se recurriría al sistema de con-
venciones distritales y en el caso de los aspirantes a alcaldes
una selección directa por la vía de elecciones internas super-
visadas por los comités seccionales.
Entre los primeros resultados, se supo que tan sólo el Co-
mité Municipal del Centro, con sede en Villahermosa, de

149
Los partidos políticos en Tabasco

acuerdo con datos de sus 86 seccionales habrían registrados


alrededor de 100 mil militantes.
El PRI para elegir candidatos a presidentes municipales,
determinó un proceso de selección interna mediante el siste-
ma de consulta directa a las bases militantes.
Este método consistía en que los priistas registrados en
el padrón del partido, eligieran mediante el voto secreto y
directo a sus candidatos a las alcaldías.
Para ello el Comité Ejecutivo Nacional designaría delega-
dos en cada uno de los municipios para conducir y desarro-
llar el proceso. Paralelamente, se revisó junto con todas las
organizaciones, el padrón de militantes en cada municipio y
se llevó a cabo una intensa campaña para verificar la afiliación
y reafiliación partidista.
En el municipio del Centro se postuló un solo candidato
el Dr. Amador Izundegui, mientras que, en el municipio de
Cunduacán, fue el lugar donde se integró la lista más grande
con 13 posibles candidatos, situación inédita en la vida elec-
toral de la entidad.
Sin embargo, la intención de González Pedrero de fortale-
cer el PRI, estimulando procesos internos de consulta directa
a las bases (González, 1987) en la postulación de candidatos
a la mitad de su periodo no gozó de la respuesta esperada,
puesto que los grupos locales mostraron resistencias y obs-
táculos.
El poco tiempo de selección de candidatos a presidentes
municipales para las elecciones locales de 1985 generó sus-

150
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

picacias de que el propio Gobernador decidiría, de ahí que


la idea no se concretara en la democratización del PRI o de
su gobierno. Finalmente, en el proceso de consulta directa a
las bases de los 17 municipios sólo en 7 se consideró que la
disputa por las alcaldías había adquirido alguna forma de di-
visión pero no por el arraigo de los posibles candidatos, sino
por la presencia de fuertes intereses económicos.
La efervescencia política se evidenció en los municipios de
Balancán, Emiliano Zapata, Huimanguillo, Jalpa de Méndez
y Jonuta. La lista oficial de los candidatos fue publicada el 10
de septiembre, sin ninguna impugnación y resultaron electos
en esta contienda electoral, los siguientes:

Cuadro No. 14
Alcaldes electos por el principio de mayoría relativa 1986-1988

Fuente: elaboración propia con base en el Catálogo Político


Electoral 1962-1994, IEE.

151
Los partidos políticos en Tabasco

Una característica constante de la vida en las entidades


priistas fue la movilidad política de las dirigencias de los
sectores que se reciclaban, interrumpían sus funciones para
dedicarse a las actividades electorales, cargos de elección po-
pular, y posteriormente a la administración pública, tal es el
caso:
• El diputado de la LI Legislatura, Rodolfo Jiménez Da-
masco, quien se desempeñó como presidente del Comité
Directivo Estatal del PRI y después solicitó licencia para
sumarse al grupo de precandidatos a la alcaldía de Jalapa.
• El diputado Freddy Chablé, presidente de la Gran Comi-
sión de la Cámara solicitó licencia a su responsabilidad
como diputado para aspirar a la presidencia de Macus-
pana.
• Los diputados Darwin González Ballina, Heberto Ca-
brera Jasso y Carmen Sánchez Jiménez, también solici-
taron licencia.
• En este sentido, rindieron protesta el 31 de septiembre
de 1985 cuatro suplentes como nuevos diputados pro-
pietarios: José Manuel Zurita Oropeza, Mario Marín
Canepa, Saturnino Olán Hernández y Víctor Méndez
Martínez, de los distritos de Jalapa, Balancán, Emiliano
Zapata y Nacajuca.
• Alcaldes que buscaron una diputación fueron Gustavo
Rosario Torres y Josué Xicoténcatl Sánchez, quienes se
retiraron de sus cargos al frente de ayuntamientos para
buscar la postulación como diputados a la LII Legisla-
tura.

152
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Por otra parte, en relación a los partidos de oposición,


sólo alcanzaron regidurías. En Tacotalpa, dos partidos políti-
cos asumieron el porcentaje necesario para que se les asigna-
ran regidores de representación proporcional, siendo tan solo
una regiduría la correspondiente a dicho municipio, obteni-
da por el PST al obtener el mayor número de sufragios.

Cuadro No. 15
Regidores electos por el principio de representación proporcional
1986-1988

Fuente: elaboración propia con base en el Catálogo Político Electoral 1962-1994, IEE.

El PRI obtuvo en 1985 un enorme incremento de votos


en los municipios de Cárdenas y de Centro (Villahermosa),
podría decirse que este partido fincó su avance total en estos
dos distritos, ya que la votación sumada le daba arriba de 50
mil votos en cada tipo de elección, y después en 1991, cons-
tituyen la derrota del PRI.

153
Los partidos políticos en Tabasco

Cuadro No. 16
Votación del PRI. Nivel de elección: Alcalde.

Fuente: elaboración propia con base en Cedeño del Olmo, “Las elecciones en Tabasco y la pug-
na por la gubernatura 1988-1994” en Revista Mexicana de Ciencias Políticas y Sociales
No. 161 julio-septiembre de 1995, México FCPYS UNAM, Cuadro No. 4.

De acuerdo con Cedeño del Olmo esta votación da como


resultado lo siguiente:
• En el municipio de Centro, donde siempre han surgido
candidaturas de unidad por el PRI, la votación se incre-
mentó en un 63.9 % y en Cárdenas en más de 200 %, lo
que ofreció un cambio extraordinario.
• Paralelamente en la votación de 1985 el PRI perdió votos
en seis municipios para los dos tipos de votación (alcal-
días y diputaciones), en tanto que se presentó un aumen-
to poco significativo en otros dos distritos de acuerdo al
siguiente cuadro.

154
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Cuadro No. 17
Municipios con decremento de votación del PRI.
Nivel de elección: alcaldes.

Fuente: elaboración propia con base en el Catálogo Político Electoral 1962-1994, IEE.

En cifras totales con respecto a la elección de 1982, el PRI


perdió 12 mil 580 votos en elección de alcaldes y 9 mil 147
votos para diputados.
En forma general las cifras indican que, pese al aumento
de la votación absoluta del partido, en términos reales perdió
votantes, ya que de 274 mil 258 votos obtenidos en 1982
para regidores, le representó en ese entonces el 61.9% de un
padrón electoral que estaba compuesto por 442 mil 509 vo-
tantes.
Sin embargo, un trienio después, con 332 mil 748 votos,
sólo logró alcanzar el 56 % de una población empadronada
de 590 mil 485.
Lo mismo sucedió con la elección de diputados, donde
bajó de 59.2 a un 55.5 % a pesar de que la votación pasó de
262 mil 034 a 328 mil 493 votos. Esto quiere decir que pese
a los cambios en los métodos de selección de candidatos no

155
Los partidos políticos en Tabasco

se garantizó un aumento sustancial en la votación para elegir


alcaldes y diputados.
Por otro lado, se dio el caso, bajo esta condición de con-
sulta directa, que el candidato a diputado obtenía más votos
que la postulación para presidente municipal; esto sucedió
en cuatro distritos, en tanto que en las elecciones de 1982
ocurrió en seis distritos; resultó recurrente tal situación en
Cárdenas y Cunduacán.
Una vez establecidas las planillas, dos días después se afec-
taron las convenciones distritales del PRI en cada municipio
en donde por el sistema tradicional de negociación entre sec-
tores se eligieron a los candidatos a diputados para integrar
la LII Legislatura.
Los partidos que postularon candidatos fueron siete: PAN,
PPS, PST, PSUM PARM, PDM y por supuesto el PRI. El
día de las elecciones se logró la votación del 60% del padrón
electoral de un promedio de 520 mil votantes.
Entre 1982 y la elección del trienio posterior 1985, el PRI
y el PAN manifestaron la siguiente votación:

Cuadro No. 18
Votación para diputados

Fuente: elaboración propia con base en el Catálogo Político Electoral 1962-1994, IEE.

156
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

El proceso electoral abrió diversas posiciones del sistema


local de partidos, por un lado permitió un campo de acción
a dos partidos políticos, el PDM y el PARM, lo que muestra
que se trata de alternativas limitadas y en realidad carentes de
vinculaciones significativas de participación cotidiana que se
expresara a su vez en un importante respaldo electoral.

Cuadro No. 19
Diputados electos por el principio de representación proporcio-
nal 1986-1988

Fuente: elaboración propia con base en el Catálogo Político Electoral 1962-1994, IEE.

Y por otro lado, al iniciar tendencias que tienen un distin-


to grado de aceptación entre la sociedad civil, tales como los
casos del PPS, PST y PSUM, este grupo de partidos resulta
una variable determinante en la negociación política local.
El PAN quedó marginado de la lucha política y con serias
dificultades para volver a incrementar su votación local, pues
su posición se demeritó desde mediados del año previo a la
elección. El PRI no experimenta grandes avances en zonas
muy localizadas y lo cual era de suponer tendería en el futuro
a complicarse. Sin embargo, esos espacios no tendieron a

157
Los partidos políticos en Tabasco

cubrirse por otros partidos en lo inmediato. Las posibilida-


des de acción conjunta de los partidos PST, PPS y PSUM e
incluso con el PMT, no fue posible pese a los argumentos
comunes y que trascienden el ámbito electoral. Sin embargo
el PST en la realidad se comportó como una suerte de aliado
del PRI al ser receptor de las inclinaciones a la izquierda del
PRI.
La experiencia política de cada partido de oposición en
esa elección resultó aislada y poco articulada por regiones.
El Socialista Unificado de México y Auténtico de la Revolu-
ción, por su parte, mantuvieron una postura discreta, donde
el primero dio por hecho que se registraría un avance del
PST como la opción que supo canalizar el descontento (ar-
gumento que también compartió el PMT) sin comprometer
las expectativas de sus propios alcances. Sin embargo éste no
muestra variación en sus zonas de influencia conservándose
como en 1982: un partido estable de crecimiento mínimo.
No obstante, no debe subestimarse por los sistemáticos
intentos de mayor penetración y de capacidad de negocia-
ción. No sólo ante los triunfos electorales, sino también de
gestión de diversas demandas de la población. El sistema de
control del PRI mostró cierta vulnerabilidad ante otras op-
ciones como es el caso del PST, que declaró adjudicaciones
de triunfos en los municipios de Macuspana, Tacotalpa y Na-
cajuca, donde afirmaban tener constancias de irregularidades
como para pedir la anulación de las votaciones.
El PST mostró que podía convertirse en una opción cana-
lizadora del descontento contra la administración municipal
y, de hecho, intentó afianzar su posición desde las elecciones

158
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

federales al hacer pública la noticia de que el voto plurinomi-


nal de la importante capa sindical petrolera sería para ellos.
Por su parte el dirigente sindical y a la sazón también alcalde
de Macuspana, no objetó esta suposición y sí en cambio le
acarreó al PRI mayores problemas al tomarse la conflictiva
decisión para elegir candidato a la diputación respectiva.
El otro caso impugnado fue el de Tacotalpa, por el arrai-
go de ciertas formas de dominación política de grupos tradi-
cionales poco aptos para la asimilación hacia nuevas formas
de renovación. Este tipo de presiones políticas posibilitan
el cambio de la población hacia posturas intermedias que,
sin alejarlos del PRI, sea una opción para canalizar la incon-
formidad. Por ende, la vulnerabilidad relativa está en razón
directa al tipo de antecedentes socio-políticos que confluyen
hacia un determinado tipo de partidos.
3.5 Reforma Electoral de 1987
Por otra parte la LII Legislatura aprobó el Código Electo-
ral del Estado de Tabasco, el primero de julio de 1987, por
decreto No. 0578. Con este ordenamiento electoral que-
da abrogada la Ley electoral promulgada el 24 de marzo de
1979.
De tal forma que la elección de diputados por el princi-
pio de mayoría relativa y por el principio de representación
proporcional a partir de la LII Legislatura del Congreso, la
elección de ayuntamientos y la del gobernador, para los pe-
riodos de 1989 a 1991 y de 1989 a 1994, respectivamente,
iniciarían el nuevo calendario a partir del segundo miércoles
del mes de noviembre de 1988.

159
Los partidos políticos en Tabasco

Las características más relevantes del Código Electoral son


las que a continuación se enumeran:
• La derogación del procedimiento para la obtención del
registro de un partido político condicionado a la vota-
ción;
• La notificación de la integración y funcionamiento de los
organismos electorales;
• El cambio de la fecha electoral de domingo a miércoles
declarando no laborable;
• La modificación de los procedimientos de cómputo re-
duciendo considerablemente los periodos entre el día de
la elección y el de publicación de los resultados;
• De la ampliación de las garantías de los partidos políticos
y candidatos durante toda la campaña electoral;
• La ampliación de un sistema de funcionamiento público
para sus actividades, de tal forma que para las elecciones
de 1988 el financiamiento se distribuiría a los partidos
tomando en consideración los resultados electorales co-
rrespondientes a dicho proceso electoral a partir de la se-
gunda anualidad del 3 % correspondiente a 1987;
• La creación de un Tribunal de lo Contencioso Electoral
dotado de autonomía e imparcialidad para resolver las
anomalías que pudieran presentarse en las elecciones.

Los magistrados que lo integrarían serían designados por


el Congreso del Estado a propuesta de los partidos
políticos. Dotado de autonomía completa, el tribunal
sería competente para determinar la legalidad y
el cumplimiento de los procesos y las observaciones de las

160
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

normas electorales. Por otra parte, en la asignación de


diputaciones y regidurías plurinominales, se observan las
siguientes reglas:
• No podrán tener derecho los partidos que obteniendo el
51 % de más de la votación estatal efectiva y su núme-
ro de constancias de mayoría relativa representaran un
porcentaje del total de la Cámara, superior o igual a su
porcentaje de votos:
• bien, que obteniendo menos del 51 % de la votación
estatal efectiva y su número de constancias de mayoría
relativa fueron iguales o mayor a la mitad más uno de los
miembros de la Cámara.
• Si ningún partido obtiene el 51% de la votación estatal
efectiva y ninguno alcanza, con sus constancias de mayoría
relativa, la mitad más uno de los miembros de la Cámara,
al partido con más constancias de mayoría le serán
asignados diputados de representación proporcional, hasta
alcanzar la mayoría absoluta de la Cámara.

Para el caso de las regidurías se observarían las siguientes


normas:

• En los municipios con población menor o igual a cien


mil habitantes se asignaría la regiduría de representación
proporcional al partido que habiendo obtenido al menos
el 1.5 % de la votación, obtuviera una votación superior
a los demás partidos;
• o bien en los municipios con población superior a cien
mil habitantes se asignaran las dos regidurías al partido
que obtuviera al menos el 1 % de la votación.

161
Los partidos políticos en Tabasco

Tales modificaciones supondrían en la renovación a par-


tir de la LIII Legislatura 1989-1991, una participación más
plural a la vista de todos los partidos políticos. De esta for-
ma, aparte de los 17 diputados de mayoría, uno por cada
municipio de la entidad, la cifra de plurinominales en las dos
circunscripciones pasó de 4 a 8 curules, de las cuales en la
elección siguiente se asignaron 4 al PRI, 2 al PPS y 2 al PST.
Para hacer frente a las próximas elecciones, el PRI pu-
blicó en 1987 su estructura en sus Cuadernos Seccionales,
señalando que tiene constituidos diecisiete Comités Muni-
cipales, asentados en cada una de las cabeceras respectivas y
cuenta con unos mil cincuenta y nueve comités seccionales
que representan la prolongación del PRI en cada comunidad,
ejido, ranchería o colonia, estableciéndose como los órganos
de dirección seccional.
En cuanto a su estructura sectorial, el sector agrario era
representado por la Liga de Comunidades Agrarias y Sin-
dicatos Campesinos, afiliada a la Confederación Nacional
Campesina, que agrupaba a noventa y nueve organizaciones:
ejidales, comunales, rurales, agrícolas, ganaderas ejidales y
cooperativas de producción agropecuaria.
Asimismo, el sector obrero contaba con la Federación de
Trabajadores de México, afiliado a la Confederación de Tra-
bajadores de México, que aglutinaba a ciento cuarenta y un
sindicatos de trabajadores de las diversas ramas de la produc-
ción de bienes y servicios. Una Federación de Organizaciones
Populares, que representaba al sector popular, afiliada a la
Confederación Nacional de Organizaciones Populares, que
agrupaba a ciento sesenta y ocho organizaciones de profesio-

162
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

nales y técnicos, taxistas, locatarios, camioneros, trabajadores


no asalariados, trabajadores al servicio de la administración
pública federal, estatal y municipal, pequeños propietarios,
maestros y empleados bancarios. (Cuadernos de los Seccio-
nales).
3.6 El Frente Democrático Nacional
Sin embargo, no se debe dejar de lado la influencia e impor-
tancia que los sucesos políticos nacionales han reflejado en la
participación política tabasqueña. La desigualdad social que
había contribuido en los setenta a profundizar la crisis eco-
nómica, concurrió también, en los ochenta, cuando la des-
igualdad se exacerbó a generalizar en el país la crisis política
del régimen.
La tensión entre las dos principales corrientes del sistema
–la neoliberal y la nacionalista– se fue intensificando confor-
me la crisis se profundizaba. A lo largo de 1987, durante el
proceso de selección del candidato del PRI a la presidencia,
esta tensión entre las dos tendencias llegó a su límite.
La naturaleza del sistema político mexicano había propi-
ciado desde sus inicios en 1928 que la lucha por el poder
político se diese siempre dentro de los cauces del Partido.
Era inevitable que así fuera, puesto que la extensión de sus
alianzas, la pluralidad ideológica de sus filas, todo ello hacía
que las opciones dentro del PRI a pesar de tener un mismo
origen, fueran reales.
Al mismo tiempo, la amplitud del grupo en el poder, in-
cluyendo dentro de su seno todo tipo de tendencias, redujo
necesariamente el espacio político de la oposición.

163
Los partidos políticos en Tabasco

El principal partido de la derecha, el Partido Acción Na-


cional (PAN), constituido en 1939 para hacer frente al pro-
yecto cardenista, resultó superfluo después de que se estre-
chara el contacto del Estado con la burguesía, los partidos de
izquierda, a su vez por el dogma doctrinario, fueron neutrali-
zados por un régimen corporativo que los desvinculaba de las
organizaciones populares.
La permanencia del Partido en el poder requería de una
política que reflejara la variedad ideológica de sus miembros,
la diversidad en el origen de sus alianzas; al inclinar la balanza
a favor del capital, Miguel de la Madrid no supo dar juego
dentro del sistema a los diferentes elementos que lo llevaron
al poder.
Con la elección del candidato oficial en 1987 se corría
entonces el peligro de que ese mismo grupo gobernante se
prolongara en el poder, afectando los intereses, públicos y
privados de quienes habían sido marginados.
Fue entonces cuando parte de la tendencia nacionalista
del partido en el gobierno, la Corriente Democrática, se in-
tegró como grupo de presión dentro del sistema (Garrido,
1993). La designación del candidato del PRI a la presidencia
ha sido en México, como se sabe, responsabilidad, en última
instancia, del Presidente de la República. Su decisión, sin em-
bargo, no puede tener un carácter arbitrario. Más allá de su
propia voluntad están los intereses colectivos del sistema que
necesita ventilarse, cambiar.
La elección del candidato del Partido no era nunca im-
puesta por el presidente en turno sin consultarla, sin nego-

164
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

ciarla –aunque no se hiciera nunca de manera pública– con


los diferentes grupos de presión que ejercían su fuerza no
nada más desde el Partido sino desde la misma sociedad. Cár-
denas, por ejemplo, se comprometió con la candidatura de
Ávila Camacho ante la embestida de la derecha; más tarde,
Alemán que quiso incluso reelegirse, debió comprometerse
también con la de Ruiz Cortines.
El mismo López Mateos representó a su modo un com-
promiso entre dos miembros del gabinete que se disputaban
la candidatura del Partido. Con la designación de Salinas de
Gortari el 4 de octubre de 1987 se optaba, sin embargo, de
forma aparente por la continuidad. El candidato del PRI
Carlos Salinas de Gortari a las elecciones de 1988 era visto
por la opinión pública como el artífice de la política de aus-
teridad en el gobierno del presidente Miguel de la Madrid.
La austeridad había dañado sobre todo a los trabajadores
y a las clases medias. Entre 1982 y 1988, de acuerdo con el
Centro de Estudios para América Latina, los salarios de los
obreros mexicanos, al caer en un promedio de 50 %, fueron
más castigados en esos últimos seis años que los de cualquier
otro país latinoamericano. Por ello, el sector obrero del PRI,
antes de que se designara a Salinas de Gortari, había querido
vetar su candidatura, sin embargo, una vez designado, el sec-
tor se disciplinó (por lo menos formalmente) a la voluntad
de su partido. No así en cambio la Corriente Democrática.
Las dos figuras más prominentes del movimiento, Cuauh-
témoc Cárdenas y Porfirio Muñoz Ledo, se desvincularon pú-
blicamente del PRI para lanzar su candidatura independiente
pocas semanas después. El rompimiento de la disidencia con

165
Los partidos políticos en Tabasco

el Partido en víspera de elecciones no era un fenómeno nuevo


para el régimen. En 1940, 1946 y 1952 con Almazán, Padilla
y Henríquez Guzmán, hubo rupturas importantes.
Ninguno de los tres obtuvo, no obstante, como aspiran-
tes independientes, resultados satisfactorios frente a los del
candidato presidencial durante los comicios: 5.72, 19.33 y
15.87 fueron sus respectivos porcentajes.
Estas cifras demostraron la debilidad de la oposición, en
particular de la disidencia, no porque reflejaran el voto popu-
lar, sino porque fueron sintomáticas de la relación de fuerzas
con la que contó el partido del Estado, manipulando impu-
nemente a beneficio suyo los votos que habían sido deposi-
tados en las urnas.
En 1988, por una parte, con un PRI fracturado por la
división interna, y la difícil relación del gobierno con el mo-
vimiento obrero, por otra, el capital financiero seguía especu-
lando contra la moneda, a la política de concesiones del pre-
sidente Miguel de la Madrid, todo ello se daba en el contexto
de la más severa crisis económica desde los años treinta, y la
postulación de Cuauhtémoc Cárdenas como candidato a la
Presidencia de la República.
La imagen de México en el exterior estaba gravemente
deteriorada. El régimen era visto como corrupto, ineficien-
te, antidemocrático y a pesar del acercamiento ideológico, la
misma relación con los Estados Unidos era tensa.
El gobierno y por extensión simbiótica, el PRI, llegaba
debilitado a la contienda electoral. Su adversario, en cambio,
no dejaba de crecer. Cuauhtémoc Cárdenas, hijo del general

166
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Lázaro Cárdenas, representaba para el pueblo mexicano la


reencarnación del nacionalismo revolucionario que le había
procurado al país sus mejores conquistas.
El movimiento cardenista contaba con una sociedad civil
organizada, enriquecida por la movilización estudiantil de
1968, por la experiencia del terremoto de 1985; una socie-
dad civil que había sabido mantenerse al margen del corpo-
rativismo.
El PRI subestimó su importancia y no pudo evitar que
Cárdenas utilizara el registro de los llamados “partidos pa-
raestatales” con la postulación del Partido Auténtico de la Re-
volución Mexicana (PARM), del Partido Popular Socialista
(PPS), del Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción
Nacional (PFCRN) y de tantas organizaciones más.
La Campaña del Frente Democrático Nacional, como se
llamó a la coalición, fue creciendo a grandes pasos: el 12 de
febrero, en San Pedro de las Colonias, el 18 de marzo en el
Zócalo, el 26 de mayo en la Universidad Nacional Autónoma
de México, fueron todas fechas definitorias en el desarrollo
del movimiento.
Por otra parte, unas semanas antes de las elecciones, He-
berto Castillo, candidato por el Partido Mexicano Socialista
(PMS), declinó su candidatura a favor de Cárdenas. Las ban-
deras cardenistas habían conseguido, de tal suerte, no sólo
fracturar al PRI, sino ganarse la adhesión de todos los parti-
dos situados de centro a izquierda.
Nadie sin embargo logró imaginar, aún entonces, lo que
pasaría el 6 de julio. El PRI ganó las elecciones y el Frente

167
Los partidos políticos en Tabasco

Cardenista se constituyó en la segunda fuerza electoral, sin


dejar de afirmar que se había cometido fraude electoral.
El voto emitido el 6 de julio fue sin duda un voto que
buscaba más justicia en la gestión económica del gobierno,
más democracia en el quehacer político del país.
Un importante porcentaje del voto cardenista, sobre todo
aquel que venía de los sectores más beneficiados por el régi-
men, los burócratas del Distrito Federal, los ejidatarios de la
Laguna, los petroleros de Poza Rica, Veracruz, no fue pues
un voto necesariamente en contra del sistema –como pudo
serlo por ejemplo el voto por el PAN– sino en contra de su
desviación neoliberal.
El rechazo político a un programa de gobierno se convir-
tió así, imperceptible pero inevitable en un rechazo ideológi-
co a los fundamentos del sistema. Votar y defender el voto
fueron de tal modo dos gestos políticos distintos. La capital
el centro neurálgico del país, manifestó con su voto en las
urnas y su presencia en las calles, la voluntad de que se diera
un cambio en esta dirección.
En los comicios federales de 1988, señala Reveles (1995),
se expresaron cuatro hechos esenciales:
• El partido de Estado padeció una aguda crisis interna.
• Se confirmó la madurez del lugar electoral el PAN.
• El sorprendente respaldo popular conseguido por la can-
didatura de Cuauhtémoc Cárdenas sentó las bases para la
constitución de un nuevo partido en el corto plazo.

168
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

• Se constató la subsistencia de los partidos llamados pa-


raestatales, de aparente oposición pero en realidad subor-
dinados al gobierno.
3.6.1 El Frente Democrático Nacional en Tabasco
Sin embargo el PRI no esperaba una oposición real con el
surgimiento y fortalecimiento del FDN y luego del PRD. En
Tabasco el FDN surgió con el liderazgo de Andrés Manuel
López Obrador y Darwin González Ballina, propiciado por
las coyunturas electorales, y asume las siguientes caracterís-
ticas:
• El fenómeno cardenista de 1988 impactó decisivamente
en la vida de la entidad;
• Se expresó inmediatamente en una actividad electoral,
capaz de ocasionar serios problemas a un PRI considera-
do sin oposición real;
• Surge una forma de liderazgo que, proviniendo del mis-
mo PRI, se radicalizó para buscar un cambio en las for-
mas de aplicar la democracia electoral.
• En un plazo muy corto disputa con gran éxito uno de
los aspectos clave en la actividad partidista, en cualquier
entidad, como son las presidencias municipales, y
• Logró acumular elementos que contribuyeron a la crisis
de la que resulta la separación de un gobernador.
El PRD se desarrolla bajo circunstancias muy propicias
por tratarse de un momento electoral y por la paulatina des-
articulación corporativa del PRI; si bien en su antecedente
como FDN postula a López Obrador a la gubernatura, en los

169
Los partidos políticos en Tabasco

hechos el Frente estaba organizado con otros partidos, entre


ellos el PST, el PARM y el PPS. El inusitado crecimiento
del FDN coinciden los estudiosos, en cuanto a que los acon-
tecimientos federales, aunados a la situación del PRI estatal
con las formas de intermediarismo desarticuladas y la selec-
ción del candidato a la gubernatura con enormes obstáculos,
coadyuvaron a un cambio en la orientación de la clientela
electoral (Reveles, 1989).
Para Cedeño del Olmo la capacidad de control del PRI
en Tabasco se vio contrarrestada por los siguientes motivos:
1. Nunca había tenido que competir por una clientela elec-
toral que era prácticamente cautiva y desde el trabajo de
sus seccionales hasta sus sectores, su capacidad de ges-
tión se consideraba eficiente ya que era favorecido por
los mismos funcionarios públicos surgidos de las filas del
partido.
2. La inconformidad de los propios miembros del PRI,
unos porque consideraron insuficiente el proyecto de
González Pedrero para activar el PRI y otros, por la for-
ma en que fueron tratados por el gobernador Neme Cas-
tillo, quien utilizó los mecanismos de consulta para elegir
candidatos en procesos electorales. Ciertamente el PAN
y el PPS normalmente registraban planillas sin ninguna
relación con una difícil realidad dada su escasa vincula-
ción al medio.
El Partido Comunista Mexicano inicia en forma focaliza-
da su actividad en 1975, primero como un pequeño grupo,
particularmente en la zona de la Chontalpa, y hasta en los

170
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

años ochenta cuando tiene un desarrollo debido al continuo


contacto con seguidores de diversas agrupaciones provenien-
tes de otras zonas del estado que contaban con diversas tra-
yectorias y experiencia política, pero López Obrador, en ese
momento podía unirlos.
Vale la pena señalar que López Obrador había dejado la
dirección del PRI cuando fue nombrado por el gobernador
en agosto de 1983, oficial mayor del gobierno.
En principio aceptó el enroque, pero a las pocas horas
renunció al cargo. A partir de entonces se mantuvo sin nin-
guna actividad partidista. Días después de transcurridas las
elecciones federales, López Obrador se entrevista con Cuau-
htémoc Cárdenas, al tiempo que campesinos e indígenas de
los municipios de Centro y Nacajuca lo proponen como can-
didato a la gubernatura por el FDN.
Los partidos políticos con registro en Tabasco decidieron
apoyar a López Obrador, retirando en ese momento su leal-
tad opositora al PRI. El acuerdo señalaba que el PARM,
PMS, PFCRN y PPS, postulaban la candidatura de López
Obrador (Reveles, 1989).
Los dirigentes estatales de los partidos integrantes del
Frente, para sostener la nominación renunciaron a sus can-
didaturas: Gonzalo González Calzada por la fórmula PMS
y PARM, Román Ramírez del PPS y Ángel Zamora del PF-
CRN. Sin embargo, ninguno de ellos parecía lograr avances
en términos del número de votos. En cambio apoyando a
López Obrador en una unidad de intereses tácticos, se asegu-
raban los registros correspondientes.

171
Los partidos políticos en Tabasco

La presencia de López Obrador propició la disidencia de


otros miembros dirigentes del PRI. Renunciaron pública-
mente Laureano Naranjo Cobián, ex secretario general del
PRI y Darwin González Ballina, ex secretario general de la
Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos y
a la sazón candidato a diputado federal electo del PRI, para
sumarse a los apoyos de la candidatura frentista.
El Frente Democrático Nacional y después el Partido de
la Revolución Democrática se convirtió en un importante
bastión del neocardenismo y se estableció en el sistema de
partidos de Tabasco.
3.7 Conclusiones
• La vida en la cúpula del PRI en Tabasco hasta los años
ochenta no difiere de la tendencia que experimenta este
partido a nivel nacional, en cuanto a su interacción y
dependencia del presidencialismo o de los gobernadores
en los estados y también en cuanto a que los cambios en
su Comité Directivo, son más rápidos cuando en proce-
sos electorales está de por medio el cambio sexenal en el
Poder Ejecutivo. El papel omnipresente del presidencia-
lismo en la entidad no sólo se circunscribe a su partido,
sino a la vida política tabasqueña.
• En Tabasco, históricamente se ha dado una actividad
partidista única centrada en el PRI, y es hasta fines de
los ochenta que tiende a cambiar esta situación.
• Con estas experiencias electorales en el sistema de parti-
dos se identifica: un partido dominante, el PRI, un gru-
po de partidos con alcances limitados PPS y PST y un

172
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

tercer grupo compuesto por organizaciones que tienden


al estancamiento o incluso al retroceso tal es el caso de los
partidos PSUM, PAN PDM y PARM.
• La tensión entre las dos principales corrientes del siste-
ma –la neoliberal y la nacionalista- se fue intensificando
conforme la crisis se profundizaba, surgiendo así la Co-
rriente Democrática y dando paso a la constitución de
un nuevo partido político.

173
Capítulo 4

Las elecciones de Tabasco:


1988- 1994

En el presente capítulo se aborda un análisis sobre los parti-


dos, cuyo enfoque es la participación electoral donde candi-
datos, campañas y resultados electorales son objeto de estudio
de textos sobre procesos electorales. En el análisis prevalece el
enfoque cuantitativo. Las condiciones de los procesos electo-
rales representan un punto vital en la vida política del estado
de Tabasco, puesto que reflejan la acción democrática de la
sociedad. Para ubicar el contexto de las elecciones del periodo
de estudio se establecen algunas variables socioeconómicas.
4.1 Economía y política tabasqueña
Tabasco como parte integrante de México no escapa al mo-
delo neoliberal, al contexto en que está inmerso, ha vivido
una serie de transformaciones sociales, políticas, económicas
y culturales causadas por la explotación en gran escala de los
hidrocarburos. Estos cambios son perceptibles claramente
en los siguientes indicadores económicos y demográficos, así
como en la inserción de Tabasco en la vida del país:
• La alta marginalidad que influye en la cultura política no
es aplicable para el estado de Tabasco señala el ex gober-
nador Enrique González Pedrero, quien expresa: “Dicen

174
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

los teóricos que, en general, la primera condición para


que un individuo se interese por la política es tener re-
suelto el problema de la subsistencia. Tal vez porque la
naturaleza ha sido tan pródiga que, según el dicho, “en
Tabasco el que no trabaja come y el que trabaja se hace
rico”, quizá porque somos gente de tierra caliente; acaso
por tradición histórica: la política es ocupación y preo-
cupación favorita de los tabasqueños” (González, 1987).
• La importancia relativa que el pueblo había dado a la
política, se relaciona en parte con las promesas de cam-
paña, la esperanza que está latente en la población de que
mejorará la realidad presente; con la influencia de los me-
dios de comunicación que promueven la participación
política; la falta de entretenimiento y recreación (más en
el campo que en la ciudad), donde la idea de la política
se convierte en recibir al candidato, como una novedad,
como parte de un evento de entretenimiento.
• En Tabasco con una población registrada en 1990 de 1,
501, 744 habitantes, la tasa de ocupación1 alcanzada de
69.9 significa que del total de la población económica-
mente activa, 70 de cada 100 personas estaban ocupadas,
es decir, que por lo menos trabajaron una hora en la se-
mana previa al levantamiento censal (INEGI, 1992).
• En relación a la educación en un rango de 15 a 65 años
y más, se registra una población de 865, 525 habitan-
tes, de los cuales 754, 206 saben leer y escribir; y el res-
to 109,406 personas eran analfabetas. Sin embargo 1,
913 habitantes no especificaron su condición (INEGI,

1 La tasa de ocupación representa a las personas de 12 y más años que realizaron alguna actividad
económica al menos durante una hora en un periodo de referencia. Se considera también a los que
no trabajaron, pero sí tenían trabajo porque mantuvieron el vínculo con su empleo u ocupación.

175
Los partidos políticos en Tabasco

1992). Por otra parte, es mayor el número de analfabetis-


mo en las mujeres, representan el 64 %. Los municipios
con mayor analfabetismo son el Centro, cuya cabecera
municipal es la ciudad de Villahermosa representa el 17
% de analfabetismo, indicador contradictorio, dada la
cercanía con la capital del estado, le siguen en porcenta-
jes Cárdenas, Huimanguillo, Comalcalco y Macuspana
(INEGI, 1992). Vale la pena señalar que Villahermosa,
capital del estado, Cárdenas, Comalcalco y Tenosique
son los principales polos de concentración de población
en la entidad. En 1990, 25.2 % de la población estatal
residía en alguna de esas cuatro ciudades.
• La mayoría de las localidades tabasqueñas eran peque-
ñas: de las 2, 475 localidades censadas en 1990, 76.67
% contaban con menos de 500 habitantes y agrupaban
sólo 15.9 % de la población; en contraste, en el 23.4 %
restante de las localidades vivían 84.1 % de los habitantes
de la entidad. La gran cantidad de localidades pequeñas
y de difícil acceso representa un reto para las acciones
orientadas a satisfacer las demandas educativas, de salud
y otros servicios públicos.
• En relación a la marginación de Tabasco, se identifica
que los mayores niveles de mortalidad y fecundidad se
asocian a condiciones socioeconómicas desfavorables.
Este vínculo generalmente se traduce en un círculo vi-
cioso entre pobreza y rezago demográfico y se observa
con claridad en Tabasco, una de la entidades con mayor
marginación en 1990 al ocupar el décimo octavo lugar
en fecundidad y mortalidad infantil (Consejo Nacional
de Población, 1996).

176
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

• El nivel de la mortalidad infantil es muy sensible a varia-


ciones en las condiciones de vida de la población. En los
municipios de Tabasco se observa una estrecha relación
entre la tasa de mortalidad infantil y el grado de margi-
nación. En 1990, Tacotalpa y Centla presentaban tasas
de mortalidad infantil superiores a 46 decesos por cada
mil habitantes, magnitud que superaba en 29 % la media
estatal (35.6 por mil nacimientos) y en 27 % el promedio
nacional (36.2m por mil).
• Existe también un estrecho vínculo entre los niveles de
fecundidad y de marginación. En los municipios de Ta-
basco, conforme disminuye el grado de bienestar, au-
menta el número de hijos. La descendencia mayor de
3.9 hijos por mujer, que prevalece en los municipios de
Balancán, Tacotalpa, Huimanguillo y Jalpa de Méndez
equivale al nivel registrado en el país en 1985.
En otros temas, como el comportamiento político del
electorado y el freno al desarrollo de ciertos movimientos de
protesta, la línea de causalidad no es tan nítida ni tiene un
carácter univoco. Sin embargo, no creemos que sea posible
desligar ambos fenómenos.
El petróleo, es pues, la contradicción fundamental de Tabas-
co, puesto que es la causa de un crecimiento económico de gran
magnitud, al tiempo que se erige como el principal bloqueo para
la modernización económica tabasqueña y una de las principales
generadoras de conflictos sociales. La vida pública tabasqueña
se caracteriza –y no creemos que cambie en el futuro– por
su nivel de conflictividad social. El origen de esta afirmación
es el deterioro económico, ambiental y social que viven los
tabasqueños.

177
Los partidos políticos en Tabasco

La crisis del modelo petrolero, combinada con la baja


competencia de los productos agrícolas en los mercados in-
ternacionales genera una situación socioeconómica precaria
para amplios sectores de la población. Esta situación se ha
agravado por las medidas de política económica, como la
apertura comercial que crean vulnerabilidad en la economía
de México.
De acuerdo con las interpretaciones sobre el fenómeno
petrolero, señala Cedeño del Olmo se podría considerar que
en un lapso de 1973 a 1991, se enmarca un cambio del auge
al decremento de la aportación tabasqueña a la producción
media nacional.
Estas fluctuaciones a su vez se pueden valorar a la luz de
las tendencias en la movilización y del conflicto socio-polí-
tico que desembocaron en crisis (Cedeño, 1999). En Tabas-
co el sector que más ha crecido en los últimos años ha sido
el terciario, con el surgimiento de actividades comerciales y
de servicios; el que menos se ha desarrollado y ha sido más
castigado es el agrícola, con una fuerte disminución en sus
ingresos.
En un estado rural, la actividad petrolera no solo ha rele-
gado las actividades tradicionales, ha afectado tierras y aguas
de campesinos y pescadores. La contaminación provocada
por la explotación petrolera ha desencadenado una sucesión
de movimientos reivindicativos y de protesta por parte de los
sectores afectados a lo largo de las últimas décadas.
El repunte internacional de los precios del petróleo, el
descubrimiento de nuevos yacimientos, el subsecuente finan-

178
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

ciamiento que la banca internacional otorga a México y el


inicio de un periodo sexenal con la llegada de López Portillo
a la presidencia de la República, permitieron impulsar en for-
ma inmediata y acelerada la explotación de zonas petroleras.
Tabasco, se convirtió instantáneamente en el principal
productor de crudo en el país, pero con una serie de efectos
colaterales que en lo político y social se manifestó en los si-
guientes comportamientos que se asocian directa o indirec-
tamente:
1. Cambios en la estructura productiva del estado. Ma-
nifiesta sobre todo en las características de la superficie
cultivada, así como en el volumen y precios de los prin-
cipales productos de la entidad, en este caso el cacao, el
plátano y la copra.
2. Cambios en los volúmenes de la inversión pública federal
y en los presupuestos anuales del gobierno estatal.
3. Una rápida modificación en las condiciones de nego-
ciación del gobierno estatal tendiente a buscar una ma-
yor canalización de recursos. La acción gubernamental
se caracteriza en una primera etapa 1977-1982 por los
conflictos y las presiones del gobernador contra PEMEX,
centrada en la obtención de recursos por vía de impues-
tos.
4. Una segunda etapa que coincidió con el sexenio de En-
rique González Pedrero (1983-1987) donde la acción
gubernamental se tradujo en la búsqueda de soluciones
políticas negociadas, mediante la adecuación de un me-
canismo tripartita, cuyos resultados se manifestaron en

179
Los partidos políticos en Tabasco

importantes apoyos para programas de inversión en el


marco de un incremento en la movilización rural.
5. Por otra parte Rovirosa Wade y González Pedrero lo-
graron un “trato preferencial” por parte del presidente
en turno, situación que no lograron Trujillo y Salvador
Neme2.
6. Se realizaron cambios en las estructuras de la administra-
ción pública estatal que tendieron a la centralización de
poder de decisión en el gobernador.
7. Continuos apoyos a productores organizados en las aso-
ciaciones para neutralizar los efectos de la movilización
sobre todo entre los pequeños y medianos productores.
8. Nuevas formas de organización, fundamentalmente en
el medio rural de las zonas de actividad petrolera, que
se enmarcan en situaciones de movilización y conflicto
grupal.
En resumen, recordando los procesos históricos, los úl-
timos años de la década de los cincuenta representaron los
inicios del cambio regional, afianzados en los setenta, pues
Tabasco se convirtió en un escenario de enclave donde se ex-
ploraron y ensayaron diversas políticas de desarrollo, situa-

2 José Salvador Neme nació en Villahermosa, Tab., el 22 de octubre de 1931. Abogado (1955)
por la Escuela Nacional de Jurisprudencia de la UNAM, al graduarse presentó las tesis “La relación
del trabajo. Su evolución” Incursionó desde joven en la política. Fue asesor jurídico del gobierno
de Tabasco (1955) y secretario del Ayuntamiento del Centro (1956-1958). Desempeñó después
varios cargos en el Departamento del Distrito Federal. Impartió clases en la Facultad de Derecho de
la UNAM, de 1967 a 1968 y de 1982 a 1983. Fue Secretario de Gobierno de Tabasco, durante el
mandato de Leandro Rovirosa Wade (1977-1982), senador por su entidad y presidente de la Gran
Comisión, y gobernador de Tabasco (1989-1992). En 1991 le fue otorgada la presea al Mérito en
la Administración Pública. Diccionario Enciclopédico de Tabasco, Tomo II, Gobierno del Estado
1994, pp. 465-466.

180
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

ción que prevaleció con claridad hasta mediados de los años


ochenta y de ahí el futuro es incierto.
A partir de las elecciones presidenciales y locales de 1988
la consolidación del Frente Democrático Nacional y poste-
riormente el Partido de la Revolución Democrática ha sido
un elemento nuevo que se ha mantenido creciente en las elec-
ciones.
La presencia geográfica del PRD se concentra en sus orí-
genes en ciertos municipios petroleros de la Chontalpa (Cár-
denas, Macuspana y Nacajuca), lo cual permite suponer que
gran parte del crecimiento de la oposición se ligó a los cam-
bios introducidos por la dinámica petrolera.
Después de un importante impulso del gobierno federal
a Tabasco, se dio una menor atención, por lo que se observa
un acelerado desgaste de las formas de gestión con la conse-
cuente pérdida de legitimidad y gobernabilidad.
La parte más visible de estas limitaciones normalmente se
desarrollan con vínculos hacia los procesos electorales y hacia
el sistema de partidos que por cierto relacionan nuevamente
los elementos nacionales con la dinámica regional, auspician-
do la consolidación de partidos políticos y paralelamente,
problemas de legitimidad en el ejercicio gubernamental.
Ciertamente, el hecho de que en Tabasco no existiera una
organización política capaz de organizar las resistencias y dar
forma a las demandas y descontento social que se canaliza al
margen del gobierno y el PRI local, se explicase por la versa-
tilidad de PRI de adaptarse a los cambios y por otro parte el
corte autoritario y hasta represivo de las decisiones adoptadas

181
Los partidos políticos en Tabasco

ante estas demandas. Por ende, en Tabasco en los últimos


años se modificaron las formas de movilización social y los
procesos políticos que algunas veces desembocan en conflic-
tos, esto implicó para el PRI una importante experiencia de
maduración de los procedimientos de selección interna, aun-
que es persistente la presencia de condiciones de funcionalis-
mo y para otras agrupaciones una nueva expansión.
4.2 Las elecciones presidenciales en Tabasco
La historia, las tradiciones, la movilización social y los grupos
de poder, han dado a cada estado, una identidad diferente
que se expresa en la organización política, en la presencia de
partidos de oposición y en las preferencias electorales, de ahí
el interés en el análisis histórico y geográfico.
En el periodo 1964 a 1994 señala Gómez Tagle (1996) se
han producido cambios importantes en el sistema de parti-
dos que se reflejan parcialmente en las estadísticas electorales
oficiales. Las elecciones de 1988 representan un caso en toda
la serie estadística del PRI, ha sido la única vez en que un par-
tido de oposición ha ganado con más del 50 % de los votos
en las elecciones federales en cinco estados del país.
La influencia cardenista se extendió a muchas entidades
que no tenían una tradición de oposición, como Baja Cali-
fornia Sur, Sinaloa, Nayarit, Colima, Michoacán, Oaxaca y
Jalisco en el Pacífico; Guanajuato, Tlaxcala y Querétaro en
el centro; Veracruz y Tamaulipas en el Golfo; y en el norte
Chihuahua y Coahuila.
Sin embargo, trece entidades mantuvieron su lealtad por
voluntad o por fuerza al partido oficial, y sirvieron para com-

182
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

pensar la baja votación del candidato priista. En el centro:


Puebla, Hidalgo, Querétaro, San Luis Potosí, Zacatecas y
Durango; y en el norte, Nuevo León y Sonora. En el sureste
fueron: Chiapas, Campeche, Yucatán y Quintana Roo, y por
supuesto Tabasco. La historia electoral de Tabasco en el pe-
riodo posrevolucionario demuestra que ha sido una entidad
de reserva de votos incondicionales del partido oficial.
Las únicas excepciones, al igual que a nivel nacional, han
sido los comicios de 1952 y 1988. En la contienda de 1952 el
18 % del electorado tabasqueño expresó sus preferencias por
Henríquez. Tras este descalabro, se recuperan con López Ma-
teos que obtiene el 98.85 % de los sufragios, Díaz Ordaz el
99.33 % y desde Luis Echeverría hasta Miguel de la Madrid,
los candidatos oficiales alcanzaron porcentajes superiores al
91 %.
En 1988 el candidato del PRI, Carlos Salinas de Gortari,
obtiene 199, 166 votos, es decir, el 74.3 %, mientras que el
aspirante del FDN, Cuauhtémoc Cárdenas, obtiene 53, 449
votos, lo que significa que recibe el apoyo de casi el 20 %
de los tabasqueños; Clouthier registra 14, 078 votos, lo que
representa el 5.2 %. Lo mismo cabe decir de las elecciones
a senadores, a gobernador, diputados locales y a presidentes
municipales (Nassif & Molinar, 1990).
La omnipresencia del PRI en el estado sugería que la úni-
ca posibilidad de hacer política era en las filas del partido
oficial. Sin embargo, la idea del cambio desde dentro en el
sentido de la modernización y la democratización del PRI
ha sido uno de los temas dominantes de la reciente historia
de Tabasco. Para el investigador Leonardo Curzio son tres las

183
Los partidos políticos en Tabasco

coyunturas en las que Tabasco ocupa un lugar importante en


el debate nacional:
• El fallido intento de Carlos A. Madrazo por modernizar
el partido oficial.
• La propuesta del gobernador Enrique González Pedrero.
• La experiencia emanada de la XIV Asamblea Nacional
priista que generó dos conflictos internos de grandes
proporciones: la selección de la dirigencia del PRI y la
designación de los candidatos a presidentes municipales
en 1991.
Las transformaciones operadas en el campo político elec-
toral tabasqueño a partir de 1988, muestran un patrón de
comportamiento diferente del plano nacional. Como se
mencionó anteriormente con el 20 % obtenido por Cárde-
nas, en Tabasco al igual que el resto del país entraba a una
nueva fase.
Hasta aquí las tendencias electorales a nivel nacional y
local funcionaban con la misma lógica. Posteriormente, las
elecciones de Tabasco no admiten un análisis nacional. Las
particularidades regionales, las coyunturas electorales de cada
estado y los candidatos adquieren una relevancia especial.
En Tabasco, el candidato a gobernador por el FDN, An-
drés Manuel López Obrador, supera por poco más de 6 mil
votos la marca de Cárdenas. En este sentido, la elección a
gobernador de 1988 marca un camino para la opción carde-
nista en Tabasco, que poco a poco, se separará de la tendencia
nacional (Curzio, 1994).

184
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

4.3 Las elecciones locales de Tabasco 1988-1991


Los acontecimientos políticos más relevantes en Tabasco, son,
sin duda, la celebración de las elecciones del 9 de noviembre
de 1988, las del 17 de noviembre de 1991(ver cuadro No.
20) y la de 1994. Las primeras no sólo eran importantes a
nivel local, sino también la última elección importante de la
administración de De la Madrid y la primera que al nuevo
equipo gobernante le tocaría asumir, un equipo que enarbo-
laba la bandera de la “modernidad” como idea fundamental
de su quehacer político.

Cuadro No. 20
Votaciones en Tabasco en las elecciones de 1988 y 1991

Fuente: elaboración propia con base en las votaciones presidencial y federal de 1988:
Gómez Tagle, Silvia. Las estadísticas electorales de Reforma Política, México, El Colegio de
México, pp. 200-215. Para la votación local, Secretaría de Gobernación: Dirección de Pro-
cesos Electorales. Los resultados de 1991 corresponden al IFE publicado en Mira núm. 81,
septiembre de 1991.

185
Los partidos políticos en Tabasco

Por su parte, la reforma electoral de 1994 y las elecciones


a las que dio marco significaron un punto de inflexión en el
proceso político nacional, puesto que a pesar de su inequidad
supusieron una transformación del espacio electoral en Mé-
xico, dadas las transformaciones en las elecciones locales de
algunos estados. Sin embargo Tabasco parece ser la excepción
que confirma la regla.
4.3.1 Las elecciones para gobernador
Las elecciones del 20 de noviembre para gobernador gene-
raron un conflicto, que lleva a considerar que las elecciones
tabasqueñas son un rezago respecto a la dinámica nacional
(Curzio, 1998). Tabasco, contaba con 1, 133 secciones elec-
torales a nivel federal y 1, 744 casillas, cinco distritos federa-
les y 17 locales. El Congreso local se componía de 17 diputa-
dos de mayoría relativa y 12 de representación proporcional.
Como ya se ha señalado al abrirse el proceso de sucesión
del presidente De la Madrid se produjo una significativa rup-
tura en el seno del PRI. En Tabasco la ruptura fue encabezada
por el carismático ex dirigente del PRI local Andrés Manuel
López Obrador.
Sin embargo, en relación a las deserciones de priistas, el
comportamiento de Tabasco respecto al plano nacional es di-
vergente. En el plano nacional, se observa a partir de 1988
una reducción del nivel de enfrentamiento dentro del partido
oficial. Y en cambio los escindidos del PRI adquirían en muy
poco tiempo, un peso específico en la política regional.
La candidatura de Salvador Neme Castillo fue muy con-
trovertida, amplios sectores priistas manifestaron su incon-

186
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

formidad, pero a fin de cuentas se impuso la voluntad pre-


sidencial. La particularidad de Tabasco es que la actividad
subterránea se va a prolongar.
Sin embargo, lo que para el PRI fue una elección ejem-
plar, no lo fue para la oposición, periodistas y observadores.
El FDN recibió menos de la mitad de los registros de repre-
sentantes que pidió.
En más de 200 casillas se expulsó a los representantes del
Frente. Cierre anticipado de casillas, padrón electoral con
una excrecencia de casi 50 mil votantes, actuación de bri-
gadas volantes, robo de urnas, no entrega de credenciales de
elector, boletas anuladas, etcétera.
Las irregularidades fueron tan numerosas que los parti-
dos de oposición solicitaron anulación de las elecciones. El
jueves 24 de noviembre, con la ausencia de los diputados de
la oposición, el Congreso del estado aprobó el dictamen que
declaraba gobernador electo a Salvador Neme Castillo.
El decreto 0871 publicado en el Diario Oficial de la Fede-
ración con fecha 26 de noviembre de 1988 señala que el H.
Congreso del Estado calificó las elecciones celebradas el 9 de
noviembre de ese año, cuyos resultados fueron los siguientes:
• Salvador José Neme Castillo postulado por el PRI obtu-
vo 205, 518 votos.
• Andrés Manuel López Obrador3, postulado por los Parti-

3 Andrés Manuel López Obrador. Nació en Macuspana, Tabasco el 13 de noviembre de 1953.


Licenciado en ciencias políticas y sociales por la UNAM, fue delegado del INI en Tabasco y presiden-
te del Comité Directivo Estatal del PRI, cargo al que renunció en agosto de 1983. En 1988 aceptó
la invitación del Frente Democrático Nacional para participar como candidato a la gubernatura de

187
Los partidos políticos en Tabasco

dos Popular Socialista, Mexicano Socialista, Frente Car-


denista de Reconstrucción Nacional y Auténtico de la
Revolución Mexicana obtuvo 56, 015;
• Miguel Augusto Castillo Pérez postulado por el Partido
Demócrata Mexicano obtuvo 1,229 votos.
Neme asume el poder para el periodo 1989-1994; sin em-
bargo el debate sobre la democratización del PRI siguió cues-
tionándose a través de conflictos y fueron el desencadenante
de la caída de su gobierno:
• A tan sólo seis meses de iniciada la administración, Víc-
tor Manuel López Cruz, dirigente estatal del PRI propo-
nía que los comités seccionales se convirtieran en gestores
de las demandas sociales, que además vigilaría la hono-
rabilidad de los funcionarios estatales, que estaba siendo
fuertemente cuestionada. Esperaba renovar democrática-
mente a los 1899 comités seccionales del PRI en los 17
municipios.
• No se dio la negociación de grupos para integrar un go-
bierno plural, participativo y representativo de las dife-
rentes corrientes que conformaban la estructura del po-
der en Tabasco.
• Desde los primeros días de gobierno empezaron los en-
frentamientos con los miembros del equipo del anterior
gobernador bajo el lema de la “tabasqueñización”, puesto
que el gobernador Enrique González Pedrero provenía

Tabasco. Después de las elecciones, se afilió al Partido de la Revolución Democrática y organizó los
comités directivos estatales y municipales. Ha sido nuevamente postulado por el PRD como candi-
dato a la gubernatura para el periodo 1995-2000. Es autor de los libros: Los primeros pasos: Tabasco,
1810-1867, Del esplendor a la sombra: la República restaurada, Tabasco 1867-1876 y Fraude electoral en
Tabasco. Diccionario Enciclopédico de Tabasco, Tomo II, Gobierno del Estado 1994, pág. 401.

188
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

del centro y además traía consigo a colaboradores que se


insertaron en espacios que tradicionalmente habían sido
para los políticos nativos.
• Neme sostenía serias divergencias con poderosos intere-
ses del centro de la Federación.
• Otros conflictos, que van desde la violación de derechos
humanos hasta la corrupción del equipo gubernamental,
cabe destacar los siguientes:
» Separación de López Obrador y otros conocidos
miembros del PRI.
» Disputa por el control estatal de la CTM.
» La censura pública y detallada del gobierno de
Neme Castillo por la ex corriente crítica.
» Represión al grupo Antorcha Campesina de la co-
lonia Las Gaviotas, Sur de Villahermosa.
» Finalmente la guerra de declaraciones y acusacio-
nes entre los dos contendientes y sus grupos
a la dirección estatal del PRI: Carlos Prats Pérez
y Jesús Madrazo Martínez de Escobar (Curzio,
1994).
Las tensiones se hicieron evidentes, ante el control de la
estructura local del partido en los primeros días de 1991. El
partido oficial exhibía sus límites.
El enfrentamiento entre Jesús Madrazo y Carlos Prats por
el control del PRI local, evidenció los intereses de grupo. La
disputa por el control del aparato no sólo implicaba a grupos

189
Los partidos políticos en Tabasco

locales, la pugna se trasladaba al centro político del país y se


interpreta como un enfrentamiento Neme-centro. Tras mu-
tuas acusaciones de fraude entre los contendientes, la eviden-
cia del fracaso democratizador no podía ocultarse, a tal grado
que se declaró nulo el proceso electoral por parte del CEN
del PRI, la designación por parte del centro, de dirigentes
interinos como Amador Izundegui y protestas airadas con
Luis Donaldo Colosio, Presidente del PRI.
Sin embargo, no se pacificaron los ánimos. La inestabili-
dad, producto de las pugnas y los múltiples enfrentamientos,
hacía que el PRI cambiara constantemente de coordinador
regional.
A Izundegui lo sustituye Mixuiero quien resulta responsa-
ble de las “imposiciones” en la consulta interna para definir
los candidatos oficiales para las elecciones locales de 1991,
segunda fase del fracaso del proceso democratizador del PRI.
Las presiones del Movimiento Popular Priista (MPP) que
integraba a los presuntos afectados por las irregularidades
registradas en los comicios internos, lograron la salida de
Mixuiero, y fue sucedido por Ernesto Miranda, quien ocupó
el cargo menos de un mes. Pocos días antes de las elecciones,
fue designado Jorge Reyes Vides.
4.4 Las elecciones federales de agosto de 1991
En las elecciones federales de agosto de 1991, el PRI con-
siguió la victoria en los cinco distritos federales y en la cir-
cunscripción senatorial. Sin embargo, la perspectiva de las
elecciones locales en noviembre de 1991, restó importancia
al proceso federal de agosto.

190
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

El Frente Democrático Nacional no admite un análisis


nacional. Este partido a nivel nacional, en las elecciones fe-
derales sufre un descalabro, pero en Tabasco, el candidato
a gobernador por el FDN, Andrés Manuel López Obrador,
supera por poco más de 6 mil votos la marca de Cárdenas.
Tras la desintegración de la fórmula FDN y la creación del
Partido de la Revolución Democrática (PRD), este partido
logró en las federales de 1991 elevar su número de votantes,
situándose por encima de los 63 mil votos, es decir, se bene-
fició de un incremento de 10 mil votos sobre los resultados
obtenidos en julio de 1988.
Las elecciones federales de 1991 se desarrollaron en un
marco de tranquilidad, quizás a causa del nuevo padrón elec-
toral y a la nueva credencial con fotografía. También se contó
con un nuevo órgano de procedimientos electorales y una
mayor participación de los partidos políticos.
4.5 Las elecciones de presidentes municipales y los
conflictos
Sin considerar a la democracia política como una forma ra-
cional para resolver los conflictos que se desprenden de la
lucha por el poder político, en la sociedad tradicional como
la tabasqueña existen mecanismos de mediación en las rela-
ciones políticas que sin ser democráticas ofrecen formas al-
ternativas para resolver los conflictos sociales, tales como los
cacicazgos, que se sustentan en relaciones clientelares y de
un intercambio vertical de bienes y servicios. Por otra parte,
también el corporativismo ha permitido el control y la parti-
cipación política (Gómez Tagle, 1993).

191
Los partidos políticos en Tabasco

Cuadro No. 21
Elección de Diputados Federales por el principio de representa-
ción proporcional

Fuente: elaboración propia, comparativo de resultados electorales y participación ciudadana


de las elecciones federales de 1991- 2003 con base en datos de la Dirección Ejecutiva de
Organización Electoral. Dirección de Estadística y Documentación Electoral, IFE México
2004.

La violencia es un ingrediente cotidiano de este tipo de


modelo político, sin embargo, esa violencia no desborda los
contenidos tradicionales, sólo persigue el cambio de lideraz-
go.
Históricamente en la lucha entre caciques, el ganador se
asimila a la estructura de poder existente y no entra en con-
tradicción ni con el PRI local, pues no pone en riesgo su
existencia, aunque así lo parezca por entrar en conflicto, ni
con el sistema político nacional.
No se había reflejado una lucha ideológica ni se buscaba
una opción de poder alternativo. Sin embargo en México, el
modelo tradicional de control político empezó a entrar en
crisis desde los años setenta, y en Tabasco ha sido con el car-

192
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

denismo que se ha ofrecido una alternativa de poder, sobre


todo en el medio rural, donde otros partidos de oposición
como el PPS y el PAN habían penetrado muy poco.
La violencia se presenta como una consecuencia de la in-
dignación moral que se produce en los municipios donde se
modifican los principios de dominación legítima, sin cam-
biar las formas de control político.
Por un lado, se ha producido un desgaste de las estructuras
tradicionales de poder y de relaciones clientelares; por el otro,
se han suscitado conflictos en el interior del PRI porque no
se han atendido las demandas de democratización interna,
y finalmente, por la aparición de nuevos partidos políticos
capaces de convocar a sectores de la sociedad que no habían
encontrado una representación política alternativa.
Un ejemplo de los conflictos al interior del PRI se presen-
tó días antes de las elecciones federales, cuando se destapó el
primer enfrentamiento de carácter local, ante la selección de
candidatos a los gobiernos municipales.
Para el municipio del centro con cabecera municipal en
Villahermosa, en aras de la posibilidad de que se eligieran
candidaturas de consenso o de unidad, Raúl Ojeda Zubieta,
presidente con licencia de la Asociación de Hoteles y Moteles
de la entidad, se postula como aspirante y para ello pedía que
de acuerdo con las disposiciones de la XIV asamblea del PRI,
se consultara a las bases del partido en todos los municipios.
Por su parte Salvador Neme Castillo, proponía la can-
didatura de consenso, mientras que sectores de su partido
denunciaban que tras esa fórmula se esconde la nominación

193
Los partidos políticos en Tabasco

personal de un favorito. El PRI postuló en los municipios


de Jonuta y Centro candidatos de unidad. En las restantes
quince localidades se verificaron elecciones primarias en las
que participaron 50 precandidatos.
Los priistas vivieron en carne propia, cuando el goberna-
dor quiso imponer a sus candidatos; los opositores a Neme
Castillo fueron “rasurados” del padrón priista e inclusive su-
frieron violencia al ser reprimidas manifestaciones de protes-
ta.
Tras unos polémicos comicios, se empezaron a registrar
disturbios, marchas y declaraciones de diversa intensidad en
casi todos los municipios:
• En Teapa, las votaciones se suspendieron por actos de
violencia y finalmente la comisión dictaminadora del
PRI decidió que el triunfador era Llergo Heredia. En res-
puesta 100 militantes del PRI tomaron las oficinas del
Comité Directivo Estatal para protestar. Un sector de los
priistas que apoyaban a Juan José Roca Wade formaron
el Frente Cívico Teapaneco (FCT) para postularlo frente
al candidato oficial Llergo Heredia.
• Miembros del PRI de Comalcalco protestaban por las
irregularidades verificadas en el proceso de consulta a la
base.
• En Cárdenas los simpatizantes de Morales Gamas ocu-
paron la sede municipal del partido para protestar por
la postulación de Fernando Valenzuela, presuntamente
impuesto por el secretario de gobierno de Neme. La di-
sidencia priista forma en Cárdenas el Frente Cívico Car-
denense.

194
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

• Francisco Alcudia Arellano presentaba documentación


que acreditaba su triunfo en Jalpa de Méndez.
• Se registraron disturbios de cierta importancia en Teno-
sique.
• En Nacajuca sucedieron enfrentamientos entre sectores
del PRI inconformes con la candidatura de Mier y Con-
cha.
• Un colectivo de diversos municipios empezaron una
huelga de hambre ante el despacho del líder del PRI na-
cional Luis Donaldo Colosio, en protesta por el fraude.
• Según Milton Lastra él era el legítimo aspirante del parti-
do oficial a la presidencia municipal de Balancán.
Finalmente, los problemas derivados de la consulta a la
base salieron rápidamente de los cauces regionales. Las pro-
testas de los inconformes tabasqueños originaron una mesa
de negociaciones que sesionaba con las autoridades locales
del PRI, el gobernador Salvador Neme, el secretario de ges-
tión social del CEN del PRI Ignacio Ovalle Fernández y el
senador electo Manuel Gurría. Aparentemente la sugerencia
del funcionario del CEN era reconocer los triunfos que se
acreditaban, pero el gobernador se opuso.
En Tabasco se confirma en ese momento lo que Jacque-
line Peschard (1985) señala acerca de los escenarios del PRI:
El régimen electoral mexicano, dominado por el partido
oficial y con una oposición débil, ha hecho que las elec-
ciones sean fundamentalmente competencia de la élite
política, momentos de juego y recambios internos en los
que la ciudadanía sólo ha fungido como sancionadora

195
Los partidos políticos en Tabasco

de las decisiones que sobre el personal político son to-


madas en las altas esferas burocráticas.

Los procesos electorales han desempeñado tradicional-


mente un papel de ritual legitimador del predominio del
PRI, garantizado en gran medida por su propia estructura
corporativa incrustada al aparato estatal y las redes de control
político que ha implantado.
Sin embargo, en Tabasco surgieron límites al ritual le-
gitimador, porque algunos indicadores del sistema político
mexicano se desgastaron, perdiendo credibilidad y con ello,
fuerza legitimadora. La extremada concentración de faculta-
des en el titular del Ejecutivo estatal que otrora fuera fuente
limitante de la eficacia gubernamental, comenzó a mostrar
sus limitantes.
Los conflictos fueron capitalizados por el PRD tanto a ni-
vel de potenciales votantes como a la integración de cuadros
priistas a sus filas, como una actividad constante, sobre todo
en fechas electorales:
• Juan José Roca Wade es postulado por el PRD a la alcal-
día de Teapa. Del PRI se pasan 600 militantes en bloque
al PRD en apoyo a Roca.
• Militantes de Jalpa, simpatizantes de Francisco Alcudia
Arellano, se pasaron al PRD.
• En Cárdenas, ciertos sectores del PRI manifestaron sus
simpatías por Wilson.
La Comisión Estatal Electoral en un dictamen aprobado
el 13 de septiembre por los representantes del PRI, PAN,

196
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

PFCRN Y PPS determinaba que la lista de candidatos a di-


putados locales de representación proporcional del PRD era
improcedente, por las siguientes razones:
• Julieta Uribe Caldera –que encabezaba la lista por la pri-
mera circunscripción– no se había separado en el plazo
oportuno de sus funciones como representante de su par-
tido en la CEE.
• Dorilián Díaz Pérez, número uno de la lista a la segunda
circunscripción, tenía suspendidos sus derechos ciudada-
nos por un proceso.
Para el PRD en el caso de Julieta Uribe había pruebas de
su separación del cargo 90 días antes de la elección y en el
de Díaz Pérez una disposición constitucional federal pasaba
por encima de una disposición de la Constitución del estado,
y por lo tanto, Díaz Pérez estaba facultado legalmente para
integrar la lista.
Esta maniobra política en la que participaron los partidos
políticos que aspiraban a ocupar las posiciones que tocarían
a los candidatos perredistas, se daba en el tiempo límite, de
modo que el PRD no tenía la posibilidad de reemplazar a sus
candidatos. El recurso de revocación interpuesto por el PRD
fue rechazado por la misma CEE.
A fin de no ser descartado de la competencia por curules
plurinominales, el PRD inicia una movilización que debía
culminar con un plantón frente al palacio de gobierno.
En este contexto de gran tensión entre el PRD y la CEE
se produjo una entrevista de Salvador Neme con Andrés Ma-
nuel López Obrador, que según ciertos medios, se hizo a ins-

197
Los partidos políticos en Tabasco

tancias de la Secretaría de Gobernación (Excelsior, 1991). El


resultado de este encuentro fue que ambas partes esperarían
la resolución del Tribunal al recurso de revocación interpues-
to por el PRD. Por lo tanto, el PRD detenía su campaña de
movilizaciones a la espera del fallo.
El Tribunal dio parcialmente la razón a las dos partes. La
decisión ordenaba a la CEE registrar las listas de candidatos
a plurinominales del PRD a condición de que el PRD sus-
tituyera, en 48 horas, a los candidatos inhabilitados, esto es,
Julieta Uribe y Dorilián Díaz. Finalmente el PRD propuso a
Alberto Pérez Mendoza y René Brondo Bulnes como susti-
tutos.
4.6 El éxodo por la democracia
El último episodio electoral que cerró el trienio 1988-1991
fue el Éxodo por la democracia, protagonizado por el PRD
de Tabasco.
Ante las elecciones locales de presidentes municipales,
que revistieron una gran importancia en comparación con
las federales de diputados y senadores, pues para los priistas,
representaron un esfuerzo para hacer quedar bien al PRI.
En Tabasco también hubo grupos de observadores orga-
nizados por la Comisión de Derechos Humanos de Tabasco
(AMDH), y otras 17 organizaciones, no gubernamentales. Se
reunieron 400 observadores voluntarios que pertenecían a 9
de los 17 municipios de Tabasco.
En total se cuidaron 322 casillas (22 %) de las mil 510 ca-
sillas instaladas en el estado. Los ciudadanos fueron excluidos

198
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

del padrón electoral en los municipios donde la oposición era


más fuerte, Por ejemplo, en el municipio de Cárdenas sólo
se empadronó a 46, 000 de 71, 000 ciudadanos potenciales.
Los organismos electorales locales mantenían una estruc-
tura vertical de tal forma que todas las decisiones dependie-
ran del Secretario de Gobierno. No había medios de comu-
nicación masivos totalmente independientes, sólo dieron
información el diario La Verdad del Sureste y un programa
de radio.
El día de las elecciones se descubrieron lugares donde se
cruzaban boletas para “hacer tacos” de votos para el PRI,
había policías disfrazados de civiles votando repetidas veces,
los funcionarios de casillas siempre favorecieron al partido
oficial, había propaganda dentro de las casillas, todas estas
irregularidades se presentaron, entre muchas otras.
A fin de cuentas, los priistas consideraron que los candi-
datos del PRD tenían demasiados votos y entonces se proce-
dió a anularlos en grandes cantidades:
• En Cárdenas el PRI ganó por 440 votos y se anularon 3,
783.
• En Nacajuca fueron anulados 3, 123 votos y el PRI ganó
por 1, 221.
• En Huimanguillo el PRD obtuvo 2, 243 votos, se anu-
laron 3, 324.
• En Macuspana la diferencia entre el PRI y el PRD fue de
4 mil 827 sufragios mientras que el total de votos anula-
dos fue de 5 mil 647.

199
Los partidos políticos en Tabasco

• En Comalcalco se anuló el 22.8 % del total de votos.


• En el municipio de Centro la proporción fue de 16 %.
• En Centla se anuló el 15.1 % de los votos.
Ante estas irregularidades, la protesta comenzó primero
en Tabasco, con mítines y marchas, luego se decidió iniciar
una caminata a la ciudad de México. López Obrador al frente
de cerca de 500 personas inició el “Éxodo por la Democracia”
que recorrió más de mil kilómetros en 51 días de marcha.
Atravesó Veracruz, donde se sumaron los perredistas incon-
formes con el fraude electoral en las elecciones municipales
de Ángel R. Cabada y Jesús Carranza y de San Andrés Tuxtla,
Catemaco y Tezonapa, donde no se reconoció el triunfo de la
oposición (La Jornada, 1991).
El Éxodo llegó al Zócalo de la ciudad de México el 11 de
enero de 1992. Este esfuerzo insólito mereció el reconoci-
miento tanto de la dirección, como de las bases del PRD que
estuvieron presentes con el Éxodo en muchos momentos del
trayecto.
La justicia de sus demandas convocó a miles de ciuda-
danos de muy diversas corrientes políticas. El 11 de enero
estuvieron presentes en el mitin del zócalo la dirigencia del
PAN, del PRD, Salvador Nava, organizaciones civiles y sin-
dicatos. El día 12 se abrió el diálogo con el gobierno, sólo se
logró el reconocimiento del triunfo electoral del PRD en el
municipio de Cárdenas.
Estando fuera de los tiempos electorales y habiendo ago-
tado las formas legales, este asunto se resolvió cuando el

200
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

presidente electo del PRI renunció y nombró un “consejo


municipal” donde quedaron los perredistas que habían sido
electos. En el caso de los demás municipios en conflicto hubo
“arreglos” razonables, los candidatos aceptaron y el Éxodo se
regresó a Tabasco el mismo 12 de enero por la noche.
Por una parte, el gobierno federal preocupado por la go-
bernabilidad y su imagen internacional ante la firma de los
acuerdos de paz de El Salvador en ese mismo mes de enero,
que centraba la atención mundial en México, prefirió reco-
nocer los triunfos electorales de la oposición, tras una serie de
presiones, negociaciones y movilizaciones, a la legitimidad,
lo que evidencia una altísima concentración de poder y un
retraso político.
Por otra parte, quedó demostrado que los resultados y
las decisiones de los órganos electorales carecen de entidad
propia. Su importancia, en todo caso, estriba en que son un
elemento político negociable.
El ordenamiento jurídico e institucional es visiblemente
obviado por el propio gobierno federal, lo cual supone un
reconocimiento del procedimiento irregular de la maquinaria
electoral.
El contenido de los acuerdos entre el PRD y la Secretaría
de Gobernación es el siguiente:
• Cárdenas: consejo municipal plural encabezado por Car-
los Alberto Wilson con otro miembro del PRD y uno
del PRI
• Nacajuca: renuncia de Óscar Mier y Concha e instala-
ción de un nuevo concejo encabezado por un ciudadano

201
Los partidos políticos en Tabasco

Gráfica No. 1
Elecciones de ayuntamiento 1991

ELECCIONES DE AYUNTAMIENTO
1991

200000
PRI
150000 PRD
VOTOS 100000 PAN
PFCRN
50000
PDM
0 PPS
1
PARM
PARTIDOS

Fuente: elaboración propia con base en Reveles Vázquez Francisco, Búsqueda y encuentro de
un liderazgo local: el gobernador Roberto Madrazo y el PRI de Tabasco, en Revista Mexi-
cana de Ciencias Políticas y Sociales, No. 179 Instituto de Investigaciones Sociales, FCPyS-
UNAM.

distinguido (sin partido) acompañado por un miembro


del PRI y otro del PRD.
• Macuspana: renuncia de Carlos Manuel Rovirosa y toma
de posición de un ciudadano respetable y conciliador del
PRI.
En Cárdenas la planilla electa en los comicios del 17 de
noviembre de 1991 fue declarada nula por el Congreso del
Estado, nombrándose un Consejo Municipal integrado por:
Jorge Casanova Rosique, Jesús Noverola Pérez y Marcelino
Mena Bautista. Sin embargo, la marcha organizada por el
Partido de la Revolución Democrática hacia la ciudad de Mé-
xico, dio como resultado una concertación que consistió en

202
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

la sustitución de este concejo municipal, que fungió hasta el


10 de enero de 1992, fecha en que tomó posesión del Ayun-
tamiento, el Concejo Municipal integrado por: Carlos Alber-
to Wilson, Gustavo López Cortázar, ambos del PRD y Roger
Falconi Vera del PRI, quien renunció a su cargo concejal al
día siguiente de la toma de posesión, siendo designado en su
lugar el MVZ José Manuel Ficachi Solano.
Así mismo en Macuspana se sustituyó el Concejo Munici-
pal en la misma fecha, y fue integrado por: Julio César Pérez
Oropeza, José Juan Paz Reyes y Xicoténcatl Romero León.
Los acuerdos de Gobernación suscitaron diferentes reaccio-
nes. En Macuspana, Rovirosa pidió licencia sin renunciar de
modo que el cabildo nombró a uno de los regidores, Raúl
Pérez Hernández. Los mismos priistas denunciaron la ma-
niobra de que se prolongara el “rovirosismo” sin Rovirosa.
En Nacajuca el Concejo Municipal se integró por el Dr.
Roosevelt Gomes Flores de la sociedad civil, Arsenio López
García y César de la Cruz Osorio, ambos del PRD. En Cun-
duacán Enrique Campos Mateos no terminó su periodo y fue
sustituido por el Prof. Gabriel Montejo.
En Emiliano Zapata José Bernat Marín dejó el cargo
por problemas legales-familiares y fue sustituido por el Lic.
Ramón Rodríguez Laynes. En Jalapa Liborio Correa López
solicitó licencia para ocupar la dirigencia de la CNC y fue
sustituido por el Lic. Jesús Torpey Andrade. En Tacotalpa
Antonio Román Álvarez fue destituido sustituyéndolo el
Prof. Gabriel Jacinto Vázquez Cabrera. En Tenosique tam-
bién fue destituido Carlos Paz Contreras, sustituyéndolo Bal-
tazar Vega Fernández.

203
Los partidos políticos en Tabasco

Gráfica No. 2

ELECCIONES DIPUTADOS 1991

PRI
PRD
PAN
PFCRN
PPS
PARM

Fuente: elaboración propia con base en Reveles Vázquez Francisco, Búsqueda y encuentro de
un liderazgo local: el gobernador Roberto Madrazo y el PRI de Tabasco, en Revista Mexicana
de Ciencias Políticas y Sociales, No. 179 Instituto de Investigaciones Sociales, FCPyS-
UNAM.

Las resistencias de los priistas locales de llevar a buen tér-


mino los acuerdos de la ciudad de México, demostraban que
las tensiones entre Neme y la Federación vislumbraban
la caída del gobernador. Por si fuera poco, hay que agregar
los niveles de corrupción que marcaron prácticamente
toda la gestión de Neme.

204
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Finalmente, en junio de 1991, el voto mayoritario del


PRI desechó la petición de juicio político contra Salvador
Neme a quien se acusaba –junto con su equipo– de múltiples
escándalos. Aparentemente, en la compra del Banco BCH
participaron como accionistas del Grupo del Sureste funcio-
narios del poder judicial y del gobierno estatal.
Sin embargo, el 28 de enero de 1992, Salvador Neme
Castillo pidió licencia al Congreso Local para apartarse de

Cuadro No. 22
Regidores electos por el principio de representación proporcional
1992-1994

Fuente: elaboración propia con base en el Catálogo Político Electoral 1962-1994 Instituto
Estatal Electoral

205
Los partidos políticos en Tabasco

sus funciones y aceptar la invitación del Ejecutivo federal a


integrarse a su equipo como Coordinador de Fomento Pe-
cuario de la SARH.
El senador Gurría tomaba el relevo, mejor aceptado por
los priistas tabasqueños. Gurría desempeñó el cargo hasta di-
ciembre de 1994 ya que habiendo transcurrido más de tres
años del periodo de gobierno, la ley no prevé elecciones ex-
traordinarias. Con la salida de Neme del gobierno y la llegada
de un miembro de la oposición a la presidencia del segundo
municipio del estado, la era del Tabasco uniformemente pri-
ista terminó (Curzio, 1994).
Entre 1988 y 1991, los problemas electorales influyeron
en la renuncia voluntaria de cuatro gobernadores: Manzani-
lla en Yucatán, Aguirre en Guanajuato, Zapata en San Luis
Potosí y Neme en Tabasco, y en la de multitud de presidentes
municipales a lo largo de todo el país.
Las sociedades de las entidades federativas donde la pre-
sencia de grupos opositores era una realidad desde hacía 20 ó
30 años, venían asimilando, con más intensidad, el proceso
de evolución de una nueva cultura política donde era evi-
dente que los grupos y partidos de oposición presionaban y
cuestionaban permanentemente al gobierno.
Por lo tanto el gobierno tendía a actuar con mayor cuida-
do y responsabilidad, consciente de cualquier error o abuso
de autoridad, podía ser denunciado abiertamente y poner en
entredicho su imagen y acción gubernamental, con costos
políticos más elevados. Pero no sucedía así en Tabasco, don-
de la acción del gobierno no era cuestionada, o lo es desde

206
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

tiempo muy reciente, con la aparición del PRD en 1988. Sin


embargo, el éxodo de la democracia y otras movilizaciones
representaron avances que delinearon los primeros rasgos de
una cultura política en proceso de evolución, también es que
este proceso se presentó en forma tardía con respecto a otras
regiones del país, debido entre otros, a los siguientes factores
que señala De la Vega Asmitia (1993):
• El aislamiento que sufrió el estado al no contar con me-
dios y vías de comunicación en el centro de la república,
sino hasta 1960 cuando se termina la carretera del Golfo
y Tabasco se integra físicamente al país;
• La ausencia de partidos y grupos de oposición efectivos
durante muchos años;
• Los “caciquismos” heredados desde el garridismo que
originaron una profunda división de la clase política lo-
cal que hoy se traduce en un desafortunado “canibalismo
político”;
• La ausencia notoria de tradición democrática en el esta-
do, pues es hasta el año de 1919 cuando se efectúan en
Tabasco, las primeras elecciones regidas por las normas
de la nueva Constitución Política;
• Y como consecuencia de ello, una actitud pasiva de la
sociedad tabasqueña confiada en que el gobierno habría
de resolver todos sus problemas.
Son algunos elementos que podrían explicar la emergen-
cia tardía de la evolución de una verdadera “cultura política”
en Tabasco, a la que Carlos Sirvent agregaría la población
dedicada a las actividades agrícolas, que es bastante amplia,

207
Los partidos políticos en Tabasco

la educación baja y su marginalidad alta, pero sobre todo es


producto de una ruptura al interior del PRI, que se ha conso-
lidado como proyecto alternativo, en donde Andrés Manuel
López Obrador ha enfrentado el fraude del aparato político
electoral (Reyes, 2002).
Una prueba de ello es la mayor credibilidad en el sistema
electoral y se refleja en la disminución del abstencionismo en
Tabasco, para 1988 el IFE reportó un abstencionismo del 59
%; del 46 % en 1991 y del 26,72 % en 1994.
En Tabasco, ya no se podía hablar más de la democracia
perfecta que señaló Enrique González Pedrero:
Es un lugar común considerar que no puede haber de-
mocracia cuando existe un partido tan fuerte como el
PRI en Tabasco, porque la democracia consiste en la
alternancia de los partidos en el poder. Pero, no por co-
mún, la tesis es menos falsa. Como lo es, también dedu-
cir de esta premisa la conclusión de que hay que hacer
crecer artificialmente a la oposición. O bien, que hay
que esperar a que ésta se fortalezca sola para, entonces,
empezar a hablar de democracia (González, 1987).

4.7 Las elecciones de 1994


En los años noventa se apreció un cambio radical en la geo-
grafía política del país que se reflejó en los resultados electo-
rales, a pesar de las distorsiones que todavía podía sufrir la
voluntad de los votantes por el efecto del control guberna-
mental sobre aspectos importantes del proceso electoral.
Es importante señalar que, en las elecciones de México, en
momentos de crisis como 1959-60; 1986-70; 1982 y 1994

208
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

los resultados electorales oficiales demostraron una votación


mayoritaria a favor del partido en el poder que desde muchos
puntos de vista, fue responsable de esas crisis económicas o
políticas.
Lo que lleva a pensar que ha persistido un control guber-
namental eficiente, sobre todo en elecciones federales; por
lo que los resultados estadísticos no revelaron la verdadera
dimensión de la crisis, ni la voluntad popular, aun cuando
dieron una idea de tendencias históricas muy consistentes: la
disminución de la votación a favor del PRI, la consolidación
del PAN en entidades como Chihuahua, Guanajuato, Baja
California y Jalisco.
El surgimiento de una nueva oposición de izquierda a
partir de 1988 que compitieron con el PRI en sus propios
bastiones: Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Veracruz, Nayarit,
Hidalgo, y por supuesto Tabasco.
La volatilidad del electorado urbano de la ciudad de Mé-
xico y la zona metropolitana, así como de Baja California.
Sin embargo, la elección presidencial de 1994 fue muy ho-
mogénea desde la perspectiva de la votación del PRI y las
diferencias entre los estados se encuentran entre los partidos
de izquierda PRD, PT y el PAN.
En Tabasco 1994 es la cima de un proceso iniciado en
1988 y reforzado en 1991. Los actores, en parte, también
son los mismos; por un lado, el candidato del PRD Andrés
Manuel López Obrador, aunque con mayor capacidad de im-
pacto sobre también más amplios sectores de la población
rural.

209
Los partidos políticos en Tabasco

El avance de la oposición perredista en Tabasco, de 1988


a 1994 triplicó sus votos, al grado que en el último proceso
electoral federal obtuvo alrededor de 205 mil votos, es de-
cir, el mismo número de sufragios con que se supone ganó
Salvador Neme las elecciones locales seis años atrás; por otro
lado, el acusado deterioro del PRI. No sorprende esta reali-
dad dado que la proclamada ideología revolucionaria ha per-
dido empuje no sólo porque los gobiernos no han cumplido
con sus postulados esenciales de justicia social, sino que no es
herencia exclusiva del PRI, puesto que la evocan también los
demás partidos políticos, incluidos los de izquierda.

Cuadro No. 23
Elecciones presidenciales 1994

Fuente: elaboración propia con base en datos del Instituto Federal Electoral.

La votación de los tabasqueños a los tres partidos princi-


pales que contendieron en las elecciones presidenciales y para
el Senado de la República, señalan que el partido ganador fue
el PRI y el PRD se constituyó en la primera minoría (Gon-
zalez, 1998).

210
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Cuadro No. 24
Elecciones de senadores 1994

Fuente: elaboración propia con base en los datos del Instituto Federal Electoral.

Estableciendo una comparación de la votación del PRD


para diputados de mayoría relativa entre 1991 y 1994 se de-
tecta que en 1991 el PRD registró 63, 459 votos y en 1994
alcanzó 205, 364 votos, lo que significa un crecimiento de
1991 a 1994 de141, 905 votos.

Cuadro No. 25
Elecciones de diputados de mayoría relativa 1994

Fuente: elaboración propia con base en datos del Instituto Federal Electoral.

211
Los partidos políticos en Tabasco

Cuadro No. 26
Elecciones de diputados de representación proporcional 1994

Fuente: elaboración propia con base en datos del Instituto Federal Electoral

La política en Tabasco ha adquirido una relevancia ex-


traordinaria desde que en 1988 el PRI dejó de ser el partido
hegemónico en la entidad. Sin duda alguna, después de las
elecciones de agosto, para el PRD lo más importante era ga-
nar la gubernatura de Tabasco en noviembre del mismo año.
En materia de legislación electoral, fue relevante el hecho
de que a tres días de iniciarse el proceso en el estado se creó la
fiscalía de Delitos Electorales, gracias a la enorme presión que
ejercieron algunos partidos de oposición, sobre todo el PRD.
Las reformas hechas al código penal en delitos electorales,
la aprobación de la realización del conteo rápido y la parti-
cipación de los observadores electorales, todos ellos fueron
mecanismos novedosos.
Los tres candidatos más fuertes en Tabasco, Roberto Ma-
drazo Pintado4 del PRI, Juan José Rodríguez Prats del PAN y

4 Roberto Madrazo Pintado nació en la ciudad de México el 30 de julio de 1952. Licenciado en


derecho por la UNAM, se especializó en urbanismo en la Universidad de California. En el Depar-

212
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Andrés Manuel López Obrador del PRD estaban unidos por


su pasado partidista ya que provienen de las filas del Revolu-
cionario Institucional y los tres fueron dirigentes estatales de
este partido en Tabasco (Gobierno de Tabasco, 1994).

Cuadro No. 27
Candidatos contendientes por la gubernatura de Tabasco
Elección 20 de noviembre de 1994

Fuente: elaboración propia con base en los datos de la Revista Democrática Año I número
1 octubre 1994, IEE Tabasco.

tamento del Distrito Federal fue asesor del regente y titular de la Delegación Magdalena Contreras.
Militante del PRI desde 1970, ha ocupado, entre otros, los cargos de secretario general del Movi-
miento Nacional Juvenil Revolucionario Popular (1974) y del Movimiento Nacional de la Juventud
Revolucionaria (1977), delegado general en Chihuahua (1984), secretario de Promoción y Gestoría
(1984), secretario adjunto de Políticas para la Juventud (1987) y secretario de Organización del
Comité Ejecutivo Nacional (1988), presidente del Comité Directivo en Tabasco (1988) y director de
la Escuela Nacional de Cuadros (1991). En 1976 fue electo diputado federal y en 1988 senador por
Tabasco. En 1991 volvió a ocupar una diputación federal, desempeñando también la presidencia del
Colegio Electoral y de la Comisión de Educación, y la secretaría de la Gran Comisión. En 1993 pidió
licencia para dirigir nuevamente el Comité Directivo del PRI en Tabasco. Es autor del libro Donde
empieza el pavimento (1987). En 1994 fue postulado como candidato a la gubernatura de Tabasco.
Diccionario Enciclopédico de Tabasco, Tomo II, Gobierno del Estado 1994, pp. 414.

213
Los partidos políticos en Tabasco

Gráfica No. 3
Elecciones a gobernador 1999

ELECCIONES DE GOBERNADOR 1994

300000 PRI
250000 PRD
200000 PAN
VOTOS 150000 PT
100000 PPS
50000 PFCRN
0 PARM
1 PVEM
PARTIDOS PDM

Fuente: elaboración propia con base en datos de Reveles Vázquez Francisco, Búsqueda
y encuentro de un liderazgo local: el gobernador Roberto Madrazo y el PRI de Tabasco,
en Revista Mexicana de Ciencias Políticas y Sociales, No. 179 Instituto de Investiga-
ciones Sociales, FCPyS-UNAM.

Los distritos más conflictivos para el PRI en la elección


para gobernador fueron el III con cabecera en Cárdenas, y
el X asentado en Jalpa de Méndez. En los dos distritos el
PRD obtuvo una votación ligeramente por encima del PRI.
En el caso de las elecciones para elegir diputados locales la
situación fue similar, se perdieron los mismos distritos. La
contienda más fuerte se dio a nivel municipal, en donde el
PRD obtuvo el triunfo en cuatro municipios: Cárdenas, Jal-
pa de Méndez, Nacajuca y Teapa, lo que significa el 23.53 %
respecto al total de 17 alcaldías.

214
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Cuadro No. 28
Elección de alcaldes 1994
(Miles de votos)

Fuente: elaboración propia con base en el Instituto Electoral de Tabasco.

El Congreso local de Tabasco registra en su haber 28


Legislaturas, integra a 17 diputados de mayoría relativa y 11
de representación proporcional. En 1994 el PRD como
oposición real alcanzó 5 diputaciones de representación
proporcional, lo que significa un 17.9% de participación y
representatividad del PRD por entidad federativa.
Roberto Madrazo logró sortear todos los embates que le
llegaron desde las filas del perredismo, la capacidad de eludir
estos golpes y sostenerse en el gobierno le valieron un alto ni-
vel de popularidad entre el priismo y para los tabasqueños los
dos constituyeron “los gigantes del edén”. Este enfrentamien-
to entre dos líderes de muy diferente naturaleza, se reflejó en
un alto nivel de competitividad electoral.
El 20 de noviembre de 1994 se celebraron en Tabasco las
elecciones para gobernador y de acuerdo con el decreto nú-
mero 0793 del periódico oficial del 21 de diciembre de 1994,
el Colegio Electoral estableció “el triunfo legítimo del ciuda-
dano Roberto Madrazo Pintado quien obtuvo 297, 365 vo-
tos” para el periodo que comprende del 1 de enero de 1995 al
31 de diciembre del año 2000. En estas elecciones 86 mil ta-

215
Los partidos políticos en Tabasco

basqueños que sufragaron en agosto, decidieron quedarse en


sus casas el día de las elecciones locales. Esta desmotivación
ciudadana trajo como consecuencia que ni López Obrador
ni Madrazo pudieran superar la marca de los presidenciales
de sus respectivos partidos. Roberto Madrazo obtuvo cerca
de 64 mil votos menos que Ernesto Zedillo y López Obrador
logró 5 mil votos menos que Cuauhtémoc Cárdenas.
Roberto Madrazo logró las simpatías de cerca de 300 mil
votantes, lo cual le dio un poco más del 56 % de la votación.
López Obrador alcanzó más de 200 mil votos, casi un 38 %.
La competitividad electoral se dio de manera diferenciada a
lo largo del territorio tabasqueño, como puede apreciarse en
el siguiente cuadro:

Cuadro No. 29
Resultados electorales de la elección a Gobernador en Tabasco,
1994. (Expresado en porcentajes)

Fuente: elaboración propia con base en los datos de Curzio, Leonardo, “Tabasco en el contexto
nacional”, Cuadro 1 p. 293 en Gutiérrez Garza Estela, Coord. El Debate Nacional, UNAM,
ED. Diana México 1998.

216
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Si se observan las diferencias porcentuales se aprecia que


las votaciones se dieron en un contexto de elecciones alta-
mente competidas, en cinco distritos locales es posible hablar
de comicios altamente disputados.
Sin embargo los resultados electorales fueron cuestiona-
dos, se negó el ingreso al sistema de cómputo al representante
del PRD, ensombreciendo la credibilidad de las elecciones.
Uno de los más importantes reclamos por parte del PRD,
aludía a una serie de conversaciones que supuestamente Ma-
drazo sostuvo con los delegados regionales del PRI (inter-
vención telefónica) Salvador Sánchez y Pedro Vázquez Col-
menares para montar un operativo entre las 4:00 y las 6:00
PM con el fin de promover la votación a favor de Madrazo
Pintado, el mismo día de la elección.
Otro reclamo fue que en algunas casillas la votación re-
basaba la cantidad de votantes registrados en el padrón; este
caso se dio en la casilla 592 de Comalcalco, donde la vota-
ción se fue hasta 1,047 electores, cuando sólo deberían estar
inscritas 750 personas por casilla.
Las acusaciones siguieron ante la Fiscalía Especial para la
atención de delitos electorales, hasta llegar a 21 impugnacio-
nes por parte del PRI y el PRD. El PRD buscó a toda costa
la anulación de los comicios.
Para intentar limpiar las irregularidades de la elección y
llegar a un acuerdo que no desbordara el espacio regional,
se abrió una instancia de diálogo conocida como la Mesa de
Teapa, pero nunca llegó a generar expectativas reales de solu-
ción. El problema pasó entonces al plano nacional.

217
Los partidos políticos en Tabasco

López Obrador inició una segunda versión del éxodo de


perredistas tabasqueños hacia la capital. Este nuevo éxodo
salió de Tabasco el 23 de abril y llegó a la ciudad de México
el 3 de junio, es decir 41 días después, la marcha era de cerca
de 4,000 tabasqueños (Barrera, 1998).
La agenda político-informativa que se manejó parecía más
preocupada por temas de alcance nacional, la Proclama Na-
cional emitida por personalidades del PRD de Tabasco el 20
de abril de 1995, planteaba una serie de temas que buscaban
una posible convergencia con otras organizaciones sociales y
políticas para ampliar la agenda de discusión.
Los asuntos planteados eran los siguientes:
• Nuevo gabinete presidencial.
• Un nuevo tratamiento a la deuda externa.
• Asignar el 10 % del presupuesto federal a los indígenas.
• Congelamiento de los despidos en el sector público, es-
pecialmente en Pemex.
• Confiscación de los bienes mal habidos a Carlos Salinas
de Gortari y sus socios.
• Solución política en Chiapas.
• No a la privatización de Pemex.
• Derogación del incremento del IVA.
A partir de estos planteamientos se convocó a la creación
de una Alianza Nacional Democrática (14 de mayo de 1995).

218
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

En la lucha política, López Obrador se caracterizó por la


creación de su propio aparato de espionaje que le permitió
al final de la marcha el escándalo llamado el “Tabascogate”
con el anuncio de los gastos de campaña de Madrazo, el PRI
gastó alrededor de 70 millones de dólares.
El 13 de junio de 1995 la PGR recibía de manos de An-
drés Manuel López Obrador una documentación que acredi-
taba lo siguiente: el candidato del PRI había gastado cerca de
238 millones de pesos en su campaña.
La Procuraduría recibió las pruebas e inició una inves-
tigación lo que provocó la indignación del gobernador. En
respuesta el 21 de agosto de 1995 Madrazo interpuso una
controversia, por invasión de competencias, en contra de la
Procuraduría General de la República.
La PGR acreditó un gasto superior a los 100 millones de
pesos en la campaña tabasqueña. El tope para los gastos de
campaña era de cuatro millones, según la regulación electoral
de Tabasco.
Las pruebas del presunto gasto del priismo tabasqueño
fueron remitidas a la Secretaría de Hacienda y Crédito Pú-
blico, que no encontró delito. Por su parte, el PRD decidió
turnar a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos
el expediente de irregularidades detectadas en los comicios
de 1994.
El fallo del Tribunal Colegiado Federal refrendó la deci-
sión del juez segundo de distrito en cuanto a que no había
delito que perseguir a raíz de la demanda interpuesta por el
PRD en materia de financiamiento de la campaña electoral

219
Los partidos políticos en Tabasco

de 1994. Por lo tanto, el Consejo Estatal del Instituto Elec-


toral de Tabasco también decidió que no procedía el estudio
de las cuentas de 1994 por parte de los consejeros. Madrazo
consiguió simpatías en las filas de su partido por sus enfrenta-
mientos con la federación y por descalificar al entonces pro-
curador Antonio Lozano de extracción panista.
Finalmente es posible afirmar que de 1988 a 1994 se de-
sarrolla en Tabasco un sistema de partidos completamente
diferente de lo que es el patrón de comportamiento nacional.
Mientras que en el plano nacional el PRD va perdiendo
capacidad de penetración desde 1989, en Tabasco el partido
neocardenista multiplica el número de sus votantes. El PRI
por su parte, pasa de ser el partido dominante a enfrentarse
con un alto grado de competitividad.
Es de notarse que el crecimiento perredista se hace en de-
trimento del Revolucionario Institucional, como lo eviden-
cian sus principales líderes que han salido de las filas priistas.
Se dio en Tabasco, en términos reales una especie de biparti-
dismo PRI-PRD polarizador, que no fue común en el resto
de la República. El PAN jugó un papel residual en el estado.
El sorpresivo ascenso que tuvo el PAN en las elecciones de
agosto de 1994, cuando su candidato presidencial cosechó en
Tabasco 47, 267 votos, es decir, un 7.5 %, la votación más
alta de su historia, pasó a desplomarse en noviembre, cuando
el candidato panista a gobernador, Rodríguez Prats, pierde
votación absoluta al obtener 13, 410 sufragios, cuatro meses
después. Finalmente vale la pena apuntar que en la vida po-
lítica reciente de Tabasco para investigadores como Cedeño

220
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

del Olmo los problemas electorales son una consecuencia de


las transformaciones inducidas en la economía, hay una resis-
tencia en las coaliciones para cambiar las formas de dominio.
El marco político en el sector industrial es un sindicalismo
petrolero muy poderoso, pero altamente corrupto, también
una dirigencia en el sector campesino que desmoviliza y obs-
taculiza los proyectos agroindustriales y dirigencias de asocia-
ciones, particularmente de cacaoteros y copreros acusados de
malversación de recursos financieros.
Aunado a esta situación se combina una oposición de nue-
vo cuño, nucleada y rápidamente desarrollada en el Partido
de la Revolución Democrática, donde no es extraño que sus
principales dirigentes provengan del PRI y de una incipiente
oposición que parecía no tener futuro alguno.
En Tabasco el sistema de partidos hasta 1976 llegó a crecer
sólo de manera coyuntural, particularmente en las elecciones
para elegir gobernador. Además, las oposiciones partidistas
que se registraron de alguna forma “gravitaron” en torno al
partido del Estado que, por lo demás, se adecuó bastante
bien como maquinaria electoral y como el escenario para el
desarrollo de poderosos liderazgos locales.
De esta manera, después de una gran parábola de poder
construida por los gobernadores, se desembocó en una crisis
del mismo sistema en donde el epicentro se encuentra en un
problema de gobernabilidad y legitimidad, manifestados cí-
clicamente en 1988, 1992 y 1995.
En Tabasco, ni el gobierno, ni su partido pueden justifi-
car su supuesta vocación democrática al margen del terreno

221
Los partidos políticos en Tabasco

electoral. Si antes pudieron postergar el desarrollo político


en espera del desarrollo económico, hoy empieza a tornar-
se contraproducente y a generar efectos negativos, porque
el desacuerdo con el partido del Estado puede actualmente
expresarse en partidos de oposición que incrementaron su
fuerza electoral.
4.8 Conclusiones
• Los comicios federales del 6 de julio de 1988 fueron los
más competidos y debatidos en la historia reciente de
México, no sólo por la erosión del PRI, sino por las op-
ciones electorales que atrajeron a muchos votantes. En
Tabasco se marcó el inicio de una nueva etapa en la diná-
mica de la lucha política.
• Históricamente en Tabasco, el PRI desempeñaba un es-
pacio de reclutamiento y renovación de la clase política
local. La disputa interna definía el resultado de la elec-
ción, por ende, todo se daba al interior del partido.
• En 1988, en Tabasco, el PRI consiguió el 75 % de los vo-
tos, en tanto que el Frente Democrático Nacional ganó
20 % en las elecciones federales. Sin embargo, la absten-
ción llegó a casi 58 %.
• El 9 de noviembre de 1988 el PRI contendió contra la
coalición del PPS, PFCRN, PARM Y PMS, el Frente
Democrático Nacional, que impulsó la candidatura de
Andrés Manuel López Obrador para gobernador de Ta-
basco. El FDN registró 21.32 %, probablemente por la
cantidad de votos anulados (4.74 %) y por la elevada
abstención, que llegó a 58.35 %.

222
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

• El PRI postuló a Salvador Neme como candidato a la


gubernatura, incrementando su votación al lograr 78.21
% de los votos, poco más que en la federal.
• En 1991, asistimos a la presencia de dos fuerzas en la en-
tidad: el PRI y el PRD. En la elección de ayuntamientos
el PRI logró 67.37 % de los votos y el PRD obtuvo el
27.10 %, el PAN registró el 1.92 % y el restante 3.6 % se
repartió entre los otros partidos.
• En la elección de diputados locales, el PRI alcanzó el
57.82 %, un poco menos que en la de ayuntamientos,
pero el PRD también redujo su porcentaje al alcanzar el
23.81 %. En estos comicios los votos anulados aumenta-
ron mucho, causando suspicacias.
• Ante las irregularidades el PRD realizó una movilización
a la que llamó: ”El éxodo por la democracia” llevada a
cabo de Tabasco al D.F.; esta marcha contribuyó a la caí-
da del gobernador, necesaria para la renovación y cohe-
sión en torno al liderazgo de Madrazo, con lo cual ten-
dría la capacidad de enfrentar y derrotar al PRD en los
comicios de 1994.
• En 1994, el PRI ganó la mayoría de los puestos de elec-
ción, pero redujo sus porcentajes de votación. En la elec-
ción para gobernador obtuvo 56.33 %, el PRD 37.56 %
y el PAN 2.49 %. En los municipios de Cárdenas y Jalpa
de Méndez el PRD ganó los comicios.
• Las elecciones fueron severamente cuestionadas por el
PRD y el PAN, se dio un intento de intervención del
presidente para resolver el conflicto poselectoral median-
te la salida del gobernador electo. Sin embargo, la clase
política y los empresarios apoyaron a Roberto Madrazo.

223
Capítulo 5

Las elecciones federales,


estatal y municipales 1997-
2012

El presente capítulo es una revisión de la forma en que los


partidos políticos se fueron interrelacionando, las interaccio-
nes y disputas y sus liderazgos para establecer una historia
política y abonar en la comprensión del comportamiento del
electorado. Una serie de reformas electorales emprendidas en
1996, 2002 y 2007 fueron cruciales para reconfigurar el sis-
tema de partidos y el impulso reformador que se generó en la
oposición política, en la ciudadanía organizada, en particular
el de las oposiciones más organizadas en esos periodos: del
PRD y el PAN (Morlino, 2005).
En 1996, durante el gobierno de Ernesto Zedillo Ponce
de León, se reformó de nuevo el Código Federal de Institu-
ciones y Procedimientos Electorales (COFIPE) para buscar
mayor equidad entre los partidos.
El control que durante ochenta años mantuvo el Ejecuti-
vo a través del Secretario de Gobernación, sobre el proceso
electoral dio paso a una nueva conformación de los órganos
electorales, se reforzó así la independencia del Instituto Fede-

224
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

ral Electoral, al desligar al Poder Ejecutivo de su integración


y reservar el voto exclusivamente a los consejeros ciudadanos
(Villafranco, 1999).
La reforma electoral de 1996 permitió que las fuerzas po-
líticas se desarrollaran de otra forma y brindó acceso a los me-
dios electrónicos, logrando con ello posicionarse fuertemente
en la sociedad.
Las elecciones de este periodo se circunscribieron a las
modificaciones presentadas por la reforma electoral de 1996
que cambió entre otras, las siguientes condiciones:
• El gobierno abandonó la organización electoral y pasó
a manos de personas merecedoras de la confianza de los
partidos políticos.
• El Tribunal Federal Electoral cuya función es dirimir las
controversias legales, también debió realizar cambios, ta-
les como:
» La designación de los magistrados estaría a cargo
de la Cámara de Senadores, según propuesta de la
Suprema Corte de Justicia; se instauró un control
de legalidad de constitucionalidad, esto es, una
vía para controlar que todos los actos en materia
electoral pudieran ser impugnados y revisados por
la vía jurídica. El Tribunal no sólo atendería con-
flictos federales sino también locales.
» Se modificó el régimen legal de los partidos polí-
ticos: el voto ciudadano definiría la permanencia
en el sistema de partidos. Se incrementó, además

225
Los partidos políticos en Tabasco

el porcentaje para la representación en el Con-


greso.
• Los recursos financieros públicos de los partidos aumen-
taron drásticamente, 600 % en relación con tres años
antes, y lo mismo ocurrió con el acceso de los medios
electrónicos. El financiamiento se distribuyó en 70 %
conforme a la votación inmediata anterior y 30 % de un
modo igualitario; se definieron topes a los gastos de cam-
paña, con serias restricciones a las aportaciones privadas
y con mecanismos más estrictos en control, auditoría y
vigilancia.
• Se rediseñó la cláusula de gobernabilidad en relación con
la Cámara de Diputados, se instauró un tope a la sobre
representación: ningún partido podría tener 8 % más de
escaños que su propia votación, salvo que lo consiguie-
ra a través de la votación uninominal. Quedó en 300 el
número máximo de diputados tanto uninominales como
de representación proporcional que puede poseer un par-
tido; se estableció un 2 % en el porcentaje mínimo de
votos para que un partido pudiera mantener su registro y
representantes en la Cámara de Diputados; y el número
total de afiliados de un partido no podría ser menor a
0.13 % del padrón electoral federal con un mínimo de
tres mil afiliados en por lo menos diez entidades federati-
vas y se creó la figura de asociación o agrupación política.
En la Cámara de Senadores el sistema de representación
proporcional se dio para el 25 % de los senadores, que-
dando de la siguiente manera: dos senadores de mayoría,
uno de primera minoría y tendría mayor pluralismo con
la elección de 32 senadores en una lista nacional de repre-
sentación proporcional.

226
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

• Se incluyó a la ciudad de México en la competencia elec-


toral mediante la elección directa de su Jefe de gobierno y se
ampliaron las facultades de la Asamblea Legislativa del Dis-
trito Federal (Becerra, Salazar, & Woldenberg, 2000).
En Tabasco es costumbre seguir los acuerdos en materia
federal y realizar cambios que determinaron los últimos tres
procesos electorales locales de 1991, 1994, y 1997.
El último código electoral se promulgó en marzo de 1997,
en el cual se establecieron cambios, tales como:
• La integración de la Cámara de Diputados se amplió de
17 a 18 legisladores de mayoría relativa y de 12 a 13
electos por el principio de representación proporcional.
• En relación con los partidos políticos cambió el término
de partidos estatales a partidos locales y se conservó el
requisito de contar con un mínimo de 12 mil afiliados
en la entidad.
• Se insertó un capítulo dedicado a la normatividad de las
agrupaciones políticas nacionales y locales, que no po-
dían registrarse de acuerdo con el Código anterior y se
fijó un número de 6 mil afiliados y cuando menos diez
delegaciones en igual número de municipios.
• Con respecto al financiamiento, desapareció el inciso j)
del artículo 54 que establecía que los partidos con re-
gistro condicionado recibirían el 50 % en relación a lo
señalado para cada partido político con registro definiti-
vo. Para 1997 aunque obtuvieran una curul de mayoría
relativa, sin el 1.5 % de la votación total se suspenderían
los suministros económicos y los derechos.

227
Los partidos políticos en Tabasco

• El inciso b) determinó que el 30 % de la cantidad total


para el financiamiento de los partidos se entregará en for-
ma igualitaria a los partidos políticos con representación
en el Congreso del Estado, y el 70 % restante se distribui-
ría de acuerdo al porcentaje de votación obtenido.
• Desapareció el título sexto que señalaba las situaciones
en que se determinaba la pérdida de registro.
• Estableció una sección especial “Delitos contra la Auto-
nomía del Pueblo de Tabasco” inédita en otros estados;
establecía severas sanciones contra quienes propicien el
fraude electoral; prohíbe a los ministros de cultos religio-
sos inducir el voto por algún partido o candidato, o a la
abstención. Establece todo lo relacionado a la coacción
del voto y a la alteración de credenciales y del padrón
electoral.
• Con respecto al órgano electoral del estado, el nombre de
Instituto Estatal Electoral se cambió por el de Instituto
Electoral de Tabasco (IET).
Los partidos PAN, PRD y PT impugnaron la forma en
que se integró el Instituto y unos meses antes de que se inicia-
ra el proceso electoral se formó un grupo parlamentario local
autodenominado Grupo Independencia conformado por los
partidos: PAN, PRD, PT y PVEM, quienes cuestionaban
además la reforma electoral de la que había surgido el nuevo
Código Electoral.
En respuesta, la fracción priista convocó a la legislatura
federal para que atestiguara el desarrollo integral del proceso.

228
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

5.1 Elecciones de 1997 a nivel nacional


A nivel nacional, en las elecciones del 6 de julio, el PRI redu-
jo su votación total, el PRI perdió la mayoría en la Cámara
de Diputados por primera vez en la historia, con un 38 % de
la votación y 239 curules (que representaron el 47.8 % de la
Cámara); el conjunto de la oposición ganó el otro 62 % de
la votación, las 261 curules restantes (52.2 % de la Cámara )
así como el control del gobierno de la Cámara de Diputados,
estos resultados colocaron al presidente Zedillo en una situa-
ción inédita de minoría.
En las elecciones para senadores obtuvo el PRI 77 posicio-
nes; perdió la elección de jefe de Gobierno con su candidato
Alfredo del Mazo; asimismo perdió las 40 diputaciones de
mayoría relativa en la Asamblea Legislativa del D.F., redujo
su presencia a 11 diputados de representación proporcional
y de igual manera, perdió las gubernaturas de Nuevo León y
Querétaro.
El PAN por su parte en las elecciones federales obtuvo el
27.20 % de la votación para diputados y con ello alcanzó 121
curules en total; en las elecciones para jefe de Gobierno del
D.F., con su candidato electo Carlos Castillo Peraza, perdió
con el 15.58 % de la votación, pero obtuvo nueve diputados
a la Asamblea de Representantes.
En las elecciones para gobernadores triunfó en Nuevo
León y Querétaro. Además, el Consejo Nacional del PAN
ratificó que sólo aceptaría el 61 % (unos 367 millones de
pesos) del financiamiento público que le correspondía para
ese año electoral.

229
Los partidos políticos en Tabasco

En 1997 logró su ascenso al poder el PRD, con lo cual lla-


mó la atención de los especialistas. El PRD obtuvo el 26.29
% de la votación total para diputados federales; obtuvo en to-
tal 125 curules. En la elección para senadores logró 13 triun-
fos; el candidato Cuauhtémoc Cárdenas ganó la elección de
jefe de gobierno con el 48 % de los votos, obtuvo 38 de los
40 diputados de mayoría a la Asamblea Legislativa del D.F.
No obstante, conformada por alrededor de 120 perredis-
tas de 21 estados del país, surgió Convergencia Democrática
Nacional al interior del PRD como una facción crítica al cen-
tralismo de la dirigencia nacional. La integraron entre otros,
René Bejarano, Armando Quintero, Jaime Enríquez, y Layda
Yamile, entre otros (Sirvent, 2002).
En julio de 1997 el PAN logró el primer lugar en la vo-
tación para Senadores en siete estados: Baja California, Co-
lima, Chihuahua, Guanajuato, Jalisco, Nuevo León y Que-
rétaro. Por su parte el PRD se convirtió en la primera fuerza
electoral en tres entidades: el Distrito Federal, Michoacán y
Morelos.
Las primeras elecciones locales de 1995 hasta las del 6 de
julio de 1997, recibieron bajo nivel de impugnación de los
resultados y fueron frecuentes los triunfos electorales de la
oposición, bajo la lógica del presidente Zedillo de brindar-
les reconocimiento a fin de no agregar tensiones políticas a
la situación de crisis económica y crisis política provocada
por la ruptura del presidente Salinas quien negaba al PRD la
obtención de alguna gubernatura, y así se aceptó el triunfo
panista en Baja California en 1989, Guanajuato en 1991 y
Chihuahua en 1992; se sumaron las de Jalisco en 1995, nue-

230
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

vamente Baja California y Guanajuato y las de Querétaro y


Nuevo León en 1997.
Sorprendió el triunfo del PRD en la primera elección de
jefe de gobierno del Distrito Federal y más todavía con el
margen del triunfo opositor en una proporción de casi dos
a uno con respecto al PRI, puesto que el PRD obtuvo 48.1
% y el PRI 25.6 % y la derrota del partido gobernante en
todos los distritos locales y federales de la entidad. Los casos
de Colima, San Luis Potosí y Campeche fueron escenarios de
impugnación postelectoral donde se disputaron la guberna-
tura, los ayuntamientos y el legislativo local.
Después de esta elección la geografía electoral del país es
distinta que hasta un partido pequeño como el Partido del
Trabajo gobernó la capital de Durango, con lo cual se conso-
lida el carácter competitivo del sistema de partidos y tiende
a consolidar una lógica tripartidista a nivel nacional y que se
desagrega en lógicas bipartidistas en las entidades y distrita-
les; en el nivel federal se traduce en probabilidad de triunfos
opositores y en el nivel local en gubernaturas y ayuntamien-
tos (Becerra P. , 1997).
5.2 Elecciones de 1997 en Tabasco
En Tabasco los resultados de la elección intermedia vislum-
braron las expectativas de la oposición. Sólo tres partidos reci-
bieron financiamiento: PRI, PAN y PRD; dos lograron con-
solidarse, el Partido del Trabajo y el PVEM; los otros partidos
en la elección anterior de julio perdieron su registro federal:
PC, PPS y PDM. La entidad que desde 1988 se consideró
como parte de los bastiones del perredismo, y después de la

231
Los partidos políticos en Tabasco

nutrida votación de 1994 que le permitió acceder a cuatro


alcaldías se esperaba que se situara como escenario proclive
al conflicto y que registrara índices de crecimiento estables.
No obstante, desde una perspectiva partidaria los pronósticos
sobre un aumento de influencia fallaron y se contrastaron
con la realidad del Distrito Federal en las elecciones federal

Cuadro No. 30
Elecciones para Diputados Federales en Tabasco 1997

Fuente: elaboración propia con base en datos del Atlas de Resultados Electorales Federales
1991-2015.

y local, así como en Veracruz. Las elecciones federales gene-


raron el mayor índice de votación para el PRI y
mostraron un repliegue del electorado (Cedeño, 2001).
En el cuadro No. 30 se observa que de los 530,350 votos
válidos el PRI obtuvo el 50.16 %, el PRD 39.58 % y el
PAN 4.53 %.
El voto se centró principalmente en las dos opciones
partidistas más importantes en la entidad tabasqueña, el PRI
y PRD, entre ambas se iniciaron procesos de alternancia en

232
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Cuadro No. 31
Elecciones para Diputados Locales 1997

Fuente: elaboración propia con base en las estadísticas de 1997del Instituto de Elección y
Participación Ciudadana de Tabasco.

los cargos públicos, municipales, y distritales, más no en la


gubernatura, lo que permitió al PRI acceder al ejercicio de
recursos públicos que le facilitaron el triunfo en los comicios
locales. El PRI recuperó los puestos de elección popular, con-
solidando al partido y al gobierno de Madrazo en el estado.
En el PRD dos corrientes lucharon por el control de su
agenda: por un lado, la camarilla de los “duros” encabeza-
da por López Obrador que buscaba impugnar los resulta-
dos electorales y renunciar a los cargos ganados, es decir a
11 diputaciones locales de representación proporcional y 22

233
Los partidos políticos en Tabasco

Cuadro No. 32
Elecciones para Presidentes Municipales en Tabasco 1997

Fuente: elaboración propia con base en las estadísticas de 1997del Instituto de Elección y
Participación Ciudadana de Tabasco.

regidurías; encabezada por la presidencia del partido, esta-


ban los “moderados” quienes pedían que López Obrador no
interviniera en la vida interna del partido. Finalmente se
aceptaron los resultados y López Obrador siguió controlando
el partido.
El PRD aumentó sus votos y alcanzó el 40 % del electora-
do tanto en diputados locales, como federales: por su parte el
PRI logró superar el 50 % con la cual ganó todas las diputa-
ciones de mayoría. El PAN sólo promedió el 4 %. Con estos
resultados el entusiasmo se fortaleció de cara a las próximas
elecciones para gobernador. Madrazo impuso a Andrade, a

234
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

pesar de que a nivel nacional la propuesta era Arturo Núñez


Jiménez quien al no verse favorecido renunció al PRI y se
sumó a las filas del PRD con su amigo López Obrador.
5.3 Elecciones federales 2000
La democracia mexicana al comienzo de un nuevo siglo vis-
lumbró en los resultados del año 2000 la alternancia parti-
dista en el Poder Ejecutivo, la derrota electoral que sufrió el
PRI el 6 de julio de 1997 al perder la mayoría de curules en
la Cámara de Diputados permitió un poder legislativo plural
y acotó que el partido del presidente no fuera mayoritario.
En las elecciones presidenciales del año 2000 y después de
71 años ininterrumpidos, el Partido Nacional Revoluciona-
rio / Partido de la Revolución Mexicana / Partido Revolucio-
nario Institucional perdió la presidencia de la república pero
mantuvo la mayoría simple en la Cámara de Diputados, la
mayoría de los congresos locales, de las gubernaturas y de las
presidencias municipales del país. Se dio una alternancia en
el poder (Bolivar, 2004).
La victoria del candidato presidencial del PAN, Vicente
Fox es uno de los hitos políticos más importantes de la vida
política mexicana posrevolucionaria, puesto que el candidato
proviene de las filas opositoras. El candidato panista obtuvo
casi 16 millones de votos contra 13 y medio de su conten-
diente Labastida. En tercer lugar, los candidatos perredistas.
El sistema de elección en el año 2000 para la Cámara de
diputados se dio con base en el sistema mixto en el que el 60
% de la representación se elige por mayoría simple de votos y
el 40 % restante en proporción de votos obtenidos.

235
Los partidos políticos en Tabasco

Se crearon nuevos partidos políticos durante el proceso


electoral del año 2000: Convergencia por la Democracia
(CD), Alianza Social (PAS) y Social Nacionalista (PSN). Se
integraron en la coalición de izquierda denominada Alianza
por México, la cual postuló a Cuauhtémoc Cárdenas como
candidato a la presidencia.

Cuadro No. 33
Elecciones Federales para Presidente en Tabasco 2000

Fuente: elaboración propia con base en los datos del Atlas de Resultados Electorales Federales
1991-2015.

El PRI comenzó su decadencia desde 1970 y tocó fondo


cuando el Partido Acción Nacional ganó la elección presi-
dencial. El candidato presidencial que competía por tercera
vez logró menos votos que en ocasiones anteriores, el número
de legisladores se redujo quedando en tercer lugar. Su mayor
logro fue la conquista de la jefatura de gobierno del Distrito
Federal ganada por segunda vez y la mayoría en la Asamblea
Legislativa.
Los viejos partidos minoritarios desaparecieron: el Par-
tido Popular Socialista, el Partido Cardenista, antes Partido
del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional y mucho

236
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

antes el Partido Socialista de los Trabajadores; el Partido Au-


téntico de la Revolución Mexicana y el Partido Demócrata
Mexicano, conocido después como Unión Nacional Oposi-
tora y finalmente como Partido Alianza Social. Otros par-
tidos no lograron refrendar su registro tales como: Partido
México Posible, Partido Sociedad Nacionalista o el Partido
Democracia Social. Los partidos que sí lograron refrendar
su registro fueron: Partido del Trabajo y el Partido Verde
Ecologista de México y Convergencia por la Democracia
(actualmente Convergencia) (Reveles, 2008).
En las elecciones de 2000 de nueva cuenta se dio la pérdi-
da de la mayoría absoluta del PRI en la Cámara de Diputados
y por primera vez de la mayoría absoluta en la Cámara de Se-
nadores. Vicente Fox obtuvo el 42.5 % de los votos y el PAN
(Alianza por el Cambio) el 38.1 y 38.2 % para senadores y
diputados respectivamente, lo que representó una bancada
de 46 senadores (El PVEM obtuvo cinco senadores dentro de
la coalición) y 206 diputados (17 del PVEM).
El PRI logró el 36.1 % de la votación para Presidente de
la República, 36.7 y 36.9 % para senadores y diputados res-
pectivamente, lo que representó 60 senadores y 209 diputa-
dos de mayoría relativa, es decir, no se constituye en mayoría
absoluta en ninguna de las Cámaras del Poder Legislativo.
El PRD obtuvo con la “Alianza por México” el 16.4 % de
votos para Presidente de la República, y un poco más del 18
% para legisladores, logrando así un grupo parlamentario de
15 legisladores en la Cámara de Senadores y de 50 legislado-
res en la Cámara de Diputados.

237
Los partidos políticos en Tabasco

El sistema de partidos fue adquiriendo características de


mayor consistencia, evolucionó de un sistema de partido do-
minante con oposiciones fragmentadas a un sistema de tres
partidos competitivos y otros partidos de menor tamaño que
aún estaban por consolidar su presencia definitiva. El sistema
electoral introduce el elemento de proporcionalidad que trae
como consecuencia el multipartidismo con tres partidos pre-
dominantes y otros partidos menores (Álvarez, 2012).

Cuadro No. 34
Elecciones Federales para Senadores en Tabasco 2000

Fuente: elaboración propia con base en los datos del Atlas de Resultados Electorales Federales
1991-2015.

En Tabasco, de acuerdo a la naturaleza centralista del sis-


tema político mexicano, quienes se convirtieron en candi-
datos a diputados o senadores pasaron a gozar de una doble
ventaja en la lucha por la gubernatura debido a que: primero,
se les permitió reforzar las relaciones con los grupos locales
a través de la campaña política; y segundo, se beneficiaron
con la posibilidad de relacionarse o reforzar relaciones con la
clase política nacional, una vez que tomaron la protesta como
legisladores.

238
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Cuadro No. 35
Elecciones para Diputados Federales en Tabasco 2000

Fuente: elaboración propia con base en los datos del Atlas de Resultados Electorales Federales
1991-2015.

5.4 Elecciones estatales y municipales de 2000


En las elecciones de 2000 en Tabasco compitieron por la
gubernatura: PRI Manuel Andrade, PRD César Raúl Ojeda
Zubieta, José Antonio de la Vega Asmitia por el PAN y Héc-
tor Arguello López PT, quien siendo senador priista renunció
en 1998 por discrepancias con Madrazo y permaneció como
senador independiente y otros ocho contendientes. Manuel
Andrade Díaz dos veces diputado: en la LIV y en la LVI le-
gislaturas, fungió en esta última como Presidente de la Gran
Comisión del H. Congreso del Estado. César Raúl Ojeda
Zubieta, fue Diputado Federal por el I Distrito de Tabasco
a la LVI Legislatura en 1994 y Senador por Tabasco desde
2000 a 2006. José Antonio de la Vega Asmitia en 2003 fue
electo Diputado Federal a la LIX Legislatura.
La división del priismo tabasqueño provocada por el go-
bernador Madrazo llevó a la renuncia de varios miembros
destacados tales como Arturo Nuñez, ex coordinador de los

239
Los partidos políticos en Tabasco

diputados priistas y Humberto Mayans, diputado en funcio-


nes, quienes además llamaron a votar por el candidato pe-
rredista. El candidato del PAN esperaba al menos repetir la
votación que había logrado Fox en el estado el 2 de julio,
cuando logró 174, 843 votos, el 26.13 % (Becerra P. , 2003).
Realizadas las elecciones del 2000 (15 de octubre de
2000), y aún sin concluir los conteos preliminares, entre acu-
saciones mutuas, tanto Andrade como Ojeda se autoprocla-
maban ganadores de la elección.
Sin embargo, los reportes del Instituto Electoral del esta-
do daban como ganador a Manuel Andrade con el 44,05 %
de los votos contra 43,27 % de César Raúl Ojeda, mientras
que el panista De la Vega acumulaba el 8,39 %. El PRD y
el PAN por su parte, decidieron acudir al Tribunal Electoral
del Poder Judicial de la Federación a impugnar el proceso
electoral.
El 29 de diciembre de 2000, dos días antes de que Manuel
Andrade tomara posesión como Gobernador Constitucional,
en un hecho sin precedentes en México y que no se volvería
a repetir, la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder
Judicial de la Federación, con cuatro votos a favor y dos en
contra, decidió con base en la llamada “causal abstracta de
nulidad de elección”, anular la elección de Gobernador de
Tabasco y la revocación de la constancia de mayoría de An-
drade.
De acuerdo con Orozco (2011) el Tribunal tomó la de-
cisión considerando que “el gobierno del estado de Tabasco
no fue neutral en la elección de gobernador, lo cual implica

240
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

no solo una afectación en libertad del posible sufragio, sino


de los principios de legalidad, certeza, imparcialidad e inde-
pendencia que deben regir la actuación de las autoridades
electorales, entre las que destacan las siguientes:
a) La desproporción o falta de equidad en el tiempo con
que contaron los partidos políticos en los medios de comuni-
cación electrónica, como la televisión, ya que según el moni-
toreo realizado por la Comisión de Radiodifusión del Conse-
jo Estatal Electoral, al PRI (cuyo candidato fue el ganador y
era el partido en el gobierno) se le dedicó 86.98 % del tiempo
total de transmisión en el canal siete, así como 52.95 % en
el canal nueve, en tanto que el tiempo dedicado al resto de
los partidos fue de 13.01 % en el canal siete y 47.04 % en el
canal nueve.
Lo más grave fue que se demostró que la concesionaria del
canal siete de televisión era una empresa con una participa-
ción mayoritaria (98 %) del gobierno del estado de Tabasco,
conculcándose el principio de equidad en el acceso a los me-
dios de comunicación, previsto en el artículo 116, fracción
IV, inciso g), de la Constitución federal.
b) La apertura de 1, 338 paquetes electorales en las sesio-
nes de cómputo distrital, equivalentes a 65 % de las casillas
instaladas en el estado de Tabasco, que se realizaron en la ma-
yoría de los casos sin que se surtiera alguna de las hipótesis de
excepción previstas en el artículo 244 del código electoral; en
nueve distritos, que representan 50 % de los distritos electo-
rales del estado, fueron abiertos sin justificación –y en varias
ocasiones, a propuesta del PRI– la totalidad de los paquetes
electorales.

241
Los partidos políticos en Tabasco

c) La quema, en las instalaciones del IV Consejo Distrital


Electoral, sin justificación alguna, de material electoral origi-
nal utilizado en la elección de gobernador (incluidas actas de
escrutinio y cómputo), correspondiente tanto al IV como al
V distritos electorales.
d) Los indicios, adminiculados en su conjunto, relacio-
nados con el financiamiento ilícito del secretario de Comu-
nicaciones y Transportes a la campaña del candidato a go-
bernador del partido en el gobierno, como resultado de las
aportaciones de taxistas a quienes se les prometió la entrega
de permisos de autos de alquiler, además de la compra y dis-
tribución de despensas, láminas de zinc, máquinas de coser,
máquinas de escribir, molinos, machetes, limas, bicicletas y
artículos deportivos.
e) La localización de material electoral diverso, sin justifi-
cación alguna, en la sede de la empresa Chocoweb.
Asimismo, se debe tomar en cuenta que la diferencia entre
los partidos que ocuparon el primero y segundo lugar fue de
8, 001 votos, equivalentes a 1.18 puntos porcentuales, consi-
deró que las diversas irregularidades acreditadas pudieron ser
la causa de que un determinado partido fuera el triunfador,
ya que si las anomalías no se hubieran producido, el resultado
podría haber sido otro; de ahí que haya determinado revocar
las sentencias reclamadas y declarar la nulidad de la elección
de gobernador.”
Ante la ausencia de Gobernador Electo, el congreso del
estado designó a Enrique Priego Oropeza como Gobernador
Interino, quien debería de permanecer hasta 18 meses en el

242
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Cuadro No. 36
Elecciones para Diputados Locales en Tabasco 2000

Fuente: elaboración propia con base en las estadísticas de 2000 del Instituto de Elección y
Participación Ciudadana de Tabasco.

cargo y convocar a nuevas elecciones para Gobernador. Priego


Oropeza gobernó de enero a diciembre de 2001. El sistema
electoral del país al contar con leyes y aparatos perfectamen-
te capacitados para resolver los asuntos de su competencia
evidenció que la reforma electoral de 1996 permitió que los
problemas en los procesos electorales se dirimieran por la vía
institucional, ese también fue el mensaje enviado por el pre-

243
Los partidos políticos en Tabasco

Cuadro No. 37
Elecciones para Presidente Municipal en Tabasco 2000

Fuente: elaboración propia con base en las estadísticas de 2000 del Instituto de Elección y
Participación Ciudadana de Tabasco.

sidente panista (Favela & Martínez, 2003). Los resultados


para los cargos de presidentes municipales y diputados loca-
les también favorecieron al PRI, para los primeros, ganó doce
y el PRD cinco; en las elecciones para diputados ganó doce
lugares, mientras que el PRD alcanzó seis. El crecimiento del
PRD fue evidente no sólo en la gubernatura, sino que en las
elecciones de mayoría logró superar al PRI.

244
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Cuadro No. 38
Elección para Gobernador en Tabasco 2000

Fuente: elaboración propia con base en las estadísticas de 2001 del Instituto de Elección y
Participación Ciudadana de Tabasco.

En las nuevas elecciones de 2001 compitieron otra vez


Manuel Andrade y César Raúl Ojeda Zubieta. El PRI ob-
tuvo por segunda vez la mayoría de votos, y con una mayor
ventaja, al ganar con el 50.67 % contra el 45.96 %. Ojeda
impugnó de nuevo y finalmente aceptó su derrota. El PAN
solo obtuvo dos puntos porcentuales del total de la votación.

245
Los partidos políticos en Tabasco

5.5 Elecciones federales y locales de 2003


A nivel nacional en las elecciones de 2003 el abstencionis-
mo se evidenció, seis de cada diez electores se abstuvieron de
participar en la contienda electoral (Jiménez, 2004), ello se
explica por muchos factores: 1) las expectativas que generó el
primer gobierno panista después de 71 años de gobernar el
PRI, tal como una administración eficaz; 2) la democratiza-
ción del régimen político; 3) y la confrontación entre todos
los actores políticos y en particular una pugna creciente entre
el presidente de la república y el Jefe de Gobierno del Distrito
Federal, incrementaron el escepticismo de los ciudadanos y el
abstencionismo.
Estos factores sumados a las condiciones que desestimu-
lan a los electores para acudir a las urnas, tales como: no hay
personalidades fuertes en los medios, las campañas son reali-
zadas por los partidos y no por los candidatos, sólo los aspi-
rantes a parlamentarios llevan a cabo su labor de proselitismo
restringida a su distrito o entidad correspondiente.
Los aspirantes por la vía de representación proporcional
ni siquiera están obligados a llevar a cabo campañas, por lo
tanto, son los partidos los que llevan el mayor peso de la
contienda. De manera que el 2003 constituyó una contienda
entre partidos y no entre candidatos y el abstencionismo les
afectó a todos.
Los partidos minoritarios se diferenciaron en 2003, el
Partido Verde se alió con el PRI y el Partido del Trabajo con
el PRD, buscaron sobrevivir y un reducido pero seguro nú-
mero de escaños. Convergencia compitió solo y logró sobre-

246
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

pasar el umbral electoral del 2 % con escaso margen. Los


partidos emergentes nuevos no lograron refrendar su registro
provisional, aunque lograron presencia en ciertas regiones del
país, sobre todo en el Distrito Federal.
Los votos obtenidos permitieron la composición del con-
greso de la siguiente manera: PRI con 224 diputados, 160 de
mayoría y 64 de representación proporcional; el PAN 151,
81 de mayoría y 70 de representación proporcional; el PRD
97, 56 de mayoría y 41 de representación proporcional; el
PVEM 17, 3 y 14; el PT 6, todos de representación y Con-
vergencia 5, todos de representación.
En Tabasco en las elecciones de 2003 para diputados fe-
derales el PRI ganó todos los distritos. La brecha aumentó
en 10 puntos, quedando arriba el PRI como se observa en el
cuadro No.39.

Cuadro No. 39
Elecciones para Diputado Federal en Tabasco 2003

Fuente: elaboración propia con base en el Atlas de Resultados Electorales Federales 1991-
2015.

247
Los partidos políticos en Tabasco

Cuadro No. 40
Elecciones para Diputados Locales en Tabasco 2003

Fuente: elaboración propia con base en las estadísticas de 2003 del Instituto de Elección y
Participación Ciudadana de Tabasco.

A partir de las elecciones del 2001 el PRD se fue consoli-


dando de tal forma que, en 2003, en las elecciones para presi-
dentes municipales, ganó 11 de los 17 municipios, –seis más
que en 2000– y la mayoría en el congreso local. El PRD logró
rebasar al PRI obteniendo el 45 % de los votos, mientras que
el PRI logró el 42 % lo cual manifiesta la competencia, como
se observa en el siguiente cuadro:

248
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Cuadro No. 41
Elecciones para Presidente Municipal en Tabasco 2003

Fuente: elaboración propia con base en las estadísticas de 2003 del Instituto de Elección y
Participación Ciudadana de Tabasco.

5.6 Elecciones federales y comicios locales de 2006


En las elecciones presidenciales de 2006 el PAN nominó a
Felipe Calderón Hinojosa, el resultado fue visto como un
triunfo de la estructura del partido sobre el gobierno, ante
Santiago Creel Miranda quien había obtenido apoyos de
todo tipo. En el PRD el ex líder máximo Cuauhtémoc Cár-

249
Los partidos políticos en Tabasco

denas, fue desplazado por Andrés Manuel López Obrador,


su gestión al frente del gobierno capitalino le redituó todo el
apoyo difundido por las encuestas. En el PRI Roberto Ma-

Cuadro No. 42
Elecciones para Presidente de la República en Tabasco 2006

Fuente: elaboración propia con base en los datos del Atlas de Resultados Electorales Federales
1991-2015.

drazo compitió con Arturo Montiel ex gobernador del Esta-


do de México y quien representó a una corriente integrada
por varios gobernadores denominada Unidad Democrática
identificada por la prensa como el TUCOM, “todos unidos
contra Madrazo”.

250
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Por su parte Madrazo, dirigente nacional, disfrutó del


éxito electoral de su partido después de la alternancia, y en
televisión abierta denunció a Montiel por “enriquecimiento
inexplicable”; este recurso mediático causó el efecto esperado
y el ex gobernador abandonó la contienda interna y escapó
del acoso y de un proceso penal en su contra. Esta huida
orilló a los integrantes de Unidad Democrática a optar por la
negociación, Madrazo conquistó así la candidatura en medio
de un divisionismo de su partido.
El PVEM se alió con el PRI, el PT y Convergencia se alia-
ron con el PRD. Los nuevos, el PANAL y el PASC debieron
postular a sus respectivos abanderados de acuerdo a la ley,
por ello el primero postuló a Roberto Campa, ex militante de
larga trayectoria en el PRI (sobre todo en el Distrito Federal)
que contaba además con el apoyo de Elba Esther Gordillo y
del SNTE. El PASC postuló a Patricia Mercado, de trayec-
toria feminista y dirigente del Partido México Posible. Final-
mente resultó ganador Felipe Calderón Hinojosa del PAN.
En Tabasco en 2006 en la elección para Gobernador el
PRD postuló de nuevo a César Raúl Ojeda Zubieta, quien
contó con el apoyo de Andrés Manuel López Obrador. Por
su parte el PRI vivió un contexto de división entre sus parti-
darios por una disputa entre Madrazo y Andrade para decidir
en el proceso de selección del candidato.
El Senador priista Óscar Cantón Zetina se perfilaba como
el mejor candidato. No obstante Madrazo favorecía a Florizel
Medina Pereznieto, Andrade, gobernador en turno prefirió
apoyar a Andrés Granier Melo, ex alcalde de Villahermosa,
y fue postulado por el PRI con todo el apoyo del gobierno

251
Los partidos políticos en Tabasco

Cuadro No. 43
Elección para Gobernador en Tabasco 2006

Fuente: elaboración propia con base en datos del Atlas de Resultados Electorales Federales
1991-2015.

estatal para su campaña. El PRI recuperó aún más su vo-


tación, obtuvo 52.77% de los sufragios y el PRD el 42.9%,
diez puntos porcentuales fueron la diferencia, los cuales
contrastaron con los resultados de los ayuntamientos y de

252
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

las diputaciones locales. Al igual que en el año 2000, los re-


sultados de la elección fueron impugnados ante el Tribunal
Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) por la
Coalición por Bien de Todos que incluyó al PRD, el
Partido del Trabajo y Convergencia, que declaró sólo nulas
14 casillas (Pliego, 2007) y ratificó el triunfo de Andrés
Granier Melo, en tanto se señaló que el PRD no comprobó
las irregularidades denunciadas. En la elección para
diputados federales el PRD en alianza con el Partido del
Trabajo y Convergencia logró la mayor votación.

Cuadro No. 44
Elecciones para Diputados Federales en Tabasco 2006

Fuente: elaboración propia con base en datos del Atlas de Resultados Electorales Federales
1991-2015.

253
Los partidos políticos en Tabasco

Cuadro No. 45
Elecciones para Presidentes Municipales y Regidores en Tabasco
2006

Fuente: elaboración propia con base en las estadísticas de 2006 del Instituto de Elección
y Participación Ciudadana de Tabasco.

Cuadro No. 46
Elecciones para Diputados Locales en Tabasco 2006

Fuente: elaboración propia con base en las estadísticas de 2006 del Instituto de Elección y
Participación Ciudadana de Tabasco.

254
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

5.7 Elecciones federales de 2009


Durante el recorrido político-electoral de los gobiernos de
Vicente Fox Quesada (2000-2006) y Felipe Calderón Hino-
josa (2006-2012) el PRI se convirtió en un partido colabo-
rador del PAN para impulsar algunas reformas legislativas
aprovechando su posición de partido dominante.
Esa relación fue bautizada como PRIAN. Su posición en
el Congreso de la Unión en ambos periodos de gobierno de
derecha, le permitió al PRI alcanzar victorias electorales esta-
tales y locales.
También inició su fase de recuperación en entidades fede-
rativas que para entrada la primera década del siglo XXI ha-
bían pasado por al menos una primera alternancia electoral.
Para el año 2009 cuando se renueva el Congreso de la Unión,
el PRI muestra otra vez signos de fortaleza electoral, conservó
en ese año 20 gobernadores y la mayoría legislativa en igual
número de congresos locales.
El PAN se mantuvo doce años en la presidencia de la Re-
pública y desde ahí debió de lidiar con una mayoría de gober-
nadores emanados del PRI, con líderes priistas en el Senado
de la República y en el Congreso de la Unión.
Al igual que su antecesor Vicente Fox, Felipe Calderón y
su grupo compacto de panistas disfrutaron del poder presi-
dencial, pero en ningún momento intentaron desmantelar
el andamiaje institucional, corporativo y clientelar construi-
do por los priistas. Ello dejó intacto el tejido social-electoral
priista y con dicho sistema organizacional el PRI compitió y
ganó espacios de poder local, estatal y federal durante toda

255
Los partidos políticos en Tabasco

la ruta de los dos sexenios de derecha (López, Martínez, &


León, 2014). En la jornada electoral del 2009 en Tabasco
se renovaron los 17 ayuntamientos y 36 diputados locales,
21 electos por mayoría relativa votados en cada uno de los
distritos electorales del estado y 15 electos por el principio de
representación proporcional.
No obstante, el proceso electoral presentó diversas in-
consistencias derivadas de las impugnaciones a la reforma
electoral: se empezó por los plazos que debieron redefinirse,
así como los procesos de selección de candidatos que se pre-
sentaron caros y poco confiables que no solo evidenciaron
pugnas partidistas más allá de las cotidianas durante las vo-
taciones, sino incluso impregnadas de violencia (Hernández
& Medina, 2011).

Cuadro No. 47
Elecciones para Diputados Federales en Tabasco 2009

Fuente: elaboración propia con base en los datos del Atlas de Resultados Electorales Federales
1991-2015.

En 2008 se modificaron las reglas electorales tanto fede-


rales como estatales, en Tabasco se llevó a cabo la reforma a
la Constitución estatal en materia electoral mediante la que

256
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

se derogó el Código Electoral existente y se sustituyó por una


nueva Ley Electoral del Estado de Tabasco cuya regulación es
en torno a partidos políticos, coaliciones, precampañas, ac-
tos de proselitismo, financiamiento público, acceso a medios
de comunicación, a la integración del Instituto Electoral, la
creación de la Contraloría General y el Consejo Estatal del
propio Instituto.
Se expidió también la Ley de Medios de Impugnación
que regula la conformación del Congreso, su instalación, se-
siones, facultades, sustitución del gobernador y del Tribunal
Electoral, entre otros.

Cuadro No. 48
Elecciones para Diputados Locales en Tabasco 2009

Fuente: elaboración propia con base en las estadísticas de 2009 del Instituto de Elección y
Participación Ciudadana de Tabasco.

257
Los partidos políticos en Tabasco

Cuadro No. 49
Elecciones para Presidente Municipal y Regidores en Tabasco
2009

Fuente: elaboración propia con base en las estadísticas de 2009 del Instituto de Elección y
Participación Ciudadana de Tabasco.

5.8 Elecciones federales y comicios locales de 2012


En 2012 el PRI ocupó un lugar preponderante en la opo-
sición política; esperó pacientemente su regreso al poder
presidencial, se afianzó en diversos estados de la República,
su estructura territorial en diversas regiones no se alteró, ni
desapareció y se posicionó como el táctico de los acuerdos
legislativos a partir del segundo sexenio panista.
En el PRD para la selección del candidato a Gobernador
se consideraron: a el diputado federal Adán Augusto López
Hernández y al ex Senador Óscar Cantón Zetina y Arturo

258
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Núñez Jiménez, quien era respaldado por López Obrador.


Núñez Jiménez vice presidente del Senado, ex presidente del
IFE y ex subsecretario de Gobernación, fue el Candidato de
“unidad” al vencer mediante encuestas a sus rivales. El PAN
postuló a Gerardo Priego Tapia.

Cuadro No. 50
Elecciones para Presidente de la República en Tabasco 2012

Fuente: elaboración propia con base en datos del Atlas de Resultados Electorales Federales
1991-2015.

En el PRI, a Humberto Mayans Canabal, ex secretario


general de gobierno, y ex perredista, se le retiró como posible
candidato porque no cumplía con cinco años de militancia
en el PRI.
En la lista de aspirantes se anotaron: la ex senadora y di-
putada federal Georgina Trujillo; el ex alcalde de Centro,
Evaristo Hernández Cruz; y el Senador Francisco Herrera,
Luis Felipe Graham, ex secretario de salud estatal (puesto al
que renunció para participar), Jesús Alí de la Torre, alcalde
de Centro hasta 2011. Finalmente, el abanderado fue Jesús
Alí de la Torre.

259
Los partidos políticos en Tabasco

Cuadro No. 51
Elecciones para Gobernador en Tabasco 2012

Fuente: elaboración propia con base en las estadísticas de 2012 del Instituto de Elección y
Participación Ciudadana de Tabasco.

El día de los comicios comenzó a operar el Programa de


Resultados Electorales Preliminares de Tabasco (PREPT),
tras el cierre, el perredista Arturo Núñez Jiménez resultó
triunfador con el 51.3 % de los votos; Alí de la Torre del
PRI 43.7 %. El PRD logró el triunfo en diez
ayuntamientos: Cárdenas, Centla, Centro, Comalcalco,
Cunduacán, Huimanguillo, Jalpa de Méndez, Macuspana,
Nacajuca y Tacotalpa; además ganó catorce distritos
uninominales de mayoría relativa.

260
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Cuadro No. 52
Elecciones para Senadores en Tabasco 2012

Fuente: elaboración propia con base en datos del Atlas de Resultados Electorales Federales
1991-2015.

Cuadro No. 53
Elecciones para Diputados Federales en Tabasco 2012

Fuente: elaboración propia con base en datos del Atlas de Resultados Electorales Federales
1991-2015.

261
Los partidos políticos en Tabasco

El Partido del Trabajo alcanzó dos escaños y Movimien-


to Ciudadano uno, aliados políticos del PRD con lo cual la
coalición Movimiento Progresista obtuvo la mayoría de las
21 diputaciones distribuidas por esta fórmula. Esta coalición
alcanzó la mayoría absoluta del Congreso local: 14 curules
por la vía de la representación proporcional, al final logró 17
escaños, el PT consiguió cinco y dos de Movimiento Ciuda-
dano.

Cuadro No. 54
Elecciones para Diputados Locales en Tabasco 2012

Fuente: elaboración propia con base en las estadísticas de 2012 del Instituto Elección y
Participación Ciudadana de Tabasco.

262
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

Por su parte el PRI obtuvo el triunfo en tres distritos y


siete municipios: Balancán, Emiliano Zapata, Jalapa, Jonuta,
Paraíso, Teapa y Tenosique. Por la vía de la representación
proporcional alcanzó siete, el PVEM y el PANAL uno res-
pectivamente y el PAN dos.

Cuadro No. 55
Elecciones para Presidentes Municipales y Regidores en Tabasco
2012

Fuente: elaboración propia con base en las estadísticas de 2012 del Instituto Elección y
Participación Ciudadana de Tabasco.

En el comportamiento electoral para la renovación de los


cargos federales y locales se identificaron tres momentos his-
tóricos que permitieron agrupar las tendencias de las vota-
ciones: la de más vieja data desde la instauración del Partido
Nacional Revolucionario se caracterizó por la hegemonía del
hoy PRI y su declive constante que abarcó hasta los años pre-

263
Los partidos políticos en Tabasco

vios a los primeros comicios críticos a nivel estatal de 1991


y 1994, (vistos anteriormente); el segundo momento se ca-
racterizó por una tendencia constante a la competitividad y
fragmentación del voto, así como por medios de estabiliza-
ción de la volatilidad electoral que se extendió hasta el año de
2008 en que se modificó la reglamentación electoral estatal
y se creó la Ley Electoral del Estado de Tabasco, así como la
Ley de Medios de Impugnación Electoral a fin de consolidar
el sistema de partidos.
El tercer momento se centró en los últimos comicios
(2009-2012) donde se dio el proceso de alternancia estatal
que vislumbra un cambio en el comportamiento del votante
tabasqueño (Bravo & Martínez, 2014).
5.9 Conclusiones
En el recuento con la alternancia en la gubernatura del estado
en 2012 termina el proceso que comenzó en 1988 fecha de
inicio del periodo de estudio cuya importancia radica en el
posicionamiento de los partidos de izquierda. No obstante,
las impugnaciones por los resultados electorales para gober-
nador señalan desde 1994 que las reglas del juego son difusas,
y el bipartidismo una realidad PRI-PRD.
• La alternancia en Tabasco se explica por las escisiones del
PRI a nivel nacional y el debilitamiento del PRI local a
consecuencia de los conflictos y escisiones. El PRD enca-
bezó la alternancia con un medio ambiente propicio para
el movimiento del voto ante factores sociodemográficos
como la pobreza y marginación de los tabasqueños, más
que pensar en una alta conciencia que determine en tér-
minos ideológicos si optar por la derecha o la izquierda,

264
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

además la competencia partidista es más visible cada día


evidenciando una nueva era para la participación política
con nuevas reglas de juego.
• El sistema de partidos local se centra en dos fuerzas po-
lítico-electorales: el Partido Revolucionario Institucional
y el Partido de la Revolución Democrática, el resto se
presentan como partidos testimoniales.
• El comportamiento electoral cambia a partir de los años
noventa, en la renovación de los cargos federales para
Presidente de la República, senadores y diputados se
observa un debilitamiento de la hegemonía priista y co-
micios críticos estatales (1994); una tendencia constante
hacia la competitividad y fragmentación del voto, hasta
las nuevas reglas del 2008 y los comicios de 2009 y 2012
donde se da la alternancia estatal y un sistema multipar-
dista de más de tres partidos.
• El liderazgo de AMLO en el perredismo tabasqueño ha
sido innegable: generó fuertes tensiones entre las corrien-
tes internas, su arribo a la capital del país, así como a
la dirigencia nacional del PRD, aseguraron su influencia
sobre los grupos y derivaron en su recomposición hasta
llegar a la alternancia estatal.

265
Conclusiones

1. En el desarrollo histórico de México las raíces del siste-


ma político moderno se encuentran en la necesidad que
tuvieron de integración y unificación que se dan al final
de la lucha armada de 1910. El Estado Mexicano se pre-
ocupó por organizar y propiciar la participación de los
diferentes grupos sociales a través del sistema político.
2. Los principales pilares del sistema político mexicano tie-
nen su origen en esos años. La institución presidencial,
el partido en el gobierno y las organizaciones de masas se
forjaron en las primeras décadas del siglo XX. En 1928,
tras el asesinato del general Obregón, el presidente Ca-
lles, en su cuarto y último Informe de gobierno (1o. de
septiembre de 1928) propuso la reforma política que dio
fin al régimen caudillista para dar inicio a un régimen
institucional.
3. Calles sentó las bases del Partido Nacional Revolucio-
nario (PNR) con el cual buscó institucionalizar la lucha
entre las diversas facciones surgidas de la Revolución.
Desde entonces y hasta 1936, cuando salió desterrado
del país, constituyó con su sola presencia el aval de la
unidad dentro del nuevo régimen y por lo mismo esa
política tiene una influencia decisiva en Tabasco.
4. Durante el gobierno del general Lázaro Cárdenas, el po-
der político en el país se transfirió de manera paulatina,
del Partido de Calles al Presidente de la República y en
consecuencia se reflejó a nivel local.

266
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

5. En el Partido por la injerencia del Estado, se integraron


en aquel entonces los sectores obrero, campesino, popu-
lar y militar, proceso que se dio también en Tabasco y
así surgen la Confederación de Trabajadores de México
(CTM) en febrero de 1936, la Confederación Nacional
Campesina (CNC) en agosto de 1938. El Partido Nacio-
nal Revolucionario se transforma ese mismo año, refle-
jando así su nueva ideología en el Partido de la Revolu-
ción Mexicana.
6. Un Estado poderoso resultaba en efecto indispensable
para poder hacer frente a la más seria oposición a las re-
formas cardenistas: el latifundio, los intereses extranje-
ros. Cárdenas se decide de tal suerte por incorporar las
organizaciones de masas al Partido, de modo que, con su
apoyo, se lograra impulsar con mayor fuerza el proyecto
de la Revolución.
7. El PRM de Tabasco como después el PRI mantuvo en
los sectores instituciones no para defender los intereses
de las clases que formalmente representaban, sino para
mantener en ellas la disciplina que se requería para que
diera frutos la política oficial por la que se optó a partir
de los cuarenta. Antes de esta fecha, el Partido Socialista
Radical Tabasqueño a través de las Ligas de Resistencia
expresaron las demandas de las clases explotadas y su in-
fluencia regional y nacional contribuyó a frenar el viraje
derechista de los gobiernos posrevolucionarios.
8. Los mismos rasgos corporativos del régimen, sin embar-
go, no cambiarían mucho desde entonces hasta la fecha
y ese fue el caso de Tabasco. Habrá sólo dos modifica-

267
Los partidos políticos en Tabasco

ciones al suprimirse el sector militar durante el gobierno


del general Ávila Camacho, y la creación en febrero de
1943, de la Confederación Nacional Obrera y Popular
(CNOP), y a partir de 1946 se integró formalmente al
Partido Revolucionario Institucional.
9. El sistema político mexicano se puede conocer mejor que
nada a nivel local. En Tabasco el PRI vio venir sus prime-
ros síntomas de decadencia por las políticas económicas
del régimen que acentuaron la desigualdad, proceso que
fue clave de lo que iba a acontecer a nivel político, du-
rante la década de los setenta y más tarde, en lo político
durante la década de los ochenta.
10. En Tabasco hasta antes de 1988 en las experiencias elec-
torales en el sistema de partidos se identifican: un partido
dominante, el PRI, un grupo de partidos con alcances
limitados PPS y PST y un tercer grupo compuesto por
organizaciones que tienden al estancamiento o incluso
al retroceso, tal es el caso de los partidos PSUM, PAN
PDM y PARM.
11. Los sucesos ocurridos a partir del periodo de estudio
1988-1994 denotan un cambio radical de la geografía
política de Tabasco. El cambio se refiere a tres aspectos
fundamentales:
» a) Se fue incrementando la presencia electoral
de la oposición, no solo del PRD, sino también,
aunque en menor medida del PAN. La oposición
no sólo apareció en las zonas rurales sino también
en las zonas urbanas que también golpeó la crisis

268
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

económica, donde tradicionalmente el dominio


era del partido oficial;
» b) a partir de la década de los ochenta, se incre-
mentó por otra parte la participación de la so-
ciedad civil tabasqueña en organizaciones: de
colonos, comerciantes, campesinos, trabajadores,
y agrupaciones de las clases medias como Aso-
ciaciones de Padres de Familia, organizaciones
independientes de los partidos, cuyos niveles de
participación ciudadana persisten bajos.
» c) se manifiesta en consecuencia un importante
deterioro del consenso priista en el estado y en la
legitimidad, de los gobiernos, sobre todo en las
zonas rurales.
» d) la fragilidad histórica de la sociedad civil ta-
basqueña no radicó solamente en la inexistencia
de partidos de oposición, sino también de organi-
zaciones sociales independientes del partido ofi-
cial. Incluso la mayoría de las organizaciones del
partido oficial, ni en sus orígenes surgieron como
producto de movilizaciones.
12. En Tabasco la superación del garridismo, que influyó en
toda la primera mitad de este siglo, propició una lucha
con tendencias a la polarización por la fuerza de los pro-
cedimientos corporativos, donde también se combinaron
los intereses del centro, concretamente de los Presidentes
de la República en turno para favorecer a los candidatos
de su interés; la presión que ejerció la sucesión presiden-

269
Los partidos políticos en Tabasco

cial sobre los posibles candidatos a la gubernatura; y las


fuerzas sociales, en particular de los productores agríco-
las, de concesionarios del transporte terrestre y de los na-
cientes sindicatos.
13. Para los años setenta el fortalecimiento de las organi-
zaciones de maestros, de ganaderos, de cacaoteros y de
petroleros les permitió ocupar las primeras líneas del
escenario, pero con la variante de que el PRI continúo
siendo la arena política para la pervivencia de espacios de
dominio muy cerrados.
14. El PRI fue en la segunda mitad del siglo XX el canal
de movilidad política, y permitió cambiar y sostener la
dirección de sindicatos y asociaciones, lo que hasta 1988
propició una fuerte circulación de las elites en el poder
hacia las alcaldías, las diputaciones locales y, eventual-
mente las federales.
15. El control de votantes por medio del PRI estatal se de-
terioró aceleradamente desde 1985, como aconteció en
todo el país al modificar el gobierno de De la Madrid el
modelo económico, privilegiando de manera desmedida
a los grupos empresariales y esto se evidenció cuando el
PRI dio su máxima apertura participativa en la elección
de alcaldes, en procesos que el entonces gobernador En-
rique González Pedrero denominó la “democracia de car-
ne y hueso”, hasta llegar a una situación crítica en 1991 y
que definitivamente llega al rompimiento en 1994.
16. En ese proceso de pérdida de espacios del PRI, hubo
otras causas, unas internas y otras externas, desde la pér-

270
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

dida de votantes por el intermediarismo gubernamental


poco funcional; y las viciadas prácticas en la selección de
candidatos; pero también por los cambios que se fueron
operando en el sistema de partidos y los comportamien-
tos electorales a ellos asociados.
17. El PRI de Tabasco no cambió y siguió considerando que
la renovación de autoridades locales no debía hacerse en
los procesos electorales sino en la negociación y designa-
ción de los candidatos entre los sectores y esto contribu-
yó a su desmantelamiento.
18. En las disputas internas en el PRI entre los diversos gru-
pos de poder las prácticas tradicionales de coacción o de
amenaza siguieron estando presentes como una forma de
violencia intercaciquil o faccional, y ello no pareció sino
acelerar la descomposición interna y su pérdida de hege-
monía.
19. Existen formas de violencia política funcional al sistema,
ya que juegan, un papel importante en la circulación de
las elites políticas locales. Es decir, como una violencia
institucionalizada al ser considerada como un recurso
normal y permitido en la lucha por el poder, tanto por
los actores políticos como por los sujetos que permane-
cían pasivos frente al proceso conflictivo.
20. Desde una perspectiva electoral, Tabasco dejó de ser una
ínsula priista: primero por la tendencia manifestada de
conflictos no resueltos en el interior del PRI local. Segun-
do por una oposición iniciada en su interior, e incubada
desde principios de la década de los ochenta, y tercero,

271
Los partidos políticos en Tabasco

por la irrupción del PRD en la escena local que regional-


mente impactó más que en otros lugares del país, donde
todavía no existían opciones partidistas de esta fuerza.
21. El crecimiento electoral del PRD en Tabasco se expli-
ca en parte por la fuerte beligerancia que mostraron sus
cuadros dirigentes, prácticamente capaces de enfrentar
lo que venga; por otro, la insistencia a la resistencia y
desobediencia civil, misma que fue muy atractiva para
una población descontenta por el deterioro de su poder
adquisitivo, tal como lo muestran las marchas de 1991 y
de 1994 a la Ciudad de México.
22. La competitividad electoral local cobró mayor importan-
cia en este periodo 1988-1994, Tabasco no sólo se con-
virtió en el espacio privilegiado de la contienda entre el
partido del Estado y la oposición, ni fue únicamente el
nivel de gobierno en el que la alternancia en el poder
fue ya una realidad, sino que también se constituyó en
un laboratorio en el que se ensayaron y prefiguraron de
manera vacilante, diversos escenarios de modernización
política, que hasta ahora no han trastocado la estructura
central del poder.
23. Para el PRD, a nivel nacional, Tabasco a pesar de los re-
sultados federales de 1994 fue una entidad que le aportó
un gran apoyo, fue de especial importancia en las elec-
ciones federales y por ende fue un elemento clave en las
negociaciones de sus espacios.
24. Las expresiones políticas opositoras y de amplios secto-
res de ciudadanos de Tabasco, percibieron también los

272
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

procesos locales como un resquicio para irrumpir en el


escenario nacional, lo que le dio a las contiendas locales
una dimensión nacional.
25. Las conquistas electorales poseen una vinculación con
los procesos de reforma y los avances generados desde la
oposición, ello se evidenció en la revisión comparativa
de los resultados obtenidos por cada partido político en
las elecciones para presidente, gobernadores, diputados y
senadores y diputados locales y ayuntamientos desde el
año 1997 hasta el 2012.
26. Los procesos electorales locales durante el periodo estu-
diado presentan un comportamiento plural y competiti-
vo, un avance hacia esquemas bipartidistas y la reducción
de distancias entre las principales agrupaciones políticas.
27. Con dos gobiernos federales panistas podría llegar a pen-
sarse que en Tabasco se hubiera dado un desplazamiento
hacia dicho partido, cuestión que no sucedió.
28. Tabasco conquistó su primer caso de alternancia partidis-
ta en el gobierno estatal tras los comicios locales de 2012
producto de un proceso de largo plazo.
29. El comportamiento electoral consiste en una tendencia
constante y progresiva de competitividad en los cargos
públicos en disputa, centrada en los partidos: Revolucio-
nario institucional y de la Revolución Democrática.
30. En la concurrencia entre las elecciones estatales y fede-
rales existió una gran similitud en el comportamiento
electoral. En Tabasco se adoptaron y adecuaron diversas

273
Los partidos políticos en Tabasco

disposiciones y modificaciones en torno al marco institu-


cional federal tendiendo a consolidar las condiciones de
competencia electoral.

274
Dra. Beatriz Pérez Sánchez

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Wilfrido Miguel Contreras Sánchez
Secretario de Investigación, Posgrado y Vinculación

Pablo Marín Olán


Director de Difusión, Divulgación Científica y Tecnológica

Francisco Cubas Jiménez


Jefe del Departamento Editorial de Publicaciones No Periódicas

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