• DOSSIER.

PORQUE ES NAVIDAD

y un lecho busca
Maité Dautant

Hoce tiempo que Maité dejó de ser el secreto

mejor guardado del Banco del libro de
Venezuela y, desde entonces, todos quienes
han tenido lo oportunidad de leerlo o
escucharlo han podido ser testigos de su
prestado tu Niño
para nacer. ..
envidiable capacidad paro integrar lo pasión,
el rigor, lo erudición y lo sensibilidad que lo
caracterizan 01 hablar de libros infantiles

Cada diciembre una suerte de tiempo Lindo pajarito que vive en el llano
mítico, de presente puro, se abre y revive desde tu piquito dale un pedacito
la humilde llegada del Hijo de Dios. La al venezolano.
música, la literatura, la danza y todas las
manifestaciones de la tradición popular se Alpargata de oro, cogollito blanco
juntan en cada lugar del mundo para dar no lo desampares, vuelve tu mirada,
un tono particular a este momento tan es­ al venezolano.
pecial del año.
En Venezuela, parte de la tradición na­ Mientras la poesía popular transita a
videña está contenida en las canciones que través de los aguinaldos y parrandas que
ubican la Natividad en pueblos o regiones le ponen banda sonora a nuestra Navidad,
conocidas. Esto hace que el aconteci­ un poeta de lo popular y lo cotidiano nos
miento resulte muy cercano, como esas cuenta de manera sencilla y sentida qué
anécdotas familiares cuyos protagonistas pasó el día en que nació el Hijo de Dios.
se desdibujan en el tiempo y terminan por Cada año las palabras de Aquiles Nazoa
adquirir matices de personajes de ficción, (1920-1976) recorren hogares, escuelas,
pero sin perder su vinculación con lo real. medios de comunicación y espacios públi­
El niño Jesús es, entonces, de nuestra cos para contarnos, en versos octosílabos,
tierra, tal vez hijo de unos vecinos, o de su versión de la historia.
unos parientes lejanos, como lo dejan en­ Este poeta, cuya obra está en el imagi­
trever estos versos de un aguinaldo popu­ nario de muchas generaciones de venezo­
lar margariteño: lanos, suele vincularse a un muy agudo
sentido del humor. Sin embargo, fue
Dicen que en Juangriego capaz de crear imágenes de profunda ter­
nació el niño Dios nura y delicadeza, como las de Retabli/lo
y que en la ensenada de Navidad y Retablo Aragüeño, dos re­
María lo bañó. latos en verso que forman parte del gran
tejido de referentes afectivos que abrigan
Puede estar tan cerca de nosotros cada año a la Navidad venezolana. A par­
como Pacheco, personaje legendario que tir de la década de los noventa estos poe­
desde el cerro El Ávila trae el frío decem­ mas consiguieron en el formato de libro
brino a Caracas, tal como nos lo cuenta álbum una valiosa vía para llegar a un au­
Simón Díaz en una de sus canciones: ditorio mucho mayor. Grandes y peque­
ños, de la provincia o de la capital, dentro
Del Ávila viene un niño chiquitico o fuera del país, los lectores pueden en­
muy arropadito, lleno de bondad contrar un vínculo con nuestra identidad
que a los caraqueños les trae de la sierra nacional en medio de un relato de pro­
la brisa serena de la Navidad. porciones universales.
Bajo el concepto de retablo, que en
El niño Jesús también puede ser llanero este caso sintetiza el concepto de teatrino,
y conocer perfectamente los referentes de la representación teatral de la historia sa­
la región con los que, en este otro agui­ grada y las imágenes unidas por un guión,
Ilustraciones de Morella Fuenmayor del naldo de Simón Díaz, se le ofrecen expre­ Nazoa trata el tema de la Natividad como
libro Retablo Aragüeño de Aquiles siones de cariño y se apela a su un acontecimiento familiar, con un mar­
Nazoa. Caracas: Playca, 1998 generosidad: cado tono afectivo, y en una atmósfera

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EDUCAClON y BIBLIOTECA N. 180 - NOVIEMBRE·DIClEMBRE 2010
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muy cercana a la vida de las comunidades habita tantos hogares venezolanos, ligada cada uno de los que niegan posada a la
populares. a la familiaridad con los hilos y las telas Virgen y a san José.
En Retablillo de Navidad hay una es­ que sirven no sólo para proveer de abrigo Cabe destacar que ambos personajes
trecha relación entre la sencillez, la po­ y vestimenta a los de la casa, sino también son representados como un matrimonio
breza, la generosidad que habita entre los para asegurar el sustento de todos con su mixto, lo que hace un guiño al tema del
que menos tienen y el milagro de la vida trabajo. mestizaje y refuerza el carácter familiar de
que florece en cualquier momento y lugar. Una vez descrita la bienvenida en la la obra al señalar una realidad tan común
La historia de José y María es la misma de casa de los pastores, la voz narrativa des­ en nuestro país, que no se ve.
tanta gente pobre que se ve en apuros cribe de manera muy sutil, el momento del La edición de 2007, de la misma edi­
ante el hecho de esperar un hijo: parto en tres acciones sucesivas: torial, cambia el formato y la ilustración,
con lo que este tradicional texto adquiere
De su esposo en compañía, Ya la Virgen tiende el manto unas dimensiones especiales. Tal como lo
soñolienta y fatigada, sobre la hierba olorosa; explica la ilustradora, Ana Palmero, su tra­
por ver si les dan posada ya como delgada rosa bajo está inspirado en los manuscritos me­
toca en las puertas María. se dobla su cuerpo santo; dievales copiados e iluminados por
Él le dice: Esposa mía, ya a través de un claro llanto monjes. Las imágenes recogen un impor­
ten calma, vamos a ver. .. los ojos del buey la ven; tante trabajo de investigación sobre sim­
Nos abrirán al saber llora el burrito también. bología bíblica, lo que se manifiesta tanto
que te encuentras en estado en cada detalle de la ilustración como en
y un lecho busca prestado Y como si de pronto se nos devolviera los colores empleados. Como bien se ex­
tu Niño para nacer. a la realidad de un teatrino o de una es­ plica al final del libro, cada doble página
cena de pesebre, la narración cierra di­ está llena de guiños, de imágenes simbóli­
Pero nadie abre, así que se deja colar ciendo: cas que se complementan y que potencian
un cuestionamiento a la indiferencia y la el sentido del relato.
falta de solidaridad ante la necesidad de los Y la historia nos relata Pero no por eso se pierden los refe­
otros: que una estrella de hojalata rentes de la cultura popular venezolana,
brilló esa noche en Belén. como la vestimenta de los personajes o la
De portón van en portón incorporación de elementos de fauna y
suplicando humildemente En la primera edición para niños de flora, así como de instrumentos musicales
y en todos les da la gente esta obra, publicada por Ekaré en 1994, llaneros. Con esta propuesta de ilustración
la misma contestación: la ilustración contextualiza aún más el re­ el lector tiene la posibilidad de adentrarse
"Esta casa no es pensión", lato y nos ubica en la cotidianidad de un en la exploración de distintos símbolos que
o "¿Cuánto van a pagar? .. " pueblo del interior venezolano: casas ru­ enriquecen la experiencia de la lectura y la
rales de techos de zinc, papagayos atra­ expanden cada vez.
y la voz del narrador no puede menos pados en el cableado eléctrico, caminos de En Retablo aragüeño, editado por
que conmoverse, y conmovernos, ante tierra. Playco en 1998, la historia de la Anun­
tanto desamparo: Los tonos cálidos dan una luminosidad ciación y de la Natividad se mezclan para
particular a los protagonistas de la histo­ ofrecernos un relato afectuoso y alegre. Ya
Qué pobrecitos que son, ria, lo que contrasta con su situación de en la portadilla unos parranderitos, como
qué pena tan sin alivio. vulnerabilidad. En los rostros de cada per­ los que aún en provincias van de puerta
Todos tienen lecho tibio sonaje se representa un estado emocional en puerta cantando aguinaldos, dan la
pero nadie corazón. e incluso una intención, como ocurre con bienvenida al lector. En este libro la por-

En medio de esa aparente oscuridad, se

enciende una luz. La generosidad y la
compasión de unos pastores proporcio­
nan hospitalidad y amor para recibir y ex­
pandir la luz divina que trae consigo el
nacimiento del niño Jesús:

A la casa de un pastor
van por fin José y María;
sólo piden hostería
para que nazca el Señor.
Pero hay allí tanto amor
por los buenos peregrinos,
que la pastota sus linos
abandona en el telar
y al punto les va a buscar
cuajadas, panes y vino.

La pastora que deja su labor para aten­

der a los peregrinos tiene reminiscencias
de la figura femenina que ha habitado y

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tada y las guardas recuerdan, por una parte, la decoración de las paredes de casas co­
loniales que aún existen en sectores populares de Caracas como La Pastora, pero a la
vez tiene una cierta familiaridad con las colchas de retazos, esas que hacían las abuelas
antiguamente. A diferencia del Retablillo de Navidad, el tono de este texto no se cen­
tra en las tribulaciones de San José y la Virgen al no conseguir cobijo, sino en el lado
cotidiano y a la vez sagrado de la historia. Por otra parte, junto a la voz del narrador se
intercalan diálogos de los personajes, con lo que se percibe con mayor fuerza el carác­
ter teatral típico del los retablos.
En la ilustración, hecha por Morella Fuenmayor, la Virgen y San José están ubicados
en la página izquierda, recorriendo un camino que atraviesa colinas y pueblos del estado
Aragua:

Él conduciéndola a pie
ella en una borriquilla
vienen llegando a la Villa
la Virgen y San José.
Flores de fino matiz
dejando a su paso van:
hoy pasaron por San Juan
ayer salieron de Ortiz.

En las páginas de la derecha el ángel Gabriel, representado por un niño vestido de

llanero, camina en dirección contraria procurando salirles al encuentro, hasta que lo
logra:

Niño que muestras de Oriente

la estrella en el sombrerito
¿a dónde vas tan solito
por estos campos sin gente?

El ángel cuenta que está en busca de María. Ésta le revela su identidad y entonces el
ángel puede entregar su mensaje:

He venido de ti en pos
para anunciarte, ¡oh María!
que en la noche de este día
serás la madre de Dios.

Una luz especial acompaña a los personajes y se potencia en el encuentro de María

con el ángel para dar una iluminación especial a las escenas finales, que transcurren en y el radiante parpadeo
el porche de una casa. Una vez más, el momento del nacimiento es apenas sugerido en
del pascual lucero brilla:­
el texto: ,
,
el nine nació en la Villa:
El aire se hace un rumor .""•._.�"", . Is¡s Deo.
__

de espigas, flores y henos

a María entre los senos
coloca el niño una flor.

En la última escena los pequeños parranderos de la portadilla corren, colina abajo,

hacia el lugar donde está la Sagrada Familia para adorar al Niño, seguidos por una pas­
tora con sus ovejas, mientras el narrador cierra su relato con una alusión a la estrella y
con la aseveración de que el niño Jesús nació en un pueblo venezolano:

y el radiante parpadeo
del pascual lucero brilla;
ya el niño nació en la Villa
"Gloria in Excelsis Deo".

Historias breves, como de juguete, que nos ofrecen en el formato de libro álbum la
posibilidad de aproximarnos a este episodio de la historia sagrada a través de una ex­
periencia estética múltiple, signada por la calidez de los textos y de las imágenes. ��

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