Nereida

nereida

s. f. MITOLOGÍA Ninfa con cuerpo de mujer de cintura para arriba, y de pez de cintura abajo, que según la mitología clásica vivía en el mar.
Gran Diccionario de la Lengua Española © 2022 Larousse Editorial, S.L.

Nereida (Nēreís)

 
mit. Cada una de las hijas de Nereo y Doris, ninfas del mar.
Diccionario Enciclopédico Vox 1. © 2009 Larousse Editorial, S.L.
Traducciones

Nereida

nereide

Nereida

néréide

Nereida

Nereïde

Nereida

Νηρηίδα

Nereida

Нереида

Nereida

Nereida

Nereida

Nereid

Nereida

ネレイド

Nereida

Nereid

nereida

SFnereid
Collins Spanish Dictionary - Complete and Unabridged 8th Edition 2005 © William Collins Sons & Co. Ltd. 1971, 1988 © HarperCollins Publishers 1992, 1993, 1996, 1997, 2000, 2003, 2005
Ejemplos ?
Y José, cual un Alfeo persiguiendo a su Arethusa de orilla a orilla se cruza en una danza sin par, ignorando que al pasar a una nereida enamora, aquella que Lola Mora sin querer dejó escapar.
Santo Tomás de Villanueva (San Martino, Siena) Inmaculada Concepción (San Martino, Siena) Caridad (1673-75, tumba de Alejandro VII, San Pedro del Vaticano) San José (1675-85, Ball State Museum of Art, Indiana) San Juan Bautista y San Juan Evangelista (1677-79, Gesù e Maria, Roma) San Felipe (1695, Brompton Oratory, Londres) San Mateo (1695, Brompton Oratory, Londres) Estatua de Pío II (1698, Catedral de Siena) Educación de la Virgen (1700, The Cleveland Museum of Art) San Felipe (1703-12, San Juan de Letrán, Roma) Nereida (1705-15...
Odiseo es ayudado por la nereida Leucótea, quien le da una manta con la que debe taparse el pecho y nadar hasta la isla de los feacios.
Durante la guerra contra los Titanes, Tetis alzó a Rea como su diosa-hija, pero no hay registros de cultos activos a Tetis en época histórica. Tetis ha sido confundida a veces con otra diosa marina del mismo nombre, la nereida esposa de Peleo y madre de Aquiles.
Esta es la genealogía más aceptada para el dios epónimo de los tribalios, Tribalo o Triballus: Urano y Gea engendraron a Crono.: Crono y Rea engendraron a Poseidón.: Poseidón y la ninfa Toosa engendraron al cíclope Polifemo.:: Polifemo y la nereida Galatea engendraron a Celto, Gálata e Ilirio (epónimos de los celtas, gálatas e ilirios), según otras fuentes Ilirio era hijo de Cadmo y Harmonia.:: Ilirio engendró a Autario (epónimo de los autariates).::: Autario engendró a Panonio (epónimo de los panonios).::: Finalmente Panonio engendró a Tribalo.
Entonces Julián ve un brillo en el promontorio, cerca de un cabo cercano a su mansión donde se encuentra un bello y brillante tridente junto a una mujer que viste unas armaduras, se trataba de Tethis la Sirena (que simboliza la esposa de Poseidón, la Nereida Anfitrite en la mitología griega), quien le dice que ese tridente le pertenece a él, puesto que él es la reencarnación de Poseidón y le lleva a su palacio submarino.
El primer satélite de Neptuno descubierto fue Tritón en 1846 por William Lassell, 17 días después del descubrimiento de Neptuno. No se descubrió ningún otro satélite de Neptuno hasta 1949, cuando Gerard Kuiper descubrió Nereida.
Un diseño robusto, sencillo y muy bien ideado. La segunda cámara sumergible que apareció fue la Lomo Nereida, de la cual consta que se fabricaron 10 ejemplares.
El nombre Tritón también fue propuesto por otros, pero no empezaría a utilizarse genéricamente hasta el año 1949, cuando fuera descubierta la segunda luna neptuniana Nereida.
Tritón es ligeramente más grande que Plutón y la composición de ambos es similar, lo que conduce a la hipótesis de que ambos comparten el mismo origen. Esto explicaría la relativa pobreza del sistema de lunas de Neptuno y la alta excentricidad orbital de Nereida.
Image:StandingBuddha.jpg Buda de pie, antigua región de Gandhara, norte de Pakistán, siglo I. Image: NereidAndKetos.JPG Panel de piedra con nereida cabalgando un monstruo marino, Sirkap, siglo II a.
Se dice que la ninfa Calipso, enamorada de un mortal, le detuvo a la fuerza en su isla; se sabe que una Nereida tuvo tratos íntimos con el rey de Pthia, y Egeria con el justo Numa, y Venus con Vulcano, que al dejar el yunque presentábase a su vista tiznado y tambaleándose con el pie cojitranco.