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El taller de tonos de
lenguas otomangues
ha impulsado el
desarrollo de
ortografías para
lenguas tonales
Participantes del seminario 1 Cortesía Mario Chávez
Dr. Mario E. Chávez Peón
Profesor-investigador del ciesas-DF
mariochavezpeon@gmail.com
El resultado de las tres ediciones del taller de tonos de lenguas otomangues ha
sido sumamente positivo en diferentes ámbitos. Desde su inicio, el taller se ha
llevado a cabo cada año en la ciudad de Oaxaca de Juárez, con el apoyo de la Fundación Alfredo Harp Helú, el Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (Inali), la
Biblioteca de Investigación “Juan de Córdova” y de un cuerpo académico interdisciplinario, interinstitucional e internacional.
Muchos estudiantes han realizado investigaciones varias, desde ponencias hasta tesis de licenciatura y maestría, derivadas del trabajo de estos talleres, entre ellos
varios estudiantes del CIESAS. En cuanto al impacto social, el taller ha impulsado
el desarrollo de ortografías para lenguas tonales. No indicar el tono dentro del
alfabeto de una lengua tonal sería similar a no escribir vocales en cualquier otro
idioma. Los tonos son unidades contrastivas esenciales en la distinción léxica y
gramatical. Por ende, el óptimo desarrollo de las ortografías de lenguas indígenas
debe incluir su escritura. A raíz de lo anterior, se han impulsado también proyectos
especíicos como vocabularios y diccionarios y, sobre todo, se ha apoyado la formación académica de hablantes de lenguas otomangues.
El taller de tonos, contribuye así a la tan necesaria creación de espacios para el
estudio de las lenguas indígenas, la formación académica de lingüistas, hablantes
y no hablantes, y el entendimiento cada vez mayor de la fascinante diversidad lingüística y cultural de México.
Del 17 al 27 de junio del presente año se llevó a cabo el tercer taller de tonos de
lenguas otomangues, con sede en la Biblioteca de Investigación “Juan de Córdova”,
en Oaxaca, Oaxaca. Este taller, cuya primera edición tuvo lugar en 2012, está dirigido a hablantes de lenguas indígenas que trabajan en proyectos culturales, académicos o educativos a favor de sus lenguas y tiene como objetivo contribuir al desarrollo y perfeccionamiento del análisis de la tonología de los idiomas otomangues.
Las lenguas otomangues constituyen la familia lingüística más diversa y compleja dentro de nuestro país. Lenguas como el mazateco, mixteco, cuicateco, zapoteco, chinanteco, entre otras, ofrecen un amplio campo de trabajo, en particular en las áreas de la fonética y la fonología, pues se caracterizan por contar con
sistemas sumamente complejos, desde amplios inventarios fonémicos (sonidos),
hasta la combinación de diversos patrones fónicos, como el uso contrastivo del
tono, diferentes tipos de fonación y acento, así como procesos morfo-fonológicos
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1 y 2: Participantes del seminario 1 Cortesía Mario Chávez
y de lexión y derivación, todos ellos temas que requieren
aún muchísimo estudio.
Una lengua es tonal si utiliza lo agudo o grave con que se
pronuncia una palabra para expresar distintos signiicados
léxicos. Es decir, dos palabras idénticas en sus secuencias de
sonidos (vocales y consonantes) pueden hacer referencia a
entidades o conceptos diferentes con base en el cambio del
tono. Por ejemplo, en matlatzinca, la palabra nu signiica, con
tono alto, ‘cabeza’, y con tono bajo, el verbo ver. De forma similar, en el mazateco de Mazatlán de Flores, la secuencia de
la consonante t más la vocal i, cambia de signiicado según
el tono con que se exprese: tí (tono alto) signiica ‘se quema’;
ti (medio), ‘se corta’; y tì (bajo), ‘pescado’. Todas las lenguas
otomangues, habladas principalmente en Oaxaca y el norte
del altiplano central, son tonales. Además de distinciones léxicas, el tono puede también usarse a nivel morfológico para
distinguir personas gramaticales y conjugaciones verbales,
entre otros elementos. Todo lo anterior es una muy breve
muestra de la diicultad analítica que pueden conllevar estas
lenguas y el arduo trabajo que representa su investigación.
Así, en 2012, el taller de tonos surge como una iniciativa
para fomentar el conocimiento y el análisis de las lenguas
otomangues. En el taller participan especialistas en dichas
lenguas que colaboran en la formación de lingüistas nativo-hablantes. El taller tiene un enfoque descriptivo, teórico y
tipológico que permite a los asistentes tener mayores bases
para la realización de proyectos relacionados con la documentación, escritura, revitalización y difusión de sus lenguas.
En el taller de 2014 contamos con la participación de
los profesores Emiliana Cruz, coordinadora general (UMass
Amherst), Francisco Arellanes (UNAM), Eric Campbell (UT Austin), Christian DiCanio (Haskens Lab, Yale), Esther Herrera (El
Colmex), John Kingston (UMass Amherst), Michael Swanton
(UNAM-Biblioteca “Juan de Córdova”), Anthony Woodbury
(UT Austin) y, por parte del CIESAS, el autor de esta nota.
En la última edición de este taller participaron más de cuarenta hablantes de un total de siete lenguas otomangues, incluyendo el chatino, chinanteco, mazateco, me’phaa, mixteco, triqui y zapoteco. En ediciones anteriores también se ha
contado con hablantes del chocholteco, mazahua, matlatzinca y otomí. Los alumnos trabajan en grupos con los profesores y asistentes durante la mañana y la tarde, discuten los
temas tratados en las presentaciones plenarias y desarrollan
investigaciones individuales o colectivas, que presentan al
inal del taller a manera de coloquio. Asimismo, varios alumnos del posgrado en Lingüística Indoamericana del CIESAS,
tanto de la maestría como del doctorado, han participado en
las tres ediciones del taller.
Cabe resaltar las tareas organizativas del equipo de la Biblioteca de Investigación “Juan de Córdova”, en particular,
la labor de Elena Yásnaya Aguilar y Tajëëw Díaz, así como
el apoyo por parte de la directora de investigación del Inali, Rosa María Rojas, y su equipo (Rosario Santos y Verónica
Martínez, entre otros colaboradores). Finalmente, hay que
mencionar la participación de destacados asistentes, alumnos de lingüística en su mayoría, que colaboraron en la ardua
tarea de encaminar las sesiones de trabajo con los grupos de
lengua junto con los profesores (en 2014: Carlos Wagner, Ana
Smith, Alejandra Ortiz, Etna Pascacio, Marcos Ramírez, Mario
Beu Hernández, Sofía Morales y Jaime Pérez).