La Oferta y La Demanda Política
La Oferta y La Demanda Política
La Oferta y La Demanda Política
Durante la dcada de los 90s, en plena instalacin del neoliberalismo en la argentina, all fue dnde la poltica perdi terreno reducindose a su mnima expresin, dando lugar a axiomas instalados por tecncratas economistas. Tan profundo cal esta nueva mirada que hasta nos hicieron seguir en los noticieros la puntuacin del riesgo pas con la cotidianeidad con la que observbamos el pronstico meteorolgico, es que de alguna forma nos anticipaba un clima, uno mucho ms artificial. En ese contexto tambin se estableci una relacin proveedor - cliente entre la poltica y la sociedad (como si pudieran separarse estos dos actores). El electorado como el cliente se limita a demandar una oferta poltica y los candidatos se valen de los recursos de marketing ms modernos para que su oferta sea la elegida. Tanto nos acostumbramos a este canal unidireccional de comunicacin, que parecan lejanos los das en los que el pueblo no solo consuma propuestas sino que era al mismo tiempo fuente de iniciativas y donde la poltica demandaba un montn de cosas que podramos nombrar como: militancia. Desde el 2003 hacia ac ese tipo de relacin poltica est cambiando, uno de los sntomas ms claros de esa transformacin es el regreso de los jvenes a la militancia, fueron los primeros en alejarse en los 90s y los primeros en volver ahora, quizs porque los jvenes son los ms escpticos y, al mismo tiempo, los que buscan con ms fuerza propuestas que esperanzan. Esta recuperacin de la poltica, aunque parezca contradictorio, tambin explica algunos resultados electorales como el de Capital Federal y Santa Fe donde tuvieron un alto desempeo propuestas vacas de contenido y con un gran marketing poltico.
La explicacin cobra forma cuando uno no slo analiza las ofertas aisladas. Slo como oferta, la propuesta que encarna la presidenta Cristina Fernndez es claramente superior, por su capacidad de generar un contexto econmico favorable, su potencialidad para materializar infraestructura y obras pblicas y hacer todo esto dando pasos claves para incluir sectores postergados; por nombrar slo tres aspectos principales. Sin embargo es indispensable saber el proyecto que propone el kirchnerismo tambin demanda, demanda participar, demanda observar los medios de comunicacin con juicio crtico, demanda mirar captulos de nuestra historia incmodos y por sobre todo nos interpela sobre nuestro rol en lo colectivo. Todava hay cierto electorado, que an ve tras el cristal de los 90s, ese es quien no acepta demandas de la poltica. Son quienes optan por propuestas que no ofrecen mucho pero no piden nada y cuya esttica proyecta una alegra abobada digna de Un mundo feliz de Aldous Huxley; pero no debe ser analizado con bronca o resignacin sino como un sntoma de que la batalla cultural demandar ms tiempo y profundizacin, mas compaeros e ideas. Estas fuerzas no piden nada, ni observar, ni pensar, es muy cmodo; ni siquiera te piden que vayas a sus actos de campaa que son lo ms parecido a un carnaval carioca que vi en mi vida. Se parecen no solo porque todos bailan, hay globos y cotilln variado; sino porque tambin son la antesala del irremediable fin de la fiesta, los ltimos coletazos antes de volver a la realidad.