Lo Sagrado y Lo Profano

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UNIVERSIDAD CATÓLICA DEL MAULE

FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES Y ECONOMICAS


ESCUELA DE SOCIOLOGÍA

Lo Sagrado y lo Profano
Mircea Eliade

Nombre: Marcos Castro Cornejo


Ramo: Introducción a la Fe
Profesor: Nelson Chávez Díaz.
El texto comienza dando una introducción e indicando que ha sido concebido y
redactado como una introducción general al estudio de los hechos religiosos, por lo
tanto se presenta analizando los distintos tipos y en que están basados
principalmente, ya sean sus simbolismos y el sistema que ellas mismas ocupan.

Como dice el título del libro, se hace una comparación constante entre lo sagrado y
lo profano, además denotando como lo profano se convierte eventualmente en algo
sagrado, dotado de características propias que finalmente puede transformarlo en
una religión.

Como introducción nos hacen ver que la religiosidad se construye desde la


conciencia, formando al hombre según ciertos parámetros y modos de conducta
que le dan sentido al mundo en que están inmersos, por lo tanto actualmente se ha
visto como el hombre ha perdido continuamente la religión, dando un mayor lugar a
lo profano, pero el autor nos dice que esto no significa que el hombre haya perdido
su religiosidad. Por lo tanto se toma lo profano a partir como una nueva
manifestación de la estructura que construye al hombre y lo dota con una razón de
ser, la misma estructura que antes se manifestaba con las expresiones sagradas es
donde lo profano ha tomado lugar.

En la introducción nos hace ver el modo investigativo que han dado sentido a los
datos expuestos, esto es analizando las modalidades de la religión, esto cambió la
perspectiva de lo que anteriormente se había hecho por lo tanto le da una
originalidad única. Al estudiarlo de esa forma nos dice que pudo extraer el verdadero
contenido y además las características específicas de estas mismas por lo tanto se
separaron de la imagen de las religiones que veían todo a partir de la idea de un
Dios como un poder terrible.

Se da también una lectura de lo sagrado, estableciendo un significado y diciendo


que lo sagrado se manifiesta apartado de la realidad y de las manifestaciones
naturales que esta misma tiene.
Partiendo con el texto en específico comienza hablando de cuando se manifiesta
lo sagrado, aclarando que el punto de partida para que el hombre conozca sobre
lo sagrado es cuando este mismo se manifiesta, y lo hace diferenciándose de
inmediato de lo profano. En el texto a esta manifestación se le da el nombre de
Hierofanía.

La definición que he podido constatar de la hierofanía es la siguente:

“Hierofanía: Es el acto de manifestación de lo sagrado.”

Por lo tanto el autor indica que en la formación de las religiones todas y cada una
de ellas se han constituido como la acumulación de estas hierofanías como
manifestaciones que terminan por dar sentido y otorgar una validación a la religión.

Las hierofanías están presentes en la mayoría de las religiones y otorgan también


el sentido a las cosas o el lugar donde se desarrollaron, dando una especie de
manifestación de lo sagrado y para un cristiano es la manifestación o encarnación
de su Dios, por lo tanto estas manifestaciones siempre tienen un carácter
misterioso, por esto a los objetos naturales y que están en este mundo profano se
les da el sentido de una realidad que no pertenece a este mundo.

El mundo de occidente ha sido el principal detractor de las hierofanías, o de la


creencia de estas mismas ya que les cuesta trabajo aceptar que para algunas
personas lo sagrado se pueda manifestar en cosas naturales, como una piedra, un
árbol, un lugar, entre otros. Pero se hace la aclaración de que no solo se trata de
esto, sino que es del sentido, por lo tanto el árbol no es adorado por ser un árbol
sino por la manifestación de lo sagrado que manifiesta.

Para las personas que ven estas cosas y creen las hierofanías la realidad de ellos
mismos cambia, no ven una solo un árbol, sino que ven algo sagrado por lo tanto
su realidad se transforma en algo sobrenatural, se revela como algo sagrado que
es cósmico o parte del universo. Por esto, el cosmo puede ser una hierofanía.

En la mayor parte donde se daba este tipo de vivencias era en la antigüedad y las
sociedades arcaicas, donde el hombre tenía tendencia de seguir y vivir cerca de las
cosas que expresaban lo sagrado, todo para ser parte de aquello y dotarse de una
forma de ser.

De estas formas las sociedades seguían asentándose en esas condiciones, por lo


tanto el mundo como lo vemos ahora y nuestra concepción de algo desacralizado
es algo relativamente nuevo en el espíritu humano.

Siguiendo los pasos del texto, nos habla de dos modos de ser, esto es parte de lo
sagrado y lo profano. Para el hombre de ahora cada cosa que hace no tiene un
sentido, sin embargo para el hombre primitivo cada cosa que hacía podía ser un
acto de comunión con lo sagrado, dotado de un sentido específico.

Lo sagrado y lo profano presenta dos modalidades de convivir en el mundo y estas


mismas han sustentado al hombre a lo largo de la humanidad.

El hombre de las sociedades tradicionales es alguien que le da un sentido religioso


a las cosas, pero su comportamiento es el de un hombre normal.

Siguiendo con el texto el autor habla de lo sagrado y la historia, lo que el autor


intentó hacer es presentar las dimensiones con las que cuenta la experiencia
religiosa para de esta forma poder separarlo de lo profano. Todo esto en el margen
del sentido de las cosas y como el hombre dotaba las cosas de un carácter sagrado.
CAPITULO 1

En el capítulo 1 se comienza a hablar del espacio sagrado y la sacralización del


mundo. Comenzando con la homogeneidad espacial e hierofanía.

Para el hombre el espacio no es un lugar homogéneo, existen diferencias entre los


espacios que son sagrados y otros que no han sido consagrados por lo tanto no
tienen este carácter.

Dice el autor que este carácter del mundo y del espacio constituye una experiencia
primordial de, porque a raíz de esto se descubre el “punto fijo” que es el eje de toda
orientación que da el mismo autor.

Todo esto es porque la revelación del espacio sagrado tiene un valor existencial
para el hombre religioso ya que el hombre dota de sentido a todo lo que tiene un
valor en su religiosidad, de esta forma el hombre que es religioso se ha esforzado
por establecer el centro del mundo, porque descubrir este centro equivale a la
creación del mundo.

Al contrario de la experiencia religiosa, lo profano cree que el espacio es


homogéneo y también que tiene un carácter neutro. Por lo que ninguna ruptura que
se produzca en este espacio establece una diferencia en mundo como un todo. Por
lo tanto se establece que hay que ver en la existencia que es desacralizada del
mundo cual sigue conservando una valoración que sea religiosa del mundo.

Lo profano no cree en un punto fijo como lo sagrado y mantiene su creencia en la


homogeneidad y la relatividad del espacio en que se encuentran. Pero el autor
establece que a pesar de esto siguen existiendo valores que recuerdan que no todo
es homogéneo que caracteriza a lo religioso en el mundo. Todo esto porque hay
lugares que son más privilegiados que otros, lugares que recuerdan cosas y que las
mismas personas les otorgan un sentido, y tienen una cualidad que es excepcional
y única para los hombres.
TEOFANÍAS Y SIGNOS.

Esto surge para poner evidencia de que no existe una homogeneidad en el espacio
como lo vive el hombre religioso aparece la iglesia. A esta misma se le otorga un
valor diferente en el espacio en que está. La iglesia participa como un umbral
separando lo sagrado de lo profano. Por esto misma la iglesia participa con un valor
diferente en el espacio en donde se encuentra. El mundo profano no participa de
esta misma.

Todo espacio que quiera ser constituido como tal implica que deba existir una
hierofanía, una irrupción en que se haga presente lo sagrado ya que esto es lo único
que podría hacer diferente a un sector del resto destacándolo de manera cualitativa.

La iglesia actúa como un medio para estar más cerca de Dios, por lo que adquiere
un simbolismo.

En esto comienzan actuar los signos, ya que estos sirven para indicar cuando un
lugar es sagrado. Cuando los signos no están presentes en un lugar no es sagrado,
y si quieren dotarlo de ese sentido se necesitan invocar los signos. Esto es evocar
fuerzas o figuras que orientan la homogeneidad del espacio para de esta forma
constituir un pie de apoyo con el mismo signo.

El hombre no puede elegir solo un lugar, sino que debe buscarlo mediante signos
que sean misteriosos.

Por esto se buscan hierofanías en lugares donde se presenten acumulaciones, ya


que el hombre religioso solo puede vivir en una atmosfera que está impregnada de
lo sagrado. Pero todo esto no solo se debe atribuir a algo humano sino que se
reproduce la obra de los dioses, para esto es necesario ver lo siguiente que es la
concepción tradicional del mundo.

CAOS Y COSMOS

Parte definiendo que el mundo es todo lo que circunda al individuo y el cosmos es


una especie de otro mundo, dotado de misticismo. En esta visión se tiene el cosmos
y el caos, para que el cosmos sea cosmos es necesario que haya sido consagrado.
El mundo es nuestro universo en el cual se manifiesta lo sagrado. Esto da validez
cuando en algunas culturas toman territorios donde se consagran y se construyen
altares. El espacio sagrado se convierte en un altar y esto equivale a una
cosmización.

Un territorio sin ocupar es un caos, pero cuando se le da el valor y se establece un


altar se hace presente el cosmos, todo esto otorgando el acto divino de la creación.

CONSAGRACIÓN DE UN LUGAR: REPETICIÓN DE LA COSMOGONÍA.

Siempre la cosmización de los territorios es parte de la consagración, es un proceso.


Se le da el sentido de reiterar la obra de los dioses. Esto es característico de ciertas
culturas.

La existencia humana vista en términos de los religiosos solo es posible gracias a


la comunicación que se tiene con el cielo. Dice que no se puede vivir sin tener una
“abertura” hacia lo transcendental.

Por lo tanto al instalarse en un territorio este se consagra, de esta forma la elección


de un territorio se transforma en la elección de un universo determinado y esté será
una réplica del de los propios dioses.

EL CENTRO DEL MUNDO

En el lugar que se le confiere ser el centro del mundo es en donde la hierofanía


rompe los niveles, de esta forma el lugar opera como una conexión hacía lo alto que
es mundo divino y también hacia lo bajo que hace referencias a las regiones
infernales, de esta forma los tres niveles se ponen en comunicación entre ellos.

Por lo tanto la columna de estos tres elementos solo se puede ubicar en el centro
del universo. De esta forma se establece el sistema de mundo que es parte de las
sociedades tradicionales, se rompe la homogeneidad, se crean aberturas entre los
tres niveles y finalmente hay imágenes que comunican una región a otra.

El mundo tradicional se concibe de esta forma. Así todas las creencias arraigan un
sentido religioso a nuestro mundo pues es el lugar más próximo al cielo.
NUESTRO MUNDO SE SITUA SIEMPRE EN EL CENTRO

Nuestro mundo debe estar en el centro solo porque presenta una comunicación
entre los dos niveles restantes. Esto caracterizaba el esparcimiento de las
sociedades tradicionales.

Ya que el hombre de estas ciudades aspiraban a vivir más cerca del centro del
mundo. A pesar de tener las iglesias que conectaban directamente al cielo buscaban
vivir más cerca del cielo por la calidad de hombres religiosos que estos eran.

Por lo tanto en todas las ciudades donde se establece una sociedad el hombre tiene
la necesidad de vivir en un cosmos ordenado, el centro constituye un punto de
partida para el ordenamiento del cosmos.

De esta forma toda construcción tiene como modelo a la cosmología. Así la


instalación de un territorio equivale a la fundación del mundo.

CIUDAD- COSMOS.

Ya que nuestro mundo es un cosmos todo ataque exterior a él amenaza con


transformarlo en un caos. Toda destrucción que se produzca en una ciudad implica
un sentimiento que los llevaría otra vez al caos.

Por lo tanto en un sentido religioso todo lo que amenaza pertenece a lo maligno, y


para que el cosmos pudiera crearse hubo que derrotar al dragón que amenazaba
en caso de su existencia.

Esta victoria sobre el dragón debía ser simbolizada periódicamente cada año, por
lo tanto cada año se constituiría otra vez.

ASUMIR LA CREACIÓN DEL MUNDO

Se subraya las diferencias entre los comportamientos de los dos mundos, tanto lo
sagrado como lo profano. En un mundo moderno las casas de las personas deben
ser funcionales, que permitan desarrollarse al individuo de la mejor manera para el
ámbito en el que está inmerso.
Como se ha visto instalarse en un lugar y levantar una morada exige una decisión
que es vital para el futuro desarrollo y la concepción de su propio mundo. Ya que
esto hace asumir la creación del mundo que prontamente se va a habitar. De esta
forma la creación se hace en base a la misma de los dioses. De ahí vienen los
sacrificios o consagraciones de los lugares para darles un sentido.

De esta forma la morada de las personas se santifica para constituir el mundo como
si fuera una creación de los dioses, de esta forma se vive en el “centro del mundo”
y se conecta de forma más fácil a los dioses.

COSMOGONÍA Y SACRIFICIO DE CONSTRUCCIÓN

Se basa en las formas de construcciones para acercar las casas al cosmos. Como
ejemplo, en la India construyen en base a lo que creen que es el centro del mundo
según los mitos que ellos mismos poseen. Si la ciudad esta santificada y las casas
también se hace especial cuidado a instalarse en cualquier lugar ya que no tendrán
este carácter. Ya que uno se crea su propio mundo en el cual debe cuidarlo y
mantenerlo.

Ya que tiene el carácter de una imitación de la creación de los dioses, de eso se


trata la cosmogonía. De esta forma toda nueva construcción toma la forma de una
nueva vida.

TEMPLO, BASÍLICA, CATEDRAL.

En todas las grandes civilizaciones el templo ha tenido una gran valoración, ya que
es una reproducción trascendente en un lugar terrestre. Claramente presenta una
diferenciación entre un espacio profano y otro sagrado, todo esto dependiendo de
donde esté construida.

La iglesia cobra un valor donde es un lugar santo por excelencia y que les pertenece
a los dioses, por lo tanto la ubicación del templo hace al lugar en general especial
ya que lo vuelve a santificar.
La estructura de esta idea perdura en todos los creyentes de una determinada
religión.
CAPITULO 2: EL TIEMPO SAGRADO Y LOS MITOS

DURACIÓN PROFANA Y TIEMPO SAGRADO.

El tiempo es igual para el hombre sagrado, no es homogéneo ni continuo. Sin


embargo el tiempo profano tiene una duración temporal que es ordinaria y en este
se inscriben los actos que son despojados de una significación religiosa.

Por lo visto el tiempo sagrado tiene una naturaleza reversible. Ya que toda fiesta
que sucede le da un carácter de poder volver el tiempo y reactualizar ese
acontecimiento cada vez que se celebre.

De esta forma el tiempo sagrado se concibe como un tiempo circular y que se puede
recuperar, de esta forma el hombre religioso trata de vivir considerando el tiempo
religioso en su vida.

Para el hombre profano también concibe una discontinuidad del tiempo pero no en
relación a lo sagrado sino que se basa en el tiempo de ocio o regocijos. Reconocen
tiempos sagrados pero no participan de ellos, por lo tanto esta cualidad del tiempo
resulta inaccesible. Sabe que no puede traer presencias divinas al mundo humano.

Para el hombre religioso es posible detener el tiempo para insertar ritos.

TEMPLUS-TEMPUS

El cosmos se reconoce como una unidad viviente que nace, se desarrolla y muere
en un intervalo de un año, reconociendo así el comienzo del Año Nuevo.

De esta forma y como el templo representa la imagen del mundo de donde está
instalado adquiere un simbolismo que es temporal.

Para el hombre religioso que es parte de las culturas arcaicas, el mundo es


renovado de manera anual, así recupera la santidad que tenía desde que salió de
su creador cada nuevo año.
Cabe destacar que a la vida cósmica se le considera como una vida en el tiempo de
carácter circular.

Por este carácter del tiempo las religiones consideran que todo tiene un principio,
un punto de partida que se establece como la creación del mundo. De esta forma
los mitos sirven para explicar la creación y dar cuenta de cómo se ha llegado a esa
realidad.

REPETICIÓN ANUAL DE LA COSMOGONÍA.

El mito que es cosmogónico es el que relata la existencia y como esta llegó al


cosmos. Los rituales que se hacen en las ceremonias es una forma de conmemorar
esta creación que se dio.

De esta forma es como en los año nuevo se da un carácter de un nuevo comienzo,


un nuevo año que implica una nueva santificación del mundo y por esto comienzan
a aparecer las ceremonias previamente mencionadas, así se purifican los pecados
que se habían hecho para recibir al nuevo mundo santificado. De esta forma el año
anterior queda abolido.

Así se crea una concepción de que el hombre es creador nuevamente cada año.

REGENERACIÓN POR RETORNO AL TIEMPO ORIGINAL.

Las cosas que el autor destaca son la repetición anual de la cosmología y que
además cuando el hombre participaba en esta regeneración del tiempo se hacía
contemporáneo por lo tanto comenzaba de nuevo con la reserva de fuerzas vitales
intacta, tal como en el momento de su nacimiento.

Esto devela la manera en que se comporta el hombre religioso con el tiempo. Ya


que ubica al tiempo de origen como algo prodigioso, ya que presenta una nueva
realidad y el hombre renovado debe apegarse a esta.

De esta forma el tiempo de origen al que se le hace mención es por excelencia el


tiempo de la cosmogonía, de esta forma este tiempo sirve como modelo a todos los
tiempos sagrados venideros ya que es el tiempo que los mismos dioses crearon y
se manifestaron en él.
Así el hombre reactualiza su mundo cada vez que quiera emprender algo de forma
exitosa.

La concepción que se crea entonces es que la vida no puede repararse sino que
solo puede recrearse por la repetición simbólica de la cosmogonía.

EL TIEMPO FESTIVO Y LA ESTRUCTURA DE LAS FIESTAS.

El tiempo de origen de una realidad, o sea el tiempo fundador tiene un valor dentro
de los hombres y también una función, por esto el hombre se esfuerza por
reactualizarlo periódicamente por medio de rituales que sean apropiados.

Las fiestas siempre se desarrollan en el tiempo en que es original y he aquí donde


se integra el tiempo original que además es sagrado, diferenciando el
comportamiento humano en un antes y después de aquella fiesta.

En algunas culturas se hacen simbolismos en las fiestas que representan el transito


del tiempo profano al tiempo sagrado.

De esta forma y proceso el hombre puede hacerse contemporáneo de los dioses a


medida que el tiempo se va reactualizando una y otra vez, y sirven para enseñar a
los hombres la sacralidad de los modelos que existen.

De esta forma el hombre busca sumergirse en este tiempo que es sagrado e


indestructible. Se hace una aclaración que las relaciones más humanas como las
sexuales, transcurren en un tiempo que es profano.

EL PERIODICO HACERCE CONTEMPORÁNEO DE LOS DIOSES.

El hombre siempre ha querido situarse en un espacio que esté cerca de los dioses,
para de esta forma crear un sentimiento de proximidad a ellos. Ya que vivir en el
centro del mundo indicaba estar cerca de ellos.

Hacerse contemporáneo de los dioses es una forma de reintegrar el tiempo sagrado


al origen, de esta forma se viven en presencia de ellos. De esta forma se busca
integrar ese sentimiento de los antepasados anteriores que sentían a los dioses
cerca de ellos.
Así el deseo de los hombres es volver a encontrarse con los dioses.

MITO = MODELO EJEMPLAR

Finalmente el mito relata una historia sagrada, un acontecimiento que tuvo lugar en
el inicio del tiempo, es una forma de revelar un misterio. Una vez que es revelado
pasa a ser una verdad absoluta para las personas que componen la comunidad
donde se ha construido.

De esta forma pueden evidenciar realidades que son sagradas y lo profano está
muy alejado, tanto que no pertenecen al carácter de los mitos ni se hacen participes
de estos mismos.

Los mitos contribuyen a la constitución del ser de las personas.

El mito sirve para revelar una sacralidad que es absoluta, pero el autor establece
que estos no pueden decirse en cualquier lugar, sino que debe ser en un lugar que
contribuya al misterio de estos mismos, e incluso en estaciones determinadas. Ya
sean en ceremonias o ritos.

Los mitos finalmente sirven para fundamentar el mundo.

REACTUALIZAR LOS MITOS

El hombre a través de los mitos se forma una constitución de ser, esto es en que se
basa en los héroes o dioses en lo que están basados para finalmente adoptar un
modelo de vida. Por lo tanto los mitos deben ser siempre parte del hombre para de
esta forma constituirlo siguiendo las prácticas que llaman a lo sagrado.

Así es necesario siempre estar reactualizando los mitos, y volviendo a considerarlos


de una forma como rememoración.

Ya que a veces las personas actúan según los mitos, si estos no están actualizados
pueden cometer barbaridades solo para seguir el modelo que ha sido impuesto en
sus propios mitos.
HISTORIA SAGRADA

Finalmente, se realiza un resumen considerando todos los puntos anteriores en los


cuales se basó para hacer separaciones entre lo profano y lo sagrado.

Basándose en el carácter del tiempo y también en los mitos que le otorgan un


sentido al hombre tanto como a lo profano que finalmente no cree en estos mismos
ya que tienen una naturaleza religiosa.

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