Informe Final Aceros Al Carbono
Informe Final Aceros Al Carbono
Informe Final Aceros Al Carbono
INTRODUCCIÓN
Proceso de elaboración:
En la presente parte del informe se procederá a explicar detalladamente, el
proceso por el cual tiene que pasar el mineral de hierro para que al final llegue
a sus productos terminados, los cuales utilizamos para el desarrollo de nuestro
entorno, con el fin de ofrecernos una vida más cómoda.
Para iniciar el proceso de elaboración del acero al carbono, se necesita en
primer lugar las materias primas, que en este caso se denomina mineral de
hierro.
La materia prima que es el mineral de hierro puede ser obtenido de
básicamente dos maneras, las cuales son primordiales en la elaboración del
acero al carbono, las cuales son:
Extracción de fuentes minerales.
En este caso se recurre a yacimientos mineros de hierro, de los cuales
se procederá a extraer el mineral necesario para sus diversos usos.
Reciclaje de elementos metálicos.
En este caso se recurre a administrar de una manera óptima los
desechos y desperdicios, para que de esa manera se contribuya al uso
sostenido de los recursos brindados por la naturaleza.
La Colada Continua:
Es la última parte del proceso de producción del acero, donde las palanquillas
se transforman en los diferentes productos de aceros largos que el mercado
nacional e internacional exige.
Este proceso empieza con el calentamiento de la palanquilla en el horno
recalentador a una temperatura de trabajo que varía entre los 1100°C y
1200°C; y de ahí pasa al tren de laminación, donde se inicia el estiramiento de
la palanquilla a través de cajas de desbaste y rodillos formando así las barras y
perfiles según el tipo de rodillo acabador que se halla colocado y de acuerdo al
largo que se desee.
El producto pasa a la mesa de enfriamiento donde se corta y empaqueta.
Si se desea obtener alambrón, el acero laminado se transfiere caliente al tren
de alambrón, donde se producen diferentes diámetros y luego pasa al
bobinador que produce diferentes rollos.
PROCESO DE CONFORMADO DE LOS ACEROS
Los tochos podrían laminarse en un gran laminador del tamaño usado para
lupias, pero esto no se acostumbra por razones económicas. Frecuentemente
se lamina lupias en un laminador continuo de tochos compuesto de alrededor
de ocho estaciones de laminado en línea recta. El acero formado, por ultimo
pasa a través del laminador y sale con un tamaño final de tocho,
aproximadamente de 50 x 50 mm., el cual es la materia prima para muchas
formas finales tales como barras, tubos y piezas forjadas.
1.2 Forja:
Es un método de manufactura de piezas
metálicas, que consisten en la deformación
plástica de un metal, ocasionada por esfuerzos
impuestos sobre él, ya sea por impacto o por
presión. En el proceso, el metal fluye en la
dirección de menor resistencia, así que
generalmente ocurrirá un alargamiento lateral al
menos que se le contenga. El grupo de metales
más importantes lo constituyen el acero y sus
aleaciones, ciertos materiales no ferrosos, como
el aluminio y sus aleaciones.
Existen dos clases de forja, en matriz abierta y en matriz cerrada.
Forja en caliente
Aparentemente el proceso es sencillo, es
decir, calentar el metal y de uno o dos
golpes forzarlo a llenar la cavidad del dado.
En realidad, el metal está muy lejos de ser
líquido, por lo tanto, no fluye tan fácilmente
a las cavidades de la matriz. Así que, para
forjar piezas, excepto aquellas de forma
sencilla, es necesario tener en cuenta lo
siguiente:
Cortar y preformar la pieza. El corte
se puede hacer con sierra a cizalla y
preformada con una prensa de forja.
Se utiliza el preformada cuando la
pieza a forjar tiene una geometría complicada a su pesa unitaria es
relativamente alta, con esta operación se modifica la configuración inicial
del metal, facilitando así su forjado final, requiere además de un
calentamiento inicial.
Calentar un trozo de metal cortado y/o preformado en hornos de
tipo eléctrico, de resistencia, de inducción, de alta frecuencia o de
combustible líquido o gaseoso. Los aceros (incluyendo el acero
inoxidable) son calentados aproximadamente a 1230 °C, en cambio, el
aluminio se calienta a 425 °C. Esta fase de calentamiento se requiere a
pesar de que el metal haya sido previamente calentado para su
preformado.
La pieza ya caliente, se coloca en la matriz de la prensa o martinete.
Dependiendo de su forma o tamaño y complejidad será el numero de
pasos y cavidades de la matriz, donde proporcionalmente se le ira dando
forma al producto. Cuando la pieza ha sido formada, pasa a unas
prensas cortadoras de menor capacidad, para en efectuar en ellas el
desbarbado. Se debe realizar inmediatamente después del formado final
para aprovechar la elevada temperatura de la pieza y hacer el corte con
una fuerza menor.
Una vez que la pieza se ha forjado y desbarbado, se le somete
normalmente a un tratamiento térmico con el propósito de aliviarle
esfuerzos originados por la deformación y reducir la dureza en caso de
aceros de alto contenido de carbón. Los métodos más usuales para
ablandar el acero son el recocido y el normalizado. Las partes hechas
por el proceso de forja en caliente, pueden pesar desde 200 grs. hasta 2
toneladas, sin embargo, la mayoría de las piezas pesan de 2 a 50 Kg.
Estampado
El estampado difiere de la forja con martillo en el que
se usa más bien una impresión cerrada que dados de
cara abierta. La forja se produce por presión o
impacto, lo cual obliga al metal caliente y flexible a
llenar la forma de los dados, en esta operación existe
un flujo drástico del metal en los dados causado por
los golpes repetidos sobre el metal. Para asegurar el
flujo propio del metal durante los golpes intermitentes,
las operaciones se dividen en un número de pasos.
Cada paso cambia la forma gradualmente,
controlando el flujo del metal hasta que se obtiene la forma final. El número de
pasos requeridos varía de acuerdo al tamaño y forma de la pieza, las
cualidades de forja del metal y las tolerancias requeridos. Para productos de
formas grandes y complicadas, puede requerir usar más de un juego de dados.
Las temperaturas aproximados del forjado son: acero de 1100 a 1250 °C.;
cobre y sus aleaciones de 750 a 925° C.; magnesio 315° C. y aluminio 370 a
450° C. la forja de acero en dados cerrados varía en tamaño desde unos
cuantos gramos hasta 10 mg.
Los dos principales tipos de martillos de estampado son el martinete de vapor y
el martinete de caída libre o martinete de tablón. En el primero, el apisonador y
el martillo son levantados por vapor, y la fuerza del golpe es controlada por el
estrangulamiento del vapor. En el martinete del tipo de caída libre, la presión de
impacto es desarrollada por la fuerza de caída del apisonador y el dado cuando
golpea sobre el dado que esta fijo.
1.3. Extrusión:
La extrusión en caliente es
un proceso que utiliza la
gran maleabilidad de los
materiales previamente
calentados para formarlo.
Consiste en forzar al metal
(contenido en una cámara
de presión) mediante un
embolo a salir a través de
una matriz formadora
especial, que determina la
sección transversal del
producto. Este emerge
como una barra continua
que se corte a la longitud deseada. La mayoría de los metales utiliza extrusión
en caliente, para reducir las fuerzas requeridas, eliminar los efectos del trabajo
en frío y reducir las propiedades direccionales. El proceso también se puede
utilizar para materiales de baja resistencia que no se pueden formar por
estirado.
Los metales que más comúnmente se someten a extrusión son: El plomo,
cobre, latón, bronce, aleaciones de aluminio y magnesio. La obtención de las
piezas metálicas por el proceso de extrusión se puede realizar para los
siguientes materiales con las temperaturas adecuadas.
Acero 1100–1250ºC
Cobre 750–925ºC
Aluminio 320 – 450 ºC
Extrusión directa
Consiste en colocar dentro de la cámara un tocho caliente y redondo que se
comprime mediante un embolo. El metal extruido a través del dado, se abre:
hasta que solo queda un pequeño residuo para cortarlo cerca del dado y
eliminar el extremo.
Extrusión indirecta
Difiere de la extrusión directa, en el que la parte extraída se forza a través del
embolo. Se requiere menor esfuerzo en este método, pues no hay fricción entre
el trozo de metal y las paredes del recipiente que lo contiene.
Sin embargo, tiene limitaciones tales como, la debilidad del ariete por ser hueco
y la imposibilidad de proporcionar un soporte adecuado a la parte extraída.
1. Carbono.
2. Níquel.
3. Níquel-cromo. Principal aleante el Níquel.
4. Molibdeno.
5. Cromo.
6. Cromo-vanadio.
7. No se fabrican.
8. Níquel-cromo-molibdeno. Principal aleante molibdeno.
9. Níquel-cromo-molibdeno. Principal aleante Níquel.
Las planchas de acero de bajo carbono son usados para productos utilizados
en la fabricación de carrocería de automóviles, planchas estañadas y planchas
de acero para esmaltar porcelana. Estos productos, deben tener propiedades
especiales, algunos de los cuales son:
- Fácil fabricación.
- Suficiente resistencia después de la fabricación.
- Apariencia atractiva antes y después de la fabricación.
- Compatibilidad con otros materiales y varios recubrimientos.
ELEMENTO % COMPOSICIÓN
Carbono 0.03 a 0.12
Manganeso 0.20 a 0.60
Silicio 0.02 a 0.15
Fósforo 0.04 max.
Azufre 0.04 max.
NO RESULFURIZADOS
MÁXIMO DE MANGANESO: 1,00 %
Resistencia Límite de
Nº SAE o Alargamiento Dureza
a la tracción fluencia
AISI en 50 mm Brinell
Rm Re
Acero Hipereutectoide
Propiedades de diseño
Hoja de
especificacio
nes de los
aceros:
TORNILLO
LOS Anillo con Diseño de Ajedrez
Planchas Gruesas
Ficha Técnica
Normas Técnicas
Composición Química
Propiedades Mecánicas
Forma de suministro
Cada plancha lleva su identificación respectiva con pintura o crayon, donde se
indica espesor, calidad y número de colada. Las planchas navales certificadas por
Lloyd´sRegister of Shipping son marcadas además con el sello de Lloyd´sRegister.
Bobinas y Planchas Zincadas Lisas
Ficha Técnica
Normas Técnicas
La masa del recubrimiento de zinc, tipo de acero, tolerancias dimensionales de
acuerdo a la norma JIS G 3302-87 SGCC; "Hot-dip Zinc-coated Steel Sheets and
Coils". La composición química del acero utilizado cumple con SAE 1009.
Revestimiento de Zinc
La masa del recubrimiento de las planchas o bobinas es la cantidad de
recubrimiento en ambas caras de la plancha o bobina expresada en g/m2
Forma de suministro
Este material se suministra en bobinas de peso variable o en paquetes de 2 t ó 3 t
aproximadamente.
En cada paquete de planchas o bobina se coloca una tarjeta adhesiva con la
identificación respectiva.
Planchas Zincadas Onduladas
Ficha Técnica
Normas Técnicas
La masa del recubrimiento de zinc y el tipo de acero de acuerdo a JIS 3302-87
SGCC . La composición química del acero utilizado cumple con SAE 1009.
Revestimiento de Zinc
Similar a las planchas zincadas lisas con recubrimiento Z 12 de norma JIS
G3302/p> Se pueden suministrar otros recubrimientos, previa consulta.
Forma de suministro
Las planchas se suministran en paquetes de 2 t ó 3 t aproximadamente.
En cada paquete de planchas se coloca una tarjeta adhesiva con la identificación
respectiva.
2. Montaje:
El montaje de probetas de acero es realizado generalmente mediante
una resina fenólica termoestable, tal como la baquelita. La baquelita
ofrece las ventajas de un rápido montaje y de una relativa dureza; la
otra ventaja es la de mantener lisa o nivelada la superficie de la probeta
durante el desbaste y el pulido. La principal de desventaja de la
baquelita es su temperatura de termoestabilidad o de fraguado que se
encuentra en el rango de 135 a 149°C. Muchas probetas de acero no
pueden ser calentadas en este rango debido a que esto afectaría su
microestructura. Por lo tanto, es esencial considerar el efecto de la
temperatura del proceso de montaje sobre la microestructura del acero,
cuando éstas son montadas en baquelita. Otra desventaja es que
probetas frágiles pueden ser dañadas por la presión requerida, mientras
se realiza el montaje.
En ciertos casos las muestras de acero son montadas en materiales
termoplásticos; tales como la lucita. Similar a los materiales
termoestables, los materiales termoplásticos requieren presión y calor,
su temperatura de fusión es variable; algunos son bajos como 66°Cy
otros tan alto como 149°C. La principal desventaja de los materiales
termoplásticos es su suavidad; por lo que es muy recomendable que la
probeta sea rodeada en el montaje por un material duro para preservar
su llanura o nivel.
Muchos metalógrafos prefieren los plásticos que son endurecibles a
temperatura ambiente, como las resinas epóxicas. Esto es debido a que
los materiales de montaje se los usa en estado líquido, y se puede verter
en muchos moldes a la vez. Los plásticos para montaje a temperatura
de ambiente normalmente requieren varias horas (o toda una noche)
para solidificar; sin embargo, algunas formulaciones, solidifican en 1 o 2
horas, dependiendo de la cantidad de endurecedor usado. Estos
montajes por lo común son bastante suaves y, por lo tanto, requieren de
técnicas de montaje similares a aquellas usadas para materiales
termoplásticos. Las principales ventajas de las resinas epóxicas son las
siguientes:
No se usa presión, y así las resinas epóxicas pueden ser usadas
para el montaje de probetas frágiles.
Se generan temperaturas más bajas que aquellas requeridas para
el montaje de materiales; tales como la baquelita o lucita.
Las resinas epóxicas tienen alta resistencia a los ácidos y
solventes fuertes.
El tamaño de la probeta que puede ser montada en resinas
epóxicas está limitado sólo por el tamaño del contenedor para el
montaje.
Técnicas de montaje:
Las técnicas específicas usadas durante el montaje de probetas de
aceros al carbono y aleados depende de: los aumentos a ser usado, los
requerimientos de preservación del borde, y los materiales de montaje.
Cuando la examinación a ser realizada no es mayor a 100 X, no
existiendo un particular interés en los bordes, y no siendo un problema la
máxima temperatura incurrida en el montaje, no se necesitan medidas
especiales; y todo lo discutido sobre materiales para montaje, es
satisfactorio. En contraste, el montaje debe ser hecho con mucho
cuidado, cuando la probeta será examinada a más de 100 X, o cuando la
preservación del borde es de principal importancia (especialmente si se
va a usar uno de los materiales de montaje más suaves). Para obtener
un grado de nivelamiento apropiado de los bordes para su examinación
a altos aumentos, pueden ser requeridas técnicas especiales.
El uso de materiales de montaje tan duros como la baquelita, ayuda a
conseguir y retener la llanura; pero muchas veces las probetas de
ensayo deben ser niqueladas antes o después del seccionamiento, o
deben ser rodeadas en el molde con una sección de un tubo o con un
pedazo de material duro. La adición de partículas de cerámica (o de
partículas metálicas compatibles con la probeta con respecto a su
dureza, resistencia a abrasivos, y características de ataque), ayuda a
mantener el nivelamiento de la superficie; especialmente, si el montaje
es realizado con materiales termoplásticos o plásticos que solidifican a
temperaturas ambiente. Los montajes realizados mediante este
procedimiento son frágiles y fáciles de romper; pero normalmente; esto
no es una desventaja significante durante la preparación de la probeta.
El recubrimiento de la probeta de ensayo con níquel es una práctica
común. Debido a que el recubrimiento de níquel protege y preserva los
bordes durante el corte final y ayuda a mantener la superficie lisa y
nivelada durante el desbate y pulido. Un espesor de recubrimiento de 50
u; es generalmente suficiente.
3. Desbaste:
La distorsión en la superficie siempre estará presente en algún grado,
sin tener en cuenta el tipo de equipo usado para el seccionamiento de la
muestra. Esto hace necesario, una serie de etapas de desbaste; con la
finalidad de remover esta capa distorsionada y producir una superficie
lisa.
Las probetas de acero requieren de dos etapas de desbaste: grueso y
fino. El desbaste grueso es hecho en papeles de carburo de silicio malla
de : 80, 100, 120. El tamaño de la malla del primer papel abrasivo
depende del proceso seccionamientos de la muestra; por ejemplo, si la
superficie fue cortada mediante sierra, será necesario un papel abrasivo
inicial de 80 malla, seguido por 100 y 120, en el caso de que la muestra
fuese seccionada mediante disco de corte, el desbaste grueso puede ser
omitido. El desbaste fino es generalmente realizado con tres o cuatro
papeles abrasivos de tamaño progresivamente más fino (usualmente
N°240, 320,400 y 600 malla).
Durante el desbaste, es necesario el uso de un flujo de agua para
mantener la probeta fría; excepto cuando están presentes en la muestra
partículas solubles en agua (por ejemplo nitruro de aluminio). Cuando se
sospecha que la muestra presenta partículas solubles en agua y es
necesario su examinación, se debe usar como medio de enfriamiento el
kerosene o algún aceite comercial sin contenido de agua.
Para obtener una superficie plana con una mínima deformación, la
probeta debería ser mantenida con las yemas de los dedos; de tal forma
que, toda la superficie sea devastada por el papel abrasivo. La presión
aplicada debe ser moderadamente fuerte, con un movimiento de un lado
a otro desde el centro a los bordes en el disco de desbaste. La superficie
de la muestra debería ser examinada periódicamente, para determinar
cuándo las ralladuras de la etapa previa han sido eliminadas. El
desbaste, debería continuar por un tiempo de dos a tres veces mayor
que el tiempo requerido para remover las rayas de la etapa previa. Esto
aseguraría la eliminación de la zona deformada. Si ocurre una faceta
durante el desbaste, el punto de aplicación de la presión debería ser
cambiado, con la finalidad de eliminarla; por ejemplo, una mayor presión
puede ser aplicada con el dedo pulgar y menos con el resto de los
dedos. En este caso, el desbaste debe proceder usando el mismo papel
abrasivo con el cual se obtuvo la faceta o con el papel anterior; y no
debe usarse otro papel más fino hasta que la superficie esté
completamente plana. Entre cada etapa de desbaste, la probeta debe
ser girada 90°.
Si la probeta (montada o no montada) no es cuadrada, la secuencia de
desbaste debería ser pea planeada para que la longitud más larga sea
paralela al desbaste final; esto evitaría el redondeo de los bordes.
Siempre que se realice el cambio de papel abrasivo, es necesario
humedecer el disco con agua para obtener una buena adherencia del
papel abrasivo, y prevenir su desprendimiento durante el desbaste.
El lavado de la probeta antes de proceder con la siguiente etapa,
previene la contaminación de los papeles abrasivos. Después del
desbaste final, toda la superficie de la muestra debería ser limpiada con
algodón y agua, lavada con alcohol y secada.
Metal Distorsionado:
La poca habilidad de los metalógrafos para reconocer superficies
distorsionadas sobre superficies pulidas, pueden guiar a conclusiones
erróneas. La fig. 2.10 muestra la microestructura de una probeta de
acero al carbono en condiciones normalizadas (enfriado al aire desde
871°C), que parece estar satisfactoriamente pulida. Esta microestructura
puede ocasionar conclusiones erróneas, por parte de los metalurgistas.
La microestructura real es una perlita fina que fue severamente
deformada durante el pulido; como muestra la fig. 2.11 que corresponde
a la misma zona después de remover la capa de metal deformado.
Casos similares pueden suceder con otros tipos de microestructuras.
Las capas superficiales deformadas pueden ser removidas por ataque y
pulidos sucesivos (con tiempos de pulido, sólo lo suficiente para remover
la capa atacada). Estos tratamientos pueden ser necesarios repetirlos
varias veces; pero, generalmente dos tratamientos son suficientes; en
todo caso, la examinación en un microscopio entre cada tratamiento,
determinará si se requiere una corrección adicional.
Pulido Electrolítico:
El pulido electrolítico presenta limitadas aplicaciones en los aceros al
carbono y aleados, debido a que remueve las inclusiones, redondea los
bordes severamente y genera ataques preferenciales en estructuras de
varias fases. El pulido electrolítico tiene la ventaja de la velocidad; un
pulido de alta calidad que revele el tamaño de grano ferrítico puede ser
obtenido en casi 2 minutos. Normalmente no es necesario montar la
probeta para pulirla electrolíticamente, pero se puede usar un montaje
conductor.
Una superficie laminada en frío puede ser electropulida sin previo
desbaste; mientras que, otros tipos de superficie generalmente son
sometidos primero a un desbaste en húmedo, con papeles de carburo
de silicio de 400 malla.
5. Ataque:
El ataque metalográfico engloba todos los procedimientos usados para
revelar las características estructurales de un metal, que no son
evidentes en pulida, antes del ataque, puede revelar aspectos
estructurales tales como porosidades, grietas e inclusiones no metálicas.
Antes de ser atacada, una probeta debe ser inspeccionada para
determinar defectos del pulido tales como rasguños, picaduras, pulidos
en relieve, colas de cometa, arranque de inclusiones y porosidades.