Prueba de Coombs
Prueba de Coombs
Prueba de Coombs
Laura Bassa
Yesenith Durán
Natalia Rodríguez
Johanys Zapateiro
Desarrollo
1.
2.
3. En medicina transfusional, como en cualquier otra área de la medicina, es indispensable contar con una
historia clínica completa antes de ordenar la transfusión de algún producto sanguíneo. Por ejemplo, es
necesario documentar episodios previos de transfusiones recibidas por el paciente, durante la presente o
pasadas enfermedades o procedimientos quirúrgicos; advertir si ha existido alguna complicación y el
resultado de esas transfusiones anteriores. Es importante tener en cuenta que la transfusión es sólo una
parte del tratamiento y no una terapia definitiva por sí misma.
A menos que la situación clínica sea urgente, siempre deben llevarse a cabo las pruebas cruzadas, antes de que
la sangre total o el paquete de glóbulos rojos sean entregados para su transfusión. Las pruebas deben
practicarse en todas las unidades de sangre o componentes que contengan glóbulos rojos.
Es importante señalar que, incluso si los resultados de las pruebas cruzadas son compatibles, éstas tienen sus
limitaciones, como el hecho de que no garantizan la sobrevida normal de los eritrocitos transfundidos ni
tampoco evitan la inmunización del receptor y no detectan los potenciales errores humanos. Es posible
considerar que la única transfusión exenta de la posibilidad de provocar inmunización es la autotransfusión o
bien la transfusión que se efectúa entre gemelos idénticos.
4.
5. Es un problema en la sangre de los bebés recién nacidos. Ocurre cuando los glóbulos rojos de su bebé se
descomponen con rapidez. Esto también se llama eritroblastosis fetal. Todas las personas tienen un tipo de
sangre (O, A, B o AB). También todas tienen un factor Rh (positivo o negativo). Puede haber un problema si
la mamá y el bebé tienen diferente tipo de sangre y factor Rh. Se da con mayor frecuencia cuando una
madre Rh negativa tiene un bebé con un padre Rh positivo. Si el factor Rh del bebé es positivo, como el de
su padre, esto puede representar un problema si los glóbulos rojos del bebé pasan a la madre Rh negativa.
Se destruyen rápidamente las células sanguíneas del bebé recién nacido, lo cual puede causar síntomas como:
El sistema inmunitario de la madre Rh negativa ve los glóbulos rojos Rh positivos del bebé como extraños. Su
sistema inmunitario responde produciendo anticuerpos para combatir y destruir esos glóbulos extraños. Su
sistema inmunitario almacena esos anticuerpos por si vuelven esos glóbulos extraños. Esto puede suceder en un
embarazo futuro. Usted quedará con sensibilidad al factor Rh.
El tratamiento sería:
Terapia de luz (fototerapia) usando luces azules especiales para convertir la bilirrubina en una forma en que
el cuerpo del bebé puede deshacerse de ella
Anticuerpos (inmunoglobulina intravenosa o IGIV) para ayudar a proteger los glóbulos rojos del bebé y que
no sean destruidos
Existen dos análisis de sangre que pueden comprobar si hay anticuerpos que ataquen a los glóbulos rojos: la
prueba de Coombs directa y la prueba de Coombs indirecta. La prueba de Coombs directa se hace sobre una
muestra de glóbulos rojos del cuerpo. Esta detecta los anticuerpos que ya están unidos a los glóbulos rojos. La
prueba de Coombs indirecta se hace sobre una muestra de la parte líquida de la sangre (suero). Esta detecta los
anticuerpos que están presentes en el torrente sanguíneo y que podrían adherirse a ciertos glóbulos rojos, lo
que daría lugar a problemas si ocurre la mezcla de la sangre.