Virtual Boy
Virtual Boy
Virtual Boy
Definición:
Virtual Boy fue la tercera consola de videojuegos, lanzada en 1995 por Nintendo,
que puede ser considerado el primer perisférico hogareño de realidad virtual,
utilizando gafas estereoscópicas.
La consola fue considerada un fracaso. Según el público y distintas fuentes, una
de las peores consolas de la historia y el mayor fracaso de Nintendo.
es una consola portatil producida por Nintendo en 1995, diseñada por Gunpei
Yokoi y su equipo en un momento en el que Nintendo trabajaba en la Nintendo 64.
Era un ingenio muy diferente no solo a todo lo que Nintendo había hecho hasta
ese momento como las máquinas Game & Watch, o el game boy, también era una
consola radicalmente distinta a cualquier otra disponible en el mercado a
mediados de los '90.
Características
Virtual Boy era la puesta más importante de Nintendo en esa época debido a que
pretendía ser la primera compañía en integrar la realidad virtual a una consola de
videojuegos.
Es la primera consola que se podría considerar capaz de generar gráficos en 3D
de serie, en una especie de realidad virtual. La Virtual Boy crea la ilusión de
profundidad con un efecto llamado “parallax”, generado por distintas
profundidades en una máquina construida por espejos. La imagen que vemos
dentro de la consola es monocromática y, en este caso, roja, puesto que la
resolución y la frecuencia requerida para mostrar estas imágenes era demasiado
alta como para usar LCD, así que se usaron LED de alta frecuencia. El color rojo
es debido a que es el LED más económico.
Desarrollada en un momento en el que parecía cantado que la realidad virtual iba
a ser el siguiente paso evolutivo de los videojuegos – algo que no tan sólo era
erróneo, sino que todavía no ha llegado a día de hoy – la Virtual
Boy proporcionaba una experiencia envolvente como ninguna.
Curiosidades
En aquel entonces estos dispositivos eran visto como algo muy novedoso y
futurista, lo que llevó a más de una compañía a atraverse con este tecnología. En
el campo de los videojuegos el caso más mediático fue el de Nintendo con
su Virtual Boy.
Casi todos los juguetes diseñados por Yokoi tenían algo en común: incorporaban
componentes electrónicos. Esta característica era poco habitual en aquella época
y los dotaba de unas prestaciones que quedaban fuera del alcance de la mayor
parte de los juguetes con los que competían, lo que sin duda contribuyó
decisivamente a su éxito comercial
Era la época de la guerra de los bits, que habían comenzado SEGA y Nintendo
con la Genesis y la SNES. Muchas compañías habían abierto repentinamente sus
divisiones y estaban desarrollando sus propias consolas. Algunas, como la Jaguar,
ya prometían una experiencia de 64 bits, aparentemente cuatro veces superior a la
Super Nintendo (la plataforma más vendida por entonces).
En 1985, una compañía de Massachusetts llamada Reflection Technology Inc
(RTI) había desarrollado una tecnología de visualización ocular a través de luces
LED de color rojo. Esta innovación se llamaba Scanned Linear Array, pero tenía
serias desventajas. La primera era la más notoria: el hecho de que no podía más
que mostrar un solo color (el rojo).
SEGA y algunas otras compañías de juguetes rechazaron el proyecto, pero
Nintendo se interesó mucho y adquirió los derechos para crear una consola portátil
basada en ella. La idea era mantener la reputación de innovación en la compañía.
El precio:
Virtual Boy costaba 180$, un precio que podría no parecer tan caro respecto a
otras consolas de la época como la primera Playstation, que llegó al mercado ese
mismo año costando 299$. Sin embargo, estaba claro que el dispositivo de
Nintendo no ofrecía las mismas prestaciones que una consola doméstica,
destacando su menor potencia y sobre todo su limitado catálogo.
Tecnología extraña, diseño incómodo:
Virtual Boy consiguió crear sensación de profundidad en los juegos, algo que
veríamos muchos años después mejor implantado en Nintendo 3DS. Sin embargo,
los juegos contaban con una paleta de colores muy limitada (negro y rojo), que fue
lo más que pudo conseguir la compañía en ese entonces. El resultado era similar
a los tonos verdes de una Game Boy, algo que restaba atractivo a un aparato
presumiblemente tan futurista e inmersivo.
En cuanto a su diseño, las opiniones son dispares pero lo que está claro es que no
era la consola más cómoda con la que jugar.
Estéticamente era rara, quizás demasiado como para que tuviese éxito. Los
gráficos sorprendieron; eran extremadamente nítidos, pero en rojo y negro.
En lo que respecta al mando, es genial a nivel de diseño, pero parecía mas propio
de un juguete que una consola, dado que una consola se estaba acostumbrado a
conectar el mando al sistema y listo, en ese caso el mando para que funcionara
debia utilizar 6 pilas, pilas que hace 25 años costaban bastante
Pocos juegos:
Virtual Boy tan sólo contó con 22 juegos, la mayoría de ellos desarrollados por la
propia Nintendo, entre los que se encontraban Mario Tennis, Galactic Pinball, 3D
Tetris, o Wario Land. Muchos de ellos realmente no suponían ningún atractivo al
ser jugados en el dispositivo. Por ejemplo en el caso de Wario, apenas tenía
sentido que tuvieramos que colocarnos un aparato en los ojos para un juego de
plataformas de desarrollo 2D, pese a que contara con varios planos de
profundidad.
Testimonio
Aunque Nintendo trató de presentar el Virtual Boy como un paso adelante para las
consolas de videojuegos, en realidad fue varios pasos hacia atrás. Virtual Boy solo tenía
una pantalla monocromática en rojo y negro, no era portátil de la misma manera que
Game Boy