Criterios para Crecidas de Diseno
Criterios para Crecidas de Diseno
Criterios para Crecidas de Diseno
JULIO, 2010
SANTA FE, ARGENTINA
Editores:
Carlos Ubaldo Paoli
Guillermo Víctor Malinow
Criterios para la determinación de crecidas de diseño
en sistemas climáticos cambiantes /
Carlos Ubaldo Paoli ... [et.al.]. -1a ed.- Santa Fe:
Universidad Nacional del Litoral, 2010.
172 p.; 29x21 cm.
ISBN 978-987-657-371-9
Editores:
Carlos Ubaldo Paoli
Guillermo Víctor Malinow
Autores:
Juan Carlos Bertoni
Federico Bizzotto
Lidia Ciabbattari
Gustavo Devoto
Oscar R. Dölling.
Facundo Ganancias
Marcelo Gaviño Novillo
Albertina González
Alfonso Gutiérrez López
Rodolfo Iturraspe
Carolina López
Guillermo Malinow
Soledad Méndez
Juan Bautista Millia
Lucia Odicini
Aldo Iván Ramírez Orozco
Carlos Guillermo Paoli
Carlos Ubaldo Paoli
Basile Pedro ©
Norma Piccoli Secretaría de Extensión,
Raul Postiglione Universidad Nacional del Litoral,
Santa Fe, Argentina, 2010.
Gerardo Riccardi
Carlos Scuderi
Queda hecho el depósito que marca la Ley 11723.
Rafael Seoane
Reservados todos los derechos.
Hernán Stenta
Adriana Urciuolo. 9 de julio 3563, cp. 3000,
Alberto I. J. Vich Santa Fe, Argentina.
Erik Zimmermann tel: 0342-4571194
editorial@unl.edu.ar
Diseño editorial: www.unl.edu.ar/editorial
Ana Carina Palumbo
Impreso en Argentina
Colaboración especial de Rosana Hämmerly Printed in Argentina
Prólogo
Cabe destacar que el Comité Argentino de Presas, la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídri-
cas, Universidad Nacional del Litoral y el Centro Regional Litoral del Instituto Nacional del Agua
fueron las instituciones organizadoras, contándose a su vez con el auspicio del Organismo
Regulador de Seguridad de Presas, la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Nación, el
Centro Argentino de Ingenieros, el Instituto Argentino de Recursos Hídricos, el Comité Nacional
para el Programa Hidrológico Internacional, el Consejo Hídrico Federal, la Asociación Argentina
de Ingeniería Sanitaria y Ambiental, la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de la
Patagonia San Juan Bosco, el Centro Universitario Rosario de Investigaciones Hidroambien-
tales y el Departamento de Hidráulica, ambos de la Facultad de Ciencias Exactas, Ingeniería
y Agrimensura de la Universidad Nacional de Rosario y el International Flood Initiative del Pro-
grama Hidrológico Internacional de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación,
la Ciencia y la Cultura.
El evento fue Coordinado por los Ingenieros Calos Ubaldo Paoli, en representación de la Fa-
cultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas, Universidad Nacional del Litoral y del Centro Regional
Litoral del Instituto Nacional del Agua y Guillermo Malinow, en representación del Comité Argen-
tino de Presas, contándose además con la colaboración de la Ingeniera Rosana Hämmerly para
lo atinente a la difusión y logística organizativa.
Uno de los principales productos de esta convocatoria es esta publicación que recopila catorce
artículos seleccionados, presentados por representantes de universidades, centros de investi-
gación y consultores de distintas partes del país y de otros países latinoamericanos. Se incluye
también la descripción resumida de las actividades del taller y las conclusiones obtenidas, por-
que los debates resultaron de un alto nivel intelectual y profesional y las conclusiones son de
una gran riqueza y valor para las investigaciones a encarar en esta temática. Un recorrido por
estos textos ofrecerá al lector una primera aproximación a la situación actual de la problemática
de estimación de crecidas de diseño bajo diferentes condiciones y realidades geográicas.
Dado que esta publicación no tiene un carácter solo cientíico sino documental, se presenta
(salvo pequeños detalles para edición) el lenguaje, estructura, organización y alcance original
de cada artículo.
Índice
Cambio Climático ¿Nuevo paradigma para estimar la crecida de una presa? Guillermo 79
Malinow.
Seguridad hidrológica de presas: método bivariado. Aldo Ramírez y Álvaro Aldama. 123
Iniciativa Internacional de Avenidas, IFI para Latinoamérica y el Caribe, LAC. Grupo de 131
Trabajo, IFI-LAC.
Crecidas de diseño en cuencas de la región del Gran Rosario. Gerardo Riccardi, Erik 137
Zimmermann, Basile Pedro, Hernán Stenta, Carlos Scuderi, Raul Postiglione, Carolina
López, Lucia Odicini, Albertina González, Soledad Méndez y Lidia Ciabbattari.
RESUMEN
La variabilidad climática, el cambio climático y la va- del riesgo por daños potenciales y/o irreversibles
riabilidad hidrológica son fenómenos diferenciados de la estructura. Esto justiica la importancia que
cuyos efectos sobre los recursos hídricos pueden en los medios técnicos se le asigna a la variabilidad
signiicar, entre otras consecuencias, modiicacio- hidrológica. En este trabajo se presentan diversas
nes en las condiciones originalmente supuestas en consideraciones relativas al comportamiento de las
el proyecto (o diseño) hidrológico de una obra hí- cuencas hidrográicas ante situaciones asociadas
drica. La variabilidad hidrológica se veriica cuando al cambio climático, la variabilidad climática y la va-
ocurren alteraciones sobre las principales entradas riabilidad hidrológica. También se incluyen aspectos
y/o salidas de un sistema hidrológico (precipitación, relativos a metodologías del diseño hidrológico ante
evapotranspiración, caudales). Puede derivar en escenarios caracterizados por la variabilidad hidroló-
el aumento de la incertidumbre asociada al normal gica. Varios análisis de casos ilustran las relexiones
funcionamiento de la obra y hasta en el aumento efectuadas.
Introducción
7
Comportamiento hidrológico y criterios del diseño de obras hídricas en sistemas climáticos cambiantes:
relexiones y análisis de casos. Juan Carlos Bertoni y Facundo Ganancias.
hidrográicas ante situaciones asociadas al cam- Comportamientos como los antedichos se obser-
bio climático y la variabilidad climática. También van en las Figura 1 y Figura 2, correspondientes a
se incluyen aspectos relativos a metodologías del registros de la cuenca del río Quinto. Esta cuenca
diseño hidrológico ante escenarios caracterizados posee sus nacientes en las Sierras de San Luis
por la variabilidad hidrológica. Varios análisis de (Argentina) y atraviesa la provincia de Córdoba en
casos ilustran las relexiones efectuadas. forma meandriforme. En ocasión de períodos muy
húmedos sus aportes han llegado a inluir en la
Variabilidad hidrológica: análisis región Noroeste de la provincia de Buenos Aires,
de entradas y salidas al sistema siendo ello el resultado de diversos factores, en-
tre los cuales se destaca las acciones antrópicas.
En la estación Dique Vulpiani (provincia de San
Ampliicación Hidrológica de Luis), la cuenca encierra 5.000 Km2. Para el perío-
las Variaciones Climáticas do 1971-1989 la precipitación media areal fue de
678 mm y el escurrimiento promedio (total) anual
Habitualmente la relación entre las variables hidro- de 43,4 [mm.año]. En la Figura 1 se observa la
lógicas de entrada y salida de una cuenca presen- relación existente entre las variables de entrada y
tan un comportamiento no lineal. Por lo general salida de esta cuenca. Se desprende cierto com-
la precipitación, P, es la variable de entrada que portamiento hidrológico no lineal, en donde la ten-
presenta mayor variabilidad espacial; en términos dencia lineal media puede ser interpretada como
comparativos la evaporación y la evapotranspira- indicativa del comportamiento observado en años
ción suelen presentar valores más uniformes, fun- medios, con discrepancias entre años extremos.
damentalmente en regiones húmedas. Por lo tan- Por su parte, la Figura 2, que ilustra acerca de la
to, una alteración en la precipitación no se releja variabilidad adimensional de la precipitación (P/
del mismo modo en el caudal, Q. A partir de datos Pm), el caudal (Q/Qm) y las pérdidas (E/Em). La
hidrológicos es posible veriicar que en los años misma ejempliica la tendencia antedicha, es de-
con valores extremos (inundaciones y sequías) la cir, de ampliicación de la respuesta de la cuenca
respuesta de la cuenca se ampliica con relación con relación a la variación adimensional de la pre-
a la variación adimensional de P. Este fenómeno cipitación.
ocurre debido a las relaciones de proporcionalidad
con que los valores de P se relacionan con los En síntesis, dentro de una visión a macro escala
de Q (Tucci, 2002). En efecto, en los años más es interesante notar que la anomalía de la precipi-
húmedos el aumento de P produce un aumento tación anual generalmente se ampliica en la res-
proporcionalmente mayor de Q ya que la iniltra- puesta de la cuenca. Por lo tanto, los siguientes
ción disminuye y la evapotranspiración real suele aspectos pueden ser considerados como tenden-
disminuir en función del aumento de días de lluvia. cia general:
Todo ello signiica un aumento del escurrimiento, • existe una ampliicación natural de las anoma-
el que resulta de la conjunción de todos estos pro- lías del caudal en función de las anomalías de
cesos. Por el contrario, en los años secos, la re- precipitación y de la evapotranspiración real;
ducción de P tiende a aumentar la evapotranspira- • la relación no lineal entre P y Q depende del
ción real (clima más seco), por lo que el resultado almacenamiento (el cual a su vez es función
es una disminución proporcionalmente mayor de del tamaño y características isiográicas de
Q. Berbery y Barros (2002) destacan que en algu- la cuenca), y de la evapotranspiración, sien-
nos casos cambios del 1% en P corresponden a do ésta más importante en regiones áridas y
cambios del 2% o más en Q. semiáridas (Argentina posee 66% de su terri-
3.0 3.000
2.500
2.5
2.000
Adimensional
2.0
1.500
Q/Qm
1.5
1.000
1.0
0.500
0.5
0.000
1950 1960 1970 1980 1990 2000 2010
0.0 800 Años
0.000 0.200 0.400 0.600 0.800 1.000 1.200 1.400 1.600 1.800
P/Pm Q/Qm E/Em
P/Pm
Figura to y Figura 2.
2. Variabilidad adimensional de Precipitación
Figura 1.1.Relación
Relación adimensional
adimensional entre
entre escurrimiento y Figura Variabilidad adimensional de
escurrimiento y láminas precipitadas en la Precipitación (P/Pm), Caudal (Q/Qm) y pérdidas
cuenca del río Quinto, Argentina. (E/Em) en la cuenca del río Quinto, Argentina.
8
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
donde:
es la variación del caudal producida a poste-
riori de observado el cambio en la lluvia;
Q es el caudal (o volumen) escurrido a nivel anual
o estacional;
es la variación producida sobre la lluvia P
(evaluada a nivel anual o mensual);
C1 es el coeiciente de escurrimiento antes de
producido el cambio en la precipitación;
C2 es el coeiciente de escurrimiento evaluado
con posterioridad al cambio de la precipitación.
Las Figuras 4 y 5 ilustran acerca del comporta- Figura 4. Variación del coeiciente C en función
miento a nivel anual de las principales variables de la precipitación anual. Estación río Grande
hidrológicas correspondientes a la cuenca del río (Córdoba, Argentina).
Grande, región serrana de la alta cuenca del río
Figura 3. Relaciones entre el coeiciente de Figura 5. Variación relativa del caudal medio
escurrimiento y las variables climáticas (Tucci, anual en función de la variación de la precipitación
2002). anual. Estación río Grande (Córdoba, Argentina).
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Comportamiento hidrológico y criterios del diseño de obras hídricas en sistemas climáticos cambiantes:
relexiones y análisis de casos. Juan Carlos Bertoni y Facundo Ganancias.
variación relativa del caudal en relación a la varia- tos. Así, en el caso de grandes cuencas hidrográ-
ción de la precipitación. icas el objetivo de la implementación de medidas
no estructurales podría centrarse, por ejemplo, en
una mejora del pronóstico climático, basado en fe-
Consideraciones sobre la Evaluación del nómenos globales. En la actualidad esta tarea ya
Impacto del Cambio Climático en la Hidrología se realiza para alcances de varios meses (de 3 a
6 meses). Por el contrario, en cuencas pequeñas,
En la última década diversos estudios han inves- particularmente las urbanas, el interés mayor de-
tigado los efectos del cambio climático sobre el bería centrarse en el pronóstico del tiempo y, par-
régimen de caudales en diferentes regiones del ticularmente en el pronóstico de cortísimo plazo
mundo. La utilización de modelos hidrológicos (“nowcasting”). En los últimos años autores como
distribuidos con base física ha sido frecuentemen- Collier y Krzyzystofowicz (2000) y Golding (2000),
te utilizada en este tipo de análisis. De acuerdo a han propuesto metodologías para el pronóstico
Meller et al. (2005), probablemente estos modelos del tiempo con sorprendentes alcances de hasta
ofrezcan los mejores resultados, especialmente 2 semanas. El “nowcasting” se ha promocionado
por la posibilidad de correlacionar los parámetros a partir de la mayor disponibilidad mundial de da-
del modelo con las características físicas de la tos de radares meteorológicos, tendencia que se
cuenca y considerar la variabilidad espacial y tem- está cristalizando también en varias regiones de
poral de los procesos involucrados. Sin embargo, América Latina.
en la opinión de Le Lay y Galle (2005), su utiliza-
ción frecuentemente se ve diicultada por la nece- Otros aspectos de la inluencia de la escala es-
sidad de informaciones de alta resolución tempo- pacial hidrológica en el impacto de la variabilidad
ral y espacial en una misma escala, las cuales no climática se veriican en el campo de la planiica-
suelen encontrarse disponibles. ción y la gestión de los recursos hídricos. En estas
áreas existe una tendencia a la extrapolación es-
Por lo general, los artículos presentados en la li- pacial de previsiones hidrológicas que frecuente-
teratura especializada evalúan la inluencia de las mente deriva de la falencia de datos hidrológicos.
modiicaciones climáticas sobre los caudales de Cuando las extrapolaciones corresponden a cuen-
una cuenca bajo estudio. De acuerdo a Meller et cas de distintos tamaños es preciso contemplar la
al. (2005), lamentablemente son muy pocos los incertidumbre que genera el hecho de considerar
que presentan estudios sobre cuencas semejan- escalas hidrológicas diferentes. La variabilidad ob-
tes, con regimenes hidrológicos distintos, y ana- servada por los procesos hidrológicos en distintas
lizan el comportamiento comparativo frente a una escalas espaciales no debe ser asociada a aquella
misma modiicación climática. resultante del cambio y/o la variabilidad climática.
Por ejemplo, una práctica de manejo de suelo que
Frecuentemente las estimaciones del cambio cli- tienda a reducir el escurrimiento supericial en una
mático y/o la variabilidad climática son sintetizadas cuenca pequeña, como la siembra directa, pue-
en variaciones probables de la precipitación. Un de tener un efecto diferente a escalas mayores.
incremento del total anual precipitado puede ser La reducción del escurrimiento supericial en las
signiicativo para grandes cuencas, ya que en és- cuencas de cabecera (debido al aumento de la in-
tas dicho cambio pueden signiicar un aumento de iltración y del almacenamiento supericial), puede
la humedad del suelo y, por lo tanto, mayor chance implicar un aumento del escurrimiento supericial
de generación de crecidas importantes. Ello puede concentrado en las cuencas de mayor tamaño que
resultar inalmente en un escenario de incremen- se localicen aguas abajo de las anteriores (por el
to de la amenaza por inundaciones (siendo éstas incremento del caudal base concentrado en los
de tipo “ribereñas”). Contrariamente, tal cambio cursos de agua). La extrapolación de caudales
en la precipitación anual no tendría un signiicado especíicos correspondientes a diferentes escalas
práctico sustancial en el caso de pequeñas cuen- espaciales también puede dar lugar a estimacio-
cas (como las consideradas en áreas urbanas). nes erróneas, las que a veces son incorrectamen-
En estas últimas la característica de precipitación te asociadas al cambio y/o la variabilidad climática.
que reviste mayor interés práctico es el eventual En síntesis, la escala espacial hidrológica resulta
aumento de la intensidad de lluvia, hecho que un importante elemento que debe ser considerado
se asocia a duraciones cortas (y por lo general a a la hora de establecer los posibles impactos que
áreas pequeñas). Eventuales modiicaciones en la sobre la Hidrología puede representar un eventual
intensidad de lluvia, sin embargo, no tendrían tras- cambio climático.
cendencia en relación con la severidad de las cre-
cidas que se podrían generar en una cuenca rural Otros tópicos que revisten interés práctico en el
de gran tamaño. Estas diferencias apuntadas en análisis de la relación entre la variabilidad hidroló-
los impactos también se deberían relejar en las gica y la variabilidad y el cambio climático han sido
medidas que se encararen para mitigar sus efec- identiicados por Meller et al. (2005):
10
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
• ¿Cuál es la faja de caudales (por ejemplo, en cursos hídricos, fundamentalmente en las ac-
la curva de permanencia) dentro de la cual ciones de regulación del uso del agua (abas-
cuencas con capacidad de almacenamien- tecimiento humano, riego, etc.).
to diferente presentan mayor sensibilidad al
cambio climático? Variabilidad Hidrológica Provocada por
• ¿Qué tipo de cuenca se recupera con mayor Alteraciones en el Uso del Suelo
rapidez en los períodos de estiaje?
Una de las funciones hidrológicas más emplea- Tal como citado previamente, la variabilidad hi-
das en la regionalización hidrológica es la curva drológica también se produce como resultado de
de permanencia de caudales. La misma relaciona diversas alteraciones antrópicas sobre los siste-
los caudales con el porcentaje del tiempo durante mas hídricos. Por lo general los mayores cambios
el cual se observó un caudal igual o superior al experimentados en el comportamiento de las va-
analizado. En los períodos de sequía o estiaje el riables hidrológicas de salida (caudales, niveles,
caudal de referencia de un curso de agua es re- producción de sedimentos, etc.) se deben a cam-
presentado por el caudal con 95 % de probabilidad bios en el uso del suelo.
de excedencia de la curva de permanencia (Q95).
Los autores citados consideraron que las cuencas Aspectos referidos a cuencas urbanas: la im-
que poseen gran capacidad de regulación de cau- permeabilización de las supericies y la reducción
dales y una importante capacidad de almacena- de la vegetación tienden a alterar los procesos
miento en el acuífero poseen mayor sensibilidad hidrológicos naturales de producción y transferen-
en el caudal Q95 a potenciales perturbaciones cia, provocando el aumento de los volúmenes y de
en la precipitación. Ello es en relación a aquellas los caudales escurridos. Los principales paráme-
cuencas con menor grado de regulación. La inter- tros hidrológicos para representar las condiciones
pretación de este comportamiento está dada en el de urbanización son: (a) el porcentaje de áreas
hecho de que en cuencas con gran capacidad de impermeables de la cuenca (entendido como la
almacenamiento la entrada al acuífero está limita- proporción del área supericial con la cual la pre-
da por la precipitación, mientras que en cuencas cipitación ingresa directamente al sistema de dre-
con pequeña capacidad de regulación la entrada naje) y (b) el tiempo de concentración, Tc. A con-
de agua al acuífero está limitada por las carac- tinuación son analizados aspectos relacionados
terísticas de la cuenca (capacidad de iniltración, con ambos tópicos:
pendiente, etc.). Analizando dos subcuencas del a) alteración del proceso de producción superi-
sector superior de la cuenca del río Paraguay los cial: en el conocido algoritmo del SCS (1975)
autores conirmaron estas hipótesis, observando los valores del parámetro CN relejan distintas
que la cuenca que poseía mayor capacidad sub- condiciones para el escurrimiento en áreas ru-
terránea demoró más para recuperarse luego de rales y urbanas, distinguiéndose en cada una
transcurrido un supuesto período de sequía. Los de ellas diversas situaciones posibles. Es im-
mismos autores indicaron que estudios llevados a portante destacar, sin embargo, que dichas re-
cabo por Wilby y Le Lay y Galle (en 1994 y 2005 laciones fueron establecidas para condiciones
respectivamente) sobre curvas de permanencia, imperantes en EEUU, pudiendo no represen-
permitieron deducir que los caudales máximos, tar adecuadamente situaciones típicas de Ar-
asociados a una probabilidad de excedencia del gentina. Por ejemplo, Luque (2008) demostró
10 %, Q10, mostraron mayor sensibilidad a la mo- que las condiciones de humedad anteceden-
diicación climática, representada en forma simpli- te y los correspondientes valores tabulados
icada por perturbaciones en la precipitación. de CN no se condicen con los volúmenes de
escurrimiento registrados en dos cuencas de
De los análisis efectuados por distintos autores ci- la región central de la provincia de Córdoba.
tados se desprende que: En relación con áreas urbanas Bertoni (2001)
• Existiría una tendencia de los caudales máxi- desarrolló una relación entre el porcentaje de
mos a ser más sensibles a los cambios de la áreas impermeables y la densidad poblacio-
precipitación en relación a los caudales míni- nal, útil para efectos de planiicación (Figura
mos; 6). Los resultados permiten veriicar que las
• Aquellas cuencas con gran capacidad de regu- ciudades brasileñas poseen menor porcentaje
lación natural, aunque poseen grandes venta- de impermeabilización per cápita, hecho deri-
jas desde el punto de vista de la disponibilidad vado de la mayor concentración urbana que
hídrica constante (y muchas veces abundan- posee aquel país.
te), son las más vulnerables a los períodos de b) alteración del proceso de transferencia super-
estiaje prolongados (interdecádicos); icial: importantes variaciones en Tc son cita-
• Estas últimas cuencas deberían recibir una das en la literatura como ejemplo del efecto
atención especial por parte de los organismos comprobado de diversas obras hidráulicas
de planiicación y gerenciamiento de los re- encaradas en áreas urbanas, semiurbanas y
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Comportamiento hidrológico y criterios del diseño de obras hídricas en sistemas climáticos cambiantes:
relexiones y análisis de casos. Juan Carlos Bertoni y Facundo Ganancias.
rurales. En 1978, Meynink (citado por Singh, dientes a las situaciones de monte nativo y cultivo
1988) mostró que al variar Tc al doble o a la de soja superaron con creces el 10 %, observan-
mitad de su valor, las estimaciones del cau- do reducciones de la iniltración base del orden de
dal pico variaron de 0.48 veces a 1.64 veces. 60 mm/h a 5 mm/h. Los cambios generalizados
Singh (1988) consideró que el rango de va- de cultivos en una región (como, por ejemplo, la
riación de Tc indicado era consistente con la fuerte expansión de las supericies cultivadas con
mayoría de los estudios empíricos llevados a soja en la región pampeana central de Argentina,
cabo hasta ese momento. Desbordes (1989) Figura 7), pueden producir cambios que, a su vez,
describió que en algunas cuencas francesas, se relacionan con el método de labranza.
el proceso de urbanización produjo la división
del “lag-time” por un factor de 5 a 15; sin em- Aspectos referidos a obras de Infraestructura:
bargo, la descarga especíica (caudal por uni- las redes viales, ferroviarias y de canales por lo
dad de área) se multiplicó por un factor entre general afectan marcadamente al escurrimiento
5 y 50. Aunque Tc diiere del “lag-time”, ambos supericial, tanto aquel que se produce en forma
representan las principales características distribuida (mantiforme) como concentrada (en
temporales de la función de transferencia de cursos y canales artiiciales). Los efectos típicos
una cuenca hídrica. se traducen en retardos, desvíos y aceleraciones
de los lujos del agua. Por lo general, los cana-
Aspectos referidos a cuencas rurales: los des- les de drenaje son obras fuertemente requeridas
montes tienden a producir disminución de la eva- por la población (ya sea ésta de carácter urbana
potranspiración potencial, reducción de la iniltra- o rural) en períodos húmedos. La legítima presión
ción y aumento de los caudales escurridos. Aoki de la población repercute en los tomadores de de-
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les, exigió un cierto nivel de inversiones tendiente de drenar áreas rurales y urbanas. Bertoni et al.
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a lograr el drenaje sistemático de estas áreas. Más (1998) estimaron que en las regiones centro y
la consideración del valor de los norte longitud
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humedales en relación a su capacidad para pro- canales artiiciales constituía alrededor del 42 %
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veer diversidad biológica, pesca y otros productos de la longitud de la red de drenaje existente en
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de la vida silvestre, así como también aspectos dichas regiones. Este porcentaje se incrementó
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13
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Comportamiento hidrológico y criterios del diseño de obras hídricas en sistemas climáticos cambiantes:
relexiones y análisis de casos. Juan Carlos Bertoni y Facundo Ganancias.
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Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
nombre del barrio da cuenta de la característica les de largo plazo (5 a 10 años, o más), efecto que
original de la zona. La comparación de fotografías tiende a colapsar los sistemas. Dado la caracte-
correspondientes al mismo punto geográico es rística preponderantemente árida y semiárida del
una muestra elocuente del notable avance de la territorio argentino, estos fenómenos adquieren
urbanización sobre áreas inundables. especial relevancia para su inluencia en la mayo-
ría de las actividades del hombre.
Por otra parte, cabe realizar una relexión sobre el
rol asignado al cambio climático en la problemá- a) Variaciones interdecádicas en los sistemas
tica de las inundaciones urbanas. En los últimos de abastecimiento de agua: la sequía es un
años en varios países de América Latina los me- fenómeno natural derivado de la disminución
dios de comunicación han evocado a menudo una de lluvia en relación a los valores normales.
profundización de la amenaza por inundaciones En Argentina este fenómeno se ha hecho sen-
sobre las ciudades, que encontraría su origen en tir preponderantemente en los últimos años,
el cambio climático. Tal como lo indica Rosengaus luego de un extenso período relativamente
(2005), frecuentemente las declaraciones mesu- húmedo que se extendió desde la pasada dé-
radas de la comunidad cientíica mundial son tra- cada del 70 y hasta el in del siglo XX. Regis-
tadas y simpliicadas por los medios de comunica- tros hidrológicos de la provincia de Corrientes
ción de masas, que las transforman en alarmistas muestran importantes sequías hidrológicas in-
y poco equilibradas. A su vez, no relejan el con- teranuales de largo período entre 2003 y 2009
texto de incertidumbre asociado a los resultados (Figuras 9 y 10; Rodríguez et al., 2010).
que, por lo general, es bien identiicado por sus La escasez de agua se produce cuando el con-
autores originales. Particularmente alarmante re- sumo de agua sobrepasa los recursos dispo-
sulta la interpretación a partir de la cual todos los nibles. Por lo tanto, aunque la escasez se evi-
acontecimientos extremos serán más extremos y dencia primordialmente en períodos de sequías,
más frecuentes. La importancia dada a las con- para un tratamiento correcto de ambos concep-
secuencias del cambio climático global quizás no tos es importante diferenciarlos claramente.
contribuye a construir una visión completa de los Cuando la sequía se solapa con la escasez del
problemas asociados al riesgo a que están sujetas agua, se produce un estrés generalizado que
las ciudades frente a las inundaciones urbanas. puede amenazar todos los usos prioritarios y
Por lo tanto, esta visión parcial del problema tam- la biodiversidad de los ríos. El abastecimiento
poco ayuda a encontrar una solución adecuada humano representa el uso prioritario por exce-
a la gestión del riesgo, ya que se minimizan los lencia. Un caso típico relacionado con las va-
aspectos asociados al importante aumento de la riaciones interanuales del clima se observa en
vulnerabilidad propia de las ciudades. Por último, el funcionamiento del sistema de provisión de
la percepción de la población sobre el cambio cli- agua a la región metropolitana de la ciudad de
mático es utilizada en América Latina para atenuar Córdoba. La ocurrencia de períodos de sequías,
las responsabilidades de los organismos respon- que representaron variaciones interanuales de
sables de la planiicación y de la gestión del ries- corto plazo, ha puesto al sistema ante situacio-
go. El aumento de la vulnerabilidad de las ciuda- nes críticas. Vicario et al. (2009) caracterizaron
des es un elemento muy sensible al contexto local dichas sequías con base en datos del período
(pues generalmente se asocia a errores o a la falta 1943-1999 en la estación San Roque (Figuras
de planiicación urbana), mientras que el cambio 11 y 12 respectivamente), representativa de la
climático se maniiesta a nivel global. Siendo así, cuenca de aporte al principal manantial de abas-
el análisis de la vulnerabilidad se convierte en un tecimiento del Gran Córdoba. Para tal in fueron
proceso complejo, mientras que la explicación del empleados los índices de Palmer (1965), PDI,
aumento de la amenaza debido al cambio climáti- y de Precipitación, SPI (McKee et al.,1993). El
co es más atractivo, dado que no produce respon- PDI se basa en las anomalías hídricas del ba-
sabilidades inmediatas y directas. lance hídrico seriado y emplea datos de precipi-
tación, evapotranspiración potencial y contenido
Impactos de anomalías interdecádicas secas: de agua disponible del suelo. El SPI considera
se destacan, entre otros, los asociados a los sis- las probabilidades de ocurrencia de precipita-
temas de: (a) abastecimiento de agua y (b) hidro- ción para un período dado.
electricidad. Debido a natural variación observada Los autores consideraron que el índice PDI es
en las series de tiempo climáticas e hidrológicas, más representativo del fenómeno de sequía,
la mayoría de los sistemas de abastecimiento de ya que contempla otras variables hidrológicas,
agua e hidroelectricidad están previstos para en- además de la precipitación, para la evaluación
frentar tanto las variaciones estacionales (intra- de dicho fenómeno. Ello permite un análisis
anuales), como también las interanuales de corto más amplio de las condiciones hidrológicas
plazo (2 a 4 años). Sin embargo, el impacto mayor del sistema analizado. El estudio permitió es-
se produce cuando ocurren variaciones interanua- timar que el tiempo de recurrencia (Tr) de un
15
Comportamiento hidrológico y criterios del diseño de obras hídricas en sistemas climáticos cambiantes:
relexiones y análisis de casos. Juan Carlos Bertoni y Facundo Ganancias.
mes con sequía severa en la cuenca del dique blación y (iv) la falta de inversiones en nuevas
San Roque es de 13,2 meses o 1,1 años. La obras de almacenamiento (en parte debido a
frecuencia de ocurrencia de un mes con una la presión ambiental destinada a impedir la
sequía extrema es de, aproximadamente, 4 ejecución de nuevas presas).
años. Los períodos plurianuales con sequías
severas y extremas se alternaron de manera b) Variaciones interdecádicas en los sistemas
cíclica y, aproximadamente, a cada 10 años hidroeléctricos: en los últimos años la presión
con períodos normales a húmedos, Los perío- de grupos ambientalistas contrarios a la eje-
dos de sequías más intensos y prolongados cución de nuevas presas se ha visto relejada
sucedieron en la segunda mitad de la déca- en la adopción a nivel internacional de nue-
da del 40 y entre ines de la década del 60 y vos criterios para el proyecto de este tipo de
principio de los 70; a partir del cual existieron obras. Uno de ellos consiste en circunscribir
extensos períodos húmedos y muy húmedos. la cota superior de los nuevos embalses a la
Desde la década del ´80 existieron eventos línea de inundación máxima provocada por
de sequías aislados y menos severos. Las las mayores crecidas históricas. Con ello se
características de las sequías permiten de- reduce el tamaño de las presas, aunque se
ducir que, en realidad, existen varios factores debe aumentar su número a in de producir
adicionales que se conjugan para componer la energía equivalente. Los nuevos aprove-
un panorama complejo en relación al abas- chamientos resultan entonces del tipo “a pelo
tecimiento de agua del Gran Córdoba. Entre de agua”, a diferencia de los tradicionales de
estos se destacan: (i) el sustancial aumento “regulación”. La adecuación del proyecto del
de población, (ii) la ausencia de �����
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fuentes ya disponibles), (iii) la falta de gestión cios de 2010, contempla esta restricción. Por
en la demanda con vistas a lograr un uso más lo tanto, aunque desde el punto de vista eco-
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eiciente del recurso por parte de toda la po- nómico y operativo sería deseable disponer
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Figura 10. Sequía hidrológica interanual en el período 2003-2009 en San Roquito, ���������
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Corrientes, Argentina.
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Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
Figura 12. Índice de Palmer aplicado a la estación San Roque. 1943-1999. (Córdoba, Argentina)
Figura 12. Índice de Palmer aplicado a la estación San Fi
Figura 13. Índice SPI aplicado a la estación San Roque. 1943-1999. (Córdoba, Argentina)
San Figura 13. Índice SPI aplicado a la estación San Roque.
de una sola presa (con un solo vertedero y un estar preparado para enfrentar, como mínimo,
único sistema de compuertas), desde la visión una situación hidrológica similar a la peor ob-
ambiental es necesario multiplicar las obras y, servada históricamente. Tal como lo señala
por lo tanto, las inversiones. Esta tendencia Kelman en el sitio web:blog.rhama.net, para
está llevando a que los sistemas hidroeléctri- el caso de Brasil esto corresponde a la sequía
cos estén creciendo en términos de energía registrada en los años 50.
generada, pero no en capacidad de regula-
ción. Jerson Kelman, especialista de trayec-
toria mundial, con destacada actuación en el Variabilidad hidrológica
campo de la hidroelectricidad, considera que y diseño de obras
ante tal realidad los sistemas hidroeléctricos
están aumentando su vulnerabilidad frente a
la ocurrencia de variaciones interdecádicas, Enfoques Estadísticos
particularmente durante sequías prolongadas. Alternativos de los Estudios
A efectos de paliar esta nueva realidad Kel-
man et al. (2004) proponen combinar en los Habitualmente el proyecto de una obra hídrica se
estudios de nivel de seguridad del abasteci- basa, entre otros aspectos, en el estudio estadísti-
miento eléctrico, los viejos conceptos de ener- co de series climáticas e hidrológicas homogéneas
gía irme y período crítico cuyas raíces fueron y estacionarias. Ello implica admitir que los datos
lanzadas por Rippl, en 1883. En la práctica, analizados provienen de una única población (y
ello signiica que el sistema eléctrico debería por lo tanto, de una misma distribución estadísti-
17
Comportamiento hidrológico y criterios del diseño de obras hídricas en sistemas climáticos cambiantes:
relexiones y análisis de casos. Juan Carlos Bertoni y Facundo Ganancias.
ca), y a su vez, que dicha distribución de probabili- hidráulicas menores tales como puentes, canales,
dad no cambia en el tiempo. Como esta deinición alcantarillas, desagües urbanos, etc. Las curvas
de estacionariedad resulta ser muy fuerte, en la I-D-F sintetizan los períodos más críticos regis-
práctica se utiliza una versión menos estricta, de trados a lo largo de diversos eventos extremos
acuerdo con la cual una serie es estacionaria en observados en la estación o puesto de medición.
sentido débil (o estacionaria en covarianza) si su Dado que rara vez una tormenta presenta perío-
media y su varianza no cambian en el tiempo. En dos críticos sucesivos de diferentes duraciones si-
la práctica el análisis de homogeneidad conduce a guiendo la envolvente asociada a un determinado
dividir la muestra en dos o más grupos de tamaños tiempo de retorno (o frecuencia), puede concluirse
iguales (o diferentes), y comparar los estadísticos que estas curvas tienden a representar cierta exa-
de la muestra: media, mediana, varianza, entre geración de la realidad. El hecho de su empleo en
otros. Por lo tanto, los análisis de homogeneidad el diseño de obras torna compatible tal caracte-
se funden con los de estacionariedad débil. rística, toda vez que se intenta establecer condi-
ciones que aseguren cierto margen de seguridad
Las series de tiempo climáticas e hidrológicas para las obras. La literatura internacional, sin em-
suelen presentar en realidad procesos no homo- bargo, cuestiona algunos aspectos del empleo de
géneos (y/o no estacionarios), debido a diferentes las curvas I-D-F. Entre ellos se destaca la destruc-
causas. Ante signos de variabilidad hidrológica ción de la estructura temporal de las tormentas,
algunos especialistas han basado sus diseños hi- hecho implícito que deriva de adoptar los interva-
drológicos en el sector más crítico de las series los más críticos de diversas tormentas asociados
hidrológicas disponibles, reduciendo la extensión a distintas duraciones. También son cuestionados
y representatividad de las mismas. Otros, sin em- ciertos criterios simpliicados y rígidos que deben
bargo, aconsejan metodologías alternativas. Kel- ser adoptados, tales como: duración de la lluvia si-
man et al. (2000) consideran que el aumento de milar al tiempo de concentración de la cuenca, de-
incertidumbre debido a la no estacionariedad de inición del peril temporal de la lluvia de proyecto
las series a escala anual (producto de la variabili- y la suposición del tiempo de retorno de los cauda-
dad climática, el uso del suelo y el empleo de agua les igual al de la lluvia. A diferencia de las curvas
para otros usos, entre otros) puede ser enfrentado I-D-F, las nuevas propuestas metodológicas se
empleando pesos diferentes para cada año de la basan en el trabajo sobre registros continuos (se-
serie histórica, en función de las circunstancias cli- ries continuas de lluvias históricas, que puede ser
matológicas. El empleo de pesos diferenciados en extendido también a otras variables hidrológicas
series estadísticas hidrológicas también ha sido tales como caudales, volúmenes, etc.), hecho que
propuesto por otros autores. Martins y Stedinger permite trabajar con una curva de frecuencia de la
(2001) y Reis, Stedinger y Martins (2005) han em- variable analizada. Nnadi et al. (1999) y Bradley et
pleado esta metodología en los estudios de fre- al. (1996) resumen trabajos orientados bajo esta
cuencias de crecidas para incorporar, además de nueva tendencia.
la serie de valores sistemáticos, aquellas estima-
ciones de caudales máximos asociados a marcas Test para el Análisis de
históricas de crecidas de gran envergadura que Homogeneidad en las Series de Tiempo
ocurrieron en el pasado. Una de las ventajas que
otorgaría la incorporación en los análisis estadís- El estudio de frecuencia de valores máximos es
ticos de todos los datos o informaciones existen- uno de los tópicos más estudiados de la Hidro-
tes, frente la alternativa de circunscripción a series logía con vistas a deinir la probabilidad de ocu-
cortas homogéneas, consistente en la disminución rrencia de lluvias intensas o crecidas máximas
del intervalo de incertidumbre alrededor de las es- asociadas al proyecto de obras hidráulicas. Para
timaciones efectuadas. el adecuado empleo de modelos estadísticos
frecuenciales es necesario veriicar en primera
Otro aspecto de la variabilidad hidrológica relacio- instancia el cumplimiento de dos pruebas de hi-
nado con el proyecto de obras se reiere al estu- pótesis: Independencia y Homogeneidad. Para
dio de lluvias severas. Estos estudios se asocian determinar si los valores que integran una serie
generalmente al establecimiento de la tormenta son independientes por lo general se emplean las
de proyecto. Esta última puede ser deinida a tra- pruebas de Anderson y Wald-Wolfowitz. Para los
vés de la Precipitación Máxima Probable (PMP), análisis de homogeneidad se emplean las pruebas
la cual es típicamente empleada en el proyecto de Helmert, t de Student y Cramer. Estas pruebas
de grandes obras hidráulicas (tales como presas se describen, entre otros, en Escalante Sandoval
de envergadura), o alternativamente, mediante y Reyes Chávez (2005).
la deinición de las Curvas Intensidad-Duración-
Frecuencia (IDF). Estas últimas han sido tradi-
cionalmente utilizadas en el proyecto de obras
18
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
Conclusión: Se acepta la hipótesis de que las Conclusión: Se acepta la hipótesis de que las
variables de la serie son Independientes. variables de la serie son Independientes
cen crecidas del río en invierno y verano respecti- cambio climático o la variabilidad climática), o bien
vamente. Estas últimas afectan a las localidades provocados por el hombre, fundamentalmente
de Alto Río Senguerr y Colonia Sarmiento y a am- cuando éste introduce cambios asociados al uso
plios sectores rurales. Para minimizar este proble- del suelo. En la escala temporal práctica corrien-
ma en el año 2007 se propuso la ejecución de un te el factor antrópico resulta, en forma recurrente,
azud a la salida del lago, de modo de producir una el que tiende a provocar los cambios hidrológicos
regulación adicional a la natural, con disminución más marcados.
de los caudales máximos de aguas abajo. Para
deinir la crecida de proyecto de los órganos de La revisión de la literatura, como así también el
descarga del azud se emplearon datos de cauda- análisis del comportamiento de algunas cuencas
les medios diarios de la estación Nacimiento, loca- como las ejempliicadas en este trabajo, permite
lizada 1 km aguas abajo de la desembocadura del identiicar varios aspectos asociados a la variabi-
lago (período 1952-2005, con interrupciones en lidad hidrológica. Entre ellos se destacan los si-
las décadas del 80 y 90). A partir de estos datos guientes:
fueron conformadas series de caudales máximos • Debido al típico comportamiento no lineal en-
medios diarios anuales (46 años) y de volúmenes tre entradas y salidas, las cuencas hidrográi-
anuales (39 años). Ambas series superaron las cas producen respuestas que tienden a ampli-
pruebas de hipótesis de independencia y homo- icar los cambios relativos que se producen en
geneidad (Tabla 2 a 5). Del análisis de las infor- la precipitación.
maciones presentadas se deduce que desde el • Por sus características isiográicas, los siste-
punto de vista estadístico no se observaron, en mas hidrológicos de llanura (frecuentemente
estos casos, tendencias que pudieran identiicar denominados “sistemas hidrológicos no tí-
la existencia de variabilidad hidrológica. picos”) presentan, en términos hidrológicos,
menor capacidad para absorber cambios pro-
Conclusiones ducidos por el hombre.
• Las cuencas hidrográicas que presentan gran
capacidad de regulación natural suelen resul-
La variabilidad hidrológica se efectiviza cuando tar más vulnerables a los períodos de estiaje
ocurren alteraciones sobre las principales entra- prolongados (interdecádicos).
das y/o salidas de un sistema hidrológico. Puede • Las variaciones interdecádicas del clima co-
resultar de cambios producidos en el clima (por el rrespondientes a anomalías húmedas o secas
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Tabla 5. Pruebas de homogeneidad. Serie de volúmenes
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anuales. Estac. Nacimiento � �!�&� � �!�&���� � 5 � �������� � ��� � �+
(Chubut).
son especialmente importantes pues pueden uno de los enfoques del diseño de obras que
provocar situaciones críticas asociadas al au- parece más promisorio es la asignación de
mento de la vulnerabilidad social. Entre las pesos diferentes a los valores correspondien-
más previsibles están las inundaciones ribe- tes a cada año de la serie histórica, en función
reñas, los problemas asociados al abasteci- de las circunstancias climatológicas. Una de
miento de agua y la coniabilidad de los siste- sus ventajas en relación al enfoque alterna-
mas hidroeléctricos. tivo de circunscribir el estudio a series cortas
• La escala espacial hidrológica también es un homogéneas radicaría en la disminución del
importante elemento que debe ser considera- intervalo de incertidumbre alrededor de las
do, ya que los efectos hidrológicos por cam- estimaciones efectuadas.
bios en las variables de entradas pueden ser
diferentes según sea el tamaño de las cuencas Los aspectos citados en este trabajo revisten
consideradas. Lo propio ocurre en relación con importancia en el campo de la planiicación y de
las medidas mitigadoras a adoptar. Por otra la gestión de los recursos hídricos. Presuponen
parte, es necesario destacar que la variabilidad bases para la identiicación de áreas donde se-
observada por los procesos hidrológicos en ría imprescindible encarar planes de contingencia
distintas escalas espaciales no debe ser nece- concretos derivados de la variabilidad climática, el
sariamente asociada a aquella resultante del cambio climático y la variabilidad hidrológica. Por
cambio y/o la variabilidad climática. lo tanto, se entiende que pueden resultan de in-
• Ante signos de variabilidad hidrológica en los terés para orientar el accionar de los organismos
registros (deducidos, por ejemplo, por la falta respectivos.
de homogeneidad estadística de las series),
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22
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
RESUMEN
El objetivo de este trabajo es presentar los princi- presa: sobrepaso, sifonaje, iltración, fallas en la
pales factores que deinen la vulnerabilidad hidro- fundación y errores de operación.
lógica de una presa. Se propone un nuevo indica- Por eso, en un intento por darle a este estudio un
dor de riesgo que considera al tipo de clima como enfoque más completo que el sólo análisis exclu-
un factor signiicativo en la seguridad hidrológica. sivamente hidrológico, se intenta en primer térmi-
El problema es importante debido a que, relativa- no caracterizar la situación de las presas argenti-
mente pequeños cambios climáticos pueden pro- nas en operación a través de un indicador primario
ducir consecuencias signiicativas en los recursos (Índice Primario de Impacto Potencial: IPIP), para
hídricos de distintas regiones y especialmente en luego, en una segunda instancia, incorporar las
cuencas hídricas ubicadas en zonas áridas y se- consecuencias que el clima y la meteorología
miáridas. podría tener sobre la estadística de los caudales
Estudiar la vulnerabilidad de las presas al cambio máximos de crecida que podrían provocar su des-
climático, en forma aislada de otros factores de trucción por sobrepaso, para generar inalmente el
gran incidencia sobre la vulnerabilidad, signiica Índice de Impacto Potencial (IIP).
una visión incompleta y sesgada del real estado de El ordenamiento por orden decreciente según el
situación de este tipo de obra hidráulica en nuestro IIP de las presas permite identiicar en una prime-
país. Sabido es que pueden ser varias las causas ra aproximación al subconjunto más comprometi-
técnicas capaces de provocar el colapso de una do de obras.
1. Introducción 40
30
das por el hombre y además son estructuras que 25
están proyectadas para durar cientos de años. De
20
hecho, aún hoy existen en pie presas que fueron
construidas por los Romanos. 15
10
La Comisión Internacional de Grandes Presas
5
(ICOLD), entidad con sede en Paris desde 1928, es-
tableció que una presa para ser considerada como 0
NOA CENTRO CUYO LITORAL COMAHUE PATAGONIA
“gran presa” debe tener una altura no menor a los 15
ZONA Fuente: ORSEP
metros (medida desde su fundación) o en caso de
que su altura se encuentre comprendida entre los 10 Figura 1. Cantidad de presas en Argentina
y 15 metros debe contener un volumen de embalse ubicadas según la región.
superior a los 3 Hm3.
indica en la Figura 1.
Utilizando estos criterios, se concluye que en Ar-
gentina hay un poco más de un centenar de gran- El Comité Argentino de Presas (CAP), que es uno
des presas distribuidas regionalmente como se de los sesenta comités nacionales de ICOLD,
23
Indicador de Riesgo y Análisis Hidrológico de la Vulnerabilidad de Presas ante Escenarios del Cambio
Climatico. Gustavo Devoto y Rafael Seoane.
como parte de sus tareas, mantiene actualizado drológico. Se utilizó por primera vez el concepto
el catálogo de grandes presas de nuestro país en de un límite superior para la precipitación deno-
colaboración con dicho organismo internacional. minada precipitación máxima posible. Este térmi-
Esta información de base organizada por el CAP no se utilizó en la mayoría de las publicaciones
fue utilizada como punto de partida para la elabo- anteriores a 1950 referidas a la determinación de
ración de este trabajo. precipitaciones extremas.
Modelos Momentos
Hazen (1930) Ponderados por
Probabilísticosod Gumbel (1940)
elos Pro Modelos Probabilidad
Probabilísticos (1980)
babilísticos
Modelos HUI
Determinísticos HU Sherman HUI Nash (1960) Geomorfoclimático
delos (1932) I. R. Iturbe et al.
Determinísticos (1980)
24
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
25
Indicador de Riesgo y Análisis Hidrológico de la Vulnerabilidad de Presas ante Escenarios del Cambio
Climatico. Gustavo Devoto y Rafael Seoane.
y los siguientes coeicientes multiplicativos de ran una serie de factores cualitativos adicionales
adecuación que de un modo caliicativo tienen un que tienen en cuenta:
correlato cuantitativo: • La población asentada aguas abajo: desde 1
• Población asentada aguas abajo hasta 1.2.
• Cercanía a centros poblados • La cercanía de la presa a centros poblados:
• Posición relativa a otras presas desde 1 hasta1.3.
• Su posición relativa frente a otras presas (por
Debe quedar claro que la construcción de este ín- ejemplo si se trata de un sistema de embal-
dice IPIP, tiene como único objetivo disponer de ses en cascada): desde 1 hasta 1.2.
un indicador numérico que permita establecer un
ordenamiento según el grado de vulnerabilidad de
cada presa. 4. Inluencia del clima
Las variables seleccionadas para conformar• el
IPIP tienen una razón que se sustenta en • lo si- Investigadores del Reino Unido han demostrado
guiente: hay parámetros físicos que caracterizan a que existe una mayor incertidumbre para las es-
•
la obra con indudable incidencia en ocasión de un timaciones de los caudales máximos anuales en
colapso como son la altura de la presa y el volu- las regiones áridas y semi-áridas que en las regio-
men almacenado en el embalse. Ambos, en forma nes húmedas ubicadas en distintas regiones del
conjunta, son representativos de la energía poten- mundo (Meigh, Farquharson & Suncliffe, 1999).
cial acumulada en el embalse.
Los estudios que realizaron tanto con datos de Áfri-
Estudios realizados por la Federal Emergency Ma- ca como de países europeos demostraron, según
nagement Agency (FEMA) de los Estados Unidos puede observarse seguidamente en la graicación
proponen una expresión empírica para el cálculo de funciones de distribución de Gumbel adimen-
expeditivo del pico de crecida generado al produ- sionales respecto de sus crecidas medias anuales
cirse una brecha en una presa por una ecuación (MAF), que en las regiones áridas y semiáridas la
del tipo: cola derecha de la distribución se incrementa rápi-
Q = a · Hn · Volm
1. Regionalización de lluvias intensas en Argentina, XIX Congreso Nacional del Agua, G. A. Devoto, Carlos Paz, Pcia. de
Córdoba, 2002.
26
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
damente hacia valores muy elevados que pueden las regiones húmedas por lo que la relación exis-
alcanzar varias veces los de la MAF. tente entre un valor de recurrencia milenaria y uno
decenal será mucho mayor en zonas áridas que
En forma semejante, un trabajo realizado en Ar- en zonas húmedas y de allí el mayor riesgo a que
gentina sobre regionalización de lluvias intensas1, las estructuras emplazadas en regiones áridas se
reairma de acuerdo con los estadísticos de las puedan ver sometidas a eventos extraordinarios.
precipitaciones estimados los resultados observa-
do por Meigh et al. (1997) para los caudales pico La Figura 5 consiste en un mapa que muestra la
de crecida. distribución espacial de la media para lluvias in-
tensas de 12 horas.
Los mapas de isolíneas de los coeicientes de va-
riación (Cv) estimados para distintas duraciones El mapa siguiente (Figura 6) muestra la distribu-
de precipitación muestran que los valores más ción espacial de los coeicientes de variación para
elevados se concentran sobre las áreas áridas lluvias intensas de 12 horas.
y semiáridas del país, lo que naturalmente tiene
inluencia sobre la forma de una distribución de
= +
0.30
0.20
g = 3Cv + Cv3
0.25
40 50 50 0.40
0.30
60 0.30
0.40
30 70
20 60 75
0.50
0.60
85
0.70
0.80
100 0.90
1.00
1.10
1.20
100 1.10
1.00
85 0.90
0.80
0.70
0.60 PRECIPITACIONES INTENSAS
75
0.50
0.40 Estimación de las Curvas I-D-F
0.30 Coeficiente de Variación
Duración 12 horas
30
40
70
Figura 6. Coeiciente de variación estimado
60 para las precipitaciones máximas.
50
40
27
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Indicador de Riesgo y Análisis Hidrológico�����������
de la Vulnerabilidad de Presas ante Escenarios del Cambio
28
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
El cambio climático puede esperarse que produz- la cuenca como un factor a ser tenido en cuenta
ca cambios en la frecuencia de precipitaciones para la ponderación del índice primario de impacto
intensas en cuencas por diferentes razones. Por potencial. De este modo se incorporó a la cuantii-
ejemplo, el incremento en la actividad convectiva. cación de la vulnerabilidad la “escala del proceso
Además, la magnitud de los caudales asociados a meteorológico” que con mayor efecto se pondrá
la fusión son determinados por el volumen de nie- en evidencia en la medida en que menor sea el
ve almacenada y la cantidad de precipitación que área de la cuenca donde está ubicada la presa.
ocurre en el periodo de fusión nival. Por otra parte,
la precipitación de invierno que ocurre en forma de
precipitación, más que en forma de nieve, podría 7. Resultados obtenidos
producir crecidas rápidas y adelantar en el tiempo
la culminación de la onda de crecidas.
El índice IPIP corregido por los factores climáticos
(grado de aridez de la cuenca) y meteorológicos
(mayor posibilidad de estar sometido a procesos
6. Inluencia de la Meteorología convectivos de mesoescala) permitió establecer
un ordenamiento de las presas por su capacidad
En Gran Bretaña durante el período comprendido de impacto en la población en caso de colapso por
entre la publicación de dos documentos oiciales sobrepaso.
de consulta sobre las crecidas: el “Flood Studies
Report” (1975) del Instituto de Hidrología de Wallin- El ordenamiento por orden decreciente de las pre-
gford y el “Flood Estimation Handbook”(1999) del sas según su Índice de Impacto Potencial permite
Centro de Ecología e Hidrología, Acreman (1989), identiicar el subconjunto de las más comprome-
reportó seis eventos históricos que habían excedi- tidas. En este grupo debieran estar las más anti-
do la PMF en áreas inferiores a los 10 km2. guas, las de mayor volumen y altura y todas aque-
llas no controladas por el Organismo Regulador
Los investigadores británicos señalaron además
que la probabilidad de que una tormenta máxima Nombre IPIP
coincida con una cuenca pequeña es mayor que corregido
sobre una grande, lo que implica que es más fre- San Roque 1664
cuente aproximarse a una PMF en caso de cuen-
cas pequeñas. Las Pirquitas 1523
Los Sauces 1439
Súmese a estas precipitaciones extraordinarias Los Molinos Nº 1 1339
observadas, los nuevos desarrollos obtenidos
en modelos de tormentas convectivas, que ha- La Viña 1282
cen uso de información de radar meteorológico, y La Florida (Cierre Principal) 1269
que calculan mayores precipitaciones que la PMP Escaba (Cierre Principal) 1045
para duraciones superiores a las 11 horas Collier
Cruz Del Eje 1040
and Hardaker (1996).
Río Tercero Nº1 1030
Estos resultados han sido atribuidos al efecto pro- El Cadillal 850
vocado por los Sistemas Convectivos de Mesoes-
cala, una clase de eventos anteriormente muy Valle Grande 839
poco conocidos y que como consecuencia no ha- Agua Del Toro 736
bían sido considerados en las metodologías tradi-
cionales. El Nihuil 688
Los Reyunos 677
Los complejos convectivos de mesoescala son
tormentas importantes, mayores a las tormentas El Chocón 462
convectivas aisladas, generan lluvias de buena
Quebrada De Ullum 449
duración, mayor a seis horas y un tamaño entre
50, 000 y 100,000 km2. Se pueden observar en las El Carrizal 420
imagenes de satélite con topes de temperaturas
Río Hondo 384
iguales a -52ºC o hasta - 32ºC según el tamaño.
En nuestro país pueden ocurrir en el NE durante Cabra Corral (Gral. M. Belgrano) 374
la primavera y el verano. Florentino Ameghino 366
Como consecuencia de todas estas recientes in- Tabla Nº 3. Clasiicación del riesgo hidrológico
vestigaciones se incorporó entonces el tamaño de según el indicador propuesto.
29
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Indicador de Riesgo y Análisis Hidrológico de la Vulnerabilidad de Presas ante Escenarios del Cambio
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de Seguridad de Presas (ORSEP). 8. Conclusiones
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veinte presas Argentinas que estarían más com- cas de los modelos aplicados para calcular
prometidas de acuerdo con los criterios estable- rámetros de diseño de las presas más ���antiguas y
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cidos y los pesos de los coeicientes de pondera- los mejores conocimientos sobre la ocurrencia de
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ción adoptados. valores extremos se combinan para mostrar
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cesidad de mantener un estudio permanente sobre
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dimensionamiento de las obras hidráulicas, y en
En la Figura Nº 8 se presenta un mapa de una zona la signiicación de desarrollar nuevas soluciones
que muestran las ubicaciones de las presas y ciu- para controlar los escurrimientos para condiciones
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dades importantes. Un análisis más detallado está hidrológicas distintas de las del pasado.
siendo desarrollado para considerar en forma más El índice propuesto incorpora la importancia del
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precisa los centros poblados y el número de ha- clima y el tamaño de las cuencas como factores
bitantes efectivamente afectados por el potencial adicionales. Pero se debe analizar cuidadosamen-
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colapso de una presa. te las ubicaciones de los embalses relativas a las
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poblaciones sujetas al aumento de riesgo.
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Figura 8. Embalses y ciudades cercanas.
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Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
Este índice presenta un sesgo bastante marcado ración distinta. No obstante, estamos seguros de
en lo relativo al tamaño del área de drenaje de la que los avances hidrológicos incorporados (área
cuenca y al clima por lo que el ordenamiento preli- de la cuenca) sin duda ayudan a lograr una forma
minar presentado podría tener algunos cambios en más efectiva de análisis de la seguridad hidrológica
futuros trabajos que incorporen formas de ponde- de las presas.
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31
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
RESUMEN
La ingeniería inanciera actual impone a la ingenie- mental del diseño es el cálculo de la crecida de di-
ría civil un nuevo reto que antes no tenía, hoy los seño que solicitará al máximo las estructuras por
gobiernos licitan sus obras hidráulicas o viales sin ejemplo: de un puente, una presa de embalse, un
proyectos deinitivos transiriendo al oferente la res- vertedero de crecidas, un acueducto, un canal de
ponsabilidad de generar y proponer alternativas de derivación, un cauce rectiicado, un sistema de dre-
proyectos, es decir hoy se licitan no proyectos, sino naje, un pasante o alcantarilla, entre otras. Para lo-
ideas. Es por ello que el ingeniero hidráulico se en- grar ambos propósitos, esto es la mayor calidad en
frenta a un mercado en el cual, de no contar con he- el menor tiempo posible, es necesario contar con
rramientas de diseño que cumplan con exigencias una estandarización de procedimientos de cálculo
de calidad y tiempos de ejecución, o bien pierde la de los principales variables de diseño, en este caso
posibilidad de realizar el estudio, o si lo hace, es po- trataremos la denominada “crecida de diseño”.
sible que el mismo no conforme los requerimientos Para contar con una estandarización del cálculo es
mínimos de calidad necesarios para asegurar un re- necesario: 1- estandarizar los procesos internos y
sultado inal de ingeniería coniable en los tiempos los procedimientos, 2- ajustarse a un Standard re-
disponibles. Por otro lado los gobiernos no poseen conocido y 3- desarrollar las pautas de control conti-
hoy un estándar mínimo de calidad en el diseño de nuo del proceso de cálculo. Este trabajo propone un
obras hidráulicas por lo que es probable que se ter- ejemplo de cuales son los aspectos que se deben
mine adjudicando la alternativa de menor valor que estandarizarse para contar con una calidad mínima
no necesariamente es la de mejor calidad. en el cálculo de las crecidas de diseño.
En el caso de la obra hidráulica, una etapa funda-
Ante esta dinámica de los mercados, la primer solamente aquellos modelos o cálculos que sean
pregunta que nos surge es: ¿Se puede estan- necesarios y suicientes; 4- Uniicar: esto permi-
darizar una crecida de diseño? ¿Podemos redu- tirá que el producto de nuestros cálculos puedan
cir tiempos sin resignar calidad en los cálculos? poseer la ansiada cualidad de ínter cambiabili-
¿Podemos hacer para que las ofertas tengan un dad nacional e internacional, es la única forma de
piso de calidad adecuado? La respuesta a estos comparar ofertas en el tan disperso mercado lici-
interrogantes es sí, dado que todo cálculo es un tatorio actual, y por lo tanto se constituye en una
procedimiento y todo procedimiento es estandari- herramienta fundamental para el que debe tomar
zable. Sin embargo para hacer bien este trabajo lo la decisión de elegir un diseño u otro con el cono-
importante es conocer que hacer para lograr una cimiento pleno de que la calidad del estudio pre-
correcta estandarización. Podemos resumir aquí sentado cumple con pautas mínimas. Lo que debe
5 acciones principales que no deben ignorarse en lograrse como meta inal de la estandarización es
la estandarización y que son: 1- Especiicar: eso un Estándar de orden internacional que permita
es usar un lenguaje claro y preciso, 2- Conocer que los resultados de los cálculos sean compara-
el proceso: es decir la etapa de conceptualización bles. 5- Por último la estandarización debe con-
debe ser clara y transparente lo que permite ge- tar con un método de evaluación de errores que
nerar diagramas de lujo del proceso de cálculo, permita detectar y registrar errores y poder plan-
3- Simpliicar: esto signiica que debe incorporarse tear soluciones en un proceso iterativo de mejora
33
Estandarización del cálculo de crecidas de diseño utilizando datos y modelos de libre disponibilidad en cuencas
sin registro de caudales. Oscar Dölling y Patricia Oviedo.
continua lo que permitirá a los diseñadores revisar drología, su cálculo tiene tanta importancia como
sus cálculos y lograr un producto inal coniable la determinación del sismo de diseño de la obra.
sin errores. Los errores pueden llevar a una em- Es posible hoy en día encontrar obras cuyos cál-
presa o bien a perder la licitación por mala calidad culos de crecidas de diseño ha sido deicientes o
o, si en caso la gana, a perder dinero por un mal mal ejecutados, asimismo las empresas contratan
diseño fundado en errores de cálculo. a veces profesionales que no han tenido expe-
riencia o debida formación formal en esta materia
En Argentina, el IRAM es el Instituto Argentino de y que pueden poner en riesgo, no solo las estruc-
Normalización y Certiicación, el mismo posee las turas diseñadas, sino la vida de quienes utilizan
más diversas áreas de normalización como son: o están a la merced del buen funcionamiento de
Alimentos y Salud, Calidad, Construcciones, Eléc- estas obras.
trica, Energía y Asuntos Ambientales, Mecánica,
Metalurgia, Seguridad, Química, entre otras. Lla- Si analizamos en detalle el escurrimiento en un
ma mucho la atención entonces que, si bien los cauce descubrimos que los caudales observados
aspectos constructivos están presentes, mas bien en una sección del mismo dependen de varios pro-
se reieren a la estandarización de procesos de cesos físicos previos. Estos procesos, combina-
construcción como son por ejemplo: por donde dos entre sí, pueden ocasionar crecidas de magni-
debe pasar un caño de gas, de electricidad o de tudes devastadoras. Los procesos físicos que dan
agua en una vivienda, y vemos que si se avanzó forma a una crecida no son fáciles de representar
mucho en las normas del cálculo estructural, así matemáticamente ya que debemos caracterizar
contamos hoy con las normas CIRSOC, pero nada variables tales como: las velocidades alcanzadas,
hay sobre como debe calcularse una crecida de los volúmenes de agua que escurren supericial-
diseño para dimensionar un puente, un vertedero, mente, la duración de los eventos de lluvia que le
la altura de una presa, de un derivador de creci- dieron origen, los arrastres y depósitos de sedi-
das, todas ellas obras hídricas de un alto impacto mentos, la distribución espacial y temporal de las
socio económico. La crecida de diseño es una va- tormentas, las alturas de agua alcanzadas en las
riable fundamental del diseño y sin embargo no es distintas secciones, la humedad antecedente de
tenida en cuenta, o peor aun, su importancia es las cuencas, si hay o no nieve, la velocidad de in-
relativizada por los propios ingenieros estructura- iltración del agua en el subsuelo, entre otras.
listas, que si bien, no tienen porque saber de hi-
34
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
La forma de la crecida, su duración, el valor máxi- que pueden obtenerse fácilmente desde Internet.
mo del caudal instantáneo alcanzado y el volumen Como ejemplo podemos mencionar los datos del
escurrido durante la misma son los parámetros Radar Interferómetro de 60 mts. de base Misión
fundamentales que deben calcularse para obte- STS-99 del transbordador espacial Endeavour que
ner una crecida de diseño realista. El calculista se puso en órbita el 11 de febrero de 2000. Este
en todo momento debe ser capaz de veriicar que satélite realizó una misión espacial cuya duración
su crecida de diseño, así como el la calculó, pue- fue de 11 días en que realizó un monitoreo continuo
de darse en la realidad porque, si trabajamos en entre los 56° sur y 60° de latitud norte a 233Km de
forma independiente cada variable que interviene altura muestreando por franjas de 225Km de ancho
cuenca, es89$9;<=>�$
decir la topografía. %#?�� �?;;@@@������������);�� �;�������������������������������
de un dato básico común, la geomorfología de la parte monitoreada por este satélite y se pueden so-
Una dimensión es- licitar las bases de datos.
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pecial adquiere entonces que la topografía, o bien
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el modelo digital de la cuenca derivado, sea lo mas Las principales características de la cuenca a tener
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dependiendo del área que recibe la precipitación, Un modelo digital de terreno, como el mostrado
la parte que se iniltra en el suelo y la parte que se en la Figura 3 y 4 , es posible desarrollarlo con
evapora se puede calcular lo que realmente escu- tecnología Globe Mapper o similar, lo que permite
rre supericialmente, la parte del lujo supericial al calculista delimitar la cuenca y las subcuencas
que va a los cauces y inalmente el hidrograma de aporte. El MDT permite representar la red de
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drenaje de�����
la cuenca de aporte, determinar los
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Figura 3. Modelo Digital de Terreno importado con Global Mapper 1.0
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Figura 4. Modelo Digital de Terreno de la cuenca del arroyo Boca del Río (San Luis) Global
Mapper 1.0
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36
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Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
parámetros físicos de la cuenca, subcuencas y posible también que la provincia posea cartas en
tramos del arroyo como son el área, la longitud proyección Gauss-Krüger, con una equidistancia
de cauces, la curva hipsográica de cada cauce de 20 m, o es común en algunos casos poder con-
principal de la subcuenca y el perímetro. tar con un plano topográico elaborado en base a
fotografías aéreas tomadas en el pasado. Es ne-
También es posible, con este tipo de herramien- cesario que los MDT sean validados, tanto con es-
tas, obtener los periles transversales y longitu- tas cartas como con topografía en base AutoCad
dinales de cada cauce principal y las curvas to- realizadas a partir de relevamientos en campo con
pográicas para distintos niveles lo que permitirá GPS para veriicación (Figura 7).
después calcular la curva de área cota volumen
de los almacenamientos para distintas secciones Para calcular una crecida de diseño existen tanto
del cauce (Figura 5). métodos Directos, que analizan los caudales de
salida de la cuenca (análisis de frecuencia de cau-
El modelo MDT de una cuenca debe ser siempre dales, métodos regionales y modelos de escala-
validado con una visita a campo con fotografías miento) como Métodos indirectos que basan el
tomadas en la zona de estudio que coincidan con análisis en las Tormentas de Diseño, calculadas a
la imagen que entrega el MDT (Figura 6) partir de curvas de Intensidad Duración Frecuen-
También se debe veriicar por comparación las cia, impulso que luego es incorporado como varia-
curvas de nivel obtenidas del MDT con las cartas ble de entrada en modelos que calculan el hidro-
topográicas de la Dirección Provincial de Catas- grama de la crecida como respuesta de la cuenca
tro de la Provincia donde se localice la cuenca, es como son el Método Racional, los Métodos de
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Figura 5. Parámetros geomorfológicos obtenidos con Modelo Digital de Terreno Global Mapper 1.0
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Figura 6. Validación del MDT (fotografía de la zona de estudio y misma vista desde el MDT)
37
Estandarización del cálculo de crecidas de diseño utilizando datos y modelos de libre disponibilidad en cuencas
sin registro de caudales. Oscar Dölling y Patricia Oviedo.
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Figura 7. Validación del MDT (comparación de curvas de nivel con cartas topográicas de terreno)
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a caudal. En este caso surgirán inevitablemente intensidad, duración frecuencia IDF, sin embargo,
varias preguntas al calculista y que deberá anali- son críticos para el diseño la Variación espacial de
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a calcular la crecida de diseño y son en- la tormenta, es decir se debe incluir en el cálculo
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tre otras: ¿Cómo deinir las tormentas de diseño?, en que lugar de la cuenca cayó y también la forma
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Criterios para la determinación de crecidas de
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en que cayó, es decir la distribución en el tiempo, Dado que las tormentas son de esencia aleato-
que nos indica si precipitó mas al principio, al me- rias la pregunta que nos cabe realizar ahora es
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dio o al inal de la tormenta. ¿Cómo asociar una probabilidad a una tormenta?
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en el diseño depende del clima de la zona y que que el caudal también es una variable aleatoria.
la geomorfología de la cuenca deine el tiempo de
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concentración, también otros factores que impac- En los métodos indirectos para poder determinar
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de la tormenta (Figura 9), es decir su distribución son también fenómenos multivariados al igual que
temporal, como son: lluvia constante o en bloque, las tormentas que las originan, cabe aquí enton-
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tormenta triangular, la tormenta tipo Sifalda, las ces pensar en que los estudios mas completos de-
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aquellos casos que no se tienen datos, lo mejor es distribución espacial y temporal, entre otras).
realizar una análisis a partir del tipo de lluvia que
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se observa en la zona y por tanto debe apelarse a Se pueden obtener relaciones entre las láminas
registros incluso a nivel regional. de lluvia local en función de su recurrencia y cons-
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Figura 9. Métodos para determinar la distribución temporal de una tormenta sintética
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39
�� #$��� ������� ��� ������������ � ��� ��������% &������ ��� �� *�� ��� ���������
Estandarización del cálculo de crecidas de diseño utilizando datos y modelos de libre disponibilidad en cuencas
sin registro de caudales. Oscar Dölling y Patricia Oviedo.
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cipitaciones acumuladas diarias
asociada a una magnitud ���� �������� ������� ���������������������� �� ���� ����� ������� ���������
determinada y a partir
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de este procedimiento veriicar los datos regionales
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obtenidos.
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que la orientación Norte Sur����������#��� � �������"��� ���� �� ��� � ��������������������������$��%�&' (��
que da origen a tormentas de tipo convectivo a su vez
de las Sierras permite el
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avance de frentes de tormentas frontales del sur. Es
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posible obtener la precipitación acumulada diaria vs.
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período de retorno para tormentas de distintas horas
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de duración y ajustar una ecuación de tendencia loga-
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Finalmente para discretizar el hietograma de dise- distribuciones internas de tormentas de Huff.
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ción típica zonal para tormentas de corta duración.
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También a partir de estudios regionales se pueden
������������������������������������������������������������������#��������
deinir las horas de duración típicas de las tormen-
�������������+������������������ ���������������+������������������$�+��������
tas (ejemplo 3 horas de duración).
����������#���������$��#����������������������������%��������������0�������12
A partir del análisis exhaustivo de las tormentas
observadas es posible realizar un análisis de la
�����������3�34���������������/���������#�5������12("�������������������
frecuencia relativa de la posición del pico de la tor-
menta, clasiicado según su duración, y dividiendo
���������������������������������������������%�����������������������������.��
esta duración por ejemplo en sextiles (un sextil es
��������������-������������������$�������������#����������������������������
una sexta parte del tiempo de duración total). Esto
indica que un correcto diseño, para la tormenta ca-
�����������������������������������������������������������������������������
racterística de la cuenca de un río necesariamente GRUPO I GRUPO II
��������������������������������#�������$�+��������������'����������������
debe contar con un estudio de la forma o sesgo
(izquierdo, centrado, derecho) en cuanto a la po-
����������$����������������/������������������������.������������������������
sición del pico en su distribución interna de la pre-
cipitación. Este componente no es menor ya que )���� �&'/�0 � �������"��� ��� � �$�/�&'� (��
��*�������������������%�������������������������������6��������������������
es posible obtener picos de crecida de magnitudes Figura 10. Mapa de isohietas para Tr: 10 años
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40 ��� ������������� �������������� ������������ ������������ ��������������� �������
�������������������������������������������������������$��������������7���+��18
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Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
simple a doble, de acuerdo a cual es la forma de tormentas registradas con el in de asociar a cada
distribución asociada a la tormenta. La distribución una de la curvas de distribución acumulada una
en el tiempo de la lluvia es un factor determinante probabilidad de ocurrencia. Propuso curvas para
de la forma, magnitud y volumen de la crecida re- distribuir una tormenta cuya duración y magnitud
sultante. Su conocimiento es esencial para estimar total se conoce, en intervalos de tiempo menores,
tormentas de diseño para proyectos de redes de teniendo al mismo tiempo, una idea de la probabili-
aguas lluvias, sistemas de drenaje de carreteras, dad de ocurrencia de dicho hietograma. La Figura
estudios de erosión, estimación de arrastres y so- 12 muestra distribuciones internas de precipitación
cavación y otros problemas de ingeniería hidráuli- típicas elaboradas por Huff .
ca. Varas (1985), utilizó el modelo RORB propues-
to por Laurenson y Mein (1983) para cuantiicar Eduardo Varas (1985) analizando un total de 296
la inluencia de la forma del hietograma sobre las tormentas registradas en la zona centro y sur de
características de la onda de crecida que genera Chile determinó curvas acumuladas de lluvia en
una tormenta. El estudio consistió en calcular y función del tiempo, representativas de tormentas
comparar los hidrogramas de respuesta del modelo de tipo frontal. Las curvas de distribución acumu-
sometido a distintos hietogramas de tormentas de lada de lluvia para distintas tormentas representan
distinta distribución temporal pero de igual magni- los intervalos más lluviosos para cada una de las
tud y duración, suponiendo idénticas condiciones duraciones elegidas. El estudio concluyó que la
de iniltración en la cuenca. Los resultados mostra- clasiicación de los temporales en función del tiem-
ron que el rango de los caudales máximos calcula- po en que ocurre la mayor parte de la precipitación
dos podían variar del simple al doble. Para estimar era más importante que la heterogeneidad espacial
hietogramas representativos para las tormentas de las tormentas. En resumen, la distribución inter-
de diseño se han propuesto varios procedimientos na de los hietogramas sintéticos de las tormentas
para distribuir la magnitud total de la lluvia en fun- de diseño se calculan para láminas totales diarias
ción del tiempo (Huff, 1967; SCS - USDA, 1986 asociadas a un período de retorno distribuidas se-
; Varas, 1986). Huff (1967) clasiicó las tormentas gún una ley que debe demostrase es típica para la
en Illinois, dependiendo si la mayor precipitación es cuenca (Figura 13).
observada en el primer, segundo, tercer o último
cuarto de la duración total del temporal. Posterior- Existe software disponible que permite clasiicar y
mente realizó un análisis de frecuencia de todas las generar tormentas sintéticas, como el que desarro-
100,0 100,0
% lluvia acumulada
% lluvia acumulada
0
10
20
30
40
50
60
70
80
90
100
100,0 100,0
% lluvia acumulada
% lluvia acumulada
0
10
20
30
40
50
60
70
80
90
100
Figura 13: Familias de tormentas definidas por Eduardo Varas para tormentas frontal
Figura 13. Familias de tormentas deinidas por Eduardo Varas
para tormentas frontales en Chile.
41
Estandarización del cálculo de crecidas de diseño utilizando datos y modelos de libre disponibilidad en cuencas
sin registro de caudales. Oscar Dölling y Patricia Oviedo.
llaron O. Dölling y E. Varas (2005) que consiste en proyecto considerando que, por ejemplo, durante
un modelo de red neuronal que interpola entre las tormentas intensas en el 50% de la duración total
curvas de distribución interna de lluvias y Universal se acumula cerca del 80% de la precipitación caí-
porque interpola también entre grupos de tormen- da. Para la distribución temporal de la precipitación
tas (igura 14, 15 y 16). se debe elegir donde ubicar el máximo bastón del
hietograma. Un criterio de distribución temporal
El modelo puede entonces descubrir a que grupo muy usado por hidrólogos es el de “bastones alter-
de lluvia pertenece un determinado patrón de tor- nados” que es la versión discreta del denominado
menta en cualquier punto de una cuenca y luego hietograma de Chicago lo que asegura una distri-
generar tormentas sintéticas de distintas magnitu- bución temporal muy severa desde el punto de vis-
des y duraciones que correspondan a este grupo. ta de la generación de caudales pico, esta última
aseveración no es universal y puede ser que otro
Existen otros métodos de cálculo de hietogramas tipo de distribución interna genere hidrogramas de
sintéticos que permiten diseñar un hietograma de respuesta mas empuntados, esto depende de la
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Figura 14. Clasiicador de lluvias SARH2005 – basado en redes neuronales ������������������"������
artiiciales para
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interpolar entre grupos y dentro de grupos de curvas de distribución interna de tormentas.
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Figura 15. Generador de lluvias SARH2005 – basado en redes neuronales artiiciales.
42
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
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geomorfología de la cuenca. La estimación de pre- rrencia de intensidades máximas horarias, para to-
cipitaciones intensas para 1, 2 y 3 horas duración das las tormentas observadas en el período de re-
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permite elaborar una serie de ecuaciones potencia- gistro, separando las tormentas cuando entre ellas
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les del tipo P= aD en la que P es la precipitación existe, por ejemplo, 2 hs o más sin precipitación,
acumulada en mm y D la duración de la tormenta se deben calcular la cantidad de picos que superan
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en minutos. determinados valores de lámina caída en una hora,
31������������������3�����������4�������������������������������(�������������5(����
ordenar de menor a mayor Imh(mm/h) y calcular el
A través de cada una de estas ecuaciones - corres- Tr = (1/Nun tormentas/num años). La presencia de
�������������������������1�����������������*���4����������������������4�����������
pondiente cada una a un período de recurrencia cerros elevados obliga a incorporar un coeiciente
���������������������������+������6���������4����������������4������*������������������
determinado -se pueden calcular las precipitacio- de decaimiento por altitud de la precipitación esti-
nes acumuladas cada 15 minutos y luego siguien- mado a partir del mapa de isohietas de precitación
��������������1���������������������(��������������������������������������+������
do el criterio de los “bastones alternados” calcular máxima acumulada diaria para el período de retor-
���������������������7����/��������������#��8����������������������������������������
en mm los hietogramas de, por ejemplo, 3 horas no analizado. El coeiciente de decaimiento de pre-
de duración (Tabla 1). Sobre la base del análisis cipitación por altitud se puede calcular como la dife-
������+� �*�9�(�������������������������1���������������������������������������������
anterior, se pueden determinar los hietogramas de rencia de ishohietas para el Tr analizado entre valle
�����0:��;�����������0�������������������������������������*�;�������������������
diseño para eventos de 5, 10, 100, 1000 y 10000 y cima de la cuenca de aporte. Es posible que en
años de recurrencia. general, las estaciones existentes se encuentren al
�������������������#� pie de las sierras o en el valle de inundación y por
La validación de un modelo de Imh (mm/h) vs Tr se lo tanto corresponda aplicar una mayoración de las
puede realizar comparando las intensidades máxi- Imh(mm/h) si queremos construir un histograma en
�����4&����������������������������������<����������������������������������/�������
mas horarias de las lluvias de diseño obtenidas y la cuenca alta, para lo cual debemos dividir las Imh
������������������������<��������������������������������������������������������"�
las intensidades máximas horarias de las lluvias zonales promedio en el coeiciente de decaimiento
observadas realmente en la región homogénea. por altura.
��������*������������������������������������31������������������3��������������������
Es necesario contar con estaciones cercanas y
(�������������+������,�����+�9�(������������������=�1�����#���1������1����������'������
conseguir la mayor cantidad de datos observados, También es posible, depende del tamaño de la
mientras mayor es la longitud de los registros, mas cuenca, determinar el factor de abatimiento areal,
��������+��������������������������(������������������)��������4���������"+��!+��!!+�
precisos son los análisis de frecuencia (Figura 17). para esto existen algunas fórmulas empíricas que
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dependen de la duración del evento en horas y de
Se puede realizar un análisis de frecuencia de ocu- la supericie de la cuenca en Km .
2
43
Estandarización del cálculo de crecidas de diseño utilizando datos y modelos de libre disponibilidad en cuencas
sin registro de caudales. Oscar Dölling y Patricia Oviedo.
44
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
duración del evento en horas y de la sup
Abatimiento Areal adicional que es representada en el modelo por su
función de distribución de probabilidades.
−38.61*10 −4 * A
Para determinar los hidrogramas de crecidas, se
F = 1 − e −1.1D + e −1.1D
0.25 0.25
utiliza en general el método hidro-meteorológico (Fi-
gura 17) que calcula los hidrogramas a partir de la
generación de hietogramas sintéticos de máximas
tormentas probables, el cálculo de iniltración, el cál-
HIETOGRAMA CON ABATIMIENTO AREAL culo de lluvia efectiva y del escurrimiento directo.
Duracion 3 hs
Area 23,13 KM2 Existe para ello un programa de simulación hidro-
F reduccion 0,979913 lógica tipo evento, lineal y semidistribuido, que per-
mite estimar hidrogramas de salida en una cuenca
o varias subcuencas (caudales máximos y tiempos
Finalmente
Finalmente unauna vez construidos
vez construidos los hist
los histogramas de al pico) a partir de condiciones extremas de lluvias,
los hidrogramas de escurrimiento sintét
diseño propuestos se deben calcular los hidrogra- aplicando para ello distintos métodos para el cálculo
mas de escurrimiento sintéticos correspondientes. de hietogramas de diseño, pérdidas por iniltración,
Lo modelos matemáticos que forman los módulos lujo base y conversión en escorrentía directa. Para
principales del cálculo de los escurrimientos sinté- modelar el comportamiento físico de la cuenca ante
ticos se pueden dividir en sistemas y subsistemas eventos de precipitaciones extremas, el programa
que representan cada fenómeno físico a analizar, considera los siguientes elementos: Subcuencas
para ello se deben tener siempre en cuenta las 5 di- (subbasins), Tramos de tránsito (routing reach),
mensiones principales que son: las 3 dimensiones Uniones (junctions), Embalses (reservoirs), Fuen-
espaciales, la dimensión temporal y la dimensión tes (Sources)
aleatoriedad. La aleatoriedad es una dimensión
Sumideros (sinks), Derivaciones (diversions). Con nia of Highways and Publics Works de USA, Pilgrim
estos siete componentes, se puede elaborar un (Australia). La tabla de la Figura 19 resume algunos
modelo que represente el comportamiento físico de de los principales métodos de determinación. Debe
la cuenca a partir de información digital de campo. entonces observarse que los tiempos al pico que
Los elementos anteriores se disponen en forma de resulten de los hidrogramas calculados con HEC-
redes dendríticas con un orden o secuencia lógi- HMS correspondan a los tiempos típicos obtenidos
ca para realizar los cálculos desde las subcuencas en el análisis hidrológico regional (Figura 19).
que conforman las cabeceras aguas arriba hasta
el punto de salida de todo el caudal aguas abajo. Para el traslado de la onda en los tramos de cau-
Lo primero y fundamental es tener correctamente ce aguas abajo se �������� �������������������������������
puede utilizar , por ejemplo,
deinida la red de drenaje (Figura 18). el modelo de Muskingum Cunge. Para el cálculo
del traslado de ondas es necesario caracterizar la
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El software de simulación más utilizado es el HEC- rugosidad del cauce, las secciones, longitudes y
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HMS (Hydrological Modeling System) del Cuerpo pendientes. Para el caso de la rugosidad se puede
utilizar el método de Cowan. El lujo base se debe
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de Ingenieros de los EEUU (HEC), que es una he-
rramienta computacional de libre disponibilidad (Fi- determinar a partir de un análisis de caudales me-
�������$���������,������(��������-���������������������
gura 21) que permite la simulación hidrológica de dios mensuales observados (o estimados).
���-.����������������������$�����������������������/
los procesos físicos que intervienen en la transfor-
mación de la lluvia en caudales a través de un sis- Módulo de precipitación del HEC, permite seleccio-
tema de componentes interconectados. Cada uno ��$��������������*������'��������������������������
nar uno de los cuatro patrones de precipitación (ti-
234�����1���$�������������������������������/������
utilizado es el SCS. El método SCS requiere la concluye que la aplicación ordenada, sistemática y
determinación del tiempo de retardo (Tlag en ho- conciente de análisis de tormentas y posterior trans-
ras) el cual es del orden del 60% del Tiempo -����*�������-�����������������������������(�����-�����
de formaciones de lluvia-escorrentía puede arrojar re-
8�����,��������&��-/� ���������!��$�9�#'����������7�-
cri- con formas cercanas a la realidad, siempre que las
terios que involucran distintos parámetros físicos simpliicaciones incorporadas a los modelos sean
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de la cuenca, algunos de ellos son: el modelo de hechas con criterios adecuados (Figura 21).
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Sanchez San Román del Dpto. de Geología de la
Univ. Salamanca (España), el de la División Califor- Es siempre útil, como último paso, construir tablas
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Figura 19. Cálculo��������>������������������$��������������
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de una cuenca�!�"�������������������
Figura 18. Parámetros geomorfológicos de una del tiempo de concentración
red de drenaje
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46
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Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
+\GURORJLF (QJLQHHULQJ &HQWHU
&HQWHU86$UP\
86$UP\ &RUSV RI (QJLQHHUV
(QJLQHHUV
+\GURORJLF 0RGHO 6\VWHP %2&$'(/5,2
450
420
Conclusiones 390
360
Tr 10000 años (659,5 m3/s)
330
Tr 100 años (392 m3/s)
600 m3/s
500 m3/s
400 m3/s
300 m3/s
200 m3/s
100 m3/s
0 m3/s
47
Estandarización del cálculo de crecidas de diseño utilizando datos y modelos de libre disponibilidad en cuencas
sin registro de caudales. Oscar Dölling y Patricia Oviedo.
jar pautas mínimas de calidad a los estudios, jar las pautas que garanticen la mejora de los
contar con resultados comparables aceptados métodos y la capacitación continua y diseñar e
por todos (a nivel nacional e internacional), i- implementar manuales de cálculo coniables.
Crecidas de Diseño Arroyo BOCA DEL RIO
Tromentas de Diseño de 3hs para distintos Períodos de retonro
t min tr5 Tr10 Tr100 TR1000 Tr10000
Lamina Total diaria 76 mm/d 88 mm/d 131 mm/d 173 mm/d 216 mm/d
Volumen PP Hm3 1,76 2,04 3,03 4,00 5,00
Q max (m3/s/15min) 200,00 236,80 392,00 538,00 659,50
Q media (m3/s/15min) 43,54 52,31 82,83 108,74 137,20
Vol. escurrido Hm3 1,42 1,71 2,72 3,59 4,54
Vol. retenido Hm3 0,34 0,33 0,31 0,41 0,46
Q base (m3/seg) 1
TablaTabla
2: Análisis volumétrico
2. Análisis decrecidas
volumétrico de crecidasde de diseño
diseño
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49
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
RESUMEN
La respuesta tradicional para mitigar las inundacio- a situaciones aún más críticas y perjudiciales a largo
nes hasta inales del Siglo XX se basó esencialmen- plazo. A in de abordar la gestión de las inundacio-
te en la construcción de infraestructura de “protec- nes desde un enfoque integrado, se propone un es-
ción y control” coniando en los niveles de protección quema metodológico conceptual que es compatible
establecidos en la mayor parte de los casos median- con el propuesto en los nuevos marcos regulatorios
te análisis estadísticos de variables hidrológicas ais- vigentes a nivel global que incorpora una visión eco-
ladas. En la actualidad se ha ampliado esta visión hidrológica y de largo plazo. Finalmente se presen-
tradicional, reconociendo a su vez la importancia tan ejemplos de la aplicación de la regulación dual
de otras amenazas concurrentes, de manifestación de los recursos hídricos mediante la aplicación de
lenta, y en consecuencia menos perceptibles, pero los principios de la ecohidrología.
cuya sinergia con las inundaciones puede dar lugar
1. Introducción
Si bien desde un punto de vista ecológico las inun- rantes en la sociedad. Y si bien las inundaciones
daciones así como los terremotos, las sequías, o son vistas por algunos actores como eventos de
los huracanes son disturbios naturales que forman naturaleza “per se” o “castigos divinos”, en reali-
parte de la dinámica natural de la Tierra, para la dad tienen lugar como resultado de la interacción
sociedad se convierten en amenazas toda vez que entre la dinámica asociada a los procesos natu-
afectan a un compuesto heterogéneo conformado rales (como las crecidas o lluvias intensas) o in-
por la población, los centros urbanos, las infraes- ducidos (rotura de presas), y la organización y la
tructuras, los sistemas productivos, el patrimonio estructura de la sociedad (Gaviño Novillo & Saran-
natural, los sistemas de transporte y la organiza- dón, 2001).
ción institucional, entre otros, que sufren cuantio-
sos daños, en casos de manera irreparable. La respuesta tradicional para mitigar las inunda-
ciones hasta inales del Siglo XX se basó esen-
En particular, el riesgo de las inundaciones, en cialmente en la construcción de infraestructura
comparación con otros riesgos, puede ser identii- de “protección y control” (presas retardadoras
cado rápidamente, se conocen medidas de mitiga- de crecidas, embalses multipropósitos, defensas
ción probadas; y los beneicios logrados al reducir longitudinales), coniando en los niveles de pro-
la vulnerabilidad son mayores que los costos de tección establecidos en la mayor parte de los ca-
reparación ambiental y social (OEA; 1991). No sos mediante análisis estadísticos de variables
obstante esta ventaja relativa, las inundaciones hidrológicas aisladas. No obstante ello, han tenido
(tanto rurales como urbanas) son un problema en lugar inundaciones extremas como resultado de
aumento en todo el mundo, y su impacto y daños las lluvias ocasionadas por huracanes en Centro-
consecuentes son cada vez mayores como resul- américa, como el Mich (1998) o el Stan (2005),
tado de los estilos o modelos de desarrollo impe- pese a que los eventos que les dieron origen te-
51
Consideraciones ecohidrológicas para la gestión integrada
de las Inundaciones. Marcelo Gaviño Novillo.
nían bajos tiempos de recurrencia. Inclusive, cre- ducido por la sociedad (rotura de presas, creación
cidas de magnitud ordinaria producen severos da- de embalses). Las inundaciones, por su parte,
ños por no considerar el ordenamiento territorial y corresponden a un concepto relativo, mediante el
ambiental en el análisis y diseño de las medidas cual los elevados niveles del agua como conse-
de atenuación (Sarandón & Gaviño Novillo, 2004; cuencia de una crecida resultan una barrera para
Gaviño Novillo, 2007; Bathurst et al, 2010). el desarrollo. (Paoli C. U., 2008).
Debido a ello, en los últimos años se ha ampliado Cada sociedad percibe de manera diferente las
la visión tradicional de la gestión de las inundacio- consecuencias de la evolución de una variable
nes, reconociendo la importancia de otras ame- ambiental. Si se analiza la variación de una va-
nazas concurrentes, de manifestación lenta, y en riable Xi con relación a la media y a lo largo del
consecuencia menos perceptibles, pero cuya si- tiempo, seguramente tendremos luctuaciones en
nergia con las inundaciones puede dar lugar a si- su valor que en ciertas ocasiones alcanzan extre-
tuaciones aún más críticas y perjudiciales a largo mos. Ello representa la variable de impulso de un
plazo. Muchas de ellas, como la erosión, la salini- sistema. Pero si sumamos al análisis la percep-
zación, la contaminación o la eutroización, están ción de la sociedad frente a la luctuación de dicha
directamente vinculadas al deterioro ambiental, no variable, encontraremos que existen ciertas ban-
obstante lo cual terminan afectando a los recursos das que deinen umbrales por encima o debajo de
hídricos, pese a que la mayoría de la sociedad no los cuales se presentan daños. En consecuencia,
reconoce a estos procesos como serias amena- existe una banda de toleracia y una de riesgo
zas. Por ejemplo, durante las crecidas los cursos como combinación de la luctuación de la variable
de agua urbanos y sistemas de drenaje pluvial, y la percepción de la sociedad (Ver Figura 1).
generalmente “entubados”, conducen aguas fuer-
temente contaminadas hacia los cuerpos recep- Es importante destacar que el umbral de toleran-
tores inales cuya degradación ambiental es cre- cia diiere en cada sociedad, e inclusive dentro
ciente, lo cual es aceptado como una solución de la misma, como consecuencia de las diver-
a las inundaciones urbanas; sin comprender la sas asimetrías existentes (sociales, económicas,
verdadera dimensión del problema, lo cual tiene educativas, sanitarias). A su vez, dichos umbrales
consecuencias en el largo plazo. Esta carencia de no son constantes en el tiempo y suelen volverse
una visión integral de la gestión de las inundacio- convergentes con el tiempo como resultado del
nes y los recursos hídricos en general es sin duda desarrollo y la consecuente elevación de la cali-
un gran desafío para la sociedad, pero ya se han dad de vida de la población.
comenzado a tomar decisiones contundentes en
este campo a partir del nuevo milenio, lo cual no Asumiendo que la variable ambiental es el nivel
deja de ser una oportunidad hacia el futuro. de agua de un curso de agua, podemos conside-
rar que tienen lugares crecidas y estiajes gene-
En este contexto, y a in de apoyar el desarrollo radores de daños o perjuicios. En particular los
de una visión integrada, en el presente trabajo se excesos (crecidas) dan lugar a inundaciones cuya
presentan una serie de conceptos que ayuden a gestión debe ser entendida como un proceso con-
los tomadores de decisión e interesados en ge- tinuo, de fuerte interacción con los diversos acto-
neral a incluir una visión ecosistémica y de largo res sociales y cuya resolución nunca será deini-
plazo para la gestión de las inundaciones. Ello se tiva, pese a que muchos tomadores de decisión
complementa con un análisis de algunas expe- intentan convencerse y convencer a otros de que
riencias novedosas en materia de regulación de la ello es posible (Calvo, Gaviño Novillo, Rohrman,
gestión de los recursos hídricos, para inalmente 2009). Por otra parte, la deinición de umbrales
presentar algunos ejemplos e identiicar oportuni- ambiciosos de no inundabilidad (principalmente
dades de incluir una visión ecohidrológica e inte- con infraestructura), se traduce en un incremento
grada en tanto un estilo alternativo para la gestión de los costos de protección que no siempre es po-
integrada de las inundaciones. sible pagar por parte de la sociedad. Si ello fuera
posible, cabe establecer también claramente a los
beneiciarios, a in de distribuir equitativamente la
2. Crecidas, inundaciones responsabilidad del repago de las inversiones a
y percepción social in de no ampliicar aún mas las brechas sociales
y económicas existentes.
Se deine a una crecida como la presencia de ni- Existen diversos tipos de inundaciones de origen
veles relativamente altos de agua en determina- natural que se maniiestan en función del proce-
dos lugares y circunstancias, cuyo origen pudo so que les da origen, y también por otros factores
haberse debido un evento natural (lluvia intensa, condicionantes. Una rápida identiicación nos indi-
derretimiento de nieves, mareas, otros) o a uno in- ca los siguientes tipos dominantes:
52
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
de vida de la población.
53
Consideraciones ecohidrológicas para la gestión integrada
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de las Inundaciones. Marcelo Gaviño Novillo.
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Como ejemplo de esta clasiicación aplicada al los procesos de toma de decisiones (que asignan
de������� �������� ����� �� ������������ �� ������ ������� ��� �� ����������� �� ������� ��� �������
caso del Noroeste de Argentina y sobre un total inversiones dominantemente en infraestructura de
337 eventos desde el año 1900 hasta el año protección), sin regular de manera acorde la ocu-
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2000 se pudo obtener los porcentajes relativos de pación del territorio y los valles de inundación.
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mismos (BETA/ENEL, 2001).
Uno de los impactos críticos durante las inundacio-
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Algunos !����������� ������� � �������� �� �������� �� ����
tipos de las inundaciones anteriores a nes surge de la �� �������� ��� �� ���������� ��
evacuación de las personas una
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su vez se ven condicionadas por otros procesos vez que los sistemas������ ����� ������ � ������� �� #$% son
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naturales como por ejemplo las mareas. La eleva- por la magnitud de un evento. La relocalización
ción de los���� �� ������� ��� ���������� �� �� (������� ���������� �� ���������� �� �� ���� )����� ���
niveles de los cursos de agua en estos temporaria de las personas requiere de un apoyo
casos tiene *'� +����"�� ,���� ����� �� �������� �� ���� � �����-�������� �� ������� ��� ����� � ��
lugar debido a una elevación de los logístico y una capacidad de organización siempre
niveles de ��������� �� ������ ���������� � ���������������� � ����� � �������� ��� ����� ��������
base del cuerpo receptor, condicionado subestimada, que genera innumerables conlictos
a su vez por ��������� ������ �� ���������� �� ���� ��������� �� ����� �"����� �� ���� ��� �� �������
otros fenómenos como el viento (ma- entre la sociedad y los gobiernos locales; entre los
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reas meteorológicas). Un ejemplo clásico de este diversos sectores de la sociedad; y entre los mis-
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tipo de inundaciones tiene lugar en los diversos mos miembros del grupo de personas relocaliza-
cursos de ��� 8$$9:�
agua que desembocan en el Río de la das. La preeminencia de las costosas inversiones
Plata, sujeto a mareas tanto astronómicas como en infraestructura por lo general eclipsa las inver-
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meteorológicas (sudestadas). siones para la preparación frente a las emergen-
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cias, en parte porque ello implica un fuerte trabajo
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Las inundaciones a su vez pueden tener origen en con las comunidades, largos plazos, el abordaje
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procesos antrópicos o como una combinación de de situaciones complejas, todo ello en un contexto
miento de ����� ������ ���� �� ���� �� �� )����� ��� *'� <����� �� �� &�������� �� +����� ;�����
directas, que se ven agravadas por el desconoci-
las relaciones funcionales del régimen La gestión del riesgo de las inundaciones debe ser
de las inundaciones como por la carencia de una entendida como un proceso continuo mediante el
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cultura del agua. Ello se hace evidente tanto en cual se logran atenuar los daños ocasionados por
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54
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
35000
30000
25000
20000
15000
10000
5000
0
01/ 01/ 1900 08/ 01/ 1900 15/ 01/ 1900 22/ 01/ 1900 29/ 01/ 1900 05/ 02/ 1900 12/ 02/ 1900
situaciones extremas que superan los umbrales entre 0 y 1. A su vez, el riesgo total puede ser eva-
de daño percibidos por la sociedad. Ello implica luado como:
considerar al menos tres instancias: evaluación,
delimitación y mitigación (Gaviño Novillo & Sa- (2) RT = Rs .E = H.V.E
randón, 2001). El proceso de toma de decisiones
basado en la comprensión de este ciclo permite donde:
organizar las estrategias de gestión que permitan • RT: (riesgo total): corresponde al número de
prevenir, mitigar o corregir los impactos mediante vidas perdidas, personas damniicadas, da-
una combinación de medidas estructurales y no ños a la propiedad, etc., debidas a un fenó-
estructurales, mediante cuya implementación es meno natural especíico.
posible inalmente reducir los daños potenciales • Rs: (riesgo especíico): indica el grado espe-
(Ver Figura 4). rado de pérdidas debidas a un fenómeno na-
tural,
La primer etapa del ciclo corresponde a la evalua- • E: (elementos bajo riesgo): indica la pobla-
ción del riesgo, y ello implica la determinación del ción, propiedades, actividad económica, in-
conjunto de factores que intervienen en su cuantii- cluyendo los servicios en riesgo en un área
cación. Para ello existen distintas aproximaciones, determinada.
siendo la más clara para el caso de los riesgos de
inundación la propuesta por las Naciones Unidas La evaluación del peligro (H) implica la determi-
y UNESCO (Varnes, 1984): nación de los factores exógenos (variaciones
térmicas extremas, precipitaciones intensas, va-
(1) Rs = H.V riaciones de radiación, vientos fuertes, crecidas),
que son función de la probabilidad de ocurrencia
donde: de los distintos tipos de eventos que dan origen
• Rs: (riesgo especíico): indica el grado esperado a las inundaciones. De manera complementaria,
de pérdidas debidas a un fenómeno natural, caben considerar los factores endógenos (físicos,
• H:(peligro): indica la probabilidad de ocurren- biológicos, socio-económicos) que son función de
cia de un evento natural en un determinado las propiedades intrínsecas de las características
período de tiempo y en un área dada poten- ambientales de la cuenca donde se veriica dicho
cialmente sujeta a dicho fenómeno, evento, puesto que actúan como un factor multipli-
• V: (vulnerabilidad): indica el grado esperado cador del peligro exógeno (Ver Figura 5). La com-
de pérdidas de un elemento o conjunto de ele- binación de ambos factores permite la evaluación
mentos determinados sujetos al riesgo resul- total del peligro, que puede ser entendido como la
tante de la ocurrencia de un fenómeno natural fuerza dinamizadora del sistema ambiental (Gavi-
de una determinada magnitud. ño Novillo & Sarandón, 2001a).
Todos estos factores son adimensionales y varían Si evaluamos únicamente la probabilidad de ocu-
55
Consideraciones ecohidrológicas para la gestión integrada
de las Inundaciones. Marcelo Gaviño Novillo.
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Matadero municipal
Ubicación del
matadero municipal
57
Consideraciones ecohidrológicas para la gestión integrada
de las Inundaciones. Marcelo Gaviño Novillo.
Peligro Vulnerabilidad
58
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
de la gestión de los recursos hídricos con el in tánea del mantenimiento de la morfología luvial
de prevenir y reducir la contaminación, fomentar (restaurando las canalizaciones, derivaciones,
su uso sostenible, proteger y mejorar los ecosis- cortas de meandros entre otros), manteniendo la
temas acuáticos, y mitigar los efectos de las inun- cantidad de agua (asignando un caudal ambiental
daciones y las sequías. Inicialmente se deben si fuera necesario) y la calidad del agua (química,
identiicar las cuencas hidrográicas e incluirlas física y biológica). Ello permite en la medida de lo
en demarcaciones hidrográicas (zonas marinas posible el hábitat luvial original.
y terrestres que integran una o varias cuencas
hidrográicas vecinas y las aguas subterráneas y A partir de los diez años de la implementación de
costeras asociadas). las que han sido señaladas la Directiva, los países deben garantizar la auto-
como las unidades preferenciales de gestión, sean sustentabilidad económica de la gestión del agua,
estas nacionales o internacionales para el caso de incluyendo los costos destinados al mantenimien-
recursos hídricos transfronterizos. En cualquier to de los ecosistemas
caso, los países deben designar una autoridad
competente para la aplicación de la normativa. 4.3. La Directiva 2007/60/CE de evaluación
y gestión de los riesgos de inundación.
Entre las diversas medidas, la Directiva prevé la
elaboración de un Plan de Gestión y un Programa Esta Directiva vigente desde octubre de 2007,
de Medidas en cada demarcación hidrográica con complementaria a la anterior, está directamente
objeto de: vinculada con el objeto del presente trabajo, e in-
• prevenir el deterioro, mejorar y restaurar el cluye tres instancias de aplicación:
estado de los cuerpos de agua supericiales, • La evaluación preliminar
lograr el “buen estado químico y ecológico” y • Los mapas de riesgos de inundación
reducir la contaminación debida a los vertidos • Los planes de gestión de riesgos de inundación
y emisiones de sustancias peligrosas;
• proteger, mejorar y restaurar las aguas subte- Evaluación preliminar: Corresponde a una evalua-
rráneas, prevenir su contaminación y deterio- ción de los riesgos en cada sector de una cuenca
ro y garantizar un equilibrio entre su captación que incluye un análisis de las inundaciones ocu-
y su renovación; rridas en el pasado, la determinación de la proba-
• preservar las zonas protegidas. bilidad de inundaciones futuras, y los daños po-
tenciales. En base a esa evaluación se clasiican
Es dable mencionar que el “buen estado de las las “zonas de riesgo potencial signiicativo” o las
aguas” (good status) es una combinación simul- “zonas sin riesgo potencial signiicativo”, poniendo
.
Figura 7: Elementos que caracterizan un “buen estado” de las aguas
Figura 7. Elementos que caracterizan un “buen estado” de las aguas. Fuente: Elaboración propia.
59
Consideraciones ecohidrológicas para la gestión integrada
de las Inundaciones. Marcelo Gaviño Novillo.
dicha información a disposición del público. Dicha rios y procedimientos para evaluar el estado quí-
zoniicación debe ser revisada cada seis años. mico de las aguas subterráneas, incluyendo un
anexo con una síntesis de las normas de calidad.
Mapas de riesgos de inundación: Complementa-
riamente se deben identiicar todas las zonas su- Como síntesis de las tres normas cabe señalar
jetas a riesgo y elaborar mapas que delimiten y que la gestión integrada de las inundaciones, y la
clasiiquen dichas zonas según su nivel de riesgo protección de la biodiversidad y el mantenimiento
(alto, medio o bajo) e indicar los daños potenciales de los servicios ambientales provistos por los eco-
que pueda ocasionar una inundación a la pobla- sistemas se han incorporado como tema priorita-
ción local, a los bienes y al ambiente. Estos ma- rio a la agenda de los tomadores de decisión.
pas deben quedar a disposición del público y ser
revisados también cada seis años.
5. La dimensión ecohidrológica en la
Planes de gestión de riesgos de inundación: Se
deben elaborar e implementar en cada demar- gestión de los recursos hídricos
cación hidrográica o cuenca un plan de gestión
de los riesgos de inundación, los cuales deben 5.1. Conceptos iniciales
ser elaborados en base al paradigma de la ges-
tión integrada de los recursos hídricos. Si la zona Como recomendación de la Conferencia Interna-
considerada se sitúa en varios países, cada uno cional sobre la Agua y Medio Ambiente (Dublín,
de ellos debe cooperar a in de in de llegar, en 1992), reconocida mundialmente por los principios
la medida de lo posible, al establecimiento de un que allí se adoptaron para la gestión integrada de
solo plan de gestión. Deben ijar un umbral de pro- los recursos hídricos, surgió la ecohidrología en
tección para cada cuenca hidrográica, subcuenca tanto una nueva ciencia cuyo nombre surge de la
o franja litoral, y establecer medidas que permitan fusión de los términos “hidrología” y “ecología”,
respetar ese nivel de protección. que propone una nueva metodología de enfoque
para la gestión del agua basada en una gestión
Las medidas de gestión deben orientarse a reducir sustentable y de largo plazo de los recursos hí-
el riesgo de inundación y sus potenciales conse- dricos. Se basa en la aplicación de los siguientes
cuencias, buscando prevenir, proteger y preparar principios (Zalewski, 2009):
a la población. En su diseño deben considerarse • Restablecer y mantener los procesos evolutivos
los siguientes aspectos: de circulación del agua, nutrientes y energía a
• la gestión integrada del agua y el territorio, escala de cuenca,
• la ordenación del territorio, • Ampliicar la capacidad de carga (solidez) de los
• los usos de la tierra y ecosistemas frente a la presión antrópica, y
• la protección de la biodiversidad. • Usar las propiedades de los ecosistemas como
herramientas de gestión del agua (ingeniería
Los “mapas de riesgo de inundación” y los “planes ecológica).
de gestión” deben ajustase a la Directiva Marco
del Agua, especialmente en lo que se reiere a Su aplicación implica una regulación dual de los
la caracterización de las cuencas hidrográicas y hidrosistemas mediante la cual: la hidrología pue-
a sus planes de gestión, así como a los procedi- de ser empleada para regular la biota (H1); la
mientos de consulta e información al público. manipulación de la biota puede convertirse e un
instrumento para la regulación de los procesos hi-
4.4. La Directiva 2006/118/CE relativa drológicos (H2); y a su vez, ambas regulaciones
a la protección de las aguas subterráneas se integran (H1 y H2) en una nueva ingeniería
contra la contaminación “blanda” que permita alcanzar inalmente una ges-
tión sustentable de los recursos hídricos y el man-
Esta norma, complementaria de las anteriores, tenimiento de los servicios ambientales provistos
tiene como objetivo establecer medidas especíi- por los ecosistemas. Este enfoque fue adoptado
cas para prevenir y controlar la contaminación de por el Programa Hidrológico Internacional de la
las aguas subterráneas, incluyendo criterios para UNESCO a partir de la Quinta Fase del su Plan
valorar el buen estado químico de dichas aguas, Estratégico en 1996.
así como para la determinación y reversión de las
tendencias signiicativas y sostenidas de conta- La cuenca, desde la ecohidrología, es considera-
minación. En particular se integra a la Directiva da como un “macrosistema ecológico” en el cual
2000/60/CE para prevenir o limitar el ingreso de se establecen mutuas interacciones (ecológicas,
contaminantes a las aguas subterráneas y evitar hidrológicas y sociales) y cuya isiología debe ser
el deterioro del estado de todas las formaciones entendida como la de un sistema complejo, sujeto
acuíferas. Complementariamente establece crite- al conocimiento de la dinámica de los “hidrosiste-
60
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el clima, � ������� � ����������
hidroquími- trientes � ������������
durante los periodos de inundaciones se
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ca, la hidrobiología,��������!
la ecotoxicología, la biología, incrementa. Las lluvias incrementan la escorrentía,
la geología, la física, así como los procesos bio- y consecuentemente la erosión y la lixiviación de
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lógicos y� ��sociales
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estas premisas, el desafío de aplicar el enfoque tos que son transportados desde la cuenca hasta
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ecohidrológico requiere pensar en términos inter- los cuerpos receptores inales. La experiencia ha
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disciplinarios, orientando el proceso de toma de demostrado las siguientes hipótesis:
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decisiones en base a evidencia cientíica pove- • Las concentraciones de nutrientes durante las
niente de ambos campos disciplinarios. crecidas ordinarias son más altas que duran-
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5.2. Consideraciones ecohidrologícas para la • Las concentraciones de nutrientes son ma-
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gestión integrada de las inundaciones yores durante las crecidas ordinarias que du-
rante los eventos extraordinarios. Las cargas
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En el caso de cuencas con aportes provenientes de nutrientes transportados en el primer caso
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de contaminación difusa, la concentración de nu- son generalmente mayores.
������������������������#&���� �����$� • Las mayores concentraciones y cargas de nu-
trientes tienen lugar durante la primera etapa
de las crecidas ordinarias, o sea en la rama
ascendente del hidrograma (etapa de concen-
tración de nutrientes). Durante la misma, las
cargas transportadas por escorrentía son las
más altas (Ver Figura 8.).
• Antes de que el caudal llegue al pico, las con-
centraciones y cargas de nutrientes comien-
zan a disminuir y siguen con este patrón du-
rante el período posterior al caudal pico (etapa
de dilución de nutrientes. (Ver Figura 8.).
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Según los supuestos anteriores, y con objeto de
Figura 8.+�����!�,���-�.��/�0����� �1223
Concentración/dilución de nutrientes mejorar la calidad del agua mediante los princi-
e hidrograma de una crecida. pios de la ecohidrología, los valles de inundación
Fuente: Zalewski & Wagner, 2003 pueden adecuarse para retener la carga de conta-
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minantes transportados durante las crecidas mo-
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Figura 9. Sedimentos en suspensión y caudal acumulado de una crecida
Fuente: Adaptado de Ford (2006)
61
Consideraciones ecohidrológicas para la gestión integrada
de las Inundaciones. Marcelo Gaviño Novillo.
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62
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
Estrategias de políticas y de
Categoría Descripción
gestión
TIPO I Grandes cambios en la morfología de los Respuesta frente a la emergen-
Catastróicas ríos, impacto geomorfológico regional con cia, evacuación total, sistemas
deslizamiento generalizado de laderas, con- de alerta, evaluación de la vul-
taminación generalizada del agua, destruc- nerabilidad, educación ambien-
ción de la infraestructura principal, destruc- tal, sistemas de información.
ción de áreas urbanas y sistemas productivos
en el valle de inundación y áreas aledañas
TIPO II Agua y sedimentos dentro de la planicie Ordenamiento territorial, siste-
Desastrosas de la inundación, erosión y sedimentación mas de alerta, evaluación de la
fuera del cauce del río, daños para puentes vulnerabilidad, evacuación de
y caminos pequeños cambios en geoformas grandes sectores de la po-
(deslizamientos), contaminación regional blación, educación ambiental,
sistemas de información.
TIPO III Eventos frecuentes con agua y sedimentos Ordenamiento territorial, gestión
Grandes en la planicie de la inundación, erosión y sed- integrada de cuencas, ecotec-
imentación dentro del cauce del río, daños a nologías
la infraestructura dentro de la planicie de la
inundación, movimiento de detritos leñosos.
TIPO IV Eventos frecuentes con el agua dentro del Gestión integrada de cuencas,
Frecuentes cauce, agua y sedimentos dentro del cauce ecotecnologías
principal del río (elevación del nivel), daños
para alguna infraestructura dentro del cauce
del río.
63
Consideraciones ecohidrológicas para la gestión integrada
de las Inundaciones. Marcelo Gaviño Novillo.
gencia efectivo elaborado con las comunidades a taminación difusa, ordenamiento territorial entre
in de organizar la evacuación y asistencia para otros) y el análisis de la vulnerabilidad presente
las zonas más susceptibles. y futuro de manera prospectiva, para inalmente
evaluar el riesgo de las inundaciones y los proce-
Para los eventos desastrosos, la estrategia debe sos asociados.
estar vinculada con la identiicación y aplicación
de una gestión integrada de cuencas, comple- Esto nos llevará a elaborar cartografía de riesgo
mentada con buenas políticas de ordenamiento de inundaciones y procesos asociados integral
territorial y planiicación para las contingencias.. que brinde a los tomadores de decisión una visión
más amplia de los daños potenciales. Los mapas
Para los grandes y pequeños eventos, la estra- así elaborados permitirán identiicar las mejores
tegia debe estar vinculada con la aplicación de medidas para atenuar el efecto de las inunda-
una gestión integrada de cuencas, con el in de ciones. En esta instancia es cuando se deberá
mantener una fuerte cobertura de vegetación para apelar al tercer principio de la ecohidrología para
controlar los procesos erosivos y bioiltrar conta- identiicar y diseñar medidas de ingeniería blanda
minantes. (ingeniería ecológica) en tanto una aproximación
alternativa a las obras tradicionales, y sobre todas
En cualquier caso la restauración y conservación las cosas la construcción de una cultura que se
de os valles de inundación en una condición cer- base en la convivencia con las inundaciones y no
cana a la original sin duda es la solución mas eco- su dominio, algo que la historia de las inundacio-
nómica y sustentable a largo plazo. nes ha demostrado imposible.
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Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
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UNESCO, Paris.
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Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
RESUMEN
La deinición de parámetros hidrológicos requeri- de tendencias climáticas, y que las cuencas con
dos para el diseño de obras hidráulicas y para el cabeceras en la Cordillera presentan contribucio-
manejo de los recursos hídricos orientado a la pre- nes de origen nival, este artículo analiza las situa-
vención de riesgos requiere establecer presuncio- ciones que dan lugar a crecidas extraordinarias en
nes coniables relativas a la ocurrencia de eventos diferentes tipos de cuencas de régimen pluvionival
extremos. El paradigma del cambio climático, hoy de Tierra del Fuego, en base al análisis de casos.
indiscutible, pero que sin embargo no era objeto de Paralelamente se presentan resultados sobre ten-
especial preocupación antes de la década del 80, dencias observadas en materia de precipitación y
ha dado lugar en los últimas años a la discusión temperatura para inalmente discutir y formular con-
en la materia dado el grado de incertidumbre en sideraciones relativas a las implicancias del cambio
la previsión de valores extremos que se motiva en y la variabilidad climática sobre la frecuencia de si-
la identiicación de tendencias deinidas en series tuaciones desencadenantes de eventos extremos y
hidrológicas y climáticas. Atendiendo a este proble- considerar recomendaciones tendientes al logro de
ma y considerando que la región austral de Argenti- previsiones más coniables.
na presenta características particulares en materia
67
Eventos extremos en Cuencas de Montaña de Régimen Pluvionival en el Contexto del Cambio Climático.
Rodolfo Iturraspe y Adriana Urciuolo.
la del Fagnano, se corresponden con la vertiente (en algunas estaciones también el día 27). En la
Norte y tienen desarrollo importante sobre tierras zona costera no fueron éstas excepcionales (36
bajas del ambiente ecotonal de transición, por de- mm en R. Grande y 40,5 mm en Ea. M. Behetty)
bajo de los 200 m. pero en cordillera, por elevación y enfriamiento del
aire húmedo estas cifras se multiplicaron (102 mm
Estudio de caso 1: Cuenca del río Grande en Paso Garibaldi, 400 m s.n.m.). La temperatura
permitió precipitación en forma líquida en cotas al-
El 30/6/2006, se produjo una inundación sin pre- tas, acelerando la fusión de la nieve. Así, se con-
cedentes en registros históricos, por los niveles al- jugaron varias situaciones:
canzados por las aguas, por su permanencia y por • Excepcional situación de humedad previa y pre-
la extensión del área de afectada. Fue resultado sencia de nieve almacenada en zonas altas.
de condiciones antecedentes particulares y una • En las zonas bajas lluvias moderadas a inten-
anomalía climática desencadenante. El primer se- sas, sobre suelo congelado, sin capacidad de
mestre de 2006 presentó características húmedas iniltración y humedales sobresaturados, dio
en el centro y Norte de la Provincia, con precipi- lugar a elevado coeiciente de escorrentía.
taciones próximas al total anual que duplicaron • Lluvias muy intensas y acelerado proceso de
las del mismo período del año 2005. Una crecida fusión de la nieve en la Cordillera y en la tran-
previa al evento, ocurrida 1/5/2006 que superó las sición, producido por la acción conjunta del
máximas anuales ordinarias, es indicadora de las ingreso de aire cálido y las lluvias.
condiciones antecedentes.
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Debido a la dimensión de la cuenca, el factor que
En este contexto, en junio se registraron importan- predispuso el evento fue la condición extraordina-
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tes nevadas y promediando el mes, un centro de ria de humedad antecedente, que en las cuencas
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alta presión se instaló en la región determinando pequeñas de cordillera, de más rápida respuesta,
condiciones muy frías y congelamiento del suelo es de menor signiicación. Las Figuras 3 y 4 mues-
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(mínimas en Tolhuin de -18ºC). Hacia in de junio tran las isohietas de la tormenta y los caudales de
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este anticiclón se desplazó a la altura de Islas Mal- crecida en tanto que la Figura 5 ilustra la magnitud
vinas y un centro de baja presión se posicionó al de la inundación.
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Oeste de TdF (Figura 3). Esta situación sinóptica
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provocando lluvias entre el 30/6
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Figura 2. Curvas hipsométricas correspondientes a las cuencas analizadas. Se aprecia en el caso
del río Grande que el 90% de la supericie se localiza debajo de los 400 m.
69
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Figura 4. Crecidas de los ríos Grande, Herminita y Chico, en proximidades del límite. La escala de
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referencia para los dos últimos es la de la derecha. El registro del Río Grande se interrumpió luego
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de que el data logger fuera cubierto por el agua. Se estima en 500 a 550 m3/s el máximo caudal
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en la desembocadura del R. Grande el 30/6/2006. Lluvias en Julio prolongaron el anegamiento de
3
áreas rurales. Tres picos previos a la máxima crecida superan 100 m /s, cada uno es de la magnitud
de una crecida máxima anual.
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Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
30
Precipitación mm a 380 m snm
Temperatura oC a 380 snm
25
Caudal m3/s
20
15
10
0
03/06/2000 01:00
02/06/2000 11:00
02/06/2000 01:00
02/06/2000 03:00
02/06/2000 05:00
02/06/2000 07:00
02/06/2000 09:00
02/06/2000 13:00
02/06/2000 15:00
02/06/2000 17:00
02/06/2000 19:00
02/06/2000 21:00
02/06/2000 23:00
03/06/2000 03:00
03/06/2000 05:00
03/06/2000 07:00
03/06/2000 09:00
03/06/2000 11:00
03/06/2000 13:00
. Precipitación, temperatura
Figura 6. Precipitación, e hidrograma
temperatura de crecida
e hidrograma del 2/6/2009
de crecida en en
del 2/6/2009 la cuenca
la cuencadel
delrío
río Ham
Hambre
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Eventos extremos en Cuencas de Montaña de Régimen Pluvionival en el Contexto del Cambio Climático.
Rodolfo Iturraspe y Adriana Urciuolo.
nes de troncos sobre tramos de cauces, que son De acuerdo a registros hidrométricos disponibles
removilizadas por las crecidas extraordinarias, ge- desde el año 2000, en ningún caso la máxima cre-
nerando acarreos de mayor magnitud como ocu- cida anual se produjo durante el período invernal.
rriera en el año 2000 en el río Cambaceres (igura Tampoco se conocen antecedentes ocurridos en
7), cuyas cabeceras se encuentran relativamente años precedentes al indicado. La mayor frecuen-
próximas a las del río Hambre. cia de crecidas máximas anuales corresponde al
período Noviembre-Diciembre, y en menor me-
El transporte de grandes volúmenes de fragmen- dida a Enero-Marzo. Esto es debido a que los
tos leñosos es un factor de riesgo muy importante episodios lluviosos que se producen en invierno
para todo tipo de instalaciones ubicadas sobre el sólo afectan el tramo inferior de la cuenca, to-
cauce y en el valle de inundación, en particular mando la forma de nevadas en las cabeceras. El
para los puentes, ya que generan obstrucción del período de lluvias en la alta cuenca corresponde
escurrimiento, incremento de los niveles y fuer- a Noviembre-Marzo, pudiendo excepcionalmente
tes solicitaciones sobre las estructuras. El riesgo abarcar octubre y/o abril, pero el mayor potencial
potencial de este tipo de eventos depende de la de ocurrencia de crecidas extremas está vincula-
cantidad de material leñoso existente en la cuen- do a eventos de lluvia sobre nieve (Iturraspe et al,
ca con posibilidad de ser movilizado. Mao et al 2009) lo que se produce en Noviembre-Diciembre,
(2008), determinaron para la cuenca del Buena cuando en las cabeceras queda todavía una im-
Esperanza una tasa de 120 m3ha-1 en la cuenca portante reserva de nieve estacional, cuya fusión
y 76 m3km-1 en el cauce, valores que son más puede ser inducida por lluvia.
elevados en cuencas con mayor proporción de
bosque que en la del B. Esperanza (36%). El máximo evento en esta cuenca tuvo lugar el 5
de noviembre de 1954 (Figura 8), luego de neva-
das excepcionales en agosto-septiembre y de un
Estudio de caso 3: cuenca del Ao. posterior período frío en octubre, que estabilizó el
Buena Esperanza. manto de nieve y retrasó el proceso de fusión (Itu-
rraspe et al, 2007, 2009). La lluvia que desenca-
Esta cuenca, de importante desarrollo altitudinal denó la crecida fue importante (42 mm a nivel del
presenta condición torrencial, propiciada por la mar) pero no tanto como para producir un evento
fuerte pendiente general dada por un desnivel de extremo en forma independiente. La temperatura
1200m en un tramo de 5300m. Su altitud mediana no fue tampoco excepcional pero posibilitó la ocu-
es de 680m (igura 2) y 1/3 de la supericie total rrencia de precipitación líquida en toda la cuenca,
se localiza sobre 800 m s.n.m. La orografía de- que aportó energía adicional y aceleró la fusión
termina un fuerte incremento de la precipitación. de la nieve.
Las observaciones en la zona urbana de Ushuaia
a 250 m altura, duplican las correspondientes a
las obtenidas al nivel del mar.
Figura 7. Gran concentración de troncos transportados por el río Cambaceres que produjeron
daños en el puente de la ruta Provincial en el año 2000.
72
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Q max:
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Qmax/Qmed:
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7.00
6.50
6.00
0.062 oC / década
5.50
T (ºC)
0.22 oC / década
5.00
Tmedia anual
4.50
.
Media móvil 4 per.
4.00 Lineal
Lineal, desde 1960
3.50
1900 1910 1920 1930 1940 1950 1960 1970 1980 1990 2000 2010
Figura
. 9. Evolución de la temperatura media anual en Ushuaia desde 1901. Se aprecia notable
diferencia entre la pendiente de la recta de ajuste de la serie completa y la de las observaciones
posteriores a 1960.
73
Eventos extremos en Cuencas de Montaña de Régimen Pluvionival en el Contexto del Cambio Climático.
Rodolfo Iturraspe y Adriana Urciuolo.
Tendencias climáticas en Tierra del Fuego en mayor medida por la tendencia invernal.
La temperatura media anual se incrementó du- En materia de precipitación, según los registros de
rante el siglo XX en aproximadamente 0.62 ºC, es Ushuaia la tendencia es netamente decreciente,
T (ºC)
T (ºC)
decir, en términos similares a los valores globales, aunque con un incipiente incremento en la últi-
(de 0,6 ± 0,02ºC según IPCC, 2001). Sin embar- ma década (Figura 11). Si bien no hay marcada
go el mayor incremento se evidenció a partir de la estacionalidad en el régimen de precipitaciones,
década del 60, con una tendencia incremental de se advierten cambios en la distribución estacional
0.22 ºC/ década (Figura 9). al analizar diferentes períodos de la serie históri-
ca, con una importante reducción en los valores
El análisis de tendencias de valores estacionales mensuales durante el invierno (Figura 12), lo que
muestra contrastes entre verano (DEF) e invierno complementado por el incremento de la tempera-
(JJA). En el primer caso se observa una tendencia tura implica una reducción en la acumulación de la
positiva muy débil al considerar todo el período y nieve estacional.
un comportamiento no homogéneo, con una época
fría hacia mediados del siglo pasado e incremento A nivel de precipitaciones máximas anuales, se
muy marcado desde la década del 60. Los regis- aprecia una tendencia decreciente (Figura 13), en
tros invernales muestran un incremento uniforme concordancia con el comportamiento de la serie
y un buen ajuste lineal, con pendiente de 0,12 ºC anual.
por década (Figura 10). A nivel secular el incre-
mento de la temperatura media anual es explicado
DEF
DEF JJA
11.0 4.0
10.0 3.0
9.0 2.0
T (oC)
T (oC)
T(oC)
0.022 oC / década
T(oC)
0.36 oC / década
8.0 1.0
o
0,12 C / década
T. Media verano
.
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55
Sin considerar temperatura 55 T > 6 °C
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45 45
40 40
35 35
(mm)
P (mm)
30 30
mm
25 25
P
20 20
15 15
10 10
5 5
0 0
1950 1960 1970 1980 1990 2000 2010
2010 1950 1960 1970 1980 1990 2000 2010
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Rodolfo Iturraspe y Adriana Urciuolo.
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Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
ner signiicantes impactos en la frecuencia y mag- sólo durante la vida útil de la misma sino duran-
nitud de las grandes crecidas. te el tiempo que la estructura permanezca en su
emplazamiento. Por ello el caudal de diseño es
El caso de cuencas con régimen pluvionival, de- el correspondiente a la crecida máxima probable,
pendiente de dos variables principales: precipita- pero además debería agregarse que esta condi-
ción y temperatura requiere de análisis bi-variado ción debe ser satisfecha para cualquier escena-
de frecuencias de los eventos extremos, a los que rio climático probable, lo cual es un concepto que
Benestad et al (2007) denominan eventos extre- normalmente no es considerado.
mos complejos. En estos casos es evidente que
la metodología tradicional de análisis de extremos Esta nueva pauta obliga a apelar a metodologías
de una variable, que generalmente es la precipita- que reduzcan el nivel de incertidumbre en el di-
ción no responde a la interpretación de este tipo seño, tales como la incorporación de modelos
de problema, y esto es independiente de la inci- no estacionarios al análisis de valores extremos
dencia del cambio climático. Los problemas deri- (Xu-Feng, 1997, El Adlouni, 2008). La validación
vados del régimen pluvionival de las cuencas de en estos casos, debe propender a realizarse utili-
Tierra del Fuego y de la sensibilidad de eventos zando herramientas modernas de modelación ma-
extremos a la variabilidad climática se replican, temática y simulación en tiempo continuo con las
con los matices propios de cada caso en gran par- que se compruebe la respuesta de la cuenca bajo
te de la eco-región Andino-Patagónica y si bien los diferentes escenarios climáticos considerados,
la bibliografía internacional muestra experiencias teniendo en cuenta además escenarios de desa-
con aplicaciones innovadoras al análisis de valo- rrollo y cambios en el uso de la tierra.
res extremos clásicamente estacionario, hay muy
pocos trabajos a nivel regional o nacional con Es evidente que se abre un nuevo paradigma
nuevos enfoques en este sentido. Asimismo es para la ingeniería de proyecto y en general para
necesario trabajar en la continua actualización de el manejo de los recursos hídricos que implicará
los escenarios climáticos factibles, así como en la la necesidad de contar con información geográi-
escala de detalle, especialmente en los ambientes ca muy pormenorizada y con series de datos más
de montaña fuertemente transicionales, de nota- extensas y detalladas, así como incorporar más
bles contrastes, como ocurre en Tierra del Fuego. variables, que alimentarán modelos matemáticos
más complejos y precisos. Se requerirán nuevos
insumos, basados en escenarios climáticos, que
deberán atender a los requerimientos del caso:
5. Conclusiones frecuente actualización, mejor resolución espacio-
temporal y especial énfasis en eventos extremos a
Las evidencias a nivel regional ratiican el carácter nivel diario. Se espera que con los avances en las
no estacionario de variables climáticas determinan- ciencias de la atmósfera, tales escenarios tiendan
tes de crecidas extremas que generan incertidum- a reducir incertidumbre y a mejorar en convergen-
bre en la estimación de los valores extremos es- cia. La incorporación de proyecciones del desarro-
perados. Es necesario en consecuencia incorporar llo socioeconómico y el análisis de su impacto en
nuevas metodologías al manejo de los recursos hí- el uso de la tierra y en el manejo de los recursos
dricos en materia de diseño de obras y prevención hídricos es el otro aspecto de gran importancia a
de riesgos que permitan considerar la sensibilidad ser considerado.
del régimen hidrológico a las tendencias climáticas
identiicadas, evitando como base única el análisis Agradecimientos
estadístico clásico de series históricas.
Los autores agradecen al personal técnico de la
Particularmente en el caso de cuencas con régi- Dirección de Recursos Hídricos de Tierra del Fue-
men de escurrimiento pluvionival, dependiente de go por el importante trabajo de campo realizado
dos variables principales, que además responden que ha permitido la obtención de información hi-
a un comportamiento no estacionario, el análisis droclimática de base. El presente trabajo ha sido
de eventos extremos alcanza un mayor nivel de realizado en el marco del proyecto EPIC FORCE,
complejidad. Al momento de deinir parámetros de Unión Europea (Contrato INCO-CT2004-510739),
diseño de obras hidráulicas, normalmente el obje- los proyectos inanciados por GEF-PNUMA deno-
tivo es asegurar la durabilidad y operación de la minados “Estudios Glaciológicos para la planiica-
obra con márgenes de probabilidad más o menos ción de usos del agua en escenarios de cambio
estrictos según el caso durante la vida útil de la climático” y “Estrategias de ordenación de recur-
misma. Pero en ciertos casos, como en el de las sos hídricos para la cuenca binacional del Río
grandes presas asentadas aguas arriba de pobla- Grande de Tierra del Fuego” y los proyectos de la
ciones, debe asegurarse que la estructura resista UNPSJB “Monitoreo de glaciares vinculados a las
los eventos extremos sin probabilidad de falla, no fuentes de agua de la ciudad de Ushuaia” y “Gla-
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Eventos extremos en Cuencas de Montaña de Régimen Pluvionival en el Contexto del Cambio Climático.
Rodolfo Iturraspe y Adriana Urciuolo.
ciología, Hidrología e Hidroinformática aplicadas a sobre los glaciares y el régimen de los cursos de
la investigación del impacto del cambio climático montaña de Tierra del Fuego”.
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Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
RESUMEN
79
Cambio climático ¿Nuevo paradigma para estimar
la crecida de una presa? Guillermo Malinow.
Como para arribar a tal crecida se estima primero se apoyan en la actualidad en una categorización
la PMP [WMO, 1986], ello será aceptable a condi- de las presas, la que tiene en cuenta el riesgo de
ción de veriicar periódicamente su validez porque potenciales impactos demográicos basados en
en su análisis ya habría intervenido información las pérdidas que la falla de la presa pudiera dar
climática de tiempo pasado, que es la que ha pre- lugar en zonas de aguas abajo, evaluándose la
sentado los cambios. pérdida esperada de vidas, las pérdidas que pro-
vocaría en los servicios esenciales para la comu-
Luego de los análisis admitidos como convencio- nidad, las pérdidas de propiedades y las pérdidas
nales, para ajustar el hidrograma de la CDV, lo re- de carácter ambiental [Malinow, G., 2009].
comendable es un enfoque basado en el análisis
del peligro incremental de inundación en las zonas Sintéticamente la tipiicación comprende los tres
aguas abajo de la presa [FEMA, 1998]. siguientes casos:
• Riesgo potencial alto: Son tipiicadas como de
Cabe acotar que la principal consideración para categoría “A” aquellas presas en las que las
evaluar la CDV es la categorización de la presa fallas o mala operación probablemente cau-
en función de su riesgo potencial aguas abajo, y sen pérdidas de vidas humanas. Existiendo
el factor determinante de esta categorización es dicho peligro no serían atendibles otros as-
justamente la pérdida potencial de vidas [Malinow, pectos para esta categorización.
G. 2009]. • Riesgo potencial signiicativo: Son tipiicadas
como de categoría “B” aquellas presas en las
Es tal la preocupación existente sobre la inluencia que las fallas o mala operación resultan en una
del cambio climático en las presas que la Interna- improbable pérdida de vidas humanas pero
tional Committee on Large Dams (ICOLD) creó en pueden causar pérdidas económicas, daños
junio de 2008 el Comité Técnico “Presas y Cam- localizados al ambiente, interrupción de insta-
bio Climático”, que tiene por misión analizar, entre laciones y comunicaciones. Estas presas pue-
otros temas, aspectos que hacen a la investiga- den estar localizadas en zonas rurales pero con
ción hidrológica, implicancias para la infraestruc- población y correspondiente infraestructura.
tura existente y posibles actuaciones para paliar • Bajo riesgo potencial: Son tipiicadas como de
los efectos de las crecidas. categoría “C” aquellas presas en las que las
fallas o mala operación resultan en una im-
probable pérdida de vidas humanas y bajas
2. Criterios para selección pérdidas económicas y ambientales. Las pér-
de crecidas de presas didas importantes se limitan a las estructura-
les del cierre.
La vida física de una presa es algo desconocido, Crecida de diseño del vertedero
en realidad se las construye “para siempre” y lo
que puede quedar fuera de servicio por obsoles- La CDV es la que se toma en cuenta para el dise-
cencia es su equipamiento hidroelectromecánico ño hidráulico del vertedero y la estructura de disi-
o por atarquinamiento su embalse. pación de energía, con un margen de seguridad
provisto por el resguardo de la presa. Con los cri-
Ello lleva a pensar que, si se está en presencia de terios aceptados más recientemente, esta crecida
cambios en los sistemas climáticos, debe actuar- debería ser elegida en función de una evaluación
se con cuidado al adoptar una metodología de es- detallada de los daños incrementales debidos al
timación del fenómeno hidrológico para su diseño eventual colapso de la presa.
o para su veriicación, porque la vida misma de la
obra puede superar la duración del período en el En los casos en que la falla de una presa podría
que inciertamente asumimos se podrían registrar ocasionar pérdidas de vidas y grandes daños ma-
tales cambios signiicativos del clima. teriales se impone el diseño sobre la base de la
CMP, mientras que en áreas agrícolas donde el
Algunos problemas y crisis relacionadas con las colapso de la presa solo podría provocar pérdidas
crecidas pueden atribuirse a la gran variabilidad en los cultivos, se acepta un diseño de la obra con
climática, pero será necesario pensar sobre posi- un grado de protección menor.
bles adaptaciones necesarias para direccionar los
efectos del cambio climático. Estos cambios pue- Bajo estas circunstancias, la hipótesis de que las es-
den signiicar una intensiicación del ciclo hidroló- tadísticas del clima pasado pueden representar las
gico global, el que a su vez podrá causar cambios del clima futuro ya no sería válida y por ende debería
en las cantidades totales de precipitación. revisarse la vigencia de los métodos probabilísticos
para el cálculo de parámetros de diseño o veriica-
Los criterios para la selección de la CDV o la CVP ción de obras hidráulicas [Barros, V. et. al., 2006].
80
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
Frente a ello, bajo condiciones no estacionarias, del agua en las zonas de aguas abajo, debido a la
cabría repensar el concepto de “evento con perío- falla de la presa, provoca una amenaza adicional
do de retorno T años” porque la probabilidad 1/T inaceptable para esas zonas.
ya no es constante.
Las estructuras de control hidráulico deben ser
Para aquellas regiones donde se hayan eviden- capaces de operar la CDA en condiciones de se-
ciado cambios climáticos, por lo ya expresado, se guridad, siendo necesario establecer normas de
cree que quedarían invalidados los análisis proba- funcionamiento para situaciones de emergencia, y
bilísticos basados en la extrapolación a grandes deben ser evaluados adecuadamente los resguar-
períodos de tiempo de aquellas series hidrológi- dos para las condiciones normales y las extremas
cas de larga data. para minimizar la probabilidad de sobrepaso por
oleaje de la presa.
Entonces con el período de registro contado a par-
tir del cambio del sistema climático, sería pruden- Crecida de veriicación de la presa
te extrapolar precipitaciones o caudales máximos
hasta 3 a 5 veces la longitud del período de regis- La CVP es aquella que representa la condición de
tro a utilizar, es decir estimar la variable hasta un crecida más extrema por la cual la presa podría
período de retorno del orden de 100 a 150 años. ser objeto de una falla, que se considera como es-
En caso de arribar a la crecida extrema por vía de cenario límite. En muchos casos los estudios hi-
la PMP [WMO,1986], ello sería aceptable a condi- drológicos de presas existentes pueden no ofrecer
ción de veriicar periódicamente su validez porque un grado adecuado de iabilidad, ya sea porque
en su estimación ya ha intervenido información cli- se han efectuados con metodologías y técnicas
mática de tiempo pasado. obsoletas o con utilización de series con registros
escasos.
Ante las circunstancias de cambio mencionadas,
se proponen los siguientes criterios: si la presa está Dada la posibilidad de cambios en los sistemas
categorizada como “A”, lo aconsejable es adoptar climáticos, es probable que las crecidas se incre-
la CDA obtenida mediante un ARI, asumiendo a la menten en intensidad y frecuencia en muchas re-
CMP como límite superior. Si la presa está catego- giones del planeta, con una mayor ocurrencia de
rizada como “B”, es decir en las que ante una falla eventos meteorológicos extremos, lo que puede
es improbable la pérdida de vidas humanas pero sí provocar una insuiciente capacidad en las obras
puede haber pérdidas económicas y daños al am- de protección existentes.
biente, cabría lexibilizar la exigencia de seguridad
y aceptar que la CDA sea la resultante de un enfo- Por ello deben ser desarrollados y considerados
que ARI asumiendo que el 75% de la CMP podría nuevos escenarios en relación con las crecidas y
ser el límite superior de la misma. las presas. Si cambia la magnitud e intensidad de
los caudales máximos durante las crecidas, los
En cambio, si la presa es de categoría “C”, donde veriicadores deberán adaptarse a las nuevas cir-
en caso de falla decididamente es improbable la cunstancias dado que aumentaría el peligro de fa-
pérdida de vidas humanas y habría bajas pérdi- lla de las presas por obsolescencia de los criterios
das económicas y ambientales, directamente se de diseño. También deberá revisarse la función de
sugiere adoptar la crecida de recurrencia media atenuación de crecidas que proporcionan dichas
100 años, estimación probabilística que entra en presas [ICOLD, 2006].
el rango de recurrencias ya admitidas en este ca-
pítulo. En la Tabla Nº 1 se resumen los tres crite- Para preservar condiciones mínimas de seguridad
rios enunciados. y para reducir la incertidumbre técnica, a la luz de
nuevos datos de caudales cuyas magnitudes pu-
El enfoque ARI basado en el riesgo incremental dieron haber aumentado en forma maniiesta, y
debido a la falla de la presa permite ver cuánto se ante el peligro de que ocurran precipitaciones extre-
puede disminuir la crecida aluente en condiciones mas más frecuentes y de mayor intensidad, surge
seguras para la presa, partiendo de la premisa apropiado realizar estudios de revisión del riesgo
que la CMP es el límite superior de las crecidas a hidrológico de aquellas presas de considerable an-
considerar a la hora de seleccionar la CDA de una tigüedad, por caso 30 años ó más a contar desde
presa [FEMA, 1998]. que fueron estimados sus parámetros hidrológicos
de diseño [IARH-CAI, 2004] [CAP, 1994].
Esta es entonces la forma para obtener la crecida
más severa en volumen, pico, forma, duración y En términos generales será necesario adaptar-
tiempos con la que resulta conveniente diseñar la se a un nuevo escenario con crecidas extremas
capacidad del vertedero de una presa, por encima más frecuentes, y por lo tanto se deberá desarro-
de la cual el incremento del nivel de la supericie llar y realzar el importante rol que juegan las pre-
81
Cambio climático ¿Nuevo paradigma para estimar
la crecida de una presa? Guillermo Malinow.
sas y embalses en la mitigación de inundaciones río, se inieren las magnitudes de potenciales cre-
[ICOLD, 2003]. cidas extraordinarias asociadas a probabilidades
de ocurrencia extremadamente bajas – por caso
Ante dicha incertidumbre, se proponen los si- con períodos de retorno de 1.000 ; 5.000 ó 10.000
guientes criterios: si la presa está categorizada años - lo que implica que a partir de una muestra
como “A”, lo aconsejable es adoptar la CMP como que a veces cubre cerca de medio siglo del com-
crecida aluente, de forma de comprobar si la ca- portamiento de un fenómeno natural, se hacen ex-
pacidad de descarga de la obra puede absorber trapolaciones a lapsos medios de tiempo entre 20
un evento extremo como éste en condiciones se- y 200 veces superiores.
guras de la presa. Si la presa está categorizada
como “B”, es decir en las que ante una falla es En contraposición, si hipotéticamente se dispusiera
improbable la pérdida de vidas humanas pero sí de una serie de datos hidrológicos de mil años no
puede haber pérdidas económicas y daños al am- se obtendría solamente la dispersión probable de
biente, cabría lexibilizar la exigencia de seguridad los caudales durante la futura vida de la presa, sino
y aceptar que la crecida aluente de veriicación también las variaciones climáticas que ocurrieron
sea equivalente, como máximo, a 0,75 CMP. durante dicho milenio. De hecho no se tiene tal serie
de datos que mostraría los ciclos climáticos pasados
En cambio, si la presa es de categoría “C”, donde ni tampoco se pueden inferir los cambios climáticos
en caso de falla decididamente es improbable la futuros [Lombardi, G., 1999]. Todo esto reairma que
pérdida de vidas humanas y habría bajas pérdi- se requiere mucha prudencia en la interpretación de
das económicas y ambientales, directamente se los datos estadísticos.
sugiere adoptar la crecida de recurrencia media
entre 100 a 150 años, estimaciones que entran Existen metodologías aceptadas universalmente
en el rango de recurrencias ya admitidas en este para efectuar tales extrapolaciones, pero siempre
capítulo. En la Tabla Nº 1 se resumen los tres cri- existió incertidumbre sobre los resultados que se ob-
terios enunciados. tenían. Si ahora se admite que existen cambios en
los sistemas climáticos, ello agravaría la situación.
(*) Se asume la CMP como límite superior Para el diseño original de los vertederos de la es-
(**) Se asume que el 75% de la CMP podría ser tructura de derivación y de la presa frontal sobre
el límite superior el río Neuquén, ubicadas en el paraje Portezuelo
Grande, que constituyen las obras de cabecera
Tabla 1. Resumen de las recomendaciones del aprovechamiento hidráulico Cerros Colorados,
generales propuestas por el autor para la en la década del ’60 se adoptó una crecida con
estimación de la CDV y la CVP en función de un caudal máximo instantáneo de 11.500 m3/s al
la categoría de la presa y teniendo en cuenta que, mediante un análisis estadístico con datos de
cambios en los sistemas climáticos. caudales máximos hasta el año 1958, se le asig-
nó una recurrencia de 5.200 años [Malinow, G. V.,
1994] [Italconsult, 1962].
3. Incertidumbre en
la estimación de crecidas Transcurridos un poco más de 40 años y para el
diseño de la presa Chihuido, a ubicar sobre el mis-
mo río a aproximadamente 80 Km aguas arriba
Dilema con las de Portezuelo Grande, en el año 2008 se oiciali-
extrapolaciones estadísticas zaron los resultados de la revisión hidrológica de
esta cuenca hídrica [AIC, 2008]. El nuevo análisis
A menudo se disponen registros hidrológicos de estadístico, que incorporó 4 nuevas crecidas im-
un período de años aceptado como suiciente en portantes ocurridas a partir del año 1972 más la
los ámbitos especializados. Con esa información, registrada en el año 2006, de características ex-
que cubre una estrecha gama de respuestas del cepcionales, dio como resultado que el caudal de
82
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
diseño de las obras de Portezuelo Grande tendría generó la crecida del año 2006 más otra tormen-
ahora una recurrencia del orden de 250 años. ta severa que generó una importante crecida en
Es así que la presa Chihuido deberá cumplir la el año 1991 [AIC, 2008]. Como resultado de ello,
función de laminar la crecida de proyecto adopta- para la nueva estimación de la CMP se obtuvo un
da, de forma tal que a las obras de derivación de caudal máximo de 25.070 m3/s, es decir un 40 %
Portezuelo Grande arribe un caudal máximo com- mayor que el estimado en la década del ’80.
patible con su actual capacidad hidráulica.
Presa Machhu II sobre el Río Machhu,
Presa Tavera-bao sobre el Río Yaque del norte, Estado de Gujarat, India
República Dominicana
Uno de los casos emblemáticos es el de la pre-
La CDV de la presa Tavera-Bao sobre el río Ya- sa Machhu II construida sobre el río Machhu, la
que del Norte fue estimada en el año 1972 en cual disponía de un vertedero con una capacidad
8.050 m3/s, deinida como de recurrencia media máxima de evacuación de 5.600 m3/s [Mistry, J.
de 10.000 años. El huracán David provocó el F., 1988] [Jansen, R. B., 1980]. Esta obra colap-
31/08/79 una crecida excepcional, a partir de la só por sobrepaso el 11/08/79 a raíz de haberse
cual se decidió revisar el estudio de probabilida- registrado una crecida con un caudal superior a
des realizado durante la etapa de proyecto, lle- 13.000 m3/s, constituyendo uno de los desastres
gándose a la conclusión de que la CDV adoptada más grandes de la historia de este tipo de acci-
entonces sólo tendría un período de retorno de dentes en el mundo.
170 años [Malinow, G. V., 1990].
Para su reconstrucción se decidió que el vertedero
tuviera capacidad suiciente para soportar la CMP.
Prudencia con la estimacion de la CMP Este escenario se estimó maximizando la tormen-
ta que provocó el accidente de la presa, obtenién-
Presa Chihuido sobre el Río Neuquén, dose un caudal máximo de 20.900 m3/s. Cuando
Provincia del Neuquén, Argentina se estaba llevando a cabo esta evaluación, en ju-
nio de 1983 se produjo una excepcional tormenta
En la etapa inicial del proyecto de la presa Chihui- ciclónica proveniente del Mar Arábigo, mucho más
do, a construir sobre el río Neuquén, en el paraje severa que la que provocó el colapso de la obra,
del mismo nombre, se estimó la CMP con un cau- lo cual obligó a rehacer el cálculo. A partir de la
dal máximo de 17.940 m3/s [Malinow, G. V., 1990] maximización de esta última tormenta se obtuvo
[AyEE, 1987]. Dado que en el año 2006 se registró una CMP con un caudal máximo de 26.400 m3/s.,
en la cuenca del río Neuquén una crecida excep- es decir un 26 % mayor que la que se había ter-
cional, se decidió revisar los análisis hidrológicos minado de estimar y 4,7 veces superior al caudal
existentes, razón por la cual se procedió a estimar de diseño de la obra original, valor que fue adop-
nuevamente la CMP para el sitio donde se empla- tado inalmente.
zará la futura presa. Se maximizó la tormenta que
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84
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
RESUMEN
Interpretar el comportamiento de una cuenca hídri- aguas abajo, basada en la pérdida esperada de vi-
ca es uno de los factores que entraña mayor incer- das, las pérdidas que provocaría en los servicios
tidumbre para el diseño y la operación de presas, esenciales para la comunidad, las pérdidas de pro-
al existir el riesgo potencial de que la capacidad piedades y las pérdidas de carácter ambiental.
de evacuación de la obra resulte insuiciente ante Dos tipos de crecidas de presas se suele emplear
la ocurrencia de tormentas extremas. en la actualidad, por un lado la Crecida de Diseño
En los casos en que la falla de una presa podría oca- del Vertedero, de menor magnitud pero que consi-
sionar pérdidas de vidas y grandes daños materia- dera los impactos aguas abajo de la obra, y por el
les se impone el diseño sobre la base de la Crecida otro la Crecida de Veriicación de la Presa, que se
Máxima Probable, mientras que en áreas agrícolas aplica a las presas existentes para evaluar la segu-
donde el colapso de la presa solo podría provocar ridad de las mismas. El presente trabajo intenta una
pérdidas en los cultivos, se acepta un diseño de la puesta al día en la materia, mostrando la evolución
obra con un grado de protección menor. de los criterios empleados en el plano internacional
Ello conduce a una categorización de las presas para seleccionar tales crecidas típicas.
en función del impacto que una falla ocasionaría
zona, puede resultar del lado de la inseguridad, todos de ajuste. Sin embargo hay gobiernos que
dado que el problema fundamental resulta ser la han impuesto una distribución particular y un cierto
sobreelevación del embalse producida por el al- método de ajuste para la estimación de crecidas,
macenamiento del volumen de la crecida frente a como es el caso de EEUU donde se ha dado el
una capacidad de evacuación reducida en rela- caso de recomendar el empleo de la distribución
ción con los criterios actuales. Log-Pearson III ajustada por el método de los mo-
mentos.
Los criterios generales, válidos para cualquier tipo
de presa están desapareciendo y son sustituidos Una manera de aumentar la coniabilidad de las
por formulaciones en las que la principal considera- estimaciones estadísticas consiste en efectuar un
ción para evaluar la CDV es la categorización de la estudio regional de frecuencias. En este caso las
presa en función de su riesgo potencial aguas aba- muestras registradas en un cierto número de esta-
jo. En este sentido el factor determinante de esta ciones hidrométricas situadas en cuencas vecinas
categorización es la pérdida potencial de vidas. con características isiográicas homogéneas se
ajustan por medio de una misma función de distri-
Luego de los análisis admitidos como convencio- bución [Devoto, G. A., 1990].
nales, para ajustar el hidrograma de la CDV, lo re-
comendable es un enfoque basado en el análisis 2.2 Análisis estadistico relacional
del peligro incremental de inundación en las zonas
aguas abajo de la presa [FEMA, 1998]. También Siguiendo dentro del campo de los análisis es-
representa una importante herramienta en el cam- tadísticos, puede ocurrir que, en grandes cuen-
po de la seguridad hidrológica de presas aquellos cas con regímenes de crecidas complejos, a una
criterios basados en un Análisis Económico de misma crecida real le corresponda un período de
Riesgo, cuya principal aplicación es la evaluación retorno diferente según se efectúe el análisis de
de la seguridad hidrológica de presas existentes. frecuencia del caudal máximo, o del volumen o
de la duración de dicha crecida. Cuando se pro-
cura adoptar una CDV de una presa tratando de
considerar el riesgo del conjunto de variables, se
2. Enfoques para estimar las crecidas analizan las relaciones entre el caudal máximo,
el volumen y la duración y suele determinarse un
Tradicionalmente, por asumir que el clima, y por Índice de Crecida que puede ser por ejemplo la
ende sus derivados hidrológicos, es estacionario relación entre el caudal máximo y el caudal medio
al menos en la escala de décadas, las crecidas se de la crecida.
han estimado mediante los enfoques que a conti-
nuación se mencionan. Con este índice que involucra las distintas varia-
bles mencionadas, a partir del análisis de frecuen-
2.1 Análisis estadístico univariado cias independiente de cada una de ellas y del mis-
mo Índice de Crecida, es posible adoptar valores
Consiste en ajustar una función de distribución de que preserven similar nivel de riesgo en al menos
probabilidades a una muestra basada en registros dos variables, y de esa forma se deine un campo
de caudales máximos registrados en una dada de variación de la tercera variable con lo cual se
estación de aforo o de los volúmenes máximos acota inmediatamente la misma y puede estimar-
aportados en un cierto lapso de tiempo. La CDV se los hidrogramas de diseño correspondientes a
es seleccionada a partir de la adopción de niveles un determinado período de retorno [Paoli, C. U.
de riesgo respecto de la ocurrencia de un cierto et. al., 1998].
evento hidrológico (período de retorno T).
2.3 Análisis estadístico bivariado
Este tipo de enfoque generalmente se ha centra-
do en el análisis estadístico de una única variable, Aceptando que un evento hidrológico presenta ge-
considerándose suiciente parta ciertas obras de neralmente características múltiples debido a las
ingeniería. Para el caso de presas de embalse, posibles combinaciones existentes entre el caudal
como los resultados que se obtienen de esta ma- máximo del hidrograma, su volumen, o bien su du-
nera proveen una valoración limitada del evento ración o el tiempo al pico, por lo expresado en 2.1,
hidrológico, en estos casos es necesario el cono- para el caso de CDV de presas de embalse existe
cimiento completo del fenómeno, valorando todas otro enfoque que recurre a una distribución bivaria-
las variables involucradas y las distintas relacio- da tal que permita describir, por ejemplo, la distribu-
nes existentes entre ellas. ción de probabilidad conjunta del caudal máximo y
del volumen máximo de la crecida para un período
Existe una cantidad de funciones de distribución de n días. En este análisis se asume la misma dis-
que son de uso habitual, lo mismo para los mé- tribución de población para ambas variables. Cabe
86
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
destacar la complejidad matemática que el análisis lisis con un enfoque basado en el riesgo incremental
bivariado involucra en su desarrollo. debido a la falla de la presa para ver cuánto se puede
disminuir la crecida aluente en condiciones seguras
2.4 Análisis determinístico o para la presa, partiendo de la premisa que la CMP
hidrometeorológico es el límite superior de las crecidas a considerar a la
hora de seleccionar la CDA de una presa.
Quedan comprendidos en este grupo todos aque-
llos métodos que intentan manejar la transforma- Esta es entonces la crecida más severa en volu-
ción entre precipitaciones y escorrentías. Las pre- men, pico, forma, duración y tiempos con la que
cipitaciones resultan ser un dato del problema, las resulta conveniente diseñar la capacidad del ver-
cuales deben maximizarse mediante análisis de tedero de una presa, por encima de la cual el in-
tipo meteorológicos para representar así la más se- cremento del nivel de la supericie del agua en las
vera combinación de las condiciones consideradas zonas de aguas abajo, debido a la falla de la presa,
como razonablemente posibles para una determi- provoca una amenaza adicional inaceptable para
nada cuenca hidrográica. esas zonas.
87
Criterios para la seguridad hidrológica de presas.
Guillermo Malinow.
damente de las consecuencias (v.g.: los impactos dor sobre la comunidad ante la pérdida de abas-
de una falla de la presa), o incorporar las conse- tecimiento de agua con, probablemente, el reque-
cuencias de modo de poder clasiicar un riesgo se- rimiento de muchos años para reconstruir la presa
gún una escala de consecuencias adversas. En el y/o para restaurar el abastecimiento completo.
caso de una presa, el concepto de riesgo se aplica
cuando la misma tiene potencial para crear conse-
cuencias adversas. 3. Categoría de las presas
según el riesgo potencial
El nivel de riesgo compatible con las consecuencias
de la falla de una presa sobre la vida y la actividad La categorización de las presas tiene en cuenta el
económica resulta expresado en términos de una riesgo de potenciales impactos demográicos de
probabilidad de excedencia anual considerada ade- frecuente aparición basados en las pérdidas que la
cuada. Así por ejemplo, si se tratara de un área den- falla de una presa pudiera dar lugar en zonas de
samente poblada o con gran desarrollo industrial, la aguas abajo.
falla de una presa ocasionaría pérdidas de vidas y
grandes daños materiales [Devoto, G. A., 1990]. Antes de ello resulta interesante mencionar algu-
nas cuestiones inherentes a las inundaciones en
Seleccionar un aceptable nivel de riesgo usando sí. Si la categorización se hace en la etapa de los
técnicas de cálculo de riesgo pueden conducir a estudios para la revisión de la seguridad, cuando la
resultados más eicientes y coniables que cuando presa está en servicio, generalmente la evaluación
las decisiones están solamente basadas en el aná- de las pérdidas mostrará un escenario mucho más
lisis tradicional de condiciones extremas y/o consi- crítico que el que se evaluó durante la etapa del
deraciones económicas [ICOLD, 2003]. diseño de la obra, por haber aumentado el peligro
potencial que la falla de la misma entraña, llevando
El criterio de riesgo relacionado a la pérdida de vidas ello a una recategorización de la presa y aumen-
es el de mayor aceptación, pero puede haber casos tando así las exigencias.
en donde las pérdidas económicas e impactos en el
medio ambiente aguas abajo de una presa son tan Esto es así porque, por acción u omisión, los asen-
graves que requieren un nivel del riesgo incluso más tamientos poblacionales ribereños avanzan hacia
bajo que el criterio de riesgo de pérdida de vidas. zonas de mayor peligro. El mayor valor venal de
las tierras aledañas a las planicies de inundación
Además existen casos donde el riesgo de vida y los induce a la ocupación de zonas más bajas de me-
daños económicos no son tan severos, pero la pér- nor valor, con la consecuente concentración de
dida del abastecimiento de agua para la irrigación, actividades humanas y la multiplicación de barrios
consumo humano o la generación de energía, sería precarios sobre las mismas.
catastróica para la región y, por lo tanto, requiere
adoptarse un bajo nivel de riesgo. También debe Debe admitirse que aún en el caso de una presa
considerarse criterios inancieros en relación a la construida en un lugar remoto, y que la inundación
capacidad de hacer frente a daños y perjuicios, y potencial no afectase a ninguna vivienda aguas
costos de la responsabilidad de una potencial falla abajo al momento de erigirse la misma, los bene-
de la presa. icios propios que la obra brinda a la zona atraen
nuevos asentamientos que van ocupando las pla-
La aplicación del AER podría variar dependiendo nicies de inundación [IARH-CAI, 2004].
de cuestiones socioeconómicas, políticas y legales
de carácter local. Variará también con la perspec- Si bien las inundaciones ocurrían antes de que se
tiva de las partes interesadas, mientras la principal decida erigir una obra, esas tierras ya eran ocupa-
preocupación del propietario de la obra puede ser das por el hombre con explotaciones agrícolas y
la rentabilidad del capital invertido en la misma, las algunos asentamientos temporarios, circunstancia
autoridades competentes estarán preocupadas por que hacía que los daños debidos a las inundacio-
la protección de la comunidad. nes no se midiesen en pérdidas de vidas y perjui-
cios económicos.
En la toma de decisiones debe considerarse fac-
tores cuantiicables, tales como: riesgo de pérdida Las inundaciones entonces son cada vez más el
de vidas y el costo de reparación de daños, con- origen de los daños y la responsabilidad del hom-
juntamente con efectos intangibles, tales como: bre por los efectos de las mismas tiene que ver
afectación social y ambiental. Además deben con- también con el manejo de las descargas de las
siderarse cuestiones legales y políticas y cualquier obras hidráulicas, que alcanza su máximo nivel en
requisito regulador. aquellos casos en que éstas se originan como con-
secuencia de la falla de la presa.
Esto también incluye el potencial efecto devasta-
88
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
Este enfoque fue dejándose de lado y en la actua- Esta crecida es la que se toma en cuenta para el
lidad, ante la hipotética falla de la presa, se anali- diseño hidráulico del vertedero y la estructura de
za el impacto aguas abajo evaluándose la pérdida disipación de energía, con un margen de seguridad
esperada de vidas, las pérdidas que provocaría provisto por el resguardo de la presa. Con los cri-
en los servicios esenciales para la comunidad, las terios aceptados más recientemente, esta crecida
pérdidas de propiedades y las pérdidas de carác- debería ser elegida en función de una evaluación
ter ambiental, consideraciones que se indican con detallada de los daños incrementales debidos al
más detalle en la Tabla Nº 1. eventual colapso de la presa.
CATEGORÍA DE LA PRESA
RIESGO A B C
POTENCIAL
ALTO SIGNIFICATIVO BAJO
Pérdida directa de Se esperan Panorama incierto, no No se esperan
vidas pérdidas en una o prevista pero se admite pérdidas, se trata de
más comunidades tal posibilidad (zonas localización rural con
con desarrollos no urbanas con pocas viviendas habitadas
de consideración residencias y solamente con carácter no
(residencial, comercial o desarrollo transitorio o permanente, inundadas
industrial). industrial). en forma discontinua.
Pérdida de Interrupción a niveles Se esperan daños a Ninguna interrupción
servicios críticos: carreteras, caminos secundarios, de servicios salvo
esenciales caminos principales, vías férreas auxiliares caminos auxiliares,
vías férreas principales, e interrupciones las reparaciones
importantes servicios u de servicios pú- de los daños son
otras presas de aguas blicos relativamente simples o rápidamente
abajo. importantes. solucionables.
Pérdidas en Importantes pérdidas Pérdidas económicas Pérdidas económicas
propiedades econó-micas, como apreciables. Afectación mínimas,
posibles daños de cierta magnitud en construcciones rurales
de signiicación instalaciones públicas en zona de tierras
a comunidades, y privadas. Fuentes agrícolas, equipos
emprendimientos alternativas de agua y y ediicios aislados
industriales, energía disponibles. privados. Pérdidas
comerciales o agrícolas. indirectas de poca
signiicación.
Pérdidas Alto costo de la El impacto ambiental Se espera un daño
ambientales mitigación o imposible requiere una mitigación incremental mínimo.
solucionar el daño. importante.
Tabla Nº 1. Categorización actual según el riesgo potencial de una presa.
89
Criterios para la seguridad hidrológica de presas.
Guillermo Malinow.
En los casos en que la falla de una presa podría Seguidamente se brinda un panorama de criterios
ocasionar pérdidas de vidas y grandes daños ma- recomendados por organismos e instituciones de
teriales se impone el diseño sobre la base de la diferentes países, los que no tienen relación alguna
CMP, mientras que en áreas agrícolas donde el con posibles cambios en los sistemas climáticos y
colapso de la presa solo podría provocar pérdidas por ende en los sistemas hidrológicos asociados a
en los cultivos, se acepta un diseño de la obra con los mismos.
un grado de protección menor. Una amplia gama
de situaciones están contempladas entre estos dos En 1979 el Cuerpo de Ingenieros de la Armada de
casos extremos y son varias las probabilidades de los EEUU recomendó criterios para la selección de
los caudales máximos que pueden considerarse a crecidas de diseño en función del riesgo potencial
los ines de salvaguardar la seguridad de la presa. aguas abajo y el tamaño de la presa [COE, 1979],
Muchas veces hay que aceptar algún tipo de riesgo los que se indican en la Tabla N° 2. En posteriores
en la selección de la CDV. El nivel de riesgo acepta- revisiones ese organismo reemplazó el criterio de
ble en cada caso es un tema delicado, por lo que la emplear el valor 0,5 CMP por la denominada Creci-
decisión inal debería estar basada en cuidadosas da Estándar de Proyecto (SPF, por Standard Project
consideraciones sobre las crecidas, sus períodos Flood) en razón de que la primera no representaba
de retorno, la potencialidad hídrica de la cuenca, una crecida con probabilidad de excedencia consis-
el tipo de área a ser protegida y las restricciones tente, y por lo tanto no brindaba un nivel adecuado
económicas existentes [Devoto, G. A., 1990]. de seguridad de la obra [Wang, B. H., 1998]. La SPF
surge de estimar la tormenta estándar de proyecto, lla que surja de un análisis de tipo económico.
la cual se basa en una tormenta extrema registrada
en la región de la presa, maximizada a partir de una La Institución Británica de Ingenieros Civiles fue
investigación de carácter meteorológico. perfeccionando sus Normas de Seguridad de Pre-
sas, recomendando [BICE, 1989] los criterios que
Asimismo el Comité Australiano de Grandes Pre- se indican en la Tabla N° 5. Al respecto las guías
sas adoptó en el año 1986 unas guías para selec- mencionan que donde el procedimiento de control
cionar crecidas de diseño de presas [ANCOLD, del embalse lo requiere y la capacidad de descarga
1986] que se incluyen en la Tabla N° 3. lo permite, la operación en o por debajo de los nive-
les especiicados deinidos a lo largo del año, pue-
Para proyectos hidroeléctricos en la zona del Pa- den adoptarse tomando la precaución de que estén
cíico, gestionados por la empresa British Colum- especiicados en los certiicados o en los informes
bia Hydro and Power de Canadá, hacia 1988 se para la presa. Donde se especiica una parte de la
elaboraron guías para la seguridad de las presas CMP se pretende que se calcule el hidrograma de
[Kartha,B. C. V, 1988] que se indican en la Tabla N° la misma y luego las ordenadas respectivas sean
4. Complementariamente se mencionaba entonces multiplicadas por 0,5 ; 0,3 ó 0,2 como igura en la
que se debía aplicar las crecidas mínimas indica- referida tabla.
das para las presas de menor tamaño o de menor
importancia en cada categoría, así como que la El Estado de Nuevo México, EEUU, ha estableci-
CDV de mayor valor debería adoptarse para aque- do en el año 2002 normas de seguridad de presas
llas obras que se aproximaran a la categoría más en las cuales el criterio de selección de la CDV se
alta siguiente, destacándose inalmente que la cre- basa en una clasiicación de la presa según el ta-
cida seleccionada no debería ser menor que aque- maño de la misma, según se indica en la Tabla N°
CONDICIÓN DE LA
PÉRDIDAS ECONÓMICAS CRECIDA
PÉRDIDAS PRESA NIVEL DE
E IMPACTOS SOCIALES DE
DE VIDAS POSTERIOR A LA RIESGO
Y DEL MEDIO AMBIENTE DISEÑO
FALLA
CRECIDA
PÉRDIDAS ECONÓMICAS E
CONDICIÓN AFLUENTE
PÉRDIDA DE VIDA IMPACTOS SOCIALES Y DEL
DE RIESGO MÍNIMA DE
MEDIO AMBIENTE
DISEÑO
6 y en el riesgo potencial para las zonas de aguas el sistema métrico decimal, mediante la cual se
abajo, que se muestra en la Tabla N° 7. hace una clasiicación de la presa según el tamaño
[Malinow, G. V., 1990].
Por otro lado, en la Tabla N° 8 se indican los crite- Por otro lado para determinar este tipo de crecidas, el
rios recomendados por diversas instituciones u or- Comité Español de Grandes Presas elaboró la Guía
ganismos de diferentes países teniendo en cuenta Técnica de Seguridad de Presas [CEGP, 1997], cri-
las condiciones de riesgo de la presa [Malinow, G. terios que se presentan en la Tabla N° 13.
V., 1990] [NBWE, 1987] [NAOS, 1985].
En orden con las recomendaciones del Comité de
Una guía técnica de la provincia de Alberta, Ca- Presas y Crecidas del International Committee on
nadá, [Franco, M. A., 2001] [Hurndall, B. J., 1988] Large Dams [ICOLD, 2003], se indica en la Tabla N°
también emplea una clasiicación de la presa según 14 una síntesis de los criterios generales empleados
sus dimensiones, para luego en función del riesgo para la selección de crecidas de diseño de presas.
potencial de la misma seleccionar la CDV (Tablas
N° 9 ; 10 y 11). Cabe mencionar que estas guías se Respecto a lo indicado en dicha tabla, se desta-
basaron fuertemente en las recomendaciones del ca que para el diseño de la obra de evacuación de
año 1979 del Cuerpo de Ingenieros de la Armada caudales propiamente dicho se podrían aceptar
de los EEUU [COE, 1979]. valores inferiores a los indicados, siempre que la
capacidad de veriicación total se cumpla sin colap-
En la Tabla N° 12 se incluye una clasiicación sui- sar la presa.
cientemente aceptada en los países que emplean
92
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
V : VOLUMEN DEL
H : ALTURA DE LA PRESA
TAMAÑO EMBALSE
(m) (millones de m3)
PEQUEÑA 3 < H ≤ 12 V ≤ 1,2
INTERMEDIA 12 < H ≤ 30 1,2 < V ≤ 61,5
GRANDE H > 30 V > 61,5
Tabla Nº 6. Clasiicación por el tamaño de la presa según la Ofice of the State Engineers, New
Mexico, EEUU, 2002
93
Criterios para la seguridad hidrológica de presas.
Guillermo Malinow.
Tabla Nº 7. Criterios para la selección de la Crecida de Diseño del Vertedero según la Ofice of the
State Engineers, New Mexico, EEUU, 2002
Tabla Nº 8. Criterios adoptados por otros organismos e instituciones para seleccionar la crecida de
una presa
94
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
4.2 Crecida de veriicación de la presa dad la CMP o aquella que tiene un gran período de
retorno (v.g.: 10.000 años) para tal veriicación.
En muchos casos los estudios hidrológicos realiza-
dos para los proyectos de las presas no ofrecen Consideraciones de tipo empíricas, citadas en la bi-
un grado adecuado de iabilidad, ya sea porque se bliografía [Franco, M. A. et. al., 2001] para seleccio-
han efectuados con metodologías y técnicas que nar la CVP, pueden ser como las empleadas en Sui-
en la actualidad podrían ser consideradas obsole- za que se ha adoptado para la crecida extrema a la
tas o por la escasa representatividad de las series crecida de recurrencia milenaria incrementada en un
de registros utilizadas. 50 %, o bien en Italia que se ha adoptado a la CDV
incrementada un 40 % para presas de hormigón y
Es así que para preservar condiciones mínimas de un 70 % para las presas de materiales sueltos. En
seguridad y para reducir la incertidumbre técnica, a ambos casos la bibliografía aporta consideraciones
la luz de haberse incrementado signiicativamente para su laminación a través del embalse.
el período de registro de parámetros hidrológicos o
bien de nuevos datos de caudales cuyas magnitu- El Comité Español de Grandes Presas, a través de
des aumentaron en forma aún más maniiesta que la Guía Técnica de Seguridad de Presas [CEGP,
el aumento medio de las precipitaciones, y ante el 1997], recomienda emplear los criterios que se pre-
peligro de que ocurran precipitaciones extremas sentan en la Tabla N° 13.
más frecuentes, surge apropiado realizar estudios
de revisión del riesgo hidrológico de aquellas pre- Considerando lo recomendado por el Comité de
sas de considerable antigüedad, por caso 30 años Presas y Crecidas del International Committee on
ó más a contar desde que fueron estimados sus Large Dams [ICOLD, 2003], para la selección de
parámetros hidrológicos de diseño [IARH-CAI, la CVP se indican en la Tabla N° 14 criterios de ca-
2004] [CAP, 1994]. rácter general empleados en la actualidad. El por-
centaje de la CMP que usualmente es empleado
En tales casos, cabe estimar la CVP que es aquella puede variar entre el 75 % y el 100 % de la misma
que representa la condición de crecida más extre- para las presas de categoría “A” y un amplio abani-
ma por la cual la presa podría ser objeto de una co que puede arrancar desde el 50 % de la misma
falla, en este caso con un bajo margen de segu- para las de categoría “B”, quedando a criterio del
ridad, que se lo considera como escenario límite. proyectista la adopción de tal porcentaje en función
Para tender a una máxima seguridad en las presas de condiciones particulares de la obra y del medio
con alto riesgo para las zonas de aguas abajo, se ambiente circundante.
adopta como crecida de veriicación de la seguri-
V : VOLUMEN DEL
H : ALTURA DE LA PRESA
TAMAÑO EMBALSE
(m) (millones de m3)
PEQUEÑA H < 12 V ≤ 1,2
INTERMEDIA 12 < H ≤ 30 1,2 < V ≤ 60
GRANDE H > 30 V > 60
Tabla Nº 9. Clasiicación por el tamaño de la presa según el Alberta’s Dam Safety Program,
Cánada, 1989
RIESGO PÉRDIDA DE
PÉRDIDAS ECONÓMICAS
POTENCIAL VIDAS HUMANAS
ALTO No previstas: construcciones de ocu- Mínimas: Zonas sin desarrollar.
pación no permanente aguas abajo. Estructuras ocasionales para
agricultura
SIGNIFICATIVO Pocas: Desarrollos no urbanos y no Apreciables: Destacado desarrollo
más que un número pequeño de vivi- agrícola, industrial o de viviendas
endas habitadas
BAJO Más que unas pocas: villas permanen- Elevadas: Industrias y agricultura de
tes o desarrollos urbanos carácter intensivo.
Tabla Nº 10. Clasiicación de la presa según el riesgo potencial, Alberta’s Dam Safety Program,
Cánada, 1989
95
Criterios para la seguridad hidrológica de presas.
Guillermo Malinow.
V : VOLUMEN DEL
H : ALTURA DE LA PRESA
TAMAÑO EMBALSE
(m) (millones de m3)
PEQUEÑA 5 < H ≤ 15 V≤1
INTERMEDIA 15 < H ≤ 30 1 < V ≤ 50
GRANDE H > 30 V > 50
CRECIDA DE
CATEGORIA CRECIDA DE DISEÑO
VERIFICACION
DE LA PRESA (m3/s)
(m3/s)
A Q1.000 Q5.000 a Q10.000
B Q500 Q1.000 a Q5.000
C Q100 Q100 a Q500
Tabla Nº 13. Criterios para la selección de las crecidas de presas del Comité Español de Grandes
Presas, España, 1997.
CRECIDA DE
CATEGORIA CRECIDA DE DISEÑO
VERIFICACION
DE LA PRESA (m3/s)
(m3/s)
A % CMP ó Q1.000 a Q5.000 CMP ó Q5.000 a Q10.000
B % CMP ó Q500 a Q1.000 ó AER % CMP ó Q1.000 a Q5.000 ó AER
C Q100 Q100 a Q150
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96
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
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Wang, B. H. (1988). Determination of Design Flood for Spillways, 16º Congreso de ICOLD, Q. 63, R.39,
San Francisco, CA, EEUU.
97
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
La articulación de competencias en el
procedimiento de determinación de una
crecida de diseño en el ámbito estatal
PAOLI, Carlos Guillermo y MILIA, Juan Bautista
Ministerio de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente de
la ciudad de Santa Fe
Almirante Brown 4751 (3000) Santa Fe, Argentina.
E-mail: cgpaoli@hotmail.com – juambamilia@yahoo.com.ar
RESUMEN
1. Introducción
Se nos ha propuesto debatir sobre los criterios de efectos en los más diversos ámbitos: la adop-
más apropiados a utilizar frente a evidencias de ción de un parámetro de diseño para construir una
cambios climáticos, de modo tal que sea posible obra hidráulica.
sustentar la determinación de las crecidas de di-
seño necesarias para el dimensionamiento y ope- Como primer jalón, resulta fundamental recordar
ración de obras hidráulicas. que el Estado es una persona de existencia ideal
y que tal naturaleza hace que, a diferencia de las
En dicho marco resulta fundamental atender a la personas físicas, conformen y expresen su volun-
decisión de selección de crecidas de diseño que tad mediante una icción en la cual se disocia a la
se utilizarán para la construcción de obras hidráu- persona que ejerce la función (Ministro, Secreta-
licas en el ámbito del Estado, y a las competen- rio, empleado de carrera) del órgano que el ejerce
cias pasibles de interactuar en tal trámite. (Ministerio, Secretaria, Dirección General).
Ante tal desafío, corresponde anticipar que la res- Tal dato resulta de suma trascendencia, porque
puesta al planteo no será inequívoca; por el con- quien decide no es la persona física, sino el Esta-
trario, la misma nos colocará ante nuevos y mayo- do mismo a partir de las potestades que al mismo
res desafíos que afrontar. se le han otorgado, sin perjuicio de las responsa-
bilidades que a los funcionarios le pueden caber
La intención es observar como el Estado llega a personalmente por el mal desempeño de sus fun-
tomar una decisión que contiene una multiplicidad ciones.
99
La articulación de competencias en el procedimiento de determinación de una crecida de diseño en el ámbito
estatal. Carlos Guillermo Paoli y Juan Bautista Milia.
Entonces, la responsabilidad es del Estado y no nos de muy difícil obtención, conspirando contra
del funcionario (con la salvedad ya hecha) que la efectiva materialización del proyecto o, por el
aprueba una obra en base una determinada creci- contrario, si por mezquinar fondos propusiéramos
da de diseño. Esto que parece tan sencillo en rea- una obra insigniicante, seguramente en el largo
lidad implica un complejo número de operaciones plazo estaríamos generando un mayor costo, por
que deben realizarse a los efectos de llegar ese la realización de una obra inútil y por no mejorar
momento inal que permite ijar cual es la voluntad las condiciones socio económicas de quienes de-
del estatal. berían verse beneiciados.
Por lo tanto, para cumplir con sus cometidos el Cabe preguntarnos, si la ecuación costo-beneicio
Estado, como toda organización compleja –y en resulta suiciente para determinar cual será la cre-
mayor medida la Administración Pública ya que cida de diseño que seleccionemos para proyectar
constituye la organización más compleja de las una obra hidráulica.
sociedades modernas-, ordena su propia actividad
en lujos. Los actos, las decisiones, no aparecen La respuesta en este caso es sencilla: NO.
como “sueltas”, sino que proceden de una serie de
actos previos, tiene un PROCEDIMIENTO que le Creemos que la adopción de una decisión acerta-
permite formar su voluntad. Ninguna decisión es da obliga el análisis del otro factor precitado: be-
one shot, es decir, ninguna decisión se agota en neiciarios y perjudicados.
un solo acto.
En general, toda obra pública trae aparejado un
Y, aunque para muchos esta revalorización del mejoramiento de la situación de un grupo de in-
procedimiento pueda parecer una incomprensible dividuos, muy probablemente, en detrimento de
injerencia de la burocracia, la debida satisfacción algunos otros.
de estas actividades concatenadas y preordena-
das a un resultado inal consagratorio de una op- Normalmente, estos mejoramientos o deterioros,
ción sobre las demás restantes aparece trascen- suelen ser cuantiicables en dinero, por lo que en
dente en orden a dar solidez conceptual a dicho cierta forma retornamos a lo ya dicho en relación
producto. al costo de la obra, no ya como tal, sino como un
todo socio económico, con egresos ciertos y pers-
En el marco de situaciones como las abordadas pectiva de retornos a través del mejoramiento de
en el presente no nos encontramos ante un proce- otros sectores.
dimiento cuyo resultado se encuentra predetermi-
nado –como lo sería el caso de otras actividades Sin embargo, con la generalidad propia de la nor-
estatales, por ejemplo el otorgamiento de una jubi- ma, ya el constituyente de 1853 previó la situa-
lación, consecuencia única ante la ostentación de ción, al consagrar en el artículo 17° de la Carta
la legalmente pautada cantidad de años de servi- Magna Nacional la necesidad de indemnizar a
cio y edad- sino que al inicio de la gestión su inal quienes sean pasibles de expropiaciones como
resulta desconocido. consecuencia de la sujeción a la utilidad pública
de su propiedad. Los diversos ordenamientos lo-
Como ya dijimos, el Estado debe decidir y para cales cuentan con su norma expropiatoria.
hacerlo debe elegir entre un gran número de po-
sibilidades que seguramente se le presentan para Pero también existen otros intangibles o bienes
resolver una misma situación y cuando existe un no determinables en dinero, como resulta ser la
abanico de opciones, también existirán distintas propia vida humana, que pueden tornar a una de-
consecuencias. cisión de este tipo, no solo una cuestión de dispo-
nibilidad de fondos, sino también de la posibilidad
En el caso particular, determinar el parámetro de de salvar o poner en riesgo a los integrantes de
diseño de crecida para la construcción de una una determinada comunidad, in último de la rea-
obra hidráulica estatal tendrá implicancia, princi- lización estatal.
palmente, en dos planos esenciales: la utilización
de fondos públicos –es decir dinero de todos- ya O también la posibilidad de que con la decisión se
sean propios o provenientes del empréstito y la afecten determinados bienes culturales, situación
generación de beneiciarios y perjudicados. que debe ser debidamente sopesada por la admi-
nistración.
Dentro del primer aspecto, no solo debemos con-
siderar el costo de la obra, que de por si no es Y todo ello sin dejar de lado el impacto ambiental
menor, por cuanto si adoptáramos un diseño ex- de la obra.
cesivamente alto, probablemente el monto nece-
sario para concretar el proyecto sea cuanto me- Así, resultan múltiples las situaciones a plantearse
100
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
a partir de la afectación de bienes que se produce mente, el nivel de riesgo que se esta dispuesto a
a partir de la decisión que en uno u otro sentido se asumir por parte de la sociedad mediante la parti-
adopte para la proyección, construcción y opera- cipación comunitaria para, inalmente, establecer
ción de las obras hidráulicas. cual será la crecida de diseño que se utilizará para
proyectar y construir la obra.
La normativa santafesina, por ejemplo, en materia de
obras públicas demuestra en su evolución temporal, Ante tal perspectiva, surge la necesidad de tratar
un paulatino avance hacia este enfoque integral. de encontrar un camino que permita, cuanto me-
nos, disminuir el margen de error en aquella deci-
Si bien la ley N° 5.188 –de Obras Públicas- se sión, optimizando la relación entre fondos públicos
encuentra desprovista de previsiones sobre otros afectados, personas y bienes beneiciados y perju-
aspectos anexos a la obra, posteriormente apare- dicados -más aún ante un contexto tan cambiante
cieron normas que fueron integrándola. como el actual-. Para ello creemos que deben arti-
cularse mecanismos que permitan –como ya hemos
En este sentido, tenemos la ley N° 9.721 de Es- dicho- constituir y decir la voluntad estatal habiendo
tudio del Escurrimiento de Aguas Supericiales en atendido a todos los condicionamiento a que ella se
las Obras Viales. encuentra expuesta al momento de determinar cual
será la crecida de diseño que se seleccione para la
Sin embargo, la mayor iniciativa tendiente a la concreción de una obra hidráulica.
atención integral de los aspectos de las obras
hasta el momento está dada por la ley N° 11.717 La respuesta, a nuestro entender, es la determina-
–de Medio Ambiente- y su decreto reglamentario ción de un procedimiento especíico para la cues-
N° 101/03, que abordara expresamente la proble- tión, por cuanto el ordenamiento de la actividad
mática de la obra pública en su Capítulo VI. administrativa en secuencias-procedimientos tie-
ne una cuádruple justiicación:
Allí, el artículo 33° exige la remisión por los or- 1. de naturaleza interna: no basta distribuir las
ganismos oiciales a cargo de la realización de tareas, sino que es necesario deinir las inter-
obras públicas (el texto reiere solamente al Mi- ferencias entre las diversas funciones, indivi-
nisterio de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, dualizando cuáles son los órganos que deben
mas posteriormente las modiicaciones de las le- intervenir en el procedimiento y cuándo deben
yes de Ministerio hacen tal preceptiva extensible a hacerlo; es decir, es una tarea de la ordena-
otros, como ser el Ministerio de Aguas, Servicios ción del procedimiento individualizarlo y deinir
Públicos y Medio Ambiente) del Plan de Obras la sucesión de sus intervenciones; de allí que el
previsto para el año en cualquiera de sus etapas, procedimiento cumpla una función organizativa
sea idea, prefactibilidad, factibilidad o proyecto, en sentido dinámico, completando el esquema
a in de analizar conjuntamente la necesidad de organizativo ya que este no puede indicar de
establecer cuáles estarán sometidas a Estudio de una vez por todas, el puesto de cada oicio en
Impacto Ambiental. La norma en comentario exige el curso de una actividad, ello se puede hacer
que la remisión sea realizada anualmente y con en la deinición del procedimiento.
un mínimo de dos meses de antelación al inicio 2. medio de composición de intereses rea-
de cada año. lizando la tarea de una “súper ley” con una
función de solucionar los conlictos entre inte-
Por su parte, en el artículo 34° se prevé además reses colectivos que, convertidos en públicos,
que la entonces Secretaría de Estado de Medio se reproducen en el seno de las administra-
Ambiente y Desarrollo Sustentable (hoy reempla- ciones; así el procedimiento ija las reglas a
zada por el Ministerio de Aguas, Servicios Públi- través de las cuales se da prevalencia a unos
cos y Medio Ambiente conforme ley N° 12.817 –de intereses públicos respecto de otros.
Ministerios-), elabore en forma conjunta con el 3. limita la actividad administrativa, deinien-
organismo o jurisdicción que genere el proyecto, do el sitio de cada órgano y los efectos de sus
los pliegos de los Estudios de Impacto Ambien- actos, con el in de poder comprobar la activi-
tal que deban ser realizados por profesionales o dad administrativa; a través de la vía procedi-
consultores externos sobre las Obras Públicas, y mental el juez está en grado de recorrer todos
los procedimientos de selección de consultores, los actos que han contribuido mas o menos
integrando así también la Comisión Técnica de directamente, a formar la voluntad estatal y
preadjudicación. comprobar si alguno de ellos no fue adecua-
damente respetado.
En deinitiva un proyecto bien formulado, no de- 4. proteje frente a posibles planteos judicia-
bería dejar de considerar los aspectos políticos, les de terceros por afectación de intereses
institucionales, legales, sociales, económicos, i- difusos, en caso de que el procedimiento haya
nancieros, ambientales, técnicos y, fundamental- sido debidamente observado.
101
La articulación de competencias en el procedimiento de determinación de una crecida de diseño en el ámbito
estatal. Carlos Guillermo Paoli y Juan Bautista Milia.
Sin embargo, no debemos olvidar lo manifesta- En deinitiva, nuestra propuesta consiste en el es-
do por Dromi en cuanto a que “el procedimiento tablecimiento de un procedimiento especíico para
administrativo no es un instrumento procesal neu- la materia, que permita contar con pautas genera-
tro, ajeno al juego axiológico-político …”1, y así, les, más allá de los ajustes propios de cada caso
aunque su exteriorización parezca una mera acu- particular, seguramente permitirá que la determi-
mulación de papeles, su esencia es expresar la nación que se adopte se la más racional en los
tensión entre el ejercicio del poder y los derechos términos de Max Weber, quien sostiene que la
individuales o de la comunidad. racionalidad “consiste en concebir primero un in
realizable para escoger después los medios idó-
Consecuentemente, el procedimiento administrati- neos para alcanzarlo.”
vo debe permitir armonizar los aspectos políticos,
en cuanto actividad tendiente al logro eicaz del
bien común; jurídicos, en tanto relación jurídica
procesal en que Administración y administrados
poseen recíprocos derechos y deberes, y técnicos,
resultando, en conjugación con los dos aspectos
anteriores, el sustento técnico-cientíico y práctico 1. DROMI, Roberto en Derecho Administrativo, 7ª
de la eicacia del procedimiento administrativo. Ed., Ciudad Argentina, Bs. As., 1998, pág. 893
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
CASSESE, Sabino. Las bases del derecho administrativo. Capítulo Noveno “El Procedimiento”, Ed.
Instituto de Administración Pública, Madrid, 1994.
DROMI, Roberto. Derecho Administrativo, 7ª Ed., Ciudad Argentina, Bs. As., 1998.
GORDILLO, Agustín. Tratado de derecho administrativo. Ed. F.D.A., Bs. As., 1997.
Marienhoff, Miguel. Tratado de derecho administrativo. Ed. Abeleldo-Perrot, Bs. As., 1975
CANO, Guillermo J. y colaboradores. Informe Final Estudio sobre Línea de Ribera, Consejo Federal de
Inversiones, 1988.
102
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
RESUMEN
En la llamada Región Litoral, la realización de nume- muy diferentes, como lo son la Cuenca Inferior del
rosos estudios efectuados en distintas épocas han río Salado (aproximadamente 30.000 km2), la cuen-
dado lugar a la adopción de crecidas de diseño de ca de aportes al Paraná Medio (aproximadamente
distintas magnitudes para un mismo río originando 1.950.000 Km2) y la Cuenca de aportes del rió Uru-
discusiones y dudas sobre la pertinencia de los crite- guay en Salto Grande (aproximadamente 245.000
rios y métodos empleados en cada caso y las justii- km2).
caciones para la adopción de uno u otro valor.
Se sintetizan previamente los conceptos principales
Se presentan en forma resumida los estudios de del Análisis de Frecuencia aplicado a crecidas y se
crecidas y el Análisis de Frecuencia de los picos que resumen los factores que intervienen en la incerti-
se efectuaron en estos estudios antecedentes en dumbre de las maximizaciones estadísticas y las
tres Cursos de la Región con Cuencas de aportes limitaciones de los métodos en uso.
103
Cambios en la serie de caudales maximos en Ríos de la Región Litoral
y su incidencia en parámetros de diseño. Carlos Ubaldo Paoli.
sobre dicha cuenca. Se pueden adoptar una o dencia muy grande en las propiedades esta-
más formas tipo de crecida según la complejidad dísticas de las muestras, principalmente en su
del régimen del curso de agua bajo estudio. coeiciente de asimetría. El uso de coeicientes
de asimetría generalizado y otros parámetros
En cuanto a la relación magnitud de la variable- tratados regionalmente, reduce los efectos ad-
recurrencia a preservar, en cuencas pequeñas versos de los outliers.
y medianas se logra una buena representación • Distribuciones de frecuencia teóricas y los mé-
conservando la maximización del caudal pico. En todos de estimación de parámetros para el AF:
estos casos primeramente se construye un hidro- La exactitud del método de momentos (MOM)
grama adimensional relativo al pico en base al hi- es severamente afectada si los datos con-
drograma tipo adoptado y luego se transforma en tienen errores en las colas de la distribución
hidrograma de diseño de una determinada recu- donde los brazos de los momentos son lar-
rrencia multiplicando las ordenadas por el caudal gos. El Método de Máxima Verosimilitud (MV)
pico maximizado para esa recurrencia. es generalmente preferido sobre el (MoM) en
Si se trata de una cuenca de gran tamaño y ré- virtud a las propiedades de los estimadores
gimen complejo, en general será necesario pre- MV. Otros métodos como los Momentos Pon-
servar la relación caudal máximo – recurrencia y derados por Probabilidades (MPP), Momentos
duración – recurrencia o volumen – recurrencia. Mixtos o Combinados (MMX) (para distribu-
ción Log-Pearson) y otras variantes, resultan
Suposiciones para el dimensionamiento basa- más eicientes para algunas distribuciones en
do en Análisis de Probabilidades: particular.
104
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
60000 1983
1992
1998
50000 1905
1966
(m3/seg)
(m3/seg)
40000
caudal máximo medio
30000
20000
10000
0
1904/05 1914/15 1924/25 1934/35 1944/45 1954/55 1964/65 1974/75 1984/85 1994/95 2004/05
40000
34000
Q (m /s)
/s)
3
32000
28000
26000
24000
1905 1915 1925 1935 1945 1955 1965 1975 1985 1995 2005
Años
Gráico Nº 2. Caudales
Gráfico Nº 2: Caudales máximos
máximos medios medios cronológicos
cronológicos del río Paraná en Corrientes de la serie
Gráfico Nº 2: Caudales
1904/05-2004/05 máximos
Corrientes de medios
la serie cronológicos
1904/05-2004/05
Corrientes de la serie 1904/05-2004/05
105
Cambios en la serie de caudales maximos en Ríos de la Región Litoral
y su incidencia en parámetros de diseño. Carlos Ubaldo Paoli.
Para la serie 1964/65-2004/05 del último de los estudios indicados, se han calculado los intervalos de
conianza que se muestran en el cuadro siguiente:
��� � ����� ��
Cuadro � �� de
3. Intervalos � ��� � ���� �
conianza de�los
��caudales
� �������� � � � ������del
máximizados � �
río�Paraná
��� � ��� ���� � ��������
en Corrientes para la serie
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1964/65-2004/05
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CRECIDAS DEL RÍO SALADO
�� � ��������� � ��� � ��������,�� � �� � ��� ��� � ���� � ��se
� ������������� � � intensas
� ��,���en al
ante la descarga sostenida en el tiempo del río
�
Bajos Submeridionales por el río Calchaquí. La curva de la media deslizante cronológica de los
caudales máximos muestra claramente una ten-
La situación mas desfavorable se produce ante dencia creciente a partir de la década del 70.
la superposición de ambos efectos, es decir que
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0��
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#���
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0��
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0 30'
0/34�
4.34#
4 34'
4�345
4/3��
�.3�#
��3�5
�/35�
5.35#
5 35'
5�355
5/3/�
/.3/#
/�3/5
//3��
��.3�#
�� 3�'
00304
0�305
40344
� 3�'
�03�4
50354
/ 3/'
/03/4
�+��
����������������������������������������������� ���!��"#�������������$%&�'&()
Gráico Nº 3. Caudales máximos del río Salado en Ruta 70 de la serie 1953/54-2004/05
*##('#& 107
Cambios en la serie de caudales maximos en Ríos de la Región Litoral
y su incidencia en parámetros de diseño. Carlos Ubaldo Paoli.
La curva de la media deslizante cronológica de los caudales máximos muestra claramente una tenden-
cia creciente a partir de la década del 70
1000
700
600
Q (m3/s)
500
media serie = 29435 m3/s
400
300
200
100
1954 1964 1974 1984 1994 2004
Años
Análisis
Análisis de frecuencias
de frecuencias de de Caudales máximos del Rí
La introducción de los nuevos años de registros
Caudales máximos del Río Salado posteriores a 1998 y fundamentalmente la intro-
ducción en la serie del máximo de abril del 2003
Un análisis detallado fue realizado en 1998 para el de 3954 m3/s, producen importantes modiicacio-
estudio de la nueva conexión vial Santa Fe - San- nes en la serie muestral. Los resultados de la apli-
to Tomé y para el redimensionamiento del puen- cación del AFMULTI arrojan los siguientes valores
te de la autopista solicitado por AUFE. En dichos muestrales
estudios se efectuó el análisis de frecuencia de
la denominada serie moderna que corresponde al longitud de la serie : 27 años
período entre 1971 - 1998. Caudal máximo medio: 865 m3/seg.
Desvio: 882 m3/seg
Los resultados de la aplicación del AFMULTI arro- Coef. de variación: 1,02
jan los siguientes valores muestrales : Coef. de asimetría: 2,31
Caudal máximo máximo: 3954 m3/seg
longitud de la serie : 23 años Caudal máximo mínimo: 154 m3/seg
Caudal máximo medio: 782 m3/seg.
Desvio: 634 m3/seg El caudal máximo diario promedio aumentó solo
Coef. de variación: 0,81 en un 11 %, pero el desvío lo hizo en casi un 40
Coef. de asimetría: 1,66 % lo que le coniere una característica de alta va-
Caudal máximo máximo: 2430 m3/seg riabilidad a la muestra (coeiciente de variación
Caudal máximo mínimo: 139 m3/seg superior al 100 %).
108
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
Los nuevos valores obtenidos del AF introducien- intervalos de conianza. El signiicado de estos
do la nueva crecida se muestran en la tabla en límites es que resulta esperable con un nivel de
comparación con los valores del AF hasta 1998. conianza del 90 % que los valores que se estiman
A efectos de tener en cuenta las incertidumbres para una probabilidad indicada, caigan dentro de
implícitas en las estimaciones, se calcularon los esos límites.
Serie 1971-2003
T (años) Serie 1971-1998 Caudal Esperado
Límite Inferior Limite Superior
( m3/seg )
500 4000 3698 5462 7227
250 3500 3170 4851 6139
100 3010 2771 4043 5316
50 2590 3470 3432 4493
20 1615 1970 2630 3672
10 1190 1438 2013 2589
5 600 1028 1402 1776
Cuadro 4. Caudales maximizados del Río Salado en Ruta 70 para diferntes series e intervalos de conianza.
(Fuente: La Cuenca del río Salado y la Crecida de abril de 2003 - INA, 2004)
Si se hubiera tenido que estimar cual era la proba- de trabajo que se encuentran desarrollando es-
bilidad y recurrencia esperada para un caudal del tos estudios, conjuntamente con los Organismos
orden de los 4000 m3/s, antes de que el mismo se pertenecientes al Ministerio de Obras, Servicios
produjera, a la luz de los estudios disponibles del Públicos y Vivienda de la Provincia de Santa Fe,
año 1998, se hubiera indicado que dicha crecida acordaron compatibilizar los criterios, información
era esperable con una recurrencia del orden de básica y metodologías que se emplean.
los 500 años, mientras que con la serie actualiza-
da el mismo valor de caudal tiene una recurrencia En particular al considerar las crecidas de dise-
de 100 años. ño del Río Salado se acordó sobre los resultados
del Análisis de Frecuencia de los Picos máximos
Pero también se pude observar que el valor de realizado por el INA, adoptando los valores para
recurrencia 100 años de la serie 1971-98 entra distintas recurrencias que se volcaron en un Acta
dentro del intervalo de conianza de la recurrencia Acuerdo. En la misma se establece también que
100 años de la serie 1971-2003. Debe tenerse en para el caso de utilizarse la crecida de referencia
cuenta que el intervalo de conianza depende fuer- de 100 años recurrencia como crecida de diseño,
temente del tamaño de la muestra y del estimador se utilice un coeiciente de mayoración de 1,2 para
de desvío, por lo que en este caso de una muestra tener en cuenta las incertidumbres descriptas en
de escasos 27 datos y CV superior al 100 %, los el punto correspondiente, provenientes funda-
intervalos son muy grandes. Así se encuentra que mentalmente del cambio climático y de las modii-
el limite superior de la crecida centenaria es un 31 caciones del uso del suelo y obras de drenaje de
% mayor que el valor central. la cuenca.
109
Cambios en la serie de caudales maximos en Ríos de la Región Litoral
y su incidencia en parámetros de diseño. Carlos Ubaldo Paoli.
dales diarios de aportes totales al embalse del los años 40 se produce un crecimiento del prome-
período 1898-2005, a partir de los cuales se ela- dio de crecidas anuales, para luego de una poco
boraron los hidrogramas para cada año de infor- marcada declinación hasta los años 60 (excepto
mación disponible. De la observación de dichos la crecida de 1959), mantenerse en valores casi
hidrogramas se conformó la serie anual calenda- constantes hasta los años 80 en que comienza
rio mediante la selección del caudal diario máximo a crecer marcadamente hasta in de siglo, man-
independiente de cada año del período muestral teniéndose a partir de entonces con valores casi
considerado. constantes o levemente crecientes. El mayor
gradiente de aumento del caudal Máximo Anual
La Figura 1 presenta la serie anual calendario de Medio se produce entre el valor acumulado hasta
los caudales máximos del río Uruguay para el pe- 1978 que era de 16.634 m3/s y el valor acumulado
ríodo 1898-2005. a 1998 que es de 17.712 m3/s que correspondería
a un gradiente del orden de los 100 m3/s/año.
La sola observación visual permite decir que en
los primeros 50 años los picos de crecida son en Teniendo en cuenta el objetivo perseguido, los es-
general menores a los que se presentan en los tudios antecedentes disponibles, el conocimiento
últimos 50 años. Hasta los años 50 solamente 3 o que a priori se tiene de las variaciones observadas
4 crecidas alcanzan o superan los 25.000 m3/s y temporalmente y de las hipótesis que se plantean
de ellos ninguna supera los 30.000 m3/s, mientras de inluencia de la variabilidad y/o cambio climá-
que a partir de los 50 son 9 o 10 las crecidas que tico, se seleccionaron los siguientes subperíodos
alcanzan o superan los 25.000 m3/s, de las cuales para ser analizados:
6 superan los 30.000 m3/s. Diversos autores inter- • 1898-2005 Por ser la serie completa
pretan estos cambios y o tendencias como efectos • 1898-1950 Primera mitad de la serie donde no
del cambio o variabilidad climática (Sir Halcrow se detectan cambios importantes.
and P, 1994), (Barros, et al, 2006) • 1951-2005 Segunda mitad con mayor fre-
cuencia de extremos importantes
Se calcularon las medias deslizantes cronológicas • 1898-1970 Serie de mas de 70 años utilizada
de los Caudales Máximos Anuales, las mismas se en estudios anteriores.
presentan en la Figura 2. • 1971-2005 Serie moderna que se asocia en
varios trabajos con aumento de precipitacio-
Se observa claramente la tendencia a un aumento nes.
del Caudal Máximo Anual Medio, pero con varia- • 1981-2005 Serie moderna más corta que se
ciones a lo largo de todo el período. En particular podría considerar.
se observa que a partir de los años 20 y hasta
Cuadro 5. Caudales maximizados del Río Uruguay en Salto Grande para las distintas series.
110
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
40000
35000
30000
25000
Q (m3/s)
20000
15000
10000
5000
0
1898
1903
1908
1913
1918
1923
1928
1933
1938
1943
1948
1953
1958
1963
1968
1973
1978
1983
1988
1993
1998
2003
Años
23000
22000
21000
20000
19000
Q (m /s)
18000
17000
16000
15000
14000
13000
1898 1908 1918 1928 1938 1948 1958 1968 1978 1988 1998
Años
111
Cambios en la serie de caudales maximos en Ríos de la Región Litoral
y su incidencia en parámetros de diseño. Carlos Ubaldo Paoli.
Los intervalos de conianza para la serie 1971-2005 que fue la recomendada, muestran que los diver-
sos máximos calculados siempre se encuentran dentro del límite superior, no así dentro del límite infe-
rior para las recurrencias más bajas y para las series mas antiguas que van hasta los años 50 o 70.
Cuadro 6. Intervalos de conianza de los caudales máximizados del río Uruguay en Salto Grande para la
serie 1971-2005
112
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
BARROS, V.; CLARKE, R.; SILVA DIAS, P. (2006). “El Cambio Climático en la Cuenca del Plata” CIMA-
CONICET. Argentina
HAMMERLY, R. y otros, (2007), Informe de Análisis de Frecuencia de caudales máximos del Río
Uruguay, en el marco del Estudio de la CMP.
PAOLI, C. U. CACIK, P., BOLZICCO, J. (1994). “La incertidumbre en el Análisis de Frecuencia de Picos
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PAOLI, C. U. CACIK, P., BOLZICCO, J. (1994). “Actualización de Crecidas de Diseño del Río Paraná en
Relación a Proyectos y Obras del Tramo”. III Seminario Argentino de Grandes Presas. Salto Grande,
Entre Ríos.
PAOLI, C. U. y GIACOSA R. (2003). Caracterización del Riesgo Hídrico con relación a las inundaciones
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ISBN N° 959-34-0246-8. EDULP, La Plata, Pcia. de Bs Aires.
PAOLI,C. U. y GONIADZKI, D. (2003). La Cuenca del Río Salado y la crecida de abril de 2003. ISBN Nº
987-20109-3-5. Publicación del INA, Santa Fe, Argentina.
113
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
RESUMEN
En la práctica ingenieril y con destino al dimensio- te sobre metodología de cálculos hidrológicos para
namiento de distintos tipos de obras de paso de el diseño y dimensionamiento de estructuras viales,
vías de comunicación se requiere el cálculo de la se llevo a cabo una búsqueda en internet basándo-
“Crecida de Diseño” o “Crecida de Proyecto”, para se en la bibliografía propuesta, obteniendo resulta-
lo cual es necesario asociar a una determinada dos satisfactorios en la mayoría de los casos.
magnitud de crecida la probabilidad anual de ser En una segunda instancia se procedió a realizar una
superada con lo que se representa el riesgo hidro- búsqueda más general, obteniendo informes, manua-
lógico del evento. les, publicaciones, etc., referidos al diseño y dimen-
En forma general, para la determinación de las di- sionamiento de puentes o carreteras que hagan refe-
mensiones de obras de paso se requiere el caudal rencia al análisis hidrológico.
máximo a conducir, pero para prever los procesos En las conclusiones las características de las creci-
erosivos y determinar protecciones y profundidades das de diseño recomendadas en los documentos y
de fundación se necesita además el hidrograma de manuales analizados se han agrupado en cuadros
la crecida de proyecto (duraciones de caudales de- separados para: puentes, alcantarillas, zanjas y ca-
terminados). nales, captación y conducciones pluviales
Con el objetivo de recopilar información anteceden-
1. Introducción
En la práctica ingenieril y con destino al dimensio- simples que conservan una forma característica.
namiento de distintos tipos de obras de paso de En estos casos lo que se hace generalmente es
vías de comunicación se requiere el cálculo de la maximizar los picos de crecidas y adoptar un hi-
“Crecida de Diseño” o “Crecida de Proyecto”, para drograma de acuerdo a esa forma típica.
lo cual es necesario asociar a una determinada
magnitud de crecida la probabilidad anual de ser Cuando no se dispone de series de caudales me-
superada con lo que se representa el riesgo hidro- didos que permitan el análisis de frecuencia de los
lógico del evento. caudales máximos, se utilizan fórmulas, méto-
dos semiempíricos o modelos de transformación
En forma general, para la determinación de las di- lluvia-caudal con los cuales una tormenta de pro-
mensiones de obras de paso se requiere el caudal yecto seleccionada es transformada en un caudal
máximo a conducir, pero para prever los procesos máximo o en un hidrograma de proyecto.
erosivos y determinar protecciones y profundida-
des de fundación se necesita además el hidrogra- En general en el País, no se dispone de suicien-
ma de la crecida de proyecto (duraciones de cau- tes registros en los numerosos cursos de agua,
dales determinados). que puedan ser utilizados en los estudios de di-
mensionamiento que son requeridos. Es frecuente
El riesgo asociado a las denominadas crecidas por lo tanto que se estimen crecidas de proyecto
de proyecto o crecidas de diseño para el caso de con modelos de transformación lluvia-caudal sin
cuencas pequeñas y medianas es representado calibración de parámetros, suponiendo en mu-
por la probabilidad de excedencia del caudal pico, chos casos que el solo hecho de usar un modelo
ya que éste guarda una relación directa con el da “mejores” resultados (Paoli C.U. et al, 1998).
volumen y duración, al tratarse de hidrogramas En realidad el ingeniero proyectista desconoce la
115
Tratamiento de Crecidas de Diseño y Adopción de Recurrencias en Manuales de Puentes y Alcantarillas.
Carlos Ubaldo Paoli y Norma Picolli.
116
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
Basados solo en datos de caudales y caracte- tudio pueden provocar divergencias importantes
rísticas del cauce del sitio: se agrupan acá en en los resultados. Son métodos utilizados cuando
general tres tipos de metodologías: no se dispone de datos directos medidos en el si-
a) Aquellas que se basan en el estudio de los tio especíico de interés.
registros históricos de caudales máximos a
in de estimar las probabilidades futuras de Transformación Lluvia – Caudal: se agrupan to-
ocurrencia de las crecidas. Son los métodos dos los métodos que se utilizan cuando no se dis-
más utilizados para obras de envergadura, pone de datos sistemáticos de caudales en el sitio
cuando se dispone de series de valores ex- o los disponibles son de corta extensión tempo-
tremos. ral, pero si se dispone de la información de lluvia
b) En el otro extremo, cuando no se dispone de en uno o varios puntos de la cuenca de aportes.
información sistemática en el sitio, sino solo Brindan relaciones simpliicadas o complejas en-
de registros aislados o marcas de máximas tre tormentas y crecidas, incluyendo los modelos
crecidas, se utilizan estos valores. transformación lluvia - escurrimiento.
c) En otros casos solo se dispone de las ca-
racterísticas (sección, pendiente, etc) del Cada método se menciona de acuerdo al nom-
sitio y con la ayuda de fórmulas hidráulicas bre con que se halla en el documento, debido a
se estiman caudales y niveles. esto es posible encontrar la misma metodología
con nombres diferentes (Ej. Distribución Estándar
Empíricos, semiempíricos y Regionales: se de Frecuencia y Análisis de Frecuencia o NRCS
agrupan acá una gran diversidad de metodolo- Método de Pérdida de Curva Número y Curva
gías, desde las basadas en Análisis de frecuencia Número). La mayoría cuenta con una pequeña
regional de caudales medidos en diversos puntos caracterización que menciona los aspectos más
y su extensión o interpolación a sitios no medidos importantes que cada publicación detalla.
en base a características físicas y/o de precipi-
tación, hasta las formulas empíricas o semiem- Es importante mencionar que hay situaciones don-
píricas desarrolladas para diversas regiones. En de no se dispuso del documento completo sino de
estos últimos casos debe tenerse en cuenta las su referencia encontrando casos donde las mis-
limitaciones de los mismos, ya que como son una mas son muy generales por lo que se procedió a
generalización surgida del análisis de un gran nú- su interpretación como en el caso de “Modelos de
mero de caos, las condiciones particulares del es- computadoras para Generación de Hidrogramas”.
Métodos
Datos de la
Basados solo en datos de
Publicación Empíricos, Semiempíri- Transformación
caudales y características
cos y Regionales Lluvia - Caudal
de cauce del sitio
Hyghway Hydrology. Hy- * Distribuciones Estándar * Ecuaciones de Regresión * SCS Graphical Peak
draulic Design Series N°2 de Frecuencia: N, LN, Gu, Regional: Discharge Method
www.fhwa.dot.gov16 LPIII
* Index Flood Method: * Método Racional
Roadway Design Manual. * USGS 1991: * Método Racional:
Chapter 7. Drainage. * USGS 1983:
www.mdot.state.ms.us9
*USGS 1967:
* USGS:
Estudios Hidráulicos - *Análisis de frecuencia: N, *Método de Creager: cuen- * Método Racional
Hidrológicos para Puentes. LN, Ga, Gu, PIII, LGu, LPIII cas mayores de 30 km2 * Método de Horton
M-PRY-CAR-1-06-004/00.
www.normas.imt.mx14 * Método de Chow
Adopción de recurrencias para Por dicha razón las características de las crecidas
la determinación de las crecidas de diseño de diseño recomendadas en los documentos y
manuales analizados se han agrupado en cuadros
Para la determinación de crecidas de diseño en separados para:
relación a obras de paso (puentes y alcantarillas) Puentes
de obras viales, en general se reieren a la magni- Alcantarillas
tud de la crecida que se debe adoptar para deter- Zanjas y Canales
minar la “luz” o sección de paso necesaria. Captación y conducciones pluviales
A la vez esta sección de paso debe ser tal que el Los documentos que se sintetizan en cuadros en
caudal que pase lo haga con una velocidad y un los cuales se encontraron recomendaciones expre-
tirante de agua que satisfaga las condiciones de sas de recurrencias a adoptar son los siguientes:
diseño de la obra de paso en relación a la altura a) Texas Department of Transportation. (2004).
del terraplén y en relación a la erosión generaliza- Hydraulics Design Manual. Chapter 5,
da y localizada. Hydrology
b) British Columbia, Ministry of Transporta-
Sin embargo el nivel de exigencia que tienen estas tion. (2007). Supplement to TAC Geometric
condiciones básicas de diseño, el nivel de agua y Design Guide
la erosión, son diferentes debido a que las conse- c) España
cuencias de que se superen los parámetros de d) U.S. Department of Transportation. (2002).
diseño establecidos son muy diferentes para la Highway Hydrology. Hydraulic Design Series
seguridad de la obra en si mismo. Para la estabili- N° 2, Second Edition, FHWA e. Concticut
dad de la obra es más peligroso el incremento de f) Secretaría de Comunicaciones y Transporte
los procesos de socavación que la sobreelevación (SCT). (2000). Estudios Hidráulicos - Hidro-
del tirante de agua y además, técnicamente es lógicos para Puentes
más factible considerar revanchas para los nive- g) Instituto de Pesquisas Rodoviárias. (2005).
les máximos esperados que para los procesos de Manual de Hidrología Básica para Estructu-
socavación. ras de Drenajem, 2ª Ediçao
h) Washington State Department of Transporta-
Por dicha razón en muchos casos se adoptan Cre- tion. (2005). Hydraulics Manual
cidas de diseño diferentes para determinar por i) Gerencia de Seguridad en el Transporte,
una parte la sección de paso en relación al tirante Comisión Nacional de Regulación del Trans-
de agua esperado y por otra parte para veriicar el porte. Instrucción técnica para estudios de
comportamiento a la erosión y elegir de esa forma hidrología de crecidas j. UTA
el tipo y la profundidad de fundación. k) New York State Department of Transpor-
tation. (1996). Highway Design Manual.
En cuanto a la diferenciación entre puentes y al- Chapter 8, Highway Drainage
cantarillas, en la mayoría de los casos, se reieren l) Massachusetts Highway Department.
a puentes las obras de paso sin fondo ijo y por (2006). Chapter 8: Drainage and Erosion
el contrario las alcantarillas se reieren a obra de Control
paso de geometría ija cerradas (cilíndricas, rec-
tangulares, ovoidales, etc.), en las cuales el escu-
119
Tratamiento de Crecidas de Diseño y Adopción de Recurrencias en Manuales de Puentes y Alcantarillas.
Carlos Ubaldo Paoli y Norma Picolli.
Puentes
Como se observa los caudales de diseño recomendados van desde 10 a 200 años, pero los valores
mas frecuentes son de 50 y 100 años. Asimismo la recurrencia para crecidas de veriicación o para
erosión es de 500 años.
Puentes
Para el caso de alcantarillas, el rango de recurren- esperados en función de los costos de obras.
cias para adoptar la crecida de diseño es muy am- (Massachuset, 2006) (New York, )
plio, en general entre 2 y 100 años, respondiendo • Si bien las Recurrencias recomendadas se
así a la gran diversidad de tipo de alcantarillas y basan en las experiencias conocidas y en el
de las condiciones de la vía de comunicación. buen juicio ingenieril, en el caso de de áreas
de alto riesgo, el análisis de riesgo de daños
A pesar de que no se brindan muchas explicacio- (costo/beneicio) puede ser necesario para
nes sobre la justiicación del nivel de riesgo que se una mejor elección (Washington, 2005)
asume al adoptar las recurrencias recomendadas,
en general se hace referencia a la importancia de En ciertos casos se hace referencia a otros facto-
la vía de comunicación y a la cuestión económica, res a tener en cuenta,
como ser: • Las revanchas que se recomiendan pueden
• Las tablas proporcionan un rango de valores depender de las restricciones de sobreeleva-
típicos, pero la selección de los valores de- ción que se permiten en la planicie inundable
ben hacerse a partir de minimizar los daños según la regulación de las mismas, de la im-
120
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
portancia que pueda tener la vía de comunicación para evacuaciones de emergencia, o como
defensa nacional. También otras consideraciones ecológicas o geomorfológicas pueden afectar la
selección de la revancha. (FHWA)
También es un rango muy amplio el que se encuentra recomendado para las recurrencias de las cre-
cidas de diseño de las obras complementarias de canalizaciones y conducción de aguas en el entorno
de las obras viales, en general entre 2 a 25 años y como máximo 50 años.
En algunos de los documentos se indican también las recurrencias recomendadas para el manejo de
los excesos pluviales locales.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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121
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Hydrology. www.udot.utah.gov
19. Washington State Department of Transportation. (2005). Hydraulics Manual. Washington, Estados
Unidos. www.wsdot.wa.gov
122
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
RESUMEN
Se presenta un nuevo enfoque para la estimación tro histórico. En el proceso de selección de la ave-
de avenidas de diseño en presas de una forma pro- nida de diseño, se considera la combinación más
babilística. El método se basa en el concepto del pe- desfavorable de las características del hidrograma,
ríodo de retorno conjunto. Este periodo de retorno de acuerdo con los efectos producidos en la estruc-
conjunto se deine en términos de los diferentes pa- tura en diseño o revisión. La metodología descrita se
rámetros que describen la avenida de diseño. Con aplicó a las presas El Iniernillo y Huites, ubicadas
esta metodología se reduce la incertidumbre sobre en México, con el propósito de revisar su seguridad
la estimación en virtud que se evita la extrapolación hidrológica. El nuevo enfoque mostró que ambos
a periodos de retorno mucho mayores que el regis- presas no son tan seguras como se supone.
Introducción
El proceso de evaluación del posible impacto de Las metodologías existentes para la estimación de
los eventos hidrológicos en una estructura hidráu- avenidas de diseño son muy variadas, tanto desde
lica y la selección de los valores de las variables el punto de vista de su planteamiento conceptual
signiicativas para su correcto funcionamiento se como de su complejidad. En general, los métodos
conoce como diseño hidrológico. para la estimación de avenidas se pueden dividir
en métodos con enfoque hidrometeorológico y
En particular, el término estimación de avenidas métodos con enfoque hidrométrico. Los primeros
de diseño se reiere a la obtención de la o las ca- se basan en datos de precipitación y en la mode-
racterísticas del hidrograma de la avenida que se lación del proceso lluvia–escurrimiento, mientras
utilizará para determinar las dimensiones de la que los segundos aprovechan la información his-
obra hidráulica por construir. Alternativamente, el tórica de escurrimiento en el sitio especíico o la
proceso se puede seguir con el in de evaluar la región en donde se ubicará la obra, pudiendo o no
bondad del diseño de obras existentes. tomar en cuenta la información de precipitaciones.
Al grupo de métodos comprendidos dentro del se-
El análisis y la predicción de avenidas han sido gundo enfoque se le conoce con el nombre gené-
tema de muchas investigaciones en el campo de rico de análisis de frecuencia de avenidas.
la hidrología. Las revistas especializadas contie-
nen numerosos artículos que presentan nuevos Muchas discusiones se han suscitado acerca de
métodos para mejorar el diseño de las obras hi- la pertinencia y conveniencia de la aplicación de
dráulicas o para estimar el error de los modelos uno u otro enfoque. La verdad es que todos los
existentes, y otros temas relacionados con el dise- métodos disponibles ofrecen ciertas ventajas y
ño hidrológico. Sin embargo, no existe un acuerdo también pueden tener deiciencias. A continuación
sobre cuál enfoque es el más indicado para la de- se consignan en forma breve algunos comentarios
terminación de avenidas para el diseño de nuevas al respecto.
obras o la revisión de obras existentes. Lo anterior
obedece a que la estimación de avenidas de di-
seño es un problema en extremo difícil que no ha
sido completamente resuelto. 123
Seguridad hidrológica de presas: método bivariado.
Aldo Ramírez y Álvaro Aldama.
124
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
A las diicultades antes descritas, se añade el he- tud de eventos asociados con diferentes niveles
cho de que resulta prácticamente imposible estimar de riesgo (diferentes periodos de retorno). Si el
un periodo de retorno asociado con una avenida periodo de retorno es mayor que el periodo de re-
estimada con base en datos de lluvia transforma- gistro, se dice que se “extrapola” en la estimación
dos en escurrimiento. Lo anterior obedece a que de gastos.
el proceso lluvia-escurrimiento es altamente no li-
neal. Esto implica que el periodo de retorno de una Los métodos basados en el enfoque hidrométrico
tormenta puede diferir notablemente del periodo también exhiben ciertas debilidades. En efecto,
de retorno del escurrimiento que ésta genera. No es frecuente que los registros de escurrimiento no
obstante, en vista de las complejidades antes se- sean homogéneos, en el sentido de que dependen
ñaladas, no es factible estimar la distribución de de las características isiográicas de la cuenca y
probabilidad de los escurrimientos derivada de la del uso del suelo en la misma, los cuales pueden
correspondiente a las precipitaciones. Esto expli- variar en el tiempo. Esto es particularmente cierto
ca por qué asignar un periodo de retorno a la AMP en cuencas sujetas a procesos de deforestación y
es aun más difícil que hacerlo para la PMP. urbanización. Adicionalmente, los periodos cortos
de registro incrementan la incertidumbre en la esti-
No obstante lo anterior, debe reconocerse que los mación de los parámetros asociados con las distri-
métodos basados en el enfoque hidrometeoroló- buciones de probabilidad y en la extrapolación de
gico son la única opción disponible para el hidró- gastos correspondientes a grandes periodos de re-
logo en cuencas no aforadas. Adicionalmente, los torno (que son los de interés para ines de diseño).
registros de precipitación son más abundantes y
menos susceptibles a los cambios de la cuenca El análisis de frecuencias de gastos máximos
que los de escurrimiento. Finalmente, la aplica- anuales sólo permite determinar un parámetro
ción de métodos basados en el empleo de datos de la avenida de diseño, esto es, el gasto pico.
de lluvia permite obtener el hidrograma completo No obstante, la determinación de las variables
de la avenida de diseño, lo cual resulta indispen- de diseño de la presa, como son la capacidad de
sable para determinar las variables de diseño de control de avenidas y las dimensiones de la obra
una presa. de demasías, exige conocer el hidrograma com-
pleto a in de transitarlo por el vaso. Por lo an-
Para el caso particular de México, se cuenta con al- terior, en la práctica se emplean procedimientos
rededor de una estación pluviométrica o pluviográ- arbitrarios para deinir el hidrograma de diseño,
ica, en condiciones adecuadas de operación, por una vez que se ha determinado el gasto pico de
cada 400 km2. Según las recomendaciones emiti- diseño mediante el empleo de una distribución de
das por la OMM (WMO, 1970), de acuerdo con las probabilidad ajustada a los datos históricos. El
características de nuestro territorio, la densidad mí- procedimiento más común consiste en “mayorar”
nima requerida para el país sería de una estación la avenida máxima histórica. Dicho procedimiento
de medición por cada 100 a 250 km2. Lo anterior, consiste en suponer que la forma del hidrograma
con el objeto de describir la variabilidad espacial de de diseño es la misma que la correspondiente a la
la lluvia en forma apropiada, particularmente en zo- creciente máxima registrada (en términos de gasto
nas montañosas y tropicales. La baja densidad de pico). Así, las ordenadas de aquél se determinan
estaciones de medición de precipitación y el hecho multiplicando las del hidrograma máximo histórico
de que la gran mayoría de estaciones sólo registran por el cociente (gasto de diseño)/(gasto máximo
precipitaciones acumuladas en 24 h, diicultan aun registrado). Sin duda alguna, es posible decir que
más el empleo de métodos basados en el enfoque se conoce una estimación del periodo de retorno
hidrometeorológico en México. asociado con el gasto pico del hidrograma de di-
seño así obtenido. Lo que no es posible decir, en
Enfoque hidrométrico estricto sentido, es que se conoce una estimación
del periodo de retorno del hidrograma completo,
El análisis de frecuencias de avenidas consiste en dado que su deinición es arbitraria desde el punto
describir probabilistamente la ocurrencia de gas- de vista probabilista.
tos máximos anuales por medio de una función de
distribución, cuyos parámetros se estiman utilizan- Por lo anteriormente expuesto, el término “estima-
do la información histórica disponible, la cual se ción de avenidas de diseño” basada en el enfoque
considera como una muestra aleatoria. El proceso hidrométrico, se considera sinónimo de “estima-
de estimación de los parámetros de la distribución ción de gastos pico”. No obstante, se ha recono-
se conoce como “ajuste de la distribución”. cido que el gasto máximo del hidrograma es una
variable de diseño aceptable solamente cuando
Una vez seleccionada la función de distribución de la variación temporal del almacenamiento de la
mejor ajuste, se utiliza para determinar la magni- cuenca no es un factor importante en el proceso
de generación del escurrimiento (McCuen, 1998).
125
Seguridad hidrológica de presas: método bivariado.
Aldo Ramírez y Álvaro Aldama.
Adicionalmente, es bien sabido que los vasos de de retorno al hidrograma completo de la avenida
las presas exhiben diferente sensibilidad al gas- de diseño no ha sido resuelto en forma satisfacto-
to pico y al volumen de una avenida. En algunos ria hasta la fecha. Al plantear una parametrización
casos, la respuesta de un vaso al transitar una de hidrogramas mediante un número inito de sus
avenida a través del mismo, es más sensible al características más importantes, el problema se
volumen que al gasto pico. El método de mayora- reduce a manejar una distribución multivariada de
ción de la avenida máxima histórica subordina el probabilidad de las mismas. La parametrización
volumen de la avenida al gasto pico, ya que una más simple de un hidrograma debe involucrar por
vez determinado éste, el volumen queda automá- lo menos al gasto pico, Q p , al volumen de escurri-
ticamente deinido. No está claro que ésta sea la miento, V , y al tiempo pico, t p (véase Figura 1).
práctica de diseño más apropiada para deinir la
capacidad de control de avenidas y las dimensio- En este sentido, los autores han desarrollado una
nes de la obra de demasías de una presa. familia de parametrizaciones basada en el em-
pleo de interpolantes hermitianos de orden impar
En vista del sustento estadístico que poseen, la (Aldama y Ramírez, 1998a), que involucran a los
aplicación de los procedimientos basados en hidro- tres parámetros del hidrograma señalados. Por tal
metría permite deinir niveles de riesgo de la obra motivo, han denominado a los miembros de dicha
por diseñar o revisar. Asimismo, al realizar análisis familia hidrogramas triparamétricos hermitianos.
de frecuencia directamente sobre las avenidas, se El hidrograma triparamétrico hermitiano de orden
evita el uso de modelos lluvia-escurrimiento, ya uno es el conocido hidrograma triangular. Una pro-
que los datos hidrométricos integran, como la res- piedad interesante de los hidrogramas triparamé-
�
máximo del hidrograma. Según se ha expuesto
en muchas aplicaciones la información acerca del
volumen de escurrimiento de la avenida, su du- ��
ración, tiempo pico y la forma del hidrograma es
esencial para la toma de una decisión correcta. �������� �������������������������������������������
Figura 1. Parametrización de un hidrograma
de diseño
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Sin embargo, el problema de asignar un periodo
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Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
127
Seguridad hidrológica de presas: método bivariado.
Aldo Ramírez y Álvaro Aldama.
6. El hidrograma obtenido se transita por el vaso, para un periodo de retorno de 10,000 años. Sin
empleando la curva de elevaciones –capacida- embargo, la aplicación de la metodología basada
des y las reglas de operación de la obra de ex- en el análisis de frecuencias conjunto bivariado
cedencias. El proceso de tránsito genera como indica que para “El Iniernillo” el riesgo hidrológico
resultados el almacenamiento y elevación es mayor que el que se cree. Se estima que la
máximos en el vaso, así como el gasto máximo presa es segura (al NAME) para un periodo de re-
descargado por la obra de excedencias. torno de 750 años aproximadamente. Para el caso
7. Se elige un nuevo par (Qp, V) tal que se siga de Huites, la presa no es segura para el periodo
cumpliendo la condición (1) y se repiten los de retorno de 10,000 años. El análisis bivariado
pasos 4 a 6 tantas veces como sea necesario indica que la presa esta diseñada para un periodo
a in de encontrar el par de valores (vector so- de retorno de 7,000 años aproximadamente.
lución) que maximice la función objetivo Zm.
8. Una vez determinada la solución, es posible Adicionalmente se determinó que El Iniernillo es
calcular los periodos de retorno del gasto pico una presa que es ligeramente más sensible al vo-
y el volumen de escurrimiento en forma indivi- lumen que al gasto pico de las avenidas de entra-
dual a través de las ecuaciones da, mientras que Huites es más sensible al pico
de las avenidas.
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Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
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World Meteorological Organization (1986). Manual for estimating of the probable maximum precipitation,
Geneva, Switzerland.
129
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
RESUMEN
La UNESCO y la WMO, han establecido una pro- técnica. El objetivo general de esta Iniciativa es
ductiva asociación desde hace algunos años y han construir las capacidades necesarias para enten-
lanzado la Iniciativa Internacional de Avenidas, der y responder de una manera eiciente ante las
(IFI). Esta Iniciativa trabaja estrechamente con la inundaciones, la vulnerabilidad y los beneicios. En
Universidad de las Naciones Unidas (UNU), con la el ámbito de Latinoamérica y El Caribe. El presente
Asociación Internacional de las Ciencias Hidrológi- artículo, presenta las principales actividades rea-
cas (IAHS) y la Estrategia Internacional de Reduc- lizadas por el Programa Hidrológico Internacional
ción de Desastres (ISDR). Otras agencias de las (OHI) de la UNESCO en el marco de esta Iniciati-
naciones unidas relacionadas con las avenidas e va, en la Región de Latinoamérica y el Caribe. Esta
inundaciones, también participaron en esta Inicia- Iniciativa promueve los enfoques multidisciplinarios
tiva. Las actividades estratégicas de esta Iniciati- en el manejo de las inundaciones para tomar en
va se enfocan en la Investigación, Crear bases de cuenta las ventajas de una gestión de riesgos y la
datos y redes de información, Educación y capa- reducción de la vulnerabilidad social, ambiental y
citación, Potenciar comunidades, y la Asistencia económica.
Introducción
El objetivo de este trabajo es dar a conocer las un marco para reducir la vulnerabilidad ecológi-
actividades de la Iniciativa Internacional de Ave- ca y socioeconómica a los extremos hidrológicos
nidas, IFI en Latinoamérica y el Caribe. LAC. (inundaciones, sequías, corrientes de fango, acu-
Esta Iniciativa, depende del Programa Hidroló- mulación de hielo).
gico Internacional (PHI) que es un programa in-
tergubernamental de cooperación cientíica de la En el Plan Estratégico para la séptima fase del
UNESCO relativo a los recursos hídricos, y es a PHI (PHI-VII, 2008-2013), el Subtema 1.2 pro-
su vez un instrumento gracias al cual los Estados puesto “Extremos hidrológicos en zonas sensibles
Miembro pretenden mejorar su conocimiento del y estresadas tanto hidroclimáticas como de bio-
ciclo hidrológico e incrementar su capacidad de masa” abarcará las medidas para la gestión de los
administrar y explotar mejor sus recursos hídricos. riesgos contra los acontecimientos hidrológicos
El PHI tiene igualmente como objetivo mejorar la extremos.
base cientíica y tecnológica con el in de desarro-
llar métodos para la gestión racional de los recur- En su 15ª reunión (17-22 de junio de 2002), el
sos hídricos, incluyendo la protección del medio Consejo Intergubernamental del PHI recomendó
ambiente. La presente fase del PHI, que abarca emprender una iniciativa internacional conjunta
el período 2002-2007, está dedicada entre otros UNESCO-Organización Meteorológica Mundial
temas al de “Interacciones del Agua: sistemas en (OMM) contra las inundaciones, con objeto de for-
peligro y desafíos sociales”. talecer la capacidad del sistema de las Naciones
Unidas de contribuir a atenuar los daños causa-
El Plan Estratégico para la Sexta Fase del PHI dos por las inundaciones.
(PHI-VI, 2002-2007), el Subtema 2.1 “Los fenó-
menos extremados y la gestión de los recursos
terrestres e hídricos” trata de la elaboración de
131
Iniciativa Internacional de Avenidas, IFI para Latinoamérica y el Caribe, LAC.
Grupo de Trabajo, IFI-LAC.
132
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
Caribe, celebrada en la ciudad de Guatemala los oicina regional del PHI y cada uno de los países
días 12 y 13 de agosto de 2007; se aprobó por participará en sus campos de especialidad y de
unanimidad dar la Coordinación Regional de esta interés, apegados en todo momento a los ámbitos
Iniciativa a México. y actividades de la Iniciativa. Asimismo, para un
mejor cumplimiento de los objetivos especíicos
Sede y coordinación lac de la IFI de la IFI, es necesaria una interacción con otras
Iniciativas.
En la VII Reunión de Comités Nacionales y Puntos
Focales del Programa Hidrológico Internacional de Con el objeto de precisar los ámbitos generales de
la UNESCO-PHI para América Latina y el Caribe; trabajo, a continuación se detallas éstos y se pro-
se aprobó la moción del CoNaMexPHI, siendo de pone un esquema de interacción con otras Inicia-
esta forma, México el actual Coordinador Regio- tivas. Cabe aclarar que este trabajo es dinámico y
nal de esta Iniciativa. debe modiicarse una vez que nuevas Iniciativas
participen en la IFI.
El Grupo de Trabajo IFI-LAC esta formado por el
momento por siete países: Argentina, Bolivia, Chi- Esta Iniciativa está abierta a recibir a todos los
le, Colombia, Costa Rica, Guatemala y México. países de Latino América y el Caribe para parti-
Las Instituciones representadas por estos países cipar en sus actividades, todo dentro del marco
son respectivamente: Universidad Nacional de de cooperación cientíica y tecnológica; y de los
Córdoba-Instituto Nacional del Agua, INA. Institu- lineamientos generales de la Iniciativa Internacio-
to de Hidráulica e Hidrología, IHH. Universidad de nal de Avenidas, IFI-LAC.
Concepción, UC. Instituto de Hidrología, Meteo-
rología y Estudios Ambientales, IDEAM. Instituto Actividades estratégicas
Costarricense de Electricidad, ICE. Instituto Na-
cional de Sismología, Vulcanología, Meteorología La Iniciativa Internacional de Avenidas trabaja con
e Hidrología, INSVMH y el Centro de Investigacio- base a cinco actividades estratégicas:
nes del Agua-Querétaro, CIAQ. Desde noviembre 1.Investigación,
de 2007, este Grupo quedó formalmente consti- 2.Crear bases de datos y redes de información,
tuido. 3.Educación y capacitación,
4.Potenciar comunidades,
Actividades propuestas 5.Asistencia técnica.
Como se señaló anteriormente, la IFI es un pro- Grupo de trabajo PHI - IFI - LAC
grama iniciado conjuntamente con la OMM y la
UNU. Se trata de una actividad que promueve un
enfoque integrado de la gestión de las crecientes El Grupo de trabajo de la Iniciativa Internacional
con objeto de optimizar el beneicio neto a largo de Avenidas, para la región de Latinoamérica y el
plazo de las inundaciones y reducir al máximo las Caribe, está formado por las siguientes institucio-
pérdidas humanas y materiales. En el plano local, nes. Es claro que se desea que el Grupo crezca
se espera que se unan a esta actividad algunos en la medida de que otras dependencias de otros
países mediante estudios monográicos con obje- países quieran trabajar y colaborar con esta Ini-
to de lograr una gestión más eicaz de las inunda- ciativa.
ciones. Se propone además organizar cursos de
formación para profesionales e investigadores de Coordinador Regional IFI -PHI-LAC
países en desarrollo, invitando para ello a profeso-
res visitantes extranjeros. También en un futuro se Centro de Investigaciones del Agua,
prevé participar, con el PWRI quien organiza junto Querétaro México, CIAQ
con el Organismo Japonés de Cooperación Inter-
nacional (JICA), en un curso de formación en or- Grupo de Trabajo
denación de los ríos y construcción de presas. De
esta forma todas las actividades estarán enmarca- • Instituto de Ingeniería, UNAM, México
das en los ámbitos generales mencionados ante- • Instituto Mexicano de Tecnología del Agua,
riormente, siempre bajo las actividades estratégi- IMTA, México
cas de: investigación, creación de bases de datos • Instituto de Hidrología, Meteorología y Estu-
y redes de información, educación y capacitación, dios Ambientales (IDEAM), Colombia
potenciar comunidades y asistencia técnica. • Instituto Costarricense de Electricidad. ICE
El mecanismo de trabajo será regulado por la • Universidad Nacional de Córdoba, Argentina
Coordinación Regional, bajo la supervisión de la
133
Iniciativa Internacional de Avenidas, IFI para Latinoamérica y el Caribe, LAC.
Grupo de Trabajo, IFI-LAC.
A.4
A.2 A.3 Alerta
A.1
Gestión de Gobernabilidad y anticipada y
Vulnerabilidad
riesgos participación gestión de
emergencias
Atmósfera y Brasil Colombia
GRAPHIC
cambio climático
Precipitación y México y Costa México y Costa Costa Rica
FRIEND / AMIGO
máximas
Cartografía, Colombia y Guatemala Guatemala
daños y seguros Guatemala
134
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
de los siguientes temas: (1) Atmósfera y cambio cada uno de los países participará en sus campos
climático, (2) Precipitación y regionalización hidro- de especialidad y de interés, apegados en todo
lógica, (3) Lluvia-escurrimiento y avenidas máxi- momento a los ámbitos y actividades de la Inicia-
mas y (4) Cartografía, daños y seguros; el siguien- tiva. Asimismo, para un mejor cumplimiento de los
te esquema ilustra su interrelación. objetivos especíicos de la IFI, es necesaria una
interacción con otras Iniciativas y Programas del
PHI. Se busca un trabajo participativo y dinámico
Conclusiones en toda la Región de Latinoamérica y el Caribe.
Para mayor información consultar la página: www.
El mecanismo de trabajo de este Grupo de Tra- iilac.org
bajo, será regulado por la Coordinación Regional,
bajo la supervisión de la oicina regional del PHI y
135
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
(1)
Consejo de Investigaciones Universidad Nacional de Rosario (CIUNR)
(2)
Consejo Nacional de Investigaciones Cientíicas y Técnicas (CONICET)
(3)
Departamento de Hidráulica. FCEIA. UNR
(4)
Centro Universitario Rosario de Investigaciones Hidroambientales. FCEIA. UNR.
José Hernández 986, (2000) Rosario, Argentina. Telefax: 0341 4808541. E-mail:
riccardi@fceia.unr.edu.ar
RESUMEN
Se describe la metodología para el diseño hidro- condición de humedad antecedente asociada a una
lógico, considerada recientemente en cuencas hi- probabilidad de excedencia P(x>x0) = 0.05 y un
drográicas de la región del gran Rosario. Origina nivel del río Paraná asociado a una recurrencia de
la revisión de las pautas de diseño históricamente 5.6 años. La veriicación de impactos se analizó a
utilizadas, la evidencia de cambios en el régimen de partir de la simulación de un evento extremo foca-
caudales máximos originados a partir de ocurrencia lizado en 100 km2., con una duración de 6 horas y
simultánea de lluvias extremas de corta y larga du- moviendo el foco de modo de producir el mayor cau-
ración, condiciones de humedad antecedentes rigu- dal y/o nivel en secciones críticas. La transformación
rosas, impermeabilizaciones a causa de desarrollos lluvia-caudal se realizó mediante un modelo distri-
urbanos, canalizaciones sin planiicación, prácticas buido físicamente basado generando hidrogramas
agrícolas que aceleran el escurrimiento, drenajes y limnigramas en la sección de salida de la cuenca
de bajos naturales, entre las más importantes. Las y en diferentes secciones internas de interés para
cuencas analizadas corresponden a la de los arro- cada escenario hidrológico considerado y para cada
yos Luduena (700 km2) y Saladillo (3200 km2). El cri- coniguración de la cuenca, involucrando distintas
terio global de diseño considerado para las obras en variantes de obras y distintos avances de obras en
la cuenca baja fue el de adoptar una lluvia de 5 días ejecución. Se concluye que la metodología plantea-
de duración, con una recurrencia de 100 años, una da ha permitido determinar caudales, velocidades y
distribución diaria según bloque alterno con máximo niveles, reproducir remansos, controles de lujo en
en el 3er. día, una distribución subdiaria basada en secciones críticas, evolución de volúmenes de esco-
las relaciones de láminas, distribución areal unifor- rrentía y almacenamiento para un mejor diseño de
me en la cuenca del arroyo Ludueña y con decai- obras contra inundaciones.
miento areal en la cuenca del arroyo Saladillo, una
Introducción
El control y aprovechamiento de los recursos hí- En la región del sur de la provincia de Santa Fe
dricos en general y la seguridad ante inundacio- (Argentina) con un clima subtropical y lluvia me-
nes de un territorio en particular, es un tema que dia anual cercana a los 1000 mm, se presentan
preocupa, con diferentes grados de intensidad, a sistemas hidrológicos de llanura en los cuales los
la población, a los profesionales involucrados en excedentes hídricos supericiales se vinculan di-
tal sector y a las autoridades responsables de la rectamente a la generación de inundaciones, por
toma de decisiones. lo que el avance en el conocimiento de la descrip-
137
Crecidas de Diseño en Cuencas de la Región del Gran Rosario. Riccardi, Zimmermann, Basile, Stenta,
Scuderi, Postiglione, López, Odicini, González, Méndez y Ciabbatari.
138
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
varía entre 70 m y 18 m sobre el nivel del mar. Su para crecidas extraordinarias, por lo que esta in-
pendiente media es del orden del 1.1 ‰, en tanto luencia debe ser considerada en el diseño.
que la pendiente local media en el valle es del orden
del 2.7 ‰. La red hídrica principal está constituida Revisión y actualización estudios estadísticos
por el Aº Ludueña y los canales Ibarlucea y Salvat, de tormentas de corta y larga duración
mientras que en épocas de lluvia se adicionan nu-
merosos y pequeños cursos naturales (cañadones) El estudio de precipitaciones tuvo por objetivo ac-
y artiiciales que aportan al escurrimiento. Por otra tualizar la estadística de las lluvias tanto para tor-
parte, la región se encuentra atravesada por impor- mentas de larga (días) como de corta (horas) dura-
tantes terraplenes tanto viales como ferroviarios, lo ción, de modo de generar la información necesaria
que permite observar una fuerte acción antrópica para la determinación los hietogramas de diseño. A
ejercida sobre la cuenca. la red de cursos perma- los efectos del diseño hidrológico se consideraron
nentes (cursos naturales y canales) es de aproxi- eventos lluviosos de tipo frontal de larga duración
madamente 140 km. La cuenca tiene un tiempo de (1 a 5 días), en tanto que para la veriicación de
concentración de aproximadamente 90-100 horas, impacto se analizaron eventos fuertemente focali-
en tanto que el tiempo al pico de un aguacero unita- zados con duración no mayor a 6 horas. Para llevar
rio uniformemente distribuido en toda la supericie a cabo el estudio estadístico de lluvias frontales se
de la cuenca es de 17-20 horas. El caudal base utilizaron series de lluvias de 3 estaciones de la re-
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del arroyo es de 0.30-0.50 m3/s, en tanto que en gión. En la Tabla 1 se describen las localizaciones
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crecidas ordinarias se alcanzan los 80 m3/s y en de toma de datos de las series y su longitud tempo-
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crecidas extraordinarias ha generado sin obras de ral. En lo que respecta a lluvias de corta duración
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Período de
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Nombre Estación Fuente de los datos
Observación
Rosario SMN- Rosario Aeropuerto 1935-2007
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Casilda INTA-Agencia de Extensión Rural Casilda 1962-2007
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140
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
método de bloques alternos. A tal in se emplearon de tales lluvias observadas en la región) en tanto
las curvas P-D-R de la estación Rosario para las que la precipitación total es de 349 mm.
duraciones de 1 día, 2 días, 3 días, 4 días y 5 días,
calculadas con el modelo de Gumbel. En las Figura Análisis de condiciones de humedad
2 (a) y (b) se presentan respectivamente los hie- antecedente de lluvias extremas
togramas determinados para las lluvias de diseño y su comportamiento estadístico
de recurrencia 100 años y 10 años. La distribución
a escala temporal sub-diaria se realizó utilizando Con el in de estimar las condiciones antecedentes
coeicientes de relación entre láminas de diferen- a las tormentas registradas se consideró el siguien-
tes duraciones, derivados de la serie corta de Ro- te índice de precipitación antecedente:
sario-Aeropuerto (40 años) a partir del modelo de
(2)
Gumbel. Cada uno de los pulsos de lluvia diarios
fueron distribuidos en forma sub-diaria adoptando
el criterio de distribuir el mayor pulso de lluvia del
hietograma diario en 12 hs y los restantes pulsos donde IPA(n) es el índice de precipitación antece-
menores en 6 hs (ver Figura 2 (c)) . dente correspondiente al día n del año, P(n) es la
precipitación del día n, k(n) el coeiciente de de-
Lluvia focalizada de corta duración caimiento correspondiente al día n, dado por la si-
guiente ecuación:
La lluvia focalizada de corta duración se determinó
(3)
considerando las intensidades máximas asociadas
a las principales lluvias de este tipo observadas en
nuestra región, las cuales produjeron severos pro-
cesos de inundación en las diferentes localidades El valor del IPA se considera un parámetro repre-
afectadas. La ecuación de la curva de regresión sentativo de un estado de humedad antecedente
ajustada a dichas intensidades máximas es: de la cuenca expresado en forma continua en el
tiempo. El coeiciente de decaimiento, variable du-
(1) rante el año, trata de reproducir las extracciones
i máx = 527.19 D-0.3743 (R2=0.9255) por evapotranspiración variables estacionalmente
debido a la variabilidad de las condiciones de inso-
lación y estado de humedad ambiente. A modo ilus-
donde i máx se expresa en mm/h y la duración D trativo se presenta en la Figura 4 la valoración del
en minutos. En la Figura 3(a) se observa la curva IPA en la Estación Rosario Aero (Serie 1935-2007)
de regresión ajustada a intensidades máximas re- de acuerdo a la formulación propuesta.
gionales registradas. En la Figura 3(b) se presenta
el hietograma de la lluvia convectiva total. La dura- Para considerar las condiciones de almacenamien-
ción de la tormenta es de 6 hs (duraciones típicas to en el suelo se han deinido los siguientes pará-
de tales lluvias observadas en la región) en tanto que la precipitación total es de 349 mm.
180
Rosario 2007
Intensidades máx. regionales
Intensidad máxima, i máx (mm/h)
160
Envolvente 527.19*D(min) ^(-0.3743)
120
140
100
Rosario 2006
120
80
Chabas 2007
Serodino 2002
P (mm)
80 40
Rosario 2006 Pergamino 1995 62
45 51
20 41 38
60
Cañada de Gómez 2001
Rosario 2006 0
40 1 2 3 4 5 6
0 30 60 90 120 150 180 210 240 270 300 330
t(hs)
Duración, D (min)
(a)
(a) (b)
(b)
141
Crecidas de Diseño en Cuencas de la Región del Gran Rosario. Riccardi, Zimmermann, Basile, Stenta,
Scuderi, Postiglione, López, Odicini, González, Méndez y Ciabbatari.
metros característicos de la cuenca del Arroyo Lu- A los efectos del diseño hidrológico se considera-
dueña (Zimmermann et al., 2009): ron estados de humedad antecedente, en relación
Profundidad radicular cultivo: 700 mm a su probabilidad de excedencia determinada en
Humedad volumétrica capacidad de campo, ӨCC: 0.36 eventos extremos. Para ello se seleccionaron las
Humedad volumétrica punto marchitez permanen- condiciones antecedentes de las tormentas extre-
te, ӨPMP: 0.19 mas y se le dio un tratamiento estadístico de modo
Humedad volumétrica saturación, ӨSAT: 0.48 de asociar el IPA y la saturación relativa Se a un
Lámina equivalente capacidad de campo, RCC: 252 mm probabilidad de excedencia, llegándose a estable-
Lámina equivalente punto marchitez perman., RPMP: cer las relaciones que se indican en la Tabla 3. Mas
133 mm detalles del presente tratamiento pueden consultar-
Lámina equivalente saturación, RSAT: 336 mm se en Zimmermann et al. (2009).
Coeicientes de decaimiento se adoptaron como:
kver = 0.980 y kinv = 0.995. P(x>x0) IPA Se
0.5 205.2 0.36
Indice IPA y parámetros
asociados a modelos de pérdidas 0.2 252.9 0.59
0.1 284.5 0.75
Dado que en deinitiva el IPA tiene que dar infor-
mación asociada con parámetros utilizados para la 0.05 314.7 0.90
estimación de pérdidas del lujo, se propone la si- 0.02 354.0 1.00
guiente manera de vincularlo; a través de la estima-
ción del grado de saturación del peril para aplicar 0.01 383.3 1.00
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el método � �� � ����
de Green � �����La
y Ampt. � �propuesta
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surge
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directamente de considerar la siguiente relación
Tabla Nº 3. Valores de IPA y Se para diferentes
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probabilidades de excedencia (Zimmermann 2009).
(Zimmermann et al., 2009):
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(2) Deinición de escenarios hidrológicos
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para el diseño y para análisis de impacto
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En la deinición de los escenarios para el diseño
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el análisis de impacto fueron
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consideradas las1�)�%5
siguientes condiciones, variables
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donde �7� 1�)�#$
Se es el grado de saturación; RPMP lámina y características del evento:
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equivalente punto marchitez permanente; RSAT lá- • Recurrencia de la lluvia total;
• Duración de la tormenta, distribución temporal
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mina equivalente saturación.
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Figura 4. Variación de IPA en estación Rosario Aero
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142
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Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
diaria y subdiaria y distribución espacial; mente basado cuasi 2d, estructurado en unidades
• Condición de humedad antecedente IPA y Se de discretización espacial cuadrangulares con un
asociados a probabilidad de excedencia; tamaño de grilla de 250 m x 250 m denominado
• Nivel Hidrométrico del río Paraná CTSS8 (Riccardi, 2001; Riccardi et al. 2008b), asis-
tido con la plataforma de pre y post procesamien-
Diseño Hidrológico. to de datos y resultados SIMULACIONES (Stenta
Tormentas de larga duración. et al., 2005). Un primer paso en la constitución
del modelo lo constituyó la generación del mode-
Duración 5 días; lluvia máxima en 24 hs, 48, 72, 96 lo digital del terreno (MDT), el cual fue ejecutado
y 120 según relaciones IDR de Rosario (Basile et a partir de la digitalización de las curvas de nivel
al. 2009), Casilda y Zavalla; distribución temporal del IGM, de relevamientos topográicos existentes
diaria de lluvias en los 5 días según método bloque e información topográica de campaña especíica-
alterno con máximo en 3er día; distribución subdia- mente llevada a cabo a los efectos del presente
ria de acuerdo a coeiciente entre láminas de distin- trabajo, donde se relevaron planialtimétricamente y
tas duraciones Pdiaria/P24; P24/P12, P12/P6; P6/ georeferenciaron todas las vías principales de es-
P3. Coeicientes extraídos de relaciones IDR; Dis- currimiento de la cuenca. El sistema de proyección
tribución espacial de la lluvia uniforme. adoptado para el MDT fue el Gauss-Krüger - faja 5
Argentina Posgar 94 Datum WGS 84. Para la crea-
Recurrencias de lluvia total: 10 años para el diseño ción del MDT en la base cuadrangular que requirió
de canalizaciones y obras de arte en zonas rurales el modelo de escurrimiento se utilizó un programa
y 100 años para el análisis en zonas urbanas cer- de tratamiento de datos topográicos realizando la
canas a la desembocadura. interpolación mediante la técnica de Kriging.
Condiciones de Humedad Antecedente: (a) Condi- El MDT desarrollado fue incluido en la platafor-
ción moderada IPA y Se con P(x>x0) = 0.5 y (b) ma y posteriormente fueron cargadas todas las
Condición severa IPA y Se P(x>x0) = 0.05. características de los cursos de agua y obras de
arte de envergadura (puentes alcantarillas y ver-
Nivel del río Paraná similar a 30 de marzo de 2007 tedero) existente en la cuenca. El modelo resultó
(Niv. Hidrom.= 5.30 m; R = 5.6 años) constituido con 11855 elementos cuadrangulares
de 250 m x 250 m, representándose alrededor de
270 km de cursos de agua permanentes, tempora-
Análisis de Impacto. rios, canales de importancia y cunetas de ruta con
Tormentas de corta duración. capacidades de conducción relevantes. Asimismo
se representaron 78 obras hidráulicas como alcan-
Duración 6 hs; lluvia total según envolvente de pre- tarillas, puentes viales y ferroviarios, embocaduras
cipitaciones máximas regionales (Figura 2). Distri- y vertedero. Una esquematización de la conigura-
bución areal constante en área de 100 km2 (resto ción se presenta en la Figura 5 (para mas detalles
de área P = 0); ubicación de centro de tormentas consultar Stenta el al., 2009a). El modelo de escu-
en diferentes puntos de la cuenca; Condición de rrimiento fue calibrado teniendo en consideración
humedad antecedente moderada. información de niveles de agua y caudales estima-
dos en una serie de crecidas históricas ocurridas
entre 1994 y 1996 como así también con informa-
Transformación de lluvia total ción de una crecida extraordinaria ocurrida en mar-
a lluvia neta y Simulación zo de 2007. Los parámetros hidráulicos ajustados
fueron los coeicientes de resistencia en cursos de
de Escurrimiento Supericial agua y los coeicientes de gasto de los puentes y
alcantarillas.
La transformación lluvia caudal fue realizada me-
diante el algoritmo de Green y Ampt. La determi- La simulación mediante el modelo CTSS8 permi-
nación de los parámetros hidráulicos del suelo Kv tió la determinación de la evolución temporal de
(permeabilidad hidráulica saturada) y Ps (potencial caudales, velocidades y niveles de agua en todo el
de succión), se realizó mediante funciones de pe- dominio espacial para todas las alternativas emer-
dotransferencia (Zimmermann et al., 2008), con gentes del diseño hidrológico. En el sistema hídrico
información de suelos espacialmente distribuida en estudio existen al menos 9 puntos característi-
originada a partir de digitalización de las cartas de cos donde fue necesario deinir caudales y niveles
suelos del INTA (INTA 1972-1988). máximos a los efectos de ijar pautas para el diseño
de obras hidráulicas, por lo cual de toda la masa
Simulación de escurrimiento supericial de resultados generados por el modelo de escu-
La simulación de transformación lluvia neta-caudal rrimiento, se extrajeron los correspondientes a los
se modelo matemático hidrológico-hidráulico física- sitios de interés. En la Figura 1 se presentan las
143
Crecidas de Diseño en Cuencas de la Región del Gran Rosario. Riccardi, Zimmermann, Basile, Stenta,
Scuderi, Postiglione, López, Odicini, González, Méndez y Ciabbatari.
localizaciones de dichos puntos. En la Tabla 4 se supericie y la lluvia total adoptada fue la resultante
presentan a modo ilustrativo los caudales máximos de las máximas lluvias convectivas observadas en
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en los puntos característicos. la región en los últimos 15 años. La precipitación
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considerada fue de 349 mm en 6 horas supera a
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A partir de la información generada, la autoridad hí- la lluvia asociada a R = 10000 años (249 mm), pu-
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drica de la$ provincia de Santa Fe comenzó a plan- diendo considerarse como semejante a la precipi-
para mitigar la vulnerabilidad ante inundaciones en ���� ����������������� ������� �� �'()���� ��*�
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tear el prediseño de obras hidráulicas necesarias tación máxima probable para esa duración. Para
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la determinación de la lluvia neta se utilizó la hipó-
zonas de humedad antecedente tipo
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etapa dio lugar a una nueva fase del trabajo en moderado lo que arrojó un valor de lluvia neta acu-
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donde se propuso un proceso retroalimentado en mulado de 266 mm, en la Figura����� �����/�����
��������� 6 se presenta la
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conjunto con los ingenieros proyectistas de modo distribución temporal de la lluvia total y neta. Dado
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de: proponer obras → veriicar mitigación de creci- que en esta etapa se priorizó la determinación del
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das en términos de niveles y caudales máximos. ��� ���� �������� ���� ���������� ���������� ����� �����
La máximo impacto sobre la zona baja del sistema hí-
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descripción de esta nueva fase puede consultarse �� �����
drico����� �
del arroyo� ������ �
Ludueña,� ����� ��������� �� � ����
el foco se fue ubicando
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en Stenta et al. (2009b). en puntos de la región centro norte de la cuenca.
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Pudo veriicarse que los mayores caudales en la
���������������� �� ����������� ���� ���������� embocadura de las conducciones cerradas se dan
Análisis de la respuesta Hidrológica cuando el foco se ubica a unos 6-10 km al oeste
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para tormentas convectivas � ��� ����� � � � ��� � ���������� � � �������
de la zona de �la�� � � � ������ �En
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la Figura se
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fuertemente focalizadas 6�������������� ���������������� �
representa 'esquemáticamente el foco más crítico
������ ��������������������� �������� �������������������� ������������� ������ ����������������
considerado para maximizar caudales en la zona
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(("�� 6�3���� � �� ������ ��� ������������� ��� � �������<������������ �� � �� �� ������������ �
Como ya' fuera mencionado, ha formado parte de
144
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
98
80
cir una tormenta de estas características son las
involucradas para cubrir el E2 y en menor medida 60
las obras emergentes del E1. Al observarse los hi-
39
drogramas y limnigramas generados en la modela- 40 7
ción es posible deducir la escases de tiempo para 47
39 36
predecir este episodio con un sistema de alerta. En 20
Conclusiones
145
Crecidas de Diseño en Cuencas de la Región del Gran Rosario. Riccardi, Zimmermann, Basile, Stenta,
Scuderi, Postiglione, López, Odicini, González, Méndez y Ciabbatari.
El diseño tanto de las vías de desagüe como de 5.6 años. Es claro que, como en otros tantos ca-
las estructuras hidráulicas en la cuenca baja se lle- sos donde cobra importancia un posible remanso
varon a cabo considerando una recurrencia de 10 iniciado en la descarga en el cuerpo receptor, el
años para las canalizaciones rurales y de R = 100 problema no solo se debe resolver en términos de
años para canalizaciones y conducciones cerradas caudales sino también en términos de niveles, lo
en cuenca baja cercanos a zonas urbanas densa- que signiica hidráulicamente hablando, en lujo no
mente pobladas. uniforme e impermanente gradualmente variado.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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Santa Fe, Argentina”. XXIII Congreso Latinoamericano de Hidráulica, Cartagena de Indias, Colombia.
15 pags.
Stenta H., Riccardi G., Navarro R., Zimmermann E., Postiglione R., Basile P., Zucca O. y Zacarias S.
(2009a), “Aplicación de un modelo matemático distribuído en la cuenca del arroyo Ludueña para
diferentes alternativas de obras hidráulicas orientadas al saneamiento hídrico integral”. XXII Congreso
Nacional del Agua, Trelew, Chubut.
146
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
Stenta H., Riccardi G., Zimmermann E., Basile P., Scuderi C., Rentería J. y Zacarias S. (2009b),
”Implementación y Explotación de un modelo matemático distribuido de escurrimiento supericial
para su utilización en sistema de alerta contra inundaciones en la cuenca del arroyo Ludueña”. XXII
Congreso Nacional del Agua, Trelew, Chubut.
Zimmermann E., Basile P., López C., Riccardi G., Stenta H., Scuderi C. y Rentería J. (2009),
“Condiciones antecedentes para la tormenta de diseño en el área del gran Rosario”. XXII Congreso
Nacional del Agua, Trelew, Chubut.
Zimmermann E., Scuderi C., Riccardi G., Stenta H., Basile P., Garcia M. y Rentería J. (2008), Asignación
de parámetros hidráulicos de suelos utilizando funciones de pedotransferencia con información de las
cartas de suelo del INTA., Modelación de procesos hidrológicos asociados al escurrimiento supericial
en áreas de llanura, ISBN 978-950-673-691-0; UNR Editora, Rosario.pp. 145-158.
147
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
RESUMEN
Introducción
Existen numerosas evidencias de cambios en cial de las precipitaciones, etc. Sumado a ello, se
las condiciones climáticas, registrados durante tiene que un porcentaje de tierras con cubierta ve-
las últimas décadas del siglo XX, sin preceden- getal, entre un 39 a 50 % (Duarte, 2006), han sido
tes en el contexto temporal de los últimos 1000 alteradas por la actividad humana. Estas cifras
años (Mann et al, 1998). Se destacan: aumento subestiman su efecto global puesto que, en mu-
entre 0.5 y 0.6°C de la temperatura media de la chas ocasiones, las tierras no afectadas han sido
Tierra desde comienzos del siglo XX (Oerlemans, fragmentadas por la modiicación de las áreas cir-
1994), importante aumento en la atmosfera de las cundantes. La transformación de las tierras provo-
concentraciones de gases de efecto invernadero, ca la alteración de hábitats y es la principal causa
incremento del nivel medio del mar, disminución de pérdida de diversidad biológica.
de la extensión y el espesor de los hielos árticos,
retrocesos de glaciares de montaña (Warrick et al, Los cambios sufridos por el Planeta desde su ori-
1996), degradación del permafrost, prolongadas gen, han sido la constante y con luctuaciones muy
sequías o catastróicas inundaciones durante los importantes a lo largo de su historia geológica; sin
últimos 100 años, cambios en la distribución espa- embargo, la mayoría de ellas han sido graduales y
149
Tendencias y cambios abruptos en el escurrimiento de algunos rios con nacientes en la cordillera y
serranias del oeste argentino. Vich, Bizzoto, Vaccarino, Correas y Manduca.
en largos periodos de tiempo. Las características para valorar las tendencias de largo plazo (ver
de los cambios recientes, se deben a la rapidez Figura 1).
con la que este está teniendo lugar, con modi-
icaciones notables en periodos de tiempo muy La cuenca del río Bermejo se encuentra localizada
cortos Los sistemas hidrológicos son potencial- sobre la vertiente oriental de las sierras subandi-
mente sensibles al cambio climático, al igual que nas, drena un amplio frente prepuneño que se ex-
la población, sus actividades y la infraestructura tiende desde los 21°10’ hasta los 24°53’ de latitud
socioeconómica, existente en el territorio de sus sur, en territorio argentino y boliviano. Presenta
cuencas. Este se pone en evidencia, no sólo por intensos procesos erosivos, con fuertes crecidas
el calentamiento de la supericie terrestre y la con- estivales, con gran capacidad de arrastres. Las
secuente modiicación de las condiciones de cir- estaciones de aforos son: Aguas Blancas, aguas
culación de las masas de aire, sino que además, arriba de la conluencia del río Grande de Tarija y
trae aparejado importantes modiicaciones en la Pozo Sarmiento, situada aguas arriba del río San
magnitud y temporalidad de los escurrimientos Francisco. El río Las Cañas tiene sus nacientes
en las sierras pampeanas, en el sector sur de los
La cordillera de Los Andes constituye el princi- Nevados del Aconquija; integra el sistema hidro-
pal sistema regulador del ciclo del agua a escala gráico endorreico del río Salí-Dulce y es aforado
continental. La cadena montañosa interactúa con en Potrero del Clavillo.
las masas de aire cargadas de humedad de ori-
gen Atlántico o Pacíico, creando en sus laderas El centro oeste de la cordillera de Los Andes com-
los máximos de precipitación regional (Prohaska prendido entre los 27°35’ y 33°30’ de latitud sur es
1976). Todas las actividades humanas que se de- drenado por un extenso sistema hidrográico del
sarrollan a lo largo de ella, se encuentran ligadas río Desaguadero-Salado-Chadileuvú o Curacó. De
al ciclo hidrológico cordillerano. Existen numero- norte a sur está integrado por los ríos Bermejo de
sas evidencias de que Los Andes está experimen- La Rioja, Jachal, San Juan, Mendoza, Tunuyan,
tando importantes cambios ambientales, ligados Diamante y Atuel. .El Mendoza conluye, junto con
al ciclo hidrológico cordillerano. Por ejemplo, una el San Juan, en el sistema lagunar de Guanacache,
enorme retracción de los cuerpos de hielo durante que en años hidrológicos ricos las lagunas des-
el siglo XX ha sido documentada tanto en los An- bordan y los excedentes son evacuados por el río
des Centrales como en los Patagónicos (Leiva et Desaguadero. Todos ellos al abandonar las últimas
al, 1989; Aniya et al, 1997; Villalba et al, 1990). elevaciones al este y se transforman en ríos alócto-
Por otra parte, el conocimiento actual del ciclo hi- nos. En la llanura, pierden su caudal por iniltración
drológico regional no permite establecer cómo se y son aprovechados íntegramente para riego. Sus
articulan dentro de las variaciones regionales del aguas provienen en su casi totalidad de la fusión
clima y que conexión tienen con los procesos aso- nívea y de los glaciares existentes en su cuenca.
ciados al cambio global.
El río San Juan, formado por el río de los Patos
El objetivo del presente trabajo es mejorar el co- (aforado en Alvarez Condarco y La Plateada) y
nocimiento de la oferta hídrica y evaluar el impac- Castaño, es medido en Km 101 y el río Km 47.3.
to sobre los recursos hídricos supericiales del El río Mendoza, se inicia en la conluencia de los
cambio climático global en algunas cuencas, que ríos Vacas, Cuevas y Tupungato en la localidad
poseen sus nacientes en la cordillera de Los An- de Punta de Vacas en la Cordillera Principal o
des y serranías del oeste argentino en un amplio del Límite, donde se encuentran sus respectivas
gradiente altitudinal, a partir de la detección los secciones de aforos. Aguas abajo es aforado en
posibles cambios en el régimen de escurrimiento Guido. El río Tunuyan en el piedemonte cordille-
de tendencias de largo plazo y cambios abruptos. rano, es aforado en la estación Valle de Uco. El
río Diamante nace al sur de la laguna del mismo
nombre, ubicada entre el volcán Maipo (5180 m) y
Materiales y métodos el Co. La Laguna (5034 m); antes de ingresar en la
llanura, penetra en Sierra Pintada y es aforado en
Área de estudio el paraje La Jaula. El río Atuel, nace en la laguna
que le da su nombre. En el piedemonte es afora-
La zona bajo estudio, se corresponde con las do en las proximidades de la localidad El Sosnea-
cuencas hidrográicas que se localizan sobre la do, donde es aforado. A partir de esta localidad la
cordillera de Los Andes y serranías del NO ar- cuenca se desarrolla en la planicie de la depre-
gentino, en un amplio gradiente latitudinal que se sión de Los Huarpes constituidos por una serie de
extiende prácticamente a largo del territorio na- bañados y esteros, de mayor signiicación en la
cional. En las distintas cuenca, se identiicaron las margen izquierda; en el paraje de La Junta el cap-
estaciones de aforos que poseen de registros hi- ta los aportes del río Salado, este es aforado en
drológicos lo suicientemente extensos (>30 años) la sección Cañada Ancha. Se dirige hacia el este,
150
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
ABL
PSA
LCA
Km 101
LPL Km 46.3
ACO
CUE GUI
VAC TUP
TUN
LJA PSO
CAN LAN
LES LNE
VAL PIN
CHI LGO
PMA
BRA
PDI
PLI
EMA
LAL
CFU
Figura 1.-
atraviesa la depresión donde es medido en Loma El Colorado es un río alóctono, formado al con-
Negra. Desde el paraje El Nihuil, corta a Sierra luir con el río 35, que aguas debajo de la con-
Pintada y forma el Cañón del Atuel, que al ingreso luencia es medido en la sección de Buta Ranquil.
del cañón es aforado en el sitio La Angostura. El Drenan la región cordillerana comprendida entre
río Pincheira es un pequeño aluente del río Ma- los 34°50’ y 37°30’ de latitud sur. Sobre un frente
largüe, inmisario de los bañados de Llancanelo; de 270 km de largo. En su curso medio, recibe
se caracteriza por ser uno de los ríos que mayor temporariamente los escasísimos caudales del
riqueza hídrica de la provincia de Mendoza. Desaguadero-Chadileuvú-Curacó. El río Grande
San Juan Km 101 101 31°20 69°06’ 18348 1310 86.5 1971-03 1971-03
Km47.3 463 31°32’ 68°53’ 25670 945 99.9 1951-03 1909-03
Vacas Punta de Vacas VAC 32° 61' 69° 46' 3050 2450 995 1949-03 1949-03
Cuevas Punta de Vacas CUE 32° 51' 69° 46' 680 2430 95.0 1949-03 1949-03
Tupungato Punta de Vacas TUP 32° 51' 69° 46' 1800 2430 95.0 1949-03 1949-03
Mendoza Guido GUI 32° 51' 69° 16' 8180 1550 100.0 1956-03 1956-03
Tunuyan Valle de Uco TUN 33° 47' 69° 25' 2380 1200 97.7 1944-03 1944-03
Diamante La Jaula LJA 34° 40' 69° 19' 2753 1500 98.5 1970-03 1970-03
Atuel Puente PSO 35° 05' 69° 36' 2385 1580 97.6 1972-06 1972-06
Sosneado
Loma Negra LNE 35°04’ 69°07’ 3860 1340 100.0 1981-06 1981-06
La Angostura LAN 35° 02' 68° 52' 3800 1200 99.8 1931-06 1906-06
Salado Cañada Ancha CAN 35°13’ 69°46’ 810 1700 95.5 1939-06 1939-06
Pincheira Pincheira PIN 35º31’ 69º48’ 160 1750 88.3 1967-06 1967-06
Grande La Estrechura LES 35°19’ 70°18’ 1070 1690 81.5 1977-06 1977-06
La Gotera LGO 35° 52' 69° 53' 6180 1400 94.8 1971-06 1971-06
Valenzuela Valle Noble VAL 35°19’ 70°18’ 243 1680 79.0 1977-06 1977-06
Chico Las Loicas CHI 35°48’ 70°05 613 1500 94.4 1991-06 1991-06
Poti Malal Pto Gendarmería PMA 35°52’ 69°57’ 840 1485 93.5 1971-06 1971-06
Colorado Buta Ranquil BRA 37°06’ 69°44’ 15300 850 - - 1939-05
Neuquén Paso de Indios PDV 38°32’ 69°25’ 30843 498 100.0 1903-03 1903-03
Limay Paso Limay PLI 40°32’ 70°26’ 26400 538 100.0 1903-95 1903-95
Chubut El Maitén EMA 42°06’ 71°10’ 1200 680 99.5 1943-03 1943-03
Los Altares LAL 43°51’ 68°30 16400 275 97.4 1946-03 1943-03
Santa Cruz Charles Fuhr CFU 50°16’ 71°54’ 15550 206 94.00 1957-03 1955-03
152
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
es el más caudaloso de todos los ríos andinos de atlánticas y pacíicas sobre la cordillera de Los
la región cuyana, formado por el Tordillo y Cobre, Andes. Esta franja, representa el máximo alcance
es aforado en el paraje La Estrechura y La Gotera. de los climas de tipo quasi-monzónico (Atlántico)
Recibe el aporte de importantes ríos como el Va- y mediterráneo (Pacíico) sobre las laderas de la
lenzuela, medido en Valle Noble, el Chico en Las cordillera, respectivamente. Presenta luctuacio-
Loicas y Poti-Malal en Puesto Gendarmería. nes estacionales, anuales y de largo plazo, que
responden, entre otros factores, a las variaciones
El río Negro formado por dos grandes colectores latitudinales en los campos de presión en América
como el Limay y Neuquén, recoge las aguas plu- del Sur.
vias y de fusión nival y glaciar de un importante
frente cordillerano, que se desarrolla entre los En los meses de verano, el cinturón de altas pre-
36°15’ Y los 41°30’ de latitud sur. La red de dre- siones de latitudes subtropicales se desplaza ha-
naje del Limay es compleja, con numerosos lagos cia el sur desde su posición media. Esto favorece
de extensión y profundidad notable y colectores. el ingreso de humedad de origen atlántica sobre
El río Limay, emisario del lago Nahuel Huapi, es la región oriental subtropical de Los Andes, la cual
aforado Paso Limay, aguas debajo de la unión con en gran porcentaje es modiicada por evapotrans-
el Collón-Cura, quien aporta más del 50 % de su piración y precipitación en la cuenca amazónica
caudal. El río Neuquén se diferencia del Limay por y del Pantanal antes de ingresar en nuestro país.
el régimen de precipitaciones que acusan una dis- Este ingreso estival de humedad se ve favoreci-
minución notable y tiende a hacerse estacionales; do por otros factores de carácter hemisférico y
además, prácticamente no existen cuencas lacus- regional. La Zona de Convergencia Intertropical
tres. El mayor tributario es el Agrio, que aguas de- alcanza en los meses de verano su posición más
bajo de la conluencia se encuentra la estación austral sobre América del Sur, y aunque no alcan-
Paso de los Indios. La cuenca del río Chubut se za el territorio argentino, moviliza hacia el sur una
extiende entre los 41°20’ y 43°, 45’ de latitud sur. importante fuente de humedad de la región sub-
En sus nacientes recibe numerosos tributarios; tropical. Por otro lado, el desarrollo de un centro
posee observaciones en el paraje de El Maitén. de baja presión continental sobre el subtrópico
Desde la conluencia del Tecka, es un río alóctono al este de los Andes, favorece el ingreso de hu-
que se desplaza a través de la meseta patagónica. medad de origen amazónica-atlántica durante el
Aguas arriba de la unión con el Chico Sur emisa- verano. En respuesta a estos procesos, el máxi-
rio temporario del sistema lacustre Colhue-Huapi, mo de precipitación a lo largo de la vertiente este
se encuentra la estación Los Altares. El río Santa de Los Andes, desde aproximadamente los 22 a
Cruz es después del Negro, el más importante de los 35° de latitud sur, se concentra en los meses
la Patagonia, abarca una zona cordillerana que se de diciembre a febrero, periodo del año donde la
extiende entre los 49°15’ y 50°30’ de latitud sur. Es inluencia atlántica alcanza su máxima expresión
el emisario de los grandes lagos: Viedma y Argen- espacial sobre el territorio argentino.
tino, unidos entre sí por el río La Leona. Las aguas
de estos lagos provienen de la fusión nival y de las Por el contrario, el desplazamiento hacia el sur du-
muchas lenguas glaciarias que conluyen en ellos. rante el verano de la banda de alta presión sobre
A pocos kilómetros de la salida del lago Argentino el océano Pacíico Sur incrementa las condiciones
se encuentra la estación de aforos Charles Fuhr. de aridez al oeste de la cordillera de Los Andes
Hasta la desembocadura en el mar Argentino es (Miller, 1976). Durante los meses de verano, las
un río alóctono. precipitaciones son muy escasas o prácticamente
nulas en la ladera oeste de la Cordillera al norte
La información de base disponible son series de de los 37° sur. Es en estos meses del año donde
caudales medios diarios, proporcionados por la el aporte de humedad del océano Pacíico en Los
Subsecretaría de Recursos Hídricos y caudales Andes es mínimo. Las precipitaciones se incre-
mensuales publicados en anuarios. Dichas series mentan gradualmente hacia mayores latitudes. A
poseen diferente longitud de registros, con inte- partir de los 45° a 48° sur, la inluencia del centro
rrupciones de extensión variable. Las característi- de alta presión del sudeste del Pacíico disminuye
cas de las estaciones de aforo se muestran en la y la precipitación de este origen se incrementa. En
Tabla 1 (EVARSA, 1998). el extremo sur de la Cordillera de los Andes, la
precipitación se distribuye uniformemente durante
Clima todo el año. En los meses de invierno la situación
meteorológica se invierte.
La Diagonal Arida es una la franja del territorio
sudamericano de escasas precipitaciones que En el otoño-invierno, se produce una disminución
atraviesa el continente desde el norte del Perú de la precipitación en la vertiente oriental de Los
hasta las costas patagónicas (Bruniard 1982). Po- Andes al norte de los 35° sur. La inluencia atlán-
dría considerarse como el límite de las inluencias tica sobre Los Andes de Argentina es mínima en
153
Tendencias y cambios abruptos en el escurrimiento de algunos rios con nacientes en la cordillera y
serranias del oeste argentino. Vich, Bizzoto, Vaccarino, Correas y Manduca.
este período del año. Por el contrario, la banda análisis numérico de las variables seleccionadas
dominante de vientos del oeste se desplaza a me- que permitan caracterizar de manera sintética las
nores latitudes sobre la costa Pacíica iniciándose distintas variables analizadas; evaluar, si fuera
el período húmedo del año en los Andes Centra- necesario, algunos supuestos básicos subyacen-
les y norte de la Patagonia. La inluencia Pacíica tes en el diseño de test estadísticos (normalidad,
sobre la Cordillera de los Andes es máxima en el independencia y posición de dos o más grupos o
invierno. aleatoriedad); e identiicar posibles datos atípicos
y evaluar su impacto potencial (Figueras y Garga-
Esta dinámica atmosférica da origen a diferentes llo, 2003).
regímenes de precipitación a lo largo de la cor-
dillera de Los Andes. Al norte de los 28°S, el ré- Posteriormente, se efectúa un análisis explorato-
gimen de precipitación es quasi-monzónico con rio de los datos (AED), con el objeto de ordenar
un máximo de lluvias entre diciembre y febrero, y preparar la información disponible; realizar un
donde se concentra más del 50 % de las preci- análisis numérico de las variables seleccionadas
pitaciones anuales que son de origen netamente que permitan su caracterización de manera sin-
atlántico (Minetti y Vargas, 1997). En los Andes tética; evaluar algunos supuestos básicos sub-
Centrales, la precipitación en la alta cordillera es yacentes en el diseño de test estadísticos (nor-
mayormente de origen pacíica y se concentra en malidad, independencia y posición de dos o más
los meses de invierno (mayo a agosto). En el norte grupos o aleatoriedad); e identiicar posibles datos
de la Patagonia el régimen de precipitación es de- atípicos y evaluar su impacto potencial (Figueras
initivamente de tipo mediterráneo, con precipita- y Gargallo, 2003). En general, los distintos test a
ciones de origen pacíica concentradas en invierno emplear, particularmente los llamados test para-
(mayo a agosto). Los veranos son relativamente métricos están ligados a la distribución normal de
secos y la contribución de humedad atlántica es la población; por ello, resulta importante veriicar
solo esporádica. Al sur de los 45° S a 47° S, la pre- esta hipótesis, ya que si la misma esta es recha-
cipitación es dominantemente de origen pacíico y zada el test pierden robustez. Existen numerosos
uniformemente distribuida a lo largo de todo el año métodos para evaluar la normalidad de un conjun-
(Miller, 1976; Prohaska, 1976). to de datos, pero no existe un contraste óptimo; es
por ello que se aplicaron el Test de Shapiro-Wilks
Tratamiento y análisis de y los Test de Asimetría y Curtosis.
la información hidrológica
La independencia entre las observaciones es eva-
La información de base disponible posee diferente luada mediante el contraste del coeiciente de co-
longitud de registros, con interrupciones de longi- rrelación serial con un retardo de 1 y 2 años, el
tud variable. En función de la extensión del vacío o test de Bartlett y Von Neuman. El Test de Bartlett,
laguna de información, se aplicaron distintos pro- veriica la independencia de los valores de la serie
cedimientos para su rellenamiento (Gyau-Boakye, usando el coeiciente de autocorrelación con lag
1993). Para una longitud de tres días de datos per- 1. Se trata de un test paramétrico, que compara
didos, se emplea un polinomio interpolador de ter- el estadístico S con el valor crítico de la distribu-
cer grado. Si la extensión de la laguna, varía entre ción de t de Student. El test no paramétrico de Von
4 y 20 días; se usa un modelo autoregresivo de Neuman permite veriicar la independencia de los
primer orden con corrección. Para vacíos mayores elementos de una serie y se usa en aquellos ca-
de 20 días, se utiliza el método MOVE. (Mainte- sos que la longitud de registro sea inferior a 30
nance Of Variance Extensión) (Hirsch, 1982, cit datos. La medida de la aleatoriedad o contrates de
Salas, 1992). Este último método preserva mejor posición se realiza mediante los Test de Rachas
las características estadísticas de la serie, que los no paramétrico y Test de Kendall, similar al ante-
métodos tradicionales de regresión. Luego, se de- rior. (Kundzewicz y Robson, 2000).
terminaron 22 variables hidrológicas, a saber: Qa,
caudal anual; Qm, caudal mensual, el subíndice m Cuando se examina una muestra, a veces se pre-
denota el mes; Qmax y Qmin, caudal diario máximo y sentan datos fuera de rango, atípicos o dudosos.
mínimo respectivamente; fecha de ocurrencia de Su importancia radica en el hecho, que se trata
Qmax; Q10, caudal característico máximo rebasado de datos que pueden ser no representativos de la
10 días al año; Q355, caudal característico de se- población y pueden distorsionar los contrastes es-
quía, rebasado 355 días al año; Q30, Q90, Q180 y tadísticos. Para probar la presencia de datos atípi-
Q270, caudales característicos superados 30, 90, cos se emplearon el conocido Test de Grubbs y el
180 y 270 días al año. desarrollado por la Interagency Advisory Commit-
tee on Water Data (1982) (antiguamente WCR).
En primer lugar se efectúa un análisis explorato-
rio de los datos (AED), con el objeto de ordenar Posteriormente, se realiza el análisis para deter-
y preparar la información disponible; realizar un minar si las series son homogéneas o estaciona-
154
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
rias. Series estacionarias son aquellas que provie- a cada observación, igual a 1 para la mayor ob-
nen de regímenes hidrológicos que no han sufrido servación y N para la menor. Posteriormente se
alteraciones naturales o artiiciales. Las faltas de calcula la diferencia entre el valor asignado Ri y la
homogeneidad más frecuentes provienen de la posición relativa de la observación i y el estadís-
intervención humana (trasvase de cuenca, cons- tico T como:
trucción de embalses, cambios en el uso del sue-
lo, etc.) y de luctuaciones en el régimen de las (3)
precipitaciones y las temperaturas, producto de
cambios a escala global. En general, la mayo-
ría de las cuencas analizadas poseen muy baja
intervención humana, pero la sola sospecha de
cambios a escala planetaria en las condiciones
climáticas obliga a evaluar el régimen de escurri-
miento en lo relacionado con modiicaciones en la (4)
tendencia de largo plazo o cambios abruptos en
los valores medios de las variables hidrológicas
deinidas anteriormente.
n (n − 1)(2 n − 5) − ∑ t p (t p − 1 )(2 t p + 5)
malmente distribuida. La forma del estimador es:
(6) q
VAR( S ) =
(2) p =1
18
(7)
Donde: b pendiente de la recta de regresión, que
se asume equivalente a la tendencia de largo pla-
zo; Sx desvío estándar de la variable independien-
te; n número de datos; Sx.y error típico; N número
de observaciones. El estimador T calculado, se Donde la función signo toma valores 1 y –1, si su
compara con el valor crítico para un nivel de signi- argumento es mayor, igual o menor que cero, res-
icación α = 5 %. pectivamente; q es el número de grupos de datos
repetidos; tp representa el número de repeticiones
El test no paramétrico SROC (Spearman Rank Or- en un grupo. El signo del estadístico Z indica la di-
der Correlation), muy usado por la Organización rección de la tendencia, positivo si es creciente y
Meteorológica Mundial (Kundzewicz y Robson, negativo si es decreciente.
2000). Se basa en la asignación de un valor (R)
155
Tendencias y cambios abruptos en el escurrimiento de algunos rios con nacientes en la cordillera y
serranias del oeste argentino. Vich, Bizzoto, Vaccarino, Correas y Manduca.
Para las series que presentaban correlación serial veniente radica en el hecho que previamente debe
(falta de independencia), se aplicaron dos modii- eliminarse la tendencia en la serie. Se encuentra
caciones a la prueba. Una de ella está basada en deinido como:
la corrección de la varianza (Hamed y Rao, 1998),
de la siguiente forma: (11)
(8)
t = 1..... N
(9)
La ausencia de cambios abruptos o hipótesis nula,
es rechazada si el nivel de signiicación α es:
(12)
Donde ρs (i) es el coeiciente de auto correlación
de orden i.
∑ (xi − media )
Existen numerosos métodos para la detección de
cambios abruptos o saltos en una serie de obser- (13) K
CS k* = i =1
∀ i = 1, , K
vaciones hidrológicas (Rodionov, 2005). El test
∑ (xi − media )
más comúnmente usado es el test paramétrico t 1 K 2
de Student. Se basa en la veriicación de la igual- N i =1
dad estadística de dos medias muestrales, lo que
Q = max CS k*
signiica que ambas muestras pertenecen a la mis- (14)
ma población y por lo tanto, no ha habido cambios
abruptos en el régimen hidrológico debido a causas
k = 1..... K
antrópicas (trasvase, construcción de embalses,
etc.) o modiicaciones en la circulación general de
la atmósfera. Al ser aplicado secuencialmente, el Se rechaza la hipótesis, si Q es mayor que el valor
punto de ruptura o cambio, corresponde al mayor critico dado por Buishand (1982).
valor del estadístico T que exceda el valor crítico.
La ecuación de cálculo de estadístico es:
T=
(media A − media B ) Análisis de resultados
(N − 1)var A + (M − 1) var B
(10)
+
1 1 Análisis exploratorio de datos
N +M −2 N M
Para cada variable se han calculado el promedio,
La serie A: x1, x2. .... xN, la serie B: xN+1, xN+2. ... desvío estándar, coeiciente de variación y los va-
xN+M. Si | t | > tα/2, (N+M-2) se rechaza la hipótesis de lores extremos (máximos y mínimos). También se
igualdad de medias y es probable que se esté fren- indican los test empleados. La nomenclatura es: A
te a un cambio abrupto en la serie; el nivel de sig- se acepta la hipótesis nula, R se rechaza la hipó-
niicación empleado es de α = 0.05. Se trata de un tesis para un nivel de signiicación de α = 0.05. La
test robusto, si se pueden asumir condiciones de secuencia es: test de normalidad, independencia y
normalidad e igualdad de varianzas. aleatoriedad respectivamente. Como se han apli-
cado distintos métodos, se ha tomado un criterio
El Test de Pettitt (Pettitt, 1979), es un test no para- restrictivo, basado en el hecho que para aceptar la
métrico, de fácil aplicación y válido para la detec- condición analizada, ningún método debía recha-
ción de un solo punto de cambio; su principal incon- zar la hipótesis nula.
156
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
157
Tendencias y cambios abruptos en el escurrimiento de algunos rios con nacientes en la cordillera y
serranias del oeste argentino. Vich, Bizzoto, Vaccarino, Correas y Manduca.
158
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
de rango para las variables Qmin y Q355. Los cau- dales mensuales de estiaje (junio y Julio), presen-
dales mensuales de 1955-56 correspondiente a los tan una marcada tendencia decreciente. Esta apa-
meses de mayo, junio y octubre, son valores atípi- rente contradicción se debe al hecho que la serie
cos; también los años 1956-57, 1976-77 y 1983 es de mensuales es mucho más extensa que la de
un atípico para el caudal mensual de noviembre y caudales diarios. La estación La Plateada, muestra
enero, respectivamente. un incremento en el caudal característico de 180
días y un notable adelantamiento del caudal máxi-
En general, la gran mayoría de los caudales atípi- mo. En la estación Km 101 del San Juan, todas
cos detectados, responden a fenómenos globales las variables analizadas son homogéneas. Aguas
de características excepcionales y difícilmente se abajo, en la sección Km 47,3 solamente muestran
puedan deber a errores en las mediciones, dado tendencia creciente las variables asociadas a los
que la gran mayoría de las variables hidrológicas mínimos (Qmin, Q180, Q270 y Q355)
empleadas provienen de promedios de un conjun-
to de observaciones más o menos importantes. En la cuenca del río Mendoza, se observó en to-
Los años hidrológicos 1921-22, 1941-42, 1972-73, dos sus tributarios tendencias positivas en el cau-
1973-74, 1979-80, 1982-83, 1983-84 1987-88 y dal mínimo absoluto, excepto en el Cuevas. En el
1992-93, 1996-97, 1998-99 y 1998-00, se corres- río Vacas, se rechaza la hipótesis de homogenei-
ponden con años donde el fenómeno El Niño tuvo dad para el nivel de signiicación establecido, en
una intensidad de moderada a severa y como se las variables de Q355 y caudal de julio; también se
podrá deducir, en muchos de los años señalados presentan algunas discrepancias entre los distintos
se han detectado valores atípicos. Por lo expuesto, métodos para otras variables. El Cuevas muestran
en este trabajo no se los excluirá. tendencia positiva en los caudales característicos
de 180y 270 días. En el Tupungato, las variables
Detección de tendencias Qmin y caudales de febrero y marzo, rechazan la
hipótesis de que las series son estacionarias, sien-
Se efectuaron las regresiones lineales para las 22 do la tendencia creciente; también existen eviden-
variables hidrológicas seleccionadas, obtenidas de cias de tendencias crecientes en el caudal anual,
las 29 series de caudales disponibles, estimándose caudales rebasados durante 10, 30 y180 días al
la pendiente b paramétrica y estimador de pendien- año, caudales mensuales de verano, principio del
te B. Para la detección de tendencias, se aplica el otoño y primavera. Las series correspondientes a
test paramétrico t de Student y los test no paramé- la estación Guido, sobre el río Mendoza, rechaza la
tricos SROC, Mann y Kendal y sus correcciones hipótesis nula para prácticamente todas las varia-
(varianza y preblanqueo). bles analizadas y la tendencia es creciente.
En la cuenca del Bermejo, en la estación Aguas El Tunuyán, únicamente presenta tendencia posi-
Blanca, las variables vinculadas al máximo (Qmax y tiva para los caudales mínimo, característicos mí-
Q10) y los caudales mensuales de agosto a diciem- nimos y caudal mensual de julio. Las series de las
bre, rechazan la hipótesis de presencia de tenden- variables hidrológicas relacionadas directamente
cia; solamente el Q30 y caudal de marzo muestran con el caudal diario y caudal mensual para el río
resultados contradictorios. Aguas abajo, en Pozo Diamante, estación La Jaula, rechazan la hipóte-
sarmiento todas las variables muestran tenden- sis de la existencia de variabilidad temporal, para
cia positiva, excepto el caudal de febrero y existe el nivel de signiicación establecido. Prácticamente
discrepancia para el caudal de diciembre. En el río no se presentan discrepancias en la magnitud de la
Las Cañas, el caudal mínimo, caudales mensuales tendencia y su detección al emplear métodos para-
de otoño e invierno y caudales característicos de métricos y no paramétricos.
180 y 270 días muestran pendiente positiva; ade-
más, la fecha de ocurrencia del caudal medio se El principal aluente del Atuel sobre margen dere-
presenta más tempranamente. La pendiente del cha posee una marcada tendencia creciente en el
caudal anual es estadísticamente signiicativa si se caudal máximo y Q10. Aguas arriba de la conluen-
emplea la serie más larga. La Figura 2a, muestra el cia, en la sección Puente Sosneado los métodos
luviograma de caudal anual para la estación PSA, no paramétricos indicarían tendencia creciente en
donde se indica la tendencia no paramétrica y pa- el caudal mínimo y decreciente en los caudales
ramétrica de 3,37 y 3,19 m3/s/año, respectivamen- mensuales de mediados del verano y comienzo
te, ambas signiicativas. del otoño. Agua abajo, en la sección Loma Negra
no muestra tendencia signiicativa en ninguna de
En la cuenca del río San Juan, el análisis de la se- las variables analizadas, aunque en este caso se
rie del río de los Patos de la que se dispone infor- trata de una serie corta, menor de 20 años. La si-
mación de caudales diarios desde mediados de la guiente estación de aforos, La Angostura, muestra
década del 50, indicaría que los caudales mínimos un comportamiento muy diferente, ya que el caudal
(Qmin y Q355) son crecientes, en tanto que los cau- anual, caudales extremos y caudal característicos
159
Tendencias y cambios abruptos en el escurrimiento de algunos rios con nacientes en la cordillera y
serranias del oeste argentino. Vich, Bizzoto, Vaccarino, Correas y Manduca.
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Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
de 90, 180, 270 y 355 días de excedencia y cau- enero. El río Santa Cruz en Charles Fuhr, solamen-
dales mensuales de agosto a noviembre poseen te muestra evidencia estadísticamente signiicativa
tendencia creciente. Este comportamiento aparen- de tendencia en cualquiera de las variables cau-
temente contradictorio puede deberse en parte, a dal mínimo y característico de sequia. En la Figura
una singularidad hidrológica, ya que el Atuel, entre 2c, se muestra la tendencia no paramétrica para el
las dos últimas estaciones circula por la depresión caudal anual en CFU. En la serie corta que se ini-
de Los Huarpes y forma extensos bañados, donde cia en 1957-58, la tendencia es de -0,52 m3/s/año,
la evaporación e iniltración son muy importante. decrecientes y no signiicativa, cuando se analiza
También, es conveniente destacar la diferencia en la serie larga dos años más extensa, la tendencia
la estimación de la tendencia en el caudal anual, ya es no signiicativas y muy diferente, del orden 0,10
que s se aplica la serie más corta (70 años de regis- m3/s/año. Esta situación también se veriica si se
tro), esta es signiicativamente creciente, del orden analiza la tendencia paramétrica y las magnitudes
de 0.14 m3/s/año. En tanto, si se emplea la serie de la pendiente son similares a las encontradas.
más larga (90 años constituye la serie más extensa
de la provincia de Mendoza), no puede rechazarse Como se expresara anteriormente, para la apli-
la hipótesis de que la tendencia es nula para el nivel cación del test t de Student es importante que las
de signiicación empleada, independientemente del observaciones sean independientes y aleatorias y
método empleado (ver Figura 2b). El pequeño río las series muestrales provengan de poblaciones
Pincheira, muestra caudales crecientes en el cau- normalmente distribuidas. Dichas condiciones fue-
dal característico de sequia y caudales mensuales ron veriicadas, la condición de normalidad es re-
de junio a septiembre. chazada en 398 series, la falta de independencia
y aleatoriedad se presentan en 231 y 210 series
En la cuenca del río Grande, las estaciones ubi- respectivamente, de las 629 series analizadas.
cadas sobre el cauce principal y sus aluentes no
presenta tendencia estadísticamente signiicativa Detección de cambios
en ninguna de las variables analizadas; solamente abruptos en valores medios
en el Valenzuela, el Q355 posee tendencia decre-
ciente. Sobre el río Grande en La Estrechura y La El análisis se realiza para un nivel α = 0.05. Como
Gotera, muestran alguna evidencia de falta de ho- ya se expresara, los test requieren la condición de
mogeneidad en las series de Qmin y los caudales normalidad en la distribución, aspectos que en po-
característicos Q270 y Q355. El análisis de homoge- cos casos se cumplen, lo que introduce un importe
neidad de las series de v.h. del Chico, empleando nivel de incertidumbre en los resultados. En gene-
un método paramétrico, señalaría la presencia de ral, el test t de Student Secuencial señala puntos
tendencia en el Qmin y caudales característicos de de quiebre estadísticamente signiicativos de ma-
10, 30, 90 y 270 días de excedencia. Como las se- nera más frecuente que los otros test. Es conve-
ries son muy cortas, 16 años de record, cualquier niente destacar, que muchas veces se presentan
análisis de homogeneidad posee un alto grado de saltos múltiples, que ningún test de los empleados
incertidumbre. Para el río Colorado en Buta Ran- los identiica.
quil, solamente el caudal mensual de septiembre
muestra tendencia positiva. Algunos métodos no En las estaciones ubicadas sobre el río Bermejo y
paramétricos muestran evidencia estadísticamente en Las Cañas, la mayoría de las variables analiza-
signiicativa de tendencia en los caudales mensua- das, poseen evidencias de cambios abruptos en los
les de junio a agosto. valores medios a comienzo de la década del 70 y
en algunos casos, a mediados de la década del 50.
El río Neuquén, sección Paso de los Indios, mues- Si se graican las anomalías del Qa para PSO, des-
tra un incremento marcado de la irregularidad, ya viaciones respecto de la media, se puede observar
que el caudal máximo y el caudal mínimo presen- una tendencia creciente en los valores, como se
tan una fuerte de tendencia creciente y tendencia demostró anteriormente; también, es posible dife-
negativa, respectivamente; también, existe alguna renciar dos periodos, en los que el caudal anual
evidencia de disminución de los caudales de los medio son diferentes. En el primer periodo, que se
meses estivales. El rio Limay para la estación Paso extiende aproximadamente hasta el año 1972, se
Limay, muestra evidencias de tendencia decrecien- pueden observar que la mayorías de las observa-
te en los caudales extremos, caudales caracterís- ciones se encuentran por debajo de la media; en
ticos de estiaje y caudales mensuales de enero a el segundo, la muestra más moderna, a la inversa
abril. En el resto de las variables no se han detectan (ver Figura 3a). En la igura que relaciona las des-
cambios en las series analizadas. En el río Chubut, viaciones acumuladas con el tiempo, se observa
en las estaciones El Maitén y Los Altares, no se que los valores de caudal anual son menores que
detectan cambios en las series analizadas, excepto el valor medio, con una pequeña recuperación en
por algunas evidencias de variaciones decrecientes el año 1962, a partir del cual cae hasta un mínimo
en el caudal mínimo, caudal de sequía y caudal de en 1972; luego los caudales anuales tienden a ser
161
acumuladas en Qmin; i) saltos en Qmin.
acumuladas en Qmax; f) saltos en Qmax. Chubut en Los Altares: g) anomalía en Qmin; h) desviaciones
acumuladas en Qa; c) saltos en Qa. Mendoza en Guido: d) anomalía en Qmax; e) desviaciones
Figura 3. Cambios abruptos. Bermejo en Pozo Sarmiento: a) anomalía en Qa; b) desviaciones
(a) (b) (c)
(d) (e)
(f)
(g)
(h) (i)
Figura 3- Cambios abruptos. Bermejo en Pozo Sarmiento: a) anomalía en Qa; b) desviaciones acumuladas en Qa; c) saltos en Qa. Mendoza en Guido: d) anomalía en Qmax; e) desviaciones acumuladas en Qmax; f) saltos
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
mayores (ver Figura 3b). Ello indicaría la presencia En la cuenca del Pincheira, solo la prueba t de Stu-
de un quiebre en la serie, con un importante salto dent secuencial acepta la hipótesis de cambios en
creciente en los valores medios. Este aspecto es la media. El salto es positivo para todas las varia-
captado por los distintos test aplicados, al señalar bles relacionadas con el caudal diario, excepto para
que el año 1972 constituye un punto de quiebre es- Q10 y Q30; ocurre alrededor de 1978. También los
tadísticamente signiicativo, donde el caudal anual caudales mensuales, sin incluir al periodo de cre-
medio pasa de 294,02 m3/s a 425,70 m3/s (ver Fi- cientes (diciembre, enero y febrero) muestran evi-
gura 3c). dencia estadística de cambios bruscos en 1978. En
La Estrechura, sobre el Grande, entre 1987 y 1991,
Las estaciones de aforo en la cuenca del río San existen evidencias estadísticamente signiicativas
Juan, muestran saltos en los valores medios para de cambios bruscos a un escalón menor para casi
el caudal mínimo y caudales característicos bajos todas las v. h. bajo análisis, excepto para los cau-
(Q270 y Q355) alrededor de 1976 a 1978, excepto en dales mensuales de julio y agosto, cuyas medias
la estación Km 101. También hay evidencias es- se ubicarían en un nivel superior; aguas abajo, en
tadísticamente signiicativas de cambios caudales La Gotera, únicamente existen evidencias de saltos
mensuales en el año 1922 y 1945 o 1946 en La para los caudales mensuales de agosto y septiem-
Plateada y Km 47,3, series que comienzan a prin- bre, siendo los valores medios más modernos ma-
cipios del siglo XX. En tanto que para la estación yores. En el Valenzuela, el Qmin y Q355 para todos
Km 101, más modernas, los saltos se presentan los periodos analizados los valores medios de la
a ines de la década del 70 y comienzo de los 70. última década se encontrarían en un nivel inferior;
En la cuenca del río Mendoza, la mayoría de las de manera similar para los caudales mensuales de
variables analizadas muestran cambios abruptos octubre, febrero y marzo, pero desde el año 1988.
alrededor del año 1977, particularmente en el río El río Chico posee un registro muy corto, razón por
Tupungato. Por ejemplo, el diagrama de anomalías la cual no ha sido tenido en cuenta.
del Qmax para el río Mendoza en Guido, muestra un
periodo de caudales máximo bajos hasta 1976 0 En el río Neuquén y Limay no es posible identiicar
1977, luego una década aproximadamente de cau- claramente el año de quiebre en los valores medio
dales muy altos, para luego estabilizarse alrededor de las variables analizadas, ya que los resultados
del valor medio (Figura 3d). El diagrama de des- de los distintos test muestran resultados muy di-
viaciones acumulada, muestra dos puntos de quie- similes. En la cuenca alta del río Chubut, la serie
bre, el más importante localizado en 1976 y el otro de la estación El Maitén muestra cambios abrup-
en 1987 (Figura 3e). Los resultados de los test de tos en el caudal máximo alrededor del año 1982
Buishand y t de Student Secuencial son similares, y el caudal mínimo a principios de los 90. La serie
con un salto positivo estadísticamente signiicativo de Los Altares indicaría cambios en los caudales
en el 1976 o 1977, de 114,22 a 175,95 m3/s. La de mínima (Qmin, Q270 y Q355) y caudal mensual de
detección de un cambio abrupto en la variable Qmax, enero; se observa alguna contradicción en la fecha
no necesariamente indica cambios en la tendencia, de ocurrencia del quiebre, entre el caudal mínimo y
ya que esta es signiicativa cuando se aplican sola- el característico de sequia. A modo de ejemplo, el
mente métodos no paramétricos (Figura 3f). diagrama de anomalías del Qmin nos indicaría la
presencia de tres periodos donde los valores me-
En el Tunuyan, los test presentan resultados algo dios parecen muy distintos; uno se extiende hasta
contradictorios, siendo signiicativos en los cauda- 1963 con observaciones por debajo de la media;
les mínimos (Qmin, Q270, Q355 y QJUL) más cercanos otro hasta 1985 con valores de Qmin muy altas; el
al presente. En el río Diamante, la hipótesis de ho- siguiente, los valores por debajo de la media his-
mogeneidad es rechazada en las caudales men- tórica (Figura 3g). El gráico de las desviaciones
suales de junio a septiembre, entre1978 y 1980. acumuladas, indicarían la presencia de dos pun-
tos de quiebre, uno poco signiicado en 1963 y el
En la cuenca del Atuel, el método de desviaciones otro en 1984, muy importante (Figura 3h).Es uno
acumuladas de Buishand no mostró evidencia de de los pocos casos, donde todos los test señalan
cambios abruptos. En Puente Sosneado solo pre- la presencia de un salto negativo estadísticamen-
sentan evidencias de cambios, las v. h. de Qa, Q90 te signiicativo alrededor de 1987, donde el valor
y Q180 a ines de la década de 1980. En el Salado, medio para la serie más antigua y moderna es de
la prueba t secuencial, indica cambios en todas las 8,30 a 5,83 m3/s, respectivamente. La tendencia de
variables y los caudales mensuales. El punto de largo plazo es negativa debido a los valores cada
quiebre es prácticamente coincidente en las dis- vez menores del Qmin en la serie moderna (Figura
tintas variable, con saltos positivos alrededor de 3i). En el río Santa Cruz no hay saltos signiicativos
1952, para caudales de estiajes. En La Angostura, y los indicados por el test t de Student secuencial
todas las variables presentan evidencias de cam- muestra resultados dispares entre las distintas va-
bios abruptos positivos, con mayor coincidencia en riables que caracterizan el régimen hidrológico.
los dos métodos y el año de quiebre se ubica en la
década del 70.
163
Tendencias y cambios abruptos en el escurrimiento de algunos rios con nacientes en la cordillera y
serranias del oeste argentino. Vich, Bizzoto, Vaccarino, Correas y Manduca.
El test de desviaciones acumuladas detecto cam- En general, la gran mayoría de las observaciones
bios abruptos signiicativos en 157 series; el test de fuera de rango, responden a fenómenos globales
Student Secuencial en 317 series de las 629 anali- de características excepcionales y difícilmente se
zadas. En general, aun se requiere más investiga- puedan deber a errores en las mediciones, por tal
ción en la aceptación de un método u otro, ya sea razón, en este trabajo no se las excluye.
para detectar cambios graduales o abruptos. Por
ello, de ser posible, es conveniente la aplicación de El caudal anual muestra tendencias positivas sola-
distintas técnicas, comparar sus resultados y adop- mente en los ríos Bermejo, Las Cañas, Tupungato,
tar como resultado aquel que se presentan en el Mendoza y Atuel. El caudal diario máximo tiende
mayor número de métodos. a ser mas importante en los ríos Bermejo (PSA),
Mendoza, Salado, Atuel (LAN) y Neuquén; pro-
bablemente decreciente, en el río Limay (PDI). La
Conclusiones ocurrencia del caudal diario máximo en el río Las
Cañas se anticipa, en tanto en el río de los Patos se
La Cordillera de los Andes constituye el principal presenta más tarde; en ambos casos, no se modii-
sistema regulador del ciclo del agua a escala con- ca su magnitud. Con los registros hidrológicos dis-
tinental, al interactuar con las masas de aire car- ponibles, relativa El caudal diario mínimo tiende a
gadas de humedad de origen atlántico o Pacíico y ser mayor en la mayoría de las estaciones analiza-
por su efecto de la topografía sobre la precipitación, das, excepto en los ríos Neuquén, Limay y Chubut
particularmente en los Andes Centrales y Patagó- donde el mínimo sería más pequeño. Solamente
nicos. Almacenan agua en forma de nieve e hielo los ríos Bermejo en Pozo sarmiento, Mendoza en
durante la estación fría y proveen agua a las tierras Guido y Atuel en La Angostura, presentan tenden-
más bajas durante la estación cálida en momen- cias estadísticamente signiicativas en la mayoría
tos en que la demanda es más importante. Existen de las variables hidrológicas.
numerosos interrogantes de cómo afectarán las
temperaturas más elevadas las relaciones entre la Los distintos métodos para la determinación de
precipitación sólida y líquida, o qué consecuencias cambios abruptos en la serie de variables hidrológi-
tendrá una fusión más temprana de la nieve en la cas muestran resultados relativamente diferentes,
distribución de los escurrimientos, o bien cuál es particularmente entre Pettitt y los métodos de Buis-
el signiicado de una importante retracción de los hand, Worsley y t de Student Secuencial, para el
cuerpos de hielo, o un incremento en el espesor nivel de signiicación del 5%. El test de Pettitt, no
de la capa activa en zonas periglaciares, áreas identiicó cambios abruptos en prácticamente nin-
sometidas al congelamiento y descongelamiento guna de las 629 series analizada. La aplicación del
estacional y permafrost. Estos son algunos de los test de Worsley, es muy limitado porque requiere re-
numerosos interrogantes que se plantean y sus res- gistros que posean más de 50 observaciones. Los
puestas, constituyen uno de los grandes desafíos distintos test requieren la condición de normalidad
que enfrenta la comunidad cientíica argentina. En en la distribución, aspectos que en pocos casos se
el presente trabajo se ha planteado únicamente la cumplen, lo que introduce un importe nivel de in-
detección de tendencias en las series hidrológicas certidumbre en los resultados. En general, el test
de caudales diarios y mensuales de los ríos con t de Student Secuencial señala puntos de quiebre
nacientes en la cordillera de Los Andes. estadísticamente signiicativos de manera más fre-
cuente que los otros test. Es conveniente destacar,
La metodología empleada para la detección de que muchas veces se presentan saltos múltiples,
tendencia se basa en pruebas estadísticas para- que ningún test de los empleados los identiica.
métricas (t de Student) y no paramétricas (SROC,
Mann-Kendall y sus correcciones). Ambas pruebas El punto de quiebre se presenta generalmente en
presentaron resultados similares, para un nivel de la década de los 70. Resulta muy difícil determinar
signiicación del 5%. De las 629 series temporales el punto de salto, ya que las series no son muy ex-
analizadas, se detectaron 194 series con cambios tensas. Existen evidencias de cambios en las varia-
de tendencia paramétrica y 165 series con cambios bles hidrológicas de caudal anual y caudal mínimo
en tendencia no paramétricas y en su mayor parte diario, principalmente, para la mayoría de las esta-
ellos corresponden a periodos de aguas bajas. Los ciones analizadas. En los ríos patagónicos (Limay,
resultados derivados de la aplicación del test t de Chubut y Santa Cruz), los cambios son negativos.
Student, pierden potencia si las series analizadas
no cumplen con las condiciones de normalidad,
independencia y aleatoriedad; ambas condiciones
fueron veriicadas, cumpliéndose la primera en un
37 % de los casos y solo en un 63 y 67 % respecti-
vamente de las otras condiciones, de las 629 series
analizadas.
164
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
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166
Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
167
tipo de obras. Adopción de recurrencias y niveles Esta tarea se realizó entre el 13 y 25 de agosto vía
de riesgo, variables a considerar. correo electrónico y en la misma colaboraron ac-
tivamente los Ings. Juan Carlos BERTONI, Pablo
Consignas: CACIK y Eduardo ZAMANILLO
• ¿En qué casos de obras existentes dimensio-
nadas para una determinada crecida de dise- Asimismo y ante la necesidad de proceder a su di-
ño, se justiica actualizar el estudio o analizar fusión, se recomendó que los Coordinado-res del
el nivel de riesgo actual?. Taller procuren entrevistarse con las autoridades
• ¿Porqué no se usa más habitualmente el aná- de las Entidades Auspiciantes para presentar es-
lisis hidroeconómico y de impactos en la se- tas Conclusiones y Recomendaciones.
lección de recurrencias de diseño? ¿En qué
casos se justiica?
• ¿Es conveniente establecer normas, guías o CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
manuales para adoptar las crecidas de dise-
ño? Para ello ¿podría pensarse en una cate- En relación a los regímenes hidrológicos frente
gorización de las obras según los impactos de al cambio climático y/o variabilidad climática:
su falla?
• ¿Quién y cómo se toma la decisión del nivel Los cambios que se veriican en los regímenes
de riesgo aceptado para el dimensionamien- hidrológicos responden a diversas causas, entre
to de las obras o para establecer medidas no ellas las debidas al cambio climático y/o variabili-
estructurales (áreas de riesgo, evacuación, dad climática, por lo que se propone referirse a los
etc.)? efectos del “cambio global”, que incluye también
• ¿Debería ser obligatorio en el diseño de las otro tipo de causas que modiica las relaciones
obras el análisis de riesgo que incluya la res- hidrológicas, como pueden ser fundamentalmente
puesta ante crecidas catastróicas? los cambios en la ocupación y uso del suelo.
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Criterios para la determinación de crecidas de
diseño en sistemas climáticos cambiantes
escenarios climáticos futuros (y también de las Asimismo en este tipo de análisis debe tenerse en
modiicaciones previstas en infraestructura y uso cuenta la escala espacial de los resulta-dos de los
del suelo) pudiendo analizar el impacto que tienen modelos climáticos.
sobre los resultados los escenarios futuros.
Falta deinir cuantitativamente para cada región
También debe mencionarse la incertidumbre que cuales serán los escenarios de lluvias extremas
genera utilizar modelos cuando no se dispone de que se podrían esperar.
series de datos coniables. Asimismo se destaca la
necesidad de utilizar eventos extremos que se ha- La gran duda sigue siendo como introducir
yan dado sobre la región, en zonas cercanas, verii- escenarios climáticos en los modelos de
cando el impacto en los caudales resultantes. transformación P-Q para lo cual:
Finalmente, y en forma reiterada se menciona la En primer lugar resulta necesario deinir y con-
necesidad de contar con estudios de regionaliza- sensuar el/los escenario/s futuro/s. Luego con las
ción de extremos hidrológicos, que sirvan de base series de precipitaciones y temperaturas (evapo-
para los análisis. transpiración) surgidas de las previsiones de los
modelos climáticos, se puede incluir tal informa-
Se recomienda la elaboración de guías para esti- ción como ingreso a modelos de simulación con-
mación de crecidas, que tengan en cuenta la infor- tinua P-Q.
mación disponible y los distintos casos usuales.
Desde el punto de vista de los ingenieros se debe
En relación a si existen en Argentina eviden- interactuar más con los especialistas en los mode-
cias iables de cambios regionales de los sis- los climáticos para interpretar adecuadamente el
temas climáticos, se concluye que: funcionamiento y resultados de tales modelos.
No hay estudios determinantes en todas las regio- Respecto a la incidencia de los escenarios de va-
nes del país que permitan airmar y/o cuantiicar riabilidad en la estimación de crecidas de diseño
la magnitud del cambio. Si bien en muchas zonas de baja, media o alta recurrencia, se indica que:
del país parecería maniiesto (Pampa húmeda), a) no se conocen adecuadamente los escenarios
en otras zonas del sur del país aparecen indicios en cuanto a los extremos hidrológicos.
sobre algunos fenómenos (disminución de glacia- b) Se podría avanzar más en esta pregunta cuan-
res), pero no se observan todavía evidencias en do se deinan los escenarios
los caudales extremos. c) Se supone que los escenarios de mayor recu-
rrencia tendrán mayor impacto
Existe la necesidad de regionalizar o zoniicar el
país, en cuanto al impacto del posible cambio cli- Se planteó además, la disyuntiva respecto a poder
mático en fenómenos extremos. Se encuentran seguir hablando de recurrencias ante escenarios
zonas donde el cambio parecería evidente mien- cambiantes.
tras que en otras pareciera poco signiicativo o
que directamente no existe. En este aspecto debe Asimismo se estima que el posible Cambio Climá-
tenerse en cuenta que en amplias regiones del tico, en algunas zonas, podría incidir fuertemente
país no se dispone de adecuadas mediciones que en la determinación de la PMP, pero se desconoce
permitan cuantiicar adecuadamente el efecto. en que magnitud y bajo cuales características.
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municipal). Es deseable que existan recomenda- • Hayan ocurrido eventos extremos que así lo
ciones nacionales de carácter general que deinan justiiquen.
para los distintos tipos de obra los niveles de riesgo • Cambien los riesgos para la población, obras
a adoptar y los procedimientos mínimos exigibles. de infraestructura y/o el medio ambiente aguas
abajo de la obra.
Surge como necesario disponer de guías meto- • Haya pasado un tiempo prolongado (del or-
dológicas que establezcan los criterios y proce- den de más de veinte años) sin revisión de
dimientos mínimos a seguir para la adopción de los mismos.
crecidas de diseño. Estas deberían incluir una ca-
tegorización de las obras asociada a los criterios La actualización debería realizarse sobre aquellas
y procedimientos mínimos exigibles. obras que presenten una combinación de los fac-
tores precitados, que impliquen un mayor riesgo
Se considera que debería ser obligatoria la ela- potencial, y luego de un pormenorizado análisis
boración de Planes de Acción Durante Emergen- de prioridades. Esta revisión podrá también ser
cias (PADE´s), no solo en presas, sino también impulsada por potenciales afectados, pero siem-
en todo tipo de obras cuya potencial falla pueda pre realizada por especialistas en la materia, con
implicar una gran afectación sobre la población, la participación de la autoridad jurisdiccional con
las obras de infraestructura y/o el medio ambien- responsabilidad sobre la obra.
te (v.g.: diques de defensa de poblaciones). Dado
que los PADE’s son en primera instancia de res- La realización de los análisis hidroeconómico y de
ponsabilidad del operador de la obra, resulta ne- impactos con vistas a la selección de recurrencias
cesario que las autoridades jurisdiccionales del se justiica cuando se trata de obras que implican
territorio involucrado (municipales y provinciales), intervenciones importantes en el medio, como
integren dichos planes a los propios que deben grandes presas, obras de defensa, obras de paso,
poseer para la protección civil frente a situaciones etc., que generan impactos de índole económica,
de emergencia. ambiental y social sobre la población e infraes-
tructura preexistente. El análisis hidoreconómico
La actualización de estudios de crecidas de di- y de impactos exige la intervención de equipos
seño o el análisis del nivel de riesgo en obras interdisciplinarios, el empleo de datos no siempre
existentes, se justiica en caso que: fácilmente disponibles o de costosa obtención y
requiere de un apreciable tiempo de estudio, lo
• Se hayan modiicado las hipótesis que dei- que hace que sean difícil de justiicar para medi-
nieron la crecida de diseño (v.g.: cambios en das estructurales o no-estructurales de menor en-
el uso del suelo, ocurrencia de eventos con vergadura.
génesis meteorológica diferente).
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Se diagramó y compuso en
y se terminó de imprimir en Imprenta Macagno,
Santa Fe, Argentina, julio de 2010.