Liderazgo Efectivo
Liderazgo Efectivo
Liderazgo Efectivo
SENA
2023
1. CUALES SON LAS RESPONSABILIDADES DE UN LIDER EFECTIVO.
HABLE DE CADA UNO DE ELLOS:
R// 1.Las 5 responsabilidades más importantes de un líder en las empresa.
En la era que estamos viviendo, el liderazgo está en constante evolución. La
nueva generación de líderes, ya sea de empresas privadas u organismos
gubernamentales, se enfrenta a nuevos desafíos que demandan un liderazgo
adaptativo, tecnológico, sistémico y emprendedor, que sea responsable y rinda
cuentas ante la sociedad y asimismo refuerce la convivencia y los valores de las
sociedades democráticas. Según el Foro Económico Mundial, la carencia de
liderazgos en el mundo actual es un riesgo en sí mismo que se debe abordar con
acierto. Según mi experiencia en la materia, estas serían las cinco aristas que
apuntalan la responsabilidad de un líder:
1. El líder es el primer y último responsable del proyecto que encabeza
Líder es la persona que guía a una colectividad en la conquista de un sueño
compartido. Y ese sueño, sin importar si es propio o apropiado, será su proyecto y,
por tanto, su responsabilidad.
La responsabilidad del líder para con ese proyecto comienza desde el momento
de su formulación (o de su nombramiento) y solo debe terminar con el fin del ciclo
del líder o del proyecto. No hay más. Un líder que renuncia a su responsabilidad
en su proyecto es como un capitán que abandona su embarcación: ambos
merecen la más severa condena.
De ahí que la decisión del nombramiento para una posición de liderazgo no deba
ser tomada a la ligera, ni por quienes la estarán otorgando, ni por quienes la
estarán recibiendo. Si bien de inicio ambas partes tienen una carga compartida, en
cuanto el proyecto tenga su líder, éste debe ser completamente responsable de su
destino.
2. La responsabilidad más importante que debe asumir un líder es el
cumplimiento de la meta
Esta es la primera dimensión a partir de la cual se puede hacer una evaluación del
desempeño de cualquier individuo que encabeza a un grupo de personas.
Definir la meta es indispensable para la materialización de un proyecto. De otra
manera, la idea en cuestión no pasará de ser un sueño, un propósito o un buen
deseo. En ocasiones el líder definirá la meta, pero la mayoría de las veces estará
sujeto a una autoridad superior encargada de hacerlo y solo podrá dar su opinión.
Si el líder es responsable de fijar la meta, esa será su labor inicial más importante
pues de ella dependerá el resto de su quehacer. Si no lo es, tendrá que acatarla y
apropiarse de ella. En cualquier caso, una vez en la faena, todo lo que el líder
piense, diga o haga solo tendrá sentido si ayuda al cumplimiento de la meta, pues
esa es su responsabilidad primordial.
3. El líder tiene la responsabilidad de mejorar su futuro, el de su colectivo y el
de su entorno Es por ello que debe agudizar su sentido de responsabilidad, tanto
en amplitud, como en profundidad, pero de una manera en la que se garantice el
mayor bien posible para todas las partes.
El error más frecuente que ocurre en este proceso es el espejismo de creer que
todo lo que le beneficie al líder será benéfico para su colectivo y para su entorno.
Nada más alejado de la realidad. Por el contrario, el razonamiento debe hacerse
exactamente al revés: primero buscar el bien para el entorno, después para el
colectivo y al final para el líder.
Con toda seguridad podemos identificar fácilmente decisiones en cualquier
ámbito, público y privado, que fueron tomadas con un criterio equivocado:
anteponiendo los intereses del líder. Esta es la razón por la que existen muy pocos
grandes líderes. Porque solo muy pocos actúan con responsabilidad al momento
de ponderar la conveniencia general y la conveniencia personal.
4. El líder tiene la responsabilidad de desarrollar al máximo a cada uno de los
integrantes de su colectivo
Probablemente esta sea la responsabilidad más desatendida en el ejercicio del
liderazgo, con excepción de algunos colectivos fraternos: familia, escuela, deporte
y arte grupal, entre otros.
Sin embargo, fuera de esos ambientes, en general los líderes no solo descuidan
el desarrollo de los miembros a su cargo, sino que, de manera involuntaria, o
incluso hasta deliberada, lo evitan. Se trata de un mecanismo de supervivencia
mal entendido, bajo el supuesto de que, con el desarrollo de las personas a cargo,
se corre el riesgo de eventualmente ser sustituido por una de ellas.
Lo anterior es un claro ejemplo de anteponer el beneficio del líder, pues resulta
evidente que lo mejor para cualquier grupo humano es que todos sus integrantes
perfeccionen sus capacidades. Por tanto, el líder debe instrumentar una estrategia
sistemática para identificar, desarrollar y poner al servicio del colectivo los talentos
de cada persona bajo su custodia.